Artículo de Investigación presentado para optar al título de Especialista en Educación

Religiosa, Universidad de San Buenaventura Medellín, Facultad de Educación,

Especialización en Educación Religiosa, Medellín, 2016. Asesor: Andrés Felipe López
López, Posdoctorado de Investigación en Ciencias Sociales, Niñez y juventud.

Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE)

Diana Figueroa Villa.

Resumen

El área de ERE es fundamental, porque ayuda en la formación integral de la persona, de la

conciencia moral, del desarrollo de lo espiritual y el fomento de valores sociales, entre otros
aspectos.

No se puede desconocer la dimensión espiritual o religiosa que por naturaleza el hombre

posee y que además se ha manifestado en todas las culturas, de una forma diferente.
Pero debido a los distintos cambios que se han generado a lo largo de la historia y con la
amenaza latente de que muchos quieren hacerla desaparecer, el área se encuentra ante un desafío
muy grande: permanecer en el currículo.

Ante esto los docentes de esta área fuera de transmitir un saber desde lo doctrinal debe
hacerlo atractivo, que motive al estudiante a aprenderlo y que sea significativo, ya que lo que
enseñamos involucra la propia vida, lo más íntimo del ser. Es así como esta investigación tiene
como objetivo saber cómo debe ser el ambiente de aprendizaje del área de ERE, para lo cual se
habla primero de la situación de la enseñanza de la religión hoy, luego se plantea lo que es un
ambiente de aprendizaje, sus características e importancia en el aula; y por último se hará una
propuesta para abordar el cómo debe ser el ambiente de aprendizaje para la ERE en el aula de
clase, de esta manera se podrá abrir un camino que permita un cambio, una transformación en el
quehacer pedagógico pero que además sea significativa.
Palabras clave: Educación, ambientes de aprendizaje, pedagogía, religión, educación religiosa
escolar.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE). 2

Abstract

Religion education is essential; we are convinced that is helps in the formation about the
person, about moral science, spiritual development and promotion of social values that contribute
to healthy living, among other benefits.

We cannot ignore the spiritual or religious of man dimension that is inside him by nature
and that also appears in all cultures, in a different way.

But because of several changes that have been generated througout the history and the
latent threat that many people want it to be out of curriculum, the religion studies is facing a big
challenge: to remain in the curriculum.

In this regard, teachers in this área, in addition to transmitting doctrinal knowledge, they
must make it attractive for students, motivating them to learn. It should be significant because
what we teach involves life, the innermost of every human being. In this regard, this research
will allow people to know how learning environment of Religion Education should be, talking
first about the issue of teaching of religion education today. Second, we will raise about what is a
learning environment, characteristics and its importance in the classroom. Ans finally, a proposal
will be made in order to address how the learning environment of REE in the classroom should
be. In this way, you can open a path for a change; a transformation in the pedagogical practice,
but it can also become significant in the educational context.

Key words: Education, learning, environment, pedagogical.

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Introducción

Pensar en la situación actual de la Educación Religiosa Escolar ERE, sería como hilar una
serie de ideas, palabras y circunstancias relacionadas con la realidad del área que más que un
hermoso tapete, daría como resultado un preocupante y desconsolador panorama, que no se puede
seguir ignorando; para las escuelas públicas y hasta para muchas instituciones privadas la religión
es “la Cenicienta” del cuento de hadas, la rechazada, ahora subvalorada, porque muchos se
dejaron contaminar por nuevas ideologías, pensamientos que van destruyendo lentamente y van
dejando a su paso un vacío enorme en el corazón del ser humano. Una cosa es que el gobierno y
aquellos que tienen poder pretendan una igualdad de derechos entre todos los credos religiosos,
pero otra muy diferente, perder de vista que la escuela tiene como misión “formar las
dimensiones esenciales del ser humano, los rasgos del carácter, los valores, las actitudes
individuales y colectivas” (Coy, 2009, p. 52-53). Es aquí donde juega un papel importante el área
de religión, porque ella ayuda a ese proceso integral de la persona humana, es una de las
dimensiones más importantes, es la que permite, si se orienta adecuadamente, a darle sentido a la
vida.

En la afanosa búsqueda por el “desarrollo”, se ha llegado a descontextualizar el país,

copiando modelos pedagógicos extranjeros que no responden en nada a las necesidades y
situaciones reales de los colombianos; en el fallido intento de favorecer la libertad de conciencia,
se le ha impuesto a los ciudadanos de este país a olvidarse de Dios, de sus creencias, del otro, de
sí mismos. No es gratuito que cada día vaya en aumento el sinsentido de la vida, la intolerancia,
el irrespeto por el otro, puesto que el gran OTRO en el que se soportaba la existencia, se ha
desfigurado de las conciencias de los seres humanos, cada vez menos humanos.

Como consecuencia de todo esto, se constata que el área de ERE no ha tenido el puesto
que se merece en las instituciones educativas. Valdría la pena preguntarnos ¿Si se trata de
desarrollar y fortalecer las dimensiones del ser humano, por qué la ERE es tan poco valorada en
las escuelas públicas de nuestro país? ¿Por qué en las políticas educativas de Colombia no hay un
respaldo mayor al área? ¿Por qué los directivos docentes no le apuestan a la formación religiosa y
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espiritual de la misma manera que a las áreas mal llamadas “fundamentales”? ¿Por qué no
siempre hay un docente de religión idóneo para el área de ERE? ¿Por qué los estudiantes y padres
de Familia creen que la ERE es de menor categoría que otras áreas del conocimiento? ¿Cuál
debería ser el ambiente de aprendizaje de la ERE, para que sea significativa?

