You are on page 1of 146

6.

1 Evaluación del impacto ambiental, económico y social


Dentro del Plan de Ordenamiento y Manejo se ha considerado al desarrollo sostenible
como un sistema global, en el cual se conjugan e integran los objetivos económicos,
sociales y ambientales en una sola propuesta, diseñada para modificar la dirección actual
del desarrollo e incidir positivamente en estos tres grandes sectores. Siguiendo este
marco de actuación, la evaluación de la propuesta también debe realizarse considerando
el impacto del Plan y sus programas y proyectos en los tres grandes sectores, en función
de los resultados a nivel regional y del cumplimiento de las políticas a nivel nacional.

En las secciones siguientes se procederá a evaluar el impacto de las acciones propuestas


en los tres sectores señalados, identificando la incidencia del Plan en la conservación de
la naturaleza y la capacidad ambiental regional, así como en el grado de avance hacia la
equidad social y la eficiencia económica en el área de actuación.

6.1.1 Evaluación Ambiental

Como se ha indicado anteriormente, el Plan de Ordenamiento y Manejo se ha diseñado


específicamente para mejorar la situación ambiental de la región fronteriza amazónica,
por lo cual no requiere de una evaluación de impacto ambiental formal, de acuerdo con lo
señalado en las regulaciones de los dos países, así como en los manuales de las
entidades internacionales de financiamiento (BID, Banco Mundial). Sin embargo, a
continuación se analiza la relación de los programas y proyectos con las unidades
ambientales, riesgos naturales y bienes y servicios naturales en la región, para determinar
de mejor manera el tipo y magnitud del impacto que se ocasionará en la región con la
ejecución del Plan, conformando una declaración de efecto ambiental preliminar.

a) Areas de Intervención y Unidades Ambientales

La superficie del Plan alcanza a 47.307 km2, de los cuales 16.493 km2 (34,9%)
corresponden a zonas intervenidas, con menos de la tercera parte con usos agrícolas y
pecuarios, y la diferencia con bosques intervenidos. De esta superficie, 44% comprende
suelos de aptitud buena a moderada para la explotación agropecuaria, 49% suelos de
aptitud limitada y 7% suelos de uso agropecuario restringido o de protección.

Las tasas de deforestación en la región son sumamente elevadas. Se ha estimado que en


la Amazonía ecuatoriana se destruye anualmente 1 % del bosque (aproximadamente
50.000 ha), afectando ya a cerca de 40% de la superficie total. Si las tasas de forestación
continúan al mismo ritmo, se considera que para el año 2030 se habrán terminado los
bosques cerrados.

La estrategia espacial del Plan ha permitido concebir impactos diferenciados de acuerdo


con el tipo de utilización actual de suelo. Así, en las áreas ocupadas las acciones se
dirigen a modificar los patrones de actuación de los campesinos, de forma que utilicen
modelos de producción más adecuados a la realidad ecológica del trópico húmedo
amazónico y adaptados a la unidad ecológica y la aptitud de las tierras en que se
encuentren ubicados.
Para estas zonas se está proponiendo módulos productivos que aprovechen
adecuadamente los suelos de mejor aptitud, respetando las áreas con aptitud muy
limitada o para conservación. Adicionalmente, se diseñaron nueve módulos diferentes,
para considerar las variaciones de ubicación ecológica (ver Mapa 2, Unidades
Ambientales) así como las diferencias socioeconómicas detectadas en cada ubicación
(ver numeral 5.2, Programa de Ordenamiento de la Producción para el Desarrollo
Sustentable).

Cuadro 11 - IMPACTO DEL PLAN DE ORDENAMIENTO Y MANEJO SOBRE LOS


BIENES Y SERVICIOS NATURALES

R = regional; z = zonal; l = local;

IMPACTO: MI == Positivo muy importante; I = Positivo importante; s = Positivo


significativo; (MI) = Negativo muy importante; (I) Negativo importante; (s) Negativo
significativo.

En las zonas no ocupadas, que alcanzan a 30.814 km2, se han diseñado acciones para
fortalecer y dinamizar la actuación dentro de las áreas naturales protegidas,
complementándolas con el establecimiento de zonas de amortiguamiento que permitan la
protección y transición de las zonas agropecuarias a las de reserva. Se está proponiendo
la creación de dos áreas protegidas binacionales: Cayambe-Coca/San Miguel y
Cuyabeno/La Paya, con una extensión de reserva de 16.600 km2 y de 4.500 km2de zona
de amortiguamiento (aunque no toda esta extensión se encuentra en la zona del PSP,
principalmente en el PN La Paya).

Para los territorios indígenas, que comparten zonas ocupadas y bosques con una
extensión aproximada de 5.260 km2, se ha dado especial atención al respeto de sus
derechos de autodeterminación y autogestión, proporcionándoles instrumentos para
proteger sus tierras y bosques, mejorando a la vez su capacidad de adaptación a las
nuevas condiciones existentes en la región. Se quiere atender en forma directa a la cuarta
parte de esta población.

b) Impacto sobre los Bienes y Servicios Naturales

El Plan de Ordenamiento y Manejo se ha concebido de forma que tenga un impacto


positivo sobre el medio ambiente regional, lo cual se puede demostrar usando una matriz
de relaciones entre los diferentes programas y proyectos que lo conforman y los bienes y
servicios naturales de su área de actuación. Una síntesis de estas relaciones se presenta
en el Cuadro 11.

Las acciones del Plan, de acuerdo con los proyectos, tienen áreas de influencia
regionales, zonales y locales, con un impacto, en términos generales, positivo, muy
importante, tanto por los temas que se atiende como por el contenido de los mismos. Se
pueden destacar los grandes impactos positivos que recibirán la tierra, agua, flora, fauna,
áreas de interés humano y de recreación, los servicios culturales y las funciones de
conservación de los ecosistemas, ratificando la orientación del Plan hacia un
mejoramiento en la gestión ambiental en la región. Sin embargo, también se deben
señalar algunos puntos que requieren de mayor cuidado en la etapa de ejecución.
El Proyecto de Insumos Agropecuarios puede presentar impactos negativos de
significativos a importantes, principalmente en sus componentes de utilización de
minerales (fertilizantes fosfatados y cal agrícola), especialmente en los suelos y cursos de
agua de sus áreas de influencia. En el diseño se hacen recomendaciones importantes
sobre la forma de realizar la explotación, para que se minimicen los impactos negativos,
cuyo cumplimiento debe ser vigilado estrechamente en la explotación de las canteras. De
todas maneras, se debe señalar que los posibles impactos son de tipo local y en áreas
bastante reducidas, que tienen la contrapartida de las grandes extensiones que se
beneficiarán de la aplicación de los correctivos y fertilizantes elaborados.

En el caso del Proyecto de Procesamiento y Comercialización, se ha previsto la


instalación de varias plantas agroindustriales que permitirán estimular el establecimiento
de cultivos adaptados a la aptitud de los suelos regionales, mejorando su posibilidad de
comercialización y competencia en los mercados de cada país. Estas plantas podrían
generar algún grado de contaminación del aire y los cursos de agua de su localidad, lo
cual puede evitarse en la etapa de construcción, con la instalación de los sistemas
adecuados para procesar el agua industrial y los gases residuales. Se debe indicar que no
son industrias grandes ni generadoras de residuos peligrosos, pudiendo controlarse
fácilmente sus contaminantes.

En otros proyectos se pueden dar algunos impactos negativos locales si no se mantiene


el adecuado control en su ejecución, como en el caso de piscicultura (evacuación de agua
contaminada), transporte fluvial (contaminación menor de cursos de agua), control de
vectores de enfermedades transmisibles (pérdida de fauna nativa) y aprovechamiento de
recursos naturales de territorios indígenas (pérdida de interés científico y turístico). En
general, los proyectos del sector productivo significarán una mayor actividad económica y
de transporte, que tendrán mayores demandas yexigencias en los servicios creados por el
hombre, que deberán ampliarse y adaptarse a las nuevas condiciones que se generen.

Cuadro 12 - RELACION ENTRE EL PLAN DE ORDENAMIENTO Y MANEJO Y LAS


AMENAZAS NATURALES

CONFLICTOS: MI = Muy importante; I = Importante; s = Significativo; (MI) = Negativo muy


importante; (I) Negativo importante; (s) Negativo significativo.

En lo relacionado con el establecimiento de los módulos de producción, se debe realizar


un seguimiento continuo, para que los beneficiarios mantengan las características y
propósitos del diseño original, principalmente lo relacionado con las rotaciones, la
diversidad de especies, el uso de materia orgánica y otras técnicas desarrolladas en la
región para el mantenimiento de la fertilidad de los suelos y de la capacidad productiva del
modelo. Si alguna especie tiene un mejor rendimiento económico en un año determinado,
se corre el riesgo de que los campesinos participantes (y sus vecinos) quieran ampliar las
extensiones de ese cultivo, acercándose más a los monocultivos actuales. Desviaciones
similares pueden ocurrir con otras de las técnicas propuestas.

Por otro lado, al ejecutar en mayor escala las técnicas mejorados, se corre el riesgo de
que no se registren los mismos resultados que al nivel de investigación. En este caso se
ha considerado el monitoreo y evaluación permanente de los resultados para realizar
sobre la marcha, en conjunto con el proyecto de Investigación Ambiental, las
adecuaciones y modificaciones que se requiera, manteniendo en su mejor nivel los
resultados para los campesinos.

Finalmente, si bien el Programa de Medio Ambiente y sus proyectos son los que mayores
efectos positivos pueden tener en el medio ambiente regional, también son los que
requieren de una mayor modificación de las políticas y prioridades nacionales anteriores,
para poder alcanzar los resultados previstos.

c) Mitigación de Amenazas Naturales

Dentro de los estudios de base para el Plan, se realizó la evaluación de las principales
amenazas naturales que se encuentran afectando a la región, permitiendo que sean
consideradas en la etapa de diseño de los proyectos. Dentro de lo posible se procuró
evitar las áreas que presentan mayores riesgos para las propuestas nuevas. En los casos
que se debió prestar atención en las zonas actualmente ocupadas, se incorporó en el
diseño de los proyectos las medidas de mitigación requeridas.

Si se superponen los mapas de áreas ocupadas (actuación de los proyectos productivos)


y amenazas naturales, se puede apreciar que existen dos zonas que requieren de mayor
vigilancia y cuidado en la etapa de ejecución: los valles de Sibundoy y Quijos. Ambos se
encuentran sujetos a elevada amenaza sísmica y de erupciones volcánicas; adicional
mente, el valle del Quijos se encuentra bajo amenazas de deslizamientos y elevadas
precipitaciones.

En estos valles se ha propuesto el mejoramiento de la explotación lechera, con la


introducción de técnicas mejoradas de manejo, con poca necesidad de infraestructura
predial y ninguna extrapredial, utilizando en el diseño las normas técnicas de mitigación y
las recomendaciones que surgen del análisis de las amenazas. Por otro lado, en el
Programa de Capacitación y Organización Comunitaria se contempla una etapa de
capacitación de los técnicos y extensionistas de la región, en que se les proporcionará los
conocimientos de medio ambiente y mitigación de amenazas naturales que requieren para
desarrollar en mejor forma su trabajo.

En las demás zonas de actuación de los proyectos productivos, las amenazas son de
menor magnitud o de tipo puntual, que se pueden controlar con modificaciones de diseño
o ubicación de los proyectos que, como ya se indicó, consideran las variaciones
socioeconómicas y de ubicación en relación a las unidades ambientales.

En cuanto a las áreas no ocupadas, los proyectos que se incluyen en el Plan de


Ordenamiento y Manejo son de conservación y mantenimiento de los ecosistemas, que
requieren de pocas modificaciones al medio natural. En todo caso, las instalaciones e
infraestructura propuestas han tomado en cuenta para su ubicación y diseño la evaluación
de amenazas ya señalada.

En el Cuadro 12 se resume la interrelación existente entre los programas y proyectos que


conforman el Plan y las amenazas naturales presentes en su área de influencia. Se puede
apreciar que el Plan contribuye de manera importante, principalmente a través de sus
acciones de conservación, manejo ambiental, organización, capacitación, educación e
investigación, a reducir la vulnerabilidad de la región a causa de las amenazas naturales.
Por otro lado, también se debeseñalar que los proyectos que requieren de construcción
de infraestructura física son los que podrían ser afectados, aunque en pequeña escala y
de manera puntual, gracias a que su ubicación y diseño se realizaron tomando en
consideración la identificación de amenazas realizada previamente.

Cuadro 13 - CONTRIBUCION DEL PLAN A SATISFACER LAS NECESIDADES


HUMANAS Y REQUERIMIENTOS DE LA SOCIEDAD

R = regional; z = zonal; l = local;

IMPACTO: MI = Positivo muy importante; I = Positivo importante; s = Positivo significativo;


(MI)=Negativo muy importante; (I)=Negativo importante; (s)=Negativo Significativo.

6.1.2 Evaluación Social

La estrategia de intervención social del Plan se orienta hacia la satisfacción de las


necesidades prioritarias de los grupos más vulnerables de la región, promoviendo el
incremento de la autogestión comunitaria con respeto a sus diferencias culturales, de
forma que les permita alcanzar un mayor grado de participación en la toma de decisiones
en sus respectivas áreas.

El impacto del Plan se analizará en función de la atención que se brinde a los grupos más
vulnerables, así como a los diferentes niveles de la sociedad, en función del cumplimiento
de las políticas sociales y de su impacto en los indicadores del desarrollo regional.

a) Atención a los Grupos Humanos más Vulnerables

Las propuestas de acción desarrolladas dentro del Plan comprenden el mejoramiento de


los sistemas productivos y los ingresos de los campesinos e indígenas de la región, no
solamente a corto plazo, sino también con una visión de sostenibilidad y de respeto de los
derechos de las generaciones futuras. Se atenderá de manera directa a 2.000
comunidades y 20.000 familias rurales con las propuestas de capacitación y organización
comunitaria, 4.800 familias con los módulos de producción agropecuarios y nuevas
alternativas productivas, 1.800 familias indígenas con las propuestas de manejo de
recursos naturales, 3.900 familias y 69 organizaciones con proyectos agroindustriales, 80
organizaciones femeninas con proyectos específicos para la mujer y 400 comunidades
con proyectos pilotos forestales y agroforestales.

También se brindará una importante atención a las necesidades sociales básicas de la


población, con una cobertura del 85% de la población rural al año 2000 (64.000 familias)
con la ampliación de la atención primaria de salud, saneamiento ambiental y capacitación
y educación para la salud. Se titulará las tierras a 5.000 familias, se brindará educación
ambiental a 90.000 personas de las áreas rural y urbana, se capacitará en técnicas
ambientales a 2.500 técnicos de las principales entidades regionales y se apoyará a 100
comunidades indígenas en sus esfuerzos por recuperar y mantener sus valores culturales,
permitiendo, además, el aprovechamiento de sus conocimientos para el desarrollo
sostenible de la Amazonía.

Con este paquete integrado de acciones se dará un sustancial impulso al mejoramiento


social y económico de los grupos más vulnerables de la región, como son los campesinos,
colonos, indígenas, mujeres, micro-empresarios, docentes y, a través de todos ellos, al de
los niños, familias y organizaciones comunitarias.

b) Grado de Satisfacción de las Necesidades Humanas y de la Sociedad

El grado de bienestar de las personas y su calidad de vida pueden ser determinados


evaluando las condiciones objetivas que satisfacen las necesidades humanas y de la
sociedad, es decir el grado de obtención de los satisfactores deseados. En el Cuadro 13
se resume el grado en que cada uno de los programas y proyectos del Plan de
Ordenamiento y Manejo contribuya hacia la obtención de estos satisfactores.

En términos generales se puede decir que las acciones para apoyar la capacitación y
organización comunitaria dentro de los grupos más vulnerables de la región, con el
propósito de mejorar su capacidad de autogestión, son las que mayor impacto y mayor
duración tendrán dentro de la situación social regional. El diseño del proceso, que permite
que las propias comunidades analicen su situación, identifiquen las posibles soluciones y
realicen los necesarios esfuerzos para instrumentar su ejecución, permitirá tener, en
primer lugar, una capacitación directamente relacionada a las necesidades del desarrollo
comunitario y, en segundo lugar, una apropiación del conocimiento e internalización de los
procesos, que permitirá que los efectos deseados sean más perdurables, sin que se
pierdan una vez que se concluyan las acciones del Plan y su efecto catalizador directo en
la región.

Cuadro 14 - PRINCIPALES CONFLICTOS ENTRE EL PSP Y OTRAS ACTIVIDADES


DE DESARROLLO EN LA REGION

R= regional; z = zonal; 1 = local.

IMPACTO: MI = Positivo muy importante; I = Positivo importante; s = Positivo significativo;


(MI) = Negativo muy importante; (I) = Negativo importante; (s) = Negativo significativo.

Una vez que la sociedad regional y sus organizaciones de base tomen conciencia de su
capacidad para resolver sus problemas y generar sus propias alternativas sociales y
productivas, la dinámica del desarrollo sufrirá un cambio sustancial, con mayor capacidad
para hacer respetar sus derechos y mayor captación interna de los beneficios que
generan las actividades productivas en la zona. Estas acciones tendrán mayor sustento al
apoyarse en el proceso de descentralización y de consolidación de los organismos de
desarrollo, protección ambiental e investigación a nivel regional.

c) Impacto en las Variables Sociales Regionales

Analizando los posibles impactos del Plan en la sociedad regional en términos


demográficos, económicos, culturales y ambientales, se puede apreciar una voluntad de
mejoramiento de los principales indicadores.

A nivel demográfico los proyectos apuntan hacia la consolidación de la ocupación actual,


sin estimular la nueva inmigración. Al brindar condiciones para la producción sostenible,
asegurar la tenencia de la tierra y mejorar los servicios sociales, se está asegurando que
la población rural actual disponga de los adecuados incentivos para radicarse
permanentemente en la región. Además, a través de las acciones de organización y
capacitación se va a desarrollar el sentido de pertenencia hacia su sitio de residencia y la
conciencia del ser amazónico, cuya carencia actual está afectando de manera importante
las actitudes hacia el desarrollo, principalmente de los colonos.

El mejoramiento de la producción y la productividad, la diversifícación de las fuentes de


ingresos, la disminución de las pérdidas por las amenazas naturales y la consolidación de
los servicios de apoyo a la producción están claramente orientados al mejoramiento de los
ingresos de las familias rurales y de la región. Por otro lado, el establecimiento de
modelos productivos sostenibles (agropecuarios, forestales y aprovechamiento de otros
recursos del bosque) están contribuyendo a establecer en la región una base productiva
con uso racional de los recursos naturales renovables, preparándola para un futuro
próximo en que declinará la explotación de hidrocarburos y disminuirá su importancia en
la economía regional.

Los esfuerzos de capacitación y organización comunitaria están orientados, en el caso de


los colonos, a la creación de un sentimiento de pertenencia y de ser amazónico, con un
realce de sus valores culturales y mejoramiento de su autoestima, tanto a nivel de
individuo como de familias y organizaciones. En las comunidades y grupos indígenas, se
apoyará sus esfuerzos para recuperar y mantener sus principales expresiones culturales,
como organización, lenguaje, música, tradiciones, medicina, uso de la biodiversidad,
alimentación y tecnologías productivas, tanto para fortalecer su autoestima como para
facilitar su sobrevivencia como individuos, familias y etnias.

En términos ambientales, la orientación del Plan es hacia un manejo sostenible de los


recursos naturales de la región, buscando consolidar una estrategia de conservación y
desarrollo, que permita disminuir los conflictos que esta dualidad produce. Por otro lado,
una acción oportuna en el control de la explotación desordenada evitará los conflictos
sociales que se pueden producir por la pérdida de capacidad productiva a nivel predial,
como nuevas migraciones, delincuencia, crecimiento de barrios marginales en las
ciudades, etc. Esto es particularmente importante ante las perspectivas de paulatina pero
permanente reducción de la producción de petróleo a nivel regional.

d) Determinación de Conflictos con Otras Actividades de Desarrollo

Al considerarse en el Plan de Ordenamiento y Manejo una modificación del rumbo de la


evolución regional, debe preverse los conflictos que se pueden producir con otros
sectores, para tomar con la debida anticipación las medidas y precauciones que permitan
avanzar normalmente a las acciones diseñadas. En el Cuadro 14 se resumen los
probables conflictos que se pueden presentar.

Los sectores con los que mayor posibilidad de conflicto existe son cultivos ilegales,
desarrollo petrolero, colonización agropecuaria, explotación forestal, caza, pesca y
desarrollo vial. Respecto a los cultivos ilegales, las acciones de organización,
capacitación, protección de territorios y aprovechamiento racional de los recursos
naturales están en clara oposición a los métodos de producción utilizados para esos
cultivos, que requieren de aislamiento, poca interferencia con sus mecanismos de
comercialización y control de las comunidades, y desconocimiemto de alternativas de
producción rentables. La organización, capacitación y concientización de las comunidades
será el mejor método para minimizar los conflictos que se puedan presentar.
La explotación petrolera se ha realizado a nivel regional como un enclave y con poca
coordinación con otros sectores productivos, principalmente por la desigualdad de los
poderes de negociación. Al fortalecer a los sectores rurales, organizar a los campesinos y
apoyar el proceso de descentralización administrativa, las acciones del Plan posibilitarán
que otros sectores productivos y poblacionales participen en el proceso de toma de
decisiones conjuntamente con el sector petrolero. Se debe considerar desde las primeras
etapas de ejecución los necesarios mecanismos de concertación a nivel de entidades
estatales y privadas, para que el diálogo y la coordinación interinstitucional sea la norma
de procedimiento, sin tener que llegar al enfrentamiento.

La colonización agropecuaria y la explotación forestal han marchado conjuntamente con


el desarrollo vial de la región. Con el fortalecimiento de la protección de los parques,
zonas de amortiguamiento, territorios indígenas y otras zonas no ocupadas, existirán
mayores restricciones para este tipo de actividades. Los intereses políticos y económicos
que se encuentran atrás de la colonización deben ser informados y convencidos de la
conveniencia de la conservación de la naturaleza en la zona fronteriza, de forma que se
pueda tener el suficiente control de los nuevos proyectos que se propongan, y se respeten
los lineamientos y objetivos del desarrollo sostenible.

Con respecto a la caza y la pesca, los métodos que han venido utilizando los pobladores
de la región son destructivos e ineficientes, muchas veces motivados por la necesidad de
sobrevivencia y alimentación familiar. A través de los proyectos productivos y de
piscicultura se ofrecerá formas más económicas de abastecerse de proteína animal, que
servirán para reducir la necesidad de caza y pesca. Igualmente, a través de los
programas de educación y capacitación se brindará a nivel regional la información
necesaria para apoyar en los procesos de protección de la biodiversidad regional.
Finalmente, con el ordenamiento pesquero y el reforzamiento de las acciones de
protección en los bosques remanentes y parques también se incidirá en el control de la
caza y pesca furtiva, con fines comerciales o deportivos no autorizados.

6.1.3 Evaluación Económica y Financiera

Para reflejar el impacto económico y financiero de las acciones del Plan en la región se
utilizarán indicadores como la variación en las curvas de producción, los conflictos con los
sectores económicos activos, los índices de rentabilidad financiera, el análisis de
sensibilidad y los cambios previstos en los indicadores económicos y productivos.

a) Variación en las Curvas de Producción Predial y Regional

En los modelos actuales de producción a nivel predial, se utiliza en general una secuencia
deforestación-agricultura-pastos-barbecho, manteniendo las superficies agrícolas
relativamente constantes, incrementando los pastos y áreas improductivas, y con una
constante reducción de los bosques prediales. Aunque existen variaciones, especialmente
cuando se han introducido cultivos permanentes, este modelo conduce a un deterioro
progresivo de la productividad familiar, con ingresos constantes o decrecientes utilizando
cada vez mayor superficie en explotación.

A nivel regional este fenómeno se refleja en incremento permanente de la superficie


deforestada, reducción de la productividad por área total deforestada, mantenimiento de
rendimientos de algunos cultivos a costa de utilización periódica de nuevas tierras y
aumento de la producción regional solamente por incrementos cada vez mayores de las
nuevas áreas de colonización.

La introducción de módulos de producción por áreas de potencial homogéneo, con


tecnologías adaptadas a la fragilidad de los recursos naturales amazónicos y con los
adecuados instrumentos de apoyo, se orienta a detener o reducir sustancialmente las
tasas de deforestación predial en las unidades productivas atendidas y conseguir un
sustancial incremento de la producción y productividad a nivel predial.

Con el Plan se intervendrá directamente en 183.000 ha, correspondientes a 4.800


unidades productivas. Para mantener la sostenibilidad pero a la vez conseguir rentabilidad
en estas unidades, se debe modificar de manera importante la composición interna de las
fincas, dando mayor importancia a los cultivos perennes, salvo el caso del café que, por
condiciones de mercado y precio internacional, se reducirá. Con estas propuestas, en
doce años de intervención los bosques prediales prácticamente se mantendrán iguales,
con una reducción de apenas 2%, con incrementos en los ingresos de la explotación
familiar en un rango que va desde U$ 1.200 a U$3.650 anuales, y entre 46% y 310% en
términos porcentuales.

A nivel regional el Plan atenderá directamente, en los primeros seis años, a cerca de 12%
de las unidades productivas de colonos y 25% de los indígenas, esperándose un
importante efecto multiplicador regional, tanto por los proyectos de asistencia técnica y
capacitación productiva, como por el Programa de Capacitación y Organización
Comunitaria. Entonces, los efectos esperados a nivel predial también se reflejarán a nivel
regional, aunque en menor proporción. Se notará una reducción en las tasas generales de
deforestación, con incrementos significativos en la producción y productividad de las
áreas dedicadas a la agricultura, pastos y bosques, así como en relación con las áreas
deforestadas totales.

b) Rentabilidad Financiera y Económica

La mayor parte de las acciones del Plan se orientan a la conservación y uso racional de
los recursos de la región. Desafortunadamente no siempre se puede asignar un valor
financiero a los beneficios que esas actividades generan. La protección de los cauces de
los ríos, la disminución de la erosión, la protección del bosque nativo, las especies
endémicas y la biodiversidad que alberga, la educación e investigación ambientales, el
mejoramiento de las condiciones de salud y salubridad, la consolidación de las
organizaciones campesinas, etc., son beneficios claros en la ejecución del Plan, pero a
los cuales no se los puede valorar en los términos usuales.

La rentabilidad financiera del Plan se ha calculado en 4,6%, con mayor sensibilidad a las
variaciones en los ingresos que en las inversiones y los costos operativos. Si los ingresos
reales del Plan solamente fueran 15% mayores, por cuantificación de los beneficios
ambientales no valorados, la rentabilidad del Plan subiría a 13,1%.

El Plan orienta su actuación a favorecer a los grupos humanos más vulnerables de su


área, así como a una de las regiones más desatendidas a nivel de los dos países. Los
efectos sociales y redistributivos de las acciones del Plan están generando otra fuente de
beneficios económicos, que hará que las tasas de rentabilidad económica y social de los
proyectos sean aún mayores a lo señalado.
El Programa de Ordenamiento de la Producción, que apoya a los sectores productivos,
registra una rentabilidad de 27,3% a nivel global. A nivel predial, las rentabilidades de los
módulos propuestos fluctúan entre 20% y >50%. Los ingresos familiares netos totales
varían entre US$3.200 y US$6.600 anuales. Estos ingresos se incrementarán por la
participación en las microempresas de autogestión comunitaria, que les permitirá captar
un mayor valor agregado a nivel local y los márgenes de comercialización que ahora van
a los intermediarios.

c) Impacto en Indicadores Regionales

Con la utilización de tecnologías mejoradas se conseguirá que se incrementen los


rendimientos de los cultivos que actualmente se utilizan en la zona, a corto y mediano
plazo. Con la introducción de nuevas alternativas, de alto rendimiento, se mejorarán los
ingresos y la eficiencia de las unidades productivas en forma general, lo cual se reflejará
en los ingresos y la rentabilidad. Con la aplicación de los nuevos modelos, los ingresos a
nivel de finca se incrementarán sustancialmente, dependiendo del tamaño de los
módulos, el tipo de suelos y las alternativas que se puede aplicar, en un rango que va
desde US$1.200 a US$3.650 anuales por familia. En términos porcentuales, los ingresos
se incrementarán entre 46% y 310%, mejorando en forma notoria la rentabilidad de las
explotaciones.

En el Programa de Ordenamiento de la Producción, que es el que mayor impacto tiene


sobre el empleo regional, se generarán 4.350 empleos: 3.375 en los módulos de
producción y 975 en los otros subproyectos de procesamiento, comercialización,
introducción de especies, piscicultura e insumos agropecuarios. En los otros proyectos
también existe una importante generación de empleos, especialmente para profesionales
y técnicos: Medio Ambiente 100, Apoyo a Comunidades Indígenas 50, Salud y
Saneamiento 280. En total se creará un total de 4.780 empleos.

6.1.4 Cumplimiento de las Políticas de Desarrollo

La ejecución del Plan de Ordenamiento y Manejo contribuirá de manera sustancial al


cumplimiento de los objetivos y metas de desarrollo planteados por los dos países para la
Amazonía y para el contexto global nacional. Las acciones propuestas tienden a
conseguir el desarrollo sostenible en su área de influencia, con un adecuado desarrollo
económico, conservación del medio ambiente, equidad social y presencia en las regiones
fronterizas.

La actuación integral del Plan permite que sus acciones se apoyen y refuercen entre sí,
consiguiendo un mayor efecto que si se ejecutaran por separado. Al atacar
simultáneamente los principales problemas ambientales, sociales y económicos,
aprovechando a la vez las potencialidades identificadas, se permite dar a la propuesta la
solidez y viabilidad que requiere.

Los organismos no gubernamentales en los dos países están reclamando una pronta
atención al problema ambiental de la Amazonía, mientras que los pobladores de la misma
reclaman atención a sus necesidades sentidas, con mayores asignaciones de recursos
para resolverlas. El Plan es una forma de instrumentar soluciones viables, de canalizar
recursos hacia los sectores prioritarios y de atender en mejor forma las demandas de los
sectores más necesitados de la región.
Como se ha podido apreciar en las secciones anteriores, el impacto del Plan en el
desarrollo sostenible de la región será sustancial, con importantes efectos positivos en
términos ambientales, sociales y económicos. Asimismo se ha procurado minimizar los
conflictos entre conservación y desarrollo y entre los diferentes actores sociales y
económicos de la región, incrementando las posibilidades de ejecución de las acciones
propuestas.

Con estas acciones se apoyará claramente la efectiva materialización de las políticas


nacionales y regionales de desarrollo planteadas por los dos países, en los aspectos
ambiental, social y económico. Se avanza en la protección de los recursos naturales y el
medio ambiente, proponiendo una metodología para un desarrollo sostenible con una
mayor participación de la comunidad en la toma de decisiones y atendiendo las
necesidades sociales más urgentes, principalmente de los grupos más vulnerables. Por
otro lado, se plantean alternativas para mejorar la eficiencia de la producción e
incrementar la productividad regional y familiar, con adecuada utilización de las ventajas
comparativas, permitiendo al área fronteriza mejorar su competitividad en el proceso de
apertura económica. Finalmente, el conjunto de acciones se orienta a mejorar la calidad
de vida de la población, creando vínculos de pertenencia regionales y apropiación del
conocimiento, a fin de desarrollar el compromiso de los actores sociales hacia el
desarrollo sostenible
MEDIO AMBIENTE, DESARROLLO
ECONÓMICO Y ÉTICA. ANALISIS
CONTRADICTORIOS
(ENVIRONMENT, ECONOMIC AND ETHICAL
DEVELOPMENT. CONTRADICTORY
ANALYSIS)
RECIBIDO: 09/05/2013 REVISADO: 17/04/2015 ACEPTADO: 25/11/2016

Boscán, Marjorie
Universidad Privada Dr. Rafael Belloso Chacín, URBE, Venezuela
boscan20@gmail.com

Terán, Ana
Universidad Privada Dr. Rafael Belloso Chacín, URBE, Venezuela
anateresateran@hotmail.com

RESUMEN

El siguiente ensayo presenta una recopilación de varias vertientes relacionadas con el medio
ambiente, siendo este un tema de gran relevancia debido al compromiso que se tiene como seres
humanos de no seguir contaminándolo, pues, de él depende nuestra supervivencia. El objetivo es
describir como las personas o los individuos dentro de la sociedad no toman conciencia y no
cuidan y preservan el medio ambiente. Los autores más relevantes son Meier, G y Stiglitz, Soto y
Cárdenas, entre otros. Por otro lado, el presente artículo se enfoca a través de un análisis
metodológico descriptivo-documental debido a que se realizan consideraciones relacionadas con el
medio ambiente. Cabe destacar que como nación se debe buscar el desarrollo, pero debe ser un
desarrollo que sea capaz de no comprometer la capacidad y la satisfacción de necesidades de las
futuras generaciones. Por lo tanto, a continuación se esbozarán temas sobre la integración que
debe prevalecer entre el medio ambiente y hombre para que se tomen decisiones acertadas en
materia ambiental y de una forma ética se alcance el desarrollo económico, que es la finalidad de
toda estructura económica, llámese país, nación, empresas industrias u otras. Entonces, se debe
educar y concienciar sobre la importancia que reviste la preservación y mantenimiento del entorno
que nos rodea, establecer las prioridades ambientales a través del trabajo mancomunado,
coordinado y participativo de todos los sectores de la sociedad, con diversidad de acción
conllevará a un desarrollo ambientalmente sustentable como legado a la generación del futuro y
finalmente el despertar de una conciencia ambientalista colectiva atacaría los problemas del medio
ambiente y en este sentido la formación ambiental en el contexto económico.

Palabras Clave: ambiente, economía y ética.

ABSTRACT

The following essay presents a compilation of various aspects related to the environment, this being
a very important issue because of the commitment we have as human beings not to continue
polluting, because our survival depends on it. The aim is to describe how people or individuals
within society are not aware and do not care and preserve the environment. The most important
authors are Meier and Stiglitz, Soto and Cárdenas, among others. On the other hand this article
focuses through a descriptive-documentary methodological analysis because considerations related
to the environment are made. It should be noted that as a nation must seek development, but
should be a development that is capable of not compromising the ability and the satisfaction of
needs of future generations. So then issues of integration that should prevail between the
environment and man to make sound decisions on environmental issues takes place and ethically
economic development, which is the aim of all economic structure is reached outlining, call country,
nation, companies or other industries. Then it should educate and raise awareness of the
importance of preservation and maintenance of the environment around us, establish environmental
priorities, through joint efforts, coordinated and participatory of all sectors of society with diversity of
action will lead to a development environmentally sustainable as a legacy to the future generation
and finally the awakening of a collective environmental awareness attack environmental problems
and in this sense environmental training in the economic context.

Keywords: environment, economy and ethics.

INTRODUCCIÓN

La crisis ambiental que actualmente se ha venido manifestando a nivel global tiene su origen en el
movimiento de la vida misma. La naturaleza ha sido considerada en todos los tiempos como la
proveedora inagotable de recursos naturales y la receptora invulnerable de desechos y emisiones.
Ese concepto equivocado es el motivo principal por el cual la problemática ecológica no había
formado parte de la discusión económica y estaba marginada dentro del área de la política
ambiental.

En el curso de los últimos años, a través de la búsqueda del mejoramiento integral humano, los
países del mundo se han reunido y han arribado a acuerdos sobre las maneras de encarar muchos
de estos asuntos y mientras cada uno de estos acuerdos es un componente indispensable de la
creciente agenda del desarrollo sostenible, ha sido nuestra tendencia tratarlos en gran medida de
forma aislada.

Es necesario acotar que con demasiada frecuencia, nuestra implementación carece de


coordinación y en ocasiones hasta como si se tratara de cosas sin conexión, con la consecuencia
de arribar a resultados insatisfactorios, quedando lejos del progreso previsto en dichos acuerdos.
En ese sentido, hay que promover la construcción de una racionalidad ambiental fundada en una
nueva economía moral, ecológica y cultural como condición para establecer un nuevo modo de
producción que haga viables estilos de vida ecológicamente sostenibles y socialmente justos.

MEDIO AMBIENTE

Desde todos los tiempos, el medio ambiente entendido según Herrera Campos (2009) es el
conjunto de circunstancias físicas, culturales, económicas y sociales que rodean a las personas
ofreciéndoles un amplio abanico de posibilidades para desarrollar su vida.

Por otro lado, Publicaciones Vértice S. L. (2010) define al ambiente como todo lo que implica ser
capaz de identificar aquellos elementos del entorno con los que se interactúa, y en los que el ser
humano puede ejercer un impacto positivo o negativo.

En ese sentido, cabe destacar que el hombre por formar parte del ambiente se ha dedicado a dar
respuesta a todas las preguntas que la naturaleza, es decir, su entorno le presenta para
transformarlo y mejorarlo, usando para ello el desarrollo de su conducta innovadora que le han
permitido construir ambientes o ecosistemas artificiales que a la vez han provocado el aumento o
crecimiento poblacional, produciendo con ello efectos ambientales tales como: segregación,
hacinamiento, incapacidad de los servicios de vivienda, problemas de salud pública, destrucción de
la capa de ozono, contaminación del agua y el aire, entre otros.

El despertar de una conciencia ambientalista colectiva atacaría los problemas del medio ambiente
y en este sentido la formación ambiental en el contexto económico debe tomar cada vez mayor
importancia, tratándose de colectivos que deben desarrollar como cultura organizacional la
pertinencia y necesidad de preservar el ambiente, mediante esta acción se logrará: Incidir en la
conciencia nacional sobre la problemática ambiental y sus posibilidades de solución, por ello como
un paliativo se han elaborado una serie de normativas que buscan frenar la problemática existente.

NORMATIVA LEGAL

En Venezuela, el inicio primordial del derecho ambiental estaba dedicada en forma habitual, en la
Constitución Nacional del año 1961, y hoy en día, en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela establecida (Asamblea Nacional Constituyente, 1999) se amplificó en una parte los
Derechos Ambientales, reglamentando el compromiso del Estado de preservar el ambiente y la
necesidad de ampliar una estrategia de Ordenación del Territorio.

En ese sentido, se destaca la importancia que tiene el ambiente sobre el desarrollo armónico de un
país para alcanzar mejores niveles de vida, convirtiéndose entonces como parte de los derechos
humanos. Los Derechos Humanos son inherentes a la persona y se proclaman sagrados,
inalienables, imprescriptibles, fuera del alcance de cualquier poder político. La Declaración
Universal de Derechos Humanos es su resolución 217 A (III) adoptada por unanimidad el 10
diciembre de 1948 por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El
objetivo de esta declaración, compuesta por 30 artículos, es promover y potenciar el respeto por
los Derechos Humanos y las libertades fundamentales.

De esta forma, que en ese contenido progresivo de los derechos humanos surge el derecho al
ambiente en el programación jurídica interna, sin que coexista precisamente una indicación
expresa y formal en el derecho positivo, en comprensión de la forma de derecho innato al individuo
tal y como se subscribió en la Declaración de Estocolmo en 1971, en la cual se constituyó como
primer punto 1: "El hombre tiene derecho fundamental a la libertad, a la igualdad y al disfrute de
condiciones de vida adecuadas en un medio de calidad tal que le permita llevar una vida digna y
gozar de bienestar..."

Por otro lado, está la Ley Orgánica del Ambiente (Asamblea Nacional, 2006) la cual se necesita
que se ponga en práctica y se le dé seguimiento y monitoreo de los preceptos constitucionales, la
cual se desprende la misma y que atiende el tema relacionado con el medio ambiente, es decir, se
deben fortalecer la operatividad de las leyes existentes que velan por el cuidado y la atención del
medio ambiente.

Entre los artículos de esta Ley Orgánica del Ambiente (Asamblea Nacional, 2006) están los
siguientes:

Artículo 77. El Estado, a través de la Autoridad Nacional Ambiental, ejercerá el control ambiental
sobre las actividades y sus efectos capaces de degradar el ambiente, sin menoscabo de las
competencias de los estados, municipios, pueblos y comunidades indígenas, en aquellas materias
ambientales expresamente asignadas por la Constitución y las leyes, garantizando así la gestión
del ambiente y el desarrollo sustentable. Este artículo está relacionado con el control ambiental.

Artículo 78. El Estado implementará planes, mecanismos e instrumentos de control preventivo


para evitar ilícitos ambientales. Este se relaciona con el control preventivo.
Artículo 79. El Estado, a través de sus organismos competentes, debe desarrollar y promover
programas, planes y proyectos de medición y control de la calidad ambiental. Este artículo se
relaciona o está en concordancia con el desarrollo de programas.

Artículo 80. Se consideran actividades capaces de degradar el ambiente:

1. Las que directa o indirectamente contaminen o deterioren la atmósfera, agua, fondos marinos,
suelo y subsuelo o incidan desfavorablemente sobre las comunidades biológicas, vegetales y
animales.

2. Las que aceleren los procesos erosivos y/o incentiven la generación de movimientos morfo-
dinámicos, tales como derrumbes, movimientos de tierra, cárcavas, entre otros.

3. Las que produzcan alteraciones nocivas del flujo natural de las aguas.

4. Las que generen sedimentación en los cursos y depósitos de agua.

5. Las que alteren las dinámicas físicas, químicas y biológicas de los cuerpos de agua

6. Las que afecten los equilibrios de los humedales.

7. Las vinculadas con la generación, almacenamiento, transporte, disposición temporal o final,


tratamiento, importación y exportación de sustancias, materiales y desechos peligrosos, radiactivos
y sólidos.

8. Las relacionadas con la introducción y utilización de productos o sustancias no biodegradables.

9. Las que produzcan ruidos, vibraciones y olores molestos o nocivos.

10. Las que contribuyan con la destrucción de la capa de ozono.

11. Las que modifiquen el clima.

12. Las que produzcan radiaciones fonizantes, energía térmica, energía lumínica o campos
electromagnéticos.

13. Las que propendan a la acumulación de residuos y desechos sólidos.

14. Las que produzcan eutrofización de lagos, lagunas y embalses.

15. La introducción de especies exóticas.

16. La liberación de organismos vivos modificados genéticamente, derivados y productos que lo


contengan.

17. Las que alteren las tramas tróficas, flujos de materia y energía de las comunidades animales y
vegetales.

18. Las que afecten la sobrevivencia de especies amenazadas, vulnerables o en peligro de


extinción.

19. Las que alteren y generen cambios negativos en los ecosistemas de especial importancia.
20. Cualesquiera otras que puedan dañar el ambiente o incidir negativamente sobre las
comunidades biológicas, la salud humana y el bienestar colectivo.

Este último artículo de este capítulo VII de Control Ambiental, se relaciona con las actividades
capaces de degradar al ambiente y por tanto es fundamental para la consideración de este marco
legal que describe los alcances de la parte ambiental, que forma parte de ese análisis global.

