You are on page 1of 538

AUTORES CUBANOS

La Habana, 2007
Datos CIP- Editorial Ciencias Médicas

Pediatría / Colectivo de autores; Editores


científicos Ernesto de la
Torre Montejo y Eduardo José Pelayo
González-Posada. La Habana:
Editorial Ciencias Médicas, 2007.
5t. (1358 p.) Figs. Cuadros. Tablas.

Incluye una tabla de contenido general. Incluye


una tabla de contenido del tomo. El libro está di-
vidido en 5 partes con 41 capítulos con sus auto-
res. Incluye bibliografías.
ISBN 959-212-196-6
ISBN 959-212-199-0

WS 200

1. PEDIATRIA 2. ENFERMEDADES
RESPIRATORIAS
3. HIPERSENSIBILIDAD 4. ENFERMEDADES
HEMATOLÓGICAS
5. REUMATOLOGIA 6. OFTALMOLOGIA

Edición: Marta Trigo Marabotto y Dra. Nancy Cheping Sánchez


Diseño: DI. José Manuel Oubiña González
Ilustraciones: Manuel Izquierdo Castañeda
Emplane: Amarelis González La O y Xiomara Segura Suárez

© Colectivo de autores, 2007

© Sobre la presente edición:


Editorial Ciencias Médicas, 2007

Editorial Ciencias Médicas


Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas
Calle I No. 202 esquina a Línea, El Vedado, Ciudad de La Habana, CP 10400, Cuba.
Teléfono: 832-5338/ 838-3375
ecimed@infomed.sld.cu
Editores científicos

Dr. Ernesto de la Torre Montejo


Doctor en Ciencias
Especialista de II Grado en Hematología
Profesor Titular y Consultante de Pediatría
Profesor de Mérito

Dr. Eduardo José Pelayo González-Posada


Especialista de II Grado en Pediatría
Profesor Titular y Consultante de Pediatría
Profesor de Mérito
AUTORES

PARTE XII. APARATO RESPIRATORIO PARTE XIV. HEMATOLOGÍA

Dr. José A. González Valdés Dr. Ernesto de la Torre Montejo


Especialista de II Grado en Pediatría Doctor en Ciencias Médicas
y Administración de Salud Especialista de II Grado en Hematología
Profesor Titular de Pediatría
Profesor Titular y Consultante de Pediatría.
Dra. Eva Svarch Guerchicoff
Dra. Gladys Abreu Suárez
Doctora en Ciencias Médicas
Especialista de II Grado en Pediatría
Especialista de II Grado en Hematología
Profesora Auxiliar de Pediatría
Investigadora Titular
Profesora Consultante
Dr. Manuel Rojo Concepción
Doctor en Ciencias Médicas. Dr. Andrea F. Menéndez Veitía
Especialista de II Grado en Pediatría Especialista de II Grado en Hematología
Profesor Titular y Consultante de Pediatría Investigador Auxiliar
Profesor Auxiliar
Dr. Roberto Razón Behar
Doctor en Ciencias Médicas. Dr. Juan Carlos Jaime
Especialista de II Grado en Pediatría Especialista de I Grado en Hematología
Profesor Titular y Consultante de Pediatría Especialista de I Grado en MGI
Investigador Agregado

Dr. Sergio Machín


Especialista de II Grado en Hematología
PARTE XIII. ALERGIA Investigador Auxiliar
Profesor Asistente
Dr. Rubén Rodríguez Gavaldá
Doctor en Ciencias Médicas
Dr. Aramís Núñez Quintana
Especialista I Grado en Alergología
Especialista de I Grado en Hematología
Profesor Emérito Aspirante a Investigador
Instructor
Dra. Mercedes Jiménez Martínez
Especialista I Grado en Alergología Dr. Alejandro González Otero
Especialista de II Grado en Hematología
Dra. Cecilia Grisel Martínez Abreu Investigador Auxiliar
Especialista I Grado en Alergología Profesor Auxiliar

Dr. Reemberto Cantero Gutiérrez Dra. Delfina Almagro Vázquez


Especialista I Grado en Alergología Doctora en Ciencias
Profesor Asistente Especialista de II Grado en Hematología
Investigadora Titular
Dr. Ariel Jesús Jauma Rojo Profesora Consultante
Máster en Enfermedades Infecciosas
Especialista I Grado en Inmunología Dra. Luz Marina Pérez Torres
Profesor Instructor Especialista de I Grado en Hematología
PARTE XV. REUMATOLOGÍA Dr. Carlos E. Mendoza Santiesteban
Especialista de I Grado en Fisiología Normal
Dra. Gloria Varela Puente † y Patológica
Doctora en Ciencias Médicas Profesor Asistente
Especialista de II Grado en Pediatría Diplomado en Neurooftalmología y Retina
Profesora Titular y Consultante de Reumatología Pediátrica
Dra. María Teresa de Jesús Méndez Sánchez
Dra. Cecilia Coto Hermosilla Especialista de II Grado en Oftalmología
Especialista de I Grado en Pediatría
Profesora Instructora
Especialista de II Grado en Reumatología
Profesora Auxiliar de Pediatría
Dra. Rosa María Naranjo Fernández
Dra. Melba Méndez Méndez Especialista de II Grado en Oftalmología
Especialista de I Grado en Pediatría Profesora Asistente

Dr. Víctor Hernández González Dra. Daysi Vilches Lescaille


Especialista de I Grado en Reumatología Especialista de I Grado en Oftalmología

Dr. Ernesto Alemañy Rubio


PARTE XVI. OFTALMOLOGÍA Especialista de I Grado en Oftalmología

Dr. Eugenio Jara Casco Dra. Nereida Martínez Suárez


Doctor en Ciencias Médicas Especialista de II Grado en Oftalmología
Especialista de II Grado en Oftalmología
Profesor Instructor
Profesor Auxiliar de Oftalmología

Dra. Rosaralis Santiesteban Freyxas Dr. Alberto González García


Doctora en Ciencias Médicas Especialista de I Grado en Oftalmología
Especialista de II Grado en Oftalmología Profesor Asistente
Investigadora Titular
Profesora Titular de Oftalmología Dra. Elizabeth Escalona Leyva
Especialista de I Grado en Oftalmología
Dra. Gladis Colon Serra Profesora
Doctora en Ciencias Médicas
Especialista de II Grado en Oftalmología Dra. Dora Hitchman Barada
Profesora Titular de Oftalmología Especialista de II Grado en Oftalmología
Profesora
Colaboradores en Oftalmología
Dra. Clara Gómez Cabrera
Dr. Washington Rossel Puig Especialista de II Grado en Oftalmología
Especialista de I Grado en Morfología Profesora Asistente
Profesor Consultante

Dr. Enrique Mendoza Santiesteban Dr. Elier Ortiz González


Especialista I Grado en Neurocirugía Especialista de II Grado en Oftalmología
Profesor Instructor Profesor Asistente
PRÓLOGO
La pediatría cubana, tiene una rica y larga historia. A mediado del siglo XIX, con
la apertura de la Cátedra de Obstetricia y Enfermedades Infantiles, del Sexo y
Sifilítica, en la Universidad de La Habana, se inició la enseñanza en la atención
médica a la madre y el niño. A comienzo del siglo XX se crearon los servicios de
niños de los hospitales “Nuestra Señora de las Mercedes” y “Calixto García”,
base docente y asistencial en la que se formaron nuestros primeros pediatras.

En la primera mitad del siglo XX varios alcanzaron notoriedad en distintas ramas


de su especialidad y en 1953 se realizó en La Habana el VII Congreso Interna-
cional de Pediatría.

Pero el cuadro de salud de la mayor parte de nuestros niños, como el de la


población en general, estaba bien lejos de ser óptimo: más de la mitad de los
médicos ejercían en la capital del país, los servicios médicos en las áreas rurales
eran bien precarios y se practicaba una medicina esencialmente curativa y de
carácter privado. Ni la atención médica ni los medicamentos estaban al alcance
de una gran parte de la población.

A partir de 1959, con el triunfo de la Revolución han habido cambios radicales,


económicos, políticos y sociales. El pueblo con el liderazgo de Fidel Castro se
unió para construir una nueva sociedad, justa, culta y sana.

Se organizó un sistema de salud pública que tuvo entre sus principios esenciales
ser accesible desde todo punto de vista, se estableció el servicio médico social
rural y se dio especial importancia a la prevención y educación sanitaria. Se
modificaron los planes y programas de estudios y se extendieron las facultades
de medicina progresivamente a todas las provincias. Se instituyó un sistema de
estudios de posgrado (residencias) en todas las especialidades médicas para así
dar respuesta a la demanda de especialistas del sistema en desarrollo.

Los pediatras cubanos han desempeñado con éxito un trabajo destacado en


todo este esfuerzo: han aprovechado la experiencia precedente e incorporado,
con las adecuaciones pertinentes, los avances científicos más recientes, han
agregado la promoción y la prevención a la práctica médica cotidiana con una
concepción social, humanista, sin distingos de índole alguno y han ofrecido sus
conocimientos y experiencia a todo el que lo necesite, sea en Cuba o en cual-
quier parte del mundo donde se soliciten sus servicios.
Esta Pediatría de autores cubanos recoge la experiencia de profesores con
años de trabajo y estudio en los distintos campos de la especialidad. Tiene su
antecedente en textos publicados desde 1994 cuyos capítulos han sido revisa-
dos y actualizados y a los que se han agregado nuevos temas hasta abarcar
toda la pediatría.

En este período de trabajo hemos perdido a cinco queridos profesores que


fueron entusiastas iniciadores de este empeño: Liane Borbolla Vacher, Manuel
Amador García, Luis Córdova Vargas, Eladio Blanco Rabasa y Raúl Riverón
Corteguera. A ellos los recordamos y los sentimos presentes.

Expresamos nuestro agradecimiento a la Editorial Ciencias Médicas que con la


tenacidad y conocimientos de sus trabajadores ha hecho posible que se conclu-
ya este texto.

Esperamos que estudiantes, residentes, especialistas en pediatría y todo profe-


sional de la medicina que desee obtener información sobre el cuidado del niño
sano, la prevención de enfermedades y la adecuada atención al niño enfermo,
encuentre en estas páginas ayuda y guía para su proceder profesional. Apre-
ciaremos las sugerencias y críticas que sin duda, ayudarán a los autores a
perfeccionar una futura edición.
Contenido General
Práctica pediátrica en Cuba Neurología
Crecimiento y desarrollo Oncología
Salud mental Reumatología
Promoción, prevención y accidentes Gastroenterología
Alimentación y nutrición Nefrología
Genética Médica Urología
Neonatología Ginecología infantojuvenil
Diarreas agudas y persistentes Enfermedades metabólicas
Endocrinología
Agua y electrólitos
Oftalmología
Terapia intensiva
Otorrinolaringología
Inmunodeficiencias
Dermatología
Enfermedades infecciosas Ortopedia
Enfermedades alérgicas Enfermedades quirúrgicas
Aparato respiratorio Enfermedades no clasificadas.
Cardiología Adolescencia
Hematología Medicamentos
Contenido
Capítulo 71. Afecciones pleurales/ 951
Neumotórax/ 953
Hemotórax / 954
Aparato respiratorio/ 865 Quilotórax / 954
Tumoraciones de la pleura/ 954
Capítulo 69. Infecciones respiratorias agudas/ 865 Bibliografia / 954
Mecanismos de defensa del aparato respiratorio/ 865
Vías respiratorias superiores e inferiores/ 866
Las infecciones respiratorias agudas y su control/ 872 Capítulo 72. Síndrome coqueluchoide
Magnitud del problema/ 873 o pertussoide/ 955
Programa de control de las infecciones respiratorias agudas en Bibliografía/ 959
Cuba/ 877
Factores de riesgo en las infecciones respiratorias agudas/ 879
Infecciones respiratorias agudas altas no complicadas/ 882 Capítulo 73. Afecciones respiratorias bajas
Rinofaringitis infecciosa aguda/ 882 crónicas o recidivantes/ 959
Faringoamigdalitis con vesículas, nódulos o ulceraciones/ 883 Bibliografía / 963
Faringoamigdalitis con exudados o membranas/ 884
Infecciones respiratorias agudas bajas no complicadas/ 887
Crup infeccioso agudo / 888 Capítulo 74. Malformaciones congénitas
Laringitis espasmódica aguda / 889 de vías aéreas inferiores y los pulmones/ 963
Epiglotitis infecciosa aguda/ 889 Anomalías de laringe, tráquea y bronquios/ 964
Laringitis, laringotraqueítis y laringotraqueobronquitis/ 890 Anomalías laríngeas/ 964
Bronquitis aguda/ 892 Estenosis traqueal congénita/ 965
Traqueítis bacteriana/ 893 Atresia bronquial/ 965
Bronquiolitis/ 893 Estenosis bronquial congénita/ 966
Neumonías agudas infecciosas/ 899 Agenesia, aplasia e hipoplasia pulmonar/ 966
Neumonías en niños en los primeros 2 meses de vida/ 904 Agenesia y aplasia pulmonar/ 966
Tratamiento de las infecciones respiratorias agudas Hipoplasia pulmonar/ 966
no complicadas/ 907 Secuestro pulmonar/ 967
Cuadro de decisiones frente a una infección respiratoria Enfisema lobar congénito/ 967
aguda no complicada/ 927 Quistes congénitos de origen pulmonar/ 968
Infecciones respiratorias altas complicadas/ 928 Malformación adenomatoidea quística congénita / 969
Otitis media aguda / 928 Linfagiectasia pulmonar congénita/ 969
Sinusitis aguda/ 930 Bibliografía/ 969
Infecciones respiratorias bajas complicadas/ 931
Complicaciones de las infecciones respiratorias bajas (IRA bajas)/ 931
Pleuresía purulenta (empiema)/ 932 Capítulo 75. Diagnóstico de las masas
Absceso pulmonar/ 934 mediastinales/ 970
Neumatoceles/ 936 Bibliografía/ 975
Bibliografía / 937

Capítulo 76. Asma bronquial/ 975


Capítulo 70. Tuberculosis/ 944 Patogenia y herencia del asma bronquial/ 976
Bibliografía/ 950 Asma atópica/ 977
Asma no atópica/ 978
La herencia en el asma bronquial/ 980
Anatomía patológica del asma bronquial/ 981
Educación de los padres, otros familiares y otras personas Alergia/ 1083
en contacto con el niño o del paciente/ 993
Suprimir o evitar factores desencadenantes Capítulo 81. Enfermedades alérgicas/ 1083
de las exacerbaciones o crisis agudas del asma bronquial/ 996 Reseña histórica del desarrollo de los conocimientos
Medicamentos continuos o intermitentes/ 999 en Inmunología y Alergología/ 1083
Entrenamiento físico adecuado/ 1001 Alergia desde el nacimiento hasta los 6 meses/ 1084
Inmunoterapia/ 1001 Alergia en el niño y el adolescente/ 1084
Apoyo sicológico y emocional. Orientación profesional/ 1002 Asma/ 1084
Otros aspectos/ 1002 Dermatitis atópica/ 1084
Tratamiento de los episodios agudos de exacerbación Conjuntivitis alérgica/ 1085
o crisis agudas de asma bronquial/ 1004 Rinitis alérgica/ 1090
Esquema de tratamiento de los episodios de exacerbación Urticaria/ 1094
o crisis aguda de AB según su grado de severidad/ 1007 Enfermedad del suero/ 1098
Bibliografía/ 1011 Bibliografía/ 1100

Capítulo 77. Fibrosis quística


o mucoviscidosis/ 1012
Genética de la fibrosis quística/ 1013
Patogenia de la fibrosis quística en las vías aéreas Hematología/ 1101
y en los pulmones/ 1015
Exámenes que se deben indicar en la fibrosis quística/ 1026
Nueva clasificación de la FQ Capítulo 82. Hematopoyesis/ 1101
y afecciones relacionadas/ 1036 Bibliografía/ 1103
Bibliografía/ 1052
Capítulo 83. Anemias / 1103
Capítulo 78. Enfermedades producidas Generalidades/ 1103
Anemia por producción inadecuada de glóbulos rojos/ 1104
en las vías aéreas por la inhalación Anemia por deficiencia de hierro/ 1104
o aspiración de materias extrañas/ 1055 Anemias megaloblásticas/ 1107
Neumonía aspirativa principalmente por leche/ 1055 Anemia hipoplástica congénita (anemia de Blackfan-Diamond)/ 1109
Neumonía lipoidea/ 1056 Eritroblastopenia transitoria de la infancia / 1109
Neumonía aspirativa por otras sustancias/ 1056 Anemia de las enfermedades crónicas/ 1110
Otras neumonías aspirativas/ 1057
Anemias diseritropoyéticas congénitas/ 1111
Bibliografía / 1058
Anemias hemolíticas/ 1113
Intracorpusculares/ 1113
Capítulo 79. Otras enfermedades Extracorpusculares/ 1122
que afectan principalmente los bronquios/ 1059 Bibliografía / 1130
Bronquitis crónica/ 1059
Bronquiectasias/ 1061 Capítulo 84. Síndromes de insuficiencia medular/ 1131
Discinesia ciliar primaria/ 1065 Insuficiencias medulares congénitas/ 1131
Bronquiolitis obliterante/ 1068 Anemia de Fanconi/ 1131
Bibliografía / 1070 Trombocitopenia amegacariocítica/ 1132
Disqueratosis congénita/ 1132
Síndrome de Shwachman Diamond/ 1132
Capítulo 80. Otras enfermedades Síndrome de Kostman/ 1132
que afectan principalmente los pulmones/ 1071 Anemia aplástica adquirida/ 1132
Neumonía hipostática/ 1071 Bibliografía/ 1133
Neumonías intersticiales difusas/ 1071
Pulmón eosinofílico/ 1074
Capítulo 85. Policitemia/ 1133
Hemosiderosis pulmonar/ 1076
Policitemia vera/ 1133
Proteinosis alveolar pulmonar/ 1079 Policitemias secundarias/ 1134
Microlitiasis alveolar pulmonar/ 1080 Policitemia relativa/ 1134
Bibliografía / 1081 Bibliografía/ 1134
Capítulo 86. Alteraciones de los leucocitos/ 1134 Lupus eritematoso sistémico/ 1191
Alteraciones en el número de los leucocitos/ 1135 Esclerodermia/ 1198
Alteraciones de la función normal/ 1135 Dermatomiositis juvenil/ 1202
Las leucemias/ 1136 Vasculitis/ 1206
Alteraciones clonales con predisposición al desarrollo Bibliografia / 1218
de enfermedades malignas/ 1143
Bibliografía/ 1144

Capítulo 87. El bazo/ 1144


Bibliografía/ 1144 Oftalmología pediátrica/ 1221

Capítulo 88. Enfermedades del sistema Capítulo 92. Morfología del aparato de la visión/ 1222
Origen, desarrollo y constitución del aparato de la visión/ 1222
histiofagocítico/ 1145 Bulbo ocular/ 1223
Histiocitosis a células de Langerhans/ 1145
Órganos oculares accesorios/ 1227
Linfohistiocitosis hemofagocítica/ 1146
Vasos sanguíneos y nervios del globo ocular/ 1229
Enfermedad de Rosai Dorfman/ 1146
Bibliografía/ 1147 Vías ópticas/ 1229
Variaciones morfofuncionales/ 1230
Bibliografía/ 1231
Capítulo 89. Hemostasia / 1147
Componentes del mecanismo hemostático/ 1147
Participación de los vasos sanguíneos en la hemostasia/ 1147
Capítulo 93. Examen oftalmológico en el niño/ 1231
Participación de las plaquetas en la hemostasia/ 1148 Examen externo de los ojos/ 1231
Mecanismo de la coagulación sanguínea/ 1148 Examen de los movimientos de los ojos y la acción
Sistema fibrinolítico/ 1150 de sus músculos extrínsecos/ 1232
Púrpuras vasculares/ 1150 Examen de los medios refringentes/ 1234
Púrpuras vasculares hereditarias/ 1151 Examen de fondo de ojo/ 1234
Púrpuras vasculares adquiridas/ 1151 Exploración subjetiva/ 1237
Púrpuras vasculares inducidas por drogas/ 1152 Estudio de la agudeza visual/ 1238
Púrpuras vasculares inducidas por procesos infecciosos/ 1153 Otras pruebas de exploración objetiva/ 1239
Escorbuto/ 1153 Bibliografía/ 1241
Púrpura mecánica/ 1153
Trastornos cuantitativos y cualitativos de las plaquetas/ 1153 Capítulo 94. Párpados/ 1241
Púrpuras trombocitopénicas/ 1153
Enfermedades de los párpados/ 1241
Trombocitosis/ 1157
Anomalías congénitas/ 1241
Púrpuras por trastornos cualitativos de las plaquetas/ 1157
Trastornos de los factores plasmáticos de la coagulación/ 1158 Bibliografía/ 1245
Trastornos congénitos de los factores de la coagulación/ 1159
Trastornos adquiridos de los factores plasmáticos de la coagulación/ 1164 Capítulo 95. Aparato lagrimal/ 1246
Bibliografía/ 1167 Enfermedades de la glándula lagrimal/ 1246
Alacrimia e hiposecreción/ 1247
Capítulo 90. Terapia transfusional/ 1169 Hipersecreción/ 1247
Introducción/ 1169 Enfermedades de las vías lagrimales/ 1247
Transfusiones de eritrocitos/ 1169 Obstrución del conducto lacrimonasal/ 1247
Transfusiones de plaquetas/ 1171 Bibliografía/ 1249
Transfusiones de granulocitos neutrófilos/ 1172
Transfusiones de plasma fresco congelado/ 1172 Capítulo 96. Conjuntiva/ 1249
Selección de la sangre para transfusiones en pediatría/ 1173
Enfermedad hemolítica del feto y el recién nacido / 1173 Anomalías congénitas/ 1250
Exanguinotransfusión/ 1173 Conjuntivitis/1250
Riesgo de las transfusiones sanguíneas/ 1174 Tracoma/ 1253
Bibliografia/ 1175 Tumoraciones de la conjuntiva/ 1254
Avitaminosis A/ 1254
Otras manifestaciones conjuntivales/ 1254
Bibliografía/ 1255

Capítulo 97. Enfermedades de la esclera


Reumatología/ 1177
y córnea/ 1255
Esclerótica/ 1255
Capítulo 91. Enfermedades reumáticas/ 1177 Anomalías congénitas de la esclera/ 1255
Artritis idiopática juvenil/ 1177 Inflamaciones de la esclera/ 1256
Espondiloartropatías de inicio juvenil/ 1186 Córnea/ 1257
Anomalías congénitas de la córnea/ 1257 Capítulo 104. Enfermedades de las órbitas
Enfermedades de la córnea/ 1258
Degeneraciones y distrofias de la córnea/ 1262
y su contenido/ 1312
Síntomas y signos/ 1312
Bibliografía/ 1263 Anomalías y enfermedades/ 1314
Lesiones inflamatorias de la órbita/ 1315
Lesiones vasculares de la órbita/ 1317
Capítulo 98. Enfermedades de la úvea/ 1264 Lesiones quísticas/ 1318
Anomalías congénitas en la pupila/ 1264 Lesiones tumorales de la órbita/ 1319
Síndromes que se acompañan de anomalías del iris y pupila/ 1265 Metástasis tumorales en la órbita/ 1322
Enfermedades de la úvea/ 1266 Bibliografía/ 1323
Uveítis anterior o iridociclitis/ 1267
Uveítis intermedia/ 1267 Capítulo 105. Ambliopía y estrabismo/ 1323
Uveítis posterior/ 1267 Ambliopía/ 1323
Síndromes y complicaciones que se relacionan con la uveítis/ 1268 Estrabismo/ 1324
Tumores de la úvea/ 1269 Bibliografía/ 1330
Bibliografía/ 1270
Capítulo 106. Parálisis y otros trastornos
Capítulo 99. Cristalino/ 1271 de la motilidad ocular/ 1331
Anomalías congénitas/ 1271 Parálisis y paresias musculares/ 1331
Cataratas/ 1271 Lesiones supranucleares/ 1331
Bibliografía/ 1275 Parálisis nuclear/ 1332
Parálisis internucleares/ 1332
Lesiones en el tallo cerebral/ 1332
Capítulo 100. Glaucoma en el niño/ 1275 Unión neuromuscular/ 1335
Glaucoma juvenil/ 1279 Trastornos del propio músculo/ 1335
Bibliografía/ 1279 Nistagmo/ 1335
Bibliografía/ 1337
Capítulo 101. Enfermedades del vítreo/ 1279
Anomalías congénitas/ 1280 Capítulo 107. Refracción en el niño/ 1337
Enfermedades adquiridas/ 1281 Defectos de refracción/ 1340
Enfermedades relacionadas con síndromes/ 1283 Astenopía/ 1340
Bibliografía / 1284 Hipermetropía/ 1340
Miopía/ 1341
Astigmatismo/ 1343
Capítulo 102. Afecciones de la retina/ 1284 Bibliografía/ 1344
Anomalías congénitas/ 1284
Inflamaciones coriorretineanas/ 1285
Distrofias retinianas y coroideas/ 1287 Capítulo 108. Traumatismos oculares/ 1344
Enfermedades de los fotorreceptores/ 1289 Examen del niño traumatizado/ 1344
Afecciones vasculares de la retina/ 1291 Lesiones oculares traumáticas/ 1345
Tumores de retina/ 1294 Prevención del trauma ocular/ 1350
Signos oculares del maltrato infantil/ 1350
Desprendimiento de la retina/ 1296
Bibliografía/ 1351
Bibliografía/ 1296

Capítulo 103. Enfermedades del nervio Capítulo 109. Problemas funcionales


óptico y vía visual/ 1297 y orgánicos que provocan ceguera
Anomalías congénitas de la papila/ 1299 y baja visión. Su prevención/ 1351
Defectos adquiridos/ 1302 Examen oftalmológico/ 1353
Neuropatías ópticas hereditarias/ 1306 Bibliografía/ 1356
Neuropatías toxiconutricionales/ 1307
Tumores y neuropatías compresivas del nervio óptico o Capítulo 110. Prevención en oftalmología
la vía visual/ 1308 pediátrica en Cuba/ 1356
Otras atrofias ópticas/ 1310 Estudio investigativo/ 1356
Neuropatías isquémicas/ 1311 Programa Nacional de Prevención de Enfermedades Oculares
Traumatismos/ 1311 en el Niño/ 1356
Bibliografía/ 1311 Bibliografía/ 1358
Aparato respiratorio

rial aspirado, sino también por el sitio donde se deposita


este y la habilidad del huésped para responder: varios de
. Capítulo 69 . estos mecanismos se combinan e interactúan entre sí,
para evitar la acción de los distintos agentes agresores.
Si dividimos el aparato respiratorio en dos partes:
Infecciones respiratorias las vías respiratorias superiores y las inferiores, separa-
agudas das por la epiglotis, vamos a encontrar algunos de estos
José A. González Valdés, Gladys Abreu Suárez, Manuel Rojo mecanismos en ambas partes por igual, a veces con pre-
Concepción, Roberto Razón Behar dominio en una de las dos. Sin embargo, en general, los
mecanismos del aparato respiratorio superior van a di-
ferir bastante de los del inferior (Cuadro 69.1).
MECANISMOS DE DEFENSA
DEL APARATO RESPIRATORIO
Cuadro 69.1. Mecanismos de defensa del aparato respiratorio
El epitelio del aparato respiratorio constituye la
mayor superficie anatómica del organismo expuesta a Vías respiratorias superiores e inferiores:
los agentes externos, y no es sorprendente por lo tanto, • Filtración aerodinámica
• IgA y otras inmunoglobulinas
que las infecciones respiratorias sean las más comunes • Reflejo de la tos
que afectan al ser humano. • Aclaramiento mucociliar
Para preservar la función respiratoria, dada por un Vías respiratorias superiores:
eficiente intercambio de gases, existe un importante sis- • Filtración nasofaríngea
• Adherencia mucosa y fibronectina
tema de mecanismos locales de defensa pulmonar y se
• Interferencia bacteriana
considera el pulmón como un órgano inmune único, ya • Glandulinas
que no siempre los eventos inmunes que ocurren en él Vías respiratorias inferiores:
se reflejan en cambios paralelos en la inmunidad • Epiglotis
sistémica. • Complemento
• Células
Este complejo sistema destinado a proveer las de- - Linfocitos
fensas, fundamentalmente contra las infecciones del - Macrófago alveolar
aparato respiratorio, tiene varios componentes que pue- - Neutrófilos y eosinófilos
den ser mecánicos, como la tos, el estornudo y el acla- - Células epiteliales
ramiento mucociliar, los humorales como las • Productos celulares
- Lisozima
inmunoglobulinas y el complemento o celulares como - Lactoferrina
los linfocitos, macrófagos u otros. - Surfactante pulmonar
El tipo de mecanismo de defensa que interviene - Defensinas
está determinado no solo por la composición del mate- - Antiproteasas y antielastasas
Vías respiratorias superiores e inferiores Algunas bacterias como el Streptococcus
pneumoniae, Haemophilus. influenzae, Klebsiella,
Filtración aerodinámica Pseudomona y Proteus producen proteasas que actúan
sobre la IgAs.
La filtración aerodinámica constituye un importan- Niños con déficit de IgA en suero tienen tendencia
te mecanismo de defensa del aparato respiratorio. Este a infecciones frecuentes del aparato respiratorio, y se
sistema inerte se usa para remover grandes partículas encuentra disminución de esta al nivel de las vías respi-
suspendidas en la corriente de aire. Esta se debe en par- ratorias altas. También los déficits de IgG se acompa-
te a la filtración nasofaríngea, la epiglotis y el diseño ñan de infecciones respiratorias a repetición, sobre todo
anatómico del árbol traqueobronquial con sus múltiples de causa bacteriana, y cursan con neumonías recurren-
bifurcaciones y está muy asociada a otros mecanismos. tes. La presencia de IgG en las secreciones respirato-
Las partículas que chocan en las vías aéreas entre rias es esencial para una óptima fagocitosis de ciertas
la laringe y los bronquiolos respiratorios son limpiadas bacterias, pues actúa primariamente en la mucosa y li-
por el mecanismo de depuración mucociliar y las más mita la invasión de los organismos.
pequeñas, que llegan a las terminaciones de las vías res- La IgE aparece en dos formas. Una de ellas libre,
piratorias y alvéolos (de 0,5 a 2 μ), son ingeridas y trans- disuelta en el mucus y forma complejos no absorbibles
portadas por células como el macrófago alveolar por la con antígenos, y la otra en forma de IgE unida a
superficie respiratoria, y también pueden ser removidas mastocitos y basófilos que reaccionan con antígenos, y
por el drenaje linfático y el flujo sanguíneo. producen liberación de histamina y otros mediadores en
La detención y expulsión de estas partículas del las reacciones alérgicas.
aparato respiratorio se potencializa por reflejos como el
estornudo, la tos y la broncoconstricción, a través de la Reflejo de la tos
estimulación de receptores de estos que están localiza- La tos es un reflejo complejo que comienza con
dos por debajo del epitelio mucoso a lo largo de las vías estimulación de un receptor o componente aferente.
respiratorias. Ellos provocan una rápida respuesta a dis- Estos estímulos son conducidos al sistema nervioso cen-
tintos irritantes mecánicos o químicos y esto limita su tral (centro de la tos) desde donde se envían los impul-
llegada a las profundidades del pulmón. sos a través de vías eferentes como el vago, el nervio
frénico y los nervios espinales de C3 a S2 que estimulan
IgA y otras inmunoglobulinas los músculos respiratorios con su consiguiente contrac-
La IgA constituye un elemento importante en la ción y elevación de la presión intratorácica.
protección de las vías respiratorias, sobre todo las supe- Los componentes aferentes son neurofibrillas, re-
riores. Está constituida por un dímero de IgA unido a un ceptores sensitivos situados entre las células epiteliales
componente secretor, por lo que se llama IgA secretoria columnares ciliadas y están mayormente concentrados
(IgAs). Este es sintetizado por las células plasmáticas, en laringe, pared posterior de la tráquea, carina, y a lo
cuyos precursores son los linfocitos B provenientes del largo de bronquios gruesos, medianos y finos, y son
tejido linfoide asociando al bronquio (TLAB). muy sensibles a estímulos mecánicos y químicos. Los
En las vías aéreas las secreciones que recubren receptores de la tos no están presentes en el alvéolo por
las mucosas representan una mezcla de mucus, lo que esta puede no aparecer en la consolidación
secreciones de glándulas bronquiales e inmunoglobulinas, neumónica.
de las cuales la IgA es la principal en la parte alta. Las
secreciones nasales contienen IgAs y escasa IgG. En el Aclaramiento mucociliar
epitelio alveolar de sujetos normales están presentes la
IgAs, la IgE y la IgG, pero prácticamente no se detecta Desde el pasado siglo había una creciente aprecia-
la IgM. La IgA tiene importantes funciones, ya que atra- ción de un significativo papel desempeñado por el me-
pa y absorbe antígenos, bloquea ciertas reacciones canismo de depuración mucociliar en la eficiente función
alérgicas y evita el descenso de estos antígenos por las de remover sustancias extrañas y agentes patógenos en
vías respiratorias. Además, impide la adherencia de cier- las vías respiratorias.
tas bacterias, aglutina microorganismos, bloquea la Sharpey, en 1935, no solo describe la acción de
infectividad por virus de la influenza y otros, neutraliza los cilios, sino que también describe el movimiento ciliar
toxinas y enzimas que hacen contacto con la mucosa y en el aparato reproductivo y locomotor y su estrecha
activa el complemento por la vía alternativa. Su función relación con las secreciones a lo largo de la capa de
como anticuerpo es más importante al nivel de nariz, membrana epitelial, y el paso del aire de la nariz a la
orofaringe y tráquea. tráquea.

866 Tomo III


Posteriormente Lukas et. al. confirman el papel está constituido por glipoproteínas, proteoglicanos,
de los cilios en el aclaramiento nasal y llegan a la con- lípidos, pequeñas cantidades de otras proteínas y a ve-
clusión de que el mucus es impulsado por los cilios. Los ces DNA. Entre las proteínas más importantes se en-
avances posteriores demuestran la presencia de dos cuentran la IgA secretora, la lactoferrina y la lisozima.
componentes: el mucus y los cilios. La introducción de El mucus consta de dos capas bien definidas. Una
la microscopia electrónica sirve para demostrar la es- de ellas es líquida, llamada sol, que es periciliar y otra
tructura de los cilios del aparato respiratorio (Fig. 69.1). viscosa 1lamada gel que cubre a la anterior.
Los cilios ondulan o “baten” de manera sincrónica
con un movimiento rápido y eficaz hacia atrás, seguido
de un movimiento de recuperación. La fuerza de propul-
sión origina formación de ondas que desplazan las
secreciones mucosas en las vías aéreas.
El adecuado aclaramiento requiere un apropiado
número de cilios, pulsaciones sincrónicas y una coordi-
nación ajustada e interactuante con 1as propiedades
fisicoquímicas del mucus para asegurar un transporte
adecuado.
Fig. 69.1. Epitelio respiratorio ciliado. Los cilios revisten el aparato respiratorio alto don-
de el mucus es transportado hacia atrás en dirección a
El aclaramiento o la depuración mucociliar es la la faringe. En la porción distal del aparato respiratorio
más importante defensa mecánica de las vías aéreas y los cilios llegan a los bronquios terminales e impulsan las
brinda una fuerte línea de defensa del aparato respirato- secreciones mucosas hacia la tráquea. La proporción
rio contra las partículas inspiradas y es común, tanto para de células ciliadas, la densidad de los cilios y su longitud
las vías respiratorias altas como bajas. disminuye de las vías aéreas más proximales hacia las
Prácticamente, toda la superficie respiratoria ex- periféricas, lo cual significa que el índice de depuración
ceptuando la entrada de la nariz y algunas partes de la mucociliar es bastante más lento en las vías aéreas
nasofaringe, la faringe y la laringe, están cubiertas por intrapulmonares de menor calibre que en los bronquios
un epitelio pseudoestratificado columnar ciliado y principales, donde la rapidez de transporte lineal de par-
mucosecretor, que se extiende hasta los bronquiolos res- tículas varía de 5 a 12 mm/min.
piratorios. En los sacos terminales y la superficie alveolar Cada día se transportan 10 mL de mucus hacia la
no existe, ya que la capa simple epitelial no es ciliada. parte superior. Este volumen se incrementa 20 ó 30 ve-
Cada célula tiene alrededor de 200 cilios, los cuales a su ces en presencia de bronquitis crónica u otras enferme-
vez están constituidos por microtúbulos: 2 centrales y 9 dades respiratorias.
pares periféricos con brazos de dineína que contienen Hay sustancias que regulan el movimiento ciliar,
ATPasa (Fig. 69.2). como los beta 2 adrenérgicos, la acetilcolina, bradiquinina
El mucus respiratorio es una mezcla compleja y serotonina.
producida predominantemente por las glándulas La poca humedad y el incremento de bacterias tam-
mucosas y otras células productoras de mucus. Este bién disminuyen el mecanismo de depuración mucociliar.

Fig. 69.2. Corte transversal de un cilio normal.

Parte XII. Aparato respiratorio 867


El mecanismo de depuración mucociliar puede es- gramnegativos comienzan a aparecer en las vías respi-
tar alterado en distintas afecciones como son: síndrome ratorias altas.
de discinesia ciliar primaria, asma, fibrosis quística, sín- La presencia de este “cultivo” de gérmenes
drome de Young, infecciones por virus de la influenza A, patógenos sin aún existir infección se llama “coloniza-
micoplasmas, Bordetella pertussis, y pseudomonas, así ción”. Posteriormente, esta colonización por gérmenes
como en el déficit de alfa 1 antitripsina y en fumadores. gramnegativos predispone a neumonías, debido a peque-
También por interferencia física como ocurre en pacien- ñas y repetidas aspiraciones de las secreciones altas.
tes con intubación prolongada, donde aparecen infec- Este fenómeno se explica porque en condiciones
ciones nosocomiales graves. En la acidosis y la fiebre normales la superficie mucosa es resistente a esta colo-
alta de más de 40° también se afecta. Algunas drogas nización, pero en determinadas circunstancias, esta ba-
como la atropina, lidocaína, difenhidramina, y algunos rrera adherente disminuye, como ocurre en los pacientes
antibióticos también lo afectan. sometidos a estrés, durante las hospitalizaciones e inter-
venciones quirúrgicas. También en enfermedades como
Vías respiratorias superiores la fibrosis quística y la diabetes, se presenta este fenó-
Filtración nasofaríngea. La nariz, por sus carac- meno.
terísticas anatómicas, ofrece una combinación de una Recientes estudios sugieren que en el estrés el de-
pequeña sección para el cruce del aire, y finas curvas y fecto de la mucosa que produce disminución de la resis-
pelos en su interior que aumentan también la posibilidad tencia a la colonización se debe a una disminución de la
de impacto de las partículas. fibronectina en la superficie celular, asociada a un incre-
Al pasar el aire por la nariz las cavidades nasales mento de una proteasa salival.
realizan tres funciones que son: calentamiento, La fibronectina es una glicoproteína de alto peso
humedificación y filtración. Estas tres funciones reciben molecular que está presente sobre la superficie de las
el nombre de “acondicionamiento de aire”. células epiteliales normales en la orofaringe, en el tejido
La filtración se debe en primer lugar, a los pelos conectivo, en el plasma y en otros fluidos del cuerpo.
existentes, porque estos suprimen partículas volumino- Tiene un papel inespecífico en los mecanismos de de-
sas. Mucho más importante que la función de los pe- fensa del pulmón por bloquear la adherencia y coloniza-
los es la eliminación por precipitación turbulenta. Esta ción de las bacterias en la orofaringe, y este proceso es
se debe al choque del aire contra muchos obstáculos un mecanismo competitivo entre la fibronectina y los
como los cornetes, el tabique nasal y la faringe. El aire receptores de las superficies celulares para sitios de unión
cambia rápidamente su curso, pero las partículas no, y
de las bacterias.
se precipitan.
El macrófago alveolar tiene la propiedad de sinteti-
Cuando la nariz es sobrepasada por intubación o
zar su propia fibronectina, por lo que se plantea que
respiración bucal, grandes partículas y gases solubles en
esta sustancia también desempeña un papel fundamen-
agua tienen un gran acceso a las vías aéreas y alvéolos.
tal en las defensas de las partes bajas del aparato respi-
La profundidad hasta la cual las partículas son removi-
das varía con el tamaño de estas y con los patrones de ratorio; además, interviene en la reparación del pulmón,
respiración. De esta manera, aquellas de 10 μ o más y es uno de los productos más importantes segregados
grandes son usualmente depositadas en la nariz y en el por el fibroblasto. Así, en pacientes con enfermedades
aparato respiratorio superior, y aquellas entre 2 y 10 μ pulmonares intersticiales, donde hay inflamación cróni-
son atrapadas en la bifurcación traqueal. ca y remodelación de las estructuras pulmonares se en-
Se pueden encontrar defectos anatómicos en la fil- cuentran elevados niveles de fibronectina.
tración nasofaríngea en asociación con pólipos nasales, Interferencia bacteriana. En condiciones norma-
hipertrofia adenoidea, desviación del tabique nasal, de- les, la flora oral provee al aparato respiratorio de un tipo
formidades pos-traumáticas o tumores locales, que crean de protección por interferencia bacteriana, en la cual
predisposición a infecciones locales como sinusitis o a posibles patógenos como el estafilococo aureus y los
infecciones del aparato respiratorio inferior secundario bacilos gramnegativos se ven imposibilitados de desa-
a aspiraciones de colecciones locales supuradas. rrollarse en las vías respiratorias superiores.
Adherencia mucosa y fibronectina. En la gran Cuando esta flora normal se altera, como puede
mayoría de las personas sanas un gran número de bac- ocurrir en aquellos casos de tratamientos con antibióticos,
terias no virulentas residen en la orofaringe y boca. Du- se favorece la colonización por estos gérmenes virulen-
rante la hospitalización y otras condiciones de estrés tos anteriormente señalados, con la consiguiente infec-
algunas bacterias patógenas como los bacilos aerobios ción del aparato respiratorio.

868 Tomo III


Glandulinas. Son pequeñas moléculas de las parénquima pulmonar, y son los ganglios linfáticos regio-
secreciones nasales que tienen acción bactericida con- nales del aparato respiratorio.
tra múltiples bacterias y específicamente contra Evidencias experimentales confirman que estos
gramnegativas, principalmente Pseudomona nódulos tienen un papel fundamental en la respuesta in-
aeruginosa. mune inicial a un antígeno depositado en el parénquima
pulmonar. Ellos contienen el repertorio completo de
Vías respiratorias inferiores linfocitos T y B antígenorreactivos requeridos para ac-
Epiglotis. Está demostrada la necesidad de una tuar frente a antígenos extraños.
epiglotis anatómica y funcionalmente intacta para la pro- La organización más fascinante del tejido linfoide
tección del aparato respiratorio inferior frente a mate- está dada por el tejido linfoide asociado al bronquio
riales “infectivos” aspirados. (TLAB). Consiste en nódulos de células linfoides que
Pacientes con alteraciones como deformidades están enmarcadas en la luz de las vías aéreas sobre todo
congénitas o desgarros traumáticos, son más propensos al nivel de la bifurcación del árbol bronquial, recubiertos
a contraer infecciones de las vías respiratorias bajas. La de una capa de linfoepitelio especializado formada por
disminución del reflejo normal de la tos y el nauseoso, células epiteliales planas que carecen de cilios y están
asociados precisamente a disfunción de la epiglotis, es infiltradas por linfocitos, lo que facilita la captación de
causa de riesgo de neumonía aspirativa. antígenos extraños.
Complemento. El sistema de complemento está La población de linfocitos del TLAB está consti-
constituido por una serie de proteínas que tienen un im- tuida en su mayoría por linfocitos B y solo el 20 % de
portante papel en los mecanismos de defensa contra linfocitos T. Se plantea que los linfocitos B son los pre-
bacterias y virus, y es uno de los principales mediadores cursores de las células plasmáticas productoras de IgA
en la respuesta inflamatoria. Una gran variedad de com- secretora en la mucosa bronquial y que son semejantes
ponentes del complemento son sintetizados por el en su función a las del tubo digestivo en las placas de
macrófago alveolar (MA) y las células epiteliales. C3, Peyer.
C1, C1q, C4, C6 y C5 han sido demostrados en el lavado El anillo de Waldeyer está constituido por las amíg-
broncoalveolar (LBA). dalas faríngeas (adenoides), localizadas en la parte su-
Pacientes con anormalidades del sistema de com- perior y media de la nasofaringe posterior, las amígdalas
plemento presentan aumento de infecciones respirato- palatinas y las amígdalas linguales.
rias bacterianas. Los componentes del sistema de Estos órganos linfoides y la congregación de
complemento son importantes en el pulmón por su habi- linfocitos están compuestos principalmente por linfocitos
lidad para actuar como factor quimiotáctico al reclutar B. Los linfocitos T representan solo el 40 % de estos.
células inflamatorias al pulmón o al actuar como opsoninas Su localización es favorable para el transporte. Además
que favorecen la ingestión y muerte de bacterias por de estimular la producción de células B, las adenoides y
células fagocíticas. Por otra parte hay evidencia clínica amígdalas también segregan anticuerpos (Ig) localmen-
y experimental que implica al complemento en la injuria te y las células T presentes pueden producir interferón
pulmonar. gamma y otras linfoquinas.
Aunque histológicamente el parénquima pulmonar
Células normal se caracteriza por una relativa ausencia de tejido
Linfocitos. Hay 4 niveles de organización del linfoide, algunos agregados de células linfoides que cons-
tejido linfoide y los linfocitos en vías aéreas y pul- tituyen el tejido linfoide intersticial, están presentes
mones: adyacentes a la pleura, pequeños vasos sanguíneos y
• Nódulos linfáticos extrapulmonares o nódulos bronquiolos terminales. Un pequeño número de células
linfáticos del hilio. linfoides también están diseminadas en el intersticio y
• Tejido linfoide asociado al bronquio (TLAB). septum interalveolar. Estas células no tienen una estruc-
• Tejido linfoide intersticial. tura organizada, pero bajo condiciones de inflamación
• Linfocitos libres en bronquios y alvéolos. aguda o crónica ocurre una infiltración masiva para de-
mostrar el potencial de su aparición por reclutamiento y
Los nódulos linfáticos típicos están presentes en proliferación.
la región paratraqueal y adyacentes a los bronquios prin- El linfocito es el efector predominante en la res-
cipales en el hilio pulmonar. Ellos reciben un drenaje puesta inmune específica. Representa del 8 al 10 % de
linfático de las mucosas de los conductos aéreos y del las células presentes en el lavado broncoalveolar (LBA).

Parte XII. Aparato respiratorio 869


La mayoría de estos linfocitos libres son linfocitos T incluye C5a, productos de la pared celular de los micro-
(60 a 75 %) y la relación CD4 (auxiliadores) y CD8 bios, factores quimiotácticos derivados del neutrófilo y
(supresores o citotóxicos) es de 1,5 a 1 igual que en la linfoquinas (citoquinas). Después de emigrar ocurre la
sangre. fusión de la superficie celular y la partícula. Numerosos
La generación de esta respuesta inmune específi- receptores del macrófago que se combinan con cuerpos
ca se debe a la interrelación entre las células accesorias extraños han sido identificados y la eficiencia de la
presentadoras de antígenos (células dendríticas y fagocitosis está dada por la presencia de esos receptores.
macrófagos) y los linfocitos T y B. Con posterioridad, se produce la ingestión de las
Los linfocitos activados CD4 (Th) producen gran partículas y su destrucción por una serie de mecanismos
variedad de citoquinas (interleucinas) que participan en digestivos. El MA genera especies tóxicas del oxígeno,
el proceso inflamatorio. Los CD4 Th 1 secretan específicamente anión superóxido, peróxido de hidróge-
interferón gamma e interleucina 2 que son importantes no y radical hidroxilo, así como derivados del nitrógeno
en la hipersensibilidad retardada. Por el contrario los como el óxido nítrico con los cuales destruye organis-
CD4 Th2 producen interleucina 4, interleucina 5 e mos. También contienen proteasas preformadas como
interleucina 10 que estimulan la producción de colagenasa, elastasas y catepsinas, las cuales además
anticuerpos (Ig) por los linfocitos B. Además las del efecto potencial letal sobre agentes microbianos agre-
citoquinas de los linfocitos regulan las funciones positi- sores, degrada la matrix extracelular, y complican la res-
vas o negativas del macrófago, los neutrófilos, puesta inflamatoria. En el sitio donde el macrófago es
eosinófilos y otras células inflamatorias en diversas en- activado, proteasas y radicales tóxicos del oxígeno rom-
pen la actividad epitelial y endotelial con producción de
fermedades pulmonares como las infecciones, el asma
daño hístico.
y otras enfermedades pulmonares crónicas.
Entre los mediadores que produce el macrófago
Macrófago alveolar. El macrófago alveolar (MA),
se pueden citar las interleucinas 1 alfa y beta, el factor
constituye la primera y más importante línea de defensa
de necrosis tumoral alfa (FNT), el factor de crecimiento
contra las partículas inhaladas que llegan al alvéolo. Su
del fibroblasto, fibronectina, interferones, prostaglandinas,
papel en los mecanismos de defensa incluye la ingestión
leucotrienos, tromboxano, factor activador plaquetario
y degradación de materiales extraños (fagocitosis), ac-
(FAP) y otras sustancias que intervienen en la
túa como vehículo para transportar partículas fuera del homeostasis pulmonar, lo cual provoca distintas accio-
pulmón y detoxifica materiales inhalados; además, pro- nes, ya sean defensivas o de injuria hística.
duce activación inmunológica del linfocito. La actividad bactericida se produce fundamental-
El MA se deriva del monocito y representa el 90 % mente a través de la fagocitosis y la acción de radicales
de las células efectoras presentes en la superficie del de oxígeno y proteasas. La regulación en la producción
alvéolo pulmonar, cuando se realiza un lavado de los radicales de oxígeno, depende de múltiples facto-
broncoalveolar (LAB). También se puede encontrar en res como la susceptibilidad del germen, el tamaño y la
el intersticio. cepa. Algunos organismos son destruidos de inicio por el
Entre sus propiedades se pueden señalar la MA y otros son ingeridos por este, así se replican en su
fagocitosis, la acción bactericida, la secretora y la lo- interior sin morir, por no estar aún el macrófago activa-
comotriz y a través de estas pueden actuar frente a do, como suele ocurrir con las micobacterias, salmonella,
una gran cantidad de estímulos inflamatorios y defen- Neumocistis jirovecii, citomegalovirus CMV,
sivos, y así secreta potentes sustancias que actúan mycoplasma, toxoplasma y criptococcus.
como reguladoras o moduladoras e incluso producen Sin embargo, al ser activado el macrófago estos
inflamación y estimulan el tráfico y la motilidad de otras gérmenes son inhibidos o destruidos. La actividad del
células inflamatorias. La actual lista de moléculas MA sobre los gérmenes grampositivos es mayor que
secretadas por el macrófago alveolar incluye más de sobre los gramnegativos.
cien productos como son los metabolitos del oxígeno, Los radicales de oxígeno, fundamentalmente el
enzimas, proteasas, antiproteasas y sustancias media- H2O2 tienen una importante actividad antitumoral, pro-
doras entre otras. ducto de su toxicidad.
La fagocitosis está constituida por cuatro compo- Pacientes con alteración de las distintas funciones
nentes básicos: quimiotaxis, adherencia, ingestión y di- del MA, se pueden ver en las proteinosis alveolares,
gestión. El inicio está dado por la migración de las células donde se favorecen las infecciones neumónicas por
fagocíticas hacia el organismo o partícula invasora. nocardia y cándida y se debe a un detecto adquirido del
El macrófago emigra hacia la partícula extraña en MA, ya que no está alterada la acción bactericida, pero
respuesta a una variedad de estímulos quimiotácticos que sí la fagocítica.

870 Tomo III


La motilidad del MA está alterada en los fumado- Aunque en principio la actividad fundamental de-
res lo que favorece la infección. La actividad bactericida fensiva en el alvéolo la realiza el MA, los PMN
está alterada en la esclerodermia. También la actividad interactúan con este en determinados momentos, y tie-
del MA se encuentra alterada en enfermedades nen gran importancia, sobre todo en infecciones por gér-
mieloproliferativas. Algunas infecciones virales inhiben menes gramnegativos.
la acción fagocítica del MA. Las principales deficiencias inherentes a los PMN
Los esteroides disminuyen el número de MA, así neutrófilos se manifiestan en la enfermedad granulo-
como su actividad locomotriz y bactericida. La matosa crónica, por problemas infecciosos severos aso-
ciclofosfamida también disminuye el número. ciados a neumonías por gramnegativos y micosis.
En general, el MA representa el principal mecanis- También en el déficit de glucosa 6 fosfato-deshi-
mo para el aclaramiento de partículas en el alvéolo drogenasa, el síndrome de Beguez-Chediak-Higashy, el
pulmonar y por sí solo es capaz de realizar esta función, déficit de mieloperoxidasa, enfermedades mieloprolife-
pero en otros casos tiene un papel colaborativo en parti- rativas con neutropenia, los fumadores, la fibrosis quística
cular con el reclutamiento de otras células, PMN princi- y la diabetes mellitus, hay afectación de la actividad del
palmente. PMN neutrófilo.
Neutrófilos y eosinófilos. En sujetos normales, En pacientes con sarcoidosis, algunas enfermeda-
solo un pequeño número de polimorfonucleares des intersticiales pulmonares como neumonitis por hi-
neutrófilos y eosinófilos, menos del 1 %, están presentes persensibilidad, fibrosis pulmonar idiopática y el síndrome
en el total de células obtenidas en el lavado de distrés respiratorio agudo (ARDS) se encuentra un
broncoalveolar (LBA). Estas células sin embargo se aumento de estas células en el pulmón.
encuentran en el torrente sanguíneo, en los vasos Al igual que ocurre con otras células fagocíticas,
pulmonares y en el lecho capilar específicamente, y existe en determinadas circunstancias, el PMN neutrófilo pue-
un gran reservorio de estas. Dichas células van a ser de producir injuria pulmonar.
atraídas por sustancias proteicas llamadas quimoquinas, Células epiteliales. La capa de células epiteliales
que son citoquinas que inducen atracción de neutrófilos de las vías aéreas es el primer tejido en contactar con
y eosinófilos. Estas se adosan al endotelio por interme- sustancias deletéreas como polutantes aéreos,
aeroalergenos y microbios. La respuesta a estos estí-
dio de las moléculas de adhesión, atraviesan el endotelio
mulos por parte del epitelio incluye hipersecreción de
y pasan al epitelio del aparato respiratorio donde el
mucus, actividad ciliar alterada y cambios en la función
neutrófilo y el eosinófilo activados producen diversas
barrera/transporte de iones. Además de servir como dia-
sustancias.
na, el epitelio de vías aéreas también sirve como efector,
Estas dos células, al igual que el macrófago alveolar
y produce mediadores inflamatorios.
van a producir especies tóxicas derivadas del oxígeno, Frente a ciertos estímulos dañinos inhalados, el
como el anión superóxido, el peróxido de hidrógeno, ra- epitelio produce mediadores inflamatorios primarios como
dicales hidroxilo, y derivados de la mieloperoxidasa, y interferón gamma y factor de necrosis tumoral (FNT) lo
todos matan organismos. Además, los neutrófilos y que provoca a su vez producción de mediadores secun-
eosinófilos van a producir proteasas específicas que des- darios por las propias células epiteliales, que incluye
truyen la pared de las bacterias y otras barreras para mediadores lipídicos, especies reactivas del oxígeno y
eliminar agentes potencialmente infecciosos. nitrógeno y citoquinas. En muchas situaciones, estos
El eosinófilo posee gránulos preformados como la mediadores inflamatorios desempeñan un importante
proteína básica principal (MBP), la peroxidasa papel en la patogénesis de enfermedades respiratorias
eosinofílica, la neurotoxina derivada del eosinófilo y la crónicas como el asma.
proteína catiónica eosinofílica (PCE). Estas sustancias, Productos celulares. Un gran número de sus-
al ser liberadas, tienen una gran toxicidad sobre ciertos tancias producidas por distintas células participan acti-
organismos como los parásitos, pero también van a pro- vamente en los mecanismos de defensa del pulmón.
ducir daño hístico. Previamente ya se han señalado muchas de ellas.
Estas dos células también van a producir distintos Otros ejemplos de estos son la lisozima, la
mediadores como los productos derivados de la mem- lactoferrina, el surfactante pulmonar, las defensinas, las
brana (prostaglandinas, leucotrienos, FAP), citoquinas y glandulinas y las antiproteasas y antielastasas.
otras que también participan en las defensas de las vías Lisozima. La lisozima pulmonar humana es pro-
aéreas, pero a su vez también producen injuria de los ducida por la superficie de las células epiteliales, glándu-
tejidos. las de vías aéreas y los MA.

Parte XII. Aparato respiratorio 871


Son proteínas no específicas que tienen un amplio LAS INFECCIONES RESPIRATORIAS
espectro de acción antimicrobiana. Esta sustancia des- AGUDAS Y SU CONTROL
crita por Fleming en las secreciones nasales humanas
Las infecciones respiratorias agudas (IRA) son un
está constituida por moléculas que son capaces de ma-
complejo y heterogéneo grupo de enfermedades causa-
tar bacterias y prevenir la infección de la mucosa nasal das por distintos gérmenes que afectan cualquier punto
por estos gérmenes. del aparato respiratorio; las entidades se describen de
La actividad bactericida de la lisozima está rela- acuerdo con el lugar donde predominan los síntomas.
cionada con una acción sinérgica del complemento y los Desde el resfriado común hasta la influenza, la
anticuerpos. También actúa como moduladora de la res- infección respiratoria es una experiencia universal y
puesta inflamatoria pulmonar. Además inhibe la en la mayoría de los casos una enfermedad menor,
quimiotaxis y la producción de radicales tóxicos del oxí- aunque a veces molesta y autolimitada casi siempre.
geno por el neutrófilo, sin afectar la capacidad fagocítica Sin embargo, un grupo de pacientes pueden adquirir
de la célula. neumonía y si no reciben el tratamiento oportuno mue-
re del 10 al 20 % de ellos.
Lactoferrina. La lactoferrina es una proteína pro-
En la última Clasificación Estadística Internacional
ducida por células de las glándulas mucosas y los
de Enfermedades y Problemas relacionados con la Salud
leucocitos PMN. Es un potente agente bacteriostático y (CIE-10), Décima Revisión de la Organización Mundial
bactericida y cuando se une al hierro es capaz de matar de la Salud (OMS), que se utiliza para datos estadísticos
bacterias. de morbilidad y mortalidad y el llenado de certificados
Surfactante pulmonar. Es una sustancia de re- médicos y de defunción, las IRA comprenden un grupo
vestimiento alveolar constituida por fosfolípidos y pro- de entidades que son las siguientes:
teínas específicas que reducen la tensión superficial
alveolar durante la respiración. Las proteínas específi- Códigos.
cas A, B y C contribuyen a funciones biofísicas del
J00 - J06 Infecciones agudas de las vías respiratorias
surfactante y las A y D también tienen propiedades
superiores.
antimicrobianas. En ciertas condiciones como la enfer- J-00 Rinofaringitis aguda (resfriado común)
medad pulmonar crónica y la toxicidad de oxígeno, la J-01 Sinusitis aguda.
producción de esta sustancia por el neumocito tipo II J-02 Faringitis aguda.
está disminuida. La proteína específica A también favo- J-03 Amigdalitis aguda.
rece la migración del MA hacia los microbios y cuerpos J-04 Laringitis y traqueítis aguda
extraños. J-05 Laringitis obstructiva aguda (Crup) y Epiglotitis.
Defensinas. Descubiertas recientemente, son J-06 Infecciones agudas de las vías respiratorias
péptidos antimicrobianos clasificados en alfadefensinas superiores de sitios múltiples o no especifi-
cados.
y betadefensinas. Las alfadefensinas son proteínas ce-
J10 - J18 Influenza (gripe) y neumonía.
lulares de los macrófagos y neutrófilos y poseen activi- J-10 Influenza debida a virus de la influenza.
dad antimicrobiana sobre hongos, virus y bacterias. Las J-11 Influenza debida a virus no identificado.
betadefensinas provienen de las células epiteliales y par- J-12 Neumonía viral no clasificada.
ticipan en los mecanismos de defensa al prevenir la co- J-13 Neumonía debida a Streptococcus pneumoniae.
lonización y subsecuente infección de bacterias. J-14 Neumonía debida a H. influenzae.
Antiproteasas y antielastasas. Células de la in- J-15 Neumonía bacteriana no clasificada en otra parte.
flamación y principalmente el MA segregan proteasas y J-16 Neumonía debida a microorganismos infeccio-
sos no clasificados en otra parte.
elastasas que producen daño hístico. Afortunadamente,
J-17 Neumonías en enfermedades clasificadas en
hay antiproteasas y antielastasas que evitan e inhiben el otra parte.
posible daño que pueda producirse por las enzimas libe- J-18 Neumonía por organismos no especificados.
radas por células fagocíticas activadas. J20 - J22 Otras infecciones agudas de las vías respirato-
La alfa 1 antitripsina es la más importante rias inferiores.
antielastasa al nivel del aparato respiratorio inferior, donde J-20 Bronquitis aguda.
al nivel alveolar se une a la elastasa del neutrófilo para J-21 Bronquiolitis aguda.
evitar el daño de esta, además de inhibir otras enzimas y J-22 Infección aguda no especificada de las vías
respiratorias inferiores.
proteasas presentes en el pulmón.

872 Tomo III


Las IRA son causadas en más del 80 % de los La mortalidad es un índice de las manifestaciones
casos por virus. Los más frecuentes son el virus sincicial más graves de las IRA y estas muertes también propor-
respiratorio (VSR), influenza A y B, parainfluenza, cionan un indicador del estándar general de la atención
rinovirus, adenovirus y coronavirus. También el virus del en salud.
sarampión es frecuente en pacientes no inmunizados. Aunque la magnitud de la mortalidad por neumonía
Algunas veces están asociados a un síndrome específi- en los países en desarrollo se ha reconocido, general-
co, como por ejemplo el virus sincicial, con la bronquiolitis
mente las instituciones internacionales se han referido
y el parainfluenza 1 y 2 con el crup. Sin embargo, el
principalmente a las enfermedades diarreicas y a la
mismo síndrome puede ser causado por diversos agen-
tes y el mismo agente causa una amplia gama de malnutrición. Con frecuencia, las neumonías y las
síndromes diferentes. bronconeumonías son parte del círculo vicioso de la
En un número de casos, la infección viral es la cau- malnutrición y los episodios repetidos de diarrea e in-
sa de la infección grave que puede terminar con la muerte fección respiratoria.
o, lo más común, la infección viral se puede complicar El descuido casi general del problema de las IRA
con infección bacteriana, lo más frecuente en los países parece haber sido el resultado de la combinación de dos
del Tercer Mundo, donde los niños menores de 5 años, actitudes. Los clínicos, por una parte, opinando que las
sobre todo aquellos con factores de riesgo importantes IRA eran solo una cuestión de diagnóstico y tratamiento
tienen más probabilidades de adquirir neumonía y morir. con antimicrobianos; y para los planificadores de salud,
El 90 % de las muertes por IRA es ocasionado por las IRA constituyen un grupo complejo de entidades, por
neumonía bacteriana y principalmente por dos gérme- las cuales podría hacerse muy poco por tratarse de un
nes, el neumococo y el H. influenzae. problema comunitario, y esperan que el desarrollo
socioeconómico mejore esta situación.
Magnitud del problema Si miramos hacia atrás, dado la magnitud del pro-
blema de las IRA en los países en desarrollo, parece
Las infecciones respiratorias agudas extraordinario que el problema fuera ignorado por la OMS
en el mundo hasta 1976.
En 1976 Jelliffe se refiere a la diarrea, la neumo- Teniendo en cuenta la magnitud del problema que
nía y la malnutrición proteicocalórica como “los tres representan estas infecciones la 29 Asamblea Mundial
grandes problemas” entre las enfermedades extermina- de la Salud decide crear una sección dedicada al con-
doras de la niñez. trol de las infecciones respiratorias agudas. En 1984,
En 1980, Grant estimó que el 12 % de los niños se oficializa el Programa Global de control de las IRA,
que nacen cada año mueren durante sus 5 primeros años se aprueba uno que cubre el período 1984 a 1989 y pos-
de la vida y la mayoría de estas muertes ocurren en los teriormente otro para el período 1990 a 1995.
países más pobres, en algunos de los cuales la probabili- En 1990, la División de Población de las Naciones
dad de que un niño celebre su primer cumpleaños solo Unidas estima en 12,9 millones las defunciones ocurri-
llega al 50 %. Este importante mensaje va asociado al das en el mundo en niños menores de 5 años. De ellos,
hecho de que estos niños mueren de enfermedades 4,3 millones (el 33 %) se produce por IRA, principal-
prevenibles y tratables, particularmente las IRA, las en- mente neumonías. Además, se reportan 880 mil defun-
fermedades diarreicas agudas (EDA), sarampión, ma- ciones por sarampión, 480 mil de las cuales fueron por
laria y tos ferina. complicaciones respiratorias y 360 mil por tos ferina,
En 1980, el número de niños por debajo de 5 años que contribuyen a aumentar las defunciones por estas
fue de 554 millones y la UNICEF estimó que 10 millo- afecciones.
nes de ellos fallecían en el primer año de la vida y otros Aunque según la OMS estas cifras han disminuido
4 a 6 millones fallecían en las edades de 1 a 4 años, con
a 3,5 millones en los últimos 10 años, constituyen una
una tasa de 120 /1000 nacidos vivos. En 1997, según
Mulholland la tasa disminuyó a 88 /1000 nacidos vivos demostración palpable de la magnitud del problema pro-
en estas edades, lo que aparentemente fue un progreso. ducido por las IRA, y no son más que el reflejo de las
Sin embargo, la población de 554 millones en el 80 pasó condiciones de vida de las grandes masas desposeídas
a ser de 610 millones en 1997, por lo que el número total de los países del tercer mundo, que son los que aportan
de fallecidos se mantuvo en cifras similares a las de 1980. la gran mayoría de estos fallecidos, debido a la insalubri-
En el presente, la OMS estima que la tercera parte dad, la desatención en salud, el hambre, la pobreza y la
de estos fallecimientos en menores de 5 años son cau- ignorancia en que están sumidas como consecuencia de
sados por las infecciones respiratorias agudas. la injusticia económica y social.

Parte XII. Aparato respiratorio 873


Como se puede observar, el reconocimiento de la sarampión y la tos ferina están erradicados por la inmu-
importancia de las IRA como problema de salud en el nización.
mundo es un hecho prácticamente reciente, con menos Existen grandes diferencias en la mortalidad rela-
de 30 años de existencia. cionada con las IRA en los niños de países desarrolla-
En un Simposium realizado en Australia en 1984, dos y subdesarrollados. La diferencia parece hallarse
Douglas ya planteó: “Las IRA se hallan fuera de con- en la incidencia y gravedad de las IRA inferiores, y en
trol y representan un reto largamente ignorado en el cam- particular la neumonía. La diferencia entre los países
po de las enfermedades transmisibles. Millones de niños situados en extremos opuestos de la escala socioeco-
mueren todos los años y billones presentan morbilidad nómica se ha ampliado progresivamente. La mortalidad
aguda y crónica por sus efectos. Es inaceptable que una por IRA disminuyó en Europa y Norteamérica en la pri-
comunidad científica que ha desarrollado microships y mera mitad del siglo pasado antes que se introdujera nin-
la capacidad de visitar planetas deba continuar ignoran- guna intervención preventiva o terapéutica específica.
do un problema de salud de estas proporciones y acep- La disminución fue el resultado del perfeccionamiento
tar en forma pasiva el grado de ignorancia e impotencia gradual de las condiciones socioeconómicas.
que rodea actualmente este problema mundial”. La mortalidad por IRA es un índice de sus mani-
Como se señala en una publicación internacional
festaciones más graves. Las muertes por esta propor-
desde 1998, las IRA constituyen una pandemia olvida-
cionan un indicador operacional del estándar general de
da. La alta mortalidad no es noticia. Sin embargo, esta
la atención en salud.
es el equivalente a un avión Jumbo Jet con 400 niños
El estándar de vida de los países en desarrollo está
menores de 5 años que se estrella cada hora, día tras día
asociado con factores del huésped y ambientales, que
todo el año. Estos niños que fallecen constituyen una
aumentan el riesgo de IRA grave en los niños. Los ries-
verdadera desgracia internacional porque existen las
gos más importantes son el bajo peso al nacer y la
medidas para prevenir estas muertes: las inmunizaciones
malnutrición. La contaminación ambiental del aire inte-
y el tratamiento con antibióticos.
rior, la ausencia de lactancia materna, el humo del ciga-
A diferencia de las EDA, que producen mayor
rro, el hacinamiento y otros factores también revisten
morbilidad y afectación en los países del Tercer Mundo,
gran importancia.
las IRA afectan por igual a todos los países y a todas las
Algunos pequeños datos y cifras de diversas publi-
edades.
caciones sirven para mostrar el problema de las IRA en
Las IRA constituyen la primera causa de consul-
los países subdesarrollados, que constituye una verda-
tas médicas y de morbilidad tanto en los países desarro-
dera catástrofe:
llados como en los países en vías de desarrollo. La
− En Paraguay mueren por IRA 1 560 menores de
presencia de IRA en menores de 5 años es indepen-
5 años/1 000 nacidos vivos.
diente de las condiciones de vida y del grado de desarro-
Esta cifra es similar a la de Estados Unidos en 1911.
llo de un país. En la mayoría de los países se estima que
− Cada año mueren en Australia por IRA 4,1 niños
los niños menores de 5 años presentan de 4 a 8 episo-
menores de 5 años/ 100 00 habitantes. En Filipinas
dios de IRA por año. En un estudio realizado se observa
la cifra es 71 veces mayor.
la misma escala de incidencia en ciudades de Costa Rica,
− En la década del 80 fallecieron en Francia por
Etiopía, India y Estados Unidos.
IRA 1,7 menores de 5 años por 100 000 habitantes
La diferencia entre los niños de países desarrolla-
y en Holanda 1,1. Sin embargo en Egipto mueren
dos y los de en vías de desarrollo no radica en el núme-
173 y en Guatemala 271 por 100 000 habitantes.
ro de episodios sino en su gravedad, y es debida al
− Cada semana mueren por IRA más de 50 000
mayor riesgo de adquirir neumonía y morir en el curso
niños menores de 5 años, la gran mayoría en paí-
de una IRA.
ses del tercer mundo.
La brecha existente entre los países desarrollados
y subdesarrollados está dada como bien se señala por
Entre el 30 y el 60 % de las consultas pediátricas
las cifras de mortalidad. Las condiciones del paciente y
su medio son los que determinan esta diferencia. La la- en las instituciones de salud, y entre el 30 y el 40 % de
ringitis, la bronquiolitis o las neumonías como causa bá- los ingresos en hospitales, se atribuyen a IRA en países
sica o como complicación del sarampión y tos ferina en vías de desarrollo.
matan frecuentemente en los países del Tercer Mundo En países industrializados, la exposición a condi-
mientras que en los países desarrollados los niños pade- ciones sociales adversas aumenta también la posibilidad
cen estas enfermedades pero raramente mueren, y el de padecer IRA bajas, principalmente neumonía.

874 Tomo III


También los países desarrollados sufren las conse- 0,15/1 000 nacidos vivos y en Cuba es de 0,3/1 000 naci-
cuencias, aunque diferentes, de las IRA. Estas repre- dos vivos en 2004. En el resto de los países esta cifra es
sentan del 30 al 50 % de las atenciones médicas en la muy alta, llegando en algunos casos como Guatemala,
edad pediátrica y constituyen en muchos de estos países El Salvador, Haití, Perú, Bolivia, Nicaragua, República
el 30 % de las hospitalizaciones. Dominicana y otros, a valores 20 y 50 veces superiores.
Además, en estos países constituyen el 20 % de La Investigación Interamericana de Mortalidad en
las consultas en todas las edades, el 30 % de las ausen- la Niñez mostró que de los 35 065 defunciones de meno-
cias al trabajo, y el 75 % de las prescripciones de res de 5 años estudiados en 15 proyectos en las Améri-
antibióticos, la mayoría de los cuales son innecesarios, cas, 5 741 ocurrieron por neumonía como causa básica,
favoreciendo la aparición de cepas bacterianas resis- lo que representa el 16,3 %, y 10 299 tenían este ele-
tentes. Se calcula que en el mundo se utilizan 8 billones mento asociado, y se elevó al 29,3 %. Esto hace que las
de dólares anuales en el tratamiento de los síntomas de IRA ocupen el lugar más importante como causa básica
las IRA.
de muerte en estos países.
En un informe del Grupo Técnico Asesor en Infec-
Al igual que en el resto del mundo, del 80 al 90 %
ciones Respiratorias Agudas en Ginebra, se señala que
de las muertes por IRA en los países de América son
en los países europeos 20 millones de personas sufren
causadas por neumonías, y la mayoría de estas defun-
de IRA anualmente y que las pérdidas económicas debi-
ciones lógicamente ocurren en los países más pobres
do al ausentismo laboral, sobrepasan los 600 millones
del continente.
de días laborables al año, el equivalente a 3 000 millones
de dólares, cifra que se eleva en épocas de epidemias. Las IRA también constituyen la primera causa de
Kennedy y Forbes afirman que los fármacos consultas y hospitalizaciones en todos los países del con-
antiinfecciosos y los medicamentos para el resfriado y tinente. Del 30 al 50 % de las consultas pediátricas y del
la tos son responsables de más o menos el 50 % de las 20 al 40 % de las hospitalizaciones, se deben a estas
prescripciones realizadas a niños en la atención afecciones según datos de la Organización Panameri-
ambulatoria. Por su parte Hutton et. al. señalan que cana de la Salud (OPS).
aproximadamente el 25 % de las preparaciones farma- Las IRA constituyen, además, la principal causa
céuticas prescritas a los niños incluyen medicamentos de administración de antibióticos, el 70 % de los cuales
para la tos y el resfriado común. son innecesarios, también causante de un uso inapropia-
En Australia, se calcula que los síntomas respirato- do e indiscriminado de antihistamínicos, antitusígenos y
rios en los niños, causan un mínimo de 50 millones de expectorantes.
dólares de costos médicos y medicamentos por año, sin La otitis media aguda deja secuelas importantes
valorar los costos que influyen en la salud. En Estados como la hipoacusia y la sordera. La faringoamigdalitis
Unidos se gastan 2 000 millones de dólares anuales en por estreptococo betahemolítico es causa de complica-
prescripciones de antibióticos para la otitis media sola- ciones como la glomerulonefritis y la fiebre reumática,
mente. en un número importante de pacientes, pues al no recibir
la atención médica necesaria se presentan más secue-
Las infecciones respiratorias agudas
las e, incluso, se puede producir la muerte en un número
en las Américas de estos.
Cada año mueren alrededor de 140 000 a 150 000
niños menores de 5 años por IRA en las Américas. De Las infecciones respiratorias agudas en Cuba
ellos 100 000 son menores de un año y 40 000 a 50 000 Al igual que en el resto del mundo, las IRA consti-
de 1 a 4 años de edad.
tuyen uno de los principales problemas de salud en nues-
Mientras que las defunciones por IRA constitu-
tro país, y la primera causa de morbilidad y consultas,
yen del 1 al 3 % de las muertes en países desarrollados,
así como una de las 5 primeras causas de muerte en
en ciertos países de América Latina y el Caribe esta
cifra representa del 15 al 20 %, lo cual pone de mani- todas las edades.
fiesto las grandes diferencias socioeconómicas exis- La influenza y la neumonía ocupan el cuarto lugar
tentes entre los países desarrollados del norte, como como causa de muerte en todas las edades, superadas
Canadá y Estados Unidos, y los subdesarrollados del resto solamente por las enfermedades del corazón, los tumo-
del continente . res malignos y la enfermedad cerebrovascular. Durante
La tasa de mortalidad infantil por IRA en Canadá 2004 fallecieron 6 571 pacientes por influenza y neumo-
es de 0,1/1 000 nacidos vivos; en Estados Unidos es de nía, de los cuales solo 52 fueron menores de 15 años.

Parte XII. Aparato respiratorio 875


La morbilidad se ha mantenido inalterable en todas La morbilidad, y sobre todo la mortalidad por IRA,
las edades. Alrededor de 4 millones de atenciones médi- ha tenido variaciones importantes en nuestro país en los
cas por IRA se reportan anualmente, a pesar de que últimos 30 años, de tal forma que nos coloca con cifras
muchos enfermos por ser autolimitada la enfermedad, similares a las de los países más desarrollados. En
no acuden al médico. El 25 % del total de consultas y al América, solo Canadá y Estados Unidos nos superan
menos el 20 % de las hospitalizaciones son por IRA. ligeramente en algunos rubros, pero nuestras cifras son
En pediatría, a pesar de los avances alcanzados, muy similares a las de ambos países.
las IRA siguen constituyendo uno de los principales pro- Muchos factores han contribuido a disminuir la mor-
blemas de salud. Desde la época de los años 60 la mor- talidad por IRA en nuestro país, y entre ellos podemos
talidad por IRA, y principalmente por influenza y citar las siguientes:
neumonía han ocupado una de las 5 primeras causas de • Amplia cobertura de los servicios de salud que
muerte en el menor de 1 año, en el grupo de 1 a 4 y en el permiten que el niño reciba una atención médica
de 5 a 14 años, respectivamente. adecuada en cualquier lugar.
En el paciente menor de 1 año, en 1970, la influen- • Creación de los servicios de Neumología en los hos-
za y la neumonía ocuparon el 3er. lugar como causa de pitales pediátricos con personal especializado, y de-
muerte, con una tasa de 5,1/1 000 nacidos vivos y un dicación exclusiva y a tiempo completo para el
total de 1 202 fallecidos; en 2004, pasa al cuarto lugar diagnóstico y el tratamiento de las IRA.
con una tasa de 0,3 y solo 38 fallecidos; la tasa se redu- • Creación de la Red de Unidades de Cuidados Inten-
ce 17 veces y la cifra de fallecidos en el 98 %. sivos e Intermedios Pediátricos a lo largo de todo el
En el niño de 1 a 4 años, en 1970, fallecieron 218 país.
niños por influenza y neumonía, y en 2004 solo 9, con
• Priorización del programa por los médicos de familia
una reducción del 90 % de los fallecidos. La tasa des-
y especialistas de Medicina General Integral, con una
ciende de 2,2/10 000 habitantes en el 70; a 0,2 en 2004
cobertura del 100 % de la población en la atención
con una reducción de 10 veces.
primaria.
En el grupo de 5 a 14 años, fallecieron 50 en 1970,
• Conducta unificada de diagnóstico y tratamiento de
y solo 5 en 2004 con una reducción del 80 %. La tasa
estas enfermedades con la atención estándar de ca-
baja de 2,5/100 000 habitantes en el 70 a 0,3 en 2004,
sos, que incluye el ingreso “precoz” de todo niño que
con una reducción de 9 veces.
presente factores de riesgo importantes y terapia
En 2005 la cifra de fallecidos por IRA es similar a
con antibióticos en aquellos pacientes que así lo re-
la de 2004 en el paciente menor de 1 año.
La neumonía bacteriana es la principal causa de quieran.
muerte por IRA (90 %) en el menor de 15 años en los • Programa de inmunizaciones al 100 % de los meno-
diferentes grupos etarios y la bacteria más común que la res de 15 años que cubre un grupo de IRA.
produce es el neumococo. • Mejoría del estado nutricional de la población
La bronquiolitis aparece en epidemias anuales o pediátrica así como la disminución del bajo peso al
cada 2 años, de septiembre a enero, y constituye la se- nacer, que fue de 5 % en 2005.
gunda causa de muerte por IRA en los menores de • Incorporación en la docencia de pregrado y posgrado
1 año con cifras mínimas. de rotaciones a tiempo completo por los servicios de
Raramente alguna epiglotitis es causa de muerte Neumología pediátrica.
en el país. • Capacitación a través de cursos nacionales y pro-
También las IRA son, en la edad pediátrica, la pri- vinciales en la actualización de la atención de las IRA
mera causa de consultas y de hospitalizaciones con el a los especialistas en Pediatría y en Medicina Gene-
30 al 40 % de estas. ral integral entre otros.
El esquema de inmunización cubre al 100 % de los • Existencia de un Programa de Vigilancia
niños e incluye, entre otras, las vacunas contra la tuber- Epidemiológica de las Infecciones Respiratorias
culosis, la difteria, la tos ferina, el sarampión y el H. Agudas.
influenzae tipo b. La difteria está erradicada desde 1979, • Comunicación social mediante actividades educati-
el sarampión, desde 1993 y se interrumpe la transmi- vas a las madres y población en general a través de
sión de la tos ferina, de la que no se reportan casos medios masivos de difusión, programas de educación
desde 1994. para la salud y otras formas.

876 Tomo III


Programa de control de las infecciones • Capacitar sistemáticamente al personal técnico y pro-
respiratorias agudas en Cuba fesional de la salud.
• Educar a la población en la atención y prevención de
Ya desde la década de los 60, con la mejoría en la las IRA.
cobertura de salud y a la atención pediátrica por la crea-
ción de servicios especializados para las enfermedades El Programa contempla 5 actividades importantes:
respiratorias en los hospitales pediátricos, a las que se vigilancia, manejo estandarizado de casos, capacitación
dedicaron el 20 % de las camas, se da inicio a la aten- y comunicación social, investigaciones y evaluación.
ción preferencial de estas enfermedades. A esto se adi- A continuación explicamos cada una de ellas:
ciona el comienzo de la aplicación del Programa Nacional Vigilancia. A través del Sistema de Vigilancia se
de Inmunizaciones que se establece a partir de 1962, debe detectar el comportamiento de la mortalidad y
como un factor muy importante. morbilidad por IRA y sus cambios, así como su estudio
El Programa de Enfermedades Respiratorias Agu- causal, con la detección de los principales gérmenes cir-
das (Infecciones) en el niño surge en 1970 como parte culantes en cada momento.
del Programa de Reducción de la Mortalidad Infantil y El MINSAP mediante el Viceministerio de Higie-
continúa durante los años 80 hasta el momento actual a ne y Epidemiología y la Dirección Nacional de Estadísti-
manera de subprograma en el Programa Nacional de cas, el IPK, los Centros Provinciales y Municipales de
Atención Materno infantil. En 1989, se establece el Pro- Higiene y la red asistencial, tienen una importante parti-
grama de Reducción de Bajo Peso al Nacer que com- cipación en esta actividad.
plementa el Programa de Reducción de la Mortalidad El pediatra y el médico de atención primaria deben
Infantil y reviste gran importancia en la prevención de conocer los factores de riesgo de sus pacientes, la
las IRA. morbilidad por IRA, los síndromes clínicos que se pre-
En 2000, el MINSAP aprueba y redacta el Pro- sentan y los agentes infecciosos circulantes para poder
grama Integral de Atención y Control de las Infecciones realizar sus funciones con efectividad.
Respiratorias Agudas, que cubre todas las edades, pero Manejo estandarizado de casos. La atención
con dos vertientes bien definidas, una dirigida al menor estandarizada de los casos, tal como señala la OMS,
de 15 años, ya preexistente, y otra dirigida al mayor de constituye la piedra angular del Programa de Control de
esta edad. las Infecciones Respiratorias Agudas.
El Programa tiene como objetivo general el de re- En esta aplicación se utiliza la clasificación de las
ducir la mortalidad y morbilidad por IRA en la población Infecciones Respiratorias Agudas de Dennis y Clyde
cubana. modificada y no la Clasificación Internacional de Enfer-
Este programa en el menor de 15 años está dirigido a: medades de la OMS. Esto se realiza porque desde el
• Reducir la mortalidad por neumonía en los menores punto de vista práctico, facilita el diagnóstico anatómico
de 15 años. y etiológico y el tratamiento estandarizado del paciente.
• Reducir el uso de antibióticos y otros medicamentos Como se verá posteriormente, esta clasificación divide
para el tratamiento de las IRA. las IRA al nivel de la epiglotis en altas y bajas, y a su
• Disminuir la frecuencia de complicaciones de las in- vez estos dos grupos en no complicadas y complicadas
fecciones respiratorias agudas de las vías respirato- (Cuadro 69.2).
rias superiores. Sus cuatro puntos básicos deben ser cumplidos en
• Reducir la incidencia y gravedad de las IRA en las el orden secuencial establecido para obtener los resulta-
vías respiratorias inferiores. dos esperados: diagnóstico, clasificación, evaluación
y tratamiento.
Los objetivos específicos del Programa en Cuba En las actividades señaladas previamente está con-
son los siguientes: tenido cómo el médico debe llegar al diagnóstico de la
• Identificar y clasificar oportunamente los enfermos enfermedad que el niño presenta, y clasificarla en alta o
con IRA para realizar tratamiento ambulatorio u baja, no complicada o complicada. Este diagnóstico
hospitalario. topográfico y sindrómico, unido a elementos
• Implementar el subsistema de vigilancia. epidemiológicos que el médico debe conocer, como la
• Mantener los niveles de inmunización contra saram- circulación de determinado virus en ese momento, o el
pión, difteria y tos ferina, continuar la vacunación comportamiento epidémico por bronquiolitis o laringitis,
contra el Hemophilus influenzae tipo b y realizar por ejemplo, también permiten llegar a un posible diag-
vacunación antigripal a grupos de riesgo. nóstico causal.

Parte XII. Aparato respiratorio 877


Cuadro 69.2. Clasificación de las infecciones respiratorias agudas (IRA)

IRA altas:

• No complicadas: • Complicadas:
- Rinofaringitis aguda - Adenitis
- Faringoamigdalitis con - Otitis media
ulceraciones o vesículas - Absceso periamigdalino o retrofaríngeo
- Faringoamigdalitis con y - Sinusitis
exudados o membranas

IRA bajas:

• No complicadas: • Complicadas:
- Crups infecciosos: - Atelectasia
. Laringitis espasmódica - Empiema
. Epiglotitis - Absceso pulmonar
. Laringitis (L) - Mediastinitis
. Laringotraqueítis (LT) - Pericarditis
. Laringotraqueobronquitis - Neumotórax
(LTB) - Edema pulmonar no cardiogénico
- Bronquitis y traqueobronquitis: - Traqueítis bacteriana
- Bronquiolitis aguda - Osteomielitis
- Neumonías: - Artritis
· Neumonía intersticial - Infección bacteriana generalizada
· Neumonía lobar
· Bronconeumonía

El médico debe entonces realizar la evaluación Dentro de la atención estandarizada de casos está
del paciente, la cual se basa en 3 elementos: incluido el tratamiento estándar, con criterios científicos
• Diagnóstico probable. uniformes en todo el país, que el médico tiene que cono-
cer, dirigidos a realizar:
• Severidad del proceso.
• Tratamiento hospitalario de enfermedad muy grave
• Factores de riesgo presentes.
y neumonía grave en todos los niños.
• Tratamiento hospitalario de todas las neumonías en
Posteriormente, se decidirán e indicarán las inves-
niños menores de 1 año.
tigaciones complementarias para apoyar o confirmar el
• Tratamiento hospitalario de todas las neumonías con
diagnóstico, si fueran necesarias. Cuando ya se ha rea-
factores de riesgo importante, o complicadas, en ni-
lizado esta evaluación, el médico está en condiciones de
ños mayores de 1 año.
decidir y aplicar el tratamiento estandarizado de casos
• Tratamiento ambulatorio con ingreso domiciliario de
y determinar si el niño necesita un seguimiento ambula-
las neumonías no complicadas y sin factores de ries-
torio, ingreso en el hogar u hospitalización.
go en mayores de 1 año.
En el momento de la evaluación y más tarde, du-
• Tratamiento de niños con: faringoamigdalitis aguda,
rante el seguimiento, se debe vigilar la aparición de los
otitis, sinusitis y mastoiditis, síndromes crupales, bron-
signos de gravedad y/o evolución desfavorable, espe-
cialmente en los menores de 1 año. quitis aguda y bronquiolitis aguda.
Signos de gravedad: • Educación a las madres.
• Polipnea mayor de 50 ó 60 por min.
Capacitación y comunicación social. El desa-
• Tiraje severo.
rrollo de cursos nacionales, provinciales y municipales
• Aleteo nasal. sobre el manejo de las IRA dirigidos a especialistas en
• Cianosis. pediatría, medicina general integral y otros, constituye
• Rechazo a los alimentos. una de las actividades principales de este Programa.
• Trastornos hemodinámicos. También en la docencia de pregrado y posgrado
• Otros. de medicina y licenciatura en enfermería, el programa

878 Tomo III


se debe conocer, e incorporarse rotaciones y entrena- Cuadro 69.3. Factores de riesgo de adquirir neumonía o
mientos por los servicios de neumología de los hospita- morir en el curso de una IRA
les pediátricos.
• Relacionados con el huésped
La educación a las madres sobre la causa de las
− Corta edad.
IRA, sus manifestaciones clínicas y la manipulación de − Sexo.
estas deben desarrollarse en toda su magnitud, y el mé- − Bajo peso al nacer.
dico de atención primaria debe desempeñar un papel − No lactancia materna.
fundamental. − Déficit de micronutrientes.
La información científica actualizada y su disemi- − Falta de inmunizaciones.
− Enfermedades crónicas.
nación práctica constituyen un eslabón fundamental de • Relacionados con el medio ambiente
esta actividad. − Nivel socioeconómico de la familia.
Investigaciones. Múltiples y diversas pueden ser Escolaridad de los padres.
las investigaciones que pueden realizarse sobre las IRA. Per cápita familiar.
Estabilidad de la familia.
Como ejemplos se pueden señalar los estudios
Condiciones de la vivienda.
etnográficos, prevalencia de factores de riesgo, uso y − Contaminación ambiental.
abuso de medicamentos, causa, conocimientos de las Hogar:
madres y del personal de salud sobre las IRA, y otras. Humo de cigarro.
Evaluación. Como todo programa, este tiene una Combustible para cocinar.
Exterior
evaluación sistemática, mantenida y periódica, que valo- − Asistencia a instituciones infantiles.
ra los resultados obtenidos por su aplicación. − Enfriamiento.
• Relacionados con el agente infeccioso
FACTORES DE RIESGO − Alta prevalencia de portadores.
− Hospitalizaciones recientes.
EN LAS INFECCIONES RESPIRATORIAS − Antibioticoterapia reciente.
AGUDAS
Desde un punto de vista epidemiológico se ha es- Cuadro 69.4. Factores de riesgo de IRA grave en recién
tablecido la frecuente aparición de episodios de infec- nacidos y niños menores de 6 meses
ciones respiratorias agudas (IRA) en niños pequeños,
independientemente de sus condiciones de vida y del • Mecanismos defensivos insuficientes
− Pobre respuesta tusígena.
grado de desarrollo del país de procedencia. La diferen- − Poco desarrollo mucociliar.
cia entre países desarrollados y los en vía de desarrollo − Macrófagos insuficientes.
no radica en el número de episodios, sino en su grave- − Hipofunción del sistema del complemento.
dad, en un mayor riesgo de adquirir neumonía y morir en − Pobre respuesta de anticuerpos y pérdida de la inmuni-
dad pasiva transplacentaria.
el curso de una IRA.
• Predisposición a la insuficiencia respiratoria aguda
Se han identificado un número de factores − Respiración obligada por vía nasal.
predisponentes o de riesgo, los que se pueden agrupar − Vías aéreas mayores relativamente más anchas.
de acuerdo con su relación con el huésped, el medio − Vías aéreas periféricas más estrechas.
− Caja torácica rígida y débil.
ambiente que lo rodea y el agente infeccioso (Cuadro
− Menor elasticidad pulmonar.
69.3). En la mayoría de los niños fallecidos por IRA pue- − Menos cantidad de alvéolos.
den encontrarse más de un factor de riesgo, los − No existencia de vías de ventilación colateral.
socioeconómicos son el denominador común que favo- − Respuestas intensas de mecano receptores laríngeos
(apnea).
rece el bajo peso al nacer, la desnutrición, la falta de
− Tendencia a la fatiga del diafragma (menor desarrollo
inmunizaciones y las condiciones ambientales desfavo- del retículo sarcoplásmico).
rables.

Corta edad Sexo


La mayoría de los fallecimientos por IRA ocurren El sexo masculino es el más afectado, sin que se
en el primer año de vida y sobre todo en los primeros 6 haya definido la causa.
meses, debido a la inmadurez de las vías respiratorias y
sus mecanismos defensivos, lo que favorece la mayor Bajo peso al nacer
gravedad y la predisposición a la insuficiencia respirato- En niños nacidos antes del término o con bajo peso
ria aguda (Cuadro 69.4). para la edad gestacional hay mayor grado de inmadurez

Parte XII. Aparato respiratorio 879


y menos capacidad defensiva del sistema respiratorio Deficiencia de micronutrientes
que sus congéneres que nacieron con un peso mayor de No solo se debe considerar la desnutrición como
2 500 g. factor de riesgo en términos cuantitativos, como es el
Los niños pretérminos no recibieron las inmuno- bajo peso para su talla o edad o la disminución de la
globulinas que por vía transplacentaria les transmite la masa magra o grasa. La deficiencia de algunos
madre durante el último trimestre del embarazo y que lo micronutrientes, cualitativamente, también favorece las
protegen pasivamente. IRA graves. Se ha señalado la mayor mortalidad en ni-
Estos niños también tienen una función respirato- ños con deficiencia severa de vitamina A sin desnutri-
ria más restringida, con tendencia a la apnea y los ción asociada, por alteraciones en la inmunidad celular,
desequilibrios ácido-básicos. Son frecuentes además, los fundamentalmente en casos de sarampión complicado.
problemas nutricionales, durante el primer año de vida, La administración de vitamina A revierte estas al-
asociados a destete precoz e intolerancia digestiva. teraciones y disminuye la mortalidad por sarampión y
El bajo peso al nacer, sobre todo en los nacidos a diarreas en áreas de alta incidencia de xeroftalmía. No
término constituye uno de los dos factores de riesgo más se ha demostrado que la suplementación con vitamina A
importantes según la OMS incrementando más de siete tenga efecto sobre la mortalidad por IRA no asociada a
veces el riesgo de muerte. sarampión.
El promedio de niños con bajo peso es superior en La deficiencia de hierro, así como de selenio, zinc,
países subdesarrollados, donde se puede encontrar en cobre y otros minerales pueden constituir factores de
más del 15 % de los nacimientos. Aunque Cuba ha dis- riesgo.
minuido la incidencia del bajo peso (5,5 % en 2005), este El hierro en el organismo forma parte de enzimas y
es un factor de riesgo que sigue apareciendo en los fa- cofactores enzimáticos, que son vitales en la mayoría de
llecidos por IRA. los tejidos.
En los estados carenciales de hierro se han identi-
Desnutrición ficado diversas alteraciones que favorecen la aparición
La desnutrición severa condiciona alteraciones de infecciones:
inmunológicas y deprime las defensas locales, constitu- − Disminución de los niveles de lactoferrina en las
yendo el 2do factor de riesgo más importante según la secreciones respiratorias, lo que afecta su función
OMS (Cuadro 69.5). Su incidencia es muy baja también linfoestimuladora y su capacidad antinflamatoria,
en Cuba, pero la encontramos en varios fallecidos casi bactericida, viricida y fungicida.
siempre asociada al bajo peso al nacer y destete precoz. − Disminución de la enzima mieloperoxidasa de las
Cuadro 69.5. Factores de riesgo de IRA grave en la células fagocíticas, lo que compromete la capaci-
desnutrición dad bactericida de estas células.
− Disminución de la enzima reductasa de ribonu-
• Alteraciones generales
cleótido, lo cual afecta la síntesis del DNA en to-
− Debilidad muscular con pobre respuesta tusígena.
• Alteraciones de la inmunidad celular dos los tejidos y particularmente de las células del
− Atrofia tímica y disminución de la hormona tímica. sistema inmune.
− Disminución de los linfocitos T circulantes y de linfocitos
NK. En general, la respuesta inmune puede encontrar-
− Disminución de la transformación linfocitaria.
se comprometida ya que se ha descrito disminución de
− Disminución de la producción de interferones.
− Niveles normales o aumentados de linfocitos T supreso- la respuesta de hipersensibilidad retardada, de la pro-
res circulante. ducción de linfoquinas, de la formación de rosetas, así
• Alteraciones de la inmunidad de tipo humoral como alteraciones en la proporción y función de varios
− IgA secretoria disminuida. subsets de células T.
− Bajos niveles de complemento.
− Inmunoglobulinas normales o disminuidas.
En Cuba es frecuente la anemia ferripriva en niños
• Alteraciones de los mecanismos de defensa del sistema res- con neumonías graves.
piratorio
− Disminuye el aclaramiento de bacterias y virus. No administración de lactancia materna
− Favorece la adherencia bacteriana.
− Afecta la función del macrófago alveolar. La leche materna es el alimento ideal de la especie
Antiviral. y garantiza las necesidades del lactante. Contiene ade-
Atracción de neutrófilos. más anticuerpos, lactoferrina, células y productos celu-
− Inhibe la síntesis de surfactante.
lares que impiden la colonización del aparato respiratorio

880 Tomo III


superior por bacterias patógenas y protegen al niño pa- inmunes congénitas o adquiridas incluyendo el SIDA,
sivamente contra múltiples agentes infecciosos: virus así como la sicklemia entre otras.
sincicial respiratorio y virus de la influenza, estreptococo
B, neumococo, Hemofilus influenzae y otros. Nivel socioeconómico de la familia
En diversos estudios que comparan niños peque- Se ha demostrado que las condiciones de vida in-
ños de acuerdo con la alimentación recibida, se ha re- adecuadas favorecen las IRA graves interactuando va-
portado doble incidencia de hospitalizaciones por IRA,
rios factores: condiciones deficientes de ventilación y
mayor frecuencia de otitis media aguda, bronquiolitis
hacinamiento en las viviendas que favorecen la transmi-
severas y neumonías graves, así como incremento de la
sión de las IRA, baja escolaridad de los padres y bajo
mortalidad en lactantes que no recibieron leche materna.
percápita familiar, con un cuidado inadecuado y deficiente
Falta de inmunizaciones alimentación del niño e inestabilidad familiar. A esto se
suman problemas culturales, migraciones por guerras y
Muchas enfermedades prevenibles por vacunas hambrunas y falta de acceso a los servicios de salud.
producen neumonías o complicaciones respiratorias que
condicionan mortalidad. Contaminación ambiental
El esquema vacunal básico propuesto por la
El hogar es el lugar donde el niño permanece la
OMS previene la difteria, la tos ferina y el sarampión,
mayor parte del tiempo, por lo que resulta muy irritante
y aunque se ha ampliado la cobertura vacunal a mu-
la presencia de contaminantes en este medio.
chas regiones del mundo, todavía ocurren epidemias El humo del cigarro es el más importante de ellos,
de estas enfermedades en países en vías de desarro- sobre todo cuando es la madre o la figura que la sustitu-
llo así como resurgimiento de brotes en países que de- ye la persona que fuma.
jaron de vacunar. El humo del cigarro puede permanecer varias ho-
En el momento actual, muchos países han incorpo- ras en una habitación y su inhalación en la edad pediátrica,
rado al esquema la vacuna conjugada que previene la incluyendo al adolescente, es mucho más tóxica y noci-
enfermedad invasiva por Hemofilus influenzae tipo B, va que en el adulto. Este humo contiene partículas
la cual es altamente efectiva en erradicar la enfermedad. respirables, gases irritantes: monóxido y dióxido de car-
La enfermedad neumocócica cuenta en estos bono, dióxido de nitrógeno, aldehídos y otras muchas
momentos con una vacuna conjugada que cubre los 7 sustancias.
serotipos más frecuentes en el niño, y se encuentran en Estos componentes lesionan el epitelio de las vías
evaluación formulaciones que incluyen 9, 11 y 13 seroti- respiratorias, que disminuyen el aclaramiento mucociliar,
pos. Esta vacuna es efectiva contra los serotipos inclui- inducen hipersecreción de mucus, disminución del
dos. En poblaciones donde se ha usado, se reporta surfactante y de la actividad del macrófago alveolar y
aumento de infecciones por serotipos no vacunales, los tienen propiedades oxidantes.
cuales son en general menos invasivos y más suscepti- En niños nacidos de madres que fumaron durante
bles a la antibioticoterapia. el embarazo, se han descrito alteraciones estructurales
La vacuna antigripal, que se prepara de acuerdo en los pulmones y tienen como promedio 180 a 200 g
con el pronóstico de la cepa que circulará, puede ser menos de peso.
muy útil sobre todo en niños de alto riesgo. La aspiración pasiva de humo se asocia a la dismi-
Se trabaja en vacunas contra el estreptococo B, nución de la tasa de crecimiento de la función pulmonar
Chlamydias y Mycoplasmas, así como los principales vi- durante la niñez, mayor frecuencia de IRA bajas parti-
rus respiratorios. Aunque el virus sincicial respiratorio cularmente traqueítis y bronquitis, incremento en la tasa
de hospitalizaciones por neumonía y otras infecciones
es un patógeno muy importante en el primer año de la
respiratorias en menores de 2 años y mayor riesgo de
vida, aún no se ha logrado una vacuna que induzca una
otitis media aguda y recurrente.
respuesta inmune adecuada y duradera.
Otro contaminante del hogar es el combustible uti-
lizado para cocinar, los que también generan partículas,
Enfermedades crónicas gases tóxicos y otros compuestos, son particularmente
Existe un grupo de enfermedades que disminuyen nocivos los gases que se liberan de la combustión de
los mecanismos defensivos locales o sistémicos, favore- madera o materia orgánica, así como del keroseno y
ciendo las neumonías: malformaciones congénitas petróleo, sobre todo cuando no hay una adecuada ven-
pulmonares, digestivas o cardíacas, fibrosis quística, asma tilación en la cocina, o los alimentos se elaboran en la
bronquial y enfermedades neurológicas, neuromusculares misma habitación donde se duerme y realizan otras
u otras que se acompañan de hipotonía, las deficiencias actividades.

Parte XII. Aparato respiratorio 881


La contaminación exterior dada por los gases libe- El seguimiento de los niños de alto riesgo requiere:
rados de las industrias o la combustión de los vehículos • Controles periódicos
automotores es menos importante, pero debe tenerse en • Educación familiar
cuenta sobre todo en las grandes urbes. • Controles periódicos por personal de mayor calificación
• Criterio de ingreso más precoz, tanto en el hogar como
Asistencia a instituciones infantiles en el hospital
Cuando el niño asiste a un círculo infantil o guarde- • Seguimiento estrecho al nivel hospitalario, jerarqui-
ría, se incrementa el riesgo de transmisión de IRA virales, zación por personal de alto nivel y alta hospitalaria en
así como de colonización nasofaríngea con bacterias coordinación con su médico de atención familiar.
patógenas a partir de portadores. Similar riesgo tienen
los niños que son cuidados en una casa, cuando el nú- INFECCIONES RESPIRATORIAS AGUDAS
mero de niños es mayor de 3 ó 4. La colonización con ALTAS NO COMPLICADAS
algunos patógenos específicos como el neumococo re-
Son aquellas infecciones que afectan, fundamen-
sistente a la penicilina, es un problema importante en la talmente, estructuras del sistema respiratorio situadas
actualidad. por encima de la epiglotis y que tienen una duración de 4
En las familias numerosas, en las cuales conviven semanas o menos y promedio de 7 a 14 días. Se consi-
niños pequeños con niños de edad preescolar y escolar, deran en ellas 3 síndromes clínicos:
el riesgo de transmisión de IRA y colonización • Rinofaringitis infecciosa aguda.
nasofaríngea puede ser también mayor. • Faringoamigdalitis agudas con vesículas, exulcera-
ciones o nódulos.
Enfriamiento • Faringoamigdalitis con exudados o membranas (tam-
El enfriamiento se ha señalado como un factor de bién llamadas faringoamigdalitis, faringitis o amigda-
riesgo en países fríos y puede ser muy importante en litis supuradas).
niños con bajo peso al nacer. No se sabe exactamente si
el frío afecta los mecanismos defensivos o si la forma Rinofaringitis infecciosa aguda
de vida más cerrada y con menos ventilación en los in- En ellas están incluidos diversos cuadros clínicos
viernos muy crudos, favorece la transmisión de las IRA con distintas denominaciones: catarro común, rinitis y
y la colonización nasofaríngea. rinofaringitis catarral aguda. También hay quienes in-
cluyen en este grupo otro cuadro clínico, la rinofaringitis
Alta prevalencia de portadores nasofaríngeos infecciosa febril por Estreptococo beta hemolítico gru-
La prevalencia de bacterias productoras de neu- po A (EBHGA), que se puede presentar en lactantes
monía se incrementa en países en desarrollo debido al habitualmente desde pocos meses de edad hasta los 2 a
hacinamiento, las condiciones de vida y los altos índices 3 años de vida.
de desnutrición. Las hospitalizaciones recientes, de me- En su gran mayoría, las rinofaringitis infecciosas
nos de 1 mes y que algunos autores extienden hasta 3 agudas son producidas por virus, en particular los
meses también favorecen esta colonización. rinovirus, pero también pueden ser causadas por virus
parainfluenza, metaneumovirus humano, sincicial respi-
Consideraciones finales ratorio, coronavirus y otros virus; menos frecuentemen-
Aunque de forma general la OMS señala al bajo te, por bacterias como Mycoplasmas, Chlamydias
peso al nacer y la desnutrición como los dos factores de (principalmente pneumoniae), Estreptococos beta
riesgo más importantes, no hay dudas de que pueden hemolíticos, en particular del grupo A y otras.
existir variaciones de una región a otra. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
El conocimiento de estos factores de riesgo es muy Varían según la edad del niño.
importante tanto para la prevención como para el segui- En los menores de 6 meses, el síntoma fundamen-
miento de los niños en riesgo. tal es el estornudo con obstrucción y secreción nasal, a
La prevención requiere: veces severa, que dificulta el sueño y la ingestión de
• Identificar la prevalencia de factores de riesgo y sus alimentos y líquidos; en ocasiones se acompaña de tiraje
causas bajo ligero por la propia obstrucción. Por lo general no
• Trazar estrategias de eliminación de estos factores hay fiebre.

882 Tomo III


En los niños entre 6 meses y 3 años de edad, la la anorexia y cierto grado de astenia se pueden prolon-
fiebre es más frecuente y puede alcanzar hasta 40 °C de gar por más tiempo, hasta 2 a 3 semanas. Las diarreas
temperatura axilar, con irritabilidad y puede desencade- que pueden presentarse al comienzo del cuadro tienen
nar convulsiones en niños predispuestos. Al comienzo del una duración de pocas horas y no es raro que estén se-
cuadro pueden presentar vómitos, diarreas o ambos, que guidas de constipación por algunos días.
habitualmente son de poca duración; con frecuencia, hay
COMPLICACIONES
secreción acuosa, mucosa o hasta mucopurulenta, que,
con frecuencia, dificulta el sueño y la ingestión de alimen- Las más frecuentes son las infecciones bacterianas
tos. Muchas veces hay anorexia sin relación con las ma- secundarias que producen una rinitis purulenta, acom-
nifestaciones nasales. La orofaringe estará enrojecida, con pañada por sinusitis maxilar o no, sobre todo en los pri-
meros años de edad; en el lactante se puede producir
los folículos linfáticos aumentados en su pared posterior y,
etmoiditis caracterizada por edema y enrojecimiento
a la otoscopia, en las primeras 24 a 48 h, los tímpanos,
periocular. Entre las complicaciones tendremos tam-
con frecuencia estarán ligeramente congestivos, sin que
bién otitis media purulenta (la más frecuente), adenitis
exista otitis media.
cervical (a veces supurada), laringitis, crups y neumo-
En los niños de 4 o más años no hay fiebre o esta
nía. En pacientes hiperreactivos se puede desencadenar
es ligera. Inicialmente, hay sequedad o irritación de las
una laringitis espasmódica o un asma bronquial, a veces
fosas nasales y/o de la orofaringe, por lo general con precedida de manifestaciones laríngeas.
estornudos. A las pocas horas, con frecuencia, se agre-
gan escalofríos, dolores musculares y secreción nasal TRATAMIENTO

acuosa o mucosa que después se puede hacer Lo dividiremos como en toda IRA no complicada
mucopurulenta. Puede haber cefaleas, anorexia, aste- en: medidas generales, locales, específicas e innecesa-
nia y malestar general, o no. La orofaringe estará enro- rias o hasta perjudiciales. (Ver Tratamiento de las IRA
jecida, aunque en las primeras horas se puede presentar no complicadas.)
normal y existen adenopatías cervicales pequeñas o
Faringoamigdalitis con vesículas,
medianas. La respiración bucal produce sensación de
molestia o dolor faríngeo, así como tos seca que poste- nódulos o ulceraciones
riormente, con frecuencia, será húmeda.
Son producidas, principalmente, por virus herpes sim-
DIAGNÓSTICO
ple tipo 1 y los virus Coxsackie A. El primero produce un
La causa viral, bacteriana o por otros agentes se cuadro, la gingivoestomatitis herpética (con faringitis) y
hará por las técnicas microbiológicas correspondientes; el segundo la herpangina, la faringitis linfonodular o, con
el hemograma tiene un valor relativo, pues los cuadros menos frecuencia, el síndrome boca-mano-pie.
virales pueden producir leucopenias, normoleucocitosis
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
y hasta leucocitosis de 20 000 por mm/c o más, en sus
Estas faringoamigdalitis se caracterizan por fiebre
comienzos, por lo que el cuadro clínico y los estudios
hasta de 40°C, de aparición casi siempre súbita y con
microbiológicos son los únicos que permitirán hacer el
una duración de varios días, acompañada a veces, de
diagnóstico del síndrome y del agente causal.
vómitos; hay dolor faríngeo y odinofagia. Al examen
Se deben descartar otras afecciones en que existe
físico, en la gingivoestomatitis herpética, las encías es-
una primera fase de rinofaringitis y a las que puede se-
tán edematosas, dolorosas y sangrantes, con pequeñas
guir una segunda etapa, en horas o pocos días, con ma-
vesículas rodeadas de una zona más enrojecida que se
nifestaciones mayores: enfermedades exantemáticas,
pueden extender a toda la mucosa bucal y llegar al pala-
meningoencefalitis, neumonías, crups, gastroenteritis,
dar blando, pero respetan las amígdalas y la pared pos-
miocarditis, etc., aunque solo la evolución hacia la se-
terior de la orofaringe que están enrojecidas. Hay
gunda fase permitirá hacer el diagnóstico diferencial.
adenopatías cervicales de tamaño variable. Es impor-
EVOLUCIÓN tante el saliveo, la halitosis y el rechazo a la ingestión de
Habitualmente, se presenta sin complicaciones y agua y alimentos.
tiene una duración de 7 a 14 días como promedio. La En la herpangina, la orofaringe está enrojecida y
fiebre dura pocas horas o pocos días, al igual que las en los pilares anteriores, principalmente, aunque tam-
manifestaciones nasales, la tos y la irritabilidad, aunque bién en el paladar blando, hay pequeñas lesiones

Parte XII. Aparato respiratorio 883


vesiculares de 2 a 5 mm de diámetro rodeadas de un Hay infecciones sistémicas que pueden presentar
halo rojo y que se ulceran rápidamente y dejan FA con exudados como la fiebre tifoidea (angina de
exulceraciones que duran varios días. Hay dolor espon- Dubcet), como los virus Ebstein Barr que producen la
táneo en la orofaringe y odinofagia, con rechazo a la mononucleosis infecciosa, u otros virus que producen el
ingestión de alimentos y hasta de líquidos, con gran an- síndrome parecido a la mononucleosis, sobre todo en
siedad familiar. En la faringitis linfonodular hay enrojeci- pacientes inmunodeprimidos o malnutridos por defecto,
miento de la orofaringe y en los pilares anteriores, en donde pudiera incluirse la clásica angina de Vincent.
Estas infecciones sistémicas no las incluimos como IRA
pequeñas nodulaciones rojizas de 2 a 5 mm de diámetro
altas no complicadas.
que no se ulceran. En el síndrome boca-mano-pie, se
Microorganismos anaerobios (peptoestreptococos,
presentan manifestaciones orofaríngeas semejantes a la fusobacterias, bacteroides melanogénicos) pueden pro-
herpangina, pero están acompañadas de vesículas en las ducir cuadros graves orofaríngeos o de las estructuras
manos y en los pies, sobre todo, en los bordes. En todos adyacentes, raros hoy en día, limitados a niños con
estos cuadros hay adenopatías cervicales, renitentes y malnutrición por defecto severas o con deficiencias
más o menos dolorosas. inmunológicas congénitas o adquiridas (por ejemplos:
agranulocitosis por medicamentos, SIDA). Citaremos
DIAGNÓSTICO
algunas:
Si tenemos en cuenta las lesiones típicas de cada • FA supuradas (B. melanogenicus).
entidad, estas nos permiten plantear su causa viral, que • Angina de Ludwig (celulitis severa en los espacios
se ratificará por estudios microbiológicos. El hemograma sublingual y submaxilar, a punto de partida de absce-
no suele estar alterado, aunque en los primeros momen- sos peridentales).
tos, sobre todo en las infecciones por Coxsackie, se puede • Síndrome de Lemere (tromboflebitis séptica de la
presentar leucocitosis con neutrofilia, por lo que el yugular interna a punto de partida de FA purulentas,
leucograma no tiene el valor que algunos le achacan. otitis o mastoiditis y que pueden producir hasta abs-
cesos cerebrales).
EVOLUCIÓN
• Angina de Vincent (gingivitis necrotizantes y celulitis
Estos procesos tienen una duración habitual entre facial).
7 a 14 días y es característico, el saliveo y el rechazo de
los alimentos. Nos referiremos a la faringoamigdalitis por
COMPLICACIONES estreptococos (FAE) y tendremos en cuenta una serie
de problemas que se plantean desde los puntos de vista
Son excepcionales; la meningoencefalitis es la más
epidemiológico, de diagnóstico, de tratamiento y de com-
reportada.
plicaciones, en particular las FAE producidas por los
TRATAMIENTO Estreptococos beta hemolíticos del grupo A (EBHGA).
Lo dividiremos como en toda IRA no complicada Generalmente, las FAE son producidas por alrede-
en: medidas generales, locales, específicas e innecesa- dor de 80 serotipos diferentes y casi siempre es una afec-
rias o hasta perjudiciales. (Ver Tratamiento de las IRA ción localizada y autolimitada, pero a veces hay
no complicadas.) complicaciones inmediatas, supuradas, como absce-
sos retrofaríngeos (niños pequeños), abscesos
Faringoamigdalitis con exudados periamigdalinos (escolares sobre todo), otitis media (la
más frecuente de estas complicaciones), sinusitis y
o membranas adenitis cervical supurada; o complicaciones tardías,
También reciben el nombre de amigdalitis agudas no supuradas, como la fiebre reumática y la
supuradas y, en algunos países, anginas o simplemente glomerulonefritis difusa aguda (GNDA) que aunque más
faringitis o faringoamigdalitis (FA). frecuentemente son secundarias a impétigo o a
En países en desarrollo se clasifican en diftéricas y piodermitis (entre 1 y 5 semanas después), pueden ser
no diftéricas. En Cuba, donde la difteria ha sido el resultado de FAE producidas por algunos serotipos
erradicada desde hace más de 30 años, las FA se divi- del EBHGA (el 12 por ejemplo). La fiebre reumática
puede ser producida por casi todos los serotipos de
den, para su diagnóstico y tratamiento, en estreptocócicas
EBHGA, pero los más citados, aunque varían según los
y no estreptocócicas; estas últimas casi siempre son de distintos países, son: 1, 3, 5, 6, 18, 19 y 24. Hasta ahora,
causa viral, sobre todo por adenovirus; menos frecuen- no se ha encontrado un factor reumatógeno. La apari-
temente pueden ser producidas, en niños mayores de 8 ción de la fiebre reumática o la cardiopatía reumática
años, por Mycoplasmas pneumoniae. sigue entre 1 y 5 semanas (promedio: 20 días) a la FAE.

884 Tomo III


La Corea de Sydenham aparece un poco más tarde ángulo del maxilar. Hay congestión y edema de la farin-
(meses). ge, los pilares amigdalinos y el paladar blando, que pue-
Se han citado sobre todo en niños mayores y adoles- den presentar petequias sobre la mucosa enrojecida de
centes FAE por Estreptococos beta hemolíticos de los manera difusa. Los exudados amigdalinos positivos al
grupos C y G, que no parecen producir fiebre reumática. EBHGA por cultivo, según distintas publicaciones, apa-
En los últimos 20 años, se han descrito complica- recen entre el 30 y el 75 % de las FAE.
ciones invasivas por estreptococo como la fascitis En los niños entre 1 y 3 años de edad el cuadro clínico
necrosante o el síndrome de shock tóxico que, generalmen- de las IRA altas producidas por EBHGA tiende a presen-
te, se produce a partir de lesiones en la piel, aunque en algu- tarse con fiebre moderada, secreción nasal seromucoide y
nos pacientes se han citado como secundarias a una FAE. con prolongación por días o pocas semanas de la fiebre o
El contagio de la FAE se produce por contacto di- febrícula con irritabilidad y anorexia; son poco frecuentes
recto con pacientes enfermos, incluso por microgotas los exudados amigdalinos. En estas edades (menos de 3
de las vías respiratorias altas y parece que no es habi- años) los cuadros de faringitis con exudados amigdalinos
tual que se produzca a partir de objetos o animales. Se son producidos, generalmente, por virus, en especial
ha citado FAE por ingestión de alimentos contaminados adenovirus. Se han citado cuadros de faringitis
que producen brotes explosivos. Los alimentos estreptocócicas en algunos países en forma de brotes en
incriminados son la leche, sus derivados y, últimamente, centros de cuidados diurnos (en otros países llamados
se citan con más frecuencia la ensalada de huevos y guarderías o, entre nosotros, círculos infantiles), pero que
los huevos duros rellenos, no refrigerados y contamina- deben ser demostrados por Microbiología antes de uti-
dos por humanos. lizar penicilina u otro antibiótico de forma indiscriminada.
El período de incubación es, por lo habitual, entre 1 Estos cuadros no producen fiebre reumática.
y 5 días, y rara vez es más largo. El período de transmi-
sión en casos clínicos no tratados y sin complicaciones DIAGNÓSTICO

parece ser de 10 a 20 días, pero cuando hay secreción Lo ideal es realizar a un paciente con síntomas y
purulenta en la faringe puede ser de semanas o meses. signos que nos hagan sospechar una infección por
Los casos clínicos tratados, casi siempre con penicilina, EBHGA, una prueba de las llamadas rápidas para de-
son habitualmente no contagiosos a las 24 o 48 h de co- mostrar la existencia de antígenos estreptocócicos (latex,
menzado el tratamiento, aunque como veremos más ade- contrainmuno-electroforesis, coaglutinación, inmu-
lante, existe el problema de los portadores del EBHGA. nofluorescencia u otras).
La susceptibilidad a la FAE es general, aunque • Si la prueba resulta positiva, consideraremos que es-
muchas personas desarrollan inmunidad contra el tamos frente a una faringitis estreptocócica y debe-
serotipo del grupo A que produjo la enfermedad. Los mos tratarla.
anticuerpos pueden persistir por meses o años. La fie- • Si la prueba es negativa, se realiza un exudado
bre reumática y sobre todo la cardiopatía reumática, casi faríngeo, con una buena técnica por un personal
han desaparecido en países desarrollados con buenas bien entrenado. Si el cultivo es positivo se conside-
condiciones higiénicas y tratamiento adecuado, aunque ra como infección estreptocócica y se impone trata-
últimamente se han citado brotes en algunos de estos miento. Si el cultivo es negativo, no se indica
países que parecen estar asociados a serotipos específi- tratamiento.
cos (1, 3 y 18). En países en desarrollo el hacinamiento
y la falta de asistencia médica parece que todavía tienen Sin embargo, en la práctica diaria es imposible que
un papel importante en la morbilidad por estas afeccio- a todos los pacientes en la Atención Primaria o en los
nes, aunque no hemos encontrado muchos trabajos so- departamentos de urgencias de atención primaria o de
bre esto. En Cuba, la disminución de la fiebre reumática hospitales se les pueda investigar de esta manera pues
ha sido evidente en los últimos 30 años. Parece que hay es costoso y se necesitan técnicos bien entrenados y
cierta predisposición familiar a padecer fiebre reumática. permanentes. Por eso, en ausencia de lo anterior, nos
MANIFESTACIONES CLÍNICAS basaremos en la existencia o ausencia de una serie de
La FAE y la fiebre reumática son raras en niños síntomas y signos, aunque ninguno de ellos aislados
menores de 3 años. La FAE es más frecuente entre los es patognomónico de FA por EBHGA. Con las limita-
5 y 15 años, aunque se puede encontrar en otras eda- ciones antes enunciadas exponemos una serie de sínto-
des. Se caracteriza, clásicamente, por fiebre de apari- mas y signos, con valor estadístico relativo, que nos
ción repentina, dolor de garganta, odinofagia y ayudará en parte para diferenciar una faringitis
adenopatías cervicales dolorosas sobre todo al nivel del estreptocócica de una no estreptocócica (Cuadro 69.6).

Parte XII. Aparato respiratorio 885


Cuadro 69.6. Diagnóstico diferencial entre la FA estreptocócica y la no estreptocócica

Síntoma o signo Estreptocócica No estreptocócica

Edad* Menor de 3 años Mayor de 3 años

Adenopatías*
Tamaño Medianas o grandes Pequeñas casi siempre
Dolorosas XX-XXX/XXX 0-X/XXX
Localización Ángulo del maxilar o por Igual, pero además puede haber otras
delante del esternocleido- localizaciones en el cuello
mastoideo
Rash escarlatiniforme* SÍ NO
Contacto con FAE probada * SÍ NO
Orofaringe muy roja* SÍ Poco o moderadamente enrojecida

Punteado hemorrágico en el paladar


blando y/o faringe * SÍ NO
Odinofagia* SÍ Sí, pero menos intensa
Úvula inflamada SÍ NO, o poco
Tos NO SÍ
Rinorrea NO SÍ
Ronquera NO SÍ
Conjuntivitis NO SÍ

* Tienen valor varios de ellos para la FAE, en ausencia de tos, rinorrea, ronquera y/o conjuntivitis.

EXÁMENES DE LABORATORIO los títulos de antiDNasa B que se mantienen varios meses


Se considera que es necesaria para el diagnóstico elevados y pudieran ser de cierta utilidad en el diagnós-
una prueba rápida para estreptococos, anteriormente tico de la corea de Sydenham que aparece, por lo gene-
citada, positiva. Si esta es negativa, el exudado faríngeo ral, más de 3 meses después de la infección.
positivo, realizado con una buena técnica, que nos ser- El título de antiestreptolisina O es a veces indebi-
virá para plantear una FAE en un niño sintomático. damente utilizado. El título en adultos normales es has-
Los exámenes basados en la reacción en cadena ta 250 U Todd. En niños, no se conoce con exactitud la
de polimerasa o sondas específicas de ADN, y otras cifra normal máxima, pero, según diversos autores, es
investigaciones más recientes, parecen prometer un gran de hasta 330 ó 500 U. Cifras superiores indican una
avance en el diagnóstico positivo de la FAE, pero toda- infección estreptocócica reciente. Comienza a aumen-
vía no son de uso corriente. tar a finales de la primera semana de la infección, con-
En cuanto al leucograma, son raras las cifras de tinúa aumentando en la segunda semana y alcanza
leucocitos inferiores a 12 000 mm/c en FAE, pero una FA niveles máximos entre la 3ra. y 5ta. semanas, para des-
viral puede presentar leucocitosis de hasta 20 000 mm/c o pués ir descendiendo entre la 8va. y 12ma. semanas
más, por lo que el conteo leucocitario es de poco valor y hasta alcanzar la normalidad después de las 13 sema-
no debe ser indicado de rutina. nas. Sin embargo, si el niño se pone en contacto con
En la determinación de proteína C reactiva (PCR), estreptococos beta hemolíticos grupos A, C o G de nue-
se obtienen títulos altos en FAE en fase aguda, y nor- vo (infección sintomática o no), el TASO se puede man-
males o títulos bajos en FA virales. Los portadores de tener más tiempo elevado. En los portadores
estreptococos con FA no presentan aumento de la PCR. asintomáticos, el TASO no aumenta entre dos determi-
En los títulos de anticuerpos estreptocócicos, el tí- naciones: la primera, a la semana de encontrar el EBHGA
tulo de antiestreptolisina O (TASO o AELO), antifosfopi- en la faringe y la segunda, a la 4ta. semana. Es injusti-
ridin-nucleotidasa (antiDPNasa), antidesoxirribo- ficado repetir otro u otros ciclos de antibacterianos en
nucleasa B (antiDNasaB), antihialurodinasa (AH), pacientes con FAE comprobada clínica y microbioló-
antiestreptoquinasa(ASK) u otros, indican la existencia gicamente, solo por un TASO elevado. No se trata el
de una infección estreptocócica más o menos reciente TASO, se trata al paciente. Es criticable la conducta
pues se mantienen elevados por varias semanas, excepto de repetir una vez al mes la penicilina benzatínica en

886 Tomo III


niños asintomáticos por el solo hecho de tener el TASO u otros antibacterianos antiestreptocóccicos, excepto si
elevado, pues existe el peligro de producir hay antecedentes familiares de fiebre reumática.
superinfecciones a otras bacterias resistentes a la peni-
TRATAMIENTO
cilina, favorecer la aparición de neumococos
Como en toda IRA lo dividiremos en:
(Streptococus pneumoniae) resistentes a la penicilina
Medidas generales. Aislamiento durante la fase
que es un problema creciente en el mundo o producir
aguda y hasta 24 a 48 h después de comenzado el trata-
sensibilización alérgica a la penicilina con dosis repeti-
miento antiestreptocóccico, antitérmicos, reposo relati-
das de esta.
vo, dieta según deseos del paciente y la odinofagia. Sin
El problema de los portadores asintomáticos embargo, el familiar no debe suprimir ningún alimento.
Se prefieren los purés, gachas, gelatinas, potajes,
Después de una FAE tratada correctamente, los
EBHGA pueden persistir entre el 8 y el 15 % de estos leches y sus derivados, galletas o pan. Con más fre-
pacientes, aunque puede llegar hasta el 30 %, sobre todo cuencia se le ofrecerán líquidos como jugos, batidos o
en pacientes que han tenido escarlatina. Estos portado- compotas diluidas. Los refrescos, las sopas y los caldos,
res, que son asintomáticos, persisten en serlo por sema- en general, carecen de valor nutritivo. En la convale-
nas, por meses y a veces por años. No presentan cencia, en que con frecuencia hay aumento del apetito,
manifestaciones clínicas, el TASO es normal (con dos se debe ofrecer una comida extra diaria durante 1 ó 2
determinaciones separadas entre sí por 4 semanas), la semanas; hay autores que recomiendan que esta comi-
PCR es normal, tienen habitualmente pocas colonias en da extra contenga frijoles, que son una buena fuente de
los cultivos faríngeos, parece que no presentan fiebre proteína vegetal.
reumática y habitualmente no son contagiosos para las Medidas locales. Son discutidas. Algunos reco-
personas que los rodean. La repetición de ciclos de tra- miendan, en niños mayores, para el dolor de garganta,
tamiento en ellos generalmente fracasa en erradicar el
los gargarismos tibios frecuentes de solución salina al
EBHGA de la faringe. Existe una excepción, en las
0,9 % (aproximadamente una cucharadita de sal de co-
raras veces en que se demuestre que un portador sea el
causante de un brote de FAE; en estos casos tendrá que cina en medio litro de agua hervida). En casos extremos
tratarse a ese portador. se recomiendan analgésicos por vía bucal (paracetamol
Para algunos autores, en escolares asintomáticos o ibuprofeno).
durante brotes de FAE por EBHGA, el hallazgo de Medidas específicas. Antibióticos efectivos con-
exudados faríngeos positivos será entre 15 y 30 %, pero tra los EBHGA, con preferencia las penicilinas y en los
aquí se incluirían portadores asintomáticos (sin respues- alérgicos a estas, macrólidos (Ver Tratamiento de las
ta a diferentes antígenos de los estreptococos), infecta- IRA no complicadas.)
dos asintomáticos y enfermos tratados correctamente Medidas innecesarias o hasta perjudiciales.
por infección sintomática en los que no se han erradica- Embrocaciones con distintas preparaciones, trociscos o
do los estreptococos a pesar del tratamiento. Última-
pastillas para diluir en la boca con antibacterianos,
mente, hay autores que plantean que el paciente puede
tener hallazgos repetidos de estreptococos en los anestésicos y/o menta, supositorios que contengan
exudados faríngeos debidos a infecciones continuadas antibióticos y/o bismuto, vitamina C, vitamina A, aceite
por distintas cepas de estreptococos; no serían portado- de hígado de pescado (bacalao o tiburón) y gamma-
res asintomáticos. globulina. Los paños calientes alrededor del cuello y otras
Otro problema que plantean los portadores medidas populares, de efectividad no comprobada, tam-
asintomáticos es cuando presentan una IRA alta, pues poco tienen un uso científico, aunque algunos las reco-
por lo general no es posible determinar si es de causa miendan, si no son dañinos, para aminorar la ansiedad
viral o estreptocócica, por lo que algunos autores, en familiar.
estos casos, plantean utilizar un solo ciclo de tratamiento
antiestreptocócico, aunque otros no lo usan si no hay
APF de fiebre reumática.
INFECCIONES RESPIRATORIAS AGUDAS
En la epidemia de Utah, algún tiempo atrás, se re- BAJAS NO COMPLICADAS
portaron pacientes con fiebre reumática sin anteceden- Son aquellas infecciones que afectan fundamen-
tes claros de FAE, pero estas situaciones parecen ser poco talmente a la epiglotis o a las estructuras del sistema
frecuentes y no justifican el uso rutinario de penicilina respiratorio por debajo de ella: laringe, tráquea, bronquios

Parte XII. Aparato respiratorio 887


de diversos diámetros, o al lobulillo pulmonar, en particu- − Los repliegues aritenoepiglóticos son más redun-
lar alvéolos y/o al tejido pulmonar intersticial que los ro- dantes, con una armazón cartilaginosa menos rígida.
dea. Se consideran dentro de estos cuadros de IRA − Que el edema inflamatorio de la mucosa se propa-
bajas 4 síndromes: ga más fácilmente al tejido conectivo.
• Crup infeccioso agudo:
− Laringitis espasmódica. Cuadro 69.7. Causas de obstrucción de las vías aéreas que
− Epiglotitis o laringitis supraglótica. producen o simulan un síndrome crupal
− Laringitis (L), laringotraqueítis (LT) y
laringotraqueobroquitis (LTB). También son lla- • Laringotraqueítis (crup viral).
madas, en conjunto, laringotraqueítis virales. • Laringitis espasmódica aguda (laringitis estridulosa aguda).
• Bronquitis (o traqueobronquitis) infecciosa aguda. • Epiglotitis o laringitis supraglótica.
• Neumonía infecciosa aguda. • Laringitis diftérica.
− Neumonías intersticiales. • Traqueítis bacteriana o supurada.
− Neumonías lobares o segmentarias. • Absceso periamigdalino.
− Neumonías a focos diseminados o • Absceso retrofaríngeo.
bronconeumonías. • Uvulitis.
• Bronquiolitis del niño pequeño, sobre todo en lactantes. • Edema angioneurótico.
• Inflamación por quemaduras o lesiones por calor.
Crup infeccioso agudo • Laringitis irritativa (gases, polvo o llanto intenso).
Procesos inflamatorios que afectan a la laringe, trá-
• Cuerpos extraños sólidos en la laringe.
quea y bronquios. Los crups constituyen un síndrome
• Tumoraciones laríngeas (entre ellas la papilomatosis laríngea).
caracterizado por una tos áspera, ronca, como el ladrido
• Parálisis o paresias de las cuerdas vocales.
de un perro (perruna), a menudo acompañada de respi-
• Aspiraciones intermitentes o casi permanentes por malfor-
raciones ruidosas de tono grave, generalmente durante maciones en las vías aéreas inferiores o alteraciones neurológicas
la inspiración (estridor) y que indica una obstrucción de de los mecanismos de la deglución.
las vías aéreas (VA) bajas extratorácicas y afonía o ron- • Compresión de la laringe o del nervio recurrente por adenopatías
quera, que indica una inflamación de las cuerdas voca- u otras tumoraciones.
les. Aunque los crups pueden ser de causas no infecciosas • Estridor laríngeo congénito (diversas causas entre ellas la
(Cuadro 69.7.), como los producidos por un cuerpo extra- laringotraqueomalacia).
ño, una compresión o tumoración de la laringe o tráquea, lo
(Modificado de Kaditis y Wald)
más frecuente es que sean infecciosos.
Vamos a considerar en este epígrafe las infeccio-
nes que afectan a las VA antes mencionadas, que pro-
Entre los factores inmunológicos está que el niño
ducen grados variables de inflamación y estrechamiento
pequeño no ha estado anteriormente en contacto con
de la laringe; de la laringe y la tráquea, y de la laringe, diversos agentes infecciosos, sobre todo virus, capaces
tráquea y bronquios gruesos, medianos y hasta los fi- de producir estas infecciones y no ha creado los meca-
nos, que producen los cuadros clínicos de laringitis (L), nismos de defensa específicos contra ellos.
laringotraqueítis (LT) y laringotraqueobronquitis (LTB). Sexo. El masculino presenta estos cuadros con más
Estas infecciones muchas veces presentan facto- frecuencia que el femenino sin que se sepa el porqué.
res predisponentes: Tendencia personal y familiar. Alrededor del 15
Edad. Mientras más pequeño sea el niño, la infec- al 20 % de los pacientes con crup tienen una historia
ción tiene más posibilidades de presentarse y también familiar positiva a estos mismos cuadros. También hay
de ser más grave, debido a condiciones anatómicas e niños que tienen tendencia a repetir los crups y aunque
inmunológicas. Entre las primeras tenemos: se ha planteado en ellos una laringe anatómicamente
− El diámetro más pequeño de estas vías aéreas, alterada o una inmadurez laríngea, estas hipótesis no
− Que la región supraglótica del pequeño se presta han sido demostradas y no se conocen las causas que
más a la obstrucción, ya que el ángulo entre la favorecen la repetición de los crups en estos pacientes.
epiglotis y la glotis es más agudo que en el niño Hiperreactividad (alérgica o no). Para algunos
mayor y en el adulto, autores no desempeña un papel en el desencadenamiento
− La epiglotis en los pequeños es comparativamente y repetición de los crups, aunque para otros sí tiene im-
más larga y tubular. portancia, sobre todo en la laringitis espasmódica, pues

888 Tomo III


en la práctica se observan niños que cuando son peque- DIAGNÓSTICO


ños presentan estos cuadros y después son asmáticos. Se basará en el cuadro clínico de aparición súbita
Dentro de los crups infecciosos consideramos, se- en la noche, la ausencia evidente de la infección y en su
gún la clasificación anatomoclínica de las IRA no com- evolución. También influye la historia de cuadros ante-
plicadas, las siguientes entidades: laringitis espasmódica riores similares en el niño, pero siempre se tendrá en
aguda, epiglotitis aguda o laringitis supraglóticas y, las cuenta la posibilidad de otros tipos de crups, aunque se
laringitis (L), laringotraqueítis (LT) o laringotra- tengan antecedentes de laringitis espasmódica aguda.
queobronquítis (LTB) agudas. Muchos consideran a las
COMPLICACIONES
L, las LT y las LTB como una sola entidad, conocida por
laringotraqueítis virales. No son frecuentes y se deben a infecciones
bacterianas secundarias. También es excepcional que la
Laringitis espasmódica aguda obstrucción laríngea sea severa y tenga que recurrirse a
Aunque no se debe a una infección directa de la una vía aérea artificial. Aunque es poco probable que
laringe, se ha incluido en la clasificación pues, por lo esto se produzca, el paciente debe ser vigilado por si
general, está precedida de un cuadro infeccioso viral aumentan las manifestaciones de obstrucción.
que parece influir en su desencadenamiento. Su causa TRATAMIENTO
no está claramente demostrada. Se plantea que existe:
Se divide, como en todas las IRA no complicadas,
− Una hiperreactividad laríngea (¿alérgica?).
en: medidas generales, locales, específicas e innecesa-
− Una infección viral respiratoria que produce un es-
rias o hasta perjudiciales. (Ver Tratamiento de las IRA
pasmo laríngeo.
no complicadas.)
− Alteraciones anatómicas o funcionales en la larin-
ge de estos niños que desencadenan el espasmo Epiglotitis infecciosa aguda
laríngeo cuando hay una infección viral. También llamada supraglotitis o laringitis
− Un laringoespasmo como resultado de una hiper- supraglótica. Existe una inflamación, de causa infeccio-
sensibilidad al virus parainfluenza 1 en niños que sa, que afecta principalmente a las estructuras laríngeas
previamente han sido infectados por un virus por encima de la hendidura glótica; por lo general es un
parainfluenza 3. cuadro grave. Aunque se ha descrito producida por vi-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS rus o bacterias, en niños mayores o adultos, se tendrá en
Son más frecuentes en niños entre 1 y 4 años, en el cuenta en niños el Haemophilus influenzae tipo b, has-
ta que se demuestre lo contrario. Hoy, con la inmuniza-
sexo masculino, tiende a repetir en los meses que si-
ción contra el H.influenzae tipo b esta afección tiende
guen, y a veces se encuentra una predisposición fami-
a disminuir grandemente como se ha observado en Cuba.
liar. Con frecuencia está precedida en horas o pocos
días de un cuadro catarral alto no específico o de coriza MANIFESTACIONES CLÍNICAS
y se manifiesta bruscamente en la noche con tos perruna Por lo general se presenta en niños de 2 a 5 años.
(crupal), ronquera o afonía, estridor inspiratorio y a ve- Está precedida, con frecuencia, por pocas horas antes,
ces tiraje alto, supraesternal o supraclavicular e de un cuadro catarral alto, a veces con molestias a la
infraclavicular. El niño se despierta por la noche ansio- deglución. Aparece fiebre elevada y estado toxiinfeccioso
so, pálido, sudoroso. La orofaringe está enrojecida sin severo con estridor inspiratorio, tiraje alto o generaliza-
secreciones y al examen físico del tórax no hay estertores, do (alto y bajo), disfagia, saliveo, tos crupal, perruna.
el murmullo vesicular es normal habitualmente y se No existe ronquera o esta es poca, teniendo la voz un
ausculta el estridor laríngeo. No hay estado toxiinfeccioso. timbre como el que habla con la boca llena, aunque el
No hay fiebre o si acaso, hay febrícula. El cuadro clíni- niño generalmente habla poco por el dolor faríngeo y el
co mejora después de la madrugada y durante el día estado toxiinfeccioso.
está asintomático o presenta ligera tos perruna o ron- El paciente puede estar sentado hacia delante con
quera. Con frecuencia el cuadro se repite en las no- la boca abierta, otras veces aparece sentado con los bra-
ches siguientes aunque algo más atenuado. zos hacia atrás en la cama y el cuello en hiperextensión,
A la endoscopia, se observa una mucosa subglótica con saliveo, taquicardia y polipnea. Puede producirse
pálida, edematosa, abotagada que pudiera ser la causa un paro respiratorio súbito que en ocasiones es desen-
de la obstrucción. En otros pacientes hay un espasmo cadenado por intentar la inspección de la epiglotis por
de la glotis con cierre casi total de las regiones detrás de la lengua al examen de la orofaringe; al hacer
ventriculares y con los repliegues aritenoepiglóticos que el niño adopte determinado decúbito, sobre todo el
tensos. supino; al realizarle investigaciones de laboratorio como

Parte XII. Aparato respiratorio 889


una punción venosa, practicar radiografías del cuello o y la bacteriología, aunque cualquier crup infeccioso pue-
hasta espontáneamente. Ante este cuadro clínico no se de producir una obstrucción severa de las vías aéreas y
debe realizar la compresión de la lengua con un depre- necesitar la creación de una vía aérea artificial.
sor para intentar ver la epiglotis inflamada detrás de ella.
EVOLUCIÓN
Si el niño coopera y abre la boca se podrá observar que
la orofaringe está enrojecida y edematosa, en especial Con un diagnóstico precoz, una vía aérea artificial
la úvula y se puede ver, por detrás de la base de la len- de comienzo y un tratamiento adecuado, es favorable.
gua, la epiglotis inflamada (signo del sol poniente). Entre 24 y 48 h el paciente mejora de manera ostensi-
A la auscultación del tórax se aprecia el estridor ble; se puede decanular o desintubar habitualmente de
inspiratorio trasmitido y, de acuerdo con el grado de obs- 48 a 96 h, con una estadía hospitalaria de pocos días.
trucción, habrá disminución variable del murmullo
COMPLICACIONES
vesicular. A veces el estridor y el tiraje mejoran algo, lo
que hace creer, erróneamente, que el niño mejora, pero La más temida es el paro respiratorio súbito, segui-
el aumento de la taquicardia, la disminución del murmu- do de paro cardíaco y muerte o muerte encefálica que
llo vesicular, el agotamiento del paciente y el estado se manifesta por convulsiones, rigidez de descerebración,
toxiinfeccioso con fiebre alta, nos indica la gravedad del midriasis paralítica y que en pocos días conduce a la
cuadro, por lo que siempre se debe trasladar al paciente muerte o deja secuelas neurológicas irreversibles. Otras
e ingresarlo en un hospital pediátrico, de preferencia en complicaciones menos frecuentes son el aire
una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El traslado extraalveolar (neumotórax, neumomediastino y/o aire
se hace sin irritar al niño, sentado en el regazo de la subcutáneo) al crear una vía aérea artificial. También se
pueden producir bronconeumonías o neumonías lobares,
madre y se puede administrar oxígeno si hay condicio-
con pleuresías o sin ellas, atelectasias o shock séptico.
nes y el niño lo acepta.
Las meningitis no parecen ser frecuentes.
Los exámenes complementarios se realizan con el
otorrinolaringólogo o el anestesista junto al paciente, dis- TRATAMIENTO
puesto a intubar o mejor, después de una intubación Como toda IRA no complicada, consiste en: medi-
orolaríngea de urgencia. El hemograma presenta una das generales, locales (se insiste en una vía aérea artifi-
leucocitosis moderada o severa con neutrofilia y hasta cial precoz), específicas (antibióticos a los que sea
desviación hacia la izquierda. El exudado nasofaríngeo sensible el Haemophillus) e innecesarias o hasta perju-
en busca de Haemophilus influenzae tipo b y el diciales, como molestar con frecuencia al paciente o
hemocultivo, según algunos autores, serán positivos hasta realizarle radiografías de cuello, frontal y lateral, para
en el 80 % de los pacientes con epiglotitis por dicha bac- plantear el diagnóstico. (Ver Tratamiento de las IRA
teria. En el momento de intubar, se observa, por no complicadas.)
laringoscopia directa previa, la región supraglótica infla-
Estos pacientes deben ser ingresados precozmente,
mada con tendencia a proyectarse hacia la línea media,
sobre todo en una UCI si es posible, en cuanto sean
con una epiglotis y repliegues aritenoepiglóticos enroje-
diagnosticados o aún cuando se sospeche que tengan
cidos y edematosos; en estos momentos se toman mues-
una epiglotitis.
tras para estudios bacteriológicos.
No se debe perder tiempo en realizar radiografías Laringitis, laringotraqueítis
del cuello frontales y laterales para establecer un diag-
nóstico diferencial entre la epiglotitis (en donde se des-
y laringotraqueobronquitis
cribe una epiglotis de tamaño aumentado, redondeada, También se denominan crups subglóticos o crups
como el dedo gordo) y las laringotraqueítis virales (en virales, pues son producidos por diversos virus. Un mis-
que se describe una epiglotis alargada, no gruesa y un mo agente puede causar una laringitis (L), una
estrechamiento subglótico o signo del declive con una laringotraqueítis (LT), o una laringotraqueobronquitis
distensión por aire de la hipofaringe) . (LTB). Estos crups pueden presentar muchas manifes-
taciones clínicas comunes. Además, las complicaciones
DIAGNÓSTICO y el tratamiento son semejantes, por lo que las describi-
Se basa en el cuadro clínico, la laringoscopia direc- mos en conjunto, y señalamos algunos signos en que se
ta y los exámenes bacteriológicos, siempre teniendo en diferencian.
cuenta los cuidados anteriormente señalados. Otros crups Los virus que más frecuentemente las producen
infecciosos (diftéricos o no diftéricos) se pueden dife- son los parainfluenza 1, 2 y 3, aunque se han descrito
renciar por su evolución no tan rápida, la laringoscopia estos cuadros en infecciones por virus influenza,

890 Tomo III


adenovirus, VSR, o metaneumovirus humanos. Las in- En un mismo niño el cuadro se puede manifestar al
fecciones bacterianas que producen estos crups son muy inicio como una laringitis subglótica, en pocas horas como
discutidas e inclusive la mayoría de los autores las una laringotraqueítis y posteriormente, en más o menos
niegan. tiempo, como una laringotraqueobronquitis.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Exámenes auxiliares que se han planteado
Se pueden producir a cualquier edad, pero son más
en un crup viral (L, LT o LTB)
frecuentes entre los 2 y 5 años y disminuyen
marcadamente después de los 6. Su intensidad varía Endoscopia. Sus indicaciones no están bien de-
desde ligera a severa. Por lo habitual el cuadro, precedi- finidas y, en general, se será conservador con los cua-
do durante 12 a 72 h por un cuadro catarral inespecífi- dros ligeros, pero en los moderados, si hay facilidades,
co, con febrícula o no, aparece con una tos perruna y se debe realizar si no mejora, o trasladar al paciente a
ronquera ligeras que pueden aumentar después, fiebre donde existan condiciones para realizarla. En los pa-
cientes severos, se debe realizar siempre y estar listo
de intensidad variable, anorexia, decaimiento y estridor
para la intubación, aunque estamos de acuerdo con los
inspiratorio, que junto con otros síntomas y signos de-
que establecen que siempre que hay manifestaciones
penden de la severidad y extensión de la infección y
clínicas que nos hagan pensar en la necesidad de una
obstrucción de las vías aéreas afectadas.
vía aérea artificial, no se debe demorar su realización.
Las laringitis subglóticas (L) presentan tos
Mientras llega el personal, se debe administrar
perruna o ruda, ronquera o afonía y estridor inspiratorio
esteroides y oxígeno.
sin tiraje o con este, al principio alto y ligero, que puede
Algunos autores reservan la endoscopia para ni-
ser alto y bajo después, con aumento de la frecuencia
ños con crup severo que no responden al tratamiento
respiratoria en relación con el grado de obstrucción. La
anterior o con una historia atípica, crups recurrentes,
orofaringe aparece enrojecida sin secreciones purulentas
antecedentes de lesión de los nervios de la laringe o pa-
y el murmullo vesicular está normal, sin estertores, y cientes con un cuadro clínico compatible con traqueítis
puede auscultarse el estridor inspiratorio en reposo o solo purulenta. Siempre, al realizar la endoscopia se debe
cuando el niño llora o se mueve. obtener secreción para estudios microbiológicos. A la
En las laringotraqueítis (LT) además de la tos típi- endoscopia, en estos crup virales, hay inflamación (en-
ca, la ronquera y el estridor inspiratorio con el tiraje alto rojecimiento y edema) de la zona subglótica, y también
(o alto y bajo), a la auscultación se podrán escuchar de la tráquea y hasta de los bronquios, pero la mucosa
estertores roncos y/o subcrepitantes gruesos o media- no presenta ulceraciones ni hay exudados purulentos en
nos con murmullo vesicular normal (buen intercambio la luz bronquial que haría pensar en una traqueítis
aéreo) o disminuido de intensidad variable, en relación purulenta bacteriana que complica al cuadro viral.
con el grado de obstrucción. Oximetría. Se ha encontrado pobre correlación
En las laringotraqueobronquitis (LTB) además del entre el estado clínico y la frecuencia respiratoria, con la
cuadro laringotraqueal anteriormente descrito, aparece hipoxia por oximetría de pulso. La saturación de oxíge-
a la percusión hipersonoridad bilateral y a la ausculta- no puede presentar errores debido al movimiento del
ción estertores subcrepitantes (medianos o finos). Tam- paciente, color de la piel, alcalosis, anemia y otras cau-
bién pueden auscultarse sibilancias. Para algunos autores, sas; pero es útil cuando el paciente presenta complica-
la aparición de estertores crepitantes forma parte del ciones. La observación y examen del paciente lo más
cuadro y para otros indica una neumonía que complica frecuente posible, sin que sea molestado, constituye la
la LTB, pero lo cierto es que los subcrepitantes finos y/ mejor manera de seguir a un niño con crup viral.
o los crepitantes nos indican una mayor extensión y gra- El hemograma y la eritrosedimentación seria-
vedad del cuadro. dos. No se indican, salvo cuando se sospechen o exis-
El tiraje generalizado, el estridor que aumenta, la tan complicaciones bacterianas. Lo mismo se puede
frecuencia respiratoria y cardíaca en ascenso, la intran- establecer para la gasometría, que debe repetirse en
quilidad progresiva y sobre todo la depresión sensorial o pacientes intubados, según su evolución.
depresión con irritabilidad, indican una obstrucción se- Radiografías de tórax. No serán necesarias,
vera y la necesidad de crear una vía aérea artificial (so- excepto si se sospechan complicaciones.
bre todo por intubación). No se debe esperar la aparición
DIAGNÓSTICO
de cianosis, depresión del sensorio con poca respuesta a
los estímulos o una insuficiencia cardíaca para realizar El diagnóstico positivo se hace sobre la base del
este procedimiento. cuadro clínico y el causal por los estudios microbiológicos.

Parte XII. Aparato respiratorio 891


El diagnóstico diferencial se hace con otros tipos de crups En más del 95 % de los casos la causa es viral
infecciosos o no (Cuadro 69.7). A veces, erróneamen- (adenovirus, influenza A y B, parainfluenza, rinovirus,
te, se confunde una LTB con una bronquiolitis, pero en virus sincitial respiratorio) y está habitualmente asocia-
esta no hay tos perruna o crupal, estridor inspiratorio ni da a procesos infecciosos agudos de las vías aéreas su-
ronquera (Cuadro 69.8). periores. Después de los virus se destaca el Mycoplasma
pneumoniae como causa primaria de bronquitis aguda
Cuadro 69.8. Clasificación de los crups virales (Kaditis y Wald)
en niños sanos. Otros agentes bacterianos son excep-
cionales. También la traqueobronquitis aguda puede ser
Crup ligeros: Estridor que se presenta al excitarse el niño parte del cuadro clínico de otras afecciones como el sa-
o estridor en reposo, sin signos de dificul- rampión, tos ferina, difteria, escarlatina, fiebre tifoidea.
tad respiratoria.
DIAGNÓSTICO
Crup moderados: Estridor en reposo con tiraje alto aislado o El diagnóstico es fundamentalmente clínico, no re-
alto y bajo.
quiriendo de investigaciones de laboratorio o radiológicas,
Crup severos: Dificultad respiratoria más o menos seve- con excepción de aquellos pacientes en los que se sos-
ra, disminución del intercambio gaseoso peche una complicación bacteriana secundaria.
(murmullo vesicular disminuido) o altera- El cuadro clínico se presenta generalmente a con-
ciones de la conciencia.
tinuación de una infección viral de las vías respiratorias
superiores (obstrucción nasal, rinorrea y tos); se carac-
Podemos agregar que no se debe esperar por la teriza por presentar una tos seca persistente irritante y
aparición de midriasis, saliveo constante, insuficiencia molesta. Pocos días después la tos se vuelve productiva,
cardíaca o cianosis para crear una vía aérea artificial. y si el niño es capaz de expectorar, el esputo es claro en
EVOLUCIÓN un inicio y mucopurulento después.
La mayoría de las L, LT y LTB evolucionan satis- Entre los 5 y 10 días las secreciones aclaran y la
factoriamente entre 1 a 2 semanas (o más en las LTB). tos va disminuyendo progresivamente y desaparece al
A veces pueden durar algo más la ronquera y el estridor cabo de 1 a 2 semanas.
al llanto, pero con mejoría progresiva. Este cuadro puede acompañarse de náuseas y vó-
mitos en particular con los accesos de tos; malestar ge-
COMPLICACIONES
neral; molestias retroesternales y sensación quemante y
Entre ellas se encuentran el espesamiento de las dolor en la parte anterior del tórax.
secreciones traqueobronquiales con formación de cos- La fiebre se puede presentar en los primeros días,
tras y que muchas veces es la traducción de una infec- aunque generalmente es ligera.
ción bacteriana secundaria, aire extraalveolar como La afectación del estado general es leve o dis-
neumomediastino, neumotórax o enfisema subcutáneo, creta.
debido, a menudo, a la demora en establecer una vía En el examen físico, los hallazgos son variables;
aérea artificial, atelectasias y neumonía. puede haber polipnea ligera o moderada y disnea en oca-
Solo citamos entre las de causas iatrogénicas la siones. La respiración es ruidosa, y en la auscultación
perforación de la pared posterior de la tráquea, o la es- casi siempre hay ruidos respiratorios gruesos o roncos,
tenosis secundaria por manipulaciones endoscópicas o aunque se pueden encontrar estertores húmedos o
traqueostomía. sibilantes.
TRATAMIENTO Excepcionalmente en formas graves pueden apa-
Lo dividiremos, como en toda IRA no complicada, recer signos de hipoxia, palidez, cianosis distal, agita-
en: medidas generales, locales, específicas e innecesa- ción, toma del estado general, etc.
rias o hasta perjudiciales (Ver capítulo Tratamiento de COMPLICACIONES
las IRA no complicadas). Las complicaciones no son frecuentes, aunque en
niños desnutridos y con otras afecciones debilitantes,
BRONQUITIS AGUDA pueden aparecer complicaciones bacterianas. También
La bronquitis aguda es un proceso infeccioso del pueden presentarse atelectasias.
aparato respiratorio inferior que causa inflamación bron-
TRATAMIENTO
quial reversible. Generalmente la tráquea está también
afectada, por lo que el término más adecuado sería La bronquitis aguda es una enfermedad casi siem-
traqueobronquitis aguda. pre de causa viral, con un curso generalmente ligero y

892 Tomo III


autolimitado por lo que no existe un tratamiento es- DIAGNÓSTICO
pecífico. El cuadro clínico se caracteriza por un grave esta-
El síntoma más molesto es la tos, la cual particular- do tóxico e infeccioso, fiebre elevada, estridor y otros
mente cuando es productiva, no debe suprimirse con signos de obstrucción de las vías aéreas superiores.
antitusígenos, por ser un mecanismo efectivo en la mo- El diagnóstico se confirma por medio de la
vilización y aclaramiento de las secreciones bronquiales. laringotraqueobroncoscopia, en la cual se observa ede-
Los expectorantes, mucolíticos y los antihistamínicos ma e inflamación de la mucosa y secreciones purulentas
tampoco son eficaces. al nivel y por debajo del cricoides. Además, este método
Los antibióticos no deben indicarse pues con su permite hacer el diagnóstico diferencial con la
uso no se acorta el curso de la enfermedad, ni se evitan laringotraqueítis viral y con la epiglotitis, y al mismo tiem-
las complicaciones bacterianas. A pesar de ello suelen po remover secreciones traqueobronquiales, para la pos-
utilizarse indebidamente con relativa frecuencia, lo que
terior intubación nasotraqueal. Por lo tanto, la endoscopia
ocasiona un incremento en los costos y en la resistencia
es, al mismo tiempo, diagnóstica y terapéutica.
bacteriana a los antibióticos. Los broncodilatadores como
el salbutamol, pudieran aliviar los síntomas, particular- COMPLICACIONES
mente en aquellos casos en los que exista una hiperreac- Se han reportado las siguientes complicaciones: sín-
tividad bronquial asociada. drome de shock tóxico, shock séptico, edema pulmonar,
El drenaje postural de las secreciones bronquiales síndrome de distrés respiratorio agudo, neumonía,
y el ambiente húmedo, pueden ser de alguna utilidad. neumotórax y formación de pseudomembranas
La supresión de irritantes ambientales, particular-
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
mente el humo del tabaco, es muy eficaz para el alivio
de la tos. La evolución es rápidamente progresiva y fatal, si
no se instaura un tratamiento inmediato y adecuado.
Traqueítis bacteriana El pronóstico es favorable, en la mayoría de los
La traqueítis bacteriana es una grave afección con pacientes.
peligro para la vida, que se caracteriza por una obstruc- La fiebre tiende a desaparecer a los 2 ó 3 días de
ción aguda de las vías aéreas superiores y secreciones iniciado el tratamiento antimicrobiano. Cuando disminu-
purulentas intratraqueales. yan el edema y las secreciones purulentas, puede
Aunque no es una afección frecuente, se puede desintubarse, aunque se debe seguir con una vigilancia
presentar particularmente en los niños menores de 3 años; estrecha, mientras se continúa la administración de
pero también puede afectar a niños mayores. antibióticos y oxígeno.
Por lo general, existe un antecedente de una infec-
TRATAMIENTO
ción respiratoria viral previa, en especial una
laringotraqueítis, que, como resultado del daño de la Las bases del tratamiento son:
• Ingreso en unidad de cuidados intensivos.
mucosa traqueal o de una disminución de los mecanis-
• Establecimiento de una vía respiratoria artificial, que
mos de defensa locales, favorece una infección
permita además aspirar las secreciones muco-
bacteriana secundaria. La traqueítis bacteriana se ha
purulentas traqueales.
reportado también, aunque más infrecuentemente, como
• Agentes antimicrobianos de acuerdo con el germen
una complicación posamigdalectomía o posadenoidec-
que se sospeche o identifique.
tomía, o por una infección nosocomial en unidades de
• Administrar oxígeno de acuerdo con las necesidades.
cuidados intensivos. • Ventilación mecánica en caso de edema pulmonar,
En recién nacidos con bajo peso al nacer, la falla respiratoria o neumonía.
traqueítis bacteriana está asociada a intubación
intratraqueal prolongada. Bronquiolitis
El agente causal más frecuente es el Staphylo- La bronquiolitis es una infección respiratoria agu-
coccus aureus, aunque también puede ser causada por da (IRA) baja, de causa generalmente viral, que tiene
Haemophilus influenzae tipo b, la Moraxella como característica fundamental la obstrucción genera-
catarrhalis, el Streptococcus pyogenes, Clamidias y lizada de las vías aéreas terminales con atrapamiento de
gérmenes entéricos gramnegativos. Más raramente por aire de inicio súbito, en pocas horas, que ocasiona respi-
gérmenes anaerobios y por el Corynebacterium ración rápida e hiperinsuflación pulmonar. Aparece en
diphtheriae. los 2 primeros años de vida, sobre todo en los primeros

Parte XII. Aparato respiratorio 893


6 meses, y es un episodio aislado con nula o escasa evi- La infección se presenta con más frecuencia en
dencia de broncoespasmo anterior. los varones, en los primeros meses de vida en niños que
duermen junto a otros niños. El bajo peso al nacer y la
CAUSA
desnutrición son los dos factores de riesgo de gravedad
Enfermedad principalmente viral. El virus sincicial o muerte más importantes. También se señalan la au-
respiratorio (VSR) es el agente más común causante de sencia de lactancia materna, polución ambiental, humo
bronquiolitis. Más de la mitad de los lactantes adquiere del cigarro, malas condiciones socioculturales con haci-
la infección en la primera epidemia, pero dicho virus es namiento, bajo nivel educacional y factores económicos,
el que más afecta las vías respiratorias inferiores. Se así como la permanencia de los niños en guarderías in-
calcula que entre el 70 y el 90 % de los casos de fantiles y círculos.
bronquiolitis son producidos por este germen. La disminución de la función pulmonar al nacimien-
El VSR tiene dos grupos (A y B), cada uno de los to en niños con bajo peso y madre fumadora en el emba-
cuales tiene seis subgrupos. El segundo lugar en impor- razo son factores importantes en la presencia de
tancia causal, lo ocupan los virus de la parainfluenza 1 y bronquiolitis o no según Martínez. Welliver señala la
3. Los virus de la influenza A, rinovirus, coronavirus y controvertida relación con la atopia, y refiere mayor
adenovirus son causantes menos frecuentes de esta en- frecuencia y gravedad del proceso en pacientes con
tidad. Los adenovirus producen, en algunos pacientes, carga alérgica.
bronquiolitis severa con alta mortalidad y secuelas res- La displasia broncopulmonar o enfermedad
piratorias importantes. pulmonar crónica del prematuro, así como la fibrosis
El Mycoplasma pneumoniae ha sido también re- quística, malformaciones congénitas pulmonares y
portado como causante de bronquiolitis, pero más rara- cardiovasculares, afecciones neuromusculares e
mente. inmunodeficiencias también son factores de riesgo de
Hasta el momento no se ha demostrado ninguna morir que deben tenerse en cuenta.
bacteria como causante de esta entidad.
INMUNOLOGÍA
EPIDEMIOLOGÍA La bronquiolitis es una enfermedad autolimitada,
El VSR es el principal virus que produce IRA se- con baja mortalidad en el niño inmunocompetente y en
vera durante los 2 primeros años de vida. En las epide- consecuencia los estudios sobre respuesta inmune son
mias, la mitad de los lactantes son infestados por el virus, incompletos.
pero solo el 35 % de estos infestados desarrollan La protección contra el VSR la adquiere el niño
bronquiolitis, y el resto solo tiene IRA alta. por vía transplacentaria por el aporte de IgG, principal-
Estas epidemias ocurren una vez por año o cada mente IgG3-VSR específica, la cual aporta una protec-
dos años, y afectan a lactantes entre 2 y 6 meses, prefe- ción inmunológica de corta duración, de 6 semanas más
rentemente. El 90 % de los niños ya ha sido infestado, al o menos. Los anticuerpos IgG3-VSR se detectan en la
cumplir los 2 años de edad. La infección primaria no sangre, pero declinan muy rápido y su cantidad es me-
induce inmunidad prolongada y completa, y pueden ocu- nor en niños pretérminos, ya que el paso de madre a hijo
rrir reinfecciones, aunque las ulteriores tienden a ser más
ocurre en las últimas semanas del embarazo.
ligeras que la precedente. Diferencias antigénicas entre
La inmunidad al VSR también se adquiere pasiva-
los dos grupos del virus (A y B), favorecen estas
mente a través de la lactancia materna, en la cual se
reinfecciones.
detectan anticuerpos IgA específica al VSR y bajas con-
La clara naturaleza epidémica del virus es mun-
centraciones de IgG-VSR, así como linfocitos T reactivos
dial. En Europa y América del Norte causa grandes epi-
demias de noviembre a febrero. En Estados Unidos se al VSR en el calostro del 40 % de las madres. La pre-
reportan anualmente 90 000 hospitalizaciones y 2 700 sencia de IgA secretoria contra el VSR en fosas nasales
muertes por bronquiolitis. produce protección.
En Cuba, las epidemias se presentan de septiem- En los primeros 6 meses de la vida, la respuesta
bre a febrero, con escasa mortalidad. En el mundo sub- sérica con anticuerpos IgG es poco eficiente y pobre en
desarrollado se calcula que de los 3,5 millones de niños un grupo de niños, lo que unido a la relativa poca madu-
menores de 5 años que fallecen por IRA anualmente, el ración de varios componentes del sistema inmune, influ-
5 % de las muertes son por bronquiolitis. yen en la gravedad.
El VSR se trasmite por contaminación a través de Por las razones antes expuestas, el niño entre 6
microgotas o por vía directa, por contacto con fómites o semanas y 6 meses se hace más vulnerable a la infec-
secreciones infestadas y por contacto de manos y dedos. ción por el VSR, con cuadros más severos.

894 Tomo III


Por otro lado, la bronquiolitis se debe en su mayor FISIOPATOLOGÍA
parte a una respuesta inmunológica del huésped a la in- El VSR infesta las vías respiratorias altas primera-
fección por el virus. mente y por extensión directa se infestan las vías respi-
El sitio primario de la replicación del virus ocurre ratorias bajas y los macrófagos alveolares. La infección
en las células epiteliales del aparato respiratorio y los se extiende hasta las vías aéreas pequeñas, y se afectan
macrófagos alveolares también son susceptibles. los bronquiolos terminales y los bronquiolos respirato-
La infección de las células epiteliales y los rios. No se produce viremia.
macrófagos va a dar lugar a la producción de diversas El virus ataca a las células vivas a través de la
citoquinas. Como respuesta a la infección, las células membrana y se replica en el citoplasma. La acción del
epiteliales producen interleucina 8 (IL-8), la cual es un virus va a causar cambios citolíticos con necrosis sobre
potente quimioatrayente de neutrófilos en el pulmón y la el epitelio respiratorio y destrucción de células epiteliales
responsable del infiltrado predominante de estos. La IL- ciliadas, inflamación y edema de la submucosa y adven-
8 además, regula la producción de IL-6 y del factor ticia. Los linfocitos invaden los espacios peribronquiales
estimulador de colonias granulocito macrófago (FSC- y peribronquiolares. La mayor parte de los alvéolos no
GM) que inducen inflamación. están afectados y la inflamación tampoco afecta la
También el VSR estimula la producción por las elastina ni las fibras colágenas.
células epiteliales de IL-11, que con acciones similares a Las células mucosas producen un incremento de
la IL-6, produce activación de linfocitos B, contribuye al la producción de mucus el cual presenta cambios en su
infiltrado celular mononuclear e induce producción de composición con presencia de células mononucleares y
neuropéptidos y sustancias colinérgicas relacionadas con neutrófilos. Las células epiteliales debridadas muertas,
el broncoespasmo. la fibrina y el mucus forman tapones en las vías aéreas
La infección del macrófago alveolar induce pro- pequeñas periféricas que asociados al edema producen
ducción de IL- 1, factor de necrosis tumoral alfa (FNTα) obstrucción bronquial. La constricción del músculo liso
factor activador plaquetario (FAP), IL-6, IL- 8 e IL- 10. bronquial debido a la acción de distintas sustancias me-
La interacción entre las células epiteliales, el diadoras contribuye a la obstrucción, aunque su efecto
macrófago alveolar, los linfocitos, los neutrófilos, otras es pequeño.
células y los productos derivados de todas ellas como La obstrucción bronquial se produce tempranamen-
son las citoquinas antes señaladas y otras, las sustancias te y puede ser parcial y provocar atrapamiento de aire
derivadas de membrana, los radicales libres del oxígeno, con hiperinsuflación alveolar; o completa, provocando
proteasas, sustancias preformadas y otros productos son atelectasia. Las diferencias existentes entre las vías aé-
los causantes de la injuria hística con destrucción de las reas de los lactantes en relación con las vías aéreas de
células epiteliales e inflamación con presencia de ede- los niños mayores y adultos unidos a factores
ma, incremento del mucus, infiltrado celular y otras al- inmunológicos ya señalados explican la severidad del
teraciones. proceso en los niños pequeños. Mientras que en el adul-
Welliver et. al., fueron los primeros en mostrar de to la resistencia de vías aéreas al flujo de aire tiene poca
manera convincente que los virus respiratorios actúan influencia, en el pequeño el menor grosor y el estrecha-
como antígenos y estimulan la producción de IgE contra miento de la luz bronquial produce variaciones no uni-
los virus, principalmente contra el VSR y el parainfluenza; formes en la resistencia de los diversos conductos al
apareciendo la IgE-VSR específica elevada en la mu- flujo de aire. La ventilación perfusión desigual trae como
cosa bronquial, el epitelio nasofaríngeo y la sangre de resultado hipoxemia, que ocurre precozmente. Esta se
niños con bronquiolitis, pero son normales en los niños produce porque la sangre oxigenada proveniente de los
con otros cuadros infecciosos producidos por el VSR alvéolos ventilados no alcanza a compensar la baja ten-
diferentes a esta entidad. sión de oxígeno de los alvéolos no ventilados o
No obstante, la interrelación entre el virus, las cé- hipoventilados. La retención de CO2 se produce tardía-
lulas y otros efectores del sistema inmune solo están mente. Estos fenómenos producen acidosis metabólica
parcialmente dilucidados. y respiratoria en casos severos con presencia de insufi-
No en todos los pacientes el cuadro se presenta ciencia respiratoria aguda con consecuencias en los pa-
en una sola ocasión, ya que algunos no adquieren in- cientes graves.
munidad completa, y puede repetirse el cuadro de la En la generalidad de los pacientes, la recuperación
bronquiolitis hasta que el niño adquiere su total se produce en 3 ó 4 días y la reparación del epitelio en
inmunidad. 10 ó 15 días.

Parte XII. Aparato respiratorio 895


CUADRO CLÍNICO los niños atópicos. Los conceptos de Martínez sobre los
La afección aparece en los primeros 2 años de la pacientes con sibilancia precoz transitoria pueden ayu-
vida, sobre todo en el primero, pero es más severa en los dar a definir el posible diagnóstico.
primeros 6 meses de edad. El período de incubación es La fibrosis quística puede debutar con un cuadro
de 2 a 8 días, como promedio 5 días. La presencia de intenso de atrapamiento de aire desencadenado por una
una epidemia, casi siempre por VSR es un elemento infección viral. La prolongación del proceso más de lo
importante del diagnóstico. habitual, su severidad, los antecedentes personales y
Los niños infestados van a presentar manifesta- familiares y la presencia de los electrólitos en el sudor
ciones del aparato respiratorio superior y solo el 35 % elevados pueden confirmar el diagnóstico de fibrosis
de ellos van a presentar bronquiolitis, como se ha seña- quística.
lado previamente. El niño comienza con secreción nasal Afecciones laríngeas o traqueales como laringotra-
mucosa y tos, a veces paroxística en las primeras 24 a queobronquitis, algunas malformaciones, o un cuerpo
48 h, acompañada de fiebre no muy elevada en el 50 % extraño que produzca un mecanismo “a válvula” pue-
de los casos, así como cierta dificultad para tomar los den ser confundidos con la bronquiolitis.
alimentos e irritabilidad y vómitos en ocasiones. Se pre- La displasia broncopulmonar asociada a hiperreac-
senta dificultad respiratoria con desarrollo gradual de tividad bronquial puede presentar un cuadro de sibilancias
polipnea y tiraje en 24 h, la frecuencia respiratoria pue- y atrapamiento de aire en presencia de una infección
de alcanzar entre 60 y 80 respiraciones/min, asociada a viral. Los antecedentes de ventilación prolongada y
aleteo nasal, para luego mantenerse con esa frecuencia barotrauma en un prematuro pueden ayudar al diag-
2 ó 3 días con ligeras variaciones en distintas horas, que nóstico.
aumenta ligeramente con la ingestión de alimentos. Por último, entre otros posibles diagnósticos hay
El tórax presenta hiperinsuflación pulmonar con que señalar la presencia de una insuficiencia cardíaca
hiperresonancia por el atrapamiento de aire con tiraje en un lactante la cual puede ser confundida con una
subcostal e intercostal que va a acompañar en intensi- bronquiolitis. Ambos procesos presentan polipnea, tiraje,
dad la evolución de la polipnea. Hay presencia de estertores húmedos, taquicardia y cianosis. El descenso
estertores sibilantes y, en ocasiones, también crepitantes de los diafragmas en la bronquiolitis favorece un hígado
o subcrepitantes, con disminución del murmullo vesicular palpable (pseudohepatomegalia). El examen radiográfico
en los casos severos. El hígado y el bazo se palpan debi- de tórax en posición postero-anterior (PA) ayuda a dife-
do al descenso de los diafragmas. Hay taquicardia y al- renciar ambos procesos; se aprecia cardiomegalia en la
gunos pacientes pueden presentar hipoxia moderada o insuficiencia cardíaca, mientras que en la bronquiolitis
severa con presencia de cianosis. La apnea puede apa- por el contrario, se aprecia un corazón relativamente
recer en el menor de 6 meses, sobre todo en prematuros pequeño en relación con el diámetro del tórax,
con bajo peso, en los primeros 3 días de la enfermedad. hiperinsuflado.
Al cabo de 48 a 72 h en la mayoría de los pacientes EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
la frecuencia respiratoria comienza a disminuir para La radiografía de tórax simple en posición PA y
regresar a los valores normales en 2 ó 3 días. lateral va a mostrar la hiperinsuflación pulmonar con
La mayor parte de los pacientes van a presentar atrapamiento de aire, aumento del diámetro anteropos-
cuadros ligeros. Menos del 30 % de los niños menores terior y lateral del tórax, diafragmas descendidos, cora-
de 1 año requieren hospitalización. zón relativamente pequeño, “en gota”, y algunas áreas
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL de atelectasia (Fig. 69.3).
Clásicamente, el primer diagnóstico diferencial de No es necesario, sin embargo, desde el punto de
la bronquiolitis se realiza con la primera crisis de asma vista práctico, realizar radiografía de tórax a todos los
bronquial en un lactante. La presencia de antecedentes pacientes con bronquiolitis en el curso de una epidemia,
atópicos personales, sobre todo alergia cutánea, y fami- esta se reserva para los pacientes con cuadros modera-
liares (madre asmática), IgE elevada y la aparición del dos o severos.
cuadro desencadenado por factores ambientales y no El hemograma presenta un conteo de leucocitos
por infección viral, así como la buena respuesta a prácticamente normal, y no aparece leucopenia.
broncodilatadores pueden ayudar al diagnóstico de asma. El estudio microbiológico con demostración del vi-
No obstante, el diagnóstico se hace difícil en muchos rus por distintas técnicas inmunológicas como el test de
niños, ya que algunos con bronquiolitis pueden tener inmunofluorescencia, ELISA, o técnicas más modernas
buena respuesta a broncodilatadores. Por otra parte, como la reacción en cadena de polimerasa (PCR) son
Welliver señala que la bronquiolitis es más frecuente en importantes epidemiológicamente.

896 Tomo III


estertores en las neumonías. La deshidratación también
puede aparecer. El edema pulmonar no cardiogénico
debido a un aporte exagerado de líquidos y aumento de
la producción de hormona antidiurética inducida por el
VSR, así como la insuficiencia cardíaca son complica-
ciones menos frecuentes. La bronquiolitis obliterante y
el pulmón hiperlúcido unilateral son secuelas que llevan
a la insuficiencia respiratoria crónica y pueden aparecer
más raramente, sobre todo consecutivas a la infección
por adenovirus.
TRATAMIENTO
Deben ser revisados 3 aspectos: la prevención, las
medidas generales y el tratamiento especifico con algu-
nos medicamentos.
Prevención. Al ser el VSR el agente causal más
común de IRA y bronquiolitis en el lactante, hace más
de 40 años se tratan de encontrar medidas de preven-
ción eficaces contra este virus, aunque aún no hay una
respuesta total al problema. En 1960, se produjeron las
primeras vacunas; se obtuvo una vacuna con virus com-
Fig. 69.3. Bronquiolitis.
pletos inactivados por formalina y precipitados en alumi-
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO nio; su aplicación se caracterizó por la presencia en
La enfermedad es más severa en los niños meno- algunos niños vacunados de cuadros severos de bronquio-
res de 6 meses, en los primeros 3 días de la enfermedad litis y aumento de la mortalidad, con resultados poco cla-
y sobre todo en pacientes con factores de riesgo im- ros debido a factores inmunológicos no bien determinados,
portantes. por lo que fue retirada del mercado inmediatamente.
El ingreso hospitalario varía entre el 15 y el 30 % Con posterioridad, se ha trabajado en la obtención
de los casos y la mortalidad es de alrededor del 1 % de de una vacuna con virus vivos. Dos factores influyen en
los ingresados. la posibilidad de esta obtención: los anticuerpos mater-
La gran mayoría de los niños evolucionan hacia la nos pasivos que interfieren con la inmunogenicidad
curación en menos de una semana, sin recurrencias pos- vacunal y el sistema inmune neonatal inmaduro, que di-
teriores. Otro pequeño grupo presenta cuadros simila- ficulta una respuesta inmune importante.
res de menor intensidad en los próximos meses o el Dos medicamentos se utilizan con buenos resulta-
próximo año, y un tercer grupo, atópicos, presentarán dos en la prevención de esta entidad, cuando es produci-
asma posteriormente. Hay evidencias que sostienen que da por el VSR: la inmunoglobulina hiperinmune humana
hay una relación directa entre estas dos afecciones, de- específica contra el VSR, para uso intravenoso (IgH-
pendiendo esta posibilidad de predisposición genética, VSR) y los anticuerpos monoclonales humanizados con-
factores ambientales e intensidad del proceso. tra el VSR (palivizumab).
La administración de IgH-VSR ha dado buen re-
COMPLICACIONES
sultado para prevenir la infección. Su administración
Una de las complicaciones más importantes es la profiláctica puede neutralizar el virus antes de su penetra-
apnea, que sobre todo aparece en los primeros 3 días, en ción en las células epiteliales respiratorias. Cuando se
niños prematuros. La insuficiencia respiratoria aguda, el
aplica en el paciente infestado su efectividad es discuti-
neumotórax, neumomediastino y enfisema subcutáneo,
ble, pues ya el virus está en el interior de las células
y las atelectasias, las cuales pueden afectar un lóbulo o
hasta un pulmón completo que agravan el estado del epiteliales, secuestrado de la inmunidad humoral.
paciente, también pueden presentarse. Las infecciones La dosis de IgH-VSR es de 600 a 800 mg/kg/de
bacterianas secundarias, sobre todo la otitis media agu- peso corporal, i.v., como dosis única mensual, mientras
da y la neumonía se deben sospechar en un paciente dure el período epidémico.
que después de varios días presenta fiebre elevada y El palivizumab es un anticuerpo monoclonal hu-
rechazo al alimento, asociadas a irritabilidad y síntomas manizado contra el VSR que tiene la ventaja de admi-
locales en las otitis, o polipnea, tiraje que reaparece y nistrarse por vía intramuscular y al no provenir de

Parte XII. Aparato respiratorio 897


inmunoglobulina humana se evitan también los riesgos lo necesiten, así como la posibilidad de ventilación me-
de su uso. Está dirigido contra la proteína F del virus. Su cánica en cuadros muy severos que reúnan los criterios
dosis es de 15 mg/kg de peso corporal, i.m., también para su indicación.
cada 4 semanas, mientras dure el período epidémico La administración de oxígeno en los pacientes con
del VSR. cuadros moderados o severos es una de las medidas
Ambos productos se utilizan indistintamente en ni- más importantes en la bronquiolitis. Puede ser usado por
ños con alto riesgo, que presentan enfermedad pulmonar distintas formas como la cánula nasal (tenedor) a razón
crónica del recién nacido y niños pretérmino, con bajo de 1 a 2 L/min, el catéter nasal o por tienda. Muchos
peso, incluyendo los de menos de 35 semanas, aunque pacientes mejoran mucho con esta medida sin que sea
las ventajas que ofrece el palivizumab han tenido como necesario el uso de medicamentos específicos con res-
puestas muy variables.
resultado que la IgG-VSR sea descontinuada por algu-
Tratamiento específico. La terapéutica especí-
nos laboratorios. El palivizumab disminuye hasta 50 %
fica se basa en la necesidad y posibilidad de utilizar al-
los ingresos de los niños con displasia broncopulmonar.
gunos medicamentos sobre los cuales han existido en
La IgH-VSR está contraindicada en pacientes con los últimos años diferentes criterios para su uso, como
cardiopatías congénitas por elevarse en estos pacientes son los broncodilatadores, antivirales (ribavirin),
la mortalidad. El palivizumab tampoco ha sido autoriza- esteroides y antibióticos.
do para ser utilizado en este tipo de paciente. Broncodilatadores: Su uso es muy controvertido
Medidas importantes que deben orientarse: en la bronquiolitis. Algunos estudios demuestran efica-
La educación de los padres en lactantes con alto cia, mientras que otros lo niegan, se alega que la
riesgo: para disminuir la exposición al entorno ambien- broncoconstricción es solo un pequeño componente de
tal, para evitar contactos con personas enfermas, inclu- la obstrucción bronquial, sobre todo en los menores de 6
so hermanos que asisten a escuelas y círculos, al igual meses, quienes tienen además poco desarrollo de la
que el lavado de las manos de personas que manipulan musculatura lisa bronquial, por lo que se cuestiona su
estos niños en el hogar y en el hospital. uso en este grupo etario.
Medidas generales. En todos los pacientes se La mejor respuesta se observa con el uso de la
deben aplicar una serie de medidas generales y trata- adrenalina racémica, la cual es superior al salbutamol en
miento sintomático que se utilizan en las IRA, como son: estos niños, a pesar de lo cual el uso de este último es el
la vigilancia de la frecuencia respiratoria, la hidratación que se ha generalizado. La aminofilina y el bromide de
adecuada preferentemente por vía oral y medidas ipratropium no se usan en la bronquiolitis.
antitérmicas en algunos pacientes que así lo requieran. El salbutamol se utiliza en Estados Unidos en el
La bronquiolitis ligera puede ser tratada en el ho- 100 % de los pacientes hospitalizados en las unidades de
cuidados intensivos. En Europa el 5 % de los centros
gar. La presencia de ligera dificultad respiratoria solo
nunca lo utilizan, el 61 % lo usan siempre y en el resto
exige una buena observación, con toma de la frecuencia
solo en pacientes con factores de riesgo importantes.
respiratoria en 1 min y administración adecuada de líqui-
En Inglaterra y Australia su uso es seriamente cuestio-
dos. La lactancia materna debe mantenerse y la educa- nado y en Japón su uso es prácticamente nulo, por no
ción a las madres en cuanto a las características de la encontrarse efectos beneficiosos con su empleo. En
enfermedad y los signos que debe vigilar, es una medida Cuba, su uso es habitual en cualquier edad, pero no
imprescindible que muchos médicos no utilizan de ma- existen estudios serios, con base científica que demues-
nera adecuada. tren su eficacia o no.
Los criterios de ingreso en el hogar pueden apli- En conclusión, algunos autores en el mundo le atri-
carse a niños sin factores de riesgo importantes, sobre buyen desde una discreta hasta una incuestionable me-
todo mayores de 6 meses, para evitar el ingreso hospita- joría solo en un subgrupo de pacientes, pero determinar
lario innecesario y los peligros que este implica. Debe- de antemano cual es, no es factible.
mos recordar, como se ha señalado antes, que en la Por estos datos antes expuestos, la tendencia ac-
mayoría de los países solo requiere ingreso hospitalario tual es usarlo en mayores de 6 meses y si hay una buena
el 30 % o menos de los niños con esta afección. respuesta, continuarlo, y si no es así, suspenderlo. Su
Los pacientes con cuadros moderados o severos uso se recomienda solamente por 48 a 72 h, su mejor su
requieren hospitalización, para realizar una mejor vigi- aplicación es a través de nebulizaciones. Sus dosis ha-
lancia y poder detectar un agravamiento rápido del pro- bituales son las siguientes:
ceso y presencia de complicaciones que puedan aparecer, Salbutamol (Albuterol )
como la insuficiencia respiratoria aguda. También per- • Oral: 0,1 mg/kg de peso corporal/dosis, cada 6 h.
mite poder aplicar el oxígeno en aquellos pacientes que Jarabe de 2 mg en 5 mL

898 Tomo III


− Menor de 1 año: 1mg/dosis La dexametasona por vía oral no varía el curso
− Mayor de 1 año: 1 a 2 mg/dosis. clínico de la enfermedad en pacientes hospitalizados y la
administración de esteroides inhalados tampoco ha de-
• Nebulizaciones: mostrado eficacia en esta entidad.
Solución al 0,5 % = 5 mg/mL En la actualidad, hay criterios unánimes y fuertes
− Menor de 1 año = 1,25 mg/dosis evidencias que demuestran que el uso de los esteroides,
− 1 a 2 años = 2, 50 mg/dosis al contrario de lo que era de esperar, no mejora el cua-
Cada 20 min 3 dosis. Después continuar cada 4 ó 6 h. dro clínico de la bronquiolitis, por lo que no deben ser
usados en esta entidad.
Antivirales: el ribavirin es un nucleósido sintético de- Antibióticos: tienen un uso limitado en la
rivado de la guanosina que se utiliza desde 1985 en dis-
bronquiolitis por el hecho ya señalado en la causa, de
tintas enfermedades virales, teniendo acción sobre el VSR.
que hasta el momento no se reportan bacterias produc-
El medicamento debe ser administrado, exclusi-
toras de esta enfermedad y menos aún epidemias. Estos
vamente, en forma de nebulizaciones con un equipo
solo están indicados en aquellos pacientes que presen-
generador de partículas, a una concentración final de
ten complicaciones bacterianas secundarias, sobre todo
20 mg/mL. El tratamiento se realiza durante 12 a 18 h
la otitis media aguda, que es la mas común, y las neumo-
diarias durante un mínimo de 3 días y un máximo de
7 días. Solo debe administrarse en niños en quienes se nías. También en el caso de una bronquiolitis causada
ha confirmado el VSR como el agente causal de la por el M. pneumoniae, que es raro, estaría indicado el
bronquiolitis. uso de antibióticos.
Su indicación más precisa es en pacientes de alto Otros medicamentos: dos medicamentos: la
riesgo como son los prematuros, los que tienen gammaglobulina hiperinmune específica del VSR y los
cardiopatías congénitas, los que presentan enfermedad anticuerpos monoclonales (palivizumab) se utilizan para
pulmonar crónica y los inmunodeficientes, principalmente. disminuir los síntomas de la enfermedad cuando ya está
El medicamento es muy costoso y se necesita experien- presente en un niño, en las dosis señaladas anteriormen-
cia para su administración. te. No obstante, debemos señalar que el uso mas indica-
Su uso es muy discutido. Se refiere discreta mejo- do de estos dos productos es en la prevención.
ría en algunos niños, sin disminución de la estadía ni
mejoría de la función pulmonar, así como tampoco dis- Neumonías agudas infecciosas
minución de la mortalidad. Algunos autores señalan bue- Las neumonías son procesos inflamatorios agudos
nos efectos a largo plazo en el sentido de que se puede que afectan las zonas más distales del sistema respira-
torio: bronquiolos, alvéolos y/o tejido intersticial pulmonar.
disminuir la recurrencia de cuadros de sibilancias.
Pueden ser infecciosas o no infecciosas, agudas o cró-
Se utiliza en la gran mayoría de los hospitales de
nicas, adquiridas en la comunidad o intrahospitalarias.
Estados Unidos. En Europa solo se utiliza en el 43 % de Nos limitamos a considerar las neumonías infecciosas
los centros hospitalarios y en estos solo en algunos pa- agudas adquiridas en la comunidad.
cientes graves, excepcionalmente. En un estudio reali- Existen varias clasificaciones de neumonías agu-
zado en Canadá (PICNIC) se señalan serias dudas en das. Una de ellas es la causal, que las divide en:
relación con su efectividad en los pacientes de alto ries- Causadas por virus: sincicial respiratorio,
go por lo que se plantea la indicación de que puede ser metaneumovirus humano, parainfluenza, influenza,
usado. En Cuba, nunca se ha utilizado este medicamento. adenovirus, coronavirus, citomegalovirus, sarampión
Esteroides: durante muchos años se ha discutido (neumonías a células gigantes) y otros virus menos
el uso de estos medicamentos en la bronquiolitis. Está frecuentes.
demostrado que la administración de esteroides a ani- Causadas por bacterias. Streptococcus
males infestados con VSR y virus parainfluenza que pre- pneumoniae, Staphylococcus aureus (principalmente
sentan bronquiolitis prolonga el proceso y hay evidencias en niños menores de 2 años), Haemophylus influenzae
de que en el humano sucede algo similar. Dubbois et al. tipo b (menos frecuentes otros H.influenzae tipificables
en estudio de 500 niños con bronquiolitis tratados con no b y H. influenzae no tipificables), Estreptococo gru-
esteroides, encuentra que no existen diferencias con el po B (en RN), Listeria monocitogenes (sobre todo en
grupo control, al que se le administra placebo. El uso de recién nacidos), Klebsiella pneumoniae, Chlamydias
la hidrocortisona endovenosa tampoco produce mejoría (Trachomatis y pneumoniae), Mycoplasma
clínica. pneumoniae, Ureaplasma urealyticum (recién nacidos),

Parte XII. Aparato respiratorio 899


Legionella pneumophila, Mycobacterias (TB o Chlamydia trachomatis o pneumoniae, Mycoplasmas
atípicas), estreptococo beta hemolítico grupo A, pneumoniae o Neumocistis jirovecii. Las estructuras
Treponema pallidum, E.coli, y otras bacterias aeróbicas. más afectadas en estas neumonías son el tejido intersticial
Los mycoplasmas son bacterias que presentan cier- pulmonar y los tabiques interalveolares.
tas características por lo que algunos autores los con- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
sideran como un subgrupo aparte. Pueden intervenir, Varían según la edad y, habitualmente, son más
con mucha menor frecuencia, bacterias anaeróbicas que
severas en niños pequeños. Con frecuencia comien-
producen neumonías necrotizantes con empiemas pútri- zan como un “cuadro catarral” inespecífico: rinorrea,
dos o sin ellos o abscesos pulmonares, Por ejemplo, obstrucción nasal, orofaringe enrojecida, anorexia y tos
bacteroides melanogenitus, bacillus enteriditis,
seca. Puede haber, a veces, conjuntivitis. Con poste-
Fusobacterium,Peptoestreptoccocus, Eubacterium rioridad, aparecen manifestaciones de una IRA baja,
bacteroides fragillis. variables en intensidad según edad y agente causal:
Causadas por hongos. Aspergillus (fumigatus,
polipnea, tiraje bajo o generalizado, tórax distendido a
a veces flavus o niger), Histoplasma capsulatum, la inspección o no; a la percusión, hay sonoridad nor-
Coccidiosis inmitis, Blastocystis hominis, Candidas mal, hiposonoridad o hipersonoridad unilateral o bilate-
albicans, Neumocistis jirovecii (antes Neumocistis
ral y a la auscultación, se pueden encontrar estertores
carinii) y otros hongos menos frecuentes. húmedos finos o un síndrome de obstrucción bronquial
Causadas por protozoos. Toxoplasma gondii. difuso con espiración prolongada y sibilancias; el mur-
Causadas por Rickettsias: Coxiella burnetti
mullo vesicular puede estar normal o disminuido. Pue-
(fiebre Q). de presentarse como un síndrome coqueluchoide o con
Causadas por aspiraciones. Líquido amniótico una tos seca, pertinaz, molesta, con pocas manifesta-
meconial, alimentos líquidos o semilíquidos, cuerpos ex-
ciones estetoacústicas o sin ellas, con polipnea y tiraje
traños sólidos, líquidos (ejemplo: agua de mar o de río), o sin ellos y una radiografía positiva o no, sobre todo en
hidrocarburos (petróleo, kerosene, gasolina, pulimentos, los primeros momentos.
etc), lípidos o sustancias lipoideas, etc.
El hemograma suele ser normal, aunque puede
Causadas por infiltración eosinofílica del pul- existir leucopenia o leucocitosis con predominio de
món. El síndrome de Löeffler es una de las múltiples neutrófilos; la eritrosedimentación suele estar normal o
causas del llamado pulmón eosinofílico.
poco elevada y la proteína C reactiva (PCR) normal o
Neumonía hipostática. Lo ideal sería, para un ligeramente aumentada. Después de la 3ra. semana de
correcto tratamiento, que esta clasificación causal se evolución, en las producidas por chlamydias se pueden
pudiera utilizar en todos los pacientes, pero en la prácti- presentar eosinofilia y/o hipergammaglobulinemia.
ca se ha encontrado que con las mejores facilidades Los estudios microbiológicos pudieran ayudar a
diagnósticas hay más de 30 % de neumonías en que, establecer el microorganismo productor.
actualmente, no se puede determinar su causa. En las radiografías de tórax puede encontrarse
una hiperaereación bilateral acompañada de opacidades
Existe otra clasificación, la anatomoclínica, ba- o no, en un campo pulmonar o en ambos, reforzamientos
sada en las manifestaciones clínicas, la anatomía pa- peribronquiales o en bandas; otras veces, se presentan
tológica, la radiología u otros medios imagenológicos, infiltrados pequeños difíciles de diferenciar de mi-
que es la que utilizamos en la clasificación de las IRA croatelectasias. Más raramente se pueden presentar
de Clyde y Dennis modificada, que divide las neu- condensaciones y son raras las pleuresías. Es frecuen-
monías en: te la disociación clinicoradiológica en las neumonías
• Neumonías intersticiales. intersticiales producidas por mycoplasmas o
• Neumonías lobares o segmentarias, que afectan a chlamydias.
un lóbulo o segmento de un lóbulo. DIAGNÓSTICO
• Neumonías a focos diseminados o bronconeumonías. Se basa en las manifestaciones clínicas y radioló-
gicas. A veces, es necesario un lavado broncoalveolar
Neumonía intersticial aguda (LBA) o una biopsia pulmonar. Los estudios
La mayoría de ellas son producidas por virus, aun- microbiológicos pueden ayudar a determinar el agente
que otros microorganismos pueden causarlas como las causal.

900 Tomo III


EVOLUCIÓN en el cuadrante inferior derecho del abdomen y simular
Además del agente causal y la edad, pueden in- una apendicitis, o cuando hay inflamación de la pleura
fluir otros factores de riesgo como el estado nutricional diafragmática en las neumonías bajas, por irritación del
o inmunológico. frénico, producirse dolor en el hombro del mismo lado
Muchas veces, la evolución es satisfactoria, con
de la lesión. Al comienzo puede haber vómitos y/o
desaparición total o casi total del cuadro clínico en alre-
diarreas de corta duración en los niños pequeños en quie-
dedor de 3 semanas, aunque las imágenes radiológicas
pueden persistir por varias semanas más. nes también puede presentarse un cuadro de irritabili-
Una minoría presenta gravedad en aumento con dad y hasta convulsiones con LCR normal (citoquímico),
polipnea y tiraje progresivos, empeoramiento rápido del pero con presión aumentada. En los mayores, la expec-
cuadro clinicorradiológico y muerte por insuficiencia res- toración puede ser hemoptoica. Con frecuencia, hay
piratoria. anorexia y astenia de duración variable.
Otras veces el proceso pasa a ser crónico. Al examen físico: a la inspección, puede encon-
COMPLICACIONES
trarse, polipnea y tiraje bajo o no; a la palpación, en ni-
ños mayores aumento de las vibraciones vocales y en
Las más frecuentes son por infección bacteriana
niños pequeños aumento de las vibraciones al llanto en
secundaria, aire extraalveolar (neumotórax, neumome-
la zona afectada, acompañada de hiposonoridad o
diastino y enfisema subcutáneo) o atelectasias. El ede-
matidez a la percusión; a la auscultación, lo más fre-
ma pulmonar no cardiogénico se puede presentar por
cuente es encontrar un aumento del murmullo vesicular
una administración excesiva de líquidos por vía
con vibraciones vocales aumentadas a la voz normal
intravenosa.
(broncofonía) o a la voz cuchicheada (pectoriloquia
TRATAMIENTO áfona) en la misma zona. Si el niño no coopera, al llanto
Como en toda IRA no complicada se tendrán en las vibraciones vocales están aumentadas.
cuenta: las medidas generales, locales (incluyendo la En forma clásica se describe que sobre el lóbulo
utilización, discutida, de agonistas beta-2 adrenérgicos afectado se puede encontrar una respiración ruda o
como el salbutamol, bromuro de ipratropio o ambos), soplante con estertores crepitantes que en las horas si-
medidas específicas según el microorganismo diagnosti- guientes se cambia por un soplo tubario rodeado de una
cado, e innecesarias o hasta perjudiciales. (Ver Trata- “corona” de estertores húmedos finos.
miento de las IRA no complicadas) En escolares y preescolares, es más frecuente una
respiración ruda o respiración soplante y estertores
Neumonía lobar o segmentaria crepitantes o subcrepitantes finos sin que se escuche,
habitualmente, un soplo tubario. En niños pequeños, con
Es más frecuente en adultos y niños mayores, aun-
neumonías poco extensas, pueden no encontrarse mani-
que puede presentarse a cualquier edad.
festaciones estetoacústicas; la neumonía se manifiesta
Puede deberse a diversos microorganismos, pero,
por síntomas generales, con polipnea y en casos más
en general, son las bacterias las más frecuentes, en par-
severos, tiraje.
ticular el Str. pneumoniae (neumococo), aunque tam-
El hemograma presenta leucocitosis con neutrofilia;
bién pueden ser producidas por el H. influenzae tipo b
en los más graves, además, hay desviación a la izquier-
(cuya incidencia ha disminuido con la utilización de la da y gránulos tóxicos. Hay pacientes muy graves con
vacuna contra esta bacteria) o la K. pneumoniae (con leucopenia. La eritrosedimentación está elevada igual
tendencia a producir neumonías en los lóbulos superio- que la proteína C reactiva (PCR) cuantitativa, que es
res, sobre todo el derecho, con abscedación rápida y más valiosa que la anterior, pues sus cifras aumentan
una discreta reacción pleural); más raramente intervie- antes que ella al comienzo del proceso y disminuyen
nen otros agentes infecciosos. cuando comienza la mejoría.
El test de la procalcitonina parece ser muy supe-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
rior a las anteriores investigaciones de laboratorio cita-
Pueden comenzar de manera brusca o son prece- das para determinar la severidad y diferenciar la causa
didas por un cuadro “catarral” inespecífico, y que co- bacteriana o no, de la neumonía (lobares o bronconeu-
mienza con fiebre de intensidad variable, hasta más de monías) evitando la utilización innecesaria de antibióticos.
40°C (axilar), tos, al principio seca y después húmeda, El exudado nasofaríngeo tiene poco valor, aunque
punta de costado en el sitio afectado al respirar u otras hay quienes describen que una bacteria encontrada con
veces una punta de costado abdominal que en las neu- un alto conteo de colonias puede hacernos sospechar
monías lobares inferiores derechas se puede manifestar que sea la misma que está produciendo la neumonía. Es

Parte XII. Aparato respiratorio 901


mejor si se obtiene el material de la secreción que puede
salir de la laringe al producirse un “gag” por estimulación
de la pared posterior de la orofaringe, pero no es una
técnica fácil de realizar.
Se obtienen mejores resultados con la aspiración
endotraqueal o la punción torácica bajo control
ultrasonográfico. El hemocultivo tiene una positividad no
mayor del 15 %. Los mejores resultados se obtienen
tomando 2 a 3 pequeñas muestras de sangre en 24 h,
sobre todo cuando el niño presenta escalofríos u otros
síntomas que preceden a la fiebre, o por el medulocultivo.
Las “pruebas rápidas” para determinar antígenos de al-
gunas bacterias en sangre y orina ayudan a sospechar el
microorganismo; son más efectivas en las infecciones
por H. influenzae tipo b.
Las gasometrías no están indicadas, excepto cuando
se producen complicaciones sistémicas.
Las radiografías de tórax (frontal y lateral) demues-
tran la existencia de una zona radiopaca por condensa-
ción inflamatoria que toma un lóbulo o segmento
(Fig.69.4). Con una evolución clínica favorable no se
deben repetir antes de 7 a 10 días; hay quienes plantean
que en una neumonía a neumococos (comprobada por
microbiología), con evolución clínica favorable pudieran A
no repetirse las radiografías evolutivas. Aunque se han
realizado investigaciones para relacionar el patrón
radiográfico con la causa bacteriana o viral, la mayoría
de los autores no acepta que la radiología sea confiable
para esto y algunos solo admiten la sospecha bacteriana
de las neumonías lobares por el cuadro radiológico de un
bloque neumónico con derrame pleural.
EVOLUCIÓN
Con un tratamiento adecuado y precoz, es habi-
tualmente favorable si no existen factores de riesgo. La
fiebre debe desaparecer en 48 a 96 h de iniciado el
antibacteriano, al igual que debe haber una mejoría fran-
ca de las manifestaciones clínicas, aunque las radiogra-
fías pueden mantenerse positivas a veces varias semanas
y hasta 3 a 6 meses, pero con mejoría progresiva.
COMPLICACIONES
Se dividen en intratorácicas y extratorácicas. Las
primeras, a su vez, se subdividen en pulmonares (bron-
quiales, parenquimatosas o pleurales) y extrapulmonares.
(Ver Complicaciones de las neumonías.)
TRATAMIENTO
Como en toda IRA no complicada, lo dividimos en:
medidas generales, locales, específicas e innecesarias
B
o hasta perjudiciales. (Ver Tratamiento de las IRA no
complicadas.) Fig.69.4. Neumonía. A. Frente. B. Lateral.

902 Tomo III


Bronconeumonías o neumonías a focos las penicilinas y alrededor del 25 % de resistencia inter-
diseminados media. Algunos autores extranjeros plantean que estos
Son más frecuentes en lactantes y escolares, aun- neumococos se presentan, sobre todo, en niños meno-
que pueden ocurrir a cualquier edad y ser producidas res de 5 años de edad, que asisten a guarderías, por el
por diferentes microorganismos. En los países desarro- uso indiscriminado de antibacterianos, que han ingresa-
llados se plantea que la mayoría de ellas son de causa do en los últimos 6 meses en un hospital. En las neumo-
viral, mientras las de origen bacteriano no son más del nías adquiridas en la comunidad no los hemos encontrado
15 al 20 % de todas las bronconeumonías. En países en tan frecuentemente, pero pueden aumentar en el futuro.
desarrollo las bacterias intervienen, primaria o secunda- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
riamente, hasta en el 70 % de este síndrome. Por eso Por lo general, están precedidas por un cuadro res-
en estos países se debe tener en cuenta que toda piratorio inespecífico alto (“catarral”) de horas o pocos
bronconeumonía se considera como bacteriana mientras días de evolución. Aparece fiebre de intensidad variable,
no se demuestre lo contrario. Los microorganismos más con polipnea, con tiraje o sin él (esto último plantea un
frecuentes varian según la edad (Cuadro 69.9). cuadro más grave) y tos. En los primeros 2 meses de
vida, la bronconeumonía se puede presentar por síntomas
Cuadro 69. 9. Microorganismos más frecuentes
y signos de una “afección muy grave” (OPS/OMS) que
en las bronconeumonías, según la edad
hace indistinguible la neumonía de la meningitis, la sepsis
Primeras 12 semanas de vida − Enterobacterias u otras infecciones y que, además, puede presentarse hasta
gramnegativas s/t Escherichia coli en lactantes de más meses, sobre todo, en los desnutridos,
(adquiridas perinatales, − Staph. aureus,
en el momento del parto − K. pneumoniae
que se debe tener en cuenta para descartar la infección.
o posteriormente) − L. monocytogenes En los primeros meses de vida, pueden presentarse vó-
− Ureaplasma urealyticum mitos con diarreas o sin ellas de poca intensidad y dura-
− Strept. grupo B (primeras ción. En los primeros años se puede presentar un cuadro,
semanas)
− VSR (después de la 6ta. en niños predispuestos, de irritabilidad y convulsiones,
semana de edad) llamado antiguamente “meningismo”, pero el estudio
− Ch. trachomatis citoquímico del LCR es normal; solo se encuentra au-
− Neumocistis jirovecii
mentada presión de este.
De 3 a 12 meses de edad − Staph. aureus Al examen físico: Inspección: polipnea, con tiraje o
− Ch. trachomatis (a veces con sin este, generalizado o bajo (en este caso con depre-
cuadro coqueluchoide sión de toda la parte inferior del tórax a la inspiración) y
o bronconeumonías los pri-
meros 6 meses) aleteo nasal o no; palpación: poco importante en niños
− Str. pneumoniae pequeños; percusión: la sonoridad puede estar normal,
(neumococo) disminuida (si en la zona hay confluencia de las lesio-
− H. influenzae tipo b
− Adenovirus nes) o aumentada (cuando se acompaña de un síndrome
− VSR de obstrucción bronquial difuso); auscultación: es típica
la presencia del murmullo vesicular normal o disminuido
De 1 a 4 años − Neumococos
− H. influenzae tipo b
globalmente con estertores húmedos (subcrepitantes fi-
− Staph. aureus nos o crepitantes) en ambos campos pulmonares, o a
− K. pneumoniae veces en un solo hemitórax. Si los focos bronconeu-
mónicos confluyen y se produce una consolidación gran-
De 5 o más años − Neumococos
− Staph. aureus de, se encontrará en dicha zona signos semejantes a una
− H. influenzae tipo b u otros neumonía lobar: submatidez o matidez, murmullo vesicular
Haemóphilus alterado, rudo o soplante con broncofonía a la ausculta-
− K. pneumoniae ción de la voz o el llanto y estertores subcrepitantes fi-
− Mycoplasma pneumoniae nos o crepitantes; con menos frecuencia, se encontrará
un soplo tubario en la zona condensada.
A cualquier edad, pero con más frecuencia entre Olfación: aliento fétido, a veces pútrido, en pacien-
1 y 4 años, hay que tener en cuenta la posibilidad de tes con bronconeumonías por anaerobios, que son muy
neumococos de resistencia intermedia o totalmente re- poco frecuentes.
sistentes a las penicilinas y a otros antibacterianos En pacientes pequeños, la bronconeumonía se pue-
(macrólidos, cotrimoxazol y otros). En Cuba, se ha des- de manifestar por un síndrome de obstrucción bronquial
crito hasta 8 % de neumococos totalmente resistentes a difuso bilateral (hipersonoridad, espiración prolongada,

Parte XII. Aparato respiratorio 903


sibilantes y murmullo vesicular normal o disminuido), que toxiinfeccioso, muy graves, con leucopenias y con
clásicamente se describe como producido en bronconeu- empiemas o no.
monías virales, pero según algunos trabajos, también No obstante estas formas, que se deben tener en
puede ser causado por bacterias (neumococos, H. cuenta, hay que insistir que ni por la clínica ni la
influenzae tipo b y, en los primeros meses, también por imagenología, según la gran mayoría de los autores, se
Ch. trachomatis) que debemos tener en cuenta para no puede diagnosticar la causa de una neumonía.
demorar el inicio del tratamiento antibacteriano. EVOLUCIÓN
La presencia de fiebre no es un signo de neumo- Depende de la existencia de factores de riesgo o
nía, y puede no estar presente en niños pequeños y so- no, la edad, microorganismo productor, tiempo de evolu-
bre todo en malnutridos por defecto ción anterior del cuadro, diagnóstico precoz, tratamiento
El hemograma, en bronconeumonías bacterianas, utilizado anteriormente, calidad del cuidado médico y no
la eritrosedimentación y la PCR se comportan igual que médico (sobre todo familiares) y facilidades existentes.
lo descrito anteriormente en neumonía lobar o
COMPLICACIONES
segmentaria, al igual que los hemocultivos o
medulocultivos. Pueden ser intratorácicas o extratorácicas. Las pri-
El exudado nasofaríngeo para la mayoría de los meras las subdividiremos en pulmonares (parenquimatosas,
autores no tiene valor y es más provechosa la aspiración pleurales o bronquiales) y extrapulmonares (ver Com-
bronquial o la punción pulmonar transtorácica, guiada plicaciones de las IRA bajas).
por ultrasonido del tórax en una zona condensada. Pu- TRATAMIENTO
dieran ser útiles los “métodos rápidos” para detectar Como en toda IRA no complicada, lo dividimos en:
antígenos específicos en sangre y orina (látex, medidas generales, locales, específicas e innecesarias o
contrainmu-noelectroforesis y otras técnicas) que nos hasta perjudiciales (ver Tratamiento de las IRA no
podrían hacer sospechar el microorganismo causal. complicadas).
La radiografía de tórax frontal y lateral a distancia
de telecardiograma, presentará un moteado unilateral o Neumonías en niños en los primeros
bilateral, que puede confluir en una o varias zonas. Se 2 meses de vida
ha planteado que alrededor del 20 % de las Estas neumonías, también llamadas neumonías
bronconeumonías puede presentar una disociación clíni- neonatales, con frecuencia a focos diseminados, pre-
ca-radiológica. sentan ciertas características por las cuales se decidió
Las neumonías clásicas por Staphylococcus desarrollarlas aparte. Estos aspectos son:
aureus en lactantes y niños pequeños presentarán el Constituyen un problema de salud mundial.
cuadro típico de bronconeumonía con empiema o En la década de los 90, por cálculos efectuados, la Or-
pioneumotórax, abscesos pulmonares, neumatoceles y ganización Mundial de la Salud (OMS) consideró que
otras complicaciones. En los últimos decenios han dis- alrededor de 12 millones de niños menores de 5 años de
minuido francamente en países desarrollados. edad, morían todos los años en el mundo y de estos,
En cambio se describen cuadros severos (neumo- 4 millones fallecían por IRA, principalmente por neumo-
nías necrotizantes) adquiridos en la comunidad, en niños nías; la mayoría fallecía en países en desarrollo. Más o
mayores y adultos, producidas por estafilococos resis- menos el 70 % de la letalidad era en niños menores de
tentes a las meticilinas, cepas US 300 y US 400, con 1 año de edad y de ellos, entre el 20 y el 30 %, eran
leucocidinas Panton-Valentine. Se manifiestan por fie- menores de 2 meses.
bre alta, hipotensión, cianosis, hemoptisis, estado Pueden producir la muerte en poco tiempo.
toxiinfeccioso, leucopenia, con infiltrados múltiples, Mientras que los niños de 3 meses a 5 años de edad, que
microabscesos, empiema y raramente neumotórax y mueren por neumonía, fallecen entre el 3ro. y el 5to. día
neumatoceles; y que evolucionan a un cuadro de distrés de evolución, los menores de 3 meses fallecen en menos
respiratorio y muerte, Estos cuadros presentan, en más tiempo, a veces en pocas horas. Esto se pudiera expli-
del 80 % de ellos, lesiones cutáneas (desde abscesos car, en parte, por las características del sistema inmuno-
hasta celulitis). También pueden presentar osteomielitis lógico durante las primeras semanas de vida pues, aunque
o artritis supuradas; las neumonías necrotizantes aisla- el niño normal, a término, tiene un sistema inmunológico
das son menos frecuentes. bastante preparado para ayudar a combatir las infeccio-
También en países desarrollados, describen una nes, no ha enfrentado estímulos suficientes, por lo que
forma de neumonía por Streptococcus pneumoniae, en se produce una respuesta llamada primaria, durante una
niños mayores, de la raza blanca, con estado primoinfección.

904 Tomo III


Esta respuesta es más demorada y menos intensa sante cada vez más, en países desarrollados, de cuadros
contra el microorganismo infectante y que es diferente graves sépticos y hasta mortales, sobre todo meningitis
a la llamada respuesta secundaria producida cuando el o neumonías en primeras semanas de nacido.
mismo microorganismo penetra por segunda vez en el En la comunidad: Estreptococo neumoniae-H.
niño, que ya presentó una respuesta primaria y creó la influenzae (sobre todo tipo b), Estafilococus aureus,
llamada memoria inmunológica con anterioridad y se VSR (habitualmente después de la 5ta. semana).
produce una respuesta menos demorada, más rápida e La polipnea, con tiraje o sin él. Se considera
intensa. En la primera penetración, el microorganismo, polipnea en los 2 primeros meses de la vida cuando, en
que muchas veces es una bacteria, se puede diseminar un niño tranquilo o dormido, se presentan 60 o más res-
y provocar una infección severa que en poco tiempo piraciones por minuto y constituye, junto con el tiraje, los
dos signos más importantes para sospechar una neumo-
puede ser mortal.
nía. Sin embargo, pueden estar ausentes por caracterís-
La inmunoglobulina G (IgG) atraviesa la barrera
ticas anatomofisiológicas en un lactante pequeño, al igual
placentaria normalmente en las últimas 10 a 12 semanas
que la tos.
del embarazo, por lo que un niño al nacer prematura-
No lactancia materna o comienzo tardío de
mente puede presentar una deficiencia de IgG pasiva esta. La leche materna, y sobre todo el calostro, son
que lo hace más vulnerable a ciertas infecciones. Los fuentes ricas en anticuerpos que aumentan la inmunidad
nacidos con bajo peso y antes de las 28 semanas pueden pasiva adquirida. Además, se ha planteado que estos
presentar deficiencias en el desarrollo del aparato respi- anticuerpos en la leche materna revisten la mucosa bu-
ratorio y de los mecanismos de defensa, inmunológicos cal y de la orofaringe evitando la implantación y pene-
o no inmunológicos, que favorecen la aparición de cua- tración de microorganismos patógenos o potencialmente
dros respiratorios, entre ellos neumonías. patógenos en estas zonas, y que después estos sean
En RN y lactantes pequeños, las infecciones pue- transportados a zonas bajas del sistema respiratorio.
den presentar manifestaciones clínicas que la OPS/OMS Existen otros factores como el hacinamiento en
llama “signos de peligro” que no se manifiestan por el hospitales maternos o en el domicilio y el tabaquismo
aparato respiratorio y denotan una afección muy grave, pasivo.
ya sea neumonía, meningitis, septicemia o más de uno Se pudiera preguntar cómo es posible que un re-
de estos síndromes a la vez. Si los familiares o el perso- cién nacido que durante las 42 semanas se encuentra,
nal de la salud no tienen en cuenta estos signos de peli- por lo general, en un medio estéril (útero) y que al nacer
gro se puede demorar el traslado a un centro de salud y penetra más o menos en poco tiempo en un medio pla-
perderse un tiempo valioso para comenzar un tratamiento gado de microorganismos patógenos o potencialmente
adecuado. patógenos, no se infecte. Esto se debe a que existen
La tos. Puede estar presente, pero muchas ve- una serie de mecanismos de defensa que el humano ha
ces, es escasa o nula, lo que hace que no llame la aten- adquirido en el desarrollo filogenético de la especie y en
ción a los familiares hacia el aparato respiratorio. evitar una serie de factores de riesgo.
El microorganismo productor de la neumonía. Entre los factores predisponentes o de riesgo de
Puede variar, pero predominan las bacterias y tiene un una neumonía en un niño de menos de 3 meses de edad.
papel importante, primaria o secundariamente, en este Tenemos:
síndrome. Los microorganismos más frecuentes varían • Infección materna, incluso la fiebre como manifesta-
según el momento en que se presentó el contagio y este ción de aquella en los días antes del parto o durante
puede ser: este.
Intrauterino: Citomegalovirus, rubeola, herpes sim- • Bajo peso al nacer.
ple, virus del síndrome de inmunodeficiencia adquirida • Ruptura prematura de las membranas 12 o más ho-
(SIDA), Toxoplasma gondii, Treponema pallidum, ras antes del comienzo del parto.
Listeria monocytogenes, M. tuberculosis y otras bac- • Líquido amniótico fétido o espeso.
terias. • Parto distócico.
Preparto, intraparto, en el cunero o en el hos- • Infecciones existentes en el hospital, el salón de par-
pital donde nace el niño: Bacterias gramnegativas: to, el cunero, la habitación del hospital o en el domici-
E.coli, Klebsiellas spp. o H. influenzae b, Micoplas- lio del recién nacido.
mas: Ureaplasma urealyticum, Listeria monocitogenes • Hacinamiento y violación de las normas de higiene
Neumocistis jirovecii,Staphyloccocus aureus, en el lugar del parto o en el domicilio.
Chlamydia trachomatis, Estreptococo del grupo B, cau- • Pobreza.

Parte XII. Aparato respiratorio 905


• Irritación de las vías aéreas, principalmente por: taba- de las membranas hialinas”) con el que a veces coexis-
quismo pasivo te, y no se puede diferenciar por las radiografías. Las
• Utilización de derivados de la biomasa para cocinar imágenes de estas radiografías tampoco se pueden dife-
o calentar en el domicilio renciar de aquellas que presentan los niños con infec-
• Contaminación ambiental. ciones pulmonares a estreptococo grupo B en los
• No utilización o supresión precoz de la lactancia ma- primeros días de vida. Otras veces, se pueden observar
terna. densidades en bandas u opacidades confluentes compa-
• Onfalitis, piodermitis o perionixis (en este caso sos- tibles con bronconeumonías. Se pueden observar cavi-
pechar Staphyloccocus aureus). dades (abscesos) en infecciones sobre todo por
estafilococos, pero también se pueden observar en neu-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
monías por E.coli o Klebsiella pneumoniae. Otras ve-
En el niño que adquiere la infección en la fase
ces no se observan alteraciones o hay una hiperventilación
perinatal o después, esta se manifesta por diversos sín-
bilateral que ha hecho plantear a algunos autores que las
tomas y signos. radiografías de tórax son de poca utilidad en algunos
Con frecuencia se presentan “síntomas y signos pacientes.
de peligro” (AIEPI) como: Los exudados faríngeos o nasales: son de poca
• Disminución manifiesta del apetito traducido por dis- utilidad y puede ser más efectiva la aspiración del con-
minución en el número o la duración de las tetadas o tenido traqueal con coloración de gram del material as-
ingestión de la fórmula en menos de la mitad del vo- pirado y cultivo de este.
lumen en las últimas tomas. Hemocultivo.
• Oliguria, traducido por la disminución del número de Punción lumbar (estudios citoquímicos, coloración
pañales utilizados al día. de gram y cultivo).
• Irritabilidad o somnolencia (se dificulta despertar al También se realizarán cituria, urocultivo y
niño). coprocultivo.
• Puede presentar fiebre o por el contrario, hipoter- El hemograma: carece de valor en las prime-
mia. A veces, hay aumento de la temperatura del ras 2 semanas de vida.
tronco con enfriamiento de las extremidades. Gasometría: cuando hay dificultad respiratoria o
• Palidez, color “grisáceo” de la piel o cianosis. saturación de oxígeno por oxímetro digital para adminis-
• Vómitos repetidos. tración de este gas y la evolución del proceso.
• Adinamia e hipotonía.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
• Apneas.
• Convulsiones. Muchas veces se comienza el tratamiento como el
de una afección muy grave, pues por el cuadro no se
Cualquiera de estas manifestaciones: convulsión o puede diferenciar, inicialmente. entre una neumonía, una
meningitis o una septicemia. Cuando existen manifesta-
también 2 o más de estos síntomas y signos, nos harán
ciones respiratorias y según la edad del paciente se ten-
sospechar un proceso muy grave; se debe enviar al
drá que hacer el diagnóstico del síndrome de dificultad
niño a un centro de salud para su ingreso, ya que no es
respiratoria “idiopática”, taquipnea transitoria del RN,
posible diagnosticar neumonía, meningitis, septicemia u
aspiración meconial, hipoplasia pulmonar, edema
otra afección grave sin exámenes complementarios.
pulmonar, hemorragia intracraneal, displasia
En el aparato respiratorio se debe observar si existe:
broncopulmonar, cardiopatías congénitas u otras entida-
• Tos o esta puede ser débil o nula. des del recién nacido.
• Polipnea, con tiraje manifiesto o sin él. Estos signos
pueden estar no definidos o ausentes. TRATAMIENTO

• Sibilancias o estertores húmedos (subcrepitantes fi- Como en toda infección aguda respiratoria, tendre-
nos o crepitantes), pero pueden no auscultarse e in- mos en cuenta: medidas generales, locales, específicas
cluso el murmullo vesicular puede no estar alterado. e innecesarias o perjudiciales. Debemos aclarar princi-
• Estridor. palmente 5 aspectos:
• Quejido espiratorio o “grunt”. • Antibióticos. Es una medida fundamental. Se reco-
mienda comenzar con una penicilina i.v.
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
(bencilpenicilina o amoxicilina) asociada a un
Radiografía de tórax. Puede simular un síndro- aminoglucósido i.v. (gentamicina o amikacina). (Ver
me “de dificultad respiratoria idiopática” (o “síndrome Tratamiento de las IRA no complicadas.)

906 Tomo III


Si es producida por chlamydias o Ureaplasma que debe y puede realizarse hasta donde sea posible,
urealyticum se utiliza un macrólido. como lo han demostrado la Organización Mundial de la
• Oxígeno. Es muy importante su administración y se Salud (OMS) y otras instituciones de esta como la OPS,
debe tener en cuenta en los primeros días, la con- las autoridades gubernamentales y grupos u organiza-
centración de oxígeno arterial en prematuros. Se ad- ciones no gubernamentales.
ministrará por cánula en tenedor (“prongs”) o cateter El tratamiento preventivo depende de cada país y
nasal en flujo de 0,5 a 1 L/min según necesidades o hasta de distintas zonas del mismo país y constituye un
en cámaras de cabeza (“Hood”) con flujo de 2 a 4 L/min reto para el siglo XXI.
según necesidades. No se recomiendan las tiendas
de oxígeno. Inmunizaciones
• Abrigo. Se tratará de mantener la temperatura axilar Existen inmunizaciones contra infecciones que
del niño en más o menos 36,5 °C y su medio ambiente pueden producir IRA o que producen complicaciones
en más o menos 25,5 °C. Esto se logra abrigando al que se manifiestan por cuadros respiratorios o favore-
cen las IRA.
niño con mantas sobre el cuerpo y gorros en la cabe-
El esquema de inmunización del MINSAP, Cuba,
za, con aplicación de lámparas eléctricas o mejor en consta, entre otras inmunizaciones:
incubadoras. En países con dificultades, se puede uti- • BCG al nacer, que parece evitar la enfermedad
lizar para su traslado o en los centros hospitalarios, el tuberculosa si el contagio es ligero o evitar las com-
método del “bebé canguro”: el niño desnudo se pone plicaciones. La tuberculosis es una enfermedad so-
en contacto con la piel de la madre entre las mamas y cial por excelencia, de evolución crónica, pero puede
se cubre con mantas el cuerpo y con un gorro la cabe- comenzar como si fuera una IRA (una bronquitis o
za. No se recomienda el uso de botellas con agua una bronconeumonía).
caliente por el peligro de quemaduras. • La vacuna triple antibacteriana (DPT). Uno de sus
• Dieta. Si es posible, el niño continuará con la lactan- componentes (vacuna antitosferinosa) puede evitar
cia materna (Ver “Dieta” en Tratamiento de las en muchos niños la tos ferina o sus complicaciones,
IRA no complicadas.) Si hay dificultades por que se inicia simulando una IRA (período catarral) o
polipnea u otra causa, la madre se extraerá la leche puede producir complicaciones como bronconeu-
por el método manual y se le administra al niño por monía que muchas veces es grave y hasta mortal,
el personal médico por sonda nasogástrica y cuando sobre todo, en lactantes. Otro componente, el toxoide
mejore por cucharita. Si se encuentra con lactancia diftérico, ha contribuido a erradicar dicha infección
no materna, se utiliza la fórmula indicada por sonda en nuestro país.
nasogástrica o cucharita por un personal adecuado. • La vacuna conjugada antimeningocócica B y C. Evita
la posibilidad de presentar faringitis por
Se comienza por cantidades menores, según edad y
N.meningitides y, en un alto porcentaje de pacien-
peso, y se aumenta después según evolución.
tes, la meningitis o la forma sistémica.
• Fiebre. Se utilizan medidas físicas, pues en el RN los
• La vacuna triple viral (SPR) evita la rubeola que
medicamentos antitérmicos son mal tolerados y has-
presenta un cuadro “catarral”, evita el sarampión que
ta están contraindicados por muchos autores.
comienza con un cuadro oculonaso faríngeo y
traqueal, pero, además, se puede complicar con crup
TRATAMIENTO DE LAS INFECCIONES bacteriano severo o bronconeumonías, que presen-
RESPIRATORIAS AGUDAS tan una alta mortalidad en niños desnutridos en paí-
NO COMPLICADAS ses en desarrollo. En Cuba, desde hace varios años
se declaró por la OMS erradicado el sarampión ofi-
El tratamiento de las IRA se divide en: cialmente, como ya se hizo con el tétanos neonatal,
• Tratamiento preventivo la difteria y la poliomielitis, aunque continuamos con
• Tratamiento de las IRA no complicadas estas inmunizaciones correspondientes.
• Tratamiento de las complicaciones • La inmunización contra el Haemophilus
influenzae tipo b, que ha disminuido las epiglotitis
Tratamiento preventivo
y las bronconeumonías producidas por este tipo
Hasta hace algunos años existía un relativo pesi-
de bacterias. Hay que recordar que existen otros
mismo sobre este tipo de tratamiento. Hoy ya nadie duda
tipos de H. influenzae (tipificables no b y no

Parte XII. Aparato respiratorio 907


tipificables) que pueden producir infecciones respi- La utilización de antibióticos profilácticos en IRA
ratorias, pero parecen ser menos frecuentes y me- virales está totalmente injustificada y contraindicada,
nos graves en nuestro país, aunque hay que seguir pues no evita las infecciones bacterianas secundarias y
teniéndolas en cuenta. puede producir superinfecciones a bacterias resisten-
• La vacuna antitífica parece disminuir las complica- tes. Esta conducta debe ser combatida de una ma-
ciones. La fiebre tifoidea puede producir una nera enérgica.
faringoamigdalitis supurada, en sus comienzos que
TRATAMIENTO
puede confundir el diagnóstico.
Lo dividiremos en:
• La vacuna contra la hepatitis B, enfermedad que no
• Medidas generales.
produce IRA de por sí, pero influye sobre la nutri-
• Medidas locales.
ción, evita las lesiones hepáticas y su repercusión
• Medidas específicas.
sobre la nutrición, un factor de riesgo de las IRA.
• Medidas innecesarias o hasta perjudiciales.
• La vacuna contra la influenza. Se ha utilizado en el
personal en riesgo como ancianos y niños; también
Frente a un niño con IRA hay que tener en cuenta
se utiliza en personas de cualquier edad con afeccio-
una serie de factores como: el síndrome clínico que pre-
nes crónicas.
senta, la causa sospechada o demostrada por microbio-
• La vacuna antineumocócica polivalente conjugada de
logía, la edad del paciente, el tratamiento previo, el grado
7 serotipos, muy efectiva incluso en menores de 2
de severidad del cuadro, presencia de manifestaciones
años, evita neumonías por neumococos sensibles o
o no que nos hagan sospechar un proceso muy grave
resistentes y otitis media.
(como rechazo o poca ingestión de líquidos, vómitos per-
• Hoy se están desarrollando o están en pruebas clíni-
sistentes, disminución de la diuresis, alteraciones del sen-
cas, vacunas contra virus sincicial respiratorio o con-
sorio sobre todo obnubilación con respuesta pobre a los
tra otros microorganismos, pero que tienen el
estímulos dolorosos, convulsiones y algunos más ya des-
inconveniente de su costo.
critos anteriormente en el capítulo IRA), si presenta com-
Evitar, suprimir o atenuar factores de riesgo plicaciones o no, los conocimientos y habilidades del
personal de salud con que contamos y del personal no
de las infecciones respiratorias agudas
médico (en particular los familiares) y las facilidades dis-
Esto constituye en el momento actual, junto con las ponibles para el tratamiento.
inmunizaciones que tenemos o próximas a tener, las ba- Medidas generales. Aplicables a cualquier cua-
ses fundamentales de la prevención de las IRA. Estos dro de IRA, alta o baja. Comprenden:
factores de riesgo por su importancia se encuentran apar- • Reposo y aislamiento.
te al que remitimos al lector. • Dieta y líquidos.
• Antitérmicos.
Administración profiláctica de medicamentos • Control de la tos (excepcional).
Es de los tres aspectos de la prevención de las IRA • Educación, control de la ansiedad e intercambio de
el más discutido, pero existen algunos ejemplos (pocos opiniones con los familiares.
en las IRA) de administración profiláctica de medica- • Otras medidas generales.
mentos aceptados, como es la administración de penici-
lina o sulfamidados para prevenir las infecciones por Reposo y aislamiento. El reposo será relativo y
EBHGA en niños que han presentado fiebre reumática, de acuerdo con la vitalidad y estado del niño. No tendrá
o administrar penicilina o macrólidos (en alérgicos a las que ser obligatoriamente en la cama, pudiendo estar sen-
penicilinas) en niños con antecedentes familiares de fie- tado jugando, leyendo, dibujando, coloreando, viendo te-
bre reumática y que están en contacto con pacientes levisión, etc. El aislamiento será en una habitación o en
que presentan una infección por estos estreptococos, o la casa del niño y durará teóricamente hasta algunos
en niños sanos que están en grupos en que se presenta días después de la desaparición del cuadro clínico, aun-
un brote de FAE. que esto varía según las facilidades familiares y el sín-
Siempre que se utilice un antibiótico profiláctico se drome de IRA que presente el paciente o su tratamiento.
debe tener en cuenta la relación beneficio/costo/efec- En la práctica en muchos niños con IRA, principalmente
tos adversos o colaterales, y la aparición de cepas de altas, no se cumple o se realiza inadecuadamente. El
microorganismos resistentes al antibiótico utilizado, pro- aislamiento tiene por finalidad evitar la transmisión del
blema médico mundial en aumento. proceso a otros niños; esto en realidad varía, pues en

908 Tomo III


muchos enfermos con IRA, por virus sobre todo, co- los familiares, sobre todo de la madre; es ideal ofrecer
mienzan a ser contagiosos horas antes que aparezcan los alimentos 5 veces al día, aunque sea en menores
las manifestaciones clínicas. cantidades y estimulando al niño, para lo cual al presen-
Dieta y líquidos. Son medidas muy importantes tarle los alimentos debe ser cargado, no tener apuro en
que a veces no se tienen en cuenta. Un niño con IRA su administración, entretenerlo con relatos o libros. Cuan-
debe recibir los alimentos habituales si así lo desea; no do hay dificultades nasales o respiratorias bajas que in-
deben suprimirse. Cualquier infección, respiratoria o no, terfieren con la lactancia materna, se enseñará a la madre
puede producir anorexia en el niño, sobre todo si se acom- a extraerse la leche del pecho por la técnica manual,
paña de fiebre, molestias o dolor faríngeo, odinofagia, depositándola en un jarro o vaso bien limpio y adminis-
trarse con cuidado con una cucharita. Cuando hay difi-
nariz tupida (tapada) o malestar general que le haga re-
cultad respiratoria moderada o intensa se administrará
chazar los alimentos. Si es un niño inapetente cuando
la leche materna por sonda nasogástrica (hospitalizados).
estaba sano, la anorexia será mayor. La polipnea y el Es importante la administración de líquidos (agua,
tiraje pueden dificultar la ingestión de alimentos y hasta jugos de fruta, leche sola o en batidos, yogourt y compotas
ser un riesgo de aspiraciones en niños pequeños. con agua en forma de jugos). Los refrescos no son re-
Hay poca información científica de cómo estimu- comendables, pues si bien aportan líquido no tienen ca-
lar el apetito; las vitaminas carecen de valor y el dismi- lorías suficientes ni nutrientes.
nuir la fiebre con paracetamol no ha probado que estimule En pacientes severos se administrarán los alimen-
el apetito, aunque disminuye el malestar general. La tos líquidos por sonda nasogástrica (hospitalizados) o si
obstrucción nasal, sobre todo en niños pequeños, dismi- la dificultad respiratoria es moderada, y para evitar aspi-
nuye o dificulta la ingestión de alimentos, por lo que ha- raciones, se les ofrecerá con cucharita y con mucho
brá que tomar medidas contra ella sobre todo si la cuidado por el personal de enfermería, auxiliar o por un
secreción es espesa. familiar entrenado.
Hay que insistir con la familia que se ofrezcan ali- Excepcionalmente, en IRA bajas graves se utiliza-
mentos quizás disminuyendo la cantidad, pero acercan- rá la hidratación intravenosa en el hospital (tos repetitiva,
dificultad respiratoria marcada o severa, vómitos a re-
do el tiempo de ofrecerlos, respetando el sueño y nunca
petición o colapso) en cantidades de 1 500 mL de solu-
obligando al niño a ingerirlos. En niños con lactancia
ción de dextrosa al 5 % por metro cuadrado (m2) de
materna exclusiva se deben aumentar el número de las superficie corporal por 24 h, agregándole 30 a 50 mEq/m2
tetadas, sobre todo en la noche. de cloro y de sodio y 60 mEq/m2 de potasio en 24 h, por
Los alimentos que se pueden ofrecer serán ricos goteo contínuo mediante venoclisis, el menor tiempo po-
en calorías como cereales, harina de maíz, arroz, pan, sible y se pasará después a la vía bucal. Si junto con la
galletas y tubérculos (papa, malanga, boniato, yuca bien venoclisis hay ingestión de líquidos, se restará esta can-
cocida) a los cuales se les agregará grasas o azúcares, tidad al volumen que se está administrando por vía
aceites vegetales, margarina, mantequilla o miel. Se pre- intravenosa (i.v.), para evitar el edema pulmonar no
sentarán en forma de purés, potajes, arepas o gachas. cardiogénico, sobre todo en bronconeumonías o
Las sopas o caldos no son tan recomendables. Se agre- bronquiolitis en niños pequeños.
gará leche o derivados (mantequilla, queso derretido) a Con frecuencia, en la convalecencia de las IRA
los purés y potajes. A las arepas o gachas de harina (de hay un aumento del apetito durante 1 a 2 semanas que
maíz por ejemplo) se le agregará azúcar, mantequilla, siguen al proceso y que se debe aprovechar para admi-
nistrar mayor cantidad de alimentos y agregarle más
margarina o miel.
proteínas: frijoles (muy recomendado por la OPS), pes-
A todas las comidas se podrá añadir alimentos de
cado, huevos o carnes rojas, según las facilidades, el
origen animal según posibilidades (huevo, pescado o car-
gusto, o deseos del niño, sin obligarlo. Se aconsejará a
nes rojas bien picadas) y vegetales (zanahorias, habi-
la madre sobre la dieta normal para el futuro.
chuelas, tomates, espinaca o acelga).
Se ha comprobado que la mayoría de las IRA se
A veces el niño solo querrá un tipo de alimento como acompañan de una detención o pérdida de peso y que
galleticas, dulces o panetelas, que se les ofrecerán como aunque se aumenten los nutrientes, no se evitará, duran-
meriendas (con miel, mantequilla o huevos). Se debe res- te pocos días, un balance nutricional negativo. Una dieta
petar el gusto del niño y tener en cuenta las facilidades adecuada en esos días evitará una pérdida mayor de
de adquisición de alimentos por los familiares. peso y favorecerá la reiniciación de una dieta reforzada
La preparación de las comidas en un niño enfermo en la convalecencia, con un restablecimiento nutricional
e inapetente pone a prueba la inventiva y la paciencia de más rápido.

Parte XII. Aparato respiratorio 909


Antitérmicos. Se ha demostrado que una tempe- severos, que pueden presentar una infección severa
ratura axilar de hasta 38,5 ó 39,5 estimula el mecanis- sin fiebre.
mo mucociliar y otras funciones de defensa del Desgraciadamente, en nuestro país hay una gran
organismo: aumenta la quimiotaxis, la actividad ansiedad cuando la temperatura axilar sobrepasa los
metabólica oxidativa, la proliferación de los linfocitos B 38 °C, por lo que se debe realizar la educación de los
y la producción de inmunoglobulinas, estimula los linfocitos padres sobre la posibilidad de no comenzar el tratamien-
to antitérmico hasta que la temperatura alcance 38,5°C
T y la proliferación de los LT “helpers” o “auxiliadores”,
y de ser posible 39 °C. La fiebre es un síndrome que
aumenta las “killer cells” o “células asesinas” y la pro-
frecuentemente forma parte de las IRA, aunque fiebre
ducción de interferón. Una fiebre de esta magnitud es
no es sinónimo de IRA, ni de uso de antibacterianos en
beneficiosa al organismo.
ellas.
Por todo lo anterior, la mayoría de los autores re-
Las medidas antitérmicas se dividen en medica-
comiendan no usar antitérmicos hasta que la temperatu- mentosas y físicas:
ra axilar no sobrepase los 39 °C, excepto en niños con • Medidas medicamentosas. Se utilizarán principalmen-
antecedentes personales o familiares de convulsiones te el ácido acetil- salicílico (no en infecciones por
desencadenadas por fiebre, con afecciones neurológicas, influenza por la posibilidad, en niños de un síndrome
los hipóxicos (pues aumentan las necesidades de oxíge- de Reye), paracetamol, ibuprofeno o la dipirona (Cua-
no del organismo con la fiebre) y en los desnutridos dro 69.10).

Cuadro 69.10. Antitérmicos más utilizados en Cuba

Nombre Dosis (d.) Vía Dosis (d.) máxima Efectos adversos

Ácido acetil salicílico, 10-15 mg/kg/d. Bucal (B) 65 mg/kg/24 h - No con influenza
aas o Aspirina® cada 6 h Rectal(R) Adultos 350 a - No con varicelas
500 mg/dosis - No con dengue
- Intoxicación salicílica

Paracetamol 10-15 mg/kg/d. B 75 mg/kg/24 h - Hepatotoxicidad


c/ 6 h (máx. R Adultos:500mg/d. - Los mismos de todos los
AINE
5 dosis/24 h) 4d/24 h

Ibuprofeno 5-10 mg/kg/d. B 40 mg/kg/24 h Los mismos de todos los AINE,


4 veces/24 h R s/t gastritis.

Dipirona 10-15 mg/kg/d. B 330 mg/d. - Medulotoxicidad


4 veces/ 24 h - No se debe usar
por la vía i.m. de rutina, solo
< 1ª: 125 mg/d. i.m. en pacientes muy excepcio-
< 4ª: 250 mg/d. nales
+ 5ª: 500 mg/d. - Prohibido en algunos países.
(cada 6 h). La experiencia en Cuba no es
tan desfavorable
(Medulotoxicidad
Supositorios R Después de los rara en Cuba)
infantiles: 5 años efectos - Puede tardar en actuar hasta
<1ª:medio sup. variables según 2 h o algo más.
c/6 h (cortado el paciente
longitudinal)
1-4ª:1sup. c/6h

Indometacina| 1- 2 mg/kg/d. B No pasar dosis - Hepatotoxicidad (en Artritis


2 dosis en 24 h. R adulto: 250 mg Reumat. Juvenil)
(cada12 h c/u) en 24 h - Hipertensión
- Medulotoxicidad
- Gastritis

Piroxican 5-10 mg/24 h B No pasar dosis de adulto: - No asociarlo a AAS


en 1 ó 2 dosis 20mg/24 h - Todos los de AINE
(cada12 h c/u) - Muchos no lo recomiendan en
niños

910 Tomo III


• Medidas físicas: (1 cucharadita rasa de sal común en 500 mL de agua
− Ofrecer más líquidos por boca al niño. hervida) y que se utilizarán varias veces al día, en niños
− Mantener al niño en un lugar fresco (no frío) con mayores.
una buena circulación de aire. Algunos autores re- Educación y control de la ansiedad familiar.
comiendan colocarlo frente a un ventilador en tiem- Aunque aparece al final de las medidas generales, es en
po cálido. realidad, una de las medidas fundamentales que hay
− Balneaciones. Hay muchas discusiones al respec- que tener en cuenta en las IRA, altas o bajas. Edu-
to. La mayoría establece que su efecto es dudoso car a las madres y otros familiares de un niño con IRA
y que si se aplican a todo el cuerpo, el agua debe sobre la afección que padece, es posiblemente una de
estar tibia o fresca (nunca fría), sin frotar la piel y las medidas fundamentales en el tratamiento. De acuerdo
dejar que se seque al aire de la habitación, en es- con el síndrome que presente el niño, se educará al fa-
pera a que actúen los antitérmicos. miliar de diversas formas y se tendrá en cuenta el grado
− El niño no debe estar abrigado. de ansiedad de aquellos. Se hablará en forma sencilla,
− Los enemas fríos están contraindicados y pue- con palabras que se entiendan, evitando el uso de térmi-
den ser peligrosos. nos científicos que puedan ser mal entendidos o inter-
− No se debe adicionar alcohol para facilitar la eva- pretados erróneamente por la familia.
poración del agua (por el peligro de intoxicación
Un aspecto muy importante es comunicar a los
alcohólica).
familiares cuáles son los síntomas y signos indicadores
− Los paños húmedos en la frente, la nuca o axilas
de aumento en la severidad del cuadro o de una compli-
tienen un valor muy dudoso para disminuir la tem-
cación, como: aumento de la polipnea y el tiraje, vómitos
peratura central del cuerpo.
a repetición, obnubilación o irritabilidad progresiva, in-
− La introducción en una bañadera o una ducha con
capacidad de tomar el pecho o de ingerir líquidos y ali-
agua fresca o ligeramente tibia cuando la fiebre es
mentos, o convulsiones.
muy alta, es recomendada por algunos y rechaza-
La aparición o aumento del estridor, la ronquera, la
da por otros.
polipnea y el tiraje que aumentan, la irritabilidad u obnu-
bilación, deben ser explicados a la madre u otro familiar
En los menores de dos meses de edad, la fiebre
como manifestación de empeoramiento de un síndrome
puede ser señal de una infección bacteriana severa, por
crupal.
lo que debe enviarse al hospital para ser investigado.
Otro signo es el aumento de la frecuencia respira-
Además, los antitérmicos son mal tolerados en los dos
toria (FR). Se enseñará a los padres a determinarla du-
primeros meses de vida y pueden tener respuestas ad-
rante un minuto y se repetirá, después, a los 1 a 2 min,
versas.
estando el niño tranquilo, preferentemente dormido, y
Control de la tos (excepcional). Nunca se de-
que variará de acuerdo con la edad. Se considerará
ben utilizar antitusígenos, ni medicamentos que los con- aumento de la frecuencia respiratoria (FR) y que nor-
tengan, en niños pequeños con IRA. Raramente se malmente varía según la edad.
utilizarán en pacientes mayores de 5 años, solo cuando
la tos sea seca, rebelde, que impida el sueño, y por Una FR estará alterada, según la edad:
el menor tiempo posible: codeína 0,25 mg/kg/dosis (dosis
máxima 20 mg), c/8 h. Hay que recordar que existen Edad Respiraciones por minuto
preparados comerciales que contienen medicamentos
que no producen beneficio y que hasta pueden ser muy < 3 meses 60 o más
perjudiciales. La difenhidramina carece de utilidad con- 3 a 12 meses 50 o más
tra la tos en niños con IRA. No se usarán antitusígenos 1 a 4 años 40 o más
con tos húmeda. Algunos recomiendan cuando la tos es 5 a 9 años 30 o más
seca la aplicación de paños tibios sobre la parte anterior 10 años o más 20 o más
y superior del tórax. En ocasiones en que la tos es por
irritación faríngea, se puede utilizar limonada, agua con La presencia de las manifestaciones anteriormen-
miel o cualquier infusión tibia de uso popular no te citadas indicará a la madre o familiar que debe llevar
medicamentosa (manzanilla). No se debe utilizar infu- al niño de nuevo a una consulta médica (consultorio del
sión de hojas de té en niños pequeños por el peligro de médico de la familia, policlínico o cuerpo de guardia del
excitabilidad y hasta convulsiones. Hay quienes reco- hospital), de preferencia en donde fue consultado ante-
miendan gargarismos tibios de solución salina al 0,9 % riormente.

Parte XII. Aparato respiratorio 911


Además de los síntomas y signos anteriores, si hay necesita hacerla más fluida con el uso de gotas o atmós-
alguna otra manifestación que le haga sospechar que el fera húmeda. En lactantes y niños menores de 5 años
niño no está bien o que el proceso empeora, deberá de se utilizará solución de cloruro de sodio al 0,9 % (una
nuevo llevarlo al médico. cucharadita rasa de sal común en medio litro de agua
Un problema en nuestro país, como en otros, es hervida). Una vez fresca, de esta solución se tomará
que muchas madres o familiares buscan un medicamen- una cantidad en un frasco pequeño y limpio previamente
to (“jarabe para el catarro”, antibióticos u otros prepara- sometido a agua en ebullición.
dos) para “curar” rápidamente al paciente. Se deberá También se podrá utilizar el llamado suero
hacer las aclaraciones pertinentes al respecto. La me- clorobicarbonatado según la fórmula:
jor manera de tranquilizar a la madre o a los familiares,
es que encuentren un personal médico que escuche, Cloruro de sodio 0,20 g
examine bien, explique lo que tiene el paciente, le aclare Bicarbonato de sodio 0,10 g
dudas, le indique los síntomas y signos que deben vigilar Agua destilada estéril 20 mL
y que lo cite para otra consulta pasado el tiempo que él
estime conveniente. Se instilará desde un cuarto a medio gotero de al-
Otras medidas generales. Al comienzo de las guna de estas dos soluciones en cada orificio nasal, con
IRA pueden existir vómitos que se tratarán con sales de el niño acostado en decúbito supino y el cuello en
rehidratación oral o cocimientos de manzanilla con azú-
hiperextensión y se dejará en esta posición unos segun-
car. Cuando los vómitos persisten, se indicará reposo
dos para fluidificar las secreciones, después se volverá
gástrico por 4 h y se podrá administrar metoclopramida
por vía intramuscular (i.m.) o bucal, 0,2 mg/kg/dosis (dosis a instilar, en cada ventana nasal, una cantidad igual. Se
máxima 10 mg/dosis), vigilando efectos colaterales, o utilizará el mismo procedimiento en la otra ventana na-
dimenhidrinato:1 a 2 mg/kg/dosis. i.m. (dosis máxima sal. Se repetirá de 4 a 6 veces al día, como máximo, de
25 a 50 mg/dosis, según edad). preferencia antes de la alimentación o por la noche, se-
Pueden existir diarreas al comienzo de las IRA que gún sea necesario, y no más de 5 días (peligro de rinitis
se tratarán con sales de rehidratación oral según la dilu- irritativa o de infección bacteriana secundaria). Después
ción habitual y sin que se usen medicamentos de 5 días, la solución se desechará, pues posiblemente
antidiarreicos. Habitualmente los vómitos y/o las diarreas esté contaminada. El frasco pequeño se hierve, se lim-
que se presentan al comienzo de las IRA son transito- pia el gotero con agua hervida caliente y se guardan
rios y no necesitan tratamiento. Se debe recordar que tapado para otra ocasión. NO se utilizarán gotas nasales
en niños pequeños los vómitos repetidos pueden ser una con descongestionantes (efedrina al 1 % por ejemplo) ni
manifestación de un proceso muy grave. argirol, antibióticos, soluciones antisépticas, antihista-
En las IRA puede existir irritabilidad por dolor mínicos o esteroides.
faríngeo, malestar y en los casos graves, como Una medida recomendada por muchos es enseñar
bronconeumonías o crup, ser una señal de hipoxia. Los a las madres a fluidificar las secreciones nasales con un
sedantes siempre están contraindicados. Las molestias paño o pañuelo limpio y suave, retorcido en forma de
en la garganta o la odinofagia intensas se podrán tratar
mecha, que debe ser humedecido en la solución salina al
con los mismos medicamentos que se expusieron en
0,9 % o en la fórmula clorobicarbonatada. Este paño o
medidas antitérmicas (Cuadro 69.9).
Medidas locales. Dependerán del síndrome que pañuelo retorcido en forma de mecha se introducirá por
presenta el niño con IRA. Comprenden: la ventana nasal, donde se dejará varios segundos. Des-
• Contra la secreción y/o la obstrucción nasal (en cual- pués se utilizará igual en la otra ventana nasal. Este
quier IRA según las necesidades). procedimiento se utilizará 3 ó 4 veces al día y por pocos
• Humedificación ambiental (en todas las IRA, sobre días. No utilizar gasas o algodón.
todo en crup o en bronquitis). Otros recomiendan colocar al niño, cargado en el
• Control de la temperatura ambiental (cualquier IRA). regazo de la madre, durante 10 a 15 min, varias veces al
• Vía aérea artificial precoz (en los crups). día, frente a una atmósfera húmeda fresca (por medio
• Atmósfera húmeda (crup y bronquitis). de aparatos nebulizadores) o caliente (a partir de una
• Esteroides (sobre todo en crups virales). fuente de calor), pero evitando que el niño esté cerca de
• Oxigenoterapia (neumonías o bronquiolitis). esta. Colocar al niño muy cerca de un recipiente con
agua hirviendo, aun en brazos de la madre es un gran
Contra la secreción u obstrucción nasal. Aun- peligro (caídas y quemaduras o lesiones faciales) Cuando
que el empleo de gotas nasales ha sido objeto de contro- el niño duerme, se podrá utilizar el mismo procedimiento
versias, en ocasiones, la secreción es tan espesa que se varias veces en la noche, durante 10 ó 15 min.

912 Tomo III


Nunca se agregarán a los líquidos para vaporizar Se utilizará inicialmente la intubación orotraqueal,
distintas sustancias como mentol, eucalipto, etc., de efec- sustituida con posterioridad por la nasotraqueal. En ma-
tividad no comprobada y que pueden ser perjudiciales. nos de un personal calificado, constituye una medida
Están contraindicadas las aspiraciones de médica segura. De no contar con esto, se utilizará una
secreciones por medio de aparatos creados al efecto o traqueostomía, que necesita un personal más entrenado
aspiradoras y sondas, tanto en la casa como en los ser- y tiene más dificultades y peligros.
vicios hospitalarios (peligro de traumatismos en la mu- Se establece por algunos que cuando no se tenga a
cosa nasal, infección bacteriana o excoriaciones mano el personal para estos procederes, en casos de
intranasales o de las ventanas nasales). urgencia, se puncionará la pared anterior de la tráquea,
En niños mayores se podrá utilizar inicialmente la por debajo del primer anillo traqueal, con la aguja más
solución salina al 0,9 % o la clorobicarbonatada con la gruesa que se tenga a mano y se administrará oxígeno
misma técnica y cuidados (posición, poco tiempo de uso, humedificado a través de ella, hasta que se pueda reali-
cuando sean necesarias, etc) seguida de efedrina al 1 % zar la intubación o traqueostomía en un hospital. Se debe
o no o neosinefrina al 0,25 % (4 a 5 gotas en cada ven- evitar la obstrucción de la aguja por las secreciones.
tana nasal). Se insiste que el contenido de los frascos En la bronquiolitis, la indicación de crear una vía
sea desechado después de 5 días de uso y nunca utilizar aérea artificial para disminuir el espacio muerto y mejo-
otros medicamentos. rar la oxigenación del paciente, hoy ha perdido muchos
En niños que cooperen, una buena técnica consis- adeptos y se puede considerar como una medida excep-
tirá en que el niño de pie e inclinado hacia delante, espire cional, solo utilizada en pacientes muy graves que deben
bruscamente por la ventana nasal de un lado, presionan- ser intubados y ventilados. Lo mismo se puede decir
do con un dedo la otra ventana nasal para expulsar las sobre la intubación en pacientes con neumonías o
secreciones, que pudieran ser fluidificadas previamente bronconeumonías que se realizará, de manera excep-
con solución salina al 0,9 % o clorobicarbonatado, instilada cional, con las nuevas técnicas de ventilación, diferentes
según la técnica antes explicada. Nunca se utilizará un a las utilizadas habitualmente años atrás y siempre en
pañuelo de tela dura, ni se exhalará comprimiendo a la los servicios de UCI.
vez ambas ventanas nasales, pues favorece el pase de Las indicaciones de una vía aérea artificial en los
secreciones a las trompas de Eustaquio, obstruyéndolas pacientes con crup dependerán del estado en que lle-
y produciendo otitis media. guen estos a nosotros o según la evolución clínica. Un
Humedificación ambiental. Es conveniente que aumento progresivo del estridor, del tiraje, de las fre-
en una IRA, sobre todo alta, el ambiente tenga una hu- cuencias respiratoria y cardíaca, con irritabilidad pro-
medad relativa elevada. Se podrá utilizar agua hirvien- gresiva, o sobre todo obnubilación, seguida de depresión
do, de manera constante, en una esquina de la habitación sensorial con pobre respuesta a los estímulos doloro-
o humedificadores mecánicos o equipos caseros. Si no sos, son indicaciones de crear una vía aérea artificial.
se tienen estos medios se colgarán paños húmedos por Nunca se esperará a la aparición de cianosis, ni insufi-
toda la habitación, que se volverán a humedecer cuan- ciencia cardíaca o midriasis. El babeo intenso con otros
tas veces sean necesarias. signos en un crup, será indicación de crear una vía aé-
Control de la temperatura ambiental y rea artificial.
arropamiento del niño. Se evitará tanto el arropamiento El traslado de un niño para crear una vía aérea
excesivo del niño, como el enfriamiento de la habita- artificial se realizará lo más rápido posible, cargado en
ción, cuya temperatura ambiental ideal será alrededor brazos de la madre o sobre su regazo, el niño en posición
de 25,5 0C. En nuestro país, de clima cálido la mayor erecta, nunca acostado, con el cuello del paciente en
parte del año, debe evitarse cerrar las habitaciones de hiperextensión. Se hará acompañado de un personal
un niño con IRA. médico o paramédico adecuado y se utilizará oxígeno
Vía aérea artificial. La creación de una vía aé- humedecido si hay facilidades y el niño lo tolera y no se
rea artificial precoz en pacientes con crup (en epiglotitis irrita. También se utilizará oxígeno en los servicios de
sobre todo, aunque puede tenerse que realizar en otros urgencia o en las salas cuando se plantee realizar una
crups severos), puede ser una decisión vital. Sobre todo vía aérea artificial, hasta que llegue el personal entrenado.
en la epiglotitis se tomará esta medida antes de utilizar Atmósfera húmeda en crups infecciosos. Uno
cualquier procedimiento diagnóstico o terapéutico pues de los aspectos más debatidos sobre el tratamiento de
estos pueden precipitar una parálisis cardiorrespiratoria los crups infecciosos ha sido la atmósfera húmeda, des-
con consecuencias mortales o secuelas neurológicas de que fue instituida en el siglo XIX en que se comenzó
permanentes. con las teteras de agua hirviendo, hasta la actualidad,

Parte XII. Aparato respiratorio 913


con el uso de equipos para producir atmósfera húmeda en pacientes ingresados con crups virales severos, pa-
caliente. El peligro de quemaduras y los beneficios del cientes con cuadros moderados (ingresados o no) y hay
aire frío nocturno, descrito por muchos autores, condu- quienes los recomiendan hasta en cuadros leves. Algu-
jeron a fabricar equipos para producir atmósfera húme- nos autores los recomiendan también en las laringitis
da fresca. espasmódicas y, con respecto a su uso en las epiglotitis
Se han propuesto varios mecanismos para plan- bacterianas (por Haemophilus influenzae tipo b), las
tear los beneficios de esta atmósfera húmeda: fluidifica opiniones no son tan unánimes como en los crups virales,
las secreciones; la humedad activa receptores mecáni- aunque muchos usan esteroides después de intubado el niño.
cos productores de reflejos que aumentan el flujo respi- En pacientes intubados por un cuadro severo, el
ratorio; la sensación de seguridad y comodidad que se uso de la prednisona bucal o por catéter nasogástrico o
prednisolona bucal, i.m. o i.v., a dosis de 1 mg/kg/dosis,
producen en el niño cuando la madre lo carga y que
repetida cada 12 h y hasta 24 h después de extubados,
disminuye la ansiedad del paciente que favorece un au-
ha reducido el tiempo de intubación y las reintubaciones
mento en la severidad del crup. Hay posibles efectos
posteriores.
colaterales de la humedad y el aire frío, como la produc-
En pacientes ingresados con crups virales severos
ción de sibilancias, por lo que se debe estar atento a su o moderados, se recomienda, como esteroide de elec-
aparición de ellas (en niños hiperreactores bronquiales) ción, la dexametasona a la dosis de 0,3 a 0,6 mg/kg por
para administrar broncodilatadores de acción corta. En vía bucal, nasogástrica o parenteral y se puede repetir
pacientes asmáticos, cuando se administra atmósfera cada 12 h o antes cuando los síntomas son severos (c/6 h y
húmeda y después de terminado todo el tratamiento, se después c/12 h) y por 3 a 4 días como máximo y según
debe de ventilar la habitación, pues en un asmático se la evolución.
prefiere la habitación seca. En pacientes con crups virales moderados los
Las tiendas plásticas con que vienen muchos equi- esteroides se pueden utilizar en los servicios de urgencia
pos apartan al niño de los padres lo que produce más y continuar el tratamiento en la casa, después de haber
ansiedad en aquel y puede aumentar la dificultad res- sido observados por 4 h y el paciente no presentar estridor
piratoria; el equipo médico puede perder la observa- en reposo, con murmullo vesicular normal y una con-
ción del paciente dentro de una niebla producida por la ciencia adecuada, además de haber recibido, más de 2 h
atmósfera húmeda y con ello los signos de deterioro antes, una dosis de esteroides.
del niño. En los crups virales, también ha resultado efectiva,
Por todo lo anterior, persisten las discusiones sobre en pacientes ligeros o moderados no ingresados, la
el uso de la atmósfera húmeda, aunque la mayoría están dexametasona en dosis única de 0,3 a 0,6 mg/kg por vía
de acuerdo con sus ventajas (pero se deben suprimir las bucal o parenteral, aunque hay quien también la reco-
llamadas tiendas de crup). mienda en crups ligeros a la dosis de 0,15 mg/kg.
Otra variante sería, en un baño cerrado, se produ- En lugar de esteroides bucales o parenterales se
cirá una atmósfera húmeda (visible por un espejo al ha utilizado en pacientes ingresados, moderados o seve-
empañarse) proveniente de una ducha o llave de agua ros, la budesonida por nebulizaciones a dosis de 2 mg
caliente. El niño, cargado por un adulto, se situará den- inicialmente, seguida de 1 mg cada 12 h por 2 a 4 días; o
en su lugar, dexametasona 10 a 20 mg por la misma vía.
tro del baño por 5 a 10 min, varias veces en 24 h.
Se ha planteado que el uso por vía bucal de dexametasona
Lo ideal sería colocar al paciente, junto a equipos
tiene los mismos efectos que la budesonida nebulizada,
mecánicos que produzcan una fuente de aire húmedo y
lo que habrá que tener en cuenta desde el punto de vista
fresco, que por medio de tubos le haga llegar este flujo a económico o de facilidades. En general, la utilización de
la cara. Se administrará dicho procedimiento durante esteroides nebulizados no ha logrado superar el uso de
10 a 20 min, varias veces en 24 h, sobre todo durante la esteroides bucales.
noche. Los esteroides no deben ser administrados en ni-
Esteroides en crups virales. El uso de esteroides ños con varicelas o contacto con ellas 3 a 4 semanas
en los crups virales o subglóticos (L, LT, o LTB), por vía antes, o con tuberculosis que no están recibiendo trata-
bucal o parenteral, muy discutido durante años, parece miento antituberculoso. El uso de esteroides puede en-
haber sido aceptado como una medida casi específica mascarar una afección de base que pudiera manifestarse
en los últimos años, sobre todo a partir de 1998. Existe como crup, posibilidad remota pero descrita.
hoy una amplia bibliografía sobre la utilidad de su uso Como resumen de este epígrafe se pudiera utilizar
con una mejoría clínica después de 4 a 6 h de utilizados, el tratamiento de Kaditis y Wald, modificado, según la
aunque hay muchos pacientes descritos que han mejo- clasificación de la intensidad del crup descrita en las
rado después de 2 a 3 h de haberlos recibido. Se utilizan manifestaciones clínicas de crup (Cuadro 69.11).

914 Tomo III


Cuadro 69. 11. Tratamiento, según la severidad del crup viral

Severidad del crup viral Tratamiento

• Crup ligero. Estridor cuando el niño se irrita o llora, - Tratamiento en la casa:


o en reposo, pero sin otra alteración respiratoria. - Humedificación por 15 a 20 min
en un baño o una fuente de vapor o exponerlo al aire.
- Dexametasona por vía bucal 0,15mg/kg/dosis cada 6 a 12 h

• Crup moderado. Estridor en reposo, con tiraje intercostal - Epinefrina racémica, muy discutida.
o subcostal - Dexametasona 0,3 a 0,6 mg/kg/dosis por vía bucal y observa-
ción/
4 h en el departamento de urgencia y según evolución enviarlo
a su casa o ingresarlo siguiendo el tratamiento.
- Atmósfera húmeda

• Crup severo. Dificultad respiratoria severa, disminución del - Ingresarlo.


intercambio gaseoso, con alteraciones en la conciencia. - Epinefrina racémica, muy discutida
- Dexametasona: 0,5 mg/kg/dosis, cada 6 a 12 h según evolución.
- Intubación bajo condiciones controladas.
- Se ha utilizado, en lugar de dexametasona, prednisolona
1 mg/kg/dosis cada 6 h, por vía bucal o nasogástrica.

La utilización previa de epinefrina racémica se con- duración de cada nebulización (10 mL el total que se
sidera por algunos autores una medida fundamental den- puede administrar), por lo que el niño, muchas veces, se
tro del tratamiento de los crups virales junto con el uso intranquiliza y rechaza la nebulización. Habrá que tener
de esteroides. Este tipo de epinefrina (mezcla de en cuenta la irritación que se produce en las vías aéreas,
epinefrina D y L a partes iguales) se ha utilizado en va- aunque se haya diluido la epinefrina L. No recomen-
rios estudios a la dosis entre 0,25 y 0,75 mL (general- damos su utilización.
mente a la dosis de 0,5 mL), en una solución al 2,25 % Oxigenoterapia (sobre todo en neumonías y
administrándola con un ventilador a presión positiva in- bronquiolitis). Posiblemente las indicaciones de adminis-
termitente o con un nebulizador mecánico, en pacientes trar oxígeno constituyen uno de los problemas más de-
con crups moderados o severos, y su efecto dura alre- batidos en los últimos años. La opinión unánime es
dedor de 2 a 3 h. En los crups severos se utilizará en los que la oxigenoterapia se debe indicar en los pacientes
niños ingresados, preferiblemente en una UCI, pues pue- con hipoxia. Sin embargo, el problema surge cuando se
de haber reaparición de los síntomas después de la dis- estudia cómo diagnosticarla sobre la base de los sínto-
minución de la acción del medicamento (fenómeno de mas y signos, pues las publicaciones difieren en cuanto
rebote, negado a veces). a la relación hipoxia/manifestaciones clínicas. Además,
Para algunos autores, la disminución de la necesi- muchos de los trabajos publicados presentan una meto-
dad de crear una vía aérea artificial posterior al uso de dología con deficiencias u omisiones. Trataremos de
la epinefrina racémica se debe a que produce una mejo- exponer un consenso de la mayoría de las publicaciones
ría transitoria que permite que los esteroides utilizados revisadas. Como estableció Shann en 1993 “a un pa-
actúen; otros plantean que el crup presenta una evolu- ciente con una neumonía severa, que se muere por
ción natural hacia la resolución espontánea. Esta es la hipoxia, es lógico administrarle oxígeno para mantenerlo
explicación más divulgada actualmente y por eso consi- vivo hasta que las defensas del organismo y los
deramos que, en nuestro medio, por ahora, no es nece- antibacterianos tengan tiempo de destruir a los patógenos
sario su uso. De paso debemos llamar la atención que la causales”.
última explicación sería la misma del collarín lleno de Hay trabajos que parecen demostrar una definitiva
agua con alcohol o con alcohol solamente, o paños tibios elevación de la mortalidad en niños con neumonías se-
alrededor del cuello y que se describen como útiles en el gún el grado de hipoxia y que en niños que sobreviven
crup, por algunos autores. hay posibilidades de daño cerebral consecutivo a una
En lugares donde no hay epinefrina racémica, se- hipoxia prolongada. Sin embargo, la mortalidad por neu-
gún Waisman y cols, se puede utilizar epinefrina L monías depende, además de la saturación de oxígeno en
(levógira) a solución 1:1 000 en agua destilada. La dosis la sangre arterial, de la presencia de bacteriemia, el tipo
será de 5 mL diluida en igual cantidad solución salina (al de microorganismo, la edad del paciente y distintos facto-
0,9 %) para nebulización. Tiene el inconveniente de la res de riesgo. Todo esto explicaría en parte la dificultad

Parte XII. Aparato respiratorio 915


para considerar solamente la relación hipoxia/neumonía En un niño con neumonía o bronquiolitis, lo ideal
en la evolución y mortalidad por estas afecciones y el sería determinar periódicamente la saturación de oxíge-
papel favorable del oxígeno. no (Sat.O2) en sangre arterial, pero como esto no es
posible siempre en la práctica, nos tendremos que guiar
Indicaciones de la oxigenoterapia, en neumo- por los parámetros clínicos descritos antes.
En la oximetría de pulso, la Sat.O2 tiene, en la prác-
nías lobares, en neumonías a focos diseminados
tica, una utilidad aceptable si se tienen en cuenta facto-
(bronconeumonías) y en bronquiolitis. res que pueden darnos falsos resultados, como los que
• Cuando hay un abastecimiento de oxígeno normal o desvían hacia la izquierda la curva de disociación de la
abundante, las indicaciones son: oxihemoglobina (alcalosis, disminución de la temperatu-
− Cianosis central. Determinada por la observa- ra corporal, un aumento de la hemoglobina fetal que co-
ción del color de la lengua o al levantarla, a la luz mienza a disminuir después del nacimiento y que en los
natural o con una luz adecuada. Tiene poco va- primeros meses ha prácticamente desaparecido, y dis-
lor la observación de los labios y de los dedos, minución en la concentración en sangre del 2-3
pues estos pueden estar amoratados por frío, si difosfoglicerato) que producen disminución de la libera-
se hace la observación con luz fluorescente o en ción de oxígeno a los tejidos dando cifras falsas, norma-
algunas razas pigmentadas. Los niños con ane- les o poco disminuidas, de Sat.O2 .
mia severa e hipoxemia pueden presentar pali- Las anemias producen una Sat.O2 con valores fal-
samente más elevados. La fiebre es causante de hipoxia
dez en lugar de cianosis.
en pacientes con neumonías graves, pero el tratamiento
− Cuando hay una neumonía con frecuencia res-
será la administración de antitérmicos, con oxígeno o sin
piratoria aumentada francamente. Hay autores él. También para la determinación de la Sat.O2 habrá
que recomiendan utilizar oxígeno con una fre- que tener en cuenta falsos resultados por movimientos
cuencia respiratoria (FR) de 70 o más por minu- del dedo del niño en donde se aplica el oxímetro y la
to, aunque habrá que tener en cuenta que la FR pigmentación de la piel de algunas personas.
varía con la edad. Esta FR de 70 es válida en
niños de menos de 5 años de edad. En mayores • Cuando hay un abastecimiento de oxígeno dificulto-
de 5 años, 60 o más de FR puede ser una indica- so o no abundante, como en zonas apartadas de paí-
ción de oxígeno y hasta de 40 o más en adoles- ses en desarrollo, la oxigenoterapia tendrá que
centes. ahorrarse para las siguientes situaciones:
− Niño incapaz de tomar líquidos. Se entiende por − Pacientes con cianosis central.
incapaz un niño con neumonía y dificultad res- − Lactantes menores de dos meses con imposibili-
piratoria que no ingiera ningún o poco líquido. dad para ingerir líquidos.
− Neumonías muy graves, sobre todo en niños pe-
− Niño con tiraje bajo visible y mantenido, sin llan-
queños.
to. No solo tiraje intercostal o subcostal, sino que
• Otras indicaciones de la oxigenoterapia:
tiene más valor cuando la parte inferior de la − En el crup. Se recomienda que no se use rutina-
pared torácica se retrae en conjunto. riamente en crups infecciosos, pues la obstruc-
− Intranquilidad u obnubilación que mejoran des- ción en aumento podrá llegar a ser severa sin
pués de administrar oxígeno por un tiempo. Aquí que se manifieste cianosis hasta las etapas ter-
influirá el juicio clínico y la experiencia del per- minales, si se está utilizando oxígeno. Existen in-
sonal médico. dicaciones de administrar oxígeno al trasladar a
− Lactantes con grunt (o gruñido espiratorio); es pacientes severos, cuando lleguen en estado muy
una indicación discutida. grave al departamento de urgencias o mientras
− Neumonías complicadas, sobre todo con aire se espera el personal adecuado para crear una
extraalveolar. En pacientes complicados con vía aérea artificial.
neumotórax, pioneumotórax, neumomediastino y/o − En las complicaciones de las IRA. Con frecuen-
cia se utilizará la oxigenoterapia de inicio y se
aire subcutáneo, la administración de oxígeno fa-
suspenderá con la mejoría evidente de las ma-
vorecerá la reabsorción del aire extraalveolar. nifestaciones clínicas.
− Pacientes con neumonías muy graves que pue-
den presentar bradipnea e inclusive períodos de Las imágenes radiográficas no serán de utilidad
apnea. para retirar o continuar la administración de oxígeno;
− Pacientes con íleo paralítico o dilatación gástrica solo las manifestaciones clínicas tendrán valor, y si hay
aguda como complicaciones de la neumonía. facilidades, la Sat.O2.

916 Tomo III


Maneras de administrar el oxígeno. Hay varias que el catéter para el oxígeno, y la otra fosa nasal se
técnicas para administrarlo tenedor nasal (prongs), ca- mantendrá libre de secreciones. Siempre se debe vigi-
téter nasal, catéter nasofaríngeo (que solo se utilizará en lar la posibilidad de obstrucción del catéter o tenedor,
medios que tengan un personal adecuado para observa- que debe limpiarse 2 veces al día con agua destilada
ción mantenida, pues existe el peligro de que el catéter estéril y se utilizará otro, mientras se seca el limpiado.
descienda y se produzca dilatación gástrica aguda), cá- Se utilizará un catéter nuevo cada 2 a 3 días.
mara de cabeza (Hood), careta o tiendas de oxígeno Las tiendas de oxígeno se deben limpiar diariamente
(Cuadro 69.12). con agua estéril y secarse bien. Se deben cambiar cada
Cuadro 69.12. Distintas técnicas para la administración de oxígeno 4 días como máximo.
En el frasco donde se lava el oxígeno se chequeará
Técnica de administración Edad L/min el nivel de agua estéril 2 ó 3 veces al día como mínimo y
Tenedor nasal (prongs) se cambiará diariamente. Una vez a la semana o al
o cateter nasal < 1 año 0,5−1 terminar la administración de oxígeno, las tiendas se su-
Prongs o cateter nasal 1 - 4 años 2−3 mergirán durante 15 min, después de lavarlas con agua
Prongs o cateter nasal o estéril, en una solución antiséptica ligera, a continuación
cateter nasofaríngeo > 4 ó + años 4
Cámaras de cabeza Según la edad 4−6
se enjuagan con agua estéril y se secan al aire cubrién-
Caretas Según la edad 4−6 dolas con una gasa.
Cámaras de oxígeno Cualquier edad 10 Retirar el oxígeno. Cuando mejore el cuadro clíni-
co, disminuya francamente el tiraje y la frecuencia res-
piratoria, con sensorio y otros parámetros mejorados, se
La aplicación de O2 con un tubo frente a una ven- retirará el oxígeno y se vigilará al paciente por 10 a
tana nasal constituye un gasto innecesario de oxígeno, 20 min. Se realizará, si es posible, una determinación de
pues la cantidad que recibe el niño no se puede determi- Sat.O2. Se debe dejar el equipo junto al paciente por 12
nar, ya que la mayoría del gas no penetra en la a 24 h por si recurren los síntomas y signos, lo cual no es
nasofaringe; debe erradicarse esta costumbre. En aque- frecuente.
llos casos que no se tenga otro medio, al tubo que viene Medidas específicas. Dependerán del agente in-
de la fuente de oxígeno se le agregará una careta o feccioso encontrado o sospechado. En esta última posi-
embudo hecho de papel, cartón o un vaso plástico con bilidad, se tendrán en cuenta las características
orificio en el centro del fondo por donde se introducirá el epidemiológicas de cada región o país y las publicacio-
tubo; este embudo se aplicará sobre la cara del niño nes y experiencias nacionales e internacionales. Pasa-
cubriendo la nariz y boca. mos a plantear las medidas específicas de cada síndrome
Los prongs y el catéter nasal no necesitan oxíge- respiratorio agudo que forman parte de la clasificación
no lavado en agua destilada estéril, pues no interfieren la de Dennis y Clyde, modificada que utilizamos en Cuba.
acción humedificadora de la nariz. El catéter Infecciones respiratorias agudas altas
nasofaríngeo necesita el oxígeno lavado en agua. Las • Rinofaringitis infecciosa aguda. Es producida en la
cámaras de cabeza y las caretas son de uso transitorio o casi totalidad de los casos por virus, en particular por
se usan en servicios de urgencias. los rinovirus. En este síndrome no se deben utilizar
Con respecto a las cámaras de oxígeno con tienda, antibacterianos, aún cuando exista secreción nasal
producirán un máximo de 40 % de oxígeno a 10 L/min y mucopurulenta. La excepción sería cuando esta se-
deben estar totalmente hermetizadas, pues por peque-
creción forma parte de una sinusitis o se acompaña
ña que sea una abertura se perderá oxígeno y dismi-
de otitis media aguda.
nuirá la concentración en ellas. Además, habrá que
En casos poco frecuentes en niños pequeños, la
abrir la tienda cada vez que se examine el paciente, se
rinofaringitis puede ser producida por estreptococos
alimente, etc., por lo que después se cerrará,
beta hemolíticos grupo A, que debe ser diagnostica-
hermetizándola y se pondrá al máximo, aplicando el
flush por alrededor de 10 min, y luego se pasará a da por microbiología y se utilizará penicilina (de pre-
10 L/min. Cada vez se utilizan menos, pues se prefie- ferencia) o macrólidos (en alérgicos a la penicilina),
ren los tenedores (prongs) o el catéter nasal. Si se en las dosis y vías recomendadas en la
usan estos, y además se tiene que usar una sonda faringoamigdalitis estreptocócicas (FAE). El
nasogástrica, se pasará esta por el mismo orificio nasal cotrimoxazol (mezcla de sulfametoxazol y trimetoprim,

Parte XII. Aparato respiratorio 917


en proporción de 5:1) no es efectiva, al igual que otros caso de ser mucho el volumen que se va a inyectar, se
sulfamidados, contra las IRA altas ya establecidas. dividirá en dos partes y se inyectarán en extremidades
• Faringoamigdalitis con vesículas, nódulos o diferentes. Algunos recomiendan para disminuir el dolor
ulceraciones. Los síndromes clínicos que las produ- que produce su inyección, que una vez diluido el medi-
cen son: las gingivoestomatitis herpéticas con com- camento, se lleve a temperatura ambiente frotando el
promiso faríngeo (por herpesvirus 1 y a veces, el 2), bulbo enérgicamente entre las palmas de las manos por
la faringitis linfonodular, la herpangina y el síndrome varios minutos. En pacientes con escarlatina se reco-
boca-mano-pie, todos por virus Coxsackie A. No se mienda una segunda dosis i.m. de penicilina benzatínica
utilizarán antibacterianos. En pacientes con 10 días después de la primera.
gingivoestomatitis herpética aguda severas con Cuando no se tenga esta penicilina, y en familias
inmunocompetencia, las opiniones sobre la utilización adecuadas, se utilizará una penicilina por vía bucal en el
de acyclovir están divididas: hay, la mayoría, quienes menor número de dosis diaria y en horarios convenien-
no lo utilizan y hay otros que sí Este producto no tes para facilitar las posibilidades de su cumplimiento
actúa erradicando los virus latentes que producirán por la enfermera de terreno, un auxiliar paramédico o
aftas a repetición en labios o mucosa bucal. los familiares. El tratamiento será siempre por 10 días y
• Faringoamigdalitis con exudados o membranas. En se debe explicar bien a la familia el por qué. Se reco-
los pacientes menores de 3 años generalmente son mienda la penicilina G bucal (400 000 U dos veces al
producidas por virus, en particular adenovirus, y no día; dosis mayores no mejoran el porcentaje de éxitos de
necesitan antibacterianos.
erradicación del EBHGA, o la fenoximetil penicilina
(penicilina V), 25 mg/kg/dosis, bucal, dos veces al día
En pacientes de más de 3 años donde se comprue-
(cada 12 h).
ba por técnicas microbiológicas o se sospeche una
También se podrá utilizar amoxicilina 15 mg/kg/
faringoamigdalitis supurada por estreptococo beta
dosis cada 8 h, 10 días. Últimamente hay quienes reco-
hemolítico grupo A (FAE), se utilizará de preferencia
penicilina, o en los alérgicos a esta, macrólidos o miendan la utilización de amoxicilina bucal una sola vez
cefalosporinas de 1ra. o 2da. generación. al día (80 mg/kg/dosis) durante 5 días.
En pacientes con faringoamigdalitis supurada, en En familias no adecuadas y si no se tiene la penici-
que se comprueba por Microbiología que sea causada lina benzatínica, se utilizará penicilina novocaínica
por Mycoplasma pneumoniae, se podrán utilizar (procaínica) por vía i.m. una vez al día durante 10 días
macrólidos a cualquier edad y a la misma dosis reco- (50 000 U/kg/dosis diaria; dosis máxima 1 000 000 U/24 h).
mendada para las FAE (Cuadro 69.12). Si el paciente La inyección se debe administrar en la casa por la en-
tiene más de 8 años de edad se podrá utilizar tetraciclina, fermera de terreno o trabajador sanitario o en un lugar
por vía bucal, a la dosis de 10 mg/kg cada 6 h durante 10 de asistencia médica como las consultas o policlínicos
a 14 días. Se debe recordar que los macrólidos pueden de APS.
aumentar las concentraciones en sangre de teofilinas, En los alérgicos a la penicilina comprobados (las
astemizol, terfenidina y otros medicamentos que se es- pruebas intradérmicas con penicilina carecen de valor
tén utilizando. Al elevar las concentraciones plasmáticas por el alto número de respuestas falsas positivas o la
de estos medicamentos, se pueden producir manifesta- posibilidad de reacción al inyectar el antibiótico en pa-
ciones tóxicas. Los macrólidos se utilizarán, preferible- cientes con una o más pruebas previas negativas) se
mente, 1 h antes o 2 h después de los alimentos y la utilizará eritromicina a 15 mg/kg/dosis, cada 8 h; máxi-
tetraciclina alejada de la leche o antiácidos. mo 1 g/día, por vía bucal, durante 10 días. También algu-
En cuanto a los antibióticos en las FAE comproba- nos autores recomiendan, en lugar de la eritromicina,
das por cultivo o por métodos rápidos o sospechadas por utilizar la azitromicina bucal, en dosis total de 60 mg/kg,
las manifestaciones clínicas, lo ideal será una penicilina, dividida en dosis única diaria, ya sea 12 mg/kg/día du-
pues no se han reportados EBHGA resistentes a las rante 5 días o 20 mg/kg/día durante 3 días.
penicilinas y ya se describen EBHGA resistentes a En la práctica es a veces difícil determinar cuándo
macrólidos o cefalosporinas. utilizar antibacterianos en pacientes con una FA y que
Se preferirá una dosis única i.m. de penicilina se piense que tengan una infección estreptocócica, por
benzatínica 600 000 U en menores con 30 kg de peso (o lo que incluimos un esquema de tratamiento, modifi-
menos de 6 años de edad) o 1 200 000 U en niños de cado de trabajos de Pantell, Reyes y cols y otros
30 kg o más de peso (o de 6 o más años de edad). En autores (Fig. 69.5).

918 Tomo III


los cuales se les indican investigaciones por las cua-
les se tendrán que esperar varios días.
• Individuos portadores de EBHGA y sin aumento del
TASO en 2 determinaciones separadas por 4 sema-
nas, no necesitan tratamiento antibacteriano.
• Se utilizará una segunda dosis de penicilina benzatínica
10 días después de la primera en pacientes que han
presentado escarlatina.
• Establece, Rodríguez, una serie de situaciones muy
prácticas que hay que tener en cuenta:
• Si los estreptococos se trasmiten a otros individuos
de la familia y esté bien documentado que del niño
portador se produjo el contagio (mismo serotipo o por
estudios más sofisticados) se debe realizar tratamiento
al portador y a los familiares.
− Se haya presentado un brote de FAE, comproba
do por microbiología en una comunidad cerrada
o semicerrada (guarderías, círculos infantiles, in-
ternados, semiinternados o escuelas al campo).
Fig. 69.5. Tratamiento antibacteriano de una IRA alta. Se tratarán a todos.
− Exista un alto grado de ansiedad familiar por la
persistencia en orofaringe del estreptococo des-
Resumiendo:
pués de un tratamiento adecuado y el niño está
• No se realizará exudado faríngeo después de un tra-
asintomático (esto es discutible, pero evidente-
tamiento adecuado, en dosis y duración, con
mente hay algunas familias que a pesar de todas
antibióticos de una FAE, en niños ya asintomáticos.
las entrevistas y explicaciones, se mantienen con
• En la posibilidad que se puedan realizar estudios
gran ansiedad).
microbiológicos a todos los tratados, estos servirán
− Existen antecedentes familiares de fiebre reu-
para determinar el número de pacientes con persis- mática Todas las FAE se tratarán.
tencia de EBHGA (ver IRA). − La repetición del tratamiento con penicilina pue-
• En pacientes con antecedentes de fiebre reumática de, y muchas veces así sucede, no erradicar el
sospechada o comprobada por la clínica, se impon- EBHGA y solo se utilizará un segundo trata-
drá tratamiento profiláctico de las recidivas por un miento en pacientes escogidos, por ejemplo con
mínimo de 5 años, hasta los 18 años de edad, aunque antecedentes familiares de fiebre reumática, pe-
otros autores recomiendan hasta los 25 años, o de nicilina por 10 días (a la dosis establecida ante-
riormente) agregándose rifampicina en los
por vida si hay una cardiopatía reumática.
últimos 4 días (dosis única de 15 mg/kg/día por
• Siempre se deben tratar a niños sintomáticos con vía bucal; dosis máxima 600 mg/kg/24 h). Vi-
“pruebas rápidas” positivas o cultivos faríngeos posi- gilar y advertir a la familia sobre síntomas y
tivos a EBHGA. signos indeseables de este antibiótico, entre ellos
• No administrar antibióticos en individuos con faringitis náuseas, vómitos, anorexia, orina y otros líqui-
o rinofaringitis con cultivos negativos, realizados con dos corporales amarillos o manifestaciones tóxi-
técnicas adecuadas, a menos que no se confíe en la cas como ictericia, que deben ser comunicados
técnica empleada, el cuadro clínico sea compatible al médico.
− Hay pacientes con FAE demostrada bacteriológi-
con FAE y se demuestre el comienzo de aumento del
camente que presentan episodios múltiples y
TASO a la primera semana del inicio del cuadro. El
plantean un problema epidemiológico. A todos
inicio de administración de penicilina u otro antibióti- los familiares se les deben realizar de forma si-
co adecuado, hasta los 7 o 9 días después del co- multánea estudios bacteriológicos faríngeos.
mienzo de FAE evita la fiebre reumática. Esto se Aquellos que presenten EBHGA deben ser tra-
tendrá en cuenta sobre todo en niños con anteceden- tados, preferiblemente con penicilina benzatínica,
tes familiares comprobados de fiebre reumática, a y repetir cultivos 3 a 4 semanas después y si aún

Parte XII. Aparato respiratorio 919


presentan los estreptococos, repetirles un segun- Consejos a padres y a otros familiares
do tratamiento. Algunos recomiendan imponer
tratamiento a todos los miembros de la familia • Como en toda enfermedad, el intercambio con
sin realizar cultivo cuando esta es numerosa, con la familia, explicándole el cuadro del niño que
transmisión repetida y prolongada sobre todo en
generalmente será localizado y autolimitado, pero
aquellas personas con riesgo de tener complica-
planteando lo importante del cumplimiento del
ciones por infección estreptocócica. En estos
tratamiento antiestreptocócico durante 10 días
casos se recomienda, no olvidando al niño por-
tador o infectado por EBHGA con episodios de cuando se utiliza la vía bucal en la mayoría de
FAE a repetición, utilizar por 10 días: clindamicina los antibióticos, en dosis e intervalos recomen-
(5 a 8 mg/kg/dosis por vía bucal, cada 8 h o dados para evitar las complicaciones inmedia-
amoxicilina a 15 mg/kg/dosis cada 8 h por vía tas o supuradas y las tardías, en particular la
bucal o penicilina procaínica por 10 días (en lu- fiebre reumática.
gar de la clindamicina u amoxicilina) agregándose • Que a pesar de un tratamiento correcto pudiera
rifampicina los últimos 4 días como se describió persistir un EBHGA
en epígrafes anteriores. • Que cuando se termine el tratamiento antibióti-
− La persistencia de EBHGA no es indicación de co, no es necesario repetir los estudios micro-
amigdalectomía (Cuadro 69.13). biológicos en niños asintomáticos.
• Que cuando persista el estreptococo y el niño
Cuadro 69. 13. Antibacterianos en las FAE está asintomático, se podrán realizar algunas in-
vestigaciones, pero si persiste asintomático no
• Penicilinas
− Penicilina benzatínica i.m. Menos 30 kg: 600 000 U
será necesario repetir el tratamiento.
(Dosis única) Más 30 kg: 1 200 000 U • Hay algunos problemas, como la persistencia
de EBHGA, que plantean otras conductas algo
− Penicilina novocaínica 50 000 U/kg/d /24 h
i.m./24 h. (10 días) (Máx.1 000 000 U/24 h) diferentes y se les comunicará a los familiares
si se presentan.
Veces • La aparición, una vez, de un absceso
Por dosis: 24 h:
periamigdalino (o periamigdalitis) no es una obli-
− Penicilinas por boca (10 días) gación de amigdalectomía, como tampoco lo es
Penicilina G 400 000 U 2 el estado de portador asintomático.
Fenoximetil penicilina 25 mg/kg
(penicilina V) 25 mg/kg 2 • La aparición de diversos problemas ya mencio-
Amoxicilina 15 mg/kg 3 nados podrá plantear interconsultas médicas y
Amoxicilina/clavulánico
o sulbactán 15 mg/kg 3 después, nuevo intercambio con los familiares.
Oxacilina 25 mg/kg 4 • Será importante interrogar sobre antecedentes
de fiebre reumática o cardiopatía reumática sos-
• Macrólidos por boca
Eritromicina (10 días) 15 mg/kg 3 pechada o comprobada en familiares del niño
Claritromicina (7 a 10 días) 7,5 mg/kg 2 con FAE.
Azitromicina (5 días) 2-5 a 5 mg/kg 2 • Aclarar que la demora de varios días (hasta 7 u
• Cefalosporinas por boca (10 días) 9 desde que empieza) en iniciar el tratamiento
Cefalexina 25 mg/kg 4 con antibacterianos en espera de los cultivos NO
Cefuroxima (acetil) 15 mg/kg 2
Cefadroxil 30mg/kg(ó15mg/ kg) 1(ó 2)
favorecerá la aparición de fiebre reumática.
Cefixima 8 mg/kg 1

• Clindamicina por boca Seguimiento


(7-10 días) 5 mg/kg 4
• Dependerá del cuadro clínico, tipo de complicación,
• Con otros macrólidos o cefalosporinas por via bucal: constatar estado de portador asintomático y otros aspectos que
bien las dosis, veces al día y tiempo de tratamiento antes de se presenten.
utilizarlos. Vigilar cambios de flora a partir del 5to. día, hepato
o nefrotoxicidad. • En general la mayoría de los pacientes evoluciona-
• No sulfamidados en FAE (incluyendo cotrimoxazol) rán bien, sin complicaciones y no será necesario ci-
• Tetraciclinas: Sensibilidad baja de muchos EBHGA a ellas, por tarlos más de una vez, o ninguna, según las
lo que no se recomiendan en las FAE.
características familiares, geográficas u otras.