Situación de la ERE hoy desde diferentes estamentos

Muchos de los docentes de Religión nos encontramos con una serie de dificultades o
problemas en relación con el área, aunque sabemos que realizar un diagnóstico en este aspecto
sería una tarea de grandes dimensiones, pero estas podrían ser algunas.

Nuestro Mundo

Ha sufrido grandes transformaciones, cambios inesperados, nuevos pensamientos, un

nuevo modo ver y darle sentido a la vida. El intercambio cultural, las múltiples formas de poder,
de violencia; las continuas transformaciones basadas en otros modelos extranjeros, van
desplazando la religión. Además del fenómeno de globalización que manifiesta Coy:

La globalización, en el último siglo, ha desdibujado los límites de la relación

social interpersonal en la organización humana. Existe una comunicación global,
la población emigra de un lugar a otro y las culturas se mezclan, lo cual incide en
la transmisión y vivencia de los valores, tanto morales como religiosos, borrando
en cierta forma, las fronteras entre las naciones y las doctrinas, razón por la cual,
en las ciudades, pueblos y países se manifiesta una mayor diversidad cultural y
religiosa, lo que implica un cambio de actitud por parte de las personas y los
colectivos. (2009, p. 56).
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El Estado

Ante las nuevas reestructuraciones, la modernización, el intercambio cultural, entre otros,

el Estado, partícipe de estos grandes cambios, reconoce la diversidad de religiones y cultos
existentes en nuestro país, construye instrumentos legales para mantener la equidad y la buena
relación entre todos, dejando a un lado la identidad que se tenía como pueblo colombiano. El área
por tanto pierde cierto status, aunque siga figurando como área fundamental y obligatoria en las
instituciones, se observa el sentir de muchos de eliminarla del plan de estudios. Así mismo deja a
libre albedrío a las Instituciones Educativas para que Directivas y docentes dispongan de la
intensidad horaria, quién la dicta (que puede ser cualquiera), qué contenidos debe impartir, entre
otros aspectos que llevan a perderle el verdadero significado del área en el desarrollo humano de
la persona. Un Estado que quiere una educación de calidad basada en competencias que distan de
una realidad concreta de cada país, ciudad, región o lugar, pues al realizar las pruebas, se dan
cuenta que los niños, los adolescentes, los jóvenes y demás nos estamos rajando, el aprendizaje
que se aspira no tener no cumple con las expectativas y por tanto se esfuerzan en invertir esfuerzo
y dinero en buscar donde está la falla, y siguen buscando afuera lo que deben imponer en cada
lugar para lograr una educación con excelencia, es por eso que lo científico, lo racional lo
verificable, las pruebas, la matemática, el lenguaje son primordiales lo demás es un relleno; se
ofrecen capacitaciones, diplomados, maestrías, presupuesto, materiales y mucho más a estas áreas
que conducen hacia el camino del éxito académico; pero para las demás y en especial a religión
en casi nula la ayuda, el acompañamiento, aquí, cada docente que busque como pueda, eso sí
priorice en las pruebas dedique tiempo de su clase para ello.

La Iglesia

Comprometida con la formación humana del ser humano, está siempre dispuesta hacer los
cambios requeridos para que el área tenga la importancia que debe tener; por eso a través de la
Conferencia Episcopal para la Evangelización de la cultura y la Educación entrega unos
lineamientos y estándares que muestran lo necesario, valiosa e importante que es esta para la
formación integral de los niños, adolescentes y jóvenes. Pero también se siente una ausencia en el
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acompañamiento asertivo y continuo a los docentes de las instituciones públicas que imparten
esta área.

Las Instituciones Educativas

En muchas no se cuenta con el apoyo del Rector(a) o Coordinadores, somos como una
piedra en el zapato; el área de religión se convierte en un comodín, con ella se puede completar la
carga académica de cualquier docente, tenga o no idoneidad para transmitirla. Su intensidad
horaria es mínima. No se cuenta con el material didáctico, bibliográfico adecuado, se debe
invertir en proyectos y cosas que “valgan la pena” o se ajusten a lo que el gobierno quiere y
necesite, por ejemplo, las pruebas externas, porque con ello evalúan a la Institución y obviamente
al docente si no se alcanza la meta señalada por el gran Ministerio de Educación Nacional
(MEN).

Por otro lado, en ocasiones se le advierte al docente que no debe impartir absolutamente
nada de Educación Católica puesto que es una institución laica y se debe respetar la libertad de
culto; así que muchos docentes se convierten en sólo transmisores de teoría, aprovechan para
realizar direcciones de grupo, juegos o temas que no tienen relación con el área o simplemente se
desconectan de un plan estructurado y organizado.

El Docente de Religión

Como lo reconocen la mayoría, algunos se han convertido en facilistas, quienes dejan al

estudiante realizar cualquier otra actividad (lo importante es que estén disciplinados y callados);
otros como “dictadores”, es decir, instructores y comunicadores de un conocimiento teórico;
otros que imponen sus ideas de una manera doctrinal, radical y fundamentalista, sin tener en
cuenta la realidad del joven y del mundo que lo rodea. Profesores que han perdido su esencia de
ser maestro, su razón de ser, alguien que se ha acomodado a las circunstancias del devenir
histórico, del vaivén de la vida, no quiere esforzarse, ya esta área no tiene tanto sentido, le pierdo
la pasión, no importa las razones de tipo antropológico, su finalidad, su importancia para el
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desarrollo integral de la persona, somos libres de profesar la religión, el culto, el sistema de

creencia que tengamos, aprovechemos el espacio para formar en lo que les gusta a los niños,
niñas, adolescentes y jóvenes, tal vez juegos, hablar de valores o de las relaciones sexuales, de las
drogas, la guerrilla o el tema que esté en ese momento de moda. El área se presta para todo, para
desarrollar los temas que no se alcanzan a desarrollar en los distintos proyectos obligatorios o los
de ética o cualquier otro, no importa si tiene coherencia o no, la cuestión es hablar de algo que
domine mejor o me gusta más. No importan entonces si tiene un horizonte definido o si responde
a la edad de los chicos(as).

