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AGENCIA CANADIENSE DE DESARROLLO INTERNACIONAL (ACDI)

CANADA

GOBIERNO DEL ECUADOR


MINISTERIO DE RECURSOS NATURALES Y ENERGÉTICOS
INSTITUTO ECUATORIANO DE MINERIA (INEMIN)

PROYECTO SUR ORIENTE


ECUADOR

INFORME DE PREFACTIBILIDAD GEOLÓGICO METALOGENICO


DE LA ZONA SUR DEL YACIMIENTO AURÍFERO DE NAMBIJA

DICIEMBRE 1987
CONTENIDO

TOMOI:

LISTA DE
ANEXOS....................................................................................................iv
LISTA DE
MAPAS........................................................................................................v
LISTA DE
FIGURAS...................................................................................................vi
LISTA DE
TABLAS....................................................................................................vii

1. INTRODUCCIÓN

Objeto del proyecto y métodos utilizados


Localización y acceso
Topografía y clima
Logística
Historia y métodos de explotación
Agradecimiento

2. GEOLOGÍA GENERAL

3. GEOLOGÍA LOCAL

Descripciones litológica

Generalidades

Rocas Intrusivas
Granodiorita (G y G1)
Tonalita – Diorita (T)
Intrusivos subvolcánicos (A1 y A2)
Diques rojizos de composición tonalítica – diorítica (D1)
Diques de dolerita (D2)
Diques aplíticos e intrusivos félsicos varios (D3)
Diques de andesita porfírica (D4)

Rocas Volcánicas
Generalidades
Brecha Volcánica (V1)
Toba de lapillis (V2)
Toba de cristales (V3)
Toba Negra (V4)
Toba soldada y toba de cenizas (V5)
Basaltos alcalinos (V6)
Volcánicos indeterminados (V)

Rocas sedimentarias
Calizas y areniscas (K)

Rocas Metamórficas
Generalidades
Rocas córneas (M1)
Skarns (M2)

Análisis químicos totales de roca


Muestreo y análisis
Resultados
Interpretación sucinta

Geología estructural
Generalidades
Fotointerpretación
Estructuras generales observadas sobre terreno
Estratificación
Fallas
Diaclasas
Venas
Diques

4. GEOQUÍMICA DE LAS ROCAS Y DE LOS MINERALES


PESADOS

Introducción y métodos utilizados


Geoquímica de las rocas
Geoquímica de los minerales pesados

5. METALOGENIA

Generalidades
Contexto litológico y estructural de las mineralizaciones auríferas
Morfología de los yacimientos
Alteración hidrotermal
Paragénesis de los skans auríferos
Discusión

6. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

Conclusiones
Recomendaciones

ANEXOS

TOMO II: MAPAS

LISTA DE ANEXOS

I FOTOGRAFIAS

II GEOQUÍMICA DE ROCAS

1. Resultados de laboratorio
Análisis químico para oro y 35 elementos
Análisis químicos de roca total
2. Histogramas de la distribución de los elementos
3. Matrices de correlación
4. Diagramas de correlación

III GEOQUÍMICA DE LOS SEDIMENTOS PESADOS

1. Análisis químico para oro y 35 elementos


2. Histogramas de la distribución de los elementos
3. Matrices de correlación

IV INFORME GEOFÍSICO

V LEVANTAMIENTO GEOLÓGICO DE GALERIAS

1. Pozo Ramón
2. Pozos Ochoa números 1 y 5
3. Pozos Ochoa números 6y7

VI BIBLIOGRAFÍA

1. Referencias
2. Bibliografía de oro en skarns a través del mundo

LISTA DE MAPAS

B Mapa geológico de reconocimiento de una región se 18km2 al Sur de


Nambija. Escala 1:5000
C Mapas geoquímicos de rocas
C-1 Mapa de muestreo: rocas
C-2 Mapa geoquímico del oro en rocas
C-3 Mapa geoquímico del arsénico en rocas
C-5 Mapa geoquímico del plomo en rocas
D Mapas geoquímicos de sedimentos pesados
D-1 Mapa de muestreo: sediementos pesados
D-2 Mapa geoquímico del oro en sedimentos pesados
E Levantamiento magnetométrico: Perfifes – campo total

LISTA DE FIGURAS

1. Mapa de ubicación – Ecuador


2. Mapa de ubicación – región de Zamora
3. Mapa de la geología general de la parte Sur del Ecuador (según
DGGM,1982)
4. Interpretación fotogeológica de las estructuras generales de la región
(escala aprox.: 1:78000)
5. Diagrama de variación: (Na2O + K2O)/SiO2 (%peso). Rocas intrusivas
6. Diagrama de variación: (Na2O + K2O)/SiO2 (%peso). Rocas volcánicas
7. Diagrama de variación: K2O/SiO2 (%peso). Rocas volcánicas
8. Diagrama de variación: Na2O/SiO2 (%peso). Rocas volcánicas
9. Diagrama de variación: Na2O/K2O (%peso). Rocas volcánicas
10. Estereograma de los polos de los planos de estratificación
11. Estereograma de la densidad de los polos de los planos de fracturas
12. Estereograma de la densidad de los polos de los planos de falla
13. Estereograma de la densidad de las estrías de fallas
14. Estereograma de la densidad de los polos de los planos de vetas
15. estereograma de los polos de los planos de diques
16. Sumario paragenético de los skarns de Nambija
17. Mapa de ubicación de la red de las líneas de geofísica.
INFORME DE PREFACTIBILIDAD GEOLÓGICO METALOGENICO
DE LA ZONA SUR DEL YACIMIENTO AURÍFERO DE NAMBIJA

1. INTRODUCCIÓN

OBJETO DEL PROYECTO Y METODOS UTILIZADOS

La finalidad del proyecto consiste en elaborar un mapa geológico detallado (1:


2000) de una región de 632 hectáreas o sea 6.32 km² situada inmediatamente
al Sur de la zona aurífera de Nambija, en actual explotación. Con este
propósito, un equipo compuesto por dos geólogos y un topógrafo, y
complementando más tarde con un geofísico, han permanecido durante 1º
semanas en el área del proyecto, entre el 22 de Mayo y el 1° de Octubre de
1987. Los mapas y el informe final han sido elaborados en las oficinas de
Géomines Ltee en Montreal, Québec, Canadá.

En primer término, se ha procedido a efectuar un levantamiento topográfico a


escala 1:2000 de los arroyos y senderos utilizando brújula y cordel. Luego, se
ha elaborado el mapa geológico y simultáneamente se han tomado muestras
superficiales de rocas y sedimentos de los ríos utilizando bateas. Estas
muestras han sido después trituradas y analizadas en laboratorios por 36
elementos. De la misma manera, se han desarrollado prospecciones geofísicas
por magnetometría y electromagnetismo (VLF) sobre una malla NS-EW con
líneas de exploración que totalizan 16 km de longitud.

También, se ha efectuado un reconocimiento geológico a escala 1:5000 con


toma simultánea de muestras de roca bateas, en una región de unos 18 km2
situada al Sur y al Este de la región mapeada al detalle.

1.2 LOCALIZACION Y ACCESO

Nambija está ubicado en el Sureste del Ecuador, a 20 km al Este de Zamora,


capital de la provincia de Zamora – Chinchipe, y a 420 km al Sur de Quito.

El primer tramo de la ruta a Nambija está comprendido entre Quito y Loja.


En este primer tramo se puede viajar en avión entre Quito y La Toma
(aeropuerto de Loja) en un vuelo que dura aproximadamente una hora o en
automóvil, en un viaje que demora 18 horas, por carretera afirmada. De Loja
parte una ruta de segunda categoría a Zamora, cuyo recorrido normal demora
dos horas y media, pero los frecuentes deslizamientos de terreno que
producen en esta ruta pueden ocasionar serios retrasos. De Zamora la ruta
continúa hacía Namírez, lugar a donde se llega después de una hora de viaje.
En Namírez es necesario cruzar el río Zamora, ya sea en barca, si el nivel del
agua no está demasiado elevado, o utilizando un puente peatonal colgante. El
viaje continúa luego en automóvil u ómnibus por una hora adicional hasta
Cumay Alto (localmente llamado San Carlos), lugar donde se puede alquilar
mulas para subir a Nambija en un viaje de tres horas de duración media por
un camino de herradura en mal estado.

1.3 TOPOGRAFÍA Y CLIMA

La región en estudio se encuentra ubicada en la Cordillera de Nanguipa que


forma parte de los contrafuertes de la Cordillera Oriental de los Andes. El
relieve es muy accidentado, con altitudes que varían entre 1400 y 2400
msnm. El área se caracteriza por la presencia de numerosas fallas y
cicatrices dejadas por los deslizamientos del terreno.

El sistema de drenaje de la región está conformado por los tributarios de la


Quebrada del Fierro. Las aguas de esta quebrada desembocan sucesivamente
en los ríos Nambija, Zamora, Santiago, Marañon y Amazonas y finalmente
en el Océano Atlántico. La información climatológica es sumamente
limitada .

El clima es tropical húmedo. La temperatura oscila entre 1°C en la noche y


20°C en el día, pero excepcionalmente puede alcanzar los 30°C . La región
está frecuentemente cubierta de niebla y la precipitación sobrepasa los 3000
mm por año, lo que ha dificultado mucho el avance de los trabajos de
campo. En Septiembre se ha observado una cierta tregua en las
precipitaciones que posiblemente se prolongará hasta Diciembre.

La vegetación es del tipo floresta pluvial ecuatorial y por lo tanto muy


densa, a tal punto que es necesario utilizar machetes para abrir tronchas de
penetración. Los afloramientos rocosos mejor expuestos se encuentran en
los arroyos, que constituyen a la vez las mejoras vías de acceso.

1.4 LOGÍSTICA

Las comunicaciones son difíciles en Nambija. La única estación de radio


transmisora-receptora del lugar se encuentra en la sucursal del Banco
Central para uso interno. Dentro de poco tiempo, el banco será equipado
también con un teléfono operado a micro-ondas. En cuanto a las
instalaciones públicas, el IETEL de Zamora ofrece servicios telefónico y
telegráfico internacionales pero no dispone de teles.

El Aeropuerto más próximo es lo de La Toma, cerca de Loja, que da


servicios en los vuelos regulares a Guayaquil y Quito. Existe también una
pista de aterrizaje y un helipuerto militar en Cumbaratza. En Nambija, hay
un helipuerto ubicado en las instalaciones del Banco Central.
Asimismo,, es posible alquilar sin dificultad camionetas – taxi a Loja y al
aeropuerto La Toma, lo mismo que a Zamora. En lo que respecta a los
víveres, los productos básicos se pueden adquirir en Nambija, pero la
variedad es limitada. El agua disponible en Nambija tiene un alto riesgo de
estar contaminada, de modo que en la presente campaña el personal se ha
aprovisionado de agua manantial, considerada pura, que brota en el flanco
Sur de Mapasingue.

En Nambija es difícil encontrar un alojamiento adecuado para permanecer


por largo tiempo. Por lo tanto, se debe considerar la necesidad de construir
un campamento base. A causa del clima, el tipo de edificación más común es
de madera, sobreelevado con respecto al terreno natural y con techo de zinc.
La madera en planchas puede ser adquirida de los madereros locales pero el
zinc debe ser comprado en otro lugar. Teniendo en cuenta que la temperatura
desciende por las noches, será muy útil disponer de cualquier tipo de
calentador (a kerosene por ejemplo).

En el lugar se encuentra kerosene, petróleo diesel, gasolina y también


balones de gas. La electricidad puede ser adquirida de algunos propietarios
de chancadores equipadas con generadores eléctricos.

Asimismo, en el área es posible encontrar mano de obra no calificada:


guías – macheteros, porteadores, peones, etc. La disponibilidad de esta mano
de obra fluctúa de acuerdo al ritmo de la producción minera.

1.5 HISTORIA Y METODOS DE EXPLORACIÓN

La explotación del oro en la región data de la era precolombina. A mediados


del siglo XVI, los españoles continuaron la explotación utilizando la mano
de obra indígena, pero a fines de ese siglo las enfermedades y la
inestabilidad social ocasionaron el cierre de la actividad minera en la región.

Es recién al comienzo de la presente década que el yacimiento de Nambija


fue redescubierto por los buscadores de oro que remontaban los arroyos
lavando los sedimentos por bateas. Al principio, la explotación se hacía
discretamente, pero el secreto no pudo ser guardado por mucho tiempo y la
región fue rápidamente invadida por millares de personas contagiadas por la
fiebre del oro. Según nuestras estimaciones, al momento de elaborar este
informe, la población de Nambija está entre 7 y 10 mil habitantes.

Lamentablemente, el yacimiento está siendo explotado de manera ineficiente


y desordenada. Muchos pequeños mineros excavan sus galerías donde mejor
les parece, sin planificar y sin tener en cuenta las más elementales reglas de
seguridad.
Para accionar los martillos perforadores se utilizan compresores a motor
diesel. Una vez que los taladros son perforados, se colocan cargas de
dinamita y se vuela la roca. Después se separan visualmente la fracción
estéril de la fracción mineralizada que se transporta en seguida al hombro a
uno de los numerosos molinos donde la roca es triturada en presencia de
agua.

El producto de la molienda es pasado por un canal de lavado a fin de separar


la fracción pesada. En seguida, esta última fracción es lavada en presencia
de mercurio para obtener al final una bola de amalgama de mercurio – oro
que luego se quema al soplete para hacer hervir el mercurio y obtener oro
relativamente puro. Este producto es transportado después a la sucursal local
del Banco Central que compra el metal después de haberlo fundido y
pesado.

1.6 AGRADECIMIENTO

Los autores desean agradecer al Banco Central del Ecuador por la preciosa
ayuda que les ha proporcionado, en particular, al Jefe del Departamento de
Comercialización del Oro en Quito, Lcdo. Oswaldo Hernández, y a los
gerentes de la sucursal de Nambija, Lcdo. Galo Román, Lcdo. Fausto
Andrade y Lcdo. Baltasar Guaruizo.

Nuestras permanencia en Nambija ha sido más agradable gracias a su


hospitalidad, su experiencia respecto a las condiciones locales y su
asistencia logística , sin hablar de los servicios bancarios.

En Zamora, queremos agradecer al Sr. Magner Turner y su equipo por los


servicios logísticos prestados y por la visita a la mina de Guayaquil.

Dos profesores de la Universidad de Québec en Montreal, Dr. Michel


Gauthier y Dr. Michel Jebrak, nos han alentado mucho con sus estimulantes
discusiones sobre la naturaleza del yacimiento.

Agradecemos también al Dr. Robert Wares (Ph.D.), especializados en


skarns que ha contribuido grandemente en la elaboración del capítulo
“Metalogenia” ya la Sra. Anne Charland (M.Sc.) que nos ha hecho partícipe
de sus conocimiento sobre rocas volcánicas, ambos de la Universidad
McGill en Montreal.