CONSTITUCIÓN DEL AÑO 1999

La Constitución del 1999 no forma sino registra el derecho humano al ambiente dentro del Estado
Democrático y Social de Derecho y de Justicia, asumiendo los valores de respaldo social e
identidad de circunstancias, como un fin de acción del Estado; para ello se pronostica la toma de
medidas, entre otros disposiciones, de tipo económico, educación ambiental, infraestructura, de
dirección y transmisión de tecnología que accedan restituir las condiciones que degraden al
ambiente que están en el país.

En síntesis, los derechos ambientales se comparan con los derechos humanos esenciales como el
derecho a la vida, a la educación, a la salud, entre otros. De este modo por vez primera en la
historia constitucional del país, se constituye un Capítulo "De los Derechos Ambientales", en el cual
se encuentran los principios primordiales para la formulación y ejecución de la nueva política
ambiental del país; estos principios se localizan contenidos de forma expresa en los artículos 127,
128 y 129, adicionándose con la parte del articulado de la Carta Magna.

Artículo 127: Es un derecho y un deber de cada generación proteger y mantener el ambiente en


beneficio de sí misma y del mundo futuro. Toda persona tiene derecho individual y colectivamente
a disfrutar de una vida y un ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado.

Artículo 128: El Estado desarrollará una política de ordenación del territorio atendiendo a las
realidades ecológicas, geográficas, poblacionales, sociales, culturales, económicas, políticas, de
acuerdo con las premisas del desarrollo sustentable, que incluya la información, consulta y
participación ciudadana.

Artículo 129: Todas las actividades susceptibles de generar daños a los ecosistemas deben ser
previamente acompañadas de estudios de impacto ambiental y sociocultural. El Estado impedirá la
entrada al país de desechos tóxicos y peligrosos, así como la fabricación y uso de armas
nucleares, químicas y biológicas.

La Constitución del 1999 suscribe explícitamente que la República Bolivariana de Venezuela es un


Estado Federal descentralizado, establecido en los principios de cooperación, solidaridad,
corresponsabilidad, concurrencia e integridad territorial, y su desempeño se centra esencialmente
en la formulación y ejecución de una estrategia de impulso completo del país, que suscite el
proceso sistémico de la economía nacional sobre el fundamento de la preservación de la variedad
biológica y de los recursos naturales, como un sendero para alcanzar el auténtico desarrollo
sustentable.

DESARROLLO ECONÓMICO

Antes de hablar del desarrollo económico es preciso definir en primer lugar a la Economía, la cual
según Acedo (2003) es la ciencia social que tiene por objeto estudiar la forma como los seres
humanos utilizan los recursos para la satisfacción de sus necesidades, debido a la difícil situación
entre las necesidades ilimitadas frente a los recursos limitados, ella es sinónimo de bienestar y en
la medida que alcance el objetivo como lo es el mejorar la calidad de vida de la sociedad se podría
estar hablando de Desarrollo Económico.
Es evidente que el aumento económico es un requisito necesario pero no adecuado, para el
progreso, y que los indicadores convenidos de incremento del PIB revelan restricciones
indicadoras para estimar el desarrollo debido a que no contempla el uso que se hace del aumento
fructífero reconocido, igualmente la asignación del ingreso, como tampoco las políticas sociales
responsables de afrontar la pobreza y el atraso. De este modo el desarrollo económico para el
autor antes señalado es una transformación compleja que contiene no solo elementos de carácter
cuantitativo sino también amplias innovaciones de carácter cualitativo.

El desarrollo tiene que ser doble: en la conciencia y en las formas de distribución, ya que es crecer
en una forma que permita el desarrollo auto sostenido de la economía. Un desarrollo sostenido y
justo sería aquel cuyo objetivo básico consistiera en utilizar los recursos naturales para la
satisfacción de las necesidades del hombre, asegurando al mismo tiempo la mejora de la calidad
de vida de las generaciones actuales y futuras. Por otra parte, el desarrollo económico según
(Adelmán 2000, citado por Meier y Stiglitz, 2001) debe combinar cinco elementos:

• Crecimiento Auto sostenido, considerando el medio ambiente

• Cambio Estructural en los Patrones de Producción

• Modernización Social con conciencia sobre la utilización del entorno

• Modernización Política e Institucional y

• Mejora extendida de las condiciones humanas.

Estos elementos deben combinarse de tal forma que se logre alcanzar de manera armónica la
calidad de vida de la sociedad sin continuar deteriorando el ya deteriorado ambiente, como se
aprecia la preservación del medio ambiente es un factor importante e indispensable para alcanzar
el desarrollo económico y sostenido, este requiere que el progreso no alcance solo a una minoría y
la pobreza, desnutrición, analfabetismo, corrupción, entre otras, deben ser eliminadas para un
adecuado desarrollo sostenible.

DESARROLLO SOSTENIBLE

El discernimiento sobre el progreso ha avanzado desde un punto de vista económico a un


pensamiento que concibe el mismo como una evolución que despliega el cuadro de oportunidades
del hombre, como objeto y sujeto de evolución, y adicionalmente donde la cultura se integra bajo la
corriente de que es clave para el progreso.

El desarrollo sostenible según Rodríguez (1983) se enfoca en mejorar la calidad de vida de todos
los ciudadanos de la Tierra, sin aumentar el uso de recursos naturales más allá de la capacidad del
ambiente de proporcionarlos indefinidamente. Requiere una comprensión que la inacción tiene
consecuencias y que se deben encontrar formas innovadoras de cambiar estructuras
institucionales e influenciar conductas individuales. Se trata de tomar acción, de cambiar políticas y
prácticas en todos los niveles, desde el ámbito individual hasta el internacional

Dentro de los esfuerzos por lograr una calidad de vida, los principios del desarrollo sostenible
parten de la percepción del mundo como "una sola tierra" con un "futuro común" para la
humanidad; orientan una nueva geopolítica fundada en "pensar globalmente y actuar localmente";
establecen el "principio precautorio" para conservar la vida ante la falta de certezas del
conocimiento científico y el exceso de imperativos tecnológicos y económicos; promueven la
responsabilidad colectiva, la equidad social, la justicia ambiental y la calidad de vida de las
generaciones presentes y futuras.
No obstante, estos criterios del "desarrollo sostenible" no se han convertido en una ética como una
entidad de reglas de conducta que reoriente los asuntos económicos y políticos hacia una nueva
coherencia social y hacia modos sustentables de producción y de vida.

En ese sentido, las políticas del desarrollo sostenible buscan armonizar el proceso económico con
la conservación de la naturaleza, favoreciendo un balance entre la satisfacción de necesidades
actuales y las de las generaciones futuras. Sin embargo, pretende realizar sus objetivos
revitalizando el viejo mito desarrollista, promoviendo la invención de un crecimiento económico
sostenible sobre la naturaleza limitada del planeta.

Luego se hace preciso una participación ciudadana donde la facultad de la sociedad civil para
intervenir sobre los efectos, opciones, disposiciones y proposiciones de problemas, además de las
intenciones políticas y sociales, y en el cual la contribución equivalente y cierta de todos los
individuos en las dificultades que nos aquejan siga siendo la perspectiva para avanzar.

ÉTICA

Según Guedez (2001) “la ética procede de las convicciones y de las decisiones ante los dilemas
asociados a lo no previsto, es decir, a todo lo que no viene desde fuera, sino desde dentro de
nuestras conciencias”. De igual manera, este mismo autor la define como la actividad de examinar
los estándares morales de uno mismo o los estándares morales de la sociedad, y de preguntarse
cómo se aplican estos a nuestra vida y si son razonables o irrazonables, esto es, si se hallan
sustentados por buenas o por malas razones.

Por otro lado, Soto y Cárdenas (2007) señalan que la ética puede ser entendida como la búsqueda
de una comprensión racional de los principios de la conducta humana, la misma es legítima porque
es natural, porque es el camino por donde el hombre se realiza como ser racional y solidario. La
ética adquiere importancia por tres motivos:

• En la situación actual puede resolver el problema de injusticia mundial y local que ha generado el
desarrollo.

• Las soluciones basadas en conocimientos científicos y modelos gratuitos han proporcionado


soluciones temporales pero no han logrado mejores condiciones de vida, la pobreza ha
aumentado.

• Para combatir la pobreza y lograr un desarrollo sostenible, se necesita más que instituciones y
normas jurídicas internacionales y nacionales, además es necesario que las personas sean
responsables de su propio comportamiento y de su relación con la comunidad, es necesaria una
conciencia ética.

En este sentido, es válido que un ser humano -desde su dimensión ética- asuma como el objetivo
fundamental de su vida la búsqueda consciente y perseverante de la propia realización, en una
interacción verdaderamente humanizante con los demás y el ambiente.

ANÁLISIS CONTRADICTORIOS

A continuación, se hace inevitable mostrar que la inquietud por la indagación de un ambiente


liberado de contaminación o de cualquier elemento que disuada o perturbe el avance de las
actividades del hombre y además, acceda lograr la utilización de la diversidad biológica y de los
recursos naturales a favor social de la actual y posteriores generaciones, no es componente nuevo,
sin embargo hasta el día de hoy se resiste los efectos por el deficiente uso que se le ha dado al
mismo, resultando un problema global.
Según lo expresado anteriormente, se debe indagar por la forma de las participaciones o
actividades humanas, es decir, por la manera como se causan y muestran dichas gestiones con
concordancia al medio ambiente. ¿Cuáles son los efectos predecibles a corto, mediano y largo
plazo por estas intromisiones? ¿Y qué se puede realizar en relación a esto? De igual manera, hay
un compromiso que ha obedecido a las formas de aprovechamiento económico de la sociedad,
tanto de los regímenes capitalistas como socialistas, igualmente de la importancia que las
personas poseen frente a la naturaleza, en cuanto terratenientes y tenedores que le aprueban
aprovechar de ella, fruto de una nociva educación que en materia ambiental se describe.

Por otro lado, hasta ahora han sido muchas las políticas curativas que se han aplicado debido a la
cantidad de normativas que en materia ambiental se ha escrito, pero no se han aplicado normas de
prevención y esto ha conllevado a la degradación del medio ambiente, sin tomar en consideración
que todo proceso productivo o comercial debe sustentarse en promover la conservación y/o
rehabilitación del mismo.

En tal sentido, la gestión ambiental del país debe enfocarse primeramente en la educación e
información de las políticas de ordenación del territorio, la regulación y control de las actividades
susceptibles de degradar el ambiente y la regulación y control del aprovechamiento de los recursos
para el logro de un desarrollo equilibrado. Considerando toda la panorámica planteada, se observa
que existen muchas contradicciones y fuerzas para no darle una solución adecuada al tema del
ambiente, es decir, en primer lugar siempre se antepone el aspecto económico ante el ético y son
muchos los ejemplos, entre ellos se tiene:

• La no firma del Protocolo de Kioto (1998) por parte de Estados Unidos, siendo este uno de los
países con mayor contaminación atmosférica con la excusa de que los clorofluorocarbonos (CFC,
compuestos de flúor), que se emplean en refrigeración, aire acondicionado, disolventes de
limpieza, entre otros.

• La lluvia ácida producida por el uso de combustibles fósiles, como también a la emisión de
dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno por las centrales térmicas y por los escapes de los
vehículos a motor.

• Desechos que se vierten a ríos, mares y lagos que dañan el ecosistema del mismo y aun así se
continúa con esa tarea y los organismos competentes no hacen nada o se hacen sordos o ciegos a
la problemática.

• Cuando se utilizan de manera indiscriminada los fertilizantes sin un estudio previo, que cuando
llueve todo esto es arrastrado y llega a los acuíferos causando males terribles al ambiente.

• Accidentes nucleares, que liberan enormes cantidades de radiación, como ocurrió en Chernóbil,
Ucrania, en 1986 y el más reciente ocurrido en Japón 2011 luego del tsunami.

• La ávida solicitud de energía ha asignado la necesidad de utilizar el gas y el petróleo de las


regiones árticas, colocando en riesgo la refinada estabilidad ecológico de los ecosistemas de
tundra y su vida silvestre.

• La explotación acelerada de los recursos minerales de la tierra, que aun cuando preexisten
reglas, las mismas no se suponen y esto hace que el menoscabo al ambiente sea veloz, haciendo
descender la excelencia del mismo.

• El desgaste del suelo se está precipitando en todos los continentes y está disminuyendo unos
2000 millones de hectáreas de tierra de siembra y de pastoreo, lo que constituye un serio peligro
para el suministro global.
A pesar de disponer de numerosas leyes ambientales que rigen a nivel nacional, estatal y
municipal, no ha habido una verdadera política ambiental que contribuya a la creación de una
infraestructura y superestructura institucional que sea capaz de gestionar eficazmente los procesos
ambientales, y poder recuperar nuestros ecosistemas naturales y conservar los limitados recursos
naturales a fin de garantizar su disponibilidad a las generaciones venideras.

CONSIDERACIONES FINALES

Como consecuencia de las constantes amenazas que el ser humano ha llevado a cabo en contra
de la naturaleza, los recursos renovables y no renovables se han deteriorado a tal grado que es
urgente tomar medidas para reducir esta situación. Por lo anterior, es necesario educar y
concienciar sobre la importancia que reviste la preservación y mantenimiento del entorno que nos
rodea. La ecología, economía y ética son ejes de una de las discusiones más cruciales y
desafiantes para el presente y futuro de los seres humanos y el planeta.

Establecer las prioridades ambientales a través del trabajo mancomunado, coordinado y


participativo de todos los sectores de la sociedad con diversidad de acción conllevará a un
desarrollo ambientalmente sustentable como legado a la generación del futuro. Esta perspectiva
lleva a una reflexión que hay que aprender a desaprender para nuevamente aprender y cambiar
los esquemas mentales para tener una nueva cultura ambientalista, con visión prospectiva y
horizontes claros.

El despertar de una conciencia ambientalista colectiva, atacaría los problemas del medio ambiente
y en este sentido la formación ambiental en el contexto económico debe tomar cada vez mayor
importancia, tratándose de colectivos que deben desarrollar como cultura organizacional la
pertinencia y necesidad de preservar el ambiente, mediante esta acción se logrará incidir en la
conciencia mundial sobre la problemática ambiental y sus posibilidades de solución.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Acedo, J (2003) Economía. México. Editorial Umbral.

Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Constitución de la República


Bolivariana de Venezuela. Gaceta Oficial número 36.860. Del 30 de diciembre de 1999. Venezuela.

Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela (2006). Ley Orgánica del Ambiente.
Gaceta Oficial número 583312E. Fecha del 22 de diciembre del 2006. Venezuela.

Guedez, V. (2001). La ética gerencial. Venezuela. Editorial planeta venezolana.

Herrera C., Ramón y Cazorla, María (2009). Agricultura Transgénica y medio ambiente.
Perspectiva Legal. España. Editorial Reus.

Meier, G y Stiglitz, J. (2001). Fronteras de la economía del desarrollo el futuro en perspectiva.


Banco Mundial. México. Ediciones Alfaomega

Organización de las Naciones Unidas (1998). Protocolo de Kioto de la Convención Marco de las
Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Documente en línea. Disponible
en: https://unfccc.int/resource/docs/convkp/kpspan.pdf. Consulta: 20/12/2012.

Publicaciones Vértice, S.L. (2010). Gestión Medioambiental. Conceptos Básicos. España. Editorial
Vértice.
Soto E. y Cárdenas, J. (2007). Ética en las organizaciones. México. McGraw-Hill interamericana.

Economía Verde: un perfil para Venezuela

Por: Eduardo Ortíz Ramirez | Domingo, 23/08/2015 06:57


AM | Versión para imprimir
PRESENTACIÓN

El presente trabajo persigue ordenar un conjunto de reflexiones de interés


desde el punto de vista conceptual y de parte de la instrumentalización
que ha implicado el impulso de la idea y el concepto de la Economía
Verde. Todo esto dentro de lo que se puede conceptualizar como una
especie de imaginario verde donde se incluye el neoliberalismo verde,
nuevo ideal verde, ecosocialismo, desarrollo verde, crecimiento verde y
capitalismo verde. Estas perspectivas están vinculadas a la profusa
discusión en foros y organismos como PNUMA, UE, OCDE y BM, entre
otros. Y, en este sentido, las realidades o fantasías implícitas y explicitas
de la administración bolivariana se asocian -dadas sus inclinaciones- al
ecosocialismo.

Para ello en el papel de trabajo se revisa también lo acumulado sobre


evolución institucional y cambios ministeriales, para atender los
problemas y desafíos implicados así como la propia problemática
ambiental vinculada. Las conclusiones preliminares apuntan a que son
agudos los problemas, múltiples los desafíos y alta -hasta ahora- la
limitación para encontrar mejores equilibrios en las relaciones entre
crecimiento y ambiente. Esta última y la de crecimiento y bienestar pasan
así a ser dos grandes dicotomías que están implícitas en la conversión del
crecimiento en desarrollo social y en la no alteración o mejoramientos de
las condiciones ambientales.

I. APROXIMACIONES CONCEPTUALES

LA INTERRELACIÓN ECONOMÍA AMBIENTE


Desde sus inicios, hace Doscientos años, la ciencia económica planteó, a
través de los escritos de David Ricardo, que la disponibilidad finita del
recurso tierra generaba límites concretos al crecimiento económico y lo
cual conduciría al inevitable advenimiento de un estado estacionario,
pero ha sido en décadas recientes cuando se ha comenzado a captar, en
sus muy diversas dimensiones y mecanismos, las interrelaciones entre el
crecimiento económico y ambiente, cuya más adecuada consideración
exige un enfoque interdisciplinario.

Por su parte, la ciencia económica misma ha evolucionado, en una aguda


y fecunda controversia con los ambientalistas, hacia desarrollos analíticos
con vistas a la sistematización de las interrelaciones y a la búsqueda de
soluciones que compatibilicen el crecimiento económico con la protección
del ambiente, eliminando, compensando o reduciendo a un mínimo
aceptable su deterioro. Los conceptos de externalidades (efectos
secundarios de una actividad económica, como son los perjuicios y
mejoramientos del ambiente), bienes públicos, elección intertemporal de
objetivos de producción y consumo, efectos distributivos de las políticas
ambientalistas y de crecimiento económico, han constituido, entre otros,
recursos analíticos que han permitido incorporar en forma sistemática la
variable ambiente al análisis económico. Tales articulaciones se
relacionaron inicialmente con la perspectiva de la Economía ambiental
(entendida como de inspiración neoclásica-keynesiana).

El concepto de bienestar que, en sus inicios, venía determinado solo por


la disponibilidad de bienes y servicios que forman el producto de una
nación, hoy tiene que incorporar la calidad del ambiente como
componente fundamental, dada la magnitud de los efectos de
contaminación y de invernadero, que trascienden las fronteras y llegan a
poner en peligro la vida en el planeta.

Además de los problemas de medición que surgen en relación con el


ambiente, que son de mayor amplitud e imprecisión que los del
crecimiento económico, es de señalar que el tratamiento de conjunto de
ambas variables en el análisis económico no cubre en su totalidad todas
las interrelaciones que se generan entre ellas. Ello es así por cuanto este
análisis se refiere a los efectos de actividades económicas que tienen lugar
a través del mercado y de otras que, como el uso de viviendas por sus
propietarios o el consumo directo de la producción por parte de quienes
la realizan, específicamente a niveles de subsistencia, le son imputables
valores según precios de mercado tomados como referencia. Pero existen
efectos como el disfrute o pérdida de paisajes, lagos y ríos para fines
personales de recreación, difusión de gases tóxicos y radiación nuclear,
destrucción de la capa de ozono, que van más allá de la esfera del
mercado tradicionalmente considerada. A ello deben agregarse los efectos
que provienen del crecimiento poblacional, especialmente en centros
urbanos que adquieren las características de megalópolis y otras
clasificaciones urbanísticas definidoras de altos grados de concentración
de la población. Esta más adecuada interrelación entre las variables
económicas y ecológicas ha estado en la base de la formación de la
llamada Economía ecológica.

Es por las consideraciones anteriores que se ha llegado a considerar el


PNB (total o per cápita) como un indicador insatisfactorio del bienestar,
en virtud de que no incorpora tanto los efectos determinables y
cuantificables vía mercado, como aquellos que no lo son.

Debe señalarse el caso particular del agotamiento de los recursos


naturales, que ha originado toda una polémica sobre los límites del
crecimiento económico y el surgimiento de posiciones calificadas como
optimistas o pesimistas. Los primeros confían en que las formas posibles
de aumentar la productividad general de los recursos (cambios en la
composición de la producción que alteren los requerimientos, por
ejemplo, de recursos naturales renovables y no renovables, substitución
de insumos, progreso técnico) permitan superar los problemas de
agotamiento de aquellos y de deterioro ecológico. Los pesimistas, alegan
el surgimiento de situaciones con grados de deterioro o agotamiento que
los convierten en fenómenos irreversibles y ante lo cual llegan a postular
el detenimiento del crecimiento.

Una problemática como la señalada obliga al abordaje y tratamiento de


las políticas ambientales (su naturaleza y efectividad). Así, tenemos, por
ejemplo, las basadas en el concepto del deterioro ambiental, constituido
por externalidades provenientes de la actividad económica, que al ser
internalizadas como costos de dicho deterioro, pueden hacerse recaer
sobre los causantes. Aparte de los problemas de identificación exacta de
los efectos (pueden haber efectos remotos a partir del fenómeno inicial),
determinación de los causantes, medición o formas de compensación de
los daños, está también el de los perjuicios causados a la población en
general bajo la forma de imposibilidad de disfrute de paisajes, ríos, lagos,
o de, difusión de gases tóxicos o radiación nuclear, etc. Esto lleva a la
necesidad de establecer medidas de regulación y control, e inclusive de
prohibición de actividades contaminantes.

Un aspecto particular que ha llevado a una definición de posiciones a


favor o en contra del crecimiento, es que el análisis económico realizado a
partir del concepto de externalidades, lleva a situaciones que podrían
llamarse de compromiso, en las cuales un determinado nivel de
contaminación, asociado a un nivel o ritmo de crecimiento, puede
considerarse aceptable. Si la asociación es inevitable, como parece serlo en
muchos casos, esto puede conducir a postular como política ambientalista
el crecimiento cero.

AMBIENTE Y DESARROLLO

En los planteamientos iniciales sobre la problemática del desarrollo,


realizados después de la II Guerra Mundial, se centró en el estudio en la
trayectoria del ingreso real per cápita y otras variables macroeconómicas
(mayormente en países desarrollados), a cuya evolución estarían
asociados cambios progresivos en las variables sociales, culturales y
políticas. Estos planteamientos surgieron durante la llamada "segunda
edad de oro del capitalismo" las décadas de los 50 y los 60 cuando las
economías desarrolladas y subdesarrolladas registraron procesos
expansivos a ritmos relativamente altos y estables.

Con el posterior surgimiento de quiebras en los sistemas institucionales


de Bretton Woods ideados para organizar y orientar el funcionamiento de
la economía mundial, comenzó a ampliarse el campo de la teoría del
desarrollo, para comprender las interacciones y desfases existentes entre
el crecimiento económico y la dinámica de los aspectos sociales,
culturales y políticos. El ámbito de estos desfases e interrelaciones ya no
se reduce a los territorios nacionales sino que su evolución y efectos
trascienden las fronteras, dado el intenso proceso de globalización.

Así mismo, se ha hecho indispensable incorporar los efectos de la


irracional utilización de los recursos naturales y de la contaminación, en
los estudios del desarrollo y el crecimiento económico, dado que la
intensificación de estos procesos durante el siglo XX y XXI, ha generado
tales efectos sobre el ambiente físico y social. Esto está implicando una
presión creciente sobre el acervo total de recursos disponibles para la
humanidad, el cual tiene un carácter finito, pues aun en el caso de los
recursos potencialmente auto regenerativos existen "umbrales" de
capacidad de absorción de efectos contaminantes y de explotación. Estos
umbrales al ser sobrepasados, ponen en peligro la propia existencia del
recurso, y afectan negativamente, el nivel de bienestar y las condiciones
necesarias para la conservación de la vida humana.

Caso especial y de extrema importancia lo constituyen los minerales, los


combustibles fósiles y otros recursos energéticos. La disminución de los
acervos de los recursos naturales no renovables no es considerada, en sí
misma, como un problema ambiental, ya que su agotamiento y
variaciones en la calidad y localización de los yacimientos origina
problemas de otra índole que afectan el crecimiento y el bienestar. Son los
procesos extractivos de tales recursos, su uso en la producción y el
consumo de los productos de ellos obtenidos, los que originan serios
problemas, tales como destrucción de bienes y servicios ambientales,
polución, cambios climáticos y efecto invernadero. Al considerar los
efectos antes explicados surgen algunas connotaciones importantes. Una
es la ya aludida ampliación del concepto de bienestar, objetivo de las
políticas del desarrollo. La otra connotación importante es que, deben
combinarse la política ambiental con la estrategia y la política de
desarrollo y crecimiento económicos. Dados los altos grados de
internacionalización y globalización alcanzados en ambas dimensiones,
tal combinación debe realizarse tanto en el ámbito nacional como en el
área de las relaciones económicas internacionales. Para un país como
Venezuela, cuya economía continúa estando basada en la producción y
exportación de petróleo y sus derivados y otros recursos de origen
mineral (Eduardo Ortiz Ramírez. Reacciones fáciles ante la baja en los
precios del petróleo. 29 octubre
2014. http://www.economiainternacionalpostgradoucv.com.ve/publicacio
nes.html), es de vital importancia desarrollar un enfoque de su actividad
petrolera y minera y su interacción con el ambiente en las diversas fases
en que aquella se desenvuelve (extracción, transformación, transporte,
comercio y utilización), a los que deben agregarse los efectos ambientales
del consumo de sus productos.

Es también de importancia destacar la distinta naturaleza, consecuencias


y esquemas de soluciones de los problemas ambientales en los países en
desarrollo y en los desarrollados, lo que lleva a divergencias de criterio
que se deseaba y esperaba pudieran ser resueltas en la Segunda
Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo
(CNUMAD), también conocida como Cumbre de la tierra y realizada en
Río de Janeiro del 1ro al 12 de junio de 1992 así como también en la
Rio+20, en el año 2012, veinte años después de aquella. Mientras dichos
problemas son generados en los países menos avanzados principalmente
por las condiciones de subsistencia en que vive gran parte de su
población (deforestación y erosión de los suelos, uso de la leña como
recurso energético, etc), traslado hacia ellos de industrias contaminantes,
sobrepoblación y contaminación en centros urbanos gigantescos, en
cambio en los países desarrollados el deterioro ecológico proviene de un
avanzado desarrollo industrial y del alto consumo en masa, para utilizar
un término rostowiano. Basta con señalar que allí la cuarta parte de la
población mundial consume alrededor de las cuatro quintas partes de los
recursos del planeta. Sin desconocer la necesidad urgente de que los
países en desarrollo tomen las medidas para que su avance se
compatibilice con la protección del ambiente, es obvio también que las
responsabilidades en la restauración y defensa de la ecología del planeta
deberían ser distribuidas en función de la distinta participación de los
países en el daño ecológico. Esto por cuanto el mundo en desarrollo en
gran parte carece de la tecnología y los recursos humanos y financieros
necesarios para enfrentar y resolver el deterioro ecológico causado y
asociado a procesos de producción y de consumo en marcha.
En relación con el ajuste de los procesos de crecimiento al resguardo de la
ecología, desde finales de los ochenta, forma parte de los proyectos de
desarrollo a nivel nacional y regional el concepto de desarrollo
sustentable que posteriormente va a ser superado por el de economía
verde que señalaremos más adelante. En aquel concepto se trata de
sintetizar la necesaria armonía que debe privar en la interrelación
ambientedesarrollo, al estar en parte basado en el principio de que la
producción máxima debe ser compatible con el mantenimiento de la
productividad futura de los recursos naturales (LECOMBER, Richard.
1977 Crecimiento Económico Versus Medio Ambiente, Colección
MacMillánVicensVives de Economía, Barcelona). Aunque de reciente
difusión, el concepto aparece ya en autores de comienzos del siglo XX,
relacionado con el criterio de la sustentabilidad, que ha sido manejado
por las ciencias del agro, como un atributo de los sistemas agrícolas
(correspondiendo a la capacidad de éstos para mantener la productividad
frente a diversas perturbaciones: erosión o sequía por ejemplo). En estos
campos es bastante conocido el "Informe Burtland", que ofrece un
concepto muy completo de lo que se trata de transmitir: "El desarrollo
sustentable es el desarrollo que satisface las necesidades de la generación
presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para
satisfacer sus propias necesidades". Es así como se logra la fusión teórica
entre la sustentabilidad y el desarrollo, como base para la formulación e
implementación de estrategias integrales (Eduardo Ortiz Ramírez. 1992.
Notas sobre Economía, Ambiente y Desarrollo. Revista SIC.
EneroFebrero). Posteriormente, tal cual se indicó, aparece el concepto de
economía verde que busca hacer operativo el desarrollo sustentable.

COMERCIO INTERNACIONAL Y AMBIENTE

En el caso particular de Venezuela y dado el alto grado de dependencia


de su economía con respecto a las exportaciones de petróleo y derivados,
el enfoque global que el país debe desarrollar acerca de la actividad
petroleraminera y su interacción con el ambiente en las diversas fases
antes mencionadas, tiene que contemplar un análisis a fondo de las
implicaciones que para el ambiente tienen las prácticas comerciales y las
políticas ambientales de los países usuarios de aquel producto, además de
los que deberían ser sus intereses económico-ambientales domesticos. Es
claro que el problema es más vasto, por cuanto que existen también nexos
e interacciones entre el comercio internacional de los demás bienes y la
problemática ecológica, por lo cual también la política comercial debe
contemplar dichas interrelaciones.

Existe un grupo de problemas que son comunes a los diversos países del
mundo, a saber: emisiones de gases de invernadero, destrucción de la
capa de ozono, deforestación tropical, contaminación de los océanos,
alteración de las condiciones urbanas de vida y pérdida de la
biodiversidad. Se pueden especificar también, entre otros, la protección
de la calidad del agua y el aire, protección de los suelos, tratamiento y
disposición de la basura o desperdicios, control del ruido (varios
adquieren, dimensiones internacionales). Estos diversos fenómenos
ambientales son influenciados por las actividades comerciales
internacionales, lo que ha llevado tanto a la adopción de políticas
ambientales que interfieren el libre flujo de mercancías y servicios, como a
la discusión acerca de la adecuación de las políticas comerciales a los fines
de protección de la ecología. Se han adoptado posiciones según las cuales
el libre comercio de por sí tendería a generar efectos dañinos sobre la
naturaleza, al acelerar la explotación de recursos naturales a ritmos
contrarios al principio de sustentabilidad. Esta posibilidad se agravaría si
tales recursos están valorados a precios inferiores a los costos reales, lo
que exigiría la corrección de dichos desequilibrios en forma directa o a
través de la política tributaria, la asignación o clasificación de derechos de
propiedad o programas de manejo de recursos.

A la corrección sistemática de los efectos de deterioro sobre la base del


concepto de internalización de sus costos en el de las actividades que los
originan, debe agregarse la adopción de acuerdos internacionales para
combatirlos. El logro en este ámbito de soluciones adecuadas se dificulta
por la existencia en el campo internacional de desigualdades en niveles
de desarrollo ya antes señaladas, diferencias en preferencias sociales
sobre consumo, desarrollo y contaminación, capacidades diversas de
asimilación de efectos ambientales y financiamiento del mejoramiento
ambiental y jurisdicciones políticoadministrativas separadas y
autónomas.

Existen, además, fallas de tipo institucional en el ordenamiento del


comercio internacional, por cuanto el desaparecido GATT y la OMC han
carecido de normas claras de validez general para compatibilizar, el
desarrollo del comercio con el equilibrio ecológico. La normativa
existente se refiere para citar los casos más importantes, a los subsidios
dirigidos a cubrir los costos del abastecimiento y control de la
contaminación sujetos a acciones compensatorias por parte de los países
que se consideran afectados; los impuestos compensatorios dirigidos a
neutralizar ventajas competitivas obtenidas por gastos menores de
protección ambiental, lo cual puede convertir la calidad ambiental en un
pretexto para la protección, en especial la practicada por los países
industrializados; las excepciones a las normas sobre restricciones
cuantitativas e intervenciones discriminatorias con fines de protección de
elementos específicos del ambiente, aunque en forma y procedimientos
no bien definidos; y, finalmente, los estándares de productos y los
acuerdos internacionales sobre métodos de producción y procesos. Es de
resaltar en este último aspecto que los países más desarrollados pueden
imponer a los más débiles sus preferencias sociales en cuanto a niveles de
contaminación, formas de combatirlas y de control, etc, en desmedro de
intereses o consideraciones específicas de los países en desarrollo en
función de sus particularidades.

La ausencia de reglas y procedimientos claros y la dinámica interna para


la toma de decisiones, determinan que los organismos multilaterales de
comercio señalados hayan sido estructuralmente débiles para resolver las
disputas acerca del uso apropiado de la política comercial con fines de
protección ambiental (Martin Khor La "economía verde" desde la
perspectiva del desarrollo sostenible Cooperación en Red Euroamericana
Para El Desarrollo Sostenible. 06 setiembre 2012).

Así, las regulaciones y estándares ambientales de un país significan para


exportadores de otros países costos adicionales y dificultades. Estas
restricciones pueden convertirse en una excusa con fines realmente
proteccionistas, si, por ejemplo, no se restringe la producción interna del
bien o bienes involucrados. La legitimidad de los objetivos ambientales
puede, también, ser puesta en discusión. En tales condiciones, puede
surgir una combinación de objetivos proteccionistas ambientales y de
protección de intereses económicos cuyas consecuencias pretendidamente
favorables desde una perspectiva ecológica sean meramente fortuitas.

A lo anteriormente planteado deben agregarse las exigencias que los


países en desarrollo han realizado desde hace décadas acerca de la
necesidad de financiamiento y transferencia tecnológica, desde los países
avanzados, para combatir el deterioro ambiental y la de carácter más
universal, atinente a la adopción de políticas energéticas que permitan
revertir el efecto invernadero generado por el uso de combustibles fósiles
como carbón, petróleo y gas natural. Propuestas en este último aspecto
tuvieron como propósito reducir las emisiones de dióxido de carbono y
otros gases a determinados niveles (Protocolo de Montreal). Es una
cuestión de interés que afecta directamente a Venezuela como país
productor de energéticos sobre los cuales sigue basando -en 2015- su
desarrollo.

De manera fundamental, la negociación de convenios y tratados


internacionales debería permitir controlar o erradicar el que aspectos
ambientales sean usados como excusa para ejecutar determinadas líneas
de interés para la política comercial de algunos países, pero también, en
sentido inverso, para que con estas últimas se busquen alcanzar fines
relativos al ambiente. De lo contrario, y de seguirse desarrollando esta
última tendencia, se hará necesario establecer algunos principios y reglas
que no es claro que puedan lograrse fácilmente en una perspectiva
operativa: la no discriminación, la transparencia en las medidas de
políticas comercial relacionadas con el ambiente, proporcionalidad entre
los efectos restrictivos al comercio de las nuevas normas ambientales y los
objetivos de estas últimas, entre otras.

Por último, es altamente relevante reconocer y destacar la asociación


entre los desequilibrios económicos de distinto tipo y la necesidad de
aumentar los ingresos de exportación, por una parte, y la ejecución de
distintas líneas de expansión económica que puedan afectar el ambiente,
por la otra. Se trata de las líneas de desarrollo y competencia que siguen
llevando a cabo las sociedades avanzadas, y, de una manera particular,
los países en desarrollo, que con el impulso del comercio internacional
atinente a bienes primarios o productos básicos, buscan solucionar los
problemas asociados al crecimiento, deuda externa y bajos precios de
tales productos. Puede destacarse como América Latina no ha
abandonado la dependencia de tales productos, todo lo contrario la ha
fortalecido: "En 2003, las exportaciones basadas en recursos naturales
cubrían el 49% de la canasta exportadora de la región mientras que una
década más tarde esa proporción se eleva al 60%. El incremento relativo
se da en detrimento de las exportaciones de textiles y de otras
manufacturas, toda vez que las correspondientes a equipamiento de
transporte se mantienen alrededor del 10%. El aumento de la
participación de los bienes basados en recursos naturales, tendencia
consolidada desde 2008 gracias al auge de los mercados de productos
básicos, no se altera en el cuadro reciente de estancamiento de las
exportaciones." (Ver Monitor de Comercio e Integración 2014. Vientos
Adversos. Políticas para relanzar el comercio en la post-crisis. Paolo
Giordano Coordinador. Octubre 2014 BID).

LA PROBLEMÁTICA ECONÓMICO AMBIENTAL Y LA ECONOMÍA


VERDE

Veinte y tres años después de Eco 92, y casi tres después de la Río+20, la
agenda internacional sigue manteniendo problemas económicos
ambientales similares y/o aumentados, pero no un escenario donde se le
hubiese dado solución a numerosos que se han venido repitiendo. En esta
última conferencia se tuvo como puntos de interés dos puntos
principales: economía verde y estructura institucional para el desarrollo
sostenible y la erradicación de la pobreza. Sin embargo, han surgido
críticas que sostienen que la economía verde peca de un exceso de
positivismo cientificista, ya que confía en resolver los problemas
generados por el cambio climático aplicando la ciencia por encima del
debate político. Según esta perspectiva están implicadas tecnologías
cuyos riesgos son imprevisibles, como la nanotecnología, la biología
sintética y la geoingeniería, áreas donde Estados y empresas han
invertido miles de millones de dólares (Célio Bermann. Economía verde:
¿una vía para otro mundo posible? Debates científicos e intereses
políticos en torno de Río+20 Rev. Nueva Sociedad N° 239, 2012). También
debe señalarse que muchos países en desarrollo no presentan
posibilidades de acceso a estas tecnologías.

El concepto de economía verde todavía no ha conseguido una definición


ampliamente aceptada, ya sea entre economistas, ambientalistas o
ecologistas. Es un concepto de cierta complejidad y no se puede esperar
que, en un futuro cercano, se alcance un consenso sobre su significado, su
uso, su utilidad y menos aún sobre las implicaciones políticas que
sobrelleva.

El término de economía verde en principio remite a una economía


respetuosa del ambiente, con propósito de conservar los recursos
naturales, así como de minimizar la contaminación y las emisiones
nocivas para el mismo, acompañada de una elaboración de productos que
no lo dañen ni por su existencia ni por su consumo. Dentro de las
interrogantes se tiene si en tal perspectiva económica deberán limitarse
otros aspectos, como el crecimiento económico de los países pobres y el
desarrollo social, la erradicación de la pobreza o la creación de empleo. A
tales efectos la economía verde debería reposar sobe una ecuación de tres
variables: el imperativo medioambiental, el de desarrollo (tanto en su
dimensión económica como social) y el principio de equidad, que
vincularía las dimensiones ambientales y de desarrollo.

Por consiguiente, la economía verde debería definirse en el marco de esta


ecuación, que, por otro lado, debe abarcar tanto las dimensiones
internacionales como las nacionales. Sus objetivos, principios, medidas,
propuestas o las iniciativas que partan de ella deberían integrarse en el
marco y criterios de la ecuación ambiente-desarrollo-equidad para así
promover la economía verde en el contexto del desarrollo sostenible,
destacándole su valor en el aspecto positivo que consiste en reconocer el
valor económico y social del ambiente (Martin Khor. La "economía verde"
desde la perspectiva del desarrollo sostenible. Cooperación en Red
Euroamericana Para El Desarrollo Sostenible. 06 setiembre 2012).

II. PROPUESTAS INTERNACIONALES DE INTERÉS


En el impulso del llamado crecimiento verde, se han buscado desarrollar
numerosos instrumentos correspondientes a las atenciones requeridas
por otros tantos problemas existentes, sobre todo para el caso de los
países de menor desarrollo. Uno de ellos es el caso de los Bonos Verdes
(BV) y otro de interés es la aplicación del Índice Better Life. Puede
apreciarse que uno de estos instrumentos remite al campo del
financiamiento y otro al de la medición del desarrollo –en este caso
económico ambiental-.

La escogencia des estos instrumentos no desestima el conjunto de muchos


otros que pueden existir en un campo donde se han venido tomando
abundantes iniciativas como las que pueden asociarse a las actividades
del PNUMA, la OCDE y la UE en donde se han puesto en ejecución la
Green Economy Initiative, Green Growth Strategy, Europa 2020 Strategy,
respectivamente. En estas iniciativas existen instrumentos y acciones
diversas atinentes a hacer más verde la economía, estimular la
producción de bienes sustentables, formación de recursos humanos en
concordancia con el equilibrio social y el carácter verde de la misma, o
lograr alcanzar mecanismos de compensación económica y social que
eliminen fundamentos estructurales de las crisis económicas así como
facilitar y garantizar distintos mecanismos de soporte e inversión para un
perfil sustentable del crecimiento, según programas y proyección
temporal de las iniciativas y estrategias señaladas (elementos de
referencia pueden verse en Gurtowski, Ídem…2011).

BONOS VERDES

Los BV (Green Bond) consisten en una emisión de deuda privada o


pública que tiene como fin utilizar los fondos que captan en proyectos
relacionados con la moderación y/o adaptación al cambio climático (o sea
para proyectos verdes); funcionan como un bono común y corriente y con
una retribución relacionada linealmente con el riesgo implicado. En su
mayoría, son emitidos por los bancos multilaterales, algunos bancos
comerciales y en menor medida los ejecutores de proyectos verdes y son
comprados principalmente por inversores institucionales (ej. fondos de
pensión, administradores de fondos de inversión, inversores de impacto,
etc.) interesados en apoyar las inversiones del caso.
Gracias a un proceso interno de elegibilidad (desarrollado por el mismo
emisor) o a través de una certificación externa (como la otorgada por
el Climate Bond Initiative), el tenedor del bono se asegura que los fondos
tengan los destinos prometidos. El propietario del bono cumple con su
mandato ambiental o moral pero, cuando se trata de retribución
monetaria, su posición es la asociada a obtener el mayor beneficio de su
inversión. Los tenedores del bono no financian proyectos en forma directa
por lo que no toman los riesgos relacionados con dichos proyectos, y, si
bien financian proyectos en forma indirecta (a través por ejemplo del
programa de BV del Banco Mundial), la retribución se basa únicamente
en el rating del emisor. En razón de estas particularidades en ocasiones
no se tiene certeza sobre su rol como impulsores de la inversión asociada
a la problemática del cambio climático (Diego Flaiban. Bonos Verdes,
¿Sólo buenas intenciones? www.blogs.iadb.org 30 de mayo de 2012, 7:00
am).

