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LUIS MEDINA PENA Los barbaros del Norte GUARDIA NACIONAL Y POL{TICA EN NUEVO LEON, SIGLO XIX 99 2 CIDE FONDO DE CULTURA ECONOMICA CENTRO DE INVESTIGACION Y DOCENCIA ECONOMICAS Primera edicién, 2014 ‘Medina Pena, Luis ‘os bésbaros del Norte. Guardia Nacional y poitia en Nuevo L ‘iis Medina Petia, ~ México FCE, CIDE, 2018, 487 pilus. 21 x 14cm ~(Seecin de Obras de Historia) ISBN 978-607-1620514 A Enrique Florescano y Jean Meyer en, siglo XE 1. Historia — Nuevo Ledn (México) ~ Siglo XIX 2. Historia — Economia [Nuevo Le6n (Mérico)- Siglo XIX'3, Mésico~ Politics y gobierno «Side DX VSer tt Lerizs2 Dewey 972.04 M3525 Distibucion mundi Diseio de portada: Laura Bsponda Agullar D.R.©2014, Luis Medina Pena D.R,€ 2014, Centro de Investigacion y Docencia Econémicas (Carretera Mésico-Toluca, 3685; 01210 México, D. FE D.R. ©2014, Fondo de Cultura Econdmica Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 Mesico,D.R Empress cerifcada ISO 60012008 Comentarios: eitorialofondodeculturaeconomica.com \Wwowefondodculturaeconomica com Tel (55) 227-4672 fax (95) 5227 4694 ‘Se probe la reproduecion total o parcial de esta obra, sea cul fuere tmedio, sin la anuencis por escrito dl titular de los derechos ISBN 978-607-16-2051-4 Impreso en México « Printed in Merico {NDICE Portico. Los bérbaros del Norte... a 13, I. Pais, paisaje y paisanaje 15 Tl, La comancheria 37 IIL La organizacién de la Guardia Nacional. . 90 IV. El Plan de Monterrey de 1855 126 V. La politica nacional en la era de Vidaurri 152 VI. Las primeras andanadas politicas 199 VIL. El Ejército del Norte .. 244 VIII. Bautismo de fuego = 269 TX. Ahualulco Hp 298 | X. Juarez contra Vidaurri 325 XI Elenfrentamiento final - e387 XII. Un poco de sociologia de todo aquello 383 XIII. ¥ también de economia Peper eT Epilogo ae 437 Explicacién y agradecimientos. . . . 443 Bibliografia... 2... 447 ANExos Anexo 1. Nombres modemos de lugares de la region 473 Anexo 2, Lista no exhaustiva de productos para el abastecimiento del Ejército del Norte 475 Mapas LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL om Enos 12 aftos que duré la primera Reptiblica, los mandos de] ejército vieron con creciente antipatia la existencia mis- . ma de las milicias y la forma de gobierno que las hacia posi- II, LA ORGANIZACION bles. Para la mayorfa de los altos jefes del ejército, milicia y DE LA GUARDIA NACIONAL federalismo estaban estrechamente relacionados pues los con- sideraban dos serios obstaculos para la buena gobernacién del pats. Y sus temores no eran infundados. En 1832 el ejérci- Es raxciso distinguir claramente entre el sistema de milicias y fo federal enfrent6 una coalicién de estados formada por Ja- la Guardia Nacional pues respondieron a conceptos distintos isco, San Luis Potosi y Zacatecas, que unieron fuerzas para y a necesidades coyunturales diferentes. El sistema miliciano cexigir la restitucién a la presideneia de Manuel Gémez Pedraza fue estableciclo por la Constitucién de 1824, al momento de la yyla dimisién de Anastasio Bustamante. Este tiltimo, al mando implantacién del federalismo, como un mecanismo para sal- de las fuerzas federales, los derrot6 en la batalla de la vaguardar la soberanfa de los estados. En el arreglo constitu- cienda de Gallinero, en las goteras de Dolores, Guanajuato, el cional el sistema de milicias heredé las pocas virtudes y los ee seticribeye ears poem scnplanisletoperaciceeetee muchos vicios de las organizadas por José Maria Calleja para fuerte sabor napoleénico. Aunque la federacién estaba desti- combatir a los insurgentes en los afios previes a la consuna- nada a sobrevivir poco mas de dos arios a la batalla, la derrota cin de la Independencia." Los vicios més importantes que BP caaticidn canteltiayG a xtside paso a lal soliciGn eantza se transmitieron fueron la distincién entre milicias activas y se- sta que impuso la Constitucién de 1836, Con Ja derrota de Ga- dentarias, y la tendencia de estas ttimas a la indisciplina y a llinero se demostr6 que las milicias no eran el terrible adver- rogatear sus servicios con las autoridades civiles y militares. La sario que tanto temfa el ejército federal. Cuando finalmente Constitucion de 1824 habia previsto también, como facu tad. se fracturé la primera Reptiblica, triuntaron los asf llamados del Congreso Federal (articulo 50 fraccién xx), Ja de dar regla- “hombres de bien’ que vefan con nostalgia el centralismo co- ‘mentos para organizar y disciplinar a la milicia local de los es- Jonial y los estados perdieron no s6lo su soberanfa, sino tam- tados, reservando a las autoridades estatales cl nombramiento bign sus milicias. de jeles y oficiales asi como la facultad de instruirla y dispo- ner de ella. Los congresos ordinatios de Ia primera Reptiblica legislaron poco sobre el arreglo de las milicias, limitandose a pea ¥ rRorosir0s DETRAS DE La GUARDIA NACIONAL precisar cudndo el gobierno federal podia echar mano de las milicias activas 0 en qué casos esas milicias podian percibir De 1836 a 1856, afio este tiltimo en que se impuso de nueva los haberes fijados para el ejército federal. La organizacién mi ‘cuenta el federalismo con el triunfo de la revolucién de Ayutla, liciana qued6 asi a criterio de cada estado. En conse México basculé entre una restauracién de la forma federal y ni todos los estados formaron milicias ni todas las milicias se diversas