En la Universidad de Laval en Québec, queremos agradecer al Dr. Réjean


Hébert (Ph.D.) y a la Sra. Sylvie Roy (M.Sc.) por sus descripciones
petrográficas, así como al Dr. Robert Ledoux (Ph.D.) por sus apreciados
consejos concernientes a los minerales pesados.

Agradecemos, asimismo, a todo el equipo del INEMIN del Ecuador, cuyos


innumerables servicios conformarían una lista demasiado extensa. Además,
agradecemos también al Ing. Edgar Pillajo, quien ha elaborado la cartografía
del vértice NE del mapa B.

Estamos particularmente reconocidos por los servicios del Ing. Ivan Endara,
Director del Laboratorio de Chillogallo, y del Dr. Ahmed Mahmood,
perteneciente a la oficina regional de Geomines en Rouyn-Noranda
(Québec), por la ejecución de los estudios petrográficos.

Agradecemos a la brigada de campo conformada por el Sr. Marc Chénier –


geólogo jefe de proyecto, la Sra. Sylvie Prud’homme – geóloga, el Sr. Albert
Bastien – técnico – topógrafo – dibujante, el Sr. Jan Stembera – geofísico, y
el Sr. Arturo Cabrera – asistente de campo y soporte logístico en Ecuador.

En fin, muchas gracias a todo el personal auxiliar tanto en el Ecuador como


el la sede Central de Géomines en Montréal. Canadá.

2 GEOLOGÍA GENERAL

Existen dos mapas geológicos recientes, a escala 1:1.000.000. que cubren la


República del Ecuador. Uno de ellos ha sido publicado por la DGGM y el
Instituto Francés de Petróleo, en 1969, y el oro por la DGGM y el Instituto
de Ciencias Geológicas, en 1982. El presente capítulo está ampliamente
basado en este último y en el boletín explicativo que lo acompaña.

El Ecuador está dividido en tres provincias geológicas que corresponden


aproximadamente a las tres regiones fisiográficas. Estas tres regiones son, de
Oeste a Este. La Costa, la Sierra dividida en dos cordilleras separadas por el
Valle Interandino en el Norte del país y el Oriente separado en dos regiones:
la zona subandina y la Cuenca Oriental (Figura 3)

El basamento de la costa está constituido por rocas basálticas toleíticas del


Cretáceo, que constituirían una porción de la corteza Oceánica soldada al
Continente. Estas rocas están recubiertas de sedimentos detríticos del
Cretáceo Superior y del Terciario.

La Cordillera Occidental está compuesta por rocas volcánicas basálticas del


Cretáceo (equivalentes a aquellas de la Costa), recubiertas de lavas
andesíticas y de piroclásticos del Terciario y del Cuaternario. La Cordillera
Real (u Oriental), por el contrario está formada por una gran cantidad de
rocas metamórficas (esquistas a mica) del Paleozoico. El surco intra-andino,
que separa las dos cordilleras en la mitad norte del país, es una depresión
cuya exacta naturaleza no es conocida debido a que los contactos están
cubiertos por el volcanismo reciente.

Una gran falla de cabalgamiento separa la Sierra del Oriente, donde se


encuentra en primer término la zona subandina estructuralmente separada,
pero estratigrafícamente formando parte de la Cuenca Oriental propiamente
dicha situada más al Este. Esta cuenca está compuesta de rocas sedimentarias
depositadas en tres fases sobre las rocas precambrianas del Escudo Guyano-
Brasileño.

Primero, los sedimentarios marinos del Peleozoico y del Mesozoico Inferior


(Formaciones Pumbuiza, Macuma, Santiago y Chapiza), fase terminada por
el volcanismo (miembro Misahuallí de la Formación Chapiza). Luego, la
deposición de sedimentos marinos geosinclinales del Cretáceo Superior
(formaciones Hollín, Napo y Tena reagrupadas también bajo el nombre de
formación Limón).

El fin del Cretáceo marca el origen del orogenismo andino que se caracteriza
por una sedimentación clásica proveniente del Oeste.

La zona subandina se ha deformado (pliegues y cabalgamientos) en el


Terciario Superior. La falla de cabalgamiento que define el límite Oeste de la
zona subandina y su contacto con la Cordillera Real está marcada por la
presencia de una serie de batolitos granitoides del Jurásico (¿ ),
probablemente desplazados por el tectonísmo asociado al levantamiento de la
proto-cordillera (fin del Cretáceo). Las rocas volcánicas y subvolcánicas
asociados a ciertos batolitos, como el batolito Abitagua e incluídas en el
miembre Misahuallí de la Formación Chapiza, podrían representar una fase
tardía de ese mismo plutonismo (evidencia de origen comagmático). Por
extensión, está teoría podría relacionarse quizás también con lar rocas
volcánicas observadas dentro de los límites del batolito de Zamora, en el área
objeto del presente estudio. Además de rocas plutónicas granitoides, se han
mapeado, muy cerca de esta región, rocas sedimentarias de las Formaciones
Santiago y Chapiza al Norte y al Sur y posiblemente al Este (Feininger,
1987), lo mismo que sedimentos más jóvenes de la Formación Limón (al
Norte).

Feininger (1987) propone una teoría según la cual el Ecuador estaría


dividido en cinco “terrenos” allotóctonosos, entre los que se halla el
“Santiago Terrane” que comprende la mitad Sur tanto de la Cordillera Real
como de la zona subandina (incluyendo el Batolito de Zamora), zona
caracterizada por la presencia exclusiva de la Formación Santiago que estaría
ausente en las demás áreas.

Santamaría et al. (1983) y Pillajo (1983) han efectuado trabajos en la región


de Nambija (mapas fotogeológicos y visitas de reconocimiento general).
Ambos identifican una zona de rocas sedimentarias y volcánicas al inferior
del batolito, zona que habría estado en parte eskarnificada. El yacimiento
aurífero de Nambija se encuentra dentro de esta zona.
3 GEOLOGÍA LOCAL

3.1 DESCRIPCIONES LITOLÓGICAS

3.1.1 GENERALIDADES

En el marco del presente trabajo se han llevado a cabo dos


levantamientos geológicos. El primero, a escala 1:2000, ha cubierto una
zona de 6 km2 ubicada inmediatamente al Sur del yacimiento de Nambija en
actual explotación. Al Este y al Sur de esta zona detallada, se efectuó un
mapeo a nivel de reconocimiento, a escala 1:5000, que cubre una superficie
total de 18 km2 .

Durante el desarrollo de estos levantamientos fueron descritos cerca de


700 afloramientos y las informaciones litológicas y estructurales obtenidas
fueron debidamente registradas sobre los mapas topográficos respectivos.
Con el propósito de determinar la naturaleza de las unidades litológicas
encontradas, muy afectadas localmente por alteración hidrotermal, y para
precisar la naturaleza de la mineralización aurífera, se han estudiado 180
láminas delgadas simples y 56 láminas delgadas pulidas con la intervención
de cinco especialistas en petrografía. Todas las muestras provienen de la
zona de 18 km2, salvo 29 que fueron tomadas dentro del sector de la mina de
Guaysimi. Las conclusiones de estos estudios petrográficos forman parte de
la descripción de las diferentes unidades litológicas y del capítulo
“Metalogenia”.

La región de Nambija es poco conocida geológicamente, los pocos


mapas existentes son muy generales y han sido elaborados en su mayoría
por interpretación fotogeológica. Esta región situada al Sur del Ecuador, en
la zona subandina, es una zona tectonoestratificada, caracterizada por la
presencia de sedimentos y volcánicos de edad Paleozoica a Mesozoica
cortados por batolitos de composición entre tonalitica y granodiorítica de
edad Jurásica (¿). La zona es tectónicamente activa y constituye una cintura
fuertemente cabalgada que se desplaza actualmente hacía el Este.

La estratigrafía de esta zona es relativamente bien conocida en el Norte


y en la parte central del país, en su mayor parte gracias a los trabajos de
exploración petrolera. Por el contrario, en el Sur del país, al Este de Zamora,
el sector no está muy documentado y, según ciertos trabajos recientes
(Feininger, 1987), parecería que la estratigrafía y la evolución tectónica en
este lugar habrían sido diferentes con relación a la parte Norte.

En consecuencia, si bien las rocas observadas en estos levantamientos


parecen pertenecer a la formación Santiago (Jurásico-Superior), faltan datos
geológicos a escala regional y local en la región de Nambija, de modo que la
superficie restringida de la zona estudiada no permite establecer
correlaciones estratigráficas en el presente estudio. Además, las relaciones
entre las diferentes unidades litológicas encontradas no siempre pueden ser
claramente establecidas en razón a las numerosas fallas que cortan toda la
zona considerada.

Durante el mapeo, hemos tentado de reagrupar las rocas estudiadas por


facies comodamente reconocibles sobre el terreno, es decir, en unidades
litológicas mapeables. De manera general, se encuentra una secuencia
volcano-sedimentaria que aloja a las mineralizaciones auríferas, formando
una banda de algunos kilómetros de ancho en el seno de un batolito de
composición granodiorítica. Esta banda volcano-sedimentaria parece
extenderse por varias decenas de kilómetros según orientación N-S y está
limitada al Este y al Oeste por fallas probablemente normales.

La secuencia está constituida por rocas piroclásticas (brecha volcánica,


tobas de bloques y lapilis, tobas de cristales, tobas de cenizas) entre las
cuales se intercalan delgados horizontes de calcáreas (arenas y lutitas
calcáreas) metasomatizadas en skarns y asociadas a las mineralizaciones
auríferas. Todos estos materiales están cortados por diques y por pequeños
stocks de diorita, de apilita y de rocas subvolcánicas de composición
semejante a las rocas estrusivas también volcanitos (basaltos alcalinos) y
doleritas tardías en las zonas de fallas y cizallamiento.

3.1.2 ROCAS INTRUSIVAS

3.12.1 Granodiorita (G y G1)

Esta unidad litológica, probablemente ubicada en la parte inferior


de la secuencia estratigráfica de la zona estudiada, se encuentra en
los bordes Este y Oeste de la superficie mapeada, constituyendo de
hecho un batolito que se extiende a lo largo de varios kilómetrosa
dentro de la región. En el sector considerado, esta unidad está
cortada por numerosas fallas que han dado lugar a una estructura de
hundimiento dentro de la cual se ha depositado posteriormente una
secuencia volcano-sedimentaria.

La unidad está bien caracterizada en los afloramientos y puede o no


presentar alteraciones. La roca es de color rosado, gris y blanco con
pequeñas manchas negras causadas por los cristales de hornblenda.
La textura es generalmente media y equigranular. En la parte
oriental de la zona mapeada, en la región del río Guaysimi, se
observa una facies de fenocristales de hornblenda con tamaño
medio que varía entre 5 mm y 1cm.

Localmente, la granodiorita puede contener enclaves de material


intrusivo fino de color gris oscuro y de diámetro variable entre 2 y
10 cm. Se nota igualmente ciertas zonas de composición más
potásica que le confieren a la roca un color más rojizo.

A nivel petrográfico, la granodiorita se compone principalmente de


cuarzo de extinción ondulada, de plagioclasas (oligoclasas-
andesina) y de feldespatos potásicos kaolinizados y sericitizados, de
hornblenda y de pequeñas cantidades de biotita con alteración en
clorita y de tarazas de minerales opacas diseminados
(principalmente pirita). Se observa igualmente trazas de apatita y de
zircón como inclusiones en las plagioclasas, así como esfeno. La
epidota, bajo la forma de cristales prismáticos, se encuentra en
forma de inclusión en las plagioclasas feldespatos, reemplazando a
la hornblenda y en forma de vetillas. Finalmente, se encuentran
carbonatos secundarios alterando las plagioclasas y la hornblenda.

3.1.2.2 Tonalita-diorita (T)

La segunda unidad intrusiva importante de la región parece cortar


la granodiotita. Su composición, aunque localmente tonalítica, es
principalmente diorita. Se la encuentra frecuentemente en la
granodiorita en los bordes de la zona mapeada, en contacto de falla
con los volcanitos según una dirección NS. Se nota también la
presencia de algunos diques así como de un pequeño stock en
intrusión dentro de los volcanitos en la parte central de la región
(Quebrada #15). En este lugar, la diorita está cortada por
numerosas fallas y los contactos de intrusión con los volcánicos
que la rodea parecen marcados por fallas.

Megascópicamente, la roca es de textura fina, (1 mm),


equigranular, de color gris claro a gris medio, localmente cortada
por vetillas rosadas de alteración potásica. En la parte oriental de la
región, se observan localmente afloramientos de granitoide
completamente rosado adentro de esta unidad.

La aroca se compone principalmente de feldespatos potásicos y de


plagioclasas kaolinizadas, sericitizadas y epidotizados, de cuarzo
de extinción ondulada, y de hornblenda y biotita alteradas en
clorita. Se nota también calcita secundaria intersiticial en las
plagioclasas y la hornblenda, así como en forma de vetillas. Están
igualmente presentes los minerales opacos. En una muestra
(#1101), se observa un “stockowork” de venillas de pirita, pirrotita
y calcopirita, con impregnaciones de magnetita asociadas a las
alteraciones en epidota-clorita.

Los diques observados en la región pueden ser microdioríticos, de


color blanquecino, sericitizados, con los minerales máficos
completamente alterados.
En el centro de la región, en la Quebrada #11, se notan diques
completamente cataclazadas con epidota, clinozoisita y tremolita-
ferro-actinota. Un poco más al Este, en la Quebrada #14, a la altura
de los Pozos Ochoa, se pieden observar un intrusivo de color
blanquecino y de textura fina, probablemente semi-profundo y
situado a lo largo de una falla E-W, la cual están asociados algunos
ocurrencias de skarn. La roca presenta una alteración biotítica
precoz, una muy fuerte alteración hidrotermal sericítica con
piritización y finalmente una alteración potásica.

3.1.2.3 Intrusivos subvolcánicos (A1 y A2)

Entre los intrusivos que parecen tardíos y que cortan la granodiorita


y la diorita, se nota una facies hipoabisal de composición andesítica
que se presenta bajo la forma de pequeñas intrusiones en la parte
Suroeste así como en el centro de la región, asociada a los skarns
de las zonas mineralizadas en actual explotación de Nambija. Se ha
notado su presencia en el sector de Mapasingue, donde parece
intercalada con los horizontes de toba de cenizas, así como en la
zona del Playón.

A superficie fresca, la roca es de textura porfírica con fenocristales


de plagioclasa blanquecina de 1 a 2 mm, en el seno de una matriz
de color gris verduzco, frecuentemente piritizada. Cuando la roca
está alterada, se presenta de color blanquecino y de textura más
bien media.

