1º de mayo: El discurso de Jean-Marie LE PEN,

Traducido por Jordi Garriga para Tribuna de Europa

( www.tribunadeeuropa.com )
http://www.frontnational.com/?p=4708#more-4708

1º de mayo: El discurso de Jean-Marie LE PEN en Paris

El texto del discurso de Jean-Marie LE PEN:

Queridos Amigos, Queridos Camaradas,

Cuadros y Militantes del Front National,
Patriotas franceses,
Señoras y Señores,

Una vez más, nos hemos reunido este 1º de mayo para homenajear a
Juana de Arco, heroína nacional, Santa y Mártir.

Este desfile será el 101, ya que fue en 1909 la 1ª vez que, los Camelots du
Roi, desafiando la prohibición gubernamental inauguraron la tradición
de este homenaje popular.

Es también el 37 desfile organizado por el Front National, el 1º de mayo

que de este modo exalta cada año a la Patria y al Trabajo.

Es a todos vosotros, queridos amigos, a quienes agradezco ante todo

por vuestra fidelidad y vuestra devoción.

Permitidme además que nombre al Cercle National des Combattants,

sus banderas, sus veteranos y a su jefe, Roger Holeindre.

Gracias también al DPS cuyos guardias aseguran en todo momento la

seguridad de nuestras manifestaciones bajo la dirección de Eric
Staëlens.

Gracias también al equipo de las Grandes Manifestaciones que, bajo la

dirección de Yann LE PEN ha asegurado la organización de esta
jornada.

El Front National no ha podido, este año, ayudar en la financiación de

los autocares de las provincias, es sabido que sus finanzas se hallan
abrumadas económicamente por el fracaso de sus candidatos en las
Elecciones Legislativas de 2007.
Podíamos temerlo todo por este desastre político y financiero, pero el
coraje, la abnegación, la tenacidad de los dirigentes y los militantes del
nos han permitido triunfar sobre la adversidad.

La resurrección empezó en las elecciones cantonales, se confirmó en las

elecciones europeas donde pese a la competencia de listas traidoras, 3
diputados del Front National fueron elegidos: Bruno GOLLNISCH, Marine
LE PEN y yo mismo.

Hace menos, en las elecciones regionales, también pese a las listas de

traidores, además de los sondeos falseados y medios económicos
modestos, condujimos al Front National a las primeras filas de la política
francesa, alcanzando el 11.4% en la 1ª vuelta y el 17.8% en las 12
regiones donde habíamos traspasado la barrera calificativa de la 1ª
vuelta.

En vuestro nombre, quiero saludar a los 118 Consejeros regionales, la

mayoría de los cuales se hallan entre nosotros.

No pensamos quedarnos aquí, y frente a la dramática situación de

nuestra Nación y de nuestro pueblo francés, emprendemos la
reconquista y primeramente en las próximas elecciones cantonales.

En los 2.000 cantones a renovar, vamos a luchar para que nuestros

conciudadanos abran los ojos y los oídos antes de que no sea
demasiado tarde, alejarlos de la mortal abstención y prepararnos así
para 2012, la elección presidencial y las elecciones legislativas.

Desde este mismo instante, os cito para el año que viene, al día
siguiente de las elecciones cantorales, pero sobretodo para 2012 entre
las dos vueltas de la Presidencial, que también será el 600 aniversario del
nacimiento de Juana de Arco.

Ese día espero una inmensa manifestación de la fe en la Patria, de la

esperanza en la victoria, de la caridad respecto a nuestro pueblo
maltratado y humillado.

Cuando Juana de Arco aparece, a finales de la cristiandad medieval,

un nuevo capítulo se abre en la historia del mundo.

La Bula de Oro había secularizado al Imperio. El Gran Cisma desolaba al

universo cristiano.

La toma de Constantinopla por los turcos iba a islamizar todo el Medio

Oriente, y la guerra de los husitas, con sus horrores, anunciaba el tiempo
de las revoluciones.
Pero, ya hacía más de 900 años que Clodoveo había sido bautizado en
Reims y que Hugo Capeto había fundado su dinastía 400 años antes.

« Figura Histórica sin igual en parte alguna » dijo de Juana el Cardenal

Pie.

Juana es una gran santa política venida en el tiempo de las Naciones.

Tal como, algunas décadas después los descubridores de nuevas tierras,

ella parte, empujada por sus voces, para revelarse a la Historia,
envalentonar al Delfín que duda, triunfar sobre los obstáculos y las
cábalas, liberar Orleáns y hacer que se consagre al Rey en Reims.

Vendida por Isabel de Baviera y el infame Tratado de Troyes a los

ingleses que ocupan y devastan el país, Francia corre el peligro de no
ser más que una provincia de la corona de Inglaterra.

Con Juana, Francia vuelve a ella no sin dificultades ni terribles golpes.

Pese a la fe, el coraje, el talento militar del general más joven de nuestra
historia, Juana deberá ir hasta la condena a muerte ordenada por
jueces traidores a sueldo del Extranjero y hasta el martirio para cumplir
con su prodigioso destino.

La heroica patriota no tiene necesidad de ver ella misma la salida

definitiva de los ingleses de Francia. Ella había dado el impulso, la
Historia hará el resto.

Heroína inmaculada, hija de la tierra y del cielo, los santos le

encomendaron la misión, en los tiempos de infortunio, de salvar a la
Patria de la invasión extranjera. En efecto, ya en esa época, Francia
excitaba la codicia de muchos por su belleza, su grandeza y su riqueza.