Dos entidades del Grupo del Banco Mundial –el Banco Internacional de
Reconstrucción y Fomento (BIRF) y la Corporación Financiera
Internacional (IFC)– han sido esenciales para el desarrollo del mercado
mundial de BV, desde la primera oferta del Banco Mundial en 2008 hasta
las dos emisiones de referencia de IFC por US$1.000 millones en 2013. Los
ingresos provenientes de estos bonos se han utilizado para inversiones
que ayuden a enfrentar el cambio climático.

En Túnez, los BV emitidos por el Banco Mundial ayudan a mejorar la


eficiencia de las tareas de riego y la disponibilidad de agua en zonas
rurales donde las fuentes de agua subterránea están bajo presión.
En China, colaboran en la disminución de la vulnerabilidad de las
comunidades ante los desastres naturales mediante sistemas de control y
alerta de inundaciones. En Colombiay México apuntalan la eficiencia
energética en los sistemas de transporte público, y en otros
lugares, proyectos de energía renovable.

Visto en inicios de 2014 debe señalarse que desde 2008, el Banco Mundial
había movilizado más de US$4.500 millones mediante 60 transacciones de
BV en 17 monedas, en tanto que IFC había emitido US$3.400 millones en
BV, incluidas dos emisiones por US$1.000 millones en 2013 señaladas. Los
ingresos de los BV del Banco Mundial e IFC son destinados a cuentas
separadas que se crean para apoyar el financiamiento de proyectos que
cumplen con criterios específicos de selección.

La oferta de IFC de US$1.000 millones, en noviembre de 2013, atrajo a un


nuevo grupo de inversores en BV, conformado por Ford Motor Company,
Microsoft y los bancos centrales de Brasil y Alemania. Un bono verde a
tasa flotante emitido por el Banco Mundial en enero de 2014 captó el
interés de inversores institucionales: BlackRock, TIAA-Cref y Goldman
Sachs Private Wealth Management, además de otros fondos de pensiones
e inversionistas (www.bancomundial.org marzo 4 2014).

El balance a inicios de 2015 es más exitoso que lo previamente señalado,


pues una vez más asentada la experiencia con los BV, se observa que el
año 2014 se habían emitido BV por US$11.000 millones. El presidente del
banco Mundial llamó a que se duplicara esa cifra cuando se realizara en
septiembre de 2014 la Cumbre sobre el Clima convocada por el secretario
general de las Naciones Unidas. Con la emisión de los primeros bonos de
nuevos emisores, la creación de nuevos índices de BV, y las inversiones
de más compradores, el año cerró con la emisión de nuevos BV por más
de US$35.000 millones.

El papel de nuevos emisores ha sido significativo para el impulso en 2014


y lo que se perfila para 2015. Las ciudades y organismos estatales que han
usado bonos en el pasado para recaudar fondos para proyectos de
infraestructura, comenzaron a emitir BV para ayudar a apoyar y destacar
proyectos no dañinos para el ambiente y el clima, como las mejoras en la
eficiencia y el transporte público. Johannesburgo (Sudáfrica), emitió el
primer bono verde municipal de África en 2014 para ayudar a financiar
proyectos de reducción de emisiones que incluyen la energía de biogás, la
energía solar, y el transporte sostenible.

Las corporaciones y empresas de servicios públicos también han


comenzado a emitir BV para apoyar proyectos no dañinos para el
ambiente. La empresa de servicios públicos francesa GDF Suez realizó la
mayor emisión de BV hasta la fecha, por un monto de 2.500 millones de
euros, para financiar proyectos de energía renovable, como los parques
eólicos y el trabajo sobre eficiencia energética, como la medición
inteligente y las redes integradas de calefacción urbana.

Para los emisores, el sello verde puede ayudar a llegar a nuevos


inversionistas. A medida que el mercado de BV crezca, se estima habrá
prioridad de los proyectos ecológicos sobre los demás, y los emisores con
sólidas credenciales de sostenibilidad serán recompensados con una base
más amplia de inversionistas. También están apareciendo nuevos tipos de
BV y los bonos se están ampliando a nuevas monedas. El Banco Mundial
cerró su primer bono verde para inversionistas minoristas a comienzos de
enero, recaudando US$91 millones para proyectos inocuos para el clima.
IFC, que ha emitido hasta el momento BV por un monto de US$3.700
millones, emitió sus primeros en renminbi y soles peruanos en 2014.

La interpretación entusiasta desde el Banco Mundial es que las finanzas


públicas por sí solas nunca serán suficientes para controlar el cambio
climático: es necesaria la inversión privada en proyectos climáticamente
inteligentes para poner las economías en una senda de crecimiento más
limpio. La construcción de un mercado de BV que puedan movilizar el
financiamiento del sector privado ayuda a educar a este mismo sector,
acerca de las inversiones para el desarrollo e impulsa la movilización de
fondos del sector privado (www.bancomundial.org enero 22 2015).

INDICE BETTER LIFE

En mayo 2011 -en el contexto de su 50 aniversario- después de


consideraciones, discusiones y estudios considerables OCDE informó
sobre la aparición del Índice para una Vida Mejor. Consustancial a estos
casos se consideró que permitiría mediciones más completas que las
permitidas por el PIB. Tu Índice para una Vida Mejor, es parte integral de
la iniciativa de una Vida Mejor y busca medir el bienestar y el progreso.
El índice permitirá a los ciudadanos comparar sus vidas en los 36 países
de OCDE, abarcando 11 aspectos - vivienda, ingresos, empleos,
comunidad, educación, ambiente, gobernanza, salud, satisfacción de vida,
seguridad, y equilibrio entre lo laboral y la vida-. "Este índice sintetiza a
la OCDE sus 50 años, cruzando las barreras del conocimiento y el
entendimiento de forma pionera e innovadora" aseguró el Secretario
General de la OCDE, Ángel Gurría. "Mucha gente alrededor del mundo
deseaba ir más allá del PIB desde hace tiempo. Este índice está diseñado
para esas personas. Tiene un potencial extraordinario para ayudarnos a
concebir mejores políticas para una vida mejor" (www.oecd.org 24 de
mayo 2011).

Se estima que el índice Better life junto a otros instrumentos –se


consideran índices interactivos- que aplica OCDE: 1. Permiten orientar la
formulación de políticas para mejorar la calidad de vida. 2. Relacionan las
políticas con la vida de la gente. 3. Fomentan el apoyo a las medidas
políticas necesarias. 4. Favorecen la participación en la vida cívica
alentando al público a crear sus propios índices y a compartir sus
preferencias. 5. Capacitan a la población al mejorar la comprensión de la
formulación de políticas. De la misma manera pueden destacarse
conclusiones de los usuarios que suministran información a OCDE desde
mayo de 2011 a mayo de 2013 las cuales indican que: 1. La satisfacción
ante la vida, Educación y Salud son los temas de bienestar más
importantes para los ciudadanos. 2. Los hombres y las mujeres comparten
las mismas prioridades. 3. Las preferencias de bienestar son muy
similares entre los distintos países y regiones.

Hasta 2013 El sitio del Índice para una Vida Mejor tuvo más de 1.8
millones de visitas desde 184 países y se consultaron más de 3.7 millones
de páginas. También se intercambiaron más de 45.200 Índices para una
Vida Mejor. El resultado básico es que los usuarios se han identificado
con los 11 temas utilizados para medir el bienestar: la vivienda, los
ingresos, el empleo, la comunidad, la educación, el ambiente, el
compromiso cívico, la salud, la satisfacción ante la vida, la seguridad y el
balance vida-trabajo. En promedio, los usuarios han incluido
sistemáticamente todos los temas para crear sus índices y calificaciones.
La satisfacción ante la vida, la salud y la educación son, tal cual se señaló,
los tres temas mejor puntuados por los usuarios de todo el mundo. Estos
tres temas se mantuvieron como los sobresalientes, tanto para el visitante
de los países nórdicos como para el de América Latina, lo que indica que
las preferencias de bienestar no son propias de una región (Índice para
una Vida Mejor. Enfoque en los países de habla hispana de la OCDE
Chile, España, Estados Unidos y México. OECD Better life. Initiative.
2013).

A pesar de la similitud de intereses, los resultados -como pasa con otros


índices cuando se comparan países desarrollados y en desarrollo- dan a
aquellos como mejor ubicados en los mismos. De esta manera, en uno de
los variados registros existentes, y que se destaca aquí, para ubicar los
siete mejor colocados países de los treinta y seis integrantes de OCDE se
presentaron los siguientes resultados.

Se trata de la medición de estándares de vida desarrollados para los


países OCDE adicionándoles las condiciones medioambientales de sus
territorios. Chile uno de los países latinoamericanos que forma parte de
este grupo debe decirse que ocupa el lugar N°36. El Índice Better Life se
estructura así con el fin de concienciar a instituciones, empresas y
ciudadanos y fomentar la toma de medidas para mejorar su ambiente,
salud y calidad de vida.

Los siete países mejor posicionados son:

1. Suecia: Los suecos se exponen a 10,5 microgramos por metro cúbico


(µg/m3) de material particulado fino, el más bajo de los miembros de la
OCDE. Además, solo el 2% de la población testifica carecer de acceso a
espacios verdes y el 97% están satisfechos con la calidad de su agua. Su
puntuación es 10 de 10. 2. Reino Unido: Los niveles registrados de
material particulado fino se sitúan en el 12,7 µg/m3, por debajo de la
media europea (22 µg/m3). El 97% de los habitantes del reino unido se
encuentra satisfecho con el agua potable, mientras que el 6% de los
británicos cree no tener espacios verdes cercanos. Su puntuación fue 9,7
de 10. 3. Islandia: Cuentan con 14,5 µg/m3 de material particulado fino y
el 97% de los islandeses considera que el agua que consumen es de
calidad. Su puntaje es de 9,6 de 10. 4. Alemania: Sus niveles de material
particulado fino son de 16,2 µg/m3. El 4% de la población no está
satisfecha con el agua potable, y el mismo porcentaje tampoco se siente
satisfecha con el acceso a áreas verdes. Su puntuación es de 9,3 de 10. 5.
Noruega: Tienen un 15,9% µg/m3 de material particulado fino. Un 95%
está conforme con la calidad del agua potable y el 2% señala que no tiene
espacios verdes a su alcance. Su puntuación es de 9,2 de 10. 6. Finlandia:
Cuentan con niveles de material particulado fino del orden del 14,9
µg/m3. Menos del 1% de sus ciudadanos sostiene no disponer de espacios
verdes cercanos y el 6% no se encuentra a gusto con su calidad del agua.
Su puntuación es de 9,2 de 10. 7. Luxemburgo: Solo tienen 12,6% µg/m3
de material particulado fino. El 11% de sus ciudadanos siente que adolece
de espacios verdes cercanos y el 8% no está satisfecho con la calidad del
agua. Obtiene un puntaje de 9,2 de 10. Los últimos lugares los obtienen
España en el lugar 28, Corea 29, Polonia 30, México 31, Federación Rusa
32, Israel 33, Grecia 34, Turquía 35 y Chile 36. Ninguno supera el 5 en su
puntuación (www.veoverde.com 3 de julio 2012).

III. INSTITUCIONES VENEZOLANAS PARA ATENDER LA


ECONOMÍA VERDE

ECOSOCIALISMO VS ECOCAPITALISMO

En cuanto a la evolución institucional desde el inicio del período sin HC


(en líneas generales 2013) debe recordarse que su administración se
dedicó a desinstitucionalizar o ejecutar lo que la revolución bolivariana
entendió desde 1999 como refundar las instituciones, una vez finalizado
el proceso mismo de la Asamblea Constituyente que terminó con la
aprobación de la Nueva Constitución en diciembre de ese mismo año. La
institución militar, el BCV, PDVSA, los ministerios viejos y nuevos, y
otras, son todas instancias donde la llamada refundación de las
instituciones no ha hecho más que adaptar la dinámica y objetivos de esas
instituciones a los intereses que han pasado a hegemonizar la dinámica
del Estado y específicamente el gobierno de HC y de su continuador
Nicolás Maduro (NM).

De los elementos previamente señalados, es de importancia resaltar la


ampliación de las dimensiones operativas de las instituciones
gubernamentales vía funcionamiento o articulación de ministerios viejos
y nuevos. En sus inicios, la administración bolivariana se distinguió -en
expresiones del presidente HC- por criticar el excesivo burocratismo
estatal y numero de ministerios, por señalar dos de sus permanentes
referencias. Una evaluación muy preliminar, después de más de quince
años, permite evidenciar que la administración señalada ha aumentado
considerablemente el número de ministerios y funcionarios que
conforman la nómina del sector público, con -entre otros- innegables fines
políticos. Numerosos temas, según las inclinaciones del presidente HC y
también de NM y sus respectivas camarillas, han inspirado la formación
de nuevos ministerios, organismos o reestructuraciones o
reagrupamientos entre ellos: el mundo pluripolar, las comunas, el eco
socialismo, viviendas, misiones, salud, revolución cultural y cualesquiera
de otros tantos temas han estado en la base de aquellas creaciones de
ministerios y/o reestructuraciones.

La evaluación del número de veces que la administración bolivariana ha


reestructurado ministerios o creado nuevos ministerios, según esta
dinámica que hemos planteado, puede conformar un tema
suficientemente vasto para la realización de otro trabajo; más aún, si ello
se realiza evaluando la eficiencia o el cumplimiento de objetivos, según se
hayan planteado como justificativos de la creación o reestructuraciones
según los casos.

En la cadena nacional del día 2 de septiembre de 2014 donde el Presidente


NM había prometido un sacudón, para alterar, transformar, dominar el
estado burgués o sus restos, además de la referencia permanente a la
retórica de 15 años de la administración bolivariana, la mayor parte de
aquella se concentró en detallar cinco revoluciones que debían
fortalecerse -sin muchos elementos de novedad (la económica, del
conocimiento, de las misiones, de las políticas de estado y del socialismo
territorial)- a la par que un conjunto de restructuraciones y nuevas
instancias administrativas según la línea ya indicada.

Una de las reestructuraciones planteadas fue la de la eliminación del


Ministerio de ambiente y su conversión en un Viceministerio ha sido
interpretada como una degradación inconveniente dada su incorporación
al Ministerio de Vivienda, Habitat y Ecosocialismo. En la discusión
acumulada en Venezuela sobre estos asuntos se llegó a perfilar como más
conveniente la supervisión de actividades como la construcción de
viviendas por parte de la instancia ministerial ambiental (puede verse
Enrique Prieto Silva, Absurda degradación del Ministerio del
Ambiente. www.analitica.com 13 de septiembre 2014). Esta
restructuración, sin embargo, abarca elementos de tipo conceptual que
han estado presentes en las discusiones internacionales de académicos,
políticos divulgadores e indudablemente que remite a los campos de las
relaciones entre economía-ambiente, ecología-política y a las actividades
políticas de partidos izquierdistas, ecologistas, verdes, entre otros. Un
autor vinculado a estas dimensiones nos brinda una conceptualización
del ecosocialismo: "Qué es por consiguiente el ecosocialismo? Se trata de
una corriente de pensamiento y de acción ecologista que hace suyos los
principios fundamentales del marxismo —debidamente desembarazados
de los residuos productivistas. Para los eco-socialistas, la lógica del
mercado y la ganancia, del mismo modo que el autoritarismo burocrático
del supuesto «socialismo real», es incompatible con las exigencias de la
salvaguardia del medio ambiente natural. Todos critican la ideología de
las corrientes dominantes del movimiento obrero, pero reconocen que los
trabajadores y sus organizaciones son una fuerza esencial para la
transformación radical del sistema, y para el establecimiento de una
nueva sociedad, socialista y ecologista." (Michael Lowy, ¿Qué es el
Ecosocialismo? 17 de septiembre 2013. www.democraciasocialista.org).

Por su parte la organización Comunicadores en Acción de clara tendencia


oficialista presenta una serie de elementos de divulgación -en tiempo
posterior cercano al momento de comunicar el llamado sacudón el
presidente NM- en cuanto a la medida y al ecosocialismo: "1. Parte del
legado del Cmdt. Chávez: «Suprimir la lógica del capital», «Hacer
irreversible el tránsito al socialismo», COMO NO RETORNO 2. Abarca la
revalorización de la naturaleza, el ecosistema, el hábitat comunitario,
combinado con la reutilización y reciclaje de materiales 3. Involucra lo
afectivo y la querencia por la localidad, valorando la arquitectura
tradicional, la gastronomía popular, las efemérides. 4. El territorio como
referente geo-histórico, como espacio pequeño que contiene acervos
culturales y vocación productiva. 5. Se conecta con lo endógeno, con las
internalidades como fuerzas propias, desde adentro y por dentro,
motorizando el desarrollo local 6. Se articula con la geometría del poder y
con el sistema de agregación comunal, siendo parte integral del poder
popular 7. Asume la democratización de los medios de producción, con
nuevas formas de propiedad, haciendo énfasis en la propiedad social
directa. 8. Apoya diversas formas de organización socio-productivas,
proyectos y redes encadenadas productivamente a escala comunal. 9.
Eslabonamiento del proceso, articulando la producción-procesamiento-
distribución-consumo, como una telaraña que cubre el territorio. 10. Se
construye con diagnóstico participativo centrado en el dialogo de saberes
y se operacionaliza a través de los Puntos y Círculos. 11. Tejido
productivo sustentable y diversificado donde debe injertarse la propiedad
social y el espíritu socialista. 12. Se rigen por una planificación consciente,
orientadas por cupos y pedidos, enfrentando las relaciones mercantiles y
de mercado." (Comunicadores en Accion, Ecosocialismo como Nuevo
Enfoque Socio-productivo que supera la Lógica del
Capital. www.aporrea.org 13 de septiembre 2014).

INSTITUCIONES Y ECONOMÍA VERDE

ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

La principal institución que regula o podía regular variados perfiles


asociados a la Economía Verde en Venezuela pasó a ser, desde el último
trimestre de 2014 -tal cual se indicó- el Ministerio del Poder Popular para
Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda. A finales del primer trimestre de 2015
esa función se le asigna a un nuevo ministerio denominado Ministerio de
Ecosocialismo y aguas.

En el mismo sentido de elementos de importancia para este trabajo debe


destacarse que según la Ley Orgánica de la Administración Pública
(Decreto N° 1.424, 17 de noviembre de 2014, Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela N° 6.147), en su Artículo 28: "Los
órganos y entes de la Administración Pública estarán internamente
ordenados de manera jerárquica y relacionados de conformidad con la
distribución vertical de atribuciones en niveles organizativos". También
pueden estar descentralizados o desconcentrados, funcional y
territorialmente. De acuerdo al Artículo 29 de la Ley… señalada, los entes
descentralizados con forma de derecho público estarán conformados por
aquellas personas jurídicas creadas y regidas por normas de derecho
público y tendrán atribuido el ejercicio de potestades públicas.
El Artículo 30 de dicha Ley establece el principio de descentralización
territorial: "La Administración Pública Nacional, con el propósito de
incrementar la eficiencia y eficacia de su gestión, podrá descentralizar
competencias y servicios públicos en los estados, distritos metropolitanos
y municipios, de conformidad con la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela y la ley". Así también, el Artículo 31 establece el
principio de desconcentración funcional y territorial: "La Administración
Pública, con el objetivo de acercarse a las personas y mejorar el servicio
prestado, podrá adaptar su organización a determinadas condiciones de
especialidad funcional y de particularidad territorial, transfiriendo
atribuciones de sus órganos superiores a sus órganos inferiores, mediante
acto administrativo dictado de conformidad con el presente Decreto con
Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica. (…) La desconcentración de
atribuciones sólo podrá revertirse mediante la modificación o derogación
del instrumento jurídico que le dio origen".

SACUDÓN

Mediante Decreto Presidencial N° 1.227, de fecha 03 de septiembre de


2014, publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de
Venezuela, número 40.489 –y en el contexto del Sacudón-, se ordenó la
supresión del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente y del
Ministerio del Poder Popular para Vivienda y Hábitat, y se creó el
Ministerio del Poder Popular para Vivienda, Hábitat y el Ecosocialismo,
con competencia en el ámbito de las políticas públicas del Ejecutivo
Nacional en materia de vivienda, hábitat humano, la conservación y
administración ambiental y ecosocialismo.

Por otra parte según el Artículo N° 1 del Decreto 1.293 de 03 octubre 2014
publicado en Gaceta N° 40.511, "…se modifica la denominación del
Ministerio del Poder Popular para Vivienda, Hábitat y Ecosocialismo, por
la de MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA ECOSOCIALISMO,
HÁBITAT Y VIVIENDA". Y dado el Artículo N° 3, se crean los Despachos
de Viceministros y Viceministras del Ministerio del Poder Popular para
Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda, que a continuación se mencionan:
1. El Despacho del Viceministro o de la Viceministra de Ecosocialismo
Ambiental.

2. El Despacho del Viceministro o de la Viceministra de Ecosocialismo en


Vivienda.

3. El Despacho del Viceministro o de la Viceministra de Gestión


Ecosocialista de Aguas.

4. El Despacho del Viceministro o de la Viceministra de Gestión


Ecosocialista en Supervisión y Seguimiento de Obras.

5. El Despacho del Viceministro o de la Viceministra de Manejo


Ecosocialista de Desechos y Residuos.

Según el Artículo N° 4, el Despacho del Viceministro o Viceministra de


Ecosocialismo Ambiental, tendrá las siguientes atribuciones:

 Desarrollar e implementar lo concerniente a la planificación, gestión,


protección, vigilancia y control ambiental con visión ecosocialista.

 Planificar políticas para la protección y manejo de la diversidad


biológica.

 Establecer alianzas estratégicas nacionales e internacionales en materia


ambiental y ecosocialista.

 Fomentar actividades tendentes a la conservación de los recursos


naturales del Ambiente.

Siguiendo al Artículo N° 6, el Despacho del Viceministro o Viceministra


de Gestión Ecosocialista de Aguas, tendrá las siguientes atribuciones:

 Desarrollar e implementar políticas y planes sectoriales en materia de


aguas.

 Diseñar, construir, operar y mantener las obras de captación,


tratamiento y distribución de agua potable, aguas servidas, de
saneamiento ambiental y de embalses.
 Establecer alianzas estratégicas, nacionales e internacionales en
materia de agua.

 Generar políticas de evaluación y gestión de las empresas prestadoras


de servicio hidrológico, regionales y nacionales, en el marco del
desarrollo armónico, con respeto por la naturaleza y las prácticas
ecosocialistas.

El Artículo N° 7 establece que el Despacho del Viceministro o


Viceministra de Gestión Ecosocialista en Supervisión y Seguimiento de
Obras, tendrá las siguientes atribuciones:

 Diseñar las políticas para el control y seguimiento de la ejecución de


obras en materia de equipamiento ambiental.

 Generar políticas y lineamientos para la captación, tratamiento y


distribución de agua potable; de aguas servidas; de saneamiento
ambiental y de embalses, de urbanismos de vivienda y de
equipamiento urbano, que adelanten los entes adscritos responsables
de llevarlas a cabo.

 Elaborar el Plan de Evaluación y Supervisión de las Obras.

 Establecer alianzas estratégicas, nacionales e internacionales para el


seguimiento y control de obras en materia ambiental, hábitat y
vivienda.

Siguiendo al Artículo N° 8, el Despacho del Viceministro o Viceministra


de Manejo Ecosocialista de Desechos y Residuos, tendrá las siguientes
atribuciones:

 Formular políticas y planes sectoriales para el manejo integral de


residuos y desechos domésticos, industriales, agropecuarios y
hospitalarios.

 Formular políticas para el diseño, construcción, operación y


mantenimiento de obras y/o equipos de recolección, transporte,
procesamiento o tratamiento, reciclaje o disposición de residuos.
 Establecer alianzas estratégicas, nacionales e internacionales en
materia de residuos y desechos.

 Generar políticas de evaluación y gestión de las empresas prestadoras


de servicio estadales, municipales y comunales, en el marco del
desarrollo armónico, con respeto por la naturaleza y las prácticas
ecosocialistas.

Con la creación de estos Despachos de Viceministros, como los de


Ecosocialismo Ambiental, Ecosocialismo en Vivienda, Gestión
Ecosocialista de Aguas, Gestión Ecosocialista en Supervisión y
Seguimiento de Obras y Manejo Ecosocialista de Desechos y Residuos, se
fomenta la desconcentración funcional del Ministerio del Poder Popular
para Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda, para así poder ejercer más
eficientemente sus funciones en materia de conservación del ambiente y
Economía Verde.

La desconcentración funcional y territorial se da también a través de una


serie de entes adscritos a este Ministerio del Poder Popular con
competencia en Economía Verde, entre los cuales destacan los siguientes:

 Compañía Nacional de Reforestación (CONARE). Empresa del Estado


que se encarga de atender y/o ejecutar requerimientos que le formulen
organismos públicos nacionales o regionales, organizaciones
industriales, empresas, compañías, asociaciones, misiones,
cooperativas, y cualquiera otra organización o personas interesadas en
la recuperación ambiental de los espacios degradados o en proceso de
degradación.

 Fundación de Educación Ambiental (FUNDAMBIENTE). Tiene como


objetivos: desarrollar programas educativos ambientales, con miras a
la concienciación del ser en la sociedad socialista, la participación
protagónica y la inclusión social; así como, crear espacios y formas de
participación directa y activa para afianzar la responsabilidad social
de la empresa pública, como la privada, para la generación de fondos
que apoyen la conservación ambiental.

 Instituto Nacional de Parques (INPARQUES).


 Instituto para el Control y la Conservación de la Cuenca del Lago de
Maracaibo (ICLAM). Ente nacional designado por el estado
venezolano para ejecutar las funciones de promoción, planificación,
programación, coordinación y evaluación de las acciones necesarias
para mejorar, preservar y controlar la vida de este sistema natural.

 Laboratorio Nacional de Hidraúlica (LNH). Institución que tiene como


misión apoyar al Estado en el aprovechamiento racional y manejo
soberano del recurso agua realizando estudios y proyectos,
convencionales y no convencionales, de Ingeniería Hidraúlica y
Sanitaria.

Por otro lado, no es sólo la Administración Pública Nacional la que le


compete atender la Economía Verde, sino también a la Administración
Pública Estadal y Municipal, así como al poder popular organizado en
comunas; pues, a través de la descentralización funcional y territorial se le
da poder a las instancias locales, para que resuelvan de forma más
eficiente y efectiva los problemas con respecto a la contaminación y a la
preservación del ambiente, dado que las instancias locales son las que
mejor conocen sus dificultades. Por supuesto, que tanto en los casos de
desconcentración funcional y territorial dentro del Ministerio del Poder
Popular para Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda, como de
descentralización funcional y territorial del Poder Público, la asignación
de funciones debe estar en consonancia con los lineamientos establecidos
por la Administración Pública Central, en correspondencia con el Plan de
la Patria, Segundo Plan Socialista de Desarrollo Económico y Social de la
Nación 2013-2019 (Gaceta Oficial de la República Bolivariana de
Venezuela N° 6.118, 4 de diciembre de 2013) y la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela (1999).

PLAN DE LA PATRIA (SEGUNDO PLAN SOCIALISTA DE


DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL DE LA NACIÓN 2013-2019).

El Gran Objetivo Histórico N° 2 del Plan de la Patria es "continuar


construyendo el socialismo bolivariano del siglo XXI, en Venezuela, como
alternativa al sistema destructivo y salvaje del capitalismo (…)". Se
vislumbra la idea de Ecosocialismo, es decir, producir para garantizar la
mayor suma de igualdad posible sin dañar el ambiente. Mientras que el
Gran Objetivo Histórico N° 5 del Plan de la Patria trata de la preservación
de la especie humana y el ambiente: "Contribuir con la preservación de la
vida en el planeta y la salvación de la especie humana".

Por su parte, desagregaciones del Gran Objetivo Histórico N° 5 permiten


precisar El Objetivo Nacional 5.1 que hace referencia directa al
Ecosocialismo: "Construir e impulsar el modelo económico productivo
eco-socialista, basado en una relación armónica entre el hombre y la
naturaleza, que garantice el uso y aprovechamiento racional, óptimo y
sostenible de los recursos naturales, respetando los procesos y ciclos de la
naturaleza". Por otra parte, el Objetivo Nacional 5.4 hace referencia al
impulso de la Economía Verde a nivel internacional a través de los
movimientos ecológicos y señala que hay que "contribuir a la
conformación de un gran movimiento mundial para contener las causas y
reparar los efectos de cambio climático que ocurren como consecuencia
del modelo capitalista depredador".

Por otra parte, en el Plan de la Patria 2013-2019 pueden ubicarse políticas


y programas para el sector ambiente, conservación y ordenación
territorial, entre las que pueden destacarse las siguientes:

Política:

1. Asegurar una gestión del agua partiendo de las cuencas hidrográficas


como unidades de gestión, con el objetivo de satisfacer las necesidades
humanas, ecológicas y la demanda generada por los procesos productivos
del país.

Programas:

-Promover la recuperación de los cuerpos de agua y suelos en las cuencas


de nueve regiones hidrográficas.

-Mantener actualizado el inventario de disponibilidad y demanda de


agua superficial y subterránea en las cuencas hidrográficas, tanto en
calidad como en cantidad.
-Generar la información básica ambiental, la cartografía y el catastro, para
la gestión integral de las cuencas.

-Promover el desarrollo social integral y su interrelación con el cambio


climático en diferentes cuencas a nivel nacional.

-Elaboración de planes de gestión integral de las aguas en las regiones y


cuencas hidrográficas, con la participación de las comunidades.

Política:

2. Garantizar una ordenación y gestión soberana del territorio que oriente


una organización socio-territorial ecológica y socialmente sustentable.

Programas:

-Ordenación del territorio sobre la base de sustentabilidad ecológica y la


equidad socio territorial, mediante la participación del poder popular.

-Sistema de observación territorial para la evaluación y seguimiento de


las condiciones ambientales y la dinámica de la ocupación del territorio.

Política:

3. Profundizar la acción educativa y comunicacional en todos los ámbitos


de la vida nacional, en función del fortalecimiento de una conciencia
crítica y acción transformadora que contribuyan a la preservación de la
vida en el planeta.

Política:

4. Asegurar un ambiente sano mediante el manejo adecuado de los


residuos, desechos sólidos, materiales y desechos peligrosos.

Programas:

-Asistencia técnica a la formulación y aplicación de planes para el manejo


de los residuos, desechos sólidos, materiales y desechos peligrosos.

-Participación de la comunidad organizada para el manejo de los residuos


y desechos sólidos.
-Participación y articulación de los diferentes niveles de gobierno, en la
gestión integral de los residuos, desechos sólidos, materiales y desechos
peligrosos.

En los conceptos de la Administración Bolivariana las políticas pasan por


tres fases fundamentales para que puedan tener éxito: diseño, ejecución y
control. Muchas políticas fracasan porque se quedan en el papel y nunca
se ejecutan efectivamente, y para ello hace falta el control ciudadano para
garantizar y exigir su cumplimiento; es por ello, que el Estado venezolano
con la Constitución de 1999 impulsa la democracia participativa y
protagónica, es decir, el ejercicio directo de la democracia a través del
Poder Popular, en donde el pueblo organizado puede participar
políticamente y resolver los asuntos que le atañen, no sólo al momento de
votar o de un referéndum revocatorio, sino permanentemente a través de
la comunas, así como ejercer funciones de contraloría.

CONSTITUCIÓN

Por último, en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela


(1999) (Gaceta Oficial Extraordinaria N° 5.453, de fecha 24 de marzo de
2000), el capítulo IX hace referencia a los Derechos Ambientales. Y en el
Artículo 127 se establece lo siguiente: "Es un derecho y un deber de cada
generación proteger y mantener el ambiente en beneficio de sí misma y
del mundo futuro. Toda persona tiene derecho individual y
colectivamente a disfrutar de una vida y de un ambiente seguro, sano y
ecológicamente equilibrado. El Estado protegerá al ambiente, la
diversidad biológica, los recursos genéticos, los procesos ecológicos, los
parques nacionales y monumentos naturales y demás áreas de especial
importancia ecológica.(…) Es una obligación fundamental del Estado, con
la activa participación de la sociedad, garantizar que la población se
desenvuelva en un ambiente libre de contaminación, en donde el aire, el
agua, los suelos, las costas, el clima, la capa de ozono, las especies vivas,
sean especialmente protegidos, de conformidad con la ley".

En el Artículo 128 por otra parte se destaca que "El Estado desarrollará
una política de ordenación del territorio atendiendo a las realidades
ecológicas, geográficas, poblacionales, sociales, culturales, económicas,
políticas, de acuerdo con las premisas del desarrollo sustentable, que
incluya la información, consulta y participación ciudadana". De esta
forma, la protección del ambiente compete principalmente al Estado, pero
también a la sociedad y a las empresas –a través de la responsabilidad
medioambiental-, y aquel exige su cumplimiento.

Para fomentar la Economía Verde en Venezuela, es necesaria una


solución al problema habitacional con respecto a las zonas marginales
urbanas y rurales, que tanto contaminan al ambiente y causan daños a la
población. De la misma manera, es vital impulsar una política de
desarrollo local, para que así se logre que la población trabaje y estudie
cerca de donde vive, así como unas condiciones óptimas de vivienda y
hábitat.

En el Artículo 129 de la Constitución se destaca lo siguiente con respecto


a los intereses pertinentes de una Economía Verde: "Todas las actividades
susceptibles de generar daños a los ecosistemas deben ser previamente
acompañadas de estudios de impacto ambiental y sociocultural. El Estado
impedirá la entrada al país de desechos tóxicos y peligrosos, así como la
fabricación y uso de armas nucleares, químicas y biológicas. (…) En los
contratos que la República celebre con personas naturales o jurídicas,
nacionales o extranjeras, o en los permisos que se otorguen, que afecten
los recursos naturales, se considerará incluida, aun cuando no estuviera
expresa, la obligación de conservar el equilibrio ecológico, de permitir el
acceso a la tecnología y la transferencia de la misma en condiciones
mutuamente convenidas y de restablecer el ambiente a su estado natural
si éste resultare alterado, en los términos que fije la ley".

En consecuencia, la transferencia tecnológica que realicen empresas


extranjeras por la vía de inversión extranjera directa, así como los
procesos productivos, no pueden estar en conflicto con la preservación
del ambiente. Los mismos son elementos altamente vinculados con los
intereses del concepto de Economía Verde: producir sin dañar al planeta.

IV. EVOLUCIÓN DE LA PROBLEMÁTICA ECONÓMICO AMBIENTAL


VENEZOLANA

PRINCIPALES PROBLEMAS AMBIENTALES DE 2012


Se presenta a continuación un grupo de los 15 principales problemas
ambientales identificados por VITALIS (Situación Ambiental de
Venezuela 2012. Análisis de Percepción del Sector. 2013. www.vitalis.net)
de un total de 65, ordenados de mayor a menor importancia, de acuerdo
con la frecuencia y coincidencia en su mención por parte de especialistas
consultados por dicha organización. Algunos de los problemas citados
están relacionados entre sí, sin embargo, en algunos casos se mantiene su
mención autónoma, para facilitar su análisis y comprensión y los cuales
trascienden la escala temporal del año 2012. Es de señalar que en las
primeras posiciones aparecen los que tienen que ver con contaminación
en variados ámbitos, agua y manejo de desechos sólidos que son dentro
de nuestro interés altamente significativos, independientemente de la
también muy alta significación que tienen otros.

De acuerdo a lo señalado, los principales problemas ambientales del año


2012 según VITALIS fueron:

1. Débil gestión de los recursos hídricos, en la cuenca del Lago de


Valencia, embalses de Maticora (Falcón) y la Mariposa (Miranda), e
inadecuado manejo de aguas servidas y residuales que contaminan las
fuentes de agua superficiales y subterráneas, dañan el paisaje, y
comprometen los atributos físico-químicos y naturales de ríos, riachuelos,
lagunas, lagos y playas a nivel nacional. Se suma el limitado tratamiento
y acceso al agua potable.

2. Incremento en la contaminación atmosférica en los centros urbanos, por


emisiones de fuentes móviles, teniendo sistemas de supervisión y control
que se han debilitado. En un contexto de congestionamiento vehicular y
falta de planes de transporte público eficiente y no contaminante. El
parque automotor de transporte colectivo, tiene un promedio de
operación de 15 años.

3. Inapropiado manejo de los residuos y desechos sólidos (principalmente


domésticos), tanto desde la fuente como en los sistemas de transporte,
tratamiento y/o disposición final, en particular en las grandes ciudades.
Numerosos vertederos y botaderos proliferan en el país.
4. Vertidos de hidrocarburos a cuerpos de agua (derrame en el Río
Guarapiche, estado Monagas; comunidad Guepe, sur del estado
Anzoátegui). En 2011 ocurrieron 4.052 derrames, entre hidrocarburos y
otras sustancias químicas. Se trata de un incremento de 69,33% con
respecto a los 2.393 derrames registrados en el 2010.

5. Mal manejo de árboles en las principales ciudades del país, incluyendo


podas inapropiadas, enfermedades, stress hídrico o exposición a agentes
contaminantes atmosféricos.

6. Derroche de agua y energía eléctrica por la ciudadanía. Los esfuerzos


educativos, informativos, y coercitivos, no brindan los resultados
esperados.

7. Desatención de especies domésticas en control veterinario y retiro de


animales atropellados en calles, avenidas y autopistas. La Ley de
Animales Domésticos se aplica poco y no es conocida.

8. Pocos esfuerzos en educación ambiental, para formar valores a la


ciudadanía y promover modos en favor de un ambiente sano y
equilibrado. Muchas de las iniciativas en el período evaluado se articulan
más en campañas publicitarias que educativas (VITALIS. Ídem… 2013).

9. La basura electoral representa un problema, dado el poco compromiso


por parte de las diferentes opciones partidistas para su recolección. Se
afectan las áreas públicas con grafitis, murales, pendones y afiches.

10. La basura proveniente de la promoción de espectáculos, también ha


incrementado el deterioro del panorama urbano.

11. Anarquía en el subsector de motos con emisiones atmosféricas y


sonoras sin control, incluyendo el uso incorrecto de vías, contribuyendo
al caos vehicular, irrespeto a las normas e interrelacionándose con la
delincuencia.

12. Carencia de planes y estrategias que permitan generar mecanismos


para mermar los impactos del cambio climático y promover medidas de
adaptación.
13. Pocos esfuerzos en la planificación y conservación de áreas
protegidas, cuyos planes de ordenamiento y manejo se encuentran
desactualizados.

14. Amenaza de los Parques Nacionales con proyectos urbanísticos, como


fue el caso del P.N. Los Médanos-Falcón (se dio la valiente negación de
los funcionarios medios de INPARQUES).

15. Debilitamiento de la función de guardería ambiental, para controlar -


entre otros aspectos- el comercio ilegal de flora y fauna en carreteras y
ciudades, la ocupación de áreas protegidas y el desarrollo de proyectos
urbanísticos sin evaluaciones de impacto ambiental (VITALIS. Ídem…
2013).

UN ENFOQUE DESDE LA PERSPECTIVA DE LA EDUCACIÓN,


DISPOSICIÓN AMBIENTAL Y EL ECOSOCIALISMO.

Presentamos a continuación un enfoque sobre 10 problemas ambientales


de Venezuela, el cual insiste en la actitud y disposición del individuo así
como en el optimismo que acarrea la visión del ecosocialismo según
interpretación de algunos analistas (Carlos Fermín. Los 10 problemas
socio-ambientales de Venezuela www.aporrea.org. Lunes, 22/09/2014.)

El primer problema la falta de Cultura de Reciclaje. Se encuentran


abundantes desechos sólidos que los ciudadanos lanzan en calles y
lugares diversos (empaques de frituras, latas, pañales desechables, discos
compactos, cajas, entre otros).

El segundo problema, el excesivo consumo eléctrico que colide con una


voluntaria eficiencia energética, existan apagones o no los haya.

El tercer problema, el mal uso del agua potable al no existir cultura de


ahorro de la misma. Se trata del agua potable y de los cuerpos de agua
dulce y salada afectados por la indolencia ambiental. Se tiene así la
contaminación del Lago de Maracaibo y Valencia, Laguna de Píritu y
Sinamaica, y ríos Guaire, Chama, Tocuyo, Manzanares y Motatán. Basura
doméstica e industrial, fugas de hidrocarburos, escombros de
construcciones urbanísticas están en la base de tal situación.
El cuarto problema, la contaminación sonora. El ciudadano común se
acostumbra a la bocina de los camiones, corneteo de vehículos, música
con alto volumen y ruido de motocicletas.

El quinto problema, la contaminación del aire asociada a la


industrialización y desarrollo del sector productivo. No se controlan
emisiones de gases que conllevan a la polución del ambiente, y que
ocasionan enfermedades respiratorias.

El sexto problema, engloba al maltrato animal en eventos como las


Corridas de Toros, que no guardan relación con el Ecosocialismo. Este
incluye el respeto por la diversidad biológica y los derechos de los
animales.

El séptimo problema, la contaminación visual de espacios naturales.


Afiches, pancartas, carteles luminosos y vallas publicitarias, conforman la
basura visual.

El octavo problema, la amenaza de los mega proyectos extractivos en el


territorio venezolano, asociados a derrames petroleros en el Lago de
Maracaibo y campamentos de minería ilegal en zonas rurales y boscosas
de los estados Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro. La búsqueda de oro,
plata y diamante, está coligada a los esfuerzos para poder pagar el
oneroso tráfico de combustible.

El noveno problema, la deforestación urbana. Maracaibo, se ha


convertido en emblema de esta afectación ambiental. Más de 850 árboles
fueron arrancados de avenidas, creando un foco de deforestación masiva.
Durante 2014 se afectó los embalses de Tulé, Manuelote y Tres Ríos; Igual
la deforestación sedimenta la represa de Burro Negro y trastoca la Sierra
de Perijá, por cultivos de malanga, desmontes, incendios forestales y
obtención ilícita de madera. Afectación de áreas verdes por piques de
fango, rustiqueo y tunning así como por las carreras "Fun Race 4x4", que
afectaron el paisaje natural de la Gran Sabana. La normativa legal que los
prohíbe no ha evitado el daño ambiental extendido a los Médanos de
Coro, Río Cinaruco, y Parque Nacional Morrocoy. Se contratan terrenos
privados (haciendas, fincas, granjas), para llevar a cabo el deporte
extremo.
El décimo problema, la indiferencia ecológica que denota la existencia de
los venezolanos.

La obligatoriedad de impartir la Educación Ambiental en los colegios


públicos y privados, es fundamental para replantear el destino
conservacionista de la Sociedad Moderna. Las Brigadas Integrales
Comunitarias y los Guardianes del Agua, deben seguir masificando el
mensaje Ecosocialista en Venezuela. El ministerio Vivienda, Hábitat y
Ecosocialismo, puede influir en un desarrollo que no excluya las variables
ambientales en el modo de vida que conllevan los venezolanos. Los
desafíos en materia ambiental, deben ser el preludio de iniciativas verdes,
que ponderen el uso de energías renovables (eólica, solar, geotérmica)
para diversificar el marco energético, se construyan más viviendas dignas
con los necesarios Estudios de Impacto Ambiental (EIA), y se impulse la
Agro-ecología en los campos venezolanos, buscando consolidar una
verdadera línea Ecosocialista (Carlos Fermín… Ídem).