920 Tomo III


• Las otitis medias deberán ser evaluadas periódica- del cuadro se pasará la misma dosis a la vía
mente, primero entre las 24 a 48 h de iniciado el trata- bucal o por catéter nasogástrico, por un total de
miento, después a la semana o antes y posteriormente 10 días como mínimo. La dosis de la amoxicilina
según la evolución. Hay que recordar que las altera- será de 15 mg/kg/dosis cada 6 h durante 48 a
ciones del tímpano pueden demorar en desaparecer, 96 h y cuando mejore el cuadro, se pasará a la
a veces durante algunas semanas estando el pacien- misma dosis por vía bucal o catéter nasogástrico,
te asintomático. Lo mismo sucede con otras compli- por un total de 10 días como mínimo. También
caciones sépticas cuyas evaluaciones ulteriores se recomienda, en lugar de los antibacterianos
dependerán del tipo y su evolución. anteriores, utilizar ceftriaxona, por vía i.v. inicial-
• Cuando hay antecedentes familiares de fiebre reu- mente y con la mejoría del cuadro por vía i.m.
mática, las evaluaciones variarán. La dosis única es de 100 mg/kg/dosis, o dividida
• Para algunos autores, los pacientes con exudados en 2 subdosis, en 24 h, durante 7 a 10 días. Dosis
amigdalinos, más frecuentemente presentan fiebre máxima 4 g/24 h.
alta, TASO elevado, PCR elevada y serán los casos Con la utilización de la vacuna contra el H.
que tienen más probabilidades de presentar fiebre influenzae tipo b, este síndrome, producido por
reumática, por lo que deberán tener un seguimiento dichas bacterias, ha disminuido considera-
más estrecho según las facilidades que se tengan. blemente y es raro encontrarlo hoy en día en
• Es importante tener en cuenta que los familiares de Cuba.
un niño enfermo variarán en su ansiedad, desde los Hay que recordar que la epiglotitis pudiera ser pro-
que con una explicación sencilla y apropiada se tran- ducida por H. influenzae no tipificable o tipificable
quilizan, hasta los que presentan una gran ansiedad. no b, en donde se utilizarían los antibacterianos
Por lo tanto, el intercambio con los familiares y las anteriormente descritos. En niños mayores se han
evaluaciones ulteriores variarán teniendo en cuenta descrito epiglotitis por virus o por otras bacterias,
el tipo de familia del niño. estas últimas discutidas. En las de causa viral, que
se presentan en niños mayores de 6 años y que
En aquellos pacientes, muy poco frecuentes, que generalmente producen un cuadro menos intenso,
presentan síndromes infecciosos supurados en orofaringe
no se utilizarán antibacterianos.
o partes blandas adyacentes, por bacterias anaerobias,
Como medida práctica, una epiglotitis moderada
por ejemplo un angina de Vincent (ver Faringo-amig-
o severa, más aún si se acompaña de un cuadro
dalitis con exudados o membranas) se tratarán por
toxiinfeccioso o de respuesta inflamatoria
vía i.v. con bencilpenicilina en dosis de 100 000 a 150
sistémica aguda, se considerará de causa
000 U/kg/dosis cada 4 a 6 h (máximo 12 000 000 U/24 h) y
metronidazol en dosis de 5 mg/kg/dosis, i.v., cada 6 h. bacteriana, sobre todo por H. influenzae tipo b y
Duración del TTT 14 a 21 días. se tratará como se expuso anteriormente hasta
que se demuestre lo contrario.
Infecciones respiratorias agudas bajas − Laringitis (L), laringotraqueítis (LT) o
• Crups infecciosos agudos. Comprenden:
laringotraqueobronquitis (LTB) que han sido de-
− Laringitis espasmódica aguda que como se des-
nominadas crup subglótico o viral pues son pro-
cribió en el capítulo de IRA su verdadera causa ducidas, generalmente, por virus (sobre todo los
no se conoce, pero parece tener un desencade- virus parainfluenza 2). No necesitan tratamien-
nante viral. No se deben utilizar antibacteria- to antibacteriano, excepto que se produzca una
nos. Solo utilizar medidas locales y generales. complicación como la traqueítis o traqueobron-
− Supraglotitis aguda o epiglotitis aguda. En la ma- quitis purulenta que se considerará de causa
yoría de los pacientes frente a un cuadro clínico bacteriana.
sugerente se considerará producida por − Bronquitis o traqueobronquitis infecciosas agu-
Haemophilus influenzae tipo b y se tratará con das. Habitualmente son producidas por virus y
cloranfenicol y amoxicilina por vía parenteral, i.v. no se utilizan antibacterianos. Es importante tra-
(después de establecida una vía aérea artificial, tar o erradicar los factores predisponentes o
preferiblemente por intubación). Cuando llegue agravantes.
el resultado microbiológico se utilizará el − Neumonías infecciosas agudas. Comprenden
antibacteriano al cual es más sensible la bacte- 3 síndromes: neumonías intersticiales, neumonías
ria. La dosis del cloranfenicol es de 25 mg/kg/do- lobares o segmentarias y neumonías a focos di-
sis cada 6 h durante 48 a 96 h y con la mejoría seminados o bronconeumonías.

Parte XII. Aparato respiratorio 921


− Neumonías intersticiales agudas. Habitualmen- única. Dosis máxima en 24 h 1 000 000 U. Tiem-
te son producidas por virus y en estos casos, po total del tratamiento de 10 a 14 días.
no necesitan la utilización de antibacterianos En alérgicos a la penicilina, se utilizará un
que incluso pueden ser perjudiciales. macrólido en las mismas dosis, vías y duración
Existen medicamentos específicos para algu- utilizadas para las Chlamydias trachomatis (ver
nos virus como las neumonías intersticiales por Neumonía intersticiales) o más excepcional-
el citomegalovirus, en que se utilizará ganciclovir. mente, cefaloridinas de 1ra. o 2da. generación
Los Mycoplasmas pneumoniae: pueden produ- (cefuroxima, por ejemplo) por vía i.v., i.m. o bu-
cir este tipo de neumonías y se utilizará cal según el cuadro clínico.
eritromicina a 10 mg/kg/dosis cada 6 h, por 14 Hay autores que recomiendan para las neumo-
días, vía bucal, o claritromicina 7,5 mg/kg/dosis, nías a neumococos (lobares, o en bronconeu-
cada 12 h, durante 10 a 14 días, vía bucal o
monías también): amoxicilina 15 mg/kg/dosis,
azitromicina, a 5 mg/kg/dosis, cada 12 h, duran-
cada 8 h, comenzando por vía parenteral (i.v. o
te 10 a 14 días, vía bucal. En niños mayores de
8 años de edad se puede utilizar tetraciclina a i.m., según la intensidad del cuadro clínico) y
10 mg/kg/dosis, vía bucal, cada 6 h, por 10 a 14 pasando después a la vía bucal a la misma dosis.
días. Dosis máxima 250 mg cada 6 h por 24 horas. Tiempo total del tratamiento 10 a 14 días. Según
La Chlamydia trachomatis puede producir una la edad, intensidad del cuadro y otros factores
neumonía intersticial. Se utilizará eritromicina puede comenzar el TTT en la casa o comenzar
por vía bucal, en la dosis de 10 mg/kg/dosis, cada ingresado y continuar en la casa (ingreso domi-
6 h, por 14 días, o claritromicina 7,5 mg/kg/ ciliario), en contacto con el hospital.
dosis, bucal, cada 12 h, durante 10 a 14 días, o No se recomiendan la penicilina benzatínica o la
azitromicina, bucal, a 5 mg/kg/dosis, cada 12 h, penicilina V, en el tratamiento de las neumonías
durante 10 a 14 días. (estrategia AIEPI/OPS).
Las Chlamydias pneumoniae pueden producir Cuando se utiliza penicilina en neumonías a
neumonías intersticiales y se recomienda utilizar neumococos hay que tener en cuenta los
macrólidos por vía bucal en las mismas dosis y neumococos resistentes, ya sean parcialmente
duración que las neumonías producidas por la resistentes o totalmente resistentes a las penici-
Ch. trachomatis. En niños mayores de 8 años,
linas (Cuadro 69.14), cuyo porcentaje es varia-
se utilizará, tetraciclina por vía bucal, a 10 mg/
ble según los países, y sus distintas regiones. En
kg/dosis, cada 6 h, durante 10 a 14 días. Dosis
la práctica se ha encontrado que grandes dosis
máxima: 250 mg cada 6 h.
Los Pneumocistis jirovecii, que pueden produ- de penicilinas parenterales son efectivas en el
cir neumonía intersticial, se tratarán con TTT de las neumonías por neumococos resis-
cotrimoxazol, a la dosis de sulfametoxazol (SMX) tentes.
de 50 mg/kg/dosis, cada 12 h, por vía bucal, du- Otra alternativa será utilizar cotrimoxazol (SMX/
rante 14 días. Si el cuadro no mejora, o es muy TMP) en la dosis del SMX de 20 mg/kg/dosis
intenso al comienzo, iniciar o agregar cada 12 h por vía bucal durante 10 a 14 días.
pentamidina. En las neumonías lobares en que se sospeche o
− Neumonías lobares o segmentarias: General- demuestre que son producidas por Klebsiella
mente son producidas, en niños mayores de pneumoniae, se utilizará un aminoglucósido
5 años, por bacterias, en particular por Strepto- como gentamicina (2,5 mg/kg/dosis cada 8 a 12 h
coccus pneumoniae (neumococos). por vía i.v. o i.m. durante 10 a 14 días), o cloran-
Se utilizará de preferencia la bencilpenicilina G fenicol por vía i.m., o i.v. inicialmente, a 25 mg/
(penicilina cristalina) por vía i.v. a la dosis de kg/dosis cada 6 h y a las 48 a 72 h, con la mejo-
150 000 U/kg/dosis cada 4 a 6 h i.v. si el cuadro ría del cuadro, se puede utilizar por vía bucal en
es severo o se sospecha (o se encuentra por igual dosis y separación entre ellas mismas; el
microbiología) resistencia intermedia y sin pasar tiempo total de tratamiento será de 10 a 14 días
de 12 000 000 U/24 h. Si se utiliza i.v. (cuadros y la dosis máxima para 24 h será de 2 gramos.
no severos) a la dosis de 50 000 U/kg/dosis, cada Excepcionalmente se tendrá que utilizar
6 h. Si el cuadro mejora se continuará con peni- cefalosporinas de tercera generación:
cilina novocaínica 50 000 U/kg por 24 h, dosis cefotaxima, ceftazidima o ceftriaxona por vía

922 Tomo III


parenteral en dosis descritas en el cuadro 69.15. de 5 años de edad se considerarán de causa
En neumonías lobares por H. influenzae se uti- bacteriana hasta que se demuestre lo contrario
lizará cloranfenicol o macrólidos en las dosis re- y tratarán según este concepto.
comendadas en el cuadro 69.14. Existen varios esquemas de tratamiento para
Lo anterior se refiere a niños mayores de 5 estas neumonías bacterianas:
años de edad, ambulatorios o ingresados, que La OPS/OMS en la estrategia AIEPI (Atención
han adquirido la infección fuera del hospital y Integrada a las Enfermedades Prevalentes de la
no son inmunodeprimidos. En pacientes de 2
Infancia) recomiendan para niños de 2 meses a
meses a 5 años de edad se utilizarán los anti-
5 años de edad, los siguientes esquemas A o B:
bióticos recomendados en las bronconeumonías
en pacientes de esta edad como se describe − Esquema A. En bronconeumonías muy graves
más adelante. (polipnea y tiraje manifiestos, puede haber cia-
− Bronconeumonías o neumonías a focos disemi- nosis e imposibilidad de ingerir líquidos) se co-
nados. Son propias de los menores de 5 años de menzará con penicilina cristalina (bencilpenicilina
edad, pero se pueden presentar a cualquier edad. G) i.v. a 50 000 U/kg/dosis, 4 a 6 dosis en 24 h
En los países desarrollados las bacterias consti- (máximo 12 000 000 U/24 h) junto con
tuyen hasta el 20 % de las causas de estas cloranfenicol: 25 mg/kg/dosis cada 6 h por vía i.v.
bronconeumonías, pero en los países, en desa- Hay quienes recomiendan utilizar solamente el
rrollo, las bacterias intervienen, primaria o se- cloranfenicol, sin penicilina. Las posibilidades de
cundariamente, hasta en el 70 % de estas anemia aplástica por cloranfenicol oscilan entre
neumonías en menores de 5 años de edad. En 1 por 20 000 a 40 000 pacientes tratados con
estos países las bronconeumonías en menores este antibacteriano.

Cuadro 69.14. Antibacterianos recomendados en neumonías (lobares, segmentarias o bronconeumonías) a neumococos resistentes
a la penicilina

Tipo de resistencia Antibióticos

Neumococos con Bencilpenicilina G (“Penicilina cristalina”)


resistencia intermedia 150 000-200 000 U/kg/dosis i.v. c/4 a 6 h
(CIM entre 0,1 a 1,0 mcg/mL) (sin pasar de 12 000 000 U/24h)
Alternativas (i.v.):

- Vancomicina
o
- Cefalosporina de 3ra. generación
(ceftriaxona, cefotaxima, ceftazidima)

Neumococos con - Ceftriaxona: 100 mg/kg/dosis


resistencia total i.v., dosis única/24h
(CIM mayor o igual o
a 2 mcg/mL) - Cefotaxima: 50 mg/kg/dosis,
i.v. c/6-8 h/24 h
o
- Ceftazidima: 50 mg/kg/dosis,
i.v. c/6-8 h/24 h

Si resistente a las cefalosporinas de 3ra. generación -Vancomicina: 10-15 mg/kg/dosis, c/6 h


(CIM mayor o igual 0,5 mcg/mL) (4 veces al día. i.v. lentamente/24 h)
o
- Meropenem: 20-40 mg/kg/dosis i.v. o i.m.
c/8 h /24 h

Duración del tratamiento: Promedio 14 días.


Dosis máxima: 4 g de ceftrioxona y ceftazidima, 2 g de cefotaxima

Parte XII. Aparato respiratorio 923


Cuando mejore el cuadro clínico se pasará a la 12 h por 10 días, o azitromicina a 5 mg/kg/dosis
penicilina procaínica (novocaínica): 50 000 U/kg cada 12 h, durante 10 días. Vigilar cambio de
en una dosis única diaria i.m. y cloranfenicol a flora intestinal después del 5to. día. Se puede
25 mg/kg/dosis cada 6 h por vía bucal. La dosis utilizar una de estas alternativas en el domicilio,
máxima diaria es de 2 g en 24 h. La duración en bronconeumonías no severas, con poca
habitual del tratamiento será de 10 a 14 días.
polipnea, sin tiraje, en niños de más de 2 años de
Si a las 48 a 72 h de iniciado el tratamiento, no
hay mejoría clínica, o antes, si se sospecha una edad, que ingieren bien los líquidos y en familias
bronconeumonía estafilocócica o existen absce- confiables. De acuerdo con el cuadro clínico se
sos o empiema a la radiografía de tórax o al ul- puede comenzar el tratamiento en el hospital y
trasonido, se sustituirá la penicilina cristalina por después, al mejorar, seguir el TTT en el domici-
oxacilina, cloroxacilina, nafcilina, flucloxacilina lio y siempre de acuerdo con el equipo de la APS
o meticilina. Hay cepas de estafilococos resis- (ingreso domiciliario). En otros países se pudie-
tentes a esta familia de penicilinas semisintéticas, ra realizar todo el TTT (tratamiento) en el domi-
tanto intrahospitalarias como en la comunidad. cilio si hay dificultades hospitalarias o problemas
La duración del tratamiento en una geográficos.
bronconeumonía estafilocócica será por un mí- En pacientes mayores de 5 años, si no presentan
nimo de 3 semanas.
tiraje y la polipnea no es severa se tratarán con
Cuando no hay mejoría con cloranfenicol o a las
penicilinas semisintéticas, sobre todo si aparecen algunas de las variantes anteriormente descritas
abscesos o empiema, se sustituirá este por un y en el domicilio desde los primeros momentos,
aminoglucósido. El más utilizado es la gentamicina atendidos por el médico y la enfermera de aten-
i.v. o i.m. a 2,5 mg/kg/dosis cada 8 a 12 h por 2 ción primaria de salud (APS). Se trasladarán al
semanas. La amikacina (a 7,5 mg/kg/dosis cada hospital si evolucionan desfavorablemente o si
12 h durante 10 días) es menos recomendada por la familia no coopera
ser más cara, ototóxica o nefrotóxica, que la Toda neumonía severa, cualquiera que sea la edad
gentamicina, aunque hay bacterias resistentes a del niño se comenzará el tratamiento ingresado
esta y no a la amikacina (hasta 10 %). Resumien- (Cuadros 69.14, 69.15 y 69.16).
do: con esta última variante se utilizará gentamicina En aquellos pacientes, muy poco frecuentes, que
sola o con cloxacilina.
presentan neumonías lobares o bronconeumo-
Esquema B. En bronconeumonías graves (an-
nías, por bacterias anaerobias, se tratarán por
tes clasificadas como moderadas) con
polipnea, pero sin tiraje manifiesto, sin ciano- vía i.v. con bencilpenicilina en dosis de 100 000
sis e ingiriendo bien los líquidos. Se podrá co- a 150 000 U/kg/dosis cada 4 a 6 h (máximo
menzar con penicilina cristalina (seguida por 12 000 000 U/24 h) y metronidazol en dosis
procaínica con la mejoría del cuadro clínico) de 5 mg/kg/dosis, i.v., cada 6 h. Duración del
junto con cloranfenicol o cotrimoxazol, cada 6 h TTT 14 a 21 días. Son cuadros graves, tóxicos,
(los esquemas de la estrategia AIEPI han casi siempre secundarios a cuadros sépticos en
dado buenos resultados en países en desarro- orofaringe o intervenciones odontológicas o de
llo o cuando hay dificultades con los ingresos ORL y con alteraciones nutricionales o deficien-
hospitalarios). cias inmunológicas congénitas o adquiridas. Se
Una alternativa, recomendada por muchos au- utilizan la penicilina junto al metronidazol, pues
tores, sería comenzar con amoxicilina (con o sin
hay cepas anaeróbicas que han creado resisten-
ácido clavulánico o sulbactan) a 15 mg/kg/dosis
cada 8 h por vía parenteral inicialmente (i.v. o cia a la penicilina.
i.m.) y después por vía bucal, durante 10 a 14 días − Bronquiolitis en niños pequeños, sobre todo
como total, con los alimentos o no, pero con abun- lactantes. Descritas aparte, incluyendo tratamien-
dantes líquidos. to. Se debe aclarar que las medidas más impor-
Otras alternativas serían comenzar con cotrimoxazol tantes radican en las generales, locales y evitar
a la dosis del SMX de 20 mg/kg/dosis cada 12 h medidas innecesarias. Las medidas específicas
por vía bucal durante 10 a 14 días o en su lugar (como los medicamentos antivirales) son discu-
comenzar con un macrólido por vía bucal: tidas. Se tendrá siempre en cuenta los factores
eritromicina 10 mg/kg/dosis cada 6 h, por 10 a de riesgo o agravantes, por su importancia so-
14 días; o claritromicina 7,5 mg/kg/dosis cada bre la evolución y el pronóstico de la afección.

924 Tomo III


Cuadro 69.15. Antibacterianos recomendados por algunos autores en neumonías severas adquiridas en la comunidad (también recomendados
en neumonías adquiridas en el hospital)

Edad De elección dosis(d.),vía Alternativas


Frecuencia(c/_h)

RN de menos Amoxicilina 15 mg/kg/d. i.v., c/12h Amoxicilina i.v. c/12h


7 días + (igual d. que la de elección)
Amikacina 7,5 mg/kg/d. i.v. c/12h
+
Gentamicina
2,5mg/kg/d. i.v. c/12 h
RN de 7 días Amoxicilina 20 mg/kg/d. i.v. c/6 h Amoxicilina, i.v. c/6h
o más + (igual d. a la de elección)
Amikacina 7,5mg/kg/d. i.v. c/12 h
+
Gentamicina 2,5mg/kg/d.
IV c/8-12h

Lactantes de más 2 meses, Cloxacilina 25mg/kg/d. B c/6h Meticilina


preescolares o 25mg/kg/d. i.v. c/6h
o mayores. bencilpenicilina 50 000 U/kg/d. i.v. o- cloxacilina (igual dosis
(preferida) c/4 a 6h (Máx. 12 000 000 U. i.v./ 24 h) que elección)
+ +
ceftriaxona 100mg/kg/d. i.v.c/24h cloranfenicol
o 25mg/kg/d. i.v. c/6h
cefotaxima 25mg/kg/d. i.v. c/6 h o
o cefuroxima sola
ceftazidima 25mg/Kg/d. i.v. c/6 h 25-50mg/kg/d. i.v.c/8h

Dosis máxima de: - Ceftriaxona: 4 g/24 h


- Cefotaxima: 2 g/24 h
- Ceftazidima: 4 g/24 h

Medidas innecesarias o hasta perjudiciales. indicación sería en un niño con xeroftalmia en que
Muchas veces por la insistencia familiar o el deseo del una IRA pudiera favorecer una complicación grave
médico de “hacer algo más” se indican medicamentos respiratoria o una úlcera de la córnea.
innecesarios o hasta perjudiciales y que no deben utili- • Vitamina C: no se ha demostrado ningún efecto be-
zarse en las IRA, como son: neficioso en las IRA.
• Antibacterianos, con o sin esteroides, vasocons- • Medicamentos contra la tos, expectorantes, muco-
trictores o antihistamínicos en gotas nasales o líticos, broncodilatadores o antihistamínicos ya sean
nebulizaciones nasales (sprays nasales). aislados o reunidos, prescritos como fórmulas.
• Antibacterianos para uso tópico en pastillas o trociscos • Cetylpyridinium, domiphen (antisépticos) o
para disolver en la boca, en las faringitis. benzocaína, o dyclonine (anestésicos) aislados o re-
• Antisépticos tópicos y/o anestésicos en gargarismos unidos en distintas presentaciones para aliviar mo-
o pastillas para uso en faringitis. lestias o dolor en la orofaringe.
• Gammaglobulina i.m. o gammaglobulina hiperinmune • Muchos medicamentos comerciales “contra la tos” o
i.v. (no se ha comprobado que favorezcan una mejor “el catarro” son caros, de efectos no comprobados y
algunos pueden producir efectos adversos. Producen
evolución del proceso en niños con IgG normal, in-
en algunos familiares una falsa sensación de seguri-
cluso en neumonías muy graves).
dad, por lo que se descuida la observación del niño. En
• Levamisol u otros inmunomoduladores en pacientes
cambio, se deben estimular los preparados caseros
sin afecciones inmunológicas (inmunocom-petentes). como la clásica limonada tibia o agua tibia con miel
• Supositorios con antibacterianos y/o bismuto. que pueden aliviar la tos por irritación faríngea.
• Suspensión de aceite de hígado de pescados (baca- • Fricciones del tórax con distintos productos comer-
lao, tiburón, etc). ciales que no tienen eficacia comprobada científica-
• Jarabe yodotánico. mente. Los medicamentos que contengan alcanfor
• Vitamina A: no se ha comprobado que en el curso de al ser ingeridos por error o frotados dentro de la nariz
las IRA atenúe su severidad, acorte su evolución o del niño pueden ser tóxicos. Las preparaciones que
evite complicaciones. Hay algunos trabajos en que contienen alcanfor pueden contener suficiente canti-
su administración en la fase aguda de una infección dad para producir convulsiones o muerte si son inge-
respiratoria puede tener efectos adversos. Quizás una ridas por el niño.

Parte XII. Aparato respiratorio 925


Cuadro 69.16. Dosis de antibacterianos recomendados en menores de 2 meses de edad con neumonías neonatales

Antibacterianos Edad Edad


Menos de 7 días 7 días o más
UI o mg/kg/dosis (d.) UI o mg/kg/dosis (d.)
<2000 g >2000 g <2000 g >2000 g

• Penicilinas
- Bencilpenicilina 25 000 U 50 000 U 25 000 U 50 000 U
(penicilina cristalina). c/12 h c/8 h c/8 h c/6 h
- Amoxicilina 25 mg 50 mg 25mg 50 mg
c/12 h c/8 h c/ 8 h c/6 h
- Cloxacilina (si por estafilococos 25mg 25mg 25 mg 25 mg
demostrado o con abscesos o empiema) c/12 h c/8 h c/8 h c/6 h
- Ticarcilina 75 mg 75 mg 75 mg 75 mg
c/12 h c/8 h c/8 h c/6 h

• Aminoglucósidos
- Gentamicina 2,5mg 2,5 mg 2,5 mg 2,5 mg
c/12 h c/12 c/8-12 h c/8-12 h
- Amikacina 7,5 mg 7,5 mg 7,5 mg 7,5 mg
c/12 h c/12 h c/12 h c/12 h

• Vancomicina i.v.
(Staphylococus aureus 10 mg 10 mg 10 mg 10 mg
resistentes a penicilinas c/12 h c/12 h h c/8 h c/8 h
semisintéticas)

• Cefalosporinas
- Ceftriaxona 50 mg 50 mg 50 mg 50-100 mg
c/24 h c/24 h c/24 h c/24 h
- Cefotaxima 50 mg 50 mg 50 mg 50 mg
c/12 h c/12 h c/8-12 h c/8-12 h
- Ceftazidima 50 mg 50 mg 50 mg 50 mg
c/12 h c/8 h c/8 h c/8 h
• Cloranfenicol No recomendado 25 mg c/12 h 25 mg c/6 h

• Cotrimoxazol No utilizarlo en niños prematuros o ictéricos. En países en desarrollo se ha utilizado


- Sulfametoxazol (SMX) + en neumonías neonatales (+ penicilina) a la dosis de SMZ de 20mg/kg/d c/12 h (bucal).
Trimetoprim(TMP) Si Neumocistis jirovesi: (SMX a 50 mg/kg/d (bucal o i.v.) c/12 h
Proporción 5:1

Se recomienda habitualmente una de las penicilinas más un aminoglucósido por vía i.m. o i.v. (niños muy graves o con signos de colapso)
La duración será por 10 días como mínimo; en las neumonías estafilocócicas un mínimo de 3 semanas.

• No aspiraciones nasales con aparatos caseros o por son- • Jarabes expectorantes con antihistamínicos u otros
das con aspiradores en el domicilio o en el hospital. Pue- medicamentos no tienen efecto comprobado cientí-
den producir lesiones en la mucosa nasal y/o infecciones. ficamente. Los antihistamínicos en niños con IRA solo
• Las infusiones de té pueden producir en niños pe- tendrán acción favorable si los pacientes tienen, ade-
queños excitación y hasta convulsiones al ser indica- más de la IRA, una rinitis alérgica a la que pudieran
das para calmar la tos. mejorar, pero siempre se tendrá en cuenta la posibili-
• Inhalaciones de eucaliptus, mentol y otros productos dad que las secreciones puedan disminuir en fluidez.
que no han demostrado ser beneficiosos en otitis, la- • Los preparados de plantas a las que se atribuyen efec-
ringitis o sinusitis y pueden ser irritantes a la mucosa. tos medicinales solo deben ser recetados por facul-
• Gotas nasales oleosas o, por vía bucal, aceite de mesa, tativos entrenados y con conocimientos de estos
con o sin orégano, u otras sustancias, pues pueden productos y posibles efectos adversos.
producir neumonías oleosas graves por aspiración al • Las transfusiones son innecesarias con cifras de Hb
administrarse al niño. de 6 g % o mayores. Se deben indicar con cifras de

926 Tomo III


5 g % o menores, s/t glóbulos lavados. El criterio estreptocóccicos: si positivos es una FAE y si es negati-
clínico será fundamental. Siempre se tendrán en cuen- vo realizar un exudado faríngeo, con buena técnica y
ta los efectos adversos de toda transfusión. medios de cultivos; si este es positivo es una FAE y es
negativo, no lo es.
CUADRO DE DECISIONES FRENTE Omitimos las FA diftéricas, pues en nuestro país
A UNA INFECCIÓN RESPIRATORIA están erradicadas desde hace años, pero en un país sub-
desarrollado el primer paso sería dividir las FA supuradas
AGUDA NO COMPLICADA en diftéricas y no diftéricas.
Años atrás, grupos de expertos de la OMS y otros Un paso final sería aplicar el TTT según el síndro-
autores, plantearon diversos cuadros de decisiones para me (Ver Tratamiento de las IRA no complicadas.)
facilitar el diagnóstico y el tratamiento estándar de las IRA. (Fig.69.6.)
Presentamos el cuadro de decisiones que propusimos para
Cuba basado en la clasificación que utilizamos en nuestro
país, modificada de la de Dennis y Clyde y que fue apro-
bada por el MINSAP. Este cuadro no tiene valor para
niños menores de 3 meses; a partir de esta edad se puede
emplear en las IRA no complicadas, aunque ningún cua-
dro puede sustituir el juicio clínico del médico.
Antes de llegar a la conclusión de qué tipo de IRA
presenta el paciente hay que descartar que el niño no
presente una enfermedad o afección muy grave como
lo establece la estrategia AIEPI de OPS/OMS y
UNICEF. (Ver IRA.) Además, se debe tener en cuenta
los factores de riesgos, capaces de influir en el tipo, la
severidad y complicaciones de la IRA.
El Cuadro comienza planteando una IRA por va-
rias de estas manifestaciones: secreción o congestión
nasal, síntomas o signos faríngeos, tos seca, húmeda o
con una sonoridad o timbre particular (perruna, crupal,
en latón), polipnea, tiraje, ronquera, estridor, estertores
secos o húmedos o sin ellos. Otras manifestaciones como
la fiebre, anorexia, intranquilidad o astenia, no son
Fig. 69. 6. Algoritino para las IRA altas.
patognomónicos de IRA.
Un primer paso es establecer si es una IRA alta o
baja, de acuerdo con la no existencia de polipnea, tiraje
Si es una IRA baja. Primer paso: presentará,
y/o no tos o esta no es predominante (IRA alta) o están
habitualmente, uno o varias de estas manifestaciones:
presentes uno o más de ellos (IRA baja).
polipnea, tiraje, tos (esta será una de las manifestacio-
Si es una IRA alta. Pasamos a un segundo paso
de acuerdo con el EF, sobre todo de la orofaringe y se- nes más llamativas del cuadro clínico).
gún los hallazgos, la IRA alta la incluiremos dentro de Segundo paso: si presenta una o más de estas
uno de los tres síndromes de la clasificación que utiliza- manifestaciones: tos perruna,o crupal, estridor, ron-
mos: rinofaringitis; faringoamigdalitis con exulceraciones, quera: Si presenta una o más de las manifestaciones
nódulos o vesículas; o es una faringoamigdalitis con anteriores, es un síndrome crupal. Si no las presenta, es
exudados o membranas. un síndrome no crupal
Un paso que sigue, si es una faringoamigdalitis con Tercer paso: si síndrome crupal, de acuerdo con
exudados o membranas, nos basaremos en la presencia las manifestaciones clínicas, lo incluiremos, según los
de algunas manifestaciones (ninguna de ellas son síntomas y signos, en alguno de las 3 tipos de crup:
patognomónicas) de una FA estreptocóccica (FAE) o − Laringitis espamódica.
no. Estas últimas las dividimos en virales o por bacte- − Epiglotitis o laringitis supraglótica.
rias (principalmente Mycoplasma pneumoniae). Lo − Laringitis (L), laringotraqueítis (LT) o laringotra-
ideal serían los métodos rápidos para antígenos queobronquitis (crups virales).

Parte XII. Aparato respiratorio 927


Si síndrome no crupal, incluiremos el cuadro, se- INFECCIONES RESPIRATORIAS ALTAS
gún síntomas y signos, en uno de estos grandes grupos: COMPLICADAS
• Bronquitis o traqueobronquitis: no polipnea, no tiraje
y tos no perruna (ya sea seca o húmeda), roncos o
no, subcrepitantes gruesos o no.
Otitis media aguda
• Neumonías: polipnea, tiraje manifiesto (bajo o gene-
La otitis media aguda (OMA), se define como la
ralizado), estertores secos (sibilancias) o húmedos inflamación del oído medio y es una de las enfermeda-
(subcrepitantes finos o medianos o crepitantes). des más comunes de la infancia.
• Las manifestaciones al EF pueden estar localizadas Es más frecuente en los 5 primeros años de vida,
en una zona del pulmón (neumonías lobares o sobre todo en el menor de 18 meses. Se calcula que
segmentarias), durante el primer año de vida, del 40 al 50 % de los
• Localizadas en uno o ambos pulmones (bronconeu- episodios de infección respiratoria aguda (IRA) se com-
monías). En las bronconeumonías los focos inflama- plican con una OMA.
torios pueden confluir y producen al EF signos de En su patogénesis se señala, en primer lugar, la
neumonías lobares. disfunción de la trompa de Eustaquio. Este conducto
• En las neumonías intersticiales, generalmente las comunica la nasofaringe con el oído medio, y permite la
manifestaciones al EF son bilaterales. ventilación y el drenaje de las secreciones. A semejanza
del resto del aparato respiratorio, está cubierto por un
epitelio ciliado. El movimiento ciliar no solo favorece el
A veces existen disociaciones clinicoradiológicas
drenaje de las secreciones del oído medio, sino además
por lo que la mayoría de los autores consideran que los
interfiere con la aspiración de aquellas que provienen de
signos más importantes en las neumonías son la polipnea
la nasofaringe. El músculo tensor del velo del paladar se
y, cuando el cuadro es más severo, el tiraje bajo (de toda contrae durante la deglución, el llanto y el estornudo, y
la zona baja del tórax). cierra el orificio de la trompa.
Cuarto paso: TTT del síndrome que presenta el En el niño, la trompa de Eustaquio es más corta y
paciente. (Fig. 69.7) tiene menos soporte cartilaginoso, lo que unido a la alta
frecuencia de episodios de IRA virales en los primeros
años de vida, favorece la aparición de esta complicación.
Los virus juegan un papel preponderante en la
patogénesis, ya que alteran los receptores epiteliales res-
piratorios, favorecen la adherencia bacteriana, disminu-
yen el aclaramiento mucociliar y la respuesta inmune,
promoviendo el desarrollo de infección bacteriana se-
cundaria, a partir de las bacterias que colonizan la
nasofaringe.
Entre los factores de riesgo para el desarrollo de
OMA se citan:
• Sexo masculino.
• Hendidura palatina y otras anomalías.
• Fumador pasivo.
• Lactancia artificial.
• Atopia.
• Convivir con hermanos pequeños.
• Asistencia a círculos infantiles.

En niños con OMA recurrente (3 o más episodios


en 6 meses) se pueden asociar, además, otros factores
predisponentes o de riesgo:
• Adenoiditis crónica.
• Debut en el primer año de vida.
• Infección inicial por neumococo.
Fig. 69.7. Algoritmo para las IRA bajas. • Discinesia ciliar, fibrosis quística, deficiencias inmunes.

928 Tomo III


• Factores genéticos no bien definidos. mal y bacilos gramnegativos. En poblaciones con alta
• Reflujo gastroesofágico. cobertura de vacunación antineumocócica conjugada en
CUADRO CLÍNICO
< de 2 años, se ha observado cambios en la etiología de
las OMA, con incremento de serotipos no vacunales y
Las OMA están precedidas de una IRA alta. En
de H. influenzae no tipificable productor de ß-
niños seguidos evolutivamente durante una IRA, se ha
lactamasas.
observado que las OMA aparecen, habitualmente, des-
Se pueden observar infecciones mixtas: virales y
pués de 3 a 9 días del inicio de una IRA.
bacterianas, y de bacterias aerobias y anaerobias.
Se observa fiebre en el 60 % de los casos y el
Las infecciones mixtas tienen una evolución más
dolor de oído es el síntoma referido más importante.
tórpida. Los virus más aislados son: sincicial respirato-
Puede asociarse rinitis, dolor de garganta, irritabilidad,
rio, influenza y parainfluenza.
alteraciones del sueño y conjuntivitis, así como vómitos
En niños con OMA y presencia de rinitis mucosa y
y anorexia.
conjuntivitis purulenta es muy frecuente el aislamiento
El examen otoscópico muestra un tímpano enroje-
de H. influenzae no tipificable. La asociación de
cido, opaco, con pérdida de puntos luminosos y disminu- faringoamigdalitis con exudados y OMA es característi-
ción de su movilidad. En estadios más avanzados, la ca de la infección por adenovirus.
membrana puede estar abombada y finalmente apare- El exudado ótico de las secreciones que drenan
cer una perforación en la parte tensa con salida de pus hacia el conducto auditivo externo, tiene poco valor para
(5 % de los casos). el diagnóstico causal de las OMA, ya que se produce
Se debe evitar el sobrediagnóstico de OMA por el sobrecrecimiento bacteriano de gérmenes que normal-
ligero enrojecimiento timpánico que se observa en niños mente viven en él.
que lloran, mientras se realiza la otoscopia.
También debe hacerse diagnóstico diferencial TRATAMIENTO
con las otitis medias con derrame, las que aparecen El tratamiento preventivo debe ir dirigido a elimi-
entre 3 y 16 semanas después de iniciada una OMA y nar los factores de riesgo y propiciar una lactancia ma-
el paciente está asintomático, solo refiere sensación terna adecuada.
de oído ocupado, y la otoscopia muestra niveles La vacunación contra el virus de la influenza ha
hidroaéreos, membrana traslúcida, poco móvil y a demostrado su eficacia para disminuir la frecuencia de
veces retracción. las OMA, pero no se dispone de vacunas contra el virus
Cuando persiste por más de 16 semanas se le de- sincicial respiratorio, que es el patógeno más frecuente
nomina otitis media con derrame persistente. en el primer año de vida.
Las complicaciones sépticas locales y a distancia La vacunación contra el H. influenzae tipo b no
son poco frecuentes después de la era antibiótica, pero previene las OMA por H.influenzae no tipificable. Es-
existe riesgo de pérdida auditiva en las OMA recurren- tudios realizados en países que han usado la vacuna
tes y en las otitis medias con derrame persistente. heptavalente (7 serotipos) antineumocócica conjugada,
no reportan menor incidencia de OMA, pero sí incre-
CAUSA
mento de serotipos no vacunales con reducida resisten-
Aunque los virus juegan un papel preponderante cia a antimicrobianos.
en la patogénesis de esta entidad, se aíslan bacterias En niños con OMA, se pueden administrar
hasta en el 85 % de los casos, por lo que se debe consi- analgésicos orales o parenterales, para obtener alivio sin-
derar una infección bacteriana. tomático.
En estudios realizados con esterilización del con- No deben utilizarse preparaciones tópicas, sobre
ducto y la membrana, y realización de timpanocentesis, todo si hay perforaciones, para evitar el riesgo de
el germen más aislado es el Streptococcus pneumoniae sobreinfección. En caso de otorrea, la OMS recomien-
hasta en el 40 % de los casos, seguido por el da el secado gentil del conducto.
Haemophilus influenzae no tipificable (20 a 30 %). En los últimos años, un grupo de estudios aleatorios
Otras bacterias aisladas son: Moraxella catharralis controlados, han demostrado resolución espontánea
(10 a 15 %), Streptoccocus beta hemolítico, hasta en el 80 % de niños con OMA. A esto se añade
staphiloccocus aureus (más frecuente en el recién el potencial de riesgo del uso de antibióticos y la apari-
nacido), bacterias anaerobias procedentes de flora nor- ción de resistencia bacteriana. Es por ello que muchos

Parte XII. Aparato respiratorio 929


autores recomiendan el tratamiento con antibióticos, de respiratorios, las de localización maxilar son las más fre-
inicio, en los menores de 2 años (por el mayor riesgo de cuentes. Las sinusitis frontales y esfenoidales son raras
complicaciones sépticas como la mastoiditis), en los ni- y, usualmente, se presentan como parte de una
ños con otorrea purulenta, sépticos, en otitis recurrentes pansinusitis.
y en aquellos que asisten a instituciones infantiles. En FISIOPATOLOGÍA
los niños mayores de 2 años, sin riesgo, la conducta se- Los 4 pares de senos paranasales se originan de
ría expectante en las primeras 48 h, y se indican invaginaciones de la cavidad nasal, y tienen como fun-
antibióticos en caso de no mejoría. ción proteger las estructuras intracraneales del trauma
El antibiótico de elección es la amoxicillina, ya que y mejorar la olfacción y la resonancia de la voz. Están
cubre los dos gérmenes más frecuentes. Se puede utili- recubiertos por un epitelio ciliado productor de mucus;
zar penicilina procaínica, de no tolerarse por vía oral. el mecanismo de depuración mucociliar es el encargado
La dosis de la amoxicillina es de 50 mg/kg/día que de su drenaje hacia la cavidad nasal a través del ostium
se puede elevar hasta 80 mg/kg/día en menores de 2 correspondiente.
años, cuando se ha recibido antibiótico recientemente y Las sinusitis se desarrollan cuando se afecta el dre-
en los que asisten a instituciones infantiles. En caso de naje normal de los senos y se retienen las secreciones
no haber respuesta al tratamiento en 72 h, debe mucosas. Esto da lugar a cambios en el pH y metabolis-
sospecharse resistencia antimicrobiana, y en este caso mo de la mucosa, daño del epitelio ciliado y sobrecre-
se puede utilizar amoxicillina asociada a ácido cimiento bacteriano.
clavulánico, un macrólido o cefalosporinas de 2da o 3ra Los factores predisponentes para la sinusitis son:
generación • IRA frecuentes en la niñez.
En niños alérgicos, debe utilizarse un macrólido o • Alergia.
cefalosporina. El cotrimoxazol no se recomienda, por la • Hipertrofias adenoideas.
alta frecuencia de neumococos resistentes a él en nues- • Discinesias ciliares.
tro medio. • Fibrosis quística.
La timpanocentesis o miringotomía se recomien- • Inmunodeficiencias.
da en tímpanos abombados y en niños con apariencia • Poliposis y tumores.
séptica. • Cuerpos extraños.
El tratamiento de las OMA se debe realizar du- • Anomalías congénitas: defectos de tabique, del com-
rante 7 días, aunque muchos autores recomiendan es- plejo osteomeatal y otros.
quemas cortos de 5 días, por los buenos resultados • Abscesos dentales.
obtenidos. • Reflujo gastroesofágico.

Sinusitis aguda Pacientes intubados o con sonda nasogástrica


La sinusitis aguda se define como un proceso in- prolongada también son más susceptibles de adquirir
flamatorio de la mucosa de uno de los senos paranasales sinusitis.
o más, con una duración de hasta 4 semanas. Si los sín- CAUSA
tomas persisten por más de este tiempo y hasta 12 se- Aunque los virus inician el proceso, las bacterias
manas, se trata de sinusitis subagudas, y después de los son los agentes causales fundamentales.
3 meses se consideran sinusitis crónicas. Las sinusitis Los gérmenes más frecuentemente aislados son
recurrentes son sinusitis agudas que se repiten 4 veces Streptoccocus pneumoniae, Haemophilus influenzae
al año o más. no tipificables y Moraxella catharralis. En sinusitis
En las rinofaringitis agudas hay participación de los crónicas se pueden encontrar infecciones mixtas y otros
senos paranasales, pero, generalmente, esta afectación gérmenes aerobios y anaerobios. Las aspergillosis son
desaparece en pocos días, al remitir el cuadro catarral. raras y se describen en individuos inmunodeficientes.
En individuos con factores predisponentes se puede es-
tablecer una sinusitis aguda, por lo que se considera una CUADRO CLÍNICO
complicación de una infección respiratoria aguda (IRA) En el niño, la sinusitis tiende a ser más insidiosa
alta, aunque no siempre su origen es infeccioso. que en el adulto. Generalmente, hay una historia de in-
Las sinusitis, también llamadas rinosinusitis por lo fección del aparato respiratorio superior que se prolon-
que expresamos, son más frecuentes en las edades es- ga más de 10 ó 14 días. Con frecuencia, se trata de un
colares y en las épocas de mayor circulación de virus escolar asmático que estaba controlado, y se presenta

930 Tomo III


con síntomas de asma y pobre respuesta al tratamiento de 4 a 6 semanas en casos subagudos. En general, se
después de una infección viral. recomienda mantener por 10 días más el tratamiento,
La fiebre no es común, y por lo general, es de bajo después que hayan remitido los síntomas.
grado. Puede haber secreción purulenta y obstrucción En niños alérgicos se puede usar un macrólido o
nasal, tos nocturna y menos frecuentemente dolor de cefalosporina.
oído o de garganta, halitosis, fatiga y sensación de cuer- El cotrimoxazol puede usarse, si no hay alta resis-
po extraño o flemas en la garganta, con la consiguiente
tencia del neumococo en la comunidad. En Cuba, la re-
carraspera o aclaramiento de garganta. En niños mayo-
sistencia reportada hace no recomendable su uso.
res, puede referirse cefalea, dolor facial o dental e
hiposmia. La respuesta al tratamiento es rápida y si no hay
El edema periorbitario es más frecuente en niños mejoría, se debe sospechar un germen productor de
pequeños y se asocia a etmoiditis. betalactamasas y debe utilizarse amoxicillina asociada a
En el examen físico se pueden apreciar secreciones inhibidores de las betalactamasas o una cefalosporina
o costras nasales, respiración bucal, edema periorbitario, de 2da. o 3ra. generación.
adenopatías submaxilares, dolor en la percusión sobre Los descongestionantes nasales tienen efecto de
los senos maxilares o frontales, faringe posterior rebote al suspenderlos, y no deben usarse de rutina.
granulosa o empedrada y desviaciones del tabique na- Los antihistamínicos solo están indicados en rinitis
sal. Se pueden observar secreciones al nivel del meato alérgicas, y los esteroides nasales tópicos pueden ser
correspondiente. Un examen físico nasal normal, no ex- muy útiles en las sinusopatías alérgicas por su efecto
cluye el diagnóstico. antiinflamatorio y porque previenen las sinusitis en estos
DIAGNÓSTICO niños.
La radiografía simple de los senos paranasales con-
firma el diagnóstico, con la presencia de opacificación, INFECCIONES RESPIRATORIAS BAJAS
niveles hidroaéreos o engrosamientos mucosos mayo- COMPLICADAS
res de 4 mm.
Si la historia y el examen físico son típicos de sinu- Complicaciones de las infecciones
sitis, no es imprescindible la confirmación radiográfica.
Si los síntomas persisten o recurren al terminar el trata- respiratorias bajas (IRA bajas)
miento, debe hacerse un estudio simple de los senos Las clasificaremos en intratorácicas y extra-
paranasales. torácicas.
La tomografía axial computarizada (TAC) está in-
dicada en sinusitis crónicas o recurrentes, para descar- Intratorácicas
tar anomalías congénitas. La resonancia magnética • Pulmonares
nuclear (RMN) es útil para evaluar complicaciones − Pleurales:
intracraneales u orbitarias de la sinusitis. Pleuresía purulenta o empiema.
El exudado nasofaríngeo tiene poco valor predictivo
Pioneumotórax, con o sin fístula broncopleural.
de la bacteria causante de la sinusitis. En pacientes
Neumotórax.
inmunosuprimidos, o con complicaciones orbitarias o
intracraneales, puede ser necesaria la punción del antro Engrosamiento pleural.
para estudio microbiológico. Pleuresías exvacuo (abiertas al exterior); son hoy
Se realizan otros estudios diagnósticos, en depen- excepcionales.
dencia del cuadro clínico y del factor predisponente sos- − Pulmonares propiamente dichas:
pechado. Abscesos pulmonares.
Fístula broncopleural.
COMPLICACIONES
Neumatoceles posinfecciosos.
Las complicaciones severas como celulitis y abs- Edema pulmonar no cardiogénico.
cesos periorbitarios, absceso peridural o subdural, trom- Reactivación de un foco tuberculoso.
bosis del seno cavernoso, meningitis y osteomielitis son
Neumopatía crónica secundaria a una neumo-
raras y ocurren generalmente, en niños inmu-
nía aguda.
nosuprimidos.
− Bronquiales:
TRATAMIENTO Atelectasias.
El antibiótico de elección es la amoxicillina, en do- Bronquiectasias.
sis máxima durante 14 a 21 días, la que puede extenderse Bronquitis crónicas.

Parte XII. Aparato respiratorio 931


Hiperreactividad bronquial (discutida). Muchas de las manifestaciones clínicas de las pleu-
Colapso piógeno broncopulmonar de William y resías son las mismas de las neumonías, de las cuales
O’Reilly. son una complicación: fiebre de intensidad variable, pero
• No pulmonares (mediastinales o cardíacas): que persiste o reaparece, a veces “en agujas”, polipnea
− Mediastinitis. y tiraje bajo o generalizado que aumentan, astenia, ano-
− Miocarditis. rexia, estado toxiinfeccioso, con un examen físico (EF)
− Endocarditis. en que se pondrán de manifiesto los signos de consolida-
− Pericarditis, con derrame o no; con o sin de en- ción de una neumonía lobar o los de una bronconeumonía,
grosamiento pericárdico. cuando el empiema es pequeño. Cuando el volumen de
− Neumomediastino. pus es moderado o abundante, además de los síntomas
− Adenopatías mediastinales, medianas o grandes.
generales antes mencionados, se encontrarán signos de
interposición líquida: a la inspección, además de la
Extratorácicas polipnea y el tiraje, se podrá encontrar los espacios
intercostales abombados (en niños pequeños); a la pal-
• Ileo paralítico.
pación, las vibraciones vocales estarán disminuidas o
• Dilatación gástrica aguda.
• Deshidratación hipertónica. abolidas; a la percusión, submatidez o matidez; a la aus-
• Hiponatremia, hipoglucemia y quetosis de ayuno (so- cultación, disminución o abolición de las vibraciones vo-
bre todo en desnutridos o recién nacidos). cales al llanto (niños pequeños) o al decir “treinta y tres”
• Shock séptico. (niños mayores que cooperan), disminución o abolición
• Otitis media aguda. del murmullo vesicular o de la respiración soplante si
• Sinusitis. existía antes, así como la desaparición o dificultad para
• Edema pulmonar no cardiogénico. escuchar los estertores húmedos, subcrepitantes finos o
• Conjuntivitis purulenta. crepitantes, que se encontraban debido a la neumonía
• Localizaciones a distancia: meningitis, absceso cere- subyacente. La auscultación del latido de la punta del
bral, osteomielitis, artritis supuradas, celulitis, septi- corazón estará desviada hacia el lado opuesto del em-
cemias y otras. piema, y esta desviación depende de la cantidad del de-
rrame purulento. Por esto, en todo derrame pleural se
Pleuresía purulenta (empiema) debe marcar el sitio en donde se ausculta mejor el latido
Es la acumulación de pus en el espacio pleural. de la punta y una desviación de este, hacia el lado opuesto
Junto con los abscesos pulmonares, es la complicación de la pleuresía, casi siempre acompañada de aumento
más frecuente de las neumonías bacterianas. Con fre- de la polipnea y del tiraje, nos indica que se ha producido
cuencia son unilaterales. Se producen por infecciones un aumento del pus coleccionado entre las dos “hojas”
pulmonares estafilocócicas (principalmente en lactantes), pleurales y tomar medidas adecuadas.
por Haemophilus influenzae (raras después del uso
de la vacuna) y neumococos; son más raras por otras EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
bacterias como las Klebsiellas pneumoniae y otras El hemograma, habitualmente, presenta leucocitosis
bacterias aeróbicas. Más raramente por bacterias con neutrofilia y a veces desviación hacia la izquierda y
anaeróbicas. Casi siempre en neumonía secundarias a gránulos tóxicos intraleucocitarios.
infecciones en la boca o por intervenciones quirúrgicas La eritrosedimentación estará aumentada así como
odontológicas o de ORL. la proteína C reactiva (PCR) con títulos elevados.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS En la radiografía de tórax, frontal y acostada, cuan-
Habitualmente se presentan temprano en el curso do hay cierta cantidad de pus, habrá una radiopacidad
de las neumonías lobares o de las bronconeumonías; con en la periferia del campo pulmonar de 1 cm o más o
menos frecuencia cuando estas neumonías van mejo- estar totalmente opaco. Podrá haber desviación hacia
rando y más raramente después de que las manifesta- el lado opuesto del corazón y otras estructuras del
ciones clínicas han desaparecido días antes. En toda mediastino, signo que indica un empiema de gran volu-
neumonía en que han desaparecido los síntomas o estos men sobre el cual hay que actuar rápidamente. La ra-
han mejorado, la reaparición de la fiebre y otras mani- diografía, de pie y frontal, puede demostrar un nivel
festaciones o síntomas toxiinfecciosos nos hará pensar hidroaéreo. Clásicamente, se describe que a los cam-
en la posibilidad de una complicación: empiema, absce- bios de posición, la opacidad, en caso de derrames mo-
sos pulmonares o ambos. derados o pequeños, cambia su nivel, pero cuando el

932 Tomo III


pus es espeso o hay tabicaciones, esto no se constatará. antígenos bacterianos. Según algunas publicaciones más
En derrames de cierta magnitud se puede encontrar, a la del 70 % de las bacterias que producen los empiemas
radiografía frontal acostada, en la periferia del campo son anaerobias, alrededor del 20 % puede haber una
pulmonar, una zona marginal ligeramente más mezcla de bacterias aerobias y anaerobias, y menos del
radiotransparente; cuando existe, nos permitirá descar- 10 % son anaerobias.
tar un engrosamiento pleural. En la opacidad se pudie- COMPLICACIONES
ran observar zonas menos densas y en niños pequeños Las más importantes son un absceso pulmonar, que
un ensanchamiento de los espacios intercostales del lado también complica la neumonía, y que drene a la pleura
afectado (Fig. 69.8). produciendo un empiema o pioneumotórax con fístula
broncopleural; una pericarditis, con derrame o sin él, sobre
todo en empiemas del hemitórax izquierdo (por contigüi-
dad o abertura del empiema dentro de la cavidad
pericárdica), mediastinitis, peritonitis (por ruptura del
empiema a través del diafragma, lo cual es raro),
osteomielitis en costillas, derrame exvacuo (por empie-
ma a presión e infección con necrosis de la pared del
tórax; es hoy excepcional), y localizaciones sépticas a
distancia como artritis, meningitis, etc. La bacteriemia o
septicemia es más frecuente en los empiemas por
estafilococos o neumococos invasivos o Haemophilus
influenzae tipo b (aunque esto es muy poco frecuente
hoy por el uso de la vacuna). Evolutivamente, puede
producirse un engrosamiento pleural, a veces por no
evacuar de manera adecuada el pus en tiempo y forma.
Habitualmente, evolucionan bien entre nosotros sin de-
jar secuelas.
TRATAMIENTO
Lo dividiremos en: medidas generales, locales, es-
pecíficas y medidas innecesarias y hasta perjudiciales.
(Ver Tratamiento de las IRA no complicadas.)
Se deben aclarar ciertos aspectos:
Fig. 69.8. Neumonía del pulmón izquierdo con derrame
• Medidas locales
pleural asociado.
Cuando el pus es escaso y no espeso se debe aspi-
El ultrasonido torácico permite, cuando hay dudas, rar lo más posible por toracocentesis o punción pleural,
determinar la existencia de empiema, su cantidad aproxi- pero no están justificadas las punciones aspirativas a
mada, así como la evolución del derrame, su aumento o repetición para evacuar el pus.
disminución, y la presencia de tabicaciones o abscesos En lugar de ellas, o si la pleuresía es de cierta exten-
pulmonares. Además, evitará la repetición de radiogra- sión, se realiza una toracotomía mínima introducien-
fías con su peligro de excesivas radiaciones y un costo do una sonda con varios orificios, para evitar se
menor por paciente. obstruya, conectada a un equipo adecuado con as-
La TAC solo se utilizará cuando se sospechen otras piración contínua. No se realizarán presiones negati-
lesiones o haya dudas diagnósticas. vas mayores de 8 cm de agua, pues cifras más altas
En la fase inicial, el líquido pleural, claro, presenta
pueden favorecer la aparición de una fístula
un pH menor de 7,20; la dehidrogenasa láctica (DHL)
broncopleural o ampliarla, si existía previamente.
será mayor de 200 U/dL; una glucosa inferior a 60 mg/
La instilación de fibrinolíticos o enzimas en la pleura,
dL o con cifras la mitad o menores que la glucemia del
paciente; la proteína será superior a 3 g/dL y Pandy po- muy recomendada en los 90, se discute actualmente,
sitivo. Estos datos permitirán diferenciar la pleuresía de pues hay publicaciones que plantean que a la larga
un trasudado. no ofrecen ventajas sobre su no utilización, y ade-
El estudio bacteriológico del pus obtenido por pun- más, se pueden producir reacciones debido al pro-
ción pleural o toracocentesis nos puede poner de mani- ducto instilado.
fiesto las bacterias causales por tinción de Gram, por El engrosamiento pleural pequeño no será tratado,
cultivo en medios adecuados y/o por la búsqueda de pues desaparece en pocas semanas. Su evolución se

Parte XII. Aparato respiratorio 933


sigue por US torácico. En los engrosamientos me- afecciones como, por ejemplo, una neumonía lobar o una
dianos o grandes se recomienda decorticación pleural, bronconeumonía. Trataremos sobre estas dos últimas
últimamente con lasser. En los últimos 40 años, en causas. Su frecuencia ha disminuido en los países desa-
estos engrosamientos, después que el cuadro clínico rrollados, debido a un mejor tratamiento de las neumo-
ha mejorado significativamente con antibióticos por nías y a la eliminación de factores de riesgo. En los países
2 semanas, y descartada TB u otras causas que la en desarrollo persisten en su frecuencia y en la letalidad
contraindiquen, hemos utilizado prednisona o o secuelas que dejan.
prednisolona, bucal, 1 a 2 mg/kg/24h, durante 1 a 2 Los abscesos pulmonares que complican a las neu-
semanas. Además, en niños que cooperan, soplar monías, también llamados paraneumónicos o
varias veces, por un globo o guante elástico. Este metaneumónicos, son producidos por diversos
ejercicio se repite 3 veces al día. Los pacientes microorganismos en particular por bacterias, sobre todo
evolucionan satisfactoriamente sin necesidad de te- aeróbicas: Estafilococos aureus, Haemophilus
ner que realizar, posteriormente, toracotomía y influenzae, Streptococus pneumoniae y con menos
decorticación. Al final, si queda algún engrosamien- frecuencia Estreptococos alfa y beta, E. coli, Klebsiella
to pleural, que casi siempre es pequeño, se seguirá pneumoniae, u otras. Pueden ser producidos, menos
por la clínica y ultrasonido torácico. frecuentemente, por bacterias anaeróbicas, casi siem-
• Medidas específicas pre por aspiración de material contaminado por bacte-
Lo ideal es utilizar un antibacteriano, según la sensi- rias anaeróbicas del grupo bacteroides, fusobacterias o
bilidad de la bacteria encontrada en el líquido pleural. cocos grampositivos y procedentes de la orofaringe por
Sin embargo, sobre todo cuando se han usado gingivitis o abscesos peridentarios o por intervenciones
antibacterianos previamente, esto no es posible mu- odóntológicas o de ORL.
chas veces o puede que no existan facilidades para Los abscesos pueden ser únicos o múltiples, los
estudios microbiológicos del pus. Se utilizarán los padecen 2 veces más los pacientes del sexo masculino y
antibacterianos indicados en Tratamiento de las IRA son más frecuentes en el pulmón derecho. Hay autores
(en la tabla sobre antibacterianos en neumonías que establecen que los abscesos predominan en la parte
lobares o bronconeumonías muy graves). posterior de los lóbulos superiores o en el segmento apical
El lavado pleural con antibióticos o su instilación en de los lóbulos inferiores.
la cavidad pleural no han demostrado mejores resul- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
tados que el uso de terapéuticas antibacterianas por Muchas veces se superponen a los de la neumonía
vías i.v., i.m. o bucal. Incluso, se pueden producir que presenta el niño: polipnea, tiraje, tos húmeda gene-
efectos muy graves y hasta mortales por la introduc- ralmente y expectoración en niños mayores que tam-
ción de algunos tipos de antibióticos (como los bién se pueden quejar de dolor en la zona afectada al
aminoglucósidos) en la pleura por bloqueo de la pla- respirar o al toser. La reaparición de la fiebre en un niño
ca mioneural y paro respiratorio, o una infección se- con neumonía o el mantenimiento de aquella por 2 a 4
cundaria por bacterias resistentes. días después de comenzado un tratamiento adecuado,
• Medidas innecesarias o hasta perjudiciales nos debe hacer sospechar una complicación: absceso
No se ha demostrado que la utilización de inmuno- pulmonar, empiema o ambos. Se pueden acompañar
globulina hiperinmune por vía i.v. mejore el pronósti- además de escalofríos, sudores, expectoración purulenta
co de los empiemas. Tampoco están indicadas, y un aumento o aparición de un estado toxinfeccioso.
habitualmente, las transfusiones con cifras de he- La fiebre puede ser mantenida o intermitente, con “pi-
moglobina superiores a 6 g %. cos febriles” que pueden durar hasta 2 a 3 semanas aun-
que el niño esté evolucionando satisfactoriamente con
Absceso pulmonar
desaparición del estado toxiinfeccioso, mejoría del ape-
El absceso pulmonar se define como una lesión
tito, buena actividad y EF mejorando. La expectoración
necrótica, supurativa, única o múltiple. La zona
necrosada se licúa, pudiendo evacuarse, parcial o total- puede ser mucopurulenta o purulenta y a veces muy
mente por un bronquio, habitualmente fino, producién- abundante y brusca en forma de vómito (vómica) pro-
dose la clásica imagen radiológica, redondeada la duciendo, en niños pequeños, la muerte por obstrucción
mayoría de las veces, con la periferia gruesa, más densa bronquial severa por el pus aspirado y evacuado súbita-
y una zona central, clara o con un nivel hidroaéreo (cuan- mente, aunque esta situación es rara hoy en día. En
do se realiza de pie). Pueden ser primarios o secunda- pacientes con abscesos por anaerobios la expectoración,
rios, estos últimos producidos a partir de diversas además de tener un aspecto pútrido, será fétida y el

934 Tomo III


aliento también presentará fetidez, habrá fiebre alta, pos- una técnica y medios de cultivo diferentes para las bac-
tración severa y estado toxinfeccioso intenso. Puede terias anaeróbicas que para las aeróbicas.
haber hemoptisis en abscesos por aerobios o anaerobios. El hemocultivo (en menos del 15 %) o el
En la zona afectada se encontrará matidez o subma- medulocultivo (2 veces más positividad) podrán ser po-
tidez, estertores húmedos (crepitantes o subcrepitantes sitivos a la bacteria productora del proceso.
finos), broncofonía, soplo tubario o menos frecuentemen- DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
te soplo cavernoso. Si los abscesos son pequeños pue-
Se realizará con la tuberculosis cavitada, las
den no existir manifestaciones estetoacústicas o ser muy
bronquiectasias, los quistes y otras malformaciones
discretas; por ejemplo, una alteración del murmullo
pulmonares infectadas secundariamente o los
vesicular. La aparición de dedos en “palillo de tambor”
neumatoceles posinfecciosos infectados secundariamen-
se encontrará en abscesos de evolución prolongada con
te (esto último no es frecuente).
poca o ninguna mejoría, algo difícil de encontrar hoy
debido a un tratamiento precoz y adecuado. COMPLICACIONES

EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
Pioneumotórax (la más frecuente), fístula
broncopleural, empiema, neumotórax, atelectasias de
Se encontrará al hemograma leucocitosis con
zonas pulmonares comprimidas por el absceso o de otras
neutrofilia y desviación hacia la izquierda; la
estructuras en contacto con este, mediastinitis, hemo-
eritrosedimentación y la proteína C reactiva elevadas
rragias masivas (raras), muerte por obstrucción masiva
francamente.
bronquial por pus (raras); o focos sépticos a distancia
Las radiografías, frontal y lateral, presentarán una
(como abscesos cerebrales). Las bronquiectasias pue-
o varias zonas redondeadas, a veces cuneiformes en una
den manifestarse en un tiempo más o menos largo que
vista y redondeada en otra, más densa y gruesa en la
sigue al absceso.
periferia y que puede presentar con su evolución, en su
centro, zonas más claras o una imagen hidroaérea que TRATAMIENTO
cambia según la posición en que se coloque el enfermo. Igual al de toda neumonía grave (bronconeumonías
A veces en su centro claro, se pueden encontrar zonas o neumonías lobares o segmentarias). Comprenden me-
más densas, expresión radiográfica del tejido pulmonar didas generales: contra la fiebre y el dolor, la dieta, el
necrótico. La desaparición de los hallazgos radiológicos reposo, etc.; medidas locales, en donde se tendrá en cuenta
se produce entre 1 a 3 meses, pero puede no ser com- la aspiración intracavitaria o drenaje por broncoscopia o
pleta hasta 6 meses de comenzada la abscedación. por vía transtorácica bajo control por ultrasonido torácico;
El ultrasonido del tórax, en la zona afectada, per-
medidas específicas (antibioticoterapia) y medidas inne-
mitirá comprobar, muchas veces, una o varias zonas
cesarias o hasta perjudiciales (Ver Tratamiento de las
ecolúcidas equivalentes a las zonas claras de la radio-
IRA no complicadas.)
grafía (y que se presentarán antes que en estas). -Por
Hay que aclarar que casi siempre se comenzará
ello el US sirve para un diagnóstico más precoz de los
con un tratamiento médico conservador al que seguirá
abscesos y para su evolución, evitando el uso innecesa-
un tratamiento medicoquirúrgico cuando no presentan
rio de radiaciones.
una evolución satisfactoria en pocas semanas. Estas úl-
La TAC es muy útil para el diagnóstico, en situa-
timas consistirán en algunas de estas variantes:
ciones que requieren una mejor definición y localización
• Aspiración broncoscópica para tratar de evacuar la
anatómica del absceso; se puede observar una reacción
mayor cantidad de pus, en abscesos no pequeños.
pleural o un derrame acompañante, con una (o más de
Muchos lo consideran como un tratamiento precoz y
una) imagen pulmonar densa, casi siempre redondeada,
que debe repetirse hasta el máximo drenaje del pus,
más clara en su centro, típico del absceso.
aunque no todos están de acuerdo con las repeticio-
Los abscesos, por imagenología, se pueden encon- nes de esta técnica.
trar en cualquier zona del pulmón, aunque son más fre- • Punción transtorácica pulmonar y aspiración bajo US.
cuentes en los lóbulos superiores, sobre todo el derecho, • La inserción de un cateter o sonda transtorácica e
el lóbulo inferior izquierdo y el segmento apical basal de intracavitaria con aspiración contínua por horas o
los lóbulos inferiores. pocos días generalmente (Monaldi).
Los estudios bacteriológicos de la expectoración o • Resección segmentaria o lobectomía, cuando las con-
del material aspirado por broncoscopia, o por punción ductas anteriores han fracasado y el proceso se pro-
pulmonar bajo control ultrasonográfico, podrán demos- longa, con poca o sin mejoría, tratando de extirpar
trar las bacterias productoras del proceso; se utilizará la menor cantidad de tejido pulmonar normal. Para

Parte XII. Aparato respiratorio 935


muchos este proceder no debe demorarse semanas no en todas las cavidades demostradas en las radiogra-
por la aparición de adherencias o engrosamientos fías de tórax, nos referiremos a aquellas cavidades en el
pleurales que obligarían a utilizar una técnica más pulmón que aparecen generalmente en las primeras 3
amplia y mayor resección de tejido pulmonar. semanas (más frecuentemente al final de la primera se-
mana) de una neumonía lobar o segmentaria o en
El tratamiento con antibióticos será según la bac- bronconeumonías con una zona en que confluyen los
teria sospechada o encontrada y con su sensibilidad de- focos inflamatorios con el aspecto radiológico de una
mostrada. En la primera posibilidad, hay que tener en neumonía lobar o segmentaria. Algunos los denominan
cuenta que en los lactantes con abscesos pulmonares, neumatoceles posinfecciosos.
las bacterias más frecuentes que los producen son los Se han planteado en las neumonías estafilocócicas
Estafilococos aureus coagulasa positiva (penicilina cris- o por Klebsiella pneumoniae, pero también se descri-
talina o cloxacilin más un aminoglucósido: gentamicina o ben en neumonías producidas por Haemophilus
amikacina); en preescolares o escolares cuando no se influenzae, Streptococcus pneumoniae y, menos fre-
encuentra la causa, se comenzará con una penicilina cuentemente, en otras neumonías bacterianas.
(bencilpenicilina o cloxacilina) más cloranfenicol o una Hay dos opiniones sobre su producción:
cefalosporina de tercera o cuarta generación (Cuadros Una, la más descrita, es la ruptura de alvéolos in-
69.14, 69.15 y 69.16). flamados, que dejan pasar el aire al tejido pulmonar que
Según el juicio clínico, se utilizarán el o los los rodea y por eso la cavidad tiene una forma redon-
antibacterianos escogidos por no menos de 3 semanas. deada: por la elasticidad del tejido pulmonar; y se produ-
Hay quienes recomiendan continuar por vía bucal hasta ce un mecanismo a válvula, por lo que penetra más aire
4 a 8 semanas como tratamiento total desde el diagnós- en la cavidad que el que sale, por lo que la cavidad au-
tico del absceso, pero la duración total dependerá de la menta, hasta que las presiones se igualan dentro de esta,
evolución clínica e imagenológica. En abscesos por bac-
se cierra el mecanismo a válvula y después el aire se
terias anaeróbicas se recomienda penicilina cristalina
reabsorbe, no dejando secuelas.
(bencilpenicilina) a la dosis de 150 000 U/ kg/dosis por
La otra, que plantea que la ruptura se produce en
vía i.v. c/4-6 h (dosis máxima de 12 000 000 U/24 h),
los bronquiolos y se siguen los mismos pasos que la pri-
metronidazol i.v. en dosis de 5mg kg/6 h. La duración
mera opinión.
del tratamiento será como mínimo de 21 días y según
evolución clínica e imagenológica. En los abscesos pro- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
ducidos por estafilococos se recomienda una duración En la gran mayoría de los casos, es un hallazgo
del TTT de 3 a 6 semanas. imagenológico en el curso de una neumonía durante las
Cuando se utilicen antibacterianos por tiempo pro- 2 a 3 primeras semanas de su evolución, que se hace
longado se debe vigilar el cambio de flora intestinal. Al-
más manifiesto a medida que la neumonía regresa, au-
gunos recomiendan por vía bucal productos derivados
del Saccaromyces boulardi o lactulosa que se descri- mentando su tamaño hasta que se equiparan las tensio-
ben que evitan el cambio de flora intestinal y la aparición nes aéreas entre la cavidad y la de las vías aéreas con la
de enteritis por anaerobios, sobre todo por el Clortridium que se comunica por un mecanismo a válvula, para re-
difficile o vigilar la aparición de deposiciones blandas o gresar en semanas posteriores, sin que presenten sínto-
semilíquidas con eritema perianal. No se debe esperar mas característicos.
por el cuadro de deposiciones líquidas, sanguinolentas o Sin embargo, en ocasiones, el aumento del aire
no, con distensión abdominal y radiografías abdominales dentro de la cavidad se incrementa progresivamente y
con paredes intestinales engrosadas y en casos más gra- se hace más grande, comprimiendo zonas adyacentes
ves, con signos de neumatosis quística intestinal y hasta del pulmón que se hacen atelectásicas y se puede pro-
hepatograma aéreo. La administración de probióticos ducir un conflicto de espacio grave con compromiso en
constituyen un tema actual; la utilización de yogourt bio- la función respiratoria, dando lugar a una insuficiencia
lógico producido por ciertas bacterias, es el más barato
cardiopulmonar que necesita una terapéutica de urgencia.
medio para evitar las disbacteriosis, aunque algunos no
lo recomiendan. Otras veces, la presión dentro del neumatocele
aumenta progresivamente y conduce a su ruptura entre
Neumatoceles las 2 hojas de la pleura, con una fístula broncopleural o
Aunque etimológicamente neumatocele significa ca- no, creándose un neumotórax a tensión con sus mani-
vidad pulmonar (de “neumo” = pulmón, “cele” = cavidad) festaciones clínicas de polipnea y tiraje progresivos,
y hay autores que así lo consideran, al utilizar este térmi- abombamiento del hemitórax correspondiente (en

936 Tomo III


lactantes), hipersonoridad de ese lado y disminución o sión negativa baja (menor de 8 cm de agua), un drenaje
ausencia del murmullo vesicular con desviación del sellado o un drenaje abierto al exterior (si hay fístula
mediastino hacia el lado opuesto y dificultad ventilatoria broncopleural).
y circulatoria en el otro pulmón, que se traduce por insu- Los neumatoceles infectados secundariamente
ficiencia cardiorespiratoria y hasta la muerte si no se (poco frecuentes) se tratarán como un absceso pulmonar.
actúa rápidamente. (Ver Tratamiento del absceso pulmonar).
Más raramente se puede infectar la cavidad pro-
Bibliografía
duciéndose las manifestaciones clínicas y radiológicas
Mecanismo de defensa del aparato respiratorio
de un absceso pulmonar. Afzelius B, Mossberg B and Slein E: “Immotile cilia Syndrome”.
A la radiografía de tórax, se encontrará una o más Page: 4817-27. In: Scriver, The metabolic basis of inherited
de una cavidad con aire en su interior y con bordes finos diseases. 8th Ed. Mc Graw Hill, New York, London, 2001.
Baker C, Evans T, Randie B and Haslam P: “Damage to surfactant-
sin signos inflamatorios, que aumenta hasta cierto punto, specific protein in acute respiratory distress syndrome”.
disminuyendo, después progresivamente en algunas se- Lancet, London, 1999; 353: 1232-7.
Bloem PG, Henricks P and Nykamp P: “Cell adhesion molecules
manas. Repetimos, esto es lo más frecuente. Otras ve- and asthma”. Clin Exp All, 1997; 27: 128-41.
ces, cuando la evolución no es satisfactoria, se observará Burroughs M, Horga MA, Murrell T and Moscosa A:
“Respiratory infections”. Page: 439-52. In: Krugmans
una cavidad con un aumento progresivo y hasta una des- Infectious Diseases of Children. 11th Ed, Mosby Co, USA,
viación de las estructuras del mediastino hacia el otro 2004.
Casale T: “Small airways large effects”. American College of
pulmón (que aparece congestivo). Allergy, Asthma and Immunology. Annual Meeting, Nov 13,
Cuando existe neumotórax las manifestaciones 1998.
radiográficas serán las de esta entidad: radiotransparencia Cazzola P: “Neutrophil function and humoral immunity in children
with recurrent infection”. Ann All, 1989, 63(9): 213-8.
mayor o menor según la severidad del proceso con el Cheung CY, Poon LL, Lan AS, Lu Kw, Lan YL, Shortridge KT et
pulmón atelectasiado y hasta desviación del mediastino al: “Induction of proinflammatory cytokines in human
macrophages by Influenza A virus”. Lancet, London, 2002;
hacia el otro lado, en casos severos 360: 1831-7.
En neumatoceles infectados secundariamente el Crapo JD: “Estructura y función respiratoria”. Page: 417-22. In:
cuadro radiográfico (y clínico) será el correspondiente a Goldman-Bennett: Cecil. Tratado de Medicina Interna, 21th
Ed, Mc Graw Hill, Interamericana de España, 2000.
un absceso pulmonar. Diamond G and Bevin CH: “Beta defensinas: endogenous
antibiotics of the innate host defence response”. Clin
EVOLUCIÓN
Immunol Immunopath, 1998; 88(3): 221-5.
Dependerá de cómo se comporte el mecanismo a Hadalad G and Pérez J: “Defence mechanism and metabolic
válvula entre las vías aéreas y la cavidad. Habitualmen- functions of the lung”. Page: 1373-5. In: Berhman, Kliegman
and Jenson. Nelson Textbook of Pediatrics.17th Ed. Saunders
te después de aumentar, regresan de tamaño sin dejar
Co, Philadelphia, 2003.
secuelas clínicas o imagenológicas. Cuando hay un au- Jorrinsen M: “Correlations among mucociliary transport, ciliary
mento progresivo de la tensión intracavitaria se pueden function and ciliary structure”. Am J Rhinol, 1998; 12(1): 53-8.
presentar conflictos de espacio o ruptura de la cavidad Kaltreide H: “Immune mechanism in the normal lung”. Seminar
en la pleura, por lo que se produce un neumotórax como Respir Med, 1998; 38(7): 143-55.
Luster A: “Chemokines: chemotactic cytokines that mediate
se describió en el cuadro clínico. Cuando se infectan, inflammation”. N Eng J Med, Boston, 1998, 338(7): 436-44.
evolucionan como un absceso pulmonar. Manin LD, Rochelle LG, Fisher B, Krunkosky t and Adler K:”Airway
ephitellium as a factor of inflammation: molecular regulation of
TRATAMIENTO
secondary mediators”. Eur Respir J, 1997; 10: 2139-46.
Habitualmente es expectante, sin tomar ninguna Manin T: “The relationship between malnutrition and lung
infection”. Clin Chest Med, 1987; 8(3):359-72.
medida, aunque el tamaño de la cavidad hay que seguir- Maus V et al: “Expression of proinflammatory cytokines by flow-
lo evolutivamente por imagenología, en particular por US sorted alveolar macrophages in severe pneumonia”. Eur
torácico, Cuando hay un conflicto de espacio da buenos Respir J, Copenhagen, 1998; 11: 534-41.
Middleton. Normal lung defences. Allergy: Principles and practice.
resultados la técnica de Monaldi: pleurotomía mínima con 5th Ed, Mosby Year Book Inc, New York, 1998.
colocación de un catéter o sonda en el interior de la ca- Murphy S and Florman A: “Lung defences against infections: A
clinical correlation”. Pediatrics, Evanston, 1983; 72(1): 1-15.
vidad, que se conecta con un sistema de drenaje sellado; Pennington J: “Respiratory tract infections: Intrinsic risk factors”.
esto ocasiona la disminución progresiva de la cavidad, Am J Med, 1984; 15: 34-41.
hasta su desaparición casi o totalmente, en pocos días Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
children, 3rd Ed, pp234, Blackwell Scientific, London, 1990.
sin dejar secuelas clínicas ni imagenológicas. Lo mismo Reynolds H and Elias J: “Pulmonary mechanism against
se realizará si existe una fístula broncopleural o en un infections”. Page: 265-75. In Fishman’s Pulmonary Diseases
and disorders. 3rd Ed, Mc Graw Hill, New York, London,
neumotórax, pudiendo utilizarse una aspiración con pre- 1998.

Parte XII. Aparato respiratorio 937


Richardson M: “Sore throat: tonsillitis and adenoiditis”. Med Clin Mandell D and Bennetts: “Principles and practice of infectious
North Am, 1999; 83(1): 75-83. diseases”. 4th Ed, Churchill Livingstone, New York, 1995.
Sybille Y and Reynolds H: “Macrophages and polimorphonuclear Marrie T: “Community-acquired pneumonia: Epidemiology,
neutrophils in lung defences and injury”. Am Rev Respir Dis, etiology and treatment”. Infect Dis Clin North Am,
1990; 141: 471-501. Philadelphia, 1998; 12(3): 723-40.
Sleigh M, Blake J and Liron M: “The propulsion of mucus by Martinez VA: “Person to person transmission of Andes
cilia”. Am Rev Respir Dis, 1998; 137: 726-41. Hantavirus” Emerg Inf Dis. 2005;11(12):1848-53
White JC: “Impairment of antibacterial defence mechanism of the Mulholland K: “Magnitude of the problem of childhood
lung by extrapulmonar infection”. J Infect Dis, Chicago, pneumonia”. Lancet, London, 1999; 354: 590-2.
1986; 153(2): 202-8. Noticias sobre AIEPI. OPS, Washington, 1999, No. 2.
OMS: “Clasificación estadística internacional de enfermedades y
problemas relacionados con la salud: CIE-10. Décima
Las infecciones respiratorias agudas y su control revisión”. Public Científica No.954, Washington DC, 1995.
Atkinson W, Wolfe CH, Hamilton SH and Nelson R: Ottmani S, Scherpbier R, Pio A et al: “PAL: A primary health care
“Epidemiology and prevention of vaccine-preventable strategies for the integrated management of respiratory
diseases”. CDC, 6th Ed, Atlanta, USA, 2001. conditions in people under five years of age and over”. WHO,
American Academy of Pediatrics: “Appropriate use of 2005.
antimicrobial agents”. Page: 695-7. In: Pickering LK. Red Palofox M et al: Diagnostic value of tachipnea in pneumonia defined
Book 2003. Report of the Committee on Infectious Diseases. radiologically”. Arch Dis Child, London, 2000; 82: 41-5.
26th Ed Elkgrove Village, USA, 2003. Pérez J, Tejero MA, Madrid A et al: “Neumonía adquirida en la
Bellamy C: “Progreso para la infancia”. UNICEF, New York, Vol comunidad”. Page: 1-14. In: II Curso Nacional de
Actualización en Neumología Pediátrica. Cobas Barroso N.
1, 2003.
Ergon Madrid, 2005.
Bellamy C: “Estado Mundial de la infancia, 2004”. UNICEF, New
Pichichero M: “Understanding antibiotic overuse for respiratory
York, 2003.
tract infection in children”. Pediatrics, Evanston, 1999; 104:
Benguigui Y, Lopes Antuñano FG, Schmunis G and Yunes J: 1260-2.
“Infecciones Respiratorias en niños. OPS. Serie HCTI AIEPI- Pio A: “La magnitud del problema de la infecciones respiratorias
1, Washington, DC, 1997. agudas”. Rev Cubana Med Gen Integ, La Habana; 1986; 2(4):
Burrough M et al: “Respiratory infections”. Page: 493-532. In: 91-3.
Krugman’s Infectious Diseases of Children. 11th Ed, Mosby Rojo M, González J, Razón R and Mir J: “Neumonías”. Page:
Co, USA, 2004. 338-53. In: Machado O. Manual de diagnóstico y tratamiento
Cox N: “Prevention of control of influenza”. Lancet, London, en Pediatría, Ed. Pueblo y Educación, La Habana, 1986.
1999; 354: 527-8. Shann F and Steiford M: “Vaccines for children in rich and poor
Cuba. Ministerio de Salud Pública: “Anuario estadístico”. Editorial countries”. Lancet, London, 1999; 354: Suppl: s7-11.
de Ciencias Médicas, La Habana 2004. The evolution of diarrhoeal and acute respiratory disease control at
Cuba. Ministerio de Salud Pública: Programa Integral de atención y WHO, Department of Child and Adolescent Health and
control de las IRA”. Ed Ciencias Médicas, La Habana, 2000. Development. WHO-CHS-CA H-99-12, 2000.
Douglas R: “Infecciones respiratorias agudas en la niñez. Taller Tosjesen K and Olness K: “Child health in the developing world”.
Internacional de Sydney, Australia”. Rev Cubana Med Gen Page: 1214. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson
Integ, La Habana, 1986; 2(4): 65-7. Textbook of Pediatrics.17th Ed. Saunders Co, Philadelphia,
2003.
Factor S, La Claire J, Bronsdon M, Suleymanova F, Altinbaeva G,
Tratamiento de la neumonía en el medio comunitario. UNICEF/
Kadirof B, Shamieva V et al: “Streptococcus Pneumoniae and
OMS. 2004.
Haemophilus Influenzae type b carriage Central Asia”. Emerg Watson R et al: “Anti-microbial use for pediatric upper
Infect Dis, 2005; 11(9): 1476-80. respiratory infections: reported, practice, actual practice and
Garenne M, Ronsman C and Campbell H: “The magnitude of parental belief”. Pediatrics, Evanston, 1999; 104: 1251-7.
mortality from acute respiratory infection in children under
five years in developing countries”. Rapp Trimest Statist Factores de riesgo en las infecciones respiratorias agudas
Sanit Mond, 1992; 45: 180-91. Bellamy C: “Progreso para la Infancia”. UNICEF. New York,
González JA: “Comentarios”. Rev Cubana Med Gen Integ, La 2004.
Habana; 1986; 2(4): 91-3. Bellamy C: “Estado Mundial de la Infancia 2004”. UNICEF. New
González JA y Riverón R: “Mortalidad por Infecciones York, 2004.
Respiratorias Agudas en el menor de 5 años. Cuba 70-93”. Bisgard KM, Kao A, Leakej PM, Strebel B and Perkins et al:
Congreso Latinoamericano de Pediatría, Costa Rica, 1994. “Haemophilus Influenzae invasive disease in the United
H5N1 Avian Influenza virases in Asia. WHO Global Influenza States, 1994-1995: near disappearance of a vaccine-
Program Surveillance Network. Emerg Infect Dis, 2005; preventable childhood disease”. Emerg Infect Dis, 1998,
4(2)229-36.
11(10):1515-21
Burroughs M: “Respiratory Infections”. Page: 493-530. In:
Infecciones respiratorias agudas. IRA, OMS.ARI-90-17, Ginebra, 991. Krugman’s Infectious Diseases of Children. 11th Ed, Mosby
Infecciones respiratorias agudas. Pro-salute Novi Mondi. OPS, Co, USA, 2004.
Washington DC, 1992. Campbell JD and Rennels MB: “Pneumococcal vaccines”. Drugs
Kendigs-Chernick, Ed.”Disorders of the respiratory tract in Today, 1999, 35(6)461-72.
children. 7h Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006. Courvalin P: “Antimicrobial drug resistance”. Emerg Infect Dis,
Lo JYC, Tsang T, Leung Y, Yeung E, Wu T and Lim W: 2005, 11(10)1503-7.
“Respiratory infections during SARS outbreak”. Emerg Infect Cox NJ and Subbarao K: “Influenza”. Lancet, London, 1999, 354:
Dis, 2005; 11(11): 1738-41 1277-82.

938 Tomo III


Cutts FT, Zaman SMA, Enwere G, Jaffar S, Levine OS, Okoko JB Rodríguez RS. Infecciones respiratorias agudas de las vías
et al: “Efficacy of nine-valent pneumococcal conjugate respiratorias altas. En: Benguigui Y, López Antuñano FJ,
vaccine against pneumonia and invasive pneumococcal Schumunis G, Yunez J eds. Infecciones respiratorias en niños.
disease in The Gambia: randomised, double-blind, placebo- p181-188. Serie HCT/AIEPI-1. OPS/OMS. Washington,
controlled trial”. Lancet, London, 2005; 365:1139-46. USA. 1997.
Keren R, Zaontis E, Bridges C et al: “Neurological and Rosen CL, Haddad GG. Acute Nasopharyngitis. En: Behrman RE,
neuromuscular disease as a risk factor for respiratory failure Kliegman RM, Arvin AM eds. Nelson Textbook of
in children hospitalized with Influenza infection”. JAMA, Pediatrics. 15th. Ed. Part XIX. Seccion 2. Chapter 327.
Chicago, 2005; 294(2):2188-94. p11188-1189. W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA, 1996.
Nelshe RB, Mendelman PM, Treanor J, King J, Gruber WC, Rosen CL, Haddad GG. Acute Pharyngitis. En: Behrman RE,
Piedra P, Bernstein DI: “The efficacy of live attenuate , cold Kliegman RM, Arvin AM eds. Nelson Textbook of
adapted, trivalent intranasal influenza virus vaccine in Pediatrics. 15th. Ed. Part XIX. Seccion 2. Chapter 327.
children”. N Eng J Med, Boston, 1998, 338: 1405-12. p1189-1198. W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA, 1996.
Sagarin MJ, Roberts J. Acute Faryngitis. En: To the Editor.
Nguyen-Van-Tam J and Neal KR: “Clinical effectiveness, policies
NEJM 2001; 344: 479-480.
and practices for influenza and pneumococcal vaccines”.
Stevens DI. Invasive Group A Streptococcal Infections. Infectious
Seminar Respir Infect, Philadelphia, 1999, 14(2):184-95.
Diseases in Clinical Practice 2002; 11: 16-22.
Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in Webb KH. Does culture confirmation of high-sensitivity rapid
children,Page: 234; 3rd Ed, Blackwell Scientific, London, streptococcal tests make sense? A medical desition analysis.
1990. Pediatrics 1998; 101: E2-E3.
Rubinsky R: “Streptococcus Pneumoniae: Epidemiología y Trujillo H. Amigdalofaringitis aguda. Separata del II Congreso
resistencia a antimicrobianos de las enfermedades invasivas en Colombiano de Neumología Pediátrica, VI Simposio Nacional
América Latina”. Rev Chil Infect, 2001, 18, Suppl 1: s10-14. y II Encuentro Nacional de FQ Setiembre 25-28. Medellín,
Sarasqueta P, Hidalgo S, Simonovich M, Bardosa P et al: Colombia. 1996.
“Mortalidad postneonatal por Infecciones Respiratorias
Bajas, antecedentes adversos de la salud y fallas del proceso Infecciones respiratorias agudas bajas no complicadas
de atención”. Med Infant, 1993, 1: 10-4. Committee on Infectious Diseases de la American Academy of
Setish T: “Preventive Pediatrics”. Page: 14-19. In: Berhman, Pediatrics, Report. En: Pickering LK, ed. Red Book: 26th
Kliegman and Jenson. Nelsons Textbook of Pediatrics. 17th ed. (Buscar Enfermedad Infecciosa o capítulo que desee
Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003. American Academy of Pediatrics. Grove Village, IL., USA.
Stathis SL, Ocalla Ghan M, Williams GM, Najiman JM et al: 2003.
“Maternal cigarette smoking during pregnancy is an Medscape. Viral Croup: A Current Perspectiva. (Revisión de
diversos tópicos: Abstract and Epidemiology, Etiology and
independent predictor for symptoms of middle ear disease at
Epidemiology, Patogénesis and Clinical Manifestations,
five years post delivery”. Pediatrics, Evanston, 1990,
Differential Diagnosis, Management, Conclusion). J Pediatr
104(2):E161-E166.
Health Care 2004; 18: 297-301. © 2004 Mosby, Inc.
Tratamiento de la neumonía en el medio comunitario. UNICEF/ Orenstein DM. Acute inflamatory Upper Airway. En: Behrman
OMS, 2004, New York. RE, Kliegman RM, Arvin A eds. Nelson Textbook of
Victora, GC: “Factores de Riesgo en las IRA bajas”. Page: 45-63. Pediatrics. 15th. Ed. Part XIX. Seccion 3. Chapter 332
In: Benguigui Y. Infecciones respiratorias en niños. OPS, p11201 1205 W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA, 1996.
Washington, D. C. 1997. Rodríguez RS. Infecciones respiratorias agudas de la vías
respiratorias altas. Crup y otras infecciones de las vías aéreas
Infecciones respiratorias agudas altas no complicadas superiores. En Benguigui Y, López Antuñano FJ, Schmunis G,
Bisno AL. Acute Faryngitis. N Eng J Med (NEJM) 2001; 344: Yunez J. eds. Infecciones respiratorias en niños. Serie HCT/
205-211. AIEPI-1. p201-214. OPS/OMS. Washington DC., USA.
Arnor SS.. Anaerobic Infections.. En: Behrman RE, Kliegman RM, 1997.
Arvin AM eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 15th.Ed. Part Kaditis AG, Wald ER. Viral croup: current diagnosis and treatment.
XVII. Seccion 2. Chapter 194. p817-822. W.B. Saunders Co. Pediatr Infect Dis J. 1998; 17:827-834.
Philadelphia, USA, 1996.
Committee on Infectious Diseases de la American Academy of Bronquitis aguda
Pediatrics, Report. En: Pickering LK, ed. Red Book: 26th ed.
Hueston WJ, Mainous AG 3rd. Acute bronchitis Am Fam
(Buscar Enfermedad Infecciosa o capítulo que desee).
Physician 1998;57(6):1270-6,1281-2
American Academy of Pediatrics. Grove Village. IL., USA.
2003. F Fleming DM, Pannell RS, Elliot AJ, Cross KW. Respiratory
Marco del Pont J. Farringoamigdalitis. En Meneghello J., Fanta E, illness associated with influenza and respiratory syncytial
Paris E. Puga TF eds. Pediatría Meneghello. T1, 5ta. Ed. virus infection. Arch Dis Chil. 2005 Jul 90(7):741-6
p1226-1229. Serie PALTEX, Organización Panamericana de Mainous AG 3rd, Zoorob RJ, Hueston WJ. Current management of
la Salud. Ed. Médica Panamericana SA. Buenos Aires, acute bronchitis in ambulatory care: The use of antibiotics
Argentina. 1997. and bronchodilators. Arch Fam Med 1996;5(2):79-83.
Pantel RH. Faringitis: diagnóstico y manejo. En: American McIsacc WJ, To T.Antibiotics for lower respiratory tract
Academy of Pediatrics ed. (Traducido por Dpto. Médico Lab infections. Still too frequently prescribed? Can Fam
Abbott). Bogotá,Colombia. Pediatrics. in Review 1982; 1:
Physician. 2004 Apr;50:569-75.
43-48.
Vallano Ferraz A, Danes CarreraS i, Ochoa Sangrador
Reyes H, Guiscafré H, et al. Diagnóstico de la farindoamigdalitis
estreptocócica ¿Criterio clínico o coaglutinación? Bol Hosp. C..Antimicrobial treatment of bronchial infections in hospital
Infantn Mex 1991; 46: 628-635. emergency rooms An Pediatr (Barc). 2004 Aug;61(2):143-9

Parte XII. Aparato respiratorio 939


Crespo M, Tardio E. Bronquitis. Bronquitis Aguda, en Manuel De Boeck K, Vandre A, Van Pierde S, Coorbel L et al:
Cruz Hernández, Tratado de Pediatría 8ª ed. Pp 1225-1228. “Respiratory syncitial virus Bronchiolitis: a double blind
Ediciones Eergon S.A.Madrid, 2001 Dexamethasone efficacy study”. J Pediatr, St Louis, 1997;
Stern RC. Acute bronchitis. In Behrman RE, Kliegman 131(6): 919-21.
RM, Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of De Vincenzo J: “Prevention and treatment of Respiratory syncitial
Pediatrics15th ed. Philadelphia: W B Saunders virus infections”. Adv Pediatr Infect Dis, Chicago, 1998; 13:
Company; 1996.p.1210. 1-47.
Wilson R, Rayner CF. Bronchitis. Curr Opin Pulm Med Derish M, Hodge G, Dunn G and Arigno R: “Aerosolized albuterol
1995;1(3):177-8. improves airway reactivity in infants with acute respiratory
failure from Respiratory syncitial virus”. Pediatr Pulmonol,
Traqueítis bacteriana Philadelphia, 1999; 26: 12-20.
Bernstein T, Brill R, Jacobs B. Is bacterial tracheitis changing? A Edell D, Khoshoo V, Ross G and Salter K: “Early ribavirin
14-month experience in a pediatric intensive care unit. Clin treatment of bronchiolitis: Effect on long-term respiratory
Infect Dis 1998;27(3): 458-62. morbidity”. Chest, Park Ridge, 2002, 122: 935-9.
Pastor X Afecciones laringo-traqueales. Traquietis bacteriana, en Everart M: “What link between respiratory viral infection and
Manuel Cruz Hernández, Tratado de Pediatría 8ª p 1221. atopic asthma”. Lancet, London, 1999; 354: 527-8.
Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001 Fisher R, Gruber C, Edward K, Reed G et al: “Twenty years of
Britto J, Habibi P, Walters S, Levin M, Nadel S. Systemic outpatients Respiratory syncitial virus infections”.
complications associated with bacterial tracheitis. Arch Dis Pediatrics, Evanston, 1997; 99(2): 1-5.
Child 1996;74(3): 249-50. Flores G and Hortwith R: “Efficacy of beta-2 agonist in
Brook I. Aerobic and anaerobic microbiology of bacterial tracheitis bronchiolitis: a reappraisal and meta-analysis”. Pediatrics,
in children. Pediatr Emerg care 1997;13(1):16-8 Evanston, 1997; 44(2): 117-124.
Horowitz IN. Staphylococcal tracheitis, pneumonia, and adult Goodman D: “Inflammatory disorders of the small airways”. Page:
respiratory syndrome. Pediatr Emerg Care 1996;12(4): 288-90. 1414-1418. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson
Orenstein DM Bacterial tracheitis. In Behrman RE, Kliegman RM, Textbook of Pediatrics.17th Ed. Saunders Co Philadelphia,
Arvin AM, Nelson WA.Nelson Textbook of Pediatrics 15th 2003.
ed. Philadelphia: W B Saunders Company; 1996. p.1205. Kellner JD, Ohlsson A, Gadowski AM and Wang EE:
Marcoa AS, Molini MN, Rodríguez NA, Martinon TF, Martinon “Bronchodilators for bronchiolitis (Cochrane review). In: The
SJM. Bacterial tracheitis: an infectious cause of upper airway Cochrane Library, Issue 1, Oxford: Update, Software, 2003.
obstruction to be considered in children. An Pediatr (Barc). Kimper JL: “Prevention and treatment of Respiratory syncitial
2005 Aug;63(2):164-8. virus bronchiolitis and post-bronchiolitis wheezing”. Respir
.Stroud RH, Friedman NR. An update on inflammatory disorders Res, 2002; 3: 540-55.
of the pediatric airway: epiglottitis, croup, and tracheitis. Am Kimper J and Schaad: “Treatment of Respiratory syncitial virus
J of the Otolaryngol.2001;(4):268-75 bronchiolitis”. Pediatr Infect Dis J, Baltimore, 1997; 16: 479-81.
Cordero L, Sananes M, DedhiyaP, Ayers LW Purulence and gram- Klassen T: “Recent advances in the treatment of bronchiolitis and
negative bacilli in tracheal aspirates of mechanically ventilated laryngitis”. Pediatr Clin North Am, Philadelphia, 1997,
very low birth weight infants. JPerinatol.2001Sep;21(6):376-81. 44(1):249-61.
Kline M, Margalis M, Marcini J et al: “The impact of severe
Bronquiolitis respiratory syncitial virus on the child, carnegies and family
Adcock P, Sanders C and Marshall G: “Standardizing the care of during hospitalization and recovery”. Pediatrics, Evanston,
bronchiolitis”. Arch Pediatr Adolesc Med, Chicago, 1998;
2005; 115(6): 1536-46.
152: 739-44.
Larsen G and Colasurdo G: “Neural control mechanism within
Blanco Quirós A, González H, Arranz E and Lapena S: “Decreased
airways: disruption by respiratory syncitial virus”. J Pediatr,
Interleukin-12 level in umbilical cord blood in children who
St Louis, 1996; 135(2) Suppl 2: s21-6.
developed acute bronchiolitis”. Pediatr Pulmonol,
Martínez F, Wright A, Taussig L, Holberg C et al: “Asthma and
Philadelphia, 1999; 28: 175-80.
wheezing in the six first years of life”. N Eng J Med, Boston,
Bont L, Van Wright A and Kimpen J: “Prophilaxis against
1995, 332: 133-8.
respiratory syncitial virus in premature infants”. Lancet,
Martínez F and Helms P: “Types of asthma and wheezing”. Eur
London, 1999; 354: 1003-4.
Respir J, Copenhagen, 1998; Suppl 27: s3-8.
Bresse C: “Bronchiolitis”. Page: 710-16. In: Mandell, Douglas and
Mc Bride JT and Mc Connochie: “Respiratory syncitial virus,
Bennett, Principles and practice of infectious diseases, 6th Ed,
recurrent wheezing and Ribavirin”. Pediatr Pulmonol,
Churchill Livingstone, New York, London, 2006.
Philadelphia, 1998; 25: 145-6.
Burroughs M: “Respiratory infections”. Page: 493-530. In:
Navarro M, Haro Gomez M, Perez G and Romero M: “Infección
Krugman’s Infectious Diseases of Children. 11th Ed, Mosby
viral y sibilancias recurrentes”. Page: 45-66. In: II Curso
Co, USA, 2004.
Nacional de Actualización en Neumología Pediátrica. Cobas
Coffin S and Offit P: “New vaccines against mucosal pathogens:
Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
Rotavirus and Respiratory syncitial virus advances”. Pediatr
Ogra PL: “Respiratory syncitial virus: the virus, the disease and
Infect Dis, Baltimore, 1998; 13: 333-48.
the immune response”. Pediatr Resp Rev, 2004; 5: 119-26.
Couto S and Delia C. “Bronquiolitis Aguda”. Page: 261-79. In:
Orenstein D: “Bronchiolitis”. Page: 1211-3. In: Berhman,
Benguigui Y, Lopez F, Schmunis G and Yunes J. Infecciones
Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of Pediatrics.17th Ed.
Respiratorias Agudas en niños. OPS/OMS Serie HTC/AIEPI,
Washington, 1997. Saunders Co, Philadelphia, 2003.

940 Tomo III


Psarras S, Papadopoulos NG and Johnston SL: “Pathogenesis of Rojo M, González J, Razón R, Mir J (+). Neumonías. En:
respiratory syncitial virus bronchiolitis-related wheezing”. Machado O. et al. eds. Manual de procedimientos
Pediatr Resp Rev, 2004; 5: 179-84. diagnósticos y tratamiento. p338-53. MINSAP. Editorial
Rodríguez W: “Management strategies for respiratory syncitial Pueblo y Educación. La Habana, Cuba. 1986.
virus infection in infants”. Pediatr, St Louis, 1999; 135(2): Russell G. Community acquire Pneumonia. (Basado en Guidelines
Suppl s45-50. of community acquired pneumonia in chidren . Thorax.
Silvestri M, Sabatini S, De Filippi AC and Rossi GA: “The December 2001). Arch Dis Chid 2001; 85: 445-446.
wheezy-infant: immunological and molecular considerations”. Russell G. Community acquired pneumonia.(From BTS
Pediatr Resp Rev, 2004; 5: 81-7. management of community acquired pneumonia). Thorax.
Simoes E: “Respiratory syncitial virus infection: Pathogenesis, Decenber 2001) Arch Dis Child 2001; 85: 445-446.
treatment and prevention”. Curr Opin Infect Dis, 1997; 19: Ruvinsky R, Balanzat AM. Neumonías bacterianas y virales. En:
113-20. Benguigui Y, Lopez FJ, Schmunis G, Yunes J. eds.
Stein R, Sherrill D, Morgan W, Holberg C et al: “Respiratory Infecciones respiratorias en niños. Serie HCT/AIEPI-1
syncitial virus in early life and risk of wheeze and allergy by p.215-49. OPS/OMS; Washington DC, USA. 1997.
age 13 years”. Lancet, London, 1999; 354: 847-52. Velazquez J. Infecciones respiratorias bajas. Neumonía. En: Meza
Van Schaik SM, Welliver RC, Kimper JL et al: “Novel Pathways JE, ed. Temas de Pediatría. p120-30. Sociedad Venezolana de
in the pathogenesis of respiratory syncitial virus disease”. Puericultura y Pediatría. Caracas,Venezuela. 1997.
Pediatr Pulmonol, Philadelphia, 2000; 30: 131-8. Virkki R, Juven F, Rikalainen Svedström E. Mertsola J, Ruuskanen
Wang E, Law J, Robinson B, Dobson S et al: “PICNIC Study of O. Differentiation of bacterial and viral pneumonia in children
the role of age and respiratory syncitial virus illness in Thorax 2002 57: 438-441.
patients with underlying heart or lung disease”. Pediatrics,
Evanston, 1997; 99(3): 1-5. Neumonías en niños en los primeros 2 meses de vida
Welliver R: “Immunological mechanism of virus inducing wheezing Campbell H. La vulnerabilidad del lactante es mayor durante los
and asthma”. J Pediatr, St Louis, 1999; 35(2): Suppl s14-20. dos primeros meses de vida. Noticias sobre IRA. P25-26
Whol M: “Bronchiolitis”. Page: 360-6. In: Kendig JC and Chernick OPS/OMS 1994.
V. Disorders of the respiratory tract in children”. 7th Ed, WB Cherian T. El lactante menor de dos meses. Guía para el
Saunders, Philadelphia, 2006. tratamiento y cuidado. Noticias sobre IRA. OPS/OMS
——: “Respiratory syncitial virus infection”. Lancet, London, 1994; 25; 7,8.
1999; 354: 847-52. Mulholland K, Weber M. Reconocimiento de causas y síntomas de
la neunomía. Noticias sobre IRA. OPS/OMS 1994; 25: 2,3.
Neumonías agudas infecciosas
OFICINA PANAMERICANA DE LA SALUD. Infecciones
Archivist. Staphylococcal necrotising pneuminia. Arch Dis Chid
respiratorias agudas en los niños: Tratamiento de casos en
2002; 87:224-225.
hospitales pequeños. Traducción del documento original
Berti I, Faraguna D. Pneumonia in Children Correspondence N
(WHO/ARI/90.5); Washington DC, USA. 1992.
Eng J Med 2002; 346: 1916
Prober CG. Pneumonia in neonatos. En Behrman RE, Kliegman
Davies H.D. y cols. Reliability of the chest radiograph in the
RM, Arvin AN eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 15 Ed.
diagnosis of lower respiratory infections in young children,
Part XII Section 2 Chapter 99 p537-539. W.B.Saunders Co.
Pediatr Infect Dis J 1996; 15:600-04.
Philadelphia, USA. 1996
Herrera O. Neumonías bacterianas. En: Meneghello J, Fanta E,
Speer ME, Weisman LE. Pneumonia. En: Hansen TN, Cooper
Paris E, Puga TF, eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed.
TR, Weisman,eds. Contemporary Diagnosis and Management
Tomo 1. p1301-05 Editorial Médica Pamnamericana SA.
of Neonatal Respiratory Diseases p1303. Handbooks in
Buenos Aires; Argentina 1997.
Levine MI, Mascia AV. eds. Enfermedades y anomalías Health Care Co. Pennsylvania, USA. 1998.
pulmonares en la infancia y la niñez. p141-60. Editorial Beta
Tratamiento de las infecciones respiratorias agudas no
S.R.L. Buenos Aires, Argentina 1986.
complicadas
Lim W-S. Idetifying failure of empirical tratment for pneumonia:
Barclay L, Vega C. Procalcitonin Testing reduces antibiotic Use in
vigilance and common sense. Thorax 2004; 59:918-919.
Lower Respiratory Tract Infections. Lancet, Feb. 21
McIntosh K. Community-acquired pneumonia in children. N
(Mescape 2005).
Engl J Med 2002; 346: 429-437.
Nicholson AG, Bush A. Methodology for assessing patterns of Benenson AS. ed. Manual para el control de las enfermedades
intersticial pneumonia in children. Letters to the editor Arch transmisibles. XVI Ed. p335-344 . OPS/OMS. Washington
Dis Chikd 2001; 85: 172. DC, USA. 1997.
Prober CJ. Neumonía. En: Behrman RE, Kliegman RM, Arvin Bisno AL. Acute Pharyngitis. N Engl j Med 2001: 344: 205-211.
AM eds. NELSON Textbook of Pediarics. 15th. Ed. Part British Thoracic Society of Standard of Care Committee BTS
XVII. Seccion1. Chapter 170. p716-721. W.B. Saunders Co. Guidelines for the Management of Community Acquire
Philadelphia, USA. 1996. Pnemonia in Childhood. Thorax (Supplem.) 2002; 57: i1-i24.
Rojo M, Lainé D y et al. Infecciones Respiratorias Agudas. Brown K. Alimentación de los niños enfermos. Noticias sobre IRA
Orientaciones Metodológicas. MINSAP. Ciudad de La Grupo CID-ARTHAG a través de OPS y PAHEF.
Habana, Cuba 1996. Washington DC, USA. 1995. 31: 4,5.

Parte XII. Aparato respiratorio 941


Cohen R. Defining the Optimum Treatment Regimen for Programa de Control de las Infecciones Respiratorias Agudas de la
Azithomycin in Acute Tonsillopharyngitis. Pediatr Infect Dis OMS. Oxigenoterapia para las Infecciones Respiratorias
J. 2004; 23: S129-S134. (c) 2004 Lippincott Williams & Agudas en niños. En: Benguigui Y. ed. Infecciones
Wilkins (Medscape). Respiratorias Agudas: Fundamentos Técnicos y de las
Committee on Infectious Diseases de la American Academy of Estrategias de Control. p93-126. Serie HCT/AIEPI-8, OPS/
Pediatrics, Report. En: Pickering LK, ed. Red Book: 26th ed. OMS. Washington DC. USA. 1997.
(Buscar Enfermedad Infecciosa o capítulo que desee). Reyes H, et al. Diagnóstico de la faringoamigdalitis estreptocócica
¿Criterio clínico o coaglutinación? Bol Hosp Infant Mex
American Academy of Pediatrics. Elk Grove Village. IL.,
1991; 46: 628-635.
USA. 2003.
Robinson D, Campbell H, Raina Bang A, El Muti AR. Let´s learn
Cherian T. Treating coughs and colds. Child Health Dialogue WHO
about ACUTE RESPIRATORY INFCCTIONS. Booklet
Geneve, Switzerland.1998; 10: 2,3. (How to talk with mothers about ARI). AHRTAG. London,
Cherian T. El lactante menor de dos meses. Guía para el UK. 1995.
tratamiento y cuidado. Noticias sobre IRA. OPS/OMS Rodríguez RS Infecciones respiratorias agudas de las vías
Washington DC, USA. 1994; 25; 7, 8. respiratorias altas En: Benguigui Y, López Antuñano FJ,
Gilbert DN, Moellering Jr, RC, Sande MA. Eds. The Sandford Schmunis G, Yunes J, eds. Infecciones respiratorias en niños.
GUIDE TO ANTIMICROBIAL THERAPY. 30th. Ed. Serie HCT/AIEPI-1; p181-88. OPS/OMS. Washington DC,
p68,120. Antimicrobial Therapy Inc. Vermont, USA. 2000. USA. 1997.
Herrera O. Neumonías bacterianas. En: Meneghello V, Fanta E, Rojo M., González J., Razón R., Mir J.(+) En: Machado O. ed.
Paris E, Puga TF, eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed. Manual de procedimientos de diagnóstico y tratamiento.
T 1. p1301-04. Serie PALTEX (OPS/OMS) Editorial Médica p309-19, 329-32, 338-53. MINSAP. Editorial Pueblo y
PANAMERICANA. Buenos Aires, Argentina. 1997. Educación. Ciudad de La Habana, Cuba. 1986.
Kaditis AG, Wald ME. Viral crup: current diagnosis and treatment Rojo M, Lainé D y cols. Infecciones Respiratorias Agudas.
(CME Review Article). Pediatr Infect Dis J 1998; 17: 827-834. Orientaciones Metodológicas. MINSAP. Ciudad de La
Kramer M, Campbell H. Tratamiento de la fiebre en niños con Habana, Cuba 1996.
infecciones respiratorias agudas. En: Benguigui Y. ed. Russell G. Community acquired pneumonia. (From BTS
Infecciones Respiratorias Agudas: Fundamentos Técnicos y management of community acquired pneumonia,Thorax
de las Estrategias de Salud. Serie HCT/AIEPI-8. p52-63. Decenber 2001) Arch Dis Child 2001; 85: 445-446.
OPS/OMS. Washington DC, USA. 1997. Ruvinsky R, Balanzat AM. Neumonías bacterianas y virales. En:
Benguigui Y, Lopez FJ, Schmunis G, Yunes J. eds. Infecciones
Lim W-S. Identifying failure of empirical treatment for pneumonia:
respiratorias en niños Serie HCT/AIEPI-1 p215-49. OPS/
vigilante and common sense Thorax 2004; 59:918-919.
OMS; Washington DC, USA. 1997.
Marco del Pont J. Faringoamigdalitis En: Meneghello J, Fanta E, Schroeder K, Fahey T. Should we advise parents to administer
Paris E, Puga TF, eds. PEDIATRIA MENEGHELLO 5ta.Ed. over the counter cough medicines for acute cough? Sistematic
T1, p1226-1238. Editorial Médica Panamericana. Buenos review of randomised controlled trials Arch Dis Chid 2002;
Aires, Argentina. 1997. 86: 170-175.
OFICINA PANAMERICANA DE LA SALUD. Infecciones Sinaniotis CA. Communitis-acquired pneumonia: diagnosis avd
respiratorias agudas en los niños: Tratamiento de casos en treatment. Pediatr Pulmunol Suppl 1999; 18: 144-145.
hospitales pequeños. Traducción del documento original Smith J, Finn A Antimicrobial prophylaxis. Arch Dis Child
(WHO/ARI/90.5); Washington DC, USA. 1992. 1999; 80: 388-392.
Pantel RH. Faringitis Diagnóstico y Manejo. Pediatrics in Review. Speer ME, Weisman LE. Pneumonia. En: Hansen TN, Copper TR,
Acad. Amer. de Pediatría (Traducción al español por el Dpto. Weisman LE, eds. Contemporary Diagnosis and Management
Méd. de Abbott Labs.) Bogotá, Colombia. 1982; 1:43-48. of Neonatal Respiratory Diseases, II ed. Handbook in Health
Paradise JL, Bluestone CD,Colborn DC et al. Tonsillectomy and Care Company. p130-33. Pennsylvania, USA. 1998.
Adenotonsillectomy for Recurret Throat in Infections in Teirstein AS. The Elusive Goal of Therapy for Usual Interstitial
Moderatelly Affected Children. Abstract. PEDIATRICS Pneumonia. N Eng J Med 2004; 350: 181-183.
2002; 110: 7-15. Trujillo H. Amigdalofaringitis aguda.(separata de conferencia). II
Penny M, Creed-Kanashiro. Alimentación para una buena salud. Congreso Colombiano de Neumología Pediátrica, VI Simposio
Diálogo sobre Atención Infantil AIEPI Washington DC, Nacional y II Encuentro Colombiano de FQ.. Sept. 25-28,
USA. 1998; 4: 6. Medellín, Colombia. 1996.
Velazquez J. INFECCIONES RESPIRATORIAS BAJAS.
Prober CJ. Neumonía Acute inflamatory Upper Airway. En:
Neumonía. En: Meza JE, ed. Temas de Pediatría. p.120-30:
Behrman RE, Kliegman RM, Arvin AM eds. Nelson
Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría. Caracas,
Textbook of Pediatrics. 15th. Ed. Part XVii. Section 1. Venezuela 1997.
Chapter 170. p716-721. W.B. Saunders Co. Philadelphia, Waisman Y. Prospective randomized double blind study comparing
USA. 1996. L epinefrine and racemic epinefrine aerosols in the treatment
Prober CG. Pneumonia in neonatos. En Behrman RE, Kliegman of laringotracheitis (croup). Pediatrics 1992; 42:436-47.
RM, Arvin AN eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 15 Ed. Woensel van JBM, Aalderen van WMC, Kimpen JLL. Viral lower
Part XII Section 2. Chapter 99 p537-539. W.B .Saunders Co. respiratory tract infection in infants and young
Philadelphia, USA. 1996. children.(Clinical review). BMJ 2003; 327: 36-40.
Programa de Control de las Infecciones Respiratorias Agudas de la World Health Organization. Etiology and clinical signs of serious
OMS. Los antibióticos en el tratamiento de las infecciones infections in young infants in developing countries: a who
respiratorias agudas en niños menores de 5 años. En: collaborative study. Suppl. En Eichenwald HF. Guest ed.
Benguigui Y. ed. Infecciones Respiratorias Agudas: Pedatr Infect Dis J. 1999; 18: Supplement.
Fundamentos técnicos y de las Estrategias de control. Serie Wubble L, Muniz l, Ahmed A. Etiology and treatment of
HCT/AIEPI-8. p23-44. OPS/OMS. Washington DC, USA. community acquired pneumonia in ambulatory children.
1997. Pediatr Infect Dis 1999; 18: 98-104.

942 Tomo III


Cuadro de decisiones frente a una infección respiratoria Mc Cormick DP, Chonmaitre T, Pittman C, Sheed K, Friedman
aguda no complicada NR, Uchida T and Baldwin CD: “Non-severe Acute Otitis
Benguigui Y. El control de las infecciones respiratorias agudas a Media: A clinical trial comparing outcome of watchful-waiting
nivel de los servicios locales de salud. Noticias sobre IRA. vs. immediate antibiotic treatment. Pediatrics. Evanston,
OPS/OMS. Washington DC, USA. Diciembre 1989. 2005, 115(6)1455-65.
OMS-OPS. Tratamiento de los niños con infecciones respiratorias Paradise J: “Otitis Media”. Pag 2138-46. In: Nelson Textbook of
agudas: modelos simplificados para decisión terapéutica en Pediatric. Berhman, Kliegman and Jensa. 17th Ed, Saunders
niños. ICP-ARI. OPS/OMS. Washington DC, USA. 1985. Co Philadelphia.2003.
Rojo M. Cuadro de decisiones frente a una Infección Respiratoria Pelton S: “Otitis Media: Re-evaluation of diagnosis in the era of
Aguda no Complicada. Rev Cub Med Gen Integr 1990; 6: the antimicrobial resistance, pneumococcal vaccine and
391-400. evolving morbidity”. Pediatr Clin North Am, Philadelphia,
2005, 52: 711-28.
Otitis media aguda Robers M, Shilder A, Zielhuis G and Rosenfeld R: “Otitis Media.
Albrich W, Mannet L and Harbarth S: “Antibiotic selective Seminar”. Lancet, London, 2004; 363: 465-73.
pressure and resistance in S Pneumoniae and S Pyogenes”. Takata G, Chan L, Shekelle P et al: “Evidence-assessment of
Emerging Infectious Diseases.2004, 10(3)514-517. management of Acute Otitis Media: The role of antibiotics in
American Academy of Pediatrics: “Acute Otitis Media”. 695-96 in treatment of uncomplicated Acute Otitis Media”. Pediatrics,
Pickering L K Ed Red Book: 2003 Report of the Committee Evanston, 2001. 108(2): 239-47.
on Infectious Diseases 26th Ed, Elk Grove Village USA.
Berman S:”Otitis Media in children”. N Engl J Med Sinusitis aguda
Boston.1995,332(23)1560-5 American Academy of Pediatrics: “Clinical Practice Guideline
Blumer J: “Clinical perspectives on sinusitis and otitis media”. Management of sinusitis”. Pediatrics, Evanston, 2001. 108 (3).
Pediatr Infect Dis J, Baltimore.1998, 17; s68-72. American Academy of Pediatrics: “Sinusitis”. Page: 676-81. In:
Brook I and Gober AE:”Bacterial interference in the nasopharynx Pickering L K Ed Red Book: 2003 Report of the Committee
following antimicrobial therapy of acute otitis media”. J on Infectious Diseases 26th Ed, Elk Grove Village USA.
Antimicrobial Chemother, London.1998, 41; 489-92. Burroughs M et al: “Respiratory infections”. Page: 493-530. In:
Cuba. Ministerio de Salud Pública: “Programa Integral de Atención Krugmans Infectious Diseases of Children. 11th Ed, Mosby
y Control de las Infecciones Respiratorias Agudas”. Co, USA, 2004.
UICTER.2000:19-20. De Chazo RD, Chapin K and Swain RR: “Fungal sinusitis”. N
Dowell SF, Butler JC, Giebink GS, Jacobs MR et al:”Acute Otitis
Engl J Med, Boston, 1997, 337(4):254-9.
Media: Management and surveillance in an era of
Gwalney J: “Sinusitis” Page: 676-81. In: Mandell, Douglas and
pneumococcal resistance. Streptococcus Pneumoniae
Bennetts. Principles and Practice of Infectious Diseases. 6th
Therapeutic Working Group”. Pediatr Infect Dis,
Ed. Churchill Livingstone. New York-London, 2005.
Baltimore.1999, 18; 1-9.
Faden H, Duffy L and Boeve M: “Otitis Media: back to basic”. Hoover GE, Newman LJ, Platts-Mills TAE, Phillips CD et al:
Pediatr Infect Dis J, Baltimore.1998, 17; 1105-13. “Chronis sinusitis: risk factors for extensive disease”. J
Finkelstein JA, Stille CJ, Rifas-Shiman SL and Goldman D: Allergy Clin Immunol, St Louis, 1997, 100: 185-91.
“Watchful-Waiting for Acute Otitis Media: are parents and Kennedy DW and Thaler ER: “Acute vs. Chronic sinusitis:
physicians ready?” Pediatrics, Evanston, 2005, 115(6):1466-73. Etiology, management, and outcomes”. Infect Dis Clin Pract,
Fireman P:”Otitis Media and Eustachian tube dysfunction. 1997, 6(2) s49.
Connection to allergic rhinitis”. J Allergy Clin Immunol, St Kronemer KA and Mc Alister WC: “Sinusitis and its imaging in
Louis, 1997: s787-97. the pediatric population”. Pediatr Radiol, Berlin. 1997, 27:
Garbutt J, Jeffe D and Shackelford PG: “Diagnosis of treatment of 837-46.
Acute Otitis Media: an assessment”. Pediatrics, Evanston, Ohveira CA, Sole D, Maspitz CK and Rachelevsky GS:
2003; 112(1): “Improvement of bronchial hyper responsiveness in
Garbutt J, St Geme JW, May A, Storch G and Shackelford PG: asthmatic children treated for concomitant sinusitis”. Ann
“Developing community-specific recommendation for first- Allergy Asthma Immunol, 1997, 79: 70-4.
line treatment of Acute Otitis Media: Is high-dose amoxicillin Pappas D and Owen J: “Sinusitis”. Page: 1391-2. In: Berhman,
necessary?” Pediatrics, Evanston, 2004. 114(2): 342-7. Kliegman and Jenson. Nelsons Textbook of Pediatrics. 17th
Klein J:”Otitis Media” Pag 417-428. In: Krugman’s Infections
Ed. Saunders Co Philadelphia, 2003.
Diseases of Children. 11th Ed, Mosby Ed USA, 2004.
Slavin R: “Nasal polips and sinusitis” JAMA, Chicago, 1997. 278:
Kontiokarrit T, Koivunen P, Niemela M, Poca T et al.:
1849-54.
“Symptoms of Acute Otitis Media”. Pediatr Infect Dis J,
Van Buchem EL, Knottnerus JA, Schrijnemaekers UJJ and Peeter
Baltimore, 1998. 17: 676-9.
Kozyrskyj AL, Hildes-Rripsteine E, Lonstaffe SEA, Wincott LL Mf: “Primary- care-based randomised placebo-controlled trial
et al: ”Treatment of Acute Otitis Media with a shortened of antibiotic treatment in acute maxillary sinusitis”. Lancet,
course of antibiotics”. JAMA, Chicago, 1998. 279:1736-42. London, 1997, 349: 683-7.
Luotonen M, Uhari M, Aitola L, Lukkaroiner AM et al:”Nation- Virant ES: “Sinusitis and asthma: related airway diseases”.
wide population-based survey of Otitis Media and school Pediatric Asthma, Allergy& Immunol, 1998, 12(3)169-74.
achievement”. Int J Pediatr Otorhinolaryngol, Limeric, 1998, Zacharisen MC and Kelly KJ: “Allergic and infectious pediatric
43:41-51. sinusitis”. Pediatr Ann, New York, 1998; 27(11):759-66.

Parte XII. Aparato respiratorio 943


Infecciones respiratorias bajas complicadas Levine MI, Mascia AV. editores. Enfermedades y anomalías
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías pulmonares en la infancia y la niñez. Sus diagnósticos y
bacterianas. En Meneghello J, Fanta J, Paris E, Puga TF, eds. tratamientos. En: Quistes Pulmonares adquiridos.
PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed. Tomo 1 p.1306-1311. p.25,29,86,144.. Editorial Beta SRL. Buenos Aires, Argentina
Editorial Médica Panamericana S.A. Buenos Aires, 1968.
Argentina 1997. Rojo M, Mir J(+), González J, Razón R. Neumonías. En:
Balfour-Lynn IM, Abrahamson E, Cohen G, et al, on behalf of The Machado O. y cols. editores. Manual de Procedimientos
Paediatric Pleural Disease Subcommittee of BTS Standards of Diagnósticos y Tratamientos en Pediatría. p329-332
Care Committee. BTS Guidelines for Management of Editorial Pueblo y Educación. La Habana, Cuba. 1986.
Pleural Infections in Children. Thorax 2005; 60: i1-i21. Zudhi M, Spear R., et al. Percutaneous Catheter Drainage of
British Thoracic Society of Standard of Care Committee BTS Tension Neumatocele, Secundarily Infected Pneumatocele
Guidelines for the Manage- ment of Community Acquire and Lung Abscess in Children. Crit Care Med 1996; 24:
Pnemonia in Childhood. Thorax (Supplem.) 2002; 57: i1-i24 230-33.
Orenstein DM. Purulent pleuresy (Empyema) En: Behrman RE,
Kliegman RM, Harbin AM. eds. Nelson Textbook of
Pediatrics. 15 Ed. Part XIX. Section 4. Chapter 365.3 p1253-
1254. WB Saunder Co. Philadelphia,USA. 1996.
Ruvinsky R, Balanzat C. Neumonías bacterianas y virales En:
Benguigui Y, López FJ, Shmunis G, Yunes J, eds. Infecciones . Capítulo 70 .
respiratorias en niños. p215-49. OPS/OMS Serie HCT/
AIEPI. Washington DC USA. 1997.
Singh M, Singh, SK, Chowdhary SK. Management of Empyema
Thoracic in Children. Indian Pediatrcs 2002; 39: 145-159. Tuberculosis
Yamanaka A, Hirai T, Ohtake Y, Watanabe M, Nakamura K, Gladys Abreu Suárez
Tanabe T. Surgery for Thoracic Empiema with Rupture of
Lung Abscesses in a Child. J Pediatr Surg 1998; 1408-1410.
La tuberculosis (TB) constituye hoy en día, un pro-
Absceso pulmonar blema de salud a escala mundial, y se estima que la ter-
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías
bacterianas. En: Meneghello J, Fanta E, Paris A, Puga T F, cera parte del planeta está infectada, con 8 millones de
eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. Tomo 1 p3306-3311. casos nuevos anuales de enfermedad activa y 3 millo-
Editorial Médica PANAMERICANA; Buenos Aires, nes de muertes por año.
Argentina 1997. En la edad pediátrica, se calculan 170 000 muertes
Asher MI, Leversa AM. Lung abcess. En: Chernik V, Boat TF eds.
anuales por tuberculosis.
Kendig Disorders of the Respiratory Tract in Children. 6th. Ed.
p552-560. WB. Saunders Co. Philadelphia, USA. 1998. Las áreas más afectadas son el sudeste asiático y
Joosten K, Hazelet J. Staphylococcal Pneumonia in Childhood: el África subsahariana, e incide fundamentalmente en
with early intervention, lower mortality? Pediatr Pneumol países no desarrollados y en los sectores más
1995; 20:83-88. desprotegidos de los países desarrollados.
Levine H T, Mascia A V, eds. Abscesos del pulmón. En:
Enfermedades y anomalías pulmonares en la infancia y la
La TB ha constituido un azote desde que el hom-
niñez. Sus diagnósticos y tratamientos. p. 187-91. Editorial bre comenzó a vivir en grandes comunidades, y es la
Beta S.R.L. Buenos Aires, Argentina, 1968. primera causa de muerte al inicio del siglo XX. A partir
Stern RC. Pulmonery abscess. En Behrman RE, Kliegman RM, de ahí mostró una tendencia francamente descendente,
Arvin AM. Eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 15 Ed. Part hasta llegar a tasas inferiores a 5 x 100 000 habitantes
XIX, Section 4. Chapter 358. p1233, 1234 WB Saunders
Co. Philadelphia, USA. 1996. en países desarrollados. El supuesto de que las enfer-
Tant T. Pediatric Lung Abscess: Clinical Management and medades infecciosas, entre ellas la TB, estaban prácti-
Outcome. Pediatr Infect Dis J 1995; 14: 51-55. camente erradicadas, condujo al abandono de los
Yamanaka A, Hirai T, Ohtake Y, Watanabe M, Nakamura K, programas de control y del tratamiento supervisado, lo
Tanabe T. Surgery for Thoracic Empiema with Rupture of
que unido a la emergencia del SIDA, el deterioro de las
Lung Abscesses in a Child. J Pediatr Surg 1998; 1408-1410.
Zudhi M, Spear R et al. Percutaneous catheter drainage of tension condiciones de vida y la aparición de resistencia a las
neumatoceles, secundary infected neumatocele and lung abscess principales drogas antituberculosas, ha dado lugar a un
in children. Crit Care and Resp Med 1996; 24: 330-333. fenómeno epidemiológico con reemergencia de la TB,
tanto en países no desarrollados como desarrollados,
Neumatoceles
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías
desde fines de la década de los 80. Esta situación ha
bacterianas. En: Meneghello J, Fanta E, Paris E, Puga TF, eds. sido de tal magnitud, que en 1993, la OMS declaró emer-
PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed. Tomo 1 p1306-1311. gencia global, por primera vez en su historia, y convocó
Editorial Médica Panamericana S A; Buenos Aires, Argentina. a todas las naciones a revitalizar o crear programas de
1997. control de la TB.

944 Tomo III


Infecciones respiratorias bajas complicadas Levine MI, Mascia AV. editores. Enfermedades y anomalías
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías pulmonares en la infancia y la niñez. Sus diagnósticos y
bacterianas. En Meneghello J, Fanta J, Paris E, Puga TF, eds. tratamientos. En: Quistes Pulmonares adquiridos.
PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed. Tomo 1 p.1306-1311. p.25,29,86,144.. Editorial Beta SRL. Buenos Aires, Argentina
Editorial Médica Panamericana S.A. Buenos Aires, 1968.
Argentina 1997. Rojo M, Mir J(+), González J, Razón R. Neumonías. En:
Balfour-Lynn IM, Abrahamson E, Cohen G, et al, on behalf of The Machado O. y cols. editores. Manual de Procedimientos
Paediatric Pleural Disease Subcommittee of BTS Standards of Diagnósticos y Tratamientos en Pediatría. p329-332
Care Committee. BTS Guidelines for Management of Editorial Pueblo y Educación. La Habana, Cuba. 1986.
Pleural Infections in Children. Thorax 2005; 60: i1-i21. Zudhi M, Spear R., et al. Percutaneous Catheter Drainage of
British Thoracic Society of Standard of Care Committee BTS Tension Neumatocele, Secundarily Infected Pneumatocele
Guidelines for the Manage- ment of Community Acquire and Lung Abscess in Children. Crit Care Med 1996; 24:
Pnemonia in Childhood. Thorax (Supplem.) 2002; 57: i1-i24 230-33.
Orenstein DM. Purulent pleuresy (Empyema) En: Behrman RE,
Kliegman RM, Harbin AM. eds. Nelson Textbook of
Pediatrics. 15 Ed. Part XIX. Section 4. Chapter 365.3 p1253-
1254. WB Saunder Co. Philadelphia,USA. 1996.
Ruvinsky R, Balanzat C. Neumonías bacterianas y virales En:
Benguigui Y, López FJ, Shmunis G, Yunes J, eds. Infecciones . Capítulo 70 .
respiratorias en niños. p215-49. OPS/OMS Serie HCT/
AIEPI. Washington DC USA. 1997.
Singh M, Singh, SK, Chowdhary SK. Management of Empyema
Thoracic in Children. Indian Pediatrcs 2002; 39: 145-159. Tuberculosis
Yamanaka A, Hirai T, Ohtake Y, Watanabe M, Nakamura K, Gladys Abreu Suárez
Tanabe T. Surgery for Thoracic Empiema with Rupture of
Lung Abscesses in a Child. J Pediatr Surg 1998; 1408-1410.
La tuberculosis (TB) constituye hoy en día, un pro-
Absceso pulmonar blema de salud a escala mundial, y se estima que la ter-
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías
bacterianas. En: Meneghello J, Fanta E, Paris A, Puga T F, cera parte del planeta está infectada, con 8 millones de
eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. Tomo 1 p3306-3311. casos nuevos anuales de enfermedad activa y 3 millo-
Editorial Médica PANAMERICANA; Buenos Aires, nes de muertes por año.
Argentina 1997. En la edad pediátrica, se calculan 170 000 muertes
Asher MI, Leversa AM. Lung abcess. En: Chernik V, Boat TF eds.
anuales por tuberculosis.
Kendig Disorders of the Respiratory Tract in Children. 6th. Ed.
p552-560. WB. Saunders Co. Philadelphia, USA. 1998. Las áreas más afectadas son el sudeste asiático y
Joosten K, Hazelet J. Staphylococcal Pneumonia in Childhood: el África subsahariana, e incide fundamentalmente en
with early intervention, lower mortality? Pediatr Pneumol países no desarrollados y en los sectores más
1995; 20:83-88. desprotegidos de los países desarrollados.
Levine H T, Mascia A V, eds. Abscesos del pulmón. En:
Enfermedades y anomalías pulmonares en la infancia y la
La TB ha constituido un azote desde que el hom-
niñez. Sus diagnósticos y tratamientos. p. 187-91. Editorial bre comenzó a vivir en grandes comunidades, y es la
Beta S.R.L. Buenos Aires, Argentina, 1968. primera causa de muerte al inicio del siglo XX. A partir
Stern RC. Pulmonery abscess. En Behrman RE, Kliegman RM, de ahí mostró una tendencia francamente descendente,
Arvin AM. Eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 15 Ed. Part hasta llegar a tasas inferiores a 5 x 100 000 habitantes
XIX, Section 4. Chapter 358. p1233, 1234 WB Saunders
Co. Philadelphia, USA. 1996. en países desarrollados. El supuesto de que las enfer-
Tant T. Pediatric Lung Abscess: Clinical Management and medades infecciosas, entre ellas la TB, estaban prácti-
Outcome. Pediatr Infect Dis J 1995; 14: 51-55. camente erradicadas, condujo al abandono de los
Yamanaka A, Hirai T, Ohtake Y, Watanabe M, Nakamura K, programas de control y del tratamiento supervisado, lo
Tanabe T. Surgery for Thoracic Empiema with Rupture of
que unido a la emergencia del SIDA, el deterioro de las
Lung Abscesses in a Child. J Pediatr Surg 1998; 1408-1410.
Zudhi M, Spear R et al. Percutaneous catheter drainage of tension condiciones de vida y la aparición de resistencia a las
neumatoceles, secundary infected neumatocele and lung abscess principales drogas antituberculosas, ha dado lugar a un
in children. Crit Care and Resp Med 1996; 24: 330-333. fenómeno epidemiológico con reemergencia de la TB,
tanto en países no desarrollados como desarrollados,
Neumatoceles
Alvarez C, Sánchez I. Complicaciones de las neumonías
desde fines de la década de los 80. Esta situación ha
bacterianas. En: Meneghello J, Fanta E, Paris E, Puga TF, eds. sido de tal magnitud, que en 1993, la OMS declaró emer-
PEDIATRIA MENEGHELLO. V Ed. Tomo 1 p1306-1311. gencia global, por primera vez en su historia, y convocó
Editorial Médica Panamericana S A; Buenos Aires, Argentina. a todas las naciones a revitalizar o crear programas de
1997. control de la TB.

944 Tomo III


Cuba cuenta con un programa de control que data ral de forma directa, a partir de un enfermo. La mitad de
desde 1963 y ha transitado por varias etapas. En 1972 la los enfermos son contagiosos, sobre todo aquellos con
tasa fue de 14,5 x 100 000 habitantes, y llegó a ser de 4,4 cavernas, con gran población bacilar y que presentan
en 1988. A partir de estos momentos, se produce un in- micobacterias al examen directo del esputo.
cremento de las tasas, llegando en 1994 a 14,3 asociado Las partículas inhaladas que logran eludir los me-
a problemas en la operación del Programa y a las difi- canismos defensivos, llegan a zonas bajas y medias del
cultades económicas del país. La asociación de la infec- pulmón, y a alvéolos de localización subpleural. A este
ción por el virus del VIH y la TB no se ha vinculado con nivel las micobacterias inician su multiplicación. Inicial-
el incremento de esta última en el país. Hasta el cierre mente se produce una respuesta inflamatoria inespecífica
de 1998 se habían identificado 137 casos entre los 2 155 de polimorfonucleares (PMN) y fagocitosis por
seropositivos al VIH conocidos. Similar situación ocurre macrófagos alveolares, sin que se produzcan manifesta-
con la multirresistencia (Cuadro 70.1, Fig.70.1). ciones clínicas, ya que los bacilos carecen de toxinas y
En 2004 solo se reportaron 736 enfermos, de ellos enzimas. Estos macrófagos no activados son incapaces
3 menores de 15 años, para una tasa de 6,6 y 0,1 × 100 000 de destruir a los bacilos fagocitados, se produce disemi-
habitantes en esas edades, respectivamente. nación a linfáticos regionales y bacteriemia en diferen-
tes tejidos, donde se producen siembras.
CAUSA
Como parte de la respuesta inmune, el macrófago
La tuberculosis es producida por bacterias del com- alveolar procesa los antígenos tuberculosos, los vincula
plejo Micobacterium tuberculosis: M tuberculosis (más al complejo de histocompatibilidad mayor tipo II (HMC
importante), M. bovis (muy poco frecuente), M. II) y lo expresa en su superficie. Linfocitos T - CD4
africanum (excepcional, no descrito en Cuba), M. reconocen estos antígenos y se produce una expansión
microtti y M.canetti (raros). clonal, se generan linfocitos T memoria (Tm) que circu-
Es un bacilo grampositivo aerobio, con gran conte- larán de por vida, y linfocitos T auxiliadores o helper
nido de lípidos y ceras, que se tiñe con la coloración de tipo 1 (Th 1) que producen una serie de citoquinas, entre
Ziehl Nielsen y resiste la decoloración, porque es un bacilo ellas el interferón gamma (INFγ ), que activan a los
ácido alcohol resistente (BAAR) y que se multiplica macrófagos alveolares. También se induce respuesta de
lentamente: demora en duplicarse entre 16 y 20 h. Es linfocitos B, con producción de anticuerpos con poco
destruido por la luz solar y las altas temperaturas, pero valor protector, así como, en menor medida, respuesta
puede sobrevivir en el esputo desecado en condiciones de linfocitos T supresores o citotóxicos (Ts), células NK
favorables. y células T gamma delta.
Historia natural e inmunología. La tuberculosis Los macrófagos ya activados liberan enzimas
se adquiere habitualmente por inhalación de goticas en fagosomales que destruyen a los bacilos fagocitados.
suspensión que contienen M. tuberculosis, por lo gene- Durante este proceso, tanto en el sitio inicial como en
Cuadro 70.1. Resistencia a drogas antituberculosas, Cuba, 1994-1997

% de resistencia primaria

INH RIF ETA EST


No. S C S C S C S C

763 1,0 2,0 0,1 0,9 0 0 6,0 6,9

No. Susceptibilidad Resistencia 1 droga 2 drogas 3 drogas 4 drogas >4 drogas MDR
a drogas a cualquier
drogas

763 91,7 8,3 7,2 0,5 0,5 0 1,0 0,7

% de resistencia adquirida

23 8,7 91,3 65,2 13,0 13,0 0 26,1 13,0

Fuente: Laboratorio Nacional de Referencia de Micobacterias, IPK.


INH: isoniacida. EST: estreptomicina.RIF: rifampicina. C: combinada
ETA: etambutol. MDR: multidrogorresistencia. S: simple.

Parte XII. Aparato respiratorio 945


Fig.70.1. Casos notificados por tuberculosis. Cuba, 1970-2000.

las siembras, se ha ido formando un granuloma, cuyo La enfermedad se puede producir por aumento de
centro contiene los bacilos y macrófagos que han muer- la lesión inicial o por reactivación de bacilos que queda-
to y otros detritos, con un pH ácido que inhibe la multipli- ron viables en lesiones fibrosadas de las siembras.
cación celular y aspecto de queso: necrosis caseosa. Estos bacilos permanecen “dormidos” gracias a la
Alrededor de este centro se agrupan los macrófagos inmunidad celular, y pueden reactivarse cuando dismi-
activados, muy unidos y semejan un epitelio, por lo que nuye esta en algunas condiciones patológicas o de ries-
se les llama células epitelioides, y algunas fusionadas go: desnutrición, diabetes, alcoholismo, drogadicción,
formando células gigantes multinucleadas de Langerhans. SIDA, enfermedades o tratamientos inmunosupresores
Por fuera se halla una “corona” de linfocitos que
y en la senectud.
producen citoquinas que continúan activando a los
macrófagos. Todo este proceso descrito dura entre 3 y MANIFESTACIONES CLÍNICAS
8 semanas, transcurridas las cuales se establece la in- El niño que desarrolla enfermedad a partir de una
munidad celular y la hipersensibilidad retardada. primoinfección tuberculosa, generalmente es poco sin-
En la mayoría de las personas, aproximadamente tomático, aunque puede estar gravemente enfermo en
el 95 % de los casos, este proceso termina con la muer- las formas diseminadas.
te de los bacilos, y la fibrosis y calcificación de los El complejo primario tuberculoso aparece, por lo
granulomas, y la persona infectada no desarrolla la en-
general en los primeros 6 meses que siguen a la in-
fermedad, se conoce solo que ha transcurrido este pro-
fección.
ceso, si realizamos una prueba de tuberculina y
Se pueden observar raramente manifestaciones de
detectamos hipersensibilidad retardada a antígenos
tuberculosos. A este estado posinfeccioso sin desarrollo hipersensibilidad retardada: febrícula, eritema nudoso o
de enfermedad se le llama también enfermedad o infec- queratoconjuntivitis flictenular. Puede existir fiebre lige-
ción tuberculosa latente. ra, no aumento de peso y síntomas respiratorios como
La evolución de la primoinfección tuberculosa de- tos. Aproximadamente el 90 % de los niños cura espon-
pende de la respuesta inmune. táneamente y solo el 10 % evoluciona hacia un complejo
Si es una respuesta equilibrada, con predominio de primario progresivo, con fiebre ligera persistente, pérdi-
la inmunidad celular y la respuesta Th 1, lo más probable da de apetito y de peso, síntomas generales y sudación.
es que no se desarrolle enfermedad, pero si predomina Manifestaciones respiratorias. Tos que puede
la hipersensibilidad retardada, la respuesta citotóxica que ser seca, húmeda, quintosa o perruna, menos frecuente-
es muy destructiva, las lesiones tienden a cavitarse, mente, dolor torácico o disnea. La expectoración
drenar su contenido caseoso al exterior, y extenderse hemoptoica es rara en estos casos, y es más frecuente
las lesiones, aumenta la población bacilar con la mayor en las tuberculosis de reinfección, con cavernas y en las
oxigenación y epidemiológicamente el individuo es ca- endobronquitis. Pueden aparecer, en el examen físico,
paz de transmitir la enfermedad. manifestaciones de una condensación inflamatoria o de
El riesgo de enfermar existe durante toda la vida y una compresión extrínseca de las vías aéreas: estridor,
es del 5 al 10 %, aunque hay mayores posibilidades en roncos o sibilantes, más raramente otras manifestacio-
los primeros 2 años que siguen a la infección y en las nes compresivas que producen edema en esclavina, cir-
edades extremas de la vida. culación colateral u otros.

946 Tomo III


En estos niños puede aparecer, además, un verda- cuentes las formas extrapulmonares, hay menos organi-
dero empiema tuberculoso por drenaje de un foco zación de los granulomas, con radiologías atípicas, sin
caseoso a pleura, con el cuadro clínico de un síndrome cavidades y existe anergia a la tuberculina. La coexis-
de interposición líquida. A largo plazo, pueden aparecer tencia de estas infecciones acelera ambas enfermeda-
secuelas bronquiales como estenosis o bronquiectasias. des: la inmunodeficiencia celular favorece la conversión
La TB de reinfección se puede ver a cualquier edad, de infección a enfermedad tuberculosa progresiva y la
pero es más frecuente en el adolescente y adulto, afecta respuesta de citoquinas a la enfermedad tuberculosa
acelera la replicación viral.
característicamente los vértices o el segmento apical de
los lóbulos inferiores pulmonares y el cuadro cursa con DIAGNÓSTICO
síntomas respiratorios como tos y expectoración de lar- El diagnóstico se hace fundamentalmente por la
ga evolución. búsqueda activa de casos entre los contactos de un tu-
La pleuresía tuberculosa se considera una forma berculoso bacilífero, teniendo en cuenta las formas poco
extrapulmonar y se diferencia del empiema ya descrito, sintomáticas. Esto se conoce como control de foco.
en que se origina de una siembra al nivel pleural que se Se debe descartar TB (búsqueda pasiva) en aque-
reactiva, se ve generalmente después de los 5 años de llos casos que concurran por manifestaciones respirato-
edad, con fiebre ligera y dolor torácico de tipo pleural, y rias prolongadas (sintomático respiratorio de más de
el líquido obtenido es de carácter serofibrinoso con pre- 14 días = SR + 14), que incluyen neumonías que no
dominio linfocitario. respondan al tratamiento habitual, con imágenes que no
Las formas graves o diseminadas (meningitis TB y se modifican, síndromes febriles prolongados en que se
TB miliar con meningitis asociada o sin esta), son más hayan descartado las causas más frecuentes, síndromes
frecuentes en edades extremas, en los primeros meses adénicos u otras manifestaciones compatibles con TB.
que siguen a una infección y tienen alta mortalidad. Por En grupos de alto riesgo (drogadictos, internados
lo general, son secundarias a la diseminación en prisiones e indigentes) puede ser útil también la bús-
hematógena, por drenaje del contenido caseoso en un queda activa de casos.
En el estudio de los contactos (control de foco) se
vaso sanguíneo. Las meningitis puras también se pue-
hará siempre:
den deber a la reactivación de un foco intracraneal.
• Una valoración clínica.
La TB miliar cursa con un síndrome febril prolon-
• Una prueba de tuberculina (Mantoux).
gado, hepatoesplenomegalia y adenopatías. Pueden apa- • Una radiografía de tórax.
recer tubérculos coroideos y lesiones cutáneas. El • Estudios microbiológicos o de otro tipo, que depen-
diagnóstico se hace cuando aparecen las lesiones derán del cuadro clínico radiológico encontrado.
radiológicas miliares en los pulmones, expresión de múl-
tiples siembras. La valoración clínica lleva un interrogatorio y exa-
La TB meníngea es de inicio insidioso, pero tiene men físico dirigido a los elementos ya descritos.
una fase inicial de manifestaciones generales: fiebre li- La prueba de Mantoux se realiza con el PPD, RT23
gera, vómitos, anorexia, seguida por manifestaciones de derivado proteico purificado, que es una mezcla natural
hipertensión endocraneana con signos meníngeos y tras- preparada con filtrado de cultivos de M. tuberculosis
tornos de conducta, al final llega el coma, la parálisis de esterilizados al calor. Fue elaborada por Siebert, en 1939,
pares craneales y la muerte. y es aún el material estándar de referencia.
En ambas formas diseminadas puede coexistir un Los antígenos micobacterianos que contiene evo-
complejo primario pulmonar. can una respuesta de hipersensibilidad retardada, por
La adenitis es la forma de TB extrapulmonar más linfocitos T memoria en individuos infectados, su
frecuente en el niño, aparece en los meses siguientes a positividad nos indica reconocimiento de antígenos en
la infección, es más frecuente la localización cervical y individuos que han estado en contacto con el bacilo, pero
se caracteriza por una adenopatía o por varias, y no se no discrimina enfermedad latente de enfermedad acti-
modifica con tratamiento antibiótico. Puede fistulizar, va. El individuo vacunado con BCG también puede res-
indurarse y adherirse a planos profundos. ponder al PPD pero en menor grado, lo que dificulta su
Otras localizaciones extrapulmonares (óseas, arti- interpretación. En nuestro país, con una cobertura de
culares, peritoneales, pericarditis, etc.), son muy raras BCG al nacimiento mayor de 98,9 % la mayoría de los
en nuestro medio. En pacientes con SIDA son muy fre- niños tienen una reacción a la tuberculina menor de 5 mm.

Parte XII. Aparato respiratorio 947


La prueba de Mantoux se realiza con 0,1 mL de estímulo o recordatorio al sistema inmune. Este fenó-
PPD RT23 (2 UT) por vía intradérmica en el plano dor- meno se llama efecto “booster” o de refuerzo, es más
sal del antebrazo izquierdo en la unión del tercio superior frecuente observarlo en el adulto y en el caso de los
con los dos tercios inferiores, hacia el borde externo y niños, en el adolescente.
se lee a las 48 ó 72 h, se señalan con tinta los bordes de En ningún caso, una prueba de tuberculina, aunque
la induración que se palpe, nunca el eritema y se mide se repita varias veces, es capaz de sensibilizar a un indi-
viduo, para ello es necesaria la respuesta inmune al nivel
el diámetro máximo transversal al eje longitudinal del
del tejido linfoide ya descrita.
brazo.
En la actualidad se describe un inmunoensayo que
valora en sangre la respuesta de interferón-ã a algunos
Interpretación de la prueba de tuberculina
antígenos micobacterianos y se plantea que tiene una
coincidencia del 85 % con la prueba de tuberculina.
Lectura Resultado
La radiografía de tórax es fundamental en los com-
plejos primarios que sean poco sintomáticos. Casi nunca
0-4 mm (no reactor) No infectados y falsos vemos el granuloma inicial, con excepción de los com-
negativos plejos primarios progresivos que tienen un aspecto
5-9 mm (reactores Infectados por M. neumónico, ni vemos generalmente la linfangitis
débiles) tuberculosis interfocal. El componente más observado es el
Reacciones cruzadas ganglionar, existe una o más adenopatías en el hilio o
con micobacterias bifurcación de la tráquea, se puede ver directamente o
Vacunados con BCG dar signos indirectos como un enfisema localizado o una
10-14 mm (reactores Infectados por M. atelectasia. La adenopatía también puede cavitarse.
francos) tuberculosis Pueden ser útiles los cortes tomográficos lineales
Enfermos de TB o la tomografía axial computarizada en casos dudosos.
Reacciones cruzadas No hay imágenes patognomónicas en la TB. Pue-
Vacunados con BCG den aparecer calcificaciones, áreas de consolidación,
15 o más (hiperérgicos) Infectados y enfermos fibrosis y cavitaciones, derrames o adherencias pleurales
de TB y en el caso de la TB miliar, el punteado fino difuso ho-
mogéneo que la caracteriza y que se diferencia de la
diseminación broncógena, pues esta tiene nódulos más
En los controles de foco de un tuberculoso bacilífero
gruesos y de diferente tamaño.
(BAAR +), a los efectos de definir los contactos infec-
Estudios microbiológicos para examen directo y
tados, se tomarán como positivos a esta prueba a todos
cultivo se hacen siempre que haya tos productiva o cuan-
los casos reactores de 5 mm o más.
do se demuestren lesiones parenquimatosas, ya sea re-
En pacientes con SIDA, o con manifestaciones clí-
cogiendo esputo o contenido gástrico, y más raramente
nicas compatibles con TB también debe considerarse
lavado broncoalveolar.
positiva (PPD +).
En formas extrapulmonares también se puede ha-
Una vez que se considera que un caso es PPD+, o
cer estudio microbiológico de otras muestras, así como
sea, que está infectado con el M. tuberculosis, no debe
valoración por anatomía patológica.
repetirse la prueba si hay una nueva exposición al baci-
Los estudios convencionales en TB tienen la des-
lo, porque ya sabemos que está infectado.
ventaja de su larga demora (de 6 a 8 semanas), para
Cuando existen enfermedades o condiciones que
tener el resultado del cultivo y la sensibilidad a las dro-
disminuyen la respuesta inmune, la reacción a la
gas antituberculosas.
tuberculina puede ser negativa aunque esté infectado. Se han descrito métodos radiométricos, que indi-
Si hacemos la prueba en el período que media entre la can presencia de micobacterias entre 5 y 14 días, méto-
aspiración del bacilo y el desarrollo de inmunidad celular dos serológicos o ELISA para detección de anticuerpos
e hipersensibilidad retardada (3 a 8 semanas), la reac- y estudios cromatográficos que identifican diferentes
ción a la tuberculina puede ser también falsa negativa. sustancias micobacterianas. Actualmente, con el cono-
Como la memoria inmune se puede atenuar con el cimiento del DNA micobacteriano, se utilizan técnicas
tiempo, se recomienda repetir la prueba de Mantoux basadas en genética molecular, que pueden agilizar el
después de 1 a 2 semanas de la inicial, a aquellos casos diagnóstico o sirven para estudios epidemiológicos:
con alta sospecha de TB y Mantoux inicial anérgico. • Sondas de hibridación de DNA
Su positividad implica que la prueba inicial sirvió de • Reacción en cadena de polimerasa (PCR).

948 Tomo III


• Análisis de informador de luciferaza. de eficacia variables, y se señala que previene fun-
• Polimorfismos de restricción de longitud del fragmento. damentalmente las formas graves o diseminadas de
• Spoligotyping. la enfermedad y disminuye por tanto, la mortalidad.
Algunos países desarrollados han limitado su uso a
En los niños, es poco frecuente el aislamiento del grupos de alto riesgo.
bacilo, lo que unido a la baja incidencia de tuberculosis, En la actualidad se trabaja en nuevas vacunas dirigi-
motiva la recomendación de nuestro Programa de Con- das en 2 sentidos:
trol para confirmar los casos presuntivos a través de las − Mejorar la vacuna BCG, al hacerla más potente.
Comisiones Provinciales y del Centro de Referencia − Crear una nueva vacuna.
Nacional. • Prevención en los trabajadores de la salud que ingre-
TRATAMIENTO
san en áreas de investigación, diagnóstico o atención
a pacientes con TB.
A pesar del panorama epidemiológico ya descrito,
• Educación sanitaria.
la TB continúa siendo una enfermedad prevenible y cu-
rable. La OMS tenía como meta para el 2000, lograr
que todos los países detectaran el 70 % de los enfermos Tratamiento curativo:
bacilíferos y lograran la curación del 85 % de ellos, lo El tratamiento efectivo de la TB se basa en la apli-
cual no se ha logrado. cación sistemática de la terapia multidroga directamen-
Prevención te supervisada (estrategia DOTS de la OMS) y en el
• La medida preventiva más eficaz es cortar la cadena seguimiento de los resultados de este tratamiento, y se
de transmisión a partir de la detección, tratamiento y divide en dos fases:
curación de los enfermos. • Inicial o bactericida (negativiza los cultivos).
• La quimioprofilaxis con isoniacida ha demostrado ser • Continuación o esterilizante.
eficaz hasta en el 85 % de los casos y puede ser:
− Primaria: individuos no infectados (PPD-) pero Existen 4 grupos de población bacilar en un enfer-
en contacto estrecho con un tuberculoso mo: extracelular (en las cavidades), intracelular (en los
bacilífero. macrófagos), semidormidos (caseum) y dormidos. La
− Secundaria: individuos infectados (PPD+) pero actividad metabólica es alta en los extracelulares, baja
no enfermos, la quimioprofilaxis trata de elimi- en los intracelulares, ocurre en accesos en los
nar bacilos viables en las siembras. semidormidos y muy baja en los dormidos. Las drogas
La quimioprofilaxis se administra a razón de bactericidas, particularmente la isoniacida, matan rápi-
5 mg/kg/día sin exceder los 300 mg. damente los bacilos extracelulares, los que representan
Se puede administrar bisemanal: 15 mg/kg/día, el 90 %, mientras que la pirazinamida es muy efectiva
sin exceder 900 mg por dosis, en casos que no contra los intracelulares. En la fase de continuación se
sea posible garantizar el esquema de dosis dia- deben eliminar, además, los semidormidos. La rifampicina
ria. Debe administrarse bajo supervisión directa es efectiva contra las tres primeras poblaciones. Ningu-
por el personal de salud. na medicación es efectiva contra los organismos dormi-
La quimioprofilaxis primaria (individuos PPD-) dos. Estos serán destruidos si “despiertan” e incrementan
se administra durante 2 meses y se repite la prue- su actividad metabólica, o se mantienen dormidos gra-
ba de tuberculina, si esta se mantiene negativa, cias al sistema inmune.
se interrumpe la profilaxis, si por el contrario
resulta positiva se mantiene por 6 meses. La Clasificación de los enfermos para tratamiento:
quimioprofilaxis secundaria se administra durante • Categoría I
6 meses y solo una vez en la vida. Casos nuevos de TB bacilíferos (BAAR +) y casos
En el SIDA y otras condicionantes de alto ries- graves.
go, puede extenderse a un año. • Categoría II
No debe iniciarse nunca la quimioprofilaxis has- Retratamiento (recaídas, fracasos y abandonos de
ta estar seguros de que el paciente no está en- BAAR+).
fermo, ya que esto puede constituir una • Categoría III
monoterapia con el riesgo de desarrollo de re- Casos nuevos de TB no bacilíferos (BAAR -), for-
sistencia. mas extrapulmonares no graves.
• Vacunación BCG: la OMS recomienda su uso en • Categoría IV
países con alta prevalencia de TB, con porcentajes Casos crónicos.

Parte XII. Aparato respiratorio 949


La mayoría de los niños caerán en la categoría III Bibliografía
y en ocasiones en la I.
Albino JA and Reichmann LB: “The treatment of Tuberculosis”.
El esquema de tratamiento de la categoría I consta Respiration, Basel, 1998, 65: 237-55.
de 4 drogas en la primera fase, la 4ta. puede ser estrepto- American Academy of Pediatrics: “Tuberculosis”. 643-60. In:
micina o preferiblemente etambutol, por la resistencia a Pickering L K Ed Red Book: 2003 Report of the Committee
la estreptomicina en nuestro medio (Cuadro 70.2). on Infectious Diseases, 26th Ed, Elk Grove Village USA.
Armas L and González Ochoa E: “Manejo de la Tuberculosis en la
República de Cuba”. Rev Cubana Med Trop, La Habana,
Cuadro 70.2. Esquema de tratamiento de la categoría I
1998, 50(2):150-8.
Bass J: “Tuberculosis”. Clin Med N Am, Mexico1993, 77(6):
Primera fase diaria (60 dosis)
1289-1319.
Blumberg HM, Leonard MK and Jasmer RM: “Update on the
Dosis
treatment of Tuberculosis and Tuberculosis latent infection”.
Droga Presentación Diaria Máxima
JAMA, Chicago, 2005, 293(22): 2776-84.
Crofton J: “Directrices para la Tuberculosis fármaco resistente”.
Isoniacida Tab. de 150 mg 5mg/kg 300 mg
WHO/TB/96.210 (Rev. 1) Organización Mundial de la Salud,
Rifampicina Tab. de 300 mg 10 mg/kg 600 mg
Ginebra, 1997.
Pirazinamida Tab. de 500 mg 15-30 mg/kg 1,5-2g
Dotres C: “Programa Nacional de Control de la Tuberculosis:
Estreptomicina Bbo. de 1 g 15 mg/kg 1g (<50 años)
Manual de Normas y Procedimientos”. Editorial Ciencias
Médicas, La Habana, 1999.
Dpiaz R, Kremen K, De Hoas PEW, Gómez IR et al: “Molecular
Segunda fase: intermitente 2 veces por semana
epidemiology of Tuberculosis in Cuba outside of Havana,
(40 dosis)
julio 1994-june 1995: utility of spoligotyping vs. 156110
restriction fragment length polymorphism”. Int J Tuberc
Dosis
Lung Dis, 1998, 2(9): 743-50.
Droga Presentación Diaria Máxima
Drobniewski F, Pablos-Mendez A and Raviglione MC:
“Epidemiology of tuberculosis in the world”. Sem Respir Crit
Isoniacida Tab. de 150 mg 15 mg/kg 750 mg
Care Med, 1997, 18(5): 419-29.
Rifampicina Tab. de 300 mg 10 mg/kg 600 mg
Dye C, Watt CJ, Bleed DM, Hosseini SM and Raviglione MC:
“Evolution of Tuberculosis control and prospects for
Nota: El etambutol, en la primera fase, se utiliza a razón de 25 mg/kg
reducing Tuberculosis incidence, prevalence and death
y con una dosis máxima de 2,5 g. No se utilizará en personas cuyas
globally”. JAMA, Chicago, 2005, 293(22): 2776-84.
limitaciones impidan poder detectgar a tiempo la toxicidad sobre el
Geng E, Kreiswirth B, Burzynski R and Schluger NW: “Clinical
nervio óptico y en aquellas con neuropatía óptica previa: en estos
and radiographic correlates of primary and reactivation
casos, se utilizará la estreptomicina en la dosis antes descrita.
Tuberculosis”. JAMA, Chicago, 2005, 293(22): 2740-5.
Mederos L, Quiñones Y, Ruiz R, Teja I et al: “Análisis
cromatográfico de cepas de Mycobacterium Tuberculosis
La categoría II lleva una fase inicial que se extien- aisladas de un brote en pacientes VIH en Cuba”. Rev Cubana
Med Trop, La Habana, 1998, 50(2): 120-3.
de a 3 meses (90 dosis) con 4 ó 5 drogas y la 2da fase de Muñoz F and Starke J: “Tuberculosis”. Page: 958-71. In:
5 meses, 3 veces por semana (60 dosis) con 3 drogas. Berhman, Kliegman and Jenson. Nelsons Textbook of
La categoría III es similar a la I, pero solo con 3 Pediatrics. 17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
drogas. Nelson LJ, Schneider E, Wells CD and Moore N: “Epidemiology
of childhood Tuberculosis in The United States, 1993-2001:
La categoría IV requiere de drogas de 2da línea. The need for continue vigilance”. Pediatrics, Evanston, 2004,
Este tratamiento se realiza en centros especializados. 114(2):333-41.
Deben tenerse en cuenta situaciones especiales como Oliva C, Callejón A y Marrero CL: “Novedades en Tuberculosis”.
Page: 23-42. n: II Curso Nacional de Actualización en
enfermos de SIDA, hepatopatías crónicas y otras.
Neumología Pediátrica. Cobas Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
Los esteroides se utilizan en pacientes muy gra- OPS.” Tuberculosis and children: the missing diagnosis”. Suppl
ves, meningitis con focalidad neurológica, TB disemina- Child Health Dialogue, 1996, AHRTAG, London
da y reacciones de hipersensibilidad a drogas ECM1M35B, UK.
Pablos-Mendez A, Raviglione MC, Laszlo A, Binkin N et al:
antituberculosas. “Global surveillance for antituberculosis drug resistance,
El resurgimiento de la TB ha traído consigo el inte- 1994-1997”. N Eng J Med, Boston, 1998, 338: 1641-9.
rés por buscar nuevos elementos diagnósticos y tera- Pai M, Gokhale K, Joshi R, Dogra S, Kalantri S, Mendirata D,
péuticos. Narang P et al: “Mycobacterium Tuberculosis infection in
health care workers in rural India. Comparison of a whole-
Actualmente, se trabaja en la búsqueda de nuevas blood Interferon γ assay with tuberculin skin testing”.
drogas antituberculosas y en la aplicación de tratamien- JAMA, Chicago, 2005: 293:2746-55.
tos inmunomoduladores en pacientes con evolución Pilheu JA: “Tuberculosis 2000: Problems and solutions”. Int J
tórpida. Tuberc Lung Dis, 1998, 2(9): 696-703.

950 Tomo III


Starke J: “Tuberculosis”. Page: 731-67. In: Krugmans Infectious Cuadro 71.1. Derrames pleurales
Diseases of Children. 11th Ed, Mosby Co, USA, 2004.
Wooton SH, González BE, Pawlak R, Teeter LD, Smith KC, • Hidrotórax o trasudados:
Musser JM, Starke JR and Gravis EA: “Epidemiology of − Insuficiencia cardíaca.
pediatric Tuberculosis using traditional and molecular
techniques: Houston, Texas”. Pediatrics, Evanston, 2005, − Síndrome nefrótico.
116(5): 1141-47. − Cirrosis hepática
− Hipoproteinemia (desnutrición severa).
− Diálisis peritoneal.
− Atelectasia.
. Capítulo 71 . − Otras.
• Exudados:
− Infecciones:
Afecciones pleurales Derrames paraneumónicos.
Gladys Abreu Suárez . Neumonías bacterianas.
. Neumonías atípicas.
La pleura es una fina membrana que cubre la su- . Tuberculosis.
. Neumonías micóticas.
perficie interna torácica (pleura parietal) y envuelve los
. Neumonías parasitarias.
pulmones (pleura visceral). La pleura parietal dispone Infecciones por debajo del diafragma.
de una rica inervación sensitiva y es irrigada por la cir- − Tumoraciones:
culación sistémica, a diferencia de la pleura visceral que − Causas inmunológicas:
es sensible al dolor y su vascularización proviene de la Pancreatitis.
Embolismo pulmonar.
circulación pulmonar. Ambas están constituidas por una
Uremia.
capa simple de células mesoteliales, que se apoyan en − Enfermedades de los linfáticos:
una red de tejidos conectivos que contienen vasos san- Quilotórax.
guíneos y linfáticos. Entre estas células aparecen estomas − Iatrogénicas.
que comunican directamente con los linfáticos. Drogas.
Radiaciones.
El espacio pleural que se crea entre ambos
mesotelios, es real y contiene normalmente de 0,1 a 0,2
mL/kg de peso corporal de un líquido claro que contiene
1,5 g de proteínas/dL y alrededor de 1 500 células/mL Exudados
con predominio de monocitos y un pH de 7,60. Este lí- Resultan de la inflamación pleural o de la afecta-
quido es esencialmente instersticial de la pleura parietal, ción del drenaje linfático.
ya que es irrigada por la circulación sistémica y como la Para que un líquido pleural se considere exudado,
presión en el espacio pleural es subatmosférica, hay un debe reunir uno de los requisitos siguiente:
• Relación de proteínas totales en líquido pleural con la
gradiente de presión hacia dicho espacio.
del suero de 0,5 o más.
En condiciones normales, la formación de líquido y
• Actividad de deshidrogenasa láctica (DHL) en líqui-
su reabsorción a través de los linfáticos están balancea- do pleural de 200 U o más.
das. Puede producirse acumulación de líquido por: • Relación de actividad de DHL en líquido pleural con
• Incremento en su formación: la del suero de 0,6 o más.
− Incremento en la presión hidrostática.
− Disminución de la presión oncótica intravascular. Los derrames paraneumónicos o pleuresías son la
− Aumento de la permeabilidad vascular. causa más frecuente de exudado pleural.
− Movimiento de líquido del espacio peritoneal. La neumonía en una localización subpleural
• Por disminución en su reabsorción: incrementa la permeabilidad capilar pleural y pulmonar,
− Drenaje linfático bloqueado. y se filtra un líquido estéril rico en proteínas, con mode-
rado número de leucocitos polimorfonucleares (PMN).
Derrames pleurales Metabolitos del oxígeno y otros productos liberados por
Se originan por múltiples causas, tanto si son los PMN y las bacterias, son los responsables del daño
trasudados como exudados (Cuadro 71.1). al endotelio vascular y del aumento de la permeabilidad.

Parte XII. Aparato respiratorio 951


Starke J: “Tuberculosis”. Page: 731-67. In: Krugmans Infectious Cuadro 71.1. Derrames pleurales
Diseases of Children. 11th Ed, Mosby Co, USA, 2004.
Wooton SH, González BE, Pawlak R, Teeter LD, Smith KC, • Hidrotórax o trasudados:
Musser JM, Starke JR and Gravis EA: “Epidemiology of − Insuficiencia cardíaca.
pediatric Tuberculosis using traditional and molecular
techniques: Houston, Texas”. Pediatrics, Evanston, 2005, − Síndrome nefrótico.
116(5): 1141-47. − Cirrosis hepática
− Hipoproteinemia (desnutrición severa).
− Diálisis peritoneal.
− Atelectasia.
. Capítulo 71 . − Otras.
• Exudados:
− Infecciones:
Afecciones pleurales Derrames paraneumónicos.
Gladys Abreu Suárez . Neumonías bacterianas.
. Neumonías atípicas.
La pleura es una fina membrana que cubre la su- . Tuberculosis.
. Neumonías micóticas.
perficie interna torácica (pleura parietal) y envuelve los
. Neumonías parasitarias.
pulmones (pleura visceral). La pleura parietal dispone Infecciones por debajo del diafragma.
de una rica inervación sensitiva y es irrigada por la cir- − Tumoraciones:
culación sistémica, a diferencia de la pleura visceral que − Causas inmunológicas:
es sensible al dolor y su vascularización proviene de la Pancreatitis.
Embolismo pulmonar.
circulación pulmonar. Ambas están constituidas por una
Uremia.
capa simple de células mesoteliales, que se apoyan en − Enfermedades de los linfáticos:
una red de tejidos conectivos que contienen vasos san- Quilotórax.
guíneos y linfáticos. Entre estas células aparecen estomas − Iatrogénicas.
que comunican directamente con los linfáticos. Drogas.
Radiaciones.
El espacio pleural que se crea entre ambos
mesotelios, es real y contiene normalmente de 0,1 a 0,2
mL/kg de peso corporal de un líquido claro que contiene
1,5 g de proteínas/dL y alrededor de 1 500 células/mL Exudados
con predominio de monocitos y un pH de 7,60. Este lí- Resultan de la inflamación pleural o de la afecta-
quido es esencialmente instersticial de la pleura parietal, ción del drenaje linfático.
ya que es irrigada por la circulación sistémica y como la Para que un líquido pleural se considere exudado,
presión en el espacio pleural es subatmosférica, hay un debe reunir uno de los requisitos siguiente:
• Relación de proteínas totales en líquido pleural con la
gradiente de presión hacia dicho espacio.
del suero de 0,5 o más.
En condiciones normales, la formación de líquido y
• Actividad de deshidrogenasa láctica (DHL) en líqui-
su reabsorción a través de los linfáticos están balancea- do pleural de 200 U o más.
das. Puede producirse acumulación de líquido por: • Relación de actividad de DHL en líquido pleural con
• Incremento en su formación: la del suero de 0,6 o más.
− Incremento en la presión hidrostática.
− Disminución de la presión oncótica intravascular. Los derrames paraneumónicos o pleuresías son la
− Aumento de la permeabilidad vascular. causa más frecuente de exudado pleural.
− Movimiento de líquido del espacio peritoneal. La neumonía en una localización subpleural
• Por disminución en su reabsorción: incrementa la permeabilidad capilar pleural y pulmonar,
− Drenaje linfático bloqueado. y se filtra un líquido estéril rico en proteínas, con mode-
rado número de leucocitos polimorfonucleares (PMN).
Derrames pleurales Metabolitos del oxígeno y otros productos liberados por
Se originan por múltiples causas, tanto si son los PMN y las bacterias, son los responsables del daño
trasudados como exudados (Cuadro 71.1). al endotelio vascular y del aumento de la permeabilidad.

Parte XII. Aparato respiratorio 951


Este es el llamado estadio inflamatorio. En la clíni- En este estadio disminuyen más el pH y la glucosa
ca se observan los síntomas propios de la neumonía, es en el líquido pleural, y aumenta la DHL.
importante el dolor torácico que aumenta con las inspi- Los hallazgos clínicos son similares, pero no se
raciones profundas, la tos y al estirarse, y que puede modifican con los cambios de posición.
irradiarse al hombro o a la espalda. El niño adopta una De no evacuarse el derrame, a las 2 ó 3 semanas
postura antálgica y se queja. del inicio sobreviene el estadio de organización o empie-
El dolor es mayor en las llamadas pleuresías plásti- ma crónico, en que los fibroblastos continúan depositan-
do colágeno y una membrana fibrinopurulenta encierra
cas o secas, en que la cantidad de líquido es pequeña y
el pulmón (fibrotórax o paquipleuritis).
puede disminuir cuando su volumen aumenta.
Un empiema no evacuado puede fistulizar a bron-
En la medida en que el derrame es mayor, puede
quio y provocar una fístula broncopleural y un
aparecer dificultad respiratoria y cianosis. En el examen pioneumotórax. También puede producir abscesos
físico, en dependencia de la magnitud del derrame, se pulmonares, pericarditis purulenta, osteomielitis de las
aprecia matidez, y disminución de las vibraciones voca- costillas, peritonitis por ruptura diafragmática y compli-
les y del murmullo vesicular. caciones sépticas a distancia.
Al inicio puede palparse y auscultarse un roce ás-
pero, de fricción que desaparece al acumularse líquido. CAUSA

El mediastino puede desplazarse hacia el lado no afecto, La pleuresía es una complicación relativamente
y observarse desviación del latido de la punta. Estos frecuente en las neumonías bacterianas y se reporta hasta
hallazgos se modifican con los cambios de posición, pero el 66 % de gérmenes aerobios aislados, tanto gram-
mucho más lentamente que cuando se trata de un positivos como gramnegativos; en alrededor del 24 %
trasudado. de los casos se aíslan gérmenes anaerobios y el 10 %
Si en este estadio la terapéutica antibiótica se de- son infecciones mixtas.
mora en iniciarse o no es adecuada, las bacterias inva- En nuestro medio el neumococo es el agente más
den el espacio pleural. importante de las neumonías adquiridas en la comuni-
Productos de las bacterias, como los componentes dad, en niños mayores de 2 meses.
de la pared celular del neumococo, se unen a leucocitos Otros microorganismos pueden ser estreptococo
y otras células, y estimulan la producción de citoquinas y del grupo B (en recién nacidos), Haemophilus
mediadores: interleucina 1 (IL-1), interleucina 6 (IL-6), influenzae en individuos no vacunados, así como
interleucina 8 (IL-8), factor activador plaquetario (PAF) Staphylococcus y Klebsiella.
y factor de necrosis tumoral (TNF) alfa. Es importante la causa tuberculosa en países don-
Los leucocitos PMN migran hacia la pleura atraí- de la tuberculosis infantil es frecuente.
dos por la IL-8, el PAF y los componentes de la pared Las neumonías virales y por micoplasmas pueden
bacteriana. Estos componentes también activan la vía cursar con derrames generalmente pequeños y unilate-
alternativa del complemento y la “cascada” de la coa- rales que regresan en 1 semana, con aspecto seroso y
gulación. Hay aumento de la actividad procoagulante y escasas células mononucleares con glucosa normal. En
disminución de la fibrinólisis, lo que favorece la deposi- algunas infecciones por micoplasmas pueden observar-
ción de fibrina en el espacio pleural. Los fibroblastos se derrames masivos.
son activados e invaden la pleura y segregan colágeno, DIAGNÓSTICO
que junto con la fibrina producen tabiques entre las ho-
Los estudios radiográficos de toráx (anteroposterior,
jas pleurales. Este estadio se llama de tabicación o
lateral y Pancoast) y ultrasonográficos evidencian el
fibrinopurulento. derrame; es muy útil el ultrasonido en las pleuresías
Con la continuación del proceso infeccioso, las bac- tabicadas y en derrames que se localizan atípicamente
terias y leucocitos muertos liberan sustancias que au- en el espacio subpulmonar. La tomografía axial
mentan la inflamación. A diferencia de la neumonía, a computarizada (TAC) puede diferenciar entre enfer-
nivel de la pleura estos detritos y la fibrina no pueden ser medad pleural y parenquimatosa, y determinar
eliminados por el organismo, ya que bloquean el drenaje tabicamiento.
linfático, por lo que el derrame puede incrementarse en La punción pleural confirma el diagnóstico y per-
este estadio, aunque la neumonía mejore, y es necesario mite el estudio del líquido tanto citoquímico como micro-
el drenaje terapéutico. biológico; debe evacuarse la mayor cantidad de líquido
El exudado adquiere un aspecto de líquido gelati- para aliviar los síntomas compresivos. Debe realizarse
noso, que se coagula y puede llegar a ser francamente en derrames que ocupan más de un tercio del hemitórax
purulento. o en cualquier paciente con evolución no satisfactoria.

952 Tomo III


TRATAMIENTO El neumotórax espontáneo es raro en el niño. En
La terapéutica está dirigida, en primer lugar, a la dependencia de la causa, pueden presentarse
enfermedad de base. La antibioticoterapia estará en hidroneumotórax, pioneumotórax y hemoneumotórax.
dependencia de la causa infecciosa que se sospeche y
CUADRO CLÍNICO
debe ser de larga duración, en el caso de los empiemas.
Penicilinas y cefalosporina penetran bien en la cavidad Su comienzo es brusco con dolor típicamente
pleural, pero no sucede así con los aminoglucósidos en pleurítico, disnea y cianosis, en dependencia de su mag-
pacientes con empiema. nitud. Hay taquicardia y taquipnea reflejas. En el exa-
La pleurotomía con aspiración y drenaje está indi- men físico se constatan dificultad respiratoria, retracciones
cada en los llamados derrames complicados: con latido de la punta desviado en sentido contrario al
• Derrames purulentos (empiemas). lado del neumotórax, y disminución de las vibraciones
• Cuando la tinción de Gram del líquido pleural demues- vocales y del murmullo vesicular con timpanismo.
tre gérmenes. En casos poco frecuentes, en niños con heridas
• Aunque el aspecto macroscóspico no sea purulento, penetrantes del tórax o ventilados con presión positiva
si hay presencia en el líquido pleural de: puede verse neumotórax a tensión, pues el gas se acu-
− pH < 7,10. mula con una presión superior a la atmosférica, y produ-
− Glucosa < 40 mg/dL ó 2,2 mmol/L. ce desplazamiento mediastinal y aumento de la
− DHL > 1 000 U. resistencia pulmonar, lo que lleva al paciente a la insufi-
ciencia cardíaca derecha aguda.
La cantidad de proteínas y PMN tiene poco valor La radiografía demuestra la presencia de aire, so-
para definir si un derrame es complicado. bre todo la realizada en espiración (Fig. 71.1).
La colocación del catéter puede ser guiada por ul-
trasonido, cuando exista tabicamiento. Si el drenaje falla
por obstrucción del catéter, puede ser necesario un tubo
más grueso y/o usar fibrinolíticos (estreptoquinasa o
uroquinasa).
En caso de derrames complicados de evolución
desfavorable, colecciones tabicadas de difícil drenaje o
larga evolución, se recomienda realizar tempranamente
una toracoscopia video-asistida (mínimo acceso), para
lisis de adherencias, extracción de pus, fibrina y lavado
de cavidad pleural.
En sepsis pleurales persistentes, se recomienda la
decorticación.

Neumotórax
Se le llama así a la presencia de aire en el espacio
pleural, el cual puede penetrar a través de la pleura parietal
por heridas penetrantes del tórax, perforaciones
diafragmáticas o de forma iatrogénica como sucede en
la punción pleural, la canalización de subclavia u otros
Fig. 71.1. Neumatórax izquierdo.
procederes.
También puede entrar a través de la pleura visceral
por ruptura de bulas, neumatoceles, alvéolos o abscesos La evolución es hacia la reabsorción en la semana.
subpleurales, o en el curso de un empiema que “fistulice El tratamiento será el de la enfermedad de base; se ad-
a bronquio”. ministran analgésicos, así como oxigenoterapia para ace-
Es poco frecuente en el niño, pero se observa lerar la reabsorción, ya que aumenta el gradiente de
fundamentalmente en el recién nacido. En el resto de la presión.
edad pediátrica puede verse, sobre todo, como compli- La pleurotomía con sello de agua está indicada en
cación del asma y de las neumonías estafilocócicas, en los grandes neumotórax que dificulten la ventilación.
la fibrosis quística, en las bronquiolitis, en el síndrome de Las recidivas pueden requerir pleurodesis química
Ehler Danlos y Marfán, y en el secuestro pulmonar, va- o toracotomía con extirpación de bulas y raspado de la
riedad quística. pleura basal.

Parte XII. Aparato respiratorio 953


Hemotórax linfocitos, lo que disminuye la respuesta inmunológica
Es la presencia de sangre en la cavidad pleural. del niño, por lo que debe hacerse solo cuando compro-
Es más frecuente en el curso de los traumatismos meta la respiración. La mayoría de los quilotórax
torácicos y en procederes investigativos como traumáticos cesan o disminuyen en 1 ó 2 semanas; en
toracocentesis y biopsias. Con menor frecuencia se ob- caso contrario, se puede intentar ligar el conducto o rea-
servan en neoplasias, discrasias sanguíneas, acompañan- lizar pleurodesis química.
do a un neumotórax (hemoneumotórax), en la
tuberculosis y en el empiema, por erosión de un vaso
Tumoraciones de la pleura
sanguíneo. Son raras en el niño. Pueden ser primarias o
El diagnóstico diferencial se debe hacer con una metastásicas.
toracocentesis traumática, ya que pocas gotas pueden Los linfomas mediastinales pueden infiltrar la pleura,
teñir el líquido pleural. En ese caso, el color del líquido aunque es más frecuente que produzcan un derrame
mientras se aspira no es uniforme, se coagula en minu- pleural, por obstrucción linfática o del conducto torácico.
tos y no se observa hemosiderina en los macrófagos. Generalmente existen adenopatías mediastinales y el lí-
El tratamiento se dirige a la enfermedad de base, quido es seroso, aunque puede ser sanguinolento o le-
al control de la hemorragia y a la reposición de sangre. choso, con pocas células y predominar los linfocitos.
Debe eliminarse la sangre para evitar adherencias Los mesoteliomas son raros en el niño. En el adul-
pleurales. to se han asociado a exposición prolongada a asbesto.
Pueden ser benignos, con elementos fibrosos o malignos
Quilotórax fibrosarcomatosos. Su inicio es insidioso con dolor
Es una consecuencia de la ruptura del conducto torácico localizado, disnea, tos y pérdida de peso. Son
torácico con el consiguiente escape de quilo y su irrup- unilaterales y crecen a lo largo del mediatismo.
ción en la cavidad pleural. DIAGNÓSTICO
Su causa más frecuente es la cirugía torácica y En la radiografía se observa un derrame pleural
los traumatismos, aunque puede ser secundario a le-
con nódulos o engrosamiento mediastinal y toma
siones tumorales, usualmente linfomas. Puede asociar-
pericárdica.
se al síndrome de Noonan, las linfangiomatosis, trombosis
Hay resistencia a la aguja cuando se punciona, y
del conducto torácico y anomalías congénitas del siste-
ma ductal. Muchas veces no se demuestra la causa. Es se obtiene un líquido seroso o sanguinolento, viscoso, con
más frecuente del lado izquierdo. menos de 5 000 células/mL, pH bajo y LDH normal.
Clínicamente, se manifiestan los síntomas de la La confirmación se realiza por toratocomía, ya que la
enfermedad de base y la disnea, que aparece al biopsia pleural y el estudio citológico del líquido, habi-
incrementarse el derrame. El diagnóstico lo da el estu- tualmente, no son concluyentes.
dio del líquido; este tiene un aspecto característicamen- El tratamiento es quirúrgico, con una corta super-
te lechoso, es inodoro, con predominio de linfocitos. La vivencia.
glucosa es similar a la del suero y el pH es 7,40, con
una elevada concentración de triglicéridos (usualmente
Bibliografia
110 mg/dL) y una relación colesterol-triglicéridos de 1. Avansino J, Goldman B, Sawin R and Flum D: “Primary operative
vs. non-operative therapy for paediatric empyema. A
Las concentraciones de triglicéridos entre 50 y 110 mg/dL metanalysis.” Pediatrics, Evanston, 2005, 115(6):1652-9.
no son definitorias, por lo que se requiere una electroforesis Brooks I: “Microbiology of empyema in children and adolescents”
de lipoproteínas. Pediatrics, Evanston, 1990, 85: 922-6.
Bryant R and Salman C: “Pleural effusion and empyema” Page:
Este estudio permite el diagnóstico diferencial con 743-50. In Mandel Douglas and Bennett: Principles and
los derrames crónicos o pseudoquilotórax, que por su practice of Infectious Diseases. 5th Ed. Churchill Livingstone.
alto contenido de colesterol pueden adquirir este aspec- NY-London, 2000.
to lechoso. También es útil en pacientes desnutridos o Desencious JC and Guillemoft D: “Consequences of bacterial
resistance to antimicrobial agents. Conference summary”.
en recién nacidos que no hayan sido alimentados, en los Emerging Infect Dis.2004, 10(4): 759-60.
que el líquido tiene un aspecto seroso. Gómez R y Santillana P: “Neumotórax y derrame pleural”. Page.:
El manejo de estos enfermos debe estar dirigido a 248-55. In: Takahashi T. Cirugía. Bases clínicas y prácticas.
la causa, si se trata de un tumor, y a la alimentación con Mc Graw-Hill-Interamericana, México, 2003.
Hoff SJ, Neblett WW, Edwards KM, Heller RM et al:
una dieta pobre en grasas y sal, y rica en proteínas y “Parapneumonic empyema in children: decortications hasten
vitaminas liposolubles. La evacuación del derrame pro- recovery in patients with severe pleural infections”. Pediatr
duce considerables pérdidas calóricas, de proteínas y Infect Dis J, Baltimore, 1991; 10: 194-9.

954 Tomo III


Kroegel C and Antony VB: “Immunobiology of pleural aisló B. pertussis en 139 de ellos, junto con adenovirus
inflammation: Potential implications for pathogenesis, en la quinta parte; en los restantes 62 pacientes, en que
diagnosis and treatment”. Eur Respir J, Copenhagen, 1997. no se aisló la B. pertussis, se encontró también en la
10: 2411-8.
quinta parte de ellos adenovirus, lo que ratificó, al pare-
Pérez Frías J et al: “Neumonía adquirida en la comunidad.
Complicaciones y problemas en la práctica pediátrica”. Page: cer, lo establecido por Klenk y cols, tres años antes, que
1-14. In: Cobas Barroso. II Curso Nacional de Neumología una infección mixta, bacteriana y viral, pudiera estar pre-
Pediátrica. Ergon, España, 2005. sente en el síndrome tosferinoso o coqueluchoide. Re-
Phelan P, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in portes posteriores señalan dicho síndrome en infecciones
children, Page:83-5; 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
1990. por Chlamydia trachomatis y también en afecciones
Sahn SA: “The pleura. State of the art”. Am Rev Respir Dis, New de causa no infecciosa como la fibrosis quística. Se
York, 1988, 138: 184-234. acepta hoy, por consenso, el síndrome tosferinoso,
Sanh SA: “Management of complicated parapneumonic effusions” pertussoide o coqueluchoide, que es producido por dis-
Am Rev Respir Dis, New York, 1993, 148: 813-7.
tintas causas, infecciosas o no, y cuyas manifestaciones
Shoseyov A, Bibi H, Shatzberg G et al: “Short-term course and
outcome of treatments of pleural empyema in pediatric clínicas son semejantes a la tos ferina, que siempre de-
patients”. Chest, Park Ridge, 2002, 121:836-40. berá descartarse, y que se incluye en dicho síndrome.
Smith/Their: Fisiopatología. Principios básicos de la enfermedad.
Page: 833-35. Editorial Científico Técnica, La Habana, 1983. CAUSA
Trujillo JJ: “Tratamiento toracoscópico del empiema pleural en el Infecciosas y no infecciosas.
niño”. Trabajo para optar por el Titulo de Especialista de 1er • Infecciosas
Grado en Pediatría. Hospital William Soler, Facultad Enrique
− Bacterianas:
Cabrera. ISCM-H. 2004.
Winnie G: “Pleurisy, Pneumothorax and Hydrothorax”. Page: Bordetella pertussis
1461-5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelsons Bordetella parapertussis
Textbook of Pediatrics. 17th Ed. Saunders Co Philadelphia, Bordetella bronchiséptica
2003.
Mycobacterium tuberculoso
Chlamydia trachomatis (lactantes y niños pe-
queños) y Chlam. pneumoniae
. Capítulo 72 . Mycoplasma pneumoniae
Otras bacterias (discutido)
− Virales:
Síndrome coqueluchoide Adenovirus (los más frecuentemente encontrados)
Citomegalovirus y otros (?).
o pertussoide Micóticas
Manuel Rojo Concepción
Neumocistis jirovecii (antes denominado N.
carinii). Se presenta sobre todo en prematuros
En 1964, Olson y colaboradores reportaron una
o niños con deficiencias inmunológicas congéni-
afección con manifestaciones clínicas semejantes a la
tas o adquiridas)
tos ferina en una familia en la que no se pudo aislar la
Aspergillus fumigatus
Bordetella pertussis y encontraron, en la orofaringe de Hystoplasma capsulatum
los niños, adenovirus tipo 2, y en todos los miembros de − Mixtas, por bacterias y virus
la familia un aumento significativo de anticuerpos fijadores • No infecciosas
del complemento al adenovirus, que persistieron por − Hiperreactivas (alérgicas o no).
meses. En 1966, Collier y colaboradores describieron − Irritativas.
dos hermanos con manifestaciones clínicas semejantes − Fibrosis quística (FQ).
a la tos ferina en que se aisló adenovirus tipo 5 y deno- − Cuerpos extraños sólidos en vías aéreas inferio-
minaron a este cuadro “síndrome pertussis”. En ambos res, en particular laringe o en la tráquea.
reportes, se encontró eosinofilia en la convalecencia, − Aspirativas, dependientes de alteraciones en el
cuando habitualmente no se realizan estudios mecanismo de la deglución de causas anatómi-
hematológicos. Posteriormente, se produjeron varios cas o funcionales o del esófago, por ejemplo: fís-
reportes de cuadros parecidos a la tos ferina provoca- tula en H, chalasia, acalasia, estenosis esofágica,
dos por adenovirus, con leucocitosis y linfocitosis en el anillo vascular.
período de estado y en la convalecencia, eosinofilia. El − Disautonomía familiar (frecuente en hebreos).
informe de Islur y cols. (1975) hace referencia a un − Adenopatías mediastinales infecciosas (tu-
“síndrome de tos ferina” en 201 niños en los que se berculosas o no), o neoplásicas (linfomas).

Parte XII. Aparato respiratorio 955


Kroegel C and Antony VB: “Immunobiology of pleural aisló B. pertussis en 139 de ellos, junto con adenovirus
inflammation: Potential implications for pathogenesis, en la quinta parte; en los restantes 62 pacientes, en que
diagnosis and treatment”. Eur Respir J, Copenhagen, 1997. no se aisló la B. pertussis, se encontró también en la
10: 2411-8.
quinta parte de ellos adenovirus, lo que ratificó, al pare-
Pérez Frías J et al: “Neumonía adquirida en la comunidad.
Complicaciones y problemas en la práctica pediátrica”. Page: cer, lo establecido por Klenk y cols, tres años antes, que
1-14. In: Cobas Barroso. II Curso Nacional de Neumología una infección mixta, bacteriana y viral, pudiera estar pre-
Pediátrica. Ergon, España, 2005. sente en el síndrome tosferinoso o coqueluchoide. Re-
Phelan P, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in portes posteriores señalan dicho síndrome en infecciones
children, Page:83-5; 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
1990. por Chlamydia trachomatis y también en afecciones
Sahn SA: “The pleura. State of the art”. Am Rev Respir Dis, New de causa no infecciosa como la fibrosis quística. Se
York, 1988, 138: 184-234. acepta hoy, por consenso, el síndrome tosferinoso,
Sanh SA: “Management of complicated parapneumonic effusions” pertussoide o coqueluchoide, que es producido por dis-
Am Rev Respir Dis, New York, 1993, 148: 813-7.
tintas causas, infecciosas o no, y cuyas manifestaciones
Shoseyov A, Bibi H, Shatzberg G et al: “Short-term course and
outcome of treatments of pleural empyema in pediatric clínicas son semejantes a la tos ferina, que siempre de-
patients”. Chest, Park Ridge, 2002, 121:836-40. berá descartarse, y que se incluye en dicho síndrome.
Smith/Their: Fisiopatología. Principios básicos de la enfermedad.
Page: 833-35. Editorial Científico Técnica, La Habana, 1983. CAUSA
Trujillo JJ: “Tratamiento toracoscópico del empiema pleural en el Infecciosas y no infecciosas.
niño”. Trabajo para optar por el Titulo de Especialista de 1er • Infecciosas
Grado en Pediatría. Hospital William Soler, Facultad Enrique
− Bacterianas:
Cabrera. ISCM-H. 2004.
Winnie G: “Pleurisy, Pneumothorax and Hydrothorax”. Page: Bordetella pertussis
1461-5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelsons Bordetella parapertussis
Textbook of Pediatrics. 17th Ed. Saunders Co Philadelphia, Bordetella bronchiséptica
2003.
Mycobacterium tuberculoso
Chlamydia trachomatis (lactantes y niños pe-
queños) y Chlam. pneumoniae
. Capítulo 72 . Mycoplasma pneumoniae
Otras bacterias (discutido)
− Virales:
Síndrome coqueluchoide Adenovirus (los más frecuentemente encontrados)
Citomegalovirus y otros (?).
o pertussoide Micóticas
Manuel Rojo Concepción
Neumocistis jirovecii (antes denominado N.
carinii). Se presenta sobre todo en prematuros
En 1964, Olson y colaboradores reportaron una
o niños con deficiencias inmunológicas congéni-
afección con manifestaciones clínicas semejantes a la
tas o adquiridas)
tos ferina en una familia en la que no se pudo aislar la
Aspergillus fumigatus
Bordetella pertussis y encontraron, en la orofaringe de Hystoplasma capsulatum
los niños, adenovirus tipo 2, y en todos los miembros de − Mixtas, por bacterias y virus
la familia un aumento significativo de anticuerpos fijadores • No infecciosas
del complemento al adenovirus, que persistieron por − Hiperreactivas (alérgicas o no).
meses. En 1966, Collier y colaboradores describieron − Irritativas.
dos hermanos con manifestaciones clínicas semejantes − Fibrosis quística (FQ).
a la tos ferina en que se aisló adenovirus tipo 5 y deno- − Cuerpos extraños sólidos en vías aéreas inferio-
minaron a este cuadro “síndrome pertussis”. En ambos res, en particular laringe o en la tráquea.
reportes, se encontró eosinofilia en la convalecencia, − Aspirativas, dependientes de alteraciones en el
cuando habitualmente no se realizan estudios mecanismo de la deglución de causas anatómi-
hematológicos. Posteriormente, se produjeron varios cas o funcionales o del esófago, por ejemplo: fís-
reportes de cuadros parecidos a la tos ferina provoca- tula en H, chalasia, acalasia, estenosis esofágica,
dos por adenovirus, con leucocitosis y linfocitosis en el anillo vascular.
período de estado y en la convalecencia, eosinofilia. El − Disautonomía familiar (frecuente en hebreos).
informe de Islur y cols. (1975) hace referencia a un − Adenopatías mediastinales infecciosas (tu-
“síndrome de tos ferina” en 201 niños en los que se berculosas o no), o neoplásicas (linfomas).

Parte XII. Aparato respiratorio 955


− Otras tumoraciones mediastínicas. más de 2 semanas, la tos es tanto diurna como nocturna
− Síndrome de disquinesia ciliar (casi siempre por y las crisis pueden ser desencadenadas sin causa apa-
infección secundaria). rente o por el llanto, aire frío, ingestión de líquidos o co-
midas, presión sobre la tráquea, o contacto con irritantes
En Cuba entre las causas más frecuentes están, al como humo, olores, tabaco y otros. A veces, las crisis
parecer, las producidas por virus. La tos ferina es muy son tan severas, que se acompañan de apnea, necesi-
poco frecuente, en gran parte por la inmunización triple tando el niño respiración artificial. Se puede producir la
(DPT). En lactantes pequeños hay que tener en cuenta úlcera del frenillo en cuadros severos. En los niños este
las infecciones producidas por Chlamydias trachomatis estadio dura más de 2 meses (hace siglos, los chinos
sobre todo si el paciente tiene o ha tenido conjuntivitis en denominaron a la tos ferina como la tos de los cien días).
las primeras semanas de vida (30 a 50 %) o la madre En los cuadros virales se ha planteado que las cri-
presentó secreción vaginal de causa no precisada du- sis son menos intensas y más espaciadas, con una me-
rante el embarazo. Entre las no infecciosas, en nuestro nor duración del cuadro clínico en su totalidad.
medio, parecen ser las de causa hiperreactiva (alérgicas En el período de convalecencia, que es difícil de
sobre todo) las más frecuentes, así como las irritativas. separar del período anterior, las crisis se hacen progresi-
Hay pacientes con FQ que presentan en su evolución o vamente menos intensas y frecuentes. Hay recupera-
debutan con un síndrome coqueluchoide. ción del apetito, aumento de peso y de la vitalidad general.
En algunos países desarrollados, aunque desde los Este estadio puede durar semanas o meses Con fre-
años 90 del siglo pasado ya se había reportado, se han cuencia las crisis pueden reaparecer, aunque menos in-
diagnosticado en los últimos años, tos ferina en niños tensas y duraderas, a las semanas o meses de
mayores y adultos, entre estos en personal médico adul- considerarse terminado el síndrome, a la ocasión de in-
to en hospitales. Muchos de ellos fueron vacunados con fecciones respiratorias o por contacto con irritantes.
la DPT y reactivados, pero, con el tiempo los efectos
DIAGNÓSTICO
beneficiosos de la inmunización fueron disminuyendo, y
se comportaron como si no hubiesen sido vacunados. El síndrome se diagnosticará basándose en el cua-
dro clínico relatado o presenciado y su causa, infecciosa
MANIFESTACIONES CLÍNICAS o no, por una historia clínica completa incluyendo datos
Se caracterizan los síndromes coqueluchoides, so- epidemiológicos y por estudios microbiológicos.
bre todo en la tos ferina, por 3 estadios: catarral, espas- Siempre se debe descartar la tos ferina mediante
módico y de convalecencia. cultivos de la secreción nasofaríngea en medios de cul-
En el estadio catarral (con una duración alrededor tivo específicos como el de Bordet-Gengou fresco o el
de 2 semanas) se presentan síntomas de IRA alta: rinitis, de Regan-Lowe. El procedimiento de la placa tosida es
estornudos, obstrucción nasal, sin fiebre o con ella, pero mucho menos efectivo que el cultivo de la secreción
casi siempre no elevada. Al final de este estadío se nasofaríngea aspirada y no hay que esperar a que el
comienza a presentar tos sobre todo nocturna. paciente presente las quintas de tos para tomar las mues-
En el estadio espasmódico la tos se hace más fre- tras. En realidad, el aislamiento de la B. pertussis será
cuente en la noche y comienzan a aparecer las crisis de posible a finales del período catarral (en donde general-
tos características, llamadas quintas, tanto en el día como mente no se indica, excepto cuando hay una epidemia) o
en la noche. Estas crisis de tos, casi siempre seca, se a comienzos del período espasmódico; posteriormente
presentan en paroxismos de diversa intensidad y dura- es raro que el cultivo sea positivo, pues según algunos
ción. Su frecuencia varía entre unas pocas a decenas de microbiólogos es una bacteria “caprichosa”. Ninguna
“quintas” al día y terminan con un ruido inspiratorio o prueba serológica aislada es altamente sensible y espe-
“gallo” (que frecuentemente falta en el lactante y en cífica, en estos momentos. La leucocitosis con
niños mayores o adultos) seguido de apnea, con vómitos linfocitosis elevada, muchas veces en relación con la se-
o expulsión por la boca de una secreción espesa, muco- veridad del cuadro, que se presentan en el período es-
sa o blanquecina. Habitualmente, después de una crisis, pasmódico, es típica del síndrome coqueluchoide por B.
si es intensa, el niño está adinámico, hipotónico y hasta pertussis como ya se ha descrito al comienzo de este
con cianosis, que también se puede presentar durante tema. Los estudios virológicos (aislamiento del virus, au-
las crisis de tos. Raramente hay convulsiones. La pre- mento de títulos en sueros pareados o por otros métodos
sencia de fiebre alta nos debe hacer sospechar una com- como inmunofluorescencia, fijación de complemento, etc.)
plicación broncopulmonar, muy grave en niños pequeños, permitirán realizar el diagnóstico del síndrome de causa
sobre todo en lactantes. Durante este estadio, que dura viral. Los producidos por mycoplasmas se diagnosticarán

956 Tomo III


por cultivo que es difícil o por fijación del complemen- con muerte o lesiones neurológicas permanentes por
to; los producidos por Neumocistis jirovecii por aspi- hipoxia. Son menos frecuentes las hemorragias
ración bronquial, lavado broncopulmonar o raramente, intracraneales a veces precedidas, debidas a la intensi-
pues es un proceder cruento, por punción pulmonar y dad de las crisis, por hemorragias subconjuntivales,
aspiración. petequias en la parte superior del tórax, en el cuello y la
En los síndromes de causa no infecciosa el diag- cara. En realidad, las complicaciones más temidas de
nóstico se basará en la historia clínica y los anteceden- los síndromes coqueluchoides son las neurológicas y las
tes que, junto con el juicio clínico, nos orientará a indicar respiratorias sobre todo bronconeumonías en niños pe-
electrólitos en el sudor, radiografía de tórax, TAC, queños. También puede producirse malnutrición o exa-
broncoscopia, biopsia bronquial, etc. teniendo en cuenta cerbación de ella si existía anteriormente, por vómitos
que se tratará de ser preciso en sus indicaciones según repetidos y la poca ingestión de alimentos durante días o
un criterio lógico y no ordenando una serie numerosa de semanas. No debemos olvidar que, sobre todo la tos
investigaciones de manera rutinaria (Cuadro 72.1). ferina, como enfermedad anergizante puede producir la
reactivación de un foco tuberculoso latente.
COMPLICACIONES
TRATAMIENTO
Bronconeumonías, bronquiectasias residuales,
atelectasias, convulsiones, meningoencefalitis, apneas Preventivo. Lo más importante en los síndromes
severas que podrán conducir al paro cardiorrespiratorio coqueluchoides de causa infecciosa es la prevención de

Cuadro. 72.1. Algunas afecciones que producen síndrome coqueluchoide de causa no infecciosa de base, aunque pueden infectarse
secundariamente

Afección Manifestaciones clínicas

Hiperreactividad Manifestaciones clínicas + pruebas funcionales respiratorias de provocación con histamina o


bronquial (alérgica ejercicios y mejoría con nebulización de beta-2 agonistas adrenérgicos de acción rápida como
o no) salbutamol.

Fibrosis quística Electrólitos en el sudor elevados + Manifestaciones clínicas (respiratorias, digestivas) y/o
APF positiva de FQ en hermanos o primos hermanos sobre todo. Estudio genético.

Disquinesia ciliar Cuadros respiratorios altos, sobre todo otitis media, y bajos a repetición + estudios
ultramicroscópicos de los cilios. Sospeche este síndrome cuando hay síndrome de Kartagener.

Fístula Manifestaciones clínicas de aspiración, en vías aéreas bajas, frecuentes. APP de prematuridad.
traqueoesofágica Estudio radiológico contrastado de esófago con técnica para fístula en H, cinefluoroscopia.
en H

Reflujo GE con aspi- Manifestaciones clínicas y exámenes de esófago compatibles con reflujo GE (manometría,
raciones a repetición Phmetría, endoscopia) + administración de leche con radioisótopos (tecnesio radioactivo).
Puede haber respuesta al tratamiento sintomático del reflujo.

Cuerpos extraños só- Antecedentes personales de aspiración presenciado por otra persona (no siempre se puede
lidos en vías aéreas inferiores obtener este dato, para algunos esto es positivo en menos del 50 % de los pacientes)
seguidos de cuadros respiratorios crónicos o a repetición o atelectasias a la radiografía.
Broncoscopia, con BAL o no.

Alteraciones cardiovasculares congénitas Manifestaciones clínicas + estudios cardiovasculares: telecardiograma, ecocardiografía, ECG,
o adquiridas esofagograma, angiocardiografía, resonancia magnética.

Irritativas Manifestaciones clínicas en relación con irritantes y respuesta favorable después de eliminar-
los. Broncoscopia. BAL (lavado bronquioalveolar)

Malformaciones congénitas del Antecedentes de cuadros aspirativos. Esofagografía y otros estudios esofágicos, incluyendo
esófago con aspiraciones cinefluoroscopia.

Disautonomía familiar Otros síntomas de la afección como problemas de la succión y deglución en la lactancia, insen-
Enfermedad de Riley-Day sibilidad al dolor, y otras alteraciones neurológicas, mal control de la temperatura corporal,
“crisis autónomas” después de los 3 años de edad, prueba de histamina u otras y esofagograma
con cambios de posición. Se observa sobre todo en hebreos.

Parte XII. Aparato respiratorio 957


las infecciones por microorganismos que puedan pro- que se desencadenan las crisis cuando se le administran
ducirlos (poco posible en la práctica médica diaria). nebulizaciones. En cambio, existen algunas medidas que
La inmunización con la triple antibacteriana DPT se citan como de utilidad y que pasamos a tratar
de la que forma parte la vacuna antitosferinosa (la utili- someramente:
zada actualmente tiene una efectividad entre 60 y 80 % Antimicrobianos. La utilización de eritromicina
según algunos autores) es fundamental y no debe omi- u otros macrólidos, o rifampicina en la tos ferina no
tirse, salvo muy contadas excepciones, teniendo en cuen- ha demostrado eficacia en reducir la intensidad y du-
ta las experiencias de algunos lugares en donde se
ración del proceso ya establecido. Hay quienes seña-
suspendió como Tokio y el Reino Unido que presenta-
lan que su utilización disminuye la contagiosidad, y de
ron posteriomente epidemias de tos ferina.
manera temprana a finales del estadío catarral o co-
En Cuba se seguirá el esquema de vacunación del
mienzo del espasmódico tiene algún beneficio sobre
MINSAP.
También se recomienda evitar el contacto con por- las manifestaciones clínicas. En los infectados por B.
tadores o que padezcan infecciones por microorganismos pertussis, Chlamydia trachomatis o Mycoplasma
que puedan causar el síndrome; esto último, es difícil de pneumoniae o por otras bacterias sensibles, se reco-
cumplir en la práctica diaria. mienda la eritromicina a 10 o 15 mg/kg/dosis, 3 ó 4
La utilización de antibióticos (eritromicina u otros veces en 24 h y por 14 días, vía bucal (prefiriéndose
macrólidos o rifampicina) de manera preventiva en los con- el laurilsulfato de eritromicina estolato). También se
tactos, es muy discutida y muchos no los recomiendan. ha recomendado la azitromicina, bucal, a 12 mg/kg/en
La gammaglobulina hiperinmune contra la tos una sola dosis diaria durante 5 a 10 días o la
ferina, no se utiliza en Cuba pues la OMS no recomien- claritromicina, bucal, a 15 mg/kg por 24 h, en una o
da su utilización en los contactos no inmunizados, ya que dos subdosis (cada una de 7,5 mg/kg) durante 10 días
no evita la infección, ni se ha demostrado que la atenúa; como mínimo. Otros recomiendan el uso de
incluso en algunos países desarrollados se ha suspendi- cotrimoxazol, mezcla de sufametoxazol (SMZ) y
do su producción. trimetoprim (TMP) en proporción 5:1, a la dosis del
En los síndromes de causa no infecciosa se tratará SMZ de 20 mg/kg/dosis cada 12 horas durante 14 días
de evitarlos (por ejemplo, aspiración de un cuerpo extra- y por vía bucal.
ño) o diagnosticar y tratar precozmente aquellas afec- Se ha señalado que con frecuencia se producen
ciones que puedan producirlos (como la FQ). recidivas al poco tiempo de suspender el antibacteriano.
Tratamiento del síndrome coqueluchoide pre- Las penicilinas ni la cefalosporinas de primera o
sente. Una vez presentado el síndrome, podemos divi- segunda generaciòn no tienen efecto sobre la B.
dir el tratamiento en sintomático y contra la afección pestussis. No hemos encontrado citas con cefalosporinas
causal que lo está produciendo. de 3ra. generación en la tos ferina.
En el tratamiento sintomático se han tenido en cuen- En los síndromes producidos por Mycoplasma
ta diversas medidas como evitar factores desenca- pneumoniae o por Chlamydia pneumoniae se ha utili-
denantes de las crisis (ya visto anteriormente al describir zado en niños después de los 8 años de edad, la
el cuadro clínico), no colocar al niño en decúbito supino tetraciclina.
durante las crisis, pues se producen vómitos y puede En el síndrome producido por el Mycobacterium
aspirarse el contenido gástrico a las vías aéreas y pro- tuberculosis (debido a compresión bronquial o del ner-
ducirse una neumonía aspirativa. Se puede colocar al vio recurrente por adenopatías) hay algunos autores que
niño en decúbito prono y hasta en posición inclinada li- recomiendan utilizar prednisona por 2 semanas y siem-
gera con la cabeza hacia abajo durante las crisis, pero pre con cuatro medicamentos antituberculosos
los golpes en la espalda tienen una eficacia no demos- (isoniacida, rifampicina, estreptomicina o etambutol y
trada, aunque hay quienes recomiendan frotar la espal- pirazinamida) durante 6 a 7 meses, primero diariamente
da del niño en decúbito prono durante las quintas de por 2 meses y después 2 veces por semana. (Ver Tu-
tos. Colocar al niño en una atmósfera húmeda y fresca berculosis.)
no ha demostrado de manera absoluta su eficacia e in- Dieta. Debe ser bien equilibrada, en pequeñas co-
cluso hay quienes no la recomiendan. Tampoco ha de- midas, pero más frecuentes y después de las crisis o
mostrado ser eficaz la utilización del salbutamol quintas de tos. Las comidas voluminosas pueden pro-
(albuterol) en nebulizaciones y hasta hay pacientes en ducir vómitos, desencadenar crisis o ambos cuadros.

958 Tomo III


Alimentos como galletas, tostadas u otros que se des- En los síndromes de causa no infecciosa se reali-
menuzan con facilidad, irritando la orofaringe, pueden zará el tratamiento correspondiente de la afección que
producir quintas de tos, así como los líquidos abundan- causa el cuadro coqueluchoide (hiperreactividad bron-
tes y/o fríos. En lactantes a veces hay que recurrir a quial, fibrosis quística, cuerpo extraño y otras causas)
la alimentación por sonda nasogástrica. No obligar al (Cuadro 72.1).
niño a ingerir alimentos.
Apoyo sicológico a los familiares y un ambiente de Bibliografía
tranquilidad para el paciente, Benenson AS, ed. Tos ferina por B. pertussis y parapertussis En:
Aspirar, de manera suave con extracción de las Manual para el control de las enfermedades transmisibles.
secreciones después de los episodios severos en niños XVI Ed. p446-51. Publicación No.564, OPS/OMS:
Washigton DC, USA. 1997.
pequeños. Se realizará por una enfermera entrenada para Collier AM, et al. Generalized types of adenovirus infection
la aspiración rápida después de las quintas de tos, pues associated with the pertussis syndrome. J. Pediatr 1966;
generalmente, estas son seguidas de un momento relati- 69:1073-1078.
Islur Y. The whooping cough syndrome: a continuing pediatric
vamente refractario a nuevas crisis de tos. No se realiza-
problem. Clin Pediatr 1975; 14:1971-1976.
rá de manera rutinaria sino según necesidades. Committee on Infectious Diseases. American Academy of
Oxigenoterapia en niños pequeños con apneas se- Pediatrics Report. En: Pickering LK, ed. Red Book: 26th
veras, de manera constante o intermitente, aunque siem- Ed. Section 3. Pertussis. American Academy of Pediatrics.
Elk Grove Village. IL, USA. 2003.
pre se tendrá en cuenta la tolerancia del pequeño. Hewlett EL, Edwards KM. Pertussis—Not Just for Kids. N
Habitación. Se recomienda que esté ventilada con Eng J Ned 2005; 352: 1215-1222.
una temperatura si es posible alrededor de los 20 a Klenky S.. Bacteriologically proved pertussis and adenovirus
infection. Am J Dis Child 1972; 124: 203-208.
25 °C y libre de irritantes (polvo, humo incluyendo del
Lee Nemir R. Pertussoid Eosinophilic Pnemonia. En: Kendig Jr.
tabaco, olores y otros) y un ambiente tranquilo. En niños EL, Chernick V, eds. Disorders of the Respiratory Tract in
mayores evitar un aumento de la actividad que pudiera Children. p986-997. W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA. 1977.
desencadenar crisis. Llorens J. Tos ferina En: Meneghello B, Fanta E, Paris E, Puga TF,
eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. 5ª. Ed. p903-911.
Anticonvulsivantes. En cuadros severos se ha Editorial Médica PANAMERICANA. Buenos Aires,
recomendado fenobarbital (5 mg/kg/24 h por vía bucal Argentina. 1997.
dividido en 3 a 4 subdosis) o difenilhidantoína (5 mg/kg/ Long SS. Pertussis. En: Berhman RE, Kliegman RM, Arvin AM,
24 h por vía bucal en 3 a 4 subdosis). Recordar que eds. 17ª Ed. Section 3. Part XVII Chapter 181. p779-784.
W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA. 2003.
estos medicamentos por vía bucal tardan en producir Olson JC. Comments in Gellis’ Yearbook of
efecto 4 ó 5 días y si las crisis son muy intensas se reco- Pediatric.:YEARBOOK MEDICAL PUBLISHERS CO.
mienda comenzar, simultáneamente junto con la vía bu- Chicago, USA. 1967-1968.
Savage F. Tos ferina. En: OPS, Fundación W.K. Kellog, PAHEF y
cal, por vía i.m., los 3 ó 4 días iniciales, a la misma dosis,
UNICEF eds. Noticias sobre IRA. Washington DC, USA. No
y que se disminuirá progresivamente la medicación 16-17 1991; 1-4.
parenteral y se suspenderá al 4to. día en que ya debe
comenzar a actuar la dosis bucal. Lo ideal sería la dosi-
ficación en sangre del medicamento utilizado. Si en 2 o
más semanas no se observan resultados favorables se . Capítulo 73 .
suspenderá el medicamento o se cambiará por el otro.
Siempre se debe tener en cuenta que la vía parenteral
puede desencadenar crisis debido al llanto por el dolor
Afecciones respiratorias bajas
de la inyección. crónicas o recidivantes
Estos medicamentos no se conocen como ac- José A. González Valdés
túan. y en realidad es un tratamiento empírico y
Se considera como una afección respiratoria baja
últimamente se está eliminando su administración.
crónica aquella que tiene una duración de más de 4 sema-
Con respecto a la utilización de diazepan, clorpromacina
nas sin mejorar de manera ostensible y como una afec-
u otros medicamentos recomendados por algunos au-
ción recidivante la que se repite con las mismas
tores, no se tiene experiencia en su utilización y se dis-
características generalmente en un período de pocos
cute si producen algún beneficio y que hasta pueden
meses o años.
ser perjudiciales.

Parte XII. Aparato respiratorio 959


Alimentos como galletas, tostadas u otros que se des- En los síndromes de causa no infecciosa se reali-
menuzan con facilidad, irritando la orofaringe, pueden zará el tratamiento correspondiente de la afección que
producir quintas de tos, así como los líquidos abundan- causa el cuadro coqueluchoide (hiperreactividad bron-
tes y/o fríos. En lactantes a veces hay que recurrir a quial, fibrosis quística, cuerpo extraño y otras causas)
la alimentación por sonda nasogástrica. No obligar al (Cuadro 72.1).
niño a ingerir alimentos.
Apoyo sicológico a los familiares y un ambiente de Bibliografía
tranquilidad para el paciente, Benenson AS, ed. Tos ferina por B. pertussis y parapertussis En:
Aspirar, de manera suave con extracción de las Manual para el control de las enfermedades transmisibles.
secreciones después de los episodios severos en niños XVI Ed. p446-51. Publicación No.564, OPS/OMS:
Washigton DC, USA. 1997.
pequeños. Se realizará por una enfermera entrenada para Collier AM, et al. Generalized types of adenovirus infection
la aspiración rápida después de las quintas de tos, pues associated with the pertussis syndrome. J. Pediatr 1966;
generalmente, estas son seguidas de un momento relati- 69:1073-1078.
Islur Y. The whooping cough syndrome: a continuing pediatric
vamente refractario a nuevas crisis de tos. No se realiza-
problem. Clin Pediatr 1975; 14:1971-1976.
rá de manera rutinaria sino según necesidades. Committee on Infectious Diseases. American Academy of
Oxigenoterapia en niños pequeños con apneas se- Pediatrics Report. En: Pickering LK, ed. Red Book: 26th
veras, de manera constante o intermitente, aunque siem- Ed. Section 3. Pertussis. American Academy of Pediatrics.
Elk Grove Village. IL, USA. 2003.
pre se tendrá en cuenta la tolerancia del pequeño. Hewlett EL, Edwards KM. Pertussis—Not Just for Kids. N
Habitación. Se recomienda que esté ventilada con Eng J Ned 2005; 352: 1215-1222.
una temperatura si es posible alrededor de los 20 a Klenky S.. Bacteriologically proved pertussis and adenovirus
infection. Am J Dis Child 1972; 124: 203-208.
25 °C y libre de irritantes (polvo, humo incluyendo del
Lee Nemir R. Pertussoid Eosinophilic Pnemonia. En: Kendig Jr.
tabaco, olores y otros) y un ambiente tranquilo. En niños EL, Chernick V, eds. Disorders of the Respiratory Tract in
mayores evitar un aumento de la actividad que pudiera Children. p986-997. W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA. 1977.
desencadenar crisis. Llorens J. Tos ferina En: Meneghello B, Fanta E, Paris E, Puga TF,
eds. PEDIATRIA MENEGHELLO. 5ª. Ed. p903-911.
Anticonvulsivantes. En cuadros severos se ha Editorial Médica PANAMERICANA. Buenos Aires,
recomendado fenobarbital (5 mg/kg/24 h por vía bucal Argentina. 1997.
dividido en 3 a 4 subdosis) o difenilhidantoína (5 mg/kg/ Long SS. Pertussis. En: Berhman RE, Kliegman RM, Arvin AM,
24 h por vía bucal en 3 a 4 subdosis). Recordar que eds. 17ª Ed. Section 3. Part XVII Chapter 181. p779-784.
W.B. Saunders Co. Philadelphia, USA. 2003.
estos medicamentos por vía bucal tardan en producir Olson JC. Comments in Gellis’ Yearbook of
efecto 4 ó 5 días y si las crisis son muy intensas se reco- Pediatric.:YEARBOOK MEDICAL PUBLISHERS CO.
mienda comenzar, simultáneamente junto con la vía bu- Chicago, USA. 1967-1968.
Savage F. Tos ferina. En: OPS, Fundación W.K. Kellog, PAHEF y
cal, por vía i.m., los 3 ó 4 días iniciales, a la misma dosis,
UNICEF eds. Noticias sobre IRA. Washington DC, USA. No
y que se disminuirá progresivamente la medicación 16-17 1991; 1-4.
parenteral y se suspenderá al 4to. día en que ya debe
comenzar a actuar la dosis bucal. Lo ideal sería la dosi-
ficación en sangre del medicamento utilizado. Si en 2 o
más semanas no se observan resultados favorables se . Capítulo 73 .
suspenderá el medicamento o se cambiará por el otro.
Siempre se debe tener en cuenta que la vía parenteral
puede desencadenar crisis debido al llanto por el dolor
Afecciones respiratorias bajas
de la inyección. crónicas o recidivantes
Estos medicamentos no se conocen como ac- José A. González Valdés
túan. y en realidad es un tratamiento empírico y
Se considera como una afección respiratoria baja
últimamente se está eliminando su administración.
crónica aquella que tiene una duración de más de 4 sema-
Con respecto a la utilización de diazepan, clorpromacina
nas sin mejorar de manera ostensible y como una afec-
u otros medicamentos recomendados por algunos au-
ción recidivante la que se repite con las mismas
tores, no se tiene experiencia en su utilización y se dis-
características generalmente en un período de pocos
cute si producen algún beneficio y que hasta pueden
meses o años.
ser perjudiciales.

Parte XII. Aparato respiratorio 959


Wald define como neumonía recurrente cuando al adquiridas, propias del aparato respiratorio, afecciones
menos 2 episodios de neumonía ocurren en un año o 3 o esofágicas y cardiovasculares, así como entidades que
más episodios ocurren en cualquier tiempo. Para aplicar afectan otros aparatos y sistemas, pero que producen
este concepto, es necesario que exista entre estos pro- alteraciones importantes sobre el aparato respiratorio,
cesos una desaparición radiológica completa de las le- que dan lugar a estas manifestaciones crónicas o a re-
siones y así se diferencian de la neumonía persistente. petición. Estas entidades son:
Muchos autores consideran las recidivantes den- • Asma bronquial.
tro de las crónicas y así dividen las afecciones bajas del • Fibrosis quística.
aparato respiratorio en dos grandes grupos: agudas y • Déficits inmunológicos.
crónicas. • Cuerpos extraños en vías aéreas inferiores.
CAUSA • Alteraciones congénitas o adquiridas del aparato res-
Las causas de estas afecciones se dividen en 2 piratorio
grandes grupos, en dependencia si son de origen primiti- − Agenesia, hipoplasia o aplasia pulmonar.
vamente infecciosas o no. − Enfisema lobar congénito.
Afecciones crónicas pulmonares primitivamen- − Quistes pulmonares.
te infecciosas − Secuestro pulmonar.
• Bacterianas
− Bronquiectasias.
Algunas bacterias entre las cuales pueden citarse el
− Displasia adenomatoidea quística pulmonar.
Staphiloccocus aureus, Klebsiella aerobacter,
Haemophillus influenzae, Pseudomonas y − Linfangiectasia pulmonar.
Mycobacterium tuberculosis así como otras me- − Estenosis bronquiales
nos frecuentes pueden causar estas entidades. La − Laringotraqueomalasia.
Chlamydia trachomatis en los primeros meses de • Malformaciones o alteraciones funcionales del esó-
vida y la Chlamydia pneumoniae en la adolescen- fago.
cia, pueden producir neumonías atípicas de varias − Reflujo gastroesofágico.
semanas de evolución sin mejoría ostensible. − Divertículos.
• Micóticas
− Estenosis esofágica.
Formas crónicas de infección respiratoria pueden ser
− Acalasia.
producidas por hongos, como ocurre con la
histoplasmosis y la aspergilosis, por el Histoplasma − Fístula traqueoesofágica.
Capsulatum y el Aspergilus fumigatus, o más ra- − Trastornos funcionales de la deglución.
ramente la criptococosis, la coccidioidomicosis y la • Malformaciones congénitas cardiovasculares.
nocardosis, entre otras. El hongo Pneumocistis − Cardiopatías con flujo pulmonar aumentado.
jirovecii (antes P. carinii) puede provocar infección − Anillos vasculares.
respiratoria crónica, sobre todo en pacientes con − Fístula arteriovenosa.
SIDA u otras formas de inmunodeficiencias.
− Agenesia o hipoplasia de vasos pulmonares.
• Virales
• Discinesia ciliar.
A veces algunos virus como el citomegalovirus en
los primeros meses de la vida, y los adenovirus 3, 7 y • Displasia broncopulmonar.
21, que pueden producir una bronquiolitis obliterante, • Neumonías intersticiales.
causan estas entidades crónicas, al igual que puede • Bronquiolitis obliterante.
ocurrir con el virus del SIDA. • Déficit de α-1 antripsina.
• Otros gérmenes • Hemosiderosis pulmonar.
Algunas neumonías atípicas producidas por • Microlitiasis alveolar.
Mycoplasma pneumoniae se prolongan por varias
• Proteinosis alveolar.
semanas sin mejoría notable, aunque con buen pro-
• Pulmón eosinofílico.
nóstico.
• Sarcoidosis.
Afecciones crónicas pulmonares no primitiva- • Sicklemia.
mente infecciosas • Enfermedades del mesénquima.
En este grupo están incluidas las más frecuentes y • Deformidades torácicas.
comprenden tanto las afecciones congénitas como las • Afecciones neurológicas y neuromusculares.

960 Tomo III


MANIFESTACIONES CLÍNICAS • Electrólitos en el sudor.
Los síntomas y signos por los que se pueden mani- • Pruebas cutáneas:
festar las afecciones respiratorias crónicas podemos di- − Prueba de Mantoux.
vidirlos en pulmonares y extrapulmonares: − Test de Nickelson Weim.
• Pulmonares − Test de histoplasmina.
− Tos. − Pruebas alérgicas cutáneas.
− Expectoración. • Estudios microbiológicos.
− Hemoptisis. • Pruebas funcionales respiratorias.
− Dolor torácico. • Endoscopia del aparato respiratorio.
− Respiración ruidosa. • Estudio de muestra del lavado broncoalveolar.
− Disnea. • Biopsias y estudios anatomopatológicos:
− Estridor. − Biopsia pleural.
− Tiraje. − Nasal.
− Tórax hiperinsuflado. − Bronquial.
− Alteraciones del murmullo vesicular. − Pulmonar.
− Estertores sibilantes. − Ganglionar.
− Estertores húmedos. − Piezas obtenidas por cirugía.
• Extrapulmonares. • Manometría y pH esofágico
− Fiebre, escalofríos y sudaciones. • Estudios imagenológicos:
− Pérdida de peso. − Rayos X de tórax simple en varias vistas.
− Detención del crecimiento. − Rayos X de senos paranasales.
− Anorexia. − Tránsito esofagogástrico.
− Náuseas. − Tomografía lineal.
− Fatigabilidad, debilidad y astenia. − Tomografía axial computarizada ( TAC).
− Cefalea. − Broncografía.
− Rinorrea y otorrea. − Angiocardiografía y arteriografía.
− Cianosis. − Ecocardiografía.
− Dedos en “palillo de tambor” y “uñas en vidrio − Gammagrafía.
de reloj”. − Resonancia magnética nuclear (RMN).

DIAGNÓSTICO
Generalmente, varias de estas manifestaciones
A continuación se exponen varios conceptos que
pulmonares y extrapulmonares se asocian en un niño, y
el médico siempre debe tener en cuenta frente a un pa-
hacen pensar en una afección respiratoria crónica.
ciente que se puede presentar con un posible cuadro de
En el niño, muchas veces, manifestaciones como
una infección respiratoria crónica o recidivante, para lle-
no aumento de peso y talla, astenia, respiración ruidosa
gar al diagnóstico.
y disnea son más frecuentes que la tos, síntoma funda-
• En los primeros años de vida, un niño normal puede
mental de una afección respiratoria crónica del adulto.
presentar anualmente varias infecciones respirato-
INVESTIGACIONES rias altas agudas y los padres acuden al médico pen-
Múltiples y variados son los exámenes que se rea- sando que tienen una infección crónica o a repetición.
lizan para llegar al diagnóstico en estas entidades. El Otros niños presentan infecciones respiratorias cró-
médico debe indicar secuencialmente las más impres- nicas altas, pero sin la participación de la parte baja
cindibles y menos invasivas, la mayoría de las cuales, del aparato respiratorio. Estos no pueden ser inclui-
aunque no todas, se señalan a continuación: dos dentro de ninguna entidad particular y aunque
• Hematológicas: hay que estudiarlos para determinar si hay una afec-
− Hemograma. ción causal de estos cuadros, se trata de exposicio-
− Eritrosedimentación. nes repetidas o mantenidas a infecciones en el hogar,
− Proteína C reactiva. el círculo infantil y la escuela. Estos pacientes son
− Alfa-1 antitripsina. presentados por los padres como “niños que no se
− Estudios inmunológicos. les quita el catarro” o que “no salen de un catarro

Parte XII. Aparato respiratorio 961


para entrar en otro”. Una vez estudiados se infor- primer diagnóstico que se debe considerar es el asma,
mará a los padres de este hecho y se les asegurará, la entidad más frecuente. En este caso, los antece-
que generalmente, con el tiempo sus cuadros se es- dentes personales y familiares de alergia, el desen-
paciarán o desaparecerán entre los 6 y 9 años lo que cadenamiento de las crisis por factores inmunológicos
no excluye que sean tratados o vigilados. o no inmunológicos, la IgE elevada, la respuesta rápi-
• La confección de una buena historia clínica es deci- da a broncodilatadores u otros datos, apoyarán el
siva en el diagnóstico de estas entidades e influye diagnóstico. En la fibrosis quística los antecedentes
grandemente en los planteamientos y en disminuir el familiares, el íleo meconial o el íctero prolongado, la
número de investigaciones, al determinar cuáles presencia de manifestaciones digestivas como el sín-
son las más necesarias y el orden en que se deben drome de mal absorción, el prolapso rectal u otras,
realizar. orientarán a investigar los electrólitos en el sudor.
• Con frecuencia, las afecciones crónicas primitivamen- Una historia de bajo peso al nacer, distrés respirato-
te infecciosas se caracterizan por síntomas respira- rio, terapéutica con ventilación mecánica y oxígeno
torios de larga evolución acompañados de en las primeras semanas en un niño desnutrido e
manifestaciones generales entre las que se encuen- hipóxico hacen plantear la displasia broncopulmonar.
tran el síndrome febril prolongado, la astenia, la ano- La presencia de tos nocturna, regurgitaciones o vó-
rexia, la no ganancia de peso, las adenopatías u otras, mitos, hacen sospechar el reflujo gastroesofágico e
asociadas a imágenes radiológicas características de indicar el examen radiográfico del tránsito
estas entidades como las lesiones inflamatorias bi-
esofagogástrico, la manometría y el pH esofágico,
laterales y mantenidas que aparecen en algunas mi-
así como el estudio gammagráfico. Otras entidades
cosis, la tuberculosis pulmonar, los procesos virales o
como la hemosiderosis pulmonar, la discinesia ciliar,
lesiones neumónicas extensas en un pulmón, mu-
chas veces asociadas a neumatocele o empiema el síndrome del pulmón eosinofílico o el déficit de alfa-
como ocurre en infecciones bacterianas por 1 antitripsina también pueden producir estas mani-
Staphilococcus aureus o H influenzae. festaciones y ser confundidas con el asma.
• Frente a la presencia de neumonías a repetición es • Las neumonías a repetición en un niño con cardio-
de gran utilidad su localización, y es necesario preci- patía congénita con flujo pulmonar aumentado se
sar si estas afectan el mismo lóbulo o por el contrario asocia a cardiomegalia, soplo cardíaco, signos de in-
su localización es variable. Es evidente que cuando suficiencia cardíaca y alteraciones electrocar-
el lóbulo afectado es siempre el mismo el defecto diográficas que apoyan el diagnóstico, el cual se
debe ser local y de tipo anatómico, igual que en precisará por la ecocardiografía y los estudios con-
muchas alteraciones congénitas o adquiridas trastados cardiovasculares, de ser necesario.
broncopulmonares como el secuestro pulmonar, • En los pacientes con anillos vasculares los sínto-
bronquiectasias, estenosis bronquiales, presencia de mas pueden estar asociados a signos de compresión
cuerpo extraño intrabronquial u otras. En estas enti- traqueal o esofágica, y los estudios con el esofago-
dades van a predominar las neumonías recidivantes grama, la angiocardiografía y la arteriografía los
que alternan con períodos asintomáticos y donde des- confirmarán.
pués de una terapéutica antibiótica adecuada dismi- • Hay niños en que predominan los síntomas y signos
nuye notablemente o desaparece la imagen de la de otros aparatos o sistemas como ocurre con la
lesión, para al cabo de algunas semanas reaparecer sicklemia donde la anemia y otras manifestaciones
con la misma localización
hematológicas son las llamativas, y el cuadro pulmonar,
• Cuando la neumonía se repite en diversos sitios en
llamado síndrome torácico agudo (STA) o pulmón
cualquiera de los 2 pulmones, las causas más fre-
cuentes se deben siempre a afecciones bronco- sicklémico es esporádico, aunque a veces es severo;
pulmonares difusas o a enfermedades que afectan o las enfermedades del mesénquima, donde las ma-
varios aparatos o sistemas, que incluyen el aparato nifestaciones renales, cardiovasculares, osteoar-
respiratorio: el asma bronquial, el síndrome de ticulares u otras son más importantes; o en pacientes
discinesia ciliar, la fibrosis quística, las inmunodefi- con trastornos neurológicos y musculares crónicos
ciencias u otras. en los cuales el encamamiento, la hipotonía muscular
• Si el cuadro se caracteriza por neumonías a repeti- generalizada que afecta los músculos de la respira-
ción, en cualquiera de los 2 pulmones, asociados a ción y los reflejos disminuidos, favorecen la infec-
cuadros de obstrucción bronquial recidivantes, el ción pulmonar repetida o mantenida crónicamente.

962 Tomo III


• Siempre se debe pensar en las afecciones más fre- Falco U, Fernández de Sevilla T and Alegre J: “Bacterial
cuentes: el asma; la fibrosis quística; las inmuno-de- pneumonia in HIV infected patients”. Eur Respir J,
ficiencias; las alteraciones gastroesofágicas como el Copenhagen, 1994; 7(2): 235-9.
reflujo; algunas malformaciones congénitas; las in- Garcia G and Martinez A: “Neumonías recurrentes”. Page: 15-22.
In: II Curso Nacional de Actualización en Neumología
fecciones crónicas primarias o secundarias a aspira-
Pediátrica. Cobas Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
ción de cuerpo extraño, pero a la vez se debe recordar Kravitz R: “Congenital malformations of the lungs”. Pediatr Clin
que otras entidades también pueden producir cua- North Am, Philadelphia, 1994, 41(3):453-72.
dros similares. Entre los criterios importantes que se Lodha R, Puranik M, Natchu VC and Kabra SK: “Recurrent
deben tener en cuenta para estas enfermedades es- pneumonia in children: clinical profile and underlying causes”.
tán la forma de aparición de estos cuadros, ya sean Acta Paediatr, 2002; 91: 1170-3.
Mc Lusky T and Levison H: “Cystic Fibrosis”. Page: 692-729. In:
de inicio súbito o más lentamente, la edad del pacien-
Kendigs-Chernick, Ed. ”Disorders of the respiratory tract in
te en que comienzan a presentarse y la localización children. 7th Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006.
de las lesiones de acuerdo con las distintas causas. Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
• El estudio de estos niños se debe comenzar por las children, Page: 234 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
investigaciones más simples y evitar al máximo las 1990.
más invasivas cuando no sean necesarias. No es co- Robin HR, Buttler SM, Wohl ME, Geller DE, Colin AA, Schdlow
DV et al: “Pulmonary exacerbations in cystic fibrosis”.
rrecto ni recomendable indicar de inicio una “bate-
Pediatr Pulmonol, Philadelphia, 2004; 37: 400-61.
ría” de investigaciones sin seguir una secuencia lógica Regelman WE: “Diagnosing the cause of recurrent and persistent
de acuerdo con los posibles diagnósticos, pues siem- pneumonia in children”. Ann Pediatr, 1993; 22(9): 561-8.
pre debe primar el pensamiento médico sobre los Rowe S, Miller S and Sorcher E: “Mechanism of disease: Cystic
esquemas. Fibrosis”. N Eng J Med, Boston, 2005, 359(19): 1992-2001.
• Existen exámenes muy precisos frente a la sospecha Schlesinger C, Neeraraghavan, S and Koss M: “Constrictive
(obliterative) bronchiolitis”. Curr Opin Pulm Med, 1998,
de distintas entidades: el test de los electrólitos en el 4(5): 288-93.
sudor, en la fibrosis quística; la broncografía y la TAC Vaughan D and Katkin JP: “Chronic recurrent pneumonia in
en las bronquiectasias; la biopsia nasal o bronquial children”. Seminar Resp Infect, 2002; 17: 72-84.
Wald E: “Recurrent pneumonia in children”. Adv Pediatr Infect
con estudio por microscopia electrónica en la
Dis, Chicago, 1990; 5: 183-202.
discinesia ciliar; los estudios cardiovasculares con- Ward P and Hunninghake G: “Lung inflammation and fibrosis”.
trastados: angiocardiografía y arteriografía en mal- Am J Respir Crit Care Med, 1998; 157: 123-9.
formaciones congénitas cardiovasculares o WHO Meeting on global alliance against chronic respiratory
pulmonares; o la broncoscopia, ante la sospecha de diseases (GARD) WHO/NMH/CHP/CPM, Geneva J, 2005.
un cuerpo extraño intrabronquial.
• Por último, es importante considerar que a la vez que
no se debe abusar de las indicaciones no necesarias,
también es importante precisar el diagnóstico correcto . Capítulo 74 .
y lo más precozmente posible, ya que de esto depen-
de el pronóstico del paciente para evitar el deterioro
pulmonar y la evolución hacia una insuficiencia res-
piratoria crónica, producto de diagnósticos tardíos o
Malformaciones congénitas
erróneos que impidan una terapéutica adecuada. de vías aéreas inferiores
Bibliografía
y los pulmones
José A. González Valdés
Afzelius B, Mosberg B and Stein E: “Immotile cilia Syndrome”.
Page: 4817-67. In: Scriver Ch et al. The metabolic and Las malformaciones congénitas de las vías aéreas
molecular bases of inherited disease. 8th Ed, Mc Graw Hill,
New York, London. 2001. respiratorias y los pulmones son entidades importantes,
Boat T: “Chronic or recurrent respiratory symptoms”. Page: 1401- relativamente frecuentes y se caracterizan porque en
5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of mayor o menor grado van a envolver cuatro estructuras
Pediatrics.17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
Ciftci E, Gunes M, Koksal Y, Ince E and Dogru U: “Causes of fundamentales:
recurrent pneumonia in Turkish children in the University • Vías aéreas.
Hospital”. J Trop Pediatr, 2003; 49: 212-5.
• Parénquima pulmonar.
Easthman K, Fall A, Mitchell L and Spencer D: “The need to
redefine non cystic fibrosis bronchiectasis in childhood”. • Vasos arteriales pulmonares.
Torax, 2004, 59: 324-7. • Drenaje venoso pulmonar.

Parte XII. Aparato respiratorio 963


• Siempre se debe pensar en las afecciones más fre- Falco U, Fernández de Sevilla T and Alegre J: “Bacterial
cuentes: el asma; la fibrosis quística; las inmuno-de- pneumonia in HIV infected patients”. Eur Respir J,
ficiencias; las alteraciones gastroesofágicas como el Copenhagen, 1994; 7(2): 235-9.
reflujo; algunas malformaciones congénitas; las in- Garcia G and Martinez A: “Neumonías recurrentes”. Page: 15-22.
In: II Curso Nacional de Actualización en Neumología
fecciones crónicas primarias o secundarias a aspira-
Pediátrica. Cobas Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
ción de cuerpo extraño, pero a la vez se debe recordar Kravitz R: “Congenital malformations of the lungs”. Pediatr Clin
que otras entidades también pueden producir cua- North Am, Philadelphia, 1994, 41(3):453-72.
dros similares. Entre los criterios importantes que se Lodha R, Puranik M, Natchu VC and Kabra SK: “Recurrent
deben tener en cuenta para estas enfermedades es- pneumonia in children: clinical profile and underlying causes”.
tán la forma de aparición de estos cuadros, ya sean Acta Paediatr, 2002; 91: 1170-3.
Mc Lusky T and Levison H: “Cystic Fibrosis”. Page: 692-729. In:
de inicio súbito o más lentamente, la edad del pacien-
Kendigs-Chernick, Ed. ”Disorders of the respiratory tract in
te en que comienzan a presentarse y la localización children. 7th Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006.
de las lesiones de acuerdo con las distintas causas. Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
• El estudio de estos niños se debe comenzar por las children, Page: 234 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
investigaciones más simples y evitar al máximo las 1990.
más invasivas cuando no sean necesarias. No es co- Robin HR, Buttler SM, Wohl ME, Geller DE, Colin AA, Schdlow
DV et al: “Pulmonary exacerbations in cystic fibrosis”.
rrecto ni recomendable indicar de inicio una “bate-
Pediatr Pulmonol, Philadelphia, 2004; 37: 400-61.
ría” de investigaciones sin seguir una secuencia lógica Regelman WE: “Diagnosing the cause of recurrent and persistent
de acuerdo con los posibles diagnósticos, pues siem- pneumonia in children”. Ann Pediatr, 1993; 22(9): 561-8.
pre debe primar el pensamiento médico sobre los Rowe S, Miller S and Sorcher E: “Mechanism of disease: Cystic
esquemas. Fibrosis”. N Eng J Med, Boston, 2005, 359(19): 1992-2001.
• Existen exámenes muy precisos frente a la sospecha Schlesinger C, Neeraraghavan, S and Koss M: “Constrictive
(obliterative) bronchiolitis”. Curr Opin Pulm Med, 1998,
de distintas entidades: el test de los electrólitos en el 4(5): 288-93.
sudor, en la fibrosis quística; la broncografía y la TAC Vaughan D and Katkin JP: “Chronic recurrent pneumonia in
en las bronquiectasias; la biopsia nasal o bronquial children”. Seminar Resp Infect, 2002; 17: 72-84.
Wald E: “Recurrent pneumonia in children”. Adv Pediatr Infect
con estudio por microscopia electrónica en la
Dis, Chicago, 1990; 5: 183-202.
discinesia ciliar; los estudios cardiovasculares con- Ward P and Hunninghake G: “Lung inflammation and fibrosis”.
trastados: angiocardiografía y arteriografía en mal- Am J Respir Crit Care Med, 1998; 157: 123-9.
formaciones congénitas cardiovasculares o WHO Meeting on global alliance against chronic respiratory
pulmonares; o la broncoscopia, ante la sospecha de diseases (GARD) WHO/NMH/CHP/CPM, Geneva J, 2005.
un cuerpo extraño intrabronquial.
• Por último, es importante considerar que a la vez que
no se debe abusar de las indicaciones no necesarias,
también es importante precisar el diagnóstico correcto . Capítulo 74 .
y lo más precozmente posible, ya que de esto depen-
de el pronóstico del paciente para evitar el deterioro
pulmonar y la evolución hacia una insuficiencia res-
piratoria crónica, producto de diagnósticos tardíos o
Malformaciones congénitas
erróneos que impidan una terapéutica adecuada. de vías aéreas inferiores
Bibliografía
y los pulmones
José A. González Valdés
Afzelius B, Mosberg B and Stein E: “Immotile cilia Syndrome”.
Page: 4817-67. In: Scriver Ch et al. The metabolic and Las malformaciones congénitas de las vías aéreas
molecular bases of inherited disease. 8th Ed, Mc Graw Hill,
New York, London. 2001. respiratorias y los pulmones son entidades importantes,
Boat T: “Chronic or recurrent respiratory symptoms”. Page: 1401- relativamente frecuentes y se caracterizan porque en
5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of mayor o menor grado van a envolver cuatro estructuras
Pediatrics.17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
Ciftci E, Gunes M, Koksal Y, Ince E and Dogru U: “Causes of fundamentales:
recurrent pneumonia in Turkish children in the University • Vías aéreas.
Hospital”. J Trop Pediatr, 2003; 49: 212-5.
• Parénquima pulmonar.
Easthman K, Fall A, Mitchell L and Spencer D: “The need to
redefine non cystic fibrosis bronchiectasis in childhood”. • Vasos arteriales pulmonares.
Torax, 2004, 59: 324-7. • Drenaje venoso pulmonar.

Parte XII. Aparato respiratorio 963


Existen dos grupos bien definidos de malforma- rizan, por lo general, por cuatro formas de presenta-
ciones. El primero, a expensas de las alteraciones pri- ción.
marias de las dos primeras estructuras, es decir de las La primera está dada por el “distress respirato-
vías aéreas y del parénquima pulmonar; y el segundo, rio” que puede aparecer en las primeras horas o sema-
a expensas de las alteraciones de los vasos arteriales y nas de vida casi siempre, o posteriormente. Esta
el drenaje venoso pulmonar, es decir de las dos últi- marcada dificultad respiratoria progresiva puede llevar
mas. al niño a la muerte, y se presenta cuando la lesión com-
Las vías aéreas inferiores y el parénquima promete gran parte del tejido pulmonar e interfiere
pulmonar tienen un mismo origen embrionario, ya que con la función respiratoria.
ambas estructuras se derivan del brote ventral del in- Esta presentación es común en malformaciones
testino primitivo, llamado también “divertículo respira- traqueales, enfisema lobar congénito, algunos quistes
torio”. Distintas causas pueden afectar esta etapa del pulmonares grandes, neumotórax que sigue a la ruptu-
desarrollo embrionario, lo que trae como consecuencia ra de quistes, secuestros pulmonares, fístulas
la aparición de malformaciones congénitas propiamen- arteriovenosas con insuficiencia cardíaca por el gran
te dichas de las vías aéreas inferiores y los pulmones, flujo de sangre o aplasia pulmonar entre otras.
entre las cuales como las más importantes podemos se- La segunda forma de presentación se caracteriza
ñalar las siguientes: por infección persistente o recurrente; por ejemplo,
• Anomalías de laringe, tráquea y bronquios cuando hay un área del pulmón con comunicación bron-
• Agenesia, aplasia e hipoplasia pulmonar. quial anormal que se infesta frecuentemente, como
• Secuestro pulmonar. ocurre en el secuestro pulmonar, las estenosis bron-
• Enfisema lobar congénito. quiales o la hipoplasia pulmonar.
• Quistes congénitos. Otra forma de manifestarse es cuando existen
• Malformación adenomatoidea quística. estrechamientos bronquiales producto de estenosis con-
génitas o compresión extrínseca por vasos anómalos,
El segundo grupo de malformaciones, las quistes o enfisema lobar congénito. En estos casos, la
vasculares, está formado por aquellas que se derivan presencia de estertores sibilantes localizados en un área
de las alteraciones del desarrollo del sexto arco arterial determinada, es el síntoma principal.
aórtico embrionario y del sistema venoso que dan ori- Por último, el paciente puede estar asintomático y
gen a las arterias y venas pulmonares que afectan el el diagnóstico se realiza accidentalmente durante la rea-
flujo sanguíneo y el drenaje venoso pulmonar y como lización de un examen radiológico de tórax, como ocu-
consecuencia, secundariamente, el desarrollo del árbol rre con algunos quistes pulmonares o el pulmón
bronquial y los pulmones. Entre estas malformaciones, hipoplásico.
que no serán motivo de este tema, podemos señalar
como las más importantes el síndrome del pulmón ANOMALÍAS DE LARINGE, TRÁQUEA
hipogenético (hipoplasia de pulmón y arteria pulmonar Y BRONQUIOS
derecha, dextrocardia y retorno venoso anómalo); la
agenesia de la arteria pulmonar derecha o izquierda; Anomalías laríngeas
coartación y estenosis de la arteria pulmonar; La atresia de la laringe es incompatible con la
aneurismas de arteria pulmonar; origen anómalo de la vida. Solo algunos pacientes se reportan salvados al na-
arteria pulmonar izquierda; retorno venoso pulmonar cer con traqueostomía y ventilación transtraqueal
anómalo parcial o total y las fístulas arteriovenosas El estridor congénito persistente o que aparece
pulmonares. después del nacimiento se debe a alteraciones en la la-
Por último, el desarrollo alterado de los vasos ringe o en sus estructuras adyacentes.
linfáticos pulmonares, da origen a la linfangiectasia La laringomalacia es la más común de las ano-
pulmonar congénita. malías congénitas de la laringe y la causa principal de
En la forma clínica las malformaciones congéni- este estridor congénito. Más de la mitad de los casos
tas de las vías aéreas bajas y los pulmones se caracte- presentan flacidez o debilidad de los cartílagos aritenoides

964 Tomo III


y también puede aparecer epiglotis “blanda” o débil o de tejido fibroso, localizada en el área subglótica o justa-
flacidez de la glotis. La apertura de las paredes de la mente por encima de la carina. También han sido descri-
laringe produce colapso y obstrucción de las vías aéreas tas lesiones más extensas.
con la inspiración. La laringomalacia puede estar aso- Las manifestaciones clínicas dependen del grado
ciada a estenosis subglótica, parálisis de cuerdas voca- de estenosis. Aparecen después del nacimiento y se ca-
les, epiglotis en omega, traqueomalacia o broncomalacia racterizan por estridor de tipo inspiratorio y espiratorio
en algunos casos. Tiene predominio en varones y su asociados a dificultad respiratoria marcada con tiraje
sintomatología es variable. El estridor está presente al generalizado. La infección bacteriana puede producir
nacimiento, pero se puede presentar en ocasiones, des- traqueítis purulenta con tapones de mucus que pueden
pués de los 2 meses. En los casos ligeros, el estridor y la agravar el proceso.
retracción costal son poco manifiestos y no causan pro- La exploración por laringoscopia y el traqueograma
blemas. Se producen ruidos y sonidos respiratorios aso- confirman el diagnóstico. La tomografía axial computa-
ciados con la inspiración cuando el niño está en decúbito rizada (TAC), la resonancia magnética nuclear (RMN)
supino. Algunos tienen respiración ruidosa; otros un rui- y la ecografía ayudan a determinar la causa del proceso
do laríngeo y dificultad respiratoria marcada con retrac- y las malformaciones asociadas.
ción torácica inspiratoria supraclavicular, intercostal y Las estenosis ligeras pueden mejorar cuando el niño
subcostal. Cuando la retracción es severa, puede apare- crece, pero las moderadas y severas requieren trata-
cer deformidad torácica y la alimentación puede estar miento quirúrgico.
afectada con poca ganancia de peso y desnutrición.
El estridor persiste por meses y hasta después de 1 Atresia bronquial
año de edad, y desaparece gradualmente con el creci- Es una rara malformación que, aparentemente, se
miento y el desarrollo de las vías aéreas. debe a traumatismos u otras lesiones ocurridas durante
El diagnóstico se realiza con la laringoscopia y el el desarrollo fetal, después de dieciséis semanas de vida
tratamiento es conservador con cuidados generales al intrauterina; este planteamiento se basa en el desarrollo
niño para evitar la aspiración de alimentos. alcanzado por el segmento distal del bronquio afectado.
Las membranas laríngeas son raras, y se produ- Se encuentra atresia completa de un bronquio lobar
cen por la separación incompleta del mesénquima fetal o segmentario. El lóbulo superior izquierdo es el más
entre los dos lados de la laringe. La mayoría ocurre en- afectado. La parte distal del segmento atrésico (bron-
tre las cuerdas vocales. También se pueden presentar quio residual) está dilatado. Este broncocele, así consti-
entre los aritenoides. El grado de obstrucción respirato- tuido, está recubierto de epitelio ciliado con mucus y
ria depende de la extensión. El diagnóstico rápido de células debridadas en su interior; a veces se forman ta-
una obstrucción completa es esencial para prevenir la pones. Se encuentran dilataciones quísticas que dan la
asfixia del recién nacido. El niño nace con dificultad res- impresión de bronquiectasias y hay dilatación de alvéolos
piratoria intensa y severo estridor, el llanto es débil y sin destrucción de sus paredes, aunque su número está
anormal en sus características. La obstrucción puede reducido en el lóbulo afectado.
A veces el cuadro clínico está dado por dificultad
ser incompleta con solo estridor y disnea moderados. El
respiratoria en el recién nacido o en edades posteriores,
tratamiento quirúrgico es necesario.
por infecciones respiratorias recurrentes en el lóbulo
Los quistes laríngeos, laringoceles, hendidura
afectado y el pulmón adyacente comprimido. En otras
laríngea y laringoesofágica, así como las parálisis
ocasiones, puede encontrarse la presencia de estertores
de las cuerdas vocales son otras malformaciones con-
sibilantes unilaterales. Muchas veces el diagnóstico se
génitas de la laringe que se presentan raramente.
realiza de forma accidental por un hallazgo radiológico.
Estenosis traqueal congénita El examen del tórax por rayos X muestra
Es una rara anomalía que se puede presentar aisla- hiperinsuflación localizada o la presencia de una masa
da o asociada a otras. La mayoría de las veces se presen- oval o elíptica parahiliar, que se corresponde con el bron-
ta en un corto segmento e involucra dos o tres anillos. quio distal dilatado y lleno de mucus. El tratamiento es
Hollinger y Jhoston la describen como una estructura quirúrgico.

Parte XII. Aparato respiratorio 965


Estenosis bronquial congénita El pulmón por lo general también es más pequeño y
Es una rara malformación que casi siempre se pre- con frecuencia, tiene un reducido número de genera-
senta aislada, aunque a veces está asociada a pectus ciones bronquiales y alvéolos. Los vasos son rudimen-
excavatum. En cuanto a su morfología se encuentra tarios al igual que el pulmón. Puede ocurrir en un pulmón
afectación de un bronquio principal a la salida de la carina. completo, que es lo más frecuente o más raramente
Más raramente puede estar localizada en un bronquio afectar solo un lóbulo o ambos pulmones. Puede estar
de un lóbulo o ser segmentaria. El bronquio estenosado, asociada a malformaciones cardiovasculares.
presenta con frecuencia broncomalacia con pobre de-
Agenesia y aplasia pulmonar
sarrollo cartilaginoso. En ocasiones, en lesiones de un
Esta entidad y la aplasia se estudian conjuntamente
bronquio de un lóbulo o segmentarias, aparece un vaso
por ser similares desde el punto de vista funcional, y tie-
anómalo que produce compresión.
nen una causa desconocida. En el 50 % de los casos se
El cuadro clínico se caracteriza por dificultad res-
asocia a malformaciones cardiovasculares como la
piratoria y estertores sibilantes unilaterales con
tetralogía de Fallot, el ductus arterioso y las malformacio-
hiperinsuflación pulmonar de dicho hemitórax. Otras
nes de grandes vasos, sobre todo cuando son del lado
veces, el cuadro clínico está dado por infección respira-
derecho. Las del lado izquierdo tienen mejor pronóstico.
toria baja recurrente.
El inadecuado tejido pulmonar puede provocar di-
Radiológicamente se aprecia un pulmón o un lóbu-
ficultad respiratoria intensa en las primeras semanas de
lo con aumento de la radiotransparencia por hiper-
vida, con cianosis intermitente por la reserva respirato-
insuflación, o lesiones de infección recurrente.
ria limitada. Se puede observar retardo en el crecimien-
El diagnóstico diferencial se realiza con algún cuer-
to del niño e infecciones respiratorias a repetición en los
po extraño intrabronquial y con el síndrome del pulmón
primeros años de vida con dificultad en el drenaje de las
hiperlúcido unilateral (Swyer-James) que es importante;
secreciones. Se puede apreciar también asimetría del
la broncoscopia, la broncografía y la TAC, confirman
tórax, con poco desarrollo del hemitorax afectado y con
dicho diagnóstico.
estrechamiento de los espacios intercostales.
El tratamiento en los pacientes que presentan
La ausencia de la sonoridad pulmonar normal y del
broncomalacia, que constituyen la mayoría, es conser-
murmullo vesicular, así como la desviación del mediastino
vador. En casos con vasos anómalos está indicada la
que se comprueba en la auscultación cardiovascular,
cirugía.
denotan la falta del pulmón de dicho lado.
A veces la presencia del otro pulmón herniado no
AGENESIA, APLASIA E HIPOPLASIA permite la determinación de estos síntomas. El paciente
PULMONAR
puede estar asintomático y el diagnóstico se realiza por
Distintos factores conocidos o no, pueden influir un hallazgo radiológico. Las radiografías muestran au-
y afectar la formación y el desarrollo de uno o de am- sencia del parénquima pulmonar aereado en el hemitórax
bos pulmones. correspondiente con estrechamiento de los espacios
Esta insuficiencia en el desarrollo trae como con- intercostales, elevación del hemidiafragma y desviación
secuencia tres grados de alteración: la agenesia, la del mediastino con desplazamiento del otro pulmón, que
aplasia y la hipoplasia pulmonar. se aprecia más grande de lo normal. La TAC, la ecografía
La agenesia se caracteriza por una total ausen- y la broncografía, son útiles para precisar el diagnóstico.
cia de las estructuras bronquiales, vasculares y del
parénquima pulmonar de un pulmón o de ambos. Hipoplasia pulmonar
En la aplasia se observa un bronquio rudimenta- Puede ser unilateral o bilateral. Esta última se
rio que termina en un bolsón ciego y no hay desarrollo ve asociada a una hernia diafragmática. El síndrome
de las estructuras vasculares ni del parénquima de Potter se caracteriza por hipoplasia pulmonar bila-
pulmonar. teral, asociada a malformaciones renales graves como
En la hipoplasia se observa un bronquio com- hipoplasia o agenesia bilateral en un paciente con
pletamente formado, pero más pequeño de lo normal. hidropis fetal por isoinmunización. Estos pacientes

966 Tomo III


fallecen en pocos días y en ellos se encuentra reduc- te. Este tipo de secuestro puede estar conectado al
ción de las generaciones de vías aéreas y del número árbol respiratorio normal o no.
y tamaño de los alvéolos. Las manifestaciones clínicas están dadas por la
La hipoplasia unilateral se puede presentar aislada presencia de neumonía, que se caracteriza por una ima-
o asociada a otras malformaciones. La hipoplasia gen de condensación en la zona afectada. Cuando hay
pulmonar derecha con drenaje venoso anómalo de ve- comunicación, la infección es persistente o recurrente,
nas pulmonares y secuestro pulmonar es una entidad con resolución incompleta. A veces puede complicarse
definida, denominada “síndrome de la cimitarra”. con empiema. Algunos pacientes pueden presentar he-
La hipoplasia aislada se puede manifestar en el niño moptisis y también neumotórax. En el recién nacido
puede aparecer distrés respiratorio por compresión
por infecciones respiratorias bajas a repetición en los
quística sobre el pulmón. Un grupo de pacientes es
primeros años de vida. El desarrollo del niño está rara-
asintomático y el diagnóstico se realiza por un hallazgo
mente afectado. En el examen físico puede aparecer
radiológico.
tiraje ligero con discreta polipnea. Puede apreciarse
El secuestro extralobar se caracteriza por estar
asimetría torácica y estrechamiento de los espacios
separado totalmente del pulmón y es de localización
intercostales del lado afectado. A veces, el diagnóstico izquierda en más del 90 % de los casos. El vaso arterial
se obtiene por un hallazgo radiológico. que le suministra la sangre se deriva de la aorta abdo-
El diagnóstico radiológico se hace por la presencia minal o de alguno de sus vasos y el drenaje venoso se
de un hemitórax más pequeño con espacios intercostales efectúa a través del sistema venoso sistémico, casi
estrechados, hemidiafragma elevado y atracción del siempre en la vena cava, ázigos o hemiázigos. La ma-
mediastino hacia ese lado con desviación de la tráquea. yoría de estos secuestros extrapulmonares son
La broncografía y el angiocardiograma, demues- asintomáticos y constituyen un hallazgo radiológico. En
tran la distribución anormal bronquial y vascular con poco otras ocasiones, producen compresión pulmonar y rara
desarrollo y un pulmón más pequeño. vez infección. Radiológicamente, los secuestros
Los pacientes con hipoplasias aisladas, no tienen pulmonares se caracterizan por lesiones multiquísticas
tratamiento específico y presentan buen pronóstico. Es en cualesquiera de los dos pulmones sobre todo en los
necesario el tratamiento adecuado de las infecciones lóbulos inferiores. La densidad puede estar aumentada
respiratorias en los primeros años de la vida, ya que son por la presencia de infecciones, y se observa una con-
las que pueden causar mortalidad en estas edades. solidación uniforme.
La TAC y la broncografía muestran la lesión
Secuestro pulmonar multiquística y el desplazamiento bronquial. Raramen-
Es una malformación congénita pulmonar, carac- te el contraste puede penetrar en los secuestros que
terizada por una porción de tejido pulmonar que está comunican con el árbol respiratorio normal.
separada del resto del pulmón y recibe un flujo anor- La aortografía define el diagnóstico mostrando el
mal de sangre proveniente de una arteria sistémica. El vaso que irriga sistémicamente la lesión y sus caracte-
secuestro se clasifica en intralobar y extralobar. El rísticas y el drenaje.
primero está asociado íntimamente al tejido pulmonar El tratamiento de esta entidad es quirúrgico en
normal y el segundo está separado y cubierto por su todos los pacientes.
propia pleura. Se han descrito tipos intermedios.
El secuestro intralobar es una porción no ENFISEMA LOBAR CONGÉNITO
funcionante del pulmón cubierto por la pleura visceral El enfisema lobar congénito, es una causa im-
de un lóbulo pulmonar, su circulación se deriva de los portante de dificultad respiratoria en los primeros me-
vasos provenientes de la aorta descendente o una de ses de vida, que se produce por una hiperinsuflación
sus ramas y su drenaje venoso se efectúa a través del de un lóbulo pulmonar.
sistema venoso pulmonar, y produce un shunt de iz- La principal causa de esta anomalía (más del 70 %)
quierda a derecha. La mayoría se ubica en los lóbulos se debe a alteraciones cartilaginosas del bronquio afec-
inferiores, y se señala una mayor frecuencia en el lado tado por ausencia de los cartílagos o por hipoplasia o
izquierdo. Los lóbulos superiores se afectan raramen- displasia de estos. En ocasiones, se encuentran tapones

Parte XII. Aparato respiratorio 967


de mucus o repliegues membranosos intrabronquiales una pared constituida por un epitelio columnar ciliado
que causan la obstrucción. La compresión del bron- pseudoestratificado con glándulas mucosas, tejido elás-
quio por un vaso anómalo, también puede ser causa de tico, músculo liso y cartílago. Algunos quistes
esta entidad, y a veces puede asociarse a cardiopatías intrapulmonares, más periféricos, pueden presentar una
congénitas. estructura que recuerda más los bronquiolos y
Se plantea que las alteraciones cartilaginosas por alvéolos, con un epitelio no ciliado, sin cartílagos ni
glándulas mucosas. Estos quistes reciben su aporte
sí solas no explican el cuadro y que la hiperinsuflación
sanguíneo en forma similar a como lo recibe el resto del
mantenida se debe en parte a una afectación asociada
pulmón. Pueden tener comunicación con el árbol bron-
de la elasticidad del tejido conjuntivo.
quial y la frecuencia de calcificaciones en sus paredes
Esta entidad predomina en los varones (3:1), se lo-
es muy rara. Cuando se infestan, su contenido puede
caliza principalmente en el lóbulo superior izquierdo y el
ser pus y aire.
lóbulo medio derecho.
La mayoría de los quistes extrapulmonares
El cuadro clínico se caracteriza, casi siempre por (broncógenos) se van a localizar en los mediastinos me-
dificultad respiratoria marcada, sobre todo en las dos pri- dio o posterior, y son muy raros en el anterior. Están
meras semanas de vida. El recién nacido presenta situados juntos a la tráquea, en la bifurcación traqueal
taquipnea, tiraje bajo intercostal o subcostal, asimetría cerca de un bronquio principal o parahiliar. En ocasiones,
torácica por hiperinsuflación del hemitórax afectado, se asocian a defectos del pericardio.
hiperresonancia pulmonar y disminución del murmullo El cuadro clínico de estos quistes extrapulmonares,
vesicular, así como estertores roncos y principalmente se caracteriza principalmente por síntomas de compre-
sibilantes unilaterales en el lado de la lesión. Puede pre- sión traqueal o de un bronquio principal.
sentarse cianosis. Raramente la entidad aparece en épo- Puede aparecer dificultad respiratoria severa por
cas posteriores de la vida o constituye un hallazgo compresión traqueal. La tos irritativa, el estridor
radiológico. El examen radiográfico muestra hiper- inspiratorio, el tiraje y las sibilancias son síntomas frecuen-
insuflación con atrapamiento de aire del lado afectado, tes. Puede ocurrir la infección del quiste. A veces el pa-
con descenso del diafragma homólogo y desviación del ciente está asintomático y el diagnóstico se realiza por un
mediastino hacia el lado contrario, con atelectasia de otros hallazgo radiológico de una tumoración del mediastino que
lóbulos por compresión. La TAC y la angiocar-diografia desplaza y comprime la tráquea y el esófago.
pueden ayudar a encontrar el diagnóstico, y la broncografía Los quistes intrapulmonares se localizan con más
y la broncoscopia en el niño con distrés pueden ser peli- frecuencia en los lóbulos superiores de cualesquiera de
grosas, por lo que no se recomienda. El diagnóstico dife- los dos pulmones, pueden ser únicos o múltiples y sus
rencial se establece con el quiste pulmonar, el neumotórax manifestaciones clínicas son variadas. Si el quiste tiene
o un cuerpo extraño intrabronquial. una importante comunicación con un bronquio, puede
La evolución de esta afección puede ser rápida y insuflarse progresivamente por un mecanismo a “válvu-
progresiva por lo que en muchas ocasiones se convierte la”, que produce compresión del parénquima pulmonar
en una urgencia pediátrica, que implica tratamiento qui- normal, con desplazamiento del mediastino y alteracio-
rúrgico con extirpación del lóbulo afectado. nes de la función cardíaca por el quiste a tensión. Puede
aparecer dificultad respiratoria intensa al nacimiento o
QUISTES CONGÉNITOS DE ORIGEN posteriormente, agravarse por la ingestión de alimentos,
y asociarse con tos, sibilancia y cianosis. El diagnóstico
PULMONAR diferencial con el enfisema lobar congénito, es impor-
Estos quistes se originan por un desarrollo anormal tante en estos pacientes.
del divertículo ventral del intestino primitivo entre el día 16 La tos con episodios febriles asociados a neumo-
y el 40 del desarrollo embrionario. nías recurrentes, que no se curan por completo, puede
Pueden encontrarse en el parénquima pulmonar, y ser también otra forma de presentación. La compresión
se denominan intrapulmonares o fuera de este, entonces bronquial puede originar sibilancias en un hemitórax.
se llaman quistes broncógenos extrapulmonares o Puede ocurrir dificultad respiratoria súbita por ruptura
mediastinales. Muy raramente aparecen por debajo del del quiste con presencia de neumotórax. La hemoptisis
diafragma. Estos quistes son más frecuentes en el va- es rara. El diagnóstico se puede hacer en un niño
rón, se caracterizan histológicamente porque sus pare- asintomático, al realizarse un examen radiológico de tó-
des están revestidas de un epitelio y este está revestido rax indicado por otra causa.
de un material mucoide. La mayoría, tanto los En radiología, los quistes extrapulmonares
intrapulmonares como los extrapulmonares, presentan broncógenos se presentan como masas de densidad

968 Tomo III


homogénea, ovales o redondeados, que desplazan y ambos pulmones, y se aprecia en áreas perivasculares,
comprimen tráquea y esófago, o por la presencia de subpleurales e interlobulares.
un pulmón hiperinsuflado por compresión de un bron- En la tercera parte de los pacientes, esta entidad
quio principal. En los quistes intrapulmonares también se asocia con malformaciones cardiovasculares que
se pueden encontrar imágenes, redondeadas u ova- afectan el retorno venoso, por lo que en estos casos se
les, homogéneas en cualquiera de los dos pulmones. consideran secundarios a estos trastornos.
Si hay infección secundaria o comunicación bronquial, Los pacientes con linfangiectasias pulmonares vi-
puede apreciarse aire y pus con presencia de un nivel ven poco tiempo. Las manifestaciones clínicas están
hidroaéreo, que al igual que en el absceso, varía dadas por intensa dificultad respiratoria al nacer o en
con la posición del paciente. los primeros días de vida que se va agravando y lleva a
La TAC, la broncografia y el esofagograma son la muerte. Radiológicamente se aprecian áreas de
útiles para el diagnóstico. hiperinsuflación pulmonar, zonas de atelectasia y ede-
El tratamiento definitivo es quirúrgico; también ma pulmonar e imágenes reticulares.
son importantes los tratamientos de la infección y Se han descrito pacientes con linfangiectasias gene-
del neumotórax , cuando se presentan. ralizadas que afectan a otros órganos y donde la lesión
pulmonar es menor, y se han encontrando lesiones intesti-
MALFORMACIÓN ADENOMATOIDEA nales, entre otras, con una mayor supervivencia. El sín-
QUÍSTICA CONGÉNITA drome de Noonan puede estar asociado a linfangiectasias
pulmonares. No hay tratamiento específico.
Está constituida por una masa intralobar de tejido
pulmonar desorganizado, bien clasificada como Bibliografía
hamartoma pulmonar. No tiene preferencia por ningún
Adel A and Abdulla O: “Pulmonary resection in infants for
lóbulo o pulmón y se caracteriza por ser sólida en recién congenital pulmonary malformation”. Chest, 2003; 124: 125-32
nacidos y más quística en niños mayores. Tiene un siste- Chernick-Kendigs, Ed. ”Disorders of the respiratory tract in
ma bronquial, bien definido, que puede comunicar con el children”. 7th Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006.
árbol bronquial y el riego sanguíneo se efectúa a través Fraser R and Pare JA: “Diagnosis of the diseases of the chest”.
de la circulación pulmonar. Page: 602-56. 2nd Ed WB Saunders Co, Philadelphia-London-
Histológicamente se encuentra un sobrecrecimiento Toronto, 1977.
Green T and Finder J: “Congenital disorders of the lung”. Page:
de los bronquiolos con cambios proliferativos de la mu- 1423-5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook
cosa, células mucoides y metaplasia. of Pediatrics.17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
Las manifestaciones clínicas se presentan casi siem- Husain A and Hessel G: “Neonatal pulmonary dysplasia”. Pediatr
pre, en la etapa del recién nacido, en dependencia del Pathol, 1993; 13: 475-84.
Kuhn J: “Pulmón normal y anomalías”. Page: 239-56. In: Caffey:
volumen pulmonar afectado.
Diagnóstico por imágenes en Pediatría. Ed Panamericana,
Hay una marcada dificultad respiratoria, con cia- Bogotá-México, 1992.
nosis a veces asociada a hidramnios maternos, y el ede- Linan S, Moreno A and Vizmanos G: “Malformaciones
ma del recién nacido es la primera manifestación. broncopulmonares congénitas”. Page: 141-58. In: II Curso
Nacional de Actualización en Neumología Pediátrica. Cobas
Si la lesión no es extensa, los síntomas pueden apa-
Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
recer después, con presencia de infecciones respirato- Mata JM and Castellote A: “Pulmonary malformation beyond the
rias recurrentes en el pulmón afectado, o en ocasiones, neonatal period”. Pediatr Chest Imaging, Heidelberg: Springer
constituye un hallazgo radiológico en un paciente 2002; 93-111.
O Neill J: “Pulmonary Malformations”. Page: 873-97. In: Pediatr
asintomático. La radiología muestra una masa compuesta
Surgery, 5th Ed, Mosby Co, St Louis, 1998.
de múltiples quistes aereados esparcidos en un área de Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
pulmón determinada, que si es grande puede provocar children, Page: 311-47. 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
desplazamiento del mediastino. El diagnóstico diferen- 1990.
cial se debe establecer con el secuestro pulmonar y el Robbins. Manual de Patología estructural y funcional. Anomalías
congénitas. Page: 404. 6th Ed, Mc Graw Hill, Interamericana,
enfisema lobar congénito, principalmente. 2002.
El tratamiento es quirúrgico. Robert PA, Holland AT, Holliday RJ, Arbuckle SM and Cass DT:
“Congenital lobar emphysema: like father like son”. J Pediatr
Linfagiectasia pulmonar congénita Surgery, 2002; 37: 799-801.
Salzberg A and Krumel T: “Congenital malformations of the lower
Esta rara malformación se debe a un defecto en
respiratory tract”. Page: 227-67. In: Kendigs-Chernick, Ed.
el desarrollo de los linfáticos pulmonares, se caracte- ”Disorders of the respiratory tract in children”. 7th Ed, WB
riza por marcada dilatación generalizada de estos en Saunders, Philadelphia, 2006.

Parte XII. Aparato respiratorio 969


La compresión del esófago provoca síntomas di-
gestivos como disfagia, regurgitaciones, babeo o sialorrea.
. Capítulo 75 . Raramente se puede presentar hematemesis.
La compresión de algunos nervios puede provocar
su excitación o parálisis. La neuralgia frénica, o la pre-
Diagnóstico de las masas sencia de hipo o de disnea con parálisis diafragmática
pueden aparecer, aunque son raras en el niño. La irrita-
mediastinales ción del neumogástrico puede causar tos seca, irritativa,
José A. González Valdés
disnea, bradicardia y espasmo esofágico. La destruc-
ción del ganglio estelar es rara en niños, pero puede pro-
El mediastino está situado en la parte central del ducir el clásico síndrome de Claudio Bernard Horner
tórax. Sus límites anatómicos están representados late- dado por miosis, disminución de la hendidura palpebral,
ralmente por las pleuras parietales, cuando se reflejan anisocoria, enoftalmia y anhidrosis del lado afecto. La
en la parte media de ambos pulmones; por arriba, por la excitación de este ganglio, por el contrario, provoca el
parte superior o boca del tórax y, por debajo, por los síndrome de Porfour du Petit, con anisocoria, midriasis,
diafragmas. La parte anterior está limitada por el ester- exoftalmía y sudación de la hemicara correspondiente.
nón y posteriormente, por las superficies anteriores de La compresión de los nervios intercostales puede pro-
los cuerpos vertebrales torácicos. Este espacio a su vez ducir neuralgias.
está subdividido en tres compartimientos: el mediastino La masa mediastinal también puede comprimir va-
anterior (para algunos anterosuperior), el medio y el pos- sos arteriales, venosos o linfáticos. Así, aparece el sín-
terior, lo que permite una mejor localización de las ma- drome de la vena cava superior, en el cual la compresión
sas mediastinales. de este vaso produce el edema y la cianosis en esclavi-
Estas tumoraciones son afecciones importantes, na, que afecta cara, cuello, miembros superiores y parte
poco frecuentes y benignas en su mayoría. Más o me- superior del tórax, todo esto asociado a circulación cola-
nos, solo el 25 % son malignas. No obstante, toda masa teral. El derrame pleural y el quilotórax también pueden
sólida observada en un niño se deberá considerar como aparecer, pero son raros.
maligna, mientras no se demuestre lo contrario. Los pacientes con tumores mediastinales presen-
El diagnóstico de las masas mediastinales se basa tan, además, manifestaciones específicas de algunas
en tres elementos fundamentales: las manifestaciones entidades como presencia de miastenia gravis en algu-
clínicas, la localización de la tumoración en uno de los nos timomas; hipoglicemia en teratomas; hipertensión
tres compartimientos del mediastino y la realización de arterial en tumores neurogénicos, o manifestaciones ge-
un grupo de investigaciones, que van a conducir a su nerales como fiebre, anemia, pérdida de peso, anorexia,
diagnóstico definitivo. adenopatías u otros síntomas asociados en niños con
linfomas, leucemias, procesos infecciosos como tuber-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
culosis o mononucleosis infecciosa, entre otros.
Los síntomas de las masas mediastinales son va-
riables. En muchas ocasiones, el paciente está Localización
asintomático y la tumoración se detecta en un examen
Un examen radiográfico simple del tórax en vistas
radiográfico simple de tórax. Cuando la tumoración se
anteroposterior y lateral, es decisivo para localizar las
hace lo suficientemente grande, comprimirá los órganos
masas mediastinales en cualesquiera de los tres com-
vecinos y aparecerán los síntomas más diversos: dolor partimientos en que se divide el mediastino (anterior o
torácico, retroesternal, lancinante a veces, intenso, sor- anterosuperior, el medio y el posterior), ya que cada uno
do o constante, localizado o que puede irradiarse. de estos tienen estructuras únicas y las afecciones van
La compresión de la tráquea o los bronquios prin- a tener predominio en uno de ellos.
cipales produce, con frecuencia, distintas manifestacio- Mediastino anterior. El mediastino anterior está
nes respiratorias. La presencia de tos seca, irritativa, limitado por delante por el esternón y, posteriormente
molesta, a veces paroxística o emetizante puede ser la por el pericardio, aorta ascendente y vasos braquioce-
primera manifestación. Puede aparecer estridor fálicos. En este espacio se encuentran las estructuras
inspiratorio, ronquera, polipnea y tiraje así como mani- siguientes:
festaciones asmatiformes con respiración sibilante o • Glándula tímica.
crisis de disnea paroxística. Cuando la dificultad respi- • Ganglios linfáticos mediastinales anteriores.
ratoria es muy marcada, puede aparecer cianosis. • Arterias y venas mamarias internas.

970 Tomo III


• Parte anterior del pericardio. No se describen metástasis ni recidivas, son asinto-
• Tejido adiposo. máticos o raramente dan síntomas de compresión
• Extensiones subesternales de las glándulas tiroides y traqueal.
paratiroides. Los tumores de células germinales se clasifican,
• Foramen de Morgagni. por algunos autores, dentro de las neoplasias tímicas,
porque existen pocas dudas de su origen en el interior de
Las masas que van a encontrarse en esta región esta glándula. Este grupo incluye los teratomas benig-
del mediastino son las siguientes: nos y malignos, germinomas, carcinomas y tumores del
saco vitelino.
• Hiperplasia del timo.
Los teratomas son los más frecuentes y se en-
• Timomas.
cuentran, casi exclusivamente, en el mediastino
• Timolipomas.
anterosuperior, al nivel de la unión del corazón con los
• Tumores de células germinales:
grandes vasos. Más o menos, el 80 % son benignos. En
− Teratomas. el 75 % de las lesiones se encuentran calcificaciones. El
− Quistes dermoides. tumor contiene representación en algún estadio de ma-
− Germinomas. duración de las tres capas germinales. Cuando las lesio-
− Carcinoma embrionario. nes son quísticas, y contienen pelos y dientes son
− Coriocarcinomas. denominadas quistes dermoides, aunque en realidad no
− Teratocarcinomas. tienen un origen solo ectodérmico.
− Tumores del saco vitelino. La mayoría de los pacientes están asintomáticos,
• Lipomas, fibromas, hemangiomas. pero algunos pueden ocasionar síntomas de compresión
• Masas tiroideas y masas paratiroideas. del aparato respiratorio, o más raramente de la vena cava
• Higroma quístico. superior o bien atelectasia pulmonar por compresión de
• Quistes del pericardio. los bronquios. Los teratomas, en su mayoría, son
• Hernia diafragmática (Morgagni). resecables con facilidad, y algunos pueden ocasionar
hipoglucemia por producción de insulina.
El resto de los tumores de este grupo es muy raro
El agrandamiento o hiperplasia del timo es un
en los niños.
hallazgo muy común en la primera infancia. El tamaño y
Los lipomas se presentan en cualesquiera de los
la forma del timo agrandado son muy variables y de-
tres compartimientos, pero la mayoría son anteriores.
penden de la inspiración o espiración, el llanto o la posi- Casi siempre son benignos y raramente dan síntomas de
ción del niño. Radiológicamente, puede haber un compresión de las estructuras mediastinales. En la ra-
ensanchamiento bilateral de la sombra del mediastino diografía se ven menos densos que otras masas y, en
anterior en un niño con menos de 2 años, con muescas ocasiones, se proyectan hacia un solo lado del mediastino.
formadas por sus lóbulos, dando la típica imagen “en vela”. Más raramente se pueden encontrar los fibromas,
La mayor parte de las tumoraciones derivadas de tumores derivados del mesénquima, benignos y la ma-
las células que normalmente existen en el timo (timomas), yoría asintomáticos, así como los hemangiomas benig-
son neoplasmas linfoepiteliales sólidos o más raramente nos o malignos.
quísticos. Los sólidos son las neoplasias más frecuentes Las masas tiroideas constituyen un bajo porcen-
en el mediastino anterior y pueden ser benignas o malig- taje de los tumores del mediastino anterior. En la mayo-
nas, y pueden presentar elementos epiteliales, linfocíticos ría de los casos hay una conexión entre la masa
o ambos. Los tumores benignos son de crecimiento len- retroesternal y una tiroides palpable en el cuello. El
to y, en ocasiones, se asocian a manifestaciones de 80 % de estas masas se originan del polo inferior o del
istmo de la tiroides y se extienden dentro del mediastino
miastenia gravis. Los malignos son de crecimiento más
anterior por delante de la tráquea. La mayor parte de los
rápido y sus síntomas van a estar dados por la compre-
pacientes está asintomática y otros presentan síntomas
sión de la tráquea, el esófago o la vena cava superior. de compresión traqueal con distrés respiratorio, estridor
Los timolipomas son neoplasias benignas carac- y ronquera por compresión del nervio recurrente. Ade-
terizadas por una mezcla de grasa y tejido tímico más, puede encontrarse bocio nodular y tirotoxicosis.
hiperplásico. Su peso, por lo general excede los 500 g y En el examen radiográfico se puede observar una masa
no son propiamente lipomas, ya que también el tejido homogénea bien definida, con desplazamientos poste-
tímico aparece hiperplásico y diseminado en la grasa. rior y lateral de la tráquea.

Parte XII. Aparato respiratorio 971


La presencia de glándulas paratiroides en el −Linfadenitis infecciosa:
mediastino, se debe a la migración de estas con la glán- TB pulmonar
dula tímica en el período embrionario. Solo se aprecian Histoplasmosis
cuando su tamaño es el resultado de una hiperplasia o Mononucleosis
una neoplasia. Los tumores paratiroideos son raros, y Otras
cuando se presentan, su diagnóstico se establece por • Anomalías de grandes vasos
ser hiperfuncionantes y aparecer síntomas de − Aneurisma de la aorta.
hiperparatiroidismo con anorexia, fatiga, náuseas, vómi-
− Anillos vasculares.
tos, constipación e hipotonía muscular.
− Dilatación de la arteria pulmonar.
El higroma quístico o linfangioma aparece al
− Anomalías venosas.
principio de la vida y tiene un origen embrionario. Son
• Quistes broncógenos
quistes variables, en número uniloculares o multiloculares
tapizados de endotelio y están llenos de un líquido gela- • Hernia diafragmática (Morgagni)
tinoso claro. La presencia de una masa mediastinal an-
terior asociada a una masa quística en la región cervical, Las masas que más frecuentemente se presentan
plantea el diagnóstico. Los signos de compresión traqueal, en el mediastino medio se corresponden con adenopatías
pueden aparecer. En el examen radiográfico se aprecia debidas a distintas causas, en su mayoría malignas.
una lesión tumoral oval, lisa, poliquística en mediastino Los linfomas constituyen la causa más frecuente
anterior y superior. Raramente se asocia a quilotórax. de estas y, a su vez, el de Hodgkin es el más común. El
Los quistes del pericardio, pleuropericárdicos o 50 % de los pacientes afectados por esta enfermedad
mesoteliales son casi siempre asintomáticos y se descu- presentan adenopatías mediastinales, las cuales se pue-
bren en un examen radiográfico. Están constituidos por den observar en las imágenes radiográficas unilatera-
un saco de tejido conectivo o fibroso revestido de una les o bilaterales, a veces asimétricas, apreciándose un
capa simple de endotelio o mesotelio, pueden contener ensanchamiento del mediastino con afectación de los
líquido claro o seroso y, a veces, se comunican con la
ganglios paratraqueales y más raramente de los hiliares;
cavidad pericárdica, son pequeños, de contornos redon-
también pueden afectarse los ganglios del cuello y del
deados u ovales, de 3 a 8 cm de diámetro como prome-
mediastino anterior. Además de presentar los síntomas
dio y se localizan en el ángulo cardiofrénico,
preferiblemente. Raras veces provocan síntomas de generales propios de esta enfermedad, el niño también
opresión retroestenal, cuando son muy grandes. Se ven puede presentar aquellos que se deben a la toma
como una imagen inseparable del corazón y el mediastinal como el dolor torácico y los originados
ecocardiograma permite obtener su diagnóstico. por compresión o desplazamiento de los órganos ve-
Mediastino medio. El mediastino medio está li- cinos, principalmente tráquea, bronquios, nervio
mitado, por delante, por el anterior y, por detrás por el frénico, nervio recurrente laríngeo, o la vena cava
posterior y contiene los órganos siguientes: superior, entre otros.
• Ganglios linfáticos. Además de los linfomas, otras afecciones malig-
• Pericardio. nas como las leucemias y las metástasis de algunos tu-
• Corazón. mores, también pueden afectar estos ganglios.
• Aorta ascendente y arco aórtico. Tanto en la sarcoidosis como la tuberculosis,
• Arterias y venas pulmonares. histoplasmosis y mononucleosis infecciosa, entre otras,
• Arterias y venas braquiocefálicas. la presencia de adenopatías en el mediastino medio pue-
• Tráquea y bronquios principales. de existir con las mismas características clínicas ya se-
• Nervios frénicos. ñaladas de compresión de órganos vecinos, asociadas a
• Nervios vagos (parte superior). manifestaciones propias de cada enfermedad.
Las anomalías vasculares también van a ser causa
En esta región vamos a encontrar las tumoraciones de una masa tumoral al nivel del mediastino medio, a
siguientes: expensas, sobre todo, de las principales arterias y venas
• Adenopatías de esta región.
− Linfomas. Los aneurismas de la aorta son muy raros en los
− Leucemias. niños. Más frecuentes son los anillos vasculares, que
− Ganglios metastásicos. son congénitos y se deben a anomalías del desarrollo del
− Sarcoidosis. sistema del arco aórtico. Casi siempre dan manifestaciones

972 Tomo III


en los primeros años de la vida, principalmente por com- − Quistes neuroentéricos.
presión de la tráquea y el esófago, con la consiguiente • Meningocele.
dificultad respiratoria, infecciones respiratorias a repeti- • Hernia de Bochdaleck.
ción y disfagia. • Quiste del conducto torácico.
La dilatación de la arteria pulmonar se asocia a • Afecciones esofágicas:
cuadros de hipertensión pulmonar y shunts de izquierda − Divertículos.
a derecha. Las anomalías venosas, sobre todo las de la − Megaesófago.
vena cava superior, la ácigos y las del drenaje venoso − Hernia hiatal.
pulmonar son raras. Muchas de estas enfermedades • Neoplasias óseas.
vasculares son asintomáticas y su estudio mediante la
angiocardiografía selectiva, la arteriografía y la Los neuroblastomas son los tumores más frecuen-
ecocardiografía u otros exámenes por imagen, permite tes del mediastino posterior y constituyen más del 80 %
de estos. Son tumores malignos, neurogénicos, origina-
definir su diagnóstico.
dos de las células simpáticas primitivas (simpaticogonia),
Los quistes broncógenos, que se presentan tanto
derivadas de la cresta neural. Aparecen en los primeros
en esta zona como en el mediastino posterior, donde se
años de la vida y son más frecuentes en el varón. Son
describen, también pueden originar, principalmente, sín-
asintomáticos en más del 50 % de los pacientes y se
tomas de compresión traqueobronquial. La hernia a tra- detectan por un examen radiográfico de tórax. Pueden
vés del foramen de Morgagni se presenta en el mediastino aparecer síntomas de compresión traqueal o esofágica,
anterior y en el medio. Este foramen consiste en una o dolor torácico por compresión de nervios intercostales.
pequeña formación triangular en el diafragma, a pocos Se asocian a manifestaciones de hipertensión arterial,
centímetros de la línea media en cada lado, entre las flushing, sudación excesiva y otros síntomas secunda-
fibras musculares originadas entre el cifoesternón y la rios a la elevación de las catecolaminas.
séptima costilla. Cuando es más grande que lo normal, En radiología se ven ovalados o redondeados, cir-
permite que el contenido abdominal se hernie al tórax. cunscritos, paravertebrales y raramente tienen calcifi-
Ocurre en el lado derecho ya que el izquierdo está pro- caciones. La TAC y otros estudios radiológicos confirman
tegido por el pericardio. La hernia puede contener el diagnóstico. La presencia de células en “roseta” en el
omentun, hígado, intestino delgado o grueso. A veces, se medulograma y la elevación del ácido vanililmandélico
observa como una masa homogénea de densidad varia- en orina, también son importantes.
ble. Puede haber presencia de gas, si hay intestino. Pue- Los tumores quísticos enterógenos como su nom-
de haber presencia de distrés respiratorio, dolor bre lo indica, son lesiones quísticas que se originan por
retroesternal o síntomas gastrointestinales. A veces es defectos en el desarrollo embrionario del intestino primi-
asintomática. tivo. Los tres principales son los quistes broncógenos,
Mediastino posterior. Está limitado, por delante, las formaciones quísticas entéricas y los quistes
por el pericardio, y por detrás, por la parte anterior de la neuroentéricos.
columna vertebral. En él vamos a encontrar estas es- Los quistes broncógenos son raros y se caracte-
tructuras:
rizan por estar revestidos de un epitelio columnal ciliado
• Cadena simpática paravertebral.
semejante al del tracto respiratorio. Muchas veces son
• Esófago.
asintomáticos y otras, provocan síntomas de compre-
• Aorta descendente.
sión traqueal o esofágica. En exámenes radiológicos se
• Vena ácigos y hemiácigos.
caracterizan por ser masas redondeadas con densidad
• Nervios vagos (parte inferior).
líquida y, a veces, con aire en su interior. Se localizan en
• Conducto torácico.
el mediastino medio y en el posterior.
• Ganglios linfáticos posteriores.
Las formaciones quísticas entéricas llamadas
• Foramen de Bochdaleck.
también quistes gastroentéricos, ocupan el segundo lu-
En esta región las tumoraciones más importantes gar en frecuencia dentro de los tumores del mediastino
que van aparecer son las siguientes: posterior. Estos quistes están recubiertos de una muco-
• Neuroblastomas. sa semejante a la del esófago, estómago o intestino. Son
• Tumores quísticos enterógenos: más frecuentes en varones. Raras veces producen do-
− Quistes broncógenos. lor, por la presencia de una úlcera péptica en el quiste.
− Quistes gastroentéricos. Radiológicamente son masas redondeadas u ovales,

Parte XII. Aparato respiratorio 973


homogéneas, con contenido de líquido y aire, si se co- en esta región del mediastino, al igual que ocurre con
munican con el aparato digestivo. En este grupo se en- linfomas cuando afectan la cadena ganglionar parietal
cuentran las duplicaciones que reciben una irrigación posterior.
común con el tracto digestivo, como ocurre en las INVESTIGACIONES
duplicaciones esofágicas.
Los estudios imagenológicos constituyen el proce-
Los quistes neuroentéricos, histológicamente se
der más importante para definir la localización y exten-
caracterizan porque sus paredes contienen elementos
sión de las masas mediastinales.
gastrointestinales y neurales. Estos quistes están conec-
La radiografía simple de tórax en proyecciones
tados por un pedículo a las meninges y a la médula espinal,
anteroposterior, lateral y oblicuas, localiza la masa en
a través de un defecto en forma de túnel en los cuerpos
uno de los compartimientos mediastinales, además, per-
vertebrales. A veces, se comunican con el tracto gastro-
mite obtener información sobre la forma, el tamaño, la
intestinal. Pueden producir dolor torácico o distrés res-
densidad, la presencia de calcificaciones o no y otros
piratorio. Radiológicamente se caracterizan por ser
datos que ayudan a definir malignidad o no. Los exáme-
masas homogéneas, ovaladas, con contenido de líquido,
nes de tórax penetrados, en distintas proyecciones, pue-
a veces asociadas a anomalías como hemivértebras,
den ayudar a definir masas confusas.
espina bífida y hernia diafragmática.
El meningocele es una rara anomalía del canal La radiografía de la columna vertebral, en varias
espinal, que consiste en la herniación de las leptomeninges posiciones, está indicada, sobre todo, en pacientes con
a través del orificio intervertebral. Puede ser único o tumoraciones en el mediastino posterior.
múltiple y más frecuente en el lado derecho. El menin- La tomografía lineal sirve para caracterizar y deli-
gocele contiene solo líquido y el mielomeningocele tiene, mitar mejor las lesiones, y para definir la presencia de
además, elementos nerviosos. A veces, se asocian a cavidades y calcificaciones.
anomalías costales y vertebrales, y pueden ser confun- La fluoroscopia define masas y adherencias a dis-
didos con tumores neurogénicos. La mayoría es tintos órganos, pulsaciones u otras características im-
asintomática. portantes.
La hernia de Bochdaleck se presenta cuando El esofagograma detecta compresiones extrínse-
ocurre una incompleta fusión del mesenterio dorsal con cas de esófago, hernias hiatales, divertículos y otras en-
el pleuroperitoneal, de la cual se origina un hiato fermedades propias de este órgano.
diafragmático: el foramen de Bochdaleck, que puede Los estudios contrastados de corazón y vasos como
aparecer en cualesquiera de los dos hemitórax. A través la angiocardiografía selectiva, aortografía, cavografía,
de este orificio puede herniarse el omentun, el bazo, el arteriografía pulmonar, aplicación de técnicas de sus-
riñón u otros órganos, y presentarse un cuadro de distrés tracción digitálica, linfografía y otras, son importantes
respiratorio grave del recién nacido, unido a una masa para valorar las alteraciones que pueden aparecer a
en el mediastino posterior. Esta afección puede apare- expensas de distintos vasos, sistema linfático y otros ór-
cer asociada a otras anomalías como la hipoplasia ganos mediastinales.
pulmonar y las cardiopatías congénitas. La mielografía es un examen que, aunque más raro,
Los quistes del conducto torácico ocurren en tiene indicaciones precisas en algunos pacientes.
cualquier parte de su trayecto, desde el vértice hasta el La introducción de la tomografía axial computa-
diafragma, y pueden desplazar al mediastino al lado rizada (TAC) en 1975, convierte este proceder en el más
opuesto, lo cual produce compresión traqueal con difi- importante para el diagnóstico; asociado y complemen-
cultad respiratoria. No son frecuentes. tado posteriormente por la resonancia magnética nu-
También pueden aparecer algunas afecciones clear (RMN). La TAC permite imágenes más nítidas,
esofágicas en esta localización, que se caracterizan por
cortes transversales, visualizar mejor los límites del tu-
disfagia, tos crónica (a veces nocturna) y neumonías
mor, densidad, localización, características (sólidos,
recurrentes, como ocurre en el divertículo esofágico,
quísticos, mixtos, calcificados), extensión y relación con
casi siempre localizado en el tercio inferior; el
megaesófago y la hernia hiatal esofágica, que son órganos adyacentes. El uso de contraste vascular aso-
raros. El esofagograma es importante para establecer el ciado a la TAC, define la relación de la masa con los
diagnóstico. vasos y la RMN proporciona información adicional es-
Por último, una variada gama de neoplasias que pecialmente en lesiones posteriores.
pueden afectar la columna vertebral y las costillas como El ultrasonido transtorácico y transesofágico es útil
el tumor de Ewing, se pueden presentar como una masa en enfermedades cardiovasculares y del pericardio.