Microscópicamente, se observan fenocristales de plagioclasas


automorfas a sub-automorfas, fuertemente sericitizadas, en una
matriz cuarzo-feldespática micrograneada. Los minerales máficos
(anfiboles?) están enteramente descompuestos en clorita, ferro-
actinota, calcita y epidota. Se nota igualmente cuarzo y calcita
secundarios en microfisuras.

En las vecindados del stock dioríritico, en la parte centro-este de la


región, los resultados del levantamiento geofísico indican la
presencia probable de un dique de granitoide de dirección NW-N.
Los afloramientos en los alrededores indican la presencia de rocas
de tipo filón, hollocristalinas y porfiriodes. Megascópicamente, la
roca muestra una matriz fina de color beige a marrón claro con
fenocristales de plagioclasas blanquecinas de 2 a 4 mm.
Microscópicamente, además de las plagioclasas, se nota la
hornblenda verde, un poco de cuarzo en una matriz cuarzo-
feldespática con esfeno, turmalina y opacos accesorios. La
composición es tonaítica.
3.1.2.4 Diques rojizos de composición tonalítica-diorítica (D1)

Al Noroeste de la zona mapeada, en particular en el seno de la


diorita, se observan diques de algunos metros de espesor, de
dirección E-W, NE-SW y de inclinación abrupta, constituidos de un
material marrón-rojizo a rojizo, de textura ligeramente porfírica,
compuesto de plagioclasas (y de feldespatos potásicos) alteradas
por las calcita y epidota, de cuarzo, y de un fierro-magnésico
(anfibol) clorotizado. Se nota también la apatita, en inclusiones
dentro de la plagioclasa, y la epidota. Localmente, los diques
presentan bordes de cerca de 1 m de ancho compuestos de un
material fino, laminado, de color beige. En láminas delgadas, la
roca es leucócrata, constituída de minerales félsicos completamente
sercitizados. La composición global de las diques parece ser
tonálitica a granodiorítica.

Finalmente, estos diques parecen estar desplazados por las fallas N


y NE.

3.1.2.5 Diques de dolerita (D2)

Algunos diques de dolerita cortan los volcanitos en la parte central,


al Sur de la región. Estos diques, de dirección NW, parecen
asociados a la falla importante de la misma dirección y decalados
ligeramente por las fallas de orientación N-S y NE-SW.

Estos diques, con un ancho máximo de unos 2 metros, presentan


una superficie fresca de color verde oscuro, de textura fina a media
o ligeramente porfírica. Están compuestos de plagioclasas
medianamente básicas, kaolinizadas, de piroxenos (augita)
fracturados con una alteración clorítica y un poco de minerales
opacos diseminados. Localmente, se han podido observar cintas en
el seno de los diques con un borde afanítico oscuro y niveles de
color oscuro y de textura fina a media, alterando con niveles más
claros.

Se debe notar que los diques, posteriores a los volcánicos, no son


afectados por toda la red de fracturas multiples que cortan a estos
últimos.
3.1.2.6 Diques aplíticos e intrusivos félsicos varios (D3)

Varios planos de fallas N-S y E-W están asociados a la presencia de


aplitas o de intrusivos félsicos, generalmente de color gris claro y
de textura gruesa.

Estas rocas están compuestas principalmente de plagioclasas


(oligoclasa-andesina) y feldespatos potásicos, kaolinizados,
sericitizados y con alteraciones en epidota y carbonatos. Con
mucha frecuencia, estas rocas están caracterizadas por estructuras
de deformación intensa con cuarzo de extinción rodante, en láminas
de deformación y anfiboles (hornblenda) tectonizados,
transformados en clorita en una matriz siliciosa recristalizada.

3.1.2.7 Diques de andesita porfírica (D4)

En el centro-norte de la región, en las Quebradas #11 y #14, se


notan “diques” o coladas de andesita porfírica de cerca de 1 m de
ancho cortando las rocas piroclásticas. En los afloraminetos, la roca
es de color gris-verdoso claro con fenocristales de 2 a 5 mm
diámetro y de color oscuro.

En láminas delgadas, se observa una matriz formada por microlitos


de plagioclasas, fenocristales sub-automorfos de un antiguo
ferromagnesiano (piroxeno u hornblenda) enteramente remplazados
por la matriz. Finalmente, se nota la presencia de pirita y de
calcopirita, en masas irregulares de cerca de 5 mm de diámetro
diseminadas en la roca.

3.1.3 ROCAS VOLCÁNICAS

3.1.3.1 Generalidades

La mayor parte del territorio mapeado para este estudio está compuesto
de rocas volcánicas, que conforman una secuencia volcano-
sedimentaria. Tal como se ha mencionado anteriormente, estas rocas
forman una banda de algunos kilómetros de ancho, de orientación N-S,
y está en contacto de falla con la granodiorita.
Parece, a la luz de las observaciones de campo, que las rocas
volcánicas serían posteriores a un batolito granodiorito. Sin embargo,
las rocas volcánicas están cortadas por diques y por pequeños
instrusiones de composición tonálitica-dioritica, así como por dikes de
dolerita, intrusivos félsicos y, menos frecuentemente, por rocas
hipoabisales, coladas de lavas andésiticas y basálticos inyectados en
las zonas de cizallamiento.

La secuencia está formada principalmente de rocas piroclásticas en las


que la composición paraece bastante uniforme, de andésitica a dacítica
localmente. De forma ngeneral, se observan tobas de lapillas, de
cristales y localmente vidriosos, constituidos por cristales de
plagioclasas y por fragmentos de traquiandesita en el seno de una
matriz volcánica. Con mucha frecuencia, se nota la presencia de
minerales metamórficos tales como la epidota, zoisita, tremolita-ferro-
actinota, clorita, vesubianita, calcita, probablemente debidos a un
metamorfismo de contacto. Las facies finales constituyen las rocas
córneas.

Tal como se ha mencionado en la introducción de este capítulo, las


diferentes facies mapeadas representan facies descriptivas (“unidades
litológicas mapeables”) antes que unidades litoestratigráficas en el
sentido estricto. La distinción entre las diversas partes, si bien es
esencialmente granulométrica, está dada también por el color y la
textura de la roca, así como por el porcentaje y la composición de sus
constituyentes. Localmente, las rocas presentan características propias
en varias facies y no siempre ha podido ser establecida una distinción
muy clara.

3.13.2 Brecha Volcánica (V1)

La facies más característica consiste en una brecha volcánica localizada


en la parte Noreste del área mapeada, es decir, en la Quebrada del
Diamante y al Este de la Cordillera de Nanguipa.

En los afloramientos, esta unidad litológica se presenta ya sea


masivamente o intercalada con tobas de bloques, lapilis y cenizas,
formando cintas visibles a la escala natural. La composición de estas
tobas parece la misma que de la brecha, con la sola diferencia del
menor tamaño y la abundancia de los fragmentos en la roca.

La facies brechosa presenta una superficie de alteración blanquecina a


beige clara con fragmentos de color negruzco. En superficie fresca, la
matriz es generalmente verdosa media a oscura. La roca se compone
principalmente de una matriz criptocristalina cuarzo-feldespática, de
fenocristales de plagioclasas de cerca de 2 mm y de fragmentos líticos
subangulares de tamaño medio, alrededor de 1 a 4 cm, pudiendo
alcanzar una decena de centímetros. Estos fragmentos son de origen
volcánico, provienen de rocas traquíticas compuestas de microlitos de
plagioclasas con vidrio volcánico y presentan una textura fluidal. La
composición global de la brecha volcánica es andesítica.

Toba de Lapilis (V2)

Esta facies ocupa la mayor parte de la superficie mapeada y puede


presentar diversos aspectos. Sin embargo, en términos generales esta
unidad se compone de fenocristales y de fragmentos líticos volcánicos
subangulares de tamaño variable entre 1 mm y 3 cm (con una media
alrededor de 1 a 2 mm) en el seno de una matriz fina. La superficie de
alteración es de color gris-verdoso medio beige claro, manchada de
puntos negros que presentan un aspectos que denota la erosión
diferencial de los fragmentos.

En la parte oriental de la Quebrada del Diamante, esta toba de


fragmento líticos y de fenocristales es el equivalente de la brecha
volcánica de grano grueso descrita anteriormente. Se nota igualmente
en el mismo sector, y frecuentemente intercalada con estas facies, una
roca un poco diferentes con una superficie fresca gris clara mostrando
fragmentos, sobre todo de fenocristales pálidos y oscuros.

En láminas delgadas, la composición se revela similar a aquella de la


brecha. Se observan fenocristales de plagioclasas (0.2-1 mm),
ocasionalmente sericitizados y epidotizados con fragmentos de roca
andesítica de textura traquítica. La matriz compuesta de cuarzo, de
feldespatos y localmente de micas, es finamente cristalina. Se puede
también notar alteraciones en clorita, epidota y serecita, así como
cuarzo secundario y carbones en vetillas.la composición global de la
roca es andesítica y dacítica localmente.

Toba de Cristales (V3)

Si bien comprenden ocasionalmente fragmentos líticos y se emparentan


también con las tobas de lapílis descritas antes, las rocas agrupadas
bajo la presente facies contiene un porcentaje relativamente más
elevado de fenocristales. A superficie fresca, esta unidad litológica
presenta fenocristales blanquecinos de plagioclasas de cerca de 1 a 2
mm en el seno de una matriz gris oscura a negra. Cuando la roca está
alterada puede presentar un tinte gris claro o verdoso.
Microscópicamente, se observan cristales de plagioclasas (oligoclasa-
andesina) que pueden estar sericitizados o epidotizados con la
hornblenda cloritizada localmente en una matriz criptocristalina cuarzo-
feldespática. Se nota frecuentemente una alteración en epidota, clorita,
calcita y una silicificación secundaria en toda la roca cuya composición
puede variar de generalmente andesítica a riodacítica localmente.

En la Quebrada del Fierro Sur, en el centro-sur de la región mapeada, la


presencia de una zona de falla cusa alteraciones potásicas y
carbonatadas y principalmente una silicificación en el seno de la roca
que se presenta entonces de color gris claro a verdoso claro, cortada por
numerosas vetillas y con pirita diseminada.

En la zona ubicada en las inmediaciones del stock de tonalita-diorita,


en el centro de la región, es decir, en la intersección de la Quebrada del
Fierro y de la Quebrada de la Culebra Verde y en el camino de
Guaysimi, la roca muestra una alteración potásica pronunciada. Se
notan feldespatos potásicos y la presencia de epidota y ocasionalmente
de granate.

Toba Negra (V4)

Esta faices agrupa a las rocas de granulometría netamente más fina en


comparación con las otras faices descritas antes y comprende las tobas
de cenizas así como las tobas líticas de cristales de composición
riodacítica a andesítica. En el seno de esta unidad se observan
frecuentemente cintas originidas por la alternancia de capas de cenizas,
de lapilis y cristales, en particular en el centro de la región, dirigiéndose
hacia el Norte y la colina de Mapasingue (cabecera de las Quebradas #5
y #11).

La litología características de esta facies es una toba de color gris oscuro


a negro, de textura afanítica y de composición andesítica. En láminas
delgadas, se notan cristales de plagioclasas, cuarzo y biotita,
recristalizados con un tamaño medio de alrededor de 0.05 a .5 mm.
Igualmente, se pueden constar la presencia de vidrio volcánico en
proceso de desvitrificación, transformándose en clorita. Esta toba negra
puede ser observada, entre otros, en la Quebrada del Fierro, entre el
ramal Sur de esta misma quebrada y la Quebrada de la Culebra Verde.

En la Quebrada #11, se puede remarcar los afloramientos de una roca de


color gris oscuro, ligeramente rojiza y de textura afanítica. Localmente,
esta roca muestra fenocristales de plagioclasa y fragmentos líticos
traquiandesíticos cuyo tamaño varía de 1 a 4 mm, así como filones
vserdoso de epidota. La matriz criptocristalina cuarzo-feldespática está
epidotizada y la tremolita y el cuarzo reemplazan localmente los
fragmentos líticos.

Toba Soldada y Toba de Cenizas (V5)

Esta facies comprende las rocas piroclásticas situadas sobre la colina de


Mapasingue, en la parte centro-norte de la región mapeada, y asociadas
a los skarns auríferos. Incluye, igualmente, los piróclasticos idénticos
que han sido observados en contacto con los skarns de la explotación
de Nambija que son denominados “caja” por los habitantes del lugar.

Los afloramientos de esta roca muestran una superficie de alteración


beige claro y una textura afanítica. Esta alteración penetra
profundamente en la roca y solo muy raramente se puede percibir una
superficie más fresca de color gris pálido azulado. En láminas delgadas,
esta facies revela una composición de toba lítica con fragmentos
soldados de tranquiandesita y de roca hialina con cemento vítreo y
fenocristales de plagioclasa. La matriz de granos muy finos está
sericitizada. Se nota, igualmente, una intensa silicificación manifestada
por numerosas playas, agregados y filones de cuarzo, así como de
epidota, de calcita y de vesubianita en las zonas de contacto con los
skarns.

Estos niveles afaníticos pueden estar intercalados a la escala


centimétrica con horizontes de material blanquecino de textura fina, los
mismos que son particularmente observables en las cumbres de
Mapasingue hacia el flanco Sur. Los horizontes están constituídos de
tobas con fenocristales de plagióclasa completamente sericitizados y
algunos fragmentos de roca traquítica, cuyas plagioclasas están
transformadas en tremolita esferulítica. Se nota también una fuerte
silicificación de la roca.

En la extremidad Este de la colina Mapasingue se observa una roca


similar, pero en la que el tamaño de los cristales es superior a los de las
otras rocas piroclástico. Por esa razón, esta roca ha sido representada
bajo la facies de tobas de cristales sobre el mapa geológica. Este
piroclástico es el equivalente de una traquiandesita o microdiorita con
una matriz holocristalina y algunos fragmentos de composición
andesítica. La roca ha sufrido, por otro lado, un tectonismo brusco, tal
como lo revela la presencia de fracturas paralelas llenas de cuarzo, así
como un metamorfísmo de contacto con epidota y vesubianita.

Desde el punto de vista petrográfico, las rocas pertenecen a esa facies


se pueden aproximar con aquellas de la facies “toba negra” con cintas.
Se podría decir que su aspecto actual, así como sus susceptibilidades
magnéticas bajas, serían debidas a una fuerte alteración hidrotermal y a
una intensa silicificación, antes que una composición original más
félsica.
Algunas ocurrencias (Quebradas #5 et #14) de toba soldada más típica
(“ash-flow tuff”) han sido incluídas igualmente en esta facies. Esta toba
lítica de cristales está constituida esencialmente de plagioclasas
sericitizadas y epidotizadas en una matriz vítrea alterada en zeolitos o
hidrobiotita y presenta estructuras fluidales (laminaciones y espinas de
vidrio estiradas).

