Peter Wohlleben

Escucha
hablar
a los árboles
un pequeño viaje de descubrimiento
a través del bosque
Traducido por Anna Álvarez
 Índice
prefAcio 6
8 ¿Cómo funciona ¿cómo respiran los árboles?   10
un árbol? ¿puede un árbol adelgazar?   12
¿puede un árbol tener granos?   14
¿cómo hace un árbol para mantenerse derecho?   16

18 La vida familiar ¿cómo hacen los árboles para tener un bebé?   20

en el bosque ¿los árboles tienen abuelos?   22
¿qué aprenden los árboles en la escuela?   24
¿todos los animales tienen una familia?   26

28 En el bosque ¿los árboles pueden hablar?   30

todo se cuenta ¿hay internet en el bosque?   32
¿qué cuentan las aves?   34
¿Cómo se comunican los gatos monteses
y los ciervos?   36

38 Cada árbol ¿DE QUÉ TIENEN MIEDO LOS ÁRBOLES?   40

es único ¿PREFIEREn ALGUNOS ÁRBOLES ESTAR SoLOS?   42
¿HAY ÁRBOLES VALIENTES?   44
¿QUÉ ÁRBOLES baten RÉCORDS?   46

48 Los árboles ¿CÓMO BEBEN LOS ÁRBOLES?   50

son grandes ¿LOS BOSQUES PUEDEN PRODUCIR LLUVIA?   52
bebedores ¿CÓMO SE LIMPIA EL BOSQUE?   54
¿POR QUÉ ARDE EL BOSQUE?   56

58 Los árboles ¿pOR QUÉ LOS ARBUSTOS SON TAN PEQUEÑOS?   60

y sus vecinos ¿QUIÉN TREPA POR LOS ÁRBOLES?   62
¿CUÁNTOS CORZOS VIVEN EN EL BOSQUE?   64
¿POR QUÉ NO CRECEN MUCHAS FLORES EN EL BOSQUE?   66
68 La vida de ¿Quién vive en lo alto del árbol?   70
los animales ¿Quién vive en las hojas?   72
del bosque ¿quién vive en la oscuridad?   74
¿dónde viven los corzos y los jabalíes?   76

78 ¿Qué saben ¿los animales van a la escuela?   80

hacer los ¿cómo de inteligentes son los insectos?   82
animales? ¿quién es el mejor detective?   84
¿QUÉ ANIMALES TIENEN ANIMALES DOMÉSTICOS?   86

88 En el bosque ¿POR QUÉ CRECEN HONGOS en LOS ÁRBOLES?   90

también hay ¿POR QUÉ UN ÁRBOL SE PONE ENFERMO?   92
problemas ¿Cómo sabemos que un animal está enfermo?   94
de salud ¿de qué tienes que cuidarte en el bosque?   96

98 Las cuatro ¿Cómo se dan cuenta los árboles de

estaciones que ha llegado la primavera?   100
del bosque ¿Los árboles transpiran en verano?   102
¿Por qué los árboles pierden sus hojas en otoño?   104
¿De qué viven los árboles y los animales en invierno?  106

108 El bosque ¿Para qué necesitamos LA madera?   110

y nosotros ¿Por qué NOS TEMEN MUCHOS ANIMALES?   112
¿Son peligrosos los lobos?   114
¿de quién es el bosque?   116

118 Los árboles ¿Por qué es importante que haya árboles en la ciudad?  120
y los animales ¿Por qué a los árboles no les gustan los perros?   122
en la ciudad ¿Qué hacen los árboles por la noche?   124
¿Qué animales viven en la ciudad?   126

Créditos de fotografías   128
 ¡Sigue mis pasos y
descubre el bosque!

