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Universidad de los Hemisferios

Nombre: Anderson Loyo

Materia: Derecho Romano

Fecha: 14-09-2017

1.-Desde la fundación de Roma hasta las leyes de las XII Tablas

El Derecho Civil Papiniano o Ley Papiria

Esta suerte cabe a la colección comprensiva de las leyes del tiempo de los reyes,
compilada por el pontífice Máximo, Sesto, o Publio Papirio en el reinado del
último Tarquino, si se ha de dar fe a Dionisio de Halicarnaso y al jurisconsulto
Pomponio. Se le dio, según se dice, el nombre de Derecho Civil Papiniano y de
Ley Papiria, no porque Papirio añadiese nada propio, sino porque ordenó las
leyes que antes estaban esparcidas. De crear es que se limitaría este trabajo a
las leyes relativas al culto, viniendo a ser un libro de ritos destinado a los
sacerdotes, obra que comentó Granio Flaco en tiempos de Julio César.
Derecho de propiedad y familia
El derecho de propiedad es la base de la constitución de la familia. El jefe de la
sociedad doméstica es dueño de las personas, como lo es de las cosas que
corresponden a los que la componen; no son los vínculos naturales de la sangre,
sino los de la ley y los de la propiedad los que fijan las relaciones entre sus
miembros: la agnación, esto es, el parentesco civil, se sobrepone a los estrechos
lazos de la naturaleza. La mujer nunca es dueña de sí misma; cuando no está
en potestad paterna, queda sujeta a una tutela perpetua y sólo sale de ella para
entrar en poder del marido (convenire in manum viri), o con una fórmula patricia
y sacerdotal (per confarreationem), o por una venta imaginaria (per
coemptionem), o por una prescripción simbólica (per usum): de cualquier de
estos modos viene a ser hija de familia respecto de su marido; pero el matrimonio
no puede confundir las razas patricia y plebeya, que en cierto modo vienen a ser
dos diferentes naciones que habitan un mismo pueblo.

El Derecho, en la infancia del pueblo romano

Así sucedió en Roma: la ciencia del Derecho en el periodo que hemos referido,
no tenía existencia propia, sino que formaba una parte de los conocimientos que
en tan ruda edad constituían el saber humano.

2.-Desde la publicación de las Doce Tablas hasta Cicerón


Origen de diversas leyes romanas (Valeria, Horacia, Publilia, Hortensia y
Canuleya) y de los tribunos militares
Las ventajas que la plebe hasta aquí había conseguido, no eran suficientes para
satisfacer sus justas exigencias; estas naturalmente debían aumentar en
proporción del buen éxito que obtenían. Así es que después de las ley de las
Doce Tablas, vemos empeñarse, aún más obstinadamente que antes, la lucha
que sostenían con los patricios. A estas disensiones debieron sus origen las
leyes Valeria Horacia, Publilia, Hortensia, y Canuleya y la creación de los
tribunos militares

Los plebiscitos

Los plebiscitos, que eran los decretos de la plebe votados a propuesta de uno
de sus tribunos, vinieron por el contrario a ser la principal fuente del derecho civil
positivo, y no diferenciándose en los efectos de las leyes, llegaron a confundirse
con ellas y a llevar su nombre. En las asambleas de la plebe la preponderancia
era de las tribus rústicas, pues eran treinta y una, al mismo tiempo que sólo eran
cuatro las urbanas compuestas originariamente de los que no poseían bienes
inmuebles, y que llegaron a tener un número desproporcionado de ciudadanos.
En ellas se introdujo también la votación secreta.
Derecho no promulgado derivado de la costumbre, los edictos de los
magistrados y doctrina de jurisconsultos
El Derecho no promulgado presenta diversidad de orígenes, que tienen mayor
influencia aun que los del positivo: moderando el rigor austero del antiguo
derecho, sustituye a sus principios exclusivos otros más generales reconocidos
por todos los pueblos civilizados de la antigüedad. Se deriva de la costumbre, de
los edictos de los magistrados y de la doctrina de los jurisconsultos: estos dos
últimas fuentes, más adelante, pasarán a ser derecho escrito, como
observaremos oportunamente.

3.-Desde Cicerón hasta el imperio de Alejandro Severo

Los decretos de las asambleas del pueblo –en la forma de ley o plebiscito:
muy habituales al principio de este período

Los decretos de las asambleas del pueblo bajo la forma de leyes o de plebiscitos
nunca fueron más numerosas que al principio de esta época en medio de las
sangrientas disensiones que dividían a los ciudadanos. Muchos de estos
decretos conservaron gran importancia en el derecho civil, siendo después
objeto de las tareas de los jurisconsultos clásicos: la ley Julia y la Papia Popea
fueron las más fecundas en consecuencias.

Los emperadores se pronunciaban a través de edictos, decretos y


rescriptos
Además de los edictos, los emperadores daban decretos, esto es, pronunciaban
decisiones en los negocios judiciales que se sometían a su juicio, y rescriptos
llamados también epistolae, es decir, respuesta a las consultas sobre los puntos
de derecho privado que se les hacían: de estos diferentes modos de expresar
los príncipes su voluntad y de su fuerza respectiva hablaremos al comentar las
Instituciones de Justiniano.

4.-Desde Alejandro Severo hasta Justiniano

La propagación del cristianismo y la invasión de los bárbaros en las


provincias del Imperio romano, acontecimientos claves en este período
Dos grandes acontecimientos, nacidos ambos en el período que antecede, y
continuados en medio de las devastaciones que agitaron el imperio durante los
años que acabamos de reseñar, llaman preferentemente la atención por la gran
influencia que van a ejercer en los destinos del mundo y en las relaciones
jurídicas de los hombres: estos acontecimientos son la propagación del
cristianismo y la invasión de los bárbaros en las provincias del imperio romano.

Tribus bárbaras invaden el Imperio romano

Coincidieron con la propagación del cristianismo las invasiones de las tribus


bárbaras del Norte, que las armas romanas no podían contener. Con ellas se
abren en la historia las páginas sangrientas que cambian el aspecto del mundo,
y que empezando por introducir una ansiedad general, destruyen la seguridad,
fomentan la anarquía y el despotismo y concluyen por sumir a los pueblos en la
barbarie. Vencedores o vencidos, los bárbaros son siempre enemigos
formidables: los mismos medios que emplean los emperadores para evitar sus
incursiones, les sirven de aliciente para emprenderlas. Esta calamidad que había
comenzado ya en tiempo de los Antoninos, no podía menos de tomar cuerpo en
medio de la debilidad y de las luchas intestinas del imperio.

El papel de las escuelas públicas del Derecho de Roma, Constantinopla y


Berito

Las escuelas públicas del Derecho establecidas en Roma, en Constantinopla y


en Berito, ciudad de la Siria, sostuvieron la memoria y los escritos de los
jurisconsultos del periodo precedente, contribuyeron de este modo a que no
perecieron los libros que después habían de servir para la compilación de
Justiniano. En las escuelas de Constantinopla y de Berito había cuatro
profesores (antecessores), a que daban los títulos disertissimi, clarissimi,
illustres, y que por sus méritos en el magisterio llegaban a las dignidades de más
categoría, como la de comites consistorii, magistri. Los que se dedicaban a la
jurisprudencia debían concurrir a las escuelas por cinco años, si bien solo en los
tres primeros se les daba el nombre de auditores.

Bibliografía

Petit, E. F. G. (1989). Tratado elemental de derecho romano.

Argüello, L. R. R. A. (1988). Manual de derecho romano: historia e instituciones.


Astrea,

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