Basaltos Alcalinos (V6)

En ciertas zonas de fallas mayores (Quebradas #5, Quebrada del Fierro


Sur, Pozo Ramón), se nota la presencia de lavas tardías.

En los afloramientos, la roca es de color verde oscuro, de textura


afanítica a porfirítica, con fenocristales de plagioclasas que alcanzan 1
mm de tamaño, epidota y clorita.

En láminas delgadas se observan plagioclasas sericitizadas y


epidotizadas ya sea con hornblenda o con un piroxeno (titano-augita).
La matriz está compuesta de microlitos de plagioclasa y de vidrio
volcánico reemplazado por clorita y serpentina. La epidota, el cuarzo y
los carbonatos están presentes en vetillas y la clorita bajo la forma de
alteración de minerales máficos. Los minerales opacos están
diseminados en la matriz o en forma de inclusiones en los anfiboles.

Estas rocas han sido clasificadas como andesitas o andesitas basálticas


cuando se han efectuado los estudios petrográficos. Los análisis
químicos de roca total revelan, sin embargo, una afinidad alcalina para
estas rocas que han sido regrupadas bajo la denominación de “Basaltos
alcalinos” en atención a los estudios geoquímicos más detallados.

Volcánicos Indeterminados (V)

Esta categoría ha sido utilizada sobre el mapa geológico en los lugares


en que no han sido posible especificar el tipo de roca volcánica, ya sea
en razón a la falta de datos o a la intensa alteración hidrotermal que no
permiten la identificación de la roca.
ROCAS SEDIMENTARIAS

Calizas y Areniscas (k)

La sola ocurrencia importante de calizas en la región se ubica en los


alrededores de Pozo Ramón, al Noreste de la región mapeada. En este
lugar, se observa un acantillado con calizas intercaladas con algunos
pocos bancos de arenisca así como con tubas líticas de lapilis. Ciertos
bancos de calizas están metamorfoseadas en skarns.

Las calizas observadas están constituídas por calcarenitas, calcisititas y


calcilutitas, ligeramente marmorizadas en contacto con el skarn. Un
fragmento de braquiópodo no identificable ha sido remarcado
localmente.

Los bancos de areniscas tienen entre 0.5 y 2 m de ancho y están


compuestos de feldespatos angulosos sericitizados y kaolinizados,
granos de cuarzo redondeados así como fragmentos de rocas efusivas
constituidos de cristales submicroscópicos. El cemento es carbonatado.

ROCAS METAMORFICAS

3.1.5.1 Generalidades

Los sectores donde se encuentran las rocas córneas y los skarns


representan zonas de metamorfismo de contacto, acompañado de
metasomatismo en el caso de la formación de los skarns. Estas rocas
derivan de la transformación de una secuencia volcano-sedimentaria en
la cual rocas piroclásticos están intercaladas con calizas y areniscas
calcáreas.

En los alrededores inmediatos a la región mapeada, las únicas zonas


importantes donde se pueden observar los skarns constituyen los
mismos emplazamientos de explotación minera de Nambija y de
Guaysimi. En estos lugares, las rocas carbonatadas originales están
completamente alteradas en skarns, mientras que las rocas piroclásticas,
esencialmente de granulometría muy fina, están transformada en rocas
córneas.

3.1.5.2 Rocas Córneas

La mayoría de rocas de esta unidad están asociadas a la presencia de


horizontes skarníferos, aunque también se encuentran afloramientos
aislados en el seno de los piroclásticos en contacto con cualquier
intrusivo.

En los sectores de explotación aurífera de Nambija y Guaysimi las


rocas córneas se presentan bajo la forma de rocas de color verde claro,
de textura fina a afanítica y de aspecto silicificado. Las rocas pueden
mostrar igualmente finas laminaciones (2 mm) paralelas y estar
interstratificadas con horizontes más gruesos de epidota o granate.
Generalmente, no se encuentran valores auríferos significativos en el
seno de esta facies; sin embargo, se observa una roca córnea
mineralizada, íntimamente asociadas a las zonas de skarns aurífero, de
color verde oscuro y de textura muy fina. Finalmente, se encuentran
rocas completamente epidotizadas, de color verde pistache y de textura
afanítica.

En la zona de lo Pozos Ochoa, varios afloramientos encierran una


mineralogía derivada de un metamorfismo de contacto probablemente
debido a la presencia del intrusivo diorítico. De esta manera, se nota
una roca córnea de color gris verdoso claro, de textura fina a afanítica,
con pirita y calcopirita en vetillas.

Al Este de la Cordillera de Nanguipa, al borde del batolito


granodioritico, se observan afloramientos puntuales de skarns y de
granodiorítico, se observan afloramientos puntuales de skarns y de roca
córnea en el seno de los piroclásticos. En general, la roca es de textura
fina a medianamente fina, de color verde oscuro, con zonas alteradas de
color verde claro y rosado y vetillas de epidota.

En láminas delgadas, todas las rocas descritas demuestran un origen


volcánico, pertenecen generalmente a las tobas líticas con cristales, de
textura fina (toba negra V4, toba de ceniza V5) y exhiben una
minerología metamoórfica. Se observan diversos ensamblajes
mineralógicos que comprenden sesncialmente a la epidota, zoisita,
vesubianita, diopsida, tremolita-ferroactinota y calcita. La matriz es
frecuentemente cloritizada, epidotizada y sericitizada pudiéndose notar
localmente una silicificación secundaria de toda la roca.

3.1.5.3 Skarns (M2)

Muy pocos afloramientos de skarns propiamente dichos han podido ser


observados en la región mapeada para este trabajo. Se notan algunas
ocurrencias puntuales dentro del área con levantamiento geológico a
nivel de reconocimiento al Este de la Cordillera de Nanguipa que
parecen derivarse del metamorfismo de delgadas capas carbonatadas
intercaladas con rocas piroclásticas.

En el centro de la región. En los alrededores de los Pozos Ochoa, se ha


constatado la presencia de skarns y de roca córnea en contacto con la
intrusión dioritica subvolcánica completamente alterada
hodrotermalmente.

El borde Oeste del intrusivo presenta un skarns de granates cálcicos y


carbonatados que derivan probablemente de una roca carbonatada,
mientras que la extremidad oriental se encuentra una roca a base de
vesubianita y zoisita que muestra una silificación intensa y constituye,
probablemente, un endoskarn.

En el sector de Pozo Ramón se nota la presencia de skarns en el seno de


los afloramientos de calizas bajo la forma de pequeños lentes en los que
los contactos siguen los planos de estratificación. En Pozo Ramón, se
puede ver una de estas capas, de cerca de 5 m de espesor, que ha sido
completamente explotada.

En este lugar, el skarns, de textura gruesa, está compuesto


principalmente de granetes cálcicos, de calcita, vesubianita, epidota,
diopsida y cuarzo, así como una mineralización dee pirita, pirotita,
calcopirita y esfalerita. Los horizontes piroclásticos intercaladas con las
calizas son sobre todo epidotizados en estas de alteración.

En las explotaciones mineras de Nambija y Gauysimi se observan


skarns auríferos que contienen principalmente granatos cálcicos
(grosularia), diopsida, vesubianita, cuarzo, calcita y adularia. La calcita,
bajo la forma de gruesas placas, altera y engloba la vesubianita. De la
misma forma, el cuarzo secundario invade la roca, englobando y
rodeando los minerales metamórficos.

Los skarns se presentan frecuentemente con cintas en las que se pueden


observar delgadas franjas de color verde claro y de granos finos que
representan niveles de rocas córneas derivadas de piroclásticos,
alterando con camas de skarn de granates, de textura más gruesa.

3.2 ANALISIS QUÍMICOS TOTALES DE ROCA

3.2.1 Muestreo y Análisis

Con el propósito de determinar la naturaleza química de las


diferentes unidades litológicas así como de las alteraciones hidrotermales
que les afectan, se ha seleccionado 94 muestras para análisis total.

Las muestras fueron seleccionadas en forma tal de tener un muestreo


representativo de todas las facies observadas, tanto de las rocas que
presentan poca o ninguna alteración como de aquellas que aparecen
alteradas en el terreno. La procedencia de estas muestras es como sigue: 22
corresponden a las diferentes rocas intrusivas, 46 a la secuencia de
piroclásticos y volcánicos, 6 a los afloramientos de skarn dentro de la
región estudiada, incluyendo 9 muestras de la mina de Nambija y 2 de la
mina de Guaysimi.

Las muestras de roca han sido molidas hasta conseguir una granulometría
que pasa la malla 200 en el laboratorio del INEMIN, en Chillogallo
(Quito), y remitidas luego al laboratorio Bondar-Clegg de Ottawa, Canadá.
El análisis químico ha sido efectuado por espectrometría de la emisión
atómica del plasma para los elementos mayores tales como Si02, Al203, Fe
(total), Mg0, Ca0, Na20, K20, Ti02, P205, Mn0, así como también para el
C02 et S (total).

3.2.2 Resultados

Los resultados generales se presentan en el Anexo II-1.2 por orden


numérico. El anexo incluye la litología correspondiente a cada muestra así
como una leyenda de las abreviaciones utilizadas.

Todos los lugares de procedencia de las muestras analizadas están


identificados sobre el mapa de localización C-1, excepción hecha de 6
muestras de skarn provenientes de la explotación de Nambija, (#1287-A,
1287-B, 1289, 1336-C, 1340, 207), y de las dos muestras de skarn
pertenecientes a la explotación de Guaysimi (#G-2, G-5) que se ubican fuera
de los límites del mapa. Las tres restantes muestras de Nambija (# 1290-A,
1290-B, et 1290-C) están incluídas en el mapa de localización. Se debe notar
que la mayoría de muestras analizadas por los elementos mayores, son
igualmente analizadas por los 36 elementos menores.

Sobre 46 muestras de rocas volcánicas y 22 de rocas intrusivas, es decir, sobre


68 de las 94 muestras analizadas se han aplicado procedimientos
informáticos. Las figuras 5 a 9 presentan los diagramas binarios de variación
de óxidos: Na20 + K20 versus Si02, para los dos grupos y K20 versus Si02,
Na20 versus Si02 y Na20 versus K20 para los rocas volcánicas solamente. El
número de cada muestra está conveniente identificado sobre todos los
diagramas y las diferentes unidades litológicas están representadas por
símbolo distintos.

3.2.3 Interpretación Sucinta

El examen de los diagramas de variación indica en primer lugar la similitud


de composición entre las rocas intrusivas y extrusivas; los dos grupos
presentan el mismo patrón de dispersión alrededor de la curva que separa los
campos alcalinos y subalcanicos. Esta característica sugeriría igualmente el
carácter de transición del medio originario de estas rocas.

Si bien los elevados contenidos de álcalis en ciertas muestras situadas cerca


de las zonas de skarns, de fallas menores o de los intrusivos en el caso de los
piroclásticos, demuestran sin ninguna duda la presencia de una alteración
potásica en el seno de las rocas, parece dudoso que este solo hecho sea
responsable del carácter netamente alcalino de ciertas muestras. Esta
situación, al ser comparada con las dos poblaciones de Na obtenidas como
resultado del procesamiento de los datos geoquímicos ver capítulo 4.2, solo
permite especular por el momento sobre la posibilidad de la existencia de dos
diferentes episodios de magmatismo o de dos episodios de alteración
potásica. En el grupo de rocas volcánicas, parece notarse una tendencia
subalcalina calco-alcalina en los piroclásticos, mientras que las coladas
lávicas relativamente poco alteradas encontradas esporádicamente en las
zonas de falla asociadas a los episodios magmáticos tardíos, revelarían una
tendencia alcalina y pertenecerían, por lo tanto, a los basaltos alcalinos.

De la misma forma, las rocas intrusivas que presentan poca o ninguna


alteración muestran también una tendencia subalcalina, a excepción de las
rocas hipoabisales asociadas igualmente a los eventos magmáticos tardíos
que presentan composiciones situadas en el campo alcalino.

Estas observaciones podrían entonces indicar la presencia de dos fuentes o


episodios volcánicos y de un medio tectónico en transición. Un entorno
tectónico de cuenca tras-arco asociada a un arco magmático continental y al
volcanismo calco-alcalino, puede ser fácilmente considerado. Un
enriquecimiento potásico y una evolución hacia episodios magmáticos
menores más alcalinos, no es cosa desconocida en este tipo de contexto
(Reading, 1978; Best, 1982).

Finalmente, el examen de los resultados del análisis de las muestras que se


presentan alteradas sobre el terreno el terreno no revela, a primera vista,
diferencias marcadas con las muestras más frescas, como se habría podido
esperar. De todas maneras, está presente una alteración potásica, tal como ha
ido mencionado antes y la figura 9 muestra la relación inversamente
proporcional entre Na20 y K20. se nota igualmente una alteración calco-
silícea en el seno de las rocas situadas cerca de zonas de skarn.

3.3 GEOLOGIA ESTRUCTURAL

3.3.1 Generalidades

En el curso de los levantamientos geológicos, se han tomado cerca de 2000


mediaciones estructurales, las mismas que fueron posteriormente procesadas
por métodos informáticos. Los estereogramas obtenidos se presentan en las
figuras 10 a 15. La zona estudiada presenta principalmente planos de falla y
fracturamiento y sería interesante hacer un levantamiento estructural
directamente dentro del sector mineralizado de Nambija, con la finalidad de
comprender mejor las relaciones entre los mismos planos y con las zonas de
mineralización.
3.3.2 Fotointerpretación

Los resultados de la interpretación fotogeológica se presentan en la figura


4.

Los alineamientos más marcados a escala regional están orientados en la


dirección NS y parecen delimitar un corredor de rocas volcánico-
sedimentarias, en forma de crestas abruptas, en el seno de rocas granitoides
que presentan relieves más redondeados. Los yacimientos de skarns
auríferos de Camba, Campanilla, Nambija y Guaysimi están situados en el
seno de esta banda de rocas que parece extenderse por varios kilómetros de
longitud. El examen más atento de los alineamientos NS revela que podría
tratarse de fallas normales, posiblemente con un alzamiento de los tramos
centrales y un hundimiento de los bordes Este y Oeste.

Se presentan también numerosos alineamiento de orientación N-NE y NE y


limitados por los alineamientos NS. En el centro de la región considerada
se presenta un importante alineamiento NW cortando los yacimientos de
Nambija y Guaysimi.

Otros elementos de dirección general EW son igualmente importantes y


cortan la estructuras NS de una manera más extensiva. En general, el
sistema hidrográfico refleja los alineamientos estructurales.

En conclusión, al Sur de la región estudiada se nota una estructura de


forma circular y de origen desconocido. Entre otras posibilidades, la
estructura podría representar la traza de un antiguo centro volcánico. Esta
estructura está cortada por un alineamiento NW semejante a aquel que une
los yacimientos de Nambija y Gauysimi. En ciertas zonas de las
Cordilleras, se encuentran sistemas de calderas asociadas a las fosas
tectónicas (grabens) y a los yacimientos de filón (por ejem., San Juan,
Colorado, USA). Sería interesante explorar esta estructura en forma más
intensiva a fin de verificar su naturaleza y su importancia.

