Professional Documents
Culture Documents
La historia de México, país ubicado en el norte del continente americano (en la porción más
septentrional de Mesoamérica), se remonta a unos 4000 años (conforme al consenso de
Clovis), en que se estima ocurrieron los primeros asentamientos de pobladores sedentarios.
Antes de la conquista por los españoles en el siglo XVI, lo que ahora es México fue habitado
por pueblos de culturas que interactuaron entre ellos en diverso grado, en el tiempo y el
territorio. De aquella época sobresalen la cultura olmeca, la tolteca, la teotihuacana, la maya,
la náhuatl, la totonaca, la zapoteca, la mixteca y la tarasca, entre otras.
Vino, al iniciarse el siglo XX, un cruento movimiento social que sentó bases políticas,
jurídicas y sociales del México actual. Durante la mayor parte de tal siglo la nación vivió en
paz un proceso de aprendizaje y autocorrección, tanto en lo institucional como en los aspectos
social y económico. Al cabo de diversas crisis de corte fundamentalmente económico y
político, la última de las cuales no aún superada, la nación evoluciona y se asienta hacia el
fin de la primera década del siglo XXI, ocasión en que se cumplen 200 años de su
independencia de España y 100 años de su revolución.
Índice
1 Periodización
2 México prehispánico
2.1 Olmecas
2.2 Mayas
2.3 Teotihuacan
2.4 Tula-Xicocotitlan
2.5 Imperio mexica
3 México virreinal
4 Edad Contemporánea
4.1 México Independiente
4.2 Siglo XIX
4.3 El Imperio mexicano
4.4 Primera República Federal
4.5 El porfiriato
4.6 La Revolución mexicana
4.7 Periodo posrevolucionario: el Maximato
4.8 Presidente Lázaro Cárdenas
4.9 Siglo XXI
Periodización
La historia de México suele dividirse en tres grandes períodos. Antes de la historia tenemos
la prehistoria que, a diferencia de la historia europea, la prehistoria de América se divide en
tres periodos: el Periodo arqueolítico que, aproximadamente, va del año 30.000 a.C. al 9500
a.C.; el Cenolítico del 9500 al 5000 a.C. y finalmente el periodo Protoneolítico del 5000 al
2500 a. C.
Cabe también señalar que, el territorio que comprende actualmente México, se ha dividido
para su estudio prehispánico en tres áreas culturales (Mesoamérica, Oasisamérica y
Aridoamérica), siendo la primera donde se asentaron las sociedades más complejas y la
última una zona habitada principalmente por tribus nómadas.
El México moderno abarcó pues un siglo exactamente, de los inicios del movimiento
insurgente en 1810 a 1910, con el estallido de la Revolución Mexicana. En esta época fue
cuando se intentó construir una nación, ya separada de España y el país se vio envuelto en
diferentes conflictos, tanto internos como externos hasta el triunfo liberal en 1867.
Comprendió también la República Restaurada (1867-1876) y el ascenso de Porfirio Díaz al
poder en 1876.4
México prehispánico
El territorio fue descubierto y habitado por grupos de cazadores y recolectores nómadas hace
más de 20,000 años. Por miles de años, los habitantes de esta región de América se dedicaron
a la cacería y la recolección, hasta que se descubrió la agricultura. En Guilá Naquitz se
encontraron los más antiguos restos de la domesticación de varios cultivos, aunque la
agricultura se desarrolló también en sitios como el valle de Tehuacán y la sierra de
Tamaulipas. La domesticación del maíz tuvo lugar alrededor del quinto elemento del milenio
antes de la era común. A partir de entonces los grupos humanos dependieron cada vez más
de los cultivos, hasta que se establecieron las aldeas agrícolas y sedentarias en Mesoamérica.
Mientras que en Mesoamérica la agricultura prosperaba, los pueblos norteños seguían siendo
completamente dependientes de la cacería y la recolección.
La historia prehispánica de lo que actualmente es el norte de México es mal conocida porque
los pueblos que ocuparon la región tenían una cultura material limitada. Los pueblos de
costumbres nómadas que habitaron los desiertos, costas y montañas al norte de Mesoamérica
son llamados aridoamericanos, pero no compartían entre sí su cultura. La cueva de la Perra
(Tamaulipas) vio la invención de la agricultura en América y contó con presencia humana
desde el año 12000 a. C. Hay testimonios de los pueblos nómadas en sitios como Cueva de
la Candelaria (Coahuila, 8000 a. C.), o El Conchalito (Baja California Sur). También en Baja
California se encuentran las pinturas rupestres de la Sierra de San Francisco que continuaron
en funciones hasta el siglo XIX, cuando desaparecieron los últimos indígenas de esa región.
Diagrama comparativo de algunas cronologías propuestas para las culturas del centro de
México.