versiones de centralismo. En 1846, cuando inicié la crearon bajo los mismos criterios. En esta medida las unida- guerra con los Estados Unidos, el pais se encontraba en la eres des que se formaron en los estados se constituyeron en una {a de una modalidad de centralismo que habia probado ya su serie de pequeiios ejércitos locales alternativos al permanente, Ineficacia para enderezar la hacienda y las finanzas naciona- que llegaron a usarse contra la federacién, les, La restauraci6n del federalismo la llevé a cabo, en medio de la guerra, un congreso extraordinario producto del Plan de Peres Ciaran cee en ess ye la La Ciudadela que, fuera de eso y de aprobar un Acta de Refor- de Me, st ot rs ke Moray eg dee Ueda thas ni hacia ni dejaba hacer en la conduceion de la defensa Tniernacional de Andalita/ Universidad de Sevilla, Soils, 1997, pp. 79478 °0 2 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL del territorio nacional.? La division de los liberales en puros y moderados paralizaba al poder Legislativo y esa pardlisis afec- taba la eficacia del Ejecutivo. En medio de la invasién, y ante la perspectiva de que el ejército federal no pudiera con la de- fensa, el general José Mariano Salas, presidente transitorio de la Repiiblica y comandante del ejército libertador republicano, decidié crear la Guardia Nacional. El decreto que emitié el 11 de septiembre de 1846 decia que no obstante ser facultad del Congreso formar reglamentos para la milicia, dada la “excén- trica posicién de la Reptblica’, se establecfa la creacién de la Guardia Nacional en los estados y territorios federales. Sigo aqui casi textualmente la introduceién de este documento por= que quiero resaltar cémo en pocas Iineas se pasa del concepto constitucional de la milicia tradicional al de Guardia Nacional Al mencionar la milicia relaciondndola con las facultades del congreso y al referirse a la guardia vinculada a las excepciona- Jes cireunstancias por las que atravesaba el pafs, més que jus~ tificar el decreto que emitia, lo que hacfa Salas era anunciar an giro completo, cualitativo e institucional en la organizacién de Jos ciudadanos armados. El decreto del general Salas logré por primera vez la iden- tificacion entre el servicio militar de los ciudadanos y la na- cidn, concepto este tiltimo puesto en boga por la Revolucisn francesa y que aparecfa en ese momento como el solvente ade- cuado para diluir los chovinismos de campanario. Si se revisa el texto relativo a las milicias en la Constitucién de 1824, la co- nexiOn seméntica es entre milicia y estados. En el decreto del general Salas se cambia estados por naci6n y ésta irrumpe en el texto entreverdndose con la obligacién ciudadana de defen« der al pafs, cuando el temido peligro externo finalmente se ha hecho realidad. Pero qué hay detras del decreto? ¢En qué pre- cedente se habfa inspirado? El decreto capitalizaba una no tan vieja experiencia: la efi- cacia de las guerrillas y de la guerra no convencional para la defensa de territorios. Tras la Independencia se haba tomalo 2 Reynaldo Sordo Codefo, “El Congreso y la guerra con los Estados Uni dos de América, 1846-1848", en Josefina Vtequez (coord), Mezco al tin-po de su guerra con los Estados Unidos (1546-1848), Fondo de Cultura Feondl= ca/El Colegio de Mexico! Secretaria de Relaciones Enterires, México, 1997, pp. 47-54 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 93 en cuenta la eficacia de la guerrilla insurgente (1811-1821) en Jas Instrucciones de 1824 para la formacién de cuerpos lige- ros de caballeria a fin de que sus integrantes pudieran comba- {ir de manera personal e irregular. Sin embargo, como sefia- la Kahle, lleg6 a predominar dentro del ejéreito mexicano un prejuicio en contra de la guerrilla, particularmente en los pe- riodos de las recurrentes presidencias de Santa Anna.’ Pero de- {rds del decreto operaba también un mito muy extendido en. las mentalidades de las élites. Se le conoce como el recluta- miento en masa (evée ent masse) que habfa sido consignado en el decreto de la Convencién de agosto de 1793 en Francia.t No fue el primer reclutamiento de la Revolucion francesa; desde su inicio se habia conocido al menos otro importante en Ja primavera de ese mismo afio, que habia producido 300000 hombres y muchas quejas por las injusticias en los procedi- imientos y en la distribucién de cupos por regiones, munici- pios y ciudades. Tampoco era la primera ver que se hablaba de la Guardia Nacional en Francia, pues las milicias existie- ron antes de la Revolucién, aunque se organizaban primor- dialmente para la seguridad interior.’ En el antiguo régi- men los cuerpos de policfa y seguridad locales, reclutados entre los lugarefios, habfan evolucionado hasta la formacién de una Guardia Nacional, con la de Parfs como la més pro- minente. El rasgo que le daba peculiaridad al decreto francés de 1793 era la identificaci6n de patria y nacién mediante un apa- rene reclutamiento de toda la sociedad con fines defensivos ante el cerco de los demés pafses monérquicos y antirrevolu- narios. A la patria se la vefa en el antiguo régimen como el conglomerado de stibditos; con la Revolucién francesa debuts » Giinther Kahle, Elejército y la formacién del Estado en los comienzos de la Independencia de Mésico, Fondo de Cultura Econdmica, México, 1997, pp. 139-147 4 Alan Forrest, “La pair en danger: The French Revolution and the First Lenée en masse", en Daniel Moran y Arthur Waldron (es), The People int Arms. Miltary Myth and National Mobilization since the French Revolution, Cam- bridge University Press, Cambridge, 2003, pp. 8-32. Una Investigacion exhaustiva sobre el origen y desarrollo de la Guardia Nacional en Francia, mas por l lado de la seguridad interna que por el Indo militar, en Georges Carrot, La Garde Narionale (1789-1871). Une foreé publ: que ambigué, UHarmatian, Paris, 2001, pp. 24-164. a on LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL. el concepto de nacién y se definis como el conjunto de ciuda. danos, todos iguales, todos con los mismos derechos y obliga. ciones frente a la Republica. El decreto de 1793 fue la univer: salizacién del deber ciudadano de defender al Estado. Este rasgo fue el que contribuyé de manera decisiva a la formacién del mito, pues los ejércitos franceses, reforzados por el nueva) reclutamiento, salvaron efectivamente a la Revolucién de sus enemigos externos e internos.* El éxito del reclutamiento de los contingentes que contri buyeron a rechazar a los invasores del territorio de la Rept blica francesa en esos primeros afos dificiles forjé el mito que capt6 la imaginacién de los lideres de patrias en peligro du- ante todo el siglo xrx. En México, cuyas élites lefan mucho y estaban siempre al tanto de lo que se publicaba en Franc seguramente conocieron las glorificaciones del ejército popu: * EL mito de a levee en masse, la puesta en practica de la defensa del Esta- do por la totalidad de la nacién, toms forma conereta partir de un pera del proyecto de decreto debido a la exaliada pluma del diputado Bertrand: Barrere, relator del Comité de Salud Publica, El pirrato ha venide resonando, en los libros de historia desde entonces, y en el siglo xr inflam la imaging cin de muchos politicos lainoamericanos, Decta: “Los jovenes combatita seréin los encargados de vencer; los hombres easadoslorjarn Ins armas, trans Portardn la impedimentay la arlleria, ypreparardn las subsistencias; las mx jeres, que por fin tomar su lugar y seguirin sus destinos dentro de las revo Tuclones, olvidar Tos trabajos indies; ss manos delicadas producirén los tuniformes de los soldados, har tiendas de campatia,y aportarn sus ater ciones en los hospitales en donde los defensores de la patria recibir ee dado a sus heridas; los ninos eonvertirin los tapes en vendajes: es por ellos {que se combate; los nifios, los que estén destinadas a recibir todos los frutos de Ia revolucion,levantardn sus manos al cielo; los ancianos, que retomaran la 'mision que tenan entre os pucblos antigues, harn que se les lev a los hea res publices y ah inflamarn a arojo de los ovenes guerreros, propagarin el tlio a los reyes y predicarén la unidad de la Repablica. Asi, encerrando alos ciudadanos jovenes entre los dos extremos de la vida, entre los elogios de los ancianos y el reconocimionto de los nin, habremos hecho més quc si: ciente para la defensa pablica”. Segin el decreto, todos los franceses eran gue lesen su abligacin de defender al Estado de sus enemigos, tal y como lo deci la constitucsn jacobina de junio de 1793; se exigia, porlo tanto, el esuerzo ttl aunque habia exentos: los que no tenfan edad militar (sta se reducta al inter. valo de los 18 a 25 anos), Ios funcionarios y los obroros de las armerias 0 al servicio de las fuerzas armadas. La traduccién es mia; el original del decreto en francés puede consultarse en The French Revolution Research Collection “Les archives de la Révolution franeaive. Pergamon Press, sf, en Bibliotheque Nationale de France: gallica bn fr LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 9s de la Revolucién francesa a través de los escritos de Mada- ede Staél, de los historiadores Francois Mignet y Alphonse ers, asf como en las novelas historicas de Walter Scott.” De julectura les qued6 claro que la devée en masse habia salvado Ja Republica francesa al fortalecer al ejército con refuerzos cos y debidamente adoctrinados, y habia salvado a la re- jucion al permitir al Comité de Salud Pablica iniciar cl “Te- "con apoyo miliciano. La idea prendié en las mentes de Ios erales puros: al pais no lo salvaria un ejéreito de leva, sino 10 de ciudadanos. Y de paso contribuiria a derrotar a los con- yadores del interior En el apresurado decreto mexicano del 1846 se concibié Guardia Nacional como version atemperada de la levée ent .e, pero vinculndola con la democracia no con la nacién. I decreto introdujo la nocién de guardia, definiéndola como cuerpo “inherente a las instituciones democraticas". Por tal ‘razén, segin el decreto, la Guardia Nacional debfa ser una ins- itucidn permanente. Quedaban sujetos al servicio militar en Ta guardia todos los varones entre 16 y 50 afos, con la obliga- jén de registrarse en padrones especiales que llevarfan las fautoridades del lugar de su residencia. No inscribirse conducia a la pérdida de los derechos politicos. No todos servitian en Jas guardias activas y sedentarias; habria exentos de servicio, ‘pero sujetos a un impuesto mensual. Asf, todos los varones, eumplirian de una forma u otra con su obligacion militar. A fin de cuentas el reclutamiento previsto por el decteto mexicano no fue tan universal como el francés, pues no s6lo limitaba a los varones en edad militar, sino que haba nu- jerosas excepciones. En la parte dedicada a los exentos se mia de manifesto cusles