D esde hace veintiséis años, organizo excursiones

para niños por el bosque y siempre me ha
parecido muy aburrido limitarme a presentar las
diferentes especies de árboles que existen. ¿No te
parece mucho más atractivo poder morder una rama
para probar su sabor? ¿O descubrir el Internet del
bosque? ¡Porque de verdad existe! Los árboles están
interconectados e intercambian mensajes. Viven en
familia, se ayudan unos a otros e incluso saben contar.
Parece un cuento de hadas, pero es la pura realidad.
El bosque es un lugar apasionante, mucho más que
una sucesión de árboles. Todo esto se lo enseño a los
niños en mi Academia del Bosque, y ahora te lo estoy
explicando a ti también gracias a este libro.

M ientras paseamos por el bosque también hablamos de los animales.

Por cierto, ¿cómo vive un jabalí? ¿Es peligroso toparse con un lobo?
¿Las crías de los animales van a la escuela?

S iempre es mejor hacer las cosas por sí mismo y resulta muy divertido
resolver enigmas: con este libro podrás realizar experimentos e intentar
contestar unas asombrosas preguntas. Nuestro programa también incluye
algunas exploraciones. Juntos viajaremos por ejemplo a África y América.
Sin olvidar la ciudad: entre las casas y por las calles viven muchos más árboles
y animales de lo que los humanos se imaginan. Algunos se sienten incluso
particularmente a gusto en ese entorno, donde podrás convertirte también en
un/a experto/a en la naturaleza.

6
H e disfrutado mucho escribiendo este libro. Y me encantó el día
en que sacamos las fotos para el libro con Elias, Jonathan, Nele y
Nele, Mia, Finn, Miko, Romy, Sophie y Jan.

M e acompañaron en cada experimento y nos reímos mucho. Fue entonces

cuando comprendí una cosa importante: incluso cuando hayas terminado el
libro y llevado a cabo todos los experimentos, el bosque seguirá teniendo secretos
que revelarte. El día que soplamos pompas de jabón a través de un leño de madera
(¡te puedo asegurar que funciona!), Romy empezó de pronto a interesarse por los
árboles y a recoger ramas de formas extrañas para llevárselas a casa.

C ada día se puede descubrir algo nuevo en el bosque —incluso yo que

soy guarda forestal, nunca dejo de descubrir cosas nuevas—. ¡Sígueme
y recorre conmigo este libro y los caminos del bosque!

En este libro te iré enseñando

cosas que tú podrás buscar
o experimentar en el bosque.
Recuerda que siempre tienes que ir
acompañado por un adulto. Ya sabes
que el fuego es peligroso. Y si tienes
alergias, te aconsejo que no te
lleves nada a la boca ni comas nada
mientras estés en el bosque.

7
8
¿Cómo
funciona
un árbol?

El cuerpo del árbol es gigantesco. Al

igual que el tuyo se compone de varias
partes. posee algo parecido a huesos,
venas y piel. pero, por cierto,
¿cómo respira el árbol?

9
 ¿Cómo respiran
los árboles?
Para los árboles, las hojas son esenciales. ¿Sabes por qué?
Gracias a ellas, ¡los árboles pueden prepararse su propia
comida! Cuando tienen hambre —los árboles siempre tienen
hambre—, basta con que orienten sus hojas hacia la luz.

L a luz les proporciona a las hojas la energía

necesaria para fabricar azúcar mezclando un
poco de agua y de aire. Estarás sorprendido:
¿Las hojas necesitan aire? ¿Pueden respirar como
tú y yo? Pues sí, las hojas inspiran y expiran e
incluso lo hacen… por la boca. Tienen una especie
de labios, bastante parecidos a tu boca, que
pueden abrirse y cerrarse. Sin embargo, existe
una diferencia importante con la tuya: el árbol no
tiene una sola boca, sino miles. Son minúsculas
y se encuentran debajo de las hojas. Cuando el
tiempo es muy seco y caluroso, las hojas cierran
sus bocas. Al respirar pierden agua, al igual que
tú. Si quieres averiguarlo, echa tu aliento sobre
un espejo y verás cómo se queda empañado (tu
respiración causa un fenómeno de condensación).
Cuando cierras la boca, puedes seguir respirando
El alerce se vuelve
amarillo en otoño, por la nariz. Asimismo, aunque cierre todas sus bocas, el árbol
al igual que los árboles no se ahoga. ¿Y sabes por qué? Pues porque puede seguir
de hoja caduca.
respirando a través de su corteza y de sus raíces.

