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@. Levi Shevuss (1992) @® Captruto 15 LA NOCION DE ESTRUCTURA EN STNOLOGIA! Es preciso no tomar por verdedes histdricas las inves- jones que pueden hacerse sobre este tema, sino considerarlas solamente como razonamientos hipotéti- cos y condicionales, destinados a esclarecer la natura: leza de las cosas antes que 2 mostrar su verdadero origen y como semejantes a los razonamientos que diariamente hacen nuestros fisicos acerca de la for- ‘macién del mundo, J.J, Rousseau, Discours sur erigine de Vinégalité par- imi tes hommes, La nocién de estructura social evoca problemas demasiado vastos Y vagos para ser tratados dentro de los limites de un articulo. El Programa de este simposio lo admite implicitamente: han sido asig- nados a otros participantes temas muy préxim2s al nuestro. Asi, por ejemplo, estudios tales como los consagrados al estilo, a las catego- rias universales de la cultura, a la lingliistica estructural, se vinculan ‘muy estrechamente con nuestro tema y el lector deberd también acudir a ellos. ; Por otra parte, cuando se habla de estructura social, se hace sobre toda referencia a los aspectos formales de los fendmenos. sociales, se abandona, pues, el campo de la descripciéa y se consideran no- ciones y categorfas que no pertenecen en sentido propio a la etnolo- afa, pero que ésta querria emplear a la manera de otras disciplinas que, desde hace mucho, tratan algunos de sus problemas como noso- tos desearfamos poder tratar los nuestros. Estos difieren, sin duda, en cuanto al contenido, pero —equivocados 0 no— tenemos el senti- miento de que nuestros propios problemas podrian ser estudiados de ‘modo parecido, con la condicién de adoptar el mismo tipo de for malizacién, El interés de las investigaciones estructurales es, precisa. 1, Este trabajo fue traducido al francés y adaptado de la versign original en inglés: Social Structure, Wenner-Gren Foundation International Symposium on Anthropology, Nueva York, 1982, Se publicé ulteriormente en A, L. Krosber (ed), Anthropology’ To-Day, Illinois, Unisersity of Chicago Press, 1953, pags. 524553 " tal ver no sea otra cosa que una com ino eon sentido bien precios enn es ar durante una decena de ahoe soges Se la emplea porque suena apradate Puede, sin duda, ser considevade tenay mamiene testa de su estructura, Pero lo mismo san eas, esd cate, fseléico, un organismo, una sociedad Sapa a ot , un cristal © una maquina, Cualguier cn ets ue no sea algo completamente amorfow hese na Scone. fonces, fda, Una personalidad tipica (Kroeber, Este texto apunta personalidad bésican, inventario de todos los libros y articulee Se ocupan de las relaciones sociales i limites Ja sola lista excederia los limites 2. Comparese et texto citado lérmino “estructura socials! lo feproducir en nota los titulos come s encontrara fécilmente, por el notes bibliografia general incluida a1 Ane! ae pletos de las obras. citadas del autor y Ia fecha de publicacién, nee volumen, LA NOcION DE ESTRUCTURA 301 comparar nuestn Ni 1. DerINtctsn y PRonLeMas'pe méropo EI principio fundamental afirma que la nocién de estructura social 0 se Tefiere a la realidad empirica, sino a los modelos construidos de acuerdo con ésta, Aparece, asi, la diferencia entre dos nociones fan Proximas que a menudo se las ha confundido; quiero decir. las de estructura social y de relaciones sociales. Las relaciones seeialas son la materia prima empleada para la construccién de los modelos Sue Ponen de manifiesto la estructura social misma, Esta no puede Ser reducida, en ninguin caso, al conjunto de las relaciones sociales observables en una sociedad determinada. Las investigaciones de ec. tructura no r sis estructural empleadas e1 Se trata, entonces, de saber en qué consisten estos modelos que son el objeto propio de los andlisis estructurales. El problema no vainente cuatro condiciones, En primer lugar, una estructura presenta un cardcter de sistema. Consiste en elementos tales que una modificacion cualquiera en uno de ellos entrafia una modificacién en todos los demas. En segundo lugar, todo modelo pertenece a un grupo de trans- formaciones, carla una de las cuales corresponde a un modelo de ia misma familia, de manera que el conjunto de estas transformacionee constituye un grupo de modelos. En tercer lugar, las propiedades' antes indicadas permiten prede- cir de qué manera reaccionar4 el modelo, en caso de que uno de sue elementos se modifique. Finalmente, el modelo debe ser construido de tal manera que su funcionamiento pueda dar cuenta de todos los hechos observados? 3 pCommarese con von Neumann: «Los modelos (tales como los juegos) son construcciones tedricas que suponen una definicion precsa, exhaustive fap Sie 302 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA a) Observacion y experimentacion Se distinguirén siempre estos dos niveles. La observacién de los hechos y la elaboracién de los métodos que permiten emplearlos para construir modelos no se confunden nunca con la experimentacton Por medio de los modelos mismos. Por cexperimentacién sobre los Modelos» entiendo el conjunto de procedimientos que permiten saber cémo reacciona un modelo sometido a modificaciones 0 comparar dos modelos del mismo tipo o de tipos diferentes entre sf. Esta dis tincién es indispensable para evitar ciertos malentendidos, No hay, acaso, contradiccién entre la observacién etnografica, siempre con, creta e individualizada, y las investigaciones estructurales, a las que Se atribuye a menudo un carécter abstracto y formal, con el propésito de negar que pueda pasarse de la primera a las segundas? La contra. diceién se desvanece cuando se ha comprendido que estos caracteres antitéticos corresponden a dos niveles diferentes 0, para ser més exactos, corresponden a dos etapas de la investigacién, En el plano de la observacién, la regla principal —casi podria decirse la tinica €s que los hechos deben ser observados y descritos con exactitud, sin permitir que los prejuicios teéricos alteren su naturaleza y su impor. tancia. Esta regla implica otra, por via de consecuencia: los hechos deben ser estudiados en s{ mismos (zqué procesos concretos los han Producido?) y también en relacién con el conjunto (es decir. que todo cambio observado en un punto seré vinculado a las circunstancias globales de su aparicién). Esta regla y sus corolarios han sido claramente formulados por K. Goldstein (1951, pags. 18-25) a propésito de investigaciones psico. fisiolégicas; son aplicables también a otras formas de andlisis extrac. tural. Desde nuestro punto de vista, permiten comprender que no existe contradiccién, sino intima cotrelacién, entre el cuidado por 2] detalle conereto, propio de lu descripcion etnogratica, y 1a valider generalidad que reivindicamos para el modelo construido @ partir de ella. Se pueden concebir, en efecto, muchos madelos diferentes pero cémodos, por distintas razones, para describir y explicar un grupo de fenémenos. Con todo, el mejor sera siempre el modelo fcativo, Pero habitualmente, a ciertos aspcctos consideradoe ratio, as condiciones enumerudas mas arriba rman y Morgenstern, 194), LA NOCION DE ESTRUCTURA 303 verdadero, es decir, aquel que, siendo el més simple, responder a la doble condicién de no utilizar otros hechos