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ISABEL FRAIRE

De Poemas en el regazo de la muerte, 1977.

EUROPA

En este minicontinente
superpoblado y supercomunicado
hasta en las revistas más sofisticadas
aparecen los anuncios

hombre aburrido busca


mujer aburrida
para compartir aburrimiento

"COMPLEJO HABITACIONAL"

I
La mañana surge lentamente como un vapor que se eleva
y se difunde en el aire

cruza los cuadros de verde pasto


saltando corriendo saltando
un niño
con una bolsa de mandado en la mano

II
los edificios de departamentos
presentan superficies planas rectangulares

las ventanas tienen contraventanas grises


que se cierran o abren
como tapas
cada cuarto una caja

el jardín de pasto liso y verde como alfombra recién comprada


está encuadrado por filas regulares de árboles idénticos
que arrojan una sombra continua
como la de un muro

III
aquí nadie se habla me dice una vecina
que después de un año
ha roto con la regla
a horas previsibles
dos o tres viejos y una niña
sacan a pasear sus respectivos perros
uno de ellos acostumbra
soltarle la cadena
los otros se detienen
cada vez
que se detiene el perro

IV
en general reina el silencio
sólo roto por el ruido del tráfico
que aumenta notoriamente
a las horas de entrada y salida de las oficinas

pero ocasionalmente
se oye a través de las paredes
una discusión agria violenta
cargada del resentimiento
de una vida estropeada
o la música de fondo
melodramática y jadeante
de la televisión

V
a una cuadra de distancia
grandes máquinas
se ocupan de arrasar un bosquecillo

para levantar un gran conjunto de edificios


idénticos a éste
UTOPÍAS CONTEMPORÁNEAS

El otro día en una fiesta


hablé con una chica llamada Desirée (hazme favor)

su renombre produjo ecos


románticos
históricos
hasta platónicos

resultó que trabaja programando una computadora


y así como otras gentes sueñan a colores
ella cada noche sueña
en un lenguaje de computadora
compuesto de
flechas que son órdenes
inflexibles
lógicas

me resulta imposible confesó


desenvolverme en una relación humana

todo lo reduzco a signos a flechas a órdenes

de noche
tengo pesadillas
en que formo parte de una computadora enorme
hasta que llega la hora
de levantarme para ir a trabajar

I
sí quisiera escribir objetivamente
diría
el mundo está de la chingada
qué se puede hacer para remediarlo?
vamos a tomar nota de las posibilidades efectivas
y habiendo levantado constancia de una realidad sin ilusiones
pasaría a la acción
dejaría de escribir

II
quedaría un problema
con qué sustituir a ese mundo que está de la chingada?
ahí entra de nuevo la poesía

PÉNDULO

Cómo darse cuenta de la realidad


sin suspender
el hormigueo insensato
distrayente
de los actos

sin entregarse
por completo
a la mirada
Para ver deveras ver lo que está ahí

y sin embargo
tarde o temprano
la mirada se cansa

del éxtasis nirvana contemplación o análisis


se pasa
si se quiere que el mundo siga dando vueltas
al acto indispensable
que le da con la puerta en las narices
al pensamiento
ELENA JORDANA

De Poemas no mandados, 1979.

PRÓLOGO

Sabines dijo:
A la chingada las lágrimas
y se puso a
llorar
como se ponen a parir.

Yo dije:
al carajo la poesía
y me puse a escribir
como
se ponen a vivir.

XIII. TANGO

Soy esa borrachera que necesitás a mitad de año


cuando el aguinaldo
las vacaciones
el ascenso
aún están lejos
soy la nota disonante
que te ayuda a sobrellevar esa armonía monótona
que decís que es tu vida
soy ese minuto de locura
que te permite aguantar el resto de la hora
el elogio dicho con firmeza tal que descarta tu duda
la urna en que depositas tus lastimeros "vos no sabés"
tus pequeñas frustraciones cotidianas
tus:
el café está frío
quién me abrió esta carta
otra vez la cuenta del gas

soy la que despierta los rincones más inéditos de tu piel


la que te hace decir:
con vos me siento otra vez un colegial
soy
en otras palabras
esa mujer que te llevás a un hotel
en una noche de borrachera
y a quien te olvidás de preguntar su nombre
o si podrás volverla a ver algún día.

XXII

Creo en la televisión
creo en el yoga
creo en la crema Ponds y los enjuagues bucales
con un poca más de fe
podría también creer en Carter
en la declaración de los derechos humanos
y en la paz.

XXIII

Ahora creo que todo va a cambiar.


Hace una semana compré un libro vital:
Cómo conquistar amigos y disfrutar de la vida.
Cada mañana leo un capítulo:
ayer me tocó repetirme, ante cada contratiempo,
soy feliz, soy feliz, soy feliz
hoy me toca abrirme vitalmente a todas las
oportunidades o sea: decir a todo que sí
mañana me tocará pensar un poco en los demás:
tratar de adivinar qué quieren, para
complacerlos de inmediato.
Yo creo que en una semana todo va a ser
perfecto…
salvo que aún no he decidido si seguir leyendo
o de una vez abrir la llave del gas.
KYRA GALVÁN