974 Tomo III


El uso de la medicina nuclear, como la Ryu J and Habermann: “Pulmonary lymphoma. Primary and
gammagrafía tiroidea con Yodo 131, Galium 67 en systemic disease”. Seminar Respir Crit Care Med, 1997;
linfomas, e Indium 111 en infecciones mediastinales, así 18(4): 341-52.
Szela Kelly C and Kelly R Jr: “Lymphoadenophaty in children”.
como la TAC con emisión de fotones simples, o de
Pediatr Clin North Am, Philadelphia, 1998, 45(4): 875-88.
protones, también son útiles. Takeda S, Miyosi S, Minami M, Ohta M, Masaoka A and
La exploración endoscópica del aparato respirato- Matsuda H: “Clinical spectrum of mediastinal cystis”. Chest,
rio y del tubo digestivo puede estar indicada en algunos Park Ridge, 2003, 124: 98-101.
pacientes, y es de gran utilidad diagnóstica.
Se pueden realizar estudios anatómicos e
histológicos diversos de muestras obtenidas por
toracoscopias, biopsias, punciones directas de tumores . Capítulo 76 .
a través del ultrasonido, mediastinoscopia o mediasti-
notomía. Con ganglios, médula ósea en medulogramas,
u otros materiales obtenidos por diversas vías, se puede Asma bronquial
precisar el diagnóstico. Manuel Rojo Concepción
Además, en dependendencia de la posible causa
de la tumoración están indicadas algunas investigacio- El asma bronquial (AB) ha sido considerada, en
nes de laboratorio, como dosificaciones de ácido
diversas reuniones internacionales de consenso, como
vanililmandélico, hormonas, calcio y fósforo, glucemia,
una afección inflamatoria crónica de las vías aéreas ba-
alfafetoproteína, Paul y Bunnel, prueba de Mantoux, test
jas, en particular de los bronquios, que se produce en
de histoplasmina y otras múltiples que definen un diag-
personas “predispuestas”. Esta inflamación produce una
nóstico, y que son muy variadas.
Finalmente, después de realizarse el diagnóstico disminución en el calibre de los bronquios, acompañada
correcto de una masa mediastinal en el niño, se proce- de una manera de reaccionar, más intensa, de estos bron-
derá al tratamiento, ya sea médico o quirúrgico. quios frente a una serie de estímulos (hiperreactividad
bronquial). Esta reacción bronquial exagerada es dife-
Bibliografía rente a como responden los bronquios a estos mismos
Al-Qahtani AR, Di Lorenzo M and Yazbeck S: “Endobronchial estímulos en personas no asmáticas. El AB presenta
tumors in children: Institutional experience and literature cuadros repetidos de aumento de la inflamación y de la
review”. J Pediatr Surg, 2003; 38: 733-6. hiperreactividad bronquial (HRB) llamados crisis o epi-
Caffey AR: “Diagnóstico por imágenes en Pediatría”. Pág. 340-68.
Editorial Médica Panamericana, Buenos Aires, 1992.
sodios de exacerbación agudos. La inflamación y la HRB
Castleberry R: “Biology and treatment of neuroblastoma”. Pediatr pueden ser reversibles, total o parcialmente, con un tra-
Clin North Am, Philadelphia, 1997, 44(4): 919-37. tamiento precoz, adecuado, individualizado o, con mu-
Chernick-Kendigs, Ed.”Disorders of the respiratory tract in cha menos frecuencia, de forma espontánea.
children”. Page: 624-48. 7 th Ed, WB Saunders, Philadelphia,
2006. El concepto de AB comprende una serie de as-
Geng E, Kreiswirth B, Burzynski R and Schluger NW: “Clinical pectos:
and radiographic correlates of primary and reactivation • Inflamación crónica inespecífica de las vías aéreas
Tuberculosis”. JAMA, Chicago, 2005, 293(22): 2740-5.
Green T and Finders J: “Congenital disorders of the lung”. Page:
en particular de los bronquios, con obstrucción bila-
1423-5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook teral y difusa, pero no simétrica. Esta inflamación
of Pediatrics.17th Ed. Saunders Co Philadelphia, 2003 se produce en individuos “predispuestos” al AB.
Katz B and Miller G: “Epstein Barr Virus infections”. Page: 143- • La mayoría de los pacientes presenta, además, una
60. In: Krugman’ s Infectious Diseases of Children. 11th Ed,
Mosby Co, USA, 2004. HRB aunque esta no es exclusiva del AB, pues pue-
Lynch J, Kazerooni E and Gay E: “Pulmonary sarcoidosis”. Clin de encontrarse en otras afecciones.
Chest Med, Philadelphia, 1997; 18(4): 755-85. • En la mayoría de los pacientes, la inflamación cróni-
Oneill J, Rowe M, Grosfeld J, Fonkalsrud E et al: Pediatric
ca y la HRB, que también produce obstrucción, pue-
Surgery, Page: 839-51. 5th Ed. Mosby, St Louis, 1998.
Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in den ser reversibles, total o parcialmente, con un
children. Page: 311-47. 3rd Ed, Blackwell Scientific, London, tratamiento particularizado, precoz, adecuado y pro-
1990. longado.
Putman J: “The mediastinum: Overview, anatomy and diagnostic
• Las manifestaciones clínicas durante los episodios de
approach”. Page: 1469-85. In Fishman’s Pulmonary Diseases
and disorders. 3rd Ed, Mc Graw Hill, New York, London, exacerbación varían según el grado de obstrucción
1998. bronquial. No son patognomónicas de AB pues hay

Parte XII. Aparato respiratorio 975


El uso de la medicina nuclear, como la Ryu J and Habermann: “Pulmonary lymphoma. Primary and
gammagrafía tiroidea con Yodo 131, Galium 67 en systemic disease”. Seminar Respir Crit Care Med, 1997;
linfomas, e Indium 111 en infecciones mediastinales, así 18(4): 341-52.
Szela Kelly C and Kelly R Jr: “Lymphoadenophaty in children”.
como la TAC con emisión de fotones simples, o de
Pediatr Clin North Am, Philadelphia, 1998, 45(4): 875-88.
protones, también son útiles. Takeda S, Miyosi S, Minami M, Ohta M, Masaoka A and
La exploración endoscópica del aparato respirato- Matsuda H: “Clinical spectrum of mediastinal cystis”. Chest,
rio y del tubo digestivo puede estar indicada en algunos Park Ridge, 2003, 124: 98-101.
pacientes, y es de gran utilidad diagnóstica.
Se pueden realizar estudios anatómicos e
histológicos diversos de muestras obtenidas por
toracoscopias, biopsias, punciones directas de tumores . Capítulo 76 .
a través del ultrasonido, mediastinoscopia o mediasti-
notomía. Con ganglios, médula ósea en medulogramas,
u otros materiales obtenidos por diversas vías, se puede Asma bronquial
precisar el diagnóstico. Manuel Rojo Concepción
Además, en dependendencia de la posible causa
de la tumoración están indicadas algunas investigacio- El asma bronquial (AB) ha sido considerada, en
nes de laboratorio, como dosificaciones de ácido
diversas reuniones internacionales de consenso, como
vanililmandélico, hormonas, calcio y fósforo, glucemia,
una afección inflamatoria crónica de las vías aéreas ba-
alfafetoproteína, Paul y Bunnel, prueba de Mantoux, test
jas, en particular de los bronquios, que se produce en
de histoplasmina y otras múltiples que definen un diag-
personas “predispuestas”. Esta inflamación produce una
nóstico, y que son muy variadas.
Finalmente, después de realizarse el diagnóstico disminución en el calibre de los bronquios, acompañada
correcto de una masa mediastinal en el niño, se proce- de una manera de reaccionar, más intensa, de estos bron-
derá al tratamiento, ya sea médico o quirúrgico. quios frente a una serie de estímulos (hiperreactividad
bronquial). Esta reacción bronquial exagerada es dife-
Bibliografía rente a como responden los bronquios a estos mismos
Al-Qahtani AR, Di Lorenzo M and Yazbeck S: “Endobronchial estímulos en personas no asmáticas. El AB presenta
tumors in children: Institutional experience and literature cuadros repetidos de aumento de la inflamación y de la
review”. J Pediatr Surg, 2003; 38: 733-6. hiperreactividad bronquial (HRB) llamados crisis o epi-
Caffey AR: “Diagnóstico por imágenes en Pediatría”. Pág. 340-68.
Editorial Médica Panamericana, Buenos Aires, 1992.
sodios de exacerbación agudos. La inflamación y la HRB
Castleberry R: “Biology and treatment of neuroblastoma”. Pediatr pueden ser reversibles, total o parcialmente, con un tra-
Clin North Am, Philadelphia, 1997, 44(4): 919-37. tamiento precoz, adecuado, individualizado o, con mu-
Chernick-Kendigs, Ed.”Disorders of the respiratory tract in cha menos frecuencia, de forma espontánea.
children”. Page: 624-48. 7 th Ed, WB Saunders, Philadelphia,
2006. El concepto de AB comprende una serie de as-
Geng E, Kreiswirth B, Burzynski R and Schluger NW: “Clinical pectos:
and radiographic correlates of primary and reactivation • Inflamación crónica inespecífica de las vías aéreas
Tuberculosis”. JAMA, Chicago, 2005, 293(22): 2740-5.
Green T and Finders J: “Congenital disorders of the lung”. Page:
en particular de los bronquios, con obstrucción bila-
1423-5. In: Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook teral y difusa, pero no simétrica. Esta inflamación
of Pediatrics.17th Ed. Saunders Co Philadelphia, 2003 se produce en individuos “predispuestos” al AB.
Katz B and Miller G: “Epstein Barr Virus infections”. Page: 143- • La mayoría de los pacientes presenta, además, una
60. In: Krugman’ s Infectious Diseases of Children. 11th Ed,
Mosby Co, USA, 2004. HRB aunque esta no es exclusiva del AB, pues pue-
Lynch J, Kazerooni E and Gay E: “Pulmonary sarcoidosis”. Clin de encontrarse en otras afecciones.
Chest Med, Philadelphia, 1997; 18(4): 755-85. • En la mayoría de los pacientes, la inflamación cróni-
Oneill J, Rowe M, Grosfeld J, Fonkalsrud E et al: Pediatric
ca y la HRB, que también produce obstrucción, pue-
Surgery, Page: 839-51. 5th Ed. Mosby, St Louis, 1998.
Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in den ser reversibles, total o parcialmente, con un
children. Page: 311-47. 3rd Ed, Blackwell Scientific, London, tratamiento particularizado, precoz, adecuado y pro-
1990. longado.
Putman J: “The mediastinum: Overview, anatomy and diagnostic
• Las manifestaciones clínicas durante los episodios de
approach”. Page: 1469-85. In Fishman’s Pulmonary Diseases
and disorders. 3rd Ed, Mc Graw Hill, New York, London, exacerbación varían según el grado de obstrucción
1998. bronquial. No son patognomónicas de AB pues hay

Parte XII. Aparato respiratorio 975


otras afecciones que las presentan, constituyendo el atienden actualmente no es solo por una mejor organiza-
síndrome de obstrucción bronquial difusa (SOBD) o ción y atención médica, sino a que también hay un au-
síndrome de “atrapamiento” de aire bilateral pulmonar . mento real de asmáticos, como sucede en muchos países,
• Las manifestaciones clínicas de las exacerbaciones debido a causas hereditarias y sobre todo a factores
varían de un paciente a otro y aún en un mismo pa- exógenos (urbanización, contaminación ambiental, me-
ciente. Estas exacerbaciones tienen otras caracte- nor mortalidad en niños, tabaquismo, cambios dietéticos
rísticas que más adelante se citarán. y de hábitos de vida y otros factores de la vida moder-
Pudiera agregarse, a lo anterior, algunos otros as- na). Según una investigación nacional sobre prevalencia
pectos señalados por varios autores:
de AB en Cuba, realizada años atrás, esta era de alrede-
• El AB del niño es a menudo presentada como una
dor del 12 % en menores de 15 años y 8 % para todas
afección complicada, caprichosa, confusa y que des-
las edades. Trabajos posteriores realizados a distintos
aparece en la pubertad habitualmente, lo que no es
cierto. grupos han mostrado cifras superiores. En pacientes
• El AB no controlada por un tratamiento adecuado es pediátricos de 1 a 15 años de edad la relación sexo
una experiencia duradera, impredecible, alarmante, masculino:sexo femenino en AB es de entre 1,75:1,00 a
que en mayor o menor grado altera la calidad de vida 2,50:1,00 según diversos trabajos cubanos. (En la pobla-
del paciente y de sus familiares; puede ser irreversi- ción total la relación M:F es de 1,10:1,00 según el
ble y hasta mortal. MINSAP). La tasa de letalidad, por 100 000 habitantes,
• El AB controlada con un tratamiento adecuado tiene en el 2 000 fue de 0,1 en edades de 0 a 9 años, de 0,3
un pronóstico favorable, aunque su evolución se debe entre 10 y 14 años y de 0,8 entre 15 y 19 años de edad,
continuar por meses o años. según datos de la Comisión Nacional de Asma del
• El AB no tiene actualmente un tratamiento curativo Viceministerio de Higiene y Epidemiología. Es decir, que
total, pero sus manifestaciones clínicas, que son las la mortalidad por AB es baja en las edades pediátricas
que molestan al paciente, se pueden hacer desapare- en nuestro país, no así la morbilidad, pues los niños
cer o disminuir, hasta lograr una vida normal o casi asmáticos constituyen no menos de la quinta parte de
normal para este y sus familiares, con una serie de todas las consultas, urgentes o no, en los distintos nive-
medidas, medicamentosas y no medicamentosas, te- les de APS y hospitales pediátricos.
niendo en cuenta los conocimientos actuales sobre la Según muchos autores no se debe utilizar el térmi-
afección.
no bronquitis asmática, pues hay quien lo considera
• El AB tiene como piedra angular de su tratamiento a
como una entidad aparte del asma, lo que demora el
los familiares y al paciente, cuando este cuenta con
comienzo de un tratamiento temprano del AB, que es
una edad adecuada para comprenderlo. Ellos son
los mayores responsables del tratamiento que debe uno de los aspectos más importantes en el control y pro-
ser establecido, enseñado, dirigido, supervisado y evo- nóstico de la afección. Por otra parte, hay que recono-
lucionado por un equipo de salud, en particular por el cer que, en los primeros momentos, sobre todo en niños
médico. pequeños, se pueden presentar dudas en el diagnóstico
• El AB puede y debe ser tratada en la mayoría de los como asmáticos, pero en general muchos de los niños
pacientes por el equipo de salud de la Atención Pri- de más de 4 años con cuadros de sibilancias a repeti-
maria (APS). En aquellos pacientes moderados o se- ción, son o serán asmáticos.
veros o que no evolucionen bien, se solicitarán
interconsultas con el pediatra, el neumólogo, el PATOGENIA Y HERENCIA DEL ASMA
alergista, el sicólogo o siquiatra y otros. Solo en la BRONQUIAL
APS se puede tener una visión global del niño asmá-
Es muy compleja y no está totalmente aclarada.
tico y del medio que lo rodea.
Se presenta en individuos “predispuestos”. No se
• Cada vez cobra más fuerza el criterio que el AB no
ha establecido totalmente qué hace que una persona esté
es una afección única, sino una expresión clínica co-
predispuesta a padecer de asma bronquial. Se han cita-
mún, de diferentes mecanismos patogénicos, por lo
que el AB podría ser un síndrome. do 2 grupos de factores: la atopia y factores no atópicos,
por lo que hoy se habla de asma atópica (la más estudia-
En Cuba, al igual que en muchos países, el AB cons- da en pacientes pediátricos y que es mediada por IgE) y
tituye un problema importante de salud. Consideramos de asma no atópica (con diversos factores no mediados
que el aumento en el número de niños asmáticos que se por IgE, que veremos más adelante).

976 Tomo III


Asma atópica Los linfocitos B (LB) son activados, en asmáticos
Se plantea que solo del 15 al 30 % de los atópicos atópicos, por mediadores químicos (interleuquinas y otros)
son asmáticos. producidos por un tipo de linfocito T (LTH2) o linfocitos
Se debe considerar al AB como la resultante de “helper” o “auxiliadores” (tipo 2). Cuando estos linfocitos
una inflamación crónica de las vías aéreas bajas, en TH2 son estimulados, liberan varias interleuquinas (so-
particular los bronquios, la mayoría de las veces o siem- bre todo IL-5, IL-4, IL3 e IL-13) entre otras sustancias.
pre acompañada de HRB. La IL-5 estimula a los eosinófilos y se producen
En el asma atópica intervienen tres grandes prostaglandinas, sobre todo la F2 alfa (PG-F2 alfa),
factores: leucotrienos B4, C4 y D4, factor activador plaquetario
(FAP o en inglés PAF), tromboxano A2 (Tx-A2) y otros
Numerosas células: macrófagos, células dendrí-
mediadores químicos. Además, se produce la transfor-
ticas del pulmón, linfocitos T, linfocitos B (generalmen-
mación de los eosinófilos en eosinófilos hipodensos que
te estimulados por linfocitos T), mastocitos, eosinófilos,
son más estables, con mayor liberación de otros media-
neutrófilos, etc.
dores químicos como la proteína básica mayor (PBM),
Numerosos mediadores químicos (se citan más
la proteína catiónica eosinofílica (PCE) entre otras, que
de 200).
intervienen en la HRB y además son sustancias
Células de la mucosa bronquial, otras estruc- citotóxicas sobre las células de la mucosa bronquial,
turas del bronquio y células de los vasos sanguí- denudándolas. La IL-4 estimula a los LB transformán-
neos de la pared bronquial. dolos en células secretoras de IgE. Esta actúa sobre los
Estos tres factores producen, entre otros eventos, receptores IgE de los mastocitos liberando histamina,
infiltración de células inflamatorias, edema bronquial y prostaglandina D2 (PTG-D2), leucotrienos C4 (LT-C4)
secreción mucosa aumentada y espesa. En la HRB que y otros mediadores. La IL-13 actúa sobre los mastocitos
acompaña a la inflamación bronquial, causante de y además sobre las células endoteliales de los vasos,
broncoespasmo, intervienen los mastocitos inicialmente que liberarán mediadores químicos. En las inflamaciones
y después otras células con receptores IgE (como los crónicas, granulomatosas o no, predominan, entre otras,
macrófagos y los linfocitos B). la IL-1 e IL-2; en cambio en la inflamación crónica del
Inicialmente se planteó que lo primario era el asmático, alérgico sobre todo, predominan las IL-4, IL-
broncoespasmo que se manifiesta por tos y/o sibilancias 5, IL-13 lo que parece ser otro punto de diferenciación
y disnea. Desde hace algunos años se plantea que lo entre el asmático y el no asmático.
básico es la inflamación crónica de los bronquios, que En los pacientes atópicos se produce:
produce o se acompaña de HRB, que causan un au- • Un primer estadio que es la exposición a un estímu-
mento de la obstrucción ya existente por la inflamación lo particular o alergeno (con más frecuencia un
crónica, aunque esta de por sí, al aumentar por diversos aeroalergeno o alergeno inhalado) y con menos fre-
estímulos, alérgicos o no, produce más obstrucción (Fig.76.1). cuencia a un medicamento o a un alimento.

Fig. 76.1. Patogenia del asma bronquial.

Parte XII. Aparato respiratorio 977


• Un segundo estadio o de sensibilización que pue- del pulmón (producidas intraútero o después de
de durar semanas, meses y hasta años dependiendo nacido): por ejemplo, por una madre fumadora durante
de la continuidad o intensidad del contacto, tipo de el embarazo o después (planteada por los seguidores de
alergenos y la vía de penetración en el organismo. la hipótesis higiénica).
Habitualmente este período es asintomá-tico; los Anormalidades del óxido nítrico (NO): Estas
alergenos del cuerpo, las secreciones o heces fecales anormalidades pueden ser debidas a una disminución del
de ácaros del polvo de la casa, los alergenos de las NO por alteraciones en su producción (por deficiencia
cucarachas y otros que participan en lo que se cono- de la NOS u óxido nítrico sintetasa que produce el NO a
ce por el polvo de la casa, son los más importantes. partir de la L-arginina) o anormalidades en su destruc-
• Un tercer estadio, de reexposición al mismo alergeno ción. El NO es un potente vasodilatador y broncodilatador
que produjo la sensibilización y que desencadena una que tiene una importante función en la regulación de las
serie de mecanismos complejos que no son total- vías aéreas y vasos pulmonares. Se considera como un
mente conocidos. posible neurotransmisor del sistema no adrenérgico/no
• Un cuarto estadio que es la aparición de las mani-
colinérgico y se origina en tejidos neurales y no neurales
festaciones clínicas.
(macrófagos, eosinófilos y otras células).
Anormalidades congénitas del músculo liso
En resumen, el AB resulta de una compleja
bronquial.
interacción o interrelación de:
Alteración congénita de la relación de Reed
• Numerosas células inflamatorias.
(relación entre el diámetro bronquial y el de la luz
• Mediadores químicos (en número mayor de 200, aun-
bronquial).
que para muchos los leucotrienos son los mediadores
Hipertonía vagal, congénita o adquirida, man-
que producen las mayores alteraciones inflamatorias).
• Células epiteliales bronquiales y otras células y es-
tenida.
tructuras de las vías aéreas incluyendo el endotelio Disminución de la neuroendopeptidasa (NEP).
vascular y las terminaciones nerviosas amielínicas Alteración de la enzima convertidora de la
(fibras C). angiotensima (ECA).
Posiblemente existan otros factores por de-
Además, por acción de mediadores químicos, se mostrar.
produce la expresión de distintas moléculas de adhesión
en la superficie de las células inflamatorias circulantes
Hipótesis higiénica
y en la superficie de las células endoteliales, sobre todo Muy debatida, teniendo muchos partidarios de ella
en las vénulas poscapilares. Estas moléculas favorecen que tratan de explicar casi todas las alteraciones
la adhesión y el paso de estas células inflamatorias a fisiopatogénicas del asma bronquial por esta hipótesis,
través de los capilares de la pared bronquial y son res- mientras que hay otros autores que plantean que la hipó-
tesis higiénica no puede responder a muchas
ponsables de la infiltración bronquial y peribronquial, so-
interrogantes del AB.
bre todo por eosinófilos, característica del AB y de su
La hipótesis higiénica plantea, de manera resumi-
persistencia.
da, que de todos los subtipos de linfocitos T (LT), exis-
La mucosa de las vías aéreas, desde la nasofaringe ten, fundamentalmente, 2 tipos de linfocitos: los “helper”
hasta los bronquios finos, es una mucosa única y las o ayudantes (LTH), que son importantes en la patogenia
manifestaciones nasales juegan un papel importante en del asma: los LTH1 y los LTH2. Los LTH1 producen,
la patogenia del AB. En el asma atópica en niños, hay principalmente, interleuquina 1 (IL-1) y la IL-2 e
que tener en cuenta que en el 70 o más porcentaje de los interferón (IFN). Los LTH2 producen, fundamental-
pacientes hay manifestaciones al nivel de la mucosa nasal mente, IL-4, IL-5, IL-3 e IL-13 (que tienen un papel
que se producen o preceden al asma. importante en el asma bronquial atópica) y que son
inhibidas, en su producción o función, por los productos
Asma no atópica de los LTH1, en particular por el IFN.
No mediada por IgE. Se citan diversos factores: Se plantean diversas variantes:
Alteraciones funcionales (disminución de la • En las personas no asmáticas hay un equilibrio entre
función de los pulmones) u orgánicas en el desarrollo los LTH1 y los LTH2.

978 Tomo III


• En los asmáticos hay un predominio del LTH2 en productos de la biomasa (kerosene, petróleo, gasoli-
cualquier edad, estimulados por diversos factores na, leña o desechos de cosechas utilizados en la coc-
(alergenos o no) con aumento de las IL que ellos pro- ción de alimentos o para calentar los hogares, etc.),
ducen y que actuarían sobre los receptores de las las infecciones a repetición sobre todo las virales, aun-
distintas células que se citaron anteriormente como que se admiten las producidas por chlamydias o
los mastocitos, los eosinófilos y otras, cuyos produc- mycoplasmas y se discuten otras bacterias, el uso
tos, ya descritos anteriormente, desencadenarían las excesivo o a repetición de algunos medicamentos
distintas manifestaciones del AB.
(antibacterianos, ácido acetil-salicílico,
• Normalmente en el feto y en el primer o en los 2
antiinflamatorios no esteroideos) y contrastes
primeros años de vida extrauterina, hay un predomi-
radiológicos. No se ha comprobado que las emocio-
nio de LTH2, que nos explicaría sobre la sensibiliza-
ción intraútero o en los primeros meses de la vida, al nes severas sean factores causales, aunque se con-
recibir el feto o el niño diversos estímulos, como han sideran desencadenantes. Los factores causales
planteado muchos autores, que el asma puede co- actuarían sobre “personas predispuestas”.
menzar desde el útero o en los primeros meses de
vida extrauterina. Lo ideal sería evitar, lo más posible, estos factores
• También se ha planteado que infecciones en los pri- causales, sobre todo en niños con antecedentes familia-
meros meses de vida pueden favorecer la disminu- res de AB o atopia, en particular los familiares de primer
ción de la predisposición al asma ulteriormente (pues orden y entre ellos la madre. Existen evidencias de
con las infecciones hay un aumento de los LTH1 y sensibilización a alergenos por vía intrauterina o altera-
sus productos, sobre todo el IFN, que inhibirían a los ciones en el desarrollo del pulmón fetal sobre todo en
LTH2 y sus productos). embarazadas que fuman y que siempre deberíamos te-
ner en cuenta, aunque habitualmente la prevención de
Hoy se plantea que también intervienen los LTH3, las causas del asma se orienta hacia la vida extrauterina.
que presentan una acción inhibidora o reguladora sobre
Este concepto de evitar factores causales ha creado un
los LTH1 y los LTH2, y que pudieran jugar una función
nuevo enfoque en el tratamiento del AB: el tratamiento
en la evolución del asma.
preventivo.
Factores causales y factores desencadenantes Los factores desencadenantes son aquellos que
en asma bronquial producen las exacerbaciones del AB en asmáticos y el
evitarlos o suprimirlos constituye uno de los aspectos
Los factores causales son los que producen la in-
fundamentales en el tratamiento del asma.
flamación crónica inespecífica que hoy se considera la
Se pueden dividir en factores inmunológicos o
base del AB. El grado de inflamación está en relación
casi siempre con una exposición mantenida o muy repe- alérgicos (generalmente mediados por IgE, en asma
tida, el tipo del factor causal y la vía por donde penetran atópica) y factores no inmunológicos (en asma atópica
en el organismo: la más frecuente en el asma atópica, y en asma no atópica).
es la vía inhalante. Los alérgicos o inmunológicos comprenden (en
Los factores causales pueden ser alergenos asma atópica):
(inmunológicos) y no alergenos (no inmunológicos). • Alergenos inhalantes o aeroalergenos como los del
• Entre los alergenos (asma atópica) parecen ser los ácaro; el polvo de la casa; los de las cucarachas (que
causantes más frecuentes los de los ácaros del polvo parecen jugar un papel tan importante como los de
de la casa (que son más de uno) y los alergenos de los ácaros en países en desarrollo y en las casas de
las cucarachas. También se consideran el pelo, sali- familias de bajo nivel socioeconómico en ciudades
va y la caspa de los animales sobre todo los domésti- de países desarrollados); la caspa, saliva o lana de
cos o mascotas (gatos, roedores, aves, perros), el animales, sobre todo mascotas; los pólenes; los hon-
polen, los hongos llamados mohos o las levaduras y gos, llamados mohos o las levaduras; la inhalación
con menos frecuencia, algunos alimentos o medica- de harina de soya, no protegida y descargada en puer-
mentos. tos, trasmitida por el aire.
• Entre los no alergenos (asma no atópica) se citan los • Alimentos, que cada vez se les da menos importan-
factores irritantes como el humo del tabaco o sobre cia como desencadenantes de los episodios de exa-
todo del cigarrillo, el humo de la combustión de cerbación, aunque se ha comprobado que hay

Parte XII. Aparato respiratorio 979


pacientes atópicos con exacerbaciones producidas por y factores ambientales. Los factores genéticos con-
la leche y lacticinios, huevos, naranja, tomate, fresa, sisten en la presencia de 2 o más genes de baja
mariscos y pescados. penetrancia y los factores ambientales, que favorecen
• Medicamentos, como antibacterianos (sobre todo
la aparición, o que son necesarios para la expresión clí-
penicilinas, sulfamidados y cefalosporinas), ácido
nica (fenotipo). En la herencia genética compleja hay
acetilsalicílico, antiinflamatorios no esteroideos
(AINE), o contrastes yodados para estudios varias tipos, en el AB se consideran que intervienen dos
imagenológicos. de ellos: ya sea la herencia poligénica (la más aceptada,
en que existen dos o más genes favorecedores del AB
Los factores no inmunológicos (en asma atópica y en un mismo individuo) o la heterogeneidad genética (en
en asma no atópica) constituyen una amplia lista de sus- que existen diversos grupos de genes iguales en diver-
tancias, muchas de ellas resultantes de la vida moderna. sos grupos de individuos). Cualquiera que sea el tipo de
Los citados con más frecuencia son: herencia genética compleja los factores ambientales
• Agentes físicos: irritantes, debido al tabaquismo acti-
deben estar presentes para que se produzca AB.
vo o pasivo, kerosene, petróleo, gasolina y otras ema-
En la genética del asma bronquial se ha planteado
naciones producidas por la combustión de derivados
la intervención de distintos genes presentes en diversos
de la biomasa, fabricaciones, pinturas y otros olores.
Parece que juega una importante función el humo u cromosomas:
olor resultante de la combustión de las grasas utiliza- • Cromosoma 5: gen promotor de la producción de IL-
das para cocinar alimentos. También dentro de los 5 por los LTH2 activados y el gene de los receptores
agentes físicos se consideran los cambios meteoro- beta 2 adrenérgicos del músculo bronquial.
lógicos y la neblina, así como las temperaturas extre- • Cromosoma 6: gene promotor de la expresión del sis-
mas, sobre todo el frío. tema de histocompatibilidad mayor (HCM), que en
• Infecciones principalmente virales, sobre todo en ni- el humano corresponde al sistema HLA de la super-
ños menores de 5 años de edad, aunque también hay ficie del macrófago. Este sistema presenta las frac-
quienes aceptan las producidas por Chlamydias o por ciones del alergeno incorporado por el macrófago o
Mycoplasmas pneumoniae. las células dendríticas del pulmón al LTH2 que los
• Ejercicios físicos. reciben por los receptores de alergenos.
• Las emociones fuertes, como ansiedad, miedo, de- • Cromosoma 7: gene de las cadenas beta de los re-
presión y la risa o el llanto. ceptores de alergenos en los LTH2, al cual los frag-
• En los adolescentes que ya han presentado la
mentos de alergenos son ofrecidos por el sistema HLA
menarquia, pueden desencadenarse episodios en los
de los macrófagos o de las células dendríticas del
días antes o durante la menstruación.
pulmón.
La herencia en el asma bronquial • Cromosoma 14: gene de las cadenas alfa de los

Desde hace años se planteaba que en muchos receptores de alergenos en los LTH2 ofrecidos por
asmáticos la herencia jugaba una conducta importante. el sistema HLA de los macrófagos o las células
Con posterioridad se consideraba que cuando ambos dendríticas del pulmón.
• Cromosoma 11: gene del receptor IgE en los
padres habían padecido o padecían de AB, la posibilidad
de presentarla el hijo era de alrededor del 50 % y si uno mastocitos.
• Otros cromosomas que pudieran intervenir en el AB,
solo de los progenitores estaba implicado, la posibilidad
era menor, predominando la madre. como el 20 en que existe el gene ADAM-33, y que
En los últimos 20 años el estudio de la herencia ha últimamente, se le da gran importancia, por algunos,
entrado en una nueva fase con investigaciones bien com- en la inflamación crónica y en la HRB.
plementadas, que la ratifican como de primer orden en
el AB y sobre todo en lo relativo a la atopia. Hay que tener en cuenta que existen dificultades
Al considerar la herencia en el AB hay que tener en el estudio de la genética del AB debido a varias
en cuenta que es una herencia genética compleja, que causas:
no sigue las leyes de Mendel y no se manifiesta como • No hay una definición o concepto de AB aceptados
producida por un solo gen. En la herencia genética por todos y esto influye que se incluyan en las inves-
compleja hay que tener en cuenta factores genéticos tigaciones pacientes que no presenten AB.

980 Tomo III


• Las manifestaciones clínicas son variables y no ex- descritos clásicamente en esputos de asmáticos adul-
clusivas de AB, pueden presentarlas otras entidades. tos) y otros contenidos, como los cristales de Charcot
• Muchas investigaciones no tienen una misma meto- Leyden que se derivan de los eosinófilos alterados.
dología y presentan algunas inconsistencias o sesgos, Los tapones producen obstrucciones en bronquios
por lo cual no se pueden incluir en los meta-análisis finos (causantes de atelectasias pequeñas o
para obtener mayores conclusiones. microatelectasias), en bronquios medianos o en bron-
quios gruesos (que pueden producir atelectasias de
Lo cierto es que la herencia en AB es aceptada un segmento, de un lóbulo o hasta todo un pulmón),
por casi todos los autores y que su estudio juega una causando cortocir-cuitos venoarteriales y alteracio-
función importante para un futuro. El conocer a un indi- nes de la ventilación/perfusión, demostradas por di-
viduo en riesgo (portadores de genes que intervengan versas pruebas funcionales respiratorias en asmáticos.
en el AB) permite: • Infiltrados inflamatorios en la pared, constituidos por
• Tomar medidas efectivas precoces para evitar fac-
neutrófilos (que predominan en casos fatales de epi-
tores ambientales capaces de favorecer o producir sodios agudos de comienzo y evolución súbita o casi
la afección en dichas personas. súbita) o por eosinófilos (lo mas frecuente); además
• Efectuar una terapéutica más correcta según la alte-
se encuentran linfocitos T sobre todo del tipo H2,
ración de los genes implicados en el estudio de distin-
mastocitos degranulados y otras células.
tos individuos asmáticos.
• Edema de la pared bronquial.
• Se podrían utilizar técnicas de terapia génica introdu-
• Hipertrofia de las fibras musculares bronquiales (pa-
ciendo genes normales en sus cromosomas como se
cientes crónicos severos).
está tratando de hacer en algunas afecciones como
• Lesiones epiteliales: denudaciones de la mucosa,
la fibrosis quística, pero esto parece lejos de lograrse
microulceraciones o zonas de fibrosis en donde se
por ahora.
produjeron aquellas, y que al ser numerosas
ANATOMÍA PATOLÓGICA DEL ASMA (asmáticos severos) pueden cooperar a producir la
llamada remodelación, con alteraciones funcionales
BRONQUIAL
o anatómicas, descritas como responsables del asma
En niños asmáticos hay dificultades en la descrip-
persistente severa con limitación mantenida del flujo
ción de los hallazgos patológicos por la baja letalidad del
aéreo.También hay cilios denudados y en casos se-
AB en los primeros años en países desarrollados y las
consideraciones éticas para realizar biopsias bronquia- veros fusión, de varios de ellos produciendo
les por broncofibroscopia o lavados bronquioalveolares “macrocilios” que no son funcionales y pueden dar
(BAL) de rutina. Es por esto que los hallazgos que se lugar a un síndrome de disquinesia ciliar secundaria.
describen han sido obtenidos de niños mayores o ado- Hay engrosamiento de la membrana basal y hasta
lescentes fallecidos por AB o sometidos a BAL y sobre depósito de colágeno (sobre todo tipo III), signo de
todo de adultos fallecidos, sometidos a biopsias bron- cronicidad. Se han descrito fibrosis por debajo de
quiales o BAL. aquélla, que contribuye a las manifestaciones anor-
A la observación macroscópica: los pulmones se males persistentes conocidas como remodelación.
presentan hiperinsuflados o con áreas de hiperinflación
y áreas de actelectasias bilaterales y de extensión varia-
Parece ser que los hallazgos fundamentales en
bles, pero no simétricas, con secreciones mucosas, es-
casos de fallecidos, son una infiltración sobre todo de
pesas, intrabroquiales.
eosinófilos o neutrófilos en las vías aéreas y en el in-
A la microscopia se citan:
• Broncospasmo y/o engrosamiento de las fibras mus-
tersticio pulmonar (espacio que media entre el lecho
culares lisas bronquiales; para algunos es un hallazgo vascular y la mucosa bronquial), infiltración de leucocitos
raro. (TH2 sobre todo), mastocitos, neutrófilos, basófilos y
• Tapones de mucus en la luz bronquial, en donde se otras células; engrosamiento de la membrana basal y
encuentran detritus, células inflamatorias, células de zonas denudadas de la mucosa bronquial (sin cilios ni
la mucosa bronquial denudadas que aparecen aisla- células), con congestión de los vasos de la pared y tapo-
das o agrupadas (los llamados cuerpos de Creola, nes en la luz bronquial.

Parte XII. Aparato respiratorio 981


MANIFESTACIONES CLÍNICAS • Las manifestaciones generales pueden producir el
El asma bronquial es una afección inflamatoria cró- síndrome fatiga-tensión en que el niño está asténico,
nica inespecífica, en la que predominan, habitualmente, irritable o hiperactivo. Otras veces, hay familiares
eosinófilos en las vías aéreas, sobre todo en los bron- observadores que relatan “cambios de carácter” que
quios y en los bronquiolos terminales. Presenta episo- no pueden definir o anorexia.
dios de exacerbaciones agudas a repetición, también Se considera por muchos, que más del 70 % de los
niños presentan una o varias de las manifestaciones
llamados crisis, en que hay un aumento de la inflama-
prodrómicas, y que será útil reconocerlas para insti-
ción y la hiperreactividad bronquial con una mayor difi- tuir un tratamiento precoz, sobre todo cuando no se
cultad al flujo aéreo a través de los bronquios. Sus tienen flujómetros (medidores de flujo espiratorio
síntomas y signos dependerán del grado de obstrucción, máximo o FEM) o no pueden utilizarse por tener el
que se traduce por un aumento de la resistencia en las niño menos de 5 o 6 años de edad.
vías aéreas (Raw) en proporción a la severidad de la • Las manifestaciones clínicas de las crisis o episodios
obstrucción. agudos de exacerbación se manifiestan por tos seca,
Entre los episodios de exacerbación los pacientes que se presenta a cualquier hora del día, pero que au-
suelen estar asintomáticos, aunque en asmáticos mode- menta o se presenta inicialmente durante la noche, en
rados no bien tratados, y sobre todo en los severos, hay la madrugada, o bien al levantarse y a veces se acom-
alteraciones en la función pulmonar que son muchas paña de intranquilidad durante el sueño o el niño se
veces reversibles o parcialmente reversibles con despierta. La tos puede ser la única manifestación de
una exacerbación o crisis, acompañada de un descen-
salbutamol (albuterol) u otros broncodilatadores beta 2
so del FEM por debajo del 20 % de las cifras conside-
adrenérgicos de acción rápida y/o bromuro de ipratropio.
radas normales, según distintas tablas, para su talla y
En las ocasiones en que las pruebas de la función sexo o por debajo del 20 % de la cifra mejor alcanza-
pulmonar no sean reversibles o que la reversibilidad sea da en monitoreos previos, entre los episodios, y por 2 a
escasa se necesitará utilizar esteroides; por ejemplo, 3 veces al día durante una, o mejor, dos semanas (nos
prednisona por vía bucal durante 10 a 14 días y repetir referimos a pacientes que están entrenados en el uso
las pruebas posteriormente. de medidores de flujo entre los episodios; en aquellos
Los episodios agudos de exacerbación en niños, no entrenados carecen de valor las determinaciones y
con frecuencia, son precedidos de manifestaciones hasta pueden ser contradictorias o erróneas). La tos,
prodrómicas, negadas por algunos que plantean que en las exacerbaciones, generalmente se acompaña de
muchas de ellas son ya indicadoras de aumento de la disnea, opresión torácica o ambas, polipnea y tiraje
obstrucción de las vías aéreas; es decir, de una crisis. (variables según el grado de obstrucción),
hipersonoridad a la percusión bilateral del tórax,
Los síntomas y signos prodrómicos se pueden ma-
sibilancias, al principio espiratorias y en episodios mo-
nifestar en el aparato respiratorio, los ojos, la lengua o
derados o severos inspiratorios y espiratorios a la aus-
algunas manifestaciones generales:
cultación; la espiración estará prolongada y el murmullo
• Las manifestaciones respiratorias prodrómicas son vesicular estará normal o disminuido, en mayor o me-
las más frecuentes y serán altas y/o bajas. Las altas nor intensidad, de acuerdo con el grado de obstrucción
se manifiestan por prurito nasal, estornudos, conges- al igual que otras manifestaciones que dependerán de
tión y/o secreción nasal habitualmente acuosa o ella como intranquilidad, utilización de músculos acce-
seromucosa, incolora o amarillenta (por aumento de sorios de la respiración, alteraciones del llanto o al ha-
eosinófilos). Las manifestaciones bajas estarán da- blar, sudación, intranquilidad o depresión del sensorio,
das por tos, que muchas veces ya es una manifesta- palidez o cianosis central comprobada al examen de la
ción del episodio agudo y no una manifestación región sublingual, pues el examen de las extremidades
prodrómica, al igual que la sensación de opresión de los dedos en busca de cianosis no tiene valor, ya
torácica o de disnea. que esta puede aparecer cuando los dedos están fríos
o simularse una cianosis cuando la luz no es la natural
• Las manifestaciones oculares pueden ser prurito ocu-
y se utiliza la llamada entre nosotros “luz fría”, “luz
lar, enrojecimiento y secreción ocular acuosa o re-
neón” o fluorescente.
borde oscuro periocular.
• Las manifestaciones linguales están dadas por la len- Nota: en Tratamiento, se encuentran las manifestaciones clínicas cla-
gua geográfica, que precede a la exacerbación y des- sificadas según la severidad de los episodios agudos o de exacerba-
aparece cuando se termina la crisis. ción del AB.

982 Tomo III


Además de las manifestaciones clínicas y su inten- muchos todas estas afecciones sumadas (ex-
sidad hay que tener en cuenta en los episodios de exa- ceptuando la bronquiolitis y las neumonías en
cerbación, otros tres aspectos: niños pequeños) son del 10 al 20 % de las en-
• Características que presentarán los episodios: tidades del SOBD, del cual el AB es la prime-
− Tendrán una duración e intensidad variable de ra causa (más 70 al 60 % de todas las causas
un asmático a otro y en un mismo asmático, del SOBD).
aunque esto puede ser modificado con el tra- • Las manifestaciones clínicas de los episodios se acom-
tamiento. pañarán de una alteración o de una mayor disminu-
− Se producen muchas veces en una misma épo- ción de la función pulmonar si se había encontrado
ca del año. alterada previamente, entre los episodios. En la prác-
- Pueden presentar variaciones circadianas en la tica se utilizará la medición del flujo espiratorio máxi-
respuesta de algunos medicamentos (teofilinas mo (FEM en español, o PEFR o PEF, en inglés) por
o esteroides). medio de flujómetros para uso domiciliario, en la es-
− Aparecen o empeoran por las noches. cuela, en el trabajo, etc., por el mismo paciente, con
− Los episodios aparecen o empeoran: o sin ayuda de los familia-res.También pueden ser
Con infecciones virales respiratorias, sobre todo utilizados en hospitales o consultorios, equipos de
en niños menores de 5 años de edad. espirometría que realizan diversas mediciones de las
Con cambios meteorológicos. cuales la más aceptada es el volumen espiratorio
Contacto con alergenos, sobre todo aeroaler- forzado en un segundo (VEF-1 en español o FEV-1
genos. en inglés). Para muchos autores, la utilización de los
Contacto con irritantes domiciliarios o extradomi- mediadores de flujo o flujómetros es esencial para el
ciliarios. seguimiento de los episodios de exacerbación o cri-
sis, aunque esto dependerá de las facilidades para
Con ejercicios.
su adquisición sobre todo en los países en desarrollo,
Con emociones intensas.
la edad del paciente (generalmente se utilizan des-
En adolescentes que han tenido la menarquia,
pués de los 5 a 6 años de edad) y la cooperación de
antes o coincidiendo con la menstruación.
los familiares y el paciente. La flujometría nunca de-
berá sustituir a la espirometría.
Los episodios pueden aparecer minutos después de
los estímulos (respuesta precoz), horas después (res-
En los episodios agudos de exacerbación, el pa-
puesta tardía, más severa y duradera) o mixtas (res-
ciente podrá presentar manifestaciones clínicas en ex-
puesta precoz y tardía a la vez). Alrededor del 70 %
tremo graves y que rápidamente se deben diagnosticar
de los niños presentan respuestas tardías o mixtas y comenzar a tratar antes de su traslado, lo más urgente
(más severas). posible a un hospital, en especial a la unidad de cuidados
• Ausencia de otras afecciones que forman parte del
intensivos (UCI). Las manifestaciones serán: polipnea
síndrome de obstrucción bronquial difusa (SOBD), severa, tiraje generalizado severo, movimientos
que pueden presentar manifestaciones clínicas se- toracoabdominales paradójicos, para algunos autores la
mejantes a la del asma: desaparición de la matidez cardíaca en niños pequeños
− Infecciones respiratorias agudas: bronquiolitis del es importante, disminución marcada del murmullo
niño menor, algunas neumonías sobre todo virales vesicular o ausencia casi total de este, pocas o ninguna
(del 10 al 20 % de las causas del SOBD). sibilancias con espiración prolongada, taquicardia extre-
− Otras afecciones: fibrosis quística, alteraciones ma (o peor, bradicardia), irritabilidad o sensorio deprimi-
orgánicas o funcionales del esófago (sobre todo do con poca o ninguna respuesta a los estímulos y cianosis
reflujo gastroesofágico), alteraciones congéni- (esta puede faltar cuando hay anemia severa).
tas o adquiridas del aparato respiratorio, cuer- Hay pacientes, poco frecuentes, llamados por no-
pos extraños en vías aéreas, alteraciones sotros “lábiles”, que presentan, en pocas horas, mani-
cardiovasculares congénitas o adquiridas festaciones graves. Los “lábiles”, entre estos cuadros,
(miocarditis), síndrome de disquinesia ciliar, son normales tanto por la ausencia de manifestaciones
displasia broncopulmonar, tuberculosis miliar, clínicas, como por las PFR. Deben ser conocidos por
u otras afecciones menos frecuentes. Para sus familiares, por la APS y por el hospital.

Parte XII. Aparato respiratorio 983


DIAGNÓSTICO El segundo grupo presentará HRB, las PFR se-
Se basará fundamentalmente en 4 aspectos: rán anormales (compatibles con obstrucción
• Historia clínica completa en busca de datos compati- bronquial) y las pruebas cutáneas positivas. Ge-
bles con AB (y que es la base del diagnóstico). neralmente serán asmáticos atópicos.
• Investigaciones que ayudarán al diagnóstico (pero no
son más importantes ni sustitutos, en importancia, a Los restantes niños que no presentaron sibilancias
las manifestaciones clínicas). antes de los 5 años de edad (4 ó 3 de 5) no serán
• Descartar otras afecciones que pueden presentar asmáticos, excepto si existen factores ambientales muy
manifestaciones clínicas semejantes al AB, que for- adversos.
man parte del SOBD. Los niños de 5 años o más, generalmente no pre-
• Respuesta al tratamiento. sentarán AB, excepto cuando hay factores ambientales
favorecedores. Se demuestran de nuevo que en el asma
Antes de comenzar a describir cada epígrafe, hay intervienen factores genéticos y factores ambientales o
que llamar la atención que el diagnóstico del asma bron- exógenos.
quial no siempre es fácil, sobre todo en pacientes de Una vez tenido en cuenta lo anterior, en el diagnós-
menos de 5 años de edad. tico de AB debemos tener en cuenta varios aspectos:
Se ha descrito que 1 a 2 pacientes de cada 5 niños, • Historia clínica (HCl) completa. En todo paciente en
con menos de 5 años de edad, pueden presentar uno o que se sospeche un AB el paso más importante será
más cuadros de sibilancias en estas edades. realizar una HCl completa, sobre todo en los prime-
Estos cuadros tienen en común: ros años de la vida cuando no se cuenta con investi-
• Una disminución de la función pulmonar en los pri- gaciones para demostrar la existencia de obstrucción
meros meses de la vida. bronquial bilateral, generalmente reversible con un
• Generalmente presentan uno o más factores:
tratamiento con salbutamol u otro broncodilatador de
APF de familiares con sibilancias, sobre todo en miem- acción rápida.
La HCl tendrá en cuenta la anamnesis y el examen
bros de la primera generación que les preceden, en
físico.
particular la madre.
− Anamnesis. En la historia de la enfermedad ac-
Tabaquismo familiar durante el embarazo, sobre
tual al igual que en toda HCl se tendrá en cuenta
todo una madre fumadora.
una descripción completa de las manifestacio-
Predomina el sexo masculino.
nes clínicas desde su comienzo hasta que nos
Presentan, en el medio familiar, condiciones adver-
llega el niño, siguiendo un orden cronológico
sas socioculturales.
(cronopatograma). También se incluirá una se-
Han sido pretérminos.
rie de preguntas sobre:
Han necesitado recibir oxígeno, sin o, más impor-
Crisis recurrentes de “falta de aire” y/o de sibilancias
tante, con intubación al nacer o poco días después.
o “ruidos musicales agudos” en el tórax.
Cuadros de sonidos “musicales”, sibilancias o tos
De estos pacientes con cuadros de sibilancias en
después del llanto, la risa o de ejercicios. A ve-
los primeros años (y que antes citamos son 1 ó 2 de
ces hay niños preescolares que no participan en
cada 5 niños):
las mismas actividades de sus compañeritos o
− 2/3 de ellos presentan las sibilancias desencade-
las comienzan y abandonan al poco tiempo, “a
nadas por IRA, sobre todo virales.
descansar”.
− 1/3 presentan ellos o en su familia, síntomas o
Cuadros de tos crónica o recurrente, sobre todo
signos que pueden indicar atopia.
nocturnos, que se acompañan de sibilancias
− A los 6 años de edad:
(“ruidos musicales”) o no.
El primer grupo no presentará HRB, las pruebas
Los “catarros” o manifestaciones respiratorias
funcionales respiratorias (PFR) serán normales
duran más de lo habitual, más de 14 días, con
y las pruebas cutáneas negativas. Generalmen-
“pecho húmedo” o “pechuguera” como decimos
te no serán asmáticos atópicos.
en nuestro país.

984 Tomo III


Se hará hincapié sobre cuadros de tos y/o de respirar y aspecto del tórax. Podrá llegar con
sibilancias que ocurren o empeoran con infeccio- una exacerbación y entonces presentará las ma-
nes virales respiratorias, polvo doméstico (ácaros); nifestaciones clínicas que le corresponden ya
cambios meteorológicos, exposición al frío y me- descritas (Manifestaciones clínicas).
nos frecuente al calor; irritantes sobre todo humo En asmáticos severos entre los episodios de agu-
del cigarrillo o del tabaco; contactos con animales dización pueden existir algunas manifestaciones
domésticos (mascotas); ejercicio; emociones u como tos, respiración ruda y/o pectus excavatum
otros posibles factores desencade-nantes. A ve- o sobre todo pectus carinatus. Más raramente
ces, hay que pedir a los familiares y/o al paciente se podrá encontrar un reborde retraído en la parte
(según su edad) que con más tranquilidad en su inferior del tórax.
casa haga una lista y traiga anotados los posibles Al examen de la piel, además de las manifesta-
factores, para la próxima consulta. ciones en la cara (en búsqueda de pliegue de
Antecedentes patológicos personales: atopia, Dennie debajo del párpado inferior o dermatitis
tabaquismo (pasivo o activo), prematuridad o en las mejillas) se buscarán lesiones o huellas en
pretérmino, oxigenoterapia al nacer con los pliegues cutáneos de los brazos y piernas com-
intubación o no, cuadros de “bronconeumonías”, patibles con dermatitis atópica, eczema
medicamentos utilizados y su respuesta, sobre retroauricular, prúrigo o huellas de rascado.
todo si mejoran con broncodilatadores; afeccio- Son excepcionales los dedos hipocráticos y la
nes cutáneas, principalmente en los pliegues de cianosis, que se presentan más frecuentemente
flexión en brazos y piernas, mejillas o dermatitis
en afecciones cardiovasculares o respiratorias
seborreica en el cuero cabelludo.
crónicas no asmáticas
Síntomas y/o manifestaciones prodómicas a los
Al examen de la lengua puede encontrarse lengua
cuadros por los cuales consulta, ya descritas an-
geográfica en los prodromos de una exacerbación
teriormente (manifestaciones clínicas).
• Investigaciones que ayudarán al diagnóstico, que
Alimentación: lactancia materna solamente
siempre se basará en la clínica.
(tiempo), ablactación, problemas con alimentos.
− Pruebas funcionales respiratorias (PFR). El diag-
Inmunizaciones: el niño debe tener al día el es-
nóstico de AB, según las facilidades, colabora-
quema de vacunaciones establecido por el
ción y edad del paciente, deberá ser ayudado
MINSAP.
por la presencia de una obstrucción bronquial
Antecedentes patológicos familiares: de atopia,
reversible. Las más utilizadas y fáciles de reali-
tabaquismo activo, asma sobre todo en familia-
zar son la espirometría forzada y la determi-
res de primer orden y en particular de la madre.
nación del flujo espiratorio máximo (FEM).
Hay que aclarar que la dermatitis atópica, la rinitis
La espirometría forzada, generalmente se pue-
alérgica y/o los antecedentes de asma familiar o
de realizar en niños mayores de 6 años de edad
de otras manifestaciones atópicas están frecuen-
y con poca frecuencia antes. En algunos países
temente presentes, pero no son indicadores ab-
desarrollados se pueden realizar estas pruebas
solutos que el niño padezca de AB.
a cualquier edad, incluyendo en recién nacidos,
− Examen físico (EF): será completo, pero con más
en algunos servicios de referencia o de investi-
hincapié sobre el sistema respiratorio en sus seg-
gación con equipos especiales; pero difícilmente
mentos superior e inferior (tórax) y sobre la piel.
se tendrán los recursos en países en desarrollo
El EF puede ser totalmente negativo en el mo-
mento de realizar la HCl o al examen del seg- para ser realizadas de manera habitual. La
mento superior del sistema respiratorio presentar espirometría forzada es una prueba sencilla, eco-
evidencias de rinitis (obstrucción, rinorrea, pru- nómica, la mayor parte de las veces confiable y
rito nasal), cornetes edematosos pálidos o no invasiva, pero necesita de la colaboración del
violáceos, pólipos nasales (raros en niños con niño. Según diversas reuniones de consenso y
AB y cuya presencia nos hará investigar fibrosis paneles de expertos se deben tener en cuenta el
quística). Al EF del tórax, aunque puede ser VEF-1 (volumen espiratorio forzado en 1 segun-
totalmente negativo entre los episodios agudos, do o FEV-1 en inglés), la relación VEF-1/CVF
se determinará la frecuencia respiratoria, forma (esta última es la capacidad vital forzada o FVC,

Parte XII. Aparato respiratorio 985


en inglés), el FEF25-75 (flujo espiratorio forza- Se sospechará AB si hay:
do entre el 25 y 75 % de la curva, o FEF25-75 Mejoría del FEM, más del 15 % después de 15 a
en inglés). Según lo aceptado en la espirometría 20 min de un aerosol de salbutamol.
forzada y siempre basados en la clínica, se pue- Disminución del 15% o más del FEM después
de sospechar el diagnóstico de AB cuando exis- de trotar, o con otro ejercicio por 6 min y midién-
ten 2 o más de los siguientes criterios: dola varios minutos después, sin que el niño esté
VEF-1 menor del 80 % de lo calculado como utilizando tratamiento.
normal en distintas tablas. Para otros autores, Variabilidad del FEM entre una prueba realizada
una cifra menor del 90 % en la mañana y otra realizada después de 12 h,
La relación VEF-1/CVF menor del 85 % de lo de más del 20 %, cuando el paciente usa
normal. broncodilatadores de acción prolongada o del
El FEF25-75 menor del 45 % de lo normal. 10% en pacientes que no usan broncodilatadores.
Existe respuesta a un beta-agonista de acción La variabilidad del FEM (V-FEM) se calcula se-
rápida (casi siempre utilizándose el salbutamol gún la fórmula:
en nebulizaciones) cuando hay:
FEM máximo en pruebas de
Mejoría del VEF-1 mayor del 15 %. 24 h – FEM mínimo en 24 h x 100
Mejoría de VEF-1/CVF mayor del 20 % V-FEM =
Mejoría del FEF25-75 mayor del 40 % FEM máximo en las pruebas de 24 h

El criterio más aceptado para el diagnóstico es el La variabilidad del FEM también se utilizará en la
VEF-1. Algunos pacientes con AB ligera pueden clasificación, hoy aceptada por reuniones de con-
presentar las determinaciones normales. Se re- sensos internacionales del AB (asma leve inter-
comienda repetir estas pruebas cada 1 a 2 años, mitente, asma leve persistente, asma moderada
después de estabilizado el paciente con un trata- persistente y asma severa persistente), que se basa
miento adecuado. En algunos asmáticos, cuando en gran parte en el uso de flujómetros. Esto pue-
existe una obstrucción inflamatoria crónica seve- de, en países en desarrollo, traer problemas futu-
ra y en los que las pruebas espirométricas ante- ros por dificultades en su adquisición, aunque la
riores son poco reveladoras, se pueden utilizar citaremos al hablar del tratamiento por haber sido
esteroides durante 2 semanas y repetir las prue- aprobada por consenso en la Comisión Cubana
bas días después. Se indicará prednisona a una de Asma Bronquial del Viceministerio de Higiene
dosis única de 2 mg/kg/dosis (dosis máxima en y Epidemiología del MINSAP. Hay que recono-
niños 40 mg/24 h), por vía bucal, durante 14 días cer que introduce un signo objetivo, medible, al
siempre que no haya contraindicaciones de su uso clasificar la severidad del AB de lo cual carecían
como una tuberculosis sin tratamiento adecuado, las otras clasificaciones anteriores basadas sola-
contacto con varicelas en las últimas semanas o mente en las manifestaciones clínicas.
infección herpética aguda. La espirometría for- Existen muchos tipos de medidores del FEM,
zada puede utilizarse induciendo alteraciones con pero la técnica es similar:
histamina, metacolina o ejercicios previos. Paciente de pie.
El FEM no es un sustituto de la espirometría for- Se toma el flujómetro con el marcador al inicio
zada, pero puede utilizarse en la práctica con el uso de la escala. Se realiza una inspiración máxima
de flujómetros individuales. Necesitan de la co- que se mantendrá (tórax distendido al máximo).
operación del paciente utilizándose (después de los Se introduce la boquilla del flujómetro en la boca
6 años de edad) en la casa, escuela, trabajo, etc. del paciente, rodeándola con los labios y no intro-
Para muchos autores es fundamental en el segui- duciendo la lengua en el orificio de la boquilla.
miento del AB y para determinar precozmente la Se hará una espiración brusca y total, lo más
aparición de un episodio de exacerbación o de AB rápida posible a través de la boquilla.
o su evolución con el tratamiento. Sin embargo, el Se retirará el flujómetro y se verá el medidor
paciente debe ser entrenado en su uso; durante 10 que indica L/min, que se anotará.
a 14 días se determinará el FEM 2 veces en 24h y Se repetirá la prueba 2 veces más, tomando la
entonces se escogerán las cifras mejores obteni- cifra mayor de las 3 pruebas que se comparará
das o se guiarán por tablas aceptadas según talla con la cifra en las tablas aceptadas o en las que
y sexo, como las de Warwick. traen los distintos flujómetros, anotándola junto

986 Tomo III


con la fecha y hora. La evaluación del FEM 2 a
3 veces al día, se realizará por 2 a 3 semanas,
para agregar a las manifestaciones clínicas, en
el diagnóstico y la conducta que se debe seguir.
Cuando el paciente no pueda lograr cifras supe-
riores del 80 % del FEM, según las tablas, se
podrán utilizar esteroides de la misma manera
que se recomendó al hablar de espirometría for-
zada, en pacientes severos.
Existen en algunos países desarrollados, por
ejemplo en el Reino Unido, medidores portátiles
que determinan la resistencia de las vías aéreas
(Raw) para utilizar tanto en consultas como en
el hogar y que se plantea pueden ser útiles en
pacientes menores de 5 años o de otras edades
que no pueden realizar, por alguna causa, el FEM
o la espirometría forzada. Parece que pudieran
ser útiles en un futuro, aunque quizás el costo
sea una limitante en su utilización generalizada.
• Otras investigaciones:
Radiografías de tórax. Ha habido un exceso de uti-
lización de las radiaciones en asmáticos. Entre los Fig. 76.3. Asma bronquial. Vista lateral.
episodios de exacerbación, solamente se indicarán
radiografías de tórax cuando se sospeche otra afec-
ción causante de la obstrucción de las vías aéreas, En los episodios de exacerbación ligeros o modera-
por no tener el paciente una evolución satisfactoria. dos, no son necesarias las radiografías de tórax. En
Hay quienes recomiendan realizarla al comenzar el los cuadros moderados que no evolucionan bien y en
tratamiento para comparación futura, aunque esta sea los severos hay quienes siempre recomiendan reali-
normal o pueda presentar el cuadro radiográfico pro- zar una radiografía simple de tórax, frontal y lateral,
pio de todas las afecciones que forman parte del sín- a distancia de telecardiograma (Figs.76.2 y 76.3).
drome de obstrucción bronquial difusa y bilateral. Los hallazgos más frecuentes de las radiografías rea-
lizadas durante las exacerbaciones en la vista frontal
son hiperaereación con aumento de la radiotrans-
parencia en ambos campos pulmonares y ensancha-
miento de los espacios intercostales, con protusión
del pulmón entre los espacios, esto último solo en los
cuadros muy severos de obstrucción bronquial. Los
hemidiafragmas estarán descendidos, estando el de-
recho por debajo del arco posterior de la 8va. costilla
derecha. Puede haber distensión de la cámara
gástrica, indicación de una polipnea más o menos in-
tensa; el área cardíaca estará normal o disminuida
(el llamado “corazón en gota”) con el arco de la arte-
ria pulmonar normal; a veces este aparece convexo
(signo de sospecha de hipertensión pulmonar más o
menos severa o de un edema pulmonar no
cardiogénico, complicación casi siempre iatrogénica
del asma bronquial); los hilios pueden estar aumenta-
dos. Se pueden encontrar pequeños moteados casi
siempre producidos por microatelectasias. También
se pudieran encontrar complicaciones como: atelec-
tasias segmentarias o lobares, excepcionalmente de
Fig. 76.2. Asma bronquial. Vista frontal. todo un pulmón por tapones mucosos, aire

Parte XII. Aparato respiratorio 987


extraalveolar (neumotórax, neumomediastino o el mal El uso de radiografías de senos paranasales no tiene
denominado “enfisema” subcutáneo), moteados valor en los primeros años de edad para el diagnósti-
radioopacos muchas veces mal diagnosticados como co de sinusitis. Cuando existe sinusitis maxilar, como
bronconeumonías, indistinguible de las microa- una complicación o que sea causa de una pobre
telectasias o compatibles con edema pulmonar no evolución de AB, puede presentarse opacidad total o
cardiogénico. En la vista lateral se puede comprobar aumento del grosor de la mucosa mayor de 4 mm
aumento del diámetro anteroposterior del tórax, con bilateral o unilateral. Nos parece excesivo y hasta
los hemidiafragmas descendidos y aplanados, rara- peligroso (radiaciones) utilizar la TAC en los
mente cóncavos hacia arriba. Hay aumento del aire asmáticos de manera rutinaria.
retroesternal. Un signo no patognomónico, pero que El reflujo gastroesofágico (RGE) como factor agra-
se puede presentar en el edema pulmonar no vante del AB no podrá ser descartado por el reflujo
cardiogénico complicante del AB es la observación comprobado a la esofagografía en niños menores de
de las cisuras interlobares por líquido en ellas o más 1 año de edad, sino por medio de radioisótopos como
frecuentemente las líneas de Kerley. el tecnesio radioactivo, que presentará signos de as-
Pruebas cutáneas a alergenos. No tienen valor rea- piración bronquial constatados en las primeras horas
lizarlas en niños menores de 4 años de edad según o a las 12 ó 24 h después de ingerida la leche con el
muchos autores y en mayores de esta edad se utiliza- radioisótopo.
rán para la evaluación de la reactividad a aeroalergenos En los últimos años existen una serie de trabajos que
no evitables (de los ácaros, de las cucarachas, hongos, determinan en sangre, saliva, expectoración u orina, di-
pólenes). Siempre hay que correlacionarlas con las ma- versas sustancias, pero son costosos y no se utilizan en
nifestaciones clínicas, pues una prueba positiva no ga- la práctica corriente. Entre ellos tenemos la determina-
rantiza que ese alergeno sea el responsable del AB. ción en sangre u orina de la proteína catiónica
Las pruebas cutáneas con alimentos son discutibles y eosinofílica, interleuquina 4, interleuquina 5, u otros me-
su utilidad es muchas veces negada. Las pruebas diadores químicos. Estas determinaciones se conside-
cutáneas pueden servir para comprobar la evolución ran como marcadores de inflamación; la mayoría de
de la inmunoterapia. los autores estiman que son un dato más para el diag-
Las pruebas de provocación con aeroalergenos, utili- nóstico de AB; la base del diagnóstico sigue siendo una
buena HCl y ayuda algo más por la determinación de
zando equipos especiales, pudieran ser más indicadoras,
las PFR cuando el niño tenga edad para cooperar.
pero tienen el peligro de respuestas tardías graves en
Óxido nítrico en el aire expirado (eNO), que es tam-
algunos niños por lo que se deben utilizar bajo indica-
bién un marcador de la respuesta inflamatoria, es con-
ciones precisas y vigilando las respuestas intensas,
siderado por algunos autores de gran importancia en
sobre todo las tardías.
el AB, pues además de estar aumentado en el asmáti-
IgE sérica total. Debido a otras afecciones, sobre
co, permite determinar la mejoría evolutiva de la afec-
todo el parasitismo intestinal por helmintos, que pue- ción y la reaparición del aumento del eNO en aquéllos
den producir IgE elevada, tienen relativo valor. Ade- asmáticos en remisiones prolongadas cuando vuelven
más, se ha descrito que entre el 10 y el 30 % de los a presentar los cuadros de exacerbaciones.
niños asmáticos tienen IgE total normales. Quizás ten- • Otras afecciones que pueden presentar manifesta-
ga más utilidad la determinación de las IgE específi- ciones clínicas semejantes al AB formando parte del
cas a distintos alergenos inhalantes, realizada in vitro, síndrome de obstrucción aguda difusa (SOBD).
sobre todo para medir factores de riesgo de sensibili- Como se ha descrito anteriormente, el AB se diag-
zación alérgica productora de AB o para valorar la nosticará principalmente basándose en las manifes-
efectividad de la inmunoterapia. taciones clínicas, ayudada por las PFR si es posible y
Hay que valorar las indicaciones de los hemogramas la demostración de obstrucción reversible, total o
en lo que respecta a la eosinofilia relativa, o el conteo parcial, en la mayoría de los pacientes, a los
absoluto de eosinófilos en sangre, pues desde hace broncodilatadores beta-2 adrenérgicos de acción cor-
años se ha planteado que pueden estar aumentados en ta. Teniendo en cuenta que una serie de afecciones
el AB atópica y en la no atópica, así como en otras presentan las mismas manifestaciones clínicas que
afecciones. Lo mismo se pudiera establecer para el el AB, al hacer el diagnóstico, en ocasiones, se ten-
conteo absoluto de eosinófilos en sangre, en la secre- drán que descartar. Estas entidades junto con el AB
ción nasal o en la expectoración. Hay quienes lo con- forman el llamado síndrome de obstrucción bronquial
sideran útil. bilateral o difusa (SOBD).

988 Tomo III


Este síndrome presenta manifestaciones clínicas, con algunas investigaciones de las que planteamos an-
generalmente en forma de episodios, semejantes al teriormente, positivas, que no se han podido realizar o
asma (tos, polipnea, tiraje, hipersonoridad torácica ser normales y que no presenta ningún cuadro de afec-
bilateral, espiración prolongada, sibilantes, etc.) y ra- ciones enunciadas de SOBD, que responde a un TTT,
diografías, parecidas a las descritas en los episodios sugiere que el paciente sea asmático. Pero no se debe
de exacerbación o crisis aguda de AB. olvidar que hay afecciones que forman parte del
Este SOBD, también denominado como “atrapamiento SOBD, que responden a un TTT de asma, o, a veces,
aéreo” pulmonar bilateral o síndrome sibilante, es más un asmático no responde a un TTT para la afección
frecuente en los primeros años y las infecciones virales (muchas de ellas por no ser cumplido en su casa). Por
juegan un papel importante. Comprende más de 20 ó esto es que la respuesta al TTT tiene un valor, im-
30 afecciones (y la lista aumenta cada vez más). portante pero relativo. Nunca se diagnosticará asma
Presenta 3 grupos:
en un niño, solamente por la respuesta positiva al TTT.
− Asma bronquial. La mayoría (60 a 70 % de to-
dos los SOBD) de los pacientes con cuadro de COMPLICACIONES
sibilancias a repetición, sobre todo después de
• Complicaciones de los episodios de exacerbación o
los primeros 3 años de edad, son asmáticos.
crisis aguda de AB.
− Bronquiolitis virales en niños pequeños, neumo-
• Cuadros severos con insuficiencia respiratoria y sus
nías intersticiales virales y hasta en neumonías
bacterianas por Chlamydias o Mycoplasma alteraciones severas de ventilación/perfusión, con
pneumonae y quizás otras bacterias (20 a 15 % hipoxia, con o sin hipercapnia y repercusión
de los SOBD). cardiovascular y que son las más temidas, pues pue-
− Un grupo de afecciones que constituyen, en con- den producir la muerte.
junto, alrededor del 20 al 15 % del SOBD; que • Aire extralveolar (neumotórax, neumomediastino o el
además de las manifestaciones asmatiformes aire subcutáneo, mal llamado “enfisema” subcutáneo)
presentan otras características. Se realizará el que puede ser de severidad variable, estimándose que
diagnóstico basándose en investigaciones diver- se produce en alrededor del 1 % de las exacerbaciones.
sas y según la sospecha clínica. Comprenden: • Atelectasias: microatelectasias (6 a 10 % de las cri-
Fibrosis quística sis) o atelectasias segmentarias, lobares y, más ra-
Cuerpos extraños en tráquea o bronquios ras, de todo un pulmón.
Síndrome de adducción de las cuerdas voca- • Infecciones secundarias: neumonías o bronconeu-
les (que también puede agravar un AB). monías bacterianas.
Malformaciones congénitas o alteraciones ad- • Edema pulmonar no cardiogénico, casi siempre
quiridas de las vías aéreas bajas (laringotra- iatrogénico por administración excesiva de hidratación
queomalacia, membranas laríngeas, estenosis, etc.). i.v., aunque está descrito que se puede producir por
Alteraciones anatómicas o funcionales del uso de broncodilatadores beta-2 adrenérgicos, sobre
esófago como la fístula traqueoesofágica en todo si el paciente presenta hipoxia.
H, reflujo gastroesofágico, anillos vasculares. • Deshidratación hipertónica
Alteraciones cardiovasculares congénitas • Reacciones adversas o reacciones tóxicas a los medi-
(como anillo vascular, endomiocardiopatías
camentos, en particular con las teofilinas y que se ca-
primarias) o adquiridas (miocarditis).
racterizan por intranquilidad o irritabilidad, insomnio,
Bronquiolitis obliterante.
taquicardia, poliuria, anorexia, náuseas y vómitos; pro-
Adenopatías no tuberculosas o tumoraciones
ducción o exacerbación de un reflujo gastroesofágico
mediastinales (como linfomas) con compresión
previo. Las manifestaciones de intoxicación más fre-
de las vías aéreas bajas o del nervio recurrente.
cuentes son vómitos repetidos, hematemesis, cefaleas,
Displasia broncopulmonar.
taquiarritmias, convulsiones, coma y hasta muerte. Han
Síndrome de disquinesia ciliar, primaria o se-
sido invocadas por aumento de la concentración reco-
cundaria.
Tuberculosis intratorácica (adenopatías mendada de teofilina en suero, aunque se han descrito
mediastinales o granulia tuberculosa por en algunos niños con cifras normales de 5 a 15 μg/mL.
ejemplo) Los supositorios son los que más fácilmente la produ-
• Respuesta favorable al tratamiento (TTT). Un niño cen, por lo cual en algunos países se ha prohibido su uso
con manifestaciones clínicas compatibles con asma, y en las reuniones de consenso internacionales no se

Parte XII. Aparato respiratorio 989


recomiendan. Con respecto a los broncodilatadores en un grupo de ellos puede reaparecer el AB
beta-2 adrenérgicos de acción corta se han descrito varias décadas después de desaparecida.
efectos indeseables como taquicardia, palpitaciones, − 25 % se mantendrá asintomático la mayor parte
irritabilidad, temblor en las manos. Como manifesta- de la vida o teniendo cuadros más esporádicos
ciones tóxicas del uso de beta-2 adrenérgicos se han en ocasión de ponerse en contacto con factores
descrito edema pulmonar no cardiogénico (sobre todo desencadenantes.
cuando hay hipoxia y no se ha administrado oxígeno − 24 % tendrá que mantener un tratamiento más o
previamente durante 15 a 20 min), trastornos menos intenso, por tiempo prolongado.
cardiovasculares severos como taquiarritmias y hasta − Menos del 1 % presentará una evolución desfa-
la muerte. vorable, que puede hasta ser mortal, debido en
• Complicaciones a largo plazo en el AB. Se han des- gran parte al no cumplimiento adecuado del tra-
crito fundamentalmente: tamiento y lesiones irreversibles bronco-
− Retraso del crecimiento (pacientes severos). pulmonares.
− Trastornos de la personalidad (dependencia, mala
adaptación social, mala autoimagen, neurosis o Se plantea, por muchos autores, que los factores
sicosis ). más importantes para predecir la continuación del asma
− Baja escolaridad. del niño hacia la adultez son:
− Deformidades torácicas en pacientes severos − Edad temprana de comienzo.
(pectus excavatum, pectus carinatus, depre- − Sensibilización a ácaros del polvo de la casa.
sión en la zona inferior del tórax en forma de − Función pulmonar reducida.
surco horizontal). − Presencia de HRB en la niñez que no responde
− Con el uso de corticosteroides prolongados, por a las medidas terapéuticas.
vía bucal, por más de 2 a 3 semanas: las mismas
complicaciones descritas en otras afecciones en Aunque hay grupos de pacientes que evolucionan sa-
que se utilizan de manera prolongada. Por el tisfactoriamente a pesar de contactos tempranos con facto-
uso de esteroides por vía inhalante, se han des- res causales, se tratan de grupos de pacientes con una serie
crito las mismas alteraciones que por vía bucal, de condiciones presentes y para la mayoría de los autores, no
sobre todo con dosis elevadas diarias o de más está probado que el contacto precoz con alergenos induce
de 1 mg/24 h con beclometasona o budesonida tolerancia a no padecer de asma posteriormente
(o con dosis bioequivalentes de otros esteroides). Asmáticos de difícil manejo. Dependerán de va-
Siempre con su uso se vigilará el crecimiento rios factores:
del niño aunque hay que valorar la relación efectos • Por parte del paciente:
beneficiosos/efectos adversos/costo en AB. Con − Hospitalizaciones repetidas y bien justificadas.
dosis menores, las habituales, son muy raras. − Múltiples visitas a los departamentos de ur-
gencia.
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
− Ingreso en UCI en los últimos 12 meses, sobre
Dependerá de un diagnóstico temprano y de un tra- todo por insuficiencia respiratoria tipo II (con
tamiento precoz, adecuado e individualizado que estará hipoxia e hipercapnia).
en gran parte relacionado con el conocimiento y cumpli- − Incumplimiento del tratamiento, parcial o total-
miento del tratamiento por parte de los familiares y del mente.
paciente (cuando este tenga edad suficiente para ello). − Casos pocos frecuentes de “asmáticos lábiles”
Esto es lo que se conoce como automanejo o mejor, que presentan una evolución rápida a episodios
comanejo (pues es en cooperación con el equipo médi- severos separados entre sí por períodos de tiem-
co). Hay pacientes asmáticos moderados persistentes o po asintomáticos (por clínica y PFR).
hasta ligeros persistentes que han presentado alteracio- • Factores debidos a la falta de educación apropiada a
nes funcionales y/o orgánicas broncopulmonaces irrever- los familiares y/o del paciente o por:
sibles (remodelación) tan tempranas como 2 años después − No percibir adecuadamente la severidad del epi-
de comenzada el AB y no ser tratada. sodio agudo.
Existen publicaciones planteando, como prome- − Fracaso en detectar una respuesta clínica pobre
dio, que: al tratamiento.
− 50 % de los asmáticos con un tratamiento ade- • Factores sociales:
cuado en tiempo y forma, las manifestaciones − Familias con deficiencias en cumplir el tratamien-
clínicas pueden desaparecer por años, aunque to entre episodios de exacerbación o intercrisis.

990 Tomo III


Familias “disfuncionales”.
− Tratamiento preventivo. Se realiza en indivi-
Problemas sicológicos de la familia y/o del pa-
− duos predispuestos, para evitar la sensibilización.
ciente, primarios o secundarios al asma. Cada día, con la mayor comprensión del AB en con-
• Factores por falta de acceso al cuidado médico por:
junto, sobre todo en lo que respecta a la herencia y
− Domicilio alejado del lugar en que se prestan ser-
otros factores que intervienen en la inflamación cró-
vicios médicos.
− Falta de acceso a un tratamiento intercrisis, por
nica inespecífica del AB, considerada como la altera-
causas económicas o no. ción más importante de esta afección, tiene mayor
• Factores por parte del equipo médico por: peso este tipo de tratamiento. Aunque podemos decir
− Preparación inadecuada o incoordinaciones en que aunque comenzó en los últimos años, en el futuro
el equipo médico. tendrá un papel fundamental el tratamiento preventi-
− No dedicar suficiente tiempo a la atención del vo. Existen pruebas, más o menos recientes, que el
paciente o a sus familiares. feto se puede sensibilizar intraútero, pero en estos
− Mala salud del médico o cambios frecuentes en momentos la prevención está dirigida, sobre todo, a la
el equipo médico. vida extrauterina, en aquellos que pertenecen a fami-
• Factores étnicos:
lias con antecedentes atópicos o alérgicos, que se
− Los inmigrantes y los de raza negra tienen el
doble o triple de mortalidad (según publicacio- considera como el factor predisponente más impor-
nes de algunos países) que los ciudadanos naci- tante en el AB. Ya se plantearon al describir la
dos en ellos o de raza blanca. Parece que esto patogenia del AB los posibles factores predisponentes,
se relaciona más bien con factores socioeco- y se amplió algo más al tratar de los factores causales,
nómicos que étnicos. por lo que para evitar repeticiones se remite al lector
a dichos acápites en este capítulo. No obstante, lo
TRATAMIENTO
resumiremos en:
Consideraremos, para más facilidad dividirlo en 3 • Tratamiento preventivo en embarazadas o prenatal,
aspectos, aunque el tratamiento del AB será uno solo, y principalmente en lo que respecto a evitar el taba-
que tendrá como objetivos los que se expresan en el quismo activo o pasivo y otros factores en ellas (la
cuadro 76.1. Tendremos en cuenta: ingestión de alimentos que han sido planteados que
• Tratamiento preventivo. puedan sensibilizar al feto intraútero, por ejemplo, el
• Tratamiento entre los episodios de exacerbaciones o huevo), evitar que la madre asmática esté en contac-
crisis agudas del AB. to con alergenos o irritantes capaces de aumentar o
• Tratamiento de las exacerbaciones o crisis aguda del AB.
producir respuestas atópicas o episodios de asma
bronquial durante el embarazo, y que deben tratarse
Cuadro 76.1. Objetivos que hay que alcanzar con un tratamiento
adecuado del asma bronquial precoz y rápidamente si se producen. También se
considera importante preparar a la embarazada para
Que el paciente disfrute, desde los puntos de vista físico, la lactancia materna.
síquico y social, de una vida normal o lo más normal posible, • Tratamiento preventivo posnatal, en individuos con-
disminuyendo la morbilidad y mortalidad por asma bron- siderados “predispuestos”, por asma o herencia
quial. Para esto se tratará de:
• Eliminar los episodios de exacerbación aguda o disminuir-
atópica según los APF, sobre todo en familiares de
los al mínimo, en frecuencia o intensidad. primer orden, en particular la madre. Pueden sepa-
• Asistencia mantenida a la escuela o con un mínimo de faltas. rarse en varios aspectos:
• Que tenga un sueño reparador, libre de AB. − Promoción, que debe comenzar durante el em-
• Evitar asistencia a los servicios de urgencias y las hospita- barazo, de la lactancia materna exclusiva, sin
lizaciones o reducirlas al mínimo posible.
• Evitar trastornos emocionales.
adición de ningún otro alimento, durante los pri-
• Normalizar, totalmente, o lo más posible, las funciones meros 6 meses de vida, aunque algunos no com-
pulmonares alteradas y variaciones excesivas del flujo parten este concepto.
espiratorio máximo (FEM). − Evitar la exposición durante los primeros meses
• Evitar efectos colaterales de los medicamentos. o años de vida a aeroalergenos, en particular los
• Reducir al máximo, la hiperreactividad bronquial.
de los ácaros domésticos, del polvo de la casa,
• Evitar la obstruccion irreversible de las vías aéreas.
de las cucarachas y otros alergenos inhalados.
Todo esto se podrá obtener con un tratamiento precoz e individualizado, − Evitar alimentos como clara de huevo o la yema
por un tiempo más o menos prolongado y con la colaboración de los no bien salcochada, cítricos, y otros alimentos o
familiares, otras personas y del paciente (cuando tenga edad suficiente para
comprender la importancia del cumplimiento del tratamiento del AB) y que
algunos medicamentos, ya citados, que pueden
será establecido y evolucionado por el médico y su equipo. producir sensibilizaciones.

Parte XII. Aparato respiratorio 991


− Se ha planteado en diversos estudios que los ni- y otras sustancias. Estos autores plantean, que si se
ños son sensibilizados a estos alergenos en los modificaran estos factores, en veinte años habría una
primeros años de la vida, lo que posteriormente disminución en la atopia y del AB. Esto pudiera ser obje-
favorece la aparición del AB. to de investigaciones futuras.
− Evitar el contacto con factores irritantes en par- Tratamiento de control entre las exacerba-
ticular el tabaquismo pasivo, sobre todo en los ciones o crisis agudas del asma. También llamado
niños pequeños. de sostén, intercrisis, interexacerbaciones, o controla-
• En lo que respecta a las infecciones del sistema res- dor. Debe ser mantenido por meses y años en la ma-
piratorio, muchos plantean que se deben evitar, sobre yor parte de los niños asmáticos, en particular en
todo en los primeros años de la vida. Hay algunos aquellos clasificados como asmáticos moderados per-
trabajos en niños sometidos a frecuentes infecciones sistentes y sobre todo, en los asmáticos severos persis-
virales, sobre todo en niños pequeños, que según al- tentes (Cuadro 76.2).
gunos autores, por el contrario, evitarían la atopia. Se El tratamiento intercrisis, de sostén o controlador
plantea según ellos una estimulación por la infección será individualizado, según la edad del paciente y la cla-
de los linfocitos TH1 que producen, sobre todo, sificación del tipo de AB (ligera intermitente, ligera per-
interferón, que disminuyen los linfocitos TH2 que in- sistente, moderada persistente o severa persistente), al
tervienen en la fisiopatogenia del asma, produciendo tener en cuenta la relación costo/beneficio/efectos cola-
s/t IL3, IL4 e IL5. Esta hipótesis llamada higiénica terales, el estado sociocultural de la familia y del pacien-
es muy discutida; parece explicar algunos aspectos te y según las facilidades que se tengan. Este tratamiento
en el AB, pero no explica otros. de sostén o controlador se debe comenzar en cuanto se
haga el diagnóstico de AB.
También se plantea, por algunos, que el uso, o me-
jor pudiéramos decir el abuso, de antibacterianos bucales, Cuadro 76,2. Clasificación del asma bronquial (AB)
sobre todo eritromicina y cefalosporinas, durante los pri-
meros 2 años de vida, favorece la aparición de asma Intermitente Persistente
ulteriormente. AB AB AB AB
Acerca del parasitismo intestinal hay quienes plan- leve leve moderada severa
tean que en los países en desarrollo, sobre todo en Áfri-
Episodios: < 1 v/sem. < 2 v/sem. > 2 v/ sem. Continuos
ca y Asia, en donde el AB parece ser menos frecuente, o casi
dichas infecciones serían las causantes de las bajas ci- continuos
fras de prevalencia de AB reportadas. Nos parece que
pocas h < 24 h > 24 h días
hay que ser muy cuidadosos frente a este planteamiento,
que no tiene en cuenta otros factores, entre ellos la falta de < 5 /año 5 - 9 / año 10 o más/año muchos
asistencia médica en muchos países de estos continentes y
Actividad: no alterada puede alterada muy alterada
cuál es el concepto en ellos de que es el AB. alterada
Existen autores que plantean que el aumento del
act.e.epis: normal c/s normal sint. +/- síntomas
AB en los últimos decenios en países desarrollados, se
debe, en gran parte, a factores como el aumento de la Síntomas
contaminación ambiental; los nuevos tipos de fabrica- nocturnos: <2v/mes >2v/mes >2v/sem frecuentes
ciones habitacionales que tratan de ahorrar espacio por FEM Y/O
el costo de construcción y crear una mayor facilidad de VEF-1: > 80 % > 80 % de 60-80 % < 60 %
calentamiento de las habitaciones, dificultando la airea-
Variabilidad
ción de ellas y aumentando los alergenos en esas fabri- Del FEM: < 20% e/20-30 % > 30 % > 30 %
caciones; los cambios en los hábitos dietéticos como el
aumento de los ácidos grasos omega 6, la disminución FEM max/24 h – FEM min/24 h x 100
Variabilidad FEM =
de ácidos grasos omega 3, disminución de factores FEM max/24 h
antioxidantes y la disminución de oligoelementos en las
dietas modernas; la disminución de la lactancia materna Se evaluará el paciente cada 6 a 12 meses
exclusiva en los primeros meses de la vida; los alimen- (Utilizada en nuestro país por recomendación de la Comisión Nacional
de Asma del Viceministerio de Higiene y Epidemiología del MINSAP).
tos enlatados o conservados, en que intervienen los sulfitos

992 Tomo III


El tratamiento comprenderá: a su conducta diaria, los tratamientos son mejor con-
• Educación de los padres, otros familiares y otras per- ducidos, el cumplimiento es mejor, se disminuye la
sonas en contacto con el niño o el paciente. ansiedad, disminuyen el número e intensidad de los
• Suprimir o evitar factores desencadenantes de las episodios de exacerbaciones o crisis agudas del AB,
exacerbaciones o crisis agudas del AB. disminuyen las visitas a los Servicios de Urgencia,
• Medicamentos continuos o intermitentes. disminuyen o desaparecen los ingresos y se obtienen
• Entrenamiento físico adecuado. mejores resultados en el control del AB con una cali-
• Inmunoterapia. dad de vida óptima en la mayoría de los pacientes y
• Apoyo psicológico y emocional. Orientación pro-
sus familiares.
fesional.
La educación comprende:
• Otros aspectos.
• Conocimientos generales.
• Eliminar o evitar en lo posible los factores desenca-
EDUCACIÓN DE LOS PADRES, OTROS
denantes.
FAMILIARES Y OTRAS PERSONAS
• Conocer los medicamentos que se utilizan en lo que
EN CONTACTO CON EL NIÑO corresponde a sus dosis, horario, forma de actuar y
O DEL PACIENTE de administración, efectos o reacciones que se pue-
También se hará extensivo a todas las personas den producir, cuáles medicamentos son útiles duran-
que tengan relación con el paciente en su casa, círcu- te las crisis y cuáles son útiles entre las crisis, así como
los infantiles (guarderías, centros de cuidados diur- otros aspectos que se señalarán más adelante.
nos), escuelas, etc. Este epígrafe constituye uno de • Conocer el manejo de equipos sencillos que se pue-
los pilares fundamentales del tratamiento del AB. Uno den utilizar por el paciente y/o familiares.
de los objetivos principales de esta educación, sobre • Reconocer la intensidad del episodio agudo del AB,
todo de los familiares más cercanos al paciente y de cómo iniciar su tratamiento y cuándo se debe buscar
este, cuando tenga edad y comprenda lo que se le ayuda médica.
enseña, es que participen activamente en la conduc-
ción del AB, lo que se conoce con el nombre de Conocimientos generales. Estos se comenzarán
automanejo o comanejo, el cual debe ser comenza- a proporcionar desde la primera consulta empezando por
do desde la primera consulta. En la totalidad de las los fundamentales: qué es el AB, por qué se produce,
reuniones internacionales de consenso sobre AB se qué se puede hacer, cómo evitarla o atenuarla. Poste-
establece que este automanejo o comanejo constitu- riormente en cada consulta, se aumentará la cantidad y
ye un aspecto importante en el tratamiento y pronós- calidad de los conocimientos teniendo en cuenta las ca-
tico del AB. También, al proporcionarle, por parte del racterísticas individuales y socioculturales de los fami-
grupo médico (GM) una serie de conocimientos y ha- liares y/o pacientes. Hay que considerar que los
bilidades al grupo paciente/familiares (PF), será im- familiares/pacientes, la mayoría de las veces, no podrán
portante no solo proporcionarles conocimientos y saber todos los aspectos de AB, pero deben conocer los
habilidades, sino que estos se incorporen a la vida dia- conceptos básicos que se les explicarán con palabras
ria del paciente/familia y que adquieran confianza en sencillas; se evitarán términos médicos o técnicos que
cómo evitar y resolver dentro de lo posible, las con- muchas veces confundan a quienes reciben los conoci-
tingencias futuras para que se obtenga una calidad mientos o no los comprendan y los incorporen mal, pro-
de vida normal o casi normal. También, al educar, duciéndose lo contrario a nuestras intenciones.
debemos escuchar del paciente y sus familiares, sus Eliminar o evitar factores desencadenantes. Hay
dudas, ansiedades y lo que esperan obtener del trata- que enseñar cómo hacerlo desde la primera consulta en
miento a corto y largo plazo creando una interrelación que se les planteará a familia/paciente, comenzando por
armónica y adecuada, de confianza mutua entre los los más importantes y frecuentes: aeroalergenos, sobre
dos grupos (GM y PF) que intervienen en el trata- todo los de los ácaros y los de las cucarachas, y los
miento del AB. Se ha demostrado que cuando el pa- irritantes, sobre todo el humo del tabaco y más aún de
ciente y sus familiares comprenden y manejan una los cigarrillos. En las consultas siguientes se indagará
serie de conocimientos y habilidades que incorporan sobre las dificultades presentadas al tomar las medidas

Parte XII. Aparato respiratorio 993


recomendadas y se preguntará si se sospecha que exis- utilización y en cada consulta comprobarse el uso, sobre
tan otro u otros factores por los familiares y/o paciente. todo de broncodilatadores, cromoglicato disódico o
Hay que tener cuidado con la restricción inicial de ali- corticosteroides por medio de inhaladores dosificados
mentos, considerados por los familiares en nuestro país presurizados (IDP o en inglés MDI), inhaladores
de excesiva importancia en el desencadenamiento del dosificadores activados por la respiración, inhaladores
AB. Algunos autores, hoy los consideran como una cau- de polvo seco o los nebulizadores. El equipo médico
sa no muy frecuente de desencadenamiento de crisis, enseñará a utilizar correctamente el equipo que se esco-
ja y pedirá que este con el medicamento se lleve a las
aunque hay reportados casos probados producidas por
consultas ulteriores para comprobar su utilización ade-
la leche y derivados, huevo, cítricos, maní, mariscos y
cuada o no; esto último es la causa más frecuente del
pescados. La lista aparece como interminable en algu-
“fracaso” de un medicamento. En la mayoría de los pa-
nos libros, pero se plantea que el AB desencadenada
cientes que usan medicamentos en inhaladores
por alimentos tiene una duración corta, que es más fre-
dosificadores presurizados (MDI) se les recomendará
cuente en los primeros años de la vida y hay que aclarar
que se utilicen con espaciadores (aerocámaras o
que una cosa es un alimento produciendo manifestacio-
inhalocámaras) sobre todo durante los primeros 5 a 6
nes de alergia, intolerancia digestiva o de una alergia años de edad, aunque muchos los recomiendan a cual-
cutánea y otra es un alimento produciendo AB. Por eso, quier edad. Existen muchos espaciadores de plástico y
hay autores que para apoyar el AB desencadenada por hasta algunos metálicos, prefiriéndose los que tengan
alimentos plantean que hay que realizar pruebas de eli- alrededor de 500 mL o más de capacidad cuando hay
minación y reexposición a cada uno de los alimentos más dificultades en el uso de aparatos de MDI, lo que puede
citados y por varias veces; pero inclusive este argumen- pasar aún en niños mayores. Cuando no hay facilidades
to es rebatido por otros. Lo cierto es que se debe evitar para adquirir los espaciadores comerciales se pueden
de comienzo eliminar la leche, el huevo y otros alimen- hacer de manera artesanal utilizando un frasco plástico
tos durante un tiempo más o menos largo sin que se de 250 a 500 mL de capacidad, de los usados para medi-
tenga una sospecha importante. Se eliminarán de co- camentos, refrescos o agua mineral que se seccionarán
mienzo los aeroalergenos de los ácaros y de las cucara- por su base y se sustituirá esta por un círculo de plástico
chas y los irritantes como el humo del tabaco y sobre o cartón duro, con un orificio en el centro por donde se
todo cigarrillos y los productos de la combustión de deri- introducirá la boquilla del aparato de MDI y por el extre-
vados de biomasa (kerosene, gasolina, etc.). En las con- mo del otro lado, más estrecho o boca del frasco se
sultas siguientes se evitarán otros posibles factores como respirará por la boca. También se podrá usar, sobre todo
animales domiciliarios, sobre todo mascotas, mohos, en niños pequeños, un vaso plástico de 125 a 250 mL al
pólenes, olores fuertes de pintura, insecticidas, etc. Los que se le abrirá un pequeño círculo en la base por donde
factores infecciosos sobre todo virales, el ejercicio y las se introducirá el aparato de MDI y el otro extremo del
emociones también deben ser considerados. Más ade- vaso se aplicará sobre la piel de la cara, rodeando con
lante, como parte del tratamiento intercrisis, interepi- sus bordes y cubriendo la boca y la nariz del paciente.
sodios agudos o de sostén, se aclararán más sobre estos Se recomiendan varias técnicas al utilizar el espaciador,
factores. La enfermera(o) de terreno y/o el trabajador(a) pero la que utilizamos es la siguiente:
social jugarán un papel importante en ayudar a suprimir, • Agitar el aparato de MDI por 10 o más segundos.
atenuar o evitar estos factores. • Introducirlo por el orificio de la parte posterior o base
Conocimientos de los medicamentos que se van del espaciador.
a utilizar. Es importante que el grupo familia/paciente • El paciente realizará una inspiracion lenta y prolon-
conozca los medicamentos que se utilizarán, aclarándo- gada seguida de una apnea y después espirará total-
se bien cuáles son los medicamentos que se usarán para mente y de manera lenta, por la boca.
el tratamiento de sostén o intercrisis y los que se utiliza- • El paciente colocará la boquilla del espaciador en su
rán en los episodios de exacerbación o crisis de asma boca con los labios bien apretados sobre ella, ro-
aguda (también llamados medicamentos de rescate por deándola.
algunos). Siempre insistir que los medicamentos indica- • El paciente o familiar accionará el aparato (“puff”)
dos a cada paciente no se suspenderán, disminuirán o apretándole su rama vertical o mayor por sus dos
aumentarán sin una indicación por escrito de un médi- extremos entre el índice y el pulgar e inmediatamen-
co, con su firma, fecha y nombre del paciente. te el paciente hará una inspiración lenta, progresiva
Conocimiento del manejo de algunos equipos máxima por una duración de 3 a 5 s hasta que los
sencillos por el paciente y/o familiares. Aquí tendre- pulmones estén expandidos al máximo (tórax disten-
mos en cuenta que se deben enseñar para qué sirven, su dido al máximo).

994 Tomo III


• Al final de esta inspiración lenta, progresiva y máxi- Los nebulizadores se prefieren para utilizar en
ma el paciente contendrá la respiración haciendo una hospitales o consultas, sobre todo para administrar
apnea durante 5 a 10 s. broncodilatadores en las crisis agudas. Tienen inconve-
• Espirará posteriormente, por la boca, lentamente, nientes, al utilizarse en el hogar, como su costo, peso y
dentro del espaciador. cuidados que hay que tener de limpieza cada vez que se
• Continuará inspirando y espirando en el espaciador utilizan. Además hay que tener en cuenta que en contra
de manera normal durante 10 o más veces. de lo que recomiendan los fabricantes, no todos son ade-
• Retirará el espaciador. cuados y deben ser adquiridos por personas que conoz-
can sobre ellos. Los nebulizadores a presión positiva
Si se recomiendan más de un accionar o “puff” intermitente no son mejores en su uso; los nebulizadores
estos se separarán entre sí por 1 a 5 min. No se inspi- ultrasónicos no tienen ventajas demostradas sobre los
rará ni espirará por la nariz mientras se realiza la técnica mecánicos de más fácil limpieza, más fácil reparación y
y la lengua no obstruirá el orificio de la boquilla. En niños menor costo, siempre que el fabricante del nebulizador
pequeños, el espaciador tendrá agregado una pequeña mecánico cumpla una serie de requisitos técnicos reco-
careta que se colocará sobre la cara cubriendo la boca y mendados.
nariz del niño que respirará por ella durante 20 a 30 s. Si Otro aparato utilizado en los asmáticos de más de
el niño coopera (más de 2 a 3 años) se pudiera utilizar el 5 ó 6 años de edad son los medidores de flujo pico
espaciador sin careta, pero comprimiendo con los dedos (medidores de FEM o flujómetros) los cuales ya fueron
del familiar las ventanas nasales. El niño estará de pie descritos anteriormente junto con la técnica de uso en el
mientras realiza la técnica o sentado con la columna verte- epígrafe de las pruebas funcionales respiratorias en el
bral erecta si no es posible que esté de pie. acápite de Diagnóstico del AB. Para muchos autores la
Los errores más importantes en el uso de los utilización de aparatos medidores del flujo pico o flujo
espaciadores y posible “fracaso” del tratamiento son: espiratorio máximo (FEM) es fundamental no solo para
• No agitar el aparato de MDI al comienzo de cada
ayudar al diagnóstico de AB; además, serán útiles para
utilización. clasificar el AB en niños mayores de 5 años de edad,
• Más de un “puff” a la vez. Deben de separarse por
para comprobar la intensidad de una exacerbación o cri-
1 a 5 min entre sí y siguiendo la técnica indicada. sis aguda y evaluar los beneficios del tratamiento. En
• Dejar pasar más de 1 s sin inspirar después del “puff”.
algunos países desarrollados se considera que un asmá-
• Inspirar demasiado rápido después del “puff”, la ins-
tico mayor de 5 años no puede ser tratado correctamen-
te sin la utilización de estos aparatos medidores de FEM
piración será lenta, progresiva y máxima por 3 a 5 s.
en cuyo uso se debe entrenar a los pacientes y familiares.
• No sostener la respiración después de la inspiración
Cómo reconocer la intensidad del episodio agu-
máxima, durante 5 a 10 s.
do de exacerbación y buscar ayuda médica. Consti-
• Se limpiará el espaciador periódicamente con agua
tuye un aspecto importante, difícil y que se debe enseñar
tibia, si se puede con un detergente suave, sin perfu-
repetidamente a pacientes y familiares. Dependerá en
me, y después se enjuagará varias veces con agua
primer lugar si el paciente tiene edad suficiente y está
tibia, secándolo al aire sobre un plato o cubeta cu-
entrenado en el uso de medidores de FEM o no.
bierto por un paño. Cuando el paciente está previamente entrenado: la
• Hay quienes recomiendan no eliminar totalmente el
utilización del FEM nos indicará la intensidad de un epi-
polvo del detergente que evitará la atracción entre la sodio agudo (ver tratamiento de las exacerbaciones o
pared plástica del espaciador y las partículas del me- crisis agudas) y a veces hasta nos pondrá en aviso por
dicamento; otros no comparten esa opinión por te- horas antes, cuando no no existan manifestaciones clí-
mor a respuestas alérgicas al detergente y nicas del inicio de una crisis aguda. Su disminución por
recomiendan espaciadores metálicos. debajo del 80 % de los valores calculados por curvas
según sexo y talla o de la mejor cifra alcanzada por el
Los otros tipos de aparatos citados anteriormente paciente entre las crisis será un índice objetivo de una
(Spinhaler®, Turbohaler®, etc.) se pueden utilizar, y son crisis y la conducta que se debe seguir:
muy útiles, en pacientes de más de 6 a 8 años de edad. • Si las cifras son inferiores o iguales al 50 % se debe
Necesitan de la colaboración del paciente, que debe de llevar al paciente rápidamente a un servicio de ur-
entrenarse adecuadamente según cada aparato y sus gencia de atención primaria u hospital.
instrucciones, aunque muchos autores recomiendan los • Cuando las cifras son superiores al 50 % se comenza-
equipos de MDI con espaciador a cualquier edad. rá el tratamiento domiciliario indicado en las consultas

Parte XII. Aparato respiratorio 995


previas, mientras se vigila al niño después de las pri- algunos irritantes en particular el humo del tabaco y ci-
meras dosis de broncodilatadores administradas y se garrillos, los olores y el humo procedente de la combus-
repetirá el FEM 30 min después de la última dosis. tión de derivados de la biomasa como kerosene, gasolina,
• Si no hay mejoría se llevará al niño a un servicio de petróleo u otros.
urgencia.
• Si mejoró el FEM, se podrá continuar el TTT de la Medidas contra los ácaros y del polvo
crisis en el hogar. repitiendo el FEM cada 1 a 4 h de la casa en general y en particular
hasta ponerse en contacto con su médico. de la habitación del niño asmático
(Nota: con cualquier medida de FEM, la sensación
Un niño pasa habitualmente la mayoría del tiempo
de malestar, pánico, ansiedad o dificultad respiratoria
apreciable indica que se debe buscar ayuda médica durmiendo, jugando, leyendo o en otras actividades, en
inmediata en un servicio de urgencia). su habitación u otros lugares de la casa. Los alergenos
• Si el paciente no está entrenado en el uso del medi- de los ácaros, que se alimentan de residuos epiteliales
dor del FEM, la conducta variará. de animales y humanos, habitan en lugares cálidos y
• Si se trata de una familia confiable con buen nivel húmedos como habitaciones, camas y muebles forra-
sociocultural y no existe señales de dificultad respi- dos. Son casi imposibles de eliminar totalmente en nues-
ratoria moderada o severa, se podrá iniciar el trata- tro medio, pero se tomarán las medidas siguientes:
miento indicado para el hogar por su médico y se • Evitar las cortinas y alfombras en el cuarto del niño y
contactará con él posteriormente. Los signos de di- otros lugares en donde él pueda estar como salas o
ficultad respiratoria manifiesta serán polipnea de más salones de ver televisión, hacer tareas, jugar, etc. Si
del 25 % de lo normal según la edad, utilización de las cortinas no se pueden retirar, se deberán lavar en
músculos accesorios como el esternocleido- agua caliente (55°) una vez por semana. Iguales me-
mastoideo, trapecio y escalenos (contracturados), didas se utilizarán para las ropas de cama. Después
tiraje bajo manifiesto, dificultad al hablar o al llanto, se secarán al aire y al sol.
intranquilidad, pánico, malestar, sibilancias francamen- • Introducir totalmente las almohadas y el colchón en
te audibles, o alteraciones en el sensorio.
cubiertas herméticas de plástico impermeable que se
• Si se trata de familia no confiable o con nivel socio-
cerrarán con cremalleras (zippers) y se sellarán con
cultural bajo o si hay signos de riesgo, se debe llevar
cinta adhesiva. A todo el forro se le pasará un paño
lo más rápido posible a un servicio de urgencia.
• Los asmáticos, poco frecuentes, clasificados como húmedo o se aspirará diariamente. Una vez a la se-
“lábiles”, con antecedentes de episodios aislados que mana se le pasará el paño y se expondrá por todos
rápidamente se agravan, se deberán llevar lo más sus lados al sol, el mayor tiempo posible.
rápidamente posible a un servicio de urgencia, aunque • Limpiar una vez por semana la habitación del niño
parezcan tener un episodio de exacerbación ligera. con agua caliente (55°C) y, si es posible, el resto de
• En Cuba, a la mayoría de los familiares se les indica la casa. Una vez baldeadas las habitaciones estas se
que cuando el niño presente una crisis aguda de AB secarán totalmente y se permitirá la entrada de los
se debe buscar ayuda médica en APS excepto en rayos solares abriendo las ventanas y puertas si no
familias y/o pacientes confiables, con buen nivel hay contraindicaciones.
sociocultural y entrenados, que tengan un episodio • El uso de las aspiradoras pudiera ser útil, aunque no
ligero de exacerbación, en que se podrá comenzar eliminarán totalmente los ácaros.
con el broncodilatador indicado previamente por su • El niño no estará en la habitación mientras se hace la
médico. limpieza y esta quede totalmente seca y aireada.
• Suprimir de las habitaciones las alfombras, cortinas
SUPRIMIR O EVITAR FACTORES
gruesas, libros, revistas y juguetes de peluche y cuan-
DESENCADENANTES do esto no se pueda, deben ser introducidos en en-
DE LAS EXACERBACIONES O CRISIS volturas plásticas impermeables selladas y se les
AGUDAS DEL ASMA BRONQUIAL pasará un paño húmedo diariamente, secándose al
sol si es posible.
Deben siempre tomarse medidas para evitar • Se evitarán las colchas de lana, cuadros, flores y otros
aeroalergenos, sobre todo los de los ácaros y los de las objetos capaces de almacenar polvo así como lám-
cucarachas (suprimirlos o disminuirlos), al igual que paras y adornos.

996 Tomo III


• Nunca se utilizarán escobas ni plumeros en la limpie- Medidas contra los mohos (hongos filamentosos
za. El uso de acaricidas y sustancias como solucio- que producen esporas que se inhalan en el aire
nes de ácido tánico al 3 % parecen haber perdido el donde quedan suspendidas)
favor, pues se plantea que no tiene una utilidad com- • Se debe reducir la humedad del hogar aireándola y
probada o que ellos pueden producir cuadros de AB. permitiendo que penetre el sol, sobre todo en el
• No se utilizarán en la habitación del niño muebles dormitorio.
que estén tapizados; deberán ser de madera, plásti- • Evitar que el niño penetre en habitaciones cerradas,
co o cuero. mal ventiladas y en donde no llega la luz solar, como
• No se permitirá al niño que se siente, duerma o salte sótanos, que deben limpiarse frecuentemente.
sobre muebles tapizados o cubiertos de tela. Que no • Limpiar periódicamente los closets y muebles. Algu-
salte en la cama. nos recomiendan utilizar lejía o preparados
• Los ventiladores movilizarán los alergenos del cuarto deshumedificadores dentro de los escaparates y
en donde está el niño, por lo que no se recomienda su uso. closets.
• Tratar que la humedad relativa de la habitación sea • No permitir que la ropa de uso diario se ponga dentro
inferior al 50 % lo que es imposible en nuestro país de escaparates, closets u otros muebles. Cuando se
con una humedad relativa mayor del 80 % como pro- vayan a utilizar ropas, sábanas, etc. que estaban guar-
medio anual. Los deshumidificadores (alto costo) no dados, antes de usarse, se deben exponer al aire y
han resuelto totalmente el problema, al igual que los sobre todo al sol por pocas horas. Si es posible las
filtros electrostáticos. ropas se lavarán previamente, cuando llevan tiempo
• La habitación del niño debe ser la más ventilada y guardadas.
soleada de la casa si es posible, abriendo las venta- • Los zapatos de uso diario deben de estar al aire y
nas la mayor parte del tiempo, excepto cuando el niño fuera de la habitación.
esté sensibilizado a alergenos exteriores o exista con-
taminación ambiental o plantas cerca de las venta- Medidas con respecto a los animales
nas, (que deben siempre evitarse). domésticos
• Los closets y escaparates estarán cerrados. • Constituye en nuestro país un verdadero problema
• Si hay que utilizar vaporizadores en la habitación del cuando hay que tomarlas.
• Se deben evitar animales en los hogares de niños
paciente, esta posteriormente debe secarse abriendo
asmáticos. Si existían previamente, que no estén en
puertas y ventanas, permitiendo la entrada de los ra-
la casa y, sobre todo, que no penetren en el dormito-
yos solares y del aire, el mayor tiempo posible. rio del paciente.
• Hay quienes recomiendan el uso de hamacas, mu- • Convencer a los familiares, lo cual muchas veces
cho más fáciles de limpiar, en lugar de camas. Tam- es difícil, que los animales deben ser regalados a
bién se recomiendan camas de hierro y bastidores otras personas, pues el niño no debe estar en con-
con sabanas dentro de una funda, sin colchón (o este tacto con ellos.
forrado). • Bañar a los animales con preparados contra la caspa
una vez por semana.
Medidas contra los alergenos de las cucarachas • Hay que advertir que, aunque los animales se retiren
• Evitar grietas en las paredes y entradas del exterior. de la casa, se pueden mantener las manifestaciones
clínicas en el niño sensibilizado a la caspa, lana o sa-
• Manténgase los alimentos tapados.
liva, durante varias semanas. Se plantea que estos
• Limpiar periódicamente la casa como se recomendó
síntomas pueden durar hasta varios meses después
anteriormente. de retirada la mascota de la casa.
• No permitir comer en la habitación del paciente.
• Se prefiere el uso de trampas, cebos o ácido bórico Medidas contra el polen extradomiciliario
en esferas, con o sin azúcar, pero que no estén al • De ser posible, cerrar las ventanas y puertas, evitan-
alcance del niño. do contacto con el exterior en las épocas en que es
• Se debe evitar el uso de insecticidas en la habitación elevada su concentración en el aire y que variará en
y si hay que utilizarlos, el niño no entrará en ella has- su horario y estación, según el tipo de polen al cual el
ta uno o más días después que el olor no se detecte. niño está sensibilizado.

Parte XII. Aparato respiratorio 997


• Que el paciente no juegue ni esté en zonas donde Medidas contra las infecciones
exista césped o plantas. Cuando estas se estén lim- • El asmático debe tener al día el esquema de inmuni-
piando o cortando (hongos y polen) tampoco debe zación establecido por el MINSAP, excepto que sea
estar presente. alérgico a algunos de sus componentes Se inmunizará
periódicamente contra la influenza, siempre que sea
Medidas contra el humo del cigarrillo
posible.
y otros irritantes
• Evitar los cambios bruscos de temperatura, lo cual
• No deberán fumar los familiares ni, desde luego, el es muchas veces imposible, al igual que las infeccio-
paciente. Recordar que las partículas del humo del nes respiratorias, pues muchas infecciones virales
tabaco o cigarrillo pueden quedar en las paredes y pueden producir contagio 12 a 24 h previas a la apa-
ropas de los fumadores, durante horas, aunque estén rición de las manifestaciones clínicas. Se recomien-
expuestas al aire. da en asmáticos persistentes moderados o, sobre todo,
• Evitar el uso de kerosene, leña y otros productos de los severos, no estar en lugares cerrados y con va-
la biomasa para cocinar o calentar las habitaciones. rias personas.
• Evitar el contacto con insecticidas, detergentes, • Se recomienda en asmáticos severos y hay quien tam-
sprays, perfumes, pinturas, materiales de construc- bién lo plantea en los moderados, en donde se haya com-
ción y otros irritantes. probado el desencadenamiento de episodios de
• Si se cocina con kerosene, el niño debe estar alejado exacerbación de AB por infecciones virales respi-
de la habitación en donde se encuentra el equipo, ratorias, administrar corticosteroides, en los prime-
sobre todo al encender o apagarlo y, si es posible, el ros 2 a 3 días de comienzo de los síntomas (prednisona
paciente debe estar fuera de la casa cuando se están 1 a 2 mg/kg/24 h por vía bucal) excepto en las
utilizando. La cocina debe tener puertas y los bordes gingivoestomatitis herpéticas, tuberculosis no contro-
cerrarse con tela o papel. Con gas de uso doméstico, lada o contacto con varicelas de 2 a 4 semanas antes
aunque mucho menos irritante, se tomarán las medi- del uso de cortocoesteroides, en individuos susceptibles
das semejantes que con el kerosene, alejando al niño a esta.
del lugar donde se utiliza.
• Evitar el contacto con el humo u olores, producto de Medidas contra factores emocionales
la combustión de grasas o aceites utilizados para co- y psicológicos en que se haya demostrado
cinar o de alimentos quemados. que desencadenen episodios de asma bronquial
Medidas que se deben tomar en pacientes • Técnicas de relajación.
que presentan asma desencadenada • Control del estrés.
por ejercicios • Ayuda por el psicólogo y por el psiquiatra en casos
• No deben proscribirse las actividades físicas; se de- necesarios.
ben estimular los ejercicios. • Medidas contra medicamentos y contrastes
• En pacientes con ADE se utilizarán agonistas beta 2 radiológicos
adrenérgicos (como el salbutamol) 15 a 20 min antes • Se evitará totalmente la utilización de aspirina o
de realizar ejercicios. También se pudiera utilizar antiinflamatorios no esteroideos (AINE) en pacien-
cromoglicato disódico u otro antiinflamatorio antes tes comprobados que reaccionan adversamente a
del ejercicio aunque parecen ser menos efectivos que ellos.
los broncodilatadores inhalados. Los antileucotrienos • Evitar el uso de bloqueadores beta 2 adrenérgicos,
parecen tener una indicación precisa en estos pa- por vía bucal o hasta en gotas oculares, en pacientes
cientes. asmáticos.
• Ejercicios de calentamiento durante 10 a 15 min an- • Evitar en lo posible el uso de contrastes yodados en
tes de realizar ejercicios o deportes; se prefieren pacientes asmáticos.
aquellos como la natación, caminar, trote y béisbol, • Hay quienes recomiendan la utilización de esteroides
siempre entrenando progresivamente al paciente aun- y/o antihistamínicos previos a su uso; lo que es discu-
que se tendrá en cuenta las facilidades, preferencias tido. También se discute el valor de las pruebas
y estado del paciente. intradérmicas previas al uso de los contrastes. Si hay
• Deben evitarse los ejercicios extenuantes, sobre todo una reacción adversa al uso del contraste, la primer
cuando hay una alta contaminación ambiental. indicación será epinefrina.

998 Tomo III


• Evitar en niños asmáticos o con antecedentes atópicos pacientes durante los primeros años de edad. La dosis
el uso indiscriminado y repetido de antibacterianos variará entre 0,5 mg cada 12 h a 1 mg cada 12 h por vía
sobre todo penicilinas, sulfamidados y cefalosporinas. bucal, en dependencia de la edad y respuesta, que debe
comenzar a aparecer de 10 a 15 días después de co-
Son numerosos los factores que pueden producir menzado el tratamiento, aunque se establece que pre-
exacerbaciones del AB y que variarán según cada pa- sentan un efecto máximo de 4 a 6 semanas. Se
ciente, por lo que deben ser demostrados que son cau- recomienda no retirarlos bruscamente después de va-
santes del desencadenamiento del asma, antes de rios meses de su uso.
suprimirlos de rutina. Se procederá por pasos, pero siem-
Con el astemizol se ha señalado la aparición del
pre en un niño asmático se tomarán medidas contra
síndrome de torsades de pointes, aunque no frecuen-
aeroalergenos, principalmente los de los ácaros del pol-
vo de la casa y los de las cucarachas y de irritantes, en te, con peligros de efectos adversos cardíacos: QT pro-
particular el tabaquismo, activo o pasivo. longado, taquicardias ventriculares y arritmias con peligro
Hay que tener en cuenta que no se puede, pues es para la vida. Algunos establecen que la posibilidad de
imposible y hasta no aconsejable, desde el punto de vista aparición es mayor cuando se utilizan conjuntamente con
emocional y práctico, prohibir un gran número de facto- teofilina; macrólidos o antimicóticos tipo ketaconazol.
res desencadenantes de manera rutinaria, salvo en pa- Esto ha hecho que haya desacuerdo entre diferentes
cientes no controlados a pesar de un tratamiento adecuado. autores que se dividen en 2 grupos: uno que no lo reco-
En la práctica, entre más larga sea la lista de prohi- mienda en niños hasta que existan más trabajos científi-
biciones, más posibilidades existen que no sean cumpli- cos y el otro que mantiene que es útil, pero antes de su
das. Nos limitaremos de comienzo a evitar o suprimir los uso se deben realizar estudios cardiovasculares de cada
factores más frecuentes anteriormente citados y aque-
paciente y repetirlos en las primeras semanas del trata-
llos en que esté demostrado que desencadenan crisis de
AB. Las pruebas cutáneas siempre tienen que relacio- miento donde parecen ser más frecuentes los efectos
narse en las manifestaciones clínicas y nunca evitar un adversos. Por ahora no se recomienda su uso.
alergeno solo basándose en una prueba cutánea positiva. Con respecto a la terfenidina, tiene los mismos
Con respecto a parásitos intestinales y AB es un efectos colaterales que el astemizol, por lo que no lo
asunto debatido, pero todo niño, asmático o no, con pa- recomendamos, en niños, por ahora.
rasitismo intestinal, debe ser tratado. Evitar el abuso de Existen nuevos antihistamínicos (por ejemplo, la
tratamientos en pacientes con heces fecales que con- cetirizina) más modernos, que se plantean, no producen
tengan quistes de protozoos y que estén asintomáticos. los efectos de los 2 anteriores.
Entre los antinflamatorios, que sin duda son los me-
MEDICAMENTOS CONTINUOS dicamentos de uso continuo indicados en todos los
O INTERMITENTES asmáticos, excepto en aquellos clasificados como lige-
Dependerá de la clasificación que se haya realiza- ros intermitentes, tenemos a los derivados de las
do del paciente y otros factores que hemos citado ante- cromonas (cromoglicato disódico y nedocromil), cuya
riormente. acción antinflamatoria se discute por la mayoría de
En los pacientes con asma ligera, intermitente o per- los autores y los corticoesteroides adrenales, en que
sistente, habitualmente no se utilizarán medicamentos en- todos están de acuerdo con su acción antiflamatoria.
tre los episodios o crisis agudas del AB. Todos ellos se utilizan por nebulizaciones o inhalados por
Muchos autores recomiendan en pacientes con aparatos de MDI (dosificadores presurizados de dosis
asma leve persistente la utilización de un antihistamínico medida) preferiblemente con espaciadores u otros tipos
anti-H1 de acción prolongada como, ketotifeno, astemizol, de aparatos de administración por vía aérea según el
terfenidina. medicamento y el fabricante.
El ketotifeno, el más usado, ha sido debatido. Los El cromoglicato disódico se utilizará con el apa-
efectos colaterales más señalados son somnolencia y au-
rato correspondiente (Spinhaler u otros) 20 mg por inha-
mento de apetito con ascenso de peso que desaparecen
lación o “puff” (hay quienes recomiendan 5 mg) de 4 a 2
habitualmente con el uso. Otros efectos colaterales son los
descritos en el uso de todo antihistamínico. No existen, has- veces al día (niños mayores) o por aparatos MDI (cual-
ta ahora, trabajos con un número suficiente de casos y con quier edad), preferiblemente con espaciadores.
rigor científico adecuado, en que se pruebe que sea El nedocromil sódico se utilizará de 4 a 2 dosis
oncogénico. Es más efectivo en pacientes asmáticos con al día, 1 a 2 “puffs” cada vez, por MDI con espaciador .
rinitis alérgica mantenida o intermitente y sobre todo en Tiene su principal inconveniente en que alrededor del

Parte XII. Aparato respiratorio 999


25 % de los pacientes se quejan de mal sabor en la recomendados por algunos autores en estos momen-
boca después de su uso, que a veces desaparece ha- tos, se utilizarán en niños de 12 o más años de edad;
ciendo gargarismos de solución salina al 0,9 % (1 cu- aunque hay productos que el fabricante sugiere utili-
charadita de sal en medio litro de agua, hirviendo la zarlos en mayores de 6 años, pero siempre realizar el
solución y posteriormente enfriándola) pero a veces monitoreo de las enzimas hepáticas cada 3 meses y
los pacientes, aún así, rechazan su uso. recordar que algunos pueden tener interacciones con
Los esteroides por inhalación (beclametasona ciertos alimentos. Se utilizan aisladamente o en pa-
o budesonide) se utilizan habitualmente en dosis de cientes con esteroides, en donde se plantea que pue-
menos de 400 μg en 24 h (asmáticos leves persisten- den disminuir las dosis de estos últimos o hasta
tes), 400-800 μg en 24 h (asmáticos moderados per- suspenderlos, en un tiempo más o menos largo. La
sistentes) o más de 800 μg en 24 h (asmáticos severos mayoría de los autores establecen que no existe sufi-
persistentes). Casi siempre se utilizan en 2 subdosis, ciente experiencia publicada sobre el efecto de su uso
alrededor de las 7 a.m. (7:00 horas) y 3 p.m. (15:00 prolongado en niños y que pueden producirse efectos
horas) o a la dosis bioequivalente para otros esteroides. colaterales.
Son considerados actualmente el medicamento de elec- En pacientes asmáticos moderados, o sobre todo
ción en el tratamiento de sostén del asma. Se reco- severos persistentes, se puede utilizar, agregándose a
mienda enjuagar varias veces la boca con agua hervida los antinflamatorios, beta 2 adrenérgicos de acción pro-
después de su uso para evitar la absorción del longada o teofilina de liberación lenta cuando no se con-
esteroide por vía digestiva. Aunque con dosis peque- trolan totalmente los síntomas, sobre todo los nocturnos.
ñas se pueden producir efectos colaterales, sobre todo Entre los primeros tenemos el salmeterol por MDI en-
alteraciones del crecimiento y de la densidad ósea, tre 50 a 100 microgramos 2 veces al día y en niños ma-
estas serán más frecuentes en dosis elevadas de más yores de 4 años de edad o el clembuterol de 5 a 10 mg/
de 800 μg o sobre todo, más de un 1 000 μg por día. 24 h en niños mayores de 12 años de edad por vía bucal
Hay preparados comerciales de esteroides para uso o el formoterol en niños mayores de 10 a 12 años de
nasal, muy útiles en asmáticos con manifestaciones edad, por MDI. Las teofilinas de liberación lenta, se
nasales, o para uso ocular, cuando presentan sínto- recomiendan por vía bucal en niños mayores de 1 año
mas oculares. de edad comenzando por 10 mg/kg/24 h, en 1 ó 2
Se recomienda con los antiinflamatorios, en ge- subdosis, que se puede aumentar progresivamente has-
neral, comenzar con dosis más elevadas a las que le ta 16 mg/kg/24 h aunque lo más importante es realizar
corresponderían al paciente y, a los 2 ó 3 meses des- periódicamente dosificaciones de teofilina en suero y
pués de estabilizado se disminuyan progresivamente las ajustar la dosis alcanzando una concentración manteni-
dosis hasta llegar a aquella que mantenga al asmático da entre 5 a 15 mcg/mL (5 a 15 mg/L). Se tendrán que
sin episodios o con un número reducido y con menor vigilar aquellos factores que pueden aumentar su con-
intensidad. centración y facilitar intoxicación, o disminuirla, redu-
La prednisona o la prednisolona, por vía bucal, ciendo el efecto de la teofilina (Cuadro 76.3).
en pacientes severos, se utilizará en dosis de 1 a 2 mg/ Con respecto a otros medicamentos utilizados en
kg/24 h (máximo 40 a 60 mg/24 h según la edad) divi- asmáticos adultos severos que no responden inclusive
didas en 2 subdosis/24 h o en días alternos, aunque hoy a los corticosteroides por vía bucal se citan, para pros-
se recomienda utilizar una dosis total única diaria por cribir su uso en niños, como el acetonido de
vía bucal en los alrededores de las 3 pm (15:00 horas). triamcinolona, TAO + metilprednisolona, sales de oro,
Siempre se realizará el resto del tratamiento, sobre todo methotrexate, ciclosporinas, hidroxicloroquina, dapsona
en lo referente a suprimir o evitar en lo posible los y gammaglobulina hiperinmune i.v.
alergenos, en especial los aeroalergenos, y los irritantes, En los últimos años se ha reportado como útil, la
sobre todo tabaquismo y los productos de la combus- utilización de anticuerpos monoclonales contra la IgE
tión de la biomasa. (Omalizumab) en pacientes severos. Es muy caro y
Los medicamentos que compiten con los recep- para su utilización hay que tener en cuenta la relación
tores de los leucotrienos o “antileucotrienos”, muy costo/beneficios/efectos colaterales.

1000 Tomo III


Cuadro 76.3. Algunas situaciones o medicamentos que pueden modificar la concentración en suero de la teofilina.

• Aumentan la concentración en suero (y por lo tanto puede favorecer la aparición de intoxicación por teofilinas)
− Dieta: excesiva en grasas o en carbohidratos.
− Fiebre de 38 o más grados celsios (°C).
− Insuficiencia cardíaca no compensada.
− Cirrosis hepática
− Abuso de café, té, refrescos de cola o chocolate (efectos aditivos).
− Eritromicina y otros macrólidos como claritromicina o azitromicina, triacetiloleandomicina (TAO).
− Quinolonas (como ciprofloxacina).
− Cimetidina.
• Disminuyen la concentración en suero (los efectos broncodilatadores de la teofilina serán menores)
− Dieta: rica o excesiva en proteínas.
− Tabaquismo, pasivo o activo.
− Fenobarbital.
− Difenilhidantoinas.
− Carbamazepina.
− Rifampicina.

Lo ideal es dosificar periódicamente los niveles de teofilina en suero, manteniéndolos entre 5 y 15 μg/mL y ajustar la dosis de acuerdo con la
concentración.

ENTRENAMIENTO FÍSICO ADECUADO riantes deben ser cambiadas periódicamente para que el
niño no se aburra de su realización. Otra variante sería
Todo asmático, de acuerdo con la edad, posibilida-
soplar, apagándola, una vela encendida a cierta distan-
des y grado de tolerancia, debe tener un entrenamiento
cia del paciente y que con el tiempo se coloca cada vez
físico adecuado, al que se le debe estimular la práctica de
más alejada de este o mover una pelota de tennis de
los deportes. Se establece que un entrenamiento físico
mesa, soplándola de manera lenta, progresiva y máxi-
adecuado tiene varias ventajas; por ejemplo: desarrolla la
ma colocada sobre un mesa.
musculatura, favorece que el niño no se considere dife-
Los ejercicios de relajación, de los cuales hay di-
rente a sus amigos, y como en todo individuo, hace que se
versas técnicas, son ampliamente recomendados por
sienta mejor y elimine ansiedades o tensiones, al reforzar muchos y hay pacientes que al realizarlos, cuando apa-
su autoestima. Se recomiendan ejercicios que necesiten recen las primeras manifestaciones clínicas de una cri-
esfuerzos no mantenidos, siempre que se realicen de ma- sis, pueden lograr que esta no avance, posiblemente al
nera progresiva y que, inicialmente el niño no intervenga eliminar la ansiedad que puede contribuir al aumento del
en competiciones. Un deporte recomendado es la nata- episodio de exacerbación. Algunos autores plantean que
ción, al igual que el caminar, trotar, montar en bicicleta y favorecen la dilatación de las vías aéreas y la acción de
deportes marciales, siempre con calentamiento previo. Si los medicamentos indicados (pero no aclaran cómo ac-
el niño padece de asma con ejercicio, se debe administrar túan). Consideramos que los ejercicios de relajación se-
de 15 a 20 min antes de realizarlo, un medicamento ade- rían un apoyo al resto del tratamiento y cuya eficacia
cuado, prefiriéndose el salbutamol u otro agonista beta-2 dependerá de la ansiedad del paciente.
adrenérgico, mejor según algunos los llamados
antileucotrienos. INMUNOTERAPIA
En pacientes con asma persistente se recomien-
Comúnmente llamada entre nosotros “vacunas”,
da la realización de ejercicios respiratorios de los cua-
constituye un aspecto muy debatido actualmente, pues las
les existen muchos, que tienen por finalidad reforzar el
opiniones están divididas. Unos aducen que son innece-
tono de la musculatura torácica y sobre todo, de los sarias, teniendo en cuenta los medicamentos con que se
músculos que forman la llamada “prensa abdominal”. cuentan hoy para controlar el AB y las reacciones adver-
Se basan todos en realizar una inspiración lenta, pro- sas, a veces graves, que se pueden producir. Otros, en
gresiva y máxima, seguida de una espiración lenta, pro- cambio, las usan o abusan, indicándolas de “rutina”. Hay
gresiva y máxima, contrayendo la musculatura trabajos científicos controlados en que parecen ser efec-
abdominal, y además realizar otros ejercicios para me- tivas cuando se utilizan extractos bien estandarizados en
jorar la llamada cintura escapular. Las distintas va- pacientes sensibilizados frente a alergenos inevitables de

Parte XII. Aparato respiratorio 1001


suprimir como los de los ácaros del polvo de la casa, hon- zas o desinfecciones, y otros muchos más. Hoy día esto
gos, sobre todo alternaria, o polen. Parecen ser más efec- no se cumple, debido en parte a los tratamientos contra el
tivas cuando se trata de pacientes con asma persistente, asma. Conocemos magníficos médicos, enfermeras, pin-
ligera o moderada, y acompañada de rinitis alérgica, per- tores, ingenieros y con otras profesiones o empleos, que
sistente o intermitente, o de conjuntivitis alérgica. Los son asmáticos, a veces severos, aunque debemos reco-
consensos internacionales no recomiendan los extractos nocer que estos últimos son severos en parte por no cum-
de bacterias, alimentos, Candida albicans e insectos por plir, adecuadamente, el tratamiento antiasmático.
no haberse podido demostrar su efectividad al igual que
el uso de “vacunas” por vía sublingual o digestiva. Las OTROS ASPECTOS
reacciones de la inmunoterapia oscilan entre 5 y 30 %
Dieta: se ha recomendado por algunos estudios, que
para los alergenos de los ácaros y entre el 5 y 20 % para
esta debe ser rica en antioxidantes (vitamina E, vitamina
los del césped. Pueden ser ligeras, moderadas o graves y
C, betacarotenos) y pescado de carnes oscuras (como
más raramente mortales, pero se debe considerar siem-
pre los beneficios y riesgos en cada paciente en que se el jurel). También se ha recomendado aceite de hígado de
utilicen, recomendándose una serie de aspectos: pescado (bacalao, tiburón) que es rico en ácidos grasos
• Que la inmunoterapia debe ser indicada por un espe-
omega 3 que son poliinsaturados y de cadena larga. Hay
cialista y administrada por médicos entrenados en el quienes recomiendan que, en general, los asmáticos evi-
tratamiento de las reacciones sistémicas por si se pro- ten dietas ricas en sal.
duce anafilaxia. Con respecto a la sinusitis o el reflujo gastroeso-
• Que aquellos pacientes con múltiples sensibilidades fágico, la mayoría opinan que se deben tratar, pues pue-
alérgicas y/o desencadenantes no alérgicos, proba- den favorecer los episodios o crisis aguda de AB.
blemente no se beneficien con una inmunoterapia es- Evitar la amigdaloadenoidectomía, si no existen ra-
pecífica. zones muy justificadas, pues hay publicaciones que esta-
• Que el paciente debe estar asintomático al adminis- blecen que en los asmáticos a los que se les ha realizado,
trarse. No tener en cuenta esto puede dar lugar a aproximadamente la tercera parte empeora, la otra terce-
manifestaciones adversas, incluyendo una angeítis ra parte no mejora y el otro tercio mejora. También hay
necrotizante generalizada o síndrome de Churg- que tener en cuenta las reacciones a la anestesia general.
Strauss, aunque esto es muy poco frecuente. Las reuniones de consensos internacionales realiza-
• Que después de un episodio de exacerbación no se das en Europa, Sudamérica y Estados Unidos ponen en
debe reiniciar la inmunoterapia hasta 2 a 3 semanas duda algunas conductas como la utilización de aparatos
posteriores de la crisis, con FEM o VEF-1 superio- generadores de iones negativos en la habitación del pacien-
res al 70 % de los valores del paciente, determinado te; que diversas técnicas de fisioterapia torácica (drenaje
previamente entre las crisis. postural, percusión y vibraciones) no deben utilizarse en los
• La duración del tratamiento debe ser no menor de 2 primeros días de un episodio de exacerbación o crisis agu-
a 3 años, pero esta, junto con la forma y dosis de da, pues pueden ser perjudiciales; y algunos métodos de
administrar el extracto, deben ser determinados por terapia alternativa como la acupuntura en que algunos es-
un especialista entrenado o un alergista y aplicado en tudios controlados han encontrado que, aunque reducen las
la consulta de estos. sibilancias después de ejercicios, los efectos son pequeños
y que en la mayoría de pacientes no se ha demostrado un
APOYO PSICOLÓGICO Y EMOCIONAL. efecto duradero, achacado según ellos a una “acción
cortical”. Con respecto a la hipnosis tiene una acción dudo-
ORIENTACIÓN PROFESIONAL sa en asmáticos y quizás sirva en pacientes con trastornos
Importante para evitar trastornos emocionales o psi- emocionales. Al referirse a ejercicios yoga plantean que
cológicos más graves. Siempre deben ser suministrados pueden ser útiles solo en asmáticos con trastornos emocio-
por el personal médico a los familiares del enfermo, que nales; para otros son útiles sus ejercicios de relajación.
deben aminorar la ansiedad que produce toda afección cró- Algunas técnicas quirúrgicas como la globectomía en adul-
nica. En pacientes con asma moderada persistente, ade- tos producen una mejoría por acción emocional de dura-
más, serán apoyados por la enfermera de terreno, la ción transitoria, y tenemos entendido se ha abandonado.
trabajadora social y a veces un psicólogo. En pacientes con La homeopatía no ha demostrado sus beneficios, al igual
asma severa persistente además del anterior personal, se que la diatermia y otras medidas físicas sobre el tórax. Mu-
necesitará muchas veces la ayuda de un psiquiatra. chas de estas técnicas deben ser probadas utilizando una
Orientación profesional. Se recomiendan profe- metodología científica que puedan reproducirse y utilizando
siones o trabajos que se deben evitar: relacionados con la además pacientes testigos sin tratamiento en ninguno de
medicina, pinturas y otros irritantes, fabricaciones, limpie- los 2 grupos, para comparar los resultados. El peligro de

1002 Tomo III


muchas de estas técnicas es que el paciente y sus familia- método por una duración de meses, o, cuando la rinitis es
res abandonan los tratamientos probados como efectivo, lo estacional se comenzará este tratamiento durante 2 a 3
que puede constituir un peligro potencial para el control a semanas antes de la época de aparición de la rinitis y
largo plazo del AB. durante esta: Parece ser muy importante la inmunoterapia,
Hoy se considera muy importante tratar, entre las en pacientes con rinitis persistente, dirigida contra los
crisis o episodios agudos de exacerbación, las rinitis alergenos de los ácaros, mohos y polen (sobre todo de la
alérgicas estacionales o mantenidas, en asmáticos que las Ambrosía o grama) durante meses y después de estabili-
presentan. Se evitarán los alergenos, irritantes y otros fac- zado el paciente se suspenderá la inmunoterapia, conti-
tores que se demuestren o sospechen puedan producir nuando las otras medidas. En las rinitis estacionales se
los síntomas o exacerbaciones. Se administrarán realizará la inmunoterapia durante varias semanas antes
antihistamínicos de acción prolongada por vía bucal, o y durante la estación en que se produce la rinitis.
mejor cromoglicato disódico o esteroides por nebulizadores En el cuadro 76.4 se resume el tratamiento manteni-
nasales o en gotas, 2 a 3 veces en 24 h durante varias do o de sostén entre las exacerbaciones o crisis agudas
semanas suspendiéndolos varias semanas siguiendo este de AB.
Cuadro 76.4. Tratamiento de sostén, mantenido o entre las exacerbaciones del AB

Asma leve Asma leve Asma moderada Asma severa


intermitente persistente persistente persistente

Educación del paciente y Siempre Siempre Siempre Siempre


familiar

Medidas contra factores Siempre Siempre Siempre Siempre


exacerbantes

Medicamentos No Antihistamínicos Cromoglicato disódico, Esteroides inh.


mantenidos de acción prolongada, nedocromil y/o (>800 μg/24 h) y/o
cromoglicato disódico esteroides inh: beclome- orales en 2 subdosis
o nedocromil. tasona o budesonide: diarias o 1 sola dosis
Esteroides inh.? 400-800 μg/ 24 h a las 3 pm (15:00 h).
400 μg/24 h o menos. (u otros en dosis bio- Teofilina de liber. lenta.
equivalentes a la B2 acción prol.
beclometasona).

Entrenamiento Siempre Siempre Siempre Según tolere:


físico deportes deportes deportes ejercicios
Ejercicios Ejercicios respiratorios
respiratorios. respiratorios. Ejercicios de
Ejercicios de relajación relajación.

Inmunoterapia No Sí Sí ?
(Alergenos no (Discutido) No recomendados
evitables totalmente) Alergenos no evitabl: por algunos autores
discutido su uso por ácaros, hongos, polen de países
muchos autores, s/t en pacientes con desarrollados:
aunque hay pruebas rinitis y/o conjuntivitis. cuidados con las
de beneficios si bien Personal preparado. reacciones.
utilizadas En consulta médico.
Alergenos estándar.

Apoyo y orientación Siempre Siempre familia Siempre los anteriores Siempre los
familia médico, más sicólogo. anteriores
médico enfermera de más siquiatra.
terreno, trab. social.

Otras medidas - Tratamiento de la rinitis alérgica: medidas ambientales, cromoglicato disódico o esteroides nasales,
inmunoterapia.
- Dieta baja en sal y rica en ácidos grasos omega 3 (discutido).
- TTT de sinusitis, reflujo GE (si se demuestra o sospecha aspiración).
- Discutido: hipnosis, acupuntura, equipos de iones negativos, TTT homeopático.
- No amigdaloadenoidectomía de rutina.
- No otros TTT de adultos.
- Antileucotrienos: según edad y tipo de medicamento utilizado.
- Omalizumab (valorar costo/beneficio/respuestas secundarias).

Parte XII. Aparato respiratorio 1003


TRATAMIENTO DE LOS EPISODIOS ción del cuadro fue súbita, no sea por la as-
AGUDOS DE EXACERBACIÓN O CRISIS piración de un cuerpo extraño o sea debido
AGUDAS DE ASMA BRONQUIAL a una insuficiencia cardíaca por malforma-
ción congénita o por miocarditis. En esta
En pacientes debidamente controlados, con un tra-
última posibilidad la utilización de agonistas
tamiento de sostén o mantenido, la aparición de un epi-
beta-2 adrenérgicos pudiera producir efec-
sodio de exacerbación del AB muchas veces indicará
tos adversos. Además, un asmático com-
una violación de dicho tratamiento por lo que, después
probado podrá aspirar un cuerpo extraño o
de recuperado del episodio agudo, hay que determinar
presentar una insuficiencia cardíaca por mio-
la causa de esta violación, discutirla sin críticas y evi-
carditis o malformación congénita cardio-
tar que se repitan. Otras veces, se tendrán que modifi-
vascular.
car algunos aspectos del tratamiento de sostén. En
• Una vez realizado el paso anterior y teniendo la po-
otras ocasiones, se tratan de un factor desencadenante
sibilidad segura, o casi segura, que se trata de un
de la crisis que será difícil evitar, como un cambio me-
episodio de exacerbación o crisis aguda de un AB,
teorológico.
se procederá a clasificar la severidad del episodio
La utilización de más de un aparato para inhalar
de exacerbación o crisis aguda, en ligera, modera-
broncodilatador de acción rápida por mes (por ejemplo
da o severa, de acuerdo con los síntomas y signos y
un aparato de MDI de salbutamol 200 “puffs” por apa-
si es factible, con la ayuda de algunas investigacio-
rato) indicará que el tratamiento de sostén se debe re-
nes (Cuadro 76.5).
visar y/o modificar por lo que se deben aumentar o
• Ya realizada la clasificación de la severidad del epi-
cambiar los medicamentos que se estén utilizando.
En el tratamiento (en la APS o en cuerpos de sodio de exacerbación que presenta el paciente se
guardia o urgencias de hospitales, sobre todo procederá a realizarle el tratamiento (Cuadro 76.6).
• Hay que tener en cuenta varios síntomas y signos
pediátricos) de los episodios agudos o crisis se po-
drán seguir los pasos: que nos harán sospechar que el niño presenta un
• Cuando el niño llega a nosotros con dificultad respi-
cuadro muy severo, próximo a un paro respiratorio.
ratoria manifiesta, procederemos, en primer lugar, Se trasladará rápidamente a un servicio de urgen-
a administrar oxígeno por careta a un flujo pro- cia, pero administrándole oxígeno por careta, man-
medio de 6 L/ min, durante 10 min o más. tenido, desde que se sospeche el diagnóstico y
• Mientras se administra oxígeno se procederá a rea- comenzando, si es posible y hasta que llegue un
lizar algunas preguntas: ¿Y a ha presentado cuadros transporte adecuado, con la administración de
anteriores y está diagnosticado como asmático? esteroides, primera dosis, y después de administra-
− En caso afirmativo, se preguntará sobre el tra- do oxígeno por más de 10 min, se utilizará salbutamol
tamiento utilizado en los episodios anteriores, por nebulizador. Las manifestaciones de gravedad
tiempo de duración, medicamentos utilizados, serán varias de las siguientes: FR muy aumentada
dosis si se recuerdan y respuestas favorables o (por encima del 50 % de las cifras normales para
adversas, que muchas veces pueden estar en su edad), disnea severa, lenguaje y llanto escaso o
relación con las dosis, vías de administración y ausente, uso de los músculos respiratorios acceso-
tiempo del medicamento utilizado. rios cervicales con contractura y tiraje bajo intenso
− Sobre el episodio por el cual consulta se pre- de toda la parte baja del tórax, cianosis central, sen-
guntará desde cuánto tiempo atrás comenzó a sorio obnubilado, y más grave aún, cuando no hay
presentar las manifestaciones clínicas, el tra- respuesta o es pobre a estímulos físicos, con pocas
tamiento utilizado, las dosis, vías y efectos, favo- o ninguna sibilancias y murmullo vesicular (MV)
rables o adversos, obtenidos por los medicamentos. muy disminuido o casi ausente. En estos pacientes
− Si se trata de un primer episodio de dificul- no se realizará ninguna investigación como la de-
tad respiratoria con sibilancias y por lo que terminación del FEM. La aparición de bradipnea y/
no podemos determinar que el niño sea un o bradicardia o convulsiones, será más aún de peor
asmático, se tendrá que indicar un tratamien- pronóstico. Se ingresarán en el hospital, y si es po-
to sintomático y tener en cuenta, si la apari- sible, en una UCI.

1004 Tomo III


Cuadro 76.5. Severidad del episodio de exacerbación o crisis aguda de AB

Episodio
Síntomas y signos Ligero Moderado Severo

- Frecuencia respiratoria No aumento Aumento Aumentada


o <25 % de lo o e/ 25 y 50 % o más del 50 % de N
normal (N) de N

FR según edad = <2meses: 2-12meses: 1-4 años: <40/min. 5-9 años : <30/min.
<60/min <50/min 10 o más años: <20/min.

- Disnea (según edad) No o ligera Moderada Severa

- Lenguaje Normal Frases cortas Palabras aisladas


Frases cortas

- Llanto Normal Entrecortado Débil o ausente

- Tiraje No o ligero Moderado Severo


(bajo) (alto y bajo)

- Músculos accesorios No Uso del esternocleido- Uso, además, del trapecio


(contracturados) mastoideo y escalenos

- Piel y mucosas Normal Pálidas Pálidas, sudosas o


cianosis central

- Sensorio Normal Normal o irritable Muy irritable


u obnubilado.
Mala respuesta
a estímulos

-Auscultación Sibilantes Sibilantes Pocas o no sibilancias


espiratorios espiratorios
e inspiratorios

- Murmullo vesicular Normal Disminuido Muy disminuido o casi ausente

- Pulso paradójico <10 10-20 > 20


(mm/Hg)

- O2 Sat (%) >95 90-95 < 90

- PCO2 (mm/Hg) < 35 35-40 > 40

- FEM 70-90 % de lo normal (N) 50-70 % de N < 50 % de N

Nota: Si por la clasificación presenta un episodio moderado, pero un solo síntoma, signo o investigación aparece como severa; por ejemplo,
muy irritable, clasificaremos al niño como con un episodio severo

• Existe un grupo de factores de riesgo cuya presencia nos cados” pues entre nosotros, no siempre las hos-
hará analizar el ingreso de un paciente con un episodio de pitalizaciones son justificadas, pero en caso de
exacerbación. Estos pacientes pueden tener un pronós- duda o por factores casi siempre no médicos,
tico adverso y hasta con riesgo para la vida cuando: como dificultades familiares o lugar del domici-
− Están con tratamiento o han estado en los últi- lio, se hospitalizan.
mos 6 a 12 meses con tratamiento de − Han ingresado en una unidad de cuidados inten-
corticoesteroides sistémicos o inhalados, estos úl- sivos en los últimos 12 meses, por insuficiencia
timos a dosis consideradas elevadas. respiratoria severa.
− Han asistido repetidamente a servicios de urgen- − “Asmáticos lábiles” cualquiera que sea la severidad
cia durante el episodio actual. Se evaluará que el del episodio con el cual llegue a nosotros. Se trata
tratamiento haya sido correcto y si se ha cumpli- de pacientes, poco frecuentes, que presentan ante-
do debidamente. cedentes de episodios esporádicos severos, entre los
− Hospitalizaciones repetidas por episodios agudos cuales los pacientes están clínica y por PFR
de AB; pudiéramos agregar la palabra “justifi- asintomáticos, y que en pocas horas se agravan.

Parte XII. Aparato respiratorio 1005


Asmáticos en que no se cumple el tratamien-
− − Incumplimiento del tratamiento en su domicilio.
to, por el paciente o por sus familiares, debi- Se trata de la causa más frecuente de una evolu-
do a padecimientos siquiátricos o problemas ción no favorable de un episodio agudo de AB; se
sicosociales familiares o personales. debe investigar reiteradamente esta posibilidad.
− Pacientes que no han respondido a las medi- − Persiste en contacto mantenido con factores
das llevadas a cabo o con uso inadecuado, por desencadenantes, alergenos o irritantes princi-
defecto o por exceso, de los medicamentos. palmente, o cualquier otro factor que no se pue-
− Pacientes o familiares que no reconocen la
de o no se quiere eliminar (animales domésticos)
existencia de síntomas y signos moderados o
por parte de la familia.
severos; que no buscan ayuda médica en tiem-
− Cuando existen complicaciones: atelectasias, in-
po o no comienzan un tratamiento precoz.
− Factores geográficos o dificultades en trans-
fecciones, reflujo gastroesofágico, aire
porte, que no le permita tener acceso a una extraalveolar (neumotórax, neumomediastino y/
atención médica adecuada al presentar o au- o “enfisema” subcutáneo).
mentar la severidad de un episodio. − No es un asmático. Presenta otra afección (que
− Pacientes o familias conocidas, en que no se ten- puede o no coexistir con AB) ya citadas ante-
ga confianza por problemas sicosociales, fami- riormente en este capítulo bajo la denomina-
lias “disfuncionales” o por alguna otra causa. ción de síndrome de obstrución bronquial difuso
• Cuando un paciente con un episodio de exacerba- o de “atrapamiento” aéreo como fibrosis
ción no evoluciona adecuadamente a pesar de un tra- quística, déficit inmunológico, u otras. (Ver
tamiento correcto, puede ser por: Diagnóstico de AB.)

Cuadro 76.6. Medicamentos en las exacerbaciones del asma en niños

Medicamento y vía Dosis = d. Continuación (dosis=d.)

Beta-2 agonistas

• Salbutamol (albuterol)
- bucal (jarabe 2 mg/5mL) 0,1 mg/kg/d o según edad: Cada 6-8 h
< 1 año = 1 mg/d.
> 1 año = 2 mg/d.

- nebulizaciones (sol. 0,5 % = 5 mg = 1.00 mL) O2 previo 10-20 min


2,5 mg = 0,50 mL 0,1-0,3 mg/kg/d. (episodio moderado o severo)
1,25 mg = 0,25 mL ó por edad por d. Cada 20-30 min x 3d.
<1año: 1,25 mg Después c/1h, c/4 o c/6 h
1-4 años: 2,50 mg (según evol. y severidad).
5-12 años: 5,00 mg
>12 años: 5-10 mg

- MDI (100 μg/inh. o “puff” ) 1 “puff” Cada 1-5 min. 2-4 d.


Después c/ 1, c/4 o c/6 h
(según evol. y severidad).

con espaciador 0,075 mg/kg/d. Cada 6-8 h


1 “puff”

• Terbutalina
- bucal Cada 1-5 min × 2d.
- MDI (200 μg/“puff”)
con “terbuhaler” ®

- Epinefrina
Sol. acuosa al 1 x 1 000 s.c. 0,01 mL/kg /d. Cada 20-30 min × 3d. después cada
(Máx. 0,3 mL/d.) 6-8 h o pasar a otro broncod.
O2 previo 10 min o más si crisis mode
radas o severas.

1006 Tomo III


Cuadro 76.6. (continuación)

Medicamento y vía Dosis = d. Continuación (dosis=d.)

- Bromuro de ipratropio (250-500 mcg/mL) Cada hora x 3 d. ó cada


Nebulizaciones 20-30 min × 3 d., con o sin Salbut.

- MDI (40 μg/ “puff”) 1 “puff” Cada 1 a 5 min × 2d. después


con espaciador cada h × 3 d (con o sin Salbut).

- Xantinas
- Bucal (teofilina) 4-5 mg/kg/d. Cada 6-8 h
i.v. (aminofilina) 5-6 mg/kg/d. Cada 6 a 8 h (bolo) ó i.v.
contínua: 0,6-0,9 mg/kg/h

- Esteroides
Prednisona bucal 1 mg/kg/d. Cada 6 h; desp.7am y 3pm
Hidrocortisona i.v. e i.m. 5 mg/kg/d. i.m. o i.v. ( y pasar a un esteroide
(Máx/d 100mg) bucal lo más pronto posible)

Tomado de:Henry R, et al. Serie HCT/AIEPI-8 Benguigui Y. ed. OPS/OMS 1997.


Hakonarson H, Grunstein M. En: Asthma. Barnes P, et al. Eds. 1997.
Levy B, Kitch R, Fanta CH. Int Care Med (Verlag) 1998.

Esquema de tratamiento tamiento de sostén) por lo que sería ideal las


de los episodios de exacerbación dosificaciones de teofilina en suero (imposible en
la práctica diaria), ajustando las dosis para que
o crisis aguda de AB según su grado se mantengan cifras entre 5 y 15 μg/mL. Hoy
de severidad se utiliza cada vez menos en el tratamiento de los
episodios agudos, pero si no se tiene epinefrina o
Episodios leves agonistas beta-2 adrenér-gicos, se tendrá que uti-
• Comenzar el tratamiento con broncodilatadores. En lizar la teofilina bucal en estos episodios. No se
orden de preferencia: recomienda, habitualmente, asociarla con otro
− Estimulantes beta-2 adrenérgicos, preferente- boncodilatador en particular agonistas beta-2
mente salbutamol (albuterol) por vía bucal (dis- adrenérgicos, ni utilizar la teofilina o sus deriva-
cutido), por MDI (preferiblemente con dos, por vía rectal.
espaciadores) o por nebulizadores. En su lugar − El bromuro de ipratropio por nebulizaciones: es-
se puede utilizar terbutalina por vía bucal o por tará indicado cuando el paciente es intolerante,
MDI. Se utilizará una dosis por vía bucal c/6 no responde satisfactoriamente o con una res-
a 8 h, o por vía inhalatoria: MDI o nebulizadores, puesta paradójica de broncoconstricción (excep-
una dosis cada 20 a 30 min hasta 3 dosis, según cional) al salbutamol, o en las crisis agudas, que
sea necesario (Cuadro 76.6). no responden a los beta 2 agonistas, producidas
− Otra variante sería (si no se tiene a mano alguno
por la utilización de inhibidores beta-2
de los broncodilatadores beta-2 agonistas anterior- adrenérgicos, como el propanolol por cualquier
mente citados), la epinefrina por vía subcutánea vía, incluyendo gotas oculares. En estos últimos
(s.c.): una dosis cada 20 a 30 min hasta 3 dosis, años se ha planteado que en el receptor beta 2
según necesidades, en solución acuosa al 1 x 1 000. agonista del músculo bronquial, en el sitio 16 de la
− Se pudiera utilizar teofilina por vía bucal cada 6 a cadena de pares de aminoácidos que lo constitu-
8 h de comienzo y a la dosis recomendada (Cua- yen, habitualmente se presenta la glicina (Gly/Gly)
dro 76.6). Se reducirá la dosis a la mitad si se ha y el paciente es sensible a la acción del
utilizado teofilina en las últimas 8 h o teofilina de salbutamol; pero hay personas que en ese sitio
liberación lenta en las últimas 24 h, si hay fiebre 16 presentan arginina (arg/arg) en las que el
de más de 38° C por más de 12 h o cualquier otro salmutamol no actuaría (o actuaría exacerban-
de los factores que pueden aumentar la concen- do el broncospasmo?) y en cambio estaría indi-
tración en sangre (Cuadro 76.3). Vigilar signos cado el bromuro de ipratropio, al cual
adversos o de intoxicación (descritos en el tra- responderían satisfactoriamente.

Parte XII. Aparato respiratorio 1007


• Hidratación por vía bucal, según requerimientos y to según las manifestaciones clínicas. La utiliza-
deseos del niño. ción de broncodilatadores sobre todo beta-2
• Sacarlo del medio en donde puedan haber adrenérgicos solamente se mantendrán según la
precipitantes de las crisis de AB sobre todo presencia de sibilancias y otras manifestaciones
aeroalergenos, irritantes u otras causas que se co- de broncocons-tricción. No se recomienda el uso
nozcan, o sospeche, que intervienen en las crisis mantenido de broncodilatadores beta-2
en el paciente. adrenérgicos de acción corta, pues se ha descrito
• Antitérmicos si fiebre. Evitar el ácido que pueden exacerbar la hiperreactividad bronquial
acetilsalicílico, sobre todo, si hay o se sospecha por un uso indebidamente mantenido.
intolerancia a este. Hay publicaciones que pare-
cen demostrar que el ibuprofeno es bien tolerado Episodios moderados
por los asmáticos. • Oxígeno. La mayoría recomienda, al inicio de cuadro
• Nunca antibacterianos, excepto frente a una cri- clínico, la utilización de oxígeno por careta a un flujo
sis desencadenada por infecciones bacterianas, promedio de 6 L por min durante 10 a 15 min, si el
demostradas por microbiología o por una alta sos- episodio moderado tiene más de 1 a 2 h de duración.
pecha clínica. Los cuadros de AB desencadena- Otros lo utilizan, siempre, de comienzo.
dos por infecciones se considerarán de causa viral • Broncodilatadores, preferiblemente salbutamol
hasta que no se demuestre, científicamente, lo (albuterol) en nebulizaciones (sol. al 0,5 %), la canti-
contrario. dad necesaria diluida en 4 a 5 mL de solución salina al
• Explicar a los familiares que están con el niño, el 0,9 %. Si el paciente está entrenado se podrá utilizar el
estado de este; evitar la ansiedad. Conducta tran- salbutamol por aparatos de MDI con espaciador. Se
quila frente al paciente o sus acompañantes. utilizarán hasta 3 dosis por MDI o nebulizador y con
• Nunca utilizar en niños con crisis de AB: sedantes, flujo de oxígeno (o menos frecuentemente aire com-
antitusígenos, “expectorantes” o “fluidificantes”, primido), de 6 a 8 L /min, separadas cada dosis entre
incluyendo la N-acetilcisteína en nebulizaciones 20 a 30 min examinando al paciente después de cada
(que puede producir broncoconstricción, agravan- aplicación. Después de la tercera dosis si existe
do la crisis), atropina, sulfato de magnesia i.v. (hay mejoría se observará al paciente por pocas horas y
quienes plantean que no es efectivo y otros que sí si es necesario (y planteándose la hospitalización) se
lo es), opiáceos, alcohol u otros medicamentos de repetirá una nueva dosis por vía inhalatoria (preferi-
eficacia no comprobada o que puedan producir blemente por nebulizador) a la hora. Si hay mejoría,
se continuará el tratamiento por vía inhalante en la casa
efectos adversos. La utilización de yoduro de
según facilidades, pero si esto no se puede llevar a
potasio puede producir, con su uso mantenido, di-
cabo, se continuará con jarabe de salbutamol cuando
versos efectos nocivos entre ellos sobre la glándu-
ha habido una gran mejoría con el salbutamol inicial o
la tiroides.
con teofilina por vía bucal en la dosis recomendada en
• Casi nunca se ingresarán salvo que exista alguno
el cuadro 76.6.
de los factores de riesgo anteriormente citado.
• En lugar del salbutamol, se podrá utilizar terbutalina
• Cuando después de verificar que el cuadro no re-
por MDI con espaciador Nebuhaler ®.
aparece, ni empeora, en las horas que sigue al tra-
• Otra variante es comenzar con epinefrina acuosa al
tamiento con broncodilatadores, se enviará a su
1 x 1000 hasta 3 dosis separadas por 20 a 30 min
domicilio u otro lugar de acuerdo con las facilida- cada una. Si mejora se continuará con un
des, con el tratamiento explicado y por escrito. Lo broncodilatador (teofilina bucal, o mejor, salbutamol
ideal será continuar con el tratamiento con que se o terbutalina inhalatorias), cada 4 a 6 h.
comenzó, utilizando salbutamol por vía bucal, por • El bromuro de ipratropio se utilizará según indicacio-
MDI con espaciador (niños entrenados) o por nes ya citadas en los episodios ligeros. También se
nebulizadores, o se comenzará con teofilina por vía puede aplicar en nebulizaciones junto al salbutamol
bucal, si lo anterior no se puede realizar, según las utilizándolo en la dosis recomendada (Cuadro 76.6)
dosis e intervalos recomendados en el cuadro 76.6. en el mismo nebulizador, hasta 3 dosis.
• Que sea seguido por su médico de APS dentro de • Hidratación por vía bucal; excepcionalmente i.v., en
las 24 h siguientes, el que continuará el tratamien- venoclisis, por el menor tiempo posible.

1008 Tomo III


• Evitar el contacto con factores desencadenantes o Episodios severos
agravantes (como en los episodios leves). • Hospitalización inmediata con oxígeno por cateter
• Corticosteroides por vía bucal. Hay quienes los nasal o cánulas nasales (prongs) con un flujo de oxí-
utilizan de comienzo por vía bucal (prednisona o geno según la edad:
prednisolona; Cuadro 76.6). Otros, los utilizan, si − menores de 1 año = 0,5 ó 1 L/min.
no hay mejoría después del tercer broncodilatador, − 1 a 3 años de edad = 2 ó 3 L/min.
por nebulización o por MDI. La utilización de − 4 o más años = 4 ó más L/min.
esteroides (por ejemplo hidrocortisona en dosis de No se recomiendan las tiendas de oxígeno, pero
si estas tienen que utilizarse se mantendrá el oxí-
5 a 10 mg/kg sin sobrepasar los 100 mg/dosis, pues
geno humedificado (sin necesidad de atmósfera
dosis mayores no producen más efecto) por vía
húmeda), bien cerrada la tienda y con las demás
parenteral, no tiene, al parecer, beneficio sobre los
precauciones que se tienen que tener en cuenta
esteroides bucales excepto en pacientes antes de cuando se administra el oxígeno por tienda. La
trasladarlos al hospital, si hay manifestaciones de duración de la administración de oxígeno depen-
colapso vascular, el niño se niega a ingerir el derá de la evolución clínica (y gasométrica o de la
esteroide o presenta vómitos. La dosis se repetirá Sat O2 por oxímetría transcutánea si es posible).
cada 6 h según sea necesario, pasando al esteroide, − Bicarbonato de sodio al 4 %. Excepcionalmente
por vía bucal, lo más pronto posible, cada 6 h du- utilizado pues la acidosis metabólica desapare-
rante las primeras 24 h y después 2 veces al día cerá con la administración de oxígeno. En ca-
(Cuadro 76.6) por 3 a 10 días (de promedio por 4 a sos muy poco frecuentes y muy graves, en que
5 días) sin que se tenga que disminuir progresiva- se demuestre una acidosis metabólica se utiliza-
mente las dosis. rá bicarbonato de sodio al 4 % (1 mL = 0,5 mEq
• Antitérmicos si fiebre y nunca antibacterianos de Na+) i.v., lentamente, según la fórmula:
teniendo en cuenta lo señalado en los episodios
0,6 x kg (BE – 2,5)
ligeros. mEq de Na+ a utilizar =
• Explicar a la familia el estado del niño, evitar ansie- 2
dad con una actitud calmada y realizar valoraciones
periódicas y separadas según la evolución del cuadro. Nunca se administrará la dosis total de inicio; se
• Nunca utilizar productos de eficacia no comproba- administrará la mitad de la dosis total, lentamente,
da o que puedan producir efectos adversos, como por vía i.v. y a la hora, después con una gasometría
se aclaró en los Episodios ligeros. previa y según sus resultados, se administrará la
• Ingreso. Se podrá continuar el tratamiento en el do- otra mitad de la dosis calculada, si es necesario.
micilio del niño, salvo que existan factores de ries- Siempre se seguirá administrando oxígeno y es muy
go, que se deben analizar. Antes de remitirlo al hogar difícil que sea necesaria la utilización del bicarbo-
se debe vigilar al niño por pocas horas constatando nato. Se cita más bien para recomendar que no se
que ha mejorado o que las manifestaciones no re- utilice, salvo en casos muy excepcionales.
− Broncodilatadores. Salbutamol (sol. 0,5 %) en
gresan antes de 4 h. De no mejorar el niño se hos-
pitalizará con oxígeno por varias horas según la nebulizador (con oxígeno) según la dosis reco-
mendada (Cuadro 76.6), repetidas cada 20 a 30
evolución clínica (y saturación de oxígeno por equi-
min hasta 3 dosis. Se pueden repetir después
pos de medición transcutánea si es posible) y se
una dosis cada hora hasta 3 veces y según la
tratará como un episodio severo.
evolución ulterior, cada 4 ó 6 h y siempre conti-
• Al enviarlo a su domicilio desde el servicio de ur-
nuando con el oxígeno entre las dosis.
gencia o después de estar ingresado el menor tiem-
Se pudiera agregar al salbutamol, bromuro de
po en el hospital, salvo que existan importantes ipratropio mezclándose una dosis con cada dosis
factores de riesgo, se seguirán las mismas reco- de salbutamol en el mismo nebulizador (Fig.76.4).
mendaciones que en Episodios ligeros. Si el niño tiene La utilización de salbutamol o terbutalina por vía
tratamiento de sostén o intercrisis se continuará o parenteral se reservará habitualmente para las
modificará según su médico de APS u otro que esté UCI y parecen no ser francamente superiores a
al frente del niño, y si no lo tiene, se evaluará co- las nebulizaciones, teniendo el peligro de efec-
menzar el tratamiento de sostén. tos adversos como la hipocalemia

Parte XII. Aparato respiratorio 1009


No se recomienda, por la mayoría, la utiliza- 30 a 50 mEq/m 2 /24 h y K+ a dosis de 40 a
ción conjunta de salbutamol por cualquier vía y 60 mEq/m 2 /24 h o la solución que tenemos de
gluconato de potasio (Polisal ®): 2 mL por cada 100
aminofilina i.v. pues se establece que no existe
mL que queden por pasar de la venoclisis, una
acción aditiva y hay peligro de mayores mani-
vez que el paciente haya orinado.
festaciones tóxicas. Hay autores que la utilizan a Se descontarán los líquidos ingeridos por vía bucal
las 4 h de comenzado el tratamiento con salbutamol, del que se está administrando por vía i.v. cada 6 h,
si no existe mejoría del cuadro severo. por el peligro de edema pulmonar no cardiogénico.
• Esteroides por vía parenteral (pocas horas si nece- La hidratación i.v. se utilizará por el mínimo tiempo,
sario) o por vía bucal como se describió en las crisis pasando a la vía bucal en cuanto sea posible.
moderadas y según las dosis del cuadro 76.6. Tar- • No se utilizarán antibacterianos excepto cuando exis-
dan en actuar, casi el mismo tiempo, tanto por vía ta una infección bacteriana como se planteó en los
parenteral como por la bucal, como mínimo 2 a 4 h, Episodios ligeros o en los moderados. Igual conducta
dependiendo del paciente y/o del esteroide utilizado. con los antitérmicos.
• Hidratación preferiblemente bucal. Solo en pocos • Está contraindicada la fisioterapia torácica en los pri-
casos se utilizará la vía i.v. a la dosis de dextrosa meros uno a dos días del episodio; posteriormente,
al 5 % en agua de 1 500 mL/m2/24 h, Na+ y Cl- de según las necesidades.

Fig. 76.4. Algoritmo para el tratamiento en atención primaria de los episodios de las exacerbaciones del AB.

1010 Tomo III


• No se utilizarán aquellos medicamentos de eficacia Malka S. Consideraciones Prácticas para el Diagnóstico y
no comprobada o que puedan tener efectos adver- Tratamiento del Asma. Grupo LA para el Estudio y
sos, ya aclarados en los Episodios ligeros. Tratamiento del Asma. Reunión de consenso realizada en
Caracas, Venezuela en 1997. Actualizada y publicada en
• Evitar la ansiedad familiar y del paciente, con una actitud 1999. OPS/OMS, Soc. Venez..de Alergia, Asma e
tranquila, evaluar frecuentemente al niño, sin molestarlo Inmunología, UNASMA y FUNDASMALER, Caracas,
y explicar las medidas que se están tomando. Vnezuela. 1999.
Marian N. Prasad L. Genetics in Asthma: A Review. Chest
• Cuando el paciente no mejora en el Servicio de Afec-
1997; 112:1397-1408.
ciones Respiratorias se trasladará a la UCI. Cada McKenzie SA. Bush A. Difficult asthma. Thorax 2002; 57: 915-916.
vez se utiliza menos la intubación en el asmático gra- Medscape. Omalizumab. Medscape Allergy & Clin Imm 2005.
ve y si es necesaria, se utilizará con las nuevas técni- Provisional Committee of Am Acad Pediatr On Quality
Improvement Practical Parameter. The Office Management of
cas de ventilación. Acute Exacerbations of Asthma in Children. Pediatrics.
• Al enviarlo a su domicilio se darán las mismas indica- Special Article. 1994; 93:119-126.
ciones que en los Episodios moderados. Siempre se Pijnenburg MW, Hofhuis W, Hop WC, De Jongste JG. Exhaled
nitric oxide predict asthma relapse in children with clinical
habrá de revisar, por el médico del paciente, el trata- asthma remission. Thorax 2005; 60: 215-218.
miento de sostén o interepisodio o comenzarlo, si no se Sandford A, Weir PD. The Genetics of Asthma:State of the Art.
estaba utilizando. Hay que aclarar que cualquier asmá- Am J Respir Crit Care 1996; 153:1749-1765.
tico (leve intermitente o leve, moderado o severo per- Sears MR, Greene JM, Willan AR, Wieck EM, et al. A
longitudinal, Population-Based, Cohort Study of Chidhood
sistente) puede presentar un episodio de exacerbación Asthma Followed to Adulthood. N Eng J Med 2003;
de cualquier severidad (ligera, moderada o severa). 349:1414-1422.
Sheffer AL et al. Global Initiative for Asthma. NHLB/WHO
Bibliografía Workshop Report 1993. Pub No. 955659. Bethesda, USA. 1995.
Shapiro SD, Owen CA. ADAM-33 surfaces as an Asthmatic
AIEPI/OPS. Foro regional sobre el control del ASMA en el Gene. N Eng J Med. 2002; 347: 936-938.
contexto de AIEPI. Organización Panamericana de la Salud. Shore SA. Airway Smooth Muscle in Asthma. Not Just More of
1999 Junio 24-26. Isla Margarita, Venezuela. Washington: the Same. N Eng J Med 2004; 351: 531-532.
Serie HCT/AIEPI-35.E. 2000. Silverman M, Taussig L. Early Childhood Asthma: What are the
Bousquet J., Heijaoui A., Michel FB. Specific Immunotherapy in Questions? Amer J Resp Crit Care Med 1994; 151: 50-542.
Asthma. J Allergy Clin Immunol 1990; 86: 292-306. Staffa JA. Risk of selected serious cardiac events among new
Castro Rodíguez JA. Implicaciones del GOAL en el asma infantil. users of antihistaminics. Clin Ther 1995; 17:1062-1077.
An Pediatr (Barc). 2005; 62: 519-521. Stempel DA, Szeffler SL Asthma. The Pediatr. Clin. N.A. Volumen
Gelfand EW.. Responses to Allergens and Viruses: Age Matters. 39 Diciembre (volumen dedicado a Asma Bronquial en
© 2004 Medscape. Niños). 1992.
Guivellin L, et al. Systemic Necrosis Angiitis with asthma: Causes Strunk RC. Asthma diagnosis of preschool children.
and Precipitating Factors in 43 Cases. Lung. 1987; 165:165-72 Pediatrics. 1989; 109: 357-361.
Hakonarson H., Grunstein MM. Management of Childhood Talbot TR, Hartert TV, Miitchel MS, Halasa N , et al. Asthma as
Asthma. En: Asthma. Barnes P.J. Grunstein MM, Leif AR, a Risk Factor for Invasive Neumococcal Disease. N Eng J
Woolcock AJ, eds. p1847-1868. Lippincott-Raven Publs; Med 2005; 352: 2082-2090.
Philadelphia, USA. 1997. Toogood JH. Inhaled Steroids En: Asthma. Barnes PJ Grunstein
Harrison BDW. Difficult asthma (Editorial) Thorax 2003; 58: MM, Leif AR, Woolcock AJ. eds. Lippincot-Raven Publs.
555-556. Philadelphia, USA. 1997.
Henry R. Berman S., Campbell H. Broncodilatadores y otros Venegas G. ed. ASMA, DIAGNOSTICO Y MANEJO. VI Curso
medicamentos para el tratamiento de las enfermedades Postgrado Anual de la ACMI (Asociación Colombiana de
asociadas con sibilancias en niños. En: Infecciones Medicina Interna) con el apoyo de la Soc. Colombiana de
Respiratorias Agudas. Fundamentos Técnicos de las Estrategias de Neumología y Cirugía del Tórax y la Asoc. Colombiana de
Control. Benguigui Y. ed. p66-92. Serie HCT/AIEPI-8. Alergia, Asma e Inmunología. Santa. Fé de Bogotá, Colombia.1998.
Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial Van Bever HP, Stevens WJ. Pharmacotherapy of Childhood
de la Salud; Washington DC, USA. 1997. Asthma. Drugs 1992; 44: 36-46.
Holgate ST, Lock G. Improving the management of atopic diseases. Vonk JM, Postma DS, Brezen, et al. Asthma chidhood factors
Arch Dis Child. 2005; 90: 826-831. associated with asthma remission after 30 years follow up.
National Institutes of Health. Highlights of the Expert. Panel, Thorax 2004; 59: 925-929.
Report 2: Guidelines for the Diagnosis and Management of Warner JO. Asthma: a follow up statement from an international
Asthma. NHI Publication No. 97-40501A. Bethesda, USA. 1997 paediatric asthma consensus group. Arch Dis Child 1992;
Khan KK. Save your Breath. A guide to effective control of 67: 240-248.
asthma. Asthma Society of Canada y Astra Pharm. Inc. White MC, Etzel RA. Re-examination of epidemic asthma in
Toronto, Canada 1994. New Orleans, Louisiana, in relation to the prevalence of soy
Kimetowicz J. Allergens to cockroach. N Eng J Med 1997; at the harbor. Am J Epidemiol 1997; 145:432-438.
456:336-363. Woolcock AJ. Asthma: What are the Important Experiments? State
Malka S. Asma? Alergia? Las respuestas de algunas dudas que Ud. of the Art Conference Summary. Am Rev Respir Dis
puede tener. FUNDASMALER (Fundación para Padres de 1998; 38:730-744.
Niños Asmáticos y Enfermedades Alérgicas). Caracas, Zimmerman B. THE NEW FACE OF ASTHMA.(Booklet).
Venezuela. 1994. Ontario: Canadian Allergy Information Ass. 1993

Parte XII. Aparato respiratorio 1011


Se manifiesta por alteraciones en las células
epiteliales y anormalidades en las glándulas
. Capítulo 77 . exocrinas. Para muchos, los principales problemas en
la FQ consisten en alteraciones en la humidificación de
las secreciones de esas glándulas y en anormalidades
Fibrosis quística en la conducta de macromoléculas. Estas alteraciones
o mucoviscidosis y anormalidades hacen que se presenten múltiples ma-
Manuel Rojo Concepción nifestaciones clínicas, de intensidad y localización varia-
bles. El sistema respiratorio es uno de los que presenta
La fibrosis quística (FQ) o mucoviscidosis es, con más frecuencia los efectos de la afección, muchas
hasta ahora, una afección incurable y la más letal de veces severos y mortales. También se manifiesta de
las afecciones genéticas en los niños blancos, caucásicos. manera importante en el sistema digestivo, donde se pro-
Presenta los aspectos: duce, en más del 85 % de los pacientes, una dificultad
• Generalizada. en la digestión y absorción adecuada de los nutrientes
• Hereditaria. de la dieta, debida sobre todo a una insuficiencia
• Se manifesta por alteraciones en las células epiteliales pancreática exógena, y en las glándulas sudoríparas
y anormalidades en las glándulas exocrinas. que producen en la mayoría de los pacientes un su-
• No es tan rara. dor con cifras elevadas de electrólitos, en particu-
• No presenta una predilección por un sexo sobre otro. lar del cloro (Cl-).
• Frecuente en la niñez, pero no exclusiva de ella. No es tan rara. Se considera que la frecuencia
de la FQ es de 1 x 2 500 a 1 x 3 500 en recién nacidos
Generalizada. Afecta, directa o indirectamente, a vivos (RNV) de la raza blanca, caucásicos, y de 1 x
una parte de todos los aparatos o sistemas del cuerpo 10 000 a 1 x 17 000 en RNV en negros. Al parecer en
humano (afección multisistémica), en particular las vías otras razas, sobre todo la amarilla, es menos frecuente.
aéreas, sobre todo las bajas (y secundariamente los pul- Hay autores que plantean que en la raza negra algunas
mones), glándulas sudoríparas, páncreas, intestinos, hí- mutaciones pueden ser frecuentes y que la FQ en esta
gado y vías biliares, conductos deferentes y epidídimo raza no ha sido más diagnosticada debido a la alta fre-
(varones) y menos frecuentemente, cuello uterino (hem- cuencia de diagnósticos incorrectos como diarrea infan-
bras). til, malnutrición y/o infección pulmonar crónica. En todas
Hereditaria. Es una afección hereditaria autonó- las naciones en que se ha investigado se han encontrado
mica recesiva, al parecer producida fundamentalmente, pacientes con FQ. En Cuba hace más de 30 años se
por un solo gene alterado denominado gene FQ. Se han realizó, auspiciada por la Asociación Internacional de FQ
descrito, hasta el 2004, más de 1 000 mutaciones y más (ICF[M]A) y el MINSAP, con el BM-Test MECONIO
de 300 polimorfismos difererentes. Se manifiesta cuan- ®, realizándole a los positivos electrólitos en el sudor por
do una persona hereda un gene FQ de la madre y el otro iontoforesis con pilocarpina, una investigación nacional
gene FQ del padre. Cuando el paciente hereda los 2 por nuestra Comisión Cubana de Fibrosis Quística
genes FQ con la misma mutación se denominan (CCFQ) durante un año, en algo más de 23 000 RN
homocigótico y cuando hereda 2 genes FQ que tienen vivos en los 12 principales hospitales obstétricos en toda
una mutación diferente se denomina heterocigótico la isla; cifra que representó, en el grupo estudiado, alre-
compuesto. Los padres de los pacientes tienen, habi- dedor de la quinta parte de los RNV que tuvimos duran-
tualmente, cada uno de ellos, un solo gene FQ y se de- te ese tiempo y se encontró una frecuencia algo mayor
nominan heterocigóticos; y no padecen de FQ, pero de 1 x 5 000 RNV.
pueden trasmitir el gene mutado a sus hijos. Desde hace No tiene predilección de un sexo sobre el
algunos años, se plantea la existencia de genes modifi- otro. Aunque hay algunas publicaciones que señalan una
pequeña predilección sobre el sexo masculino, la mayo-
cadores que pudieran cambiar la expresividad clínica de
ría de los autores establecen que no hay predominio de
la enfermedad o fenotipo, sobre todo en lo referente a
un sexo sobre el otro. Muchos han planteado que la
las manifestaciones broncopulmonares. Hay factores
mortalidad es mayor en el sexo femenino después de los
exógenos que también intervienen en la expresividad de
6 años de edad. En algunos estudios en niños con FQ se
la afección o fenotipo.

1012 Tomo III


ha encontrado que los varones son en general más pe- y el otro del padre. Aquellos que son heterocigóticos; es
queños y delgados que las hembras de la misma edad, decir, con un solo gene FQ, heredado de la madre o del
pero estas presentan una mayor disminución de las prue- padre, podrían transmitir el gene pero no padecerían la
bas funcionales respiratorias (PFR), y lo relacionan con enfermedad. Cuando 2 heterocigóticos del gene FQ (1
variaciones en el tamaño de las vías aéreas entre ambos de cada 25 personas blancas según países desarrolla-
sexos, que pudiera intervenir en el pronóstico diferente dos; en Cuba se plantea para toda la población que sea
entre ambos sexos. alrededor de 1 por cada 50 personas o más) tienen des-
Frecuente en la niñez, pero no exclusiva de
cendencia habrá en cada embarazo 4 posibilidades:
ella. En Cuba desde 1974, en que se fundó, hasta di-
• Una posibilidad de 4 en tener un hijo con FQ
ciembre de 1996, la CCFQ encontró, en algo más de
(homocigótico o heterocigótico compuesto).
300 pacientes, reportados por distintos núcleos de traba-
• Posibilidades de 4 en tener un hijo portador de un
jo, que el 55 % de los pacientes comenzaron con mani-
festaciones clínicas en el primer año de la vida; el 33 % gene FQ (heterocigótico) que podrá, a su vez, trans-
las comenzaron entre 1 a 4 años de edad y casi el 3 % mitir un gene FQ a sus hijos, y
presentaron los primeros síntomas siendo adultos, des- • Una posibilidad de 4 de tener un hijo sin ningún gene
pués de una niñez reportada como normal. Se ha seña- FQ (considerado como sano en lo que respecta a la
lado que su aparición en adultos es de alrededor del 7 % FQ).
en países desarrollados. Muchos de estos pacientes pre-
sentaron formas oligosintomáticas (como deposiciones En 1989 Lap-Chee-Tsui, Riordan, Collins y otros
alteradas y alteraciones en el peso o sinobronquitis cró- investigadores, en dos grupos de estudio separados, uno
nicas) y generalmente presentan mutaciones poco fre- en Canadá y otro en Estados Unidos de Norteamérica,
cuentes. reportaron que habían aislado el gene de la FQ en el
En 1998, Schwierbert, Benos y Fuller, resumie- brazo largo del cromosoma 7 en su parte media, posi-
ron que la FQ era una afección autosomal recesiva cau- ción 7q31. Este gene codifica un polipéptido con 1 480
sada por mutaciones en el gene FQ que codifica una aminoácidos que se designó por la abreviatura de CFTR
proteína (denominada CFTR más de 20 años atrás). como ya se planteó anteriormente. El gene FQ es un
Dicha CFTR, abreviatura del inglés de cystic fibrosis gene que ha sufrido un cambio o mutación en tres pares
transmembrane conductance regulator (o regulador de de bases de la cadena del DNA del cromosoma 7 y la
la conducción transmembranosa para la fibrosis quística CFTR que se codifica a partir de este gene no es normal
o RTFQ en español, aunque en general se denomina en (mutada) o está ausente, produciéndose un efecto anor-
el mundo por la abreviatura en inglés) se comporta como mal en las distintas células epiteliales del organismo que
una proteína transportadora multifuncional. Su disfunción contienen este polipéptido. Hasta el 2004 se habían des-
o ausencia es causa de una exocrinopatía múltiple resul- crito más de 1 000 mutaciones del gene FQ, responsable
tante de anormalidades, de intensidad variable, en mu- cada mutación de una CFTR diferente, capaz de produ-
chos tejidos exocrinos, principalmente los de las vías cir distintas alteraciones funcionales en esas células
aéreas, páncreas, intestinos, hígado y vías biliares, con- epiteliales; que podría explicar en parte, aunque no
ductos deferentes y glándulas sudoríparas. Creemos que totalmente, las distintas manifestaciones clínicas
esta definición, además de hacernos pensar lo múltiple (fenotipos) en los pacientes FQ. Hoy se considera la
y variable de las manifestaciones clínicas de la FQ, nos CFTR como uno de los distintos canales del cloro (Cl-)
resume, en algo, su genética y de las múltiples funciones en la superficie apical de las células epiteliales, de aque-
llos canales del Cl- dependientes del AMPc (adenosin
de la CFTR.
monofosfato cíclico) estimulado por la proteína kinasa
A. La CFTR se consideró después como formando parte
• ¿Es un síndrome la FQ? Desde hace tiempo me hago
de la familia conocida como transportadores ABC (del
esta pregunta y más ahora con las últimas informa-
inglés “ATP Binding Cassette”) que tienen más de una
ciones que uno lee sobre la enfermedad.
función, pues la CFTR además de tener una función
transportadora fundamental, el paso del cloro (Cl-) des-
GENÉTICA DE LA FIBROSIS QUÍSTICA de la célula a la luz bronquial, tiene otras funciones en el
Desde hace tiempo, se consideró a la FQ como transporte de otros substratos, como por ejemplo al in-
una afección hereditaria genética, autosómica recesiva, tervenir en el transporte del sodio (Na+) desde la luz
que la padecían aquellas personas que heredaban 2 genes bronquial hacia el interior de las células epiteliales a tra-
FQ, también denominado gene CFTR, uno de la madre vés de los canales transportadores de sodio (ENaC),

Parte XII. Aparato respiratorio 1013


produciendo un mayor pasaje de Na+ al interior de las Las más de 1000 mutaciones del gene FQ se han
células epiteliales. Se ha demostrado que en pacientes agrupado en 5 clases (aunque útimamente hay quienes
FQ hay una reabsorción de sodio de 2 a 3 veces mayor, citan 6): la I (no síntesis de CFTR) como en la mutación
en el epitelio bronquial, al compararlos con individuos G542X que es la segunda más frecuente, hasta ahora,
no FQ. La pobre eliminación o no del Cl- hacia la luz en nuestro país (8 %), después de la delta F 508; la II
bronquial por dichos canales (aunque no son los únicos (bloqueo en el procesamiento o colocación anormal de
para el Cl-, pues los hay no dependientes de la CFTR) y la CFTR en la superficie apical de las células) como la
la mayor reabsorción de Na+ de la luz hacia el epitelio, mutación delta F 508; la III (bloqueo en la regulación de
sería capaz de disminuir y alterar el líquido que cubre la CFTR) como en la mutación G551D; la IV (alteración
superficie epitelial de las vías aéreas o ASF (del inglés en la conductancia del Cl-) como la mutación R117H y
Airways Superficial Fluid), influyendo en gran parte para la clase V (síntesis reducida de CFTR) como en la muta-
que este líquido sea más espeso o viscoso. Las funcio- ción A455E. Se ha planteado que las mutaciones de las
nes de los canales del cloro y del sodio, cada vez más clases I, II y III producen relativamente severas altera-
comprendidas, parecen jugar un papel importante en la ciones en la fisiología de las células que las contienen,
inflamación, infección crónica y, al final, la aparición de mientras que las mutaciones de las clases IV y V tien-
bronquiectasias en la FQ, aunque se insiste que estas no den a producir menores alteraciones. Según lo anterior,
serían las únicas acciones planteadas de la CFTR, como las mutaciones incluidas en las 3 primeras clases, produ-
se analizará más adelante. Actualmente hay quienes cirían fenotipos “severos” y las 2 últimas clases produ-
consideran que son más importantes las alteraciones en cirían fenotipos “ligeros”. Un paciente FQ heterocigótico
el paso del ión bicarbonato como causa de las manifes- compuesto, con un gene FQ con una mutación “severa”
taciones de la FQ y que aquellos pacientes con manifes- (heredada de uno de los progenitores) y el otro gene FQ
taciones clínicas ligeras de FQ tienen un transporte con una mutación “ligera” (heredada del otro progeni-
disminuido, aunque presente, del ión bicarbonato. tor), tendría manifestaciones clínicas (fenotipo) menos
Con respecto al gene FQ o gene CFTR, en los pa- severas que cuando es homocigótico a una misma mu-
cientes blancos con FQ el gene alterado o mutado en- tación “severa” o son heterocigóticos compuestos, con
contrado más frecuentemente (70 % de los pacientes y 2 genes con mutaciones “severas” distintas. Cuando el
portadores caucásicos investigados en el norte y centro paciente presentara 2 mutaciones “ligeras” iguales
de Europa y en dos de los tres países de Norteamérica: (homocigóticos) o 2 mutaciones “ligeras” diferentes
Estados Unidos y Canadá, no así, al parecer, en México (heterocigóticos compuestos) el cuadro clínico sería
es el llamado gene FQ delta F 508. Esta denominación, menos severo. Esto es lo planteado por algunos autores
delta F 508 proviene del tipo de CFTR que produce ese reconocidos, pero no es muchas veces exacto pues se
gene y de las abreviaturas: delta (que significa delección conocen que hay factores exógenos al paciente (infec-
o supresión), F (fenilalanina, el aminoácido ausente en ciones, irritantes como el tabaquismo, contaminación at-
la molécula de CFTR producida por el gene FQ) y 508 mosférica, diagnóstico precoz, tratamiento precoz y
pues en la CFTR no existe la fenilalanina, que debía adecuado de la FQ u otros factores) que intervienen en
estar presente en el número 508 de la cadena de 1 480 el tipo, comienzo, gravedad y evolución de las manifes-
aminoácidos que forma el polipéptido CFTR. Cada vez taciones clínicas de la FQ. También pueden existir genes
más aumentan las evidencias que hay grandes diferen- modificadores presentes en el mismo cromosoma 7 o
cias, en la distribución regional, de un país a otro o aún en otros, como el cromosoma 19 en donde parece existir
en un mismo país, de las mutaciones y que dependerán un gene modificador que influye en la aparición del íleo
meconial en recién nacidos vivos con FQ. Los genes
de las etnias prevalentes en esa región, país o zona del
modificadores, como su nombre lo indica, son genes
país. En Cuba, se ha encontrado que en pacientes FQ,
mutados o con polimorfismos, capaces de actuar sobre
investigados por el Centro Nacional de Genética Médi- el fenotipo FQ. Para algunos se han descritos algo más
ca, alrededor del 33 % tenían la mutación delta F 508, de 300 polimorfismos en pacientes FQ, pero ningún
cifra muy parecida a la de algunos reportes de España, polimorfismo por si solo intervendría en el diagnóstico
excepto los que provienen del país vasco. Los cubanos de la FQ, si no se acompaña de al menos una mutación
somos descendientes de españoles (blancos), de africa- en el gene FQ.
nos (negros) o la unión de españoles y africanos (mula- El gene de la alfa-1 antitripsina (también llamada
tos), y menos frecuentemente de otras razas, lo que alfa-1 antiproteinasa inhibidor) ha sido investigado; se
podría explicar nuestro menor porcentaje de la mutación encontraron polimorfismos en este gene que se traduci-
aludida anteriormente. rían en bajos niveles en sangre de la proteína que se

1014 Tomo III


asociaría a manifestaciones ligeras de FQ, aunque no entre la FQ y otras enfermedades con CFTR”. Este
hay una explicación adecuada a este fenómeno y que planteamiento, junto con los de otros autores, ha condu-
parece contradecir lo que se ha planteado clásicamente, cido a la nueva clasificación de la FQ que se presentó
es decir, que la alfa-1 antitripsina inhibe la elastasa evi- en la Internacional Cystic Fibrosis (Mucoviscidosis)
tando mayores lesiones pulmonares. En cambio, el gene Association por el profesor Dodge y cuyas bases se
de la MBL (Manosa Binding Lectin o manosa unida a la confeccionaron en una reunión conjunta en junio de 2000
lectina) cuando hay variantes en sus alelos, se producen de la OMS, ICF(M)A y otras 2 organizaciones. (Ver
bajas cifras en sangre de MBL y se ha relacionado esto
Clasificación de la FQ).
con un pobre pronóstico, al parecer con muerte más tem-
prana por enfermedad pulmonar en pacientes FQ infec-
tados por Pseudomonas aeruginosas o por
PATOGENIA DE LA FIBROSIS QUÍSTICA
Burkholderia cepacia. También se ha planteado que EN LAS VÍAS AÉREAS
el gene del Transforming Growth Factor beta (Factor Y EN LOS PULMONES
Transformador del Crecimiento, beta) pueden presentar Actualmente no existe una teoría que pueda ex-
polimorfismos que producirían fenotipos FQ asociados plicar todas las manifestaciones de la fibrosis quística y,
a fibrosis pulmonar y enfermedad severa. Se han citado desde luego, ninguna puede aclarar todas las alteracio-
polimorfismos en genes de citoquinas: TNF alfa, IL-1 e
nes producidas en las vías aéreas bajas y los pulmones,
IL10, que podrían actuar como genes modificadores de
aunque se plantean una serie de conceptos aceptados
la FQ.
por la mayoría, que exponemos a continuación:
Todo lo anterior explica lo difícil que resulta rela-
• Se ha planteado clásicamente que la alteración bási-
cionar las mutaciones del gene FQ que tenga el pacien-
te (genotipo) con las manifestaciones clínicas de la FQ ca en la FQ se debe a una pobre eliminación del Cl-
(fenotipo) y hasta ahora lo único que parece cierto en la desde las células epiteliales bronquiales hacia la luz
relación genotipo/fenotipo es en lo que respecta a la in- bronquial, y una mayor reabsorción del Na+ desde
suficiencia pancreática (IP) o la suficiencia pancreática esta hacia el epitelio, lo que producirían una pobre
(SP). Desde hace tiempo se había planteado hidratación del líquido (ASF) que cubre la cara apical
clínicamente que los pacientes con SP (que hoy se con- de dichas células, que se hace más espeso, viscoso y
sideran que presentan, generalmente, genes FQ con adherente. Estudios más actualizados plantean que
mutaciones “ligeras” y/o poco frecuentes) tenían mu- si bien esto es cierto, la reducción del transporte del
cho mejor pronóstico que aquellos con IP (y que hoy se ion bicarbonato (HCO3–) juega un papel importante,
plantean presentan genes FQ con mutaciones “severas”). pues este ion es fundamental en la fisiología hística
En cambio, parece que las mutaciones del gene FQ pre- normal. Algunos autores han planteado, recientemen-
sentan una menor infuencia sobre las manifestaciones te, que corregir el transporte del Cl- solamente, no
broncopulmonares y hepáticas, en las cuales parecen reduciría de forma apreciable los síntomas respirato-
jugar un papel importante los factores ambientales y los rios de la FQ y aumentar el transporte del bicarbona-
genes modificadores. Como se ha establecido por algu- to es fundamental. Para Quinton el grado de se
nos autores estos conceptos deben ampliarse en los próxi- veridad de la FQ se correlacionaría más con el trans-
mos años, para ayudarnos a una mejor comprensión en porte del HCO3– que con el del Cl- y los casos
la relación con la enfermedad pulmonar crónica de la
ligeros tienen una disminución del transporte del bi-
FQ (EPCr. de FQ) y con otras afecciones pulmonares
carbonato, pero presentan algún grado de transporte,
que presentan inflamación y “remodelamiento” de las
vías aéreas, como el asma, las bronquiectasias y enfer- mientras que los casos severos no tienen transporte
medad obstructiva pulmonar crónica (EOPC). Quizás del bicarbonato.
esto nos permita conocer el nexo entre pacientes con • La FQ es una afección que presenta manifestacio-
FQ y el mayor número de sus familiares con asma, cuan- nes en las vías aéreas por complejas alteraciones en
do se compara con los APF en niños sin FQ y que ha las células epiteliales producidas por factores
sido descrito desde hace tiempo por varios autores, y genéticos (mutaciones del gene FQ con disfunción o
que lo hemos observado en nuestros pacientes. Como ausencia de CFTR y genes modificadores) y facto-
ha establecido Zielenski “la variedad del espectro de res ambientales (infecciones, irritantes inhalados
enfermedades asociadas con genes mutantes CFTR, sobre todo el humo de cigarrillos y tabacos o puros,
establece la necesidad que se revisen el criterio diag- diagnóstico precoz, contaminación ambiental, trata-
nóstico para la FQ y el dilema de crear la separación miento rápido, intenso, mantenido e individualizado

Parte XII. Aparato respiratorio 1015


y otros factores) Las diversas manifestaciones células epiteliales bronquiales destruidas y/o inflama-
clínicas y el comportamiento de la afección depen- das) y un aumento de leucotrienos 4 derivados del
derán en gran parte de ambos tipos de factores. En ácido araquidónico de la pared de los PMN y de las
la mayoría de los pacientes con manifestaciones clí- células epiteliales destruidas.
nicas típicas, el sistema respiratorio, sobre todo las Las proteasas liberadas (sobre todo elastasas y
vías aéreas bajas (y los pulmones secundariamente) catepsina G) son tratadas de neutralizar por un au-
participan en esta afección e influyen, de manera im- mento de las antiproteasas, en particular la alfa-1
portante, en la severidad, el pronóstico y hasta en la antitripsina (también denominada “inhibidora de la
letalidad de la FQ. alfa-1 proteinasa”), pero en muchos pacientes, sobre
• Se ha planteado la denominada enfermedad pulmonar todo cuando hay una infección crónica, las
crónica de la FQ (EPCr de FQ) que se caracteriza antiproteasas no logran neutralizar todas las proteasas
en los pacientes FQ típicos por una inflamación pre- y queda un exceso de estas, sobre todo de elastasas,
coz y crónica a partir de la superficie epitelial del que intervienen en la destrucción de los tejidos
sistema respiratorio. Se considera por muchos, que pulmonares y en particular de las fibras elásticas.
la inflamación se presenta, en los casos típicos, des- El incremento de DNA participa de forma importan-
de los primeros meses de la vida, a partir de las vías te en el aumento en la viscosidad del mucus del ASF,
aéreas pequeñas (de menos de 2 mm de diámetro) lo que favorece una mayor obstrucción de las vías
antes de la infección que la acompaña. Otros esta- aéreas bajas, sobre todo aquellas que tienen menos
de 2 mm de diámetro denominadas periféricas, lo que
blecen que la infección precede a la inflamación, pero
constituye uno de los aspectos más importantes en la
que los métodos actuales no permiten detectarla
patogenia de la EPCr de la FQ. También el aumento
precozmente.
del DNA es uno de los factores, que junto con las
• La relación gene CFTR mutada/inflamación crónica
proteasas, alteran la función del aparato mucociliar
no está totalmente aclarada, pero sin duda existen
bronquial, lo que favorece el acúmulo de las
algunas alteraciones patogénicas que la señalan,
secreciones y la colonización y/o infección por
como: microorganismos en particular algunos tipos de bac-
En dicha inflamación predominan los leucocitos terias. La infección aumenta la inflamación y esta la
polimorfonucleares neutrófilos (PMN). Se ha en- obstrucción, entonces se crea un círculo vicioso (in-
contrado en lavados bronquioalveolares (BAL) de pa- fección - inflamación - obstrucción - infección - más
cientes FQ, aún con enfermedad pulmonar ligera, un inflamación y así continúa), lo que hay que tratar de
aumento de neutrófilos de 20 a 40 veces mayor que detener o disminuir.
en niños sanos de la misma edad y con cifras mucho Los radicales libres de oxígeno intervienen (aunque
más elevadas que las encontradas en otras afeccio- hay otras causas) en la destrucción de los tejidos
nes inflamatorias crónicas broncopulmonares en ni- pulmonares.
ños de la misma edad. En esos mismos estudios del La mayor producción de leucotrienos, que además
líquido que existe sobre la superficie epitelial de las de ser potentes agentes proinflamatorios y
vías aéreas o ASF (del inglés Airways Superficial broncoconstrictores, son quimiotácticos en particular
Fluid) se han encontrado, en pacientes FQ, los para los neutrófilos.
macrófagos también aumentados, pero en número
mucho menor que los neutrófilos y un aumento me- Todo lo anterior explica algunas medidas recomen-
nor aún, aunque existente, de linfocitos. dadas más recientemente en el tratamiento de la EPCr.
También parece intervenir un aumento de la de la FQ: la utilización por vía inhalante de antiproteasas
interleuquina 8 (IL-8), una de cuyas acciones es ser en particular el uso de alfa-1 antitripsina recombinante;
quimiotáctica para los neutrófilos. Además, hay una la utilización de nebulizaciones de DNasa recombinante
disminución de la IL-10 que es inhibidora de la atrac- (Pulmozime®) que fragmentaría el DNA liberado en la
ción de neutrófilos y de la inflamación. Estas altera- expectoración y facilitaría la fluidificación de las
ciones parecen estar relacionadas, en parte, en la secreciones de las vías aéreas; la utilización del Gelsolin™
producción de IL-8 y la IL-10, con la CFTR. que fragmentaría las fibras de actina aumentadas en las
Los neutrófilos (PMN) al reactivarse o destruirse, secreciones bronquiales por la inflamación y que tam-
sobre todo cuando se produce infección, liberan bién intervienen en el espesamiento de dichas
proteasas, ácido desoxirribonucleico (DNA), radica- secreciones; el uso de antiinflamatorios como el
les libres de oxígeno (radicales superóxidos, hidroxilos ibuprofeno por la vía bucal o la utilización de esteroides
y otros productos provenientes de los PMN y de las u otros antiinflamatorios inhalados.

1016 Tomo III


• Otro de los factores invocados en la EP de FQ es la − Alteraciones del metabolismo de los ácidos
disminución del glutatión en las células bronquiales grasos esenciales polinsaturados de cadena lar-
de pacientes con FQ, en relación con la CFTR alte- ga (omega 3) y disminución de DHA con au-
rada. El glutatión tiene propiedades antiinflamatorias mento de AA intracelular.
Todos estos factores parecen estar relaciona-
y antioxidantes y al estar disminuido, se favorecerían
dos, directa o indirectamente, con la CFTR al-
la inflamación y las lesiones pulmonares (estas últi- terada.
mas también producidas por liberación de proteasas Con respecto a las infecciones broncopulmonares
y radicales libres de oxígeno en el pulmón, como ya pueden ser producidas por diversos agentes prin-
se ha citado). cipalmente virus y bacterias. Serán agudas (vi-
En la EPCr de la FQ pueden además intervenir rus, sobre todo los VSR en niños pequeños),
inmunocomplejos que contribuyen, al parecer, por un Staphyloccocus aureus, Haemophilus
mecanismo de hipersensibilidad tipo III, a aumentar influenzae, klebsiellas), a repetición o cróni-
las lesiones pulmonares destructivas. Las toxinas y cas, jugando un papel importante en estas últi-
otros productos bacterianos actúan como proteasas mas, las Pseudomonas aeruginosas y en menor
proporción los Staphyloccocus áureus y los
e intervienen también en la formación de
Haemophilus influenzae. Menos frecuente-
inmunocomplejos al unirse a las IgG aumentadas por mente pudieran intervenir en estas infecciones
la infección bronquial crónica. crónicas: la Burkholderias cepacia, la
También pudiera jugar papel la CFTR alterada en el Stenotrophomonas maltofilia (discutida su ac-
aumento del ácido araquidónico de la pared celular ción sobre los pulmones), Alcaligenes
en pacientes con FQ y a partir de esto, una produc- xylosoxidans, Acinetobacters, Mycobacterias,
ción mayor de eicosanoides que intervienen en la Clamydias neumoniae u otros microorganismos,
inflamación. los cuales cada vez aumentan más su presencia,
Alteraciones en el metabolismo de los ácidos grasos por la mayor supervivencia de los pacientes
esenciales, omega 3, que desde hace años se estu- fibroquísticos.
dian con interés. Últimamente se ha planteado que En la EPCr de FQ, se ha planteado una relación
CFTR mutada e infección, que no está totalmente
las células epiteliales de los pacientes con FQ tienen
aclarada, aunque hay hechos que nos permiten
niveles altos de AA (ácido araquidónico) que es
plantear esta relación y entre los cuales citare-
proinflamatorio y que los niveles de DHA (ácido
mos someramente algunos de los descritos:
docosahexanoico) están disminuidos. El DHA tiene − Se plantea por algunos, que las células bronquia-
propiedades antiinflamatorias y antiinfecciosas. Se- les, por endocitosis, capturan bacterias (s/t
gún algunas investigaciones, al administrar DHA se Pseudomonas aeruginosas) y que al
aumentaría su nivel en células epiteliales obtenidas descamarse aquellas, se eliminan las bacterias
de pacientes FQ y se disminuirían los niveles de AA con las células. En pacientes con FQ este me-
en ellas. Esta hipótesis parece abrir nuevas perspec- canismo estaría alterado debido a la CFTR
tivas en la comprensión y en el tratamiento de las mutada, sobre todo cuando el paciente presenta
manifestaciones broncopulmonares, con la adminis- la mutación delta F 508.
tración de DHA, por vía bucal, y que también parece − Productos celulares aumentados, como las
actuar favorablemente sobre el páncreas y las célu- citoquinas, que podrían estar relacionadas con
las intestinales. la CFTR mutada. En pacientes FQ hay una pro-
ducción mayor de IL-8 que favorece una mayor
Resumiendo hasta aquí, la EPCr.de FQ es una enti-
atracción y acumulación de neutrófilos en el pul-
dad compleja en la que intervienen múltiples facto-
món, característica de la inflamación en esta
res, conocidos o no, de los cuales ya se han citado
afección, pero también hay una menor libera-
algunos: ción de IL-10, que normalmente restringe dicha
PMN muy aumentados (con aumento y/o liberación acumulación de neutrófilos en el pulmón. Para
de proteasas, DNA, radicales libres de O2). otros autores, el aumento demostrado de la IL-8
− Aumento de eicosanoides, sobre todo en el ASF es solo una parte pequeña del
leucotrienos tipo C 4. verdadero aumento de la IL-8, pues esta tam-
− Aumento de antiproteasas. bién se presenta unida a la IgG, IgA, sulfato de
− Producción de inmumocomplejos. heparán y alfa 2 macroglobulina, que interven-
− Aumento de la IgG. drían en la inflamación/infección.

Parte XII. Aparato respiratorio 1017


− Sulfomucinas. El mucus del ASF normal está Otros han planteado que el ASF es normal. Se-
constituido principalmente por agua, proteínas, gún este concepto la utilización de soluciones de
electrólitos (s/t cloro, sodio, calcio y potasio) y cloruro de sodio hipertónicas en nebulizaciones,
glicoproteínas, neutras y ácidas. De estas últi- defendido por algunos en el tratamiento de la
mas hay dos tipos: sialomucinas y sulfomucinas, FQ, no parecería recomendable ni tampoco el
más de las primeras que de las segundas. En la amiloride en nebulizaciones (que inhibe la
FQ predominan las sulfomucinas, atribuida en reabsorción de sodio por el epitelio de las vías
parte por la CFTR mutada, que produce un au- aéreas).
mento en las células epiteliales de la sulfatación de Se plantea, por algunos, que en los pacientes con
glicoconjugados de alto peso molecular, que se FQ hay en el ASF, una disminución de la activi-
secretan o permanecen en la pared celular. dad de las defensinas, sobre todo la beta-1, lo
Las sulfomucinas secretadas contribuyen al que en parte favorecería las infecciones, inde-
espesamiento del mucus (junto con el DNA au- pendientemente o no del contenido de Cl- y Na+
mentado, la excreción disminuída de Cl- por los en el ASF, y esto sería, directa o indirectamente,
canales correspondientes, la mayor reabsorción resultante de otra de las funciones alteradas por
de Na+ por los ENAC y de agua) que dificul- la CFTR mutada.
ta los mecanismos de limpieza de las vías aé-
reas realizada por los movimientos de los cilios, Después de cierto tiempo, variable de un paciente
que están alterados en su funcionamiento, en FQ a otro, muchos de ellos, en su mayoría, menores de 5
parte, por este mucus espesado y por las años de edad, comienzan a padecer de infecciones re-
proteasas. También parecen alterar el movimien- currentes, habitualmente de distintos genotipos de
to ciliar los leucotrienos y otros eicosanoides Pseudomonas aeruginosas (favorecidas estas infec-
derivados del ácido araquidónico de las células ciones por otras anteriores producidas muchas veces por
y que además son potentes quimotácticos de diversos virus, estafilococos u otras bacterias) que se
neutrófilos, proinflamatorios y hasta favorece- deben tratar de erradicar por un tratamiento enérgico y
dores de la hiperreactividad bronquial (HRB) que precoz para evitar que se hagan crónicas. En muchos
muchos fibroquísticos presentan (entre 20 y de estos pacientes llega un momento en que las
70 % según diversos autores). pseudomonas, adheridas a las células bronquiales sufren
Las sulfomucinas que permanecen en la pared una transformación, cambian su metabolismo, se agru-
celular producen alteraciones en los grupos pan y se rodean de una matrix polimérica hidratada (cuyo
moleculares de “reconocimiento y rechazo” lo mayor componente es alginato), se crean formaciones
que trae un aumento relativo del “potencial de
sesiles denominadas “biofilms” y en donde no penetran,
adherencia” de diversos microorganismos, so-
o lo hacen con dificultad los anticuerpos, antisépticos o
bre todo de algunas bacterias, se favorece la
antibacterianos. Se produce entonces una infección cró-
colonización y la infección, principalmente por
nica, lenta, mantenida, no erradicable hasta ahora,
Staphylococcus aureus, Haemophilus
pero que se debe detener o disminuir en su evolución,
influenzae, Klebsiellas pneumoniae y
pues conduce a una disminución inexorable y progresiva
Pseudomonas aeruginosa.
de la función pulmonar. Parece que hay factores loca-
− Líquido que cubre la superficie apical de las cé-
les, por parte del paciente, que favorecerían la transfor-
lulas epiteliales de las vías respiratorias o su abre-
mación de las Pseudomonas aeruginosa en esta
viatura ASF (del inglés airways superficial fluid).
variedad denominada “mucoide” (que de manera abre-
Clásicamente se plantea que este líquido está
viada se escribe “Ps M” o solo “M”).
disminuido en agua y que es hipotónico (o
Una teoría interesante, que últimamente parece
isotónico) debido a la falta o disfunción de la
CFTR, que es uno de los canales del Cl- en la cobrar auge, es la referente a la disminución, en pacien-
superficie apical de las células epiteliales Sin em- tes con FQ, de la MBL (Manosa Binding Lectine o
bargo, no hay un acuerdo al respecto, pues en lectina unida a la manosa), La MBL son moléculas
los últimos años un grupo de investigadores plan- protéicas que tienen propiedades antibacterianas,
tean que mientras que en individuos normales el antimicóticas y antivirales. Se encuentran aumentadas
ASF es bajo en Cl- y Na+, en los pacientes en sangre y tejidos inflamados y parece que actúan como
fibroquísticos es hipertónico, alto en Cl- y Na+, opsoninas, al estimular la acción del complemento. Se
lo que inhibiría los péptidos antibacterianos na- ha encontrado disminuida en el 10 % de personas sanas
turales (sobre todo las defensinas beta) que se y hay portadores del gene FQ delta F508, con concentra-
encuentran en la superficie de las células ciones de 1/8 de las concentraciones en sangre de perso-
epiteliales de las vías aéreas. nas normales. En los homocigóticos FQ con MBL baja

1018 Tomo III


en sangre se favorecerían las infecciones por síndrome de malabsorción intestinal, y/o debidas a
Psedomonas aeruginosa (y también por Burkolderia. otras alteraciones del páncreas.
cepacia) produciéndose además una evolución más ad- • Manifestaciones dependientes de las alteraciones
versa de la EPCr. de FQ. gastrointestinales y hepatobiliares.
Esta teoría tiene dos aspectos interesantes: • Manifestaciones dependientes de las glándulas
− Sería la primera vez que se demostrara una cau- sudoríparas.
sa genética no relacionada con el gene FQ ni • Otras manifestaciones clínicas de la FQ.
por factores ambientales determinante de cier-
tas infecciones y de una causa de evolución
Manifestaciones clínicas dependientes del sis-
desfavorable de ellas en pacientes FQ.
tema respiratorio. Son las más frecuentes y en la
− La molécula de MBL constituida por 240
aminoácidos, pudiera ser producida en los mayoría de los pacientes condicionan la evolución y el
laboratorios y administrarse en el futuro a pa- pronóstico. En el cuadro 77.1 están resumidas, pero des-
cientes con FQ que presenten deficiencias de cribiremos las fundamentales en un paciente típico en
MBL. que las manifestaciones aparecen en los primeros me-
ses de vida, aunque pudieran comenzar algo más tarde.
La severidad de la enfermedad pulmonar tiene una Las primeras manifestaciones serán tos, polipnea
interrelación íntima con la nutrición y con las alteracio- o ambas. La tos al comienzo será seca y esporádica,
nes del aparato digestivo, en particular con la insufi- pero en un tiempo variable se hace más frecuente y des-
ciencia pancreática (IP) y la cirrosis hepática. Esto hay pués casi mantenida y de seca se transforma en húme-
que tenerlo en cuenta en todo paciente FQ. da con expectoración mucosa, mucopurulenta o
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
francamente purulenta según la edad, la severidad de
las lesiones pulmonares y la infección crónica que se
Son múltiples. Varían de un paciente a otro en los
agregue. En la evolución, pueden aparecer cuadros bron-
síntomas y signos, en su intensidad y en su evolución,
quiales o asmatiformes y en cualquier momento se pre-
aún en pacientes con el mismo genotipo y en una misma
familia. Participan además de la CFTC alterada, facto- sentan bronconeumonías, que en los menores de 2 años
res exógenos y genes modificadores. son frecuentemente producidas por Staphyloccocus
Las manifestaciones clínicas podemos dividirlas en: aureus, a veces acompañadas de pleuresías purulentas.
• Manifestaciones dependientes del sistema respiratorio. Otras veces se presentan cuadros semejantes a una
• Manifestaciones dependientes de la insuficiencia bronquiolitis, pero que se repiten o cuadros coquelu-
pancreática exógena, que se traducen por un choides, que pueden repetirse. La radiografía de tórax

Cuadro 77.1. Manifestaciones clínicas de la FQ por parte del sistema respiratorio y según grupo de edades

Lactantes o preescolares Escolares o adolescentes

Polipnea Polipnea
Tos recurrente o crónica Tos recurrente o crónica
Bronquiolitis o cuadros Cuadros asmatiformes
asmatiformes recurrentes recurrentes
Bronquitis recurrentes Bronquitis recurrentes o crónica
Bronconeumonías, neumo- Bronconeumonías o neumonías
nías recidivantes o crónicas recidivantes o crónicas
Atelectasias recurrentes Atelectasias recurrentes
Otitis media recurrente Pansinusitis
Alteraciones en los dedos Alteraciones en los dedos
(dedos en “palillo de tam- (dedos en “palillo de tambor”
bor” y/o uñas en “vidrio de y/o uñas en “vidrio de reloj”)
reloj”)
Poliposis nasal Poliposis nasal
Proptosis unilateral Mucoceles en senos maxilares
Colonización o infección (recurrentes o crónicas) de vías aéreas bajas s/t por Staphylococcus
aureus, Hemophyllus influenzae o Pseudomonas aeruginosa (M o no M)
Hemoptisis (de severidad variable)
Neumotórax
“Cor pulmonale” crónico

Parte XII. Aparato respiratorio 1019


en los primeros momentos presentará un patrón com-
patible con un síndrome de obstrucción bronquial difuso
y bilateral, sobre todo en la vista lateral. También se pue-
den observar atelectasias segmentarias o lobares y/o
reforzamiento severo de la trama broncovascular. Al exa-
men físico, que al comienzo solo se detectará
hipersonoridad, con polipnea o sin ella, se acompañará
posteriormente de estertores húmedos y/o sibilantes es-
porádicos. Los estertores húmedos se harán más o me-
nos permanentes y bilaterales o en algunas zonas
pulmonares como el lóbulo superior derecho o en una base,
con dificultad respiratoria, primero al ejercicio y después
permanente. El tórax “en tonel”, con tiraje y/ o defor-
midades como pectus carinatus y una mala posición de
pie, con la cabeza y los hombros caídos hacia delante se
presentarán en los pacientes más severos. Cuando esto
sucede es frecuente encontrar una disminución de la masa
y del tono muscular y marcada escasez del tejido
celuloadiposo subcutáneo. En los estadios más avanza-
dos, el paciente presenta ortopnea, estertores húmedos
mantenidos, con dedos en “palillos de tambor” y uñas en
“vidrio de reloj” francamente ostensibles y que ya habían
aparecido tiempo atrás y aumentado progresivamente.
Puede haber cianosis, al ejercicio primero y después man-
tenida en los pacientes más graves o en fases avanzadas.
El cuadro final será de un “corpulmonale” crónico, sobre-
viniendo la muerte habitualmente por una exacerbación
de la infección crónica broncopulmonar. En muchos pa-
cientes se conserva la consciencia hasta horas antes de
la muerte lo que hace más dramático el cuadro final.
Con respecto al segmento superior del sistema res-
piratorio se puede presentar obstrucción nasal, con
rinorrea o sin ella. Entre el 10 al 15 % de los pacientes Fig.77.1. Enfermedad pulmonar de la FQ.
pueden presentar poliposis nasal, que al aumentar en
tamaño producirán severa obstrucción nasal que favo-
recerían la obstrucción de las vías aéreas con hipertensión
pulmonar y posteriormente un “corpulmonale”, aunque
este se produce generalmente por lesiones broncopul-
monares severas. Muchas veces la poliposis nasal es
recidivante después de la polipectomía. Las otitis son
frecuentes al igual que la opacidad de ambos senos maxi-
lares a las radiografías y alteraciones en la TAC de los
senos paranasales. A veces hay secreción purulenta des-
cendiendo por el cavum nasofaríngeo causada por una
sinusitis crónica.
Hay pacientes en que predominan las manifesta-
ciones respiratorias bajas, agudas, a repetición o cróni-
cas, pero en los casos típicos se acompañan de
participación del sistema digestivo con un síndrome de
malabsorción por insuficiencia pancreática exógena y
con poco aumento de la talla y el peso. En pacientes
más graves hay detención del peso y hasta pérdida de
este (Figs.77.1 y 77.2). Fig. 77.2. Inflamación y daño pulmonar en la FQ.

1020 Tomo III


Manifestaciones clínicas dependientes de la aclarar una serie de aspectos todavía no bien determi-
insuficiencia pancreática exógena, que se traducen nados, pues hay que tener en cuenta que pueden haber
por un síndrome de malabsorción intestinal, y/o de- un grupo de factores propios de la FQ que parecen que
bidas a otras alteraciones del páncreas. Más del 85% influyen en la DMFQ y sobre todo en su mal pronóstico:
de los pacientes presentan insuficiencia pancreática (IP) • Infecciones agudas respiratorias o infección crónica
exógena, de intensidad variable que se puede presentar con exacerbaciones.
antes de, o con más frecuencia, acompañando a las mani- • Aumento de las necesidades calóricas.
festaciones respiratorias o en los primeros meses que si- • Malnutrición crónica, que se puede exacerbar con
guen a la aparición de estas manifestaciones. A veces la las infecciones causantes de anorexia y vómitos; aun-
IP tarda en aparecer, entre 1 y 20 años después de pre- que estas dos manifestaciones pueden presentarse
sentado el cuadro broncopulmonar. El paciente promedio en la FQ por otras causas.
presenta de 3 a 6 deposiciones en 24 h, semipastosas, • Malabsorción por la IP, a pesar de la utilización de
voluminosas, pálidas, fétidas (con olor rancio marca- enzimas pancreáticas, que contribuye a la
do) que flotan en el agua y brillosas, teniendo a ve- malnutrición.
• Movimientos intestinales anormales que pueden influir
ces pequeñas gotas de grasa visibles. El aspecto de las
en la absorción intestinal y en los niveles de la glucemia.
heces fecales es como se describió anteriormente y no
• Afección hepática, que puede presentarse en la FQ.
son totalmente líquidas. Pudieran presentarse diarreas man-
• Ingestión variable de los alimentos cada día, que de-
tenidas por déficit de lactasa, poco frecuentes en pacien-
penderá de distintos factores.
tes blancos o episodios agudos de diarreas, como en
cualquier otro niño sin FQ, por infecciones entéricas, so- Pudiera debutar bruscamente con una cetoacidosis,
bre todo por enterovirus aunque pueden deberse a otras o la DMFQ aparece de manera insidiosa con poliuria,
causas (para algunos autores las infecciones por Giardia polidipsia, polifagia (a veces anorexia) y/o poco aumento
lamblia son frecuentes en pacientes con FQ) , pero lo de peso. Incluso, a veces, se ignora su presencia por años
característico de la FQ son las deposiciones alteradas en un paciente que no aumenta de peso satisfactoriamen-
mantenidas con las características anteriormente des- te aunque parezca evolucionar bien en otros aspectos.
critas, compatibles con un síndrome de malabsorción El diagnóstico se basará, como en las otras formas
intestinal por insuficiencia pancreática exógena. Lo de DM, en:
anterior se acompaña de un abdomen prominente, flatus • Glucemia en ayunas elevada de ≥ 7 mM (126 mg%).
muy fétidos, disminución del TCS, con las regiones glúteas • Curva de tolerancia a la adminitración de glucosa
aplanadas y con pliegues cutáneos verticales (“aspecto bucal. Cifras ≥ 11,1 mM (200 mg %) a las 2 h de la
de bolsa de señora” descrito por los autores clásicos en ingestión de la glucosa. Esta investigación, además
las desnutriciones severas de cualquier causa). La masa de ser valiosa para el diagnóstico de una DM, es útil
muscular estará disminuida en volumen y tono, con extre- para las otras formas ligeras de alteraciones de la
midades delgadas. Hay poco aumento, detención o hasta glucosa sanguínea.
disminución del peso. El apetito puede ser voraz, pero al • También se pueden tener en cuenta otros criterios:
utilizar las enzimas pancreáticas debe disminuir, aunque glucemia en ayunas alterada además de una glucemia
puede haber anorexia, difícil de superar, con el avance de a cualquier hora del día ≥ 11,1 mM (200 mg%) o
glucemia elevada, realizada durante el día, 2 o más
la enfermedad pulmonar, por un vaciamiento gástrico re-
veces y con manifestaciones clínicas.
tardado, por problemas con familiares que tratan de obli-
gar al paciente a comer y sobre todo con las En pacientes con DMFQ las cifras de glucemia que
exacerbaciones pulmonares infecciosas. Se pudieran pre- ellos tengan de antes, pueden elevarse con las infecciones
sentar manifestaciones de deficiencias de vitaminas o de manera transitoria durante una sobrecarga física. Se
liposolubles aunque el raquitismo por deficiencia exógena pueden encontrar alteraciones de la prueba de tolerancia a
de vitamina D es excepcional en la fibrosis quística. la glucosa precozmente, en pacientes con FQ.
Con respecto al páncreas endógeno, por el mayor En la DMFQ se han reportado problemas
número de pacientes que hoy sobreviven más allá de la microvasculares en riñones y/o oftalmológicos y altera-
primera década de vida, se diagnostica cada vez más la ciones neurológicas, pero no parecen ser un serio pro-
diabetes mellitus de la fibrosis quística o DMFQ, cuya blema las afecciones coronarias ateroscleróticas o los
frecuencia aumenta con la edad, desde la adolescencia accidentes vasculares encefálicos.
(± 20 %) hasta en mayores de 30 años de edad (± 40 %). La aparición de una DMFQ ensombrece el pro-
Esta afección tiene características tanto de la diabetes nóstico de la FQ, por lo que debe tratarse precoz y
tipo 1 como de la tipo 2 y se continúa estudiando para enérgicamente.

Parte XII. Aparato respiratorio 1021


Cada vez más se reportan pancreatitis crónicas o meconial es producida por la FQ, pero esta debe des-
recurrentes, sobre todo en pacientes con insuficiencia cartarse siempre que presente un íleo meconial. Hoy
pancreática (IP). Pueden pasar no diagnosticadas si no se sospecha que tiene relación con genes modificado-
se sospechan, principalmente en pacientes con FQ res en el cromosoma 19.
con SP en los que las pancreatitis parecen ser raras Otra manifestación, más frecuente en los RN con
(Cuadro 77.2). FQ, comparado con niños normales, es la expulsión tardía
Cuadro 77.2. Manifestaciones clinicas de la FQ dependientes
(más de 24 h) del meconio o síndrome del tapón meconial.
del páncreas y manifestaciones de malabsorción Frente a este cuadro se debe descartar siempre la
posibilidad de FQ.
Lactantes/preescolares Escolares/adolescentes El reflujo gastroesofágico (RGE) es una manifes-
tación frecuente en la FQ. Puede ser causa de broncoas-
Deposiciones alteradas Deposiciones alteradas piraciones de material alimenticio que agravaría las
Mantenidas Mantenidas
Esteatorrea Esteatorrea
manifestaciones respiratorias, pero tendrán que demos-
No recuperan el peso al trarse las aspiraciones con estudios con radioisótopos
nacer a los 15 dias (RN) (tecnesio), pues la sola demostración de un RGE no plan-
Fracaso en aumentar normal- Fracaso en aumentar de tea que haya broncoaspiraciones.
mente de peso y talla (en peso y talla (en pacientes
Otra manifestación digestiva menos frecuente, pero
pacientes severos detención severos pérdida de peso)
del peso) que puede ser causa de dolor abdominal en la FQ, es el
Edema, hipoproteinemia, anemia Deficiencia de lactosa ulcus gastroduodenal que se deberá descartar por estu-
(primeros meses de vida) (cólicos y/o diarreas) dios endoscópicos, pues los estudios radiográficos fre-
Deficiencias de vit. A, K, E Deficiencias de vit. A, K,E cuentemente no son de utilidad.
Ferropenia sin anemia Ferropenia sin anemia
Deficiencia de oligoelementos Deficiencia de
Se puede presentar impacto de las heces fecales
oligoelementos en el ciego manifestándose como una masa palpable en
Curva de tolerancia a la Curva de tolerancia a la el cuadrante inferior derecho del abdomen, dolorosa o no.
glucosa alterada (poco frecuente) glucosa alterada (2da. dé- Hay prolapsos rectales en el 10 al 20 % de los
cada o más de vida)
pacientes pequeños no sometidos a un tratamiento con
Diabetes mellitus (>10
años de edad y aumenta enzimas pancreáticas o con dosis menores a las necesa-
su frecuencia rias de acuerdo con la dieta. La mayoría de estos
con la edad) prolapsos se presentan en menores de 5 años de edad y
Pancreatitis (crónica o Pancreatitis (crónica o se reducen por técnicas manuales; raramente necesitan
recurrente) recurrente)
tratamiento quirúrgico.
Una manifestación relativamente frecuente es el sín-
Manifestaciones clínicas dependientes de al- drome obstructivo intestinal distal o SOID, antes llamado
teraciones gastrointestinales y hepatobiliares. En- “equivalente del íleo meconial”. Puede aparecer en niños
tre el 5 y el 15 % de los RN vivos con FQ presentan con FQ no diagnosticados como una manifestación inicial
íleo meconial; se manifiesta en las primeras 24 a 48 h o pueden ser recidivantes en pacientes con FQ (5 a 20 %)
del nacimiento por distensión abdominal, vómitos y no ya diagnosticados Para muchos es una complicación pro-
expulsión del meconio. Las radiografías simples del ab- ducida por dosis inadecuadas de enzimas pancreáticas,
domen presentan un cuadro típico de dilatación de las su supresión brusca o por cambios bruscos en la dieta,
asas intestinales delgadas con pocos niveles hidroaéreos aunque también se han invocado una disminución de líqui-
y con aspecto granuloso de las asas (de “cristal neva- dos corporales de causa exógena o endógena, por insufi-
do” o “en pompas de jabón”) sobre todo hacia la parte ciencia cardíaca o por causas desconocidas. Se manifiesta
central e inferior del abdomen. Raramente se presen- por dolor abdominal de intensidad variable, mantenido o
tan calcificaciones intrabdominales, secuelas de una intermitente, vómitos, constipación (aunque raras veces
peritonitis meconial debida a una perforación intestinal presenta diarreas). Al EF el abdomen estará distendido,
intraútero. El enema baritado puede demostrar el recto puede ser doloroso y se pueden o no palpar masas intraab-
y el sigmoides estrechos (hipofuncionante). El íleo dominales sobre todo en el cuadrante inferior izquierdo
meconial se puede acompañar de complicaciones: del abdomen.
vólvulos, atresias o estenosis intestinales. A veces se El íctero neonatal prolongado por espesamiento
presenta, posteriormente, un íctero neonatal prolonga- (“impisación”) de la bilis puede ser una manifestación
do. No siempre la aparición en un RN de un íleo de FQ y se presenta en más del 50 % de los RNV que
han presentado íleo meconial.

1022 Tomo III


En la FQ se puede presentar una hepatomegalia Manifestaciones clínicas dependientes de las
por esteatosis hepática (hasta 30 %) o por un cuadro glándulas sudoríparas o manifestaciones metabó-
denominado de “cirrosis biliar focal” (5 al 10 %) y más licas. Es importante destacar que durante las épocas de
raro (alrededor del 1 al 2 %) una cirrosis portal que pue- calor, por la gran sudación que se produce, pueden apa-
de conducir a una hipertensión portal con várices recer deshidratación hipotónica o hipona-tremias con
esofágicas, esplenomegalia y hasta hiperesplenismo. La astenia y hasta cuadros de colapso o “golpes de calor”
cirrosis, que parece estar aumentando, hay quienes la que se deben tratar con soluciones hipertónicas de Cl
relacionan con algunos tipos de mutación, pero esto no Na, por vía i.v.
es aceptado por la mayoría de los autores. Actualmente, Puede llamar la atención a las madres, cuando
se plantea que intervienen genes modificadores. Se ha besan la frente de sus hijos con FQ el sabor salado del
establecido que la intensidad del cuadro respiratorio y la sudor. En algunas zonas de Europa, desde varios si-
cirrosis hepática están directamente relacionadas y glos atrás, se decía que cuando se besaba a pequeños
que la aparición de esta ensombrece más el pronósti- y presentaban un sabor salado del sudor tenían una vida
co de la FQ. corta (¿por tener FQ?). Se ha planteado que la FQ es
Los pacientes con FQ pueden presentar litiasis
una mutación adquirida en el humano como una defen-
vesicular causante de dolores abdominales recurrentes
sa contra las epidemias de cólera en Europa durante la
(Cuadro 77.3).
Edad Media. Parece ser que las células intestinales
Cuadro 77.3. Alteraciones intestinales y hepatobiliares en la FQ portadoras del gene FQ son más resistentes a la toxina
según grupos de edades del Vibrion cholerae y a la Salmonella tiphi, por lo
que se produjo la mutación debido a las epidemias en
Lactantes Escolares Adolescentes aquella época; algunos autores no están de acuerdo
y recién nacidos y preescolares con esta teoría. Hay quienes establecen que la afec-
Ileo meconial Síndrome de obs- Síndrome de ob- ción apareció hace muchísimo más tiempo atrás, en la
intestinal trucción intestinal trucción distal Era Paleolítica.
- simple distal (soid) (soid) Se pueden presentar, en algunos pacientes, pe-
- complicado:
Vólvulos, atresia,
queñísimos gránulos de sal en la frente y sobre todo
estenosis, en las cejas, resultantes del sudor, rico en ClNa, eva-
calcificaciones porado.
intraperitoneales.
Se han descrito alcalosis metabólicas, con
Síndrome de tapón hipocloremia, en pacientes con FQ.
meconial o expulsión Hay lactantes que presentan un cuadro con edema
tardía del meconio
generalizado, acompañado de hipoproteinemia y con
Íctero neonatal
prolongado anemia ferripriva o no. Los electrólitos en el sudor serán
Hepatomegalia Hepatomegalia normales, elevándose con la desaparición del anasarca
(por: esteatosis (por: esteatosis (Cuadro 77.4).
hepática, hepática
cirrosis biliar cirrosis biliar
focal, focal, Cuadro 77.4. Manifestaciones clinicas en la FQ por parte de las
cirrosis difusa Cirrosis difusa glándulas sudoríparas y alteraciones metabólicas y según grupos
con/sin con/sin de edades
hipertensión hipertensión
portal, y/o portal y/o Lactantes/preescolares Escolares/adolescentes
hiperesplenismo hiperesplenismo
Hiponatremia con astenia Hiponatremia con astenia
Seudoquiste del Prolapso rectal Prolapso rectal Deshidratación hipotónica Deshidratación hipotónica
colon transverso reflujo g-e masas abdominales
“Golpe de calor” “Golpe de calor”
hernia inguinal palpables
(frecuentemente invaginac. Intest. Alcalosis metabólica Curva de tolerancia a la
acompañada de apendicitis hipocloremica glucosa alterada
hidrocele) diverticulitis “Besos salados” Diabetes mellitus de la FQ
ulcus gd colecistitis Cristales de sal sobre la
(calculosa o no)
piel de la frente o cejas
vólvulos

Parte XII. Aparato respiratorio 1023


Otras manifestaciones clínicas de la FQ. La precozmente, pues se puede mejorar la incontinencia o
neuritis óptica es generalmente secundaria al uso de al- controlarse por medio de ejercicios que mejoren la
gunos medicamentos como el cloranfenicol. Pueden en- muscultura del “suelo” pelviano.
contrarse alteraciones del fondo de ojo paréntesis por La inteligencia no parece estar afectada en la
hipercapnia) o xeroftalmia y/o ceguera nocturna (por FQ y por el contrario, en algunos estudios se ha en-
deficiencia de vitamina A). contrado que muchos pacientes tienen un IQ de cali-
Se puede presentar disminución de la densidad ficación normal alta o superior a lo normal. Muchos
ósea en pacientes adultos con FQ y menos a menudo pacientes plantean profesiones en que ayuden a otros
en adolescentes, mientras que las alteraciones minera- pacientes con FQ o con otras enfermedades crónicas,
les óseas son poco frecuentes en niños. Pueden pre- invalidantes o no.
sentarse fracturas óseas en adultos, en las costillas que Pueden haber trastornos de la conducta, emocio-
dificultarán la respiración, el drenaje bronquial y la nales, de inferioridad, de mala autoimagen o pobre adap-
fisioterapia, empeorando el pronóstico de las manifes- tación social, debidas, muchas veces, a una dependencia
taciones broncopulmonares en pacientes con FQ. excesiva de los familiares, por lo que debe estimularse
Se ha descrito aumento de volumen de las glán- la independencia, mejoría de la autoimagen y el
dulas salivales sobre todo las submaxilares; algunos lo automanejo de su afección en los pacientes con FQ,
relacionan con la malnutrición. educándolos desde pequeños sobre su enfermedad y
Son conocidas, según algunos trabajos, las mal- la conducción de ella. Hasta hace pocos años, los as-
formaciones urogenitales en pacientes con FQ sobre pectos sicosociales en la FQ no habían sido amplia-
todo hipospadias. La atresia u obstrucción de los con- mente estudiados, pero en los últimos años, por el
ductos deferentes, y/o el epidídimo, es causa frecuente aumento de la supervivencia en los pacientes con FQ,
de esterilidad masculina. La potencia sexual y la sexua- han adquirido gran importancia.
lidad no están alteradas en pacientes con FQ, excepto En los últimos años se ha planteado, sobre todo en
si hay trastornos siquiátricos o lesiones pulmonares la adolescencia y en la adultez, la relación FQ y
severas. Menos frecuente es la esterilidad femenina, neoplasias malignas. La mayoría de los trabajos plan-
por alteraciones del mucus del cuello uterino o por tean que no hay un aumento de los distintos tipos de
pólipos cervicales. neoplasias en total, al compararlo con la población gene-
Se han descrito irritaciones y hasta grietas y ral. En cambio, parece que existe un aumento de
excoraciones dolorosas del prepucio y molestias neoformaciones malignas del sistema digestivo (sobre
vaginales durante o después del coito, achacadas al todo cáncer del páncreas, hígado o intestinos) en pa-
aumento de sal en las secreciones prepuciales. cientes con FQ, al compararlos con la población en ge-
El embarazo en las pacientes con FQ con mani- neral (Cuadros 77.5, 77.6 y 77.7).
festaciones respiratorias leves, generalmente, es bien
tolerado, pero cuando existen manifestaciones mode- Cuadro 77.5. Otras manifestaciones clínicas de la FQ
radas o severas, sobre todo con lesiones
Lactantes o preescolares Escolares/adolescentes
broncopulmonares de cierta magnitud, puede ser peli-
groso o causar empeoramiento del cuadro clínico de la Hipercarotinemia Aumento de las glándulas
afección, lo que debe ser conocido por la paciente an- salivares s/t submaxilares
tes que se produzca el embarazo. Neuritis óptica Eritema nudoso (EN)
Cardiomegalia, fibrosis Artritis, con o sin EN
Se puede presentar fracaso del crecimiento en
miocárdica o ambas Erupciones eritematosas
pacientes con FQ y para muchos, si es severo, puede o petequias
ser un signo de pronóstico adverso, sobre todo, la defi- Caries dentales Caries dentales
ciencia en la talla. Hipospadias Hipospadias
Es frecuente la incontinencia urinaria en adoles- Criptorquidia
Hidroceles con hernia inguinal Hidroceles con hernia inguinal
centes y en mujeres adultas, que se producen con los
o sin ella o sin ella
esfuerzos al estornudar, toser, reir, al realizar Retrasos en maduración
espirometrías o la fisioterapia. Muchas veces se ocul- ósea
tan por las pacientes, con retraimiento en sus activida- Infertilidad masculina, y me-
des sociales, negación a continuar la fisioterapia y/o nos frecuente femenina
Ausencia congénita de Atresia de
realizar PFR. Deben ser investigadas y según distin-
conductos deferentes conductos deferentes y/o
tos autores, varían entre el 60 y más del 90 % de las epidídimos
pacientes; estas deben ser enviadas a un urólogo

1024 Tomo III


Cuadro 77.6. Manifestaciones clínicas compatibles con el diagnóstico de fibrosis quística*

• Enfermedad sino-bronco-pulmonar crónica (ESBPCr) de la FQ:


− Polipnea, tos crónica, síndrome coqueluchoide, espectoración.
− Estertores húmedos (localizados o generalizados, persistentes o intermitentes) y/o manifestaciones de obstrucción difusa de las vías
aéreas (sibilancias, hiperinflación).
− Anormalidades (una o varias) en las radiografías o TAC de tórax (hiperinflación, infiltrados, atelectasias, bronquiectasias, múltiples
pequeños abscesos pulmonares).
− Infección intrabronquial persistente a bacterias frecuentes en la FQ: Staphyloccocus aureus (MRSA o no), Pseudomonas aeruginosa
(no mucoide o mucoide), Burkholderias cepacia. Últimamente ha aumentado la importancia de bacterias resistentes a su erradicación,
p/ej. Stenotrophomonas maltofilia o Acinetobacter.
− Sinusitis, pólipos nasales, anomalías en senos paranasales (por radiografías o TAC).
− Dedos “en palillos de tambor” (“digital clubbing”).
• Anormalidades digestivas y/o nutricionales:
− Intestinales:
Ileo meconial (complicado o no) o retardo en la expulsión del meconio de más de 24 h de nacido.
Síndrome de obstrucción intestinal distal (SOID).
Prolapsos rectales.
− Pancreáticas:
Insuficiencia pancreática exocrina.
Pancreatitis agudas, recidivantes o crónicas.
Diabetes mellitus de la fibrosis quística (DMFQ o CFDM en inglés).
− Hepáticas:
Enfermedad hepática crónica manifestada por la clínica, US hepático y/o biopsias: esteatosis, cirrosis focal biliar o cirrosis multilobular
(con signos de hipertensión portal o sin ellos: esplenomegalia, várices esofágicas sangrantes o no, y/o hiperesplenismo).
Alteraciones de la vesícula o vías biliares: hipoplasias, cálculos, colangitis esclerosante.
− Nutricionales:
Recién nacidos: fracaso en alcanzar el peso del nacimiento a las 2 semanas de nacido.
Fracaso en aumentar correctamente de peso o talla (cualquier edad, sobre todo en menores 5 años).
Edema con hipoproteinemia (con anemia ferripriva o sin ella), sobre todo en lactantes.
Complicaciones secundarias a deficiencias de vitaminas liposolubles.
• Síndrome por pérdida de sal o metabólico.
− Depleción aguda de sal o deshidratación hipotónica.
− Alcalosis metabólica.
• Anomalías urogenitales masculinas, que producen azoospermia obstructiva, por ejemplo agenesia congénita bilateral de los conductos
deferentes (CBAVD).

* Modificado de:Hilman BC. Genetic and Immunologic Aspects of Cystic Fibrosis. Ann Allergy Asthma & Immunol 1997; 79:379-390. y de: WHO.
Classification of CysticFibrosis and Related Disorders. Report of a joint WHO-ICF(M)A-ECFS-ECFNT meeting.

Cuadro 77.7. Clasificación de la FQ y afecciones relacionadas (modificado de Dodge. Reunión, 07-2 000, de OMS, ICF(M)A, ECFS, ECFTN)

Tipo E.S. (2-3) Manifestaciones sino- Manifestaciones APF Gene FQ


Elevad. broncopulmonares Ip +/- y otras (s/t hermanos, y/o polimorf
(CL- > 60 (SBP) manifestaciones primos hnos.
mEq/L) digestivas

FQ Si Epcr. de FQ +/- IP: si Sí Homocig.


Típica Sinusitis y/o +/- otras: o o
Con IP pólipos nasales - hepáticas, No Heterocig.
- DMFQ, compuestos
- il. Mec. o soid, (2 genes FQ.
- pancreatitis, diferentes)
- prol. rectales

FQ Si Epcr. de FQ IP: no Sí Homocig.


Típica +/- +/- otras: o o
Sin IP Sinusitis -hepáticas, No heterocig.
y/o pólipos -DMFQ compuestos
nasales

Parte XII. Aparato respiratorio 1025


Cuadro 77.7. (continuación)

Tipo E.S. (2-3) Manifestaciones sino- Manifestaciones APF Gene FQ


Elevad. broncopulmonares Ip +/- y otras (s/t hermanos, y/o polimorf
(CL- > 60 (SBP) manifestaciones primos hnos.
mEq/L) digestivas

FQ Si Bronquitis cron. IP: si o no Sí Homocig.


no a repet. , y/o sibilantes +/- otras: o o
típica (asma o no) -hepáticas, No Heterocig.
-DMFQ, compuestos
- prol.rectales

FQ otros tipos Si no o IP: si o no Sí Homocig.


manif. SBP. +/- otras o
aisladas, manifestac. heterocig.
o poco frecuentes digestivas compuestos
(ej. Íleo meconial)

No FQ, No Azoospermia obstructiva aislada. Homoc.


Pero otra afección No Pancreatitis crónica o recurr. o
relacionada con el No Abpa. heterocig.
gen FQ. No Bronquiectasias diseminadas- compuestos
(related No Pan-bronquiolitis difusa. o
Conditions) No Colangitis esclerosante. heterocig.
No Hipertripsinogenemia neonatal.
No Hipertripsinogenemia neonatal No
sin mutación.
(menos del 4 % de la población ?)

• Administradas. Se eliminan las formas clínicas anteriores del icd-10.


- no se aceptan estudios genéticos positivos si no presentan manifestaciones clínicas multiorgánicas de FQ.
- del 1 a 2%: electr. en sudor normales (se discutirán en CCFQ).
- Es. dudosos (cloro = 40 a 60mEq/L): otras investigaciones excepto con manifestaciones clínicas bien sugerentes de FQ S/T en lactantes.

EXÁMENES QUE SE DEBEN INDICAR realicen frecuentemente (no menos de 50 por año) y
por un mismo personal entrenado para ello para
EN LA FIBROSIS QUÍSTICA
evitar errores e inconsistencias. Ningún labora-
Electrólitos en el sudor (ES). Constituyen jun- torio está exento de cometer errores al realizar
to con las manifestaciones clínicas respiratorias, digesti- ES (Cuadro 77.8). Periódicamente se debe revisar la
vas de insuficiencia pancreática exógena o ambas, y los técnica utilizada; si es posible por una persona con
antecedentes familiares positivos de FQ, sobre todo en experiencia en ella y que no pertenezca al laboratorio u
hermanos o primos hermanos, la base del diagnóstico hospital en donde se realiza la revisión.
de la afección. Más del 98 % de los fibroquísticos pre- Hay pacientes con cuadros clínicos multisinto-
sentan electrólitos en el sudor elevados, con cifras de máticos compatibles con FQ en que el Cl- en el sudor es
Cl- superiores a 60 mEq/L (60 mM/L). Se realizarán, normal. A estos pacientes se les repitirán meses des-
por lo menos, 2 determinaciones en días diferentes. Hay pués las determinaciones hasta constatar 2 electrólitos
algunos autores que plantean cifras por encima de elevados, pues se han descrito pacientes que durante un
70 mEq/L de ES para plantear FQ. Se determinará por tiempo los electrólitos son normales (casos raros des-
el método de iontoforesis con pilocarpina. Aunque pos- critos por Barbero). Mientras, se tratarán en consultas
teriormente se ha utilizado la determinación de la de FQ, pero no se anotarán en el registro de FQ. Deben
osmolaridad del sudor (elevada en FQ) o el uso de elec- discutirse con MINSAP/CCFQ, Grupo Central.
trodos cloro sensibles, la determinación de electrólitos Los lactantes con cifras entre 40 y 60 mEq/L ten-
en el sudor (por iontoforesis) sigue siendo el método drán posibilidades de ser fibroquísticos si presentan ma-
mundialmente aceptado y es confiable siempre que nifestaciones clínicas típicas de FQ, pero se deben discutir
se realice en un laboratorio en el que se siga riguro- en el Grupo Central MINSAP/CCFQ, antes de incluir-
samente la técnica de Gibson y Cook, en donde se los en el registro nacional de FQ.

1026 Tomo III


Cuadro 77.8. Causas de errores de laboratorio de electrólitos en el sudor por iontoforesis con pilocarpina

• Laboratorio en que no se utiliza la técnica con frecuencia.


• Deficiencia en la manipulación de las gasas o papel (mala pesada, no tomar con pinzas).
• Utilizar cualquier papel o gasas.
• No utilizar agua bidestilada o tridestilada.
• Utilizar la misma zona del antebrazo.
• Cantidad de sudor insuficiente (<100 mg).
• Evaporación de la muestra al trasladarla al laboratorio.
• (si se determinan CL- y Na+ a la vez al comparar ambas cifras no deben ser superiores a 20 mEq/L entre las dos; algunos establecen que
no sean superiores a 10 mEq/L). Generalmente se considera que la sola determinación del CL- en el sudor es aceptable. No se acepta
la determinación única del Na. Cuando se utilizan Cl- y Na+ es excepcional que ambas cifras sean idénticas.
• Aceptar cifras de Cl- superiores a 200 mEq/L.

En los pacientes con ES normales o dudosos que elevadas (y con la certeza de la calidad de la técnica) no
tengan un cuadro tìpico y mayores de 1 año de edad, son necesarias repetirlas posteriormente. En aquellos pa-
se realizarán otras determinaciones como la diferencia cientes que se repitieran y fueran normales en 2 o más
del potencial nasal, pues en la FQ se presenta una mayor pruebas, indicarían que hubo error en algunas de las de-
diferencia de potencial (más negativa de –40 mA, ha- terminaciones y no habrá base para continuar plantean-
bitualmente entre –80 y –120 mA) que en los sujetos do el diagnóstico de FQ. Se revisarán las
normales. Esta diferencia negativa de potencial nasal
manifestaciones clínicas y remitirá el paciente a otro la-
se mantendrá después del lavado de la mucosa nasal
con solución salina normal (al 0,9 %) y mejorará o se boratorio de confianza en la técnica, en donde se repeti-
normalizará después del lavado con amiloride. Mien- rán los ES por lo menos 2 veces en día separados. No
tras no se pueda realizar esta prueba, el paciente será obstante, serán presentados a la CCFQ/MINSAP que
considerado como sospechoso de presentar FQ, conti- nombrará un grupo para la reevaluación del paciente.
nuará en las consultas de FQ y se consultará con el Las pruebas de cristalización del sudor, la del par-
Grupo Central CCFQ, aunque no se incluirán en el che sobre la piel y otros “screenings” no serán
Registro de Pacientes como afectado de FQ. Algunos sustitutivas de la iontoforesis con pilocarpina, que siem-
autores recomiendan realizar a estos pacientes, la de- pre se deberán realizar en esos individuos.
terminación de la lipasa en sangre, con una técnica ade- En la forma con edema e hipoproteinemia los ES
cuada, que estará aumentada en niños con FQ de más son, generalmente, normales, elevándose al tratar el ede-
de 1 año de edad con SP o disminuidas en FQ con IP. ma y la hipoproteinemia, con la desaparición del anasarca,
Deben esperarse más investigaciones al respecto so-
que no se tratará con diuréticos.
bre estos planteamientos.
Hasta ahora los niños clínicamente sospechosos
de FQ con electrólitos normales o dudosos (entre 40 y Cuadro 77.9. Otras afecciones en donde se han descrito algunos
pacientes con electrólitos elevados
60 mEq/L) se les debe realizar determinación de dife-
rencia de potencial nasal y comprobar, por estudios • Insuficiencia adrenal
genéticos, que sean homocigóticos, con 2 genes FQ • Displasia ectodérmica hidrótica
con la misma mutación o heterocigóticos compuestos, • Glucogenosis tipo 1
• Deficiencia de glucosa 6 fosfato deshidrogenasa
con 2 genes FQ con distintas mutaciones. • Seudohipoaldosteronismo
Los electrólitos en el sudor (ES) elevados, en au- • Hipotiroidismo
sencia de manifestaciones clínicas típicas sugerentes • Mucopolisacaridosis
• Fucosidosis
de FQ y sin antecedentes familiares probados de la • Diabetes insípida nefrogénica
afección no permiten plantear la FQ, pues, aunque • Disautonomía familiar
son poco frecuentes, hay algunos pacientes con otras • Síndrome de Mauriac
• Síndrome de colestasia familiar (las manifestaciones clínicas ayu-
enfermedades en que se han descrito electrólitos en el darán a diferenciarlas de la FQ)
sudor elevados (Cuadro 77.9).
Con respecto a la desnutrición los electrólitos en el sudor son habitual-
En la FQ las cifras más elevadas no están en re- mente normales. En algunos pacientes pueden presentar cifras dudosas
lación con el pronóstico o la severidad de la afección, o ligeramente elevadas, pero al mejorar la desnutrición con el trata-
miento, se normalizarán las cifras.
aunque se ha planteado que las cifras de Cl- son más Los asmáticos habitualmente presentarán electrólitos en el sudor nor-
elevadas en pacientes FQ con IP que en pacientes FQ males. Se han descrito asmáticos con FQ; hay pacientes con FQ que
con SP. Una vez obtenidas 2 o más determinaciones presentan sibilancias sin ser asmáticos.

Parte XII. Aparato respiratorio 1027


Hay casos excepcionales de pacientes con FQ tenido, es recomendada por algunos, al igual que la de-
(1 al 2 %) con manifestaciones clínicas sugerentes y terminación de las enzimas pancreáticas por estimulación
con electrólitos normales y en relación, generalmente, del páncreas exógeno con pancreatocimina- secretina,
con mutaciones poco frecuentes. Para diagnosticarlos pero son métodos invasivos, molestos y se utilizan me-
como FQ hay que determinar, por investigaciones nos hoy en día. Incluso se ha comparado las ventajas de
genéticas, que el paciente sea homocigótico (2 mutacio- este último método de estimulación con la determina-
nes iguales) o heterocigótico compuesto (2 mutaciones ción de la elastasa 1 pancreática en heces fecales, que
diferentes) y con mutaciones aceptadas del gene FQ, es no es una prueba cruenta y que parece ser más efectiva
decir que tenga un gene FQ heredado de la madre y el que la prueba de estimulación pancreática.
otro gene FQ heredado del padre, o por otras pruebas Sobre la determinacion de la función pancreática
más sofisticadas. endógena ya se trató en DMFQ. (Ver Manifestacio-
En el Congreso Internacional de Gastroenterología nes clínicas).
Pediátrica del 2000 se planteó, en un curso precongreso, También para el estudio del páncreas se utilizan las
que las glándulas sudoríparas humanas no pueden se- determinaciones de proteínas específicas en sangre
cretar sudor con cifras mayores de 180 mEq/L de Cl-. (tripsina inmunorreactiva, amilasa y lipasa, esta última
Cuando en un análisis de ES se reporten cifras de 200 o ya citada anteriormente), el US y la TAC abdominales y
más mEq/L de Cl- se considerará un error de técnica y la pancreatocolecistografía.
no se aceptará dicho análisis (ver Clasificación). Imagenología. Las radiografías simples de tó-
Pruebas de la función pancreática exógena. El rax pueden sugerir el diagnóstico en muchas ocasio-
estudio de la función pancreática, según algunos autores, nes, pero no son patognomónicas. Nos permiten, junto
no se necesita muchas veces en la práctica diaria para el con la clínica y otros exámenes complementarios, so-
diagnóstico de FQ, que se basará, en la mayoría de los bre todo las pruebas funcionales respiratorias (PFR),
pacientes, en las manifestaciones clínicas seguir la evolución, favorable o no, de las manifesta-
broncopulmonares junto a las de insuficiencia pancreática ciones respiratorias del paciente. En los comienzos de
exógena (el aspecto de las heces fecales anteriormente la afección pueden ser normales o presentar
descritas en Manifestaciones clínicas), constatadas por el hiperaereación bilateral (“atrapamiento”) con descen-
personal médico responsable del paciente (no se tendrán so de los hemidiafragmas, que a veces pueden estar
en cuenta referencias verbales o escritas) y, por lo me- aplanados o hasta algo cóncavos hacia arriba, sobre
nos, dos ES con Cl- elevados, realizados en un laboratorio todo en la radiografía lateral en donde también se po-
confiable. A pesar de ello sería conveniente determinar la drá constatar un aumento del diámetro anteroposterior
existencia de esteatorrea por alguna prueba de laborato- del tórax con aumento de la zona radiotransparente
rio, pues la FQ es la principal causa de insuficiencia retroesternal. Posteriormente, junto a la hiperinflación
pancreática exógena en niños, aunque no la única. hay aumento de las sombras broncovasculares y más
Entre las pruebas directas para determinar la pre- adelante, pueden aparecer zonas de consolidación, de
sencia aumentada de grasas en las heces fecales, tene- tamaños variables, generalmente bilaterales, que a ve-
mos la de van de Kamer o determinación de la excreción ces (casos avanzados) adoptan una forma granúlica.
de grasas en las heces fecales recogidas por 3 días se- También con el avance del cuadro clínico, se encontra-
guidos y que, además de determinar el grado de rán zonas radiopacas confluentes, alternando con áreas
esteatorrea, es útil para valorar la efectividad del trata- de radiotransparencia aumentada, algunas pequeñas
miento. Desde hace algunos años, se le está dando gran y redondeadas resultantes de la evacuación de los
importancia a la determinación de elastasa-1 pancreática abscesos a los bronquios pequeños o debidas a bron-
en heces fecales. quiectasias. También pueden haber atelectasias en di-
El estudio de grasas en heces fecales por versos segmentos, únicas o varias a la vez, permanentes
coloraciones y por 3 días seguidos NO es confiable. (sobre todo en los lóbulos superiores) o a repetición, en
Las pruebas indirectas de no absorción de grasas no son la misma zona o no. Pudieran observarse adenopatías
recomendables (lipodiol, palmitato de cloranfenicol y mediastinales. La cardiomegalia con el aumento del arco
otras), pues muchas veces los resultados no son de la arteria pulmonar es tardía, en casos severos y
confiables. avanzados. Resumiendo, las imágenes radiográficas
La intubación duodenal en ayunas para determinar que pueden presentarse, aisladas o más frecuente-
una viscosidad aumentada (con el viscocímetro de mente asociadas, serán: hiperinflación bilateral,
Ostwald por ejemplo) con bicarbonato bajo y con la de- infiltrados, atelectasias, abscesos y bron-
terminación de las enzimas pancráticas del material ob- quiectasias.

1028 Tomo III


Las radiografías de los senos paranasales mues- grado de obstrucción y después con una periodicidad
tran radiopacidad de los senos maxilares en la mayoría variable de acuerdo con cada enfermo. El FEM no será
de los pacientes típicos después de los 7 años de edad. un sustituto de la espirometría que nos proporcionará
Pueden observarse imágenes polipoideas dentro de los datos más seguros.
senos. También se describen malformaciones sinusales La espirometría permitirá como mínimo deter-
a la TAC. minar la CVF (capacidad vital forzada), el VEF-1 (vo-
Las radiografías de abdomen se indicarán en el íleo lumen espiratorio forzado en 1 s), el índice de Tiffenau
meconial (ver Manifestaciones clínicas) o en los (VEF-1/CVF) y el FEF 25-75 (flujo espiratorio forza-
síndromes de obstrucción intestinal distal. do en el 25 al 75 % de la curva) que es el primer
La ultrasonografía abdominal será útil para deter- parámetro que se altera. De acuerdo con el grado de
minar alteraciones macroscópicas del páncreas (aunque la afección cuando existe participación broncopulmonar,
muchas veces no se puede observar este por aumento tendremos inicialmente alteraciones obstructivas (dis-
de los gases intestinales); son excepcionales las calcifi- minución del VEF-1, del VEF-1/CVF y sobre todo del
caciones. También será útil la US abdominal para deter- FEF 25-75) y una curva flujo/volumen obstructiva. Con
minar alteraciones hepáticas (esteatosis) y de la vesícula el avance de la afección se agregarán alteraciones su-
(retraída o aumentada de volumen, cálculos). gerentes de restricción (disminución de la CVF, aun-
La TAC (sobre todo la TAC de alta resolución) del que en cuadros obstructivos más severos la CVF puede
tórax solo se indicará cuando sea necesaria. Podrá ser estar ligeramente disminuida). En casos más avanza-
útil para determinar y localizar las bronquiectasias y su dos los resultados pueden ser mixtos, pero son más
severidad. La tomografía computarizada de alta resolu- severos los patrones obstructivos; aunque a veces hay
ción permitirá sospechar la evolutividad de las lesiones un predominio restrictivo. Si se desea obtener datos
pulmonares en lactantes y preescolares y de una mane- sobre el VR (volumen residual) que está aumentado
ra indirecta, indicar el grado de alteración de la función en pacientes con FQ con cierto grado de lesiones o
pulmonar, pero hay que considerar la radiaciones que para el seguimiento de la obstrucción, se tendrá que
reciben los pacientes. utilizar un gas inerte. Otras investigaciones más espe-
La resonancia magnética con colangiopancrea- cializadas necesitarán un laboratorio de fisiología res-
tografía parece abrirse paso para determinar alteracio- piratoria con técnicas y aparatos más sofisticados.
nes pancreáticas y hepatobiliares sustituyendo a otras La gasometría arterial permitirá conocer el grado
investigaciones más invasivas que se deben evitar. de hipoxia, la saturación de oxígeno, la hipercapnia y
La densitometría por emisión decal de fotones nos alteraciones acidobásicas del enfermo de manera basal,
ayudará a determinar la masa ósea corporal o densidad en las exacerbaciones, durante el ejercicio, la
mineral ósea (DMO) que parece estar en relación con fisioterapia o el sueño. En los episodios infecciosos
la severidad de la EPCr de la FQ. Estas alteraciones, agudos broncopulmonares o en la exacerbación de la
habitualmente se encuentran durante o después de la infección crónica, las alteraciones gasométricas son
adolescencia, pudiendo llegar a la osteoporosis. valiosas para la conducta de urgencia que se debe
Electrocardiograma y ecocardiograma. Rara- seguir y el pronóstico inmediato. Después que ha pa-
mente estará alterado el ECG en los primeros años, pu- sado el cuadro, las cifras gasométricas pueden volver
diéndose encontrar sobrecarga derecha tardía en a las anteriores que tenía el paciente antes de agravar-
pacientes con evolución desfavorable. En casos seve- se y serán útiles para suspender algunas medidas de
ros, al final, se pueden encontrar hipertrofia ventricular tratamiento.
derecha y P pulmonares. En cambio, el ecocardiograma Otras investigaciones. Un hemograma comple-
es valioso para detectar precozmente la repercusión so- to, incluyendo la descripción de la lámina periférica,
bre las cavidades cardíacas derechas y la arteria permitirá descartar anemia o una hipocromía. Aunque
pulmonar, así como su evolución. En el ecocardiograma la hemoglobina sea normal, puede haber deficiencias
con Doppler se podrá plantear, de manera indirecta, la de hierro y si se sospecha, sería útil indicar otras deter-
presión aumentada o no en la arteria pulmonar. minaciones (que no sea la determinación del hierro sé-
Pruebas de funciones pulmonares. EL FEM rico) como el índice de saturación, la determinación de
(flujo espiratorio máximo) es la manera más simple para la tranferrina o la protoporfirina sérica. La leucocitosis,
seguir periódicamente la evolución de la función la eritrosedimentación elevada y sobre todo la
pulmonar utilizando un flujómetro. Inicialmente, según positividad y cifras de la proteína C reactiva (PCR)
la cooperación del paciente, se utilizará varias veces al nos indicarán la posibilidad e intensidad de una infec-
día, y se comprobará por tablas para la talla y sexo, el ción pulmonar y nos servirá también para su evolución.

Parte XII. Aparato respiratorio 1029


Según las facilidades, se podrán indicar determi- pseudomonas aeriginosa en la variedad mucoide (M).
naciones de vitamina B12, ácido fólico, oligoelementos Para muchos, entre ellos Höiby la determinación de
y ácidos grasos esenciales. A veces se indicarán estu- dos o más anticuerpos en sangre a antígenos de
dios de la coagulación que serán anormales por déficit Pseudomonas aeruginosas será indicativo de infec-
de vitamina K (por no administración de vitamina K ción crónica por dicha bacteria. Hasta ahora ningún
concomitantemente con la utilización de antibióticos por antibacteriano ha logrado erradicar las Pseudomonas
tiempo prolongado) o por hepatopatía severa. mucoides (M) de las secreciones traqueobronquiales,
Podrán ayudarnos la realización de ionogramas, pero cursos periódicos de ciertos antibacterianos pa-
glucemia, pruebas sobre las funciones hepáticas y de- recen mejorar el estado clínico general y respiratorio
terminaciones de vitamina (sobre todo A, D, E). de los pacientes, según los autores daneses Llama la
Microbiología. Un punto importante es el estu- atención que la adquisición, en nuestro país, de las
dio de las secreciones traqueobronquiales por aspira- Pseudomonas sea muy frecuente, en pacientes con
ción o expectoración, esta última se realizará con una formas típicas de FQ, durante los primeros 4 años de la
buena técnica y con menos de 10 células espinosas por vida.
campo que permite descartar que la expectoración no La Burkholderia cepacia, en algunos países
esté mezclada con saliva. Menos importantes son los constituye un problema epidemiológico, clínico y so-
exudados faríngeos profundos obteniendo la muestra cial, aunque la Pseudomonas aeruginosa es la bac-
por estimulación de la pared posterior de la orofaringe teria más frecuentemente encontrada en pacientes con
en búsqueda del microrganismo causante de la infec- FQ típica.
ción y tratarla apropiadamente según la sensibilidad a Otras bacterias como las Stenotrophomonas
los antibacterianos, aunque a veces no se correlacionan maltofilia, Alcaligenes xyloxidans, Acinetobacters,
la sensibilidad in vitro y las respuestas in vivo a los algunas más no fermentadoras y las mycobacterias
antimicrobianos utilizados. Para muchos autores entre atípicas, están aumentando su importancia como or-
ellos Höiby, la presencia de Ps. aeruginosa en ganismos patógenos y/o resistentes, debido, en parte,
exudados faringeos profundos, estimulando la pared a la mayor supervivencia y por la mayor utilización
posterior faríngea para producir el “gag”, tienen valor de antibacterianos en pacientes con FQ.
si se presentan Pseudomonas aeruginosas de la va- A veces habrá que diagnosticar una aspergilosis
riedad M, y/o en las no M, si el conteo de colonias está broncopulmonar alérgica (ABPA) u otras micosis que
elevado. En los exudados profundos la ausencia de Ps. complican la FQ, pero el simple hecho de encontrar
aeruginosa puede tener un valor bastante aceptable, hongos en la expectoración no será diagnóstico de in-
aunque la determinación en sangre de anticuerpos fección, si no se acompaña de un cuadro clínico suge-
antiseudomonas es lo que nos permitirá plantear la in- rente y sobre todo de respuestas inmunológicas
fección crónica broncopulmonar a estas bacterias, su adecuadas (ver Tratamiento) a un hongo.
evolutividad y respuesta al tratamiento durante las Estudios inmunológicos. Se realizarán, nunca
exacerbaciones. de manera habitual, por un laboratorio especializado,
Los estudios bacteriológicos periódicos o cuando siempre que se sospechen deficiencias inmunológicas.
existan exacerbaciones broncopulmonares, son nece- Los pacientes con FQ, a pesar de las alteraciones
sarios. En los primeros momentos de la FQ las bacte- inmuno-lógicas localizadas al pulmón, poco frecuente-
rias más frecuentemente encontradas serán los mente presentan deficiencias inmunológicas sistémicas.
Staphylo-ccoccus aureus, resistente o no a “las La electroforesis puede arrojar la gammaglobulina ele-
Meticilinas” (MRSA), aunque pueden encontrarse vada en relación con la infección crónica pulmonar.
Haemophilus influenzae, Klebsiellas pneumoniae, Para algunos la determinación de inmunocomplejos cir-
Streptoccocus pneumoniae y otros microorganismos. culantes es importante para ciertas conductas terapéu-
En muchos pacientes un hallazgo habitual son las ticas. La determinación de los distintos subgrupos de
Pseudomonas aeruginosas de distintos genotipos, que IgG por inmunoelectroforesis podría ser útil para el
producen infecciones a repetición, que si no se tratan pronóstico de la afección pulmonar; según algunos au-
precoz e intensamente, en varios meses la infección se tores, tienen un pronóstico más reservado aquellos pa-
hace crónica, jugando un papel importante la forma- cientes con aumentos de la IgG-2 y de la IgG-3, aunque
ción de biofilms y con transformación de las esto no es aceptado por otros.

1030 Tomo III


En resumen, aunque son múltiples los análisis que utilizar otras determinaciones para el diagnóstico (estu-
se pueden realizar en la FQ, estos se indicarán según dios genéticos, diferencia de potencial nasal u otras). En
cada paciente. Se recomienda indicar al inicio de la FQ, los adolescentes y en adultos con Cl- entre >60 y < 100
además de 2 electrólitos en el sudor como mínimo (que mEq/, se podrá utilizar fluorhidrocortisona, dexametasona
deberán estar elevados el Cl- y el Na+ por encima de o prednisona por una semana antes de repetir los
60 mEq/L o solamente el Cl- (sin realizar el Na+), las electrólitos en el sudor; las cifras elevadas disminuirán,
siguientes investigaciones: después de la utilización de algunos de estos esteroides,
• Radiografías de tórax (frontal y lateral) a distancia en sujetos no fibroquísticos.
de telecardiograma. Si se determinan Cl- y Na+ a la vez, no deben de
• Electrocardiograma. haber cifras, entre estos dos electrólitos, superiores a 20
• Ecocardiograma. mEq/L al compararlas. La cantidad de sudor recolecta-
• Hemograma. da debe ser superior a 100 mg, utilizando una balanza
• Eritrosedimentación, o mejor, proteína C reactiva ultraanalítica. No se acepta la utilización de otro tipo de
cuantitativa. balanza.
• Estudio microbiológico de las secreciones bronquia- El diagnóstico considerará, clásicamente dos as-
les y/o de las secreciones nasofaríngeas profundas pectos:
(estas últimas de menor valor). • Electrólitos en el sudor elevados (Cl- mayor de
• Ultrasonido abdominal. 60 mEq/L) y por lo menos dos determinaciones
• Pruebas funcionales respiratorias (PFR): espirome- realizadas en un laboratorio en que frecuentemen-
tría y gasometría, que se repetirán por lo menos 1 te se efectúen estas investigaciones, en días dife-
vez al año. En la práctica se puede utilizar las deter- rentes y por un mismo personal con experiencia
minaciones periódicas del FEM con flujómetros en esta determinación, para evitar inconsistencias
individales, aunque nunca el FEM (PEFR en inglés) o errores.
sustituirá a las espirometrías. Junto con una o más de estas manifestaciones:
• Otras determinaciones se indicarán según el pacien- − Neumopatías o broncopatías crónicas o a repe-
te y las facilidades que se tengan; no son necesarias tición.
siempre las pruebas de función pancreática exógenas − Síndrome clínico o por investigaciones de labo-
si existe un síndrome clínico de insuficiencia ratorio (que podrán no ser necesarias en la prác-
pancreática exógena (la FQ es la causa más frecuente tica) o ambas, de deficiencia pancreática
de insuficiencia pancreática exógena en el niño), jun- exógena.
to con electrólitos en el sudor elevados, con manifes- − Antecedentes familiares de pacientes con FQ,
taciones respiratorias o sin ellas y con APF positivos sobre todo en hermanos o primos hermanos, per-
de FQ o sin él, comprobados por el personal médico fectamente comprobados por el personal médi-
y estudios genéticos que demuestren que el paciente co (nunca “sospechosos” o referidos).
es homocigótico o heterocigótico compuesto para
genes FQ. Debido a que la FQ presenta una gran variedad de
DIAGNÓSTICO
manifestaciones clínicas que se pueden encontrar en
otras enfermedades, es importante para su diagnóstico
El diagnóstico de las formas típicas de la FQ se
tenerlas en cuenta y descartarlas cuando se presenten
basará en el cuadro clínico multisistémico compatible con
la enfermedad junto con 2 o más determinaciones de una serie de cuadros según la edad:
los electrólitos en el sudor, con cifras de Cl- superiores a • Recién nacidos
60 mEq/L (o 60 mM/L) por el método de iontoforesis − Ileo meconial.
con pilocarpina y recordando que lo aceptado − Síndrome de tapón meconial (demora en la ex-
internacionalmente es el Cl-. Hay adolescentes y adul- pulsión del meconio más de 24 h).
tos, que presentan cifras de electrólitos en el sudor − Síndrome de bilis espesa con prolongación del
elevadas (hasta 100 mEq/L), por lo que en ellos al igual íctero neonatal (más del 50 % de los FQ con
que en niños con cifras de electrólitos en el sudor no este síndrome están precedidos de íleo meconial).
totalmente elevadas (entre 40 y 60 mEq/L) y que pre- − Atresia, estenosis, vólvulos o alguna otra afec-
senten síntomas compatibles con FQ, se tendrán que ción capaz de producir una obstrucción intesti-

Parte XII. Aparato respiratorio 1031


nal en el recién nacido. Radiografías abdomina- − Edema generalizado con hipoproteinemia, con o
les con calcificaciones peritoneales. sin anemia ferripriva (lactantes).
− Que no alcance, antes de los 15 días después del − Deficiencia de vitaminas liposolubles a pesar de
parto, el peso de nacimiento. un buen aporte nutricional.
− Diabetes mellitus.
• Niños de otras edades y en adultos − Manifestaciones neurológicas sin un diagnóstico
− Pulmonares preciso.
− Infecciones respiratorias bronquiales o bronco- − Seudohipoaldosteronismo
pulmonares a repetición o crónicas. − Infertilidad masculina o femenina.
− Empiema, en lactantes sobre todo, y casi siem- − Pólipos del cuello uterino en la mujer adulta.
pre secundarias a bronconeumonías estafilo- − Aumento de las glándulas salivares, sobre todo
cócicas. de las submaxilares.
− Síndrome coqueluchoide o tosferinoso. − Amiloidosis.
− Cuadros obstructivos bronquiales difusos a re- − Artropatías, con o sin eritema nudoso.
petición (asma o no).
− Atelectasias permanentes o a repetición. Desde hace algunos años el interés de los investi-
− Sinusitis crónica o a repetición. gadores se ha centrado en el diagnóstico precoz de la
− Sinobronquitis crónicas. FQ en la etapa prenatal o del recién nacido para instituir
− Poliposis nasal. un tratamiento precoz de la FQ desde los primeros días
− Neumotórax. de vida, con la finalidad de evitar la aparición o progre-
− Hemoptisis. sión de las lesiones y mejorar el pronóstico del paciente,
− Síndrome de disquinesia ciliar. además de realizar el consejo genético a los familiares.
− Deficiencias inmunológicas con infecciones res- Por el momento, estas investigaciones, por el costo y la
piratorias, preferentemente bajas. tecnología necesaria, están limitadas a aquellas familias
en riesgo; es decir, aquellas familias en que ha habido
• Nutricionales o digestivas uno o más pacientes con FQ. Algunas ya se han utiliza-
do de forma masiva a toda o una parte de la población
− Crecimiento y desarrollo insuficiente (a cualquier
en paises desarrollados. No es de extrañar que en un
edad).
futuro más o menos próximo, con los adelantos en
− Disminución o detención del crecimiento.
genética y en bioquímica, se puedan realizar despistajes
− Acrodermatitis enteropática.
masivos costeables para la detección prenatal o posnatal
− Síndrome de malabsorción intestinal.
de homocigóticos y heterocigóticos al gene FQ.
− Prolapsos rectales.
Las pruebas más utilizadas en el presente, algunas
− Reflujo gastroesofágico con bronconeumopatías
de las cuales se están utilizando en nuestro país, son:
crónicas o recidivantes. • Etapa intrauterina
− Cirrosis hepática, con o sin hipertensión portal.
− La determinación, entre las 14 y 16 semanas de
− Invaginación intestinal.
gestación, en el líquido amniótico de alteracio-
− Masas abdominales (impacto fecal). nes de algunas enzimas, por ejemplo la isoenzima
− Cólicos biliares o litiasis vesicular. de la fosfatasa alcalina (elevada en fetos con
− Dolores abdominales a repetición. FQ sobre todo con íleo meconial, que puede ser
− Úlcera gastroduodenal en niños. reconocido al ultrasonido) y de la gamma
− Síndrome oclusivo intestinal. glutamiltranspeptidasa y la aminopeptidasa (am-
− Giardiasis con sintomatología intestinal manteni- bas significativamente disminuidas en el líquido
da y que no responde a tratamientos repetidos amniótico de fetos con FQ).
(sin contacto con infectados). − La biopsia de las vellosidades coriónicas entre
las 6 y 8 semanas de gestación junto con “son-
• Otros das” de DNA específicas. Necesitarían ade-
− “Golpe de calor”. más, que exista en la familia un paciente vivo
− Hiponatremias. con FQ que se estudie al igual que los padres.
− Algunos autores han planteado la utilidad de ul-
− Alcalosis metabólicas con hipocloremia, sin otra
causa demostrable. trasonido uterino y si se encuentra en el feto una

1032 Tomo III


ecogenicidad intestinal aumentada se debe sos- EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
pechar y descartar íleo meconial por FQ, aun- La evolución y el pronóstico dependen de varios
que esta no es la única causa de íleo meconial ni factores:
de ecogenicidad intestinal aumentada en fetos. • La intensidad o gravedad de por sí de la afección
• Etapa neonatal precoz pues hay formas ligeras (con poca repercusión
− Determinación de albúmina elevada en la pri- broncopulmonar y digestiva); formas moderadas, cuyo
mera muestra de meconio por diversos méto- pronóstico dependerá en gran parte, de un diagnóstico
dos, entre ellos el BM test-MECONIO™ que precoz y un tratamiento intensivo, mantenido e
se debe utilizar siguiendo una metodología muy individualizado; y formas severas, que pueden pro-
estricta. ducir la muerte del lactante o en los primeros años de
− Determinación de un aumento de tripsinógeno la vida, a pesar de un tratamiento adecuado. Esta
inmunoreactivo (TIR) en una gota de sangre, evolución estará en relación con la mutación del gene
obtenida por punción del talón del recién nacido FQ aunque se debe tener en cuenta que contribuyen
al nacimiento, sobre un papel de filtro que se también factores exógenos o ambientales, otros fac-
podrá enviar por correo. Si la prueba es positiva, tores genéticos como los genes modificadores y otros
hay que repetirla antes de las 4 semanas. Pare- aspectos, entre ellos, por ejemplo, la existencia de
ce útil, según algunos autores, en el diagnóstico polimorfismos en el gene de la MBL.
de alrededor del 90 % de neonatos con FQ, pero • Para muchos autores, aquellos pacientes con íleo
como en todos los métodos, hay resultados fal- meconial tienen un mejor pronóstico que los pacien-
sos negativos o falsos positivos (hasta 10 %), tes con formas típicas de FQ, pues permiten iniciar
Estudios con un número elevado de RN investi- un tratamiento precoz correcto y evitar la aparición o
gados, como en Wisconsin, han demostrado su retardar el avance de las lesiones broncopulmonares
utilidad, sobre todo cuando se acompañan de y mantener una nutrición adecuada. Cuando hay que
estudios genéticos. Se han encontrado pacien- realizar resecciones intestinales en pacientes con íleo
tes FQ entre 1 al 3 % de los RNV investigados meconial, el pronóstico es menos favorable debido,
y en hasta 12 al 14 % de heterocigóticos; no se al parecer, a deficiencias ulteriores de ácidos grasos
ha explicado, hasta ahora, la causa de esto últi- esenciales, de cadena larga y poliinsaturados.
mo. Al igual que la mayoría de las otras investi- • Otro factor en la evolución y pronóstico de la enfer-
gaciones se necesita corroborar ulteriormente la medad, es la cooperación familiar y la actitud del pa-
FQ por la prueba de electrólitos en el sudor por ciente hacia su afección, cuando tenga edad para
iontoforesis con pilocarpina. Hay que recordar comprenderla.
que esta última prueba es dificultosa en las pri- • Casi siempre un diagnóstico precoz, por “screenings”
meras 3 a 6 semanas de vida, pues con frecuen- o no, con un tratamiento enérgico, individualizado y
cia es difícil obtener más de 100 mg de sudor a de comienzo temprano, deberá producir un mejor pro-
estas edades. nóstico.
− Se están planteando otros “screenings”, como la • También influirá el grado de las lesiones pulmonares
determinación de la proteína asociada a la que tenga el paciente cuando se realice el diagnósti-
pancretitis (PAP) en RNV, pero se necesitan co. En Canadá, según Tullis, la determinación del
la repetición de estas determinaciones por otros FEV-1 y la rapidez de declinación de la función
grupos de investigadores para demostrar su valor. pulmonar, constituye uno de los mejores parámetros
para predecir la supervivencia de los pacientes.
Existen publicaciones en que plantean que los pe- • El estado nutricional adecuado contituye un parámetro
queños, detectados por “screenings” al nacer , entre 5 a importante. Se cita que una vez presentadas cierto
13 años después, presentan una evolución mucho más grado de alteraciones nutricionales, sobre todo en los
favorable, con evolución respiratoria y nutricional mu- primeros años de vida, son difíciles de revertirlas. Se
cho mejor, que aquellos que no fueron diagnosticados ha citado que una reducción en la talla y peso a la
hasta la aparición de las manifestaciones clínicas. Hay edad de 3 años, está asociada con una reducción de
quienes establecen que con la utilización estos “screenings” la función pulmonar a los 6 años de edad, aunque no
no se prolonga apreciablemente la colonización precoz está claro si una mejoría evidente del estado nutricional
por Pseudomonas aeruginosa. en el año que sigue al diagnóstico, en respuesta al

Parte XII. Aparato respiratorio 1033


tratamiento, podría producir una mejoría de la fun- Kulczicki modificado por Doershuck, Mathews y
ción pulmonar años después. colaboradores. Aunque existen otros conteos o scores,
• La aparición de la DMFQ puede ser un factor ad- todos presentan algunas deficiencias u omisiones, Si bien
verso en el pronóstico de la FQ. con el conteo de Shw.-K modificado, cuando se utiliza
• La aparición de una cirrosis hepática, sería un individualmente, a cada paciente, hay que agregarle otros
parámetro adverso en la evolución y el pronóstico de factores: estado cardiovascular incluyendo el
la FQ ecocardiograma; infección crónica pulmonar por
• Un estado socioeconómico y cultural bajo de la fami- Pseudomonas aeruginosa sobre todo la variante
lia, influye de manera desfavorable en la evolución mucoide u otras bacterias resistentes, estado de las prue-
de la FQ. bas funcionales respiratorias; presencia de DMFQ o
• La infección por Burkholderia cepacia sería otro cirrosis hepática; comprensión y cooperación al trata-
factor adverso, así como la infección pulmonar cró- miento por parte de los familiares y pacientes o algunos
nica por Pseudomonas aeruginosa, sobre todo por aspectos más que afectan el conteo. Este nos permite
la variedad mucoide. fácilmente considerar la severidad de la FQ y su pro-
nóstico de los pacientes en grupos de “excelente” (100
De una supervivencia media de pacientes con FQ a 86 puntos), “bueno” (85 a 71 puntos), “regular”
de menos de 5 años de edad en 1940, esta ha mejorado (70 a 56 puntos), “moderado” (55 a 41 puntos) y “seve-
progresivamente y en el 2001 la vida media de los ro” (40 o menos puntos). En general , los pacientes con
fibroquísticos era de más de 30 años en países conteos de “excelente” o “bueno” tienen, habitualmen-
médicamente desarrollados; y algunos, como Dinamar- te, un buen pronóstico, siempre que sean tratados debi-
ca, comienzan a plantear una vida media de hasta más damente, aquellos con conteos de “severo” o “moderado”
de 40 años. Esto se debe al desarrollo de las ciencias tienen un mal pronóstico y muchas posibilidades de fa-
médicas, el mejor conocimiento de la patogenia de la FQ llecer en poco tiempo; en pacientes con “regular” de-
y a un tratamiento precoz e intenso de la FQ, sobre penderán su evolución del tratamiento y otros factores
todo de la enfermedad pulmonar de la FQ que juega un como por ejemplo el grado de lesión pulmonar y el esta-
papel fundamental en su evolución y pronóstico, junto a do nutricional cuando se hizo el diagnóstico o llega a
un tratamiento dietético adecuado, con la utilización nosotros.
correcta de las nuevas enzimas pancreáticas, con la Aquellos centros de FQ que monitorean a sus pa-
mejoría del estado nutricional del paciente y a un mayor cientes con respecto al peso para la talla, indican
conocimiento de la afección por parte del personal mé- espirometrías con frecuencia, están atentos a la nutri-
dico, de los familiares y de los pacientes. ción y la íntima relación de esta con las manifestaciones
Con el aumento de la esperanza de vida y el mayor digestivas, la dieta y las enzimas pancreáticas, que ade-
número de pacientes que llegan a la adolescencia y a la más tratan agresiva y precozmente las infecciones res-
edad adulta, se han puesto de manifiesto un buen núme- piratorias, presentan una mejor nutrición, función
ro de problemas biosicosociales como la DMFQ, el cui- pulmonar y mayor supervivencia, que aquellos centros
dado del paciente por sí mismo, la independencia y que no tienen tanto en cuenta estos parámetros y por lo
dependencia a la vez del paciente a su familia, la planifi- tanto el pronóstico de sus pacientes es menos favorable.
cación del trabajo del paciente, la planificación familiar COMPLICACIONES
y otros problemas que hace 15 o más años no se presen- No podemos extendernos en ellas, aunque están
taban. Se considera que, en algunos países desarrolla- perfectamente descritas en algunos trabajos que apare-
dos, alrededor de un 30 % de pacientes con FQ no están cen en las bibliografías recomendadas, al final de esta
diagnosticados, y que en Latinoamérica la proporción actualización, pero se debe aclarar que varias de las
debe ser mucho mayor (se cita hasta 90 % de pacientes complicaciones son, para muchos autores, parte del
con FQ no diagnosticados en algunos países de LA). En cuadro clínico de la FQ; por ejemplo: las neumonías, los
Latinoamérica la vida media es mucho menor de 10 años dolores abdominales recurrentes, atelectasias y el “cor
de edad. En Cuba, según el registro de 1997 de la CCFQ, pulmonale” crónico. Las complicaciones pueden divi-
la vida media de los pacientes FQ era de unos meses dirse en:
por encima de los 12 años de edad. • Complicaciones más frecuentes del sistema respi-
En nuestro país, para la evolución de los pacientes ratorio (no en orden de frecuencia):
con FQ, se recomienda emplear por los distintos grupos − Aspergilosis broncopulmonar alérgica (ABPA).
de trabajos de la CCFQ, el conteo de Shwachman y − Atelectasias a repetición o mantenidas.

1034 Tomo III


−Hemoptisis moderadas o severas. laxantes?, ¿otras causas, como por ejemplo,
−Neumotórax. polímeros utilizados para la capa que revisten
−Insuficiencia respiratoria. los microgránulos? muy plantedo últimamente, o
−Bronquiectasias. ¿por varias causas a la vez?).
−Abscesos pulmonares. − Síndrome de obstrucción intestinal distal (SOID),
−Infección broncopulmonar por Burkholderia anteriormente denominado “equivalente del íleo
cepacia, que puede producir un cuadro agu- meconial”.
do toxiinfeccioso con dificultad respiratoria con − Pancreatitis crónicas o a repetición.
bronconeumonía abscedada, con diseminación − Cálculos vesiculares.
hematógena y muerte en poco tiempo (síndro- − Calcificaciones pancreáticas.
me cepacia); un cuadro de destrucción progre- − Tumores malignos del aparato digestivo (dis-
siva del parénquima pulmonar con insuficiencia cutido).
respiratoria en meses; o un cuadro de infección − Asociación con otras afecciones: intolerancia a
crónica de evolución progresiva y resistente a la lactosa, ileítis regional, intolerancia a proteí-
todo tratamiento. Más raramente, se han des- nas de la leche de vaca.
crito cuadros mantenidos ligeros, de evolución • Complicaciones dependientes de la pérdida de sal y
lenta. Estos diferentes cuadros parecen estar, agua por el sudor
en parte, relacionados, al menos en parte, con − Cuadros de adinamia.
distintos genovares (cepas) de la B. cepacia, de − Pérdida de conocimiento o “golpes de calor”.
las cuales se han reportado por lo menos 5 y en − Deshidratación hiponatrémica.
algunas se han descrito cuadros pulmonares más • Otras complicaciones
severos que en otras. Para Elborn la cepa II − Cirrosis hepática sin o con hipertensión portal o
(o Bulkholderia multivorans) se asocia a cua- sin ella con várices esofágicas, con
dros pulmonares menos severos, mientras que hiperesplenismo por esplenomegalia o sin él.
la cepa (o tipo) III, la más fecuente en su hallaz- − Diabetes mellitus de la FQ (DMFQ).
go, es muy infecciosa. Pero siempre habrá que − Esterilidad, sobre todo masculina.
tener en cuenta otros factores que puedan in- − Trastornos de la personalidad o de adaptación
fluir en la evolución adversa de una infección social.
en un paciente con FQ como ya se citó con la − Dependencia excesiva a la familia por parte del
deficiencia de la MBL. paciente.
− Neurosis.
− Empiemas, sobre todo estafilocócicos y en niños
− Sicosis (no frecuentes).
pequeños.
− Deficiencia escolar.
− Bronquiolitis obliterante.
− “Cor pulmonale” crónico.
− Cuadros de rechazo de trasplante vs hospede-
− Incontinencia urinaria femenina s/t en adolescen-
ros, cuadros de pánico o de afección de estrés
tes y adultas.
postraumáticos” (PTSD). Todos estos síndromes
− Vulvovaginitis moniliásicas.
se han descrito en pacientes con FQ transplan- − Trastornos neurológicos (niños mayores), ane-
tados. mia hemolítica o acrodermatitis enteropática
• Complicaciones más frecuentes del aparato digesti-
(lactantes o niños menores ) por deficiencia de
vo (no en orden de frecuencia): vitamina E.
− Reflujo gastroesofágico (con o sin manifestacio- − Hemorragias por deficiencia de vitamina K.
nes respiratorias por aspiración y/o con esofagitis − Ceguera nocturna, xeroftalmia, ulceraciones
que pudiera conducir a una estenosis esofágica). corneales, por deficiencia de vitamina A.
− Gastritis. − Acrodermatitis enteropática por deficiencia de
− Úlcera gastroduodenal. zinc.
− Constipación intensa. − Síndrome de seudoBartter.
− Apendicitis. − Anemia por déficit de B12.
− Invaginación intestinal. − Deficiencia de cicatrización de heridas.
− Vólvulos intestinales. − Anasarca, con o sin anemia hipocrómica.
− Prolapso rectal. − Síndrome de disquinesia ciliar secundaria.
− Colonopatía fibrosante (¿en relación con dosis − Iatrogénicas: hipercalcemia, hipercalciuria y hasta
elevadas de lipasa ingeridas diariamente?, ¿por nefrocalcinosis por exceso de administración de

Parte XII. Aparato respiratorio 1035


vitamina D; deficiencias de magnesio secunda- La clasificación siguiente (que cambiará según fu-
rias al abuso de aminoglucósidos o por adminis- turos conceptos) se basa sobre todo en las manifesta-
tración bucal repetida de N-acetilcisteína, neuritis ciones clínicas, aunque también se deben considerar las
óptica por cloranfenicol. investigaciones genéticas. En la nueva clasificación con-
− Fracturas por osteoporosis. Se ha llamado la aten- sideramos 5 tipos:
ción sobre las fracturas de costillas como un pro- • Los primeros 4 tipos (FQ típica con IP, FQ típica con
blema creciente en adultos con FQ y su efecto SP, FQ atípica y FQ otras) corresponden a pacientes
adverso sobre la tos, la movilización de las con FQ y en cada uno de estos tipos se considera-
secreciones y la fisioterapia.
rán:
− Osteoartropatía neúmica hipertrofiante.
− Electrólitos en el sudor.
− Cardiomegalia “idiopática” (que simula una
− Manifestaciones respiratorias.
endomiocardiopatía primaria).
− Manifestaciones pancreáticas exócrinas y otras

NUEVA CLASIFICACIÓN DE LA FQ manifestaciones digestivas.