Docentes con una actitud de irrespeto y falta de diálogo interreligioso, que no sabe situarse
ante la diversidad de sistemas de creencias, no distingue la doctrina ni los principios propios de la
Iglesia Católica ni las propuestas de otros grupos religioso. En muchos falta preparación en una
puesta pedagógica, didáctica y utilización adecuada de recursos educativos que le permitan
enseñar los contenidos del área de una forma más dinámica, que cautive a los estudiantes, pero
que además se adecúe al nivel de desarrollo que se encuentren.

Pero también se encuentra docentes que les duele el área, que se han formado en ella, que
saben y están conscientes de lo importante que es, le dedican tiempo, estudios para transmitirla de
la mejor manera posible; pero se sienten como en una isla, solos y abandonados, hay un vacío en
su interior, tratan de que no se apague esa luz que se llevan dentro, para no llegar a ser un simple
profesor, uno más del montón, arrinconado, transmisor de pequeños contenidos catequéticos,
parroquiales, de religiosidad popular, alejándose de su verdadera misión como maestro de ERE.

Estudiantes

Algunos dicen abiertamente que les da pereza la clase, otros que el área de religión no
debería existir, puesto que en las pruebas que realiza el estado no sale nada en relación con ella,
por tanto, no debe ser evaluada.

Otros no le encuentran sentido y hacen lo mínimo de lo mínimo al menos para no perder

el área. Se nota desmotivación cuando se les pide leer un documento, piensan que no se debe
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exigir, que debería ser fácil y que nadie la debe perder, no es necesario los contenidos, es mejor
los juegos. Hay estudiantes con serias dificultades familiares que los han llevado al consumo de
sustancias alucinógenas, a intentos de suicidio, entre otras, no encuentran la relación entre la vida
y el área ¿esto para qué? ¿En qué me ayuda?

Otros rechazan el mundo de lo religioso, la fe, Dios sólo es un invento del hombre. Otros
por supuesto quieren saber más de Dios, de la Biblia, de los profetas, le deberían dar más tiempo
al área. Hay diversidad de cultos entre ellos, protestantes, evangélicos, testigos de Jehová,
cristianos, también hay católicos y por supuesto el ateo.

Expresan que en el área se debe hablar de las otras religiones, de sus dioses, pensamientos,
doctrinas, que no es sólo desde lo católico o rezar o actos religiosos que no tienen sentido para
ellos.

También hay quienes dicen que el área es importante ya que les permite reflexionar sobre
su propio proyecto de vida, a tener esperanza y fe en ellos mismos.

Padres de familia

Han delegado su responsabilidad a la escuela de educar y ser formadora de sus hijos,

muchos quieren que se les enseñe las oraciones, pasajes de la Biblia, pero al mismo tiempo que
sea de su propia religión; comparten la misma idea de muchos de que por religión nadie puede
perder, no es un área importante, no deberían impartirla en la escuela, que vayan a la parroquia.
Varios de los padres de familia como lo estudiantes no saben de qué religión son, pues en un
mismo hogar hay discrepancias (ateo, cristiano, católico). Son pocos los que apoyan el área y
tienen claridad de porqué es importante en el desarrollo integral de sus hijos(as).

Además de todo esto se sabe que el ambiente cultural en que se está inmerso condiciona y
dificulta el proceso de enseñanza-aprendizaje, donde la variedad de sistemas de creencias, cultos,
sectas, diversidad de pensamientos, entre otros, transmiten diversidad de conceptos y vivencias
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE). 9

de la fe que aparentemente pueden ser más atractivos los unos de los otros; se está en medio de
contradicciones que dificultad la tarea del maestro de ERE.

Ambientes de Aprendizaje

El término ambientes de aprendizaje tiene un rango de acción muy amplio, son múltiples
las miradas que existen sobre este concepto, en muchos casos reflejan una mirada de lo que hay
físicamente dentro y fuera de la institución, de las personas que interactúan, de todo lo que se
puede aprender, de las actitudes y comportamientos en diferentes escenarios y situaciones, de la
forma en que se enseña, lo que acontece dentro del aula, el cómo se evalúa, entre otros aspectos.
Aquí no se quiere ni limitar ni agotar el concepto como tal, es más bien retomar algunas
definiciones y elementos que posibilita un acercamiento a la propuesta de un ambiente de
aprendizaje propicio para el área de ERE.

La palabra ambiente surge del latín “ambientis” que procede del verbo “ambere” y
significa «rodear», también se conoce como el entorno, la atmosfera o el aire que respiran los
seres vivos y en el cual terminan por ser transformados. A continuación, se hará referencia al
ambiente educativo aquel donde confluye el proceso de enseñanza-aprendizaje. En el portal de
Colombia aprende dice al respecto que es:

Un espacio en el que los estudiantes interactúan, bajo condiciones y circunstancias

físicas, humanas, sociales y culturales propicias, para generar experiencias de
aprendizaje significativo y con sentido. Dichas experiencias son el resultado de
actividades y dinámicas propuestas, acompañadas y orientadas por un docente.
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, s.f., párr. 2)

También se puede rescatar algunos elementos como el trabajo colaborativo, la

construcción y producción de saberes desde los mismos estudiantes, la responsabilidad que tiene
cada uno en su propio proceso de aprendizaje, la interacción con otros estudiantes.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Duarte nos dice que un ambiente educativo no es sólo la parte física, sino que también hay
que tener en cuenta una serie de elementos como son la ubicación, organización, los
comportamientos que establecen en X o Y lugar, cómo los sujetos interactúan con esos objetos,
las relaciones que se establecen los unos con los otros, el papel que adoptan, y las diversas
actividades que se desarrollen (2003, p.102); además expresa que estos ambientes deben ser
diversos, lúdicos y teniendo en cuenta lo virtual, ya que traen nuevas formas de aprender.