Hace casi 600 años, Francia fue entregada al rey de Inglaterra con la
complicidad de la Iglesia, de la Universidad y de los intrigantes de la
Corte.

El Rey Carlos VI se vuelve loco, los señores feudales se combaten unos a

otros, y el país acaba de ser entregado al “extranjero” por el
ignominioso Tratado de Troyes de 1420 suscrito por la Reina Isabel de
Baviera y Carlos VI el Rey loco, con Enrique V de Lancaster, Rey de
Inglaterra. El delfín de Francia se exilia y el Papa Martin V será el único
que se niegue a ser cómplice de esta traición.

Cuatro años antes, los ingleses habían desembarcado en Normandía y

aplastado a la caballería francesa en Azincourt donde será hecho
prisionero el más antiguo de los poetas franceses, Carlos de Orleáns.
En 1422, Enrique V muere, Enrique VI, Rey de Inglaterra es proclamado
Rey de Francia, todo parece perdido o casi, cuando un rayo de sol
ilumina al país con el destino heroico de una niña de 12 años guiada
por las voces de los santos en el árbol de las hadas.

¿Qué dicen pues estas voces? ¿Qué dicen pues Santa Catherine, Santa
Margarita, y San Miguel a esta pastorcilla tocada por la gracia de Dios?
¡Salva a Francia ayudando al Rey!

Niñita inspirada y fiel a su palabra, logrará la proeza de hacer creer en

este milagro.

Cinco años más tarde, Juana, hija del pueblo, sin saber montar a
caballo, se lanza a Domrémy para cumplir con el destino más
prodigioso de la historia humana.

Tiene 16 años cuando encuentra al Rey en Chinon. Se pone entonces a

la cabeza de su Ejército, y, aunque herida por un viratón de ballesta,
portando su estandarte, da ella misma el asalto el 8 de mayo de 1429 y
libera Orleáns, aplasta a los ingleses en Jargeau y el 18 de junio en
Patay. En cinco meses, habrá vencido a los ingleses y hecho consagrar
al Rey en Reims donde Rémi había bautizado a Clodoveo casi mil años
antes.

Dos meses más tarde, a las puertas de Paris, le hieren por tercera vez.

El 23 de mayo de 1430, es hecha prisionera en Compiègne y vendida a

los ingleses por los borgoñones. Encarcelada en Rouen dentro de una
jaula de hierro, luego encadenada de pies a cabeza, es vigilada por los
soldados en un sórdido calabozo.

Juzgada por un tribunal eclesiástico presidido por el infame obispo

CAUCHON, es condenada a muerte y quemada viva, el 30 de mayo de
1431 en la pira de Rouen. Su último suspiro es un acto de fe y de
oración: Jesús, Maria. No tiene más que 19 años.

En esa fecha, la liberación va por buen camino y uno de sus antiguos

compañeros de armas, el Condestable de Richemont acabará de
botar a los ingleses fuera de Francia en 1453.

Figura histórica de nuestro patrimonio nacional, fue Santa y Mártir a la

vez, fue un gran jefe guerrero destinado al Combate por Dios y por
Francia. Una frase de ella que debe llegarnos al corazón « Ah, nunca he
visto sangre de franceses sin que se me hayan erizado los cabellos ».

Nada le será ahorrado a cambio de su gloria inmortal, ni los abandonos,

ni las traiciones, ni las cobardías, ni los insultos más bajos, ni incluso las
más ignominiosas calumnias. Incluso ya fue víctima de la desinformación
y de la diabolización.

Pero, tal como demostramos una vez más este 1º de mayo, Juana es
nuestro ejemplo y su recuerdo resta imperecedero.

Fe en la Francia eterna, amor a la Patria, defensa del Pueblo, autoridad,

independencia, identidad, seguridad, valentía, fe, honor y sacrificio,
tales fueron sus principios, que hoy son los nuestros.

Señoras y Señores, hoy, al alba del siglo 21, el mismo peligro abruma a
Francia. Su desaparición programada por los perversos tratados de
Maastricht y Lisboa, señala nuestro deber de resistencia para el presente
y sobretodo para el futuro.

Sí, hará entonces seis siglos que nació en Domrémy el personaje más
excepcional, el más extraordinario de la historia no solamente de
Francia o de Europa, sino incluso del mundo.

Ningún Santo, ningún jefe guerrero, ninguna criatura ilustre habrá

realizado en un tiempo tan corto un destino tan prodigioso.

Humilde hija de la tierra y del cielo, encomendada en tiempos de

infortunio para salvar a Francia en peligro de desaparecer mediante la
violencia y la traición dentro de un bloque extranjero y de perder con
ello su soberanía, su independencia, su lengua, su identidad.

¿No hay un extraño paralelismo entre la situación de esa época y la que

nos amenaza hoy?

Entre la ruina económica, social, financiera, la parálisis política, la

invasión del territorio por los ingleses es punto por punto lo que en la
actualidad anuncia la ruina de la industria, de la agricultura, del
artesanado, el paro masivo, la inseguridad en los campos y ciudades,
los vertiginosos déficits del presupuesto nacional (150 MM), la deuda
(1.500 MM) y lo que cuesta cada año en intereses (47 MM), los
presupuesto sociales: Seguridad Social (30 MM), Fondos de Jubilación
(25 MM) y Unedic (10 MM).

Sin hablar del déficit de nuestra balanza comercial: 45 MM, en déficit

desde hace 10 años.