− Antecedentes familiares (bien comprobados) de
Y AFECCIONES RELACIONADAS
FQ o no.
Esta clasificación se basa, con algunas modifica- − Investigaciones genéticas.
ciones, en la propuesta presentada por el Profesor J. • El 5º. tipo considera un grupo de “Afecciones rela-
Dodge a la ICF(M)A y en el documento WHO/CF/
cionadas con la FQ”. Estas afecciones presentan
HGN/00.2 que nos envió el doctor V, Boulyjenkov
en su genotipo, por lo menos un gene FQ (gene
(OMS) hace pocos años.
CFTR) y cuando aparecen aisladas en un individuo,
En la fibrosis quística (FQ) al planificar una clasifi-
cación, hay que tener en cuenta varios aspectos, algu- este no se considera como FQ. Pero debe ser segui-
nos de ellos expuestos en los últimos años. La mayoría do en consulta externa, pues si en el futuro presen-
de ellos están señalados en este documento: tara electrólitos en el sudor elevados, junto con
“En la fibrosis quística (FQ) la relación geno- manifestaciones clínicas compatibles con la FQ, en-
tipo-fenotipo no parece ser consistente, excepto en tonces la afección, clasificada hasta entonces como
lo referente a la insuficiencia pancreática (IP) o la sufi- “relacionada” (bronquiectasias difusas, hipertripsino-
ciencia pancreática (SP)” . Esto es debido a que in- genemia congénita, azoospermia obstructiva) el pa-
tervienen genes modificadores y factores exógenos ciente se consideraría como FQ. Si la “afección
o ambientales, que pueden actuar sobre el fenotipo relacionada” (ABPA, pancreatitis crónica, colangitis
de esta afección, modificándolo. esclerosante) aparece en un paciente ya diagnos-
“Hay descritas más de 1000 mutaciones del gene ticado como FQ entonces se consideraría como
FQ y más de 300 polimorfismos” (hasta el 2004). una complicación de la FQ.
“Hay pacientes homocigóticos a la mutación del
gene delta F508, aún en una misma familia, que tienen TRATAMIENTO

fenotipos diferentes”. Debe ser precoz, intensivo, individualizado, de


“Hay algunos pacientes con mutaciones severas, acuerdo con las manifestaciones clínicas que presente
que persisten asintomáticos por lo menos los primeros el paciente y las alteraciones encontradas en los exáme-
años de la vida y hasta la 5ª. década de esta” (descritos nes complementarios. El tratamiento será realizado por
por Warwick). un grupo multidisciplinario con experiencia en la afec-
“Algunos pacientes, con fenotipos FQ típicos, no ción, dirigido fundamentalmente por un pediatra o
se les ha encontrado el genotipo, aún con estudios de neumólogo que se encargará de la orientación del gru-
secuencias del gene CFTR” (descritos por Tsui). po. El especialista de atención primaria o médico y la
La CFTR tiene otras acciones, algunas conocidas enfermera de la familia del paciente, en todo momento,
y otras por conocer. deben tener acceso a dicho grupo o formar parte de
Por todo lo anterior y teniendo en cuenta que los este. En Cuba, la CCFQ, tiene núcleos en varios hospi-
estudios genéticos parecen presentar una buena especi- tales, sobre todo pediátricos, en que se deben realizar
ficidad, pero no una buena sensibilidad (los estudios consultas semanales y de acuerdo con su severidad de
genéticos son inconsistentes para basarse exclusivamente la FQ, el paciente se citará cada pocas semanas o cada
en ellos al hacer una clasificación), por lo que fue ne- 6 meses, según la severidad y evolución. Hay que evi-
cesaria una clasificación según los conceptos nuevos. tar que a la misma consulta asistan pacientes con

1036 Tomo III


Pseudomonas aeruginosa o Burkholderia cepacia y médico principal cada 6 o 12 meses según el paciente.
pacientes sin que estén colonizados con ellas, pues está En cada consulta se le dará atención fundamental a las
demostrado el peligro de infecciones cruzadas en me- manifestaciones respiratorias y digestivas, la fisioterapia,
dios hospitalarios. Deben de citarse, según posibilida- la nutrición, dieta y enzimas pancreáticas, uso de
des, no más de 4 a 5 pacientes en cada consulta, tratando antibacterianos u otros medicamentos, los estudios de
que ese mismo día además de la consulta del pediatra o microbiología. Las PFR se realizarán por lo menos una
neumólogo, junto al fisioterapeuta (que revisará la vez al año. Siempre se estará atento a aclarar las dudas
fisioterapia), la enfermera y el (la) trabajador (a) social, y problemas emocionales o de otro tipo que se hayan
sean atendidos (periódicamente y según las necesida- presentado desde la visita anterior.
des del paciente), en las consultas del nutriólogo, del si- Dividiremos el tratamiento en:
quiatra o sicólogo, del gastroenterólogo o de cualquier • Medidas contra las manifestaciones dependientes del
otro especialista y se realizarán las investigaciones ne- sistema respiratorio.
cesarias (Cuadro 77.10). Lo ideal es que el paciente y • Medidas contra las manifestaciones dependientes de
familiares no tengan que asistir repetidamente al hospi- la insuficiencia pancreática exógena, que producen
tal o centro donde se consulte (para evitar problemas de un síndrome de malabsorción, o de otras alteraciones
infecciones cruzadas, pérdida de trabajo o escuela, trans- del páncreas.
portación u otras molestias); se recomienda que la con- • Medidas contra las manifestaciones dependientes de
sulta de FQ coincida con las consultas de otras las alteraciones gastrointestinales y hepatobiliares.
especialidades que también tengan una participación en • Medidas contra las deficiencias nutricionales o cómo
el seguimiento de los pacientes o mejor, que el paciente evitarlas.
asista al centro especializado desde temprano, almuerce • Medidas contra los problemas emocionales o
en un lugar destinado para ellos, y termine al final de la sicosociales y la relación del grupo paciente/familia
tarde, para regresar a su hogar después de haber asisti- (P/F) y el grupo médico (G/M).
do a varias consultas y le hayan realizado las investiga- • Utilización de sal común en la dieta y administración
ciones necesarias. de líquidos.
Muchos de los pacientes se ingresarán al hacerse • Otras medidas.
el diagnóstico o para ratificarlo en un hospital donde exista • Conocimientos, por los familiares y el paciente, de
un grupo de la CCFQ y sin un contacto directo con otros cómo se puede manifestar una infección bronco-
fibroquísticos durante el ingreso. Se valorará la situa- pulmonar o una exacerbación de ella, para tomar
ción del enfermo, sobre todo los aspectos respiratorios, las medidas adecuadas rápidamente.
digestivos y nutricionales. Se realizarán las investigacio-
nes necesarias, en particular las PFR, la imagenología y Debemos aclarar que la disminución en la mortali-
los estudios microbiológicos y la obtención de datos dad temprana y el aumento de la supervivencia prome-
sicosociales. Se explicará y se enseñará la técnica de dio por encima de los 30 años de edad, producido en
fisioterapia que debe utilizar y que formará parte de un países desarrollados, se ha basado en un mejor conoci-
tratamiento integral y multidisciplinario. Se realizará el miento de la FQ, en su diagnóstico precoz y el trata-
conteo que se utilice: Shwachman-Kulczycki modifica- miento individualizado por el personal médico y familiares,
do por Mathews y Doershuk, el de Shwachman- y se incluye al paciente de acuerdo con la edad. Tam-
bién han influido:
Birminghan, el del NIH. o cualquier otro y se les
• Desarrollo de terapias antibacterianas.
suministrará a los padres los primeros conocimientos
• Fisioterapia: técnicas y terapias agregadas.
sobre la FQ incluyendo el consejo genético preferible-
• Tratamiento nutricional incluyendo la dieta y la utili-
mente por el o la genetista. Se aclararán, con palabras
zación de enzimas pancreáticas de mejor calidad.
sencillas, las dudas y ansiedades que sienten los familia-
• Un mejor conocimiento por parte de pacientes y los
res y el paciente, sin que se recomiende expresar un familiares sobre FQ.
pronóstico definitivo. Progresivamente, en las otras con-
sultas, se continuará la enseñanza a los familiares y al Sin embargo, es asombrosa la cantidad de otras
paciente, cuando tenga edad adecuada para compren- medidas, con la consiguiente disparidad de criterios so-
der, y se explicarán los cambios o adiciones en el trata- bre ellas, que se plantean en estos momentos y que tie-
miento que sean necesarios. El conteo de nen diversas finalidades:
Shwachman-Kulcziki modificado por Doershuck y • Actuar sobre la anormalidad genética por medio de
Mathews (o cualquier otro conteo) se realizará por el la terapia génica que consiste en introducir genes

Parte XII. Aparato respiratorio 1037


Cuadro 77.10. Atención habitual de un paciente FQ recomendada por varios autores franceses (modificada a nuestro medio)

Cada Dos veces Una vez al No de manera En busca de:


3 meses al año año sistemática. alteraciones del tórax,
del estado nutricional,
crecimiento, pubertad
y otras manifestaciones.

Examen físico. X (el promedio, dependerá


del estado del paciente)
Exámen ORL X Pólipos
Sinusitis
PFR incluye
gasometría X Cuadro obstructivo o
como hipoxemia.
mínimo Hipercapnia. Alt.
ácid.bás.

Rayos X tórax u otras X Empeoramiento del


determinaciones si evol. clínica cuadro radiográfico o
imagenológicas satisfac de otras investigaciones
imagenológicas

“Scanning” torácico X Bronquiectasias

US abdominal X Alteraciones hepáticas,


de vesícula biliar
o páncreas

Ecocardiografía X Sobrecarga derecha


(preferiblemente con Sospecha de
Doppler) hipertensión
pulmonar

Esofagoscopia X Esofagitis,
Várices esofágicas

Estudio microbiológico X Flora de expectoración


o por aspiración de la
mínimo VA inferiores
y según (nasofaríngeo discutido)
evoluc.

Hemograma
Si Hb dism.:estudio
de anemia X

Ionograma X Cifras bajas de cloro y


sodio

Glucemia, s/t después Descartar diabetes


de 10 años de edad X mellitus de la FQ
mínimo (DMFQ)

Examen nutricional X Estado nutricional


mínimo
Dosificación de
vitaminas y
oligoelementos. X Deficiencias
Examen inmunológico X Deficiencias
si se necesita inmunológicas

1038 Tomo III


CFTR normales clonados, en las células respirato- en sangre entre 50 a 100 μg/mL, aunque ya se
rias. Es la esperanza de un futuro, al parecer no tan citan reacciones adversas y siempre se debe
cercano, pues lo que se anunció, en 1993, como rela- utilizar con dosificaciones periódicas en sangre;
tivamente sencillo, la introducción de genes norma- utilizar esteroides u otros antiinflamatorios
les en las células epiteliales respiratorias por medio inhalados o por vía bucal.
de virus o liposomas, ha encontrado dificultades téc- − Tratar de erradicar o disminuir la infección o sus
nicas. Las investigaciones continúan y hay espe- consecuencias: nebulizar: Alfa-1 antitripsina na-
ranzas en que estas se vayan superando con la tural o recombinante; aerosoles de antibacteria-
utilización de nuevos vectores como los rAAV 5 ó 6 nos ya sea un aminoglucósido como tobramicina
(adeno virus asociados recombinados números 5 ó “clásica” o una especial (T oby®) obtenida sin
6), nuevos liposomas u otras técnicas actualmente otros agregados que produzcan irritación de las
en investigación. vías aéreas, aunque hay autores que continúan
• Actuar sobre la CFTR alterada por medio de tera- utilizando la tobramicina clásica de uso parenteral,
pias diversas: sustituyendo fragmentos de CFTR anor- pues establecen que no es tan frecuente la irri-
mal por fragmentos normales dentro de las células; tación y su costo es menor, u otros antibac-
utilizando fenilbutirato por vía bucal (para pacientes terianos (colimicina); administrar nuevos
deltaF508 que “colocaría” la CFTR normalmente en antibacterianos como el meropenem i.v., u otras
medidas.
la pared celular) o utilizando algunos amino-glucósidos
− Actuar contra órganos severamente dañados:
(por ejemplo la gentamicina) parenterales en ciertas
transplantes pulmonares que parecen ser la me-
mutaciones “stop” como la G542X.
dida que se debe utilizar en pacientes con seve-
• Actuar sobre la alteración del transporte de iones o
ro daño pulmonar, a pesar de un tratamiento
sobre la secreción anormal de mucus: por
intenso, utilizando parámetros y técnicas que va-
nebulizaciones de UTP (uridin trifosfato) que esti- rían según los distintos autores y que produce
mula el paso del Cl- desde las células epiteliales ac- una supervivencia compatible con las que se ob-
tuando sobre otros canales de Cl- no dependientes tienen en los transplantes en otras enfermeda-
de la CFTR; nebulizaciones de amiloride que inhibe des pulmonares crónicas y mejora la calidad de
la reabsorción exagerada de Na+ hacia la células; vida durante varios años en un porcentaje apre-
DNasa recombinante inhalada (Pulmozime®) que ciable de pacientes. La mayor dificultad radica
fraccionaría el DNA del mucus en las secreciones en la falta de órganos donados y que se trata de
respiratorias y que actualmente parece tener los obviar con los transplantes de lóbulos de perso-
mejores resultados en los primeros 5 años de la vida nas vivas, ahora en auge. También se realizan
de los fibroquísticos; gelsolin que fragmentaría la transplantes de páncreas o de hígado.
actina en estas secreciones, milrinone u otras − Fertilizar in vitro con óvulos maternos, utilizan-
terapeúticas. do el semen normal de padres FQ con agenesia
• Actuar sobre la inflamación y la infección pulmo-nar, bilateral congénita de los conductos deferentes
evitándola o tratándola: o por otras técnicas de inseminación complicadas.
− Evitar la inflamación o la infección: utilizar
dextrán de alto peso molecular nebulizado, que Varias de las acciones anteriormente enumeradas
parece interferir la adherencia de las ya son una realidad (DNasa recombinante, amiloride,
Pseudomonas aeruginosa a las células de las ibuprofeno, algunos nuevos antibacterianos, transplantes)
vías aéreas; péptidos antibacterianos (un plan- pero otras están restringidas a investigaciones de labo-
teamiento atractivo para el futuro, pero que ha ratorio que progresan o están en fase I o II de investiga-
tenido dificultades en sus inicios); vacunas con- ción; algunas de ellas parecen ser prometedoras.
tra pseudomonas (en estudio desde hace algu- Pasemos a las medidas actuales que se deberán
nos años en Europa pero que hasta ahora no ha utilizar en la mayoría de los pacientes FQ:
cumplido lo esperado aunque las últimas pare- Medidas contra las manifestaciones del siste-
cen prometer), vacunas contra los virus respira- ma respiratorio. Son sintomáticas y sus objetivos están
torio sincicial (RSV); ibuprofen como encaminados fundamentalmente a:
antinflamatorio y preferiblemente de manera − La limpieza del árbol traqueobronquial de secrecio-
precoz (en dosis de 20 a 30 mg/kg/dosis, 2 ve- nes espesas, infectadas o no.
ces en 24 h, por vía bucal, para obtener cifras − Control o supresión de las infecciones.

Parte XII. Aparato respiratorio 1039


Medidas para la limpieza del árbol traqueo- Comprenden entrenamiento de resistencia, ejercicios
bronquial para fortalecer la musculatura sobre todo la del tórax
• La fisioterapia del tórax constituye, hasta ahora, la y la llamada “prensa abdominal”, ejercicios de movi-
mejor manera de facilitar la limpieza de las lización del tórax, la columna vertebral, cuello y hom-
secreciones, utilizando distintas técnicas como dre- bros.
naje postural y percusión, muchas veces asociadas Los pacientes desnutridos o graves, con baja satura-
con vibraciones sobre distintos segmentos pulmonares ción arterial de O2, no se beneficiarán de los ejerci-
(sobre todo en niños pequeños), ciclo activo de la cios para fortalecer la musculatura ni del
respiración, drenaje autógeno, drenaje autógeno mo- entrenamiento de resistencia.
dificado, presión espiratoria positiva, presión Algunos pacientes presentan broncoespasmo provo-
espiratoria positiva de alta presión o presión espiratoria cado por los ejercicios.
positiva oscilante (aparatos flutters). Se recomienda utilizar, previo a la fisioterapia,
La/el fisioterapeuta seleccionará y enseñará la téc- broncodilatadores del tipo agonistas beta-2
nica más adecuada según la edad del paciente, sus adrenérgicos de acción corta inhalados, a la misma
características y las de sus familiares, revisándolas dosis y forma que para el asma bronquial. Hay pa-
periódicamente. Las distintas técnicas se pueden cientes que presentan disminución de la Sat.O2 du-
rotar hasta encontrar la que mejor convenga al pa- rante los ejercicios; en ellos se realizarán los
ciente o se acepte por este; a veces se cambiarán de ejercicios con administración de oxígeno.
tiempo en tiempo, para mantener el interés del niño. Algunos utilizan ejercicios de relajación, con buenos
Ninguna otra técnica ha sido aprobada por la IPG/ resultados.
FQ (Grupo Internacional para la Fisioterapia en FQ) • En todo paciente con FQ de acuerdo con sus carac-
cuyos planteamientos son aceptados por la Asocia- terísticas, excepto los graves, se debe estimular la
ción Internacional de FQ (ICF[M]A) y a la que realización de deportes, sin competiciones, por lo
pertenece la CCFQ desde principios de la década menos al principio, y de acuerdo con sus posibilida-
del 70. des. Nunca los deportes sustituirán a la fisioterapia
• Terapia de inhalación. Se considera hoy un compo-
Han aparecido trabajos en los que se reportan bene-
ficios de masajes a pacientes de 5 a 12 años de edad, nente importante en el tratamiento de la FQ, casi
siempre con la fisioterapia del tórax, aunque se ha-
que disminuyen, según sus autores, la ansiedad. Tam-
brán de tener en cuenta, además de los medicamen-
bién se ha recomendado la utilización de autohipnosis
tos que se van a utilizar, una serie de características
en niños mayores o adultos, para disminuir los mo-
al adquirir los equipos nebulizadores. Se podrán utilizar:
mentos de estrés por punciones venosas u otras
− Broncodilatadores: en pacientes que presenten
situaciones que se producen en la FQ, pero hasta
broncoespasmos con la fisioterapia del tórax o
ahora son necesarios nuevos estudios para ser acep-
con el ejercicio. Se utilizarán beta-2 adrenérgicos
tados en la fisioterapia de la FQ. Lo mismo sucede
de acción corta inhalados (salbutamol/albuterol)
con la diatermia u otras electroterapias, calor sobre
15 a 20 min antes de la terapia del tórax o el
el tórax, magnetoterapia u otras medidas, cuyos be-
ejercicio y mientras sean necesarios. Nunca
neficios no han sido científicamente comprobados
de manera mantenida, pues pueden aumentar las
en pacientes FQ y que nunca deben sustituir a la
necesidades calóricas basales y/o aumentar la
fisioterapia.
HRB (hiperreactividad bronquial) si esta existe,
Muchos recomiendan, mientras se realiza la
por su utilización continuada.
fisioterapia, acompañarla con música o la lectura de
− Esteroides inhalados para disminuir la inflama-
cuentos; la primera medida parece estarse imponiendo
ción. Se necesitan varias semanas para ver los
rápidamente.
resultados. Habitualmente se utilizarán a conti-
• Los ejercicios físicos son importantes para mantener
nuación de la terapia del tórax. Un reporte de
en forma física y mental óptima a los pacientes. Son 1999 estableció que en Europa se utilizaban, en
parte del tratamiento integral en la FQ. No solamen- el 25,5 % de los pacientes investigados y en
te ayudarán a eliminar el mucus, también aumentan Norteamérica en el 11 %. La utilizacion del
la fuerza muscular, mejoran la autoimagen del pa- cromoglicato disódico o del nedocromil en lugar
ciente y su capacidad para el trabajo y los deportes. de los esteroides no aparece mucho en la litera-
NUNCA serán sustitutos de la fisioterapia del tórax y tura revisada y hoy se utilizan poco sin que sus-
serán individualizados. tituyan los antiinflamatorios..

1040 Tomo III


− Antibióticos administrados por nebulizaciones, 2 alcancen de nuevo los niveles que tenía el pa-
a 3 v/24 h, después de la terapia del tórax. Se ciente antes de la exacerbación.
han utilizado numerosos antibacterianos. Los que • Tratamiento cíclico. Consiste en administrar dos o
últimamente son más recomiendados son la más antibacterianos cada 3 meses por 2 a 3 semanas
colistina (de 1 000 000 a 2 000 000 Us por en pacientes con infección crónica por Pseudomonas
nebulización) o un aminoglucósido como la aeruginosa, sobre todo con la variedad mucoide (M).
tobramicina o la gentamicina (de 80 a 120 mg No erradican la infección, pero mejorarán el estado
por nebulización; la dosis varía según los auto- general del paciente y algunos síntomas. Hay quie-
res). Hoy forman parte del tratamiento habitual. nes también establecen que se produce una mejoría
Parece que los antibacterianos inhalados no pro- de las PFR y que disminuyen las exacerbaciones e
ducen resistencia bacteriana apreciable por al- ingresos. Su principal limitante es el costo. Cuando
gún tiempo y evitan o mejoran las infecciones se produce una infección crónica a otras bacterias,
como por ejemplo Staphyloccocus aureus o
de las vías aéreas bajas.
Haemóphilus influenzae, se recomienda por algu-
− Agentes para disminuir la viscosidad del mucus por
nos realizar también tratamientos cíclicos contra la
nebulizaciones. Se utilizan antes de la fisioterapia
bacteria infectante.
del tórax. Hay diversas preferencias sobre la sus-
tancia que se pueda utilizar: solución salina Cada vez se insiste más en la asociación de Ps.
hipertónica 2 v/24 h (discutido), amiloride 4 v/24 h aeruginosas y Staphyilococcus áureus que debe ser
(según algunos, preferiblemente con UTP) y sospechada, demostrada en diversos medios de cultivos
DNasa recombinante (Pulmozime ®) 1v/24h; esta y tratadas ambas bacterias, a la vez o simultáneamente.
última al parecer con buenos resultados durante Los antibacterianos que se deben utilizar depende-
algún tiempo, en pacientes seleccionados y utili- rán de las bacterias encontradas o sospechadas y su
zando alguna de las marcas de nebulizadores re- sensibilidad. Uno de los aspectos más debatidos en FQ
comendados por el fabricante. Hoy se recomienda en los momentos actuales es cómo utilizar los
utilizarla precozmente en niños menores de 5 años antibacterianos, pues se plantean distintos factores que
de edad. Su principal limitante es el costo. Hay pueden, adversamente, influir sobre ellos: pobre pene-
autores que recomiendan la DNasa con Gelsolin. tración intracelular de los antibióticos (lo que explicaría
en parte la resistencia de algunas bacterias como el H.
Nota: La N-acetilcisteína por nebulizaciones no se recomienda ac- influenzae), resultados de sensibilidad diferentes in vivo
tualmente ya que se pueden producir espasmos bronquiales y sus e in vitro (que pudiera deberse a la existencia de colo-
efectos fluidificantes, por nebulizaciones, no han sido comproba- nias en biofilms), mejores resultados con el uso simultá-
dos en trabajos con una buena metodología científica Se pueden
neo de aminoglucósidos y cefaloridinas en lugar de
utilizar en lavados bronquiales, que casi ya no se usan excepto en
casos muy graves y sus efectos son muy transitorios y con agrava- aisladamente, sin una alta frecuencia de alteraciones
ción a veces inmediata aunque transitoria del cuadro agudo que plan- renales, ototóxicas o ambas; utilización de antibacterianos
teó su utilización. No hay pruebas científicas sobre su acción en dosis superiores a las utilizadas en niños con otras
fluidificante por vía bucal, en forma de jarabes u otros preparados afecciones (por la mayor eliminación renal de los
comerciales. Se ha recomendado en pacientes con dolores abdomina- antibacterianos debido a la CFTR alterada en las células
les, no severos, a repetición sin causas aparentes y solo por el tiempo de los túbulis proximales, mayor dificultad del pase de
necesario, por vía bucal. Los resultados parecen ser satisfactorios.
antibióticos al mucus bronquial en pacientes FQ y/o
metabolización hepática alterada de los antibióticos en
Medidas para controlar o suprimir las infec- la FQ). No obstante todo lo anterior se tendrá que con-
ciones broncopulmonares tinuar su utilización según consensos y que tratamos de
• Antibióticos por nebulizaciones, como se expuso an- exponer a continuación:
teriormente. En las infecciones agudas. Los antibacterianos
• Antibacterianos por vía i.v. o bucal. Existen 2 ten- se utilizarán durante 2 semanas o más, según la evolu-
dencias: ción clínica, de los exámenes complementarios, princi-
− Cuando se produce o exacerba una infección palmente las PFR, y de la imagenología. Deberá
pulmonar se tratarán por 2 a 3 (o más) semanas, mantenerse el tratamiento hasta que los anteriores
hasta que desaparezcan las manifestaciones clí- parámetros sean semejantes a los que presentaba el
nicas de la infección o el cuadro clínico y los paciente antes de la infección. En lactantes se pensará
exámenes auxiliares, sobre todo las PFR, en Staphylococcus aureus, aunque pueden padecer

Parte XII. Aparato respiratorio 1041


infecciones por otras bacterias como Haemophilus • Un tercer ciclo, cuando las pseudomonas son aisla-
influenzae o Klebsiellas. Lo mismo se establece para das otra vez más en los 6 meses después que el pa-
preescolares o escolares. Los Haemophilus influenzae ciente recibió el primer ciclo. Durante 3 a 6 meses:
tipo b parecen no ser frecuentes en niños vacunados, Ciprofloxacina, 20 mg/kg/dosis, 2v/24h (max. 1,5 g/
pero se pueden presentar infecciones por H. influenzae día) por vía bucal más uno cualquiera de los 3
no tipo b. En pacientes mayores o con manifestaciones antibacterianos (colistina, tobramicina o gentamicina)
pulmonares moderadas o severas, se pensará inicialmen- inhalados, 2 v/24 h y a la misma dosis que las reco-
te en Pseudomonas aeruginosas no mucoide, aunque mendadas en el ciclo anterior.
pueden intervenir otros microorganismos. • Hay autores, debido a la importancia del tratamiento
Se plantea, por muchos autores, en una infección de las primeras infecciones con la eliminación de las
inicial por Ps. Aeruginosa no mucoide, utilizar bacterias, que utilizan, de comienzo, el tercer ciclo.
precozmente hasta 3 ciclos de tratamientos, pues se debe
evitar que esta infección bacteriana se haga crónica: En las infecciones crónicas por Ps. Aeruginosa:
• Un primer ciclo. Durante 3 semanas: Cipro-floxacina, se utilizarán ciclos de tratamiento i.v., de 2 a 3 semanas
10 a 20 mg/kg/dosis, 2 v/día (max. 1,5 g/día), bucal, de duración, con 2 o más antibacterianos descritos como
más colistina (1 000 000 de U) o tobramicina o efectivos contra estas bacterias (Cuadro 77.11), cada
gentamicina (80 a 120 mg) nebulizada, 2 v/día. 3 meses. Si aparece antes de este tiempo una exacerba-
• Un segundo ciclo, cuando las pseudomonas son ais- ción, se tratará. Hay autores que plantean igual conduc-
ladas otra vez, en los 6 meses después que el pa- ta de tratamiento cíclico, utilizando los antibacterianos
ciente recibió el primer ciclo. Durante 3 semanas: según la sensibilidad, en infecciones crónicas por otras
Ciprofloxacina, 20 mg/kg/dosis, 2v/día (max. 1.5g/día), bacterias, sobre todo Staphylococcus aureus.
bucal, más colistina: (2 000 000 Us.) o tobramicina Para Höiby y colaboradores, en pacientes con Ps,
o gentamicina (80 a 120 mg) nebulizada, 2 v/día. aeruginosa con una significante respuesta de 2 o más

Cuadro 77.11. Antibacterianos recomendados en FQ. Dosis y vías de administración

Antibacterianos por dosis (d) Cada


Contra 3 microorganismos niño adultos horas y (vía)
frecuentes en FQ

-Estafilococos aureus
Ácido fusídico 15 a 30 mg/kg 1 a 1,5 g/24 h 8 h(B)
Cloxacilina 25 a 50 mg/ kg 2 a 3 g/24 h 8 h(B)
Cotrimoxazol 25 a 50 mg/ kg 1600 mg/24 h 12 h(B)
(SMZ + TMP) (SMZ) (SMZ)
Claritromicina o azitromicina 10 a 15 mg/ kg 500/1000mg/24h 12h(B)
Rifampicina (excepcional) 10 mg/ kg 600 mg/24 h 12h(B)

-Haemophilus influenzae
Cotrimoxazol Las mismas dosis y vías
Cefalosporina de 3ª generación recomendadas en este cuadro
Macrólidos con otras bacterias
Cloranfenicol 25 mg/kg 2-4 g/24 h 6 h(B
o i.v.)
-Pseudomonas aeruginosa
Ciprofloxacina 20-30 mg/kg 1,5 g/24 h 12h(B)
Tobramicina 10 mg/kg 200/500mg/24h* 12h(i.v.)
Amikacina 10 mg/kg 1 g/24 h(máx.)* 12h(i.v.)
Meropenem 40 mg/kg 2 - 3 g/24 h* 8h(i.v.)
Ceftazidima 200-300 mg/kg 3 - 4 g/24 h 8-12h
Azlocilina 75 mg/kg 9-12 g/24 h (i.v.)
Aztreonam 50-75 mg/kg 9-12 g/24 h 6h(i.v.)
Piperacilina 75 mg/kg 12 g/24 h 6h (i.v.)
Ticarcilina 100-150 mg/kg 15 g/24 h 6h (i.v.)
8h(i.v.)

* (según función renal); h = horas; d. = dosis; B = vía bucal; i.v.= vía intravenosa.

1042 Tomo III


anticuerpos en sangre, que indicaría una infección cróni- • Fiebre de 38°C o más.
ca, utiliza, de por vida, cada 3 meses en ciclos de 2 sema- • Aumento de la disnea, aparición de polipnea o au-
nas una asociación de antimicrobianos como sigue a mento de la frecuencia respiratoria en relación con
continuación: la polipnea que presentaba el paciente antes del cua-
Ciprofloxacina bucal dro actual.
más: • Nuevos hallazgos a la auscultación: estertores hú-
tobramicina i.v. + piperacilina i.v. medos que aumentan o aparecen, con o sin sibilancias.
o tobramicina i.v. + ceftazidima i.v. • Disminución de la tolerancia al ejercicio.
o tobramicina i.v. + aztreonan i.v. • Alteraciones en las heces fecales.
o tobramicina i.v. + meropenem i.v. • Aparición de nuevos hallazgos radiográficos.
y • Disminución del VEF-1, en un 10 % o más del que
colistina inhalada tenía el paciente antes de la exacerbación.
• Ausentismo escolar o al trabajo.
(Según los daneses, este método, junto con otras medidas (fisioterapia, • Pérdida de peso mayor de 1 kg o 5 % del peso basal.
enzimas pancreáticas y algunas más) han sido responsables de la
expectativa de vida de más de 40 años en el Centro de FQ, Copenhagen. La aparición de varios de estos síntomas o signos
Este tratamiento es muy caro y no es aceptado en otros países desa- nos hará plantear, y tratar rápidamente, una infección o
rrollados). una exacerbación de la ya existente, utilizando un grupo
de medidas: 2 o más antibacterianos, por vía i.v. (no i.m.,
En las infecciones crónicas broncopulmonares por si no se puede determinar la CMI en sangre) o bucal
Pseudomonas aeruginosas variedad mucoide (M), que para la ciprofoxacina, generalmente acompañados de
no se han erradicado hasta el momento y producen una nebulizaciones de antibacterianos, aumento de la
declinación en las funciones pulmonares en mayor o fisioterapia en duración y número de veces al día,
menor proporción según cada paciente, juegan papel el oxigenoterapia (casi siempre necesaria), esteroides
estado nutricional del paciente y las manifestaciones di- sistémicos sobre todo en niños pequeños, medidas
gestivas pancreáticas entre otros factores. antitérmicas, líquidos preferiblemente por vía bucal, jun-
En estas infecciones se siguen principalmente 3 to con otras medidas que ya se utilizaban como la dieta y
tendencias: las enzimas pancreáticas. Para muchos autores las
• Tratamiento cíclico cada 3 meses por 2 ó 3 semanas exacerbaciones se podrán plantear teniendo en cuenta
como se citó anteriormente. Cuando hay una exa- las manifestaciones clínicas anteriormente citadas, pero
cerbación se realizará tratamiento. hay otros parámetros de laboratorio que ratifican la po-
• Se tratarán solamente las exacerbaciones por 2 a 4 sibilidad de una exacerbación (Cuadro 77.12) y varios
semanas. No se utilizará tratamiento cíclico entre ellas. de ellos no solo sirven para plantear las exacerbaciones
• Utilización mantenida por meses, domiciliaria, por vía sino también, al repetirlas evolutivamente, para determi-
bucal, de ciprofloxacina (10 a 20 mg/kg/d. 2v/24h) o nar su intensidad y por cuanto tiempo debe mantenerse
macrólidos (claritromicina o azitromicina, bucal, el tratamiento.
1v/24 h, entre 250 si < 40 kg de peso o 500 mg si > También, y sobre todo cuando existen exacerba-
40 kg de peso/24 h), más colistina o un aminoglucósido ciones, se deben evitar factores ambientales irritantes
inhalados 2v/24 h a la misma dosis anteriormente como la contaminación ambiental, humo de tabaco o ci-
descrita. Duración máxima del TTT: no se sabe, no- garrillos, pinturas, desinfectantes, insecticidas, perfumes
sotros lo hemos utilizado por un año como mínimo, y otros que puedan aumentar la inflamación y/o producir
con buenos resultados. broncoespasmo (en cuyo caso habría que agregar
broncodilatadores agonistas beta-2 adrenérgicos de ac-
En los niños, los antibacterianos, aunque en dosis ción corta, por nebulizaciones).
elevadas, no sobrepasarán la dosis recomendada para
NOTA: En los últimos años vuelve a surgir el planteamiento de tratar
adultos. enérgica y prolongadamente las infecciones iniciales a Staphylococcus
Las exacerbaciones se diagnosticarán frente a una aureus, por la posibilidad que produzcan lesiones que favorezcan las
serie de manifestaciones: infecciones posteriores por Pseudomonas aeruginosas; este criterio
• Aumento de la tos. no es aceptado por otros. Actualmente hay 2 tendencias: los que man-
tienen por tiempo prolongado los antibacterianos antiestafilocóccicos,
• Astenia.
alegando prolongar la aparición de colonización secundaria por
• Anorexia. Pseudomonas aeruginosa y los otros que se oponen a ello, alegando
• Aumento de la cantidad y/o alteraciones en aspecto que favorecerían la aparición temprana de otras bacterias que infectan
de la expectoración, a veces con sangre. a pacientes con FQ, sobre todo, Pseudomonas aeruginosa.

Parte XII. Aparato respiratorio 1043


Cuadro 77.12. Principales manifestaciones indicadoras de una exacerbación en la fibrosis quística

• Clínicas:
- Tos nocturna o aumento de la tos en las últimas 24 a 48 h.
- Expectoración: aumentada, más viscosa o purulenta (puede presentar estrías de sangre).
- Aumento o aparición de la disnea y/o polipnea.
- Malestar.
- Disminución del apetito y del peso.
- Aumento de las deposiciones o alteraciones en su calidad: más blandas, más voluminosas, más numerosas, estetorrea manifiesta o que
aumenta.
- Fiebre de más de 38° C.
(Para muchos, una o más de estas, serán suficientes en la práctica)

• En expectoración:
- Aumento de la albúmina.
- Aumento de PMN.
- Aumento de elastasas.

• En sangre:
- Leucocitosis.
- Aumento de la eritrosedimentación y/o de la PCR.
- Aumento de la elastasa de los PMN.

• Espirométricos (de acuerdo con parámetros anteriores del paciente):


- Disminución de la CVF (FVC).
- Disminución del VEF-1 (FEV-1).
- Disminución del FEM (PEFR o PEF).
- Disminución (más del 40 %) del FEF 25-75.

• Gasométricos:
- Disminución Sat.O2 en sangre.
- Disminución PO2 en sangre.

En pacientes con FQ con aspergilosis broncopul- Medidas contra las manifestaciones de insufi-
monar alérgica (ABPA), bien documentada, se reco- ciencia pancreática exógena que conducen a un sín-
mienda la utilización de corticoesteroides, por ejemplo drome de malabsorción y otras alteraciones
prednisona o prednisolona bucal a 2 mg/kg/24 h, en una pancreáticas.
sola dosis diaria, preferiblemente a las 15:00 h, por 6 a Más del 85 % de los pacientes con FQ necesitarán
12 meses, disminuyéndola después lentamente. Hay enzimas pancreáticas (EP) contra la insuficiencia
quienes recomiendan, además, utilizar ketaconazol bu- pancreática exógena.
cal (3 a 5 mg/kg/dosis cada 12 a 24 h. Máximo 400 mg/ Se tendrán en cuenta una serie de recomendaciones:
• Las EP se administrarán en forma de polvo, tabletas,
24 h) o, mejor, itraconazol bucal (2 a 4 mg/kg/dosis
cápsulas, gránulos o mejor, cápsulas con micrográ-
cada 12 a 24 h. Máximo 200 mg/24 h). El hallazgo del
nulos recubiertos dentro de ellas, que son relativa-
hongo en la expectoración no es criterio para plantear mente resistentes a la acidez gástrica.
ABPA, pues del 20 al 70 % de los pacientes con FQ • La dosis necesaria será la que elimine o disminuya
pueden presentar aspergilus en ella. Habrá que basarse apreciablemente la esteatorrea, el aspecto y/o el nú-
en varios aspectos: manifestaciones clínicas: que el cua- mero de las deposiciones por día, con un aumento de
dro no responde a los tratamientos antibacterianos habi- peso satisfactorio del paciente. A veces esto no se
tuales o se agrave, sibilancias, aumento de la puede obtener de manera completa, por lo que hay
expectoración (a veces con granulaciones oscuras en que agregar otros medicamentos.
ella), nuevas imágenes radiográficas, cambiantes o no, • Hay pacientes en que no se puede suprimir totalmente
junto con eosinofilia, precipitinas elevadas a aspergilus, la esteatorrea y el aumento progresivo de las EP no
hipergammaglobulinemia, IgE total y/o específica eleva- produce ninguna mejoría en las deposiciones. A ve-
das u otras determinaciones más sofisticadas. En cua- ces esta situación se mejora (y hasta se puede dismi-
dros prolongados pueden aparecer bronquiectasias nuir la cantidad de EP que se utiliza) al agregar
centrales y/o fibrosis pulmonar. La frecuencia de ABPA antiácidos bucales (que no contengan Ca++ o Mg++)
oscila entre 1 al 10 % en pacientes con FQ. Los cuadros como el bicarbonato de sodio (5 a 15 g/m2 de super-
pueden repetirse en los pacientes que la han padecido. ficie corporal/24 h) o antihistamínicos bloqueadores

1044 Tomo III


de los receptores H2, por vía bucal, como cimetidina Medidas contra las deficiencias nutricionales
(5 mg/kg dosis, 4 a 6 v/24 h) o ranitidina (2 mg/kg/ o cómo evitarlas. Se ha comprobado que los pacientes
dosis 2 a 3v/24 h). Se reportan buenos resultados con una buena nutrición tienen mejor pronóstico que
con omeprazol cuando existen deposiciones altera- aquellos que no la presentan.
das a pesar de una dosis alta de EP. Otras veces se Para una mejor nutrición hay que tener en cuenta
agregarán sales biliares o taurina. las EP que se van a administrar y su técnica; un trata-
• No se debe administrar más de 10 000 U/kg/24 h de miento intensivo e individualizado de las manifestacio-
lipasa. nes respiratorias; la dieta; la administración de vitaminas
• Se evitará administrar las EP con cítricos y gelatinas. y oligoelementos y el tratamiento de las deficiencias
Se podrán administrar con una cucharada de miel, nutricionales si existieran.
mermelada o leche. No debe espolvorear las EP so- Se debe estimar el estado nutricional del paciente
bre los alimentos. Los microgránulos recubiertos con por medio de diferentes métodos de valoración
capa entérica no se masticarán. (antropométricos, bioquímicos y electrónicos). Aunque
• Las EP se repartirán con cada comida (d, a y c) en ninguno de los métodos antropométricos de valoración
dosis mayores y en las meriendas (2 a 3 /24 h), en nutricional son totalmente confiables, es útil para la
dosis menores. Cuando el niño va enfrentar una trans- práctica diaria la utilización del índice nutricional (IN)
gresión dietética, como cuando asiste a una fiesta, se que se basa en relacionar el peso (P) y la talla (T) del
podrá agregar una dosis extra. paciente (pte) con el P y T promedios (P/T 50 o 50th
• Se prefiere administrar la dosis de cada comida a su percentile) para su edad y sexo según las curvas nor-
comienzo de ellas, aunque hay niños que responden
males de cada país (en Cuba las del profesor Jordán),
mejor dividiendo la dosis de cada comida en 2 partes,
utilizando la fórmula:
una se le administrará al comienzo y la otra a la
mitad de ella. En otros, más raramente, se adminis-
trarán las EP al final de las comidas y pudiera esto P pte x T pte. x 100 = IN Normal de 90 a 110 %
ser debido al paso retardado de las cápsulas o los P 50 x T 50 Malnutrido < 90 %
microgránulos al duodeno. Cada paciente presentará Sobrepeso de 111 a 120 %
su particularidad. Hay autores que consideran que Obesidad > 120 %
“la administración de EP es arte y ciencia; a veces
más arte que ciencia”, lo que quiere decir que no Nota: Habrá que tener en cuenta pacientes con marcadas deficien-
siempre es fácil, de comienzo, encontrar la dosis y cias en el peso y en la talla para su edad y sexo, pues al calcular su
forma correcta de administrar las enzimas índice nutricional aparecen falsamente como “normales” cuando en
pancreáticas. realidad son malnutridos y estarán en lo que se ha llamado
• Cuando las deposiciones se alteran, después de estar “homeorrexis”. En los últimos años se prefieren otros índices
mejoradas o controladas, se considerará que hay antropológicos como el IMC.
que aumentar las dosis de EP, pero investigando an-
tes si hubo una transgresión dietética, hay una infec- En lactantes pequeños con FQ la utilización de la
ción o una alteración en la cantidad de EP
leche materna es lo indicado y debido a la lipasa que
administrada con las comidas.
contiene, nos permite no utilizar enzimas pancreáticas o
• Hay que advertir que con las EP hay disminución del
administrarlas en dosis bajas. Nada puede superar la
apetito excesivo que el paciente puede haber pre-
sentado antes del tratamiento y/o un olor peculiar en lactancia materna, pero de no ser posible esta, se podrá
las heces fecales. utilizar leche de vaca o alguna de las fórmulas comer-
• Hay pocos pacientes alérgicos a las EP (por alergia ciales maternizadas o íntegras, no semidescremadas,
al cerdo) y habrá que cambiar a una EP que no pro- agregándose, si es necesario, enzimas pancreáticas pre-
venga del cerdo. Algunos presentan irritación de la feriblemente en microgránulos con cubierta entérica que
mucosa bucal con EP en polvo, lo que no sucede con se administrarían en una cucharadita de la fórmula uti-
la administración de EP en cápsulas, tabletas o lizada. En niños sin lactancia materna, la ablactación se
microgránulos con cubierta entérica. No se debe ins- realizará entre los 3 a 6 meses, aunque hay muchos que
pirar el polvo (irritación de la mucosa respiratoria con preconizan comenzarla antes. La dieta a otras edades
estornudos, tos u otras manifestaciones). será hipercalórica, algo elevada o normal en proteínas y
elevada en grasas. Los pacientes con FQ necesitan,
La DMFQ será tratada por un endocrinólogo que según la mayoría de las publicaciones, entre 25 y 50 %
debe tener en cuenta la utilización de insulina y evitando de calorías por encima de las necesidades de los niños
una restricción dietética. normales.

Parte XII. Aparato respiratorio 1045


Las necesidades calóricas en pacientes con FQ Los triglicéridos de cadena media han perdido la
serán (promedio) por 24 h: importancia de años atrás y son utilizados hoy por pocos
Menores de 1 año de edad = 125 a 150 kcal/kg/24 h. autores o en casos especiales. Para muchos, los prepa-
Mayores de 1 año de edad = 1500/kcal (necesidades rados comerciales para reforzar la dieta se utilizarán
kcal/día en FQ al año) cuando esta no se pueda cumplir y nunca para sustituir
más 150 kcal por cada año de edad. O sea: una dieta natural libre, recomendada para la FQ, rica en
calorías y grasas.
Al año de edad = 1 650 kcal/24 h La administración de ácidos grasos esenciales,
A los 2 años… = 1 800 kcal/24 h poliinsaturados, pueden ser suministrados, en parte, por
A los 3 años… = 1 950 kcal/24 h aceites vegetales en la alimentación, utilizando la vía
A los 4 años… = 2 100 kcal/24 h transcutánea por iontoforesis o aplicándolos sobre la piel
de las extremidades, 2 veces por día cuando exista o se
A los 5 años… = 2 250 kcal/24 h
sospeche una deficiencia de ellos.
A los 6 años… = 2 400 kcal/24 h
Es de gran importancia la vigilancia del aumento
A los 7 años… = 2 550 kcal/24 h
de la esteatorrea o la aparición de otras manifestaciones
A los 8 años… = 2 700 kcal/24 h
como el síndrome de obstrucción intestinal distal (SOID)
A los 9 años… = 2 850 kcal/24 h
que algunos lo achacan, entre otras causas, al aumento
A los 10años… = 3 000 kcal/24 h de la grasa y/o a dosis insuficientes de enzimas
pancreáticas.
En la adolescencia (10 a 19 a) y en adultos (20 o En aquellos pacientes en que el aumento de peso
más años) = 3 000 a 4 000 kcal/ 24 h. Se tendrán en es muy poco o está detenido de manera mantenida se
cuenta diversos factores, como por ejemplo: crecimien- plantea la utilización, durante pocos meses, de alimenta-
to y desarrollo, actividad física, frecuencia respiratoria ción por sonda nasogástrica nocturna con el aporte con-
aumentada, fiebre, enfermedad pulmonar crónica de la tinuo, gota a gota, mientras el niño duerme, de algunos
FQ y otros factores que aumenten las necesidades ener- preparados comerciales. En pacientes con detención
géticas (calóricas). mantenida del peso se plantea alimentación por
Las calorías diarias se repartirán de la siguiente gastrostomía o gastroyeyunostomía por 2 a 3 meses, pero
forma: será un procedimiento poco frecuente y menos aún la
Proteínas = 20 % de las calorías alimentación parenteral, que se utilizará excepcional-
Carbohidratos = 40 % de las calorías mente.
Lípidos = 40 % de las calorías (10 % de és- La administración rutinaria de vitaminas es discuti-
tas por ácidos grasos esenciales, da si la dieta es adecuada y si se utilizan enzimas
incluyendo en estos, de 0,5 al 1 % pancreáticas cuando hay IP. Algunos plantean que en
de ácido docosahexaenoico (DHA) FQ las necesidades de vitaminas liposolubles (ADEK)
según posibilidades. son alrededor del doble de las necesidades normales
recomendada para la edad. En pacientes malnutridos
En la mayoría de los pacientes, se conseguirá una será conveniente administrar: vitamina A: 5000 UI/día
buena nutrición a base de una dieta libre, sin restricción (3 UI= 1 μg de retinol) y vitamina D 800 UI/día
en grasas, utilizando los alimentos que tenga cada hogar (40 UI=1 μg)), aunque el raquitismo exógeno es ex-
siempre que estos sean ricos en proteínas y calorías. cepcional en la FQ. Algunos informes establecen que la
La dieta total se dividirá durante el día en 3 comidas adición de beta carotenos (1 mg/kg/24 h/ 3 meses; máxi-
(desayuno, almuerzo y comida) y 2 a 3 meriendas in- mo 50 mg/24 h) en la dieta es efectiva en la FQ para
disminuir los marcadores de la inflamación como el
tercaladas. Los alimentos más recomendados serán
malondialdehido en sangre, pero se necesitan más estu-
carnes rojas y pescado fresco, huevo, leche (alrededor
dios para comprobar que sea un suplemento útil en la
de 500 mL/24 h), queso (excepto queso crema), almido-
dieta de la FQ. Con respecto a la vitamina E sus niveles
nes (una ración diaria), azúcares y dulces sin restriccio- séricos pueden ser bajos y aunque raramente se produ-
nes al igual que las frutas y los vegetales. De acuerdo cen manifestaciones clínicas (anemia hemolítica o
con la tolerancia se agregarán papas fritas, pan con acrodermatitis enteropática en lactantes y alteraciones
mantequilla o margarina, helados, cremas y pastelería. neurológicas en niños de más edad) se recomienda ad-
Se cocinarán los alimentos con grasas vegetales como ministrar la vitamina E en dosis diaria de 100 a 400 UI
aceite de girasol, de oliva, de maní, u otros. (1UI= 1mg) por boca y según la edad. Es conveniente

1046 Tomo III


administrar la vitamina K, 2 veces por semana, por vía acompaña de anorexia, en donde parecen jugar pa-
bucal, a pacientes con afección hepática o cuando hay pel la IL-1, la IL-6 y el FNT-alfa (factor de necrosis
utilización de antibióticos de manera prolongada. Para tumoral alfa) y que parecen ser responsables de la
muchos no es necesario utilizar las vitaminas caquexia en casos avanzados.
hidrosolubles como las del complejo B o la C si la dieta • Diabetes mellitus de la FQ no adecuadamente trata-
es normal, aunque otros recomiendan duplicar las dosis da o hepatopatía severa.
• En la adolescencia, sobre todo en el sexo femenino,
diarias recomendadas. Hay quienes plantean utilizar vi-
por la preferencia de alimentos hipocalóricos debido
tamina C 500 mg por día contra el estrés oxidativo, lo
a costumbres estéticas de sus compañeras.
que no es aprobado por muchos, pues aumentaría la aci-
dez gástrica que pudiera dificultar la acción de las enzimas Cuando se indica la dieta hay que comprobar que
pancreáticas en el duodeno. sea adecuadamente ofrecida e ingerida totalmente. Se
Con respecto a los minerales hay quienes plantean realizará un interrogatorio adecuado sobre la cantidad y
que la utilización de calcio (500 mg/24 h) es importante calidad de los alimentos suministrados al paciente. El
cuando la densidad mineral ósea (DMO) está disminui- nutriólogo y la (el) dietista del grupo médico jugarán un
da, para evitar la osteopenia o en su fase más avanzada, papel fundamental en la educación del paciente y sus
la osteoporosis (en donde se administraría 1000 mg/día), familiares, en particular cómo balancear la dieta indica-
pero con una buena dieta, incluyendo 500 mL de leche da y su presentación. La enfermera de la atención pri-
de vaca diaria, se aportarán las necesidades de Ca++ maria puede ser de gran ayuda. Hay publicaciones que
parecen demostrar una gran importancia de la interven-
normales.
ción nutricional o apoyo sicológico en la nutrición de los
Los aportes de oligoelementos recomendados son: pacientes. Sucede con frecuencia en nuestro país, que
Fe elemental: bucal: no suplementar (se ha descri- los familiares, ansiosos de que el niño ingiera todos los
to hemosiderosis hepática por su uso). Solo se adminis- alimentos, primeramente con ofrecimientos y cuando, más
trará cuando exista un déficit de Fe demostrado por un tarde o más temprano, esto fracasa, lo obligan, a veces
índice de saturación, ferritina sérica, protoporfirina con amenazas, peleas o hasta problemas familiares, por
eritrocitaria disminuidas u otras determinaciones. No se lo que se crea un ambiente inapropiado durante las co-
debe confiar en la determinación del Fe sérico para in- midas que llega a ser un acto desagradable y se produce
vestigar deficiencia de hierro. más anorexia. Aquí es importante la intervención
Zn elemental: 10 a 15 mg/día, bucal. Por períodos nutricional por el sicólogo o el siquiatra, teniendo a ve-
no mayores de 2 a 3 meses y en pacientes con ces que suprimirse la hostilidad de paciente/familiares
hacia estos colegas por concepciones erróneas previas.
malnutrición o déficit de vitamina A.
Medidas contra las manifestaciones gastro-in-
Cu: no está decidido su aporte. Algunos recomien-
testinales o hepatobiliares. En el tratamiento de pa-
dan 2 mg de Cu elemental, bucal en osteoporosis rebel- cientes con afectación hepática y colestasis, la utilización
des y por cortos períodos. del ácido ursodeoxicólico (AUDC o URSO) parece ser
Se: no aportar. Se ha reportado que con prepara- efectivo, entre más temprano se utilice, a la dosis de 10
dos de EP en gránulos con cubierta entérica no es a 20 mg/kg/24 h por vía bucal. No se conocen sus efec-
necesario su aporte, pues ya estas contienen selenio en tos en la prevención de la enfermedad hepática y no es
la cubierta. Hay autores que recomiendan utilizar diaria- efectivo cuando la cirrosis hepática está ya presente.
mente 0,2 mg de Se elemental, por vía bucal, en pacien- Hay quienes lo utilizan con taurina (30 mg/kg/24 h) pero
tes con afectación hepática y que previene la cirrosis. la mayoría asocian esta al AUDC solamente cuando
Se necesitan más investigaciones al respecto. existe malabsorción intestinal acompañante.
Siempre hay que tener en cuenta que los proble- Cuando el paciente presenta dolores abdominales
a repetición, sin un cuadro definido de SOID, que puede
mas nutricionales serán secundarios a:
ser debido a varias causas, después de descartar com-
• Insuficiencia pancreática exógena.
plicaciones agudas de la FQ, se recomienda la adminis-
• Pobre ingestión de nutrientes en pacientes con evo-
tración de N-acetilcisteína 250 a 500 mg, por vía bucal,
lución desfavorable, sobre todo con enfermedad 2 a 3 veces al día, además de determinar que las dosis
pulmonar Crónica de la FQ. de EP y la dieta sean adecuadas. De continuar los cua-
• Aumento de las necesidades calóricas diarias resul- dros dolorosos se reinvestigarán: ulcus duodenal,
tante de la polipnea, fiebre y otras manifestaciones colecistitis, pancreatitis a repetición y otras causas de
de una exacerbación infecciosa pulmonar que se dolores abdominales recurrentes en pacientes con FQ.

Parte XII. Aparato respiratorio 1047


Hay pacientes que presentan constipación. La ad- FQ. Cada día los problemas que se deben tener en cuenta
ministración de laxantes está proscrita por muchos, que son mayores y tan variados, que es imposible detallarlos
plantean que pueden ser una de las causas que colabora en este capítulo. Pudiéramos citarlos, dividiéndolos en
con la aparición de colonopatía fibrosante de la FQ, en varias fases:
cuya causa principal se cita el exceso de lipasa por altas • Fase inicial que sigue al diagnóstico.
dosis administradas de EP. También el exceso de EP • Fase durante los primeros 3 ó 4 años que siguen al
puede producir constipación. Se tratará con aumento de diagnóstico.
líquidos, ejercicios físicos sobre todo abdominales de • Fase entre los 5 a 9 años de edad.
acuerdo con la tolerancia del paciente y aumentando los • Fase de la adolescencia.
alimentos ricos en fibra vegetal. Hay quienes recomien- • Fase cuando el paciente con FQ llega a la adultez.
dan agregar medicamentos a base de S. boulardi o • Fase cuando está próximo un desenlace fatal.
lactulosa (10 a 40 mL/24 h, repartidos con los alimen-
tos) con buenos resultados. En la fase inicial que sigue al diagnóstico habrá
Clásicamente se describe un apetito exagerado en que tener en cuenta las ansiedades, confusiones, senti-
pacientes con FQ y no siempre sucede así, presentando mientos de culpabilidad y el cambio de vida intenso que
anorexia principalmente en pacientes con enfermedad se producirá en la familia, entre otros aspectos.
pulmonar crónica de la FQ moderada o sobre todo se- En la fase durante los primeros 3 a 4 años que
vera, con lesiones hepáticas, con una infección o exa- siguen al diagnóstico se presentarán problemas nuevos
cerbación de la infección crónica que ya existía. A veces, y diarios según el nivel sociocultural y económico de la
pudiera estar la anorexia relacionada con malos hábitos familia. Una parte importante de esta fase lo constitui-
dietéticos que habrán que modificar con intervención rá: la adaptación a una nueva vida para el paciente y
nutricional o apoyo sicológico. Las vitaminas en altas familiares, las hospitalizaciones, el tiempo dedicado al
dosis o los preparados antianoréxicos carecen de valor. tratamiento, la dependencia del paciente en los familia-
Existen varios estudios en que se recomienda la utiliza- res, el abandono o el cumplimiento irregular del trata-
ción de acetato de megestrol en pacientes anoréxicos y miento. Períodos de rechazo al diagnóstico, ansiedad,
con mala evolución nutricional, pero se recomienda más depresión y euforia que se pueden presentar en cual-
investigaciones para su uso generalizado. Hay pacien- quier momento de la enfermedad, pero sobre todo en
tes que presentan retardo del vaciamiento gástrico que esta fase. También se pueden presentar celos por parte
pudiera ser causa de anorexia, debiendo ser remitidos a de los hermanos.
un gastroenterólogo con experiencia en FQ para la utili- En la fase de los 5 a 9 años de edad, cuando el
zación de procinéticos y otras medidas. paciente fue diagnosticado a edades tempranas, además
El SOID se tratará con hidratación parenteral, sus- de los problemas que haya tenido desde entonces, se
pensión transitoria de la vía bucal, administración por agregarán los que implican la asistencia a la escuela en
sonda nasogástrica de EP, de gastrografina junto con que el niño sale de su medio familiar y en donde juega un
enemas de dicho contraste o las fórmulas de solución de papel importante el (la) maestro (a) y sus auxiliares. Se
Bohm o solución de polyethylene-glycol-electrolyte, 20 ha encontrado que de una manera general la FQ no afec-
a 40 ml/kg en una hora por vía bucal o sonda nasogástrica ta la inteligencia y que estos niños inclusive tienen una
o la formula Golytely por enemas evacuantes. inteligencia normal superior o a veces más que normal.
Medidas que hay que tener en cuenta sobre pro- Esto, unido a las faltas de asistencia escolar por ingre-
blemas sicosociales e interrelación paciente-familia sos o cuadros de exacerbaciones atendidos en el hogar
y grupo médico (P/F y G/M). u hospital y reiteradas asistencias a consultas, pueden
Constituyen uno de los aspectos más importantes ser causa de problemas emocionales y conflictos, tanto
en el tratamiento de la FQ. Son múltiples las preocupa- en la escuela como en el hogar.
ciones y necesidades sicosociales de cada uno de los La fase de la adolescencia, difícil en todo niño
pacientes y sus familiares, además de las que se pre- sano cuando surge la contradicción en que desea
sentan en forma colectiva. En todas las consultas serán independizarse de los familiares cuando es todavía de-
revisadas por el médico principal, teniendo una partici- pendiente de ellos económicamente o en otros aspectos,
pación importante el sicólogo o siquiatra y el sociólogo o resulta aún más difícil en pacientes con afecciones cró-
visitador social. Es de gran importancia la ayuda del nicas y la FQ no es una excepción. En esta etapa se
médico y la enfermera de la familia. presentan problemas, a veces severos, en el adelanto
Son relativamente pocos los estudios sicosociales, escolar, con la familia y con el cumplimiento del trata-
económicos y de otros aspectos relacionados con la miento, sobre todo de la fisioterapia. Otro problema

1048 Tomo III


frecuente es el deseo de ser aceptado por sus amigos y opiniones. Sin embargo, no siempre son bien informa-
la asistencia a eventos sociales sin los familiares. Esta dos u orientados ni se establece una estrecha relación
es una de las fases más complicadas en la FQ. PF/GM, que debe ir más allá de la consulta u hospital.
La fase de adultez implica la posibilidad de nuevos Lo importante no es la cantidad de información que re-
problemas derivados del trabajo, matrimonio, la sexuali- ciban, sino la calidad. Al diagnóstico, se debe limitar la
dad y la reproducción, problemas económicos y otros información, en términos comprensibles, a los aspectos
que podrán agravar más aún los problemas no total- básicos de la FQ y su tratamiento. Posteriormente, y de
mente resueltos desde las fases anteriores. El traspaso manera progresiva, se aportarán nuevos conocimientos
de un paciente de un hospital pediátrico a uno de adultos y habilidades de acuerdo con las particularidades
constituye uno de los aspectos más difíciles en el trata- sicobiosociales del grupo P/F. El G/M no se limitará a
miento de la FQ y que es abordado de diferentes mane- informar, también debe ayudar a producir cambios en la
ras según los distintos países y aún en un mismo país. forma de pensar y en el estilo de vida de P/F. Estos
Hay quienes consideran que se debe comenzar a abor- últimos, muchas veces se quejan que no se les dedica
dar este aspecto desde los primeros momentos, cuando tiempo suficiente por el G/M, que se les suministra in-
se diagnostica la afección, pero muchos consideran que formaciones contradictorias, que no se les informa so-
el período de traspaso está más indicado en la adoles- bre el tratamiento de forma adecuada y que se les dan
cencia y durará alrededor de 2 años. Siempre se debe evasivas a sus planteamientos. La educación debe ser
tener en cuenta las opiniones, las dudas, los temores y honesta, individualizada, útil, actualizada, confiable y de
las ansiedades de los pacientes y los familiares. No hay fácil adquisición. La relación siempre tiene que tener en
un consenso sobre este importante aspecto de la FQ. cuenta el respeto mutuo entre los dos grupos, P/F y G/
En la fase cuando es próximo un desenlace fatal M. Se deben estimular las reuniones entre grupos de P/
se debe tener en cuenta esta eventualidad y ser asumida F nacionales e internacionales y si es posible la forma-
por el grupo médico (G/M ) en particular por el sicólogo ción de asociaciones.
y/o siquiatra, que ayudará al paciente y sus familiares. Se hace hincapié en la importancia de que exista
Se debe dedicar un párrafo aparte a los problemas una estrecha relación armónica y respetuosa entre los
resultantes de la separación o divorcio de los padres y, pacientes, sus padres y el personal médico.
aunque se ha publicado que esta posibilidad no es mayor Es importante el que las (los) maestras (os), auxi-
en las familias de pacientes con FQ, hay que tenerlo en liares docentes o cualquier personal en contacto con
cuenta y ayudar a afrontarlo si se presenta. Igualmente pacientes con FQ tengan conocimientos sobre la afec-
son importantes en cualquier época de la vida los pro- ción por diversos medios, entre ellos folletos. Cada vez
blemas surgidos por el fallecimiento de un hermano, de es más importante la participación del personal docente
otro familiar o de un amigo con FQ. en la ayuda a combatir la fibrosis quística.
Hemos citado solo algunos de los problemas que Un aspecto muy importante es evitar el contacto
se pueden presentar en la vida de la familia y pacientes de pacientes FQ con Ps. aeruginosa y sobre todo, con
que tendrán que ser previstos y en los cuales participará Burkholderias cepacia entre ellos y con pacientes sin
el grupo médico, en particular el sicólogo, muchas veces estas bacterias. Aunque no hay un concenso absoluto
el siquiatra, la enfermera, el sociólogo y el trabajador sobre esto, la mayoría de las publicaciones están de
social para lograr la mejor calidad de vida posible. acuerdo con evitar estos contactos. Constituye un pro-
La interrelación paciente-familia/grupo médico (PF/ blema muy difícil de afrontar pero, desgraciadamente,
GM) presenta un aspecto importante: la forma y calidad se tiene que tener en cuenta, sobre todo en las consul-
del conocimiento que se debe suministrar. Aunque el tas, hospitales, campamentos de recreo, reuniones cien-
grupo médico sigue siendo el que aporta la mayor parte tíficas o sociales. Está demostrada, sin dudas, la
de los conocimientos a familiares y pacientes con FQ, transmisión, entre pacientes o por contactos con objetos
estos acuden a otras fuentes que van desde impresos de pacientes, con estas bacterias o por el uso común de
como libros, folletos, periódicos y revistas, audiovisuales lavabos, baños y artículos de uso personal para aseo.
(radio, TV), intercambio con otros pacientes o familia- En muchos países desarrollados están médicamente pro-
res y hasta Internet. Ya no estamos en la época en que hibidos estos contactos, inclusive el médico de asisten-
los P/F eran pasivos, ahora ocupan, con toda razón, el cia debe emitir un certificado oficial de que el paciente
centro de la FQ de una manera activa, pidiendo infor- no presenta dichas bacterias para su asistencia a even-
mación y que se tengan en cuenta sus preocupaciones y tos científicos o sociales, campos de recreo, etc. En esto

Parte XII. Aparato respiratorio 1049


no se incluyen los niños sanos en contacto con pa- problema por los pacientes y familiares, lo que depende-
cientes FQ portadores de las bacterias citadas; en aque- rá en parte del estado sociocultural de ellos.
llos no se producen una infección pulmonar crónica. El grupo médico (G/P) señalará el problema que
Considero que uno de los planteamientos más equi- será colectivo, de percepción, de nivel sociocultural y
librados es el del Grupo para la Prevención de la Infec- hasta filosófico, evitando estimular los contactos. Al
ción de la Cystic Fibrosis Trust del Reino Unido que hacer el planteamiento, recomendando que los pacien-
señala la importancia de mantener la higiene y la super- tes FQ infectados no se pongan en contacto con pa-
visión microbiológica regular en los pacientes con FQ y cientes con FQ que no estén infectados por
establece los datos a favor (según la mayoría de los tra- Ps.aeruginosa, M o no, y sobre todo en lo que respec-
bajos por ellos revisados) o en contra de la segregación ta a la B. cepacia, se debe ser muy cuidadoso en los
de los pacientes con FQ. Como aclara el profesor planteamientos. ¿Después de leer las publicaciones
Littlewood, al hacer comentarios sobre esos plantea- al respecto y si usted tuviera un familiar con FQ no
mientos, es obvia la recomendación de separar los pa- colonizado, lo pondría en contacto con otro paciente
cientes con cepas “altamente transmisibles” de colonizado o infectado? ¿Si fuera padre o madre de un
Psedomunas aeruginosa, de aquellos que no tengan paciente infectado por las bacterias antes menciona-
ninguna colonización o infección por estas bacterias e das, le gustaría que le dijeran que su hijo puede ser
inclusive la separación de los primeros de los pacientes peligroso y que sea segregado? La cuestión no puede
con infecciones por otras cepas corrientes de Ps. ser resuelta por decreto ni por la fuerza, solo por la
Aeruginosa. Señala que aunque existen publicaciones educación, la comprensión y un acuerdo entre los dos
en que reportan no evidencias de transmisión en hospi- grupos P/F y G/M. El hacer caso omiso del problema,
tales pequeños o que establecen que la transmisión es estimular o no evitar el contacto en lo posible, es faltar
baja, que además muchos pacientes adquieren las a aquella regla de que el Grupo Médico debe evitar
Pseudomonas aeruginosa a edades tempranas y fue- todo lo que pueda ser dañino al paciente.
ra de los hospitales; y aunque no puede ser obligatoria la Desde hace algún tiempo se han establecido una
segregación, es una sensible precaution (palabras tex- serie de cuidados que deben de ponerse en práctica
tuales que pudieran traducirse como precaución que se para evitar o alargar la colonización o la infección en
debe tener en cuenta, preocupación lógica). Más ade- pacientes con FQ por Pseudomonas aeruginosa: hi-
lante señala Littlwood que la manera de saber si una giene máxima posible en el hogar y otros lugares a don-
cepa es “altamente transmisible” o no, es por medio de de asiste el paciente, desinfección extrema y repetida
estudios genéticos especiales en las bacterias como es de lavabos, duchas y otros lugares que se puedan con-
la técnica “de la huella genómica” y determinando la taminar con desechos de humanos o animales. Los ar-
existencia de estas bacterias así investigadas en los con- tículos de aseo y para alimentos, deben ser individuales
tactos para poder establecer su grado de transmisibilidad. y bien higienizados después de su uso. Los “pomos” o
En el Reino Unido hay 2 laboratorios para responder a picaportes de las puertas serán reiteradamente limpia-
esta importante interrogante y que los médicos, el resto dos y sobre todo, el lavado escrupuloso frecuente de
del personal hospitalario y cada paciente deben estar al las manos de los pacientes y familiares y del personal
tanto de estos tipos de bacterias así investigadas. Ade- médico, con jabón, agua limpia, toallas desechables. Los
más, en otros países desarrollados también se tiene este artículos de limpieza o de tocador estarán
cuidado en hospitales y consultas externas y cita a Ca- individualizados. Ya se citaron anteriormente los cuida-
nadá y USA. Hemos encontrado trabajos de otros paí- dos en consultas, hospitales y que se harán extensivos
ses como Suecia, Suiza, Francia e incluso a Dinamarca a campamentos de recreación y reuniones sociales (en
en que se separan los pacientes con FQ. Hay quienes estas últimas la edad de los pacientes será importan-
son más estrictos y separan a los pacientes en el hospi- te). En cuanto se refiere a la transmisión de
tal y en las consultas externas en 4 grupos (pacientes Burkholderia cepacia las medidas serán extremas;
con Ps. aeruginosas mucoides, pacientes con Ps. se recomienda por todos la segregación; algunos lle-
aeruginosa. no M, pacientes sin Ps. Aeruginosa y pa- gan a recomendar la utilización de guantes, batas sani-
cientes con Burkholderias cepacia). La opinión ma-
tarias y hasta tapabocas, aunque en lugar de estos
yoritaria es sobre la separación no solamente en
hospitales y consultas externas, sino también en centros últimos aditamentos muchos recomiendan los lavados
de recreos y congresos. En lo que respecta a las activi- de las manos repetidos y adecuados.
dades sociales dependerán de la edad de los pacientes, Utilización de sal común en la dieta y ofrecer
del tipo y lugar del contacto, estado de comprensión del líquidos abundantes. Esto es importante en Cuba, en

1050 Tomo III


que el niño puede tener una sudación aumentada, sobre intervención y continuándola después según la evolución,
todo en el verano, con pérdidas de cloruro de sodio, que por 1 a 2 semanas.
podrán conducirlo a distintos cuadros de depleción sali- Con respecto al embarazo y parto, aunque se ha
na. Se recomienda agregar sal común sobre todo en el planteado que hay una disminución de posibilidades de
verano, repartida en las distintas comidas y en dosis mí- embarazo en muchas mujeres con FQ por alteraciones
nima según la edad: de 1 g/día en lactantes (1/4 de en el mucus del cuello uterino y/o alteraciones del pH
cucharadita de 5 mL), de 2 a 3 g en preescolares (1/2 vaginal, son cada vez más las pacientes que presentan
cucharadita) y de 4 g en escolares (1 cucharadita), aun- embarazos. Solo la pareja deberá tomar la decisión final
que esto variará según los pacientes. La preparación de de continuar el embarazo o no, según razones
papelillos de sal común, con las subdosis individuales, socioculturales, filosóficas, religiosas, el estado clínico
separadas que se van a utilizar por día, es una medida de la paciente, estudios genéticos y otras. Las dificulta-
práctica. Cuando exista una complicación cardíaca no des deben ser expuestas por el G/M sin hacer sugeren-
se administrará sal de la manera habitual; se deberá in- cia alguna sobre la conducta que debe seguir y el genetista
les reordará el consejo genético. En las pacientes con
dicar las dosis de acuerdo con cada paciente.
pocas lesiones broncopulmonares, el embarazo y el par-
La administración de líquidos en forma de agua en
to podrán ser afrontados sin mayores problemas. En las
abundancia, o mejor leche, batidos o jugos, constituye
pacientes con lesiones moderadas o severas se les de-
un aspecto importante. Se evitará el uso indiscriminado
ben exponer las posibilidades de que se produzca un
de refrescos comerciales que, si bien aportan líquidos, deterioro, más o menos severo, de la función pulmonar,
son pobres en calorías y contienen con frecuencia agre- pero debe ser respetada, en primer lugar, la decisión de
gados sintéticos (saborizantes, colorantes) sin ningún la pareja.
valor nutritivo, y para algunos hasta peligrosos. La orientación profesional se debe comenzar des-
Otras medidas. Se recomienda utilizar en Cuba el de niño para evitar las profesiones o empleos que recla-
Programa Nacional de Inmunizaciones planteado por el men una labor física intensa, así como los
Ministerio de Salud Pública. extremadamente sedentarios o agotadores, al igual que
Se debe administrar la “vacuna” correspondiente aquellos trabajos en que el paciente tenga una alta expo-
contra la influenza cuando se prevé, exista una epidemia sición a infecciones respiratorias, cambios extremos de
de dicha afección o mejor, anualmente, como se está temperatura, polvos, vapores y otros irritantes. Sin em-
realizando en nuestro país. bargo, este consejo será individualizado para cada pa-
Las intervenciones quirúrgicas menores se reali- ciente y conocemos de pacientes con FQ que son
zarán con anestesia local y de acuerdo con el estado del excelentes médicos, enfermeras, pintores o con otras
paciente. Aunque para los pólipos nasales se ha reco- profesiones o empleos que muchas veces no seríamos
mendado la utilización local de corticosteroides, muchas capaces de recomendar.
veces tendrán que realizarse polipectomías por el es- La utilización de corticoesteroides por vía bucal de
pecialista en ORL, a veces repetidas. manera mantenida para evitar o atenuar la inflamación
Las intervenciones quirúrgicas mayores electivas crónica, en estos momentos, parece no ser lo indicado
(por ejemplo, herniorrafia) sobre todo en aquellos pa- por los resultados adversos (hipertensión, catarata,
cientes con cierto grado de lesión pulmonar, deben ser hiperglucemia) encontrados hace pocos años en un es-
tudio multicéntrico realizado en Norteamérica. La utili-
precedidas por 2 o más semanas de tratamiento inten-
zación de corticosteroides, por vía bucal o parenteral,
sivo sobre el sistema respiratorio, en particular de
está limitada a pacientes con asma bronquial y FQ que
fisioterapia, una dieta bien balanceada y teniendo en no responden inicialmente a los broncodilatadores y a
cuenta el estado nutricional. otras medidas o aquellos pacientes con aspergilosis
En las intervenciones quirúrgicas de urgencia, la broncopulmonar alérgica (ABPA). Hay lactantes con
anestesia general debe ser utilizada por el menor tiempo FQ que presentan cuadros severos de obstrucción bron-
posible y realizar al paciente una aspiración traqueobron- quial difusa aguda en donde estarán indicados los
quial amplia antes de retirar la intubación. Posteriormente esteroides junto con medidas como oxígeno, antibac-
se comenzará lo más pronto posible la fisioterapia del terianos y la fisioterapia del tórax entre otras.
tórax para evitar la obstrucción bronquial por La administración de oxígeno se utilizará en las
secreciones. Hay quienes además, recomiendan la utili- exacerbaciones agudas de las infecciones crónicas o en
zación de antibacterianos i.v., según la bacteria que co- las neumonías o bronconeumonías agudas. En los
lonice o infecte al paciente, comenzando el día de la pacientes con insuficiencia respiratoria crónica se podrá

Parte XII. Aparato respiratorio 1051


utilizar la oxigenoterapia, por indicación médica estric- Geneva, Switzerland 1996. Document WHO/HGN/
ta. También se indicará oxígeno cuando presenten ICF(M)A/GL/96.2 1996.
desaturación arterial durante el sueño, la fisioterapia o Archivist. Manose binding lectin. Arch Dis Child 2001;
85:201.
con los ejercicios. Atlas AB, Orenstein SR, Orenstein DM. Pancretitis in young
La administración en el domicilio de antibióticos i.v. children with cystic fibrosis. J Pediatr 1992; 120: 756-759.
por catéteres a pacientes cuando presentan exacerba- Augartin A, Shiloviech H, Doolman R,.Aviram M, Akons H, et al.
ciones o cuando son utilizados en ciclos, es una medida Serum lipasa levels as a diagnostic marker in CF patients with
normal or borderline sweat test. Pediatr Pulmonol 2000; 30:
valiosa. En nuestro país se está utilizando según un gru- 320-323.
po de medidas aprobadas por el MINSAP. Aunque al- Association Francaise de Lutte contre la Mucoviscidose (Desde el
gunos señalan que se pueden presentar problemas, las 2001, Vaincre la MUCOVISCIDOSE). Departament Medical.
ventajas parecen ser mayores que las desventajas, si se Informaciones y Consejos para el tratamiento de la
Mucoviscidosis o Fibrosis Quística. La traducción al
utilizan en F/P convenientemente entrenados y sobre todo español fué autorizada a la Asociación Balear de Fibrosis
cuando se les suministra todo lo necesario por un centro Quística. 1997.
médico, ya esterilizado y equipos por separado para cada Azcorra I, Salcedo A. (coordinadores). Guía de apoyo y cuidados
administración. Encuestas a pacientes adultos no han para enfermos y familiares con Fibrosis con Quística. Equipo
multidisciplinario de la Unidad de Fibrosis Quística Hospital
encontrado una opinión mayoritaria: una parte están a infantil “Niño Jesús” y “Hospital de la Princesa”. Madrid,
favor y otra parte en contra. España. 2001.
Es importante discutir con los adolescentes con FQ, Barbero GJ. Therapeutic Approaches to Cystic Fibrosis. A Digest
of Current Information. An International Pediatric
o mejor desde antes, sobre la esterilidad masculina (a la Association publication in collaboration with UNICEF and
edad adecuada se deben realizar espermatogramas) y WHO. INTERNATIONAL CHILD HEALTH 1995; 6:
se debe aclarar al paciente que en la FQ la sexualidad y 77-92.
Baumer JH. Evidence base guidelines for the performance of sweat
el vigor sexual no se afectan y que su vida sexual puede test for the investigation of cystic fibrosis in the UK. Arch
ser normal (aunque las lesiones broncopulmonares de Dis Chid 2003; 1126-1127.
cierta severidad constituirán una limitante). Beall R. ed. HIGHLIGTS of XIV Annual North American Cystic
Fibrosis Conference. Cystic Fibrosis Foundation CD
Conocimiento de cuándo el paciente presenta ROM. Med-Doc. Nov. 9-12. Baltimore (MD), USA. 2000.
una infección broncopulmonar o una exacerbación Beharry S, Ellis L, Corey M, Marcon M, Durie P. How useful is
para actuar sobre ella precozmente. Uno de los as- fecal elastase1 as a marker of exocrine pancreatic disease? J
Pediatr 2002: 141: 84-90.
pectos más importante en el diagnóstico precoz de una Bilton D, McCormack JG. Cystic Fibrosis Management
infección broncopulmonar o una exacerbación de lo EP Prospects for the Future. 1st. European Congress of
de FQ, que debe ser conocido por los familiares y el Chemotherapy; 1996. Glasgow, United Kingdom. 1996.
Blau H, Katznelson D, Miller MS. eds. Proceedings of the XIIth
paciente, para contactar a su médico y comenzar rápi-
International Cystic Fibrosis Congress; 1996 June 16-22.
damente un tratamiento temprano y enérgico. Israel, Jerusalem. Israel J Medical Sci; (Supplement). 1996.
• Aumento de la tos. Boat TF. Fibrosis Quística. En: Behrman RE, Kliegman RM,
• Astenia. Alvin AM. eds. NELSON. TRATADO DE PEDIATRIA.
• Anorexia. 15ª. Ed. p554-68. McGraw-Hill-INTERAMERICANA.
Madrid, España. 1998.
• Aumento de la cantidad y/o alteraciones en aspecto
Bronsveld I, Bijman J. Clinical presentaton of exclusive cystic
de la expectoración, a veces con sangre. fibrosis lung disease. Thorax 1999; 54:194-95.
• Fiebre de 38°C o más. BurnsJL,Gibson RL, Mc Namara S. Longitudinal assessment of
• Aumento de la disnea, aparición de polipnea o au- Pseudomonasaeruginosa in young children with cystic
fibrosis. J Infect Dis 2001; 183: 444-452.
mento de la frecuencia respiratoria en relación con Bush SA, Bisgaard H, Geddes D, Lannefors L. Nebulizers in
la polipnea que presentaba el paciente antes del cua- cystic fibrosis. Eur Respir Rev 2000; 76: 552
dro actual. Cade A, Walters MP, McGinley N, Firth J, Brownlee KG,
Conway SP, Littlewood JM. Evaluation of fecal pancreatic
• Disminución de la tolerancia al ejercicio. elastase-1 as a measure of pancreatic exocrine function in
• Alteraciones en las heces fecales. children with cystic fibrosis. Pediatr Pulmonol 2000; 29:
• Pérdida de peso mayor de 1 kg o 5 % del peso basal. 172-176.
Conway SP. Evidence for using nebulizad antibiotics in cystic
fobrosis. Arch Dis Child 1099; 80: 307-309.
Bibliografía Costerton JM, Steward PS, Greenberg EP. Bacterial Biofilms. A
Abreu e Silva F, Dodge JA. GUIDELINES FOR THE Common Cause of Persistent Infections. SCIENCE 1999;
DIAGNOSIS AND MANAGEMENT OF CYSTIC 284: 1318-22.
FIBROSIS. World Health Organization Human Genetics Cystic Fibrosis Foundation. Tenth Annual North American Cystic
Programmeanthe International Cystic Fibrosis Fibrosis Conference. October 23-26; Florida, USA. Pediatr
(Mucoviscidosis) Association. WHO-ICF(M)A Document; Pulmunol 1996; 22 Suppl.13.

1052 Tomo III


CYSTIC FIBROSIS TRUST. ANTIBIOTIC TREATMENT Ferrer Calvete J. Diagnóstico de la fibrosis quística. En: Rojo M,
FOR CYTIC FIBROSIS. Report of the UK Cystic García E, Bosch C, eds. Libro de conferencias y resúmenes
Fibrosis Trust Antibiotic Group. (Littlewood L, Chairman). del VIII Congreso Latinoamericano de Fibrosis Quística
2nd. Ed. Cystic Fibrosis Trust. London, United Kingston. (Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-latinoamericana de
2002 FQ. Octubre 20-23; p.99-102. Palacio de las Convenciones.
Davidson AGF. ed. Cystic Fibrosis Literature Review. Annual La Habana, Cuba. 1997.
Report. Addressed to International Cystic Fibrosis Ferrer Calvete J, Ferrer González P, Ribes C, Beneyto M.
(Mucoviscidosis) Association. Annual General Meeting Screening neonatal de la fibrosis quística. Perspectivas
Novenber 24, Scientific/Medical Advisory Committee (S/ actuales. Act Nutr 1998; 24: 10-15.
MAC) Report. Buenos Aires, Argentina. 1999. Foucaud P. Infection bronchopulmonaire LA MUCOVISCIDOSE.
Day BJ, van Heeckeren AM, Min E, Velsor LW. Role for cystic RÉFERENCE 1997; 2: 22-25.
fibrosis transmembrane conductance regulator protein in a Fiel SB. Aerosolized Antibiotic Treatment of Cystic Fibrosis. J
glutathione response to bronchopulmonary pseudomonas Respir Care Practitioners 1998, Reproducido en Noticias de
infections. Infect Immun 2004; 72: 2045-2051. la International Association of Cystic Fibrosis Adults:
Denton M, Hall MJ, Todd NJ, Kerr KG, Litllewood JM. IACFA Newsletter 1999; 56: 3-9.
Improved isolation of Stenotrophomonas maltophilia from Fredericksen B, Koch C, Höiby N. Antibiotic treatment of initial
the sputum of patients with cystic fibrosis using a selective colonization with Pseudomonas aeruginosa postpones
medium. Clin Microbiol Infect 2000; 6: 395-96. chronic infection and prevents deterioration of pulmonary
Derelle J. Inflammation. LA MUCOVISCIDOSE. RÉFÉRENCE function in cystic fibrosis. Pediatr Pulmonol 1997; 23:
1997; 2:26-29. 330-35.
Dodge JA. Report of a new clasification of Cystic Fibrosis and Gauthier L. Azithomycin. ACFCQ (Adult Cystic Fibrosis
Related Disorders. Addressed to the ICF(M)A. (Types and Committee of Quebec) svb 2004; 28: 20-22.
Aspects). President´s Annual Report.(Mr.Weggen). Govan JR. Infection control in cystic fibrosis: methicillin resistan
Distribuido a todas las Asociaciones Nacionales Miembros de Staphylococcus aureus, Pseudomonas aeruginosa and the
la ICF(M)A; 2000. Bulkholderia cepacia complex. J Roy Soc Med 2000;
Doershuck CF, Mathews LW, Tucker AS, Nudelman H, George 29 (Suppl 38): 40-45.
MD, Wise M, et al. A 5 year evaluation of a therapeutic Gibson LE, Cooke RE. A test for concentration of electrolytes in
program for patients with cystic fibrosis. J Pediatr 1964; sweat in cystic fibrosis of the pancreas utilizing pilocarpine
65: 677- 693. iontophoresis. Pediatrics 1959; 23: 545-549.
Döring G. Lung inflammation in cystic fibrosis. En: Rojo M, Götz MH. Cystic Fibrosis Literature Review Annual Report.
García E, Bosch C. eds. Libro de conferencias y resúmenes ICF(M)A Annual General Meeting; June 6. Scientific/
del VIII Congreso Latinoamericano de Fibrosis Quística Medical Advisory Committee (S/MAC) Report. Vienna,
(Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-latinoamericana de Austria. 2001.
FQ. Octubre 20-23. p66-72. Palacio de las Convenciones. Grupo Internacional de Fisioterapia en Fibrosis Quística (GIF/
La Habana,Cuba. 1997. FQ). FISIOTERAPIA en el Tratamiento de la Fibrosis
Doull JM. Recent advances in cystic fibrosis. Arch Dis Child Quística (FQ). Versión en español para uso interno de la
2001; 85: 62-66. Escuela Universitaria de Enfermería y Fisioterapia “San Juan
Duijvestin YCM, Brand PLP. Systemic review of N- de Dios” y la Federación Española contra la Fibrosis
acetylcisteine. Acta Pediatr 1999; 88: 38-41. Quística (FEFQ). 1997.
Equi AC, Pike SE, Davies J, Bush A. Use of cough swabs in Henderson RC, Madsen CD. Bone mineral content and body
cystic fibrisis clinic. Arch Dis Chile 2001; 85: 438-439. composition in children and young adults with cystic
Escobar H, Máiz L, Suárez L, Antelo C, Baquero F, Cobos N, et fibrosis. Pediatr Pulmonol 1999; 27 80-84.
al. Consenso sobre determinados aspectos de la patología Hilman BC. Genetic and Immunologic Aspects of Cystic Fibrosis.
pulmonar en pacientes con fibrosis quística. Consensos Ann Allergy Asthma Immunol 1997; 79: 379-90.
elaborados durante los encuentros 98 de la Fundación “Sira Hodson ME, Gueddes DM. eds. CYSTIC FIBROSIS. Chapman
Carrasco” para ayuda a la fibrosis quística. p91-94. Madrid, & Hall Medical. London, United Kingdon (UK). 1995.
España. 1998 Höiby N. Pseudomonas in Cystic Fibrosis: past, present, future.
Escobar H, Jara P, Suárez L, Bousoño C, García MD, Manzanares The Fourth Joseph Levy Memorial Lecture (separata); June
J, et al. Proyecto sobre la valoración de la patología hepática. 1998. CYSTIC FIBROSIS TRUST, Scandipharm Inc. and
Consensos elaborados durante los encuentros 98 de la
SHS International. Berlin, German Federal Republic. 1999; 1-25.
Fundación “Sira Carrasco” para ayuda a la fibrosis quística.
p13-30. Madrid, España. 1998. Höiby N. Cross-infections in cystic fibrosis patients. En: Rojo
Escobar H, Suárez L. Fibrosis Quística. Guía para pacientes y M, García E E,Bosch C. eds. Libro de conferencias y
familiares. Ministerio de Sanidad y Consumo. Madrid, resúmenes del VIII Congreso Latinoamericano de Fibrosis
España. 1998. Quística (Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-
Escobar H, Infante D, Manzanares J, Lambruchini N, Bousoño C, latinoamericana de FQ. p54-58. Octubre 20-23. Palacio de
Ferrer Calvete J, et al. Fibrosis Quística: actualización y las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997.
control de la nutrición. Pediátrika 2001; 1 (Supl.): 1-32. Höiby N, Koch C, Frederiksen B. TREATMENT of Cystic
European Work Group of Cystic Fibrosis. EWG-CF Conference. Fibrosis in Denmark. Adult Cystic Fibrosis Committee of
June 2-6. Davos, Switzerland. 1997. Quebec (ACFCQ). svb. 1999; 24: 18-20.
Feldmann D, Tamalat A, Boule M. Genotype analysis and Jiménez R. Aspectos Básicos en la Nutrición del Niño con Fibrosis
phenotypic manifestations of children with intermediate Quística. Publicación del Instituto Superior de Ciencias
cloride test results. Chest 2000; 118:1591- 1599. Médicas de la Habana. La Habana, Cuba. 1995.

Parte XII. Aparato respiratorio 1053


Johansen HK, Norregaard L, Gotzsche OC, Pressler T, Koch, Oermann CM, Sokrider MM, Konstan MW. The Use of
Höiby N. Antibody response to Pseudomonas aeruginosa in AntiInflamatory Medications in Cystic Fibrosis. Chest
cystic fibrosis patients: A marker of therapeutic success?- A 1999; 115: 1053-1058.
30-year Cohort study of survival in Danish CF patients after Palys JR Proceedings of the 13rd. NORTH AMERICAN CYSTIC
onset of chronic P. aeruginosa lung infection. Pediatr FIBROSIS CONFERENCE. October 23-27. Florida, USA.
Pulmunol 2004; 37: 427-432. International Association of Cystic Fibrosis Adults (IACFA)
Koch C, Höiby N. Pathogenesis of Cystic Fibrosis. Lancet Newsletter 2000; 58: 3-19.
1993;34:1065-69. Penchart PB, Durie PR. Pathogenesis of malnutrition in cystic
Kraemer R, Schöni MH. eds. Proceedings of the 21st European fibrosis and its treatment. Clin Nutr 2000; 19: 387-394.
Working Group Conference. Davos, Switzerland. 1997. Pérez-Aguilar FJ. Fibrosis Quística y Aparato Digestivo:
Kirk JM. Inconsistencies in sweat testing in United Kingdom consideraciones fisiopatológicas, clínicas y terapéuticas.
laboratories. Arch Dis Child 2000; 82: 425-427. Medicina Clínica 1998; 32: 508-15.
Konstan MW, Byard PJ, Hoppel CL, Davis PB. Effects of high Plante M. Sexuality and Cystic Fibrosis. Adult Cystic Fibrosis
dose ibuprofen in patients with cystic fibrosis. N Engl J Committee of Quebec (ACFCQ). svb. 1998; 23: 22, 23.
Med 1995; 332: 848-854. Prince AS. Biofilms, Antimicrobial Resistance, and Airway
Lands L. Lung Inflamation and Oxidative Stress. Adult Cystic Infection. N Eng J Med 2002; 1110-1111.
Fibrosis Committee of Quebec (ACFCQ). svb. 1998; Ramagopal M, Lands LC. Inhaled tobramicin and bronchial
23:18-21. hyperactivity in cystic fibrosis. Pediatr Pulmunol 2000;
Lap-Chee-Tsui, Hancock B, Downey G. The CF Gene Discovery: 29: 366-70.
10 years later.The Newsletter of the Canadian CF Ratjen F, Comes G, Paul K, Posselt HG, Wagner TO, Harms K.
Foundation: Candid Facts 1999; 3:1-3. Effect of continuous antistaphylococcal therapy on the rate
Littlewood J. The Infection on CF. Control Group´s: new of P. aeruginosa acquisition in patients with cystic fibrosis.
document. CF NEWS. Medical & Scientific supplement. Pediatr Pulmonol 2001; 31: 13-16.
CYSTIC FIBROSIS TRUST and Astra Zeneca Lab. London, Redemann B, Hillyard S, Jacklin T. XIIIth. INTERNATIONAL
United Kingdon. SPRING 2001. CYSTIC FIBROSIS CONGRESS. June 4-8; 2000.
Ludwig Neto N. Métodos diagnósticos e screening da Fibrose Stokholm, Sweden. Med./Scientific Conferences Report;
Cistica. En: Rojo M, García E, Bosch C. eds. Libro de IACFA Newsletter 2000; 59: 18-33.
conferencias y resúmenes del VIII Congreso Latinoamericano Robberechet E. 3eme assises des Centres de Soins de la
de Fibrosis Quística (Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano- Mucoviscidosis a Poiters les 28 et 29 avril 2000.
latinoamericana de FQ. Octubre 20-23. p73-75. Palacio de Association Belge de Lutte contre la Mucoviscidosis.
las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997. MUCO Bulletin. 2000; 121: 6-10.
Lukacs GL, Durie PR. Fharmacologic Approaches to Correcting Rojo M. FIBROSIS QUISTICA Comentarios para pacientes y
the Basic Defect in Cystic Fibrosis. N Eng J Med 2003; familiares. Ministerio de Salud Pública (MINSAP). La
349:1401-1404. Habana, Cuba. 2001.
Marcotte JE. Cross-Contamination by Pseudomonas aeruginosa: Rossboth DW. The impact of hygiene and microbiology in cystic
Myth or Reality? Adult Cystic Fibrosis Committee of fibrosis patients. IACFA Newsletter 2001; 60: 5-11.
Quebec(ACFCQ). svb 2000; 2:21- 22. Royal College of Pathologist. Issues in CYSTIC FIBROSIS:
Massie J, Gaskink, Van Aspern P, Wilcken B. Sweat testing Antibiotic Therapy Report of a Meeting at the R.C.P. 1996
following newborn screening for cystic fibrosis. Pediatr London, United Kingdom. Entregado en EWG/CF Congress;
Pulmunol 2000; 29: 452-56. 1997, June 1-4. Davos, Switzerland. 1997.
Modelell I, Alvarez A, Guarner L, De Gracia J, Malongelada JR. Saavedra M, Vasil M, Randell S, West J, Rodean D. Pseudomonas
Gastrointestinal, liver and pancreatic involvement in adults aeruginosa-Human Airway Epithelial Cell Interaction. Chest
patients with Cystic Fibrosis. Páncreas 2001; 22: 395-399. 2002: 121: 40S-42S.
Moran A. Cystic Fibrosis Related Diabetes. IACFA Newsletter Salcedo Posadas A, García Novo MD. eds. Fibrosis Quística. 1ª.
2001; 60: 12-18. Ed. Roche Lab. Madrid, España; 1997.
McNaughton SA, Stormont DA. Growth failure in cystic fibrosis. Sánchez I, Guiraldes E. Fibrosis Quística. En: Meneghello J,
J Pediatr Child Health 1999; 35: 86-92. Fanta E, Paris E, Puga TF, eds. MENEGHELLO
Morgan WJ, Tullis E, Höiby N. Care and survival: international PEDIATRIA. 5ta.Ed. p1374-79. Editora Médica
experiences. Meeting of the American Thoracic Society CF PANAMERICANA. Buenos Aires, Argentina 1997.
News. Medical and Scientific supplement. San Francisco, Sánchez-Solís M, Pajarón M. Aspectos pulmonares en la Fibrosis
USA. SUMMER 2001. Quística. En: Rojo M, García E, Bosch C, eds. Libro de
Nadal JM. El calcio y otros minerales en la fibrosis quística. conferencias y resúmenes del VIII Congreso Latinoamericano
Estado actual. En: Rojo M, García E, Bosch C. eds. Libro de de Fibrosis Quística (Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-
conferencias y resúmenes del VIII Congreso Latinoamericano latinoamericana de FQ. Octubre 20-23. p91-94. Palacio de
de Fibrosis Quística (Mucoviscidosis) y III Jornada las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997.
Hispano-latino-americana de FQ. p112-17. Octubre 20-23. Sánchez-Solís M, Pajarón M. Valor de los “scores” en la
Palacio de las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997. evaluación del paciente con fibrosis quística. En: Rojo M,
Niaander N. Urinary incontinence in females with cystic fibrosis. García E, Bosch C, eds. Libro de conferencias y resúmenes
IACFA Newsletter 2001; 60: 31-35. del VIII Congreso Latinoamericano de Fibrosis Quística
Ojeniyi B. Frederiksen B. Höiby N. Pseudomonas aeruginosa (Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-latinoamericana de
cross-infection among patients with cystic fibrosis during a FQ; p54-58. Octubre 20-23. Palacio de las Convenciones. La
winter camp. Pediatr Pulmonol 2000; 29:177-81. Habana, Cuba. 1997.

1054 Tomo III


Schwierbert EM, Benos DJ, Fuller CM. Cystic Fibrosis. A
Multiple Exocrinopathy caused by Dysfunction in a
Multifunctional Transport Protein Am J Med 1998; 104: . Capítulo 78 .
576-590.
Speert DP. Cystic Fibrosisis and Burkholderia cepecia. Adult
Cystic Fibrosis Committee of Quebec (ACFCQ). svb.
2000; 25:23-25. Enfermedades producidas
Spencker FB, Staber L, Lietz T, Schielle R, Rodloff AC.
Development of resistance in Pseudomonas aeruginosa en las vías aéreas
obtained from patients with cystic fibrosis at different times.
Clin Microbiol Infect 2003; 9: 370-379.
por la inhalación o aspiración
Suárez L, Máiz L, Escobar H. Alimentación y suplementos de materias extrañas
enzimáticos en la fibrosis quística. En: Rojo M, García E Gladys Abreu Suárez
Bosch C, eds. Libro de conferencias y resúmenes del VIII
Congreso Latinoamericano de Fibrosis Quística La inhalación o aspiración de material extraño en
(Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-latinoamericana de
FQ. p45-48. Octubre 20-23. Palacio de las Convenciones. La
las vías respiratorias puede dar lugar a diferentes cua-
Habana, Cuba. 1997. dros clínicos, en dependencia de la naturaleza de la ma-
Super M. Cystic fibrosis newborn screening and detection of teria inhalada, el lugar donde se aloje y el grado de
carriers. Arch Dis Child Fetal Neonatal Edition 2003; 88: obstrucción que produzca.
F44-F48. Su presentación puede ser aguda, en el caso de la
Taccetti G, Campana S, Marianelly L. Multiresistent non-
fermentative gram-negative bacteria in cystic fibrosis
aspiración accidental de un cuerpo extraño, pero tam-
patients: the results of an Italian multicenter study. Italian bién puede manifestarse como enfermedad pulmonar
Group for Cystic Fibrosis Microbiology. Eur J crónica si el diagnóstico se retarda o cuando repetidas
Microbiol 1999; 15: 24-28. aspiraciones de leche u otros alimentos se producen en
Talmacin I, Varlolla L, Mortensen J, Schidlow DV. Risk factors for pacientes con algún trastorno predisponente.
emergence of Stenotrophomonas maltophilia in CF. Pediatr
Pulmonol 2000; 30: 10-15. Neumonía aspirativa principalmente
Taylor CJ, Hillet PG. Gastric emptying and intestinal transit of
pancreatic enzyme supplements in cystic fibrosis. Arch Dis
por leche
Child 1999; 80: 149-52. Esta neumonía se ve fundamentalmente asociada
Tubbs D, Lenney W, Alcock P, Cambell CA, Gray J, Pantin C. a la aspiración repetida de pequeñas cantidades de le-
Pseudomonas aeruginosa in cystic fibrosis: cross-infection che u otros alimentos en pacientes que padecen trastor-
and the need for segregation. Respir Med. 2001; 95:147-52.
nos de la succión y deglución, anomalías congénitas,
Walkowiak J, Cicky WK, Herzig KH. Comparison of fecal level
of elastase 1 with secretin-cholecystokinin test in patients trastornos neuromusculares, en niños que regurgiten por
with cystic fibrosis. Scand J Gastroenterlogy 1999; 34: 202- una malfunción esofágica y menos frecuentemente cuan-
207. do existen fístulas traqueoesofágicas.
Wolter JM, Bowler SD, Mc Cormack JG. Are antipseudomonas
antibiotics really beneficial in acute exacerbations of cystic ANATOMÍA PATOLÓGICA
fibrosis?. Aust N Z J Med 1999; 29:15-21. La presencia de leche, alimentos o jugo en las vías
World Heath Organization. Classification of Cystic Fibrosis and
Related Disorders. Report of a joint WHO/ ICF(M)A/ aéreas produce una reacción inflamatoria aguda, carac-
ECFS/ ECFTN meeting; June 2000. Copenhagen,Sweden. terizada por la exudación de neutrófilos, macrófagos y
Document WHO/CF/HGN/00.2 2000. hematíes.
Webber B, Pryor J. The Physical Treatment of Cystic Fibrosis Sucesivamente aparecen células mononucleares en
(Traducción al español por Nadal JM, Nadal Monsoni, J y
F. Murcia, España. London: Cystic Fibrosis Research los espacios alveolares, células epiteliales y algunas cé-
Trust; 1996. lulas gigantes, que constituyen una reacción
Weibel MR. Relationship between the person with cystic fibrosis, granulomatosa. Al final aparecen fibroblastos, que ha-
her/his parents and the doctor. En: Rojo M, García E, Bosch cen que el proceso evolucione hacia la fibrosis. Las as-
C, eds. Libro de conferencias y resúmenes del VIII Congreso
Latinoamericano de Fibrosis Quística (Mucoviscidosis) y III piraciones repetidas producen neumonía crónica, que
Jornada Hispano-latinoamericana de FQ. Octubre 20-23. puede evolucionar hacia la bronquiolitis obliterante y la
p117-19. Palacio de las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997. fibrosis pulmonar.
WHO. The Molecular Genetic Epidemiology of Cystic Fibrosis.
Report of a Joint Meeting of WHO/ECFTN/ICF(M)A/ CUADRO CLÍNICO
ECFS. WHO/HGN/CF/WG/04.02 2002 Está dado, en primer lugar, por las manifestaciones
Wideman E. Aspectos Sicosociales tratados en la XIII Annual
propias del trastorno que condiciona la aspiración, aunque
North American CF Conference IACFA Newsletter 2000,
58: 10-15. en muchas ocasiones niños con reflujo gastroesofágico no

Parte XII. Aparato respiratorio 1055


Schwierbert EM, Benos DJ, Fuller CM. Cystic Fibrosis. A
Multiple Exocrinopathy caused by Dysfunction in a
Multifunctional Transport Protein Am J Med 1998; 104: . Capítulo 78 .
576-590.
Speert DP. Cystic Fibrosisis and Burkholderia cepecia. Adult
Cystic Fibrosis Committee of Quebec (ACFCQ). svb.
2000; 25:23-25. Enfermedades producidas
Spencker FB, Staber L, Lietz T, Schielle R, Rodloff AC.
Development of resistance in Pseudomonas aeruginosa en las vías aéreas
obtained from patients with cystic fibrosis at different times.
Clin Microbiol Infect 2003; 9: 370-379.
por la inhalación o aspiración
Suárez L, Máiz L, Escobar H. Alimentación y suplementos de materias extrañas
enzimáticos en la fibrosis quística. En: Rojo M, García E Gladys Abreu Suárez
Bosch C, eds. Libro de conferencias y resúmenes del VIII
Congreso Latinoamericano de Fibrosis Quística La inhalación o aspiración de material extraño en
(Mucoviscidosis) y III Jornada Hispano-latinoamericana de
FQ. p45-48. Octubre 20-23. Palacio de las Convenciones. La
las vías respiratorias puede dar lugar a diferentes cua-
Habana, Cuba. 1997. dros clínicos, en dependencia de la naturaleza de la ma-
Super M. Cystic fibrosis newborn screening and detection of teria inhalada, el lugar donde se aloje y el grado de
carriers. Arch Dis Child Fetal Neonatal Edition 2003; 88: obstrucción que produzca.
F44-F48. Su presentación puede ser aguda, en el caso de la
Taccetti G, Campana S, Marianelly L. Multiresistent non-
fermentative gram-negative bacteria in cystic fibrosis
aspiración accidental de un cuerpo extraño, pero tam-
patients: the results of an Italian multicenter study. Italian bién puede manifestarse como enfermedad pulmonar
Group for Cystic Fibrosis Microbiology. Eur J crónica si el diagnóstico se retarda o cuando repetidas
Microbiol 1999; 15: 24-28. aspiraciones de leche u otros alimentos se producen en
Talmacin I, Varlolla L, Mortensen J, Schidlow DV. Risk factors for pacientes con algún trastorno predisponente.
emergence of Stenotrophomonas maltophilia in CF. Pediatr
Pulmonol 2000; 30: 10-15. Neumonía aspirativa principalmente
Taylor CJ, Hillet PG. Gastric emptying and intestinal transit of
pancreatic enzyme supplements in cystic fibrosis. Arch Dis
por leche
Child 1999; 80: 149-52. Esta neumonía se ve fundamentalmente asociada
Tubbs D, Lenney W, Alcock P, Cambell CA, Gray J, Pantin C. a la aspiración repetida de pequeñas cantidades de le-
Pseudomonas aeruginosa in cystic fibrosis: cross-infection che u otros alimentos en pacientes que padecen trastor-
and the need for segregation. Respir Med. 2001; 95:147-52.
nos de la succión y deglución, anomalías congénitas,
Walkowiak J, Cicky WK, Herzig KH. Comparison of fecal level
of elastase 1 with secretin-cholecystokinin test in patients trastornos neuromusculares, en niños que regurgiten por
with cystic fibrosis. Scand J Gastroenterlogy 1999; 34: 202- una malfunción esofágica y menos frecuentemente cuan-
207. do existen fístulas traqueoesofágicas.
Wolter JM, Bowler SD, Mc Cormack JG. Are antipseudomonas
antibiotics really beneficial in acute exacerbations of cystic ANATOMÍA PATOLÓGICA
fibrosis?. Aust N Z J Med 1999; 29:15-21. La presencia de leche, alimentos o jugo en las vías
World Heath Organization. Classification of Cystic Fibrosis and
Related Disorders. Report of a joint WHO/ ICF(M)A/ aéreas produce una reacción inflamatoria aguda, carac-
ECFS/ ECFTN meeting; June 2000. Copenhagen,Sweden. terizada por la exudación de neutrófilos, macrófagos y
Document WHO/CF/HGN/00.2 2000. hematíes.
Webber B, Pryor J. The Physical Treatment of Cystic Fibrosis Sucesivamente aparecen células mononucleares en
(Traducción al español por Nadal JM, Nadal Monsoni, J y
F. Murcia, España. London: Cystic Fibrosis Research los espacios alveolares, células epiteliales y algunas cé-
Trust; 1996. lulas gigantes, que constituyen una reacción
Weibel MR. Relationship between the person with cystic fibrosis, granulomatosa. Al final aparecen fibroblastos, que ha-
her/his parents and the doctor. En: Rojo M, García E, Bosch cen que el proceso evolucione hacia la fibrosis. Las as-
C, eds. Libro de conferencias y resúmenes del VIII Congreso
Latinoamericano de Fibrosis Quística (Mucoviscidosis) y III piraciones repetidas producen neumonía crónica, que
Jornada Hispano-latinoamericana de FQ. Octubre 20-23. puede evolucionar hacia la bronquiolitis obliterante y la
p117-19. Palacio de las Convenciones. La Habana, Cuba. 1997. fibrosis pulmonar.
WHO. The Molecular Genetic Epidemiology of Cystic Fibrosis.
Report of a Joint Meeting of WHO/ECFTN/ICF(M)A/ CUADRO CLÍNICO
ECFS. WHO/HGN/CF/WG/04.02 2002 Está dado, en primer lugar, por las manifestaciones
Wideman E. Aspectos Sicosociales tratados en la XIII Annual
propias del trastorno que condiciona la aspiración, aunque
North American CF Conference IACFA Newsletter 2000,
58: 10-15. en muchas ocasiones niños con reflujo gastroesofágico no

Parte XII. Aparato respiratorio 1055


tienen regurgitación visible ni otros síntomas digestivos, alimentación que eviten la aspiración de alimentos y, al
y dominan el cuadro las manifestaciones respiratorias. mismo tiempo, garanticen una buena nutrición, como la
La tos, en ocasiones nocturna, la polipnea y la res- alimentación por sonda nasogástrica o gastrostomía.
piración ruidosa y silbante, son las manifestaciones más Deben prevenirse las infecciones respiratorias.
frecuentes; además puede constatarse tórax
hiperinsuflado, tiraje y presencia de estertores secos, en
Neumonía lipoidea
La neumonía lipoidea exógena es una forma de
dependencia de la magnitud de la aspiración.
neumonía por aspiración en niños que reciben aceite
En algunos pacientes con reflujo gastroesofágico
mineral para la constipación. Se ha descrito también con
se ha señalado, también, la aparición de disfonía y larin-
la administración de aceites de origen animal o vegetal,
gitis recurrente, así como desencadenamiento de obs- con el uso excesivo de brillo de labios en adolescentes o
trucción bronquial en niños asmáticos. con gotas nasales oleosas. Cuando estas sustancias se
Puede producirse infección bacteriana secundaria, ingieren antes de acostarse, una delgada película puede
lo que agravaría el cuadro clínico, por lo que puede apa- quedar adherida en la faringe y ser aspirada durante el
recer fiebre, cianosis y severa disnea. sueño.
Los niños con aspiración continuada evolucionan Estas sustancias no estimulan el reflejo tusígeno y
hacia la neumonía intersticial crónica y la fibrosis además inhiben la actividad ciliar, llegan a las vías aé-
pulmonar, con tos persistente, fiebre recurrente, males- reas y predominan las lesiones en el lado derecho. La
tar, taquipnea y desnutrición. reacción granulomatosa es mayor con las grasas
insaturadas, animales, que son más irritantes.
DIAGNÓSTICO
El cuadro clínico es variable y es asintomático en
Debe ser sospechado en todo paciente con bron- la mitad de los casos.
quitis o neumonía recurrente, sobre todo si se asocia con Puede presentarse fiebre, dolor torácico, tos y
dificultad para la alimentación o vómitos, por lo que el disnea.
interrogatorio, así como la observación del niño, mien- El diagnóstico se basa en los antecedentes, el pa-
tras se alimenta, son elementos fundamentales. trón radiográfico de neumonía aspirativa y la demostra-
En el diagnóstico positivo es muy importante la ra- ción de macrófagos cargados de grasa en el esputo o en
diografía de tórax, en la que se apreciará desde un lavados broncoalveolares.
reforzamiento hiliar en casos leves, hiperinsuflación en El diagnóstico diferencial debe hacerse con las
ocasiones y en casos avanzados o con infección neumonías lipoideas endógenas, que se ven en el curso
sobreañadida aparece moteado inflamatorio en parches de la proteinosis pulmonar alveolar, enfermedades de
o de distribución segmentaria que se ubican sobre todo almacenamiento de grasa, embolismos grasos y otros.
en los segmentos más posteriores de ambos lóbulos, su-
Neumonía aspirativa
periores e inferiores, en niños pequeños o pacientes de
cualquier edad que permanezcan acostados.
por otras sustancias
En niños mayores, las lesiones se ubican funda- Su incidencia en nuestro medio ha disminuido. Se
mentalmente en lóbulos inferiores, aunque pueden afec- presenta, generalmente, en niños que comienzan a ca-
minar, cuando no son cuidados por su madre o están de
tar língula u lóbulo medio. En ambos casos, el hemitórax
visita en otra casa. Es muy común que el kerosene esté
derecho es el más afectado.
envasado en botellas de refresco u otro recipiente que el
El diagnóstico causal se determina de acuerdo con
niño identifique como alimento.
el cuadro clínico, la presencia de trastornos nerviosos o
Aunque de manera habitual el niño solo ingiere una
musculares y la realización de estudios de la función
pequeña cantidad, se presenta inmediatamente tos seca
esofágica.
irritativa, polipnea y tiraje. El murmullo vesicular está
TRATAMIENTO disminuido y pueden aparecer sibilancias y subcrepitantes
La terapéutica está dirigida, en primer lugar, al con- en las bases. Puede aparecer fiebre en las primeras
trol de la enfermedad causante de la aspiración, ya sea 24 h, como parte de este cuadro.
mediante tratamiento médico o corrección quirúrgica. Si la cantidad ingerida es pequeña y no se realizan
En niños con daño cerebral severo, o con anoma- maniobras que incrementen la aspiración hacia las vías
lías no susceptibles de corrección quirúrgica o que aéreas, como provocar el vómito o hacer un lavado gás-
deba retardarse, pueden valorarse otras formas de trico, este cuadro inicial desaparece en pocos días.

1056 Tomo III


Cuando se ingiere mayor cantidad, la aspiración Cuerpo extraño en las vías aéreas
masiva puede provocar sofocación, cianosis, hipotensión, La inhalación o aspiración de un cuerpo extraño
taquicardia y tendencia al colapso, y el cuadro puede hacia las vías aéreas, es un accidente relativamente fre-
demorarse 2 semanas o más.
cuente en la infancia. Si el cuadro de sofocación o as-
De inicio, la radiografía de tórax es habitualmente
fixia inicial no es presenciado por los padres, la mayoría
negativa y aparecen las lesiones de neumonitis química,
de las veces los síntomas obstructivos se atribuyen a
después de varias horas (Fig. 78.1).
otras enfermedades comunes en el niño como asma o
laringitis, y el diagnóstico se retarda en días, semanas o
aun meses y esto provoca las complicaciones.
Se observa, sobre todo, en niños menores de 3 años,
y es excepcional por debajo de los 6 meses. Los varo-
nes son mucho más propensos que las niñas.
En nuestro medio, son frecuentes los cuerpos ex-
traños vegetales como maní o frijoles, fragmentos de
hueso o carne, así como pedazos pequeños de plástico o
alfileres.
De acuerdo con su localización, pueden conside-
rarse los cuerpos extraños en laringe y tráquea, y los
cuerpos extraños intrabronquiales.

Cuerpos extraños en laringe y tráquea


Aproximadamente, solo el 6 % de los cuerpos ex-
traños inhalados, se aloja en laringe o tráquea y es más
Fig. 78.1. Neumonía aspirativa por ingestión de kerosene. frecuente en niños menores de 3 años de edad.
La localización más frecuente es la subglótica, se-
Pueden aparecer complicaciones, y la más frecuen- guida por la porción superior de la tráquea; la localiza-
te es la neumonía bacteriana secundaria con fiebre que ción supraglótica es infrecuente.
reaparece del tercer al quinto día, neumotórax y derra- La obstrucción total en el momento de la aspira-
me pleural. ción puede ser causa de muerte súbita; en los restantes
El estudio de escolares que sufrieron neumonía casos este episodio de sofocación, con frecuencia, se
aspirativa por kerosene en la infancia, ha demostrado desconoce y el niño se presenta con tos, sibilancia y
una hiperreactividad bronquial adquirida, secundaria al
estridor. Pueden asociarse retracción esternal, ronquera
daño pulmonar sufrido.
y cianosis.
En primer lugar el tratamiento es preventivo al edu-
La radiografía de tórax habitualmente es normal,
car a la familia.
mientras que los estudios radiográficos del cuello,
En caso de neumonía aspirativa, son importantes
las medidas generales, la oxigenoterapia y la hidratación, anteroposterior y lateral, pueden sugerir el diagnóstico
y puede ser necesaria, en algunos casos, la ventilación en el 90 % de los casos, y muestran estrechamiento de
mecánica. la laringe y en algunas ocasiones se visualiza el cuerpo
La antibioticoterapia profiláctica no está indicada extraño cuando es radioopaco.
y solo se usa cuando se sospecha infección bacteriana La broncoscopia confirma el diagnóstico y permite
secundaria. la extracción del cuerpo extraño; si la manipulación es
muy laboriosa o el edema laríngeo existente es muy gran-
Otras neumonías aspirativas de, puede ser necesario practicar una traqueostomía.
Algunas sustancias como talcos, pinturas, esporas Los cuerpos extraños alojados en el esófago supe-
y gases, entre otras, pueden producir neumonías rior pueden producir signos compresivos traqueales como
aspirativas con fenómenos inflamatorios agudos y a ve- estridor o sibilancias, aunque predominan la disfagia y la
ces crónicos. sialorrea, que permiten el diagnóstico diferencial.
La prevención, al educar a la familia, es funda- Si el diagnóstico no se realiza en las primeras 24 h,
mental, ya que también constituyen accidentes evitables. la posibilidad de complicaciones se duplica. Las más

Parte XII. Aparato respiratorio 1057


frecuentes son: el neumotórax, el edema subglótico
posendoscopia y la movilización del cuerpo extraño ha-
cia un bronquio.

Cuerpos extraños intrabronquiales


Pueden verse en niños de mayor edad, y se acom-
pañan de menos complicaciones y mortalidad que los de
localización laringotraqueal.
Después del episodio de sofocación inicial, se ins-
tala una tríada característica de tos, sibilancias y dismi-
nución del murmullo vesicular en el hemitórax afecto,
aunque se reporta que en la tercera parte de los casos,
puede verse un período de latencia en el que el niño está
asintomático, lo que se atribuye a la adaptación de los
receptores sensoriales de superficie a la presión prolon-
Fig. 78.2. Cuerpo extraño en vías respiratorias.
gada del cuerpo extraño.
Los cuerpos extraños que por su forma y tamaño larga duración, puede observarse atelectasia asociada a
obstruyen la vía aérea y los de naturaleza vegetal que la neumonía o no.
producen una gran reacción irritativa, son los que más
TRATAMIENTO
síntomas producen.
El cuadro clínico variará de acuerdo con el grado La prevención de este accidente es fundamental,
de obstrucción, se produce un enfisema obstructivo si la al enseñar a la madre a no dejar objetos pequeños al
oclusión es parcial, y predominan las sibilancias y el alcance del niño y no colocarlos ella en la boca, ya que
murmullo disminuido en la parte del pulmón afectada. el menor puede imitar su conducta.
Cuando la obstrucción total se establece, el seg- La broncoscopia con broncoscopio rígido permite
mento o lóbulo posterior a esta se colapsa, predomina la la extracción del cuerpo extraño. La fisioterapia y el dre-
tos y clínicamente aparecen las manifestaciones de un naje postural pueden ser peligrosos, por lo que no se
síndrome de condensación atelectásico. recomiendan.
Cuando el diagnóstico se retarda, aparece la neu-
monía que no se resuelve con el tratamiento antibiótico, Bibliografía
si no se extrae el cuerpo extraño, lo que plantea el diag- Black A: “Urgencias Pediátricas: IRA”. Page: 142. Salvat,
nóstico diferencial con otras neumopatías crónicas. Barcelona, 1985.
Si el cuerpo extraño se moviliza y se impacta en el Escribano A: “Fibrobroncoscopia en Pediatría”In: II Curso
Nacional de Actualización en Neumología Pediátrica. Cobas
bronquio del hemitórax opuesto, se produce una
Barroso N. Ergon Madrid, 2005.
hiperinsuflación, lo que lleva al paciente a una insufi- Fernández I, Gutiérrez C, Álvarez V and Peláez D: “Bronco
ciencia respiratoria aguda. aspiración de cuerpos extraños en la infancia: revisión de 210
En algunos pacientes no diagnosticados, se puede casos.” Ann Esp Pediatr, Madrid. 2000, 53: 335-8.
Hollinger L: “Foreign bodies in the airways”. Page 1410-11. In:
observar tos crónica, a veces quintosa, asociada a Berhman, Kliegman and Jenson. Nelsons Textbook of
atelectasia y, en ocasiones, hemoptisis. Estos casos evo- Pediatrics. 17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
lucionan hacia una supuración pulmonar. Karakoc F, Karadag GB, Akbenlioglu C, Ersu R, Yildizeli B, Yuksel
M et al: “Foreign body aspiration: what is the outcome”.
La radiografía de tórax puede ser normal en el
Pediatrics, Evanston. 2002, 34: 30-36.
15 % de los casos y no son frecuentes los cuerpos ex- Phelan P, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
traños radioopacos (Fig. 78.2). La radiografía en espi- children, Page: 234; 3rd Ed, Blackwell Scientific, London,
1990.
ración puede demostrar el enfisema obstructivo en el
Piantadosi C: “Lesiones pulmonares, físicas y químicas y por
lado afecto, con desviación mediastinal y aplanamiento inhalación”. In: Goldman-Bennett. Cecil. Tratado de
del diafragma. Por ultrasonografía, se aprecia inmovili- Medicina Interna. Mc Graw Hill. Interamericana de España.
SAV. Madrid, W Saunders Co, 2000.
dad diafragmática en este lado. La broncoscopia confir-
Rudolph A. Pediatrics Textbook. Page 424, 17th Ed. ACC Norwalk,
ma el diagnóstico y además es terapéutica. En casos de Connecticut, 1992.

1058 Tomo III


• Compresiones en distintos segmentos del aparato
respiratorio bajo (traqueomalasia, broncomalasia,
. Capítulo 79 . adenitis, anillos vasculares).
• Deficiencias inmunológicas o en los mecanismos de
defensa del aparato respiratorio.
Otras enfermedades • Por obstrucción de las vías aéreas superiores que
hace que el niño respire por la boca un aire no sufi-
que afectan principalmente cientemente filtrado de partículas, humedificado y ca-
los bronquios lentado.
Roberto Razón Behar y José A. González Valdés
La mayoría de los casos de bronquitis crónica pue-
de revelar la interacción de una serie de factores extrín-
Bronquitis crónica secos (fumador activo o pasivo, polución atmosférica)
La bronquitis crónica en los niños es discutida por con otros intrínsecos, que dependen del paciente.
algunos autores como una entidad clínica como tal; pero Como se puede observar el término bronquitis cró-
hay pacientes con tos mantenida y a veces con otros nica constituye un verdadero reto para el pediatra o para
el médico de la atención primaria que consulta a un niño
síntomas y signos, sin demostrarse una causa subyacen-
con tos de más de 4 semanas de evolución.
te, que son diagnosticados como enfermos de “bronquitis
crónica”, aunque desde el punto de vista anatomopatológico DIAGNÓSTICO

se trata de traqueobronquitis, pues generalmente la trá- El diagnóstico se basará en la historia clínica y en


quea, también está inflamada. los exámenes complementarios.
Frente al diagnóstico de una bronquitis crónica, hay INTERROGATORIO
que descartar diferentes causas, tanto del aparato respi- Es fundamental, pues permite orientarnos hacia las
ratorio como de enfermedades de otros aparatos o sis- causas más frecuentes: irritación bronquial, hiperreac-
temas. Puede ser la consecuencia de una infección tividad bronquial, aspiraciones, afecciones respiratorias
bacteriana (Streptococcus pneumoniae, Haemophilus altas con respiración bucal, etc.
influenzae, Moraxella catarrhalis, Chlamydia
pneumoniae, Mycoplasma pneumoniae y otros) que Tiempo de evolución del cuadro clínico
complica una bronquitis aguda infecciosa viral. Otras Características de la tos: si es seca nos hace pen-
causas que también deben plantearse son: sar en causas irritativas o hiperreactivas, alérgicas o no,
• Una manifestación de hiperactividad bronquial, sobre todo cuando es nocturna; cuando la tos es húme-
alérgica o no (causa frecuente); da con expectoración purulenta podríamos pensar en la
• Una manifestación de irritación de la tráquea y bron- posibilidad de una infección primaria o secundaria; la
quios por partículas tales como: humos nocivos, par- exacerbación de la tos con los cambios de tiempo, olo-
ticularmente el producido por la combustión del tabaco res, polvo, etc.
(fumadores activos y pasivos), kerosene u otros hi-
drocarburos, material textil o de construcción, fumi- Antecedentes atópicos personales o familiares
gación, pinturas polvo, contaminantes no domésticos, etc.).
• La producida por aspiración de alimentos como con- Condiciones ambientales. Incluye estado de la
secuencia de una alteración funcional u orgánica del vivienda, polución áerea y el medio en que se desen-
esófago (reflujo gastroesofágico, chalasia, acalasia, vuelve el niño.
estenosis, fístula traqueoesofágica, etc.). CUADRO CLÍNICO
• Secundarias a una sinusitis crónica (sinobronquitis). Se caracteriza fundamentalmente por tos seca o
• La manifestación de una tuberculosis pulmonar productiva, que se presenta sobre todo durante la noche,
intratorácica. o al acostarse o al levantarse, y que en los niños peque-
• Cardiopatías congénitas con flujo pulmonar aumen- ños puede producir vómitos flemosos y en los mayores,
tado. molestias dolorosas en la parte anterior del tórax; a ve-
• Una manifestación de una fibrosis quística. ces con expectoración mucosa, mucopurulenta o más
• Un síndrome de discinesia ciliar primaria. excepcionalmente purulenta.
• Por alteraciones anatómicas o anormalidades de la Por lo general no hay fiebre y su presencia debe ha-
pared torácica (pectus excavatum, cifosis o cer sospechar una exacerbación del cuadro, casi siempre
cifoescoliosis moderadas o severas, etc.). por una infección bacteriana o una complicación, en

Parte XII. Aparato respiratorio 1059


particular una neumonía o bronconeumonía. Se pueden La indicación de otras investigaciones más espe-
presentar síntomas generales como anorexia, astenia y cializadas solo se realizará después de descartadas afec-
hasta detención o pérdida de peso o no. ciones subyacentes con los exámenes anteriores.
El examen físico del tórax, en las bronquitis cróni- COMPLICACIONES
cas no complicadas y sin causa subyacente demostrable
Muchas de las complicaciones de las bronquitis
será prácticamente normal; aunque pudieran haber crónicas pueden ser producidas por las afecciones que
estertores roncos con subcrepitantes medianos o grue- las causan: atelectasias, bronquiectasias, neumonías,
sos o sin ellos y respiración ruda. También puede haber enfisema (en estos casos también se debe descartar el
sibilancias. déficit de alfa-1 antitripsina) y adenitis paratraqueales.
Además del examen del aparato respiratorio, se
TRATAMIENTO
debe determinar la existencia de secreción purulenta en
el cavum nasofaríngeo o no, deformidades del tórax y Si se determina la causa subyacente se debe tratar
de la columna vertebral; la posibilidad de cardiopatías específica y adecuadamente.
En caso de hiperreactividad bronquial de causa
congénitas o adquiridas, etc.
alérgica la utilización de broncodilatadores y anti-
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS inflamatorios (cromoglicato disódico o esteroides
inhalados) puede ser de utilidad.
Se pueden indicar según los resultados del interro- La alimentación debe ser equilibrada.
gatorio, cuadro clínico y examen físico e incluyen: La actividad normal para la edad y reposo en los
• Hemograma y eritrosedimentación brotes o reagudizaciones.
• Prueba de Mantoux Es importante el control ambiental y la supresión
• Radiografía simple de tórax, frontal y lateral que puede de factores irritantes, particularmente el humo del taba-
ser normal o encontrarse un aumento de la trama co, polvo, determinados olores, etc.
broncovascular con posibles zonas de atelectasia mí- La atención psicológica es necesaria en estos en-
nimas, no específica de diagnóstico. En la bronquitis fermos, tanto en la asistencia y orientación del niño, como
crónica secundaria a algunas afecciones subyacen- en el entorno familiar que le rodea.
tes se pudieran encontrar: cuerpo extraño radiopaco; No todos los pacientes con bronquitis crónica ne-
alteraciones compatibles con una fibrosis quística; cesitan ser tratados con antibióticos. En casos de
entre otras. exacerbaciones por infección bacteriana secundaria y
• Radiografía de senos paranasales, siempre después de acuerdo con los gérmenes sospechados o identifica-
de los 2 años de edad y en distintas vistas según la dos se podrá utilizar betalactámicos solos o con
edad del paciente. inhibidores de la betalactamasa (amoxicillina asociada a
• Estudio microbiólogico de secreciones nasofarín- ácido clavulánico), cefalosporinas, macrólidos o
geas, de la expectoración, o de la aspiración fluoroquinolonas. La selección se hará también de acuer-
endoscópica bronquial o lavado bronquial. do con la presencia de alguna enfermedad de base co-
• Electrólitos en el sudor (si se sospecha fibrosis existente o no. En los casos de bronquitis crónica simple
quística). se pueden indicar: ampicillina, amoxicillina o
• Estudios inmunológicos (no rutinariamente). sulfametoxazol-trimetropim a las dosis indicadas por vía
• Estudios alergológicos (si se sospecha hiperreactividad oral. No se ha demostrado que los aerosoles con
bronquial alérgica). antibióticos sean beneficiosos.
• Electrocardiograma y ecocardiograma ( si se sospe- Como medidas locales pueden utilizarse:
cha cardiopatía). • En niños pequeños, atmósfera húmeda durante la
• Estudio radiológico de esófago bajo pantalla de tele- noche, por medio de nebulizadores o con un recipien-
visión (si se sospechan alteraciones funcionales u te con agua hirviendo constantemente junto a la cuna.
orgánicas). • En niños mayores, se pueden hacer inhalaciones de
• Broncoscopia en los casos de dificil diagnóstico o ante agua hirviendo (sin agregados), varias veces al día.
la necesidad de descubrir posibles complicaciones. • Cambios frecuentes de posición en niños pequeños.
Se realizará biopsia bronquial si se sospecha síndro- • Cuando hay secreciones abundantes, se realizará
me de discinesia ciliar primaria. drenaje postural; colocando al paciente en varias po-
• Broncografía (si se sospecha bronquiectasias secun- siciones, con palmoteo o percusión durante 1 ó 2 mi-
darias a bronquitis crónica). nutos en cada segmento pulmonar.

1060 Tomo III


Bronquiectasias • Hipoplasia pulmonar.
Las bronquiectasias constituyen un proceso respi- • Malformaciones costales y vertebrales (Yurpin-
ratorio crónico caracterizado por dilataciones bronquia- Lemoine, agenesia costal).
les resultantes de la destrucción del tejido elástico y de
la musculatura de las paredes de dichos conductos, que Las bronquiectasias adquiridas constituyen la
condicionan fenómenos inflamatorios y retención de gran mayoría de las dilataciones bronquiales. Pueden ser
secreciones, y obstrucción regional de las vías aéreas. producidas por:
Se desconoce la verdadera incidencia en niños, pero • Las neumonías por: tos ferina, sarampión, tuberculo-
estudios de varios autores la señalan entre 1,06 y 1,7 x sis, micosis, SIDA, agentes bacterianos y también
10 000 niños; aunque ha disminuido últimamente debido virales, particularmente por adenovirus. Se conside-
a un mejor conocimiento, un diagnóstico temprano de la ra que las infecciones por adenovirus, pueden lesio-
enfermedad y de sus causas, y un tratamiento adecuado. nar directa o indirectamente el epitelio bronquial, que
Las bronquiectasias son más frecuentes en niños inician una serie de procesos, entre ellos las infeccio-
de las clases económicas más bajas y en los países en nes bacterianas secundarias, que condicionan la apa-
desarrollo, presumiblemente porque las infecciones res- rición de bronquiectasias.
piratorias son más frecuentes y recurrentes, mayor pre- • Aspiración de cuerpos extraños traqueales o bron-
sencia de factores ambientales irritantes de las vías quiales.
aéreas, tasas de inmunizaciones más bajas y mayores • Fibrosis quística (causa más frecuente de bron-
deficiencias nutricionales. quiectasias difusas).
La fisiopatología incluye inflamación, producción • Compresión bronquial por adenopatías tuberculosas
de mucus y obstrucción regional de las vías aéreas. o de otras causas, infecciosas o no (linfomas, etc.).
• Abscesos pulmonares.
CLASIFICACIÓN • Masas o tumores mediastínicos.
Las bronquiectasias se clasifican en congénitas y • Infecciones pulmonares recurrentes y crónicas.
adquiridas. • Atelectasia prolongada.
Las bronquiectasias congénitas constituyen un • El síndrome de discinesia ciliar primaria, con síndro-
pequeño número y pueden explicarse por defectos con- me de Kartagener o sin él.
génitos, alteraciones anatómicas o predisposición racial. • Sarcoidosis.
Se presentan aisladas o asociadas a otras malformacio- • Anomalías anatómicas pulmonares.
nes: secuestro pulmonar, pólipos nasales, hidrocefalia, • Deficiencias inmunológicas congénitas o adquiridas.
fisura palatina, etc. • Asma bronquial. La coexistencia de asma bronquial
Se considera que el desarrollo bronquial se detie- y bronquiectasias está asociada con enfermedad
ne, ocasionando la formación de quistes que, al infectar- más severa.
se destruyen la pared bronquial. • Bronquitis crónica, aislada o con sinusitis (sinobron-
Entre ellas se citan: quiales).
• Bronquiectasias familiares (Cockayne y Torgersen). • Asociadas a patología esofágica (reflujo gastroeso-
• Un defecto del desarrollo del cartílago bronquial (fra- fágico, acalasia, estenosis, fistula traqueoesofágica).
gilidad cartilaginosa) descrito por Williams y Campell, • Deficiencia de alfa-1-antitripsina.
que puede tener una incidencia familiar.
• Traqueobroncomegalia, primeramente descrita por En las bronquiectasias adquiridas, cualquiera que
Moumer-Kuhn, en que se pueden producir sea su causa, se acepta que debe haber una infección
bronquiectasias por un fracaso del desarrollo de los con obstrucción del bronquio, ya que parece que la obs-
tejidos elástico y muscular de la tráquea y bronquios. trucción sola, si no hay una infección primaria o secun-
Es una afección rara que se puede sospechar por la daria, no produce lesión permanente en la pared
presencia en las radiografías simples de tórax de una bronquial.
tráquea muy dilatada, casi siempre del ancho de un
ANATOMÍA PATOLÓGICA
cuerpo vertebral.
• También pudiera incluirse aquí la displasia En las bronquiectasias adquiridas, macroscópica-
adenomatoidea quística pulmonar, descrita por mente los bronquios afectados se observan dilatados, ya
Newhauser, en que además de bronquiectasias, hay sea de forma cilíndrica, fusiformes o saculares; a menu-
alteraciones de los vasos sanguíneos y linfáticos y do hay atelectasia del o de los lóbulos afectados, y con
malformaciones quísticas. frecuencia engrosamiento pleural con adherencias. En

Parte XII. Aparato respiratorio 1061


las bronquiectasias saculares se encuentra en su luz un presencia de bronquiectasias; otras veces hay cuadros
material purulento o mucopurulento. También en la zona pulmonares inflamatorios recurrentes en una misma zona;
afectada (lóbulo o segmento), puede haber lesiones de y otras el proceso inflamatorio se mantiene o aumenta.
bronconeumonía, áreas de enfisema, o fibrosis distal a Cuando las bronquiectasias están instauradas, el
las alteraciones bronquiales. cuadro clínico clásico se caracteriza por tos crónica y
Dependiendo de la duración y naturaleza de la in- húmeda, con expectoración sobre todo matinal. La ex-
fección se producirán respuestas hísticas, y se observa pectoración, al principio es mucosa, pero, con posteriori-
microscópicamente destrucción bronquial con cambios dad se puede transformar en amarillenta o verdosa, hasta
inflamatorios. Al inicio del proceso, hay destrucción del francamente purulenta y con fetidez; a veces con es-
tejido elástico; posteriormente hay daño de la capa mus- trías de sangre y hasta verdaderas hemoptisis en los casos
crónicos más severos. Los niños pequeños, generalmente,
cular, y finalmente, del cartílago del bronquio. Cuanto
degluten las secreciones.
más avanzada es la lesión, mayores son las alteraciones
Los pacientes pueden presentar anorexia, pérdida
del cartílago y hay desde no afectación en las
de peso o retraso en aumentar de peso, irritabilidad y
bronquiectasias cilíndricas hasta ausencia de este tejido
febrículas intermitentes. Este cuadro crónico puede pre-
en las saculares. La mucosa bronquial puede estar ulce- sentar exacerbaciones febriles, con neumonías recurren-
rada, fibrosada o denudada, encima de vasos sanguí- tes en las zonas afectadas.
neos dilatados que se pueden romper y ocasionar El examen físico puede ser normal, o presentar
hemoptisis. hiposonoridad en la percusión; en la auscultación,
También se pueden encontrar hipertrofia de las disiminución del murmullo vesicular, con estertores hú-
glándulas mucosas, hiperplasia linfoide y alteraciones en medos mantenidos en la zona de las lesiones bronquia-
las ramas de las arterias bronquiales y pulmonares. Se les; puede haber sibilancias.
puede observar, frecuentemente, anastomosis entre las Las hemoptisis, cuando se presentan, son de inten-
arterias bronquiales y pulmonares. sidad variable; a veces tan severas que producen ane-
mia aguda. Algunos autores plantean que estos cuadros
LOCALIZACIONES
no son tan intensos en las bronquiectasias. Se describe
El lóbulo inferior izquierdo es el que más frecuen- una forma seca, que solo se manifiesta por hemoptisis
temente presenta bronquiectasias, como consecuencia recurrente.
de aspiración de un cuerpo extraño. El lóbulo medio de- Se puede presentar disnea de esfuerzo al comien-
recho es un sitio frecuente de lesión, cuando las zo, y después mantenida (ortopnea) en los casos seve-
bronquiectasias son producidas también por un cuerpo ros, cuya intensidad aumenta; también la presencia de
extraño o por adenopatías hiliares tuberculosas o no, dedos en “palillos de tambor” y uñas en “vidrio de reloj”.
seguidas de peribronquitis, infección crónica y atelectasia
INVESTIGACIONES
(síndrome del lóbulo medio derecho).
La broncoscopia se indica en pacientes con
Otras localizaciones frecuentes son los segmentos
atelectasias persistentes o recurrentes, o en aquellos ni-
basales de los lóbulos superiores y los segmentos de la
ños con hallazgos persistentes al examen físico de los
língula. pulmones. No solo sirve para el diagnóstico causal (cuer-
Aunque las bronquiectasias pueden estar confina- po extraño no radioopaco, tapón de muco-pus, compre-
das a un lóbulo, cuando son bilaterales, suelen presen- sión extrínseca del bronquio, estenosis, tumoraciones,
tarse en zonas múltiples. etc), sino que también se utiliza para el estudio microbio-
DIAGNÓSTICO
lógico del material aspirado y hasta, en algunas casos
como parte del tratamiento.
Se basará en el cuadro clínico y las investigaciones.
La radiografía simple de tórax en vista anteropos-
CUADRO CLÍNICO terior, laterales y oblicuas pueden no aportar ningún ele-
Las manifestaciones clínicas, por lo general, apa- mento, o presentar un aumento de la trama
recen en la primera década de la vida, particularmente broncovascular y líneas radioopacas desde el hilio hasta
en los primeros 5 años; y varían desde el niño la base, con adenopatías o no; atelectasias persistentes
asintomático, hasta el que presenta un cuadro florido. en base, sobre todo de forma triangular con vértice en el
El comienzo puede ser agudo, como consecuencia ángulo costofrénico (en el hemitórax izquierdo, la ima-
de una infección broncopulmonar y se produce una gen puede ser retrocardíaca); o la imagen “en panal”,
atelectasia que no regresa, lo que haría sospechar la que solo se ve en casos avanzados (Fig.79.1).

1062 Tomo III


También se realizan radiografías de senos
paranasales, hemograma, eritrosedimentación,
electrólitos en el sudor, prueba de tuberculina, estudios
inmunológicos, y cuantas investigaciones sean útiles para
precisar un diagnóstico causal adecuado.
Las pruebas funcionales respiratorias sirven para
demostrar si existe un componente restrictivo o
restrictivoobstructivo, la evolución, la respuesta al trata-
miento médico y la factibilidad de intervención quirúrgi-
ca o no.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Se realiza con la bronquitis crónica, las neumonías
crónicas o recurrentes, el asma bronquial, el absceso
Fig. 79.1. Bronquiectasia. pulmonar, la tuberculosis, la fibrosis quística, las malfor-
maciones quísticas del pulmón, la discinesia ciliar prima-
La ultrasonografía torácica podrá confirmar estos ria, y otras afecciones capaces de producir tos crónica,
hallazgos y delimitar áreas bronquiectásicas. expectoración y manifestaciones estetoacústicas más o
La tomografía lineal y la tomografía axial menos mantenidas. Muchas de estas afecciones pue-
computarizada (TAC), pueden demostrar las dilatacio- den causar bronquiectasias.
nes bronquiales. Hoy se sugiere que la TAC de alta re-
Los pulmones “en panal” pueden ser manifesta-
solución es el examen de elección para obtener el
ciones de otras afecciones, incluso la enfermedad quística
diagnóstico de bronquiectasias.
congénita, la displasia adenomatoidea pulmonar, el
La broncografía es una investigación de importan-
cia en el estudio de las bronquiectasias. Es un proceder granuloma eosinofílico, el síndrome de Wilson-Mikity en
seguro en manos de un médico entrenado, excepto las prematuros, la esclerosis tuberosa y la sarcoidosis.
rarísimas reacciones al material de contraste. Debe rea- COMPLICACIONES
lizarse de 1 a 2 meses después que haya desaparecido Las más frecuentes son: las neumonías y bronco-
la neumonía, la atelectasia o la aspiración del cuerpo neumonías en la zona afectada, la pleuresía recurrente,
extraño que se sospeche haya producido la complica- el empiema, la fístula broncopleural, los abscesos
ción bronquial; el paciente debe estar lo más libre posi- pulmonares o cerebrales y la amiloidosis. También las
ble de infección, y después de drenaje postural y hemoptisis severas con anemia aguda y sus consecuen-
fisioterapia por 2 o más semanas antes de realizar la cias; además de las complicaciones secundarias a las
investigación. transfusiones. Estas complicaciones pueden conducir al
Algunos autores recomiendan que este proceder agravamiento y a la muerte del paciente.
diagnóstico siempre debe estar precedido de una
TRATAMIENTO
broncoscopía con lavado broncoalveolar y estudio mi-
crobiológico del material aspirado, para utilizar Profiláctico. El mejor tratamiento es el preventi-
antibacterianos durante 2 semanas, de acuerdo con los vo, es decir, el adecuado para evitar las afecciones que
resultados. puedan producir las bronquiectasias, para lo cual son
Si con este método no mejoran las secreciones bron- importantes las inmunizaciones contra la tos ferina, el
quiales, se podrá realizar previo a la broncografía, un sarampión y la tuberculosis, aunque con esta última se
lavado broncoalveolar. La broncografía muestra el tipo tendrá en cuenta que pudiera presentarse a pesar de la
de dilatación, la extensión del proceso, y otros datos como utilización del BCG, por lo que es importante el diagnós-
la falta de estrechamiento gradual de la luz de los bron- tico precoz y el tratamiento correcto de la afección.
quios hacia la periferia, el agrupamiento de los bronquios Con respecto a las neumonías bacterianas, tam-
terciarios, la interrupción brusca del medio de contraste bién la utilización de vacunas contra los agentes
y, en casos severos, la falta de relleno alveolar. Una bacterianos más frecuentes: (el Streptococcus
radiografía simple de tórax, 24 h después de la pneumoniae y el Haemophilus influenzae tipo b); así
broncografía, permite ver el cúmulo persistente de ma- como el tratamiento rápido y adecuado, disminuyen las
terial de contraste en la zona afectada. posibilidades de bronquiectasias.

Parte XII. Aparato respiratorio 1063


Con respecto a las neumonías virales, en especial • Tratar las afecciones de base que condujeron a las
por adenovirus, sigue siendo un reto en cuanto a la pre- bronquiectasias.
vención y el tratamiento. • Uso de antimicrobianos. Se recomienda no utilizar
También es importante diagnosticar y tratar antibacterianos durante períodos prolongados, ya sea
precozmente las atelectasias, incluso el uso de la de forma permanente o intermitente. En la mayoría
broncoscopía de urgencia en los casos confirmados o de los niños las infecciones bronquiales son de causa
sospechosos de cuerpos extraños intrabronquiales; y de viral, y no están indicados los antibióticos. Su uso
urgencia relativa en las otras causas de atelectasias. continuado favorece la resistencia microbiana y las
La utilización del drenaje postural y la fisioterapia infecciones micóticas. Algunas afecciones que oca-
respiratoria en la fibrosis quística, en el síndrome de sionan bronquiectasias deben ser tratadas con
discinesia ciliar primaria y en otras afecciones pueden antibacterianos permanentemente, por ejemplo la
evitar o retrasar la aparición de bronquiectasias. fibrosis quística en pacientes colonizados o infecta-
El tratamiento temprano y adecuado del asma bron- dos por Pseudomonas; pero, en general, el uso de
quial y de la sinusitis es importante también en la profi- antibacterianos se restringe en casos de exacer-
laxis de esta afección. baciones de infecciones bacterianas que afectan las
De la afección. Médico. Está indicado en aque- lesiones. Hasta que no se tenga el estudio microbio-
llos pacientes cuya enfermedad sea mínima o lógico se puede comenzar con sulfametotaxol +
asintomática; en pacientes cuya afección es extensa y trimetropin (cotrimoxa-zol), o amoxicilina, para des-
no toleran el tratamiento quirúrgico, debido a otras afec- pués, hay mejoría, sustituir con otros antibacterianos.
ciones subyacentes graves, o cuyas lesiones sean tan En estos casos de exacerbaciones, el tratamiento se
extensas con gran destrucción del parénquima pulmonar, extenderá por 2 ó 3 semanas. Se reportan buenos
con una función disminuida y, que la cantidad de tejido resultados con la utilización de la gentamicina
pulmonar que quede después de la operación no permita nebulizada también en bronquiectasias no causadas
mantener un adecuado intercambio gaseoso. por fibrosis quística.
En aquellos niños con poco tiempo de evolución de • En casos de hemoptisis severas con anemia, esta debe
bronquiectasias cilíndricas, que siguen a algunas neu- corregirse. La cateterización y obstrucción de las arte-
monías, las dilataciones muchas veces, son reversibles rias bronquiales en el sitio afectado es una indicación
con el tiempo y con un tratamiento médico, e inclusive frente a las hemoptisis severas o repetidas.
sin él; por lo que para algunos autores no son considera- Quirúrgico. La mayoría de los niños se benefician
das verdaderas bronquiectasias. de la cirugía particularmente cuando se puede elimi-
El tratamiento se basa en: nar todo el tejido afectado.
• Fisioterapia respiratoria. Drenaje postural y fisio- Incluye resección de un lóbulo o segmento afectados
terapia de 3 a 4 veces al día, para drenar las secre- de bronquiectasias saculares o fusiformes y que se
ciones; se requiere en ocasiones de broncoscopia con mantenga suficiente tejido pulmonar con función res-
aspiraciones o lavados bronquiales. El drenaje postural piratoria adecuada, en pacientes con síntomas per-
con palmoteo o percusión dígitodigital se realizará en sistentes o intermitentes; cuando fracasa se debe
el segmento o los segmentos afectados, con una téc- controlar con antimicrobianos la infección localizada
nica similar a la de los pacientes pequeños afectados en la zona de bronquiectasias; bronquiectasias locali-
por fibrosis quística. zadas, acompañadas de atelectasias, neumonía,
En casos de hemoptisis, se suspende provisionalmente neumonitis o bronquitis recurrentes en el mismo ló-
esta parte del tratamiento. bulo; hemoptisis importantes y repetidas; cuando el
Es importante la rehabilitación respiratoria y el en- paciente no evoluciona favorablemente ante el tra-
trenamiento de los músculos inspiratorios. tamiento médico, y cuando hay un cuerpo extraño
• Eliminar las atelectasias, ya sea con fisioterapia y que no puede extraerse mediante la broncoscopía, o
drenaje postural o por medio de broncoscopías y la- un cuerpo extraño fragmentado que ocasiona lesio-
vados bronquiales, según se describió anteriormente. nes supuradas, particularmente vegetales (maní, fri-
• Tratamiento adecuado de la sinusitis, si coexiste. joles, etc.).
• Broncodilatadores si se comprueba broncoespasmo. Algunos autores plantean que la extirpación se debe
• Alimentación adecuada, tratamiento de las deficien- realizar siempre que hayan bronquiectasias, pues la
cias nutricionales, práctica de ejercicios, etc. y otros infección se pudiera extender a otras partes sanas
factores que puedan influir adversamente en la evo- del árbol bronquial; otros no consideran factible
lución del paciente. esta posibilidad, y plantean que cuando se hace

1064 Tomo III


una resección adecuada de las bronquiectasias, el de un enfermo en cada embarazo (1 en 4). El síndrome
paciente curará, y si posteriormente aparecen lesio- de Kartagener que es la forma clínica asociada a la
nes en otras zonas, es porque en la broncografía dextrocardia o situs inversus, se presenta en la mi-
preoperatoria o en la TAC de alta resolución, se tad de los pacientes por lo que su probabilidad es de
obviaron o no se pusieron de manifiesto otros bron- 1 en 8.
quios lesionados; pero se puede agregar que depen- Las alteraciones estructurales de los cilios tienen
de también del tipo de afección o enfermedad que múltiples variantes y pueden ocurrir por defectos en una
dio origen a las bronquiectasias. de las varias proteínas relacionadas con el axonema del
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
cilio, como son la dineína, la nexina, u otras. Cualquier
alteración produce la enfermedad y el defecto genético
La evolución depende de la gravedad del proceso
y de la causa que dio lugar a la aparición de puede corresponder a más de un cromosoma. El defec-
bronquiectasias. La severidad de la afección varía des- to genético que se hereda en una pareja siempre es el
de pacientes asintomáticos por tiempo más o menos lar- mismo.
go, hasta aquellos con una evolución grave, crónica y No se puede diagnosticar al portador ya que en
hasta progresiva; que fallecen por infección, hemoptisis este la estructura ciliar es normal. El hombre enfermo
grave o insuficiencia respiratoria con cor pulmonale. es estéril por lo general.
Se ha observado que muchos niños con bron- FISIOPATOLOGÍA
quiectasias, al aproximarse a la adolescencia mejoran, y
El mecanismo de depuración mucociliar es la más
a veces esta mejoría es duradera; aunque otros presen-
importante defensa mecánica de las vías aéreas. Está
tan posteriormente cuadros respiratorios frecuentes. No
constituido por dos partes: el mucus y los cilios.
obstante, si antes había indicación para tratamiento
El mucus consta de dos capas bien definidas: una
quirúrgico sin respuesta al tratamiento médico, no se debe
líquida llamada sol y la otra más espesa llamada gel que
esperar hasta la adolescencia por si mejoran.
cubre la anterior.
El pronóstico ha mejorado en los últimos años.
La principal función de los cilios es transportar a
Tanto con el tratamiento médico como con el qui- través de los movimientos ondulatorios el mucus hacia
rúrgico, se pueden obtener resultados satisfactorios. la boca. La efectividad del mecanismo de depuración
Si las bronquiectasias se diagnostican temprana- mucociliar depende del movimiento de los cilios, las ca-
mente y se indica un tratamiento médico adecuado, la racterísticas de la composición, y espesamiento del
frecuencia de resecciones quirúrgicas se reduce. mucus y la coordinación de los movimientos ciliares. Hay
La supervivencia dependerá de la extensión y ca- sustancias que modulan el movimiento ciliar como los
racterísticas de las bronquiectasias y de la asociación beta 2 adrenérgicos, acetilcolina, bradiquinina, y
con otras enfermedades causales. serotonina entre otras. El síndrome de discinesia ciliar
se debe a un defecto primario de los cilios, los cuales
Discinesia ciliar primaria son completamente inmóviles, débilmente móviles o efec-
La discinesia ciliar primaria (DCP), también cono- túan movimientos erráticos e incordinados por lo que el
cida como síndrome de los cilios inmóviles, inmovilidad mecanismo falla.
ciliar o dismotilidad ciliar es una enfermedad genética Los cilios están localizados en las superficies
caracterizada por una afección respiratoria crónica y epiteliales de las vías aéreas como son los conductos
recurrente, de comienzo temprano, asociada en el 50 % nasales, trompa de Eustaquio, mucosa de oído medio,
de los casos a dextrocardia o situs inversus. El defecto nasofaringe, tráquea y bronquios, hasta los bronquiolos.
básico de esta entidad está dado por una alteración del Los alvéolos están desprovistos de epitelio ciliado. Tam-
mecanismo de depuración mucociliar, debido bién existen células ciliadas en la capa ependimal del
específicamente a una alteración primaria de los cilios cerebro, canal central de la médula espinal, saco lagrimal,
que provoca disminución o ausencia de su movimiento partes del cuello uterino, trompa de Falopio y conductos
normal. eferentes. Además, hay células con monocilios al nivel
Genética. Este defecto autosómico y recesivo se de la glándula tiroides, córnea, coroide ocular y epitelio
presenta con una frecuencia variable de 1 x 10 000 a 1 x embrionario. La cola del espermatozoide es un cilio mo-
20 000 nacimientos. En Cuba se desconoce la frecuen- dificado.
cia. Afecta por igual a ambos sexos y no guarda rela- La densidad de células ciliadas en el epitelio respi-
ción con la edad de la madre. La unión de una pareja de ratorio varía. En las vías aéreas grandes el 80 % de las
heterocigóticos da 25 % de probabilidades del nacimiento células son ciliadas. En las vías aéreas pequeñas existe

Parte XII. Aparato respiratorio 1065


una menor proporción de células ciliadas. Cada célula ciliar y el defecto puede deberse a alteraciones de una
de las vías aéreas tiene como promedio alrededor de proteínas o varias. Todas resultan en anormal batimiento
200 cilios en su superficie, aunque en algunos lugares es o inmovilidad de los cilios con el consiguiente defectuo-
menor su número. so aclaramiento mucociliar. Esto implica retención de
El cilio tiene en su estructura una parte basal don- mucus, falla en el aclaramiento de organismos patógenos
de se fija a la célula, un tronco y una corona o vértice, seguido de infecciones respiratorias con la consiguiente
que es una estructura especializada muy importante en injuria de paredes en las vías aéreas.
su relación de contacto con el mucus. Un corte trans- Afzelius ha descrito múltiples variantes de motilidad
versal del tronco demuestra que el cilio está formado anormal como son la disminución del número de cilios, el
por una membrana externa y un axonema de estructu- aumento de la frecuencia de ondulación, aumento de la
ras proteicas cilioesqueléticas (Fig. 69.2). El axonema frecuencia con pulsaciones de poca amplitud, movimien-
está formado por un anillo de 9 microtúbulos dobles tos en “tirabuzón”, ondulaciones como flagelos y otras.
(dobletes) que rodean a un par central. Los cilios de vías respiratorias y los espermatozoides
Hay 2 hileras de brazos a lo largo de cada doblete. presentan siempre la misma alteración en el mismo pa-
Estos brazos están constituidos por dineína, proteína de ciente. Hay defectos específicos y siempre este produ-
ce la misma afectación del movimiento. Los defectos en
alto peso molecular que es una ATPasa responsable del
los brazos de dineína en el 50 % de los pacientes con-
trabajo ciliar, al producir la fuerza motora para que el
vierten esta alteración en la más frecuente.
cilio oscile o bata. La dineína es la más importante pro- El epitelio embrionario, frecuentemente tiene un cilio
teína del cilio. Los microtubos centrales están unidos a por célula. En el desarrollo normal de eventos este cilio
los dobletes periféricos por otra proteína que constituye ondula y su movimiento origina que el corazón se mueva
los rayos de rueda, que le da al cilio mayor rigidez. A su a la izquierda y el hígado a la derecha del cuerpo. Cuan-
vez, cada doblete de tubos periféricos está conectado al do no hay trabajo ciliar adecuado esto no ocurre. Esto
próximo por las uniones de nexina, proteína que es res- explica según Layton la presencia de situs inversus en
ponsable del mantenimiento de la estructura del axonema el 50 % de los pacientes con DCP.
durante el deslizamiento ciliar.
CUADRO CLÍNICO
Los cilios baten u ondulan y se mueven por un
movimiento deslizante de los microtubos. Al inicio del Aunque se afectan células ciliadas en distintos ór-
ciclo de ondulación ellos se encorvan en la base y se ganos, la característica principal de la enfermedad está
mueven hacia atrás, perpendicular a la superficie. dada por las manifestaciones respiratorias.
Subsecuentemente se deslizan como si rotaran en un El síndrome de dificultad respiratoria del RN, pue-
movimiento hacia delante. Estos movimientos de incli- de ser la primera manifestación. Las manifestaciones
respiratorias pueden comenzar a presentarse en la pri-
nación y rotación en sentido del reloj, rotaciones
mera infancia y están dadas por cuadros recurrentes de
tridimensionales, son posibles por la hidrólisis del
fiebre, tos, secreción nasal y manifestaciones bajas. Son
adenosintrifosfato y los brazos de dineina con liberación
frecuentes historia clínica de otitis media crónica en los
de energía. Cuando se visualizan por microscopia elec-
senos etmoidales y maxilares. La alteración de la activi-
trónica, los cilios de vías aéreas se ven con actividad
dad de depuración mucociliar en el oído medio, trompa
coordinada regional y ocurren las ondas del movimiento de Eustaquio y senos favorecen estas manifestaciones
ciliar. La frecuencia de esta ondulación o “batido” esde y agravan su evolución. Se puede presentar disminución
1-20 Hz con las más grandes ondulaciones en las vías de la audición y pólipos nasales. Las manifestaciones
aéreas mayores y se coordina con la velocidad del mucus. bajas debido a la afectación mucociliar favorecen la
En 1975, Afzelius et al reconocieron que una deficien- aparición de cuadros de bronquitis crónica, neumonías
cia en el brazo de dineína del espermatozoide de un pa- recurrentes y atelectasias, con mayor afectación en el
ciente con Síndrome de Kartagener es el causante de su pulmón derecho. La enfermedad progresa con pérdida
inmovilidad. En 1976, Pendersen describe ausencia de de peso, disminución de la tolerancia al ejercicio y la
brazos de dineína en el axonema de cilios de mucosa presencia de bronquiectasias.
nasal en pacientes con Kartagener. Posteriormente, En 1901, Oeri describió por primera vez, la asocia-
Afzelius describe en otro paciente con Síndrome de ción de situs inversus con bronquiectasias. En 1933,
Kartagener que los cilios se mueven, pero anormalmente. Kartagener describió el síndrome que lleva su nombre
Defectos de los brazos de dineína, microtubos, rayos de en 4 varones con la tríada clásica de situs inversus,
rueda y proteínas de brazos centrales se describen en la sinusitis, y bronquiectasias. Las bronquiectasias no están
figura 69.2. Hay más de 200 polipéptidos en la estructura presentes al nacimiento, pero aparecen posteriormente,

1066 Tomo III


después de infecciones bajas a repetición. Entre los 10 y hasta que el paciente siente su gusto. El tiempo debe ser
18 años, la mitad de los pacientes las presentan, cilíndri- inferior a 30 min. En la DCP el tiempo sobrepasa los
cas o saculares y aparecen en ambos pulmones. La tos 60 min. Puede haber falsos negativos y en los niños me-
crónica con expectoración mucosa o mucopurulenta es nores de 10 años es poco probable que la prueba sea
frecuente en niños mayores. Se observa abundancia de confiable.
secreciones purulentas matutinas. La presencia de fie- Hay una buena correlación entre el movimiento
bre, el aumento de la tos y las secreciones manifiestan ciliar y la movilidad del espermatozoide, por lo que se
las exacerbaciones de la infección respiratoria. Son fre- puede realizar el examen de este último. No obstante,
cuentes la obstrucción bronquial con tórax hiperinsuflado pueden existir otras causas de inmovilidad del esperma-
y las sibilancias. Aparece disnea de esfuerzo con fun- tozoide ajenas a esta entidad. Por esta razón y sobre
ción pulmonar disminuida. Hay presencia de “dedos en todo en niños, la observación directa de la inmovilidad o
palillo de tambor” y “uñas en vidrio de reloj” en el 20 % la motilidad alterada de los cilios es la mejor alternativa
de los enfermos. Se presenta cianosis en casos severos, diagnóstica. Puede realizarse la medición de la frecuen-
con insuficiencia respiratoria crónica. El situs inversus cia del latido ciliar por estudios fotométricos de células
se presenta solo en el 50 % de los pacientes. En otros,
de la mucosa nasal obtenido por cepillado. En sujetos
puede aparecer más raramente dextrocardia aislada o
normales la frecuencia está entre 9 y 14 Hz. En pacien-
transposición de los grandes vasos. La evolución de la
enfermedad es variable, desde los pacientes con sínto- tes con DCP está disminuido o ausente. El análisis del
mas en la etapa del RN hasta aquellos que llegan a la movimiento ciliar se puede realizar con equipos
adolescencia y adultez con pocos síntomas, o, por el con- sofisticados y costosos como cinematografía de alta ve-
trario, con insuficiencia respiratoria crónica. Otros pre- locidad o sistema de vídeo con cámara lenta y parada
sentan aumento de síntomas nasales en la adolescencia con grabación continua y visualización en monitor.
para posteriormente mejorar. Anormalidades corneales Pueden ser utilizados estroboscopios acoplados y
están presentes en 9 de cada 10 pacientes. Puede ocu- espectroscopios de rayos láser. Con ellos, se determina
rrir retinitis pigmentaria o degeneración de la retina. la frecuencia, la coordinación y la amplitud del
Puede aparecer anosmia, cefalea “sorda” no relaciona- batimiento ciliar.
da con sinusitis, depresión, mayor riesgo de hidrocefalia La radiografía de tórax puede mostrar la presencia
y mayor frecuencia de esquizofrenia. Puede haber de tórax hiperinsuflado por atrapamiento de aire, así como
hidrocele con elevada frecuencia, infertilidad en casi to- la posible presencia de bronquiectasias, las cuales se
dos los hombres y embarazo ectópico con mayor fre- confirman con la tomografia axial computarizada y la
cuencia que en mujeres sanas. broncografia. La radiología de senos perinasales pone
DIAGNÓSTICO de manifiesto la ausencia o hipoplasia de senos fronta-
Además de la presencia del cuadro clínico, sobre les, la sinusitis y células mastoides pobremente aereadas.
todo cuando se presenta el síndrome de Kartagener, Las pruebas funcionales respiratorias van a estar
deben realizarse una serie de investigaciones. alteradas con presencia o predominio de un componente
Existen algunas exploraciones que sirven para va- obstructivo.
lorar la función mucociliar como son la técnica de Karja, El diagnóstico se confirma con microscopia elec-
la prueba de sacarina y la técnica del carbón vegetal trónica y se determinan los defectos estructurales del
descrita por Passali. cilio y de la cola del espermatozoide ya señaladas pre-
El aclaramiento nasal ciliar por la técnica de Karja viamente.
consiste en colocar una gota de albúmina humana mar-
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
cada con tecnecio 99 radiactivo en el cornete inferior.
El diagnóstico diferencial se debe realizar con un
Con una gammacámara asociada a computadora se
monitorea el movimiento cada 10 s por 10 min hasta la grupo de enfermedades caracterizadas por manifesta-
llegada de la sustancia a la nasofaringe. El resultado se ciones respiratorias a repetición o neumopatías crónicas
mide en milímetros por minutos y el valor normal es de 6 asociadas a sinusitis.
a10 mm/min. La DCP tiene muchas cosas en común con la
La medida del aclaramiento ciliar por el método fibrosis quística (FQ), como la infertilidad en el hombre.
anterior es costosa por lo que se puede realizar la prue- La FQ tiene peor pronóstico en general y los electrólitos
ba de sacarina. Se coloca una partícula de sacarina de- en el sudor, los estudios genéticos y antecedentes fami-
trás del cornete inferior y se mide el tiempo transcurrido liares, pueden ayudar a diferenciarlos.

Parte XII. Aparato respiratorio 1067


El síndrome de Young con azoospermia obstructiva El uso de otros productos como los mucolíticos tie-
e infecciones sinopulmonares crónicas es otra posibili- ne poco valor con resultados inciertos.
dad que se puede descartar. Su evolución es, en general, El paciente debe tener una vida activa y debe ser
más benigna y la tendencia es a mejorar en la medida controlado periódicamente.
que el paciente crece.
Pacientes asmáticos con cuadros recurrentes de
Bronquiolitis obliterante
Descrita por Lange en 1902, en dos pacientes que
sinusitis e infecciones respiratorias bajas pueden ser
inhalaron dióxido de nitrógeno, la bronquiolitis obliterante
objeto de un diagnóstico diferencial con esta entidad.
(BO) es un proceso caracterizado por inflamación y
La presencia de dextrocardia o situs inversus ocu-
fibrosis que ocurre predominantemente en las paredes y
rre en el 50 % de los pacientes con DCP pero a su vez el
tejidos contiguos a los bronquiolos respiratorios y que
50 % de las dextrocardias y situs inversus son aisladas
tienen como resultante el estrechamiento de su luz. Es
y no están relacionadas con la discinesia ciliar. En el
una entidad que se observa en niños mayores de 6 me-
caso de una de estas entidades aisladas asociadas al
ses y es más frecuente en algunas poblaciones, sobre
asma, el diagnóstico se hace muy difícil.
todo en regiones asiáticas y Nueva Zelandia.
Pacientes con inmunodeficiencia en quienes las
infecciones sinobronquiales y las otitis son frecuentes, al CAUSA

igual que las neumonías, también plantean el diagnóstico La BO se presenta como una rara complicación
diferencial. de infecciones respiratorias agudas producidas por
En general todo paciente que presente bronquiec- adenovirus, virus sincicial respiratorio, influenza A y sa-
tasias asociadas a infecciones respiratorias a repetición rampión. Otros gérmenes involucrados son el
deben ser estudiados para buscar su causa, pues al- Mycoplasma pneumoniae y el Haemophylus
gunas infecciones pueden corresponder a pacientes pertussis. Los adenovirus se consideran como la causa
con DCP. infecciosa más importante sobre todo los tipos 7 y 21.
También se puede presentar consecutivamente a
TRATAMIENTO
la inhalación de diversas sustancias tóxicas como dióxido
El tratamiento de estos pacientes es sintomático. de nitrógeno, dióxido de sulfuro, ácido hidroclórico y áci-
La fisioterapia respiratoria y el drenaje postural mejoran do nítrico.
el drenaje del mucus y disminuye la posibilidad de infec- La ingestión de drogas como la penicilamina y la
ciones. nitrofurantoína aparecen como causa de BO. En el su-
Los antibióticos se deben usar siempre en la pre- deste asiático la ingestión de un vegetal, el Sauropus
sencia de infección manifiesta demostrada, cuando hay androgynour la provoca.
sinusitis, otitis o infección respiratoria baja de causa Esta enfermedad puede aparecer en pacientes con
bacteriana. Los antibióticos orales tienen efectividad en enfermedades del mesénquima como la artritis
la mayoría de los pacientes. reumatoidea y el lupus eritematoso sistémico.
En pacientes con obstrucción bronquial e hiperreac- Después del advenimiento de los trasplantes, la
tividad bronquial manifiesta, el uso de broncodilatadores causa más frecuente de BO han pasado a ser los tras-
beta 2 adrenérgicos tiene efectividad, y produce mejoría plantes de corazón- pulmón y el de pulmón. Se reporta,
del cuadro obstructivo. al menos, que el 30 % de estos pacientes trasplantados
Se deben realizar preventivamente las inmuniza- presentan BO en los dos primeros años posteriores a la
ciones contra tos ferina, sarampión, H. influenzae tipo b, intervención. El trasplante de médula también es una
neumococo y virus de la influenza. Además se debe evi- causa de BO. La presencia de infección por
tar la contaminación ambiental con el humo de cigarro u citomegalovirus en los trasplantados aumenta la frecuen-
otros irritantes de las vías aéreas, pues esto es muy im-
cia de la entidad.
portante.
En algunos pacientes no se puede determinar el
La cirugía de sinusitis crónica, otitis y pólipos nasales
puede mejorar a algunos pacientes, aunque se debe ser origen de la enfermedad.
conservador. El tratamiento quirúrgico de las FISIOPATOLOGÍA
bronquiectasias, también debe ser considerado, en algu- Algunas células y sus productos están involucrados
nos pacientes, con una valoración adecuada sobre todo en la aparición de BO. En muestras obtenidas de lavado
cuando son localizadas. bronquial se encuentra un incremento del número de

1068 Tomo III


neutrófilos. Las proteasas y las especies reactivas de respiratoria, tiraje, tórax hiperinsuflado con atrapamiento
oxígeno secretadas por estas células son capaces de de aire y estertores roncos y sibilantes, en ocasiones
causar daño importante de los tejidos. También el óxido crepitantes y subcrepitantes.
nítrico producido por los neutrófilos y otras células, me- Otras veces, llama la atención en el paciente la
dia en el daño hístico, y esto favorece la inflamación sibilancia mantenida y la tos crónica persistente con el
progresiva, fibropoliferación con cambios en la morfolo- desarrollo de un cuadro obstructivo bronquial que res-
gía de los fibroblastos y estimulación de su actividad. El ponde pobremente a los broncodilatadores.
factor de crecimiento derivado de las plaquetas también En ocasiones, los cuadros clínico y radiológico
participa en la generación de la BO, al igual que otras mantenidos presentan exacerbaciones con episodios de
células y citoquinas. neumonías, sibilancias y atelectasias; estas últimas son
El daño del epitelio respiratorio induce la prolifera- más frecuentes en el lóbulo superior derecho en lactantes
ción de células mesenquimatosas, produciéndose cica- y en el lóbulo inferior izquierdo en niños mayores.
trices colágenas densas en vías aéreas pequeñas. La enfermedad puede afectar un solo pulmón (pul-
Hay dos tipos de bronquiolítis obliterante identifi- món hiperlúcido unilateral o síndrome de Swyer James),
cadas: la BO proliferativa y la BO constrictiva. con bronquiolitis obliterante de un pulmón asociada a
En la primera la injuria hística de vías aéreas pe- hipoplasia arterial pulmonar del mismo lado, y el proceso
queñas y bronquiolos y la reparación posterior de los se desarrolla después de una infección respiratoria agu-
tejidos lleva a la producción de tejido de granulación y da viral, que da manifestaciones de una obstrucción bron-
exudados con presencia de masas polipoideas que pro- quial unilateral.
ducen fibrosis y obstrucción en las vías aéreas. La presencia de hiperreactividad bronquial en un
En la BO constrictiva los bronquiolos están estre- paciente transplantado sugiere la posibilidad del inicio de
chados o estenosados por fibrosis circular peribronquial una bronquiolitis obliterante.
mural o subepitelial y a veces se produce oclusión com- Posteriormente el paciente puede evolucionar ha-
pleta. Hay obstrucción de las vías aéreas con cicatriza- cia una insuficiencia respiratoria crónica. En algunos
ción concéntrica sin presencia de tapones, pólipos o tejido casos, hay un deterioro rápido y la muerte se produce en
de granulación. El proceso de cicatrización que conduce pocas semanas. En otras, el paciente sobrevive con
a bronquiolitis constrictiva es una condición irreversible.
hipoxia, presencia de dedos en “palillo de tambor” y “uñas
El estrechamiento proximal del bronquiolo está caracte-
en vidrio de reloj”, aparición de bronquiectasias y otras
rizado por defecto obstructivo y el estrechamiento distal
complicaciones propias de una enfermedad pulmonar
produce defecto restrictivo. En la BO hay predominio
crónica. Sly señala que al menos el 50 % de los niños
del estrechamiento proximal.
que presentan neumonías por adenovirus tipo 7 tienen
El estudio por biopsia transbronquial muestra hi-
evidencia de obstrucción bronquial 12 años después.
pertrofia y elevación del epitelio bronquial, infiltración
celular de la pared con destrucción y desorganización EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
del músculo y tejido elástico y fibrosis. El mayor daño se El estudio radiológico simple de tórax muestra
produce en pequeños bronquios y bronquiolos. La mu- atrapamiento de aire e hiperinsuflación pulmonar,
cosa está destruida y los vasos estrechados, con áreas atelectasias y neumonías. El derrame pleural se presen-
de distensión, atelectasias y fibrosis. ta raramente. La TAC confirma estas alteraciones y
CUADRO CLÍNICO además, muestra las dilataciones bronquiales y el engro-
La afección se presenta en un niño con historia de samiento de la pared bronquial. En la broncografía se
infección respiratoria aguda previa, antecedentes de as- observa una imagen típica de “árbol podado” y presen-
piración de sustancias tóxicas o ingestión de ciertos cia de bronquiectasias.
medicamentos, con una enfermedad del mesénquima, En el síndrome de Swyer James, se observan las
antecedentes de transplante u otros procesos imágenes unilaterales y la angiografía muestra la
involucrados en su causa. Algunos autores señalan que hipoplasia de la rama pulmonar afectada. Deben reali-
el reflujo gastroesofágico es un factor predisponente. zarse las investigaciones necesarias de acuerdo con la
En el caso de infección aguda previa, casi siempre causa sospechada. La IgE elevada es un signo de mal
viral, como una bronquiolitis aguda, el niño, a diferencia pronóstico según algunos autores.
de otros cuyo proceso mejora en pocos días, presenta
un cuadro mantenido y persistente que se prolonga, o TRATAMIENTO
después de una mejoría comienza de nuevo a intensifi- No existe tratamiento específico en la mayoría de
carse la sintomatología con polipnea, dificultad los pacientes. Estos deben tratarse de acuerdo con la

Parte XII. Aparato respiratorio 1069


posible causa. En receptores de transplantes algunos Cruz M, Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Bronquiectasias,
agentes inmunosupresores tienen más eficacia que otros en Manuel Cruz Hernández. Tratado de Pediatría 8ª
para prevenir el proceso. ed.,Pp.1286-8, Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001.
Twiss J, Byrnes C, Johnson R, Holland D. Nebulized gentamicin-
Los esteroides constituyen el único medicamento suitable for chilhood bronchiectasis. Int J Pharm 2005; 295(1-
que puede mejorar el cuadro clínico, aunque los criterios 2):113-9.
son contradictorios. Algunos reportan mejoría clínica Newal C, Stockley RA, Hill SL. Exercise training and inspiratory
evidente y otros no. Se deben usar por tiempo prolon- muscle training in patients with bronchiectasis Thorax
gado. 2005;60:943-8.
Otgun I, Karnak I Tanyel FC, Senocak ME, Buyupamukicu N.
Bibliografía Surgical treatment of bronchiectasis in children.Pediatr Surg
2004;39(10):1532-6.
Bronquitis crónica Chang AB, Masel JP, Boyce NC, Wheaton G, Tornillo PJ. Non-
Donner CF. Infectious exacerbation of chronic bronchitis. CF bronchiectasis: clinical and HRCT evaluation. Pediatr
ORIONE Board. Monaldi Arch Chest Dis 1999;54(1): 43-8. Pulmonol 2003;35(6):477-83.
Eller J, Ede A, Schaberg T, Niederman MS, Mauch H, Lode H. Callahan CW, Redding GJ. Bronchiectasis in children:orpahn
Infective exacerbations of chronic bronchitis: relation between disease or persistent problem? Pediatr Pulmonol
bacteriologic etiology and lung function. Chest 1998;113(6): 2002;33(6):492-6.
1542-8
Grossman RF.Management of acute exacerbation of chronic Discinesia ciliar primaria
bronchitis Can Resp J 1999;6 Suppl A:40A–5ª. Afzelius B, Mosberg B and Stein E: “Immotile cilia Syndrome”.
Heath JM, Mongia R. Chronic bronchitis: primary care Page: 4817-67. In: Scriver Ch et al. The metabolic and
molecular bases of inherited disease. 8th Ed, Mc Graw Hill,
management.Am Fam Physician 1998;57(10): 2365-72,
New York, London. 2001.
2376-8.
Domingo C, Mirapeix R, Encabo B and Roig J: “Clínica y
Stern RC. Chronic Bronchitis. In Behrman RE, Kliegman RM,
ultraestructura de la discinesia ciliar primaria y el Síndrome de
Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of Pediatrics 17h Young”. Rev Clin Esp, Madrid, 1997; 197(2):100-3.
ed. Philadelphia: W B Saunders Company; 1996. p.1210-11. Eastman K, Fall A, Mitchell L and Spencer D: “The need to
Schwartz J. Air pollution and children’ s health. Pediatrics redefine non cystic fibrosis bronchiectasis in childhood”.
2004Apr;113(4Suppl):1037-43 Torax, 2004, 59: 324-7.
Crespo M, Tardio E. Bronquitis. Bronquitis Crónica. Bronquitis Haddad G: “Primary ciliary dyskinesia”. Page: 1450-1. In:
Recurrente, en Manuel Cruz Hernández, Tratado de Pediatría 8ª Berhman, Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of
ed. Pp 1228-1230. Ediciones Eergon S.A.Madrid, 2001 Pediatrics.17th Ed. Saunders Co, Philadelphia, 2003.
Teig N, Anders A, Schmidt C, Rieger C, Gatermann S. Hellinck J, Demedts M and De Boeck K: “Primary ciliary
Chlamydophila pneumoniae and Mycoplasma pneumoniae in dyskinesia: evolution of pulmonary function”. Europ J
respiratory specimens of children with chronic lung diseases. Pediatr, Berlin, 1998; 157: 422-6.
Thorax 2005,60:962-66. Jorinssen M, Bertram B and Eloy PH: “Ciliary dyskinesia in the
Schmidt SM, Muller CE, Gurtler L, Bruns R, Ballke EH, nose and paranasal sinus”. Acta OtoRhino-Laringol Belg
Wiersbitzky SK, Chlamydophila pneumoniae respiratory Broxelles, 1997; 51: 353-66.
tract infection aggravates therapy refractory bronchitis or Jorissen M: “Correlations among mucociliary transport, ciliary
pneumonia in childhood. Klin Padiatr.2005 217(1):9-14. function and ciliary structure”. Am J Rhinol, 1998; 12(1): 53-8.
Kawakami M, Hattori Y and Nakamura S: “Reflection of
Raxhinskii SV, Volkov IK. Chronic bronchitis in children Probl
structural abnormality in the axonema of respiratory cilia in
Tuberk Bolezn Legk. 2004;(1):36-9.
the clinical features of immotile cilia syndrome”. Intern Med,
Bronquiectasias Tokyo, 1996; 35(8): 617-23.
Armengot M, Juan G, Carda C, Basterra J, Cano B. The Loukides S, Kharitonov S, Wodehouse S, Cole S et al: “Effect of
prevalence of primary dyskinetic ciliary syndrome in arginine on mucociliary function in primary dyskinesia”.
patients with sinusitis and bronchiectasis. An Lancet, London, 1998; 352: 371-2.
Otorrinolaringol Ibero Am 1995;22(1):85-92. Montaner A, Carceller M, Carda Batalla C, Sanchez Medina C et
Ceruti E. Bronquiectasias. En Meneghello RJ, Fant NE, Paris ME, al: “Protocolo diagnóstico del Síndrome de la diskinesia ciliar
Puga TF. Pediatría Meneghello, 5ta ed. Buenos Aires: primaria en la infancia”. Ann Esp Pediatr, Madrid; 1994; 40: 122-6.
Editorial Médica Pan-Americana;1997. p.1332-6. Noone PG, Leigh NW, Sannuti A, Minnix ST, Carson J, Hazucha
Fasheh WY, Rychen GE. The middle lobe syndrome in pediatrics. M et al: “Primary ciliary dyskinesia: Diagnosis and
A study of 27 cases. An Esp Pediatr 1998;49(6):582-6. phenotipic features”. Am J Respir Crit Care Med, 2004, 169:
Kendig E Jr, Chernick V. Bronchiectasis. In disorders of the 459-67.
respiratoriy tract in children 7th.ed.Philadelphia: W. B
Phelan PD, Landau L and Olinsky A: Respiratory Illnesses in
Saunders Company; 2006. p. 446-69.
Levine M, Mascia A. Bronquiectasias. En Enfermedades y children, Page: 180-6; 3rd Ed, Page: 180-6, Blackwell
anomalías pulmonares en la infancia y la niñez. Buenos Scientific, London, 1990.
Aires:Editorial Beta S. R. L.; 1968. p. 217-221. Pizzi S, Cazzato S, Bernardi F, Mantovani W and Cenochi G:
Stern RL. Bronchiectasis. In Beharman RE, Kliegman RM, Arvin “Clinical pathological evaluation of ciliary dyskinesia:
AM, Nelson WE. Nelsson Texbook of Pediatrics 17th ed. diagnostic role of electronic microscopy ultra structure”.
Philadelphia:W. B. Saunders Company;2003. p.1232-3. Pathol, 2003, 27: 243-52.

1070 Tomo III


Rivas D and Roig J: “Diskinesia ciliar primaria”. Med Clin, En las partes declives hay edema y aumento de la
Barcelona, 1991; 97:144-6. permeabilidad de los componentes que constituyen la
Rossman C and Newhouse M: “Primary ciliary dyskinesia:
barrera alveolocapilar, favoreciendo la instauración de
evaluation and management”. Pediatr Pulmonol, Philadelphia,
1988; 5: 36-50. la neumonía.
Sleigh M, Blake J and Liron N: “The propulsion of mucus by Los síntomas no son característicos, y al examen
cilia”. A m Rev Respir Dis, New York, 1998; 137: 726-41. físico se puede encontrar en la zona de declive del tórax:
matidez a la percusión, disminución del murmullo vesicular
Bronquiolitis obliterante
Boas S: “Bronchiolitis Obliterans” Page: 1422. In: Berhman,
y estertores húmedos.
Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of Pediatrics.17th Ed. El tratamiento es fundamentalmente preventivo e
Saunders Co Philadelphia, 2003. incluye fisioterapia y cambiar frecuentemente al paciente
Bochler A and Estenne M: “Obliterative bronchiolitis after lung
transplantation”. Curr Opin Pulm Med, 2000, 6(2): 133-9.
de posición.
Costabel V, Teschler H, Schoenfeld B, Hartung W et al: “BOOP in
Europe”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl 1: 145-205. Neumonías intersticiales difusas
Covin B: “Bronchiolitis Obliterans organizing pneumonia. A Las neumonías intersticiales difusas, constituyen un
British view”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl 1: 1-5.
Hirsch J, Elssmer A, Mazur G, Maier KL et al: “Bronchiolitis grupo heterogéneo de afecciones respiratorias crónicas
Obliterans Syndrome after heart-lung transplantation”. Am y progresivas, que se caracterizan por lesiones al nivel
Respir Crit Care Med, 1999, 160(5):1640-6. del intersticio pulmonar, con cambios en la población
Kendigs-Chernick, Ed.”Disorders of the respiratory tract in celular y desorganización del tejido conectivo.
children”. Page: 366-9. 7th Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006.
King TE Jr: “Bronchiolitis”. Page: 825-47. In Fishman’ s El primer reporte de estas entidades fue realizado
Pulmonary Diseases and disorders. 3rd Ed, Mc Graw Hill, por L. Hamman y A. Rich en 1944, quienes describieron
New York, London, 1998. cuatro pacientes con evolución desfavorable que pre-
Kitaichi M: “Differential diagnosis of Bronchiolitis Obliterans
organizing pneumonia”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl
sentaban procesos respiratorios crónicos, con lesiones
1: 445-95. intersticiales pulmonares que producían cicatrices ex-
Schlesinger CS, Veeraraghavan S and Koss MN: “Constrictive tensas. Los autores no señalaron ningún agente
(Obliterative) Bronchiolitis”. Curr Opin Pulm Med, 1998, etiológico.
4(5): 288-93.
Stanbrook M and Kesten S: “Bronchial reactivity after lung
J.G. Scadding en 1967, señaló el término de
transplantation predicts early bronchiolitis obliterans”. Am alveolitis fibrosante mural, cuando el proceso se carac-
Respir Crit Care Med, 1999, 160(6):2034-9. terizaba por el engrosamiento de los tabiques alveolares
Wang JV, Chen KY, Chang YC, Chang YL et al: “Swyer James con células mononucleares en el intersticio, y el término
Syndrome complicated by lung abscess”. J Formos Med
Assoc, Hong Kong, 2000; 99(3): 252-6.
de alveolitis fibrosante descamativa, si habían células
descamativas en el interior de los alvéolos.
Se ha utilizado una amplia variedad de términos para
describir las enfermedades intersticiales difusas asocia-
das a fibrosis, entre ellos, el Síndrome de Hamman Rich.
. Capítulo 80 .
Clasificación
En 1968 A.A. Liebow clasificó este grupo de enti-
Otras enfermedades dades, en cinco variedades, de acuerdo con los compo-
que afectan principalmente nentes alveolares predominantes y las estructuras
afectadas:
los pulmones • La neumonía intersticial clásica o usual (UIP), ca-
Roberto Razón Behar racterizada por una afección alveolar difusa con
necrosis de las células de revestimiento alveolar, exu-
Neumonía hipostática dado y líquido dentro del alvéolo con formación de
La neumonía hipostática se presenta en pacien- membrana hialina, permaneciendo la membrana basal
tes que mantienen un decúbito prolongado en la misma intacta; y proliferación de neumocitos II.
posición. El tejido hiperplásico intersticial está infiltrado con
Puede aparecer en el posoperatorio; después de células mononucleares.
una congestión pulmonar pasiva prolongada; en enfer- El daño celular del epitelio alveolar y la expresión
medades donde exista una parálisis o debilidad alterada de los fibroblastos son elementos clave. Al-
neuromuscular respiratoria como en el síndrome de gunos mediadores solubles, secretados por las célu-
Guillian-Barré, en la polimiositis y la dermatomiositis; y las circundantes, estimulan la actividad de los
en otras enfermedades donde exista inmovilidad. fibroblastos (Fig. 80.1).

Parte XII. Aparato respiratorio 1071


Rivas D and Roig J: “Diskinesia ciliar primaria”. Med Clin, En las partes declives hay edema y aumento de la
Barcelona, 1991; 97:144-6. permeabilidad de los componentes que constituyen la
Rossman C and Newhouse M: “Primary ciliary dyskinesia:
barrera alveolocapilar, favoreciendo la instauración de
evaluation and management”. Pediatr Pulmonol, Philadelphia,
1988; 5: 36-50. la neumonía.
Sleigh M, Blake J and Liron N: “The propulsion of mucus by Los síntomas no son característicos, y al examen
cilia”. A m Rev Respir Dis, New York, 1998; 137: 726-41. físico se puede encontrar en la zona de declive del tórax:
matidez a la percusión, disminución del murmullo vesicular
Bronquiolitis obliterante
Boas S: “Bronchiolitis Obliterans” Page: 1422. In: Berhman,
y estertores húmedos.
Kliegman and Jenson. Nelson Textbook of Pediatrics.17th Ed. El tratamiento es fundamentalmente preventivo e
Saunders Co Philadelphia, 2003. incluye fisioterapia y cambiar frecuentemente al paciente
Bochler A and Estenne M: “Obliterative bronchiolitis after lung
transplantation”. Curr Opin Pulm Med, 2000, 6(2): 133-9.
de posición.
Costabel V, Teschler H, Schoenfeld B, Hartung W et al: “BOOP in
Europe”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl 1: 145-205. Neumonías intersticiales difusas
Covin B: “Bronchiolitis Obliterans organizing pneumonia. A Las neumonías intersticiales difusas, constituyen un
British view”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl 1: 1-5.
Hirsch J, Elssmer A, Mazur G, Maier KL et al: “Bronchiolitis grupo heterogéneo de afecciones respiratorias crónicas
Obliterans Syndrome after heart-lung transplantation”. Am y progresivas, que se caracterizan por lesiones al nivel
Respir Crit Care Med, 1999, 160(5):1640-6. del intersticio pulmonar, con cambios en la población
Kendigs-Chernick, Ed.”Disorders of the respiratory tract in celular y desorganización del tejido conectivo.
children”. Page: 366-9. 7th Ed, WB Saunders, Philadelphia, 2006.
King TE Jr: “Bronchiolitis”. Page: 825-47. In Fishman’ s El primer reporte de estas entidades fue realizado
Pulmonary Diseases and disorders. 3rd Ed, Mc Graw Hill, por L. Hamman y A. Rich en 1944, quienes describieron
New York, London, 1998. cuatro pacientes con evolución desfavorable que pre-
Kitaichi M: “Differential diagnosis of Bronchiolitis Obliterans
organizing pneumonia”. Chest, Park Ridge, 1992, 102: Suppl
sentaban procesos respiratorios crónicos, con lesiones
1: 445-95. intersticiales pulmonares que producían cicatrices ex-
Schlesinger CS, Veeraraghavan S and Koss MN: “Constrictive tensas. Los autores no señalaron ningún agente
(Obliterative) Bronchiolitis”. Curr Opin Pulm Med, 1998, etiológico.
4(5): 288-93.
Stanbrook M and Kesten S: “Bronchial reactivity after lung
J.G. Scadding en 1967, señaló el término de
transplantation predicts early bronchiolitis obliterans”. Am alveolitis fibrosante mural, cuando el proceso se carac-
Respir Crit Care Med, 1999, 160(6):2034-9. terizaba por el engrosamiento de los tabiques alveolares
Wang JV, Chen KY, Chang YC, Chang YL et al: “Swyer James con células mononucleares en el intersticio, y el término
Syndrome complicated by lung abscess”. J Formos Med
Assoc, Hong Kong, 2000; 99(3): 252-6.
de alveolitis fibrosante descamativa, si habían células
descamativas en el interior de los alvéolos.
Se ha utilizado una amplia variedad de términos para
describir las enfermedades intersticiales difusas asocia-
das a fibrosis, entre ellos, el Síndrome de Hamman Rich.
. Capítulo 80 .
Clasificación
En 1968 A.A. Liebow clasificó este grupo de enti-
Otras enfermedades dades, en cinco variedades, de acuerdo con los compo-
que afectan principalmente nentes alveolares predominantes y las estructuras
afectadas:
los pulmones • La neumonía intersticial clásica o usual (UIP), ca-
Roberto Razón Behar racterizada por una afección alveolar difusa con
necrosis de las células de revestimiento alveolar, exu-
Neumonía hipostática dado y líquido dentro del alvéolo con formación de
La neumonía hipostática se presenta en pacien- membrana hialina, permaneciendo la membrana basal
tes que mantienen un decúbito prolongado en la misma intacta; y proliferación de neumocitos II.
posición. El tejido hiperplásico intersticial está infiltrado con
Puede aparecer en el posoperatorio; después de células mononucleares.
una congestión pulmonar pasiva prolongada; en enfer- El daño celular del epitelio alveolar y la expresión
medades donde exista una parálisis o debilidad alterada de los fibroblastos son elementos clave. Al-
neuromuscular respiratoria como en el síndrome de gunos mediadores solubles, secretados por las célu-
Guillian-Barré, en la polimiositis y la dermatomiositis; y las circundantes, estimulan la actividad de los
en otras enfermedades donde exista inmovilidad. fibroblastos (Fig. 80.1).

Parte XII. Aparato respiratorio 1071


puede, en ocasiones, afectar bronquiolos terminales.
Se asocia, frecuentemente, a disgammaglobulinemias
o estados inmunodepresivos, como el SIDA.
Puede verse en otras entidades clínicas definidas (sín-
drome de Sjögren, miastenia gravis y hepatitis crónica)
• La neumonía intersticial a células gigantes, se carac-
teriza por la presencia de innumerables células gi-
gantes de forma caprichosa y muy fagocíticas
(caníbales), así como de células mononucleares en el
interior de los alvéolos.
En el espacio intersticial se observa fibrosis y un
infiltrado plasmolinfocitario.
Fig. 80.1. Modelo conceptual de la patogénesis de la fibro-
sis pulmonar idiopática.
Estos patrones histológicos representan manifesta-
ciones de daño hístico y su reparación.
La UIP es la más común de las neumonías Intersticiales Las diferentes variedades de neumonía intersticiales
idiopáticas constituyendo del 47 al 71 % de los casos. difusas no se consideran entidades separadas, sino
• La bronquiolitis obliterante (BO), con daño alveolar que constituyen etapas de un mismo proceso, aun-
difuso. Se encuentran las mismas alteraciones que que también se ha señalado que esta clasificación
en la forma clásica. Además existe daño en los representa un agrupamiento de lesiones, pero no está
bronquiolos con formación de masas polipoideas y clara su interrelación.
nodulares; degranulación y exudados que se organi- La separación de la forma usual de la descamativa
zan y obliteran la luz de los conductos respiratorios. es objeto de discusión. La mayoría de los casos co-
Los alvéolos contienen fagocitos. rresponden, precisamente, a estas 2 variedades; la
En 1985 se describe la bronquiolitis obliterante con linfoidea es menos común y el tipo de células gigan-
neumonía intersticial (BOOP), como una enferme- tes representa una rara curiosidad histológica. La
dad clinicopatólogica, en la cual se presentan proce- bronquiolitis obliterante es mucho más conocida en
sos intersticiales; aunque persisten todavía algunas la actuallidad debido a la realización de biopsias
confusiones en la diferenciación histopato-lógica con pulmonares en fases tempranas de esta enfermedad.
la BO. L. Fan en 1993 propone una clasificación más simple:
La BOOP muestra una reacción organizativa con • Enfermedades intersticiales no granulomatosas.
daño pulmonar subagudo y la ausencia de − Alveolitis fibrosante criptogénica (similar a la
remodelación, lo que la separa de otros procesos UIP)
fibróticos crónicos comola UIP. En ocasiones se re- − Neumonía organizativa (similar a la BOOP)
laciona con causas específicas: infecciones por − Neumonía intersticial linfocítica.
adenovirus (3, 7 y 21), algunas drogas y artritis − Daño alveolar difuso.
reumatoidea, pero en muchas ocasiones es idiopática.
− Enfermedades granulomatosas.
• La neumonía intersticial descamativa (DIP), en la cual
− Sarcoidosis.
no existen necrosis alveolar, exudado, ni membrana
− Alveolitis alérgica extrínseca.
hialina; la característica más notable es la prolifera-
− Otras.
ción y descamación de neumocitos II dentro de los
alvéolos y engrosamiento de las paredes alveolares; EPIDEMIOLOGÍA
con menor cantidad de infiltrado intersticial de Aunque las neumonías intersticiales difusas no son
linfocitos y células plasmáticas. frecuentes, se ha observado un incremento de su inci-
En la actualidad se considera que el infiltrado alveolar dencia en los últimos años.
está constituido fundamentalmente por macrófagos. Las edades más afectadas están entre los 30 y
También se plantea que la DIP es una fase temprana 40 años. El inicio en edades jóvenes es bien conocido en
de la UIP con un mejor pronóstico y buena respues- las variedades UIP y DIP. Se señalan casos familiares,
ta al tratamiento esteroideo. tanto en niños como en adultos. La variedad linfocítica
• La neumonía intersticial linfoidea, caracterizada por es más frecuente en el sexo femenino. Se han descrito
la afectación casi exclusiva del espacio intersticial pacientes tan jóvenes como de 14 meses y tan viejos
con infiltración linfocitaria y de células plasmáticas, como de 77 años.

1072 Tomo III


CAUSA En la BO los factores desencadenantes, por lo ge-
Las neumonías difusas pueden obedecer a una neral no se identifican. En la mayor parte de los casos
causa no definida, o estar asociada a factores genéticos en niños, pueden estar relacionados con infecciones
del grupo autosómico dominante; y a enfermedades pulmonares como el sarampión, gripe, adenovirus, virus
colágenas, aunque rara vez en el niño. sincicial respiratorio, micoplasma y tos ferina.
En la fibrosis pulmonar idiopática del lactante, la La BO es una complicación frecuente del
aparición temprana de síntomas sugiere una causa transplante pulmonar.
intraútero.
DIAGNÓSTICO
Se han señalado también diferentes agentes
causales: Las neumonías intersticiales difusas se parecen en
• Polvos inorgánicos (sílice, silicatos, asbesto, carbón, su forma de presentación y en su diagnóstico. El cuadro
aluminio, berilio, metales pesados, etc.). clínico está dado por la presencia de insuficiencia respi-
• Polvos orgánicos, la mayoría de los cuales son hon- ratoria progresiva, debido a la fibrosis intersticial.
gos termófilos (Mycropolyspors faeni y El comienzo es insidioso con tos seca e irritativa, y
Thermoactinomyces vulgaris, entre los más fre- se caracteriza por la presencia de disnea, primero du-
cuentes). rante el esfuerzo, pero después incluso en reposo, que
• Polvos químicos (baquelita, cloruro de polivinilo, etc.). puede evolucionar en meses o años hacia la insuficien-
• Gases (oxígeno, cloro y óxido de nitrógeno). cia respiratoria crónica.
• Medicamentos (metrotexate, busulfan, ciclofos- En fases más avanzadas se presentan además cia-
famida, azatioprina, nitrofurantoína, difenilhidantoína, nosis, anorexia, fatiga, pérdida de peso y dolor torácico,
hidralacina, penicilina, bloqueadores beta, etc.). a veces de origen pleural. Ocurre neumotórax en el
• Radiaciones. 30 % de los casos.
• Agentes infecciosos (bacterias, micobacterias, virus, En el examen físico, encontramos taquicardia,
hongos, micoplasma, parásitos). taquipnea, cianosis, crepitantes, subcrepitantes finos lo-
• Aerosoles (grasa y aceites). calizados hacia las bases pulmonares, uñas “en vidrio de
• Otros (enfermedad renal crónica, uremia, insuficien- reloj” y dedos hipocráticos. La fiebre es inusual; pero
cia cardíaca crónica o fenómenos de rechazo cuando se presenta puede haber una infección neumónica
inmunológico). sobreañadida, la cual puede ser la forma de presenta-
ción de la enfermedad y también representar un serio
FISIOPATOLOGÍA
problema para la vida del paciente.
Las UIP y DIP son idiopáticas, aunque evidencias En el período terminal se pueden observar signos
importantes sugieren que los factores inmunológicos es- de falla cardíaca ventricular derecho.
tán envueltos, desconociéndose cuándo las reacciones Las radiografías torácicas muestran, en fases tem-
inmunes son en hipótesis primarias o secundarias a otros pranas de la enfermedad, imágenes borrosas hacia las
eventos posiblemente transitorios. Los mecanismos bases con aspecto de vidrio deslustrado. Si la lesión
inmunohumorales están implicados debido a la frecuen- avanza, se puede apreciar un patrón difuso reticular,
cia relativa de la presencia de anticuerpos antinucleares, micronodular o mixto, que se irradia desde los hilios a lo
el factor reumatoideo positivo, la evidencia clínica fre- largo de los bordes del corazón hacia las bases. En los
cuente de enfermedad vascular colágena o la asocia- niños las imágenes pueden tener una característica más
ción a enfermedades autoinmunes, la hipergammaglo- irregular. En las fases más avanzadas, se observa el
bulinemia, la presencia de inmunocomplejos circulantes patrón de “panal de abeja”.
y/o crioglobulinas séricas, y, en algunos casos, el depósi- La tomografía axial computarizada de alta resolu-
to en las paredes alveolares de material semejante ción tiene gran sensibilidad y precisión para detectar las
ultraestructuralmente a inmunoglobulinas. características y la extensión de las lesiones.
También se supone que los macrófagos alveolares El estudio de la función respiratoria ofrece un pa-
estimulados por inmunocomplejos, pueden desempeñar trón clásico restrictivo, con disminución de la capacidad
un papel, al liberar factores estimuladores de la fibrosis vital funcional, la distensibilidad y la capacidad de difusión.
como la fibronectina y el factor de crecimiento derivado Se observa con frecuencia hipoxemia, que se
de los macrófagos que estimula la producción de incrementa con el ejercicio. La PCO2 está usualmente
colágeno que conduce a la producción de granulomas y baja o normal.
fibrosis tanto al nivel intersticial como intraalveolar con Los hallazgos de laboratorio no son específicos. Más
distorsión de la estructura pulmonar. del 90 % de los pacientes tienen una eritrosedimentación

Parte XII. Aparato respiratorio 1073


elevada. A veces, se observa hipergammaglobulinemia, respuesta clínica se suspende. Si hay respuesta se con-
factor reumatoideo y anticuerpos antinucleares positi- tinúa a una dosis de 1 a 1,5 mg/kg/día durante un mes
vos, y la presencia de crioglobulinas séricas e inmuno- antes de cambiar a un régimen en días alternos durante
complejos circulantes. 2 a 2,5 años.
La gammagrafía con galio o tecnesio se utiliza para Se reporta que con la utilización del interferón
detectar los sitios de inflamación y valorar la evolución gamma-1b asociado a prednisolona en dosis bajas, se
del proceso. ha obtenido mejoría en pacientes con fibrosis pulmonar
Los estudios citológicos del líquido de los lavados idiopática, en los que no hubo respuesta anterior a los
broncoalveolares al inicio fueron muy prometedores para glucocorticoides.
el diagnóstico de las neumonías intersticiales difusas, pero En algunos reportes en adultos, se han utilizado
ahora se consideran como un método en la investiga- medicamentos inmunosupresores (ciclofosfamida y
ción, aunque no está claramente establecido su papel azatioprina) e hidroxicloroquina, y se ha comunicado efec-
clínico. tividad en algunos casos; pero los resultados no son de-
En estas afecciones, el lavado se usa para deter- finitivos.
minar la actividad inflamatoria (porcentaje de linfocitos, El transplante simple pulmonar, pudiera ser una
neutrófilos, eosinófilos y macrófagos) y la respuesta al opción en pacientes en que fallen los tratamientos
tratamiento, así como un medio de pronóstico. Los estu- médicos.
dios seriados por este método tienen cierta utilidad EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
práctica.
Las neumonías intersticiales difusas, por lo gene-
La biopsia pulmonar a “cielo abierto” o por
ral, tienen una evolución invariablemente progresiva, que
toracoscopia asistida por vídeo, es el procedimiento
está relacionada con la afectación cada vez mayor del
diagnóstico definitivo para establecer el tipo de fibrosis
y excluir otras causas de pulmón restrictivo. tejido pulmonar. La evolución es fatal y se puede exten-
der desde meses hasta 1, 2 o más años.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL El pronóstico de la UIP es pobre. El promedio de
Se debe realizar con las enfermedades colágenas, superviviencia después del diagnóstico es aproximada-
sarcoidosis y otras enfermedades granulomatosas, así mente de 3 años.
como con una serie de condiciones que pueden producir En algunos niños se observa resolución espontá-
inflamación pulmonar difusa. nea sin tratamiento, mientras que en otros progresan
TRATAMIENTO hacia la muerte a pesar de un máximo tratamiento.
Es sintomático y de soporte, con hincapié en la pre- La hipertensión pulmonar y la falla ventricular de-
vención y tratamiento de las infecciones respiratorias. recha son las alteraciones más graves que se pueden
Los corticosteroides se han utilizado con respues- observar en la evolución de estas entidades. La mayo-
tas variables e inconsistentes en la mayor parte de ría de los niños mueren por falla respiratoria, y el episo-
los casos, con mejoría sintomática aparentemente dio final está precipitado por infecciones respiratorias
ocasional. intercurrentes.
Se señala que en la variedad descamativa, el uso
de los esteroides tiene considerable beneficio y, a veces Pulmón eosinofílico
curan la enfermedad. El pulmón eosinofílico es un síndrome caracteriza-
Teniendo en cuenta la mejoría subjetiva en un gru- do por infiltrados pulmonares diseminados, anormales y
po de pacientes con neumonías intersticiales difusas, y transitorios, acompañados de eosinofilia moderada
dado que estas drogas tienen cierta efectividad, se reco- (10 al 20 %), de síntomas sistémicos ligeros o modera-
mienda un tratamiento con corticosteroides. La dos y ausencia de signos de infección.
prednisona es la droga de elección, y la dosis debe ser Comprende un grupo diverso de desórdenes que
alta y mantenida por períodos largos y disminuida lenta- se caracterizan por presentar infiltración pulmonar
mente. Un esquema recomendado es el siguiente: eosinofílica asociada a otras células inflamatorias.
prednisona 2 mg/kg de peso corporal/día, vía oral, du-
En 1932, W. Löeffler describió los primeros casos,
rante 6 a 8 semanas. Si se observa una respuesta favo-
lo cual le valió que este síndrome se conociera por su
rable, el tratamiento se prolonga durante más de 1 año, y
luego se va reduciendo la dosis de forma gradual hasta nombre. Posteriormente, se han descrito cuadros clíni-
suspenderla. Otro esquema plantea un curso inicial de cos similares con muchas variantes, que han sido agru-
prednisolona 2 mg/kg/día durante 3 meses. Si no hay pados en los términos de pulmón eosinofílico, neumonía

1074 Tomo III


eosinofílica, o infiltrados pulmonares con eosinófilos, Algunos casos del síndrome de Löeffler pueden
aunque se retiene el de síndrome de Löeffler debido a la deberse a otras causas:
familiaridad de dicha denominación para el pediatra. • Drogas y agentes químicos: nitrofurantoína, aspirina,
ácido paramino-salícilico, hidralacina, mecamilamina,
CLASIFICACIÓN
penicilina, sulfamidados, imipramina, carbamazepina,
Crofton et al., en 1952 propusieron la siguiente mefenesina, clorpropamida, elementos del humo in-
clasificación para este grupo heterogéneo de entidades. dustrial, níquel, etc.
Grupo I: eosinofilia pulmonar simple o síndrome • Inhalaciones de polvo orgánicos: esporas de hongos
Löeffler; en los casos en que la infiltración pulmonar o desechos de animales.
persiste por menos de 1 mes, con síntomas ligeros o au- • Bacterias u hongos: tuberculosis, coccidiomicosis,
sentes. blastomicosis, histoplasmosis y aspergillosis.
Grupo II: eosinofilia pulmonar prolongada: La du- • Pólenes y ácaros diversos.
ración es de 2 a 6 semanas con síntomas evidentes y,
ocasionalmente recurrentes. Se ha señalado un tipo de neumonía eosinofílica
Grupo III: eosinofilia tropical: asociada a la pre- pertusoide en lactantes pequeños, con evolución benig-
sencia de microfilarias degenerativas en los granulomas na, caracterizada por tos coqueluchoide, linfocitosis y
eosinofílicos pulmonares, con síntomas ligeros o mode- eosinofilia, causada por adenovirus tipo 2 o por la
rados, eosinofília marcada y transcurso prolongado en Chlamydia trachomatis. Los infiltrados pulmonares, en
los casos que no reciban tratamiento. estos casos, pueden persistir por períodos mayores
Grupo IV: eosinofilia pulmonar con asma, de 1 mes.
asmáticos con infiltrados pulmonares de naturaleza cam- Existen otras variedades de pulmón eosinofílico, no
comunes en la infancia, que afectan otros tejidos ade-
biante.
más de la infiltración eosinofílica pulmonar.
Grupo V: poliarteritis nodosa, por lo usual, pacien-
tes severamente enfermos con componente asmático, FISIOPATOLOGÍA
de pronóstico reservado. En términos de inmunología básica y mecanismos
Carrington et al., en 1969 utilizaron el término de de biología celular, la naturaleza del pulmón eosinofílico
neumonía eosinofílica crónica, en aquellos casos asocia- todavía no está clara, aunque se considera como reac-
dos a asma o no con larga evolución y con característi- ciones inmunoalérgicas del pulmón ante diferentes agen-
cas histológicas pulmonares uniformes. tes; el tejido intersticial es el órgano de choque, que da
Los criterios basados en la duración de la enfer- lugar a la presencia de infiltrados y al aumento de los
medad o en la presencia de asma pueden ser eosinófilos en sangre, esputo y tejido pulmonar.
transgredidos tanto en la forma crónica como en los ca- Hoy en día se conoce que los eosinófilos son célu-
sos en que se incrimine algún agente causal como dro- las efectoras citotóxicas potentes, y que la generación
de la interleuquina 5 (IL-5) y el factor estimulante de
ga o parásito.
colonias de granulocitos/macrófagos (GM-CSF) son
En muchas ocasiones, en el síndrome clásico del
importantes en el reclutamiento masivo y la activación
pulmón eosinofílico o síndrome de Löeffler, no se de- de los eosinófilos en el pulmón. La IL-5 induce a su vez
muestra ningún agente biológico específico. En esos la liberación por los eosinófilos del factor de crecimien-
casos, se han clasificado como: to vascular (VEGF), que incrementa la permeabilidad
• Enfermedad pulmonar eosinofílica idiopática vascular.
• Síndrome hipereosinofílico idiopático. Los eosinófilos y el contenido granular que liberan,
• Neumonía eosinofílica aguda. inducen los cambios inflamatorios que ocurren en la fase
• Síndrome de Löeffler. tardía de la reacción anafiláctica, así como en otras res-
puestas alérgicas, incluso el asma. También son capa-
CAUSA
ces de mediar la citotoxicidad a los helmintos.
Cuando se encuentra una causa determinada pue- Los eosinófilos participan en los procesos de repa-
de ser por parasitismo por Ascaris lumbricoides o ración, pero debido a las propiedades biológicas poten-
Toxocara canis o catis, aunque la amebiasis, trichinosis, tes de sus gránulos (proteína básica mayor y proteína
la paragonoimiasis y la infección por filaria (síndrome de catiónica eosinofílica) y de los constituyentes de la mem-
Weingarten), pueden dar un cuadro similar. Se han re- brana (leucotrieno C4, factor de activación plaquetaria
portado también el Strongyloides stercoralis, el Necator y productos de la 1-5 lipoxigenasa), contribuyen también
americanus y el Ancylostoma braziliense. al daño hístico.

Parte XII. Aparato respiratorio 1075


Las alteraciones patológicas asociadas al asma, favorablemente con fiebre alta, postración, disnea ex-
rinitis, angioedema, el síndrome eosinofílico idiopático, trema y falla respiratoria.
etc., son ocasionadas por los efectos de los productos El desarrollo de la forma clásica o síndrome de
tóxicos liberados por los gránulos eosinofílicos. Los Löeffler es autolimitado, por lo que no requiere tratamien-
eosinófilos parecen ser igualmente importantes en to. Se debe tratar de determinar la causa o agente causal
asmáticos atópicos o no, así como en otras enfermeda- desencadenante del proceso. Si se confirma o sospecha
des diversas, como la alveolitis fibrosante y la eosinofilia parasitismo intestinal, particularmente el Ascaris
pulmonar, las que están asociadas a igual o mayor ele- lumbricoides, se recomienda el tratamiento específico.
vación de los conteos eosinofílicos pulmonares, sin la Si las lesiones pulmonares son severas, o la tos o
sibilancias son significativas, el uso de corticosteroides
evidencia de asma bronquial. Ello puede reflejar la posi-
produce una resolución rápida del proceso.
bilidad que diferentes causas desencadenantes produz-
Cuando la respuesta al tratamiento es pobre o len-
can activación en diferentes localizaciones.
ta, se deben investigar factores de base, complicacio-
DIAGNÓSTICO nes, o un diagnóstico alternativo como angeítis
En la forma clásica de pulmón eosinofílico o sín- hiperreactiva, granulomatosis, o la bronquiolitis
drome de Löeffler, los síntomas son ligeros o están au- obliterante.
sentes, a pesar de la presencia de amplias lesiones
Hemosiderosis pulmonar
pulmonares; y consisten en tos a veces paroxística, fe-
Se denomina hemosiderosis pulmonar a los proce-
brícula, malestar general, sibilancias y, ocasionalmente
sos caracterizados por dépositos anormales de
estertores aislados y pleuresía. En lactantes y niños pe-
hemosiderina en los pulmones, secundarios a
queños puede observarse hepatomegalia. Todas las ma- sangramientos alveolares difusos y repetidos.
nifestaciones son transitorias y desaparecen sin Esta enfermedad no es frecuente en niños y el diag-
tratamiento en el curso de 1 mes aproximadamente. nóstico es a veces difícil y el curso clínico variable.
En las radiografías torácicas se observan lesiones
pulmonares unilaterales o bilaterales, por lo usual como Clasificación
infiltrados neumónicos homogéneos simples u ocasional- Se clasifican en primarias y secundarias:
mente como atelectasias. En pocos días, la lesión tiende a Primarias: (Las más diagnosticadas en el niño)
aclarar, pero pueden aparecer nuevas áreas afectadas. • Idiopática:
El diagnóstico se puede confirmar por el estudio − Asociada a hipersensibilidad a la leche de vaca
citológico del lavado broncoalveolar. (Síndrome de Heiner).
Existe una leucitosis moderada con eosinofilia que − Asociada a miocarditis.
varía del 10 al 50 %. − Asociada a glomerulonefritis progresiva (Síndro-
En las pruebas de función respiratoria, se observa, me de Goodpasture).
a menudo, una reducción de la capacidad vital y una − Asociada a insuficiencia pancreática.
disminución significativa del flujo espiratorio forzado en − Asociada a enfermedad celíaca.
1 s. En la mayor parte de los casos, estos valores vuel- Secundarias:
ven a la normalidad semanas o meses después de la • Asociada a estenosis mitral o con insuficiencia car-
recuperación. díaca izquierda crónica de cualquier causa.
Se debe indicar exámenes de heces fecales en • Asociada a enfermedades del colágeno (poliarteritis
busca de parasistismo intestinal, particularmente el nodosa, granulomatosis de Wegener o artritis
Ascaris lumbricoides. reumatoidea).
• Asociada a enfermedades hematológicas (púrpura
PRONÓSTICO Y TRATAMIENTO
trombocitopénica. o púrpura anafilactoide)
El pronóstico y el tratamiento varían, dependiendo
de la causa. Hemosiderosis pulmonar idiopática
En los pacientes con neumonía eosinofílica crónica Las caracteristicas principales son:
idiopática, la enfermedad es de mayor duración y seve- • Anemia
ridad que en los pacientes con síndrome de Löeffler, y • Cuadros de sangramientos pulmonares a repetición.
puede durar entre 6 semanas y 3 meses y más. Algunos • Insuficiencia respiratoria progresiva, debido a la en-
pacientes tienen remisiones espontáneas o mediante fermedad pulmonar crónica que se desarrolla.
tratamiento esteroideo; con recurrencias varios años • Sin alteraciones en otros órganos y sistemas.
después. Rara vez pueden evolucionar progresiva y des- • De causa desconocida.

1076 Tomo III


Anemia: Es típicamente microcítica e hipocrómica, cluyen dentro de la forma idiopática que es propia del
y puede preceder a las manifestaciones pulmonares, niño y rara en adultos.
en forma de anemia con hierro sérico bajo que no res- De causa desconocida. Muchos autores plan-
ponde satisfactoriamente al tratamiento y que señala tean que es una afección de tipo inmunológica, consi-
que las hemorragias se están produciendo al nivel derada como la teoría más admitida actualmente. En
pulmonar. Cuando se producen las agudizaciones algunos casos se ha demostrado la presencia de
pulmonares, la anemia se agrava, puede haber anticuerpos antimembrana basal pulmonares y de
reticulocitosis y aumento de la bilirrubina y del anticuerpos citoplasmáticos antineutrófilos. También se
urobilinógeno. La reticulocitosis recurrente es un signo han planteado mecanismos tóxicos ambientales que cau-
muy útil de episodios de sangramientos recurrentes. san defectos en la membrana basal de los capilares
También puede producirse una insuficiencia cardíaca pulmonares.
por la severidad de la anemia, unida a las manifesta- Se ha reportado grupos de niños menores de un
ciones respiratorias. año, con hemorragia pulmonar masiva y hemosiderosis,
Cuadros de sangramientos pulmonares a repe- en la ciudad de Cleveland, Ohio, y en el poblado, cerca-
tición: Al comienzo pueden ser insidiosos en forma de
no a Cleveland, de Cuyahoga, sugiriéndose que los
fatiga, palidez y ligera dificultad respiratoria, pero poste-
lactantes afectados han estado expuestos a contaminan-
riormente se transforman en cuadros de polipnea de
tes ambientales. El hongo Stacybotyrs atra ha sido im-
varios días de duración, con sensación de opresión en el
plicado en el desarrollo de la enfermedad debido a que
tórax o cuadros de disnea de esfuerzo y tos. A veces
hay dificultad para aumentar de peso. En los cua- crecen en aguas que contengan materiales basados en
dros típicos hay fiebre, polipnea, taquicardia, tiraje celulosa saturada. En las casas donde existan estos
de intensidad variable, sibilancias o estertores localiza- materiales, si contaminan las aguas, se desarrolla dicho
dos o generalizados, que junto con la leucocitosis y las hongo y sus toxinas pueden ser la causa de la hemorra-
alteraciones radiográficas, hacen pensar en una neumo- gia pulmonar. Si estas aguas se eliminan del hogar, se
nía bacteriana. evitan nuevos episodios.
En los cuadros severos, puede estar acompañada Cohen S (1998) describió una fase preaguda de 5
de insuficiencia cardíaca y, a veces, de hemoptisis. Las a 10 días antes del comienzo de la fase de hemorragia
radiografías de tórax pueden ser normales en el co- alveolar aguda, donde hay neutropenia y eosinofilia.
mienzo, pero en las crisis se puede observar desde in- Además, observó un incremento de los neutrófilos en el
filtrados mínimos y opacidades mal definidas en las lavado broncoalveolar durante la fase de recuperación, por
zonas parahiliares y las bases pulmonares, hasta una lo que plantea una nueva hipótesis en relación con el papel
afección pulmonar masiva con grandes zonas de del neutrófilo en la fisiopatología de la enfermedad.
opacificación, atrapamiento de aire y adenopatías En algunos raros casos hay una incidencia familiar
mediastínicas hiliares secundarias. La distribución puede que pudiera plantear una base genética.
ser asimétrica. Se pueden observar variaciones impor- DIAGNÓSTICO
tantes de un día para otro, con aclaramiento de las le-
El diagnóstico positivo se basará, además de en las
siones y presencia de patrones intersticiales reticulares.
manifestaciones clínicas y radiográficas, en el hallazgo
En etapas avanzadas de la enfermedad, se establecen
de macrófagos cargados de hemosiderina (siderocitos)
opacidades intersticiales gruesas. La tomografía
en el contenido gástrico o en los esputos, que no siempre
computarizada de alta resolución revela cambios
son positivos, o en el material obtenido por aspiración o
fibróticos pulmonares tempranos.
lavado broncoalveolar, durante las agudizaciones o poco
Insuficiencia respiratoria progresiva. Es de tipo
después de estas. A veces, entre las crisis, hay que re-
restrictivo, demostrada mediante pruebas funcionales
currir a la biopsia pulmonar a “cielo abierto” o mediante
respiratorias. Este cuadro conduce a la muerte. Se des-
toracoscopia asistida por vídeo, donde se encontrará,
cribe que la mitad de los pacientes con esta entidad fa-
además de los siderocitos en los alvéolos, hemorragia
llecen de 1 a 5 años de establecido totalmente el cuadro,
intraalveolar, hiperplasia epitelial y fibrosis intersticial.
por una insuficiencia respiratoria crónica o por una
hemorragía pulmonar aguda masiva. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Sin alteraciones en otros órganos y sistemas. Se realiza con las neumonías bacterianas, la tuber-
Existen hemosiderosis primarias que se acompañan de culosis intratorácica, las afecciones micóticas y diver-
alteraciones en otros órganos y sistemas, pero no se in- sas entidades broncopulmonares restrictivas.

Parte XII. Aparato respiratorio 1077


TRATAMIENTO de nuevo, de manera lenta y progresiva, estos alimen-
Depende del cuadro que se presente en esos mo- tos. El resto del tratamiento incluso los esteroides, es
mentos. En la fase de agudización, se utiliza oxígeno, igual al de la hemosiderosis pulmonar idiopática.
antibióticos y a veces es necesario transfundir glóbulos.
Además se impondrá tratamiento específico, si se pre- Hemosiderosis pulmonar primaria
senta una insuficiencia cardíaca. También se pueden em- con miocarditis
plear los esteroides, que posteriormente se mantendrán El cuadro clínico es semejante a la forma idiopática,
por 1 ó 2 años, aunque la respuesta es variable; en algu- excepto que en el electrocardiograma hay signos de in-
nos, inducen remisión y en otros, no hay resultados. Algu- tensidad variable de lesión miocárdica, y en la radiogra-
nos autores recomiendan el uso de esteroides inhalados. fía de tórax puede haber cardiomegalia. El pronóstico es
No hay un acuerdo unánime sobre el valor de la reservado y el tratamiento también es similar al de la
utilización de los inmunosupresores (azatioprina o hemosiderosis pulmonar idiopática.
ciclofosfamida), la desferroxiamina, la hidroxicloroquina
y otros. Se ha reportado efectividad con el tratamien- Hemosiderosis pulmonar primaria
to de ciclofosfamida a bajas dosis por períodos pro- con glomerulonefritis progresiva (síndrome
longados.
de Goodpasture )
Se debe tratar la insuficiencia respiratoria si se
desarrolla. Raras veces se presenta en niños. Afecta funda-
mentalmente a adolescentes y adultos jóvenes. El cua-
PRONÓSTICO dro clínico es semejante a la hemosiderosis primaria
Es posible una supervivencia prolongada. La pre- idiopática, pero con una glomerulonefritis. La mayoría
sencia de autoanticuerpos, particularmente anticuerpos de los pacientes (del 80 al 90 %), presenta hemoptisis, la
citoplasmáticos antineutrófilos, son factores de pobre cual precede al desarrollo de la glomerulonefritis entre
pronóstico. 8 y l2 meses. La hemorragia puede ser ligera o severa, y
Saeed et. al. (1999) describieron una superviven- a menudo está asociada a anemia por déficit de hierro y
cia de 5 años en el 86 % de un grupo de pacientes con conteo elevado de leucocitos.
tratamientos extensos con inmunosupresores. En el síndrome de Goodpasture aparecen
Kiper et. al. (1999) señalaron, igualmente, bene- anticuerpos antiglomerulares, que afectan tanto la mem-
ficios por largos períodos con esteroides en bajas dosis, brana basal glomerular como la alveolar. Para que estos
lo cual parece disminuir las crisis y prolongar la vida. anticuerpos afecten la membrana alveolar, es necesario
que haya un aumento en la permeabilidad de esta mem-
Hemosiderosis pulmonar primaria brana. Ello explica por qué el síndrome de Goodpasture
con hipersensibilidad a la leche de vaca se relaciona con factores que dañan la membrana basal
(síndrome de Heiner) alveolar, como son una infección viral, la exposición a
Los niños, en particular los lactantes, presentan un hidrocarburos, el humo del tabaco, o la ventilación me-
cuadro clínico semejante a la hemosiderosis pulmonar cánica con altas concentraciones de oxígeno.
La biopsia renal demuestra una glomerulonefritis
idiopática; su diagnóstico se basa de igual forma en las
proliferativa o membranosa, y depósitos de IgG en las
manifestaciones clínicas y radiográficas y en el hallazgo
membranas basales glomerulares. También se pueden
de siderocitos; pero además, presentan niveles séricos
detectar estos anticuerpos en el suero. Con frecuencia
extraordinariamente elevados de precipitinas a las pro- aparece evolutivamente una enfermedad renal progresi-
teínas de la leche de vaca, lo que sugiere una base va con hipertensión arterial, insuficiencia renal y muerte.
inmunológica del proceso. El tratamiento se basa en el empleo de plas-
A veces, se acompañan de otitis media recurrente, maféresis, corticoides e inmunosupresores, además, de
rinitis crónica, manifestaciones digestivas y detención o medidas de mantenimiento (hemodiálisis), que mejoran
retraso del crecimiento. o retrasan la evolución hacia la insuficiencia renal.
Al suspender la leche, los síntomas mejoran o desapa-
recen en la mayoría de los pacientes, pero vuelven a reapa- Hemosiderosis pulmonar primaria
recer cuando se introduce de nuevo la leche o sus derivados. con insuficiencia pancreática
El tratamiento básico consiste en suspender la le- Hetzel (1968) reportó un caso de hemosiderosis
che de vaca y sus derivados o los alimentos que los pulmonar primaria asociada a insuficiencia pancreática.
contengan durante varios años, y después reintroducir Razón et. al. (1987) describieron el caso de un paciente

1078 Tomo III


de 17 meses que falleció por un cuadro de insuficiencia teína B (gen SFTP 3). La más frecuente es la inserción de
pancreática, y en los hallazgos anatomopatológicos apa- dos pares de bases al nivel del codón 121 (121 ins 2).
recieron una hemosiderosis pulmonar y una fibrosis En pacientes homocigóticos se presenta la enfer-
pancreática. Se discute la posibilidad de una base medad y los heterocigóticos son clínicamente normales,
inmunológica del proceso. pero se puede identificar mediante las pruebas de diag-
nóstico molecular; y son de importancia en el diagnósti-
Hemosiderosis pulmonar idiopática co prenatal de la enfermedad, en particular en familias
con enfermedad celíaca que han tenido un recién nacido a término fallecido de
una falla respiratoria inexplicable.
Se ha reportado esta asociación, además de incre-
En los pulmones de estos recién nacidos con déficit
mentos de la IgA sérica y una remisión en el 50 % de los
del SP-B, las proteínas A y C del surfactante están en
casos después de la terapia inmunosupresora.
cantidades y distribución anormales y se acumulan en los
espacios alveolares; además, se presenta descamación e
Hemosiderosis pulmonar secundaria hiperplasia del epitelio alveolar y fibrosis intersticial.
Las cardiopatías (estenosis mitral) pueden causar El cuadro clínico se caracteriza por una dificultad
hemorragias intrapulmonares y, secundariamente apa- respiratoria progresiva y severa, en un recién nacido a
recer una hemosiderosis. término.
La poliarteritis nodosa, la granulomatosis de Wegener, El diagnóstico diferencial se debe realizar con otras
la artritis reumatoidea, el lupus eritematoso sistémico, y enfermedades pulmonares y cardíacas del recién naci-
otras enfermedades colágenas vasculares también pueden do, en particular el síndrome de dificultad respiratoria,
ser causa de hemosiderosis pulmonar secundaria. cardiopatías congénitas y otras.
Asimismo, las enfermedades hematológicas como Los hallazgos radiológicos se deben a la presencia
la púrpura anafilactoide de Schonlein-Henoch y la púr- del fluido alveolar, y consisten en un infiltrado fino y di-
pura trombocitopénica idiopática pueden presentar he- fuso, que se irradia desde los hilios hacia la periferia en
morragias pulmonares con hemosiderosis secundaria. forma de alas de mariposa. A veces, este infiltrado toma
un aspecto nodular ligero. En la mayor parte de los ca-
Proteinosis alveolar pulmonar sos, las lesiones son bilaterales y simétricas. En la
La proteinosis alveolar pulmonar (PAP) es una tomografía axial computarizada se puede observar el
causa de enfermedad intersticial crónica pulmonar en patrón reticulomicronodular.
los niños. Esta rara enfermedad fue descrita en 1958 El diagnóstico se confirma mediante la biopsia
por Rosen et al. en 27 pacientes. pulmonar a “cielo abierto” o por toracoscopia asistida
Clínicamente se caracteriza por disnea progresiva por video; también mediante el lavado broncoalveolar se
y tos; rápidamente, conduce a una insuficiencia respira- precisa la ausencia del SP-B.
toria; radiológicamente se manifiesta por la presencia No existe tratamiento efectivo de la enfermedad.
de infiltrados bilaterales que recuerdan el edema Solo se indican medidas de soporte con oxígeno, ventila-
pulmonar e histológicamente, por la acumulación y lle- ción asistida u oxigenación de membrana extracorpórea.
nado alveolar por un material lipoproteináceo que es La mayoría de los afectados fallecen en los prime-
positivo a la coloración de ácido peryódico-Schiff (PAS ros 6 meses de vida. Se ha considerado el transplante
positivo). pulmonar, como una opción terapéutica alternativa.
Se han descrito 2 formas clínicas de la PAP en
niños: la proteinosis alveolar congénita (PAC) y la de Proteinosis alveolar pulmonar esporádica
tipo esporádico (PAE), que es la forma clínica del adulto. La forma esporádica (forma del adulto) de la
proteinosis alveolar (PRE), es rara en niños y su causa,
Proteinosis alveolar pulmonar congénita en la forma primaria o idiopática, se desconoce. La pre-
La proteinosis alveolar congénita (PAC) se debe a un sencia de autoanticuerpos contra el factor estimulante
de colonias granulocitos/macrófagos (GM-CSF), pare-
déficit congénito de la proteína B del surfactante (SP-B), y,
ce tener un papel fundamental en la patogénesis de esta
por lo tanto, se considera una enfermedad hereditaria;
forma de proteinosis pulmonar en el adulto. Estos
clínicamente, se presenta como una falla respiratoria seve- anticuerpos neutralizantes de un isotipo de
ra y mortal en niños recién nacidos a término. La base inmunoglubulina G contra el factor de estimulación de
fisiopatológica se debe a una incapacidad para sintetizar colonias GM-CSF es lo que causa disfunción de los
cantidades adecuadas del SP-B, para su funcionamiento macrófagos alveolares, y como consecuencia, produce
normal. El cuadro genómico revela mutaciones de la pro- una disminución del aclaramiento del surfactante. El papel

Parte XII. Aparato respiratorio 1079


de estos autoanticuerpos en las formas pediátricas de la Microlitiasis alveolar pulmonar
PAP no está definido todavía. La microlitiasis alveolar pulmonar es una rara afec-
Otros autores señalan que la PAE se debe prima- ción que se caracteriza por la presencia y acúmulo de
riamente, a alteraciones en la acumulación y concentra- materias cálcicas intraalveolares.
ción de las proteínas A y D del surfactante (SP-A) y Fue descrita por primera vez por Friedrich en 1856
(SP-D) en los espacios alveolares, con niveles normales y posteriormente por Harbitz en 1918. El nombre de
de la proteína B (SP-B). microlitiasis alveolar, fue utilizado por primera vez por
En la forma secundaria de la PAE, se plantea que Puhr en 1933. Desde entonces se han reportado en la
la enfermedad es una reacción inespecífica a diversas literatura más de 300 casos.
injurias: polvos inorgánicos, productos químicos e infec- Su causa es desconocida. No ha sido posible com-
ciones, en particular en pacientes inmunodeprimidos. probar un factor genético, aunque en ocasiones se ha
Las manifestaciones clínicas son diversas y la his- observado una asociación familiar bien definida, como
toria natural es variable. El inicio puede ser brusco o en Turquía, que hasta 1993 se habían reportado
insidioso. Generalmente, los primeros síntomas son dis- 52 casos. Otros autores confirman la herencia autosó-
nea progresiva y tos, a menudo productiva, con esputos mica recesiva de la enfermedad.
espesos y amarrillentos. Además, pueden incluir fiebre, Se considera que el depósito de calcio se produce
fatiga, pérdida de peso y dolor torácico. La hemoptisis desde el nacimiento, por anormalidades enzimáticas
ocurre de manera ocasional. Los hallazgos físicos son intraalveolares o alveolares, sin que existan alteraciones
escasos y pueden consistir en estertores aislados, y en en el metabolismo del calcio y del fósforo. Posiblemente
etapas más tardías, hipocratismo digital y cianosis. el depósito de calcio en el alveólo es debido a la
Los estudios de la función pulmonar muestran pa- alcalinidad de su pared (anhidrasa carbónica anormal).
trones restrictivos. La capacidad vital está reducida en La mayor parte de los casos han sido reportados
grado variable. Los flujos son normales y la capacidad en adultos, algunos en adolescentes y unos pocos en ni-
de difusión está severamente disminuida. La gasometría ños y lactantes.
arterial por lo general muestra una hipoxemia con alcalosis No existe predominio de sexo, con excepción de
respiratoria crónica. los casos familiares, en que la proporción entre el feme-
Estas anormalidades mejoran cuando la enferme- nino y el masculino es de 2:1.
dad cura espontánea o terapéuticamente.
El diagnóstico diferencial se realiza fundamental- DIAGNÓSTICO

mente, con enfermedades cardiovasculares asociadas a Menos de la mitad de los pacientes con microlitiasis
edema pulmonar, sarcoidosis, infecciones micóticas, neu- alveolar pulmonar, son asintomáticos en el momento del
monías por Pneumocystis jirovecii, etc. diagnóstico.
La evolución de la enfermedad puede ser de pocos Con frecuencia se reconoce la enfermedad cuan-
días o meses. En lactantes y niños, son frecuentes las do se realiza una radiografía torácica por una afección
infecciones bacterianas secundarias y las infecciones por no relacionada con el proceso.
hongos. Durante mucho tiempo los pacientes suelen estar
En los casos de larga evolución, el curso fatal pue- sin síntomas, pero a medida que progresa el cúmulo de
de ser ocasionado por falla respiratoria progresiva o por sustancias cálcicas en los alvéolos presentan, principal-
superinfecciones. mente, tos seca persistente y rebelde, y después desa-
Se han utilizado diferentes métodos terapéuticos, rrollan disnea y en ocasionales hemoptisis. En algunos
de los cuales el lavado broncoalveolar repetido es el más casos, pueden ocurrir episodios repetidos de neumonías
indicado debido a los resultados satisfactorios obtenidos, o pleuresías, o presentarse neumotórax.
pues se observan mejorías espectaculares transitorias En el estadio final, estos pacientes desarrollan sín-
con aclaramiento radiológico y mejoría del intercambio tomas y signos de insuficiencia respiratoria progresiva:
gaseoso. Durante las recaídas, es necesario repetir di- cianosis, hipocratismo digital y cor pulmonale con falla
chos lavados. Con la introducción de este método, el congestiva del corazón derecho.
pronóstico ha mejorado, en particular en adultos. Los Los hallazgos radiológicos torácicos simples se consi-
niños, en general, tienen poca respuesta con la utiliza- deran diagnósticos y consisten en la presencia de
ción de este proceder. micronódulos simétricos, predominantemente en las bases
Los antibióticos deben ser indicados únicamente pulmonares, que dan la imagen de “tormenta de arena”; de
cuando se presenten infecciones bacterianas secunda- forma gradual pueden afectar el resto de los pulmones du-
rias. El uso de corticosteroides no altera la evolución rante la vida del adulto. De manera ocasional, en casos de
progresiva de la enfermedad. larga evolución, se pueden observar bulas enfisematosas.

1080 Tomo III


Las esférulas de calcio fijan el galio 69, cualidad Bibliografía
que sirve de ayuda en el diagnóstico.
Neumonía hipostática
La tomografía axial computarizada de alta resolu- Korchyns’kyi OO,Horban’ VO. The morphofunctional changes in
ción, la resonancia magnética y la gammagrafía con Tc99m, the air-blood barrier in hypostatic pneumonia. Lik Sprava
aportan patrones patognomónicos de la enfermedad. 1996;5-6: 103-6.
Rees J. Guillian-Barre syndrome. Clinical manifestations and
El diagnóstico se confirma mediante el lavado directions for treatment. Drugs 1995;49(6): 912-920.
broncoalveolar y la biopsia pulmonar transbronquial, a Schwarz MI. Pulmonary and cardiac manifestations of
cielo abierto o por toracoscopia asistida por vídeo. En el polymiositis-dermatomiositis. J Thorac Imaging 1992;7(2):
estudio histológico se observa la presencia de microlitios 46-54.
Stern RC. Hypostatic pneumonia. In Behrman R, Kliegman RM,
de 0,1 a 0,3 mm de diámetro, formados por láminas cál- Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of Pediatrics 17h
cicas en “tela de cebolla”, sobre un centro de sustancia ed. Philadelphia: W B Saunders Company; 2003. p.1221.
proteica y mucopolisacárida. Se pueden observar, tam-
bién, un infiltrado inflamatorio ligero y un aumento del Neumonías intersticiales difusas
Crystal RG et.al. Interstitial lung disease Currents concepts if
tejido intersticial fibroso. pathogenesis, staging and therapy. Am Med 1981;70:542-568.
La composición de los microlitios es de sales de cal- Diaz CA.Neumonitis intersticial crónica. En Meneghello RJ, Fanta
cio y fósforo en una proporción de 2:1. En el análisis deta- NE, Paris ME, Puga TF. Pediatría Meneghello 5ta.ed.Buenos
llado del lavado broncoalveolar, se observa elevación de las Aires: Editorial Médica Pan-Americana; 1997. p1320-4.
Orenstein DM. Obliterant Bronchiolitis. In Behrman RE,
proteínas totales, de la fosfatidilserina y del fosfatidilglicerol. Kliegman RM, Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of
En los casos avanzados, el estudio de la función Pediatrics 17th ed. Philadelphia: W B Saunders Company;
pulmonar muestra un patrón de enfermedad restrictiva 2003. p.1223-4.
Raghu G, Mageto YN, Lockhart D, Scmidt RA, Wood DE,
pulmonar, con disminución de los flujos espiratorios y de
Godwin JD. The accuracy of the clinical diagnosis of new-
la capacidad de difusión. onset idiopathic pulmonary fibrosis and other intestitial lung
El calcio y fósforo séricos, la función parotídea y disease: A prospective study. Chest 1999;116(5):1168-74.
las radiografías óseas, son normales. Stern RC Desquamative interstitial pneumonitis. Idiopathic diffuse
interstitial fibrosis of the lung. In Behrman RE, Kliegman RM,
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of Pediatrics 15th ed.
Philadelphia: W B Saunder Company; 1996. p.1220, 1223-4.
El diagnóstico diferencial se realiza fundamental- Ziesche R, Hofbauer E, Wittmann K, Petkov V, Block LH. A
mente, con la histoplasmosis pulmonar y con otras en- preliminary study of long-term treatment with interferon
gamma-1b and low dose prednisolone in patients with
fermedades: proteinosis alveolar, tuberculosis miliar, idiopathic pulmonary fibrosis. N Engl J Med
sarcoidosis, hemosiderosis pulmonar, edema pulmonar, 1999;341(17):1264-9.
neumonía por Pneumocystis jirovecii, etc. Cruz M, Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Fibrosis
Pulmonar Idiopática, en Manuel Cruz Hernández, Tratado de
TRATAMIENTO Pediatría 8ª ed. p.1286. Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001.
Hacking D, Smyth R, Shaw N, Kokia G, Carty H, Heaf D
No existe tratamiento específico para esta enfer- Idiopathic pulmonary fibrosis in infants: good prognosis with
medad. Solo en casos que lo necesiten se indican medi- conservative management. Arch Dis Child 2000;83:152-7
das sintomáticas y de soporte. Brody AS.Imaging considerations: interstitial lung disease in
children. Radiol Clin North Am. 2005;43(2):391-403
Deben tratarse oportunamente las infecciones res- Swigris JJ, Berry Gj, Raffin Ta, Kuschner WGLymphoid
piratorias, así como disminuir los riesgos de la exposición interstitial pneumonia: a narrative review. Chest.
a contaminantes ambientales, en particular el humo del 2002;122(6): 2150-64
Lynch JP, Arbor A, Wurfel M, Kevin Flaherty K, White E,
tabaco. Es importante la inmunización contra enfermeda- Martinez F, Travis W, Raghu G, M.D. Usual Interstitial
des infectocontagiosas: sarampión, tos ferina, e influenza. Pneumonia. Semin Respir Crit Care Med 2001;22(4):357-85.
El transplante pulmonar secuencial bilateral puede ser
una opción en un estadio muy avanzado de la enfermedad. Pulmón eosinofílico
Se deben realizar radiografías de tórax a todos los Crofton, JW, et al. Pulmonary eosinophilia. Thorax 1952;7:1-35.
Hall LR, Mehlotra RK, Higgins AW, Haxhiu MA, Pearlman E. An
miembros de la familia para detectar otros posibles en- essential role for interleukin and eosinophils in helminth-
fermos, e informar a los padres la posibilidad de que induced airway hpyerresponsiveness. Infect Immun
futuros hijos pudieran también padecer la enfermedad. 1998;66(9):4425-30.
Miltgen J, Nguyen Hy Thuy G, Gueguen E, Cuguilliere A, Bonnet
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO D. The eosinophilic lung. Med Trop (Mars) 1998;58(4
Suppl):447-53.
La microlitiasis alveolar pulmonar es una enferme- Ong RK, Doyle RL. Tropical pulmonary eosinophilia. Chest
dad de larga evolución y de curso lento y progresivo. 1998;113(6):1673-9.
Los pacientes mueren finalmente, en la edad media de Stern RE. Loeffler Syndrome (Eosinophilic pneumonia). In
Behrman RE, Kliegman RM, Arvin AM, Nelson WE. Nelson
la vida por insuficiencia cardiorrespiratoria y, a veces, Textbook of Pediatrics 17th ed. Philadelphia: W B Saunders
por infecciones sobreañadidas. Company; 2003. p.1219-20.

Parte XII. Aparato respiratorio 1081


Nishigaki Y, Fujiuchi S, Yamazaki Y, Matsumoto H, Takeda A, Goldstein LS, Kavuru MS, Curtis-McCarthy P, Christie Ha,
Fujita Y, Okamoto K, Fujikane T, Shimizu T, Kikuchi Farver C, Stoller JK. Pulmonary alveolar proteinosis: clinical
K.Increased vascular endothelial growth factor in acute features and outcomes. Chest 1998;114(5):1352-62.
eosinophilic pneumonia. Eur Respir J. 2003;21(5):774-8. Kitamura T, Tanaka N, Watanabe J, Uchida, Kanegasaki S, Yamada
Philit F, Etienne-Mastroianni B, Parrot A, Guerin C, Robert D, Y et al. Idiopathic pulmonary alveolar proteinosis as an
Cordier JF.Idiopathic acute eosinophilic pneumonia: a study autoinmune disease with neutralizing antibody against
of 22 patients. Am J Respir Crit Care Med. Granulocyte/Macrophage colony-stimulating factor. J Exp
2002;166(9):1235-9. Med 1999;190(6):875-80.
Cruz M, Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Eosinofilia, en Sakai Y, Abo W, Yoshimura H, Sano H, Kuroki Y, Satoh M, et al.
Manuel Cruz Hernández, Tratado de Pediatría 8ª ed., Pulmonary alveolar proteinosis in infants Eur J Pediatr
P.1284. Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001. 1999;158(5):424-6.
Williams GD, Christodoulou J, Stack J, Symons P, Wert Se,
Murrell MJ, et al. Surfactant protein B deficiency: clinical,
Hemosiderosis pulmonar
histological and molecular evaluation. J Pediatr Child Health
Cohen S. Idiopathic pulmonary hemosiderosis.Am J Med Sci
1999;35(2):214-20.
1999;317(1):67-74. Mazzone PJ, Thomassen MJ, Mani S. Kavuru MS. Pulmonary
Heiner DD, Sear JW, Kniker WFS. Multiple precipitins to cow’ s Alveolar Proteinosis: Recent Advances Semin Respir Crit
milk in chronic respiratory disease. Syndrome including poor Care Med 2002; 23(2):115-26
growth, gastrointestinal symptons, evidence of allergy, iron Latzin P, Tredano M, Wust Y, de Blic J, Nicolai T, Bewig B,
deficiency anemia and pulmonar hemosiderosis. Am J Dis Stanzel F, Kohler D, Bahuau M, Griese M.
Child 1962;103:634. Anti-GM-CSF antibodies in paediatric pulmonary alveolar
Milman N, Pedersen FM. Idiopathic pulmonary haemosiderosis. proteinosis. Thorax. 2005;60(1):39-44
Epidemiology, pathogenic aspects and diagnosis. Resp Med De Blic J.Pulmonary alveolar proteinosis in children. Paediatr
1998;92(7):902-7. Respir Rev. 2004;5(4):316-22
Montana E, Etzel RA, Allan T, Horgan TE, Dearborn DG. Beccaria M, Luisetti M, Rodi G, Corsico A, Zoia MC, Colato S,
Environmental risk factors associated with pediatric Pochetti P, Braschi A, Pozzi E, Cervei I.
idiopathic pulmonary hemorrhage and hemosiderosis in a Long-term durable benefit after whole lung lavage in
Cleveland community.Pediatrics 1997;99(1):E5. pulmonary alveolar proteinosis. Eur Respir J.
Razón BR, Cubero MO. Hemosiderosis pulmonar asociada con 2004;23(4):526-31
fibrosis pancreática. Informe de un paciente. Rev Cub Ped. M Cruz. Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Proteinosis
Alveolar, en Manuel Cruz Hernández, Tratado de Pediatría 8ª
1987;59(6):1005-10.
ed., Pp. 1285-6. Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001.
Huang SH, Lee PY, Niu CK Treatment of pediatric idiopathic
pulmonary hemosiderosis with low-dose cyclophosphamide.
Microlitiasis alveolar pulmonar
Ann Pharmacother.2003;37:1618-21
Edelman JD, Bavaria J, Kaiser LR, Litzky LA, Palevsky HI,
Cruz M, Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Hemosiderosis
Kotloff RM. Bilateral sequential lung transplantation for
pulmonar, en Manuel Cruz Hernández. Tratado de Pediatría
pulmonary alveolar microlithiasis.Chest 1997;112(4):1140-4.
8ª ed.;Pp. 1280-1 Ediciones Ergon S.A. Madrid, 2001 Mariotta S, Guidi L, Papale, Ricci A, Bisetti A. Pulmonary
Stern RC. Pulmonary hemosiderosis. In Behrman RE, Kliegman alveolar microlithiasis: review of Italian reports. Eur J
RM, Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of Pediatrics Epidemiol 1997;13(5):587-90.
17h ed. Philadelphia: W B Saunders Company; 2003. Pracyk JB, Simonson SG, Young SL, Ghio AJ, Roggli VL,
p.1221-2. Piantadosi CA. Composition of lung lavage in pulmonary
Dearborn DG, Smith PG, Dahms BB, Allan TM, Sorenson WG, alveolar microlithiasis, Respiration 1996;63(4):254-60.
Montana F, Etzel RA Clinical profile of 30 infants with acute Stern RC, Pulmonary alveolar microlithiasis. In Behrman RE,
pulmonary hemorrhage in Cleveland. : Pediatrics. Kliegman RM, Arvin AM, Nelson WE. Nelson Textbook of
2002;110(3):627-37 Pediatrics 17th ed. Philadelphia: W B Saunders Company;
Yao TC, Hung LI, Jaing TH, Yang CPPitfalls in the diagnosis of 2003. p.1224.
idiopathic pulmonary haemosiderosis.Arch Dis Child. Ucan ES, Keyb AI, Aydilek R, Yalen Z, Sebit S, Kudu M, Ok U.
2002;86(6):436-8 Pulmonary alveolar microlithiasis:review of Turquish reports.
Le Clainche L, Le Bourgeois M, Fauroux B, Forenza N, Thorax 1993;48:171-3.
Dommergues JP, Desbois JC, Bellon G, Dorollo J, Dutau G, Pino APP, Gassiot NC, Ramos TTNI, Hernández LL,
Marguet C, Pin I, Tillie-Leblond I, Scheinmann P, De Blic J. Microlitiasis alveolar. Diagnóstico por biopsia transbronquial.
Long-term outcome of idiopathic pulmonary hemosiderosis Presentación de 1 caso. Rev Cub Med.40(1) ene-mar 2001
in children. Medicine (Baltimore). 2000;79(5):318-26 Mariotta S et al. Pulmonary alveolar microlithiasis: report on 576
Martínez GM, Puerta V M, Martínez B JC, Martínez C A cases published in the literature. Sarcoidosis Vasc Diffuse
Vasculitis y síndromes hemorrágicos pulmonares. An Esp Lung Dis. 2004;21(3):173-81
Pediatr 2002,56:44-5. Wang HY. Pulmonary alveolar microlithiasis: report of familial
cases. Chin Med J (Engl). 2004;117(6):950-2
Proteinosis alveolar pulmonar Castellana G, et al. Pulmonary alveolar microlithiasis. World cases
Colten HR, deMello DE. Pulmonary alveolar proteinosis. In and review of the literature. Respiration. 2003;70(5):549-55
Beharman RE, Kliegman RM, Arvin, Nelson WE. Nelson Cruz M, Tardio E. Bronconeumopatías crónicas. Microlitiasis
Textbook of Pediatrics 17h ed. Philadelphia: W B Saunders alveolar pulmonar, en Manuel Cruz Hernándes, Tratado de
Company;2003. p.1222-3. Pediatría 8ª er ., p. 1285 Ediciones Ergon S.A.. Madrid, 2001.

1082 Tomo III


Alergia

En 1931, en los EE. UU., Coca y Sultzberger crean


el término atopia que significa sin ubicación conocida, para
. Capítulo 81 . designar enfermedades como el asma, la rinitis, la llamada
dermatitis atópica y otras que son expresivas de un cambio
de reactividad del individuo, o sea, de mecanismo alérgico.
Enfermedades alérgicas En 1963, los profesores ingleses Gell y Coombs,
Rubén Rodríguez Gavaldá, Mercedes Jiménez Martínez, con los antecedentes mencionados, hacen un aporte his-
Cecilia Grisel Martínez Abreu, Reemberto Cantero Gutiérrez
y Ariel Jesús Jauma Rojo
tórico al conocimiento de la alergia, con su esclarecedora
clasificación de las reacciones alérgicas en los 4 tipos que
se exponen:
• Tipo 1 o alergia anafiláctica. A este tipo pertenecen el
RESEÑA HISTÓRICA DEL DESARROLLO asma, la rinoconjuntivitis, la dermatitis atópica y otras
DE LOS CONOCIMIENTOS menos frecuentes. En este tipo de reacción alérgica
EN INMUNOLOGÍA Y ALERGOLOGÍA un anticuerpo del tipo IgE de las inmunoglobulinas se
En 1893 Louis Pasteur observó que las gallinas fija a los receptores de superficie de los mastocitos, y
inyectadas con cultivo viejo del vibrión del cólera aviario cuando penetra el alérgeno, la célula libera los media-
quedaron protegidas, habían cambiado contra el germen dores químicos que provocan una reacción inmediata,
vivo, y creó el término vacunación en honor a Eduardo broncoespástica y una tardía e inflamatoria que, en el
Jenner, que un siglo antes había utilizado la linfa de la caso del asma, causa la remodelación de las vías aé-
viruela vacuna para proteger la población. reas y conduce de forma gradual hacia la cronicidad.
• Tipo II o alergia citolítica o citotóxica. En este tipo, un
CONCEPTO anticuerpo específico, al unirse con un antígeno fijado
En 1902 los franceses Richet y Portier, en busca a la superficie de una célula o con una célula que se
de una vacuna contra la toxina de una anémona de mar haya hecho antigénica por alteración de su estructura
(agua mala) que abunda en el Mediterráneo, encontra- química, provoca grave reacción de autoagresión con
ron que, al inyectarle por segunda vez la toxina al perro severo daño hístico. A este tipo de reacción pertene-
Neptuno, el animal murió súbitamente; de ahí surge la cen las llamadas enfermedades autoinmunes, las re-
palabra anafilaxia que significa sin protección. acciones transfusionales, la enfermedad hemolítica del
En 1906 el pediatra vienés Clemens von Pirquet recién nacido, la tiroiditis de Hashimoto y otras.
se percató de que, tanto las gallinas que se salvaron, • Tipo III o enfermedad de los complejos tóxicos. En
como el perro que murió, habían cambiado la reactividad este tipo, el antígeno y el anticuerpo se unen en el to-
de los animales al producto inyectado, y propuso el tér- rrente sanguíneo o en el líquido intercelular, precipitan
mino alergia que, etimológicamente significa otra mane- en los tejidos y activan el sistema de complemento,
ra de reaccionar; por ello, cuando se dice enfermedad cuyas enzimas proteolíticas causan daño secundario
alérgica se comete un error porque alérgica es la perso- en el órgano o sistema donde se depositen, menos gra-
na, no la enfermedad. ves que el daño primario del tipo II.
• Tipo IV o de sensibilidad retardada. Este tipo de reac- el diagnóstico debe ser precoz y sospecharse ya desde el
ción difiere de las anteriores en que la hipersensibili- embarazo, cuando la futura madre tiene antecedentes de
dad no se manifiesta en los tejidos, sino en la célula asma, rinitis alérgica, urticaria o migraña. En todo caso
inmunocompetente, en el linfocito T auxiliador o en el corresponde identificar o tratar el síndrome alérgico en el
macrófago en cuya superficie se fija un anticuerpo niño menor de 5 años que consta de los siguientes compo-
citofílico. La principal entidad clínica de este tipo es la nentes:
dermatitis por contacto. • Nasal: rinitis, rinofaringitis, otitis media, catarros fre-
cuentes.
PATOGENIA
• Laríngeo: tos perruna, seudo croup nocturno.
Las enfermedades alérgicas comienzan por la sen- • Traqueal: tos seca nocturna pertinaz.
sibilidad del niño alérgico a factores patogénicos (alergenos)
que le rodean. Esa primera fase transcurre durante los 3 En el manejo del paciente es esencial la estrategia
ó 4 primeros años de la vida. preventiva, en la que tiene un papel principal el alergólogo
Junto con la sensibilización comienza la segunda fase pediatra que orienta y controla. En el tratamiento en su
de incubación, que no es silente como en las infecciones, conjunto participan, además, el pediatra, el especialista de
sino prodrómica, con manifestaciones clínicas equivalen- Medicina General Integral, enfermeras, psicólogos,
tes o precursoras de la enfermedad. psicopedagogos y fisiatras. La estrategia se basa en los
siguientes principios:
ALERGIA DESDE EL NACIMIENTO • Educación de la familia y del paciente.
HASTA LOS 6 MESES • Control de los factores ambientales de riesgo, incluyen-
Alrededor del 30 % de los niños nacidos de madres do alimentos.
asmáticas tienen los estigmas alérgicos siguientes: obs- • Medicación controlada según criterio médico.
trucción nasal al nacer y cólicos en las primeras semanas; • Inmunoterapia mucosal metaespecífica y adyuvantes
más adelante los lactantes pueden presentar erupciones indicados y controlados por el alergólogo pediatra.
pápulo-eritematosas y rashes transitorios, debidos a la • Rehabilitación física y psicológica, según criterio espe-
unión de anticuerpos maternos transplacentarios con cializado.
antígenos ambientales transmamarios.
Dermatitis atópica
De las enfermedades alérgicas del niño, la dermati-
ALERGIA EN EL NIÑO tis atópica (DA) le sigue al asma en importancia, por su
Y EL ADOLESCENTE frecuencia y por el sufrimiento individual y familiar que
Estudios de prevalencia muestran que el 57 % de ocasiona. Su tasa de prevalencia en el menor de 10 años
los menores de 15 años sufren enfermedades alérgicas, es del 8 al 10 %, y aunque tiende a desaparecer en la
lo cual constituye serio problema epidemiológico de salud, adolescencia, en ocasiones persiste en la adultez donde
por su alta prevalencia, afectación de la calidad de vida también se le conoce como prúrigo de Besnier, prúrigo
del paciente y su familia, elevado costo para la familia y el diatésico y neurodermitis.
Estado, y complejidad operacional de su manejo. Casi siempre comienza en la lactancia, a los 6 ó
Los procesos alérgicos que con mayor frecuencia 7 meses, por erupciones papulovesiculosas en la cara,
afectan la población infantil son: el asma, la rinocon- que cambian gradualmente hacia las flexuras antecubitales
juntivitis, la dermatitis atópica, la dermatitis por contacto y y poplíteas, el cuello, las muñecas y los tobillos. En algu-
el síndrome urticaria edema. nos casos estas manifestaciones son precedidas por ec-
zema retroauricular desde las primeras semanas o por
Asma zonas depigmentadas llamadas pitiriasis alba.
El asma es una enfermedad frecuente en Cuba y El síntoma más característico de la DA es el prurito,
al igual que en otros países puede considerarse un pro- a veces intenso y pertinaz, en particular cuando se infecta
blema de salud. En el año 2005 la prevalencia fue de la piel secundariamente por un estafilococo.
88,3 por 1 000 habitantes de todas las edades. Con frecuencia, en el niño con DA se observa el
En este libro el asma se trata en la parte correspon- fenómeno conocido como alternancia mórbida, en el que
diente a enfermedades respiratorias, pero desde el punto el asma y la dermatitis se alternan, de modo que cuando el
de vista de la alergología pediátrica se deben enfatizar paciente mejora la piel, comienza o empeora el asma y
algunos conceptos. viceversa. En la entrevista con las madres, el médico siem-
Se acepta por muchos que el asma en el niño es pre debe tener en cuenta este aspecto que tiene gran va-
subdiagnosticada y subtratada, y por eso se insiste en que lor diagnóstico.

1084 Tomo III


PATOGENIA Y FISIOPATOLOGÍA En las fases agudas, con exudación y costras, se
La lectura cuidadosa de este epígrafe tiene mucha aplicarán compresas o baños de inmersión para remover
importancia para comprender las íntimas y necesarias las costras y dejar una superficie húmeda, no irritante,
relaciones entre la clínica y la ciencia básica. con el propósito de facilitar la absorción de cualquier apli-
La patogenia de la DA no estuvo bien esclarecida cación tópica; la más usada para ese fin es la solución de
hasta hace muy poco. Se sabía que existe un reclutamiento Burows, diluida al 1:20, en compresas (la solución de
de células inflamatorias (linfocitos, eosinófilos y macrófagos) Burows es acetato de aluminio al 0,5 %). El acetato de
que infiltran la piel y provocan un estado de hiperreactividad aluminio es un astringente muy efectivo para reducir la
cutánea, tal como ocurre en los bronquios con el asma, y exudación, pero no debe usarse en las lesiones secas,
ello aparentemente justificaría el calificativo de atópica. Sin descamativas donde podría provocar fisuras.
embargo, en 1943, los pioneros de la Alergología Erich Son muy útiles los corticosteroides tópicos en cre-
Urbach, dermatólogo, y Philip Gottlieb, internista, de la mas, pero con la precaución de no usar los fluorinados,
Universidad de Pennsylvania, propusieron el nombre de que tienden a afinar en exceso la piel y producir estrías,
dermatitis infantil como término puramente descriptivo y principalmente en la cara, cuello y en las áreas flexurales
clínico, no comprometido con ningún mecanismo de los que de los lactantes.
se conocían entonces, y porque no podían comprender cómo Cuando hay señales de infección secundaria, casi
si era atópica igual que el asma, mantenía con esta una siempre por estafilococo (la DA predispone a la infección
relación inversa casi antagónica, como tampoco podían por este germen y por el herpes virus) se usarán antibióticos
explicarse entonces los cambios migratorios de las lesiones sistémicos y tópicos, en cremas. Como tratamiento
cutáneas, características de la enfermedad. antibacteriano pueden también usarse compresas de
Estas contradicciones se explican hoy con la identi- permanganato de potasio, al 1/5 000 y también de povidona
ficación de 2 estirpes de linfocitos conocidos como Th1 y yodada o de cloruro de benzalconio.
Th2 que forman un eje regulador de las respuestas de El objetivo principal es prevenir las exacerbaciones
tolerancia y de hipersensibilidad. agudas de la enfermedad debidas a alguna de las inciden-
El binomio asma-dermatitis atópica y el eje Th1-Th2 cias siguientes: infecciones bacterianas, virales o micóticas
son fuertes instrumentos para restaurarle al término aler- para las cuales la DA es predisponente, frío o calor exce-
gia el valor que le dio von Pirquet, y para comprender sivos, tejidos irritantes (lana, seda, ropa áspera, nailon),
cuánta razón tenían Urbach y Gottlieb cuando propusie- ejercicios fuertes, retozos, exceso de calor o de frío am-
ron eliminar el término atopia de la literatura médica y del biental o del agua de baño, detergentes y otros. En el
pensamiento de los médicos. manejo de la DA se han usado algunos supuestos
En efecto, los 2 tipos de respuesta reguladas por el moduladores de la respuesta alérgica, como el interferón
eje expresan un cambio de la manera de reaccionar del gamma y la ciclosporina A, la cual tiene acción
individuo y por consiguiente las 2 son respuestas alérgicas, antipruriginosa con resultados variables y transitorios. En
como lo expresó el pediatra von Pirquet hace cerca de el hospital “William Soler” se han visto resultados alenta-
100 años. dores con inmunoterapia metaespecífica y adyuvante por
Desde el punto de vista alergológico la llamada DA, vía sublingual.
por su alternancia con el asma y por la típica migración de
sus lesiones, puede considerarse como una más de las Conjuntivitis alérgica
enfermedades de autoagresión (mal llamadas INTRODUCCIÓN
autoinmunes), que el niño alérgico, al inicio, no reconoce El ojo constituye una forma frecuente de inflama-
su piel como propia y tiende a rechazarla por un mecanis-
ción, tanto en lo referente a las reacciones alérgicas loca-
mo Th2 hasta que alcance un grado de maduración tole-
les como de todo el cuerpo. La mayoría de los procesos
rable, regido por la estirpe Th1
alérgicos oculares afectan la conjuntiva, la cual forma una
Existe una forma clínica de la DA en la que coexis-
barrera natural frente a la invasión de sustancias extrañas
ten en el paciente: la DA, el asma y la rinitis; esta forma
que proceden del medio externo.
clínica se conoce como complejo de Stokes, es muy seve-
Los alergenos (sustancias capaces de producir aler-
ra y difícil de tratar.
gia) pueden llegar a la conjuntiva por la vía aérea (alergenos
TRATAMIENTO aerotransportados o aeroalergenos), por contacto (a tra-
Se entiende por tratamiento el de las exacer-baciones vés de las manos o la aplicación local de medicamentos)
agudas y por manejo, una estrategia dirigida a evitar las o por vía sanguínea. Las lágrimas ejercen una función
exacerbaciones o reducir su frecuencia e intensidad para limpiadora que elimina los alergenos y los mediadores de
mejorar la calidad de vida del paciente y su familia. la inflamación.

ParteXIII. Alergia 1085


En la córnea, por el contrario, no se pueden producir una membrana que bordea la parte interna del párpado
reacciones alérgicas debido a la falta de riego sanguíneo y se extiende sobre la parte blanca en el frente del ojo
y de células como los mastocitos. (Fig. 81.1).
ANTECEDENTES
Mecanismo de la reacción alérgica
El primero en establecer la conjuntivitis atópica
El fenómeno de inflamación alérgica se caracteriza
como entidad clínica fue el inglés Bostock, en 1819. Años
por una respuesta inmediata, consecuencia de una libera-
más tarde, en 1928, MacCulloch asoció esta condición
con los cultivos de heno; no obstante, hubo que esperar ción IgE-dependiente de mediadores de mastocitos y
hasta los años 40 para que, gracias al trabajo de varios basófilos, seguida de una fase retardada y más prolongada,
grupos de investigadores franceses, alemanes y norte- en la que ocurre infiltración a expensas de eosinófilos y
americanos, el concepto de alergia se desvinculara de otras células.
manera definitiva del origen infeccioso al que hasta en- En este proceso existe una compleja interacción
tonces se encontraba ligado. entre “células residentes” (mastocitos, células presenta-
La conjuntivitis vernal fue descrita en sus inicios por doras de antígeno, células epiteliales y células endoteliales)
Arlt en 1846, y la enfermedad se caracterizó como enti- y “células reclutadas” (Iinfocitos T, monocitos, eosinófilos,
dad en 1876 por Saemisch, el cual la denominó como basófilos y plaquetas); ambas son fuentes mediadoras.
catarro primaveral, dada su periodicidad. En estos complejos sistemas se puede diferenciar
El test de provocación conjuntival es una de las prue- diversos estadios de la inflamación:
bas más antiguas, utilizadas para el diagnóstico de enfer- • Exposición alergénica y sensibilización, con la forma-
medades alérgicas, y fue Blackley en 1870, quien lo usó ción de células Th2 productoras de interleucinas (IL-
por primera vez, desde entonces se emplea con las finali- 4, IL-5, etc.).
dades siguientes: • Aparición de células plasmáticas productoras de IgE,
• Confirmar el diagnóstico de alergia. fijación de IgE a la superficie de células efectoras
• Estudiar los signos y síntomas de las reacciones (mastocitos y basófilos) y aparición de interleucinas
alérgicas. con acciones quimiotácticas de eosinófilo y citoquinas.
• Evaluar el mecanismo de producción de la respuesta • Liberación de aminas preformadas del mastocito, pro-
alérgica. ductos de la rotura de la membrana celular con apa-
• Valorar la eficacia de los tratamientos antiin- rición de leucotrienos, prostaglandinas, otros
flamatorios.
mediadores directos, quimocinas, citoquinas,
DEFINICIÓN neuropéptidos, productos intermediarios reactivos del
La conjuntivitis alérgica es una inflamación de la nitrógeno y oxígeno, activación de eosinófilos con
mucosa conjuntival que produce picor, eritema, sensación producción de enzimas líticas y la expresión de molé-
de quemazón en los ojos, molestias a la luz, aumento de culas de adhesión.
lagrimeo y sensación de arenillas al mover los párpados. • Aparición de síntomas característicos en las conjunti-
Los párpados y la conjuntiva son los lugares más vitis, picor, equimosis, epífora, fotofobia, sensación de
afectados por las reacciones alérgicas. La conjuntiva es cuerpo extraño, etc.

Fig. 81.1.

1086 Tomo III


CLASIFICACIÓN • Epitelios de animales domésticos: gato, perro, caballo,
• Conjuntivitis alérgica (CA). hámster, conejos, cobayos y ratones.
• Queratoconjuntivitis vernal (KCJV). • Otros de origen profesional como el látex, las hari-
• Queratoconjuntivitis atópica (KCJA). nas, etc.
• Conjuntivitis papilar gigante (CJPG).
SÍNTOMAS
• Dermatoconjuntivitis alérgica por contacto (DCA).
El mayor síntoma es el prurito en el ojo; además,
DIAGNÓSTICOS PRINCIPALES DE ALERGIA OCULAR el individuo puede experimentar ardor y enrojecimien-
Conjuntivitis alérgica. Es la fase de afección ocu- to de los ojos, así como lagrimeo. Los síntomas por lo
lar de la rinoconjuntivitis alérgica, principalmente aparece general no están asociados con conjuntivitis alérgica,
en la alergia al polen, pero puede ser en la alergia a los incluyen dolor severo, descarga de materia infectada y
ácaros del polvo doméstico o a epitelios de animales do- disminución de la visión.
mésticos. A diferencia de otras conjuntivitis de origen Conjuntivitis alérgica aguda. Parece ser el tipo
alérgico (KCJV y KCJA) no produce lesiones residuales, más frecuente relacionado con las alergias de la esta-
por lo que es importante evitar la yatrogenia. ción. Causa de repente una suave o severa inflama-
Queratoconjuntivitis vernal. Es una inflamación ción de la conjuntiva y los párpados. La conjuntiva
bilateral de la conjuntiva que se presenta con mayor fre-
aparece pálida, pero los vasos sanguíneos muy visi-
cuencia en los niños y adolescentes, suele dar más sínto-
bles. Los síntomas más prominentes son prurito y ar-
mas durante los meses de primavera-verano, aunque en
dor; también es común el lagrimeo abundante. Las
algunos casos puede ser todo el año.
personas con este tipo de conjuntivitis casi siempre tie-
Queratoconjuntivitis atópica. Los pacientes con
dermatitis atópica (DA) pueden presentar lesiones en los nen síntomas nasales.
párpados al igual que en el resto de la piel. La conjuntiva Conjuntivitis alérgica crónica. Esta es menos
y córnea también se pueden ver afectadas; estas lesiones común y potencialmente más severa que la conjuntivi-
oculares asociadas con la DA es lo que se denomina tis aguda, debida a un alergeno al cual la persona está
queratoconjuntivitis atópica. casi siempre expuesta (polvo, comida, pelos, etc.).
Conjuntivitis papilar gigante. Es un tipo de con- Como no ocurre en el tipo de conjuntivitis aguda, en la
juntivitis similar a la queratoconjuntivitis vernal, pero apare- crónica hay muy poca evidencia de inflamación, sin
ce solo en pacientes que usan lentes de contacto blandas. embargo, el prurito y el ardor están presentes, y la sen-
Aunque con menos frecuencia, también han sido descritas sibilidad a la luz puede ser un problema.
tras el uso de lentes de contacto duras e incluso prótesis Estos problemas crónicos algunas veces son mal
oculares. Se desconoce su mecanismo de producción, aun- diagnosticados, como el síndrome de ojos secos con
que se ha sugerido que puede ser producido por una res- conjuntivitis no alérgica; en ocasiones, estos síntomas
puesta alérgica o irritativa a depósitos (antígenos y/o son considerados como psicosomáticos hasta que el
irritantes) acumulados en las lentes, o bien a preservativo alergeno es identificado y abolido.
como el timerosal, utilizado en algunas soluciones antisépti-
DIAGNÓSTICO DE LA CONJUNTIVITIS
cas para las lentes de contacto. El traumatismo crónico del
párpado parece ser también un agente común precipitante. Lo primero que realizará un médico es recoger en la
Dermatoconjuntivitis alérgica por contacto. Historia Clínica el relato de los síntomas que padece el
Debido a que la piel del párpado es fina, resulta especial- paciente, donde se obtienen los datos siguientes:
mente susceptible a la dermatitis por contacto (DC), tanto • Antecedentes personales y familiares de atopia (aler-
de origen alérgico como de origen irritativo. Cuando el gia familiar).
agente causal afecta, además de la piel del párpado, tam- • Descripción de los síntomas: picor ocular, lagrimeo/
bién la conjuntiva, se produce dermatoconjuntivitis (DCJ). epífora, fotofobia, edema o inyección conjuntival, sen-
sación de cuerpo extraño y la asociación con sínto-
CAUSAS DE LA CONJUNTIVITIS ALÉRGICA mas de alergia nasal (estornudos, picor nasal, hidrorrea
Entre los factores alergénicos que pueden causar y obstrucción nasal), bronquial (tos, expectoración y
conjuntivitis alérgicas se encuentran: sibilantes o disnea) o cutánea (picor, lesiones de la
• Ácaros del polvo doméstico: Dermatophagoides, piel, etc.).
Lepidogliphus, Tyrophagus, etc. • También se recogerán datos de temporalidad de los
• Pólenes, gramíneas, cupresus, pinus, platanus, betula, síntomas, ¿es estacional o perenne?
olea, parietaria, artemisa, etc. • Características de la vivienda: rural o urbana, soleada
• Hongos aerógenos: Aspergillus, Altenaria, etc. o humedad.

ParteXIII. Alergia 1087


Para confirmar posibles agentes causantes de la • Prueba del parche. Se realiza en el diagnóstico de la
conjuntivitis alérgica se pueden realizar los estudios si- dermatoconjuntivitis alérgica por contacto. Es una prue-
guientes: ba específica que se aplica para identificar las sustan-
• Técnica del Prick, test para las pruebas de alergia: cias que ocasionan las dermatitis alérgicas. Se aplican
− Se realiza una pequeña punción con una lanceta, a en la espalda, colocando pequeños discos impregna-
través de una gota de alérgeno (extracto comercia- dos con poca cantidad de la sustancia o sustancias a
lizado) depositada sobre la piel; suele practicarse en evaluar. Se disponen en filas y una vez colocadas se
la superficie interna del antebrazo. Se realizan prue- cubren con un esparadrapo. Los parches se mantie-
bas para varios alergenos a la vez. La piel se marca nen durante 48 h, por lo que el paciente debe seguir
con un bolígrafo o rotulador para identificar el lugar una serie de normas para evitar que se alteren los re-
de cada prueba. sultados: no mojarse la espalda, evitar el calor y la
Para evitar el error de un falso negativo o un falso sudación, no rascarse la zona y no exponerla a la luz.
positivo se realizan otras 2 pruebas cutáneas -con- A las 48 h, se marca la piel en primer lugar, se retiran
trol- con histamina y suero fisiológico. La piel poco los parches y se realiza la primera lectura y entre las
reactiva manifestará una leve reacción a la 72 y 96 h se repite la lectura.
histamina, lo cual ocurre también si el paciente está Se realizan mediante grupos y en general se comienza
en tratamiento con antihistamínicos, por lo que de- con un panel de 29 alergenos que corresponden al
berá dejar de tomarlos al menos una semana antes estándar europeo. Entran en este panel los alergenos
de la realización de la prueba, y por lo tanto los que con mayor frecuencia causan alergia por contac-
resultados serán poco representativos. Si el suero to; además, según el tipo de sospecha existen paneles
fisiológico provoca una reacción visible, nos encon- por diversas profesiones o por grupos de contactantes
traremos ante una piel con dermografismo, espe- (cosméticos, metales, etc.).
cial reactividad cutánea (se observa en la piel el DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
dibujo que se realice con un objeto romo). En am-
El diagnóstico diferencial de la conjuntivitis alérgica
bos casos los resultados de las pruebas tendrán
debe hacerse con:
escaso valor diagnóstico.
• Conjuntivitis infecciosas:
Cuando una pequeña cantidad de alérgeno ha pe-
− Conjuntivitis virales. Especialmente por
netrado en el interior de la piel, en el lugar de la
adenovirus. Evoluciona sin prurito, se palpan
prueba ocurrirá la reacción de las células sensibili-
adenopatías preauriculares y en la secreción ocular
zadas, donde se liberan determinadas sustancias
hay células mononucleares en lugar de eosinófilos.
químicas que darán lugar a la formación de un ha-
− Conjuntivitis bacterianas. Ausencia de prurito, se-
bón sobreelevado, rodeado por un área de enroje-
creción purulenta en lugar de serosa, en el frotis
cimiento que causa picazón.
conjuntival se observan polimorfonucleares y
• Pruebas cutáneas o pruebas de alergia. Son un intento
bacterias.
de reproducir en la piel lo que se supone que ocurre en
− Conjuntivitis por Chlamydia trachomatis (agente
los órganos donde tienen lugar los síntomas de alergia.
TRIC, tracoma y conjuntivitis de inclusión). Por las
La piel contiene el mismo tipo de células especiales que
manifestaciones clínicas, en ambas se encuentran
las localizadas en las fosas nasales o el pulmón, y que
cuerpos de inclusión en los raspados conjuntivales.
están preparadas para reaccionar con los alergenos; para
• Conjuntivitis vernal. La secreción es espesa y pegajo-
ello se probarán en los alergenos mencionados anterior-
sa, se observa hipertrofia papilar marcada.
mente en las causas de alergia de esta enfermedad.
• Conjuntivitis por cuerpos extraños y/o abrasión y/o úl-
• Prueba de provocación conjuntival. Se realiza para
ceras corneales. Pueden excluirse mediante la tinción
confirmar el diagnóstico de la causa de la alergia, para
del ojo con fluoresceína y examen bajo ampliación con
ello se aplica el alergeno sospechoso en una de las
buena luz focal.
conjuntivas y se compara con la otra en cuanto a la
• Dermatoconjuntivitis por contacto. A diferencia de la
posible aparición de síntomas.A los 15 min se realizan
CJA existe afección palpebral (eccema).
las lecturas de las pruebas, midiendo el tamaño del
• Conjuntivitis seca. En mujeres menopáusicas (más raro
habón. Es una prueba indolora y bastante segura.
en jóvenes) puede haber xerostomía, la cual se confir-
• Determinación de IgE total y de IgE específica. Es
ma por la prueba de Schirmer.
una técnica que se realiza mediante la extracción de
suero y en el laboratorio. Lo que se mide es el nivel de TRATAMIENTO
IgE específico contra los alergenos sospechosos de Sintomático. Como tratamiento sintomático puede
causar los síntomas. utilizarse antiinflamatorios no esteroideos (AINE) tópicos,

1088 Tomo III


antihistamínicos, estabilizadores de los mastocitos, tos secundarios. Además, un efecto benéfico extra
vasoconstrictores y corticoides tópicos: ocurre cuando existen síntomas de rinitis, al drenar el
• AINE. El ketorolaco al 0,5 % y el pranoprofeno al 0,1 % CGDS oftálmico en las fosas nasales a través de los
son antiinflamatorios no esteroideos tópicos que pare- conductos lagrimales.
cen tener alguna eficacia para aliviar el prurito ocular El nedocromil sódico al 2 %, administrado solo 2 ve-
en la conjuntivitis alérgica. Se ha sugerido que actúan ces al día, presenta al menos la misma eficacia que
por inhibición de la síntesis de prostaglandinas (en la cuando se administra el CGDS al 4 %, 4 veces al día
secreción lacrimal), que son capaces de inducir pruri- en la conjuntivitis alérgica estacional; este presenta
to; no obstante, su efectividad es pobre. rápido inicio de acción y un perfil de seguridad similar
• Antihistamínicos: al CGDS. Además, el nedocromil 4 veces al día es
− Tópicos. La levocabastina 0,5 % es un potente más eficaz que el CGDS en las conjuntivitis alérgicas
antihistamínico -anti-H1 con una potencia 65 veces perennes.
mayor que el astemizol y que apenas produce irrita- La lodoxamida al 0,1 %, administrada 4 veces al día,
ción, con un perfil de seguridad similar al aunque inicialmente utilizada solo para la KCJV, CJPG
cromoglicato de sodio (CGDS). Es al menos tan efi- y KCJA, también es útil en la CJA, e incluso es más
caz como el CGDS o anti-H1 orales, para aliviar el eficaz que el CGDS al 4 % y con un perfil de seguri-
prurito ocular en la conjuntivitis alérgica. Se admi- dad bueno. La mejoría comienza a manifestarse por
nistra de 2 a 4 veces al día y su máxima acción se lo general a los 3 días, aunque pueden ser necesarias
consigue en pocos minutos. unas 4 semanas para conseguir su efecto máximo.
La azelastina 0,05 % es también un seguro y poten- • Vasoconstrictrores. A menudo un alivio rápido se con-
te antagonista de los receptores H1, con rápido co- sigue con las soluciones calmantes, como las de ácido
mienzo de acción, y aunque desde hace algunos años bórico asociado con vasoconstrictor tópico como el
se utiliza con éxito para el tratamiento de la rinitis colirio de fenilefrina (visadrón), una gota en cada ojo
alérgica, solo recientemente ha sido comercializada de 2 a 3 veces al día. No obstante, debe evitarse su
su presentación para su uso oftálmico. empleo a largo plazo por la vasodilatación secundaria
La emedastina es un potente antihistamínico, de muy permanente que produce. Además, los
reciente investigación que presenta una alta y selec- vasoconstrictores tópicos no deben administrarse en
tiva afinidad por los receptores H1 y que está tam- pacientes con glaucoma de ángulo estrecho.
bién disponible en gotas oftálmicas. • Corticoides. Los esteroides tópicos son el tratamiento
− Sistémicos. Los antihistamínicos sistémicos por vía más eficaz, aunque debe reservarse solo a las formas
oral tienen la ventaja no solo de mejorar los sínto- más severas y en general limitarse al período de una
mas oculares, también los nasales. Es preferible uti- semana. Estrictamente deben prescribirse tras garan-
lizar aquellos carentes de efectos sedativos como la tizar que no exista enfermedad viral (queratocon-
terfenadina 60 mg/12 h, o el astemizol 10 mg/24 h. juntivitis herpética) y/o glaucoma mediante previa
El efecto terapéutico de la terfenadina comienza en exploración y seguimiento por el oftalmólogo. Es pre-
el plazo de 2 h y como máximo a las 4 h. Por el ferible la clobetasona butirato o la medrisona, una gota
contrario, la acción del astemizol se inicia mucho en cada ojo, 4 veces al día, debido a su escasa absor-
más tarde cuando se produce el efecto ción y menor probabilidad de ocasionar cambios en la
antihistamínico al cabo de 16 a 17 h de su adminis- presión intraocular.
tración y como máximo a los 4 días de iniciado el
tratamiento. Tratamiento causal. El tratamiento profiláctico con-
La loratadina, cetirizina y ebastina son antihis- siste en evitar los alergenos y la administración de
tamínicos no sedativos, de más reciente investiga- inmunoterapia específica, la cual ha demostrado de mane-
ción, con buen y similar perfil de eficacia-seguridad, ra evidente su eficacia para reducir la intensidad de sínto-
rápido comienzo de acción (1 a 3 h) y posología de mas oculares, tras la exposición a los alergenos y los
10 mg, administrados tan solo una vez al día. requerimientos de medicación sintomática. La inmunoterapia
• Estabilizadores de los mastocitos. El cromoglicato debe prolongarse como mínimo de 3 a 5 años.
disódico al 4 %, una gota en cada ojo, cada 6 h es Los ejemplos de advertencias dadas a los pacientes
también beneficioso. Con este tratamiento, si bien al- para evitar los alergenos polínicos son:
gunos pacientes refieren mejoría de 24 a 48 h del co- • Mantener las ventanas cerradas durante la noche.
mienzo de su administración, su máximo efecto casi Utilizar aire acondicionado con filtros.
siempre no se alcanza hasta los 10 a 14 días. La me- • Tomar la medicación prescrita por su alergólogo.
dicación en general es bien tolerada y carente de efec- • Evitar cortar el césped o tumbarse sobre él.

ParteXIII. Alergia 1089


• Higiene extrema del hogar. No utilizar escobas o plu- sujetos atópicos, sustancias normalmente inofensivas como
meros. el polen o el polvo doméstico pueden producirles inflama-
• Usar colchones y ropa de cama sintéticos. ción nasal, lo que se conoce como rinitis alérgica (RA).
• Durante la crisis, no utilizar lentillas. Utilice gafas si Aunque no es una enfermedad grave, tiene gran
las necesita. importancia debido al impacto sobre la calidad de vida y el
• Lavar los ojos con suero fisiológico estéril. No utilizar rendimiento escolar de los niños.
líquidos desconocidos.
DEFINICIÓN
• Puede usar compresas frías sobre los ojos, los alivian
y descongestionan. La RA se define desde el punto de vista clínico, como
• Utilice gafas apropiadas para bañarse en el mar. un trastorno sintomático de la nariz en sujetos atópicos,
• No fumar y evitar los lugares cargados de humo (dis- donde tras la exposición a un alergeno, se produce una
cotecas, bares, etc.). inflamación de las membranas nasales mediadas por un
• No tenga animales domésticos. anticuerpo que es la inmunoglobulina E.
• No utilice lacas, perfumes, maquillaje o sprays. La alergia nasal puede aparecer en cualquier etapa
• No tenga en su habitación alfombras, cortinas, pelu- de la vida, incluso en el lactante. Se considera que es una
ches. de las enfermedades más frecuentes de la infancia.
• Los días con fuerte viento procure no pasear, sobre También la RA se puede asociar con el asma; se
todo, cerca de árboles. plantea que son enfermedades comórbidas, que sugieren
el concepto: “una vía área, una enfermedad”. Un alto
La conjuntivitis alérgica no se cura definitivamente; porcentaje de pacientes con rinitis (20 al 40 %) tienen
se puede aliviar toda vez que aparece la crisis, y lo más asma, mientras que entre el 30 y 50 % de asmáticos tie-
importante es que se puede evitar su aparición: no poner- nen rinitis. Se ha sugerido que el tratamiento óptimo de la
se en contacto con el alérgeno que la produce, que es rinitis puede prevenir la aparición del asma o mejora el
conocido por nosotros. asma coexistente.
La importancia de la alergia ocular se debe más a su CLASIFICACIÓN
elevada frecuencia en la población general, que su severi- La RA tradicionalmente se ha dividido en estacional
dad, ya que solo algunos casos de queratoconjuntivitis atópica y perenne. En la actualidad existe otra clasificación, se-
y vernal pueden producir trastornos de la visión. La mayo- gún la duración de los síntomas en: intermitente y persis-
ría de casos constituyen procesos más o menos banales, tente, y según la gravedad de los síntomas y el impacto
que no por ello se deben obviar, pues suelen producir mo- sobre la calidad de vida de los pacientes también se pue-
lestias suficientemente intensas como para llegar a dificul- den clasificar en: leve y moderada-grave.
tar las tareas cotidianas del individuo. Los síntomas alérgicos Según la duración de los síntomas:
alarman de manera especial a los pacientes, porque ade- • Intermitente
más de la molesta sensación de picor y escozor, la hincha- − Menos de 4 días a la semana.
zón y el enrojecimiento de los ojos son percibidos por la − Menos de 4 semanas.
familia, los amigos o los compañeros. Dada la función úni- • Persistente
ca y altamente especializada del ojo, una reacción leve puede − Más de 4 días a la semana.
alterar mucho la calidad de vida del paciente. − Más de 4 semanas.
Rinitis alérgica Según la gravedad de los síntomas y el impacto so-
INTRODUCCIÓN bre la calidad de vida:
La mucosa nasal es un área corporal muy vascula- • Leve
rizada que humidifica, limpia y calienta el aire que se ins- − Sueño normal.
pira; está cubierta por una capa epitelial y ciliada, tapizada − No se altera la actividad diaria, deporte y tiempo
por una secreción mucosa; en esta zona están ubicados libre.
también los receptores olfatorios que proporcionan el sen- − Escuela y trabajos normales.
tido del olfato. − Sin síntomas molestos.
Otra función de la nariz es participar en la defensa del • Moderada-grave
cuerpo contra sustancias nocivas que están presentes en el − Sueño alterado.
aire que respiramos; cuando se produce el contacto con un − Alteración de la actividad diaria, deporte y tiem-
agente extraño, intenta neutralizarlo con la producción de po libre.
una inflamación local, la cual induce a los síntomas conoci- − Escuela y trabajos alterados.
dos como secreción y obstrucción nasal. Sin embargo, en − Síntomas molestos.