fuera de los conside- rados, y de dar cuenta de todos. La primera tarea es, pues, saber cuales son estos hechos. b) Conciencia ¢ inconsciente Los modelos pueden ser conscientes 0 inconscientes, segiin el nivel en el que funcionan. Boas, a quien corvesponde el mérito de esta distincion, ha mostrado que un grupo de fendmenos se presta mucho mejor al andlisis estructural cuando Ia sociedad no dispone de un modelo consciente para interpretarlo o justificarlo (1911, pagi- hha 67). Sorprendera tal vez encontrar citado aqui a Boas como uno de los maestros del pensamiento estructuralista; algunos estarian dis. Puestos a atribuirle ef papel opuesto, En otro trabajo‘ he tratado de mostrar que el fracaso de Boas, desde el punto de vista estructuralista, no se explica por la incomprensién nj la hostilidad, En la historia del estructuralismo, Boas ha sido mas bien un precursor, Pero ha preten- dido imponer a las investigaciones estructurales condiciones dema- siado rigurosas. Algunas de ellas han podido ser asimiladas por sus Sucesores, pero otras eran tan severas y tan dificiles de cumplir Que hubieran esterilizado el progreso cientifico en cualquier campo. Un modelo cualquiera puede ser consciente o inconsciente sin ‘que esta condicién afecte su naturaleza. Solo es posible decir que luna estructura sumergida en forma superfical en el inconsciente hace mas probable la existencia de un modelo que la oculta, como luna pantalla, a la conciencia colectiva. Los modelos conscientes, en efecto —que se llaman comunmente «normas»— se cuentan entre les mas pobres, debido a que su funcién no consiste en exponer los resor- tes de las creencias y los usos. sino en perpetuarlos. El analicis estructural se enfrenta, asi, a una situacién paraddjica, bien conocida por el lingilista: cuanto mds nitida es la estructura manifiesta, tanto mas dificil se vuelve aprehender la estructura profunda, a causa de los modelos conscientes y deformados que se interponen como obs. téculos entre el observador y su objeto. El etndlogo deberd, pues, distinguir siempre entre las dos situa: ciones en que corre el riesgo de encontrarse, Puede tener que cons. truir un modelo correspondiente a fendmenos cayo cardcter sistemati- co no ha sido percibido por la sociedad estudiada, Esta es la situacién mas simple, y Boas ha sefialado que ofrece al mismo tiempo el terre no mas favorable para la investigacién etnoldgiea. En otros casos, sin embargo, el etnélogo tiene que vérselas no solamente con materiales brutos, sino también con modelos ya construidos por la cultura en 4. Historia y etnotogtas, capitulo 1 de este libro. 308 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA feaeston, bajo forma de interpretaciones. He sefalado ya que seme- Fas Typos Pueden ser muy imperfectos, pero ello ne siempre cote ea eMuchas culturas Hamadas primitivas han elaborade modelos Toots {e8l2s matrimoniales, por ejemplo— mejores que ioe nage, es at dos etndlogos profesionates! Hay, pues, dos razsues pare oe, Menos, aheacmOUelos ecaseross, Primero, pueden ser buenos 0, al Tome wotrecer un camino de acceso a ia estructura; cada culture simaicn @ estos modelos, productos de la cultura indigens: no aes Paciegs aue las normas culturales no son automaticamente’ eetrasee Titinac” més bien importantes piezas que ayudan a descubrit cots teninas: Ya se trate de documentos en bruto, ya de controucntes feoticas comparables a las que aporta el propio etnélose, Durkheim y Mauss han comprendido bien que las Fepresentacio- eee femenina, que marcan una fecha importante en la histori ao Is estudios estructuralistas (Richardson y Kroeber, 1940), y también algunas otras de las que hablaremos mas adelante sigs) halardnclempls yun andisisdetalado en Lévi-Strauss (199, pg, S58 y sigs $ Sobre este tema, véanse los capitulos 7 y & de este volumen. LA NocION DE ESTRUCTURA 305 No existe, sin embargo, ninguna conexién necesaria entre las no- clones de. medida y las de estructura. Las investigaciones estracie, rales han aparecido en las ciencias sociales como una consecuencia, indirecta de ciertos desarrollos de la matematica moderna, que han Glorgado creciente importancia al punto de vista cualitativo, alejam dose.as{ de la perspectiva cuantitativa de la matematica tradicicnal, En ‘Gistintos campos: légica matematica, teoria de los conjuntos, torfa de los grupos y topologia, se ha comprendido cémo problema que RO comportaban solucién métrica podian igualmente ser some. {dos a un tratamiento riguroso. Recordemos aqui los titulos de Inc gpias (de mayor importancia para las ciencias sociales: Theory of Games and Economic Behavior, de J. von Neumann y 0. Morgene form (1940); Cybernetics, etc., de N. Wiener (1948); The Mathematical Theory of Communication, de C. Shannon y W, Weaver (1950), 4) Modelos mecdnicos y modelos estadisticos ), 8€ deberian definit entonces medias y el modelo apropiado seria de naturaleza estadistion Entre estas dos formas existen, sin duda, ‘ormas intecmedias, depender de los dos tipos de modelos, segiin la manera en que se lee parupe entre si © con otros fenémenos. Un sistema que favorese of Matrimonio entre primos cruzados, pero donde esta formule: idect trades. oni, $010 a una determinada proporcién de las uniones resi: wadat, exige, para set explicado de manera satislactoria, ale were modelo mecanico y un modelo estadistico. {as investigaciones estructurales carecetian ce interds si las es: 306 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA tructuras no fueran traducibles a modelos cuyas propiedades formales son comparables, con independencia de los elementos que las com. Ponen. El estructuralista tiene por tarea identificar y aislar los niveles de realidad que poseen un valor estratégico desde el punto de vista en que él se coloca; dicho de otra manera, que pueden ser represen: tados en forma de modelos, sea cual fuere la naturaleza de estos uiltimos. A veces es posible también considerar simulténeamente los mis- mos datos colocdndose en puntos de vista diferentes, que poseen por igual un valor estratégico, aunque los modelos correspondientes sean ya mecanicos, ya estadisticos. Los ciencias exactas y naturales cono- cen situaciones de este tipo; asi, por ejemplo, la teoria de los cuerpos en movimiento pertenece a la mecénica, si los cuerpos considerados Son poco numerosos, Pero cuando este nimero aumenta mds alld de un cierto orden de magnitud, es preciso recurrir a la termodind- mica, vale decir, reemplazar el’ anterior modelo mecdnico por un modelo estadistico, aunque la naturaleza de los fenémenos perma. nezea la misma en’ ambos casos. En las ciencias humanas y sociales se presentan a menudo situa- ciones del mismo género. Témese, por ejemplo, el suicidio: se lo Puede considerar desde dos perspectivas diferentes. El anilisis de Jos casos individuales permite construir lo que se podria llamar modelos mecdnicos de suicidio, cuyos elementos estén constituidos por el tipo de personalidad de la victima, su historia individual, las Propiedades de los grupos primario y secundario a los cuales perte. hnecié, y asi sucesivamente; pero se pueden también construir modelos estadisticos, fundados en la frecuencia de suicides durante cierto periodo, en una o varias sociedades, o también en grupos primarios Y Secundarios de