La inmigración aplasta a Francia como una plancha de plomo, 10

millones de inmigrantes en 35 años, 400.000 legales y clandestinos por
año, 150.000 naturalizaciones por año.
Mientras Europa, que nos ha quitado lo esencial de nuestra soberanía,
produce el 80 % de nuestras leyes y paraliza cualquier esfuerzo por
independizarnos.

El euro ha sido un elemento de encarecimiento de la vida.

Débil, arruina a los franceses que cada vez importan más petróleo y
bienes que ya no fabrican;
Fuerte, asfixia nuestras exportaciones.

Contrariamente a lo que afirma sonriente la Marquesa de Bercy, no

todo va demasiado bien, e incluso, ¡todo va de mal en peor!

¿La crisis financiera que ya ha arruinado a mucha gente no se ha

acabado? Lo que nos espera no es recrecer, sino la recrisis!

La bancarrota amenaza a varios países de Eurolandia, empezando por

Grecia que solicita el auxilio de otros países europeos, como el nuestro,
ya endeudados hasta el cuello.

Después de Grecia, serán Portugal, España, Irlanda, Italia, y nuestro

turno llegará.

¿No es el primer Ministro Fillon quien ya habló hace algunos meses de

quiebra?

A todos vosotros aquí, de nuevo reunidos, mis fieles compañeros en

tantas alegres victorias y crueles derrotas, a vosotros, siempre presentes
cuando los menos templados, los menos rudos, los más frágiles huían
ante los malos vientos de nuestra muerte anunciada;

A todos vosotros: ¡salud y gracias!

Vuestra presencia es aquí la de la esperanza, de esa certeza irresistible

de que todo es posible: la victoria y el cambio.

Hace aún algunos meses, nuestro Front experimentó en 2007 debido a

una derrota electorial, ciertamente injusta, pero hiriente, al borde de la
ruina financiera, ¡ver florecer la traición, las calumnias y las mentiras!

Durante esa época, el Sistema UMPS y su pandilla de secuaces, de «

colaboracionistas » a sueldo, de autoridades inmorales y de
despreciadores habituales se deleitaban con la muerte anunciada del
Front National: « ¡El Front National se muere, el Front National está
muerto! ».

No era más que un grito de consuelo cobarde.

¡Gran consuelo!
Finalmente consigo misma, sin molestias, ¡sin ese despertador en las
torres de la ciudad que toca la alarma de los desastres anunciados!

Pues la Francia sufriente, la Francia meritoria, la Francia valiente, la

Francia maltratada, la Francia laboriosa, la Francia abandonada, os ha
dado voz.

Pues cuando Francia habla, escoge a su mensajero, al único partido

anti-Sistema, el que no traiciona, el que no transige.

El que no pisotea sus convicciones para correr hacia el poder con el fin
de saciar ambiciones personales y aprovechar los lujos y fastos de la
República.

La Francia sufriente, la Francia meritoria, la Francia valiente, la Francia

maltratada, la Francia laboriosa, la Francia abandonada escoge el
Front National. Ciertamente, aún no es más que una vanguardia, pero
ella abre el camino, ¡vosotros abrís el camino!

Nadie puede poner en duda nuestra voluntad, forjada por más de

treinta años de oposición irreducible a este Sistema UMPS que no hemos
dejado de denunciar:

Derecha en el poder a la que se opone la Izquierda, que gana las

elecciones para hacer la misma política que la Derecha a la que
acaba de vencer;

Izquierda en el poder a la que se opone la Derecha, que gana las

elecciones para hacer la misma política que la Izquierda a la que
acaba de vencer;

¡Y nos sorprendemos de la desafección de los ciudadanos por las

elecciones, de la abstención y del rechazo a los políticos!

Votan juntos en un 90 % de los casos, se oponen para hacer la misma

política, en una comedia grotesca que sería risible ¡si no pusiera en
juego la supervivencia de Francia!

Y seguro de su impunidad, el Sistema ya no se esconde, reclutando

según el azar de las necesidades electorales a un Besson, un Kouchner,
un Mitterrand, en un formidable abrazo del oso a todos esos ingenuos
electores de Derecha e Izquierda que se levantan de buena mañana
para ir a votar a sus campos respectivos, los cuales ya les han
traicionado antes de la batalla y cuyo único terreno de enfrentamiento
¡será el matrimonio o no de los homosexuales y su posible o no derecho
de adopción!
La Crisis no es más que el resultado de las respectivas carencias,
conjugadas, tanto de la derecha como de la izquierda, puesto que solo
ellos tuvieron el poder, ¡y solo ellos!

Desde hace 40 años, bajo la presión de la ideología ultraliberal del

capitalismo financiero, no es más que una antífona: ¡Muerte al Estado
nación y a sus corolarios: el servicio público y la protección social!

¡Todo por el beneficio, el hombre es un lobo para el hombre!

Prioridad para el egoísmo individual, al todo aquí y ahora y sin

esfuerzo,¡a la codicia sin límite y al menor coste!

Y quién no ve que esta ideología del todo para mí, nada para los
demás, reúne en un arco en apariencia improbable pero en verdad tan
coherente al Trader estafador de Goldman Sachs, a los miles de millones
de bonos robados a millones de pequeños ahorradores, y al dealer de
las ciudades que trafica para ganar en una jornada el salario mensual
de un obrero francés, y ¡que mata por un cigarrillo!

Quién no percibe este rechazo del individualismo mortífero, ese veneno

de todas las comunidades humanas, que hace de nuestras sociedades
actuales lugares de crueldad social hasta el momento desconocida, en
las solidaridades fracasadas, en los vínculos humanos y afectivos
disueltos.