Y por último se quiere abordar también la siguiente definición

Son ámbitos escolares de desarrollo humano; por esto, potencian el desarrollo en

los tres aspectos: socio afectivo, cognitivo y físico-creativo. Además, este
desarrollo ocurre a partir de unas experiencias que han sido determinadas por una
intención formativa, lo que significa que no han ocurrido de manera casual
siguiendo las circunstancias, sino que apuntan a los propósitos de maestros que
buscan el desarrollo deseable del sujeto. Los ambientes de aprendizaje, entonces,
ocurren siempre en el marco escolar y buscan brindar a los estudiantes las
herramientas para que logren fortalecer habilidades para el aprendizaje autónomo
(Guardia, s.f., p. 25).

Al relacionar estas definiciones se puede constatar que generar un ambiente de aprendizaje

no es tan sencillo, requiere de una planeación y creatividad por parte del docente, generar un
espacio donde los estudiantes logren aprender, pero que al mismo tiempo sea significativo, que lo
ayude a crecer, que lo que aprendió no se le olvide y por supuesto que le sea útil para su vida,
pero además requiere dinamismo, cambios necesarios según las necesidades de cada grupo.

Los ambientes de aprendizaje no pueden ser estáticos, ni pretender que sean homogénicos,
ya que hoy más que nunca todo está en un movimiento continuo y acelerado, por tanto deben
estar en constantes cambio, para ello se requiere de los aportes de los estudiantes, los docentes
integrantes y responsables del área para que juntos generar un amplio abanico de posibilidades y
alternativas donde surja algo nuevo, no es cambiar por cambiar, pues lo que sirve para uno no
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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necesariamente es aplicable al otro, pero es más fácil cuando tengo la posibilidad de escoger lo
que más le conviene a un grupo determinado.

Un ambiente de aprendizaje debe responder a interrogantes como: ¿Qué contenido se debe

enseñar? ¿Qué clase de estudiantes se tiene en el aula? ¿Cómo aprenden, qué les gusta? ¿Qué
recursos se tiene? ¿Qué y cómo evaluar?, entre otros aspectos que posibiliten el proceso de
enseñanza-aprendizaje.

Generar un ambiente de aprendizaje debe estar en conexión con el contexto en donde se

encuentra, el Proyecto Educativo Institucional (PEI), el nivel y el grupo, los recursos y
materiales, es aprovechar todo lo que se tiene a la mano de una manera articulada.

Un buen ambiente puede generar experiencias de mayor significación, más saludables,

activan la apertura al conocimiento, más sensibles a la interacción con el otro, lo que aprende no
se olvida, se aplica y se transforma.

Ambientes de aprendizaje para la ERE

Al tratar de dar una respuesta a la pregunta ¿cuál debe ser el ambiente de aprendizaje de la
ERE, para que sea significativa?, he buscado respuestas en muchas partes desde videos,
documentos, seminarios dictados por los docentes de la especialización, diagnósticos realizados a
estudiantes, tratando de encontrar la respuesta adecuada, aquella que lleve a la significación del
área en medio de un mundo que la rechaza y no le ve sentido. Han surgido en mi mente una serie
de elementos que pueden ser distantes y alejados entre sí, pero siento que están todos conectados
como un gran engranaje donde cada pieza se une con otra y otra generando una conexión, un
movimiento que armoniza y puede generar cambios en este proceso de enseñanza-aprendizaje.

En este aparte se hará referencia a algunas de las piezas, obviamente puede haber muchas
más que ayudan a crear un ambiente adecuado
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Figura 1. Elementos que intervienen en un ambiente de aprendizaje.

Fuente: https://goo.gl/1JydEF. Modificada y creada por Diana F.V.

El Estado

Una de las piezas con las que se quiere comenzar, ya que en el panel: Cómo comprometer
a la ciudadanía con la educación, los diferentes autores muestran su preocupación por la calidad
de la Educación en Colombia basada en algunas de las tendencias educativas actuales, los
constantes esfuerzos que hace el gobierno para que se alcance los estándares más altos a nivel
nacional e internacional, por medio de programas que se han convertido en pilares fundamentales
como Todos a Aprender; además de los convenios que han adquirido con otros países para tal fin
y con la firme convicción de que toda la sociedad y los actores del proceso enseñanza-aprendizaje
se deben comprometer con la Educación, sólo así se podrá transformar la sociedad (Semana,
2014).

La ministra de Educación María Fernanda Campo en el video de Semana (2014) señala

dos de las tendencias educativas como soy la Calidad Educativa y la Educación basada en
competencias, habla de una atención integral desde la infancia, pero se piensa que es necesario
apuntar a la formación de todas las dimensiones de la persona, en especial la dimensión religiosa,
la cual está siendo relegada, a sabiendas de que está arraigada en su propio ser, no sólo
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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matemáticas, lenguaje o ciencias y ¿será que se sigue haciendo énfasis a la educación de la época
antigua o medieval? ¿Qué tanto se ha avanzado en este aspecto? ¿A caso los resultados obtenidos
en épocas anteriores no son suficientes, para que el hombre discierna en su actuar y saber?
¿Cuáles son realmente las áreas que llevan al hombre a un desarrollo integral y a un progreso que
lo dignifique?, porque muy bien lo expresa el Papa Juan Pablo II (2001) en su encíclica Solicitud
Social cuando dice que “un desarrollo que no abarque la dimensión cultural, trascendente y
religiosa del hombre y de la sociedad”, sólo lo llevará a la esclavitud (p. 73).