tipos diferentes, etcétera. Sea cual fuere la pers. Pectiva elegida, de este modo habremos aislado niveles donde el es- fudio estructural del suicidio es significativo; en otros términos, nive. tea. que autorizan la eonstruccion de modelos que puedan ser compa. rables en cuanto a 1) distintas formas de suicidio; 2) sociedades diferentes; 3) distintos tipos de fenémenos sociales. El progreso clen. tifico no consiste solamente en el descubrimiento de constantes ca racteristicas de cada nivel, sino también en delimitar niveles no loca. lizados todavia, en los cuales conserva su valor estratégico el estudio de determinados fenémenos. Es lo que ha ocurrido con el advenimien. to del psicoandlisis, que descubrié el modo de establecer modelos co. frespondientes a un nuevo campo de investigacién: la vida psiquica del paciente tomada en su totalidad. Estas consideraciones ayudarén a comprender mejor la dualidad (sentimos la tentacién de decir: la contradiccién) que caracteriza a los estudios estructurales. Nos proponemos, primero, aislar niveles significativos, 1o cual implica segmentar los fendmenos. Desde este Punto de vista, cada tipo de estudios estructurales pretende ser auto. LA NOCION DE ESTRUCTURA 307 momo, independiente con respecto a todos los demés y también con respecto a la investigacién de los mismos hechos pero sobre la base de otros métodos. Y, sin embargo, nuestras investigaciones no se interesan en otra cosa que en construir modelos cuyas propiedades formales, considerando la comparacién y la explicacion, sean redu. cibles a las propiedades de otros modelos pertenecientes a niveles estratégicos distintos. Podemos, asf, esperar que los muros que sepa- ran las disciplinas vecinas seran abatidos, y que entre ellas se promo. vera una verdadera colaboracién, He aqui un caso que permitiré ilustrar este punto. El problema de las relaciones entre la historia y Ia etnologia ha sido motivo re- cientemente de numerosas discusiones. No obstante las eriticas que se me han hecho/ insisto en que la nocién de tiempo no constituye el centro del debate. Ahora bien, si lo que distingue a estas dos dis- ciplinas no es una perspectiva temporal propia de la historia, zen qué consiste su diferencia? Para responder, necesitamos referirnos @ Jas observaciones presentadas en el pardgrafo anterior y situar la historia y la etnologia en el seno de las otras ciencias sociales, La ethografia y la historia difieren, ante todo, de la etnologla y Ja sociologfa, en Ja medida en que las ‘dos primeras se fundan en la reunién y organizacién de documentos, mientras que las dos ultimas estudian mds bien los modelos construidos a partir de esos documen- tos y por medio de ellos. En segundo lugar, la etnografia y la etnologia corresponden res- pectivamente a dos etapas de una misma investigacién, que desem- boca finalmente en modelos mecénicos, mientras que la historia (y las restantes disciplinas clasificadas por lo general como ciencias sauxiliares» de la historia) culmina en modelos estadisticos. Las rela ciones entre nuestras cuatro disciplinas pueden entonces ser reducidas a dos oposiciones, una entre observacién empitica y construccién de modelos (que caracteriza la etapa inicial) y la otra entre el cardcter estadistico 0 mecdnico de los modelos, considerados como punto de Negada. Si aplicamos arbitrariamente el signo + al primer término y el signo — al segundo término de cada oposicién, obtenemos lo Siguiente: 7. ‘Acerca de estas discusiones, véase C, Lévi-Strauss, «Historia y etnologiae (cap, 1 de este volumen); Race ef histoire, Paris, 1982; dichos trabajos han sus citados criticas y comentarios por parte de: C. Lefort, «change et Ie lutte des hhommess, Les Temps Modernes, febrero 1951; «Soctetes sans histoire et historicités, Cahiers Internationaux de Sociologi, vol. 12, afo 7, 1952. Jean Pouilion, «L'euvre de Claude LéviStrauss», Les Temps Modernes, julio 19%; Roger Bastide, sLovi Strauss ou Tethnographe a la recherche du temps perdus, Presence ‘Africana, abribmayo 1956; G. Balandier, «Grandeur et servitude de Vethnologues, Cahiers die Sud, ao 43, n, 337, 1956 308 PROBLEMAS DE MToDo Y ENSENANZA [Historia | Sociotogia | Emografia [Etnologia Observacién empirica/cons- truccién de modelos + = + = Modelos mecénicos/modetos estadisticos es ea + + , 0 inclusive Frario a) Una serie de oscilaciones entre ambas formar’ fo! el con. Eailo. el tiempo de la historia es cestadisticos: ona reversible y lucion que retrotra- iiblica romana, seria 1A NOCION DE ESTRUCTURA 309 Gag Nestigaciones estructurales. RadeliffeBrown y Lowie hay ten Gido, ambos, a sobreestimar dicho papel. El primero eecribe (1952, pag. 14): Ss considera generalmente que la sociologia teérica es una clen- Ge nauctiva, La induccién es, efectivamente, el procedimients loaee Genpremite inferir proposiciones generales de la consideracion ao Glemplos especiales. El profesor Evans-Pritchard.. parece porear’s te clactncae am t040 Iéaico de induccién, que empiea la comparacton Ie clasificacién y la generalizacién, no puede ser aplicade a lee fon ae la emennos ¥ 8 la vida social... En lo que a mi respecta, sostenso dhe fa etmologia se funda en el estudio comparctivo y sistenduien oe lun gran mimero de sociedades.» En un estudio anterior, Radcliffe Brown decia, a propésito de la religién (1945, pag, 1): «El método experimental aplicado a la si ensefis. que debemos poner a prueba nuestras To suficiente de religi fiestan. Una empresa semejante sobrepasa las ca investigador y supone la colaboracién entre varios rei misma perspectiva, Lowie comienza per seflar (19484, pé- gina 38) que «la literatura etnolégica estd llena de pretendidas oo laciones que carecen de toda base experi de cada caso entrafia como consecuencia una rsstriccién on al nae Taare Gc clemplos que es posible considerar de esta manera, No so corre entonces el riesgo de limitarse a casos que son demasiado espe. FinelSt $f: Porto demés, como se desarrolla el evolucfonismo biolégieo contem. Pordneo, en los trabajos de J. B.S. Haldane, GC, Simmer er ow PROULEMAS DE METODO Y ENSERANZA ciales para poder formular, sobre una base tan estrecha, conclusiones las para los restantes? Goldstein responde (1951, pag. 25): «Esta objecién olvida completamente la situacién real: ante todo, la acumt. lacion de hechos —inclusive muy numerosos— no sitve de nade ei hhan sido establecidos de un modo imperfecto, y no conduce nunca al conocimiento de las cosas tal como ocurren en realidad... Es pre- ciso elegir casos que permitan formular juicios decisivos. Pero’ en. tonces lo que se ha establecido en un caso valdré para los otrose Pocos etnélogos aceptarian suscribir esta conclusion. Por tanto, la investigacién estructuralista es vana si no se tiene plena conciene del dilema de Goldstein: o bien estudiar muchos casos, de una man era siempre superficial y sin grandes resultados, o bien limitaree Fesueltamente al andlisis en profundidad de un pequeio mimero de ellos y probar asi que, en fin de cuentas, una experiencia bien heche vale una demostracién. eCémo explicar esta adhesién de tantos antropélogos al método comparativo? von Neurone ie ha Propuesto una teoria matematica para una conducts tan aval y Nenmumy egerse— tan subjetiva como el sfarols en el péquer? (vos ‘Neumann y Morgenstern, 