Professional Documents
Culture Documents
ANTONIO HELGUERA 03
EL Ciudad de México, 1965. Estudió en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado, “La Esmeralda”. Comenzó a publicar
LIBRERO en el periódico El Día y años después en La Jornada; en fechas recientes sus colaboraciones aparecen en el semanario
Proceso. De última publicación, y en coautoría con Fabrizio Mejía Madrid, ilustró Manual para votantes primerizos o expertos
DE... (hastiados o esperanzados) (Océano, 2018). + Ve la entrevista
en mascultura.mx
Foto: R. R. Fullton©
¿Cuántos libros tienes? ¿Hay algún autor o libro que te hayan cambiado la vida?
No sé. Ésta era la biblioteca de mis papás, entonces muchos de los libros son heredados. Ten- Hay varios. A uno le cambia la vida leer Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez. Tam-
go mis libros regados por todos lados. Ésa es una colección de literatura universal empastada bién me cambió, no la vida, pero sí la forma de verla, Desmond Morris con El mono desnudo.
en piel que era de mi abuelo y, en general, los que predominan son libros de arte y libros de Creo que a uno lo cambian los libros de historia; cuando los lees y los entiendes —historia mun-
historietas, caricatura, cómic, novelas. Cuántos son, no sé. dial y de México— ya no ves igual las cosas.
UTOPÍA/DISTOPÍA En esta primera colaboración del año nuestros columnistas analizan ambos
polos, porque aunque nos concentremos en el mejor camino, nunca hay que
Director de marketing
Félix Gil Baizán
18 dejar de lado las calamidades que lo bordean. Karen Chacek nos acerca a la felix@revistaleemas.mx
edición ilustrada de El libro de la selva, cuya lectura estimula la creatividad e
FIEBRE FERRANTE invita a la reflexión. Raquel Castro parte de los problemas planteados en No Promoción y difusión
Fabián Vásquez Escalante
es normal para hablar de la violencia que subyuga a nuestro país. Bernardo
Dra. Lee Fernández, Bef, regresa con dos novelas gráficas que también se ubican en fabian@revistaleemas.mx
22 una parte del espectro utopía y distopía. Ricardo Sánchez Riancho declara
en su recomendación mensual: “La poesía no sólo está en los versos, sino Editora literaria
en la buena literatura”. Y, para finalizar, año nuevo, columna nueva: Dra. Lee América Gutiérrez Espinosa
LA BRÚJULA QUE será la encargada de recetarnos las lecturas adecuadas en “Doctora Libros”.
APUNTA HACIA ORIENTE Alberto Chimal reflexiona en torno a los conceptos que nos ocupan en este
Redacción
Angélica Fajardo Cortés
R. de la Lanza número y hace un rastreo en la literatura que los aborda. D. Arce García traza
24 una breve genealogía del término utopía y de algunos de sus exponentes. R. Corrección de estilo
de la Lanza nos comparte una breve reseña de Brújula, novela de Mathias Isaura Leonardo
ENTREVISTA Miguel Bonasso 10 Énard. Por otro lado, el monero Antonio Helguera nos abrió las puertas de
RECONOCER su biblioteca personal, custodiada por dos perritas que lo acompañaron. La Editor audiovisual
LA VIOLENCIA ilustradora Vyara Boyadjieva colabora de nuevo desde Bulgaria con “Slippery Edwin Reyes Maya
Jóvenes /Raquel Castro 16 ARTÍCULO Alberto Chimal places”, mientras que Alets Klamroth diseña la infografía central con algunos
Editor web y redes sociales
—porque hay muchos más— de los principales exponentes del pensamiento
24 utópico y distópico.
Víctor García
Aunque este número esté poblado de distopías, no se pierden de vista la es- Consejo editorial
SLIPPERY PLACES peranza y la imaginación que deben imperar para construir un mejor lugar. Alberto Achar
Vyara Boyadjieva Jorge Lebedev
26
¡Anúnciate con nosotros!
NEO-TOKIO 2019 Tiraje mensual de
Nerd Plus /Bernardo (55) 5335 1327 / 6995 3920
Fernández, Bef contacto@revistaleemas.mx 60 mil ejemplares
28
Editor responsable: Yara Beatriz Sánchez De La Barquera Vidal, Información: (55) 5413 0397, Ventas Publicidad: (55) 5335 1327. Editado
por www.taraediciones.com Correo electrónico: contacto@revistaleemas.mx, Distribución: Librerías Gandhi, S.A. de C.V., Dirección:
POESÍA QUE NO SE Benjamín Franklin 98, Piso 1 y 3, Escandón, Delegación Miguel Hidalgo, 11800, Mexico, D.F. Número de Reserva al Título ante el Instituto
ESCRIBE EN VERSO Nacional del Derecho de Autor: 04-2009-051820092500-102. Certificado de Licitud de Título No. 14505 y Certificado de Licitud de
Contenido No. 12078 expedidos en la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Registro
Con/versando/ Ricardo Sán- Postal EN TRÁMITE. Preprensa e impresión: Multigráfica Publicitaria S.A. de C.V. en Avena núm.15 Colonia Granjas Esmeralda. Iztapalapa.
C.P. 09810, México D. F. Título incorporado en el Padrón Nacional de Medios Impresos de la Secretaría de Gobernación. Queda prohibida
chez Riancho la reproducción parcial o total, directa e indirecta, por cualquier medio o procedimiento, del contenido de la presente obra, sin contar con
30 la autorización previa, expresa y por escrito del editor, en términos de la legislación autoral y, en su caso, de los tratados internacionales
aplicables, la persona que infrinja esta disposición se hará acreedora a las sanciones correspondientes. El contenido de los artículos es
responsabilidad de los autores. Librerías Gandhi y la casa editorial se deslindan de los mensajes expresados en los espacios publicitarios cuya
responsabilidad pertenece al anunciante. Hecho en México.