Como queda evidente esta interpretación de los problemas ambientales,


es altamente optimista en las políticas e instituciones asociadas a la
administración bolivariana y al Ecosocialismo. Parte, sin embargo, de un
conjunto de críticas muy asociadas al desempeño individual y grupal,
cuyas raíces se encuentran en la sociedad de consumo, el individualismo
y en última instancia el Ecocapitalismo.

LA PERSPECTIVA DE TRES PROBLEMAS FUNDAMENTALES

En el desarrollo y dinámica de estos tres problemas que se resaltan, se


observa la alta influencia de la falta de conciencia ciudadana en los
cuidados ambientales, la impunidad derivada de la falta de
procesamiento de casos y sanciones más que de la ausencia de leyes y la
ausencia de acciones gubernamentales focalizadas para la solución de los
problemas.

IMPACTOS GENERADOS POR LA EXTRACCIÓN DE PETRÓLEO Y LA


CONTAMINACIÓN DEL AIRE

En el caso de la explotación petrolera, sus marcas están en la zona de


producción y a lo largo de los procesos de transporte, refinación y
distribución. El acceso a recursos económicos por parte de los gobiernos
venezolanos y la persistencia de una economía basada en combustibles
baratos, han generado una cultura de derroche, consumo incontrolado,
desvalorización de la naturaleza y falta de previsión, generándose a su
vez impactos en contaminación de aire, suelos y aguas, altos volúmenes
de desechos sólidos, despilfarro de energía y recursos (Ver La visión de la
Red ARA. APORTES PARA UN DIAGNÓSTICO DE LA
PROBLEMÁTICA AMBIENTAL DE VENEZUELA. Mayo 2011.
http://red‐ara‐venezuela.blogspot.com).

En este tema, algunos de los problemas más importantes que se detectan


para ARA son: 1. Deterioro de ecosistemas sensibles en la Faja Petrolífera
del Orinoco y Lago de Maracaibo, resultado de continuos derrames y
fugas. 2. Contaminación por metales pesados en la Costa Oriental del
Lago de Maracaibo. 3. Pérdida de suelos y procesos erosivos en las zonas
en exploración y producción en la Faja Petrolífera del Orinoco. 4.
Presencia de pasivos ambientales, incluyendo fosas con residuos
petroleros con riesgo de desborde y lixiviación. 5. Fallas en el manejo de
subproductos del proceso de refinación (principalmente azufre y coque),
generan contaminación de agua, aire y suelos. 6. Altos valores en las
emisiones de CO2, SO2 y NOx en procesos de refinación y mejoramiento.

Adicionalmente, los entrevistados por ARA alertaron sobre los enormes


riesgos ambientales y sociales asociados al desarrollo de megaproyectos
petroleros y gasíferos, en los cuales no se tiene información sobre criterios
ambientales y socioculturales a ser aplicados. Entre esos: 1. Expansión en
la Faja Petrolera del Orinoco, la cual afectará un área de 55 mil Km2 al sur
de los estados Monagas, Anzoátegui y Guárico. 2. Complejo gasífero
Gran Mariscal de Ayacucho (Proyecto CIGMA) en Güiria, estado Sucre. 3.
Complejo Petroquímico de Paraguaná. 4. Proyecto Gasífero Rafael
Urdaneta (costas de Zulia y Falcón).

En relación con la situación planteada, los siguientes datos refuerzan lo


señalado: 1. La actividad petrolera ha acumulado enormes pasivos
ambientales, incluyendo: 10.269 fosas, 120 mil metros cúbicos de desechos
peligrosos, 533 mil de lodos y 2.353 instalaciones abandonadas. 2.
Petróleos de Venezuela (PDVSA) estima en más de 1.500 millones de
dólares los montos de los pasivos ambientales acumulados por esta
empresa (La visión de la Red ARA… Ídem).

Altamente vinculado con la producción y consumo de hidrocarburos así


como con un patrón de desarrollo que estimula y mantiene la producción
y el rentismo petrolero como elemento fundamental, se encuentra lo
concerniente a la contaminación del aire. Presenta cuatro causas
principales: 1. Emisiones de vehículos automotores. 2. Quema de basura.
3. Incendios de vegetación. 4. Emisiones de instalaciones industriales.
Existe poca información sobre los niveles que alcanza tal contaminación y
los pocos datos existentes, muestran gráficos anualizados de los valores
de material particulado suspendido en el aire en las ciudades del país y
emisiones de dióxido de carbono a nivel nacional. No hay datos sobre
niveles de contaminación por zonas y períodos de tiempo, para conocer
los niveles de exposición de la población a contaminantes como
monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno, óxidos de azufre y ozono; así
como tampoco muestreos sobre la calidad de aire de las ciudades o en
áreas cercanas a cementeras, petroquímicas, canteras, siderúrgicas,
espacios cercanos a botaderos de basura o áreas sometidas a fumigación
permanente. En ausencia de esta información, no es posible determinar el
efecto negativo de la exposición a esos contaminantes, ni fundamentar
decisiones para controlar las repercusiones por la presencia de los
mismos en el ambiente.

Estas situaciones se ven reflejadas en los siguientes datos: 1. En estudio


realizado en el año 2000 en el municipio Baruta del estado Miranda se
encontró que el tránsito automotor y las emisiones a partir de fuentes
domiciliarias y comerciales son los mayores contribuyentes a la
contaminación por dióxido de carbono. 2. Según el Instituto Nacional de
Tránsito y Transporte Terrestre (INTTT), el parque automotor de
Venezuela es de 5.350.000 unidades, de los cuales 2,2 millones de
vehículos transitan en Caracas. 3. La quema de desechos domésticos,
comerciales e industriales con presencia de plásticos, genera dioxinas y
furanos (compuestos altamente tóxicos) (La visión de la Red ARA…
Ídem).
En el caso del tránsito automotor se ha propuesto la llamada
chatarrización que consiste en sacar de circulación numerosos vehículos
de transporte público (rapiditos en Barquisimeto, taxis en Caracas) que
contribuyen a la contaminación y, además, afean las ciudades y generan
episodios de incertidumbre para otros vehículos. Lo barato de la gasolina,
la falta de supervisión, la permisividad para el desarrollo de formas de
economía informal, la inexistencia de un sistema transporte público más
articulado y la inseguridad –entre otros elementos- se encuentran entre
los determinantes de la existencia de estos vehículos y de la relativa
masificación del uso del auto privado en la vida diaria de ciudades
venezolanas (puede verse www.elimpulso.com 18 de noviembre 2013).

Debe señalarse que Venezuela ocupa el cuarto lugar entre los países más
afectados por contaminación del aire en América Latina. La región tiene a
México, como el país más contaminado, con una contaminación en el aire
de 79 microgramos por metro cúbico (ug/m3), según datos del Banco
Interamericano de Desarrollo (la cifra considerada normal es 10
microgramos por metro cúbico, y se considera cualquiera superior como
aire contaminado). Le siguen Chile (64 ug/m3), Perú (63 ug/m3),
Venezuela (47 ug/m3), Guatemala (45 ug/m3), Colombia (43 ug/m3),
Brasil (41 ug/m3), Ecuador (38 ug/m3), Costa Rica (31 ug/m3) y Argentina
(30 ug/m3) (ver http://www.economiahoy.mx/ 25/09/2014).

En este contexto de problemas asociados a la producción petrolera,


energía, transporte y contaminación del aire pueden destacarse las
recomendaciones contenidas en el trabajo de VITALIS (VITALIS. Ídem…
2013) ya referido.

- Continuar los programas de ahorro energético, con la creación de mesas


técnicas que permitan a los ciudadanos expresar ideas y llegar a
consensos, incluyendo a los sectores productivo, académico, ONG y
medios de comunicación social.

- Impulsar el uso de energías alternativas o verdes, disminuyendo el uso


de sistemas basados en combustibles fósiles. Evitar el uso de la energía
nuclear, que aunque limpia, sus residuos y desechos requieren estrictos
controles.
- Mejorar condiciones del transporte público. El parque automotor tiene
en promedio 15 años, y numerosos vehículos no cuentan con los sistemas
de mantenimiento apropiados.

- Promover la creación y desarrollo de sistemas masivos de transporte


impulsados por energías limpias.

- Evaluar alternativas para descongestionar el tráfico de las ciudades,


mediante el establecimiento de canales de flujo y contra flujo y planes de
día de parada.

- Continuar y fortalecer el programa de reconversión vehicular a gas,


masificando los sistemas de distribución, que son escasos en las
principales ciudades (VITALIS. Ídem… 2013).

Por último, señalamos soluciones que para lo que hemos ubicado como el
primer problema, derivan de la óptica de las instituciones públicas. Para
ellos nos beneficiamos del hecho de que para la realización de este trabajo
tuvimos contacto con instancias superiores del Ministerio del Poder
Popular de Transporte Terrestre y Obras Públicas buscando ordenar
precisiones atinentes a las políticas y alternativas que el escenario
nacional de la administración bolivariana le presenta al país, en cuanto a
los retos y adaptabilidad atinentes al cambio climático en el campo
específico del tránsito terrestre que se mantiene en base al consumo de
energía fósil –y de manera fundamental gasolina- considerablemente
barata según los parámetros del mercado internacional. Adicionalmente
debe entenderse que el escenario del transporte nacional ha estado
asociado al uso categórico del auto privado y que implica grosso modo
un 80% de desplazamiento en transporte privado y 20% en público. E
igualmente debe resaltarse como una característica de la flota de
transporte público terrestre el carácter viejo de las unidades que de
manera frecuente superan los 15 años.

En tales sentidos en los contactos desarrollados durante el mes de marzo


de 2015 no se perfilaron mayores perspectivas de cambio en cuanto a
transporte y uso de energías alternas. Por su parte la reestructuración del
transporte público parte de un conjunto de lineamientos que de seguidas
resumimos. En primer lugar, se buscaría fortalecer el sistema de
transporte a gas (que aunque energía fósil es menos contaminante). Para
ello se han instrumentado dentro de la administración bolivariana la
compra de autobuses chinos a gas en un número de 4.500 así como la
traída/producción de 20000 taxis también chinos híbridos (gasolina y gas).
En segundo lugar, se estipula que el sistema de transporte público en
Venezuela no es rentable y los precios que cobra deberían ser
considerablemente más altos. En tercer lugar, se estipula que la solución o
guía de restructuración del transporte público venezolano debe partir de
líneas de organización en base a una troncal básico (tren, metro u otro
tipo) al cual se articulen líneas de autobuses tal cual se han estructurado
en ciudades como Bogotá (Transmilenio), Lima (Metropolitana) o
Santiago de Chile aprovechando la participación del sector público y
privado en conjunto. En cuarto lugar, pueden también instrumentarse
mecanismos de modernización de flotas, vía implementación de procesos
de chatarrización en el sentido de facilitar el desprendimiento de parte de
propietarios de unidades muy viejas o deterioradas –tal cual se señaló
más arriba-. Dadas las condiciones del mercado en Venezuela, sobre todo
a medida que se complejizó el panorama económico con aumento de la
inflación, escasez y desinversión a partir de 2012 – en lo visto hasta
avanzado el primer semestre de 2015- y se han observado dificultados en
ejecutar medidas de este tipo en un contexto de distorsión de precios
relativos. En quinto lugar, y en lo visto en más de 15 años de
administración bolivariana no se han ordenado políticas atinentes a
interese o desarrollos del carro eléctrico, híbrido (fósil y eléctrico),
biodiesel o hidrógeno.

CONTAMINACIÓN DEL AGUA Y SUS EFECTOS SOBRE LA SALUD


HUMANA.

En Venezuela, el problema de contaminación del agua es de viejo tiempo.


Los problemas se han acrecentado por la creación de concentraciones
industriales –aunque disminuidas en la actualidad por variadas razones-,
desarrollos urbanos y turísticos a las orillas de importantes cuerpos de
agua. Tales son los casos como la cuenca del lago de Valencia, el lago de
Maracaibo, la cuenca baja de los ríos Orinoco y del Caroní, costas de
Golfo Triste, costas del estado Anzoátegui (principalmente entre el
Complejo Petroquímico José Antonio Anzoátegui -Jose- y el terminal de
Guaraguao), costas al norte de la isla de Margarita, costa occidental de
Paraguaná en Falcón, y la cuenca del río Tuy (La visión de la Red ARA…
Ídem).

Las zonas alteradas, son captadoras o reservorios de agua utilizada para


consumo humano y agrícola. De esta manera se va deteriorando cada vez
más la calidad de las aguas y su consumo presenta riesgos para la salud.
En el año 2001, la administración bolivariana declaró al "sistema hídrico
nacional como una emergencia de atención fundamental" y alentó al
Ejecutivo Nacional a diseñar "un plan estratégico nacional para el
saneamiento de acueductos de todo el país", "en un plazo no mayor de
diez años".

Los siguientes datos ilustran lo indicado:

-Sólo 14,4% (350) de las fuentes emisoras (efluentes industriales) poseen


sistema de tratamiento y sólo 32% de las aguas residuales en Venezuela lo
reciben. Se han medido valores altos de contaminación en aguas
continentales y costeras como consecuencia de la descarga de aguas
servidas no tratadas, aguas de escorrentía de zonas agrícolas y emisiones
industriales. Se aprecia que el consumo diario de lubricantes y grasas
para vehículos es de 4 mil 500 barriles. En años recientes el Ministerio del
Poder Popular para el Ambiente (MPPA) evaluó técnicas para reutilizar
estos aceites, pero no se conocen resultados de ello.

-Los resultados de las evaluaciones (MPPA) de calidad de agua indican


que las aguas del río Tocuyo y el lago de Maracaibo se consideran
regulares; en los casos de del río Yaracuy, lago de Valencia y Maracaibo,
malas y el río Tuy muy mala.

-El lago de Valencia es afectado por descargas de aguas servidas de


origen doméstico e industrial y en menor razón por actividades
agropecuarias.

-Organizaciones e investigadores han denunciado la baja calidad del agua


para consumo humano en el estado Carabobo (presencia de sustancias
peligrosas en concentraciones tóxicas en las tuberías) (La visión de la Red
ARA… Ídem).

Lo dramático de la situación en el estado Carabobo está en la base de las


actividades del Movimiento por la Calidad del Agua. Desde la
potabilizadora que sirve al área metropolitana de Valencia, se precisan
datos para abril, mayo y junio de 2014, donde cada mes supera en
situación problemática al anterior: turbiedad de 5,9, de 8,2 y de 12,7 (5
unidades son el límite); aluminio disuelto en cada litro a razón de 0,16, de
0,58 y de 0,78 (la norma venezolana limita en 0,20 miligramos); cloro libre,
para desinfectar, que debería oscilar en torno a 1 miligramo por litro, pero
que viene en caída libre con 0,8 en abril, 0,1 en mayo y el inusual 0,0 de
junio. Debe señalarse que esta es una agudización de una situación
altamente problemática sobre la cual se viene insistiendo cinco años atrás
de 2014 y que el movimiento ha planteado a distintos agentes sociales y
políticos para que "Hagan de ésta una causa común, de máxima prioridad
para la sustentabilidad presente y futura de Valencia y la salud pública de
sus ciudadanos"
(http://movimientoporlacalidaddelagua.blogspot.com/ Domingo, 13 de
julio de 2014). Debe señalarse que el caso del lago de Valencia ha estado
relacionado con el nombramiento de una Autoridad Única (Gaceta Oficial
Nº 38.134 de fecha 24 de febrero del año 2005) junto a la declaración de
emergencia y a que muchas discusiones hayan caído en calificativos de
ecocidio e incluso genocidio, con culpas a unas u otras administraciones o
grupos políticos, así como haber implicado el uso o mal uso de millones
de Bs F. y dólares solicitados a organismos internacionales (BID, CAF)
(http://elvenezolanonews.com/ 3 de abril 2014).

Las siguientes son las recomendaciones extraídas de VITALIS (VITALIS.


Ídem… 2013).

- Elaborar y promulgar el reglamento a la Ley de Aguas, basado en una


amplia consulta a todos los sectores de la sociedad venezolana.

- Impulsar la construcción de plantas de tratamiento de aguas servidas a


nivel municipal, para disminuir el impacto que las aguas residuales
ocasionan sobre los distintos cuerpos de agua. Los esfuerzos adelantados
por las autoridades a nivel nacional son insuficientes.

- Desarrollar programas técnicos de control de la calidad de los cuerpos


de agua, pues los mismos se concentran en las playas y balnearios de ríos
y lagos, y en temporadas vacacionales.

- Promover la gestión integrada de los recursos hídricos, a fin de


sistematizar el desarrollo, asignación y monitoreo del uso del agua, dados
objetivos sociales, económicos y ambientales.

- Fortalecer el manejo de las cuencas hidrográficas como instancia


fundamental de gestión de los recursos hídricos, por medio de planes
estratégicos y operativos consensuados con los principales actores.

- Impulsar nuevas formas de aprovechar el agua, modernizando los


sistemas de transporte y distribución, a fin de evitar pérdidas y tomas
ilegales (VITALIS. Ídem… 2013).

GESTIÓN DE LOS RESIDUOS SÓLIDOS

Estimulada por estudios de la Oficina Panamericana de la Salud donde se


destaca la problemática situación de la disposición de desechos sólidos la
administración bolivariana en 2001 declara "el problema de la basura
como emergencia nacional, y de atención prioritaria el manejo integral
apropiado de los residuos y desechos sólidos en el país", considerando
"que el mal manejo" de éstos es causa principal de "impactos negativos
sanitarios y ambientales" (La visión de la Red ARA… Ídem).

En el 2004, se promulgó la Ley de Residuos y Desechos Sólidos que


prohibía la disposición de residuos y desechos sólidos en vertederos a
cielo abierto y otorgaba un plazo de cinco años para la clausura de los ya
existentes. Al cumplirse el plazo, aún se contabilizaban 270 vertederos a
cielo abierto. Siete años más tarde, se tiene una nueva Ley de Gestión
Integral de la Basura con el fin de "reducir la generación de la basura y
garantizar que su recolección, aprovechamiento y disposición final sea
realizada en forma sanitaria y ambientalmente segura".
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la generación de
residuos sólidos en Venezuela se duplicó en sólo siete años, pasando de
casi medio kilo por habitante por día en el año 2000 a casi un kilo en el
2007. Se contabilizaron 311 sitios de disposición final a nivel nacional,
distribuidos en 95 rellenos sanitarios (31%), 136 vertederos (43%), y 80
botaderos (26%) en el 2007 (año en que se recolectaron más de 25.000
toneladas diarias).

La Fundación Azul Ambientalistas ha planteado por su parte que existen


más de 1.000 vertederos no reconocidos, haciéndose difícil su
cuantificación dada la multiplicación indiscriminada y falta de control
por parte de autoridades municipales. Formalmente se reconoce la
existencia de 6 Rellenos Sanitarios para poblaciones que sobrepasan los
500.000 habitantes, los cuales son: La Bonanza, en el Estado Miranda
(recibe toda la basura de la ciudad de Caracas); Manorta, ubicado en La
Fría-Estado Táchira; El Guayabal, ubicado en el Municipio Zamora del
Estado Aragua; El Tigre, ubicado en la población de Guacara-Estado
Carabobo; La Ciénaga, en el municipio Jesús Enrique Lossada-Estado
Zulia (recibe la basura de la ciudad de Maracaibo); y Cerro de Piedras, al
norte del Estado Anzoátegui (recibe la basura de Barcelona, Lecherías y
Puerto La Cruz). La Ciénaga y Cerro de Piedras, se convirtieron en
vertederos de basura (mala administración y el mal manejo técnico). La
Bonanza es el único que cumple con los estándares internacionales,
aunque la cantidad de basura que recibe la colapsan
(www.azulambientalistas.org Una Verdadera Propuesta para el Problema
de la Basura).

Por otro lado en el año 2006, el Observatorio Regional de Salud señaló


que Venezuela no tenía una disposición final segura para residuos
peligrosos (hospitalarios, radiactivos, plaguicidas), ya que gozaban como
destino final el mismo que otros residuos sólidos. En 2010, MPPA señaló
que "la Unidad de Desechos Bioinfecciosos recolecta alrededor de 80
toneladas de residuos hospitalarios al mes", las cuales son trasladadas al
relleno sanitario de La Bonanza, "mientras que los establecimientos de
salud privada lo hacen por medio de compañías de servicio" (La visión de
la Red ARA… Ídem).
Los siguientes datos ilustran el problema de los desechos y basura, no
sólo a nivel urbano sino también en áreas naturales:

Recolección de 2.155 toneladas de desechos sólidos por parte del Instituto


Nacional de Parques (INPARQUES) en el monumento natural Arístides
Rojas (año 2002). La acumulación de desechos sólidos fue descrita como
una amenaza para los parques Archipiélago Los Roques, Laguna de
Tacarigua y Henri Pittier. La urbanización La Isabelica (estado Carabobo)
genera 80 toneladas de basura diaria (1 kg por persona). En el Día
Mundial de las Playas 2010, se recogieron más de 100 toneladas de
desechos sólidos en 120 playas. En Isla La Tortuga se recolectaron 38
bolsas de desechos sólidos y 4 sacos con vidrio y objetos oxidados en un
día. 50 bolsas de 200 litros, fueron llenadas con vidrio, aluminio, envases
de agroquímicos y plásticos en un día, en el páramo de Tuñame (La
visión de la Red ARA… Ídem).

Nuevamente pueden destacarse las recomendaciones de VITALIS


(VITALIS. Ídem… 2013).

- Establecer nuevas plantas de transferencia, que contribuyan con el


manejo apropiado de los desechos (entre sitios de recolección y de
disposición final).

- Dotar a las ciudades con infraestructura para manejar sus residuos y


desechos, incluyendo sistemas que permitan separar aquellos que puedan
ser reciclados; así como con sistemas de transporte apropiados, personal
capacitado, plantas de transferencia y rellenos sanitarios con criterios
técnicos y ambientales.

- Establecer una estructura operativa funcional que fomente la reducción,


reutilización y reciclaje de residuos sólidos, tanto a nivel urbano como
rural.

-Manejar los residuos y desechos de acuerdo con su naturaleza


(doméstica, industrial, agrícola, hospitalaria, tóxica y peligrosa).

- Reglamentar la Ley de Gestión Integral de la Basura, y actualizar las


normas técnicas que servirían de soporte en materia técnica, legal y penal.
- Desarrollar métodos que permitan persuadir y penalizar de
conformidad con la Ley Penal del Ambiente, a usuarios reincidentes en
mala disposición y/o manejo de residuos (VITALIS. Ídem… 2013).

V. ¿ES FACTIBLE LA ECONOMÍA VERDE EN LA VENEZUELA


ACTUAL?

Se ha revisado en este trabajo un conjunto de elementos asociados a la


idea y concepto de economía verde y a las condiciones y posibilidades de
ejecutorias en Venezuela que pudieran permitir aprovecharlos para el
mejor encausamiento de las relaciones entre crecimiento y ambiente.

Algunos desarrollos internacionales como el asociado al uso de


indicadores como el Better Life resumen parte del tamaño de nuestra
aguda problemática ambiental pues –efectivamente- quienes mejor salen
posicionados son los países de más alto desarrollo económico y social;
varios de ellos del norte de Europa. Correspondientemente, las
posibilidades de aprovechar mecanismos de financiamiento como los
Bonos Verdes están asociadas a la claridad y precisión de los proyectos de
inversión y la transparencia y -en algunos casos- consenso social y
político a través de la consulta para llevar a cabo tales iniciativas.

Por otra parte, dadas las inclinaciones, sesgos y definiciones políticas de


la administración bolivariana es obligado incorporar a la discusión sobre
economía verde la dicotomía socialismo-capitalismo en dos perspectivas.
La primera atañe a las diferencias ecosocialismo vs ecocapitalismo y, la
segunda, a las concernientes al capitalismo rentístico vs socialismo
rentístico. En el primer caso, se trata de la perspectiva que puede
abarcarse dentro de lo que se puede llamar imaginario verde y que nos
perfila al ecosocialismo con soluciones que siempre terminan en la
destrucción del capitalismo. La problemática en esto abarca la
visualización de como las revoluciones -y la venezolana es muestra de
ello-, ni han acabado con la pobreza (Eduardo Ortiz Ramírez. Bienestar y
miseria. ¿Solucionan las revoluciones la
pobreza? www.almomento360.com. Caracas, 7/9/2014) ni terminan
produciendo las mejores prácticas en cuanto a la atención de los
problemas ambientales. En el caso del socialismo rentístico se termina
teniendo la misma dinámica del disfrute de un medio de producción no
producido y con la presencia o profundización de problemas ambientales
resaltados en este trabajo.

Producción petrolera y contaminación del aire, contaminación de las


aguas y manejo de desechos sólidos terminan siendo a nuestro parecer y
cotejándolos con tratamientos internacionales tres problemas
fundamentales para las ejecutorias en Venezuela desde la perspectiva de
la economía verde. Una adicional y de creciente problematización es lo
que atañe a la deficiente atención de la problemática ambiental para el
desarrollo de la actividad turística: naturaleza agredida; parques
desatendidos; basura no recogida y sumideros de contaminación, malos
olores y basura no son infrecuentes en distintos lugares turísticos en
Venezuela; pero igualmente puede destacarse la amenaza permanente de
la inseguridad y la agresión e irrespeto de invasores a terrenos, parques y
zonas montañosas. La actividad turística presenta una dimensión directa
y transparente en la perspectiva ambiental. Es por ello que se le pueden
atribuir características para arrastrar a otros sectores, en los esfuerzos
para propender a impulsar la economía verde.

En todas las dinámicas de la problemática ambiental venezolana puede


evidenciarse la influencia de matices identificables según los casos con el
individuo pero más aun con prácticas de políticas públicas, o ausencia de
ellas, que nos remiten a falta de conciencia ciudadana en los cuidados
ambientales, impunidad derivada de la falla en procesamiento de casos y
sanciones más que de la ausencia de leyes y la desaparición de acciones
gubernamentales focalizadas para la solución de los problemas. De la
misma manera es de importancia el sesgo histórico determinado por el
mantenimiento de la dependencia petrolera a pesar de lo planteado en
distintos planes de la nación por igualmente distintas administraciones
de la misma; fundamentándose tal sesgo en la ilusión permanente de
vivir del petróleo más que sembrar el petróleo. Pero también debe
señalarse una dinámica que genera una ficción de atención de los
problemas ambientales y de otro tipo y que consiste en declarar
permanentemente emergencias que no se corresponden con acciones
concretas y solución de aquellos. Todo esto a pesar de las numerosas
leyes y normas que existen y que no son necesariamente bien aplicadas o
correspondidas con acciones.

VI. BIBLIOGRAFÍA.

Bermann, Célio. Economía verde: ¿una vía para otro mundo posible?
Debates científicos e intereses políticos en torno de Río+20 Rev. Nueva
Sociedad N° 239, 2012

BID. Monitor de Comercio e Integración 2014. Vientos Adversos. Políticas


para relanzar el comercio en la post-crisis. Paolo Giordano Coordinador.
Octubre 2014.

Cabral y Bowling, Roberto B.; Fuentes de financiamiento para el cambio


climático. SERIE Financiamiento para el desarrollo N° 254, ONU CEPAL,
Chile 2014.

Comunicadores en Accion. Ecosocialismo como Nuevo Enfoque Socio-


productivo que supera la Lógica del Capital. www.aporrea.org 13 de
septiembre 2014.

CONINDUSTRIA. Observaciones al proyecto de Ley de la calidad de


aguas y del aire. 16 de enero 2015, www.conindustria.org (Proyecto de
parte de la Asamblea del 2 de diciembre de 2014).

De Miguel, Carlos y Marcia Tavares-compiladores. El desafío de la


sostenibilidad ambiental en América Latina y el Caribe. CEPAL. ONU
2015.

Fermín, Carlos. Los 10 problemas socio-ambientales de Venezuela Lunes,


22/09/2014 www.aporrea.org. carlosfermin123@hotmail.com. http://ekolo
gia.com.ve/

Flaiban, Diego. Bonos Verdes, ¿Sólo buenas


intenciones? www.blogs.iadb.org 30 de mayo de 2012, 7:00 am.

Fundación Azul Ambientalistas. Una Verdadera Propuesta para el


Problema de la Basura. www.azulambientalistas.org.
Gurtowski, Sławomir. Green Economy Idea. Limits, Perspectives,
Implications. PROBLEMY EKOROZWOJU. PROBLEMS OF
SUSTAINABLE DEVELOPMENT 2011, vol. 6, no 1, 75-82.
https://www.academia.edu/Documents/in/Green_Economy.

Instituto de estudios ecologistas del tercer mundo. Estudios ecologistas


N° 8. Capitalismo Verde. Quito Diciembre 2012.
www.thecornerhouse.org.uk

Khor, Martin. La "economía verde" desde la perspectiva del desarrollo


sostenible Cooperación en Red Euroamericana Para El Desarrollo
Sostenible. 06 setiembre 2012

La visión de la Red ARA. APORTES PARA UN DIAGNÓSTICO DE LA


PROBLEMÁTICA AMBIENTAL DE VENEZUELA .Mayo
2011. http://red‐ara‐venezuela.blogspot.com)

LECOMBER, Richard. 1977 Crecimiento Económico Versus Medio


Ambiente, Colección MacMillánVicensVives de Economía, Barcelona.

Lowy, Michael, ¿Qué es el Ecosocialismo? 17 de septiembre


2013. www.democraciasocialista.org

Meyer, Johan Kristian. Collapsing societies and forced migration.


November 2012. Sociología Crítica https://dedona.wordpress.com Posted
on 28/02/2015.

North, Douglass. La teoría económica neo-institucionalista y el desarrollo


latinoamericano. Barcelona: Instituto Internacional de Gobernabilidad,
Proyecto PNUD "Red para la Gobernabilidad y el Desarrollo en América
Latina"), 1998.

NotiAmbienteVE. http://notiambienteve.blogspot.com/2015/02. Godzilla,


la cuaresma y el ambiente (noticias luego de la muerte del Minamb),
miércoles, 18 de febrero de 2015.

OCDE. Hacia el crecimiento verde. Un resumen para los diseñadores de


Políticas. Mayo 2011
Ortiz Ramírez, Eduardo. Notas sobre Economía, Ambiente y Desarrollo.
Revista SIC. EneroFebrero 1992.

Ortiz Ramírez, Eduardo. Bienestar y miseria. ¿Solucionan las


revoluciones la pobreza? www.almomento360.com. Caracas, 7/9/2014

Ortiz Ramírez, Eduardo. Reacciones fáciles ante la baja en los precios del
petróleo. 29 octubre
2014. http://www.economiainternacionalpostgradoucv.com.ve/publicacio
nes.html

Pérez Lares, Manuel E. Economía Ecológica y tecnológica como elementos


para el desarrollo sostenible en América Latina. Período: 2000-2010.
Trabajo de Grado de Maestría en proceso de discusión. Tutor Prof.
Alfredo Ordoñez. UCV. 2015.

PNUMA. Hacia una Economía Verde. Guía para el desarrollo sostenible y


la erradicación de la pobreza. 2011. www.unep.org/greeneconomy.

Prieto Silva, Enrique. Absurda degradación del Ministerio del


Ambiente. www.analitica.com 13 de septiembre 2014.

República bolivariana de Venezuela. Constitución de la República


Bolivariana de Venezuela (1999), publicada en Gaceta Oficial
Extraordinaria N° 5.453, de fecha 24 de marzo de 2000.

___________________________. Plan de la Patria, Segundo Plan Socialista


de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2013-2019, publicado en la
Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 6.118, de
fecha 4 de diciembre de 2013.

Russi, Daniela y Joan Martinez-Alier. Los pasivos


ambientales. http://www.flacso.org.ec/docs.

Tombari, Stephanie. How Green is Your Economy? A comparison of


public policies in Michigan and Ontario. Paper for presentation at
Capitalism and Socialism: Utopia, Globalization, and Revolution
Conference, University of Southern Indiana, November 6-8, 2014.
https://www.academia.edu/Documents/in/Green_Economy.
VITALIS (2013). Situación Ambiental de Venezuela 2012. Análisis de
Percepción del Sector. Editores y Compiladores: D. Díaz Martín, Y.
Frontado, M. Da Silva, A. Lizaraz, I. Lameda, V. Valera, C. Gómez., E.
Monroy, Z. Martinez, J. Apostólico y G. Suárez. 42 pp. Disponible online
en: www.vitalis.net.

VIDEOS

¿Quién mató el coche eléctrico? 2006 (puede verse


en https://vimeo.com/34788607).

Diagnóstico de la Situación Ambiental en el Estado Zulia-Venezuela


2014. https://www.youtube.com/watch?v=woZgSHodHkQ&t=199.
Publicado el 28 de septiembre de 2014. Entrevista a Gustavo Carrasquel,
Director General de la Fundación Azul Ambientalistas.
Economía Ambiental

Fabián Eduardo Sánchez Cruz


fabian_sc20@hotmail.com

Una introducción a la Economía Ambiental

En los tiempos modernos donde la globalización gana los titulares de los medios de comunicación,
parece mostrarnos una aparente falta de interés hacia la conservación del medio ambiente, pero en
realidad no es así, una verdadera integración económica debe ir a la par de la implementación de
medidas regulatorias que no coarten la actividad económica y que contribuyan a un desarrollo
sustentable, además de una gestión ambiental en donde se vea implicada la ciudadanía, no como
grupo de presión, sino como personas partícipes al tomar decisiones con consecuencias ambientales.

Es precisamente en este esquema general donde la economía ambiental surge para buscar o por lo
menos plantear vías favorables que conlleven a la optimización en la explotación de recursos
naturales, cuyas reservas son escasas pero con usos diversos por los cuales hay que optar.

La economía ambiental abarca el estudio de los problemas ambientales empleando la visión y las
herramientas de la economía. Actualmente, existe un concepto erróneo de Economía, ya que lo
primero que se piensa es que su campo de estudio es en su totalidad sobre decisiones de negocios
y cómo obtener rendimientos en el modo de producción capitalista. Pero la Economía se enfoca
sobre las decisiones que realizan actores económicos sobre el uso de recursos escasos.

Para iniciar el estudio sobre economía ambiental, primero definámosla en el espacio económico:

 ECONOMÍA
o MICROECONOMÍA
Estudio de la empresa y del consumidor
 ECONOMÍA DEL BIENESTAR
 ECONOMÍA AMBIENTAL
Optimización en la explotación de recursos, medios de gestión
ambiental e instrumentos para lograr el desarrollo sustentable.

UNA PERSPECTIVA ECONÓMICA

A partir de la tercera división del trabajo en la comunidad primitiva, se logra iniciar una evaluación
del impacto del hombre sobre su medio ambiente, desde la perspectiva de un desarrollo económico
cuya finalidad es la de buscar calidad de vida y satisfacer necesidades. Pero para alcanzar estos
objetivos el ser humano causa la destrucción de su ambiente; pero sólo en los tiempos modernos se
ha iniciado un rescate oportuno en la salvaguarda de los recursos naturales.

Pero una primera idea que se debería autocuestionar es ¿por qué causar el deterioro del medio
ambiente?, para responder se puede hacer alusión a diversas causas, la más común, sería por una
falta de respeto implícita en la cultura de la sociedad, la carencia de ética, o el simple posicionamiento
de “no hacer nada”. El cuidado de los recursos naturales no requiere de una actitud pasiva, sino de
un trabajo activo e inmediato, por medios que realmente propongan soluciones y no agraven la
condición actual.

Las mejores propuestas para alcanzar la protección y preservación del medio, es en la


concientización de las personas en sus ámbitos de consumo, y de la responsabilidad inherente de
las instituciones privadas y públicas a crear incentivos que conduzcan a los consumidores a tomar
decisiones en una dirección determinada.

Las empresas deben implementar medidas estratégicas que evalúen los efectos sociales,
tecnológico – culturales, económicos y ecológicos, que permitan crear una cultura ambiental, y
olvidarse de ganancias que se obtengan a expensas del medio ambiente. Así como los grandes
corporativos establecen un costo social, deberían comenzar a considerar un costo ambiental, en
donde las actividades sean en pro del medio ambiente e inclusive complementarias.

Por otro lado, no sólo las empresas son fuente de contaminación, los consumidores individuales
contribuyen a esta problemática de una manera potencial, un ciudadano no cuenta con un registro
contable que le permita conocer la utilidad o pérdida que le ocasiona contaminar, pero sí conoce las
consecuencias de hacerlo.

Cualquier estructura económica producirá un impacto ambiental destructivo si los incentivos no están
encaminados a evitarlo. El incentivo es una ganancia adicional que influye sobre el comportamiento
de las personas, por ejemplo una persona que esta acostumbrada a tirar desechos de aluminio a la
calle, de pronto se da cuenta que le resulta más rentable juntarla y venderla para su reciclaje. Otros
aspectos que influyen en el comportamiento de las personas son los factores psicológicos como la
autoestima o la satisfacción de haber realizado una acción positiva.

Pero un incentivo económico tiene implicaciones más sobresalientes, ya que éstos representan
problemas microeconómicos y macroeconómicos. En el primer caso tiene que ver con el
comportamiento de los individuos o microempresas, firmas contaminadoras y firmas reguladoras de
impacto ambiental. En el caso macroeconómico se refiere a las reformas estructurales reflejadas en
un desarrollo del país visto como un todo. Estos dos aspectos resultan de vital importancia para
poder emitir políticas ambientales coherentes con la coyuntura económica.

Otro aspecto que ha cobrado importancia en el campo de la economía ambiental es la correlación


de los impactos del crecimiento económico en la calidad ambiental, esta problemática tiene
infiltraciones serias en el comportamiento de los consumidores y en la planeación económica familiar.
Uno de los principales foros donde se evalúan estos temas de manera crítica y objetiva es en la
Organización de las Naciones Unidas, tanto por los países desarrollados como por los
subdesarrollados dependientes y atrasados.

¿CALIDAD DE VIDA VS. CALIDAD AMBIENTAL?

No podemos hablar de un verdadero desarrollo económico si primero no revisamos las políticas en


materia ambiental, la sociedad debe estar comprometida a buscar una representación democrática
que exponga de manera clara las carencias que comparten y que comúnmente se agravan con el
paso del tiempo.

La sociedad no aprueba medidas legislativas que solucionan parcialmente problemas de la realidad,


no se puede hablar de calidad de vida, medida por un PIB per cápita, si no hablamos de medidas de
impacto ambiental que buscan una mejor calidad ambiental, se debe entender que ambos objetivos
no son rivales, sino complementarios.

Actualmente el papel del economista ha cobrado importancia en la resolución de controversias al


aplicar métodos de análisis como el de riesgo, costo-beneficio y el de costo-efectividad.

 Análisis costo- efectividad : Éste es simplemente un análisis en el cual se observa la


manera más económica de lograr un objetivo determinado de calidad ambiental o,
expresándolo en términos equivalentes, de lograr el máximo mejoramiento de cierto objetivo
ambiental para un gasto determinado de recursos.
 Análisis costo- beneficio : En este tipo de análisis, como su nombre lo indica, los
beneficios de la acción propuesta se calculan y comparan con los costos totales que asumiría
la sociedad si se llevara al cabo, dicha acción. Pero es relevante decir que los grupos
ambientalistas se inclinan normalmente por los beneficios y los grupos de negocios se
concentran usualmente en los costos.
 Análisis de riesgos : Los dos elementos esenciales en el análisis de riesgos consisten en
identificar y cuantificar estos riesgos. La identificación depende, en gran medida, de la
información disponible; por ejemplo, el costo real para emprender una determinada actividad.
La evaluación depende de una combinación de las matemáticas con la valoración subjetiva
del analista.

¿QUIÉN DEBE PAGAR?

Dentro de la problemática ambiental, surge uno de las mayores controversias, ¿quién debe pagar
los costos por incrementar la calidad ambiental?. En un principio se pensaría el que tira la basura,
debe recogerla; esto funcionaría si sólo hubiera dos personas en el mundo, pero la población se
incrementa día a día, por lo que hay que buscar soluciones que abarquen a esta latente demanda.
Pero la problemática no esta basada en la textualidad del cuestionamiento, sino en lo que no esta
escrito, en primer lugar se debería apostar a prevenir en vez de solucionar, a ganar en vez de pagar.

Las empresas pueden considerar pasar el costo al precio del producto, o en la baja de salarios de
sus empelados, o en traspasarlo a las utilidades de los accionistas, pero no se resolvería nada, se
pagaría permanentemente lo que no se deja de destruir. Una planeación estratégica que incluya el
cumplimiento a las leyes ambientales, a implementación de medidas correctoras, auditorías
ambientales permanentes y a una evaluación de impacto ambiental adecuada, serían costos iniciales
de una inversión cuyas utilidades no se verían mermadas.

Pero que sucede si el planteamiento es aún más complicado, y ponemos en visión las externalidades,
definidos como costos o beneficios de una transacción económica que recaen sobre gente que no
participa en la transacción, que son el resultado de la falta de derechos de propiedad. Es en 1960
cuando Ronald Coase , plantea lo que se conoce como elTeorema de Coase, es la proposición de
que si los derechos de propiedad existen y si los costos de las transacciones son bajos, las
transacciones privadas son eficientes. Esto aplica si los agentes que interviene son reducidos, pero
que sucede en la realidad, no es posible que todo los ciudadanos de un país se pongan a negociar
lo mejor sobre el Océano Pacífico.

Y es precisamente aquí donde el Estado puede intervenir mediante diversos mecanismos que
permitan regularizar un comportamiento sobre algo que carece de derechos de propiedad, uno es
los cargos por emisiones, permisos negociables (por medio de análisis de costo-beneficio) y los
impuestos.

GESTIÓN AMBIENTAL

Se entiende por Gestión ambiental al conjunto de acciones encaminadas a lograr la máxima


racionalidad en el proceso de decisión relativo a la conservación, defensa, protección y mejora del
Medio Ambiente, basándose en una información coordinada multidisciplinaria y en la participación
de los ciudadanos siempre que sea posible. Mediante esta metodología en la toma de decisiones se
da una nueva comprensión del hombre sobre la naturaleza, viéndose a sí mismo como responsable
por la protección del medio ambiente. Esta nueva visión general debe estar encaminada hacia el
desarrollo humano, pero con una calidad ambiental y lograr el equilibrio ecológico.
Los principales principios de la Gestión ambiental son:

 Regulación de la capacidad de absorción del medio a los impactos.


 Previsión y prevención de impactos ambientales.
 Ordenar la planificación territorial.
 Monitoreo de informes, de las condiciones ambientales.

