UNA CRÍTICA a

LA LEY de GARANTÍA de los DERECHOS

de la NIÑEZ

PABLO N. GONZÁLEZ
 UNA CRÍTICA a LA LEY de GARANTÍA de los DERECHOS de la NIÑEZ

D
urante los últimos meses, la ley de garantía de los derechos de la niñez ha causado
cierta controversia. Partiendo por la idea de una “autonomía progresiva”1, hasta el
discutido “enfoque de género” (además de una pésima redacción). El propósito
principal de este sistema de leyes es disminuir la discriminación hacia los menores.
Lamentablemente el modo en el cual esto se quiere lograr, contiene cierto “vacío legal” que
da prácticamente una total independencia de los menores.
La gran controversia que el sistema de garantías ha provocado en la comunidad cristiana
es en relación al enfoque de género. El cual ha sido enfocado a romper con toda diferencia
sexual en los menores. Es decir, el sistema impide que los individuos sean diferenciados
como hombres o mujeres desde una edad temprana. Esto no simplemente indica que los
niños puedan ser tratados como niñas o viceversa. Sino que también indica que ambos
pueden tener absolutamente el mismo trato. Lamentablemente esta información no llega a
nuestras iglesias, y tampoco es algo de lo que el “cristiano promedio” se quiera informar.
En el siguiente informe se expondrá la definición el sistema de garantías, su propósito, y
su enfoque de género. Y finalmente, se hará una crítica a lo expuesto desde la perspectiva
cristiana de este autor.

LA LEY Y SU DESTINO:

En primer lugar, nuestra crítica se enfocará en el destino de esta ley. Por lo cual, haré una
“exegesis” de ciertos artículos y escritos controversiales. Posteriormente aplicaré el escrito
a la vida diaria de todos los chilenos (siempre y cuando el texto produzca una aplicación
práctica). Y por último, se realizará una crítica al texto analizado (obviamente dese la
perspectiva cristiana-bíblica de este autor). Por lo tanto, procedo a analizar el texto.
El sistema de garantías ha sido «definido como el conjunto de políticas, instituciones y
normas orientadas a velar por el desarrollo físico, mental, espiritual y social de los niños, y
adolescentes, de acuerdo con la Política Nacional y los recursos dispuestos para tal
efecto»2. Esto quiere decir que el conjunto de normas incluidas en el sistema de garantías
tienen la finalidad de guardar el desarrollo integral de los menores. Y, este desarrollo se
hará de acuerdo con la política nacional y con los recursos disponibles para dicho fin. Todo
esto puede ser dividido de la siguiente manera:

 El sistema de garantías es un conjunto de políticas, instituciones y normas.

 Estas normas han sido creadas con el fin de guardar el desarrollo integral de los
menores.

1
La “autonomía progresiva” busca iniciar prácticamente una independencia en los menores, dependiendo esta
de la capacidad de cada uno.
2
Política Nacional de niñez y adolescencia: sistema integral de garantías de derechos de la niñez y
adolescencia, Pág. 73. Véase también págs. 29, 59, 65, 71 y 86. (para ver el documento ingresar a:
http://www.consejoinfancia.gob.cl/wp-content/uploads/2016/03/POLITICA-2015-2025_versionweb.pdf)
ultima vez revisado el 08.05.2017.

2
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 La forma en la cual se llevará a cabo el desarrollo de los menores será de acuerdo

con las políticas nacionales y los recursos disponibles.

Al tener en cuenta esta división, lo primero que podemos destacar es el conjunto de