eran las actividades consideradas, indispensables y no sujetas a alteraciones por el reclutamiento, > Owen Connelly, “The Historiography ofthe Levée en masse of 1793", en Daniel Morén y Arthur Waldron (eds), The People in Arms, Miltary Myth and tional Mobilization since the French Revolution, Cambridge University Press, Cambridge, 2003, pp. 3337; Lilla Gulot de la Garza, “El competido ‘undo de Ia lecira:librerfas y gabinetes de lectura en la ciudad de México, 1821-1855", on Laura Salas de In Torre (coord), Constructores de un cambio. ultra ipresores-edioresy Ubveras en la ciudad de México, 1830-1855, Ins fluo José Maria Luis Mora, México, 2003, passim, Antonio Alatorre, Los 4001 aos de la engi espafola, Fondo de Cultura Econémica, México, 1989, pp. 282-283, “| 96 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL or Eran objeto de exencién: a) los ordenados in sacris; b) los problema central con las milicias anteriores por falta de una funcionarios ptiblicos; c) médicos, cirujanos y boticarios; Jey reglamentaria, Para hacer mas clara la situacién en los dos d) rectores, catedréticos y estudiantes de colegios, y los pre tiltimos casos, guarnicién y campafia, se establecfa que la ceptores de ensefianza primaria; ¢) militares en activo o ret guardia quedaba sujeta a las ordenanzas del ejército federal. rados; ) extranjeros de naciones en guerra con el pais; g) los Sin embargo, los gobernadores tenfan siempre que costear la eriados domésticos; h) los marineros; i) los que, de acuerdo, organizaci6n, el entrenamiento y la disciplina de sus miem- con facultativos, tenfan impedimento fisico perpetuo (o en’er- firr;. Los gobemadares quedaban obligados a rendir cuentas medad habitual); j) los simples jornaleros del campo; &) los mensuales al gobierno general sobre la fuerza, el armamento obreros de las minas. Las primeras cuatro categorias de exen- ylos progresos de la guardia en su estado. El armamento si tos pagarian un impuesto especial que iba de cuatro reales a ria igual y del mismo calibre que el del ejército federal y debia dos pesos mensuales, segtin su patrimonio y a juicio de la au- ser sufragado por los estados, y se consideraba acto merito- toridad civil del lugar. Puede verse que al exentar del servicio rio que los guardias nacionales se presentaran al servicio ar- 1 jornaleros del campo y mineros habia el interés por mantener’ mados por su propio peculio. El uniforme quedaba a criterio funcionando los dos sectores econémicos mas importantes Ge las autoridades estatales, y se disponfa que el de la tropa para el pats. se costeara a cargo de los fondos integrados con el impuesto Habfa dos formas de registro: el voluntario en Ios cuar- del exento. teles y la selecci6n por jurados especiales en los padrones En el decreto se enfatizaba particularmente el carécter ciu- que levantarfan las autoridades municipales en todas las 20- dadano de la Guardia Nacional. Enire las medidas para lograr | munidades del pais. Los jurados dedicarfan al servicio activo tse objetivo destacaban las elecciones en sus filas. La Guar- de Ia mitad las dos terceras partes de los empadronadas ele- dia Nacional nacié como corporacién militar demoeratica. De | gibles en el lugar, dejando la determinacién de los exentos, de acuerdo con el decreto la tropa de cada compaiifa elegia a sus acuerdo con los criterios sefialados por la ley, a juicio de la auto- cabos, sargentos y oficiales. Los jefes eran designados por los ridad local. Se prohibfan terminantemente, como en el decr=to bficiales y sargentos. Al jefe de operaciones y al inspector francés de 1793, los reemplazos: pagar a alguien para servir en general de la Guardia Nacional los nombraba el gobernador, su lugar. Aqui surgfa por primera vez en México la idea de la quien por Ia naturaleza de su cango politico era el comandan- obligacién ciudadana de defender a la patria, hasta entonzes teen jefe. Las elecciones internas es algo a lo que los ejércitos sélo a cargo del ejército profesional. Una obligacién que iba regulares eran absolutamente impermeables y reacios pues mucho mis allé de la colonial de servir gratuitamente en los se consideraba que conspiraban contra la disciplina. Ante tal cargos edilicios. El minimo a pagar se reduciria posteriormeate riesgo les resultaba mejor profesionalizar a sus cuadros. Sin de cuatro a dos reales y en Nuevo Leén serfa la tasa mds ge- embargo, investigaciones recientes sobre las cualidades del neralizada, ‘mando militar han encontrado en la Antigtiedad el “liderazgo Seguian disposiciones sobre la organizaci6n de unidades: heroico”, en el que los soldados siguen a su lider porque es ca- y cuerpos, y se establecian tres estados de la Guardia Nacio- paz de ascgurarles triunfos constantes. Se trata de un carisma nal, que se utilizaban para normar la distribucién de gastos especial basado en la habilidad, la inteligencia y el conoci- entre la federaci6n y los estados. La Guardia Nacional poia miento técnico de la guerra, Puestos a escoger, los soldados | estar en asamblea, en servicio de guarnicién o en campatia, Dreficren un lider capaz.y exitoso.