1090 Tomo III


CAUSA receptores específicos de los mastocitos; cuando se vuel-
Los agentes que provocan alergia nasal con más ve a poner en contacto con el alergeno ocasiona la
frecuencia durante el primer año de vida son el polvo del degranulación de los mastocitos y la liberación de media-
hogar, los alimentos y el epitelio de los animales. La rinitis dores, también de la histamina y los leucotrienos respon-
debida al polen suele aparecer después de los 3 años de sables de la fase inmediata de la respuesta alérgica. De
edad. manera simultánea se produce una infiltración de la mu-
Los alergenos estacionales más evidentes son el cosa nasal por eosinófilos, cuya activación libera proteí-
polen de los pastos, malezas, esporas de hongos y detri- nas citotóxicas que causan la fase tardía de la inflamación
tos de los insectos. alérgica y la inflamación crónica nasal.
Las causas más importantes de la RA perenne son Los síntomas de la RA son la consecuencia de la
los alergenos inhalados de ambientes interiores como ácaros exposición a un alergeno en un individuo sensibilizado;
del polvo doméstico, el moho, descamaciones epiteliales de estos alergenos son los pólenes de las gramíneas, árboles
los animales, algunas plantas, cucarachas y alimentos. y plantas en primavera-otoño y los ácaros, los animales
El polvo doméstico es una mezcla de hilachas, ácaros, de compañía y los hongos en la rinitis perenne.
caspa, partes de insectos, fibras y otras partículas. Se ha PREVENCIÓN
comprobado que en muchas regiones geográficas algu- Las medidas para la prevención están dirigidas a
nos ácaros como el Dermatophagoide farinae y el prevenir la hiperrespuesta nasal evitando el humo del ta-
Dermatofagoide pteronyssinus son las principales fuen- baco, olores fuertes, aire acondicionado, cambios bruscos
tes de antígenos en el polvo doméstico. de temperatura e impedir la exposición a los alergenos, ya
Los antígenos de origen animal son alergenos noto- que su eliminación contribuye al alivio de la enfermedad.
rios, en particular, muy potentes los de gatos y caballos. Evitar la exposición al alergeno causal es el único
Pueden ocurrir súbitas respuestas violentas, incluso cuan- tratamiento necesario en la mayoría de los casos de aler-
do no hay un contacto directo con los animales, sino con gia a los alimentos, medicamentos, animales y otros
áreas contaminadas por la caspa, la saliva u orina de estos; alergenos como restos o detritus de insectos.
algunas de estas sustancias mantienen su actividad hasta 6
meses después que el animal ha desaparecido; existen opi- CUADRO CLÍNICO

niones de que el epitelio del perro puede sensibilizar de for- Casi siempre la RA aparece en la niñez, la adoles-
ma parecida. Otros animales como el hámsters y ratones cencia y al comienzo de la edad adulta. Un antecedente
son capaces de provocar síntomas en niños susceptibles. personal de otras enfermedades atópicas o antecedentes
Los alimentos constituyen una de las causas más familiares de este tipo de enfermedad subraya la sospe-
importantes de alergias nasales en niños pequeños. Cual- cha de su origen alérgico.
quier clase de alimento puede ocasionar síntomas, pero Uno o más de los síntomas siguientes como: rinorrea
los que con mayor frecuencia la producen son: leches, serosa, estornudos, obstrucción nasal, prurito nasal y con-
huevos, cítricos, maíz, trigo y otros granos de cereales. juntivitis son sugestivos de la RA.
Las manifestaciones clínicas pueden aparecer de
inmediato o después de algunas horas. • Rinitis alérgica estacional. Los síntomas se presen-
Además de todas las sustancias específicas nom- tan o aumentan en determinadas estaciones, son pe-
bradas, que actúan por inhalación e ingestión a través de riódicos y corresponden con la variación estacional de
una respuesta mediada por la IgE, existe un grupo de los aeroalergenos. Entre los síntomas característicos
irritantes no específicos como el humo del tabaco, olores están:
fuertes, contaminación del aire, desodorantes, • Rinorrea acuosa y transparente.
vaporizaciones aromáticas y los cambios climáticos, ca- • Obstrucción nasal total o parcial del flujo de aire.
paces de provocar síntomas en los niños alérgicos. Cuando es intensa puede implicar el bloqueo de los
Los alergenos ocupacionales son también causa de senos paranasales o de las trompas de Eustaquio, y
RA, pero en la edad adulta. provocar dolor de oído o cefalea típica de la sinusitis.
• Congestión nasal, causada por la inflamación de los
PATOGENIA
cornetes, es una de las quejas más frecuentes. Pa-
Entre las células involucradas en la inflamación de roxismos de estornudos.
la RA se destacan los linfocitos, mastocitos y eosinófilos. • Prurito en ojos, nariz, oídos y garganta.
Los alergenos durante la fase de sensibilización inducen • Lagrimeo y dolor ocular junto con una secreción ge-
los linfocitos Th2 a producir una serie de citocinas que latinosa (conjuntivitis) matinal.
estimulan la síntesis de IgE específica, la cual se fija a los • Alteración de los sentidos del gusto y del olfato.

ParteXIII. Alergia 1091


• Se puede presentar tos seca e improductiva debido al • Cuadro clínico y examen físico: ya descrito en el
drenaje de las secreciones nasales y a la irritación de acápite anterior.
la nasofaringe.
Diagnóstico diferencial. Se hará con las afeccio-
Rinitis alérgica perenne: nes siguientes:
• Aquí los alergenos muestran poca o ninguna variedad • Rinitis infecciosa.
estacional. • Rinitis alérgica: estacional y perenne (ya descrita).
• Los síntomas son intermitentes o continuos durante • Rinitis eosinofílica no alérgica: tiene reacciones nor-
todo el año, aunque son muy similares a los de la rinitis males a las pruebas cutáneas; niveles normales de
alérgica estacional, en general son menos intensos. IgE séricas y tendencia a responder bien al tratamiento
• El paciente se queja con frecuencia de tener un res- tópico con corticosteroides.
friado persistente o una sinusitis crónica. • Rinitis medicamentosa: causada por efecto rebote a
• El síntoma más común es la congestión nasal. Los las gotas nasales o a los atomizadores.
estornudos, la rinorrea clara y el purito nasofaríngeo • Rinitis vasomotora: produce síntomas persistentes sin
ocular se presentan con menos frecuencia en la RA correlación, con exposición a alergenos específicos;
perenne que en los que sufren rinitis alérgica la obstrucción nasal aumenta frecuentemente con los
estacional. cambios de tiempo, emociones, con la humedad o con
• La epistaxis es rara en lactantes, pero se puede ver la contaminación del aire.
con frecuencia en niños mayores. • Trastornos de la función nasal: asociado con
hipotiroidismo, cuerpo extraño, pólipos nasales, des-
Los lactantes o niños pequeños que presentan con- viación del tabique nasal, adenoides y amígdalas agran-
gestión nasal pueden sentirse malhumorados, irritables y dadas, enfermedad sinusal, rinorrea de líquido
fatigarse fácilmente, estos trastornos del comportamiento cefalorraquídeo por traumatismo craneal e intoleran-
descritos por algunos autores, como parte del síndrome cia a la aspirina. Producen síntomas nasales unilate-
alérgico de tensión-fatiga, a menudo se atribuyen de ma- rales, los que se pueden reconocer en el examen físico.
nera errónea a los efectos secundarios de los Las reacciones normales a las pruebas alérgicas indi-
antihistamínicos. can que la enfermedad es de origen no alérgico.
Hallazgos físicos. Los hallazgos físicos positivos
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
durante los períodos de RA están limitados a la nariz, los
ojos y los oídos. • Pruebas cutáneas (Prick test): confirma cuáles
Cara: ojeras alérgicas, “saludo alérgico” (que es fro- alergenos serán utilizados para el régimen de
tar la nariz con la mano debido al picor y la rinorrea serosa, inmunoterapia.
lo que ocasiona un pliegue en la base de la nariz). • Frotis nasal: si se comprueban grandes cantidades de
Nariz: cornetes nasales pálidos, azulosos y eosinófilos sugiere la presencia de un factor alérgico.
edematosos cubiertos por secreciones claras. Aunque también puede observarse una preponderan-
Ojos: lagrimeo, inyección de la esclera y la conjunti- cia de eosinófilos en casos de rinitis eosinofílica no
va, edema e inflamación periorbital. alérgica y en la rinitis vasomotora.
Oídos: ocasionalmente membrana timpánica obstrui- • Si lo que predominan son polimorfonucleares estare-
da e inmóvil. mos en presencia de un factor infeccioso; sin embar-
Examen oral: paladar estrecho y arqueado, con go, la ausencia de eosinófilos no excluye la alergia.
sobremordida marcada o maloclusión dental si se ha res- • El recuento eosinofílico periférico puede o no estar
pirado por la boca durante la infancia. elevado en el caso de la RA, tiene muy poca impor-
DIAGNÓSTICO tancia a menos que sea moderadamente alto.
Se basa en la Historia Clínica detallada, que incluye • Determinación de los niveles séricos totales de IgE:
cuadro clínico, examen físico, diagnóstico diferencial y el valor clínico es limitado porque ellos están elevados
exámenes complementarios. solo del 30 al 40 % de los pacientes con RA, y tam-
Diagnóstico clínico: bién ocurre un aumento de los niveles totales de IgE
• Antecedentes patológicos familiares. Presencia de en condiciones no alérgicas. Un nivel elevado de es-
enfermedades atópicas familiares. tos anticuerpos no establece un diagnóstico de alergia
• Antecedentes patológicos personales. Antecedente de y un nivel normal no lo descarta.
síndrome obstructivo nasal y cólicos abdominales en • Tomografía computadorizada: se usan raras veces,
la etapa de recién nacido y lactante, otras enferme- excepto cuando se sospecha la complicación con
dades alérgicas. rinosinusitis crónica recurrente.

1092 Tomo III


• Imágenes radiográficas. Igual criterio al anterior. • La inflamación de la nariz puede aumentar la
• Resonancia magnética: proporciona mejores imáge- hiperactividad de las vías respiratorias inferiores. Al-
nes diagnósticas de los tejidos blandos que la tomografía gunos posibles mecanismos son:
computadorizada, pero es menos adecuada para pro- − Reacción nasal alérgica que altera la reactividad
ducir imágenes de la anatomía ósea de esta región. bronquial a través de un reflejo nasobronquial.
• Espirometría: útil para detectar asma subclínica. − La respiración bucal causada por la obstrucción
• Test de radioalergoabsorción: determina los nasal produce broncospasmo frente al aire frío y
anticuerpos IgE específicos. seco.
− Aspiración pulmonar del contenido nasal.
Conviene recordar que es esencial que se evalúen • La RA y la rinosinusitis coexisten con frecuencia y
los resultados de los exámenes complementarios en rela- están definitivamente relacionadas:
ción con los problemas clínicos del paciente a la luz de la − Muy raras veces se presenta sinusitis en ausen-
Historia Clínica detallada. cia de rinitis.
COMPLICACIONES
− La rinosinusitis crónica puede estar relacionada
con un proceso inflamatorio similar al que se ob-
• Otitis media serosa. Como consecuencia de una
serva en la RA.
disfunción obstructiva de la trompa de Eustaquio, de- − Los pólipos nasales se relacionan con la
bida al edema de la mucosa y de las secreciones. rinosinusitis crónica.
Algunas veces el proceso es agudo y cura de forma
espontánea. Cuando es crónica puede conducir a la TRATAMIENTO

pérdida de la audición con efectos adversos en el El tratamiento de la RA depende del diagnóstico


desarrollo del lenguaje y de la esfera cognoscitiva, o correcto y se deben tener en cuenta 3 aspectos básicos:
ambos. El niño pequeño es el que tiene los riesgos • Medidas preventivas (ya explicadas).
más altos de presentar estas últimas situaciones. • Usar los medicamentos apropiados.
• La inmunoterapia.
• Sinusitis crónica. En los niños los síntomas incluyen
Uso de medicamentos apropiados. El objetivo
secreciones nasales crónicas, tos persistente (espe-
de la farmacoterapia es aliviar y prevenir los síntomas del
cialmente nocturna) y otitis media recurrente. Pensa- paciente.
mos en sinusitis: Los medicamentos usados en el tratamiento son:
− Siempre que los síntomas de infección o RA sean • Antihistamínicos. Pueden usarse por vía oral o
más prolongados que lo esperado. intranasal:
− Cuando el paciente presenta dolor intenso en el − Los antihistamínicos de primera generación son
área implicada de los senos. clínicamente efectivos, aunque su uso es limitado
− Cuando el asma del paciente no responde de for- por el inconveniente de su acción anticolinérgica
ma adecuada a los medicamentos. y sedativa, por lo cual se prefieren los de segunda
− Cuando el paciente presenta una bronquitis pro- generación por carecer considerablemente de esas
longada o persistente que no responde al trata- propiedades sedativas.
miento adecuado. − Actúan sobre los receptores H1 de la histamina,
bloqueando los síntomas inducidos por esta.
− Efectivos sobre el picor nasal, el estornudo y la
Otras consideraciones acerca de la RA que debe-
rinorrea acuosa. Ineficaces sobre la congestión y
mos tener en cuenta son las siguientes:
el bloqueo nasal.
• La RA y el asma a menudo coexisten, por lo que: − Los antihistamínicos tópicos (intranasales) son
− Algunos pacientes con RA se quejan de aumento de eficaces.
los síntomas del asma, durante la estación en la que − Pueden combinarse los antihistamínicos orales con
abunda el polen. descongestionantes orales.
− La rinitis y el asma afectan la misma mucosa respi- • Corticosteroides:
ratoria. − Uso sistémico:
− La inflamación interviene en la patogenia de ambas Aunque estos agentes tienen un profundo efecto
entidades. beneficioso en la RA, su uso es casuísticamente
• Las reacciones alérgicas de la mucosa nasal pueden necesario en el tratamiento de esa enfermedad,
empeorar potencialmente los procesos inflamatorios excepto en pacientes con síntomas intensos y se
asmáticos de las vías respiratorias inferiores. administrará un ciclo corto (de 3 a 7 días).

ParteXIII. Alergia 1093


− Corticosteroides nasales: pero el tratamiento prolongado (más de 3 a 4 días
Constituyen el tratamiento de elección cuando el de uso) produce obstrucción nasal progresivamen-
componente obstructivo es el síntoma más im- te más severa, debido a un fenómeno congestivo
portante. de rebote (rinitis medicamentosa).
Su uso profiláctico reduce la congestión, − La combinación de un descongestionante más
estornudos, rinorrea, prurito del paladar y la tos. un antihistamínico ha sugerido mejores resulta-
Se pueden administrar junto con antihistamínicos dos que cuando se emplean por separado. Esta
cuando hay síntomas nasales constantes o con combinación también es más efectiva para el
síntomas oculares molestos. alivio de los síntomas nasales y oculares que la
El tratamiento se continúa en ausencia de síntomas. beclometasona nasal.
Los corticoides nasales (excepto la bedome- • Preparaciones oftálmicas: los estabilizadores de los
tasona) no alteran el crecimiento de los niños, ni mastocitos, los antihistamínicos oculares y el
el funcionamiento del eje hipotálamohipofiso- antiinflamatorio no esteroideo ketorolac (ocular) son
suprarrenal. usados de forma tópica en preparaciones oftálmicas
• Antagonistas de los receptores de leucotrienos para las conjuntivitis alérgicas, y reducen de manera
(Montelukast): significativa los síntomas oculares y el prurito.
− Alivian los síntomas nasales en pacientes con • Vapores y lavado nasal con agua: también puede ser
RA; sin embargo, son relativamente débiles útil la inhalación de vapor tibio por la nariz durante 10
como única terapia. La función de esta droga es a 15 min, de 2 a 4 veces diarias y el lavado nasal con
como un ayudante en el tratamiento de pacien- agua salada tibia.
tes que no han tenido adecuada respuesta al tra-
tamiento con antihistamínicos, a los corticoides Inmunoterapia. Indicada en pacientes con RA sen-
nasales o ambos. sibles a los alergenos específicos, en los cuales las medi-
− No está claramente demostrado que cuando se das preventivas y el tratamiento farmacológico no han
encuentran combinados con otros antihista-mínicos sido eficaces.
o corticoides nasales reduzcan los síntomas más Los anticuerpos monoclonales antiIgE son una nue-
que los antihistamínicos o los corticoides solos. va opción de tratamiento en la rinitis.
• Estabilizadores de los mastocitos: Para el tratamiento de la RA debemos recordar los
− El cromolín sódico intranasal bloquea las reac- aspectos siguientes:
ciones alérgicas nasales, tanto en la fase aguda • Verificar las causas de los síntomas alérgicos mediante
como tardía. la Historia Clínica y los exámenes.
− Alivia estornudos, rinorrea, congestión y prurito • Reducir o evitar la exposición a alergenos.
nasal, pero no alivia los síntomas oculares. • Iniciar el tratamiento con la inhalación de
− Eficaz en el tratamiento de la RA estacional y corticosteroide nasal y antihistamínico oral de segun-
perenne. da generación o ambos.
− Iniciar el tratamiento antes de la exposición • Si hay persistencia de síntomas nasales, añadir un
alergénica y continuarlo durante el período de ex- antagonista de los leucotrienos; si persiste el prurito y
posición.
el lagrimeo se añade un antihistamínico ocular, un es-
− Más efectivo cuando se usa de manera profiláctica
tabilizador del mastocito o una droga antiinfla-matoria
de 4 a 6 veces diarias.
no esteroidea.
• Anticolinérgico:
• Se debe considerar la inmunoterapia si la calidad del
− El bromuro de ipratropio disminuye la rinorrea
alivio con la medicación es inadecuada, para prevenir
acuosa que otros medicamentos no hayan podido
la progresión de la enfermedad, o si el paciente está
controlar.
afectado por otra complicación, por ejemplo, asma y
− No alivia la congestión nasal, prurito ni estornudos.
sinusitis
• Descongestionantes orales o nasales:
− Estimulan los receptores adrenérgicos o inhiben
Urticaria
la liberación de noradrenalina y reducen la con-
gestión nasal. La piel es un órgano del cuerpo humano, no es una
− Descongestionantes orales tienen efectos secun- simple envoltura; representa la sexta parte del peso cor-
darios como hipertensión, agitación, insomnio, poral. La piel es límite entre el ser humano y su medio
cefalea, taquicardia, etc. externo, por lo que está continuamente expuesta a las
− Los descongestionantes tópicos (intranasales) agresiones físicas, químicas y biológicas que pueden mo-
actúan más rápido y más eficaces que los orales, dificarla en sentido anormal.

1094 Tomo III


Relación de algunos medicamentos utilizados en la rinitis alérgica

Clasificación Modo de acción Medicamento y dosis

Antihistamínico de 2ª generación. Bloqueadores de los receptores H1 Cetirizine (Zyrtec) 5mg

Inhiben la liberación de Autacoides Mayor de 12 años: 1 a 2 comprimidos


1v/día ó 1 comprimido
10 mg 1v/día
Zyrtec (jarabe) 5 mg/5 ml De 2-5 años:
comenzar con ½ cucharadita
1 v /día; se puede aumentar a
1cdta. 1v/día ó a ½ cdta 2v/día
Loratadine (claritín, alavert) mayores de 12
años: 1comprimido (10mg)
1v/día.
Jarabe 5 mg/5 ml de 2-5 años: 1cdta. 1v/día
De 6-11años: 1-2 cdta. 1v/día
Desloratidine (clarinex): mayores de 12
años:1 comprimido (5 mg) 1 v/día.

Corticosteroide nasal Inhiben el influjo de células inflamatorias Dipropionato de beclometasona: de 6-12 años:
1 atomización en cada fosa
(beconase) 2 v/diarias.
Mayores de 12 años: de 1-2
atomizaciones ( 42 µg/atom) en cada
fosa, 2 veces al día.
Budesonide
Mayores de 6 años: 2 atomizaciones
(Rhinocort) (32 µg/atom) en cada fosa,
1 vez al día.

Propionato de fluticasona (flonase):


Mayores de 4 años: comenzando con
1 atomización en cada fosa 1 vez al día
ó 2 atomizaciones (50 µg/atom) en cada
fosa 1 vez al día.

Triamcinolona (nasalcort): de 6-12 años: 1


atomización (55 µg/atom) en
cada fosa, 1 vez al día. Se puede aumentar
a 2 atomizaciones 1 vez al día.
Mayores de 12 años: 2 atomizaciones en cada
fosa 1 vez al día.

Antagonistas de leucotrienos Bloquean los receptores de leucotrienos Montelukast (4 mg) de 2-5años: 1 tab al
atardecer
(Singulair) (5 mg) de 6-14 años: 1 tab al
atardecer

Anticolinérgicos Bloquean los receptores de acetilcolina Ipratropium: mayores de 6 años 2


atomizaciones (Atroven nasal) (21µg/atom)
en cada fosa, de 2-3 veces al día al 0,03%

Estabilizadores intranasales Inhiben la liberación de histamina Cromolyn (nasalcrom) mayores de 6 años


de los mastocitos 1 atomización
(5,2 mg/atom) en cada fosa 3-4 veces diarias
(cada 8-6 horas); se puede aumentar hasta un
máximo de 6 veces diarias

Agonistas α adrenérgicos Actúa como vasoconstrictor Pseudoefedrina (Sudafed) Niños mayores de


12 años: 1 cápsula c/12 horas
(cápsula de 120 mg)

ParteXIII. Alergia 1095


Se interrelaciona con los demás órganos del cuerpo PATOGENIA
por vías vasculares, linfáticas y nerviosas e interviene en El proceso central en la urticaria es la liberación de
los intercambios humorales enzimáticos y producción de mediadores vasoactivos a través de varios mecanismos
anticuerpos de varios tipos, por lo que sufre las conse- diferentes que son capaces de afectar la permeabilidad
cuencias de alteraciones patológicas de otros órganos e vascular cutánea, los cuales pueden ser de carácter
influye también sobre ellos. inmunológico y no inmunológico, y de estos mediadores la
Es por ello que en la piel se encuentra un número histamina desempeña el papel principal.
importante de enfermedades, producto a veces de altera- La enfermedad no es más que una forma cutánea
ciones internas y otras, debido a las agresiones externas. localizada de anafilaxia, ya que el mecanismo inmunológico
La piel contiene 3 capas netamente definidas: epi- y los alergenos son semejantes.
dermis, dermis e hipodermis. Los anticuerpos IgE sensibles a medicamentos, ali-
La epidermis es la capa más externa, es exclusiva- mentos o venenos de insectos reaccionan con las células
mente celular y constituye el ejemplo típico de lo que en dianas cutáneas (mastocitos y basófilos) y liberan media-
histología se denomina: epitelio pavimentoso estratificado, dores químicos de la anafilaxia.
pues se divide en zonas bien definidas, constituidas por Los anticuerpos IgG o IgM, formados por la
células características. Desde dentro hacia fuera se de- estimulación con el antígeno, pueden activar la vía clásica
nominan: capa basal, capa espinosa, capa granulosa y capa del complemento, que generan anafilatoxinas C5a o C3a
córnea. En la palma de la mano y planta de los pies está la las cuales estimulan la producción de mediadores de la
capa lúcida entre las 2 últimas capas. anafilaxia.
La dermis, inmediatamente por debajo de la epider- La activación de la vía alterna del complemento tam-
mis, es una masa o magma de fibras de colágenos, de bién genera la producción de estas anafilatoxinas, puesto
reticulina y de elastina, sostenida por la llamada sustancia que ellas surgen de la vía efectora final en la secuencia
fundamental. Dentro de esa masa se encuentran los vasos del complemento.
sanguíneos, linfáticos, los nervios, folículos y glándulas. Los agentes físicos o los traumatismos podrían libe-
rar histamina por medio de estimulación mecánica.
CONCEPTO La aspirina y los medicamentos antiinflamatorios no
Es una enfermedad de la piel de causa diversa, que esteroideos tienen un efecto inespecífico de potenciación
se manifiesta por la aparición de habones; estos son ele- sobre la urticaria y/o angioedema.
vaciones circunscritas de la piel, de color rojo intenso, ro- Existen otras sustancias involucradas en la patogenia
sado o blanquecino, de consistencia elástica, forma y de la urticaria que desempeñan un papel importante en el
tamaño variable, y que es provocada por una vasodilatación proceso inflamatorio y en las alteraciones de la permeabi-
y aumento de la permeabilidad vascular, con infiltración lidad vascular, por ejemplo, la prostaglandina D2
de la dermis con plasma procedente de los capilares, ade- (vasodilatadora), los leucotrienos C y D, el factor de acti-
más, con engrosamiento de las papilas dérmicas y acu- vación plaquetaria (PAF) (aumento de la permeabilidad
mulación de fibras de colágeno. vascular) y la producción de bradicinina que participa tam-
Evoluciona con prurito intenso o sin él, malestar ge- bién en el proceso.
neral e incluso fiebre. CAUSAS DE URTICARIA Y/O ANGIOEDEMA
El angioedema es ocasionado por las mismas alte- La alergia, las infecciones, los factores físicos, de-
raciones patológicas, pero al nivel de la dermis profunda y terminadas enfermedades generales y la tensión emocio-
tejido celular subcutáneo. nal han sido responsable de urticaria.
CLASIFICACIÓN E INCIDENCIA También con menor frecuencia existen otros oríge-
La urticaria es un problema de salud frecuente en el nes que se deben considerar siempre, como en la evolu-
niño; se dice que hasta el 20 % puede sufrir de urticaria ción de reacciones transfusionales, picaduras de insectos,
una vez en la vida. La duración de los episodios ayuda a los alergenos inhalables o por contacto, las enfermedades
su clasificación, más bien con fines de tratamiento. del colágeno, los padecimientos malignos, las anormalida-
Urticaria aguda. Cuando la duración total del pro- des hereditarias y la urticaria crónica idiopática.
blema es menor que 6 semanas. Los alergenos ingeridos constituyen una causa más
Urticaria crónica. Cuando los síntomas persisten fuerte de urticaria que los inhalados. Cualquier alimento o
por más de 6 semanas. medicamento puede causar ronchas.
Urticaria recurrente. Cuando los períodos libres Entre las causas más identificables de urticaria es-
de síntomas son más largos que las crisis. tán los medicamentos; son innumerables los fármacos

1096 Tomo III


implicados en este problema, como la penicilina y los pro- Las pruebas cutáneas con los alergenos inhalables
ductos que contienen este antibiótico, como queso fer- se recomiendan solo en aquellos casos en los cuales los
mentados, leche, vacunas, etc. La procaína, extractos antecedentes sugieren una relación de tales alergenos con
hepáticos, vitaminas, laxantes y remedios para el dolor de la urticaria del paciente.
cabeza deben también tenerse en cuenta. La aspirina y La alergia por alimentos se diagnostica mediante los
los antiinflamatorios no esteroideos causan urticaria y/o antecedentes alimentarios, el uso de alimentos para elimi-
angioedema por un mecanismo no inmunológico. nar alergenos probables y las provocaciones apropiadas
Cuando se sospecha el diagnóstico, se debe probar con los alimentos sospechados. También resulta de inte-
mediante la eliminación del agente, y si este es identifica- rés realizar la prueba de radioalergoabsorbente (RAST),
do de manera correcta, se observará una reducción gra- que es de utilidad.
dual de los síntomas. La alergia a medicamentos requiere un minucioso
La infección localizada o generalizada puede provo-
análisis de la Historia Clínica del enfermo; en cuanto a la
car urticaria, concomitante con la respuesta inmunológica
ingestión reciente de medicamentos, la eliminación del
del huésped al organismo infectante, por ejemplo, en las
medicamento sospechoso y en ocasiones la provocación
enfermedades parasitarias que a menudo se encuentran
asociadas con eosinofilia y una respuesta inmunológica deliberada, aunque las pruebas cutáneas son útiles para
con aumento de IgE. La urticaria también puede verse describir determinados medicamentos alérgicos como la
durante las fases prodrómicas de algunas infecciones penicilina.
virales, en especial de la hepatitis B y la mononucleosis Cuando el estudio orienta hacia algunas de las cau-
infecciosa. La infecciones bacterianas producen urticaria sas físicas, se deben realizar entonces las pruebas para
con menos frecuencia. cada una de ellas.
En aquellos niños menores de 6 meses, que por al- Si es urticaria por el frío, se hace mediante la aplica-
guna razón no han sido alimentados con leche materna, ción de un cubito de hielo al antebrazo durante 5 min para
los alimentos son las causas de urticaria más importantes, observar la aparición de urticaria localizada después que
y la leche de vaca es el principal agente involucrado. la piel ha sido recalentada.
Otros alimentos que se relacionan como causa de Las pruebas semejantes con el calor, luz ultravioleta
urticaria en el niño son: el huevo, el maní, las conservas o el agua en una zona de prueba de la piel son apropiadas,
y la soja. si los antecedentes sugieren estas causas.
También hay que tener en cuenta el papel de los Si se sospecha infección, son de utilidad: la veloci-
aditivos alimentarios, que poseen bastante interés y se han dad de sedimentación, los cultivos de orina y faringe, títu-
reportado: la tartrazina, el ácido benzoico y los salicilatos los de antiestreptolisinas, anticuerpos contra virus (de ser
como generadores de urticaria crónica. posible ) y proteína C reactiva.
En cuanto a los factores físicos, estos tienen carac- Si se piensa en una enfermedad inmunitaria de base,
terísticas en común, como la propiedad de inducir la urti- se debe realizar determinación del complemento y sus frac-
caria por factores ambientales, cambios de temperaturas ciones, así como la cuantificación de inmunoglobulinas e
o por estimulación directa de la piel mediante presión, ras- incluso la biopsia cutánea.
pado, vibración o luz. Entre sus formas clínicas están: el Deberá hacerse hincapié en que en la mayoría de
dermografismo, urticaria por presión, vibratoria, inducida
los casos de urticaria recurrente o crónica no es posible
por el frío, calor, luz solar (actínica), agua (acuógena) y la
encontrar una causa, ni aun con la investigación más mi-
colinérgica. Esta última es un padecimiento en el cual
nuciosa.
aparecen ronchas pequeñas, con una zona de eritema cir-
cunvecino después del ejercicio, exceso de calor o por Existen estadísticas que refieren que la causa de la
intensa tensión emocional. urticaria crónica solo se logra identificar en el 10 % de los
También la urticaria se acompaña de enfermedades casos.
de tipo general como: neoplasias, enfermedad de Hodgkin, TRATAMIENTO
los linfomas y trastornos del tejido conectivo, como lupus El tratamiento ideal es la eliminación de la causa
eritematoso sistémico. El trauma emocional puede provo- que produce la urticaria, cuando esta se puede detectar,
car urticaria y/o angioedema, o agravar hacia la forma pero cuando no es posible, ha de recurrirse a los
crónica de esta.
antihistamínicos, tanto sedantes como no sedantes y solo
DIAGNÓSTICO cuando estos no resuelvan los síntomas, entonces se ini-
Como en todo diagnóstico de alergia, son esencia- cia el tratamiento con esteroides orales.
les una meticulosa Historia Clínica y un examen físico Casi siempre el tratamiento se inicia antes de definir
completo. la causa y debe estar orientado al alivio de los síntomas.

ParteXIII. Alergia 1097


Es necesario evitar factores estimulantes no especí- Los inmunocomplejos pueden estar formados por
ficos y por ello, algunas medidas generales son de gran autoantígenos o por antígenos extraños con anticuerpos
ayuda, como empleo de compresas frías, baños tibios, evitar unidos. Las características anatomopatológicas de las
exposición a radiación solar, etc. enfermedades por inmunocomplejos reflejan el sitio (o los
La terapia medicamentosa incluye antihistamínicos sitios) de depósito de inmunocomplejos, y no están deter-
de primera o segunda generación. minadas por la fuente celular del antígeno. Por consiguiente,
En casos refractarios se utilizan esteroides orales y las enfermedades mediadas por inmunocomplejos tienden
de modo muy ocasional simpaticomiméticos (epinefrina a ser sistémicas, con una especificidad escasa o nula de-
1:1 000 en dosis de 0,01 mL/kg de peso, hasta el máximo bido a un antígeno particular localizado en un tejido u ór-
de 0,3 mL. gano determinado.
Si los antihistamínicos H1 no logran el control de los En la mayoría de los casos estos anticuerpos son
síntomas, entonces debe valorarse la adicción de un anta- autoanticuerpos, aunque en algunas ocasiones pueden
gonista H2. producirse contra un antígeno extraño que presenta
Entre los antihistamínicos clásicos el de mayor utili- reactividad cruzada inmunológica con un componente de
dad es la hidroxicina, 3 ó 4 veces al día, y la dosis depen- los tejidos propios.
derá de la intensidad de la urticaria y la tolerancia del
ANTECEDENTES
paciente a la dosis de 1 a 3 mg/kg/día.
En 1911, Clemens Von Pirquet sospechó la exis-
El ketotifeno también ha mostrado utilidad en la te-
tencia de las enfermedades causadas por inmunocom-
rapéutica de la urticaria crónica y en algunos pacientes
plejos (unión de los antígenos con sus respectivos
con urticaria física, que puede ser administrado en las dosis
anticuerpos). En esa época las infecciones diftéricas se
convencionales y por tiempo prolongado. En la urticaria
trataban con suero procedente de caballos, que habían
por frío es especialmente útil la ciproheptadina en dosis
sido inmunizados con la toxina diftérica, proceso que
de 2 a 4 mg cada 8 h.
constituía un ejemplo de inmunización pasiva contra esta
En la urticaria colinérgica, de elección se emplea la
toxina , mediante la transferencia de suero que contenía
hidroxicina, en dosis de 0,5 mg/kg de peso, para la urtica-
anticuerpos antitoxina.
ria solar los filtros solares son de gran utilidad.
Von Pirquet observó que los pacientes a los que se
Cuando los antihistamínicos por sí solos son insufi-
había inyectado suero de caballo con antitoxina desarro-
cientes para controlar los síntomas, entonces se usan los llaban inflamación articular (artritis), exantema y fiebre.
esteroides sistémicos, y es la prednisona o prednisolona Dos características clínicas de esta reacción sugerían
los de primera elección, en dosis de 2 mg/kg/día en días que estas manifestaciones no se debían a la infección ni
alternos durante el menor tiempo posible. a un componente tóxico del propio suero. En primer lu-
Las preparaciones locales de esteroides, gar los síntomas aparecían incluso tras la inyección de
antihistamínicos y otras sustancias no han mostrado ser suero de caballo sin antitoxina, de forma que las lesiones
de utilidad. no podían atribuirse al anticuerpo antidifteria. En segun-
A pesar de todo lo que hoy día se conoce acerca de do lugar, los síntomas aparecían al menos una semana
los mecanismos y causas de la urticaria, así como dispo- después de la primera inyección de suero de caballo, y
ner con mejores métodos diagnósticos y medicamentos, con mayor rapidez tras cada inyección repetida.
en la mayoría de los pacientes con urticaria crónica, esta Von Pirquet llegó a la conclusión de que esta en-
continúa siendo un misterio sin resolver, por lo que el ca- fermedad estaba causada por una reacción del huésped
mino de la investigación en este campo aún es largo. a algún componente del suero de caballo, estos
anticuerpos formaban complejos con las proteínas in-
Enfermedad del suero yectadas, y la enfermedad se debía a los anticuerpos o a
INTRODUCCIÓN los inmunocomplejos. Hoy se sabe que sus conclusiones
El suero es la porción de líquido claro de la sangre eran absolutamente exactas. Denominó a este proceso
que no contiene células sanguíneas, pero sí contiene mu- Trastorno del suero; en la actualidad se le conoce ha-
chas proteínas, como los anticuerpos, los cuales se for- bitualmente como enfermedad del suero, y representa el
man como parte de la respuesta inmunológica que protege prototipo de los trastornos sistémicos mediados por
al organismo contra las infecciones. inmunocomplejos.
Las enfermedades mediadas por anticuerpos se pro- DEFINICIÓN
ducen por complejos antígeno-anticuerpo que se forman Es un grupo de síntomas causados por respuesta
en la circulación y se depositan en las paredes vasculares. inmunológica de hipersensibilidad tipo III ante determinados

1098 Tomo III


medicamentos o antisueros (inmunización pasiva con un antígeno, lo que da lugar a una reacción no controlada,
anticuerpos de un animal u otra persona). no modulada, exagerada (hipersensibilidad) que implica
daño hístico, debido al depósito de estos inmunocomplejos
CAUSA
en los vasos sanguíneos, y activa a las células de la infla-
Se le atribuye a suero procedente de caballos que mación y al complemento.
han sido inmunizados con la toxina diftérica y que poste-
Las inmunoglobulinas poseen la región Fc, la cual
riormente se le inyecta a humanos.
interactúa con el receptor Fc presente en diversas estir-
La exposición a determinados medicamentos (en par-
pes celulares, como es el caso de los leucocitos, entre
ticular la penicilina) puede causar un proceso similar. A di-
ellos el neutrófilo.
ferencia de otras alergias a medicamentos, que se
desarrollan muy rápido cuando se ha recibido el medica- Una vez que los inmunocomplejos se depositan en
mento por segunda vez, la enfermedad del suero puede los vasos sanguíneos, las inmunoglobulinas que forman
desarrollarse entre 7 y 21 días después de la primera expo- parte de estos inmunocomplejos a través de su región Fc,
sición al medicamento. Es posible que las moléculas de los interactúa con el receptor Fc presentes en los leucocitos
medicamentos se combinen con una proteína de la sangre que llegan al lugar de depósito de estos inmunocomplejos.
antes de ser erróneamente identificadas como un antígeno. De esta forma se activa el complemento y los neutrófilos
Los productos sanguíneos pueden inducir también a liberan las enzimas presentes en sus gránulos, así como
la enfermedad del suero. los intermediarios reactivos de oxígeno, por lo que provo-
can vasculitis en el vaso donde ocurrió el depósito.
PATOGENIA
La enfermedad del suero es diferente al shock
El antisuero es una preparación de suero que ha
anafiláctico, el cual tiene una reacción inmediata con sín-
sido extraída de una persona o animal y que ya ha desa-
tomas mucho más severos.
rrollado inmunidad contra un microorganismo en parti-
cular, por lo que contiene anticuerpos contra el mismo. PREVENCIÓN
Se puede aplicar una inyección del antisuero (inmuniza- Nada se conoce para prevenir el desarrollo de la
ción pasiva) cuando una persona ha estado expuesta a enfermedad del suero.
un microorganismo potencialmente peligroso contra el Las personas que han experimentado la enferme-
cual no ha sido inmunizada; esto brinda protección in- dad del suero, un shock anafiláctico o alergia a un medi-
mediata (aunque temporal), mientras la persona desa- camento deben evitar el uso futuro del antisuero o el
rrolla su propia respuesta inmunológica contra la toxina medicamento.
o el microorganismo, como en el caso de los antisueros Se debe limitar el uso de suero de caballos u otros
para la exposición al tétano y la rabia. animales siempre que sea posible.
Hoy día se dispone de inmunoglobulinas de origen
humano para el tratamiento del tétanos y la profilaxis de CUADRO CLÍNICO
la rabia. Se incluyen síntomas como:
La enfermedad del suero es una reacción de hi- • Erupción cutánea.
persensibilidad parecida a una alergia. El sistema • Picazón (prurito).
inmunológico identifica mal una proteína contenida en el • Urticaria.
suero, la confunde con una sustancia potencialmente • Dolor articular.
peligrosa (antígeno) y desarrolla una respuesta inmune • Artritis.
contra el antisuero. Los anticuerpos se unen a la proteí- • Fiebre.
na del antisuero para crear partículas más grandes (com- • Indisposición.
plejos inmunes), los cuales se depositan en diversos • Ganglios linfáticos agrandados.
tejidos, y causa inflamación u otra variedad de síntomas.
Las enfermedades causadas por inmunocomplejos Debido a que el organismo necesita tiempo para pro-
circulantes son producidas por mecanismos de hipersen- ducir anticuerpos para un antígeno nuevo, los síntomas no
sibilidad tipo III, y están mediadas por inmunocomplejos se desarrollan hasta un lapso de 7 a 21 días después de la
de antígenos circulantes y anticuerpos IgG o IgM. El exposición inicial al antisuero.
mecanismo de lesión hística y de enfermedad es el re- Los pacientes pueden desarrollar síntomas entre
clutamiento y activación de leucocitos mediados por el 1 y 3 días si previamente han sido expuestos al agente
complemento y por el receptor de Fc. causal, debido a que ya se encontraban sensibilizados
La enfermedad del suero se produce debido a esta y la respuesta inmune secundaria de memoria es más
reacción, donde el organismo reconoce como extraño a rápida.

ParteXIII. Alergia 1099


DIAGNÓSTICO Los corticosteroides tópicos u otros medicamentos
Un correcto interrogatorio y examen físico ayu- tópicos que proporcionan alivio (aplicados a un área loca-
dan a establecer el diagnóstico. lizada de la piel) pueden aliviar la molestia del prurito y la
El antecedente de exposición a una proteína ex- erupción. Los antihistamínicos pueden acortar la duración
traña debe ser explorado. Se constata una erupción cu- de la enfermedad y ayudan a aliviar la erupción y la pica-
tánea que puede llegar a ser generalizada y que se zón; los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos
acompaña de prurito más o menos intenso. pueden aliviar el dolor articular. En los casos más severos
Las grandes articulaciones (rodillas, codos y tobi- se pueden prescribir corticosteroides sistémicos como la
llos) se encuentran inflamadas, aunque en ocasiones prednisona y en algunos pacientes, los inmunosupresores
se pueden verificar los signos cardinales de la inflama- más potentes (ciclosporina, azatioprina, entre otros).
ción (calor, dolor, rubor, tumor e impotencia funcional) Se debe suspender la administración de los medi-
en las pequeñas articulaciones. camentos causales.
Los ganglios linfáticos pueden agrandarse y pre- En algunos casos se recurre a la plasmaféresis
sentar sensibilidad a la palpación. para remover los inmunocomplejos.
El diagnóstico diferencial debe hacerse con otros Se debe evitar el uso futuro del medicamento o
procesos y enfermedades autoinmunes, como son la
antisuero en cuestión, y a los médicos (como los
fiebre reumática, el lupus eritematoso sistémico y las
odontólogos y personal del hospital) se les debe adver-
reacciones transfusionales.
tir de las alergias a medicamentos antes de tratar al
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS paciente.
La orina puede contener hematuria macroscópica
o microscópica, así como proteinuria. Bibliografía
Los exámenes de sangre pueden indicar vasculitis Colaboración del Dr. Alejandro Aguilar. Oftalmólogo especialista en
o inflamación de los vasos sanguíneos (anticuerpos superficie ocular. Sanatorio Las Lomas. San Isidro, Argentina.
Datos sobre los Ojos. Centro de Oftalmología de la Universidad de
anticitoplasmáticos del neutrófilo, ANCA, positivo).
Illinois en Chicago.
Puede observarse trombocitopenia. http://www.tuotromedico.com/tema/alergia _ocular. php
Se observa elevación de los inmunocomplejos cir- TUOTROMEDICO ALERGIAS: Alergia Ocular. Conjuntivitis
culantes (ICC). Alérgica.
Puede encontrarse positiva la proteína C reactiva, Allergic rhinitis and its impact on asthma ( ARIA 2001). Disponible
en http://www.whiar.com consultado en octubre, 2004.
así como el factor reumatoideo. Fireman P. Otitis media and eustahian tube dysfuntion: connection to
Existe disminución de los niveles séricos de com- allergic rhinitis. J Allergic Clin Immunology 1997; 99: 5787-797.
plemento (C3 y C4). Marshall Plant, Martin D, Valentine D. Allergic Rhiniti. N Engl J
Med 2005; 353: 1934-44.
COMPLICACIONES Möller C, Dreborg S, Ferdousi HA, Halken S, Host S, Jacobsen I et
Una posible complicación es el incremento del ries- al. Pollen immunotherapy reduces the development of asthma
in children with seasonal rhinoconjuntivitis (the PAT-study). J
go de anafilaxia por la exposición futura a la sustancia.
Allergy Clin Immunol 2002; 109:251-6.
Existe la posibilidad de desarrollar neuritis Skoner DP. Allergic rhinitis: definition, epidemiology,
periférica y síndrome de Guillain-Barré. pathophysiology detection and diagnosis. J Allergy Clin
La carditis y glomerulonefritis es rara. Immunol 2001; 108:2-8.
Ghosh S, Ranna AJ, Kauer S. Urticaria in children. Pediatr Dermatol
PRONÓSTICO 1993;10:107.
Los síntomas tienden a desaparecer a los pocos González G, Alcalá G. Urticaria. Alergia e Inmunología. Temas de
Pediatría 1997.
días, ya que la enfermedad es autolimitada. Debe evi-
Miller TP, Zeiss R. Urticaria and angioedema. Allergy Proc 1993;14
tarse en el futuro el antisuero o los medicamentos (2):131.
causales. Vázquez-Nava F. Urticaria crónica. Características, diagnóstico y
Se debe buscar asistencia médica si la persona tratamiento. Rev Alerg Mex 1992;39:46.
ha recibido un medicamento o antisuero durante las Bibliografía
Roitt Iván M. Inmunología: Fundamentos. 9ª ed. Madrid: Editorial
últimas 2 semanas y aparecen síntomas de la enferme- Médica Panamericana;1998:356-58.
dad del suero. Abbas Abul K. Inmunología Celular y Molecular. 4ta. ed. Madrid:
Mc Graw; 2002:421-23.
TRATAMIENTO
Stites Daniel P. Medical Immunology. 9na. ed. Stamford: Mc Graw,
El objetivo del tratamiento es aliviar los síntomas. 1997:419-23.

1100 Tomo III


Hematología

de la gestación a medida que aumenta la formación de


las células hemáticas en la médula ósea.
. Capítulo 82 . En el niño, la médula ósea activa ocupa un espa-
cio relativamente mayor que en el adulto, pero hacia los
4 años un número importante de células adiposas apare-
Hematopoyesis cen en la diáfisis de los huesos largos y progresivamente
Ernesto de la Torre Montejo el tejido adiposo va reemplazando a la médula roja acti-
va, de manera que a los 18 años esta última queda con-
Al proceso de producción de todas las células finada al esternón, vértebras, pelvis, cráneo y la epífisis
hemáticas se le denomina hematopoyesis. Las células proximal del fémur y del húmero.
hemáticas comprenden: los glóbulos rojos, los glóbulos El microambiente en el que las células hematopo-
blancos, (granulocitos, monocitos y linfocitos) y las yéticas progenitoras crecen y se diferencian se denomi-
plaquetas. Los glóbulos rojos tienen la función esencial na estroma y está constituido por macromoléculas
de transportar el oxígeno a los tejidos, también transpor- extracelulares y varios tipos de células: fibroblastos es-
tan gases respiratorios y el dióxido de carbono. Los pecializados, adipocitos, macrófagos, linfocitos y células
granulocitos y monocitos tienen un papel clave en la endoteliales de los capilares y senos (Fig. 82.1).
fagocitosis y los procesos inflamatorios. Los linfocitos Algunas células derivadas de la célula madre (stem
son las células responsables de la inmunidad, protegen cell) hematopoyética, no se encuentran en la sangre sino
de microorganismos patógenos y de la acción de en los tejidos, donde alcanzan los estadios finales de di-
macromoléculas extrañas. Las plaquetas juegan un pa- ferenciación, como son las células dendríticas, entre ellas
pel decisivo en la hemostasia por medio de varios meca- las células de Langerhans, del tejido linfoide y de la piel.
nismos. Para que se produzca el proceso de maduración
Estas células, diferentes en sus formas, estructu- hacia un tipo celular específico son necesarias además
ras y funciones, derivan de una célula común, la célula del microambiente adecuado, un tipo de glicoproteínas,
pluripotencial, capaz de autorrenovarse y dar origen llamadas factores de crecimiento (FC), que son las en-
mediante un proceso de proliferación y maduración a cargadas de regular el proceso mediante el cual las cé-
las células adultas mencionadas. lulas alcanzan su completa madurez. Algunos de estos
Durante el desarrollo fetal, la hematopoyesis pasa FC tienen un potencial multilineal, ya que pueden actuar
por varias etapas. Se inicia entre los 10 y 14 días de la
sobre la célula madre.
gestación, en el saco vitelino. Entre las 6 y 8 semanas de
gestación el hígado reemplaza al saco vitelino como sitio La produción de glóbulos rojos se realiza bajo la
principal de producción de las células hemáticas y se influencia de varios FC, derivados de macrófagos,
convierte en el órgano fundamental de la hematopoyesis. linfocitos y células del estroma, pero ninguno tiene un
Su actividad comienza a disminuir en el segundo trimestre papel más importante que la eritropoyetina (EPO). En el
Fig.82.1 Desarrollo de las células hemáticas.

feto esta glicoproteína se produce inicialmente en el Los factores G-CFS, GM-CFS y CSF-1 no solo estimu-
hígado, pero al final del embarazo el riñón asume esta lan la diferenciación hasta las etapas terminales, sino
función. La EPO se une a receptores específicos en las que también activan la actividad fagocítica en las célu-
células progenitoras eritropoyéticas y estimula su proli- las maduras. El factor G-CSF está localizado en el
feración y maduración hasta llegar al hematíe adulto. El cromosoma 17 y el GM-CSF y la IL-5 en el cromosoma 5.
gen responsable de la producción de EPO está localiza- El transporte de oxígeno a los tejidos se realiza por
do en el cromosoma 7q 11-22. La EPO materna no cru- los glóbulos rojos por medio de la hemoglobina. Esta es
za la barrera placentaria, por lo que carece de influencia una proteína compleja que consta de un grupo hem y
en la producción de glóbulos rojos por el feto. una molécula protéica, la globina, que está formada a su
El factor de maduración que estimula la produc- vez por dos pares de cadenas, cuya estructura varía
ción de plaquetas es la trombopoyetina, cuyo gen está durante los períodos embrionarios, fetal y adulto y dan
localizado en el cromosoma 3q 27-28. lugar a las variantes de hemoglobina embrionaria, fetal y
Los factores de crecimiento que apoyan la dife- adulta respectivamente.
renciación terminal de granulocitos y macrófagos son: Existen 3 variedades de hemoglobinas embrionarias:
GM-CSF que apoya la línea granulocítica y monocítica/ la Gower 1, la Gower 2 y la Pórtland. Las dos
macrófago; G-CSF, CF-1 y IL-5, que apoyan la diferen- hemoglobinas Gower tienen 2 cadenas epsilón (ε), y el
ciación de granulocitos neutrófilos, monocitos/ otro par es zeta (Z) en la Gower 1 y alpha (α) en la
macrófagos y granulocitos eosinófilos respectivamente. Gower 2. La hemoglobina Portland tiene 2 cadenas

1102 Tomo III


epsilón (α ) y 2 cadenas gamma (β). Las hemoglobinas Tabla 82.2. Valores de leucocitos y fórmula leucocitaria
embrionarias desaparecen en el 3er. mes de gestación. Fórmula leucocitaria
La hemoglobina fetal (HbF) está formada por Edad Leucoc Neutróf Linfoc Monoc Eosinóf
2 cadenas α y 2 cadenas γ. Esta hemoglobina predo-
mina a partir de la octava semana de gestación y co- Al nacer 18,1 60 31 6 2
mienza a declinar en el tercer trimestre del embarazo. (9,0-30,0)
1ra. semana 12,2 45 42 9 4
En el momento del nacimiento la HbF representa el 70 % (5,0-21,0)
del total de la hemoglobina, pero su síntesis disminuye 2da. semana 11,4 40 48 9 3
(5,0-21,0)
rápidamente y a los 12 meses constituye menos del 1mes 10,8 35 35 7 3
1% del total. (5,0-19,5)
6 meses 11,9 32 61 5 3
Es importante conocer estas variaciones fisiológi- (6,0-17,5)
cas de la HbF, ya que valores elevados se observan en 1 año 11,4 31 61 5 3
(6,0-17,5)
varias enfermedades genéticas con alteraciones en la 2 años 10,6 30 59 5 3
cadena de la globina. (6,0-17,0)
4 años 9,1 42 50 5 3
La hemoglobina del adulto tiene 2 variantes nor- (5,5-15,5)
males: la A1, que es la predominante y la A2. La A1 está 6 años 8,5 50 42 5 3
(5,0-14,5)
constituida por 2 cadenas beta (β) y dos cadenas alfa 8 años 8,3 55 39 4 2
(α) y la A2 por 2 cadenas delta (δ) y 2 cadenas alfa (4,5-13,5)
10 años 8,1 54 38 4 2
(α). A partir del año de nacido la composición de la (4,5-13,5)
hemoglobina es la siguiente: Hb A, 97 %; Hb A2 2,5 %; 16 años 7,8 57 35 5 3
Hb F menor o igual a 1 %. (4,5-13,0)
Durante la gestación predominan las hemoglobinas
embrionarias y fetal, pero se pueden encontrar peque- Bibliografía
ñas cantidades de hemoglobinas adultas, lo que permite Nathan DG, Oski FA, Hematology of infancy and childhood 6 th
mediante técnicas de biología molecular, el diagnóstico ed WB Sounders Company Philadelphia,2003
prenatal de enfermedades vinculadas a anomalías en la
cadenas y de la globina.
Para el pediatra, es importante conocer las varia-
ciones fisiológicas que se producen en los indicadores . Capítulo 83 .
hematológicos en diferentes edades (Tablas 82.1 y 82.2).
Anemias
Eva Svarch, Andrea F. Menéndez Veitía, Juan Carlos Jaime
Tabla 82.1. Valores hematológicos en el niño en diferentes edades
Sergio Machín y Aramís Núñez Quintana
Edad Hemoglobina Hematócrito
promedio (g/L) promedio (%) GENERALIDADES
Al nacer 190 61 La anemia es la disminución en el número de gló-
1ra. semana 179 56 bulos rojos y de la concentración de hemoglobina por
2da. semana 173 54 debajo de los valores considerados como normales para
1mes 142 43
2 meses 107 31 cada edad y sexo.
3 meses 113 33 Con valores de hemoglobina de más de 70g/L exis-
6 meses 123 36 ten pocas manifestaciones clínicas. Por debajo de este
8 meses 121 36 valor aparece palidez cutaneomucosa. Cuando la ane-
10 meses 119 36
1 año 116 35 mia se instala lentamente pueden existir muy pocos sín-
2 años 117 35 tomas; estos son taquicardia, astenia, disnea de esfuerzo,
4 años 126 37 dilatación cardíaca y en casos severos, insuficiencia
6 años 127 38 cardíaca congestiva.
8 años 129 39
10 y 12 años 130 39
La anemia no es una enfermedad sino una mani-
13-16 años festación de numerosos procesos.
Sexo M 16 47 Son muy importantes para realizar un diagnóstico
Sexo F 14 42 correcto el interrogatorio, el examen físico y el estudio de

Parte XIV. Hematología 1103


epsilón (α ) y 2 cadenas gamma (β). Las hemoglobinas Tabla 82.2. Valores de leucocitos y fórmula leucocitaria
embrionarias desaparecen en el 3er. mes de gestación. Fórmula leucocitaria
La hemoglobina fetal (HbF) está formada por Edad Leucoc Neutróf Linfoc Monoc Eosinóf
2 cadenas α y 2 cadenas γ. Esta hemoglobina predo-
mina a partir de la octava semana de gestación y co- Al nacer 18,1 60 31 6 2
mienza a declinar en el tercer trimestre del embarazo. (9,0-30,0)
1ra. semana 12,2 45 42 9 4
En el momento del nacimiento la HbF representa el 70 % (5,0-21,0)
del total de la hemoglobina, pero su síntesis disminuye 2da. semana 11,4 40 48 9 3
(5,0-21,0)
rápidamente y a los 12 meses constituye menos del 1mes 10,8 35 35 7 3
1% del total. (5,0-19,5)
6 meses 11,9 32 61 5 3
Es importante conocer estas variaciones fisiológi- (6,0-17,5)
cas de la HbF, ya que valores elevados se observan en 1 año 11,4 31 61 5 3
(6,0-17,5)
varias enfermedades genéticas con alteraciones en la 2 años 10,6 30 59 5 3
cadena de la globina. (6,0-17,0)
4 años 9,1 42 50 5 3
La hemoglobina del adulto tiene 2 variantes nor- (5,5-15,5)
males: la A1, que es la predominante y la A2. La A1 está 6 años 8,5 50 42 5 3
(5,0-14,5)
constituida por 2 cadenas beta (β) y dos cadenas alfa 8 años 8,3 55 39 4 2
(α) y la A2 por 2 cadenas delta (δ) y 2 cadenas alfa (4,5-13,5)
10 años 8,1 54 38 4 2
(α). A partir del año de nacido la composición de la (4,5-13,5)
hemoglobina es la siguiente: Hb A, 97 %; Hb A2 2,5 %; 16 años 7,8 57 35 5 3
Hb F menor o igual a 1 %. (4,5-13,0)
Durante la gestación predominan las hemoglobinas
embrionarias y fetal, pero se pueden encontrar peque- Bibliografía
ñas cantidades de hemoglobinas adultas, lo que permite Nathan DG, Oski FA, Hematology of infancy and childhood 6 th
mediante técnicas de biología molecular, el diagnóstico ed WB Sounders Company Philadelphia,2003
prenatal de enfermedades vinculadas a anomalías en la
cadenas y de la globina.
Para el pediatra, es importante conocer las varia-
ciones fisiológicas que se producen en los indicadores . Capítulo 83 .
hematológicos en diferentes edades (Tablas 82.1 y 82.2).
Anemias
Eva Svarch, Andrea F. Menéndez Veitía, Juan Carlos Jaime
Tabla 82.1. Valores hematológicos en el niño en diferentes edades
Sergio Machín y Aramís Núñez Quintana
Edad Hemoglobina Hematócrito
promedio (g/L) promedio (%) GENERALIDADES
Al nacer 190 61 La anemia es la disminución en el número de gló-
1ra. semana 179 56 bulos rojos y de la concentración de hemoglobina por
2da. semana 173 54 debajo de los valores considerados como normales para
1mes 142 43
2 meses 107 31 cada edad y sexo.
3 meses 113 33 Con valores de hemoglobina de más de 70g/L exis-
6 meses 123 36 ten pocas manifestaciones clínicas. Por debajo de este
8 meses 121 36 valor aparece palidez cutaneomucosa. Cuando la ane-
10 meses 119 36
1 año 116 35 mia se instala lentamente pueden existir muy pocos sín-
2 años 117 35 tomas; estos son taquicardia, astenia, disnea de esfuerzo,
4 años 126 37 dilatación cardíaca y en casos severos, insuficiencia
6 años 127 38 cardíaca congestiva.
8 años 129 39
10 y 12 años 130 39
La anemia no es una enfermedad sino una mani-
13-16 años festación de numerosos procesos.
Sexo M 16 47 Son muy importantes para realizar un diagnóstico
Sexo F 14 42 correcto el interrogatorio, el examen físico y el estudio de

Parte XIV. Hematología 1103


la lámina de sangre periférica. Las constantes la producción de hemoglobina por el eritron. Los altos
corpusculares permiten delimitar 3 gupos: las anemias niveles de expresión del receptor de la transferrina 1 ase-
microcíticas hipocrómicas, macrocíticas o megalo-blásticas guran la captación de hierro dentro de ese compartimien-
y las normocíticas. En el primer grupo se encuentran la to. El hierro de la hemoglobina tiene un intercambio
anemia por deficiencia de hierro que es la anemia más substancial ya que los eritrocitos senescentes son
frecuente no solo en los países en vías de desarrollo sino fagocitados por los macrófagos. El hierro extraído de los
también en los desarrollados; las talasemias y la anemia macrófagos es captado primariamente por la ferroportina,
de la infección crónica. En el segundo grupo están la de- la misma proteína que se expresa en el enterocito duodenal.
ficiencia de vitamina B12 y ácido fólico y muy raramente Los hepatocitos almacenan las reservas de hierro y
errores congénitos del metabolismo; y en el tercero las liberan hierro a la circulación por la vía de la ferroportina,
anemias por pérdida aguda de sangre y las anemias que es un factor determinante en la homeostasis del hie-
hemolíticas en las que existe reticulocitosis. La presencia rro. Recientemente, se ha descubierto la hepcidina que
de drepanocitos, esferocitos, o fragmentocitos puede orien- juega un importante papel en el hepatocito para modular
la ferroportina. La hepcidina es un péptido de 25
tar el diagnóstico causal. Si se encuentran alteraciones de
aminoácidos que se ha identificado como la hormona prin-
las plaqueta y/o leucocitos es indispensable realizar el es-
cipal en la modulación de la absoción del hierro. Igual-
tudio de la médula ósea porque puede tratarse de una
mente existen hormonas involucradas en la expresión de
aplasia medular o de una leucemia.
la hepcidina como son la HFE, el receptor de la
transferrina 2 (TFR 2) y la hemojuvelina (HJV) cuyo
ANEMIA POR PRODUCCIÓN INADECUADA mecanismo aún es desconocido.
DE GLÓBULOS ROJOS Cada uno de los factores que intervienen en la ab-
sorción del hierro (hierro almacenado, actividad
Anemia por deficiencia de hierro eritropoyética, nivel de hemoglobina, contenido de oxíge-
La anemia por deficiencia de hierro es la más fre- no y las citocinas inflamatorias), también regulan la ex-
cuente en el lactante y la niñez. Esto se debe a aspectos presión de la hepcidina del hígado. Cuando cada uno de
básicos del metabolismo del hierro y de la nutrición. El esos factores sufren un cambio, la absorción intestinal varía
hierro corporal del recién nacido es de 0,5 g aproximada- inversamente con la expresión hepática de la hepcidina.
mente, mientras que en el adulto es de unos 5 g. Por lo CAUSA
tanto, para superar esa diferencia es necesario la absor- En el niño menor de 3 años de edad la anemia por
ción de 0,8 mg de hierro diarios durante los primeros 15 deficiencia de hierro tiene una alta frecuencia. Esto se
años. Además, se necesitan otras pequeñas cantidades debe a que en este período de la vida los depósitos del
para equilibrar las pérdidas fisiológicas debidas a la des- metal son muy escasos, por lo que el metabolismo del
camación de las células. Para mantener un balance posi- hierro se encuentra en un equilibrio inestable. El recién
tivo en la niñez hay que ingresar 10 mg diarios de hierro. nacido tiene cifras de hemoglobina de 160 a 200 g/L; en
Metabolismo del hierro. La mayor parte del hie- los dos primeros meses de la vida disminuye a cifras entre
rro de la dieta se absorbe en el duodeno (10 % de lo que 110 y 120 g/L. El hierro que se libera del catabolismo de la
se ingiere). El hierro férrico de la dieta se reduce al esta- hemoglobina se deposita fundamentalmente en el hígado,
do ferroso y esto ocurre en el borde en cepillo del
en el bazo y en la médula ósea. La dieta en esos primeros
enterocito por medio de la enzima reductasa férrica
meses de la vida es muy pobre en hierro, por lo que para
duodenal (Dcytb). El hierro ferroso es transportado a tra-
la síntesis de hemoglobina se utiliza el de los depósitos.
vés de la membrana plasmática apical del enterocito por
En un lactante cuyo peso al nacer fue normal, aproxi-
la transportadora metal divalente 1 (DMT 1). Ese hierro
del enterocito puede ser almacenado de forma intracelular madamente a los 6 meses de edad se le ha agotado el
como ferritina y después excretado por las heces cuando hierro de los depósitos. A partir de esa época aparece la
los enterocitos senescentes son eliminados o puede ser anemia si no se aporta suficiente hierro con la dieta.
transferido a través de la membrana basolateral del En el niño, debido al aumento constante del volu-
enterocito al plasma. El hierro es transferido fuera del men sanguíneo, el 30 % del hierro utilizado proviene del
enterocito por la enzima ferroportina basolateral trans- que se ingiere (en el adulto solo el 5 %).
portadora y ese proceso es facilitado por la hefastina, Las causas que precipitan la aparición de la ane-
homóloga de la ceruloplasmina. mia en ese período de la vida son: hemorragias en la
El hierro liberado a la circulación se une a la madre antes o durante el parto, transfusión fetomaterna
transferrina y así es transportado a los diferentes sitios o fetofetal en los gemelos. Estas causas privan al niño
para su utilización y almacenamiento. Su mayor uso es en de cierta cantidad de sangre y, por lo tanto, de hierro.

1104 Tomo III


Cuando se realiza una exanguinotransfusión en el perío- Cuadro 83.1. Causas de anemia ferripriva
do de recién nacido, se intercambia la sangre de una
hemoglobina elevada con otra que tiene una hemoglobi- Niño menor de 3 años
na más baja, por lo que se priva al niño de una cantidad • Prematuridad
de hierro. • Hemorragias en la madre antes o durante el parto
En los prematuros, la anemia por deficiencia de • Transfusión feto-materna
hierro es casi inevitable porque como el peso al nacer es • Transfusión feto-fetal en los gemelos
• Exanguinotransfusión
menor que el del niño normal, también es menor la masa
• Crecimiento rápido en el primer año de vida
total de hemoglobina y la cantidad de hierro y por lo • Ablactación y alimentación inadecuadas
tanto, se acumula menos hierro en los depósitos en los 2
primeros meses de la vida, en el período denominado Niño mayor de 3 años
anemia fisiológica de la infancia. A diferencia del niño • Pérdida crónica de sangre por parasitismo
con peso normal al nacer, la anemia puede aparecer antes o divertículos (divertículo de Meckel)
de los 6 meses de edad y ser más severa. • Crecimiento acelerado en la adolescencia
A todas las causas antes mencionadas se debe • Pérdidas menstruales en las niñas
añadir el crecimiento rápido que aumenta los requeri-
mientos de hierro.
En el niño pequeño desempeña un papel importan- Los requerimientos de hierro son de 1mg/kg/día
te en la causa de la anemia una ablactación y alimenta- desde los 4 meses de edad hasta los 3 años, cuando se
ción deficientes en hierro. trata de un recién nacido a término; de 2 mg/kg/día en el
En el niño mayor, la causa es similar a la del adulto: prematuro desde los 2 meses de edad. El máximo en
alteraciones en la absorción intestinal, pérdida crónica ambos casos es de 15 mg/kg/día.
de sangre por parasitismo (necatoriasis y tricocefaliasis), En los niños de 4 a 10 años es de 10 mg/día y en el
divertículo de Meckel u otras alteraciones. En el niño adolescente, de 18 mg/día.
siempre tiene más importancia que en el adulto el conte- CUADRO CLÍNICO
nido de hierro de la dieta.
En la adolescencia existe un crecimiento acelera- La anemia por deficiencia de hierro es de instala-
do, por lo que es frecuente la deficiencia de hierro en ción lenta por lo que se pueden alcanzar cifras muy ba-
este período de la vida y en las niñas adolescentes se jas de hemoglobina sin manifestaciones clínicas
añaden además los sangramientos por la menstruación importantes. Solo si la anemia es muy severa se consta-
(Cuadro 83.1). ta taquicardia y cardiomegalia.

Cuadro 83.2. Indicadores de las diferentes etapas en la anemia por deficiencia de hierro

Indicadores Etapas
Prelatente latente Manifiesta
Hierro en médula ósea ⇓ Ausente
Ausente
Ferritina ⇓ ⇓⇓ ⇓⇓⇓
Protoporfirina libre - ⇑ ⇑
Hierro sérico N ⇓ ⇓
Capacidad total ± ⇑ ⇑⇑
Índice de saturación N ⇓ ⇓⇓
Volumen corpuscular medio, y N N ⇓
hemoglobina corpuscular media
Hemoglobina N ± ⇓
Clínica - Astenia, adinamia Cuadro más
y otros manifiesto

Parte XIV. Hematología 1105


Existe fatiga, irritabilidad, anorexia, en ocasiones leche materna se absorbe mejor que el de la leche de
pica, somnolencia y signos de mala absorción intestinal. vaca. La ablactación y la alimentación posterior deben
La respuesta inmune y el desarrollo intelectual pue- ser correctas. Los alimentos más ricos en hierro y mejor
den estar afectados. El mecanismo por el cual la defi- absorbibles son la carne de res, carnero, puerco, pollo y
ciencia de hierro daña la función neurológica es pescado. Los frijoles, la miel y otros alimentos contienen
desconocido. Se ha señalado que se relaciona con algu- hierro pero se absorbe poco. Es necesario evitar canti-
nas enzimas del tejido neural que requieren de hierro dades excesivas de leche y papillas.
para su función normal como son los citocromos y la En los prematuros se indica hierro profiláctico des-
monoaminoxidasa.
de los 2 hasta los 6 meses de edad.
También se describen cambios epiteliales, en el
La transfusión de glóbulos rojos a 10 mL/kg de peso
tracto digestivo como glositis, atrofia de las papilas
linguales, sobre todo en las anemias severas. se utiliza solo si existen signos de insuficiencia cardíaca
El examen físico no muestra datos de interés salvo o si la hemoglobina desciende a cifras menores de 40 a
la palidez cutaneomucosa y raramente esplenomegalia 50 g/L. El tratamiento de elección son las sales de hierro
ligera. por vía oral. Existen varios preparados (Tabla 83.1).
Tabla 83.1 Sales de hierro
DIAGNÓSTICO
Existen 3 etapas en la anemia por deficiencia de Sales de hierro Cantidad Porcentaje Cantidad de
hierro: en la primera, hay una disminución del hierro de de sal (%) hierro elemental
los depósitos; en la segunda, disminuye el hierro de la (mg) (mg)
transferrina y en la tercera, aparece la anemia. Gluconato ferroso 300 12 36
En el primer estadio, se agota el hierro de la mé- Sulfato ferroso 300 20 60
dula ósea y por lo tanto, la coloración del azul de prusia Fumarato ferroso 200 33 66
es negativa y la ferritina sérica disminuye (valor nor- Fumarato ferroso 150 49
mal: 16 a 300 μg/L). (suspensión)
En la segunda etapa el hierro sérico (valor normal:
10,7 a 32,2 μmol/L) y el porcentaje de la saturación (va- La dosis es de 6 a 10 mg/kg/día de hierro elemental.
lor normal: 0,16 a 0,60 %) están disminuidos y la capaci- Las dosis tóxicas de hierro son muy variables. La
dad total (valor normal: 50 a 75 μmol/L) está aumentada. intoxicación aguda produce shock con hemorragia
En la tercera, aparecen microcitosis e hipocromía, anemia gastrointestinal. Deben guardarse las tabletas fuera del
y aumento de la protoporfirina eritrocitaria (Cuadro 83.2). alcance de los niños.
Los reticulocitos están normales o disminuidos; los El hierro se comienza a administrar por una terce-
leucocitos y el número de plaquetas son normales, rara- ra o cuarta parte de la dosis total y se aumenta paulati-
mente disminuidos o aumentados. namente porque puede producir gastritis, diarreas o
Las constantes corpusculares VCM, HCM y constipación. Tiñe las heces fecales de negro y puede
CHCM están disminuidas. No es necesario el manchar los dientes. Se administra fuera de las comi-
medulograma, pero cuando se realiza se observa das, pero si hay intolerancia puede darse con los alimentos.
hiperplasia del sistema eritropoyético y la coloración de Si la anemia es severa una o dos semanas después
azul prusia es negativa. del comienzo del tratamiento se produce un aumento de
Diagnóstico diferencial. Se debe realizar con la reticulocitos. La hemoglobina se normaliza en 1 ó 2 me-
talasemia menor en la que existe un aumento de la HbA2 ses. El tratamiento total es de 3 a 4 meses para reponer
y el hierro sérico es normal. La asociación de las 2 en- el hierro de los depósitos. Raramente es necesario utili-
fermedades no es rara. También se debe realizar el diag- zar el hierro intramuscular: hierro dextrana (inferón), solo
nóstico diferencial con la anemia de la infección crónica
cuando se comprueba intolerancia al hierro oral o este
en la que el hierro sérico está bajo, pero la capacidad
no se absorbe. La dosis total se calcula por medio de la
total también.
fórmula:
En la hemosiderosis pulmonar idiopática tiene lu-
Dosis total = 13 - Hb inicial x kg de peso x 10
gar una deficiencia de hierro, pero el diagnóstico se rea-
liza por la presencia de episodios pulmonares agudos a
repetición, acompañados a veces de hemoptisis. Esa cantidad se divide en inyecciones de 50 mg/
cada 4 días. Las inyecciones deben ponerse en zigzag
TRATAMIENTO para no teñir la piel en el sitio de inyección. Se deben
El tratamiento profiláctico consiste en administrar vigilar las posibles reacciones adversas. El hierro
lactancia materna al recién nacido ya que el hierro de la intravenoso no se utiliza en el niño.

1106 Tomo III


Anemias megaloblásticas microorganismos y sus más altas concentraciones se
Son trastornos caracterizados por alteraciones encuentran en el hígado, riñón, carne de res y productos
morfológicas en sangre periférica y en médula ósea, que lácteos (Cuadro 83.4).
son el resultado de la interrupción de la síntesis de ADN, Los requerimientos diarios son de 2 a 3 μg/día. La
mientras se mantiene prácticamente normal la síntesis absorción es activa y pasiva. El proceso activo depende
de RNA y proteínas. Esto provoca una asincronía en la del factor intrínseco y de que exista un sitio receptor
maduración nucleocitoplasmática que afecta a todas las intacto en el íleo. El factor intrínseco es segregado por
células en proliferación fundamentalmente a aquellas de las células parietales del estómago, las mismas que se-
crecimiento rápido. La proliferación y maduración de gregan el ácido clorhídrico.
los precursores hematopoyéticos requieren sustancias El ácido fólico o ácido pteroilglutámico actúa como
que deben ser aportadas al organismo por los alimentos, coenzima en todos los sistemas metabólicos de los ma-
los denominados factores de maduración. Los más im- míferos en los que existe transferencia de unidades de
portantes por su intervención en la síntesis de ADN son un carbono, fundamentalmente en la síntesis de las purinas
la vitamina B12 y el ácido fólico. Su deficiencia determi- y pirimidinas.
na que los precursores hematopoyéticos no consigan al-
Una dieta normal contiene de 1 a 1,2 mg de ácido
canzar un grado suficiente de diferenciación y se
fólico al día.
produzca una hematopoyesis ineficaz. La causa de la
Los alimentos más ricos en ácido fólico son el hí-
anemia megaloblástica es en el 90 % de los casos por
gado de res y de pollo y los vegetales verdes. La leche
deficiencia de ácido fólico o vitamina B12. En los niños
casi siempre ocurre por deficiencia de ácido fólico ya de cabra es muy pobre en ácido fólico.
que el deficiencia de vitamina B12 es excepcional. El ácido fólico se absorbe en el duodeno y primera
Algunas características de la vitamina B12 y el porción del yeyuno y se degrada con la cocción.
ácido fólico. La vitamina B12 es una cianocobalamina Las proteínas transportadoras son los receptores
que interviene en una serie de reacciones por medio de de folatos (FR) y los transportadores (reduced folatos
las cuales el colesterol y algunos ácidos grasos, así como carrier, RFC) (Cuadro 83.4).
ciertos aminoácidos y timina, pueden ser usados como Deficiencia de vitamina B12.
fuentes de energía para la gluconeogénesis por la vía del CAUSA
ciclo de Krebs o para formar ácido aminolevulínico. Las
Puede deberse a:
proteínas transportadoras de la vitamina B12 se mues-
• Defectos en la absorción
tran en el cuadro 83.3. − Anemia perniciosa, fundamentalmente en meno-
res de 10 años (rara).
Cuadro 83.3. Proteínas transportadoras de vitamina B12 − Malabsorción por alteraciones intestinales (ciru-
gías y enterocolitis).
Producción Deficiencia
− Defecto del factor intrínseco.
Factor intrínseco Células parietales Anemia perni- − Síndrome de Imerslund- Gräsbeck.
gástricas ciosa juvenil • Deficiencia en la dieta.
• Por drogas
Transcobalamina 2 Enterocitos, Deficiencia − Neomicina.
macrófagos congénita − Ácido paraminobenzoico.
fibroblastos de TC2
y hepatocitos • Deficiencia enzimática.
• Infección por el VIH con o sin SIDA.
Haptocorreras Granulocitos, Deficiencia CUADRO CLÍNICO
glándulas congénita
salivales Se caracteriza por palidez, fatigabilidad, atrofia de
y células las papilas linguales, glositis recurrente y manifestacio-
endoteliales nes neurológicas: ataxia, parestesias, ausencia de los
reflejos tendinosos, que se producen por degeneración
Receptor TC2 Todas las células axonal de los cordones laterales de la médula espinal.
Los diferentes síndromes clínicos son: la deficien-
Una dieta normal contiene de 3 a 30 μg de vitami- cia dietética que se presenta en lactantes alimentados
na B 12 al día. Es sintetizada exclusivamente por exclusivamente con leche materna de madres con

Parte XIV. Hematología 1107


deficiencia severa; la anemia perniciosa congénita por TRATAMIENTO
deficiencia de factor intrínseco, autosómica recesiva; la En la anemia perniciosa juvenil se administran de
anemia perniciosa juvenil semejante a la del adulto con 500 a 1 000 g de vitamina B12 intramuscular cada uno o
atrofia gástrica, aclorhidia y ausencia del factor intrínse- dos meses durante toda la vida. Si hay manifestaciones
co. Estas enfermedades son raras en la infancia. Otras neurológicas esta misma dosis se administra más fre-
son excepcionales como el síndrome de Imerslund- cuentemente.
Gräsbeck que se debe a un defecto de absorción de la Deficiencia de ácido fólico. La deficiencia de ácido
vitamina B12. fólico en el niño es más frecuente que la de vitamina B12
DATOS DE LABORATORIO CAUSA
La anemia es macrocítica. Los leucocitos y las Puede deberse a:
plaquetas pueden estar disminuidos. Existen siempre en • Defectos en la absorción (diarreas crónicas).
la lámina de sangre periférica: ovalocitos, macrocitos y • Defectos en la dieta (alimentación con leche de ca-
leucocitos hipersegmentados. bra).
La vitamina B12 está disminuida (valor normal: 120 • Drogas: metotrexato, trimetropin, primidona y
a 700 pmol/L). El ácido metilmalónico en orina está au- fenitoína.
mentado. Las constantes corpusculares son macrocíticas. • Deficiencias enzimáticas.
La médula ósea presenta alteraciones morfológicas • Aumento de los requerimientos (lactancia, anemias
en las tres series: megacariopoyética, granulopoyética y hemolíticas, hipertiroidismo).
eritopoyética que constituyen los llamados cambios
CUADRO CLÍNICO
megaloblásticos. El diagnóstico de la anemia perniciosa
juvenil se confirma con la prueba de Schilling que con- La deficiencia de ácido fólico se puede presentar
siste en medir la absorción de vitamina B12 radioactiva en lactantes de 5 a 11 meses de edad y especialmente
con la administración y sin ella de factor intrínseco. en los prematuros.

Cuadro 83.4. Algunas características de la vitamina B12 y el ácido fólico.

Indicadores Vitamina B12 Ácido fólico

Síntesis Bacterias intestinales Bacterias y plantas

Forma natural Metil desoxiadenosil e


hidroxicobalamina Poliglutamatos
Fuentes Vísceras, carnes, pescados, Vegetales, levaduras,
mariscos y yema de huevo viandas, frutas,
legumbres e hígado

Función metabólica Síntesis de metionina. Síntesis de


Metabolismo de los aminoácidos, purinas
propionatos y pirimidinas

Absorción Ileón terminal Yeyuno y duodeno


(factor intrínseco)
Requerimientos
1-5 μg/día
1-2 μg/día (niños) 250 μg/día

Depósitos 2-5 mg 5-15 mg

Pérdidas 1-3 μg/día 5 μg/día


Destrucción Condiciones alcalinas, Calor, álcalis, cocción
pasteurización, altas prolongada y gran
temperaturas en presencia volumen de agua
de vitamina C

1108 Tomo III


Excepto la palidez y a veces una ligera espleno- DATOS DE LABORATORIO
megalia, no existen otras manifestaciones clínicas. Se Los hallazgos hematológicos más característicos
han descrito alteraciones inmunológicas. son la macrocitosis, la reticulocitopenia y la depresión o
DATOS DE LABORATORIO
ausencia del sistema eritropoyético en la médula ósea.
Los leucocitos y plaquetas son generalmente normales,
Las alteraciones en sangre periférica y médula ósea
pero en ocasiones se presenta trombocitosis y más ra-
son semejantes a las que se producen en la deficiencia
ramente neutropenia. La HbF está elevada y se observa
de vitamina B12. El ácido fólico sérico está disminuido
un aumento de la expresión del antígeno. La actividad
(valor normal: 9,1 a 45 nmol/L). El ácido fólico de la adenosindesaminasa eritrocitaria está elevada.
eritrocitario también está disminuido (valor normal: 340
a 1 813 nmol/L). Existe un aumento del ácido TRATAMIENTO

formiminoglutámico en orina. Se administran transfusiones de glóbulos rojos cuan-


do la hemoglobina es inferior a 70 g/L. Los pacientes
TRATAMIENTO
politransfundidos deben recibir tratamiento quelante del
El tratamiento consiste en la administración de áci- hierro con deferoxamina cuando la ferritina se encuen-
do fólico, una dosis de 100 a 200 μg/ día. Sin embargo, tre en valores mayores de 1 500 μg/dL y preferiblemen-
se acostumbra indicar de 1 a 5 mg/día, durante un mes. te en niños mayores de 3 años.
El tratamiento de elección es la prednisona a
Anemia hipoplástica congénita (anemia 40 mg/m2/día hasta que la hemoglobina se estabilice alre-
de Blackfan-Diamond) dedor de 100 g/L, luego se disminuye la dosis lentamente
hasta encontrar la cantidad mínima necesaria para mante-
CUADRO CLÍNICO
ner cifras de hemoglobina aceptables sin requerimientos
Es una aplasia pura de células rojas que se presen- transfusionales. En ocasiones, dosis tan pequeñas como
ta en 2 a 7 por millón de niños nacidos vivos. La edad 2,5 mg dos veces a la semana son suficientes para mante-
media de presentación es de 2 meses. Más del 90 % se ner una eritropoyesis adecuada. Los efectos colaterales
diagnostica antes del año de edad. más frecuentes de la prednisona son: retardo del crecimiento,
El paciente presenta signos de anemia severa: pa- aumento de peso, apariencia cushingoide, osteoporosis,
lidez, letargia, irritabilidad, insuficiencia cardíaca. En el hipertensión arterial, diabetes mellitus y trastornos
gastrointestinales. Entre el 60 y 80 % de los niños res-
40 ó 50 % de los niños existen malformaciones congé-
ponden a los corticoesteroides, pero algunos son depen-
nitas: aplanamiento de la eminencia tenar, anomalías dientes de estos, por lo que solo en el 40 % de los pacientes
del pulgar como pulgar trifalángico, hipogonadismo, baja el esteroide puede mantenerse a dosis bajas. El 20 % logra
talla, malformaciones renales y cardíacas; paladar o la remisión completa y puede suspender el tratamiento. Se
labio hendido; Pterigium coli; hipertelorismo; nariz describen respuestas espontáneas tardías. Se han ensaya-
aplanada y labio superior grueso. Se describe el pelo do otros tratamientos como los andrógenos, la ciclosporina,
de dos colores y una mirada inteligente. La apariencia la ciclofosfamida, la globulina antilinfocítica, altas dosis de
del enfermo puede ser la de un síndrome de Turner o metilpred-nisolona, altas dosis de gammaglobulinas
de Noonan. intravenosas, eritropoyetina e interleucina 3 pero los resul-
Se debe realizar el diagnóstico diferencial con la tados han sido pobres, El trasplante de células progenitoras
eritroblastopenia transitoria de la infancia cuyo cuadro hematopoyéticas se utiliza en los pacientes resistentes a los
clínico y hematológico es muy similar, pero su comienzo esteroides, con una sobrevida del 80 %.
es más tardío, entre 1 y 4 años de edad. Existe depre-
sión del sistema eritropoyético que se recupera espontá-
Eritroblastopenia transitoria
neamente o con prednisona entre 1 y 2 meses. de la infancia
Es la aplasia pura del sistema eritropoyético más
CAUSA frecuente en la infancia. Se presenta en niños con eda-
La mayoría de los casos son esporádicos, aunque des comprendidas entre 1 y 3 años, raramente entre
la presentación familiar puede ocurrir en el 15 % de los 6 meses y un año.
pacientes con un patrón de herencia autosómico domi- Su causa es una supresión inmunológica transitoria
nante o recesivo. Los genes involucrados son: el RPS19 de la eritropoyesis producida probablemente por una in-
(19q1.32) en el 25 % de los casos, el 8p23.2, p22 y otro fección viral.
que aún no se ha identificado. La forma de acción de la La anemia es normocítica, la HbF y la adenosin-
proteína RSP19 se desconoce. desaminasa son normales.

Parte XIV. Hematología 1109


No tiene tratamiento, solo transfusiones de glóbu- tica con agentes citorreductores y radioterapia pueden
los rojos si el descenso de la hemoglobina es muy mar- agravar la anemia.
cado. Entre 1 y 2 meses se produce una recuperación Los distintos mecanismos son los siguientes:
espontánea de la eritropoyesis. • La invasión de microorganismos, la emergencia de
En las anemias hemolíticas crónicas puede ocurrir células malignas o la disrregulación inmune permite
una depresión transitoria de la eritropoyesis causada por la activación de células T (CD3+) y de los monocitos
una infección por el parvovirus B19, dura aproximada- y estos inducen los mecanismos efectores inmunes
mente de 10 a 15 días y es conocida como dosis aplástica, que producen citocinas: interferón γ (de las células
generalmente requiere una transfusión. T) FNTα, IL6, IL 10 (de los monocitos y
macrófagos).
Anemia de las enfermedades crónicas • La IL-6 y los polisacáridos estimulan la expresión
La anemia de las enfermedades crónicas es la se- hepática de la hepcidina, la cual inhibe la absorción
gunda más frecuente después de la deficiencia de hie- duodenal del hierro.
rro. Se conoce también como anemia de la inflamación. • El interferón γ, y los polisacáridos aumentan la ex-
Las causas más frecuentes son: presión de la enzima transportadora metal divalente
• Infecciones agudas o crónicas: 1 en los macrófagos, estimulan la captación del ión
− Virales. ferroso (Fe 2+ ) disminuyen la expresión de la
− Bacterianas. ferroportina 1 transportadora de hierro e inhiben la
− Parasitarias. salida de hierro de los macrófagos, proceso que es
− Micóticas. también afectado por la hepcidina. Al mismo tiempo,
• Enfermedades hematológicas malignas y tumores el FNT α, la IL-1, IL-6 y la IL-10 inducen la expre-
sólidos sión de la ferritina y estimulan el depósito y retención
• Procesos autoinmunes de hierro dentro de los macrófagos. En resumen, esos
− Artritis reumatoide. mecanismos dan paso a una disminución de la con-
− Lupus eritematoso diseminado y otras enfermeda- centración de hierro en la circulación y por lo tanto a
des del tejido conectivo. una limitada disponibilidad de hierro en las células
− Vasculitis. eritroides.
− Enfermedades inflamatorias digestivas. • El FNTα y el IFγ inhiben la producción de eritropo-
− Sarcoidosis. yetina en el riñón.
− Enfermedad injerto contra huésped crónica. • El FNTα, el interferón γ y la IL-1 inhiben directa-
− Enfermedad renal crónica. mente la diferenciación y proliferación de las células
− Fisiopatología progenitoras eritroides. Además, la limitada disponi-
• Procesos inmunes: bilidad del hierro y la disminución de la actividad bio-
− Interleucina (IL) y factor de necrosis tumoral (FNT) lógica de la eritropoyetina dan paso a la inhibición de
la eritropoyesis y al desarrollo de la anemia.
− Citoquinas (IL-1 y FNT) y células del sistema
reticuloendotelial inducen cambios en la
La anemia de las enfermedades renales crónicas
homeostasis del hierro.
posee algunas características de la anemia de las en-
− Alteraciones de la proliferación de las células
fermedades crónicas, aunque la disminución de la
progenitoras eritroides (eritropoyesis ineficaz).
producción de eritropoyetina, que ocurre en la insufi-
− Disminución de la vida media eritrocitaria.
ciencia renal y los efectos antiproliferativos de la acu-
− Disminución de la producción de eritropoyetina.
mulación de toxinas urémicas contribuyen a agravar la
anemia.
La eritropoyesis puede ser afectada también por la
infiltración de células del tumor en la médula ósea o por DATOS DE LABORATORIO
microorganismos como se ve en la infección por el virus de • Anemia normocítica normocrómica, habitualmente
la inmunodeficiencia humana (VIH), hepatitis C y malaria. ligera o moderada.
Las células tumorales pueden producir citocinas • Recuento de reticulocitos bajo.
inflamatorias y radicales libres que dañan las células • Concentración de hierro sérico bajo.
progenitoras eritroides. Los sangramientos, las deficien- • Saturación de la transferrina baja.
cias de vitaminas (B12 y ácido fólico), el hiperesplenismo, • Nivel de transferrina normal o disminuido.
la hemólisis autoinmune, la disfunción renal y la terapéu- • Ferritina normal o aumentada (Cuadro 83.5).

1110 Tomo III


Cuadro 83.5. Diferencias entre la anemia de las enfermedades crónicas y la anemia ferripriva

Indicadores Anemia de las Anemia


enfermedades crónicas ferripriva

Grado de anemia Ligera a moderada Variable


Volumen corpuscular medio Normal o aumentado Disminuido
Hierro sérico Disminuido Disminuido
Índice de saturación Disminuido Muy disminuido
Ferritina sérica Normal o aumentada Disminuida
Transferrina Normal o disminuida Aumentada
Recuento de reticulocitos Normal o disminuido Disminuido
Nivel de citoquinas Aumentado Normal

TRATAMIENTO CUADRO CLÍNICO


• Tratamiento de la enfermedad de base. La edad en el momento del diagnóstico puede va-
• Transfusiones: según el nivel de hemoglobina y la riar y depende de la severidad neonatal del proceso. Las
condición clínica del paciente. formas más graves se diagnostican en el período y re-
• La eritropoyetina: puede ser efectiva en pacientes quieren un intenso tratamiento transfusional. La forma
con cáncer que reciben quimioterapia, en la insufi- clínica más común es de intensidad moderada y suele
ciencia renal crónica y en pacientes con infección manifestarse en la infancia y adolescencia o incluso más
por VIH. tarde. La anemia es moderada, alrededor del 90 g/L,
acompañada de ictericia intermitente, esplenomegalia y
Anemias diseritropoyéticas congénitas en ocasiones hepatomegalia.
El término anemia diseritropoyética congénita Se describen diversas malformaciones congénitas:
(ADC) fue propuesto por Wendt y Heimpel en 1967, baja estatura, sindactilia, hipoplasia o pérdida de algunas
para designar un grupo de trastornos hereditarios en los uñas o de falanges distales en dedos de las manos o
que la eritropoyesis se encuentra alterada tanto cuanti-
pies, metatarsianos adicionales, pie zambo, hoyuelo sa-
tativa como cualitativamente. Es una anemia heredita-
cro, ojos almendrados muy azules, hipertelorismo, puen-
ria, refractaria, de grado variable, caracterizada por
eritropoyesis ineficaz, alteraciones morfológicas de los te nasal amplio y pelo rubio.
eritroblastos que afectan fundamentalmente al núcleo DATOS DE LABORATORIO
(multinuclearidad), disminución de la vida media de los La cifra de hemoglobina es variable. La lámina de
eritrocitos, esplenomegalia y aumento ligero de la sangre periférica muestra macrocitosis y presencia de
bilirrubina indirecta en el suero. anomalías morfológicas eritrocitarias como anisocitosis,
A la fisiopatología de la anemia en la ADC contri- con predominio de eliptocitos y dacriocitos. Puede
buyen, por lo tanto, el defecto en la formación de eritrocitos
observarse punteado basófilo y anillos de Cabot como
por su destrucción intramedular (eritropoyesis ineficaz) y
consecuencia del trastorno madurativo. El recuento de
su mayor destrucción en la sangre periférica, fenómenos
reticulocitos está, por lo general, normal o disminuido.
que han sido demostrados por estudios eritrocinéticos.
Clasificación de las ADC. Se clasifican en 3 Existe un aumento de la bilirrubina sérica de tipo
grandes grupos: ADC tipo I, ADC tipo II y ADC tipo III. indirecto y descenso de la haptoglobina.
En los últimos años se han descrito nuevas formas de Al microscopio óptico la médula ósea muestra
ADC basadas en el análisis exhaustivo de sus aspectos hiperplasia eritroide y elementos displásticos en los
morfológicos pero cuya documentación y clasificación eritroblastos, con frecuente precipitado citoplasmático,
son aún imprecisas: ADC tipo IV, V,VI, y VII. algunos núcleos son irregulares y con cariorrexis. Se ob-
serva también un número elevado de eritroblastos
Anemia diseritropoyética congénita de tipo I binucleados, más raramente los eritroblastos pueden te-
La ADC tipo I, es una enfermedad autosómica ner 3 y hasta 4 núcleos y estar conectados por puentes
recesiva, rara. La mayoría de los casos se originan en internucleares. Son características las largas hebras de
países europeos. cromatina que en ocasiones unen núcleos de células

Parte XIV. Hematología 1111


separadas. La microscopia electrónica revela conden- aloanticuerpo presente en 30 % de sueros normales. Por
sación esponjosa de la cromatina, en queso suizo. Se ha ello, la prueba de la hemólisis en medio ácido (prueba de
descrito aumento de la hemoglobina A2 como en la ß- Ham-Dacie), resulta útil en el diagnóstico siempre que
talasemia, probablemente de origen secundario. se emplee suero heterólogo. El anticuerpo anti-i presen-
te en el suero heterólogo reconoce un antígeno de la
GENÉTICA
membrana eritrocitaria que aparece como consecuen-
El gen responsable se ha identificado recientemente cia del trastorno de la glicosilación propio de la ADC II.
en homocigotos de origen beduino. Este gen llamado El examen de la médula ósea muestra una
CDAN1, está situado en el cromosoma 15 (q15.1- q15.3), hiperplasia eritroide con presencia de eritroblastos
muy próximo al EPB42 (15q15 - q21), un gen eritroide binucleados y sobre todo multinucleados. Al microsco-
que codifica para la proteína 4.2 cuya ausencia produce pio electrónico, la característica más llamativa y especí-
una variedad rara de esferocitosis hereditaria. Más alejado fica es la presencia de imágenes vesiculares alargadas,
se encuentra el gen CDAN3, responsable de la ADC III. situadas paralelamente a la membrana plasmática que
Los pacientes beduinos con ADC I presentan 8 haplotipos se conocen como doble membrana.
diferentes y se estima que la mutación involucrada debe La electroforesis de las proteínas de la membrana
tener unos 400 años de antigüedad. eritrocitaria muestra modificaciones en su composición
EVOLUCIÓN proteica. Esto favorece la fagocitosis de los eritrocitos
Se ve agravada por la sobrecarga de hierro (cirrosis en el bazo y explica el efecto beneficioso de la
hepática, pigmentación cutánea, disfunción endocrina y esplenectomía en algunos pacientes.
en su forma más grave insuficiencia cardíaca congestiva) GENÉTICA
y las complicaciones biliares (obstrucción biliar, El gen de la ADC II, denominado CDAN2, se ha
pancreatitis y perforación con peritonitis biliar). localizado en el cromosoma 20 (20q11.2), aunque en el
10 % de los pacientes no parece ser esta la localización,
Anemia diseritropoyética congénita de tipo II lo que sugiere que existe al menos otro locus genético
Tipo de herencia e incidencia. Es la forma más para el CDAN2.
frecuente de ADC y se hereda con carácter autosómico
recesivo, los heterocigotos son sintomáticos. En su ma- Anemia diseritropoyética congénita de tipo III
yoría se describen en el sur de Italia.
ADC III es la más rara de las 3 formas clásicas de
CUADRO CLÍNICO estas anemias. La mayoría de los pacientes estudiados
El diagnóstico puede ser en el período neonatal, pertenecen a familias de las que la mejor conocida es la
durante la lactancia, en la infancia o al inicio de la edad sueca llamada Vasterbotten. En todos los casos familia-
adulta. Los principales hallazgos clínicos son anemia, res estudiados el patrón de herencia es autosómico do-
ictericia y esplenomegalia con o sin hepatomegalia. La minante, aunque se han publicado también casos
gravedad de la anemia es variable y se debe al efecto
esporádicos.
combinado de la eritropoyesis ineficaz y de la
hemólisis. Muy rara vez se encuentran manifestacio- Clínicamente, la ADC familiar es bien tolerada y
nes de hemólisis grave como prominencia frontal o suele cursar con astenia moderada, discreta ictericia y
parietal y retraso mental. esplenomegalia variable. La hemoglobina se encuentra
disminuida, pero nunca existen requerimientos
DATOS DE LABORATORIO
transfusionales. La anemia generalmente normocítica,
Los valores de hemoglobina son por lo general acep-
se debe a eritropoyesis ineficaz y a cierto grado de
tables, pero pueden disminuir en el curso de las infeccio-
hemólisis intravascular, acompañada de hemosiderinuria.
nes. Los reticulocitos están normales o disminuidos y la
morfología eritrocitaria muestra anisopoiquilocitosis con A diferencia de otras formas de la ADC, en esta no se
punteado basófilo. La concentración de bilirrubina y la suele observar sobrecarga de hierro. El recuento de
actividad de la LDH sérica están elevadas y la reticulocitos es normal o está disminuido. La lámina de
haptoglobina disminuida. La fragilidad osmótica de los sangre periférica muestra anisocitosis y punteado
eritrocitos está aumentada en un elevado número de basófilo. La médula ósea pone en evidencia hiperplasia
pacientes. Los eritrocitos de la ADC II presentan una eritroide, a veces con eritroblastos gigantes multi-
mayor aglutinación frente a los anticuerpos anti-i y cuando nucleados. Se ha descrito asociación con anomalías vi-
se incuban en suero acidificado, hemolizan por un suales con degeneración macular y vascular y gammapatía

1112 Tomo III


monoclonal. En ocasiones, las formas esporádicas pueden se conoce, pero se ha demostrado que las células en
mostrar signos distintivos como facie mongoloide, transformación linfoblastoide procedentes de pacientes
turricefalia, cráneo en cepillo y retraso mental. con ADC I liberan menos interferón a que las células
El gen responsable de la ADC III denominado normales.
CDAN3 se encuentra en el cromosoma 15 (15q21-q25).
Otras anemias diseritropoyéticas congénitas ANEMIAS HEMOLÍTICAS
• ADC IV: La hemólisis se caracteriza por la destrucción ace-
− Anemia grave, que requiere de transfusiones. lerada de los glóbulos rojos. Si la velocidad de destruc-
− Hiperplasia eritroide con ligero aumento de ción excede la capacidad de la médula ósea para
eritroblastos. producirlos aparece la anemia. La sobrevida normal del
− Ausencia de precipitado proteico dentro de los eritrocito es de 110 a 120 días (vida media de 55 a 60 días).
eritroblastos. En la anemia hemolítica existen reticulocitosis y aumen-
• ADC V: to de la bilirrubina indirecta.
− Hemoglobina normal o casi normal.
− VCM normal o ligeramente elevado.
Intracorpusculares
− Hiperbilirrubinemia no conjugada.
Anemias por alteraciones de la membrana
− Hiperplasia eritroide normoblástica sin displasia.
eritrocitaria
• ADC VI:
− Hemoglobina normal o casi normal. La membrana del glóbulo rojo es la responsable
− Macrocitosis. de las propiedades mecánicas y de la mayoría de las
funciones fisiológicas de la célula. Está formada por
− Hiperplasia megaloblástica.
una bicapa lipídica constituida en el 80% por
• ADC VII:
fosfolípidos y colesterol y en menor medida, por
− Anemia grave que requiere transfusiones.
glicolípidos y aminofosfolípidos. Entre las proteínas
− Hiperplasia eritroide con anomalía de los núcleos más importantes se destacan la espectrina (Sp), la
de los eritroblastos. ankirina (bandas 2.1, 2.2, 2.3 y 2.6), las bandas 4.1,
− Inclusiones intraeritroblásticas (cadena α y ß 4.2, 4.9, la aducina, la tropomiosina y la banda 7. Otras
de la globina). proteínas se disponen en la cara exterior de la bicapa
TRATAMIENTO
lipídica y ellas son fundamentalmente antígenos de
grupos sanguíneos.
No existe un tratamiento específico para la ADC,
Las interacciones entre las proteínas determinan-
excepto el interferón α para la ADC I.
tes de la integridad de la membrana eritrocitaria son de
Aunque muchas veces son necesarias las transfu-
dos tipos: verticales y horizontales. Las verticales son
siones, estas se deben evitar siempre que sea posible
las que fijan el esqueleto a la doble capa lipídica. Las
para reducir la sobrecarga de hierro. En pacientes con horizontales son las responsables de la estabilidad global
ADC II grave se han publicado resultados parciales con del esqueleto.
la esplenectomía, debido a su componente hemolítico. Los defectos en algunas de estas proteínas dan lu-
Está indicada además la colecistectomía, pues reduce la gar a trastornos clínicos en los cuales está involucrada
mortalidad por complicaciones biliares. Debe evitarse la estabilidad del glóbulo rojo. Entre ellos los más fre-
en lo posible la administración de hierro sobre todo en la cuentes y mejor estudiados son la esferocitosis y la
ADC I y II. eliptocitosis hereditaria.
La eritropoyetina humana recombinante no ha re- Esferocitosis hereditaria. La esferocitosis he-
sultado efectiva. Se ha demostrado la respuesta al reditaria (EH) es una entidad caracterizada por anemia
interferón α en pacientes con ADC I con aumento de la hemolítica de severidad variable, con presencia de
hemoglobina de forma progresiva y desaparición de los esferocitos en sangre periférica y una respuesta favora-
requerimientos transfusionales. Este hallazgo fue casual ble a la esplenectomía. Es una de las anemias hemolíticas
en una paciente con ADC I y hepatitis C. El interferón más frecuente en el mundo. Se ha señalado una preva-
produjo disminución de la eritropoyesis ineficaz y des- lencia de 1:2 000 en algunos países europeos.
aparición de las alteraciones celulares en la microscopia Se transmite con un patrón autosómico dominan-
electrónica. El mecanismo de acción del interferón no te en el 75 % de los pacientes, el 25 % restante tiene un

Parte XIV. Hematología 1113


patrón autosómico recesivo o se debe a nuevas mu- caracteriza por la presencia de esferocitos en la lámina
taciones de sangre periférica. Por otra parte los hallazgos
morfológicos encontrados son los mismos que en otros
FISIOPATOLOGÍA
procesos hemolíticos: cifras elevadas de reticulocitos,
Existe una alteración en las interacciones vertica-
aumento de la bilirrubina indirecta y una elevada excre-
les entre la espectrina y la proteína 4.1. También hay
ción de urobilinógeno.
una disminución de los niveles de espectrina y un defecto
de esta proteína. Se ha observado un defecto de la La prueba más utilizada para el diagnóstico de la
ankirina. EH es la fragilidad o resistencia osmótica del glóbulo
La lesión en la membrana es consecuencia de una rojo. Debido a que los esferocitos tienen una relación
disminución del área de la célula, debida a una pérdida superficie/volumen disminuida, tienen una capacidad dis-
de las microvesículas o a una contracción de la superfi- minuida para aumentar su volumen y se destruyen con
cie de la membrana. La concentración de fosfolípidos y más facilidad que las células normales. Otras pruebas
colesterol es del 15 al 20 % menor de lo normal. útiles son la del glicerol y la prueba rosa.
Se produce una disminución de la relación superfi- La fijación con glutaraldehído es útil para detectar
cie/volumen, la célula se vuelve más esférica, es menos la presencia de esferocitos.
deformable y esto hace que sea un obstáculo para su El análisis de las proteínas de la membrana
paso por los sinusoides esplénicos, donde se destruye. eritrocitaria se utiliza para cuantificar las proteínas con
CUADRO CLÍNICO migración anormal y el estudio molecular ha permitido
Existen cuatro formas según la severidad clínica, identificar un número importante de mutaciones en dife-
las cifras de hemoglobina, los niveles de bilirrubina y los rentes proteínas de la membrana eritrocitaria.
reticulocitos: COMPLICACIONES
• Portador asintomático: son los padres de un paciente Los complicaciones son: crisis hemolíticas asocia-
afectado que no presentan ninguna alteración. En das a infecciones virales con aumento de la reticulo-
ocasiones la afectación es muy leve, con ligero au- citosis, ictericia y esplenomegalia. En ocasiones es
mento de las cifras de reticulocitos y escasos necesaria la transfusión de glóbulos rojos.
esferocitos. La crisis aplástica debida a la infección por el
• Esferocitosis hereditaria ligera: comprende entre el parvovirus B19, es una complicación más importante con
20 y 30 % de todos los pacientes con esferocitosis disminución marcada de la hemoglobina y reticulo-
hereditaria autosómica dominante, que en general pre- citopenia.
sentan una hemólisis ligera compensada. Frecuente- La litiasis vesicular, es más frecuente en el adulto,
mente son asintomáticos y difíciles de diagnosticar. aunque se ha observado en todas las edades.
La anemia y la esplenomegalia son muy ligeras o Otras complicaciones son: úlceras en miembros
están ausentes. inferiores y retraso en el crecimiento y en el desarrollo
• Esferocitosis hereditaria típica: entre el 50 y 60 % de sexual, debidas posiblemente a la anemia crónica.
los pacientes con esferocitosis hereditaria autosómica
dominante tienen esta variedad. Presentan anemia TRATAMIENTO

de ligera a moderada, íctericia más común en los ni- Se debe realizar un seguimiento y evaluación clíni-
ños y esplenomegalia en alrededor del 50 %. En ge- ca y de laboratorio en cada consulta. A todos los pacien-
neral no es necesario utilizar transfusiones. tes se les prescribe ácido fólico de forma profiláctica.
• Esferocitosis hereditaria severa: estos pacientes evo- La esplenectomía es el tratamiento de elección, ya
lucionan con una hemólisis severa y presentan re- que es el más efectivo en el control de la anemia, aun-
querimientos transfusionales frecuentes. La mayoría que la sobrevida de los glóbulos rojos permanece acor-
tada y los esferocitos no desaparecen. Está indicada en
tienen una forma autosómica recesiva de la enfer-
pacientes con anemia hemolítica severa, en aquellos con
medad y representan del 5 al 10 %. La esplenectomía
una esplenomegalia importante y en los que presentan
es el tratamiento de elección en esta forma clínica. litiasis vesicular. La esplenectomía se debe realizar, si
Generalmente la enfermedad se diagnostica al naci- es posible, despúes de los 5 años. En los menores de
miento por ictericia y hemólisis. esta edad el peligro de sepsis fulminante posesplenec-
tomía es mayor. La esplenectomía parcial se ha practi-
DATOS DE LABORATORIO
cado con éxito y reduce este riesgo. Se debe realizar
La anemia generalmente es normocítica, tratamiento antibiótico profiláctico con penicilina
normocrómica, con VCM, normal o disminuido y se durante por lo menos 3 años posteriores a la operación.

1114 Tomo III


Eliptocitosis hereditaria. La eliptocitosis here- • Eliptocitosis hereditaria con hemólisis crónica: exis-
ditaria comprende un grupo de alteraciones heredita- ten pacientes con eliptocitosis hereditaria asociada a
rias, diferentes desde los puntos de vistas clínico, genético hemólisis moderada o severa, que requieren
y bioquímico, que tienen en común la presencia en san- esplenectomía y otros que tienen un cuadro clínico
gre periférica de eritrocitos elípticos (eliptocitos). ligero.
Según la morfología del hematíe se divide en 3 • Piropoiquilocitosis hereditaria (PPH): esta alteración
grupos: autosómica recesiva, se caracteriza por anemia
• La eliptocitosis hereditaria común, la más frecuente, hemolítica severa con micropoiquilocitosis y
caracterizada por eliptocitos discoides. microesferocitosis. Los sujetos con PPH son
• La eliptocitosis hereditaria esferocítica (ovalocítica). heterocigóticos para la mutación de la a espectrina.
• La eliptocitosis hereditaria estomatocítica, también Esta entidad es más frecuente en la raza negra y no
llamada del sudeste asiático. se sabe con seguridad si representa una forma de
eliptocitosis hereditaria o una alteración diferente. En
PATOGENIA
muchos casos uno de los padres tiene una eliptocitosis
La forma del hematíe se debe a alteraciones de la
hereditaria ligera.
espectrina y el defecto más común es la mutación de la
α o ß espectrina en la unión de ambas cadenas. Tam- DATOS DE LABORATORIO
bién se describe la deficiencia o disfunción de la proteí- Se observan abundantes eliptocitos en la lámina de
na 4.1, así como la ausencia de la glicoforina C. Todas sangre periférica. La resistencia osmótica está dismi-
estas alteraciones disminuyen la integridad bidimensional nuida. La electroforesis de la membrana revela la anor-
del esqueleto de la membrana del eritrocito y estos de- malidad de las proteínas.
fectos hacen a la membrana inestable lo que produce su El diagnóstico se realiza a través de la prueba de
fragmentación cuando los glóbulos rojos son sometidos inestabilidad térmica: el eritrocito normal se fragmenta a
al estrés de la circulación. temperaturas de 49 a 50 °C y en la PPH se fragmenta a
Esta entidad es más frecuente en pacientes de la las temperaturas de 45 a 46 °C.
raza negra y fundamentalmente en el África ecuato- El diagnóstico diferencial se debe realizar con el
rial. Tanto la eliptocitosis hereditaria común como la deficiencia de hierro, las talasemias, la anemia
ovalocitosis del sudeste asiático se trasmiten con carác- megaloblástica, la mielofibrosis y la deficiencia de
ter autosómico dominante. piruvato kinasa.
CUADRO CLÍNICO TRATAMIENTO
Existen diferentes formas clínicas entre las que se La forma ligera no requiere tratamiento. En los
encuentran: pacientes con hemólisis moderada o severa, la
• Estado de portador asintomático: solo la detección esplenectomía mejora el cuadro clínico y disminuye la
bioquímica del defecto de la membrana ha podido necesidad de transfusiones de glóbulos. Todos los pa-
identificar muchos individuos con esta patología, los cientes deben recibir siempre ácido fólico.
cuales son con frecuencia padres o familiares de pa-
cientes con piropoiquilocitosis hereditaria y en oca- Hemoglobinopatías
siones con eliptocitosis hereditaria. Las complicaciones que puede presentar la hemo-
• Eliptocitosis hereditaria ligera: los pacientes son
globina pueden ser diversas.
asintomáticos y un examen de rutina detecta la alte-
La drepanocitosis. Estructura y función de la he-
ración. A pesar de que no presentan síntomas, pue-
den tener evidencias de hemólisis en los exámenes moglobina: La hemoglobina es una proteína constituida
de laboratorio. por dos pares de cadenas polipeptídicas diferentes, dos
• Eliptocitosis hereditaria con hemólisis esporádica: se y dos cada una de las cuales se une al grupo hem.
presenta cuando se produce algún estrés, como in- Los genes de las cadenas están situados en el
fecciones, deficiencia de vitamina B12 o embarazo. cromosoma 16 y los de las cadenas en el 11.
• Eliptocitosis hereditaria con poiquilocitosis infantil: los Después del nacimiento predomina la Hb F que
portadores del gen de la eliptocitosis hereditaria, en disminuye rápidamente y en el niño de alrededor de 1
ocasiones tienen anemia hemolítica severa con año la composición de la hemoglobina es aproximada-
eliptocitos y poiquilocitos. En el segundo año de vida mente: Hb A: 97 %, Hb A2: 2,5 % y Hb F: < 1 %.
la hemólisis disminuye y el cuadro clínico se trans- Las alteraciones de la hemoglobina pueden ser es-
forma en una eliptocitosis hereditaria ligera. tructurales y consisten frecuentemente en la sustitución

Parte XIV. Hematología 1115


de un aminoácido por otro en la cadena polipeptídica disminuye aparecen la anemia y la reticulocitosis, alre-
como es el caso de la Hb S en la que el ácido glutámico dedor de los 3 meses de edad y después de los 6 meses
es sustituido por la valina y la Hb C en la que el ácido se pueden presentar manifestaciones clínicas. Una
glutámico es sustituido por la lisina. Otras alteraciones manifestación precoz y casi patognomónica es la dactilitis
son cuantitativas como ocurre con las talasemias. o síndrome mano-pie que consiste en dolor y signos
La drepanocitosis comprende a un grupo de ane- inflamatorios del dorso de las manos y pies que puede
mias hemolíticas congénitas las más frecuentes de las
afectar uno o todos los sitios (Fig.83.1). La repetición de
cuales son la anemia drepanocítica (AD) homocigótica
esta crisis puede dejarse como secuela el acortamiento
para la Hbs (SS), la hemoglobinopatía SC y las Sβ
talasemias que pueden ser Sβ+ o Sβ0. de los dedos (Fig.83.2).
Anemia drepanocítica. Es la anemia hemolítica
congénita frecuente en el mundo. El gen de las cadenas
s se encuentra con gran frecuencia en zonas en las que
el paludismo por Plasmodium falciparum es endémico:
muchas regiones de África, el área mediterránea, algu-
nas zonas de Turquía, el Oriente medio y la India. Tam-
bién es frecuente en los países de América en los que se
practicó el comercio de esclavos. El gen de la Hb S se
ha perpetuado porque el rasgo drepanocítico (AS o por-
tador) es resistente al paludismo cerebral fenómeno que
se denomina polimorfismo balanceado.
FISIOPATOLOGÍA
La Hb S polimeriza en condiciones de baja tensión
de oxígeno, distorsiona al hematíe en su forma clásica de
drepanocito. Esta célula tiene una sobrevida menor lo que
ocasiona la anemia hemolítica y es más rígida, por lo que Fig. 83.1. Acortamiento de los dedos secuela de crisis
mano- pie repetidos.
ocluye, en general la microcirculación, pero en ocasio-
nes puede ocluir vasos grandes. Este cuadro aparente-
mente simple es en realidad muy complejo. El evento
desencadenante es la polimerización de la Hb S en condi-
ciones de baja tensión de oxígeno, pero en la oclusión
vascular participan factores dependientes del glóbulo rojo
como la CHCM y el porcentaje de Hb F, el mecanismo de
transporte de cationes que conduce a la deshidratación
por pérdida de K y agua y la adhesión de los hematíes al
endotelio capilar en la que participan varias moléculas de
adhesión. También existe un tono vasomotor anormal que
favorece la vasoconstricción. Se produce secundariamente
una activación de la coagulación con formación de
trombina proadhesiva. Alteraciones cuantitativas y cuali-
tativas de los leucocitos juegan un papel importante. La
leucocitosis se relaciona de manera directa con la
morbilidad y también con la mortalidad. En la actualidad, Fig. 83.2. Crisis mano-pie.
se plantea que la oclusión microvascular es una forma de
injuria de reperfusión en la que el consumo de óxido nítri- Las manifestaciones clínicas dependen de la
co (potente vasodilatador) y la generación de radicales hemólisis y de la obstrucción vascular; las primeras son
libres activan la respuesta inflamatoria sistémica y llevan la anemia crónica, la ictericia y el retraso del crecimien-
al daño crónico de los órganos. to y maduración sexual. También en relación con la
CUADRO CLÍNICO hemólisis crónica es frecuente la litiasis vesicular. La
Las manifestaciones clínicas no son evidentes al infección por parvovirus B 19 conduce a la crisis aplástica
nacimiento por el elevado porcentaje de Hb F que difi- con disminución casi siempre severa de la hemoglobina
culta la polimerización de la Hb S. A medida que la Hb F que requiere transfusión y deja inmunidad permanente.

1116 Tomo III


Las manifestaciones dependientes de la oclusión Otra manifestación es el accidente vascular ence-
vascular más frecuentes son: las crisis vasooclusivas fálico (AVE) que con una incidencia de 10 % en la pri-
dolorosas (CVOD), el síndrome torácico agudo (STA) y mera década de la vida es la complicación más grave de
la crisis de secuestro esplénico (CSE) (Fig. 83.3). Las la enfermedad porque puede conducir a la muerte o de-
CVOD se pueden producir en cualquier sitio de la eco- jar secuelas graves. La manifestación más frecuente es
la hemiplejia, pero cualquier signo neurológico puede
nomía, se pueden acompañar de fiebre de baja intensi-
ocurrir: convulsiones, toma de pares craneales y coma.
dad y signos inflamatorios, tienen una frecuencia,
Tiene la característica de que en el 60 % de los casos
intensidad y duración muy variables en diferentes pa- recurre. Existen AVE transitorios y un proceso llamado
cientes y aún en un mismo paciente en diferentes perío- enfermedad cerebrovascular silente que se detecta con
dos de su vida. En ocasiones son precipitadas por RMN en el 22 % de los niños menores de 14 años. Este
procesos infecciosos o por el frío o la deshidratación, proceso es causa de retraso escolar, disminución del
pero casi siempre se presentan sin ninguna causa espe- cociente intelectual y otras alteraciones neuropsicológicas
cífica. Cuando la CVOD es de localización abdominal y no tiene tratamiento hasta el momento actual.
se debe hacer el diagnóstico diferencial con un abdo- Otras manifestaciones son el priapismo, la necrosis
men agudo. aséptica de la cabeza de los huesos largos, la úlcera
maleolar, muy rara en el niño (comienza a aparecer en
el adolescente) la hipostenuria, enuresis y hematuria.
La oclusión microvascular crónica lleva al daño
crónico de los órganos: en el bazo a la asplenia funcional
al comienzo y orgánica después, lo que favorece las in-
fecciones por neumococo, Hemophilus influenzae,
Salmonella y Escherichia coli.
Las lesiones hepáticas en el adulto no son raras;
fibrosis o cirrosis y la insuficiencia renal crónica afecta
al 20 % de los pacientes mayores de 20 años.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico se realiza por la electroforesis de
hemoglobina que muestra la banda lenta característica
de la Hb S y por la prueba de solubilidad positiva. Siem-
pre que sea posible se debe realizar EF de Hb y prueba
de solubilidad a los padres. La Hb F suele estar aumen-
tada en alrededor del 5 % en la mayoría de los pacientes.
DATOS DE LABORATORIO
La hemoglobina oscila entre 60 y 80 g/L, los
reticulocitos están aumentados en cifras variables, siem-
Fig.83.3 Síndrome torácico agudo.
pre mayores del 6 %, la bilirrubina aumentada a predo-
minio de la indirecta. En la lámina de sangre periférica
El STA se caracteriza por la aparición de nuevos
el hallazgo más característico es la presencia de
infiltrados en la radiografía de tórax acompañados casi
drepanocitos (Fig. 83.4).
siempre de manifestaciones respiratorias agudas, fiebre
y en ocasiones, dolor torácico. Puede ser causado por
infección, infarto o tromboembolismo pulmonar. En el
niño la causa más frecuente es la infección. Es de seve-
ridad variable y los microorganismos más implicados son:
el neumococo, el estafilococo, el micoplasma y la
clamidia.
La CSE aguda se presenta en el 20 % de los niños
menores de 4 años de edad con una disminución brusca
de la hemoglobina de más de 20 g/L y aumento de tama-
ño del bazo. Es muy grave y el paciente puede fallecer
si no se transfunde rápido. Fig. 83.4. Drepanocitos en lámina de sangre periférica.

Parte XIV. Hematología 1117


TRATAMIENTO El cuadro clínico de la anemia drepenocítice y el
Depende del cuadro clínico de la enfermedad. En de la Sβ° talasemia son semejantes. El de la
las formas severas con más de 3 CVOD severas al año, hemoglobinopatía SC y el de la Sβ+ talasemia son me-
1 episodio de STA en dos años consecutivos o el antece- nos severos.
dente de AVE se utiliza la hidroxiurea a 15 mg/kg/día. El Estado de portador de HbS (AS). El estado de por-
tratamiento con hidroxiurea se puede utilizar durante 3 a tador de Hb S es asintomático. La cantidad de Hb S en
5 años, pero su duración depende del cuadro clínico del sus hematíes es menor que la cantidad de Hb A lo que
paciente. impide la polimerización de la Hb en condiciones normales.
El tratamiento de las CVOD se realiza con En condiciones de severa hipoxia como vuelos en avio-
hidratación y analgésicos. En el STA se utiliza oxigeno- nes no presurizados y en la hipoxia que acompaña a la
terapia y antibióticos. La combinación de una anestesia general en cirugías de larga duración pueden
cefalosporina y un macrólido es una buena opción al igual ocurrir infartos esplénicos o en otros órganos. En niños
que la transfusión simple. En los casos graves, se reali- mayores y adultos se puede presentar hipostenuria y
za exanguinotransfusión para aumentar la cifra de he- raramente hematuria macroscópica.
El hemograma es totalmente normal y el diagnósti-
moglobina y disminuir el porcentaje de Hb S. Se debe
co se hace por la electroforesis de hemoglobina y la prue-
evitar la sobrehidratación y hacer un uso juicioso de los
ba de solubilidad.
analgésicos que deprimen el centro respiratorio. En el Es muy importante el consejo genético sobre todo
AVE la exanguinotransfusión debe ser inmediata y es en las parejas de portadores en las que se debe realizar
necesario mantener un régimen de hipertransfusión du- el diagnóstico prenatal cuando decidan tener descen-
rante por lo menos 3 años. En la CSE aguda es impor- dencia.
tante la transfusión. Si se produce más de una crisis está Otras hemoglobinopatías. Son muy raras salvo
indicada la esplenectomía. En Cuba, desde 1986, se rea- la Hb E, muy frecuente en el sudeste asiático. Otras
liza esplenectomía parcial que preserva parte de tejido alteraciones son las hemoglobinas inestables, las
esplénico funcionante y hace menos probable la sepsis hemoglobinas con aumento o disminución de la afinidad
fulminante posesplenectomía total. por el oxígeno, la metahemoglobinemia y la persistencia
La detección precoz, en niños menores de 5 años hereditaria de la Hb F.
de edad, de microalbuminuria y el tratamiento con enzimas Síndromes talasémicos. Constituyen un grupo
convertidoras de la angiotensina puede retrasar y even- heterogéneo de alteraciones de la hemoglobina produ-
tualmente impedir el daño renal crónico. cidas por diferentes alteraciones genéticas: deleciones
En el priapismo no se utiliza, en general la totales o parciales de los genes de las cadenas de la
exanguinotransfusión, el tratamiento es el lavado de los globina y sustituciones, deleciones o inserciones de
cuerpos cavernosos con soluciones muy diluidas de nucleótidos. La consecuencia de estas alteraciones es
adrenalina de ser posible en las primeras 24 h de instala- una disminución o ausencia del RNA mensajero (RNAm)
do el cuadro. Si no se obtiene en ese lapso mejoría se para la síntesis de una o más de las cadenas de la globina
debe realizar tratamiento quirúrgico (derivación caverno- o la formación de un RNAm funcionalmente defectuoso.
esponjosa). El resultado es una disminución o ausencia completa de
la síntesis de una de las cadenas de la hemoglobina. Se
El plan nacional de diagnóstico prenatal de la
han descrito más de 100 mutaciones que determinan
drepanocitosis se comenzó a realizar en Cuba en 1983.
fenotipos talasémicos.
El diagnóstico del paciente desde el nacimiento permite
realizar la prevención de muchas complicaciones. El uso FISIOPATOLOGÍA

de penicilina oral profiláctica desde los 3 meses de edad La disminución en la síntesis de las cadenas de la
hasta los 5 años, la educación de los padres y la mejoría globina trae como consecuencia microcitosis e
en las condiciones socioeconómicas han disminuido de hipocromía y un exceso relativo de una de ellas que pre-
cipita y daña la membrana del glóbulo rojo, lo que produ-
manera ostensible la morbilidad y la mortalidad. El pro-
ce anemia hemolítica. En la talasemia mayor
medio de sobrevida de la anemia drepanocítica en la
(homocigótica) el exceso de cadenas forma precipita-
actualidad en el país es de 53 años. dos muy insolubles que lesionan la membrana lo que dis-
Otras drepanocitosis. Se deben a la herencia de minuye la sobrevida del hematíe y trae como consecuencia
la Hb S y otras alteraciones de la Hb. Las más frecuen- una eritropoyesis ineficaz.
tes en Cuba son la hemoglobinopatía SC y las S β° y Sβ+ En el feto y en el recién nacido el exceso de cade-
talasemias. nas γ en la talasemia hace que se formen tetrámeros de

1118 Tomo III


cadenas (Hb Bart's). En el niño mayor y en el adulto se una cifra de Hb entre 100 y 110 g/L. Esta conducta dis-
forman tetrámeros de cadenas β (Hb H). minuye las alteraciones óseas y cardíacas y mejora la
Talasemia homocigótica ( ß°/ ß°) mayor, ane- calidad de vida del paciente. Es importante utilizar gló-
mia de Cooley). Es la forma más severa de talasemia. bulos rojos compatibles con los grupos sanguíneos más
importantes del paciente para evitar en lo posible la
CUADRO CLÍNICO
aloinmunización.
Se caracteriza por anemia hemolítica intensa que La hemosiderosis es una consecuencia inevitable
aparece después de los 6 meses de edad. El cuadro del régimen de hipertransfusión. En 500 mL de hematíes
clínico ha cambiado radicalmente después del tratamien- existen 200 mg de hierro que se depositan en los tejidos,
to con el régimen de transfusiones crónicas. porque no hay mecanismos para excretar el exceso de
Sin transfusiones existe una anemia muy severa, hierro del organismo. Para disminuir los depósitos de hie-
ictericia, hipertrofia del tejido eritropoyético dentro y fuera rro se debe utilizar la desferroxamina, un agente quelante
de la médula ósea. La expansión de la médula ósea en
del hierro que no se absorbe por vía oral y tiene una vida
los huesos largos puede llevar a fracturas patológicas y
media muy corta, por lo que se debe utilizar por vía sub-
en los huesos de la cara y del cráneo a deformaciones
cutánea (s.c.) en infusión continua durante 8 a 12 h/ 5 a
que producen una facies muy característica. La
7 días por semana con una bomba de infusión portátil
eritropoyesis extramedular determina también
mientras el paciente duerme. También se puede utilizar
hepatoesplenomegalia marcada con hiperesplenismo. Si
la vía subcutánea (s.c.) directa o intramuscular (i.m.)
el paciente sobrevive se produce hemosiderosis, retraso
pero su efectividad es menor. En la actualidad hay
del crecimiento y desarrollo sexual y alteraciones
quelantes por vía oral, el más estudiado la deferriprona
endocrinas, sobre todo diabetes, aunque la esperanza de
se usa con la desferroxamina en los pacientes con
vida sin tratamiento en esos casos alcanza muy pocos
sobrecarga severa de hierro, lo que permite mejorar el
años. Como en toda anemia hemolítica crónica se puede
cumplimiento del segundo que es muy malo en general
producir litiasis vesicular.
La muerte se produce por alteraciones cardíacas, sobre todo en los adolescentes. Con un tratamiento
fundamentalmente arritmias e insuficiencia cardíaca quelante adecuado se evitan o retrasan las complicacio-
congestiva. nes y aumenta de manera considerable la supervi-
Con transfusiones muchas de estas manifestacio- vencia.
nes y complicaciones se pueden evitar o retrasar su apa- La esplenectomía se indica en muchos pacientes
rición. cuando presentan hiperesplenismo. Hay que inmunizar
al enfermo previamente contra el neumococo y utilizar
DATOS DE LABORATORIO penicilina oral profiláctica por lo menos durante 3 años
En los enfermos no transfundidos, las alteraciones después de la operación. Se puede realizar esplenectomía
de los glóbulos rojos son severas: microcitosis, marcada parcial con la que es más improbable la sepsis sobreaguda
hipocromía, target cells, marcada poiquilocitosis y posesplenectomía que tiene una alta mortalidad. El
normoblastos, cuyo número aumenta después de la transplante de progenitores hematopoyéticos se ha rea-
esplenectomía. Después de la esplenectomía se ven lizado con éxito en muchos pacientes.
también en periferia y médula ósea inclusiones que es- En la actualidad el diagnóstico prenatal ha dismi-
tán constituidas por precipitados de cadenas. Las cifras nuido la incidencia de la enfermedad en las zonas en la
de hemoglobina descienden progresivamente a valores que esta tiene una alta prevalencia.
menores de 50 g/L, los reticulocitos están elevados, pero Otros síndromes talasémicos. La β talasemia in-
no tanto como en la drepanocitosis, existe un aumento termedia (β+/β+) es una forma menos severa que la
de la bilirrubina indirecta, el hierro sérico está elevado, talasemia mayor, que se presenta con deformidades
la capacidad de saturación de la transferrina y la esqueléticas y hepatoesplenomegalia pero mantiene una
transferrina elevadas. En la β° talasemia la Hb F es de hemoglobina estable alrededor de 60 a 80 g/L con un
más de 90 %, la Hb A2 está elevada y no existe Hb A. requerimiento transfusional muy bajo.
En la β+ la Hb F oscila entre 60 y 80 % y la Hb A entre La β talasemia menor o heterocigótica es asin-
20 y 40 %. La Hb A2 está aumentada. tomática. Las cifras de hemoglobina pueden ser norma-
les o estar ligeramente disminuidas. Por ser una anemia
TRATAMIENTO
microcítica hipocrómica se confunde con la deficiencia
Consiste en administrar transfusiones de glóbulos de hierro. La Hb A2 está aumentada. No requiere trata-
rojos a 15 a 20 mL/ kg de peso corporal para mantener miento.

Parte XIV. Hematología 1119


Otros síndromes talasémicos son la persistencia autosómico recesivo y en la forma homocigótica, cursa
hereditaria de la Hb F asintomática, la δ/ß talasemia y la con hemólisis.
Hb Lepore.
FISIOPATOLOGÍA
Alfa talasemias.Son anemias microcíticas
La PK cataliza la conversión del fosfoenolpiruvato
hipocrómicas causadas por la síntesis insuficiente de las
en piruvato, generando así adenosintrisfosfato (ATP).
cadenas a de la globina. Son frecuentes en muchas zo-
En la deficiencia de esta enzima se produce una acumu-
nas de África , Asia y en países de la cuenca del Medi-
lación de 2,3 difosfoglicerato y las concentraciones de
terráneo.
ATP, piruvato, lactato y el consumo de glucosa disminu-
La mayoría de las α talasemias se deben a deleción
yen. También se produce una disminución de
de los genes de la globina α. Normalmente hay 4 genes
nicotinamida adenina dinucleótido (NAD), todo lo que
α, la deleción puede ocurrir en 1, 2, 3 o los 4 genes. La
lleva a potenciar la hemólisis.
deleción de 1 solo gen produce el fenotipo de portador
A medida que los requerimientos energéticos su-
silente, la deleción de 2 el rasgo α talasemia, la de 3 la
peran la disponibilidad de ATP, las bombas de la mem-
enfermedad por Hb H y la de 4 el hidrops fetalis que es
brana que mantienen los gradientes catiónicos comienzan
incompatible con la vida. Las características clínicas de
cada uno se observan en el cuadro 83.6. a fallar. Al inicio, la pérdida de potasio es mayor que la
Anemias hemolíticas por defectos ganancia de sodio y la eliminación obligada de agua pro-
enzimáticos. El glóbulo rojo maduro desprovisto de nú- voca una contracción celular y formación de espículas
cleo, mitocondrias, ribosomas y otros organelos no tiene en la superficie. Los glóbulos rojos deshidratados,
capacidad para la replicación celular, síntesis de proteí- distorsionados y rígidos experimentan una destrucción
nas ni fosforilación oxidativa. La producción glicolítica prematura.
de adenosin-trifofato (ATP), la única fuente conocida CAUSA
de energía del hematíe es suficiente para llenar sus limi- Hay dos genes involucrados en esta entidad, pero
tados requerimientos metabólicos. La deficiencia de va- sólo el PKLR se ha mapeado en el cromosoma 21 y se
rias enzimas que participan en la glicolisis da lugar a han comunicado 133 mutaciones en el gen estructural.
anemias hemolíticas, las de piruvato kinasa (PK) y glu-
cosa 6 fosfato deshidrogenasa (GGPD) son los más fre- CUADRO CLÍNICO

cuentes que comprometen la vía de Embden Meyerhof. La expresión de esta deficiencia enzimática es muy
Deficiencia de piruvato kinasa. La mayoría de variable. El cuadro clínico oscila entre una ictericia
los casos son descritos en Europa, EE.UU. y Japón, neonatal acentuada que requiere exanguinotransfusión
aunque existen en todo el mundo. Es una anemia y puede producir kernicterus, hasta la hemólisis com-
hemolítica congénita, que se transmite con carácter pensada que se detecta en ocasiones en el adulto.

Cuadro 83.6. Características clínicas de diferentes tipos de α talasemia

Tipo de α talasemia Cuadro clínico Patrón de Hb No. de genes afectados

Portador silente Ninguno 1-2 % de Hb Bart's 1


al nacimiento

Rasgo Hb normal o 5-10 % de Hb Bart's 2


ligeramente al nacimiento
disminuida

Enfermedad por Hb H Anemia hemolítica 5-30 % de Hb Bart's 3


moderada al nacimiento. Luego Hb H
Cuerpos de inclusión
en los hematíes

Hidrops fetalis Muerte intrauterina o Casi exclusivamente 4


al nacimiento Hb Bart's. Pequeñas
cantidades de Hb
Portland y de Hb H

1120 Tomo III


Las manifestaciones se presentan casi siempre en la membrana del glóbulo rojo, en pacientes con anemia
el primer año de vida: ictericia, anemia y esplenomegalia. hemolítica por deficiencia de G6PD.
Las complicaciones son similares a las de otras ane- La deficiencia de esta enzima no se manifiesta a
mias hemolíticas: litiasis vesicular, hiperplasia de la médu- menos que se ingieran algunas sustancias o se produz-
la ósea, úlceras maleolares y sobrecarga de hierro. can determinadas infecciones que hacen que se ponga
de manifiesto la existencia del defecto enzimático.
DATOS DE LABORATORIO
Se han descrito 2 variantes de la deficiencia de
La anemia es de moderada a severa, normocítica esta enzima:
normocrómica y los reticulocitos están aumentados. La • La G6PD A. Variante que necesita agentes exógenos
sangre periférica muestra policromatofilia, anisocitosis,
para que se produzca hemólisis y es un marcador
poiquilocitosis y normoblastos. En algunos casos se ob-
de la raza negra. Es frecuente en Cuba.
servan hematíes con espículas superficiales y acantocitos.
• G6PD B. Variante que no necesita agentes externos
La cuantificación de la actividad enzimática co-
para la hemólisis y no varía con el envejecimiento
rrobora el diagnóstico.
celular. Es frecuente en algunos países de Europa
TRATAMIENTO como Francia, Italia y Alemania.
Se debe administrar suplemento diario de ácido CUADRO CLÍNICO
fólico. La esplenectomía puede disminuir o eliminar los
La deficiencia de G6PD es una condición heredi-
requerimientos transfusionales. En lo posible se debe taria ligada al cromosoma X que se expresa por comple-
practicar después de los 5 años de edad, por el peligro to en varones. Existen diferentes cuadros clínicos.
de sepsis fulminante. Después de la esplenectomía es Íctero neonatal. Se ha comunicado ictericia en los
necesario indicar penicilina profiláctica durante los tres recién nacidos, asociada a deficiencia de G6PD. Mu-
años posteriores a la operación. chas de las comunicaciones provienen de la región me-
Deficiencia de glucosa-6-fosfato deshidro- diterránea, aunque de manera esporádica, se han
genasa eritrocitaria. La G6PD interviene en la prime- registrado casos en otras partes del mundo. La causa
ra reacción del ciclo de las pentosas, cataliza la del íctero neonatal no está clara. Generalmente, la va-
conversión de glucosa 6-fosfato (G6P) proveniente de riante enzimática de G6PD encontrada en estos niños
la glucólisis anaerobia en 6-fosfogluconato (6PG) y ob- es del tipo B- (variante con actividad enzimática muy
tiene NADPH a partir de la nicotinamida adenina disminuida), lo que implica una relación directa con la
dinucleótido fosfato (NADP). Esta vía es la principal presencia de un estrés oxidativo, provocado por una dis-
fuente de obtención de la forma reducida del NADP en minución en la defensa antioxidante del eritrocito. Los
los eritrocitos humanos. recién nacidos con íctero neonatal no tienen anteceden-
tes de exposición a fármacos, aunque la presencia en el
La deficiencia de G6PD produce una falla en el
ambiente de un producto químico capaz de causar
metabolismo del glutatión y su resultado es la hemólisis.
hemólisis no puede ser excluida. La transferencia a tra-
Se ha observado que un elevado número de variantes vés de la placenta de fármacos y compuestos químicos
deficientes de G6PD no se asocian a hemólisis crónica, tomados por la madre se ha implicado en ocasiones, como
por lo que se puede inferir que una pequeña cantidad de la causa del íctero neonatal.
actividad residual es suficiente para los requerimientos Favismo. Se denomina favismo a la hemólisis agu-
del eritrocito. da que se desarrolla en algunos individuos después de la
En la deficiencia de G6PD con hemólisis crónica ingestión de los frijoles fava (Vicia faba) o la inhalación
asociada es evidente que la producción de NADPH es del polen de estos frijoles. Desde hace muchos años se
inadecuada, aunque se desconoce con exactitud cómo ha establecido que existe una relación directa de este
esto ocasiona la hemólisis. Los niveles de GSH son tan cuadro con la deficiencia de G6PD y se plantea que
bajos, que los grupos sulfhidrilos no pueden ser manteni- todo individuo que presenta favismo es deficiente de
dos en su forma reducida y se producen uniones G6PD, pero no todos los deficientes presentan hemólisis
intramoleculares e intermoleculares entre estos grupos. por la ingestión de este alimento.
La acumulación de sustancias que producen radicales Los síntomas del favismo se desarrollan pocas ho-
libres, conducen a la peroxidación de los lípidos de la ras después de la ingestión. Los más comunes son las
membrana, lo que no puede ser contrarrestado por el náuseas, vómitos, malestar y vértigo, seguido esto de
metabolismo del glutatión. Se ha observado la forma- hemólisis, hemoglobinemia y hemoglobinuria. Los sínto-
ción de agregados de las proteínas del citoesqueleto de mas desaparecen de 2 a 6 días.

Parte XIV. Hematología 1121


Anemia hemolítica inducida por infecciones. • Ácido nalidíxico.
La infección es otra de las causas de hemólisis en indivi- • Sulfamidas (sulfanilamida, sulfacetamida, sulfapiridina
duos deficientes de G6PD, sobre todo la hepatitis viral, y sulfametoxazol).
la neumonía y la fiebre tifoidea. • Vitamina C.
El mecanismo de hemólisis inducida por infeccio- • Vitamina K.
nes no es bien conocido. Una explicación puede ser que • Azul de metileno.
la generación de peróxido de hidrógeno por los neutrófilos • Trinitrotolueno.
puede provocar una disminución en la cantidad de glutatión
• Azul de toluidina.
reducido, cuya función es eliminar del glóbulo rojo la
• Niridazol.
acumulación de metabolitos que oxidan a los grupos
• Sulfonas (tiazosulfona y diafenilsulfona).
sulfhidrilos formados por el estrés oxidativo. Esto
disminuye la capacidad protectora de la célula. Por otra • Diuréticos de tiazida.
parte, la activación de los neutrófilos interviene directa- • Fenotiazina.
mente en la peroxidación de los lípidos de la membrana • Orinasa.
y provoca de forma directa la destrucción de la célula. • Dimercaprol.
Anemia hemolítica inducida por fármacos. La • Habas.
aparición de episodios hemolíticos después de la inges- • Naftalina.
tión de ciertas drogas se detectó por primera vez en in-
dividuos de la raza negra que recibieron primaquina. Anemia hemolítica crónica. Presencia de íctero
Posteriormente, se descubrieron muchas drogas con efec- neonatal, con evidencias de hemólisis o sin ella y pa-
to similar. La anemia hemolítica aguda inducida por cientes con anemia hemolítica crónica o episodios de
fármacos es el prototipo clínico de la deficiencia de G6PD. hemólisis relacionados con la ingestión de medica-
El mecanismo exacto de destrucción de los glóbu- mentos o de habas o con infecciones; casi siempre
los rojos por estos fármacos todavía no está esclareci- en varones.
do. Compuestos como el azul de metileno y el DATOS DE LABORATORIO
monosulfato de fenacina oxidan directamente el NADPH Las pruebas que conforman el diagnóstico son:
a NADP+. Otros como el ascorbato, la nitrofurantoína • Cuantificación de la actividad enzimática.
y la doxorubicina oxidan el GSH. Existen otros com- • Electroforesis en gel de almidón.
puestos químicos como la primaquina y el daunorubicina • Estudio de los padres.
que oxidan tanto al NADPH como al GSH. Los episo- • Prueba de estabilidad del GSH.
dios típicos de hemólisis se producen de 1 a 3 días des- • Prueba de la autohemólisis.
pués de la administración del fármaco. Existe una rápida • Formación de cuerpos de Heinz.
caída de la hemoglobina y la orina se torna oscura. Este TRATAMIENTO
cuadro cesa en 4 a 6 días. La profilaxis consiste en evitar la ingestión de sus-
Entre las drogas que pueden inducir la hemólisis tancias o medicamentos que pueden desencadenar la
están las siguientes: hemólisis.
• Anilinas. Se han utilizado diferentes drogas como la vitami-
• Antipalúdicos (primaquina, pamaquina y pentaquina). na E por su acción antioxidante y el xilitol, por su capa-
• Aspirina. cidad de producir NADPH.
• Efedrina. Si la caída de la hemoglobina es importante se in-
• Cloramfenicol. dican transfusiones de glóbulos rojos.
• Cloratos (sódico y potásico).
Extracorpusculares
• Cotrimoxazol.
• Dapsona.
Anemias hemolíticas autoinmunes
• Fenacetina.
• Nitrofurantoína. Constituyen un grupo de trastornos, caracteriza-
• Probenecid. dos por la presencia de autoanticuerpos contra antígenos
• Procainamida. presentes en la membrana de los eritrocitos que provo-
• Quinidina. can el acortamiento de su vida media.

1122 Tomo III


FISIOPATOLOGÍA en importancia es el hígado, que es capaz de aclarar
La destrucción de los eritrocitos mediada por eritrocitos sensibilizados con C3b por activación del
autoanticuerpos se puede producir por la activación del complemento por anticuerpos de tipo IgM. El hema-
sistema del complemento y provocar hemólisis tíe es fagocitado total o parcialmente; la fagocitosis
intravascular o por mecanismos celulares (opsonización parcial produce pérdida de superficie de la membra-
y fagocitosis) que llevan a la hemólisis extravascular o a na con conservación del contenido celular lo que da
una combinación de ambos mecanismos. lugar al esferocito.
La activación de todo el sistema del complemento • La destrucción de células cubiertas por anticuerpos
provoca la ruptura de la membrana eritrocitaria y una puede suceder sin fagocitosis. Si un eritrocito cubier-
hemólisis intravascular que se caracteriza por la presen- to por anticuerpos se adhiere a una célula fagocítica,
cia de hemoglobinemia y hemoglobinuria. El mecanismo pero no es ingerido, se puede producir la lisis median-
principal de citólisis mediada por el complemento es a te un proceso conocido como citotoxicidad mediada por
través de la activación de la vía clásica. Los anticuerpos células dependientes de anticuerpos. Los gránulos
que son capaces de activar la cascada clásica del com- citoplasmáticos son capaces de verter su contenido
plemento son las inmunoglobulinas IgM, IgG1 o IgG3. Si y provocar la lisis del eritrocito.
los eritrocitos se sensibilizan con anticuerpos que no fi-
jan el complemento o si están sensibilizados con compo- Clasificación de las anemias hemolíticas
nentes del complemento, pero no continúan a través de autoinmunes. Las anemias hemolíticas autoinmunes
toda la cascada hasta la lisis, pueden ser destruidos o (AHAI) se pueden clasificar de acuerdo con las propie-
dañados por células del sistema mononuclear fagocítico. dades específicas del autoanticuerpo. El 70 al 80 % son
Este mecanismo produce hemólisis extravascular que producidas por anticuerpos calientes, preferentemente
se caracteriza por hiperbilirrubinemia, deshidrogenasa reactivos a 37 ºC. Una pequeña proporción son produci-
láctica (LDH) elevada y haptoglobina sérica baja, pero das por anticuerpos fríos, que muestran una actividad
no hemoglobinemia ni hemoglobinuria. En la hemólisis óptima a temperaturas menores de 37 ºC (4 a 22 ºC).
extravascular el proceso de adherencia inmune es fun- Esta clasificación es importante, no solo, por las diferen-
damental para la destrucción mediada por células. En cias en la fisiopatología de la destrucción del eritrocito,
este proceso, son esenciales las inmunoproteínas sino también por las características propias del
bifuncionales, que pueden adherirse a la célula diana y a autoanticuerpo (tipo y especificidad) y mucho más por
componentes específicos sobre la célula destructora. Los las diferencias en el enfoque terapéutico en uno u otro
dos tipos principales de estas inmunoproteínas son los caso. Una proporción más pequeña de pacientes con
anticuerpos tipo IgG y los componentes del complemen- AHAI tienen anticuerpos fríos y calientes (AHAI mix-
to C4b y C3b. Como consecuencia de la adherencia in- ta) que aparentemente reconocen antígenos diferentes
mune el eritrocito puede ser destruido por dos en la membrana eritrocitaria. La destrucción eritrocitaria
mecanismos: es por lo general más severa en estos casos.
• Las moléculas de IgG unidas a los eritrocitos Otra forma de clasificar las AHAI está basada en
interactúan con receptores Fc sobre leucocitos la ausencia o presencia de enfermedades relacionadas
polimorfonucleares y monocitos. Esto provoca la unión (AHAI primaria o idiopática y AHAI secundaria) lo cual
del eritrocito a la célula destructora que puede llevar tiene implicaciones pronósticas y terapéuticas.
a la fagocitosis. La hemólisis extravascular, en la que
los eritrocitos son destruidos por contacto directo con AHAI por anticuerpos calientes
los monocitos y macrófagos del sistema mononuclear • Idiopática.
fagocítico (SMF) es más frecuente que la hemólisis • Secundaria.
intravascular por activación del complemento. El SMF − Infecciones.
tiene una función dual como sitio de aclaramiento de − Procesos linfoproliferativos.
eritrocitos (sensibilizados por anticuerpos y comple- − Colagenopatías.
mento, senescentes o estructuralmente anormales) y
de generación de respuesta inmune. El bazo es el Síndrome de aglutininas frías (SAF)
órgano principal del SMF. Los macrófagos esplénicos • Idiopático.
tienen receptores Fc que facilitan la unión de la por- • Secundario.
ción Fc de la IgG unida al eritrocito y por tanto, su − Infecciones por Mycoplasma pneumoniae;
fagocitosis. La hemoconcentración en los cordones mononucleosis infecciosa y otras infecciones
esplénicos favorece el contacto entre los eritrocitos virales.
sensibilizados y los macrófagos. El segundo órgano − Procesos linfoproliferativos malignos.

Parte XIV. Hematología 1123


Hemoglobinuria paroxística por frío (inmunosupresión y esplenectomía) o a sangramientos
• Idiopática. incontrolables por trombocitopenia (síndrome de Evans).
• Secundaria
DATOS DE LABORATORIO
• Infecciones virales.
En la mayoría de los pacientes la anemia es seve-
• Sífilis terciaria.
ra con cifras de hemoglobina que pueden variar de 30 a
90 g/L. Los leucocitos son en su mayoría normales,
AHAI atípica
aunque en algunos casos pueden estar elevado con pre-
• Mixta (anticuerpo frío y caliente).
sencia de precursores (mielocitos y metamielocitos) en
• Con prueba de antiglobulinas negativa.
sangre periférica. El número de plaquetas es variable,
por lo general normal o elevados Menos frecuentemen-
Anemia hemolítica autoinmune por anticuer-
te se puede encontrar trombocitopenia también de cau-
pos calientes. Son producidas por autoanticuerpos que
sa inmune (síndrome de Evans).
poseen una alta afinidad por los eritrocitos a 37 ºC. Es-
Los reticulocitos están elevados en grado variable
tos autoanticuerpos, predominantemente IgG, producen
en la mayoría de los pacientes. Puede existir
opsonización y fagocitosis de los eritrocitos por medio
reticulocitopenia en casos con hemólisis hiperaguda en
de receptores Fc presentes en los macrófagos del bazo
la etapa inicial, en parte por el tiempo fisiológico reque-
y fijan complemento de forma ineficiente por lo que la
rido para el aumento de la producción de nuevos
hemólisis intravascular es excepcional. Dos tercios de
hematíes. Otros pacientes pueden tener reticulocitopenia
los casos tienen especificidad por antígenos eritrocitarios
persistente, posiblemente porque el anticuerpo
del sistema de grupo Rh.
antieritrocitario también reconoce el mismo antígeno pre-
CUADRO CLÍNICO sente en los precursores eritroides con la consecuente
La presentación depende no solo de la severidad de hemólisis intramedular.
la anemia sino también de la rapidez con que se instala el El extendido de sangre periférica muestra signos
proceso hemolítico. El inicio puede ser insidioso, con apa- característicos de anemia hemolítica: esferocitos,
rición gradual de síntomas de anemia, acompañado a macrocitos, policromatofilia, punteado basófilo,
menudo de ictericia, hepatomegalia y esplenomegalia. En poiquilocitosis y presencia de normoblastos. El examen
otros, el comienzo es súbito, con dolor en abdomen y re- de la médula ósea muestra hiperplasia eritroide y au-
gión lumbar, malestar, fiebre y manifestaciones de anemia mento de los depósitos de hierro.
rápidamente crecientes (polipnea, taquicardia y falla car- ESTUDIO SEROLÓGICO
díaca). Es frecuente una historia de orinas oscuras debida
El estudio más importante es la prueba de
a la presencia de pigmentos biliares o hemoglobinuria. Se
antiglobulinas directa (PAD) o prueba de Coombs di-
encuentra ictericia en más del 40 % de los pacientes. En
recta que demuestra la presencia de inmunoglobulinas
las formas secundarias se añaden las manifestaciones clí-
y/o complemento unido a los eritrocitos del paciente, por
nicas de la enfermedad asociada.
medio del suero de Coombs poliespecífico que contiene
Existe un predominio del sexo masculino, más del
anticuerpos contra inmunoglobulinas humanas y compo-
50 % de los pacientes son menores de 4 años en el mo-
nentes del complemento, principalmente C3. Si se pro-
mento de la presentación. La forma aguda transitoria es
duce aglutinación con el suero de Coombs, el uso del
relativamente más frecuente que la forma insidiosa o
suero monoespecífico que reacciona selectivamente con
crónica, la hepatoesplenomegalia está presente en más
IgG o con C3 puede definir el patrón de especificidad.
del 50 % de los casos en la forma crónica y es menos
Sueros monoespecíficos para IgM o IgA se pueden usar
frecuente en la forma aguda. Existen manifestaciones
en casos seleccionados.
de infección viral, fundamentalmente infecciones respi-
Existen 3 patrones de reacción de la PAD en la
ratorias altas en ambas formas, pero más frecuentemente AHAI por anticuerpos calientes:
en la forma aguda. La asociación con enfermedades • Eritrocitos sensibilizados con IgG.
crónicas como el lupus eritematoso sistémico (LES) y • Eritrocitos sensibilizados con IgG y complemento (C3
los procesos linfoproliferativos es poco frecuente, pero y C4).
su incidencia es mayor en pacientes con forma de pre- • Eritrocitos sensibilizados con componentes del com-
sentación crónica y mayores de 12 años de edad. La plemento, sin inmunoglobulinas detectables.
mortalidad es relativamente baja (aproximadamente
11 %) no relacionada con la severidad de la hemólisis, El anticuerpo detectado con mayor frecuencia es
por lo general asociada a complicaciones del tratamiento de tipo IgG (IgG1 y IgG3). Este anticuerpo se puede

1124 Tomo III


unir a todos los eritrocitos del panel (no especificidad). autoinmune si está presente. En el lactante, la enferme-
En ocasiones, se ha demostrado que reaccionan de for- dad puede ser fulminante, con resistencia a todos los
ma preferente con antígenos específicos, habitualmente tratamientos incluyendo la esplenectomía y la timectomía.
del sistema de grupos Rh. TRATAMIENTO
Existen pacientes con hallazgos sugestivos de
Algunos pacientes con AHAI por anticuerpos ca-
AHAI, con respuesta al tratamiento esteroideo en los
lientes tienen un proceso hemolítico ligero autolimitado
cuales la PAD es negativa. En muchos de estos enfer- que no requiere tratamiento. La mayoría de los enfer-
mos los glóbulos rojos están cubiertos con cantidades de mos tiene una hemólisis moderada o severa y necesitan
autoanticuerpos IgG menores que lo necesario para que intervención terapéutica inmediata.
se produzca una reacción de antiglobulinas positiva (IgG El tratamiento inicial se realiza con prednisona a la
subnormal). Métodos más sensibles permiten detectar dosis de 2,5 mg/kg de peso corporal por día, administra-
pequeñas cantidades de IgG sobre la superficie del eri- da por vía oral. Este tratamiento produce respuesta en
trocito o en un eluido altamente concentrado. el 75 % de los niños con anticuerpos IgG. No se ha do-
Otras pruebas de hemólisis son la disminución de cumentado un aumento en la efectividad de dosis mayo-
la haptoglobina y el aumento de la LDH y de la bilirrubina res o de la administración parenteral.
indirecta. El tratamiento esteroideo debe mantenerse aproxi-
DIAGNÓSTICO madamente 3 meses.
Las manifestaciones clínicas asociadas a la ane- Los enfermos que no responden al tratamiento des-
mia y a la hemólisis, el examen de la lámina de sangre pués de 3 semanas, dependientes del esteroide (reapari-
periférica, la reticulocitosis, así como la elevación de la ción de la hemólisis al disminuir la dosis o suspenderlo) o
bilirrubina indirecta de la LDH y la disminución de la que requieren altas dosis para mantener cifras de hemo-
haptoglobina pueden hacer sospechar el diagnóstico. El globina y hematócrito aceptables deben ser evaluados
elemento más importante para el diagnóstico es la para otros tratamientos. Esta decisión debe ser tomada
positividad de la PAD aunque su negatividad no la ex- dentro de los primeros 6 a 12 meses después del diag-
cluye. nóstico para evitar los efectos adversos de la adminis-
El diagnóstico diferencial se debe realizar con otras tración a largo plazo de los esteroides. Si la respuesta al
anemias esferocíticas como la esferocitosis hereditaria, esteroide no es adecuada, se indicara la esplenectomía,
otros procesos hemolíticos: hemoglobinuria paroxística a no ser que la cirugía esté completamente contrain-
nocturna y anemias hemolíticas microangiopáticas. En dicada. La esplenectomía elimina el sitio primario donde
todos estos procesos la PAD es negativa. los glóbulos rojos son destruidos y el sitio potencial de
En las anemias hemolíticas con PAD positiva, el producción de autoanticuerpos. Aproximadamente del
interrogatorio minucioso y la caracterización serológica 50 al 75 % de los pacientes tienen una remisión
del anticuerpo pueden diferenciar a la AHAI por
hematológica completa o parcial después de la
anticuerpos calientes de la AHAI por anticuerpos fríos,
esplenectomía. Este proceder no debe ser realizado en
de la anemia hemolítica inmune relacionada con drogas,
de la reacción hemolítica postransfusional inmediata y niños menores de 5 años de edad, a menos que la condi-
de la enfermedad hemolítica del recién nacido. ción clínica lo requiera. La mortalidad y morbilidad in-
mediata de la esplenectomia es baja. Después de esta
PRONÓSTICO los pacientes tienen un riesgo aumentado de sepsis ful-
En el niño, la AHAI por anticuerpos calientes es minante, con una susceptibilidad especial a gérmenes
precedida por lo general por una infección viral o inmu- encapsulados como el Pneumococo. La vacunación
nización y tiene una presentación aguda. La mayoría de
antineumocócica administrada antes de la esplenectomía
los casos tienen un curso autolimitado y una rápida res-
puesta a los esteroides. La secundaria o asociada a otras y la administración profiláctica de penicilina oral, 250 a
enfermedades es más insidiosa y la respuesta al esteroide 500 mg/día disminuyen este riesgo. Los pacientes deben
es variable. Los pacientes que se recuperan del proceso ser educados al respecto y orientados para que acudan
hemolítico inicial tienen un buen pronóstico y las recaí- a su médico ante cualquier signo de infección.
das son raras. El pronóstico en las formas secundarias En los enfermos en los que no se logre un control
depende del curso de la enfermedad de base. adecuado de la hemólisis con esteroides y esplenectomía,
La mortalidad es en general baja, entre 10 y 12 %. en los que recaen después de la esplenectomía o en los
Puede ser más alta en la forma crónica debida a las que tienen un riesgo quirúrgico alto, se pueden utilizar
complicaciones del tratamiento y a la trombocitopenia otros inmunosupresores como la ciclofosfamida o la

Parte XIV. Hematología 1125


azatioprina (inmurán). Otras drogas como la vincristina, damente 1 %. Históricamente se describió en pacientes
el danazol y la gammaglobulina i.v. (GIV) se han em- afectados por formas congénitas o terciarias de sífilis
pleado con resultados variables. Más recientemente se después de una exposición al frío. En la actualidad su
ha ensayado el uso del anticuerpo monoclonal antiCD20 causa se relaciona con infecciones virales recientes.
(Rituximab). Las manifestaciones clínicas corresponden a un
La transfusión de glóbulos rojos debe ser evitada proceso agudo de hemólisis intravascular: fiebre, esca-
en lo posible, se reserva para algunas situaciones en las lofríos, dolor lumbar, hemoglobinemia, hemoglobinuria y
que las manifestaciones clínicas de la anemia amenacen anemia. En la lámina de sangre periférica aparecen
la vida del paciente. anisopoiquilocitosis, esferocitos, eritroblastos y fenóme-
Síndrome de Evans. Se caracteriza por la asocia- nos de eritrofagocitosis. El anticuerpo responsable es
ción de AHAI y trombocitopenia inmune. Ambas una IgG que se eluye de los eritrocitos del paciente, pero
citopenias pueden no estar presentes de forma simultá- no se detecta en la PAD. La positividad de la prueba es
nea. Aparecen con frecuencia en momentos diferentes. débil y causada por moléculas de C3d unidas a la mem-
Se origina por el desarrollo de múltiples autoanti- brana del eritrocito. Este anticuerpo es una hemolisina
cuerpos que reaccionan contra antígenos eritrocitarios y bifásica, porque se une a los eritrocitos en frío y con
plaquetarios. posterioridad causa su destrucción al subir la tempera-
Este síndrome se puede presentar asociado a LES, tura hasta 37 ºC (prueba de Donath- Landsteiner). El
otras enfermedades del colágeno, enfermedades malig- anticuerpo tiene especificidad antiP.
nas y hemoglobinuria poraxística nocturna.
El pronóstico es menos favorable que el de la Anemia hemolítica microangiopática
AHAI. El manejo inicial debe ser similar al de la AHAI La microangiopatía trombótica (MAT) es un tér-
no complicada. La respuesta a esteroides, esplenectomía mino anatomopatológico que describe la existencia de
e inmunosupresores es menor, con mayor tendencia a la trombosis en los pequeños vasos del organismo. La
recaída. trombocitopenia y la anemia hemolítica están casi in-
Anemia hemolítica autoinmune por anticuerpos variablemente presentes en pacientes con MAT y son
fríos. Se conoce como síndrome de aglutininas frías. Es el reflejo de la disrupción y consumo de plaquetas y
producida por anticuerpos de tipo IgM, que solo son ac- hematíes en la microcirculación. La presencia de otros
tivos a temperatura de 5 ºC; sin embargo, pueden ser signos clínicos depende de la distribución de las lesio-
clínicamente significativos si su intervalo térmico de re- nes microvasculares y la consecuente disfunción orgá-
acción alcanza de 28 a 31 ºC. Estos anticuerpos produ- nica. Algunos autores adoptan esta denominación para
cen hemólisis intravascular y/o extravascular por referirse en su conjunto a dos enfermedades: el síndro-
activación del complemento sobre la superficie del eri- me urémico hemolítico (SUH) y la púrpura
trocito. Por lo general, se trata de formas transitorias trombocitopénica trombótica (PTT), los cuales com-
asociadas a infecciones como la mononucleosis infec- parten muchas características.
ciosa y la neumonía por mycoplasma. Clásicamente, el diagnóstico de SUH se realiza
Se presenta con cuadros de hemólisis aguda de- cuando predomina la afección renal y es más frecuente
pendientes de la exposición al frío, caracterizados por en niños. En adultos predomina la afección neurológica
hemoglobinuria y episodios de acrocianosis. Los pacien- y el síndrome se denomina PTT.
tes con este tipo de anemia tienen una PAD positiva. Las anemias hemolíticas por trombosis en los va-
Aunque el anticuerpo implicado es de tipo IgM, activador sos pueden ser secundarias a microtrombosis o
del complemento, en la membrana del eritrocito solo se macrotrombosis y estas a su vez pueden ser congénitas
detecta C3d. El autoanticuerpo suele tener una especifi- o adquiridas (Cuadro 83.6.)
cidad anti-I. Síndrome urémico hemolítico. EL SUH es un
La AHAI por aglutininas frías idiopática tiene un cuadro caracterizado por insuficiencia renal aguda,
pronóstico mejor que la AHAI por anticuerpos calien- trombocitopenia y anemia hemolítica microangiopática
tes, aunque el tratamiento con corticosteroides no es muy y está causado, en la mayoría de los casos, por cepas de
efectivo. Escherichia coli productoras de verotoxinas (Escherichia
Hemoglobinuria paroxística por frío. Se trata coli enterohemorrágica ECEH). La más frecuente es la
de una forma de AHAI de baja incidencia aproxima- del serotipo 0157: H7.

1126 Tomo III


Cuadro 83.6. Causas de anemia hemolítica EPIDEMIOLOGÍA
angiopática Aunque siempre se relaciona la presencia de SUH
con el antecedente de diarreas de tipo invasivo, no es
Hemólisis secundaria a alteraciones macrovas- así en todos los casos, pues existe una división impor-
culares tante en SUH típico o D+, que presenta como antece-
• Valvulopatías cardíacas dente enfermedades diarreicas agudas, y el atípico o
• Reparación quirúrgica de defectos cardíacos D-, que no tiene este antecedente (Cuadro 83.7).
• Inserción de válvulas cardíacas La ECEH O157: H7, que es el agente causal de la
colitis hemorrágica, produce una potente toxina conoci-
Hemólisis secundaria a alteraciones microvas- da como Shiga-like toxin, llamada así por su semejanza
culares con la producida por la Shigella dysenteriae o verotoxina.
• Congénitas • Adquiridas Basadas en cultivos de heces fecales, existen evi-
− Síndrome de Vasculitis inmunológicas dencias que relacionan a la infección por la ECEH con
Kasabach-Merritt secundarias a: el clásico SUH posdiarreico debido a la presencia de
− Síndrome hemolítico glomerulonefritis aguda, una citotoxina fecal o de anticuerpos en el paciente, aun-
urémico familiar poliarteritis, esclerodermia que una gran variedad de organismos se han implicado
y granulomatosis de en la patogénesis de este síndrome.
Wegener En general, el SUH afecta con mayor frecuencia
Rechazo del trasplante a los lactantes y a los niños menores de 5 años y es
renal mucho menos frecuente en los adultos. Se ha descrito
Vasculitis alérgicas una mayor incidencia en el sexo femenino y en pacien-
tes de la raza blanca.
Microangiopatía con
hipertensión
Cuadro 83.7. Diferencias entre el síndrome urémico
Preclamsia y eclampsia
hemolítico típico (SUH D+) y el SUH atípico (SUH D-)
Microangiopatía por
enfermedades malignas Características SHU D+ SHU D-
Síndrome hemolítico
urémico Antecedentes No Si
Púrpura trombocitopénica patológicos familiares
trombótica
Edad < 1 año > 5 años
Variación estacional Sí No
Pródromos Diarrea No diarrea
Clasificación del SUH. Se divide en:
• Idiopático. Hipertensión Moderada Severa
• Secundario que se puede producir por: endocraneana
− Causas infecciosas: Escherichia coli 0 157: H7, Complicaciones Poco Comunes
Shigella dysenteriae tipo 1, neumococo, comunes
Salmonella typhi, Campylobacter fetus jejuni, Histología Microan- Arteriopatía
Yersinia pseudotuberculosis, bacterioides, virus giopatía
portillo, cocksackie, ECHO virus, influenza, Epstein glomerular
Barr, rotavirus, y el virus de la inmunodeficiencia
adquirida (VIH). Recurrencia Rara Común
− Causas no infecciosas (esporádico): tumores, dro- Frecuencia 90 % de 10 % de
gas como contraceptivos orales, ciclosporina A, los casos los casos
mitomicina C, FK 506, OKT3, metronidazol, peni-
cilina, cisplatino, daunorubicina, arabinósido de Evolución Favorable Desfavo-
citosina, desoxycoformicina, ticlopidina y quinina, rable
embarazo, enfermedades sistémicas, trasplantes de Factor von Presente Ausente
médula ósea o riñón y glomerulonefritis. También Willebrand
se describe el SUH familiar autosómico recesivo o disfuncional
dominante. Alteración del No Sí
factor H

Parte XIV. Hematología 1127


CAUSA Por otro lado, la anemia hemolítica es secundaria a
El SUH/PTT puede corresponder a causas muy di- la disminución de la luz de los pequeños vasos. Cuando
versas, entre las cuales se pueden citar: las formas los eritrocitos pasan por estos vasos con la luz disminui-
posinfecciosas, descritas en infecciones por Shigella, da, se fragmentan y adquieren formas abigarradas
Salmonella, Escherichia coli, Klebsiella, pseudomonas, (fragmentocitos) y son destruidos.
estreptococos, Yersinia y varios tipos de virus (coxsackie, Existe en la actualidad evidencia de que la forma
ECHO, adenovirus, etc.), y el VIH-1 no diarreica del SUH (SUH D- ), está asociada con al-
Existen formas familiares hereditarias y recurren- teraciones y mutaciones de la proteína plasmática
tes, y formas de patogenia inmunológica, que pueden multifuncional y multidominio del factor H y varios
cursar con hipocomplementemia, depósitos glomerulares estudios han mostrado una clara asociación entre nive-
de C3 y de forma excepcional, presencia de factor ne- les bajos de complemento y mutaciones del gen del fac-
frítico C3. tor H en el SUH D.
El SUH/PTT se puede presentar en enfermeda- El factor H, entre otras funciones, actúa como un
des sistémicas, como el LES, la esclerodermia, la regulador temprano de la cascada del complemento. Este
nefropatía por radiación, el trasplante renal, la hipertensión factor determina el destino de las moléculas de C3b re-
cién generadas, y actúa como un cofactor del factor I en
arterial esencial y la hipertensión maligna.
la degradación de C3b, segulando la estabilidad y forma-
Se describe el SUH/PTT debido a anovulatorios
ción de la convertasa de la vía alternativa del complemen-
mitomicina C, ciclosporina A y antiinflamatorios no
to C3bBb. Ante una agresión endotelial de cualquier origen,
esteroideos (fenilbutazona, diclofenaco y quinina).
la activación de plaquetas y leucocitos contribuye a pro-
PATOGENIA mover la formación de esta convertasa, la cual a su vez
La Escherichia coli productora de una toxina lleva a la separación del tercer componente del sistema
citopática, es la causa de la enfermedad. La asociación de complemento (C3) a su forma activa C3b disponible
entre Escherichia coli productora de verotoxina y el para reaccionar con cualquier superficie celular.
SUH, está mediada por la producción de una citotoxina CUADRO CLÍNICO
similar a la exotoxina que produce la Shigella La infección por Escherichia coli 0157:H7 se pue-
dysenteriae tipo 1. de manifestar como una infección asintomática o llegar
La Escherichia coli 0157: H7 productora de la a causar la muerte, pasando por cuadros diarreicos
verotoxina o la Shigella, se ingiere con los alimentos con- sanguinolentos, no sanguinolentos, PTT o SUH. Se esti-
taminados poco cocidos (carne, leche no pasteurizada, ma que aproximadamente el 10 % de las infecciones
etc.), coloniza el intestino grueso y se adhiere a las célu- por Escherichia coli productora de verotoxinas, en ni-
las epiteliales de la mucosa del colon. Después de inva- ños menores de 10 años, evolucionan hacia el SUH.
dir y destruir dichas células, el tejido subyacente y su Este cuadro suele ser precedido por diarrea
vascularización, se produce la diarrea, que generalmen- sanguinolenta, fiebre elevada y dolor abdominal impor-
te es hemorrágica. tante de tipo cólico. Existen una serie de factores, cuya
El efecto dañino de las toxinas bacterianas sobre las presencia hace más probable la evolución de una infec-
células endoteliales renales y de otros órganos puede ser ción por Escherichia coli hacia un SUH y que por lo
potenciado por otras sustancias, como los lipopolisacáridos tanto, son un signo de alarma: fiebre elevada (tempera-
(un componente de la Shigella dysenteriae y de la tura rectal mayor de 39 °C), leucocitosis importante
Escherichia coli 0157: H7), las interleucinas y el factor de (mayor de 13/109/L), diarrea sanguinolenta, edad infe-
necrosis tumoral liberado por los monocitos, macrófagos rior a los 2 años y tratamiento previo con agentes
y posiblemente por las células mesangiales expuestas a espasmolíticos.
las endotoxinas. Las proteasas liberadas por los neutrófilos Pueden existir también signos de afectación del
contribuyen también al daño de las células endoteliales y riñón, como hematuria macroscópica y proteinuria de
explican la relación entre la intensidad de la neutrofilia y hasta 3 g/24 h.
un mal pronóstico. Además de la insuficiencia renal, un hallazgo fre-
El daño de las células endoteliales glomerulares cuente es la hipertensión arterial grave y a veces malig-
produce una disminución de la luz glomerular, que es na, probablemente a causa de la lesión microvascular y
favorecida por la liberación de citocinas de potente ac- la consiguiente activación del sistema reninaangiotensina.
ción vasoconstrictora, lo cual aumenta la resistencia En la actualidad, se están observando casos secunda-
vascular, disminuye el flujo sanguíneo renal, y lleva de rios a la infección neumocócica llamados casos atípicos,
esta forma a la insuficiencia renal. ya que no están asociados en su mayoría con diarreas,

1128 Tomo III


de los cuales se piensa que tengan una patogenia dife- das en el 90 % de los casos. En el medulograma existe
rente y generalmente afectan a niños mayores de 2 años. una respuesta compensatoria, con hiperplasia de los sis-
Algunos pacientes desarrollan insuficiencia cardíaca temas eritropoyético y megacariopoyético. También se
y anomalías electrocardiográficas en los que pueden influir detecta una hiperbilirrubinemia indirecta que rara vez
varios factores como la hipertensión, la retención hidrosalina excede de 2 a 3 mg/dL, así como una disminución de la
secundaria a la insuficiencia renal y la anemia, pero se haptoglobina, y elevación de la LDH.
piensa que existe una miocardiopatía específica ligada al Las pruebas de función renal muestran una eleva-
síndrome. Las manifestaciones neurológicas del SUH/PTT ción de la urea y de la creatinina. Pueden aparecer tras-
se pueden presentar como desorientación, confusión, con- tornos electrolíticos como hipercalcemia, hiperfosfatemia,
hiperuricemia, hiponatremia, hipocalcemia e
vulsiones, signos focales o coma.
hipocarbonatemia.
El segundo componente esencial del SUH es la
En las heces fecales hay un crecimiento de la
anemia hemolítica microangiopática.
Escherichia coli 0157: H7. La toxina se detecta en he-
Para su diagnóstico, es esencial observar en la lá-
ces fecales y en sangre.
mina de sangre periférica hematíes fragmentados,
Se puede observar hematuria, leucocituria,
esquistocitos y células en casco. A menudo se encuen-
proteinuria y cilindruria.
tran otros signos de hemólisis: reticulocitosis, disminu-
También existen pruebas serológicas para la de-
ción de la haptoglobina, hiperbilirrubinemia indirecta y
tección de anticuerpos contra el serotipo 0157: H7.
aumento de la LDH.
El tercer componente de la tríada es la TRATAMIENTO
trombocitopenia causada por el consumo periférico. Los niños con SUH debido a la shiga-toxina de la
La plaquetopenia suele ser moderada alrededor de Escherichia coli, casi siempre se recuperan espontá-
100 /109 /L, pero puede ser severa. neamente y no requieren tratamiento con plasma. La
Los estudios de la coagulación pueden mostrar corrección de las alteraciones hidroelectrolíticas y el re-
además de la trombocitopenia, un discreto aumento de poso intestinal son el tratamiento de elección en los ca-
los productos de degradación del fibrinógeno. sos de SUH D+. La recuperación espontánea se produce
DIAGNÓSTICO
en algunas semanas en el 85 al 95 % de los niños.
El tratamiento específico debe comenzar tan pronto
Los criterios diagnósticos tradicionales incluyen:
como se establezca el diagnóstico, para controlar rápida-
anemia hemolítica microangiopática, trombocitopenia e
insuficiencia renal aguda. El diagnóstico es fácil si esta mente la enfermedad y minimizar el riesgo de secuelas.
tríada ocurre en un niño después de un episodio de dia- El recuento de plaquetas y el nivel sérico de la LDH son
rrea y sobre todo si esta es sanguinolenta. Los síndromes los marcadores más sensibles para monitorear la respuesta
incompletos también ocurren, la anemia y la a la terapia con plasma. El tratamiento se debe continuar
trombocitopenia pueden ser ligeras o estar ausentes y la hasta la remisión completa de la enfermedad. No obstan-
nefropatía aguda puede no existir o ser ligera. te, no existen parámetros clínicos que puedan predecir
Se deben realizar coprocultivos en búsqueda de exactamente la duración del tratamiento.
Escherichia coli 0157:H7. Las pruebas serológicas para La mortalidad en esta entidad se ha reducido
la detección de anticuerpos contra 0157 se realizan solo significativamente en los últimos 40 años, del 40 al 50 %
en laboratorios de investigación. a el 3 al 5 %, probablemente como resultado de un
mejor manejo de las medidas de soporte, control de la
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL anemia, insuficiencia renal, hipertensión arterial y
Se realiza con otros procesos que cursan con disbalance del agua y electrólitos. Los agentes
trombocitopenia como el LES, la púrpura trombo- antidiarreicos pueden aumentar el riesgo de megacolon
citopénica inmunológica y la coagulación intravascular tóxico. El uso de antibióticos para tratar la infección
diseminada (CID). por Escherichia coli, ha aumentado el riesgo de SUH.
La injuria de la membrana bacteriana inducida por el
DATOS DE LABORATORIO
antibiótico podría favorecer la liberación de grandes
En el hemograma se observa anemia de grado va- cantidades de toxina preformada, sumado a que la te-
riable, que puede llegar hasta valores entre 40 y 50 g/L. rapia antibiótica podría dar a la Escherichia coli 0157:H7
Esta es secundaria a una hemólisis intravascular con una ventaja selectiva, si estos organismos no son elimi-
prueba de Coombs casi siempre negativa. En la lámina nados del intestino tan rápidamente, como lo es la flora
de sangre periférica se observan fragmentocitos. Los intestinal normal. Además, ciertos antibióticos, en par-
reticulocitos están aumentados y las plaquetas disminui- ticular las quinolonas, el trimetopin y la flurazolidona,

Parte XIV. Hematología 1129


son potentes inductores de expresión del gen de la PRONÓSTICO
shigatoxina y pueden incrementar el nivel de la toxina El resumen del pronóstico del SUH se muestra a
en el intestino. continuación:
Se encuentran en estudio nuevos agentes desti- • Aproximadamente el 85 % de los niños con SUH se
nados a prevenir la exposición de los órganos a la shiga- recuperan completamente con terapia de soporte.
toxina. El más promisorio es la resina, synsorb-Pk • Aproximadamente del 15 al 20 % de los niños pue-
(chromosorb) compuesta por carbohidratos sintéticos den presentar hipertensión de 3 a 5 años, después de
unidos a una sílice coloidal que se une con ella; otra la aparición de la enfermedad.
posibilidad es utilizar una Escherichia coli modificada • En adultos con SUH la mortalidad es baja, sin em-
por recombinación genética, que muestra sobre su su- bargo, la función renal se puede comprometer en
pacientes no tratados.
perficie un receptor que se asemeja al receptor para la
• Se estima que cerca del 80 % de los adultos con SUH,
shiga-toxina, que la absorbe y neutraliza con alta efi- pueden requerir diálisis o trasplante renal a largo plazo.
ciencia. Por último, el starfish, que es un carbohidrato
oligovalente soluble en agua que puede unirse a las Criterios de mal pronóstico. Son factores de mal
moléculas de la toxina. pronóstico: la insuficiencia renal prolongada, el compromi-
El tratamiento con vitamina E se ha utilizado para so glomerular extenso (> 80 %), la edad superior a
corregir el reducido poder antioxidante detectado en el 5 años, el compromiso de arterias de mediano calibre,
SUH y posiblemente involucrado en el daño peroxidativo el consumo persistente de factores de la coagulación, la
hipertensión arterial severa (especialmente de aparición
de los hematíes. La vitamina E administrada en una do-
tardía), el compromiso del SNC, y la neutrofilia. En los
sis de 1 000 mg/m2 /día durante al menos una semana, niños mayores que desarrollan la enfermedad en los
se ha asociado con un buen curso clínico. meses de invierno y en los pacientes con cáncer que
reciben quimioterapia el pronóstico es también pobre.
Medidas que se deben emplear para el tratamiento
• Control estricto del equilibrio hidromineral con res- Bibliografía
tricción de los líquidos a 400 mL/m2 y manejo de la Anemia por deficiencia de hierro
hiponatremia. McKie AT, Barrow D, LATUNDE-DADA, et al. An iron-
regulated ferric reductase associated with the absortion of
• Transfusión de glóbulos rojos solo si existen signos o dietary iron Science 2001; 291:1755.
síntomas de hipovolemia o Hb < a 70 g/L. Cook JD, Skikne BS. Estimates of iron subficiency in the US
• No se usarán antibióticos de forma rutinaria. population Blood 1986;68:726
Bothwell TH, Charlton RW.A general approach of the problems of
• Si el ritmo diurético es < a 1mL/kg/h, se utilizará una iron deficiency and iron overlood in the population at large
infusión de furosemida. Semin Hematol 1982;19:54.
• Dopamina a dosis renales, con el objetivo de mejorar
Anemias megaloblásticas
la perfusión a este nivel. Hoffbrand AV and Hebert V. Nutritional anemias. Sem Hematol
• Control estricto de la tensión arterial. 1999;36, suppl 7:13-23.
• Se valorará la administración de plasma y la realiza- Chanarin I The megaloblastic anaemias. London, Blackwell
Scientific Publications, 1979.
ción de plasmaféresis. Zittoun J Folate and nutrition chemoterapia 1985;4:388
• Diálisis peritoneal, cuando se produce:
− Oliguria que no responde a dosis altas de Anemias de enfermedades crónicas
Weiss g, Goodnough LT. Anemia of chronic disease N Eng J Med
furosemida. 2005; 352:1011-1023.
− Sobrecarga hídrica. Means RT Jr Recent developments in the anemia of chronic
− Acidosis que no responde a la administración de disease Curr Hematol Rep 2003;2:116-21
bicarbonato. Anemias diseritropoyéticas congénitas
− Hipertensión arterial refractaria a las medidas Hodges VM, Molloy GY, Wickramasinghe SN. Genetic
farmacológicas. heterogeneity of congenital dyserythropoietic anemia type I.
Blood 1999;94:1139-40.
Iolascon A, Delaunay J, Wickramasinghe SN, Perrotta S, Gigante
En los casos en los que sea difícil o esté contrain- M, Camaschella C. Natural history of congenital
dicada la diálisis peritoneal, se recomienda el uso de dyserythropoietic anemia type II. Blood 2001; 98: 1258-60.
hemodiálisis. En casos extremos, cuando el paciente Sandstrom H, Wahlin A. Congenital dyserythropoietic anemia
evoluciona hacia la insuficiencia renal crónica, se debe type III. Haematologica 2000; 85: 753-7.
Virjee S, Hatton C. Congenital dyserythropoiesis type I and
realizar trasplante renal. alpha-interferon therapy. BR J Haematol 1996; 94: 579.

1130 Tomo III


Esferocitosis hereditaria
Tse WT, Lux SE. Red blood cells membrane disorders Br J . Capítulo 84 .
Haematol, 1999;104:2
iolacona, Miraglia del Giudice E Hereditary spherocitosis; from
clinical to molecular defects haematologica 1998;83:240
Gallagher PG, Ferreira JD. Molecular basis of erythrocyte
membrane disorders. Curr Opin Hematol 1997;4:128-34
Síndromes de insuficiencia
medular
Drepanocitosis Sergio Machín
Colombo B, Svarch E, Martinez G. Genética y clínica de las
hemoglobinas humanas. 2a.ed. Ed Pueblo y Educación, La
Habana, 1993 INSUFICIENCIAS MEDULARES
Stuart MJ, Nagel RL. Sickle-cell disease Lancet 2004; 364:1343. CONGÉNITAS
Svarch E, Machín S Nieves RM, et al. H Hydroxyurea treatment
in children with sickle cell anemia in Central America and the Las insuficiencias medulares son un conjunto de
Caribbean countries. Pediatric Blood Cancer 2006; 47:111 trastornos poco frecuentes en pediatría, que se caracte-
Granda H, Gispert S, Dorticos A, et al. Cuban program for
prevention of sickle cell disease. Lancet 1991;337:152. rizan por citopenias aisladas o combinadas como conse-
cuencia de una producción ineficaz en la médula ósea.
Síndromes talasémicos
Pueden ser congénitas o adquiridas. El 25 % de las insu-
Colombo B, Svarch E, Martinez G Genética y clínica de las
hemoglobinas anormales:2a ed. Ed Pueblo y Educación. La ficiencias medulares son congénitas y tienen alguna al-
Habana 1993 Pag 196-228 teración genética.
Nathan DG Oski FA Hemato of infancy end childhood 6th ed. WB
Saunders Company Philadelphia 2003 p 842-919.
Se describirán los siguientes síndromes:
Borgna-Pignatti C. A Few New tiles in a large • Anemia de Fanconi.
mosaic.Haematologica 2006;91;1159 • Trombocitopenia amegacariocítica.
Deficiencia de piruvato kinasa • Disqueratosis congénita.
Glader BE, Lukens JN: Hereditary hemolytic anemias associated • Síndrome de Shwachman-Diamond.
with abnormalities of erythrocyte glycolysis and nucleotide • Síndrome de Kostman.
metabolism. In: Lee GR, Foerster J, Lukens J, Paraskevas F,
Greer JP, Rodgers GM, eds. Wintrobe's Clinical Hematology.
10th ed. Baltimore, Md: Williams & Wilkins; 1999: 1160-75. Anemia de Fanconi
Deficiencia de glucosa-6- fosfato deshidrogenasa CUADRO CLÍNICO
Metha A. Glucose-6-phosphate-dehydrogenase deficiency. Best Es una enfermedad autosómica recesiva
Pract Res Clin Haematol 2000;13:21.
Jacobach G. Biochemical and genetic bases of red cell enzime
genéticamente compleja, heterogénea desde el punto de
deficiency. Best Pract Res Clin Haematol 2000; 13:1-20. vista fenotípico, que se caracteriza por una insuficiencia
Arese P, De Fiora A: Pathophisiology of hemolysis in glucose-6- medular progresiva. En la actualidad se han descrito 11
phosphate dehydrogenase deficiency. Sem of Hematology
1990; 27: 1-40. subtipos genéticos y en 8 se ha identificado el gen
involucrado. El sitio A (gen FANCA) es el más frecuen-
Anemias hemolíticas autoinmunes te (65 a 70 %) y en él se han descrito más de 100 muta-
Garraty G, Martin-Vega C, Petz LD, et al. Immune Haemolytic
Anaemias. En: Immune Haemolytic Anaemias. Ed. ciones, lo que explica la gran heterogeneidad clínica de
Proceedings of de European School of Trasfusion Medicine. la anemia de Fanconi que puede ir desde ninguna hasta
1996.p. 1-116.
Warren RW, Collins ML. Immune hemolytic anemia in children.
múltiples malformaciones congénitas: hiperpigmentación
Crit Rev Oncol Hematol 1988; 8: 65. de la piel, manchas café con leche, alteraciones
Shulman IA, Branch DR, Nelson JM, .Autoimmune hemolytic esqueléticas, como aplasia o hipoplasia del radio, ausen-
anemia with both cold and warm autoantibodies. JAMA
1985; 254:1175. cia o hipoplasia del dedo pulgar, pulgar supernumerario;
Quartier P, Brethon B, Philipper P, et al. Treatment of childhood microcefalia, estrabismo, microftalmía, sordera, retraso
autoimmune haemolytic anemia with rituximab. Lancet mental, hipogonadismo, malformaciones renales y car-
2001;358: 1511.
díacas. La media de edad de aparición de las manifesta-
Anemia hemolítica microangiopática ciones hematológicas es de 7 años, pero se puede
Valles PG, Pesle S, Piovano L, et al. Postdiarrheal Shiga toxin-
mediated hemolytic uremic syndrome similar to septic shock.
diagnosticar en el adulto. En el curso de la enfermedad
Medicina (B Aires). 2005;65:395-401. se pueden presentar procesos malignos: leucemia
Trippaerts M, Demaret P, Lombet J,. The hemolytic uremic mieloide aguda, síndrome mielodisplástico o tumores
syndrome prime reason for acute renal failure in children. Rev
Med Liege. 2005,60:729. sólidos.

Parte XIV. Hematología 1131


Esferocitosis hereditaria
Tse WT, Lux SE. Red blood cells membrane disorders Br J . Capítulo 84 .
Haematol, 1999;104:2
iolacona, Miraglia del Giudice E Hereditary spherocitosis; from
clinical to molecular defects haematologica 1998;83:240
Gallagher PG, Ferreira JD. Molecular basis of erythrocyte
membrane disorders. Curr Opin Hematol 1997;4:128-34
Síndromes de insuficiencia
medular
Drepanocitosis Sergio Machín
Colombo B, Svarch E, Martinez G. Genética y clínica de las
hemoglobinas humanas. 2a.ed. Ed Pueblo y Educación, La
Habana, 1993 INSUFICIENCIAS MEDULARES
Stuart MJ, Nagel RL. Sickle-cell disease Lancet 2004; 364:1343. CONGÉNITAS
Svarch E, Machín S Nieves RM, et al. H Hydroxyurea treatment
in children with sickle cell anemia in Central America and the Las insuficiencias medulares son un conjunto de
Caribbean countries. Pediatric Blood Cancer 2006; 47:111 trastornos poco frecuentes en pediatría, que se caracte-
Granda H, Gispert S, Dorticos A, et al. Cuban program for
prevention of sickle cell disease. Lancet 1991;337:152. rizan por citopenias aisladas o combinadas como conse-
cuencia de una producción ineficaz en la médula ósea.
Síndromes talasémicos
Pueden ser congénitas o adquiridas. El 25 % de las insu-
Colombo B, Svarch E, Martinez G Genética y clínica de las
hemoglobinas anormales:2a ed. Ed Pueblo y Educación. La ficiencias medulares son congénitas y tienen alguna al-
Habana 1993 Pag 196-228 teración genética.
Nathan DG Oski FA Hemato of infancy end childhood 6th ed. WB
Saunders Company Philadelphia 2003 p 842-919.
Se describirán los siguientes síndromes:
Borgna-Pignatti C. A Few New tiles in a large • Anemia de Fanconi.
mosaic.Haematologica 2006;91;1159 • Trombocitopenia amegacariocítica.
Deficiencia de piruvato kinasa • Disqueratosis congénita.
Glader BE, Lukens JN: Hereditary hemolytic anemias associated • Síndrome de Shwachman-Diamond.
with abnormalities of erythrocyte glycolysis and nucleotide • Síndrome de Kostman.
metabolism. In: Lee GR, Foerster J, Lukens J, Paraskevas F,
Greer JP, Rodgers GM, eds. Wintrobe's Clinical Hematology.
10th ed. Baltimore, Md: Williams & Wilkins; 1999: 1160-75. Anemia de Fanconi
Deficiencia de glucosa-6- fosfato deshidrogenasa CUADRO CLÍNICO
Metha A. Glucose-6-phosphate-dehydrogenase deficiency. Best Es una enfermedad autosómica recesiva
Pract Res Clin Haematol 2000;13:21.
Jacobach G. Biochemical and genetic bases of red cell enzime
genéticamente compleja, heterogénea desde el punto de
deficiency. Best Pract Res Clin Haematol 2000; 13:1-20. vista fenotípico, que se caracteriza por una insuficiencia
Arese P, De Fiora A: Pathophisiology of hemolysis in glucose-6- medular progresiva. En la actualidad se han descrito 11
phosphate dehydrogenase deficiency. Sem of Hematology
1990; 27: 1-40. subtipos genéticos y en 8 se ha identificado el gen
involucrado. El sitio A (gen FANCA) es el más frecuen-
Anemias hemolíticas autoinmunes te (65 a 70 %) y en él se han descrito más de 100 muta-
Garraty G, Martin-Vega C, Petz LD, et al. Immune Haemolytic
Anaemias. En: Immune Haemolytic Anaemias. Ed. ciones, lo que explica la gran heterogeneidad clínica de
Proceedings of de European School of Trasfusion Medicine. la anemia de Fanconi que puede ir desde ninguna hasta
1996.p. 1-116.
Warren RW, Collins ML. Immune hemolytic anemia in children.
múltiples malformaciones congénitas: hiperpigmentación
Crit Rev Oncol Hematol 1988; 8: 65. de la piel, manchas café con leche, alteraciones
Shulman IA, Branch DR, Nelson JM, .Autoimmune hemolytic esqueléticas, como aplasia o hipoplasia del radio, ausen-
anemia with both cold and warm autoantibodies. JAMA
1985; 254:1175. cia o hipoplasia del dedo pulgar, pulgar supernumerario;
Quartier P, Brethon B, Philipper P, et al. Treatment of childhood microcefalia, estrabismo, microftalmía, sordera, retraso
autoimmune haemolytic anemia with rituximab. Lancet mental, hipogonadismo, malformaciones renales y car-
2001;358: 1511.
díacas. La media de edad de aparición de las manifesta-
Anemia hemolítica microangiopática ciones hematológicas es de 7 años, pero se puede
Valles PG, Pesle S, Piovano L, et al. Postdiarrheal Shiga toxin-
mediated hemolytic uremic syndrome similar to septic shock.
diagnosticar en el adulto. En el curso de la enfermedad
Medicina (B Aires). 2005;65:395-401. se pueden presentar procesos malignos: leucemia
Trippaerts M, Demaret P, Lombet J,. The hemolytic uremic mieloide aguda, síndrome mielodisplástico o tumores
syndrome prime reason for acute renal failure in children. Rev
Med Liege. 2005,60:729. sólidos.

Parte XIV. Hematología 1131


DATOS DE LABORATORIO plaquetas y medidas específicas según la localización
La hemoglobina, leucocitos, plaquetas y del sangramiento. El TPH es el único tratamiento
reticulocitos están disminuidos. El aspirado y la biopsia curativo.
de la médula ósea presentan hipocelularidad, con pocos
elementos hematopoyéticos y aumento de linfocitos, Disqueratosis congénita
histiocitos, células plasmáticas y tejido graso. En ocasio- Es una forma rara de displasia ectodérmica,
nes, en el período inicial de la enfermedad, el aspirado recesiva ligada al sexo, con hiperpigmentación reticulada
puede ser celular y hasta hipercelular con solo depre- de la piel, atrofia de la uñas y leucoplaquia. La anemia
sión del sistema megacariopoyético. Con el tiempo se aplástica se presenta en la mitad de los pacientes, gene-
produce una depresión progresiva de la celularidad. La ralmente en la segunda década de la vida.
HbF y el antígeno i están aumentados. La eritropoyetina
está aumentada. Síndrome de Shwachman Diamond
En la anemia aplástica de Fanconi las células Consiste en una insuficiencia del páncreas exocrino
hematopoyéticas presentan inestabilidad genética y au- asociada a neutropenia. Es autosómica recesiva y apa-
mento de la apoptosis, con mayor número de rupturas rece en el lactante o niño pequeño. El 40 % de los pa-
cromosómicas espontáneas o inducidas por agentes cientes desarrollan anemia y trombocitopenia.
clastogénicos como el diepoxibutano y la mitomicina C.
El análisis de las rupturas, reordenamientos, intercam- Síndrome de Kostman
bios y endorreduplicaciones cromosómicas inducidas por Llamado también agranulocitosis infantil. Es
estos agentes en los linfocitos de la sangre periférica o autosómico dominante en la mayoría de los pacientes.
fibroblastos de la piel han demostrado ser una prueba Se presenta en el primer año de la vida con infecciones
diagnóstica de la enfermedad. piógenas graves y muerte temprana. El uso del factor
TRATAMIENTO
de crecimiento granulocítico (G-CGF) ha mejorado el
pronóstico.
El único tratamiento potencialmente curativo es el
trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH) Anemia aplástica adquirida
alogénico. En los pacientes que no tienen donante se La incidencia de esta enfermedad es de 2 a 6 por
utiliza tratamiento de soporte: transfusiones de glóbulos millón de personas, menos frecuente en el niño. Se ca-
rojos y plaquetas y antifibrinolíticos. El tratamiento con racteriza por pancitopenia con hipocelularidad de la mé-
andrógenos combinado o no con corticoesteroides dis- dula ósea en ausencia de una infiltración anormal o
minuye los requerimientos transfusionales, raramente aumento de reticulina. Las formas más severas presen-
aumentan los leucocitos y excepcionalmente las tan < 0,5/10 9 /L neutrófilos, < 20/10 9/L plaquetas,
plaquetas. El andrógeno más utilizado es la oximetolona. < 1/109/L de reticulocitos y/o <25 % de celularidad ó de
Los andrógenos producen virilización y son hepatotóxicos. 25 al 50 % con <30 % de células hematopoyéticas en la
En infecciones severas se puede utilizar el factor de cre-
médula ósea. Puede ser idiopática (70 al 80 %) o secun-
cimiento granulocítico-monocítico (GM-CSF) que aumen-
daria a drogas como el cloramfenicol, sales de oro,
ta la cifra de neutrófilos y monocitos. La terapia génica
es una posibilidad en el futuro. antiinflamatorios no esteroideos y carbamazepina, quí-
Con los tratamientos actuales la supervivencia de micos como el benceno, radiaciones ionizantes; infec-
la enfermedad ha aumentado. La mediana de sobrevida ciones virales (hepatitis no-A, no-B, no-C y no-G), LES
entre el inicio de las manifestaciones hematológicas y el y timoma.
fallecimiento es de 7 años y el riesgo de muerte es de Existen múltiples evidencias que indican que en la
80 % a los 20 años si no se realiza TPH alogénico fisiopatología de esta enfermedad participa un proceso
inmunológico con aumento de los linfocitos T activados
Trombocitopenia amegacariocítica circulantes que producen citocinas como el interferón
Es una enfermedad hereditaria autosómica recesiva que suprime la hematopoyesis. También contribuyen las
muy rara que se diagnostica en el primer año de la vida alteraciones del microambiente de la médula ósea.
por hemorragias cutaneomucosas y/o gastrointestinales,
CUADRO CLÍNICO
con trombocitopenia aislada y ausencia o disminución
del sistema megacariopoyético en el aspirado y en la El cuadro clínico depende de la intensidad de la
biopsia de la médula ósea. Cuando se presentan cua- pancitopenia: palidez cutaneomucosa, fatigabilidad,
dros hemorrágicos se administra concentrado de taquicardia, infecciones bacterianas frecuentes, úlceras

1132 Tomo III


en mucosas y manifestaciones hemorrágicas fundamen- histocompatible. El tratamiento inmunosupresor con
talmente petequias, equímosis y sangramientos mucosos. gammaglobulina antitimocítica y ciclosporina A puede
No existe visceromegalia. producir una recuperación parcial o total de la
hematopoyesis hasta en el 80 % de los enfermos que no
DATOS DE LABORATORIO
tienen donante. El 40 % de estos enfermos están ex-
La anemia es normocítica normocrómica. Los puestos a desarrollar una enfermedad clonal.
leucocitos están disminuidos al igual que las plaquetas. El uso de GM-CSF o G-CSF es muy discutido y
El aspirado y la biopsia de la médula ósea presentan siempre debe ser utilizados asociados a los tratamientos
hipocelularidad con aumento del tejido graso, depresión anteriores, nunca como medida terapéutica inicial
de los tres sistemas hematopoyéticos y ausencia de in- aislada.
filtración por células ajenas al parénquima medular o Los andrógenos se pueden indicar cuando no hay
reticulina. La biopsia de médula ósea es indispensable respuesta al tratamiento inmunosupresor con el objetivo
para el diagnóstico, clasificación y tratamiento de la en- de disminuir temporalmente los requerimientos
fermedad. trasfusionales.
El estudio ferrocinético muestra un tiempo de acla-
ramiento del hierro plasmático prolongado y una dismi- Bibliografía
nución de su intercambio y de su utilización. Alter BP. Inherinted bone marrow failure syndromes. In: Nathan
En esta variedad de aplasia no existen alteraciones OQ, Oski SH, Ginsburg D, Look AT, eds. 6th ed Hematology
citogenéticas, pero siempre se debe realizar el estudio of infancy and childhood. Philadelphia, W.B. Saunders Co;
del cariotipo utilizando agentes clastogénicos que indu- 2003. p. 280.
Bagdy GC Jr. Genetics basis of Fanconi anemia. Curr Opin
cen las rupturas cromosómicas para el diagnóstico dife- Hematol 2003; 10: 68.
rencial con la anemia de Fanconi. Guidelines for the diagnosis and management of acquired aplastic
La hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN) en anaemia. Brit J Haematol 2003; 123: 782.
ocasiones se presenta como una aplasia, sobre todo en
niños pequeños. En alrededor del 50 % de enfermos con
aplasia, la prueba de Hams es positiva y se ha demos- . Capítulo 85 .
trado la ausencia de la enzima fosfatidilinositol glicosilada.
Esto se conoce como síndrome HPN/aplasia, por lo que
en todos los casos se deben realizar las pruebas de Hams, Policitemia
Crosby y sucrosa y el inmunofenotipo con antiCD55 y Eva Svarch
antiCD59 para identificar esta asociación.
La policitemia se define como un aumento en el
TRATAMIENTO
número de hematíes circulantes, de la hemoglobina y del
Se debe iniciar inmediatamente después del diag- hematócrito por encima de los valores considerados
nóstico, dirigido a la identificación y eliminación de posi- como normales. Existen tres variedades: primaria o vera,
bles factores causales, a las complicaciones secundarias secundaria y relativa. En los primeros dos tipos hay un
a la pancitopenia y a la restauración de la hematopoyesis aumento de la masa total de glóbulos rojos mientras que
normal. en el tercero la masa total de glóbulos rojos es normal y
Se administran transfusiones de glóbulos rojos para existe una disminución del volumen plasmático.
mantener la hemoglobina alrededor de 70 g/L y de con-
centrado de plaquetas solo cuando se presenten cua- POLICITEMIA VERA
dros hemorrágicos. Se recomienda el uso de agentes
Está clasificada como un síndrome mieloproli-
quelantes del hierro en los pacientes politransfundidos.
Las infecciones bacterianas en enfermos con ferativo y se caracteriza por la expansión clonal de una
neutropenia pueden ser rápidamente fatales, por lo que célula progenitora multipotencial que se diferencia hacia
está indicado siempre el uso de antibióticos de amplio las células precursoras eritroides capaces de proliferar
espectro por vía intravenosa, no se debe utilizar la vía en ausencia de eritropoyetina.
intramuscular por el riesgo de sangramiento. Cuando se Es muy rara en niños. Se han descrito 20 casos
sospecha una infección micótica se debe tratar enérgi- hasta el 2003 y no todos ellos están bien caracterizados.
camente. Las infecciones virales son raras. Su patogenia se desconoce.
El TPH es el único tratamiento curativo, pero solo La dosificación de eritropoyetina en suero es nor-
una minoría de los pacientes tiene un donante mal o está disminuida y su receptor es normal.

Parte XIV. Hematología 1133


en mucosas y manifestaciones hemorrágicas fundamen- histocompatible. El tratamiento inmunosupresor con
talmente petequias, equímosis y sangramientos mucosos. gammaglobulina antitimocítica y ciclosporina A puede
No existe visceromegalia. producir una recuperación parcial o total de la
hematopoyesis hasta en el 80 % de los enfermos que no
DATOS DE LABORATORIO
tienen donante. El 40 % de estos enfermos están ex-
La anemia es normocítica normocrómica. Los puestos a desarrollar una enfermedad clonal.
leucocitos están disminuidos al igual que las plaquetas. El uso de GM-CSF o G-CSF es muy discutido y
El aspirado y la biopsia de la médula ósea presentan siempre debe ser utilizados asociados a los tratamientos
hipocelularidad con aumento del tejido graso, depresión anteriores, nunca como medida terapéutica inicial
de los tres sistemas hematopoyéticos y ausencia de in- aislada.
filtración por células ajenas al parénquima medular o Los andrógenos se pueden indicar cuando no hay
reticulina. La biopsia de médula ósea es indispensable respuesta al tratamiento inmunosupresor con el objetivo
para el diagnóstico, clasificación y tratamiento de la en- de disminuir temporalmente los requerimientos
fermedad. trasfusionales.
El estudio ferrocinético muestra un tiempo de acla-
ramiento del hierro plasmático prolongado y una dismi- Bibliografía
nución de su intercambio y de su utilización. Alter BP. Inherinted bone marrow failure syndromes. In: Nathan
En esta variedad de aplasia no existen alteraciones OQ, Oski SH, Ginsburg D, Look AT, eds. 6th ed Hematology
citogenéticas, pero siempre se debe realizar el estudio of infancy and childhood. Philadelphia, W.B. Saunders Co;
del cariotipo utilizando agentes clastogénicos que indu- 2003. p. 280.
Bagdy GC Jr. Genetics basis of Fanconi anemia. Curr Opin
cen las rupturas cromosómicas para el diagnóstico dife- Hematol 2003; 10: 68.
rencial con la anemia de Fanconi. Guidelines for the diagnosis and management of acquired aplastic
La hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN) en anaemia. Brit J Haematol 2003; 123: 782.
ocasiones se presenta como una aplasia, sobre todo en
niños pequeños. En alrededor del 50 % de enfermos con
aplasia, la prueba de Hams es positiva y se ha demos- . Capítulo 85 .
trado la ausencia de la enzima fosfatidilinositol glicosilada.
Esto se conoce como síndrome HPN/aplasia, por lo que
en todos los casos se deben realizar las pruebas de Hams, Policitemia
Crosby y sucrosa y el inmunofenotipo con antiCD55 y Eva Svarch
antiCD59 para identificar esta asociación.
La policitemia se define como un aumento en el
TRATAMIENTO
número de hematíes circulantes, de la hemoglobina y del
Se debe iniciar inmediatamente después del diag- hematócrito por encima de los valores considerados
nóstico, dirigido a la identificación y eliminación de posi- como normales. Existen tres variedades: primaria o vera,
bles factores causales, a las complicaciones secundarias secundaria y relativa. En los primeros dos tipos hay un
a la pancitopenia y a la restauración de la hematopoyesis aumento de la masa total de glóbulos rojos mientras que
normal. en el tercero la masa total de glóbulos rojos es normal y
Se administran transfusiones de glóbulos rojos para existe una disminución del volumen plasmático.
mantener la hemoglobina alrededor de 70 g/L y de con-
centrado de plaquetas solo cuando se presenten cua- POLICITEMIA VERA
dros hemorrágicos. Se recomienda el uso de agentes
Está clasificada como un síndrome mieloproli-
quelantes del hierro en los pacientes politransfundidos.
Las infecciones bacterianas en enfermos con ferativo y se caracteriza por la expansión clonal de una
neutropenia pueden ser rápidamente fatales, por lo que célula progenitora multipotencial que se diferencia hacia
está indicado siempre el uso de antibióticos de amplio las células precursoras eritroides capaces de proliferar
espectro por vía intravenosa, no se debe utilizar la vía en ausencia de eritropoyetina.
intramuscular por el riesgo de sangramiento. Cuando se Es muy rara en niños. Se han descrito 20 casos
sospecha una infección micótica se debe tratar enérgi- hasta el 2003 y no todos ellos están bien caracterizados.
camente. Las infecciones virales son raras. Su patogenia se desconoce.
El TPH es el único tratamiento curativo, pero solo La dosificación de eritropoyetina en suero es nor-
una minoría de los pacientes tiene un donante mal o está disminuida y su receptor es normal.

Parte XIV. Hematología 1133


La poliglobulina puede causar síntomas cardíacos • Hemoglobinopatías.
como disnea e hipertensión y síntomas neurológicos como − Variantes de hemoglobina con aumento de la afi-
mareos y parestesias. Se pueden producir trombosis y nidad por el oxígeno.
hemorragias por trombocitosis y alteración de la función − Deficiencia de metahemoglobina reductasa.
plaquetaria. Al examen físico se constata casi siempre − Tumores malignos (renales, hepáticos,
hepatoesplenomegalia e hipertensión arterial. suprarrenales o cerebelosos).
DIAGNÓSTICO
− Quistes renales o hidronefrosis.
− Síndrome de Cushing.
Para el diagnóstico se utilizan criterios mayores
− Tratamiento con esteroides anabolizantes.
(categoría A) y criterios menores (categoría B)
• Familiar.
Categoría A
− Las causas más frecuentes de policitemia secun-
• Aumento de la masa total de glóbulos rojos (sexo
daria son las alteraciones cardiovasculares con cor-
masculino = 36 mL/kg y sexo femenino = 32 mL/kg).
tocircuito de derecha a izquierda y las enfermedades
• Saturación arterial de oxígeno = 92 %.
pulmonares.
• Esplenomegalia
Las manifestaciones clínicas son: cianosis,
Categoría B hiperemia de las mucosas y acropaquia. Cuando el
• Trombocitosis (>400 x 109/L). hematócrito es mayor de 65 % las manifestaciones de
• Leucocitosis (>12 x 109/L). hiperviscosidad pueden obligar a realizar flebotomía.
• Aumento de la fosfatasa alcalina leucocitaria. La mayor demanda de producción de glóbulos rojos
• Aumento de la vitamina B12 y de la capacidad de puede traer como consecuencia una deficiencia de hie-
captación de la vitamina B12. rro en cuyo caso debe realizarse tratamiento. Los
hematíes deficientes en hierro son más rígidos, lo que
El diagnóstico se realiza con A1+, A2 + y A3 + o aumenta aún más el riesgo de trombosis intracraneal,
A1 + y A2+ y dos de la categoría B. debe hacerse periódicamente estudio del hierro. Las
La flebotomía y los agentes antiplaquetarios como personas que viven a grandes alturas desarrollan
la aspirina disminuyen el riesgo de trombosis y hemorra- policitemia por hipoxia. La hemoglobina aumenta 4 %
gia. Si el paciente no mejora con estas medidas se pue- por cada 1 000 m de altura.
den utilizar fármacos antiproliferativos como la
hidroxiurea, el interferón α o el anagrelide. POLICITEMIA RELATIVA
El riesgo de transformación en mielofibrosis o La policitemia relativa es en realidad una
leucemia aguda ha disminuido desde que se dejaron hemoconcentración que desaparece cuando se restaura
de emplear los agentes alquilantes y el fósforo el volumen plasmático. Esta situación se produce en la
radiactivo. deshidratación aguda por quemaduras u otras causas.
No son raras las supervivencias prolongadas.
Bibliografía
POLICITEMIAS SECUNDARIAS Nathan DG Osk, FA. Hematology of infancy and childhood 6th ed
WB Saunders Company. Philcadelphia, 2003 p 1193-5
Existen diferentes tipos:
• Neonatales.
− Transfusión materno-fetal o feto-fetal en el caso
de gemelos. . Capítulo 86 .
− Trisomías 13,18, ó 21.
− Madre diabética.
− Retraso del crecimiento intrauterino. Alteraciones de los leucocitos
Alejandro González Otero
− Hiperplasia suprarrenal.
− Tirotoxicosis.
• Por hipoxia. Se incluyen diferentes aspectos:
− Altitud. • Alteraciones en el número de los leucocitos.
− Enfermedad cardíaca o pulmonar. • Alteraciones de la función normal.
− Hipoventilación central. • Alteraciones malignas: las leucemias.

1134 Tomo III


La poliglobulina puede causar síntomas cardíacos • Hemoglobinopatías.
como disnea e hipertensión y síntomas neurológicos como − Variantes de hemoglobina con aumento de la afi-
mareos y parestesias. Se pueden producir trombosis y nidad por el oxígeno.
hemorragias por trombocitosis y alteración de la función − Deficiencia de metahemoglobina reductasa.
plaquetaria. Al examen físico se constata casi siempre − Tumores malignos (renales, hepáticos,
hepatoesplenomegalia e hipertensión arterial. suprarrenales o cerebelosos).
DIAGNÓSTICO
− Quistes renales o hidronefrosis.
− Síndrome de Cushing.
Para el diagnóstico se utilizan criterios mayores
− Tratamiento con esteroides anabolizantes.
(categoría A) y criterios menores (categoría B)
• Familiar.
Categoría A
− Las causas más frecuentes de policitemia secun-
• Aumento de la masa total de glóbulos rojos (sexo
daria son las alteraciones cardiovasculares con cor-
masculino = 36 mL/kg y sexo femenino = 32 mL/kg).
tocircuito de derecha a izquierda y las enfermedades
• Saturación arterial de oxígeno = 92 %.
pulmonares.
• Esplenomegalia
Las manifestaciones clínicas son: cianosis,
Categoría B hiperemia de las mucosas y acropaquia. Cuando el
• Trombocitosis (>400 x 109/L). hematócrito es mayor de 65 % las manifestaciones de
• Leucocitosis (>12 x 109/L). hiperviscosidad pueden obligar a realizar flebotomía.
• Aumento de la fosfatasa alcalina leucocitaria. La mayor demanda de producción de glóbulos rojos
• Aumento de la vitamina B12 y de la capacidad de puede traer como consecuencia una deficiencia de hie-
captación de la vitamina B12. rro en cuyo caso debe realizarse tratamiento. Los
hematíes deficientes en hierro son más rígidos, lo que
El diagnóstico se realiza con A1+, A2 + y A3 + o aumenta aún más el riesgo de trombosis intracraneal,
A1 + y A2+ y dos de la categoría B. debe hacerse periódicamente estudio del hierro. Las
La flebotomía y los agentes antiplaquetarios como personas que viven a grandes alturas desarrollan
la aspirina disminuyen el riesgo de trombosis y hemorra- policitemia por hipoxia. La hemoglobina aumenta 4 %
gia. Si el paciente no mejora con estas medidas se pue- por cada 1 000 m de altura.
den utilizar fármacos antiproliferativos como la
hidroxiurea, el interferón α o el anagrelide. POLICITEMIA RELATIVA
El riesgo de transformación en mielofibrosis o La policitemia relativa es en realidad una
leucemia aguda ha disminuido desde que se dejaron hemoconcentración que desaparece cuando se restaura
de emplear los agentes alquilantes y el fósforo el volumen plasmático. Esta situación se produce en la
radiactivo. deshidratación aguda por quemaduras u otras causas.
No son raras las supervivencias prolongadas.
Bibliografía
POLICITEMIAS SECUNDARIAS Nathan DG Osk, FA. Hematology of infancy and childhood 6th ed
WB Saunders Company. Philcadelphia, 2003 p 1193-5
Existen diferentes tipos:
• Neonatales.
− Transfusión materno-fetal o feto-fetal en el caso
de gemelos. . Capítulo 86 .
− Trisomías 13,18, ó 21.
− Madre diabética.
− Retraso del crecimiento intrauterino. Alteraciones de los leucocitos
Alejandro González Otero
− Hiperplasia suprarrenal.
− Tirotoxicosis.
• Por hipoxia. Se incluyen diferentes aspectos:
− Altitud. • Alteraciones en el número de los leucocitos.
− Enfermedad cardíaca o pulmonar. • Alteraciones de la función normal.
− Hipoventilación central. • Alteraciones malignas: las leucemias.

1134 Tomo III


• Alteraciones clonales con predisposición al desarro- estas células mieloides depende de las características
llo de enfermedades malignas (síndromes mielopro- de la tinción con coloraciones supravitales) y los linfocitos
liferativos, mielodisplásticos ymielodisplásticos- que tienen que ver con la producción de anticuerpos, la
mieloproliferativos). respuesta inmune y la memoria inmunológica.
Este tema tratará fundamentalmente de los
Alteraciones en el número neutrófilos. Para una fagocitosis adecuada el neutrófilo
de los leucocitos debe efectuar diferentes procesos: adhesión al endotelio,
En condiciones fisiológicas el número de leucocitos migración al sitio requerido (quimiotaxis), endocitosis con
después de la etapa de recién nacido se encuentra entre formación del fagosoma, que es una vacuola que engloba
5 y 10/109/L con una composición de la fórmula diferen- al germen o partícula, en la cual se produce la destruc-
cial que cambia de acuerdo con la edad. En el recién ción y la peroxidación por la descarga de los gránulos
nacido hay predominio de neutrófilos o segmentados, y donde existen enzimas de diferentes tipos; además, para
ya desde la etapa de lactante hasta los 6 años hay que se produzca la endocitosis tiene que ocurrir la
linfocitosis que después disminuye hasta alcanzar una opsonización del germen o partícula, que no depende del
fórmula diferencial como la del adulto. Las causas de neutrófilo, sino de factores presentes en el plasma
leucocitosis son diversas, pero dentro de las no malignas (opsoninas) y que permiten la fagocitosis.
las infecciones son las más comunes.
Se describen alteraciones con traducción clínica en
Se considera leucopenia cuando las cifras son in-
cada una de las etapas, así como en la opsonización. En
feriores a 5/109/L y casi siempre son neutropenias con
los pacientes afectados la cifra de leucocitos es normal,
valores inferiores a 1,5/10 9/L. La severidad de la
pero tienen un cuadro clínico caracterizado por la for-
neutropenia depende del número absoluto de neutrófilos,
que se obtiene mediante una regla de 3 entre el porcen- mación de abscesos e infecciones graves; un ejemplo es
taje de neutrófilos y el número total de leucocitos; por la enfermedad granulomatosa crónica, donde la función
ejemplo, con 4 /109/L leucocitos y 20 % de neutrófilos, la granulocítica es normal, aunque no se produce la
cifra total de estas células sería 800/109/L. La función peroxidación. Esta enfermedad es más frecuente en
fundamental de los neutrófilos y de los monocitos es la varones, pues hay una forma ligada al cromosoma X.
fagocitosis. Las neutropenias se clasifican como ligeras Otra de las alteraciones funcionales es el síndrome
con valores entre 1 y 1,5 / 109/L, moderadas con valores de Beguez-Chediak-Higashi donde hay defectos en la
entre 0,5 y 1 / 109/L, severas con valores< 0,5 / 109/L y descarga de los gránulos primarios. Este síndrome fue
muy severas < 0,2 /109/L. descrito desde el punto de vista clínico por el doctor
Las causas más frecuentes son adquiridas como Antonio Beguez César, en Santiago de Cuba, y las alte-
consecuencia de algunas infecciones, por un tratamien- raciones leucocitarias fueron descritas simultáneamen-
to citostático o por una aplasia medular, aunque se han te en Cuba y en Japón. El trastorno se hereda de forma
descrito causas congénitas. Dentro de estas últimas se autosómica recesiva y los pacientes padecen de albinismo
describen síndromes como el de Shwchman-Diamond, oculocutáneo, hepatoesplenomegalia, disfunción
donde existen alteraciones múltiples de diferentes teji- neurológica, sangramientos debidos a trombocitopenia y
dos o la disqueratosis congénita, aunque hay otros que a defectos de la función plaquetaria y susceptibilidad a
solo afectan la hematopoyesis, como la enfermedad de las infecciones. En sangre periférica y en la médula ósea
Kostman o la neutropenia cíclica. En la enfermedad de existen lisosomas gigantes fundamentalmente en los
Kostman, el niño tiene infecciones desde el nacimiento neutrófilos.
con una neutropenia severa y tendencia a la transfor-
Los eosinófilos representan alrededor del 3 al 4 %
mación en una leucemia aguda. En esta enfermedad hay
de la fórmula leucocitaria normal y se ha descrito su
un defecto de la enzima elastasa neutrofílica, con res-
aumento en numerosas condiciones sobre todo en las
puesta al factor estimulador de colonias granulocítica
infestaciones parasitarias, los procesos alérgicos y algu-
(G-CSF).
nas enfermedades malignas como los linfomas. Se dis-
Alteraciones de la función normal cute mucho la existencia de leucemia eosinofílica. El
Los leucocitos tienen diferentes funciones: los síndrome hipereosinofílico primario está bien definido y
neutrófilos y los monocitos tienen como función funda- se caracteriza por eosinofilia absoluta >1 500/109/L sin
mental la fagocitosis, los eosinófilos producen citocinas causa aparente, por lo menos 6 meses de evolución con
que intervienen en las respuestas de hipersensibilidad, repercusión orgánica. Fundamentalmente cardíaca,
los basófilos que se cargan de histamina (el nombre de neurológica y pulmonar.

Parte XIV. Hematología 1135


Las leucemias son no linfoides, por lo que hay 2 formas: la LLA, ligera-
Las leucemias son procesos neoplásicos del tejido mente más frecuente en varones y con un pico de ma-
hematopoyético de naturaleza clonal, que se caracteri- yor incidencia entre los 2 y 6 años, y las leucemias
zan por ausencia de la regulación fisiológica con anoma- mieloides agudas (LMA). En la edad adulta ocurre a la
lías de la proliferación de los leucocitos y de los inversa.
mecanismos de apoptosis. Se originan en la médula ósea Existen diferentes métodos para caracterizar y cla-
y su evolución sin tratamiento es uniformemente fatal. sificar la célula leucémica.
Es la enfermedad maligna más frecuente en la in- Métodos morfológicos. Con estas técnicas de
fancia. Según los datos del Registro Nacional de Cán- coloración supravital es posible clasificar alrededor del
cer de Cuba comprende del 37 al 38 % de las neoplasias 95 % de las leucemias agudas. En 1975 hubo un acuer-
de la infancia. Cada año se diagnostican entre 3 y 4 do entre morfólogos de diferentes países, que dio origen
nuevos enfermos por cada 100 000 niños menores de a la clasificación franco-americano-británica (FAB), la
18 años. cual dividió las LLA en 3 grupos y la LMA en 7 (Cuadro
86.1). Después de esta clasificación se añadieron modi-
PATOGENIA ficaciones que han tratado de incorporar los hallazgos
No se conoce con exactitud su causa pero, al igual del inmunofenotipaje y las alteraciones citogenéticas y
que para el resto de las enfermedades malignas, sin duda moleculares. En un inicio se consideraba que era nece-
es multifactorial. Se han implicado muchas causas am- sario que existiera más del 30 % de blastos en la aspira-
bientales, y es bien conocido que la incidencia de las ción medular, para considerar que el enfermo tenía
leucemias aumenta al mejorar las condiciones leucemia aguda. En la actualidad el diagnóstico de
socioeconómicas y el desarrollo social, posiblemente leucemia aguda se realiza cuando en médula osea se
debido a que disminuye la morbimortalidad por otras detecta a más del 20 % de blastos.
causas, sobre todo por enfermedades infecciosas. En
más del 50 % de las leucemias se detectan alteraciones Cuadro 86.1. Clasificación de las LLA
cromosómicas y en las que no aparecen, su ausencia
posiblemente solo refleja la incapacidad para Tipo Características morfológicas
diagnosticarlas por los métodos actuales. Sin embargo,
se reafirma que esta no es la única causa, por ejemplo, L1 Homogeneidad celular >75 %
la t(12:21) que involucra a los genes TEL-AML y que de blastos pequeños
ocurre en alrededor del 30 % de las leucemias linfoides L2 Heterogeneidad <75 % de blastos
agudas (LLA), se ha podido detectar desde el nacimien- pequeños
to, pero solo en una parte de los niños que la tienen se L3 Homogeneidad de blastos grandes,
desarrolla la enfermedad maligna. En los niños con el vacuolados de tipo Burkitt
síndrome de Down y en otros síndromes genéticos, las
leucemias son más frecuentes. Se han mencionado in-
fecciones virales como ocurre con las leucemias de otras La variedad más frecuente es la L1 y se señala
especies animales, pero esto no se ha comprobado con que en la L2 el pronóstico es peor, porque tiene mayor
certeza. actividad proliferativa, aunque en realidad el pronóstico
depende de múltiples factores y no solo de la morfolo-
CLASIFICACIÓN
gía. No hay una relación entre estos 2 subtipos y el resto
Se clasifican en agudas y crónicas de acuerdo con
de las formas de clasificación; salvo en la L3 que cons-
las características morfológicas y el grado de madura-
tituye menos del 3 % de las LLA, y que se asocia con
ción celular. También dentro de una perspectiva históri-
marcadores de células B maduras. Esta variedad de LLA
ca, cuando no existía ningún tratamiento efectivo tenía
requiere un tratamiento diferenciado.
importancia para esta clasificación el tiempo de super-
La clasificación FAB de las LMA se observa en el
vivencia después del diagnóstico, pues en las agudas era
cuadro 86.2.
excepcional que sobrepasara los 3 meses. Las leucemias
agudas se dividen desde el punto de vista morfológico Pueden existir leucemias provenientes de cada tipo
en linfoides y mieloides. No llegan a 100 los niños con celular mieloide, o sea, granulocítico con menor o mayor
leucemia linfoide crónica descritos en la literatura y la diferenciación, mixto como la mielomonocítica,
leucemia mieloide crónica (LMC) será analizada en los monocítica pura, derivadas de los precursores eritroides
síndromes mieloproliferativos crónicos. En la infancia el que es poco frecuente en general, y muy rara en la in-
75 % de las leucemias son de estirpe linfoide y el resto fancia y provenientes de los megacarioblastos.

1136 Tomo III


Cuadro 86.2. Clasificación FAB de las LMA mieloides en proporciones similares, y también es posi-
ble que una LLA exprese un marcador mieloide o vice-
Tipo Características morfológicas versa.
Alteraciones cromosómicas. Se han descrito
M0 Leucemia indiferenciada múltiples alteraciones cromosómicas en las leucemias
M1 Leucemia mieloide con poca diferen- agudas. Las alteraciones pueden ser numéricas y es-
ciación tructurales. En las numéricas se describe hiperdiploidía
M2 Leucemia mieloide con diferenciación cuando hay más de 46 cromosomas, hipodiploidía cuan-
M3 Leucemia promielocítica do la cifra es menor de 46. El cariotipo puede ser numé-
M4 Leucemia mielomonocítica ricamente normal. La hipodiploidia tiene mal pronóstico.
M5 Leucemia monocítica Las alteraciones estructurales más frecuentes son
M6 Eritroleucemia las translocaciones. Se han detectado translocaciones
M7 Leucemia megacarioblástica en más del 50 % de las leucemias agudas tanto linfoides
como mieloides y estas tienen valor pronóstico indepen-
diente (Cuadro 86.3).
Las coloraciones citoquímicas ayudan a estable- En el 70 % de los lactantes está presente la t(4;11)
cer el diagnóstico. Las más importantes son la y solo en el 5 % de los demás enfermos, por lo cual se
mieloperoxidasa, cuya positividad afirma el origen plantea que la leucemia del lactante puede ser una enti-
mieloide y las estearasas inespecíficas de inhibición, con dad diferente. Las translocaciones que involucran al
fluoruro de sodio que establecen el origen monocítico. cromosoma 8 están relacionadas con la síntesis de
Las leucemias morfológicamente más diferencia- inmunoglobulinas que tiene lugar en las células B madu-
das tienen mejor pronóstico. ras. Las alteraciones citogenéticas y moleculares con ma-
Métodos inmunológicos. La clasificación yor importancia en las LMA se exponen en el cuadro 86.4.
inmunológica es imprescindible en el estudio de la biolo- La M3 es una de las leucemias agudas con más
gía de la célula leucémica. En un inicio solo fue aplicable posibilidades de curación, si se logra obtener la remisión,
al estudio de la LLA, pero con el desarrollo de los y como es bastante homogénea en cuanto a la
anticuerpos monoclonales y la citometría de flujo, en la translocación presente, no es difícil monitorearla al nivel
actualidad es muy útil también en las LMA. molecular. Existen varias técnicas para el estudio
Los blastos expresan los marcadores de las célu- citogenético, como la técnica de bandas y el FISH
las normales de donde derivó el clon leucémico; de esta (hibridización in situ), que permiten con mayor o menor
manera, alrededor del 75 % de las LLA son de origen B precisión el estudio de los genes.
inmaduro; cerca del 20 % expresan marcadores T y el El índice de ADN realizado por citometría de flujo
3 % expresan marcadores de célula B madura que tie- tiene un valor normal de 1,16. Valores superiores o infe-
nen una evolución desfavorable si son tratadas con los riores se corresponden con hiperdiplopía o hipodiploidía,
esquemas habituales. respectivamente. Se han detectado genes que tienen que
Las LMA también se clasifican inmunológicamente, ver con la resistencia a las drogas y que aumentan su
pues hay anticuerpos monoclonales específicos para los expresión antes de una recaída.
diferentes tipos, y es posible establecer el diagnóstico Se han descrito alteraciones que aparecen en las
cuando existen dudas con la morfología. Las leucemias leucemias secundarias como son la deleción de los
híbridas comparten marcadores, tanto linfoides como cromosomas 5 ó 7 que tienen un pronóstico desfavorable.

Cuadro 86.3.Translocaciones más frecuentes en la LLA

Translocación Genes implicados Frecuencia (%) Pronóstico

12,21 TEL-AML 25-30 Favorable


9,22 bcr-abl 5 Muy desfavorable
4,11 MLL-AF4 5 (en los Muy desfavorable
lactantes: 70)
8:14, 2:8, 8:22 MYC-IGH, IGl-MYC, Desfavorable con los
MYC_IGk 3 tratamientos clásicos

Parte XIV. Hematología 1137


Cuadro 86.4. Translocaciones más frecuentes en la LMA

Translocación Genes implicados Frecuencia (%) Pronóstico

M2( 8:21) CBFA2-AML1 60 Favorable


M3(15:17) PML-RARα 80 Favorable
M4(Eo) inv 16 MYH11-CBFB 10 Favorable
M5 (alt 11) Combinaciones del MLL 70 Desfavorable
con otros genes
M7 (1:22) OTT-MAL 30 Desfavorable

Alteraciones moleculares. No es posible definir medular. Como manifestaciones extramedulares se pue-


la patogenia de las leucemias sin comentar que pueden den detectar adenopatías cervicales, axilares y/o inguinales
existir múltiples mecanismos moleculares, que van desde de tamaño variable. Las adenopatías mediastinales son
la formación de un gen de fusión, como ocurre con el características de la variedad T. Además, puede palparse
cromosoma Filadelfia (Ph), que será mencionado en deta- hepatomegalia y esplenomegalia de tamaño variable. Es
lle cuando se aborde la LMC y que puede observarse en el raro que existan síntomas neurológicos al inicio debidos a
5 % de las LLA del niño. Este gen híbrido forma un la enfermedad, aunque la infiltración meníngea no es rara
cromosoma nuevo con parte del cromosoma 9 y parte del durante la evolución. La duración de los síntomas antes
22, pero lo más importante es que se produce una proteí- de establecer el diagnóstico de la LLA puede variar de
na nueva con actividad de tirosinquinasa, que aumenta la días a semanas y en casos raros hasta meses. La ano-
proliferación celular. De esta manera suele ocurrir que rexia es común y los dolores óseos son frecuentes, debi-
una traslocación al nivel molecular puede mover de lugar dos a la infiltración leucémica del periostio. Los niños
un gen represor o activador y alterar su función normal. pequeños en particular pueden presentar claudicación o
Otra aplicación del estudio molecular es que se negarse a caminar. Puede haber artralgias y síntomas
puede detectar la alteración cuando es conocida al ini- generales poco específicos, que en ocasiones hacen di-
cio, hasta en una sola célula en un millón. La remisión fícil el diagnóstico clínico.
molecular es mucho más precisa que la remisión En las LMA los síntomas y signos son similares,
morfológica e indica la efectividad del tratamiento em- aunque en general más agudos. Las adenopatías
pleado. Para realizar estas técnicas se utilizan los méto- mediastínicas y la visceromegalia son raras. Hay carac-
dos de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) que terísticas más frecuentes en los diferentes subtipos. En
permiten amplificar el ADN. la M3 (promielocítica) son bastante comunes los tras-
Clasificación actual. En los últimos años se ha tornos de la hemostasia, que se pueden manifestar por
tratado de establecer clasificaciones que tengan en con- hemorragias importantes, ya sean debidas a una coagu-
sideración los diferentes métodos de estudio y si bien en lación intravascular diseminada (CID) o a una fibrinólisis
la LLA no han existido demasiados cambios excepto la primaria. En la actualidad es infrecuente que el enfermo
incorporación del inmunofenotipo (de células B o T) y muera debido a sangramientos, porque el tratamiento es
las alteraciones citogenéticas y moleculares, sobre todo muy efectivo. En las variedades con componente
las de mal pronóstico como la t(4:11) y la t(9, 22) en las monocítico (M4 y M5) es común la hipertrofia gingival y
LMA han ocurrido cambios importantes. En el cuadro pueden verse lesiones cutáneas. Son las leucemias que
86.5 se exponen los aspectos más relevantes de la clasi- presentan mayor incidencia de infiltración del sistema
nervioso central (SNC) en la fase inicial debido a las
ficación de la OMS del 2003.
características migratorias del monocito. En las LMA,
CUADRO CLÍNICO sobre todo, en las que tienen un componente mieloide o
Los signos y síntomas dependen tanto del grado de monocítico se puede observar el sarcoma granulocítico
infiltración medular como de la diseminación extramedular. o monocítico que se presenta como una tumoración
Los hallazgos clínicos iniciales más frecuentes de la LLA extramedular con frecuente localización retroorbitaria.
son: palidez cutáneo-mucosa, astenia, manifestaciones Esta manifestación se puede acompañar de infiltración
hemorrágicas de sangramiento o púrpura y fiebre de cau- medular o no y causa una exoftalmía unilateral. Cuando
sa infecciosa o por la propia enfermedad. es de origen mieloide la tumoración es verdosa, debido
Estas manifestaciones reflejan la anemia, la al contenido de mieloperoxidasa, de ahí el nombre de
trombocitopenia y la neutropenia debidas a la infiltración cloroma con que también se le conoce.

1138 Tomo III


Cuadro 86.5. Clasificación de la OMS de la LMA

Clasificación Tipos de Leucemia

Leucemias con anomalías cromosómicas M2 t (8:21), M3 t (15:17), M4 inv (16), M5 t (4:11)


recurrentes
Leucemias sin anomalías cromosómicas M0, M1, M2, M4, M5, M6 y M7 de la clasificación FAB
recurrentes
Leucemias secundarias a un tratamiento Fundamentalmente secundarias a tratamiento
citostático con agentes alquilantes o epipodofilotoxinas
Leucemias derivadas de un síndrome Cualquier tipo morfológico generalmente
mieloproliferativo o mielodisplásico previo con mielodisplasia asociada

DATOS DE LABORATORIO plasma y presente en la orina en las variedades con com-


Los elementos diagnósticos más importantes están ponente monocítico. Es importante realizar el
en el hemograma y el medulograma. En el primero se inmunofenotipaje y los estudios citogenéticos y
detecta anemia que puede ser severa, generalmente hay moleculares. Además de lo señalado, en la actualidad se
trombocitopenia y puede existir leucopenia, un número emplean métodos de estudio del perfil de expresión de
normal de leucocitos o leucocitosis. De forma habitual los genes (microarrays) que permiten estudiar de forma
hay células blásticas en sangre periférica, y es posible a rápida miles de genes.
través del examen de la lámina de periferia llegar a un
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
diagnóstico morfológico. El hallazgo de los bastones de
Auer, que son inclusiones citoplasmáticas característi- Es habitual que no existan dificultades para reali-
zar el diagnóstico; en ocasiones puede ser difícil cuando
cas, permite establecer que es una variedad mieloide y,
el cuadro morfológico no es típico en sangre periférica y
si son muy numerosos, se debe realizar el diagnóstico de
no se obtiene material de la médula ósea. En estos ca-
una M3 (leucemia promielocítica) hipergranular. Las
sos debe realizarse el diagnóstico diferencial con la ane-
coloraciones citoquímicas son importantes sobre todo la
mia aplástica. En esta entidad, a pesar de que el cuadro
mieloperoxidasa que confirma la variedad mieloide. En
clínico puede ser semejante, no hay visceromegalia y en
ocasiones, puede ser necesario realizar biopsia de mé- el medulograma o en la biopsia se observa depresión de
dula ósea. la médula ósea sin blastos. La púrpura trombocitopénica
Los estudios de la hemostasia son importantes para inmunológica (PTI) puede también confundirse, pero en
descartar CID u otras alteraciones. Los exámenes esta entidad solo existe trombocitopenia y la aspiración
radiográficos de huesos pueden ser útiles en la LLA, medular es normal.
porque muestran las bandas radiotransparentes típicas y En los linfomas no Hodgkin no hay infiltración
lesiones osteolíticas; también la radiografía de tórax para medular y cuando esta existe es focal. Si la infiltración
precisar lesiones inflamatorias y adenopatías fuese masiva con blastos en periferia, no es posible el
mediastínicas. La sonografía es útil para precisar las diagnóstico diferencial y el tratamiento es el de una
características de la visceromegalia. LLA. Otros tumores como el neuroblastoma pueden
Es imprescindible en la LLA y en las variedades tener un cuadro clínico sugestivo, pero en el
con componente monocítico (M4 y M5) realizar el estu- medulograma es posible establecer el diagnóstico. Una
dio del líquido cefalorraquídeo (LCR) para detectar la enfermedad que puede provocar dificultades
infiltración del SNC. diagnóstica es la mononucleosis infecciosa, aunque la
Los estudios de química sanguínea que miden fun- ausencia de infiltración medular, el título de anticuerpos
ción hepática, renal y otros parámetros como glicemia heterófilos o específicos contra el virus de Ebstein Barr
durante el tratamiento esteroideo son necesarios, así y la evolución autolimitada de la enfermedad descar-
como los niveles de la deshidrogenasa láctica (LDH), tan la leucemia. Algunas infecciones en particular: la
que aunque casi siempre se correlaciona con la cifra de fiebre reumática, las colagenopatías y algunas afec-
leucocitos es un índice de masa tumoral, cifras elevadas ciones ortopédicas como la osteomielitis y con mayor
(>500 UI/L) se asocian con un peor pronóstico. La frecuencia la sinovitis de cadera pueden incluirse en el
lisozima (muramidasa) está casi siempre elevada en el diagnóstico diferencial.

Parte XIV. Hematología 1139


EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO también se describen algunos factores pronósticos favo-
Antes del uso efectivo de los citostáticos, el pronós- rables (Cuadro 86.7).
tico de las leucemias agudas era fatal, con una supervi- En las LMA ocurre algo similar a lo descrito en la
vencia no mayor de 3 meses a partir del diagnóstico. En la LLA, el factor pronóstico más relevante es la respuesta
actualidad más del 90 % de los enfermos con LLA obtie- al tratamiento.
nen remisión inicial (se denomina remisión al estado en Una de las complicaciones que influyen en la evolu-
que no hay evidencias clínicas ni hematológicas de la en- ción de la enfermedad son las infecciones. En los perío-
fermedad), y más del 70 % de ellos cura definitivamente. dos de infiltración leucémica o de neutropenia
En las LMA también ha mejorado el pronóstico: más posquimioterapia las infecciones más frecuentes son
del 60 % obtiene remisión inicial y cerca del 40 % puede bacterianas y micóticas. Cuando el enfermo está en re-
curar con quimioterapia, este porcentaje puede aumentar misión con el tratamiento que es inmunosupresor, las in-
en ambos tipos si se aplica el trasplante de células fecciones más comunes son virales y protozoarias sobre
progenitoras hematopoyéticas (TCPH) en los enfermos todo por Pneumocystis carinii. La infección por el virus
que lo requieran. de la hepatitis B ha disminuido de manera significativa en
En la LPA (M3) más de la mitad de los pacientes Cuba, debido a que casi siempre los pacientes ya han sido
fallecía al inicio de la enfermedad debido a las complica- inmunizados previamente con esquema de vacunación
ciones hemorrágicas, esta situación se ha revertido con el vigente. Aún existe el riesgo de la infección por el virus de
uso del ácido transretinoico (ATRA) o del trióxido de ar- la hepatitis C.
sénico, que actúan específicamente al nivel molecular sobre TRATAMIENTO
la traslocación genética. En la actualidad pueden curar En los últimos años el tratamiento de la leucemia
más del 80 % de los pacientes. aguda se ha perfeccionado y se ha hecho muy complejo,
En las leucemias agudas se han descrito numerosos por lo que estos enfermos deben tratarse en centros que
factores pronósticos que permiten clasificar los enfermos puedan ofrecer las condiciones necesarias y además que
en grupos de riesgo. De acuerdo con esta clasificación se tengan un personal médico y de enfermería entrenados.
utilizan tratamientos diferenciados (Cuadro 86.6). Está demostrado que los pacientes tratados con proto-
Existen muchos factores pronósticos más, pero sin colos establecidos, atendidos en centros especializados
duda el más importante es la respuesta al tratamiento. A que tratan más de 10 enfermos al año, evolucionan
pesar de tener todos los factores favorables, alrededor mejor. Otro factor muy importante, sobre todo para paí-
del 20 % de los niños de buen pronóstico sufren recaídas. ses pequeños como Cuba, donde se diagnostican menos
La detección de enfermedad mínima residual (EMR) des- de 100 enfermos nuevos por año, es la integración en
pués del tratamiento es muy desfavorable, pero en los grupos cooperativos multinacionales para obtener expe-
enfermos en que no se comprueba, no se puede descartar riencias y solucionar interrogantes, que permitan mejo-
de manera absoluta el riesgo de recaída. Para las LMA rar la supervivencia en poco tiempo

Cuadro 86.6. Factores pronósticos en la LLA

Factor pronóstico Evolución favorable

Edad Mayores de 2 años y menores de 5 años


Sexo Femenino
Color de la piel Blanca
Adenopatías mediastínicas Ausentes
Infiltración inicial del SNC Ausente
Leucocitos en sangre periférica <20 x 109/L
Hiperdiploidía >50 cromosomas
Inmunofenotipo Precursor B (CD10 +)
Estudio molecular Ausencia t(9:22) ,t(4:11)
LDH <500 UI/L
Respuesta a la monoterapia con prednisona <1 000 bastos el día 8 de tratamiento
Respuesta al tratamiento Obtención de la remisión

1140 Tomo III


Cuadro 86.7. Factores pronósticos en la LMA para mejorar la calidad de vida. En la actualidad existen
inhibidores de la serotonina como el ondasetron, el
Factor pronóstico Evolución favorable granisetron u otros "setrones" que son muy efectivos.
Leucemia secundaria Ausente Otro aspecto importante del tratamiento de so-
porte es la terapia transfusional. Siempre es preferi-
SDMP o SMPC previo Ausente ble el uso de componentes y evitar al máximo la sangre
total. La transfusión de glóbulos debe ser empleada
Alteraciones cromosó- M2 con t(8:21), M3 con durante la administración del tratamiento citostático
micas recurrentes de para mantener una cifra de Hb superior a 100 g/L. La
t(15:17) , M4 (inv 16)
buen pronóstico transfusión de plaquetas está indicada siempre que
hay sangramientos debidos a trombocitopenia y en la
Respuesta al tratamiento Precoz LMA cuando la cifra de plaquetas es <10/109/L. El
riesgo de hemorragias en este tipo de leucemias es
mayor, por lo que se deben emplear los concentrados
Desde 1972 hasta 2002, Cuba formó parte del Gru- de plaquetas profilácticos. El uso de plasma, albúmi-
po Latinoamericano de Tratamiento de Hemopatías na o de crioprecipitado que contiene altas concentra-
Malignas (GLATHEM), que agrupaba a varios países
ciones de fibrinógeno y fibronectina pueden estar
del área y se emplearon 7 protocolos diferentes para la
indicados.
LLA y 3 para las LMA, con los que se trataron más de
Tratamiento de la LLA. En la mayoría de los
900 y 120 niños, respectivamente. Desde 2002 Cuba se
protocolos el tratamiento se divide en 4 fases: inducción,
integró al Grupo de Estudio Internacional BFM (I-BFM-
consolidación, profilaxis de la leucemia meníngea y man-
SG) que agrupa a más de 20 países en varios continen-
tenimiento. Los medicamentos más utilizados son: los
tes y que solo en su primer año pudo tratar con un
esquema único más de 1 200 niños con LLA. esteroides (prednisona o dexametasona), la vincristina
El tratamiento de las leucemias comprende 2 as- (VCR), la L-asparaginasa (L-asa), las antraciclinas
pectos: el tratamiento específico y el tratamiento de sos- (daunorubicina o doxorubicina), la ciclofosfamida (CFM),
tén, que ha ido adquiriendo mayor relevancia en los el arabinósido de citosina (ara-C), el methotrexato (MTX)
últimos años y que es común para ambos tipos de y la mercaptopurina (6-MP). En casos seleccionados se
leucemia. Para las etapas de tratamiento intensivo es han empleado también el etopósido o el tenipósido.
necesario tener condiciones de aislamiento en cubículos Inducción. El propósito inicial del tratamiento es
con al menos un flujo de aire inverso. Es importante el obtener la remisión. Aunque con la combinación de
uso de ropa limpia y en ocasiones estéril y el lavado de VCR y prednisona (p) se puede obtener la remisión
manos exhaustivo antes de manipular al paciente. Los inicial en aproximadamente el 85 % de los enfermos, la
antibióticos deben ser de amplio espectro y se debe in- adición de L-asa o daunorubicina (DNR) hace que el
cluir una cefalosporina de tercera o cuarta generación y porcentaje sea del 95 % o más y además se prolonga
un aminoglucósido o carbapenemo. La vancomicina se la duración de la remisión. No está comprobado que la
utiliza para el tratamiento del estaflilococo coagulasa administración de una droga más sea útil en los pacien-
negativo si el enfermo tiene instalado un catéter venoso tes de bajo riesgo. Los pacientes que no responden a
central (recomendable cuando se van a realizar trata- este tratamiento tienen muy mal pronóstico. Es impor-
mientos intensivos) tante también la rapidez con que se logre la disminu-
Los antimicóticos sistémicos se emplean cuando ción de los blastos en sangre periférica y se obtenga la
no existe respuesta a los antimicrobianos o hay eviden- remisión.
cia de una infección por hongos. Para acortar los perío- Consolidación. En todos los protocolos se realiza
dos de neutropenia, disminuir la incidencia de infecciones y por lo general incluye diferentes etapas. Al inicio se
bacterianas y evitar atrasos importantes en la adminis- emplean drogas que no se utilizaron en la inducción in-
tración de los citostáticos se ha empleado con éxito el mediatamente después de obtenida esta. Más tarde se
G-CSF. El trimetroprim-sulfametoxazol se administra emplean dosis altas de MTX que varían entre 2 y 5 g/m2
durante todo el tratamiento para disminuir la incidencia con rescate con ácido folínico de acuerdo con los resul-
de infecciones bacterianas y por Pneumoicistys carinii. tados del fenotipo inmunológico de la célula leucémica y
El control de los vómitos y las náuseas es imprescindible del grupo de riesgo (en las variantes T y en los enfermos

Parte XIV. Hematología 1141


de alto riesgo la dosis de MTX es mayor) y después hay suspendido este. En este grupo de enfermos así como
una etapa de reinducción tardía donde se administran en los de muy alto riesgo en el momento del diagnóstico
drogas de forma similar a la inducción y a la primera está indicado después de completada la quimioterapia
parte de la consolidación. el trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH)
Profilaxis de la leucemia meníngea. En los años alogénico si el paciente tiene un donante compatible.
previos a la introducción de esta fase, los éxitos obteni- Tratamiento de las LMA. El tratamiento de las
dos con la quimioterapia sistémica estaban asociados de LMA ha evolucionado de manera similar al de las LLA
manera paradójica con una alta incidencia de infiltración aunque con particularidades como ocurre por ejemplo
leucémica de las meninges que llegaba a más del 50 % en la leucemia promielocítica LPA M3. Las fases del
de los enfermos y era la causa de terminación de la re- tratamiento son inducción, consolidación e intensifica-
misión. En la década de los años 70 del pasado siglo se ción. En la mayoría de las LMA parece no ser necesario
planteó que el SNC era un "santuario" donde las células el mantenimiento salvo en la M3 y la profilaxis de la
leucémicas que no se detectan o erradican en el mo- infiltración meníngea solo es imprescindible en las varie-
mento del diagnóstico o durante la inducción de la remi- dades con componente monocítico.
sión se mantienen protegidas por la barrera Inducción. Consta de ciclos cortos de combi-
hematoencefálica de la acción citotóxica de los medica- nación de dos o tres citostáticos con una duración de
mentos administrados por vía sistémica. Esto llevó a los 7 a 10 días lo que causa una aplasia muy severa. Es
necesario un tratamiento de soporte enérgico con
investigadores del Hospital "St Jude"de Memphis,
antibióticos, hemoderivados y estrictas medidas de
EE.UU. a utilizar el concepto de terapia total. Ellos ad-
aislamiento, pues en esta fase el paciente puede mo-
ministraron cobaltoterapia craneoespinal y redujeron de
rir por infección o hemorragia. Las combinaciones más
manera significativa la infiltración meníngea. Este mé- empleadas son las de una antraciclina (DNR,
todo aunque efectivo se emplea en la actualidad solo en idarubicina o doxorubicina) durante 3 días y ara-C
pacientes seleccionados pues es muy tóxico y produce durante 7 días. La antraciclina puede ser sustituida
muchas secuelas. Más tarde se demostró que la admi- por carboplatino o mitoxantrona. Algunos añaden una
nistración de MTX intratecal (IT) solo o asociado con tercera droga: el etopósido o la 6-tioguanina pero no
ara-C y esteroides era efectiva en el control de la enfer- parece esencial. Las posibilidades de obtener una re-
medad del SNC. En la actualidad se considera que es misión son de alrededor del 60 %
suficiente el uso de MTX IT solo en los enfermos con Consolidación. Se han empleado las llamadas
buen riesgo asociado con el uso de dosis altas de MTX ¨megadosis ¨de ara-C (3g/m2)/4 a 6 dosis asociadas con
por vía i.v. mitoxantrona. En el grupo BFM se utiliza un protocolo
Mantenimiento. Es conocido que cuando se ob- similar a la inducción de la LLA, sin L-asa que es
tiene la remisión y terminan las etapas de consolidación inefectiva en las LMA y con adición del ara-C. Cuando
quedan aún células leucémicas que pueden producir una se indica la profilaxis de la infiltración meníngea se utili-
recaída de la enfermedad en un tiempo más o menos za el ara-C IT.
breve. Por esta causa es necesario el tratamiento de Intensificación. Para esta etapa se han empleado
mantenimiento para tratar de eliminar estas células las megadosis de ara-C asociadas con etopósido y se
residuales. Los medicamentos más empleados en esta puede realizar un TPH incluso autólogo si no existe un
fase son la 6-MP diaria y el MTX una vez a la semana donante HLA compatible para un TPH alogénico que
ambos por vía oral. La duración de esta fase debe ser siempre es la mejor opción. En algunos tipos de LMA se
de 2 años a partir del diagnóstico han empleado anticuerpos monoclonales contra antígenos
El pronóstico de los enfermos que completan el tra- mieloides con éxito variable, pero todavía no hay sufi-
tamiento es bueno con >80 % de probabilidades de su- ciente experiencia con este tipo de terapéutica.
pervivencia. Para poder considerar a un paciente Tratamiento de la leucemia promielocítica
definitivamente curado deben haber transcurrido 10 años (M3). Esta leucemia tiene particularidades que son ca-
desde el diagnóstico sin complicaciones debidas a la en- racterísticas. En la inducción se combinan las
fermedad. La complicación más grave es la recaída que antraciclinas con el ATRA. Posteriormente se hacen
puede ser medular o extramedular (meníngea, testicular, varias consolidaciones con antraciclinas y ATRA y es
ocular o en otras localizaciones). Cuando la recaída es necesario una etapa de mantenimiento con 6-MP y
extramedular el pronóstico es mejor que en las recaídas MTX oral como en la LLA durante 2 años con refuer-
hematológicas aunque el pronóstico también depende del zos con ATRA. El pronóstico de la M3 con el gen de
momento en que esta se produzca; es peor si se produce fusión PML-RARα es favorable con un porcentaje
durante el tratamiento que cuando ocurre después de de curación > de 80 %.

1142 Tomo III


En general el pronóstico de la LMA excepto el de vo que el paciente fallezca antes debido a las complica-
la leucemia promielocítica es peor que el de la LLA pero ciones o a otras causas no relacionadas. Hasta la actua-
con quimioterapia es posible obtener alrededor de 40 % lidad el único tratamiento curativo de estos procesos es
de supervivencia a los 5 años. Estos valores pueden au- el TPH alogénico aunque desde hace unos años se ha
mentar cuando se realiza TPH. empleado en la LMC el imatinib. Esta droga inhibe la
tirosinakinasa. Con ella se han logrado remisiones
Alteraciones clonales cromosómicas y moleculares con restauración de la
con predisposición al desarrollo hematopoyesis normal en muchos pacientes. Además
posibilita que se pueda efectuar un TPH autólogo. Otras
de enfermedades malignas drogas útiles en la fase crónica son el interferón a y la
En este grupo se incluyen alteraciones derivadas hidroxiurea.
de un clon celular con potencialidad variable para una
transformación maligna. Las formas de presentación Síndromes mielodisplásticos
varían desde la proliferación marcada, la displasia o una En este grupo de entidades se combina la
combinación de las dos condiciones. hipocelularidad de la médula con alguna citopenia
periférica y signos de dismielopoyesis. Entre estos se
Síndromes mieloproliferativos crónicos (SMPC)
encuentran trastornos de la segmentación de los
Este grupo de enfermedades se caracteriza por una granulocitos, asincronía de la maduración núcleo-
proliferación severa de todas las líneas celulares inclu- citoplasmática, depósito anormal de hierro en los pre-
yendo los fibroblastos con pérdida de los espacios cursores eritropoyéticos entre otras anomalías. Además
medulares fisiológicos y por una disminución de la puede haber un aumento del porcentaje de blastos en la
apoptosis. Son más frecuentes en el adulto mayor, pero médula > de 5 %, pero < de 20 %. Estas entidades son
se han descrito en el niño. Se denominan de acuerdo más frecuentes en el adulto mayor aunque se han des-
con la línea celular que predomine o con la presencia de crito en niños sobre todo las anemias refractarias con
alteraciones cromosómicas o moleculares específicas. exceso de blastos. La evolución puede ser hacia una
Las manifestaciones clínicas son variables. Se clasifi- leucemia aguda, pero puede permanecer el cuadro clíni-
can en policitemia vera, en la que predomina la co y hematológico sin variación por largos períodos de
eritrocitosis absoluta con cifras muy elevadas de hemog- tiempo. En la anemia refractaria con exceso de blastos
lobina, la trombocitemia esencial con cifras muy elevadas se recomienda realizar un tratamiento citostático como
de plaquetas e hiperplasia del sistema megacariopoyético, en una leucemia mieloide aguda y realizar posteriormente
la mielofibrosis idiopática en la que hay una prolifera- un TPH.
ción del sistema megacariopoyético y de los fibroblastos
y la LMC que se caracteriza por una proliferación pre- Síndromes mielodisplásticos-mieloproliferativos
dominante de la serie granulopoyética con todas las for- En este grupo de entidades coexisten elementos
mas madurativas en la sangre periférica y la presencia de ambas alteraciones. Son infrecuentes en el niño ex-
de una alteración cromosómica específica descrita en cepto la leucemia mielomonocítica juvenil (LMMJ) que
1960 que se denomina cromosoma Filadelfia o Ph. Este representa alrededor del 3 % de todas las leucemias en
representa una traslocación recíproca 9:22 que al nivel la edad pediátrica y aparece fundamentalmente antes
molecular implica la formación de un gen de fusión de los 4 años de edad. Se caracteriza por anemia varia-
bcr/abl con actividad de tirosinakinasa. Esta alteración ble, trombocitopenia, leucocitosis raramente >100/109/L
molecular determina la proliferación celular; y es la ca- con monocitosis o células mononucleares atípicas. En el
racterística definitoria de esta enfermedad independien- medulograma no se observa un aumento de blastos. El
temente de la presentación clínica, es decir, que si el examen físico muestra un niño enfermo con
cuadro clínico el de una policitemia vera, pero tiene el hepatoesplenomegalia variable y en algunos pacientes
cromosoma Ph o la traslocación bcr/abl es una LMC. se aprecian manchas café con leche, pues en el 20 % de
Es importante señalar que en todas las LMC existe la estos niños está presente el gen de la neurofibromatosis
traslocación, pero en ocasiones no aparece el tipo 1. Hay elementos de hematopoyesis fetal y puede
cromosoma Ph. detectarse aumento de hemoglobina fetal y aunque se
En todo este grupo de enfermedades mielopro- discute si son dos entidades diferentes o la misma puede
liferativas la evolución es hacia una leucemia aguda sal- haber alteraciones citogenéticas dadas por la presencia

Parte XIV. Hematología 1143


de monosomía 7. El tratamiento citostático habitual no de los elementos formes de la sangre periférica como lo
es efectivo y la evolución es variable El paciente puede demuestran la trombocitosis y leucocitosis que apare-
morir debido a infecciones o hemorragias aunque se ha cen después de la esplenectomía.
descrito la transformación a una leucemia aguda. Se El bazo puede afectarse desde el punto de vista
describen enfermos con larga supervivencia. Aparente- funcional. La hipofunción (hipoesplenismo o asplenia
mente el pronóstico es mejor cuando el diagnóstico se funcional) ocurre sobre todo en la anemia drepanocítica
hace más temprano en la vida. El TPH puede ser cura- en la que con el transcurso del tiempo se produce una
tivo de esta entidad. asplenia orgánica por fibrosis. También se describe en
la enfermedad celíaca. En estos casos se encuentran en
Bibliografía
sangre periférica corpúsculos de Howell Jolly y aumen-
Alteraciones de los leucocitos
to de pitted cells. La complicación más grave de la
Nathan DG, Oski FA Hematology of infancy and childhood 6th ed
WB Saunders Company. Philadelphia 2003 p. 923-1010. asplenia es la sepsis sobreaguda sobre todo por
Bonilla MA, Dale D, Zeidler C,. et al. Long-term safety of neumococo, meningococo o hemofilus. Es más frecuen-
treatment with recombinant human granulocyte colony- te en los primeros 3 años después de la esplenectomía,
stimulating factor (r-met HUG-CSF) in patients wilth severe
congenital neutropenias Br J Haematol 1994;88:723.
pero puede ocurrir en cualquier momento de la vida.
Bux J, Behrens g, Jaeger G, Welte K Diagnosis and clinical course La profilaxis se realiza con vacuna antineu-
of autoimmune neutropenia in infancy Analysis of 240 cases. mocóccica y penicilina por vía oral. durante 3 años des-
Blood 1998;91;181- pués de la operación, pero lo más importante es instruir
Las leucemias al paciente y familiares de los peligros que corre para
Abstracts 5th Bi-annual symposium on childhood leukemia. que en presencia de fiebre acuda rápidamente al médi-
Noordwij kerhout, The Netherlands, 2006 co y le comunique su estado de enfermo esple-
Pui CH, Evans WE. Treatment of acute lymphoblastic leukemia. N
nectomizado para ser tratado con antibióticos de
Eng J Med 2006;354:166-76.
Brenner MK, Pinkel D [Cure of leukemia. Sem Hematol 1999;36 inmediato. Para el tratamiento empírico se recomien-
(suppl 7];73 dan cefotaxima, ceftriaxona o vancomicina.
El hiperesplenismo se asocia siempre a esple-
Alteraciones clonales
Nishino HT, Chang CC Myelodisplastic syndromes.
nomegalia. Las causas más frecuentes de esplenomegalia
Clinicopathologic features, pathobiology and molecular son: hipertensión portal, hepatopatías crónicas, anemias
pathogenesis. Arch Pathol Lab Med 2005;129:1299. hemolíticas congénitas, anemias hemolíticas autoinmunes,
infecciones, colagenopatías, enfermedades malignas
como leucemias agudas y crónicas, síndromes
mieloproliferativos y linfomas. También se encuentra
. Capítulo 87 . esplenomegalia en alteraciones congénitas del metabo-
lismo lipídico como la enfermedad de Gaucher y de
Niemman Pick.
El bazo Las indicaciones más frecuentes de esplenectomía
Eva Svarch
en el niño son: la púrpura trombocitopénica idiopática, la
ruptura traumática del bazo, las anemias hemolíticas
El bazo es un órgano linfoide, altamente vascula-
congénitas como esferocitosis y ovalocitosis heredita-
rizado no indispensable para la vida. Tiene como una de
sus funciones la de filtro de elementos formes de la san- rias, la drepanocitosis con crisis de secuestro esplénico
gre periférica que presentan alguna alteración. En la pulpa y la talasemia mayor con hiperesplenismo.
roja existe un enlentecimiento del flujo sanguíneo, dismi- En los casos en que existe indicación de esplenec-
nución del pH, de la glucosa y del oxígeno que hace que tomía total esta se puede practicar por mínimo acceso.
los hematíes envejecidos se destruyan y también aque- En las anemias hemolíticas congénitas en las que es útil
llos con alguna alteración como los esferocitos. Tiene dejar un remanente esplénico es preferible realizar
también funciones inmunológicas: produce anticuerpos esplenectomía parcial.
especialmente del tipo Ig M y sustancias que potencian
Bibliografía
la fagocitosis como el complemento y la tufsina. El bazo
Svarch E, Nordet I, Valdes J, González A, de la Torre E. Partial
es el principal lugar de eliminación de microorganismos
splenectomy in children with sickle cell disease.
sobre todo encapsulados y actúa también como reservorio Hematológica 2003;88:222.

1144 Tomo III


de monosomía 7. El tratamiento citostático habitual no de los elementos formes de la sangre periférica como lo
es efectivo y la evolución es variable El paciente puede demuestran la trombocitosis y leucocitosis que apare-
morir debido a infecciones o hemorragias aunque se ha cen después de la esplenectomía.
descrito la transformación a una leucemia aguda. Se El bazo puede afectarse desde el punto de vista
describen enfermos con larga supervivencia. Aparente- funcional. La hipofunción (hipoesplenismo o asplenia
mente el pronóstico es mejor cuando el diagnóstico se funcional) ocurre sobre todo en la anemia drepanocítica
hace más temprano en la vida. El TPH puede ser cura- en la que con el transcurso del tiempo se produce una
tivo de esta entidad. asplenia orgánica por fibrosis. También se describe en
la enfermedad celíaca. En estos casos se encuentran en
Bibliografía
sangre periférica corpúsculos de Howell Jolly y aumen-
Alteraciones de los leucocitos
to de pitted cells. La complicación más grave de la
Nathan DG, Oski FA Hematology of infancy and childhood 6th ed
WB Saunders Company. Philadelphia 2003 p. 923-1010. asplenia es la sepsis sobreaguda sobre todo por
Bonilla MA, Dale D, Zeidler C,. et al. Long-term safety of neumococo, meningococo o hemofilus. Es más frecuen-
treatment with recombinant human granulocyte colony- te en los primeros 3 años después de la esplenectomía,
stimulating factor (r-met HUG-CSF) in patients wilth severe
congenital neutropenias Br J Haematol 1994;88:723.
pero puede ocurrir en cualquier momento de la vida.
Bux J, Behrens g, Jaeger G, Welte K Diagnosis and clinical course La profilaxis se realiza con vacuna antineu-
of autoimmune neutropenia in infancy Analysis of 240 cases. mocóccica y penicilina por vía oral. durante 3 años des-
Blood 1998;91;181- pués de la operación, pero lo más importante es instruir
Las leucemias al paciente y familiares de los peligros que corre para
Abstracts 5th Bi-annual symposium on childhood leukemia. que en presencia de fiebre acuda rápidamente al médi-
Noordwij kerhout, The Netherlands, 2006 co y le comunique su estado de enfermo esple-
Pui CH, Evans WE. Treatment of acute lymphoblastic leukemia. N
nectomizado para ser tratado con antibióticos de
Eng J Med 2006;354:166-76.
Brenner MK, Pinkel D [Cure of leukemia. Sem Hematol 1999;36 inmediato. Para el tratamiento empírico se recomien-
(suppl 7];73 dan cefotaxima, ceftriaxona o vancomicina.
El hiperesplenismo se asocia siempre a esple-
Alteraciones clonales
Nishino HT, Chang CC Myelodisplastic syndromes.
nomegalia. Las causas más frecuentes de esplenomegalia
Clinicopathologic features, pathobiology and molecular son: hipertensión portal, hepatopatías crónicas, anemias
pathogenesis. Arch Pathol Lab Med 2005;129:1299. hemolíticas congénitas, anemias hemolíticas autoinmunes,
infecciones, colagenopatías, enfermedades malignas
como leucemias agudas y crónicas, síndromes
mieloproliferativos y linfomas. También se encuentra
. Capítulo 87 . esplenomegalia en alteraciones congénitas del metabo-
lismo lipídico como la enfermedad de Gaucher y de
Niemman Pick.
El bazo Las indicaciones más frecuentes de esplenectomía
Eva Svarch
en el niño son: la púrpura trombocitopénica idiopática, la
ruptura traumática del bazo, las anemias hemolíticas
El bazo es un órgano linfoide, altamente vascula-
congénitas como esferocitosis y ovalocitosis heredita-
rizado no indispensable para la vida. Tiene como una de
sus funciones la de filtro de elementos formes de la san- rias, la drepanocitosis con crisis de secuestro esplénico
gre periférica que presentan alguna alteración. En la pulpa y la talasemia mayor con hiperesplenismo.
roja existe un enlentecimiento del flujo sanguíneo, dismi- En los casos en que existe indicación de esplenec-
nución del pH, de la glucosa y del oxígeno que hace que tomía total esta se puede practicar por mínimo acceso.
los hematíes envejecidos se destruyan y también aque- En las anemias hemolíticas congénitas en las que es útil
llos con alguna alteración como los esferocitos. Tiene dejar un remanente esplénico es preferible realizar
también funciones inmunológicas: produce anticuerpos esplenectomía parcial.
especialmente del tipo Ig M y sustancias que potencian
Bibliografía
la fagocitosis como el complemento y la tufsina. El bazo
Svarch E, Nordet I, Valdes J, González A, de la Torre E. Partial
es el principal lugar de eliminación de microorganismos
splenectomy in children with sickle cell disease.
sobre todo encapsulados y actúa también como reservorio Hematológica 2003;88:222.

1144 Tomo III


nos. Es probable que en su migración participen molé-
culas de adhesión específicas. También las citocinas jue-
. Capítulo 88 . gan papel en manifestaciones clínicas como la fiebre, la
pérdida de peso y muchas otras desencadenando lo que
se ha dado en llamar tormenta de citocinas.
Enfermedades del sistema CUADRO CLÍNICO
histiofagocítico Depende de la extensión del proceso y del tejido u
Eva Svarch órgano comprometido. Puede ser unifocal, granuloma
eosinófilo, localizado en hueso, piel, mucosas, ganglio u
Las histiocitosis son enfermedades del sistema otros sitios. La localización más frecuente es en el hue-
histiofagocítico. El histiocito es una célula del sistema so y los más afectados son: cráneo, huesos largos de
inmune que incluye entre otras a los macrófagos, encar- miembros superiores y planos (costillas, pelvis y vérte-
gados de procesar al antígeno y a las células dendríticas bras). Puede existir exoftalmía. Se describen formas
que tienen como función presentar el antígeno a los multifocales con lesiones múltiples en huesos u otros te-
linfocitos T. Una de las células dendríticas más impor- jidos y formas especiales como la localización en el SNC.
tantes es la de Langerhans que tiene su origen en la La forma multisistémica se presenta con fiebre, pér-
médula ósea y reside en condiciones normales en la piel, dida de peso, lesiones en la piel del tipo de la dermatitis
mucosas y pulmón. seborreica, otitis media, hepatoesplenomegalia y adenopatías.
• De comportamiento biológico variable Pueden existir también anemia, manifestaciones
− Relacionadas con las células de Langerhans: las hemorrágicas y un aumento de la susceptibilidad a las in-
más importantes son la histicitosis a células de fecciones bacterianas. En ocasiones se pueden presentar
Langerhans y el xantogranuloma infantil. lesiones pulmonares, del tubo digestivo (síndrome de
− Relacionadas con el macrófago: la linfohistiocitosis malabsorción) y del SNC, sobre todo diabetes insípida. La
hemofagocítica primaria (familiar o esporádica), los forma multisistémica puede ser de alto riesgo si están
síndromes hemofagocíticos secundarios por infec- involucrados la médula ósea, el hígado, el bazo y el pulmón
ciones o procesos malignas y la enfermedad de y de bajo riesgo si estos órganos no están comprometidos.
Rosai Dorfman. La asociación de la histiocitosis a células de
• Alteraciones malignas Langerhans con enfermedades malignas es más frecuen-
− Leucemia monocítica aguda (M5 a o b), leucemia te de lo que cabría esperar por el azar.
mielomonocítica (M 4) y leucemia monocítica DIAGNÓSTICO
crónica.
Se realiza por el cuadro clínico, las alteraciones
radiológicas y el estudio anatomopatológico. En contraste
Existen otras enfermedades de comportamiento
con la heterogeneidad clínica de la enfermedad los ha-
biológico variable y malignas pero son excepcionales.
llazgos histológicos son semejantes en todas las varieda-
Las que más interesan al pediatra son la histiocitosis
des. El más característico es la presencia de las células
a células de Langerhans y la linfohistiocitosis
de Langerhans en un contexto semejante al de la infla-
hemofagocítica.
mación: neutrófilos, eosinófilos, células plasmáticas,
Histiocitosis a células de Langerhans linfocitos e histiocitos gigantes multinucleados. El diag-
Su incidencia es de 1,64/100 000 niños entre 0 y 2 nóstico de certeza requiere la presencia de los gránulos
años de edad con un ligero predominio en varones. Co- de Birbeck en la microscopia electrónica y de un mar-
nocida anteriormente como histiocitosis X tiene un es- cador específico el CD1a.
pectro clínico muy amplio; desde una lesión única casi Las lesiones en el aspirado de médula ósea son
siempre ósea que puede curar espontáneamente inespecíficas aunque exista anemia y trombocitopenia.
(granuloma eosinófilo), hasta una forma multisistémica Raramente se encuentra infiltración por histiocitos. La
semejante a la leucemia muchas veces de evolución fa- presencia del CD1a estudiado por citometría de flujo
tal (enfermedad de Letterer-Siwe). parece tener cierta importancia.
TRATAMIENTO
PATOGENIA
Depende de la extensión de la enfermedad. Si la le-
La patogenia es desconocida. A pesar de su natu-
sión es única y está localizada en hueso se puede observar
raleza monoclonal la mayoría de los estudios indican que
se trata de un proceso reactivo más que neoplásico. Las su evolución sin tratamiento o realizar curetaje con o sin
células de Langerhans pueden infiltrar todos los órga- inyección intralesional de esteroides. Este procedimiento

Parte XIV. Hematología 1145


es aconsejable porque permite la comprobación histológica Cuadro 88.2. Definición de respuesta al tratamiento.
de que se trata de un granuloma eosinófilo. Si la lesión no
es accesible a la cirugía se administra radioterapia a bajas Mejor Resolución No enfermedad
dosis (alrededor de 600 cGy). completa activa
En las formas multifocal y multisistémica se debe Regresión Enfermedad
utilizar quimioterapia. El último protocolo de la Sociedad activa mejor
Internacional del Histiocito tiene dos ramas A y B. En la
rama A para pacientes de bajo riesgo se utiliza prednisona Intermedia Mixta Regresión en un
y vinblastina en la etapa inicial y mercaptopurina con sitio. Nuevas
pulsos de prednisona y vinblastina en el tratamiento de lesiones en otro
continuación. En los pacientes de alto riesgo se utiliza la
rama B que incluye prednisona, vinblastina y metotrexato Peor Estable No cambios
en la fase inicial y un tratamiento de continuación igual
en las lesiones
al de la rama A más metotrexato.
Progresión
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
Dependen de la edad del paciente en el momento del
diagnóstico, de la extensión de la enfermedad, de los órga- Linfohistiocitosis hemofagocítica
nos involucrados y de la respuesta al tratamiento. Los me- La linfohistiocitosis hemofagocítica (LHHF) pue-
nores de 2 años con disfunción hepática, pulmonar o de la de ser familiar, autosómica recesiva o secundaria. La
médula ósea tienen mal pronóstico. Existe una correlación LHHF familiar se sospecha cuando algún otro miembro
lineal entre el número de órganos afectados y la mortali- de la familia ha sido afectado o cuando existe consan-
dad. Cuando están afectados 1 ó 2 órganos la mortalidad guinidad en los padres. Se presenta en los primeros me-
es de alrededor del 10 %, cuando están afectados más de 2 ses de la vida, siempre en niños menores de 2 años de
es del 90 %. Los pacientes con enfermedad localizada tie- edad, y es uniformemente fatal. La variedad secundaria
nen excelente pronóstico con mortalidad casi nula. aparece después de los 2 años, se asocia a infecciones
La respuesta al tratamiento no se puede evaluar como virales, sobre todo por el virus de Epstein Barr (síndro-
la de la leucemia aguda por lo que no se deben utilizar los me hemofagocítico asociado a virus) y puede curar.
términos remisión y recaída. La respuesta más favorable La patogenia es desconocida. Las manifestacio-
es aquella en la que no se demuestran evidencias de la nes clínicas más frecuentes son: fiebre, hepatoesple-
enfermedad. En ocasiones, los síntomas y signos mejoran, nomegalia, disfunción hepática, ictericia, alteraciones del
pero no desaparecen y no se presentan lesiones nuevas y SNC, adenopatías y citopenias fundamentalmente
en otras la enfermedad progresa ya sea porque empeoran trombocitopenia.
los síntomas y signos presentes antes de la quimioterapia o Los datos de laboratorio más importantes son: la
porque aparecen otros nuevos. En los cuadros 88.1 y 88.2 hemofagocitosis, la ferritina, la LDH, el receptor de la
se describen los tipos de evolución más frecuentes. IL2 y el interferón γ están elevados. La actividad de las
Cuadro.88.1. Definición del estado de enfermedad células asesinas naturales está disminuida, los triglicéridos
elevados, el fibrinógeno bajo y existen anemia,
No activa No evidencias Resolución de trombocitopenia y leucopenia.
de enfermedad todos los signos En todos los órganos afectados hay proliferación
y síntomas. marcada de histiocitos con hemofagocitosis.
Enfermedad Regresión de Sin tratamiento la variedad familiar es rápidamen-
en regresión signos y/o síntomas. te fatal. Se han utilizado exanguinotransfusiones o
No nuevas lesiones plasmaféresis, diferentes citostáticos con los cuales se
Enfermedad Enfermedad Persistencia ha logrado prolongar la vida, pero no la curación. El úni-
activa estable de signos co tratamiento curativo es el TPH alogénico.
y/o síntomas En la LHHF secundaria se han obtenido algunos
éxitos con quimioterapia o con TPH.
Enfermedad Progresión de
progresiva signos Enfermedad de Rosai Dorfman
y/o síntomas. Es más frecuente en adultos jóvenes.
Aparición Su causa es desconocida. Se ha relacionado con
de nuevas lesiones una infección por el virus de Epstein Barr lo que podría

1146 Tomo III


alterar la respuesta a un antígeno específico, pero des- sistemas biológicos que participan en el mecanismo
conocido. hemostático son los sistemas quinina y complemento y
Existen evidencias de que la célula infiltrante es de los inhibidores fisiológicos del mecanismo de la coagula-
naturaleza policlonal. ción (Cuadro 89.1).
El cuadro clínico clásico se caracteriza por gran- Cuadro 89.1. Componentes del mecanismo hemostático
des adenopatías cervicales bilaterales, indoloras, que a
veces constituyen un problema estético. Cualquier gru- • Pared vascular
po ganglionar puede estar afectado. En el 30 % de los • Plaquetas
enfermos las manifestaciones pueden ser extragan- • Mecanismo de la coagulación sanguínea
glionares. Los sitios involucrados más frecuentes son la • Sistema fibrinolítico
nasofaringe, las glándulas salivales, la cavidad oral, los • Inhibidores fisiológicos del mecanismo de la
huesos y la piel. En ocasiones, el paciente presenta fie- coagulación
• Sistema quinina
bre y corta estatura.
• Sistema complemento
Las alteraciones anatomopatológicas consisten en
la presencia en los sinusoides de los ganglios de gran
cantidad de linfocitos e histiocitos que conducen a un La secuencia de reacciones que ocurren en la
borramiento casi total de la arquitectura del ganglio hemostasia se pueden expresar de manera esquemá-
linfático con elementos importantes de leucofagocitosis tica de la forma siguiente: vasoconstricción localiza-
y eritrofagocitosis. da, adhesión y agregación plaquetarias con formación
Las lesiones cutáneas son xantomatosas y las del del tapón plaquetario, su reforzamiento con la forma-
hueso líticas, difíciles de diferenciar de las de la ción de fibrina y aparición del tapón fibrinoplaquetario
y finalmente su eliminación a través del sistema
histiocitosis a células de Langerhans.
fibrinolítico.
Si la enfermedad es indolente no se aconseja trata-
miento. Participación de los vasos sanguíneos
Bibliografía en la hemostasia
Después de la lesión de la pared vascular se
Nathan DG, Oski FA Hematology of infancy and childhood 6th ed.
WB Saunders Company, Philadelphia, 2003. p1375-96. produce una vasoconstricción refleja, que se mani-
Svarch E, Arteaga R, Pavón V, González A Las histiocitosis. Rev fiesta particularmente en las pequeñas arteriolas y el
Cubana Hematol, Inmunol Hemot 2001; 17: 151-63. esfínter precapilar, lo que provoca una marcada dis-
Favara BE, Feller AC, Pauli M, Jaffe ES, Weis LM, Arico M et al.
A contemporary clasification of histiocytic disorders of minución del flujo sanguíneo. Esta vasoconstricción
childhood. Med Pediatr Oncol 1997; 29: 157-66. es mantenida por sustancias vasoespásticas como la
serotonina y el tromboxano A2 (TXA2) liberadas de
las plaquetas.
La función del endotelio vascular en relación con
. Capítulo 89 . la regulación de la hemostasia se efectúa por la pre-
sencia de diversos componentes con actividad tanto
Hemostasia procoagulante como anticoagulante (Cuadro 89.2). En-
Delfina Almagro tre los factores procoagulantes o protrombóticos que
promueven la hemostasia se encuentran entre otros,
el factor tisular, colágeno, factor von Willebrand
(FvW), fibronectina, inhibidores del activador del
COMPONENTES DEL MECANISMO plasminógeno (PAI-1) y moléculas de adhesión. Los
HEMOSTÁTICO componentes con actividad anticoagulante o
La hemostasia es el mecanismo para detener el antitrombótica más relevantes que previenen la for-
flujo sanguíneo a través de la pared vascular y eliminar mación de trombos y la oclusión vascular son la
los trombos una vez formados. Sus principales compo- prostaciclina (PGI2), antitrombina III (AT-III),
nentes son los vasos sanguíneos, las plaquetas, el meca- activador tisular del plasminógeno (t-PA) y los
nismo de la coagulación y el sistema fibrinolítico. Otros glucosaminoglicanos.

Parte XIV. Hematología 1147


alterar la respuesta a un antígeno específico, pero des- sistemas biológicos que participan en el mecanismo
conocido. hemostático son los sistemas quinina y complemento y
Existen evidencias de que la célula infiltrante es de los inhibidores fisiológicos del mecanismo de la coagula-
naturaleza policlonal. ción (Cuadro 89.1).
El cuadro clínico clásico se caracteriza por gran- Cuadro 89.1. Componentes del mecanismo hemostático
des adenopatías cervicales bilaterales, indoloras, que a
veces constituyen un problema estético. Cualquier gru- • Pared vascular
po ganglionar puede estar afectado. En el 30 % de los • Plaquetas
enfermos las manifestaciones pueden ser extragan- • Mecanismo de la coagulación sanguínea
glionares. Los sitios involucrados más frecuentes son la • Sistema fibrinolítico
nasofaringe, las glándulas salivales, la cavidad oral, los • Inhibidores fisiológicos del mecanismo de la
huesos y la piel. En ocasiones, el paciente presenta fie- coagulación
• Sistema quinina
bre y corta estatura.
• Sistema complemento
Las alteraciones anatomopatológicas consisten en
la presencia en los sinusoides de los ganglios de gran
cantidad de linfocitos e histiocitos que conducen a un La secuencia de reacciones que ocurren en la
borramiento casi total de la arquitectura del ganglio hemostasia se pueden expresar de manera esquemá-
linfático con elementos importantes de leucofagocitosis tica de la forma siguiente: vasoconstricción localiza-
y eritrofagocitosis. da, adhesión y agregación plaquetarias con formación
Las lesiones cutáneas son xantomatosas y las del del tapón plaquetario, su reforzamiento con la forma-
hueso líticas, difíciles de diferenciar de las de la ción de fibrina y aparición del tapón fibrinoplaquetario
y finalmente su eliminación a través del sistema
histiocitosis a células de Langerhans.
fibrinolítico.
Si la enfermedad es indolente no se aconseja trata-
miento. Participación de los vasos sanguíneos
Bibliografía en la hemostasia
Después de la lesión de la pared vascular se
Nathan DG, Oski FA Hematology of infancy and childhood 6th ed.
WB Saunders Company, Philadelphia, 2003. p1375-96. produce una vasoconstricción refleja, que se mani-
Svarch E, Arteaga R, Pavón V, González A Las histiocitosis. Rev fiesta particularmente en las pequeñas arteriolas y el
Cubana Hematol, Inmunol Hemot 2001; 17: 151-63. esfínter precapilar, lo que provoca una marcada dis-
Favara BE, Feller AC, Pauli M, Jaffe ES, Weis LM, Arico M et al.
A contemporary clasification of histiocytic disorders of minución del flujo sanguíneo. Esta vasoconstricción
childhood. Med Pediatr Oncol 1997; 29: 157-66. es mantenida por sustancias vasoespásticas como la
serotonina y el tromboxano A2 (TXA2) liberadas de
las plaquetas.
La función del endotelio vascular en relación con
. Capítulo 89 . la regulación de la hemostasia se efectúa por la pre-
sencia de diversos componentes con actividad tanto
Hemostasia procoagulante como anticoagulante (Cuadro 89.2). En-
Delfina Almagro tre los factores procoagulantes o protrombóticos que
promueven la hemostasia se encuentran entre otros,
el factor tisular, colágeno, factor von Willebrand
(FvW), fibronectina, inhibidores del activador del
COMPONENTES DEL MECANISMO plasminógeno (PAI-1) y moléculas de adhesión. Los
HEMOSTÁTICO componentes con actividad anticoagulante o
La hemostasia es el mecanismo para detener el antitrombótica más relevantes que previenen la for-
flujo sanguíneo a través de la pared vascular y eliminar mación de trombos y la oclusión vascular son la
los trombos una vez formados. Sus principales compo- prostaciclina (PGI2), antitrombina III (AT-III),
nentes son los vasos sanguíneos, las plaquetas, el meca- activador tisular del plasminógeno (t-PA) y los
nismo de la coagulación y el sistema fibrinolítico. Otros glucosaminoglicanos.

Parte XIV. Hematología 1147


Cuadro 89.2. Componentes de la pared vascular Cuadro 89.3. Contenido de los gránulos plaquetarios

• Procoagulantes: • Gránulos densos:


- Factor tisular − Difosfato de adenosina (ADP)
- Colágeno − Trifosfato de adenosina (ATP)
- Factor von Willebrand − Serotonina
- Fibronectina − Calcio
- Inhibidor del activador del plasminógeno-1 • Gránulos alfa:
(PAI-1) − Beta-tromboglobulina
- Moléculas de adhesión − Factor plaquetario 4
• Anticoagulantes:
− Factor de crecimiento derivado de las
- Prostaciclina (PGl2)
plaquetas
- Antitrombina III (AT-III)
− Fibrinógeno
- Activador tisular del plasminógeno (t-PA)
- Glucosaminoglicanos − Factor V
− Factor von Willebrand
− Fibronectina
Participación de las plaquetas − Trombospondina
en la hemostasia
Las plaquetas son células secretoras anucleadas La agregación plaquetaria es un complejo pro-
derivadas de los megacariocitos de la médula ósea. Bajo ceso biológico mediante el cual las plaquetas se unen
condiciones fisiológicas las plaquetas se encuentran en entre sí para formar el tapón hemostático y en el que
estado, de reposo una vez activadas por diversos participan de manera decisiva los inductores de la agre-
agonistas (ADP, trombina, TXA2, epinefrina y colágeno), gación como el ADP, epinefrina colágeno, trombina y
se produce el cambio de forma donde la plaqueta pierde el fibrinógeno y su receptor en la membrana
su forma discoide, se convierte en una esfera con plaquetaria la GPIIb/IIIa.
pseudópodos, secreta las sustancias contenidas en sus Las plaquetas tienen una participación relevante
gránulos intracelulares, se agrega y forma el tapón en el mecanismo de la coagulación sanguínea a tra-
hemostático primario. vés de los fosfolípidos de la membrana, en particular
En la formación del tapón hemostático que es la fosfatidilserina que es un importante mediador de
plaqueta-dependiente, se manifiestan las funciones fun- la actividad procoagulante de la membrana. Los
damentales de las plaquetas: adhesión, reacción de libe- fosfolípidos plaquetarios ofrecen la superficie nece-
ración y agregación. saria para la interacción de los factores de la coagu-
La adhesión plaquetaria se produce por la unión de lación.
las plaquetas al colágeno subendotelial expuesto, esta
interacción requiere la presencia del FvW que se une al Mecanismo de la coagulación
complejo glicoproteína (GP) Ib-IX de la membrana sanguínea
plaquetaria y al colágeno a través de sus receptores y El mecanismo de la coagulación sanguínea es uno
actúa como un puente entre las plaquetas y el subendotelio. de los principales componentes de la hemostasia normal
La reacción de liberación o secreción plaquetaria, y si bien la formación del tapón hemostático primario es
que ocurre de inmediato después de la adhesión, juega plaqueta dependiente, su estabilidad está relacionada
un importante papel en la hemostasia, ya que permite la con la presencia de fibrina.
liberación local y concentrada, en el sitio de daño vascular, Clásicamente se ha considerado que el proceso de
de sustancias contendidas en los gránulos densos y alfa la coagulación sanguínea consiste en una serie de reac-
del citoplasma y que son esenciales para lograr una ciones del tipo enzimasustrato que comienza con la acti-
hemostasia normal (Cuadro 89.3). En los gránulos den- vación por una superficie de contacto y culmina con la
sos se encuentran los nucleótidos de adenina, serotonina formación del coágulo de fibrina, lo que se ha conocido
y calcio y en los gránulos alfa, beta-tromboglobulina, fac- como teoría de la cascada enzimática. Se ha propuesto
tor plaquetario 4, FvW, fibrinógeno, factor V, factor de la existencia de 2 vías de activación del mecanismo
crecimiento derivado de las plaquetas y trombospondina. de la coagulación: la vía intrínseca, activada por una

1148 Tomo III


superficie de contacto y la vía extrínseca iniciada por el
daño hístico.
Los conocimientos del mecanismo de la coagula-
ción adquiridos con posterioridad indican que un simple
modelo secuencial no es adecuado para explicar este
complejo sistema y en la actualidad se considera que las
reacciones de la coagulación se producen a partir de
complejos en el que participan un zimógeno, una proteasa
y cofactores sobre una membrana unidos por puentes
de calcio.
En el llamado sistema contacto de la coagulación Fig 89.2. Vía extrínseca de la coagulación sanguínea.
(Fig 89.1), que forma parte del sistema intrínseco, parti-
cipan los factores XII, XI, precalicreína (factor Fletcher),
La vía común de la coagulación sanguínea se inicia
y quininógeno de alto molecular (QAPM) (factor
a partir del factor Xa que con el factor Va, fosfolípidos e
Fitzgerald). Se considera que este sistema se inicia con iones de calcio forman el complejo protrombinasa que
la unión del factor XII a una superficie cargada negativa convierte la protrombina en trombina, la cual actúa so-
y que el factor XII activado (FXIIa) actúa sobre el fac- bre el fibrinógeno y el factor XIII para formar la fibrina
tor XI y la precalicreína; la calicreína formada a su vez estable (Fig. 89.3).
activa al FXII. El factor XIa activa al factor IX y el
factor IXa en presencia del factor VIIIa, fosfolípidos e
iones de calcio activa al factor X.

Fig. 89.3. Vía común de la coagulación sanguínea.

En la actualidad se consideran tres etapas o fases


en el mecanismo de la coagulación: iniciación, propaga-
ción o amplificación y finalización.
Las reacciones en la cascada enzimática de la coa-
Fig. 89.1 Sistema intrínseco de la coagulación sanguínea. gulación que previamente fueron conocidas como la vía
extrínseca corresponden con la fase de iniciación de este
Las deficiencias de FXII, precalicreína y QAPM proceso. Las pequeñas cantidades de trombina genera-
no provocan manifestaciones hemorrágicas, lo que de- das durante esta fase son suficientes para activar las
muestra que el llamado sistema contacto tiene poca im- plaquetas y algunos factores de la coagulación, pero no
portancia en el mecanismo hemostático. son capaces de formar un coágulo de fibrina estable. La
La vía extrínseca se inicia a partir de la exposi- fase de amplificación o propagación se produce a partir
ción del factor tisular y es la vía principal de la acti- de la trombina generada en la fase anterior la cual acti-
vación del mecanismo de la coagulación sanguínea va nuevos factores de la coagulación y determina una
normal (Fig. 89.2). La secuencia factor VII-factor X- generación explosiva de trombina. En la fase de finali-
factor II se vería reforzada por las reacciones factor zación intervienen los mecanismos inhibitorios de este
VII-factor IX-factor X. A esta última interacción del proceso.
sistema extrínseco se le denomina vía alternativa de la El mecanismo de la coagulación sanguínea posee
coagulación. inhibidores fisiológicos, entre los cuales el inhibidor de la

Parte XIV. Hematología 1149


vía del factor tisular (IVFT), proteína C, proteína S y la plasminógeno en una enzima proteolítica, la plasmina
antitrombina III (ATIII) son las de mayor importancia. cuyo sustrato natural es la fibrina, aunque puede ejer-
El IVFT regula la actividad del complejo FVIIa/FT. cer su acción sobre otras proteínas de la coagula-
Para la acción de este inhibidor se requiere la presencia ción, entre ellas el fibrinógeno y los factores V y
del FXa. VIII. De la acción de la plasmina sobre el fibrinógeno
La proteína C, cuya síntesis hepática es dependiente se generan los productos de degradación del
de la vitamina K, es activada por la trombina unida a la fibrinógeno (PDF).
trombomodulina, proteína que se encuentra en la super- Los activadores del plasminógeno pueden ser de
ficie de las células endoteliales. La proteína C activada tipo hístico o de tipo uroquinasa, el primero es el de ma-
inactiva los factores Va y VIIIa y por lo tanto limita la yor importancia fisiológica y se encuentra en el endotelio
generación de trombina. La proteína S forma parte tam- vascular.
bién de las proteínas sintetizadas en el hígado en presencia La inhibición del sistema fibrinolítico puede ocu-
de la vitamina K y actúa como cofactor del sistema de la rrir al nivel de los activadores o de la plasmina genera-
proteína C. da. La acción de los activadores del plasminógeno es
La AT-III es el inhibidor más importante para la regulada por los inhibidores del activador del plasminó-
regulación del mecanismo de la coagulación ya que neu- geno que en los últimos años han adquirido notable im-
traliza más del 50 % de la trombina generada, así como portancia en algunos estados patológicos con tendencia
inhibe los factores VIIa, IXa, Xa, XIa y XIIa. Su acción trombótica.
sobre las proteínas de la coagulación es notablemente Los inhibidores fundamentales de la plasmina son
acelerada por la heparina, por lo que se denomina tam- la alfa 2-antiplasmina, que inhibe de manera instantánea
bién cofactor de la heparina. la actividad de esta enzima y la alfa 2-macroglobulina
La presencia de episodios trombóticos recurren- con una velocidad de inhibición más lenta, por lo que se
tes en familias con deficiencia congénita de estas pro- considera un inhibidor de segunda línea.
teínas demuestra su importancia fisiológica.
PÚRPURAS VASCULARES
Sistema fibrinolítico
Las púrpuras vasculares comprenden un grupo de
El sistema fibrinolítico participa en la etapa fi-
trastornos hemorrágicos caracterizados por la presen-
nal del proceso hemostático y su función fundamen-
cia de sangramientos en piel y mucosas debido a altera-
tal es la eliminación de la fibrina depositada en los ciones estructurales y/o funcionales de la pared vascular
vasos sanguíneos, por lo que tiene una notable impor- y sus tejidos de sostén, estas pueden ser hereditarias o
tancia en la recanalización de los vasos trombosados adquiridas (Cuadro 89.4).
(Fig. 89.4).