3.3.3 Estructuras Generales observadas sobre el Terreno

En forma general, toda la zona estudiada está fracturada y fallada. Tal como
lo indica la interpretación fotogeológica, la región está cortada por
numerosas e importantes, con orientaciones N-NE, NE (como la falla visible
en el sector de la mina de Nambija y de la falla a lo largo de la Quebrada #5)
y NW (como la falla que sigue la Quebrada del Fierro Sur y se extiende de
Nambija a la Mina Guaysimi).
Se observa, asimismo, importantes fallas en dirección EW (más precisamente
a 280°-290°). En la Quebrada del Fierro, al centro de la región estudiada,
existen planos de cizallamiento y fallas importantes, así como en los Pozos
Ochoa, donde una falla EW parece marcar el borde de una intrusión y da
origen a una zona de cizallamiento importante en la Quebrada #14.

En fin, en la extremidad NE de la colina de Mapasingue en el sector de la


mina de Nambija, se nota un plano de falla mayor orientado a 280°-290° a lo
largo del cual se observa una brecha tectónica. Es posible que esta falla,
como aquella de los Pozos Ochoa, se prolongue hacia el Este, atravesando la
Cordillera de Nanguipa, tal como lo sugiere la fotointerpretación y la
interpretación de los valores geoquímicos en oro que parecen seguir estos
alineamientos.

Los movimientos observados a lo largo de los planos de falla NS, N-NE son
casi siempre movimientos verticales, mientras que los corrimientos
horizontales parecen haber tenido lugar preferentemente según los planos
EW. Esto es particularmente evidente en el sector del playón de la mina de
Nambija, donde se puede observar dos planos de falla subverticales que
parecen conjugados con las orientaciones 20° y 110°. Los planos NE y NW
limitados por las fallas NS representarían fracturas de extensión ligadas a un
sistema principal NS y a sistemas secundarios N-NE y EW.

Es difícil establecer con precisión la cronología de los planos de falla sin un


estudio estructural más minucioso. Sin embargo, se puede suponer que el
primer sistema emplazado ha sido el sistema NS, responsable de los
hundimientos y de la creación de un graben. Los sistemas subsiguientes
serían las fallas NW/SE y NE/SW a lo largo de los cuales se encuentran
diques de dolerita y de basaltos alcalinos, respectivamente. Finalmente,
serían intervenidos los planos EW y NS, de manera posiblemente conjugada,
y los numerosos intrusivos félsicos se habrían insertado según esos planos de
fractura, como por ejemplo el intrusivo volcánico félsico de los Pozos Ochoa
o los diques graníticos de la Quebrada del Fierro Sur. El hecho del que el
sistema NS pueda haber vuelto a despalazarse tardíamente está indicado,
entre otros, por la traza ahora rectilínea de ese sistema primario. Las
observaciones estructurales a la escala del afloramiento abonan igualmente
en el mismo sentido. Los sistemas de venas de cuarzo-pirita localizados en
los volcánicos son casi exclusivamente orientados según ese plano y cortan a
menudo los otros sistemas. Los diques de dolerita, tardíos en relación con las
volcánicas, son casi unicamente cortados por diaclasas y venillas de
orientación NS.

Sin querer especular demasiado, mencionamos que los sistemas de fallas


NNE y EW han sido reconocidos en el Suroeste del Ecuador, ligados al
movimiento ENE de la Placa de Nazca en el Terciario Superior. El pórfiro
cuprífero de Chaucha en el Suroeste del país está situado en la intersección
de esas dos fallas transversales (Frutos, 1986).
Finalmente, han sido medidos algunas decenas de planos de estratificación
dentro de las unidades piroclásticas y calcáreas, demostrando la orientación
NW de las capas, con una inclinación hacia el NE en la parte Oeste de la
banda inclinación hacia el NE en la parte Oeste de la banda volcáno-
sedimentaria (sector del Mapasingue), y una orientación SE, con un
buzamiento hacia el SW en la parte Este (sector del Pozo Ramón y de la
Cordillera de Nanguipa). Esto, conjuntamente con los contactos litológicos
observados, sugiere una estructura sinclinale con los sedimentos piroclásticos
gruesos al exterior pasando a los sedimentos más finos asociados a las
secuencias carbonatadas y a los skarns auríferos hacia el interior de la
estructura. El alineamiento NW/SE que corta los yacimientos de Nambija y
Guaysimi correspondería aproximadamente al eje de la estructura.
Finalmente, parece que una falla EW, situada en los alrededores de la
Quebrada del Fierro, ha dado lugar al corrimiento de la estructura hacia la
izquierda.

La determinación de los ejes estructurales importantes está confirmada por


los estereogramas obtenidos con el procesamiento informático de los datos.

3.3.4 Estratificación

La figura 10 presenta los polos de estratificación medios. Este diagrama


sugiere, de manera general, una estructura de eje NW/SE con micropliegues
irregulares, probablemente debidos a los movimientos a lo largo de las
numerosas fallas.

3.3.5 Fallas

Las figuras 12 y 13 representan las concentraciones de los polos de los


planos de falla y las estrías que les son asociadas respectivamente.

Se pueden definir cuatro (4) grandes familias de planos. La más importante


agrupa a los planos de orientación N-NE/S-SW (5° a 20°) y de inclinación
principalmente abrupta (70°-90°). Una segunda familia tendría como plano
medio una orientación NE/SW (30°) con una inclinación 55° a 70°. Una
tercera familia seguiría una orientación NE/SW (40°) inclinación abrupta de
80° a 90°. Finalmente, una última familia, menos importante por la densidad
de fracturas que la caracteriza, con una orientación entre 90° y 115° y una
inclinación sobre el SW de alrededor de 50° a 80°.

3.3.6 Diaclasas

La figura 11 representa el diagrama de contornos de densidad de los polos de


fracturas. Las diaclasas orientación multidireccional con inclinaciones
generalmente abruptas. A pesar de todo, los sistemas más frecuentes son
esencialmente los mismos que para las fallas, es decir, los sistemas N-NE/S-
SW, NE/SW, E-W, y una familia de planos menos importante NW/SE.

3.3.7 Venas

Las venas (fig. 14) se orientan siguiendo el sistema de fracturas importante,


es decir, en torno a un plano N-NE (5°-10°) con una inclinación media de
65°. Otros dos planos secundarios pueden ser igualmente observados según
las orientaciones medias de NE/SW(60°-80°) y NW/SE (300°-330°) con
inclinaciones subverticales.

3.3.8 Diques

La figura 15 presenta un diagrama de polos de direcciones e inclinaciones de


los diques, con símbolos diferentes según su composición. En general, los
planos compilados en este diagrama muestran una orientación media NW-SE.

4 GEOQUÍMICA DE LAS ROCAS Y DE LOS MINERALES


PESADOS

4.1 INTRODUCCION Y METODOS UTILIZADOS

Durante la campaña de cartografía geológica, se han recopilado


sistemáticamente tanto muestras superficiales de roca como muestras de la
fracción pesada de los sedimentos en los arroyos, estas últimas concentradas
utilizando las bateas que se emplean para llevar oro. Se han obtenidos 565
muestras de roca y 321 muestras de sedimentos, lo que hace un total de 886
muestras. Estas muestras han sido recogidas sobre todo dentro de la región
de 682 hectáreas pero también en la zona de reconocimiento de 18 km 2. el
emplazamiento de los puntos muestreados está indicado en los Mapas C-1 y
D-1, respectivamente.

Las muestras de roca han sido trituradas en el laboratorio del INEMIN, en


Chillogallo (Quito), hasta que el material resultante pase la malla 200 y luego
han sido enviadas para ser analizadas en el laboratorio Bondar-Clegg, de
Ottawa, Canadá. Las muestras de mineral pesado han sido también molidas
en este mismo laboratorio.

Las 866 muestras han sido analizadas por activación neutrónica


simultáneamente al oro y a 33 elementos más y por absorción atómica al
cobre y al plomo. Los resultados han sido envíados a Géomines en disquetes
y transferidos luego a nuestro fichero electrónico. Una impresión de este
fichero, incluyendo todos los resultados del análisis y las coordenadas de
cada muestra, figura en los Anexos II-1.1 y III-1.

Los datos de este fichero han sido procesados numéricamente con ayuda del
programa GDM (Geological Data Management) en una computadora IBM
PC-AT. Las rocas y los minerales pesados han sido tratados separadamente
para producir los siguientes documentos: tablas de estadísticas de base,
matrices de correlación, histogramas de leyes, diagramas binarios y mapas
geoquímicos a escala 1:5000.

Par los diagramas binarios, se ha utilizado la escala logarítimica en razón a la


gran extensión de los valores (ver Tabla 1).

Los histogramas muestran la distribución de las concentraciones de cada


elemento investigado. Por la misma razón anterior, no siempre resulta posible
presentar gráficamente la totalidad de las leyes, de modo que en algunos
histogramas ha sido necesario colocar notas explicativas. Los mapas
geoquímicos a la escala 1:5000 muestran, con la ayuda de símbolos, la
distribución de las leyes dentro de la región de cada uno de los elementos
considerados. Adicionalmente, se ha indicado con un punto negro sobre
todos los mapas geoquímicos, el emplazamiento de 32 muestras de roca en
las que la concentración del oro se presenta anómala, i.e. 100ppb (ver
capítulo 4.2).

4.2 GEOQUIMICA DE LAS ROCAS

El examen de los histogramas de leyes de oro en las rocas analizadas ha


permitido definir el límite de concentraciones anómalas en 100 ppb, por
encima de la cual existen 32 muestras. Comprando los promedios
geométricos de las leyes de cada elemento de este subgrupo (Tabla 1) se
observa que el promedio de la media es más elevado para el arsénico, el
fierro y el plomo y más bajo para el sodio y el bario (no se ha tenido en
cuenta el tungsteno a causa de la contaminación debida a la trituración).
Estos cinco elementos han sido considerados como elementos
acompañantes del oro y por eso se han elaborado los histogramas
(Anexo II-2), los diagramas binarios de cada uno de ellos versus el oro
(Anexo II-4) y los mapas geoquímicos a la escal 1:5,000 de la
distribución de cada uno de estos elementos dentro de la región (Mapas
C-2 a C-7).

Las leyes de oro en las rocas de la región varían desde valores menores
que el índice de dirección (5 ppb) hasta un máximo de 37,900 ppb (Tabla
1). Las leyes anómalas (>100 ppb) están frecuentemente asociadas a las
fallas o a las zonas de cizallamiento y aparecen algunas veces alineadas
según los planos de fallas mayores, como por ejemplo a lo largo de la
Quebrada del Fierro – El Diamante, con una prolongación posible al
Este de la cresta de la Cordillera de Nanguipa. En la esquina Noroeste de
la zona, los valores anómalos , se nota una concentración de valores
elevados en la parte extrema Norte de la región, cerca del yacimiento de
Nambija. Es de notar que al Este de la cresta de la Cordillera de
Nanguipa, las leyes de oro son generalmente muy bajas con excepción
de una de ellas.

Las leyes de arsénico en las rocas de la región varían desde valores más
pequeños que el índice de detección (1 ppm) hasta un máximo de 383
ppm. La gran mayoría de leyes se ubican en menos de 40 ppm y el
promedio geométrico es de 4.99 ppm (ver Tabla 1). Las concentraciones
anómalas se encuentran agrupadas dentro de la región de Mapasingue,
donde las leyes de oro son relativamente elevadas, y directamente al Sur
de dicha región, en el sector de “Los Pozos Ochoa”, donde las leyes de
oro son más bien bajas. En la Quebrada de las Avispas, al este de la
cresta de la Cordillera de Nanguipa, hay una cierta correspondencia entre
los valores elevados de las leyes del oro y del arsénico. En los otros
lugares (por ejemplo más al Oeste y al Suroeste), donde las leyes de oro
son elevadas, no hay correspondencia con el arsénico. Estas
observaciones demuestran el valor limitado del arsénico como indicador
de la presencia de oro dentro de la región en estudio.

La presencia del fierro en las rocas varía también desde leyes más bajas
que el límite de detección (i.e. 0.5%) hasta un máximo de 43%. La gran
mayoría de las leyes se está en menos de 10% y el promedio geométrico
es de 3.8% (ver Tabla 1 y Anexo II-3). Las leyes elevadas están
generalmente asociadas a la presencia de la pirita. El fierro es un fiel
compañero del oro en todas las áreas del mundo (Boyle, 1979) y
Nambija no es una excepción. El fierro sigue muy cerca al oro en el
sentido de que donde los valores del oro son elevados, los del fierro lo
son también y viceversa (ver Mapa C-4).

El contenido en plomo en las rocas varía desde leyes más pequeñas que
el índice de detección (i.e 2 ppm) hasta un máximo de 10,600 ppm con
un promedio geométrico de 6.47 ppm (Tabla 1). Aunque la media
geométrica sea más elevada para las muestras con oro a >100 ppb que
para la totalidad de las muestras, no hay realmente correlación entre el
plomo y el oro. Esto es evidente en el diagrama binario (Anexo II-4)
donde, para la mayor parte de las muestras anómalas en oro, el valor
correspondiente en plomo no es muy elevado. Observando el mapa
geoquímico del elemento (Mapa C-5), queda remarcado que las
concentraciones elevadas de plomo se hallan agrupadas en dos sitios en
particular: “Pozo Ramón” y los “Pozos Ochoa”. En primer caso, se
encuentra también un poco de zinc asociado a las leyes bajas anómalas
de bario. Desde el punto de vista geológico se encuentra dentro de las
calizas estraterificadas donde se halla galena y esfalerita. Los pozos han
sido abandonados después de un primer intento de explotación a causa
de una baja ley de oro. En los “Pozos Ochoa” las leyes elevadas de
plomo también están asociadas a las bajas leyes de bario. Se encuentra
un poco de skarn, pero la roca principal es una toba alterada. Los pozos
han sido rápidamente abandonados.

Sin embargo, el primero acompaña al oro en la Quebrada al Oeste, en


una zona de falla importante. Conviene notar que los contenidos
correspondientes de sodio son particularmente bajos.

Se encuentra también una serie de concentraciones anómalas de plomo


alineados según un eje NS, sobre una paralela ubicada al Este de la
cresta de la Cordillera de Nanguipa.