Al final de esta etapa, Teotihuacan se había convertido en la urbe más importante del valle
de México. Durante el Clásico Temprano (ss. II-VI/VIII) la influencia de Teotihuacan se dejó
sentir en toda Mesoamérica, apoyada por su poder político y comercial.16 Tuvo importantes
aliados, como Monte Albán en los Valles Centrales de Oaxaca. La civilización
mesoamericana se extendió hacia el norte en sitios como La Quemada. Del norte también
llegaron influencias culturales, visibles en la cultura huasteca. El clásico fue también la época
de la consolidación de la cultura maya en la península de Yucatán, la planicie de Tabasco y
las tierras altas de Chiapas. Por otro lado, en los valles y montañas al norte de la sierra Madre
Occidental se desarrolló la cultura Paquimé, resultado de la consolidación de la agricultura
en el noroeste y del intercambio entre Mesoamérica y Oasisamérica.
Durante los siglos X al XII, el centro de México fue dominado por Tollan-Xicocotitlan, la
capital de los toltecas. Esta ciudad estableció vínculos muy fuertes con varias regiones de
Mesoamérica, pero particularmente con la península de Yucatán, donde se ubica la ciudad
maya de Chichén Itzá. En Oaxaca, mientras tanto, los mixtecos iniciaron un proceso
expansionista que los llevó a ocupar los Valles Centrales donde habitaban los zapotecos. En
1325 los mexicas fundaron México-Tenochtitlan, la capital del Estado más extenso que
conoció la Mesoamérica prehispánica, que sólo rivalizó con los purépechas de Tzintzuntzan.
Olmecas
Los Olmecas se asentaron en la región tropical del sur de Veracruz y Tabasco. Los vestigios
de la cultura Olmeca son posiblemente los más Mesoamérica, como la cabeza olmeca
encontrada en el yacimiento de La Venta, Tabasco.
La cultura olmeca, también conocida como cultura madre, tuvo su desarrollo entre los años
1200 a. C. y 500 a. C. en la región costera del Golfo de México (actualmente comprende los
estados de Veracruz y Tabasco); dicha civilización se ubicó en el área central de los llamados
Habitantes del país del hule.
La economía de los olmecas tuvo como base la agricultura de roza, la cual consiste en talar
grandes extensiones de árboles para despejar la tierra y después sembrar; practicaban la caza
y la pesca, así como, en menor medida, la recolección de frutos.
Los sitios arqueológicos más sobresalientes son La Venta, en el estado de Tabasco; la San
Lorenzo y Tres Zapotes. En La Venta la construcción de sus edificios es simétrica, dispuestos
en un eje largo que va de norte a sur; los monumentos están colocados a los lados. Este centro
ceremonial sirvió de ejemplo para el resto de las culturas mesoamericanas, pues diseños
similares los percibimos en otros centros urbanos.
Los sacerdotes, quienes poseían conocimientos astronómicos sobre los períodos de lluvia y
los idóneos para la siembra, eran, probablemente, la clase dirigente. Algunos investigadores
mexicanos han supuesto la existencia de un gobierno teocrático apoyado por la clase militar.
Existen pruebas de que los olmecas utilizaban una escritura jeroglífica y desarrollaron la
Rueda Calendárica, evidencia de su progreso, la cual contaba con 365 días. Realizaron
diversos monumentos, como las famosas cabezas olmecas, que probablemente eran retratos
de guerreros prominentes en batalla o de personajes de alta jerarquía.
Esta cultura desapareció en el año 500 a. C., debido, probablemente, a un desastre natural
que los obligó a dejar sus centros urbanos y, como consecuencia, desaparecer de los registros
históricos. "La cultura olmeca se puede definir como la Cultura Madre de la América Pre-
Colombina", según Mohd Ateeque.19
Mayas
El territorio que ocupaban los mayas comprende los actuales estados de Yucatán, Campeche,
Quintana Roo, parte de Chiapas y Tabasco en México; y Belice, Guatemala y Honduras en
Centroamérica. A partir del siglo III de nuestra era, la cultura maya empezó un florecimiento
impresionante, que perduró hasta el siglo IX, que ha sido llamado período clásico.
Los Mayas también desarrollaron el comercio mediante el uso de redes marítimas y terrestres,
abarcando gran parte de Mesoamérica, comerciando con mercaderías que obtenían de lugares
tan lejanos como el imperio inca[cita requerida] sirviendo en muchos casos de enlace con los
mexicas y sus dominios mesoamericanos. Debido a estas redes comerciales, a los mayas se
les ha llamado «los fenicios de América»21
Teotihuacan
La civilización teotihuacana se desarrolló al noreste del Valle de México entre los años 200
y 650 d.C. Estaban concentrados en una sola ciudad, alcanzando gran mérito de
construcciones y también en la cultura.