AMERICAN BLOOD EncuÉntranos a nivel nacional en: FILIJ • FIL GDL • FIL Minería • FIL Zócalo • Cine Tonalá • Cineteca Nacional • GritaRa-
Joserra Ortiz dio (Universidades, preparatorias CDMX y área Metropolitana) • Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández en Bellas Artes •
30 Orquesta Sinfónica de Minería • OFUNAM •Teatro de la Ciudad Esperanza Iris • Colegio Nacional • SAE INSTITUTE • UNAM • Universi-
dad IBERO • Universidad ANÁHUAC del Norte • Instituto Mexicano Norteamericano Relaciones Culturales (Monterrey) • Casa LAMM
• Biblioteca José Vasconcelos • Foro Shakespeare • Museo Nacional de Culturas Populares • Museo Franz Mayer • Centro Cultural
España • CONARTE (Monterrey) • CENART• MUAC • Museo Jumex • Museo El ECO • MUCA Roma • Museo Universitario del Chopo •
Museo Soumaya “Loreto”• Museo Rufino Tamayo •
FICCIÓN NO FICCIÓN
JÓVENES
UNO SIEMPRECAMBIAALAMORDESU EXTRAORDINARIO TODO LO QUE FUIMOS MIL VECES HASTA SIEMPRE COSAS QUE PIENSAS CUANDO
VIDA(POR OTROAMOR OPOROTRAVIDA) R. J. Palacio Alberto Villarreal John Green TE MUERDES LAS UÑAS
Amalia Andrade Arango NUBE DE TINTA PLANETA NUBE DE TINTA Amalia Andrade Arango
PLANETA PLANETA
07
ELECTRÓNICOS ARTE
PREDICCIONES 2018
Mía Astral
PLANETA TEORÍA DE LA MÚSICA
Si 2017 era el año de transición entre los viejos paradigmas y los nuevos, el Francisco Moncada García
2018 es el año para materializar lo que has soñado. Las estructuras que ya
no sirven terminarán de caerse y verás levantarse ante ti un sistema nuevo.
EDICIONES FRAMONG
Teoría con la que toda persona puede aprender los conceptos de la música a
Con Predicciones 2018 descubre cómo poner en práctica tu visión renovada
partir de un sistema de preguntas y respuestas.
y aprende a utilizar los cambios astrológicos a tu favor.
NIÑOS
GRAVITY FALLS: DIARIO 3 CUENTOS DE BUENAS NOCHES GRAVITY FALLS. DIPPER Y MABEL: GRAVITY FALLS. GUÍA DE GRAVITY FALLS. LEJOS DE CASA
Disney PARA NIÑAS REBELDES LA MALDICIÓN DE LOS PIRATAS MISTERIO Y DIVERSIÓN Disney
PLANETA JUNIOR Elena Favilli/ Francesca Cavallo Disney Disney FCE
PLANETA PLANETA JUNIOR PLANETA JUNIOR
08
Ve la entrevista
en mascultura.mx
l deseo es un impulso primario y no algo que uno se seo no fue del todo el desarrollo de un plan concreto: “He casi proscrita y la única en la que yo podía tener un ren-
detenga a analizar o cuestionar. Nos puede llevar a estado sometido a ciertas condiciones un tanto azarosas. dimiento mejor. Yo era un mal alumno, nunca reprobé,
experimentar grandes satisfacciones o a caminos oscu- En vez de que se presenten las musas como mujeres ma- pero siempre estuve a punto de hacerlo, y me convencí
ros que hubiéramos preferido evitar. Pero, al final, el deseo ravillosas que estimulan la creación, muchas veces lo que —quizá con bastante motivo— de que yo era una perso-
es el origen de prácticamente todo, y de ahí que valga la sucede es que te habla un jefe de redacción furibundo; na inferior a las demás. Fue una educación muy tortuo-
pena pensar en él como una poderosa arma, pensar en su realmente hay mucho que agradecerle a estas personas sa y neurótica, yo tenía urticarias en los brazos, en casi
utilidad, como lo dice el título del último libro de ensayos que casi te obligan a trabajar. En ocasiones la petición todas las articulaciones, pesadillas terribles y me costó
de Juan Villoro, La utilidad del deseo (Anagrama, 2017). surge de alguien que conoce tus pasiones literarias, que mucho trabajo sobreponerme a esta pesadilla de haber
sabe que tú has estado leyendo a un autor, entonces te aprendido en una lengua extraña y con un sentido de la
“El título podría parecer uno de autoayuda, de erotismo, pide un texto. Otros son temas elegidos. Quizás si alguna disciplina tan fuerte, pero hay cosas que si no te matan
pero se refiere en este caso al deseo literario. Los hermanos vez logro juntar todos los ensayos tendrán otro tipo de te fortalecen, y la lengua alemana fue para mí una de
Grimm ampararon todos sus cuentos con este lema mara- orden, pero por ahora es como un corte de caja, un corte ellas; no solamente no me mató sino que con el tiempo
villoso: ‘Entonces cuando desear todavía era útil’; ellos se parcial de lecturas en los últimos ocho años”. se convirtió en una auténtica pasión. Entendí que la gran
referían a ese mundo de las hadas en el que podías pedir cultura alemana era un capital, aunque me costó mucho
un deseo y se te concedía, y yo creo que por extensión la Este nuevo volumen se divide en cuatro partes: “Los mo- trabajo llegar a esto, no le veía ninguna utilidad. La idea
literatura tiene que ver con ese gesto. Tú abres un libro en tivos de la escritura”, “La orilla europea”, “La orilla lati- de utilidad en cultura me parece muy importante, por eso
busca de que la felicidad sea posible, de que el placer será noamericana”, e “Infancia, lenguas extranjeras y otras el título de mi libro”. Villoro sigue al pie de un baúl del
gratificante y, si el libro funciona, sientes que el deseo tuvo enfermedades”. Todo comienza cuando Juan Villoro re- que extrae páginas en las que cuenta y analiza anécdotas
una llegada a buen término. Entonces, la escritura es una gresa al origen, a su formación y a su relación con el es- de otros textos y escritores: “El libro en general trata de
reflexión acerca de la utilidad del deseo, sobre la necesidad pañol: “Yo tuve una formación un poco rara porque estu- entender a los escritores como personajes literarios. Me
de pedir algo y por supuesto la recompensa que puede en- dié en El Colegio Alemán. Creo que esta educación sirvió gustaría pensar que mis ensayos tienen algo de ejercicios
tregar a cambio el escritor”, puntualiza Villoro. para que nada me gustara tanto como el español. Fue una narrativos; es decir, se trata de vidas muchas veces tem-
educación a contrapelo de mi propia lengua y por lo tan- pestuosas, turbulentas, que han determinado la obra de
Después de Efectos personales y De eso se trata, sus ante- to mi propia lengua se convirtió en un exiguo espacio de los escritores; también el contexto en el que se han mo-
riores libros de ensayos, la creación de La utilidad del de- libertad; era la lengua del recreo, de los amigos, la lengua vido, la influencia que tuvieron de la religión, la política,
la psicología de su tiempo. Todas estas cosas yo creo que mérito, y por eso Ricardo Piglia propuso alguna vez ha- aprende es el propio ensayista porque trata de poner en
determinan una obra, entonces he tratado de hacer estos cer el gran museo de la traducción”. blanco y negro sus pasiones sin explicárselas a sí mismo y,
retratos como un paisaje en el que se pueda entender qué al hacerlo, explicárselas a otra persona, porque los entusias-
escribieron estos autores y cuál fue su tiempo, cuál fue la El ensayo es el género literario que contiene los pasajes mos son por necesidad contagiosos y piden compañía, en-
vida que hizo posible esta escritura”. de La utilidad del deseo, un género que no es el más po- tonces quieres compartirlo con el otro. Es una manera pecu-
pular, pero que puede ser amable y accesible: “El ensayo liar de hacer que los libros circulen, que se mantengan vivos”.