Cuadro 89.4. Clasificación de las púrpuras vasculares

• Hereditarias:
− Telangiectasia hemorrágica hereditaria
(enfermedad de Rendú Osler)
− Síndrome de Ehlers-Danlos
− Ataxia telangiectasia
− Síndrome de Marfán
− Osteogénesis imperfecta
− Pseudoxantoma elástico
• Adquiridas:
Fig. 89.4. Sistema fibrinolítico. − Púrpura Schonlein-Henoch
− Púrpura inducida por drogas
− Púrpura secundaria a infección
En la fibrinolisis intervienen numerosas proteí- − Escorbuto
nas: proactivadores, activadores e inhibidores, de su − Púrpura mecánica
interacción resulta la conversión de un zimógeno: el

1150 Tomo III


Púrpuras vasculares hereditarias Síndrome de Ehlers-Danlos
El síndrome de Ehlers-Danlos (SED) es un tras-
Telangiectasia hemorrágica hereditaria torno hereditario del tejido conectivo clínica y
(enfermedad de Rendú Osler) genéticamente heterogéneo que está relacionado con
La enfermedad de Rendú Osler es un trastorno defectos específicos de la biosíntesis del colágeno. Las
vascular caracterizado por dilatación y tortuosidad de manifestaciones clínicas se caracterizan en su forma más
los capilares y vénulas que dan lugar a la formación de común por la presencia de hiperelasticidad cutánea,
telangiectasias en piel y mucosas que constituyen las hiperextensibilidad articular, equimosis espontáneas,
manifestaciones fundamentales de la enfermedad (Cua- sangramiento gingival al cepillado y hematomas después
dro 89.5). Su modo de herencia es autosómico dominan- de traumas ligeros. El SED se ha clasificado en seis
te. Las lesiones características de este trastorno, que formas clínicas en dependencia de las alteraciones
son de color rojo brillante o púrpura de hasta 3 mm de moleculares y bioquímicas de este trastorno. No se co-
diámetro, pueden ser también nodulares o estrelladas. noce ningún tratamiento efectivo para este síndrome.
Se localizan habitualmente en la cara, lengua, labios, y
pabellones auriculares, mucosa nasal y dedos; aunque Ataxia telangiectasia
pueden aparecer en cualquier región del cuerpo. Las
manifestaciones más comunes son: epistaxis La ataxia telangiectasia se expresa en varios órga-
sangramientos digestivos, genitourinarios y respiratorios. nos y sistemas y se hereda con carácter autosómico
La anemia se observa con frecuencia y depende de la recesivo. Se caracteriza por ataxia cerebelosa progresi-
magnitud de los episodios hemorrágicos. Pueden pre- va, telangiectasia oculocútanea, severos trastornos
sentarse fístulas arteriovenosas en pulmón que pueden inmunológicos y una alta incidencia de neoplasias. La
provocar insuficiencia respiratoria crónica, infecciones presencia de telangiectasias se puede observar también
pulmonares recurrentes y policitemia. Se han observado en los vasos meníngeos y pulmonares. Habitualmente
fístulas arteriovenosas y otras malformaciones vasculares los primeros síntomas, que son dificultad en el balance
en vasos retinianos cerebrales y hepáticos. y la marcha, aparecen temprano en la niñez.
Otras púrpuras vasculares congénitas como el sín-
Cuadro 89.5. Manifestaciones clínicas de la enferme-
drome de Marfán, la osteogénesis imperfecta y el
dad de Rendú-Osler
pseudoxantoma elástico, presentan en general altera-
• Lesiones telangiectásicas ciones óseas, oculares y de la piel.
• Epistaxis
• Hematuria Púrpuras vasculares adquiridas
• Hemoptisis
• Fístulas arteriovenosas Púrpura de Schonlein-Henoch
• Anemia La púrpura de Schonlein-Henoch (PSH) es una
vasculitis sistémica en la cual se presentan depósitos de
IgA en la pared vascular de los pequeños vasos de la
Las pruebas de laboratorio de la hemostasia son
piel, intestino y glomérulos y se caracteriza clínicamente
normales y solo un pequeño número de pacientes tienen
por púrpura, dolor abdominal a tipo cólico, artralgia o
trastornos de la función plaquetaria.
artritis y hematuria.
El tratamiento de la enfermedad de Rendú Osler
es sintomático. Se ha utilizado la compresión, cauteriza- Diversos agentes se han relacionado con este tras-
ción y electrocoagulación de las lesiones, así como la torno: infección por estreptococo del grupo A, adenovirus,
dermoplastia septal, embolización y ligadura arterial. En parvovirus B19, hipersensibilidad a algunos alimentos o
las epistaxis se ha obtenido variable éxito con el uso de medicamentos así como picadura de insectos y vacu-
estrógenos o su combinación con progesterona para in- nas. Tiene su mayor frecuencia en niños entre 3 y 10
ducir la metaplasia escamosa de la mucosa nasal y la años de edad y es rara en menores de 2 años.
fotocoagulación endonasal con láser. El tratamiento qui- En este trastorno se encuentra una vasculitis agu-
rúrgico está indicado cuando existen fístulas sintomáticas da de capilares y arteriolas con acumulación
y en aquellos casos con lesiones localizadas en el tubo perivascular de leucocitos y eritrocitos y sufusiones
digestivo. La anemia consecutiva a sangramientos re- serosanguíneas en los tejidos subcutáneos, submucosos
currentes debe ser corregida con sales de hierro. y subserosos.

Parte XIV. Hematología 1151


MANIFESTACIONES CLÍNICAS típicas puede realizarse el diagnóstico, la presencia de
Las manifestaciones cutáneas de la PSH se pre- la IgA en las paredes de los vasos asociada con las
sentan en diversas fases evolutivas (Cuadro 89.6). Se manifestaciones de vasculitis, constituyen el diagnósti-
pueden observar lesiones urticarianas, pápulas, vesícu- co de certeza de la PSH. En el caso de sospecha clíni-
las y bulas hemorrágicas que pueden evolucionar hacia ca se debe realizar biopsia de piel para corroborar el
la necrosis. Se localizan por lo general, en las extremi- diagnóstico. El examen de orina en busca de hematuria
dades, sobre todo en las inferiores y en la región glútea y proteinuria no debe faltar en ningún caso. En la san-
con una distribución simétrica. Estas lesiones no se ob- gre periférica se puede encontrar neutrofilia y
servan en el tronco. Pueden no ser llamativas e incluso eosinofilia. El estudio de la coagulación es normal, sal-
estar ausentes y la fiebre, cefalea, dolor abdominal o vo la prueba del lazo que es positiva en aproximada-
articular ser los síntomas iniciales de la enfermedad. mente 25 % de los casos.
En ausencia de las lesiones purpúricas, las mani-
Cuadro 89.6. Características clínicas de la púrpura de festaciones abdominales pueden semejar un abdomen
Schonlen-Henoch agudo, la afectación renal una glomerulonefritis aguda y
las manifestaciones articulares confundirse con las que
• Lesiones purpúricas se hallan en la fiebre reumática.
• Manifestaciones gastrointestinales: EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
− Dolor abdominal tipo cólico
En general, la enfermedad tiene un buen pronós-
− Náuseas tico con una duración entre 1 y 6 semanas salvo en
− Vómitos aquellos casos en que se presenta alguna complicación
− Sangramiento digestivo como la insuficiencia renal, perforación e invaginación
− Invaginación intestinal intestinal o hemorragia cerebral. En un número escaso
• Manifestaciones articulares: de pacientes se presentan cuadros clínicos recurrentes
− Artralgias con períodos de tiempo que van desde semanas hasta
− Artritis varios meses.
• Manifestaciones renales:
TRATAMIENTO
− Hematuria
− Proteinuria En la mayoría de los pacientes se utiliza trata-
− Insuficiencia renal miento sintomático y reposo. Aunque la prednisona ha
sido empleada con frecuencia en el tratamiento de la
Las manifestaciones digestivas, que se presentan PSH, sus resultados han sido inciertos y solo se ha ob-
aproximadamente en dos tercios de los pacientes, son tenido alguna mejoría de los síntomas articulares y ab-
provocadas por extravasación serosanguínea dentro de dominales. En la afectación renal no han demostrado
la pared intestinal y se caracteriza por dolor abdominal ser de utilidad. Entre los agentes terapéuticos utiliza-
tipo cólico y puede acompañarse de vómitos, diarreas, dos con variable respuesta se encuentran la
enterorragia y melena. La perforación y la invaginación metilprednisolona en bolo, plasmaféresis, danazol e
intestinal son complicaciones que ocurren en ocasiones inmunosupresores.
en estos enfermos.
La toma articular en la PSH ocurre entre el 60 y el Púrpuras vasculares inducidas
80 % de los casos. Las artralgias y artritis se presentan por drogas
habitualmente en las articulaciones de mediano tamaño, Existe un número importante de drogas que pue-
en particular rodilla y tobillo. Estas manifestaciones son den provocar manifestaciones hemorrágicas secunda-
transitorias y no dejan secuelas permanentes. rias a trastornos de la pared vascular (Cuadro 89.7).
La lesión renal, que se expresa clínicamente por Las púrpuras vasculares inducidas por drogas se carac-
hematuria y albuminuria, es la manifestación más grave terizan clásicamente por la presencia de lesiones
de este trastorno y ocurre en el 50 % de los niños, aun- purpúricas en ocasiones pruriginosas que en la mayoría
que solo el 10 % de los casos evolucionan hacia la
de los casos desaparecen al descontinuar el medicamen-
insuficiencia renal crónica.
to. En general, el curso de este trastorno es benigno.
DIAGNÓSTICO Probablemente estas sustancias actúan como haptenos
Aunque en la mayoría de los casos con las mani- con la producción de inmunocomplejos que se depositan
festaciones clínicas, en particular las lesiones cutáneas en el endotelio vascular.

1152 Tomo III


Cuadro 89.7. Algunas drogas que inducen púrpura Púrpura mecánica
vascular La púrpura mecánica se presenta con cierta fre-
cuencia en el niño. Las lesiones, por lo general en forma
• Penicilina
de petequias, aparecen en la cara y el cuello por un au-
• Sulfamida
mento local de la presión intracapilar que puede ser pro-
• Aspirina y otros antiinflamatorios no esteroideos
• Propiltiuracilo vocada por tos, vómitos o convulsiones.
• Hidralazina
• Allopurinol TRASTORNOS CUANTITATIVOS
• Cefalosporinas Y CUALITATIVOS DE LAS PLAQUETAS
• Meticilina Las enfermedades hemorrágicas producidas por
• Diuréticos trastornos plaquetarios se caracterizan por la presencia
• Factores estimulantes de colonias de manifestaciones hemorrágicas principalmente en piel
y mucosas, en particular en los casos de disminución del
Púrpuras vasculares inducidas número de plaquetas o alteración de una o varias de sus
por procesos infecciosos funciones.
Un numeroso grupo de agentes infecciosos son
capaces de producir lesiones purpúricas por daño del
Púrpuras trombocitopénicas
endotelio vascular. La lesión vascular puede ser con- Las púrpuras trombocitopénicas incluyen un número
secuencia de la acción directa de estos agentes o sus importante de trastornos que tiene como característica
productos. Por otra parte, se ha sugerido que las toxinas común una disminución del número de plaquetas y ma-
bacterianas pueden desencadenar procesos autoinmunes nifestaciones hemorrágicas que en general se presentan
con alteración de la pared vascular. en forma de petequias, equimosis y sangramientos
La púrpura fulminans se caracteriza por comienzo mucosos (Cuadro 89.9).
súbito, gran toma del estado general y equimosis de dis-
tribución simétrica con lesiones de infarto en la piel. Con Trombocitopenias por disminución
alguna frecuencia se observa gangrena en las extremi- de la producción plaquetaria
dades y shock. Este cuadro está relacionado con las in-
Las púrpuras trombocitopénicas por disminución de
fecciones agudas, en particular con la meningococcemia.
La mayoría de los casos tiene un curso fatal. la producción de plaquetas pueden ser congénitas o ad-
quiridas, se caracterizan por la disminución de los
Escorbuto megacariocitos de la médula ósea y en un número im-
Las manifestaciones clínicas del escorbuto son la portante de estos trastornos la médula ósea está
expresión de alteraciones estructurales del colágeno, globalmente dañada, por lo que se asocian con anemia y
defectos en la formación de la matrix osteoide y aumen- leucopenia.
to de la reabsorción ósea provocada por la deficiencia
de la vitamina C (Cuadro 89.8). Clínicamente se carac- Trombocitopenias por aumento de la destrucción
teriza por astenia, gingivorragias, lesiones purpúricas en plaquetaria
la piel y hematomas subcutáneos. En el 80 % de los Las púrpuras trombocitopénicas por aumento de la
casos se presentan artralgias, mialgias y hemorragias
destrucción plaquetaria se caracterizan por una dismi-
subperiósticas. Con la administración de vitamina C des-
nución brusca del número de plaquetas y manifestacio-
aparecen los síntomas.
nes hemorrágicas de moderadas a severas y pueden ser
Cuadro 89.8. Manifestaciones del escorbuto de origen inmune y no inmune.
Púrpuras trombocitopénicas idiopáticas. La púrpu-
• Gingivorragias ra trombocitopénica idiopática (PTI) es una enferme-
• Astenia dad inmunológica que se caracteriza por trombo-citopenia
• Lesiones purpúricas debida a la fagocitosis de las plaquetas cubiertas por
• Hematomas subcutáneos anticuerpos por los macrófagos, un número normal o
• Mialgias aumentado de megacariocitos de la médula ósea y que
• Hemorragias subperiósticas no está relacionada con otros procesos patológicos ni
• Hematomas musculares con la exposición a drogas o agentes químicos.

Parte XIV. Hematología 1153


Cuadro 89.9. Clasificación de las trombocitopenias

Trombocitopenias por disminución Trombocitopenias por aumento


de la producción de plaquetas de la destrucción plaquetaria

• Congénitas: • Inmunes:
- Síndrome de Fanconi - Púrpura trombocitopénica idiopática
- Púrpura amegacariocítica - Púrpura trombocitopénica idiopática materna
con ausencia de radios - Púrpura postransfusional
- Trombocitopenia hereditaria ligada al sexo - Inducida por drogas
(síndrome de Winskott-Aldrich) - Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH)
• Adquiridas: - Trombocitopenia aloinmune neonatal
- Anemia aplástica - Colagenopatías (LES)
- Infiltración medular (leucemia y mielofibrosis) • No inmunes:
- Agentes físicos-químicos - Coagulación intravascular diseminada
- Fármacos - Síndrome urémico hemolítico
- Deficiencia de vitamina B12 y ácido fólico - Procesos infecciosos
- Síndromes mielodisplásticos
- Insuficiencia renal

Trombocitopenias por pérdidas de plaquetas Trombocitopenia secuestro plaquetas

• Hemorragia • Hiperesplenismo
• Hemodiálisis
• Perfusión extracorpórea

La PTI es frecuente en niños entre 2 y 6 años de aparecen en un menor número de casos. La hemorragia
edad, no tiene predilección en cuanto al sexo en este intracraneal, la complicación más grave de la PTI, se
grupo etario y es rara en el primer año de la vida. Su presenta en menos del 2 % de los niños y ocurre en el
incidencia anual es de alrededor de 4 por 100 000 niños. período inicial de la enfermedad.
La esplenomegalia se observa en un número muy
FISIOPATOLOGÍA
escaso de enfermos, por lo que cuando se presenta es
Harrington et. al. ofrecieron las primeras evi- necesario investigar la posibilidad de otro estado patoló-
dencias de la participación del sistema inmunológico en gico, en particular lupus eritematoso sistémico (LES),
esta enfermedad, al demostrar que el plasma de pacien- mononucleosis infecciosa o trastornos linfoproliferativos
tes con PTI provocaba trombocitopenia severa cuando (Cuadro 89.10).
era transfundido a sujetos normales. Se ha demostrado
que la mayoría de los pacientes con PTI tienen aumento Cuadro 89.10. Manifestaciones clínicas de la púrpura
de la IgG sobre la superficie plaquetaria. Existen algu- trombocitopénica idiopática
nas evidencias de una pérdida del balance linfocitario, • Petequias
por defecto de la función de los linfocitos T supresores. • Equimosis
El bazo desempeña un papel importante en esta • Epistaxis
enfermedad ya que es el sitio principal de destrucción • Hematuria
plaquetaria. • Sangramientos digestivos
MANIFESTACIONES CLÍNICAS • Hemorragia intracraneal (rara)
El cuadro clínico de la PTI se caracteriza por la
presencia de manifestaciones hemorrágicas fundamen- En la PTI se han descrito dos formas clínicas: agu-
talmente en piel y mucosas. Son frecuentes las petequias, da y crónica. La aguda es la más frecuente en el niño,
equimosis, epistaxis y gingivorragias. La hematuria, los tiene un comienzo súbito y en más del 60 % de los casos
sangramientos digestivos y la hemorragia conjuntival remite espontáneamente. Entre el 50 y el 85 % de estos

1154 Tomo III


pacientes se encuentran antecedentes de procesos in- aumento de linfocitos maduros y eosinofilia. Un elemento
fecciosos inespecíficos de la porción superior del apara- diagnóstico de importancia es la presencia de anticuerpos
to respiratorio. La variedad crónica de la enfermedad, antiplaquetarios. Se ha observado en algunos pacientes
que se ha definido como aquella en que la trombocitopenia trastornos de la función plaquetaria.
se prolonga por más de 6 meses y es más frecuente en
TRATAMIENTO
el adulto. Su comienzo es insidioso, no está precedido
La PTI aguda, que es la más frecuente en el niño,
por procesos infecciosos y las remisiones espontáneas
tiene una alta incidencia de remisiones espontáneas, por
son infrecuentes.
lo que la mayoría de los pacientes no requieren trata-
Se ha observado que un grupo de pacientes con
miento.
PTI crónica presentan otros trastornos inmunes que in-
En el tratamiento de esta enfermedad se han utili-
cluyen el LES, artritis reumatoidea y anemia hemolítica
zado un número importante de medidas terapéuticas con
autoinmune.
resultados variables (Cuadro 89.11).
Alrededor del 50 % de los recién nacidos de ma-
dres con PTI crónica presentan trombocitopenia provo- Cuadro 89.11. Tratamiento de la púrpura trombo-
cada por el paso de los anticuerpos antiplaquetarios citopénica idiopática
maternos a través de la placenta.
• Corticosteroides
DIAGNÓSTICO
• Esplenectomía
El diagnóstico de la PTI se realiza, en esencia,
• Azatioprina
por exclusión, por lo que es necesario realizar el diag-
• Danazol
nóstico diferencial con un grupo de trastornos que se
• Dexametasona
acompañan de trombocitopenia. Clínicamente se pue-
• IgG i.v.
den excluir aquellos que presentan hepatomegalia,
• Interferón-alfa recombinante
esplenomegalia, fiebre o anemia severa no relaciona-
• Ciclofosfamida
da con el sangramiento. Los exámenes de laboratorio
• Vincristina
diferencian otro grupo importante de estados trombo-
• Vinblastina
citopénicos, en particular el medulograma que exclu-
ye las trombocitopenias provocadas por infiltración
medular. Las trombocitopenias que tienen realmente Los corticosteroides son de uso común y en gene-
importancia en cuanto al diagnóstico diferencial son ral se recomiendan como tratamiento inicial, del 25 al
aquellas indistinguibles de la PTI desde el punto de 60 % de los pacientes tienen una respuesta favorable,
vista clínico y de laboratorio, como las secundarias a con elevación del recuento plaquetario entre 3 y 7 días
ingestión de drogas y exposición de algunas sustan- después de comenzado el tratamiento. En un número
cias tóxicas. importante de pacientes ocurre una recaída una vez sus-
Debe tenerse en cuenta que en algunos casos con pendido el medicamento. Su utilización a largo plazo no
LES la trombocitopenia puede aparecer meses antes es recomendable, ya que no aporta mejores resultados y
de que se manifiesten los síntomas y signos propios de la puede provocar graves efectos secundarios. La
enfermedad. prednisona se usa a la dosis de 1 a 2 mg/kg/día durante
El estudio de laboratorio muestra por lo general 4 semanas.
trombocitopenia por debajo de 20/109/L plaquetas, parti- La esplenectomía es el tratamiento más efectivo
cularmente al inicio de la enfermedad. de la PTI crónica con un número de remisiones comple-
Las pruebas de la hemostasia muestran las altera- tas que fluctúan entre el 65 y el 75 %. La frecuencia de
ciones relacionadas con la trombocitopenia: tiempo de procesos sépticos severos después de este proceder
sangramiento prolongado, prueba del lazo positiva y tras- hacen recomendable su posposición hasta, por lo me-
tornos de la retracción del coágulo. La vida media de las nos, los 4 años de edad y el uso de tratamiento profilác-
plaquetas está muy disminuida. La anemia, si existe, está tico con vacuna antineumocóccica 2 semanas antes del
relacionada y es proporcional a la pérdida de sangre. acto quirúrgico y penicilina v.o. después de su realiza-
Aunque el número de leucocitos es normal, se puede ción. La esplenectomía produce una rápida elevación de
encontrar una ligera eosinofilia. El medulograma mues- las plaquetas, que aparece tan pronto se pinza el pedículo
tra un número normal o aumentado de megacariocitos esplénico. Las recaídas después de la esplenectomía se
con alteraciones morfológicas que expresan trastornos han atribuido en algunos casos a la presencia de bazos
de la maduración. También es posible encontrar un accesorios.

Parte XIV. Hematología 1155


En el tratamiento de los pacientes refractarios a Trombocitopenia en la infección por el virus de
los corticosteroides y la esplenectomía se han utilizado la inmunodeficiencia humana. La trombocitopenia es
un gran número de drogas con variable resultado, entre el trastorno hemostático más frecuente en los pacientes
ellas: azatioprina, danazol, dexametasona a grandes do- infectados por el VIH. El cuadro clínico es similar a la
sis, interferón-alfa recombinante y ciclosporina. Los agen- PTI y la presencia de autoanticuerpos parece jugar el
tes quimioterapéuticos como la ciclosfosfamida, papel patogénico principal. Se considera que el trata-
vincristina y vinblastina han tenido poco éxito y gran miento más efectivo son los agentes antirretrovirales.
cantidad de efectos secundarios indeseables. Con el uso Trombocitopenia neonatal aloinmune. La
de IgG i.v. en altas dosis e IgG antiD se han obtenido
trombocitopenia neonatal aloinmune se produce por la
respuestas satisfactorias pero habitualmente transitorias
respuesta inmune de la madre contra los antígenos de
por lo que estos agentes estarían indicados en situacio-
las plaquetas fetales. Alrededor de la mitad de los ca-
nes de emergencia y en la preparación para la
esplenectomía o cualquier otro proceder quirúrgico. sos el antígeno plaquetario PlA1 es el responsable de este
Las transfusiones de plaquetas no son de uso co- trastorno.
mún en el tratamiento de la PTI, por cuanto una vez Los niños afectados desarrollan lesiones purpúricas
transfundidas son destruidas muy rápido y raramente se en la etapa neonatal; la hemorragia intracraneal se ob-
observa un aumento detectable en su número en el pa- serva con cierta frecuencia, puede aparecer íctero en la
ciente; se consideran de alguna utilidad en el sangra- 1ra. semana de vida y los casos leves no requieren tra-
miento intracraneal junto con la infusión de IgG i.v. tamiento. En aquellos casos con trombocitopenia severa
Púrpura postransfusional. En este trastorno el el tratamiento de elección es la infusión de IgG i.v. La
comienzo de la trombocitopenia es brusco y ocurre exsanguinotransfusión también ha sido empleada en al-
aproximadamne una semana después de la transfusión. gunos casos.
En más del 90 % de los casos se encuentra un anti- Púrpuras trombocitopénicas no inmunes. Coa-
cuerpo contra el antígeno plaquetario PlA1 que está gulación intravascular diseminada. La coagulacón
presente en el 97 % de la población normal, de manera intravascular diseminada (CID) es un síndrome
que el 3 % de las personas con ausencia de este
trombohemorrágico que se caracteriza por la presencia
antígeno plaquetario se encuentran en riesgo de desa-
de depósitos de fibrina en la microcirculación y se pre-
rrollar una púrpura postransfusional.
senta como complicación de un número importante de
Púrpura inducida por drogas. La trombo-
citopenia inducida por quinina fue observada a princi- procesos patológicos. La trombocitopenia forma parte
pios el siglo pasado. Hoy se conoce un grupo numeroso esencial de este trastorno.
de medicamentos que pueden provocar trombo- Síndrome urémico hemolítico. El síndrome
citopenia (Cuadro 89.12). urémico hemolítico (SUH) se caracteriza por la presen-
cia de trombocitopenia, anemia hemolítica microan-
Cuadro 89.12. Algunos medicamentos que provocan giopática e insuficiencia renal aguda. Es muy similar a la
trombocitopenia púrpura trombocitopénica trombótica (PTT). Se diferen-
cian en que el SUH es más frecuente en niños menores
• Quinina • Ampicilina de 8 años de edad, no tiene predilección por el sexo, la
• Quinidina • Gentamicina lesión está prácticamente limitada al riñón y el pronós-
• Heparina • Norfloxacina tico es más favorable. Las manifestaciones neurológicas
• Levamisol • Ácido nalidíxico son raras y de menor severidad y la insuficiencia renal
• Antiinflamatorios • Anticonvulsivantes es frecuente y severa.
no esteroideos • Novobiocina Trombocitopenia no inmune inducida por infec-
• Penicilina ciones. En los procesos infecciosos la trombocitopenia
La droga parece actuar como un hapteno y provo- es variable desde leve hasta severa. En los casos de
car la formación del anticuerpo cuando se une a una infecciones congénitas la trombocitopenia está presente
proteína transportadora. El complejo anticuerpo-droga- en recién nacidos con diversas enfermedades entre otras
plaqueta induce la trombocitopenia. El trastorno es habi- la toxoplasmosis, rubéola, enfermedad de inclusión
tualmente autolimitado y el recuento plaquetario regresa citomegálica, herpes virus y sífilis. En el niño mayor puede
a la normalidad una vez que la droga es eliminada de la presentarse con frecuencia durante procesos bacte-
circulación. rianos, virales y por rickettsias.

1156 Tomo III


Trombocitosis Cuadro 89.14. Trombocitopatías congénitas
El aumento del número de plaquetas puede ser
consecuencia de un incremento de la producción o de la • Trastornos de la membrana plaquetaria
proliferación de los megacariocitos de la médula ósea − Síndrome de Bernard Soulier
(Cuadro 89.13). − Enfermedad de Glanzmann

Cuadro 89.13. Causas de trombocitosis • Trastornos de los gránulos


− Deficiencia de gránulos densos:
• Primarias:
Síndrome de Beguez-Chediak-Higashi
− Síndromes mieloproliferativos Síndrome de Wiskott-Aldrich
− Trombocitemia esencial − Deficiencia de gránulos alfa
− Policitemia vera Síndrome de la plaqueta gris
− Metaplasia mieloide agnogénica − Deficiencia de gránulas densos y alfa
− Leucemia mieloide crónica
• Secundarias: • Trastornos de la síntesis del tromboxano
− Posesplenectomía − Deficiencia de la ciclooxigenasa
− Pérdida aguda de sangre − Deficiencia de la tromboxano sintetasa
− Deficiencia de hierro
− Recuperación de la médula ósea • Trastornos de la movilización del calcio
− Tratamiento con vitamina B12
− Tratamiento con ácido fólico Síndrome de Bernard-Soulier. El síndrome de
− Infecciones crónicas Bernard-Soulier (SBS) se caracteriza por la presencia
de manifestaciones hemorrágicas que comienzan en eta-
La trombocitosis secundaria o reactiva se ha ob- pas tempranas de la vida. Los episodios hemorrágicos
servado después de la esplenectomía, en la pérdida agu- son habitualmente severos y frecuentes en particular
da de sangre, deficiencia de hierro y en ocasiones, en la epistaxis, sangramientos cutáneos, gingivorragia y
recuperación de la médula ósea después del tratamiento metrorragia. La hematuria, los sangramientos digestivos
con vitamina B12 o ácido fólico. La trombocitosis en es- y la hemorragia intracraneal se observan con menor fre-
tos casos es transitoria, benigna y habitualmente no su- cuencia. Este síndrome se hereda con carácter
pera la cifra de 1 000/ 109 /L. autosómico recesivo. El estudio de laboratorio muestra
La trombocitosis que acompaña los síndromes tiempo de sangramiento prolongado, trombocitopenia
mieloproliferativos en particular la trombocitemia esen- moderada con plaquetas gigantes, disminución de la ad-
cial generalmente excede 1 000/109/L. A pesar del ele- hesión plaquetaria, trastornos de la agregación plaquetaria
vado número de plaquetas, las manifestaciones con ristocetina y defecto del complejo GP Ib/IX de la
trombóticas no son frecuentes ya que en estos trastor- membrana plaquetaria.
nos coexiste una disfunción plaquetaria. Enfermedad de Glanzmann. La enfermedad de
Glanzmann o trombastenia de Glanzmann es clínicamente
Púrpuras por trastornos cualitativos indistinguible del síndrome de Bernard-Soulier y de ma-
de las plaquetas nera similar se hereda con carácter autosómico recesivo.
Las trombocitopatías son un grupo de enfermeda- Desde el punto de vista de laboratorio se caracte-
des provocadas por alteraciones de la función plaquetaría riza por tiempo de sangramiento prolongado, defecto
que pueden ser congénitas o adquiridas. Su expresión en la retracción del coágulo, número normal de
clínica es muy variable, desde pacientes con manifesta- plaquetas, ausencia de agregación plaquetaria con ADP,
ciones hemorrágicas severas hasta enfermos práctica- epinefrina, colágeno y trombina con respuesta normal
mente asintomáticos. a la ristocetina, disminución del fibrinógeno plaquetario
y disminución o ausencia de la GP IIb/IIIa de la mem-
Trombocitopatías congénitas brana plaquetaria.
Alteraciones de la membrana plaquetaria. Den- Alteración de los gránulos plaquetarios. Los
tro de los trastornos congénitos de la membrana trastornos de la liberación del contenido de los gránulos
plaquetaria, entre los más estudiados se encuentran y el intraplaquetarios pueden ser por alteraciones de los grá-
síndrome de Bernard-Soulier y la trombastenia de nulos o del mecanismo de secreción de estos. Los de-
Glanzmann (Cuadro 89.14). fectos de los gránulos densos, que se conocen también

Parte XIV. Hematología 1157


como enfermedad del Pool de almacenamiento, son los Cuadro 89.15. Trombocitopatías adquiridas
más frecuentes. Las manifestaciones clínicas son muy
variables y se caracterizan por la ausencia de la segun- • Uremia
da onda de agregación plaquetaria inducida por ADP y • Drogas con acción antiplaquetaria
epinefrina. − Aspirina
Se han encontrado también defectos en los gránu- − Dipiridamol
los alfa (síndrome de la plaqueta gris) y en ambos tipos − Ticlopidina
de gránulos con manifestaciones hemorrágicas muy variables. − Clopidogrel
Trastornos de la síntesis del tromboxano. Este − Dazoxibén
tipo de trastorno es raro y se presenta con tendencia − Antiinflamatorios no esteroideos
hemorrágica leve o moderada. Puede ser causado por
− Dextrán
defecto en varias enzimas que toman parte en la vía
− Antidepresivos
metabólica del araquidonato: fosfolipasas, ciclooxigenasa
• Síndromes mieloproliferativos
y tromboxano sintetasa.
• Disproteinemias
Trastornos de la movilización del calcio. La
• Púrpura trombocitopénica idiopática
movilización del calcio de su sitio de almacenamiento, el
sistema tubular denso, es necesaria para la activación • Cardiopatías congénitas
plaquetaria. Se han encontrado un grupo de pacientes
con trastornos de la función plaquetaria a los que se ha
atribuido como elemento causal un defecto en la movili- Un número de drogas cada día mayor interfie-
zación del calcio. ren en la función plaquetaria, entre las cuales se des-
No existe tratamiento curativo para las trombo- tacan por su acción antiplaquetaria: la aspirina, el
citopatías congénitas. Es importante recomendar a los dipiridamol, la ticlopidina, el clopidogrel, los antiin-
pacientes que eviten los traumatismos y la ingestión de flamatorios no esteroideos, los antihistamínicos y los
medicamentos que interfieren con la hemostasia como antidepresivos.
la aspirina y otras drogas antiinflamatorias no esteroideas, Los síndromes mieloproliferativos, las leucemias
los antihistamínicos y antidepresivos. En el tratamiento agudas y la PTI son las enfermedades hematológicas
sintomático de estas enfermedades se han utilizado con que con mayor frecuencia se asocian a disfunción
éxito los antifibrinolíticos, ácido epsilón amino caproico plaquetaria.
y ácido tranexámico, en particular en los sangramientos En las cardiopatías congénitas se han encontrado
menstruales y de la mucosa oral. El uso de transfusio- trastornos de la función plaquetaria, lo que constituye un
nes de plaquetas se reserva para aquellos casos con hallazgo importante, ya que el tratamiento habitual de
sangramientos severos o que van a ser sometidos a in- estos pacientes es quirúrgico con el riesgo de
tervenciones quirúrgicas.
sangramiento que comporta este tipo de terapéutica.
Trombocitopatías adquiridas
TRASTORNOS DE LOS FACTORES
Los defectos adquiridos de la función plaquetaria
han sido observados en numerosos trastornos, lo que PLASMÁTICOS DE LA COAGULACIÓN
demuestra que la disfunción plaquetaria puede ser Las manifestaciones hemorrágicas que caracteri-
consecuencia de la acción de múltiples factores (Cua- zan las enfermedades por trastornos de los factores
dro 89.15). plasmáticos de la coagulación son por lo general del tipo
Con frecuencia la uremia se acompaña de ten- de grandes equimosis, hematomas intramusculares y
dencia al sangramiento y aunque se han encontrado sangramientos intraarticulares y viscerales. Estos tras-
otros defectos de la hemostasia, la disfunción tornos pueden ser congénitos o adquiridos (Cuadro
plaquetaria es el hallazgo más común y con probabi- 89.16); los primeros afectan con mayor frecuencia un
lidad el de mayor importancia clínica. Se han obser-
solo factor de la coagulación, mientras que en los adqui-
vado un número importante de defectos plaquetarios,
ridos existe disminución de varios factores. A pesar de
entre ellos, trastornos de la interacción del FvW y su
receptor en la membrana plaquetaria, en la síntesis la complejidad de la alteración, del mecanismo de la coa-
de las prostaglandinas con disminución del TXA2 y gulación en este último caso, en general las manifesta-
disminución de la actividad procoagulante de la mem- ciones hemorrágicas, son menos severas que en los
brana plaquetaria. defectos de origen congénito.

1158 Tomo III


Cuadro 89.16. Trastornos hemorrágicos por alteración de un hemofílico con una mujer portadora, en el cual el
de los factores plasmáticos de la coagulación 50% de los varones tendrían la posibilidad de ser
Congénitos: Adquiridos: hemofílicos, la mitad de las hijas portadoras y la mitad
hemofílicas.
• Ligado al sexo: • Deficiencia de los factores
− Hemofilia A dependientes de vitamina K: Se consideran portadoras de esta enfermedad obli-
− Hemofilia B − Enfermedad hemorrágica gadas las hijas de los hemofílicos, las madres de más de
del recién nacido un paciente hemofílico y las madres de un hemofílico
− Síndrome de malabsorción con antecedentes familiares de hemofilia. Las llamadas
• Autosómico − Hepatopatías posibles portadoras son las madres de un hemofílico sin
recesivo: − Drogas antecedentes familiares de hemofilia y aquellas mujeres
− Afibrinogenemia antagonistas con hermanos u otros familiares maternos con hemofilia
− Hipofibrinogenemia de la vitamina K (Cuadro 89.17).
− Deficiencia de: − Terapéutica antibiótica
protrombina, prolongada
factor V, − Íctero obstructivo
factor VII, • Inhibidores de la coagulación:
factor X, −Inhibidores específicos de
factor XI, factores de la coagulación
factor XII − Lupus eritematoso
y factor XIII sistémico
• Autosómico • Consumo acelerado de
dominante factores de la coagulación
o recesivo: −Coagulación intravascular
− Enfermedad de diseminada
von Willebrand
Fig.89.5. Herencia de la hemofilia.

Trastornos congénitos de los factores Cuadro 89.17. Tipos de portadoras de hemofilia


de la coagulación
• Portadoras obligadas:
Hemofilia − Hijas de pacientes hemofílicos
− Madres de más de un hijo hemofílico
La hemofilia es una enfermedad hemorrágica he-
− Madres de un hijo hemofílico y familiares ma-
reditaria producida por la disminución del factor VIII
ternos con hemofilia
(hemofilia A) o del factor IX (hemofilia B) de la coa- • Posibles portadoras:
gulación. La incidencia de la hemofilia A es de 1 en − Madres de un hijo hemofílico
10 000 varones y de la hemofilia B de 1 en 60 000 varo- − Mujeres con familiares maternos con hemofilia
nes. Ambas enfermedades son indistinguibles desde el
punto de vista genético y clínico.
Herencia. La hemofilia es un ejemplo típico de Alrededor del 25 % de los pacientes no refieren
herencia recesiva ligada al sexo, de manera que la alte- antecedentes familiares de la enfermedad, lo que podría
ración genética se encuentra en el cromosoma X estar relacionado con mutaciones genéticas o con la
(Fig.89.5). Las posibilidades de transmisión en cada existencia, en algunos casos, de familias poco numero-
embarazo serán, en el caso de la unión de un individuo sas en las cuales predomina el sexo femenino.
sano con una mujer portadora, ella podría transmitir la MANIFESTACIONES CLÍNICAS
enfermedad a la mitad de sus hijos varones y el estado En la hemofilia, la severidad de los sangramientos
de portadora, a la mitad de sus hijas. Cuando se trate de mantiene una relación directa con la actividad del factor
una mujer sana y un hombre afectado, todos los hijos en el plasma, de manera que estos pacientes se han
varones serán sanos y sus hijas, portadoras de la enfer- clasificado en: graves, aquellos que muestran menos
medad. Más raramente, se podría dar el caso de la unión del 1 % de la actividad del factor; moderados, del 1 al

Parte XIV. Hematología 1159


5 % de actividad; y leves, del 6 al 30 % de la actividad
del factor.
En los casos graves, las manifestaciones hemo-
rrágicas se producen con frecuencia de manera espon-
tánea. Los pacientes moderados no suelen sangrar
espontáneamente, pero el menor traumatismo les puede
provocar hemorragias profusas. Los hemofílicos leves
solo presentan sangramientos en respuesta a traumatismos
importantes, cirugía o extracciones dentarias.
La edad de aparición de las manifestaciones
hemorrágicas depende del grado de severidad de la en-
fermedad, aunque con frecuencia son raras en la etapa
neonatal, ya que el recién nacido está relativamente pro-
tegido por su escasa movilidad. Los sangramientos se
presentan en forma de grandes equimosis, hematomas,
sangramientos musculares y articulares y hemorragias
viscerales (Cuadro 89.18).

Cuadro 89.18. Manifestaciones clínicas de la hemofilia


• Sangramientos articulares:
− Rodilla Fig. 89. 6. Artropatía hemofílica.
− Tobillo
− Codo
− Hombro Los sangramientos intramusculares son muy fre-
− Cadera cuentes en la hemofilia y juegan también un papel im-
• Sangramientos musculares: portante en el desarrollo de las secuelas que muestran
− Psoas-ilíaco estos enfermos, ya que pueden comprimir músculos,
− Glúteo nervios o vasos sanguíneos y producen isquemia, paráli-
− Muslo sis o contracturas permanentes. De particular importan-
− Pantorrilla cia es el sangramiento en el psoasilíaco que en ocasiones
• Hematuria es recidivante y se puede presentar como un abdomen
• Sangramiento digestivo agudo y si es del lado derecho semejar una apendicitis
• Sangramientos nasales y de la mucosa oral aguda. Con frecuencia, puede palparse una masa dolo-
• Sangramiento en el sistema nervioso central rosa en fosa ilíaca con flexión de la cadera y sensación
de parestesia en la cara anterior del muslo. El diag-
Los sangramientos articulares (hemartrosis) cons- nóstico de certeza se establece por ultrasonografia
tituyen una de las manifestaciones clínicas más carac- abdominal.
terísticas de la hemofilia y hacen su aparición cuando La hematuria es una manifestación clínica frecuen-
el niño comienza a gatear o caminar. El comienzo del te en el paciente hemofílico y en general, no expresa un
sangramiento se caracteriza por la presencia de cos- trastorno renal grave. Puede ser recidivante y en oca-
quilleo, sensación de ardor y parestesia en la zona arti- siones puede complicarse con una uropatía obstructiva
cular. Pocas horas después, aparece aumento de debida a la presencia de coágulos en las vías urinarias.
Los sangramíentos digestivos se suelen presentar con
volumen, elevación importante de la temperatura local,
menor frecuencia y en el caso de recurrencia casi siempre
dolor intenso y la piel, al nivel de la articulación, toma obedecen a una lesión orgánica como gastritis, úlcera péptica
un color rojo vivo. El sangramiento se produce proba- o poliposis intestinal. Los sangramientos de la mucosa oral
blemente a partir de los vasos sinoviales. Las son frecuentes, pero en general de fácil control.
hemartrosis tienden a ser recidivantes y son la causa El sangramiento del sistema nervioso central (SNC),
principal de las deformidades e invalidez que en ocasio- aunque no es frecuente, es una de las causas principales
nes presentan estos enfermos (Fig. 89.6). En orden de de muerte. Su localización de mayor a menor frecuencia
frecuencia, las articulaciones más afectadas son: rodilla, es subdural, epidural, subaracnoidea e intracerebral. Las
tobillo, codo, hombro y cadera. manifestaciones clínicas más frecuentes son cefalea,

1160 Tomo III


náuseas, vómitos, irritabilidad y crisis convulsivas que pue- Cuadro 89.19. Tratamiento integral del paciente
den llegar a pérdida de la conciencia. hemofílico
El sangramiento intraespinal es más raro y en la
Ortopédico-rehabilitador
mayoría de los casos no está asociado a un traumatismo
Estomatológico
significativo o a una fractura de la columna vertebral. El
Psicológico
diagnóstico se debe sospechar ante la presencia de do-
• Durante los episodios hemorrágicos
lor agudo en la espalda o en el cuello, de intensidad cre-
− Sustitutivo
ciente aún en ausencia de una parálisis motora-sensitiva
− Plasma fresco congelado
ascendente.
− Crioprecipitado
DIAGNÓSTICO − Concentrado de complejo protrombínico
El diagnóstico de la hemofilia se establece por los − Concentrados de factor VIII y factor IX
antecedentes familiares y personales, manifestaciones − Concentrado de factor VIII porcino
clínicas y el hallazgo de laboratorio de la disminución de − Concentrado de factor VIIa recombinante
la actividad del factor VIII o del factor IX, lo cual cons- • Otros agentes terapéuticos
tituye el diagnóstico de certeza de la enfermedad. En el − Antifibrinolíticos (ácido epsilon amino
estudio de despistaje tanto el tiempo de sangramiento, caproico y ácido tranexámico)
tiempo de protrombina y tiempo de trombina son norma- − DDAVP
les. El tiempo parcial de tromboplastina activado se en- − Corticosteroides
cuentra prolongado. Esta prueba aunque no es específica,
cuando está alterada, hace sospechar el diagnóstico en
la mayoría de los casos. Para el tratamiento de la hemofilia están disponi-
En la actualidad es posible realizar el diagnóstico bles algunos productos: plasma fresco congelado,
prenatal y detectar a la portadora de hemofilia por técni- crioprecipitado, concentrados de factor VIII y factor IX
cas de análisis del ADN. de origen plasmático y recombinante, concentrado de
factor VIII porcino y más recientemente concentrado
TRATAMIENTO
de factor VIIa recombinante.
La hemofilia es una enfermedad que requiere del El tratamiento sustitutivo idóneo en la hemofilia
concurso de un grupo de especialistas para lograr un son los concentrados de factor VIII o factor IX. La
tratamiento adecuado, ya que este no es solo necesario dosis se calcula teniendo en cuenta que 1 unidad de
durante los episodios agudos sino también entre ellos factor VIII/kg de peso eleva el 2 % este factor en el
(Cuadro 89.19). Las secuelas provocadas por los plasma y 1 unidad de factor IX/kg de peso lleva 1,5 %
sangramientos intraarticulares e intramusculares que este factor en el plasma. En el caso de la hemofilia A
pueden llevar a profundos cambios musculoesqueléticos se ha utilizado el crioprecipitado cuando no está dispo-
y llegar a grados variables de invalidez, determinan que nible el concentrado. Tanto el crioprecipitado como
el tratamiento integral de estos enfermos no se puede el plasma tienen el riesgo potencial de transmisión
alcanzar de manera plena si no se toma en considera- viral (Cuadro 89.20).
ción la rehabilitación de estas secuelas y el impacto de
esta enfermedad en la esfera psicosocial, y se logra Cuadro 89.20. Tratamiento sustitutivo de la hemofilia
ofrecer a estos pacientes la posibilidad de una integra-
ción óptima a la vida social. Por lo tanto, en el tratamien- Tipo de sangramiento Porcentaje
to integral de la hemofilia participará el hematólogo, del factor a elevar
ortopédico, estomatólogo, fisioterapeuta y psicólogo.
En el niño pequeño constituye un elemento de gran Hemartrosis 20-40
importancia la prevención de traumas mediante la pro- Hematomas profundos 40-50
tección de la cuna y el corral. Extracciones dentarias 30-40
Hematuria 25-30
Durante los episodios hemorrágicos lo primario es
Intervenciones quirúrgicas Niveles normales
la valoración del tipo y sitio del sangramiento, ya que de
Sangramientos en sitios Niveles normales
ello dependerá la cantidad y frecuencia del tratamiento
peligrosos: sistema nervioso
sustitutivo. Es necesario puntualizar que el nivel del fac-
central, base de la lengua,
tor para asegurar la hemostasia después de traumatismos
cuello, orofaringe e
es mayor que el indicado para el control del sangramiento
intratorácico
espontáneo.

Parte XIV. Hematología 1161


El tratamiento de la hemartrosis aguda va dirigido sintético de la vasopresina puede aumentar el nivel de
fundamentalmente a detener el sangramiento, aliviar el factor VIII alrededor de 3 veces los niveles básicos del
dolor, mantener o restablecer la función articular y tra- paciente. El paracetamol o dextropropoxifeno pueden
tar de evitar los cambios crónicos de la articulación. En ser utilizados para aliviar el dolor y la fiebre. La aspirina
estos casos, se elevará el nivel de factor VIII o factor y el resto de los antiinflamatorios no esteroideos están
IX entre 20 y 40 %, en dependencia de la intensidad de contraindicados por su conocida acción antiagregante
la hemorragia y las condiciones de la articulación, bolsa plaquetaria.
de hielo e inmovilización con férula de yeso. Está con- Complicaciones del tratamiento. Las principa-
traindicado el uso de cilindros de yeso. La punción arti- les complicaciones del tratamiento de la hemofilia son el
cular solo se realizará cuando exista aumento de volumen
desarrollo de inhibidores del factor VIII o factor IX y la
importante con dolor intenso. Una vez transcurrida la
transmisión de virus en particular el virus de la hepatitis
fase aguda, es necesario comenzar un programa de re-
C (VHC) y el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
habilitación. Para la prevención de las hemartrosis
recidivantes, por lo general, se utilizan dos métodos te- La presencia de inhibidores del factor VIII o del
rapéuticos, la resección de la sinovial (sinovectomia) por factor IX continúa siendo un desafío en el tratamiento
artroscopia o la fibrosis de esta (sinoviortesís) más utili- de estos enfermos ya que puede poner en peligro su
zada en la actualidad. vida cuando se produce un episodio hemorrágico seve-
Los hematomas musculares profundos deben tra- ro. Su tratamiento dependerá del nivel de los inhibidores,
tarse rápida e intensamente con la reposición de facto- en los casos con menos de 10UB/mL (bajos
res a niveles mínimos de 40 a 50 % durante varios días. respondedores) puede utilizarse altas dosis del factor en
En la mayoría de los pacientes con hematuria es deficiencia y en el caso de la hemofilia A habitualmente
necesario el uso de tratamiento sustitutivo para elevar el se asocia concentrado de complejo protrombínico acti-
factor entre el 25 y el 30 %, reposo e hidratación. Los vado y en algunos casos concentrado de factor VIII
antifibrinolíticos están contraindicados ya que pueden porcino. El tratamiento de los pacientes altos
provocar una uropatía obstructiva. respondedores, más de 10UB/mL, es mucho más com-
En el caso de las intervenciones quirúrgicas se debe plejo, en particular cuando se presentan episodios
investigar previamente la presencia de inhibidores del hemorrágicos que pueden poner en peligro la vida del
factor VIII o factor IX. Los niveles del factor deben paciente o es necesario una intervención quirúrgica de
mantenerse dentro de límites normales durante el acto urgencia. En estos pacientes se han utilizado varios mé-
quirúrgico y 2 días después de la intervención, el resto, todos terapéuticos: plasmaféresis, inmunoadsorción o
el posoperatorio, se mantendrá el factor con niveles de inmunosupresores e IgG i.v.
actividad entre 25 y 30 %. En la actualidad el tratamiento de elección en pa-
Las extracciones dentarias requieren el uso de tra- cientes con inhibidores es el concentrado de factor VIIa
tamiento sustitutivo para alcanzar entre el 30 y 40 % del recombinante.
factor en el plasma. Se añadirá ácido epsilón amino
La hepatitis C es otra de las complicaciones re-
caproico (AEAC) a la dosis de 0,1g/kg de peso/6 h.
levantes del tratamiento de la hemofilia, ya que la
Para evitar las extracciones dentarias se debe dar
enfermedad hepática tiene una contribución importante
especial atención al tratamiento estomatológico profilác-
en los índices de mortalidad de estos pacientes. Puede
tico. En el niño son suficientes de 3 a 4 visitas anuales al
considerarse a la hepatitis C como una enfermedad pro-
especialista para una adecuada atención estomatológica.
Las hemorragias en sitios que pueden poner en gresiva si se tiene en cuenta que del 50 al 75 % de los
peligro la vida del paciente como los sangramientos del pacientes evolucionan hacia la cronicidad y que del 20 al
SNC, base de la lengua, orofaringe, cuello e intratorácicas 30 % de estos desarrollan cirrosis hepática. Por otra
requieren tratamiento sustitutivo inmediato cada 8 a 12 h o parte, se ha encontrado que la incidencia de carcino-
en infusión continua para mantener niveles normales del ma hepatocelular es 30 veces mayor en hemofílicos
factor. que en la población general.
Además del tratamiento sustitutivo, que es el prin- La transmisión del VIH fue un hecho común en la
cipal elemento terapéutico, en la hemofilia se han em- década del 80 del pasado siglo, causado por la utilización
pleado otros medicamentos en determinadas situaciones. de concentrados de factores sin inactivación viral, se
Los antifibrinolíticos como el AEAC y el ácido contaminó hasta el 85 % de los hemofílicos tratados con
tranexámico se asocian al tratamiento sustitutivo en par- estos concentrados. En la actualidad se ha logrado evi-
ticular en casos de extracciones dentarias y tar la transmisión del virus por esta vía con el uso de
sangramiento bucal. El DDAVP, que es un análogo concentrados tratados con métodos de inactivación viral.

1162 Tomo III


Enfermedad de von Willebrand Cuadro 89.21. Clasificación de la enfermedad de von
Willebrand
La enfermedad de von Willebrand (EvW) es un
trastorno hemorrágico hereditario cuya incidencia ha sido Tipo Trastorno molecular Herencia
difícil de establecer, ya que las pruebas específicas para
el diagnóstico no siempre están disponibles. En general, 1 Disminución cuantitativa Autosómica
se considera que la incidencia puede llegar hasta el 1 % del factor von Willebrand dominante
de la población general. Este trastorno es causado por
un deficiencia cuantitativa o cualitativa del factor von 2A Disminución de la Autosómica
Willebrand (FvW), una proteína de gran tamaño que se función dependiente dominante
sintetiza en el endotelio vascular y en los megacariocitos de las plaquetas
de la médula ósea. Su sitio de almacenamiento son los Ausencia de grandes
cuerpos de Weibel-Palade del endotelio vascular. El FvW multímeros en plasma
tiene 2 funciones principales en el mecanismo y plaquetas
hemostático, participa de manera relevante en la adhe-
sión plaquetaria y al unirse al factor VIII en el plasma, 2B Aumento de la Autosómica
ejerce una acción protectora sobre esta proteína y evita afinidad del factor von dominante
su rápida destrucción. Willebrand a la GPlb
de las plaquetas
CLASIFICACIÓN
La EvW se ha clasificado en 3 fenotipos principa- 2M Disminución de la Autosómica
les (Cuadro 89.21). En el tipo 1, que es el más frecuen- función dependiente recesiva
te, existe una disminución cuantitativa del FvW y del de las plaquetas.
factor VIII. El tipo 2 se caracteriza por cambios cuali- Presencia de grandes
tativos del FvW y se han descrito 4 subtipos relaciona- multímeros
dos con la afinidad de este factor a su receptor en la
membrana plaquetaria, presencia de grandes multímeros 2N Disminución de la Autosómica
y su afinidad con el factor VIII. En el tipo 3 el FvW está afinidad del factor von recesiva
ausente. Willebrand por el factor VIII
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
3 Ausencia del factor von Autosómica
La expresión clínica de este trastorno es muy va-
Willebrand recesiva
riable (Cuadro 89.22). En la mayoría de los pacientes
con el tipo 1 de la enfermedad el cuadro clínico es leve,
con sangramientos mucosos ocasionales como epistaxis,
Cuadro 89.22. Manifestaciones clínicas de la enfer-
menorragia y gingivorragia. La hemorragia después de medad de von Willebrand
extracciones dentarias u otros procederes invasivos está
siempre presente. Los pacientes del tipo 2 con frecuen- Tipo 1 y 2
cia presentan episodios hemorrágicos más severos. • Epistaxis
Ambos tipos pueden presentar sangramientos digesti- • Gingivorragia
vos que en su mayoría son recurrentes, de difícil trata- • Menorragia
miento y que en algunos casos, se asocian con lesiones • Sangramiento digestivo
angiodisplásticas. El cuadro clínico de los pacientes con
el tipo 3 de la enfermedad es mucho más severo y pue- Tipo 3
de semejar al de la hemofilia A. • Hemartrosis
• Hematomas musculares
DIAGNÓSTICO
En general, el diagnóstico de la EvW se apoya en
un grupo de pruebas de laboratorio: tiempo de donde se observa una respuesta aumentada con bajas
sangramiento, determinación del FvW antigénico, acti- concentraciones de esta sustancia. Otros métodos que
vidad del cofactor ristocetina, dosificación del factor se utilizan en laboratorios más especializados son la de-
VIII y la agregación plaquetaria inducida por ristocetina; terminación de la unión del FvW al colágeno y el estudio
esta última prueba es útil en el diagnóstico del tipo 2B del patrón multimérico del FvW.

Parte XIV. Hematología 1163


TRATAMIENTO (TP), tiempo parcial de tromboplastina activado (TPTA),
Las dos medidas terapéuticas esenciales en el tra- tiempo de trombina (TT) y tiempo de reptilasa. En algu-
tamiento de la EvW son la desmopresina (DDAVP) y el nos pacientes se han encontrado trastornos de la fun-
tratamiento sustitutivo (Cuadro 89.23). ción plaquetaria.
Cuadro 89.23. Tratamiento de la enfermedad de von En la hipofibrinogenemia, a diferencia de la
Willebrand afibrinogenemia se pueden encontrar niveles de
fibrinógeno entre 0,2 g/L y 1 g/L. Aunque el sangramiento
• Desmopresina (DDAVP) por el cordón umbilical es frecuente, el resto de las ma-
• Tratamiento sustitutivo: nifestaciones hemorrágicas son más leves. La prolon-
− Crioprecipitado gación de las pruebas de laboratorio dependerá del nivel
− Concentrado de factor VIII de pureza de fibrinógeno en el plasma del paciente.
intermedia
− Concentrado de factor von Willebrand Otros defectos congénitos de los factores
• Otros agentes terapéuticos: plasmáticos de la coagulación
• Antifibrinolíticos
− Ácido epsilon aminocaproico Los defectos congénitos de los otros factores de la
− Ácido tranexámico coagulación (II,V, VII, X, XI, XII y XIII ) son en extre-
• Anticonceptivos orales mo raros, se heredan con carácter autosómico recesivo
y en general presentan manifestaciones hemorrágicas
de moderadas a severas. Sería útil hacer hincapié en
La desmopresina es un derivado sintético de la algunas características clínicas que los diferencian. En
hormona antidiurética (ADH) que libera el FvW de los la deficiencia del factor V se observa con cierta fre-
cuerpos de Wiebel-Palade de las células endoteliales. cuencia el sangramiento por el cordón umbilical. La de-
La dosis habitual es de 0,3 μg/kg i.v. en infusión conti- ficiencia del los factores VII y X se caracteriza por
nua por 30 min. Puede ser también administrado por vía sangramientos severos que incluyen las hemartrosis y
s.c. a la misma dosis o por inhalación nasal a dosis de los hematomas musculares. Los pacientes con deficien-
150 a 300 μg/kg. Está indicado en los pacientes con tipo cia de factor XII, como sucede con otros componentes
1 de la enfermedad. Está contraindicado en los pacien- del sistema contacto (precalicreína y quininógeno de alto
tes con tipo 2B. peso molecular), no presentan manifestaciones
El tratamiento sustitutivo se utiliza en aquellos ca- hemorrágicas y lo que con cierta frecuencia se ha ob-
sos que no responden o que no son candidatos al uso del servado es un aumento de la incidencia de eventos
DDAVP. Los productos más utilizados son el trombóticos en pacientes con deficiencia de este factor.
crioprecipitado, concentrado de factor VIII de pureza En los casos con deficiencia de factor XIII, el
intermedia y concentrados de FvW. El crioprecipitado sangramiento después de extracciones dentarias y otros
puede detener la mayoría de los episodios hemorrágicos procederes quirúrgicos se presentan varias horas des-
de estos pacientes, aunque su uso está limitado por el pués y existen trastornos en la cicatrización de las
peligro potencial de transmisión de virus. heridas.
Los sangramientos menstruales profusos pueden
Trastornos adquiridos de los factores
controlarse en un grupo numeroso de casos con el uso
de antifibrinolíticos. plasmáticos de la coagulación

Afrinogenemia e hipofibrinogenemia Deficiencia de los factores dependientes


de la vitamina K
La afibrinogenemia es una enfermedad
hemorrágica congénita que se caracteriza por La vitamina K es indispensable para la síntesis de
los factores II, VII, IX y X y los inhibidores del mecanis-
sangramientos profusos por pequeños traumas,
mo de la coagulación proteína C y proteína S.
menorragias, epistaxis, equimosis, y sangramientos di- Para una adecuada actividad de estos factores
gestivos. Con frecuencia, el primer signo clínico de este plasmáticos es necesaria la conversión de varios resi-
trastorno es el sangramiento por el cordón umbilical. En duos de ácido glutámico en gamma-carboxiglutámico,
el estudio de laboratorio se detecta la ausencia de mediante la adición de un grupo carboxilo al átomo de
fibrinógeno y la prolongación del tiempo de protrombina carbono gamma, lo que aumenta su afinidad por el

1164 Tomo III


calcio que es el elemento que lo une a los fosfolípidos. La CID se puede presentar en una amplia varie-
La vitamina K es un cofactor necesario para esta reac- dad de condiciones clínicas (Cuadro 89.24). Los proce-
ción de carboxilación (Fig. 89.7). sos sépticos son probablemente la causa más común de
CID. La endotoxina bacteriana o lipopolisacáridos (LPS)
componentes de la pared de las bacterias gramnegativas
son uno de los desencadenantes mejor conocidos de la
CID. Los LPS son los responsables del cuadro séptico y
del shock endotóxico por inducción de una respuesta
inflamatoria generalizada, caracterizada por la liberación
de citocinas, entre ellas, el factor de necrosis tumoral
(FNT) que juega un papel relevante en este proceso ya
que provoca la exposición del factor tisular que se en-
cuentra en la pared vascular. La CID se puede presen-
Fig 89.7. Carboxilación de los residuos de ácido glutámico tar también en la sepsis a bacterias grampositivas en un
de la protrombina. proceso similar a través de los mucopolisacáridos de la
pared de estas bacterias.
Enfermedad hemorrágica del recién nacido. Es Cuadro 89.24. Procesos clínicos asociados con coa-
un trastorno provocado por la deficiencia de vitamina K. gulación intravascular diseminada
El uso profiláctico de esta vitamina en el recién nacido
• Sepsis
prácticamente ha hecho desaparecer esta enfermedad.
• Traumas
Suele presentarse entre el 2do. y el 7mo. día después
• Enfermedades malignas
del nacimiento con manifestaciones hemorrágicas de mo-
− Tumores sólidos
derada a severa intensidad. Con el uso de vitamina K
− Leucemia aguda promielocítica
las manifestaciones hemorrágicas desaparecen en- • Hemangioma gigante (síndrome de Kasabach-
tre 4 y 12 h. Merritt)
Hepatopatías. Aunque en el hígado se sintetizan • Hemólisis masiva
prácticamente todos los factores plasmáticos de la coa- • Reacción postransfusional
gulación y en las hepatopatías severas, en particular en • Rechazo de trasplante
las hepatitis crónicas, cirrosis hepática y enfermedades • Quemaduras
con infiltración hepática, puede existir disminución en un
número importante de factores de la coagulación; los La CID es también frecuente en los traumas se-
factores involucrados inicialmente son los dependientes veros. La liberación de fosfolípidos, hemólisis y daño
de la vitamina K. El factor VII en general es el primer endotelial pueden promover la activación de la coa-
factor afectado debido a que su vida media es más corta gulación.
(4 a 6 h). Las manifestaciones hemorrágicas son en ge- Un grupo importante de enfermedades malignas
neral leves y el uso de plasma fresco congelado o con- puede provocar CID, probablemente por la expresión el
centrado de complejo protrombínico solo es necesario factor tisular en la superficie de las células tumorales.
para realizar una biopsia hepática o cualquier otro pro- En el caso de la leucemia aguda promielocítica, la libe-
ceder quirúrgico. ración de sustancias procoagulantes de los promielocitos
malignos son el elemento esencial en el desarrollo
Coagulación intravascular diseminada de la CID.
En los quemados graves, la CID es desencadena-
La coagulación intravascular diseminada (CID) es
da por varias vías, exposición al factor tisular,
un trastorno adquirido que se presenta como complica-
microhemólisis y procesos sépticos.
ción de un grupo variado de enfermedades y se caracte- En los pacientes con hemangioma gigante (síndro-
riza por la presencia de microtrombosis y hemorragia. me de Kasabach-Merritt) se produce una activación
La deposición intravascular de fibrina fundamentalmen- del mecanismo de la coagulación localmente con con-
te en la microcirculación, la disminución de los factores sumo de factores de la coagulación y plaquetas, even-
plasmáticos de la coagulación y las plaquetas y la acti- tualmente los factores de la coagulación activados en el
vación del sistema fibrinolítico como respuesta fisiológi- hemangioma alcanzan la circulación sistémica y desen-
ca, constituyen los elementos esenciales del síndrome. cadenan una CID.

Parte XIV. Hematología 1165


FISIOPATOLOGÍA los inhibidores fisiológicos de la coagulación están
En el proceso de activación de la coagulación se afectados en la CID, en particular la ATIII que se en-
producen una serie de factores activados, la generación cuentra muy disminuida por la activación de la coagula-
de trombina juega un papel central en la fisiopatología ción y trastornos de su síntesis.
de la CID (Fig 89.8). La formación de plasmina es tam-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
bién una consecuencia relevante del proceso de CID.
Durante la coagulación se produce una activación del Las manifestaciones clínicas de la CID son muy
sistema quinina que provoca un aumento de la permeabi- variables y, en ocasiones, están determinadas por la en-
fermedad de base. Se pueden presentar petequias y equi-
lidad vascular, hipotensión y shock. La acción de la
mosis, así como sangramientos después de actos
trombina generada sobre el fibrinógeno produce un in-
quirúrgicos y por los sitios de puntura. En algunos en-
cremento de los monómeros de fibrina y de los
fermos las manifestaciones de la enfermedad de base
fibrinopéptidos A y B. La plasmina ejerce una acción son opacadas por la presencia de sangramiento profuso,
proteolítica sobre los factores de la coagulación que con- isquemia con falla múltiple de órganos y shock.
tribuyen a la disminución de estos y activa al comple- Se han descrito 3 formas clínicas de la CID: la for-
mento con la subsecuente lisis celular; la lisis de los ma aguda que ocurre en los politraumatizados, la
eritrocitos libera ADP y fosfolípidos de la membrana y subaguda que caracteriza los procesos infecciosos y la
la lisis plaquetaria no solo causa una mayor forma crónica típica de los procesos malignos.
trombocitopenia, sino que ofrece más material
DIAGNÓSTICO
procoagulante plaquetario. Por otra parte, la plasmina
Los hallazgos de laboratorio en la CID son expre-
actúa sobre el fibrinógeno con formación de los produc-
sión de los cambios fisiopatológicos que ocurren en este
tos de degradación del fibrinógeno (PDF) que inhiben la
proceso, por lo que son variables y en ocasiones difíciles
polimerización de la fibrina y producen disfunción
de interpretar. Estos resultados deben correlacionarse
plaquetaria, lo que contribuye al sangramiento. La obs- con la enfermedad de base y las manifestaciones clíni-
trucción vascular por la fibrina depositada, elemento cas del paciente (Cuadro 89.25).
central del síndrome, provoca la isquemia hística que es Existe una disminución de la cifra de plaquetas y
la causa principal de muerte y de la anemia hemolítica de los factores de la coagulación que se expresa por una
microangiopática. Es necesario hacer hincapié en que prolongación del TP, TPTA y TT.

Fig. 89.8. Fisiopatología de la coagulación intravascular diseminada.

1166 Tomo III


Cuadro 89.25. Diagnóstico de laboratorio de la coa- Cuadro 89.26. Tratamiento de la coagulación
gulación intravascular diseminada. intravascular diseminada.

• Trombocitopenia. • Tratamiento de la enfermedad de base.


• Disminución de los factores de la coagulación. • Tratamiento de sostén.
• Aumento de los monómeros de fibrina. − Tratamiento del shock
• Aumento de PDF. − Tratamiento de la disfunción orgánica
• Aumento del dímero-D. • Tratamiento de reemplazo.
• Aumento del fibrinopéptido A. • Detención de la coagulación intravascular.
• Disminución de la antitrombina III. − Heparina
• Tratamiento de reemplazo.
• Plasma fresco congelado.
Aunque se ha afirmado que el fibrinógeno y el fac-
• Crioprecipitado.
tor VIII siempre se encuentran disminuidos en este tras- • Concentrado de AT LL.
torno, pueden estar dentro de límites normales, ya que
estas proteínas son reactantes de fase aguda y, por lo
resultados de laboratorio. La administración de concen-
tanto, se elevan en múltiples situaciones fisiológicas y
trado de ATIII ha sido utilizado con variable éxito.
patológicas. Por otra parte, en algunos casos puede
Los antifibrinolíticos están, en general, contraindicados
encontrarse disminución de todos los factores plasmáticos
en la CID.
de la coagulación. La disminución de la ATIII no solo
tiene importancia diagnóstica y evolutiva sino Bibliografía
implicaciones terapéuticas. En la lámina de sangre Componentes del mecanismo hemostático
periférica se observan las alteraciones características Almagro D. Fisiología plaquetaria. Act Hematol Inmunol 1980; 4: 2-9.
de una anemia hemolítica microangiopática. Brouwer J P, Veeger NJGM, Kluin- Nelemans HC, van der Meer
La determinación de los monómeros de fibrina, de J. The pathogenesis of venous thrombo embolism: evidence
for multiple interrelated causes. Ann Intern Med 2006;
los PDF y el dímero-D y la dosificación del fibrinopéptido 145:807-15.
A son, junto con el recuento plaquetario, los elementos De Fouw NJ, Haverkate F, Bertina RM. Protein C and
diagnósticos esenciales de este síndrome. fribrinolysis: a link between coagulation and fibrinolysis.
Adv. Exp Med Biol 1990;281:235-43.
TRATAMIENTO Díaz A, Almagro D. Estado actual del mecanismo de la coagulación
El elemento central del tratamiento de la CID es sanguínea. Rev Cubana Hematol Inmunol Hemoter 2001; 17:
77-89.
el tratamiento de la enfermedad de base acompañado González I, Almagro D. Glicoproteínas de la membrana
de medidas generales de sostén, que permitan mante- plaquetaria. Hematol Inmunol 1984;5:55-62.
ner al paciente en condiciones fisiológicas aceptables. Jaffe EA. The role of blood vessels in hemostasis In: William WJ,
Solo en los casos en que la causa de la CID no puede Beutler E, Erslev AJ et al (eds) Hematology 4th edition Ma
Graw- Hill New York, 1990, pp 1322-8.
ser eliminada lo antes posible mediante estas medidas Kaiserer-Friede A, Ware J, Leng L, Marchese P, Guggeri ZM Astil
terapéuticas, o en aquellos pacientes con tromboem- SJ. Lateral clustering of platelet GPIb-IX complexes leads to
bolismo o extensa deposición de fibrina, estará justifica- up-regulation of the adhesive function of integrin J Biol Chem
do el uso de heparina (Cuadro 89.26). 2002;297:11949-56.
Kozek-Langenreker SA. The effects of drugs used in anaesthesia in
La heparina se utiliza por vía i.v. en infusión conti- platelet membrana receptors ando n platelet function. Curr
nua, se comienza con una dosis de 150 hasta 180 U/kg Drug Targets 2002;3:247-58.
en 24 h (7,5 U/kg/h) y si no se obtiene respuesta se Mannucci PM. Laboratory detection of inherited thrombophilia: a
aumenta la dosis a 10 U/kg/h. Por lo general, no es ne- historical perspecthive. Semin thromb Hemost 2005;31:5-10
Reed GL Fitzgerald L, Polgar j. Molecular mechanism of platelet
cesario elevar ulteriormente la dosis. La heparina de bajo exoscitosi: insights into the “secrete” life of thrombocytes.
peso molecular por vía s.c. se puede también emplear Blood 2000;96:3334-42.
como una alternativa sobre todo en pacientes con for- Rubio R, Almagro D. Sistema fibrinolítico. Rev Cubana Hematol
mas subagudas y crónicas del síndrome. Inmunol Hemoter 1990;6:317-33.
La terapéutica sustitutiva con hemoderivados pue- Ruggeri ZM. New insights into yhe mechanisms of o\platelet
adhesión and aggregation. Semin Hematol 1994;31:229-237.
de incluirse dentro de las medidas de sostén y el uso de Sandset M, Abilgaard V. Extrinsic pathway inhibitor- the key of
plasma fresco congelado, plaquetas y crioprecipitado, feedback control of blood coagulation iniciated by
dependerá de las manifestaciones clínicas y de los thromboplastin. Haemostasis 1990;21:219-39.

Parte XIV. Hematología 1167


Solonvaara M, Kuismanen K, Mononen T, Riikonen P. Diagnosis Cheng Y, Wong RSM, Soo YOY et al. Inicial treatment of immune
and treatment of newborn with homocygons protein C thrombocytopenic purpura with high-dose Dexamethasone.
deficiency. Acta Paediar 2004;93:137-9. New Engl J Med 2003;349:831-36.
Van Tilburg NH, Rosendaal FR, Bertina RM. Thrombin Chiarini L, Bertoldi C, Narmi F. Management of patients with
activatable fibrinolysis inhibitor and the risk for deep vein coagulation disorders in oral and maxillofacial surgery I.
trombosis. Blood 2000;95:2855-9. Management of patients with hypocoagulation caused by
Wilman B. Plasminogen activator inhibitor1 (PAI-1) in plasma: its primary thrombocytopathy. Minerva stomatol 1997;46:61-71.
role in thrombotic disease. Thromb Haemost 1995;74:71-6. Deloughery TG. Thrombocytopenia in critical care patients . J
Intensive Care Med 2002;17:267-82.
George JN, Vesely SK. Immune thrombocytopenic purpura- Let
Púrpuras vasculares
the treatment fit the patient. New Engl J Med 2003;249:903-5.
Albright JA, Millar EA. Osteogenesis Imperfecta. Clin Orthop
Kumar R, Ghali A, Ekaldious AN, Mahmoud OI, Al-Lumci AS.
1981;159:2-10. Post-transfusion purpura: a case report. Ann Hematol
Ansell BM, Falcini F. Cutaneous vasculitis in children. Clin 2001;80:488-91.
Dermatol 1999;17:577-80. Maroto AA, Cabrera MH, Pérez-Arellano JL. HIV-related
Arrigoni M, Spolare R. Pseudoxantoma elasticum. A rare cause of thrombocytopenic purpura not relapsing during CD4 cell-
upper digestive hemorrhage. Minerva Chir 1992;47:1641-5. guided treatment interruptions. AIDS 2005;19:1111-2.
Davin JC, Weening JJ. Diagnosis of Henoch-Schonlein purpura: Repetto HA. Long-term course and mechanism of progressión of
renal or skin biopsy? Pediatr Nephrol 2004;19:702-3. renal disease in hemolytic uremic syndrome. Kidney Int
Fain O. Musculoskeletal manifestation of scurvy. Joint Bone 2005:97:102- 6.
Spine 2005;72:124-8. Schafer AI. Thrombocytosis and thrombocythemia. Blood Rev
Haitjema T,Wasterman CJ, Overtoom TT. Hereditary hemorrhagic 2001;15:159-66.
telangiectasia (Osler- Weber-Rendu disease):a new insight in Scharf RE. Congenital and acquired platelet function disorders.
pathogenesis, complications and treatment. Arch Intern Med Hamostaseologie 2003;23:170-80.
1996;156:714-20. Sukhovyi MV, Voznivk VP, Iushchenko N, Vdovtsov AA, Tomilin
Holder T, Joy MS, Falk RJ. Cutaneous and systemic VV. Clinical criteria in the diagnosis of mild and occult forms
manifestations of drug-induced vasculitis. Ann Pharmacother
of coagulopathy and thrombocytopathy. Klin Khir
2002;36:130-147.
2001;9:17-9.
Mao JR, Bristol J. The Ehlers-Danlos síndrome:on beyond
Williams JA,Boxer LA. Combination therapy for Refractory
collagens. J Clin Invest 2001;107:1063-9.
Idiopathic Thrombocytopenic Purpura in adolescents.
Noguera A, Fortuny C, Pons M. Pneumococcal- associated
purpura fulminans in a healthy infant. Pediatr Emerg care Hematol Oncol 2003;25:232-5.
2004;20:528-30. Wyrick-Glatzel J. Quantitative and Qualitative vascular and
Olgunturk R, Oguz D, Tunaoglu S, Ikizler C, Sezgin A, Kula S. platelet disorders, both congenital and acquired. In:
Pulmonary arteriovenous fistula in the newborn: a case report Harmening DM (Ed) Clinical Hematology and Fundamentals
of Rendu-Osler-Weber syndrome and a review of the of Hemostasis. Third Ed. FA Davis Company-Philadelphia,
literature. Turk J Pediatr 2001;43:332-7. 1997 pp.509-30.
Tizard EJ. Henoch-Schonlein purpura. Arch Dis Child Zeller B, Rajantie J, Hedlund-Treutiger et al. Childhood Idiopathic
1999;80:380-3. Thrombocytopenic Purpura in the Nordic Countries:
Triki C, Feki I, Meziou M, Torki H, Zahaf A, Mhiri C. Clinical epidemiology and predictors of chronic disease. Acta Paediatr
2005;94:178-84.
bilogical and genetic study of 24 patients with ataxia
telangiectasia from southern Tunisia. Rev Neurol
Trastorno de los factores plasmáticos de la coagulación
2000;156:634-7.
Almagro D, Corral JF, Cruz A. Parahemofilia (deficiencia congénito
de factor V ). Reporte de un caso. Rev Invest Clín (Mex)
Trastornos cuantitativos y cualitativos de las plaquetas
1974; 26:175-9.
Almagro D. Danazol in idiopathic thrombocytopenic purpura .
Acta Haemat 1985;7:120. Almagro D, Espinosa E, Cruz Y, Corral JF. Afibrinogenemia
Almagro D. Trombocitopatias congénitas. Rev Cubana Hematol congénita. Descripción de dos casos. Sangre 1979;24:187-94.
Inmunol Hemoter 1986;2:197-212. Almagro D. Algunos aspectos del tratamiento de la hemofilia. Rev
Almagro D, Martinez T, Roque MC. Respuesta terapéutica en la Cubana Ped 1984;56:109-15.
púrpura trombocitopenica idiopática. Rev Cubana Hematol Almagro D. Recientes avances en hemofilia. Rev Cubana Hematol
Inmunol Hemoter 1988;4:28-42. Inmunol Hemotr 1989;5:470-6.
Almagro D, Hernández P, López-Saura P, Apezteguia I. Interferon- Almagro D, Rubio R, González I, Díaz A. Vida natural de los
alfa recombinante en el tratamiento de la púrpura inhibidores del factor VIII en pacientes hemofílicos. Rev
trombocitopénica idiopática crónica. Rev Iberoamer Tromb Cubana Hematol Inmunol Hemoter 1990;6:355-63.
Hemost 1990;3:39-41. Antunes SV, Vicari P, Cavalhoiro S, Bordin JO. Intracraneal
Almagro D, Crespo O, Gonzalez X, Espinosa E. Dosis haemorrhage among a population of haemophilic patients in
intermedias de danazol en la púrpura trombocitopenica Brazil. Haemophilia 2003;9:573-77.
idiopatica crónica Rev Iberoamer Tromb Hemost 1996;9:19-21. Berntrop E, Ingerslev J, Schulman S. von Willebrand disease: an
Aster RH. Can drugs cause autoimmune thrombocytopenic update in the Aland Islands. Haemophilia 1999; 5(suppl 2):1-6.
purpura? Semin Hematol 2000;37:229-38. Carvana CC, Schwartz L. Disorders of plasma clotting factors In:
Brolikova D, Belusa M, Bajer M, Buriakova M, Penka M. Harmering (Ed). Clinical Hematology and Fundamentals of
Thrombocytopenia and thrombocytopathy in neonates and Hemostasis. Third Edition FA Davis Company. Philadelphia
infants. Cesk Pediatr 1990;45:209-13. 1997; 531-53.
Caen J, Castaldi P, Ruan C. Thrombocytopenias and Dempfle CE. Sepsis-associated coagulation disorders.
thrombocytopathies. Rev Invest Clin 1994; suppl, 153-62. Hamostaseologie 2005;35:183-9.

1168 Tomo III


Green D. Complication associated with the treatment of
. Capítulo 82 .
Las transfusiones de sangre y sus componentes
haemophilias with inhibitors. Haemophilia 1999;5:11-7. no están libres de riesgos, a pesar de todas las pruebas
Ingerslev J, Gursel T. Diagnosis of von Willebrand disease.
Haemophilia 1999;5 (suppl 2):50-6. seroepidemiológicas que se realizan como pesquisa a
Kaufmann JE, Oksche A, Wollheim CB, Gunther G, Rosenthal la sangre después de donada, debido al conocido perío-
W,Vischer UM. Vasopressin-induced von Willebrand factor do de ventana que tienen los más importantes marca-
secretion from endothelial cells involves V2 receptors and
cAMP. J Clin Invest 2000;106:107-16. dores virales (VIH, VHC, VHB). Otros o efectos
Levy M, Ten Cate H. Disseminated intravascular coagulation. adversos de la transfusión son la aloinmunización, y las
New Engl J Med 1999;341:586-92. reacciones alérgicas, febriles y hemolíticas. Las trans-
Levy M. Disseminated intravascular coagulation: what's new? Crit
Care Clin 2005;21:449-67. fusiones deben ser administradas solo cuando se ob-
Makris M. Systematic review of the management of patients with tengan verdaderos beneficios como es corregir una
haemophilia A and inhibitors. Blood Coagul Fibrinol deficiencia o disfunción de un componente sanguíneo
2004;15:525-7.
Oranwiroon S, Akkarapatumwong V, Pung-Amrilt P et al. que causa un evidente y significativo problema clínico.
Determination of haemophilia A carriers status by mutation Cuando el tratamiento con componentes sanguí-
analysis. Haemophilia 2001;7:20-5. neos se administra por una indicación médica correc-
Procharec-Sobioszek M, Windyga J, Maryniak RK, Misiak A,
Szczepanik A. Angiodysplasia as a cause of recurrent ta, se obtiene un beneficio terapéutico. La transfusión
bleeding from the small bowel in patients with von- solo se realizará si los beneficios superan los riesgos
Willebrand disease. Report of 4 patients, Pol J Pathol potenciales.
2004;55:173-6.
Rodeghiero F, Castaman G. treatment of von Willebrand disease. Los comités transfusionales o de sangre de las insti-
Semin Hematol 2005;42:29-35. tuciones hospitalarias del país deben asegurar la exis-
Rodriguez-Merchan EC. Effects of haemophilia joints of children
tencia, consulta y cumplimiento de los procederes de
and adults. Clin Orthop 1996;328:7-13.
Sagarra M, González J, Cantero D, Nordet I, Almagro D. banco de sangre y servicios de transfusión que estipulan
Sinovectomía artroscópica en la artropatía hemofílica de la las normas y los procedimientos para la actividad de la
rodilla. Rev Iberoamer Tromb Hemost 1992;5:29-30.
medicina transfusional.
Sadler JE. A revised classification of von Willebrand disease.
Thomb Haemost 1994;71:520-25. Los principios del tratamiento transfusional en ni-
Slofstra SH, Van't veer C, Buurman WA, Reitsma PH, ten Cate H, ños y adolescentes son similares a los del adulto, pero
Spek CA. Low molecular weight heparin attenuates multiple los lactantes tienen necesidades especiales por lo tanto,
organ failure in a murine model of disseminated intravascular
coagulation. Crit Care Med 2005;33:1455-7. cada uno de estos grupos serán discutidos por separado.
Tradati F, Colombo M, Mannucci PM et al. A multicenter study
of hepatocellular carcinoma in Italian hemophiliacs with Transfusiones de eritrocitos
chronic hepatitis C. Blood 1998;91:1173-7. Si se tienen en cuenta los cambios fisiológicos que
Trasi S, Ghosh K, Shetty S, Mohanty D. von W Disease: a ocurren en el feto y durante el transcurso de la infancia,
laboratory approach. Natl Med J India 2005;18:78-84.
Young G, Aledort L. Therapy for haemophilia: recent advances and las transfusiones en el niño suelen dividirse en 2 perío-
goals for the future. Expert Opin Emerg Drugs 2005;10:173-84. dos: desde el nacimiento hasta los 4 meses y lactantes
mayores de 4 meses y niños.
En algunos casos de transfusión en neonatos, algu-
nas instituciones solicitan sangre total (o las mezclas
. Capítulo 90. equivalentes) para las siguientes situaciones terapeúticas:
• Exanguinotransfusión.
• Oxigenación extracorpórea de membrana y bypass
Terapia transfusional (desvío) cardiopulmonar.
Luz Marina Pérez Torres
• Reemplazo de más de un volumen de sangre dentro
de un período de 24 h.
INTRODUCCIÓN
La llamada sangre fresca total es una práctica
La medicina transfusional ha experimentado en
transfusional del pasado.
los últimos años un considerable progreso como resul-
tado de los aportes de la medicina y la tecnología ins- Los concentrados de eritrocitos (CE) se transfunden
trumental. Su objetivo principal es la obtención y para aumentar la capacidad transportadora de oxígeno
transfusión de componentes sanguíneos de manera se- de la sangre, y mantener una oxigenación satisfactoria
gura, eficaz y eficiente. de los tejidos.

Parte XIV. Hematología 1169


Green D. Complication associated with the treatment of
. Capítulo 82 .
Las transfusiones de sangre y sus componentes
haemophilias with inhibitors. Haemophilia 1999;5:11-7. no están libres de riesgos, a pesar de todas las pruebas
Ingerslev J, Gursel T. Diagnosis of von Willebrand disease.
Haemophilia 1999;5 (suppl 2):50-6. seroepidemiológicas que se realizan como pesquisa a
Kaufmann JE, Oksche A, Wollheim CB, Gunther G, Rosenthal la sangre después de donada, debido al conocido perío-
W,Vischer UM. Vasopressin-induced von Willebrand factor do de ventana que tienen los más importantes marca-
secretion from endothelial cells involves V2 receptors and
cAMP. J Clin Invest 2000;106:107-16. dores virales (VIH, VHC, VHB). Otros o efectos
Levy M, Ten Cate H. Disseminated intravascular coagulation. adversos de la transfusión son la aloinmunización, y las
New Engl J Med 1999;341:586-92. reacciones alérgicas, febriles y hemolíticas. Las trans-
Levy M. Disseminated intravascular coagulation: what's new? Crit
Care Clin 2005;21:449-67. fusiones deben ser administradas solo cuando se ob-
Makris M. Systematic review of the management of patients with tengan verdaderos beneficios como es corregir una
haemophilia A and inhibitors. Blood Coagul Fibrinol deficiencia o disfunción de un componente sanguíneo
2004;15:525-7.
Oranwiroon S, Akkarapatumwong V, Pung-Amrilt P et al. que causa un evidente y significativo problema clínico.
Determination of haemophilia A carriers status by mutation Cuando el tratamiento con componentes sanguí-
analysis. Haemophilia 2001;7:20-5. neos se administra por una indicación médica correc-
Procharec-Sobioszek M, Windyga J, Maryniak RK, Misiak A,
Szczepanik A. Angiodysplasia as a cause of recurrent ta, se obtiene un beneficio terapéutico. La transfusión
bleeding from the small bowel in patients with von- solo se realizará si los beneficios superan los riesgos
Willebrand disease. Report of 4 patients, Pol J Pathol potenciales.
2004;55:173-6.
Rodeghiero F, Castaman G. treatment of von Willebrand disease. Los comités transfusionales o de sangre de las insti-
Semin Hematol 2005;42:29-35. tuciones hospitalarias del país deben asegurar la exis-
Rodriguez-Merchan EC. Effects of haemophilia joints of children
tencia, consulta y cumplimiento de los procederes de
and adults. Clin Orthop 1996;328:7-13.
Sagarra M, González J, Cantero D, Nordet I, Almagro D. banco de sangre y servicios de transfusión que estipulan
Sinovectomía artroscópica en la artropatía hemofílica de la las normas y los procedimientos para la actividad de la
rodilla. Rev Iberoamer Tromb Hemost 1992;5:29-30.
medicina transfusional.
Sadler JE. A revised classification of von Willebrand disease.
Thomb Haemost 1994;71:520-25. Los principios del tratamiento transfusional en ni-
Slofstra SH, Van't veer C, Buurman WA, Reitsma PH, ten Cate H, ños y adolescentes son similares a los del adulto, pero
Spek CA. Low molecular weight heparin attenuates multiple los lactantes tienen necesidades especiales por lo tanto,
organ failure in a murine model of disseminated intravascular
coagulation. Crit Care Med 2005;33:1455-7. cada uno de estos grupos serán discutidos por separado.
Tradati F, Colombo M, Mannucci PM et al. A multicenter study
of hepatocellular carcinoma in Italian hemophiliacs with Transfusiones de eritrocitos
chronic hepatitis C. Blood 1998;91:1173-7. Si se tienen en cuenta los cambios fisiológicos que
Trasi S, Ghosh K, Shetty S, Mohanty D. von W Disease: a ocurren en el feto y durante el transcurso de la infancia,
laboratory approach. Natl Med J India 2005;18:78-84.
Young G, Aledort L. Therapy for haemophilia: recent advances and las transfusiones en el niño suelen dividirse en 2 perío-
goals for the future. Expert Opin Emerg Drugs 2005;10:173-84. dos: desde el nacimiento hasta los 4 meses y lactantes
mayores de 4 meses y niños.
En algunos casos de transfusión en neonatos, algu-
nas instituciones solicitan sangre total (o las mezclas
. Capítulo 90. equivalentes) para las siguientes situaciones terapeúticas:
• Exanguinotransfusión.
• Oxigenación extracorpórea de membrana y bypass
Terapia transfusional (desvío) cardiopulmonar.
Luz Marina Pérez Torres
• Reemplazo de más de un volumen de sangre dentro
de un período de 24 h.
INTRODUCCIÓN
La llamada sangre fresca total es una práctica
La medicina transfusional ha experimentado en
transfusional del pasado.
los últimos años un considerable progreso como resul-
tado de los aportes de la medicina y la tecnología ins- Los concentrados de eritrocitos (CE) se transfunden
trumental. Su objetivo principal es la obtención y para aumentar la capacidad transportadora de oxígeno
transfusión de componentes sanguíneos de manera se- de la sangre, y mantener una oxigenación satisfactoria
gura, eficaz y eficiente. de los tejidos.

Parte XIV. Hematología 1169


Las transfusiones en niños tienen lineamientos di- En general, los CE se administran para mantener
ferentes que se deben considerar, ya que los niveles de un valor de hemoglobina que se cree el más deseable
hemoglobina en niños sanos son menores que en adultos para cada estado clínico. Este enfoque clínico es im-
y además, porque estos por lo general no presentan las preciso, pero indicaciones fisiológicas como la masa
enfermedades características de los adultos. de glóbulos rojos, el oxígeno disponible, las mediciones
En niños mayores de 4 meses se deben considerar los de transporte de oxígeno y extracción en los tejidos
siguientes criterios para la transfusión de hematíes en CE: son demasiado engorrosas para la práctica clínica.
• Hemoglobina en el preoperatorio < 80 g/L cuando Debido a que los datos definidos están limitados, es
no existe una terapia alternativa. importante que los pediatras evalúen críticamente la
• Hemoglobina < 80 g/L en pacientes con signos y necesidad de transfusiones de CE a la luz de la fisiolo-
síntomas de anemia. gía involucrada.
• Pérdida de sangre > 25 % del volumen sanguíneo Durante las primeras semanas de vida, todos los
circulante y condición hemodinámica inestable. recién nacidos experimentan una disminución en la masa
• Hemoglobina < 130 g/L en niños con enfermedades de los eritrocitos circulantes causadas por factores fi-
agudas severas (enfermedad pulmonar severa que siológicos y en niños enfermos por pérdida de sangre
requiere ventilación asistida). Es una práctica común por extracciones para pruebas de laboratorio (fleboto-
mantener los niveles de hemoglobina lo más cerca- mía). En recién nacidos a término saludables, el valor de
nos posibles al rango normal como por ejemplo: hemoglobina raramente cae por debajo de 90 g/L a la
− Hemoglobina > 80 g/L en pacientes que están re- edad de 10 a 12 semanas. Esta disminución de la hemo-
cibiendo quimioterapia y/o radioterapia. globina no requiere transfusiones. En contraste, la dis-
− Hemoglobina > 80 g/L en pacientes con anemia minución aparece más temprano y es más pronunciada
crónica sin respuesta a tratamientos y medicamen- en niños prematuros, aun en aquellos sin complicaciones,
tos. La anemia por deficiencia de hierro se trata en quienes la concentración promedio de hemoglobina
con éxito con hierro oral aún con niveles de hemo- cae a aproximadamente 80 g/L en recién nacidos de
globina por debajo de 70 g/L. Otros factores dife- 1,0 a 1,5 kg de peso al nacer y a 70 g/L en aquellos que
rentes de la concentración de hemoglobina tienen pesan menos de 1,0 kg. Muchos niños con peso al nacer
que ser considerados en la decisión de transfundir. de menos de 1,0 kg necesitan CE.
El nivel óptimo de hemoglobina para recién naci-
Las transfusiones de CE para enfermedades tales dos que enfrentan una cirugía mayor no ha sido estable-
como la drepanocitosis y la talasemia se discuten en los
cido por estudios definidos, sin embargo, parece razonable
capítulos correspondientes.
mantener la hemoglobina por encima de los 100 g/L
En la actualidad, se utilizan terapias alternativas
(hematócrito >30) debido a la limitada capacidad del
tales como la eritropoyetina humana recombinante que
ha demostrado ser capaz de disminuir las transfusiones corazón, pulmones y vasculatura de estos niños para
de CE y mejorar la condición de los niños con insuficien- compensar la anemia, la inferior sobrecarga de oxígeno
cia renal crónica. Cuando existe anemia severa se debe debido a la disminuida interacción entre la hemoglobina
balancear su efecto adverso sobre el crecimiento y el fetal y el 2,3 difosfoglicérido (DPG) y la inmadurez de
desarrollo contra los efectos adversos de las transfusio- órganos vitales como el riñón e hígado.
nes a repetición. El CE de elección para niños y adolescentes es la
En niños menores de 4 meses deben ser conside- suspensión estándar de eritrocitos separados de la san-
rados los siguientes criterios para la transfusión de gre total por centrifugación y resuspensión en una solu-
hematíes, aunque no estén basados en estudios científi- ción anticoagulante/preservante a un valor de hematócrito
cos controlados: de alrededor del 60 %. La dosis usual es de 10 a 15 mL/kg,
• Hb < 130 g/L y enfermedad pulmonar severa, car- pero los volúmenes transfundidos varían mucho en de-
diopatía cianótica o falla cardíaca. pendencia de las circunstancias clínicas.
• Pérdida aguda de más del 10 % del volumen sanguí- La infusión debe ser lenta (2 ó 4 h). Los neona-
neo o síntomas y signos de anemia sin respuesta a la tólogos que insisten en transfundir CE frescos gene-
administración de fluidos. ralmente temen que el potasio plasmático aumente
• Hb < 80 g/L en un recién nacido con manifestacio- en las bolsas de CE durante un almacenamiento pro-
nes clínicas de anemia. longado.

1170 Tomo III


Criterios para las transfusiones de concentrado La literatura señala que alrededor del 25 % de los
de eritrocitos en el niño: recién nacidos tratados en unidades de cuidados intensi-
vos tienen un número de plaquetas de menos de
• Niños y adolescentes:
− Pérdida aguda > 25 % del volumen sanguíneo circulante. 150/109/L al ingreso. Múltiples mecanismos patogénicos
− Hemoglobina < 800 g/L en el período están involucrados en estos niños.
perioperatorio. Los valores de plaquetas de menos de 100/109/L
− Hemoglobina <1 300 g/L y enfermedad tienen riesgos clínicos significativos en los prematu-
cardiopulmonar severa. ros. No es necesario transfundir plaquetas cuando
− Hemoglobina < 80 g/L y anemia crónica la trombocitopenia es ligera (plaquetas <150 pero
sintomática. >100/109/L).
− Hemoglobina < 80 g/L e insuficiencia medular. El objetivo ideal de la mayoría de las transfusiones
• Lactantes en los primeros 4 meses de vida: de plaquetas es aumentar las plaquetas a más de
− Hemoglobina <130 g/L y enfermedad pulmonar 50/109/L y en recién nacidos a más de 100/109/L, esto
severa. puede obtenerse infundiendo 10 mL/kg de concentrado
− Hemoglobina <130 g/L y enfermedad cardíaca severa. de plaquetas estándar obtenidas de unidades de sangre
− Hemoglobina <100 g/L y cirugía mayor. total o por tromboféresis.
− Hemoglobina < 80 g/L y anemia sintomática. Para niños mayores, la dosis apropiada es un pool
de 4 a 6 unidades de plaquetas de sangre total o una
Transfusiones de plaquetas unidad de plaquetas por aféresis. Los concentrados de
Las indicaciones de transfusiones de plaquetas en plaquetas deben ser transfundidos tan rápidamente como
niños con alteraciones cualitativas y cuantitativas son las condiciones del paciente lo permitan y dentro de las 2 h.
similares a la de los adultos. Los enfermos que requieren repetidas transfusio-
El concentrado de plaquetas obtenido de una uni- nes deben recibir productos sanguíneos pobres en
dad de sangre total contiene de 0,55 a 0,75 / 109 plaquetas leucocitos, incluyendo los concentrados plaquetarios, para
en 40 a 60 mL de plasma y en condiciones óptimas debe disminuir la aloinmunización y la refractariedad a las
elevar las plaquetas de 5 000 a 10 000 en un paciente plaquetas y reducir el riesgo de infecciones por
de 70 kg de peso. La dosis de 1 unidad/kg de peso o citomegalovirus trasmitidas por la transfusión.
4 unidades/m2 de superficie corporal, aumenta la cifra Es importante disminuir las transfusiones repetidas
de plaquetas a 50/109 o más, con lo que se obtiene un de plaquetas del grupo O a receptores del grupo A o B
efecto terapéutico adecuado. Las siguientes dosis de- porque los anticuerpos antiA o antiB pasivos en el plas-
penden del estado del paciente y de la existencia de si- ma del grupo O pueden producir hemólisis.
tuaciones que disminuyan la sobrevida plaquetaria.
La velocidad de administración debe estar entre 2 y Criterios para la transfusión de plaquetas
4 h y las plaquetas deben ser almacenadas en agitación en pediatría
continua suave durante un período de hasta 5 días. Si • Niños y adolescentes:
permanecen a 4 ºC sin agitación, la viabilidad − Plaquetas (PLTs) < 50/109/L y sangramiento.
plaquetaria disminuye. − PLTs < 50/109/L y procedimiento invasivo.
Las transfusiones de plaquetas se deben adminis- − PLTs < 20/109/L y falla medular con factores
trar a pacientes con cifras de plaquetas de menos de de riesgo para hemorragias.
50/109/L cuando existe un sangramiento activo a previo − PLTs < 10/109/L y falla medular sin factores de
a un procedimiento invasivo. Los estudios de pacientes riesgo para hemorragias.
con trombocitopenia por una insuficiencia de la médula − PLTs con cualquier recuento, pero con disfunción
ósea indican que los sangramientos espontáneos se plaquetaria más sangramiento o procedimiento
incrementan marcadamente cuando los niveles de invasivo.
plaquetas caen por debajo de 20/109/L. • Lactantes en los primeros 4 meses de vida.
En pacientes con trastornos cualitativos de las − PLTs < 100/109/L y sangramiento.
plaquetas, las transfusiones de plaquetas se justifican − PLTs < 50/109/L y procedimiento invasivo.
solamente si ocurren sangramientos significativos o si − PLTs < 20/109/L clínicamente estables.
es necesario realizar un procedimiento invasivo. Tera- − PLTs < 100/109/L clínicamente inestables.
pias alternativas, en particular el acetato de − PLTs con cualquier recuento, pero con disfunción
desmopresina, pueden ser consideradas para evitar las plaquetaria más sangramiento o procedimiento
transfusiones de plaquetas. invasivo.

Parte XIV. Hematología 1171


Transfusiones de granulocitos mielopoyesis y los neutrófilos en recién nacidos. El G-
neutrófilos CSF es muy eficaz para el tratamiento de algunos tipos
de neutropenia congénita severa.
La transfusión de granulocitos (GTX) ha sido muy
Una vez que la decisión de utilizar GTX se ha to-
poco utilizada, sin embargo, la disponibilidad actual para
mado, se debe transfundir una dosis adecuada de célu-
colectar altos números de neutrófilos de donantes esti-
las frescas por leucoféresis. Los recién nacidos y
mulados con el factor estimulante de colonias
lactantes con peso menor de 10 kg deben recibir < de 1-
granulocíticos recombinante (G-CSF) ha creado un re-
2/109 neutrófilos/kg. Los lactantes mayores y los niños
novado interés, en particular para trasplante de progeni-
deben recibir una dosis total de por lo menos 1/1010
tores hematopoyéticos de sangre periférica o médula
neutrófilos por cada GTX, la dosis para el adolescente
ósea. El uso de GTX en sepsis bacteriana que no res-
es 5 a 8/1010 por GTX, una dosis que requiere que los
ponde a antibióticos en pacientes con neutropenia seve-
donantes sean estimulados con G-CSF. Los GTX deben
ra (<0,5/10 9 /L) es apoyado por muchos estudios ser dadas todos los días hasta que la infección mejore o
controlados. los neutrófilos en sangre excedan 1/109/L durantes va-
Niños con defectos cualitativos de los neutrófilos rios días.
(disfunción de neutrófilos) usualmente tienen un adecuado
número de neutrófilos, pero son susceptibles a serias Criterios para las transfusiones de granulocitos
infecciones porque sus células destruyen de forma en pediatría
ineficiente a los microorganismos patógenos. Los • Niños y adolescentes:
síndromes de disfunción de neutrófilos son raros y − Neutrófilos < 0,5/109/L e infección bacteriana sin
ningún estudio definido ha establecido la eficacia de los respuesta al tratamiento antimicrobiano.
GTX, sin embargo, algunos pacientes con infecciones − Defecto cualitativo de neutrófilos e infección (bac-
progresivas con riesgo para la vida han mejorado nota- teria o hongos) sin respuesta a una apropiada te-
blemente con la GTX más la terapia antimicrobiana. Estas rapia antimicrobiana.
alteraciones son crónicas y por el riesgo de inducir
aloinmunización, la GTX es recomendada solamente Recién nacidos en los primeros 4 meses de vida.
Neutrófilos < 3/109/L en la primera semana de vida
cuando las infecciones no responden rápidamente al tra-
ó < 1/109/L después e infección bacteriana fulmi-
tamiento con antibióticos.
nante. No administrar anfotericin B con la GTX.
Los recién nacidos son susceptibles a padecer in-
fecciones bacterianas severas y un número de defectos Transfusiones de plasma fresco
de las defensas corporales neonatales pueden ser facto- congelado
res contribuyentes. Estas anormalidades se acentúan en Los criterios para las transfusiones de plasma fresco
prematuros enfermos y es lógico considerar entonces la congelado (PFC) en niños, son similares a las de los
utilización de GTX. Los recién nacidos que presentan adultos. El PFC se transfunde para reemplazar deficien-
sepsis fulminante, con una neutropenia relativa cias clínicamente significativas de proteínas plasmáticas
(< 3/10 9 /L durante la primera semana de vida; para las cuales no existen concentrados altamente puri-
< 1,0/109/L después), y una disminución severa del pool ficados. Los requerimientos para el uso de PFC varían
de almacenamiento medular de neutrófilos (10 % de cé- con el factor específico que se debe reemplazar, pero
lulas medulares nucleadas) tienen un riesgo grande de una dosis inicial de 15 mL/kg es generalmente satisfac-
morir si solo se tratan con antibióticos. A pesar de que toria. Las transfusiones de PFC son eficaces para el
algunos estudios han demostrado un beneficio significa- tratamiento de deficiencias de los factores de la coagu-
tivo de las GTX, estas no se usan habitualmente. La lación II, V, IX, X y XI. Las deficiencias de factor XIII
literatura señala en la actualidad la utilización de tera- y de fibrinógeno son tratadas con crioprecipitado. Las
pias alternativas incluyendo inmunoglobulina intravenosa transfusiones de PFC ya no se recomiendan para el tra-
y G-CSF o GM-CSF. Los resultados de los estudios que tamiento de pacientes con hemofilia A o B y deficien-
evalúan la utilidad de la inmunoglobulina intravenosa son cias de factor VII porque están disponibles concentrados
variables. Los datos actuales son insuficientes para de- más seguros de factor VIII, IX y VII. En Cuba la hemo-
terminar si los factores de los G-CSF o G-M-CSF tie- filia A ligera o moderada y ciertos tipos de enfermedad
nen un papel significativo en el tratamiento de estos niños de von Willebrand se tratan con crioprecipitado, aunque
a pesar de que ambos, han demostrado aumentar la en algunas situaciones pueden ser necesario utilizar los

1172 Tomo III


concentrados. Para el tratamiento de la hemofilia B se Cuando se tratan lactantes con hemorragias, el
utiliza generalmente PFC aunque en algunas situaciones crioprecipitado debe ser considerado por su pequeño
también pueden estar disponible los concentrados. Un volumen de infusión. Sin embargo, el crioprecipitado
importante uso del PFC, aunque raro en niños, es para la contiene solamente fibrinógeno y factores VIII y XIII,
reversión rápida de los efectos de la warfarina en pa- por lo que no es efectivo para el tratamiento de las situa-
cientes que están sangrando activamente o que requie- ciones clínicas usuales en lactantes por deficiencias
ren cirugía de emergencia (en quienes las deficiencias múltiples de factores de la coagulación, a pesar de la
funcionales de factores II, VII, IX y X no pueden ser conveniencia de su pequeño volumen de infusión. En
rápidamente revertidas por la vitamina K). Las transfu- estudios preliminares, la infusión de muy pequeños volú-
menes de factor VII activado recombinante ha salvado
siones de PFC en pacientes con enfermedad hepática
vidas en pacientes con hemorragias debido a diferentes
crónica y tiempo de coagulación prolongado no se reco-
mecanismos.
miendan, a menos que el sangramiento esté presente o
sea necesario un procedimiento invasivo. Criterios para las transfusiones de plasma
A pesar de que su principal beneficio es en el trata- fresco congelado en pediatría
miento de sangramientos asociados con deficiencias de fac-
• Deficiencia severa de factores de la coagulación y
tores de la coagulación, el PFC también contiene algunas
sangramiento.
proteínas anticoagulantes (antitrombina III, proteína C y S)
• Deficiencia severa de factores de la coagulación y
cuyas deficiencias se han asociado con trombosis. En de- procedimiento invasivo.
terminadas situaciones el PFC puede ser apropiado como
• Revertir los efectos de la warfarina de forma emer-
tratamiento sustitutivo (con tratamiento anticoagulante) en
gente.
pacientes con predisposición a las trombosis. Sin embargo,
• Coagulopatía por dilución y sangramiento.
cuando están disponibles, es preferible utilizarlos en con-
• Reemplazo de proteínas anticoagulantes
centrados purificados. Otras indicaciones del PFC son para
(antitrombina-III, proteína C y S).
la plasmaféresis en pacientes con púrpura trombo-
• Fluido de reemplazo para intercambio plasmático en
citopénica trombótica u otras alteraciones como en las
la púrpura trombocitopénica trombótica.
hemorragias o coagulopatías severas. El PFC no está in-
dicado para corregir la hipovolemia o como terapia de Selección de la sangre
reemplazo de inmunoglobulinas debido a que existen al-
para transfusiones en pediatría
ternativas más seguras (soluciones de albúmina e
Todos los componentes sanguíneos para la trans-
inmunoglobulinas intravenosas respectivamente). fusión en pediatría tienen que ser isogrupo con relación
En recién nacidos, las transfusiones de PFC mere- al receptor y solo excepcionalmente (cuando existe riesgo
cen consideraciones especiales. Las indicaciones de PFC para la vida del paciente) se utilizará sangre compatible.
son las siguientes: Para los antígenos del sistema Rh también debe existir
• Reconstitución de CE para simular sangre total y ser compatibilidad.
utilizada en transfusiones masivas (transfusiones de
intercambio o cirugía cardiovascular). Enfermedad hemolítica del feto
• Hemorragia secundaria a deficiencia de vitamina K. y el recién nacido
• Coagulación intravascular diseminada con san- La enfermedad hemolítica del feto y del recién
gramiento. nacido es una afección inmunológica aloinmune en la
• Sangramientos en deficiencias congénitas de facto- cual la sobrevida del hematíe EHRN está acortada, de-
res de la coagulación cuando un tratamiento más es- bido a la acción de anticuerpos maternos que pasan a
pecífico no está disponible o es inapropiado. través de la placenta y que son específicos contra
antígenos de origen paterno presentes en los hematíes
El uso de transfusiones profilácticas de PFC para del feto y del recién nacido.
prevenir la hemorragia intraventricular en prematuros
no se recomienda. El uso de PFC en transfusiones de Exanguinotransfusión
intercambio parcial para el tratamiento del síndrome de Este proceder fue introducido por Wallerstein en
hiperviscosidad neonatal es innecesario porque se dispone 1945. Se emplea en el tratamiento de la EHRN severa,
de soluciones coloidales más seguras. pues corrige la anemia, elimina los hematíes unidos a las

Parte XIV. Hematología 1173


inmunoglobulinas así como las inmunoglobulinas libres y como exógenas, por contaminación en el proce-
disminuye la bilirrubina liberadas por la hemólisis samiento.
eritrocitaria. Si se cumplen las buenas prácticas en todo el pro-
Las indicaciones son las siguientes: ceso, este riesgo es ínfimo.
• Bilirrubina sanguínea no conjugada entre 6 y 9 mg/L A continuación se muestran los microorganismos
en los recién nacidos pretérmino. más importantes que pueden transmitir infecciones en
• Bilirrubina sanguínea no conjugada en 18 mg/dL en las transfusiones de sangre:
los recién nacidos a término. • Virus
• Incremento rápido de la bilirrubina sanguínea no con- − Plasmáticos. − Celulares.
jugada, excediendo los 8,6 μmol/L/h. − Hepatitis C. − Citomegalovirus.
− Hepatitis B. − Epstein-Barr.
El mayor problema de la exanguinotransfusión en − Hepatitis A. − HTLV I / II.
la EHRN es la selección de la sangre adecuada. Como − Otras: D, E, GC, Delta.
la madre y el niño pueden pertenecer a grupos ABO − VIH 1 y 2 (SIDA).
distintos, normalmente se utilizan hematíes del grupo O. − HHV-8 (sarcoma de Kaposi).
Si el anticuerpo problema es antiD, los hematíes tienen − HHV-6.
que ser Rh negativos. Si la madre y el niño tienen el − TTV.
mismo grupo ABO, pueden utilizarse hematíes isogrupo − Parvovirus B 19.
y si el anticuerpo problema no es antiD los hematíes − Virus del Oeste del Nilo.
administrados deben ser carentes del antígeno problema. • Parásitos:
Para los recién nacidos, por lo general se reco- − Plasmodios (falciparum, vivax, ovale o malarias)
mienda una exaguinotransfusión equivalente a dos ve- − Tripanosoma cruzi (Chagas).
ces su volumen sanguíneo. − Babesiosis.
Para realizar este proceder, los concentrados de − Borrelia bugdorferi (enfermedad de Lyme).
eritrocitos pueden combinarse con PFC, compatible con − Leishmania (Wuchereria bancroft).
los hematíes del neonato y de los glóbulos rojos que se − Toxoplasma gondii.
van a transfundir; o administrar sangre total (de menos • Bacterias:
de 4 días) exenta de capa leucoplaquetaria, libre de − Estafilococos.
citomegalovirus e irradiada (2 500 rads), para evitar el − B. difteroides.
riesgo potencial de enfermedad de injerto contra hués- − Micrococos.
ped y carente de Hb S. − Pseudomonas.
El cálculo del volumen de los componentes sanguí- − Acromobacterias.
neos que se va a emplear en una exanguinotransfusión − Coniformes.
de doble volumen se realiza de la forma siguiente: − Salmonella.
• Volumen sanguíneo total del recién nacido VST − Yersinia enterocolítica.
= 85 mL/kg. − Serratia M.
• Volumen de la exanguinotransfusión VET = 2 (VST). − Treponema pallidum.
• Volumen de glóbulos a infundir VG = VET 0,7(VET)
(donde 0,7 es el hematócrito aproximado de los En la actualidad, el riesgo de enfermedades infec-
hematíes que se va a infundir). ciosas es muy bajo con la metodología de amplificación
• Volumen de plasma fresco congelado a infundir de los ácidos nucleicos y otras pruebas de pesquisaje
(VPFC), VPFC = VET- VG. realizadas internacionalmente. El riesgo de transmitir el
VIH asociado con la transfusión es de 1/1 millón de
Riesgo de las transfusiones sanguíneas donantes expuestos con estimados que promedian de
A pesar de que los riesgos de las transfusiones de 1/800 000 a 500 000 donantes expuestos. De forma si-
sangre alogénicas son muy bajos, las transfusiones de- milar, el riesgo de hepatitis C viral es 1/1 millón de do-
ben ser administradas solo cuando el beneficio que se nantes expuestos. Los citomegalovirus asociados con la
espera obtener excede a los riesgos. transfusión pueden ser casi eliminados transfundiendo
Infecciones transmitidas por la sangre. Una productos sanguíneos celulares reducidos en leucocitos
de las complicaciones poco frecuentes, que tiene la o seleccionando sangre de donantes seronegativos para
transfusión de sangre, es la posibilidad de transmisión anticuerpos a citomegalovirus. Los riesgos de infeccio-
de infecciones, tanto endógenas, ya sea por el donante, nes adicionales incluyen otros tipos de hepatitis y

1174 Tomo III


retrovirus, parvovirus B19, virus de Epstein-Barr y las Acciones para la reducción de los riesgos
enfermedades de Chagas y Creutzfeldt-Jacob. de transmisión de infecciones por la sangre
Los riesgos asociados a la transfusión de naturale- y componentes
za no infecciosa que pueden ocurrir son: sobrecarga de
• Selección adecuada de los donantes de sangre.
líquido, enfermedad injerto contra huésped, disbalance
• Pesquisaje cuidadoso de la sangre.
electrolítico y ácido-base, sobrecarga de hierro, aumen-
• Disponibilidad de donantes voluntarios y habituales.
to de la susceptibilidad al daño oxidativo, exposición a
• Indicación científica y racional de la transfusión.
plasticidas, hemólisis cuando ocurre activación del
• Cumplimiento riguroso de las buenas prácticas clíni-
antígeno T de los hematíes, inmunosupresión y
cas y de laboratorio.
aloinmunización. La aloinmunización a hematíes y
antígenos leucocitarios parece ser muy poco común en Frecuencia de grupos sanguíneos en donantes de sangre en Cuba
niños.
En niños prematuros existe una disfunción Sistema ABO. (n=2107)
inmunológica, pero el riesgo de que adquieran la enfer- Grupo Frecuencia
Sanguíneo %
medad injerto contra huésped postransfusional se discu-
te. La edad, el número de linfocitos inmunocompetentes O 49,03
en la transfusión, el grado de compatibilidad HLA entre A 36,68
donante y receptor y otros fenómenos que no se cono- B 11,20
AB 3,09
cen bien, determinan qué pacientes tienen más riesgo.
Muchos centros que tratan a niños pretérmino, Sistema Rh Hr. (n=1607)
transfunden exclusivamente productos celulares irradia- Grupo Frecuencia
Sanguíneo %
dos. Los productos sanguíneos celulares utilizados en
transfusiones intrauterinas deben ser irradiados ya que son Positivos 86,5
transfusiones para pacientes con severos desórdenes de Negativos 13,5
inmunodeficiencia congénita y receptores de trasplan-
tes de células progenitoras hematopoyéticas.
La práctica actual utiliza irradiación gamma de una
fuente de aceleración linear de cesio, o cobalto a una
Bibliografia
dosis promedio de 2 500 a 5 000 cGy, con unc una dosis Behrman RE, Kliegman R M, Jenson HB. Nelson- Tratado de
pediatría 17 ed Elsevier Madrid 2004
mínima de 2,500. Todos los componentes sanguíneos Ballester JM ABC de la medicine transfusional guias clínicas
celulares deben ser irradiados pero los productos MINSAP La Habana 2006
congelados acelulares tales como el plasma y el American association blood banks. Manual técnico. 12º edición.
1997.
crioprecipitado no lo requieren. Borbolla L, Contreros E, Pujol MM. Manual práctico de medicina
La reducción de leucocitos no puede ser sustituida transfusional, 2002.
por la irradiación gamma para prevenir la enfermedad Ballester J M y col. Procederes para bancos de sangre y servicios
de transfusión. Cuba 2004.
injerto contra huésped.

Parte XIV. Hematología 1175


Reumatología
Ha sido conocido bajo otros nombres síndrome de
Whisler-Fanconi, enfermedad de Still-Chaufard y otros,
. Capítulo 91 . actualmente en desuso.
En 1977 en la reunión de la EULAR las opiniones
en cuanto al nombre de la enfermedad, se dividieron y
Enfermedades reumáticas los europeos prefieren llamarla Artritis Crónica Juvenil,
Gloria Varela Puente †, Cecilia Coto Hermosilla,Victor pero en América seguía llamándose Artritis Reumatoidea
Hernández González y Melba Méndez Méndez Juvenil. En 1994, un grupo de reumatólogos pediátricos
de todo el mundo se reunieron en Santiago de Chile bajo
la supervisión de la OMS y la Liga Internacional Contra
Artritis idiopática juvenil el Reumatismo (ILAR). La reunión presidida por el doc-
La artritis idiopática juvenil se caracteriza por la tor Chester Fin elaboró un sistema de clasificación de
inflamación crónica de la sinovial articular de causa des- las artritis en la infancia para tratar de englobar las cla-
conocida. Es la más frecuente de las enfermedades ar- sificaciones. Dicho grupo se reunió nuevamente en 1997
ticulares crónicas encontradas en el niño y su expresión en Durban modificando algunos criterios (Cuadro 91.1).
clínica es variable; a veces las manifestaciones son es- Actualmente, a partir de 2002 se están usando nuevos
casas, con toma articular discreta, pero en ocasiones criterios de clasificación que consideran 7 categorías
puede acompañarse de síntomas extrarticulares impor- diagnósticas (Cuadro 91.2) que son las que utilizaremos
tantes que ensombrecen el pronóstico. Durante su evo- en esta parte de esta obra. Tenemos que tener en cuen-
lución se pueden ir instalando limitaciones y deformidades ta que se trata de criterios de clasificación, que se han
del aparato locomotor que pueden ser definitivas o agra- creado para tratar de agrupar a pacientes de un modo
varse los síntomas extrarticulares y complicaciones. homogéneo. Es posible que más adelante se vaya modi-
Se ha cuestionado, si se trata de una sola enferme- ficando dicha clasificación para reducir el número de
dad, con formas variables de presentación y evolución, niños que se incluyen en la categoría de "otras artritis".
o son varias enfermedades de causa diferente.
Apuntes históricos. La primera descripción de CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN

la ocurrencia de problemas reumáticos en el niño se debe Los términos de artritis crónica juvenil y artritis
a Conil en 1884; posteriormente en 1980, Diamont- reumatoide juvenil han sido reemplazados por artritis
Berger describió 35 casos de niños con problemas reu- idiopática juvenil (AIJ) según los acuerdos de la ILAR
máticos. De gran importancia fue el trabajo de Jorge 2002. El término de AIJ se aplica a la inflamación cró-
Frederic Still, en 1987 donde describía 22 pacientes, nica de la sinovial articular, por más de 6 semanas, de
que además de las alteraciones articulares, presentaban causa desconocida, con manifestaciones extrarticulares
grandes alteraciones extrarticulares como fiebre, exan- o sin ellas, que comienza antes de los 16 años. Se divide
tema, poliserositis, adenopatías y otras alteraciones, se en 7 tipos relacionados con la forma de comienzo en los
le dió el nombre de enfermedad de Still. Posteriormente primeros 6 meses que son: forma sistémica cuando pre-
Bywater describió este mismo cuadro en adultos por lo dominan los síntomas extraarticulares, forma poliarticular
que se llamó enfermedad de Still del adulto. seronegativa cuando hay toma de más de 5 articulaciones
y el factor reumatoideo es negativo, forma poliarticular EPIDEMIOLOGÍA
seropositiva con afectación de más de 5 articulaciones y La incidencia es variable en diferentes países don-
con factor reumatoideo positivo, forma oligoarticular per- de se ha estudiado, EEUU, Francia, Inglaterra y otros,
sistente si se afectan 4 o menos articulaciones, forma pero se puede estimar que es de 10 por 100 000 niños
oligoarticular extendida cuando hay compromiso de 4 por año. La prevalencia se calcula en alrededor de 100
articulaciones o menos al inicio de la enfermedad pero pacientes por 100 000 niños. En general es más fre-
se extiende posteriormente a toma de más articulacio- cuente en niñas con una relación de 7:1. Puede presen-
nes, artritis psoriásica cuando existen manifestaciones tarse a cualquier edad, pero hay 2 picos de mayor
de psoriasis en el niño o artritis y antecedentes familia- frecuencia: a los 2 años y después de los 9 años.
res de psoriasis; artritis relacionada con entesitis en pre-
sencia de inflamación articular con toma de las entesis PATOGENIA
(síndrome SEA), otras artritis, las inflamaciones articu- En la patogenia se deben considerar factores am-
lares que no se puedan clasificar en los otros grupos. bientales, genéticos y los inmunopatógenos.
Se han producido numerosas controversias entre Factores ambientales: Se han investigado varios
los reumatólogos pediátricos, en relación con la denomi- microorganismos como el virus de la rubéola, en los que
nación y clasificaciones para llegar a un acuerdo unáni- se observó la presentación de una enfermedad parecida
me que sería muy importante para los trabajos o a la AIJ en niños que habían sido vacunados previa-
investigaciones cooperadas. mente con este virus. La clamidia ha sido aislada en
Es de gran interés conocer las proposiciones utili- algunos pacientes con un cuadro parecido a la AIJ.
zadas hasta hace poco y la actual. Se ha descrito poliartritis después de la infección
por parvovirus 19. También las infecciones por
Cuadro 91.1. Artritis idiópaticas
micoplasmas han sido relacionadas con la enfermedad;
Santiago de Chile Durban, África del sur sin llegar a conclusiones que puedan afirmar la relación
1994 1997 de estos microorganismos como causa de la enferme-
dad. Se ha observado la producción de artritis idiopática
Sistémica Sistémica después de un traumatismo.
Definitiva Factores genéticos: En la práctica es poco fre-
Probable cuente encontrar pacientes con familiares que padecen
Oligoartritis Oligoartritis la enfermedad. No obstante algunos autores como
Persistente Bywater y Ansell han investigado concordancia en ge-
Oligoartritis extendida Extendida melos y describen casos familiares.
Poliatritis FR positivo Poliatritis FR positivo En la medida que se analizan las enfermedades
Poliatrtitis FR negativo Poliartritis FR negativo autoinmunes como la AIJ, se han ido descubriendo rela-
Artritis psoriásica Artritis psoriásica ciones con los diferentes tipos del Complejo Mayor de
Artritis entesitis Artritis entesitis Histocompatibilidad (CMH). En los pacientes poliar-
ticulares de AIJ con factor reumatoideo positivo existe
Otras artritis. asociación con HLA-DR4 (DRB1* 0401/0404/0405)
como sucede en el adulto con factor reumatoideo
En estos momentos se están usando nuevos crite- positivo (FR+).
rios de clasificación que consideran 7 categorías En las niñas menores de 6 años se ha observado
diagnósticas (ILAR 2002): asociación con los HLA-DR5 (DRB1*11) DR8
(DRB1*0801), DR6 (DRB1*1301) y DPB*0201. Esta
Cuadro 91.2. Artritis idiopática juvenil
forma con cierta frecuencia es anticuerpos antinucleares
• Forma sistémica. (ANA) positivos y se puede asociar con la iridociclitis
• Forma poliarticular seronegativa. crónica y anticuerpos antiDEK.
• Forma poliarticular seropositiva. Factores inmunológicos: En el sinovium se en-
• Forma oligoarticular: cuentran las células T, macrófagos y fibroblastos, ade-
− Persistente más de las células B y las presentadoras de antígenos.
− Extendida En las enfermedades autoinmunes, se ha eviden-
• Artritis psoriásica. ciado que las células T CD4+ juegan un papel impor-
• Artritis relacionada con entesitis (SEA). tante, principalmente las Th1 que producen factor de
• Otras artritis. necrosis tumoral α (TNFα), interleuquina 1 (IL1) e

1178 Tomo III


interferón gamma (INFγ) que son citocinas Se ha comprobado que cuando se neutralizaba el TNFα
proinflamatorias; los factores que determinan la diferen- se inhibía la producción de IL-1 y otras moléculas, como
ciación en células Th1 o su contrapartida Th2 son la colagenasa, que es estimulada y aumenta las molécu-
multifactoriales y en esta enfermedad hay una desvia- las de adhesión en el endotelio vascular que tiene capa-
ción de la respuesta inmune hacia el predominio de las Th1. cidad para aumentar la actividad quimiotáctica para los
Las células T CD4 son el principal componente del linfocitos T. La IL-15 es secretada por macrófagos y
infiltrado sinovial. En un mismo individuo el tipo de célu- fibroblastos y aumenta el reclutamiento y activación de
las T es restringido y se pueden encontrar clones idénti- las células T. Las citoquinas antagonistas podrían inhibir
cos en diferentes articulaciones y en diferentes tiempos el proceso y ello constituye la base de propuestas tera-
de la enfermedad. En sangre periférica, en pacientes péuticas.
diferentes, se han descrito estructuras compartidas en Se hace evidente que diferentes acciones mole-
la cadena ß del receptor de la célula T (TCR); parecen culares y celulares desencadenan en el sinovium una
existir clones de células con una predisposición a algu- cascada de eventos fisiopatológicos que llevan a un daño
nos productos microbianos o autoantígenos encontrán- característico y progresivo.
dose en la selección de esta respuesta con ciertos alelos El estudio de todos los elementos celulares, de las
de HLA-D4 (DRB1*0401, DRB*0404) o HLA-DR1* citocinas y enzimas, pueden conducir al descubrimiento
(DRB1*0101). Estos resultados podían hacer pensar que de factores capaces de inhibir los mecanismos produc-
las células T tienen la mayor importancia en el control y tores de la enfermedad.
el progreso de la enfermedad. Sin embargo las terapias
ANATOMÍA PATOLÓGICA
experimentales anticélulas T no han aportado la mejoría
esperada. Las lesiones iniciales parecen corresponder a la
Además de las citoquinas proinflamatorias se en- activación o lesión de las células microvasculares del
cuentran también citocinas antiinflamatorias: Th2, IL-4, endotelio de la sinovial, lo que sugiere que el factor
IL-6 incluyendo IL-10 que no han podido regular el pro- desencadenante o agente causal es llevado a la sinovial
ceso inflamatorio, por lo que se interpreta la AIJ como por la corriente sanguínea; la luz de estos vasos sanguí-
un desequilibrio entre las citoquinas. neos aparecen ocluidas por plaquetas, leucocitos y
En la reacción inflamatoria de la sinovial, intervie- trombos de fibrina y hay exudación de plasma y edema
nen otras citoquinas que resultan de la interacción entre en el tejido subsinovial y efusión en la cavidad articular.
el endotelio de la membrana sinovial y los leucocitos y Las células de la capa superficial son activadas y au-
linfocitos; en el endotelio, hay grandes cantidades de mentan el número y grosor; alrededor de los vasos se
selectinas P y E, ICAM-1 y VCAM-1 que pueden ser aumentan células mononucleares entre la capa superfi-
bloqueadas por anticuerpos monoclonales y por drogas cial y el tejido sinovial más profundo. Según progresa la
antiinflamatorias. enfermedad a los estadios crónicos, la sinovial se
También se encuentran enzimas: metoloproteinasas edematiza y se hipertrofia masivamente. Las capas su-
(colagenasas, gelatinasas), serineproteasas y catepsinas perficiales que normalmente son de 1 a 3 células pueden
que intervienen en la destrucción oseacartilaginosa. aumentar a 5 ó 10 células. Hay infiltración de células
Las citoquinas IL-1 y TNFα constituyen las de parecidas a macrófagos, fibroblastos y sinoviocitos. Por
mayor actividad en el proceso inflamatorio principalmente debajo de estas capas se infiltran células mononucleares
el TNFα y se ha comprobado que cuando es neutraliza- formando nódulos alrededor de los vasos sanguíneos.
do, se inhibe la producción de IL-1 y otras moléculas En la periferia de los nódulos se observan
inflamatorias, por lo cual constituye uno de los blancos macrófagos, células T CD4 + predominantemente, cé-
terapéuticos más prometedores. lulas plasmáticas y células B.
Recientemente se ha investigado la IL-15 en la in-
Este proceso inflamatorio se acompaña de prolife-
flamación sinovial y se ha encontrado que es una molé-
ración y activación del tejido conectivo que invaden y
cula proinflamatoria de gran potencia por ser
destruyen el cartílago y el hueso subcondral en las már-
quimiotáctica sobre los linfocitos T; es secretada por
genes de las articulaciones. Este tejido granulomatoso e
macrófagos y/o fibroblastos y su presencia aumenta el
número y actividad de las células T en la membrana invasivo es lo que se designa como pannus que no es
sinovial, aumentando la producción del TNFα que des- más que la representación histológica del proceso
encadena las vías proinflamatorias. inmunológico. El cartílago y el hueso periarticulares van
Las citoquinas, entre las que se encuentran el TNFα destruyendo la cápsula articular que puede llevar a la
y la IL-1, son reguladoras de la inflamación sinovial deformidad y limitación funcional.

Parte XV. Reumatología 1179


MANIFESTACIONES CLÍNICAS de artritis idiopática seropositiva, esplenomegalia y
Forma de comienzo sistémico: Para su definición, neutropenia).
además de manifestaciones sistémicas, se requiere que Las serositis se presentan en 1/3 de los casos: las
la artritis se acompañe, precediéndola o no de fiebre de pleuritis son generalmente subclínicas; se han observa-
al menos 2 semanas de duración. Esta forma se carac- do miocarditis, que pueden llevar a la insuficiencia car-
teriza por la importancia de los síntomas extrarticulares. díaca lo que es muy raro. La toma peritoneal puede
Representa el 10 ó 20 % de los niños, se inicia a cual- manifestarse por dolores abdominales de localización
quier edad, pero es más frecuente por debajo de los variable y puede semejar un cuadro de abdomen agudo.
6 años. El comienzo es agudo con fiebre alta que apare- Las investigaciones complementarias no son
ce en el 100 % de los pacientes, de tipo intermitente, diagnósticas; se presenta anemia, la eritrosedimentación
diaria, con cifras máximas hasta 40 ºC o más, que puede se eleva a cifras importantes y la proteína C reactiva es
tener uno o dos ascensos en el día notándose diferen- positiva. La leucocitosis muy elevada con cifras de
cias hasta de 4 ºC; rara vez se acompaña de escalofríos 20 000 a 30 000 o más leucocitos con predominio de
o convulsiones. Durante la hiperpirexia el niño puede segmentados. El FR y los ANA son negativos.
aparecer irritable o apático y anoréxico; la fiebre es pro- La evolución de la forma sistémica es variable, hay
longada y a veces constituye el único síntoma durante casos que son monocíclicos, con una sola crisis inicial
un período más o menos largo. Los pacientes pueden que no se repite, se describe que 50 % de casos cursa
aparecer alarmantemente enfermos durante el período por brotes, que en un período de tiempo de difícil deter-
febril y sorprendentemente bien durante su remisión. Le minación no vuelven a recaer y aparece una curación
sigue en importancia el exantema, aparece en el 90 % aparente. El 30 % toman un curso poliarticular con im-
de los pacientes, es evanescente y acompaña los picos portantes lesiones osteoarticulares y una incapacidad
febriles; es maculoso o maculopapuloso de color rojo funcional de moderada a severa. Del 5 al 6 % de los casos
salmón de localización con preferencia en tronco y ex- pueden desarrollar amiloidosis y 2 % pueden morir.
tremidades y también se puede observar en palmas y Forma de comienzo poliarticular. Este tipo pre-
plantas, puede intensificarse con el calor y se provoca senta 5 o más articulaciones tomadas; representa del 20
cuando se estimula la piel (fenómeno de Koebner). al 30 % de todas las artritis idiopáticas juveniles. Se divi-
Habitualmente la fiebre y el exantema suelen pre- den en 2 subtipos: con factor reumatoideo negativo
ceder a la artritis. Las manifestaciones articulares a ve- (FR-) o factor reumatoideo positivo (FR+). La enfer-
ces no aparecen en las primeras etapas, aunque puede medad seropositiva es menos frecuente que la
haber mialgias y artralgias, durante las crisis febriles. La seronegativa.
artritis puede presentar un patrón oligoarticular o Subtipo poliarticular seronegativa. Se puede
poliarticular afectando grandes articulaciones de miem- presentar a cualquier edad, afecta las grandes articu-
bros inferiores (rodillas, tobillos y caderas), y también laciones (rodillas, muñecas, codos y tobillos) y simul-
puede afectar muñecas, pequeñas articulaciones de las táneamente pequeñas articulaciones de las manos y los
manos y con menor frecuencia de los pies. La afecta- pies, puede haber afectación de las articulaciones tan-
ción de la temporomandibular en esta forma de inicio no to interfalángicas proximales como distales. Es simé-
es frecuente, pero puede aparecer si el proceso evolu- trica. Es característica la artritis de las articulaciones
ciona a la forma poliarticular. Con bastante frecuencia interapofisarias de la columna cervical, que ocurre en
existe cervicalgia con afectación de las vértebras cervi- aproximadamente 50 % de los niños con forma
cales, con envaramiento matutino. poliarticular, la artritis de las temporomandibulares es
Las adenopatías se observan hasta en 80 %, son relativamente frecuente y a veces produce micrognatia.
simétricas, indoloras de tamaño variable, que pueden
Las articulaciones se encuentran tumefactas y calien-
hacerse prominentes en cuello, axilas, regiones
tes, aunque no suelen estar eritematosas y hay poco
epitrocleares e inguinales.
dolor espontáneo, que aparece a la presión o movilidad
La hepatomegalia se presenta en gran número de
pacientes, es generalmente moderada y no suele de las zonas articulares inflamadas. Puede haber
acompañarse de alteraciones importantes de las prue- tenosinovitis al nivel de los extensores y flexores de
bas de función hepática, el uso de AINEs debe ser con las manos y de los pies, dejando grandes limitaciones,
precaución por ser mayor el riesgo de desarrollar que van a ocasionar la poca movilidad en las manos de
hepatotoxicidad. estos pacientes.
El bazo puede aumentar de tamaño en el 30 % de A veces exhiben manifestaciones, como fiebre, ano-
los casos, en ausencia del síndrome de Felty (asociación rexia, astenia y puede tener afectación del crecimiento.

1180 Tomo III


Las investigaciones de laboratorio: generalmente En los análisis complementarios se encuentra ane-
ausentes, puede haber anemia, con leucocitosis, a ve- mia, aumento de eritrosedimentación y proteína C
ces aumento de la eritrosedimentación y proteína C reactiva positiva. El FR positivo es la característica de
reactiva. Los ANA son positivos en más del 25%. El este tipo, debe ser positivo al menos en 2 ocasiones en
factor reumatoideo siempre es negativo. Las alteracio- un período de 3 meses, durante los 6 primeros meses de
nes radiológicas pueden ser erosiones, fusiones, anqui- la enfermedad. El 75 % de los pacientes pueden ser
losis, luxaciones, osteoporosis. etc. ANA positivos.
La evolución de la enfermedad es por brotes que La evolución es muy variable; en algunos pacien-
va dejando limitaciones; esta forma tiene un mejor pro- tes llegan a presentarse importantes limitaciones y
nóstico funcional que la forma seropositiva, porque tiene deformidades articulares. En otras ocasiones, es de
menor incidencia de lesiones erosivas (Fig.91.1). tipo policíclico, con períodos de remisión. La diferen-
cia mayor con la forma seronegativa es su agresividad
clínica con mayor tendencia a desarrollar deformidades.
En esta forma es rara la uveítis. Se han reportado casos
asociados al síndrome seco y queratitis. Pueden apare-
cer complicaciones importantes a lo largo de la evolu-
ción; subluxación atloidoaxoidea, insuficiencia aórtica,
fibrosis pulmonar, vasculitis, síndrome de Sjögren y sín-
drome de Felty.
Si se consideran todas las formas poliarticulares,
aproximadamente el 5 % de los pacientes presentan
uveítis crónica, de los cuales 15 % son seronegativos.
Forma de comienzo oligoarticular. Se clasifican
en este tipo los pacientes con toma de 4 articulaciones o
menos, durante los primeros 6 meses de la enfermedad.
La forma oligoarticular es la más frecuente y represen-
ta el 60 % de los casos. Se divide en 2 subgrupos que
quedan definidos según su evolución:
• Oligoarticular persistente: no afecta a más de 4 arti-
Fig. 91.1. Niño de 10 años, poliarticular seronegativo, con
culaciones a lo largo de la enfermedad.
toma de las articulaciones interfalángicas proximales de las • Oligoarticular extendida: afecta a 5 o más articula-
manos y ambas rodillas con aumento de volumen, dolor y ciones diferentes después de los primeros seis me-
limitación a los movimientos. ses del diagnóstico de la enfermedad.
Subtipo poliarticular seropositiva. Se presenta
En esta forma de AIJ, en aproximadamente el
por lo general en niñas de más de 8 años de edad, pero
75 % de los casos suele comenzar como una monoartritis
puede afectar a niños más pequeños. Se manifiesta en
de rodilla (Fig. 91.2). Después de las rodillas se afectan
cualquier articulación grande: rodillas, muñecas, cade-
los tobillos, casi nunca comienza afectando la cadera,
ras; y a medida que avanza el proceso, hombros y codos
o articulaciones pequeñas, con toma de las MTCF e IFP con posterioridad y en orden decreciente se toman las
y IFD de las manos y las MTTF de los pies. Es simétri- articulaciones de los dedos de las manos, de los pies, las
ca. La afectación de las manos con alteraciones de los muñecas, los codos y por último la cadera. Algunos au-
tendones flexores y con formación de nódulos, además tores han señalado que esta forma evoluciona hacia la
de la deformidad de los carpos, le confieren el aspecto forma oligoarticular extendida a los 6 años de seguimien-
de manos en garra, los pies pueden sufrir similares alte- to. Los factores de predicción para la extensión
raciones. Puede producirse, como en el adulto, el sín- poliarticular son la presencia de destrucción articular,
drome del túnel carpiano. elevación persistente de la velocidad de sedimentación
La aparición de nódulos subcutáneos en las partes globular, afectación de más de una articulación al ini-
de presión (olécranon) y en las vainas tendinosas es de cio y de al menos una articulación de miembros su-
mal pronóstico. periores (Fig. 91.3).

Parte XV. Reumatología 1181


La complicación más temible es la iritis o
iridociclitis crónica que en algunos casos puede ser
asintomática, pero se puede manifestar por enrojeci-
miento de los ojos y fotofobia. Tiene una alta inciden-
cia, hasta 20% en algunas estadísticas. Puede preceder
a la artritis en años e igualmente se puede presentar
después de ella. No hay relación entre la gravedad de
la artritis y la iridociclitis. La afectación ocular evolu-
ciona por crisis y puede conducir a la pérdida de la
visión. En ocasiones es bilateral, a veces llegan al
reumatólogo ya con complicaciones de la lesión ocular,
debido a su escasa sintomatología y la corta edad del
niño. Estos pacientes deben ser seguidos por un oftal-
mólogo y deben examinarse por lámpara de hendidura,
periódicamente.
Los complementarios son importantes en este grupo
ya que tienen anticuerpos antinucleares (ANA) positivos
en el 68 al 85 % de los casos y está asociado a un mayor
Fig.91.2. Monoartritis de rodilla izquierda con aumento de riesgo de uveítis y de complicaciones oculares: catara-
volumen, dolor, limitación a la extensión, sin rubor. tas, glaucoma, queratitis en banda. Los ANA son positi-
vos en el 91 % de los niños con uveítis.
No deben incluirse en este grupo oligoarticular los
pacientes que tengan uno de estos enunciados:
• Historia familiar de psoriasis confirmada por un es-
pecialista en al menos un familiar directo de primero
o segundo grado.
• Historia familiar de enfermedad asociada al marca-
dor genético HLA B27 en un familiar directo.
• Ser varón HLA B 27 positivo con brote de artritis
después de los 8 años e edad.
• Tener criterios de artritis sistémica.

Artritis psoriásica de comienzo infantil


Para clasificar a un niño dentro de esta categoría
debe de padecer de artritis más psoriasis, o artritis y al
menos 2 de los siguientes puntos.
• Dactilitis
• Antecedente familiar de psoriasis en parientes de pri-
mer grado
• Punteado ungueal u onicolisis.

El cuadro clínico en los niños es variable. Es más


frecuente en niñas que en varones. Puede incluir pa-
cientes que tienen artritis y/o lesiones psoriásicas,
dactilitis (30 al 50 %), pocillos ungueales, rash parecido
a la psoriasis o historia familiar de psoriasis. La edad de
Fig. 91.3. Niña de 3 años con aumento de volumen y flexo
comienzo es a menudo entre los 7 y los 11 años y la
de rodilla izquierda, aumento de volumen en tobillo izquier- psoriasis entre los 9 y los 13 años. Representa del 2 al
do, tipo oligoarticular extendida, sin toma ocular. 15 % de todos los casos de AIJ.

1182 Tomo III


La artritis psoriásica de comienzo juvenil, como Predomina en el sexo masculino, comienza alrede-
grupo, se ha asociado con HLA-A2, HLA-B17, HLA- dor de los 10 años, con entensitis en todos los casos, el
DR1 y HLA-DR6. La artritis severa ha sido asociada al 76 % tiene HLA-B27, los factores reumatoideos y los
HLA-A11 y HLA-B7. La oligoartritis está asociada al anticuerpos antinucleares son negativos. La artropatía y
HLA-DR5 y HLA-Drw8. la entensopatía comprometen de forma característica las
La artritis es la manifestación inicial en el 50 % extremidades inferiores. Las manifestaciones extraar-
de los casos, la psoriasis en el 40 % y ambas simultá- ticulares en pacientes con el síndrome SEA incluye
neamente en el 10 %. Al inicio el 70 % de los niños con enfermedades inespecíficas del intestino, uveítis aguda,
artritis psoriásica juvenil tienen oligoartritis. Se afectan y síntomas sistémicos.
más frecuentemente las rodillas, tobillos, IFP de los pies
e IFP de las manos. Poco después varios pacientes Otras artritis
desarrollan poliartritis en las extremidades superiores Se trata de niños con una "artritis indiferenciada",
e inferiores. La dactilitis es relativamente común (35 al de causa desconocida, que dura al menos 6 semanas y
50 % de los pacientes). Recordar que la afectación de que no cumple criterios de ninguna de las otras catego-
una pequeña articulación o vaina sinovial de un pie es rías o bien los cumple en más de una de ellas. Es nece-
muy típica de la artritis psoriásica infantil. La artritis de saria una evaluación cuidadosa de estos pacientes a lo
las IFD ocurre en el 30 % de los pacientes. Después largo del tiempo.
de varios años de enfermedad se incrementa la fre-
cuencia de toma de codos, MCF, MTF, muñecas y ca- Alteraciones del crecimiento
deras. Se ha observado que en los niños es muy poco En la AIJ se puede afectar el crecimiento, de ma-
frecuente la afectación de las sacroilíacas, la entesitis, nera directa, por ser una enfermedad crónica e
la uveítis y la asociación con HLA B 27. La toma de la inflamatoria, principalmente en las formas de comienzo
columna cervical es mayor que el de otros segmentos. sistémico y poliarticular y durante los períodos de activi-
Los cambios radiográficos consisten en osteopenia y dad clínica y biológica de la enfermedad.
estrechamiento del espacio articular, algunos casos tie-
El proceso de crecimiento, determinado genéti-
nen periostitis, erosiones, cambios destructivos y an-
camente y modulado por un conjunto de factores
quilosis de manos, columna cervical y articulaciones
extragenéticos, es el resultado de una interacción
de las caderas.
compleja y continuada de genes y ambiente que se
Los niños tienen lesiones de la piel ligera o mode-
rada, del cuero cabelludo, ombligo, superficies inicia en la vida intrauterina y se mantiene a lo largo
extensoras y pliegues Las uñas en el 70 % de niños de toda la infancia. Intervienen diversos factores, los
con artritis, particularmente de las articulaciones IFP, intrínsecos donde influyen determinadas hormonas
tiene pocillos y estrías y más rara vez adelgazamiento como las de crecimiento, la somatomedina, la tiroidea,
o lisis. La actividad de la enfermedad de la piel no ne- y en la adolescencia, las hormonas sexuales y los
cesariamente es paralela a la artritis. Las manifesta- factores extrínsecos como los nutrientes, la actividad
ciones sistémicas en 15 % de los casos incluyen fiebre, física y otros.
pericarditis, enfermedades inflamatorias intestinales e El crecimiento en longitud, se determina al nivel
iridociclitis. del cartílago de crecimiento donde interactúan los dife-
rentes factores, además de los anteriores, el movimiento
Artritis relacionada con entesitis (síndrome y las posiciones a que están sometidos, así como las eta-
SEA) pas de reposo.
En este síndrome se incluyen los pacientes que pre- Las alteraciones del crecimiento, pueden ser loca-
sentan artritis y entesitis o artritis más entesitis con al lizadas cuando se toman las articulaciones temporo-
menos 2 de los siguientes datos: mandibulares, que generan una hipognatia dando la
• Dolor al nivel de las sacroilíacas. llamada "cara de pájaro". En las extremidades pueden
• Raquialgia de tipo inflamatorio. producir discrepancias, más notables en extremidades
• Presencia de HLA B27. inferiores, cuando se toman una sola rodilla o un solo
• APF de 1er. o 2do. grado con enfermedad asociada tobillo. También se puede producir el crecimiento exa-
a HLA B27. gerado de un solo dedo o acortamiento de un pie. Trata-
• Uveítis anterior. mientos con los glucocorticoides por tiempo prolongado
• Inicio de artritis en niño mayor de 8 años. intervienen negativamente en la talla final.

Parte XV. Reumatología 1183


INVESTIGACIONES COMPLEMENTARIAS trofia de la falange subyacente puede ser el único cam-
Se presenta anemia, generalmente normocítica, bio durante muchos meses. La rarefacción regional
puede ser microcítica si hay sangramiento digestivo por radiológica se puede ver por varios meses en la articula-
la ingestión de salicilatos o por reacción a otras dro- ción afectada.
gas; leucocitosis elevada, más de 20 000 en la forma La osteoporosis regional está en desproporción con
sistémica. el desuso de la articulación. Después de pocos meses
En la electroforesis de proteínas hay aumento de en los niños pequeños y antes que haya destrucción del
alfa-1, alfa-2 y gammaglobulina. El factor reumatoideo cartílago, los centros de osificación epifisarios aumen-
puede ser positivo del 5 al 10 % coincidiendo más con la tan y empiezan a diferenciarse más tempranamente. Esta
artritis poliarticular. Los anticuerpos antinucleares aceleración de la madurez de los huesos redondos, cen-
pueden ser positivos en los pacientes de comienzo tros epifisarios y los sesamoideos son debidos también a
oligoarticular y poliarticular, y son negativos en la forma
hiperemia. El acortamiento residual de los dedos puede
sistémica.
confundirse con hipoplasia congénita.
El complemento hemolítico es normal o aumenta-
La columna cervical puede ser el primer lugar
do en sangre periférica y disminuido en líquido sinovial.
afectado y los hallazgos radiológicos recuerdan la falta
El líquido sinovial es de aspecto turbio, con
de segmentación congénita. La toma de las articula-
leucocitos de 3 000 a 30 000 a predominio de neutrófilos;
ciones temporomandibulares lleva con frecuencia a
la glucosa disminuida y el coágulo pobre.
Los cambios estructurales que determinan los cam- hipoplasia severa y atrofia de la mandíbula. La erosión
bios radiológicos son básicamente: inflamación subaguda ósea es un signo radiológico tardío. En la actualidad,
o crónica del tejido articular o periarticular, seguido de además de la radiología simple se emplea la ecografía
exagerado crecimiento de la sinovial (formación de en la valoración de los procesos articulares, puesto que
pannus) lo cual lleva a la destrucción del tejido subya- permite visualizar, con gran definición anatómica, las
cente y al extremo del hueso que recubre el cartílago, diferentes estructuras de una articulación. La
cuando la penetración del pannus es suficientemente ultrasonografía permite analizar con gran definición
profunda. El tejido conectivo en la cavidad medular estructuras tenosinoviales. En manos expertas, puede
intraósea, contigua a la artritis también se hipertrofia y incluso definir el pannus en forma de nódulos
es responsable, en parte, de rarefacción severa terminal hiperecoicos alrededor del tendón.
que se observa en los rayos X. La cápsula articular, tam- Otros métodos imagenológicos pueden ser útiles,
bién interviene en la reacción inflamatoria; ella se vuel- la TAC y la resonancia magnética (RM) que en deter-
ve vascularizada, fibrosada y redundante de la misma minadas articulaciones como las temporomandibulares,
manera que en la sinovial. sacroilíiacas y columna vertebral es de mucha utilidad.
Estos cambios capsulares en asociación con la La gammagrafía puede expresar un aumento de
fibrosis regional y los músculos de la región son respon- la captación del radiofármaco en las articulaciones
sables de las contracturas. En algunos casos, hay necrosis afectadas.
focal suficiente en los músculos para producir calcifica- DIAGNÓSTICO Y DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
ciones focales en la proximidad de la articulación afec- Depende de la forma de comienzo; en la forma
tada. Cuando la destrucción del cartílago es extensa, se sistémica, cuando predominan la fiebre y el eritema, hay
produce fibrosis y se desarrollan adherencias entre las que descartar, en primer lugar, las sepsis generalizadas
partes distales de huesos opuestos, en una rígida anqui- ya sea de origen viral o bacteriana, sobre todo cuando el
losis ósea, permanente. cuadro febril es prolongado; aquí son de interés los
Los hallazgos radiológicos dependen del estadío de hemocultivos, cuando hay adenopatías, además de las
la enfermedad, en la cual se examina el paciente. Du- enfermedades infecciosas como la mononucleosis, la
rante las primeras semanas de las manifestaciones clíni- rubéola y de otros microorganismos, es necesario des-
cas, el aumento de volumen de la articulación y cartar una leucosis aguda u otro proceso oncopro-
periarticular es visible. Puede afectarse de inicio una liferativo. En las formas de comienzo monoarticular, hay
sola articulación. que pensar en una artritis séptica, la artritis tuberculosa,
Cuando la AIJ aparece en las articulaciones de la sinovitis vellonodular pigmentaria u otras tumoraciones
los dedos durante los años tempranos de la vida, la in- óseas, además del parvovirus 19 y la enfermedad de
flamación difusa de partes blandas de un dedo e hiper- Lyme.

1184 Tomo III


La fiebre reumática puede ser objeto de diferen- necesario que cuente con una atención fisioterapéutica,
ciación, en las formas oligoarticular y poliarticular con que evite la tendencia a las deformidades y limitaciones
toma de grandes articulaciones, pero no cumple con el de su aparato locomotor. Se trata de un paciente crónico
criterio de 6 semanas de toma de una articulación, es donde las relaciones médico-paciente, familia y escuela
fugaz y es frecuente la carditis. adecuadas deben contribuir y hacerlo comprender las
La mayoría de las enfermedades inflamatorias del diferentes etapas de su enfermedad.
tejido conectivo en su comienzo se pueden confundir con Tratamiento medicamentoso. Debe ser institui-
AIJ, entre ellas el lupus eritematoso sistémico, la do precozmente y usar de inicio los medicamentos de
dermatomiositis, los síndromes vasculíticos; menos fre- 1ra. línea.
cuentes, la colitis ulcerativa, la enfermedad de Crohn y Los salicilatos (aspirina) de uso frecuente en dosis
la sarcoidosis. de 90 a 100 mg/kg/día produce disminución del dolor y
actividad antiinflamatoria, puede causar efectos secun-
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO darios, digestivos, la posibilidad de ulcus gástrico y
La evolución de la enfermedad está en relación sangramiento digestivo. Su uso ha disminuido por el te-
con la forma clínica. mor a la enfermedad de Reye que se puede producir en
Los casos con manifestaciones sistémicas, pueden algunas circunstancias y también produce un aumento
mantener su actividad durante semanas o meses en de las transaminasas que cuando es elevada y persistente
dependencia de su respuesta al tratamiento; otras veces obliga a la suspensión del medicamento.
hacen remisiones más o menos duraderas, presentando En este grupo se encuentran los antiinflamatorios
nuevas crisis, algunos pueden complicarse con altera- no esteroideos (AINEs) como el ibuprofen, el naproxeno,
ciones cardíacas, pericarditis o miocarditis o infeccio- tolmetin, indometacina y otros, que también pueden pro-
nes, debido al tratamiento con los medicamentos ducir reacciones adversas, además de los trastornos di-
inmunosupresores que ensombrecen el pronóstico. La gestivos y hepáticos, pueden dar síntomas renales, por
forma oligoarticular persistente puede mantener el mis- lo que deben vigilarse; la efectividad puede comprobar-
mo número de articulaciones más o menos activas; la se en semanas o meses; no se recomienda la ingestión
uveítis o iridociclitis es una complicación típica de este de dos de ellos al mismo tiempo.
subtipo y pueden llevar a la pérdida de la visión. En ausencia de efectividad, debe pasarse a los
Otras oligoarticulares extendidas, pueden ir aumen- medicamentos de segunda línea.
tando el número de articulaciones y evolucionar hacia Se puede comenzar con sales de oro: thiomalato
una poliarticular. de sodio o aurothioglucosa, por la vía intramuscular se
Consideradas en conjunto, el 70 % pueden hacer recomienda 1mg/kg/día, 1 vez por semana, los primeros
remisiones prolongadas con escasa o nula incapacidad 6 meses, después alargando el tiempo de inyección, es
funcional. decir, cada 15 días o cada 30 días.
La mortalidad es escasa, casi siempre causada, bien También se ha usado el oro oral diariamente; debe
por una sepsis favorecida por los inmunosupresores o vigilarse la aparición de efectos secundarios, ya que tie-
por amiloidosis renal. nen toxicidad al nivel de la piel, médula ósea, riñones,
COMPLICACIONES dando leucopenia, trombocitopenia o proteinuria y
Los pacientes con forma de comienzo sistémico, hematuria.
principalmente, si están en tratamiento con inmunosu- Están también indicados los tratamientos con
presores pueden hacer sepsis, generalmente bacteriana. antipalúdicos: cloroquina e hidroxicloroquina a dosis de
Otra complicación grave es el síndrome de activación 4 ó 7 mg/kg/día respectivamente; la toxicidad al nivel del
macrofágica (MAS) que puede terminar con la vida del nervio óptico requiere vigilancia por oftalmología.
paciente; se puede sospechar en un caso aparentemen- La D-penicilamina, con efectos tóxicos al nivel re-
te mejorado que comienza a hacer fiebre alta, decai- nal, médula ósea o miastenia grave, no ha sido de uso
miento, trastornos digestivos y sangramiento. frecuente.
Otra complicación en cualquiera de las formas es Actualmente, la droga más usada después del fra-
la amiloidosis renal, que se plantea cuando hay proteinuria caso con AINEs es el methotrexate, tanto por vía oral
persitente. como parenteral. Las dosis recomendadas son de 10 a
15 mg/m² una vez por semana. En algunos casos en que
TRATAMIENTO no se presenta mejoría, algunos autores han aumentado
En la AIJ, hay que tener en cuenta que se está esta dosis con buenos resultados. Algunos investigado-
tratando un individuo en crecimiento por tanto es res refieren remisión en el 30 % de los casos, después

Parte XV. Reumatología 1185


de meses y hasta un año de tratamiento. El tiempo en El interferón gamma ha sido usado en niños en
que puede ser usado el medicamento en niños no se ha varios ensayos clínicos. Se ha observado mejoría y re-
determinado todavía; no existe experiencia en el núme- misión; en pacientes de comienzo sistémico y
ro de años, pero hay niños que la han tomado por 5 ó 6 oligoarticular, con buenos resultados clínicos, así como
años, sin manifestar toxicidad. Existen datos de que con la disminución y suspensión de los esteroides. Los efec-
la suspensión del medicamento y después de años de tos adversos encontrados son fiebre, cefalea, escalofríos
remisión se ha presentado una crisis de la enfermedad. y más raro leucopenia. La suspensión del medicamento
Se reportan numerosos efectos secundarios: síntomas puede producir recaídas.
gastrointestinales, úlcera péptica, ulceraciones orales, El exceso de TNFα encontrado en estos pacientes
aumento de las nodulaciones a cualquier nivel, aumento ha llevado a la producción de un dímero soluble p75, en
de las enzimas hepáticas, cuya persistencia es una cau- la búsqueda de anticuerpos monoclonales, que neutrali-
sa de suspensión del medicamento. Se puede afirmar cen esta citoquina.
que en las dosis señaladas la toxicidad es escasa. Debe El etanercept compuesto por proteína natural
vigilarse en las primeras semanas, hemograma con dife- neutralizante del TNF; se ha obtenido una buena res-
rencial, enzimas hepáticas, análisis de orina y después puesta, por si mismo o combinada con el methotrexate.
alargar el tiempo de realizarlos. Se ha utilizado en niños consiguiendo mejoría en el
Los glucocorticoides. Este grupo de medicamen- 30 % y otras investigaciones hasta 56 % de mejoría.
tos tienen acciones similares a los glucocorticoides Los efectos secundarios han sido infecciones, cefaleas,
endógenos; tienen un efecto antiinflamatorio potente, náuseas y vómitos. Otro neutralizador del TNF el
pero también son inmunosupresores. La secreción infliximab es un anticuerpo quimérico (ratón-hombre) que
endógena, tiene un ritmo circadiano, con un pico de pro- se ha ensayado en adultos.
ducción en la mañana; de aquí que su ingestión en este Se han usado también anticuerpos humanos, todos
horario puede disminuir sus efectos adversos. Tiene in- en etapa de investigación.
dicaciones varias en la AIJ. También se ha utilizado un receptor antagonista de
En los pacientes de comienzo sistémico, más gra- la IL-1.
ves se pueden usar i.v. en forma de bolos de El trasplante de médula ósea en niños refractorios
metilprednisolona durante 3 a 5 días para después pasar a otros tratamientos se ha ensayado en un corto número
a la vía oral a 2 mg/kg/día. de niños. La técnica se basa en la eliminación de clones
Puede usarse a dosis bajas conjuntamente con los agresivos de células T y B de la médula ósea del pacien-
medicamentos de 2da. línea, de efecto más tardío y nos te, purgada e inyectándole el líquido que contiene célu-
sirve de puente, mientras se produce el efecto de estas. las madre. El tratamiento incluye altas dosis de
La vía local, intrarticular está indicada en casos ciclofosfamida e irradiación total del cuerpo. De los 29
oligoarticulares. También la vía local se usa en las uveítis niños, 4 han muerto por infecciones invasivas o por el
en inyecciones locales, en manos del oftalmólogo. síndrome de activación de macrófagos.
Los efectos secundarios son numerosos como la Los niños que sobrevivieron han tenido mejoría sig-
osteoporosis, las necrosis asépticas; el síndrome de nificativa. Se plantean otras modalidades de trasplante
Cushing y la limitación del crecimiento, por lo que los de médula con otras técnicas.
glucocorticoides deben usarse en las menores dosis y el
menor tiempo posible. Espondiloartropatías de inicio juvenil
La azatioprina tiene un efecto moderado, pero Las espondiloartropatías de inicio juvenil son un gru-
asociado a otros medicamentos, sobre todo los gluco- po de entidades clínicas, síndromes y enfermedades que
corticoides, nos permite la disminución y suspensión comienzan antes de los 16 años. Cursan con inflamación
de estos. de las entesis, de la sinovial de las articulaciones, de las
La ciclosporina A también ha sido usada en estos bursas y de las vainas tendinosas (dactilitis, tenosinovitis).
pacientes, con buenos resultados en la iridociclitis. Pue- Afectan a las articulaciones del raquis (espondilítis y
de usarse localmente en los ojos o parenteral o por vía sacroileitis) y las periféricas. Se afectan principalmente
oral, pero la nefrotoxicidad es muy frecuente. las extremidades inferiores de niños con antecedentes de
Modificadores de la respuesta biológica. La haber tenido infecciones genitales o enterales o sin ellas,
cantidad de citoquinas, interleuquinas y otros elementos como factores desencadenantes. Se acompañan de va-
inmunológicos que intervienen en la inmunopatogenia riadas manifestaciones extrarticulares (ojo, piel, mucosas,
de la enfermedad ha llevado a los investigadores a ex- pulmones). Existe una fuerte asociación con el antígeno
plorar algún efecto modificado o curativo en la AIJ. leucocitario humano HLA B27. Cursan con factor

1186 Tomo III


reumatoideo y anticuerpos antinucleares negativos. Pue- el sitio de unión al antígeno. El HLA-B27*05 es el más
de haber afectación de válvulas cardíacas, del parénquima frecuente en espondiloartropatía de inicio juvenil.
pulmonar y cierto grado de superposición entre las dife- El HLA-B27 presenta el antígeno bacteriano a los
rentes enfermedades. Por la presencia de factores linfocitos CD8, tiene mimetismo molecular con antígenos
genéticos hay una importante incidencia familiar. bacterianos, es modificado durante la infección
Las espondiloartropatias juveniles se agrupan en: bacteriana y se vuelve antigénico, y es responsable del
• Artritis reactivas a determinadas infecciones intesti- deficiente procesamiento, presentación y eliminación de
nales y genitourinarias. la bacteria. Las bacterias implicadas son: Klebsiella
• Artritis asociadas a enfermedades inflamatorias in- Pneumoniae, Yersinia enterocolítica, Shiguella
testinales. flexneri, Salmonella typhimurium, Campilobacter
• Espondiloartritis anquilosante juvenil. jejuni, Chlamidia trachomatis, Borrelia, Neisseria,
• Tarsitis anquilosante. Estreptococo, Cryptosporidium.
EPIDEMIOLOGÍA Se han encontrado fragmentos de DNA o de
Las espondiloartropatías de inicio juvenil constitu- antígeno en el líquido y membrana sinoviales, pero no se
yen el 10 al 15 % de los pacientes con enfermedades trata de una artritis séptica.
reumáticas. La incidencia es de 1,44 y 2,1 por 100 000 La inflamación intestinal, la infección, el trastorno
niños en Canadá, 2,00 por 100 000 en EE.UU. Es fre- de la permeabilidad intestinal, la presencia de fragmen-
cuente en mestizos mejicanos, chinos, indios y tos antigénicos, ser portador de HLA B-27 y la presencia
norafricanos. Son más frecuentes en el sexo masculino de linfocitos T citotóxicos, con el péptido artritogénico
y comienzan alrededor de los 10 años. son los responsables, presumiblemente, del daño articu-
lar. Las células T citotóxicas con especificidad por uno
PATOGENIA o más péptidos propios, derivados del tejido articular,
No se ha demostrado la existencia de un agente reaccionan con péptidos derivados de virus, bacterias
causal específico capaz de producirlas. con similitud molecular al tejido articular (reacción cru-
Se plantea la presencia de 3 elementos muy rela- zada por mimetismo molecular).
cionados entre sí y muy importantes en su desarrollo, Hay diversas teorías para plantear la patogenia de
aunque los 3 no estén presentes en el 100 % de los ca- este síndrome: la similitud de péptidos o antígenos
sos. Se trata de una fuerte asociación con el HLA B27, bacterianos con polimorfismos de la molécula B-27, hace
el aumento de la permeabilidad intestinal y la presencia que se active la respuesta de linfocitos T contra péptidos
anterior de infecciones genitourinarias o enterales. La foráneos y contra las células propias que posean esa
molécula HLA B-27. La presencia de la molécula de
inflamación de la mucosa intestinal conlleva un desequi-
HLA B-27 condiciona una respuesta alterada frente a
librio entre citoquinas proinflamatorias y antiinflamatorias
agentes infecciosos: una respuesta inmune más intensa
localmente. Se plantea la presencia de otros elementos
y la célula no tiene todas las posibilidades de liberarse
ambientales y genéticos.
de fragmentos bacterianos con capacidad antigénica.
La prevalencia de espondiloartropatías en la po-
Hay una estrecha asociación entre el intestino y
blación general depende directamente de la presencia
las espondiloartropatías. Más del 70 % de los pacientes
del gen del HLA-B27 en esa área geográfica. Entre
con espondiloartropatías tienen cambios inflamatorios,
pacientes con espondiloartropatías, 60 a 90 % tienen
HLA-B27. no específicos, agudos o crónicos en la submucosa o
Los antígenos leucocitarios humanos (HLA) son mucosa del íleo terminal, o del colón. Lo que podría in-
antígenos presentes en la superficie de todas las células crementar la permeabilidad para algunos antígenos e in-
nucleadas, plaquetas y espermatozoides y otras que se fluir en la respuesta local.
codifican por genes localizados en una región del genoma
del Complejo Mayor de Histocompatibilidad (CMH) lo-
Artritis reactiva
calizado en el cromosoma 6, que se agrupan en clase I, Se trata de una inflamación articular estéril, inicia-
II y III. da por un agente infeccioso a distancia (tractus
La molécula HLA- B27 pertenece a la clase I y se gastrointestinal o urogenital), sin aislarse en la articula-
divide en 13 subtipos: 2701 al 2713. ción ningún germen patógeno. Se trata de una enferme-
Cada uno de ellos difiere en 13 residuos de dad sistémica y no limitada. Se ha identificado con el
aminoácidos que están directamente relacionados con término de síndrome de Reiter. Pertenece a las

Parte XV. Reumatología 1187


espondiloartropatías por presentar características co- La afectación del SOMA puede ser ligero males-
munes del grupo: tar articular, artralgias, artritis ligera a severa, con calor,
– Patrón de afectación articular periférico. rubor. Puede ser monoarticular u oligoarticular (rodillas,
– Posible ocurrencia de proceso inflamatorio axial. tarsos, tobillos) con un patrón asimétrico. Se puede en-
– Prevalencia aumentada del HLA- B27. contrar sacroiliítis, tendinitis, tenosinovitis, entesitis
(clínicamente la entesitis, con predominio en las extre-
En el siglo XVI y XVII: Pierre van Forest y Martiniere midades inferiores, se presenta con dolor y molestia al
asocian artritis con uretritis. Benjamin Brodie hace la presionar las terminaciones tendinosas o inserciones
longitudinales de tendones, ligamentos y cápsulas arti-
1ra. descripción de la enfermedad en el siglo XIX. Es en
culares. La hinchazón del tejido blando es por la infla-
1916 que Hans Reiter describe la tríada en un oficial
mación de las vainas tendinosas y las bursas adyacentes),
después de una disentería. En 1967 se usa por vez pri-
mialgias a veces dactilitis, rigidez matinal y/o dolor en
mera el término y entre 1972-1974 se tipifica el HLA- columna lumbar. Las manifestaciones oculares suelen
B27 completando la descripción de la enfermedad. Su ser uveítis, que a veces puede ser la primera o única
incidencia real es difícil de calcular. La distribución mun- manifestación de las artritis reactivas con fotofobia, ojo
dial, es mayor en Escandinavia con una incidencia anual rojo y dolor; conjuntivitis, que puede resolver espontá-
de 30 x100 000 x año. Hay pocos datos en el niño, es neamente o evolucionar a cronicidad; episcleritis y
rara en el viejo. Se trata de un desorden propio del adul- queratitis. Las manifestaciones de piel y mucosas son:
to joven. No hay diferencia con el sexo, pero se plantea queratodermia blenorrágica, eritema nodoso, balanitis y
que en varones del 65 al 96 % son HLA-B27. Las salpingitis, lesiones eritematosas, lesiones brillantes y
bacterias implicadas son: Salmonella typhimurium, dolorosas en la lengua, paladar y labios. Las otras mani-
Shiguella flexneri, Yersinia enterocolítica, Yersinis festaciones pueden ser:cardíacas, urinarias, pulmonares,
pseudotuberculosis, Campilobacter jejuni, Borrelia, digestivas y neurológicas.
Clamydia trachomatis,Ureoplasma urealiticum, El tratamiento es de fase aguda con antiinfla-
Brucella, Crytosporidium, E. coli, Blastocistis matorios no esteroideos (indometacina, a la que mejor
hominis, Giardia lamblia, Entamoeba histolítica, responde) por 3 meses, esteroide local o sistémico,
estreptococo. antibióticos, compresas frías para el dolor y edema arti-
La patogenia de la enfermedad se produce por una cular. El reposo físico debe ser por corto tiempo. En la
interacción de un factor externo infeccioso con un fase crónica: metotrexate, sulfasalasina, azatioprina,
factor interno genético, que regula la respuesta del AINEs. Terapia física intensiva.
huésped. La evolución de estos pacientes es variable, en al-
Los pacientes con la presencia de HLA-B27 de- gunos se trata de un proceso autolimitado, que evolucio-
sarrollan una enfermedad más agresiva, con toma axial na en pocos meses. Otros evolucionan con recidivas
y tendencia a la cronicidad. Se trata de una relación de lentamente a la cronicidad. De ellos unos pueden sufrir
un huésped genéticamente predispuesto con un antígeno anquílosis articular y/o presentar sindesmófitos en co-
artritogénico, lo que provoca ruptura de los mecanismos lumna.
de defensa del huésped, con formación de
inmunocomplejos circulantes que se depositan en la Artropatías enteropáticas
articulación provocando artritis. Hay formación de • Enfermedades inflamatorias intestinales (EII).
anticuerpos contra HLA-B27 por reacción cruzada. La • Enteritis infecciosa.
función de los neutrófilos está aumentada lo que da ma- • Enfermedad de Whipple.
yor inflamación con una respuesta inmune celular y • Bypass por cirugia intestinal.
humoral mantenida. El cuadro clínico se caracteriza por • Enfermedad celíaca.
un período infeccioso caracterizado por una infección
entérica o genitourinaria, leve, severo o inadvertido, Artritis asociadas
luego un período incubación de pocos días hasta sema-
Las artritis asociadas a enfermedades inflamatorias
nas en que se instala el período prodrómico: malestar,
fiebre, dolor abdominal (a veces mal interpretado como intestinales (EII) son las que se asocian a la enfermedad
“apendicitis o salpingitis”), fatigas y finalmente el pe- de Crohn y a la colitis ulcerativa idiopática (CUI). Los
ríodo de estado con manifestaciones del sistema criterios para el diagnóstico incluyen los datos clínicos:
osteomioarticular (SOMA) , de piel, mucosas y ocula- artritis con cuadros diarreicos recurrentes con moco y
res entre otras. sangre, y otros más sistémicos; y los cambios radiológicos

1188 Tomo III


e histológicos propios de cada entidad. La artritis es la El diagnóstico no ofrece duda cuando aparece la
manifestación extraintestinal más frecuente de las EII. artritis y las manifestaciones digestivas. En ausencia de
No hay predominio del sexo, pero el componente axial síntomas digestivos hay que tener en cuenta que se pue-
suele verse más en el varón, con HLA B27, 8 al 15 % de de diagnosticar erróneamente como una artritis idiopática
familiares tienen antecedente de EII. La prevalencia de juvenil y al aparecer con posterioridad los síntomas di-
la CUI es de 50 a 100 x 100 000 hab., para el Crohn es gestivos, cambia el diagnóstico, en estos casos la pre-
de 75 x 100 000. Parece ser más frecuente en los blancos sencia del HLA-B 27 da mejor orientación diagnóstica.
y en los judíos. La espondilitis anquilosante en la CUI es Hay que preguntar insistentemente el antecedente
del 1 al 25 %, para el Crohn es del 2 al 7 %. La artritis de dolor abdominal, deposiciones anormales, amenorrea,
periférica suele aparecer años después de la inflamación pérdida de peso, anemia, etc, que pueden no ser recogi-
intestinal o antes que ella o simultáneamente a la EII. dos en los primeros momentos.
En el Crohn de inicio juvenil los síntomas iniciales Desde el punto de vista de laboratorio podemos
más frecuentes son diarrea y fiebre, anorexia, dolor ab- encontrar anemia ferropénica, trombocitosis marcada,
dominal o masa palpable, sangre en las heces, pérdida más en la enfermedad de Crohn. La eritrosedimentacion
de peso y retardo del crecimiento. En la colitis ulcerativa está acelerada y la proteína C reactiva es positiva. El
de inicio juvenil los síntomas iniciales frecuentes son: factor reumatoide y los anticuerpos antinucleares (ANA)
diarreas, melena y dolor abdominal asociado con son negativos . Puede verse ANCA patrón p positivos
leucocitos en las heces. en 60 % de CUI. El HLA-B27 está presente sobretodo
El patrón articular puede ser: periférico, monoar-ticular si desarrollan sacroiliítis y espondilitis. Otros marcado-
o pauciarticular, raro poliarticular; tiene carácter episódico, res genéticos: BW 16, BW 18, BW62.
dura unos 2 meses, remite espontáneamente por meses o El diagnóstico definitivo se hace con estudio
años, sin dejar secuela. Suele tener carácter migratorio. endoscópico y biopsia de la lesión.
La inflamación articular suele coincidir con la acti-
vidad intestinal. Afecta generalmente los miembros in- TRATAMIENTO

feriores: caderas, tobillos, rodillas, MTF. En el 50 % de La artritis no requiere tratamiento específico, pues
los pacientes la exacerbación de la enfermedad articu- remitirá con la mejoría del cuadro intestinal. La infiltra-
lar coincide con síntomas intestinales. La espondilitis y ción local con acetato de triamcinolona en grandes arti-
sacroiliítis de la enfermedad de Crohn y de la colitis culaciones se ha utilizado. El uso de AINEs, si hay toma
ulcerativa están asociadas al HLA-B27. axial, o dosis bajas de esteroides se puede indicar para
La toma axial es del 5 al 12 % (casos silentes), hay aliviar el dolor. El AINE puede aumentar más la per-
una frecuente asociación con el HLA- B27. Puede haber meabilidad intestinal aunque se reportan buenos resulta-
sacroiliítis subclínica o no, dolor y/o rigidez de columna dos con naproxeno, indometacina y diclofenaco. Si los
lumbar. Cumplen los criterios de la E.anquilosante. Puede síntomas son resistentes se recomienda la azulfidina, el
preceder en años a las manifestaciones digestivas. El curso metotrexate (MTX) o la azatioprina. Hay casos que
de la actividad axial es independiente de la inflamación requieren resección parcial de segmentos intestinales
intestinal. Otras manifestaciones pueden ser: entesitis de afectados. Siempre hay que insistir en la terapia física y
fascia plantar, del aquiliano o tendón rotuliano; dolor glúteo, ocupacional, programa de ejercicios, y el uso de ortesis,
limitación de movimientos de columna y de expansibilidad si es necesario.
torácica. Manifestaciones extrarticulares, las manifesta-
Artritis y enfermedad de Whipple
ciones oculares como la uveítis anterior es la más fre-
cuente (3 al 11 %), de comienzo agudo, unilateral, asociada Se trata de una enfermedad multisistémica
al HLA- B27 y toma axial; la piel se ve comprometida (lipodistrofia intestinal) rara. Más frecuente en el hom-
en 10 al 25 % con lesiones de pioderma gangrenoso en la bre 9:1 Se caracteriza por fiebre, diarreas, esteatorrea,
CUI, sin relación con su actividad y eritema nodoso en el edemas, pérdida de peso, linfoadenopatías, serositis,
Crohn, sí relacionado con su actividad intestinal. Pueden uveítis, afectación del sistema nerviosos central. La ar-
encontrarse aftas orales. La amiloidosis secundaria se ve tritis aparece en el 80 % de casos. Se trata de una artri-
más en el Crohn y es de mal pronóstico. tis migratoria, periférica, poliarticular, no deformante.
Las manifestaciones generales en el Crohn: retraso Hay toma axial solo en 8 al 20 %. HLA- B 27 positivo
pondoestatural, astenia, fiebre, dolor abdominal, vómitos, en 30 % de casos. Rara vez se encuentran lesiones
heces blandas o no. En la CUI diarreas mucosan- erosivas en los estudios radiológicos. La biopsia se pue-
guinolentas, escasa repercusión general. de hacer de intestino delgado, sinovial y ganglios. En la

Parte XV. Reumatología 1189


sangre se encuentra la presencia de macrófagos conte- sacroilíacas, la columna vertebral y las grandes articula-
niendo gránulos que se tiñen con el PAS, y por M/O se ciones periféricas, la mayoría son varones, y comienza
observan microorganismos bacilares de Trophoderma después de los 10 años. La inflamación en las articula-
whippelii, lo que ha sugerido la presencia de una artritis ciones vertebrales lleva a la rigidez de la columna.
reactiva enteropática. El tratamiento es con antibiótico Hay una fuerte predisposición genética, asociada
por 1 o más años del tipo tetraciclinas, con lo que se a la presencia del HLA-B27 en más del 90 % de los
logra la curación. Otros antibióticos pueden ser las sulfas, pacientes con EAJ.
cloranfenicol y penicilinas. La oligoartritis se presenta al inicio, pero al finali-
zar el primer año cerca del 25 % tienen poliartritis. Es
Artritis y derivación intestinal raro el compromiso de las articulaciones de miembros
Se puede encontrar artritis en el 6 al 52 % de los superiores.
casos hasta 3 años después de la cirugía. Se trata de La entesitis predomina fundamentalmente en las
una artritis periférica muy dolorosa, simétrica, migratoria, extremidades inferiores. Las exacerbaciones y remisio-
poliarticular no deformante, aunque puede ser crónica. nes de la artritis y la entesitis coinciden, en general la
Existe afectación de rodillas, hombros, codos, tobillos, entesitis es más severa y persiste por más tiempo.
MTF y MC. Puede verse tomada la columna sin cam- Los síntomas axiales ocurren primero en la por-
bios estructurales. En la piel se pueden ver lesiones ción lumbar, en las sacroilíacas y en la columna torácica
vesiculopustulosas, urticarianas y equímosis. Los hallaz- y menos frecuentemente en el cuello. La aparición de
gos de laboratorio son: anemia megaloblástica, dolor lumbar o sacroilíaco así como la rigidez son más
eritrosedimentacion acelerada, ANA y FR negativos. intensas por la mañana y mejoran con el movimiento.
En cuanto al tratamiento los AINE son útiles. En casos Los síntomas constitucionales no son raros en los
necesarios se puede usar antibióticos. En casos refrac- estadíos activos de la enfermedad. Entre 5 y 10 % tienen
tarios se usa esteroides. La reconstitución del intestino fiebre elevada, pérdida de peso, debilidad muscular y
produce resolución de todos los síntomas. atrofia, fatiga, adenopatías, leucocitosis, anemia y
eritrosedimentación acelerada. Más del 27 % tienen uno
Artritis y enfermedad celíaca o más ataques de uveítis aguda no granulomatosa. Las
manifestaciones cardiovasculares no son raras e inclu-
Se trata de una enfermedad producida por lesión
yen insuficiencia de la válvula aórtica y trastornos
de mucosa intestinal debida a la sensibilidad al gluten, inespecíficos de la conducción; son complicaciones ra-
con gran aumento de permeabilidad intestinal, mala ab- ras la pericarditis y la fibrosis pulmonar.
sorción y mejoría al suspender esta proteína de la dieta Más del 80 % de los pacientes con EAJ tienen
Puede presentarse a cualquier edad, más en el niño de enfermedades intestinales no específicas.
6m a 2a. La artritis es muy rara. La patogenia no está No hay pruebas específicas. El HLA B 27 es positivo
clara, se plantea que hay trastornos de la absorción de en cerca del 95 % de los pacientes. La eritrosedimentación
antígenos a través de la mucosa yeyunal inflamada lo está acelerada en la fase activa y puede haber anemia.
que sería el detonador de una respuesta inmune. El factor reumatoideo y los anticuerpos antinucleares
El cuadro clínico se caracteriza por ser una forma son negativos.
sistémica que involucrará articulaciones periféricas, re- En estudios radiográficos de las articulaciones
lativamente simétricas, y con rigidez matutina La toma sacroilíacas en la EAJ reflejan osteoporosis y erosio-
articular es muy variada, pueden afectarse: caderas, ro- nes en la enfermedad precoz y esclerosis con fusión en
dillas, hombros y columna lumbar, y con menos frecuen- la fase avanzada. Si existe osificación de los bordes ex-
cia los codos, muñecas, tobillos, la sacroiliítis se encuentra ternos de los discos intervertebrales (sindesmofitos) se
en algunos casos. La radiología aporta pocos datos. El produce una fusión de la columna. Ocasionalmente los
HLA-B27 está presente en muy pocos pacientes. Otros cambios erosivos y destructivos se encuentran en las
marcadores: A1, B8, DR3, DQ2 y posiblemente esté pequeñas articulaciones de los pies, de las manos y las
mediada por la inmunidad celular por linfocitos CD4 Th1. caderas.
El tratamiento es una dieta libre de gluten, lo que lleva a
la desaparición de artritis. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN Y DIAGNÓSTICO DE LAS EAJ
Criterios de Bernard Amor se basan en signos
Espondilitis anquilosante juvenil (EAJ) clínicos, radiológicos y de laboratorio. Son muy sensi-
Es una enfermedad inflamatoria crónica en niños bles y específicos (Sensibilidad = 91,9 %; Especifi-
menores de 16 años, que toma las articulaciones cidad = 97,9 % )

1190 Tomo III


Criterios clínicos: Puntos los varones. La afectación tarsal puede acompañar a
• Dolor lumbar o torácico nocturno otras localizaciones axiales o periféricas o representar
y rigidez matinal dorsal o lumbar 1 una forma aislada.
• Oligoartritis asimétrica 2 DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
• Dolores en nalgas imprecisos, DE LAS ESPONDILOARTROPATÍAS JUVENILES
o alternantes 1ó 2 Se debe hacer el diagnóstico diferencial con enfer-
• Tumefacción del dedo en salchicha 2 medades oncohematológicas de la infancia, tumores de
• Entesopatía o talalgia 2 la médula espinal, enfermedad de Sheuermann y otros
• Iritis 2 problemas ortopédicos de la columna, defectos anató-
• Uretritis, cervicitis 1 mes antes comienzo 1 micos, infecciones de las vértebras y /o de los discos
• Diarrea 1mes antes del comienzo 1 intervertebrales (discitis).
• Psoriasis, balanitis o enteritis crónica 2
TRATAMIENTO

Criterios radiológicos: La mejor forma de manejar a los niños con


• Sacroiliítis grado II bilateral espondiloartropatía juvenil es teniendo en cuenta todos
ó III unilateral 3 los aspectos de su persona, tanto la educación, como
su desarrollo pondoestatural, su desarrollo escolar, su
Genéticos: ambiente familiar y sus amistades. Hay que estar atentos
• Presencia B 27, historia familiar de EA al seguimiento adecuado por el fisiatra para ayudarlos
• Reiter, psoriasis, uveítis o con tratamiento físico. Es importante lograr mante-
enterocolitis crónica 2 nerlos lo más activos posibles y recomendarles que
deben de hacer los ejercicios indicados diariamente,
Terapéuticos: para evitar contracturas articulares y limitaciones de
• Disminución del dolor dentro extremidades inferiores y de la columna. Los medica-
de 48 h con AINEs 2 mentos más utilizados durante las crisis son los AINEs
y la sulfazalazina. Para cada entidad hay variantes di-
Diagnóstico
versas de su tratamiento.
• La aplicación de estos criterios tienen valor en niños
Por presentarse en general después de los 10 años,
y se considera diagnóstico confirmado si la suma de
al inicio de la adolescencia, hay que comunicarse efecti-
los puntos de los 12 criterios es igual o superior a 6.
va y afectivamente con estos pacientes para que parti-
Tarsitis anquilosante cipen de forma activa en el tratamiento de su
enfermedad. Deben comprender que si ellos ayudan,
Este término se refiere a un grupo de hallazgos
los resultados serán mejores y habrá menos contradic-
clínicos y radiográficos que incluyen enfermedad
inflamatoria (sinovitis articulares, entesitis, tenosinovitis ciones en el plano familiar. Es importante hablar con la
y bursitis) y proliferativa (periostitis, entensofitosis y an- familia que se enfrenta a enfermedades crónicas. En
quilosis ósea) que afectan el pie. ocasiones, no saben tratar a un adolescente, de por sí
Las características clínicas de la tarsitis anquilosante contradictorio, que presenta una enfermedad que lo
son dolor, aumento de volumen de tejidos blandos alrede- limita físicamente. El adolescente con una enfermedad
dor de los maléolos, tendón de Aquiles, tarso, tobillo y ar- crónica tiende a rechazar la enfermedad y no cumple
ticulaciones metartarsofalángicas. Hay disminución de los tratamientos orientados. Su manejo es siempre un
la movilidad del tarso, articulaciones del tobillo y MTF y reto para el médico que lo atiende.
pie plano (mucho menos frecuente pie cavus) e
hiperextensión de las articulaciones MTF. La radiografía Lupus eritematoso sistémico
va de discreta osteopenia de los huesos del tarso, estre- El lupus eritematoso sistémico (LES) es una en-
chamiento del espacio articular, a anquilosis comprome- fermedad autoinmune con presencia de anticuerpos
tiendo más articulaciones del tarso, con quistes óseos, y antinucleares (ANA), que se caracteriza por la forma-
proliferación ósea en las entesis. Las imágenes de RM ción de anticuerpos e inmunocomplejos que median res-
muestran señales hiperintensas provenientes de vainas puestas inflamatorias en múltiples órganos. El comienzo
sinoviales, bursas y raramente, espacio articular. en la infancia suele ser mucho más grave que en la
En esta enfermedad se encuentra el HLA B 27 adultez. Su evolución es imprevisible y de pronóstico
en 10 % de los casos y afecta predominantemente a potencialmente fatal.

Parte XV. Reumatología 1191


EPIDEMIOLOGÍA mación incontrolada de autoanticuerpos. El lupus eri-
El 2 % de la población de niños con enfermedades tematoso sistemático es el prototipo de desorden por
reumáticas padece de lupus eritematoso sistémico. Hay inmunocomplejos (IC) formados por diversidad de
pocos datos epidemiológicos fidedignos. La incidencia autoanticuerpos contra múltiples antígenos. El sistema
oscila entre 0,4 y 9,0 por 100 000 niños. Se presenta más de complemento tiene un papel central en la inflama-
en la raza negra, asiática e hindú que en la caucásica. ción y en el daño hístico en el LES; interviene en el
En los menores de 4 años la relación femenino-masculi- aclaramiento de los complejos inmunes circulantes por
no es de 2 a 1, va aumentando en la pubertad hasta 3 a medio de su fracción C3b (CR1) que se adhiere al recep-
1 ó 5,5 a 1. La mayor incidencia es en las edades
tor para CR1 de los eritrocitos, con lo cual los
prepuberales y puberales. De nuestra serie de 86 pa-
inmunocomplejos circulantes (ICC) son retirados de la
cientes con lupus eritematoso sistémico de inicio en la
infancia, 56 de ellos para el 65,5 % comenzaron des- circulación; se plantea que en el LES hay una falla en
pués de los 10 años: 49 niñas y 8 niños. el aclaramiento de los ICC por una posible deficiencia
de receptores para C3b en los eritrocitos. El sistema
PATOGENIA de complemento interviene en el depósito de los IC en
Cuadro 91.3. Lupus eritematoso sistémico los tejidos, piel, vasos, riñón, etc.; al desencadenarse la
cascada del complemento formándose el complejo de
Factores genéticos:
Factores psico- ataque a la membrana (C5b6789) que provoca lisis
neuroinmunoen- HLA, RCT
Citocinas
docrinos: stress,
IgS
celular, daño hístico y por lo tanto, signos y síntomas de
depresión, neuro-
trasmisores
Apoptosis la enfermedad. En la nefritis lúpica se ha demostrado
hormonas Moléculas por técnicas de inmunofluorescencia la presencia de
Factores ambientales adhesivas Factores inmunoglobulinas y complemento en los tejidos renales
inmunológicos: y anticuerpos ADN y antiADN en los glomérulos afec-
Virus, bacterias, citocinas,
hongos, SuperAg, Linf Th1,Th2, Th3 tados, el LES con nefritis se asocia a niveles disminui-
HSP, drogas, sol Linf. γ y λ, red idiot.
Act .policlonal cel B dos de complemento sérico. La activación intravascular
del complemento libera componentes biológicamente
activos, como C3a y C5a hacia la circulación, y provo-
La causa es desconocida. Se trata de una enfer- ca la activación de células inflamatorias que pueden
medad multifactorial. Se implican factores genéticos, ocasionar daño isquémico en pequeños vasos de regio-
inmunológicos, ambientales y psiconeuroendocrinos; nes lejanas al sitio del depósito de inmucomplejos, posi-
todas las células están relacionadas por las moléculas ble explicación del síndrome de disfunción pulmonar
adhesivas (Cuadro 91.3) reversible y de manifestaciones de lupus del sistema
Los factores genéticos. Se han asociado con la nervioso central.
prevalencia de HLA A1, B8, DW2/DR2 y DRW3/ En el lupus eritematoso sistémico existen, entre
DR3. Se ha encontrado polimorfismo en las cadenas otros, anticuerpos antieritrocitos, antiplaquetas,
α y β de los receptores de células T (RCT) y en las antilinfocíticos y antifosfolípidos. Los de mayor impor-
inmunoglobulinas (IgS). Se ha detectado el aumento tancia inmunológica y clínica son los anticuerpos con-
de la apoptosis por disrregulación de los genes Bcl 2 y tra antígenos nucleares o citoplasmáticos. Los
FAS-Apo 1, lo que ocasiona un aumento de la libera- anticuerpos antinucleares (AAN) abarcan anticuerpos
ción de los antígenos nucleares y citoplasmáticos. Hay contra antígenos nucleares, como los antiRo/SSA y
producción deteriorada de citocinas. antiLa/SSB, antiSm y antiADN y anticuerpos contra
Los factores inmunológicos. El defecto de la re- antígenos citoplasmáticos. Los anticuerpos anti-Sm son
gulación de la red idiotipo-antiidiotipo, la producción de- relativamente específicos del LES. Los anticuerpos
teriorada de citocinas, las anormalidades en las células antiADN de doble cadena van asociados a la enfer-
T así como el incremento de la expresión de las molé- medad activa y son exclusivos del LES.
culas adhesivas: E-selectina, VCAM-1 e ICAM-1, han Las reacciones de los anticuerpos con los
sido encontrados en los pacientes con lupus eritemato- antígenos nucleares, citoplasmáticos o de las membra-
so sistémico. La activación policlonal de las células B, nas celulares, forman inmunocomplejos que se deposi-
normalmente ocurre para yugular una infección, pero tan en los tejidos, provocan la respuesta inflamatoria
en el LES, el proceso regulatorio normal fracasa, no se con la activación del complemento, la liberación de pro-
detiene la activación policlonal, y se produce una for- ductos biológicamente activos y el daño hístico.

1192 Tomo III


Los factores ambientales. Los virus parecen es- A (IgM, IgG, IgA), así como componentes del comple-
tar implicados en la producción de las alteraciones mento en el mesangio y en la membrana basal. Por las
inmunológicas, sobre todo el virus de Ebstein Barr que características histológicas se pueden encontrar signos
puede provocar la activación policlonal de las células de actividad (cambios proliferativos, necrosis/cariorexis,
B. Actualmente se postula la acción de los retrovirus. crecientes celulares, infiltración leucocitaria, trombos
Las infecciones por bacterias, hongos, superan- hialinos, inflamación intersticial) y de cronicidad
tígenos pueden exacerbar la enfermedad. Los fármacos (glomérulos escleróticos, crecientes fibrosos, atrofia tubular
como la clorpromacina, procainamida, hidralazina, y fibrosis intersticial).
betabloqueantes, antitiroideos, sales de oro y otros, se La biopsia de piel estudiada por inmunofluo-
consideran desencadenantes de un cuadro clínico se- rescencia presenta inflamación y degeneración en la
mejante al LES, conocido como lupus inducido por dro- unión dermoepidérmica con depósitos granulares de
gas, pero cuyas manifestaciones desaparecen un tiempo inmunoglobulinas y de fracciones del complemento.
después de haber suspendido el fármaco inductor. Otros órganos afectados se estudian habitualmen-
Se plantea que las radiaciones ultravioletas pue- te en las autopsias. Sin embargo, los tejidos pueden mos-
den producir alteraciones en el ácido desoxirribonucleico trar inflamación no específica sin anormalidad de los
(ADN) de la piel convirtiéndolo en antigénico y des- vasos; los hallazgos patológicos son muchas veces, mí-
encadenar la respuesta inmunológica. nimos. Por ejemplo, en el sistema nervioso central, a
Los factores psiconeuroendocrinos. La visión pesar de las variadas y dramáticas manifestaciones clí-
integradora de la psiconeuroinmunoendocrinología (PNIE) nicas, pueden verse solamente microinfartos corticales
explica el efecto del estrés, los estados de ánimo y los y vasculopatía con cambios degenerativos o prolife-
cambios hormonales en la exacerbación o desencadena- rativos; la inflamación y la necrosis indicadora de
miento del LES. Los vínculos físicos entre el sistema vasculitis solo se encuentra ocasionalmente. Además, el
nervioso, el sistema endocrino, el sistema inmune, y el plexo coroide puede contener depósitos de inmu-
resto de los órganos, ha sido demostrado por la presencia noglobulinas, pero su presencia no está directamente
de receptores para hormonas, neurotransmisores y citocinas correlacionada con los eventos clínicos y pudiera ser solo
en células de todos los sistemas, lo que establece una red la localización incidental de los inmunocomplejos.
molecular que interrelaciona todos los sistemas entre sí y El corazón de los pacientes con LES puede mos-
en estrecha relación con el medio ambiente. El sistema trar focos inespecíficos de inflamación en el pericardio,
psiconeuroinmuneendocrino puede explicar mejor las ca- miocardio y endocardio, incluso en ausencia de mani-
racterísticas del adolescente con LES tanto desde el pun- festaciones clínicas. La endocarditis verrugosa de
to de vista emocional como físico. En la adolescencia Libman-Sacks es un hallazgo clásico en el LES.
comienza la activación del sistema endocrino, que provo- La vasculopatía oclusiva causada por trombosis
ca una verdadera explosión hormonal que afecta todos venosas y arteriales es un hallazgo patológico común.
los sistemas. En un paciente con una enfermedad La fibrosis periarterial o cambios de tela de cebolla en
autoinmune, el desequilibrio del sistema inmune, el bazo son considerados patognomónicos del LES.
hiperreactivo, propio de su enfermedad, más la activación
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
hormonal y el desarrollo neurofisiológico conlleva a una
alteración de la homeostasis interna que afecta todos los Los síntomas más frecuentes en los niños son fie-
órganos y sistemas. bre, malestar general, artralgias o artritis y exantema
malar. En nuestra serie, el 88 % tuvo artritis y el 81,8%
ANATOMÍA PATOLÓGICA tuvo manifestaciones cutáneas. El lupus eritematoso sis-
Los hallazgos patológicos en el LES ocurren en todo témico puede empezar de manera aguda o insidiosa; in-
el cuerpo y se manifiestan por inflamación, anormalida- cluso los síntomas anteceden en años el diagnóstico de
des de los vasos sanguíneos que incluye vasculopatía y la enfermedad.
vasculitis, y depósito de inmunocomplejos. De los órga- Manifestaciones cutaneomucosas. Las manifes-
nos comprometidos por el lupus, la patología del riñón es taciones cutáneas tienen un amplio espectro y apare-
la más conocida por el uso de la biopsia renal en el curso cen en algún momento de la enfermedad, la típica
de la enfermedad. El estudio de las muestras renales por "erupción en alas de mariposa", localizada en las zonas
microscopia óptica, inmunofluorescente y electrónica ha malares y sobre el dorso de la nariz, es fotosensible y
permitido detectar depósitos de inmunoglobulinas M, G y puede extenderse a cara, cuero cabelludo, cuello y tórax

Parte XV. Reumatología 1193


(Cuadro 91.4). La lesión discoide aislada es rara en los
niños. Pueden aparecer lesiones puntiformes palmo-
plantares; en las puntas de los dedos y en las extremi-
dades; lesiones purpúricas, si hay trombocitopenia;
exantemas vasculares y livedo reticularis. Las lesiones
de la mucosa oral, ulcerosas, a menudo indoloras, apa-
recen en el paladar y en las mucosas de la boca y de la
nariz. La alopecia por inflamación alrededor de los
folículos pilosos se presenta en placa o generalizada
(Fig. 91.4, 91,5 y 91,6).

Cuadro 91.4. Manifestaciones cutáneas en el lupus eri-


tematoso sistémico
Específicas
• Rash malar.
• LED (lupus eritematoso discoide).
• LESC (lupus eritematoso subcutáneo crónico):
- Papuloescamoso
Fig. 91.5. Paciente femenina de 12 años con lesiones equi-
- Anular policíclico
móticas por vasculitis en lupus eritematoso.
No específicas
• Fotosensibilidad. • Livedo reticularis.
• Úlceras orales. • Lesiones bulosas.
• Alopecia. • Paniculitis.
• Fenómeno de Raynaud. • Vasculitis urticariana.
• Cambios ungueales. • Vasculitis.

Fig. 91.6. Alopecia en paciente femenina de 14 años con


lupus eritematoso subcutáneo crónico.

Manifestaciones osteomioarticulares. Las


artralgias son frecuentes, la artritis se presenta inclu-
so en 80 % de los niños con lupus eritematoso
sistémico, tiene carácter transitorio y rara vez es
deformante. La necrosis aséptica, sobre todo de la
cabeza femoral puede verse debido a la enfermedad
o por el uso de esteroides. Las mialgias y miositis,
con aumento de las enzimas musculares, son relativa-
mente frecuentes.
Manifestaciones cardiovasculares. Las alteracio-
Fig. 91.4. Paciente de 13 años, femenina, con erupción en nes cardíacas pueden ser soplos, roces pericárdicos,
alas de mariposa y lesiones eritematopapulosas en cara, cardiomegalia, debido a miocarditis, pericarditis o endo-
pabellones auriculares, región anterior del tórax y brazos. carditis verrugosa de Libman Sacks. La pericarditis es la
Pelo quebradizo, escaso, con zonas de alopecia. más común de las afectaciones, se puede manifestar con

1194 Tomo III


dolor que aumenta con el decúbito, no siempre va acom- Manifestaciones oculares. La afectación ocular
pañada de roce pericárdico ni de cardiomegalia importan- se presenta como epiescleritis, iritis o cambios vasculares
te. En ocasiones son asintomáticas y se detectan por retinianos con hemorragias o exudados (cuerpos
electrocardiograma o ecocardiograma. citoides). Las complicaciones trombóticas de arterias y
Los pacientes con LES tienen más riesgo de desa- venas especialmente, ocurren en los pacientes con
rrollar enfermedad coronaria por vasculitis, corticoterapia, anticuerpos antifosfolípidos (anticuerpos anticardiolipinas
dislipoproteinemia, así como por el estado de y anticoagulante lúpico).
hipercoagulabilidad producido por los anticuerpos Manifestaciones renales. La afección renal re-
antifosfolípidos. Se han descrito infartos miocárdicos en viste gran importancia porque da el pronóstico de la en-
edades muy tempranas. fermedad. Pueden no estar presentes y ser una "nefritis
Manifestaciones pulmonares. Pleuritis, la más fre- silente" o afectar seriamente la función renal con diver-
cuente, neumonía, hemorragia pulmonar o fibrosis sos grados de nefropatía lúpica que pueden llevar a la
pulmonar crónica, no son frecuentes en la edad pediátrica. insuficiencia renal crónica. Las manifestaciones clínicas
Manifestaciones neuropsiquiátricas. En el com- consisten en alteraciones aisladas del sedimento urinario,
promiso del sistema nervioso central, que afecta aproxi- con hematuria habitualmente microscópica y cilindruria,
madamente al 25 % de los niños con LES se describen proteinuria con síndrome nefrótico o sin él, e insuficiencia
alteraciones de la personalidad, convulsiones, acciden- renal. La hipertensión arterial es un problema común y
tes cerebrovasculares y neuritis periféricas (Cuadro puede ser secundaria a la afectación renal, a vasculitis,
91.5). En nuestra serie, el 27,2 % tuvo manifestaciones al tratamiento esteroideo y a aterosclerosis.
neurológicas con un amplio abanico de síntomas y sig- La mayoría de los estudios plantean una mayor afec-
nos del sistema nervioso central y periférico. tación renal en el lupus eritematoso sistémico en la infan-
Manifestaciones digestivas. Pueden ser: dolor ab- cia que en los pacientes adultos. La biopsia renal es
dominal, vómitos, diarreas, melena e infarto intestinal por importante para determinar el grado de lesión glomerular;
vasculitis. la relativa agresividad de la técnica limita su uso.
De nuestros pacientes, 33 niños fueron biopsisados
Cuadro 91.5. Manifestaciones neuropsiquiátricas y el 100 % tuvo algún grado de afectación renal, por estu-
mayores en el lupus eritematoso sistémico dios de inmunofluorescencia. El 33 % (17 pacientes) de
los pacientes no mostraban alteración en el sedimento uri-
• Disfunción cerebral difusa: nario ni en la función renal y presentaban nefritis tipo II,
− Síndrome orgánico cerebral 7 niños tenían lesiones de grado III; 5, grado IV y 4, grado
− Psicosis V según la Clasificación Morfológica modificada OMS.
− Desórdenes afectivos mayores La supervivencia, en niños con nefropatía lúpica
• Disfunción cerebral focal: de nuestra serie, según el método de Kaplan-Meier fue
− Convulsiones, de todos los tipos de 100 % a los 5 años y de 95 % a los 10 y 14 años.
− Accidentes cerebrovasculares Otras manifestaciones. Las poliserositis (pleuri-
− Mielitis transversa tis, pericarditis y peritonitis) son causa de dolor torácico,
• Trastorno de movimiento: precordial y abdominal. La hepatoesplenomegalia y las
− Corea adenopatías no son infrecuentes.
− Atetosis
− Parkinson-like DATOS DE LABORATORIO

− Ataxia cerebral La presencia de anticuerpos antinucleares en el


• Neuropatía periférica: 95 % de los pacientes es la mejor representación del pro-
− Sensitivomotora simétrica ceso autoinmune. Los antiADN de doble cadena son un
− Mononeuritis múltiple índice de gravedad y de actividad y son más frecuentes
− Síndrome de Guillain-Barré en los niños que en los adultos. El complemento hemolítico
− Neuropatía autonómica sérico (CH50) y sus componentes C3 y C4 están dismi-
nuidos y los inmunocomplejos circulantes elevados en los
• Misceláneas:
pacientes con lupus eritematoso sistémico grave y activo,
− Meningitis aséptica
sobre todo en los que presentan nefritis. La detección de
− Pseudotumor cerebral los anticuerpos antifosfolípidos (AAP) se ha asociado con
− Trombosis venosa cerebral fenómenos trombóticos venosos y/o arteriales.

Parte XV. Reumatología 1195


Hay un aumento de gammaglobulinas por la gran hipergammaglobulinemia, la anemia, la leucopenia y los
cantidad de autoanticuerpos. La anemia puede depender signos o síntomas de compromiso renal pueden orientar
de la enfermedad inflamatoria crónica, producida por dis- el diagnóstico.
minución de la eritropoyesis, que es una anemia normocítica La biopsia de piel es de utilidad por la demostra-
y normocrómica, simulando una anemia ferropénica, pero ción de depósitos de inmunoglobulinas y complemento,
con depósitos de hierro aumentados o de la hemólisis por técnicas de inmunofluorescencia, en la unión
autoinmune que cursa con reticulocitos aumentados y dermoepidérmica.
haptoglobina sérica disminuida. La leucopenia, la linfopenia La biopsia renal ofrece datos histoinmunopatoló-
y/o la trombocitopenia posiblemente son causadas por gicos que indican de una forma objetiva el grado de
anticuerpos antileucocitos, antilínfocitos y antiplaquetarios. afectación renal, permite su clasificación en los 6 gra-
El sedimento urinario puede tener leucocitos, hematíes, dos de nefritis lúpica establecidos por la OMS, y deter-
cilindros y proteínas que se asociará con un mayor o me- mina su pronóstico y ayuda a una mejor conducción
nor grado de lesión renal. Los niños con nefritis difusa terapéutica.
proliferativa (grado IV en la clasificación de nefritis lúpica
de la OMS) evolucionan al deterioro de la función renal Lupus inducido
con elevación de los niveles de nitrógeno ureico o de El lupus inducido por fármacos se puede presentar
creatinina en sangre y con el establecimiento progresivo con el uso de anticonvulsivantes, antihipertensivos e
de la insuficiencia renal crónica. hidralacina. La mayoría de los pacientes tienen AAN
positivos y manifestaciones clínicas como fiebre, artritis,
DIAGNÓSTICO exantema y serositis. Las manifestaciones graves como
El diagnóstico es clínico y debe ser corroborado nefritis o afectación del sistema nervioso central son
por las pruebas inmunológicas. Los criterios para el diag- raras. Este cuadro desaparece con la interrupción del
nóstico de lupus eritematoso sistémico de la American medicamento que lo provocó.
Rheumatism Association (ARA) (Cuadro 91.6), han
permitido uniformidad en los diagnósticos. Lupus neonatal
Los hijos de madres portadoras de lupus eritema-
Cuadro 91.6. Criterios diagnósticos para el lupus eri- toso sistémico pueden presentar en la etapa neonatal un
tematoso sistémico síndrome relacionado con esa enfermedad. Lo más fre-
• Rash malar. cuente es la positividad de los anticuerpos antinucleares.
• Fotosensibilidad. Las lesiones eritematosas de la piel, poco descamativas,
• Lesiones discoides. después de la exposición al sol o a otras fuentes de luz
• Serositis (pleuritis o pericarditis). ultravioleta, trombocitopenia, anemia hemolítica y enfer-
• Trastornos renales (hematuria y/o proteinuria medad colostática del hígado. Las lesiones cardíacas se
y/o cilindruria). caracterizan por fibrosis y destrucción de los haces
• Artritis no erosiva de 2 articulaciones o más. sinoauricular, auriculoventricular o de Hiz, causan blo-
• Trastornos hematológicos (anemia hemolítica o queo auriculoventricular que puede comenzar en el 2do.
leucopenia <4 000/mm3, o linfopenia <1500/mm3 o o 3er. trimestre del embarazo, aunque se dice que la
trombocitopenia <100 000/mm3).
enfermedad lúpica del recién nacido es transitoria, el tejido
• Trastornos neurológicos: psicosis o convulsiones.
cicatricial puede llevar a un bloqueo permanente que en
• Ulceraciones orales o nasofaríngeas.
• Trastornos inmunológicos: anticuerpos antiADN, o la mayor parte de los casos se soluciona con la implan-
anticuerpos antiSm, o test falso positivo para la sífilis. tación de un marcapaso; el 10 % mantiene insuficiencia
• Título anormal de anticuerpos antinucleares. cardíaca relacionada con una miocardiopatía dilatada.
Este síndrome es causado por el paso de anticuerpos
Al menos 4 de los 11 criterios deben de estar presentes para el de la madre al feto de forma pasiva. Los anticuerpos
diagnóstico definitivo. American Rheumatism Association Criteria más relacionados con estas lesiones son el antiRo (SS-
revised in 1982. A), el antiLa (SS-B) y el antiRNP. En la enfermedad
cardíaca el antiRo parece ser el más agresivo, el 3 % de
La negatividad de los AAN hace dudar del diag- madres con este anticuerpo tienen hijos con bloqueo AV
nóstico de lupus eritemato sistémico. Los antiADN de que requieren marcapaso.
doble cadena exclusivos del lupus eritematoso sistémico,
solo aparecen con la enfermedad grave o activa. La dis- TRATAMIENTO
minución de los niveles de complemento correlacionado La terapia en el lupus eritematoso sistémico se
con el aumento de inmunocomplejos circulantes, la debe individualizar según la gravedad y la extensión de

1196 Tomo III


la enfermedad en cada paciente. La evaluación completa Es de vital importancia el seguimiento meticuloso
permite detectar el compromiso de órganos importantes de los niños con lupus eritematoso sistémico, tanto su
de valor pronóstico, como son los riñones. No existe tra- control clínico como serológico y renal. Cualquier signo
tamiento específico. Las terapias utilizadas buscan elimi- de empeoramiento de la enfermedad o cualquier proce-
nar la inflamación y controlar el desorden inmunológico. so infeccioso se debe ser detectado precozmente y con-
Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), y los trolado adecuadamente. El lupus activo se debe
salicilatos se utilizan como tratamientos sintomáticos de considerar como una urgencia que exige una evaluación
artritis y otras molestias, pero no detienen el proceso rápida y un tratamiento drástico para su control antes
inmunopatológico. Los antipalúdicos hidroxicloroquina a que el daño orgánico sea irreparable. En el lupus juvenil
7mg/kg/día se utilizan en las manifestaciones cutáneas, debemos diferenciar los pacientes que comienzan antes
con control riguroso por la toxicidad retiniana. de la pubertad de los que lo hacen en la adolescencia,
En los niños, la mayoría de los autores coinciden no por las formas de presentación ni por el cuadro clíni-
en que se trata de una enfermedad más grave que en el co, sino por la repercusión psicológica y la atención que
adulto y que requiere de dosis mayores de esteroides es distinta en esos grupos de edades. El niño antes de
para hacer desaparecer los síntomas. Se comienza con los 10 añospermite que su enfermedad sea controlada
dosis de 1 a 2 mg/kg/día de prednisona que se mantiene con más facilidad por sus padres y por los médicos, lo
por 6 a 8 semanas, posteriormente se reducen las dosis que no ocurre al llegar a la adolescencia o comenzar
a días alternos hasta dosis mínimas (0,25 mg/kg/día) de durante ese período de la vida.
mantenimiento. La asociación con antipalúdicos o De acuerdo con el enfoque de integración psico-
citostáticos puede ser útil como ahorradores de esteroides neuroinmunoendocrino consideramos que los pacientes
para evitar las serias reacciones secundarias que estos adolescentes se ven afectados física y psíquicamente por
producen (síndrome de Cushing, osteopenia, cataratas, su enfermedad y por los tratamientos, lo que compromete
osteonecrosis y afectación del eje hipotalamohi- su autoestima, crea angustia, ansiedad, agresividad, re-
pofisoadrenal, entre otras) chazo a los medicamentos y aumento de las dificultades
En los niños con LES y nefritis o con afectación familiares. Los médicos necesitan tener conocimientos de
sistémica grave, el tratamiento está dirigido a suprimir la las características de la adolescencia y del efecto de una
actividad de la enfermedad renal y sistémica, lo que se enfermedad crónica en el adolescente y su familia.
demuestra por la normalización de los niveles de comple- No se trata solo del tratamiento medicamentoso,
mento sérico y la reducción de los anticuerpos antiDNA es necesario e imprescindible ganarse la confianza y el
circulantes. Diversos estudios demuestran que se obtiene respeto del adolescente lúpico, dirigirse a él individual-
mejor respuesta al asociar la prednisona a medicamentos mente, obviando el binomio madre-hijo, aclarar sus du-
citostáticos como la azatioprina o ciclofosfamida que per- das y ofrecerles perspectivas posibles.
miten la reducción de la prednisona con menos riesgo de Al ayudarlos a comprender su enfermedad podre-
activación de la enfermedad. La azatioprina se utiliza a mos lograr encaminarlos a una adultez lo más satisfac-
dosis de 2 mg/kg/día. La ciclofosfamida tiene dosis de toria posible.
2 mg/kg/día por vía oral. Se utiliza más frecuentemente PRONÓSTICO
por vía intravenosa a 750 mg/m²/dosis mensual durante
6 meses y posteriormente trimestral hasta completar En los últimos diez años se han comprendido mejor
2 años de tratamiento. Los efectos a largo plazo de los los mecanismos patogénicos del lupus eritematoso
fármacos citotóxicos en los niños son mal conocidos; los sistémico. El uso de los nuevos estudios serológicos,
efectos secundarios más temidos son el aumento de sus- inmunopatológicos e imagenológicos para monitorear la
ceptibilidad a infecciones graves, la supresión gonadal y actividad de la enfermedad, la protección de la piel a las
posible inducción de procesos malignos. radiaciones ultravioletas, el uso de terapias combinadas,
Las convulsiones, la psicosis y otras alteraciones del así como el manejo adecuado de la insuficiencia renal,
sistema nervioso central se asocian a la enfermedad acti- incluido los transplantes, han variado de forma dramática
va. La experiencia actual indica que el tratamiento del lupus el pronóstico y la supervivencia de los niños con lupus
infantil con ciclofosfamida intravenosa y esteroides es alen- eritematoso sistémico. Las cifras de supervivencia alcan-
tador. En los pacientes con anticuerpos antifosfolipídicos zan en varios países desarrollados más del 90 % a los 5
asociados con fenómenos trombóticos a diversos niveles años y hasta el 88 % a los 10 años. En nuestra serie fue,
se les deben agregar al esquema terapéutico elegido agen- según las curvas de Kaplan y Meier, de 95 % a los 5 años
tes antiplaquetarios y anticoagulantes. En la nefritis lúpica y 88 % a los 10 y 15 años de seguimiento. A pesar de
grave la diálisis y el transplante renal son nuevas posibilida- estas cifras alentadoras persiste el riesgo de una mayor
des factibles y con resultados satisfactorios. morbilidad debido incluso a los tratamientos utilizados.

Parte XV. Reumatología 1197


El pronóstico final del lupus eritematoso de comienzo Como mecanismo patogénico se conoce que exis-
en la infancia aún no está definido, el futuro podrá apor- ten alteraciones fundamentales en 3 niveles:
tar nuevos medicamentos menos agresivos, más efica- • En el endotelio de los capilares y las arterias de pe-
ces y que permitan una mejor calidad de vida a los queño calibre
pacientes. • En el sistema inmune, tanto humoral como celular.
• En el tejido conectivo, estimulando a los fibroblastos.
Esclerodermia
CONCEPTO
Se plantea que el daño endotelial constituye la le-
sión primaria, dando lugar a la hiperplasia subendotelial,
Enfermedad del tejido conectivo que se caracteri-
agregación plaquetaria que ocasiona hiperreactividad y
za por la presencia de fibrosis en múltiples órganos y
oclusión vascular y finalmente isquemia hística. Segui-
sistemas; afecta fundamentalmente la piel, tubo digesti-
vo, pulmones, corazón y riñones. damente se activaría el sistema inmune a través de los
La afectación básica de la enfermedad es un tras- linfocitos B produciendo autoanticuerpos (antitopoi-
torno de la microcirculación (capilares y arterias de pe- somerasa-I, anticentrómero, antinucleares e
queño calibre) y del tejido conectivo, lo que conlleva inmunoglobulinas) y los linfocitos T que provocan libera-
lentamente a obliteración vascular y fibrosis secundaria ción de interleuquinas y factor transformador de creci-
en los órganos diana. miento ß, ocasionando infiltrado inflamatorio. Por último
Algunos pacientes solo muestran alteraciones lo- la estimulación de los fibroblastos induce la activación
calizadas al nivel de la piel, mientras que otros, además
transcripcional de genes de proteínas de la matriz
presentan afectación de órganos internos; se denomina
entonces, esclerosis sistémica. Existe la llamada extracelular, lo que da lugar a una producción excesiva
''esclerodermia sine esclerodermia'', la cual se caracte- de tejido conectivo y a la fibrosis.
riza por la presencia de fibrosis en los órganos internos
ANATOMÍA PATOLÓGICA
sin afectación de la piel.
La enfermedad se puede manifestar en diferentes En el estudio histológico de la piel durante la fase
grados de severidad y progresión, observándose pacien- inicial de la enfermedad se observa un infiltrado infla-
tes con solo simples lesiones cutáneas y otros con gran- matorio perivascular con la presencia de linfocitos y cé-
des afectaciones viscerales, de los cuales algunos lulas cebadas. En la fase tardía ya es notable la
evolucionan rápidamente hacia las complicaciones densificación del colágeno. En la dermis y el tejido
renales, pulmonares y cardíacas, capaces de provocar celular subcutáneo, con atrofia de la epidermis, las glán-
la muerte. Estas formas agresivas de esclerodermia ra- dulas y los folículos pilosos. Puede observarse también
ras veces se presentan en los niños. hialinización y fibrosis arteriolar.
CLASIFICACIÓN
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
• Esclerosis sistémica: Esclerosis sistémica (ES). Comienza de forma
− Con afectación cutánea difusa insidiosa, con dolores articulares, rigidez para realizar
− Con afectación cutánea limitada los movimientos, pérdida de peso y fatiga fácil.
• Esclerodermia localizada: La afectación de la piel es la manifestación clínica
− Morfea más característica. Presenta en su evolución tres fases:
− Lineal en la primera fase (edematosa) la piel se hincha por
EPIDEMIOLOGÍA acumulación de líquido, haciéndose más evidente en los
La esclerodermia es muy poco frecuente en los dedos de las manos, los cuales adquieren el aspecto de
niños, aunque las formas localizadas de la enfermedad "salchichas". En la segunda (esclerótica), la piel aumen-
son las que más se presentan en la niñez y en la adoles- ta de espesor y se torna más tirante. En la última fase
cencia. Su mayor frecuencia es en la tercera y cuarta (atrófica), la piel disminuye de espesor. La mayoría de
década de la vida; predomina en el sexo femenino. To- los pacientes consultan en la segunda fase de la enfer-
das las razas la padecen. medad, cuando la piel está endurecida, difícil de pelliz-
car, con limitación de los movimientos de los dedos,
PATOGENIA disminución de la apertura de la boca y escasa expresi-
El agente causal se desconoce, aunque se ha invo- vidad en la cara.
cado la infección por un virus como posible iniciador de Son frecuentes los cambios de coloración de la piel
la enfermedad. Algunos autores plantean cierta como hiperpigmentación, hipopigmentación y la secuen-
predisposición genética. cia de manifestaciones características del fenómeno de

1198 Tomo III


Raynaud (palidez-cianosis, eritema), el cual se presenta
en el 90 % de las esclerosis sistémicas difusas y en
muchos casos constituye el signo inicial de esta enfer-
medad precediéndola en meses o años. Además pueden
aparecer telangiectasias, calcificaciones y úlceras cutá-
neas secundarias a isquemia, fundamentalmente en la
punta de los dedos de las manos, los cuales se observan
afinados.
La afectación musculoesquelética más frecuente
es la contractura articular. El paciente puede referir
artralgias, rigidez matinal y en ocasiones presentar artri-
tis. Raramente aparece miositis.
En el tubo digestivo lo más frecuente es la disfagia
a los sólidos, siguiéndole los dolores abdominales, cons- Fig. 91.7. Paciente femenina de 11 años con calcificaciones
tipación y en ocasiones diarreas. en partes blandas por síndrome CREST
Las manifestaciones pulmonares aparecen en pe- Investigaciones para el diagnóstico:
ríodos avanzados de la enfermedad. La disnea de es- • Biopsia de la piel afectada.
fuerzo y la tos seca es lo más comúnmente observado. • Capilaroscopia periungueal.
En casos muy avanzados el paciente puede presentar • Determinación de autoanticuerpos.
crepitantes bibasales, derrame pleural e hipertensión
• Electrocardiograma.
pulmonar (HTP).
• Rayos X de tórax.
En la esclerosis sistémica la afectación cardíaca
• Pruebas funcionales respiratorias.
es silente y solo en 20 % de los casos se expresa
• Tomografía axial computarizada de alta resolución.
clínicamente. Constituye la primera causa de muerte en
• Ecocardiograma con doppler.
la esclerosis sistémica infantil, fundamentalmente por
• Esofagograma.
miocarditis. El sistema de conducción y el ritmo cardía-
• Manometría esofágica.
co también se alteran.
• Aclaramiento de creatinina.
La afectación renal es menos severa en los niños.
• Proteinuria de 24 h.
Se presenta en la mitad de estos pacientes, manifestán-
dose por proteinuria, hematuria microscópica, disminu- TRATAMIENTO
ción del filtrado glomerular e hipertensión alterial no Medidas generales:
maligna. • Buena relación médico-paciente-familia.
El sistema nervioso central raramente se afecta, la
• Apoyo emocional al paciente.
neuralgia del trigémino es ocasionalmente un síntoma
• Evitar causas de vasospasmo:
inicial en la ES en el niño.
− Exposición al frío
En la esclerosis sistémica con afectación cutánea
limitada generalmente a cara y manos, los daños − Fumar
sistémicos son tardíos y por consiguiente tienen un pro- − Tensiones emocionales
nóstico mejor. Lo más característico de esta variedad − Traumatismos
de ES es el llamado síndrome CREST ( C=calcinosis,
R=Raynaud, E=alteraciones esofágicas, S=esclero- Medidas físicas y terapia ocupacional:
• Masajes de la piel.
dactilia, T=telangiectasias) (Fig.91.7).
• Movilidad articular.
DIAGNÓSTICO • Apertura de la boca.
Criterio mayor. Esclerodermia proximal a las arti- • Férulas estáticas y dinámicas.
culaciones metacarpofalángicas o metatarsofalángicas. • Baños de agua tibia.
Criterios menores. Esclerodactilia, úlceras
digitales, fibrosis pulmonar bilateral. Medidas dietéticas:
Con el criterio mayor o dos criterios menores • Dieta blanda si disfagia.
(97 % de seguridad), se diagnostica la esclerosis • Dieta muy nutritiva si síndrome de malabsorción in-
sistémica (ES). testinal.

Parte XV. Reumatología 1199


Elevar la cabecera de la cama si pirosis A diferencia de la esclerosis sistémica, la esclero-
Uso de lociones y jabones lubricantes de la piel dermia localizada es la que mayormente afecta a los
Medidas quirúrgicas niños.
• Liberación de calcificaciones. Morfea. Área hiperpigmentada y/o hipopigmen-
• Artroplastia. tada de la piel, una o múltiples, asimétricas, de diferen-
tes formas y tamaños. Inicialmente las lesiones pueden
Tratamiento medicamentoso: estar edematosas, calientes y eritematosas, pero cuan-
Antifibróticos: D-penicilamina (10 mg/kg/día divi- do la enfermedad avanza hacia la cronicidad estas se
dida en 2 ó 3 subdosis por vía oral).
vuelven fibróticas, endurecidas y atróficas, con superfi-
Colchicina (0,5 mg a 1 mg diario dividida en 1 ó 2
cie pulida y brillante, desaparición de los vellos, cese de
subdosis por vía oral).
la transpiración y ligera hipoestesia.
Otros agentes antifibróticos en líneas de investiga-
Las lesiones generalmente se limitan a una parte
ción: Interferón gamma, relaxina.
del cuerpo; las más frecuentes se encuentran en tronco
Inmunosupresores no selectivos: Esteroides:
y extremidades inferiores. Cuando se trata de numero-
prednisona, dosis no mayor de 20 mg diarios (solo en los
sas placas de morfea, en ocasiones confluentes, que afec-
siguientes casos):
tan a gran parte de la superficie corporal, se le denomina
− Artritis o tenosinovitis refractaria.
morfea generalizada (Fig. 91.8).
− Miositis.
− Fase edematosa de la enfermedad.
− Alveolitis.

Metrotexate: 10 mg/m² semanal, dosis única por


vía oral.
Ciclofosfamida. 2 mg/kg/día, 2 subdosis por vía oral
(en casos de alveolitis fibrosante pulmonar).
Inmunosupresores selectivos:
Ciclosporina A: 2.5 mg/kg/día.

Terapia vascular:
Fenómeno de Raynaud:
Bloqueadores de los canales de calcio: nifedipina:
10- 20mg/dosis cada 8 h vía oral.
Diltiazen, verapamilo, felodipino.
Crisis renal hipertensiva:
Inhibidores de la enzima convertidora de la angio-
tensina (ECA)
Captopril, enalapril.
Hipertensión pulmonar:
Antagonista selectivo de los receptores de
serotonina. Ketanserina. 60 a 100 mg/día.
Inhibidores de la ECA. Prostaciclinas. Iloprost. Fig. 91.8. Áreas hiperpigmentadas y endurecidas en la re-
Las manifestaciones gastrointestinales se tratan gión de la espalda de niño de 11 años con placas de morfea.
según los síntomas que predominen.
Pueden usarse antiácidos, antiespasmódicos,
metoclopramida, suplementos dietéticos y vitamínicos. Esclerodermia lineal. Esta forma de esclerodermia
Esclerodermia localizada (EL). Se caracteriza afecta generalmente a niños y adolescentes. Es rara en
por la aparición de lesiones fibróticas en la piel y el tejido los adultos. Las lesiones asientan con mayor frecuencia
celular subcutáneo, sin afectación de órganos internos. en las extremidades, siguiéndole la cabeza y rara vez el
De acuerdo con la presentación de las lesiones se tronco.
En las extremidades la enfermedad se manifiesta
describen dos formas clínicas: morfea y esclerodermia
por lesiones fibróticas en bandas, induradas, con mayor
lineal.

1200 Tomo III


grado de alteración de la pigmentación, las cuales pro-
gresan ocasionando retracciones e hipotrofia de las
estructuras subyacentes, provocando dificultad en el uso
de la extremidad afectada (Fig. 91.9).

Fig. 91.10. Paciente de 4 años con lesiones de hipotrofia de


las estructuras de la hemicara derecha con piel hipercrómica
por esclerodermia localizada.

Los anticuerpos antinucleares están presentes en


el 70 % de todas las formas clínicas de esclerodermia.
La histología de la esclerodermia lineal es similar a
la observada en la ES.
El diagnóstico de la esclerodermia lineal es funda-
mentalmente clínico. La biopsia de la lesión ayuda a des-
cartar otras enfermedades.
Fig. 91.9. Lesión fibrótica, lineal de aspecto nacarado a lo
EVOLUCIÓN
largo de la pierna derecha de una niña de 10 años con
esclerodermia de tipo lineal. La esclerodermia localizada es una enfermedad
autolimitada, con una duración media de 5 años de acti-
vidad por lo que el pronóstico de vida es bueno.
En la cabeza lo más común es que aparezca una
lesión conocida como "golpe de sable", la cual consiste TRATAMIENTO

en una depresión lineal o surco desde la nariz a la frente, Aunque la esclerodermia localizada es una enfer-
pero que se puede extender a cuero cabelludo y cuello, medad autolimitada, debe tratarse cuando la lesión está
de color blanquecino y brillante y con hipotrofia de las activa y crece rápidamente en extensión.
estructuras de la hemicara afectada. Además, un redu- En todos los casos, debe comenzarse tratamiento
cido número de estos pacientes pueden presentar alte- con un antifibrótico, D-penicilamina o colchicina a las
raciones oculares, calcificaciones intracraneales y dosis señaladas anteriormente.
convulsiones (Fig. 91.10). Debe utilizarse antifibróticos más esteroides a do-
sis no mayor de 20 mg diarios de prednisona en las si-
INVESTIGACIÓN guientes condiciones: si lesiones rápidamente progresivas,
Un aumento de la velocidad de sedimentación glo- si lesiones que cruzan articulaciones, si fascitis activa en
bular, eosinofilia e hipergammaglobulinemia policlonal tejido subyacente.
se detecta sólo en la mitad de los casos con morfea También es beneficiosa la aplicación de cremas
generalizada. esteroideas en las lesiones activas.

Parte XV. Reumatología 1201


Otras medidas terapéuticas: La DMJ tiene una incidencia anual aproximada de
− Tratamiento sintomático. 0,2/100 000 habitantes aunque puede ser mayor en
− Terapia física para mantener la movilidad articular. otras regiones, con una prevalencia de 1 a 3,2 por
− Conducta quirúrgica para corregir deformidades millón de habitantes en la edad pediátrica.
severas. La edad promedio de presentación de la DM en el
− Psicoterapia de apoyo. niño es de 7 años con dos picos: uno a los 5 a 6 años sin
predominio de sexo y otro a los 10 años en el que predomina
Dermatomiositis juvenil el femenino. En otros estudios se ha encontrado una pro-
porción inversa; es más frecuente en el varón en una
Las miopatías inflamatorias idiopáticas (MII)
relación 1,3: 1. En nuestra serie de 15 pacientes segui-
engloban a un grupo heterogéneo de patologías que se
dos por 15 años tuvimos 7 pacientes femeninos y 8 pa-
caracterizan por debilidad muscular fundamentalmente
cientes masculinos.
proximal e inflamación no supurativa del músculo es- Algunos autores plantean en relación con la raza
quelético. Dentro de las MII la dermatomiositis (DM) y que es más frecuente en la negra, con un pico de co-
la polimiositis (PM) son entidades específicas con ca- mienzo en el adulto joven negro.
racterísticas clínicas, inmunológicas e histológicas bien
definidas cuyo daño no se limita a piel y músculo sino CAUSA Y PATOGENIA
que se extiende a los diferentes órganos y sistemas y La causa de la PM/DM sigue siendo desconocida,
dan lugar a diferentes síndromes clínicos. sin embargo, existen evidencias como en otras enfer-
Aspectos históricos. La dermatomiositis fue re- medades autoinmunes, que el origen sea multifactorial,
conocida como una entidad clínica específica a finales resultado de la interacción de factores ambientales y una
del siglo XIX por clínicos alemanes: Wagner en 1863 y predisposición genética. A lo largo de los años se han
Unverricht en 1887, quien introdujo el término considerado varios mecanismos en el desarrollo de la
dermatomiositis y señaló además que la forma de pre- enfermedad como una agresión directa por agentes
sentación en el niño tenía mejor pronóstico que la del exógenos, una alteración primaria de la inmunidad o la
adulto. aparición de una respuesta autoinmune. La mayoría de
El primer caso en América no fue documentado los autores coinciden en la teoría de que un factor
hasta 1888. exógeno probablemente infeccioso desencadenaría una
En 1950, con la introducción de la corticoterapia reacción autoinmune que generaría una vasculitis me-
mejoró notablemente el pronóstico de los pacientes diada por inmunocomplejos en un huésped genéticamente
con DM. predispuesto.
Siekert y Fleisher demostraron la utilidad de la La ocurrencia de PM/DM en gemelos monocigotos
transaminasa glutámico oxalacética en la evaluación de y en familiares de primera línea sugiere una predisposición
los pacientes con MII. genética. La DMJ se ha objetivado con mayor frecuen-
A finales de los años 50 y 60 Everet y Curtis y cia en niños que poseen los marcadores genéticos espe-
Banker y Víctor respectivamente hicieron hincapié en cíficos HLA-DR3, HLA-B8 y HLA- DQA1*0501, sin
que características clínicas como la vasculitis y la conocerse cuál de estos marcadores controla la suscep-
calcinosis diferencian la presentación infantil de la del tibilidad o intensidad de la enfermedad. La presencia de
adulto. antiJo1 se relaciona con una mayor frecuencia del mar-
CONCEPTO cador HLA-DRW52.
La dermatomiositis juvenil (DMJ) es una enferme- Entre los factores ambientales son los infecciosos
dad multisistémica, relativamente rara y de causa des- y dentro de ellos los virus sobre los que recae la mayor
conocida, caracterizada por inflamación no supurativa evidencia en cuanto a su participación en la patogenia
del músculo estriado y piel, con presencia de vasculitis de la MII. El mecanismo mediante el cual la infección
como alteración anatomopatológica subyacente y que desencadenaría la enfermedad permanece desconocido.
cursa con debilidad muscular simétrica, rash y aparición Los virus coxsackie de los grupos A y B, los virus ECHO,
tardía de calcinosis. La presencia de vasculitis y el de- el de la rubéola y el de la hepatitis B han sido los más
sarrollo de calcinosis son las características que permi- estudiados en relación con el origen de estas entidades.
ten diferenciar la dermatomiositis del niño de la del adulto. El estudio de la patogénesis de las MII se centra
en las anomalías inmunológicas por la presencia de
EPIDEMIOLOGÍA autoanticuerpos en el suero y las alteraciones de otros
La dermatomiositis juvenil y la polimiositis son las parámetros de la función inmune que implican tanto a
enfermedades reumatológicas sistémicas menos comunes. los sistemas de inmunidad celular y humoral.

1202 Tomo III


Afectación de la inmunidad humoral. Se ha po- En el músculo esquelético se observan cambios
dido comprobar en algunos estudios, la presencia de de- correspondientes a una capilaropatía característica en
pósitos de inmunoglobulinas (Igs), fracciones del el niño con áreas de necrosis focal y fagocitosis de fi-
complemento, complejo de ataque a la membrana (C5b-9) bras musculares, infiltrado inflamatorio de localización
e inmunocomplejos circulantes al nivel de los capilares perivascular formado por macrófagos y linfocitos B y
musculares. T4, presencia de células musculares en regeneración,
En la sangre periférica se ha detectado un aumen- disminución del número de capilares en relación con el
to del porcentaje de células B que producen de forma número de fibras musculares por un lado y por la pre-
espontánea altos niveles de Igs y al nivel del músculo se sencia de vacuolización, necrosis e inclusiones
ha objetivado también un alto porcentaje de células B y tubulorreticulares en la célula endotelial, depósitos de Igs,
una relación elevada de células CD4/CD8 con la consi- oclusiones microvasculares, microinfartos y áreas de
guiente estimulación de los linfocitos B y más produc- atrofia perifascicular característica por el otro.
ción de Igs. Esta afectación vascular se presenta con similares
características al nivel de pequeñas arterias y vénulas;
Por otra parte, se ha descubierto recientemente una
afectan igualmente a piel, tejido celular subcutáneo, sis-
familia de autoanticuerpos, los cuales aparecen casi ex-
tema gastrointestinal, y otros órganos internos, motivo
clusivamente en pacientes con miositis (Ac específicos por el cual la DMJ se considera una vasculitis sistémica
de miositis--AEM). Ellos están dirigidos contra compo- primaria.
nentes celulares intracitoplasmáticos y contra partículas
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
de la maquinaria de la síntesis de proteínas, sin embargo,
se considera que estos anticuerpos no constituyen los De forma general, la DM se presenta con debili-
agentes patogénicos primarios del daño muscular. Cada dad muscular proximal, cansancio, fiebre y rash. El cua-
dro clínico está caracterizado por las manifestaciones
uno de ellos está asociado a un síndrome clínico particu-
generales, musculares, articulares y dérmicas, fiebre de
lar, con un HLA predominante, un comienzo caracterís-
intensidad variable (38 a 40 °C) y otras relacionadas
tico y probablemente una respuesta terapéutica con la afectación de los diferentes órganos y sistemas.
determinada. Las manifestaciones generales están dadas por una
Afectación de la inmunidad celular. Se ha co- astenia marcada, con sensación de enfermedad, irritabi-
municado que los linfocitos y los productos linfocitarios lidad, fatiga, anorexia, pérdida variable de peso; puede
de algunos niños con DMJ son citotóxicos, así como la haber una erupción ligera de piel.
transformación linfoblástica que sufren los linfocitos cuan- Las lesiones de piel representan el síntoma inicial
do se cultivan in vitro con células musculares. de la enfermedad en el 50 % de los pacientes, son debi-
En las biopsias de músculo de pacientes con DM das a la vasculitis subyacente y pueden preceder a la
existe una mayor proporción de linfocitos T CD4 +, de afección muscular en un período variable, en el niño es
linfocitos B y del complejo de ataque a la membrana frecuente que aparezcan a los pocos días o semanas del
localizados principalmente en regiones perivasculares. inicio de las manifestaciones musculares. Suelen dividir-
Probablemente los linfocitos T destruyen directa- se en típicas e inespecíficas.
mente a las células musculares por un mecanismo de Dentro de las lesiones típicas se incluye el rash en
citotoxicidad mediada por células y dirigidas por heliotropo (no patognomónico) y las pápulas de Gottron
antígenos. sí patognomónica de la entidad. El rash en heliotropo es
Por todos los datos anteriormente expuestos existe una coloración eritematoviolácea con telangiectasias en
la hipótesis patogénica que considera que una respuesta ocasiones, con predominio en los párpados superiores y
inmune humoral ocasionaría una afectación muscular de disposición simétrica, que suele asociarse a edema
secundaria a la isquemia. Esto se basa en la presencia de intensidad variable. Su reaparición indica recaída de
de depósitos de Igs, complemento e infiltrado inflamatorio la enfermedad.
formado casi en su totalidad por células B y linfocitos Otros eritemas maculares también de color rojo
T4, dirigidos contra los capilares y por consiguiente la violáceo se suelen observar en el espacio interciliar, sur-
formación de microinfartos y atrofia perifascicular.
co nasogeniano, regiones malares, triángulo del escote,
ANATOMÍA PATOLÓGICA nuca, parte superior de la espalda, zonas de extensión
Las alteraciones características aparecen al nivel de de las extremidades (respetando las regiones
piel y músculo fundamentalmente; aunque otros sistemas palmoplantares) y en ocasiones abdomen. Estas lesio-
como el gastrointestinal pueden estar comprometidos. nes son fotosensibles y pueden ser pruriginosas.

Parte XV. Reumatología 1203


Las pápulas de Gottron se ven hasta en el 80 % de Las manifestaciones musculares constituyen el sín-
los pacientes y consisten en placas eritematovioláceas toma fundamental y consisten en debilidad muscular si-
elevadas o atróficas, lisas y/o escamosas que evolucio- métrica y proximal, acompañada de dolor muscular, así
nan hacia un aspecto brillante por atrofia y con tenden- como de edema indurado. Los principales grupos
cia a la descamación. Se localizan sobre las prominencias musculares implicados son los de la cintura pélvica ma-
óseas de las manos, en particular sobre las articulaciones
nifestándose por imposibilidad de subir escaleras, saltar
metacarpofalángicas e interfalángicas, en codos y rodillas.
o levantarse de una silla o del suelo; de la cintura
Los sitios de depósito de calcio o calcinosis pueden
ser locales o generalizados y ocurren al nivel intracutáneo, escapular que puede pasar inadvertida y se caracteriza
subcutáneo, en la fascia muscular y en el tejido conectivo por dificultad para peinarse o elevar los brazos, de la
alrededor de los haces musculares. Es un problema tar- musculatura flexora del cuello que se objetiva por la di-
dío (desde 6 meses hasta 10 ó 20 años después del diag- ficultad de sostener la cabeza al incorporarnos del plano
nóstico) y discapacitante que ocurre en 30 a 50 % de de la cama y la musculatura faríngea, hipofaríngea y del
casos de DM crónica de comienzo en el niño; es excep- velo del paladar lo cual produce voz nasal y trastornos a
cional en la del adulto. Se producen en áreas sometidas la deglución.
a presión ósea y no suelen resolver con tratamiento. En La afectación articular suele ser frecuente en la
4 niños de nuestra serie se desarrollaron calcificacio- fase inicial de la enfermedad, no es de carácter erosivo
nes, uno de ellos tuvo calcinosis universal.
ni invalidante, afecta a grandes y pequeñas articulaciones
Puede verse hipertrofia cuticular con gran eritema
y presencia de telangiectasias, fácilmente detectables de forma simétrica, semejando una artritis idiopática
por una capilaroscopia del lecho ungueal. juvenil.
Otras lesiones dermatológicas de tipo inespecífico Como en toda enfermedad autoinmune y sistémica
son el fenómeno de Raynaud, dermatitis exfoliativas, se pueden presentar alteraciones al nivel de cualquier
vesículas o ampollas, alteraciones hiperpigmentadas o órgano; los más afectados son los pulmones, el tracto
hipopigmentadas, alopecia, panniculitis, lesiones de gastrointestinal y el aparato cardiovascular; son más raras
mucosas, etc.(Fig. 91.11). las afectaciones renal y del sistema nervioso central.
Las manifestaciones digestivas, además de las al-
teraciones en la deglución y retardo del vaciamiento
esofágico, se van a presentar síntomas relacionados con
los trastornos vasculíticos de base: melena y hematemesis
hasta infarto y ulceración de la pared con la consiguien-
te perforación; esta es una de las causas de muerte en
el niño, además se puede presentar neumatosis intesti-
nal, neumoperitoneo e incluso trastornos de la absorción.
Las alteraciones respiratorias pueden deberse a
broncoaspiración de material alimentario o de secreciones
nasofaríngeas facilitado por la debilidad de la muscula-
tura respiratoria accesoria y los trastornos a la deglu-
ción. Por otra parte puede producirse una neumonitis
intersticial poco sospechada pero no tan infrecuente y
que cursa con tos intensa y disnea.
Las alteraciones cardiovasculares generalmente son
asintomáticas y descubiertas post mortem, no obstante
puede haber trastornos de la conducción y pericarditis.
Desde el punto de vista ocular es frecuente la
retinitis secundaria a vasculitis y degeneración de las
fibras nerviosas retinianas. Puede traducirse por
exudados algodonosos y evolucionar hacia la recupera-
ción espontánea o con tratamiento esteroideo o cursar a
Fig. 91.11. Paciente femenina de 11 años de edad, con DMJ, pérdida completa de la visión.
que presenta lesiones diversas en cuero cabelludo y piel. Al nivel del sistema nervioso central son escasas
Área alopécica importante. las manifestaciones clínicas, algunos han reportado

1204 Tomo III


trastornos del lenguaje y del aprendizaje así como re- Las determinaciones de autoanticuerpos detectan
lajación de esfínteres. hasta en el 60 % de los casos anticuerpos antinucleares
El metabolismo óseo muestra una disminución de positivos. En el niño la presencia de antiMi2 y antiPm-
la actividad osteoblástica con una disminución de la ab- Scl es menor que en el adulto.
sorción del calcio que junto al tratamiento esteroideo van Hay un número elevado de niños con DMJ que
a determinar una reducción variable de la masa ósea. presentan anticuerpos frente a una proteína nuclear de
56 kd, lo cual puede estar relacionado en algunos casos
ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS
con el grado de actividad de la enfermedad.
La elevación de las enzimas musculares es de gran Puede observarse microhematuria y excreción del
valor y constituye un criterio diagnóstico, debiendo ácido gammacarboxiglutámico en niños con calcinosis
medirse las cuatro enzimas derivadas del músculo:
y relacionado con el grado de daño endotelial.
creatinfosfoquinasa (CPK), transaminasas (TGO, TGP),
Otras exploraciones deben incluir estudios
lactato deshidrogenasa (LDH) y aldolasa, ya que en al-
oftalmológicos por la elevada frecuencia de afectación
gunos casos puede estar aumentada una sola de ellas.
Electromiografía (EMG). Su utilidad radica en la ocular en el niño; estudios óseos por la posibilidad de
diferenciación del origen muscular de la afectación mus- estos pacientes de desarrollar osteoporosis; pruebas fun-
cular sea nerviosa o muscular. Las alteraciones son cionales respiratorias; ECG y ecocardiografía para com-
inespecíficas y algunos la consideran no indispensable probar trastornos de conducción y alteraciones
para el diagnóstico. miocárdicas respectivamente, así como estudios contras-
Los cambios que suelen verse se corresponden a tados del aparato digestivo.
una miopatía por la presencia de potenciales de unidad DIAGNÓSTICO Y DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
motora polifásicos, de corta duración y baja amplitud y
El diagnóstico de DMJ se establece ante la pre-
por otra parte a una denervación por observarse
sencia de las típicas lesiones de piel, la debilidad muscu-
fibrilaciones y ondas positivas.
lar proximal y la elevación de enzimas musculares,
La EMG en nuestra serie se realizó a 12 pacien-
tes; fue positiva en el 83,3 %. Repetida tiempo después descartando otras entidades entre ellas el LES. En 1975
a 2 de los casos en los que fue normal de inicio y se hizo Bohan y Peter establecieron los criterios diagnósticos
patológica en 1 de ellos. aún vigentes, pero modificados en los últimos años. Ellos
Biopsia muscular. Constituye un criterio diagnós- incluyen:
tico, aunque se considera no imprescindible en aquellos • Debilidad muscular proximal simétrica.
casos que presentan manifestaciones clínicas típicas • Elevación de enzimas musculares.
asociadas a elevación de enzimas musculares. Por otra • Cambios EMG típicos de miositis.
parte, el hecho que sea normal no descarta la existencia • Rash típico.
de la enfermedad. En nuestra serie de 15 pacientes la • Biopsia muscular que demuestra miositis inflamatoria.
biopsia de piel y músculo se practicó a 8 niños de la que
se obtuvo un cuadro histológico compatible con miopatía Se considera por tanto:
inflamatoria en 7 de ellos (87,5 %). DMJ definida: si reúne de 3 a 4 criterios en pre-
Se debe tomar la muestra de un músculo afectado, sencia de rash.
deltoides o cuadriceps del lado opuesto donde se realizó DMJ probable: si reúne eritema y 2 criterios.
la EMG y realizar estudios histoquímicos e inmunohisto- DMJ posible: si reúne eritema y 1 criterio.
químicos independientemente de la valoración por Para confirmar el diagnóstico es necesario com-
microscopia óptica de la capilaropatía característica de probar 3 criterios además de ser imprescindible la pre-
esta entidad. sencia de rash.
Técnicas de imagen. Los avances tecnológicos El rash obliga a descartar otras entidades del teji-
en el US, la tomografía computarizada, la RMN y la do conectivo como el lupus eritematoso sistémico y los
espectroscopia por RM con fósforo 31 (ERMP) son de síndromes de superposición fundamentalmente.
máxima utilidad para el reconocimiento y seguimiento Si no existen lesiones de piel deben excluirse las
de esta miopatía. causas infecciosas de miositis: virales, bacterianas o
Otros estudios complementarios. El hemograma parasitarias; las miopatías primarias (distrofia muscular,
puede poner en evidencia una linfopenia relativa con miopatías metabólicas); las relacionadas con alteracio-
aumento del porcentaje de linfocitos B y disminución del nes endocrinas (hipotiroidismo, síndrome de Cushing y
número absoluto de los CD8. enfermedad de Addison). Además debe hacerse el diag-
La eritrosedimentación y la proteína C reactiva no nóstico diferencial con las polineuritis, con otras entida-
denotan alteraciones relevantes. des del tejido conectivo como la artritis idiopática juvenil

Parte XV. Reumatología 1205


(AIJ), la esclerodermia, la poliarteritis nodosa, con otras aquellos en quienes se producen efectos indeseables
miopatías inducidas por fármacos y aquellas menos importantes o en enfermedad progresiva que compro-
frecuentes producidas por agentes físicos o asociadas a meta la vida. En ellos se incluyen el methotrexate (MTX),
enfermedades malignas o inmunodeficiencias. ciclosporina A y la azathioprina. Los antimaláricos se
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO reservan para controlar las manifestaciones dérmicas
El curso de esta entidad puede ser agudo hasta en intensas y/o resistentes al esteroide.
el 20 % de los casos en el que se produce una recupera- Las gammaglobulinas intravenosas también han sido
ción total en un plazo medio de 2 años y crónico que es usadas recientemente con buenos resultados.
el más frecuente y evoluciona de 2 formas: En el tratamiento de la calcinosis no hay ninguna
• Policíclica caracterizada por recaídas después de droga que se considere efectiva para la resolución de
retirar el tratamiento variando el tiempo desde me- los depósitos de calcio, entre las drogas más utilizadas
ses hasta varios años después. se encuentran la colchicina, probenecid, warfarina, hi-
• Crónica contínua: la enfermedad se mantiene activa dróxido de aluminio y diltiacem.
durante más de 2 años con exacerbaciones a pesar En la fase aguda de la enfermedad luego de esta-
del tratamiento. blecerse el diagnóstico debe iniciarse fisioterapia con
ejercicios pasivos solamente para evitar contracturas
El resultado funcional final estará muy relacionado musculares y los activos deben realizarse después que
con la presencia de calcinosis y contracturas muscula- haya cedido la inflamación aguda.
res que son más frecuentes en el curso crónico. A todos los niños debe suministrársele un suple-
Hasta el 10 % de los pacientes puede desarrollar mento de calcio y vitamina D3 para prevenir la osteo-
después otra enfermedad del tejido conjuntivo. porosis secundaria al tratamiento fundamentalmente.
El pronóstico ha mejorado notablemente desde la
introducción de los esteroides en el tratamiento en 1950: Vasculitis
disminuyen la mortalidad cuyas causas más frecuentes Las vasculitis comprenden un grupo heterogéneo
son la debilidad muscular progresiva y refractaria al tra- de procesos clinicopatológicos que tienen en común al-
tamiento; la perforación gastrointestinal secundaria a teraciones inflamatorias de las paredes de los vasos san-
vasculitis; las infecciones y la miocarditis. guíneos. La epidemiología es complicada por la relativa
La evolución fue satisfactoria en la mayoría de
rareza y por las variaciones regionales y étnicas; aun-
nuestros 15 pacientes. Solo 2 tuvieron una evolución
que la edad más frecuente de muchas de ellas es la 5ta.
tórpida a pesar de las diferentes conductas terapéuticas
década se pueden presentar en ambos extremos de la
empleadas.
vida; sin embargo, la enfermedad de Kawasaki ocurre
Como índice de mal pronóstico se consideran aque-
solo en el niño y la enfermedad de Schönlein Henoch en
llos casos de curso rápido y gran afectación general,
retardo en el diagnóstico, terapia incorrecta y pobre res- las edades tempranas, la enfermedad a células gigantes
puesta al tratamiento esteroideo. está generalmente limitada a después de los 60 años. Al
ser las vasculitis un grupo de diferentes enfermedades,
TRATAMIENTO la expresión clínica a veces no se relaciona con la
El tratamiento está dirigido a detener el proceso fisiopatología, por lo que las clasificaciones en numero-
inflamatorio y a la recuperación de la fuerza y la función sas entidades no se ajustan a la clínica, ni a su
musculares. Los esteroides constituyen la base angular fisiopatología.
del tratamiento y gracias a su aparición la mortalidad se
ANATOMÍA PATOLÓGICA
redujo de 50 o más a solo el 7 %. Dicho tratamiento
debe ser individualizado. La dosis inicial recomendada Las vasculitis pueden afectar cualquier vaso del
es de 1 a 2 mg/kg/d por vía oral; aunque en los casos de organismo. Casi ninguno de los procesos patológicos es
comienzo severo agudo debe ser valorada la administra- específico. En algunos síndromes, los estudios por
ción intravenosa de pulsos de metilprednisolona y una inmunofluorescencia pueden orientar el diagnóstico; en
vez controlada la enfermedad desde el punto de vista los casos donde se detecta IgM y C3 puede ser demos-
clínico y enzimático se deben disminuir gradualmente trativo de que se trata de una vasculitis por hipersensibi-
para minimizar los efectos secundarios, individualizando lidad; la presencia de IgA y C3 son sugestivos de un
cada caso. Otros medicamentos que se consideran de síndrome de Schönlein Henoch. La superposición en los
gran valor en el tratamiento son los inmunosupresores, cambios patológicos se hace evidente al nivel del riñón.
indicados en los casos refractarios al esteroide, en Las lesiones tienden a ser focales y segmentarias; son

1206 Tomo III


consideradas segmentarias porque se limitan a segmentos • Vasculitis granulomatosas:
del vaso y focales porque no toman todos los vasos del − Granulomatosis alérgica.
mismo calibre; tampoco se toma toda la circunferencia − Granulomatosis de Wegener.
− Granulomatosis linfomatoide.
del vaso con igual intensidad. Las lesiones de la pared − Angeítis primaria del SNC.
del vaso pueden ser necróticas o granulomatosas y el • Arteritis de células gigantes:
infiltrado inflamatorio puede ser por polimorfonucleares, − Arteritis de Takayasu.
linfocitos o eosinófilos. − Arteritis temporal.
• Otras vasculitis:
CLASIFICACIÓN
− Síndrome de Behçet.
Vasculitis primarias: − Enfermedad de Mencha-Haberman.
• Afectando los grandes vasos, medianos y pequeños: − Síndrome de Köhlmeir-Degos.
− Arteritis de Takayasu.
− Arteritis a células gigantes. Tomada de Cassidy JT, et al, 1995.
• Afectando predominantemente medianos y peque-
ños vasos: PATOGENIA
− Poliarteritis nodosa. Basado en estudios en modelos animales, la
− Síndrome de Church-Strauss. patogenia de las vasculitis se atribuyó a inmunocomplejos
− Granulomatosis de Wegener. circulantes solubles que se depositaban en la pared de
• Afectando predominantemente vasos pequeños: los vasos en sitios cuya permeabilidad estaba aumenta-
− Poliangeítis microscópica. da. La activación de la cascada del complemento pro-
− Síndrome de Schönlein Henoch. duce C3a, C5a y C5, 6,7. Estos factores atraen los PMN
− Angeítis cutánea leucocitoclástica. y monocitos que favorecen que se produzca una reac-
• Misceláneas: ción inflamatoria aguda en el sitio de la activación del
− Enfermedad de Buerger.
complemento, que por la producción de enzimas y pro-
− Síndrome de Cogan.
ductos oxidativos son capaces de dañar el tejido. Se en-
− Enfermedad de Kawasaki.
contraron evidencias que sugieren que las vasculitis por
Vasculitis secundarias: hipersensibilidad, el síndrome de Schönlein- Henoch y
• Vasculitis relacionadas con infecciones. poliarteritis nodosa están asociadas a los virus de la
• Vasculitis secundarias a colagenosis. hepatitis B. Sin embargo, no se han podido encontrar
• Vasculitis secundarias a globulinemia mixta esencial. evidencias de que otras vasculitis puedan producirse por
• Vasculitis relacionadas con neoplasias. este mecanismo.
• Vasculitis hipocomplementémica urticarial. En investigaciones posteriores se han encontrado
• Vasculitis postransplante de órganos. moléculas en la superficie de las células endoteliales y
• Síndromes seudovasculíticos (mixoma, endocarditis). en los leucocitos que hacen más comprensible el desa-
rrollo de lesiones inflamatorias. Estas moléculas proteicas
Tomada de la Nomenclatura y clasificación Vasculitis. Artri- encontradas en la superficie de estas células son las
tis Rheum 37:184,1994. integrinas, selectinas y varios miembros de la familia de
inmunoglobulinas. Los leucocitos tienen integrinas y
Vasculitis en niños selectinas; las células endoteliales portan selectinas y
miembros de la familia de inmunoglobulinas princi-
CLASIFICACIÓN palmente ICAM y VCAM. Las integrinas: CD 11b/ CD
• Poliarteritis: 18 se encuentran en las células mieloides y las integrinas
− Poliarteritis nodosa. CD 11a/CD 18 también llamadas LFA-1 se encuentran
− Enfermedad de Kawasaki. en los linfocitos.
− Poliarteritis microscópica. Las selectinas: L- selectina se corresponden con
− Poliarteritis cutánea. los linfocitos y las P-selectinas con las plaquetas; las E-
• Síndrome de Cogan: selectinas en las células endoteliales; las integrinas
− Vasculitis leucocitoclástica. CD11b/CD 18, la CD11a/CD18 y las LFA-1 se adhie-
− Púrpura de Schönlein Henoch. ren a las inmunoglobulinas ICAM-1. Las P selectinas y
− Angeítis por hipersensibilidad. las L selectinas traban a los leucocitos en el endotelio y
− Vasculitis urticarial hipocomplementémica. VCAM -1se une a la integrina VLA-4 con los linfocitos,

Parte XV. Reumatología 1207


células mononucleares y eosinófilos. La inducción de posteriormente se han encontrado anticuerpos de virus
estas moléculas es por citoquinas. de la hepatitis C en ocasiones de la hepatitis A. Existen
Para explicar el papel de estas moléculas se acep- evidencias de que los mecanismos inmunológicos estén
ta que los leucocitos ruedan a lo largo de los vasos por relacionados con inmunocomplejos circulantes que se lo-
acción de las selectinas; se produce primero un calizan en la pared de los vasos; la activación del com-
enlentecimiento de los leucocitos que favorece la unión plemento produce la presencia de citoquinas que
entre las integrinas de los leucocitos y las moléculas de aumentan la permeabilidad vascular y atracción de PMN
adhesión que se hace cada vez más fuerte y que es im- que favorecen la lesión inflamatoria. La aparición de
prescindible para que los leucocitos atraviesen entre las anticuerpos anticitoplasma de neutrófilos (ANCA) en
células endoteliales hacia el foco inflamatorio. algunos casos no descarta la posibilidad de otros meca-
Otro factor que se ha encontrado es de tipo circu- nismos patogénicos.
lante: el anticuerpo anticitoplasma de neutrófilos (ANCA).
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Hay dos tipos de ANCA, uno que responde a la
proteinasa C-ANCA y se ha asociado con la enferme- El cuadro clínico comienza con síntomas genera-
dad de Wegener y otro que responde a la mielopero- les, fiebre, malestar general, decaimiento, astenia, ano-
xidasa. Este anticuerpo puede causar ruptura respiratoria rexia y pérdida de peso importante. En la piel es notable
y producción de lisosomas y radicales libres de O2 que el livedo reticular que a veces se acompaña de lesiones
causan daño endotelial. maculopapulosas y se aprecian nódulos dolorosos; lesiones
También intervienen en la patogenia los anticuerpos de aspectos purpúrico que traducen lesiones necróticas
anticélula endotelial. Los estudios inmunopatológicos han que llevan a gangrena con pérdida de tejidos en la parte
demostrado la intervención de las células T. En algunos distal de las extremidades, principalmente en los dedos
síndromes vasculíticos se ha encontrado que el infiltrado de las manos y pies.
está compuesto principalmente de linfocitos T activados
En el sistema osteomioarticular se manifiesta por
y macrófagos.
mialgias y artralgias. Es frecuente la afectación del sis-
Los mecanismos capaces de activar los linfocitos
tema nervioso central o periférico. En el SNC puede
T parecen ser heterogéneos y pueden variar en los dife-
haber síntomas encefalíticos, hemiparesias, parálisis de
rentes síndromes.
III, IV y VI pares craneales. El sistema nervioso peri-
Poliarteritis nodosa férico se presenta con mononeuritis múltiple o polineuro-
patía sensoromotora, radiculitis. La lesión anatómica se
CONCEPTO inicia en los vasa nervorum al nivel de los nervios afec-
La poliarteritis nodosa (PAN) es una vasculitis poco tados.
frecuente en niños; llamada también enfermedad de La toma renal comienza con proteinuria y hematuria
Kusmaul-Maier y se caracteriza por afectar las arterias y se puede manifestar por un síndrome nefrótico o por
de pequeño y mediano volumen preferentemente, pero una glomerulonefritis, otras veces la hipertensión arterial
puede localizarse en otros órganos. es el síntoma inicial. En el aparato digestivo pueden
ANATOMÍA PATOLÓGICA
aparecer desde síntomas ligeros como dolor abdominal
y vómitos hasta síntomas graves como hemorragias,
Pertenece al grupo de las arteritis necrotizantes,
perforación o infarto de los vasos mesentéricos. Las
es segmentaria y focal y tiende a localizarse en la
manifestaciones pulmonares pueden aparecer como de-
bifurcación de las arterias. En el inicio hay alteraciones
fibrinosas de la íntima con infiltración de polimor- rrames pleurales, infiltrados del parénquima demostrables
fonucleares y se va extendiendo a toda la capa media por rayos X. En el corazón puede afectarse tanto el
con destrucción de la elástica, infiltración de pericardio como el miocardio produciendo arritmias y
mononucleares, formación de aneurismas, trombosis alteraciones de las coronarias, con posibilidad de infar-
secundarias e infartos. Las lesiones pueden estar en eta- to. La toma cardíaca es de mal pronóstico.
pas evolutivas diferentes. EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
PATOGENIA Hay anemia, leucocitosis importante con eosinofilia.
En un principio trató de relacionarse con el La eritrosedimentación se eleva y la proteína C reactiva
estreptococo beta hemolítico; sin embargo, el hallazgo es positiva.
del antígeno de superficie de la hepatitis B o anticuerpos El antígeno de la hepatitis B puede ser positivo. Se
en suero, le confirió a este virus un papel causal; ha descrito en algunos casos ANCAs positivo.

1208 Tomo III


DIAGNÓSTICO CAUSA
El diagnóstico positivo se establece por la biopsia, Las características clínicas y epidemiológicas ha-
se debe recoger la muestra de acuerdo con los órganos cen pensar que es causada por algún agente microbiano,
afectados: piel, músculo, riñón. La angiografía puede pero hasta el momento no se ha podido demostrar nin-
mostrar el o los vasos lesionados. guno específico. Se ha relacionado con estafilococos
productores de toxina 1 del síndrome de shock tóxico.
Criterios diagnósticos de la poliarteritis nodosa: PATOGENIA
• Pérdida de peso de 4 kg o más, no debida a dietas u
En la fase aguda de la enfermedad se producen
otros factores.
una serie de alteraciones inmunológicas: linfopenia, au-
• Livedo reticularis.
mento de linfocitos T-4; descenso de linfocitos T-8; acti-
• Dolor espontáneo o a la palpación en los testículos.
vación de polimorfonucleares; monocitos y macrófagos,
• Debilidad muscular o mialgias.
activación policlonal de linfocitos B. La presencia de un
• Mononeuropatía o polineuropatía.
agente infeccioso o tóxico que actúa como un
• Tensión arterial diastólica mayor de 90 mmHg. Urea
superantígeno produce la activación inmune y el aumen-
o creatinina elevadas.
to de citoquinas circulantes. En la enfermedad de
• Virus de la hepatitis B.
Kawasaki la producción de IL-2 permanece elevada un
• Arteriograma mostrando aneurismas u oclusión de
largo período (más que en otras enfermedades). Es po-
arterias viscerales, no debidas a arterioesclerosis o
sible que los receptores de IL-2 se unan a la IL-2 y
fibrosis muscular.
formen complejos circulantes solubles.
• Biopsia mostrando los signos típicos.
El factor de necrosis tumoral alfa (TNFα) también
está aumentado en la fase aguda de la enfermedad así
(American College of Rheumatology 1990. Se requieren 3 o
como los niveles de interferón gamma, principalmente
más criterios).
los que hacen vasculitis. La IL-6 incrementa los reactantes
TRATAMIENTO de la fase aguda y en la fase de convalecencia alcanza
De entrada se usan los esteroides, la prednisona niveles normales. La IL-8 facilita la quimiotaxis y pro-
de 1 a 2 mg/kg/día o su equivalente. Si no hay respuesta duce infiltración de leucocitos. Tanto la IL-6 como la
favorable se agregan azathioprina a 2 mg/kg/día o IL-8 están aumentados en estos pacientes. El TNFα es
ciclofosfamida oral a 2 mg/kg/día. En los pacientes más responsable de la expresión de moléculas de adhesión
graves se puede usar la vía intravenosa en forma de intercelular tipo 1(ICAM-1) y de ELAM-1. Los pacien-
bolos de ciclofosfamida. tes que desarrollan lesiones coronarias presentan
aumento de ICAM-1 en la fase aguda. El ELAM-1 está
Enfermedad de Kawasaki relacionado con la adhesividad de los polimorfos a la su-
perficie de células endoteliales, mientras que el ICAM-1
CONCEPTO está involucrado en la adhesión de los polimorfos,
La enfermedad de Kawasaki (EK) es una vasculitis monocitos y linfocitos a la superficie de las células
sistémica que ocurre preferentemente en niños pequeños. endoteliales, lo que favorece la formación de trombos.
La lesión de las arterias coronarias con formación de La activación de los linfocitos B en la fase aguda
aneurismas puede ser causa de oclusión y muerte súbita lleva a un aumento de la formación de inmunoglobulinas
por infarto del miocardio. y de anticuerpos citotóxicos frente a las células
EPIDEMIOLOGÍA endoteliales. Por otra parte, los neutrófilos al activarse
La mayor incidencia es entre 1 y 2 años de edad y liberan superóxido, radicales O2 y aumenta la produc-
ción de leucotrienos.
el 80 % ocurre en menores de 4 años. La relación niño/
La activación del sistema inmune en la enferme-
niña es de 1,5:1. Se ha observado en todos los continen-
dad de Kawasaki ocasiona daño celular endotelial y com-
tes, pero es particularmente frecuente en zonas asiáti- prende dos estadíos. Un primer estadío en que las
cas, con las mayores tasas en niños de origen japonés y citoquinas expresan el ELAM-1 e ICAM-1 los cuales
coreano donde las tasas de incidencia endémica anual se unen a los leucocitos y a las células endoteliales y en
son de 50 a 100 casos en menores de 5 años; durante las segundo estadío en que se forman los anticuerpos
epidemias, pueden aumentar en 6 veces el número de citotóxicos frente a nuevos antígenos lo que constituye
casos. Se presentan en brotes epidémicos cada 3 a 5 años. un proceso autoinmune. La migración de macrófagos y
No hay evidencia de transmisión de persona a persona. linfocitos en la zona de inflamación en la fase aguda y

Parte XV. Reumatología 1209


crónica junto a la producción de autoanticuerpos da lu- la fase aguda de la enfermedad. Todo lo cual sugiere
gar a la lesión de las células endoteliales lo que condicio- que la EK es producida por patógenos comunes en ni-
na vasculitis y trombos vasculares. ños genéticamente predispuestos y que la vasculitis es
Por otra parte, como refieren Shulman y cols. el mediada inmunológicamente aunque los agentes están
receptor de las células T (TCR) está compuesta por dos pendientes de ser identificados o confirmados.
cadenas de péptidos alfa / beta y gamma / delta uni-
ANATOMÍA PATOLÓGICA
das por un puente bisulfuro (S-S) y es el responsable del
reconocimiento del antígeno. Cada cadena tiene una re- Los cambios anatomopatológicos se corresponden
gión alfa y beta y una región constante y una región con una vasculitis sistémica que dura aproximadamente
hipervariable. La región variable se une a un determi- 7 semanas y afecta principalmente las arterias coronarias
nante específico. Es concretamente la variabilidad de la y se acompaña además de inflamación de algunos órga-
estructura de la parte distal de las cadenas alfa / beta/ o nos como el corazón y el hígado. Pasa por diferentes
gamma / delta lo que determina el polimorfismo del TCR, estadíos: las dos primeras semanas se aprecia
y la especificidad clonal. La molécula completa del TCR perivasculitis de arteriolas, capilares y vénulas, arterias
además del receptor antigénico específico, está consti- finas y venas y después se inflaman la íntima, adventicia
tuida por una serie de moléculas. El llamado complejo y áreas perivasculares de las arterias de mediano cali-
CD 3 que es indispensable para la transcripción de la bre. Al nivel del corazón se observa infiltrado inflamato-
señal. Al contrario de las inmunoglobulinas, el TCR re- rio de las paredes de los vasos coronarios, con hipertrofia
conoce los antígenos solo como péptidos presentes en el de la íntima, se toma también el tejido de conducción
contexto de una molécula del complejo mayor de auriculoventricular, el miocardio y el pericardio, a veces
histocompatibilidad (CMH clase I o II) por lo que exclu- con presencia de derrame; puede haber compromiso de
sivamente reconoce moléculas extrañas que han entra- las válvulas auriculoventriculares.
do a formar parte de una célula propia. Los linfocitos T Durante las siguientes dos semanas el infiltrado
reconocen dos tipos diferentes de antígenos: inflamatorio disminuye pasando de polinuclear a
• Los péptidos derivados de antígenos proteicos con- mononuclear y se producen aneurismas por fragmenta-
vencionales. ción de la lámina elástica interna y lesión de la media;
• Los superantígenos. disminuye el infiltrado del miocardio, pericardio y
endocardio. Posteriormente, se produce fibrosis y se
El TCR reconoce los antígenos convencionales con observan lesiones cicatriciales de las arterias y el tejido
elementos variables de la cadena alfa o de la beta mien- miocárdico. Puede haber zonas de estenosis de las
coronarias además de los aneurismas. Menos frecuente
tras que los superantígenos se reconocen por algunas
es la aparición de aneurismas y estenosis en las arterias
de las regiones variables de la cadena beta del TCR. El
axilares, ilíacas y arterias de los órganos mesentéricos.
superantígeno uniendo la porción lateral del TCR y las
MCH de clase II hace de puente entre las células T que MANIFESTACIONES CLÍNICAS
expresan determinantes y beta y las células presentado- Síntomas principales. El comienzo de la enfer-
ras de antígeno. Es por esto que los superantígenos ac- medad es abrupto con fiebre elevada de 38 a 40 ºC que
tivan a un número grande de células T, a todas las que dura de 1 a 2 semanas y raramente 2 a 4 semanas; entre
tienen una porción particular beta y el resultado es la el 2do. y 4to. día del inicio aparece congestión conjuntival,
activación y la proliferación policlonal de las células T más acentuada en la conjuntiva bulbar, sin secreción
con la correspondiente liberación masiva de citoquinas. evidente. Los labios muy enrojecidos se secan y apare-
Por otra parte, los superantígenos tienen más probabilida- cen fisuras en ocasiones sangrantes con formación de
des que los antígenos convencionales de producir reac- costras. La mucosa de la boca y la faringe se torna in-
ciones cruzadas con antígenos propios por lo que podrían tensamente enrojecida, sin vesículas ni exudados o mem-
tener un papel muy importante en la producción de en- branas, las papilas de la lengua se hipertrofian tomando
fermedades autoinmunes. un aspecto aframbuesado; estos cambios desaparecen
Otro posible desencadenante, como señalan Qrav- en 2 semanas, aunque los labios pueden mantenerse
Boger y cols., del sistema inmune es la HSP (heat shock enrojecidos hasta 4 semanas (Fig. 91.12). Entre el
protein) que es un antígeno de distintos patógenos primero y el quinto día aparece el exantema en la
bacterianos. En la fase de convalecencia de pacientes cara que lo más frecuente es que sea eritematopapuloso,
con EK se han encontrado en suero niveles elevados de que se extiende por el tronco y extremidades, puede ser
anticuerpos frente a la HSP 65 (antiHSP 65) pero no en morbiliforme o polimorfo y en ocasiones escarlatiniforme

1210 Tomo III


y desaparece conjuntamente con la fiebre. Al mismo La afectación del sistema nervioso central se ma-
tiempo, se presenta enrojecimiento palmar y plantar, nifiesta por irritabilidad y si hay toma encefálica, puede
indurado y edematoso y bien delimitado de la piel del producir convulsiones y ser causa de un LCR anormal
dorso y el tarso; de 10 a 15 días después del comienzo, con pleocitosis a expensas de células mononucleares.
se produce descamación en colgajos muy evidente en La artritis es de tipo poliarticular al nivel de gran-
los dedos de las manos y pies y que puede extenderse des y pequeñas articulaciones. En los ojos además de la
hasta la muñeca. Una adenopatía cervical puede apare- congestión conjuntival, más raramente se puede encon-
cer al mismo tiempo que la fiebre o puede precederla; trar queratitis superficial, iridociclitis, opacidad del vítreo
generalmente es unilateral de más de 1,5 cm de diáme- y edema papilar.
tro y es ligeramente dolorosa.
INVESTIGACIONES COMPLEMENTARIAS
En sangre es común la leucocitosis con desviación
izquierda, trombocitosis, aumento de la velocidad de la
eritrosedimentación, proteína C reactiva positiva. En la
orina, leucocituria y proteinuria ligera. La ecocardiografía
bidimensional es de primordial importancia en la bús-
queda de dilatación y aneurismas de las coronarias. En
ocasiones, es necesario realizar angiografía de las
coronarias.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico se establece por las características
clínicas. Se recomienda aplicar los criterios diagnósticos
que se muestran anteriormente. Cinco de los seis con-
firman la enfermedad; pero con la presencia de cuatro
se puede establecer cuando se comprueba la presenta-
ción de aneurisma de las coronarias por ecocardiografía
Fig. 91.12. Enfermedad de Kawasaki. Paciente de 13 meses bidimensional o angiografía de las coronarias. En el diag-
con lesiones papuloeritematosas en la piel de la cara, inyec- nóstico diferencial hay que considerar principalmente las
ción conjuntival sin exudados, lesiones periorales, enfermedades exantemáticas febriles de la infancia, las
fisuraciones pequeñas en ambos labios. reacciones por hipersensibilidad, el síndrome de Stevens-
Johnson y la artritis idiopática juvenil de comienzo
Otros hallazgos significativos. Si bien los sínto- sistémico.
mas descritos tienen gran valor diagnóstico, las mani- Criterios diagnósticos de la enfermedad de
festaciones al nivel de otros órganos y sistemas le Kawasaki:
confieren severidad al cuadro clínico. • Fiebre de al menos 5 días de duración.
Al nivel del aparato cardiovascular: la carditis pue- Presencia de 4 de las 5 manifestaciones siguientes:
de ser ligera o grave; se auscultan soplos, apagamiento • Inyección conjuntival bilateral.
de los tonos, ritmo de galope y arritmias, llegando a la • Cambios de la mucosa de la orofaringe, incluyendo
insuficiencia cardíaca en algunos casos; en el ECG se faringe enrojecida, labios enrojecidos, secos y
describen: prolongación de los espacios P-R y Q-T y fisurados.
bajo voltaje; a los rayos X cardiomegalia relacionada con • Cambios en extremidades con edema o eritema en
miocarditis o derrame; la ecocardiografía puede demos- las manos o pies, descamación de comienzo
trar dilatación o aneurismas de las arterias coronarias. periungueal.
El infarto del miocardio puede ser la causa de muerte • Rash, primeramente en el tronco, polimorfo pero no
súbita. La lesión de otras arterias como las axilares, vesiculoso.
subclavias e ilíacas, se traducen por alteraciones de los • Adenopatías cervicales.
pulsos en el nivel correspondiente. Raramente se produ- Enfermedades no explicada por otras causas conocidas.
cen necrosis y amputaciones de los dedos. Los síntomas
TRATAMIENTO
gastrointestinales incluyen vómitos, diarreas y dolor ab-
dominal. El compromiso hepático y la hidropesía de la Tan pronto se hace el diagnóstico, el niño debe ser
vesícula biliar pueden dar lugar a hepatomegalia, aumento hospitalizado para comenzar el tratamiento con inmu-
de la bilirrubina o las transaminasas. noglobulina intravenosa (IG i.v.) y aspirina. La IG i.v. en

Parte XV. Reumatología 1211


dosis de 400 mg/kg/día durante 4 días consecutivos o 2 g/kg Púrpura de Schönlein-Henoch
en una sola dosis en infusión a pasar en 10 a 12 h, esta La enfermedad de Schönlein-Henoch o púrpura
dosis que es más eficaz para la prevención de aneurismas, anafilactoide es la vasculitis más común en el niño y
sobre todo si se administra en los primeros 5 días de la clínicamente se caracteriza por lesiones purpúricas de
enfermedad; la aspirina en dosis de 80 a 100 mg/kg/día la piel, artritis, dolor abdominal y disfunción renal.
en dosis fraccionadas, durante la etapa aguda, para des-
EPIDEMIOLOGÍA
pués disminuir a 3 a 10 mg/kg/día o un comprimido de
La incidencia se calcula en 13,5 por 100 000 ni-
81 mg. El mantenimiento de la aspirina va a depender
ños por año. Su mayor frecuencia ocurre entre los 2 y
de la presencia de aneurismas o no y de su desapari- 11 años, aunque se puede presentar a cualquier edad.
ción. Si no existen aneurismas se suspende la aspirina Predomina en el sexo masculino con una proporción
cuando se normalicen la eritrosedimentación y la hombre / mujer de 2:1,5.
trombocitosis. La persistencia de aneurismas requiere el
ANATOMÍA PATOLÓGICA
mantenimiento de la aspirina a dosis de 3 a 5 mg/kg que se
puede asociar a otro anticoagulante de manera prolon- Los vasos afectados son las arteriolas precapilares
gada si estos son gigantes o múltiples. En las este- y los capilares e integran el grupo de las vasculitis
leucocitoclásticas. Muestran un aspecto típico de la frag-
nosis y obstrucciones de las coronarias puede ser
mentación de los núcleos de los leucocitos polimor-
necesario el tratamiento quirúrgico por revascularización.
fonucleares en los estadíos más precoces y se
Se citan casos de transplante de corazón en esta enfer-
acompañan de necrosis fibrinoide y en piel, tracto
medad. gastrointestinal y sinovial; con inmunofluorescencia se
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO observa depósito de IgA y C3.
Generalmente la enfermedad es autolimitada y PATOGENIA
transcurre sin complicaciones. Los aneurismas
Se acepta como mecanismo inmunopatógeno que
coronarios pueden aparecer desde el final de la primera
el proceso inflamatorio es mediado por complejos
semana hasta la cuarta y en ocasiones hasta la octava
semana. Es frecuente que las dilataciones y los peque- antígeno anticuerpos que se localizan debajo del endotelio
ños aneurismas desaparezcan. Los aneurismas gigantes de los vasos afectados, la activación del complemento
y múltiples se mantienen y pueden ser causa de provoca la producción de factores, citoquinas y aminas
tortuosidades, estenosis y trombosis. El diagnóstico pre- presoras, que aumentan la permeabilidad y producen la
coz y el uso de IG i.v. han disminuido el riesgo de las migración de polimorfonucleares con la producción de
complicaciones y de la mortalidad. leucocitoclasis precoz, la presencia de fibrina, necrosis
fibrinoide y la extravasación de hematíes. Por
Poliarteritis nodosa cutánea inmunofluorescencia se puede detectar IgA y C3. Al ni-
La poliarteritis cutánea se caracteriza por la pre- vel renal se produce proliferación mesangial, aumento
sencia de nódulos palpables de coloración violácea que de la matriz y crecientes epiteliales con demostración
pueden aparecer en zonas diferentes, generalmente be- también de IgA y C3.
nignas; pueden acompañarse de artralgias y mialgias,
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
sin otras manifestaciones viscerales. Responden a la
terapéutica con esteroides u otros Aines. Son recidivantes Manifestaciones cutáneas. En la forma tópica, la
independientemente del tratamiento. Las recidivas se han enfermedad comienza por manchas urticarianas
relacionado con infecciones por estreptococo beta- eritematopapulosas que evolucionan hacia un rash
hemolíticos, por lo que algunos autores recomiendan la petequial, purpúrico característico, palpable, a veces con
penicilina benzatínica como profiláctica. prurito; se localiza preferentemente en extremidades in-
feriores, en regiones glúteas, muslos, piernas y pies con
Síndrome de Cogan carácter ortostático, ya que disminuyen con el reposo y
Es una vasculitis que se observa en adultos jóve- aumentan con la deambulación. Este rash cambia de
nes y excepcionalmente en niños. Se caracteriza por una color: rojo, morado, amarillo y desaparecen en 1 a 2 se-
aortitis que puede llevar a la insuficiencia aórtica; se manas; aparecen por brotes. En ocasiones, pueden pro-
acompaña de queratitis intersticial, sordera y disfunción ducirse en extremidades superiores, la cara y la espalda.
vestibular, clínicamente presenta fotofobia, sordera y Puede presentarse edema del cuero cabelludo, párpa-
vértigos. Los síntomas remiten con corticoides. dos y cara.

1212 Tomo III


Manifestaciones musculoesqueléticas. Las En un alto porcentaje de casos puede aparecer
artralgias y artritis se presentan en más del 50 % de los sangre oculta en heces fecales.
pacientes. Las articulaciones tomadas son tobillos, los La urea, creatinina y el filtrado glomerular permi-
más frecuentemente afectados, rodillas y muñecas. Los ten conocer la función renal. Si se sospecha pancreatitis
síntomas articulares son dolor espontáneo y a la movili- debe realizarse amilasa. La sospecha de otras compli-
zación, la tumefacción con predominio periarticular, aun- caciones, obligaría a efectuar otros estudios complemen-
que puede haber sinovitis con líquido de tipo seroso, no tarios como US, TAC y RMN.
hemático, de intensidad variable, no son migratorias, pero DIAGNÓSTICO Y DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
pueden ser recurrentes.
El diagnóstico es principalmente clínico, sobretodo
Manifestaciones del aparato digestivo. El dolor
si se presenta la tríada de púrpura, artritis o artralgia y
abdominal puede ser intenso y asociarse a vómitos, se
dolores abdominales. Cuando uno de estos síntomas es
puede observar sangre macroscópica u oculta en heces.
ligero o pasa inadvertido, habrá que hacer el diagnóstico
Tienen una frecuencia variable entre 35 y 55 % de los
diferencial con otros procesos como la púrpura tromboci-
casos. Es causado por extravasación de líquido y sangre
topénica inmunológica, la púrpura por hipersensibilidad,
en la submucosa, o en la pared del intestino y puede ser
las infecciones como la meningococcemia, el síndrome
causa de invaginación intestinal. Pueden encontrarse
hemolítico urémico, las leucemias, etc.
ulceraciones, pancreatitis e hidropesía de la vesícula bi-
liar. La invaginación debe sospecharse en los casos de EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
dolor intenso y se puede detectar por ultrasonido del El pronóstico de la púrpura de Schönlein- Henoch
abdomen, generalmente es ileocecal. es bueno en los casos típicos que no presentan toma
Manifestaciones renales. La afectación renal en renal o lesiones del SNC. Dura entre 4 y 8 semanas.
el síndrome de Schönlein Henoch es variable. Lo más fre- Puede ser recurrente y se señala que en ellas los síntomas
cuente es que se produzca una hematuria microscópica son generalmente menos intensos, los más frecuentes
aislada o asociada a una proteinuria discreta que des- en recurrir son la artritis y la hematuria. Si hay afecta-
aparece con los demás síntomas. En ocasiones, se ins- ción renal se mantiene la hematuria con la posibilidad de
tala una glomerulonefritis que puede, en el peor de los
evolucionar hacia una insuficiencia renal.
casos, evolucionar a la insuficiencia renal terminal. En
cualquiera de las modalidades de glomerulonefritis se TRATAMIENTO
detecta por inmunofluorescencia la IgA, preferentemente El tratamiento está en relación con la intensidad de
mesangial. Además del riñón otras estructuras del apa- la enfermedad y la ocurrencia de complicaciones. En
rato genitourinario se pueden presentar como hemato- los casos ligeros, la enfermedad puede desaparecer con
ma de la pared vesical, uretritis, hemorragia del cordón reposo y observación, siempre vigilando la aparición de
espermático y hemorragia e inflamación de los testícu- agravamiento a través de la realización de exámenes de
los, de la pared escrotal con riesgo de torsión del testículo. orina, tensión arterial, sangre oculta en heces, así como
Otras manifestaciones. Más raramente pueden otros síntomas en aparatos y sistemas. En los casos de
presentarse como hemoptisis que traducen hemorragia cólico, sangramiento digestivo y vómitos está indicado la
pulmonar que puede llevar a la muerte. Al nivel del sis- prednisona a 1 a 2 mg/ kg / día por vía intravenosa. En
tema nervioso aparece cefalea, irritabilidad; la vasculitis los pacientes con sangramiento digestivo, la ranitidina a
del SNC puede presentar hemorragia intracraneal, con- 5 mg/kg puede ayudar.
vulsiones y hemorragias subaracnoideas. En las complicaciones pulmonares, testiculares y
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
del SNC se indica también la prednisona. Cuando apa-
rece la complicación renal se trata el paciente en rela-
El hemograma suele ser normal, pero si existe
ción con el tipo de lesión, determinada preferentemente
sangramiento presenta anemia. La eritrosedimentación
por biopsia renal. Si la evolución condujera a la insufi-
puede estar aumentada así como la cifra de plaquetas.
ciencia renal crónica terminal, son tributarios de
La IgA puede ser normal o elevada así como la transplante.
IgM y la IgG G y el C3.
Puede comprobarse disminución del factor VIII de Angeítis por hipersensibilidad
la coagulación en los casos en que se presentan diátesis
hemorrágica. CONCEPTO
El examen de orina se debe realizar en todos los Este cuadro se consideraba relacionado con la ad-
pacientes por la presencia de hematíes y de proteínas. ministración de sueros heterólogos como el de la difteria

Parte XV. Reumatología 1213


y el tétanos y se denominaba enfermedad del suero; ac- anticitoplasma de neutrófilos (ANCA) y eosinofilia le
tualmente por su escasa utilización, se observa más bien han conferido una denominación diferente. Es más fre-
con la ingestión de medicamentos y en ocasiones, no se cuente en el sexo masculino y tiene una incidencia baja.
determina el agente productor. Es una enfermedad tipo Desde el punto de vista anatomopatológico se ca-
producida por inmunocomplejos y se encuadra dentro racteriza por una vasculitis necrozante granulomatosa
de las vasculitis leucocitoclásticas afectando las
con infiltración de eosinófilos que afecta el aparato respi-
arteriolas, capilares y vénulas.
ratorio con predilección de los vasos pequeños, aunque
MANIFESTACIONES CLÍNICAS pueden afectarse arterias, venas pequeñas y medianas;
Generalmente comienzan 1 ó 2 semanas después los nódulos granulomatosos están rodeados de eosinófilos,
del contacto con el antígeno, pero si con anterioridad el células plasmáticas, linfocitos, células gigantes e
paciente ha presentado alguna reacción con este, pue- histiocitos.
den comenzar entre 1 a 3 días. Los síntomas de fiebre y
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
malestar general se acompañan de una erupción cutá-
nea de tipo urticariano que se hace purpúrica y además Esta afección se presenta en pacientes con histo-
puede presentar edema de la cara, mialgias y artralgias ria de alergia y asma. En ocasiones se desarrolla por
y trastornos digestivos como dolor abdominal o vómitos. etapas; primeramente un aumento de las manifestacio-
Habitualmente es autolimitada y dura días. nes alérgicas y del asma seguida de eosinofilia y final-
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
mente vasculitis.
Desde el inicio de la enfermedad pueden aparecer
Puede tener leucocitosis y eosinofilia, con
eritrosedimentación acelerada.En la orina puede apare- fiebre, malestar general y pérdida de peso. En la medida
cer hematuria ligera y proteinuria transitorias. Hay que la enfermedad progresa el asma puede mejorar. En
hipergammaglobulinemia e inmunocomplejos circulantes la piel pueden aparecer petequias y ulceraciones. Se
aumentados. En la biopsia de piel hay infiltración de producirá falta de aire y molestias respiratorias debidas
neutrófilos, eosinófilos, con los fragmentos nucleares tí- a las lesiones pulmonares. En los rayos X de pulmón se
picos de las vasculitis leucocitoclásticas. observan infiltrados focales y transitorios.
Pueden producirse derrames pleurales y el líquido
DIAGNÓSTICO
pleural puede contener abundantes eosinófilos. En el
Con la identificación del agente causal y las carac-
aparato cardiovascular se pueden presentar hipertensión
terísticas clínicas, las que generalmente aparecen en la
arterial, pericarditis e infarto del miocardio. Puede apa-
misma etapa evolutiva, se puede definir el síndrome.
Cuando el agente no puede ser identificado debe coinci- recer dolor abdominal y es posible el desarrollo de
dir con las características de la biopsia, con la presencia glomerulonefritis, pero esta no es progresiva.
en la inmunofluorescencia de IgA, IgM, IgE o C3. Pue- Las afecciones del sistema nervioso son poco fre-
de hacerse crónica y clínicamente hay que diferenciarla cuentes, aunque a veces se manifiesta una neuropatía
del síndrome de Schönlein Henoch, crioglobulinemia e periférica.
infecciones, así como de otras enfermedades como la DIAGNÓSTICO
urticaria hipocomplementémica y con la endocarditis
Se debe sospechar en un niño con historia de asma
bacteriana.
que presente síntomas de enfermedad sistémica con
TRATAMIENTO eosinofilia marcada, en cuyo caso debe realizarse biopsia.
Consiste en evitar el antígeno responsable, predni-
sona 1mg/kg/día. Se pueden usar los antihistamínicos si Criterios diagnósticos
hay prurito. • Asma.
• Eosinofilia mayor de 10 %.
Granulomatosis alérgica • Neuropatía.
CONCEPTO • Infiltrados pulmonares (no fijos).
Conocida también como síndrome de Church- • Anomalías de los senos paranasales.
Strauss, se puede presentar a cualquier edad, pero es • Eosinófilos extravasculares.
rara en niños. Durante un tiempo largo se consideraba
como una PAN con asma, pero la presencia de The American College of Rheumatology, Arthritis
granulomas y su asociación con anticuerpos Rheum. 1990.