La ley de bario en las rocas varía desde valores menores que el índice de
detección (100 ppm) hasta un máximo de 28,200 ppm, con un promedio
geométrico de 458 ppm (Tabla 1). Para el grupo de muestras en las que
el oro es anómalo, el promedio geométrico correspondiente al bario es
de 217 ppm (Tabla 2), bastante más bajo que para el conjunto de las
muestras. Sobre el diagrama binario (Anexo II-4) se ve claramente esta
tendencia. En el mapa geoquímico de el elemento (Mapa C-6), los
valores bajos anómalos de bario están asociados generalmente a las altas
leyes de oro, pero se encuentran también bajas leyes de bario en la
región de “Pozo Ramón” y “Pozos Ochoa”. Además, se evidencia un
alineamiento de valores anómalos de bario sobre el flanco Este de la
Cordillera de Nanguipa.

Las características de sodio en las rocas varían de 0.1 a 6.7% con un


promedio geométrico de 1.6%. para las 32 muestras, en las cuales el
contenido de oro es superior a 100 ppb, este promedio es de 0.2%,
netamente más bajo. Según el diagrama binario del sodio versus el oro
(Anexo II-4) parece haber dos (2) poblaciones: una primera con valores
elevados de sodio para las leyes de oro menores que 100 ppm y una
segunda población con bajas leyes de sodio.

Sobre el mapa geoquímico del sodio (Mapa C-7) se ve que las leyes
bajas de este elemento están asociadas a los contenidos elevados de oro.
Pero se encuentra también lugares, como “Pozo Ramón”, donde no hay
prácticamente oro, pero plomo y zinc asociados a bajas leyes de sodio.
El sodio tendría, entonces, escaso valor como indicador del oro en la
región.

En el capítulo 3.2, se han comprado los valores de k20 versus los valores
de Na20 para 46 muestras de rocas volcánicas en las que se han
efectuado análisis totales. El resultado es una relación inversamente
proporcional. Sería interesante analizar la totalidad de las muestras
tomadas de la región en relación a su contenido de potasio y poner los
resultados sobre un mapa a fin de ver si se puede ubicar de esta forma las
zonas de alteración potásica que estarían quizás ligadas a la presencia del
oro.
4.3 GEOQUIMICA DE LOS MINERALES PESADOS

Para las 321 muestras de la fracción pesada de los sedimentos de río


recogidos y concentrados por bateas y luego analizados por 36 elementos
(Anexo III-1), se ha elaborado también una tabla de estadísticas de base
(Tabla 3), dos matrices de correlación: aritmética y logarítmica (Anexo III-
3), un histograma de concentraciones de oro (Anexo III-2) y el mapa
geoquímico del oro (Mapa D-2).

Además, al igual que para las muestras de roca, se ha elaborado una tabla
de estadísticas para las muestras que tenían concentraciones elevadas de
oro, o sea mayores que 1500 ppb (Tabla 4). Comparando las medias
geométricas de los elementos de esta tabla con aquellas de la totalidad de
las muestras, queda evidenciado que el promedio es más elevado en el
subgrupo para el arsénico, el antimonio, el bario y el tungsteno, los que
serían por lo tanto elementos acompañados del oro en los concentrados por
bateas.

Para este estudio se han considerado únicamente los valores del oro, visto
que es el propio oro el mejor indicador por el oro. La ley varía desde
valores menores que el índice de detección (5 ppb) hasta un máximo de
41,500 ppb, con un promedio geométrico de 182 ppb.

Sobre el mapa geoquímico del oro presente en los concentrados por bateas,
se ve que los contenidos elevados en oro se encuentran agrupados en
cuatro lugares en particular:

- Primeramente, en la mayor parte de los arroyos que drenan el flanco Sur


de Mapasingue, en el sector NW de la región, lo que no resulta
sorprendente si se considera la proximidad del yacimiento de Nambija.
- En el segundo lugar, se encuentra una concentración de altas leyes en el
tramo centro-sur de la Quebrada del Fierro. Esta anomalía es interesante a
causa de la coyuntura favorable: falla importante y proximidad de rocas
volcánicas de grano fino (frecuentemente asociadas al calcáreo) (ver
capítulo 5).
- Una tercera concentración de valores altos del contenido de oro en las
bateas se encuentra en la zona de reconocimiento, en la esquina SW de la
región de la Quebrada 24, donde casi todas las muestras presentan valores.
Considerando que se añade a esto la proximidad de una falla importante en
dirección NS, la anomalía resulta muy interesante. Desde que las leyes de
oro son muy elevadas, es posible que sea debido a la presencia de este
metal en forma de pepitas, lo que estaría posiblemente asociado a un
pórfido (visto la predominancia de intrusivos en ese sector). De toda
manera se necesitaría hacer un mapeo geológico y un muestreo más
detallados en este sector.
- Una cuarta anomalía, también en la zona de reconocimiento, se encuentra
en el sector SE de la región, aguas abajo del yacimiento aurífero de
Guaysimi, en actual explotación, sobre la Quebrada #22. las muestras
tomadas aguas arriba presentan el riesgo de estar contaminadas por los
relaves de las minas, pero las cuatro muestras de valores anómalos han
sido tomadas más aguas abajo, en los afluentes que vienen del Oeste. Esta
zona merecería ser mejor examinada: además de los valores anómalos
encontrados en las bateas, se debe tener en cuenta la presencia de un gran
canto rodado calcáreo observado en la Quebrada #22, entre las muestras
B92 et B93. Adicionalmente, las condiciones geológicas existentes sobre
el flanco Este de la cresta de la Cordillera Nanguipa serían favorables a la
presencia de skarn: o sea sedimentos volcánicos mapeados no lejos de allí,
posiblemente con intercalaciones de calizas (el canto rodado) y la
proximidad de una falla importante en la dirección NS a lo largo de la
cresta.

5 METALOGENIA

5.1 GENERALIDADES

Este capítulo presenta las conclusiones de un estudio paragenético


realizado con el propósito de definir un modelo metalogénico del
yacimiento de Nambija. La superficie cubierta por nuestros trabajos de
campo no incluyen al propio yacimiento de Nambija. Habiendo
realizado únicamente dos jornadas de trabajos y teniendo disponible
solamente las muestras tomadas, las conclusiones que se presentan son
propuestas únicamente como una primera etapa dentro del proceso de
elaboración de un modelo genético del yacimiento. Se recomendará
efectuar estudios subsecuentes, estratigráficos, estructurales y
paragenéticos, en los sitios mismos de todos los yacimientos conocidos
de la banda volcano-sedimentaria (Cambana, Campanilla, Nambija y
Guaysimi) en paralelo con estudios del contexto geológico regional a fin
de precisar el modelo.

Las muestras examinadas han sido tomadas en los sectores de


Mapasingue, de El Arco y del Playón en la zona mineralizada de
Nambija, en la mina Guaysimi durante una visita al terreno, así como en
diferentes lugares incluidos en la superficie mapeada al detalle,
principalmente en el sector del Pozo Ramón.

El estudio paragenético ha abarcado:

1) Una evaluación megascópica de la alteración dentro de los skarns y


las rocas volcánicas asociadas, incluyendo pruebas de alteración
potásica.
2) Un examen en láminas delgadas pulidas de los skarns auríferos y
estériles.
3) Una consulta bibliográfica tendiente a comparar estos yacimientos
con los otros skarns auríferos (ver Anexo VI-2).
5.2 CONTEXTO LITOLÓGICO Y ESTRUCTURAL DE LAS
MINERALIZACIONES AURÍFERAS

Las mineralizaciones auríferas se ubican dentro de los skarns en el seno de


una secuencia volcano-sedimentaria. Esta última constituye una banda de
rocas de algunos kilómetros de ancho, de orientación NS y de extensión
desconocida, limitada a cada lado por fallas que parecen definir un foso
tectónico (graben) al interior de un batolito granogioritico.

La secuencia está constituida de piroclásticos (brecha volcánica, tobas de


bloques y lapilis, tobas de cristales y cenizas) y de volcánicos mixtos
alcalinos y calco-alcalinos (basaltos alcalinos, andesitas, dacitas) dentro de
los cuales se intercalan delgados horizontes de calizas (arenas y lutitas
calcáreas). El conjunto está cortado por diques y por pequeños stocks de
diorita, aplica y rocas subvolcánicas de composiciones semejantes a las
rocas extrusivas. No han sido observadas rocas sedimentarias pelíticas. La
secuencia volcano-sedimentaria está afectada por plegamientos más o
menos irregulares que definen globalmente una estructura sinclinale de eje
NW/SE, fuertemente cortada por fallas N-S, N-NE, NW/SE, NE/SW con
movimientos verticales y por fallas E-W a lo largo de las cuales se han
producido corrimientos horizontales.

Del exterior hacia el interior del sinclinal se pasa de facies piroclásticas


gruesas hacia las facies más finas.

Se observan dos tipos de skarn en la región. El primero, situado en la parte


oriental de la zona estudiada (Pozo Ramón), está en contacto de falla con
piroclásticos medios a gruesos. Los valores en oro son débiles y la
mineralización observada está constituida por pirita, calcopirita y esfalerita
con un poco de galena.

Los skarns auríferos propiamente dichos están localizados en el centro de


la región estudiada, en el corazón de la estructura synforme y están
asociados a las tobas de cenizas pudiendo presentarse finalmente
laminados, silíficados y metamorfoseados. Las susceptibilidades
magnéticas de estas rocas parecen ser más bajas que de las rocas
circundantes, lo que queda demostrado por el levantamiento geofísico. La
explicación de este hecho- propiedades intrínsecas de las rocas o producto
de la alteración hidrotermal muy intensa-es todavía desconocida.

Se nota igualmente la presencia de stocks y de diques dioríticos así como de


intrusiones subvolcánicas mineralizadas en pirita en las vencidades de los
skarns. En la mina de Nambija, sector del Playón, se ha observado
localmente una roca que se asemeja a una brecha intrusiva (diatreme)
asociada a las zonas mineralizadas.
Finalmente, el yacimiento de Guaysimi, localizado dentro del mismo tipo de
roca que el de Nambija, se encuentra en la prolongación del alineamiento
NW/SE que define el eje del sinclinal.

5.3 MORFOLOGIA DE LOS YACIMIENTOS

La mineralización aurífera económica parece ligada exclusivamente a los


horizontes de skarns y de rocas córneas intercaladas, aunque se nota también
un enriquecimiento en oro de las zonas de fallas mayores adentro de las rocas
volcánicas. Los niveles de calizas, skarns y cenizas más competentes
constituyen formaciones muy fracturadas y permeables que permiten el
pasaje de soluciones mineralizantes. La presencia de materias precipitantes
(Fe, C02 ) puede igualmente jugar un rol de trampa geoquímica además de
trampa estructural originada por el gran número de fracturas.

En Nambija, la mineralización aurífera se presenta bajo la forma de oro al


estado nativo, tanto diseminado en la roca, más frecuentemente entre los
granates de los skarns de textura gruesa (derivados del metamorfismo de
rocas carbonatadas bastantes puras), como de los lentes o de las venas de
cuarzo-feldespato potásico que cortan los skarns y las rocas córneas
(derivadas del metamorfismo de las rocas piroclásticas).

En Guaysimi, el contexto es similar. La secuencia típica observado, según


ciertos mineros, serían tobas alteradas por intemperismo (llamados
“cuarcitas”), seguidas de tobas laminadas metamorfoseadas en rocas córneas,
de color verde claro, seguidos después de brechas (no siempre presentes) y
de skarn propiamente dicho.

La mineralización está diseminada en los skarns pero en ciertas zonas, se


presenta bajo la forma de venillas de cuarzo-feldespato potásico que cortan
toda la secuencia antes descrita.

5.4 ALTERACION HIDROTERMAL

Un examen megascópico de cerca de 25 muestras provenientes del


sector mapeado y del yacimiento de Nambija señala dos tipos de
alteración importante:

1) Alteración potásica en las rocas ígneas y piroclásticas. Esta


alteración comprende el reemplazo de las plagioclasas, en forma de
fenocristales y dentro la matriz, por un feldespato potásico y por la
epidota así como el reemplazo de los anfíboles por la biotita o la
clorita. La pirita puede estar introducida en las fracturas.

El teñido de las muestras con cobaltinitrito de sodio indica que todas


las rocas están alteradas, salvo posiblemente las aplitas, en las cuales
la tintura se presenta débil. La alteración potásica intensa se
manifiesta por una alteración de color rosado, beige o gris pálido en
la matriz de la roca (#1056 a , 1056c, 1065 a, 1175, 1329c) a lo largo
de las venas y fracturas (#79 a, 209, 1033 a). Los fenocristales de
pliagioclasa están completamente reemplazados (1329c) o alterados
a lo largo de los planos de clivage (#1056 a). La muestra #1037b
presenta una alteración potásica brechosa cortada por una vena de
cuarzo estéril.

2) Alteración calco-silícea de las calizas (exoskarns)y, en contacto con


los exoskarns, una alteración semejante pero limitada de los
piroclásticos (endoskarns). Los exoskarns están caracterizados por
un ensamblaje calco-silíceo de granos medios de color verde, beige o
marrón pálido. La mineralogía y la paragenesis de los exoskarns se
describen en el capítulo siguiente.

5.5 PARAGENESIS DE LOS SKARNS CURIFEROS

Los eskarns primarios de Nambija presentan textura y mineralogía


simples, con un ensamblaje de granete-clinopiroxeno de granos medios.
Los cristales de granate (70%) son principalmente allotriomorfos y de
0.5 a 1mm de ancho. Además, los cristales tienen bandas coloreadas
concéntricas y son anisotrópicos y deformados. Las texturas de
deformación incluyen laminas y “kinks” de sobretensión, extinciones
onduladas y texturas cataclásticas (fracturación, brechificación). En una
muestra proveniente de los alrededores de Pozo Ramón (1329C) se
observa un granate isotrópico idiomorfo que reemplaza a los granates
anisotrópicos (foto 21), lo que indica por lo menos dos generaciones de
granates, siendo los más jóvenes posteriores a la deformación que ha
sobretensionado los granates precoces. Químicamente, los granates son
miembros de la serie de la solución sólida grosularia-andradita (C03(A1,
Fe)2Si3012). El color beige de los garnates sugiere principalmente la
grosularia, mientras que la andradita es habitualmente de color oscuro.
Los clinopiroxenos (30%) son de la serie diopsida-salita, con cristales
allotrimorfos de hasta 0.5 mm de longitud que forman masas irregulares
entreveradas con los cristales de granate. Se observa, asociados a la
diopsida, cerca de 1% de granos de pirita y de calcopirita así como trazas
de calcita y de epidota. En la muestra 1329C, la esfalerita (10%) llenan
las fracturas y proporcionan la característica brechosa a los granates
(foto 22). Esta textura representa una removilización de mineralización
primaria asociada a una deformación.

