Professional Documents
Culture Documents
INTRODUCCIÓN:
Después de la accidentada
experiencia del año pasado nos quedamos
con ganas de camino . El comienzo lo
realizamos desde Fuenterroble de
Salvatierra y Pepe sufrió un accidente a los
siete kilómetros de la salida. A él le
impidió realizar el camino y a nosotros, el
faltarnos un compañero , nos impidió el
disfrute del camino tal y como nos hubiera
gustado.
En este año, me plantee realizar la
peregrinación desde la puerta de mi casa,
en parte por resarcirme del año pasado. Mi
pensamiento era realizarlo solo, pero mi
vecino Juan me dijo que é l también lo
quería hacer conmigo. La verdad es que pensé que no iba en serio, Juan
con 60 tacos, sin coger nunca bicicletas durante tantos días seguidos y a
una media de cien kilómetros diarios, creí que al final cambiaria de idea y
no me acompañaría. Sin embargo pronto me haría cambiar de opinión, lo
veía salir todos los días a entrenar, a machacarse, con una voluntad
tremenda y al final me acompaño e hicimos un camino bastante bueno,
sin accidentes, sin enfermedad alguna, con buen compañerismo. S olo el
cansancio que se iba acumulando día a día . Y es que hacer los 1 .100
kilómetros en once etapas, son muchas pedaladas al día.
En conclusión, todo bien, buena relación entre nosotros, sin
discrepancia alguna. Tan solo mencionar el hecho de que al final hicimos
demasiada carretera, para mi gusto. A Juan no le iban bien los caminos y
por esta razón tuvimos que ir alternando camino y carretera.
Ahora hay que esperar a las próximas vacaciones de verano para
emprender un nuevo camino.
Deseamos que la narración de nuestras andanzas, por e sos
senderos, ayude a cuantas personas realicen el Camino de Santiago de la
Vía de la Plata por Sanabria y hasta Santiago de Compostela.
No intentamos hacer una guía del camino, ya existen muchas. Lo
que queremos es comentar nuestras vivencias durante el recorrido, junto
con algunas anécdotas que nos acaecieron.
Con esa sana intención queremos hacer llegar esta memoria a una
amplia mayoría de personas y al mismo tiempo , que la lectura no se
convierta en un tostón. Por el contrario, esperamos que sea amena y
entretenida.
2
1ª Etapa: Coria del Río – Almadén de la Plata
17 de Julio
Kilómetros: 83,41
Media por hora: 13,00
Velocidad máxima: 56,7
Salida: 7:30 h.
Llegada: 15:00 h.
Tiempo pedaleo: 6:23 h.
Tiempo real: 8:30 h.
La primera etapa la
empezamos en la puerta de casa,
a las 7 de la mañana. Es la hora
adecuada. Por estas fechas ya
tenemos luz diurna.
Nos dirigimos al centro de
nuestra localidad, Coria del Río.
Unos amigos habían prometido
que nos acompañarían durante
este primer tramo. Esperamos y al
ver que pasaban de las 7,30 y
nuestros amigos dormilones no
aparecían, comenzamos a
pedalear para vivir nuestra
aventura.
Pasamos por Itálica y no paramos siquiera, será que al tenerlo tan
cerca no sabemos apreciar ese legado.
Llegamos a Guillena y como de
costumbre desayunamos en el Bar El
Frances. Tostaita con su aceite de oliva.
Por este nuestro sur hay que
aprovechar las tostaitas
que más arriba se acaban.
Salimos de Guillena
en dirección Castilblanco,
los olivares y frutales,
pronto se permutaría n en
dehesas de alcornoque y
encinas.
A mitad del trayecto , o
sea, a los 8 kilómetros se
puede localizar un pozo
donde se puede reponer el agua . Es potable, rica y fresca.
Un letrero en varios idiomas indica donde esta el pozo .