1214 Tomo III


TRATAMIENTO aparece una rinitis crónica o sinusitis que se agrava. Se
Se indica esteroides: prednisona o sus equivalen- produce secreción nasal purulenta o sanguinolenta y
tes. De no haber respuesta: azathioprina o ciclofos- expresa dolor en lo senos perinasales y la aparición de
famida. úlceras orales y nasales acaban por determinar la des-
trucción de los tejidos nasales que llevan a la deformidad
Granulomatosis de Wegener en silla de montar.
Las lesiones pulmonares en ocasiones son
CONCEPTO asintomáticas pero generalmente son dolorosas, con
La granulomatosis de Wegener es una vasculitis esputos purulentos o sanguinolentos y hemorragias. Se
poco común; se puede observar a cualquier edad pero produce estenosis subglótica y lesiones traqueales.
es más frecuente en el adulto joven, con ligera prepon- Los síntomas oculares se manifiestan por
derancia en el sexo masculino, pero algunos autores se- epiescleritis, uveítis y proptosis causados por granulomas
ñalan que en los niños predomina en el sexo femenino. orbitarios.
Puede ocurrir neuropatía periférica, en la piel
PATOGENIA ulceraciones, nódulos y púrpuras.
La afectación del tractus respiratorio alto y bajo Cuando se toma el riñón, se expresa por proteinuria,
sugiere la posibilidad de un antígeno inhalado. La hematuria y cilindros hemáticos.
respuesta de algunos pacientes a la ingetión de
EXÁMENES DE LABORATORIO
trimetropina-sulfametoxazol principalmente en las
recidivas hace pensar que los agentes infecciosos jue- Puede haber anemia normocítica, normocrómica;
gan algún papel en la enfermedad. Entre los mecanis- leucocitosis y ligera eosinofilia. Los reactantes de fase
mos inmunológicos se ha citado la activación de los aguda como la proteína C reactiva y la eritrose-
linfocitos T4, la producción de complejos antígeno- dimentación están alterados.
anticuerpos que se adhieren a los vasos provocando la Los c-ANCA son característicos de esta enfer-
reacción inflamatoria. La presencia de anticuerpos medad con 80 al 90 % de positividad en los casos acti-
anticitoplasma de neutrófilos, específicamente los que vos y tienen una gran importancia.
responden a la proteinasa 3 en la enfermedad y la de- En los rayos X de tórax hay nódulos infiltrados que
mostración de que es importante para el diagnóstico y el se cavitan frecuentemente.
tratamiento, prueban la intervención de estos c-ANCA La biopsia muestra una granulomatosis necrotizante
en la patogenia y la presencia de TNFα con los ANCA que invade arterias y venas pequeñas.
son capaces de dañar el endotelio. Por otra parte, se ha DIAGNÓSTICO
demostrado in vitro que la asociación de ancas, conjun- Debe sospecharse en pacientes con ulceraciones
tamente con la disminución de la alfa 1 antitripsina tam- orales o nasales, progresivas. La positividad de los c-
bién son más activos. La intervención de otras citoquinas, ANCA tiene un gran valor diagnóstico. Deben ser ex-
moléculas de adhesión, anticuerpos anticélula endotelial, cluidas otras enfermedades respiratorias como la
intervienen en el mecanismo, permitiendo la constitución tuberculosis, infecciones por hongos, la granulomatosis
del foco inflamatorio. linfomatoide y el síndrome de Church - Strauss.
ANATOMÍA PATOLÓGICA TRATAMIENTO
Afecta a vasos de pequeño y mediano calibre Se indica una combinación de esteroides y
(arteriolar, capilares y vénulas), en ocasiones arterias; ciclofosfamida por vía oral, si hay remisión se mantiene
se produce una inflamación granulomatosa con necrosis la ciclofosfamida durante un año.
fibrinoide e infiltración, primero de polimorfonucleares y También se ha usado la gammaglobulina
después linfocitos, monocitos e histiocitos y células gi- intravenosa con buenos resultados.
gantes con destrucción de la elástica al nivel del tracto En casos localizados se ha usado el trimetropín -
respiratorio alto y bajo. En el riñón se produce una sulfametoxazol.
glomerulonefritis focal y segmentaria y con menor fre- Pueden producirse recidivas.
cuencia una nefritis intersticial.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Vasculitis primaria del sistema nervioso central
Al comienzo, los pacientes se presentan con sig- Las vasculitis localizadas en el sistema nervioso
nos generales, no específicos, con fiebre, malestar ge- central reciben el nombre de angeítis o vasculitis prima-
neral, pérdida de peso, artralgias y mialgias; después ria o aislada del SNC. Afecta vasos de mediano y

Parte XV. Reumatología 1215


pequeño tamaño, principalmente del cerebro, pero tam- lesiones son focales y segmentarias. Puede ser afecta-
bién puede tomar médula y meninges. da la arteria pulmonar.
EPIDEMIOLOGÍA MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Se puede presentar a cualquier edad; predomina En las primeras fases de la enfermedad los sínto-
en varones entre 40 y 50 años. Se han descrito pocos mas son inespecíficos, tales como malestar general,
casos en menores de 18 años. artralgias y sinovitis ligera; lesiones que sugieren erite-
PATOGENIA ma nodoso pueden ser observados en las extremidades.
Se desconoce su etiopatogenia pero se han visto ca- La enfermedad progresa con una velocidad varia-
sos asociados a linfomas reticulares, herpes zoster y HIV. ble y después de semanas o meses aparecen síntomas
relacionados con insuficiencia vascular: enfriamiento de
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
extremidades, cefalea, amaurosis o diplopía. La tensión
Los síntomas precoces son la cefalea, confusión y arterial se eleva debido a estenosis de las arterias
pérdida de las funciones intelectuales; después van subclavias. En las extremidades inferiores aparece clau-
apareciendo convulsiones o síntomas de focalización
dicación en relación con la localización en la aorta ter-
y parálisis de pares craneales. Su evolución puede ser
minal o ilíacas. El estrechamiento de las mesentéricas
mortal en pocas semanas o progresivamente crónica y
se manifiesta al nivel abdominal y la toma de los vasos
durar años.
cervicales se traduce por isquemia cerebral.
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS Se observan diferencias de presión arterial de más
Los más significativos son la eritrosedimentación de 10 mm de Hg entre miembros superiores e inferiores
que está elevada y el líquido cefalorraquídeo, con au- y las lesiones al nivel de las arterias renales puede pro-
mento discreto de linfocitos y proteinorraquia marcada. ducir hipertensión arterial.
La angiografía cerebral es la investigación más impor- Pueden escucharse soplos en diferentes niveles en
tante frente a la sospecha de la enfermedad y puede relación con el o los vasos estenosados. La aparición de
mostrar aneurismas, oclusiones y otras irregularidades angina pectoris estará en relación con las lesiones de
de los vasos intracraneales. En niños se ha descrito con aortitis si afectan al ostium de las coronarias.
relativa frecuencia un cuadro neurológico al que se le ha EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
dado el nombre de enfermedad de Moya-Moya, que se
En la etapa inflamatoria hay anemia normocítica,
caracteriza por un patrón angiográfico donde se obser-
aumento de velocidad de la eritrosedimentación y
van irregularidades de las arterias que rodean el polígo-
trombocitosis. El ECG puede mostrar isquemia. Los ra-
no de Willis dando una imagen descrita o comparada
yos X de tórax detectan la dilatación de la aorta torácica.
con "bocanadas de humo" y que algunos autores la con-
En el ultrasonido se detectan estenosis, aneurismas y
sideran dentro de las angeítis primarias del SNC.
obstrucciones a diferentes niveles de la aorta o sus ra-
Arteritis de Takayasu mas principales. La arteriografía demuestra estre-
chamientos, aneurismas y oclusiones en la aorta o sus
CONCEPTO ramas proximales. Los estudios de tomografía y reso-
La arteritis de Takayasu, también llamada "enfer- nancia magnética son muy útiles para corroborar los
medad sin pulso" es una vasculitis crónica que afecta la hallazgos de la angiografía y la evolución de las lesiones.
aorta y sus ramas. Es poco frecuente en el niño y des-
DIAGNÓSTICO
pués de los 40 años; puede verse en cualquier parte del
mundo, es más frecuente en mujeres de origen asiático El diagnóstico se establece por la clínica y los estu-
en una proporción de 9 a 1. En estudios realizados en dios angiográficos.
Japón se encontró un mayor riesgo y severidad en pa- TRATAMIENTO
cientes HLA B 52. La mayoría de los pacientes responden a los
ANATOMÍA PATOLÓGICA esteroides y al cesar la actividad de la enfermedad se
Es una arteritis a células gigantes, donde las lesio- rebajan, sin que exista recaída. Cuando se mantiene la
nes iniciales se localizan en los vasa vasorum de la ad- actividad con esteroides se agrega ciclofosfamida dia-
venticia, la presencia de linfocitos Th 1 parece estimular riamente o methotrexate 1 vez por semana. Algunos
la infiltración de macrófagos y células gigantes. Las pacientes mantienen actividad y están asintomáticos por

1216 Tomo III


lo que se evolucionan realizando estudios angiográficos de los casos y en el 48 % es el primer síntoma que apare-
seriados. Individuos clínicamente silentes pueden nece- ce. Son dolorosas, generalmente miden menos de
sitar cirugía, ya que tienen actividad por lo que debe to- 10 mm, a veces más, se localizan en cualquier lugar de
marse biopsia en todos los casos operados. la mucosa y son recidivantes (Fig. 91.13). Las
ulceraciones genitales tienen las mismas características
Enfermedad de Behçet que las lesiones orales, también recidivantes, pero apa-
recen con menos frecuencia (74 %) en los pacientes.
CONCEPTO
La enfermedad de Behçet (EB) inicialmente co-
nocida como una tríada constituida por úlceras orales,
genitales y uveítis, actualmente se conceptúa como una
vasculitis multisistémica. Su primera descripción se debe
a un oftalmólogo griego Adamantiades en 1931, pero
lleva el nombre de un dermatólogo turco, Hulusis Behçet
que valoró la importancia de la tríada e hizo considera-
ciones en relación con una causa viral.
EPIDEMIOLOGÍA
Es una enfermedad universal, pero es más frecuen-
te en el lejano y medio oriente y en el Mediterráneo, su
mayor incidencia es en Turquía. Es más frecuente en el
adulto joven, con predominio del sexo masculino. En la
mujer es más moderada.
PATOGENIA
Se considera como una enfermedad multifactorial,
donde intervienen factores ambientales que actúan en
individuos inmunogenéticamente predispuesto. Los es-
tudios del HLA muestran una asociación del HLA-B5,
principalmente al HLA-B51.Este antígeno no se ha en-
contrado en individuos anglosajones. Se ha asociado al
HLA-B12 para las formas cutaneo-mucosa y al HLA-
B27 en pacientes con sacroileítis. Se han descrito casos
familiares.
Se han encontrado alteraciones inmunológicas
como hipergammaglobulinemia del tipo IgG, IgA e IgM. Fig. 91.13.Paciente femenina de 7 años de edad con
ulceraciones en la mucosa oral por enfermedad de Behçet
No se han encontrado anticuerpos antinucleares, hay
inmunocomplejos circulantes y autoanticuerpos contra
mucosa oral y genital y cardiolipina. Manifestaciones cutáneas. Son frecuentes los
La inmunidad celular está alterada; muestra dismi- nódulos de forma redondeada u oval de color rojo violá-
nución de linfocitos T periféricos y los linfocitos CD4, ceo, muy parecidos al eritema nudoso cuando se locali-
con aumento de los CD8 sobre todo antes de los brotes. zan en las extremidades inferiores, también se pueden
Desde el punto de vista de las infecciones, la posi- observar pápulas, vesículas y ulceraciones. La intensa
bilidad del virus del herpes simple-1 es el más estudiado hipersensibilidad es causa del llamado"signo del
y se ha encontrado un aumento de los anticuerpos HSV-1. pinchazo", que se provoca cuando se pincha en cual-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS quier parte de la piel con una aguja estéril, se gira, se
La EB es rara en niños y de difícil diagnóstico ya saca y se lee a las 24 h, la positividad consiste en la
que no existen criterios serológicos, bioquímicos y de aparición de una pápula seguida de una pústula estéril.
anatomía patológica específicos, por lo que los signos En los niños es rara su producción.
clínicos son muy importantes en todos sus aspectos. Afectación articular. Se observan artralgias o ar-
Manifestaciones mucosas. Las aftas orales son tritis que toman grandes articulaciones como rodillas y
las lesiones más frecuentes, se encuentran en el 100 % tobillos, en menos de 4 articulaciones y que no producen

Parte XV. Reumatología 1217


deformidades. Se acompañan de fiebre y agravación de Otros medicamentos como la talidomida y el FK
las ulceraciones y lesiones de la piel y evolucionan por 506 se han ensayado en la EB, cuyos efectos tóxicos
brotes. deben tenerse en cuenta.
Afectación vascular. Puede lesionar vasos de to-
dos los calibres, tanto venas como arterias, produciendo Síndrome de Köhlmeir-Degos
trombosis venosas profundas o superficiales. Las alte- Es una enfermedad muy rara, pero puede ser mor-
raciones arteriales, son menos frecuente pero de mal tal. Es una vasculitis que lesiona arterias de pequeño y
pronóstico, al tomar los grandes troncos arteriales como mediano calibre a niveles de la piel y aparato
la arteria pulmonar, la aorta abdominal y roturas de gastrointestinal y que consiste en una oclusión progresi-
aneurismas. va vascular. Se conoce con el nombre de papulosis
Afectación ocular. Son características la uveítis atrófica maligna.
anterior o iridociclitis y la uveítis posterior con
coriorretinitis. Las complicaciones son graves: catara- Bibliografia
tas, glaucoma y otras que pueden llevar a la pérdida de Artritis idiopática juvenil
la visión. Ansell B. M. Albert E. Inmunogenetics of Juvenil Chronic artritis.
Afectación neurológica. Se presentan alrededor Scand. J. Rheumatology Sup. 1987;66:85-91.
Burton D. Clinical Spectrum of antineutrophil cytoplasmic
del 27 %. Las más frecuentes son las meningoencefalitis, antibody. Up Todate 2000;800-998.
la hipertensión intracraneana benigna y neuropatía Coto C, Varela G, Hernández V et al. Uso de interferon gamma
periférica. Otras menos frecuentes como el síndrome recombinante in pediatric patients with advanced JCA.
Biotherapy 1998; 11:15-20.
piramidal, el síndrome cerebeloso y otras más raras. Cassidy JT. Artritis Idiopática Juvenil en: Kelly's: Tratado de
Afectaciones de otros sistemas y aparatos como Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003;
el pulmonar, digestivo y renal son posibles. 3:1294-1312.
Giannini EH, JamesT. Cassidy et al. Seminars. Arthritis Rheum
DIAGNÓSTICO August 1993; 23 (1): 34-46.
Guillaume S, Prieur AM, Coste J. Long-term outcome and
No ofrece dificultades cuando está presente la
prognosis in oligoarticular-onset juvenile idiopathic
tríada característica. Hay casos atípicos donde el arthritis.Arthritis Rheum 2000;43: 1858-1865.
diagnóstico se dificulta y es necesario descartar otras Lowell DJ, Giannini E et al. Safety and efficacy of Embrel
enfermedades que cursan con aftas orales u otras com- (etanercept).Arthritis Rheum 1999; 42 5 (Sppl) S117.
Lovell DJ., Giannini EH. et al. Etanercept in children with
binaciones de síntomas.
polyarticular juvenile rheumatoid arthritis. N Eng J Med.
EVOLUCIÓN March 16, 2000; 342: 763-769.
Mier R, Lowell D et al. Medication choices in Juvenile
Cursa con brotes de 2 a 4 semanas de duración Rheumatoid arthritis. J.C.R. Oct. 1996; 2 (5).
con períodos de remisión más o menos largos. La uveítis Petty RE: Revision of the proposed for Clasification criteria for
tiene un mal pronóstico en relación con la visión, por lo Juvenil Idiopatic Arthritis. J Pediatr 1999;135:316-320.
que debe ser atendida por el oftalmólogo. Petty RE, Southwood TR, Manners P, et al. International League
of Associations for Rheumatology. International League of
TRATAMIENTO Associations for Rheumatology classification of juvenile
idiopathic arthritis: second revision, Edmonton, 2001. J
El tratamiento estará en relación con la severidad
Rheumatol. 2004; 31:390-392.
y el predominio de los síntomas en cada paciente. En la Reiff O. Treating JRA in the new millemium. 11,2001;WYE 111.
fase inflamatoria aguda se recomienda los esteroides a Rosenberg A. Petty R. Reiter diseases in children. Arthritis and
dosis altas, 2 mg/kg/día de prednisona o su equivalente. Rheum 1982; 25:1041-1047.
También se han administrado pulsos de metilprednisolona Romicka AM.Classification criteria and clinical picture of juvenile
idiopathic arthritis.Pol Merkuriusz Lek 2002 Feb;12
a 1 g/m² durante 3 días consecutivos. Si hay uveítis se (68):157-9.
usan medicamentos como el clorambucilo que es eficaz Roberton DM, Cabral DA, Malleson PN, Petty RE. Juvenile
pero con toxicidad importante: esterilidad y riesgo de psoriatic arthritis:followup and evalution of diagnostic
leucosis. La ciclosporina se recomienda también y se criteria. J Rheumatol 1996;25:1041-1047.
Salvatierra RD, Salvatierra OJ, Raya AE, Sánchez MR. Artritis
refieren buenos resultados aunque es nefrotóxica. Cuando
idiopática Juvenil en : Reumatología Infantil Ed Formación
predominan los síntomas cutáneos, mucosos o articulares Alcalá: Formación Continuada de Pediatría:2004, Vol 8
se recomienda la colchicina en dosis de 0,5 a 1,5 mg/día ;8:159-186.
de acuerdo con la tolerancia, vigilando los efectos se- Verbsky JW, White AJ. Effective use of the recombinant
cundarios generalmente digestivos, si se tolera puede interleukin 1 receptor antagonist anakinra in therapy resistant
systemic onset juvenile rheumatoid arthritis. J Rheumatol.
usarse por un tiempo largo y parece prevenir las recidivas. 2004;31:2071-2075.

1218 Tomo III


Wallace C: The use of methrotexate in chilhood Rheumatoid Tarasova LN, Drozdova EA. Clinical features of HLA-B27
disease. Arthritis Rheum March 1998; 41: 3. positive and negative uveitis Vestn Oftalmol 2000 May-
Weiss IH,Wallace CA, Sherry D. Methrotexate for resistant Jun;116(3):25-7
chronic with juvenile rheumatoide arthritis. Eye clinic. J
Pediatric 1998. Lupus eritomatoso sistémico
Woo P, Southwood TR,Prieur AM. Randomized, placebo- Barron KS, Silverman ED, Gonzalez J, Renbeille JD: Clinical,
contolled,crossover trial of low-dose oral metotrexate in serologic and inmunogenetic studies in childhood onset
children with extended oligoarticular or systemic arthritis. systemic lupus erythematosus. Arthritis Rheum 1993:63:348
Arthritis Rheum 2000;43:1849-1857. Bartosh SM, Fine RN, Sullivan EK.Outcome after transplantation
of young patients with systemic lupus erythematosus: a
Espondiloartropatías de inicio juvenil report of the North American pediatric renal transplant
cooperative study. Transplantation 2001 Sep 15;72(5):973-8
Ansell BM,Hall MA, Loftus JK, et al. A multicenter pilot study
Boumpas DT, Austin H, Fessler BJ, Balow JE, Klippel JH,
of sulphazalazine in juvenil chronic arthritis. Clin Exp
Lockshin M. Systemic
Rheumatol 1991; 9: 201-3 lupus erythematosus: emerging concepts. Part 1 Ann Intern Med
David Tak Yan Yu,Peng Thin Fau Síndrome de Reiter y 1995; 122: 940- 950.
espondiloartropatías indiferenciadas. en: Kelly’s: Tratado de Brunner HI, Silverman ED, To T, Bombardier C, Feldman BM.
Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003; Risk factors for damage in childhood-onset systemic lupus
2:1055-1067. erythematosus: cumulative disease activity and medication
Burgos-Vargas R. Juvenile onset spondyloarthropathies: use predict disease damage. Arthritis Rheum 2002 Feb;
therapeutic aspects. Ann Rheum Dis 2002 Dec;61 Suppl 46(2):436-44
3:III33-9 Cameron JS: Lupus nephritis in childhood and adolescence. Pediatr
Burgos Vargas R, Pacheco-Tena C, Vazquez-Mellado J. Juvenile- Nephrol 1994; 8:230.
Onset Spondiloarthropathies. Rheum Dis Clin North Am Cassidy JT. Lupus Eritematoso sistémico, dermatomiositis juvenil,
1997 Aug;23(3):569-92 esclerodermia y vasculitis en: Kelly's: Tratado de
Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003;
Erdes Sh, Guseva IA, Benevolenskaia LI. Relations between
3:1315-1318.
ankylosing spondyloarthritis and HLA-B27 in various ethnic Coto C, Varela G, Hernández V et al. Supervivencia en niños
groups in Russia Ter Arkh 2001;73(1):27-30. cubanos con Lupus Eritematoso Sistémico . Rev Cub
Foeldvari I, Bidde M. Validation of the proposed ILAR Reumatol 2000;2:54-63
classification criteria for juvenile idiopathic arthritis. Coto C, Varela G, Hernández V et al. Lupus Eritematoso Sistémico
International League of Associations for Rheumatology. J en la adolescencia. Rev Cub Reumatol 2003;Vol IV:2:53-58.
Rheumatol 2000 Apr;27(4):1069-72 Emre S, Bilge I, Sirin A, Kilicaslan I, Nayir A,
Gonzalez DJ, Roldán MD. Espondiloartropatías en el niño en :. Oktem F, Uysal V. Lupus nephritis in children: prognostic
Reumatología Infantil Ed Formación Alcalá: Formación significance of
Continuada de Pediatría: 2004;Vol 8: (8)187-200. clinicopathological findings. Nephron 2001 Feb;87(2):118-26
Haibel H, Rudwaleit M, Braun J, Sieper J. Epidemiology and Garcia-Consuegra J. Lupus Eritematoso Sistémico en : Manual
patient management in the area of spondyloarthritisZ práctico de Reumatología PediátricaEditorial mra S.L 2000;
315-323.
Rheumatol 2002 Feb;61(1):30-8
Gladman DD: Prognosis of SLE and factors that affect it. Curr
Huhtinen M, Karma A. HLA-B27 typing in the categorisation of
Opin Rheumatol l992;3:789-796.
uveitis in a HLA-B27 rich population. Br J Ophthalmol Golbus J, McCune WJ: Lupus nephritis. Classification, prognosis,
2000 Apr;84(4):413-6 inmunopathogenesis and treatment. Rheum Dis Clin North
Lionetti P, Pupi A, Veltroni M, Fonda C, Cavicchi MC, Azzari C, Am 1994; 20:213-242.
Falcini F. Evidence of subclinical intestinal inflammation by Lang BA, Silverman ED: A clinical overview of systemic lupus
99m technetium leukocyte scintigraphy in patients with erythematosus in childhood. Pediatr Rev 1993;14:194.
HLA-B27 positive juvenile onset active Lawrence S, Luy L, Laxer R, Krafchik B, Silverman E :The health
spondyloarthropathy. J Rheumatol 2000 Jun;27(6):1538-41 of mothers of children with cutaneous neonatal lupus
Luong AA, Salonen DC. Imaging of the seronegative erythematosus differs from that of mothers of children with
spondyloarthropathies. Curr Rheumatol Rep 2000 congenital heart block. Am J Med 2000 Jun 15;108(9):705-9
Aug;2(4):288-96 Lehman T. A practical guide to systemic lupus erythematosus.
Pepmueller PH, Moore TL. Juvenile spondyloarthropathies. Curr Pediatr Clin North Am 1995; 45(5): 1223-1237.
Opin Rheumatol 2000 Jul;12(4):269-73 Lee LA.Neonatal lupus: clinical features, therapy, and
Palm O, Moum B, Ongre A, Gran JT. Prevalence of ankylosing pathogenesis. Curr Rheumatol Rep 2001 Oct;3(5):391-5
Lee T, von Scheven E, Sandborg C. Systemic lupus erythematosus
spondylitis and other spondyloarthropathies among patients
and antiphospholipid syndrome in children and adolescents.
with inflammatory bowel disease: a population study (the
Curr Opin Rheumatol 2001 Sep;13(5):415-21
IBSEN study). Rheumatol 2002 Mar;29(3):511-5 Massardo L, Martinez ME, Jacobell S, Villaroel L, Rosenberg H,
Rosenberg AM. Juvenile onset spondyloarthropathies. Curr Opin Rivero S. Survival of chilean patients with systemic lupus
Rheumatol 2000 Sep;12(5):425-9 erythematosus. Sem Arthritis Rheum 1994;24:1-11.
Singsen BH: Juvenile Spondyloarthropaties in: Primer on the Raya AE, Salvatierra OJ. Lupus eritematoso sistémico en la
Rheumatic Disease. 10th Ed. Atlanta:Arthritis infancia y la adolescencia en: Reumatología Infantil Ed
Foundation,1993:171-175. Formación Alcalá: Formación Continuada de Pediatría: 2004,
Schaller JG. Espondilitis Anquilosante y otras Vol 8 ;9: 201-240.
espondiloartropatías en: Nelson WE: Tratado de Pediatria. 15 Stenberg Ester M and col. Distress response and tuhe regulation of
Ed. Madrid: Mc Graw Hill, 1997:1:840-843. inflamatory diseases. An Internal Medicine,1992:117:854 - 866.

Parte XV. Reumatología 1219


Stenberg E, Lipton JM, Smith Craig C. Neuroinmunomodumation. Esclerodemia
Perspetive al Athreya BH.Juvenile scleroderma.Curr Opin Rheumatol 2002
new milenium. An of the New York Academy of Sciences. Sep;14(5):553-61.
Autoinmune diseases 2000;917 (XIV): 778-835. Bottoni CR, Reinker KA, Gardner RD, Person DA.Scleroderma in
Schaller JG. Lupus eritematoso sistémico en: Nelson WE: Tratado childhood: a 35-year history of cases and review of the
de Pediatria. 15 Ed. Madrid: Mc Graw Hill,1997; 1: 843-847. literature. J Pediatr Orthop 2000 Jul-Aug;20(4):442-9.
Tan EM, Cohen AS, Fries JF, Masi AT, McShane DJ, Rothfield Cassidy JT. Lupus Eritematoso sistémico, dermatomiositis juvenil,
NF, et al.: The 1982 revised criteria for the classification of esclerodermia y vasculitis en: Kelly's: Tratado de
systemic lupus erythematosus. Arthritis Rheum Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003;
1982:25:1271-1277. 3:1323-1327
Tanaka H, Tateyama T, Waga S. Methylprednisolone pulse Chozas NC, García SP Esclerodermia en la infancia en:
therapy in Japanese children with severe lupus nephritis. Reumatología Infantil Ed Formación Alcalá: Formación
Pediatr Nephrol 2001 Oct;16(10):817-9 Continuada de Pediatría: 2004, Vol 8;11:261-272.
Turkel SB, Miller JH, Reiff A.Case series: neuropsychiatric Foeldvari I, Wulffraat N.Recognition and management of
symptoms with pediatric systemic lupus erythematosus. J scleroderma in children. PaediatrDrugs2001;3(8):575-83.
Am Acad Child Adolesc Psychiatry 2001 Apr;40(4):482-5 Martini A.Juvenile systemic scleroderma. Curr Rheumatol Rep
2001 Oct;3(5):387-90
Dermatomiositis juvenil Nagai Y, Hattori T, Ishikawa O.Unilateral generalized morphea in
Cassidy JT. Lupus Eritematoso sistémico, dermatomiositis juvenil, childhood.J Dermatol 2002 Jul;29(7):435-8.
esclerodermia y vasculitis en: Kelly's: Tratado de Schaller JG. Esclerodemia en niños en: Nelson WE: Tratado de
Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003; Pediatria. 15 Ed. Madrid: Mc Graw Hill,1997; 1: 857.
3:1319-1322. Uziel J, Miller ML, Laxer R. Scleroderma in Children. Pediatr Clin
Fraga A., Chávez-López M. Miopatías Inflamatorias: North Am 1995; 45(5): 1171-1205.
Dermatomiositis y Polimiositis. en Tornero J.Tratado White P. Other Pediatric Rheumatic Diseases in: Primer on the
Iberoamericano de Reumatología. Madrid.Global Solution Rheumatic Disease. 10th Ed. Atlanta: Arthritis
System S.L. 1998.461-78 Foundation,1993:176-181
Ferrer GM,Guzmán MA. Dermatomiositis en: en : Reumatología
Infantil Ed Formación Alcalá: Formación Continuada de Vasculitis
Pediatría:2004, Vol 8 ;10:243-260. Atreya BH. Vasculitis in Children. Curr Opin Rheumatol.1996; 8:
Grau JM., Casademont J. Polimiositis-Dermatomiositis. en 477-484. 2.-Cassidy JT "Pediatric Rheumatology" W B
KhamashtaMA., Font J. Enfermedades Autoinmunes del Saunders Company Philadelphia, 1995.
Tejido Conectivo. Barcelona.Editorial Doyma. 1993. 79-92 Cassidy JT. Lupus Eritematoso sistémico, dermatomiositis juvenil,
Ichiki Y., Akiyama T. An extremely severe case of cutaneous esclerodermia y vasculitis en: Kelly's: Tratado de
calcinosis with juvenile dermatomyositis and successful treatment Reumatología. 6ta edición Madrid: Marbán Libros: 2003;
with diltiazem.Br J Dermatol 2001 Apr; 144(4): 894-7 3:1328-1335.
Koler RA., Montemarano A. Dermatomyositis. Am Fam Cid M, M.D. New development in the pathogenesis of systemic
Physician, 2001 Nov 1,64(9): 1565-72 vasculitis. Curr Opin Rheumatol 1996; 8:1-11. 5.-Epstein
Malagón C. Enfermedades Reumáticas en la edad pediátrica. En Franklin H. Coestimulatory B7 molecules and autoinmune
Molina J., Molina JF. Reumatología 5ta. Edición .Medellín diseases. N Engl J Med. 1998; 335 (18):1369-1377.
.Ediciones CIB. 1998. 340-606.Medsger TA., Foster BJ, Bernard C, Drummond. Kawasaki complicated of
Méndez. M, Coto C, Varela G, Hernández V Aspectos clínico y stenosis. Arch Dis Child 2000, 83 (3) 233-5.
epidemiológicosen dermatomiositis juvenil. Estudio de 15 Gul H, Ivane M, Kowice M. Familial aggregation of Behçet
años. Rev Cub Reumatol 2004;Vol VI:36-43. disease. Am Rheum Dis, 2000 Aug: 59 (8): 622-5.
Méndez M, Coto C, Varela G, Hernández V Dermatomisitis
George C. Tsokos, MD. Lymphocytes citoquines inflammation
juvenil con calcinosis universal. Presentación de un caso. Rev
and immune trafficking. Curr Opin Rheumatol 1996; 8: 395-402.
Cub Reumatol 2005;Vol VII:14-20.
Gumen H, Everkliogu. Thoracic involment in Behçet disease. Lung,
Moleres R. Postulados Reumatológicos. Polimiositis. Barcelona.
Viking. 1997.13-116. 2000: 178 (3) 161-70.
Moreno P., Martínez CN, Oliva S. Dermatomiositis juvenil. En Holman RC, Shahriari A. Hospitalization among children in Hawaii
González E. Manual Práctico de Reumatología Pediátrica. and Connecticut. Arch Pediat Adolescence. Aug 2000; 154
Madrid. Laboratorios Menarini.1999. 397-418. (8): 804-8.
Mukamel M., Morev. New insight into calcinosis of Juvenile Lic J T. Nomenclature and classification of vasculitis. Arthritis
Dermatomyositis: a study of composition and treatment. J Rheum 1994;37: 181-186.
Pediatr 2001 May ; 138(5):763-6. Garry S. Hoffm, M D. Editorial overview. Vasculitis Syndroms.
Oddis CV. Inflammatory muscle disease in Klipplel: JH.,Dieppe Curr Opin Rheumatol 1994; 9: 1-2.
PA. Rheumatology. London. Mosby- Doyma.1995. 121-144. Garcia FJ, Malagón A C. Vasculitis en la infancia en : Reumatología
Pachman LM. Dermatomiositis juvenil. Fisiopatología y Infantil Ed Formación Alcalá: Formación Continuada de
expresión de la enfermedad. Rheum Dis Clin North Am, 1995 Pediatría:2004,Vol 8;12:273-294.
Oct, 42(5):1003-23 González Miguel García, Pollería Carlos, Epidemiology of the
Ramanan AV, Sawhney S. Central nervous system complications in vasculitis. Rheu Dis Clin North Am Nov. 2001; 27 (4)
Wolfgang L. Gross, Elena Chernok. Inmunodiagnosis and
two cases of juvenile onset dermatomyositis. Rheumatology
pathophisiology aspects of cytoplasm antibodies in
(Oxford) 2001 Nov; 40 (11)1 1293-8.
vasculitis. Curr Opin Rheumatol 1995; 7: 11-19.
Tses, Rubelskg S. The arthritis of inflammatory childhood miositis Weyand CM,Gorinzy J. Multisystem interactions in the
syndromes. J. Rheumatol 2001 Jan; 28 (1): 192-7. pathogenesis of vasculitis, Curr Opin Rheumatol 1997; 9: 3-11

1220 Tomo III


Oftalmología pediátrica

diferentes estructuras; su función sigue en desarrollo años


A la memoria de los doctores José Rafael Montalvo
después del nacimiento; el sistema nervioso central, del
Covarrubia y Domingo Madan Bebeagua, quienes fue-
ron los primeros en dedicarse a la oftalmología y pedia- que forma parte el sistema visual, está en un complejo
tría en Cuba de forma conjunta. Sus vidas ejemplares, proceso de maduración y en pleno período de desarrollo,
entregadas al trabajo en estas ramas de las ciencias mé- así como el sistema autoinmune, que lo predispone a re-
dicas, son un ejemplo para las nuevas generaciones. acciones diferentes a las del adulto frente a determina-
das noxas.
Es por ello la necesidad de conocer la oftalmología
El ser humano es un todo, derivado de las tres ca- por parte del pediatra y del médico general integral en
pas embrionarias que también toman parte en la consti- sus aspectos generales, de sus características específi-
tución del órgano visual y por tanto, sobre el globo ocular cas y del desarrollo del sistema visual en el recién naci-
repercuten enfermedades generales que afectan otros do y en las diferentes edades.
aparatos y sistemas. En el ojo esto se hace muy ostensi- El médico que se enfrenta a un niño con una enfer-
ble al tener fácil acceso a él mediante la observación medad ocular también debe tener conocimiento de psi-
directa y magnificada de los tejidos que lo forman y al cología, pues así se logra un mejor examen y diagnóstico,
visualizar en vivo a la retina y nervio óptico con el exa- además de brindar a los padres atención especial y las
men de fondo de ojo. Este examen, como una ventana explicaciones necesarias sobre la afección de sus hijos.
abierta, muestra lo que indirectamente sucede en parte Resulta fundamental no dar orientaciones imprecisas y
del sistema nervioso central y el estado de los vasos muy especialmente hablar a los padres de posible fecha
intracraneales, así como los del resto del organismo. La de cirugía, pues por lo regular no hay un patrón fijo de
oftalmoscopia facilita la detección de alteraciones en reacción al tratamiento.
las estructuras oculares que son significativas en un Conocer la necesidad del examen ocular, del estu-
gran número de enfermedades sistémicas, las que de- dio de la agudeza visual del paralelismo de los ejes vi-
ben ser planteadas y buscadas para ayudar a hacer un suales, y la refracción en el niño, para evitar la ambliopía
diagnóstico más preciso. A su vez, es obligatorio el co- u otras causas de disfunción, es fundamental para la
nocimiento del órgano visual y de las enfermedades que prevención de la discapacidad visual, en lo cual el pedia-
lo afectan, para determinar el desarrollo, estado de sa- tra y el médico general integral tienen un papel funda-
mental, ya que deben sospechar deficiencias visuales y
lud y la conservación de un sentido tan importante como
remitirla a tiempo para ser corregida.
la visión.
Esta parte de la obra va dirigida a ellos y a los que
Para la atención oftalmológica del niño, no valen quieran ampliar un poco el conocimiento que obtuvieron
tan solo los conocimientos sobre esa especialidad, sino en sus estudios de pregrado en esta especialidad. Tam-
también las particularidades que tiene esta práctica, pues bién a nuestros oftalmólogos, los que pueden utilizarla
los ojos no son únicamente más pequeños que los del como guía básica para la enseñanza. Sirva a su vez de
adulto. El ojo del niño está creciendo constantemente, tributo de reconocimiento al trabajo abnegado de mu-
modificando la relación de tamaño que existe entre sus chos de ellos, lo que se refleja en la bibliografía de
los diferentes capítulos, donde se encuentran la mayo- parte distal dilatada, la retina. En la quinta semana, la
ría de los artículos de autores cubanos, publicados en parte distal de cada vesícula óptica se deprime convir-
Cuba en los últimos 30 años, relacionados con la materia tiéndose en la cúpula óptica, que posee dos láminas, ex-
en cuestión. terna e interna, separadas por un espacio que luego
Estudie estas páginas y recuerde siempre, que a desaparece al ponerse en contacto las dos láminas
un niño en la Cuba actual le queda un promedio de retinianas. La lámina externa de la cúpula origina el epi-
77 años de vida por delante. Cuidemos su visión. telio pigmentario de la retina que va a quedar fuerte-
mente adherido a la lámina interna. Esa lámina interna
se forma de la parte nerviosa u óptica de la retina que va
a tapizar todo el polo posterior hasta la ora serrata y
. Capítulo 92 . seguir por la cara posterior del cuerpo ciliar y del iris,
como un epitelio. De la lámina interna de la retina se van
a derivar los fotorreceptores, la primera neurona de la
Morfología del aparato vía visual o célula bipolar, la segunda neurona o célula
de la visión ganglionar y las células de asociación y sostén, dispues-
Eugenio Jara Casco, Washington Rosell Puig, Gladys Colom tas en 10 capas que se pueden observar al microscopio.
Serra, Rosaralis Santiesteban Freixas Los músculos esfínter y dilatador de la pupila también
tiene un origen neuroectodérmico.
El conocimiento de la morfología del aparato de la Hay una depresión en la parte distal de la cúpula
visión es indispensable para comprender sus funciones óptica que se extiende por su parte ventral formando la
y sus alteraciones anatomofuncionales. fisura óptica, por donde entra parte del mesénquima al
El aparato de la visión es un conjunto de estructu- interior del globo ocular. Sus bordes se fusionan poste-
ras que le proporcionan al individuo la facultad de ver, o riormente, cerca de la hora seis del globo, en caso de falla
sea, de percibir imágenes. Al nacimiento, el aparato vi- en ese cierre puede quedar como un coloboma inferior
sual aún no está completamente desarrollado, lo que se en esa región del iris.
va logrando en los siguientes meses y pasan años para Del ectodermo superficial, por acción inductora
que el niño alcance la completa y perfecta función de las vesículas ópticas, se forma la vesícula del lente o
visual. cristalino, que se separa del ectodermo y se sitúa en el
El ojo capta los estímulos luminosos por los interior de la cúpula óptica. El mesodermo, que se en-
cuentra por delante del cristalino, forma el iris, cuerpo
fotorreceptores que, a través del mecanismo de la
ciliar y la córnea y entre ellos unas cavidades llamadas
fototransducción, transforma el estímulo luminoso en
cámara anterior y cámara posterior. El iris es una es-
impulsos nerviosos que son conducidos por la retina y tructura no perforada al principio, por lo que el cristalino
vía visual hacia la corteza cerebral, donde se encuen- queda cubierto por una capa de tejido iridiano nombrada
tran los centros nerviosos superiores, que procesan la membrana pupilar, la que desaparece después, en vida
información visual recibida y permiten ver el mundo ex- intrauterina.
terior. Parte del mesénquima que rodea la cúpula óptica
penetra por la fisura óptica dando origen al cuerpo ví-
ORIGEN, DESARROLLO treo y a los vasos hialoideos que desaparecen posterior-
Y CONSTITUCIÓN DEL APARATO mente. La parte del mesénquima que rodea la cúpula
DE LA VISIÓN óptica por fuera se diferencia en dos túnicas, la interna o
vasculosa que formará la coroides y en su parte anterior
Los componentes del aparato de la visión se origi- el cuerpo ciliar e iris, y la externa o fibrosa que formará
nan de 3 fuentes distintas: la esclera y la córnea. La parte externa de la córnea está
• Ectodermo neural. cubierta por una capa epitelial que deriva del ectodermo
• Ectodermo superficial. superficial, que se continúa con la conjuntiva.
• Mesodermo. Los párpados se originan en la séptima semana, a
partir de pliegues ectodérmicos que contienen
Del ectodermo neural se originan los esbozos óp- mesénquima, situados por arriba y por debajo de la cór-
ticos en la cuarta semana del desarrollo intrauterino al nea en desarrollo. Estos pliegues crecen y en la novena
formarse las vesículas ópticas, que son 2 evaginaciones semana se fusionan sus bordes. En el quinto mes esta
del prosencéfalo de la parte que se convierte después unión comienza a desintegrarse, quedando los párpados
en diencéfalo, cuyo pedículo forma el nervio óptico y su totalmente separados hacia el séptimo mes.

1222 Tomo III


El aparato lagrimal (glándulas y conductos Bulbo ocular
lagrimales) deriva del ectodermo superficial, mientras que Los bulbos oculares, están situados en las partes
los músculos extrínsecos del bulbo ocular y fascias
anteriores de las órbitas y cada uno de ellos tiene la for-
orbitarias se originan del mesodermo de esta región.
ma de una esfera de 1,7 cm de diámetro en el recién
En el aparato de la visión, después de terminado el
desarrollo embrionario, se distinguen tres partes: nacido, y hasta 2,4 cm en el adulto. Su forma es pareci-
• El bulbo ocular (globo del ojo) (Fig. 92.1). da a una esfera en la que se describen dos polos: ante-
• Los órganos oculares accesorios (anexos del ojo) rior, que es más abombado por la curvatura aumentada
(Fig. 92.2). de la córnea, y posterior.
• Las vías ópticas (Fig. 92.3).

Fig. 92. 1. Globo ocular.

Fig. 92. 2. Anexos del ojo. Fig. 92. 3. Vías y campos visuales.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1223


El globo ocular tiene estructuras que forman su La lámina cribosa, está atravesada por los elemen-
continente y otras que son su contenido. El continente o tos vasculonerviosos del ojo que entran o salen del
pared, está formado por tres túnicas superpuestas: la globo ocular, principalmente las fibras de las células
externa o fibrosa (córnea-esclera), la media o vasculosa ganglionares de la retina que forman el nervio óptico.
(úvea) y la interna nerviosa o sensorial, llamada retina. La estructura de la esclera está constituida por tejido
Esas túnicas o capas rodean a un contenido, parte de los conectivo denso bastante uniforme, en la que se des-
cuales son llamados medios transparentes y refringentes: criben 3 capas:
son ellos el humor acuoso, el lente o cristalino y el cuer- − Lámina epiescleral.
po vítreo, a través de los cuales pasa la luz del medio − Sustancia propia.
exterior hacia la retina. − Lámina fusca u oscura.
• La túnica media o vasculosa (úvea) es blanda, es-
Continente del bulbo ocular ponjosa y de color oscuro, como la uva negra, por su
• La túnica externa o fibrosa, que es dura y resisten- pigmentación y vascularización, cuya función funda-
te, le proporciona al globo ocular su forma, sostén y mental es garantizar la nutrición del ojo. En esta túni-
protección. Tiene la superficie externa lisa, la cual ca se describen 3 porciones:
recubre a la conjuntiva en su función anterior, hasta − Iris.
la unión corneoescleral, lo que facilita el deslizamien- − Cuerpo ciliar.
to del ojo en sus movimientos. − Coroides.
El iris es la parte anterior de la túnica vasculosa que
La córnea es la parte anterior de la túnica externa,
se dispone en un plano frontal en forma de disco, con
menos extensa (1/6), del tamaño del globo ocular, in-
un orificio central, de diámetro variable llamado pu-
colora, transparente y avascular, en forma de disco
pila, que actúa como un diafragma regulando la can-
abombado convexo hacia delante, con un ángulo de tidad de luz que llega a la retina. El iris está situado
curvatura mayor que el de la esclera, con la cual se entre la córnea y el cristalino, dividiendo este espacio
une en bisel mediante una zona circular y estrecha en dos cámaras, anterior y posterior, comunicadas
llamada limbo esclerocorneal. Su diámetro aproxima- por la pupila y que contienen el humor acuoso que se
do es de 12 mm y su espesor es mayor en la periferia produce en los procesos ciliares. En la estructura del
(1 mm) que en el centro (0,7 mm). La córnea está iris se destacan 3 capas:
formada por cinco capas: Epitelio anterior.
− Epitelio anterior. Estroma de tejido conectivo con células
− Membrana de Bowman. pigmentadas, vasos sanguíneos y los músculos es-
− Sustancia propia o estroma de tejido conectivo. fínter, inervado por el tercer nervio craneal y el
− Membrana de Descemet. dilatador de la pupila, por el simpático.
− Endotelio corneal. Epitelio posterior, de doble capa, la posterior muy
La transparencia de la córnea se debe a la regulari- pigmentada.
dad en la estructura de su sustancia propia, la homo- El color del iris, determina el color del ojo y varía en
geneidad en la composición química de los elementos los distintos individuos, en dependencia de la canti-
que la componen y la ausencia de vasos sanguíneos dad de pigmentos que contenga, de manera que, si es
y linfáticos. Sin embargo, posee numerosas ramifi- abundante, adquiere tonalidades oscuras (pardos y
caciones nerviosas, del ramo oftálmico del nervio negros) y, si es escaso, tonalidades claras (verdes y
trigémino, por lo cual es la zona más sensible del or- azules).
ganismo. El cuerpo ciliar es la parte intermedia y engrosada
La esclera es la parte posterior de la túnica externa, de la túnica vasculosa, que se dispone en forma cir-
más extensa (5/6), blanca y opaca, que es más grue- cular como un anillo por delante de la coroides y se
sa en el polo posterior (1 mm) y más delgada en el conecta a la perfieria del lente o cristalino mediante
ecuador (0,4 mm), e intermedia en su unión con la el ligamento suspensorio o zónula de Zinn. En su es-
córnea (0,7 mm). En la esclera se insertan los mús- pesor se distinguen dos estructuras distintas, los mús-
culos extrínsecos del ojo y hacia la parte medial del culos ciliares y los procesos ciliares.
polo posterior sus fibras se separan formando un área Los músculos ciliares están constituidos por fibras
redondeada conocida como lámina cribosa, por las musculares lisas localizadas externamente, y dispues-
perforaciones de sus laminillas. tas en distintas posiciones, que con su contracción

1224 Tomo III


actúan sobre los ligamentos que sostienen al cristali- La porción ciega carece de fotorreceptores y tiene
no detrás del iris, cambian su curvatura y llevan a una estructura muy simple con abundantes células
cabo la acomodación para la visión cercana. pigmentadas que tapizan al iris y al cuerpo ciliar en
Los procesos ciliares son repliegues muy su cara posterior.
vascularizados, localizados internamente, donde se La porción óptica es la más extensa y se une por
produce el humor acuoso. delante con la porción ciega mediante un borde den-
La coroides es la porción posterior y más extensa tado llamado ora serrata. Esta porción de la retina
de la túnica coroidea (2/3), separada de la esclera
tiene una estructura más compleja formada por diez
por un espacio virtual (pericoroidal) y atravesada en
estratos (Fig. 92 .4):
su parte posterior por elementos vasculares y ner-
viosos. Su estructura está compuesta fundamental- − Epitelio pigmentario.
mente por vasos y pigmentos que le dan nutrición al − Fotorreceptores.
ojo y la oscuridad necesaria en su interior para que − Limitante externa.
se lleve a cabo el proceso de la visión de forma ópti- − Nuclear externa.
ma. Tiene cuatro láminas: − Plexiforme externa.
− Supracoroidal. Separa la coroides de la esclera. − Nuclear interna.
− Vasculosa. Vasos gruesos y de mediano calibre y − Plexiforme interna.
además pigmentos. − Capa de núcleos de las células ganglionares.
− Coriocapilar. Vasos muy finos y pigmentos. − Capa de las fibras nerviosas.
− Basal o vítrea de Bruch. Separa a los capilares − Limitante interna.
del epitelio pigmentario de la retina.
• La túnica interna o sensorial, es la retina que co- Estos 10 estratos se agrupan según sus características
linda con la túnica media o vasculosa en toda su ex- morfofuncionales en dos partes: la del epitelio pigmentario,
tensión, por lo cual se describen tres porciones: íntimamente adherido a la coroidess por su cara externa
coroidea, ciliar e irídica. La primera constituye la por- y a las capas nerviosa de la retina, interdigitadas con el
ción óptica y las otras dos la porción ciega. segmento externo de sus fotorreceptores.

Fig. 92. 4. Células de la retina.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1225


En la parte nerviosa de la retina, que comprende La mácula o mancha amarilla es una porción es-
los 9 estratos restantes, se destacan los fotorre- pecializada de la retina que, situada en el polo posterior,
ceptores, llamados conos y bastones que se co- tiene unos 2 mm de diámetro y color rojizo más oscuro,
nectan entre sí a través de las células horizontales presenta en su centro la fosita central (foveola) que con-
y dos tipos de neuronas de las vías de conducción tiene solamente conos, y constituye el área preparada
para lograr la máxima agudeza visual.
nerviosa: las células bipolares y las células
El disco del nervio óptico o papila, está situado a
ganglionares. Las células que traen solo informa- unos 3 mm de la mácula y nasal a ella. Tiene 1,5 mm de
ción de conos se conectan directamente con las diámetro, es de forma redonda o a veces ligeramente
bipolares y estas con las ganglionares; las bipolares ovalada, con el mayor diámetro vertical, de bordes pre-
que traen información de bastones se conectan con cisos y color rosa más claro que el resto de la retina. No
las ganglionares a través de algunas células bipolares hay en ella conos ni bastones, por lo que es un punto
y de las amacrinas, de conexión horizontal. ciego. Por detrás de la papila penetran los vasos que
Además, la retina contiene otras células de asocia- van a nutrir a la retina, arteria y vena central, ramas de
ción, horizontales y células de sostén (neuroglias). los vasos oftálmicos que se van ramificando según avan-
La retina se caracteriza por ser transparente y con- zan o regresan de la retina (Fig. 92.5).
tiene varios elementos nerviosos. Los fotorre-
ceptores tienen la función de captar los estímulos
Contenido del bulbo ocular
luminosos y transformarlos en impulsos nerviosos, El humor acuoso es un líquido claro y transparen-
los que son conducidos por las vías ópticas hacia la te, denominado así por su semejanza con el agua. Con-
corteza cerebral donde son percibidos. tiene sustancias disueltas del plasma sanguíneo, pero con
poca concentración de proteínas. Su función es nutrir
Los conos, son los menos numerosos y constitu-
las estructuras avasculares del ojo y mantener la tensión
yen los receptores encargados de la visión central,
ocular (de 15 a 21 mm Hg). El humor acuoso se produ-
diurna y de la interpretación de los colores. Los ce en los procesos ciliares, se vierte en la cámara poste-
bastones son los más numerosos y constituyen los rior, pasa a través de la pupila a la cámara anterior y en
receptores encargados de la visión periférica y en el ángulo iridocorneal es drenado hacia el seno venoso
la oscuridad. escleral, situado en el espesor de la esclera (conducto
Al observar el fondo del ojo mediante un oftalmos- de Schlemm), incorporándose a la circulación sanguí-
copio se distingue a través de la retina, que es transpa- nea, a través de las venas acuosas.
rente el color rojizo del fondo, debido al pigmento que El cristalino es una lente de forma redonda, visto
esta y la coroides contienen y a la sangre que circula de frente y biconvexa de perfil; tiene unos 10 mm de
por la túnica vasculosa. En él se destacan 2 zonas de diámetro, es incoloro, transparente y avascular, de con-
gran importancia: la mácula y el disco del nervio ópti- sistencia dura y elástica, dispuesto en un plano frontal
co, que difieren en su estructura y color (Fig. 92.5). entre el iris y el cuerpo vítreo. Su función es enfocar los
rayos luminosos en la retina donde se forman las imáge-
nes de los objetos que se observan y, además, interviene
en el mecanismo de acomodación de la visión, que per-
mite ver los objetos a diferentes distancias, lo que hace
cambiando su curvatura. El lente o cristalino presenta
dos caras con sus polos (anterior y posterior) y un borde
periférico o ecuador que se conecta al cuerpo ciliar me-
diante el ligamento suspensorio o zónula de Zinn. En su
estructura se describen una cápsula elástica que envuelve
la sustancia del lente y en él se destacan dos partes; la
corteza y el núcleo, este último de consistencia más dura.
El cuerpo vítreo es una masa gelatinosa, incolora,
transparente y avascular, semejante a un gel, que ocupa
la mayor parte del contenido del ojo en la cámara vítrea,
espacio situado entre el lente con su ligamento suspen-
sorio y la capa limitante interna de la retina. En la es-
tructura del cuerpo vítreo se distinguen dos porciones, la
Fig. 92. 5. Fondo de ojo. membrana y el estroma (Cuadro 92.1).

1226 Tomo III


Cuadro 92.1. Continente y contenido del bulbo ocular • Elementos auxiliares del aparato muscular:
− Fascias orbitales:
Continente Periórbita.
Vaina bulbar.
• Túnica externa: fibrosa de sostén
Fascias musculares.
− Córnea
• Cuerpo adiposo.
− Esclera
• Túnica media: vascular y nutritiva (úvea)
Los supercilios o cejas son dos formaciones pilosas
− Úvea anterior: iris y cuerpo ciliar
arqueadas situadas en las regiones superciliares, que
− Úvea posterior: coroides
protegen al ojo del polvo y sudor de la frente.
• Túnica interna (retina)
Los párpados son dos pliegues movibles: superior
− Óptica (coroidea)
e inferior. En cada párpado se destacan dos caras (an-
− Ciega (ciliar e irídea) terior y posterior) y un borde libre que tiene dos limbos o
labios (anterior y posterior). Cerca del limbo anterior se
Contenido encuentran los cilios o pestañas, unas 70 en cada párpa-
do y desembocan las glándulas sebáceas (de Zeiss) y
• Humor acuoso sudoríparas o ciliares (de Moll), mientras que en el limbo
• Cristalino posterior desembocan las glándulas tarsales de tipo
• Cuerpo vítreo sebácea (de Meibomio). En la estructura del párpado se
distinguen 4 capas:
− La piel que cubre su cara anterior.
Órganos oculares accesorios − Fibras musculares estriadas, parte palpebral del
Los órganos oculares accesorios o anexos del ojo orbicular de los párpados, inervado por el facial; el
incluyen: músculo elevador del párpado superior, por el tercer
• Órganos protectores: nervio craneal y fibras lisas (músculos tarsales o de
− Supercilios o cejas. Muller), del sistema simpático.
− Párpados: − Tejido conectivo fibroso que se hace más denso ha-
Superior. cia el borde libre formando el tarso palpebral, que le
Inferior. proporciona al párpado su forma y sostén; contiene
− Túnica conjuntiva. las glándulas tarsales (Meibomio).
Palpebral. − La túnica conjuntiva, que reviste su cara posterior.
Bulbar.
Fondo de saco. La túnica conjuntiva es una membrana mucosa,
• Aparato lagrimal: transparente y vascularizada en la que se describen dos
− Glándulas lagrimales: porciones: palpebral y bulbar. La porción palpebral tapi-
Orbitaria. za la cara posterior de los párpados y está íntimamente
Palpebral. adherida al tarso. La porción bulbar cubre la cara ante-
− Lago lagrimal. rior del bulbo ocular hasta los bordes de la córnea. La
− Vías lagrimales: unión de la conjuntiva palpebral con la bulbar forma un
Puntos lagrimales. fondo de saco llamado fórnix conjuntival (superior e in-
Canalículos lagrimales. ferior). Los vasos que irrigan a la conjuntiva vienen de
Saco lagrimal. los conjuntivales posteriores, rama de los vasos
Conducto nasolagrimal. palpebrales y de los ciliares anteriores que atraviesan la
• Aparato oculomotor: esclerótica y penetran en el interior del ojo. El drenaje
− Músculos extrínsecos del bulbo ocular: venoso se realiza a través de las venas palpebrales o
Recto superior. directamente a la vena oftálmica superior o inferior. Los
Recto inferior. canales linfáticos se disponen en dos plexos, uno super-
Recto medial o interno. ficial y otro profundo. Estos van a drenar en los nódulos
Recto lateral o externo. linfáticos preauriculares y submaxilares; la inervación
Oblicuo superior o mayor. de la conjuntiva proviene de la primera rama del nervio
Oblicuo inferior o menor. trigémino.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1227


El aparato lagrimal se compone de dos partes: menor número, situadas en la conjuntiva del borde
Una porción secretora, las glándulas lagrimales; y una proximal de la lámina tarsal.
porción excretora, las vías lagrimales (Fig. 92.6). La pri- La porción excretora y consta de los dos puntos
mera produce las lágrimas y las vierte en la conjuntiva. lagrimales, los canalículos, el saco y el conducto
La segunda las conduce desde el saco conjuntival hasta lacrimonasal.
las fosas nasales. La porción secretora está formada − Los puntos lagrimales son diminutos y están situados
por la glándula lagrimal de tipo tubuloalveolar serosa, uno en cada párpado a 6 mm del ángulo interno.
con 2 porciones situadas en la región anterolateral de la − Los canalículos continúan a los orificios, en sentido
pared superior o techo de órbita: vertical primero y horizontal después, para terminar
− Glándula lagrimal principal. juntos o por separado en el saco lagrimal.
− Glándulas lagrimales accesorias (de Krause y − El saco lagrimal es la porción superior dilatada del
Wolfring). conducto lacrimonasal alojado en el canal formado
por el hueso lagrimal y la apófisis nasal del maxilar
superior.
− El conducto nasal es un canal formado por los hue-
sos maxilar superior, lagrimal y cornete inferior. Su
longitud es de 15 a 24 mm y su diámetro de 4 a 6
mm. Termina en el meato inferior a 30 mm de la
abertura nasal.

Las lágrimas constituyen un líquido claro, algo


alcalino que contienen una enzima (lisozima), de poder
bacteriostático, y cuya función es humedecer y proteger
la conjuntiva y la córnea. Las lágrimas vertidas se acu-
mulan en el lago lagrimal. El lago lagrimal es el espacio
situado en el ángulo medial o interno del ojo, donde se
encuentran la carúncula lagrimal y las papilas lagrimales
(superior e inferior) que tienen un orificio llamado punto
lagrimal, por donde penetran las lágrimas a los conduc-
tos lagrimales.
Los músculos del globo ocular o extrínsecos del
ojo (músculos rectos: superior, inferior, medial o interno
y lateral o externo; y músculos oblicuos: superior o ma-
Fig. 92. 6. Vías lagrimales. yor e inferior o menor), son de tipo estriado y se extien-
den desde la profundidad de la órbita (anillo tendinoso
La glándula principal se subdivide en una porción común o anillo de Zinn), hasta la esclera con la particu-
orbitaria y otra porción palpebral. laridad de que los músculos llamados rectos se insertan
La porción orbitaria está alojada en la fosa lagrimal, a ella por delante del ecuador y los oblicuos por detrás;
situada en el ángulo superoexterno de la órbita de las el músculo oblicuo superior se refleja o cambia de posi-
cuales parten varios conductos excretores que drenan ción y se dirige, desde el ángulo superointerno de la órbi-
las lágrimas en el fórnix conjuntival superior. Es una ta hacia atrás, insertándose en la esclera por detrás del
glándula de forma ovalada de unos 20 mm de largo, ecuador; el músculo oblicuo inferior es el único que no
12 mm de ancho y 5 mm de espesor. se inicia en el fondo de la órbita, sino en la parte
La porción palpebral ocupa la parte superoexterna anteroinferior de la pared medial de la órbita y se inserta
en la esclera por detrás del ecuador (Fig. 92.7).
del párpado superior y los conductos excretores se abren
En general, los músculos rectos mueven el ojo en
en el fondo de saco conjuntival superior. También exis-
el sentido que indican sus nombres, mientras que los
ten pequeñas y numerosas glándulas lagrimales acceso-
músculos oblicuos lo mueven contrario a su nombre, el
rias diseminadas por la túnica conjuntiva palpebral oblicuo superior hacia abajo y el oblicuo inferior hacia
(superior e inferior). arriba, sobre todo desde la posición de addución aunque
Las glándulas lagrimales accesorias son las de su acción principal es la de girar el globo sobre su eje
Krause, situadas en los fondos de saco superior e infe- anteroposterior, el oblicuo superior en intorsión y el obli-
rior, más numerosas en el superior y las de Wolfring, en cuo inferior en extorsión.

1228 Tomo III


Las venas del bulbo ocular son homónimas a las
arterias y recogen la sangre de los territorios irrigados
por ellas, conduciéndola hacia la vena oftálmica a través
de las venas vorticosas, dispuestas en torbellino en la
zona del ecuador, que recogen la sangre de la túnica
vasculosa.
Los nervios del globo ocular son ramos del nervio
oftálmico, ramo superior del nervio trigémino (fibras sen-
sitivas) y del nervio oculomotor (fibras parasimpáticas).

Vías ópticas
Las vías ópticas constan de los nervios ópticos, en
la que se nombran cuatro porciones o regiones, N1, N2,
N3 y N4; el quiasma óptico, donde se entrecruzan las
fibras provenientes de la retina nasal; los colículos supe-
Fig. 92. 7. Músculos extrínsecos del ojo. riores, las radiaciones ópticas y los centros nerviosos
superiores en la corteza cerebral, áreas V1 a V5.
La mayoría de estos músculos están inervados por Las vías ópticas se caracterizan porque el nervio
el nervio oculomotor (III), excepto el músculo oblicuo óptico no posee ganglio en su trayecto, ya que este no
superior que está inervado por el nervio troclear (IV) y es un verdadero nervio craneal ni periférico sino sustan-
el músculo recto lateral por el nervio abductor (VI). cia blanca en una prolongación del diencéfalo. Las pro-
Las fascias orbitarias son envolturas de tejido longaciones axónicas de las células ganglionares de la
conjuntivo, entre ellas se destacan: la periórbita que ta- retina, al salir por la perforación de las láminas cribosas,
piza las paredes de la órbita, la vaina bulbar (cápsula de forman el nervio óptico en su primera porción o N1.
Tenon), que rodea al bulbo ocular por su parte posterior Estos axones que salen del ojo, formando el nervio
correspondiente a la esclera, y las fascias musculares óptico, se internan en la órbita (porción N2) y atraviesan
que envuelven a los músculos contenidos en las órbitas. el canal óptico (porción N3) para penetrar en la fosa
Además, el espacio comprendido entre las estructuras craneal media, donde se reúne con los axones del lado
intraorbitarias está relleno por la grasa o cuerpo adiposo opuesto constituyendo el quiasma óptico donde solo sus
que sostiene estas estructuras. fibras mediales o nasales se cruzan. De ahí, las fibras
nasales del lado opuesto y las fibras temporales del pro-
Las órbitas son 2 cavidades óseas situadas a am-
pio lado continúan por el tracto óptico hasta los cen-
bos lados de la parte anterosuperior de la cara, que tie-
tros subcorticales ópticos, situados en el mesencéfalo
nen la forma comparada a una pirámide de cuatro lados,
(colículos superiores) y en los cuerpos geniculados la-
cuyo vértice está situado profundamente hacia atrás y terales del tálamo.
la base se corresponde con el orificio anterior de la órbi- En los colículos superiores se conectan con los
ta en la cara. Presenta 4 paredes (superior, inferior, late- núcleos de los nervios craneales que inervan la muscu-
ral y medial) y varios orificios que la comunican con latura del ojo, estableciendo mecanismos reflejos entre
cavidades óseas vecinas. Está ocupada en su parte an- los nervios craneales tercero, cuarto y sexto y con otros
terior por el bulbo ocular y en su parte posterior por es- nervios craneales en el tallo cerebral.
tructuras intraorbitarias (músculos, nervios y vasos Los cuerpos celulares de la última neurona de la
sanguíneos), sostenidos por el cuerpo adiposo de la vía parten de los cuerpos geniculados laterales y sus
órbita. axones forman la radiación óptica, que contienen in-
formación proveniente de la retina nasal contralateral y
Vasos sanguíneos y nervios del globo la temporal del propio lado. Esas radiaciones ópticas lle-
ocular van en su parte inferior la información de las retinas
Las arterias del bulbo ocular proceden de la arte- inferiores correspondientes y en la parte superior, la de
ria oftálmica, vía central de la retina que irriga esta es- las retinas superiores; en el medio de ellas van las fibras
tructura y las ramas ciliares que irrigan las túnicas externa del haz papilomacular.
o fibrosa y media o vasculosa. Algunas ramas ciliares Los centros nerviosos superiores de la corteza
forman en el borde ciliar del iris el círculo arterioso ma- cerebral se sitúan en los bordes del surco calcarino de
yor y en el borde pupilar el círculo arterial menor. los lóbulos occipitales a donde llega la información que

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1229


traen las neuronas que forman la radiación óptica. Allí, primer año, de 19,1 mm; a los 6 años, de 20,5 mm y en el
en el área V1 se colocan en una exacta disposición adulto, de 24,5 mm.
retinotópica; los que provienen del área macular en la El ritmo de crecimiento de las distintas partes
porción más externa y posterior del lóbulo occipital de del bulbo ocular es diferente. En el recién nacido las
los bordes de la cisura calcarina y de áreas retinales lo estructuras anteriores son relativamente mayores que
más periférico en la profundidad. De ahí parte la infor- las posteriores, pero en los primeros años de la vida
mación a otras áreas occipitales, y después a otras zo- crecen menos, adquiriendo el bulbo ocular una forma
nas del encéfalo donde siguen existiendo mapas más esférica.
retinotópicos, pero para distintas modalidades de la in- La esclera en el lactante es delgada, translúcida y
formación y también a otros centros somatotópicos y de de color azulado. La córnea en el recién nacido tiene la
relación. convexidad aumentada, es relativamente grande (unos
10 mm de diámetro), y adquiere el tamaño del adulto en
Resumen de las vías ópticas el segundo año de vida (unos 12 mm de diámetro).
La cámara anterior en el recién nacido es estre-
Fotorreceptores Conos y bastones de cha. El iris al nacimiento es de color azuloso o grisáceo
la retina por la escasez de pigmentos, y según estos van aumen-
tando en los primeros meses y años; el iris experimenta
I neurona o bipolar Células bipolares de la cambios progresivos en su coloración.
retina La pupila en el recién nacido es pequeña y está
situada algo por debajo y medial al centro de la córnea.
II neurona o ganglionar Células ganglionares de Es difícil de dilatar, aun con los midriáticos, y pueden
la retina verse remanentes de la membrana pupilar, como hilos
de una tela de araña, que desaparecen en pocas sema-
Axones de las células Nervios, quiasma y nas. El reflejo pupilar en los recién nacidos responde
ganglionares tractos ópticos poco a los cambios de iluminación.
El cristalino en el recién nacido es más esférico
Centro subcortical Colículos superiores del que el del adulto.
mesencéfalo En el cuerpo vítreo se pueden ver restos de los
vasos hialoideos.
Cuerpo celular de la Cuerpos geniculados la- El fondo de ojo en el recién nacido es en general
III neurona terales del hipotálamo más pálido, lo que dificulta ver con facilidad todas las
características de la retina y a través de esta se distin-
Axones de la III neurona Radiación óptica guen los vasos coroidesos. La papila o disco del nervio
óptico es más pálida, por lo que a veces puede confun-
Centro cortical occipital Bordes del surco dirse con la atrofia óptica.
y áreas aledañas calcarino, áreasV1 a V5 La mácula y la fosita central (foveola) tienen lími-
tes pocos definidos y no resalta claramente el color rojo
Áreas de asociación Resto del encéfalo amarillento central.
El poder refractivo en los lactantes es un poco
hipermétrope, debido principalmente al menor diámetro
Variaciones morfofuncionales anteroposterior del ojo y la forma redondeada del lente.
Entre las variaciones morfofuncionales del apara- La respuesta a los estímulos visuales tiene va-
to de la visión en las primeras etapas de la vida posnatal riaciones en las primeras etapas de la vida. El niño re-
se destaca lo siguiente: cién nacido mantiene los ojos cerrados la mayor parte
El tamaño del bulbo ocular en el recién nacido del tiempo, aunque puede ver bultos y reacciona a la luz
es más pequeño que en el adulto; representa aproxima- intensa. Un ejemplo de respuesta precoz ante un estí-
damente las tres cuartas partes. El crecimiento del bul- mulo visual es la atención del niño hacia el rostro de la
bo ocular es muy intenso durante el primer año y continúa madre cuando está lactando.
creciendo con cierta rapidez hasta el tercer año, pero a A partir de la segunda semana muestra interés por
partir de esta edad hasta la pubertad es más lento, y con los objetos grandes. Al primer mes sigue con la mirada
posterioridad su crecimiento es poco significativo. El diá- algunos objetos y a los seis meses puede observar con
metro del bulbo ocular es al nacer de 16,9 mm; en el detenimiento un objeto durante un par de minutos.

1230 Tomo III


La coordinación de los movimientos oculares y medicaciones, desarrollo psicomotor, escolar y estabili-
su alineación son irregulares hasta los 6 meses; edad dad emocional.
en que el recién nacido adquiere el paralelismo ocular. Los padres o encargados de la crianza del niño
Una desviación o pérdida del paralelismo después de pueden dar datos de interés derivados de la observa-
esta edad debe ser valorada por el especialista. ción diaria, como el grado de deficiencia visual; movi-
mientos oculares anormales, desviación de los ojos y la
Bibliografía cabeza y, en casos de ciertos tipos de estrabismo, la in-
Jiménez Amaya JM. Anatomía funcional de la corteza cerebral termitencia o no de la desviación o de un síntoma o
implicada en los procesos visuales. Neurol;2000:30(7):656-662.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Cause. Update on General
signo. El perfil temporal de la pérdida visual es impor-
Medicine. San Francisco: American Academy of tante para sospechar su causa.
Opthalmology; 2003-2004. Para disminuir el tiempo en tensión emocional del
Moore KL. Clinically oriented anatomy 3ra ed. Baltimore.
niño que acude al médico puede dedicarse la atención a
Williams-Wilkins, 1993.
Moore KL. Embriología clínica. 6ta ed. USA, Mc Graw-Hill hablar con los padres, mientras al niño se le deja jugar
Americana, 1999. con algún objeto o juguete que debe tenerse en la con-
Prives M, Lisenkov N, Busskovich V. Anatomía humana. 5ta. Ed. sulta y llame su atención. Cuando ya esté hecho el inte-
Moscú MIR 1984.
Rouviere H, Delmas A. Anatomía humana 10ma. Ed. Paris.
rrogatorio, el médico debe leerlo y comprobarlo antes de
Masson, 1999. que el niño entre al consultorio para ganar tiempo y de-
Sadler TW. Langnan Embriología humana, 7ma ed. México. Medica dicarlo al examen.
Panamericana, 1996.
En casos de niños mayores se debe interrogar al
Testut L, Latarjet A. Compendio de anatomía descriptiva.
Barcelona. Salvat 1995. propio niño y ganar su confianza. En ocasiones, este
puede revelar cosas que ni los padres conocen. Esta
misma relación de conversar con el niño facilita des-
pués, realizar el examen.
. Capítulo 93 .
EXAMEN EXTERNO DE LOS OJOS
Antes y durante el examen se intenta jugar con el
Examen oftalmológico niño y conversar con él, mientras se le observa y se
en el niño lleva a cabo así la inspección. Se prosigue con las ma-
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas niobras que no hacen contacto directo con el niño, como
el estudio del paralelismo de los ejes oculares, el tapar y
El especialista en pediatría y el médico de la familia destapar los ojos, el estudio de los reflejos pupilares,
deben realizar el examen oftalmológico como parte del que se pueden hacer con la luz de una linterna o mirando
examen general del niño, sin pretender que sea, tanto des- a distancia a través del oftalmoscopio, lo que es más
de el punto de vista clínico como instrumental, similar al fácil para el observador con presbicia.
que realiza el oftalmólogo. Debe procurarse que el exa- Para realizar el examen debe dejársele escoger, si
men resulte suficiente para detectar alteraciones que re- quiere estar solo en la silla de reconocimiento o en las
quieran su remisión, o en el caso de enfermedades simples, piernas de su madre o acompañante. La parte del exa-
o una urgencia extrema sin posibilidades de consultar a un men que más molesta se deja para el final.
especialista, permitan llegar al diagnóstico y ser tratados En la inspección externa se tiene en cuenta: forma
por el propio pediatra o el médico de medicina general, y simetría de las órbitas, y de los anejos oculares; forma,
hasta que sea posible la atención especializada. movimiento y posición de los párpados abiertos y cerra-
La anamnesis debe ser cuidadosa, interrogando a dos, así como el color y estado de la conjuntiva y la
la madre sobre antecedentes familiares de enfermeda- esclera; de ser necesario realizar la eversión del párpa-
des oculares y generales con repercusión ocular, lo cual do superior, se dejará para más tarde. La observación
ayuda a conocer si el problema es congénito o adquirido desde arriba facilita la detección de asimetrías, proptosis,
y si pueden estar relacionados o formar parte de enfer- pulsaciones, etcétera.
medad general con repercusión ocular. Muchos datos A continuación se hace palpación del área donde
útiles se pueden obtener con un detallado interrogatorio sobre se sitúa la glándula lagrimal y del saco lagrimal, en bus-
antecedentes de enfermedades generales, traumas, ca de aumento de volumen. En caso de existir aumento

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1231


La coordinación de los movimientos oculares y medicaciones, desarrollo psicomotor, escolar y estabili-
su alineación son irregulares hasta los 6 meses; edad dad emocional.
en que el recién nacido adquiere el paralelismo ocular. Los padres o encargados de la crianza del niño
Una desviación o pérdida del paralelismo después de pueden dar datos de interés derivados de la observa-
esta edad debe ser valorada por el especialista. ción diaria, como el grado de deficiencia visual; movi-
mientos oculares anormales, desviación de los ojos y la
Bibliografía cabeza y, en casos de ciertos tipos de estrabismo, la in-
Jiménez Amaya JM. Anatomía funcional de la corteza cerebral termitencia o no de la desviación o de un síntoma o
implicada en los procesos visuales. Neurol;2000:30(7):656-662.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Cause. Update on General
signo. El perfil temporal de la pérdida visual es impor-
Medicine. San Francisco: American Academy of tante para sospechar su causa.
Opthalmology; 2003-2004. Para disminuir el tiempo en tensión emocional del
Moore KL. Clinically oriented anatomy 3ra ed. Baltimore.
niño que acude al médico puede dedicarse la atención a
Williams-Wilkins, 1993.
Moore KL. Embriología clínica. 6ta ed. USA, Mc Graw-Hill hablar con los padres, mientras al niño se le deja jugar
Americana, 1999. con algún objeto o juguete que debe tenerse en la con-
Prives M, Lisenkov N, Busskovich V. Anatomía humana. 5ta. Ed. sulta y llame su atención. Cuando ya esté hecho el inte-
Moscú MIR 1984.
Rouviere H, Delmas A. Anatomía humana 10ma. Ed. Paris.
rrogatorio, el médico debe leerlo y comprobarlo antes de
Masson, 1999. que el niño entre al consultorio para ganar tiempo y de-
Sadler TW. Langnan Embriología humana, 7ma ed. México. Medica dicarlo al examen.
Panamericana, 1996.
En casos de niños mayores se debe interrogar al
Testut L, Latarjet A. Compendio de anatomía descriptiva.
Barcelona. Salvat 1995. propio niño y ganar su confianza. En ocasiones, este
puede revelar cosas que ni los padres conocen. Esta
misma relación de conversar con el niño facilita des-
pués, realizar el examen.
. Capítulo 93 .
EXAMEN EXTERNO DE LOS OJOS
Antes y durante el examen se intenta jugar con el
Examen oftalmológico niño y conversar con él, mientras se le observa y se
en el niño lleva a cabo así la inspección. Se prosigue con las ma-
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas niobras que no hacen contacto directo con el niño, como
el estudio del paralelismo de los ejes oculares, el tapar y
El especialista en pediatría y el médico de la familia destapar los ojos, el estudio de los reflejos pupilares,
deben realizar el examen oftalmológico como parte del que se pueden hacer con la luz de una linterna o mirando
examen general del niño, sin pretender que sea, tanto des- a distancia a través del oftalmoscopio, lo que es más
de el punto de vista clínico como instrumental, similar al fácil para el observador con presbicia.
que realiza el oftalmólogo. Debe procurarse que el exa- Para realizar el examen debe dejársele escoger, si
men resulte suficiente para detectar alteraciones que re- quiere estar solo en la silla de reconocimiento o en las
quieran su remisión, o en el caso de enfermedades simples, piernas de su madre o acompañante. La parte del exa-
o una urgencia extrema sin posibilidades de consultar a un men que más molesta se deja para el final.
especialista, permitan llegar al diagnóstico y ser tratados En la inspección externa se tiene en cuenta: forma
por el propio pediatra o el médico de medicina general, y simetría de las órbitas, y de los anejos oculares; forma,
hasta que sea posible la atención especializada. movimiento y posición de los párpados abiertos y cerra-
La anamnesis debe ser cuidadosa, interrogando a dos, así como el color y estado de la conjuntiva y la
la madre sobre antecedentes familiares de enfermeda- esclera; de ser necesario realizar la eversión del párpa-
des oculares y generales con repercusión ocular, lo cual do superior, se dejará para más tarde. La observación
ayuda a conocer si el problema es congénito o adquirido desde arriba facilita la detección de asimetrías, proptosis,
y si pueden estar relacionados o formar parte de enfer- pulsaciones, etcétera.
medad general con repercusión ocular. Muchos datos A continuación se hace palpación del área donde
útiles se pueden obtener con un detallado interrogatorio sobre se sitúa la glándula lagrimal y del saco lagrimal, en bus-
antecedentes de enfermedades generales, traumas, ca de aumento de volumen. En caso de existir aumento

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1231


de tamaño, se oprime para observar si hay reflujo o se- La búsqueda del reflejo pupilar aferente paradóji-
creción por los puntos lagrimales (Fig. 93.1). co o pupila de Marcus Gunn, es una maniobra útil para
La córnea se explora, con la luz oblicua, para com- detectar de forma objetiva daño funcional mínimo del
probar su transparencia, regularidad y tamaño, así como nervio óptico. Esto se lleva a cabo pasando rápidamente
la profundidad y el estado de la cámara anterior, el iris, la luz de uno a otro ojo por encima del entrecejo y deján-
la forma y tamaño de la pupila, la cara anterior del cris- dola en él de 2 ó 3 s; si en un ojo se observa una con-
talino, única área visible con iluminación oblicua. De ser tracción normal de la pupila, se pasa al otro ojo lo que
necesario, se debe utilizar lámpara de hendidura en ni- repite de forma alterna; se ve entonces si se produce
también la contracción o si por el contrario la pupila se
ños mayores (Fig. 93.2).
dilata al iluminarla, lo que es índice de afectación funcio-
nal asimétrica del nervio óptico principalmente.
Es de interés estudiar la respuesta pupilar al apa-
gar la luz y quedar en oscuridad. En esas condiciones
normalmente la pupila debe dilatarse, pero en algunos
casos ocurre una constricción patológica de pocos se-
gundos, seguida de una dilatación lenta. Este fenómeno
se observa en algunas enfermedades en que está impli-
cada la retina y el nervio óptico.

Examen de los movimientos de los ojos


y la acción de sus músculos
extrínsecos
El estudio de la motilidad ocular es fundamental en
Fig. 93. 1. Compresión del saco lagrimal. el examen del niño, pues permite diagnosticar precozmente
paresias y parálisis musculares, estrabismos manifiestos
y latentes, trastornos de los nervios craneales que tienen
a cargo su movimiento, de los núcleos que los originan,
los segmentos supranucleares y la corteza cerebral que
los rigen. Debe realizarse al inicio del examen cuando las
maniobras de inspección u otras no hayan provocado in-
comodidad o rechazo al niño y existan más posibilidades
de su cooperación.
Para la exploración adecuada de la motilidad ocular
hay que considerar la ejecución de los movimientos nor-
males de los ojos y la presencia de movimientos anorma-
les, casi siempre involuntarios.
El paralelismo de los ejes visuales se investiga ilumi-
nando ambos ojos con una luz colocada al frente, para
atraer con ella la atención del paciente. Normalmente en
Fig. 93. 2. Examen de segmento anterior con lámpara de la mirada al frente y a 30 cm de distancia, el observador
hendidura. debe ver la luz de examen como un punto luminoso en el
centro de ambas pupilas o ligeramente desplazadas hacia
Los reflejos pupilares, fotomotor, consensual y aco- adentro, pero simétricas en ambos ojos. A esta maniobra
modación-convergencia se examinan con luz de una lin- se le conoce como prueba de Hirschberg y se dice que es
terna o el propio oftalmoscopio. Se debe recordar que de 0°, si el reflejo se observa en posición simétrica en
en el recién nacido los reflejos pupilares no están bien ambos ojos. Si en uno de ellos la luz no cae cercana al
desarrollados y las pupilas son mióticas. La respuesta centro pupilar como en el otro ojo y lo hace en el borde
de contracción enérgica del reflejo fotomotor es índice pupilar, se dice que hay 15° de desviación, que puede ser
de buena visión y su ausencia debe hacer pensar en daño convergente si la luz cae en el borde externo pupilar o
del efector, como se ve en la parálisis del músculo cons- divergente, si lo hace en el interno. Se dice que la desvia-
trictor o en disfunción del nervio óptico o de la retina. ción es de 45° si la luz cae en el limbo y que es de 30° si

1232 Tomo III


cae entre el borde pupilar y el limbo. A continuación fijan- Se debe estudiar primero la función muscular de
do la luz que se mantiene al frente, se tapa y destapa cada cada ojo, en las nueve posiciones diagnósticas de mira-
ojo por separado y luego ambos ojos de forma alternante da, correspondiente seis de ellas a la función de cada
como en un balanceo de la oclusión. Si los ojos estaban en uno de los músculos por separado.
0° de desviación y al destaparlos alternativamente no se Se exploran las seis posiciones diagnósticas de
nota movimiento alguno de refijación, se dice que hay mirada y otras tres adicionales, al frente y desde ahí,
paralelismo ocular perfecto u ortoforia (Fig. 93.3). arriba y abajo. Téngase en cuenta que el movimiento
que se debe efectuar debe partir de la posición del ojo
señalada, para poder identificar el músculo por separa-
do o los músculos que intervienen en el movimiento lo
cual se hace de la forma siguiente:
Esquema de movimientos oculares y los mús-
culos responsables de los distintos movimientos,
en el ojo derecho, de una persona que tenemos al
frente.

Fig. 93. 3. Hipertropia ojo derecho.

Esta maniobra es la más utilizada en el examen del


paralelismo de los ejes oculares en los niños y es la de
cubrir alternativamente uno y otro ojo. Si se observa
movimiento de refijación del ojo que se destapa para
hacerlo fijar la luz, que viene de afuera hacia adentro, se
dice que existe desviación externa o divergente, latente
o exoforia. Si se observa movimiento de refijación del
ojo que se destapa para hacerlo fijar, viniendo este de
adentro hacia afuera, se dice que hay una desviación Si desde la mirada al frente se mueve el ojo hacia
latente interna o convergente, llamada también esoforia fuera, o sea, se abduce, actuó el recto o externo de OD;
o endoforia. Si el movimiento de refijación se produce debe quedar 1 mm de esclera visible, si existe buena
de arriba hacia abajo, se dice que existe una desviación
función de ese músculo (P1).
vertical superior latente o hiperforia; si el movimiento de
Si desde la mirada en abducción no máxima se ele-
refijación se produce de abajo hacia arriba, se dice que
existe una desviación latente vertical inferior o hipoforia. va el ojo, actuó el recto superior de OD solamente (P2).
Esta prueba debe hacerse para cerca, lejos y en mirada Si desde la mirada en abducción no máxima se
de lectura, o sea 30 grados por debajo de la horizontal. deprime el ojo, actuó el recto inferior de OD sola-
La exploración del movimiento que realizan los mente (P3).
músculos de un solo ojo se conoce como ducciones, y Si desde la mirada al frente se mueve el ojo hacia
como versiones a los movimientos conjugados de la nariz, o sea se aduce, actuó el recto interno de OD; no
ambos ojos (Fig. 93.4). debe quedar ni 1 mm de esclera visible en este movi-
miento extremo interno (P4).
Si desde la mirada en aducción extrema se eleva el
ojo, actuó el oblicuo inferior de OD solo (P5).
Si desde la mirada en aducción extrema se depri-
me el ojo, actuó el oblicuo superior de OD solo (P6).
Si desde la posición de mirada al frente se eleva el
ojo, actuaron los dos elevadores, recto superior y obli-
cuo inferior de OD (P7).
Si desde la mirada al frente se mira hacia abajo,
actuaron los dos depresores, recto inferior y oblicuo su-
perior de OD (P8).
Fig. 93. 4. Versiones.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1233


La prueba de cubrir y descubrir los ojos por sepa- preferirse este método de oftalmoscopia indirecta, pues
rado o de forma alternante, sin permitir un intervalo de se alcanza a ver más área de retina periférica la que
visión binocular, se aplica no solo en la mirada al frente puede afectarse en determinados procesos, como la
sino en todas las posiciones de mirada, de lejos y de cerca. prematuridad (Fig. 93.5).
También deben estudiarse por separado los movi-
mientos de seguimiento lento, al hacer que el niño fije la
vista en un objeto que se mueve muy despacio, y que
haga movimientos rápidos de búsqueda o sácadas, al
pedirle que mire de inmediato a un objeto que se ha co-
locado en posición casi extrema de mirada.
La vergencia es un tipo de movimiento disconjugado
que llevan los ojos en direcciones opuestas; el ejemplo
más frecuente se observa en la convergencia que se
produce con la lectura de cerca, dirigiendo las fóveas al
mismo objetivo.

Examen de los medios refringentes


Una vez terminado el examen de los anejos, motilidad
ocular y del segmento anterior, se procede a la revisión Fig. 93. 5. Examen de fondo de ojo con oftalmoscopio
del cristalino y cuerpo vítreo mediante las técnicas de ilu- indirecto.
minación oblicua, oftalmoscopia a distancia y la observa-
ción de las imágenes de Purkinge. Para esto último se La oftalmoscopia directa es la más utilizada en el
exploran los reflejos que sobre la córnea y cristalino pro- examen del fondo de ojo, por los que no son especialistas.
duce una luz que se desplaza en sentido horizontal frente Para realizarla en el niño pequeño, la mayoría de las ve-
a la córnea. De esta forma, se puede observar una luz de ces es necesario garantizar la inmovilidad de la cabeza,
mayor tamaño, que se refleja en la córnea, y otra menor para lo cual se requiere la colaboración de la enfermera o
en la cara anterior del cristalino, ambas se desplazan a del acompañante del niño, que deben encargarse de colo-
favor del movimiento de la luz, y una tercera luz pequeña, carlo boca arriba con la cabeza del niño entre las piernas
pero que se desplaza en sentido contrario y que se refleja del médico y de sujetarle las manos y los pies. En contra
en la cara posterior del cristalino. En caso de estar libre el de este método de restricción sucede que el pequeño pa-
área de la pupila y si no se observa el reflejo de fondo rojo ciente se siente inconforme, casi siempre llora, cierra los
naranja mediante la oftalmoscopia a distancia, la presen- ojos y con ello se produce el fenómeno de Bell, escon-
cia de las tres imágenes de Purkinge asegura la transpa- diendo el ojo hacia arriba. En casos de lactantes lo mejor
rencia del cristalino y localiza a la opacidad detrás de él, es esperar que tenga hambre y tratar de hacer el examen
es decir en el cuerpo vítreo. con la pupila dilatada mientras toma el alimento en su bi-
La oftalmoscopia a distancia se realiza haciendo berón. Si el médico dedica suficiente tiempo, en ocasio-
incidir la luz del oftalmoscopio en el área pupilar a nes se puede realizar el examen de fondo de ojo, si no se
0,30 cm de distancia aproximadamente, sujetando la le toca, mientras el niño se encuentra en los brazos de la
cabeza del niño o sin tocarlo, de no ser necesario. Se madre y es eso lo que se recomienda (Figs. 93.6 y 93.6A).
puede realizar con pupila normal o dilatada en busca de A excepción de un estudio de polo posterior en un
opacidades del cristalino que no alcancen el área pupilar. examen de rutina y en el cual no quede duda de la nor-
malidad del fondo de ojo, el examen debe realizarse con
Examen de fondo de ojo midriasis. Para ello se dilata la pupila (ciclopentolato
El examen del fondo de ojo se puede realizar de a 1 % o tropicamida de 0,5 a 1 %, a lo que puede
forma directa o indirecta. Para practicar la oftalmoscopia adicionarse neosinefril a 2,5 %). Para los niños de poco
directa, se localiza a través de la pupila el reflejo rojo na- pigmento iridiano una sola aplicación de 1 gota del medi-
ranja de fondo de ojo, acercándose lentamente sin perder camento y esperar 30 min, puede bastar para dilatar la
ese reflejo del fondo, donde se observa una imagen directa pupila, no así en los pacientes con iris muy pigmentado,
ampliada en casi 15 veces, que cubre de 10 a 15°. a quienes puede ser necesario aplicarle una o dos veces
En la oftalmoscopia indirecta, a cargo del oftalmó- más la dosis cada 15 ó 20 min. Se debe comprimir sua-
logo especializado, se utiliza el oftalmoscopio binocular vemente, pero con firmeza, el saco lagrimal durante uno
de Schepens, con el cual se visualiza una imagen del o dos minutos después de instilado el midriático, para
fondo de ojo invertida y con ampliación de tres a cinco tratar de que el colirio no pase a las fosas nasales, se ab-
veces. En el niño, para un examen bien detallado, debe sorba y llegue en poca cantidad al torrente sanguíneo.

1234 Tomo III


puede demorarse hasta los 2 años, de ahí una de las expli-
caciones de la palidez mayor en los menores de 6 meses.
Para examinar los vasos retinianos se parte del cen-
tro de la papila, donde se reconocen los principales tron-
cos en que se divide la arteria y vena central, valorando
su color, calibre y el reflejo arterial, que es brillante a lo
largo de estos vasos, el que no debe ocupar más de un
tercio del diámetro de la arteria. La vena siempre es más
oscura y de mayor calibre que la arteria, con relación
arteria vena de 2 a 3. La mayoría de las veces la arteria
cruza por encima de la vena y no debe de haber interrup-
ciones de la columna hemática.
Para completar el estudio del fondo de ojo se reco-
rre, con la luz del oftalmoscopio directo, un área un poco
más periférica al polo posterior de la retina; para ello se le
pide al niño que dirija los ojos hacia arriba, abajo, afuera y
adentro para ver lo máximo posible de periferia media en
estas posiciones de mirada.
Se presta atención al color del fondo de ojo que debe
ser rojo naranja, el que puede variar en dependencia de la
cantidad de pigmento que contenga la retina y la coroides.
En el niño rubio es mucho más claro y en el albino se trans-
parenta toda la red coroidea, se ven los vasos gruesos de
esa capa y hasta la esclera. ( Fig. 93.7 y 93.7A).

Figs. 93. 6 y 93. 6A. Examen de fondo de ojo con oftalmos-


copio directo.

Cuando sea visible la imagen del fondo de ojo se


hace girar el disco de lentes del oftalmoscopio para obte-
ner una imagen nítida. La diferencia de 3 dioptrías entre
una estructura y otra de la retina para verlas con nitidez,
equivale a 1 mm de diferencia de profundidad entre am-
bas estructuras.
Una vez enfocada la retina, en niños que ya coope-
ran, se les pide que miren al frente y, si la papila no apare-
ce ante nuestra vista, se busca una arteria o vena y se le
sigue hasta su emergencia, en el sentido hacia donde au-
menta su grosor, obteniéndose entonces la imagen de la
papila. En ella se estudia: su forma, que es oval, en senti-
do vertical, o redonda; tamaño de 1,5 mm de diámetro
aproximadamente; bordes bien definidos; superficie pla-
na o algo excavada en su centro, el anillo de tejido neural
que rodea la excavación o anillo neurorretiniano; color
rosa amarillento, más pálido en el sector temporal y total
en niños menores de 6 meses.
Se debe tener en cuenta que la mielinización del ner- Figs. 93. 7 y 93. 7A. Fondo de ojo normal en un niño tri-
vio no está completa hasta después de los 7 meses, lo que gueño. A. Fondo de ojo normal en un niño rubio.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1235


En el fondo de ojo se deben buscar si existen focos La mácula puede ser asiento de alteraciones míni-
pigmentarios, exudativos, hemorrágicos u otro tipo de mas, apenas visibles con el oftalmoscopio, que disminu-
lesión que interrumpa el color rojo naranja de la retina yen en gran medida la agudeza visual central y pueden
normal. Las lesiones para ser localizadas se pintan, re- ser confundidas con una neuropatía. Las maculopatías
tratan o se ubican para describirlas según posición del se acompañan en la mayoría de los casos de
horario del reloj y se miden en tamaño, comparativa- metamorfopsias, aumento del tiempo de recuperación
mente, de acuerdo con el de la papila (diámetro del dis- del foto-estrés o imágenes deformadas, por lo que el
co), lo que se usa como unidad de medida. Debe hacerse estudio subjetivo de su función se vuelve imprescindible
con pupila dilatada y luz anaeritra, preferentemente para el diagnóstico.
halógena.
Detalles de mayor interés que hay que considerar
Para explorar el área macular se enfoca de nuevo
en las afecciones de la mácula y el nervio óptico
la papila y se le pide al paciente que mire a la luz del
oftalmoscopio. Si no obedece se trata de desplazar la luz
Mácula Nervio óptico
desde la papila hacia el lado temporal, en busca de la
mácula. Si el niño rechaza y mueve los ojos dificultando
Reflejo foveolar Disco óptico
el examen, se sitúa la luz del oftalmoscopio sobre el polo
posterior, hasta que las estructuras de nuestro interés Pigmentación Vasos sanguíneos;
pasen por el área de observación, al mover el niño los arteriolas.
ojos. De ser necesario se puede sedar o anestesiar para
realizar un buen estudio de fondo de ojo. Cicatrices Capas de fibras
En la mácula se verifica la ausencia de vasos, el ganglionares
color algo más oscuro que el resto del fondo de ojo y el Desprendimiento
brillo central, reflejo de la foveola, centro de la mácula y seroso
la fóvea, área que la rodea, reflejos muy bien definidos
en personas jóvenes. Se debe tener en cuenta que hasta En el recién nacido el fondo es poco pigmentado,
después de los 4 meses la fóvea no completa su madu- pues no se ha completado la maduración de los
ración. cromatóforos coroideos. El aspecto del fondo de ojo varía
La papila y la mácula son los puntos de máximo en dependencia de la intensidad de la luz del
interés en el examen del fondo de ojo, aunque no por ello oftalmoscopio o interposición de filtros coloreados, la
debe de dejarse de explorar el resto. opacificación de los medios, factores individuales como
vascularización de coroides, grado de pigmentación del
epitelio pigmentario, número de cromatóforos de la
Principales elementos que se deben estudiar en coroides y pigmentación de otros tejidos como la piel.
el fondo de ojo En personas de tez oscura el fondo posee un aspecto
más rojizo, mientras que en individuos de tez blanca o
• Papila. Tamaño, forma, bordes, color, conteo de poco pigmentados se visualiza la trama vascular coroidea
capilares, disposición y emergencia de vasos, sobre un fondo más claro. La papila aparece más pálida
excavación, anillo neuroretiniano, relación disco y con un tono grisáceo que recuerda a la ceniza. La
copa, malformaciones. coloración blanco rosada de la papila normal no se ad-
• Mácula. Reflejos normales del joven, color, zona quiere hasta los dos o tres meses o más tarde en los
avascular, estructuras anormales en esa zona. prematuros. El área macular en el recién nacido tiene
• Vasos sanguíneos. Conteo de capilares sobre la un aspecto poco uniforme y no existe el reflejo foveal.
papila, relación arteria vena, nitidez del vaso, sig- La retina está pálida y con los vasos menos desarrolla-
nos de entrecruzamiento anormal, ancho del área dos; la periferia retiniana tiene un aspecto grisáceo. Hay
de brillo central arterial, continuidad de su luz, más tortuosidad vascular y el calibre venoso está más
otras modificaciones vasculares. aumentado que el arterial en comparación con el adul-
to. La retina tiene un lustre brillante que cambia de po-
• Retina periférica. Retina de todo el cuadrante
sición con la ligera rotación del disco de lentes del
retiniano observado, terminación de vasos en pe-
oftalmoscopio o disco de Reckoss.
riferia, estado de la retina, etc. Como ya se dijo, la mejor forma de explorar el fon-
• Retina peripapilar. Cambio en las capas de fi- do de ojo en un niño es mediante la oftalmoscopia indi-
bras nerviosas de la retina. recta binocular, pero este examen requiere de

1236 Tomo III


entrenamiento especial y experiencia. Se pueden hacer Para conocer la falta de visión de un niño pequeño,
verdaderos cortes biomicroscópicos del fondo de ojo es necesario auxiliarse de diferentes maniobras que ayu-
con lámparas de hendidura y lentes de diferentes tipos dan a sospecharlo y a confirmarlo, como colocar un ob-
que darán imágenes invertidas o directas de áreas jeto o luz frente a sus ojos y desplazarla hacia otras
preferenciales, con diferentes grados de ampliación, es- posiciones de mirada, para ver si el niño la sigue con los
tudio que puede ser presenciado por otros especialistas ojos, o también observarlo a ver si los objetos que lo
mediante un espejo lateral del coobsevador o en panta- rodean llaman su atención.
llas de proyección, para lo que se debe contar con la Si la falta de visión es monocular cuando se le
cooperación del niño. muestra algún objeto y se le ocluye el ojo con visión, el
niño reacciona inmediatamente y rechaza la maniobra.
Exploración subjetiva Llora y retira la mano del examinador o el oclusor utili-
El estudio funcional del órgano visual comprende zado. En cambio, cuando se ocluye el ojo sin visión, el
numerosas pruebas y exámenes que investigan el esta- niño no opone resistencia al examen y sigue con la mira-
do del aparato oculomotor y sensorial en toda su exten- da del ojo que ve, el objeto en movimiento que se le
sión. Entre las técnicas que estudian el aspecto sensorial
muestra. Esto hace sospechar o confirmar la existencia
están: la exploración de la agudeza visual; el estudio de
de una disminución o ausencia de visión en el ojo ocluido;
la refracción; visión de los colores; desarrollo sensorial;
sí en el examen que se realizó no se encontró un proce-
estereopsia y binocularidad; adaptometría; sensibilidad
so orgánico que lo justifique, el primer diagnóstico es el
al contraste espacial, temporal y de movimiento; curva
de una ambliopía.
de adaptación a la oscuridad, y el campo visual, entre
La visión se desarrolla a partir del código genético
otros (Fig. 93.8). En estas pruebas intervienen la coope-
de cada individuo, la capacidad de las estructuras que
ración y estado de conciencia del paciente, por lo que
son difíciles de realizar en menores de 3 a 4 años. en ese proceso intervienen y de los estímulos del entor-
no del niño. Varios días después del nacimiento el reflejo
de parpadeo a la luz brillante está presente y a las 6
semanas ya hay interés por fijar imágenes, como suce-
de con la cara de la madre, e interesarse en objetos gran-
des, luminosos o coloreados. Más tarde, es capaz de
seguirlos con la mirada. El desarrollo de la visión es ace-
lerado en el primer mes de vida y ya desde los 2 a 4 años
muchos niños alcanzan un grado de visión similar a la
del adulto.
Los movimientos rápidos en busca de un objetivo,
sácadas, ya están bien desarrollados a los 3 meses.
Existe acomodación a los 4 meses y estereopsia entre 3
y 7 meses. A los 6 meses ya hay fijación de la fóvea y
están desarrollados los movimientos de persecución.
La falta de estas habilidades debe inducir a pensar
en deficiencia visual, lo cual se refuerza si se observa
estrabismo monocular, nistagmo u otra anormalidad que
Fig. 93. 8. Campo visual dinámico. impida que exista fijación con la fóvea. Se debe tener en
cuenta que en niños prematuros la visión demora más
El examen subjetivo en el niño es más difícil que en en desarrollarse y que puede existir cierto retardo en el
el adulto por la falta de cooperación, pero a veces sor-
desarrollo de la visión, lo que debe motivar su remisión
prende la disposición que para ello muestran algunos
de inmediato al oftalmólogo.
desde temprana edad. Las pruebas más importantes son:
El niño, que ya coopera, debe examinarse de igual
el reconocimiento de la forma mediante la medición de
la agudeza visual corregida por refracción, el color, la manera que el adulto, aunque siempre manteniendo una
binocularidad y la estereopsia, así como el campo visual. comunicación especial y afectuosa para lograr que ayu-
En el niño muy pequeño lo que más datos aporta es de al examinador en todos los pasos del estudio. Por lo
la observación que de él se haga, si se saben qué habili- general es útil para entrenarlo empezar a medir la visión
dades debe tener para el tiempo de nacido. de forma binocular.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1237


Estudio de la agudeza visual to, aunque se considera por algunos autores que esta
Para la exploración de la agudeza visual (AV) en etapa concluye a los 2 años.
niños que cooperan, por lo regular entre 4 a 7 años, se • Segundo período o etapa de "estabilización", que se
les exhorta al reconocimiento de objetos cada vez más continúa desde los 2 a 4 años hasta los 8 a 10 años,
pequeños, por ejemplo: animales o cosas conocidas o la tiempo durante el cual el niño estabiliza los conoci-
posición en que se coloca la letra E del optotipo, con las mientos adquiridos y su visión se hace indeleble has-
patas arriba, abajo, derecha e izquierda o con letras, si ta el resto de sus días.
sabe leer (Figs. 93.9 y 93.9A).
Toda interferencia para que se forme la imagen en
la mácula como puede ser la provocada por ptosis
palpebral, opacidad de los medios, oclusión prolongada
de un ojo en el tratamiento de estrabismo o un trauma-
tismo, puede detener el desarrollo y provocar una grave
disminución de la visión. La falta de desarrollo visual sin
lesión orgánica aparente, se llama ambliopía.
La visión de los colores se explora en los niños que
aún no saben reconocer letras o números, mediante va-
rios métodos como el seguimiento con el dedo de las
figuras trazadas en diferentes combinaciones de puntos
de colores en las tablas pseudoisocromáticas de Ishihara,
que exploran la visión de colores en el eje rojo verde.
Este tipo de prueba es de gran ayuda para el examen de
niños que en la escuela tienen dificultad con el reconoci-
miento de los colores, lo cual es relativamente frecuen-
te, ya que 8 % de los varones y 0,5 % de las hembras
padecen de defectos de visión de colores congénitos,
con el rojo y verde. Estos niños confunden los colores
verdes con carmelitas y los morados con azules. A ve-
ces solo tienen problemas con objetos pequeños.
Para explorar la binocularidad se usan pruebas espe-
ciales como la de Titmus, en las que se le muestra al niño
ciertas figuras que provocan una reacción repulsiva o de
Fig. 93. 9 y 93.9A. Cartillas de E y de letras. miedo en el sujeto, si hay buena visión binocular y
estereopsia; esto lo conocemos por el gesto de desagrado
Si se trata de un niño inteligente, siendo aún pe- que la figura vista provoca en el niño. Existen además prue-
queño, se puede tomar la visión con cierto grado de bas para saber si la visión de un ojo está siendo suprimida.
confiabilidad. Si no alcanza la visión de la unidad o el 20/ La prueba de fotoestrés es muy sencilla y útil para
20, se realiza refracción, para conocer la mejor agudeza conocer si la deficiencia visual se debe a una maculopatía
visual corregida. De no existir la posibilidad de hacer o a una afección del nervio óptico, lo que puede hacer el
refracción, el niño debe mirar la cartilla de pruebas a pediatra, si dispone de una cartilla de pruebas. El tiempo
través de un pequeño agujero de 2 mm tallado sobre un de recuperación debe estar prolongado en una
oclusor. Si hay mejoría evidente de la visión la deficien- maculopatía y no alterarse en una neuropatía. Sus pasos
cia es debida por lo regular a un defecto refractivo. son los siguientes:
Se debe recordar que en un niño pequeño la pre- • Se explora la AV y se corrige con refracción, si fuera
sencia de estrabismo monocular nos obliga a sospechar necesario. No debe realizarse, si la AV es peor de
mala visión monocular y el nistagmo en mala visión de 20/80.
ambos ojos. • Por 10 s se deslumbra con luz fuerte, colocada a 2 ó
En el desarrollo de la agudeza visual se considera prác- 3 cm del ojo que va ser examinado.
tico y necesario dividirla en dos grandes períodos o etapas: • Se explora de nuevo, la AV y se mide el tiempo que
• Etapa de "desarrollo y perfeccionamiento", que se tarda en recobrar la visión del primer examen.
inicia desde el nacimiento hasta los 4 años, en la cual • Anormal. Si el tiempo de recuperación es mayor de
el niño logra obtener visión normal igual a la del adul- 60 s o hay gran diferencia entre ojos.

1238 Tomo III


Otra prueba de función muy sencilla es la de satura- Las pruebas electrofisiológicas: el eletrorreti-
ción del color. Se muestra al paciente, en cada ojo por nograma a luz difusa, el electrorretinograma con pa-
separado, un objeto de color rojo y se le pide que diga trón, los potenciales evocados visuales corticales y el
si hay diferencias de color y cuál es la diferencia. Se electrooculograma, son estudios que dan a conocer el
afecta de forma importante en las neuropatías. estado de las diferentes capas de retina y vía visual y
permite separar el estudio funcional de los conos y bas-
Otras pruebas de exploración objetiva tones y hasta estudiar puntos determinados de la retina
Existen múltiples métodos de exploración objetiva y corteza visual. Son de gran utilidad para el diagnós-
del órgano visual que usan diversos instrumentos, algu- tico ya que permiten ubicar topográficamente la lesión,
nos simples, y otros mucho más complejos. La mayoría suponer su causa y en algunos casos se alteran antes
de ellos requieren la cooperación del niño, o su sedación de que puedan observarse lesiones en el fondo del ojo
y debe realizarse por el especialista en oftalmología, en- (Figs. 93.11 y 93.11 A).
tre ellos la tonometría, gonioscopia, la microscopia ultra-
sónica del segmento anterior, la microscopia especular
corneal, pruebas con colorantes de uso tópico e
intravenoso, el ultrasonido, entre otros.
Además del examen del fondo de ojo con
oftalmoscopia, son importantes para el diagnóstico el uso
en el oftalmoscopio de diferentes filtros, como los que
proporcionan la luz aneritra o libre de rojo de color ver-
doso, que sirve para destacar elementos de fondo como
vasos, hemorragias, y fibras ganglionares, otro filtro es
el de color azul violeta para buscar autofluorescencia,
presentes en algunas estructuras del fondo, como las
drusas papilares. Los oftalmoscopios también tienen un
punto pequeño oscuro en medio de la luz que se proyec-
ta para explorar si la fijación del punto se realiza real-
mente en la fóvea, al pedirle al niño que lo mire y observar
que el punto oscuro cae en ella. Fig. 93. 11. Electrorretinograma estandarizado normal.
Las pruebas contrastadas son de gran valor, como
por ejemplo, la angiografía fluoresceínica retiniana, que
en un estudio vascular y dinámico en el tiempo, mues-
tran las alteraciones en: coroides, papila y en retina y
su vasculatura, en cuatro fases diferentes marcadas
por el tiempo transcurrido y el avance del contraste en
los vasos del ojo; se usan además otros contrastes
como el verde indocianina para destacar áreas de inte-
rés en el fondo de ojo (Fig. 93.10).

Fig. 93. 11A. Electrorretinograma multifocal normal.

El ultrasonido ocular permite hacer mediciones y


observar los ecos de las diferentes estructuras del ojo
y la órbita y dar una visión de estas estructuras. Más
reciente el estudio de tomografía óptica coherente per-
mite obtener verdaderos estudios tomográficos en vivo
y diferenciar ocho capas de la retina, así como medir
Fig. 93. 10. Angiografía fluoresceínica del polo posterior. las diferentes estructuras y el grosor de las capas de

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1239


fibras ganglionares, lo que aporta gran información en
Signos Neuropatía óptica
el estudio de las enfermedades de la retina y el nervio Maculopatías
óptico (Fig. 93.12).
El estudio de una deficiencia visual con examen Disminución visual Común Común
de fondo de ojo aparentemente normal es un reto a la Discromatopsia Grave Moderada
pericia del especialista. En ese caso es posible que se Prueba de Amsler Escotomas Metamor-
fopsias
trate de una leve maculopatía o neuropatía óptica no Defecto pupilar aferente Común Raro
precisada por oftalmoscopia para lo que deben tener- Campo visual Múltiples Centrales
se en cuenta los síntomas, signos y resultados de prue- defectos
bas especiales para aclarar la causa de la deficiencia Oftalmoscopia Palidez, Anomalías
visual. inflamación maculares,
o normal palidez
temporal
Síntomas Neuropatía óptica
Maculopatías Pruebas Neuropatía óptica Maculopatías

Metamorfopsia Rara Común Fotoestrés Normal Anormal


Obscurecimiento Visual Común Raro
ERG Normal Anormal
Reconocimiento de pérdida (+focal)
del campo periférico Común Raro
Fotopsia Rara Común OCT Normal Anormal
Hipersensibilidad a la luz Rara Común
Dolor Algunos Raro o anormal

PERG Anormal Anormal

PEV Latencia Latencia


prolongada prolongada

Oftalmoscopia Palidez Anomalías


papilar, maculares,
inflamación o palidez
normal temporal

Fig. 93. 12. Estudio de retina con el tomógrafo óptico coherente. Corte al nivel de la mácula y su similitud con un corte
histológico.

1240 Tomo III


Bibliografía rior permanece hacia fuera en el canto o ángulo externo
y hacia dentro en el canto o ángulo interno.
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Fundamentals and
Principles of Ophthalmology; American Academy San Su gran movilidad es debida a que su piel es una de
Francisco: American Academy of Ophthalmology; 2003-2004. las más delgadas y laxas del cuerpo. En ellos se obser-
Paneca Santiesteban, Rosaralis; Francisco Plasencia, Marta; van numerosas glándulas como las de Zeiss, que son
Santiesteban Freixas, Rosaralis; Carrero Salgado, Magdalena; folículos sebáceos, las de Moll o sudoríparas modifica-
Mendoza Santiesteban
Carlos E. Electrorretinograma: Valores normales con diferentes
das, y las de Meibomio. En los bordes libres palpebrales
protocolos de estudio. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2) emergen tres hileras de pelos cortos, curvos y gruesos
Fulton AB, Hansen RM, Manning KA. Measuring visual acuity in que constituyen las pestañas.
infant. Surv Ophthalmol 1998;25:352. La dureza y firmeza de los párpados se lo confiere
Glaser JS. Neuro ophthalmology examination: General una placa de tejido fibroso denso denominada tarso; el
considerations and special techniques: In Glaser J S editor:
Neuro ophthalmology. Philadelphia, 1990, JB Lippincott. del párpado superior es más ancho que el inferior. Am-
González García, Alberto O; Ortiz González, Elier; Santiesteban bos tarsos se unen a las paredes laterales de la órbita.
Freixas,Rosaralis; Mendoza Santiesteban, Carlos E. Valor del Las arterias palpebrales derivan de la oftálmica fun-
electrorretinograma a patrón y tiempo retino-cortical en el damentalmente a través de las ramas supraorbitaria,
diagnóstico precoz de la neuropatía glaucomatosa. Rev
Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
supratroclear, lagrimal y dorsonasal; las venas desem-
Hoyt CS, Niekel BL, Billsen FA. Ophthalmological examination of bocan en la vena oftálmica y la vena facial; la inervación
the infan Survey Ophthalmol, 1980;89:560. depende del III nervio craneal, que inerva el músculo
Isemberg SJ: Clinical application of the pupil examination in elevador, el VII par craneal o facial, que inerva el
neonates. J Pediatric 1991;1118-650.
Liu GT, Volpe NJ, Galetta SL. Neuro-Ophthalmology. Diagnosis
orbicular, y el simpático para el músculo liso de Muller.
and Management. Saunders co. 2001. Chapter 5. Visual loss. La interrupción de la inervación simpática causa ptosis,
Optic Neuropathies:3-57. miosis y anhidrosis, conocida como los signos del síndro-
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric me de Horner. La inervación sensorial deriva del quinto
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
nervio craneal.
2005, p 84-93.USA.
Nelson L. Exploración ocular. En Behrman RE, Kliegman RM,
Arvin AM. Nelson, Tratado de Pediatría. La Habana: Ecimed, ENFERMEDADES DE LOS PÁRPADOS
1998;t3:2194-6.
Paneca Santiesteban, Rosaralis; Amaro Nodarse, Jorge E; Mendoza Entre las afecciones oftalmológicas fundamenta-
Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas, Rosaralis. les que se manifiestan en los párpados están:
Electrorretinograma estandarizado con respuesta de conos S y • Las anomalías congénitas.
onda C en diabéticos sin retinopatía. Rev Cubana Oftalmol.
2005;18(2)
• Las inflamaciones.
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, • Los tumores.
2005,Argentina.
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St. Anomalías congénitas
Louis: Mosby; 1995.
Como en otras partes del cuerpo humano, los pár-
pados pueden ser afectados por varias anomalías congé-
nitas, las cuales se pueden presentar de forma aislada o
estar asociadas a otras en la cara o con enfermedades
. Capítulo 94 . sistémicas.
La mayoría de las anomalías congénitas de los pár-
Párpados pados ocurren durante el segundo mes de gestación y por
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra lo general, su aparición es infrecuente. Se describen alre-
y Clara Gómez Cabrera dedor de 13, entre ellas el criptoftalmos o falta de desa-
rrollo de los pliegues palpebrales, o las malformaciones
Los párpados son estructuras pares, bilaterales, con que acompañan al microftalmos y anoftalmo; los
repliegues delgados de piel, músculos y tejido fibroso, colobomas y pseudocolobomas; el anquiloblefaro, en el
formados a partir del ectodermo superficial, que tienen que se observan bandas de tejido que une a los párpados
la función de proteger las estructuras delicadas del ojo. entre sí; retracción congénita del párpado superior y des-
Los pliegues que forman los párpados superior e inferior censo inferior del canto externo del párpado, entre otras.
se funden en la semana ocho de vida embrionaria y se Se expondrán solo las más frecuentes.
mantienen fusionados hasta cerca del sexto mes de Epicantus: Es un pliegue cutáneo entre el párpa-
embarazo. La unión de ambos párpados, superior e infe- do superior e inferior en forma de media luna que

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1241


Bibliografía rior permanece hacia fuera en el canto o ángulo externo
y hacia dentro en el canto o ángulo interno.
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Fundamentals and
Principles of Ophthalmology; American Academy San Su gran movilidad es debida a que su piel es una de
Francisco: American Academy of Ophthalmology; 2003-2004. las más delgadas y laxas del cuerpo. En ellos se obser-
Paneca Santiesteban, Rosaralis; Francisco Plasencia, Marta; van numerosas glándulas como las de Zeiss, que son
Santiesteban Freixas, Rosaralis; Carrero Salgado, Magdalena; folículos sebáceos, las de Moll o sudoríparas modifica-
Mendoza Santiesteban
Carlos E. Electrorretinograma: Valores normales con diferentes
das, y las de Meibomio. En los bordes libres palpebrales
protocolos de estudio. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2) emergen tres hileras de pelos cortos, curvos y gruesos
Fulton AB, Hansen RM, Manning KA. Measuring visual acuity in que constituyen las pestañas.
infant. Surv Ophthalmol 1998;25:352. La dureza y firmeza de los párpados se lo confiere
Glaser JS. Neuro ophthalmology examination: General una placa de tejido fibroso denso denominada tarso; el
considerations and special techniques: In Glaser J S editor:
Neuro ophthalmology. Philadelphia, 1990, JB Lippincott. del párpado superior es más ancho que el inferior. Am-
González García, Alberto O; Ortiz González, Elier; Santiesteban bos tarsos se unen a las paredes laterales de la órbita.
Freixas,Rosaralis; Mendoza Santiesteban, Carlos E. Valor del Las arterias palpebrales derivan de la oftálmica fun-
electrorretinograma a patrón y tiempo retino-cortical en el damentalmente a través de las ramas supraorbitaria,
diagnóstico precoz de la neuropatía glaucomatosa. Rev
Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
supratroclear, lagrimal y dorsonasal; las venas desem-
Hoyt CS, Niekel BL, Billsen FA. Ophthalmological examination of bocan en la vena oftálmica y la vena facial; la inervación
the infan Survey Ophthalmol, 1980;89:560. depende del III nervio craneal, que inerva el músculo
Isemberg SJ: Clinical application of the pupil examination in elevador, el VII par craneal o facial, que inerva el
neonates. J Pediatric 1991;1118-650.
Liu GT, Volpe NJ, Galetta SL. Neuro-Ophthalmology. Diagnosis
orbicular, y el simpático para el músculo liso de Muller.
and Management. Saunders co. 2001. Chapter 5. Visual loss. La interrupción de la inervación simpática causa ptosis,
Optic Neuropathies:3-57. miosis y anhidrosis, conocida como los signos del síndro-
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric me de Horner. La inervación sensorial deriva del quinto
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
nervio craneal.
2005, p 84-93.USA.
Nelson L. Exploración ocular. En Behrman RE, Kliegman RM,
Arvin AM. Nelson, Tratado de Pediatría. La Habana: Ecimed, ENFERMEDADES DE LOS PÁRPADOS
1998;t3:2194-6.
Paneca Santiesteban, Rosaralis; Amaro Nodarse, Jorge E; Mendoza Entre las afecciones oftalmológicas fundamenta-
Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas, Rosaralis. les que se manifiestan en los párpados están:
Electrorretinograma estandarizado con respuesta de conos S y • Las anomalías congénitas.
onda C en diabéticos sin retinopatía. Rev Cubana Oftalmol.
2005;18(2)
• Las inflamaciones.
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, • Los tumores.
2005,Argentina.
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St. Anomalías congénitas
Louis: Mosby; 1995.
Como en otras partes del cuerpo humano, los pár-
pados pueden ser afectados por varias anomalías congé-
nitas, las cuales se pueden presentar de forma aislada o
estar asociadas a otras en la cara o con enfermedades
. Capítulo 94 . sistémicas.
La mayoría de las anomalías congénitas de los pár-
Párpados pados ocurren durante el segundo mes de gestación y por
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra lo general, su aparición es infrecuente. Se describen alre-
y Clara Gómez Cabrera dedor de 13, entre ellas el criptoftalmos o falta de desa-
rrollo de los pliegues palpebrales, o las malformaciones
Los párpados son estructuras pares, bilaterales, con que acompañan al microftalmos y anoftalmo; los
repliegues delgados de piel, músculos y tejido fibroso, colobomas y pseudocolobomas; el anquiloblefaro, en el
formados a partir del ectodermo superficial, que tienen que se observan bandas de tejido que une a los párpados
la función de proteger las estructuras delicadas del ojo. entre sí; retracción congénita del párpado superior y des-
Los pliegues que forman los párpados superior e inferior censo inferior del canto externo del párpado, entre otras.
se funden en la semana ocho de vida embrionaria y se Se expondrán solo las más frecuentes.
mantienen fusionados hasta cerca del sexto mes de Epicantus: Es un pliegue cutáneo entre el párpa-
embarazo. La unión de ambos párpados, superior e infe- do superior e inferior en forma de media luna que

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1241


recubre el ojo en su ángulo interno. Es motivo de con- pupilar en el niño pequeño es causa de ausencia del de-
sulta frecuente por la familia que lo confunde con un sarrollo de la visión en ese ojo y como consecuencia
estrabismo, pues al mover el ojo hacia adentro, este se puede provocar ambliopía, por lo que se debe realizar la
recubre parcialmente con el pliegue palpebral, seme- cirugía en edades tempranas de la vida.
jando un estrabismo convergente. Es característico de Epibléfaron: suele asociarse al epicantus; Es la
la raza amarilla, pero se observa en niños de otras ra-
presencia de un pliegue de piel en el párpado inferior que
zas entre 1 y 4 años. Disminuye y desaparece espon-
hace que las pestañas se inviertan y rocen el bulbo ocular,
táneamente con los años, al desarrollar la raíz nasal.
provocando en algunas ocasiones conjuntivitis y queratitis,
Se observa en algunos síndromes como el de Down,
aunque por lo general cursa de forma asintomática. Se
Turner y otros (Fig. 94.1).
observa en los asiáticos y en niños recién nacidos y tiende
a desaparecer con el desarrollo facial.
Distriquiasis: es la presencia de una segunda hi-
lera de pestañas en el lugar donde se abren las glándulas
de meibomio. La triquiasis es adquirida y se refiere a la
mala dirección que toman las pestañas al dirigirse hacia
adentro, lo cual daña la córnea.
Entropión: es una inversión del borde libre
palpebral que arrastra a las pestañas produciendo irrita-
ción mecánica de la conjuntiva y de la córnea. Afecta
con mayor frecuencia el párpado inferior y requiere en
algunos pacientes tratamiento quirúrgico para evitar el
daño corneal.
Fig. 94.1. Epicantus. Telecanto: es un aumento de la distancia
Ptosis palpebral: Es la caída del borde palpebral intercantal, suele asociarse a epicantus y blefarofimosis.
superior mayor de 2 mm por debajo del limbo esclerocorneal La blefarofimosis es la disminución en el largo horizon-
en su zona superior. Puede ser unilateral o bilateral. El des- tal de la fisura palpebral (Fig. 94.3).
censo del párpado puede ser desde leve a grave.
En los niños las ptosis más frecuentes son la congé-
nita simple y la aponeurótica, que se caracteriza por la
buena función que tiene el músculo elevador del párpado,
aunque se pueden observar otros tipos de ptosis (Fig. 94.2).

Fig. 94.3. Blefarofimosis.

El síndrome de blefarofímosis es de tipo autosómico


dominante, que incluye varias anomalías palpebrales,
como ptosis, epicantus inverso, telecanto, blefarofímosis
Fig. 94.2. Ptosis palpebral aponeurótica. y a veces ectropión del párpado inferior.
En la ptosis congénita simple el párpado está liso Afecciones inflamatorias
sin el pliegue normal y para poder ver, el niño contrae el
En los niños, las afecciones inflamatorias de los
músculo frontal, eleva la ceja y reclina la cabeza hacia párpados que se presentan con relativa frecuencia son
atrás. Existen 3 grados de acuerdo con su posición. Grado las siguientes:
I, si el párpado cubre hasta el borde superior de la pupi- Orzuelo externo: es un pequeño absceso del bor-
la. Grado II, si el párpado cubre parcialmente la pupila. de libre palpebral causado generalmente por una infec-
Grado III, si cubre el área pupilar. Cuando ocluye el área ción de las glándulas de Zeiss o de Moll. Se asocia

1242 Tomo III


frecuentemente a infección por estafilococo y puede estar la blefaritis seborreica, aunque pueden coexistir ambas
presente más de una lesión; en ocasiones se afecta todo formas, blefaritis mixtas.
el borde libre palpebral. Blefaritis estafilocócica: se caracteriza por
Orzuelo interno: Es un pequeño absceso causa- hiperemia y engrosamiento del borde libre y la presencia
do por infección estafilocócica aguda de las glándulas de costras amarillentas que se adhieren fuertemente a
de Meibomio. Este absceso puede abrir por piel o por la la base de las pestañas.
conjuntiva tarsal (Fig. 94.4).

Fig. 94.4. Orzuelo interno.

Ambos tipos de orzuelo pueden estar asociados a


enfermedades carenciales, a estados de inmunodepresión
o a defectos refractivos no corregidos. Fig. 94.5. Chalazion.
Tratamiento:
Fomentos tibios de agua hervida o suero fisiológico. En los casos más graves se forman úlceras acom-
Pomada antibiótica- antiinflamatoria. pañadas de grietas y excoriaciones de la piel. Ese tipo
Incisión y drenaje, si no resuelve espontáneamente. de blefaritis siempre va acompañada de conjuntivitis de
Antibiótico y antiinflamatorios no esteroideos, mayor o menor grado y queratitis que por lo general toma
sistémicos si se acompaña de celulitis o si son la porción inferior de la córnea. Los síntomas estarán en
recidivantes. dependencia de la magnitud de la blefaritis y son fre-
cuentes, el ardor y prurito localizado, la sensación de
Chalazion: Es una inflamación lipogranulomatosa cuerpo extraño y la fotofobia, si hay toma de la conjun-
crónica de las glándulas de Meibomio causada por un blo- tiva y de la córnea.
queo de los orificios de salida. Cuando son pequeños pue- Blefaritis seborreica: los signos y síntomas son
den desaparecer espontáneamente. Algunos autores menos intensos que en la forma anterior, con frecuencia
denominan al chalazion como quiste de las glándulas de acompaña a la seborrea del cuero cabelludo, de las ce-
Meibomio. jas y de los oídos. Se caracteriza por la presencia de
Se caracteriza por una tumefacción indolora, de escamas blanco-grisáseas y oleosas en las pestañas que
tamaño variable dura al tacto, adherida al tarso pero no no causan ulceraciones en el borde libre. Es producido
a la piel y al evertir el párpado se reconoce por una por el Pityrosporum ovale.
coloración rojo intensa que tiende a tornarse gris con el Tratamiento:
tiempo. Su reabsorción espontánea a veces demora hasta Mantener la limpieza del cuero cabelludo en el
6 meses o más. En algunos casos es necesario la inci- tipo seborreico.
sión y drenaje o tratamiento con crioterapia (Fig. 94.5). Actuar sobre los factores causales o predispo-
Blefaritis: Es el estado inflamatorio crónico de los nentes.
bordes palpebrales que generalmente evoluciona por Limpieza mecánica de los bordes libres
crisis de exacerbaciones y remisiones. La poca higiene, palpebrales.
mala alimentación, enfermedades debilitantes, estados Aplicación de pomada antibiótica y en los casos
de inmunodepresión, defectos refractivos, medio ambien- resistentes, antibióticos orales.
te adverso e irritante, así como factores alérgicos, se
señalan entre las causas predisponentes. Impétigo: es causado por el estreptococo. Suele
Se han descrito varias formas clínicas de las cua- afectar con relativa frecuencia al niño pequeño y provo-
les las más frecuentes son la blefaritis estafilocócica y ca vesículas, pústulas y costras que pueden cubrir el

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1243


párpado, las que son molestas y dolorosas. Son necesa- Tumores palpebrales
rias las curas con suero fisiológico y la limpieza y elimi- En los párpados se pueden desarrollar tanto tumores
nación de las costras para evitar la propagación, así como benignos como malignos que son, en la clínica y en su
el uso local de eritromicina o cefalexina u otros histología, semejantes a los de la piel de la cara. Su inciden-
antibióticos en forma de ungüentos. cia varía mucho en las distintas partes del mundo y en las
Celulitis: es un proceso infeccioso limitado a la
diversas razas. Los tumores benignos son muy frecuentes
piel y al tejido subcutáneo anterior de los párpados. Se
y su aparición aumenta con la edad. Su exéresis general-
caracteriza por edema, rubor, calor que evoluciona ha-
mente se practica por motivos cosméticos, pues es usual
cia una zona de fluctuación por donde habitualmente se
que sean asintomáticos, excepto si se sitúan en el borde
produce el drenaje de un material purulento.
Se presenta con frecuencia con puerta de entrada libre palpebral o la unión mucocutánea. Las tumoraciones
del germen por picada de insecto, herida o cuerpo extra- se observan poco en los niños y las más frecuentes son los
ño en el párpado, que suele abscedarse por lo que en papilomas, nevus, molusco contagioso y hemangiomas.
estos casos se indica tratamiento antibiótico local y Papiloma: Tumores comunes que suelen tener de
sistémico. Se utiliza en su primera fase fomentos fres- 1 a 5 mm de diámetro, de color carne o pardo y aspecto
cos de suero fisiológico y una vez que mejore el estado polipoideo; pueden ser sésiles o pediculados, aunque en
inflamatorio, fomentos tibios para facilitar el drenaje es- los niños son casi siempre pediculados; múltiples y loca-
pontáneo de las secreciones; en casos aislados se reali- lizados en el borde libre palpebral. Su causa es viral.
za incisión del absceso, si no drena espontáneamente. Con frecuencia recidivan si son incompletamente rese-
Algunas veces se puede complicar avanzando a áreas cados o mal manipulados. El tratamiento es quirúrgico y
más profundas. con crioterapia (Fig. 94.6).
Picadura de insectos: es frecuente la picada de
insectos en los niños (abejas, hormigas, entre otras) oca-
sionando grandes edemas de los párpados debido a la
reacción alérgica que estos producen, por lo que su tra-
tamiento debe estar dirigido al uso de antihistamínicos
principalmente.
Parásitos: algunos parásitos (giardias, oxiuros) pro-
vocan edemas palpebrales y conjuntivitis por reacción
alérgica, y no es hasta que estos son eliminados que cesa
el cuadro clínico oftalmológico.
El pedículis pubis puede anidar en las pestañas
provocando prurito y escozor, acompañándose en oca-
siones de blefaro-conjuntivitis interna. El tratamiento con-
siste en aumentar las medidas higiénicas personales, el Fig. 94.6. Papiloma.
uso de jabones y champú específicos, extraer los parási-
tos y aplicar ungüento de óxido amarillo de mercurio y Nevus: se presentan con frecuencia en la práctica
antibióticos en las lesiones de piel. oftalmológica. Son congénitos y por lo general
Recordar que la pediculosis es una enfermedad inaparentes al nacer. Consisten en nidos de melanocitos
de transmisión sexual. Debe tenerse cuidado de no modificados de pigmentación variable, aunque pueden
acostar al niño en camas que puedan estar contamina- ser amelánicos. Se clasifican en tres grandes grupos:
das por el parásito y recomendar examen y tratamien- nevus de unión, compuestos e intradérmicos; este últi-
to a los padres. mo es un nevus maduro que a diferencia de los dos an-
Virus: los virus del herpes simple y del herpes zóster teriores no es susceptible de sufrir transformación
pueden también afectar los párpados provocando vesículas maligna. El tratamiento es quirúrgico (Fig. 94.7).
en el borde libre y piel que se rompen y ulceran, dando Molusco contagioso: tumor papuloso provocado
lugar a una costra amarillenta; el dolor suele ser intenso. En por un virus del grupo pox. Son pápulas de superficie
el herpes zóster se puede afectar la córnea, incluso provo- lisa con una umbilicación central. Con frecuencia afec-
car uveitis, neuritis y necrosis retinal aguda. Igualmente debe tan el borde libre palpebral en niños y se acompañan de
realizarse limpieza de las lesiones, sobre todo para evitar la conjuntivitis folicular e incluso queratitis, que no desapa-
infección secundaria. El tratamiento antiviral debe comen- recen hasta tanto no se trate el molusco. El tratamiento
zar precozmente, tanto por vía sistémica como locales. es la exéresis o la crioterapia (Fig. 94.8).

1244 Tomo III


de glaucoma y angioma coroideo. En ocasiones, el nevus
no es tan característico y no se diagnostica, por lo que
ante cualquier angioma palpebral debe tomarse la ten-
sión ocular y examinar el fondo del ojo. Este angioma no
responde a tratamiento con esteroide. En algunos casos
se utiliza el tratamiento con láser.
Neurofibromas: la neurofibromatosis del párpado
es rara y puede dar lugar a una ptosis palpebral. La
anamnesis y las manchas de color café con leche en la
piel de la espalda del niño ayudan al diagnóstico.

Fig. 94.7. Nevus conjuntival.

Fig. 94.9. Hemangioma capilar.

Bibliografía
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Orbit, Eyelids,
and Lacrimal System. San Francisco: American Academy
Fig. 94.8. Molusco contagioso. of Ophthalmology;2003-2004.
Cantor L.B. Orbit, Eyelids, and Lacrimal System. San
Francisco: American Academy Ophthalmology. 2003-
Angiomas: en los niños, el tipo más frecuente de 2004.
hemangioma es el denominado hemangioma capilar que Stewart W.B. Surgery of the Eyelids, Orbit and Lacrimal
System. San Francisco: American Academy of
aparece al nacimiento o en las primeras semanas de vida.
Ophthalmology. 1995:34-133.
Es de color rojo púrpura y tiende a crecer hasta el año Gómez Cabrera C, Falcón Marquez I. Lesiones Pigmentadas de
de edad, después de lo cual puede sufrir regresión es- Párpado y Conjuntiva. Rev Cubana Oftalmol 2002; 15(1):
pontánea por lo que el tratamiento, por lo general, es 57-61.
observación, a menos que comprometa el desarrollo vi- Gómez Cabrera C, Herrera Soto M, Falcón Marquez I. Tumores
sual (Fig. 94.9). Benignos de los Párpados. Rev Cubana Oftalmol 2001;
Se utiliza tratamiento local con inyecciones de 14(2): 125-8.
Gómez Cabrera C, Toro Toloza I, Vigoa Aranguren L. Tumores
esteroides (betametasona y triamcinolona) o interferón, de los Anexos Oculares. Rev Cubana Oftalmol 2001; 14(2):
con lo que se logra detener el crecimiento y la tumoración 129-34.
involuciona, disminuyendo de tamaño, sin ser necesaria Herrera Soto M, González Rodríguez C, Martínez Suárez M.
su exéresis quirúrgica. Comportamiento de la ptosis palpebral en el Servicio de
Oculoplastia. Año 2001. Rev Cubana Oftalmol 2002; 15(2).
El nevus rojo o nevus flammeus del síndrome de Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Sturge-Weber, es un angioma unilateral que sigue la dis- Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and
tribución del nervio trigémino en la cara; se acompaña Wilkins. 2005,p367-384. USA.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1245


Pila Pérez, R, Arioza Cineda. Manifestaciones oftalmológicas de haber colocado el colorante se introduce un aplicador
de la ictiosis congénita. Rev Cubana Oftalmol 1989;2(1- en la fosa nasal o se ordena al paciente sonarse la nariz
2):15-21. cubriendo su desembocadura con un apósito y verifi-
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005, cando si el líquido nasal está coloreado o no (Fig. 95.2).
Argentina.
Puig Mora, MC, Cordiés Justin, N. Reconstrucción total del
párpado superior con conservación de su movilidad. Rev
Cubana Oftalmol 1988;1(1):57-65.
Sedeño Cruz, Ibis; Novoa Sánchez, Ester; Padrón Álvarez,
Vivian; García González, Francisco; San Martín Geisse,
Raúl· Blefaritis por Demodex folliculorum: Diagnóstico y
tratamiento. Rev Cubana Oftalmol. 2006;19(1)
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus.
St. Louis: Mosby; 1995.

. Capítulo 95 . Fig. 95.1. Prueba de Schirmer.

Aparato lagrimal
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra
y Nereyda Martínez Suárez.

El aparato lagrimal es un medio de protección del


ojo, ya que la lágrima actúa de forma mecánica lubri-
cando la superficie ocular, arrastrando cuerpos extra-
ños minúsculos que llegan a ella, así como eliminando
microorganismos del medio exterior, gracias a su ac-
ción bactericida. Influye además en la función visual
manteniendo la córnea húmeda y transparente.
La lágrima es un líquido algo alcalino con una pro-
porción grande de cloruro de sodio y una enzima, la
lisozima con poder antibacteriano. Las lágrimas riegan
la conjuntiva y la córnea humedeciendo la superficie
ocular y se pierden, parte por evaporación y el resto
por medio del parpadeo que la conduce al saco lagrimal,
conducto lacrimo-nasal y nariz. La disminución en la
producción de lágrimas acarrea trastornos a la conjunti-
va y a la córnea. Fig. 95.2. Prueba de desaparición del contraste de Jones.
Medida de producción de lágrimas. La secre-
ción lagrimal se mide mediante la prueba de Schirmer ENFERMEDADES DE LA GLÁNDULA
con tiras de papel de filtro de 5 x 35 mm; su extremo se LAGRIMAL
dobla en 5 mm, se coloca entre el tercio medio y el
Las enfermedades de las glándulas lagrimales son
externo del párpado inferior, el resto de la tira sobresale poco frecuentes. Pueden ser de carácter adquirido o
entre los párpados. Cuando el lagrimeo es normal se congénito, como su ausencia o criptoftalmos, alacrimia,
humedecen de 10 a 15 mm del papel en 5 min (Fig. 95.1). y la hiposecreción lagrimal; se pueden observar, ade-
Permeabilidad de las vías lagrimales. Para co- más, quistes, fístulas y prolapsos.
nocer la permeabilidad de las vías lagrimales se usa la Entre las afecciones adquiridas se encuentran las
prueba de desaparición del contraste: se coloca una inflamaciones, tumores, traumas o enfermedades sisté-
gota de fluoresceína en cada ojo y se esperan 5 min; micas que afecten a distintas glándulas del organismo.
se observa entonces la desaparición del colorante o no. La inflamación de la glándula, dacrioadenitis, pue-
Otra prueba es la de Jones I, consiste en que a los 5 min de ser aguda o crónica y acompaña a enfermedades

1246 Tomo III


Pila Pérez, R, Arioza Cineda. Manifestaciones oftalmológicas de haber colocado el colorante se introduce un aplicador
de la ictiosis congénita. Rev Cubana Oftalmol 1989;2(1- en la fosa nasal o se ordena al paciente sonarse la nariz
2):15-21. cubriendo su desembocadura con un apósito y verifi-
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005, cando si el líquido nasal está coloreado o no (Fig. 95.2).
Argentina.
Puig Mora, MC, Cordiés Justin, N. Reconstrucción total del
párpado superior con conservación de su movilidad. Rev
Cubana Oftalmol 1988;1(1):57-65.
Sedeño Cruz, Ibis; Novoa Sánchez, Ester; Padrón Álvarez,
Vivian; García González, Francisco; San Martín Geisse,
Raúl· Blefaritis por Demodex folliculorum: Diagnóstico y
tratamiento. Rev Cubana Oftalmol. 2006;19(1)
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus.
St. Louis: Mosby; 1995.

. Capítulo 95 . Fig. 95.1. Prueba de Schirmer.

Aparato lagrimal
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra
y Nereyda Martínez Suárez.

El aparato lagrimal es un medio de protección del


ojo, ya que la lágrima actúa de forma mecánica lubri-
cando la superficie ocular, arrastrando cuerpos extra-
ños minúsculos que llegan a ella, así como eliminando
microorganismos del medio exterior, gracias a su ac-
ción bactericida. Influye además en la función visual
manteniendo la córnea húmeda y transparente.
La lágrima es un líquido algo alcalino con una pro-
porción grande de cloruro de sodio y una enzima, la
lisozima con poder antibacteriano. Las lágrimas riegan
la conjuntiva y la córnea humedeciendo la superficie
ocular y se pierden, parte por evaporación y el resto
por medio del parpadeo que la conduce al saco lagrimal,
conducto lacrimo-nasal y nariz. La disminución en la
producción de lágrimas acarrea trastornos a la conjunti-
va y a la córnea. Fig. 95.2. Prueba de desaparición del contraste de Jones.
Medida de producción de lágrimas. La secre-
ción lagrimal se mide mediante la prueba de Schirmer ENFERMEDADES DE LA GLÁNDULA
con tiras de papel de filtro de 5 x 35 mm; su extremo se LAGRIMAL
dobla en 5 mm, se coloca entre el tercio medio y el
Las enfermedades de las glándulas lagrimales son
externo del párpado inferior, el resto de la tira sobresale poco frecuentes. Pueden ser de carácter adquirido o
entre los párpados. Cuando el lagrimeo es normal se congénito, como su ausencia o criptoftalmos, alacrimia,
humedecen de 10 a 15 mm del papel en 5 min (Fig. 95.1). y la hiposecreción lagrimal; se pueden observar, ade-
Permeabilidad de las vías lagrimales. Para co- más, quistes, fístulas y prolapsos.
nocer la permeabilidad de las vías lagrimales se usa la Entre las afecciones adquiridas se encuentran las
prueba de desaparición del contraste: se coloca una inflamaciones, tumores, traumas o enfermedades sisté-
gota de fluoresceína en cada ojo y se esperan 5 min; micas que afecten a distintas glándulas del organismo.
se observa entonces la desaparición del colorante o no. La inflamación de la glándula, dacrioadenitis, pue-
Otra prueba es la de Jones I, consiste en que a los 5 min de ser aguda o crónica y acompaña a enfermedades

1246 Tomo III


infecciosas como fiebre tifoidea, tuberculosis, escarlati- Obstrución del conducto lacrimonasal
na, parotiditis y mononucleosis. La enfermedad más frecuente de las vías
Los tumores son excepciones en la glándula lagrimales excretoras en el niño es la obstrucción del
lagrimal. conducto lacrimonasal, que afecta alrededor del 5 % de
los recién nacidos.
Alacrimia e hiposecreción Las obstrucciones, si son congénitas, se detectan,
Cuando se enferma la glándula se altera la produc- por lo regular, a partir de la tercera semana o los prime-
ción de lágrimas, lo que puede ir desde su disminución a ros meses de nacido. Con mayor frecuencia son unila-
su ausencia. La alacrimia (ausencia de lágrimas) y la terales y la obstrucción puede estar en diferentes partes
hiposecreción lagrimal se diagnostican casi siempre des- de las vías lagrimales excretoras, como son:
pués de la aparición de complicaciones dadas por la se- − Puntos lagrimales; por atresia congénita o adquirida,
quedad del ojo como la hipoestesia corneal, queratitis y la cual requiere dilatación y a veces tratamiento qui-
ulceración. Se observa en el síndrome de Riley Day, en rúrgico.
el cual además de la ausencia de lágrimas aparecen otras − Canalículos lagrimales; por malformaciones, cuerpos
malformaciones congénitas; en el de Sjögren, que puede extraños, inflamaciones o traumatismos; la terapéu-
asociarse a enfermedades del colágeno, artritis tica siempre es quirúrgica.
reumatoidea, entre otras. − Conducto lacrimonasal; en la mayoría de los pacien-
tes es congénita por permanencia de detritus celula-
Hipersecreción res, o por falta de imperforación de la válvula de
La hipersecreción de lágrimas ocurre, además del Hásner, la cual se encuentra en la desembocadura
llanto sentimental, en la exposición al sol fuerte o a la del conducto lacrimonasal y en raros casos por obs-
luz intensa, en los pacientes con cuerpos extraños trucción del canal óseo.
conjun-tivales o corneales, conjuntivitis, lesiones o − La fístula congénita del saco lagrimal es rara. El
inflamaciones de la córnea y la úvea, y en el glaucoma dacriocele es una dilatación del saco lagrimal, se ob-
congénito, entre otras. serva como una masa de más de 1 cm de color
Relación de las afecciones de las glándulas lagrimales azuloso, producido por el bloqueo congénito del con-
ducto lacrimonasal y la imposibilidad de drenar las
• Enfermedades congénitas: lágrimas.
− Criptoftalmos, que es la ausencia de la glándula SÍNTOMAS
lagrimal.
El síntoma por excelencia que caracteriza el cua-
− Quistes (excepcionales).
dro clínico es la epífora o lagrimeo pasivo. La dificultad
− Fístulas.
en el drenaje de las lágrimas a veces conduce a una
− Prolapsos.
infección secundaria con secreción. Por ello, frente a
− Ausencia del reflejo de lagrimeo cuando el niño
secreciones oculares serosas, mucosas, mucopurulentas
llora o grita.
o francamente purulentas, que no mejoran con el trata-
− Ausencia de lágrimas o hiposecreción lagrimal
miento de la conjuntivitis, que casi siempre lo acompaña,
• Enfermedades adquiridas:
debe sospecharse que hay obstrucción en las vías
− Inflamaciones (dacrioadenitis).
lagrimales. En estos casos las lágrimas se almacenan en
− Traumas.
el saco lagrimal, que es una zona donde hay acumula-
− Enfermedades sistémicas. ción de lágrimas, las cuales se puede infectar y hacerse
− Lágrima de cocodrilo cuando se produce reflejo mucopurulenta o purulenta, y provocar una dacriocistitis.
de lagrimeo con la masticación. En la mayoría de las veces evoluciona de forma crónica,
• Alacrimia, hiposecreción e hipersecreción. con epífora y secreción como síntomas cardinales.
• Tumores
DIAGNÓSTICO
En los niños se realizan las pruebas para compro-
Enfermedades de las vías lagrimales bar la permeabilidad de las vías lagrimales ya descritas
La mayoría de las afecciones del aparato lagrimal, (prueba de desaparición del contraste y de Jones I).
casi siempre congénitas, afectan a las vías de excre- Al comprimir suavemente el área correspondiente
ción, como son: la ausencia o imperforación de los al saco lagrimal, se observa la salida del pus de reflujo
puntos lagrimales, anomalías en la posición y número de por los orificios lagrimales. En caso de no realizar el
estos. tratamiento correcto el proceso evoluciona hacia la

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1247


cronicidad. Excepcionalmente en niños de 2 ó 3 años
puede pasar a una etapa aguda de la enfermedad con
tumefacción, enrojecimiento y dolor en el área corres-
pondiente al saco (Fig. 95.3).

Fig. 95.4. Técnica de compresión del saco lagrimal.

Si se logra restablecer la permeabilidad, se siente


bajo el dedo un ligero crujido o crepitación que puede
dar lugar a la salida de pus o sangre por el orificio nasal
correspondiente. Con posterioridad a la compresión del
Fig. 95.3. Dacriocistitis. saco, si se tiene éxito, se indican colirios antibióticos du-
TRATAMIENTO
rante 2 semanas.
Por lo general, es suficiente una sola maniobra para
El tratamiento y la edad a que debe ser aplicada
resolver la obstrucción, pero si fuera necesario se debe
cada variante de este, es muy discutido. Algunos autores
repetir varias veces.
indican la instilación de colirios antibióticos varias veces
Si no se consigue la curación con este método, se
al día para evitar la infección. También se sugieren masa-
hacen lavados a presión con jeringuillas y sondajes por
jes simples y compresiones del saco lagrimal. La com-
el oftalmólogo. La edad a la cual se lleva a cabo este
presión del saco lagrimal tiene la ventaja de su fácil
sondaje varía. Algunos especialistas aconsejan que se
realización, la cual es factible de llevar a cabo por el
realice en el tercer o cuarto mes de vida, otros al año, ya
pediatra, en especial si se encuentra en lugares apartados
que muchas de estas obstrucciones se resuelven espon-
en que no sea posible la atención del oftalmólogo. Si el
táneamente antes de esa edad, pero para la mayoría
tratamiento se inicia en las primeras semanas de vida puede
esta práctica debe hacerse de forma precoz, sobre todo
obtenerse la curación de la casi totalidad de los pacientes,
si hay infección.
lo cual puede evitar otros tratamientos más cruentos como:
Por lo regular, el sondaje, que debe realizar siem-
lavados, sondajes o la cirugía de las vías lagrimales.
pre el oftalmólogo, resuelve gran parte de las obstruc-
Técnica de la compresión del saco lagrimal. Se
ciones. En caso necesario, el sondaje puede repetirse
utiliza un algodón, del tamaño aproximado de un garban-
una o dos veces más (Fig. 95.5).
zo, bien comprimido , lo cual se logra humedeciéndolo y
También puede acudirse a la colocación en el con-
apretándolo entre el pulgar y el índice, hasta que tenga
ducto lagrimal de un fino tubo de silicona que se deja por
buena consistencia. Se coloca el algodón sobre los con-
períodos de 4 a 6 meses (Fig. 95.6).
ductos lagrimales y la parte superior del saco sostenién-
dolo con el pulgar de la mano derecha, en tanto que la
mano izquierda sujeta la región occipital de la cabeza del
niño (Fig. 95.4).
Se presiona sobre el algodón en forma simple, pero
con fuerza, siguiendo el sentido de una línea que termina
en la región mastoidea del lado opuesto. Esta fuerza que
se realiza sobre el algodón humedecido transmite la pre-
sión al contenido del saco lagrimal lleno, que de esta
forma puede vencer la obstrucción inferior. Cuando se
comprime el algodón se deben presionar simultáneamente
el saco y los conductos lagrimales para evitar el reflujo y
conseguir el objetivo de arrastre deseado. Fig. 95.5. Sondaje de vías lagrimales.

1248 Tomo III


Martínez Suárez Nereyda, Angel Castro Mestre, Raúl Pérez
Suárez y Aley Hernández Hurtado. Valor de la ecografía en
las afecciones de las vías lagrimales excretoras Rev Cubana
Oftalmol, 1996;9(2).
Martínez Suárez Nereyda, Noelio Rodríguez Méndez
Tratamiento quirúrgico de las interrupciones canaliculares.
Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1).
Martínez Suárez, N. Importancia de la dacriocistografia. Rev
Cubana. Oftalmol 1991;4(1):14-23.
Milend N Naik, Sasntosh G H. Eye and Lacrimal Surgery in
Ophthalmic Surgery The Cutting Edge Sandeep Saxena
2006. Cap 19 p 605-609
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and
Wilkins. 2005, p360-366.USA.
Rodríguez Vargas J, Crdenas Martiatu J‚ Hidalgo Zaldivar V, Pérez
Jesús R. Análisis clínico oftalmológico en el síndrome de
Stevens Johnson. Rev. Cubana Oftalmol 1990;3(3):256-62.
Santana Álvarez J, Rodríguez Romero A, de la Guardia J.
Dacriocistitis crónica. Resultados del tratamiento quirúrgico.
Rev Cubana Oftalmol 1995;18(1):238.
Sigler Villanueva A, Pardillo Morales A, Amora Novoa J. La
citología de impresión conjuntival y la biopsia de la glándula
salival accesoria en el síndrome de ojo seco. Rev Cubana
Oftalmol 1995;18(1)29-35.
Fig. 95. 6. Colocación de tubo de silicona. Smit TJ, Mourits MP. Factors affecting the success of
nasolacrimal duct probing for congenital nasolacrimal duct
obstruction. Am-J-Ophthalmol 1999;127(5):616-7.
Bibliografía Smit TJ, Mourits MP. Monocanalicular lesions: to reconstruct or
not. Ophthalmology 1999;106(7):1310-2.
Agramonte Centelles Ileana, Marta Herrera Soto, Nereyda
Wirostko WJ, Garcia GH, Cory S, Harris GJ. Acute
Martínez y Carmen M. Padilla González. Efectividad de la dacryocystitis as a presenting sign of pediatric leukemia.
compresión del saco lagrimal vs. sondaje de la vía lagrimal en Am-J-Ophthalmol 1999;127(6):734-6.
la dacriocistitis congénita. Rev Cubana Oftalmol Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
2004;17(1). Louis: Mosby; 1995.
Alemañy J., Villar R. , Manual de Oftalmología. Sistema
Lagrimal. Editorial Ciencias Médicas. 4ta edición. 2003
P.71-76.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Orbit, Eyelids,
and Lacrimal System. San Francisco: American Academy of
. Capítulo 96 .
Ophthalmology;2003-2004.
Díaz Fernández JM, Fernández Pérez FS, García Gali M, Conjuntiva
Rodríguez ALba, M. Caracterización clinicoterapéutica de la Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra,
dacriocistitis crónica traumática. Rev Cubana Oftalmol Alberto Omar González García
1996;9(1):46-53.
Dorta Contreras AJ, Ferrer Martínez T, Carreiro Cruz E, Sánchez Solo en casos excepcionales y en edades más avan-
Martínez C. IgA secretora en lágrimas de pacientes con
zadas se recurre a la cirugía, la dacriocistorrinostomía.
conjuntivitis hemorrágica por Coxsackie A 24. Rev Cubana
Oftalmol 1993;6(1):12-8. La conjuntiva es una membrana mucosa vascula-
García Álvarez H, Hernández González J, Apulinaire Pannini J y rizada, lisa, que tapiza la porción anterior del globo ocu-
Ortiz González E. Prueba de Schirmer y tiempo de lar y la interior de los párpados. Está compuesta por la
desintegración de la película de lágrima en la conjuntiva bulbar, la palpebral y un fondo de saco o fornix
queratoconjutivitis seca. Rev Cubana de Oftalm. 1997;1:27-32. conjuntival, donde la conjuntiva cambia de dirección.
García Alvarez Hernán, Rodolfo Hernández González, Juan J.
Apolinaire Pennini y Elier Ortiz González. Pruebas de
En la conjuntiva se encuentran las glándulas res-
Schirmer y tiempo de desintegración de la película de ponsables de la producción del mucus (capa interna de
lágrimas en la queratoconjuntivitis seca. Rev Cubana la lágrima), componente esencial en la adherencia de la
Oftalmol 1997;10(1-2) película lagrimal. La conjuntiva, además, tiene una fun-
Martínez Suárez N. Dacriocistorrinostomía externa. Análisis ción protectora contra las infecciones por estar muy
de resultados en 5 años. Rev Cubana de Oftalmol
vascularizada, por contener las células que constituyen
.,2002;15(2)
Martínez Suárez N. Tratamiento quirúrgico de las interrupciones la primera barrera de defensa celular y por el aporte de
canaliculares. Rev Cubana de Oftalmol. 1999; 12 (1): 46-52 inmunoglobulinas, entre otras.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1249


Martínez Suárez Nereyda, Angel Castro Mestre, Raúl Pérez
Suárez y Aley Hernández Hurtado. Valor de la ecografía en
las afecciones de las vías lagrimales excretoras Rev Cubana
Oftalmol, 1996;9(2).
Martínez Suárez Nereyda, Noelio Rodríguez Méndez
Tratamiento quirúrgico de las interrupciones canaliculares.
Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1).
Martínez Suárez, N. Importancia de la dacriocistografia. Rev
Cubana. Oftalmol 1991;4(1):14-23.
Milend N Naik, Sasntosh G H. Eye and Lacrimal Surgery in
Ophthalmic Surgery The Cutting Edge Sandeep Saxena
2006. Cap 19 p 605-609
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and
Wilkins. 2005, p360-366.USA.
Rodríguez Vargas J, Crdenas Martiatu J‚ Hidalgo Zaldivar V, Pérez
Jesús R. Análisis clínico oftalmológico en el síndrome de
Stevens Johnson. Rev. Cubana Oftalmol 1990;3(3):256-62.
Santana Álvarez J, Rodríguez Romero A, de la Guardia J.
Dacriocistitis crónica. Resultados del tratamiento quirúrgico.
Rev Cubana Oftalmol 1995;18(1):238.
Sigler Villanueva A, Pardillo Morales A, Amora Novoa J. La
citología de impresión conjuntival y la biopsia de la glándula
salival accesoria en el síndrome de ojo seco. Rev Cubana
Oftalmol 1995;18(1)29-35.
Fig. 95. 6. Colocación de tubo de silicona. Smit TJ, Mourits MP. Factors affecting the success of
nasolacrimal duct probing for congenital nasolacrimal duct
obstruction. Am-J-Ophthalmol 1999;127(5):616-7.
Bibliografía Smit TJ, Mourits MP. Monocanalicular lesions: to reconstruct or
not. Ophthalmology 1999;106(7):1310-2.
Agramonte Centelles Ileana, Marta Herrera Soto, Nereyda
Wirostko WJ, Garcia GH, Cory S, Harris GJ. Acute
Martínez y Carmen M. Padilla González. Efectividad de la dacryocystitis as a presenting sign of pediatric leukemia.
compresión del saco lagrimal vs. sondaje de la vía lagrimal en Am-J-Ophthalmol 1999;127(6):734-6.
la dacriocistitis congénita. Rev Cubana Oftalmol Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
2004;17(1). Louis: Mosby; 1995.
Alemañy J., Villar R. , Manual de Oftalmología. Sistema
Lagrimal. Editorial Ciencias Médicas. 4ta edición. 2003
P.71-76.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Orbit, Eyelids,
and Lacrimal System. San Francisco: American Academy of
. Capítulo 96 .
Ophthalmology;2003-2004.
Díaz Fernández JM, Fernández Pérez FS, García Gali M, Conjuntiva
Rodríguez ALba, M. Caracterización clinicoterapéutica de la Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra,
dacriocistitis crónica traumática. Rev Cubana Oftalmol Alberto Omar González García
1996;9(1):46-53.
Dorta Contreras AJ, Ferrer Martínez T, Carreiro Cruz E, Sánchez Solo en casos excepcionales y en edades más avan-
Martínez C. IgA secretora en lágrimas de pacientes con
zadas se recurre a la cirugía, la dacriocistorrinostomía.
conjuntivitis hemorrágica por Coxsackie A 24. Rev Cubana
Oftalmol 1993;6(1):12-8. La conjuntiva es una membrana mucosa vascula-
García Álvarez H, Hernández González J, Apulinaire Pannini J y rizada, lisa, que tapiza la porción anterior del globo ocu-
Ortiz González E. Prueba de Schirmer y tiempo de lar y la interior de los párpados. Está compuesta por la
desintegración de la película de lágrima en la conjuntiva bulbar, la palpebral y un fondo de saco o fornix
queratoconjutivitis seca. Rev Cubana de Oftalm. 1997;1:27-32. conjuntival, donde la conjuntiva cambia de dirección.
García Alvarez Hernán, Rodolfo Hernández González, Juan J.
Apolinaire Pennini y Elier Ortiz González. Pruebas de
En la conjuntiva se encuentran las glándulas res-
Schirmer y tiempo de desintegración de la película de ponsables de la producción del mucus (capa interna de
lágrimas en la queratoconjuntivitis seca. Rev Cubana la lágrima), componente esencial en la adherencia de la
Oftalmol 1997;10(1-2) película lagrimal. La conjuntiva, además, tiene una fun-
Martínez Suárez N. Dacriocistorrinostomía externa. Análisis ción protectora contra las infecciones por estar muy
de resultados en 5 años. Rev Cubana de Oftalmol
vascularizada, por contener las células que constituyen
.,2002;15(2)
Martínez Suárez N. Tratamiento quirúrgico de las interrupciones la primera barrera de defensa celular y por el aporte de
canaliculares. Rev Cubana de Oftalmol. 1999; 12 (1): 46-52 inmunoglobulinas, entre otras.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1249


La conjuntiva tiene una flora normal que puede
variar en los gérmenes que la componen (Cuadro 96.1).

Cuadro 96. 1. Flora normal de la superficie ocular

Staphylococcus especies (primeramente tipo


coagulasa negativo)
Diphtheroids
Staphylococcus epidermidis
S. pneumoniae (transitorio)
Haemophilus I (transitorio)
Moraxella (transitorio)
Staphylococcus aureus (transitorio)

Fig. 96.3. Hemorragia subconjuntival.


Frente a diversas noxas, la conjuntiva puede edema-
tizarse, aumentar el calibre de sus vasos, o ingurgitarse, y Si la conjuntiva se erosiona o desaparece queda
ser asiento de hemorragias por debajo de ella (Figs. 96.1, expuesta una superficie no lisa, lo cual puede provocar
96.2 y 96.3). adherencias entre la superficie del párpado y la conjun-
tiva, lo que se conoce como simbléfaron.

ANOMALÍAS CONGÉNITAS
Las anomalías congénitas son raras en la conjunti-
va. Entre ellas están el quiste dermoide y la xerosis con
sequedad.
La conjuntiva puede ser asiento de inflamaciones,
tumores, degeneraciones hiperplásticas y xerosis, entre
otras. La inflamación es su enfermedad más común a
cualquier edad.

Conjuntivitis
Se puede clasificar según el agente causal en:
• Bacterianas.
• Virales.
• Micóticas.
Fig. 96.1. Quemosis conjuntival.
• Parasitarias.
• Alérgicas
• Traumáticas.

Según su cuadro clínico y evolución se consideran


de tipo agudo o crónico. En las conjuntivitis agudas los
síntomas y signos son: sensación de arenilla o cuerpo
extraño, lagrimeo, enrojecimiento de la conjuntiva en
mayor o menor grado, secreción mucopurulenta o
purulenta, edema palpebral y quemosis de la conjuntiva.
La conjuntivitis es una enfermedad que se mani-
fiesta casi siempre en los dos ojos, pero empieza por uno
de ellos y rápidamente se afecta el segundo.
En las conjuntivitis crónicas se observa un cuadro
clínico similar, pero más atenuado y de más larga dura-
ción. Existen factores de riesgo que favorecen la insta-
Fig. 96.2. Dilatación de vasos. lación de la conjuntivitis (Cuadro 96.2).

1250 Tomo III


Cuadro 96. 2. Factores de riesgo Otros agentes son: el estreptococo piógeno, que for-
ma membranas o seudomembranas; las Neisserias; es-
Anomalías de las márgenes de los párpados tafilococo epidérmico; Streptococcus viridans;
Cierre incompleto de los párpados Moraxella; Pseudomona; Echerichia coli; etc. El es-
Parpadeo inadecuado tafilococo áureo también es causa frecuente de conjunti-
Mal posición palpebral (entropión, ectropión, etc) vitis crónica. La Moraxella provoca un tipo de conjuntivitis
Ojo seco con predominio en los ángulos de los párpados (conjunti-
Anomalías cualitativas de la lágrima vitis angular). Estos enfermos responden satisfactoriamen-
Traumas te al uso tópico de antibióticos específicos en colirios.
Inmunosupresión local o sistémica Por lo frecuente de estas conjuntivitis deben tomar-
se medidas higiénicas y preventivas que eviten la propa-
gación de estas infecciones en los lugares donde sobre
Conjuntivitis bacterianas
todo los niños se reúnen, en particular en las escuelas y
Es el tipo de inflamación de la conjuntiva más fre- círculos infantiles.
cuente, sobre todo en los niños. Oftalmía neonatorum. La oftalmía neonatorum o
CLASIFICACIÓN
del recién nacido es la que aparece en los primeros días
de la vida y hasta las 4 semanas, ocasionada por cualquie-
• Conjuntivitis bacteriana aguda.
ra de los agentes antes mencionados y por otros más agre-
• Conjuntivitis bacteriana hiperaguda.
sivos que pueden llevar a grave afectación visual y general
• Conjuntivitis bacteriana crónica. y hasta la muerte en la infección por la Pseudomona
aeruginosa que es muy rara. Es una conjuntivitis aguda,
Las bacterias que con frecuencia afectan la conjun- por lo regular purulenta, que se adquiere por contamina-
tiva de forma aguda son el estafilococo, sobre todo el de ción durante el paso del feto por el cuello uterino y la
tipo áureo y el Streptococcus pneumoniae, ambas muy vagina enfermos de la madre. A veces se produce la in-
frecuente en niños (sobre todo como epidemias en institu- fección antes del nacimiento, cuando hay ruptura prema-
ciones donde los niños se agrupen). Estos dos agentes, tura de las membranas. Su causa más frecuente es la
que de manera transitoria pueden formar parte de la flora Neisseria gonorrhoeae, la Chlamydia trachomatis, el
normal, frente a determinados factores de riesgo pueden S. pneumoniae y el S. aureus.
volverse patógenos. El Haemophilus influenzae, que se Cuando es ocasionada por el gonococo su diagnós-
ve con frecuencia después de enfermedades del tracto tico tiene particular importancia por el riesgo que presen-
respiratorio, es otro de los gérmenes que con frecuencia tan de ulceración, perforación corneal y endoftalmitis,
afectan la conjuntiva, ocasionando las llamadas conjunti- además de infección sistémica. Los síntomas aparecen,
vitis catarrales agudas. En ellas, la hiperemia conjuntival por lo regular, entre los 2 y 5 días después del nacimiento.
es moderada y la secreción mucopurulenta, lo que hace Hay secreción purulenta, gran edema palpebral y la con-
que los párpados amanezcan pegados. La producida por juntiva está roja y con quemosis, lo que dificulta la obser-
Haemophilus puede complicarse con inflamación o le- vación de la córnea.
sión corneal. Por lo regular responden bien al tratamiento También otros agentes transmitidos por vía sexual,
con antibióticos en particular el cloranfenicol (Fig.96.4). producen la conjuntivitis neonatorum; la Chlamydia
trachomatis, responsable de la mayoría de los casos, y con
menos frecuencia el linfogranuloma venéreo, el molusco
contagioso, el estafilococo dorado y la Candida albicans.
Todos ellos pueden producir similar cuadro clínico infeccio-
so entre los 5 y 8 días, el cual solamente puede adjudicarse
a una u otra causa mediante el estudio de los exudados y su
cultivo. La oftalmía neonatorum producida por el gonococo
es muy frecuente en los países subdesarrollados en tanto
que las provocadas por Chlamydia trachomatis y otros
gérmenes inciden más en países con mayor desarrollo.
La prevención de la oftalmía neonatorum se lleva
a cabo con el método de Credé, que consiste en el lava-
do y limpieza de los ojos del recién nacido con agua desti-
lada y la instilación de una gota de nitrato de plata al
1 %. El colirio puede producir irritación y provocar una
Fig. 96.4. Conjuntivitis bacteriana con secreción. conjuntivitis química. Su acción sobre el gonococo es

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1251


buena y el germen no establece resistencia. El nitrato de TRATAMIENTO

plata se debe conservar en frascos de color ámbar, es- Localmente deben realizarse lavados abundantes
tar libre de alcoholes y recambiar diariamente. La pre- y frecuentes con soluciones salinas para arrastrar las
vención cubre el 90 %, pero lamentablemente en la secreciones, acompañados de fomentos fríos. No deben
infección por clamidia el nitrato de plata no es efectivo, usarse colirio de atropina, ni otros que contengan
por lo que no garantiza una protección absoluta y se debe esteroides (Cuadro 96.3).
recurrir en estos casos a colirios antibióticos.
Conjuntivitis virales
En la conjuntivitis química, provocada por la irritación
que produce la profilaxis con el colirio de nitrato de plata, Las conjuntivitis virales más frecuentes son por
sus síntomas comienzan a las 12 h de instilado y su acción adenovirus, que pueden producir queratoconjuntivitis epi-
démicas, y la fiebre faringoconjuntival. La vía de contagio
no dura más de 48 h. No requiere tratamiento salvo algu-
puede ser respiratoria o por contacto. Se caracterizan por
nos fomentos fríos de suero fisiológico o agua destilada.
hiperemia conjuntival y secreción acuosa. Si no es bilate-
Los estudios de Laga y col. demostraron similar ral desde el inicio puede tardar varios días antes que
eficacia del nitrato de plata al 1% y del ungüento oftál- comiencen los síntomas en el otro ojo. Con frecuencia
mico de tetraciclina, en la profilaxis de la conjuntivitis aparecen infiltrados de leucocitos sobre la conjuntiva
por gonococo. palpebral y puede verse como complicación el infiltrado
En general, la profilaxis correcta es hacer estudio corneal, después de haber mejorado los síntomas
de la secreción vaginal de la madre antes del parto y conjuntivales. Se acompaña de adenopatía preauricular e
poner tratamiento en caso de encontrar alguna infec- infección respiratoria alta. La queratitis provoca visión
ción. La importancia de ello quedó demostrada en un borrosa, fotofobia y lagrimeo. Estas lesiones en la córnea
estudio aleatorizado y a doble ciega, donde se demostró al cicatrizar dejan opacidades generalmente puntiformes
que en los recién nacidos que no tenían riesgo de infec- que pueden permanecer durante semanas o meses. No
ción, el nitrato de plata, la eritromicina y la no profilaxis tiene tratamiento específico solo sintomático.
La conjuntivitis hemorrágica se produce por los
surtieron igual efecto en la prevención de la oftalmía
enterovirus. El enterovirus-70 ha afectado a la pobla-
neonatorum.
ción cubana en brotes epidémicos importantes ocasio-
nando la conjuntivitis hemorrágica, diagnóstico que se
Cuadro 96.3. Tratamiento de la oftalmía neonatorum realiza clínicamente por la presencia de hemorragias
subconjuntivales características en la conjuntiva bulbar
Causa Tratamiento superior en el inicio del cuadro. El período de incubación
es muy corto, su aparición es súbita y cursa sin trata-
Química No miento entre 5 y 7 días. Hay adenopatía preauricular y
Chlamydia Eritromicina (jarabe 50 mg/kg/ en ocasiones se complica con una queratitis superficial.
día oral en 2 ó 4 dosis por 14
Puede haber malestar general con febrícula y no suele
días)
Bacteria dejar secuelas. No existe tratamiento específico, aun-
Cocos gram- Eritromicina 0,5% o que las medidas epidemiológicas ayudan a controlar la
positivos tetraciclina 1% (ungüentos propagación de las epidemias.
cada 4 h por 7 días) El herpes simple en el recién nacido es una enfer-
Bacilos medad que puede ser grave. La conjuntivitis se presenta
gramnegativos Gentamicina o tobramicina a los pocos días o pasados 2 ó 3 semanas después del
(ungüentos cada 4 h por 7 días) nacimiento, y debe sospecharse si hay antecedentes
maternos de infección genital. Se debe a los tipos I y II
Neisseria Penicilina G (100,000 U/kg de herpes. Este último más frecuente en la contamina-
gonorrhoeae día i.v. dividida en 4 dosis por ción por vía vaginal.
7 días) En los adultos se caracteriza además por la pre-
Virus sencia de vesículas en las márgenes del párpado.
Herpes simplex Trifluridina 1% (cada 2 h por Si la córnea es afectada se complica el cuadro y se
7 días o hasta la eptelización presenta queratitis y hasta puede perforarse. El trata-
de la córnea, pero no más de
miento antiviral tópico y parenteral debe iniciarse cuan-
21 días)
Acyclovir (10 mg/kg o 500 mg/ to antes, para lo cual se recomienda acyclovir, el que no
m2 i.v. cada 8 h por 10 días) solo ayuda a combatir la enfermedad sino que previene
la ocurrencia de nuevos brotes o su gravedad.

1252 Tomo III


Conjuntivitis micóticas La conjuntivitis vernal o primaveral se caracte-
Las conjuntivitis de causa micótica son raras. La riza por la hipertrofia papilar, con aspecto de empedrado
en la conjuntiva palpebral superior. El limbo corneal pa-
producida por Candida albicans, casi siempre se
rece gelatinoso y el niño presenta picazón, fotofobia,
acompaña de infección palpebral o bucal. La conjunti-
lagrimeo y blefarospasmo. La enfermedad cursa por
va está hiperémica y se pueden observar en los fondos brotes y es necesaria la administración de esteroides para
de saco conjuntivales placas blanquecinas sugestivas de eliminar las molestias. Con el tiempo la conjuntiva bulbar
la enfermedad. El tratamiento consiste en la aplicación toma una coloración amarillo pardusca. El uso de colirio
de ungüento de nistatina. de cromoglicato de sodio (Intal) está indicado.

Conjuntivitis parasitarias Conjuntivitis traumática


Las conjuntivitis parasitarias son frecuentes en las Las conjuntivitis traumáticas pueden ocurrir por
regiones africana, asiática, centroamericana y traumas contusos o cortantes. También se producen por
suramericana. En Cuba no se registran pacientes con la acción de agentes físicos y químicos.
conjuntivitis de este tipo. Los síntomas más frecuentes son similares a los
Otra causa de conjuntivitis que puede llevar a la de las otras conjuntivitis, pero sin secreción, salvo por la
ceguera es por la oncocercosis. El parásito es trasmitido infección secundaria y acompañados del cuadro clínico
por moscas. Las microfilarias emigran al interior del ojo de un traumatismo ocular.
y ocasionan la conjuntivitis, lesiones corneales y en la La conjuntivitis química puede variar el cuadro clí-
úvea, catarata, neuritis y atrofia óptica. Otros parásitos nico en dependencia del agente agresor, desde una leve
que pueden afectar a la conjuntiva son: Trichinella irritación hasta una grave lesión. Las más frecuentes
spiralis, Schistosoma, miasis, loaiasis, etc. son provocadas por ácidos y álcalis.

Conjuntivitis alérgicas Tracoma


El tracoma es una enfermedad que se desarrolla a
Las conjuntivitis alérgicas pueden presentarse ais- cualquier edad y se manifiesta como una queratocon-
ladamente o ser manifestación de un cuadro clínico juntivitis producida por la Chlamydia trachomatis. En
alérgico generalizado. Se caracterizan por moderada los exámenes por frotis aparecen los cuerpos de inclu-
hiperemia de la conjuntiva, fotofobia y lagrimeo, pero sión citoplasmáticos característicos. Es una conjuntivitis
sobre todo por prurito ocular. La quemosis conjuntival purulenta con hipertrofia papilar, folículos en la conjun-
puede ser el signo clínico que predomine. Los alergenos tiva bulbar y vascularización de la córnea. Puede con-
son diversos no obstante el tratamiento con antihis- ducir a la ceguera en el transcurso de los 15 a 20 años
tamínicos y colirios antialérgicos suelen ser suficientes. siguientes por sus complicaciones.
Otro de los tratamientos que se pueden usar, sobre todo El tracoma está extendido por todo el mundo, espe-
en las crisis, son los colirios esteroideos. En los casos cialmente por los países subdesarrollados donde alcanza
que no mejoran, o hacen crisis repetidas, deben reali- incidencias alarmantes y lleva, si no es atendido en tiempo
zarse interconsultas con el especialista en alergia y forma, a la pérdida de la visión. No es frecuente en
(Fig.96.5). América, pero sí en los países del norte de África, donde
la enfermedad se observa en los escolares de los prime-
ros grados. En la actualidad, en Cuba, no se detecta más
que en pacientes que lo adquieren en otros países, pero el
hecho de las tareas de cooperación internacionalistas a
pueblos con hacinamiento, falta de higiene y abasteci-
miento deficiente del agua, obliga a conocerlo y saber cómo
actuar frente a los pacientes portadores.
Sus síntomas son: fotofobia, ardor, sensación de
cuerpo extraño, lagrimeo y blefarospasmo, secreción
mucopurulenta y trastornos en la visión.
Esta sintomatología es muy variada, y permite divi-
dir su evolución en cuatro períodos:
Período I (insidioso). Hay signos leves de conjunti-
vitis, edema y congestión de la conjuntiva, con folículos muy
Fig. 96.5. Conjuntivitis alérgica. pequeños en la porción tarsal. Dura semanas o meses.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1253


Período II (agudo). Síntomas de conjuntivitis agu- característico en el síndrome de Goldenhar
da con gran inflamación y secreción purulenta. Hay (oculoauriculovertebral).
predominio de grandes folículos con hipertrofia papilar • También se pueden ver quistes epiteliales, llenos de
que puede provocar ptosis palpebral. Se prolonga varias líquido en la conjuntiva bulbar y fondo de saco;
semanas o meses. hemangioma capilar; linfangiomas y linfangiectasias.
Período III (cicatrizal). Desaparecen los folículos Los linfomas se observan como masas subconjun-
y papilas hipertróficas, pero se instalan modificaciones tivales de color salmón.
por bandas cicatrizales blancas en la conjuntiva tarsal. A • En más del 90 % de los pacientes con anemia a hematíes
veces toda la superficie conjuntival está representada falciformes hay tortuosidad de los vasos de la conjunti-
por una membrana cicatrizal que hace desaparecer el va, sobre todo en el área temporal inferior. Esta anoma-
pliegue del fondo de saco. La infiltración y neovascula- lía no tiene efecto perjudicial en el ojo del paciente.
rización producen una invasión de vasos hacia la cór- • El carcinoma de células escamosas es un tumor
nea y provoca el pannus tracomatoso que la cubre y maligno que tiene la característica de ser muy invasivo
disminuye la agudeza visual. Otras veces hay ulcera- y penetrar los tejidos intraoculares o extenderse a la
ciones recidivantes con fotofobia y dolor que dura años. órbita. Por tal motivo su diagnóstico precoz es de
Puede comenzar a verse entropión, en este período. vital importancia.
Período IV (curación). Desaparecen los sínto-
mas o son muy discretos, pero se mantiene el tejido Avitaminosis A
cicatrizal lo que conlleva secuelas como el entropión y la Otra de las enfermedades que afectan la conjunti-
triquiasis. También se observa simbléfaron, xerosis va, propia de países subdesarrollados, es la avitaminosis
conjuntival y opacidad con estafiloma de la córnea. A o xerosis conjuntival, con la conocida mancha de Bitot
sobre la conjuntiva, de color amarillento. Puede provo-
Existen otras formas de presentación de la enfer- car, además, lesiones corneales, úlceras, estafilomas y
medad, en particular la hiperaguda, que se puede obser- su perforación. Es esta una de las causas frecuentes de
var en personas jóvenes o adultas que tienen contacto pérdida de la visión en niños de 3 a 7 años en países del
con los enfermos en las regiones o zonas tracomatosas Tercer Mundo.
y sin inmunidad alguna adquieren la enfermedad.
La conducta ideal es el tratamiento preventivo con Otras manifestaciones conjuntivales
antibióticos que se realiza en los escolares de las escuelas Los granulomas aparecen consecutivos a heridas
primarias en los países endémicos entre las edades de 5 a quirúrgicas o traumáticas, o cuerpos extraños alojados en
7 años. La Organización Mundial de la Salud lo viene prac- la conjuntiva, como tejido cicatrizal en las quemaduras
ticando en el norte de África desde hace varias décadas. corneales y en las conjuntivales, formando simbléfaron.
El pterigión es una lesión hiperplásica muy rara en
Conjuntivitis en el curso de enfermedades niños, frecuente en personas sometidas a irritaciones
sistémicas constantes como polvo, aire, sol y salitre. Es una masa
Entre las enfermedades sistémicas que pueden cau- plana de aspecto carnoso triangular cuyo vértice crece
sar conjuntivitis están: mononucleosis infecciosa, influen- hacia la córnea, más frecuente en el lado interno. El
za, sarampión, (que pueden tener hemorragias tratamiento curativo es quirúrgico (Fig.96.6).
subconjuntivales), rubéola; varicela (con vesículas y
ulceraciones); el síndrome oculofaríngeo de Parinaud;
el síndrome de Stevens-Johnson y el síndrome de Reiter,
que se presenta clásicamente con conjuntivitis, uretritis,
poliartritis e iridociclitis.

Tumoraciones de la conjuntiva
• El nevus pigmentado puede ser congénito o apare-
cer en los primeros años de la vida, de preferencia
en la conjuntiva bulbar, cerca del limbo corneal. Es
benigno, pero por la posibilidad de malignizarse en la
edad adulta se recomienda su extirpación.
• El quiste epidermoide o dermoide epibulbar es una
tumoración congénita de color blanco amarillenta, re-
dondeada, que se presenta en el limbo corneal. Es Fig. 96.6. Pterigión pigmentado.

1254 Tomo III


Bibliografía
Carrero Salgado, Yuset Montejo Pujadas y Daisy Chi Alteraciones
en el electrorretinograma de los pacientes con distrofia
. Capítulo 97 .
muscular de Duchenne y su relación con las deleciones del gen
responsable de la enfermedad. Rev Cubana Oftalmol Enfermedades de la esclera
1999;12(2).
Céspedes Valcárcel Alfredo J. Farmacología en enfermedades
y córnea
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
oftálmicas (II). Antimicrobianos. Rev Cubana Oftalmol
Elizabeth Escalona Leyva
1996;9(1).
Estruch Fajardo I, Alemany Martorell J, Gómez Hechavarría AH. La esclerótica y la córnea constituyen la cubierta
Estudio a doble ciegas con el cromoglicato de sodio en la
externa protectora del ojo. La esclera es una capa den-
conjuntivitis alérgica crónica. Rev. cubana. Oftalmol
sa, blanquecina y avascular que se continúa hacia de-
1994;7(1-2):11-18.
lante con la córnea que es transparente, avascular y
Fernández Hernández Y, Martínez Ribalta J, Pérez Blázquez G.
Estudio clínico bacteriológico y microbiológico de la
funciona como una ventana a través de la cual pasan los
conjuntivitis. Rev Cubana Oftalmol 1989;2(1-2):55-63. rayos de luz hacia la retina. Ellas pueden estar afecta-
Fisher, M. Conjuntivitis en Niños. Clínicas Pediátricas de das por procesos inflamatorios, infecciosos y trauma-
Norteamérica 1987;6:1579-87. tismos que suelen poner en peligro la integridad del globo
García Álvarez Hernán, María Isabel González Mesa, Carmen ocular. Constituyen la primera barrera de protección del
Cabarga Haro, Juan Ramón Alegre. Xerosis conjuntival y ojo y que por sus manifestaciones de pérdida de agude-
corneal ligera por déficit de vitamina A Rev Cubana Oftalmol za visual y dolor fundamentalmente, son a veces muy
1999;12(1):. dramáticos, lo que supone un reto para el médico de
Laga et al. Prophilaxis of gonococcal and chlamydial ophthalmia atención primaria y del oftalmólogo en general.
neonatorum. New Engl J Med 1988;318:653-7. Sobre la base de que la esclera y la córnea están
Maria Teresa Alemañy González, Vivian Padrón Alvarez, María
muy relacionadas, es por lo que se estudian juntas en
Elena Marín Valdés y Frank García González. Rev Cubana
un tema.
Oftalmol 1996;9(2). Autoplastía cunjuntival en el pterigium
primario. Rev Cubana Oftalmol, 1996;9(2)
Moreno Pérez, Lourdes M. Estudio microbiológico de la
ESCLERÓTICA
conjuntivitis crónica. Rev Cubana Oftalmol, 1992;5(2):118-21.
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric Anomalías congénitas de la esclera
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. Entre las anomalías congénitas de la esclera se
2005, p201-216.USA. señala el aumento de su transparencia por adelgazamien-
Padrón Alvarez Vivian, María Teresa Alemañy González, María to, lo que da lugar a un color azul claro por visualización
Elena Marín Valdés e Ibis Sedeño Cruz. Utilidad de la lente de los pigmentos coroideos a través de ella. Se debe a
de contacto blanda terapéutica en afecciones corneales. Rev un defecto en su condensación, lo que ocurre alrededor
Cubana Oftalmol 1996;9(1)
del tercer mes de vida intrauterina.
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005,
Las escleras azules se ven en más de una veintena
Argentina.
de enfermedades o síndromes, como los de Crouzon,
Quiñones Varela Irene, Mariela Rodríguez Martí, Yolanda
Mapolón Arcendor, Grettel VilatoPorto Alteraciones
Marfan, Loewe, Paget, Ehlers-Danlos, la fenilcetonuria,
psíquicas en niños con retinosis pigmentaria. Rev Cubana entre otros. La osteogénesis imperfecta es el más cono-
Oftalmol 1999;12(2):. cido de los que cursan con las escleras azules, en la cual
Rodríguez Hernández Mayra, Rosaralis Santiesteban Freixas, se acompaña de fragilidad ósea, espina bífida,
Santiago Luis González, Rosa Guerra Badía, Marta Francisco cardiopatías, alteraciones de la piel, dientes, articulacio-
Plasencia, Magdalena Sigler Villanueva Aldo, Andrés Pardillo nes y ojos. También se observa en otras anomalías ocu-
Morales y José Zamora Novoa La citología de impresión lares como embriotoxon, queratocono, megalocórnea y
conjuntival y la biopsia de la glándula salival accesoria en el catarata.
síndrome de ojo seco. Rev Cubana Oftalmol 1995;8(1) La debilidad de las paredes del ojo en el síndro-
Tamayo Lamothe E, Jaime Suárez G, López Paredes S. Flora me de Ehlers-Danlos puede llevar a la perforación del
conjuntival normal, estudio realizado en el preoperatorio de bulbo ocular por microtraumas, además de presentar fre-
100 pacientes. Rev. Cubana Oftalmol 1990;3(2):137-47. cuentemente desprendimientos de retina, queratocono y
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St. algunas anomalías morfoscópicas como hipertelorismo
Louis: Mosby; 1995. y epicanto.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1255


Bibliografía
Carrero Salgado, Yuset Montejo Pujadas y Daisy Chi Alteraciones
en el electrorretinograma de los pacientes con distrofia
. Capítulo 97 .
muscular de Duchenne y su relación con las deleciones del gen
responsable de la enfermedad. Rev Cubana Oftalmol Enfermedades de la esclera
1999;12(2).
Céspedes Valcárcel Alfredo J. Farmacología en enfermedades
y córnea
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
oftálmicas (II). Antimicrobianos. Rev Cubana Oftalmol
Elizabeth Escalona Leyva
1996;9(1).
Estruch Fajardo I, Alemany Martorell J, Gómez Hechavarría AH. La esclerótica y la córnea constituyen la cubierta
Estudio a doble ciegas con el cromoglicato de sodio en la
externa protectora del ojo. La esclera es una capa den-
conjuntivitis alérgica crónica. Rev. cubana. Oftalmol
sa, blanquecina y avascular que se continúa hacia de-
1994;7(1-2):11-18.
lante con la córnea que es transparente, avascular y
Fernández Hernández Y, Martínez Ribalta J, Pérez Blázquez G.
Estudio clínico bacteriológico y microbiológico de la
funciona como una ventana a través de la cual pasan los
conjuntivitis. Rev Cubana Oftalmol 1989;2(1-2):55-63. rayos de luz hacia la retina. Ellas pueden estar afecta-
Fisher, M. Conjuntivitis en Niños. Clínicas Pediátricas de das por procesos inflamatorios, infecciosos y trauma-
Norteamérica 1987;6:1579-87. tismos que suelen poner en peligro la integridad del globo
García Álvarez Hernán, María Isabel González Mesa, Carmen ocular. Constituyen la primera barrera de protección del
Cabarga Haro, Juan Ramón Alegre. Xerosis conjuntival y ojo y que por sus manifestaciones de pérdida de agude-
corneal ligera por déficit de vitamina A Rev Cubana Oftalmol za visual y dolor fundamentalmente, son a veces muy
1999;12(1):. dramáticos, lo que supone un reto para el médico de
Laga et al. Prophilaxis of gonococcal and chlamydial ophthalmia atención primaria y del oftalmólogo en general.
neonatorum. New Engl J Med 1988;318:653-7. Sobre la base de que la esclera y la córnea están
Maria Teresa Alemañy González, Vivian Padrón Alvarez, María
muy relacionadas, es por lo que se estudian juntas en
Elena Marín Valdés y Frank García González. Rev Cubana
un tema.
Oftalmol 1996;9(2). Autoplastía cunjuntival en el pterigium
primario. Rev Cubana Oftalmol, 1996;9(2)
Moreno Pérez, Lourdes M. Estudio microbiológico de la
ESCLERÓTICA
conjuntivitis crónica. Rev Cubana Oftalmol, 1992;5(2):118-21.
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric Anomalías congénitas de la esclera
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. Entre las anomalías congénitas de la esclera se
2005, p201-216.USA. señala el aumento de su transparencia por adelgazamien-
Padrón Alvarez Vivian, María Teresa Alemañy González, María to, lo que da lugar a un color azul claro por visualización
Elena Marín Valdés e Ibis Sedeño Cruz. Utilidad de la lente de los pigmentos coroideos a través de ella. Se debe a
de contacto blanda terapéutica en afecciones corneales. Rev un defecto en su condensación, lo que ocurre alrededor
Cubana Oftalmol 1996;9(1)
del tercer mes de vida intrauterina.
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005,
Las escleras azules se ven en más de una veintena
Argentina.
de enfermedades o síndromes, como los de Crouzon,
Quiñones Varela Irene, Mariela Rodríguez Martí, Yolanda
Mapolón Arcendor, Grettel VilatoPorto Alteraciones
Marfan, Loewe, Paget, Ehlers-Danlos, la fenilcetonuria,
psíquicas en niños con retinosis pigmentaria. Rev Cubana entre otros. La osteogénesis imperfecta es el más cono-
Oftalmol 1999;12(2):. cido de los que cursan con las escleras azules, en la cual
Rodríguez Hernández Mayra, Rosaralis Santiesteban Freixas, se acompaña de fragilidad ósea, espina bífida,
Santiago Luis González, Rosa Guerra Badía, Marta Francisco cardiopatías, alteraciones de la piel, dientes, articulacio-
Plasencia, Magdalena Sigler Villanueva Aldo, Andrés Pardillo nes y ojos. También se observa en otras anomalías ocu-
Morales y José Zamora Novoa La citología de impresión lares como embriotoxon, queratocono, megalocórnea y
conjuntival y la biopsia de la glándula salival accesoria en el catarata.
síndrome de ojo seco. Rev Cubana Oftalmol 1995;8(1) La debilidad de las paredes del ojo en el síndro-
Tamayo Lamothe E, Jaime Suárez G, López Paredes S. Flora me de Ehlers-Danlos puede llevar a la perforación del
conjuntival normal, estudio realizado en el preoperatorio de bulbo ocular por microtraumas, además de presentar fre-
100 pacientes. Rev. Cubana Oftalmol 1990;3(2):137-47. cuentemente desprendimientos de retina, queratocono y
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St. algunas anomalías morfoscópicas como hipertelorismo
Louis: Mosby; 1995. y epicanto.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1255


La melanosis oculodérmica, también conocida por violáceo purpúrico intenso que puede ser difuso, apare-
Nevus de Ota, provoca aumento en la pigmentación de ce inflamación de la conjuntiva y dilatación vascular;
la epiesclera, la piel periocular y la úvea. Hay veces que pueden formarse placas rojo oscuro y nódulos blancos
la pigmentación se extiende y toma la distribución de la elevados. Su causa e incidencia es similar a la de la
primera y segunda rama del trigémino. episcleritis. Es poco frecuente, pero cuando la esclera
está muy inflamada y se adelgaza puede formar un
Inflamaciones de la esclera estafiloma, anterior o posterior (Fig. 97.2).
La esclera puede ser asiento de inflamación su-
perficial o profunda. La superficial o episcleritis es la
inflamación que afecta a la epiesclerótica que es la capa
delgada de tejido elástico vascular superpuesta a la es-
clerótica (Fig. 97.1). Esta afección es por lo general uni-
lateral, de causa desconocida y se presenta sobre todo
en mujeres adultas. Se pueden asociar a enfermedades
generales como: lepra, tuberculosis, sífilis, colagenosis,
enfermedades articulares, enfermedades metabólicas
como la gota, tirotoxicosis, y alergias en general.

Fig. 97.2. Ectasia anterior de la esclera.

DIAGNÓSTICO
Se realiza fundamentalmente por la clínica, se de-
ben investigar otras patologías sistémicas y raramente
la biopsia.
TRATAMIENTO
En la episcleritis, suelen dar buenos resultados los
antiinflamatorios y /o esteroides tópicos en dosis míni-
mas terapéuticas.
No se ha demostrado que con los tratamientos el
proceso se acorte y ceda satisfactoriamente. Dejado a
su evolución natural se resuelve de forma espontánea
en unas semanas, por lo que se aconseja medidas senci-
llas para alivio de las molestias, como lágrimas artificia-
Fig. 97.1. Episcleritis. les. Si se asocia a enfermedades sistémicas, se requerirá
tratar dichos procesos.
Los síntomas incluyen: fotofobia, lagrimeo, dolor e En las escleritis, es fundamental el tratamiento
inflamación. Al examen se observa hiperemia localizada sistémico con antiinflamatorios,esteroides y con
en forma difusa o de placa elevada y rojiza (nódulo duro) inmunosupresores, bajo control y dependiendo de los
localizada fundamentalmente en la hendidura palpebral. posibles efectos colaterales. Tópicamente, pueden ayu-
Puede asociarse con congestión y edema de la conjunti- dar los antiinflamatorios no esteroideos y los esteroideos,
va suprayacente; tienden a ser recidivantes. Es excep- así mismo habrá que tratar las complicaciones oculares
cional su presentación en el niño.
que se deriven. Las inyecciones de esteroides
La escleritis es la inflamación de todo el espesor
subconjuntivales, como algunos preconizan deben evi-
de la esclerótica, poco frecuente, crónica asociada con
tarse, ya que existe un gran riesgo de perforación.
enfermedades generales. Puede ser unilateral o bilate-
ral y afecta con más frecuencia a las mujeres. Su evo- PRONÓSTICO
lución es lenta, prolongada, y de carácter grave; entre Bueno en las episcleritis si no se asocia con otras
sus complicaciones están la queratitis, uveítis y glauco- afecciones oculares o sistémicas, ya que en ese caso se
ma secundario. ensombrece. Mal pronóstico en las escleritis ya que en
Los síntomas más relevantes son: dolor muy inten- la mayoría de los casos la enfermedad base es de esa
so con fotofobia y lagrimeo, al examen aparece un color característica.

1256 Tomo III


CÓRNEA aunque puede ser más clara en el centro; presenta
vascularización superficial o profunda. Se caracteriza
Anomalías congénitas de la córnea por opacificación no progresiva ni inflamatoria de toda
Las anomalías congénitas de la córnea son poco la córnea o solo la periferia, con vascularización. La
frecuentes y comprenden desde la ausencia de la cór- mayoría de los casos son esporádicos, pero puede
nea hasta las anomalías del tamaño, forma, curvatura y heredarse con carácter autosómico recesivo o domi-
transparencia. Entre las más frecuentes se encuentran: nante; la forma dominante es menos grave. En los ca-
• Megalocórnea. sos de compromiso total de la córnea, la agudeza visual
• Microcórnea. está muy afectada. Los resultados de reparación qui-
• Esclerocórnea. rúrgica (trasplante de córnea) son poco alentadores por
• Queratocono. la presencia de ambliopía profunda y alto grado de fa-
• Córnea plana. lla del injerto.
• Opacidades congénitas.
• Disgenesias del segmento anterior.

Megalocórnea
Se define como una córnea cuyo diámetro horizon-
tal es igual o superior a 13 mm o en los recién nacidos,
mayor de 12 mm. La afectación congénita suele ser bila-
teral y se transmite con carácter recesivo y ligado al sexo;
el 90 % de los pacientes son masculinos.
La córnea es nítida e histológicamente normal.
Estos casos son más propensos a luxación del cristalino
y al glaucoma y aparecen con frecuencia cataratas an- Fig. 97.3. Microcórnea.
tes de los 40 años de edad. Su aumento no es progresi-
vo, a diferencia de lo que se ve en el glaucoma congénito,
Queratocono
con quien hay que hacer el diagnóstico diferencial. No
da síntomas y por lo general se asocia a defectos de Es una procidencia cónica o abombamiento pro-
gresivo, no inflamatorio, del centro de la córnea, la cual
refracción. El diagnóstico definitivo debe hacerlo el of-
se adelgaza y provoca miopía y astigmatismo intensos.
talmólogo.
Tiene una base congénita y una tendencia familiar. Este
estado tiende a progresar y opacar la córnea. A veces
Microcórnea
ya está presente desde el nacimiento, en cuyo caso
Se define como una córnea con un diámetro hori- suele ir acompañado de otras malformaciones; en caso
zontal igual o inferior a 10 mm en presencia de un ojo contrario se desarrolla después de la adolescencia. El
normal. Si todo el ojo es pequeño se usa el término queratocono posterior es poco frecuente, se caracteri-
microftalmos. za por un adelgazamiento central de las capas corneales
Puede ser unilateral o bilateral y verse sola o aso- posteriores y superficie anterior normal, no existen in-
ciada a otras anomalías del segmento anterior o del ojo dicios hereditarios, es unilateral y no progresiva; la cór-
(Fig. 97.3). Se transmite con carácter autosómico nea por lo común se ve transparente y la visión es
recesivo o dominante. La córnea suele ser transparente normal, pero puede producirse velamiento del estroma
y si el globo ocular es por lo demás normal, la AV puede corneal.
ser buena. Puede estar asociada a disminución de la cur- Córnea plana. Se trata de una aplanación corneal
vatura corneal, produciendo una hipermetropía. Apare- y de la esclerótica. El diámetro de la córnea está redu-
ce glaucoma en 20 % de casos, en la vida adulta. cido por invasión de la esclerótica sobre todo en la par-
te superior e inferior. Por lo regular es bilateral y con
Esclerocórnea tendencia familiar. Se hereda con carácter autosómico
dominante o recesivo; a forma recesiva es más grave.
Es una opacidad corneal congénita, unilateral o La córnea central es transparente, pero también puede
bilateral, en la cual el aspecto de la córnea recuerda al observarse opacificación difusa de la córnea. La cá-
de la esclera, como si esta continuara sobre la córnea, mara anterior suele ser menos profunda de lo habitual,

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1257


pero no parece que sea frecuente el glaucoma. Se aso- mente graves, los cuales pueden evolucionar hasta la
cia con otras anomalías congénitas, como esclerocórnea pérdida total de su transparencia y por lo tanto de la
o microcórnea, defectos refractivos importantes, ya visión e incluso comprometer la unidad anatómica, o sea,
que la córnea pierde su alto poder dióptrico y en mu- llevar a la pérdida del globo ocular.
chos casos se acompaña de glaucoma de ángulo estre- La excepción son las erosiones corneales, casi
cho. siempre de origen traumático, en las que se pierde el
epitelio corneal. Ese epitelio regenera por lo regular an-
Opacidades congénitas de la córnea tes de las 48 h, si se ocluye el ojo adecuadamente. Es
Estas opacidades suelen ser parciales o totales y a difícil observar esas lesiones a simple vista, lo que se
pesar de representar una aberración del desarrollo, pue- facilita tiñendo la córnea con fluoresceína sódica y la-
den tener un origen inflamatorio. Son centrales y vando el exceso de colorante. En caso de existir una
periféricas y están asociadas en muchas ocasiones a erosión se ve cómo el área correspondiente toma color
otras malformaciones del segmento anterior. Entre ellas verde, algo fluorescente, sobre todo si se usa la luz de
se encuentran la distrofia estromal congénita y distrofia cobalto (Fig. 97.4).
endotelial congénita entre otras. En el recién nacido se
ve con edema y opacidad de la córnea por ruptura de la
membrana de Descemet, provocada por traumas en el
parto, además pueden aparecer opacidades corneales
por infecciones maternas que provocan queratitis
intrauterinas en el feto de causa bacterianas o sifilítica
por lo general.

Disgenesias del segmento anterior


Entre las más frecuentes están el embriotoxon pos-
terior, el síndrome de Axenfeld Rieger y la anomalía de
Peters.
El embriotoxon posterior es una malformación
periférica de la córnea que se ve como una línea blanca
cercana y concéntrica al limbo, que produce una
Fig. 97.4. Erosión corneal teñida con fluoresceína.
protrusión en la cámara anterior, por el desplazamiento
de la línea de Schwalbe. Se hereda con carácter Las enfermedades de la córnea se pueden agrupar
autosómico dominante de la siguiente manera:
El síndrome de Axenfeld-Rieger, y la anomalía de • Inflamaciones corneales.
Peters, en las cuales, además de la córnea periférica, • Degeneraciones y distrofias.
está afectado el iris y otras estructuras. Entre estas la • Traumatismos.
más frecuente es la anomalía de Peters la cual se ca- • Tumores.
racteriza por una opacidad corneal central (leucoma de
la córnea) que se asocia a un defecto posterior de la Inflamaciones corneales: queratitis
córnea, afecta al estroma corneal, la membrana de Se dividen en infecciosas y no infecciosas:
Descemet, y hay un desarrollo patológico del segmento Queratitis infecciosas:
anterior, a la que se suman opacidad y adherencias al Queratitis ulcerativas bacterianas.
iris y cristalino. El espesor de la córnea está normal o Queratitis ulcerativas micóticas.
aumentado. No hay vascularización ni inflamación. Es Queratitis víricas.
probable que sea el resultado de múltiples causas. Nor- Queratitis por parásitos.
malmente no hay antecedentes hereditarios.
Queratitis no infecciosas:
Enfermedades de la córnea Úlcera corneal inmunológica (Úlcera marginal
Para el estudio de las enfermedades de la córnea catarral, úlcera de Mooren) (Fig. 97.5).
se debe examinar al paciente con la luz oblicua del Úlceras corneales periféricas asociadas a enfer-
oftalmoscopio o con la lámpara de hendidura. Las en- medades sistémicas.
fermedades corneales son siempre procesos potencial- Queratitis por exposición.

1258 Tomo III


son Pseudomonas aeuriginosa, Staphylococcus
aurens, Streptococcus pneumoniae. Para que la
queratitis se produzca es necesario la existencia de de-
fecto en el epitelio y que haya bacterias.
Existen, sin embargo, bacterias que pueden pene-
trar el epitelio intacto como es el caso de la Neisseria
gonorrhoeae, Corynebacterium diphteriae,
Hemophylus aegyptius y Listeria. Estas úlceras siempre
son graves y requieren rápido diagnóstico y tratamiento,
pues de ello depende su evolución, pronóstico de con-
servación de la visión y de la integridad del globo ocular.
Son síntomas comunes en estas úlceras: el dolor, la
fotofobia, el lagrimeo y la disminución de la agudeza vi-
sual en casos con afectación de la córnea central. Los
signos comunes son hiperemia ocular intensa, con inyec-
Fig. 97.5. Úlcera de Mooren. ción a predominio ciliar, secreciones serofibrinosas o
mucopurulentas, defecto corneal de extensión y profundi-
Los procesos inflamatorios corneales son simila- dad variable, edema corneal más o menos generalizado,
res al resto de los tejidos, con la diferencia de que al ser reacción en cámara anterior con hipopión e hifema en
la córnea un tejido avascular, los fenómenos vasculares casos graves. La infiltración corneal difiere según el ger-
correspondientes a la inflamación se van a localizar al men pero de forma general son bien delimitadas, con bor-
nivel del limbo esclerocorneal y en el iris. Por tanto, los des regulares, de aspecto húmedo, blanda por lisis del
signos inflamatorios corneales se manifiestan fundamen- estroma corneal y se acompañan de hipopión a veces ex-
talmente en el segmento anterior del ojo. Estos signos tenso y móvil. Su evolución es rápida y se asocian compli-
son la hiperemia de los vasos del limbo, miosis y presen- caciones como uveítis, glaucoma secundario, perforación
cia de células y/o exudados en cámara anterior (efecto corneal, endoftalmitis y pérdida total de la visión.
Tyndall), pérdida de transparencia producida por el ede- Es importante tener presente la infección por la
ma, infiltrado, por los productos de la inflamación. Estas Neisseria gonorrhoeae la cual provoca una conjuntivi-
pueden llegar a una fibrosis con pérdida de elasticidad y tis purulenta con edema de párpados y quemosis intensa
lesiones hísticas, por pérdida de sustancia, adelgazamiento grave. Conduce en pocas horas a una ulceración corneal
que incluso puede llegar a la perforación, fibrosis y for- que perfora rápidamente, por lo que constituye una ver-
mación de neovasos. dadera urgencia su diagnóstico y tratamiento precoz para
Queratitis infecciosas. Existen mecanismos de evitar serias complicaciones que conllevarían a la pérdi-
defensa de la superficie ocular que protegen al ojo de
da del globo ocular.
las permanentes agresiones del medio entre los que es-
tán: los párpados, acción mecánica de las lágrimas, pre- DIAGNÓSTICO
sencia de lisozima, lactoferrina, betalisina y anticuerpos • Se debe realizar interrogatorio en busca de antece-
naturales sobre todo en las lágrimas; atrapamiento y eli- dentes oculares o generales previos.
minación de organismos por el mucus, superficie epitelial • Cuadro clínico y examen oftalmológico completo.
intacta, flora normal de la superficie corneal que ayuda • Realizado el diagnóstico se debe remitir al oftalmólogo.
a impedir el sobrecrecimiento de organismos nativos o
la invasión por patógenos entre otras. Por tanto, las TRATAMIENTO
interferencias en estos mecanismos de defensa, tales Después de tomar muestras para examen directo
como: los traumatismos, alteraciones de los párpados: y cultivos microbiológicos se debe comenzar el trata-
exposición corneal, triquiasis, entropión, lagoftalmos, ojos miento médico sobre la base de antibióticos tópicos en
secos y obstrucción del drenaje lagrimal, abuso de forma de colirios fortificados utilizando combinación de
antibióticos y esteroides tópicos que modifican la flora aminoglucósidos con cefalosporinas en dosis de cada
normal, uso de lentes de contacto, queratopatía 15 min a una hora según gravedad de la úlcera. Tam-
ampollosa, anestesia corneal, erosiones recidivantes, le- bién se pueden utilizar las fluoroquinolonas solas o com-
sión física o química, deterioro localizado o sistémico de binadas, midriáticos ciclopléjicos y antiinflamatorios no
la respuesta inmune, entre otras, predisponen al hués- esteroideos. Las complicaciones como el glaucoma se-
ped a la infección corneal. cundario, se deben tratar con hipotensores oculares:
Queratitis ulcerativa bacteriana. Las bacterias timolol al 0,5%, acetazolamida tópica y sistémica y
patógenas más frecuentemente halladas en las úlceras manitol, según la gravedad del caso. Se debe comenzar

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1259


el tratamiento con antibióticos inmediatamente, sin es- Las complicaciones pueden ser uveítis, glaucoma
perar el resultado del laboratorio; cuando este llega se secundario y perforación corneal.
hacen cambios terapéuticos, solo si la úlcera ha empeo-
DIAGNÓSTICO
rado y no hay respuesta a los medicamentos indicados
inicialmente. Al igual que en las bacterianas debe realizarse in-
El tratamiento quirúrgico se puede hacer en casos terrogatorio, examen minucioso y enviar al oftalmólogo.
de complicaciones como peligro de perforación corneal TRATAMIENTO
inminente, en cuyo caso se realizarán recubrimientos Debe hacerse raspado de la ulceración para el es-
conjuntivales y trasplantes corneales terapéuticos. tudio directo y cultivo en el laboratorio.
Queratitis ulcerativa micótica. Las úlceras El tratamiento es difícil, debido a diversas causas:
corneales de causa micótica se deben sospechar en pa- • Diagnóstico tardío.
cientes con antecedentes de trauma con un agente ve-
• Toxicidad y acción solo fungistática de los fármacos
getal, uso de lentes de contacto, de forma oportunista en
antifúngicos.
córneas previamente debilitadas e inmunodeprimidas:
• Persistencia de los mecanismos inflamatorios.
queratitis Sicca, síndrome de Sjogren, queratitis herpética,
e inmunológicos, aunque no sean viables los hongos.
bullosa, transplante corneal y tratamientos crónicos con
antibióticos y esteroides. Los gérmenes más frecuentes • Dificultad de regeneración del tejido corneal por
son: hongos filamentosos aspergillu y fusarium y entre ser avascular.
los levaduriformes la Cándida albicans. En nuestro me-
dio, son más frecuentes los hongos filamentosos y den- Los antifúngicos disponibles son:
tro de ellos el fusarium ocupa el primer lugar. Son, por lo − Imidazoles (miconazol, clortrimazol, econazol,
general, úlceras de evolución lenta, insidiosa con poca ketoconazol).
respuesta al tratamiento antimicótico y conducen a graves − Triazoles (itraconazol, fluconazol).
complicaciones que comprometen al órgano de la visión. − Polienos (anfotericin B, natamicina).
Sus síntomas fundamentales son comunes al de las − Pirimidinas (flucitosina).
úlceras bacterianas pero más moderados; el dolor es poco
intenso a no ser que se asocie con inflamación uveal. Se indicarán estos antifúngicos solos o de prefe-
Los síntomas en la mayoría de los casos no se asocian rencia combinados en forma de colirios cada 15 min o
con la gravedad de la ulceración corneal (Fig. 97.6). cada 1 h en dependencia de la gravedad de la lesión,
además del tratamiento oral, que también estaría indica-
do. Colirios midriáticos cicloplégicos y se añaden
antiinflamatorios no esteroideos, hipotensores oculares
en dependencia de las complicaciones que se puedan
presentar.
Los tratamientos son largos y deben prolongarse
al menos durante 6 semanas después que la ulceración
está aparentemente aséptica, pues tienden a recurrir.
En muchos casos es necesario llegar al tratamien-
to quirúrgico con recubrimientos conjuntivales y trasplan-
tes corneales en caliente con fines terapéuticos.
Queratitis víricas. Queratitis por adenovirus: las
queratitis pueden estar asociadas a conjuntivitis epidé-
mica por adenovirus, las cuales aparecen en la segunda
semana de la afectación corneal. El contagio se realiza
Fig. 97.6. Absceso corneal micótico.
por contacto directo o a través de cosméticos, dedos o
instrumentos contaminados, a veces por el agua de las
Sus signos comunes son: inyección ciliar, defecto
epitelial y opacidad corneal, ulceración corneal con bor- piscinas. Suele comenzar con una conjuntivitis aguda,
des elevados, irregulares, de aspecto seco y áspero, con con hipertrofia folicular y adenopatía preauricular. Por
lesiones satélites, edema corneal, hipopión denso, poco lo regular es bilateral y en algunos casos se presenta
movible e hifema en casos más graves. Las secreciones con seudomembranas, edema epitelial corneal con alte-
son escasas y la formación de abscesos corneales es raciones puntiformes, que pueden acompañarse de ero-
frecuente. siones corneales.

1260 Tomo III


Las alteraciones corneales evolucionan en unos diez DIAGNÓSTICO
días a opacidad epitelial y subepitelial, que puede mante- • Por el interrogatorio y cuadro clínico.
nerse meses o años. • Laboratorio (citología de las lesiones).
• Histopatológico.
TRATAMIENTO
Los medicamentos antivíricos no son efectivos. TRATAMIENTO
Esteroides: están muy controvertidos (se indican El específico en las formas epiteliales es: antivirales
solo si hay molestias intensas, disminución de la visión e tópicos como la trifluortimidina y el aciclovir que tam-
infiltrados subepiteliales). bién se indica por vía sistémica.
Queratitis por herpes simple. es la forma de en- En las formas estromales es indispensable la adi-
fermedad ocular infecciosa endémica más prevalente ción de esteroides tópicos y/o sistémicos y añadir
de los países desarrollados y constituye, después de los midriáticos cicloplégicos para el alivio de los síntomas.
traumatismos, la causa más frecuente de pérdida de vi- La mayoría de los pacientes presentan opacidades
sión por opacidad corneal. La especie humana es el úni- corneales residuales que afectan la visión considerable-
co reservorio natural del virus. El contagio se realiza por mente y requieren de un trasplante de córnea.
contacto directo con la lesión herpética o a través de Queratitis por herpes zoster. el agente causante
secreciones contaminadas con el virus, saliva, secreciones es el virus varicella-zoster, menos frecuente que el her-
nasales, lágrimas. Por lo regular hay una primoinfección pes simple pero puede producir graves complicaciones.
en la infancia, la cual origina una infección subclínica. Síntomas: fiebre, malestar, cefaleas, picor, dolor,
Su curso es con recurrencias que varían su frecuencia, erupción vesicular y deficiencia visual variable.
cuando el virus latente es reactivado por algún factor Signos: ptosis palpebral, por edema, conjuntivitis
predisponente que afecte al huésped, como deficiencia con secreción mucoide, vesículas en borde de párpados
inmunológica; enfermedades sistémicas, (diabetes y piel de la hemicara, epiescleritis, queratitis numular,
mellitus), deficiencia vitamínica, enfermedades virales, uveitis anterior, hipertensión ocular, oftalmoplejía y com-
traumatismos, entre otros.
plicaciones neurológicas y hasta dejar una neuralgia
Síntomas: dolor variable, que disminuye a medida
posherpética crónica.
que se hace crónica la lesión, debido a la disminución de
la sensibilidad, fotofobia y disminución de la agudeza vi- DIAGNÓSTICO
sual en dependencia de la localización. Por la clínica y el laboratorio.
Signos: según sitio de la localización; puede afec-
TRATAMIENTO
tar a cada una o a todas las capas de la córnea, ser
centrales o periféricas, y adoptar formas epiteliales Esteroides tópicos y midriáticos.
puntiforme o dendríticas que al unirse toman aspecto Aciclovir tópico y sistémico en dosis altas (800 mg,
geográfico, o estromales, en forma de queratitis 5 veces al día), incluso intravenoso en casos graves,
disciforme o intersticial. Hay inyección ciliar, reacción mantener al menos durante una semana.
en cámara anterior, que difiere en cada caso según la Queratitis por parásitos. La acanthamoeba es un
gravedad de la lesión (Fig. 97.7). protozoo incapaz de afectar una córnea intacta.
Se asocian cada vez más al uso de lentes de con-
tacto fundamentalmente blandos. Las causas son, mala
manipulación y falta de asepsia.
Síntomas: dolor, fotofobia intensa, pérdida de vi-
sión y al examen se observan variedad de lesiones que
hacen que el diagnóstico sea en muchos casos tardío;
pueden aparecer líneas epiteliales en relieve, que con-
tienen partículas del protozoo, y semejarse a las queratitis
dendríticas, intensa congestión del limbo esclerocorneal
y uveítis anterior.
Su evolución es tórpida y prolongada, pues suele
ser resistente al tratamiento; puede llegar a perforar y
extenderse a la esclerótica
DIAGNÓSTICO
Las pruebas de laboratorio son negativas para bac-
Fig. 97.7. Queratitis por adenovirus. terias y hongos.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1261


Identificación del parásito en el material y tinción y los síntomas y signos oculares, básicamente con
con blanco Calcofluor. esteroides, inmunosupresores y tratamiento quirúrgico
Identificación de los quistes por microscopia en caso necesario.
confocal en vivo. Las queratitis alérgicas se asocian generalmente a
TRATAMIENTO
pacientes que padecen de cuadros clínicos alérgicos
generales y que provocan queratitis, cuyos síntomas ca-
Suele ser difícil por la gran resistencia a quimio-
racterísticos son: escozor, lagrimeo y fotofobia. El trata-
terápicos. Es fundamental la precocidad del diagnóstico,
miento va dirigido a la enfermedad de base y a los
ya que en sus inicios, pueden dar buenos resultados, por
síntomas y signos oculares que presenta el paciente.
vía tópica prolongada e intensiva, la asociación de:
Queratitis por exposición. Aparece en cualquier
− Colirio de neomicina-poliximina B - gramicidina.
condición en la cual la córnea no está humedecida ade-
− Colirio de isetionato de propamidina al 0,1%.
cuadamente o no está protegida por los párpados como
− Pomada oftálmica de miconazol al 1%.
sucede en el exoftalmos, entropión, traumatismos que
− Pomada oftálmica de clotrimazol al 1%.
afecten el párpado, parálisis facial que imposibilita ce-
rrar los párpados y en el coma. La lesión está localizada
En muchos casos y debido al tratamiento tardío, se
por lo general en la mitad inferior de la córnea y es esté-
hace necesaria una queratoplastia.
ril, a menos que se presente una infección secundaria.
El tratamiento va encaminado a tratar la causa, colirios
Queratitis no infecciosas. Úlcera marginal
y ungüentos lubricantes, lentes de contacto y tratamien-
catarral. Suele aparecer como complicación de las blefaro-
to quirúrgico.
conjuntivitis estafilocócicas. Se tratan de reacciones
antígeno-anticuerpo frente a los antígenos bacterianos. Degeneraciones y distrofias
Los síntomas más frecuentes son el dolor, lagrimeo,
de la córnea
fotofobia y sensación de cuerpo extraño y los signos,
Las alteraciones degenerativas en la córnea pro-
inyección ciliar general o sectorial, infiltración subepitelial
gresan de forma paulatina; la mayoría están relaciona-
al nivel de limbo y de forma oval, fina con neovascula-
das con la edad, o son consecutivas a procesos
rización. El tratamiento es el de la blefaritis, con
inflamatorios oculares o de causa desconocida. Entre
antibióticos y esteroides tópicos y medidas de higiene. ellas se citan: anillo limbal o arco blanco de Vogt, arco
La úlcera de Mooren es una ulceración crónica y senil o gerontoxon, degeneración amiloidea, queratopatía
dolorosa, que comienza en la periferia corneal y puede en banda, degeneración de Salzmann, degeneración
extenderse a la totalidad, ocasionando deficiencia vi- marginal de Terrien.
sual e incluso perforación. No se conoce la causa El aspecto clínico es parecido en líneas generales;
(necrosis isquémica por vasculitis límbica). Sus sínto- son opacidades corneales blanquecinas o pardo-ama-
mas fundamentales son el dolor intenso, fotofobia y rillentas que se localizan en su mayoría, en la periferia,
lagrimeo y los signos, ulceración única o múltiple en la excepto la amiloidea y en banda que suelen tomar la
periferia corneal que avanza progresivamente hasta to- parte central. El tratamiento médico va encaminado a
mar la córnea periférica en 360° con adelgazamiento aliviar síntomas en pacientes que lo requieran y solo el
y/o perforación, edema de conjuntiva y epiesclera alre- quirúrgico puede aportar beneficios, en algunos casos.
dedor de la lesión y signos de reacción uveal. El trata- Las distrofias de la córnea son de causa descono-
miento es complejo, en muchos casos inefectivo; su cida, hereditarias, aparecen hacia la 2ª década de la vida.
evolución es lenta y se utilizan corticoides tópicos e Son bilaterales y progresivas y pueden afectar a to-
inmunosupresores en los casos más graves. El tratamiento das las capas de la córnea. El grado de afectación
quirúrgico estaría indicado en los casos graves con per- corneal varía desde casi asintomático, con hallazgos al
foración corneal. examinar con lámpara de hendidura, hasta verdaderas
Úlceras corneales asociadas a enfermedades opacidades con pérdida visual importante. Puede afec-
sistémicas. Suelen ser lesiones marginales corneales, tar a las distintas estructuras de la córnea por separado,
diversas, y asociadas a procesos inmunológicos relacio- como son el epitelio corneal, el estroma, la membrana
nados con enfermedades como: artritis reumatoide, de Descemet y el endotelio.
granulomatosis de Wegener, poliarteritis nodosa. El tra- El diagnóstico se realiza por el examen en lámpara
tamiento está encaminado a tratar la enfermedad de base de hendidura, microscopia especular y microscopia

1262 Tomo III


confocal en vivo. El tratamiento en la mayoría suele ser A veces se pueden ver formaciones sospechosas
quirúrgico mediante el trasplante de córnea. en las zonas marginales que son granulomas a cuerpos
Hay 2 formas de distrofias ectásicas, que por su extraños. El diagnóstico es histopatológico. El tratamiento
morfología, en muchos casos son de fácil diagnóstico es quirúrgico.
por el médico de atención primaria; se trata del
queratocono y queratoglobo. Sus nombres indican el Bibliografía
tipo de deformidad de la córnea, el que se puede identi-
Aldo Sigler Villanueva, María Julia Machado Cano y Rolando Rey
ficar en los casos avanzados, mirando los ojos desde el Bravo Córnea plana congenita. Rev Cubana Oftalmol
ángulo lateral. Su tratamiento es con lentes de contacto 1997;10(1-2).
y el definitivo es quirúrgico. Aldo Sigler Villanueva, María Julia Machado Cano y Rolando Rey
Bravo Córnea plana congenita. Rev Cubana Oftalmol
Traumatismos 1997;10(1-2)
Las principales lesiones traumáticas de la córnea Bengoa Gonzalez A,Gutierrez E, Pérez Eugenio. Atlas Urgencias
en Oftalmología.Médica, Vol 1 Esteve, Ed Glosa, Barcelona,
son la erosión corneal, los cuerpos extraños corneales
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. External Disease
superficiales y profundos, contusiones, heridas corneales
and Cornea. San Francisco: American Academy of
perforantes o no y quemaduras por agentes físicos o Ophthalmology;2003-2004.
químicos. Díaz Cominches G, Anderes Álvarez M, Iglesias Fernández M,
Benítez Merino, MC. Técnica quirúrgica de reforzamiento
Tumores corneal para el queratocono (RCQ). Rev cubana Oftalmol
Tumores de la córnea y la esclera. Por ser la cór- 1996;9(1):5-13.
nea y la esclera tejidos avasculares, es infrecuente la Díaz Cominches Generoso, Moisés Anderes Alvarez, Migdalia
Iglesias Fernández y María del Carmen Benítez Meriño.
patología tumoral. Los tumores suelen ser primarios y
Técnica quirúrgica de reforzamiento corneal para el
de naturaleza epitelial; los tumores secundarios son ex-
queratocono (RCQ). Rev Cubana Oftalmol 1996;9(1)
cepcionales. Son más frecuentes en la periferia. La Ehlers N, Modis L, Moller-Pedersen T. A morphological and
sintomatología habitual es la irritativa y el signo principal functional study of Congenital Hereditary Endothelial
es la presencia de la neoformación, que es la que hace Dystrophy. Acta-Ophthalmol-Scand 1998; 76(3): 314-8.
consultar. El crecimiento es lento. Fdez J, Alañon F.J. Oftalmología en atención primaria. Ed
Entre los tumores de la córnea y la esclera se Formación Alcalá, España, 2003: 155-176.
encuentra el quiste dermoide del limbo esclerocorneal, Flores Pérez Daysi, Yunia H. Labrada Rodríguez y Migdalis
González Leyva Síndrome Axenfeld-Rieger. Presentación de
(Fig. 97.8) que surge en la conjuntiva y se extiende
un caso Rev Cubana Oftalmol 2000;13(1):.
sobre la córnea. Se encuentra rodeado completamente
García Álvarez B, Robles Duquesne M, Suárez Dávila Z. Estudio
por tejido corneal y es similar a los quistes dermoide micológico en ulceras corneales. Rev. cubana Oftalmol
que se pueden desarrollar en cualquier otra región. El 1989;2(1-2):65-9.
tratamiento es quirúrgico. Se debe extirpar y hacer in- García Díaz L, Casanas A, Herrera M, Castro A. Microftalmos.
jerto de córnea en la zona operada. Tiende a recidivar. Rev. cubana Oftalmol 1989;2(3):140-60.
Marina de La Barca Lleonart, Adalberto Paz Sarduy, María
Antonia Ocaña Gil y Leonardo Atienza Lois Estudio
multidisciplinario de un caso clínico de displasia
Oculoauriculovertebral de Goldehar. Rev Cubana Oftalmol
2001;14(1).
Padrón Álvarez V, Alemany González MT, Marín Valdés ME;
Sedeo Cruz I. Utilidad de la lente de contacto blanda
terapéutica en afecciones corneales. Rev Cubana Oftalmol
1996;9(1):20-4.
Padrón Alvarez Vivian, María Teresa Alemañy González, María
Elena Marín Valdés e Ibis Sedeño Cruz. Utilidad de la lente
de contacto blanda terapéutica en afecciones corneales. Rev
Cubana Oftalmol 1996;9(1)
Parc C, Legeais JM, Salvanet-Bouccara S, Pouliquen Y, Renard G.
Cornea plana and severe ametropia. J Fr Ophtalmol
Fig. 97.8. Quiste dermoide del limbo. 1998;21(6):451-3.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1263


Ríos Pérez MT, Guerra Gómez L, Martín Penango M, Rodríguez gencia. Ante estímulos dolorosos o psicosensoriales, las
Blanco A. Displasia oculoauriculovertebral, síndrome de pupilas se dilatan.
Goldenhar.Rev. cubana Oftalmol 1989;2(1-2):43-8. La pupila en el recién nacido suele estar contraída
Santiago Reyes MC, Río Torres M, Vila Dopico I, Lantigua Cruz y la infancia es la etapa en la cual el diámetro es el
A. Distrofia macular corneal. Rev. Cuba. Oftalmol mayor que alcanza en la vida. En el sueño y la anestesia
1990;3(3):216-30.
profunda la pupila está contraída, y dilatada en el sínco-
Sigler Villanueva A, Machado Cano MJ, Rey Bravo R. Córnea
pe y la muerte.
Plana Congénita. Rev Cuba Oftalmol 1997; 10(1/2):23-6.
Sykes SO, Riemann C, Santos CI, Meisler DM, Lowder CY, et al.
Haemophilus influenzae associated scleritis. Br-J-
ANOMALÍAS CONGÉNITAS
Ophthalmol 1999; 83(4):410-3. EN LA PUPILA
Wang AG, Wu CC, Liu-JH. Bacterial corneal ulcer: A multivariate Las principales anomalías congénitas del iris y la
study. Ophthalmologica 1998; 212(2):126-32.
pupila son:
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
• Membrana pupilar persistente.
Louis: Mosby; 1995.
• Heterocromía simple.
• Aniridia.
• Displasia del iris.
• Coloboma de iris.
. Capítulo 98 . • Discoria.
• Microcoria o miosis congénita.
Enfermedades de la úvea • Policoria.
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
• Midriasis congénita.
Daysi Vilches Lescaille • Anisocoria.

La membrana pupilar persistente se debe al de-


El tracto uveal es la túnica media, capa eminente-
fecto en la reabsorción del tejido iridiano que cubre la
mente vascular que da la nutrición al ojo. Está formado pupila en forma de hilos finos verticales, las que deben
por el iris y el cuerpo ciliar o úvea anterior y la coroides desaparecer en los últimos 2 meses de vida intrauterina.
o úvea posterior. El iris está perforado en su centro y La heterocromía simple es el color diferente del
ese orificio forma la pupila, la cual se modifica según iris en los dos ojos o una parte de un iris. La forma
el estado o la influencia de los sistemas simpático y congénita se presenta con herencia autosómica domi-
parasimpático que controlan su dinámica. Las anoma- nante o asociada al síndrome de Waardenburg, en el que
lías del iris por lo tanto pueden afectar también a la coexisten otras anomalías de párpados, raíz nasal an-
pupila. cha, mechón de pelo blanco y sordera neurosensorial
El músculo constrictor de la pupila, inervado por el (Fig. 98.1). La adquirida es causada por: traumas, he-
tercer nervio craneal tiene como antagonista al músculo morragias, uveítis, glaucoma, atrofia del iris, tumores
como el retinoblastoma y el síndrome de Horner.
dilatador, que es inervado por el simpático. El balance
entre estos dos sistemas mantiene a la pupila en cons-
tante apertura y cierre, lo que es llamado hippus fisioló-
gico. En la oscuridad las pupilas se dilatan y frente a la
luz, se contraen.
Es importante la evaluación del estado de la pupila
y sus reacciones en la localización de lesiones
intracraneales que afectan sus vías aferente y eferente.
Al estimular la retina mediante una luz, la pupila se
contrae, lo que se conoce como reflejo fotomotor o di-
recto, mientras que sucede lo mismo en el otro ojo no Fig. 98.1. Heterocromía del iris y anisocoria.
iluminado, reflejo consensual.
Al mirar un objeto que se acerca, las pupilas se La aniridia es la ausencia total o parcial del iris,
contraen y los ojos convergen, así como se contraen los casi siempre hereditaria y familiar. Esta anomalía es pura
músculos ciliares para llevar a cabo la acomodación, lo o asociada a catarata, glaucoma, hipoplasia foveal y del
que es conocido como reflejo de acomodación-conver- nervio óptico. Otras veces se acompaña de anomalías

1264 Tomo III


Ríos Pérez MT, Guerra Gómez L, Martín Penango M, Rodríguez gencia. Ante estímulos dolorosos o psicosensoriales, las
Blanco A. Displasia oculoauriculovertebral, síndrome de pupilas se dilatan.
Goldenhar.Rev. cubana Oftalmol 1989;2(1-2):43-8. La pupila en el recién nacido suele estar contraída
Santiago Reyes MC, Río Torres M, Vila Dopico I, Lantigua Cruz y la infancia es la etapa en la cual el diámetro es el
A. Distrofia macular corneal. Rev. Cuba. Oftalmol mayor que alcanza en la vida. En el sueño y la anestesia
1990;3(3):216-30.
profunda la pupila está contraída, y dilatada en el sínco-
Sigler Villanueva A, Machado Cano MJ, Rey Bravo R. Córnea
pe y la muerte.
Plana Congénita. Rev Cuba Oftalmol 1997; 10(1/2):23-6.
Sykes SO, Riemann C, Santos CI, Meisler DM, Lowder CY, et al.
Haemophilus influenzae associated scleritis. Br-J-
ANOMALÍAS CONGÉNITAS
Ophthalmol 1999; 83(4):410-3. EN LA PUPILA
Wang AG, Wu CC, Liu-JH. Bacterial corneal ulcer: A multivariate Las principales anomalías congénitas del iris y la
study. Ophthalmologica 1998; 212(2):126-32.
pupila son:
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
• Membrana pupilar persistente.
Louis: Mosby; 1995.
• Heterocromía simple.
• Aniridia.
• Displasia del iris.
• Coloboma de iris.
. Capítulo 98 . • Discoria.
• Microcoria o miosis congénita.
Enfermedades de la úvea • Policoria.
Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
• Midriasis congénita.
Daysi Vilches Lescaille • Anisocoria.

La membrana pupilar persistente se debe al de-


El tracto uveal es la túnica media, capa eminente-
fecto en la reabsorción del tejido iridiano que cubre la
mente vascular que da la nutrición al ojo. Está formado pupila en forma de hilos finos verticales, las que deben
por el iris y el cuerpo ciliar o úvea anterior y la coroides desaparecer en los últimos 2 meses de vida intrauterina.
o úvea posterior. El iris está perforado en su centro y La heterocromía simple es el color diferente del
ese orificio forma la pupila, la cual se modifica según iris en los dos ojos o una parte de un iris. La forma
el estado o la influencia de los sistemas simpático y congénita se presenta con herencia autosómica domi-
parasimpático que controlan su dinámica. Las anoma- nante o asociada al síndrome de Waardenburg, en el que
lías del iris por lo tanto pueden afectar también a la coexisten otras anomalías de párpados, raíz nasal an-
pupila. cha, mechón de pelo blanco y sordera neurosensorial
El músculo constrictor de la pupila, inervado por el (Fig. 98.1). La adquirida es causada por: traumas, he-
tercer nervio craneal tiene como antagonista al músculo morragias, uveítis, glaucoma, atrofia del iris, tumores
como el retinoblastoma y el síndrome de Horner.
dilatador, que es inervado por el simpático. El balance
entre estos dos sistemas mantiene a la pupila en cons-
tante apertura y cierre, lo que es llamado hippus fisioló-
gico. En la oscuridad las pupilas se dilatan y frente a la
luz, se contraen.
Es importante la evaluación del estado de la pupila
y sus reacciones en la localización de lesiones
intracraneales que afectan sus vías aferente y eferente.
Al estimular la retina mediante una luz, la pupila se
contrae, lo que se conoce como reflejo fotomotor o di-
recto, mientras que sucede lo mismo en el otro ojo no Fig. 98.1. Heterocromía del iris y anisocoria.
iluminado, reflejo consensual.
Al mirar un objeto que se acerca, las pupilas se La aniridia es la ausencia total o parcial del iris,
contraen y los ojos convergen, así como se contraen los casi siempre hereditaria y familiar. Esta anomalía es pura
músculos ciliares para llevar a cabo la acomodación, lo o asociada a catarata, glaucoma, hipoplasia foveal y del
que es conocido como reflejo de acomodación-conver- nervio óptico. Otras veces se acompaña de anomalías

1264 Tomo III


generales, como las genitourinarias, retraso mental, la dos de ojos hipopigmentados; se acompaña de nistagmo
ataxia cerebelosa y existe una alta incidencia con el tu- hipoplasia macular estrabismo y ambliopía.
mor de Wilms. El hemangioma de coroides puede afectar al iris y
La displasia del iris es un trastorno del desarrollo aparecer como lesiones aisladas o como parte del sín-
que se ve en el síndrome de Reiter, junto a otras anoma- drome Sturge Weber en el que se asocia con angiomas
lías del segmento anterior y otras afecciones oculares faciales, meningiomas, retraso mental, epilepsia, despren-
no constantes, como el glaucoma. Se considera que el dimiento de retina seroso y glaucoma.
cuadro clínico del síndrome de Axenfeld y el de Reiter En el síndrome de Claude-Bernard-Horner o
es una misma entidad y que la diferencia está en la afec- paresia oculosimpática, hay miosis homolateral, ptosis
tación del iris en la de Reiter. El iris se ve hipoplásico o leve y enoftalmía, con elevación evidente del párpado
atrófico, con formación de agujeros y pupila desplazada inferior. Puede que se deba a lesión mesencefálica del
hacia el lado atrófico. Es autosómico dominante y está tronco o de la parte superior de la médula espinal, cuello,
asociado a anomalías en el desarrollo de los dientes y o porción intraorbitaria. La forma congénita se asocia
huesos de la cara. frecuentemente a parálisis braquial, por traumatismo
El coloboma de iris es un defecto de cierre de la del parto o debido a anomalías vertebrales. La pupila de
cúpula óptica que ocurre a las 7 ó 8 semanas de vida Horner se dilata poco o nada con midriáticos en colirio.
fetal, se ve como una muesca en la parte inferior del iris. En el síndrome de Argyll Robertson, o iridoplejía
Este defecto se puede extender a todo el iris, se acom- refleja, la pupila no responde a la luz, pero conserva el
paña de coloboma de coroides, retina y nervio óptico, y reflejo de acomodación-convergencia. Puede verse en
puede provocar una aniridia. la tabes de origen sifilítico.
La discoria es la posición anormal de la pupila, En el síndrome de Pourfour de Petit se observa
que por lo regular no está en línea con el cristalino, o sea midriasis, retracción palpebral, y exoftalmos con excita-
que no aparece en el centro del iris. ción simpática. Sus causas más frecuentes son: lesiones
La microcoria o miosis congénita es una malfor- del vértice pulmonar, siringomielia y enfermedades de la
mación del músculo dilatador de la pupila que puede aso- cadena ganglionar cervical.
ciarse a otras anomalías congénitas. La parálisis del tercer par craneal completo se
La policoria son varias perforaciones en el iris expresa por midriasis, ptosis y oftalmoplejía de los mús-
por hipoplasias locales del estroma y epitelio pigmentario culos recto superior, inferior, medio y oblicuo inferior,
del iris, pero la verdadera policoria es más de una pupila por lo que el ojo se desvía hacia fuera y algo abajo.
con esfínter completo y cada cual funciona independien- En la pupila tónica o pupila de Adie, el diáme-
temente. tro pupilar es grande; la pupila reacciona poco a la luz
En la midriasis congénita, el músculo constric- y si lo hace es de forma lenta y tónica, o sea, al mante-
tor de la pupila no se contrae con la luz, ni de cerca, y ner la iluminación por más de 20 min sobre el ojo. Al
muy poco con los mióticos. Es de carácter autosómico retirar la iluminación vuelve a dilatarse de forma tóni-
dominante. ca, de ahí su nombre. Se acompaña de toma de la aco-
La anisocoria es la desigualdad de diámetro entre modación, atrofia del iris, pérdida del ribete pigmentario
las pupilas de los ojos. Si la anisocoria se hace mayor en iridiano y contracciones parciales del iris a la luz, lo
la luz, la pupila más grande es la anormal y, si lo hace en que se le ha denominado como movimientos
la oscuridad, la pupila más pequeña es la anormal. La vermiformes. Existe en ese iris una hipersensibilidad
anisocoria se presenta en una gran cantidad de indi- colinérgica, que se evidencia al colocar colirio de
viduos sanos y se considera fisiológica. La caracte- pilocarpina al 0,1 % y observarse constricción pupilar
rística principal de ella es que responden bien a la luz en el iris enfermo y ninguna respuesta en el sano. Pue-
y a la oscuridad, manteniendo igual diferencia entre de hacerse bilateral y acompañarse de hipo o arreflexia
ambos ojos. osteotendinosa, lo que conforma entonces el síndrome
de Adie (Figs. 98.2 y 98.2A).
SÍNDROMES QUE SE ACOMPAÑAN El cuadro clínico, conocido como la reacción para-
dójica pupilar, se caracteriza por miosis brusca al apagar
DE ANOMALÍAS DEL IRIS Y PUPILA
la luz, lo que dura unos segundos, para después dilatarse
El albinismo es una deficiencia de melanina. En el lentamente. Se ve en enfermedades de retina y nervio
ojo hay un aumento en la transilumunación del iris y fon- óptico.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1265


ENFERMEDADES DE LA ÚVEA
Uveítis es el término que se utiliza para describir
muchas formas de inflamación intraocular; puede afec-
tar no solo la úvea sino también las estructuras adya-
centes.
La causa incluye infecciones o alteraciones del sis-
tema inmune; puede ser primaria u ocular, o asociada
con enfermedades sistémicas. Su identificación es lo más
importante. La terapia está dirigida a atacar al agente
Fig. 98.2. Pupila de Adie, dilatada. causal y podría incluir terapia con drogas antiinflamatorias
no específicas.
Se han propuesto muchas clasificaciones. Las más
útiles son.
• Anatómica.
• Clínica.
• Causal.
• Patológica.

Clasificación anatómica: anteriores, intermedia,


posteriores y panuveítis
Clasificación clínica: según su forma de
Fig. 98.2A. Pupila de Adie que contrae con pilocarpina instaurarse y duración puede ser aguda, menos de tres
muy diluida. meses, y crónica más de tres meses.
Clasificación causal: exógenas y endógenas, que
La pupila de Marcus Gunn indica un defecto se clasifican en seis tipos principales.
asimétrico de la respuesta pupilar, debido casi siempre a • Secundaria a enfermedad sistémica (artritis
afectación del nervio óptico. Es un signo muy importante y
reumatoide).
objetivo de ayuda en el diagnóstico de lesión retrobulbar. Se
• Infecciones por parásitos (toxoplasmosis).
lleva a cabo balanceando la luz por encima del entrecejo,
esperando 3 s en cada ojo para pasar al otro. En caso de • Infecciones víricas (citomegalovirus).
una leve neuropatía óptica o una extensa lesión retiniana la • Infecciones micóticas (candidiasis).
pupila del ojo enfermo, en vez de contraerse, se dilata. • Uveítis específicas idiopáticas presentan
La pupila blanca o leucocoria es un signo alar- características especiales como la uveítis intermedia.
mante que puede verse como consecuencia de catarata, • Uveítis inespecíficas idiopáticas que representan
persistencia del vítreo primario, retinopatía del prematu- 25 % del total de las uveítis.
ro, desprendimiento de retina, granulomatosis,
retinosquisis, retinopatías exudativas, panoftalmitis y Todos los procesos que provocan uveítis producen
retinoblastoma, entre otras menos frecuentes (Fig. 98.3). inflamación que lleva a la dilatación vascular, inyección
ciliar, aumento de la permeabilidad con escape de líqui-
do y células al espacio extravascular, los que se deposi-
tan en la cara posterior de la córnea, y son denominados
precipitados queráticos.
El iris y el cuerpo ciliar se inflaman y provocan
una iridociclitis o uveítis anterior (Fig.98.4), que puede
ser causada por focos sépticos en la vecindad, como
dientes, amígdalas y faringes, o a distancia, por enfer-
medades sistémicas, tanto infecciosas como no infec-
ciosas, y en respuesta a factores exógenos como son los
traumatismos.
Las reacciones inflamatorias son de varios tipos:
Fig. 98.3. Leucocoria. serosas, purulentas, plásticas o granulomatosas. Puede

1266 Tomo III


ser causada por: infecciones (bacterias, hongos, virus, − Sinequias posteriores, adherencia entre superfi-
protozoos, parásitos de varios tipos, Rickettsia) y de cie posterior del iris y cara anterior del cristalino
causa no infecciosa, que a su vez pueden ser de causa que puede extenderse a 360° en el área pupilar
exógena, como traumáticas o por quemaduras; o y producir seclusión pupilar.
endógena, como la oftalmía simpática, facoanafiláctica, − Humor acuoso turbio de modo que un delgado
debida a reacciones de hipersensibilidad, o por reacción rayo luminoso que no sea visible a través del
a tumores o procesos degenerativos. humor acuoso normal, lo es en este humor acuo-
so-plasmoide (fenómeno de Tyndall).
− Hipopión parcial o total. Cuando la fibrina es
abundante puede acumularse como una exuda-
ción blanco amarillenta en la mitad inferior o en
toda la cámara anterior del ojo.
− Nódulos del iris, que son expresión de inflama-
ción grave.
− Atrofia del iris característica de las enfermeda-
des herpéticas y de la heterocromía de Fuchs.
− Rubeosis del iris, que refleja cronicidad y grave
compromiso vascular.

Fig. 98.4. Iridociclitis. La uveítis anterior puede verse en enfermedades


sistémicas como: el síndrome de Reiter, la artritis
idiopática juvenil, colitis ulcerativa, espondilitis
En los niños, las enfermedades más frecuentes son anquilosante, psoriasis, enfermedad de Crohn y leucemia,
las de causa traumática y las provocadas por artritis. entre otras.
El pediatra debe desempeñar un papel principal en
el estudio de estos cuadros clínicos y en la búsqueda de la TRATAMIENTO
causa, ya que la mayoría son causadas por agentes infec- El tratamiento de las iritis y ciclitis (uveítis ante-
ciosos o reacciones sistémicas que, de no ser detectadas rior) va dirigido a su causa, si se conoce. Se utilizan
y tratadas, llevan a la disminución o pérdida de la visión y midriáticos ciclopléjicos para poner en reposo a esas
a otras manifestaciones. Es por ello necesario que el of- estructuras. Inyecciones de esteroides sistémicos loca-
talmólogo trabaje junto con el pediatra para buscar la cau- les por debajo de la cápsula de Tenon son a veces nece-
sa y poner tratamiento específico. sarias, sobre todo en pacientes graves.

Uveítis anterior o iridociclitis Uveítis intermedia


El cuadro clínico de este tipo de uveítis se puede El síntoma de presentación puede ser la percep-
resumir en: ción de manchas frente al ojo como moscas volantes
• Síntomas subjetivos: o flotadores, aunque se puede manifestar de inicio por
− Dolor. deficiencia visual causada por edema macular.
− Lagrimeo abundante. Afecta la parte intermedia de la úvea y suele dar
− Fotofobia intensa. una pars-planitis por inflamación de esa estructura o
− Disminución de la agudeza visual. vitritis, con poca o ninguna actividad en cámara anterior.
− Dolor ocular espontáneo, que aumenta en horas Sus causas más frecuentes son: la sarcoidosis, la
de la noche, madrugada y a la palpación. toxocariasis, toxoplasmosis y la periflebitis.
• Signos:
− Inyección ciliar o periquerática con tono violá- Uveítis posterior
ceo (ojo rojo). La inyección periquerática no se Los síntomas más comunes de la uveítis posterior
borra con la instilación de adrenalina al 1/1 000, o coroiditis son:
a diferencia de la inyección conjuntival que sí lo • Síntomas subjetivos:
hace. − Disminución de la agudeza visual.
− Edema del iris. − Macropsias, u objetos deformados y agranda-
− Precipitados queráticos. dos de tamaño.
− Miosis pupilar irregular que reacciona con − Micropsias u objetos deformados y disminuidos
pereza. de tamaño.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1267


− Miodesopsias, sensación de ver flotadores o mos-
cas volantes.
• Signos:
− Vítreo turbio.
− Focos inflamatorios en fondo de ojos, con ede-
ma de retina y coroides.

La inflamación de la coroides o tracto uveal poste- Fig. 98.7. Toxocariasis.


rior afecta casi siempre a la retina, ocasionando
coriorretinitis. La tensión ocular puede estar elevada o
disminuida. De acuerdo con su causa hay focos SÍNDROMES Y COMPLICACIONES
inflamatorios o lesiones difusas, que en algunos casos son QUE SE RELACIONAN
características.
CON LA UVEÍTIS
En las uveítis posteriores, las causas más frecuen-
tes son: toxoplasmosis, histoplasmosis, toxocariasis, en- El síndrome de Vogt-Koyanagi-Harada (VKH)
fermedades de inclusión citomegálicas, sarcoidosis, sífilis, es una enfermedad multisistémica, que se presenta con
tuberculosis, histoplasmosis, lepra y más reciente el SIDA uveítis posterior (Fig.98.8).
(Figs.98.5, 98.6 y 98.7).

Fig. 98.8. Lesiones en el síndrome de Vogt- Koyanagui- Harada.

El síndrome de Herfort es una uveítis con altera-


ciones cutáneas y de las parótidas.
El síndrome de Mikulicz se asocia a conjuntivitis.
También se afectan las vías lagrimales, y las glándulas
parótidas, submaxilares y sublinguales.
La endoftalmitis aguda es una complicación
devastadora. En el 85 % de los casos los microorganismos
Fig. 98.5. Toxoplasmosis.
causantes de las endoftalmitis provienen de la flora
periocular del paciente; el resto provienen de microor-
ganismos presentes en el lente intraocular, por la conta-
minación de instrumentos o personal del salón incluyendo
al cirujano.
La endoftalmitis se puede presentar de forma agu-
da, subaguda o crónica dependiendo del germen cau-
sante, de la gravedad y del tiempo de evolución. Las
manifestaciones clínicas que se pueden encontrar son:
dolor ocular, disminución de la agudeza visual, edema
palpebral, quemosis, edema corneal, fenómeno de
Tyndall, vitritis y episodios inflamatorios con respuesta
positiva transitoria a los esteroides.
Con el advenimiento de las nuevas tendencias de
las cirugías ambulatorias sin suturas, se hace necesario
un campo quirúrgico lo más estéril posible para evitar el
Fig. 98.6. Histoplasmosis. desarrollo de las infecciones en los días posteriores a

1268 Tomo III


ella. De ahí la importancia del control de todos los fac- Causas más frecuentes o acompañantes de las
tores de riesgos preoperatorio, transoperatorio y uveítis
posoperatorio.
La panoftalmitis es una inflamación que afec- • Uveitis anterior
ta todo el ojo y es debida casi siempre a herida − Artritis idiopática juvenil
perforante o septicemia. En casos graves es necesa- − Espondiloartropatia
rio eviscerar o enuclear el ojo. − Sarcoidosis
La oftalmía simpática, también llamada uveítis − Sífilis
simpática, es un cuadro clínico inflamatorio grave de − Nefritis aguda
la úvea, de tipo granulomatoso plástico, en el que se • Uveítis intermedia
observan lesiones coroidales conocidas como nódulos − Ciclitis crónica con igual causa
de Fuchs. Se produce como consecuencia de un pro- − Pars planitis
ceso similar en el otro ojo, es decir, el ojo enfermo • Uveítis posterior
inflamado, que por "simpatía", afecta al ojo sano. Casi − Toxoplasmosis
siempre este tipo de uveítis se debe a traumatismos − Toxocariasis
especialmente grandes, cirugías o heridas y cuerpos − Sarcoidosis
extraños. Su evolución es crónica. El ojo inicialmente − Sífilis
afectado es el excitante y el otro el simpatizante. Exis- − Citomegalovirus
ten múltiples teorías para explicar su presentación, − SIDA
entre ellos infecciones que se propagan por el nervio • Panuveítis (total)
del ojo simpatizante a través del quiasma y de ahí al − Oftalmía-simpática
nervio del otro ojo. Algunos opinan que son toxinas − Síndrome Vogt-Koyanagi-Harada
generadas por bacterias existentes en el ojo excitan- − Síndrome de Behcet
te, o también metástasis hematógenas y reacciones
alérgicas.
Algunos exámenes de laboratorio pueden ayu- TUMORES DE LA ÚVEA
dar a aclarar la enfermedad, como son: la eritrosedi- Los quistes del iris son muy raros. Entre los tumo-
mentación; la búsqueda de anticuerpos antinucleares, res primarios del iris más frecuentes, originados en los
que hacen sospechar una artritis idiopática juvenil; melanocitos, están:
rayos X de tórax en búsqueda de sarcoidosis o tu- • Nevus.
berculosis; estudios de serología para sífilis y; en el • Melanomas.
caso de uveítis posterior, análisis para detectar • Nódulos de Lisch.
toxocara, toxoplasma, herpes zoster, herpes simple
y el SIDA. Los nevus son los más frecuentes y, aunque con-
Cuando existe una inflamación muy grave de la génitos, aumentan con la edad, los que pueden causar
úvea para llegar al conocimiento de la causa o elimi- complicaciones oculares. Su diagnóstico diferencial es
nar la posible malignidad del proceso, se realiza el difícil con el melanoma maligno, que es más raro y se
diagnóstico quirúrgico mediante la paracentesis de la presenta como una masa nodular o difusa con cambios
cámara anterior y el estudio celular del líquido que de coloración del iris y heterocromía, los que crecen y
así se obtiene. En algunas pocas ocasiones se re- pueden provocar hifema (Fig.98.9).
quiere de vitrectomía. En muchos casos, la causa
de la uveítis permanece desconocida.
TRATAMIENTO
Las uveítis en general requiere del diagnóstico y
tratamiento de la enfermedad causal, así como de la
atención rápida y especializada del oftalmólogo para
evitar la disminución o pérdida de la visión. El trata-
miento se basa en: midriáticos, ciclopléjicos, esteroides
y a veces inmunosupresores. Fig. 98.9. Nevus de iris y coroides.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1269


Los nódulos de Lisch son hamartomas de no más El melanocitoma es una variante del nevus coroidal.
de 2 mm de diámetro que se ven en la neurofibromatosis La mayoría están cerca de la papila. Son más frecuen-
tipo I, enfermedad de von-Recklinghausen, como peque- tes en personas de la raza negra.
ños puntos carmelitas que incrementan en número con
la edad. Bibliografía
Otras enfermedades sistémicas pueden afectar o Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Intraocular
Inflammation and Uveitis. San Francisco: American Academy
infiltrar al iris y cuerpo ciliar, como por ejemplo el
of Ophthalmology:2003-2004.
xantogranuloma juvenil, que es una enfermedad pri- Chipont Benavente ,Cunningh Jr ET Manejo del paciente con
mariamente cutánea. Es más frecuente en niños peque- Uveítis Anterior Aguda .Arch Soc Esp Oftalmol 2002;
ños y son usualmente unilaterales. Se manifiesta por una 77:183-194).
masa carnosa amarillenta en el iris, la cual puede sangrar Díaz Comínches Generoso, Alejandro Caíñas Ronda, Rafael
Jiménez Cepeda, Ricardo Neira Peláez. Características
y ocasionar hifema, uveítis y glaucoma a causas de la epidemiológicas en pacientes portadores de queratocono. Rev
obstrucción de la trabécula por la masa tumoral. El Cubana Oftalmol 199;12(1):.
meduloepitelioma, tumor que procede del epitelio poste- Horton R, Wilming L, Rand V, Lovering RC, Bruford EA,
rior del iris y cuerpo ciliar tiene un aspecto similar Khodiyar VK, Lush MJ, Povey S, Talbot CC Jr, Wright
MW, Wain HM, Trowsdale J, Ziegler A, Beck S. Gene map
(Fig. 98.10). of the extended human MHC. Nat Rev Genet. 2004, 5: 889-99.
J .R.Fontanela G Martínez -Grau G. Simón. Uveítis Anterior
Aguda .Jano EMC Enero 2000 .Volumen 58-Número
1328p.57.
Lantigua Cruz A, Guerra Iglesias D, Zarragoitia OL V. Portilla, C.
Deleccion (11 p) y t(11;21) (q21;q22.1) en un paciente con
asociación tumor de Wilms‘-Aniridia. Rev. Cubana Oftalmol
1989; 2(3):137-47.
Morera Barrios l ,Verdura González T.E. Martínez Legón .Z
Lorenzo Legón R R. Asociación de antígenos HLA y
enfermedades oftalmológicas Rev. Cubana Hematol Inmunol
Hemoter 2001;17(1):7-18.
Ortiz González Elier, Maritza Miqueli Rodríguez, Alberto Omar
González García y Aracely Lantigua Cruz. Avances en la
genética de los glaucomas. Rev Cubana Oftalmol 1999;12(2):.
Pila Pérez R. Manifestaciones oftalmológicas de la sarcoidosis.
Rev. Cubana Oftalmol 1990; 3(1)9:19-23.
Pras E , Neuman R , Zandman-Goddard G: Intraocular
Fig. 98.10. Meduloepitelioma o xantogranuloma juvenil. inflammation in autoimmune diseases.Semin Arthritis Rheum
2004 Dec;34(3):602-9.
Sandra Borges Pérez, Caridad Monteagudo Morejón, Edith Ballate
También la leucemia, los linfomas, el neuro- Nodales y Maricel Moxam Cleghon Experiencias terapéuticas
blastoma, pueden infiltrar el tejido iridiano. en la uveítis intermedia. Rev Cubana Oftalmol 1999;12(2).
Sandra María Borges Pérez, Maricel Moxam Cleghorn, Katia
El osteoma coroidal es un tumor benigno, de
Áreas Salas y Edith María Ballate Nodales. Uveítis
naturaleza ósea, casi siempre yuxtapapilar. Se ve más intermedia. Experiencias terapéuticas Rev Cubana Oftalmol
en el sexo femenino en adolescentes o mujeres jó- 2001;14(2).
venes. Sigler Villanueva Aldo, Ceferino Román González, Jackeline Díaz
El melanoma maligno de la coroides es muy raro Luis. Oftalmía simpática: a propósito de un caso. Rev
Cubana Oftalmol 1999;12(1). Tabbara KF, Chavis PS,
en niños. Puede presentarse con el cuadro clínico de un Freeman WR. Vogt-Koyanagi-Harada syndrome in children
ojo rojo, aunque no es lo más frecuente. compared to adults. Acta-Ophthalmol-Scand 1997;76(6):723-6.
Los nevus coroidales son más frecuentes en per- Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
sonas de la raza blanca. Es una lesión carmelita grisácea, Louis: Mosby; 1995.
Zaldivar Estévez, JC, Abdo Rodríguez A, Ferrer Destrade E, Ferrer
o más clara, plana o levemente elevada con márgenes
Mahojo L. Comportamiento inmunológico en 50 pacientes
regulares y que puede tener nidos de pigmento en su diagnosticados con uveítis anterior aguda. Rev. Cubana
interior, usualmente del tamaño de un diámetro papilar. Oftalmol 1990; 3(2).87-97.
Pueden llegar a alterar la visión, si están cerca de la Zaldívar Estévez, Juan Carlos, Anselmo Abdo Rodríguez, Lourdes
Ferrer Mahojo y Ramiro Cabezas Quiroga. Eosinofilia en
mácula y hasta hacerse malignos, por lo que deben exa-
enfermos de uveitis anterior aguda. Rev Cubana Oftalmol
minarse cada 6 meses. 1995;8(1).

1270 Tomo III


puede ser parcial (subluxación) o completo (luxación);
generalmente el cristalino cae hacia atrás, dentro del
. Capítulo 99 . cuerpo vítreo. Excepcionalmente cae hacia delante
entre el iris y la córnea.
Cristalino
Eugenio Jara Casco, G.ladys Colom Serra, Rosa María La subluxación puede ser pequeña y perceptible
Naranjo Fernández solo cuando se dilata la pupila o ser mayor, en cuyo caso
se ve el borde del cristalino en el margen pupilar. El sín-
El cristalino es un lente biconvexo que se forma
toma objetivo principal es la iridodonesis y el síntoma
del engrosamiento del ectodermo que recubre la vésicula
subjetivo es la deficiencia visual con diplopía monocular.
óptica, donde se produce una placoda, la cual se invagina
La ectopia del cristalino puede ser idiopática o asociada
para formarlo, lo que sucede en diferentes pasos sucesi-
con alguna enfermedad ocular o sistémica. El síndrome
vos que comienza desde el núcleo de células originario
de Marfan es la enfermedad sistémica más común rela-
de las primeras fibras, o cristalino embrionario. A este
cionada con subluxación (Fig. 99.1).
se le van sumando células con sus fibras para formar el
cristalino fetal y más tarde el del niño, aunque el crista-
lino sigue creciendo durante toda la vida, sobreponién-
dose cada vez más fibras y aumentando el área
denominada corteza.
Sin embargo, el tamaño de la cápsula se mantiene
relativamente constante, por lo que el cristalino, al se-
guir sumándosele fibras, se va haciendo cada vez más
duro y denso. Por ello, el lente del niño es suave y si está
opacificado se puede tratar de sacar aspirándolo.
El cristalino puede sufrir daño en vida intrauterina
y expresarse por cambios en su forma, localización, ta-
maño y desarrollo, aunque lo más frecuente es que pier-
da su transparencia. La etapa en que el cristalino fue
dañado y se opacificó se conoce por la ubicación de la Fig. 99.1. Subluxación del cristalino.
opacidad en el núcleo embrionario, fetal o en la corteza
y hasta su naturaleza, según el tipo de opacidad. • Coloboma del cristalino. Se ve como una muesca en el
Las anomalías del cristalino pueden ir acompaña- borde inferior del cristalino y se asocia a un defecto
das de otras enfermedades, en particular del sistema de la zónula de Zinc. Puede estar asociado a coloboma
nervioso, tracto urinario, piel y músculo esquelético. La de iris, coroides, nervio óptico y retina.
detección precoz de los trastornos del cristalino ayuda a • Lenticono. Puede ser anterior o posterior. Es la pro-
tomar acciones para prevenir la deficiencia visual por yección cónica de la superficie anterior o posterior del
falta del desarrollo visual. cristalino, provoca miopía y astigmatismo irregular. El
lenticono posterior es casi siempre unilateral, progre-
ANOMALÍAS CONGÉNITAS sivo y con el transcurso del tiempo se opacifica.
Las principales anomalías congénitas del cristali- Cataratas
no, además de las cataratas, son las siguientes:
Concepto. El término ''catarata'' se aplica a toda
• Afaquia o falta de cristalino. Afección congénita muy
opacidad del cristalino pequeña o grande, aún las que
rara, se acompaña de otras anomalías oculares en es-
pecial microftalmía. interfieren de forma escasa la visión.
• Microesferofaquia. Se trata de un cristalino pequeño Entre las enfermedades del cristalino las
de forma esférica y a menudo ectópico. La curvatura opacidades son las que se ven con más frecuencia y las
del cristalino es pronunciada y los pacientes sufren de que más abundan. Para su estudio se clasifican en:
miopía lenticular; se presenta aislada o asociada al Sín- • Catarata congénita: se presenta al nacimiento.
drome de Weill-Marchesani. • Catarata infantil: aparece en los primeros 2 años de
• Ectopia del cristalino o subluxación. Defecto asimétrico vida.
de la zónula de Zinc o ligamento suspensorio a menu- • Catarata juvenil: aparece en la primera década de la
do bilateral, hereditario y familiar. El desplazamiento vida.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1271


Catarata congénita Diabetes mellitus.
Es la responsable del 10 % de la pérdida visual en Enfermedad de Wilson.
el niño, sigue siendo la causa más frecuente de − Infección materna (3 %):
deprivación visual tratable (Fig. 99.2). Tiene una inci- Rubéola.
dencia de 1 por cada 250 recién nacidos. Pueden ser Citomegalovirus.
parciales o completas; a veces se acompañan de otras Sífilis.
afecciones oftalmológicas como: estrabismo, Toxoplasmosis.
microftalmía, microcórnea, colobomas de iris y coroides, Varicela.
nistagmus, entre otras. A veces se acompaña de enfer- Herpes simple.
medades generales y aparece en varios síndromes. − Anomalías congénitas oculares (2 %):
Aniridia.
Microftalmía.
Disgenesia del segmento anterior.
• Cataratas unilaterales:
− Idiopáticas (80 %).
− Anomalías oculares (10 %):
Lentícono posterior.
Persistencia vítreo primario.
Disgenesia del segmento anterior.
− Traumática (8 %).
− Infección intrauterina (2 %)

Fig. 99.2. Catarata unilateral total.

CAUSA Y CLASIFICACIÓN
DE LAS CATARATAS INFANTILES
La mayoría de las cataratas congénitas unilatera-
les están causadas por disgenesia local, no se asocian
con enfermedad sistémica y no son hereditarias; en con-
traste, las bilaterales plantean sospecha de enfermedad
sistémica o de patrón hereditario.
Pueden ser bilaterales o unilaterales: Fig. 99.3. Catarata bilateral.
• Cataratas bilaterales (Fig. 99.3):
− Idiopáticas (60 %). Desconocidas en el mayor por- Clasificación morfológica de las cataratas
centaje. congénitas
− Hereditarias (30 %). Las cataratas congénitas se pueden presentar de
− Genética-metabólica y por enfermedades sistémicas forma parcial, en los polos anterior o posterior y en el
(5 %): centro del cristalino, otras veces entre la corteza y el
Síndrome de Hallerman-Streiff. núcleo transparente (lamelar o zonular) y menos fre-
Síndrome de Fabry. cuente en forma difusa.
Síndrome de Lowe (oculocerebrorenal). • Catarata anterior:
Galactosemia. − Polar anterior, piramidal
− Subcapsular anterior
Hipocalcemia.
• Catarata central:
Trisomía (síndrome de Down, síndrome de Edward − Nuclear
y síndrome de Patau). − Sutural
Síndrome de Alport. − Zonular o lamelar (Fig.99.4)
Miotonía distrófica. • Catarata posterior:
Hipoparatiroidismo. − Polar posterior.
Síndrome de Marfan. − Subcapsular posterior.

1272 Tomo III


− Persistencia del vítreo primario hiperplásico. catarata central. Es familiar, congénita estacionaria,
− Mancha de Mittendorf. situada dentro del núcleo embrionario o fetal, y se ve
• Cataratas difusas: como una opacidad granulosa o pulverulenta. Las cata-
− Membranosa. ratas nucleares significativas deben ser operadas dentro
− Punctata o cerúlea de las primeras semanas de vida.
− Catarata en abeto. Catarata zonular o coronaria. Es una variedad
− Catarata total de catarata congénita o de la primera infancia, heredi-
taria, a veces no hay antecedentes específicos, bastante
frecuente y afecta ambos ojos. Generalmente, el núcleo
es transparente y a su alrededor se observan masas opa-
cas dispuestas en forma de anillos en las capas externas
alrededor de este núcleo. Se ven zonas transparentes de
las capas internas de la corteza, mezcladas a veces con
uno o dos zonas opacas concéntricas. Su color es varia-
ble entre el gris pardo y azul. Se le puede ver acompa-
ñando a la catarata de tipo nuclear, en cuyo caso la visión
está más afectada. En general la opacidad se encuentra
cubierta por el iris y ocasionalmente al dilatar la pupila
se ve, como un disco de anillos negros separados por
zonas transparentes de color naranja, del reflejo del fon-
do de ojo. Puede ser progresiva en la pubertad y en la
Fig. 99.4. Catarata lamelar. tercera década de la vida, y la visión ser regular a mala,
en dependencia de la extensión de la opacidad. En ge-
Catarata polar anterior. Se presenta como un pun- neral, queda un anillo externo transparente a través del
to de color blanco, pequeño, menos de 3 mm de diáme- cual puede desarrollarse visión. A veces son miopes y
tro, situado en la cara anterior del cristalino. La mayor puede corregirse el defecto de refracción con espejuelos.
parte de las cataratas polares anteriores no son progresi- La conducta que se debe seguir es de acuerdo con
vas, no afectan de modo significativo la visión y se pueden la visión del paciente y a su progresión. Con las actuales
controlar con midriáticos, sin recurrir a la cirugía. técnicas quirúrgicas es más frecuente la decisión de la
Al examen a simple vista, con luz oblicua, se ve
extracción del cristalino con implante de lente intraocular,
una pequeña opacidad blanca redonda en la superficie
lo cual por lo regular tiene resultados favorables.
anterior del cristalino que acompaña a los movimientos
del ojo. Con la oftalmoscopia a distancia se observa como Catarata subcapsular. Se producen por debajo
un punto negro sobre el fondo rojo naranja de la retina. de las cápsulas anterior o posterior. Es una opacidad
Catarata piramidal. Es un tipo de catarata polar adquirida; las anteriores son más frecuentes y se rela-
anterior, de color blanco y en forma de cono, cuyo vér- cionan con Síndrome de Alpert y traumatismo. Las pos-
tice se proyecta en la cámara anterior. Estas opacidades teriores son por lo general idiopáticas, por consumo
suelen ser bilaterales, esporádicas y no se asocian a en- prolongado de esteroides, traumatismo y síndrome de
fermedades sistémicas. Down.
Catarata polar posterior. Son opacidades del cris- Catarata sutural. Son opacidades que afectan a
talino, centrales, pequeñas, densas y blancas; se obser- las suturas en Y del cristalino; pueden ser unilaterales o
van en los niños con aniridia. bilaterales y hereditarias.
Mancha de Mittendorf. Es una pequeña opaci- Cataratas difusas. Se conocen así a las opacidades
dad blanca congénita, localizada en la cápsula posterior. poco frecuentes, generalmente familiares, que adquie-
Un residuo de la arteria hialoidea que se puede extender ren diversas formas y casi todas están localizadas entre
desde el nervio óptico hasta la cara posterior del crista- la corteza y núcleo. Se describen algunas de ellas:
lino y dar este tipo de opacidad; ocurre de forma espo- Catarata membranosa. Es un cristalino opaco, fi-
rádica y se encuentra en el 2 % de los individuos broso y delgado, producido por la reabsorción de la pro-
normales. teína, que conduce a una membrana blanca. Con
Catarata nuclear. Se observa una opacidad en el frecuencia se instala como resultado de un trauma o en
centro del cristalino, de ahí que se conoce también como
afecciones como rubéola, síndrome de Lowe y otros.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1273


Su cirugía es difícil por la dureza de la membrana.
Catarata cerúlea. Es una variedad de cataratas
que presenta variable número de opacidades en forma
de puntos distribuidos iregularmente por la corteza y el
núcleo del cristalino. Muchas veces los puntos son de
color azul claro y brillantes por lo que se conoce también
como catarata cerúlea. Se pueden asociar a las catara-
tas coronarias y son fáciles de ver al examen con
biomicroscopio. Se observa en la manosidosis que es
una degradación de las lipoproteínas.
Catarata en abeto. Esta anomalía del cristalino Fig. 99.5. Catarata y glaucoma.
consiste en mechones pequeños en forma de hendidu-
ras, diseminadas de manera difusa. Al examen tiene di- es indispensable hacer el diagnóstico diferencial con otras
versas tonalidades de rojo, azul y verde; se observa en enfermedades que producen estas manifestaciones, como
los pacientes con distrofia miotónica e hipoparatiroidismo. son: retinoblastoma, desprendimiento de retina total, per-
sistencia de vítreo primario, enfermedad de Coats, etc.,
Cataratas congénitas asociadas a otras donde también se observa la pupila blanca.
enfermedades generales y oculares Las cataratas congénitas se pueden acompañar de
La catarata aparece como una de las alteraciones nistagmo o de estrabismo producido por la disminución o
características de la enfermedad de Wilson y en niños pérdida de la agudeza visual.
con galactosemia. En el primer caso, las opacidades se Aproximadamente el 25 % de las cataratas par-
disponen en forma radiada, y ha sido denominada "en ciales con menos de 3 milímetros de diámetro, no inter-
girasol". En el segundo, las opacidades toman aspecto fieren la visión y son descubiertas por casualidad en el
de gotas de aceite. examen oftalmológico.
En el síndrome de Marfan, el cristalino está TRATAMIENTO
subluxado o desplazado, por lo general, hacia arriba y
El tratamiento es quirúrgico en todos los casos, tanto
hacia el lado temporal. Puede acompañarse de catara-
en las cataratas totales monoculares como binoculares
tas parciales.
y en las cataratas parciales mayores de 3 milímetros de
Es de señalar que en ocasiones se constituye un
diámetro y con una agudeza visual de 20/50 o peor. La
tipo de opacidad del cristalino relacionada con la
cirugía de la catarata congénita se debe realizar antes
prematuridad (catarata del prematuro), sin que se haya
de las 6 a 8 semanas de vida porque el período crítico
logrado definir su mecanismo de producción. Por lo ge-
del desarrollo visual transcurre en los primeros meses,
neral, estas opacidades desaparecen espontáneamente
cuando las áreas visuales del encéfalo experimentan ma-
después de varias semanas del nacimiento.
duración rápida en respuesta a las señales visuales pro-
En niños a cualquier edad y sin vincularse directa-
cedentes de los ojos. La borrosidad de la imagen retiniana
mente a alteraciones congénitas, el cristalino puede
durante esta etapa originará una pérdida visual irre-
opacificarse a consecuencia de traumatismos y otras
versible.
enfermedades oculares a las cuales se asocia, como
Con la extracción del cristalino (lente que enfoca
ocurre en las uveítis, retinosis pigmentaria, glauco-
las imágenes dentro del ojo) se prescribe la corrección
ma, desprendimiento de retina y fibroplasia retrolental
afáquica, en dependencia de la edad del niño, con espejuelos
(Fig. 99.5).
afáquicos, lentes de contacto o implante de lente intraocular
También el uso prolongado de corticoides por vía
(controversial su uso en menores de 2 años).
oral provoca el desarrollo de opacidades subcapsulares
La rehabilitación visual se realiza de forma precoz,
posteriores. En niños expuestos a radiaciones pueden
la cual comienza con la corrección afáquica, que junto
aparecer opacidades del cristalino en uno o dos años
con la terapia de oclusión tienen la finalidad de alcanzar
posterior al tratamiento de radioterapia.
buenos resultados visuales.
SÍNTOMAS El pronóstico visual depende de varios factores: edad
En las cataratas totales, el síntoma subjetivo es la de comienzo, precocidad de la cirugía, la presencia
disminución o pérdida de la visión; el síntoma objetivo de anomalías oculares y sistémicas asociadas y una
por excelencia es la pupila blanca (leucocoria) y por ello adecuada rehabilitación.

1274 Tomo III


Bibliografía Se resume como sigue:
Buckley Eduard G. Cataratas y Anomalías del Cristalino en
• Herencia poligénica (multifactorial).
Pediatría. En: Nelson L.B. Oftalmología Pediátrica. 4ed. • Gen responsable: locus GLC3A cromosoma 2p21.
Mexico: Mc Graw- Hill interamericana, 2000: 291-318.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Lens and Cataract. Clasificación
San Francisco: American Academy of Ophthalmology;2003-
2004. El glaucoma en el niño puede ser clasificado de
Hernández Santos L. Catarata congénita: actualización. Rev muy diversos modos, atendiendo a multitud de criterios.
Cubana Oftalmol 2004;17(1).
Lloyd I C. The Lens. En: Taylor D, Hoyt C.S Pediatric • Glaucoma congénito primario es el que aparece
Ophthalmology and Strabismus. 3ed. London: Elsevier clínicamente aislado, y constituye una entidad por sí
Saunders, 2005:432-457. misma, sin unirse a otros síndromes ni a otras altera-
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. ciones oculares, salvo la malformación trabecular que
2005, p255-284. USA. origina el cuadro y las producidas como consecuen-
Pandey S.K. Etiology and Morphology of Pediatric Cataract. En: cia de la hipertensión ocular. Este glaucoma se ha
Wilson E. Pediatric Cataract Surgery. Techniques,
Complications and Management. Philadelphia: Lippincott denominado tradicionalmente congénito.
Williams and Wilkin, 2005:6-13. • Glaucoma secundario: acompaña a otras malforma-
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005, ciones o alteraciones oculares, entre las que se des-
Argentina.
Suresh K Pandey; Frank A. Billson. Pediatric Cataract Surgery.
tacan:
First edition.2005. Jaypee brothers medical publisher. New − Determinados síndromes con afectación multior-
Delhy, pp. xxii-xxxix: 200-280. gánica como la aniridia, el síndrome de Axenfeld-
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Rieger, la anomalía de Peters tipo I y II, el síndrome
Louis: Mosby; 1995.
de Lowe, el de Nance-Horan, el de Sturge-Weber,
las neurofibromatosis, entre otras.
. Capítulo 100 . • Glaucomas que complican la evolución de determi-
nados cuadros vitreorretinianos como la retinopatía
del prematuro, las displasias vitreorretinianas (Norrie)
Glaucoma en el niño o la persistencia de la vasculatura fetal, las que con-
Gladys Colom Serra, Eugenio Jara Casco, Elier Ortiz González
ducen al bloqueo angular por desplazamiento del
diafragma iridocristaliniano.
Es un proceso caracterizado por un aumento de
• Glaucomas neovasculares como estadio final del des-
la presión intraocular, originado por anomalías en el
prendimiento retiniano de larga evolución,
desarrollo del ángulo de la cámara anterior, o por otras
postraumático, o secundario a alteraciones tales como
malformaciones o alteraciones oculares que llevan con-
la vitreorretinopatía exudativa familiar, la enferme-
sigo cambios morfológicos del globo ocular y afecta-
dad de Coats, o ciertos tumores como los heman-
ción del nervio óptico.
giomas capilares retinianos, el retinoblastoma y el
CAUSA meduloepitelioma.
El glaucoma congénito (GC) es un defecto genético • Glaucomas secundarios a uveítis, por ángulo cerrado
del ojo, que se manifiesta en los primeros meses de vida. (sinequias iridianas posteriores y anteriores
En estos casos, el glaucoma puede estar acompañado periféricas) o abierto (cortisónico, trabeculitis), que
de anormalidades multisistémicas, retraso en el desarro- se ven principalmente en la iridociclitis crónica juve-
llo, características dismórficas y de un estudio nil y en la uveítis intermedia.
citogenético anormal. • Glaucomas secundarios a la cirugía, particularmente
Aunque esta condición generalmente se hereda de a la de la catarata congénita, tanto de ángulos abier-
forma autosómica recesiva, alguna aparente transmisión tos (cataratas nucleares en ojos microftálmicos), o
vertical en familias puede explicarse por seudodo- cerrados (sinequias iridianas posteriores/anteriores
minancia. En 1995, en un grupo de 17 familias con GC y periféricas).
múltiples sujetos afectados, fue cartografiado un primer • Glaucomas por mal posición cristaliniana, generalmen-
locus responsable, en la región 2p21, llamado GLC3A.25- te producidos por bloqueo pupilar y asociados a los
27. Más tarde se descubrió un segundo locus GLC3B
síndromes de Weill-Marchesani, Marfan o la
en la región 1p36.28n 1995.
homocistinuria.
Existen pruebas para diagnósticos prenatales
• Glaucomas asociados a tumores iridianos, como el
de glaucoma congénito primario que se aplica a fami-
lias de riesgo. xantogranuloma juvenil y la leucemia.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1275


Bibliografía Se resume como sigue:
Buckley Eduard G. Cataratas y Anomalías del Cristalino en
• Herencia poligénica (multifactorial).
Pediatría. En: Nelson L.B. Oftalmología Pediátrica. 4ed. • Gen responsable: locus GLC3A cromosoma 2p21.
Mexico: Mc Graw- Hill interamericana, 2000: 291-318.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Lens and Cataract. Clasificación
San Francisco: American Academy of Ophthalmology;2003-
2004. El glaucoma en el niño puede ser clasificado de
Hernández Santos L. Catarata congénita: actualización. Rev muy diversos modos, atendiendo a multitud de criterios.
Cubana Oftalmol 2004;17(1).
Lloyd I C. The Lens. En: Taylor D, Hoyt C.S Pediatric • Glaucoma congénito primario es el que aparece
Ophthalmology and Strabismus. 3ed. London: Elsevier clínicamente aislado, y constituye una entidad por sí
Saunders, 2005:432-457. misma, sin unirse a otros síndromes ni a otras altera-
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. ciones oculares, salvo la malformación trabecular que
2005, p255-284. USA. origina el cuadro y las producidas como consecuen-
Pandey S.K. Etiology and Morphology of Pediatric Cataract. En: cia de la hipertensión ocular. Este glaucoma se ha
Wilson E. Pediatric Cataract Surgery. Techniques,
Complications and Management. Philadelphia: Lippincott denominado tradicionalmente congénito.
Williams and Wilkin, 2005:6-13. • Glaucoma secundario: acompaña a otras malforma-
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, 2005, ciones o alteraciones oculares, entre las que se des-
Argentina.
Suresh K Pandey; Frank A. Billson. Pediatric Cataract Surgery.
tacan:
First edition.2005. Jaypee brothers medical publisher. New − Determinados síndromes con afectación multior-
Delhy, pp. xxii-xxxix: 200-280. gánica como la aniridia, el síndrome de Axenfeld-
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Rieger, la anomalía de Peters tipo I y II, el síndrome
Louis: Mosby; 1995.
de Lowe, el de Nance-Horan, el de Sturge-Weber,
las neurofibromatosis, entre otras.
. Capítulo 100 . • Glaucomas que complican la evolución de determi-
nados cuadros vitreorretinianos como la retinopatía
del prematuro, las displasias vitreorretinianas (Norrie)
Glaucoma en el niño o la persistencia de la vasculatura fetal, las que con-
Gladys Colom Serra, Eugenio Jara Casco, Elier Ortiz González
ducen al bloqueo angular por desplazamiento del
diafragma iridocristaliniano.
Es un proceso caracterizado por un aumento de
• Glaucomas neovasculares como estadio final del des-
la presión intraocular, originado por anomalías en el
prendimiento retiniano de larga evolución,
desarrollo del ángulo de la cámara anterior, o por otras
postraumático, o secundario a alteraciones tales como
malformaciones o alteraciones oculares que llevan con-
la vitreorretinopatía exudativa familiar, la enferme-
sigo cambios morfológicos del globo ocular y afecta-
dad de Coats, o ciertos tumores como los heman-
ción del nervio óptico.
giomas capilares retinianos, el retinoblastoma y el
CAUSA meduloepitelioma.
El glaucoma congénito (GC) es un defecto genético • Glaucomas secundarios a uveítis, por ángulo cerrado
del ojo, que se manifiesta en los primeros meses de vida. (sinequias iridianas posteriores y anteriores
En estos casos, el glaucoma puede estar acompañado periféricas) o abierto (cortisónico, trabeculitis), que
de anormalidades multisistémicas, retraso en el desarro- se ven principalmente en la iridociclitis crónica juve-
llo, características dismórficas y de un estudio nil y en la uveítis intermedia.
citogenético anormal. • Glaucomas secundarios a la cirugía, particularmente
Aunque esta condición generalmente se hereda de a la de la catarata congénita, tanto de ángulos abier-
forma autosómica recesiva, alguna aparente transmisión tos (cataratas nucleares en ojos microftálmicos), o
vertical en familias puede explicarse por seudodo- cerrados (sinequias iridianas posteriores/anteriores
minancia. En 1995, en un grupo de 17 familias con GC y periféricas).
múltiples sujetos afectados, fue cartografiado un primer • Glaucomas por mal posición cristaliniana, generalmen-
locus responsable, en la región 2p21, llamado GLC3A.25- te producidos por bloqueo pupilar y asociados a los
27. Más tarde se descubrió un segundo locus GLC3B
síndromes de Weill-Marchesani, Marfan o la
en la región 1p36.28n 1995.
homocistinuria.
Existen pruebas para diagnósticos prenatales
• Glaucomas asociados a tumores iridianos, como el
de glaucoma congénito primario que se aplica a fami-
lias de riesgo. xantogranuloma juvenil y la leucemia.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1275


• Glaucomas postraumáticos complicando hifemas y
generalmente asociados a una recesión angular.

Se debe recordar que ciertos glaucomas infantiles


secundarios pueden hacerse patentes al nacimiento, por
lo que son también, congénitos.

Aspectos epidemiológicos de los glaucomas


infantiles Fig. 100.2. Megalocórnea en el glaucoma infantil.

• 1 de cada 15 000 niños nacidos lo padecen


• Un oftalmólogo tiene oportunidad de diag-
nosticar uno cada 5 a 10 años
• A lo largo de su vida profesional podrá
diagnosticar de 4 a 8 casos
• La bilateralidad se señala entre el 75 y el
78 % de los pacientes

SINTOMATOLOGÍA
Los síntomas subjetivos del glaucoma son:
lagrimeo, fotofobia y si el niño llora sin otra causa presu-
mible, puede ser que exista dolor (Fig. 100.1). El lagrimeo,
producción excesiva de lágrimas de carácter reaccional, Fig. 100.3. Rotura de la membrana de Descemet.
acompaña al síntoma más importante que es la fotofobia.
Cuando esta es muy intensa, lleva al recién nacido a dar globo ocular se produce miopización, iridodonesis o iris
la espalda y ocultar su cabeza con el brazo. Cuando el que tiembla y subluxacion del cristalino.
niño es algo mayor, tiende a cubrirse los ojos con la mano En los lactantes menores de 1 año, si existe au-
cerrada como defensa a la agresión luminosa y se esta- mento del tamaño de la córnea y molestia a la luz, es
blece el blefarospasmo. urgente remitir al especialista por la alta posibilidad de
padecer un glaucoma que puede conducir, si no es aten-
dido precozmente, a la disminución o pérdida de la vi-
sión.
El especialista de oftalmología pediátrica o de glau-
coma hará el examen completo incluyendo el fondo de
ojos en busca de la excavación patológica de la papila, y
el estudio de la presión ocular entre otros estudios que
seguramente requerirán anestesia.
También esta se debe sospechar y remitir al oftal-
Fig. 100.1. Lagrimeo. mólogo, frente a la duda, cuando amigos y familiares
hablan de "qué ojos más grandes y bellos tiene el niño",
Los síntomas objetivos están ocasionados por la lo que posibilitará descartar los verdaderos glaucomas y
presión ocular elevada en un globo ocular de paredes hacer un tratamiento precoz.
delgadas y poco resistentes, propio de los niños en sus pri- Otro examen que realiza el oftalmólogo, útil para el
meros años de vida, estos son: el aumento del diámetro diagnóstico y el seguimiento es la biometría, cuyas ci-
de la córnea (Fig. 100.2), edema corneal y aparición de fras normales según la edad son:
roturas de la membrana de Descemet (Estrias de Haab) • Nacimiento 17,00 mm +0,25
(Fig. 100.3). Aumento del tamaño del globo ocular • 1 año 19,10 mm + 0,25
(buftalmos) y de la profundidad de la cámara anterior, • 2 años 19,60 mm + 0,25
ensanchamiento del limbo esclerocorneal y midriasis • 6 años 20,50 mm + 0,25
pupilar. Como consecuencia del aumento de tamaño del • 15 años 23,90 mm + 0,25

1276 Tomo III


DIAGNÓSTICO Cifras normales de la tonometría:
El diagnóstico positivo se hace sobre la base de los • Hasta 15 mm Hg, normal.
elementos siguientes: • De 15 a 20 mm Hg, dudosa.
• El tamaño del ojo, de la córnea y su opacidad. • Más de 20 mm Hg, patológica.
• La tensión intraocular.
• El grado de excavación de la papila.
La medición del tamaño de la córnea se realiza
con el compás de estrabismo, en su diámetro horizontal
Examen del niño glaucomatoso por el oftalmólogo
Luego de un examen rutinario de los ojos, tratando y vertical.
de medir la visión y conocer la fijación, hay que realizar Corneometría
la toma de la tensión ocular. Este examen del niño se Cifras normales:
realiza bajo anestesia general con el tonómetro, ya sea • Al nacer hasta 10 mm.
de Schiötz o con el tonómetro de aplanación de Perkin • A los 6 meses hasta 11 mm.
(Figs. 100.4 y 100.4 A). En niños a partir de los 5 años • Al año hasta 12mm.
se puede intentar realizar la tonometría con anestesia
local sola, o con los nuevos tonómetros de aire. A continuación de la toma de tensión ocular y el
estudio de la medición del tamaño de la córnea se reali-
za el examen del ángulo de la cámara anterior con lám-
para de hendidura que actualmente está acoplada al
microscopio quirúrgico. Para este examen (gonioscopia)
se utiliza un lente especial o gonioscopio.

Gonioscopia
El tejido anómalo o restos de tejidos embrionarios
en el ángulo camerular pueden adoptar diferentes for-
mas o aspectos (Fig.100.5). No existe receso angular
como en el adulto y se puede tener la impresión de que
el seno del ángulo tiene la parte correspondiente a la
banda ciliar y trabéculo ocupada o cubierta por un tejido,
que la mayoría de las veces tiene un aspecto esponjoso
y semitranslúcido. Otras veces, ese mismo tejido y en la
misma posición, está pigmentado, formando arboriza-
Fig. 100.4. Tonometría de Schiotz. ciones o constituyendo un tejido más denso y compacto
que parece una continuación del iris que tapiza la pared
escleral del ángulo; es lo que se describe como una per-
sistencia del ligamento pectíneo.