Tula-Xicocotitlan
Durante los siglos X al XII, el centro de México fue dominado por Tula, la capital de los
toltecas. Esta ciudad estableció vínculos muy fuertes con varias regiones de Mesoamérica,
pero particularmente con la península de Yucatán, donde se ubica la ciudad maya de Chichén
Itzá. En Oaxaca, mientras tanto, los mixtecos iniciaron un proceso expansionista que los llevó
a ocupar los Valles Centrales donde habitaban los zapotecos. En 1325 los mexicas fundaron
Tenochtitlán, la capital del estado más extenso que conoció la Mesoamérica prehispánica,
que sólo rivalizó con los purépechas de Tzintzuntzan.
Imperio mexica
Moctezuma Xocoyotzin (1466 – 29 de junio de 1520) Huey Tlatoani de México-Tenochtitlán
(1502-1520). El reinado de Moctezuma presencio la llegada de los españoles.
Vagaron de un lugar a otro hasta recalar en un islote del ahora extinto lago de México, ahí
encontrarían un águila que devoraba a una serpiente, y fue allí donde fundaron, en el año
1325, una modesta población que con el tiempo se convirtió en la gran Tenochtitlan.
El 13 de marzo de 1325 los aztecas llegaron a lo que hoy se conoce como el Valle de México,
(algunos historiadores dicen que vieron la señal y fundaron México-Tenochtitlan). Entraron
al Valle de México llegaron en lo que actualmente es el Bosque de Chapultepec, donde
residieron hasta que en una nueva expedición al centro del valle encontraron, el 18 de julio
de 1325, en un islote rodeado de agua, una penca donde se encontraba un nopal y sobre el
nopal un águila devorando una serpiente. Fue allí donde fundaron la Gran Tenochtitlan,
ciudad y capital del imperio mexica.
México virreinal
El virreinato de Nueva España fue una entidad territorial, integrante del Imperio español,
establecida por la Corona de Castilla durante su periodo de dominio americano. Fue creado
tras la conquista sobre los mexicas y otros pueblos de Mesoamérica, realizada entre 1519 y
1521 por las tropas de Hernán Cortés, por Real cédula de Carlos V, el 1 de enero de 1535,
aunque la instauración oficial se realizó el 8 de marzo del mismo año. Su primer virrey fue
Antonio de Mendoza y Pacheco y la capital del virreinato fue la Ciudad de México. Catedral
Metropolitana de la Ciudad de México.
El virreinato fue establecido en 1535, y su primer virrey fue Antonio de Mendoza y Pacheco.
En su historia, la Nueva España fue regida por 62 virreyes de diferente importancia histórica,
entre los que destacan Antonio María de Bucareli (1771-1779) y Fray Payo Enríquez de
Rivera (1672-1680).
El comercio del virreinato era realizado a través de dos puertos, Veracruz en el golfo; y
Acapulco en el Pacífico, a éste llegaba la Nao de China, una nave que transportaba productos
de las islas Filipinas a Nueva España y de ahí a la metrópoli. El comercio coadyuvó al
florecimiento de estos puertos, de la Ciudad de México y de las regiones intermedias entre
ambos. Hay que señalar que hasta finales del siglo XVIII, con la introducción de las reformas
borbónicas, el comercio entre los virreinatos no estaba permitido.
La sociedad novohispana estaba fuertemente segmentada: estaba dividida en vasallos del rey
y castas. Los primeros eran los españoles, los criollos y los indios. Las castas estaban
formadas a partir de la codificación acerca de las relaciones entre los grupos étnicos. Aunque
nunca fue tan severa que no permitiera el intercambio cultural o el mestizaje biológico, sí
había una definición de la posición que una persona ocupaba en la escala social de acuerdo
con una supuesta mezcla de sangres. Mientras más sangre española, mejor posición, sobre
todo si los hijos eran de matrimonio. Los españoles peninsulares, o sea los venidos de la
península, llamados despectivamente gachupines) ocupaban las posiciones de privilegio.
Edad Contemporánea
México Independiente
Este artículo o sección necesita referencias que aparezcan en una publicación acreditada. Este
aviso fue puesto el 21 de noviembre de 2014.
El 16 de septiembre de 1810 es la fecha que marca el inicio del movimiento armado, dirigido
por Miguel Hidalgo; quien fuera un simple sacerdote logró movilizar a una gran parte del
pueblo mexicano con lo que se conoce como El grito de Dolores, ya que hizo un llamado a
los habitantes de La Nueva España en la iglesia de Dolores.