L as hojas están cubiertas de una capa de cera y por

eso relucen por la parte superior. También es esa
parte la que queda expuesta al sol. Como las hojas son
muy finas, corren el riesgo de resecarse muy rápido: la
cera sirve de capa protectora y limita este proceso. De esta
Así se ven las bocas de
manera no les puede pasar nada malo. los árboles a través del
microscopio.

10
C ada árbol tiene hojas distintas. Las hojas del carpe, por
ejemplo, son dentadas (o sea, parecidas a los dientes de una
sierra) mientras que las del roble son onduladas. Existe además
¿Lo sabías?
una gran diferencia entre los árboles de hoja perenne (llamados
también coníferas) y los árboles de hoja caduca. Las hojas caducas
son largas y anchas. En cambio, las hojas perennes se asemejan a
pequeños pinchos y a menudo pican —no te acerques demasiado
a ellas—. Así se defienden las coníferas de los corzos y los ciervos:
¡les resulta imposible comerse aquellas hojas!
Los árboles caducos pierden sus hojas en invierno mientras que
el haya
los árboles perennes conservan las suyas porque allí donde viven Al haya también la llaman «madre
hace mucho frío. Los inviernos son largos y los veranos muy cortos. del bosque». Sin la intervención
Por eso es mejor que permanezcan siempre verdes. De este modo, del hombre, nuestros bosques se
cuando regrese el buen tiempo al volver la temporada buena, los compondrían casi exclusivamente
árboles ya estarán preparados para renovar sus fuerzas. Si no fuera de hayas. Su corteza es plateada y
lisa. Pero cuando el haya cumple
así, apenas les daría tiempo a rehacer todas sus hojas y a fabricar
200 años, alcanza la mitad de su vida
azúcar durante el verano. y las cosas van cambiando: ¡empieza
Las hojas son muy sensibles y no les gusta el frío. Las hojas a tener arrugas! No sé si se trata de
caducas, como las del roble o del haya, se congelarían a causa líneas de expresión, pero lo cierto es
del frío: por eso se caen antes del invierno. Las hojas de muchos que resulta importante para muchos
árboles perennes, como el abeto, contienen aceite: éste es su animales. El pico mediano (una
secreto para poder resistir las heladas. avecilla de cresta roja), por ejemplo,
no logra agarrarse a la corteza lisa

S
del haya joven. Tiene que esperar a
in embargo, existe un árbol perenne que se comporta como
que la corteza se vuelva áspera para
un árbol de hoja caduca: el alerce. En otoño, se vuelve amarillo fijar el domicilio en el bosque. Cada
y pierde las espinas. Por eso mucha gente piensa que en invierno tres o cinco años, el haya florece y
está muerto, pero en realidad sólo está hibernando. produce frutas llamadas hayucos.
Están protegidas por una cáscara
cubierta de pequeñas espinas, pero
son sedosas por dentro. Los hayucos
te pueden servir para fabricar

Q uiz
animalitos divertidos.

¿Quién tiene más espinas /hojas?

el haya el abeto
captar tanta luz como un árbol caduco, el abeto necesita muchas más espinas.
son mucho más pequeñas que las hojas del haya. Por lo tanto, para poder
cuenta con más de 10 millones de espinas. ¿Por qué? Pues porque las espinas
El abeto. El haya posee unas 200.000 hojas mientras que el abeto adulto

11
 ¿Puede un árbol
adelgazar?
Aunque no lo parezca, un árbol adulto pesa lo suyo. Puede llegar
a pesar más que cinco coches juntos. El tronco del árbol es muy
resistente, lo que le permite no desplomarse bajo su propio peso.