Es verdad que estas áreas son esenciales en la vida del hombre, ellas aportan al desarrollo
del pensamiento y al crecimiento de la sociedad productiva sí así se quiere, pero no se puede
dejar a un lado aquellas áreas que aportan no sólo un conocimiento sino también la posibilidad de
pensarnos como seres humanos, es fundamental humanizar el currículo, que el niño, adolescente,
el joven tenga un gran abanico de posibilidades para su crecimiento intelectual y formativo, todas
son fundamentales e importantes ya que todos no somos buenos para todo, la escuela no debe ser
una empresa y los estudiantes no son un producto.

Si bien es cierto que logrando mejorar la comprensión lectora y el pensamiento lógico

matemático los estudiantes avanzan, el Estado no puede olvidar que hay que educar para la vida,
y como lo expresa el Rector del Colegio Gimnasio Moderno, Víctor Alberto Gómez es
importante formar en la autoestima, en las relaciones sociales, en los valores, en:

Formar hombres de bien, ciudadanos respetuosos del país, de la diversidad, de la

diferencia. Desde el aula podemos hacer mejores ciudadanos incorporando a
nuestros planes de estudio, currículo aquello que es esencial para una vida
democrática (Semana, 2014, min. 34’50”)

Desde la ERE se pueden desarrollar habilidades como la argumentación, la reflexión,

colocar al estudiante frente a situaciones problema que los ayude a pensar y sacar sus propias
conclusiones. El área también ayuda al desarrollo de actitudes y valores que orientan al ser
humano hacia el bien personal y social, hacia el respeto por los derechos humanos, a la
construcción de la paz y sobre todo a encontrar el sentido de su vida y valorarla al máximo. La
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ERE es un gran aporte a la formación humana y espiritual del ser, no debe ser excluida del
currículo como muchos pretenden o una minucia dentro de la institución educativa.

Por tanto, esta pieza debe pensar en redimensionar los ambientes educativos en las
escuelas, modificando quizá en muchas sus espacios físicos, mejorarlos, adecuarlos a las
necesidades de la época en que se vive, facilitar recursos y materiales adecuados para docentes y
estudiantes, que los proyectos nazcan de las necesidades de cada institución y no aquellos que
son impuestas por políticas ajenas a su realidad.

Y así mismo a través de las Secretarías de Educación se debe brindar capacitaciones

adecuadas a los docentes encargados del área, por medio de instituciones especialista en este
campo, no se puede ser totalmente competente ni crear ambientes de aprendizaje significativos
sino se tiene un adecuado conocimiento, quien da matemáticas es porque lo adquirió, lo sabe, no
se pone a cualquier docente, si es lenguaje también se busca la persona idónea, entonces ¿por qué
para el área de religión se pone a cualquiera? Nadie da de lo que tiene. Y se quiere una educación
por competencias se debe tener docentes competentes para cada saber. ¿Por qué entonces sólo se
ofrece auxilios educativos para estudios superiores a las áreas de humanidades o matemáticas por
ejemplo?

La Institución Educativa

Como otra pieza importante en este engranaje, deben compartir el mismo ideal de
formación integral de la persona humana, no es sólo científico, los procesos de lecto-escritura, la
lógica matemática que requieren los estudiantes, es necesaria la formación humana, el desarrollo
de aprendizajes relacionados con sus realidades, intereses y necesidades, que los ayude a
enfrentar la vida de la mejor manera posible. En cualquier tipo de hombre que se esté formando
no debe quedar a un lado su ser religioso, personas que puedan conectarse con el Otro, con la
vida, que no sobrevivan, que acepten el reto de vivir, por ello la institución no puede discriminar
o darle menor importancia al área, ella también necesita atención, acompañamiento, requiere de
espacios y tiempos adecuados.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Debe adecuar también los espacios físicos, que las aulas tengan el número de estudiantes
pertinentes, es decir, sin saturaciones, sobrecupo, la calidad también comienza desde aquí, pues
no es cantidad. Unas aulas bien iluminadas, con buena ventilación, con paredes limpias y no
desgastadas por la humedad, escritorios adecuados, pisos limpios libres de grietas u orificios
mugrientos, el orden y la limpieza dicen mucho de la persona o institución, la imagen es
importante por eso un espacio agradable a los sentidos suscita en el interior de la persona
sensaciones como que lindo lugar, que rico trabajar aquí, que bueno es estar aquí. Crear espacios
que agraden y provoquen.

La institución educativa en esa misión de formar integralmente a la persona debe brindar

los recursos y materiales necesarios para generar experiencias de aprendizaje significativo. En
ocasiones los docentes del área de religión son los que menos tienen, ni textos, ni implementos
para el desarrollo de sus clases, el presupuesto o rubro se da a las áreas como matemáticas,
ciencias, español, porque son las importantes, las que llevarán alcanzar las metas que el mismo
estado impone a través de las pruebas externas a nivel regional, nacional e internacional; también
se le apuesta hoy al bilingüismo ¿y qué tanto se está invirtiendo en este proyecto? Insisto en que
todas las áreas son importantes si se quiere formar a la persona, por tanto, también requiere de
materiales adecuados para su enseñanza-aprendizaje.