Esta Terrible necesidad de fraternidad que se conjuga como una

caricatura en los almuerzos gigantes, las fiestas rave y los clubs de citas,
los suicidios de nuestros jóvenes, de nuestros agricultores, de los
asalariados de las grandes empresas nacidas de nuestros servicios
públicos desmantelados, y en un consumo de anti-depresivos y de
droga ¡que hace de nuestro país un triste campeón del mundo!

Qué humillante lección nos dan esos africanos desarraigados que

vigilan a nuestros ancianos en aquellos asilos mientras esperan la
muerte, diciéndonos « ¡pero en África tenemos a nuestros padres en
casa! ».

He aquí esta sociedad, este nuevo el dorado, este horizonte insuperable

que el liberalismo mundializado nos ha fabricado… ¡Y no lo hemos visto
todo!

Este infierno programado es también el resultado de la destrucción

aceptada, querida, reivindicada de la Nación, del Estado-Nación.

Pues era el marco indispensable de la defensa de los intereses

particulares de sus ciudadanos que sin embargo trascendía para
permanecer, para perdurar, en una palabra: ¡para todo lo que nos
supera y nos permite ver más alto y más lejos!

Ese Estado-Nación que permitía arbitrar los conflictos, aparcar los

apetitos de esas multi-nacionales sin corazón y sin entrañas, mantener
esos servicios públicos indispensables para los náufragos de la vida, para
los débiles, para los que viven en la miseria.

Ese Estado-Nación que mantenía a esa Escuela pública, crisol de

nuestra homogeneidad nacional, de nuestro querer vivir juntos, ascensor
social que hacía que cada escolar tuviera en su cartera la gorra de
prefecto, la maleta de empresario o su diploma de mejor obrero de
Francia, y que mantenía el Servicio militar, brazo armado de la Nación y
crisol del Pueblo.

Pero Estado-Nación, Escuela, Servicio público: ¡cuántos impedimentos

para la explotación masiva!

Era necesario destruirlos y entrar con ello en la nueva religión del

liberalismo mundializado.

El " credo libre-cambista ", que subtiende esta política, fue inventado,
hace dos décadas, por las multinacionales americanas que literalmente
se lo impusieron a los sucesivos gobiernos americanos, luego al mundo
entero.

Según este nuevo Credo, la desaparición de todos los obstáculos a los

movimientos de mercancías, de servicios, de capitales y de
poblaciones, debe permitir a cada uno ver su situación mejorada.

Este es un dogma que no necesita ninguna demostración y los que

discuten este dogma como el Premio Nobel de Economía Maurice Allais
son unos ignorantes y unos retrasados.

La instauración de la religión del Mercado, de una liberalización cada

vez mayor de los intercambios mundiales, y una explosión de los flujos
migratorios, esta libertad de los intercambios en un mundo
caracterizado por disparidades considerables de salarios, ha provocado
una ola creciente de deslocalizaciones y un sub-empleo masivo en
Europa occidental y en particular en Francia.

Se acompaña con un agravamiento de las desigualdades en las rentas,

con una inseguridad insoportable para los más desfavorecidos y como
corolario, con una disgregación constante del tejido social, acabando
en las fracturas sociales que hoy constatamos en la mayor parte de los
países occidentales.
Para Francia en particular, la liberalización mundial de los intercambios
sólo ha podido provocar, como se constata, un profundo deterioro del
nivel de vida.

La Organización de Bruselas que, desde 1974, se dejó llevar a practicar

esta política es responsable de la creación en Europa de millones de
parados, de la destrucción de segmentos enteros de la industria y de
una notable reducción del crecimiento.

Esta ideología mortífera posee una vertiente financiera: la liberalización

total de los movimientos de capitales en el mundo entero.

Una especulación masiva se está pues desarrollando a escala

planetaria.

Gigantescos mercados a plazo se crean sobre valores futuros donde las

posiciones son tomadas a crédito.

De ello resulta la creación de enormes "burbujas" financieras

fundamentalmente malsanas y potencialmente inestables como
acabamos de probar.

Este "credo" se aplica gracias a la gobernación mundial, ejercida por la

intervención de grandes organizaciones como la Comisión de Bruselas,
la O.C.D.E ., el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, y la
Organización Mundial del Comercio.

En este mercantilización de todo y de todos, hay que poner de relieve la

inmigración, esta trata de negros de los tiempos modernos, clave del
Sistema:

Tomar la fuerza de trabajo manual de los países en vías de desarrollo

mediante la inmigración en masa, primero abriendo sin control nuestras
fronteras, y transformarla en inmigración de población, es el primer
estadio de este proyecto de la economía global.

¡Permite así presionar a la baja los salarios de los obreros franceses

dentro de una verdadera deslocalización del interior!

Y después de haber roto nuestra industria, debilitado nuestros PME-PMI, y

luego haber destruido una gran parte del componente obrero, ya es a
los cuadros, a las profesiones liberales que va a dirigirse la inmigración, la
que el comendador del capitalismo universalizado, Nicolas Sarkozy,
quiere imponer: la inmigración escogida.

¡Arrancar de los países en vías de desarrollo sus cuadros dirigentes, sus

médicos, sus ingenieros, sus informáticos, para ponerlos a competir con
los nuestros, es volver a hacerles a nuestros cuadros, a nuestros médicos,
a nuestros ingenieros, a nuestros informáticos el golpe hecho a nuestros
obreros!