Un aspecto adicional que debe estar contemplado dentro de la Gestión Ambiental, es la educación
ambiental, si se cuenta con una concientización desde la edad temprana, se podrá prevenir muchos
de los graves problemas ambientales que nos aquejan hoy en día.

Todas estas medidas e instrumentos tienen como único objetivo el Desarrollo sustentable, que se
refiere al uso adecuado de los recursos que permita la satisfacción de necesidades básicas
presentes de los habitantes, pero sin comprometer los recursos de generaciones futuras.

En este nuevo orden global es la planificación socio-económica de los recursos disponibles, la opción
para resolver los problemas que avanzan por las necesidades sociales (desigualdad para alcanzar
una calidad de vida por sobre los niveles de pobreza). Pues los problemas ambientales no están
acotados a las fronteras de cada país y por esto, es crucial en la determinación del desarrollo o el
atraso de una nación.

Por lo tanto, lo más relevante es encontrar INSTRUMENTOS ECONÓMICOS Y DE REGULACIÓN


que permitan el uso eficiente y eficaz de los recursos en la producción y explotación; la incorporación
de los COSTOS junto a estas medidas, ya que así se cumplirá con una función de PROTECCIÓN
ante la indiferencia de aquellos que no tengan la intención de llegar a los niveles de exigencia fijados
internacionalmente.

COMERCIO Y MEDIO AMBIENTE EN EL MARCO INTERNACIONAL

Actualmente son diversos organismos internacionales los que preocupados por buscar un
crecimiento económico con “calidad”, han estipulado dentro de sus reglamentos la creación de
comisiones u organizaciones especiales en el campo ambiental, algunos de estos organismos son
el GATT, la UNCTAD, el PNUMA y la OCDE.

 El GATT / WTO estableció el Comité sobre Comercio y Medio Ambiente.


 La UNCTAD busca la interacción entre las políticas de comercio y de medio ambiente, mediante
consensos de sus países miembros.
 EL PNUMA se concentra en el derecho ambiental internacional, la economía ecológica y la
información ambiental y científica.
 La OCDE establece principios y orientaciones (no obligatorias) que ayudan a los Estados
miembros a integrar las políticas ambientales y económicas. Ha concebido el “principio del
contaminador paga” y el “principio del usuario paga”.

La OMC próximo a realizar su reunión ministerial a partir del 10 al 14 de septiembre del 2003 en la
Ciudad de Cancún, Quintana Roo, México. Estableció en 1995 un Comité de Comercio y Medio
Ambiente, cuyo mandato figura en la Decisión de Ministerial de Marrakech. Pero es importante
recalcar, que si bien lo que se busca es un desarrollo sustentable, éste no puede surgir con la
finalidad de coartar las relaciones intersectoriales económicas, porque carecería de objetividad.
Cómo es el caso de transferencia de tecnología poco contaminante de países desarrollados a
subdesarrollados dependientes y atrasados.
El NAFTA es el primer tratado que incluyen un apartado amplio al tema del medio ambiente. Creando
el Acuerdo Paralelo de Cooperación Ambiental (NAAEC).

Entre los aspectos que contempla se encuentran los siguientes criterios :

• Los países deben aplicar el acuerdo de manera compatible con la protección del medio ambiente
e impulsar el desarrollo sustentable.
• El reconocimiento de los convenios ambientales internacionales en el contexto de los acuerdos
comerciales.
• Ningún país puede reducir su nivel de protección ambiental con el fin de atraer inversiones.
• Un compromiso de los países de aplicar su legislación ambiental, y se contempla la posibilidad de
imponer multas en caso de que una de las partes falle persistentemente.
• Actitud flexible hacia la armonización de estándares.
• Cooperación ambiental en técnicas y estrategias para prevenir la contaminación, métodos para
cumplir y ejecutar las leyes, eco-etiquetado, auditorías ambientales, etc.
• Los países se comprometen a recurrir a mecanismos de solución establecidos en el Tratado para
controversias relativas a acuerdos ambientales y de conservación.
• Un alto grado de involucramiento de expertos externos en la solución de conflictos.

El tema del medio ambiente no tiene un formalidad en el MERCOSUR debido a que posee un
carácter comercial ; sin embargo, se han creado estancias como la Reunión Especializada de Medio
Ambiente (REMA) para incorporar el tema ambiental a las mesas de discusión.

La Unión Europea posee una legislación ambiental interna del bloque muy avanzada. Además, los
consumidores están altamente sensibilizados frente a la protección de la naturaleza y prefieren
consumir productos amistosos con el medio ambiente. Es por ello que surgen terminologías como el
método contingente para explicar la correlación de la demanda agregada con la calidad ambiental.

En APEC aparecen tratados en los temas asociados al medio ambiente que se relacionan con los
recursos naturales de que dispone la región, con un mayor interés los recursos marinos propios de
las economías miembros.

Es por este ámbito general que es necesario tomar en consideración la preservación y la mitigación
de impactos ambientales, teniendo una responsabilidad conjunta los diversos actores económicos
para buscar alcanzar ese desarrollo sustentable.

El medio ambiente debe ser un tema de discusión y de acuerdos encaminados a una gestión
ambiental acorde a la realidad económica, y no como una excusa para buscar implementar
proteccionismos y actos comerciales contrarios a la cooperación internacional.

Debemos tener en consideración que es una tarea de todos y no de algunos la planeación y ejecución
de programas ambientales, es por ello que la sociedad debe interesarse y participar en esta toma de
decisiones que al final los involucran como consumidores.

Una política ambiental debe ser discutida a la brevedad posible en un foro internacional y continuar
con los planes expuestos en la cumbre de Johannesburgo en Sudáfrica, sólo de esta manera los
países desarrollados y subdesarrollados verán una convergencia en el tema ambiental.

La reflexión y el cambio en las conductas de la sociedad, por medio de una educación ambiental
adecuada se vuelve necesaria e imprescindible para alcanzar los objetivos de una gestión ambiental.

Es hora de hacer algo... pero de hacerlo bien.


Bibliografía:
 Barry C. Field. Economía Ambiental. Colombia: Ed. MChill. 1995
 Coase, Ronald. El problema del Costo Social.
 Demsetz, Harold. Hacia una teoría de los derechos de propiedad
 McCloskey H. J. Etica y Política de la Ecología. Fondo de Cultura Económica. 1988.

Economía y ambiente: Evaluación del impacto ambiental de las actividades humanas

Por Lic. Gabriel Leandro, MBA, Economista

Contenidos:

 Economía y ambiente
 Ambiente y conceptos asociados para la Gestión Ambiental
 Evaluación del Impacto Ambiental
 Marco legal e institucional de la evaluación del impacto ambiental
 Intervención sobre el medio ambiente
 Concepto y atributos del impacto ambiental
 El ambiente y la previsibilidad de los cambios
 El proyecto y sus efectos ambientales
 Impactos y factores ambientales
 Metodología general para la EIA

Economía y ambiente

Dado que prácticamente cualquier actividad económica puede tener algún costo ambiental, es
necesario hacer la diferencia entre el concepto de ambiente y de medio ambiente. Al hablar de
ambiente se hace referencia al todo, es decir el medio físico que permite la existencia de la vida
incluida la vida misma y todas sus relaciones económicas, políticas, sociales, culturales, etc. Pero
al hablar de medio ambiente generalmente se refiere a algo externo, y por tanto parcial y
fragmentario.

En vista de que evaluar no es solo describir, sino que implica realizar una valoración y validación,
entonces se puede concluir que existe una serie de implicaciones éticas al tratar de evaluar el
impacto ambiental. En otras palabras, los actos económicos no son neutrales éticamente. Este
problema ético-económico-ambiental se resume en una sola pregunta:

¿Cómo se podría conciliar un ambiente finito dadas necesidades humanas ilimitadas?

De la pregunta anterior se pueden ampliar los siguientes puntos:

 El mundo es finito y de él deben proveerse los recursos para satisfacer las necesidades y
deseos humanos y no humanos.
 La economía se centra en cómo emplear distintos medios para lograr el sustento humano.
Aunque generalmente se dice que la economía tratar de determinar el uso adecuado de los
recursos para alcanzar fines ya dados, y en consecuencia sólo se ocupa de validar esos
medios y no los fines. Sin embargo, dada la finitud de los recursos disponibles es
necesario validar los fines también.
 Desde cierta perspectiva las necesidades humanas no son ilimitadas, sino más bien los
deseos son ilimitados.
 La división tradicional entre recursos renovables y no renovables ha ido perdiendo validez,
pues se ha observado como el aire, la tierra y el agua (tradicionalmente considerados
como recursos renovables) podrían ser de muy difícil renovación en muchos casos.

Al buscar satisfacer sus necesidades presentes el ser humano modifica el ambiente, con lo cual
podría comprometer las posibilidades de las generaciones futuras de poder satisfacer sus
necesidades. Esto se da principalmente cuando se provocan daños irreversibles a los recursos
disponibles actualmente, o bien cuando se reduce la disponibilidad futura de los mismos.

Además no existe garantía de que el avance científico sea capaz de neutralizar esos efectos en el
futuro. Conviene señalar los siguientes aspectos:

 El ser humano es parte del ambiente y sus acciones no son neutrales, y tienen un impacto
tanto sobre las condiciones actuales de vida como sobre las futuras.
 Sin duda el ser humano es un sujeto moral. El resto de los seres vivos son considerados
por algunos también como sujetos morales, mientras que otros difieren en este sentido.
Una posición aceptada puede ser el considerar la búsqueda de sustento y la satisfacción
de deseos razonables por parte del ser humano, sin importar las consecuencias sobre el
ambiente (que deberían ser las mínimas posibles) como una conducta éticamente válida.
 Aunque es cierto que se ha dado un elevado desarrollo científico y tecnológico en los
siglos recientes, éste ha tenido un elevado costo ambiental y el beneficio de ese progreso
está restringido a una porción relativamente pequeña de la humanidad.
 La actitud de las generaciones presentes hacia el ambiente con respecto a las
generaciones futuras puede ser analizada desde tres contextos posibles:
o Certeza: Cuando se conocen los efectos que generará cierta acción.
o Riesgo: El efecto sobre la naturaleza y las generaciones futuras se conoce solo en
términos de probabilidades.
o Incertidumbre: Se desconocen los efectos futuros de las decisiones presentes.

En cualquiera de los tres casos existe un debate ético sobre el privilegiar o no los derechos de las
generaciones futuras.

 La problemática ambiental es transversal a un conjunto de políticas y áreas de


conocimiento: economía, educación, salud, etc. En el abordaje de este problema se
necesita una reunificación de la práctica y el saber.
 Tanto en las economías de corte capitalista como socialista se observa un elevado
deterioro ambiental, por lo que el modelo de organización económica no parece ser
determinante de una mejor o peor situación ambiental.
 Para exigir un mayor cuidado ambiental a favor de las generaciones futuras es necesario
proporcionar los medios para lograrlo, en caso contrario no tendría sentido.
 Se debe aplicar una racionalidad evaluativo en la elección de los fines y los medios, al
evaluar el efecto de las acciones económicos que afecten el ambiente.

Ambiente y conceptos asociados para la Gestión Ambiental

La evaluación del impacto ambiental requiere de alguna manera anticipar las consecuencias de
una acción y poder así buscar las alternativas que minimicen los efectos sobre el ambiente. Para
esto es necesaria una clara comprensión de distintos procesos tecnológicos, económicos y
sociales. En otras palabras la evaluación del impacto ambiental consiste en un método de estudio y
un proceso para identificar, predecir, interpretar y comunicar información relacionada con las
consecuencias de una acción sobre medio ambiente (ecosistemas y relaciones sociales).

Desarrollo sostenible. El concepto de desarrollo sostenible posee tres dimensiones: económica,


social y ambiental, de modo que se reconceptualiza la relación entre la sociedad y la naturaleza y
se postulan algunos cambios en varias categorías económicas y en la formación económica y
social.

Es necesario superar la visión de corto plazo que ha prevalecido por mucho tiempo y que ha
dejado de lado el impacto a largo plazo sobre el medio social y ecológico. Tampoco se debe
adoptar la posición totalmente opuesta de un conservacionismo que olvida las relaciones que el
deterioro ambiental tiene con la producción. Es imperativo diseñar un modelo de crecimiento de la
producción que garantice el costo de reposición de los recursos naturales, que privilegie los
sectores que satisfacen necesidades esenciales, que promueva tecnologías compatibles con los
objetivos del desarrollo sustentable, que impulse una industrialización con oportunidades a nivel
internacional, un uso racional de la energía y que incremente y emplee el potencial de los
ecosistemas naturales.

Uno de los principales problemas que se presentan al tratar de plantear estos objetivos en forma
operativa es el problema de la medición, pues tanto los indicadores económicos, como los sociales
y los ambientales no son comparables entre sí. Esto da como resultado que haya que plantear la
cuestión del desarrollo sostenible en tres planos diferentes: económico, social y físico. A su vez
este planteamiento da como resultado un proceso de transacciones entre actores sociales,
teniendo presente que el avance en una de las tres áreas tendrá costos en las otras.

Sistemas complejos. Las problemáticas ambientales funcionan como un sistema complejo, o sea
una totalidad organizada que se caracteriza por la confluencia de procesos de diversas índoles:
físicos, biológicos, productivos, tecnológicos, sociales y económicos, todos interrelacionados entre
sí. Todos estos elementos son muy heterogéneos y mutuamente dependientes, dando en
consecuencia la imposibilidad de analizar el sistema por la simple agregación de estudios
sectoriales sobre cada uno de sus componentes. Así una alteración en cualquiera de los elementos
del sistema afectará sus relaciones con todos los demás.

Problemática ambiental. Al hablar de problemática ambiental se está haciendo referencia a una


deficiencia de racionalidad ambiental, es decir un desajuste en la lógica de uso o apropiación de
los servicios que se pueden obtener de la naturaleza. Esta racionalidad se ve afectada por
variables de tipo territorial, temporal, políticos, tecnológicos, sociales, culturales, etc. Es importante
recalcar que un problema ambiental no es simplemente un problema de la naturaleza, sino que
involucra a una sociedad.

Los problemas ambientales son un síntoma, pueden aparecer lejos de su origen, lo cual implica
que las escalas de los problemas y sus soluciones puedan ser diferentes. Así es importante en las
evaluaciones de impacto ambiental la participación de todos los actores involucrados en alguna
manera en el asunto. Sin embargo la mayoría de las veces no se lleva a cabo una verdadera
participación social, sino que son los expertos quienes interpretan los intereses de esos mismos
actores. Poco a poco los procesos de evaluación ambiental han ido convirtiéndose en instrumentos
más participativos.

Escenarios de la realidad. Se podrían señalar tres componentes básicos de la gestión ambiental:


objetivos, racionalidad y acción. Estos componentes están completamente articulados entre sí.
Estos escenarios de transformación de la realidad constituyen espacios para que los diferentes
actores interactúen concertando, negociando, articulando y coordinando sus distintos intereses.
Las crisis actuales, el nuevo papel del Estado y la globalización han llevado a cuestionar la
racionalidad científica y técnica tradicional, y han impulsado un nuevo paradigma denominado la
gestión social planificada, entendida como un replanteamiento teórico, metodológico, operativo y
técnico en busca de una integración de distintas ciencias aplicadas a esta problemática y
conducentes a una gestión integrada.

Es relevante el papel de los distintos actores en cada uno de estos escenarios: la comunidad, las
organizaciones y el gestor operando y actuando. La sustentabilidad de cualquier proyecto está
condicionada por las alianzas de poder, participación y las redes de acción social que se den a lo
largo de todo el proceso.

Evaluación del Impacto Ambiental

Una evaluación del impacto ambiental puede ser concebida como una comparación entre la
situación del ambiente dada una determinada intervención con la situación que se esperaría que se
dé sin esa intervención. La intervención puede ser de distintos tipos: urbana o rural, industrial o
agrícola, de gran, media o pequeña escala, etc.

Esta visión de la evaluación del impacto ambiental ha evolucionado a lo largo de las últimas
décadas, periodo en el que se han incorporado importantes conceptos: un enfoque
multidimensional, interdisciplinario y sistémico, una visión dinámica, el paradigma de la
incertidumbre, el desarrollo sustentable, la participación social, aspectos estratégicos, entre otros.

En este proceso de evaluación es necesaria la participación de todo un conjunto de distintas


ciencias siguiendo una ruta que debería ser multidisciplinaria-interdisciplinaria-transdisciplinaria.
Cabe resaltar que cada uno de estos conjuntos de conocimiento constituyen condiciones
necesarias, pero no suficientes para llegar a un buen resultado, pues la evaluación del impacto
ambiental no puede ser concebida como la sumatoria de todos estos saberes individuales.

Algunas de las principales áreas de conocimiento que realizan un importante aporte en cuanto al
análisis de los problemas ambientales son:

Para algunos la ciencia madre de cualquier asunto ambiental.


Ecología Proporciona la posibilidad de estudiar las interrelaciones entre las
especies y su medio.
Un importante aporte de esta ciencia es la llamada ecología del
Geografía paisaje, que relaciona las estructuras espaciales con los procesos
ecológicos.
Es de gran relevancia el conocer los comportamientos
Demografía
poblacionales y sus relaciones con las actuaciones humanas.

Arquitectura El desarrollo urbanístico le ha dado gran relevancia a la


arquitectura a la hora de hablar de asunto ambientales.
La ingeniería en sus diversas ramas permite analizar y
Ingeniería comprender el conjunto de relaciones que se dan entre un
proyecto y su ambiente.
Aporta un marco normativo, además de la relevancia de las
Derecho
distintas convenciones internacionales que se han desarrollado.
Cada día cobra más importancia la idea de que la salud no es
Medicina ausencia de enfermedad, sino que debe existir una armonía con el
entorno.
Ayuda en las construcción del “estado cero” antes del desarrollo
Geología
de un proyecto cuyo impacto se quiere estudiar.

Prácticas de intervención sobre la naturaleza. Los estilos de desarrollo involucran tres


elementos básicos: para quién se produce, cómo se produce y con qué elementos naturales se
produce. Esto conlleva a establecer diversas relaciones entre la cultura, la sociedad y la
naturaleza. Estas relaciones darán como resultado un cierto paisaje a lo largo del tiempo.

La evaluación del impacto ambiental, entendida como la comparación que se mencionó


inicialmente, requiere de dos actividades básicas: el análisis del estado actual y las perspectivas
futuras.

• El estado actual. Se debe encontrar las causas que han llevado al paisaje actual y sobre el cual
se desea llevar a cabo algún determinado proyecto.
• Perspectivas futuras. Se buscar determinar las tendencias que pueden darse a futuro ya dado el
proyecto, esto a fin de minimizar su impacto ambiental adverso.

Tecnologías y escalas de diseño. Un aspecto esencial a considerar son los relacionados con el
diseño y la producción de distintos bienes y servicios, y su relación con el ambiente, tanto por su
uso de recursos naturales como por los desechos generados. La relación sociedad-naturaleza en
cuanto al uso de la tecnología y al diseño industrial puede ser vista desde distintas perspectivas
según su escala:

• El diseño industrial. Corresponde a la microescala, al diseño mismo de los productos que ha


cobrado gran relevancia, además de la funcionalidad misma del objeto. Poco a poco ha avanzado,
incluso se ha llegado a hablar de ecodiseño.
• La escala arquitectónica. La arquitectura ha necesitado considerar distintos aspectos ambientales
en sus desarrollos.
• Ciudades. Es necesario llegar al concepto de ciudades sustentables y lograr desarrollos
urbanísticos que armonicen con la naturaleza.
• Gran escala. Hasta hace algún tiempo se consideraba que “la ciudad no se integraba a la
naturaleza, se posaba sobre ella”. Sin embargo ha sido necesario cambiar esa percepción dadas
las crisis que se han presentado en distintos sitios alrededor del mundo.
Marco legal e institucional de la evaluación del impacto ambiental

La concepción jurídica de la evaluación del impacto ambiental no se empieza a dar sino hasta los
años sesenta y setenta. Aparece primero en los Estados Unidos en la Nacional Enviroment Policy
Act, para luego ser adoptada por muchas otras naciones. En América Latina originalmente
consistía en un requisito para obtener créditos de organismos internacionales en la realización de
obras grandes. Más adelante se legisla en este sentido, siendo México el primer país
latinoamericana en avanzar en este campo.

En lo relacionado a acuerdos internacionales la evaluación del impacto ambiental es mencionada


en distintas normas generales y especiales, como la Carta de la Naturaleza y la Declaración de
Río. En esta última es donde es adoptada con toda su fuerza, específicamente en el principio 17.

El desarrollo jurídico e institucional de las evaluaciones de impacto ambiental se ha dado en forma


independiente en los distintos países e incluso en sus mismas provincias y estados, dando como
resultado una gran cantidad de distintos términos para hacer referencia a las evaluaciones de
impacto ambiental y sus procedimientos. Algunos de los vocablos que se han empleado son:
informes medioambientales, evaluación de impacto ecológico, estudios ambientales, monitoreos
ambientales, evaluaciones de impacto ambiental, declaraciones de impacto ambiental, etc. Algunos
de ellos pueden ser considerados casi como sinónimos, pero otros no.
En términos generales una evaluación de impacto ambiental comienza con una solicitud ante la
entidad administrativa correspondiente. Esto implica la presentación de una serie de documentos,
para dar lugar a la evaluación propiamente dicha. El documento de la evaluación de impacto
ambiental es estudiado por la autoridad y se discute públicamente. Tres son los resultados básicos
que se pueden obtener: la autorización del proyecto, modificarlo o denegarlo. Si es autorizado se
emite un certificado de aptitud ambiental.

En este proceso de evaluación se requiere determinar qué actividades serán incluidas en la


evaluación y cuáles no. En este sentido se emplean dos tipos de criterios:

• Criterios no discrecionales: En este caso existe una determinación legal previa, que puede
consistir en que las leyes indican las actividades que serán sometidas a la evaluación de impacto
ambiental (categorización por clasificación), o bien es necesaria una valoración inicial
(categorización por evaluación).
• Criterios discrecionales: Se somete a una valoración inicial sin que se cuente con criterios legales
previos para realizarla.
• Criterios temporales de sometimiento al procedimiento: No se realiza la evaluación por
determinado tiempo o viceversa.

De acuerdo con esta categorización se determinarán proyectos que necesariamente requerirán la


evaluación de impacto ambiental, otros serán sometidos sólo si superan ciertos parámetros y en
otros casos dependerá de la sensibilidad ecológica del área afectada.

El estudio de impacto ambiental consistirá en un documento escrito, cuyo contenido debe


satisfacer una serie de requisitos: aspectos formales, contenidos, descripción del proyecto,
materias primas empleadas, efluentes y áreas de influencia, posibles impactos ambientales (según
sus características, su naturaleza, positivos y negativos), medidas de prevención y planes de
contingencias.

Un equipo técnico de la autoridad ambiental realiza el análisis y además es sometido a consultados


de los ciudadanos y afectados, lo que se puede realizar a través de audiencias públicas, estudios
puestos a discusión del público, reuniones de carácter público, etc. Es importante acotar que la
participación del público no es vinculante en ninguno de los sistemas en Latinoamérica.

Finalmente se emite el certificado de aptitud ambiental, que requiere ser renovado periódicamente
y además generalmente existen una serie de mecanismos de control y monitoreo posterior.

Intervención sobre el medio ambiente

Actividades humanas e impacto ambiental. El medio ambiente no es un elemento dado, sino


que esta transformación de la naturaleza ha sido construida empleando el conocimiento
tecnológico en forma práctica y sistémica, lo cual abarca el hábitat natural, la sociedad, sus
valores, formas de organización, patrones de consumo y estilos de vida. Esa tecnología se
desarrolla y emplea para solucionar determinados problemas de un grupo social en un cierto
momento histórico.

El problema radica en la introducción incontrolada de la tecnología, la cual en muchas ocasiones


no se adecua al contexto específico o bien genera una serie de efectos colaterales adversos.

Se tiene entonces toda una interrelación, interacción y superposición de tres ámbitos distintos:

• Comportamientos humanos económicos y sociales


• Evolución de la naturaleza
• Conformación social del territorio
Es necesario un equilibrio entre estos ámbitos, pues una preocupación exclusiva por uno de ellos
producirá el deterioro paulatino del otro. En este contexto la tecnología representa el nexo entre el
sistema social y el sistema natural dentro de un marco histórico, constituyéndose en punto esencial
para sustentar el desarrollo en el largo plazo.

A través del tiempo se ha logrado desarrollar distintas alternativas tecnológicas, las cuales generan
efectos distintos en lo económico, social y ambiental. Así se tienen diferentes criterios para la
selección de alternativas tecnológicas (económicos, sociales, ambientales). Todas estas acciones
humanas no son neutrales, tienen algún efecto sobre el medio ambiente, de modo que es
necesario evaluar las consecuencias para el sistema natural y social de estas acciones
tecnológicas. Esto conlleva a hablar del desarrollo sostenible que pretende llevar a la práctica los
siguientes objetivos:

• Lograr el crecimiento económico


• La sustentabilidad de los sistemas naturales
• La equidad intra e inter generacional

Así toda acción humana debe ser analizada teniendo en cuenta los siguientes aspectos:

• La actividad humana debe adecuar sus acciones sobre los ecosistemas para minimizar los
efectos sobre sus fuerzas internas, buscando más bien su autorregulación y control.
• Para comprender la sinergia que los ecosistemas representan se debe comprender, al desplazar
el estado estacionario de un ecosistema, que sus relaciones internas y retroalimentación son
básicos para ese proceso sinérgico.
• El diseño y ejecución de un proyecto de desarrollo debe tomar en cuenta las características de
los ecosistemas que afecta, a fin de garantizar su permanencia.
• Los ecosistemas se encuentran estrechamente vinculados unos con otros y con todo el sistema
natural, de modo que las alteraciones en uno de ellos producirán un efecto de red, afectando así a
los demás.
• Los efectos de las actividades humanas sobre un ecosistema podrían ser detectadas mucho
tiempo después de haber ocurrido.

El Banco Mundial señala tres categorías de problemas ambientales que relacionan las causas con
la dimensión territorial:

Problemas Como son los cambios en el clima mundial, la contaminación de


globales los océanos, etc.
Problemas Este es el caso de la contaminación atmosférica transfronteriza,
regionales la contaminación de grandes cuencas, etc.
Problemas Son a escala de cada país, como la eutrofización de un embalse
locales generada por desechos de asentamientos urbanos, etc.

Tal como se ha dicho, una acción humana repercute sobre otros componentes del sistema
ambiental, y por tanto se requiere:

• Seleccionar actividades razonables para el entorno


• Localizar estas actividades de acuerdo con la capacidad del entorno
• Regular el comportamiento de estas actividades

Los dos primeros significan el respeto por las tasas de renovación de los recursos renovables y la
intensidad del uso de los recursos no renovables, y la capacidad de asimilación del ambiente. Esto
a su vez lleva a hablar de una coherencia de carácter ecológico, paisajístico, territorial, social e
institucional.
Concepto y atributos del impacto ambiental

La evaluación del impacto ambiental es una herramienta de gestión preventiva de las políticas
públicas lo cual implica la capacidad de establecer exigencias y responsabilidades relacionadas
con el ambiente tanto con respecto al mismo Estado y sus instituciones como con relación a los
distintos actores privados.

Al hablar de evaluación del impacto ambiental se tienen en cuenta los siguientes aspectos:

 Es un proceso analítico (identifica, predice cuantitativa y cualitativamente, interpreta,


previene, comunica, valora) de comparación del estado del ambiente sin la realización de
un proyecto con su estado una vez que éste se instale y esté funcionando.
 Se presupone al menos el deseo de realizar un proyecto (acción humana) que podría
afectar de alguna manera el ambiente.
 Se busca establecer un juicio previo objetivo por parte de las entidades implicadas de las
consecuencias de sus acciones sobre los componentes fisico-químicos, bióticos, culturales
y socioeconómicos del medio.
 Estudia síntomas, establece relaciones causa-efecto, identifica los agentes implicados.
 Además se desea estudiar la posibilidad de minimizar, o al menos compensar, el impacto
ambiental del proyecto.
 Establece objetivos y responsabilidades (¿Cómo hacerlo?, ¿Para quién hacerlo?, ¿Con
quién hacerlo?).
 Se reconocen tres aspectos centrales:
o Las acciones humanas no son neutrales en su relación con el ambiente.
o Las variaciones de los valores a la conservación del ambiente.
o La relación que estos cambios tienen sobre la calidad de vida.
 Contribuye a la toma de decisiones, de acuerdo con una normativa vigente.

En este mismo sentido cabe resaltar que cualquier actividad humana debe ser analizada tomando
en cuenta los siguientes aspectos:

 La importancia de las relaciones internas de los ecosistemas.


 La actividad humana debe ser adecuada para no modificar en forma drástica las relaciones
internas de los ecosistemas.
 Los proyectos deben considerar la capacidad de asimilación de los ecosistemas, para
garantizar su permanencia.
 Los ecosistemas constituyen una gran red. Al afectarse uno de ellos se producirán efectos
sobre otros más.
 Se debe considerar una transición gradual integrando los ecosistemas y el proyecto.

Los impactos ambientales pueden ser clasificados de diversas maneras. Las más importantes son:

Criterio Categorías Concepto


Afectan la calidad ambiental de modo
Positivos positivo
Calidad ambiental
Negativos Afectan la calidad ambiental de modo
negativo
Puntuales Afectan un área reducida
Extensión
Parciales Afectan un área mayor
Totales Afectan toda el área de influencia del
proyecto
Críticos
Supera los límites admisibles
El impacto se manifiesta en forma
Inmediatos
inmediata
Temporalidad
Latentes
El impacto se manifiesta en un plazo mayor
Temporales Son de permanencia breve
Persistencia
Permanentes Su impacto es permanente
No es posible volver a la situación inicial

Irreversibles Existe la posibilidad de volver a la situación


inicial
Reversibles
Existen acciones que pueden mitigar o
Recuperación Mitigables compensar el impacto

Recuperables Luego de un tiempo el ambiente regresa a


su situación inicial
Fugaces
Inmediatamente el ambiente vuelve a su
estado inicial
La influencia de la acción es directa sobre
Directos el ambiente
Relación de
causalidad
Indirectos La influencia de la acción no es directa
sobre el ambiente
No tiene relación con otros efectos
Simples
Un impacto se adiciona a otro agravando la
Interacción Sinérgicos situación

Acumulativos Se combinan creando un proceso de


degradación

El ambiente y la previsibilidad de los cambios

Diagnóstico ambiental. El diagnóstico ambiental se refiere a la construcción de un modelo que


represente un determinado problema ambiental, el cual debe ser claramente delimitado e incluye
objetivos tanto integrativos como fragmentarios. Dado que la evaluación del impacto ambiental
consiste en una comparación de un ambiente sin un cierto proyecto con la situación una vez
implementado el proyecto, entonces el diagnóstico cumple con la tarea de identificar el “estado
cero” del ambiente antes del proyecto. Esto implica describir el estado actual, sus causas
históricas, su probable evolución en ausencia del proyecto y valorar esta situación actual y su
evolución respectiva.

Dos cualidades deben ser satisfechas por cualquier diagnóstico ambiental:


• Consistencia: Esto quiere decir que debe garantizar una apropiada interacción, cuantificación y
cualificación de las variables que componen el diagnóstico.
• Legitimidad: El diagnóstico debe poder identificar y comunicar en forma objetiva lo observado,
esto sin dejar de lado ciertas “subjetividades significativas”.

Una de las etapas del diagnóstico consiste en establecer el área de influencia del proyecto:

• Area de influencia directa: Corresponde a un área delimitada por un radio cercano al proyecto,
sus actividades y la demanda primaria hacia el medio natural.
• Area de incidencia indirecta: Depende de diversos factores según el tipo de proyecto, el origen de
los insumos del proyecto, el destino de sus efluentes, emisiones, residuos, etc.

Es importante resaltar que un diagnóstico ambiental no consiste en una lista de factores


relacionados con el entorno del proyecto, sino que con base en los factores clave y los puntos
críticos del ambiente del proyecto se describe el estado cero del territorio previamente al
establecimiento del proyecto.

Inventario ambiental. El inventario ambiental debe realizar una descripción y una valoración del
ambiente en factores referentes a la población humana, fauna, flora, suelo, agua, aire, clima,
paisaje, ecosistemas, etc., antes de la operación del proyecto, detallando con precisión los posibles
factores afectados, entre otros datos relevantes. El inventario puede estar constituido por dos
partes:

• Fase descriptiva: En esta fase sólo se informa sobre los diferentes factores ambientales.
• Fase valorativa: Considera el valor de conservación de los factores ambientales estudiados en la
fase descriptiva y sus funciones tanto hacia adentro como hacia fuera del área de estudio.

El análisis está fuertemente ligado con la escala del proyecto, pues a menor escala se requerirá un
mayor detalle en el análisis de los factores implicados.

Prospección integrada del ambiente. Es necesario que antes de la puesta en marcha de un


proyecto se recopile toda la información relevante sobre el territorio y su contexto socioeconómico.
Para ello debe recurrirse a todas las fuentes de información disponibles, lo cual implica el trabajo
de equipo pluridisciplinares.

Precisiones en torno a los factores ambientales. Para poder trabajar con toda la información
necesaria es útil ordenar los distintos factores según su origen:

Aire
Clima
Medio abiótico
Geomorfología - suelo
Subsistema Físico Natural Agua
Vegetación
Medio biótico
Fauna
Medio perceptual Paisaje
Aspectos demográficos
Aspectos sociales
Subsistema socioeconómico
Aspectos económicos
Subsistema de núcleos e Infraestructura, servicios, equipamiento,
infraestructura estructura urbana
Valoración de factores ambientales. Luego de confeccionado el inventario es necesario conocer
su grado de conservación. Así los factores pueden clasificarse en:

• Cuantificables directamente: En este caso su valoración no ofrece problemas, por ejemplo la


temperatura.
• Cuantificables indirectamente: Se emplea algún indicador ambiental, al valorar el nivel cultural de
una población.
• Elementos cualitativos: Estos factores no son cuantificables, por ejemplo al considerar un hábitat
faunístico.

La incertidumbre. La interacción entre los sistemas humanos y los ecológicos es de un carácter


incierto, a tal punto que es posible hablar de una multiestabilidad de los sistemas. Surge de esta
manera un paradigma adaptativo que considera a la incertidumbre en sus análisis. Este paradigma
adaptativo se caracteriza por establecer redes de cadenas causa-efecto, considerar sistemas
ambientales poliestables, retrasos temporales de las acciones humanas, y una variabilidad
dinámica de la mayoría de los ecosistemas.

El proyecto y sus efectos ambientales

La mayor parte de los proyectos, en su concepción original, no están diseñados teniendo en cuenta
los factores ambientales, lo cual significa que la realización de una evaluación del impacto
ambiental, preferiblemente antes de la realización del proyecto, permite su replanteamiento para
considerar este tipo de variables. En este sentido es necesario establecer con detalle la capacidad
de acogida de un territorio para que pueda ser desarrollado un proyecto en él. Con este fin es
necesario realizar un inventario del medio físico, biológico, social y económico del territorio, y de
esa manera determinar sus potencialidades y limitaciones.

Etapas del proyecto. Se puede hablar de tres etapas básicas de un proyecto, ya que es
importante determinar en cuál de ellas se da un mayor impacto:

Etapa Descripción
En ciertos proyectos el mayor impacto se da en esta fase, por
Construcción
ejemplo en la construcción de una carretera.
Este es el caso de un proyecto en el que el mayor impacto se da
Operación
durante su operación.
En esta otra situación el mayor efecto se da cuando el proyecto es
Abandono
abandonado, como lo es el caso de una central nuclear.

Tipología de proyectos y EIA. En forma general podrían distinguirse las siguientes clases de
proyectos y su respectiva evaluación del impacto ambiental:

Tipo de
Tipo de EIA
impacto
Consiste básicamente en una lista de revisión para
Informe de
ponderar cuantitativamente el impacto previsible del
Bajo Impacto
proyecto. Se aplica en aquellos casos en los que se
Ambiental
espera un bajo impacto.
Evaluación
En este tipo de EIA se identifica, caracteriza y valora
simplificada de
Medio en forma cualitativa el impacto ambiental, a través del
Impacto
empleo de escalas de puntuación. Se aplica en casos
ambiental
en los que se considera que habrá un impacto
ambiental medio.
Incluye los pasos descritos en los dos tipos anteriores
Evaluación
y además el proceso de identificación, cuantificación,
detallada del
Alto valoración, corrección de medidas y participación
impacto
pública. Se aplicaría en aquellos casos en los que se
ambiental
esperaría que el impacto de proyecto sea alto.

En general se espera que la evaluación del impacto ambiental sea capaz de:

1. Identificar los impactos ambientales negativos más importantes dentro del conjunto total de
posibles efectos que podría generar un proyecto
2. Comparar las distintas alternativas de proyecto dentro de la totalidad posible.
3. Señalar una serie de medidas de prevención y control que podrían ser implementadas
4. Proyectar los costos y beneficios económicos de llevar a cabo cada alternativa técnica y
ambientalmente factible, y sus consecuencias sobre el ambiente.

Breve esquema de un estudio de impacto ambiental:

1.1 Selección y Descripción de Objetivos, localización, componentes, magnitud,


Aspectos relevantes del capacidad, tecnología, demanda de insumos,
proyecto para el Análisis oferta de productos, etapas del proyecto, marco
ambiental legal, etc.
1.2 Definición y caracterización
Estado de situación del ambiente afectado: medio
del sistema ambiental afectado
natural, antrópico, problemas ambientales, áreas
Área de estudio y región de
de valor patrimonial y cultural.
influencia
1.3 Determinación de los Impactos de la implementación del proyecto, sobre
impacto ambientales todo destacar aquellos impactos irreversibles e
potenciales inevitables.
1.3.1 Identificación y Efectos según etapa del proyecto. Empleo de
caracterización de efectos distintos instrumentos técnicos.
Asignación de magnitud y significación de efectos.
1.3.2 Evaluación de efectos Aplicación de evaluaciones cuantitativas.
Establecimiento de parámetros, áreas críticas, etc.
Proposición, valoración y comparación de
1.4 Análisis de alternativas
alternativas de localización, tecnología, etc.
Identificación de posibles acciones generales,
1.5 Propuesta de Acción medidas de prevención, eliminación, reducción,
Ambiental mitigación o compensación de impactos adversos,
etc.
Identifica, de acuerdo con el estudio realizado,
impactos, recursos, acciones, datos necesarios y
1.6 Elaboración de un plan de
realiza un plan de seguimiento y control de los
monitoreo
impactos ambientales del proyecto y las acciones
propuestas.

Impactos y factores ambientales


Impacto de las actividades sobre el sistema natural. Tal como se ha mencionado en otras clases,
ninguna actividad humana es neutra con respecto al ambiente, es decir, siempre existe algún tipo
de impacto. En consecuencia es necesario identificar cuáles impactos pueden producirse en cada
caso, sus efectos sobre el sistema natural, social y económico, las interacciones entre estos
efectos y las posibles sinergias positivas y negativas que podrían presentarse.

Las distintas actividades humanas se relacionan de distintos modos con los recursos naturales, ya
que éstos, sea en forma directa o indirecta, proveen:

• Materias primas.
• Energía.
• Sitios para disposición de residuos.

A continuación se mencionan algunos de los principales factores del sistema natural que se ven
afectados por las actividades antrópicas.

Diferentes contaminantes afectan la atmósfera,


perjudican a personas, plantas, animales, etc. La
Medio atmosférico
contaminación se genera tanto por fuentes naturales
como de origen antrópico.
Se impacta la cantidad y calidad del agua
Aguas proveniente de lluvia, ríos, lagos, etc.
superficiales Algunas fuentes de la contaminación se consideran
Sistema puntuales y otras como difusas.
natural
La explotación del suelo, la extracción de recursos y
Suelos y aguas la eliminación de residuos son las tres actividades
subterráneas que más frecuentemente impactan al suelo y a las
aguas subterráneas, afectan su cantidad y calidad.
También llamado impacto ecológico, se refiere a los
Sistema biótico efectos sobre los elementos componentes de los
ecosistemas, afectando plantas, animales, etc.
El principal efecto es la producción de bienes y
Medio socio- servicios, lo cual implica distribución, cambio y
económico consumo. Genera tanto efectos positivos como
negativos.
Medio
social Se impactan los recursos culturales, es decir los
Medio cultural relacionados con la arquitectura, sitios históricos,
(histórico y yacimientos arqueológicos, lugares de interés
arqueológico) educativo, y las modificaciones sobre los estilos de
vida de la población.

Sinergias positivas y negativas de los impactos. Al hablar de sinergia se refiere a que el efecto
final es mayor que la suma de los efectos generados por las acciones individualmente. Esto es
aplicable tanto para los efectos adversos sobre el ambiente como para aquellas acciones que
pretenden mitigar o compensar el deterioro. Se puede hablar entonces de sinergias positivas y
negativas.

Uno de los principales problemas de algunas metodologías es identificar este tipo de sinergias,
tanto positivas como negativas.

Metodología general para la EIA


Una evaluación de impacto ambiental incluye entre otros un diagnóstico ambiental, una descripción
del proyecto, la aplicación de una metodología de evaluación de impacto ambiental, un plan de
manejo y un monitoreo. La aplicación de la metodología de evaluación de impacto ambiental se
podría decir que es el “corazón” del Estudio de impacto ambiental.

Existen diversas metodologías, y no hay una que sea universal. La decisión sobre la metodología
óptima es compleja, sin embargo deben tomarse a la hora de decidir los tres siguientes aspectos:

 La metodología debe ser adecuada a lo que se va hacer (identificación de impactos,


comparación de alternativas, etc.).
 La metodología debe ser suficientemente independiente de los juicios de valor del
evaluador (su percepción y sesgos).
 La metodología debe ser económica (tanto en costo económico en requerimiento de datos,
equipo, personal, etc.).

Se mencionarán ahora las principales metodologías de evaluación del impacto ambiental, las
cuales pueden ser agrupadas en dos grandes categorías: métodos de identificación de impactos y
métodos de evaluación de impactos.