Es de recordar que en muchos colegios se le quitó horas porque el rector(a), el consejo

académico o directivo no le ve la importancia a esta área, una hora no es suficiente y más aún
cuando se programan actividades que impiden su realización, porque se considera tan poco que
sale a relucir expresiones como “que se pierda la de religión pero no la de educación física o la de
matemáticas” y los estudiantes terminan diciendo lo mismo aunque con una variante si les gusta
o no el área, si quieren o no recibir la clase, porque depende del docente que esté a cargo.

Los estudiantes

Centro de todo proceso enseñanza-aprendizaje, llenos de expectativas, sueños, otros

ávidos de conocimiento, queriendo salir adelante y forjar un mejor futuro. Esta pieza tan
fundamental para que todo funcione como se quiere, se desea que los estudiantes sean creyentes y
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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si son de otro credo religioso que sean tolerantes, estudiantes comprometidos, responsables,
participativos, amistosos, comprensivos, amigables, respetuosos con sus compañeros y docentes,
ordenados, que mantengan limpia el aula, cuidadosos con el material y recursos de la institución,
que mantengan el silencio y buen tono de voz, que sepan trabajar en equipo, que no discriminen a
nadie, que sepan resolver sus conflictos adecuadamente, atentos y que no den problema, ¡qué
maravilla!, con estudiantes así el ambiente de aprendizaje sería todo un éxito, dirían muchos.

Pero la realidad es muy distinta, si bien se cuenta con pocos estudiantes con esas
características, en el aula se encuentra estudiantes desilusionados de la vida, marcados
negativamente desde su hogar, sin ganas de vivir, buscando la oportunidad de morir, llenos de
miedos y conflictos, con grandes vacíos y dificultades de aprendizaje, estudiantes que algunos
llaman “problemáticos” e “insoportables” y “hay que salir de ellos” porque perturban el normal
desarrollo de las clases, que hacen del aula a veces un campo de batalla, donde quien tenga más
poder y dominio “gana”.

Es a partir de esta realidad que el docente debe partir, conocer y hacer girar
adecuadamente esta pieza, para que en el aula surja la oportunidad de aprender a relacionarse y a
interactuar con el otro, de reconocer que es un ser social y que es con el otro que va caminando
hacia un futuro mejor, pues no estamos solos en este mundo. En el aula y desde el área, el
docente debe facilitar al estudiante ese encuentro con la propia vida, donde cada uno le dará una
mayor significación, que más que conocimiento sea constructor de su propio proyecto de vida.
Que puedan descubrir que a pesar de todo el amor y la misericordia existen y con ellas dos se
puede lograr todo si se tiene fe.

El maestro

Una de las piezas más importantes de este engranaje. Un docente idóneo, que conoce su
saber, que está en constante actualización, que investiga, que siente que ser maestro de ERE es un
llamado especial y que por tanto cumple una misión importante dentro de la sociedad, hacer que
sus estudiantes construyan un mundo más solidario y justo, donde todos valen por lo que son. Un
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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maestro que desde adentro se deja transformar por ese gran maestro que es Jesús, quien con sus
palabras y acciones hace todo realidad.

Del perfil del docente se ha hablado mucho, hay videos, libros, películas, revistas,
conferencias, seminarios, imágenes en la red que nos dicen cómo debería ser el docente, así que
no es del todo nuevo lo que aquí se expresa, pero es bueno recordar algunos tics, elementos que
se debe tener en cuenta por el sólo hecho de ser maestros y algunos propios para el área de ERE.

Se realizó dentro de la institución de la cuál hago parte como docente de esta área una
serie de encuestas a nivel virtual y escrita, además de diálogos sostenidos con los estudiantes de
bachillerato, para saber que dicen acerca de ¿cómo debía ser el docente del área de ERE?, ante lo
cual muchos de ellos decían que debía ser un maestro que se comunique con sus estudiantes con
respeto, que su autoridad no sea autoritarismo; abierto al diálogo, creativo, entusiasta, que lo que
enseña se entienda, sea sencillo y claro. Un maestro paciente, pero “que no se la deje montar”,
que les exija pero que les de oportunidades para ganar, amigable y comprensivo, dinámico,
divertido, que se relacione bien con los estudiantes, que sepa explicar, responsable, tolerante,
colaborador, honesto, que sea feliz, que respete las diferencias de credo; carismático, que sepa de
todas las religiones, amable, alegre, organizado(a), entre muchas otras. Es claro también que es
un ideal y que en la mayoría de las instituciones no se cuenta con maestros así, por el contrario,
sus actitudes y comportamientos distan mucho de lo que es ser un verdadero maestro, pero
también hay quienes se acercan a este ideal (Estudiantes de bachillerato, encuesta virtual y
escrita, 2015-2016).

El maestro es quien puede generar dentro del aula un ambiente adecuado, en la medida en
que maneja las situaciones y variables que se presenten. Es quien cautiva y hacer enamorar al
estudiante, lo atrae y hace que entre en un clima donde aprender es más fácil, donde relacionarse
es posible, donde el pensamiento del otro no choca.

Un maestro que es consciente de que necesita una preparación adecuada y actualizada de

este saber, y si bien muchos lo tienen hay que saberlo trasmitir, puede ser un doctor, pero si no
sabe llegarles ni cautivarlos, se pierde toda oportunidad de aprendizaje, es como letra muerta.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Cuando te actualizas, el discurso se vuelve nuevo, encuentras otras propuestas para que ese
proceso de enseñanza-aprendizaje sea más oportuno y efectivo.

Un maestro que comprende que la religión más que un concepto deberá ser una
experiencia de vida, de fe, que se encuentra inmersa en el hombre, ya que lo religioso va unido a
él desde sus orígenes; por tanto, permite que dentro del aula el estudiante pueda discernir en su
dimensión religiosa desde la libertad, el diálogo ecuménico e interreligioso.