1944, pags. 186-219). mica y la lingiistica se asocien un dfa para fundar une disciplina lencia de la comunicacién, reconozcamos desde tiré sobre todo en regias. Estas reglas son inde. ‘es de In naturaleza de los participantes (individuos o grupos) presente comu- siguid. La reto- 320 PROBLEMAS DE M#TODO Y ENSERANZA cuyo juego regulan. Como dice von Neumann (op. cit, pAg, 49): «EL juego consiste en el conjunto de las reglas que lo desctiben» Se poe también introducir otras nociones:_partida, golpe, eleccién estrategia Desde este punto de vista, la naturaleza de los jugadores, Spamgiterente, y s6lo cuenta saber cuéndo un jugador puede elegit cuando no. 3) Se llega ast a introducir, en los estudios relativos al parentesco ¥,£1 matrimonio, concepciones derivadas de la teoria de la comming cién. La sinformacion» de un sistema de matrimonio es funcion sel Riimero de alternativas de que dispone el observador pars define Gl status matrimonial (es decir, el de cényuge posible, prohitia aeignado) de un individuo cualquiera, con respecto a un pretondcate determinado. En un sistema de mitades exogimicas, ects infers SiR cs gual a la unidad. En una tipologia australian, aumenta con fuer, inversamente, la «redundancia» del sistema considerado, So podra calcular asf el porcentaje de elecciones «libres» (no absolute, can rovertidos, tales como el del numero de las clases matrimoniales ga, la tribu austratiana llamada Murngin, evaluado segun los wate hevaen 2% 7. menos 7, 4 y 3, antes que investigaciones reciontes hayan permitido decidir la cuestion en favor de esta ultime circ 8. Hemos UNESCO, 1952 19. Véase mis adelante, pes. 325 y sigs, ‘otentado hacerlo en otro lugar. Véase Race er histoire, Paris, LA NOCIGN DB ESTRUCTURA 321 Hasta aqui he tratado de evaluar el posible aporte que ciertos, [Pes de investigaciones mateméticas pueden hacer a la etnologie, El principal beneficio que podemos esperar consiste —-como heeos visto— en que se nos ofrece un concepto unificador —la nocién de comunicacién—, gracias al cual se podrén consolidar en una sole ina investigaciones consideradas muy diferentes, y adquirir ciertas herramientas tedricas y metodolégicas indispensabies para el Progreso en esta direccién. Estudiaré ahora otro problema: gest la antropologia en nes de emplear estos instrumentos y de qué manera? En el curso de los iiltimos afios, la antropologia social se ha i feresado sobre todo en los hechos del parentesco. Ha reconocido ast el genio de Lewis Morgan, cuyo libro Systems of Consanguinity and Affinity of the Human Family (1871) fandé simulténeamente In ‘{uIToPologia social y los estudios de parentesco, explicando al propio tiempo por qué la primera debe otorgar tanta importancia’a los Segundos. De todos los hechos sociales, los que tocan al parentesco No obstante el desarrollo de los estudios del parentesco, ne eo cebe disimular que nuestra documentacién es muy pobre. 8i deje presen tan dado la historia, para considerar exclusivamente el tiempo Pemente, el universo humano contaba, sin duda, hace todavia poco tempo, con 3 a 4 mil sociedades distintas, pero Murdock estima Que Solamente nos es posible razonar sobre 250, cifra que a mien fener ¢s,aun demasiado optimista. gNo hemos trabajedo, pues, to suficiente? 0 més bien sa trata, por el vuntrario, de Una coneenie ja de esta ilusién inductiva que hemos denunciado antes? Nos hemes dispersado sobre un niimero demasiado grande ce culturas, hemos tratado de acumular informaciones numerosas y superficiales Ej caso de los pueblo es impresionante: para pocas regiones del Te rae Se Gncontrara una abundancia tan grande de documentos, fe, am dudosa calidad. Resulta a veces desesperante hallacce oie {os gnormes materiales acumulados por Voth, Fewkes, Dorsey, Pac Sons ¥ Tyhasta cierto punto— Stevenson: a tal extreme estos watoree Taree yceticade febrilmente @ amontonar informaciones sin pregam, ‘arse qué significaban, y sobre todo, negéndose a formular las hind. 322 PROBLEMA DE METODO Y ENSERANZA tesis que les hubieran permitido controlaias, que ese material apen Puede utlzars, La situacin ha cambiado, shertussdoner nee Wwe y Kroeber; pero algunas fagusas son irremedisles, hel noo feo Plo, Ia ausencia de estadisticas sobre los mattimnisg, woe ere Bodldo recogerse desde hace medio siglo. Com tour oa weg oerae de Fred Eggan (1950) muestra‘ las claras lo que paste eee luna regulardad estructural no obsiante presenter, unas ton reese, 8 otras, discontinuidades que se vuelven signifcaives wee ee Compara con discontinuidades homélogas pexo que deseo ae oe amos, tales como la organizacién clanica, las feslac ber eee el nw os creencias religiosas, etcétera, . . ste método verdaderamente sgalileanos™ permite espera dia alcanzaremos un nivel de andlisis en el ave Ie eoeeena en términos idénticos se repiten mecinicamente a lo largo de Ios cone fatlones; 2) un tiempo progresio, no reversible, en & Inga eta {fnuler), con secuencias del tipo:’abucla —> madre -> hecmena’ Hila > nicta; 3) un tiempo ondulatorio, ciclico, reversible en Te Ynea de Ego (vardn), definida por una alternancia continea entre Gos ftminos: shermanas © chijo* de la hermanae, respective: mente. Estas tres dimensiones son rectilineas, En conjunto, se o 4 a estructura circular de la lines de Ego (mje eotee ke oe re de ye {ncuentran dispuestos en anillo cerrado tres términos: wet Are dela madre (o hia dela hija), made, hija A eee ween tras Gorresponde para las otras linieas, entre los msi, una goon po. Perea de Ja terminologia, tanto en lo que concierne al citcuio ae face tis como a las distinciones operadas en su seno, Como cl estadig done, 1a antropologia hubiera avanzado mis de habe 0 avanado mAs de haberse puesto de acuer. do sus partdariosacerea del sentido dela conde eres ae 20. Bs decit, que busca determinar la ley de las vs en ear gue be rariaciones concomitantes, la manera aristotélica, en las simples correlaciones iat 21 Pa sentido genérico, incluyendo ambos sexos. (7.] 21. “Vease, en este volumen, los capital tnd ftom te los capitulos 3 y 4, donde este problema es tra: ba LA NocION DE ESTRUCTURA 323 del uso que puede hacerse de ella y del métcdo que implica. Por desgracia no es éste el caso, aunque cabe hallar un consuelo y un aliento para el futuro, cuando se comprueba cue al menos resulta posible comprender las divergencias y precisar sus limites. Tratemos, ues, de bosquejar répidamente las concepciones més difundidas, comparéndolas con la que ha sido propuesta al comienzo de este capitulo, La expresién cestructura social» evoca de inmediato el nombre de A. R, RadcliffeBrown® Su obra no se limita, clertamente, al estudio de los sistemas de parentesco, pero él cligié este terreno para formular sus concepciones metodolégicas en términos tales que todo etnélogo podria suscribirlos. Cuando estudiamos los sistemas de pa- entesco, anota Radcliffe-Brown, nos fijamos los objetivos siguientes: 1) elaborar una clasificacién sistemética; 2) comprender los rasgos propios de cada sistema, ya sea a) vinculando cada rasgo a un con- Junto organizado; b) reconociendo un ejemplo particular de una clase de fenémenos ya identificada; 3) finalmente, alcanzar generalizaciones vilidas sobre la naturaleza de las sociedades humanas. Y he aqui su conclusién: «BI andlisis busca