Un colector solar es un tipo especial de intercambiador de calor que transforma
la energía radiante procedente del Sol en energía térmica. Los colectores se diferencian en varios aspectos de los intercambiadores de calor convencionales. En estos últimos se lleva a cabo normalmente un intercambio de calor fluido a fluido, con altos valores de transferencia de calor, siendo la radiación un fenómeno poco importante. Los colectores solares presentan problemas muy particulares de flujos de energía bajos y variables y gran importancia del fenómeno de radiación.
Partes de un colector.
Estructura de sujeción: Estas estructuras están fabricadas con perfiles
galvanizados en forma de “L” y están tratados con un baño anticorrosión para evitar el deterioro que sufre cualquier estructura situada de manera permanente a la intemperie.
Acumulador: Acumula toda la energía térmica en un fluido, hasta que el
usuario requiera de su uso. Suelen estar formados por una doble camisa para evitar pérdidas térmicas por conducción, lo que permite su utilización en instalaciones sin bomba en el sistema primario. Funcionamiento.
Su funcionamiento es muy sencillo, se vale de la técnica de crear un mini
efecto invernadero (dentro del colector).
El vidrio opaco superior deja pasar cierta parte de la radiación solar
dentro del colector, dicha radiación se transforma al contactar con la placa interior.
La radiación resultante es incapaz de pasar a través del vidrio opaco
superior, por lo que el calor se acumula en el interior del colector, creando un pequeño efecto invernadero.
Al pasar por la caja, el fluido del deposito cercano se calienta y
transporta esa energía térmica a donde se desee.
Clasificación según su temperatura de trabajo.
Colectores de baja temperatura: Alcanzan una temperatura máxima de 50°C.
Se conforman por una placa absorbente, un circuito de fluido térmico, aislamiento térmico y la caja que contiene los componentes. También recibe el nombre de captador solar plano no protegido. Colectores de media temperatura: Alcanzan una temperatura máxima de 90°C. Estos colectores además de tener todos los componentes del colector de baja temperatura, se le añade una cubierta transparente para disminuir las pérdidas por convección y por radiación. Además se incrementa el efecto invernadero dentro del colector, y gracias a esto se logra incrementar la temperatura del fluido térmico.
Colector de alta temperatura: Alcanza una temperatura máxima de 150°C.
Este tipo de colector consiste en añadirle al colector de temperatura media, otra cubierta entre la capa transparente y la placa absorbente, y hacer un vacío entre las dos capas. Esto para crear un mayor aislamiento entre el ambiente exterior e interior del colector, y así aumentar la temperatura.
Tipos de colectores.
Colector termosifónico: Su funcionamiento es por convección natural, es
decir, que no requiere de una bomba circuladora, ni sistema de regulación. Colector de placa plana: Su uso se limita a la disponibilidad de agua caliente sanitaria y calefacción solar. Incluso se utiliza este tipo de colector solar para climatización de piscinas.
Colector de vacío: Cuando el colector de placa plana reporta dificultades para
lograr las temperaturas del agua, se recomienda utilizar este tipo de colector para disponer de agua caliente sanitaria y calefacción solar. Colector de polipropileno: Este colector solar generalmente se utiliza cuando se requiere calentar el agua de las piscinas, permitiendo prolongar el uso de ellas a lo largo del año.
Colector de cilindro parabólico: Su uso a nivel industrial se extiende a las
centrales térmicas. Se consiguen altas temperaturas del fluido transportador de calor, que es utilizado para hacer girar las turbinas eléctricas.