Uno de los pretextos tomados por los criollos para reclamar la independencia de los
virreinatos fue la ocupación de España por Napoleón Bonaparte y las tropas francesas en
1808. En varias partes de América Latina tuvieron lugar rebeliones independentistas, algunas
más exitosas que otras. México no fue la excepción. Los primeros intentos separatistas de
Nueva España corresponden los hechos ocurridos durante la Crisis política de 1808 en
México, se formó una Junta de Gobierno la cual contaba con cierta simpatía del virrey José
de Iturrigaray, pero un golpe de Estado realizado por Gabriel de Yermo depuso al virrey y a
consecuencia se encarceló a los promotores de la junta: Melchor de Talamantes, Juan
Francisco Azcárate y Lezama, Francisco Primo de Verdad y Ramos y José Antonio de Cristo.
La Real Audiencia, que favorecía a los golpistas, nombró a Pedro de Garibay como virrey
interino y toda idea de separatismo fue sofocada. Las reuniones entre criollos continuaron,
pues la inconformidad con su situación secundaria en la sociedad novohispana y la ocupación
francesa de la metrópoli eran la oportunidad para conseguir un gobierno local. El siguiente
intento por establecer un congreso independiente y autónomo fue la Conjura de Valladolid
en 1809, pero fue descubierta y sus miembros fueron procesados.
En 1811, tras varias victorias, entre las que destacan la toma de Guanajuato, Valladolid, y la
derrota que propinaron a las tropas realistas en Cerro de las Cruces, a tiro de piedra de la
Ciudad de México, el ejército insurgente se retiró hacia occidente. Fue derrotado en la Batalla
del Puente de Calderón por Félix María Calleja, a la postre virrey novohispano. Las tropas
realistas persiguieron a las de la insurgencia hasta apresarlas en Acatita de Baján, Coahuila.
Los líderes fueron fusilados en la ciudad de Chihuahua y sus cabezas trasladadas a
Guanajuato para exhibidas en las cuatro esquinas de la Alhóndiga de Granaditas.
Para este tiempo, la insurgencia se había hecho fuerte en el sur de la intendencia de México.
Al frente de la tropa se hallaba el cura y Generalísimo José María Morelos y Pavón, quien
había recibido la orden directa de Hidalgo de encabezar la revolución en la Sierra Madre del
Sur. Entre los triunfos más sonados de Morelos y su ejército, del que formaban parte, entre
otros, Mariano Matamoros, los hermanos Galeana y los hermanos Bravo), se encuentra el
sitio de Cuautla, que fue roto tras casi un año de asedio realista. Morelos convocó al primer
congreso americano en 1813, en Chilpancingo, al que acudieron diputados de las diferentes
provincias, los cuales firmaron el Acta de Independencia de la América Septentrional y
promulgaron la Constitución de Apatzingán un año más tarde, sobre la base del documento
escrito por Morelos, intitulado Sentimientos de la Nación, el Generalísimo, que había
rechazado ese título, se hizo llamar Siervo de la Nación.
Cuando Bonaparte y los franceses se retiraron de España y regresó el rey Fernando VII, envió
refuerzos a Nueva España y los realistas terminaron por minar la capacidad bélica del ejército
insurgente. Morelos fue derrotado en la Batalla de Temalaca, Puebla y conducido a la Ciudad
de México, donde fue enjuiciado, degradado y excomulgado. Finalmente, fue fusilado en San
Cristóbal Ecatepec, que hoy se llama Ecatepec de Morelos en su memoria, el 22 de diciembre
de 1815.
A esas alturas, el ejército insurgente había entrado en una fase francamente defensiva. Habían
sido fusilados Matamoros y Morelos, muertos en combate fueron algunos de los Galeana (no
todos: Pablo siguió combatiendo a los realistas en Zacatula, hasta 1822, cuando Vicente
Guerrero le mandó a avisar que la guerra había terminado un año antes). Los únicos frentes
fuertes eran el veracruzano, al mando de Guadalupe Victoria, y el de Vicente Guerrero, en el
sur de México. En el norte, la campaña relámpago de Pedro Moreno y Francisco Xavier
Mina, joven español de ideas liberales, había concluido desastrosamente, a pesar de sus
triunfos iniciales.
De esta manera, la revolución popular de independencia mexicana se hallaba muy lejos del
triunfo. El virrey Apodaca había ofrecido indulto a los insurgentes, lo que minó el ejército en
resistencia. La oferta llegó a Guerrero por conducto de su padre, y la rechazó con la famosa
frase la Patria es primero, que hoy está escrita con letras de oro en el Palacio Legislativo de
San Lázaro.
Mientras tanto, en España, en 1820 un pronunciamiento militar dio inicio al llamado trienio
liberal, durante el cual se restablecieron la Constitución y los decretos de Cádiz. La élite
novohispana estaba en contra de esa ideología por lo que se decidió por la Independencia. En
las Conspiraciones de la Profesa se encargó a Agustín de Iturbide encabezar la tarea. Éste
selló un pacto con Guerrero, jefe de los insurgentes surianos, en compañía de quien promulgó
el Plan de Iguala en 1821. Poco tiempo después, llegó Juan O'Donojú el nuevo Jefe político
superior y Capitán general de Nueva España, mal denominado el último virrey, quien firmó
con Iturbide los Tratados de Córdoba en agosto y aceptó firmar el acta de independencia de
México el 27 de septiembre de 1821.