Métodos de identificación de impactos:

Utilidad relativa
Selección
Métodos Descripción Descripción de Resumen y
Identificación
del medio actuación comunicación
de impactos
afectado de la del estudio
propuesta
Lista de
factores
ambientales
que podrían
Checklist o
ser afectados.
listas de Media Alta/baja Medio/alta Media
Pueden ser
chequeo
simples,
descriptivas,
escalonadas o
cuestionarios.
Establecen
relaciones
Diagramas
causales entre Alta
de flujo
los
componentes.
Identifican
Matrices factores
causa- potencialmente
Alta Baja Media/baja Alta/baja
efecto impactables
simples dadas ciertas
acciones.
Consiste en la
Cartografía superposición
ambiental de mapas
temáticos.
Métodos de evaluación de impactos:

Utilidad relativa
Métodos Descripción Identifi- Interpre- Predi- Comuni-
Detectar
Evaluar Réplica de
luces
cación tación cción cación riesgos resultados
rojas
Consiste en una
matriz que relaciona
las acciones de un
Matriz de
proyecto con los Alta Media Baja Baja Media/alta Media Baja
Leopold
elementos del medio
que pueden ser
afectados.
Establece una lista de
indicadores de
impacto relacionados
Sistema de con ecología,
Alta Alta Alta Baja/Media Media Nula Alta
Batelle contaminación
ambiental, aspectos
estéticos y aspectos
de interés humano.

Impactos ambientales causados por


actividades económicas de
producción y consumo
Mario Alberto Cedillo Osorio

 Medio Ambiente
 01.12.2014
 9 minutos de lectura

gestión ambiental y desarrollo sostenible


Resumen

Surge un nuevo problema dogmático que nada tiene que ver con la fe, pero si con
las actividades económicas de producción y de consumo que al mismo tiempo
inciden e impactan al medio ambiente.

En donde la omisión de una norma puede poner en riesgo todo un sistema natural
derivado de una actividad económica en donde no se puede responsabilizar de
manera directa a una persona o grupo de personas ya que dichas impactos
ambientales también se derivan de la ausencia de la norma. Es por eso la
importancia en la aplicación, desarrollo, e implementación de un dogmatismo
ambientalista que permita recobrar la confianza al considerar el marco legal y
normativo como verdadero y de aplicación estricta.

Sponsored Content

Caracas, Get to Know Beauty Bakerie CEO Cashmere NicoleBeauty Bakerie


Stock Dividends or Buybacks?GROCO CPAs & Advisors


5 Top Antivirus Products. #1 Will Shock You.My Antivirus Review

Recommended by

Introducción

El crecimiento no planeado de las ciudades y la concentración de la población en


las principales cabeceras municipales, demandan una serie de bienes y servicios
(agua, luz, seguridad, escuelas y hospitales entre otros) al mismo tiempo que
alrededor de estos se genera toda una actividad económica de consumo y
producción de bienes y servicios, modificando y alterándose el uso del suelo, de
agrícola-bosque-selva a casa habitación, potreros tiendas y empresas,
deforestando y creciendo sin un plan o proyecto, impactando de manera gradual al
medio ambiente.

Lo cual si lo cimentamos en una base dogmática Ambientalista, sustentada en el


Derecho Administrativo (reglamentación Municipal de construcción y uso del
suelo), el cual cuando se detecta una ausencia o falta de actualización del marco
legal o de decisión política, modifica y altera considerablemente el medio
ambiente.

En el presente ensayo haré referencia al concepto de Impacto Ambiental como


secuencia de las actividades económicas de producción y de consumo,
posteriormente analizare la importancia del dogmatismo y finalmente antes de mis
conclusiones me enfocare en los impactos ambientales desde una perspectiva
dogmática.

Impacto ambiental

El concepto de Evaluación de Impacto Ambiental se introdujo por primera vez en


Estados Unidos en 1969 como requisito de la National Environmental Policy Act
(ley nacional de políticas sobre el medio ambiente, comúnmente conocida como
NEPA). En donde diferentes naciones del mundo han incluido en sus
disposiciones legales y reglamentarias la EIA, la cual requiere:

 Un examen previo, para decidir si un proyecto requiere un estudio de impacto y


hasta qué nivel de detalle.
 Un estudio preliminar, que sirve para identificar los impactos claves y su magnitud,
significado e importancia.
 Una determinación de su alcance, para garantizar que la EIA se centre en
cuestiones clave y determinar dónde es necesaria una información más detallada.
 El estudio en sí, consistente en meticulosas investigaciones para predecir y/o
evaluar el impacto, y la propuesta de medidas preventivas, protectoras y
correctoras necesarias para eliminar o disminuir los efectos de la actividad en
cuestión.

En nuestro país la Ley Federal para Prevenir y Controlar la Contaminación


Ambiental (LFPCCA) coordino sus acciones con la entonces Secretaria de
Salubridad y Asistencia (SSA), y como dato curioso no se contemplaba lo
referente a Impacto Ambiental, pero si lo concerniente al manejo, prevención de la
contaminación del aire, suelos y agua.

Es a partir de 1977 que se fusionan la Secretaria de Agricultura y la de Recursos


Hidráulicos, estableciéndose directamente en el artículo 6 de la LFPCCA, en
donde indicaba que la Secretaría de Agricultura y Ganadería, la Secretaria de
Recursos Hidráulicos, la Secretaría de Industria y Comercio y la Secretaría de
Salubridad y Asistencia, deberían en su ámbito de competencias “estudiar,
planificar, evaluar y calificar todos los proyectos o trabajos relacionados con
desarrollo urbano, parques nacionales, áreas industriales y de trabajo y
zonificación en general para prevenir los problemas inherentes a la contaminación
ambiental”.

Como podemos ver los antecedentes en nuestro país del tema de Evaluación de Impacto
Ambiental se puede decir que lleva aproximadamente cuarenta años de vigencia en
donde en su momento la Secretaria de Salubridad y Asistencia, se inclinaba por el
cuidado de la salud derivado de los cambios provocados al ambiente, en la era de los
ochentas el enfoque de la Ley Federal de Protección al Ambiente es de corte urbanista,
de los noventa a la fecha se enfoca hacia la cuestión ambiental, siendo más integral y
sustentado en la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, resaltando
la importancia del manejo de los recursos naturales mediante la plataforma de desarrollo
sustentable, que permitirá garantizar un medio ambiente más digno y sano para las
futuras generaciones.

En la actualidad la citada Ley General, contempla la concurrencia de los tres


órdenes de gobierno otorgándoles facultades respecto a la “La evaluación del
impacto ambiental de las obras o actividades…” .

Por su parte la actual Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales


(SEMARNAT) a través de sus organismos desconcentrados ha utilizado como
bandera de conservación y preservación del medio ambiente, al instrumento de
Evaluación de Impacto Ambiental, mismo que está sustentado en la Ley General
del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente y su correspondiente
disposición reglamentaria.

Siendo la prioridad de dichos instrumentos legales y reglamentarios la protección,


preservación, cuidado, manejo y conservación de los ecosistemas y sus recursos
naturales.

Definiciones de Evaluación de Impacto Ambiental

“Es el marco normativo que rige la política ambiental el cual es de aplicación


estricta y obligatoria, se enfoca a prevenir el deterioro y desequilibrio ecológico
derivado del desarrollo de las actividades económicas en nuestro país”.

“El conjunto de elementos naturales y artificiales o inducidos por el hombre que


hacen posible la existencia y desarrollo de los seres humanos y demás
organismos vivos que interactúan en un espacio y tiempo determinados”.

“Modificación del ambiente ocasionado por la acción del hombre o de la


naturaleza”.

Desde mi punto de vista la puedo definir como “La relación directa o indirecta del
hombre con su medio ambiente la cual reacciona modificando su estado natural”.

Manifestación de Impacto Ambiental

Es “El documento mediante el cual se da a conocer, con base en estudios, el


impacto ambiental, significativo y potencial que generaría una obra o actividad, así
como la forma de evitarlo o atenuarlo en caso de que sea negativo”.
Tipos de Impactos Ambientales

Citando, los Impactos Ambientales estos se encuentran divididos en nueve


grupos:

1. Por la variación de la calidad ambiental (medio, alto, positivo, negativo).


2. Por la extensión (puntual, parcial, total, critica)
3. Por el momento en que se manifiesta (corto, mediano y largo plazo)
4. Por su persistencia (temporal, permanente)
5. Por su capacidad de recuperación (recuperable, irreversible, mitigable, fugaz)
6. Por la relación causa efecto (directo, indirecto, secundario)
7. Por la interrelación de acciones y/o efectos (simple, acumulativo, sinérgico)
8. Por su periodicidad (continuo, discontinuo, periódico, irregular)
9. Por la necesidad de aplicación de medidas correctoras (critico, severo, moderado)

De acuerdo a lo anterior vemos como existe una variedad de impactos y de cómo


estos pueden repercutir en el ambiente de diversas formas, mismas que en su
conjunto o de manera separadas están incidiendo en el Cambio Climático como
consecuencia de las acciones generadas por el hombre para satisfacer sus
necesidades y expectativas tanto de carácter económico como las derivadas de la
producción y del consumo, algunas de estas consecuencias son “el calentamiento
global, el agujero en la capa de ozono, el efecto invernadero, la lluvia ácida, la
contaminación del agua, aire, suelo, la erosión-desertificación del suelo”.

Dogmatismo

Cuando evocamos el término Dogmatismo regularmente lo asociamos a un


concepto teológico, pero en si al analizar y comparar los diferentes conceptos
estos como toda ciencia se deriva del griego “dogma”, que al mismo tiempo lo
podemos relacionar con la opinión preformada que tienen los seres pensantes y la
decisión de aceptar como valido un concepto.

Definición de Dogmatismo y Dogmas

Este proviene del griego δόγμα que significó en su concepción filosófica, una
opinión fundada en principios, y de esta manera fueron usados durante mucho
tiempo los vocablos «dogma» o «dogmático». Serían dogmas aquellas supuestas
verdades aceptadas sin crítica o examen, y dogmáticos aquellos que las aceptan o
conminan a otros a su aceptación.

El dogmatismo filosófico se refiere a la doctrina según la cual las facultades


cognoscitivas humanas pueden, de manera espontánea y con plena certeza,
alcanzar la verdad.

Tendencia a afirmar que una cosa es cierta y segura cuando en realidad es


discutible.
Aceptación y profesión de una doctrina sin examen crítico y en virtud de una
autoridad que no corresponde al valor intrínseco de tal doctrina.

Sexto Empírico ya usaba de esa forma el término «dogmático». Al clasificar las


distintas sectas filosóficas, este autor contrapone dogmáticos (dogmatikoí)
académicos y escépticos (skeptikoí): mientras que Aristóteles, los epicúreos y los
estoicos, se caracterizarían por creerse en posesión de la verdad, en donde la
verdad no puede ser aprehendida habiéndonos de conformar, por tanto, sólo con
la verosimilitud, los escépticos serían los filósofos examinadores que siguen
investigando –sképtomai significaba mirar cuidadosamente o examinar una cosa, y
sképsis examen o indagación.

Las aportaciones de Comte, se refiere al Dogmatismo como una actitud en la que


no tiene sustento ni la crítica ni el análisis para aceptarse como válidas ciertas
teorías en donde el sujeto permanece en un estado de confort frente al objeto.

En mi opinión dogmatismo es donde cada persona se forma su propia realidad


desde la perspectiva de su conciencia la cual puede o no ser aceptada por la
razón o puesta en duda por la carencia de elementos o juicios valorativos.

Dogmatismo Jurídico

El dogmatismo jurídico es una disciplina perteneciente al Derecho, cuyo método


se basa en la de complejos sistemas de carácter formal, compuestos por dogmas
jurídicos o tipos.

Este concepto parte de un principio cuyo fundamento es la legalidad y vigencia de


la norma fundamental la cual está integrada por un conjunto de leyes, reglamento,
códigos y demás disposiciones cuya vigencia y eficacia conforman todo un
sistema jurídico, en donde al especialista le permite consultar e interpretar una
serie de disposiciones reglamentarias y de acuerdo a la fuerza de su aplicación las
considera como verdaderas y supremas, como una garantía de su legalidad,
cuando se pone en tela de juicio la viabilidad de las disposiciones legales, les
corresponde a los jueces y magistrados quienes son los que establecen los
principios dogmáticos del derecho.

Impactos ambientales causados por las actividades económicas de producción y


de consumo desde una perspectiva dogmática.

Considero como cierto y capaz de aplicar las disposiciones reglamentarias bajo


una perspectiva dogmática cuando se analizan e interpretan todas las variables
que inciden e impactan al medio ambiente natural y en donde las actividades
económicas derivadas de la producción y de consumo, deberán de estar
legitimadas y aceptadas como verdades jurídicas en beneficio de los ciudadanos
del mundo y de las futuras generaciones.
En donde la parte económica de cualquier proceso representa un factor de
supervivencia desarrollo y sustento familiar, de satisfacción de necesidades y
expectativas, en donde estas actividades están condicionadas a las disposiciones
y reglamentaciones jurídicas, a las decisiones de carácter político y social. Al
mismo tiempo los inversionistas pequeños, medianos y grandes, nacionales e
internacionales, públicos o privados están obligados a considerar, aplicar y
respetar los estudios de Impacto Ambiental que se generen como parte de
cualquier actividad económica.

Esto es mucho más complejo de lo que se piensa ya que por mínima que sea la
actividad o inversión económica desde un pequeño taller o tiendita hasta la
construcción de grandes centros comerciales, oficinas y casas habitación para
satisfacer una necesidad de producción o consumo. Indistintamente, de manera
gradual e invisiblemente se está impactando al medio ambiente, a la flora, la
fauna, el suelo, el aire así como a los organismos y seres vivos que en ella
habitan.

En donde la perspectiva dogmática de creer, aceptar, validar y aplicar los


instrumentos normativos y legales, destinadas al cuidado, preservación y
conservación del medio ambiente así como a los organismos y seres vivos.

En paralelo con cualquier actividad económica ya sea de producción y de


consumo. Un dogmatismo ambiental es el que estará integrado por todas las
leyes, reglamentos, normas y disposiciones de carácter ambiental que permitan
alcanzar el equilibrio y preservación del medio ambiente, las cuales al robustecer
su parte dogmática serán aceptadas como verdaderas disposiciones en beneficio
de las futuras generaciones en donde no se permita su descalificación ni su crítica.

Conclusiones

Cada uno de nosotros en nuestro tramo de control e influencia aceptara como


verdaderas y aplicables las disposiciones legales creando una doble conciencia de
la fragilidad del medio ambiente y del hacer conciencia del daño irreversible que
se está generando a las futuras generaciones y el impacto que estamos causando
derivado de las actividades económicas, del consumo desmedido y servicios no
reglamentados y de marcos jurídicos inaplicables por la falta de autoridad.

Para lo cual se recomienda, analizar la información disponible, racionalizar el


consumo, separar la basura, utilizar productos biodegradables, reforestar, utilizar
lo menos posible los vehículos automotores, comprar productos nacionales
biodegradables, tratar el agua, consumir solo lo necesario. Todo esto permitirá
crear una conciencia dogmática que disminuya en lo posible los impactos
ambientales.
Cómo influye el crecimiento económico en el medio
ambiente

El desarrollo económico de los países tiene una influencia importante sobre el medio ambiente. El
volumen de tráfico comercial contribuye de varias maneras a aumentar o paliar la contaminación, dos
impactos diferentes que dependen, entre otras cosas, de los ingresos del país en el que se
desarrolla la actividad económica.
23 de febrero de 2016
Un estudio realizado en 98 países del mundo analiza la relación entre tráfico comercial y contaminación. Los
autores indican que un aumento en la producción y comercialización de bienes supone también un
incremento en los índices de contaminación. Aun así, esta afirmación debe matizarse ya que no siempre
se puede aplicar de la misma manera a todos los países. El informe demuestra que, a pesar de que el
aumento en la producción y comercialización de bienes se concibe también como un incremento directo en la
contaminación, en algunos países desarrollados se puede revertir en efectos positivos. Por el contrario, los
países desarrollados sufren un empeoramiento de la calidad del entorno natural con un mayor del desarrollo
económico.
Cuanta más actividad económica se produzca, mayor será el consumo de energía y de servicios como
transporte, un hecho que implica más costes ambientales. Por lo tanto, el estudio concluye que un tráfico
comercial muy alto es más nocivo y tiene peores consecuencias en la calidad medio ambiental.
Asimismo, los países desarrollados que tienen altos ingresos, probablemente adaptan su producción a leyes,
normas y reglamentos que regulan la contaminación. En cambio, los estados en desarrollo no cuentan
con normas tan severas para la producción de sus bienes, por lo que la fabricación y comercialización de sus
productos deja peor huella en el medio ambiente que en los países ricos.
Cuando existe un tráfico comercial elevado en algún país, el consumo de energía también es cuantioso. Este
hecho puede suponer un aumento indiscriminado de la degradación medioambiental según un estudio
publicado en 2013 sobre “los efectos del desarrollo económico, el crecimiento económico, el consumo de
carbón y la apertura comercial sobre las emisiones de CO2 en Sudáfrica”. Esta investigación analiza la
evolución de todos estos conceptos correlacionados desde 1965 hasta 2008 y concluye que el crecimiento
económico va ligado de un aumento en el consumo de energía. En el caso de Sudáfrica el carbón es la
principal fuente de energía, una de las más contaminantes.
EFECTOS POSITIVOS
Aun así, el informe anterior indica que existen indicios para pensar que una mayor actividad económica
puede tener un impacto positivo en el medio ambiente. Para lograr un crecimiento económico sano y
limpio y mantener una buena relación con nuestro entorno, el crecimiento de los beneficios de la producción y
comercialización de productos deben ir acompañados de inversiones en constantes mejoras en todos los
procesos de la actividad comercial para reducir la contaminación al mínimo posible. Esto se traduce en apoyo
a la investigación, aplicación de las medidas apropiadas, desarrollo y adaptación de nuevas tecnologías para
la creación de industrias limpias, etc.
La investigación de contaminación y crecimiento económico realizada en Sudáfrica también añade que “un
mayor grado de apertura económica y financiera refuerza el marco institucional para la creación de
incentivos a las empresas para reducir las emisiones contaminantes”. Además, en el estudio subrayan
los efectos de las políticas económicas y políticas medioambientales, así como en el comportamiento
financiero de los países. “Un mayor grado de desarrollo del sistema financiero dedicado a apuntalar las
innovaciones tecnológicas y a aumentar el gasto en I+D+I en la conservación de energía se traduce en la
eficiencia energética y por lo tanto puede reducir las emisiones”, reflejan los autores.
Etiquetas crecimiento , medio ambiente , políticas económicas
Publicado por: David Gil Garcia
GESTION AMBIENTAL EN VENEZUELA

EL DETERIORO ECOLÓGICO Y LA GESTIÓN AMBIENTAL


La carrera de gestión ambiental, que es un programa de formación universitaria, que
forma parte esencial de las políticas de educación superior y es base del desarrollo de la nación
venezolana.
Toda la gama de los aspectos de gestión y control ambiental se han constituido en temas
de la mayor importancia para el país en las últimas décadas, aunque las tecnologías disponibles
no han alcanzado el mismo grado de desarrollo para su control, poco a poco el enfoque de
conservación del ambiente se está convirtiendo en algo indispensable de tener en cuenta dentro
de cualquier estudio de factibilidad de proyectos.
Ante la necesidad de control de la polución y contaminación ocasionada sobre el medio
por la generación indiscriminada de residuos producto de las actividades antropogénicas, es
decir ocasionadas por el hombre, se hace necesario identificar, desarrollar e implementar
herramientas que permitan, de manera anticipada, hacer una evaluación temprana de conflictos
de índole ambiental, partiendo de la base del análisis de la entrada y salida de energía y
materiales del sistema, en el ambiente especifico de estudio, en el que el hombre desarrolla sus
actividades y para lo cual requiere fuentes externas.
Un conocimiento profundo de los procesos que se llevan a cabo al interior de un sistema
cualquiera, permite predecir los impactos que pueden ocasionar las actividades antropogénicas
y obtener así una percepción temprana de los mismos, posibilitando la cuantificación del efecto
de éstos, la toma de decisiones sobre las tecnologías apropiadas para la solución de los
problemas ambientales y obteniendo una visión a largo plazo para alcanzar así el manejo
sustentable de la región en estudio.
En el marco del concepto de desarrollo sustentable, que orienta la política nacional de
desarrollo, se procura el desarrollo de un crecimiento económico con responsabilidad ambiental
y calidad de vida, también el sector empresarial, debe enmarcar sus acciones dentro del marco
de la responsabilidad social integral, incluyendo en ella el aspecto de su desempeño ambiental.
El deterioro ecológico mundial está vinculado a patrones comportamiento capitalistas
como utilización de los recursos sin límites, con hábitos de consumo predadores y de ganancia
sin freno, comportamientos abusivos, la no aplicación de leyes y reglamentos que deberían
proteger el entorno y sobretodo la falta de políticas para promover la participación como la
corresponsabilidad para la protección de la vida.
Venezuela es uno de los países con mayor diversidad biológica en el mundo, gran
diversidad natural de ecosistemas, hay una diversidad social expresada en términos étnicos y
culturales, este valor estratégico de nuestros ecosistemas, dentro del contexto geopolítico
latinoamericano y mundial, hace imprescindible la formulación de una política ambiental
concreta, para conseguir un equilibrio adecuado entre el ambiente y el desarrollo de lo
económico, con un crecimiento de la población dentro de los parámetros de justicia social, pero
con uso racional de los recursos.

Esto se justifica porque nuestra situación ambiental se encuentra marcada por procesos
de deterioro y perturbación derivados de la aplicación de un modelo de desarrollo industrialista
y neoliberal basado en la dominación, la explotación y el desequilibrio.

¿Qué es gestión ambiental?


La gestión ambiental responde al "cómo hay que hacer" para conseguir lo planteado por
el desarrollo sostenible, es decir, para conseguir un equilibrio adecuado para el desarrollo
económico, crecimiento de la población, uso racional de los recursos y protección y
conservación del ambiente.
Abarca un concepto integrador superior al del manejo ambiental: de esta forma no sólo
están las acciones a ejecutarse por la parte operativa, sino también las directrices, lineamientos
y políticas formuladas desde los entes rectores, que terminan mediando la implementación.
Tiene que ver con las políticas del estado en materia ambiental, el ordenamiento territorial,
evaluación del impacto ambiental, contaminación y la educación ambiental.
Existen para las empresas privadas normas de carácter internacional, aplicada en muchos
países, como la ISO-14001, del año 2004, que establece los requerimientos mínimos para
establecer un Sistema de Gestión Ambiental, está diseñada para conseguir un equilibrio entre
el mantenimiento de la rentabilidad y la reducción de los impactos en el ambiente, plantea que
con el apoyo de las organizaciones, es posible alcanzar ambos objetivos, buscando reducir los
impactos en el ambiente y cumplir con la legislación en materia ambiental.
En este sentido la gestión ambiental en la empresa privada como publica, pasa de ser un
elemento de peso para el cumplimiento de las leyes establecidas en el marco legal venezolano,
esta gestión pública como privada debe ver las actividades que desempeña en función de lograr
un manejo integral y en equilibrio con el ambiente, dentro de los parámetros de sustentabilidad,
con el fin de obtener una adecuada calidad de vida, previniendo o mitigando los problemas
ambientales.

¿Cómo es en Venezuela el marco legal, en el área


ambiental?

El papel del programa de Gestión Ambiental y la Universidad Bolivariana de Venezuela,


es el de coadyuvar al desarrollo integral y sustentable, a través de la ejecución de proyectos de
investigación y acción que modifiquen y mejoren la calidad de vida dando respuesta a los
artículos 127, 128 y 129 de la Constitución Nacional correspondientes a los derechos
ambientales.
En nuestro marco legal, político y filosófico la Constitución de la República Bolivariana
de Venezuela, publicada en Gaceta Oficial Extraordinaria N° 5.453 de la República Bolivariana
de Venezuela. Caracas, viernes 24 de marzo de 2000.
Incluye en el Título III, Capítulo IX, “De los Derechos Ambientales” el cual establece que
los derechos y deberes de los venezolanos con referencia al mantenimiento de un ambiente
“seguro, sano y ecológicamente equilibrado”, protegiendo “la diversidad biológica, los recursos
genéticos, los procesos ecológicos, los parques nacionales y monumentos naturales y demás
áreas de especial importancia ecológica”, estableciendo la obligación del Estado en fomentar la
participación comunitaria.

ARTÍCULO 127.
Es un derecho y un deber de cada generación proteger y mantener el ambiente en beneficio de
sí misma y del mundo futuro. Toda persona tiene derecho individual y colectivamente a disfrutar
de una vida y de un ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado. El Estado protegerá
el ambiente, la diversidad biológica, los recursos genéticos, los procesos ecológicos, los
parques nacionales y monumentos naturales y demás áreas de especial importancia ecológica.
El genoma de los seres vivos no podrá ser patentado, y la ley que se refiera a los principios
bioéticos regulará la materia.

Es una obligación fundamental del Estado, con la activa participación de la sociedad, garantizar
que la población se desenvuelva en un ambiente libre de contaminación, en donde el aire, el
agua, los suelos, las costas, el clima, la capa de ozono, las especies vivas, sean especialmente
protegidos, de conformidad con la ley.

ARTÍCULO 128.
El Estado desarrollará una política de ordenación del territorio atendiendo a las realidades
ecológicas, geográficas, poblacionales, sociales, culturales, económicas, políticas, de acuerdo
con las premisas del desarrollo sustentable, que incluya la información, consulta y participación
ciudadana. Una ley orgánica desarrollará los principios y criterios para este ordenamiento.

ARTÍCULO 129.
Todas las actividades susceptibles de generar daños a los ecosistemas deben ser
previamente acompañadas de estudios de impacto ambiental y socio cultural. El Estado
impedirá la entrada al país de desechos tóxicos y peligrosos, así como la fabricación y uso de
armas nucleares, químicas y biológicas. Una ley especial regulará el uso, manejo, transporte y
almacenamiento de las sustancias tóxicas y peligrosas.
En los contratos que la República celebre con personas naturales o jurídicas, nacionales o
extranjeras, o en los permisos que se otorguen, que afecten los recursos naturales, se
considerará incluida aun cuando no estuviera expresa, la obligación de conservar el equilibrio
ecológico, de permitir el acceso a la tecnología y la transferencia de la misma en condiciones
mutuamente convenidas y de restablecer el ambiente a su estado natural si éste resultara
alterado, en los términos que fije la ley.

¿De que convenios internacionales es Venezuela


signataria en materia ambiental?
 Convención para la Protección de la Flora, de la Fauna y de las Bellezas Escénicas Naturales
de los Países de América (1941)
 Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora
Silvestres (CITES) (1977)
 Convenio para la Protección y el Desarrollo del Medio Marino de la Región del Gran Caribe
(1986) del cual se deriva el Protocolo Relativo a las Áreas, Flora y Fauna Silvestres
Especialmente Protegidas (SPAW)
 Convención relativa a los Humedales de Importancia Internacional; actualmente denominada
“Convención RAMSAR para los Humedales” (1988)
 Convención sobre Diversidad Biológica (1994) de la cual se derivan la Decisión 391 de la Junta
del Acuerdo de Cartagena sobre el Régimen Común de Acceso a los Recursos Genéticos y el
Protocolo de Bioseguridad
 Convenio Internacional de las Maderas Tropicales (1994)
 Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas (1998)
 Protocolo de Kyoto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático
(2004)
 Convenio de Rotterdam sobre el Procedimiento de Consentimiento Fundamentado Previo a
ciertos Plaguicidas y Productos Químicos Peligrosos Objeto de Comercio Internacional (2004)
 Tratado Internacional sobre Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura, 2004
 Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (2004).

¿Qué leyes apoyan la gestión ambiental en


Venezuela?
En el caso de Venezuela tenemos unas normativas legales de avanzada que han sido ejemplo
en el mundo, donde se destacada Leyes Orgánicas y Ordinarias siguientes:

Ley Orgánica del Ambiente


Ley Orgánica para la Ordenación Territorial y Urbanística
Ley Orgánica de los Espacios Acuáticos e Insulares
Ley de Diversidad Biológica
Ley Penal del Ambiente
Ley de Protección a la Fauna Silvestre y su Reglamento
Ley Forestal de Suelos y Aguas
Ley de Zonas Costeras
Ley de Zonas Especiales de Desarrollo Sustentable.

Ejemplo de lo que mencionamos, tenemos en Ley Orgánica del Ambiente (Gaceta Oficial Nº
5.833 Extraordinario del 22 de diciembre de 2006. Deroga la Gaceta Oficial N° 31.004 de fecha
16 de junio de 1976) que está estructurada en un amplio enfoque, con los siguientes títulos:

• Capítulo I: Disposiciones Generales


• Capítulo II: De la Planificación Ambiental
• Capítulo III: Del Consejo Nacional del Ambiente
• Capítulo IV: De la Administración Ambiental
• Capítulo V: De la Prohibición o Corrección de Actividades Susceptibles de Degradar el
Ambiente
• Capítulo VI: De las Sanciones
• Capítulo VII: De la Procuraduría del Ambiente
• Capítulo VIII: Disposiciones Transitorias y Finales

La novedosa Ley de Residuos y Desechos Solidos, Gaceta Oficial Número 38.068 de 18-11-
04, esta ley, en su Titulo I, Disposiciones Generales, Artículo 1. Establece que:

"La presente Ley tiene por objeto el establecimiento y aplicación de un régimen jurídico
a la producción y gestión responsable de los residuos y desechos sólidos, cuyo contenido
normativo y utilidad práctica deberá generar la reducción de los desperdicios al mínimo y evitara
situaciones de riesgo para la salud humana y calidad ambiental".

En el Articulo 5 y 6, esta ley menciona que el control y reducción de residuos y desechos como
POLITICA NACIONAL y que esta ley tiene un carácter de ORDEN PUBLICO e INTERES
SOCIAL

¿Donde se estudia Gestión ambiental?


En países de latinoamericana tenemos a Colombia, Argentina, México, Chile, pero en todos
de alguna manera tienen una licenciatura y post grado en el aérea ambiental.
En Venezuela específicamente la gestión ambiental se estudia por medio de la Misión Sucre
y es avalada en la Universidad Bolivariana de Venezuela, se cursan las materias específicas de
la carrera en los núcleos o Aldeas Bolivarianas de Aragua, Maracaibo en el Zulia, Carabobo,
Caracas, Ciudad Bolívar, Monagas, Punto Fijo.
El programa de formación tiene por objetivo el de coadyuvar al desarrollo integral sustentable,
a través de la ejecución de proyectos de investigación y acción que modifiquen y mejoren la
calidad de vida dando respuesta a los derechos ambientales.
Su actuación debe ser conjunta con las comunidades y los actores sociales, con cultura
ecológica asociada a esquemas de desarrollo integral y sustentable, basados en las nuevas
realidades socio ambientales, siempre buscando promover el desarrollo humano integral de los
estudiantes, los docentes, el personal universitario en general y el de las comunidades
vinculadas a los programas, proyectos, programas y actividades de la universidad.

¿Qué es la Misión Sucre?


El 29 de julio de 2003 se inaugura la Universidad Bolivariana de Venezuela y ese mismo día
el Presidente Chávez orienta “Un programa denominado Misión Sucre…, plan que tendrá como
propósito incorporar a unos 400 mil bachilleres de toda la nación que están sin cupo a la
educación superior totalmente gratuita y de calidad...
Se crearon varios programas de formación los cuales no estaban adscritos a ninguna
Universidad estableciendo una innovadora concepción según la cual, el Estado otorgaría los
títulos y no las universidades.
¿Por qué la Misión Sucre?
Este programa chocaba frontalmente contra el Modelo de Universidad vigente en la Ley de
Universidades y que funciona en un sistema institucional que está coronado por el Consejo
Nacional de Universidades junto a la Oficina de Planificación del Sector Universitario dentro de
una lógica fundamentada en la Autonomía Universitaria.
Los programas no dependían de ninguna Universidad, su disponibilidad financiera no
dependía de la OPSU ni de sus planificaciones, el ingreso a los programas de los estudiantes
no dependía de ninguna “prueba de aptitud académica”, la presencia espacial llegó a la mayoría
de los municipios del país, y fundamentalmente.
Sin burocratizar los procesos y demostrando (para los que lo necesitaban) que era muy barata
la educación universitaria democrática y para todos.
Veníamos de una situación donde se llegó a plantear la 3ra Vía, el Capitalismo Humano y
otras aberraciones. Debemos recordar que producto de las acciones conspirativas del 11 de
abril y el Saboteo Petrolero se define una nueva situación política de profundización de la
Revolución que conlleva entre otras cosas a organizar las misiones, y a definir el Modelo de
Desarrollo Endógeno sin antes definir qué Sociedad se iba a desarrollar, posteriormente se
define el Socialismo, estando todavía en deuda con una verdadera orientación ideológica que
sustente al Socialismo.
La Misión Sucre, representa la principal política del gobierno en educación superior, tiene
tres objetivos fundamentales:

 La cancelación de la deuda social, brindando la oportunidad a los bachilleres excluidos de


realizar estudios de educación superior con posibilidades reales de concluirlos
 La transformación de la educación superior, creando un sistema ajustado a los principios de la
Constitución Bolivariana y al Plan Nacional de Desarrollo y a nuestro juicio la más importante
 La formación de la gran masa de ciudadanos preparados profesionalmente para asumir los
cambios que requiere el proceso de transformaciones, es decir que tiene la tarea de impulsar el
Modelo Bolivariano Revolucionario, para asumir un verdadero compromiso responsable con la
patria, su formación socio política, debe estar por encima del interés individual, consustanciados
con el Proyecto Nacional de Desarrollo Económico y Social (PNDES DEL 2006) para que
coadyuven a su realización.
Está comprobado que las universidades tradicionales no son capaces de cumplir esta tarea,
sobran en Venezuela profesionales que prefieren estar desempleados a insertarse en las
políticas del estado, porque en ellas no se van a enriquecer, lo mismo sucede con la salud y los
médicos venezolanos, ya que el materialismo y el interés egoísta prevalece sobre el juramento
hipocrático.

¿Cuál es el papel de la Universidad Bolivariana de


Venezuela?
La Universidad Bolivariana de Venezuela, tienen el propósito de hacer entender el papel de
la universidad dentro de la municipalización como política de Estado que persigue combatir la
exclusión social, mejorando el acceso a la educación superior para los sectores de la población
socialmente desfavorecidos, ofreciendo una educación de calidad y orientada a dar respuestas
a las necesidades socioambientales del país.
Por otra parte, el papel del programa de grado en Gestión Ambiental es el de coadyuvar al
desarrollo integral y sustentable, a través de la ejecución de proyectos de investigación acción
que modifiquen y mejoren la calidad de vida, formando ciudadanos profesionales para actuar
de manera conjunta con las comunidades y otros actores sociales.

AUTOR: FRANCISCO DIAZ

Impacto Ambiental En Venezuela:

La degradación de las aguas marino-costeras de Venezuela, es un buen ejemplo de tales


Impactos ambientales. Las continuas descargas de aguas residuales domésticas e
industriales, así como aquellas derivadas de actividades agrícolas y petroleras, han incidido
notoriamente en su deterioro, situación que se ha visto agravada con la descarga de
sustancias tóxicas, incluyendo residuos altamente peligrosos.
Los impactos ambientales derivados de la explotación de los recursos energéticos. La
principal industria generadora de recursos económicos en Venezuela es la petrolera, pero
posiblemente no se ha reflexionado los suficiente sobre el verdadero costo de esta riqueza.
En Venezuela, los derrames de petróleo en el Lago de Maracaibo, en el Golfo de Maracaibo
y en las zonas costeras vecinas, han ocurrido desde el mismo momento en que se iniciaron
las actividades petroleras y han aumentado paralelamente con la expansión de las
explotaciones. Los volúmenes descargados accidentalmente, de manera inadvertida,
varían mucho de un año a otro y las cifras son imprecisas.
Las causas que originan éstas pérdidas están asociadas a las fases de explotación y
transporte de los hidrocarburos. No obstante, el patrón de ocurrencia es conocido por la
industria y las autoridades. Escapes por corrosión de las tuberías sublacustres y por
desperfectos en las estructuras de extracción y en las instalaciones de bombeo y estaciones
de flujo, derrames en las operaciones de deslastre o descarga de los tanqueros y otros,
constituyen los elementos característicos de dicho patrón.
El problema de los derrames es complejo y ha dado lugar a frecuentes controversias entre
las compañías que operan en la región, el gobierno nacional y los particulares afectados.
Estos últimos, han exigido indemnización a las empresas. Algunas veces, estos reclamos
trascienden a la opinión pública y reflejan la situación de las pequeñas pesquerías del lago,
ya que allí existen peces de gran valor comercial, camarones y otros recursos importantes
dentro de la economía pesquera regional y nacional, que constituyen la única fuente de
ingresos de los pequeños pescadores lacustre.
La combustión de gases hidrocarburos, como los quemadores de gas natural del Zulia, en
presencia de la luz solar reacciona formando sustancias más complejas como el nitrato de
peroxiacilo, el cual es un irritante de la vista.
Otro contaminante gaseoso de la atmósfera es monóxido de carbono, gas expelido por los
automóviles. El monóxido de carbono disminuye la capacidad de la sangre para transportar
oxígeno generando una sobrecarga en la función bombeadora del corazón.
El uso y extracción irracional de estas importantes fuente energéticas, conduce a su
agotamiento en unas cuantas décadas, obligando al desarrollo de nuevos combustibles o
fuentes de energía alternativas. Una de estas alternativas es el carbón. Existen grandes
yacimientos en muchas regiones del planeta, pero la extracción y la quema del carbón
también acarrean problemas en el ambiente, pues al igual que el petróleo, su combustión
produce dióxido de azufre que al combinarse con el agua de las nubes forma ácido sulfúrico,
que cae con la lluvia, produciendo el fenómeno llamado lluvia ácida.
Impacto ambiental derivado de la explotación de recursos mineros y agropecuarios.
La necesidad de materia prima como fuente energética, dio un notable impulso a la minería,
como extracción de algunos materiales en la tierra.
Se desarrolla así una interminable búsqueda de materiales como oro, plata, cobre, estaño,
hierro, bauxita (aluminio), entre otros, y de combustibles como el carbón y el petróleo. la
extracción de minerales, requiere la deforestación de las áreas donde se encuentra el
mineral, la necesidad creciente de energía ha hecho que se deforesten extensas zonas
trayendo graves consecuencias al medio ambiente.
Entre las consecuencias más graves tenemos la contaminación del aire, aguas y el suelo
por las máquinas y técnicas empleadas para la extracción. La minería contribuye a la
contaminación del aire mediante los gases tóxicos generados por las máquinas
excavadoras.
Otros gases nocivos surgen por las explosiones que rompen las rocas, generando
enfermedades respiratorias en los trabajadores y pobladores cercanos a la zona de
excavación y perjudicando a plantas y animales.
Los suelos no escapan al fenómeno de la contaminación, los residuos explosivos que se
dispersan los empobrecen, perjudicando así, el desarrollo de la vida. Las partículas
diseminadas por las explosiones también ocasionan la contaminación del agua al
depositarse en mares, ríos y lagos.
Aunado a esto, el mercurio utilizado para extraer el oro, envenena los ríos. Los derrames
de sustancias como el petróleo causan daños muy serios al ambiente. En general, las
actividades mineras en sus diferentes facetas pueden originar problemas muy graves de
tipo social, económico, político y ambiental. Además los mineros buscan el mineral en las
cuencas de los ríos poniendo en peligro las reservas de agua del Guri y las plantas
hidroeléctricas del río Caroní.
Las actividades agrícolas y las de ganadería, contribuyen también a la contaminación del
ambiente.
Otro impacto ambiental, pocas veces reseñado como tal, es la deforestación, la cual
alcanza en Venezuela cifras alarmantes de acuerdo a organizaciones internacionales como
la FAO. Recordemos que nuestro país ha perdido alrededor del 40% de su cobertura
vegetal original.
Sabemos que la solución para remediar las consecuencias de los impactos ambientales
posee un alto valor económico, pero también estamos convencidos que es posible, siempre
y cuando exista la voluntad, la tecnología y la capacidad técnica de nuestros funcionarios
para resolverlo. Después de todo, seguimos siendo un país rico.
en 19:53

Crecimiento económico y
conservación del medio ambiente
15 enero, 2014 Juan Pérez Ventura Cultura y Sociedad 16

Descargar artículo en formato PDF


En el mundo actual, tal y como entendemos la vida, el crecimiento económico es el único objetivo que
han de tener los países, sociedades, regiones, empresas o personas. No hay otro motivo por el que existir.
El crecimiento económico debe ser el camino para conseguir todo lo demás. Hoy en día, vivir es crecer.

¿Para qué sirve una empresa que no crece económicamente? ¿Qué papel juega una región que no tiene
crecimiento económico? ¿Tiene éxito una persona que no gana cada vez un poco más de dinero? El sistema
económico predominante se basa en el crecimiento continuo, y esa idea ha conseguido traspasar los
ámbitos económico o político y se ha implantado en lo más profundo de las consciencias de las personas.
La gente vive convencida de que el crecimiento es sinónimo de éxito y de felicidad. Y, ¿quién no quiere
ser feliz?

Crecimiento economicomedioambiente from Juan Pérez Ventura

La principal consecuencia del crecimiento económico continuo es la generación de una producción masiva
de bienes y servicios. Toda esa producción ha de ser consumida, por lo que el sistema ha desarrollado
estrategias muy efectivas para atar a las personas al consumo, que desde hace unas décadas también es
una actividad que se realiza continuamente.

Así, en el mundo actual nos encontramos con tres procesos que son continuos: el crecimiento, la
producción y el consumo. Para que se mantengan, cada uno de estos procesos depende de los otros. Por
ejemplo, sin producción no hay consumo, así como sin crecimiento no hay producción, o sin consumo no
hay producción.

La cuestión que debemos abordar es, ¿se pueden mantener continuamente estos procesos? ¿Podemos
consumir al ritmo actual durante las próximas décadas? ¿podremos seguir produciendo las cantidades de
hoy en día? Antes de contestar a estas preguntas, habría que recordar que vivimos en un planeta finito:
tiene límites. Aunque escuchando y leyendo a muchos economistas, políticos o empresarios, uno puede
pensar que no es así, lo cierto es que la Tierra no va a poder darnos petróleo o minerales toda la vida, y
que hay un número máximo de coches que pueden circular por nuestras ciudades, y un tope de humo que
nuestro aire puede soportar.

Está claro que, tal y como está diseñado el sistema, actualmente nadie se plantea dejar de crecer. El
desarrollo ha sido continuo durante siglos pasados y ha de seguir siéndolo en el futuro. El desarrollo nos
ha traído progreso y bienestar. Vivimos mejor que en la Edad Media y mejor que durante el S.XIX. Lo
curioso es que el modelo de crecimiento actual puede hacer que hoy vivamos mejor también que en el
futuro.

DESCARGAR: Se puede descargar este artículo en forma de presentación haciendo click aquí

Hemos hablado del crecimiento como forma de vida, es decir, del cómo vivimos. Ahora toca pensar en
algo que muchas veces se nos olvida: dónde vivimos. El cómo y el dónde están estrechamente relacionados,
dependen el uno del otro, y afectan el uno al otro.
El cómo hace referencia a las actividades o formas de actuar y el dónde señala el espacio físico donde
tienen lugar esas actividades. En el caso que nos ocupa, este espacio es la superficie terrestre, y el medio
ambiente como representación del escenario donde tienen lugar las actividades humanas.