* Fueron los casos de Alejan- En los dos primeros casos quedaban a las 6rdenes y expensas ro de Macedonia y de Julio César. Las elecciones solamente de los gobernadores; en el tiltimo, a las del presidente de la Re- Pablica. Esta era la forma de abrir la puerta a la federalizay * John Keegan, The Mask of Command, Penguin, Nueva York, 1988, cién de la guardia en casos urgentes, lo cual habia sido el pp 1391 98 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 9 formalizaron ese carisma. A la langa, en los lugares donde las El decreto del 1846 no Ilegé a ponerse en vigor porque elecciones fueron efectivas, la Guardia Nacional mexicana con. Ja toma de la ciudad de México por el ejército estadunidense lo 16, como fue el caso del Ejército del Norte, con los mejores oft dejé sin propésito inmediato, pero constituyé la base para ciales y jefes. A nadie se le sigue en un combate si no se tiene Ja legislacién definitiva, Provisionalmente, cuando se retira- plena confianza en su capacidad de mando. ¥ en el caso de los ron las tropas extranjeras tras el convenio de Guadalupe Hi- neoleoneses y coahuilenses, esa capacidad de mando habia sido dalgo, el decreto de Salas se aplicé como medida de emerge! ya demostrada por muchos futuros oficiales y jefes en el com. cia para conservar el orden en la ciudad de México. La capital bate con indios y Forajidos. tenfa desde tiempos coloniales la peculiar proclividad al desor- ‘Tan importante como las elecciones fue la disposici6n que den urbano y el pillaje cuando se experimentaba un vacfo de sefialaba que los jefes y oficiales “se conduciran como ciuda- poder en la ciudad. En 1848 atin no se olvidaba el saqueo de El danos que mandan ciudadanos”. De entrada podria pensarse Parian ocurrido 20 afos antes. Previsor ante un levantamien que era una disposicién demagégica, de compromiso cor: la to de los léperos capitalinos, el presidente Manuel de la Pefta y democracia que decian defender los liberales, un enunciado de Pefia dispuso, por decreto dado en Querétaro el 24 de agosto mero principio sin reflejo en la practica, Pero sf lo tuvo, al me- de 1848, poner en vigor el de Salas en la ciudad de México ante nos en el caso de la Guardia Nacional de Nuevo Le6n-Coahuila Ja inminente evacuacién del ejército de ocupacién para con- pues, a pesar de lo mucho que se indague, no se encuentran ca- servar el orden y la tranguilidad con tropas de Ia Guardia N: sos de maltrato 0 injusticia de los mandos con la tropa. Que- cional “formada de mexicanos que tienen intereses que perder jas hubo, pero mas bien relacionadas con las prestaciones que fen cualquier desorden’” las autoridades municipales tenfan que brindar a las familias El resto del pais tendria que esperar a la Ley Orgdnica de de los soldados en campatia. Por otro lado, se proporeionaban, la Guardia Nacional del 15 de julio de 1848 para organizar los incentivos para alentar el reclutamiento y para evitar desercio- contingentes estatales, que a partir de ese momento nacerian nes, pues el haber servido en la Guardia Nacional daba prefe- estrechamente ligados al orden y la seguridad interiores de los rencia para los cargos ptiblicos; y los lisiados y las familias de estados. La promulgacion de esta ley fue uno de los prime- Jos muertos en campana estaban seftalados para recibir bene- ros actos oficiales de José Joaquin de Herrera, presidente de ficios, segtin sus clases, idénticos a los acordados para los miem= Ja Reptiblica, al que le tocaria contender con la resaca de la bros del ejército federal derrota en la guerra con los estadunidenses. La medida fue Esta primera version institucional de la Guardia Nacional bien recibida, sobre todo en aquellos estados dominados por estaba pensada como un soporte mas en apoyo al orden esta liberales radicales. El periédico oficial de Nuevo Le6n, bajo la Dlecido, que en 1846, luego de la lamentable experiencia cen= direccidn del secretario de gobierno, Santiago Vidaurri, publi- tralista, era el de la Constitucién Federal de 1824, que habfa {6 notas provenientes de periédicos de otros estados en que se sido restaurada y sujeta a reformas. La misién que se le asig- ponfa por las nubes a la nueva ley. De Veracruz, por ejemplo, naba a la guardia en estas nuevas circunstancias se concretaba se reproducfa un articulo del periédico E! Guardia Nacional enel juramento que debian prestar en ceremonia ptiblica todos: (ni mas ni menos) que resaltaba las bondades de la nueva ins- titucién: estaba formada por ciudadanos, era propia de un sis- tema republicano, no gozaba de los “odiosos fueros militares", durdis a Dios y prometéis a la nacién que las armas que ésta 05 ayudaria a reducir los efectivos del ejército permanente, y ast Confia las emplearéis en sostén de su Independencia, de su liber por cl estilo. Voceros gremiales, como el Eco del Comercio, tad y sistema de gobierno, conservando el orden interior del Es: tado, guardando y haciendo guardar el debido respeto alas astos » Organo Oficial det Goblemo del Estado de Nuevo Latin, 27 de julio, 24 de ridades constituidas? agosto y7 de septiembre de 1848, sus miembros: 100 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL también apoyaron la creaci6n de la Guardia Nacional porque yeian en ella la tinica posibilidad para el restablecimients de la seguridad en los caminos del pais Las diferencias de la Ley de 1848 con el decreto de 1846 fue: ron pocas pero importantes. En primer lugar la nueva ley de~ claraba habiles para el servicio militar a todos los mexicans, varones. Ya no habia limites de edad, de hecho se trataba de una, versi6n de bolsillo del reclutamiento general francés de 1793, Al hacerlo asf, los mayores de 50 afios quedaban sujetos