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A El Siglo de Torreón
Attn. Sr. Director y Cartas del lector
Enero 7 del 2010

HACE DOSCIENTOS AÑOS en Querétaro, el 7 de enero de 1810, el cura

Miguel Hidalgo se reunía con algunas familias que comentaban en torno a los
acontecimientos políticos, sociales y económicos, locales, nacionales e internacionales y
llegaban a una conclusión radical en cuanto a México atañe porque las circunstancias
estaban a modo y lógicas para cambiar el rumbo del país que como entonces, ahora EN
ENERO DEL 2010 se encuentra, en medio de una miseria galopante, en retroceso
socioeconómico y políticamente, en manos de una canalla innombrable representada por
los más corruptos e ineptos funcionarios públicos, caterva conformada por los ricos y el
gobierno contrapuestos a los anhelos, intereses y necesidades del pueblo y, para
infelicidad y desgracia de los mexicanos y, concatenados en sus intereses pecuniarios,
ideológicos y políticos, con gobiernos y empresas extranjeros.

En lo local, la capital y los estados del centro bullían de una indiada miserable,
sin trabajo ni sustento para lo más primordial de ellos y sus familias, –como ahora- los
ricos, muy ricos, petulantes e insatisfechos aún con sus haciendas, planificando y
procurando hacer uso –mal uso- de la indiada más a su favor y en detrimento de ellos.
Las haciendas los procuraban con emolumentos menores aún y con más horas de trabajo
y el gobierno en manos de un tal Venegas –el virey- que por sus intereses ligados a los
ricos y extranjeros, descuidó la justicia existentes y proliferó la inseguridad y los abusos
–como ahora- eran el pan nuestro de cada día y a la alza. En lo nacional todo igual
menos en el Sur, Sinaloa y Sonora donde las cosas estaban peor aún.

En lo internacional, Napoleón acosando a Fernando VII y a punto de apoderarse

de España y sus colonias, México, La Nueva España incluida; Estados Unidos urdiendo
la manera de quedarse –por lo pronto- con la mitad de nuestro territorio el mundo
ignorándonos como ahora lo hace con Palestina… entonces ese era –casi- el momento
propicio para hacer algo y, esos de Querétaro e Hidalgo “harían algo” a partir de
Octubre de ese año. Las circunstancias obligaron a empezar el 16 de Septiembre y, antes
de un año, los conspiradores iniciales, todos, gracias a Elizondo, un resentido que no
recibió el trato que creía merecer, en Acatita de Bajan, apresó a la mayoría y los entregó
a los realistas y en pocos días fueron ejecutados y sin embargo, las condiciones
siguieron peor y, aún sin Morelos, posteriormente, el destino y no precisamente solo,
esos hombres sacrificados, permitió que México transitara a estadios mejores.

El gobierno actual es pésimo, –esa es mi apreciación particular salvo lo que

piensen los lectores- los pobres son muchísimos más que hace tres años y son más
pobres y los ricos son más ricos y junto a la caterva de funcionarios públicos, gobiernos
y empresas extranjeras conforman un equipo depredador fabuloso que hace TODO para
agrandar sus haciendas y canonjías y poco o nada para satisfacer las necesidades
mínimas de la mayoría de los mexicanos, como HACE DOSCIENTOS AÑOS.

Atenta y respetuosamente
Augusto Hugo Peña D.

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