El ensamblaje primario está retrogradado en una muestra proveniente de


Pozo Ramón por un episodio de mineralización zincífera. Las masas de
esfalerita que alojan pequeñas inclusiones de calcopirita y de galena
(<0.1 mm de ancho) están asociadas a un ensamblaje de pirita-
calcopirita-calcita-cuarzo-clorita-tremolita-epidota.
El ensamblaje primario de los skarns está también retrogrado por el
episodio de mineralización aurífera. A escala megascópica se observan
pequeños lentes y venas discontinuas (fisuras de tensión) de cuarzo-
feldespato potásico-calcita-hematita-clorita-zoisita-oro-nativo que
alteran el skarn. El cuarzo, la hematita y la zoisita fibrosa reemplazan al
granate, mientras que la calcita y la hematita reemplazan a la diopsida.
La pirita es reemplazada por la hematita. La adularia está identificada
por la morfología del feldespato potásico. Este ensamblaje secundario
remplaza a los minerales primarios en el borde de las venas y también en
las redes de microfracturas presentes en los skarns. Pequeñas venas de
sericita tardías cortan el ensamblaje aurífero.

El oro se encuentra en forma de granos o de masas allotriomorfas de 0.1


a 5mm de ancho en los skarns alterados o en las venas (foto 23).
Ninguna fase argentífera u otra fase sulfurada ha sido observada en las
venas, indicando que este episodio mineralizador es esencialmente
monometálico.

La muestra 70ª. Tomada en la Quebrada del fierro, una zona de falla


ubicada fuera de la zona de skarns aurífero, es un skarn completamente
retrogradado en un ensamblaje de clorita-hematita-cuarzo-calcita. Esta
muestra es anómala en oro (1860 ppb Au) y se presume que esta
alteración es el resultado, quizás el equivalente distal, del episodio de
mineralización aurífera, aunque el oro nativo y la adularia están
ausentes.

En suma, se reconocen tres estados de mineralización en las muestras


estudiadas (figura 16):

1) Mineralización primaria de pirita-esfalerita-calcopirita removilitada


siguiendo una deformación del ensamblaje de skarn;
2) Mineralización secundaria de esfalerita-pirita-calcopirita-galena que ha
retrogradado el ensamblaje de skarn.
3) Mineralización aurífera del tipo filón que también ha retrogradado el
ensamblaje primario. Aunque no se puede determinar la relación
paragenética entre los estados 2 y3, se presume que el estadio 2 constituye
una alteración secundaria mesotermal del skarn y que es más viejo que el
episodio de mineralización aurífera.

5.6 DISCUSION

Los skarns de la región de Nmbija presentan las características de los


skarns cálcicos cupríferos. Estas características incluyen:

1) Mineralización de pirita, pirrotina, calcopirita y esfalerita en una ganga


calco-silícea de granate (andradita-grosularia), diopsida, wollastonita,
magnetita, etc.
2) Retrogradación de los skarns primarios por procesos mesotermales tardíos.
3) Asociación a las intrusiones calco-alcalinas (diorita, granodiorita,
monzonita cuarcífera).
4) Derivación de metasomatismo de lechos calcáreos en las secuencias
volcánicas cogenéticas (andesitas, dacitas).
5) Medio tectWnico orogenético de arco continental (Einaudi et al., 1981;
Einaudi y Burt, 1982).

Pensamos que los skarns estudiados son derivados de un metasomatismo de


calizas observadas en las secuencia volcánico-sedimentarias. La presencia de
piroclásticos alterados no es desconocida en medios hidrotermales y la
formación de skarns en las rocas ígneas (endoskarns) es típicamente un
proceso local (Einaudi et al., 1981; Meinert, 1986). Los skarns de Nambija
son pobres en sulfuros (pirita, calcopirita, esfalerita tardía) y están asociados
a una actividad hidrotermal aparentemente ligada a las intrusiones dioríticas
locales. La alteración potásica importante de los piroclásticos, los volcánicos
y las intrusiones subvolcánicas está geográficamente asociada a los skrans y
es probablemente contemporánea a la formación de ellos. La alteración
potásica de las rocas ígneas o pelíticas asociada a la génesis de los skarns
cupríferos está bien documentada (Einaudi et al., 1981; Carten, 1986; Wares
1986).

La mineralización aurífera es muy rica en los skarns. El oro se presenta al


estado nativo, principalmente alojado en las venas discontinuas que llenan
las fisuras de tensión, lo que representa un estado del tipo filón secundario
que parecía ser independiente a la formación de los skarns. El ensamblaje
mineral2gico de las venas indica un episodio epitermal (<300°C) de tipo
adularia-sericita (Hayba, 1985), mientras que los skarns se forman
normalmente a temperaturas elevadas (400°-600°C, condiciones
mesotermales).

No se ha observado ninguna mineralización aurífera en las rocas volcánicas,


a excepción de los niveles piroclásticos intercalados con los skarns. Solo se
han encontrado venas de cuarzo ligeramente piritosas que cortan la alteración
potásica, lo que parece particular porque, habitualmente, los yacimientos
epitermales de tipo adularia-sericita están asociados a zonas de falla o están
alojados en una variedad de litologías, principalmente de volcínitos calco-
acalinos. Este tipo de mineralización es normalmente depositado un millón
de años después de la formación de la rocas encajonantes. Estos hechos
indican que los controles estructurales sobre esta mineralización epigenética
son más importantes que la naturaleza de las rocas encajonantes (Buchanan,
1981; Hayba, 1985). Así la mineralización aurífera de Nambija representa
una situación particular donde los skarns han servido de trampas
estructurales o, siendo ricos en fierro, de trampas geoquímicas donde las
estructuras han permitido una infiltración de los fluidos portadores de oro. El
comportamiento receptor de las litologías ferríferas sobre los fluidos
auríferos bisulfurados está documentado para las formaciones de fierro del
Precámbrico (Phillips et al., 1984), lo que puede ser pertinente en relación a
los skarns estudiados. A nivel mundial, los skarns de Nambija se comparan
difícilmente a los skarns conocidos, aún si estos últimos se han formado en
medios tectónicos semejantes (Einaudi, 1981, 1982), ya sean los medios del
arco oceánico o de los bordes orogénicos continentales (arco principal y arco
trasero). Los skarns “auríferos” son típicamente skarns ferríferos o cupríferos
donde el oro es extraído como subproducto de la explotación de los metales
usuales (Einaudi et al., 1981; Shimazaki, 1980; Mainert, 1986). Estos skarns
son generalmente pobres en oro (<3g/t Au) y el metal forma parte de la
mineralización primaria o está enriquecido en las venas polimétalicas
mesotermales que alteran los skarns. La mineralización aurífera está
frecuentemente asociada a la pirita nickelífera y cobaltífera en los skarns
ferríferos y a las pequeñas cantidades de bornita/calcosina, arsenopirita,
sulfuro de bismuto, telururos o sulfosales en los skarns cupríferos. La tabla 5
resume las características de los skarns explotados por los metales usuales y
por el oro.

Los yacimientos auríferos de la región de Nambija presentan un tipo de


mineralización poco común. En el Ecuador, como en el Perú, las
mineralizaciones de metales usuales de tipo skarn y las mineralizaciones
polimetálicas/auríferas del tipo filón epitermal se encuentran casi
exclusivamente en los volcánicos Mesozoicos y Cenozoicos de la Cordillera
Occidental (Petersen, 1965, 1977, 1979; Goossens, 1972, 1976). Nambija
constituye entonces un descubrimiento único de mineralización hidrotermal
cortando un skarn cálcico cuprífero.

El contexto geológico exacto de la región de Nambija permanece incierto,


teniendo en cuenta los siguientes hechos:

1) La zona subandina es una cintura cabalgada en comprensión activa;


2) La banda volcano-sedimentaria está limitada por fallas (donde la
naturaleza en profundidad es desconocida); la banda define un
alineamiento NS según la fotografía aéreas;
3) Las rocas dentro de la banda no están sometidas a un metamorfismo de
contacto. Nos permitimos especular que la banda está alojada en una
delgada lamina cabalgada entre dos intrusivos con importantes
desplazamientos horizontales. La ausencia de metamorfismo de contacto
excluye la posibilidad de un enclave gigante (roof pendant) dentro de los
batolitos. La naturaleza mixta alcalina/calco-alcalina de los volcánicos
compatible con la formación de una cuenca de arco trasero (graben) que
en el origen fue, probablemente, el medio de acumulación de secuencia
volcano-sedimentaria.

La evolución tectónica andina consiste en una superposición de etapas


sucesivas de compresiones con plegamientos, fallas inversas y magmatismo
intrusivo seguido de períodos prolongados caracterizados por la ocurrencia
de fallas normales, desarrollo de grabens y predominancia de magmatismo
intrusivo .

Las texturas de deformación singenética dentro de los skarns (granates


sobretensionados, venas epitermales dentro de las fisuras de tensión)
atestiguan la formación de yacimientos en un medio en estado de
comprensión. Este hecho podría explicar la superposición de dos tipos de
mineralización (epitermal y skarn) en los yacimientos si se especula que,
siguiendo la formación de secuencia volcano-sedimentaria ha sido
transportada a niveles litotectónicos más elevados, permitiendo la
mineralización epitermal bajo las condiciones de <300°C y de <0.1 kb.

En resumen, la mineralización aurífera de los skarns de Nambija es


netamente secundaria. Estos skarns son diferentes de los skarns auríferos
típicos en virtud de la riqueza y de la naturaleza monometálica y epitermal de
la mineralización. Concluimos entonces en que la mineralización no puede
ser clasificada como tipo “skarn aurífero”, pues ella constituye una
mineralización aurífera epitermal alojada en un skarn.

Este descubrimiento es económico y geológicamente importante porque


señala la existencia de un potencial económico para los yacimientos
epitermales auríferos no solamente en la zona subandina, sino en los skarns
cupríferos en general.

6 CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

6.1 CONCLUSIONES

Desde el punto de vista geológico, se encuentra una banda de rocas


volcano-sedimentarias orientadas en dirección NS de algunos kilómetros
de ancho que aloja a las mineralizaciones auríferas. Esta banda se
encuentra en el seno de un batolito de composición granodiorítica. La
mineralización aurífera está asociada a skarns y a rocas piroclásticas
finas. El conjunto esta cortado por dikes y pequeños stocks de diorita,
aplita y rocas subvolcánicas. Localmente, se observan también
volcánicos y doleritas tardías en las zonas de falla y cizallamientos.

Desde el punto de vista metalogénico, la mineralización aurífera en


los skarns de Nambija es netamente secundaria. Estos skarns son
diferentes de los skarns auríferos típicos en virtud de su riqueza y de la
naturaleza monometálica y epitermal de la mineralización. Nosotros
concluimos que la mineralización no puede ser clasificada como del tipo
“skarn aurífero”, pues constituye una mineralización aurífera epitermal
alojada en un skarn y representa por lo tanto un nuevo estilo de
mineralización en los Andes.

Desde el punto de vista geoquímico, la determinación del oro en los


materiales concentrados a la batea nos parece la manera más útil de
prospectar oro en la región. Tres zonas características han sido
determinados de esta manera (ver recomendaciones). La geoquímica de
las rocas nos indica que el plomo está asociado a las grandes zonas de
falla(fenómeno corriente en las zonas grabens) y que el oro parece
asociado al arsénico en las litologías favorables relacionadas con un
control estructural NW-SE.

Los levantamientos geofísicos magnetométricos y electromagnéticos


VLF han sido útiles para ayudar a mapear las unidades litologícas, pero
no directamente para reconocer las zonas auríferas.

Una inspección sumaria del yacimiento mismo de Nambija nos conduce


a creer que la mineralización aurífera estaría distribuida en pequeños
lentes ricos en oro en los skarns, pero también bajo la forma de
stockwerks y estaría asociada a los stocks y filones de rocas intrusivas
así como a los controles de orden estructural.

6.2 RECOMENDACIONES

6.2.1 Efectuar un levantamiento fotográfico aéreo con el fin de producir


una serie de aerofotografías más detalladas.

6.2.2 Estudio fotogeológico de estas fotos y mapeo regional a fin de


precisar el contexto geológico regional, especialmente la extensión
de la banda volcano-sedimentaria y la estructura (especialmente los
grabens y las calderas).

6.2.3 Análisis de muestras litogeoquímicas por el potasio a fin de


delimitar las zonas de alteración potásica (aquellas con una alta
relación k:Na).

6.2.4 Seguimiento de las tres (3) zonas características determinadas por


la presencia anómala de oro en las muestras de sedimentos
pesados: mapeo detallada, muestreo cerrado de sedimentos
pesados, muestreo litogeoquímico para el oro, el sodio y el potasio.
Las zonas skarns asociados a las rocas intrusivas y de alineamiento
en dirección NW, los skarns están frecuentemente cerca de tobas
encintadas a grano fino. En la esquina SW de la zona de
reconocimiento, la zona geológica característica seria posiblemente
un granitoide porfírico.

6.2.5 Levantamientos geofísicos magnetrométricos y electromagnéticos


VLF sobre los yacimientos conocidos de Nambija, Cambana,
Campanilla y Gauaysimi a fin de determinar si conviene utilizar
estos métodos con fines de prospección.
ANEXO IV: INFORME GEOFÍSICO

1. INTRODUCCIÓN

En el área del proyecto Sur-Oriente, Ecuador, se han efectuado


levantamientos magnetrométricos a campo total, así como
levantamientos electromagnéticos T.B.F. (VLM-EM) entre el 27 de
Agosto y el 1° de Octubre de 1987. Estos levantamientos han sido
efectuados con el principal propósito de obtener información básica
que sirva de soporte para el mejor conocimiento geológico del
terreno y también con la finalidad de buscar la evidencia geofísica
en relación con la prolongación del yacimiento de Nambija hacia el
Sur, es decir, dentro del área donde se desarrollaban nuestras
investigaciones.

2. PERSONAL

En los levantamientos ha participado el siguiente personal:

- J. Stembera, geofísico a cargo del proyecto.


- A. Bastien, técnico.
- 2 Obreros.

3. UBICACIÓN

La malla geofísica se ubica entre la Quebrada del Fierro y el límite


Norte del área del proyecto.

El emplazamiento de las líneas principales en dirección Este-Oeste


ha sido determinado por la presunta orientación Norte-Sur de las
estructuras generales, conforme se desprende del análisis de las
fotografías aéreas, así como por la distribución de los trabajadores
de campo que han realizados antes de la llegada del equipo
geofísico. Es importante señalar que, en algunos lugares, el
emplazamiento de las líneas ha estado influenciado por la
inaccesibilidad del terreno.

4. TRABAJOS REALIZADOS

Levantamientos magnetométricos a campo total: 15.0 km


Levantamientos VLF-EM, Estación NAU :15.7 km
Estación NLK :13.9 km
Las lecturas han sido tomadas cada 12.5 m para los levantamientos
magnetométricos y cada 25.0 m para los levantamientos.

Las líneas han sido señalizadas con estacas ubicadas cada 25.0 m
medidos horizontalmente. Las líneas LB 0+00 han servido de base para
conformar la malla.