3
En principio nuestra intención era terminar esta primera etapa en
Castilblanco de los Arroyos, pero llegamos temprano, sobre las 11,30 de
la mañana y fue por eso que tomamos la errónea decisión de
avituallarnos y llegar hasta Almadén de la Plata . El calor era tremendo y
temía a la subida final del día: El Monte del Calvario.
Antes de llegar a la s puertas del Parque del Berrocal surgió la
primera avería. El freno delantero de Juan había perdido un tornillo , igual
que nosotros, (pensé en ese momento) . Le hicimos una chapuza y
proseguimos nuestro camino . La chapuza resulto no ser tal pues duro
todo el camino.
El calor era sofocante
en el asfalto y entre el
tiempo que perdimos con
la avería y algunas
paradas para refrescarnos,
llegamos a la entrada del
Parque del Berrocal sobre
las 13 horas y a la subida
del Calvario a las 14,30,
¡¡casi ná!!
Lo pasamos fatal en
la subida, con avances de
apenas 4 o 5 metros y
descansando a la sombra
de cada una de las encinas
que hay en la cuesta.
Durante la ascensión se me rompieron los botines de la bici. Menos
mal que llevaba unos pedales mixtos y con los botines normales hice
todo el camino.
Si la subida al Calvario la recordaba dura de por si, parece ser que a
un lumbrera se le había ocurrido, no hace mucho, la idea de pasar una
maquina , trillándola, lo cual la endureció aun más.
Pero bueno, al final te reconforta admirar ese magnifico espectáculo
natural que se observa desde el mirador . Creo que eso es lo que año tras
año te ayuda a subir esta cuesta mítica de la Vía de la Plata.
Llegamos a Almadén y
nos dirigimos a la piscina
municipal. Al principio nos
pusieron pegas para pasar
con las bicis, pero al final las
dejamos dentro, junto a la
portería.
Después de un baño
reconfortante nos comimos
un serranito estupendo en el
bar de la piscina, regado con
zumo de cebada bien
fresquito.
4
Ya recuperados y con la tripita a rebozar de cerveza y serranito
nos dirigimos al albergue . Resulta que ese día se celebraba una maratón
de futbito en Almadén y los chavales que
venían de fuera dormirían en el
albergue. Presentía una noche movidita.
En el albergue encontramos a dos
peregrinos, uno de ellos era madrileño,
Pedro que tuvo la fatalidad de sufrir un
esguince andando por las aceras de
Castilblanco, con todo ello consiguió
llegar hasta Almadén donde el medico le
recomendó dos semanas de descanso,
sentenciando así de esta manera su
camino. Esperamos que te recuperaras y
prosiguieras tu camino, saludos Pedro.
También nos acompañaba en el
albergue una bicigrina vitoriana , Celeste, que hacia el camino sola con su
bici. Las hay que los tienen bien puesto s. Después de charlar durante un
rato y entre salidas y entradas de los chavales futboleros caímos en los
brazos de Morfeo.
Después del rato de charla cada uno a su cama, que las seis de la
mañana llega muy ligero. Celeste quedo en hacer el camino hasta
Alcuescar por carretera y que allí nos veríamos, parece ser que algo falló
por que ya no volvimos a encontrarnos y como tampoco nos pasamos los
números del móvil, no pudimos contactar . Esperamos que haya s tenido
un buen camino, un saludo coriano, Celeste .
6
3ª Etapa: Los Santos de Maimona – Alcuescar
19 de Julio
Kilómetros: 107,86
Media por hora: 16,35
Velocidad máxima: 47,1
Salida: 7:15 h.
Llegada: 16:15 h.
Tiempo pedaleo: 6:35 h.
Tiempo real: 9:00 h.
7
Nuestra estancia en Mérida fue prácticamente una entrada por una
salida. Nuestra intención era hacer una parada en el Embalse de
Proserpina y darnos un chapuzón. Nos bañamos y comimos en uno de los
chiringuitos del embalse.