Es importante crear un nivel de convivencia y respeto para que el ambiente sea agradable
y de confianza, esto requiere eliminar de nosotros todo lenguaje sarcástico, humillante,
excluyente, no es eliminar las reglas, por el contrario, es saber jugar con ellas, disciplina con
amor se diría, de manera que se disfrute más, esto nos lleva a ser asertivos y proactivos.

Debe ser capaz de motivar hasta aquel que no quiere recibir clase, sin obligar, sancionar o
imponer, se gana la voluntad del estudiante, porque lo ha encantado, lo ha enamorado del área,
esto suena como cuento de hadas, pero puede ser muy real o acaso ¿a qué maestro se recuerda
con mucho amor?, la cuestión es no perder el amor y la pasión por lo que se hace, a pesar de que
muchas veces te pierdas en la desilusión, recuerda cuando iniciaste, por qué y para qué estás ahí.
Un maestro que aprovecha su experiencia para hacer nuevas todas las cosas.

Un maestro que sigue las orientaciones dadas por el Ministerio de Educación y en nuestro
caso por la Conferencia Episcopal en cuanto a los estándares y lineamientos para el área de
religión, pero con la posibilidad de adecuarlos a la institución, de darle la posibilidad a los
estudiantes de formar parte de esa planeación por medio de pruebas diagnósticas donde se
observe las necesidades e intereses que ellos tienen y partir de todo esto elaborar un plan de área
abierto y flexible, sin olvidar que debe hacerse una continua revisión de todos los procesos,
evaluar que está funcionando y qué no, que se puede cambiar y cuáles son esas fortalezas que
hacen del área una experiencia significativa.

Un maestro capaz de alejar de su lenguaje la frase “voy a dictar clase” porque sería un
fracaso, no se trasmite un saber nada más, es necesario generar espacios donde lo aprendido
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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toque las fibras de los chicos(as), que los haga vibrar, cuestionar, criticar para mejorar y
enriquecer, es SER, saber y hacer en el contexto donde se esté.

Se debe ser activo, cambiar de mentalidad cuando esta no permite el acercamiento, aunque
cuesta trabajo hacerlo cuando hay grupos “difíciles de motivar”, pareciera que todo está perdido,
pero hay que buscarle el lado y posibilitar el diálogo, el crecimiento de los unos y los otros;
además para que esto suceda hay que liberarse de pensamientos que destruyen y alejan de la
misión de ser maestros. Es un despertar, un salir de la zona de confort, es dejar el miedo y abrirse
a nuevas posibilidades, tener una mente abierta y para muchos es dejarse guiar por el Espíritu de
Dios de tal manera que actúe como tiene que actuar, porque si Él nos guía nos conduce a la vida y
a la paz (cfr. Rm 8,6).

Otro elemento a tener en cuenta es la relacionada con la apariencia, hacer un cambio de

“look”, ¡claro que sí!, porque la imagen y la postura del docente ante sus estudiantes y cualquier
miembro de la comunidad educativa cuenta mucho, y no es cuestión de dinero y no por ser
docente del sector público se tiene que vestir de cualquier modo, tampoco es estar al “último grito
de la moda”, es verse organizado, limpio, con cierta elegancia y de acuerdo al momento o la
ocasión, el maestro es una “figura pública”, un ejemplo a seguir, el status de un colegio también
se ve reflejado en sus docentes; pero además de la apariencia hay que hacer otro salto: renovarse
desde lo más profundo de su ser, es recobrar la esperanza de que algún día todo pueda cambiar o
al menos mejorar, los grandes líderes han luchado contra toda corriente, así lo hizo Jesús, la
Madre Teresa de Calcuta, Gandhi y muchos más, tuvieron fe y confianza, aunque en muchas
ocasiones el panorama fuera oscuro y tenebroso, siguieron perseverando y no desfallecieron a
pesar del abandono o la traición de muchos. No es fácil ser maestro de esta área, es desgastante,
es impredecible, es un desafío total, pero que sólo se hace por amor y vocación.

Conclusiones

Si bien el área quedó abandonada por la cantidad de cambios que el mundo ha tenido por
grandes fenómenos como la globalización, surgimiento de nuevas ideologías donde muchos
quieren hacer pensar que la concepción religiosa está ligada únicamente a la religión católica y
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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por eso quieren que saque de cualquier lugar las imágenes que la representan, las celebraciones
que por siglos han constituido la misma cultura, con el pretexto de ser “laico”, término que en
muchas ocasiones se acomoda al pensamiento o ideología de personas que van en contra de lo
católico, ya que si se le da entrada a cultos, credos, religiones orientales o cualquier otra
experiencia que sigue siendo espiritual o religiosa.

Al interior de las instituciones llámense estado o iglesia, también se dejaron influenciar

por estas ideologías o pensamientos o “laicismo” que da pie al rechazo de lo religioso (católico),
pero también hay muchas que siguen luchando y han mostrado a través de sus proyectos que la
ERE es importante en la formación integral de la persona, crean espacios donde los estudiantes
pueden vivenciar lo religioso respetando los demás credos. De allí que el maestro de religión es el
primero que debe ser ecuménico y facilitar el diálogo interreligioso.

El Estado y en especial las instituciones deben velar porque todos sus maestros sean
idóneos en su saber específico, todas las áreas son importantes ¿será que lo que dice la ley
general de educación es lo mismo que se da en las instituciones? ¿Se brinda formación de
excelente calidad a todos los educadores?

Vale la pena que las instituciones también se pregunten por ¿cuál es el concepto de
educación que se tiene? ¿Qué clase de hombre se quiere formar? Si bien todos construyen una
misión y visión con base en esos parámetros entre otros, ¿será que coinciden en la formación
integral de la persona? ¿A qué le apuntan realmente? ¿Se está formando personas íntegras
capaces de vivir en medio de una sociedad que cada día pierde más su humanidad?