Desde su temprana vida escolar, Villoro tiene una re- es para lectores no necesariamente especializados, pero Villoro añade: “El buen ensayo es un acto de generosidad.
lación muy particular con los idiomas, por lo que su que se interesan en leer no sólo libros, sino libros acerca Tratas de poner tus intuiciones al servicio de otras personas;
opinión acerca de las traducciones es muy clara: “Hay de libros. Yo pertenezco a estos lectores; a mí me interesa incluso los ensayos críticos lo son. A veces se les reprocha a
extraordinarias traducciones como la de Javier Marías mucho, cuando un autor me gusta, no solamente saber los críticos que son muy duros en sus juicios, pero se están
de Vida y opiniones del caballero Tristram Shandy, de qué es lo que escribió, sino cuáles son los autores que lo dedicando a leer a los demás y reaccionar ante ellos, y eso
Laurence Sterne; las que Sergio Pitol ha hecho de cinco formaron. Un libro de ensayos es una habitación llena de es un hecho generoso. Yo no soy un autor que hable de los
idiomas diferentes; la traducción de Salvador Elizondo libros en donde tú invitas a los desconocidos a que en- libros que no me gustan, es más difícil hablar de los que te
de El naufragio del Deutschland, de Gerard Manley Hop- tren y los conozcan. Yo me considero un intermediario gustan. Razonar tus pasiones siempre es mucho más difícil
kins; las que aquí en México hizo del alemán José María entre las obras primarias de las que estoy escribiendo, que detectar los defectos de los demás”.
Pérez Gay; las versiones que Octavio Paz hizo de idio- y un lector. Soy una especie de cartero apasionado que
mas que no necesariamente hablaba, que lee de mane- llega y no sólo entrega la carta, sino que da una expli- La utilidad del deseo obsequia una nueva mirada a lo ya
ra indirecta, pero que lo llevaron a su libro Versiones cación acerca de la carta. Eso es el ensayo. Hay mucho conocido, como quien regresa a casa después de un largo
y diversiones; las muchísimas traducciones que José también de exploración personal, porque el ensayo es un día y la encuentra más bella y reconfortante que nunca.
Emilio Pacheco hizo de los “Cuatro cuartetos”, de Eliot. autoaprendizaje. A veces nuestras reacciones son muy Es fácil acomodarse en estas páginas y tomar una boca-
Esas obras pertenecen, yo creo, a lo mejor de un es- animales, muy primarias. Nabokov decía que la reacción nada de aire fresco para recuperar aquello que siempre
critor. La traducción es un arte, una escritura tímida más genuina que podemos tener ante el hecho estético estuvo, pero de lo que casi olvidamos su existencia. Utili-
si se quiere, porque tú no llevas la voz cantante, estás es un escalofrío en el espinazo, entonces el ensayo es el cemos el deseo para iniciar una nueva historia. +
sujeto a otro autor, pero adecuar las palabras de una arte de razonar escalofríos, de tratar de explicar por qué
gran traducción a tu propio idioma requiere de mucho a ti algo te cautivó sin que supieras bien cómo. El que más Por Angélica Fajardo C.