La siguiente parada para reponer agua fue en Aljucén y un poco
después llegamos al final de la etapa del día, Alcuescar. Era la hora de la
siesta, así que e speramos un rato
hasta que nos recibieron. Aquí hago
un inciso, quiero realizar un
reconocimiento a la labor que
desempeña el Convento Esclavos de
María y los Pobres. Al peregrino lo
tratan como de la familia. Por eso a
este albergue lo considero como un
oasis para peregrinos, además
resaltar la gran labor que hacen por
las personas con incapacidad psíquica.
Es de alabar ese trabajo
desinteresado que hacen desde la
década de los 60.
El hospitalero se llamaba
Pepe, estaba de manualidades,
recreando la iglesia de su pueblo e n
Burgos y la verdad es que le estaba
saliendo bastante bien.
Después de asignarnos
nuestra habitación hicimos la
colada y limpia mos las bicis, las
guardamos en un garaje exterior
donde el hospitalero guarda
también su coche.
A pesar de que en el
albergue nos invitaron a cenar,
preferimos dar una vuelta por la
localidad y conocer algo de la
misma. Además la cena en el
albergue era demasiado temprano.
Al pasar por el centro urbano
entramos en un edificio municipal
que resulto ser la biblioteca . Tenían
Internet y aprovechamos para
poner al día nuestros correos.
Cenamos en Casa Alejandro ,
bien y un precio asequible. Sobre las diez se cierra el albergue, así que
prontito a la ca ma y a descansar para el día siguiente.
8
4ª Etapa: Alcuescar – Cañaveral
20 de Juli0
Kilómetros: 87,47
Media por hora: 15,60
Velocidad máxima: 50
Salida: 7:00 h.
Llegada: 15:00 h.
Tiempo pedaleo: 5:24 h.
Tiempo real: 8:00 h.
Nos levantamos bien temprano y esperando a que el hospitalero
abriera el garaje, nos tomamos un pequeño desayuno consistente en
unos dulces y zumos. Al final, viendo que no aparecía el hospitalero, lo
llama mos al móvil para que nos abriera la puerta, nos abrió , preparamos
las bicis y salimos pitando hacia el camino . En este tramo se conservan
bastante bien los restos romanos y
donde vemos los primeros miliarios
de verdad.
En Casas de Don Antonio
paramos para echarnos unas fotos,
Además, justo antes de llegar a
Valdesalor echamos a faltar una
bomba manual en un pozo junto al
camino. Esperamos que no haya sido
un golfo que la ha ya mangado y solo
sea por una avería. En días de calor
un buen refrescón viene bien.
Nuestra intención era visitar la
Ciudad Monumental de Cáceres,
pero, a consecuencia de unas obras
en la plaza , la accesibilidad para las
bicis estaba bastante complicada , así
que decidimos continuar hacia Casar
de Cáceres.
9
Realizamos una parada en Casar de Cáceres para comprar
avituallamientos y r eponer agua. El camino hasta Cañaveral es seco y
solitario, exceptuando algunas fincas con ganado. Nos comimos el bocata
mañanero y paramos a sellar en el Bar Majuca .
Durante el camino hasta Casar de Cáceres coincidimos con varios
peregrinos, pero después no vimos a ninguno hasta llegar a Cañaveral .
Total, que al fin llegamos,
después de sudar la gota gorda . Nos
paramos en la fuente para
refrescarnos y allí conocimos a
Elena , una chica encantadora que
hacia sola el camino. Buscaba un
sitio que le habían recomendado
para comer. De haber ido con ella
hubiéramos acertado, pues según
ella, comió muy bien por 9 €, en el
Restaurante Villa de Cañaveral .
Bueno, pues nosotros
llegamos al albergue, dejamos las bicis dentro y buscamos algú n sitio
para comer, al final fuimos al peor, el bar Taiko , de la piscina municipal .
Se paso un par de pueblos en el precio, para la comida que nos puso.