Los primeros reconocimientos a la nación independiente provinieron de Chile, Gran
Colombia y Perú. En 1825, los Estados Unidos reconocieron a la nueva nación con los límites
de 1820 establecidos por el gobierno estadounidense y la Corona de España, en el Tratado
de Adams-Onís. Los límites estaban fijados por el paralelo 42ºN, las Rocallosas, el río
Nexpentle, el río Rojo y el río Sabina hasta desembocar en el golfo de México.
Siglo XIX
Valentín Gómez Farías dispuso en 1833 una serie de reformas liberales que provocaron la
reacción conservadora que llevó a la disolución de la primera república federal y la
instalación de una república centralista. La promulgación de las Siete Leyes en 1835 provocó
movimientos separatistas en varios departamentos, todos reprimidos salvo en Texas, que
consumó su independencia en 1836. En 1841 Yucatán se separó de México y no se
reincorporó al país hasta 1848.
México enfrentó la invasión estadounidense entre 1846 y 1848, como resultado de las
reclamaciones territoriales de Texas, que se anexó a Estados Unidos. En medio de la guerra,
los federalistas reinstalaron la Constitución de 1824. Al final del conflicto, el gobierno
mexicano se vio forzado a firmar el Tratado de Guadalupe-Hidalgo por el que entregó más
de la mitad del país a los Estados Unidos. Al terminar la guerra prosiguieron los
enfrentamientos entre facciones políticas, lo que propició la llegada por undécima y última
ocasión de Santa Anna al poder (1853-1855), que ejerció con carácter dictatorial. En 1854
los liberales se levantaron en armas encabezados por Juan Álvarez. La insurrección depuso
a Santa Anna e instaló a los liberales en el gobierno.
La promulgación de las Leyes de Reforma, de corte liberal, afectó los intereses de varios
grupos, particularmente la Iglesia. En 1857 se promulgó la nueva Carta Magna mexicana.
Entre otras cosas, el documento estableció en México un Estado laico.70 Tras el autogolpe
de Estado de Ignacio Comonfort, Benito Juárez asumió la presidencia. Inició entonces la
Guerra de Reforma que concluyó con una nueva derrota de los conservadores. A partir del
año siguiente, éstos intentarían nuevamente hacerse con el poder, apoyados por la
intervención francesa que creó el Segundo Imperio Mexicano, encabezado por Maximiliano
de Habsburgo. La invasión francesa y el imperio concluyeron en 1867 con la rendición de
los conservadores y el fusilamiento de Maximiliano en Santiago de Querétaro.
Juárez continuó en la presidencia hasta su muerte en 1872. Los últimos años de su gobierno
fueron duramente criticados por las diversas facciones liberales. Juárez fue sucedido por
Lerdo de Tejada, tildado de jacobino. Tras una rebelión provocada por las intenciones de
Lerdo de reelegirse, Porfirio Díaz llegó a la presidencia en 1876. Así comenzó el Porfiriato.
Durante ese período, la inversión extranjera y nacional fue favorecida con grandes privilegios
por parte del gobierno, lo que favoreció el desarrollo económico. En contraste las condiciones
de vida de los obreros y campesinos continuaron sin mayores cambios. La oposición política
fue eliminada por la fuerza, y los rebeldes eran exiliados u obligados a trabajar en sitios como
Valle Nacional, el valle del río Yaqui o Yucatán.
El Imperio mexicano
El Imperio Mexicano duró seis meses. Rápidamente se vio envuelto en una crisis financiera
derivada de la necesidad de pagar los daños provocados por los once años de revolución
independentista. Además, los grupos republicanos cobraban cada vez más fuerza. En el año
de 1823, Antonio López de Santa Anna y Vicente Guerrero proclamaron el Plan de Casamata,
por el que negaban al gobierno de Iturbide y anunciaban la instauración de una república. El
emperador intentó defenderse por medio de las armas, pero su ejército fue derrotado y él
exiliado en ese mismo año. Con la derrota del Imperio, las provincias centroamericanas se
separaron de México y formaron las Provincias Unidas de Centroamérica. Chiapas decidió
quedarse unido a México.
A partir de la conclusión del período de Victoria, la vida política mexicana se tornó inestable,
debido a las pugnas entre la antigua aristocracia y el pequeño grupo de burgueses liberales
del país. El personaje central a lo largo de la primera mitad del siglo XIX fue Antonio López
de Santa Anna, quien repelió la intentona hispana por reconquistar México y ascendió al
poder once veces: cinco de ellas como abanderado de los liberales y las otras seis como
conservador.