al im= puesto del exento, algo que se habia pasado por alto en e! des ereto. Las exenciones también se modificaron. Los rectores, directores y profesores, as{ como estudiantes y preceptores de ensefianza primaria ya no quedaban exentos, sino obligados a formar batallones especiales compatibles con sus obligaciones escolares. Esta disposicién sent6 la base para la militarizacién, de las instituciones de educacién media de los estados, cole= gios civiles o institutos literarios, que duré en algunas partes hasta bien entrado el siglo xx."" En cuanto a la organizacién, se desech6 aquello de guardia en asamblea, en guarnicién y en campafia, y se regres6 a la diss tincion entre guardia mévil y guardia sedentaria de las mili- cias anteriores, pero ahora atendiendo a la condicién de sus miembros, La mévil se formarfa con el seis por millar de le po- blacién, y se organizaria de modo tal que “en un caso preciso mente hacer servicio fuera del lugar de residencia duos’. Se integraban a ella en primer lugar los voluntarios, y el déficit se cubriria de acuerdo con asignacio- nes hechas por las autoridades municipales, procurando “hacer recacr la carga sobre los ciudadanos a quienes sea menos one- rosa atendida su edad, familia y género de industria, sin dar lugar a gracias personales”, La guardia sedentaria, “en el 2380 8 Fue el caso del Colegio Civil de Nuevo Ledn, creado por el gobernador Vidaurri,en cl eal slumnos y profesores quedaron encuadrados en unida- des de la guardia y fueron entrenados en ticticas de infanteria, Con la expe= dleién de la Ley del Servicio Militar durante la segunda Guerra Mundial se cere6 el Centro de Adiestramiento Colegio Civil, con sala de banderas en lt propia insttucién, para que los estudiantes preparatorianos cumpheran ‘con el servicio militar, Todavia a finales de los afios eincuenta del siglo a banda militar del Colegio Civil desfilaba el 16 de septiembre con su viejo tuniforme dela guardia: patio azul marino con raya de pantalén y vuelias ef rojo. LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 101 extraordinario de que la defensa nacional 0 las instituciones flo} hagan preciso” también podia salir en campatia fuera de su. Jugar de residencia. En ambos casos tendrian que observarse Jas formalidades previstas en la Constitucién [1824] para que el residente de la Republica pudiera usar las guardias naciona- Jes locales. Finalmente, en cuanto a detalles de la organizacion de la fuerza, se repetta lo dispuesto en el decreto de 1846: la Guardia Nacional se organizaria en infanterfa, caballeria y ar- tilleria; la primera en batallones, la segunda en escuadrones y Ja tercera en compafiias. Para formarla estaban el presidente de la Republica para el caso del Distrito Federal y Territorios, y Jos gobernadores en sus estados, quienes estaban autorizados para fijar el néimero de cuerpos a organizarse para cada arma ysefialar los cupos respectivos a las comunidades. Una ver inte~ igrados los padrones en cada municipio, éstos se daban a cono- ter a un jurado formado por el presidente municipal, que lo presidia, y cuatro oficiales de la Guardia Nacional electos por Ja corporacion municipal. El jurado calificaba las excepciones, separaba a los individuos destinados a la guardia mévil y a los batallones especiales, y distribufa al resto en las unidades fija- das por el gobierno. Los cuerpos de la guardia Mevarfan el nom- Ibe del distrito o los territorios federales o el del estado corres- ‘pondiente y s6lo se distinguirfan por el arma y el némero que Jes tocara segtin su antigtiedad. Asf, la Guardia Nacional en México nacié apegada al territorio, a los lugares de residencia de sus tropas; y no como en Francia, en donde el reclutamien- to en masa Ilev6 al reforzamiento de los cuerpos ya existentes del ejército revolucionario. Entre 1848 y 1867, afio este dltimo fn que se restaura finalmente la Reptblica, siempre fue clara Ta distinci6n entre Guardia Nacional y ejército de linea, aun en. él caso de que se mezclaran cuerpos por necesidades técticas En consecuencia, los choques entre jefes y oficiales de ambas eorporaciones fueron constantes, sobre todo durante la Gue- de Tres Anos. Del decreto de 1846 se reiteraron las formas, {de eleccion de cabos, sargentos, oficiales y jefes, asf como la prohibicién terminante de evitar el servicio recurriendo a los mplazos. Bl juramento también fue ligeramente alterado on el propésito de evitar pronunciamientos: “;Jurdis ante Dios, prometéis a la patria defender la independencia de la na- {Gdn y su sistema de gobierno, conservar el orden interior y LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 103 102 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL obedecer las leyes y las autoridades, sit tomar jamds delibera- a los Estados Unidos, la desarticulacién del comercio y la agri- cones sobre los negocios de Estado?” cultura, que provocs el decaimiento de la economia, asi como cuanto al servicio, pagos y haberes hubo algunas nove- el desprestigio y la desorganizacién del recién derrotado ejérci. dades. Cuando la guardia estuviese en guarnicién se les paga- {o permanente, trajeron consigo el recrudecimiento de los pro~ ria a la tropa, a los cabos y los sargentos tinicamente los dias, plemas de seguridad personal y comunitaria endémicos desde de fatiga siempre y cuando excedieran de uno al mes. Los je- Ja Colonia: el bandidaje, Ia inseguridad