Amanecer a las doce

Por
Isidoro Legido Martínez

Idea Propia

Creative Commons Isidoro Legido Martínez

Reconocimiento-No comercial islegmar@gmail.com
2.5 España
http://creativecommons.org/licenses/by-nc/2.5/es/
1 EXT. NOCHE. CALLE
Es una noche de verano. El cielo está muy claro y del
cielo cuelga una gran Luna llena, espectacular, enorme.
Refresca un poco. Por una calle adoquinada, apenas
iluminada por la luna, camina un grupo de TRES PERSONAS:
RAMÓN (55 años), ANTONIA (58 años) y TAMARA (17 años). Los
tres cargan con bolsas de plástico.
RAMÓN
¿Has cogido las tortillas?
ANTONIA
Siiií.
RAMÓN
Mira que no me gustaría tener que
tragarme las de tu amiga la Juani
¿Cómo puede llamar tortilla a
algo que no lleva cebolla? ¿Y el
Lepanto, lo has traído?
ANTONIA
¡Que sí, pesao, que sí! ¡Si es
que me vas a dar la noche! Para
una vez que salimos juntos.
RAMÓN
Tranquila, que si esto sale bien
lo podemos repetir más a menudo.
Ramón le tira un beso a Antonia. Antonia se ríe.
ANTONIA
Tonto.
TAMARA
Jo papa, a ver si paramos ya con
estas bromitas, que llevas toda
la semana así y ya no tienen
ninguna gracia.
Se une al grupo JUANI (50 años), que también va cargada
con bolsas.
JUANI
Hola vecinos. Qué ¿a la playa?
Hace una noche preciosa ¿verdad?
Juani se arrebuja en la chaqueta de punto que lleva sobre
sus hombros.
TAMARA
Para lo que va a servir...
 2.

ANTONIA
(seria)
¡Tamara! ¿Quieres parar ya, por
favor? Si es que nos vas a dar la
noche.
(sonriendo a Juani)
Pues sí, nos vamos a encontrar
todos los vecinos. Va a ser muy
bonito.
JUANI
Y Ramón, no creas que me he
olvidado de esa tortilla que
tanto te gusta.
Ramón le dedica media sonrisa.
RAMÓN
No sabes como te lo agradezco.
Siguen caminando. Un pesado silencio se apodera de la
comitiva.
JUANI
Bueno, yo si eso me adelanto, que
luego aquello se va a poner
imposible. Iré donde las duchas
¿os guardo un sitio?
ANTONIA
No te molestes...
RAMÓN
Gracias, ya nos veremos por ahí.
Juani marcha y Antonia la sigue con la mirada. Ramón se
para ante la entrada de un bar.
RAMÓN
Venga, os invito a tomaros una
última en casa de mi compadre.

2 INT. NOCHE. BAR

RAMÓN, ANTONIA y TAMARA entran en el bar. Es un local
sencillo, nada de diseño: tapas, quintos y mesas de las
que resulta difícil despegarse. Sentado en la barra hay un
BORRACHO (65 años) bebiendo vino tinto. Tras la barra está
JUANILLO (54 años), dueño del bar.
RAMÓN
¡Buenas noches nos de Dios!...
Ramón se sienta en el taburete de la barra y deja las
bolsas en el suelo, mientras Antonia y Tamara se ponen de
pie a su lado. Ramón golpea la barra.
 3.

RAMÓN
Y si no ¡también, que cojones!
Venga, que invito a toda la
parroquia a lo que quieran ¡un
día es un día!
Se acerca lentamente Juanillo mientras seca un cuchillo
jamonero con un trapo.
JUANILLO
Ramón, Ramón....
Juanillo mueve el cuchillo por delante del rostro de
Ramón.
JUANILLO
Tanto tiempo sin pasarte por mi
bar... y apareces así, de
repente, tan generoso.
De la cocina, situada tras la barra y separada por una
puerta ataviada con una cortinilla de plástico verde, sale
GLORIA (40 años), mujer de Juanillo, quien se sitúa a su
lado.
RAMÓN
No te lo tomes a mal Juanillo,
pero en realidad venía a ver a tu
mujer ¿qué hay de esas rondas?
Juanillo saca un quinto de la nevera.
JUANILLO
A todo el mundo le ha dado hoy
por invitar ¡hasta "El Matalobos"
ha invitado!
Juanillo señala con la cabeza al borracho, quien se da por
aludido y devuelve el saludo levantando el vaso de vino.
JUANILLO
Así que he decidido ser yo el que
invite ¡Mañana... mañana ya será
otro día!
Juanillo le pone el quinto a Ramón. Cuando Ramón lo va a
coger, lo toma Juanillo, se lo bebe casi de un trago, y lo
vuelve a dejar en la barra.
JUANILLO
Te he dejado el culín ¿no te
importa?
(a Antonia y Tamara)
Y vosotras ¿Qué os apetece?
Tamara niega con la cabeza. Antonia coge del brazo a
Ramón.
 4.