10 Ve la entrevista
en mascultura.mx
Foto: R. R. Fullton©
odos estamos hechos de historias, de la forma en la que pasajero, se había estrellado contra el cerro de El burro, Una vez desvelado lo anterior, Bonasso se inmiscuye en la
nos narramos frente a los demás y, en gran medida, de cerca de Chilpancingo, cuando iba hacia Acapulco. Venía anécdota de la novela: “El libro arranca en Cancún. Le pon-
lo que también se cuenta de nosotros. No obstante, en de Nueva York, había hecho escalas y chocó a una veloci- go como título ‘Nido de víboras’, porque Cancún en maya
esas narraciones se entremezclan rumores, ficciones que, dad de novecientos kilómetros por hora’. Según versiones significa eso. Ahí estaba veraneando una joven argentina,
por alguna u otra razón, se incorporaron a nuestra his- bastante confiables, en la escala de Houston la cia había Soledad Goldberg, hija del banquero Aarón Goldberg, per-
toria personal. Miguel Bonasso (Buenos Aires, 1940), para cambiado los altímetros del avión, creían que estaban vo- sonaje inspirado en la historia de David Graiver; le cambio
la charla pendiente, viste ligero a pesar del frío. Su visita a lando más alto, mientras que estaban ya entre las monta- el nombre porque modifico peripecias de su vida, no es
México se debe a la presentación de su novela El hombre ñas de la Sierra Madre. El que iba a bordo era David Graiver, que sea exactamente él. Soledad es secuestrada por los
que sabía morir (Grijalbo, 2017); sentado con un café en la un aventurero financiero, un tipo de treinta y cinco años narcosatánicos, que trabajan para ‘Popeye’, un hombre
mano y entusiasmo en la mirada comienza por contar una que había logrado construir una fortuna de doscientos de la cia [...]. El objetivo que tenían era llevar a cabo la
parte de su vida que es fundamental para la génesis del libro: millones de dólares. Había hecho bancos para el Mossad Operación Greyhound contra la Cuba de Fidel Castro,
israelí, tenía uno en Tel Aviv, uno en Bruselas, dos en Nueva que consistía en introducir el narcotráfico en la isla
“Llegué a México no como exiliado, era jefe de prensa del York y otro par en Argentina: era un monstruo y, además, para desprestigiar la revolución y posteriormente
movimiento peronista Montoneros, de la guerrilla, y, por era el banquero de los Montoneros. Mi organización había invadirla. Logran infiltrarse y sumar al proyecto
obvias razones, nos perseguía la dictadura. En México esta- logrado un rescate por los hermanos de Bunge & Born de a cuatro altos oficiales del Ministerio de
ban todos los grupos guerrilleros de América Latina: los san- sesenta millones de dólares —fue el mayor rescate de la Interior cuba- no, las tropas de élite,
dinistas, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacio- historia de la guerrilla urbana mundial—. Parte de ese dine- la custodia de
nal (fmln) salvadoreño, esto era un hervidero. Yo vivía acá, ro se lo dieron los Montoneros a Graiver. Esa historia a mí Fidel Castro, y a
como militante y semiclandestino, o sea, Gobernación nos me golpeó muy fuerte porque, además, Buendía publicó Arnaldo Ochoa,
toleraba. Después eso se prolongó en un exilio porque rompí en su columna que Graiver, el banquero, no había muer- un héroe de la
con la conducción de Montoneros, rompimos entre el seten- to, que había fingido su muerte y que en realidad habían República que
ta y nueve y ochenta, porque había tenido una política muy sido dos los muertos en Chilpancingo: el piloto y el copi- iba a ser nombra-
militarista, insistía más con lo armado. Un grupo, en el que yo loto; el avión se despedazó con ese choque tan violento do Jefe del Ejército
me encontraba, se daba cuenta de que ni a la dictadura ni al y tuvieron que recoger pedacitos de personas y pedacitos Occidental de Cuba. Yo
Estado podríamos derrotarlos en términos militares”. de avión. Dice Buendía: ‘no, no murió’. Robert Morgenthau conjugo todo esto desde
era el fiscal más importante de Manhattan que investigaba la ficción, que permite sa-
Poco a poco, la información que hilvana Bonasso comienza la quiebra de los dos bancos de Graiver. Él también comen- car muchas más cosas
a darle forma a una trama que se parece a la narrada en El ta que no había muerto. Yo era muy joven y esa noticia fue que la no ficción”, y
hombre que sabía morir, no sin echar mano del asombro, como una bala de diamante en la cabeza. Pasan los años agrega: “Tuve que
el mismo que años atrás repercutió en el escritor: “Yo era y en Buenos Aires me encuentro con el cónsul mexicano, hacer verosímil lo
amigo de Manuel Buendía —un periodista que fue asesi- Miguel Ponce Edmondson, y me dice: ‘¿usted cree que Graiver que era ficción
nado en 1984—, y me decía: ‘oiga, Miguel, en el setenta y murió?’, y respondí: ‘usted fue jefe de Interpol, si no lo sabe y contar lo que
seis ocurrió un terrible accidente; un avión pequeñito con, usted estamos perdidos; yo no, yo soy el periodista’. ‘No era verdad de
teóricamente, tres personas a bordo, dos tripulantes y un murió’, me dijo, ‘se bajó en la Escala de Houston’”. una manera
que no fuera aburrida, es decir, que no fuera tradicional, un perio en pocos años, y por otro lado, es de izquierda, y veía
mero reportaje, sino que fuera novela. Por ejemplo, en este con simpatía al Che, que es una contradicción, y esa ambi-
libro, Fidel Castro no aparece como en los libros de ensayos, güedad del personaje le da una riqueza enorme”. El autor
acá habla, está como nosotros, es un Fidel de carne y hueso continúa: “La mujer real de Graiver protestó contra este
[…]. Es una historia novelesca, lo que tú necesitas es ligar libro sin haberlo leído: ‘¿quiere decir que David está vivo?
este elemento y que el lector en ningún momento diga no, ¿Cómo Bonasso, que es un periodista serio, hace esto?’ Ella
esto no lo creo, porque ahí te jodiste. Tenía que hacer vero- no entendió que es una novela, y yo le contesté a ella y a su
símil hasta lo más inverosímil”. hermano: ‘no sé por qué se enojan, porque los personajes
que se parecen a ellos resultan heroicos en el libro, mejores
Los lindes entre la realidad que alimenta a la ficción se tras- incluso que ellos en la realidad’”.
