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Para : Javier.

El viento rozaba en el plido rostro de Fernando, mientras que de una colina


observaba a sus dolos. l es un nio delgado como el cable para enchufar
el ordenador, alto como un pino con dos aos de edad, y simptico como un
pequeo cachorro de perro. Aunque algo mal hablado y bastante cabren.
Bueno sigamos contando su historia y no nos vayamos a los defectos.
Sus dolos eran los grandes jugadores de ftbol, ya que l soaba con llegar
a ser uno de ellos.
Sus amigos se burlaban de l porque decan que no saba jugar, as que se
deprimi y no quiso ir a jugar ms partidos de competicin. Pero Fernando
sin embargo segua entrenando porque sobretodo disfrutaba jugando al
ftbol. Y por eso se iba a la colina para que los dems no le vieran, no se
rieran de l y poder disfrutar del deporte que amaba. Fernando apenas iba
a su casa, ni para comer porque estaba todo el da entrenando, sus padres
lo vean tan entusiasmado que decidieron apuntarlo a un club de ftbol. Al
principio no quiso asistir a los entrenamientos, pero la familia le anim y
todos se implicaron para que Fernando pudiese hacer sus sueos realidad.
Su padre sacaba tiempo de debajo de las piedras, su abuelo iba a gatas a
ver a Fernando, su abuela y su Tio abuelo se convertirn en muecos de
nieve con tal de que Fernando disfrutara, su hermana por muchoooossss
deberes que tuviera se pona a hacerlos en el campo de ftbol para animar
a su hermano ah! El baby tambin iba los aos pasaron y el tiempo
cambi, y justo hoy Fernando tendr el mejor da de su vida. Uno de sus
dolos en su infancia le ofreci ocupar su puesto en la gran final, porque l
llevaba tiempo observando a Fernando y le pareca que jugaba muy bien,
adems no tena mas remedio, se haba lesionado un tobillo. Fernando se
qued sin palabras y tartamudeando acept. No jugaron en un estadio
habitual si no en uno que se estaba construyendo precisamente para la
final, el estadio pareca un campo plagado de margaritas silvestres, con un
montn de abejas a su alrededor, pero esas flores tan hermosas resultaron
ser globos que haban puesto para la inauguracin.

Nos queda poner el mote

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