T ambién por eso el árbol está hecho de madera. Igual que tú tienes
huesos, él tiene madera, y, en realidad, ese es su esqueleto... Sin huesos
tu cuerpo sería blando como una muñeca de trapo. ¡Ni siquiera podrías
ponerte de pie! Con los árboles pasa lo mismo. Necesitan madera para
poder mantenerse en pie. Es un material tan resistente que puede soportar
el peso de árboles gigantescos.

S i observas el corte de un tronco, podrás distinguir numerosos círculos

llamados anillos. Cada año, un anillo nuevo se dibuja bajo la corteza y
así, cada vez, el tronco se va haciendo más gordo. Fíjate bien y cuenta los
anillos, desde el exterior hacia el centro. Justo en el medio está el primer
anillo: cuando se formó, el árbol sólo tenía un año. Mientras un árbol vive,
no se puede conocer con exactitud su edad, ya que los anillos sólo son
visibles en el tocón.

¡Te toca!
Coge un leño de abedul, a ser posible de madera seca. Si no
tienes en casa, pregúntales a tus amigos. Puede ser que ellos lo
tengan… Entre la leña que se vende para la chimenea suele haber
leños de abedul. Los podrás reconocer por sus marcas blancas
y negras. Unta jabón de lavavajillas a una de las extremidades
del leño, aprieta los labios en el otro lado y sopla muy fuerte.
En principio deberías ver brotar pequeñas pompas de jabón. Si
ocurre es porque el aire que has soplado va circulando por los
pequeños conductos de la madera hasta alcanzar el jabón.

12
 Q uiz
¿Cuántos años tiene este árbol?
tienes que contar los anillos (desde el exterior
hacia adentro)
10 años 20 años 30 años
20 años

L a madera que se genera dentro del tronco ya no puede desaparecer ni

transformarse, va creciendo por debajo de la corteza. Ahora entiendes por
qué un árbol no puede adelgazar. Al contrario: siempre sigue engordando.
¡Y menos mal! Sigue creciendo, se hace más ancho, más alto, y por lo tanto se
hace cada vez más pesado. Para poder aguantar su propio peso, no
le queda más remedio que tener un tronco grueso. Los árboles son
como nosotros: los adultos son más fuertes que los niños.

E xiste otro punto en común entre los árboles y los seres humanos:
las venas. Por nuestras venas corre sangre; los árboles poseen
largos conductos que parecen tubos diminutos, por los cuales corre
agua, desde las raíces hasta la copa. Si te fijas en los anillos de un
tocón, quizás puedas verlos. Parecen pequeños agujeros. El agua
sólo corre por los anillos exteriores. Por eso en verano, cuando el
árbol trabaja mucho, la parte que está justo debajo de la corteza se
queda húmeda. En cambio, el interior del tronco permanece seco.
Ahí ya no ocurre nada, el árbol no siente nada. Por eso no importa
que la madera del centro empiece a dar señales de pereza. Aunque se
forme un hueco en el centro —el tronco se parecerá entonces a un
conducto de chimenea— el árbol permanecerá estable.
Me queda una pregunta por contestar: ¿por qué los árboles
necesitan un tronco? ¿No podría crecer la copa del árbol
directamente desde las raíces? Los árboles necesitan un tronco para
alzarse por encima de los demás vegetales. Sin él no serían más que arbustos Una gran haya necesita un
tronco grueso para poder
—que de hecho vienen a ser árboles sin tronco—. Siendo las plantas más altas llevar el peso de la copa.
del mundo, los árboles no tienen motivo para temer que nadie los sobrepase…
¡a no ser que sea otro árbol, claro! Sin embargo, veremos más adelante que
algunos robles pueden ser cobardes…

13
 ¿PUEDE UN ÁRBOL
TENER GRANOS?
La humedad es una señal de buena salud
para la madera. Esto ya lo has entendido.
En pleno verano, cuando el sol calienta
el tronco, el árbol no se reseca porque
está protegido por su corteza, que es
como la piel del árbol.