en Ios caminos y los fes y oficiales no recibirfan haber alguno en periodos de guar asaltos cn despoblado, males que se agravaban a medida que nicién, lo cual de alguna manera era un aliciente para que estt- Jas tropas estadunidenses se retiraban de los territorios oe! vieran mas que dispuestos a salir en campatia pados. Los estados del noreste fueron, por su situacién geogré- La ley era puntillosa acerca de a quién y en qué circunstan- fica, lugares obligados de ocupacién permanente, con tropas cias correspondian los gastos de la guardia. El armamento, por estadunidenses acantonadas en Matamoros, Tampico y Mon- ejemplo, que debia ser igual al del ejército de linea, lo costea- terrey. Cuando esas tropas de ocupacién se retiraron, se hizo rian los estados, pero en caso de estar bajo el mando del presi jimperioso tomar medidas y la mas préxima fue la de atender dente de la Repiiblica se obligaba al gobierno federal a reponer ala Ley Orgénica de la Guardlia Nacional de ese afio. Al menos las armas y municiones perdidas 0 gastadas durante la cam en Nuevo Leén el gobierno se empeiié con peculiar impetu en pafia. Se reiteraba el mérito de los miembros de la guardia cue Ja tarea detras de la cual se ubicé como propulsor principal se armasen a su costa y ordenaba que quienes se alistaran en Santiago Vidaurv, el secretario de Gobierno. la caballeria sedentaria debfan montarse y equiparse a sus cx- Organizar y disciplinar un ejército miliciano por pequetio pensas, lo cual seguramente fue un aliciente para que hubiera {que sea presenta serios problemas técnicos y politicos. Unos muchos voluntarios con recursos en este tipo en cuerpos des- tienen que ver con cuestiones logisticas relativas a recursos tinados a prestar servicio en sus localidades. umanos (reclutamiento) y con recursos econémicos (tinan- La ley negaba el fuero militar a los miembros de la Guar ciamiento y dotacién de haberes, alimentos, armamento y dia Nacional si cometian faltas o delitos del orden comin, pera municiones). Otros tienen que ver con cuestiones politicas tales, lo otorgaba para los casos de faltas graves y delitos del orcen como la aceptacién por parte de la poblacién (anuencia a la militar, incluso cuando servian para mantener la seguridad in- obligacién militar), el papel a desempeniar de las autoridades tema de sus territorios. Se reiteraba la prohibicién a la tropa civiles inferiores, principalmente los alcaldes, y las relaciones de prestar servicios personales a los jefes u oficiales, subrayardo de las autoridades superiores (gobernador y comandante de la asf la igualdad ciudadana de estos cuerpos. Sin embargo, se at guardia estatal) con los mandos civil y militar federales. Disci- torizaba la ayudantia porque no era un servicio personal, sina) plinar a un ejército implica, por otra parte, decisiones sobre las institucional. Se preveia que los servicios distinguidos ser‘an Hcticas en las cuales entrenar a suis miembros con ejercicios premiados conforme a las leyes que normaban el otorgamiento- constantes. Ambas cuestiones, organizaci6n y disciplina, se en- de medallas, premios y recompensas del ejército regular: treveran, ya que lo organico determina las tacticas y éstas con- jonan lo orgénico. Para Vidaurri los afios que corren entre 1848 y 1851 fueron de aprendizaje en materia de organizacién Los INICIOS DE LA GuaRDIA Nacional. EN Nuevo Leon militar, Este aprendizaje, adquirido por prueba y error, lo pr pararia para formar un ejército peculiar y eficaz a partir 1855, Los afios 1846 y 1847 se fueron en blanco en lo que correspon. tuna guardia regional que en nada se parecerfa a las guardias dea la organizaci6n de la Guardia Nacional en Nuevo Leén. El hacionales de otros estados, pues la suya, como alguna vez se aio de 1848 en cambio fue diferente, como insinué lineas a-ti Jo dirfa al presidente Benito Juarez, estaria formada por ver- ba. Los efectos politicos de la derrota y la cesién de territoria @aderos ciudadanos propietarios. Ciudadanos de los cuales 104 [LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL 105 tendrfa que obtener su anuencia para su politica militar y para sieron retribuirse con dineros mal habidos. A finales de julio los objetivos politicos de ésta, a la vez que mantenia el apoyo se dio una répida expedicion de esta banda, dividida en dos de todos ellos para conservar el cargo de gobernador partidas, sobre Villa Aldama y Bustamante; de la primera po. El gobierno federal habfa propuesto la Ley Orgénica de la blaci6n saquearon 21 casas con un botin de 14050 pesos; de Guardia Nacional para garantizar, a la vez, la seguridad inte. Ja segunda poblacién, 20 casas con un provecho calculado en rior y la defensa de las fronteras. Los estados del centro del pais 47000 pesos."” Eran grandes cantidades para esas poblacio- se vefan en 30s dias asolados por asaltantes y salteadores de nes; para tener idea de la pérdida se puede comparar con la caminos."" En Jos estados del noreste, en cambio, el prob ema contribucién total anual que debian aportar todos los muni- principal era distinto, pues las incursiones de los indios hosti- Cipios al sostenimiento del gobierno del estado, que ese ano les se recrudecieron con el desplazamiento de la frontera al oscilaba alrededor de los 38000 pesos. contar éstos con un refugio muy a la mano para frustrar las, En a secuela de estos hechos se dio a conocer, el 3 de agos- persecuciones