ANTONIA
Venga Ramón, vámonos a ver si al
final vamos a llegar tarde.
RAMÓN
Pues sí, si algo hay seguro es
que mañana será otro día.
Ramón se bebe lo que queda de cerveza. Gloria intenta
regresar a la cocina, pero Juanillo se lo impide
agarrándola del brazo.
JUANILLO
¿No te irás, sin despedirte antes
del buen amigo Ramón?
Gloria se queda quieta. Mira a Juanillo y a Ramón y se
acerca poco a poco a la barra, sin decir nada. Ramón se
incorpora de su asiento y le planta un largo y apasionado
beso en la boca de Gloria, quien no opone resistencia.
Antonia mira desaprobadamente a su marido.
TAMARA
¡Papá!
ANTONIA
Venga Ramón, vámonos.
Gloria y Ramón terminan de besarse.
GLORIA
Adiós Ramón.
RAMÓN
¿Nos veremos en la playa?
GLORIA
No creo, tengo mucho lío por aquí
esta noche.
RAMÓN
¡Mujer!
Gloria se va y Juanillo se acerca a la barra, hasta
situarse frente a Ramón. Juanillo sale de la barra y
avanza hasta donde está Ramón, con media sonrisa, meneando
la cabeza y señalándole con el cuchillo.
JUANILLO
Ramón... Romero... Riaza... El
"Tres Erres". En el cole te
llamábamos el pedorreta ¿te
acuerdas?
Cuando Juanillo está junto a Ramón, Juanillo tira el
cuchillo al suelo y le da un gran abrazo.
 5.

JUANILLO
¡Pero qué cabronazo estás hecho!
Pero mira, me alegro por ti,
tú... tú has acabado haciendo lo
que querías hacer, y no has
acabado amargado con lo que
podría haber sido y no fue.
RAMÓN
Ya me hubiese gustado hacer lo
que había querido. He hecho lo
que se ha podido Juanillo, lo que
se ha podido.
ANTONIA
Qué ¿ya has terminado de hablar
con tu amiguita y el calzonazos
de su marido? ¿Ya nos podemos ir?
JUANILLO
Pero Antonia ¿vas a estar de mal
humor hasta el último día de tu
existencia? Ven aquí y dame un
abrazo.
Juanillo se acerca a Antonia, pero ésta le aparta con
brusquedad.
ANTONIA
Déjate de bobadas, y a ver si por
una vez puedes vigilar a esa y
podemos tener la noche en paz
aunque sólo sea una vez.
Antonia marcha y Tamara le va detrás.

3 EXT. NOCHE. CALLE

RAMÓN sale corriendo tras ANTONIA y TAMARA.
RAMÓN
Joder, ¿queréis hacer el favor de
esperar?
Ramón llega al lado de ANTONIA y le coge el brazo. Antonia
se apoya su cabeza en el hombro de Antonio: caminan como
dos enamorados. TAMARA aprieta el paso y se aleja de
ellos.
RAMÓN
¿Y ahora? ¿Qué le pasa a esta?
ANTONIA
Déjala, que la chica es todavía
muy niña. Pobrecica... ya nunca
sabrá lo que es el amor de
verdad.
 6.

Tamara se gira y se encara a sus padres, muy enfadada.

TAMARA
Pero... pero... ¿soy yo la única
que todavía conserva el sentido
común o qué es lo que pasa? Papá
te deja en ridículo delante de
todo el mundo dándose el lote con
su ... con su... y tú, tú... te
quedas ahí....
Ramón se acerca a su hija, pero ésta retrocede.
TAMARA
Y tú... ¿no te podías aguantar un
par de horas? ¿Tenías que irte
dando el espectáculo, como
siempre?
RAMÓN
Tamara, hija mía ¿de qué iba a
servir? ¿Por qué disimular?
Tamara empieza a respirar con dificultad y rompe a llorar.
Ramón la rodea con sus brazos en intenta consolarla.
TAMARA
¡Esto es una mierda, una mierda!
Esta noche es una farsa ridícula,
absurda.
RAMÓN
Venga ¿de qué sirve amargarse, si
no se puede hacer nada? ¿No
habíamos dicho que esta noche era
para nosotros, para disfrutar?
Antonia se une al grupo y los tres forman una piña y se
alejan calle abajo, hacia la playa que está iluminada. Por
las calles adjuntas van apareciendo grupos de gente: todos
se dirigen a la playa.