De Un pequeño moretón en la piel de nadie, 1980

DIEZ B

Día tras día


entre nueve y media y diez en la oficina
esos licenciados que llegan coqueteando
gallos de pelea
jóvenes y con buen futuro bajo sus sacos a cuadros
se me quedan mirando cuando paso.
Entonces yo segura de traer algo raro
me reviso la bragueta, los botones de la blusa.
Todo en orden. Sólo se atreverían a pensar
qué buenas nalgas.
Sólo se desprenderán de sus gestos de economistas
graduados con mención de honor
cuando se desprendan de su amadísima silla giratoria
y vuelvan al aire de la calle
a ser los pobres diablos que son
que piensan contribuyen a decidir el destino de la Patria
y que un día la salvarán de las transnacionales
—o al menos las limitarán—.
Entonces se dedicarán a presumirse sus mujeres
—buenas carnes de seguro—
y ninguno se decidirá a pagar la cena:
discutirán por el fordcito que piensan comprarse
o ya se compraron a crédito.
Posiblemente mencionen el futbol y tal vez el tenis.
Hablarán de la Ley de Inversiones Extranjeras y
citaráne l artículo cinco con puntos y comas.
Dormirán frente a la premier de la televisión
o se tomarán una cuba en casa del compañero casado.
De todos modos en la mañana e incansables
adoptarán su glamorosa figura con harta dignidad
convencidos de la utilidad de su existencia
creyendo que poder pensar
qué buenas nalgas
es un verdadero privilegio.
CONTRADICCIONES IDEOLÓGICAS AL LAVAR UN PLATO

Entre el Yin y el Yang


¿cuántos eones?
Julio Cortázar

Contradicciones ideológicas al lavar un plato. ¿No?


Y también quisiera explicar
por qué me maquillo y por qué uso perfume.
Por qué quiero cantar la belleza del cuerpo masculino.
Quiero aclararme bien ese racismo que existe
entre los hombres y las mujeres.
Aclararme por qué cuando lavo un plato
o coso un botón
él no ha de estar haciendo lo mismo.
Me pinto el ojo
no por automatismo imbécil
sino porque es el único instante en el día
en que regreso a tiempos ajenos y
mi mano se vuelve egipcia y
el rasgo del ojo, se me queda en la Historia.
La sombra en el párpado me embalsama eternamente
como mujer.
Es el rito ancestral del payaso:
mejillas rojas y boca de color.
Me pinto porque así me dignifico como bufón.
Estoy repitiendo/continuando un acto primitivo.
Es como pintar búfalos en la roca.
Y ya no hay cuevas ni búfalos
pero tengo un cuerpo para texturizarlos a mi gusto.
Uso perfume no porque lo anuncie
Cahterine Deneuve o lo use la Bardot
sino porque padezco la enfermedad
del siglo XX, la compulsión por la posesión.
Creer que en una botella puede reposar
toda la magia del cosmos,
que me voy a quitar de encima,
el olor de la herencia,
la gravedad de la crisis capitalista,
porque a pesar de todo/hembra.
Se dice que las mujeres débiles/que los hombres fuertes.
Sí y nuestras razas tan distintas.
Nuestros sexos tan diversamente complementarios.
Yin & Yang.
La otra parte es el misterio que nunca desnudaremos.
Nunca podré saber -y lo quisiera-
que se siente estar enfundada en un cuerpo masculino
y ellos no sabrán lo que es olerse a mujer
tener cólicos y jaquecas y
todas esas prendas que solemos usar.
Dos universos físicos en dialéctica constante
con la nostalgia de una unión duradera
donde la fusión de los dos desconocidos
llegue a la profundidad del entendimiento.
Hay una necesidad compulsiva
de dar razones para la escisión
para agudizar racismos con sonrisas
Y las amigas y los amigos
ellos comprenderán.
Ellos entienden la distancia que te separa
del amigo/amado/enemigo/desconocido.
Que la reconciliación es un esfuerzo máximo.
La unión, la sublimación
de nuestros propios misterios.
Que el lavar un plato
significa a veces afirmar
las contradicciones de clase
entre el hombre y la mujer.
SILVIA TOMASA RIVERA

De Poemas al desconocido/poemas a la desconocida (1984)

LOS PECHOS DE MAGALY

Los pechos de Magaly


son dos enormes girasoles
que penden de su cuerpo.
Atropellan desconocidos
y se desbordan sin recelo.
La cintura no es estrecha,
pero la curva de sus caderas
es como para entrar en su vida
y no salir sobria.
Su monte de venus…
un inmenso clavel negro.
Yo quisiera leer los pechos de Magaly
y encontrar a Dios entre sus piernas.

LA CIUDAD

I
De la ciudad
no puedo decir nada
porque llegué dormida
como quien llega al mar
a no pensar.

II
Vivir en la ciudad
es como un sueño largo
uno no sabe nunca
cuándo va a bostezar
y empieza el despertar.

III
La ciudad
es una vaca echada
nadie la vio pasar
pero llegaron a sus ubres
a aprender a mamar.

IV
De la ciudad
no amo a los que dicen
que quieren regresar
la ciudad se hizo para hablar
el mar para callar.

V
La ciudad
tiene el alma de todos
en un hilo invisible
que estrangula las ganas
de llorar.

VI
En la ciudad sólo viven
los que tienen valor
para no regresar
a morderse los sueños
en el mar.

FIN DE FIESTA

Porque no tengo necesidad de hablar


estoy callada.
Suena triste pero es más verdad que el silencio.
Anoche hablé hasta que me dolió la comisura
de los labios.
Pero anoche era un tigre.
Ahora soy aquella, la hija del hombre:
sin mañana
sin semilla
sin voz.
Sólo una idea perdida
entre la ropa sucia.

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