en caliente, El afio 1848 marc6 ast el inicio de to, en Nuevo Leén, la Ley Organica de la Guardia Nacional, una febril actividad por parte del gobierno del estado para po- promulgada por el presidente Herrera, y al dia siguiente se ex. ner en pie a la Guardia Nacional. Siempre pendiente, detrs pidi6 la circular németo 17 del gobierno del estado llamando de las circulares y decretos para conformarla en el estado se ha- a todos los municipios a iniciar de inmediato el empadrona- aba Santiago Vidaurvi, coordinando trabajos y supervisando miento, cl reclutamiento y la organizacién de unidades de Guat alos alcaldes en el cumplimiento de las tareas que en torrente dia Nacional en sus jurisdicciones. En Nuevo Leén, al igual se les vinieron encima. Los siguientes cinco afios fueron los de que en los demas estados nortefios, sc tenia poca experiencia mayor aprendizaje en organizacién militar para el secre-ario en organivaciones milicianas a diferencia de los estados del de Gobierno, pues él fue quien le dio continuidad institucio- interior como Zacatecas 0 Jalisco. Habia experiencia, eso si nal a todas las medidas relacionadas con la organizaci6n de ka en la organizaci6n de partidas de vecinos para perseguir in. guardia estatal. Sirvié en tal calidad a tres gobernadores suce- dios. Con la nueva ley los problemas no tardaron en presen- sivos del tard{o periodo federal: José Maria Paras (que fal ecié tarse y las consultas de los alcaldes al gobierno del estado se en febrero de 1850), Pedro José Garcia, gobernador susti-uto, multiplicaron. y Agapito Garcfa, electo a principios de 1851. En 1853, cuan- El reclutamiento fue el problema inmediato que enfren. do Santa Anna regres6 de su exilio colombiano y restabiecié taron las autoridades estatales por la inquietud que desperts el centralismo, desapareceria temporalmente la Guardia Nax entre la poblaci6n. De entrada, la mayor preocupacién fue la cional en el pats diferenciacién que en la ley se hacfa entre guardia mévil y Vidaurri inici6 sus actividades de organizacion militer en guardia sedentaria, y la posibilidad de que el presidente de la un marco propicio para la prisa y los medios expeditivos. En Replica pudiera disponer de aquélla para servir lejos del junio de 1848 se supo en Nuevo Leén del levantamiento del ge= estado, No obstante que el gobierno estatal aclaré en diversas neral Mariano Paredes y Arrillaga en Guanajuato. Al mes sic circulares y decretos que la guardia mévil se formarfa primor- uiente, coincidiendo con la retirada del ejército estadunidense dialmente con voluntarios y s6lo en su defecto con reclutas, de Matamoros y el licenciamiento de los voluntarios exceden= bo ciudadanos que buscaron no servir o ser exentos y, en el tes, se formé en ese puerto una banda de asaltantes cuyos peor de los casos, quedar inscritos en alguna unidad sedenta- miembros, antes de retirarse a los Estados Unidos, se propu- ria. La reticencia a salir del estado no era cobardfa ni miedo a la lucha armada, Ademés del tradicional aislacionismo de la "Laura Solares Robles, Bandidos somos y en el camino andamas. Bandi doje, eaminos y administracin dejustcia en el siglo x, 1821-1858. El aso de Michoaedn, Instituto Michoacane de Cultura/Inslituto Joss Maria Luis Mora, ® Ongario Oficial del Gobierno del Estado de Nuevo Lain, 29 de junio, 2 y Mexico, 1999, pp. 27-249, 27 de julio de 1848, | 105 LA ORGANIZACION DE LA GUARDIA NACIONAL regién, los neoleoneses no querian alejarse del estado porque tenfan que defender a sus familias y patrimonio de los ataques de indios, y poca necesidad tenfan de que se les involucrara en las tenebrosas intrigas politicas de los estados del centro, plaga- dos de pronunciamientos y sublevaciones, Definitivamente, la politica nacional gozaba de excesiva mala fama en la region, Hasta entonces, desde todas las plazas de todas las poblacio- nes del estado, las oraciones civicas en las celebraciones de la Independencia habjan mentalizado a los ncoleoneses en los por menores de esa politica barroca, complicada y peligrosa propia del “centro”, cuando los oradores atacaban a tal 0 cual bardo en pugna en la capital del pais."* Si bien buena parte del a Jo que normaba las exenciones se haba redactado con el pros posito de proteger las principales actividades econémicas, a poblacién crey6 leer en ellas que también cabian razones dis- tintas para ser exentos del servicio activo. En 1848 y 1849, la Secretaria de Gobierno se vio inundada de representaciores, cartas y peticiones de reclutas o familiares de reclutados que argiifan razones personales 0 familiares para que fueran ex: tados. La avalancha fue de tal naturaleza que en algdn mo. mento se tuvo que divulgar que los interesados ya no se tras- ladaran a Monterrey para hacer gestiones ante el gobernadof, pues la decisién sobre servir o quedar exento era competen= cia de las autoridades locales. Con el tiempo estas actitudes cambiarfan, como veremos mas adelante en otro capitulo, una ver que penetré y arraigé el discurso compuesto por San iae go Vidaurri sobre el compromiso redentor con la “Libertad”, asf con maydiscula, que le tocaba desempefiar a Nuevo Leon en el combate contra la dictadura de Santa Anna y en la Gue= rra de Reforma. Los alcaldes, de propia iniciativa 0 incitados por los vecie nos, concretaron sus dudas en la categoria de exentos:

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