Como hemos dicho, desde hace varias décadas las actividades humanas tienen que ver con fomentar el
desarrollo económico, y eso tiene un efecto concreto en el medio ambiente: lo transforma. Aunque no se
debe generalizar, lo cierto es que el paso del tiempo ha demostrado que el modelo económico vigente se
caracteriza por una explotación excesiva de los recursos naturales y por generar altos niveles de
contaminación al medio ambiente, por lo tanto el hombre transforma el medio de una manera negativa. Se
destruyen montañas para extraer minerales, se talan bosques para conseguir madera, se sobreexplotan los
acuíferos, se extinguen especies animales, se llena el aire de gases tóxicos…

Paradójicamente, estamos contaminando y dañando nuestro propio hogar. El medio ambiente es el lugar
donde vivimos. Si el medio ambiente está contaminado, nuestras vidas también. Por ello conviene divulgar
un mensaje que alimente la conciencia crítica de las personas, no ya solo por preservar el medio desde una
posición ecologista, sino para salvaguardar nuestro propio bienestar. Quizás transmitiendo esta idea, que
parte de una base egoísta, cada vez más gente se apunte a la idea de preservar el medio ambiente. Detener
el modelo de crecimiento para salvar un puñado de árboles o a unos animales no parece estar teniendo
mucho éxito entre la gente. Ha llegado la hora de aumentar el nivel de la amenaza: lo que está en juego es
nuestra propia existencia.

Cuando una fábrica vierte residuos tóxicos a un río no está contaminando únicamente el agua del río, sino
también a los peces, a las plantas y a los seres humanos que entran en contacto con él. Como aun no hemos
aprendido a fabricar agua, deberíamos tener cuidado a la hora de contaminar nuestras fuentes de este
recurso. Y de la misma manera ocurre con la madera, el aire, los minerales, las cosechas… etc. Nos
servimos del medio para sobrevivir. Contaminar el medio es una grave irresponsabilidad, y debido a que
el sistema de producción y de consumo actual es propicio a contaminar la naturaleza, es necesaria una
reflexión sobre cómo funciona el mundo hoy en día. Puede parecer una cavilación que no lleva a ninguna
parte, pero únicamente cuestionándonos el sistema establecido podemos llegar a cambiar las cosas.

Crezco, luego consumo.


Todo comienza con el consumo. La realidad demuestra que, a mayor nivel de desarrollo económico, las
sociedades tienden a ser más consumistas. Y una sociedad consumista es una sociedad que precisa de
muchos recursos, que, en su gran mayoría, se extraen del medio ambiente que nos rodea. Es decir, el
consumo afecta al medio ambiente, y casi siempre de una manera negativa.

El modelo de consumo actual es resultado de la evolución histórica del sistema de producción capitalista,
que como decía Marx se basa en la producción generalizada de mercancías. La sociedad de consumo
contemporánea nace con la llegada de la producción de masas fordista y con la puesta en práctica de las
políticas keynesianas tras la II Guerra Mundial, que permitieron un aumento del nivel de vida de la clase
trabajadora y de los sectores populares, así como su acceso al consumo de masas.

La propia lógica del sistema capitalista genera la creación artificial de necesidades de consumo, con el
objetivo de mantener un nivel de producción constante. Se crea la percepción de que necesitamos más
para vivir mejor y aparecen nuevos productos que se convierten en indispensables y que fomentan una
cultura del gasto permanente. De forma que la actual función del consumo no es cubrir necesidades, sino
satisfacer deseos. Y como tenemos muchos más deseos que necesidades, el sistema actual se caracteriza
por un alto nivel de consumo, que ha llegado a volverse patológico en la sociedad, y por ello hablamos de
consumismo.
ARTÍCULO RELACIONADO: La sociedad de consumo. Vivir es consumir (Juan Pérez Ventura,
Noviembre 2013)

El consumismo se mantiene gracias a dos procesos muy evidentes: poner a disposición del público una
serie de productos (vender) y hacerse con esos productos (comprar). En ambos casos el medio ambiente
resulta dañado. En el proceso de ‘vender’, el medio ambiente sufre con la cadena de producción que fabrica
los productos que se venden. Para poder vender un objeto primero hay que fabricarlo. Y fabricar, en el
mundo actual, significa explotar recursos y transformarlos, lo cual tiene un efecto directo sobre el medio
ambiente. Para fabricar un anillo y poder venderlo, primero hay que explotar la tierra en busca de minerales.
Por otro lado, el proceso de compra lleva asociado un inevitable proceso de desecho, pues nadie consume
un producto al 100%. Siempre se desecha algo. Todos estos desechos (masivos en un mundo consumista),
acaban en algún lugar del medio ambiente, contaminándolo casi siempre.

De esta forma el consumo afecta al medio directamente, por la generación de residuos derivados de los
bienes de consumo, e indirectamente, por los procesos de producción que explotan el medio.

¿Qué se puede hacer con estos residuos? Lo primero de todo, evitar generarlos. Mediante la prevención y
la concienciación podemos consumir productos que no generen residuos o que generen pocos. En el caso
de que sea imposible evitarlo, siempre es posible intentar la reutilización, es decir, procurar utilizar el
objeto o producto en cuestión para otros fines, o darlo a otra persona para que continúe dándole un uso. Si
tampoco se puede hacer esto, aun tenemos la opción del recliclaje. Y si no se pueden reciclar, podemos
hacer que esos residuos o desechos tengan un uso dándoles una valoración energética, es decir, que sirvan
para generar energía (principalmente quemándolos). Finalmente, si ninguna de estas opciones es posible,
lo único que podemos hacer con los residuos es echarlos al vertedero, donde seguramente provoquen un
daño al medio ambiente.

Como ya hemos dicho, el consumismo es una actividad que aumenta a la par que el crecimiento económico,
pero también está directamente relacionado con el aumento de un sector concreto de la sociedad: la clase
media, que son las personas que consumen.

En el año 2000, en el mundo más de 1500 millones de personas pertenecían a la clase media. En el 2012
ya eran 2000 millones, y en 2020 se espera que sean más de 3000 millones. Y 3000 millones de personas
consumiendo y gastando son muchas personas.

Aun así, el problema actual del deterioro ambiental debido a factores antrópicos no se justifica
principalmente por el hecho de que el planeta esté superpoblado, sino por las características de las
sociedades que lo pueblan. Es decir, el problema no es tanto por el ‘cuántos vivimos’, sino por ‘cómo
vivimos’. En el Paleolítico podríamos haber habitado el planeta 7.000 millones de personas, y no lo
habríamos contaminado ni perjudicado. Porque no importa tanto la cantidad como los modos de vida.

El modo de vida actual se basa en la competitividad y en el consumismo, dos hábitos que no favorecen
para nada la preservación del medio ambiente. Por un lado, la competitividad hace que las empresas
busquen enfermizamente la minimización de costes, y para ello explotan de manera descontrolada e
intensiva todos los recursos naturales y ponen en marcha prácticas inmorales y poco cuidadosas con el
entorno natural. Por otro lado, el consumismo afecta a las personas, que llegan a sufrir síntomas por la
necesidad de comprar cosas. Algunos autores ya hablan de hiperconsumismo en la sociedad occidental
actual. Y como hemos dicho, el consumismo provoca grandes cantidades de residuos (y por tanto,
contaminación) en el medio ambiente.

El crecimiento, la competitividad y el consumismo son tres actividades que caracterizan el modo de


desarrollo de cualquier región o país hoy en día. Son motores del desarrollo económico, pero que al mismo
tiempo hipotecan el desarrollo de generaciones futuras contaminando y dañando gravemente el medio en
el que vivimos. ¿Será posible mantener los niveles de crecimiento del consumo durante muchos años?

El modelo productivo
Directamente relacionado con el consumo en masa y el consumismo, el modelo de producción actual se
basa, precisamente, en una producción masiva. Pues el consumo en masa se mantiene únicamente gracias
a una producción en masa.

Así como el problema no es el consumo, sino el consumismo, en el caso de la producción el problema no


es el hecho de producir bienes. Durante toda la Historia de la Humanidad se han dado procesos de
producción, indispensables para la vida humana. El problema surge con la producción en masa.

La producción en masa surgió a principios del S.XX de la mano de Frederick Taylor y Henry Ford, tal y
como hemos apuntado en el anterior apartado. Consiste en la obtención de grandes cantidades de productos
exactamente iguales y de forma continuada. Es decir: producir mucha cantidad y de forma continua.

La cadena productiva es el conjunto de operaciones necesarias para llevar a cabo la producción de un bien
o servicio, que ocurren de forma planificada, y producen un cambio o transformación de materiales u
objetos.

Pero el proceso de producción no sólo transforma las materias primas o los recursos, sino también el medio
ambiente, pues entra en contacto con él de dos formas: extrayendo recursos del medio para producir bienes
y generando residuos que se depositan en el medio para su desecho.

La producción en masa implica procesos muy agresivos de extracción y de explotación de recursos


naturales. Estos procesos afectan de manera muy preocupante al medio ambiente. Y, además, el proceso
de producción genera residuos, que son desechados y contaminan el medio. Esto no sería tan preocupante
si no viviéramos con un ritmo de producción vertiginoso.

Algunos datos de producción nos dan una idea de las magnitudes que ha alcanzado este proceso. En 2013
se pusieron a la venta más de mil millones de smartphones en todo el mundo. En 2012 se fabricaron 84
millones de automóviles. En 2012 se produjeron 1500 millones de toneladas métricas de acero. El ritmo
de construcción de casas en Estados Unidos aumentó casi un 30% en Noviembre de 2013, alcanzando el
ritmo anual de 1,1 millones de viviendas.

Pero la generación de residuos y la contaminación no tienen únicamente que ver con la producción en
masa, pues esos procesos de producción sólo son posibles gracias a la energía.

El modelo energético
Cualquier sistema se mantiene con el suministro de energía. Para sostener y hacer posible los ritmos de
producción y consumo actuales, hoy en día nos apoyamos en las diferentes fuentes de energía que
disponemos. El crecimiento económico y el aumento de la producción y del consumo han ido
acompañados por un inevitable aumento de la demanda energética.
Hoy en día nos abastecemos principalmente de petróleo, carbón y gas. Fuentes de energía no renovables,
es decir, limitadas sobre la Tierra. Algún día (no muy lejano) se acabarán agotando. Aunque el modelo
económico actual, centrado en los beneficios, no se preocupa por el largo plazo y sigue consumiendo
petróleo por encima de sus posibilidades, lo cierto es que poco a poco otras fuentes de energías alternativas
y renovables se van haciendo un hueco en el suministro de energía, como la biomasa, la solar, la eólica o
los biocombustibles.

El petróleo supone un 37% de toda la energía consumida en el mundo. Uno de sus principales peligros
para la conservación del medio ambiente es la posibilidad de accidentes en los grandes petroleros que
cargan con este preciado combustible y que, de vez en cuando, se hunden en los océanos y mares
generando pérdidas ecológicas irreparables. El carbón, que genera el 25% de la energía consumida en el
planeta, también precisa de una extracción que daña al medio, pues hay que explotar minas e importantes
superficies de tierra para encontrarlo. El gas natural, que supone el 23% de la energía consumida en el
mundo, tiene una complicada extracción que produce la emisión de gases de efecto invernadero, que
contribuyen al calentamiento global del planeta. Estas tres son fuentes de energía con graves peligros y
daños medioambientales, y son precisamente las que más consumimos.

Existen otras, como la biomasa, que generan mucho menos daño ecológico. Este tipo de energía, basada
en la biomasa de la madera, residuos agrícolas y estiércol, continúa siendo una fuente principal de energía
en países poco industrializados. La energía hidroeléctrica también es limpia en cuanto a su generación y
emisión de residuos, así como la eólica o la solar, pero producen rechazo por los daños visuales y
medioambientales que producen la construcción de presas o parques eólicos. Finalmente los
biocombustibles parecen tener mucho futuro, pues son limpios y se pueden “cosechar”. Es decir, podemos
cultivar energía, en cierto modo. La principal crítica a este tipo de energía es que podemos llegar a sustituir
las extensiones de cosechas para la alimentación de la población por cosechas para la alimentación de
nuestros coches. El beneficio a toda costa.
Crecimiento infinito en un planeta finito
Según los economistas, un país necesita un crecimiento económico de entre el 1% y el 2% para crear
empleo. Este crecimiento hace referencia, entre otras cosas, al aumento de la producción de bienes y
servicios y al aumento del consumo de energía que un país tiene cada año. Es decir, crecer
económicamente significa producir más cada año y consumir más cada año que pasa.

Todos queremos tener un trabajo. Ante nuestras peticiones el sistema nos responde que, para generar
empleo, un país debe crecer. Así pues, el crecimiento económico ya no sólo es aceptado por la mayoría,
sino alabado y muy esperado.

La pregunta que es: ¿se puede crecer continuamente? ¿podemos producir cada año más bienes y servicios?
¿podemos consumir cada año más energía? ¿es sostenible en el tiempo este modelo de crecimiento
económico? Parece ser que sí, ya que el crecimiento económico es el mantra que repiten una y otra vez
los líderes mundiales y los grandes empresarios: hay que crecer, hay que ser más competitivos, hay que
producir más, consumir es signo de desarrollo socioeconómico…

En este sistema actual, basado en el crecimiento continuo, los economistas parecen no haberse dado cuenta
de que vivimos en un planeta finito. Un planeta que no podrá darnos madera continuamente, un planeta
del que no podremos extraer minerales al ritmo que queramos, un planeta que acabará saturado de
vertederos. Un planeta, en definitiva, que no está preparado para cubrir las necesidades que nos hemos
creado para vivir felizmente.

Muchas veces se nos dice que estamos viviendo por encima de nuestras posibilidades económicas, pero
realmente estamos viviendo por encima de las posibilidades ecológicas.

Basándonos en un crecimiento infinito no sólo estamos agotando importantes recursos naturales ni


generando la proliferación de impactos ambientales, sino también propiciando perturbaciones financieras,
causadas por la incapacidad de nuestros sistemas monetarios, bancarios y de inversiones para ajustarse
tanto a la escasez de recursos como al aumento de los costos ambientales. Es decir: el crecimiento infinito
no sólo es insoportable por la Tierra, sino también por el propio sistema económico.

¿Crecimiento económico que favorece al


medio ambiente?
Un interesante planteamiento sobre la relación entre crecimiento económico y medio ambiente viene de
la mano de Simon Kuznets, Premio Nobel de Economía en 1971.

A partir de las hipótesis de este autor se ha desarrollado la teoría de la Curva Ambiental de Kuznets, que
viene a representar cómo afecta el crecimiento de la economía al medio ambiente. Según esta teoría la
relación entre estas dos variables dibuja una ‘U invertida’, de forma que, conforme aumenta el crecimiento,
la degradación ambiental aumenta sólo hasta cierto punto, a partir del cual comienza a disminuir. Es decir,
llegado un momento de desarrollo económico, éste ya no afecta negativamente al medio ambiente.

Según los autores que apoyan esta teoría, el crecimiento económico no es una amenaza para el medio
ambiente en el largo plazo, sino el requisito para mejorar su calidad.
El desplazamiento que se hace desde el sector industrial al sector terciario en las economías desarrolladas
es sinónimo de una menor emisión de contaminantes, puesto que las actividades por excelencia intensivas
en consumo de energía y emisiones tóxicas son las industriales.

Los países tienden a usar menos materiales gracias al desarrollo económico, pero ésto sólo se puede
observar hoy en día en los más desarrollados. Por ejemplo Holanda o Dinamarca sí que muestran la curva
ambiental de Kuznets en su progreso socioeconómico: hoy son más ricos y contaminan menos que ayer.
Pero son casos muy concretos y aislados como para aplaudir el modelo de desarrollo.

El planeta Tierra es un sistema, compuesto por varios elementos, y no podemos analizarlo dejando a un
lado parte del problema: no todos los países tienen el nivel socioeconómico de Dinamarca. Mientras los
daneses disfrutan de un progreso técnico y de un aire limpio, cientos de millones de chinos se suben al
carro del desarrollo y, con ellos, aumenta la contaminación y el daño al medio ambiente global.

Debemos recordar que la mundialización ha hecho que vivamos en una auténtica Aldea Global, donde
todos somos vecinos. Las emisiones de unos países nos contaminan a todos.

Además el modelo de Kuznets parece olvidar otra realidad: en un mundo globalizado, si hay países que
pueden disfrutar de un desarrollo no perjudicial para el medio es porque los procesos de producción se
han trasladado a otros países, que son los que sufren las peores consecuencias del modelo de crecimiento
actual. Es decir, que en Holanda no haya fábricas contaminantes no quiere decir que hayan desaparecido:
ahora están en la India.

Debido a esta realidad, apoyada en procesos como la deslocalización empresarial, muchas veces da la
sensación de que los países menos desarrollados son los que más contaminan.
Pobreza y degradación del medio ambiente

Normalmente tendemos a relacionar la degradación del medio ambiente con la pobreza. Las imágenes de
ciudades como Lagos, Kinshasa, Manila o Bombay nos muestran grandes extensiones de asentamientos
informales, barriadas de slums, zonas industriales humeantes y contaminación de todo tipo: en el aire, en
el agua y en la tierra. Son grandes ciudades de países subdesarrollados o en proceso de desarrollo que se
han visto afectadas por el crecimiento económico, y que se caracterizan por ser hipertrofias urbanas, mal
gestionadas y muy contaminadas.

Cuando relacionamos la degradación del medio ambiente con la pobreza estamos cayendo en una
contradicción de fondo: la pobreza, por definición, no es nada contaminante ni degradante. Una situación
de pobreza no puede degradar el medio, pues la pobreza es la falta de medios para sobrevivir y la escasez
de recursos. Un pobre no contamina. No realiza ninguna actividad contaminante. Es pobre.

La contaminación procede de la actividad económica, de la presencia de la economía en el espacio. El


espacio ocupado por gente pobre apenas tiene economía, en cambio en los territorios habitados por gente
rica prolifera la actividad económica. Así pues, la degradación del medio ambiente la realizan los ricos.

Lo que ocurre es que, en un contexto de globalización económica, las actividades económicas propias de
los espacios ricos y desarrollados se trasladan a los espacios periféricos y más pobres, de forma que la
contaminación y la degradación del medio tiene lugar en estos territorios históricamente pobres. El
concepto de “aldea global” sirve para comprender cómo, en un mundo globalizado, todos vivimos en el
mismo hogar. Las actividades de unos afectan a los demás, y nadie vive aislado del resto. Esta realidad
sirve para contestar el positivismo del Modelo de Kuznets, que parece olvidar que todos vivimos en la
misma casa, que es el planeta Tierra.

En este sentido, dejando claro que el pobre no contamina (porque no tiene nada con lo que degradar el
medio ambiente), cabe preguntarse por qué es en los espacios menos desarrollados y más pobres donde
más contaminación ambiental observamos. Esto ocurre por una razón muy sencilla. Simplificado al
máximo podríamos decir: El pobre no contamina, contamina el rico. El rico contamina en el país del pobre.

Si no viviéramos en un mundo globalizado económicamente, las regiones pobres serían las menos
contaminantes. En cambio, debido a los procesos de deslocalización y de subcontratación empresarial, las
actividades industriales más contaminantes se han trasladado a los espacios menos desarrollados. Los
países ricos no contaminan tanto como los pobres, pero es debido a que se valen de éstos últimos para
realizar las actividades de producción industrial.

Modelos alternativos
Ante esta realidad que nos ha tocado vivir, con un sistema económico que se basa el crecimiento en la
explotación incontrolada de los recursos y la producción que contamina el medio ambiente, debemos
preguntarnos: ¿es necesario el crecimiento económico?

Existen otros modelos económicos que no tienen como objetivo principal el crecimiento, lo cual no quiere
decir que no persigan el desarrollo. Por ejemplo, la economía del bien común antepone otros valores a los
económicos. Esta propuesta económica se basa en una serie de principios básicos que representan valores
humanos: confianza, honestidad, responsabilidad, cooperación, solidaridad y generosidad, entre otros.
Para los defensores de la economía del bien común, aquellas empresas que se guíen por esos principios y
cumplan esos valores deben obtener ventajas legales que les permitan sobrevivir, frente a los tradicionales
valores del lucro y la competencia.
En la economía actual, el éxito se mide con indicadores monetarios como el producto interior bruto o los
beneficios, valores que no tienen en cuenta a los seres humanos ni al medio en el que vivimos. Son
indicadores que no muestran si se respetan los derechos humanos, si existen dictaduras o si hay guerras.
Que una empresa tenga beneficios no nos indica nada sobre las condiciones laborales de sus trabajadores
ni sobre lo que produce o cómo lo produce.

Para ello, el balance del bien común mide cómo es realmente una empresa: la dignidad humana de sus
trabajadores, la solidaridad, la justicia social, la sostenibilidad ecológica, la democracia con todos sus
clientes y proveedores, si la empresa promueve la esclavitud infantil, si hay desigualdades entre hombres
y mujeres… etc.

El objetivo de la economía del bien común es analizar estas variables sociales y dejar de utilizar variables
económicas. El objetivo no es el crecimiento económico, sino el crecimiento justo. Finalmente, la
evaluación de las empresas permitirá al consumidor escoger entre los productos que prefiera comprar.

Por otro lado, encontramos un interesante modelo que se basa en la Teoría del Decrecimiento. El modelo
de decrecimiento es partidario de una disminución regular controlada de la producción económica, con el
objetivo de establecer una nueva relación de equilibrio entre el ser humano y la naturaleza. Rechaza el
objetivo de crecimiento económico neoliberal y el productivismo. Los partidarios del decrecimiento
proponen una disminución del consumo y la producción controlada y racional, permitiendo respetar el
clima, los ecosistemas y a los propios seres humanos. Esto se conseguiría aplicando una serie de principios
más adecuados a una situación de recursos limitados: escala reducida, relocalización, eficiencia,
cooperación, autoproducción, intercambio, durabilidad… etc.

Aunque el término ‘decrecimiento’ puede sonar negativo, lo cierto es que el crecimiento no siempre es
bueno. Como hemos dicho, vivimos en un planeta de recursos finitos, y no podemos mantener el
crecimiento indefinidamente. En realidad, es una obviedad que necesitamos cambiar de modelo. Nadie
niega que es imposible seguir con el modelo actual. A la larga destruiremos el medio. Y lo sabemos.
Quizás no queramos aceptarlo o prefiramos traspasar el problema a generaciones futuras. Pero el momento
llegará.

Por ello superar el modelo económico es cuestión de tiempo. Si queremos darnos prisa hay que empezar
a valorar seriamente las alternativas que se presentan. Tanto las teorías de decrecimiento como la casi
utópica Economía del Bien Común parecen ir creciendo en adeptos poco a poco. No son propuestas
alocadas, son modelos alternativos que merecen ser escuchados.

Aun así, un cambio en el modelo de crecimiento económico no ha de ser buscado únicamente en las
fábricas o en los despachos. El cambio tiene que ser mucho más profundo, y ha de afectar al interior de la
conciencia de cada persona.
Revista de Investigación
versión impresa ISSN 1010-2914
Revista de Investigación vol.33 no.67 Caracas ago. 2009

La Educación Ambiental en el ámbito de la Ley Orgánica del Ambiente de


2006: Criterios fundamentales para su operacionalización en contextos
educativos formales y no formales

Environmental Education in the field of the Organic Law of Environment 2006:


fundamental criterion for its operation in formal context and not formal
education

José Humberto Lárez H.

Universidad Pedagógica Experimental Libertador-Instituto Pedagógico de Caracas,


Venezuela humberto@yahoo.com humbertolarez@hotmail.com

RESUMEN

Se presenta un análisis de la visión de la Educación Ambiental (EA), asumida por la Ley


Orgánica del Ambiente (LOA) (2006), como instrumento jurídico que contribuye a
operacionalizar el mandato constitucional de hacerla extensiva a todos los niveles y
modalidades del sistema educativo venezolano y demás ámbitos de la sociedad, en el
marco de lo establecido en el artículo 107 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela (1999). Se busca presentar didácticamente las principales
orientaciones contenidas en la LOA en relación con la definición conceptual de la EA, su
consideración como parte de la gestión ambiental, algunos lineamientos para su
ejecución, su incorporación por parte de las empresas en la formación del personal, la
consideración de los aspectos culturales y comunitarios en su desarrollo y el papel de
los medios de comunicación en su difusión, entre otros. Aspectos que revisten
particular interés para el desarrollo de las actividades pedagógicas en esta materia
tanto en los contextos formales como no formales.

Palabras clave: Educación ambiental; ley orgánica del ambiente; contextos


educativos formales y no formales

ABSTRACT

Present an analysis of the vision of Environmental Education (EE), assumed by the


Organic Law of Environment (O.L.E) (2006), as a legal instrument that contributes to
operationalize the constitutional mandate to extend it to all levels and patterns of the
Venezuelan Educational System and other areas of society, within the provisions of
Section 107 of the Bolivarian Republic of Venezuela Constitution (1999). This analysis
seeks to present a way of teaching and the main guidelines contained in the O.L.E in
relation to the conceptual definition of Environmental Education (EE). In addition to, its
consideration as part of environmental management, some guidelines for its
implementation, and incorporation in the staff formation in companies. Taking into
account the cultural and community influence in their areas and the development of
the role of the media of spreading information, among others aspects of particular
interest for the development of the pedagogical activities in this field in both the formal
and not formal contexts.

Key words: Environmental education; organic law of environment; educational


contexts formal and not formal.

INTRODUCCIÓN

La adopción de modelos economicistas de desarrollo sostenida a nivel mundial, así


como el impacto que los mismos generan sobre los sistemas físico-naturales y socio-
culturales que conforman el ambiente, han llevado a reflexionar sobre la necesidad de
revisar el modelo de interrelaciones que se ha establecido con la naturaleza y el
enorme deterioro que estas interacciones han generado a escala planetaria,
continental, regional, nacional y local.

Al analizar los principales problemas ambientales que enfrenta actualmente la


humanidad y las actividades que los generan, puede observarse, de manera clara, que
existen una gran cantidad de coincidencias y comportamientos, percepciones de la
naturaleza, valores y actitudes que se repiten en diferentes contextos y que
contribuyen de manera inexorable a la aparición de los mismos.

Es así como, la destrucción de la capa de ozono, el deterioro de la calidad del aire,


agua y suelo, la producción de desechos sólidos, el empobrecimiento de los suelos, la
deforestación, la desertificación, la extinción de especies, el avance de la pobreza, los
problemas asociados al deterioro social, la violencia, la explotación del ser humano por
sus congéneres, la extinción de los recursos naturales por su sobreexplotación, el
avance de ciertas enfermedades y los problemas asociados al calentamiento global,
entre otros, son indicadores claros de la necesidad de reflexionar de manera urgente,
acerca de pertinencia de reorientar esos modelos de interacción con el ambiente.
Cambios que deben estar orientados sin duda alguna a buscar opciones que favorezcan
la promoción de conocimientos, valores, actitudes, aptitudes y comportamientos
positivos hacia el ambiente para promover y asumir un estilo de vida ecológico, así
como la creación de condiciones que permitan la transición hacia un modelo económico
orientado al desarrollo sustentable.

Es en este contexto, donde la Educación Ambiental (EA) ha adquirido una gran


importancia, ya que ha sido vista como una de las opciones, que desde la perspectiva
educativa, posee mayor potencial para generar los cambios requeridos para la
transformación de las relaciones ser humano-naturaleza desde una perspectiva
antropocéntrica, hacia una visión ecológica de este binomio, que permita en definitiva
garantizar las condiciones de vida necesarias para la continuidad de la vida natural y
humana sobre el planeta.

Es así como La Organización de Estados Iberoamericanos (1996), al hacer referencia a


la EA, sostiene que:

En la comunidad de naciones que constituye hoy Iberoamérica (España, Portugal y


América Latina), los problemas ambientales y su relación con el desarrollo sostenible
ocupan un lugar preferente. De ahí que los jefes de Estado y presidentes de Gobierno
hayan mostrado en las Cumbres Iberoamericanas una constante preocupación por la
Educación Ambiental de los ciudadanos (p. 1).
En el caso particular de Venezuela, un ejemplo de lo planteado en la cita anterior, lo
representan los cambios que se han producido en los últimos diez años, en relación con
un conjunto de modificaciones e incorporaciones a nivel de la normativa legal, que ha
permitido abrir un espacio social para la inclusión y extensión de la EA a los contextos
educativos formales y no formales. Consciente de esta situación se plantea como
objetivo analizar la incorporación de la EA en el contexto de la Ley Orgánica del Ambiente
(LOA), aprobada en diciembre de 2006, en el marco de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela promulgada en 1999.

El trabajo realizado constituye un aporte de particular importancia para la difusión del


conocimiento de la normativa legal que regula la EA en el país. Sobre todo por constituir
la LOA (op. cit), un instrumento legal de promulgación relativamente reciente, pues data
como ya se ha mencionado de diciembre de 2006: razón por la cual su difusión es de
particular importancia en ámbitos educativos formales y ciudadanos no formales.

Así mismo la presente investigación encuentra su justificación en la relevancia práctica


y metodológica que se deriva del estudio. Por contener orientaciones explicitas sobre la
manera de operacionalizar la EA en distintos escenarios y por la posibilidad que apertura
de reflexionar sobre las implicaciones didácticas que los lineamientos contenidos en esta
Ley permitirían generar para asegurar el cumplimiento de sus objetivos y fines en el
ámbito de la gestión ambiental y el desarrollo sustentable.

MÉTODO

Por sus características el presente estudio constituye una investigación de tipo


documental, desarrollada bajo un diseño bibliográfico, cuya principal finalidad esta
orientada a analizar la incorporación de la EA en el contexto de la Ley Orgánica del
Ambiente (LOA), aprobada en diciembre de 2006, en el marco de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela promulgada en 1999.

En este sentido la UPEL (2006), define la investigación documental como “ el estudio


de problemas con el propósito de ampliar y profundizar el conocimiento de su
naturaleza, con el apoyo, principalmente, en trabajos previos, información y datos
divulgados por medios impresos, audiovisuales y electrónicos” (15).

El corpus empleado para el desarrollo del presente estudio estuvo representado


fundamentalmente por fuentes de tipo legal, principalmente la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela (1999), Gaceta Oficial de la República Bolivariana
de Venezuela, 5453, marzo 3, 2000 y la Ley Orgánica del Ambiente Gaceta Oficial
5.833 (extraordinario), diciembre 22 de 2006, así como por la Constitución de la
República de Venezuela Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 662
(extraordinario), enero 23, 1961, derogada por la actual Carta Magna.

Dicho corpus fue trabajado, mediante el estudio sistemático de la información a partir


del establecimiento de categorías de análisis generadas por el investigador, tomando
en consideración las regularidades detectadas en los elementos contenidos en las
fuentes legales seleccionadas. Luego se procedió a la aplicación del análisis de
contenido, utilizando la metodología propuesta por Cassany (1995), la cual se resume
en los siguientes pasos:

● Selección de la información relevante, lo cual se realizó mediante la revisión del


corpus establecido para el desarrollo del análisis de contenido.
● Resumen de la información a partir de la aplicación de las diferentes macro reglas
que deben emplearse para tal fin. Estas incluyen: (a) supresión o selección de la
información; (b) generalización del texto a partir de la utilización de la supresión o
selección de la información previamente realizada y (c) creación de un resumen a
partir de la construcción y reformulación del texto sobre la base de la información de la
cual se dispone.

● Análisis crítico de la información resumida, para lo cual se estudiaron las


aseveraciones constituidas por hechos, conjeturas u opiniones e inferencias. En esta
etapa también se establecieron los argumentos los cuales están conformados por dos o
más aseveraciones sobre una temática particular.

● Establecimiento de conclusiones a través del procesamiento general de información,


las cuales se elaboraron a partir del análisis de los argumentos presentados por los
diversos autores consultados en referencia con una categoría particular o una temática
específica de estudio seleccionada o propuesta por el autor como resultado de la
revisión de la información.

● Redacción del texto final: para lo cual se utilizan textos de carácter argumentativo-
expositivo. El uso de estos textos obedece a la naturaleza del análisis realizado el cual
se sustenta en su finalidad académica, así como en la utilización de los argumentos
encontrados a partir del análisis sistemático del corpus seleccionado para el desarrollo
del presente trabajo.

La Educación Ambiental y los Derechos Ambientales en el contexto de la


Constitución de la República Bolivariana de 1999.

La aprobación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en el año


1999, marcó un hito histórico para los educadores ambientales y personas interesadas
en el cuidado y conservación del ambiente. No sólo por la incorporación en el texto
constitucional de manera explicita de la obligatoriedad de la EA en todos los niveles y
modalidades del sistema educativo venezolano, sino también, por la declaración de los
derechos ambientales, los cuales formaban parte de los llamados derechos difusos en
la antigua Constitución de la República de Venezuela (1961).

Es así como en su artículo 107, la Constitución de la República Bolivariana de


Venezuela (CRBV, 1999), señala que: “ la Educación Ambiental es obligatoria en los
niveles y modalidades del sistema educativo, así como también en la educación
ciudadana no formal… ” . La declaratoria contenida en el artículo precitado constituye
un avance de particular importancia en el contexto educativo, ya que contribuyó a
materializar una de las principales aspiraciones de los educadores ambientales, como
lo es la incorporación de la EA, no sólo al sistema formal de educación, sino también su
extensión a la formación ciudadana en contextos educativos no formales, situación que
apertura una posibilidad cierta de dar a conocer sus principios, objetivos, fines y
valores a un amplio segmento de la población de Venezuela.

De manera conjunta con este avance en la EA, fueron declarados los Derechos
Ambientales en los artículos 127, 128 y 129 de la CRBV (1999), en los cuales se
establece que:

Artículo 127. Es un derecho y un deber de cada generación proteger y mantener el


ambiente en beneficio de sí misma y del mundo futuro. Toda persona tiene derecho
individual y colectivamente a disfrutar de una vida y de un ambiente seguro, sano y
ecológicamente equilibrado. El Estado protegerá el ambiente, la diversidad biológica,
los recursos genéticos, los procesos ecológicos, los parques nacionales y monumentos
naturales y demás áreas de especial importancia ecológica. El genoma de los seres
vivos no podrá ser patentado, y la ley que se refiera a los principios bioéticos regulará
la materia.

Además, señala:

Es una obligación fundamental del Estado, con la activa participación de la sociedad,


garantizar que la población se desenvuelva en un ambiente libre de contaminación, en
donde el aire, el agua, los suelos, las costas, el clima, la capa de ozono, las especies
vivas, sean especialmente protegidos, de conformidad con la ley.

En el artículo 128, se establece:

El Estado desarrollará una política de ordenación del territorio atendiendo a las


realidades ecológicas, geográficas, poblacionales, sociales, culturales, económicas,
políticas, de acuerdo con las premisas del desarrollo sustentable, que incluya la
información, consulta y participación ciudadana.

Una ley orgánica desarrollará los principios y criterios para este ordenamiento.

En el artículo 129:

Todas las actividades susceptibles de generar daños a los ecosistemas deben ser
previamente acompañadas de estudios de impacto ambiental y sociocultural. El Estado
impedirá la entrada al país de desechos tóxicos y peligrosos, así como la fabricación y
uso de armas nucleares, químicas y biológicas. Una ley especial regulará el uso,
manejo, transporte y almacenamiento de las sustancias tóxicas y peligrosas. En los
contratos que la República celebre con personas naturales o jurídicas, nacionales o
extranjeras, o en los permisos que se otorguen, que afecten los recursos naturales, se
considerará incluida aun cuando no estuviere expresa, la obligación de conservar el
equilibrio ecológico, de permitir el acceso a la tecnología y la transferencia de la misma
en condiciones mutuamente convenidas y de restablecer el ambiente a su estado
natural si éste resultare alterado, en los términos que fije la ley.

Al analizar el artículo 127, se puede observar, de manera clara, la alusión que se


realiza, no sólo a los derechos y deberes de la población, sino al papel fundamental del
Estado venezolano, como garante de un ambiente libre de contaminación para los
ciudadanos. En este sentido, el binomio derecho-deber atribuido a los ciudadanos gira
en torno a dos (2) elementos fundamentales: (a) la protección y mantenimiento del
ambiente para las presentes y futuras generaciones y (b) el derecho a disfrutar de un
ambiente sano, seguro y ecológicamente equilibrado, situación que implica a su vez la
obligación de contribuir a través de una participación activa en el mantenimiento de
estas condiciones ambiéntales favorables.

Por su parte, se asigna al Estado venezolano la protección de cinco (5) componentes


ambiéntales de particular importancia como lo son: (a) el ambiente; (b) la diversidad
biológica; (c) los recursos genéticos; (d) los procesos ecológicos y (e) los parques
nacionales y monumentos naturales y demás áreas de especial importancia ecológica.
Un aspecto de particular interés lo constituye el rango constitucional que se le da a la
prohibición de patentar el genoma.

El artículo 128 de la CRBV (op. cit),hace referencia fundamentalmente a las


competencias de orden administrativo asignadas al Estado como medios para
coadyuvar al goce de los derechos ambientales por parte de la población de Venezuela,
para ello, otorga la potestad para desarrollar una política de ordenación del territorio,
pero establece a su vez de manera explicita los criterios que deben atenderse, los
cuales hacen referencia a las realidades ecológicas, geográficas, poblacionales,
sociales, culturales, económicas, políticas, así como el enfoque de referencia bajo el
cual deberá desarrollarse al declarar de manera explicita el desarrollo sustentable y la
participación ciudadana, como parte integral de la políticas que se generen.

Otro de los avances en materia ambiental, esta representado en el artículo 129 de la


CRBV (op. cit), por el rango constitucional asignado a las Evaluaciones de Impacto
Ambiental a las que deben ser sometidas de manera previa todas las actividades que
pudieran ocasionar daños a los ecosistemas. Así mismo se declara la competencia del
Estado para impedir la entrada de desechos tóxicos al territorio nacional y la
fabricación de armas de tipo nuclear, químico y biológico.

Si bien es cierto que los elementos descritos en relación con la EA y los Derechos
Ambientales, constituyen un avance innegable en materia educativo-ambiental al ser
incorporados en el texto constitucional, los mismos requieren de la creación de una
infraestructura jurídica y administrativa que permita de manera progresiva generar los
espacios sociales para su operacionalización. Pues como lo señala (1993), esta puede
considerarse “ La Ley fundamental de la organización de un Estado” (p. 46) y por lo
tanto constituye “ Un conjunto de normas y costumbres bajo las cuales se desempeña
toda la vida del Estado” (p. 46).

En este sentido, Ramírez (op. cit), sostiene que la Constitución requiere de un conjunto
de normas que le permitan sino el logro, la búsqueda constante del cumplimiento de
los diferentes aspectos que en ella se señalan. Dicho sistema jurídico posee un orden
jerárquico, donde la Carta Magna constituye en sí misma, la supranorma, bajo la cual
debe ampararse todo ordenamiento jurídico, seguida por las leyes orgánicas, las leyes
especiales y los reglamentos.

Desde esta perspectiva, las Leyes Orgánicas constituyen el segundo nivel de


operacionalización normativo de los principios contenidos en el texto constitucional y
por tanto, su carácter es eminentemente organizativo y dirigido a tratar aspectos
específicos de una materia, tal como ocurre en el caso de la Ley Orgánica del
Ambiente, la cual regula lo concerniente a la materia ambiental.

Conceptualización de la Educación Ambiental en la Ley Orgánica del Ambiente


de 2006

La LOA vigente fue promulgada por la Asamblea Nacional de la República Bolivariana


de Venezuela, mediante la Gaceta Oficial 5.833 extraordinario del 22 de diciembre de
2006. Según su artículo 1 el objeto de esta ley es:

Establecer las disposiciones y los principios rectores para la gestión d el ambiente, en


el marco del desarrollo sustentable como derecho y deber fundamental del Estado y de
la sociedad, para contribuir a la seguridad y al logro del máximo bienestar de la
población y al sostenimiento del planeta, en interés de la humanidad. De igual forma,
establece las normas que desarrollan las garantías y derechos constitucionales a un
ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado.

Al analizar el artículo anterior, puede observarse que el objeto fundamental de la


misma se orienta a la gestión ambiental. La cual de acuerdo a la LOA debe estar
enmarcada en los principios del desarrollo sustentable y dirigida al ejercicio de los
deberes y derechos del Estado venezolano para garantizar el máximo bienestar de la
población y el establecimiento de las normas que garanticen el cumplimiento de los
derechos ambientales establecidos en los artículos 127, 128 y 129 del titulo III de la
CRBV (1999). (Gráfico 1).

En relación con la Educación Ambiental, el artículo 3 de la LOA (2006), la define como:

Proceso continuo, interactivo e integrador, mediante el cual el ser humano adquiere


conocimientos y experiencias, los comprende y analiza, los internaliza y los traduce en
comportamientos, valores y actitudes que lo preparen para participar
protagónicamente en la gestión del ambiente y el desarrollo sustentable.

Al analizar la definición de EA, expresada anteriormente puede verse que la misma se


enmarca en una concepción holística del proceso educativo, donde no sólo debe
buscarse la integración de conocimientos y experiencias, sino su comprensión y
análisis, con la finalidad de lograr la transferencia de lo aprendido. Así mismo, es
evidente el carácter valorativo de la EA asignado por la LOA, al establecer su conexión
con la posibilidad de incidir en los comportamientos, valores y actitudes de la
población, en pro de su participación en la gestión ambiental y el desarrollo
sustentable. (ver Gráfico 2).

Un elemento importante a destacar es la asunción de la gestión ambiental (GA) y el


desarrollo sustentable (DS) como marco de referencia de la EA. En tal sentido y de
acuerdo a lo establecido en el artículo 3 de la LOA (2006), estos términos se definen
como:

Gestión del ambiente: todas las actividades de la función administrativa, que


determinen y desarrollen las políticas, objetivos y responsabilidades ambientales y su
implementación, a través de la planificación, el control, la conservación y el
mejoramiento del ambiente. Desarrollo sustentable: Proceso de cambio continuo y
equitativo para lograr el máximo bienestar social, mediante el cual se procura el
desarrollo integral, con fundamento en medidas apropiadas para la conservación de los
recursos naturales y el equilibrio ecológico, satisfaciendo las necesidades de las
generaciones presentes sin comprometer las generaciones futuras.

Desde esta perspectiva, la Educación Ambiental debe dirigirse en el marco de la GA a


la formación requerida por la población para participar en todas aquellas actividades
administrativas tendentes a la formulación y operacionalización de políticas dirigidas a
la planificación, control, conservación y mejoramiento del ambiente a través de los
medios de participación social establecidos para tal fin, los cuales se sustentan
fundamentalmente en la participación ciudadana y comunitaria.