reducir la diversidad [de 20 de 300 sistemas de parentesco] a un orden, sea cual fuere. Por detrds de la diversidad puede discernirse, en efecto, un numero limitado de principios generales que se aplican y combinan de distintas maneras.» (1941, pag. 17.) Nada cabe afiadir a este Iicido programa, como no sea subrayar que Radcliffe-Brown lo ha seguido exactamente en sti estudio de los sistemas australianos, reuniendo una cantidad prodigiosa de informa. nes, introduciendo un orden donde antes s6lo habia caos, definiendo nociones esenciales como las de ciclo, par y pareja. Su descubri ‘miento del sistema Kariera, en la regién precisa y con todas las carac- teristicas por él postuladas, antes inclusive de haberse trasladado @ Australia, permanecerd en la historia del pensamiento estructuralista como un ueiorable logro deductive (1930-1931). La introduccién de Radeliffe-Brown a su libro African Systems of Kinship and Marriage Pose otros méritos: este verdadero etratado del parentesco» abre. viado busca integrar los sistemas occidentales (considerados en sus formas més entiguas) en una teoria general, Mas adelante evocaremos otras ideas de Radcliffe-Brown (en particular las relativas a la homo- logia entre terminologia y actitudes). ‘Tras haber recordado los titulos de gloria de Radcliffe Brown, debo subrayar que él ha sostenido una concepcién de las estructuras sociales muy diferente de la que propongo en es:e trabajo. Radcliffe. Brown considera que la nocién de estructura es un concepto que cumple una funcién de mediacién entre los conceptos de la antro. Pologia social y los de la biologia, «Existe una enalogia verdadera y 2, Fallecido en 1955, PROBLEMAS DE MéTODO Y ENSERANZA actitud de princi cion empirista de Radcliffe-Brown en con claridad estructura social de relocs Su obra reduce la estructura social ‘a foclales existentes en una sociedad d: pio derivan dos consecuencias. La posi ‘plica su resistencia a distinguir ‘ones sociales. De hecho, toda I conjunto de las relaciones lada. Sin duda algunas veces tructura y forma estructural, se ha visto, gran importanci; cla estructura no se puede apreherd concreta...» «Cuando queremos defini for Aecirlo ast, en el nivel de Ia gra, de la lengua hablada.» (Fortes, 1949, es decir, ayuella entre dos personacr (ie una sociedad cualquiera consists de relaciones diddicas... En una tribe Social se reduce a una red de relacion persona con Telaciones diddicas, cconstituyen vera: de Ia estructura social? bien el residuo —obtenido por andi éNo son més sideal— de una estructura Rae fente, de naturaleza mds compleja? en Podriamos aprender mucho ng lings estructura bere Glen Indica por Radshie Meee ten Sobrepasaba etme de fs ee a ie mod SO or clsifcaras en ctegees ouas, Posto Sate modo queen ls etrustra socal hay ames, mien. de LA NOCION De ESTRUCTURA 325 imismas y distinto de ellas: zqué otra cosa, pues, si no la estructura Planteada antes que las relaciones? Kas relaciones diddicas, en fin, tal como las concibe Radcliffe. Brown, forman una cadena que se puede alargar indefinidamence afiadiendo nuevas relaciones. De ah{ la resistencia de nuestro autor & alatar la estructura social como un sistema En este importante Punto se separa, pues, de Malinowski. Su filosofia se funda en ls Rocién de lo continuo; la idea de la discontinuidad le ha resultade siempre extrafia. As{ se comprende mejor su hostilidad hacia la nocion de cultura —ya sefialada— y su indiferencia ante las ensefanzas de ln ingifstica, Radcliffe Brown, observador, analista y clesificador incompara- ble, defrauda a menudo como tedrico, Lo satisfacen férmulas vagse, Que Tecubren sin éxito peticiones de principio. ¢Se han explicede realmente las prohibiciones matrimoniales, mcstrando que ayudan a tos sistemas de parentesco correspondientes a perpetuarse sin alte raciones? (Radcliffe-Brown, 1949 b). Los notables rasgos de los sia temas llamados crown-omaha, {pueden ser enteramente interpretados en funcién de la nocién de linaje? (idem, 1941). Tendré Iuego oportie nidad de expresar otras dudas, Pero estos i Por qué la obra de Radcliffe-Brown ha podi ctiticada, no obstante su important Para Murdock, las interpretaciones de Radcliffe-Brown se redu- Cirian a sabstracciones verbales, erigidas en causas primerass (1949, pég. 121). Lowie se expresa mas o menos de la misma manera (1937, égs. 224225). La controversia reciente entre Radcliffe Brown (1951) or una parte, y Lawrence y Murdock (1949) por otra, apenas ofrece un interés histérico, pero clarifica las posicionss metodoldgicas de estos autores. Hacia 1949 se disponia de una buena descripcién, hechs por Lloyd Warner (1930-31, 1937 a), del sietema de parcurcscu aus, {ano llamado todavia murngin;® ‘subsistian algunos puntos incien, tos. sin embargo, sobre todo en lo concerniente al «cierre> del sistema, Postulado por hipétesis (en la medida en que el sistema era descrite como intransitivo), pero imposible de verificar en la practica. Es notable comprobar que, para Radcliffe-Brown, el problema no existe. Si toda organizacién social se reduce a un conglomerads de relaciones de persona a persona, el sistema puede extenderse inich, nidamente: para todo individuo masculino hay, al menos tedricamente, una mujer que tendré con él la relacién de hija del hermano de ln madre (tipo de cényuge prescrito en la sociedad en cuestion), Y sin embargo, el problema aparece en otro plano, porque los indigenas han 23. Para informarse del estado final de esta cuestién, con posterioridad a la primera publicacion del presente articulo, véase RM. Berndt’ Moca (We {gmbs) Social Organizations, American Anthropologist, wl LWIL, mints poe, 185, 326 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA la clase correspondiente, y a la inversa. Para superar esta dificultad, Lawrence y Murdock han inventado tun sistema que coincide a la "mo, que tan pesadamente influye en ‘Brown? Es dudoso, puesto que este jar incompletas sus propias hipdtesis 'os tomados de prestado, que les otor- 8 veces inclusive contradicen el obje. 105 etnoldgicos. En lugar de cousiderar © a rehacerlas mediante element gan un cardcter hibrido y que tivo inicial formulado en términ 34, ,dfarmer postulaba un sistema de 1 ineas equivatentes a 7 clates 5,3 Murdock propontan en cambio un sisteme det line 39 fen la mae Marriages, Journal of the Royal articulo citado en Ia nota pre neas. Engafiado por Leach ‘en preporaba su artiuto, Berndt én conversacin y por correspondescl ne 30 habia slcanzado la solucon mds prox LA NOCION DE ESTRUCTURA 327 tos sistemas de parentesco como medios sociales destinados a cumplir una funcién social, Murdock termina traténdolos como consecuen- clas sociales de premisas expresadas en términos de biologia y de psicologia. El aporte de Murdock a los estudios estructurales puede ser con- siderado desde dos puntos de vista. En primer lugar, se ha propuesto rejuvenecer el método estadistico. Tylor ya habia empleado este mé. todo para verificar correlaciones supuestas y para descubrir otras nuevas. El empleo de técnicas modernas ha permitido a Murdock lograr progresos indudables en esta direccién. Los obstdculos que enfrenta el método estadistizo en etnologia han sido subrayados a menudo (Lowie, 1948 a, cap. III). Dado que Murdock sabe esto tan bien como cualquiera, me