Y si todos estos marcos, buenos soldados del capitalismo mundializado,

tan críticos hacia el FN, no lo habían comprendido, la Señora
Lauvergeon, Presidente de Areva, se encargó de ponerles los puntos
sobre las íes: " con iguales competencias, y bien afligidos, escogeremos
a la mujer o escogeremos a la persona que venga de… Cualquier otra
cosa que no sea el varón blanco, para ser claros ".

¡Aplastar los salarios, proletarizar cuadros y profesiones liberales, debilitar

la protección social y destruir los servicios públicos, he aquí su proyecto!

He aquí cómo se revela la máscara de la más horrorosa de las

explotaciones que ya no se esconde, orgullosa de sus bonos y de sus
stock options pagados, al precio de millones de parados y de
deslocalizaciones, de la explotación desvergonzada de los trabajadores
pobres de los países emergentes.

Como se diría en el lenguaje del golden boy en la onda " es ganador-

ganador " para las multinacionales. ¡Y " perdedor-perdedor " para el
conjunto de nuestros conciudadanos, ya sean empleados por el sector
privado o el público, los cuadros o las profesiones liberales, artesanos,
comerciantes, agricultores o pescadores!

Y, como guinda del pastel, es asegurar el mantenimiento en el

subdesarrollo de estos países en vías de desarrollo, para asegurarse un
depósito inagotable de inmigrantes y permitir así la explotación de sus
riquezas naturales por las grandes multinacionales.

Marine me decía el otro día, a propósito de este discurso del 1 de mayo

" ¡Jaurès y no Thorez! ".

¡¿Y por qué no?!Antes de que el Partido comunista francés y los

sindicatos hubieran traicionado a los obreros aceptando la
mundialización y Europa y volviéndose inmigracionistas, ¿Georges
Marchais no reclamaba su parada inmediata y no defendía el "
Produzcamos francés "?

Tenía razón, tal como nosotros teníamos razón.

Y porqué no decirlo: ¡esta Izquierda, qué todavía vive, la de la defensa

de los oprimidos, explotados, los pequeños patronos, los pequeños
funcionarios, los pequeños campesinos, ciertamente está más alejada
de la Izquierda americana de los Strauss Kahn y Aubry que de nosotros!
¡Está más cerca de nosotros que esa Derecha del rey dinero, de los
Rolex y las cantantes, la que financia a los bancos que les pagan mil
millones de bonificaciones a sus traders ¡mientras que un campesino
nuestro se suicida cada día!

Para completar el cuadro francés de este Edén liberal, evoquemos

también el reinado sin división de la gran distribución que directamente
destruyó un millón de nuestros empleos en el pequeño comercio, en la
industria, el PME-PMI, entre los agricultores y los pescadores.

Allí dónde reina la bufonada, el desprecio al derecho laboral, el crédito

revolving, este deterioro de los tiempos modernos, y donde se
representa la comedia de los precios bajos cuando todos nosotros
sabemos que los productos que nos proporcionamos en la gran
distribución, desde la leche al pescado, son comprados al productor
por debajo de su precio de coste, precio multiplicado a veces por diez
para llegar a nuestra mesa a un coste prohibitivo, incluso para un salario
medio.

¡He aquí la realidad de la crisis que todo el Sistema nos vende para
enmascarar estos errores de análisis, sus pecados económicos, sus
decisiones irreflexivas tomadas dentro de un momento de emoción, su
negativa de las realidades, su falta de valor y sus políticas de corto
alcance, sus reformas que son sólo va y viene entre ideas falsas!

¡Pero aquella realidad, vosotros la conocéis mejor que cualquiera! Es

para combatirla, es para luchar contra estas feudalidades, contra esta
casta que nos gobierna desde hace ya muchísimo tiempo que vosotros
os afiliasteis, militáis, votáis por el Front national.

Lo sabéis, si no estuviéramos ahí, ¿quién lucharía contra las

deslocalizaciones, contra la desindustrialización, el empobrecimiento
generalizado de nuestra sociedad, la proletarización de nuestra clase
media y la desaparición programada de nuestra agricultura, de nuestro
melocotón, y de nuestros tenderos bajo los golpes de la Gran
distribución.

Y en este 1 de mayo dedicado a Juana de Arco, recordemos que

combatió para echar al invasor fuera del país y dar a nuestro Pueblo, a
los pequeños de entonces este bien esencial de los pequeños, de los
desheredados: ¡la seguridad que entonces amenazaban soldados y
salteadores, mercenarios y saqueadores de toda clase!

¡Pero no hemos vuelto hoy a aquellos tiempos remotos!

Ni una sola de nuestras ciudades, de nuestras escuelas, de nuestros

trenes de la periferia o de nuestros autobuses no deja de ser el lugar de
violencias cada vez más graves, cada vez más audaces y cada vez
más impunes.

¡Porque todo el mundo las conoce, ahora, estas instrucciones dadas a

las fuerzas del orden de no perseguir a delincuentes que vayan sobre
dos ruedas, por miedo de que se hieran en la persecución y de que así
se desencadenen una revuelta!

Evidentemente, con la complicidad activa de los medios, el gobierno

intenta enmascarar la realidad, ya que revelarla es, dicen, ¡alimentar al
Front Nacional!
Enseñar la inseguridad, esa violencia odiosa y cobarde en los autobuses,
el metro, los linchamientos de alumnos en las escuelas, las agresiones
con arma a los profesores, es darle la razón al Front Nacional, es
demostrar que en eso, como en otras cosas, ¡el gobierno no hace nada!