Aunque dentro de este engranaje no se colocó a la familia no quiere decir que no sea
importante en la generación de un ambiente adecuado, por el contrario son las familias las
primeras promotoras de la experiencia espiritual y religiosa del niño, adolescente y joven, pero
deben comprender que en la institución ya no se imparte catequesis como era en épocas pasadas
donde se seguía las enseñanzas del Catecismo del padre Astete, ya que a través de la historia se
fue separando estas enseñanzas dándole un lugar específico a cada cosa. Es decir, hay prácticas
devocionales y religiosas que se aprenden en el hogar y la vida sacramental en la parroquia.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Entonces en la escuela se puede perder el área de religión como cualquier otra área
fundamental u obligatoria, pero lo más importante es que ayuda en el desarrollo integral de sus
hijos, este espacio le permite afianzar, descubrir o reconocer su vida espiritual. Las familias
deberían preguntarse ¿qué significado tiene para ellos la vida religiosa y espiritual? ¿Qué lugar
ocupa en la vida de familia? ¿Qué les trasmite a sus hijos?

Queda entonces el maestro en su aula de clase con la posibilidad de crear un ambiente

especial para la ERE, es momento de resurgir, de ser valientes, de sacar lo mejor de cada uno, y
aquellos que son licenciados en el área no deben perder la oportunidad de hacer cambios
significativos, de generar un ambiente donde los estudiantes puedan expresar sus puntos de vistas
sin ser juzgados, valorando sus aportes, que pueda dar respuesta a las preguntadas formuladas de
manera asertiva sin dejar “en visto” al estudiante. Un ambiente que provoque estudiar, que se
disfrute, donde todos generan conocimiento, el docente y el estudiante son el centro del proceso
enseñanza-aprendizaje.

Un docente con formación ecuménica, es decir, que conozca muy bien su propia religión y
los demás sistemas de creencias para que pueda diferenciarlas e identificar lo que las une y lo que
las separa, buscando la unidad y el diálogo desde la escucha, el respeto entre todos; además
facilita el diálogo interreligioso, “yo tengo razón, pero tú también”, construye puentes.

Utiliza los recursos tecnológicos que brinda el medio, diseña, estructura sus contenidos
para posibilitar nuevos aprendizajes, las TICS posibilitan la innovación, la exploración, el
encuentro entre docentes y estudiantes que comparten el interés en el mismo saber.

Un maestro que posibilita la comunicación y el trabajo en equipo con sus pares, comparte
recursos, experiencias, escucha a los otros y toma para sí lo que le ayude a dinamizar su quehacer
pedagógico, porque cuando se pone en común lo que se sabe es posible encontrar un sinnúmero
de propuestas que puedo aplicar o desechar, es cuestión de no olvidar que no se está solo, es
abrirnos y conformar comunidades de aprendizaje que lo lleven a intercambiar y a dialogar sobre
este proceso de enseñanza-aprendizaje específico en el área, es dejar el egoísmo que atrapa y no
deja avanzar.
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Hay que integrar el conocimiento, la didáctica y la vivencia, que se encarne en su historia

y pueda ser significativo, por eso la variedad en la evaluación y las estrategias metodológicas son
importantes tenerlas en cuenta no como castigo o reprensión, sino como oportunidades para ser
mejores.

El lenguaje y la forma de comunicar el mensaje debe ser el apropiado para que no se

vuelva aburridor o molesto.

Quedan sobre el tapete ¿cómo evaluar el área? ¿Qué estrategias de enseñanza-aprendizaje

debo utilizar que toquen al estudiante en su realidad misma y logre transformarla?

El maestro de la ERE debe preguntarse: ¿El área le apasiona y vibra con ella como la
primera vez?, ¿cómo la está viviendo?, ¿tiene sentido y significado en mi vida hoy? Ya que con
el tiempo se va apagando el amor, se va volviendo rutinario y sabemos que cuando la rutina entra
en la vida acaba con todo.

Por tanto, el maestro debe descubrirse en su misión, debe saber manejar sus emociones,
ser equilibrado, pero ¿será que los docentes están preparados para los cambios que se dan en la
sociedad, para las nuevas formas de entender y comprender el mundo?

Aprender a convivir es fundamental para el ser, pero vivir la vida en todo su esplendor lo,
es más. ¿Será posible conjugar el ideal con lo real? ¿De quién dependerá?
 Ambientes de aprendizaje para la Educación Religiosa Escolar (ERE).
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Referencias

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humano: Reorganización curricular por ciclos. (s.f.) Autor. Recuperado de
http://goo.gl/MQumVB
Colombia. Ministerio de Educación Nacional. Colombia Aprende la red del conocimiento.
Ambientes de aprendizaje desarrollo de competencias matemáticas: Recreando el mundo
a través de las matemáticas. (s.f.). Recuperado de http://goo.gl/6U3nf
Conferencia Episcopal de Colombia. (2012). Estándares para la Educación Religiosa Escolar,
(ERE) de la Conferencia Episcopal de Colombia: Aprobados en la XCII asamblea
plenaria del Episcopado Colombiano el 10 de febrero de 2012. Recuperado de
http://goo.gl/sO7iqR
Coy, M. (2009). Educación religiosa escolar ¿Por qué y para qué? Franciscanum: Revista de las
ciencias del espíritu, 51(152), pp. 49-70
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Pedagógicos, 29, 97-113
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Semana. (2014). Cumbre de Líderes en Educación: cómo comprometer a la ciudadanía con la
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