En el albergue está bamos solos, porque Elena se fue por la tarde
para hacer el tramo hasta Grimaldo. Después nos enteramos que
también estuvo sola en ese albergue, nos contó que el albergue estaba
muy bien y además gratuito.
10
Pues eso, salimos de Cañaveral y preferimos subir el Puerto de los
Castaños por la N-630, muy tranquila y el tráfico rodado prácticamente
nulo, quizás nos adelantaron un par de coches, no más.
Pasamos por Grimaldo y nos vino a la mente Elena, la peregrina
del día anterior, al poco rato la encontramos por el camino, charlamos un
rato, nos deseamos buen camino y seguimos pedaleando .
Paramos en el bonito pueblo de Galisteo, en el cual comimos el
bocata mañanero , con un poco de fruta.
El siguiente pueblo es Carcaboso. Aquí hay que llenar los botes de
agua, nos queda un trozo de etapa con pocos sitios donde reponerla.
Un poco antes de llegar al Arco de Caparra encontramos a un
paisano, haciendo el camino a pie desde
Sevilla. Como es natural nos bajamos de
la bici, le ofrecimos si le hacia falta algo y
nos dijo que no, que iba bien. Pensaba
dormir bajo el Arco de Caparra. Le dijimos
que preguntara si le podían dejar dormir
debajo de la marquesina del Centro,
después de un buen rato de acom pañarlo
le deseamos buen camino y proseguimos
nuestra ruta.
Visitamos el Centro de
Interpretación de la Ciudad Romana y charlamos un rato con la persona
encargada del centro . Ya no dejaban dormir allí, mala suerte para el
paisano, tendría que quedarse bajo el Arco de Caparra. Compramos en
las maquinas expendedoras unos refrescos, agua fresca y a pedalear de
nuevo.
Esta visto que el ser humano es el único animal que tropieza más
de una vez en la misma piedra, me refiero al tramo de autovía hasta
Aldeanueva de Camino. Es la segunda vez que me equivoco tirando por
el camino pegado a la autovía, al final no tiene salida y o sigues o
retrocedes ¡¡ Eso nunca!! Para atrás, ni para coger impulso, seguimos
adelante con el riesgo de que nos pusieran una multa por circular por el
arcén de la autovía.
Hay que ir muy atento a las señales en ese tramo, pues te
confundes rápidamente .
11
Al final llegamos a Aldeanueva del Camino más de las tres de la
tarde, comimos en un bar de la carretera y entre el almuerzo y un
pinchazo de Juan nos encajamos en las cinco.
Nos entró la punza y seguimos para llegar hasta Fuenterroble de
Salvatierra, mala hora en que lo decidimos , ¡¡tela marinera!! La subida a
Baños de Montemayor, el Puerto de Bejar, la subida de cabras hasta
Calzada de Bejar y después los repechos entre Valverde de Valdelacasa y
Valdelacasa nos dejo ya listos de papeles, al final llegamos a
Fuenterroble a las 21:30 horas. Nos recibieron como siempre, con
amabilidad y ofreciendo lo que tienen, que no es poco.
Calzada de Bejar
13
Una vez en la ciudad buscamos un taller de bicicletas, había que
arreglar la maneta del freno de la bici de Juan, tan solo era apretar un
tornillo, pero no disponíamos de esa llave allén, más larga de la cuenta .
En Bicis Palacios el mecánico nos apretó el tornillo en un momento ,
pero, también quería el truhán cambiar las pastillas de frenos, las cuales
eran nuevas flamantes. Menos mal que le dijimos que no, si no nos
cambia hasta la bici. Al final le pagamos y seguimos nuestro camino.
Tomamos nuestro
bocata correspondiente y
después de sellar en el
albergue y visitar Salamanca,
proseguimos hasta el final de
nuestra etapa de hoy,
decidimos que fuera Calzada
de Valdunciel, con idea de
hacer la colada, no se hizo el
día anterior, y descansar un
poco para recuperarnos del
cansancio de tantos kilómetros
acumulados en las piernas.
