UNA GRANDÍSIMA ESPAÑA PASA A CUARTOS.

ESPAÑA 5 – KAZAJSTÁN 2.

Como se podía prever nos encontramos ante un partido exigente tanto en lo mental como en lo físico. Lo que nadie
podía pensar es que la actuación de la pareja arbitral formada por el iraní Vahid Arzpeyma y el australiano Chris
Colley tendría tanta relevancia en lo que sucedería en el 40 x 20. Incluso a ese factor externo supieron
sobreponerse los hombres de Venancio López, quizás más unidos que nunca.

El partido no empezaría bien para los nuestros ya que cuando apenas se llevaban jugados 30 segundos de partido el
cierre gaditano Jesús Aicardo se tendría que retirar lesionado. Partido que no disputaría tampoco José Ruiz, ya
descartado para el resto del torneo por una rotura fibrilar en el gemelo.

Los nuestros supieron sobreponerse a este primer golpe en unos primeros minutos en los que circularon el balón de
forma magistral e incluso conseguirían adelantarse en el marcador en una falta lejana ejecutada por Sergio
Lozano. Pero poco duraría la alegría ya que apenas dos minutos más tarde los kazajos conseguirían igualar el
marcador. Yessenamanov sería el autor del tanto, tras aprovechar un rechace a disparo del meta Higuita.

A partir de ese momento los hombres de Venancio se mostraron más dubitativos, cosa que hizo crecer al plantel
del brasileño Cacau. El partido entró en un tramo con mucho disparo exterior por parte de ambos equipos ante la
dificultad existente para profundizar sin asumir riesgos. Quizás en el uno contra uno los españoles dañarían más a
su rival, aunque sin suerte de cara a puerta. Llegaríamos al final de los primeros 20 minutos con empate a un gol en
el luminoso.

Tras el paso por vestuarios nos encontraríamos con la versión más reconocible de los nuestros, con total seguridad
los mejores momentos de la bicampeona del mundo en lo que va de competición. Así llegaríamos al tercer minuto de
esta segunda mitad cuando un desborde del jugador de Movistar Inter Mario Rivillos le permitiría abrirse hueco
para filtrar un pase para que Bebe volviera a adelantar a la roja en el marcador. Con más calma y tranquilidad los
hombres de Venancio se adueñarían del control del balón, los kazajos ya no parecían tan feroces e incluso daba la
sensación de que no se encontraban cómodos. Nada más lejos de la realidad. Los de Cacau, en botas de Nurgozhin,
aprovecharían un desajuste en la defensa española para nivelar el marcador.

De nuevo todo un tanto cuesta arriba pero ocho segundos después el propio Nurgozhin, en propia puerta
adelantaría a la selección española. Volvíamos a respirar al encontrarnos de nuevo por delante en el luminoso.

A partir de aquí lo esperado, tocaba sufrir y sufrir. Kazajstán debía apretar y las faltas les apretaban a ellos. Si
la tarea de por sí ya era bastante complicada aún la complicarían más los árbitros. Faltas que solo ellos veían y
como guinda un contragolpe que acabaría en gol de Raúl Campos que no subiría al marcador puesto que el colegiado
iraní señalaría una falta la cual todavía seguimos sin encontrar tras visionar la jugada una y otra vez. Se mantenía
el 3-2 y el ambiente se volvía un tanto extraño.

Minutos más tarde, nuestras sospechas se convirtieron en realidad. Una acción por banda de Sergio Lozano
acabaría con el jugador del Barça Lassa tumbado en el suelo, con evidente cara de dolor. Para sorpresa de todo el
mundo, el árbitro sancionaría esa acción como una simulación y le mostraría la segunda amarilla al jugador
madrileño. Sencillamente inexplicable.

Tocaba defenderse con uñas, dientes y por qué no decirlo, con dos cojones, y de esos a este equipo le sobra.
Defensa en inferioridad contra la selección que mejor ataca en superioridad. Todo esto provocó una estimulación
extra para los hombres de Venancio López, que aguantarían con intensidad sus marcas e incluso anotarían dos
tantos más a puerta vacía, obra de Raúl Campos y Miguelín.

Sensaciones totalmente positivas después de las dificultades acaecidas.

De esta forma, la selección española se enfrentará en la madrugada del sábado al domingo a la de Rusia en los
cuartos de final del Mundial de Colombia, en lo que será la reedición de la final del último campeonato de Europa.
El conjunto dirigido por Skorovich eliminó a la selección de Vietnam, dirigida por el español Bruno García, por un
amplio 7-0. Destacar también de la jornada de anoche la eliminación de Brasil, una de las máximas favoritas, tras
caer derrotada en la tanda de penaltis por la selección de Irán.