tocan. Bonasso construye un thriller en el que la intriga
política remueve las mentes —y la memoria— de quienes Miguel Bonasso toma el libro y, sosteniéndolo de frente,
inspiraron a los protagonistas: “¿En qué consiste la ficción? concluye: “Cuando hicimos la portada, este hombre que se
Yo pongo a Goldberg y a su compañera en París durante el ve está difuminado y por lo tanto ya no es puntualmente
68, donde estuvieron varios muchachos argentinos de iz- David Graiver, pero si la deformación gráfica de una foto
quierda viendo qué pasaba y viendo a ese gigantón de Julio real de él. Hubo una mutación en la que, probablemente
Cortázar recorriendo las calles y anotando prolijamente las por parte de la editorial, intervino algún temor legal de que
consignas que la gente gritaba o pintaba en las paredes. la cara real del señor Graiver apareciera aquí. Pero además
Los personajes se lo encuentran, pero eso es ficción. No habría deformado la novela, porque la intriga que se siem-
obstante, Cortázar hizo eso de verdad y también vivió en bra en el lector es este señor que aparece con la cara en
la Casa Argentina de París. Los jóvenes argentinos en el sombra fumándose un cigarrillo: ¿Es David Graiver? ¿Vive
68 toman la Casa Argentina en la Ciudad Universitaria, en David, no vive, se mató en el Cerro de El burro? Son to-
repudio de la dictadura militar, y hacen a Cortázar presi- dos estos los interrogantes que me parecen que arman la
dente. Yo rescato un discurso de él en el que dice: ‘esta curiosidad por un thriller. Cuando el libro salió en Buenos
casa se va a llamar ahora Che Guevara’, y levanta la figura Aires me llamó un periodista que tenía viejos nexos en la
del Che que acababa de ser asesinado en Bolivia un poco época de la Guerra Fría con el kgb, y me dijo: ‘ah, entonces
antes; lo recupero para marcar ese clima en el que nos pa- vos estás seguro de que Graiver vive’. ¡Que el lector lo des-
recía que todo era posible y que podíamos cambiar el mun- cubra! O que otros investigadores trabajen sobre eso”. +
do en quince minutos. Es importante señalar esto porque
muestra la ambigüedad del personaje; por un lado es un Por Rolando Ramiro Vázquez Mendoza
banquero muy eficiente, tanto como para construir un im-
12
e la utopía y distopía se habla mucho a últimas fechas, bres; en “Rikki-Tikki-Tavi”, en cambio, los hombres viven
quizá más de la cuenta. Poco sorprende que la per- agradecidos por el auxilio diario de los animales; en “Too-
sona de al lado en el Metrobús, la cafetería, la red social, mai de los elefantes”, no contaré por qué un puñado de
la fila del banco o la caja del supermercado utilice una o hombres “se miraron, y miraron arriba y abajo, y se asom-
ambas palabras en el cuerpo de alguna queja mundana, braron […]”. Baste con citar que: “las costumbres de los
en la descripción de un evento trivial o en la confesión de elefantes rebasan lo que la mente de cualquier hombre,
un anhelo pasajero. Como si en el mundo de hoy utopía y negro o blanco, es capaz de sondear”; “Los servidores de
distopía sirvieran sólo de calificativos comodines para ex- su majestad” es, quizá, el cuento menos gentil con los lec-
presar nuestro buen o mal ánimo; como si nos diéramos tores que gustamos de pensarnos a nosotros mismos en la
por satisfechos con entender cualquier cosa inexplicable piel de los personajes de un relato. La historia narra parte
como historias de encantamiento y hechicería o como de la conversación de un grupo de bestias domesticadas
un rompecabezas que no se puede resolver con el uso de para servir en batalla. Animales que poco y nada entienden
la ciencia porque se han extraviado piezas. ¿De verdad lo que es una guerra. Que se preguntan en cierto momen-
hemos perdido la curiosidad por descubrir más mundo y to ¿quién da las órdenes? El hombre, por supuesto, es la res-
preferimos nadar de muertito en el mar de lo conocido? puesta que satisface a todos menos a un mulo joven, que
insiste en preguntar: Pero ¿quién da las órdenes? A lo que el
Tan necesarias son las utopías como inevitables las dis- mulo más viejo le responde: “Sólo debes obedecer al hom-
topías, sobre todo las personales. Un mundo en el que bre que va delante sin hacer preguntas”.
todo está determinado de antemano no tiene lugar para
el descubrimiento, el movimiento, la confianza de que ¿Cómo corroborar que hemos dejado de estar en la posi-
todo tiene potencial de llegar a ser. A nuestra posibilidad ción de las bestias del relato, sin antes hacernos más de
de distinguir lo ilusorio y lo averiado, el qué y cómo nos tres muy incómodas y pertinentes preguntas en torno a
afectan los otros, la configuración del mundo, la realidad nuestra propia circunstancia? Reto grande en una era en
existente, le sigue la tarea de cuestionar y proponer; de la que en sustitución de los filósofos y los artistas, son las
sugerir una utopía. Quizá lo más hermoso de Mowgli, el empresas, las falsas celebridades y las inteligencias arti-
protagonista de los tres primeros relatos de El libro de ficiales, las encargadas de cuestionar y proponer, de re-
la selva, de Rudyard Kipling, no sea su corazón valien- cordarnos la posibilidad que tiene un ideal utópico, no de
te o su lengua cortés, sino su circunstancia: Mowgli no convertirse en una teoría científica, sino de abrir caminos
pertenece a la selva por ser un hombre, y tampoco a la a nuevas posibilidades de lo que llamamos real.
aldea de los hombres por haberse criado en la selva; se
pertenece a sí mismo. Su camino, por momentos solitario Me agrada pensar que cuando nos hacemos preguntas ama-
y desafiante, es el camino del autodescubrimiento. Vaya mos la libertad; que aspirar a convertirnos en la mejor ver-
hermosa recompensa poder distinguirse de los monos, sión posible de nosotros mismos es lo que puede acercarnos
quienes dicen de sí mismos que son grandes, libres y ma- a la consumación de tan elevado objetivo; que hoy más que
ravillosos: “Lo decimos todos, así que debe ser cierto”. nunca estamos urgidos de contar con verdaderos filósofos y
Ello, aun si carecen de memoria o habla propia; si sólo artistas en nuestro interior y en el mundo de afuera.
alardean, parlotean, y fingen que son un buen pueblo de-
dicado a grandes asuntos de la selva. El libro de la selva, en su hermosa edición ilustrada por
Amanda Mijangos y Armando Fonseca, es un homenaje
En los otros relatos del libro, que incluyen escenarios a la primera publicación del libro, cuyos relatos compila-
como el mar o el jardín de una casa también siempre al- ra Macmillan en 1894, editorial que este año cumple ciento
guien imagina alguna cosa que escapa a los límites del setenta y cinco vueltas al sol. +
mundo conocido: el pequeño Kotick en “La foca blanca”
sueña con hallar un lugar al que nunca lleguen los hom-
@Malkatika
PARA VER Y OÍR
BLADE RUNNER BITCHES BREW
2049 Miles Davis
Columbia/Legacy
Denis Villeneuve
S ituada treinta años después de los sucesos de la primera película, Blade Runner 2049 es
la esperada secuela del filme de culto dirigido en 1982 por Ridley Scott. Un joven blade
M iles Davis es la figura más influyente en el jazz por múltiples razones, entre las que destaca
su prolífico proceso de creación y la experimentación en una gran diversidad de vertientes
musicales a lo largo de cinco décadas, que lo mantuvo a la vanguardia de importantes desarro-
runner, el oficial K del Departamento de Policía de Los Ángeles, descubre un secreto que llos estéticos en la música contemporánea y cultura popular.