Una vez en Calzada
llamamos a la hospitalera que
enseguida llego, nos entregó
la llave del albergue y tomó nota de nuestros datos para su registro, se
cobra un donativo.
En una sala municipal
de usos múltiples hay acceso
libre a Internet, como no
había ningún ordenador libre
la hospitalera, que también
era la encargada de esa sala,
me prestó gentilmente su
portátil y pude repasar mis
correos. Muchas gracias.
En el albergue
estábamos solos, por lo
pronto. Así que nos duchamos
y nos fuimos en busca de la
piscina municipal para
refrescarnos y tomar unas cervezas. En el bar de la misma piscina nos
tomamos unas tapas y un bocata caliente de pechuga de pollo, muy
bueno y barato. El café lo tomamos en el Bar El Sevillano y vimos la
etapa reina del Tour de Francia. El resto de la tarde la echamos en
realizar una ITV a las bicis y hacer la doble colada, al final dormimos
como los ángeles, solitos en el albergue.
14
7ª Etapa: Calzada de Valdunciel - Tábara
23 de Julio
Kilómetros: 102,62
Media por hora: 15
Velocidad máxima: 51,8
Salida: 7:10 h.
Llegada: 16:10 h.
Tiempo pedaleo: 6,53h.
Tiempo real: 9 h.
15
Llegando a Tábara coincidimos con unos peregrinos en bicicleta
que también buscaban el albergue. Después nos enteramos que eran
extremeños.
En el albergue ya estaban dos alemanas y un valenciano, a sí que
ese día no dormiríamos solos.
Salimos todos a sellar y a
recoger la llave del albergue , lo
hicimos e n el centro de turismo de
la torre en la Iglesia Románica de
Santa María, allí echamos un rato
entretenido por la amabilidad de la
encargada del ce ntro.
El albergue admite donativo y
hay que resaltar que en el exterior
del mismo se han producido
reformas. Se ha vallado y se han
construido unos boxes para los
caballos, asimismo han construido
un centro de salud a la espalda del albergue, con tan mala fortuna que el
movimiento de tierras se ha cargado el manantial del lavadero exterior.
16
Salimos sobre las 7 de la mañana, como casi siempre. A ntes
tomamos unos zumos y dulces, también como casi siempre, y tiramos
carretera “avanti” con la intención de enco ntrar ese ficticio camino
nuevo. No lo encontramos y llegamos hasta Mombuey por carretera. Allí
nos separamos de los cacereños. Ellos se quedaban a dormir en Puebla
de Sanabria y nuestra etapa terminaría más adelante, en Lubián.
Compramos en Mombue y el bocata mañanero y nos lo comimos . En la
reanudación dejamos la carretera y tiramos por caminos no asfaltados .
Al pasar por Asturianos nos entretuvimos en conocer el nuevo
albergue de peregrinos: un buen albergue, ubicado en un lateral del
polideportivo municipal, con 6 camas, buenos aseos y que cuesta 4
euros. En el Restaurante del Polideportivo te ponen menú por 9 euros.
Almorzamos en el
Restaurante Tu Casa , unos 200
metros más adelante del albergue,
como siempre, buen trato, buena
comida y buen precio del menú: 6
euros. Comimos estupendamente.
17
Después de comer había
que subir el Puerto de Padornelo ,
así que lo tomamos con calma .
Echamos una hora de siesta y ya
preparados para partir , vimos
que la rueda de Juan estaba
pinchada, arreglamos el pinchazo
y empezamos la subida con toda
tranquilidad.
En el restaurante nos
dijeron que el camino no estaba
transitable para las bicis, así que
decidimos hacerlo por la nacional
que no tiene tráfico ninguno.