limitaré a recordar el peligro del circulo vicioso: la validez de una correlacién, aun cuando esté basada en una impresionante frecuencia estadistica, de- pende, a fin de cuentas, de la validez del recorte que hemos hecho Para definir los fenémenos puestos en correlacién. El método es Siempre eficaz, en cambio, para denunciar correlaciones aceptadas erréneamente, Desde este punto de vista negativo y critico, ciertas conclusiones de Murdock pueden ser consideradas como definitivas. Murdock se ha consagrado, al mismo tiempo, a reconstruir la evolucién histérica de los sistemas de parentesco o, al menos, a definir ciertas lineas posibles 0 probables de evolucién, con exclusion de algunas otras. Llega asi a un resultado sorprendente: mas a menudo de lo que se supone (desde que Lowie —1920, cap. III— se ocupé de una hipétesis parecida de Lewis Morgan), el sistema de parentesco de tipo «hawaiano» representarfa una forma primitiva. Téngase cul- dado en notar, sin embargo, que Murdock no razona sobre sociedades reales, observadas en su contexto histérico y geogrifico y conside. radas como conjuntos organizados, sino sobre abstracciones ¢ inclu. sive —si cabe decirlo asi— sobre abstracciones de segundo grado: Comienza por aislar la organizacién social de los demas aspectos de {a cultura, tras lo cual recorta arbitrariamente la organizacién social (0 el sistema de parentesco) en piezas y trozos, segin los prineipios inspirados en las categorias tradicionales de la teoria etnolégica, antes ue como resultado de un andlisis real de cada grupo. En estas con, diciones, su reconstruccién histérica no pasa de ser una ideologia: Consiste en abstraer los elementos comunes a cada estadio para definir el estadio inmediatamente anterior, y asf sucesivamente, Claro est Que un método semejante slo puede Hlegar a un resultado: las formas menos diferenciadas aparecerin como las més antiguas, y las for. mas complejas serdn ubicadas en posiciones cada vez mds recientes, en proporcién a su complejidad. Algo as{ como si se hiciera remontay gl caballo moderno al orden de los vertebrados, y no a la especi Hipparion. Las reservas que acabamos de hacer no buscan disminuir los a ORE 328 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA Trétitos de Murdock: ha reunido abundante documentacion, con fre- ferzela antes descuidada; ha planteado problemas, Pero, preciseman seo eae, as Hamadas ciencias naturales» (1949, pag 259), 5i,¢1 lector recuerda las distinciones propuestas al contenzo de server observard que Radclffe-Brown tiende a confund coo dervacién. y experimentacién, mientras que Murdock ou distingue moos taktite claridad entre modelos estadisticos y modelo ieee ticos: trata de construir modelos mecénicos por medio dee método Gr aitico, tarea imposible, al menos de la manera directs ne que a encara, Simétricamente, ta obra de Lowie podria caracterizarse como Spesfuerzo encamnizado por responder a una sola presenee cetrucrachos? Hemos dicho que esta pregunta, inclusive, Senet flgnado ante esta situacién de una manera puremence negativa (Kroe- ber, 1920): era preciso hacerlo, En ese momenta ia Primera tarea Copsistia en demostrar lo que los hechos no evan, Lowiene dedicd, tendidas coremente, a desinteyrar ios sistemas arbitrarigs ¥ Ine pre- {endidas correlaciones. Puso ast en libertad si cate ie expres una energia wpe, eh alguna parte, como un eescéptico actinecs eon ‘embargo, Ss Guien, ¥2 en 1915, justiicaba del modo mae orden tos estu dios del parentesco: «La sustazicia misma de ls vide se puede ser analgada @ veces en forma rigurosa, en funcién del mony oe clasifi- traerces Parientes y aliados.» (1915, 1929, ¢) En el mano acne hocieanaba la, perspectiva estrechamente histériea que, Tame totizonte etnolégico e impedia percibir el funcionamioro los fax nos genetnteturales universales; definfa all{ ya la exopamia on wi cteckoe gos, como un esquema institucional que engendra los mines fectos toda ver que se halla presente, sin que sea nccerane woes 3. Fallecido en 1957. LA NOCION De EstRUCTURA 329 entre sociedades alejadas unas de otras, iggtN0s afhos més tarde, Lowie pulveriza el ecomplejo matrilineal (2219), empleando un método que debla conducirio’s door resultados dios catreemaimente originales, Lowie abria, asi, Ia puerta de lee exc ios estructurales: en cuanto al sistema de las’ deren Strauss, 1945) Hay [odavia otros descubrimientos que debemos a Lowie. El fue, fia Auda, el primero que establecié el cardcter Ulincal de wor siste- Gin efercida ganmente unilineales (1920, 1929 b); demostrd la tate, Siecrcida por el modo de residencia sobre el tipo de feta (1920); Gey7els as conductas familiares de reserva o reseeto’ y la prohibicion Gel incesto (1920, pgs, 104-105). Siempre culdadece a? considerar las qaeanizaciones sociales desde un doble punto de vista "elas insti- clones pei, BOT, UNA Parte, pero también expresiones medine oe Teac. fas reghae 9 eices idividuales (en un sentido que a veces coutnae {as reglas, y que siempre las tuerce)— fue ol tain Lowie, tan cri- TV. Dinintca socta.: EstRUCTURAS DE SUBORDINACION 9) Orden de tos elementos (individuos y grupos) en la estructura social eecesitamos exponer aqui nuestra posicién personal sobre los Pronicmas Precedentes. No obstante ntiestros esfusere Por ser obje- {i9s. ésta se manifiesta con bastante clarided ke largo de este capt. tulo, Para el autor de estas liness, los sistemae so Parentesco, eI %, Véase.el capitulo 2:del presente vohinicn: ” 330 PROBLEMAS DB M#TOD0 Y ENSEAANZA reglas matrimoniales y de filiacién, forman un conjunto coordenado cuya funcién consiste en asegurar’ la permanencia del grupo social Entrecruzando, a modo de un tejido, las relaciones consanguineas y las relaciones fundadas en Ja alianza, Esperamos haber ayudado ast 2 dilucidar el funcionamiento de la maquina social, que extrae per- Petuamente a las mujeres de sus familias consanguineas para redis. fribuirlas en otros tantos grupos domésticos, los cuales se transforman 4 Sul vez en familias consanguineas, y asi sucesivamente2” En ausencia de influencias externas, esta mAquina funcionaria indefinidamente, y la estructura social conservaria su cardcter est&. fico. Esto no ocurre, sin embargo, Debemos, pues, introducir nue. Yos elementos en el modelo teérico, cuya intervencién pueda explicar las transformaciones diacrénicas de la estructura y dé cuenta a la vez de las razones por las que una estructura social jamas se reduce a un, sistema de parentesco. Hay tres modos diferentes de contestar 9 esta doble interrogacién, Nos preguntaremos ante todo, como corresponde, cudles son los hechos. Han transcurrido afios desde que Lowie depioré la carencia de trabajos antropolégicos en materia de organizacién politica. A este Tespecto se pueden anotar algunos progresos, que debemos al mismo Lowie en sus trabajos mds recientes —al menos en lo que concierne. a América del Norte (1917, 1948 a, cap. VII, XU, XIV, 1948 b}—, ¥ & un gran libro sobre Africa dirigido por Fortes y Evans-Pritchard (1340). Son iilties las categorias fundamentales delimitadas por Lowie: Clases sociales, «cofradias», Estado, El segundo método consistiria en correlacionar los fenémenos que dependen del nivel ya aislado —es decir, los fendmenos de paren, fesco— con los del nivel inmediatamente ‘superior, en 1a medida en gue ac Jos pueda vincular entre si, Se plantean enionces dos proble mas: 1) gPueden las estructuras fundadas en el parentesco, por, sf mismas, manifestar propiedades dindmicas? 