Con el propósito de tener un punto fijo de referencia para los


trabajadores sucesivos, se ha instalado una placa de concreto en la
progresiva 0+75E de la línea LB 0+00.

5. LEVANTAMIENTOS MAGNETOMETRICO

5.1 Instrumentación

El levantamiento magnetométrico ha sido ejecutado con la ayuda de un


aparato de procesión nuclear, modelo G-856A de GEOMETRICS.
Para permitir las correcciones debidas a las variaciones diurnas, se ha
instalado en el lugar una estación base que ha operado durante la
ejecución de todo el levantamiento. La precisión del aparato es de 0.5
gamma.

5.2 Resultados

Los resultados se presentaron en forma de perfil sobre un mapa de


valores de campo total (Mapa E-1). Además, se incluye un mapa de
contornos de campo total. El nivel de base en el mapa de perfiles es de
29500 gammas. La posición de los cuerpos magnéticos está
representada por un eje que une el centro de las anomalías de cada
perfil. Las líneas 4+875N y la parte Norte de la línea 8+75E no fueron
levantadas debido a problemas técnicos.

5.3 Interpretación

El levantamiento magnetométrico ha puesto en evidencia muchas


zonas con distintas susceptibilidades magnéticas, indicando así la
existencia de unidades litoestratigráficas diferentes.

Señalamos, al mismo tiempo, que las variaciones de intensidad están,


en general, entre 100 y 500 gammas aproximadamente. El relieve
magnético en la parte Oeste de la zona del proyecto esmás acentuado
entre las líneas LB 0+00 y 2+00S del mapa E-1. el relieve se compone
de cuatro (4) ejes magnéticos –no. 1,2,3 y 4. las intensidades varían
entre 100 y 400 gammas y sugieren la presencia de un medio físico
bastante homogéneo (cuerpo intrusivo) posiblemente recortado por
diques o coladas lávicas. Parece también que esta unidad podría
prolongarse hacia el Este hasta aproximadamente 10+00W (sobre todo
entre las líneas LB O+OO y L 1+00S), asociándose al eje conductor
T.B.F no. 3(Mapa E-3)

En la parte central del área del proyecto, entre las líneas LR 4+00W, y
8+00W, se observan dos (2) ejes magnéticos no. 5 y 6 (Mapa E-1) con
una intensidad de 200-400 gammas aproximadamente. Se debe notar
que el eje no. 5 probablemente no continúa hasta la línea 4+50S puesto
que las intensidades sobre está línea son menos fuertes, del orden de
100-150 gammas. El eje magnético no. 7 (Mapa E-1) no está asociado
a los ejes mencionados anteriormente, pudiendo el mismo continuar
hasta el eje no. 5 sobre la línea 2+00S. Esta posibilidad parece estar
reforzada por las bajas intensidades magnéticas de su flanco Oeste que
se pueden observar hasta la línea 1+00S, sugiriendo así la presencia de
una falla NW-SE, o la presencia de un dique con la misma dirección,
en la prolongación de los afloramientos de basalto aclcaline traquítico
observados en la Quebrada no. 5. Los ejes no. 8,9 y 10 (Mapa E-1)
entre las líneas 3+50S y 4+50S delimitan rocas de origen posiblemente
volcánico que presentan susceptibilidades netamente más fuertes que
las rocas situadas al Norte, es decir, entre las líneas LB 0+00 y 2+00S.
Esta zona se prolonga quizás hasta 2+00E aproximadamente (sobre las
líneas 3+50S y 4+50S) y su límite está marcado por el eje magnético
no. 12.

Se observa, sobre el flanco Este del eje no. 12 (Mapa E-1), una
depresión magnética de continuidad bien definida que se prolonga
hacia el Norte, a las progresivas 362.5E (L4+50S), 337.5E (L3+50S),
237.5E (L2+00S) y quizás a la 2+00E (l1+00S).

Esta zona podría representar una banda de rocas fílicas limitada sobre
su flanco Este por el eje magnético no. 13 de la línea L2+00S(Mapa E-
1).

El eje magnético no. 14 (Mapa E-1), con una intensidad cercana a 200-
400 gammas, delimitada probablemente el flanco Oeste de un intrusivo
se asocia a las intensidades magnéticas débiles; sin embrago, parece
estar recubierto en su extremidad Norte por las rocas volcánicas, lo que
puede explicar las intensidades más fuertes, de cerca de 100 gamas,
sobre la línea 1+50N.
6. LEVANTAMIENTOS ELECTROMAGNÉTICOS T.B.F.

6.1 Instrumentación

Este levantamiento ha sido realizado simultáneamente con el


levantamiento magnético, utilizando un aparato CRONE RADEM
de Crone Geophysics que permite medir el ángulo de inclinación
(dip angle) del gran eje de la elipse de polarización. Las medidas
fueron tomadas cada 25 m y en seguida filtradas y transformadas
siguiendo el método FRASER. Como fuentes emisoras se han
utilizado dos estaciones T.B.F – Puerto Rico (NAU) a 28.5 kHz y
Seattle, Washington (NLK) a 24.8 kHz. Inicialmente se había
escogido la estación Laulauli de Hawai, pero debió ser abandonada
a causa de su débil señal.

6.2 Resultados

Los resultados obtenidos con la estación NAU, que fue


seleccionada como estación principal, se presentan en forma de una
mapa de perfiles (Mapa E-3). Las líneas Este-Oeste de la malla de
levantamiento tratada están en relación con la dirección dad de la
estación emisora. Adicionalmente, las anomalías de la estación PR
están representadas en forma de contornos (Mapa E-4) en un mapa
de filtro Fraser sobre el ángulo de inclinación (tal como se describe
en Geophysics, Vol. 34, 1969). Para la interpretación de los
resultados se ha adotado la convención de Crone. Se debe notar que
los valores sobre las líneas Norte-Sur han sido incorporados en el
tratamiento informático de los contornos, causando así un ligero
desplazamiento de ciertas anomalías sobre el mapa Fraser, sin
influenciar, sin embargo, sobre la calidad de los resultados. La
estación emisora SW ha sido relacionada con las líneas Norte-Sur
de la malla trazada (Mapa E-5). Las líneas 1+50N, 12+00W,
14+25W y una parte de 1+00S no han sido levantadas a causa de
una interrupción en la señal de la estación. Hay que notar que la
calidad de los resultados de la estación SW no son del todo
satisfactorios debido a la debilidad de la señal. Sin embargo, los
resultados obtenidos han sido incorporados en el informe.

6.3 Interpretación

Se han identificado siete (7) zonas conductoras distintas numeradas


del 1 al 7 sobre el mapa Fraser de la estación NAU (Mapa E-4),
localizadas probablemente en la roca.
Zonas Conductores 1 y 2

Estas dos (2) zonas conductoras aparecen en la esquina Oeste del


área del proyecto, entre las líneas LB0+00 y L2+00S (zona
conductota 1) y LB 0+00 y 4+50S (zona 2). Ellas corresponden a
los ejes conductores T.B.E 1, 2 y 3. La zona 1 alcanza una
intensidad de 1 grados Fraser y muestra una buena asociación con
los ejes de los cuerpos magnéticos 1 y 2 (Mapa E-1) que
representan intensidades magnéticas del orden de los 200 a 300
gammas. El tipo de la anomalía magnética indica que se trataría de
contrastes de susceptibilidad ya sea debidos a los cambios
litológicos abruptos, los que pueden estar verdaderamente
asociados a un intrusivo recortado por diques o a una zonas de
fallas de dirección N-NE.

La zona conductora 2 (eje conductor T.B.F. 3) muestras las


intensidades más fuertes, de hasta 25 grados Fraser, que se asocian
con las anomalías magnéticas débiles, próximas a los 100 gammas.
Las zonas conductoras 1 y 2 son ciertamente atribuibles a los
índices mineralizados en pirita presentes en la roca intrusiva y
asociados a las zonas de fallas.

Zona Conductora 3

Esta zona se sitúa entre las líneas LB 0+00 y 3+50S entre 6+00 y
10+00W, siguiendo una dirección NE-SO. La zona alcanza 20 y 25
grados de intensidad y está representada por los ejes conductores
T.B.F. 4 y 5 (Mapa E-3). En algunos lugares (L12+00S y 3+50S
entre 6+00W – 9+00W) la zona muestra asociaciones magnéticas
directas de 200 a 400 gammas que están representadas por los ejes
de los cuerpos magnéticos 5 y 6 (Mapa E-1). Se debe notar que las
anomalías T.B.F y magnéticas no se prolongan hasta la línea
4+50S.

Zona Conductora 4

Esta zona de intensidad media (10 a 15 grados Fraser) se sitúa entre


las líneas 3+50S y 4+50S en el nivel 6+00W. La zona parece estar
asociada al eje de cuerpos magnéticos no. 7 (Mapa E-1), con
intensidades de 200 a 300 gammas pero de limitada extensión. Una
lava máfica o una zona fallada y mineralizada en pirita puede ser el
origen de esta zona, cuyo flanco Oeste es adyacente a una zona de
intensidades magnéticas muy irregulares (L 4+50S entre 6+00W y
8+00W) que sugiere la presencia de una zona fallada.
Zona Conductora 5

Esta zona está limitada por las líneas LB 0+00 y 4+59S así como
por LR+00 en el Este y LR 4+00W. En algunos lugares, la zona
alcanza intensidades fuertes que llegan hasta 25 grados Fraser y
parece dividirse en dos (2) segmentos, el primero sobre la línea
1+00S (0+50W) y el otro entre las líneas 3+50S y 4+50S (20
grados Fraser). Esta zona está representada por el conductor no. 9
(Mapa E-3) de continuidad bien definida. Sin embargo, su
emplazamiento sobre la línea 2+00S (0+75W) no está bien
identificado. El segmento Norte de la zona no corresponde a
ninguna anomalía magnética.

Por el contrario, el segmento Sur se asocia a varias anomalías


magnéticas de intensidad madia a fuerte, entre 200 y 500 gammas,
que están representadas por los ejes magnéticos 8, 9 y 10 (Mapa E-
1). Esta característica podría indicar la presencia de diversos tipos
litológicos (volcánicos y diques intrusivos). Las anomalías
corresponderían también esta vez a zonas piritizadas adentro de
estas rocas.

Considerando lo mencionado anteriormente, la interpretación más


probable del eje conductor no. 9 (Mapa E-3) sería que se trata de
una falla, probablemente mineralizada, que puede en efecto ser la
prolongación de las estructuras que afectan al yacimiento de
Nambija al otro lado de la montaña. Dentro de esta zona fallada se
vuelve a encontrar, por otra parte, la presencia muy puntual de
skarn y de mineralización en pirita.

Zona Conductora 6

Esta zona, de limitada extensión, muestra intensidades elevadas que


llegan hasta los 30 grados Fraser entre las líneas 3+50S y 4+50S
entre2+00 y 3+00E y corresponde al eje conductor no. 10 sobre el
mapa de perfiles NAU (Mapa E-3). Se puede observar una directa
asociación con el eje del cuerpo magnético no. 12 (Mapa E-1). Esta
zona conducta parece estar emplazada en la extremidad Sur de una
zona ligeramente NO-SE que corresponde al eje magnético no. 12
(Mapa E-1) y quiz160s también al eje no. 11 (Mapa E-1). No se
debe olvidar que esta zona se encuentra dentro del eje de la
estructura sinclinal ligada al yacimiento de Nambija.
Zona Conductora 7

Esta zona se ubica en la extremidad Este, entre las líneas 1+50N y


1+00S, y presenta intensidades medias de 15 grados Fraser. La
zona no corresponde a ninguna anomalía magnética significativa,
tiene una extensión limitada y está probablemente emplazada al
medio de una estructura intrusiva.

7 CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

En cuanto respecta a la evaluación de esta parte del área del proyecto en


relación con la prolongación del yacimiento de Nambija, se debe tomar en
cuenta lo siguiente:

1) Los levantamientos geológicos efectuados no revelan la presencia de


skarns auríferos ni en la zona adyacente al yacimiento de Nambija ni en la
región explorada, a excepción del skarn del Pozo Ramón donde dos (2)
muestras tienen contenidos de oro moderadamente elevados.

2) La interpretación de la información geoquímica no demuestra ninguna


asociación significativa entre mineralización en oro y mineralización de
oro metal en los skarns investigados, lo que dificulta la elección de
métodos geofísicos apropiados.

Los trabajos efectuados en el área del proyecto han permitido detectar


siete (7) zonas conductoras. La mayoría de ellas demuestra una buena
asociación con las anomalías magnéticas. Las conclusiones estructurales
o litoestratigráficas pertinentes a cada una de las zonas se encuentran en
los par. 5.3 y 6.3 respectivamente.

En vista de las razones mencionadas anteriormente, dos (2) zonas de


importancia limitada podrían ser tomadas en consideración para la
eventual confirmación de los trabajos. Estos son:

1) La zona conductora no. 5 (Mapa E-4) definida por el eje conductor T.B.F.
no. 9(Mapa E-3), en particular su segmento entre las líneas LB 0+00 y L
2+00S, podrí ser investigada en lo que respecta a la posibilidad de
encontrar bolsones aislados de skarn así como para comprender mejor los
elementos estructurales dentro de esta zona.

Métodos de resistividad tales como la polarización provocada o la


polarización espectral provocada podrían ser empleados. En caso de
requerir investigación en profundidad, se podrían tomar en consideración
métodos magneto-telúricos (AMT, CSAMT).
Se hace notar que las zonas se baja resistividad no deberían ser las más
interesantes, pues ellas podrían corresponder a zonas de mineralización en
pirita (fallas). Estas zonas, aún si presentan valores anómalas en oro, no
son probablemente interesantes desde el punto de vista económico.

La investigación y la interpretación adecuada de las rocas de alta


resistividad podrían también ser dificultadas por la presencia de rocas con
patrones geofísicos semejantes (intrusivo, piroclástico, etc).

2) La zona de skarn situada entre el pozo Ramón y el camino Guaysimi


podría ser explorada más en detalle. Se podrían descubrir así las
bolsonadas mineralizadas en oro aisladas. La tarea probablemente sería
facilitada por la significativa mineralización en zinc que parece estar
asociada a este skarn. La población provocada en configuración dipolo-
dipolo parece ser el método más apropiado.

OBSERVACIONES RELATIVAS A LA CONTINUACIÓN DE LOS


TRABAJOS AL SUR DE LA QUEBRADA DEL FIERRO

1) Alineamiento espaciados cada 100 m como máximo.

2) Levantamiento magnético (campo total y gradiente), no para identificar


la posible extensión del yacimiento sino más bien para delimitar la
extensión de las unidades litológicas.

3) Medida de la susceptibilidad magnética directamente sobre las muestras


de roca a fin de facilitar la interpretación de los levantamientos
magnetométricos.

4) Localización de los alineamientos estructurales (fallas con pirita) con la


ayuda del método EM-VLF.

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