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Laberinto.

En el
laberinto de arriba , donde están marcadas la entrada y salida , debes seguir las siguientes reglas.

Una vez entres , solo puedes (y debes obligatoriamente hacerlo) girar cuando te encuentres con un punto negro o una pared del laberinto. El
giro puede ser 90º a derecha o izquierda pero no volver hacia atrás.

Debes pasar por todos los puntos negro una sola vez.

Describe el camino.

ACERTIJO
"Un hombre entra en un edificio y pasa allí unas horas. Sale del edificio coge el tren para volver a su casa. El tren atraviesa un túnel muy oscuro. En ese
momento el hombre se levanta nervioso y se suicida. ¿Por qué?"

Las normas ya son conocidas, se realizaran preguntas que se responderan con SI, NO o IRRELEVANTE.

SOLUCION

Un hombre ciego le operan, sale del hospital , se quita la venda y cuando vuelve a casase quita las vendas y como esta todo oscuro, se suicida

Et Tu Brute?: estrategia y debates en formato Print &


Play
abril 18, 2015agosto 16, 2016 Lorena Garcés Abarca 0 Comments

El rumbo de la historia no puede cambiarse, pero aún está permitido fantasear


e imaginar qué hubiera ocurrido alterando un solo acontecimiento. Para que
estos pensamientos tengan aún más forma, surgen juegos de mesa que
recrean de la forma más realista posible la situación. Es el caso de Et Tu
Brute?, un juego en formato Print & Play que obliga a los jugadores a apoyar a
Julio César o a ordenar asesinarle a sangre fría.

UNA PARTIDA A ET TU BRUTE?

Et Tu Brute? es un juego de mesa creado por Cesar Augusto Ocampo Castro,


disponible a través de Blox Games. Se trata de un blog dedicado a los juegos
en formato Print & Play de este autor, en el que también se encuentran, de
forma gratuita, las reglas en castellano e inglés de este juego, así como sus
componentes.

El objetivo es ser el jugador que consiga tres puntos de victoria en primer


lugar. Este juego de cartas, de 4 a 8 jugadores, convierte a los participantes en
Senadores, que debatirán sobre si apoyar a César en su idea por convertirse
en dictador o si asesinarle a sangre fría. El debate está más que asegurado,
puesto que su destino está en sus manos.
Los archivos para descargar se componen de 16 cartas de Senador, de 16
cartas de decisión divididas en ocho de traición y ocho de diplomacia y
de una carta de dictador. Para empezar a jugar, basta con imprimir estas
cartas, diseñadas en blanco y negro para resultar más económico, e incorporar
varias fichas a modo de contadores.

Antes de empezar la partida, cada jugador recibe al azar una carta de


Senador y siete contadores. Estos deberán ser distribuidos alrededor de la
carta de Senador, de tal forma que tres se queden en el lado derecho
(Renombre), tres en el izquierdo (Discordia) y uno arriba (Decisión). La carta de
Julio César se colocará en el centro de la mesa.

El jugador con la carta de Senador marcada con el número uno comienza el


juego. Más concretamente, ejecuta la fase de Quorum. En ella, dará un
discurso a favor o en contra del César, con argumentos convincentes. A
continuación, tomará su contador de Decisión y lo colocará en el lado izquierdo
de la carta de Julio César (en caso de estar de su parte) o en el derecho (si
está en su contra). Por último, elegirá a otro jugador para que decida si su
discurso ha sido bueno o no. Si lo ha sido, moverá un contador de su lado de
Discordia a Renombre. Si no, el primer jugador moverá un contador en sentido
contrario.
En el momento en que todos los jugadores hayan dado su discurso, la fase de
Quorum terminará, dando comienzo la de Idus de Marzo. En ella, los
jugadores eligen una carta de decisión (Traición o Diplomacia) y le dan la
vuelta. Si sale mayoría de Traición, el jugador con mayor cantidad de fichas en
el lado de Discordia gana un punto de victoria. Si la mayoría es Diplomacia, el
jugador con mayor número de fichas en el lado de Renombre será quien gane
el punto.

Tras esta fase, comienza una nueva ronda. En el momento en que uno de los
jugadores llegue a tres puntos de victoria, la partida finaliza, convirtiéndose en
el ganador. Así, el destino de César y de Roma puede cambiar en cada una de
las rondas en función de la capacidad de convicción y, con él, la suerte de
quienes le apoyen o le rechacen.

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