lleva oculto mucho tiempo y que tiene el potencial de sumir lo que queda de la sociedad en
A finales de los años sesenta la evolución tecnológica lo obligó a adaptarse a instrumentos eléc-
el caos, lo que le lleva a localizar al exblade runner Rick Deckard.
tricos. Relacionarse con la contracultura de Nueva York lo llevó de manera natural a conocer
Desde su creación a principios de los años ochenta el concepto de la película Blade Runner la y apreciar las tendencias populares del rock, el soul y el funk del momento, tomando de esos
ha destinado a la inmortalidad. A pesar de tratarse del recurrente tema de la ciencia que crea géneros elementos que mezcló en su experimentación creativa. Davis comenzó a componer
vida, es la manera en como se aborda lo que ha mantenido presente al film: una sociedad música más experimental que atraía a un nuevo público que lo recibió elocuentemente, aunque
llena de florituras posmodernas y abundancia visual, utópica, que implosiona gradualmente, la audiencia más purista del jazz le recriminó por “haberse vendido”. De esa especie de encrucija-
superpoblada, decadente, pero que experimenta la mezcla de las emociones, la nostalgia da artística y comercial surge uno de los álbumes más revolucionarios de la historia del jazz: Bitches
y la novedad al mismo tiempo, proyectadas por el advenimiento de la tecnología que de Brew, la obra fundacional que consolidó al jazz-rock, una fusión que incorpora al jazz instrumentos
manera frecuente hace sentir como un redescubrimiento y da una connotación a veces fal- eléctricos y las estructuras rítmicas y armónicas relacionadas con el rock. La complejidad sonora
samente positiva. del doble lp que incluía sólo seis tracks obtuvo opiniones tan coloridas como la música misma:
Esta nueva producción retoma de forma magistral la combinación del género de ciencia fic- los críticos creían que Bitches Brew representaba la muerte del jazz, pensaron que Miles había
ción inteligente con la novela policíaca que, durante un tiempo, hizo única a su predecesora; dejado la música negra por el éxito comercial del rock. Otros lo vieron como un álbum nota-
retoma también la estética original y la potencia gracias a los efectos digitales que respetan ble y atrevido que se convirtió en la mejor carta de presentación del trompetista. Para otros
los conceptos visuales de la película original, dotándola de una serie de detalles y sofistica- más extremistas, Bitches Brew era un reflejo del agresivo clima político y racial del momento,
ción que transforman a Blade Runner 2049 en una auténtica experiencia multi-sensorial. representado en la portada por la interpretación gráfica del pintor Mati Klarwein: los trasfondos
decididamente afrocéntricos y psicodélicos del arte eran una fiel imaginación de la música, resu-
A pesar del tiempo, la sensación de neostalgia es absolutamente palpable. Por ejemplo, con
miendo la locura, el genio y el ingenio creativo de un álbum tan revolucionario.
el fin de mantener la estética retrofuturista del filme original, en Blade Runner 2049 pode-
mos ver anuncios espectaculares de compañías que dejaron de existir o que no han tenido Este doble cd lanzado por el subsello Columbia/Legacy contiene las seis piezas que conforman el
una corporación física durante muchos años, como Pan Am Airlines y Atari. De acuerdo con álbum original de 1970, tomas alternativas de “Spanish Key” y “John McLaughlin” y las versiones en
el director Denis Villeneuve, eso transcurre en un futuro alternativo en el que estas marcas sencillo de “Miles Runs the Voodoo Down”, “Spanish Key”, Great Expectations” y “Little Blue Frog”.
han mantenido su éxito. Textos por Diego Herrera @diegoherrera
ada época de cada sociedad tiene cierto número de a una forma particular de gobierno democrático. Todos
palabras favoritas, esenciales: las que señalan y con- reciben lo que necesitan para subsistir, trabajan el mismo
densan los intereses, las obsesiones y los miedos de número de horas al día y disponen de tiempo libre para
quienes viven en cierto lugar y cierto tiempo. hacer lo que deseen. Además, esta forma de vivir no es
impuesta por la fuerza: los ciudadanos están mucho más
Por definición, todos sabemos cuáles son nuestras pro- felices y satisfechos que los visitantes que llegan a obser-
pias palabras esenciales, las de nuestro aquí y ahora. Yo, varlos con asombro.
que escribo en la Ciudad de México a fines de 2017, entre
muchas noticias ominosas del país y del mundo, pienso Nunca ha habido un país idéntico a Utopía, y quién sabe si
que esas palabras van de las en apariencia inofensivas, pueda haberlo. Pero la gran aportación de Moro fue otra:
como selfie o meme, hasta las francamente horribles, como dejó a las culturas occidentales la idea de que era posible
feminicidio. imaginar y proponer sociedades distintas y, sobre todo,
mejores que las que existen en realidad. No sólo se podía
Y también creo que otra de las palabras esenciales de aceptar que los gobiernos humanos son con frecuencia
aquí y ahora es distopía: el nombre de las historias negras —o siempre— imperfectos, injustos: se podía aspirar a
que nos contamos sobre el porvenir; los sueños terribles que no lo fueran, y a que los propios seres humanos en-
de lo que pensamos que vendrá. Aunque no la utilicemos contraran por su propia cuenta la manera de mejorar. La
en nuestras conversaciones cotidianas, aunque no haya- palabra utopía más que nombrar una sociedad tal como la
mos investigado la definición, la hemos encontrado. In- imaginada por su creador, pasó a significar cualquier for-
cluso puede que nos hayamos encontrado con su reverso: ma de vida considerada ideal, e incluso, de manera más
con la palabra utopía, que para muchas personas significa amplia, cualquier imagen de perfección, incluso aquellas
algo imposible por ingenuo, por absurdo: la idea de una que se consideran inalcanzables: demasiado buenas para
existencia mejor que la que conocemos. poder realizarse. En los siglos que siguieron a la muerte
de Moro, la idea se discutió muchas veces y dio lugar a
La historia de ambas palabras dice mucho del pensamien- toda clase de textos literarios, políticos y filosóficos, así
to humano de siempre, y del de hoy. como a más de un intento de instaurar regímenes que
se consideraban utópicos. La noción misma de progreso,
Utopía llegó primero, hace poco más de quinientos años. como se entiende hasta la actualidad, se debe en parte a
En esencia es una combinación de dos palabras de la len- la influencia de Utopía.