Es recordar cruelmente que Nicolás Sarkozy fue desde 2002 dos veces
ministro del interior antes de ser Presidente de la República.

También sería recordar que hizo cerrar Sangatte en el Pas de Calais en

2002, como Ministro del interior, para hacer luego cerrar « la jungla » en
el Pas de Calais en 2009, ¡en tanto que Presidente de la República!

Cruel y terrible recordatorio de estas fanfarronadas, de esta liturgia de la

palabra, de estos discursos nunca seguidos de efectos.

A los cuatro vientos del Norte, del Sur, del Este y del Oeste, hay que
añadirle « el Sarkozy »: ¡el viento que sopla por todas partes y que no va
a ningún lado!

Este no es nuestro caso, pues el Front Nacional siempre supo mantener

el rumbo, el de la defensa de Francia y de los franceses, añadiéndole
una promesa de verdad sobre la que nunca ha transigido.

Esconder la realidad de la situación de nuestro país a nuestros

conciudadanos, es impedir concretamente que se propongan las
soluciones que se imponen.

« Hacer como que » no puede servir de política.

El estado de Francia, al borde del abismo financiero, de crecimiento

anémico, con paro en continuo aumento, donde la Escuela se hunde
por segmentos enteros tal como se hunden segmentos enteros de
nuestra economía mientras explotan la inseguridad y la inmigración
clandestina, el estado de Francia exige cambios reales.

Pero son actualmente imposibles, y no decirlo es mentir, es hacer que el

país se equivoque.
Actualmente son imposibles ya que nuestros compromisos europeos han
consistido en remitir a Bruselas una gran parte de nuestra soberanía
política y económica.

Estamos en realidad gobernados por Bruselas donde la Comisión y el

Parlamento velan estrictamente por el respeto a la filosofía económica
de la Europa ultra-liberal, la libre y perfecta competencia y el libre-
cambio mundializado, es decir, la mercantilización de todo y de todos,
y luego, la inmigración y las deslocalizaciones.

Es además, y debéis comprenderlo, el punto que determina a los

verdaderos oponentes al Sistema y los cómplices más o menos visibles
de éste.

Rechazo o no a la mundialización económica, a la Europa del libre-

cambio generalizado y de la inmigración de trabajo y repoblación: he
ahí lo que separa al buen grano de la cizaña, a aquellos que combaten
realmente al Sistema y a los oponentes de pacotilla.

Comprenderéis entonces porqué, solo contra todos, el Front Nacional

sufre este ostracismo por parte de los dos lados de un Sistema en el que
se ponen de acuerdo como ladrones en una feria, organizando para los
electores esta oposición de conveniencia en la que están todos de
acuerdo.

De acuerdo también para violar conjuntamente el voto emitido por el

pueblo cuando el referéndum sobre la constitución europea, ratificando
juntos el Tratado de Lisboa, llegando para ello ¡hasta la modificación
conjunta de la Constitución!

Cómo podría ser de otra manera cuando se hallan nutridos de las

mismas ideas, formados en las mismas escuelas y cómplices en la
gestión de sus intereses comunes. ¿Y de qué es sino su expresión, sino la
de sus compromisos públicamente revelados de esta manera?

Y qué símbolo como el de la elección de Hénin-Beaumont donde todo

el Sistema, comprendiendo al Galouzeau de servicio, ¡se coaliciona
contra el Front Nacional para defender a un alcalde detenido por
corrupción!

El salario medio disminuye, la protección social se empequeñece, las

deslocalizaciones aumentan, los servicios públicos reducidos y todo esto
sin oposición, ¡las multinacionales lo soñaron, Sarkozy lo hizo!

Es para evitar esto que vosotros estáis aquí, que os habéis afiliado,
militado, votado por el Front National.

¡Pero nos hace falta hacer mucho más todavía!

¡Lo peor nunca está asegurado y existen otras vías aparte de la
violencia social, la pauperización masiva, la inseguridad y el
comunitarismo generalizados!

Nos hace falta convencer de que otra política existe, que nada se ha
acabado, que todo sigue siendo posible.

Es primero contra este descorazonamiento de nuestro pueblo en lo que

hay que luchar.

Pese a las dificultades, es preciso que cada uno de nosotros sepa que
las soluciones existen y que el cambio es posible.

Os daré aquí las grandes líneas, los grandes ejes:

Evidentemente es necesario recobrar la libertad de nuestra política

económica y monetaria, ¡es una condición indispensable y necesaria sin
la cual nada es posible!

Los intereses de los hombres se defienden en el marco nacional como el

de los niños en el marco de su familia.

Yo hago la política de Francia y de los franceses primero, yo le dejo a la

Señora Merkel la de los alemanes, incluso si los intereses de Francia y
Alemania puedan ser (y lo son frecuentemente) convergentes.

Esta reflexión de sentido común, esta evidencia política data de los

primeros tiempos en que los hombres se reagruparon en comunidad y
cuando sus intereses de grupo divergieron.

Nuestros intereses como franceses no siempre son los de los alemanes,

ingleses o polacos.

Algunas veces, evidentemente pueden converger, pero en el fondo, la

política es el egoísmo nacional.
La alianza sí, cuando es una ventaja para Francia, o al menos una
ventaja compartida, pero no por sistema, por ideología.

Europa es el sitio del mundo donde el crecimiento es el menos fuerte, y

el desempleo el más elevado, y es el lugar del mundo donde la
competencia es la más fuerte y el comercio más libre. Podéis ver como
yo un vínculo de causa y efecto

Y es tan verdadero, que las dos naciones que conocen actualmente la

aceleración más rápida y el crecimiento más fuertes son los Estados
Unidos y China, los dos Estados más proteccionistas del mundo.
Los dos países que quieren la libertad total del comercio para sus
productos y aumentan los obstáculos para el comercio de sus
competidores: ¡haz lo que yo diga, pero no hagas lo que yo hago!