En 1833 tuvo lugar el primer intento de reforma liberal profunda del Estado, encabezada por
Valentín Gómez Farías a la sazón presidente interino, y José María Luis Mora. La reforma
fracasó por el regreso de Santa Anna a la presidencia, con el apoyo de los conservadores. En
1835 fueron promulgadas las Siete Leyes, una constitución de corte centralista, que ocasionó
la declaratoria de independencia de Zacatecas (rebelión reprimida brutalmente por el general
Cos) y Texas. Este último territorio, perteneciente al estado de Coahuila y Texas, se separó
de México en 1836. Cinco años más tarde la República de Yucatán declaró su independencia,
y no se reincorporaría a México hasta 1848. Ese mismo año de 1841, el estado de Tabasco
decretó su separación de México en protesta por el centralismo imperante en el país. El estado
se reincorporó oficialmente en 1842.
Durante esa misma época, Santa Anna promulgó el 20 de octubre de 1842 un decreto, el cual
declaró la educación obligatoria entre los siete y quince años; sin embargo, fue depuesto
como presidente ese mismo día. Este hecho es uno de los pocos relevantes en el ámbito
educativo.
Tras la guerra con Estados Unidos, fue electo para la presidencia José Joaquín de Herrera. El
gobierno de Herrera fue más o menos tranquilo, aunque las elecciones para relevarlo fueron
presa de la división entre liberales y conservadores. Este nuevo conflicto se resolvió con la
llegada de Santa Anna al poder, que gobernó por última ocasión la república entre 1853 y
1855. Santa Anna se autonombró dictador de México y gobernó con el título de "Su Alteza
Serenísima" (el tratamiento fue elevado al rango de ley constitucional). Mientras tanto, la
mayor parte del país seguía en la miseria. El colmo fue el aumento en el monto de los
impuestos y la creciente corrupción del gobierno.
Benito Pablo Juárez García (1806–1872) fue un abogado y político mexicano, de origen
indígena zapoteca, presidente de México en varias ocasiones (1858-1872).
Por ello, en 1854 los liberales se fueron a la guerra, amparados en el Plan de Ayutla y
encabezados por Juan Álvarez e Ignacio Comonfort. El movimiento, conocido como
Revolución de Ayutla, concluyó con la renuncia y destierro de Santa Anna y la instalación
de Álvarez como interino. Durante las presidencias de Álvarez y Comonfort, fueron
promulgadas varias leyes de corte liberal, conocidas como Leyes de Reforma, que, entre otras
cosas, establecieron la separación entre el Estado mexicano y la Iglesia Católica y anularon
los privilegios de las corporaciones (incluidas las comunidades indígenas). La puesta en
marcha de estas leyes dio lugar a un nuevo conflicto entre liberales y conservadores, conocido
como Guerra de los Tres Años o Reforma.
Los franceses enviados por Napoleón III, al mando del Conde de Lorencez, dieron comienzo
a las hostilidades militares. El primer enfrentamiento, la batalla de Puebla, fue ganado por el
ejército de Ignacio Zaragoza y las milicias populares del estado. Ante la derrota, el emperador
envió más tropas al mando de Frédéric Forey, quien obtuvo varias victorias para los
franceses, que tomaron la capital en junio de 1863. Posteriormente, fue sustituido por
François Achille Bazaine.
El gobierno republicano, con Juárez a la cabeza, se trasladó a San Luis Potosí el 31 de mayo.
Fue perseguido por los franceses, y finalmente se estableció en Paso del Norte. Mientras
tanto, en la capital, el 10 de julio la Asamblea de Notables nombró como emperador de
México a Maximiliano de Habsburgo. El Segundo Imperio Mexicano duró hasta 1867, ya
que a partir de 1865 el ejército francés empezó a sufrir derrotas a manos de las guerrillas
mexicanas (que comenzaron a abastecerse de armamento estadounidense). La guerra culminó
con la retirada del ejército francés y con la rendición de los conservadores y el fusilamiento
del emperador en Santiago de Querétaro. Cabe señalar que durante la época imperial, se
introdujeron a México las primeras monedas con base en el sistema decimal, así como que
se crea una institución pública para atender la desolación de los indígenas; el mismo
emperador aprendió un poco de nahuatl durante su reinado.