gua griega: ou, que significa ‘no’ y fue transcrita como
una sola letra u, y topos, que significa ‘lugar’. Así, utopía Entonces llegó el siglo xx, el más sangriento de la historia
significa no-lugar: lugar que no existe. humana, durante el que la idea del progreso comenzó a
ser impugnada y criticada a la vista de los usos terribles
El escritor y filósofo inglés Thomas More, también co- que se daba a la tecnología derivada del avance de las
nocido como Tomás Moro (1478-1535), creó la palabra ciencias. En ese siglo se puso de moda el término distopía.
para emplearla en una obra suya. Publicada en 1516, es-
crita en latín en el original, se titula Libellus de optimo La palabra es una parodia o distorsión de utopía, como
reipublicae statu, deque nova insula Utopiae, es decir, precuela lo es de secuela. Se toma el prefijo griego dis,
Libro del estado ideal de una república en la nueva isla que puede significar ‘malo’, y se le agrega a topos. La
de Utopía; la historia ha abreviado el título y recordamos palabra resultante: mal-lugar, no es con exactitud lo
la palabra clave, es decir, el nombre del país que Moro contrario de utopía, pero se le usa como si lo fuera. No
describe en su texto. hay un libro titulado Distopía que sea equivalente —u
opuesto— al de Tomás Moro; más bien la palabra llega a
Ponerle Utopía a un lugar es, desde luego, anunciar que entenderse como el nombre de una sociedad temible, in-
dicho lugar es pura ficción. La isla de Utopía es uno en- deseable, peor que las que en realidad existen, a partir de
tre los miles de territorios imaginados por la literatura y la aparición de varias de aquéllas en obras de numerosos
que no tienen sitio en los mapas, desde el más allá que se autores. Hoy, distopía se usa para referirse a formas de
describe en la Divina comedia de Dante Alighieri —Infier- organización humana en historias publicadas, sobre todo,
no, Purgatorio y Paraíso— hasta el País de las Maravillas a partir de la Primera Guerra Mundial: libros, y después
de Lewis Carroll, o Santa Teresa, la ciudad violenta que películas, series, cómics, etcétera, que en vez de señalar
aparece en varias narraciones de Roberto Bolaño. A Moro un ideal lanzan advertencias respecto a la posibilidad de
le interesa dejarlo muy claro, de hecho, y otros nombres que las sociedades humanas se vuelvan más desiguales,
en el texto tienen la misma intención: por ejemplo, un tiránicas, crueles y destructivas.
río se llama Anhidro (sin agua) y un gobernante se llama
Ademos (sin pueblo). Las primeras tres distopías importantes del siglo xx apare-
cen en las novelas Nosotros, de Yevgeni Zamiatin (1921);
¿Cuál es la razón de tanta insistencia? La Utopía de Moro Un mundo feliz, de Aldous Huxley (1932) y 1984, de
intenta algo que en su propio tiempo era rarísimo: con- George Orwell (1949). Todas tienen un elemento en co-
tar acerca de un lugar inexistente, sí, pero no para en- mún que no está en Utopía y que permanece en obras
tretener a sus posibles lectores con sucesos de aparien- posteriores: suelen ser leídas como obras de ciencia ficción
cia remota y exótica, sino para proponer cambios en la —un nombre más correcto podría ser “narrativa especu-
vida real. Utopía describe una sociedad que para Moro es lativa”—, pues colocan sus sociedades espantosas “en el
ideal, como dice el título completo del libro; una que no futuro”, como consecuencia de tendencias observables
existe, pero debería existir. Era importante subrayar que en el presente de cada uno de sus autores. Cada uno a su
no se estaba elogiando a ningún país verdadero, sino, por manera, Zamiatin, Huxley y Orwell escribieron pensando
el contrario, que se quería criticar a todos, por no poner en el auge de algún tipo de totalitarismo —fascismo o es-
en práctica lo que a Moro le parecía un modo mejor de talinismo, por ejemplo— que ocurría en el mundo mientras
organización humana. ellos creaban sus obras, y vertieron en ellas el miedo que
les daba el avance de la opresión o el sufrimiento humano
Las características de la sociedad de Utopía tienen mu- que estaba delante de ellos.
cho que ver con el pensamiento del humanismo renacen-
tista, del que Moro fue representante: en la isla se otorga Esta diferencia es importante porque gracias a ella, y a pe-
un valor importante a la vida humana en general y se cree sar de la importancia del pensamiento político de muchos
necesario atenuar las diferencias entre diferentes secto- creadores de distopías, la palabra pasó también a enten-
res o clases sociales. Por ejemplo, todas las ciudades son derse como un “género” de la ficción popular, en aparien-
más o menos iguales y autónomas, con terrenos propios cia trivial y explotable en términos comerciales. Por esta
para sembrar, y todas las casas tienen el mismo diseño razón —entre otras—, nuestro propio presente no tiene
básico y utilitario. Todos los ciudadanos contribuyen a la sino miles de obras distópicas, y muchas más comunidades
producción de sus propios alimentos y bienes, así como pavorosas en obras que tienen otras etiquetas.