A estas alturas se nota que el clima es más fresco . Después de
subir el Padornelo, nos tuvimos que poner el chubasquero por el frío que
hacia al bajar.
Llegamos a Lubián y como ya
conocía el albergue fuimos
directamente al mismo. Juan quería
llegar a Agudiña . Se lo quite de la
cabeza porque había que subir
otros puertos y llegaríamos pasadas
las 9 de la noche al albergue, así
que dormimos en Lubián.
Dejamos las bicis dentro del
albergue y buscamos una tienda
para comprar la cena.
Parece que por fin han
arreglado el salidero del aseo. En el
2005 dormimos allí y estaba roto y en el 2009 seguía igual el plato de
ducha , estaba roto y el agua se filtraba justo en la entrada del albergue .
Parece que todo llega en esta vida.
El albergue estaba bastante concurrido, con nosotros había 12
peregrinos, la mayoría empezaban el camino desde allí mismo. Llego la
hospitalera y nos selló la credencial , cobró 3 euros por el albergue.
Cenamos en el propio albergue, tomamos los datos de la etapa y a
la camita, que mañana nos espera una etapa de al ta montaña .
En otra litera, una parejita empezó a hacerse carantoñas,
empezamos a meternos con ellos, porque nosotros no estábamos para
esos trotes después de 8 días fuera de casa . Ella fue mas compresiva
que el, le paro los pies y cada uno a su litera. Que espere por el camino,
joe. Los tíos es que somos así, no tenemos ningún aguante .
Al final dormimos bien, aunque por la mañana la parejita nos dijo
que le habíamos dado una autentica sinfonía de ronquidos. Yo con los
tapones es que ni me escucho.
18
9ª Etapa: Lubián – Vilar de Barrio
25 de Julio
Kilómetros: 87,70
Media por hora: 13,4
Velocidad máxima: 55,3
Salida: 7:00 h.
Llegada: 15:30 h.
Tiempo pedaleo: 6:31 h.
Tiempo real: 8:30 h.
Campobecerros, la siguiente
localidad que encontramos, ya
dispone de albergue, tiene 6 camas y
además es gratuito.
En esta localidad disponen
también de restaurante. En años
anteriores comimos en El Merendero ,
que así se llama, y la verdad es que
comimos muy bien y a buen precio.
Aprovechamos para
descansar un rato y para reponer
agua . En la misma fuente cayo el
bocata mañanero para reponer
fuerzas y empezar otro pequeño
puerto: Portocamba.
20
En Portocamba , en la Cruz de Cerdedelo , pensaba dejar un objeto
al pie de la cruz, lo traía desde Coria del Río. Luego pensé que lo mejor
era dejarlo en la Cruz de Alberguería . Esta un poco más reservado .
No es que yo sea católico, ni mucho menos, pero si vale para
alejar la mala suerte de mi y mi familia ,
pues doy por bien el dejar ese objeto al
pie de la cruz y, a lo mejor empiezo a
creer en algo más
de lo que creo.
Todavía espero
esa señal.
La verdad
es que deposite la
piedra con toda la
esperanza del
mundo.
21
10ª Etapa: Vilar de Barrio – Castro Dozón
26 de Julio
Kilómetros: 93,90
Media por hora: 13,2
Velocidad máxima: 5 3,6
Salida: 8:00 h.
Llegada: 20:00 h.
Tiempo pedaleo: 7:05 h.
Tiempo real: 12:00 h.
22
Pero antes de llegar a las
termas la bici de Juan le dice:
¡¡Quillo, que estoy cansada, que me
averío!! Y una avería de las buenas:
se rompió el cambio trasero. Así que
para atrás y a buscar una tienda de
bicis, hay que comprar un cambio
nuevo . Entre preguntar y buscar la
tienda se nos fue la hora del bocata
mañanero, ¡¡Cachi en la ma!!