Retomar el control de nuestras fronteras, para el comercio y la

inmigración, es la base de cualquier renacimiento económico.

Ya oigo a aquellos que, celosos defensores del sistema y garantes de los

intereses de las multinacionales, de los bancos y de los miembros de la
comisión de Bruselas, como el FMI presidido por el amigo de Sarkozy,
Dominique Strauss Kahn, explicarnos que esto ¡sería una línea Maginot
económica, los alambres de espino en las fronteras, y predecirnos
desabastecimiento en las tiendas!

Pero, Señores, el mundo vivió durante siglos, se desarrolló con una

libertad de comercio controlada, ¡la que nosotros proponemos

En esos tiempos en que durante varios siglos el Estado, bajo Colbert,

quien dejará un recuerdo mayor en la historia que Madame Lagarde,
¡organizaba el poder económico de Francia!

Pues el Estado fuerte, el Estado árbitro, el Estado encarnación de las

permanencias de la Nación, debe enmarcar la vida económica.

Evidentemente debe ejercer una vigilancia regular sobre la economía y,

digámoslo con osadía: controlarla.

¿Creeríamos por un solo instante que bajo el régimen del control de los
bancos asegurado por la Banca de Francia, habríamos asistido a la crisis
de las sub-primes y a la explosión de esta burbuja financiera?

Este Estado al servicio de Francia y de los franceses deberá apoyarse en

Servicios públicos de calidad a los que se les darán los medios para
ejercer su misión.

Pues lo digo aquí claramente, lo repito, no confundo a la inmensa

mayoría de los funcionarios devotos de su misión con las « nomenklatura
» sindicales nacidas en sus filas, que les traicionan con asiduidad y
constancia desde hace más de cuarenta años.

Ellas aportan también su grano de arena al Sistema y participan en su

lugar, y en particular en el ministerio de Educación destruyendo el
servicio de enseñanza.
¿no implantaron contra la mayoría del cuerpo docente el « método
global » para enseñar a leer a generaciones de niños sacrificados en
experimentos pedagógicos insensatos?
Hay actualmente más iletrados en nuestro país que bajo Napoleón III, y
el 25 % de los alumnos tienen actualmente dificultades con la lectura.

Pero la recuperación de nuestra soberanía económica, del control de

nuestas fronteras, elementos esenciales, fundadores, deben
acompañarse con un verdadero cambio de perspectivas económicas.

Cómo os decía hace un momento, el Sistema considera que el coste

del trabajo, los salarios, la protección social, son demasiado elevados en
nuestro país;
Según nuestros dirigentes, hay que reducirlos para encontrar nuestra
competitividad y volver a dar trabajo a nuestros conciudadanos;

Esta política entablada desde hace ya años y agravada bajo la política

de Nicolas Sarkozy ha mostrado sobradamente su ineficacia.

Primero porque es inaceptable la disminución de los salarios de los

trabajadores franceses, disminuir la protección social y los servicios
públicos para llevarlos hasta el nivel de aquellos… que no tienen;
que además, esta implosión por lo bajo ya está siendo avanzada por las
grandes empresas que jubilan y deslocalizan en una aceleración
continua del dumping social; y que a continuación, representa tomar la
cuestión al revés:

Los empleos provienen del crecimiento y sin poder adquisitivo, no

puede haber crecimiento.

El problema de nuestra economía es pues el poder adquisitivo.

Por debilidad, cobardía y connivencia ideológica, todos nuestros

sucesivos gobiernos se han encerrado en esta dinámica deflacionista
que consistía en hacer bajar los salarios y las transferencias sociales de
todo tipo para encontrar el camino del empleo.

Es exactamente a la inversa como hay que actuar.

Hay que restaurar el poder adquisitivo para relanzar el consumo y luego

encontrar el camino del crecimiento.

Sólo ello permitirá luchar contra el desempleo, retornar un empleo a

todos y a todas.

Como no puede ser de otro modo, el control de nuestras fronteras

económicas con la aplicación de derechos de aduana diferenciados
permitirá evitar que este crecimiento del poder de compra no se vaya a
dispersar en productos importados.
Querría recordar esta fórmula de Henry Ford Junior que justificaba al
capitalismo:
« Si no les vendo mis coches a mis obreros, ¿a quién se los venderé
entonces? ».

Esta restauración del poder adquisitivo deberá acompañarse con una

verdadera reforma fiscal que tendrá que ser justa, simplificada, y que
ella misma deberá tener como objetivo esta restauración del poder
adquisitivo así como a una mejor eficacia de nuestra economía.

Y además, es darles prioridad a dos sectores esenciales, creadores de

empleo y de valores en el marco nacional: nuestros PME y PMI, y nuestra
agricultura.

Son dos sectores estratégicos tal como lo son el comercio al por menor y
el artesanado, como ellos no deslocalizables.

Nuestro yacimiento de empleos está aquí: en esos millones de pequeñas

empresas industriales, comerciales, artesanales, sobre las que todos
sabemos que podrían contratar obreros si el alza del poder adquisitivo
suscitase una demanda solvente.

De este modo serían creados verdaderos empleos, y no solamente esos

empleos de servicios personales que es el nuevo nombre de los
domésticos o de esos empleos subvencionados que nos recuerdan
enojosamente ¡los talleres nacionales!