normas que contiene el sistema de garantías. Pues, como se dijo anteriormente, el sistema
ha sido definido como un conjunto de políticas, instituciones y normas. Esto simplemente
significa todo el sistema es un conjunto de normas y políticas. Las que obviamente están
incluidas en el resto del texto. Por lo tanto cuando hablamos del sistema de garantías, en
realidad nos referimos simplemente de un sistema de normas.
Lo segundo que podemos destacar es el propósito de estas normas, el cual es guardar el
desarrollo integral de los menores. Es decir, guardar el desarrollo físico, mental, espiritual y
social de los niños y adolescentes. Esto tampoco tiene una mayor dificultad en su
interpretación, pues simplemente el gobierno busca velar por el desarrollo de los infantes.
O en otras palabras, proteger a los niños en su formación.
Y finalmente, lo tercero que podemos destacar de este sistema es: ¿En qué forma se
guardará el desarrollo de los pequeños? Esta pregunta se responde sola. El desarrollo de los
pequeños será de acuerdo con la política nacional y los recursos disponibles. Al igual que
en los puntos anteriores, no existen impedimentos en su interpretación. Pues simplemente
es un sistema de normas y leyes que buscan guardar el desarrollo de los pequeños. El
problema con todo esto es que se hará de acuerdo con la política nacional. Es decir que el
desarrollo de nuestros hijos será guardado de acuerdo con lo que la política nacional piensa
que es correcto. Ahora, todo lo que la política nacional considera correcto se encuentra en
el documento citado anteriormente.3
El problema que existe con todo esto, es que uno de los desarrollos que se busca guardar
es el desarrollo espiritual. Lo cual, a simple vista, llama mi atención. ¿Cómo será posible
que la política nacional guarde el desarrollo espiritual de nuestros hijos? El texto solo se
limita a decir que el «estado no negará al niño a que pertenezca a (…) grupos religiosos
(…), ni a profesar y practicar su propia religión».4 Es decir que estado no impondrá una
religión obligatoria a los pequeños. Por lo cual si el niño quiere ser cristiano, el estado se lo
permitirá; si el niño quiere ser católico, el estado actuará de la misma manera; incluso, si el
menor quiere ser budista, el estado no afectará en su elección. En palabras simples, el
estado no discriminará la religión que el menor profese ser. Esta es la forma en la que el
estado guardará el desarrollo espiritual de los niños y adolescentes: disminuyendo la
discriminación religiosa.
Pero el sistema de garantías no se enfoca simplemente en el desarrollo espiritual. Pues,
como se mencionó anteriormente, su enfoque es guardar el desarrollo integral de los niños
y adolescentes del país. Con esto me refiero al desarrollo físico, mental, espiritual y social
3
Véase nota 1
4
Política Nacional de niñez y adolescencia: sistema integral de garantías de derechos de la niñez y
adolescencia, Pág. 60. Véase también págs. 88 y 96.

3
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de los niños y adolescentes del país. Y para guardar este “desarrollo integral”, el sistema
utiliza el mismo método anteriormente visto. El cual puede ser resumido a tres simples
palabras: disminuir la discriminación. Ese es el gran proyecto del sistema de garantías.
Simplemente busca disminuir la discriminación por sexo, religión, nacionalidad, o estado
mental y físico, entre otros.
Teniendo esto último en consideración, pareciera que el sistema de garantías busca el
bien de las futuras generaciones por medio de la inclusión social. Incluso, podría decirse
que este sistema busca la paz mundial. Pero en realidad, este proyecto busca destruir a las
familias del país. Y este plan ha sido elaborado tan cuidadosamente, que no nos percatamos
cómo es que somos conducidos a la ruina. A continuación, analizaremos dos puntos
cruciales en este plan.

LA LEY SY SU ENFOQUE DE GÉNERO:

Anteriormente, analizamos cuál era el propósito del sistema de garantías. Y llegamos a

la siguiente conclusión: El sistema de garantías busca guardar el desarrollo integral de los
menores. Pero, como se expuso anteriormente, el problema es que este desarrollo se
guardará de acuerdo con lo que la política nacional considere correcto. Antes de analizar
cualquier texto, debemos comprender cuál es la postura que tiene nuestro país respecto a la
identidad sexual de los menores. Para esto, nos es necesario analizar ciertas palabras
empleadas en el sistema de garantías, las cuales nos ayudarán a comprender cuál es el
propósito del “enfoque de género” en el mismo sistema.
En primer lugar, se habla hoy de una identidad de género. Esto, según Wikipedia, alude
a la percepción subjetiva que un individuo tiene sobre sí mismo en cuanto a su
propio género, que podría o no coincidir con sus características sexuales.5 O en otras
palabras, la identidad de género alude al género con el cual el individuo se identifica,
independiente de los órganos sexuales que tenga. Es decir que un hombre puede
identificarse con el sexo femenino, a pesar de que sus genitales digan lo contrario, y
viceversa. Con esta ideología nace el pensamiento de los “transgéneros”.
El segundo término a analizar es orientación sexual. Esto más bien se refiere a la
atracción sexual que el individuo posee. Lo cual, hoy en día es dividido en cuatro grupos:
(1) heterosexualidad (atracción por el sexo opuesto), (2) homosexualidad (atracción por el
mismo sexo), (3) bisexualidad (atracción por ambos sexos) y (4) asexualidad (sin atracción
sexual).
El tercer y último término a analizar es igualdad de género. Este es un término mal
utilizado el día de hoy. Pues lo único que quiere expresar es que tanto hombres como
mujeres deben recibir un trato igualitario. Con esto no me refiero a una igualdad sexual,
sino más bien a un trato respetuoso tanto para hombres como para mujeres. El problema