Muy cerca del Puente Romano
encontramos una tienda, compramos
el cambio para montarlo nosotros,
pero por tres euros más, nos lo montaron y graduaron en la misma
tienda, la casa se llama Trevinca y esta en la calle Rua do Ensino, 8,
formales y buenos profesionales.
Una vez solucionado el
problema, vuelta hacia las termas y al
fin pudimos comer algo, por poco nos
entra un yuyo.
En las termas nos tomamos un
macetón de tinto de verano y comimos
más de la cuenta, quizás para
resarcirnos del bocata mañanero
perdido, descansamos un rato y
pensamos en partir ya, para recuperar
el tiempo perdido por la avería.
23
En las fuentes había que parar, para refrescarnos y reponer el
agua, estábamos haciendo mucho esfuerzo y teníamos que hidratarnos
convenientemente.
24
Ya estábamos
deseando llegar a
Santiago.
Desayunamos en
Lalín y entre
paradas y fotos en
los lugares que nos
parecieron má s
bonitos, llegamos a
las puertas de
Santiago de
Compostela,
prácticamente sin darnos cuenta .
Justo en ese momento me di cuenta
de que había perdido el móvil, estaba casi seguro de que lo perdí en
Lestedo, 10 kilómetros más atrás. Eran la una del mediodía, así que
decidí volver sobre mis pedaladas y buscarlo. Efectivamente, allí estaba
el dichoso móvil, en el suelo, con la pantalla rota, pero por lo menos
recupere la tarjeta y la pantalla se arregla si merece la pena.
Cuando llegué de nuevo a Santiago eran las dos de la tarde, había
tardado apenas una hora, las piernas las traía a caldo.
Una vez en la ciudad compramos los billetes del autobús, para el
regreso del día siguiente, solo entran dos bicis por bus, así que hay que
andar listo o te quedas en tierra un día más.
Una vez con el billete en nuestro
poder, nos fuimos directamente a la
Plaza del Obradoiro para plasmar
nuestra llegada con las fotos de rigor, así
como felicitarnos mutuamente por el
reto conseguido.
Nos alojamos en el Ho stal Pumar,
cerca del centro. Nos costó la habitación
doble 40 euros y podíamos guardar las
bicis en un patio interior. Disponía de
baño y televisión, pero para ver la tele
estábamos nosotros.
Una vez aseaos y con la tripita llena, nos dimos una vuelta para
recoger la Compostelana y comprar
algunos recuerdos para la familia.
Nos pegamos una tremenda siesta
y después de la ducha y ponernos guapos,
es un decir, busca mos un bujio para
darnos el merecido homena je culinario,
nos recomendaron el Restaurante 16 y la
verdad es que no nos defraudaron.
Comimos estupendamente a base de bien
y no resulto nada caro, aunque esa noche ,
Juan insistió en tener el gusto de
invitarme a la cena.
25
Ya cenados nos dimos una
vuelta por Santiago, pero una
vuelta cortita. Todavía teníamos el
cansancio acumulados en nuestro
cuerpo, así que nos fuimos
temprano a la cama que mañana
será otro día.
Al día siguiente nos
levantamos y salimos a desayunar
y acabar de comprar los regalitos
para la familia, dejamos la
habitación a las 12 de la mañana y
con las bicis a cuesta nos fuimos
para el centro a dar la ultima vuelta
de este
año, al rato tiramos para la estación de
autobuses. Había que preparar las bicis para
envolverlas, compramos papel cel transparente
de cocina y las envolvimos , en total un rollo por
bici.
Después nos enteramos que la misma
compañía te vende, por 10 euros, una bolsa tan
grande que cabe la bici dentro. Será para la
próxima , porque ya teníamos las bicis que
parecían momias envueltas con el papel cel .
Y que decir más, nos despedimos de
Santiago, con el pensamiento d ándole vueltas
haciendo planes para ver que camino hacemos
en 2011.
Y 14 horas de autobús son muchas horas para pensar.
Antonio Garzón
Juan Escobar
26