Pues nuestros conciudadanos quieren vivir de su trabajo, no de empleos

subvencionados, no de la caridad pública, del RSA, del RMI, de esos
atentados a la eminente dignidad del trabajo y del trabajador.
Pues es mediante el trabajo, propio del hombre que se mantiene de pie,
¡cómo éste asume su destino de ciudadano libre!

No hace falta ser muy sabio para comprender que las dificultades de
nuestros regimenes sociales son en parte debidas al nivel de desempleo.

Un desempleado que vuelve al trabajo, son cada vez más cotizaciones

y cada vez menos indemnizaciones, es poder adquisitivo inyectado en
el país, es la esperanza que renace, es el futuro que se ilumina.

Es por esto que la necesaria revisión del sistema de pensiones,

desequilibrado por los errores de gestión de los sucesivos gobiernos,
tanto de derecha como de izquierda, no debe en modo algunos servir
como pretexto para poner en duda las conquistas sociales.

Ciertamente, la esperanza de vida se ha alargado, algunos empleos

son menos duros y hay pues que tener en cuenta estas evoluciones.
Además, las conquistas sociales son el resultado del reparto de los frutos
del crecimiento y de la productividad en beneficio de los asalariados.

Sin embargo, desde hace diez años, este reparto que era favorable a
los asalariados, evoluciona en beneficio del capital financiero, como lo
testimonia la explosión de los beneficios, las jubilaciones por motivos
financieros, las deslocalizaciones y la limitación del poder adquisitivo.

Añadirle a esto medidas de desembolso y de franquicias en materia de

sanidad y poner en duda los sistemas de pensiones, representa elegir
una vía ultra-liberal en profunda contradicción con las aspiraciones y las
tradiciones de nuestro país, es optar un poco más aún por el modelo
anglosajón.

Es, en resumen y como os acabo de decir, mediante la políticas de

control económico de nuestras fronteras, nacionales o europeas, de
protección de nuestras industrias, de apoyo a nuestros PME y de
relanzamiento del poder adquisitivo como serán arreglados los
problemas de nuestros pensionistas.

Y no olvidemos nuestra reserva de financiación, nuestro tesoro, esos 70

mil millones de euros anuales que nos cuesta la inmigración masiva,
cáncer de nuestra economía.

Esta deducción monstruosa sobre nuestra economía, es tomada de

nuestros conciudadanos y, evidentemente, de los más débiles de entre
ellos.

Pero yo os lo digo: que no se cuente con el Front National para

comulgar con ese arranque de arrepentimiento mezclado con
sensiblería borreguil y participando en el concierto derecho-humanista.

Francia sólo debe conmiseración y compasión a sus naturales, por el

simple hecho de que son franceses.
A sus ancianos, a sus discapacitados, a sus enfermos, a sus sin casa: les
debe ayuda y asistencia.

Es esta la política de Francia: para los franceses su preferencia nacional.

Esto no significa que no se tenga que llevar, respecto al resto del
mundo, una política de cooperación digna, justa, eficaz, a la altura de
los valores de Francia.

Otro futuro es posible, empezó a nacer en las últimas elecciones que no

son más que el prólogo de las batallas que se llevarán a cabo.

Es un gran movimiento el que se dibuja:

del Norte al Mediodía, del Este al Oeste,
de la pequeña tienda hasta el banco,
de la forja a la oficina,
del campo a la pesca,

Patrones o empleados, funcionarios o trabajadores del sector privado,

salidos de la Derecha y de la Izquierda,
los que creéis en el cielo o los que no:

Es a la unión que yo os invito,

A esos raros momentos de nuestra Historia donde nuestras divisiones se
borran en la gran alianza que la salvaguarda del país demanda, ¡que el
destino de Francia exige!

Amenazada en su ser, en su identidad como todos vemos, nosotros que

lo vivimos, Francia se juega su supervivencia.

Nos apela a todos a unirnos, a reunirnos para uno de esos combates

gloriosos que forman la trama de nuestra Patria.

Esta llamada, debéis lanzarla por todas partes,

Vosotros, que con vuestra presencia aquí ¡demostráis la fuerza y la
clarividencia de las vanguardias!

Pues a todos vosotros aquí,

De nuevo reunidos, mis fieles compañeros de tantas alegres victorias y
crueles derrotas,
Vosotros, siempre presentes cuando los menos templaos, los menos
rudos, los más frágiles huían ante los malos vientos de nuestra muerte
anunciada,

A todos vosotros: ¡salud y gracias!

Vuestra presencia aquí, os decía que era la de la esperanza, de esa

certeza irresistible de que todo es posible: la victoria y el cambio.

Id entonces a llevar a las cuatro esquinas del país esta semilla de

esperanza, es la estación de la primavera de la Nación, para que
venga en su momento, mañana, el tiempo de la cosecha.

Porque los hombres no viven solamente de pan, puesto que no tienen

solamente cuerpos sino también espíritus y almas, recusamos a los
materialismos, ya sean de derecha o izquierda, comunistas o
capitalistas.

Este es el porqué no separamos el culto a la Patria del amor al trabajo, y

que nosotros realizamos es este primero de mayo la síntesis de las 2
fiestas de Juana de Arco y de los patriotas, la del trabajo y de los
trabajadores.
Adelante, amigos, camaradas, compañeros en la reconstrucción de la
Nación francesa, por la revolución patriótica.

¡Viva el Front National,

viva Francia!

www.tribunadeeuropa.com