L a corteza protege el árbol así como la piel te

protege a ti. El proceso es el mismo: si uno
arranca un pedazo de corteza, el árbol pierde agua.
Es como si sangrara. Ahora entiendes por qué no
podemos arrancar nada a los árboles. Cada árbol
Así se ve una cicatriz en forma posee una corteza diferente. La del haya es lisa,
de grano. Bajo la corteza solía
mientras que la del roble es áspera y arrugada. ¡Todo depende de la edad que
haber una rama.
tengan! Una vez más, ¿ves lo parecidos que son los humanos y los árboles?
Tú tienes la piel lisa, pero las personas mayores como tu abuela y tu abuelo
tienen muchas arrugas. Cuando nos reímos, las mejillas se estiran hacia arriba
—se suelen llamar líneas de expresión— y el rostro acaba conservando huellas
de ello. No sé si los árboles pueden reírse, pero de algo estoy seguro: tienen
más y más arrugas a medida que van envejeciendo. El tronco del haya pierde

¡Te toca!
Puedes crearte un álbum con los diferentes tipos de corteza
que existen. Necesitas un folio y lápices pastel. Apoya el
papel en el tronco, sujétalo con una mano contra la corteza
y coloréalo con la otra cuidando de que tu lápiz permanezca
inclinado. Poco a poco verás aparecer la corteza en color. De
esta manera podrás tomar las huellas de las cortezas de los
diferentes árboles y coleccionarlas.

14
 Q uiz
su lustre y se agrieta. ¡Pero no antes de que cumpla
200 años! El caso del roble es diferente: con 20 años Muchas personas dejan grabados
ya empieza a presentar arrugas profundas. sus nombres en la corteza. Pero
¿qué pasa cuando crece el árbol?

E stas arrugas van apareciendo en la corteza porque

cada año los árboles se hacen más gordos. Si la
Al crecer el árbol, los nombres
se encuentran cada vez más alto.
corteza no creciera también, se desgarraría como los LOS NOMBRES NO SE MUEVEN.
botones de una camisa demasiado ajustada. Para
evitarlo, la corteza va creciendo a medida que crecen
los anillos. La corteza vieja, en el exterior, ya está
muerta. Por eso se quiebra y se forman arrugas en los
árboles.

D el cuerpo humano se van cayendo poco a

poco pedacitos de piel ya muertos —¡del tuyo
también!—. Cada día pierdes miles de trocitos de piel
pie del árbol sólo se hace más gordo.
Permanecen donde están. Sólo se eleva la parte superior; el

minúsculos, partículas de tus brazos, de tus piernas, de

tu cabeza o de tu vientre! Esto tiene una explicación sencilla: la piel siempre
vuelve a crecer. Igual ocurre con los árboles. El haya o el abeto, por ejemplo,
pierden muchos fragmentos de corteza y sus troncos parecen completamente
lisos porque sólo les queda la capa de corteza más reciente.
Al contrario, el roble y el pino pierden muy poca corteza, por lo que parece
muy espesa. Cuando queda demasiado apretada, la corteza se quiebra y así se
van formando profundas arrugas. Así pues, las arrugas no dependen únicamente
de la edad del árbol sino también de la especie.

D urante la vida de un árbol, se forman cicatrices en el tronco que reflejan

lo que el árbol ha vivido. La cicatriz más común se debe a la caída de una
rama ya muerta. El árbol suele cubrir el agujero en su tronco reconstituyendo
madera y corteza. Durante este proceso se forma una marca ovalada parecida
a un grano. La altura te indicará cuál era el grosor de la rama —equivale a la
mitad de la cicatriz.
Algunas hayas están cubiertas de cicatrices en las que se puede observar
algo blanco, parecido a moho. En realidad, se trata de pulgones envueltos en
algodón, como diminutas ovejitas, que chupan la savia de los árboles. Cuando
ocurre, la corteza queda herida y ya no es tan bonita como antes.

15
 ENLIBRERÍ
AS
APARTI
RDEMAYO201
8