5
Wikipedia: Identidad de género

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aquí es el abuso que se le dan a estas palabras, utilizadas el día de hoy para dar a entender
que tanto hombres como mujeres tienen exactamente las mismas capacidades. Cuando en
realidad, las limitaciones de ambos sexos son completamente distintas. De la misma
manera, resalto que la igualdad de género es aplicable simplemente a los derechos (p.ej. el
derecho a voto) y al respeto; pero el día de hoy, este término ha sido aplicado a la misma
composición física el ser humano. A esto lo llamo “igualdad sexual”
Dos de estos términos, identidad de género y orientación sexual, son empleados
explícitamente en la política nacional. El tercer término, igualdad de género, se desprende
implícitamente del siguiente párrafo:
Es primordial que exista una coordinación de los órganos especializados del Estado
para avanzar hacia una conceptualización y aplicación más amplia del Enfoque de
Género, donde se incluya la identificación y el análisis de las desigualdades,
discriminación, estigmatización y prejuicios por motivo de sexo, de identidad de
género y de orientación sexual de las personas.6
De este texto se desprende el propósito principal del enfoque de género. El cual, al igual
que el resto del documento, se resume en la erradicación de la discriminación. En este caso,
por el sexo del individuo. Por lo cual, se desprende implícitamente el propósito de lograr
una igualdad de género; es decir que hombres y mujeres poseen exactamente los mismos
derechos y deben ser tratados con el mismo respeto. Vuelvo a resaltar que esta idea, desde
una perspectiva general, no es mala; pero hoy en día existe un abuso con respecto a esto. Al
volver a nuestro punto, podemos decir que el enfoque de género busca eliminar la
discriminación por sexo. Para cumplir con esto, dice la política nacional, se debe apuntar a
lo siguiente:

El enfoque [de género] apunta al conjunto de prácticas, símbolos, estereotipos,

creencias, normas y valores sociales que se construyen a partir de la diferencia sexual,
la que define y prescribe modos y posibilidades de ser y a ser diferenciados para
hombres y mujeres desde la primera infancia, y a lo largo del curso de vida. Esta
distinción no sólo se ve reflejada en procesos de aprendizaje de estereotipos y de roles
específicos, sino que conlleva, muchas veces, a establecer relaciones asimétricas de
poder que afectan de manera diferente las oportunidades de integración social en los
ámbitos que las niñas y niños valoran.7

A simple vista el enfoque de género parece ser algo inofensivo. Pero en vez de generar
una igualdad de género se busca crear una igualdad sexual. Esto se puede desprender por el
enfoque que se busca crear. Pues, como se desprende del texto, toda práctica construida a
partir de la diferencia sexual, nos delimita a ser diferenciados para hombres y mujeres

6
Política Nacional de niñez y adolescencia: sistema integral de garantías de derechos de la niñez y
adolescencia, Pág. 62
7
Política Nacional de niñez y adolescencia: sistema integral de garantías de derechos de la niñez y
adolescencia, pág. 61 [énfasis agregado]

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desde la primera infancia. Se dice que son estas diferencias las que afectan a los pequeños
en la integración social. Y se desprende que todo esto, según la política nacional, produce
estereotipos de roles que producen relaciones desiguales. Por lo tanto, lo que se busca con
el enfoque de género en la educación de los pequeños, es romper con todo tipo de
diferencia sexual. Es decir que tanto un niño como una niña son exactamente iguales.
Lamentablemente, en nuestra sociedad posmodernista la igualdad de género (o más bien,
igualdad sexual) es algo normal. A los ojos de esta sociedad tanto un hombre como una
mujer son exactamente iguales no solo en sus derechos, sino que también en la
composición física. Esto es exactamente lo que busca el derecho de garantías en su enfoque
de género. En vez de crear un trato justo en los pequeños a pesar del sexo, lo que busca es
crear una igualdad sexual desde una edad temprana. De manera que los pequeños nos sean
diferenciados para hombres y mujeres, sino que sean enseñados que ambos sexos terminan
siendo prácticamente lo mismo. Lo que se busca en este enfoque de género, es alimentar la
idea de que existe una diversidad sexual y que esto es algo completamente natural. Cuando
la realidad es completamente distinta.
El enfoque de género, al fomentar la idea de una igualdad sexual, afecta completamente
la educación de los menores. Se dice que en este punto el sistema de garantías busca
romper con toda diferencia sexual. Por lo cual se busca eliminar todo estereotipo de esta
índole. Si esto es llevado a la práctica, los varones podrán usar faldas y jugar con muñecas
con toda libertad. Así también, las bebes podrán usar “ropita de hombre” porque “no existe
una diferencia sexual con los colores les bebe”. La realidad del enfoque de género no es
simplemente disminuir la discriminación por sexualidad; sino que también es dar una
libertad sexual en los menores. Promoviendo una feminidad en los hombres y una
masculinidad en las mujeres desde una edad temprana. Al fin y al cabo, este enfoque busca
promover la “diversidad de género”.

Soli Deo Gloria