Amar, cada da ms

Homila del Papa Francisco en Santa Marta

De las palabras del Salmo responsorial Seor, qu es el hombre, para que te

acuerdes de l? () Lo hiciste poco inferior a los ngeles, lo coronaste de gloria y
dignidad (cfr. Salmo 8) y del relato del Gnesis (1,20-2,4) que acabamos de
escuchar, nos sorprende la ternura y el amor de Dios que, en la Creacin, le dio al
hombre todo. Yo dira que son tres los grandes dones que podemos destacar.

Primero la identidad. Ante todo, nos dio el ADN, es decir, nos hizo hijos, nos cre a su
imagen y semejanza, como l. Y cuando uno tiene un hijo, no puede dar marcha atrs:
el hijo ya est hecho, ya est ah. Que se le parezca mucho o poco, da igual, siempre
se asemejar al padre a veces no, pero es su hijo y ha recibido su identidad. Y si el
hijo es bueno, el padre estar orgulloso de ese hijo, verdad?: Mira qu bueno es!. Y
si es un poco feo, pues el padre dice: Es guapo!, porque el padre es as. Siempre. Y
si es malo, el padre lo justifica, lo espera Jess nos ense cmo un padre sabe
esperar a sus hijos. Nos dio esa identidad de hijo: hombre y mujer; debemos aadir:
hijos. Somos como dioses, porque somos hijos de Dios.

El segundo don de Dios en la Creacin es una tarea: nos ha dado toda la tierra, para
dominarla y someterla, como dice el Gnesis. Es pues una realeza la dada al hombre,
porque Dios no lo quiere esclavo sino seor, rey, pero con una tarea. Como l trabaj
en la Creacin, nos ha dato a nosotros el trabajo, el deber de sacar adelante la
creacin. No de destruirla, sino de hacerla crecer, cuidarla, protegerla y sacarla
adelante. Nos dio todo. Es curioso, pienso yo: pero no nos dio dinero. Lo tenemos todo.
Quin hizo el dinero? No lo s. Dicen las abuelas que el diablo entra por los bolsillos:
puede ser Nos dio toda la Creacin para protegerla y llevarla adelante: ese es el
segundo don.

Y finalmente, cre Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo cre, varn y

mujer los cre. Despus del dominio sobre la creacin, este es el tercer y ltimo don:
el amor que une al hombre a la mujer. Varn y mujer los cre. No es bueno que el
hombre viva solo. Y le hizo una compaera. Dios-amor da al hombre el amor, y un
dilogo de amor debe haber sido el primero entre hombre y mujer, imagino yo.

Agradezcamos al Seor estos tres regalos que nos ha dado: la identidad, el don-tarea
y el amor. Y pidamos la gracia de proteger esa identidad de hijos, de trabajar el don
que nos ha dado y llevar adelante con nuestro trabajo ese don, y la gracia de aprender
cada da a amar ms.