En este orden de ideas, al hacer referencia a la finalidad de la EA, en el contexto de la


GA, el numeral 6 del artículo 4 de la LOA (2006), establece que la misma esta
orientada a “ … la conservación de un ambiente sano, seguro y ecológicamente
equilibrado debe ser un valor ciudadano, incorporado en la educación formal y no
formal” . En torno a la GA, el artículo 10 de la LOA (op. cit), establece que esta
actividad se encuentra bajo la rectoría de la Autoridad Nacional Ambiental, quien se
encargará de su coordinación y uno de sus objetivos será precisamente de acuerdo al
numeral 5 de este artículo “ … fomentar y estimular la educación ambiental y la
participación protagónica de la sociedad” .

En relación con la consideración del DS como referente para la EA (gráfico 3), el mismo
se caracteriza por constituir un cambio continuo, dirigido a promover el máximo
bienestar socio-ambiental, lo cual requiere de la generación de un espacio social, que
haga posible la creación de las condiciones necesarias para lograr una resignificación
de los valores, que permita la transición desde un modelo fundamentalmente
sustentado en el desarrollismo (entendido este como la producción de bienes a gran
escala, situación que genera un gran impacto ambiental sobre los sistemas físico-
naturales y socio-culturales que conforman el ambiente), hacia el desarrollo
sustentable, el cual busca el máximo bienestar social y la conservación de los recursos
naturales y el equilibrio ecológico, sin dejar de satisfacer las necesidades básicas de la
población, garantizando de esta manera la conservación de condiciones ambientales
favorables para el desarrollo de las futuras generaciones.

Objeto de la Educación Ambiental y principios para su operacionalización, de


acuerdo a la Ley Orgánica del Ambiente de 2006

En la LOA (op. cit), se dedica en su título IV, de la Educación Ambiental y la


Participación Ciudadana, el Capítulo I a la Educación Ambiental. En éste, se explicita el
objeto de la EA y los lineamientos para su desarrollo.
El artículo 34 de esta Ley al hacer referencia al objeto de la Educación Ambiental
establece que esta se encuentra dirigida a:

… promover, generar, desarrollar y consolidar en los ciudadanos y ciudadanas


conocimientos, aptitudes y actitudes para contribuir con la transformación de la
sociedad, que se reflejará en alternativas de solución a los problemas socio-
ambientales, contribuyendo así al logro del bienestar social, integrándose en la gestión
del ambiente a través de la participación activa y protagónica, bajo la premisa del
desarrollo sustentable.

Al analizar el objeto de la EA, pueden diferenciarse cuatro aspectos fundamentales: (a)


la promoción, generación, desarrollo y consolidación de conocimientos, aptitudes y
actitudes para la transformación de la sociedad; (b) la producción de alternativas de
solución a problemas de índole socio-ambiental; (c) la contribución al logro del
bienestar social y (d) la integración a la GA, mediante la participación activa en el
entorno del DS.

Al detallar el contenido del artículo anterior, puede observarse la relación que existe
entre el objeto de la EA declarado en el mismo y el concepto de la EA, presentado en
el artículo 3 de la LOA (2006). Sin embargo, se establece como elemento adicional en
el artículo 34, la alusión a la producción de alternativas de solución a los problemas
socio-ambientales como una evidencia de los conocimientos, actitudes, aptitudes
adquiridos por los ciudadanos.

En cuanto a los lineamientos para la EA, el artículo 35 de la LOA (op. cit), establece
cinco parámetros fundamentales, los cuales hacen referencia a:

● Incorporar una asignatura en materia ambiental, con carácter obligatorio, como


constitutivo del pensum en todos los niveles y modalidades del sistema educativo
bolivariano, dentro del continuo proceso de desarrollo humano, con el propósito de
formar ciudadanos y ciudadanas ambientalmente responsables, garantes del
patrimonio natural y sociocultural en el marco del desarrollo sustentable

● Vincular el ambiente con temas asociados a ética, paz, derechos humanos,


participación protagónica, la salud, el género, la pobreza, la sustentabilidad, la
conservación de la diversidad biológica, el patrimonio cultural, la economía y
desarrollo, el consumo responsable, democracia y bienestar social, integración de los
pueblos, así como la problemática ambiental mundial.

● Desarrollar procesos educativos ambientales en el ámbito de lo no formal que


promuevan y fortalezcan el derecho a la participación de ciudadanos, ciudadanas y
comunidad en general, en el marco de una gestión del ambiente en forma compartida.

● Incorporar la educación ambiental para el desarrollo endógeno sustentable, desde


una perspectiva participativa, crítica, influyente, transformadora de los sistemas
productivos que reconozca la diversidad cultural y ecológica en el ámbito de la
organización social.

● Promover el diálogo de saberes, como base del intercambio, producción y difusión de


información en los procesos educativos ambientales para generar acciones colectivas
en el abordaje y solución de problemas socio ambientales.
Los planteamientos del artículo anterior, en relación con los lineamientos para la EA,
guardan una estrecha relación con los establecido en el artículo 107 relacionado a la
obligatoriedad de la EA, en todos los niveles y modalidades del sistema educativo
venezolano; como también con la declaratoria de los derechos ambientales, contenida
en los artículos 127, 128 y 129 de la CEBV, (1999).

En este contexto, el primer lineamiento, hace referencia a la obligatoriedad de


incorporar una asignatura en materia ambiental, con carácter obligatorio como parte
del currículo en todos los niveles y modalidades del sistema educativo venezolano, lo
cual representa en cierta medida, una propuesta para la operacionalización de la EA.
Sin embargo seria conveniente, reflexionar sobre la búsqueda de opciones innovadoras
dirigidas a promover la incorporación de la dimensión ambiental en el currículo
completo, con la finalidad de promover la integración de saberes en el ámbito
educativo ambiental y su transferencia, al desarrollo de las actividades que de manera
cotidiana deben realizar los ciudadanos.

Con respecto al segundo lineamiento, el mismo se orienta a establecer relaciones entre


la EA y temas de interés general para el género humano como lo son: (a) lo axiológico
en relación con: la ética, la paz, los derechos humanos; (b) lo social, con atención en:
la participación protagónica, el patrimonio cultural, el bienestar social, el género, y la
pobreza; (c) lo económico, en lo atinente a: la sustentabilidad, la economía y el
desarrollo, el consumo responsable; (d) lo político, en lo referido a: la democracia, la
integración de los pueblos y (e) lo ambiental, en cuanto a: la conservación de la
diversidad biológica y la problemática ambiental.

Por su parte, el tercer lineamiento reviste particular importancia para la EA, porque
hace referencia directa al desarrollo de los procesos educativo-ambientales en los
ámbitos no formales, con lo cual se pretende propiciar oportunidades de formación
ciudadana y comunitaria, con miras a su incorporación en los procesos de gestión
ambiental compartida.

Cabe señalar que esta proyección de la EA al entorno no formal, es fundamental en el


proceso de formación ambiental de un gran segmento poblacional, que por diversas
circunstancias no forman parte directa de los contextos educativos formales, pero que
sin embargo tiene el deber y derecho ciudadano, de intervenir activamente por los
diversos medios de participación social que existen, en el cuidado, preservación y
resguardo del equilibrio ecológico, para garantizar el mantenimiento de condiciones de
vida favorables para las presentes y futuras generaciones.

Con relación al cuarto lineamiento, el mismo hace referencia a la consideración de los


elementos relacionados con el desarrollo endógeno sustentable, así como la relación de
estos principios con la transformación de los sistemas productivos y la necesidad de
respetar la diversidad biológica como parte importante de la organización social.

Un elemento que requiere particular mención en este caso, es la incorporación por


primera vez en este lineamiento del término “ desarrollo endógeno sustentable” ,
en los artículos relacionados con la EA. Dicho término aparece por única vez en el
numeral 4 del artículo 35 de la LOA (op. cit) y no posee en dicha normativa legal, los
elementos que permitan una interpretación clara de dicho término en este contexto,
pues su definiciónno fue incluida en el artículo 3, ni la de otros términos como
endógeno o desarrollo endógeno, que permitieran inferir su significación y alcances de
una manera explicita.
El quinto y último lineamiento parte de la necesidad de considerar la EA, como un
proceso de intercambio, que reconozca los conocimientos y experiencias previas que
poseen los participantes, se desarrolle éste en contextos formales o no formales,
Razón por la cual la EA debe concebirse fundamentalmente como un intercambio de
saberes. Además, este lineamiento enfatiza la necesidad de producir y difundir
información, como parte del proceso educativo ambiental que sea utilizada en el
estudio y la elaboración de propuestas colectivas de solución de los problemas
socioambientales. (Gráfico 4).

Uno de los aspectos de particular interés en relación con la EA presente en la LOA


(2006), lo constituye su extensión a distintos ámbitos del quehacer cotidiano, así como
su consideración en la planificación del Plan Nacional del Ambiente. El cual constituye
de acuerdo a lo establecido en el artículo 30 de la LOA (op. cit), “ … un instrumento a
largo plazo que pauta la política ambiental nacional a escala regional, estadal,
municipal y local” y que según el numeral 7 de este artículo, debe contener de
manera explicita las acciones referidas a la EA y la participación ciudadana.

Por su parte el artículo 36 y 37 de la LOA (op. cit), al hacer referencia a la


obligatoriedad de hacer extensiva la EA a otros contextos señala que:

Artículo 36. Las personas naturales o jurídicas, públicas y privadas, responsables en la


formulación y ejecución de proyectos que impliquen la utilización de los recursos
naturales y de la diversidad biológica, deben generar procesos permanentes de
educación ambiental que permitan la conservación de los ecosistemas y el desarrollo
sustentable. Artículo 37. Las instituciones públicas y privadas deberán incorporar
principios de educación ambiental en los programas de capacitación de su personal.
Al analizar lo dispuesto en el artículo 36, puede notarse la amplitud de la medida al
hacerla extensiva a las personas naturales y jurídicas, públicas y privadas, en cuanto a
la obligatoriedad de generar procesos permanentes de educación ambiental, siempre
que sean responsables de la formulación y ejecución de proyectos que requieran del
uso de recursos naturales. Dicho proceso de orden educativo-ambiental, debe estar
orientado a cubrir dos aspectos fundamentales como lo son, la conservación de
ecosistemas y el desarrollo sustentable.

Así mismo el artículo 37, busca la introducción de los principios de la EA en los


espacios laborales pertenecientes al sector público y privado, mediante su
incorporación a los programas dirigidos a la capacitación de los trabajadores. Como
aspecto complementario a estas disposiciones, el artículo 38, establece que:

En el proceso de educación ambiental, se tomarán en consideración los aportes y


conocimientos tradicionales de los pueblos y comunidades indígenas y de otras
comunidades organizadas, así como las técnicas e innovaciones, asociados al uso de
los recursos naturales y de formas de vida ecológicamente armónicas.

Como puede observarse en el artículo anterior, la EA debe ser un proceso


contextualizado, donde se consideren de manera integral los aspectos culturales y su
relación con el ambiente, ya que esto permite comprender en muchos casos, el origen
de los problemas ambientales y también generar posibles soluciones adecuadas a
contextos particulares, las cuales lleven implícitas en sí mismas, una posibilidad de
éxito mayor por estar adecuadas a la idiosincrasia de la población.

Es por ello que la EA, además de la consideración de los aspectos culturales y de


nuestras raíces representadas por el conocimiento tradicional de los pueblos indígenas,
también debe incorporar las innovaciones que de manera progresiva se realicen en
cuanto al uso de los recursos naturales y las formas de vida ecológicamente
armónicas, con lo cual se busca promover el establecimiento de relaciones ser humano
– ambiente dirigidas a conservar el equilibrio ecológico y una valoración positiva de los
sistemas físico-naturales y socio-culturales que de manera integrada conforman el
ambiente.

La referencia a los aspectos concernientes a la EA, termina en la LOA (2006), con la


inclusión de los medios de comunicación en su difusión. Al efecto el artículo 74
establece que:

Los medios de comunicación y difusión deberán incorporar en la programación, los


temas ambientales que propicien la información y el conocimiento de las complejas
interrelaciones y vínculos entre los procesos de desarrollo social y económico en la
búsqueda de un ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado, fomentando la
educación ambiental

Al analizar el texto del artículo 74, puede observarse como se establecen en el mismo
las directrices en relación con la temática que deben incorporar los medios de
comunicación en su programación en cuanto a EA se refiere. En tal sentido la norma
jurídica en cuestión establece que estos aspectos deben hacer referencia a información
y conocimiento sobre las interrelaciones que se establecen entre los factores: (a)
desarrollo social; (b) desarrollo económico y (c) ambiente seguro, sano y
ecológicamente equilibrado.
Seguidamente se presenta en el cuadro 1, un cuadro resumen de los principales
elementos relacionados con la EA presentes en la LOA (op. cit).
El cuadro anterior presenta una síntesis de los aspectos referidos a la E. A, contenidos
en la LOA (2006), el cual ha sido incluido como corolario del análisis realizado con la
finalidad de proporcionar al lector una visión integrada de los elementos tratados en el
presente artículo.

A MANERA DE CONCLUSIÓN

Como ha podido evidenciarse en los planteamientos realizados en el presente artículo,


la promulgación de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela
(1999), aperturó la posibilidad de difundir la Educación Ambiental a diversos espacios
sociales, como resultado de la declaración de hacerla extensiva a los diversos niveles y
modalidades del Sistema Educativo Venezolano y a la educación ciudadana no formal,
de acuerdo al artículo 107 de la Carta Magna. Situación que fue complementada por la
declaración de los Derechos Ambientales establecidos en los artículos 127, 128 y 129
del texto constitucional.

Es así como, en este contexto, se inicia una revisión del sistema normativo del país con
la finalidad de operacionalizar los postulados constitucionales que entraron en vigencia
a partir de la promulgación de la Carta Magna en el año 1999. Como producto de esta
iniciativa se promulgó en el año 2006, la Ley Orgánica del Ambiente vigente, la cual
incluyó un amplio contenido ambiental, con implicaciones de interés para el desarrollo
de las actividades de EA, ya que en este documento legal, no sólo se asume de
manera explicita una definición de la misma, sino que se declaran su objeto y se
establecen lineamientos específicos para su administración.

Uno de los elementos importantes de destacar es precisamente la declaratoria de la


Gestión Ambiental y el Desarrollo Sustentable, como marco de referencia para la
ejecución de las actividades de EA que se realicen, tanto en contextos formales como
no formales. Así como, su extensión a los entornos laborales al existir la obligatoriedad
de incorporarla en los programas de capacitación de personal, en instituciones públicas
y privadas, al igual que en la planificación y realización de proyectos relacionados con
el uso de los recursos naturales, sean administrados por personas naturales o
jurídicas.

Así mismo, se destaca en esta normativa, la necesidad de considerar los aportes y


conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas, la incorporación de las
innovaciones en el uso de recursos y la promoción de formas de vida ecológicamente
armónicas en el desarrollo de las actividades de EA, así como la difusión a través de
los medios de comunicación mediante la incorporación en su programación de aspectos
asociados con las interrelaciones y vínculos entre los procesos de desarrollo social y
económico en pro de un ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado.

Ciertamente falta mucho por hacer en materia ambiental, sin embargo los avances
alcanzados deben constituir un factor motivacional para el desarrollo de iniciativas
innovadoras dirigidas a difundir los principios de la EA a una mayor parte de la
población, con el fin de contribuir a la resignificación de los valores ambientales que
favorezcan una transición hacia el desarrollo sustentable en pro de la conservación de
las condiciones ambientales que permitan garantizar las condiciones requeridas para la
continuidad de la vida natural y humana en el planeta.

REFERENCIAS
1. Cassany, D. (1995). Describir el Escribir. Cómo se Aprende a escribir. 4ta
reimpresión. Barcelona: Paidos. [ Links ]

2. Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Gaceta Oficial de la


República Bolivariana de Venezuela, 5453, marzo 3, 2000. [ Links ]

3. Constitución de la República de Venezuela (1961). Gaceta Oficial de la República de


Venezuela, 662 (extraordinario), enero 23, 1961. [ Links ]

4. Ley Orgánica del Ambiente. Asamblea Nacional de la República Bolivariana de


Venezuela. Gaceta Oficial 5.833 (extraordinario), diciembre 22 de 2006. [ Links ]

5. Organización de Estados Iberoamericanos. Revista Iberoamericana de Educación


Número 11. Educación Ambiental Teoría y Práctica. Monográfico. Documento en línea
disponible en: http://www.rieoei.org/oeivirt/rie11.htm#Intro Consultado junio 16 de
2008. [ Links ]

6. Ramírez, J. (1993). Derecho General y Mercantil. Caracas: Vadell


Hermanos. [ Links ]

Crecimiento económico y
conservación del medio ambiente
15 enero, 2014 Juan Pérez Ventura Cultura y Sociedad 16
Descargar artículo en formato PDF

En el mundo actual, tal y como entendemos la vida, el crecimiento económico es el único objetivo que
han de tener los países, sociedades, regiones, empresas o personas. No hay otro motivo por el que existir.
El crecimiento económico debe ser el camino para conseguir todo lo demás. Hoy en día, vivir es crecer.

¿Para qué sirve una empresa que no crece económicamente? ¿Qué papel juega una región que no tiene
crecimiento económico? ¿Tiene éxito una persona que no gana cada vez un poco más de dinero? El sistema
económico predominante se basa en el crecimiento continuo, y esa idea ha conseguido traspasar los
ámbitos económico o político y se ha implantado en lo más profundo de las consciencias de las personas.
La gente vive convencida de que el crecimiento es sinónimo de éxito y de felicidad. Y, ¿quién no quiere
ser feliz?

Crecimiento economicomedioambiente from Juan Pérez Ventura

La principal consecuencia del crecimiento económico continuo es la generación de una producción masiva
de bienes y servicios. Toda esa producción ha de ser consumida, por lo que el sistema ha desarrollado
estrategias muy efectivas para atar a las personas al consumo, que desde hace unas décadas también es
una actividad que se realiza continuamente.

Así, en el mundo actual nos encontramos con tres procesos que son continuos: el crecimiento, la
producción y el consumo. Para que se mantengan, cada uno de estos procesos depende de los otros. Por
ejemplo, sin producción no hay consumo, así como sin crecimiento no hay producción, o sin consumo no
hay producción.

La cuestión que debemos abordar es, ¿se pueden mantener continuamente estos procesos? ¿Podemos
consumir al ritmo actual durante las próximas décadas? ¿podremos seguir produciendo las cantidades de
hoy en día? Antes de contestar a estas preguntas, habría que recordar que vivimos en un planeta finito:
tiene límites. Aunque escuchando y leyendo a muchos economistas, políticos o empresarios, uno puede
pensar que no es así, lo cierto es que la Tierra no va a poder darnos petróleo o minerales toda la vida, y
que hay un número máximo de coches que pueden circular por nuestras ciudades, y un tope de humo que
nuestro aire puede soportar.

Está claro que, tal y como está diseñado el sistema, actualmente nadie se plantea dejar de crecer. El
desarrollo ha sido continuo durante siglos pasados y ha de seguir siéndolo en el futuro. El desarrollo nos
ha traído progreso y bienestar. Vivimos mejor que en la Edad Media y mejor que durante el S.XIX. Lo
curioso es que el modelo de crecimiento actual puede hacer que hoy vivamos mejor también que en el
futuro.

DESCARGAR: Se puede descargar este artículo en forma de presentación haciendo click aquí
Hemos hablado del crecimiento como forma de vida, es decir, del cómo vivimos. Ahora toca pensar en
algo que muchas veces se nos olvida: dónde vivimos. El cómo y el dónde están estrechamente relacionados,
dependen el uno del otro, y afectan el uno al otro.

El cómo hace referencia a las actividades o formas de actuar y el dónde señala el espacio físico donde
tienen lugar esas actividades. En el caso que nos ocupa, este espacio es la superficie terrestre, y el medio
ambiente como representación del escenario donde tienen lugar las actividades humanas.

Como hemos dicho, desde hace varias décadas las actividades humanas tienen que ver con fomentar el
desarrollo económico, y eso tiene un efecto concreto en el medio ambiente: lo transforma. Aunque no se
debe generalizar, lo cierto es que el paso del tiempo ha demostrado que el modelo económico vigente se
caracteriza por una explotación excesiva de los recursos naturales y por generar altos niveles de
contaminación al medio ambiente, por lo tanto el hombre transforma el medio de una manera negativa. Se
destruyen montañas para extraer minerales, se talan bosques para conseguir madera, se sobreexplotan los
acuíferos, se extinguen especies animales, se llena el aire de gases tóxicos…

Paradójicamente, estamos contaminando y dañando nuestro propio hogar. El medio ambiente es el lugar
donde vivimos. Si el medio ambiente está contaminado, nuestras vidas también. Por ello conviene divulgar
un mensaje que alimente la conciencia crítica de las personas, no ya solo por preservar el medio desde una
posición ecologista, sino para salvaguardar nuestro propio bienestar. Quizás transmitiendo esta idea, que
parte de una base egoísta, cada vez más gente se apunte a la idea de preservar el medio ambiente. Detener
el modelo de crecimiento para salvar un puñado de árboles o a unos animales no parece estar teniendo
mucho éxito entre la gente. Ha llegado la hora de aumentar el nivel de la amenaza: lo que está en juego es
nuestra propia existencia.

Cuando una fábrica vierte residuos tóxicos a un río no está contaminando únicamente el agua del río, sino
también a los peces, a las plantas y a los seres humanos que entran en contacto con él. Como aun no hemos
aprendido a fabricar agua, deberíamos tener cuidado a la hora de contaminar nuestras fuentes de este
recurso. Y de la misma manera ocurre con la madera, el aire, los minerales, las cosechas… etc. Nos
servimos del medio para sobrevivir. Contaminar el medio es una grave irresponsabilidad, y debido a que
el sistema de producción y de consumo actual es propicio a contaminar la naturaleza, es necesaria una
reflexión sobre cómo funciona el mundo hoy en día. Puede parecer una cavilación que no lleva a ninguna
parte, pero únicamente cuestionándonos el sistema establecido podemos llegar a cambiar las cosas.

Crezco, luego consumo.


Todo comienza con el consumo. La realidad demuestra que, a mayor nivel de desarrollo económico, las
sociedades tienden a ser más consumistas. Y una sociedad consumista es una sociedad que precisa de
muchos recursos, que, en su gran mayoría, se extraen del medio ambiente que nos rodea. Es decir, el
consumo afecta al medio ambiente, y casi siempre de una manera negativa.

El modelo de consumo actual es resultado de la evolución histórica del sistema de producción capitalista,
que como decía Marx se basa en la producción generalizada de mercancías. La sociedad de consumo
contemporánea nace con la llegada de la producción de masas fordista y con la puesta en práctica de las
políticas keynesianas tras la II Guerra Mundial, que permitieron un aumento del nivel de vida de la clase
trabajadora y de los sectores populares, así como su acceso al consumo de masas.

La propia lógica del sistema capitalista genera la creación artificial de necesidades de consumo, con el
objetivo de mantener un nivel de producción constante. Se crea la percepción de que necesitamos más
para vivir mejor y aparecen nuevos productos que se convierten en indispensables y que fomentan una
cultura del gasto permanente. De forma que la actual función del consumo no es cubrir necesidades, sino
satisfacer deseos. Y como tenemos muchos más deseos que necesidades, el sistema actual se caracteriza
por un alto nivel de consumo, que ha llegado a volverse patológico en la sociedad, y por ello hablamos de
consumismo.

ARTÍCULO RELACIONADO: La sociedad de consumo. Vivir es consumir (Juan Pérez Ventura,


Noviembre 2013)

El consumismo se mantiene gracias a dos procesos muy evidentes: poner a disposición del público una
serie de productos (vender) y hacerse con esos productos (comprar). En ambos casos el medio ambiente
resulta dañado. En el proceso de ‘vender’, el medio ambiente sufre con la cadena de producción que fabrica
los productos que se venden. Para poder vender un objeto primero hay que fabricarlo. Y fabricar, en el
mundo actual, significa explotar recursos y transformarlos, lo cual tiene un efecto directo sobre el medio
ambiente. Para fabricar un anillo y poder venderlo, primero hay que explotar la tierra en busca de minerales.
Por otro lado, el proceso de compra lleva asociado un inevitable proceso de desecho, pues nadie consume
un producto al 100%. Siempre se desecha algo. Todos estos desechos (masivos en un mundo consumista),
acaban en algún lugar del medio ambiente, contaminándolo casi siempre.

De esta forma el consumo afecta al medio directamente, por la generación de residuos derivados de los
bienes de consumo, e indirectamente, por los procesos de producción que explotan el medio.

¿Qué se puede hacer con estos residuos? Lo primero de todo, evitar generarlos. Mediante la prevención y
la concienciación podemos consumir productos que no generen residuos o que generen pocos. En el caso
de que sea imposible evitarlo, siempre es posible intentar la reutilización, es decir, procurar utilizar el
objeto o producto en cuestión para otros fines, o darlo a otra persona para que continúe dándole un uso. Si
tampoco se puede hacer esto, aun tenemos la opción del recliclaje. Y si no se pueden reciclar, podemos
hacer que esos residuos o desechos tengan un uso dándoles una valoración energética, es decir, que sirvan
para generar energía (principalmente quemándolos). Finalmente, si ninguna de estas opciones es posible,
lo único que podemos hacer con los residuos es echarlos al vertedero, donde seguramente provoquen un
daño al medio ambiente.

Como ya hemos dicho, el consumismo es una actividad que aumenta a la par que el crecimiento económico,
pero también está directamente relacionado con el aumento de un sector concreto de la sociedad: la clase
media, que son las personas que consumen.

En el año 2000, en el mundo más de 1500 millones de personas pertenecían a la clase media. En el 2012
ya eran 2000 millones, y en 2020 se espera que sean más de 3000 millones. Y 3000 millones de personas
consumiendo y gastando son muchas personas.

Aun así, el problema actual del deterioro ambiental debido a factores antrópicos no se justifica
principalmente por el hecho de que el planeta esté superpoblado, sino por las características de las
sociedades que lo pueblan. Es decir, el problema no es tanto por el ‘cuántos vivimos’, sino por ‘cómo
vivimos’. En el Paleolítico podríamos haber habitado el planeta 7.000 millones de personas, y no lo
habríamos contaminado ni perjudicado. Porque no importa tanto la cantidad como los modos de vida.

El modo de vida actual se basa en la competitividad y en el consumismo, dos hábitos que no favorecen
para nada la preservación del medio ambiente. Por un lado, la competitividad hace que las empresas
busquen enfermizamente la minimización de costes, y para ello explotan de manera descontrolada e
intensiva todos los recursos naturales y ponen en marcha prácticas inmorales y poco cuidadosas con el
entorno natural. Por otro lado, el consumismo afecta a las personas, que llegan a sufrir síntomas por la
necesidad de comprar cosas. Algunos autores ya hablan de hiperconsumismo en la sociedad occidental
actual. Y como hemos dicho, el consumismo provoca grandes cantidades de residuos (y por tanto,
contaminación) en el medio ambiente.
El crecimiento, la competitividad y el consumismo son tres actividades que caracterizan el modo de
desarrollo de cualquier región o país hoy en día. Son motores del desarrollo económico, pero que al mismo
tiempo hipotecan el desarrollo de generaciones futuras contaminando y dañando gravemente el medio en
el que vivimos. ¿Será posible mantener los niveles de crecimiento del consumo durante muchos años?

El modelo productivo
Directamente relacionado con el consumo en masa y el consumismo, el modelo de producción actual se
basa, precisamente, en una producción masiva. Pues el consumo en masa se mantiene únicamente gracias
a una producción en masa.

Así como el problema no es el consumo, sino el consumismo, en el caso de la producción el problema no


es el hecho de producir bienes. Durante toda la Historia de la Humanidad se han dado procesos de
producción, indispensables para la vida humana. El problema surge con la producción en masa.

La producción en masa surgió a principios del S.XX de la mano de Frederick Taylor y Henry Ford, tal y
como hemos apuntado en el anterior apartado. Consiste en la obtención de grandes cantidades de productos
exactamente iguales y de forma continuada. Es decir: producir mucha cantidad y de forma continua.

La cadena productiva es el conjunto de operaciones necesarias para llevar a cabo la producción de un bien
o servicio, que ocurren de forma planificada, y producen un cambio o transformación de materiales u
objetos.

Pero el proceso de producción no sólo transforma las materias primas o los recursos, sino también el medio
ambiente, pues entra en contacto con él de dos formas: extrayendo recursos del medio para producir bienes
y generando residuos que se depositan en el medio para su desecho.

La producción en masa implica procesos muy agresivos de extracción y de explotación de recursos


naturales. Estos procesos afectan de manera muy preocupante al medio ambiente. Y, además, el proceso
de producción genera residuos, que son desechados y contaminan el medio. Esto no sería tan preocupante
si no viviéramos con un ritmo de producción vertiginoso.

Algunos datos de producción nos dan una idea de las magnitudes que ha alcanzado este proceso. En 2013
se pusieron a la venta más de mil millones de smartphones en todo el mundo. En 2012 se fabricaron 84
millones de automóviles. En 2012 se produjeron 1500 millones de toneladas métricas de acero. El ritmo
de construcción de casas en Estados Unidos aumentó casi un 30% en Noviembre de 2013, alcanzando el
ritmo anual de 1,1 millones de viviendas.

Pero la generación de residuos y la contaminación no tienen únicamente que ver con la producción en
masa, pues esos procesos de producción sólo son posibles gracias a la energía.

El modelo energético
Cualquier sistema se mantiene con el suministro de energía. Para sostener y hacer posible los ritmos de
producción y consumo actuales, hoy en día nos apoyamos en las diferentes fuentes de energía que
disponemos. El crecimiento económico y el aumento de la producción y del consumo han ido
acompañados por un inevitable aumento de la demanda energética.
Hoy en día nos abastecemos principalmente de petróleo, carbón y gas. Fuentes de energía no renovables,
es decir, limitadas sobre la Tierra. Algún día (no muy lejano) se acabarán agotando. Aunque el modelo
económico actual, centrado en los beneficios, no se preocupa por el largo plazo y sigue consumiendo
petróleo por encima de sus posibilidades, lo cierto es que poco a poco otras fuentes de energías alternativas
y renovables se van haciendo un hueco en el suministro de energía, como la biomasa, la solar, la eólica o
los biocombustibles.

El petróleo supone un 37% de toda la energía consumida en el mundo. Uno de sus principales peligros
para la conservación del medio ambiente es la posibilidad de accidentes en los grandes petroleros que
cargan con este preciado combustible y que, de vez en cuando, se hunden en los océanos y mares
generando pérdidas ecológicas irreparables. El carbón, que genera el 25% de la energía consumida en el
planeta, también precisa de una extracción que daña al medio, pues hay que explotar minas e importantes
superficies de tierra para encontrarlo. El gas natural, que supone el 23% de la energía consumida en el
mundo, tiene una complicada extracción que produce la emisión de gases de efecto invernadero, que
contribuyen al calentamiento global del planeta. Estas tres son fuentes de energía con graves peligros y
daños medioambientales, y son precisamente las que más consumimos.

Existen otras, como la biomasa, que generan mucho menos daño ecológico. Este tipo de energía, basada
en la biomasa de la madera, residuos agrícolas y estiércol, continúa siendo una fuente principal de energía
en países poco industrializados. La energía hidroeléctrica también es limpia en cuanto a su generación y
emisión de residuos, así como la eólica o la solar, pero producen rechazo por los daños visuales y
medioambientales que producen la construcción de presas o parques eólicos. Finalmente los
biocombustibles parecen tener mucho futuro, pues son limpios y se pueden “cosechar”. Es decir, podemos
cultivar energía, en cierto modo. La principal crítica a este tipo de energía es que podemos llegar a sustituir
las extensiones de cosechas para la alimentación de la población por cosechas para la alimentación de
nuestros coches. El beneficio a toda costa.
Crecimiento infinito en un planeta finito
Según los economistas, un país necesita un crecimiento económico de entre el 1% y el 2% para crear
empleo. Este crecimiento hace referencia, entre otras cosas, al aumento de la producción de bienes y
servicios y al aumento del consumo de energía que un país tiene cada año. Es decir, crecer
económicamente significa producir más cada año y consumir más cada año que pasa.

Todos queremos tener un trabajo. Ante nuestras peticiones el sistema nos responde que, para generar
empleo, un país debe crecer. Así pues, el crecimiento económico ya no sólo es aceptado por la mayoría,
sino alabado y muy esperado.

La pregunta que es: ¿se puede crecer continuamente? ¿podemos producir cada año más bienes y servicios?
¿podemos consumir cada año más energía? ¿es sostenible en el tiempo este modelo de crecimiento
económico? Parece ser que sí, ya que el crecimiento económico es el mantra que repiten una y otra vez
los líderes mundiales y los grandes empresarios: hay que crecer, hay que ser más competitivos, hay que
producir más, consumir es signo de desarrollo socioeconómico…

En este sistema actual, basado en el crecimiento continuo, los economistas parecen no haberse dado cuenta
de que vivimos en un planeta finito. Un planeta que no podrá darnos madera continuamente, un planeta
del que no podremos extraer minerales al ritmo que queramos, un planeta que acabará saturado de
vertederos. Un planeta, en definitiva, que no está preparado para cubrir las necesidades que nos hemos
creado para vivir felizmente.

Muchas veces se nos dice que estamos viviendo por encima de nuestras posibilidades económicas, pero
realmente estamos viviendo por encima de las posibilidades ecológicas.

Basándonos en un crecimiento infinito no sólo estamos agotando importantes recursos naturales ni


generando la proliferación de impactos ambientales, sino también propiciando perturbaciones financieras,
causadas por la incapacidad de nuestros sistemas monetarios, bancarios y de inversiones para ajustarse
tanto a la escasez de recursos como al aumento de los costos ambientales. Es decir: el crecimiento infinito
no sólo es insoportable por la Tierra, sino también por el propio sistema económico.

¿Crecimiento económico que favorece al


medio ambiente?
Un interesante planteamiento sobre la relación entre crecimiento económico y medio ambiente viene de
la mano de Simon Kuznets, Premio Nobel de Economía en 1971.

A partir de las hipótesis de este autor se ha desarrollado la teoría de la Curva Ambiental de Kuznets, que
viene a representar cómo afecta el crecimiento de la economía al medio ambiente. Según esta teoría la
relación entre estas dos variables dibuja una ‘U invertida’, de forma que, conforme aumenta el crecimiento,
la degradación ambiental aumenta sólo hasta cierto punto, a partir del cual comienza a disminuir. Es decir,
llegado un momento de desarrollo económico, éste ya no afecta negativamente al medio ambiente.

Según los autores que apoyan esta teoría, el crecimiento económico no es una amenaza para el medio
ambiente en el largo plazo, sino el requisito para mejorar su calidad.
El desplazamiento que se hace desde el sector industrial al sector terciario en las economías desarrolladas
es sinónimo de una menor emisión de contaminantes, puesto que las actividades por excelencia intensivas
en consumo de energía y emisiones tóxicas son las industriales.

Los países tienden a usar menos materiales gracias al desarrollo económico, pero ésto sólo se puede
observar hoy en día en los más desarrollados. Por ejemplo Holanda o Dinamarca sí que muestran la curva
ambiental de Kuznets en su progreso socioeconómico: hoy son más ricos y contaminan menos que ayer.
Pero son casos muy concretos y aislados como para aplaudir el modelo de desarrollo.

El planeta Tierra es un sistema, compuesto por varios elementos, y no podemos analizarlo dejando a un
lado parte del problema: no todos los países tienen el nivel socioeconómico de Dinamarca. Mientras los
daneses disfrutan de un progreso técnico y de un aire limpio, cientos de millones de chinos se suben al
carro del desarrollo y, con ellos, aumenta la contaminación y el daño al medio ambiente global.

Debemos recordar que la mundialización ha hecho que vivamos en una auténtica Aldea Global, donde
todos somos vecinos. Las emisiones de unos países nos contaminan a todos.

Además el modelo de Kuznets parece olvidar otra realidad: en un mundo globalizado, si hay países que
pueden disfrutar de un desarrollo no perjudicial para el medio es porque los procesos de producción se
han trasladado a otros países, que son los que sufren las peores consecuencias del modelo de crecimiento
actual. Es decir, que en Holanda no haya fábricas contaminantes no quiere decir que hayan desaparecido:
ahora están en la India.

Debido a esta realidad, apoyada en procesos como la deslocalización empresarial, muchas veces da la
sensación de que los países menos desarrollados son los que más contaminan.
Pobreza y degradación del medio ambiente

Normalmente tendemos a relacionar la degradación del medio ambiente con la pobreza. Las imágenes de
ciudades como Lagos, Kinshasa, Manila o Bombay nos muestran grandes extensiones de asentamientos
informales, barriadas de slums, zonas industriales humeantes y contaminación de todo tipo: en el aire, en
el agua y en la tierra. Son grandes ciudades de países subdesarrollados o en proceso de desarrollo que se
han visto afectadas por el crecimiento económico, y que se caracterizan por ser hipertrofias urbanas, mal
gestionadas y muy contaminadas.

Cuando relacionamos la degradación del medio ambiente con la pobreza estamos cayendo en una
contradicción de fondo: la pobreza, por definición, no es nada contaminante ni degradante. Una situación
de pobreza no puede degradar el medio, pues la pobreza es la falta de medios para sobrevivir y la escasez
de recursos. Un pobre no contamina. No realiza ninguna actividad contaminante. Es pobre.

La contaminación procede de la actividad económica, de la presencia de la economía en el espacio. El


espacio ocupado por gente pobre apenas tiene economía, en cambio en los territorios habitados por gente
rica prolifera la actividad económica. Así pues, la degradación del medio ambiente la realizan los ricos.

Lo que ocurre es que, en un contexto de globalización económica, las actividades económicas propias de
los espacios ricos y desarrollados se trasladan a los espacios periféricos y más pobres, de forma que la
contaminación y la degradación del medio tiene lugar en estos territorios históricamente pobres. El
concepto de “aldea global” sirve para comprender cómo, en un mundo globalizado, todos vivimos en el
mismo hogar. Las actividades de unos afectan a los demás, y nadie vive aislado del resto. Esta realidad
sirve para contestar el positivismo del Modelo de Kuznets, que parece olvidar que todos vivimos en la
misma casa, que es el planeta Tierra.

En este sentido, dejando claro que el pobre no contamina (porque no tiene nada con lo que degradar el
medio ambiente), cabe preguntarse por qué es en los espacios menos desarrollados y más pobres donde
más contaminación ambiental observamos. Esto ocurre por una razón muy sencilla. Simplificado al
máximo podríamos decir: El pobre no contamina, contamina el rico. El rico contamina en el país del pobre.

Si no viviéramos en un mundo globalizado económicamente, las regiones pobres serían las menos
contaminantes. En cambio, debido a los procesos de deslocalización y de subcontratación empresarial, las
actividades industriales más contaminantes se han trasladado a los espacios menos desarrollados. Los
países ricos no contaminan tanto como los pobres, pero es debido a que se valen de éstos últimos para
realizar las actividades de producción industrial.

Modelos alternativos
Ante esta realidad que nos ha tocado vivir, con un sistema económico que se basa el crecimiento en la
explotación incontrolada de los recursos y la producción que contamina el medio ambiente, debemos
preguntarnos: ¿es necesario el crecimiento económico?

Existen otros modelos económicos que no tienen como objetivo principal el crecimiento, lo cual no quiere
decir que no persigan el desarrollo. Por ejemplo, la economía del bien común antepone otros valores a los
económicos. Esta propuesta económica se basa en una serie de principios básicos que representan valores
humanos: confianza, honestidad, responsabilidad, cooperación, solidaridad y generosidad, entre otros.
Para los defensores de la economía del bien común, aquellas empresas que se guíen por esos principios y
cumplan esos valores deben obtener ventajas legales que les permitan sobrevivir, frente a los tradicionales
valores del lucro y la competencia.
En la economía actual, el éxito se mide con indicadores monetarios como el producto interior bruto o los
beneficios, valores que no tienen en cuenta a los seres humanos ni al medio en el que vivimos. Son
indicadores que no muestran si se respetan los derechos humanos, si existen dictaduras o si hay guerras.
Que una empresa tenga beneficios no nos indica nada sobre las condiciones laborales de sus trabajadores
ni sobre lo que produce o cómo lo produce.

Para ello, el balance del bien común mide cómo es realmente una empresa: la dignidad humana de sus
trabajadores, la solidaridad, la justicia social, la sostenibilidad ecológica, la democracia con todos sus
clientes y proveedores, si la empresa promueve la esclavitud infantil, si hay desigualdades entre hombres
y mujeres… etc.

El objetivo de la economía del bien común es analizar estas variables sociales y dejar de utilizar variables
económicas. El objetivo no es el crecimiento económico, sino el crecimiento justo. Finalmente, la
evaluación de las empresas permitirá al consumidor escoger entre los productos que prefiera comprar.

Por otro lado, encontramos un interesante modelo que se basa en la Teoría del Decrecimiento. El modelo
de decrecimiento es partidario de una disminución regular controlada de la producción económica, con el
objetivo de establecer una nueva relación de equilibrio entre el ser humano y la naturaleza. Rechaza el
objetivo de crecimiento económico neoliberal y el productivismo. Los partidarios del decrecimiento
proponen una disminución del consumo y la producción controlada y racional, permitiendo respetar el
clima, los ecosistemas y a los propios seres humanos. Esto se conseguiría aplicando una serie de principios
más adecuados a una situación de recursos limitados: escala reducida, relocalización, eficiencia,
cooperación, autoproducción, intercambio, durabilidad… etc.

Aunque el término ‘decrecimiento’ puede sonar negativo, lo cierto es que el crecimiento no siempre es
bueno. Como hemos dicho, vivimos en un planeta de recursos finitos, y no podemos mantener el
crecimiento indefinidamente. En realidad, es una obviedad que necesitamos cambiar de modelo. Nadie
niega que es imposible seguir con el modelo actual. A la larga destruiremos el medio. Y lo sabemos.
Quizás no queramos aceptarlo o prefiramos traspasar el problema a generaciones futuras. Pero el momento
llegará.

Por ello superar el modelo económico es cuestión de tiempo. Si queremos darnos prisa hay que empezar
a valorar seriamente las alternativas que se presentan. Tanto las teorías de decrecimiento como la casi
utópica Economía del Bien Común parecen ir creciendo en adeptos poco a poco. No son propuestas
alocadas, son modelos alternativos que merecen ser escuchados.

Aun así, un cambio en el modelo de crecimiento económico no ha de ser buscado únicamente en las
fábricas o en los despachos. El cambio tiene que ser mucho más profundo, y ha de afectar al interior de la
conciencia de cada persona.

You might also like