4 EXT. NOCHE. PLAYA

RAMÓN y ANTONIA están sentados en la playa. TAMARA se
levanta y marcha.
TAMARA
Voy a saluda al la Jenny un
momento.
ANTONIA
Bueno, pero no tardes, que
tenemos que estar todos juntos.
 7.

TAMARA
¡Que sí! Pesada...
ANTONIA se tumba, recostándose en el regazo de RAMÓN,
quien le da un piquito.
RAMÓN
La verdad es que no te entiendo.
ANTONIA
¿Qué quieres decir?
RAMÓN
Ahí está la Juani, esperándote
¿no le vas a decir nada?
Antonia mira asombrada a Ramón.
RAMÓN
Antonia, que son muchos años.
Ramón acaricia dulcemente a Antonia, quien baja la mirada
avergonzada. Ramón le da un beso en la frente.
RAMÓN
¿Por qué no vas con ella y estáis
por fin juntas? No creo que
importe ya.
ANTONIA
No lo he hecho hasta ahora y no
pienso hacerlo ahora.
RAMÓN
¡Mira que eres cabezota! Es que
llega el fin del mundo y tú
sigues con tus normas y tus
dichosas apariencias. ¿No puedes
relajarte un poco y actuar de
manera impulsiva?
ANTONIA
¿Cómo tú con esa pelandrusca en
el bar?
Antonia está irritada, pero Ramón intenta ser en todo
momento muy cariñoso.
RAMÓN
¿Y qué querías que hiciese?
¿Acaso podía darte lo que tú
necesitabas? Anda, vete con ella.
ANTONIA
(con media sonrisa)
¿Tienes remordimientos? No creas
que voy a dejarte que te vaya de
rositas...
 8.

Ramón mira con infinita ternura a Antonia y le acaricia el

cabello. Ella intenta zafarse, sin demasiado empeño.
Finalmente, Ramón alza a su mujer y la toma entre sus
brazos.
RAMÓN
Eres lo mejor que me ha ocurrido
en mi vida... no sabes lo que he
sufrido sabiendo que no podía
hacer nada por corresponderte.
ANTONIA
Podrías haberte quedado conmigo,
como he hecho yo.
RAMÓN
¿Y ser siempre infeliz?
ANTONIA
¿Y así has sido más feliz? ¿Y
quien te dice que yo haya sido
infeliz? ¿De verdad lo has pasado
tan mal estando conmigo?
RAMÓN
No es eso, es que.... ¡No sé
porqué no te hago caso siempre!

5 EXT. NOCHE. PLAYA

La playa está llena, ha quedado en silencio. Empieza a
oírse un lejano PITIDO. Un murmullo recorre la playa.

6 EXT. NOCHE. PLAYA

ANTONIA y RAMÓN siguen abrazados.
ANTONIA
¡Tamaraaaa! Ven para aquí.
TAMARA (OFF)
Ya voy.
RAMÓN coge la mano a ANTONIA, quien le acaricia la cara y
le da un beso en los labios. TAMARA llega y se sienta ente
los dos. Los tres, como el resto de la gente, están
mirando al horizonte, donde se ven muchas estrellas y una
luna llena espectacular. Ramón, Antonia y Tamara tienen
los brazos entrelazados. El horizonte empieza a iluminarse
y el pitido aumenta de volumen.
RAMÓN
Será bonito, ver amanecer a las
doce de la noche.
 9.

TAMARA
¿Y desaparecerá todo, la Luna y
las estrellas también?
ANTONIA
¿Y eso importa, hija mía?
TAMARA
Sí, me daría mucha pena que por
nuestra culpa todo esto... es tan
bonito... tendríamos que haber
venido más a menudo a la playa de
noche.
RAMÓN
Sssssh.
El brillo blanco lo inunda todo, no se ve nada más. Por
encima del pitido se oyen los las voces de la gente.
VOCES
Te quiero... Perdóname... Siempre
te quise... Nunca te podré
olvidar... Te quiero... Te
quiero... Perdón...Ojalá....Ya es
tarde... Siempre te amaré...
El sonido se hace insoportable y la pantalla es totalmente
blanca. Poco a poco desaparece la luz y todo vuelve a
queda a oscuras y en silencio. Sólo se ve el cielo. La
Luna ha desaparecido. Poco a poco se van apagando las
estrellas.