Juárez siguió en el poder hasta su muerte el 19 de julio de 1872. Los últimos años de su
gobierno fueron duramente criticados por las diversas facciones en que se habían dividido
los liberales. Para las elecciones de 1871, se presentaron como candidatos Sebastián Lerdo
de Tejada, Porfirio Díaz y el mismo Juárez, quien ganó. A su muerte ocupó la presidencia
Lerdo de Tejada, que elevó a rango de ley constitucional las leyes radicales de reforma
promulgadas durante el periodo de 1855-1856. Cuando Lerdo intentó reelegirse, los
porfiristas se levantaron en armas y lo derrotaron. Aunque por ley la presidencia debía ser
ocupada por José María Iglesias, los porfiristas desconocieron su gobierno y finalmente Díaz
ocupó la presidencia en 1876. Así comenzó el período que en la historia de México es
conocido como el Porfiriato.
El porfiriato
José de la Cruz Porfirio Díaz ([1830–1915) fue un militar y político mexicano, dictador y
presidente de México en varias ocasiones.
La continuidad del gobierno de Porfirio Díaz sólo fue interrumpida por cuatro años de
gobierno de Manuel González, quien era amigo del presidente. En este tiempo, llamado
porfiriato, México tuvo una cultura con gran influencia francesa. En este período las Leyes
de Reforma (en especial la Ley Lerdo) sirvieron de marco para favorecer la concentración de
tierras en manos de unos pocos terratenientes. Los campesinos eran enganchados para
trabajar en las haciendas, y algunos grupos indígenas que se mostraban particularmente
rebeldes; como los yaquis y los mayas, fueron desterrados de sus lugares de origen y
obligados en lugares como Valle Nacional, el valle del Río Yaqui o Yucatán. Los yaquis se
regresaron a pie a Sonora desde las haciendas henequeneras de Yucatán.
El gobierno de Díaz favoreció la inversión extranjera. A partir de 1893, la cabeza de este plan
de desarrollo económico fue José Yves Limantour, de ascendencia francesa y miembro del
grupo de Los Científicos. Buena parte del capital invertido en México era francés, sobre todo
en banca, comercio, textiles y minería. En los ferrocarriles, la minería y el petróleo eran de
gran importancia las inversiones inglesas, estadounidenses, alemanas y españolas. Minas,
petróleo, ferrocarril, textiles, plantaciones de azúcar: la mayoría tenía capital extranjero.
Aparentemente el país prosperaba, creando estabilidad económica, pero ciertos sectores de
la sociedad seguían en su miseria ancestral.
Mientras tanto, el Congreso nombró como interino al señor Francisco León de la Barra
(porfirista), que entregó la presidencia a Madero en noviembre de 1911. En febrero de 1913,
Victoriano Huerta dio un golpe de Estado contra Madero, a quien mandó asesinar junto con
Pino Suárez en la "Decena Trágica", y gobernó como dictador hasta 1914. Contra él, se
levantaron numerosos grupos de las más diversas clases sociales y enarbolando las más
variadas banderas: en el noroeste, Álvaro Obregón encabezó la revuelta de los pequeña clase
media campesina, en Chihuahua Pancho Villa; en Coahuila, el gobernador Venustiano
Carranza se levantó al frente de los Constitucionalistas. Cuando logró la alianza con Obregón,
éste encabezó su ejército.
Periodo posrevolucionario: el Maximato
Mientras tanto, el ejército revolucionario se dividió en dos facciones: una, encabezada por
Carranza y Obregón, moderada y vinculada con los intereses de la burguesía norteña; y la
otra, con Zapata y Villa, más radicales y vinculados con los intereses de los campesinos. Los
vencedores fueron los primeros. De acuerdo con su promesa, cuando los Constitucionalistas
triunfaron, Carranza promulgó la Constitución de 1917 que rige actualmente en México, y
que con el tiempo, tras diversas modificaciones, incorporó varias de las demandas sociales
reivindicadas por los movimientos revolucionarios y sus antecesores (jornada de ocho horas,
libertad de cultos, salario mínimo, reparto agrario, nacionalización de los recursos naturales,
etc). Zapata fue asesinado en Chinameca en 1919, y cuatro años más tarde la misma suerte
tuvo Villa.
Revolucionarios tabasqueños.
Con la llegada de Obregón al poder en 1920, varios de los artículos constitucionales fueron
puestos en vigor. Para reconstruir la economía desincautó la banca y aceptó que el Comité
de Banqueros internacional iniciara negociaciones para que México pagara su deuda externa.
Asimismo, encargó la educación a José Vasconcelos, quien al frente de la Secretaría de
Educación Pública hizo una importante labor.
Obregón fue sucedido en el cargo por Plutarco Elías Calles, quien al poner en vigor el artículo
33 de la Constitución desató la Guerra Cristera, que enfrentó a los católicos contra el ejército
federal. Calles fundó el Banco de México Al final de su período, Obregón se reeligió, pero
fue asesinado en San Ángel antes de tomar posesión. El último día de su mandato, Calles
formó en papel al Partido Nacional Revolucionario (PNR).