2) ;De qué manere las estructuras de comunicacién y las estructuras dé subordinacion reac, Cionan unas sobre otras? El primer problema es el de la educacions en lun momento determinado, cada generacién se encuentra, en efecto, en una relacién de subordinacién o de dominio con la que la precede og Ja que le sigue. Margaret Mead y otros han planteado el problema de esta manera, Existe también una manera més teérica de proceder, que con- siste en buscar las correlaciones entre ciertas posiciones (eutatices) en la estructura de parentesco (reducida a su terminologia) y lac ir ,iase sobre este punto C. LéviStrauss, «The Famllys, en H. L, Shapiro (er ndlan, Culture, and Society, Oxford, Oxford University Press, 936" coy RAE (No ha sido reprodicido en este volunen? 1A NOcTON DE ESTRUCTURA 331 fonductas (dindmicas) correspondientes, tal como se expresan en 19s derechos, deberes y obligaciones, por una parte, y en los privi- tegios, prohibiciones, eicétera, por la otra. Para Radcliffe-Brown se puede verificar una correspondencia tér- mino a término entre lo que se podria llamar el sistema de las act tudes y el sistema de las denominaciones. Cada término de parentesco corresponderfa a una conducta prescrita, positiva © negativa; cada Conducta diferencial estaria connotada por un término. Otros han Sostenido que en la préctica era imposible verificar una correspon. dencia semejante, o bien que Ia misma no iria mas alld de un nivel de aproximacién bastante tosco. Por mi parte, he propuesto una interpretacién diferente, basada en una relacién dialéctica entre actitudes y denominaciones. Las con. ductas diferenciales entre parientes tienden a organizarse sobre la base del mismo modelo que la terminologia, pero constituyen tam bién un medio de resolver tas dificultades y superar las contradic. clones inherentes a esta misma terminologia. En consecuencia, las reglas de conducta entre parientes, en una sociedad cualquiera, tradw, cirfan un esfuerzo por resolver las contradicciones que derivan del sistema terminolégico y de las reglas de alianza. En la medida en que las primeras tienden a constituirse en sistema, aparecen nuevas fontradicciones que provocan una reorganizacién de la terminologia, la ‘cual vuelve a afectar las actitudes, y as{ sucesivamente, saive durante raros periodos de equilibrio, que se ven amenazades muy répidamente.# ftructures. segin el cual no existe conexi6n necesaria entre, matrimonio, matric, {eral o patilateral par un Tado, yal modo de fllachon —cprtrlineal 9 marriages Por otro. En apoyo de su propia tesis, que afirma que el matrimonio matrlateral seria funcién de la fliacién patrilineal, estos autores invacan correlaciores sor, isticas que prueban muy poca cosa. En efecto, las socedades con filicion na, tilineal son mucho més numerosas que squellas con més, el matrimonio matrilaterale io dg esta pretendida correlacidn, sobre la base de tina muestra més importe, te (S64 sociedades), concluye: «La distribucion mundial Ce estas cortelastooes oy fan debit que leva @ poner en duda Ia interpretacion tebriea propuetias te, Murdock. «World Ethnographic Sample, American Anthropologist ns, wl. LIX, 1. 4, 1957, ‘Ag. 687). ‘Sigo pensando, de acuerdo con los términos que he empleado desde un comien- 20, Que no existe conexion necesaria entre el matrimonie con 332 PROBLEMAS DE MéTODO Y ENSES ZA es epreblema se plantea cuando consideramos sociedades en las Hraurestipsistema de parentesco no rige alianzas matrimonisies ones » équé ocurre si los participantes en los intercams, wr carsero y tiltimo método posee un cardcter més formal que ios brecedentes, Consistirfa en un estudio a prior! de wdec We tipos lecién estedistica (que no tuna explicacion. Yo tender a Jas sociedades matrilinesles: (terme hharta més dificil ia adopeion de cieloe {ficlos extremadamente cortos del matrimonio seit ente inaceptable: les por el matrimonio matri dentlemediante consideraiones pslologcas, tes’ coe, $y ‘que os lazos Siar aeget ae um dolescente son transferidos facie ina se, materno, peril fuera el caso, ef matrimonio matrlsieay ste! Press, 1955.) Oi oG MviStrauss, Tristes trdpicos, donde retomo anterior: «The Social ‘and Psyeholovical & Tribes, Transactions of the New Yeck ne L188 baer AEG AME festa hoy (1957) supectua. Existen socedades donde “ observan cicls Jerdrqucos ¢ inttanstvos, por comin somes ae eck: los temas de un estudio pects of Chieftainship in a Prinsiee Academy of Sciences, serie Il, vol VIE LA NOCTON DE ESTRUCTURA 333 femas de parentesco muestra ‘ones, la transformacién de un orden, intransitivo y ciclico. gimica con mat RE gata manera se introducen en nuestros eatudios seeps tales formal y matividad, orden y ciclo, que se prestan a um teats formal y permiten’analizar tipos generalicadoe ae estructuras socia. ter, Gonde los niveles de comunicacién y de subortinnnes Pueden ser chon de ang Se Pode llegar atin mas lejos, hasta aleonear' ie integra- dates 908 Sréenes, reales 0 virtuales? En la mayorie neat socie- dades humanas, lo que se llama is Ue Rizo Stendhal de la democracia norteamericane cone nn sistema onde un gentleman esté a las érdenes de su tankers hatin prncipos Sarg, 1S fas FL, cuya poblacion estaba orgenends, faye PEReO® del siglo Rx, en seforias uniday ene ohio eae Tea sa Bide Ce eas eR cietos casos, una seria A cra vaste Geom ae 5, ste (eco DY,D de A Hocne ha desertoy expcads eau eect tert By Dor contamsre mite: Sefalando que existen en Fidi dos formas’ ae wee Be BB de Cy Cone onus. La sefioria ‘A puede ter tradiconaiieen ae te comes coat aes mientras au i sehoria D pasts Naber snare vasala in Surucaantnd® 2 una guerra dessfortunada, bajo cf meal tea Ree mds apeta a relizada ‘x ln sma que covresponde sf reise hake SO rade act, te dos variables que operan, una con respi mae Cond Elin de fegzlaamiento, Eso corresponde’emactamente a ie Nestea ieee ral Fuse omer esse AM, Hocart, «The Northern Stites of fhe ral fuel mH, Royal Anthropological Institute: Landes oj 34 PROBLEMAS DE METODO Y ENSERANZA ) Orden de tos drdenes Para el etndlogo, la sociedad comprende un conjunto de estruc- turas que corresponden a diversos tipos de drdenes. El sistema de arentesco ofrece un medio de ordenar a los individuos segun ciertas reglas; la organizacién social proporciona otro; las estratificaciones Sociales 0 econémicas, un tercero. Todas estas estructuras de orden Pueden ser a su vez ordenadas, a condicién de descubrir qué rela. ciones las unen y de qué manera reaccionan unas sobre otras desde el punto de vista sincrénico. Mayer Fortes ha intentado con éxito (1949) construir modelos generales que integran las propiedades de diversos modelos especiales (parentesco, organizacién social, relacio. nes econémicas, etestera). Estas tentativas de formular un modelo total de una sociedad determinada ponen al etnélogo ante una dificultad ya vista al co- mienzo de este capitulo: zhasta qué punto el modo en que tna socie. dad concibe sus diversas estructuras de orden y las relaciones que las unen corresponde a Ia realidad? He indicado ya que eran posibles varias