Van algunos ejemplos. Una de las series televisivas más
famosas y celebradas de 2017, El cuento de la cria-
da (The Handmaid’s Tale), es de hecho adaptación de
una novela del mismo título de la escritora canadiense
Margaret Atwood, en la que se describe una teocracia
futura que explota a las mujeres de manera bestial. La
tetralogía de películas Los juegos del hambre —derivada
de las novelas de la estadounidense Suzanne Collins—
tiene su propio Estado totalitario —llamado Panem—,
cuyo poder se basa en una versión monstruosa y ultra-
violenta de los actuales reality shows. La obra narrativa
de J. G. Ballard, y en especial libros como Rascacielos, La
isla de cemento o El mundo sumergido, incluye referen-
cias a sociedades en declive y catástrofes ambientales o
culturales aun cuando éstas no sean siempre el centro
de sus tramas, y lo mismo sucede con series animadas
como Los Simpson, filmes como ¡Huye!, de Jordan Peele,
novelas gráficas como Watchmen, de Alan Moore y Dave
Gibbons…
Alberto Chimal
@albertochimal
Ve la entrevista en mascultura.mx
DOCTORA LIBROS
“La vida era sí y punto; sentidos se exaltan con la descripción. La vida no es fácil
con la obligación de complicársela a los demás para este par de mujeres, se mantienen entre sentimien-
antes de que nos la complicaran a nosotras” tos de frustración, placer y repulsión, las acompañamos
La amiga estupenda
en la búsqueda de su propia identidad y nos transmiten
su miedo a la vida. Es una visión del mundo sin culpa ni
¿Sufres de la llamada depresión de la última cuartilla? remordimientos, decididamente verosímil.
¿Sientes mareos por no saber cuál será tu siguiente lectu-
ra? Este espacio es para que te relajes y superemos juntos Es importante reconocer la honestidad de la prosa, la
cualquier tipo de cuadro clínico literario. Va la primera agudeza psicológica y emocional con la que Ferrante
intervención terapéutica para darte opciones en caso de construye las historias. Mención aparte ocupa el descen-
una resaca poslectura. Guarden la calma que ya llega la so —especialmente de las mujeres— a los rincones más
Doctora Lee. oscuros de los sentimientos de sus protagonistas hacia
sus madres y sus hijos, el sexo, los estudios y las relacio-
Lo sabemos: llegamos tarde a un fenómeno del que mu- nes sociales en todos los niveles. Esta obra sobrevivirá al
cho se ha discutido en el mundillo literario, un éxito pri- anonimato voluntario de su creador; hay que recordar
mero en Europa, después en Estados Unidos —dicho sea que cuando la identidad de un autor es un misterio y la
de paso, con las portadas más espantosas posibles— y calidad de la obra lo precede, ésta tiende a volverse de
por fin en el resto del mundo, incluyendo México, cuya culto, incluso si llega a millones de lectores.
primera edición llegó a las librerías en mayo del 2016. Por
eso es mejor que omitamos la dinámica de indagar quién No alimentar el culto al ego es una de las maravillas de
es el/la culpable, —permanecer en el anonimato le per- esta saga, nadie disfruta aún de este éxito como ‘lega-
mitió a Elena Ferrante “escribir sobre heridas infectadas y do intelectual’; aunque económicamente la misteriosa
recientes”, una de las escasas declaraciones de quien dice autora —seremos incluyentes, podría ser un autor— ya
ser la autora de estos libros— y pasemos directamente a tiene lo suficiente para mantener a por lo menos siete
estos cuatro libros que casi ostentan el mérito de ser una generaciones de su familia. Para ser objetivos, a nadie ya
de las sagas literarias mejor escritas de este siglo. le importa quién está detrás de Elena Ferrante; muchos
como yo nos quedamos con lo sólido de su escritura. Du-
Hace dos años terminé de leer La amiga estupenda, el rante la lectura se reconocen voces tan poderosas como
primer libro de la serie "Dos amigas"; sólo pasó una sema- la de Elsa Morante, Natalia Ginzburg y Cesare Pavese; la
na para que me lanzara sobre el segundo volumen. Así, autora tenía una evidente influencia italiana de primera
en menos de tres meses, había leído la tetralogía: Un mal mano y de gran valor.
nombre y Las deudas del cuerpo en formato impreso; el
último, La niña perdida, en digital —entonces todavía no No sería sensato determinar un tipo de lector para la se-
salía la versión impresa en México, pero ya era necesario rie "Dos amigas", estamos frente a una saga consistente
saber cómo se resolvían los conflictos—. y bien ejecutada, que ojalá no sea menospreciada por el
hecho de ser popular: llegar a todo tipo de público no de-
¿Qué sostiene el interés en cuatro tomos, si se enuncia bería condenar a la literatura de calidad. Todos podría-
cómo terminará la historia desde el principio? Para esto mos leer un mismo libro, como en una especie de perfor-
se requiere de algo más que escritura creativa o un pla- mance, pero nuestras lecturas serán distintas. El acto de
cebo con fórmulas literarias probadas y vueltas de tuer- leer es único y personal, esta tetralogía merece superar el
ca inesperadas. ¿Cuál es el truco? La habilidad y el oficio prejuicio de encontrarse entre los más vendidos. Hay que
para lograr que no sólo el lector promedio, sino también darle una oportunidad a Ferrante; eso sí, es un ejercicio
los lectores duros caigan bajo su encanto, son poco co- de todo o nada, pero debo decir que si superan las prime-
munes. ¿Los temas? La misoginia y la violencia durante la ras veintiún páginas de La amiga estupenda, seguramen-
infancia, la carencia, el desamor: no hay nada que no se te llegarán al final del cuarto y último libro.
haya escrito antes.
Advierto: hay cruda post Ferrante. Nada grave, es re-
Ferrante, quien quiera que sea, es inteligente; sabe cómo comendable dejar pasar unos días para comenzar otras
se mueven, deciden y pelean las mujeres. Todo es acción lecturas, no buscar con ansiedad una nueva saga y beber
más que introspección, podríamos clasificarla como prosa el té de su preferencia. Para no vivir ese malestar —al me-
muscular, escritura altamente física. Parecería exagerado nos no de golpe—, un consejo es ir directamente a Elsa
afirmar que casi podemos tocar a las protagonistas, pero Morante —que misteriosamente rima con Elena Ferrante—;
no lo es. Estas novelas narran la historia de Elena Greco y pueden empezar con El chal andaluz o La isla de Arturo,
Lila Cerullo, de sus familiares y amigos, de su barrio mar- y si la necesidad es de un libro extenso Mentira y sortile-
ginado en Nápoles en lo particular, y en lo general de la
gio no los decepcionará. +
sociedad italiana en su conjunto, durante los cincuenta
años en que transcurre esta historia. La ciudad se sien- Dra. Lee
te, se huele, en la primera huida más allá del barrio, los
RAQUEL CASTRO