Así dio principio al período, conocido como Maximato, porque había presidente, pero Calles,
como "Jefe Máximo de la Revolución Mexicana" era quien en realidad tenía el poder. El
Congreso nombró presidente interino a Emilio Portes Gil, quien en 1929 llegó a un acuerdo
con el clero que puso fin a la Cristiada. Además, tomó las medidas necesarias para que el
PNR, primer antecedente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), funcionara como
partido político y enfrentó los primeros efectos de la crisis de 1929.
Los otros dos presidentes del Maximato fueron Pascual Ortiz Rubio, quien llegó por
elecciones y en 1931 perdió, mediante arbitraje internacional, la soberanía sobre un territorio
lejano y casi desconocido: la Isla Clipperton o Isla de la Pasión, que pasó a manos francesas.
En su periodo se reavivó la lucha Cristera. Tras su renuncia fue presidente interino Abelardo
L. Rodríguez.
Lázaro Cárdenas del Río, el cual no sabia que hacer al llegar a poder el presidente electo para
el primer período sexenal de la historia de México posterior a la Revolución (1934-1940),
desterró a Calles, apoyado en su amplia popularidad entre la población más pobre y
mayoritaria. Dio gran impulso a la educación ("socialista") y al reparto de tierras. Es
recordado por la expropiación petrolera, acontecida el 18 de marzo de 1938, por la entrega
de los ferrocarriles a la administración obrera, por la creación del Instituto Politécnico
Nacional y por reorganizar al PNR en el Partido de la Revolución Mexicana (PRM) formado
por cuatro sectores: popular, obrero, campesino y militar. No obstante que inició con un
impulso radical, el gobierno de Cárdenas al final debió moderarse por el contexto de crisis
económica derivado de los pagos de las nacionalizaciones. Su sucesor, Manuel Ávila
Camacho, frenó el reparto agrario, concilió con la naciente clase burguesa industrial y
enfrentó la Segunda Guerra Mundial.
El Escuadrón 201, conocido como las Águilas Aztecas, fue una unidad mexicana de combate
aéreo que participó en la Segunda Guerra Mundial encuadrada dentro de la Fuerza Aérea
Expedicionaria Mexicana.
El 22 de mayo de 1942, México se une a los aliados en la segunda guerra mundial.
Su sucesor fue José López Portillo. Durante su gobierno la política de explotación petrolera
puso en operación el yacimiento del Complejo Cantarell, del cual se extrae hasta la fecha
gran parte del hidrocarburo mexicano que aporta 40 centavos por cada peso del presupuesto
nacional. Hubo un gran boom petrolero y a raíz de la caída de los precios en 1981 se desató
una gran crisis económica que desembocó en el control de cambios y la nacionalización
bancaria. Finalmente Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo forman lo que
se llamó el periodo del neoliberalismo. Con ellos se liquidaron o vendieron las más de 750
empresas del gobierno a la iniciativa privada nacional y extranjera, las llamadas
privatizaciones.
El 1 de enero de 1994 al entrar en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN) con Estados Unidos y Canadá apareció en escena el Ejército Zapatista de
Liberación Nacional el cual dijo buscar, mediante armas originalmente y después con
diálogo, desarrollar a los olvidados y pobres pueblos indígenas, habituales blancos de
violaciones, torturas y asesinatos por parte de militares y paramilitares.
Siglo XXI
En 2006 tras las elecciones generales del 2 de julio, el panista Felipe Calderón Hinojosa fue
electo presidente de México para el período del 1 de diciembre del 2006 al 30 de noviembre
del 2012. El candidato por la izquierda a la presidencia de la Nación, Andrés Manuel López
Obrador, desconoció los resultados electorales anunciados por el Instituto Federal Electoral
y acusó de fraude al presidente Vicente Fox. La Ciudad de México, se vio paralizada por una
manifestación de resistencia civil pacífica en contra de los resultados electorales.
En los primeros días de su gobierno, Felipe Calderón cumplió su supuesta promesa de mano
dura de actuar en contra del llamado crimen organizado y el narcotráfico e inició la Guerra
contra el narcotráfico, en la que se movilizó a un número considerable de elementos militares
hacia los focos de acción de dichos grupos dentro del país. El presidente subió el sueldo a los
militares y les pidió lealtad.
El 1 de diciembre de 2012 llegó a la presidencia Enrique Peña Nieto después de ganar las
elecciones del 1 de julio de ese mismo año. Elecciones que se caracterizaron por el regreso
del PRI al poder, derrotando al PAN, partido en el gobierno durante los dos sexenios
anteriores. El presidente Peña Nieto propuso una serie de reformas publicitadas como
estructurales para "mejorar la situación económica de México" y su "competitividad
internacional". Durante el gobierno de Peña Nieto, el dólar alcanzó un punto histórico, en
comparación contrastante con la devaluación del peso mexicano