respuestas, en funcién de los documentos que se tomen en Cuenta. Pero hasta ahora solamente nos hemos ocupado de los drde- nes «vividoss, es decir, de los rdenes que son a su ver funcién de una Tealidad objetiva y que cabe abordar desde fuera, con independen. cla de ta representacién que los hombres tengan de ella, Se obser vara ahora que tales érdenes evividos» suponen siempre otros, que es indispensable tomar en cuenta para comprender no sdlo los ante. tiores, sino también la manera en que cada sociedad trata de integrar- los a todos en una totalidad ordenada, Estas estructuras de orden sconcebidas», y no ya evividas», no corresponden directamente a nin. guna realidad objetiva. A diferencia de las primeras, no son stiscep. tibles de una comprobacién experimental, porque estan asociadas luna experiencia especifica con la cual, por otra parte, a veces ee con funden, El Unico control a que las podemos someter para analizarlas es, pues, el de los drdenes del primer tipo, los érdenes evividoss. Los Stdenes econcebidos» corresponden al campo del mito'y la religion, Se puede preguntar si la ideologia politica de las sociedades con. tempordneas no pertenece también a esta categoria” Radeliffe-Brown ha mostrado claramente, siguiendo a Durkheim, 32, Elector observard que este pardgrafo trata de formlar, en un lenguaje inde familar a Jos antropsiogos anglonajones, la distinlon maralta eae nbacs fucturay superestructura, lo cual muestra dicho ten de pase a hie tae, damento de las criticas he Soe font, vol 15, ns 2 querer reintrodcir "en le A este respect, weve i LA NOCION DE ESTRUCTURA 335 que Jos hechos religiosos debfan ser estudiados como parte integrante de la estructura social. Para este autor, el papel del etnélogo consiste en establecer correlaciones entre diversos tipos de religiones y diver- 808 tipos de organizaciones sociales (1945). Si su sociologia religiosa acaba con un fracaso, se debe, al parecer, a dos razones. En primer lugar, Radcliffe-Brown ha vinculado directamente las creencias y el ritual a estados afectivos. En segundo lugar, ha querido obtener, para comenzar, una expresién general de la relacién entre la sociedad y la religion, cuando lo que sobre todo necesitamos son estudios concre- tos, que permitan construir series regulares de variaciones conco- mitantes, De todo ello ha resultado una especie de descrédito que recae sobre la etnologia religiosa. Los mitos, e! ritual y las creencias religiosas forman con todo un campo pleno de promesas para los estudios estructurales, y por poco frecuentes cue sean, las investiga- clones recientes parecen particularmente fecundas. Varios autores han emprendido recientemente la tarea de estu- diar sistemas religiosos como conjuntos estructurados, Trabajos mono- gréficos como The Road of Life and Death de P. Radin (1945) y Kunapipi de R. M. Berndt (1951) se inspiran en esta concepcién. Queda abierto, asi, el camino para investigaciones sisteméticas, de las que Navaho Religion de G. Reichard es un buen ejemplo, Pero Ro por esto se descuidardn los andlisis de devalle que se refieren a elementos permanentes y no permanentes de las representaciones religiosas de una poblacién dada, durante un lapso relativamente corto, tal como los concibiera Lowie. Tal vez entonces logremos construir, en etnologta religiosa, esos smodelos en pequetia escala, destinados al andlisis comparativo... de las variaciones concomitantes... que se imponen en toda investi- gacién que se proponga explicar los hechos sociales» (Nadel, 1952). Este método s6lo permitira un progreso lento, pero proporcionaré con- clusiones que podrén contarse entre las mejores establecidas y mas convincentes « que podamos aspirar en materia de organizacién social. Nadel ha demostrado ya que existe una correlacién entre la institu. cién del shamanismo y ciertas actitudes psicclégicas caracteristicas de las sociedades correspondientes (1946). Mediznte la comparacion de documentos indoeuropeos provenientes de Islandia, Irlanda y el Céu- caso, Dumézil ha conseguido interpretar un personaje mitolégico hasta entonces enigmatico y correlacionar su papel y manifestaciones con ciertos rasgos especificos de la organizacién social de las pobla- ciones estudiadas (1948); Wittfogel y Goldfrank han aislado variaciones significativas de ciertos temas mitolégicos entre los indios pueblo, vinculéndolas a Ja infraestructura socioeconémica de cada grupo (1983), Ménica Hunter ha probado que las creencias magicas eran funcién directa de la estructura del grupo social (Hunter-Wilson, 1951). Todos estos resultados —junto con otros que no podemos comentar aqui por falta de espacio— permiten esperar que un dia estaremos 336 PROBLEMAS DE MéTODO Y ENSEANZA LA NocION DE ESTRUCTURA 37 Glosae anclones de comprender, no la funcién de las creencias reli. Blosas en la vida social (cosa resuelta desde tiemsos de Lucrecio), ‘ino los mecanismos que les permiten cumplir dich funcién, Unas pocas palabras para terminar. Nuestro estudio comenz6 por aT cnulisis de Ja nocidn de modelo, y esta misma cise Teaparece Neumann (von Neumann y Morgenstern, 1544, pég. 14): «Es infinite. tiene alreaesen tle elaborar Ia teoria casi exacta fe up ge que con- Une alrededor de 10% particulas libres, que ie ecu del ‘sistema SBar ue solamente comprende 9 grandes ‘cuetpos Ahora bien, ef cas ated std @ Ia busca de modelos, s¢ eneueroe ante un G80 lntermedio: los objetos de los cuales nos ocupamos —papeles se oEyeattos documentos desaparecen répidamente 0 se transfor n podarisis de un nuevo género, de los cuales 20 cabe esperar gee Fotamos recoger informaciones del mismo tipo. Ajustar len teenies se aobservacién a un marco tedrico que es mucho mis sven: Ser4,55 ts situacion paradéjica que rara vez se plantea en mene, deeattclenelss. Ia antropologia moderna le corresponde accotas oo desafio, te fon lo bastante para pertenecer al came dW estadistica y el sAlculo de probabilidades, Nos hallamos, pace, oo) terreno hibrido scat ngee?yMUestTOS hhechos son demasiado’ comelicehe para ser del omen” 2° Modo, y no lo son lo suficiente como sare encararlos ras nuevas. perspectivas ablertas por la teorfa de la comunica- fidn, gor Precisamente, el resultado de los merit! originales que Ip sido necesario elaborar para tratar objetos ges signos— que, de sera en adelante, pueden ser sometidos a tun annat iguroso, aun- todavia demmasiods secemasiado elevado para la mecinige eile y fodavia demasiado restringido para aplicaries lor Principios de la ter- Mieqamica, La lengua esté hecha de morfemas et os varios fotivad 2 oul9s limitados bastan pare cinerea, signi- foruivas en la frecuencia de los fonemas. En cate campo, el umbral Gt ipblicaclin de las leyes estadisticas decrece ego que se eleva ¢ Himite a partir del cual resulta posible aplicar toe? mecénicos, y Amulténeamente, el orden de magnitud de los (eases se acerca # aguel al que estd habituado el antropdlogo. fa stad actual de las investigaciones ectructurales en antropo- {rela es, pues, el siguiente: se ha conseguides een fenémenos que Hgureaanisme tipo que los fenémenos que ya puedes a tratados pauiesamente mediante las teorias de ta estravegis y la comunicacién. Hos hechos antropolégicos pertenecen una sea bastante pré-

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