Fig. 100.4A. Tonometría de Perkins. Fig. 100.5. Gonioscopia.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1277


En todo caso los 2 aspectos anteriores correspon- Conducta que se debe seguir:
den en realidad a una persistencia de tejido El tratamiento del glaucoma congénito tiene un
mesenquimatoso, antes llamado "mesodérmico". Actual- importante y único objetivo: regularizar la presión ocular
mente se sabe que deriva de la cresta neural, por tanto, y defender la visión o lo que queda de ella, por lo que a
es de estirpe neuroectodérmica al igual que los todo lactante en que se sospeche la existencia de un
queratocitos, el endotelio corneal, o el estroma del iris. glaucoma congénito debe ser examinado por un oftal-
En otros casos, se tiene la sensación de que la raíz mólogo con experiencia pediátrica:
del iris se inserta muy adelante, casi sobre la línea de • Si la presión intraocular (Po) es menor de 15 mm Hg,
Schwalbe, no se ve el seno camerular propiamente di-
se descarta el diagnóstico.
cho y es lo que se conoce como pseudoinserción ante-
• Si Po es menor de 15 mm Hg con otros signos de
rior de la raíz del iris o aplasia mesenquimal.
confirmación, se repite la exploración al mes.
Se concluye con el examen minucioso del iris, cris-
talino, vítreo y fondo de ojo con la pupila dilatada con • Si Po es de 15 a 20 mm Hg sin signos de confirma-
midriáticos no ciclopléjicos. Si en la gonioscopia no apa- ción, se repite la exploración al mes.
recen alteraciones, en caso contrario, se le realiza el • Si Po es de 15 a 20 mm Hg con signos de confirma-
examen sin dilatar la pupila. En relación con el examen ción, se indica el tratamiento quirúrgico.
de la papila si el estado de la córnea con edema lo per- • Si Po es superior a 20 mm Hg, se indica
mite y esta es normal solo en fase inicial, se observa tratamiento quirúrgico.
una excavación central, oval o redondeada y profun-
TRATAMIENTO
da, sobre todo en etapas más avanzadas.
Médico (transitorio): El tratamiento con medica-
EVOLUCIÓN
mentos es poco eficaz en estos pacientes con glaucoma,
Si la enfermedad no recibe el tratamiento adecua- aunque se deben indicar durante el período de estudio,
do, de la forma que es necesario, el ojo va aumentando antes de la cirugía.
de tamaño, la córnea se edematiza y se pone opaca, la
pupila se dilata, la cámara anterior aumenta su profundi- Quirúrgico:
dad, el iris se atrofia y "tiembla" o sea, iris trémulo o • Goniotomía.
iridodonesis. La esclerótica se adelgaza y muestra tin- • Trabeculotomía.
tes azules por transparencia del pigmento de la úvea. La • Trabeculotrabeculectomía.
papila en el examen del fondo de ojo se vuelve pálida y • Otras operaciones:
atrófica con una gran excavación francamente − Cirugía filtrante + mitomicina
glaucomatosa. − Implantes aloplásticos
PRONÓSTICO
− Procedimientos ciclodestructivos
El glaucoma en el niño es de pronóstico muy reser-
A veces es necesario más de una operación para
vado y conlleva la disminución o pérdida parcial o total
controlar la tensión ocular y lograr la disminución y des-
de la visión, en aquellos pacientes que no se diagnosti- aparición de los síntomas.
quen y traten a tiempo. Unas veces el tratamiento logra Otro aspecto que hay que tener muy en cuenta en
controlar la enfermedad y otras progresa lentamente estos pacientes, es que una vez logrado el control
hasta conducir a la ceguera, por lo que el pronóstico tensional, se comienza el seguimiento del estado visual.
siempre es reservado. Los niños a edades tempranas están en etapa de labili-
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL dad en su desarrollo visual y se hace necesaria la co-
Signo o síntoma: Diagnóstico diferencial con: rrección óptica adecuada, así como la realización de
Lagrimeo Epífora ejercicios con este fin, si fuera necesario.
Recordar que el glaucoma es una afección que
Megalocórnea Megalocórnea esencial
generalmente no se cura, sino que se detiene en su evolu-
Edema corneal Edema congénito
ción, y el oftalmólogo debe seguirlo en forma periódica.
Degeneraciones corneales,
El tratamiento del glaucoma secundario varía de
queratitis acuerdo con su causa.
Leucomas corneales Degeneraciones El oftalmólogo, en especial el pediátrico, debe te-
corneales, queratitis ner conocimiento de psicología para aplicarlos en el exa-
Megaloglobo Megalocórnea esencial, miopía men y en el trato con el niño, padres y el joven con

1278 Tomo III


glaucoma. También debe utilizar léxico comprensible, Ritch R, Shields MB, Krupin T. The Glaucomas. 2nd ed, St.
aunque no alarmante con los familiares, y brindar la Louis, Missouri, 1996, Mosby.
información de la posible evolución de la enfermedad Vaughan, D.: Oftalmología General. México: El Manual
Moderno, 2000.
para explicar el difícil pronóstico visual. Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Louis: Mosby; 1995.
Glaucoma juvenil
Es un tipo de glaucoma que aparece después de
los 4 años de edad, y por lo tanto resulta tardío, con . Capítulo 101 .
respecto al primario. Puede no presentar megalocórnea
ni buftalmos y el lagrimeo, la fotofobia y el edema corneal
son insidiosos. El aumento de la tensión ocular, la cefa- Enfermedades del vítreo
Rosaralis Santiesteban Freixas, Eugenio Jara Casco,
lea y la afectación del nervio óptico tardan en aparecer.
Ernesto Alemañy Rubio
Por ellos es difícil que el pediatra lo pueda sospechar.
Es poco frecuente este tipo de glaucoma, pero se El vítreo está compuesto por 98 % de agua y solo
debe tener presente por el oftalmólogo en los exámenes el restante 2 % es materia sólida, entre la que se en-
de fondo de ojo donde se observe escavación aumenta- cuentra el ácido hialurónico que sirve de red o unión por
da del disco óptico y hacer el diagnóstico diferencial so- su carácter hidrofílico.
bre todo con la atrofia óptica autosómica dominante o En vida embrionaria el vítreo no es transparente y
enfermedad de Kjer, que se manifiesta por pérdida vi- está surcado por vasos que van de la papila al cristalino.
sual en edades a partir de los 5 a 10 años con palidez o Con el tiempo, el vítreo se licúa más y se produce el
una excavación del disco, más bien temporal, de mayor colapso de las fibras que le sirven de andamiaje. Es sus-
diámetro vertical, que simula la atrofia glaucomatosa. tituido por el vítreo secundario y luego por el terciario,
La toma de la visión, el estudio del campo visual y este último ya transparente.
la toma de la tensión ocular son elementos básicos para La contigüidad anatómica de la retina y el vítreo
el diagnóstico, lo cual hace el especialista, así como el hacen que en gran cantidad de afecciones de este últi-
estudio detallado y periódico de la enfermedad para dar mo participe también la retina, como es el caso de mu-
el diagnóstico definitivo. chas enfermedades degenerativas o hereditarias, algunas
de ellas con manifestaciones sistémicas. Por ello, las que
Bibliografía se describan en este capítulo no se abordarán en el de
Arruda, P.A.: Glaucoma. Principios generales, diagnóstico y enfermedades de retina.
tratamiento. CIBA VISIÓN LATINO AMÉRICA; 1999. El paciente con anormalidades en el vítreo es fre-
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Glaucoma. San
cuente que se queje de ver elementos que aparecen y
Francisco: American Academy of Ophthalmology;2003-2004.
García Ferrer Lainé, Maritza Miqueli Rodríguez y María Josefa desaparecen y se mueven o pasan frente a él, como
Coba Peña. Glaucoma congénito e infantil primario: evolución moscas volantes o flotadores.
en 5 años. Rev Cubana Oftalmol 1998;11(2). El examen de esta estructura la puede hacer el
Gil-Gibernau JJ. Glaucoma en Tratado de Oftalmología Pediátrica. pediatra usando oftalmoscopia directa a distancia, mi-
Barcelona: Ediciones Scriba, 1997.
rando el reflejo naranja con pupila dilatada y buscando
Kanski, J. J.: Clinical Ophthalmology. 4th ed , Butter Worth
Heinemann. Oxford. 1999. en él alteraciones u opacidades, mirando al frente o en
Labrada R.Y, Flores P.D, González H.L. Pesquisa de glaucoma todas las posiciones de mirada. Al practicar la
juvenil en la provincia de Las Tunas. Estudio preliminar. Rev oftalmoscopia directa puede examinarse el vítreo ponien-
Cubana Oftalmol 2002; 15(1). do dioptrías positivas a los lentes del oftalmoscopio para
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
que permita hacer foco en las estructuras que se en-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005,p285-304. USA. cuentran en él, las que están más anteriores a la retina.
Miqueli Rodríguez Maritza, María Josefa Coba Peña, Caridad Existen otros métodos de exploración que usan la
Chang Rodríguez y Yolanda C. Vázquez Villares. Hallazgos oftalmoscopia indirecta o con la lámpara de hendidura
gonioscópicos en el glaucoma infantil. Rev Cubana Oftalmol con lentes propios aéreos o corneales, para observar el
1998;11(2): vítreo y el polo posterior (Fig. 101.1).
Nelson L. Glaucoma Infantil, En: Behrman RE, Kliegman RM,
Arvin AM. Nelson, Tratado de Pediatría. La Habana: Ecimed,
Cuando el vítreo pierde su transparencia, la agude-
1998;t:2238-9. za visual disminuye y si la opacidad es total no se obser-
Ortiz G.E, Miqueli R.M, González GA, Lantigua C.A. Avances en va el reflejo rojo naranja del fondo de ojo y la pérdida
la genética de los glaucomas. Rev Cubana Oftalmol l999; visual es importante. Esas opacidades pueden aclararse
12(2):77 -83. con el tiempo pero en casos de que así no lo sea, existe

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1279


glaucoma. También debe utilizar léxico comprensible, Ritch R, Shields MB, Krupin T. The Glaucomas. 2nd ed, St.
aunque no alarmante con los familiares, y brindar la Louis, Missouri, 1996, Mosby.
información de la posible evolución de la enfermedad Vaughan, D.: Oftalmología General. México: El Manual
Moderno, 2000.
para explicar el difícil pronóstico visual. Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Louis: Mosby; 1995.
Glaucoma juvenil
Es un tipo de glaucoma que aparece después de
los 4 años de edad, y por lo tanto resulta tardío, con . Capítulo 101 .
respecto al primario. Puede no presentar megalocórnea
ni buftalmos y el lagrimeo, la fotofobia y el edema corneal
son insidiosos. El aumento de la tensión ocular, la cefa- Enfermedades del vítreo
Rosaralis Santiesteban Freixas, Eugenio Jara Casco,
lea y la afectación del nervio óptico tardan en aparecer.
Ernesto Alemañy Rubio
Por ellos es difícil que el pediatra lo pueda sospechar.
Es poco frecuente este tipo de glaucoma, pero se El vítreo está compuesto por 98 % de agua y solo
debe tener presente por el oftalmólogo en los exámenes el restante 2 % es materia sólida, entre la que se en-
de fondo de ojo donde se observe escavación aumenta- cuentra el ácido hialurónico que sirve de red o unión por
da del disco óptico y hacer el diagnóstico diferencial so- su carácter hidrofílico.
bre todo con la atrofia óptica autosómica dominante o En vida embrionaria el vítreo no es transparente y
enfermedad de Kjer, que se manifiesta por pérdida vi- está surcado por vasos que van de la papila al cristalino.
sual en edades a partir de los 5 a 10 años con palidez o Con el tiempo, el vítreo se licúa más y se produce el
una excavación del disco, más bien temporal, de mayor colapso de las fibras que le sirven de andamiaje. Es sus-
diámetro vertical, que simula la atrofia glaucomatosa. tituido por el vítreo secundario y luego por el terciario,
La toma de la visión, el estudio del campo visual y este último ya transparente.
la toma de la tensión ocular son elementos básicos para La contigüidad anatómica de la retina y el vítreo
el diagnóstico, lo cual hace el especialista, así como el hacen que en gran cantidad de afecciones de este últi-
estudio detallado y periódico de la enfermedad para dar mo participe también la retina, como es el caso de mu-
el diagnóstico definitivo. chas enfermedades degenerativas o hereditarias, algunas
de ellas con manifestaciones sistémicas. Por ello, las que
Bibliografía se describan en este capítulo no se abordarán en el de
Arruda, P.A.: Glaucoma. Principios generales, diagnóstico y enfermedades de retina.
tratamiento. CIBA VISIÓN LATINO AMÉRICA; 1999. El paciente con anormalidades en el vítreo es fre-
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Glaucoma. San
cuente que se queje de ver elementos que aparecen y
Francisco: American Academy of Ophthalmology;2003-2004.
García Ferrer Lainé, Maritza Miqueli Rodríguez y María Josefa desaparecen y se mueven o pasan frente a él, como
Coba Peña. Glaucoma congénito e infantil primario: evolución moscas volantes o flotadores.
en 5 años. Rev Cubana Oftalmol 1998;11(2). El examen de esta estructura la puede hacer el
Gil-Gibernau JJ. Glaucoma en Tratado de Oftalmología Pediátrica. pediatra usando oftalmoscopia directa a distancia, mi-
Barcelona: Ediciones Scriba, 1997.
rando el reflejo naranja con pupila dilatada y buscando
Kanski, J. J.: Clinical Ophthalmology. 4th ed , Butter Worth
Heinemann. Oxford. 1999. en él alteraciones u opacidades, mirando al frente o en
Labrada R.Y, Flores P.D, González H.L. Pesquisa de glaucoma todas las posiciones de mirada. Al practicar la
juvenil en la provincia de Las Tunas. Estudio preliminar. Rev oftalmoscopia directa puede examinarse el vítreo ponien-
Cubana Oftalmol 2002; 15(1). do dioptrías positivas a los lentes del oftalmoscopio para
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
que permita hacer foco en las estructuras que se en-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005,p285-304. USA. cuentran en él, las que están más anteriores a la retina.
Miqueli Rodríguez Maritza, María Josefa Coba Peña, Caridad Existen otros métodos de exploración que usan la
Chang Rodríguez y Yolanda C. Vázquez Villares. Hallazgos oftalmoscopia indirecta o con la lámpara de hendidura
gonioscópicos en el glaucoma infantil. Rev Cubana Oftalmol con lentes propios aéreos o corneales, para observar el
1998;11(2): vítreo y el polo posterior (Fig. 101.1).
Nelson L. Glaucoma Infantil, En: Behrman RE, Kliegman RM,
Arvin AM. Nelson, Tratado de Pediatría. La Habana: Ecimed,
Cuando el vítreo pierde su transparencia, la agude-
1998;t:2238-9. za visual disminuye y si la opacidad es total no se obser-
Ortiz G.E, Miqueli R.M, González GA, Lantigua C.A. Avances en va el reflejo rojo naranja del fondo de ojo y la pérdida
la genética de los glaucomas. Rev Cubana Oftalmol l999; visual es importante. Esas opacidades pueden aclararse
12(2):77 -83. con el tiempo pero en casos de que así no lo sea, existe

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1279


la posibilidad de hacer una vitrectomía y reemplazar el El vítreo puede estar opacificado e invadido por
vítreo opaco. Debe tratarse siempre la causa que ha restos embrionarios, granulomas, como en el caso de
provocado la opacidad, que por lo regular es una enfer- algunas parasitosis (Fig. 101,3) cuando se desprende la
medad inflamatoria y/o sistémica. retina y protruye a la cavidad vítrea (Fig. 101,4), cuando
pasan secreciones, vasos o sangre al vítreo, entre otras.
En los niños la causa adquirida más frecuente de
opacidades vítreas son los procesos infecciosos y en el
adulto, los degenerativos, entre ellos el desprendimiento
del vítreo, aunque en este último no hay deterioro visual
a excepción de complicaciones con desprendimientos de
retina u otros procesos (Fig. 101.5).

Fig. 101.1. Oftalmoscopia indirecta binocular con equipo de


Scheapens.

Las alteraciones del vítreo, si no son grandes Fig. 101.3. Granuloma con invasión al vítreo.
opacidades, se hacen difíciles de observar con el
oftalmoscopio y por lo contrario, las alteraciones retinales
que lo acompañan son mucho más visibles; en ocasio-
nes cuesta trabajo diferenciar cuál de los dos sitios es el
de la lesión primaria.
Si las opacidades son parciales, se ven como man-
chas oscuras o a veces brillantes sobre el color rojo na-
ranja del fondo de ojo, las cuales se mueven por lo regular
en el vítreo en cualquier dirección, según el movimiento
que haga el ojo (Fig.101.2).

Fig. 101.4. Desprendimiento de retina.

ANOMALÍAS CONGÉNITAS
• Vítreo primario hiperplásico.
• Arteria hialoidea persistente y canal de Cloquet.

La persistencia del vítreo primario hiperplásico


denominado también túnica vasculosa lentis, es una ano-
malía congénita, en la que por lo regular no hay antece-
dentes en los prematuros. En esta entidad se mantienen,
Fig. 101.2. Opacidad vítrea. sin reabsorberse, diversas porciones del sistema hialoideo

1280 Tomo III


y del tejido fibrovascular que ocupan el vítreo y contactan
con la cara posterior del cristalino, las que deben des-
aparecer al séptimo mes de vida intrauterina. El vítreo
primario hiperplásico, se observa en el niño como una
masa de tejido opaco, más densa en su centro, tras el
cristalino. Casi siempre es unilateral y el ojo afectado se
ve más pequeño que el otro. Puede estar acompañado
de hemorragias. La cámara anterior es poco profunda y
a menudo se complica con glaucoma.

Fig. 101.6. Tunel al vítreo.

Fig. 101.5. Opacidad vítrea por retinitis micótica.

Esta afección se debe diferenciar de la fibroplasia


retrolental y del retinoblastoma. A veces se observan
restos de los vasos hialoideos en forma de una mancha
grisácea retrocristaliniana que parte de la papila, pero
este puede ser el aspecto también de un proceso infec- Fig. 101.7. Papila de Bergsmeister.
cioso que invada al vítreo (Fig. 101.6). Al examinar con
el oftalmoscopio se ve, en la cara posterior del cristalino, La arteria hialoidea persistente y la persistencia
como un punto de color negro sobre fondo anaranjado, del canal de Cloquet son otras de las anomalías con-
por la luz reflejada, que se conoce con el nombre de génitas que pueden verse en el vítreo. Normalmente
estos restos embrionarios desaparecen en los últimos
punto de Mittendorf. También se puede observar que a
meses de la gestación. Se puede observar, con el
veces penetra en el vítreo una pequeña formación espi-
oftalmoscopio, restos de esta arteria como un filamen-
ral denominada ''rabo de cerdo''. Se ha descrito una for-
to tubular grisáceo que emerge de la papila y penetra
ma anterior y una posterior: en el vítreo donde termina por un extremo libre o a
La forma anterior se observa en las primeras veces se adhiere a la cara anterior del vítreo. También
semanas de la vida como una leucocoria o pupila puede coincidir o acompañar a una opacidad de la par-
blanca, que puede ir acompañada de estrabismo y te posterior del cristalino.
nistagmo.
La forma posterior muestra velos alrededor de la ENFERMEDADES ADQUIRIDAS
papila y a veces la mácula (Fig. 101.7), velos que son La mayoría de las enfermedades que afectan al
membranas y estructuras filiformes en el cuerpo vítreo vítreo se caracterizan por alteraciones que acompañan
con restos del sistema hialoideo, que tiene la posibilidad a las afecciones de la retina, por lo regular de tipo
de provocar tracción y desprendimiento de retina. Pue- pigmentadas y su síntoma de inicio suele ser disminu-
de complicarse con hemorragia intraocular, ruptura de ción de la visión y sensación de ver moscas volando o
la cápsula posterior, opacificación del cristalino y glau- flotadores, que también se pueden presentar en enfer-
coma. medades del ojo o acompañando afecciones sistémicas.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1281


Los fenómenos inflamatorios hacen que aparez- el glaucoma y el desprendimiento de retina. La pars
can opacidades con células en el vítreo y son un signo planitis y otras opacidades del vítreo pueden verse tam-
importante para plantear ese proceso. bién en enfermedades infecciosas específicas:
sarcoidosis, tuberculosis, toxoplasmosis y toxocariasis.
Enfermedades del vítreo, no congénitas Estas alteraciones han sido descritas en la esclerosis
o adquiridas, más importantes y las asociadas múltiple. Se trata con esteroides si la visión disminuye
a síndromes: más allá de 0,5.
• Hemorragia del vítreo y prerretinianas.
• Opacidades por degeneración del vítreo.
• Opacidades vítreas de causa inflamatoria retiniana
y pars planitis.
• Retinopatías proliferativas.
• Vitreorretinopatía exudativa familiar.
• Retinosquisis juvenil.
• Coroideremia.
• Atrofia girata de la coroides.

Asociadas a síndromes:
• Síndrome de necrosis aguda retinal.
• Síndrome de Sticker.
• Síndrome de Kniest.
• Síndrome de Goldmann-Favré. Fig. 101.8. Hemorragia prerretiniana.
• Síndrome de Wardburg.
• Trisomía 13.
• Enfermedad de Norrie.
La hemorragia del vítreo y las hemorragias
prerretinianas se producen con frecuencia por
traumatismos o por ruptura de vasos anómalos presen-
tes en diversas enfermedades.
Cuando las hemorragias son pequeñas tienen un
color rojo que se observa en el examen con el
oftalmoscopio; si son mayores, aparecen como masa de
color rojo oscuro y raramente, si son muy extensas, lle-
nan la cavidad vítrea; en ese caso no se ve reflejo rojo
naranja alguno. Este tipo de hemorragia tiene un pro-
nóstico reservado.
Si las hemorragias están entre la limitante interna y Fig. 101.9 Hemorragia vítrea.
la hialoides se ven redondeadas en su sector inferior y si
el paciente está sentado o parado, con un nivel horizon-
tal. La sangre depositada más en el sector inferior, cam-
bia de posición al ponerse el paciente de lado, buscando
el área de más caída (Figs. 101.8,101.9 y 101.10 ).
La pars planitis de causa idiopática es una infla-
mación crónica de la úvea, la retina y el vítreo, común
en niños y jóvenes; es bilateral en 80 % de los pacientes.
Hay opacidades en el vítreo parecidas a copos de nieve;
a lo largo de la pars plana se ve como muros blanqueci-
nos y a veces hay inflamación leve en la cámara ante-
rior (Fig. 101,11). Se produce neovascularización en la
línea blanquecina de la parsplana, lo que puede ocasio-
nar hemorragias vítreas. Es frecuente en esos casos el
edema del disco, el edema macular cistoide, la catarata, Fig. 101.10. Hemorragia vítrea y retiniana.

1282 Tomo III


ambos sentidos, por eso conserva hasta etapas tardías
buena visión central. Presenta además nictalopía y
electrorretinograma ausente, a diferencia de las anterio-
res. Por todo ello se puede confundir con la retinitis
pigmentosa. Las mujeres portadoras asintomáticas a
veces muestran acúmulos anormales de pigmento.
La atrofia girata de la coroides es una enferme-
dad autosómica recesiva causada por defecto en la en-
zima ornitina aminotransferasa. Provoca nictalopía y mala
visión. En el fondo de ojo se observan grandes áreas
periféricas como de piedras o losas, con atrofia del epi-
telio pigmentario de la retina. El campo visual está con-
traído y el electrorretinograma está muy disminuido o
plano.
Fig. 101.11. Pars planitis. El desprendimiento de vítreo posterior es una afec-
ción observada en personas mayores por degeneración
En las retinopatías proliferativas se ven pena- del vítreo y tracción de sus inserciones, pero puede ver-
chos de vasos que invaden al vítreo; su ruptura provoca se en otras enfermedades que lo afectan, provocando
hemorragias, que pueden ser masivas. Es frecuente en miodesopsias o figuras deformadas y flotadores.
los diabéticos tipo I, muy descompensados, con
retinopatía grave, aunque se puede ver en otras enfer- Enfermedades relacionadas
medades.
La vitreorretinopatía exudativa familiar, como su
con síndromes
El síndrome de necrosis aguda retinal se ve en
nombre lo indica, es una enfermedad del vítreo y la reti-
na con alteraciones de los vasos, posiblemente por anor- pacientes inmunodeprimidos, casi siempre causado por
malidades primarias en la maduración, que recuerda a la herpes zoster o herpes virus. Se caracteriza por retinitis
retinopatía de la prematuridad. Hay exudación retiniana necrotizante y vitritis. Aparece con ojo rojo y uveítis
por detrás de la ora serrata, más a menudo en el sector granulomatosa anterior. Se observan parches blancos e
temporal, con falta de perfusión retiniana y a menudo inflamación del vítreo en la periferia. Puede afectar al
neovascularización sin reborde bien definido, a diferen- nervio óptico y producir envainamientos vasculares y
cia de la neovascularización de la retinopatía de la bridas que por tracción pueden producir desprendimien-
prematuridad. tos de retina.
La retinosquisis juvenil es una maculopatía El síndrome de Sticker es una enfermedad del te-
cistoide estrellada de las capas más superficiales de la jido conjuntivo con cambios degenerativos progresivos
retina, que al hacer perder el soporte a los vasos puede del cartílago articular, y de herencia autosómica domi-
provocar hemorragias vítreas y tracción, con desprendi- nante. Se acompaña de anormalidades orofaríngeas y
miento de retina. Se caracteriza por degeneración del ortopédicas por displasia epifisarias y a veces hipoacusia
vítreo y separación de las capas de fibras nerviosas de neurosensorial y prolapso mitral. Miopía congénita alta,
la retina que forman velos que protruyen al vítreo, sobre catarata y alteraciones vitreorretinales, y desde el punto
todo en el cuadrante temporal inferior. Las máculas tie- de vista óptico aspecto de vítreo vacío que pueden llevar
nen aspecto petaloideo o en rayos de carreta; bilateral, al desprendimiento retinal regmatógeno en la primera
aunque puede ser asimétrica y progresa lentamente. El década de la vida.
electrorretinograma muestra gran disminución de ampli- Otra afección que cursa con degeneración vitreo
tud de onda b. Suele tener un modo autosómico domi- rretinal es el síndrome de Kniest, de tipo autosómico
nante con penetrancia incompleta y los síntomas ser dominante con displasia ósea, estatura corta, articula-
subclínicos en el antecesor que la trasmite. El defecto ciones anchas y prominentes, tórax amplio con protrusión
está en el cromosoma 11. del esternón, cara ancha y puente nasal deprimido. Lo
La coroideremia es una enfermedad progresiva grave de la degeneración lleva con frecuencia a des-
ligada al cromosoma X, que daña la retina por atrofia de prendimiento de la retina.
la capa coriocapilar y llega a atrofiar toda la coroides. El síndrome de Goldmann Favré, en el que la
Se acompaña de exudados vítreos. Esta entidad degeneración vítrea se une a la degeneración del tapetum
comienza en la parte media periférica y progresa en retinal, con degeneración coriorretinal pigmentaria,

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1283


catarata y quisis retinal. El electrorretinograma se en- permite observar las manifestaciones de enfermedades
cuentra muy afectado. Se transmite con rasgo auto- propias de la retina y coroides, y en ellas las manifesta-
sómico recesivo. ciones de enfermedades sistémicas. Además del estu-
Otras enfermedades que cursan con displasias dio de fondo de ojo con los diferentes tipos de
vitreorretinal son: el síndrome de Wardburg, la trisomía oftalmoscopios son de gran ayuda para el diagnóstico
13 y la enfermedad de Norrie. los estudios de fondo de ojo contrastados, los de imáge-
nes y los de tomografía óptica coherente (OCT), que
Bibliografía brinda verdaderos cortes histológicos de la retina; las
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley´s Pediatric pruebas electrofisiológicas, en especial el electrorre-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. tinograma, entre otros.
2005, p328-346. USA.
De Crecchio G, Simonelli F, Nunziata G, Mazzeo S, Greco GM,
Las principales enfermedades que afectan a la re-
Rinaldi E, et. al. Autosomal recessive familial exudative tina son:
vitreoretinopathy: evidence for genetic heterogeneity. Clin- • Anomalías congénitas.
Genet. 1998;54(4):315-20.
• Inflamaciones coriorretineanas.
Ikeda T, Fujikado T, Tano Y, Tsujikawa K, Koizumi K, Sawa H, et
al. Vitrectomy for rhegmatogenous or tractional retinal • Distrofias retinianas y coroideas.
detachment with familial exudative vitreoretinopathy. • Enfermedades vasculares.
Ophthalmology 1999;106(6):1081-5. • Enfermedades tumorales.
Ndiaye PA, Ndoye PA, Seye C, Wane A, De Medeiros M,
Kameny A, Ba EA, Ndiaye MR, Wade A. Vitreo-retinal • Desprendimiento de la retina.
complications of hemoglobinopathy SC]. Dakar-Med
1998;43(1):21-4. ANOMALÍAS CONGÉNITAS
Zech JC, Morle L, Vincent P, Alloisio N, Bozon M, Gonnet C, et.
Al. Wagner vitreoretinal degeneration with genetic linkage • Colobomas coroideos retinianos.
refinement on chromosome 5q13-q14. Graefes-Arch-Clin- • Aplasia e hipoplasia foveal.
Exp-Ophthalmol 1999;237(5):387-93. • Malformaciones vasculares (malformaciones
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Retina and
Vitreous. San Francisco: American Academy of arteriovenosas).
Ophthalmology;2003-2004. • Albinismo.
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Louis: Mosby; 1995.
Los colobomas coriodeos-retinianos son anoma-
lías congénitas ocasionadas por el cierre anormal de la
hendidura fetal. Se observa en el fondo del ojo una zona
. Capítulo 102 . blanca de esclera hacia el sector inferior, en hora seis,
donde falta la coroides (Fig. 102.1).
Afecciones de la retina
Rosaralis Santiesteban Freixas, Ernesto Alemañy Rubio, Carlos
E. Mendoza Santiesteban

El delicado desarrollo embrionario de la retina a


partir del diencéfalo, hace que esta importante estructu-
ra pueda ser asiento de múltiples enfermedades comu-
nes del sistema nervioso central y partícipe de anomalías
congénitas variadas de ese sistema. La retina y la
coroides, se hallan íntimamente adosadas, lo que hace
que ambas al unísono se vean afectadas frecuentemen-
Fig. 102.1. Coloboma de coroides y retina.
te por las mismas causas. Sus manifestaciones pueden
ser observadas mediante la oftalmoscopia, las que se La aplasia y la hipoplasia foveal son muy ra-
diagnostican con cierta facilidad porque las estructuras ras. Se manifiesta como la ausencia o debilidad del re-
que se le anteponen son transparentes y permiten ver a flejo foveal, falta de red capilar perifoveolar, ausencia
través de ellas. La semitransparencia de la propia retina de pigmento lúteo y disminución de epitelio pigmentario
permite además, que se puedan ver algunas de sus ca- en la fóvea. Los vasos retinianos se acercan mucho a la
pas y hasta la coroides y sus vasos, por lo que el examen fóvea. Se puede asociar con otras entidades retinianas
de fondo de ojo se convierte en una ventana abierta que como aniridia, fibras de mielina, y albinismo, o síndromes

1284 Tomo III


catarata y quisis retinal. El electrorretinograma se en- permite observar las manifestaciones de enfermedades
cuentra muy afectado. Se transmite con rasgo auto- propias de la retina y coroides, y en ellas las manifesta-
sómico recesivo. ciones de enfermedades sistémicas. Además del estu-
Otras enfermedades que cursan con displasias dio de fondo de ojo con los diferentes tipos de
vitreorretinal son: el síndrome de Wardburg, la trisomía oftalmoscopios son de gran ayuda para el diagnóstico
13 y la enfermedad de Norrie. los estudios de fondo de ojo contrastados, los de imáge-
nes y los de tomografía óptica coherente (OCT), que
Bibliografía brinda verdaderos cortes histológicos de la retina; las
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley´s Pediatric pruebas electrofisiológicas, en especial el electrorre-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. tinograma, entre otros.
2005, p328-346. USA.
De Crecchio G, Simonelli F, Nunziata G, Mazzeo S, Greco GM,
Las principales enfermedades que afectan a la re-
Rinaldi E, et. al. Autosomal recessive familial exudative tina son:
vitreoretinopathy: evidence for genetic heterogeneity. Clin- • Anomalías congénitas.
Genet. 1998;54(4):315-20.
• Inflamaciones coriorretineanas.
Ikeda T, Fujikado T, Tano Y, Tsujikawa K, Koizumi K, Sawa H, et
al. Vitrectomy for rhegmatogenous or tractional retinal • Distrofias retinianas y coroideas.
detachment with familial exudative vitreoretinopathy. • Enfermedades vasculares.
Ophthalmology 1999;106(6):1081-5. • Enfermedades tumorales.
Ndiaye PA, Ndoye PA, Seye C, Wane A, De Medeiros M,
Kameny A, Ba EA, Ndiaye MR, Wade A. Vitreo-retinal • Desprendimiento de la retina.
complications of hemoglobinopathy SC]. Dakar-Med
1998;43(1):21-4. ANOMALÍAS CONGÉNITAS
Zech JC, Morle L, Vincent P, Alloisio N, Bozon M, Gonnet C, et.
Al. Wagner vitreoretinal degeneration with genetic linkage • Colobomas coroideos retinianos.
refinement on chromosome 5q13-q14. Graefes-Arch-Clin- • Aplasia e hipoplasia foveal.
Exp-Ophthalmol 1999;237(5):387-93. • Malformaciones vasculares (malformaciones
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Retina and
Vitreous. San Francisco: American Academy of arteriovenosas).
Ophthalmology;2003-2004. • Albinismo.
Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
Louis: Mosby; 1995.
Los colobomas coriodeos-retinianos son anoma-
lías congénitas ocasionadas por el cierre anormal de la
hendidura fetal. Se observa en el fondo del ojo una zona
. Capítulo 102 . blanca de esclera hacia el sector inferior, en hora seis,
donde falta la coroides (Fig. 102.1).
Afecciones de la retina
Rosaralis Santiesteban Freixas, Ernesto Alemañy Rubio, Carlos
E. Mendoza Santiesteban

El delicado desarrollo embrionario de la retina a


partir del diencéfalo, hace que esta importante estructu-
ra pueda ser asiento de múltiples enfermedades comu-
nes del sistema nervioso central y partícipe de anomalías
congénitas variadas de ese sistema. La retina y la
coroides, se hallan íntimamente adosadas, lo que hace
que ambas al unísono se vean afectadas frecuentemen-
Fig. 102.1. Coloboma de coroides y retina.
te por las mismas causas. Sus manifestaciones pueden
ser observadas mediante la oftalmoscopia, las que se La aplasia y la hipoplasia foveal son muy ra-
diagnostican con cierta facilidad porque las estructuras ras. Se manifiesta como la ausencia o debilidad del re-
que se le anteponen son transparentes y permiten ver a flejo foveal, falta de red capilar perifoveolar, ausencia
través de ellas. La semitransparencia de la propia retina de pigmento lúteo y disminución de epitelio pigmentario
permite además, que se puedan ver algunas de sus ca- en la fóvea. Los vasos retinianos se acercan mucho a la
pas y hasta la coroides y sus vasos, por lo que el examen fóvea. Se puede asociar con otras entidades retinianas
de fondo de ojo se convierte en una ventana abierta que como aniridia, fibras de mielina, y albinismo, o síndromes

1284 Tomo III


como el de Prader Willi. Existe una forma idiopática ais-
lada. Se presenta con nistagmo y mala visión desde el
nacimiento, que puede ser variable (Fig. 102.2).

Fig. 102.3. Bucles prepapilares.

Fig. 102.2. Hipoplasia macular.

Las malformaciones vasculares. La causa más


frecuente son los hemangiomas capilares retinales y las
malformaciones arteriovenosas, que pueden tener va-
rios grados de intensidad. En la de tipo I, o más leve, se
ve un solo vaso aumentado de calibre, por lo regular una
vena, que cruza el rafe horizontal. Solo algunas se acom-
pañan de comunicación arteriovenosa y a veces de quis-
Fig. 102.4. Fondo de ojo en niño con albinismo ocular.
tes en la fóvea. La variante II es una dilatación de tipo
moderada y se le llama angioma racemoso; suele tener
visión normal. En la de tipo III, la visión está reducida y Se conocen 2 formas clínicas principales del
puede acompañarse de comunicaciones arteriovenosas albinismo: la ocular con la forma ligada al cromosoma X,
en cara, cuero cabelludo, maxilar inferior y sistema ner- o autosómica recesiva, más rara, y la oculocutánea,
vioso central. Se le llama síndrome de Wyburn Manson, autosómica recesiva o dominante.
a las comunicaciones arteriovenosas retinianas acom- El albinismo, por lo regular, concomita con aplasia
pañadas de anomalías similares en otras partes del cuerpo. o hipoplasia macular, nistagmos, defectos refractivos al-
Las asas o bucles vasculares prepapilares son ano- tos y fotofobia. Se han descrito trastornos en las vías
malías congénitas del sistema vascular retinal, arterial y visuales con disminución de las fibras ópticas directas o
venoso, que se consideraban residuos del sistema que no se cruzan en el quiasma. Ambas formas pueden
hialoideo. Hoy se sugiere que se producen como entidad existir unidas a otras alteraciones, algunas de ellas gra-
independiente. En el 95 % son arteriales; se extienden al ves, como la enfermedad de Chediak-Higashi.
vítreo unos pocos milímetros y regresan a la papila. A
veces se asocian con la presencia de arterias Inflamaciones coriorretineanas
ciliorretinales y menos del 20 % son bilaterales. Por el Los procesos inflamatorios de la coroides y la reti-
remanso sanguíneo el vaso puede obstruirse, dejando na (retinocoroiditis) pueden ser clasificados, de manera
isquémica el área que le corresponde irrigar a ese vaso. muy general en de causa infecciosa o no infecciosa y
Las asas venosas son por lo general múltiples y adquiri- en congénitos o adquiridos.
das y se ven en el meningioma de las vainas del nervio,
el glioma del nervio óptico y en el glaucoma (Fig. 102.3). Causas infecciosas
El albinismo es la ausencia de pigmento retiniano y • Bacterias (sífilis, tuberculosis y otros).
uveal. En el examen del fondo de ojo se ven los vasos • Virus (rubéola, varicela, parotiditis, citomegalovirus,
coroideos y retinianos sobre el fondo blanco de la esclera. La herpes simple o zoster).
falta de pigmento en el iris le da una coloración rojiza carac- • Parásitos (toxoplasmosis, toxocariasis).
terística (Fig. 102.4). Debe diferenciarse del fondo de ojo de • Hongos (histoplasmosis presunta, candidiasis).
un niño muy rubio, en quien también se transparentan los
vasos de coroides, pero a diferencia del albino, tienen buena Causas no infecciosas
pigmentación y están presentes los reflejos del área foveal. • Sarcoidosis.
El niño albino presenta nistagmo y deficiencia visual. • Síndrome de Vogt-Koyanagui-Harada.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1285


Las retinocoroiditis o coriorretinitis, pueden dete- la fina pigmentación oscura y zonas blancas de atrofia
riorar de forma importante la visión. En estadios de ac- coriorretiniana, sobre todo en la periferia. La queratitis
tividad, se observan: exudados, vítreo turbio y focos intersticial forma parte de la tríada diagnóstica de
inflamatorios en la retina o coroides de color blanco Hutchinson. La profilaxis se hace con el pesquisaje de
amarillento de bordes difusos, con retina edematosa al- enfermedades transmisibles que se realiza a la embara-
rededor de estos. Hay disminución de la visión, como zada y el control y tratamiento de los afectados.
único síntoma, lo que hace que, en los casos en los cua- La rubéola puede afectar todas las estructuras
les el proceso es unilateral, la enfermedad pueda pasar del ojo de forma bilateral. Las más frecuentes son:
inadvertida, sobre todo en niños. En los estadios − Catarata nuclear.
cicatrizales el foco exudativo da paso a una placa blan- − Microftalmía.
ca de atrofia coriorretiniana bien delimitada con depósi- − Iridociclitis granulomatosa crónica.
tos de pigmento (Figs.102.5 y 102.6). − Glaucoma.
− Retinopatía de aspecto en sal y pimienta.

Las manifestaciones generales que acompañan a


la enfermedad son sordera, retraso mental y del creci-
miento, malformaciones cardíacas, entre otras. La pro-
filaxis de la rubéola está dirigida a la vacunación e
interrupción del embarazo, si se presenta la enfermedad
en el primer trimestre.
La enfermedad de inclusión citomegálica es la
más común de las infecciones congénitas del humano,
Fig. 102.5. Placa de coriorretinitis activa. pero la mayoría son subclínicas. Las lesiones que provo-
can en la retina son variables e inespecíficas. Por lo re-
gular, se presenta una coriorretinitis similar a la de la
toxoplas-mosis, por lo que debe hacerse el diagnóstico
diferencial entre ambas. Las lesiones son centrales o
periféricas, usualmente múltiples y casi siempre bilate-
rales. A veces se ven zonas blanquecinas y las hemorra-
gias son prominentes. Pueden cursar con estrabismo,
nistagmo, catarata, microftalmía, uveítis y neuritis óptica.
La afectación ocular en casos con enfermedad del
SIDA es muy frecuente y es de ayuda en el diagnóstico.
Los niños también la padecen y cada día aumenta el
Fig. 102.6. Placa de coriorretinitis cicatrizada.
número de recién nacidos infectados por el VIH.
Las infecciones congénitas de la retina más fre- El herpes simple tiene 2 tipos: El tipo 1 se encuen-
cuentes son producidas por: toxoplasmosis, rubéola, tra con más frecuencia en mucosa oral y ocular. Predo-
enfermedad de inclusión citomegálica, herpes simple y mina en adolescentes. La infección primaria ocurre, por
sífilis que padece la madre. El niño puede haber sido lo regular, entre 1 y 6 años y puede manifestarse en el
infectado intraútero, en el canal del parto o después. aparato ocular como queratoconjuntivitis con respuesta
La infección tuberculosa, al igual que la sifilítica folicular. La secundaria es más grave, con queratitis a
y la rubéolica, se presenta muy poco debido a la protec- repetición y opacidades corneales en la adolescencia. El
ción que ha adquirido la población cubana por los pro- herpes simple de tipo 2 se encuentra más en el tracto
gramas de vacunación y prevención. La tuberculosis genital; infecta con frecuencia en el neonato y provoca
miliar coroidea se caracteriza por múltiples y pequeños conjuntivitis, queratitis, úlceras y coriorretinitis.
nódulos amarillentos que pueden presentarse durante el El herpes zoster, responsable de la varicela en la
curso de una meningitis tuberculosa; otras formas son primera exposición y del herpes zoster en la reactivación,
menos frecuentes. es raro en niños. Puede nacer de madre infectada du-
La retinopatía sifilítica es bilateral y se presenta rante el embarazo, con graves manifestaciones de vari-
en el cuadro clínico general de sífilis congénita, que pue- cela diseminada y coriorretinitis o adquirir el herpes
de llevar al parto prematuro y a la muerte. Se expresa zoster. El sitio más afectado es el nervio trigémino, dan-
en la retina con un fondo de ojo en "sal y pimienta", por do manifestaciones oculares al afectar la primera rama

1286 Tomo III


y sobre todo el nervio nasociliar, con daño de párpados, El parásito se aloja en la retina y su muerte produ-
córnea y úvea. En niños el herpes zoster es más benig- ce una reacción inflamatoria con la formación de un
no. Es difícil de diferenciar a veces del herpes simple. granuloma blanco y exudados en el vítreo, la pupila se
La toxoplasmosis tiene alta prevalencia en Amé- ve blanca; puede ocasionar una endoftalmitis. El diag-
rica y el porcentaje de pacientes con anticuerpos a la nóstico se realiza con la prueba de ELISA y el trata-
enfermedad crece según aumenta la edad, por lo que miento es sobre la base de corticosteroides, para tratar
ser inmunológicamente positivo no asegura una infec- de mejorar el cuadro clínico inflamatorio. En algunos
ción activa, a no ser que existan estudios anteriores nor- casos está indicada la vitrectomía.
males, pero si es negativo, la descarta. Las retinocoroiditis micóticas son muy raras. Pue-
La toxoplasmosis puede ser sistémica u ocular y a den tener origen exógeno o endógeno. La coriorretinitis
su vez congénita o adquirida. La forma sistémica con- endógena debe buscarse en niños con enfermedad
génita puede estar activa o no al nacimiento. La activa micótica o a los que se le ha administrado altas dosis de
se asocia con coriorretinitis, encefalitis y enfermedades antibióticos. El hongo patógeno más frecuente aislado
viscerales y tiene una variante recurrente, la cual es es la Candida albicans. Se observa una coriorretinitis
indiferenciable de la forma adquirida. La toxoplasmosis focal con exudado de color blanco velloso que recuerda
adquirida puede ser ocular, meningoencefalítica, una colonia de hongos en un medio de cultivo (Fig. 102.8).
exantematosa y linfadenopática. La ocular puede oca- Al no diagnosticarse y tratarse oportunamente puede
sionar retininocoroiditis, papilitis o ser asintomática. desarrollar una endoftalmitis que conduce a la pérdida
La imagen típica de la coriorretinitis congénita por del ojo. El diagnóstico de la infección micótica debe rea-
toxoplasma es la de una gran placa atrófica en el área lizarse por hemocultivo y vitrectomía.
macular. Ocasionalmente pueden verse otras más pe-
queñas alrededor como una lesión satélite (Fig.102.7).
Estas lesiones u otras más periféricas en la retina pue-
den aparecer incluso después del nacimiento. La
reactivación de la toxoplasmosis congénita se presenta
adyacente a los bordes de la cicatriz con nuevas lesio-
nes blanquecinas elevadas y vitritis.

Fig. 102.8. Retinitis micótica.


La sarcoidosis también es poco frecuente en ni-
ños. Puede provocar uveítis anterior granulomatosa o
no tanto de forma aguda como crónica y dar vitritis,
periflebitis, coriorretinitis y nódulos coroideos.
La enfermedad de Vogt Koyanagi es un síndro-
me uveomeníngeo que afecta al ojo, la piel, las meninges
Fig. 102.7. Coriorretinitis por toxoplasmosis con lesión satélite.
y el oído. Su causa es discutida, y de naturaleza granulo-
La toxoplasmosis adquirida surge a cualquier edad matosa, bilateral. Se ha descrito en niños, aunque es más
y no es de preferencia macular como la congénita. En frecuente a partir de la segunda década de la vida. Se
su tratamiento se utilizan la pirimetamina y sulfonamidas caracteriza por cefaleas, disacusia, tinitus y meningitis
preferentemente, más ácido folínico y se adiciona aséptica; uveitis anterior o posterior con desprendimiento
esteroides para disminuir la reacción inflamatoria. de retina exudativo inferior e hiperemia del disco óptico.
La toxocariasis es una enfermedad parasitaria cau- El epitelio pigmentario retiniano se vuelve despigmentado
sada por el Toxocara cati, parásito intestinal de los ga- al reabsorberse el desprendimiento seroso.
tos, o Toxocara cani, parásito intestinal de los perros,
sobre todo cachorros. Los niños adquieren la enferme- Distrofias retinianas y coroideas
dad por íntimo contacto con los animales y la ingestión Son casi siempre hereditarias y afectan de forma
de los huevos. Las larvas penetran la mucosa intestinal permanente e importante a la visión. Un grupo de ellas
hasta llegar al ojo por vía sistémica. La toxocariasis ocular es propio de los fotorreceptores, como son las agrupa-
raramente se asocia a la enfermedad sistémica. das bajo el nombre de retinitis pigmentaria, que suelen

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1287


cursar con mala visión nocturna, reducción del campo autosómico dominante, bilateral y de progresión lenta. El
visual periférico y electrorretinograma muy disminuido aspecto del fondo de ojo pasa por diferentes fases que
o extinguido. afectan al área macular con el aspecto de yema de huevo
Por lo regular, se manifiestan por cúmulos de pig- al inicio, que después se fragmenta y se mezcla con otros
mentación anormal de retina, casi siempre oscura. Pue- detritos y sangre. La afectación aparece de inicio en el
den verse como enfermedades oculares o acompañando epitelio pigmentario retiniano, como lo demuestra la alte-
a enfermedades sistémicas, en las que se afectan sobre ración precoz en la electrooculografía (Fig. 102.10).
todo a los bastones.
Otro grupo de enfermedades de las capas externas
de retina dañan primariamente al epitelio pigmentario, la
membrana de Brush y la coriocapilar. Su característica
más general es el cúmulo de sustancia amarillenta, dentro
y por debajo del epitelio pigmentario de la retina, aunque
muchas de ellas se manifiestan también con pigmentacio-
nes más oscuras. No se acompañan de enfermedades de
otros órganos y sistemas. Las más frecuentes son: las
drusas retinianas, las distrofias en patrón y la enfermedad
de Best, que tienen mejor pronóstico, ya que mantienen
la visión central, al menos, durante las cinco primeras dé- Fig. 102.10. Enfermedad de Best.
cadas de la vida. Se complican por la aparición de
neovascularización subretinal. Le sigue la enfermedad de La enfermedad de Stargard es la de más tempra-
Stargard y fondo flavima-culatus. na aparición y peor visión. Aparece a menudo como un
Estas entidades y distrofias de las capas externas trastorno autosómico recesivo que se vuelve sintomática
de retina tienen apariencia de fondo características. a partir de los 7 u 8 años de edad. Es bilateral y progre-
Las drusas retinianas son pequeños cúmulos ama- siva acompañada de degeneración macular casi siem-
rillentos de lipofuscina en el epitelio pigmentario retiniano, pre. Comienza con deficiencia visual importante que
que pueden aparecer en toda la retina, pero fundamen- progresa hasta 20/200 o 0,1 en pocos años y conservan
talmente en el polo posterior (Fig. 102.9). Se observan visión periférica. En un inicio el fondo del ojo tiene po-
comúnmente como un signo de envejecimiento ocular cas alteraciones o se ve con aspecto de espolvoreado
en las edades avanzadas pero también las drusas pue- fino como plata batida sobre la mácula. Luego se acen-
den tener un carácter familiar y presumiblemente here- túa la pigmentación y pueden aparecer con pecas blan-
ditario; en estos casos afectan a individuos más jóvenes cas amarillentas en polo posterior (Fig. 102.11). La
y no se considera propiamente una distrofia, pero se maculopatía y las pecas fueron definidas como dos en-
menciona en este acápite debido a la apariencia del fon- fermedades distintas. Hoy se sabe que son fases o va-
do característica que produce. riantes de una misma enfermedad, en la que puede
Las distrofias en patrón son de varios tipos, for- predominar una u otra manifestación. Se presenta por
mas y herencias. En ellas predominan las pigmentacio- lo regular en la primera década de la vida y al inicio
nes oscuras de la retina. puede confundirse con las alteraciones maculares de la
La degeneración viteliforme o enfermedad de lipofuscinosis ceroide juvenil tipo Spielmeyer-Vogt. La
Best, puede aparecer desde la niñez con transmisión angiografía fluoresceínica muestra silencio coroideo.

Fig. 102.9. Drusas retinianas. Fig. 102.11. Enfermedad de Stargard.

1288 Tomo III


Enfermedades de los fotorreceptores los casos es autosómica recesiva. Es característico de es-
La retina del ser humano es una retina doble, con tos casos el llamado signo oculodigital, que consiste en que
dos sistemas de fotorreceptores, conos y bastones, con el paciente empuja su globo ocular con el dedo, posible-
funciones diferentes y bien definidas. Las enfermeda- mente para estimular la retina y provocar con ello fosfenos
des distróficas que los afectan, pueden alterar a uno de luminosos. Esto puede llevarlo a cierto grado de enoftalmía.
estos sistemas por separado, como es el caso del Tiene un gran espectro de presentación; el fondo del ojo
monocromatismo de bastones, o a ambos, aunque a uno puede ser normal hasta el año y las lesiones pigmentarias
de ellos en forma preferencial. Por esto se habla de dis- evidentes de retinosis pigmentaria aparecen a los 2 ó 3 años.
trofia de bastón-cono y de cono-bastón. La más fre- También puede acompañarse de pecas blancas o pigmen-
cuente son las de bastón-cono. taciones finas, en forma de sal y pimienta y lesiones
Están incluidas en este grupo de enfermedades: colobomatosas de retina. El electrorretinograma está extin-
• Retinosis pigmentaria. guido desde el inicio. Suele ir acompañado de otras mani-
• Amaurosis congénita de Leber. festaciones oculares como nistagmos, o las que aparecen
• Ceguera nocturna estacionaria congénita. más tardíamente como el queratocono. Puede asociarse o
• Distrofia de los conos. no con manifestaciones sistémicas, sobre todo neurológicas.
• Discromatopsia. Más raramente se asocia a sordera, cardiomiopatía, enfer-
• Ceguera a colores hereditaria. medad renal poliquística y osteopetrosis.
• Deficiencia de vitamina A y otras enfermedades
sistémicas.

La retinosis pigmentaria o retinitis pigmentosa es


un término general usado para enfermedades heredo
degenerativas de los fotorreceptores, predominante de los
bastones con variado tipo de herencia autosómica recesiva,
dominante y esporádica. Su síntoma característico y, por
lo regular, primero en aparecer, es la ceguera nocturna. El
miedo a la oscuridad y el comportamiento anormal al apa-
gar la luz y recomendar al niño una tarea en esas condi-
ciones, es útil para sospechar el diagnóstico.
A medida que progresa la retinosis pigmentaria se va
reduciendo el campo visual, lo que hace que el sujeto tro-
piece con los objetos en la oscuridad y más tarde, a toda
hora. El campo visual se va reduciendo concéntri-camente; Fig. 102.12. Retinosis pigmentaria.
comienza por un escotoma anular, que sigue invadiendo el
campo periférico y al final el centro, hasta la ceguera total. La ceguera nocturna estacionaria congénita es
El fondo del ojo muestra cúmulos de pigmentos en una enfermedad poco progresiva con herencia variada,
forma de osteoclastos, o de otras formas, los vasos finos en la que el síntoma fundamental es la mala visión en la
y la papila atrófica, amarillenta (Fig. 102.12). Con fre- oscuridad, tiene varios tipos en los que para definirlos es
cuencia se presentan edema macular cistoide, células en importante el tipo de herencia y el electrorretinograma.
el vítreo y catarata subcapsular posterior. En raros casos El fondo de ojo suele ser normal.
no se observa pigmento o se ven en forma de puntos blan- La distrofia de los conos es un grupo de enfer-
cos, lo que se conoce como retinitis punctata-albecens. medades con pérdida de visión central y pobre discrimi-
El uso de vasodilatadores, vitaminas, ozono y un nación de colores. Se acompaña de fotofobia y en el
tipo de cirugía revitalizadora, logran en algunos casos electrorretinograma, pérdida selectiva de la respuesta
mejorar los síntomas del paciente durante un tiempo. No de conos. Puede ser autosómica recesiva o autosómica
hay cura definitiva. Su profilaxis está encaminada al dominante y ligada al cromosoma X. Particularmente,
consejo genético. En Cuba existe un centro en cada pro- en la forma autosómica dominante hay imagen de ''ojo
vincia para detectar, estudiar y tratar estos casos. de buey'' con pigmento fino en mácula (Fig. 102.13). En
Algunas otras formas de estas distrofias bastón- el resto del examen del fondo de ojo no presenta altera-
cono son: la amaurosis congénita de Leber o retinosis ciones muy evidentes, pero se pueden observar
pigmentaria tipo congénito y la ceguera nocturna esta- telangiectasias del nervio óptico y palidez temporal.
cionaria congénita. En etapas avanzadas aparecen signos de afecta-
La amaurosis congénita de Leber, se detecta por ción de los bastones, acompañado de una contracción
lo regular durante el primer año de vida. En la mayoría de periférica del campo visual y pigmentos en periferia del

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1289


fondo de ojo, lo que es conocido como distrofia cono- según la intensidad de la deficiencia y el tipo de defecto
bastón. El electrorretinograma muestra pérdida del de visión a color en: deuteranopía si el defecto es fuerte,
fondo de ojo selectiva de la función de conos que la al verde y deuteranomalía, si es débil; protanopía y
diferencian del síndrome de Stargard. protanomalía, si el defecto, fuerte o débil, es al rojo y
tritanopía o tritanomalía, si es fuerte o débil, al azul.
La acromatopsia total es rara. Es un monocro-
matismo de bastones que se presenta con nistagmos y
fotofobia en el niño desde muy pequeño.
La acromatopsia incompleta o monocromatismo
de conos azules tiene este solo tipo de fotopigmento. En
estos casos, la agudeza visual está entre 20/60 y 20/200
y puede haber leve pigmentación de la mácula y palidez
temporal.
Las discromatopsias adquiridas están relaciona-
Fig. 102.13. Maculopatía en ojo de buey. das con la afectación de la función de los conos con sus
neuronas de orden superior, o con afectación del nervio
La discromatopsias o trastornos de visión de co- óptico, en ese caso predomina el defecto en el rojo y
lores se deben a anomalías o enfermedad que afectan verde.
principalmente a los conos. La visión cromática es uno Las formas de maculopatías pigmentarias descri-
de los más complejos y menos conocidos de los fenóme- tas en la degeneración cono-bastón, llamadas en ''ojo de
nos de la función visual. En su percepción intervienen, buey'', pueden verse, además de las ya mencionadas, en
además de los pigmentos visuales de los conos, el esta- la ataxia espinocerebelosa o atrofia olivopontocerebelar,
do funcional de la retina, vías, corteza y áreas de asocia- que se caracteriza por pérdidas de neuronas de la corte-
ción tanto como la psiquis del sujeto. Su disfunción puede za cerebral, del puente y del núcleo olivar inferior. Parte
presentarse independiente de que persista buena agude- de los casos desarrollan oftalmoparesias supranucleares
za visual, como sucede por lo regular en los defectos y degeneración retinal que provocan disminución de la
hereditarios del eje rojo-verde, o en algunos trastornos visión central y discromatopsias. Otras de las enferme-
secundarios que afecten fundamentalmente a la retina y dades que pueden dar maculopatías pigmentaria es la
en especial al nervio óptico, por lo que el examen de la enfermedad de Hallervorden-Spatz, con apraxia y pará-
función cromática se convierte en una prueba de gran lisis de la mirada vertical, las mucolipidosis y las
utilidad, que permite detectar alteraciones incipientes de maculopatías tóxicas
las estructuras mencionadas. Dalton en 1798 fue el pri- Muchas son las enfermedades sistémicas con al-
mero en describir una acromatopsia congénita. teraciones pigmentarias de retina, en las que la diferen-
La ceguera a colores hereditaria suele ser cau- cia la establece su propio cuadro clínico general y las
sada por defectos que por lo general llevan implícito la alteraciones oculares específicas. La mayoría de ellas
desaparición, por lo menos, de uno de los pigmentos de son enfermedades neurodegenerativas.
los tres tipos de conos (dicrómatas) o un cambio en sus En las esfingolipidosis lisosomales la alteración
espectros de absorción (tricrómatas anómalos). retiniana que predomina es la mancha rojo cereza. En-
De los hombres, 8 % y de las mujeres 0,4 % de la tre ellas se destacan la gangliosidosis de tipo GM2 y el
raza caucasiana padecen de una anomalía o defecto Niemann-Pick. El Tay- Sachs es más frecuente en fa-
genético en la visión de color rojo-verde que se transmi- milias judías y en ella destaca la mancha rojo cereza,
te como carácter recesivo ligado al sexo y que puede rodeada de un halo fino blanquecino por fuera de la fóvea,
variar, pero poco, en hombres de otras razas. En las donde comienzan a aparecer las células ganglionares
mujeres, el gen defectuoso es contrarrestado por el gen que son las verdaderamente afectadas, y por contraste
normal, por lo que, en las que tienen este tipo de defecto, se ve la fóvea más roja. La otra gangliosidosis GM2, es
ambos cromosomas son portadores del gen mutante. Las la de Sandhoff, en que también se observa la mancha
disfunciones en el eje amarillo-azul son de carácter oscura o rojiza en la fóvea. Ambas se acompañan de
autosómico recesivo, pero muy raras; aún más infre- cierto grado de atrofia óptica y nistagmo. Las GM1 tie-
cuente es la ceguera total a colores o acromatopsia to- nen similitud con la enfermedad de Hurler y la de Tay-
tal, que solo se presenta en 1/10 000 personas. Sachs, con facies típica y es frecuente en ella la mancha
Se llama monocrómatas a los que solo tienen uno rojo cereza de la fóvea. En la enfermedad de Niemann-
o ninguno de los pigmentos en los conos. Se clasifican Pick el área blanquecina que rodea la fóvea es mucho

1290 Tomo III


más grande. En la enfermedad de Fabré se puede ver En la zona suroriental de Cuba se encuentra la
también este aspecto del fondo de ojo. En la oclusión de mayor familia estudiada en el mundo, con 380 miem-
la arteria central de la retina destaca la fóvea de color bros. Salcedo y colaboradores identificaron en ella, 46
normal contra la retina pálida y edematisada, por lo que varones afectados entre fallecidos y vivos. Aparecieron
en contraste se ve rojiza. 21 portadores obligados y 44 probables, y se confirma-
Una de las enfermedades lisosomales que se pre- ron 13 portadores del gen por estudios moleculares, lo
sentan con retinopatía pigmentaria son las mucopolisa- que demuestra el carácter recesivo ligado al cromosoma
caridosis. Entre ellas está la de Hurler, de inicio muy X de este desorden en el que predomina la ceguera al
temprano con facies tosca, articulaciones rígidas, cifosis nacimiento, presente en 44,4 % de esos pacientes. En
y enfermedad cardiovalvular. También las de Hunter, este estudio se evidenció el retraso mental y la sordera
Sanfilippo, la enfermedad de Gaucher, la de Refsum, la sensorioneural, junto a manifestaciones extrapiramidales
cistinuria y la abetalipoproteinemia. y otros signos dismórficos no descritos antes.
Hay alteraciones retinianas en las lipofuscinosis En el laboratorio de Genética Molecular de la Uni-
ceroide, enfermedad de almacenamiento lisosomal con versidad de Hamburgo, en Alemania se determinó el
gran deterioro neurológico y alteraciones pigmentarias. defecto genético primario de estos pacientes cubanos
Tiene varias formas. La infantil o Santavouri-Haltia. Se como una nueva mutación, dada por una transversión
acompaña de retraso mental y motor, corioatetosis y T 454 G en el axón II del gen de Norrie que produce un
convulsiones con alteraciones pigmentarias y electrorre- cambio de leucina a arginina en la proteína de Norrie.
tinograma muy disminuido; la ceguera está presente en- Como es evidente por estas descripciones, el pe-
tre los 2 y 3 años de edad. La forma Jansky-Bielschowsky diatra debe remitir al oftalmólogo cuando sospeche al-
aparece entre 2 y 4 años; comienza por convulsiones, gunas de estas enfermedades para focalizar la búsqueda
ataxia, retraso mental y motor, rigidez de descerebración de los elementos del aparato visual que ayudarían al diag-
y pérdida del lenguaje. La deficiencia visual aparece entre nóstico.
los 3 y 7 años, a los que siguen las convulsiones y el
Afecciones vasculares de la retina
deterioro neurológico. La forma juvenil o Spielmeyer-
Las enfermedades vasculares de retina son raras
Vogt en la que se afecta la mácula y a la que acompaña
en los niños y, de existir, se asocian en la mayoría de los
deterioro cognitivo, espasticidad y convulsiones.
casos a enfermedades sistémicas. Los exudados, las
Otras enfermedades neurodegenerativas que se
hemorragias, el remodelamiento, la neoformación y la
acompañan de alteraciones pigmentarias de retina son
oclusión de los vasos son expresión de enfermedades
las perixosomales, como la adrenoleucodistrofia
vasculares de la retina. Las hemorragias toman la for-
neonatal, la enfermedad de Refsum y el síndrome de
ma de las capas o sitios donde se produce la
Zellweger.
extravasación sanguínea.
En las distrofias miotónicas sumado a la ptosis, La oclusión de la vena central de la retina o de
catarata y blefarospasmo se encuentran escasos tras- una de sus ramas es extremadamente rara en edades
tornos pigmentarios retinianos, pero con electrorre- pediátricas, pero pueden ocurrir en asociación a
tinograma disminuido de amplitud. síndromes de hiperviscosidad, hemoglobinopatías de cé-
En la cistinosis, además de depositarse los cuer- lulas falciformes y asas venosas congénitas vasculares;
pos cristalinos en córnea, lo hacen también en retina, se expresan con deficiencia visual y un cuadro
cara anterior de cristalino e iris. La afectación en este fondoscópico característico, en el que predominan las
caso es periférica y macular. hemorragias, vasos ingurgitados, edema de la retina y
En enfermedades dermatológicas, entre ellas las del disco óptico. En el caso de afectarse solo una rama
ictiosis, también se pueden observar alteraciones lo más frecuente es que se ocluya la temporal superior
pigmentarias de la retina. (Figs. 102.14 y 102.14 A). Hay 2 tipos; isquémicas y no
La enfermedad de Norrie, también llamada isquémicas, en dependencia de la cantidad de capilares
Warburg-Anderson, es una enfermedad congénita liga- que no perfundan y la gravedad del cuadro. La
da al cromosoma X. Suele acompañarse de retraso men- neovascularización es una de las más graves complica-
tal y sordera que empieza de niño, con microftalmía y ciones y debe ser tratada con fotocoagulación.
ceguera casi al nacer. Hay formación de seudotumores La oclusión de la arteria central de la retina o
por tejido retinal displásico, que debe diferenciarse de la de sus ramas es un cuadro más desastroso para la fun-
retinopatía del niño prematuro, con gran desorganiza- ción visual, pues se trata de una disrupción permanente
ción del contenido intraocular. de la circulación que lleva a la muerte celular en poco

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1291


tiempo; se caracteriza por retina pálida, con edema y
área foveal de buen color, por lo que se describe como
una mancha rojo cereza en la fóvea y vasos con la co-
lumna sanguínea fragmentada, lo que da paso en pocos
días a atrofia del disco y vasos afinados (Figs. 102.15 y
102.15A). Puede ser causada por trombosis local,
émbolos, vasculitis, vasoespasmos, o hipoperfusión. El
tratamiento hasta ahora es poco efectivo, aún dentro de
las primeras horas de la oclusión.

Fig. 102.15. Oclusión de arteria central de la retina.

Fig. 102.14. Oclusión de la vena central.

Fig. 102.15A. Oclusión de rama arterial.

La retinopatía diabética no suele ser manifiesta


hasta llegada la pubertad, etapa en la que puede apare-
cer o acelerarse. En el fondo de ojo las lesiones pasan
de una fase no proliferativa con pequeñas hemorragias,
microaneurismas y microexudados, a una fase más avan-
zada con mayores hemorragias, vasos de neoformación
y otras complicaciones, como el edema y la isquemia
macular que se producen en etapas no proliferativas y
Fig. 102.14A. Oclusión de rama venosa.
proliferativas (Figs. 102.16 y 102.16A). Se deben de vi-
gilar estrechamente estos pacientes con chequeos, al me-
Estas oclusiones de vasos, pueden verse en desór- nos una vez al año, para tratar las lesiones antes de que
denes trombóticos, coagulación anormal y se asocian en pasen a la fase de proliferación. El tratamiento es el de
particular a enfermedades autoinmunes. Puede alcan- la enfermedad de base y la fotocoagulación (Fig. 102.17).
zar a los vasos de coroides y del nervio óptico, lo cual La retinopatía hipertensiva también es rara en
complica el pronóstico visual aún más. niños, pero puede verse en el curso de enfermedades
Las enfermedades vasculares de la retina más co- que produzcan hipertensión secundaria, en enfermos re-
nocidas son: nales y en adolescentes grávidas con preeclampsia. En
• Retinopatía diabética. episodios de hipertensión aguda, el hallazgo principal es
• Retinopatía hipertensiva. la constricción general y focal de arteriolas, exudados
• Retinopatía de células falciformes. algodonosos, infartos coroideos, desprendimiento sero-
• La enfermedad de Coats. so y edema del disco óptico, sin dar tiempo a que se
• Enfermedad de Eales. produzcan las alteraciones de la hipertensión crónica con
• Retinopatía de la prematuridad. el estrechamiento vascular, alteraciones en los cruces
arteriovenosos, hemorragias e infarto de las capas de
Entre las enfermedades que más daño producen fibras con exudados algodonosos y exudación lipídica
en los vasos y que tienen gran repercusión en el fondo dentro de la retina, el que se puede acumular en las
del ojo están la retinopatía diabética y la hipertensiva, las cua- capas de Henle dando una imagen estrellada similar a la
les son raras en niños, pero pueden verse en adolescentes. de la neurorretinitis. El edema del disco se debe a

1292 Tomo III


isquemia local de la papila y a disrupción del transporte forma en los hematíes falciformes con hemoglobina S,
axonal, o a la presión intracraneal elevada que acompa- pudiéndose producir un glaucoma obstructivo y ceguera,
ña a la encefalopatía hipertensiva. Si hay oclusión de de ahí que esta eventualidad hay que manejarla como una
vasos coroideos se observan áreas opacas en el epitelio urgencia oftalmológica. En esos casos se hace necesario
pigmentario conocidas como manchas de Elsching y evacuar la sangre lo más rápidamente posible para pre-
puede asociarse a desprendimiento retinal exudativo. servar la visión. En la conjuntiva se observa tortuosidad
de los vasos, sobre todo en el área temporal inferior. Esta
anomalía no tiene efecto perjudicial en el ojo del paciente.
La enfermedad de Eales es una vasculitis idiopática
periférica que se ve en adultos y raramente en niños. En
ella hay falta de perfusión en la retina periférica,
neovascularización retinal, hemorragias vítreas y glau-
coma neovascular que requiere fotocoagulación para
tratar de lograr su control.
La enfermedad de Coats es idiopática, progresi-
va y no hereditaria, con predilección por varones. Es
unilateral y provoca telangiectasias y aneurismas de va-
Fig. 102.16. Retinopatía diabética no proliferativa. sos retinianos, asociados con exudación subretinal masi-
va. La mayoría de los casos ocurren entre los 6 y 10
años. Puede presentarse como una leucocoria o
estrabismo monocular. En etapas terminales puede de-
sarrollar glaucoma neovascular.
La retinopatía del prematuro es una compleja
anormalidad del desarrollo de la vasculatura retinal en
un tejido inmaduro. Ha aumentado en países desarrolla-
dos por el avance de la tecnología que permite sobrevi-
vir a niños que de otra forma hubieran fallecido. Por lo
tanto es una enfermedad poco frecuente en países atra-
sados y más frecuente en los de desarrollo medio, donde
Fig. 102.16A. Retinopatía diabética proliferativa. esos niños llegan a sobrevivir, pero no existe la posibili-
dad de hacerles exámenes por especialistas de retina
con la periodicidad requerida para detectar y tratar a
tiempo el avance de esta retinopatía.
Se ve, sobre todo, en recién nacido pretérmino y
por lo regular de menos de 1 500 gramos. Otras enfer-
medades como trastornos respiratorios, o el uso de oxí-
geno, son considerados factores de riesgo.
El desarrollo de vasos retinianos comienza en la se-
mana 16 de vida intrauterina, desde la papila hacia la peri-
feria, la que alcanza por el lado nasal en la semana 36 y por
el temporal en la 40. Si ese proceso se detiene, los vasos
terminan bruscamente a determinada distancia de la papila
Fig. 102.17. Retinopatía diabética fotocoagulada. en la retina, en forma de línea que queda constituida por
células mesenquimatosas y endoteliales. En muchos casos,
En la anemia por hematíes falciformes puede ob- la división y diferenciación celular hace que prosiga la
servarse retinopatía no proliferativa o proliferativa. La vascularización normal de la retina, pero en otros casos esa
retinopatía proliferativa es una complicación importante de banda de tejido aumenta y hay proliferación anormal de
esta anemia, que puede llevar a la ceguera, por lo que se ha vasos hacia el vítreo, la retina, cuerpo ciliar y cristalino, que
recomendado la terapéutica con rayos láser para ocluir los después pueden hacer tracción al cicatrizar, desprender la
vasos que irrigan las lesiones proliferativas avanzadas. retina y dar una leucocoria. Esto ocurre solo en 10 % de los
En los pacientes con este tipo de anemia, un trau- pacientes. En el resto de los casos, la enfermedad se detie-
matismo ocular puede producir hifema, que por las ca- ne o regresa y apenas puede observarse la línea donde
racterísticas de la cámara anterior induce a cambios de hubo la detención de la proliferación vascular.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1293


El proceso es generalmente bilateral y se clasifica las células somáticas, mientras que en el tipo hereditario
de acuerdo con la localización, extensión y gravedad de la mutación ocurre en la célula germinal. En este último
las lesiones. Casi siempre se diagnostica a las 8 ó 9 se- caso, los pacientes están en riesgo de presentar
manas después del nacimiento, lo cual puede regresar retinoblastomas adicionales, así como de tener descen-
por completo hacia los 6 meses, por lo que se deben dientes con el tumor. Se han descrito técnicas basadas en
realizar exámenes periódicos del fondo de ojo durante el análisis del ADN que permiten distinguir la variante
este tiempo. Se dice que se debe buscar la ventana de hereditaria de la no hereditaria y que es posible utilizar
tiempo para comenzar los exámenes de retina seriados, para estimaciones de riesgo y consejo genético.
que para los nacidos entre la 22 y la 27 semanas, es Aunque este tumor se puede ver ya en el recién naci-
de 31 semanas después de la última menstruación ma- do, lo usual es que se presente alrededor de los 2 años,
terna y para el resto a las 2 semanas de nacidos. disminuyendo su incidencia a partir de los 4 años. La ma-
Habitualmente la fibroplasia total da lugar a dre, por lo general, consulta al médico porque le nota al
leucocoria, atrofia del globo ocular y ceguera. Su diag- niño un reflejo blanco en la pupila, que ha sido nombrada
nóstico diferencial inmediato debe hacerse con el "pupila amaurótica de gato". A veces el signo de comienzo
retinoblastoma y otras causas de leucocoria. La preven- es el estrabismo. También puede iniciarse o acompañarse
de seudohipopión o pus en cámara anterior e hifema.
ción está encaminada a evitar el nacimiento prematuro y,
Suele ser un tumor solitario aunque en ocasiones lo
en el recién nacido, a mantener la terapia con oxígeno el
acompañan otros más pequeños. Puede crecer hacia
menor tiempo posible y en concentraciones bajas, dismi-
adentro del ojo (endofítico) o hacia afuera al espacio
nuyendo la presión de oxígeno antes de pasar al niño de la
subretiniano (exofítico) o a ambos. En su variante
incubadora al medio ambiente, con lo que se evita la caída
endofítica toma forma de coliflor de color blanco algo-
brusca de ese gas. Debe administrarse además, vitamina
donoso con neovascularización importante, que lo atra-
E como antioxidante, aunque su utilidad ha sido discutida,
viesa, con hemorragias y exudados en su superficie
y llevar a cabo el examen periódico del fondo de ojo. El
(Fig. 102.18). En la forma exofítica su color es grisáceo
tratamiento de la enfermedad consiste en la aplicación de
y su crecimiento provoca desprendimiento de retina.
crioterapia, fotocoagulación con láser y cirugía del vítreo.

Tumores de retina
La hipertrofia congénita del epitelio pigmentario
se observa con relativa frecuencia. Puede verse como un
área pigmentada o despigmentada, solitaria o multifocal,
como ''huella de oso'', de bordes bien definidos. No es
frecuente su transformación a maligno y puede asociarse
con síndromes o enfermedades generales.
El meduloepitelioma es un tumor primario del epi-
telio ciliar no pigmentado que empieza en la niñez. Pro-
duce dolor y se ve como una masa en cámara anterior,
dando leucocoria y otras complicaciones del segmento
anterior al crecer lentamente. El tratamiento es la enu-
cleación, pero tiene buen pronóstico.
El retinoblastoma es el tumor maligno intraocular
más frecuente en niños, y afecta uno o ambos ojos. Son Fig. 102.18. Retinoblastoma.
bilaterales en el 30 % y la incidencia es alta, ya que
ocurre en 1/18 000 habitantes. Puede ser esporádico o Si el tumor se deja evolucionar, el globo ocular au-
hereditario. menta considerablemente su tamaño y se produce la
El gen responsable del retinoblastoma fue identifi- propagación hacia las estructuras vecinas, vasos, nervio
cado en 1986. Se ha caracterizado como un "antioncogén" óptico, espacio subaracnoideo, quiasma y cerebro.
en el sentido de que normalmente funciona como un su- El tratamiento quirúrgico consiste en la enuclea-
presor dominante de la formación del tumor, por lo que su ción del ojo. Se puede utilizar, en algunos casos, la
alteración o inactivación, en los dos alelos, es el elemento crioterapia y la fotocoagulación con láser, además del
clave en el desarrollo del retinoblastoma. La mutación del
tratamiento radiante y quimioterapéutico que permiten
gen es pues responsable de la aparición del tumor, tanto
la remisión del tumor y la curación del paciente, si es
en la forma hereditaria como en la no hereditaria. En el
caso de la forma no hereditaria la mutación se produce en tratado a tiempo.

1294 Tomo III


Facomatosis También es frecuente la asociación de quistes y angiomas
Incluye a un amplio grupo de entidades clínicas en en vísceras, como: páncreas, testículos, riñón, huesos
las que se produce proliferación anormal en tejidos pro- etc. El hemangioma retiniano puede ser único o múltiple
y frecuentemente es bilateral. En el fondo de ojo co-
pios. Puede dañar órganos derivados del ectodermo, el
mienza por una pequeña lesión que parece un aneuris-
mesodermo y con mucha menos frecuencia del
ma dilatado de vasos de retina periférica; se vuelve
endodermo, especialmente en el tracto gastrointestinal.
después una masa rosada de mayor tamaño, a la que se
Afectan, principalmente: piel, ojos, sistema nervioso cen-
ve llegar una vena dilatada que parte de la papila y otra
tral y periférico, y vasos sanguíneos. Son seis las que
vena arterializada que lo drena. Por lo regular hay cú-
tienen importantes manifestaciones oftalmológicas: mulos de exudados de lípidos (Fig. 102.20).
• Derivados de estructuras del ectodermo:
− Neurofibromatosis.
− Esclerosis tuberosa.
• Derivados de estructuras del mesodermo:
− Von-Hippel-Lindau.
− Sturge-Weber.
− Ataxia telangiectásica.
− Síndrome de Wyburn-Mason.

La neurofibromatosis es de tipo autosómico do-


minante. Se reconocen dos enfermedades. El von
Recklinghausen o tipo 1 es la más frecuente. Junto a las
manchas color café con leche características y los
neurofibromas, se observan múltiples manifestaciones
oftalmológicas, como son: neurofibromas de párpados y
Fig. 102.19. Hamartoma astrocítico.
en conjuntiva, más en el párpado superior, que pueden
ser plexiformes; engrosamiento de nervios corneales,
tumores gliales, indistinguibles de los hamartomas
astrocíticos que se ven en la capa de fibras nerviosas de
la retina en la esclerosis tuberosa; nódulos de Lisch, que
son pequeños hamartomas de constitución melánica en
la cara anterior del iris; tumores de tejidos blandos
orbitarios que incluyen neurofibromas, gliomas,
meningiomas y otros que pueden producir exoftalmía. Si
hay alteración ósea, como pérdida o displasia, puede pro-
ducirse exoftalmo pulsátil por pase de masa encefálica
a la órbita a través del defecto óseo.
En la esclerosis tuberosa se suma, a la tríada ca-
racterística de angiofibromas faciales, convulsiones y
retraso mental, en 50 % de los casos, el hamartoma
astrocítico, que tiene aspecto nodular en la retina o papila, Fig. 102.20. Angiomatosis de von Hippel- Lindau.
de diferentes tamaños que puede estar calcificado
(Fig. 102.19). Este hallazgo, aunque no es exclusivo de La enfermedad de Sturge-Weber se conoce tam-
esta entidad, sí apoya al diagnóstico. bién como angiomatosis encéfalo trigeminal, lo que la
Las facomatosis que derivan del mesodermo y se describe. No parece ser hereditaria. La participación
presentan con alteraciones oftalmológicas importantes, oftalmológica es variada. La angiomatosis toma los pár-
afectan a los vasos sanguíneos. pados, conjuntiva, epiesclera, cuerpo ciliar iris y ángulo
Von-Hippel-Lindau es una angiomatosis retiniana de la cámara anterior, por lo que el glaucoma se asocia
autosómica dominante que suele acompañarse de a muchos de estos casos. En el fondo del ojo, además de
hemangioblastomas infratentoriales del cerebelo, tallo y la excavación provocada por el aumento de la tensión
médula, en cuyo caso se le adiciona el nombre de Lindau. ocular o el buftalmos, se puede ver hemangioma
Se puede acompañar de tumores malignos en otras lo- coroideo con aspecto de una mancha muy roja en el
calizaciones, como carcinoma renal y feocromocitoma. fondo del ojo.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1295


La ataxia telangiectásica o síndrome de Louis- − Retinosquisis juvenil ligada al X
Bar es una ataxia cerebelosa que aparece, por lo regu- − Síndrome de Ehlers Danlos
lar, antes que la telangiectasia oculocutánea, que lo hace
entre los 4 y 7 años. Es autosómica recesiva. Otras Causas de desprendimiento de retina traccional
manifestaciones oftalmológicas que pueden presentarse • Retinopatía de la prematuridad.
son, apraxia oculomotora, nistagmos y estrabismo, entre • Retinopatía de células falciformes.
otras menos frecuentes. • Vitrorretinopatía exudativa familiar.
El síndrome de Wyburn-Mason es una
facomatosis que se caracteriza por la asociación de Causas de desprendimiento de retina exudativo
malformación arteriovenosa retinal, de tipo racemoso y • Enfermedad de Coats.
lesión similar en cerebro medio. La lesión ocular es uni- • Inflamaciones intraoculares (Síndrome de Vogt-
lateral y puede englobar vasos de la órbita. Tiene predi- Koyanagui-Harada).
lección por el cuadrante inferotemporal de retina y puede • Anomalías congénitas (Foseta óptica, coloboma del
aparecer con edema, exudados y, si toma la órbita, nervio óptico).
proptosis. La extensión intracraneal es por lo regular a
• Tumores intraoculares.
lo largo de la vía óptica y puede unirse a las de la órbita
y dar parálisis oculomotora.

Desprendimiento de la retina
Entre las afectaciones graves de la retina está su
desprendimiento, el cual se produce al separarse la re-
tina neurosensorial del epitelio pigmentario retinal. Los
desprendimientos de retina (DR) se clasifican en
regmatógenos, traccionales y exudativos.
El desprendimiento de retina regmatógeno (deri-
vado del griego rhegma, rotura) se produce por una des-
garradura retiniana que permite el paso del vítreo fluido
al espacio potencial subretinal; este tipo de desprendi-
miento es el más frecuente. El desprendimiento
traccional es menos común y es causado por membra-
nas traccionales vítreas o vitreorretinales que se con-
traen y elevan la retina. El desprendimiento exudativo
se produce por diversas enfermedades que provocan un
acúmulo de fluido por debajo de la retina neurosensorial.
El desprendimiento regmatógeno se ve como un Fig. 102.21. Desprendimiento de retina.
levantamiento de retina que a veces tiene pliegues o
bolsones y un área de rotura, en el área de la retina que La retina puede ser asiento de trastornos bioquí-
originó el desprendimiento. Por estar en un plano ante- micos o de otro tipo que no siempre alteran clínicamente
rior o hacia el vítreo, para aclarar la imagen anterior se su función visual o su aspecto, pero se expresan de otras
deben poner dioptrías positivas al oftalmoscopio. Su diag- maneras, como es el caso de la distrofia muscular de
nóstico preciso requiere del examen por medio de la Duchenne. En esta entidad se respeta la función visual,
oftalmoscopia indirecta. (Fig. 102.21) pero el electrorretinograma muestra una intensa dismi-
Principales causas de los diferentes tipos de des- nución de onda B característica, que expresa disfunción
prendimientos de retina en la edad pediátrica: en capa plexiforme externa, donde también hay distrofina,
Causas de desprendimiento de retina regma- como en el músculo. Santiesteban y colaboradores en-
tógeno: contraron relación con las alteraciones del electrorre-
• Alta miopía. tinograma y el sitio de la deleción.
• Cirugía de la catarata.
• Degeneraciones retinales predisponentes. Bibliografía
• Traumatismos contusos. Aldo Sigler Villanueva, Jesús Jiménez Barredo, Ricardo Gómez Carro,
• Enfermedades asociadas: Luis A. Rodríguez Sánchez, Pedro Posada Fernández, Juana M.
− Síndrome de Marfán Maqueira Roque, Rolando Rey Bravo y Miguel A. Guevara
López. Análisis de algunas variables clínicas en relación con la
− Síndrome de Stickler/ Síndrome de Wagner-Jensen retinopatía diabética. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2)

1296 Tomo III


Baumal CR, Levin AV, Read SE. Cytomegalovirus retinitis in Rosales Quinones C, Vidal Casali S, López Cardet R, Monteagudo
immunosuppressed children. Am-J-Ophthalmol Morejón C, Basto Rodríguez MA. Procedimientos generales
1999;127(5):550-8. para el diagnostico y tratamiento de la retinopatía diabética.
Beatriz Dyce Gordon, Josefina Mejías Márquez, Mirtha Copello Rev. cubana oftalmol 1991;48(1):39-46.
Noblet, Raisa Hernández Baguer, Irma Horrach Rosa Santiesteban Freixas R, Aguilera Pacheco O, Francisco Plasencia
Aspectos genéticos y clínicos del síndrome de Usher Rev M, Luis González S. Enfermedad de Steinert.
Cubana Oftalmol 2000;13(2). Manifestaciones oftalmológicas. Rev. Cubana oftalmol,
Birch DG, Anderson JL, Fish GE. Yearly rates of rod and cone 1995,ene-jun,18(1):8-12.
functional loss in retinitis pigmentosa and cone-rod Santiesteban Freixas R, Luis González S, Plascencia Marta F, Chi
dystrophy. Ophthalmology 1999;106(2):258-68. Ramírez D, Suárez Hernández J. La Retina en la Enfermedad
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Ophthalmic de Duchenne. Estudio electrorretinográfico. Rev. cubana
Pathology and Intraocular Tumor. San Francisco: American Oftalmol, 1996, 9(2):86-91.
Santiesteban Freixas Rosaralis, Osvaldo Aguilera Pacheco, Marta
Academy of Ophthalmology; 2003-2004.
Francisco Plasencia y Santiago Luis González. Enfermedad de
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Retina and
Steinert. Manifestaciones oftalmológicas. Rev Cubana
Vitreous. San Francisco: American Academy of
Oftalmol 1995;8(1).
Ophthalmology;2003-2004.
Santiesteban Freixas Rosaralis, Santiago Luis González, Marta
Correa Sánchez Esther. Retinitis por citomegalovirus en el
Francisco Plasencia, Daisy Chi Ramirez y Juana Suárez
síndrome de inmunodeficiencia adquirida. Rev Cubana Hernández. La retina en la enfermedad de Duchenne. Estudio
Oftalmol 1988;1(3):56-8. electrorretinográfico. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
Elisa Dyce Gordon, Yolanda Mapolón Arcendor, Beatriz Dyce Solley WA, Martin DF, Newman NJ, King R, Callanan DG,
Gordon. Herencia de la retinosis pigmentaria en la provincia Zacchei T, et al. Cat scratch disease: posterior segment
Camagüey. Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1). manifestations. Ophthalmology 1999;106(8):1546-53.
Fleites Rubén Rangel, Noel Taboada Lugo y Gladys Membrides Teresita de J. Méndez Sánchez, Rolando López Cardet, Caridad
Pérez Heterogeneidad clínica y genética de la retinosis Rosales Quiñones y Armando Seuc Jo. Prevalencia de
pigmentaria. Importancia del estudio familiar y del retinopatía diabética en un área de salud del municipio
tratamiento precoz. A propósito de una familia. Rev Cubana Marianao. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
Oftalmol 2004;17(2). Varela Ramos G, Cardoso Guillen E. Estudio del Retinoblastoma
Kellner U, Jandeck C, Kraus H, Foerster MH. Hereditary macular en Nuestro Medio. Rev. Cub Oftalmol 1988;1(2):70-80.
dystrophies.. Ophthalmologe 1998;95(9):597-601. Varela Sarduy R, Pila Pérez R, Mendoza Cruz R, Avello Sánchez J.
Labrada Rodríguez, Yunia Herbania; Vega Pupo, Caridad; Manifestaciones oftalmológicas en la leucosis. Rev Cubana de
González, Luisa; Peña Hernández, Yudisneidis. Oftal.1991,v1:47-52.
Comportamiento de la retinopatía de la prematuridad en la Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
provincia Las Tunas. Rev Cubana Oftalmol. 2006;19(1). Louis: Mosby; 1995.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, Pag, 67-84, 328-346, 420-498. USA.
Peláez Molina O, Copello Noblet M. Aspectos medicosociales de
. Capítulo 103 .
los pacientes con diagnostico de Retinosis Pigmentaria. Rev.
cubana Oftalmol 1988;1(2):38-46.
Pérez Díaz M, Ravelo Pérez V, Caballero Girón B, Fernández Enfermedades del nervio
Rivero G. Retinosis pigmentaria en niños y adolescentes.
Características psicológicas. Rev Cubana de Oftalmol óptico y vía visual
1993;1:25-33. Rosaralis Santiesteban Freixas
Raisa Hernández Baguer, Irma Horrach Rosa, Niurka Scull
Álvarez, Manuel Caballero Vila, Hildelisa Sánchez González, El hecho de derivar del ectodermo neural y de ro-
Nereida Vargas Vargas y Mayra Díaz Agüero. Estudio de una dearse de las mismas capas y líquidos del encéfalo ha-
familia con retinosis pigmentaria ligada al cromosoma X cen que en la retina y el nervio óptico se puedan
causada posiblemente por gen no descrito hasta el momento. manifestar de forma objetiva daños del sistema nervioso
Rev Cubana Oftalmol 1998;11(2).
Reddy SC, Menon BS. A prospective study of ocular
central, tanto congénitos como adquiridos.
manifestations in childhood acute leukaemia. Acta- La lesión en el nervio óptico puede comenzar en el
Ophthalmol-Scand 1998;76(6):700-3. soma de las células ganglionares de la retina, en el disco
Rodríguez Hernández Mayra, Rosaralis Santiesteban Freixas, Raul óptico, nervio, quiasma, cintillas ópticas o cuerpo
Ferreira Capote y Santiago Luis González. Correlación entre geniculado y provocar atrofia del disco óptico en corto o
las deleciones en el gen DMD y las alteraciones en el largo plazo; en casos excepcionales de daño congénito
electrorretinograma de pacientes con distrofia muscular de
Duchenne. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
posgeniculado, puede observarse lesión en la papila por
Rosales Quinones C, Santiesteban Freixas R, Márquez Fernández degeneración transináptica.
M, Guell González R. Diagnóstico Precoz de Retinopatía Su expresión de disfunción es la pérdida de la vi-
Diabética en el niño por métodos electrofiosiológicos. Estudio sión, contraste y color, especialmente del rojo y el verde
Prospectivo de 5 años. Rev. cubaana Oftalmol 1988;4(1):66-71. que suele afectarse más que la agudeza visual. Dada la

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1297


Baumal CR, Levin AV, Read SE. Cytomegalovirus retinitis in Rosales Quinones C, Vidal Casali S, López Cardet R, Monteagudo
immunosuppressed children. Am-J-Ophthalmol Morejón C, Basto Rodríguez MA. Procedimientos generales
1999;127(5):550-8. para el diagnostico y tratamiento de la retinopatía diabética.
Beatriz Dyce Gordon, Josefina Mejías Márquez, Mirtha Copello Rev. cubana oftalmol 1991;48(1):39-46.
Noblet, Raisa Hernández Baguer, Irma Horrach Rosa Santiesteban Freixas R, Aguilera Pacheco O, Francisco Plasencia
Aspectos genéticos y clínicos del síndrome de Usher Rev M, Luis González S. Enfermedad de Steinert.
Cubana Oftalmol 2000;13(2). Manifestaciones oftalmológicas. Rev. Cubana oftalmol,
Birch DG, Anderson JL, Fish GE. Yearly rates of rod and cone 1995,ene-jun,18(1):8-12.
functional loss in retinitis pigmentosa and cone-rod Santiesteban Freixas R, Luis González S, Plascencia Marta F, Chi
dystrophy. Ophthalmology 1999;106(2):258-68. Ramírez D, Suárez Hernández J. La Retina en la Enfermedad
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Ophthalmic de Duchenne. Estudio electrorretinográfico. Rev. cubana
Pathology and Intraocular Tumor. San Francisco: American Oftalmol, 1996, 9(2):86-91.
Santiesteban Freixas Rosaralis, Osvaldo Aguilera Pacheco, Marta
Academy of Ophthalmology; 2003-2004.
Francisco Plasencia y Santiago Luis González. Enfermedad de
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Retina and
Steinert. Manifestaciones oftalmológicas. Rev Cubana
Vitreous. San Francisco: American Academy of
Oftalmol 1995;8(1).
Ophthalmology;2003-2004.
Santiesteban Freixas Rosaralis, Santiago Luis González, Marta
Correa Sánchez Esther. Retinitis por citomegalovirus en el
Francisco Plasencia, Daisy Chi Ramirez y Juana Suárez
síndrome de inmunodeficiencia adquirida. Rev Cubana Hernández. La retina en la enfermedad de Duchenne. Estudio
Oftalmol 1988;1(3):56-8. electrorretinográfico. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
Elisa Dyce Gordon, Yolanda Mapolón Arcendor, Beatriz Dyce Solley WA, Martin DF, Newman NJ, King R, Callanan DG,
Gordon. Herencia de la retinosis pigmentaria en la provincia Zacchei T, et al. Cat scratch disease: posterior segment
Camagüey. Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1). manifestations. Ophthalmology 1999;106(8):1546-53.
Fleites Rubén Rangel, Noel Taboada Lugo y Gladys Membrides Teresita de J. Méndez Sánchez, Rolando López Cardet, Caridad
Pérez Heterogeneidad clínica y genética de la retinosis Rosales Quiñones y Armando Seuc Jo. Prevalencia de
pigmentaria. Importancia del estudio familiar y del retinopatía diabética en un área de salud del municipio
tratamiento precoz. A propósito de una familia. Rev Cubana Marianao. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
Oftalmol 2004;17(2). Varela Ramos G, Cardoso Guillen E. Estudio del Retinoblastoma
Kellner U, Jandeck C, Kraus H, Foerster MH. Hereditary macular en Nuestro Medio. Rev. Cub Oftalmol 1988;1(2):70-80.
dystrophies.. Ophthalmologe 1998;95(9):597-601. Varela Sarduy R, Pila Pérez R, Mendoza Cruz R, Avello Sánchez J.
Labrada Rodríguez, Yunia Herbania; Vega Pupo, Caridad; Manifestaciones oftalmológicas en la leucosis. Rev Cubana de
González, Luisa; Peña Hernández, Yudisneidis. Oftal.1991,v1:47-52.
Comportamiento de la retinopatía de la prematuridad en la Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
provincia Las Tunas. Rev Cubana Oftalmol. 2006;19(1). Louis: Mosby; 1995.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, Pag, 67-84, 328-346, 420-498. USA.
Peláez Molina O, Copello Noblet M. Aspectos medicosociales de
. Capítulo 103 .
los pacientes con diagnostico de Retinosis Pigmentaria. Rev.
cubana Oftalmol 1988;1(2):38-46.
Pérez Díaz M, Ravelo Pérez V, Caballero Girón B, Fernández Enfermedades del nervio
Rivero G. Retinosis pigmentaria en niños y adolescentes.
Características psicológicas. Rev Cubana de Oftalmol óptico y vía visual
1993;1:25-33. Rosaralis Santiesteban Freixas
Raisa Hernández Baguer, Irma Horrach Rosa, Niurka Scull
Álvarez, Manuel Caballero Vila, Hildelisa Sánchez González, El hecho de derivar del ectodermo neural y de ro-
Nereida Vargas Vargas y Mayra Díaz Agüero. Estudio de una dearse de las mismas capas y líquidos del encéfalo ha-
familia con retinosis pigmentaria ligada al cromosoma X cen que en la retina y el nervio óptico se puedan
causada posiblemente por gen no descrito hasta el momento. manifestar de forma objetiva daños del sistema nervioso
Rev Cubana Oftalmol 1998;11(2).
Reddy SC, Menon BS. A prospective study of ocular
central, tanto congénitos como adquiridos.
manifestations in childhood acute leukaemia. Acta- La lesión en el nervio óptico puede comenzar en el
Ophthalmol-Scand 1998;76(6):700-3. soma de las células ganglionares de la retina, en el disco
Rodríguez Hernández Mayra, Rosaralis Santiesteban Freixas, Raul óptico, nervio, quiasma, cintillas ópticas o cuerpo
Ferreira Capote y Santiago Luis González. Correlación entre geniculado y provocar atrofia del disco óptico en corto o
las deleciones en el gen DMD y las alteraciones en el largo plazo; en casos excepcionales de daño congénito
electrorretinograma de pacientes con distrofia muscular de
Duchenne. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(2).
posgeniculado, puede observarse lesión en la papila por
Rosales Quinones C, Santiesteban Freixas R, Márquez Fernández degeneración transináptica.
M, Guell González R. Diagnóstico Precoz de Retinopatía Su expresión de disfunción es la pérdida de la vi-
Diabética en el niño por métodos electrofiosiológicos. Estudio sión, contraste y color, especialmente del rojo y el verde
Prospectivo de 5 años. Rev. cubaana Oftalmol 1988;4(1):66-71. que suele afectarse más que la agudeza visual. Dada la

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1297


exacta distribución topográfica de los axones de las cé-
lulas ganglionares a lo largo de la vía, el estudio del cam-
po visual es un examen de gran importancia en la
localización de la causa del deterioro.
Las manifestaciones objetivas más frecuentes de
las enfermedades que afectan al nervio óptico son la
atrofia y el edema, lo que varía en sus características y
constituye un elemento de gran importancia que sirve en
muchas ocasiones para aclarar el diagnóstico.
El aspecto de la papila, sus vasos y otros elemen-
tos como la pérdida total o localizada de fibras
ganglionares en determinado sector, orientan mucho en
la causa lo que debe de ir acompañada del correlato con
los defectos de campo visual. La observación de fondo
Fig. 103.2. Fondo de ojo con luz aneritra en lámpara FF450.
debe hacerse, tanto por oftalmoscopia directa, en que
las estructuras se ven de mayor tamaño, pero se abarca
menos área, que con oftalmoscopia indirecta que da El estudio de los potenciales evocados visuales de
una visión de mayor área y permite valorar de forma retina y de corteza son de gran utilidad en el estudio
más global la pérdida de fibras ganglionares y el estado funcional objetivo de las diferentes estructuras de la vía
de los vasos. También la biomicroscopia del polo poste- visual, los cuales se pueden registrar de cada punto de la
rior, con lentes especiales, es de gran utilidad en el exa- retina y construir así verdaderos mapas de función retinal
men detallado de la papila (Fig. 103.1). y cortical occipital.
El nervio óptico en todo su recorrido, y en especial
su parte visible, la papila, así como en el resto de la vía
visual, pueden ser asiento de diferentes malformacio-
nes: neuropatías, y otros tipos de procesos que se pue-
den clasificar por su expresión en el fondo de ojo o por
su causa. Ellos son:
• Malformaciones.
• Edemas.
• Atrofias.
• Procesos inflamatorios y desmielinizantes.
• Neuropatías hereditarias.
• Tóxico nutricionales.
• Tumores y compresiones del nervio óptico y de la
vía visual.
• Degeneraciones y otras enfermedades que transcurren
con atrofia óptica de variadas causas o de origen
Fig. 103.1. Examen de polo posterior con lámpara de hendidura. desconocido.
• Isquémicos.
Para detectar los elementos vasculares y la pérdi-
• Traumáticos.
da de fibras ganglionares es muy útil el uso del filtro de
luz aneritra, que traen todos los oftalmoscopios y las fo-
La secuela de estos procesos es por lo regular la
tos de fondo de ojo que se realizan con este y otros fil-
atrofia óptica, precedido o no, de edema.
tros en equipos especiales, donde se destacan con gran
detalle los elementos del fondo de ojo y las capas de Las malformaciones que puede presentar la papila
fibras (Fig. 103.2). Esa pérdida de fibras se pueden cuan- son variadas, sobre todo en forma, tamaño y color; entre
tificar con los modernos equipos que procesan imáge- las más frecuentes se encuentran las fibras de mielina,
nes del fondo de ojo como el tomógrafo retinal de papilas hipoplásicas y oblicuas y las drusas. Su aspecto
Heidelberg y la tomografía óptica coherente, (OCT), puede estar también en relación con defectos refractivos
verdaderos tomógrafos de retina y nervio óptico. o no, principalmente en lo que respecta al tamaño y forma.

1298 Tomo III


ANOMALÍAS CONGÉNITAS
DE LA PAPILA
Las anomalías congénitas más conocidas son:
• Recubrimiento mielínico.
• Aplasia verdadera de la papila.
• Papila doble y megalopapila.
• Hipoplasia de la papila.
• Colobomas.
• Fositas.
• Estafilomas.
• Discos oblicuos o inclinados.
• Drusas papilares.
• Papila de Bergmeister y persistencia de la arteria
hialoidea.
• Bucles vasculares prepapilares y comunicación
opticociliar de los vasos.
• Pigmentación anormal.

El recubrimiento mielínico de la vía visual ante-


rior comienza en el quinto mes del período embriona-
rio, desciende desde el encéfalo y se detiene en la papila,
cercano al momento del nacimiento. Si la mielinización
continúa cubre a las fibras ganglionares de la retina
que son transparentes; en esa zona, el fondo de ojo
pierde su color rojo naranja y aparece en ese sitio un Fig. 103.3 y 3A. Fibras de mielina.
área blanca nacarada, que en la mayoría de los casos
hacen cuerpo con la papila, en forma de abanico de
bordes deshilachados, detrás de lo cual los vasos
retinianos pueden quedar ocultos (Figs. 10.3 y 103.3A).
En correspondencia con esta zona de fibras
mielinazadas aparece un escotoma en el campo visual.
Esta anomalía predomina en varones y su modo de
transmisión hereditario es autosómico dominante.
La aplasia verdadera de la papila es rara; no
hereditaria y generalmente monocular; puede verse aso-
ciada a grandes malformaciones encefálicas, como,
anoftalmos o microftalmos.
La papila doble y la megalopapila también son
raras y esta última se puede asociar con defectos ce-
rebrales y de línea media facial: hipertelorismo, puente Fig. 103.4. Coloboma y papila doble.
nasal plano, labios leporinos, etc. o aparecer aislada
(Fig.103.4). La megalopapila es por lo regular bilateral, La hipoplasia de la papila es una de las anoma-
el disco óptico mide más de 2,1 mm en sus dos diáme- lías más frecuentes. Puede ser unilateral o bilateral y de
tros principales, y el resto de su estructura es de as- variados grados; a veces la atrofia es segmentaria. Se
pecto normal. A veces hay alteraciones del epitelio ve como un disco pequeño, menos de 1,5 mm, con halo
pigmentario que rodean a la papila. Por lo regular se peripapilar rodeando al disco, lo que es llamado signo del
conserva buena visión central, en el campo visual hay doble anillo. Los vasos de la papila hipoplásica son nor-
aumento de la mancha ciega y pueden verse también males. Esta anomalía ocasiona deficiencia visual de di-
caídas temporales superiores. versos tipos, por lo regular en relación con la disminución

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1299


del tamaño del disco, y en ocasiones ser inadvertida. de tejido coriorretinal pigmentado. En la mayoría de los
Cuando la hipoplasia es bilateral y la papila muy peque- casos el área peripapilar es irregular, pigmentada y cru-
ña, suele asociarse, en la mayoría de los casos, a nistagmo zada por vasos anómalos, lo que le da su nombre al sín-
y otras malformaciones oculares: microftalmos, drome de la mañana gloriosa, por la flor que tiene esa
coloboma de coroides y del disco, blefarofimosis, forma. Puede estar comprometida la retina y la coroides
dacrioestenosis, ptosis, estrabismos, parálisis oculomo- o solo el nervio óptico y sus vainas meníngeas. La fóvea
toras, entre otras. También se asocia a malformaciones puede ser hipoplásica y las capas de fibras ganglionares
cerebrales, como anomalías de línea media, incluyendo estar disminuidas. Estas anomalías congénitas del disco
agenesia de la comisura blanca anterior y septum suelen ser esporádicas (Fig. 103.6). La pérdida de la
pellucidum, quiasma, craneofaringiomas, gliomas del ner- agudeza visual se produce o se acentúa por desprendi-
vio, retardo del crecimiento, diabetes, convulsiones in- miento de retina no regmatógeno. Pueden asociarse a
tratables, y otras, por lo que se recomienda completar su otras malformaciones oculares, entre ellas colobomas
estudio con exámenes neurorradiológicos y endocrinos. de iris, cristalino y coroides o a anomalías sistémicas.
Si la hipoplasia es unilateral o segmentaria, todas estas En el síndrome de CHARGE se describe, coloboma,
otras anomalías son menos frecuentes. enfermedad cardíaca, atresia coanal, retardo del creci-
El diagnóstico se hace principalmente por miento y desarrollo asociado a coloboma renal.
oftalmoscopia simple, en la que se observa un disco pe-
queño, con vasos de calibre normal, que generalmente
está rodeado de un doble anillo, causado por los cambios
de hipopigmentación concéntrica de retina y coroides que
rodea el disco óptico (Fig. 103.5).

Fig. 103.6. Coloboma del nervio óptico y desprendimiento


seroso.

Los colobomas displásticos del disco óptico se aso-


cian por lo regular con malformaciones faciales de línea
Fig. 103.5. Hipoplasia de papila. media: hipertelorismo, labios leporinos, paladar hendido
y otras anomalías del sistema nervioso central, quistes
Las malformaciones o displasias del nervio óptico aracnoideos retrobulbares, malformaciones quísticas de
son debidas a defectos de cierre de la fisura fetal que fosa posterior encefalocele transesfenoidal, que puede
incluyen al nervio óptico en la línea media; son ellos los confundirse con una hipertrofía adenoidea y proponer
grandes colobomas y las fositas, la megalopapila y el su excéresis; y hasta con anomalías vasculares, sobre
disco oblicuo. todo de vasos carotídeos y la arteria oftálmica.
Los colobomas del nervio óptico son por lo regular Las fositas son pequeños colobomas del disco que
inferiores y se asocian a defectos del campo visual su- por lo regular ocupan la porción temporal inferior y pro-
perior y mala visión. Los de gran tamaño son excavaciones ducen defectos arciformes del campo en relación con
displásticas que se extienden a retina y coroides, los cua- su ubicación; aunque estos casos mantienen por lo re-
les distorsionan la papila, como es el ''disco de la maña- gular buena visión, pueden complicarse con desprendi-
na gloriosa''. En este caso, los vasos salen del borde de miento seroso de la mácula, en 50 % de estos pacientes,
la gran excavación, como los rayos del sol, pero pueden lo cual se duda si es debido al escape de fluido vítreo a
asumir diferentes formas, acompañados con estafilomas través del agujero papilar, pasando al espacio subretinal.
posteriores, colobomas retinocoroideos, o discos relle- Se observan como pequeños defectos intrapapilares, ova-
nos con material glial de origen embrionario, rodeados lados o redondeados de tono gris perlado, sobre el área

1300 Tomo III


del disco óptico, con leves alteraciones del epitelio fundir con edema de la papila, al elevarla y borrarla.
pigmentario contiguo, casi siempre temporal. Pueden ser Con el transcurso del tiempo las drusas van aflorando al
múltiples y bilaterales, y llegar a alcanzar un tamaño hasta disco hasta que se hacen visibles, dando un aspecto algo
de un tercio del área papilar (Fig. 103.7). irregular a este. La visión es normal en la mayoría de los
casos, aunque cuando hay gran cantidad de drusas, pue-
den comprimir y hacer más lento el flujo axoplásmico,
dar pérdidas transitorias de la visión durante segundos
por compromiso de este flujo axoplásmico y dañar mu-
cho las fibras hasta atrofiarlas y producir diversos de-
fectos de campo visual.

Fig. 103.7. Fosita del nervio óptico.

Los estafilomas. El estafiloma peripapilar es raro.


Se trata de un defecto del nivel de la pared escleral,
como una fosa que rodea a un disco óptico de aspecto
normal, pero con atrofia de coroides y epitelio
pigmentario dentro de las paredes del defecto. El fondo
Fig. 103.8. Disco oblicuo.
del estafiloma suele observarse con 10 dioptrías negati-
vas o más para alcanzar su profundidad máxima, mien-
tras que la fóvea, más anterior, se ve con apenas una o Es uno de los diagnósticos diferenciales más difíci-
dos dioptrías negativas, o sea, menos de 1 mm de despla- les con el papiledema, cuando las drusas están ocultas y
zamiento posterior, mientras el fondo del estafiloma está a elevan el disco (Figs. 103.9 y 103.9A). Ayudan al diag-
más de 3 mm. nóstico la arborización precoz de los vasos, papila plana
Los discos inclinados. Los discos inclinados o o con excavación fisiológica casi ausente; la visualiza-
papilas oblicuas, se puede considerar una variante de ción de los vasos del disco es nítida, sin que se vean
defecto colobomatoso y de posición. Se observa en el borrosos por el edema. Un elemento decisivo en el exa-
1 al 2 % de la población. Son bilaterales en la mayoría men es la autofluorecencia que se observa al examinar
de los casos, y pueden ser hereditarios. El borde supe- la papila con filtro azul de cobalto, que traen incorpora-
rior y temporal de la papila está elevado en forma de dos por lo regular los oftalmoscopios y que los hacen
teja o cornisa, lo que da la impresión de edema del disco. autofluorecer y la falta de síntomas y signos clínicos de
(Fig. 103.8). Hay ectasia nasal inferior que da por re- hipertensión endocraneana. Las drusas tienen carácter
sultado defecto colobomatoso y escotoma temporal su- familiar y en su diagnóstico es de ayuda también la ob-
perior; este defecto si es bilateral se diferencia de los servación del fondo de ojo de los padres.
campos visuales del síndrome quiasmático, porque el área La papila de Bergmeister y la persistencia de la
de no visión o escotoma, pasa la línea media hacia los arteria hialoidea son debidas a la regresión incompleta
campos nasales superiores. Concomitan casi siempre con de esas estructuras embrionarias. Se les da el nombre de
defectos refractivos tipo astigmatismos oblicuos, con el velo papilar y no es más que tejido glial que ha quedado
eje siguiendo la dirección de la inclinación del disco. La sin reabsorberse sobre la cabeza del nervio óptico, al ini-
agudeza visual puede estar normal o afectada levemente. cio del canal de Cloquet, donde pueden verse restos de lo
Las drusas papilares son formaciones redondea- que fue la arteria hialoidea. Ya fue discutida en capítulos
das, de inicio ubicadas detrás de la lámina cribosa, anteriores, así como los bucles vasculares peripapilares.
traslúcidas por cúmulo de sustancia hialina, de aspecto Los bucles o asas y la comunicación opticociliar
grumoso o nodular, de color blanco amarillentas que, si son anomalías en los vasos de la papila; este último es
están profundas en el nervio, se ocultan y se puede con- signo de meningiomas del nervio óptico, ciertos tipos de

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1301


atrofia, glaucoma y otras. Ya se comentaron en el capí- Defectos adquiridos
tulo anterior.
La pigmentación anormal es una anomalía congé- Papiledema
nita del disco óptico, lo que llega a verse como una papila
Es considerado uno de los signos principales en la
completamente oscura o variantes como placas o líneas
clínica médica, ya que en la mayoría de los casos es diag-
de pigmento sobre la superficie del disco o lámina cribosa.
nóstico de un tumor cerebral, lo que frecuentemente va
Debe ser diferenciado del melanoma maligno y el
acompañado de náuseas, cefalea y diplopía horizontal cru-
melanocitoma (Fig. 103.10).
zada por lesión de los sextos nervios craneales. Es una
emergencia médica que debe ser manejada como tal; sin
embargo, este signo es frecuentemente confundido con
otras entidades que producen edema del disco óptico, o
elevan y borran sus bordes. Por su implicación, se ha de-
finido que el término papiledema debe dejarse para el ede-
ma pasivo del disco, asociado con aumento de la presión
intracraneal; llamar edema del disco cuando no esté im-
plícito este término y seudopapiledema cuando la imagen
del fondo de ojo solo semeja esta condición, pero no lo es.
El papiledema es casi siempre bilateral, aunque en
algunos casos puede ser unilateral o asimétrico; no afecta
la visión hasta que no pasa a la fase de atrofia óptica o
cuando alguna de las lesiones que lo acompañan, como
Fig. 103.9. Drusas papilares ocultas. edema retiniano, hemorragias o exudados se sitúan en el
área macular. Los oscurecimientos visuales de segundos
de duración se refieren por el paciente en el papiledema
ya desarrollado y es un síntoma de gran importancia para
sospechar la entidad.
Entre las causas del papiledema las más frecuentes
son las lesiones que ocupan espacio, como: tumores cere-
brales, hematomas subdurales, abscesos, lesiones parasi-
tarias, hamartomas, granulomas, hemorragias
subaracnoideas, y cuando se aumenta el contenido del
líquido cefaloraquídeo o se dificulta su absorción en la
llamada hipertensión endocraneana benigna.
Los tumores infratentoriales son los que más
papiledema provocan y no todos los tumores cerebrales o
masas intracraneales provocan papiledema, lo que está
en dependencia de diferentes factores, como: localización,
Fig. 103.9A. Drusas papilares visibles.
tipo, velocidad de crecimiento, entre otros. El edema ce-
rebral, las hidrocefalias, trastornos en el retorno venoso y
meningitis, aparecen como otras de las causas. También
puede verse en ciertos tipos de craneosinostosis y, aun-
que raro, pero ha sido bien documentado en el síndrome
de Laundry-Guillain-Barré y en tumores espinales.
Una de las causas del papiledema de mayor interés
para el seguimiento oftalmológico es la mal llamada
hipertensión endocraneana benigna, o seudotumor cerebral,
cuyo diagnóstico debe ser de exclusión y estar basado en la
comprobación manométrica de la hipertensión
endocraneana. Esta entidad se ve en niños y sobre todo en
mujeres obesas de mediana edad. Puede remitir espontá-
neamente y si se disminuye de peso. En otras ocasiones, no
se controla ni con los tratamientos depletantes y van hacia
Fig. 103.10. Melanocitomas. la atrofia óptica, desmintiendo su nombre de benigna.

1302 Tomo III


Otras condiciones asociadas al seudotumor cerebral
son: disfunción endocrino metabólica, impedimento en el
retorno venoso, administración de agentes exógenos como
vitamina A, corticoides, tetraciclina, ácido nalidíxico, em-
barazo, enfermedades sistémicas como, anemia ferripriva,
discrasias sanguíneas, insuficiencia respiratoria obstructiva
crónica, encefalitis alérgica e inflamatoria, enfermedades
del oído medio, disección radical de cuello, entre otras.
Para que se produzca papiledema debe existir un
aumento de la presión del líquido cefalorraquídeo por en-
cima de 200 mm de H2O, cuyo valor en el sujeto normal
fluctúa entre 100 a 180 mm H 2O, que el espacio
intravaginal del nervio permanezca en comunicación con
el subaracnoideo, y que la presión del líquido cefalorra-
quídeo se transmita hasta la porción más anterior del ner- Fig. 103.11. Papiledema incipiente.
vio óptico. En niños muy pequeños con hipertensión
endocraneana, por grandes hidrocefalias congénitas no Se pueden observar también en esta fase pequeñas
se produce papiledema, lo cual se cree que se deba a la hemorragias lineales en las capas de fibras adyacentes a
extensibilidad ósea del cráneo, aunque, si la hipertensión los márgenes de la papila que pueden pasar inadvertidas,
es de rápida evolución, no es suficiente esta condición enmascaradas en la arborización de los vasos.
para que no se desarrolle. La presencia de latido venoso espontáneo, es otro
La medida de la presión del líquido cefalorraquídeo elemento que ayuda a negar la hipertensión
mediante punción lumbar, en casos de verdaderos endocraneana, ya que desaparece por encima de los
papiledemas en los que se haya descartado lesión 200 mm H2O, pero su ausencia no afirma el papiledema,
intracraneal expansiva, a veces es necesaria pero conlle- pues puede faltar en parte de los sujetos normales y en
va riesgos; estos pueden disminuirse si se usa un trócar momentos determinados.
fino y se extrae poca cantidad de líquido cefalorraquídeo. En el papiledema incipiente, la excavación de la
La posibilidad que brindan los nuevos estudios papila sigue intacta, las venas empiezan a ingurgitarse y
imagenológicos, de conocer el estado del contenido hacerse algo más oscuras. Al mantenerse la hipertensión
intracraneal y del sistema ventricular, permite abolir o dis- endocraneana el papiledema pasa a una fase de desa-
minuir la posibilidad de complicaciones por enclavamien- rrollo en la cual aumenta el edema intersticial; los bor-
to en la punción lumbar. des del disco óptico se elevan sobre el plano de la retina
En el papiledema se han descrito fases o estadios. y se hacen borrosos; los vasos quedan hundidos entre
La forma incipiente es la más difícil de diferenciar de otras las fibras edematosas y pierden su nitidez; aumenta la
entidades que provocan elevación y/o borramiento de la dilatación capilar y la ingurgitación venosa; pueden apa-
papila (Fig. 103.11). En esta fase, el papiledema puede recer exudados algodonosos por el infarto en las capas
ser asimétrico. Para su diagnóstico es importante tener de fibras y aumentan las hemorragias, esta última casi
en cuenta el patrón normal de fibras peripapilares y su siempre en relación con la rapidez de la instalación. Los
visualización con oftalmoscopia, usando luz aneritra para exudados pueden verse también siguiendo las fibras ra-
poder detectar los sutiles cambios que se producen en los diadas que rodean la mácula, en su lado nasal, sobre el
espacios extracelulares que rodean a las fibras. Los polos haz papilomacular. La excavación comienza a cerrarse
superiores e inferiores, algo más borrosos por el mayor y el edema retiniano circundante da un aspecto agran-
agrupamiento y grosor de las fibras, normalmente se en- dado a la papila (Fig. 103.12). Es posible la formación
turbian con el edema y no dejan ver las estriaciones que de pliegues retinianos circulares, lo que es conocido como
quedan entre los paquetes de fibras ganglionares que los signo de Paton. En esta fase es posible medir la protrusión
forman, las cuales confluyen para salir del globo ocular. del disco óptico mediante enfoques del área retiniana no
Se pierde el reflejo luminoso lineal producido por estos edematosa y la porción más elevada del disco, para lo
paquetes de fibras al hacer incidir sobre ellos un haz de cual se debe recordar que tres dioptrías positivas del
luz. Este hecho, junto a la dilatación de capilares es uno oftalmoscopio es igual a 1 mm de elevación de la papila.
de los primeros signos en ser observados por oftalmoscopia La reabsorción total de un papiledema desarrolla-
y preceden a la ingurgitación venosa, aunque es difícil a do puede durar varias semanas y tener períodos de agu-
veces interpretar las variantes de color del disco normal y dización y de disminución o regresión, lo que suele dejar
definir si hay hiperemia. huella en la retina peripapilar circundante.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1303


Fig. 103.12. Papiledema desarrollado. Fig. 103.14. Papiledema atrófico.

Si la hipertensión persiste, pasa a la fase de El momento de aparición de la fase atrófica del


papiledema crónico. Al transcurrir los meses, se papiledema se ha visto variar desde 6 semanas de la
reabsorben las hemorragias, los exudados y el edema evaluación inicial hasta meses, o años después y parece
de retina. La papila se mantiene elevada con gran di- estar relacionado con su gravedad y constancia.
latación de capilares, en forma de cabeza de meduza El diagnóstico del papiledema debe ser del dominio
(Fig. 103.13). En esa fase, puede confundirse con un del pediatra y del oftalmólogo, por lo grave de su pronóstico
disco anómalo sin excavación central. Los campos y por la gran frecuencia con que se presentan en sus con-
visuales se contraen antes de llegar a esta fase. Es- sultas niños que se quejan de cefalea, en los que se debe
tán indicadas entonces las intervenciones quirúrgicas descartar la presencia de papiledema. La cefalea puede
para tratar de evitar la atrofia, como la fenestración ser provocada también por múltiples causas generales y
del nervio óptico o las derivaciones del líquido por problemas oftalmológicos que son frecuentes, como
cefalorraquídeo. defectos refractivos, anisometropías y heteroforias
descompensadas. En el diagnóstico diferencial ayuda el tipo
de cefalea, que en la hipertensión endocraneana es aguda
o subaguda y progresiva, a diferencia de la causa ocular
que suele ser crónica e intermitente; pero se debe tener en
cuenta que no toda hipertensión endocraneana se mani-
fiesta por papiledema, sobre todo en niños pequeños. Exis-
te un gran grupo de enfermedades que provocan edema de
la papila sin hipertensión endocraneana, con las que se debe
hacer también el diagnóstico diferencial con el papiledema.
En la hipertensión arterial puede verse edema del disco
óptico por los cambios vasculares en el nivel de la retina y
papiledema, si existe encefalopatía hipertensiva.

Atrofia óptica o papilar


La atrofia de la papila es un signo o secuela, no una
Fig. 103.13. Papiledema crónico.
enfermedad; se produce por la degeneración de las fibras
nerviosas de diferentes causas. Esta atrofia del nervio
En la fase atrófica la papila se ve aplanada y toma
puede ser parcial o total. La papila se observa pálida, blan-
un aspecto blanco o grisáceo; se observan vasos afina-
ca o blanca grisácea y los vasos muchas veces son finos,
dos y envainados por la gliosis reactiva, dando un aspec- por la enfermedad causal o como consecuencia del pro-
to de atrofia sucia, aunque también la papila puede quedar pio tejido atrófico que requiere menos vascularización.
solo pálida sin este otro elemento. A la gliosis puede su- No es siempre evidente desde los primeros momen-
marse alteración del epitelio pigmentario foveal, sobre tos del daño al nervio, si la lesión no está cerca de la papila.
todo si el descenso de la tumefacción fue muy brusco, lo El tiempo de la aparición de la palidez papilar depende, en
que añade más deterioro visual al ya producido por la gran parte, de la distancia a que se encuentre la lesión y de
atrofia de fibras (Fig. 103.14). si hay fenómenos isquémicos graves añadidos.

1304 Tomo III


Aparece como secuela de edema papilar (inflama- La papilitis se ve más en los niños y con cierta
torio o por éstasis), debido a enfermedades heredode- frecuencia es bilateral. Su causa es casi siempre
generativas, metabólicas, desmielinizantes, congénitas, posinfecciosa, por reacción inmunológica, como después
carenciales, como por ejemplo, la deficiencia de vitami- del sarampión, parotiditis, mononucleosis infecciosa, ti-
na B12 y otras vitaminas del complejo B; causada por foidea, infecciones respiratorias altas, encefalitis y
algunas anemias, traumas, compresiones, inflamaciones; meningoencefalitis, en especial posvírica, sin que nece-
por toxicidad de determinados medicamentos como la sariamente se produzca una encefalopatía posinfecciosa.
quinina, cloroquina o por otros tóxicos, entre ellos metanol La sífilis, la sarcoidosis, el criptocoquiasis, la tuberculosis y
o alcohol metílico y por glaucoma. El aspecto de la papila la toxoplasmosis, entre otras enfermedades infeccio-
puede hacer sospechar su causa y el sitio donde comen- sas, pueden afectar al nervio óptico. También procesos
zó la lesión ganglionar. inflamatorios de la órbita o cavidades vecinas, como desde
los senos perinasales, pueden producir una neuritis ópti-
Procesos inflamatorios ca, y con mayor frecuencia el hemofilus.
Entre estos procesos se destacan la papilitis o neu- En los casos de neuritis se suele observar con el
ritis óptica y la neurorretinitis estrellada de Leber. oftalmoscopio, edema de la papila y retina circundante,
La papilitis o neuritis óptica anterior es un pro- hemorragias y exudados que son indistinguibles del ede-
ceso inflamatorio local de la papila, que por lo regular es ma pasivo de la papila en su etapa de desarrollo, excep-
unilateral y transcurre con edema, en el cual el paciente to en la afectación de las funciones visuales que son
sufre de alteraciones precoces e importantes de la vi-
precoces y por lo regular importantes en las neuritis
sión y del campo visual, a diferencia del edema por éx-
(Fig. 103.15).
tasis papilar, en que la deficiencia visual no aparece, por
lo regular, hasta que sobreviene la etapa de atrofia. La
neuritis puede afectar al nervio óptico en su porción
retrobulbar y ser normal el fondo de ojo durante un tiem-
po, o dar una papilitis, asociada a inflamación de la úvea
o de la retina peripapilar o no. En ella se ve edema del
disco óptico, hemorragias, exudados y células en el ví-
treo, sobre todo en los casos de origen infeccioso. Tam-
bién se puede nombrar como: axial, cuando afecta a la
porción del haz papilomacular, periaxial cuando toma la
porción extramacular y perineuritis, cuando son las vai-
nas del nervio las que están más inflamadas.
El paciente puede sentir dolor retroocular modera-
do que se exacerba con los movimientos del ojo. Los
hallazgos en los estudios funcionales son: grave pérdida
de la agudeza visual, de instalación en horas o días. En Fig. 103.15. Papilitis.
el campo visual se observa escotoma central o de cual-
quier otro tipo, en dependencia del área del nervio más
afectada; grave déficit en el reconocimiento de los colo- Es raro que ocurra aislada en el niño, y puede ser
res y desaturación, con alteración sobre todo del rojo y parte de una enfermedad desmielinizante, como la es-
verde. La respuesta pupilar aferente es paradójica en el clerosis múltiple, la neuromielitis óptica de Devic, que
ojo afecto. suele comenzar por un solo ojo y días después se afecta
En pacientes con neuritis óptica anterior se pueden el otro ojo y a continuación la paraplejía, con recupera-
observar células en el vítreo, que, si son abundantes, ción variable; la enfermedad de Schilder, también rara,
hablan a favor de un proceso inflamatorio infeccioso, bilateral con muy poca recuperación y fatal en los pri-
primario ocular o asociado con una enfermedad sistémica, meros años de vida.
lo que sugiere el diagnóstico causal y el tratamiento. Este En estos casos, la afección también puede ser
debe llevarse a cabo por personal especializado, quien retrobulbar, con fondo de ojo normal hasta que la dege-
decidirá si se debe usar esteroides (metilprednisolona) o neración retrógrada descienda y se haga visible la pali-
no, u otros antinflamatorios no esteroideos y antibióticos dez del disco óptico.
sobre la base del examen ocular y a la sospecha de en- La neuritis estrellada es de carácter monocular.
fermedad infecciosa como causa. Tiene un patrón morfológico específico, con edema foveal

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1305


y exudados profundos alrededor de la mácula como una nósticos. Se caracteriza por deficiencia visual moderada,
figura estrellada que puede ser incompleta (Fig. 103.16). poco progresiva, que se detecta por lo regular entre los
Puede verse también con hiperemia y edema del disco, 5 y 10 años de vida; deficiencia visual variable, entre 0,8 y
excepto en los raros casos que se presenta con atrofia 0,2, bastante simétrico entre los dos ojos y sin recupera-
óptica de instalación rápida. Casi siempre tiene un ca- ción visual; escotomas centrales o centrocecales no muy
rácter benigno, pues a las pocas semanas se mejora de densos, con caídas temporal superior de las isópteras
forma importante la visión y en la mayoría de los pacien- medianas y las periféricas son normales; defectos de vi-
tes no queda secuela. La presencia de exudados alrede- sión de colores, sobre todo en el eje de color amarillo azul,
dor de la mácula, le da el aspecto estrellado ("estrella al contrario de otras neuropatías ópticas en que casi siem-
macular"), el disco óptico muestra un aspecto edematoso pre se afecta más o casi exclusivamente el eje rojo verde.
como el de los primeros estadios del papiledema. Esto rompe con la regla de Koellner, quien dijo que las
enfermedades que lesionan primariamente los
fotorreceptores y las células bipolares de la retina dan
defectos al color amarillo azul y las neuropatías al rojo
verde. Hay palidez del disco, casi siempre a predominio
temporal, y en forma de gran excavación, lo que hace que
se confunda con el glaucoma juvenil (Fig.103.17). A ve-
ces transcurre asintomática.

Fig. 103.16. Neurorretinitis estrellada.

En muchos casos queda sin aclararse la causa, pero


los prodromos de enfermedad viral son frecuentes. Su
causa se ha identificado con enfermedades infecciosas:
la infección por Bartonella henselae, la enfermedad de
Lyme, la fiebre por arañazo de gato, entre otras. No se
Fig. 103.17. Atrofia óptica autosómica dominante.
relaciona con el cuadro clínico de inicio de la esclerosis
múltiple como sucede con las neuritis retobulbares o
La pérdida de células ganglionares que la caracte-
anteriores y las pars planitis. riza, como sucede en la neuropatía óptica hereditaria de
Leber, ha sugerido una posible falla mitocondrial. El gen
Neuropatías ópticas hereditarias de la AOAD está en el brazo largo del cromosoma 3 en
Las neuropatías ópticas de tipo hereditario son casi todos los pedigrís. Hoy se dice que la AOAD tipo
prácticamente monosintomáticas bilaterales y se OPA1, o del gen nuclear OPA1, localizado en
muestran por palidez del disco de aspecto limpio y a cromosomas 3q28-q29, es causada por falla en la pro-
veces la palidez está más localizada a determinado sec- teína mitocondrial que tiene que ver con la vulnerabili-
tor. Pueden ser de varios tipos y herencias. La atrofia dad de las células ganglionares. Allí se han encontrado
óptica hereditaria también se ve como manifestación ya cuatro diferentes mutaciones en los casos con este
degenerativa o del desarrollo y acompañando a enfer- tipo de atrofia hereditaria, lo que demuestra un papel
medades sistémicas. Entre ellas se encuentran la forma para la mitocondria en su fisiopatología, localizada en las
autosómica dominante, la recesiva, la atrofia óptica li- células ganglionares de la retina. La herencia se descri-
gada al X y la neuropatía óptica hereditaria de Leber, be recientemente como semidominante, más que pura-
algunas de origen mitocondrial. mente dominante. La penetrancia es variable. Otro locus
La atrofia óptica autosómica dominante, menos frecuente en 18q12.2-12.3 ha sido también iden-
(AOAD) o de Kjer, es la más frecuente de las neuropatías tificado. En Cuba, se desconoce su incidencia y hay una
hereditarias, con incidencia de 1/10 a 12 000 habitantes; sola familia notificada con comprobación molecular, la
Kjer la describió en 1959 apoyándose en sus criterios diag- que procede de la región de Mayajigua, provincia Sancti

1306 Tomo III


Spíritus, quien fue estudiada molecularmente en coope- visión periférica, en la mayoría, por lo cual estos pacientes
ración con Alemania. En las bases de datos del departa- mantienen la deambulación, sin llegar a una ceguera total.
mento de Neuroftalmología del Instituto de Neurología y En el fondo del ojo en un inicio se pueden observar dilata-
Neurocirugía, hay más de 60 casos, en menos de 10 años, ciones capilares y telangiectasias, las cuales han sido reco-
con este diagnóstico posible por los hallazgos clínicos, nocidas en el segundo ojo aún antes de que comiencen en
que no se han podido comprobar por estudio molecular. él los síntomas. Seguidamente da paso a la atrofia del haz
Los exámenes revelan considerables variaciones papilo macular y a palidez temporal del disco, que en los
en la expresión de la enfermedad entre pacientes y fa- casos de peor visión se hace total (Fig. 103.18). La mejo-
miliares con la mutación, que van desde la visión normal ría de la función visual es poco frecuente.
a muy deteriorada, sin relación con la posición o el tipo
de mutación. Para determinar el tipo de herencia se hace
necesario examinar a sus familiares, y si el estudio de
ellos es normal se deben incluir pruebas de función es-
pecíficas como la de FMH 100, o potenciales evocados
visuales, buscando afectación subclínica en posibles por-
tadores. Con relativa frecuencia aparecen casos de nue-
va mutación, que en una de las series de Delettre
sobrepasan el 40 %. Este autor propone que al menos
dos modificaciones de la OPA1 pueden llevar a la AOAD.
La atrofia óptica de forma autosómica recesiva
es muy poco frecuente. Provoca una deficiencia visual
Fig. 103.18. Neuropatía óptica hereditaria de Leber.
por lo regular mayor y se acompañan con otras lesiones
del sistema nervioso central que hacen muy grave el En Cuba, se han encontrado familias con los tres ti-
cuadro clínico; la muerte sobreviene en un lapso corto pos de mutaciones primarias que se describen en esta enti-
de tiempo, aunque existe una forma recesiva menos dad: 11778, 3460 y 14484. En la zona de Bayamo se localiza
invalidante que hay que diferenciar del resto. En ella, de la familia de mayor número de casos conocidos; ellos por-
padres por lo regular consanguíneos, la deficiencia vi- tan la mutación en la posición 11778 que es la más frecuen-
sual se detecta en los 3 ó 4 primeros años de vida y se te. Otro sitio de alta prevalencia de la enfermedad y la misma
presenta con grave deterioro visual, atrofia óptica total y mutación es el de las montañas del Escambray y las ciuda-
por lo regular nistagmo. Su similitud de síntomas y as- des y poblaciones cercanas. En las bases de datos del Ins-
pecto de fondo con la enfermedad de Leber y otras tituto de Neurología y Neurocirugía de Cuba, pasan de 15
abiotrofias tapetorretinianas, hacen complejo su diagnós- las familias registradas, con numerosos miembros afecta-
tico, que se basan en ERG anormal para estas últimas. dos. En portadores asintomáticos con la mutación se ha
La forma de atrofia óptica hereditaria ligada al detectado este estado mediante pruebas de función muy
X es aún más rara y hasta se duda de su verdadera precisas como la prueba de sensibilidad al contraste y de
existencia. colores. En el examen de fondo de ojo se ha observado la
La neuropatía óptica hereditaria de Leber dilatación de capilares, lo que se ha visto también en pa-
(NOHL) es considerada entre las enfermedades cientes antes de hacerse sintomáticos.
mitocondriales de herencia materna; por lo regular, no
aparece la deficiencia visual hasta entrada la adoles- Neuropatías toxiconutricionales
cencia, o la juventud, aunque la edad de iniciarse puede Este tipo de neuropatía es también bilateral, bas-
ser menor o mayor, lo que suele ser similar en una mis- tante simétrica y con escotomas centrales o
ma familia. En Cuba, el caso de menor edad confirmado
cecocentrales de variado tamaño. Por lo regular, son
como NOHL por estudio de ADN es una niña que pre-
provocadas por deficiencias de determinados nutrientes
sentó la enfermedad a los 9 años y un varón de 11 años
necesarios en la cadena de fosforilación oxidativa para
y el de mayor edad, un hombre de 50 años. En general
producir ATP o por tóxicos que interfieren los pasos de
tiene una incidencia de 1/40 000 a 1/50 000 habitantes.
esa cadena. Un ejemplo es la neuropatía alcohólico-
Predomina en varones, es binocular, aunque puede
tabáquica o nutricional. Su parecido en el examen
comenzar con diferencia en el tiempo entre uno y otro ojo.
La presentación es de forma subaguda, deficiencia visual oftalmológico con la NOHL en fases iniciales o que con-
que progresa en días o semanas, al unísono o con un inter- servan relativa buena visión es extraordinario, excepto
valo de semanas o meses entre la pérdida de la visión entre que la NOHL no siempre se presenta al unísono en
uno y otro ojo. Los estudios de campo visual muestran un ambos ojos y la deficiencia visual y la atrofia óptica sue-
escotoma central grande, denso, con conservación de la len ser más graves y casi total en la NOHL (Fig. 103.19).

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1307


seudotumor de la órbita, cavidades vecinas, o metásta-
sis a distancias pueden afectarlo por compresión, infil-
tración o isquemia.
Los tumores primarios del nervio óptico son los que
por lo regular se presentan con deficiencia visual an-
tes de que el exoftalmo aparezca o se haga manifiesto,
sobre todo en el caso del glioma, cuyo primer y, a veces,
único síntoma es la deficiencia visual progresiva, con el
consiguiente estrabismo y hasta nistagmo del ojo afecto.
En el estudio del fondo de ojo se observa edema del
disco óptico o una marcada atrofia, aunque puede verse
antes de la atrofia, el edema del disco infiltrado y com-
plicarse con obstrucción de la vena central; en raras
Fig. 103.19. Neuropatía óptica toxiconutricional.
ocasiones se presentan como un síndrome isquémico
ocular. Es frecuente en pacientes con neurofibromatosis
Existen muchos medicamentos y sustancias, que tipo 1. En ocasiones son de lentísimo crecimiento, por lo
asociadas a problemas nutricionales o no, pueden ocasio- cual el tratamiento de excéresis debe ser bien valorado
nar lesión de los nervios ópticos. Entre ellos los mediante el seguimiento con estudios imagenológicos.
antituberculosos, determinados antibióticos, antineo- Muchas veces, afectan al quiasma tempranamente o
plásicos y sustancias como el metanol, tolueno, el alcohol, parte de él, dando síntomas y signos de afectación bila-
tabaco entre otros. Estos dos últimos, por su frecuencia, teral; es frecuente el nistagmo monocular. Se ha descri-
han sido objeto de múltiples estudios y descripciones, en to pérdida visual brusca por hemorragia intratumoral, pero
los que el factor de disbalance nutricional se considera por lo regular el curso es progresivo. En ciertos casos la
indispensable para que se produzca la neuropatía. La atro- radioterapia y la cirugía, si el tumor es unilateral y loca-
fia del haz papilomacular es característica en estas enfer- lizado a la órbita, pueden ser valoradas, pero el trata-
medades toxicometabólicas y nutricionales que puede miento de estos casos es complejo y debe decidirse
llegar a afectar todo el disco óptico. El mismo cuadro clí- individualmente. La involución espontánea de este tipo
nico se ha descrito en embarazo, lactancia y otras enfer- de tumor ha sido descrita.
medades por deficiencias de vitaminas del complejo B, en Los meningiomas de las vainas del nervio son
tumores de crecimiento lento que producen proptosis dis-
prisioneros de guerra y poblaciones con crisis que las lle-
creta y deficiencia visual, que suele ir acompañada por
va a una disminución alimentaria brusca.
papiledema con comunicaciones arteriovenosas
Un cuadro clínico toxiconutricional similar apare-
opticociliares anormales. En la imagen de la tomografia
ció al comenzar un gran período de restricción alimentaria
axial computarizada puede verse la clásica descripción
en Cuba por graves problemas económicos en el país,
en raíles de tren que produce la infiltración de las vainas
en 1992, lo que se convirtió en la epidemia del sistema
del nervio por el tumor.
nervioso más grande de ese siglo al notificarse en me-
Otros de los tumores que con más frecuencia pue-
nos de 5 meses del año 1993, 50 000 casos. Esta situa-
den afectar la función del nervio óptico son: linfomas,
ción se mejoró con rapidez al suplir a la población con
seudotumores, quistes dermoides, neurofibromas,
tabletas multivitamínicas y alertar en elevar la calidad
rabdomiosarcomas, hemangiomas, carcinomas metas-
de los alimentos y eliminar los tóxicos; 8 años después
tásicos, tumores de glándulas lagrimales, entre otros. En
se mantenía solo como una endemia.
casos de meningitis carcinomatosa o linfomatosa la afec-
La población infantil fue la menos afectada, lo que
tación del nervio óptico es frecuente.
se consideró que se debió a la ausencia del uso o abuso
Las malformaciones orbitarias pueden provocar
del alcohol y tabaco, reconocidos como factores de alto
compresión del nervio óptico, producir hipertrofias óseas
riesgo para padecer la enfermedad en esa epidemia y la
de los huesos de la órbita, las que se observan en la
protección que en la esfera alimentaria gozan los niños craneosinostosis, y en enfermedades óseas, como la
en Cuba, lo que pudo conservarse en los períodos de enfermedad de Paget, carcinomas metastásicos y otras.
crisis económica más fuertes. En la enfermedad compresiva del nervio óptico
o en el resto de la vía óptica pregeniculada la deficiencia
Tumores y neuropatías compresivas visual es lenta y progresiva y la atrofia óptica descen-
del nervio óptico o la vía visual dente es lo esperado. En dependencia del sitio de la com-
Los gliomas y los meningiomas son los tumores presión así serán las alteraciones del campo visual, el
primarios del nervio óptico, aunque cualquier tumor y sitio de la palidez del nervio y la atrofia de fibras

1308 Tomo III


ganglionares de retina, lo que define patrones En los niños con este tipo de campo visual hay que
oftalmoscópicos y campimétricos de gran ayuda para el pensar en un craneofaringeoma, como primera posibili-
diagnóstico topográfico y a veces causal. dad, que constituyen el 3 % de todos los tumores
Una lesión unilateral prequiasmática produce atro- intracraneales. Se cree surgen a partir de los remanen-
fia de la papila de un solo ojo y la palidez será mayor en tes de las bolsas de Rathke. Crecen hacia la cisterna
la parte de la papila por donde pasan las fibras afecta- suprasellar e invaden las estructuras circundantes. Cuan-
das, tomando en consideración la exacta distribución do se extienden al tercer ventrículo bloquean el flujo de
topográfica de ellas. líquido cefalorraquídeo y provocan papiledema por hi-
Si hay compresión en el centro del quiasma, donde drocefalia obstructiva. Se acompañan de trastornos en
las fibras nasales se cruzan, o en las cintillas ópticas, don- el crecimiento y desarrollo, pubertad precoz, diabetes
de la mitad de las fibras son directas y la otra mitad cruza- insípida y obesidad.
das, la palidez que se instala es bilateral y con dos patrones
Los adenomas de hipófisis son más raros en el
diferentes según sea la compresión, quiasmática o
niño, pero no tanto en el adulto joven.
posquiasmática. En el primero, la palidez del disco óptico
Los meningiomas del ala del esfenoides, tubércu-
es de preferencia en el borde temporal y en el nasal de la
papila, sin llegar a los polos, dando una imagen de "lazo de los de la silla y del bulbo olfatorio pueden afectar al ner-
corbata o alas de mariposa" en ambos ojos por igual. Esto vio, pero la deficiencia visual suele ser más tardía; son
sucede ya que por el borde temporal de las papilas pene- raros en niños. En los del bulbo olfatorio se presentan
tran las fibras del haz papilomacular y sobre todo las fi- por lo regular, con anosmia, atrofia óptica del lado del
bras de retina nasal de ese haz y por el borde nasal de la tumor y puede, al crecer más, producir papiledema del
papila penetran el resto de las fibras de retina nasal, o sea, lado contrario, como a veces sucede en los tumores fron-
las que se cruzan en el quiasma. En este caso el campo tales de esta región, dando el clásico síndrome de Foster
visual demuestra un defecto hemianóptico temporal. Kennedy.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1309


Sin embargo, la atrofia óptica de un ojo y el edema • La distrofia neuroaxonal de Shilder, oligosacaridosis
papilar del otro ojo, elementos que componen parte de lisosomal con nistagmo, retardo del desarrollo
este síndrome, se observa con más frecuencia en el adul- psicomotor, debilidad y neuropatía periférica.
to de la tercera edad que sufre de isquemia óptica • La ceroidosis liposomal infantil tardía o Jansky-
neuropática cuando se afecta el segundo ojo, dando un Bielschowsky con retinopatía pigmentaria, ataxia,
falso síndrome de Foster Kennedy. convulsiones, espasticidad y pérdida del lenguaje.
Si la lesión es retrogeniculada no son las fibras • La adrenoleucodistrofia, enfermedad perixosomal con
nasales de ambos ojos que se cruzan en el quiasma ceguera cortical, disartria, cuadriparesia, que se aso-
las afectadas, sino las nasales de un ojo y las tempo-
cia a la enfermedad de Addison.
rales del otro. Por eso en la papila contralateral a la
lesión se observa una pérdida de fibras nasales, tanto
Entre las enfermedades del inicio de la infancia
las que entran por su borde nasal y por su borde tem-
poral, dando la palidez en esos sitios, como ya se des- que cursan con atrofia óptica están:
cribió en "lazo de corbata", mientras que en el otro • Esfingolipidosis: Enfermedad de Krabbe debida a un
ojo se afectan las fibras de retina temporal, que son defecto bioquímico que cursa con ceguera cortical,
las que entran agrupadas estrechamente por los polos irritabilidad, espasticidad y fiebre.
superior e inferior de la papila. En este caso, el cam- • Gangliosidosis GM2:
po visual muestra una hemianopsia homónima; dere- − Tay Sachs.
cha, si la lesión es izquierda, e izquierda, si la lesión − Sandhoff.
es derecha. Las lesiones posgeniculadas de la vía vi- − Niemann-Pick, con la mancha rojo cereza en la
sual dan este mismo tipo de defecto de campo visual, mácula y nistagmo, por defecto bioquímico en las
pero no provocan atrofia óptica, pues dañan la última hexosaminidasas y esfingomielinasa.
neurona de la vía visual y no la intermedia, que es la • Ceroidosis lisosomales infantil de Santavouri-Haltia
que forma el nervio óptico. con retinopatías pigmentarias, retardo del desarro-
llo, coreoatetosis y convulsiones.
Otras atrofias ópticas • Síndrome de Zellweger o enfermedad perisosomal:
En gran parte de las degeneraciones del sistema
Retinopatía pigmentaria, opacidad corneal, catara-
nervioso, los procesos metabólicos anormales, o las
ta y glaucoma, frente alta, hipotonía, retardo
enfermedades mitocondriales, la atrofia óptica es un ha-
psicomotor, convulsiones, hepatomegalia y riñones
llazgo frecuente. La mayor parte de ellas se ven for-
mando parte de un síndrome. poliquísticos.
Entre las atrofias ópticas que aparecen en la ado-
lescencia o cercana a ella están: Otras enfermedades con atrofia óptica, de origen
• La ataxia de Friedreich, que cursa con nistagmos y desconocido que cursan con atrofia óptica son:
pérdida de la audición y cuyo origen es desconocido. • Enfermedad de Canavan, con hipotonía y convulsio-
• La enfermedad mitocondrial de Fukuhara con nes y la enfermedad de Pelizaeus-merzbacher, con
mioclonias, ataxia y debilidad. espasticidad y retardo psicomotor, las que se aso-
• Las esfingolipidosis lisosomales, donde la atrofia óptica cian a nistagmo.
es el único signo visual; se acompaña con cambios de
personalidad, cálculos biliares, incontinencia y ataxia. Enfermedades mitocondriales. Son un grupo de
afecciones multisistémicas con manifestaciones clíni-
Al final de la infancia y comienzo de la adolescen- cas heterogéneas, que dañan principalmente al múscu-
cia es el momento de la posible aparición de: lo y al sistema nervioso. Entre los órganos que más
• La distrofia neuroaxonal, que se suele acompañar de afecta está, el ojo, donde se pueden observar cuatro
ceguera cortical, nistagmo, esotropia, debilidad, grupos principales de alteraciones, casi siempre bilate-
neuropatía periférica y ataxia, cuyo origen es desconocido rales, que pueden asociarse entre sí. Las manifesta-
como lo es también la ataxia telangiectásica o síndrome
ciones más frecuentes son neuropatía óptica bilateral,
de Louis Bar, en la que se observan telangiectasias
oftalmoplejia extrínseca con ptosis, retinopatía
conjuntivales, nistagmo y sácadas dismétricas con
pigmentaria, hemianopsias homónimas y ceguera
ataxia, neuropatía y trastornos inmunológicos.
• La leucodistrofia metacromática, en la que se pre- cortical, además de catarata y opacidades corneales
senta nistagmo, debilidad, ataxia y demencia. (Figs. 103.20, 103.20A y 103.21).

1310 Tomo III


Enfermedad Manifestación oftalmológica Neuropatías isquémicas
Oftalmoplejia externa Oftalmoplejia, ptosis y Las neuropatías isquémicas es otra entidad cuyo
crónica progresiva retinopatía pigmentaria cuadro fondoscópico es muy parecido al de la papilitis.
(OECP), Kearne Sayre (Fig. 103.21) En el niño son raras y se pueden ver en el curso de
Neuropatía óptica Microangiopatía, arteritis provocada por enfermedades sistémicas como
hereditaria de Leber pseudopapiledema, las colagenosis, pérdidas agudas y profusas de sangre,
(NOHL) tortuosidad vascular, pérdida compresión mantenida sobre el globo ocular, entre otras.
de haz de fibras papi-
La causa arterítica y arterioesclerótica son las más
lomacular, atrofia óptica
frecuentes, pero solo en pacientes de la tercera edad o
Miopatía mitocondrial, Hemianopsias homónima, cercanos a ella. Se caracterizan por grave alteración de
encefalopatía, acidosis ceguera cortical, retinopatía
la función visual, como se ve en las papilitis, pero de
láctica y episodios de pigmentaria, oftalmoplejia,
infartos (MELAS) atrofia óptica carácter ictal, por lo regular, reflejo pupilar aferente
paradójico en el ojo afectado y edema isquémico, o
Debilidad muscular Retinopatía pigmentaria
pálido, del disco. Van rápidamente hacia la atrofia de la
neurógena, neuropatía y atrofia óptica
periférica, ataxia y papila (Fig. 103.21). Pueden dar escotomas de variados
retinopatía pigmentaria tipos, altitudinales, arciformes o centrales.
(NARP) y síndrome
de Leight
Epilepsia mioclónica Atrofia óptica
y fibras rojas rasgadas
(MERFF)
Síndrome de Wolfram Distrofia macular y atrofia
(MIDD) óptica
Encefalopatía mitocondrial Oftalmoplejia, ptosis y
gastrointestinal (MINGIE) retinopatía pigmentaria

Fig. 103.21. Isquemia óptica neuropática anterior.

Traumatismos
El nervio óptico a todo lo largo de su recorrido y la
vía visual puede ser dañado por traumas directo o de
contragolpe.

Bibliografía
American Academy of Ophthalmology. Neuro Ophthalmology.
Section 5. The sensory visual system. Basic and Clinical
Science course 99-2000. 71-95.
Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Neuro-
Ophthalmology. San Francisco: American Academy of
Opthalmology;2003-2004.
Delettre C, Lenaers G, Pelloquin L, Belenguer P, Hamel CP OPA1
(Kjer type) dominant optic atrophy: a novel mitochondrial
disease. Mol Genet Metab 2002 Feb; 75(2):97-107.
Fuentes D, Santiesteban R, Francisco M, Hodelín R. Estudio
psicofísicos y electrofisiología, en la neuritis óptica. Rev
Cubana Oftalmología 1992;2:98-105.
González Quevedo A, Santiesteban R. Luis S, et al.
Figs. 103.20 y 103.20 A. Oftalmoplejía externa crónica pro- Inmunoglobulins in epidemic neuropathy in Cuba. J Neurol
gresiva, síndrome de Kearne Sayre y su fondo de ojo. Science 1994;127:234-5.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1311


Hedges, Thomas R. Tratamiento de la neuropatía óptica: nuevas Santiesteban Freixas R, Rodríguez Hernández M, Hirano M,
posibilidades. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2). Francisco Plasencia M, Mendoza Santiesteban C, Carrero
Hellstrom A, Wiklund LM, Svensson E. Diagnostic value of Salgado M, Méndez Larramendi I, Serrano Verdura C, Luis
magnetic resonance imaging and planimetric measurement of González S. Neuropatía óptica hereditaria de Leber y su
opic disc size in confirming optic nerve hypoplasia. J Aapos posible relación con la reciente epidemia de Cuba. Rev Neurol
1999;3(2):104-8. 1999;29(4):289-96.
Hirano M, Santiesteban R et al. Clinical course of a cohort in the Santiesteban Freixas R, Rodríguez Hernández M, Mendoza
cuban epidemic optic and peripheral neuropathy. Neurology Santiesteban CE, Carrero Salgado M, Francisco Plasencia M,
1997;48(1);19-22. Méndez Larramendi I, et al. Manifestaciones clínicas e
Hodelin R, Santiesteban R, Fuentes D. Manifestaciones identificación molecular de pacientes con neuropatía óptica
oftalmológica en niños operados por craneosinostosis. Rev. hereditaria de Leber en centro de referencia nacional para la
Cub. De Oftalmología 1997;2:91-7. neuroftalmología en Cuba. Rev Neurol 1999;29(5):408-15.
Hutzelman A, Buhl R, Freund M. Pseudotumour cerebri and optic Santiesteban Freixas, Rosaralis. Error diagnóstico en la neuropatía
hydropsmagnetic resonance imaging diagnostic and óptica epidémica. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
therapeutical considerations in a paediatric case. Eur-J-Radiol Santiesteban R. Drusas pupilares en el niño. Rev. Cubana
1998;28(2):126-8. Oftalmol 1988;1:50-7.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric Tabeada Lugo Noel, Roberto Lardoeyt Ferrer y Rubén Rangel
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. Fleites Atrofia óptica hereditaria autosómica dominante. A
2005, p 385-494. USA. propósito de una familia. Atrofia óptica hereditaria
Liu GT, Volpe NJ, Galetta SL. Neuro-Ophthalmology. Diagnosis autosómica dominante. Rev Cubana Oftalmol 2004;17(2):.
and Management. Saunders co. 2001. Chapter 5. Visual loss.
Optic Neuropathies:103-187.
Lutz A. Anales de la Academia de Ciencias. La Habana, 1912; 48:
485-489.
María Cáceres Toledo, Melba Márquez Fernández, Armando
. Capítulo 104 .
Curra Fabra Tumores hipofisarios. Su repercusión sobre la
vía visual . Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1).
Mendoza E, Santiesteban R, Francisco M, Urra I, Rodríguez V.
Enfermedades de las órbitas
Fenestración de las vainas del nervio óptico en la hipertensión y su contenido
endocraneana benigna. Rev Cubana de Oftalmol 1996;1:14-9. Enrique Mendoza Santiesteban, Rosaralis Santiesteban Freixas
Mendoza Santiesteban Enrique, Rosaralis Santiesteban Freixas,
Marta Francisco Plasencia, Ivan Urra Martínez y Virgilio
Las órbitas son las cavidades donde están conteni-
Rodríguez Oquendo. Fenestración las vainas del nervio óptico
en la hipertensión endocraneana benigna. dos y fijados los ojos, aunque parte de ellos protruyen
Rev Cubana Oftalmol 1996;9(1). del reborde orbital. En los niños, la órbita es asiento fre-
Mendoza Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas, Rosaralis; cuente de lesiones tumorales; además, de numerosas en-
González García, Alberto; González Hess, Luisa; Perdomo fermedades sistémicas o mal formativas que repercuten
Trujillo, Yahumara; Alemañy Rubio, Ernesto; Eguia, Frank; en las estructuras que ellas contienen. Están ubicadas
Vidal Casalís, Sergio La tomografía de coherencia óptica en el
diagnóstico de enfermedades de la retina y el nervio óptico.
sobre el macizo facial y sus paredes internas son casi
Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2) paralelas, mientras que las externas son divergentes. Es-
Miller N, Newman N. The essentials. Walsh and Hoyt Clinical tán en relación con la cavidad craneal y senos perinasales
Neuro Ophthalmology. Fifth Edition. Baltimore: Williams & por agujeros y fisuras que las comunican.
Wilkins, 2004; Chapters 10 and 11. Toxic deficiency optic En vida embrionaria las órbitas están más separa-
neuropathies. Hereditary optic neuropathies. p290-322 and
das entre sí. La separación aumentada entre ellas es
741-73.
Pascual Montano Alberto, Rosaralis Santiesteban Freixas, Betsy una anomalía congénita conocida como hipertelorismo.
Rivera Real, Enrique Mendoza Santiesteban y Marta La exacta medida de la distancia entre las órbitas se
Francisco. Base de datos de estudios e imágenes hace por estudios radiológicos; también se puede hacer
oftalmológicas. Rev Cubana Oftalmol 1997;10(1-2). de una forma fácil y rápida, con la medida de la distan-
Pila Pérez R, Rodríguez López A. Anemia hemolítica autoinmune cia interpupilar, aunque menos exacta.
y papiledema como primeras manifestaciones del lupus
eritematoso sistémico: a propósito de un caso. Rev. Cubana
Oftalmol 1991;4(2):101-5. SÍNTOMAS Y SIGNOS
Rodríguez M, Alexander Ch, Pairol I, Junkes A, Aufforth, Krastel
Desde el punto de vista clínico existen seis ele-
H, Casado M, Gispert S, Auburger G. Bases genéticas de la
heterogeneidad clínica de la AOAD. Análisis de tres pedigrees mentos de fundamental importancia para el enfoque
milligeneracionales. Rev Cubana Genética diagnóstico y terapéutico en pacientes con enfermeda-
Humana,1999,#1.v1 http//www.sld.cu Sep; 108(9):1595-602. des de la órbita:
Santiesteban Freixas R, Luis González S, Pamias González E, • Proptosis.
Francisco Plasencia M, Suárez Fernández J. Neuropatía
Óptica Epidémica. Nuestra experiencia y revisión histórica.
• Dolor.
Rev. Cubana Oftalmol 1998;11(1):54-65. • Progresión.

1312 Tomo III


Hedges, Thomas R. Tratamiento de la neuropatía óptica: nuevas Santiesteban Freixas R, Rodríguez Hernández M, Hirano M,
posibilidades. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2). Francisco Plasencia M, Mendoza Santiesteban C, Carrero
Hellstrom A, Wiklund LM, Svensson E. Diagnostic value of Salgado M, Méndez Larramendi I, Serrano Verdura C, Luis
magnetic resonance imaging and planimetric measurement of González S. Neuropatía óptica hereditaria de Leber y su
opic disc size in confirming optic nerve hypoplasia. J Aapos posible relación con la reciente epidemia de Cuba. Rev Neurol
1999;3(2):104-8. 1999;29(4):289-96.
Hirano M, Santiesteban R et al. Clinical course of a cohort in the Santiesteban Freixas R, Rodríguez Hernández M, Mendoza
cuban epidemic optic and peripheral neuropathy. Neurology Santiesteban CE, Carrero Salgado M, Francisco Plasencia M,
1997;48(1);19-22. Méndez Larramendi I, et al. Manifestaciones clínicas e
Hodelin R, Santiesteban R, Fuentes D. Manifestaciones identificación molecular de pacientes con neuropatía óptica
oftalmológica en niños operados por craneosinostosis. Rev. hereditaria de Leber en centro de referencia nacional para la
Cub. De Oftalmología 1997;2:91-7. neuroftalmología en Cuba. Rev Neurol 1999;29(5):408-15.
Hutzelman A, Buhl R, Freund M. Pseudotumour cerebri and optic Santiesteban Freixas, Rosaralis. Error diagnóstico en la neuropatía
hydropsmagnetic resonance imaging diagnostic and óptica epidémica. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
therapeutical considerations in a paediatric case. Eur-J-Radiol Santiesteban R. Drusas pupilares en el niño. Rev. Cubana
1998;28(2):126-8. Oftalmol 1988;1:50-7.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric Tabeada Lugo Noel, Roberto Lardoeyt Ferrer y Rubén Rangel
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins. Fleites Atrofia óptica hereditaria autosómica dominante. A
2005, p 385-494. USA. propósito de una familia. Atrofia óptica hereditaria
Liu GT, Volpe NJ, Galetta SL. Neuro-Ophthalmology. Diagnosis autosómica dominante. Rev Cubana Oftalmol 2004;17(2):.
and Management. Saunders co. 2001. Chapter 5. Visual loss.
Optic Neuropathies:103-187.
Lutz A. Anales de la Academia de Ciencias. La Habana, 1912; 48:
485-489.
María Cáceres Toledo, Melba Márquez Fernández, Armando
. Capítulo 104 .
Curra Fabra Tumores hipofisarios. Su repercusión sobre la
vía visual . Rev Cubana Oftalmol 1999;12(1).
Mendoza E, Santiesteban R, Francisco M, Urra I, Rodríguez V.
Enfermedades de las órbitas
Fenestración de las vainas del nervio óptico en la hipertensión y su contenido
endocraneana benigna. Rev Cubana de Oftalmol 1996;1:14-9. Enrique Mendoza Santiesteban, Rosaralis Santiesteban Freixas
Mendoza Santiesteban Enrique, Rosaralis Santiesteban Freixas,
Marta Francisco Plasencia, Ivan Urra Martínez y Virgilio
Las órbitas son las cavidades donde están conteni-
Rodríguez Oquendo. Fenestración las vainas del nervio óptico
en la hipertensión endocraneana benigna. dos y fijados los ojos, aunque parte de ellos protruyen
Rev Cubana Oftalmol 1996;9(1). del reborde orbital. En los niños, la órbita es asiento fre-
Mendoza Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas, Rosaralis; cuente de lesiones tumorales; además, de numerosas en-
González García, Alberto; González Hess, Luisa; Perdomo fermedades sistémicas o mal formativas que repercuten
Trujillo, Yahumara; Alemañy Rubio, Ernesto; Eguia, Frank; en las estructuras que ellas contienen. Están ubicadas
Vidal Casalís, Sergio La tomografía de coherencia óptica en el
diagnóstico de enfermedades de la retina y el nervio óptico.
sobre el macizo facial y sus paredes internas son casi
Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2) paralelas, mientras que las externas son divergentes. Es-
Miller N, Newman N. The essentials. Walsh and Hoyt Clinical tán en relación con la cavidad craneal y senos perinasales
Neuro Ophthalmology. Fifth Edition. Baltimore: Williams & por agujeros y fisuras que las comunican.
Wilkins, 2004; Chapters 10 and 11. Toxic deficiency optic En vida embrionaria las órbitas están más separa-
neuropathies. Hereditary optic neuropathies. p290-322 and
das entre sí. La separación aumentada entre ellas es
741-73.
Pascual Montano Alberto, Rosaralis Santiesteban Freixas, Betsy una anomalía congénita conocida como hipertelorismo.
Rivera Real, Enrique Mendoza Santiesteban y Marta La exacta medida de la distancia entre las órbitas se
Francisco. Base de datos de estudios e imágenes hace por estudios radiológicos; también se puede hacer
oftalmológicas. Rev Cubana Oftalmol 1997;10(1-2). de una forma fácil y rápida, con la medida de la distan-
Pila Pérez R, Rodríguez López A. Anemia hemolítica autoinmune cia interpupilar, aunque menos exacta.
y papiledema como primeras manifestaciones del lupus
eritematoso sistémico: a propósito de un caso. Rev. Cubana
Oftalmol 1991;4(2):101-5. SÍNTOMAS Y SIGNOS
Rodríguez M, Alexander Ch, Pairol I, Junkes A, Aufforth, Krastel
Desde el punto de vista clínico existen seis ele-
H, Casado M, Gispert S, Auburger G. Bases genéticas de la
heterogeneidad clínica de la AOAD. Análisis de tres pedigrees mentos de fundamental importancia para el enfoque
milligeneracionales. Rev Cubana Genética diagnóstico y terapéutico en pacientes con enfermeda-
Humana,1999,#1.v1 http//www.sld.cu Sep; 108(9):1595-602. des de la órbita:
Santiesteban Freixas R, Luis González S, Pamias González E, • Proptosis.
Francisco Plasencia M, Suárez Fernández J. Neuropatía
Óptica Epidémica. Nuestra experiencia y revisión histórica.
• Dolor.
Rev. Cubana Oftalmol 1998;11(1):54-65. • Progresión.

1312 Tomo III


• Palpación. En dependencia de la localización, la proptosis pue-
• Pulsación. de ser en sentido axial o desplazar el globo ocular hacia
• Cambios periorbitarios. afuera, adentro, arriba o abajo; de este modo, una lesión
que crezca en el ápex de la órbita va a producir un
La proptosis, también conocida como exoftalmos, exoftalmos axial y una lesión que crezca en la fosa de la
es el signo cardinal de los procesos que ocupan esta glándula lagrimal va a desplazar el ojo hacia adelante,
cavidad y es el desplazamiento anterior del ojo, en senti- abajo y adentro.
do axial o acompañado de algún desplazamiento en sen- En la evaluación del exoftalmos se deben tener
tido vertical o transversal. La forma de instalación, su presente otras causas capaces de producir falsas
consistencia, su reductibilidad, la asociación con dolor y proptosis sin que exista un verdadero incremento del
la presencia de soplos, entre otros elementos, permiten contenido de la órbita y entre ellas están:
orientar al médico hacia determinadas lesiones; así por • El megaloglobo.
ejemplo, un exoftalmos de aparición súbita después de • La debilidad o parálisis de los músculos extraoculares.
un trauma de cráneo, acompañado de enrojecimiento • El enoftalmos contralateral.
ocular, dolor y soplo, hace pensar en el diagnóstico de • La asimetría del tamaño de las órbitas.
una fístula carotidocavernosa. • La asimetría entre las fisuras palpebrales, ya sea por
Conceptualmente se considera que existe proptosis
ptosis contralateral o retracción del párpado ipsilateral.
cuando el globo ocular está desplazado en sentido ante-
rior por encima del grado de protrusión normal, el cual
Una forma de expresión de un grave grado de
es variable en dependencia del sexo, la edad y la raza, o
hipertensión orbitaria es la presencia de quemosis, que
cuando existe una diferencia de más de 2 mm entre un
no es más que el edema de conjuntiva secundario a la
ojo y el otro. Es también de valor el hecho de que exista
una diferencia de 1 ó 2 mm, si anteriormente no estaba hipertensión venosa que puede producirse en esos casos.
presente esa diferencia. El dolor es otro de los elementos de gran valor en
El exoftalmos es el signo cardinal de estas afec- la evaluación de estos pacientes y está generalmente
ciones y por la alta frecuencia de aparición y la precoci- asociado desde el inicio, a los procesos inflamatorios, las
dad con que lo hace, es al oftalmólogo, al médico de familia hemorragias, los traumatismos o los tumores malignos
o pediatra, a quien suele acudir, en primera instancia, un de muy rápido crecimiento. Puede ser también un sínto-
niño portador de este tipo de afección (Fig. 104.1). ma de comienzo tardío en estos procesos cuando apare-
ce exposición o irritación corneal.
En la progresión su evolución es de gran valor
diagnóstico, facilita la orientación causal de manera bas-
tante precisa, ya que la forma y el tiempo de instalación
de los síntomas permite descartar un gran número de
enfermedades que por su patrón temporal de evolución
no se ajustan a las del caso en cuestión.
En la palpación la presencia de una masa en la
región de la órbita que permita su palpación es útil, no
solo para el diagnóstico topográfico, sino también para
el causal, ya que la consistencia, su relación con otras
estructuras o su movilidad posibilita sospechar la exis-
tencia de determinadas lesiones y su naturaleza.
La pulsación es el latido que puede verse en el ojo
de forma sincrónica al cardíaco, acompañado de soplo o
Fig. 104.1. Exoftalmos del ojo derecho. no. Su presencia en pacientes con lesiones que ocupan
la órbita induce a pensar que son enfermedades de cau-
La explicación de este signo es bastante clara y se sa vascular fundamentalmente, aunque también se ve
basa en el elemento anatómico de que al ser la órbita una asociado a defectos óseos, congénitos o adquiridos, de
cavidad cerrada con una única abertura en sentido ante- las paredes orbitarias donde el latido cerebral se trans-
rior, cualquier aumento de volumen que ocurra en su inte- mite a los tejidos de la órbita.
rior va a producir un aumento de la presión, por lo cual su Los cambios periorbitarios o la presencia de cam-
contenido se va a desplazar hacia el sitio de menor resis- bios en las estructuras periorbitarias pueden ser de gran
tencia, que en este caso va a ser su extremo anterior. valor para el diagnóstico de algunas de estas afecciones

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1313


y constituyen signos patognomónicos de determinadas • Los síndromes de Arskog acompañado de manos y
entidades como las masas color salmón en los linfomas; pies pequeños y manto escrotal.
la congestión vascular en el área de inserción de los • El de Fraser con criptoftalmos, defecto del pabellón
músculos rectos en los seudotumores; equimosis en la auricular y alteraciones genitales.
piel de los párpados en los neuroblastomas; vasos • El de Opitz asociado a fisura palatina e hipospadia.
conjuntivales ingurgitados y en tirabuzón, con conjuntiva
roja y edematosa, en las fístulas carotidocavernosas Se asocia frecuentemente con disfunciones del siste-
(Fig. 104.2), con ojo blanco en las dilataciones venosas ma lagrimal excretor. La causa más común de
o várices (Figs. 104.3, 104.3 A). seudohipertelorismo es el aumento de la distancia entre los
cantos medios, o telecanto, aunque pueden combinarse.
La disminución de su profundidad es otra ano-
malía congénita de las órbitas, que puede provocar daño
sobre el contenido orbital.
La enoftalmía o hundimiento del globo ocular en
la órbita, no es tan frecuente y se puede ver en el niño
de forma congénita en agenesias óseas, en el síndrome
de Duane, entre otros. El enoftalmos también se puede
observar en el síndrome de Parry-Romberg, en el que
se presentan trastornos tróficos en un hemicuerpo y pér-
dida de la grasa, sobre todo en la cara y órbita; en la
Fig. 104.2. Quemosis y dilatación de vasos por fístulas desnutrición; en las fracturas del suelo de la órbita; en el
carotidocavernosa. síndrome de Claude-Bernard-Horner y como secuela
cicatrizal con fibrosis y retracciones después de absce-
sos, celulitis o heridas de la órbita. Es un signo importan-
te en las deshidrataciones graves.
Las entidades que afectan las paredes de las órbi-
tas o el resto de los tejidos que ellas albergan dan por lo
regular desplazamiento de los globos oculares, que en la
mayoría de los casos es en sentido anterior, provocando
exoftalmos.
Muchas son las anomalías craneofaciales que afec-
tan a la órbita y sus tejidos. Entre las anomalías congéni-
Fig. 104.3. Dilatación venosa palpebral de ambos ojos. tas de la órbita, donde se presenta proptosis, se hallan:
• La enfermedad de Crouzon.
• La oxicefalia.
• El síndrome de Francescheti y un grupo de malfor-
maciones craneofaciales en las que es frecuente tam-
bién la separación de las órbitas.

Las otras enfermedades orbitarias se clasifican en


cuatro grandes grupos según su causa:
• Lesiones inflamatorias.
• Lesiones vasculares.
• Lesiones quísticas.
• Lesiones tumorales.
Fig. 104.3A. Drenaje venoso del caso anterior.
Es muy importante tener en cuenta en las enfer-
medades orbitarias la forma de aparición, que se puede
ANOMALÍAS Y ENFERMEDADES clasificar en cuatro grupos fundamentales:
El hipertelorismo se observa en: • De aparición súbita.
• Muchos síndromes dismórficos craneofaciales como • De aparición rápida (horas o días).
el de Alpert, aberraciones cromosómicas y deformi- − Lesiones inflamatorias.
dades teratogénicas. Celulitis.

1314 Tomo III


Seudotumores agudos. El absceso subperióstico es el cúmulo de pus entre
− Lesiones vasculares el hueso y la periórbita. Se produce, por lo general, como
Tromboflebitis. resultado de una celulitis mal tratada. Habitualmente
Fístulas carotidocavernosas. producen exoftalmos de tipo no axial. Las dos últimas
− Lesiones tumorales formas pueden propagar la infección al seno cavernoso,
Neuroblastomas. produciendo trombosis de este y la posibilidad de una
Rabdomiosarcomas. sepsis del sistema nervioso central.
• De aparición intermedia (semanas o meses). El diagnóstico de estas lesiones es fundamental-
− Hemangioma infantil mente clínico y rara vez se requiere de estudios
− Tumores malignos de la glándula lagrimal imagenológicos para su confirmación, a no ser en el
− Encefaloceles caso del absceso donde sí se puede precisar claramen-
− Metástasis te la lesión.
− Carcinomas de senos vecinos Una vez establecido el diagnóstico, debe iniciarse
• De aparición lenta (meses o años). tratamiento por vía intravenosa con el paciente ingresa-
do. Se deben utilizar antibióticos de amplio espectro que
− Hemangioma cavernoso
cubran a gérmenes gramnegativos y grampositivos. Si
− Quiste dermoide
se pueden obtener muestras para cultivo, la terapéutica
− Tumores benignos de la glándula lagrimal
se realiza según antibiograma. El tratamiento debe man-
− Tumores óseos benignos
tenerse por nunca menos de 10 días y si es adecuado, el
− Meningiomas niño debe evolucionar favorablemente sin dejar secue-
− Gliomas del nervio óptico las. Las complicaciones pueden ser meningitis, absceso
cerebral y trombosis del seno cavernoso.
Lesiones inflamatorias de la órbita Seudotumor orbitario. Es un cuadro clínico infla-
En este grupo se incluyen tres entidades bien matorio localizado o difuso, de evolución aguda o cróni-
definidas: ca y de causa desconocida que resulta muy difícil de
• Celulitis orbitaria. diferenciar clínicamente de un tumor orbitario. Su inci-
• Seudotumor orbitario. dencia es muy variable y oscila entre 5 y 20 %. Se dis-
• Orbitopatía distiroidea. tinguen 2 formas clínicas de presentación:
• Seudotumor agudo.
Celulitis orbitaria. Es la infección bacteriana de • Seudotumor crónico.
carácter agudo de los tejidos de la órbita. Su frecuencia
está 3 entre 8 % de todas las enfermedades que ocurren El seudotumor agudo es un cuadro clínico de rápi-
en esta cavidad. Es la causa más frecuente de proptosis da evolución, caracterizado por dolor, edema palpebral,
en el niño. Puede ser ocasionada por un traumatismo o exoftalmos, quemosis, hiperemia de las inserciones mus-
herida palpebral, sinusitis o infección grave del ojo. Hay culares y oftalmoparesias. Puede producir disminución
edema, dolor, enrojecimiento de los párpados, exoftalmos de la agudeza visual. Predomina en los niños en los cua-
y limitación de los movimientos oculares acompañado les, en un tercio de los enfermos es bilateral.
de fiebre y toma del estado general. Tiene tres formas El seudotumor crónico es de evolución mucho más
clínicas bien definidas: lenta, generalmente en el curso de meses. Predomina
− Celulitis preseptal. en pacientes adultos y puede ser unilateral o bilateral. El
− Celulitis orbitaria típica. aumento de volumen de los tejidos orbitarios puede ser
− Absceso subperióstico. difuso con predominio de alguna estructura o ser sola-
mente de una de ellas. Histológicamente se caracteriza
La celulitis preseptal se limita a los párpados. El por un patrón uniforme que es independiente de la
septum orbitario actúa como una barrera y evita que la estructura afectada y consiste en un infiltrado inflama-
infección se propague al interior de la órbita. torio de linfocitos, células plasmáticas y eosinófilos y por
La celulitis orbitaria típica está caracterizada una hiperplasia linfoide folicular que se hace más mar-
clínicamente por la clásica tríada de exoftalmos, cada mientras más tiempo de evolución presente este
oftalmoplejía y dolor. Frecuentemente se acompaña de proceso.
fiebre y malestar general. Puede provocar disminución El exoftalmos es de lenta evolución, sin trastornos
de la motilidad ocular o de la visión en etapas tempranas,
de la agudeza visual, si se produce inflamación o com-
aunque posteriormente pueden aparecer a consecuencia
presión del nervio óptico.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1315


de la compresión muscular o nerviosa. La hiperemia de no ofrece dificultades. La evolución de los signos ocula-
las inserciones musculares aparece más tardíamente. res es independiente del funcionamiento tiroideo.
Cuando son lesiones difusas, el diagnóstico El exoftalmos por enfermedad tiroidea es poco fre-
imagenológico muchas veces resulta difícil. Frecuen- cuente en el niño. El hipertiroidismo o enfermedad de
temente el proceso compromete de forma predominante Graves-Basedow presenta exoftalmos bilateral cuyo sig-
a un músculo extraocular; en esos casos se observa un
no típico (von Graefe) es la imposibilidad del párpado
engrosamiento de este con aumento de la densidad y
de la reflectividad que compromete el área de inser- superior de seguir al globo ocular en la mirada hacia
ción. En ocasiones, existe un aumento de la captación abajo.
de contraste en el ámbito de la esclera (signo del ani- Los síntomas y signos iniciales suelen ser:
llo), aunque este signo puede encontrarse en cualquier • Retracción palpebral.
tipo de proceso inflamatorio. En un número no peque- • Aumento de la pigmentación de los párpados.
ño de casos es necesario realizar biopsia para confir- • Disminución del parpadeo.
mar el diagnóstico. • Asinergia palpebral.
La terapéutica inicial consiste en el uso de • Dificultad a la convergencia.
corticoesteroides, preferiblemente prednisona a dosis que • Dificultad para evertir el párpado superior.
oscilan entre 2 y 4 mg/kg de peso/día, durante un perío- • Parálisis de uno o más músculos extraoculares.
do de tiempo que puede durar varias semanas. Los pa-
cientes con afectación bilateral requieren generalmente
Posteriormente aparecen otras manifestaciones:
de tratamientos más prolongados y con mayores dosis
• Hiperemia conjuntival sobre las inserciones muscu-
que los unilaterales. En la etapa inicial de tratamiento se
lares.
puede usar también la prednisona al 1 % de forma tópi-
ca para disminuir la reacción inflamatoria superficial. • Exoftalmos axial, duro y no reductible.
Cuando falla esta terapéutica, algunos autores proponen • Disminución de la agudeza visual.
la asociación de prednisona oral a la dexametazona • Desplazamiento inferior del ojo que limita su eleva-
intravenosa a dosis variables y si no obtienen respuesta, ción por la contracción o fibrosis del músculo
recomiendan realizar una biopsia, ya sea por punción y rectoinferior.
aspiración o a cielo abierto, para confirmar el diagnósti-
co. Si la confirmación histológica es correcta debe ini- El diagnóstico imagenológico de estas afecciones
ciarse la aplicación intralesional de triamcinolona. Una resulta relativamente fácil.
cuarta etapa de tratamiento contempla el uso de la irra- En el ultrasonido de la órbita se detectan los ele-
diación orbitaria a dosis que oscilen entre 1 000 y 3 000 mentos siguientes:
radiaciones junto a medicamentos inmunosupresores • Ausencia de lesión tumoral.
como la ciclofosfamida y si fallan todos estos esquemas • Engrosamiento de los vientres musculares de alta o
o si aparecen signos de compresión del nervio óptico, media reflectividad con respeto a sus inserciones.
debe realizarse sin más demora la descompresión qui- • Aumento de la reflectividad de la grasa orbitaria.
rúrgica de la cavidad orbitaria para preservar la función • Agrandamiento de la glándula lagrimal.
visual. • Engrosamiento del nervio en los casos de neuropatía.

Orbitopatía distiroidea. Es una causa frecuente La tomografía axial computarizada aporta elemen-
de proptosis bilateral en el adulto y menos frecuente en tos de gran valor para el diagnóstico en alrededor de
los niños, aunque es válido recordar que no es rara su 90 % de los casos. Los hallazgos más típicos se cono-
presentación como un exoftalmos unilateral. Se consi- cen como la "tríada de Trokel" y consisten en:
dera como un proceso autoinmune relacionado con la • Engrosamiento de los vientres musculares con au-
glándula tiroidea. Está en discusión el hecho de que la mento de su densidad (Fig.104.4).
glándula sea, al igual que los tejidos orbitarios, un órgano • Exoftalmos.
clave de este desajuste inmunológico y no la responsa- • Hiperdensidad del ápex orbitario.
ble de este. Se caracteriza por una fibrosis que afecta
fundamentalmente los músculos rectoinferior y La resonancia magnética nuclear no aporta nue-
rectomedio. Las manifestaciones orbitarias se pueden vos elementos, pero permite un estudio más minucioso
presentar con función tiroidea normal, aumentada o dis- de las alteraciones que se presentan en los músculos.
minuida. Cuando se asocia a taquicardia, sudación, bo- Actualmente no hay aún ningún tratamiento espe-
cio, pérdida de peso y retracción palpebral, el diagnóstico cífico para esta entidad, como no sea aquel encaminado

1316 Tomo III


a estabilizar el funcionamiento de la actividad tiroidea. • Hemangioma cavernoso.
No obstante, existen algunas alternativas a las que es • Hemangiopericitoma.
necesario recurrir en caso de progresión de los signos • Hemangioendotelioma maligno.
orbitarios a pesar del tratamiento endocrinológico, y que
pueden ser de varios tipos. Se han descrito procederes Los aneurismas intraorbitarios son muy raros
quirúrgicos para el tratamiento de la retracción palpebral dentro de los procesos ocupativos de la órbita. General-
como la miotomía parcial del elevador del párpado supe- mente son de tipo sacular y, al igual que los aneurismas
rior o injertos palpebrales con esclera o duramadre intracraneales, se producen por una anomalía congénita
liofilizada. El uso de colirios vasocontrictores y de la pared arterial o por traumas o infecciones de la
simpaticomiméticos para el alivio de los trastornos órbita que la van debilitando y dilatando con el paso del
congestivos es común. Los esteroides sistémicos, pre- tiempo. Tienden a presentarse más por su efecto de masa
feriblemente prednisona, a dosis entre 60 y 100 mg/día que por signos de ruptura.
para el tratamiento de la diplopía y el exoftalmos, se El tratamiento es habitualmente quirúrgico, y está
emplean con frecuencia. Si la diplopía persiste por más encaminado a la oclusión definitiva del saco
de 6 meses, puede tratarse quirúrgicamente producien- aneurismático.
do debilitamiento del músculo afectado y nunca refor- Las várices son malformaciones venosas congé-
zando el antagonista. nitas que ocurren en el interior de la órbita y que tienden
a dilatarse de forma progresiva, produciendo manifesta-
ciones clínicas causadas por 3 mecanismos:
− Compresión de estructuras vecinas
− Aumento del volumen intraorbitario
− Rotura de sus paredes

Dentro de sus manifestaciones clínicas, el elemen-


to más significativo es el exoftalmos intermitente que
aparece o se incrementa al aumentar la presión venosa
y no tiene características pulsátiles. Puede comprome-
terse el drenaje venoso de los párpados y se observa
entonces ingurgitación venosa. El dolor orbitario es fre-
cuente y puede llegar a ser muy intenso. En etapas avan-
Fig. 104.4. Engrosamiento del vientre muscular en enferme- zadas suele presentarse diplopía y cierto grado de ptosis.
dad de Grave Bassedow. TAC. Generalmente no producen toma visual, a no ser que
ocurra una ruptura y, en ese caso, el hematoma
intraorbitario que aparece sí es capaz de producir un
En caso de neuropatía óptica, el tratamiento debe ser cuadro clínico dramático de dolor súbito, exoftalmos mar-
mucho más agresivo, empleando hasta 150 mg de cado, oftalmoparesia y disminución de la visión.
prednisona como dosis de ataque y luego manteniéndola En los rayos X simples es frecuente encontrar au-
durante varios meses a razón de 20 a 30 mg/día. Si la agu- mento de los diámetros orbitarios y del tamaño de la
deza visual disminuye por debajo de 0,5, no se debe esperar hendidura esfenoidal. Las calcificaciones muchas ve-
más tiempo y plantearse la opción quirúrgica encaminada a ces ocurren en las paredes de estas venas, lo cual faci-
la descompresión de las estructuras intraorbitarias. lita el diagnóstico.
El tratamiento de estas lesiones es por lo general
Lesiones vasculares de la órbita conservador; se recomienda evitar realizar ejercicios que
En este grupo se encuentran varios tipos de lesio- incrementen la presión venosa para disminuir el riesgo
nes que son causa frecuente de proptosis unilateral y de ruptura. La cirugía se reserva para aquellos casos
que ocupan entre 10 y 18 % en las series publicadas. Su donde exista toma de la función visual o ante un
incidencia es mayor en los niños que en los adultos. Se exoftalmos muy evidente. La escisión quirúrgica total
incluyen tumores y malformaciones vasculares: resulta muchas veces difícil por la íntima relación que
• Aneurismas intraorbitarios. pueden tener con estructuras normales.
• Várices. Las fístulas carotidocavernosas no son más que
• Fístulas carotidocavernosas. comunicaciones que se establecen entre la arteria
• Hemangioma capilar. carótida y el seno cavernoso y que permiten el paso de

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1317


sangre arterial al compartimiento venoso, provocando La primera opción terapéutica consiste en el uso
en este último un aumento de la presión que se transmite de esteroides sistémicos (prednisona oral a dosis entre 2
fundamentalmente hacia las venas orbitarias. Represen- y 3 mg/kg de peso/día) y la inyección local intralesional
tan del 2 al 6 % de las lesiones ocupativas de la órbita y de esteroides, lo cual puede reducir de forma dramática
predominan en el sexo masculino y en edades producti- los síntomas y signos.
vas de la vida. Otras opciones terapéuticas consisten en la exéresis
Las manifestaciones clínicas pueden ser quirúrgica, parcial o total con el uso de láser y técnicas
ipsilaterales, contralaterales o bilaterales y dependen del microquirúrgicas. La exéresis parcial produce favora-
patrón de drenaje venoso que tenga la fístula y de la bles resultados cosméticos sin activar el crecimiento
velocidad de su flujo. Entre las más importantes están: celular. También se han empleado bajas dosis de radia-
− Exoftalmos pulsátil de rápida evolución que tien- ción (de 300 a 500 radiaciones) para reducir el volumen
de a desplazar el ojo hacia abajo y afuera, ya de la lesión, pero este proceder tiene el riesgo de inducir
que la masa de venas dilatadas se localiza gene- la formación de cataratas.
ralmente en la porción superior de la órbita. El hemangioma cavernoso es el tumor vascular
− Soplo audible en el ojo y regiones frontales y tem- benigno más frecuente en la patología orbitaria del adul-
porales, así como en los vasos del cuello to, pero puede verse en la infancia (Fig.104.5).
− Quemosis.
− Diplopía.
− Disfunción de nervios craneales.
− Disminución de la agudeza visual.
− Cefalea y alteraciones neurológicas isquémicas
hemisféricas, por el efecto de robo que ejercen
sobre el flujo sanguíneo cerebral.
− Edema palpebral y conjuntival.
− Ingurgitación y dilatación de vasos epiesclerales
con aspecto de tirabuzón o cabeza de medusa.
− Papiledema e ingurgitación de vasos retinianos.

En los rayos X simples se pueden encontrar signos


Fig. 104.5. TAC de angioma orbitario.
de fractura del cuerpo esfenoidal (en el caso de las
fístulas postraumáticas), así como agrandamiento o ero-
sión de la hendidura esfenoidal.
Lesiones quísticas
El hemangioma capilar es el tumor vascular En este grupo se incluyen todas aquellas lesiones
intraorbitario benigno más frecuente en los niños, alcan- quísticas benignas, congénitas o adquiridas que se desa-
za hasta 22 %, y es considerado por algunos autores rrollan en el interior de la cavidad orbitaria:
como un hamartoma. Aparece durante la primera o se- • Quistes dermoides y epidermoides.
gunda semana de vida y tiende a crecer de forma rápida • Mucoceles.
durante los primeros años; a partir del segundo año de • Meningoencefaloceles.
vida tienden a involucionar lentamente. Se asocia con
Los quistes dermoides y epidermoides de forma
frecuencia a hemangiomas en otras partes del cuerpo.
conjunta para Levin están alrededor del 4 % en los pro-
Suelen hacerse evidentes en la piel de los párpados y en
cesos ocupativos de la órbita. Son lesiones congénitas,
la conjuntiva, fundamentalmente en su sector nasal, con
benignas y encapsuladas que contienen en su interior
un aspecto característico de nevus color fresa y con una elementos y sustancias derivados de tejidos dérmicos y
superficie algo elevada. epidérmicos. Los quistes epidermoides se conocen tam-
En los estudios radiológicos simples es frecuente bién como tumores perlados o colesteatomas debido al
encontrar un aumento de volumen de la cavidad orbitaria, contenido blanco nacarado que se encuentra en el inte-
de forma local o generalizada; pueden verse, además, sig- rior del quiste. En la órbita predominan los quistes
nos de esclerosis ósea. La arteriografía demuestra clara- dermoides sobre los epidermoides.
mente la lesión, así como los finos vasos tributarios, pero Clínicamente producen exoftalmos y signos
su uso debe reservarse solo para aquellos casos que va- compresivos de lenta evolución. Tienden a desplazar el
yan a ser sometidos a tratamiento quirúrgico directo. ojo hacia abajo, ya que por lo general se localizan en la

1318 Tomo III


parte superior de la cavidad orbitaria, por fuera del cono Los meningoencefaloceles consisten en la
muscular. En 80 % de los casos son palpables y su herniación de las meninges encefálicas (meningoceles)
consistencia es blanda. Por su íntimo contacto con el o del tejido cerebral junto a ellas (meningoencefaloceles)
globo ocular pueden producir pliegues retinianos y dis- a través de una dehiscencia ósea, generalmente
minución de la visión (Figs. 104.6, 104.6A). postraumática, del techo orbitario.
Producen un exoftalmos no axial, pulsátil con el
globo desplazado, por lo general, hacia abajo y a veces
hacia afuera. Pueden palparse como una masa blanda y
reductible en la porción superior de la órbita.
En los rayos X simples se puede ver la solución de
continuidad ósea y a veces un aumento del diámetro
vertical de la órbita. La tomografía axial computarizada
con cortes coronales y la resonancia magnética nuclear
son los estudios que más información brindan.
El tratamiento es siempre quirúrgico, encaminado
a reponer en su sitio las estructuras herniadas y sellar el
orificio de comunicación para evitar una fístula de líqui-
Fig. 104.6. Exoftalmos por quiste dermoide.
do cefalorraquídeo.

Lesiones tumorales de la órbita


La gran variedad de tipos tumorales que se en-
cuentran en la órbita es el resultado de la amplia varie-
dad de tejidos que allí se encuentran. Se citan solo aquellas
entidades de frecuente aparición en nuestro medio:
• Osteomas.
• Displasia fibrosa.
• Neurofibroma.
• Meningiomas.
• Glioma del nervio óptico.
• Rabdomiosarcoma.
• Adenomas pleomórficos de la glándula lagrimal.

Los osteomas son los tumores óseos más frecuen-


Fig. 104.6A. TAC en el cual se muestra el tumor. tes en todas las edades. Pueden crecer a expensas de
En los rayos X simples se aprecia, generalmente, cualquiera de las paredes orbitarias, aunque generalmen-
un defecto óseo en el techo orbitario con bordes te lo hacen desde la pared medial o desde la superior.
escleróticos y a veces se detectan calcificaciones. Son lesiones benignas de lento crecimiento.
El tratamiento consiste en la exéresis quirúrgica Su elemento clínico primordial es el exoftalmos
total sin apertura de la cápsula para así evitar reaccio- desplazado en sentido contrario al tumor. Habitualmente
nes inflamatorias en los tejidos circundantes. no hay dolor, diplopía o trastornos de la motilidad ocular.
Los mucoceles son lesiones quísticas benignas, no Tienden a localizarse en la mitad anterior de la órbita,
neoplásicas que se desarrollan en el interior de los senos por lo que suelen encontrarse a la palpación con carac-
perinasales producto de la oclusión del drenaje mucoso terísticas propias de hueso. Si crecen en el ala menor
de estos, que se acumulan y comienzan a expandir prime- del esfenoides producen disminución de la agudeza vi-
ro y erosionar después las paredes de dicha cavidad, y sual con atrofia papilar. A veces se acompañan de sínto-
crecen hacia estructuras vecinas, tales como la órbita o la mas obstructivos respiratorios nasales.
cavidad craneal. Ocupan entre 1 y 3 % de las lesiones Los rayos X simples hacen el diagnóstico en todos
expansivas de la órbita y predominan a partir de la tercera los casos al mostrar una imagen hiperdensa, regular y
década de la vida. La función de las estructuras homogénea en directa relación con el hueso. El trata-
intraorbitarias es comprometida de una u otra manera por miento de estas lesiones es quirúrgico.
el 90 % de todos los mucoceles. Predominan los que La displasia fibrosa es considerada por algunos
provienen del seno frontal. Es poco frecuente en niños. como un hamartoma óseo caracterizado por la sustitución del

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1319


hueso anormal por otro neoformado mucho más
trabeculado y menos calcificado. Aparece en niños y
adultos jóvenes, y representa entre 1 y 3 % de la enfer-
medad ocupativa de la órbita. Clínicamente se observa
asimetría facial con proptosis por la disminución de la
propia cavidad orbitaria. Por lo general, este proceso
afecta de manera predominante una de las paredes
orbitarias, lo que hace que el ojo se desplace en sentido
contrario. No hay dolor ni signos inflamatorios. La vi-
sión se compromete si se afecta el canal óptico y se
comprime el nervio. La diplopía y los trastornos de la
motilidad ocular son infrecuentes. En los rayos X sim- Fig. 104.7. Exoftalmos y neurofibromas del párpado superior.
ples se observan lesiones escleróticas irregulares junto
a otras áreas de densidad ósea disminuida. El tratamien- Los meningiomas son tumores originados de las
to debe ser quirúrgico. cubiertas meníngeas del sistema nervioso central y que
El neurofibroma es un tumor derivado de los ner- en la órbita pueden tener tres orígenes diferentes:
vios periféricos y ocupa entre 2 y 3 % de los procesos • A partir de las vainas del nervio óptico.
expansivos de la órbita y de 5 a 15 % de todos los tumo- • A partir de las paredes orbitarias (sobre todo el ápex,
res intraorbitarios. Son lesiones benignas, encapsuladas en el área de la fisura orbitaria).
y de lento crecimiento, y se asocian con frecuencia a la • Aquellos que primero son intracraneales y que invaden
enfermedad de Von Recklighausen. Pueden ser solita- secundariamente a la órbita.
rios simples, difusos y plexiformes. Esta última variedad
Los procesos malignos son raros. Su forma clínica
es patognomónica de la neurofibromatosis. Se han des-
de presentación depende del sitio donde se originen. Los
crito dos formas clínicas bien definidas:
que crecen en las vainas del nervio óptico producen
− Tipo I o forma periférica: se relaciona con alte- exoftalmos discreto de lenta evolución con disminución
raciones del cromosoma 17; es la que predomi- progresiva de la visión, signo pupilar de Marcus-Gunn,
na en el ámbito de la órbita. comunicaciones opticociliares, papiledema temprano y
− Tipo II o forma central: se relaciona con anoma- luego, atrofia óptica. El patrón de pérdida visual puede
lías del cromosoma 22. ser variable, aunque clásicamente se plantea que prime-
ro se afecta la visión periférica y luego la central. La
Según la clínica son lesiones de lenta evolución que amaurosis a la abducción del ojo es un signo
producen exoftalmos, con desplazamiento ocular o sin patognomónico de los meningiomas de las vainas del
éste, lo que depende de su localización intracónica o nervio óptico.
extracónica. La visión se compromete cuando se com- Aquellos que crecen en el ámbito de la hendidura
prime el nervio óptico y nunca cuando el tumor se origi- esfenoidal producen exoftalmos con el ojo desplazado
na en esta estructura, ya que ellos crecen a partir de las hacia afuera y abajo. Los signos de toma de los nervios
células de Schwan, las que no existen en el nervio ópti- oculomotores preceden generalmente a los trastornos
co. Es frecuente la asimetría facial y la limitación de los visuales, que aparecen una vez que se comprime el
movimientos oculares, aunque es rara la diplopía debido nervio óptico. La quemosis y el edema palpebral son
a su lenta evolución. En ocasiones, sobre todo en la for- comunes.
ma plexiforme, se observa un crecimiento anormal del Los meningiomas intracraneales con crecimiento
párpado, generalmente el superior, con pequeños y múl- orbitario producen manifestaciones clínicas mixtas; fre-
tiples nódulos palpables (Fig. 104.7). cuentemente se observan signos de compromiso de es-
En los rayos X simples se puede observar aumento tructuras de la fosa temporal, asociados a signos de
de los diámetros de la órbita, así como displasia o conflicto de espacio intraorbitario e intracraneal, con
hipoplasia de sus paredes cuando se asocia a la enfer- toma de la función visual y oculomotora.
medad de von Recklinghausen. Los signos radiológicos de estas lesiones suelen ser
La extirpación de los que crecen en los párpados muy variados. Con relativa frecuencia estos estudios son
es complicada por su tendencia a la recidiva y la defor- normales. En otras ocasiones, se puede apreciar un área
midad que dejan. de hiperostosis en el sitio de implantación del tumor. El

1320 Tomo III


agujero óptico puede estar agrandado (más de 6,5 mm, de los autores coinciden en que lo más recomendable es
o con una diferencia de más de 2 mm con el del otro la irradiación, a pesar del riesgo de complicaciones
lado) con sus bordes escleróticos, lo que lo diferencia endocrinas y neurológicas en los pacientes pediátricos.
del agrandamiento que producen los gliomas del nervio En caso de tumores limitados solo al nervio óptico, de-
óptico. Pueden detectarse calcificaciones intratumorales. ben seguirse periódicamente, sin tratamiento quirúrgico,
El tratamiento de estas lesiones debe ser siempre mientras exista visión útil y no haya signos de rápida
quirúrgico y el momento de la intervención depende del progresión.
grado de afección que esté provocando la lesión. La
mayoría de los autores consideran que la intervención
quirúrgica debe ser diferida mientras no exista compro-
miso de estructuras intracraneales y se mantenga visión
útil. Si esta no existe o hay compromiso de estructuras
intracraneales, se debe intentar su resección total. La
radioterapia como opción terapéutica debe reservarse
para las recidivas y para aquellos escasos tipos en que
exista degeneración maligna.
El glioma del nervio óptico es un tumor
neuroepitelial derivado de las células gliales del nervio
óptico que, según Pereira representan entre 1 y 3 % de
todas las causas de exoftalmos en todas las edades y
llega hasta 6 % en el grupo pediátrico. Predomina en la
infancia y se asocia hasta en 50 % de los casos a la
enfermedad de von Recklighausen. Cuando se presen-
tan en adultos tienden a ser de alto grado de malignidad.
El típico glioma del nervio óptico es un astrocitoma
pilocítico, frecuentemente quístico, de muy lento creci-
miento. Pueden estar limitados al segmento intraorbitario
del nervio óptico o pueden extenderse hacia el canal
óptico, el quiasma o incluso hacia el nervio contralateral. Fig. 104.8. TAC de paciente con gliomas en ambos nervios
El inicio de estas lesiones, habitualmente es la disminu- ópticos.
ción de la agudeza visual que puede pasar inadvertida
por la poca edad de la mayoría de los pacientes, los que El rabdomiosarcoma es el tumor orbitario maligno
acuden a consulta generalmente por un exoftalmos poco más frecuente en los niños. Tiene un comportamiento bio-
reductible detectado por la familia y que casi siempre es lógico muy agresivo y ocupa entre 2 y 4 % de la enferme-
de tipo axial. No hay dolor y el desplazamiento ocular dad orbitaria en general, el cual alcanza hasta 9 % en las
con restricciones de la motilidad aparece tardíamente al series pediátricas. Por su alta malignidad y lo rápidamen-
expandirse el tumor y afectar el cono muscular. El ede- te invasivo que resulta, requiere de un diagnóstico precoz
ma de papila es frecuente. La pupila de Marcus-Gunn y para instaurar la terapéutica lo antes posible.
la atrofia papilar también aparecen más tardíamente. El La forma clínica se caracteriza por un exoftalmos
patrón típico de pérdida visual es inverso al de los de rápida evolución, pérdida visual, oftalmoplejía, edema
meningiomas de las vainas del nervio óptico; se obser- palpebral marcado, quemosis y dolor. Tienden a ser le-
van primero las alteraciones de la visión central y luego siones extracónicas, por lo que generalmente producen
la toma de la visión periférica. exoftalmos no axial.
Los rayos X simples son de gran utilidad, muestran En la ecografía se observan imágenes de baja
el aumento del canal óptico, así como posibles anoma- reflectividad, homogéneas y de bordes bien definidos.
lías de la silla turca que indiquen la extensión quiasmática Los rayos X simples no brindan muchos elementos, pero
de la lesión. La TAC y la RMN permiten ver la lesión y si aparece destrucción ósea, el pronóstico se hace
su extensión (Fig.104.8). dudoso.
El tratamiento va a depender de la extensión de la Para confirmar el diagnóstico debe hacerse una
lesión hacia el quiasma óptico y del grado de toma vi- biopsia precoz, ya sea mediante punción y aspiración
sual. Cuando existe compromiso quiasmático no está con aguja fina (BAAF) o a través de un abordaje ante-
indicada la exéresis quirúrgica de la lesión y la mayoría rior o lateral, pero nunca transcraneal, para evitar de

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1321


esta forma la propagación de la lesión hacia dicha hay signos de descompensación sistémica de la enfer-
cavidad. medad. En el resto de los pacientes el tratamiento con-
La tendencia actual de tratamiento para estas le- siste en la radioterapia y la quimioterapia.
siones ha dejado de ser la cirugía radical, ya que son EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
tumores muy quimiosensibles y radiosensibles, reserván-
En las últimas 2 décadas ha existido, sin dudas, una
dose solo para los casos con mala respuesta a esta tera-
notable mejoría en cuanto a la evaluación previa al tra-
péutica.
tamiento definitivo de las lesiones expansivas de la órbi-
Por lo general producen desplazamiento ocular no
ta, debido al impetuoso desarrollo de las técnicas
axial antes de aparecer el exoftalmos, y casi siempre
radiológicas, aunque es válido señalar que sigue siendo
pueden detectarse a la palpación como masas indoloras
la clínica la base principal para el diagnóstico causal,
de consistencia dura. La visión y la motilidad ocular se
topográfico, fisiopatológico y muchas veces hasta para
afectan poco. Un signo patognomónico de estas entida-
el anatomopatológico en estas afecciones.
des es la presencia de masas subconjuntivales de color
Al estudiar un paciente con un cuadro de proptosis
rojo salmón.
unilateral, los resultados de los estudios imagenológicos
Los rayos X simples no brindan elementos diag-
que se indican deben responder las interrogantes si-
nósticos. A veces se encuentra esclerosis ósea reactiva
guientes:
en la vecindad del tumor.
¿Está presente una masa tumoral que desplaza el glo-
Al ser palpables, estas lesiones se deben confir-
bo ocular hacia delante?
mar histológicamente a través de biopsia, ya que su tra-
¿Está la masa tumoral restringida a la cavidad orbitaria?
tamiento no es quirúrgico. Se indica la radioterapia en
¿Compromete la masa tumoral la fosa craneal adyacente?
las lesiones primarias de la órbita y radio y quimioterapia
¿Están comprometidos los senos vecinos por la masa
en las formas sistémicas.
tumoral?
Los adenomas pleomórficos de la glándula
¿Es esta masa tumoral parte de un proceso sistémico?
lagrimal constituyen del 1 al 2 % de las lesiones
ocupativas intraorbitarias y alrededor del 30 % de las
Los estudios radiográficos simples resultan de gran
enfermedades de la glándula lagrimal. Son lesiones be-
utilidad en estos pacientes, ya que muestran:
nignas bien encapsuladas que se localizan en el cuadrante
− Las variaciones de la densidad de las estructuras
superioexterno de la porción anterior de la órbita.
óseas y de los tejidos blandos.
Sus manifestaciones clínicas son, por lo regular, de
− El aumento o disminución del volumen de las
lenta evolución. Generalmente producen exoftalmos no
órbitas.
axial con desplazamiento ocular hacia abajo y adentro.
− El cambio de los diámetros del canal óptico o de
Se palpan como masas duras, no dolorosas y poco móvi- la hendidura esfenoidal.
les. La diplopía o la disminución de la agudeza visual son − El estado de las estructuras adyacentes, entre
infrecuentes, aunque por su efecto compresivo directo otros elementos.
sobre el ojo pueden producir pliegues retinianos,
detectables mediante la fondoscopia, que sí pueden re- Su índice de positividad es alrededor de 40 % en
ducir la visión en esos casos. los pacientes con exoftalmos unilateral, por lo cual
algunos consideran que, si se dispone de tomografía
Metástasis tumorales en la órbita
computarizada o de resonancia magnética por imagen,
La siembra en el ámbito orbitario de neoplasias de
la información que brinda la radiología simple es redun-
otras localizaciones no es infrecuente como algunos pien-
dante e innecesaria, aunque nunca debe olvidarse en
san, ya que 5 % de todas las neoplasias malignas produ-
aquellos lugares con menor desarrollo tecnológico.
cen metástasis en esa zona. Su origen varía según la
Ecografía orbitaria. Se han descrito dos métodos
edad; en los niños son generalmente secundarias a
neuroblastomas, leucemias y a tumores mediastínicos. o modos ultrasónicos de explorar la cavidad orbitaria:
El diagnóstico de estas lesiones se basa en los antece- − Modo A o método unidireccional.
dentes de neoplasia en otra localización, el cuadro clíni- − Modo B o método de barrido.
co dado por un exoftalmos doloroso de rápida evolución,
con disminución de la visión, edema palpebral, quemosis, El modo A o método unidireccional consiste en
diplopía y mediante los estudios imagenológicos. una línea formada por deflexiones y picos que represen-
El tratamiento de estas lesiones solo es quirúrgico tan los ecos ultrasónicos, y se utiliza fundamentalmente
cuando se detecta un nódulo único bien delimitado y no para obtener información estructural interna de la lesión.

1322 Tomo III


El modo B o método de barrido es una imagen Bibliografía
bidimensional formada por puntos luminosos que resulta
Alegre Núñez Juan Ramón, Bárbara T. Ríos Araujo, Josefina
de más fácil interpretación práctica, y se utiliza funda- García Granda, Elvira Machado Héctor Linfoma no Hodgkin
mentalmente para la localización topográfica y espacial de la órbita diagnosticado por biopsia por aspiración con
de la lesión. aguja fina. Presentación de caso. Rev Cubana Oftalmol
Tomografía axial computarizada. Mediante este 1999;12(1).
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
estudio se visualizan las estructuras que se encuentran Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
en el plano de corte, por lo que se puede conocer la 2005, p 385-447. USA.
densidad de la lesión, su localización, su extensión, la May D. Tumors of the orbit, Neurosurgery, London, Ed. Europe,
integridad de las estructuras óseas, así como las áreas Section E, p. 1993;42-9.
Mendoza Santiesteban, Enrique; Cogollo Vargas, Pedro A;
vecinas comprometidas, lo que permite establecer es-
Mendoza Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas,
quemas terapéuticos más concretos y eficientes a cada Rosaralis · Clínica de las lesiones orbitarias y su proceder
caso en particular. La visualización de enfermedades quirúrgico. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
vasculares puede incrementarse con el uso de contraste Mouriaux F, Martinot V, Pellerin P, Patenotre P, Rouland JF,
yodado intravenoso. Constantinides-G. Survival after malignant tumors of the
orbit and periorbit treated by exenteration. Acta-Ophthalmol-
Resonancia magnética nuclear. Esta es una téc- Scand 1999;77(3):326-30.
nica muy superior a la tomografía axial computarizada Ouazzani BT, Laghmari M, Karmane A, Benchrif Z, Jidane M,
en el estudio de las enfermedades orbitarias debido a los Lamarti A, et al. Colobomatous orbital cyst associated with
elementos siguientes: microphthalmos. Apropos of a case. J-Fr-Ophtalmol
1998;21(9):701-6.
− Es mucho más específica en la caracterización
Pereira JG. Tumors of the optic nerve, Arch. ophthalmology,
de los tejidos blandos. 1953;57:1144-69.
− No usa radiaciones ionizantes. Pérez Moreira JV. Patología orbitaria, Barcelona, Editorial
− Permite realizar cortes en cualquier dirección sin Comercial Pujades,1986.
necesidad de movilizar la cabeza del paciente y Role of MR imaging. Radiol-Clin-North-Am 1999;37(1):73-87.
Rubio L, Piñeiro R, Jiménez O. Oftalmopatía del Grave Basedow
sin degradación de la imagen. en niños. Rev Cubana Oftalmol.1990,1;35-9.
− Facilita la identificación de estructuras vasculares Santiesteban R, Hodelín R, Fuentes D, Francisco M. Exoftalmos
sin necesidad de usar medios de contraste. por encefaloceles intraorbitario. Rev Cubana Oftalmología
− Brinda mayor cantidad de detalles anatómicos. 1991;1(2):37.
Shields JA et al. Clasifications and incidence of space occupying
− Define mejor el grado de encapsulación de las
lessions of the orbit, Arch. Ophthalmology, 1984;102:429-37.
lesiones. Sindhu K, Downie J, Ghabrial R, Martin F. Aetiology of childhood
proptosis. J Paediatr Child Health. 1998;34(4):374-6.
A pesar de estas ventajas, esta técnica tiene sus Tamraz JC, Outin-Tamraz C, Saban R. MR imaging anatomy of
the optic pathways. Radiol-Clin-North-Am 1999;37(1):1-36.
limitantes:
Taquechel A. Afecciones orbitarias y exoftalmos, Temas de
− No define estructuras óseas. neuroftalmología, La Habana, Ediciones del centro nacional de
− No detecta calcificaciones. información de ciencias médicas, 1974;(5): 9-72.
− Requiere de un tiempo prolongado para la adqui- Wrigth JE et al. Management of optic nerve gliomas, British J. of
ophthalmology, 1980;64(8):545-52.
sición de los datos, lo cual limita su uso en niños
o en adultos con trastornos de conciencia, an-
siedad o claustrofobia y que no pueden mante-
nerse el tiempo necesario en una misma posición. . Capítulo 105 .
Flebografía orbitaria. Es un estudio de segunda Ambliopía y estrabismo
línea en estas afecciones, usado de manera poco fre- Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
cuente y cada vez se emplea menos debido al adveni- María Teresa Méndez Sánchez
miento de la tomografía axial computarizada y la
resonancia magnética nuclear. Su indicación fundamen- Ambliopía
tal en la actualidad es el estudio de las várices orbitarias. La ambliopía es la reducción de la agudeza visual,
Su utilidad en la enfermedad orbitaria está limitada unilateral o bilateral, con la mejor corrección óptica que
a pacientes con várices, alta probabilidad de presentar no puede ser atribuido a una anormalidad estructural del
una lesión muy vascularizada con extensión intracraneal ojo o de la vía visual posterior. Es la falta de desarrollo
o para lesiones arteriales tales como aneurismas o fístulas de la visión normal en el período crítico para ello, en los
carotidocavernosas. primeros 18 meses de vida, por la carencia de estímulos

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1323


El modo B o método de barrido es una imagen Bibliografía
bidimensional formada por puntos luminosos que resulta
Alegre Núñez Juan Ramón, Bárbara T. Ríos Araujo, Josefina
de más fácil interpretación práctica, y se utiliza funda- García Granda, Elvira Machado Héctor Linfoma no Hodgkin
mentalmente para la localización topográfica y espacial de la órbita diagnosticado por biopsia por aspiración con
de la lesión. aguja fina. Presentación de caso. Rev Cubana Oftalmol
Tomografía axial computarizada. Mediante este 1999;12(1).
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
estudio se visualizan las estructuras que se encuentran Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
en el plano de corte, por lo que se puede conocer la 2005, p 385-447. USA.
densidad de la lesión, su localización, su extensión, la May D. Tumors of the orbit, Neurosurgery, London, Ed. Europe,
integridad de las estructuras óseas, así como las áreas Section E, p. 1993;42-9.
Mendoza Santiesteban, Enrique; Cogollo Vargas, Pedro A;
vecinas comprometidas, lo que permite establecer es-
Mendoza Santiesteban, Carlos E; Santiesteban Freixas,
quemas terapéuticos más concretos y eficientes a cada Rosaralis · Clínica de las lesiones orbitarias y su proceder
caso en particular. La visualización de enfermedades quirúrgico. Rev Cubana Oftalmol. 2005;18(2)
vasculares puede incrementarse con el uso de contraste Mouriaux F, Martinot V, Pellerin P, Patenotre P, Rouland JF,
yodado intravenoso. Constantinides-G. Survival after malignant tumors of the
orbit and periorbit treated by exenteration. Acta-Ophthalmol-
Resonancia magnética nuclear. Esta es una téc- Scand 1999;77(3):326-30.
nica muy superior a la tomografía axial computarizada Ouazzani BT, Laghmari M, Karmane A, Benchrif Z, Jidane M,
en el estudio de las enfermedades orbitarias debido a los Lamarti A, et al. Colobomatous orbital cyst associated with
elementos siguientes: microphthalmos. Apropos of a case. J-Fr-Ophtalmol
1998;21(9):701-6.
− Es mucho más específica en la caracterización
Pereira JG. Tumors of the optic nerve, Arch. ophthalmology,
de los tejidos blandos. 1953;57:1144-69.
− No usa radiaciones ionizantes. Pérez Moreira JV. Patología orbitaria, Barcelona, Editorial
− Permite realizar cortes en cualquier dirección sin Comercial Pujades,1986.
necesidad de movilizar la cabeza del paciente y Role of MR imaging. Radiol-Clin-North-Am 1999;37(1):73-87.
Rubio L, Piñeiro R, Jiménez O. Oftalmopatía del Grave Basedow
sin degradación de la imagen. en niños. Rev Cubana Oftalmol.1990,1;35-9.
− Facilita la identificación de estructuras vasculares Santiesteban R, Hodelín R, Fuentes D, Francisco M. Exoftalmos
sin necesidad de usar medios de contraste. por encefaloceles intraorbitario. Rev Cubana Oftalmología
− Brinda mayor cantidad de detalles anatómicos. 1991;1(2):37.
Shields JA et al. Clasifications and incidence of space occupying
− Define mejor el grado de encapsulación de las
lessions of the orbit, Arch. Ophthalmology, 1984;102:429-37.
lesiones. Sindhu K, Downie J, Ghabrial R, Martin F. Aetiology of childhood
proptosis. J Paediatr Child Health. 1998;34(4):374-6.
A pesar de estas ventajas, esta técnica tiene sus Tamraz JC, Outin-Tamraz C, Saban R. MR imaging anatomy of
the optic pathways. Radiol-Clin-North-Am 1999;37(1):1-36.
limitantes:
Taquechel A. Afecciones orbitarias y exoftalmos, Temas de
− No define estructuras óseas. neuroftalmología, La Habana, Ediciones del centro nacional de
− No detecta calcificaciones. información de ciencias médicas, 1974;(5): 9-72.
− Requiere de un tiempo prolongado para la adqui- Wrigth JE et al. Management of optic nerve gliomas, British J. of
ophthalmology, 1980;64(8):545-52.
sición de los datos, lo cual limita su uso en niños
o en adultos con trastornos de conciencia, an-
siedad o claustrofobia y que no pueden mante-
nerse el tiempo necesario en una misma posición. . Capítulo 105 .
Flebografía orbitaria. Es un estudio de segunda Ambliopía y estrabismo
línea en estas afecciones, usado de manera poco fre- Eugenio Jara Casco, Rosaralis Santiesteban Freixas,
cuente y cada vez se emplea menos debido al adveni- Teresita de Jesús Méndez Sánchez
miento de la tomografía axial computarizada y la
resonancia magnética nuclear. Su indicación fundamen- Ambliopía
tal en la actualidad es el estudio de las várices orbitarias. La ambliopía es la reducción de la agudeza visual,
Su utilidad en la enfermedad orbitaria está limitada unilateral o bilateral, con la mejor corrección óptica que
a pacientes con várices, alta probabilidad de presentar no puede ser atribuido a una anormalidad estructural del
una lesión muy vascularizada con extensión intracraneal ojo o de la vía visual posterior. Es la falta de desarrollo
o para lesiones arteriales tales como aneurismas o fístulas de la visión normal en el período crítico para ello, en los
carotidocavernosas. primeros 18 meses de vida, por la carencia de estímulos

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1323


o por ser este inadecuado. La ambliopía se considera la El resultado y éxito del tratamiento depende del diag-
primera causa de disminución o pérdida de visión nóstico precoz, a veces muy difícil en edades tempranas
monocular en niños y jóvenes. del niño.
Actualmente se sabe que la formación de imáge- El pediatra y el médico de la familia a la menor sos-
nes borrosas o desenfocadas, provocan falta del desa- pecha de una ambliopía deben remitirlo con prioridad a la
rrollo visual, o ambliopía, cuya gravedad es inversamente consulta del especialista en oftalmología, quien debe indi-
proporcional a la edad de aparición de la alteración ocu- car examen oftalmológico completo que incluye refrac-
lar, y su grado de reversibilidad depende de la duración ción con cicloplejía y hacer examen de fondo de ojo,
de la afección y de la edad a la que se comience el insistiendo en la fijación y tratar de ver si es foveal o no en
tratamiento adecuado. Esto se ve en los defectos ambos ojos. El mejor control del desarrollo de la visión en
refractivos altos, o cuando existen obstáculos para el niños pequeños, luego del primer semestre de vida, es el
desarrollo de la visión foveal en los primeros 2 años de examen de la fijación foveal.
la vida, como ptosis palpebral que cubre el área pupilar,
estrabismos y cataratas congénitas. Estrabismo
La ambliopía tiene una gran repercusión social, El estrabismo es la pérdida del paralelismo de los
pues su frecuencia se halla entre 2 y 4 % de la población ejes oculares. El término proviene del griego "strabismus"
en general, lo que obliga a la detección precoz y a reali- que significa desviar o torcer la mirada. Afecta del 3
zar actividades de pesquisaje masivo en niños para ini- al 4 % de la población infantil y es causa, no solo de
ciar el tratamiento de rehabilitación visual. disminución de la visión y ambliopía, sino también de tras-
Según Flynn, en un estudio del daño de la agudeza tornos psicológicos a veces graves por el problema es-
visual, la ambliopía no se presenta después de terminado tético que lo acompaña (Fig. 105.1).
el desarrollo de la visión; que concluye, a los 8 años de
edad. La ambliopía constituye para sorpresa de todos, la
causa principal de pérdida de la visión monocular en el
grupo de personas entre 20 y 70 años, sobrepasando a la
retinopatía diabética, el glaucoma, la degeneración ma-
cular relacionada con la edad y la catarata. Esto toma
más importancia si se conoce que, de tratarse a tiempo,
es evitable.
Causas de ambliopía, enumeradas por orden
Fig. 105.1. Estrabismo convergente.
de frecuencia:
• Ambliopía estrábica. Para el estudio del estrabismo se debe hacer el
• Ambliopía refractiva, dentro de ella la más frecuente siguiente recordatorio. Los ojos tienen 6 músculos ex-
es la anisometropía (diferencia de 1,50 dioptrías en la trínsecos cada uno, que conforman un sistema oculomotor
refracción entre los dos ojos), seguida de la isoame- que se origina en el vértice de la órbita, a excepción del
trópica, por defecto refractivo en ambos ojos, y la oblicuo inferior que nace de la parte inferomedial de la
astigmática. órbita y se insertan en la esclerótica a unos 6 a 7 mm del
• Ambliopía por deprivación, como en las ptosis limbo corneoescleral. El equilibrio de estos músculos
palpebrales totales, opacidades de córnea, cataratas mantiene el paralelismo de los ejes oculares, permite gi-
congénitas, vítreo primario hiperplásico, entre otras. rar los ojos en las cavidades orbitarias y recibir las imá-
genes en ambas fóveas.
Todas la ambliopías deben ser detectadas y trata- Existen 3 posiciones de la mirada que deben ser
das con prontitud, ya que en eso se basa la posibilidad de exploradas.
recuperación visual. • Posición primaria de la mirada. El paciente mira de
frente y adelante; debe haber paralelismo ocular per-
Magnitud de la ambliopía fecto. Actúan todos los músculos.
• Posición secundaria de la mirada. Desde la mirada al
El estudio de la agudeza visual y la refracción es el frente el sujeto mira hacia arriba, abajo, a la izquierda
parámetro principal para evaluar la magnitud de una y a la derecha; actúan determinados músculos.
ambliopía. Se puede hablar de ambliopías leves, cuando • Posición terciaria de la mirada o "posición diagnóstica";
la visión es mayor que 0,4; moderadas, entre 0,3 y 0,1; y la más importante, actúa cada músculo por separado
grave, menor que 0,1. La metodología del examen está cuando el movimiento se inicia partiendo de determi-
en relación con la edad del paciente y su cooperación. nada posición de la mirada.

1324 Tomo III


y ser alternantes o binoculares. En los estrabismos
alternantes la visión se desarrolla con normalidad en
ambos ojos, pues se usa indistintamente uno u otro ojo;
en cambio, en los estrabismos monoculares de la infan-
cia no se desarrolla correctamente la visión en el ojo que
Posiciones terciarias de la mirada: Si desde la posi- se desvía, y el pronóstico es reservado si no se realiza
ción primaria de mirada se mueve el ojo al extremo in- tratamiento.
terno, en dirección de la nariz, o adducción, actúa el recto Al describir estos tipos de trastornos del balance
medio; desde el ojo en adducción, si se mira arriba, ac- muscular ocular, llamados forias y tropías, se utilizan los
túa el oblicuo inferior y si mira abajo el oblicuo superior. prefijos eso, exo, hiper e hipo, para describir la posición
Si se mueve el ojo hacia fuera, abducción, actúa el de desviación del ojo, adentro (eso) o convergente, afuera
recto lateral. Si desde esa posición de abducción, de la (exo) o divergente, hacia arriba (hiper) y hacia abajo
mirada extrema externa, pero no total, se eleva el ojo, (hipo).
Cuando se observa un niño con tortícolis o desvia-
actúa el recto superior y si mira abajo el recto inferior.
ción compensadora de la cabeza, se debe sospechar la
Es importante la exploración de las ducciones, o
incomitancia o diferente grado de desviación entre
sea de los movimientos de los ojos por separado, de las
ambos ojos. En el caso de los músculos horizontales, la
versiones o movimientos de ambos ojos al unísono y las
cabeza se desvía hacia el lado del músculo afectado, por
vergencias, convergentes y divergentes.
ejemplo, si el músculo recto lateral del ojo derecho es el
La prueba de paralelismo de los ejes visuales me-
parético, la cabeza se desvía hacia la derecha. En caso
diante el método de Hirschberg y las pruebas de cubrir
y descubrir un ojo o hacerlo alternativamente, sin perder de estar afectados los músculos de acción vertical, el
el punto de fijación, son imprescindibles para el estudio oblicuo mayor más frecuentemente, el niño inclina la
del estrabismo. cabeza sobre el hombro opuesto al ojo afectado y depri-
me el mentón, con lo que evita la diplopía y la confusión
Clasificación del estrabismo de imágenes.
El estrabismo puede ser:
En el estudio del estrabismo se emplean varios tér-
minos específicos, de uso no comunes por el médico, • No paralítico o comitante.
que son necesarios aclarar para la comprensión del tema: • Paralítico o incomitante.
• Ortoforia u ortotropía. - Paralelismo de los ejes oculares. • Mixto.
• Heterotropía. - Estrabismos manifiestos.
• Heteroforia. - Estrabismos latentes. El estrabismo comitante o no paralítico, en el
cual la medida del ángulo de desviación es igual fijando
Cuando ambos ojos están en posición tal que reci- uno u otro ojo, se debe a causas sensoriales más que a
ben en sus máculas las imágenes del objeto que el indivi- motoras; son los más frecuentes. Se clasifican, al igual
duo está fijando, se dice que hay ortotropía. Si a un que los paralíticos, por el tipo de desviación en:
individuo ortotrópico que fija un objeto le ocluimos uno • Esotropía o estrabismo convergente, con los ojos hacia
de los ojos y este se mantiene inmóvil, es decir que con- dentro.
serva la ortotropía, decimos que hay ortoforia. • Exotropía o estrabismo divergente, con los ojos hacia
La heterotropía: es el estrabismo manifiesto o des- fuera.
viación permanente de los ojos. Se observa en todo mo- • Verticales:
mento. Hipotropía, desvía el ojo hacia abajo.
La heteroforia: se denomina así a los estrabismos Hipertropía, desvía el ojo hacia arriba.
o desviaciones latentes o que no se ven a simple vista.
Solo se detectan de forma pasajera en determinadas Tanto los estrabismos convergentes como los di-
circunstancias como fatiga física o psíquica, o en el cur- vergentes pueden verse frecuentemente combinados con
so de pruebas de oclusión de un ojo, momento en que el desviaciones verticales. Las formas A y V de
ojo deja de esforzarse para mantener el paralelismo, pues estrabismos, se caracterizan por la diferente magnitud
no hay estímulo visual binocular que así lo requiera. del ángulo de desviación en las miradas arriba y abajo,
Las tropías pueden afectar un solo ojo, por lo que tanto para las esotropías como para las exotropías.
se denominan monoculares o manifestarse en ambos ojos (Figs. 105.2 y 105.2A).

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1325


generalmente entre los 2 y 4 meses de vida, la esotropía
congénita en el sentido estricto es infrecuente o aún
inexistente, sin embargo, no es una denominación inco-
rrecta, pues resulta del fracaso congénito con probable
determinación genética del desarrollo de la visión
binocular normal.
Esotropía adquirida acomodativa o no acomodativa,
si aparece entre los 6 meses y 7años, mientras la
esotropía del adulto aparece después de los 8 años de
Fig. 105.2. Estrabismo en V, mirando arriba se separan los
ojos. edad.
La esotropía congénita se caracteriza por gran án-
gulo de desviación, limitación de la abducción,
hiperfunción de oblicuos inferiores y divergencia verti-
cal disociada (DVD). Dentro de las esotropías congénitas
se encuentra el síndrome de Ciancia que representa
aproximadamente el 10 %, denominado así en homenaje
a quien realizó las primeras descripciones clínicas com-
pletas de la esotropía del lactante con nistagmo en ab-
ducción en 1962. El nistagmo en resorte es el elemento
más constante e importante del síndrome de Ciancia, se
caracteriza por una fase rápida hacia el lado del ojo fija-
dor, aumentando en abducción y desapareciendo en
aducción.
Fig. 105.2A. Estrabismo en V, mirando abajo se acercan La esotropía congénita tiene como característica
los ojos. habitual ser monocular y con limitación de la abducción,
El estrabismo paralítico o incomitante se cono- por lo que suele desarrollar profundas ambliopías, si no
ce por la medida de la desviación que no es igual en se realiza rehabilitación visual oportuna.
ambos ojos. Todas las esodesviaciones acomodativas son ad-
Esotropía.Las esodesviaciones o estrabismos con- quiridas; aparecen generalmente a los 2½ años, coinci-
vergentes, son trastornos de la motilidad ocular que re- diendo con el incremento de la mirada de cerca y la
presentan el 50 % de las desviaciones oculares en la consecuente convergencia; pueden aparecer bruscamen-
población pediátrica; son producidas por causas anató- te o de forma intermitente, hasta que se hace fijo.
micas, inervacionales, mecánicas, refractivas, genéticas Es importante clasificarlas para definir conducta.
y acomodativas.Las esoderviaciones pueden tener, en Existe la esotropía acomodativa refractiva pura, la no
algunos casos un componente vertical, pero no es lo fre- refractiva acomodativa y la parcialmente acomodativa.
cuente (Fig. 105.3) En la esotropía acomodativa refractiva pura, el
Según la etapa de aparición puede ser: Congénito ángulo de desviación es entre 20 a 30 dioptrías prismáti-
o del infante, si aparece antes de los 6 meses de edad; cas (dp) e igual desviación de lejos y cerca. Son pacien-
tes hipermétropes elevados generalmente + 4,00 dioptrías
esféricas; puede variar en el rango entre + 3,00 y +
10,00 esf. Se indica el total de la refracción con la aco-
modación paralizada (VAP) y si con ello se logra ortoforia,
no se considera de tratamiento quirúrgico.
La esotropía no refractiva acomodativa presen-
ta un índice de acomodación-convergencia elevado, con
mayor desviación de cerca. Para su corrección se indi-
can bifocales ejecutivos, inhibidores de la colinesterasa
de acción prolongada o cirugía después de los 8 años de edad.
La esotropía parcialmente acomodativa dismi-
nuye el ángulo de desviación con el uso del total de la
Fig. 105.3. Estrabismo convergente con hipertropía. corrección óptica; la esotropía residual es quirúrgica.

1326 Tomo III


Para obtener buenos resultados en el tratamiento El tratamiento antes de los 6 años de edad es pre-
es preciso indicar oclusiones con el objetivo de lograr venir la ambliopía e indicar cristales negativos (desde -
la fijación foveal en ambos ojos, a temprana edad que 1,00 a - 3,00 esf.), si con ello se logra ortotropía y no
permita el buen desarrollo de la visión. El pediatra y el disminuye la agudeza visual; además se indican ejerci-
oftalmólogo deben detectar estos pacientes con pronti- cios de acomodación convergencia. Después de los 6
tud por el trastorno sensorial que suele ocasionar ese años, si el paciente no está compensado, se decide ci-
estado; se debe insistir con los familiares en mantener rugía. Se espera esa edad para evitar sobre correccio-
el adecuado tratamiento a pesar de lo largo e incómo- nes quirúrgicas.
do que este resulte, y así poder rescatar la visión nor- CAUSA
mal del niño antes de ser sometido a tratamiento La causa del estrabismo es plurifactorial, por eso
quirúrgico, ya que, si no se logra un buen desarrollo de es importante tener en cuenta la anamnesis; además
la visión, el paralelismo obtenido en la cirugía se puede de la herencia hay otros factores que se observan con
perder nuevamente. relativa frecuencia en los niños con trastorno de la
Aunque el tratamiento debe iniciarse lo antes posi- motilidad ocular como son: prematuridad, parto
ble, no se recomienda hasta después de los 4 meses de distócico, Apgar bajo al nacer, hipoxia, ser gemelar, entre
nacido, porque hasta esa edad en el niño no hay buen otros.
desarrollo de las fóveas, ya que su citoarquitectura no MÉTODOS DE EXAMEN Y DIAGNÓSTICO DEL ESTRABISMO
es normal y no se instala el paralelismo ocular aún. Lo primero que se debe hacer es el examen de la
Exotropía. Los estrabismos divergentes o motilidad ocular. Se realiza mediante los métodos de
exotropías, de acuerdo con su persistencia en el tiem- Hirschberg: cubrir y descubrir alternativamente ambos
po se pueden clasificar en: intermitente o permanente ojos y el estudio de los movimientos oculares en sus
y de acuerdo con la variación de la desviación según el posiciones diagnósticas de mirada (Fig. 105.5).
objeto fijado en: exceso de divergencia (desviación Método de Hirschberg o prueba de los re-
mayor de lejos que de cerca), insuficiencia de conver- flejos corneales. En la consulta diaria es práctico
gencia (desviación mayor de cerca que de lejos) o bá- utilizar este método para el diagnóstico del estrabismo,
sica (igual desviación de lejos y de cerca). que consiste en ver si el reflejo de la luz cae simétrico
La exotropía intermitente, es la más frecuente, en el centro de ambas pupilas o fuera de ellas.
representa el 85 %. Comienza en la primera infancia, El paciente debe mirar de frente al examinador, y
entre el primero y tercer año de vida. Como su nombre este último debe tener a mano una linterna o la luz del
lo indica, es una desviación en la cual el niño presenta oftalmoscopio frente a los ojos del niño. Si el reflejo de
la luz cae simétrico en el centro de la pupila en ambos
períodos normales de paralelismo y períodos de des-
ojos existe ortoforia, es decir hay paralelismo ocular
viación pasajeros.
perfecto. Si el reflejo de la luz cae en el centro de la
Un signo característico en estos pacientes es el
pupila en un ojo y en el borde de la pupila en el otro ojo,
cierre de un ojo en los ambientes iluminados o frota- hay 15° de estrabismo. Si el reflejo de la luz cae entre
miento de los ojos (Fig. 105.4). el borde de la pupila y el limbo corneoescleral hay 30º
y si cae en el limbo corneoescleral hay 45° (Fig. 105.6).
La observación del reflejo luminoso en la córnea,
al colocar una luz delante de los ojos del niño, permite
diagnosticar el estrabismo, ya que normalmente este
reflejo cae en el centro de ambas pupilas, de forma
simétrica. A continuación, en caso de que la prueba de
Hirschberg no demuestre desviación, se realiza la ma-
niobra de ocluir y desocluir cada ojo por separado y
luego de forma alternante. Si hay movimiento de
refijación de dentro hacia fuera se está ante la presen-
cia de una esoforia o estrabismo latente convergente,
y en el caso contrario, si el movimiento es de afuera
hacia adentro, ante una exoforia o estrabismo latente
divergente. Igualmente se observan las desviaciones
Fig. 105.4 Exotropía. verticales: hipoforias o hiperforias (Fig. 105.7).

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1327


Fig. 105.5. Estudio de las nueve posiciones diagnósticas de mirada.

Fig. 105.6. Estudio con método de Hirschberg.

1328 Tomo III


Fig. 105.7. Método de oclusión y desoclusión alternante.

El oftalmólogo para medir la desviación de forma objeto es localizado en el campo visual de cada ojo en
más exacta utiliza prismas. Es necesario repetir varias dos lugares diferentes. Esto puede producir diplopía, si
veces el examen del niño con estrabismo, o sospechoso el cerebro no suprime esa segunda imagen, que se le
de serlo, en consultas sucesivas, por la importancia que llama "falsa imagen" y es de menor calidad.
reviste realizar un diagnóstico y tratamiento tempranos De igual forma, el ojo desviado recibe la impresión de
para evitar la ambliopía y otros trastornos sensoriales un objeto diferente en su fóvea, el cual es localizado super-
que lo acompañan como la falsa mácula, la correspon- puesto al objeto fijado por la fóvea del ojo que en ese mo-
dencia retinal anómala, ausencia de fusión y estereopsia. mento no desvía; por eso se produce "confusión de
El diagnóstico diferencial más frecuente e impor- imágenes". Aparecen entonces mecanismos sensoriales de
tante del estrabismo convergente en niños pequeños debe compensación que varían con el sujeto, el tiempo o dura-
hacerse con el epicanto. ción de la desviación y sobre todo con la edad de aparición.
Para evitar la diplopía y la confusión de imágenes
Alteraciones sensoriales en el estrabismo se originan en el ojo desviado dos escotomas, o áreas
Cuando se produce una desviación monocular, el donde no hay visión, uno en la fóvea y el otro en el área
objeto que es visto por la fóvea del ojo fijador impresio- retiniana no correspondiente, donde caería la imagen que
na en el ojo desviado un área de retina no correspon- ve el ojo normal con la fóvea. Este mecanismo inhibito-
diente con la del otro ojo que está derecho, por lo que el rio en visión binocular se denomina "supresión".

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1329


Con el tiempo, los fenómenos de inhibición de la Bibliografía
visión foveal en el ojo desviado van cediendo lugar a
Alina Pedroso Llanes, Teresita de J. Méndez Sánchez, Rosa M.
una readaptación sensorial a la desviación, en un in-
Naranjo Fernández y Carmen M. Padilla González. Síndrome
tento por restaurar la binocularidad, lo que conlleva a de Brown. A propósito de 12 casos Rev Cubana Oftalmol
lo que se denomina "correspondencia retinal anóma- 2004;17(1).
la". Este término se ha arraigado en la literatura, pero Cantor L.B. Basic and Clinical Science Course. Pediatric
se debe decir correspondencia sensorial anómala, Ophthalmology and Strabismus. San Francisco: American
porque es la resultante de la interrelación entre cir- Academy of Ophthalmology:2003-2004.
cuitos retinogeni-culocorticales de ambos ojos. Me- David Taylor, Creig S Hoyt. Pediatric Ophthalmology and
diante ello un área extramacular del ojo desviado Strabismus. 3ed. Philadelphia: Elsevier Saunders, 2005:836-
adquiere, bajo condiciones binoculares, la misma pro- 1001.
yección espacial que la fóvea del ojo fijador, lo que se Esotropia. Resultados con mediciones a partir del limbo. Rev.
conoce como falsa mácula y a consecuencia de este Cubana Oftalmol. Vol 14, 2001, #1.
proceso se produce deficiencia visual y ambliopía en Eugene M. Helveston, The Strabismus Minute. Indianapolis:
el ojo desviado. Education in Ophthalmology, 2000:418,421,497
Estas alteraciones sensoriales están en dependen- Joaquín L. de la Lastra Rodríguez, Gilberto Barata Pitaluga, Silvia
Maristany Ugarte, Martha Martín Penago y Teresa Ríos
cia del diagnóstico y tratamiento oportuno y adecuado.
Pérez. El estrabismo en el niño y anestesia. Rev Cubana
TRATAMIENTO Oftalmol 2001;14(1).
El tratamiento del estrabismo tiene como objetivos Louis B. Cantor. Basic and Clinical Science Course. Pediatric
prevenir o eliminar la ambliopía y el ángulo de desvia- Ophthalmology and Strabismus. San Francisco: American
ción en el más corto plazo posible. Para lograrlo el oftal- Academic of Ophthalmology, 2004-2005: 20-25
mólogo debe realizar lo siguiente: Lourdes R. Hernández Santos, Rosa M. Naranjo Fernández,
• La corrección óptica de los defectos refractivos, si Teresita de J.Méndez Sánchez Técnica de suturas ajustables.
Resultados Rev Cubana Oftalmol 2001;14(1).
existieran, y sobre todo de las anisometropías, para
Méndez Sánchez Teresita de J., Rosa M. Naranjo Fernández, Alina
lograr imágenes nítidas, y en los casos de estrabismo
Pedroso Llanes y Carmen M. Padilla González Síndrome de
acomodativo, lograr la ortoforia.
Ciencia. Resultados quirúrgicos. Rev Cubana Oftalmol
• La oclusión alternante, que se realizará bajo estricto
2004;17(1).
control del oftalmólogo hasta obtener la fijación foveal Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
en ambos ojos. Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
• La corrección quirúrgica, que tiene los objetivos: fun- 2005, p 123-200.USA.
cional y estético (para lograr paralelismo ocular y vi- Plager David A. Strabismus Surgery Basic and Advanced
sión binocular) y solucionar los problemas psicológicos. Strategies. New York: Oxford, 2004:1-32
• Para el paciente niño es más importante la corrección Prieto Díaz Julio. Estrabismo. 5ed. Buenos Aires:Ediciones
estética del estrabismo, para el médico, la recupera- Científicas Argentinas,2005:1-262
ción visual y después la estética. Resultados de la Rehabilitación visual en ambliopes del Centro
• En casos necesarios los prismas se indican: para el Oftalmológico Infantil. Rev. Cubana Oftalmol. Vol 15, 2002, #2
tratamiento de las heteroforias o pequeñas tropías, en Rosa M. Naranjo Fernández, Teresita de J. Méndez Sánchez, Alina
los ángulos de desviación residual después de una ci- Pedroso Llanes y Carmen M. Padilla González Parálisis de
rugía correctora y en los estrabismos paralíticos para oblicuo superior. Comportamiento clinicoquirúrgico. Rev
Cubana Oftalmol 2004;17(2).
eliminar la diplopía.
Rosa María Naranjo Fernández, Teresita de J. Méndez Sánchez y
Lourdes Rita Hernández Santos. Esotropías: resultados con la
Se insiste que con la simple maniobra de obser-
técnica de mediciones a partir del limbo. Rev Cubana
var la córnea del niño, que fija la luz de una linterna
Oftalmol 2001;14(1):.
que se coloca al frente y abarque los dos ojos, el pe- Síndrome de Ciancia. Resultados Quirúrgicos. Rev. Cubana
diatra y el médico de la familia pueden sospechar o Oftalmología. 2004.
diagnosticar un estrabismo, al observar donde cae el Síndrome de Duane. A Proposito de 17 casos. Rev. Cubana
reflejo luminoso; frente a la duda se debe remitir al Oftalmol. Vol 15, 2002, #2
niño de inmediato al oftalmólogo para su diagnóstico Wright Kenneth W. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. St.
correcto y tratamiento. Louis: Mosby; 1995.

1330 Tomo III


principal característica que la medida del ángulo de
desviación, fijando el ojo afectado, es mayor que la des-
. Capítulo 106 . viación que se produce cuando fija el ojo sano. La otra
característica es que la desviación aumenta en la posi-
ción de mirada con limitación del movimiento, y disminu-
Parálisis y otros trastornos ye en la mirada opuesta. La paresia y la parálisis de un
de la motilidad ocular músculo oculomotor provocan la aparición de algunos
Rosaralis Santiesteban Freixas, Carlos E. Mendoza fenómenos secundarios, que no solo se limitan al ojo afec-
Santiesteban tado por la parálisis, sino también al ojo sano.
En el caso de una paresia mínima, el examen para
Las parálisis y otros trastornos de la motilidad ocu- detectarla debe ser muy detallado, en lo que ayuda el
lar son frecuentes en las enfermedades neurológicas de estudio con prismas y la coordimetría.
los niños. Las parálisis de los movimientos oculares pueden
El sistema motor ocular depende de diversas es- ser debidas a causas neurógenas, mecánicas y miógenas.
tructuras del sistema nervioso, conectadas entre sí, como Se observan en los defectos congénitos del desarrollo
son: el tallo cerebral, donde están los núcleos neurológico, en las parálisis cerebrales, en las hidrocefalias,
oculomotores y centros de mirada conjugada; el cerebe- así como por traumatismos, tumores, enfermedades
lo; el sistema vestibular; distintas zonas de la corteza metabólicas, entre otras. Las de tipo neurógenas son las
cerebral; el estado del propio órgano visual y los múscu- más frecuentes.
los que lo mueven. La maduración de estas estructuras En su sitio de control cortical, de origen nuclear y a
no se produce al unísono, de aquí que en el niño recién lo largo de su recorrido hacia el músculo efector, los ner-
nacido y en el lactante se puedan presentar movimien- vios oculomotores transitan por diversas áreas del encé-
tos anormales de los ojos que tienden a desaparecer con falo y producen determinados cuadros clínicos que permiten
el tiempo. conocer el sitio de afectación. Frente a anormalidades de
La relación de las diversas estructuras que lo com- la motilidad ocular debe establecerse si el trastorno es:
ponen hace que mediante la exploración de los movi- • Supranuclear.
mientos oculares se ponga en evidencia el estado de • Nuclear.
dichas estructuras. Esto debe hacerse sin violar los pa- • Internuclear.
sos del examen, empezando por observar al niño desde • Del tallo cerebral.
que entra al consultorio, viendo cómo coloca la cabeza • De la unión neuromuscular.
para enfocar. Deben de usarse los métodos de • Del músculo.
Hirschberg, cubrir y descubrir alternativamente los ojos,
para observar el movimiento que realiza el ojo que se
Lesiones supranucleares
destapa, explorar las ducciones y versiones en todas las Existen centros de control supranuclear de la motilidad
posiciones de mirada, de los movimientos de persecu- ocular en la corteza y tallo cerebral alto, los que dirigen la
ción, las sácadas, así como las vergencias y el estado de acción de los nervios oculomotores que están situados en el
los párpados y de las pupilas. mesocéfalo y protuberancia. Para las sácadas horizontales
Es muy útil en la exploración del sistema nervioso, se sitúan en la región del campo ocular frontal y activan la
la respuesta ocular de rotación de la cabeza; cuando se formación reticular paramediana pontina contralateral. Para
hace girar al niño entre los brazos del examinador se los movimientos de persecución se sitúan en la región
provoca una respuesta tónica lenta que es opuesta a la parietooccipital ipsilateral. Las sácadas verticales se inician
dirección de su propia rotación. La realineación ocular en neuronas del núcleo mesocefálico intersticial, rostral al
es el componente rápido o sácada de esa respuesta, todo fascículo longitunal medial, reguladas por las células del nú-
lo cual se conoce como nistagmo inducido, el cual puede cleo intersticial de Cajal.
explorar el estado de los músculos oculares, el sistema Lesiones de estas estructuras pueden ocasionar
vestibular y el visual. trastornos de la motilidad ocular de diversos tipos. En
las lesiones del cerebro medio dorsal, que provocan un
PARÁLISIS Y PARESIAS MUSCULARES cuadro clínico llamado síndrome de Parinaud, se afec-
tan un grupo de mecanismos supranucleares que inclu-
Tanto la paresia como la parálisis de uno o más
yen el control de la mirada vertical, con toma de la
músculos extraoculares dan por resultado una desvia-
elevación y dificultad en la depresión, párpados retraí-
ción ocular no concomitante, congénita o adquirida, exis-
dos, alteraciones en las vergencias con espasmo de la
te limitación a los movimientos oculares. Tiene como
convergencia, disociación del reflejo luz acercamiento e

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1331


inestabilidad de la fijación. El fenómeno de Bell y la fase contralateral, los que están conectados o enyuntados por el
rápida del nistagmo vestibular y optoquinético están daña- fascículo longitudinal medial que une a estos núcleos entre
dos. Las causas más frecuentes son pinealomas, gliomas, otros. Su desconexión causa disminución de la aducción
hidrocefalia, infartos, drogas y enfermedades metabólicas. del ojo ipsilateral que intenta ese movimiento, combinado
La doble parálisis de la elevación puede verse como con nistagmos del ojo contralateral que trata de abducir.
anormalidad benigna y transitoria. La de un solo ojo suele Las lesiones que lo provocan causan afectación del fascí-
deberse a disfunción supranuclear, aunque también podría culo longitudinal medial, como son: enfermedades
ser debida a mecanismo restrictivo en la órbita o por lesión inflamatorias, desmielinizantes, degenerativas y metabólicas.
nuclear o infranuclear. La supranuclear se confirma si en la
búsqueda del fenómeno de Bell el ojo afectado se eleva o Lesiones en el tallo cerebral
durante la maniobra de cabeza de muñeca (Fig. 106.1). Tienden a producir parálisis bilaterales combina-
das, pero los que afectan el seno cavernoso y la órbita
suelen ser unilaterales aunque también combinados.
En el tránsito por el espacio subaracnoideo se pue-
den ver afectados los tres nervios oculomotores, lo que
con frecuencia se acompaña de papiledema. En el seno
cavernoso y en la fisura orbitaria superior hay además
afectación del quinto nervio craneal, con Horner ipsilateral,
proptosis, edema del disco, dolor orbitario inyección ciliar
y epiescleral. Si la lesión es del seno cavernoso se afecta
solo la primera rama del quinto nervio craneal. En la órbi-
ta la afectación puede ser similar con toma en conjunto de
los nervios oculomotores, o por separado al sitio de la le-
sión. También pueden afectarse los nervios oculomotores,
pero sin focalización definida como se ve en procesos
febriles, tóxicos, e inmunizaciones.
Por lo regular las parálisis de los pares craneales,
tercero, cuarto y sexto en sus orígenes y trayecto ocu-
rren en conjunto, aunque es más frecuente la parálisis
del sexto par craneal. Si el daño se produce en uno de
los tres pares de nervios craneales, el cuadro clínico es
el siguiente:
• Parálisis del sexto nervio craneal.
• Parálisis de cuarto nervio craneal.
Fig. 106.1. Parálisis nuclear. • Parálisis del tercer nervio craneal.

La parálisis del sexto nervio craneal provoca un


Parálisis nuclear estrabismo convergente por afectación del recto externo,
En el ámbito nuclear la parálisis del tercer nervio dando limitación de la abducción y diplopía directa, con la
craneal es característica, ya que el subnúcleo del recto imagen falsa del lado del ojo parético. Si la afectación
superior inerva al recto superior contralateral y el está en el tallo y lesiona el fascículo longitudinal medial,
subnúcleo caudado central inerva a ambos elevadores puede haber, además, parálisis del séptimo nervio con
del párpado, lo que se expresa con afectación de la ele- pérdida del gusto en los dos tercios anteriores de la len-
vación contralateral y ptosis bilateral. gua, sordera y síndrome de Horner. En el peñasco se aso-
Los espasmos de la convergencia raramente son cia al daño del séptimo nervio, dolor en el ojo y cara, otitis
orgánicos. Se diferencian de la parálisis de los dos sex- media, salida de sangre o líquido cefalorraquídeo por el
tos nervios craneales en la miosis que presentan los ca- oído y papiledema; además de la parálisis del sexto nervio
sos con espasmos de acomodación, lo cual se acompaña craneal como tal, lo que puede producirse por compre-
de cefalea, fotofobia, diplopía y visión borrosa. sión, desmielinización, traumatismo u otra causa sobre el
o los troncos nerviosos. También puede verse este tipo de
Parálisis internucleares desviación ocular convengente en defectos de la unión
En las parálisis internucleares se desconectan los nú- neuromuscular, en defectos del propio músculo, en las frac-
cleos del recto externo ipsilateral y el recto medio turas orbitarias e inflamaciones, entre otras (Fig. 106.2).

1332 Tomo III


Fig. 106.2. Parálisis del sexto nervio craneal. Exploración de las principales posiciones de mirada.

La parálisis de cuarto nervio craneal provoca La de causa congénita es usualmente unilateral.


un estrabismo vertical que puede ser debido, como en el Se asocia a sincinesias patológicas. Estas aparecen des-
sexto par, a daño sobre el nervio y también a las afec- pués de 12 a 18 meses de la parálisis. Entre ellas están:
ciones propias del oblicuo superior por lesión en el mús- la elevación del párpado superior al contraer el músculo
culo efector o su inervación. Las causas más comunes recto medio y el inferior; la aducción o retracción del
son congénitas o traumáticas; estas últimas frecuente- globo ocular al usar el recto superior y el inferior; la
mente bilaterales. En el niño provocan tortícolis, mien- constricción pupilar al usar el recto medio y el inferior,
tras que en el adulto se manifiesta más por diplopía. La con pobre o ausente reacción pupilar a la luz. También
inclinación de la cabeza es posible que se note en foto- la parálisis oculomotora con espasmos cíclicos se pue-
grafías viejas del niño, lo que sugiere la causa congénita den ver en las parálisis congénitas.
(Fig. 106.3). Puede tratar de compensarse inclinando la
cabeza hacia el lado del ojo sano y aumenta la desvia-
ción cuando la cabeza se inclina hacia el lado del ojo con
el músculo parético. Se incrementa cuando se aduce
(Figs. 106.4, 106.4 A y 106.4 B).
La parálisis del tercer nervio craneal o parálisis
infranuclear es siempre ipsilateral y provoca ptosis con
desviación del globo ocular hacia fuera y abajo por la
acción del recto externo y oblicuo superior con midriasis
paralítica si hay daño intrínsico, como suele ocurrir en
las compresiones del tronco del nervio (Figs. 106.5 y
106.5A). Puede ser parcial o total con alteración de la
elevación del ojo y del párpado, cuando se afecta solo la
rama superior del nervio al dividirse en la órbita y sepa-
rarse de la inferior. Si hay parálisis pupilar y sincinesia
patológica se puede establecer el diagnóstico de daño al
tercer nervio. Fig. 106.3. Tortículis.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1333


Fig. 106.5 y 5 A. Parálisis del tercer nervio craneal.

En la migraña oftalmopléjica puede verse la pará-


lisis del tercer nervio craneal, la que suele ser unilateral
y familiar. La parálisis casi siempre aparece cuando des-
aparece el dolor. La recuperación en 1 a 2 meses es lo
frecuente, pero puede ser recurrente.
Entre las anomalías de la inervación están las que
afectan al sexto nervio, como el síndrome de Duane.
Puede ser unilateral o bilateral y asociarse a otras
anomalías. Se caracteriza por retracción del globo ocu-
lar, estrechamiento de la hendidura palpebral y limita-
ción de los movimientos oculares en el intento de
movimiento. Hay tres tipos (Fig. 106.6):
• Limitación de la abducción, con aducción intacta.
• Limitación de la aducción, con la abducción intacta.
• Limitación de la abducción y la aducción.

Figs. 106.4, 106.4 A y 106.4 B. Parálisis del cuarto nervio craneal.

Si la parálisis es total, pero respeta a la pupila, su-


giere una causa metabólica o isquémica, como ocurre
en la diabetes por lesión de la microvasculatura que irri-
ga al nervio.
Si el daño está en el fascículo, concomita con ataxia
cerebelosa ipsilateral, temblor rubral contralateral,
hemiparesia contralateral y parálisis de la elevación.
Puede verse con cierta frecuencia la sincinesia Fig. 106.6. Síndrome de Duane.
patológica entre el trigémino (músculos pterigoideos, so-
bre todo el interno); con el elevador del párpado supe- La diplejía facial, con problemas en los movimientos
rior, por lo que este se abre al mover la mandíbula, abrir horizontales del ojo puede ser considerada el síndrome
la boca o succionar. Puede ser bilateral, pero no es lo de Moebious. Esa dificultad en los movimientos horizon-
frecuente. Se ha descrito una forma inversa. tales del ojo puede ir desde una parálisis del sexto nervio

1334 Tomo III


craneal o una parálisis completa de los movimientos hori- la miastenia en que las pupilas están muy dilatadas y
zontales. Concomita además con atrofia de la lengua, de- responden muy poco a la luz. La oftalmoplejía es rara.
formidades de la cabeza, el cuello, el pecho y las
extremidades. Se ha sugerido como causa un defecto de
desarrollo alrededor del núcleo abducens.
Otro tipo de anomalía de inervación es la divergen-
cia sinergista en la que hay una deficiencia de aducción
con abducción bilateral simultánea en el intento de mirar
al campo de acción del recto medio afectado. Otras son:
la sincinesia congénita del elevador, el recto lateral du-
rante la abducción y la del trigémino con el sexto.

Unión neuromuscular Fig. 106.7. Oftalmoplejía externa crónica progresiva (Síndrome de


Otras causas pueden dañar la unión neuromuscular, Kearne Sayre).
como sucede en la miastenia gravis o en los propios
músculos por retracciones congénitas o consecutivas a
cirugía de estrabismo.
Nistagmo
Se define como una serie de oscilaciones rítmicas
La miastenia es una enfermedad sistémica, con
de los ojos que contiene movimientos lentos. La fase
defecto en la placa neuromuscular, que suele debutar
lenta es el movimiento que inicia el nistagmos. Si es un
con parálisis de la musculatura ocular intermitente y del
nistagmos de reciente iniciación deben hacerse estudios
elevador del párpado superior. Esta enfermedad puede
neurorradiológicos.
ser puramente ocular, lo que es infrecuente. Tiene una
El nistagmo espontáneo es el más conocido de los
forma neonatal transitoria, una congénita y la forma ju-
movimientos oculares anormales. Se caracteriza por
venil, similar a la del adulto. La forma de miastenia
oscilaciones rítmicas que contienen un movimiento lento
neonatal transitoria afecta al 12 % de los lactantes de
de los ojos, lo cual puede ser unidireccional, con fase
madres miasténicas. Hay debilidad general durante el
lenta y rápida, como el inducido. La fase lenta es el
primer día de nacido y se observa ptosis, movimientos
movimiento anormal, el cual es corregido por una sacu-
oculares limitados y debilidad de los músculos orbiculares.
dida rápida, para rescatar la fijación. La fase lenta tam-
Dura de 2 a 3 semanas, aunque puede desaparecer en
bién define la dirección del nistagmo. Puede variar de
la primera semana o prolongarse hasta dos meses. Res-
amplitud, frecuencia, dirección, simetría y mejorarse o
ponde a la prueba de tensilón. La ptosis palpebral regre-
bloquearse con determinada inclinación de la cabeza y
sa al aplicar hielo sobre el párpado caído.
de los ojos. Puede ser de tipo horizontal, vertical y rota-
La miastenia congénita se desarrolla poco después
torio. En algunos casos, se observa un movimiento elíp-
del nacimiento y no en niños de madre miasténica. Debe
tico dado por la combinación de nistagmos vertical y
vigilarse la desvalorización de la visión, de uno de los
horizontal, que no coincide en frecuencia temporal. Tam-
ojos y proceder al tratamiento para evitar la ambliopía.
bién los movimientos pueden ser de retracción.
El resto de los músculos del cuerpo con frecuencia no
Si la fase lenta es bidirecional, el nistagmo es pen-
muestran debilidad, pero el electromiograma detecta el
dular. Puede ser asimétrico entre los dos ojos, lo que
trastorno de la transmisión neuromuscular.
sugiere lesión de la vía visual.
Trastornos del propio músculo
La oftalmoplejía externa crónica progresiva es
Examen del paciente con nistagmo
una enfermedad mitocondrial o del ADN nuclear, la cual El nistagmo se estudia mediante la inspección sim-
se presenta con parálisis musculares que pueden llevar ple, con lupa o lámpara de hendidura. El de poca ampli-
hasta la imposibilidad de movilizar el globo ocular en cual- tud se detecta mejor en el examen de fondo de ojo. Debe
quier dirección y provocar ptosis palpebral bilateral. En estudiarse en todas las direcciones de mirada y con ojos
niños el tipo de parálisis oculomotora de causa mitocondrial cerrados y abiertos, ya que aumenta al cerrarlos en el
que más se observa es el de la enfermedad de Kearns de tipo vestibular, pues la fijación suprime el nistagmo de
Sayre, la que se presenta con ptosis bilateral, oftalmoplejía esta localización.
extrínseca que se va haciendo total, retardo en el creci-
miento, entre otras anomalías (Fig.106.7). Clasificación
El botulismo se manifiesta con ptosis palpebral, Puede ser congénito o adquirido. El congénito o
antes de la parálisis y falla respiratoria. Se diferencia de neonatal es el que se observa en las primeras semanas

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1335


de vida y es benigno, aunque en la mayoría de los casos El nistagmo del espasmos nutans suele ser be-
el nistagmo no es notado sino un tiempo después, lo que nigno y por lo regular se resuelve en los primeros 2 años,
hace diferente la conducta que se debe seguir, al no po- pero tumores diencefálicos pueden ocasionar un cuadro
der establecer su carácter congénito benigno. similar, lo que debe sospecharse con más fuerza si apa-
El nistagmo congénito puede ser de tipo motor o la- rece después de los 3 años de edad. Los movimientos
tente. El primero es bilateral conjugado y en un solo plano, son de tipo muy finos, pendular y de alta frecuencia o
casi siempre horizontal. No provoca oscilopsias y el niño rápidos y en cualquier dirección. Es asimétrico y puede
inclina la cabeza buscando la posición en que el nistagmo parecer unilateral, lo que es raro. Es posible que produz-
se hace menor. Aumenta al cerrar los ojos y converger.
ca ambliopía de ese ojo por la mala fijación. El movi-
El latente es de tipo sacudidas y aparece al ocluir un
miento de la cabeza y su inclinación es algo que lo
ojo. Es bilateral y conjugado, con fase lenta hacia el ojo
caracteriza, lo que dicen mejora la visión y el nistagmo.
tapado. Se ve usualmente con grandes esotropías y se
Su causa no es conocida. Empieza antes del año
distingue del congénito motor por cambios de la dirección
de edad y regresa espontáneamente alrededor de los
del nistagmo, cuando se cubren los ojos alternativamente.
dos, aunque el nistagmo puede persistir unos años más.
El nistagmo adquirido puede ser debido a lesión Como es muy parecido al que se asocia a los gliomas de
intracraneal o por pérdida visual que se presenta antes la vía visual aferente deben practicarse estudios
de los 2 años. El de pérdida visual u ocular causa nistagmo imagenológicos de la zona.
de cualquier característica y hasta puede ser monocular. En el resto de los nistagmos adquiridos, excepto el
Son la mayoría de los que aparecen en el primer año de de tipo pendular y el del espasmos nutans, predomina la
vida. Puede ser debido también a lesión intracraneal, en causa intracraneal o tóxica, en los que es frecuente la
el caso de lesiones intrínsecas o extrínsecas que afecten asociación con ataxia, disminución de la audición, tem-
la vía visual, como por un glioma o craneofaringioma. blor, hemiparesias, vértigos u otros síntomas y signos de
Las enfermedades con que se suele asociar son: altera- afectación del sistema nervioso central y vestibular, de
ciones congénitas del nervio óptico, albinismo con cualquier causa, lo que debe buscarse detalladamente.
hipoplasia macular y distrofias, entre otras. Si el examen El nistagmo alternante periódico se parece al
de fondo de ojo es normal el electrorretinograma ayuda congénito motor, excepto en que cambia de amplitud y
a confirmar la causa de disfunción retiniana, como en la dirección en pocos minutos. Es usualmente benigno, aun-
lipofuscinosis ceroide y distrofias de conos. que puede asociarse a lesiones vestibulares.
Existen clasificaciones o nominaciones del nistagmo El nistagmo evocado por la mirada es de tipo sa-
en relación con las características del movimiento: cudidas y aparece en dirección de la mirada excéntrica.
• Nistagmo voluntario. A diferencia del nistagmo congénito se puede estabilizar
• Nistagmo pendular. por la fijación y acentuarse por la oscuridad o al hacer
• Nistagmo del espasmo nutans. borrosa la imagen.
• Nistagmo alternante periódico. Se le llama nistagmo parético, si aparece en la
• Nistagmo evocado. dirección de la limitación de la mirada. Puede ser diso-
• Nistagmo parético. ciado si la limitación del movimiento ocular es asimétrica
• Nistagmo vestibular. entre ambos ojos. Está asociado a parálisis de nervios
• Nistagmo en balancín. craneales, miastenia y drogas de varios tipos como, se-
• Nistagmo que bate hacia abajo. dantes y anticonvulsivantes.
• Nistagmo que bate hacia arriba. La enfermedad cerebelosa provoca un nistagmos
• Nistagmo de retracción convergencia. parético asimétrico entre direcciones de la mirada. Por
ejemplo, en tumores de ángulo pontocerebeloso el
El nistagmo voluntario es, por lo regular, de tipo nistagmo tiene alta amplitud y baja frecuencia, cuando
horizontal, aunque puede ser vertical o torsional. Solo se se mira al lado de la lesión.
sostiene por varios segundos y frecuentemente se aso- El nistagmo vestibular es todo lo contrario. Si es
cia con la convergencia de los ojos. de origen central aparece uniplanar, a diferencia con el
El nistagmo pendular es la forma más frecuente periférico vestibular que usualmente tiene movimiento
del nistagmo ocular, pero no es propio solo de la causa torsional o multiplanar. La fijación foveal inhibe el
ocular, ya que puede ser debido también a compresiones nistagmo periférico, pero no el central. Vértigos y tinitus
e infiltraciones, como es el caso de los traumas, infartos, son comunes en el periférico.
procesos inflamatorios, degeneraciones de tallo cerebral Hay otros tres tipos de nistagmos adquiridos poco
y del cerebelo, entre otros. frecuentes, que su reconocimiento ubica la lesión en

1336 Tomo III


determinada área. Ellos son: el de tipo en balancín, por El "flutter" ocular se refiere a sácadas horizontales
daño en el diencéfalo, cerca del núcleo intersticial de desordenadas conjugadas, de ida y vuelta, que interrum-
Cajal; el nistagmo que bate hacia abajo, que lo ubica en pen la fijación; se asocia a la dismetría.
la porción inferior de la unión bulbo protuberancial; y el El opsoclonos es un movimiento multidireccional
de retracción convergencia en el área del cerebro me- ocular flutter. Se presenta como sácadas conjugadas
dio, cercano a la lámina cuadrigémina, y que afecta la caóticas o sacadomanía. Se ve en enfermedades
comisura posterior. cerebelosas y como un síndrome paraneoplásico. Se aso-
El nistagmo en balancín es de tipo pendular con cia al neuroblastoma, por lo que debe de hacerse en es-
movimientos de ojos que alternan, uno que sube y otro tos casos un buen estudio de abdomen y conocer las
que baja; mientras el que sube hace inciclotorsión, o sea cifras de ácido vanilmandélico.
gira como las manecillas del reloj, el que baja hace La apraxia ocular motora es el impedimento de
exciclotorsión o gira en contra de las manecillas. Se puede
las sácadas voluntarias, pero con la fase rápida de la
observar en grandes tumores paraselares que provocan
sácada intacta durante el nistagmo optoquinético. En la
hemianopsias bitemporales y oprimen la porción del III
congénita se caracteriza por defecto en iniciar sácadas
ventrículo.
horizontales.
En el nistagmo que bate hacia abajo las sacudi-
das surgen al mirar hacia abajo y, es causado por drogas Bibliografía
o lesiones de la unión cervicomedular. En niños es debi-
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric
da a malformación de Arnold Chiari o siringomielia. Se
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
ve en la platibasia, con impresión basilar, en las 2005, p 143-200. USA.
desmielinizaciones o isquemias de las estructuras de la Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas,
región cervicobulbar. El nistagmo que bate hacia arriba 2005,Argentina.
sugiere lesión cerebelosa de línea media localizado al Bernasconi O, Borruat FX. Unilateral accommodation spasm: a
diagnostic pitfall!. Klin-Monatsbl-Augenheilkd
vermis anterior. 1998;212(5):392-3.
El nistagmo de retracción convergencia, se pro- Farmer J and Hoyt CS. Monocular nystagmus in infancy and early
voca fácilmente con el tambor de nistagmo optoquinético childhood. Am J Ophthalmol 1984;98:504-509.
girándolo hacia abajo. Contradictoriamente a otros Gerinec A, Slysko P, Fischerova O. Use of botulinum toxin in the
treatment of strabismus. Cesk-Slov-Oftalmol
nistagmos, el movimiento patológico es la fase rápida
1998;54(3):174-8.
convergente, lo que se asocia a retracción de los globos Gordon N. The role of botulinus toxin type A in treatment with
en la órbita. Por lo general ocurre cuando mira hacia special reference to children. Brain-Dev 1999;21(3):147-51.
arriba y se asocia con dificultad para elevar la mirada, Hedges TR III, Jones A, Stark L, et al. Botulin ohpthalmoplegia.
retracción de los párpados y disociación del reflejo luz Clinical oculographic observations. Arch Ophthalmol
1983;101:211-213.
acercamiento (signo de Collier), ya que esta vía y la de Khwarg SI, Tarbet KJ, Dortzbach RK, Lucarelli MJ. Management
la mirada superior viajan por la comisura posterior. El of moderate-to-severe Marcus-Gunn jaw-winking ptosis.
pinealoma es la causa más frecuente, o la disfunción de Ophthalmology 1999;106(6):1191-6.
una derivación ventrículo peritoneal. Lennerstrand G, Nordbo OA, Tian S, Eriksson-Derouet B, Ali T.
Treatment of strabismus and nystagmus with botulinum
toxin type A. An evaluation of effects and complications.
Otros tipos de movimientos oculares anormales Acta-Ophthalmol-Scand 1998;76(1):27-7.
Existen otros tipos de movimientos oculares anor-
males que pueden ser confundidos con el nistagmo, pero
se diferencian de él en su falta de ritmo y en que no hay . Capítulo 107 .
fase lenta, pero que al igual que el nistagmo puede ser
indicativo de enfermedad sistémica o intracraneal, en
especial del cerebelo. Ellos son:
Refracción en el niño
Eugenio Jara Casco, Yahumara Alberto Escobar,
− Dismetría ocular. Legna Garrido López
− Opsoclonos.
− Apraxia ocular motora. El ojo humano es el más importante de los órganos
de los sentidos. A través de él se obtiene el 80 % de la
La dismetría ocular consiste en una sácada para información sensorial que se necesita del medio ambiente,
fijar el objeto que no llega a su destino o se sobrepasa, lo que es en gran parte posible por la refracción que en
seguida de movimientos de corrección hasta alcanzar el sus medios transparentes sufre la luz antes de llegar a
objetivo. la retina.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1337


determinada área. Ellos son: el de tipo en balancín, por El "flutter" ocular se refiere a sácadas horizontales
daño en el diencéfalo, cerca del núcleo intersticial de desordenadas conjugadas, de ida y vuelta, que interrum-
Cajal; el nistagmo que bate hacia abajo, que lo ubica en pen la fijación; se asocia a la dismetría.
la porción inferior de la unión bulbo protuberancial; y el El opsoclonos es un movimiento multidireccional
de retracción convergencia en el área del cerebro me- ocular flutter. Se presenta como sácadas conjugadas
dio, cercano a la lámina cuadrigémina, y que afecta la caóticas o sacadomanía. Se ve en enfermedades
comisura posterior. cerebelosas y como un síndrome paraneoplásico. Se aso-
El nistagmo en balancín es de tipo pendular con cia al neuroblastoma, por lo que debe de hacerse en es-
movimientos de ojos que alternan, uno que sube y otro tos casos un buen estudio de abdomen y conocer las
que baja; mientras el que sube hace inciclotorsión, o sea cifras de ácido vanilmandélico.
gira como las manecillas del reloj, el que baja hace La apraxia ocular motora es el impedimento de
exciclotorsión o gira en contra de las manecillas. Se puede
las sácadas voluntarias, pero con la fase rápida de la
observar en grandes tumores paraselares que provocan
sácada intacta durante el nistagmo optoquinético. En la
hemianopsias bitemporales y oprimen la porción del III
congénita se caracteriza por defecto en iniciar sácadas
ventrículo.
horizontales.
En el nistagmo que bate hacia abajo las sacudi-
das surgen al mirar hacia abajo y, es causado por drogas Bibliografía
o lesiones de la unión cervicomedular. En niños es debi-
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric
da a malformación de Arnold Chiari o siringomielia. Se
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
ve en la platibasia, con impresión basilar, en las 2005, p 143-200. USA.
desmielinizaciones o isquemias de las estructuras de la Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas,
región cervicobulbar. El nistagmo que bate hacia arriba 2005,Argentina.
sugiere lesión cerebelosa de línea media localizado al Bernasconi O, Borruat FX. Unilateral accommodation spasm: a
diagnostic pitfall!. Klin-Monatsbl-Augenheilkd
vermis anterior. 1998;212(5):392-3.
El nistagmo de retracción convergencia, se pro- Farmer J and Hoyt CS. Monocular nystagmus in infancy and early
voca fácilmente con el tambor de nistagmo optoquinético childhood. Am J Ophthalmol 1984;98:504-509.
girándolo hacia abajo. Contradictoriamente a otros Gerinec A, Slysko P, Fischerova O. Use of botulinum toxin in the
treatment of strabismus. Cesk-Slov-Oftalmol
nistagmos, el movimiento patológico es la fase rápida
1998;54(3):174-8.
convergente, lo que se asocia a retracción de los globos Gordon N. The role of botulinus toxin type A in treatment with
en la órbita. Por lo general ocurre cuando mira hacia special reference to children. Brain-Dev 1999;21(3):147-51.
arriba y se asocia con dificultad para elevar la mirada, Hedges TR III, Jones A, Stark L, et al. Botulin ohpthalmoplegia.
retracción de los párpados y disociación del reflejo luz Clinical oculographic observations. Arch Ophthalmol
1983;101:211-213.
acercamiento (signo de Collier), ya que esta vía y la de Khwarg SI, Tarbet KJ, Dortzbach RK, Lucarelli MJ. Management
la mirada superior viajan por la comisura posterior. El of moderate-to-severe Marcus-Gunn jaw-winking ptosis.
pinealoma es la causa más frecuente, o la disfunción de Ophthalmology 1999;106(6):1191-6.
una derivación ventrículo peritoneal. Lennerstrand G, Nordbo OA, Tian S, Eriksson-Derouet B, Ali T.
Treatment of strabismus and nystagmus with botulinum
toxin type A. An evaluation of effects and complications.
Otros tipos de movimientos oculares anormales Acta-Ophthalmol-Scand 1998;76(1):27-7.
Existen otros tipos de movimientos oculares anor-
males que pueden ser confundidos con el nistagmo, pero
se diferencian de él en su falta de ritmo y en que no hay . Capítulo 107 .
fase lenta, pero que al igual que el nistagmo puede ser
indicativo de enfermedad sistémica o intracraneal, en
especial del cerebelo. Ellos son:
Refracción en el niño
Eugenio Jara Casco, Yahumara Alberto Escobar,
− Dismetría ocular. Legna Garrido López
− Opsoclonos.
− Apraxia ocular motora. El ojo humano es el más importante de los órganos
de los sentidos. A través de él se obtiene el 80 % de la
La dismetría ocular consiste en una sácada para información sensorial que se necesita del medio ambiente,
fijar el objeto que no llega a su destino o se sobrepasa, lo que es en gran parte posible por la refracción que en
seguida de movimientos de corrección hasta alcanzar el sus medios transparentes sufre la luz antes de llegar a
objetivo. la retina.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1337


La refracción es el cambio de dirección que le ocu- Tres son las principales ametropías: hipermetropía,
rre a un rayo luminoso cuando pasa de un medio trans- miopía y astigmatismo.
parente a otro de distinto índice de refracción. Se dice Se denomina hipermetropía al defecto refractivo
que no es más que la variación de la velocidad y la en el cual la imagen cae detrás de la retina.
dirección que sufre la luz al pasar de un medio físico a
otro con diferente densidad.
En el ojo la córnea es el primer medio óptico trans-
parente que atraviesa la luz, la cual tiene gran poder
refractivo; le sigue el humor acuoso, que en el ojo cum-
ple funciones de intercambio metabólico; luego continúa
el cristalino, que es la segunda lente ocular, de menor
poder que la córnea y encargado de la acomodación. Le
sigue a continuación el humor vítreo y finalmente la reti-
na. A esta capa llega la luz reflejada por los diferentes
objetos que se miran y donde comienza a procesarse la Se denomina miopía al defecto refractivo que se
imagen visual a través de los cambios de la energía lu- produce cuando la imagen focal se forma delante de la
minosa que se transforman en reacciones eléctricas, lo retina.
que se conoce como fototransducción.
El ojo, como sistema óptico está constituido por
esos 4 dioptríos oculares: córnea, humor acuoso, crista-
lino y vítreo.

Se denomina astigmatismo al defecto refractivo


en el cual no hay un foco único en la retina, sino puntos
focales múltiples, delante o detrás de ella.
Se denomina dioptrío a la superficie de separación
de dos medios de índices de refracción diferentes y
dioptría a la unidad de medida de refracción en optometría,
que no es más que el inverso de la distancia del foco al objeto.
En clínica oftalmológica, la refracción es el estudio
de los diversos sistemas ópticos del ojo y la corrección
de sus defectos para que la imagen se forme sobre la
retina, lo cual se logra con la interposición de lentes de-
lante de la córnea.
La terminología usada en refracción es la siguien-
te: al ojo normal se le denomina emétrope, cuando la
Además de los conceptos de hipermetropía, mio-
imagen del objeto, observado a distancia, se forma en la
retina, o sea, cuando todos sus meridianos hacen foco pía y astigmatismo, se debe de conocer el término
en ella. El ojo amétrope es aquel en que la imagen no se anisometropía y aniseiconia.
forma completamente en la retina.
Anisometropía
Es la diferencia de refracción entre ambos ojos:
superior a 2,5 o 3 dioptría, por lo que se dificulta o no
existe la visión binocular; ello conduce a que se desarro-
lle y utilice activamente y de forma única el ojo de mejor
visión. Con ello se excluye el otro ojo del acto visual y no
se realiza el desarrollo normal de la visión en ese ojo
excluido, lo que lleva a que se produzca ambliopía.

1338 Tomo III


Aniseiconía con parálisis de la acomodación del ojo. El antiguo espe-
Recibe este nombre el defecto visual producido por jo plano utilizado es hoy sustituido por los modernos
desigualdad de forma y tamaño entre las dos imágenes retinoscopios de banda.
visuales de cada ojo, lo que hace muy difícil o a veces En niños mayores que ya leen y cooperan, se rea-
imposible la fusión de las imágenes; es producida por la liza la refracción por métodos objetivos y subjetivos. En
anisometropía. el primero se usa la equiascopia con pupila dilatada y
Es un defecto casi siempre asintomático, que se parálisis de la acomodación o cicloplejía y luego se pasa
debe detectar en especial en los niños pequeños, por lo al método subjetivo de tratar de que vea las letras o figu-
que su diagnóstico se realiza únicamente de forma ca- ras que se le proyectan, ajustando lo que se observó en
sual o en exámenes oculares preventivos en la búsque- la equiascopia. Al pasar el tiempo suficiente para elimi-
da de esta afección, para de inmediato iniciar su nar el efecto de la dilatación y la cicloplejía, por lo regu-
tratamiento y evitar la ambliopía. lar una semana, se realiza la prueba subjetiva, sin
Al nacer el niño el ojo es pequeño y la refracción dilatación en un examen ulterior, con el mecanismo
total debe corresponder a una hipermetropía de no más acomodativo activo, para conocer la amplitud de la aco-
de 2,5 dioptrías. Esta hipermetropía puede aumentar algo modación y prescribir la corrección más cómoda según
hasta los 7 años. El ojo va creciendo de tamaño después el grado de la ametropía de base (Figs. 107.1 y 107.2).
hasta alcanzar la emetropía, alrededor de los 15 años. Se debe recordar que los diferentes midriáticos
Durante este tiempo aumenta la longitud axil del ojo, en ciclopléjicos tienen diferentes tiempos de acción, que en
especial durante el primer año, proceso que continúa en general es de tres horas para la tropicamida, tres días
avance hasta alcanzar 24 mm. Este aumento en el diá- para la homatropina y de tres semanas para la atropina.
metro anteroposterior del ojo es compensado por los En los niños pequeños y jóvenes es preferible el
cambios de los radios de curvatura de la córnea y el uso de la caja de prueba con cristales esféricos positivos
cristalino que se aplanan con el tiempo. Las ametropías y negativos y cristales cilíndricos para el estudio de la
se deben, en parte, a una disfunción de este mecanismo refracción (Fig. 107.3).
regulador. Los refractómetros son equipos especialmente di-
Si los rayos no hacen foco en la retina para formar señados para estudio de la refracción. Existen varios
la imagen, esta se ve borrosa y no hace que los meca- modelos. Su uso no es frecuente en los niños pequeños
nismos de desarrollo visual se instalen correctamente y por el temor que tienen a los equipos que le tapan la
se perfeccionen, por lo que en un niño pequeño, de con- cara, y por la poca cooperación que muestran, lo que
tinuar en el tiempo esta situación, puede perder la opor- falsea los resultados.
tunidad de alcanzar una buena visión y producirse una
ambliopía.
MÉTODOS DE EXAMEN
Se utilizan métodos objetivos y/o subjetivos. El es-
tudio de la refracción se realiza en los lactantes y niños
pequeños por método eminentemente objetivo, denomi-
nado esquiascopia o retinoscopia.
La esquiascopia, es el estudio de la sombra pupilar.
Se realiza al iluminar el ojo con un espejo plano o cónca-
vo, o con el retinoscopio, y observar la dirección de la
sombra producida cuando se imprimen movimientos de
arriba hacia abajo, de izquierda a derecha y en los diá-
metros oblicuos. A esas sombras se les va neutralizando
su movimiento, interponiendo cristales de diferentes va-
lores; negativos, positivos o cilíndricos que contiene la
caja de prueba que se utiliza para ello, lo que se hace en
los principales ejes.
La esquiascopia es un método que no exige coope-
ración del paciente, rápido y exacto, especialmente para
aquellos que tienen gran experiencia en hacer el exa-
men. Se debe realizar siempre con cicloplejía, es decir, Fig. 107.1. Examen objetivo "Equiascopia".

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1339


• Radio de curvatura de la córnea diferente en los distin-
tos diámetros: astigmatismos simples, compuestos y
mixtos.
• Variación del índice de refracción del cristalino: es
menos frecuente
− Aumentado.
− Disminuido.

Astenopía
Es el nombre que recibe el conjunto de síntomas
producidos por los defectos refractivos y que depende
de la fatiga del músculo ciliar o de los músculos
extraoculares.
Los síntomas más frecuentes son:
• Dolor en los ojos o alrededor de ellos, agravados por la
lectura de cerca.
• Cansancio y malestar de los ojos al usarlos durante un
Fig. 107.2. Examen subjetivo usando lentes de la caja de prueba. corto tiempo para lectura de cerca. Se acompaña de
somnolencia, lagrimeo, fotofobia, congestión y un es-
tado de irritabilidad de los párpados con sensación de
picazón y ardor. Estos síntomas se acentúan por la
noche cuando el paciente está cansado o cuando hace
uso de una iluminación artificial deficiente.
• Puede haber visión doble y vértigos.
• Se acompañan de otros síntomas como: náuseas, con-
tracción de los músculos faciales, y más raramente
hemicránea.

Hipermetropía
Este defecto de refracción es consecuencia de tres
factores causales:
• Variación de la longitud axil (hipermetropía axil)
• Variación de la curvatura de los medios oculares (hi-
Fig. 107.3. Caja de prueba permetropía de curvatura).
• Variación del índice de refracción de los medios ocula-
Los más modernos son computarizados, y se utili- res (hipermetropía de índice).
zan en jóvenes y adultos. En las mediciones con la com-
putadora se debe complementar el estudio con el método La hipermetropía axil es la causa más frecuente.
subjetivo antes de prescribir los espejuelos. El eje anteroposterior del ojo es menor que lo normal.
Otro estudio objetivo que ayuda en medir la re- La hipermetropía de curvatura es menos frecuen-
fracción de cada ojo es la queratometría, en el cual se te. Es la disminución del poder refringente de la córnea
mide el radio de curvatura corneal en diferentes meri- por aplanamiento de esta.
dianos, para determinar de forma objetiva la cuantía del La hipermetropía de índice se caracteriza por la
astigmatismo corneal.
disminución del índice de refracción del cristalino. Se
ve ocasionalmente en diabetes y opacidad incipiente
DEFECTOS DE REFRACCIÓN del cristalino.
Los factores que determinan defectos de refrac- Al nacer el niño el ojo suele ser hipermétrope, sal-
ción son: vo en los casos en los que este vaya a ser miope. En los
• Variación de la longitud del eje anteroposterior del ojo: niños la hipermetropía es fisiológica hasta el término del
− Si es más largo: miopía. crecimiento anteroposterior del bulbo ocular, pero siem-
− Si es más corto: hipermetropía. pre que no exceda 2,5 dioptrías.

1340 Tomo III


El niño con hipermetropía generalmente ve bien de Miopía
lejos, a no ser que sea un defecto muy grande que puede El término miopía se refiere a la costumbre que
provocar deficiencia visual. Esto se debe al mecanismo
tienen las personas que padecen esta afección de dismi-
de acomodación que tiene el ojo para lograr visión normal.
nuir la hendidura palpebral para ver mejor.
Se clasifican en:
Síntomas
• Miopía axil.
El principal síntoma es la dificultad para la visión • Miopía de curvatura.
cercana, más que para la lejana, aunque si el defecto es • Miopía de índice.
elevado, mayor de 3 dioptrías, aparece la dificultad para
ambas distancias. Puede haber cefalea frontal que se La miopía axil es la causa más frecuente. El diá-
exacerba con el exceso del trabajo en visión próxima, metro anteroposterior del ojo es mayor de lo normal.
que por supuesto es rara en la mañana y frecuente con
La miopía de curvatura se debe al aumento de
el transcurso del día. Existe además hipersensibilidad a
convexidad de la córnea y es poco frecuente.
la luz, visión borrosa, y sensación de doble contorno. Estos
La miopía de índice es debida al aumento del ín-
síntomas se manifiestan, por lo general, después de leer,
dice de refracción del cristalino. Se ve en las cataratas
escribir, realizar trabajos de cerca y, muy especialmen-
incipientes y al inicio de la diabetes; es raro en los niños
te, por la noche y con luz artificial.
pequeños.
Las características generales o signos del ojo
La frecuencia de la miopía es difícil de establecer.
hipermétrope son las siguientes: Objetivamente se ve
Está más extendida entre los habitantes de las ciudades
congestión de vasos conjuntivales y de los bordes libres
que entre los de los campos y entre los trabajadores in-
de los párpados; el diámetro anteroposterior del ojo es
telectuales que entre los manuales. Muy frecuente en-
pequeño, la córnea es también pequeña y más
tre los chinos, japoneses, israelíes y árabes.
descentrada, el cristalino está prominente con la cámara
La miopía es de origen constitucional. No existe
anterior poco profunda. Existe tendencia al glaucoma
ningún gen que la determine, sino que es el resultado de
de ángulo cerrado.
la acción de diferentes genes, que establecen los
El examen de fondo de ojo es casi siempre normal,
parámetros de la refracción. Sin embargo hay una fuer-
pero la papila puede verse más pequeña, y sin excava-
te tendencia hereditaria.
ción fisiológica. A veces se observa la retina con aspec-
to de seda iridiscente, o sea, con cierto brillo, y cuando FORMAS CLÍNICAS
es elevado el grado de hipermetropía el nervio óptico Existen diferentes formas clínicas y clasificacio-
adquiere una tonalidad oscura, de márgenes irregula- nes, por ser la miopía una entidad polimorfa. La clasifi-
res (seudoedema papilar). cación se hace también en congénitas y adquiridas.
En los niños pequeños la hipermetropía, especial- Si la miopía es congénita o aparece en edades tem-
mente en los casos de alta graduación, puede provocar pranas de la vida es probable que el paciente padezca
estrabismo convergente y en ocasiones, ambliopía
de alta miopía de adulto.
monocular o binocular.
Algunos autores clasifican en pequeñas, medianas
TRATAMIENTO y altas a las miopías, según su grado. Para facilitar su
Se corrige con lentes esféricas, o sea, que tienen estudio, desde el punto de vista clínico, la miopía se divi-
igual poder refractivo en todos sus meridianos, conver- de en dos formas:
gentes, o lo que es lo mismo, con signo positivo; se plan- • Miopía simple o miopía refractiva.
tea de forma general que se debe corregir con la lente • Miopía progresiva o miopía enfermedad.
más fuerte que provea la mejor agudeza visual, cuando
no existen disbalances musculares significativos La miopía simple o refractiva tiene las característi-
(estrabismos). Por tanto, se debe cuantificar la correc- cas siguientes:
ción en dependencia de los síntomas, ocupación, edad y • Es igual o menor que 8 dioptrías.
capacidad de compensación o acomodación del pacien- • Se alcanza visión normal con la corrección óptica.
te. En el niño es muy importante conocer el estado del • Se detiene en su progresión a los 21 años, momento
balance muscular, magnitud del defecto y su edad, en final del crecimiento.
dependencia de lo cual se corregirá en exceso o defecto • No se observan lesiones en la retina al hacer el exa-
la hipermetropía en cuestión. men del fondo de ojo.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1341


La miopía progresiva o enfermedad:
• Es mayor de 8 dioptrías.
• No se obtiene la visión normal con la corrección óp-
tica.
• Sigue aumentando después de los 21 años.
• Presenta múltiples alteraciones en la retina al exami-
nar el fondo del ojo.

Las formas avanzadas de miopía progresiva se


denominan miopía maligna y casi siempre conduce a gran
disminución o pérdida de la visión

Síntomas
El principal síntoma es la dificultad para la visión Fig. 107.5. Miopía.
lejana, las cefaleas son bastante raras, aunque en algu-
nos casos la corrección de pequeños errores alivia los La retina es pálida, con escasos pigmentos o con
aspecto atigrado, que hace visible los vasos coroideos, y
síntomas. El paciente tiene tendencia a disminuir
en pacientes con avanzado grado de miopía zonas de
marcadamente la hendidura palpebral.
atrofia coroidea en el polo posterior.
Los padres, por lo regular, llevan al niño a la con-
En la periferia se ven también zonas de atrofia
sulta porque la maestra refiere que tiene dificultades múltiples, con degeneración tipo quístico, capaces de
para ver la pizarra o porque los padres notan que se ocasionar desprendimientos de retina.
acerca mucho al televisor o al libro cuando lee o es- Los trastornos vasculares coroideos tienen reper-
cribe. cusión en el cuerpo vítreo, donde se observan fluidez y
De forma objetiva, se pueden ver los ojos grandes, opacidades o flóculos vítreos múltiples, muy frecuentes
con tendencia al disbalance muscular, casi siempre di- en los que tienen miopía avanzada. Su síntoma son las
vergente. En la miopía simple, el fondo de ojo suele ser denominadas "moscas volantes" que los pacientes des-
normal. criben muy bien durante el interrogatorio.
En el examen del fondo de ojo de la miopía progre- Al igual que en la hipermetropía, a los pacientes con
siva se observa una papila grande. En el lado temporal miopía se debe examinar con el ojo en reposo, es decir
de dicha papila aparece primero la semiluna miópica y con parálisis de la acomodación. El diagnóstico es emi-
luego el cono miópico por ectasia del polo posterior de la nentemente objetivo en los menores de 4 a 6 años y obje-
esclerótica. En la región macular se ven modificaciones tivo y subjetivo, por lo regular, luego de esa edad si ya el
pigmentarias no específicas, atrofia coroidea y mancha paciente coopera. En la miopía refractiva el pronóstico es
bueno, no así en la miopía progresiva, que es reservado.
de Fuch, que es una zona negra debida a hemorragias
coroideas sucesivas (Figs. 107.4 y 107.5). TRATAMIENTO
Se corrigen estos defectos con lentes esféricas
negativas o sea, que tienen igual poder refractivo en to-
dos sus meridianos, cristales bicóncavos o divergentes.
Se plantea de forma general, corregir al paciente miope
con la lente más débil que provoque la mejor agudeza
visual, aunque la corrección total presenta dos ventajas
fundamentales.
Evita la tendencia a la disminución de la hendidura
palpebral y facilita que se desarrolle la acomodación -
convergencia normal.
Como sucede en la hipermetropía, la corrección se
cuantifica en dependencia del estado del balance mus-
cular, la edad y la ocupación del paciente.
En el caso de una miopía progresiva o maligna, la
Fig. 107.4. Fondo de ojo en paciente miope. retina se ve afectada por los cambios estructurales en el

1342 Tomo III


fondo de ojo y progresa aceleradamente en el tiempo, • Lagrimeo, fotofobia e hiperemia conjuntival pueden
con la posibilidad de convertir al paciente en un débil acompañar al astigmatismo como síntomas objetivos.
visual. Es esta una enfermedad de cuidado que requiere la
asistencia del retinólogo y estudios seriados para preve- En los niños se debe realizar la prueba de refrac-
nir daños irreversibles a las estructuras oculares y por ción con cicloplejía y en los pacientes con astigmatismo
consiguiente a la visión. su uso es imprescindible.
El astigmatismo es más frecuente en la infancia y
Astigmatismo predomina el hipermetrópico. Puede variar durante el
Es un defecto de refracción en el cual los rayos transcurso de la vida, sobre todo en el niño pequeño.
procedentes del infinito que llegan al ojo no convergen
TRATAMIENTO
en un foco único, sino en una línea de focos, o sea, se
debe a que hay una diferencia en el grado de refracción El tratamiento del astigmatismo se realiza con la
en los distintos meridianos del ojo. prescripción, en dependencia de si es astigmatismo
El astigmatismo es casi siempre debido a un de- hipermetrópico o miópico
Se corrige con lentes cilíndricas o sea, que tienen
fecto en la regularidad de la curvatura de la córnea,
diferente poder refractivo en todos sus meridianos; con-
donde se observa diferencia de dicha curvatura en los distin-
vergentes o divergentes, según sea el tipo de astigmatis-
tos meridianos, horizontales, verticales y oblicuos. mo. Los ejes principales son, por lo regular el horizontal
Excepcionalmente lo produce un defecto de la curva- (180°) y el vertical (90°) a los que se les llama meridia-
tura del cristalino. nos principales. Menos frecuentes son los astigmatismos
Los astigmatismos pueden ser regulares o irregu- con ejes oblicuos. Se plantea de forma general que se
lares, estos últimos se deben a cicatrices de la córnea debe corregir el total del defecto, siempre que sea posi-
provocadas por enfermedades oculares. En la práctica ble, pero cuando este es muy elevado, la corrección se
clínica diaria cuando se habla de los astigmatismos, se hará de forma escalonada.
refieren a los regulares. Para un estudio visual adecuado y completo en el
Los regulares pueden ser simples y compuestos; paciente pediátrico, además de llevar a cabo una co-
miópicos, hipermetrópicos y mixtos. En el astigmatismo rrecta refracción, con las condiciones ciclopléjicas y
simple es un solo meridiano el que no cae en la retina, en posciclopléjicas adecuadas, se debe tener en cuenta el
los compuestos ninguno de los dos lo hace, y pueden estado de la visión binocular, que no es más que el re-
estar por delante del polo posterior, en el caso de los sultado de integrar y coordinar las imágenes que recibe
astigmatismos miópicos y por detrás, en el caso de los cada ojo por separado en una imagen única, para lo que
astigmatismos hipermetrópicos. En los mixtos un meri- es imprescindible la integridad de la vía visual, la integri-
diano cae por delante y otro por detrás de la retina. dad del sistema oculomotor y del sistema sensorial, en-
tre los que existe una estrecha relación.
Síntomas y signos
Se deben utilizar para su medida los diferentes
Los síntomas ocasionados por astigmatismos son métodos, tanto objetivos como subjetivos, teniendo siem-
múltiples y, en dependencia de la intensidad del defecto, pre en cuenta los resultados obtenidos en previos estu-
son los más molestos. Entre los que más abundan están: dios y lo que usaba anteriormente en el momento de la
• La disminución de la agudeza visual, que es relativa en prescripción definitiva de la corrección. En la actualidad
los pequeños grados de astigmatismo y evidente en los existe la posibilidad de variados tratamientos quirúrgicos
altos. de los defectos refractivos, que no están indicados en
• No se reconocen ciertas letras sobre una línea, se ven los niños.
dobles o se confunden. No se distinguen con precisión
los objetos lejanos, se ven neblinosos; es significativo PREVENCIÓN

el salto de renglones en la lectura. Frente a la sospecha de defecto refractivo, el pedia-


• Cefaleas de tipo frontal, relacionadas con la lectura y tra debe remitir al niño de inmediato al oftalmólogo para
escritura, lo que se manifiesta más en los astigmatismos su examen especializado y tratamiento óptico correcto.
de tipo hipermetrópicos. Como medida de profilaxis para conocer la futura
• Fatiga visual. Por el constante esfuerzo en la acomo- visión del niño, se recomienda realizar un examen
dación no se pueden realizar trabajos de lectura o es- oftalmológico y su refracción a los 6 meses de edad; un
critura durante largo tiempo. Hay cansancio ocular y segundo examen entre 1,5 y 2 años; un tercer examen
tendencia al sueño. antes del ingreso a la escuela, a los 5 años, y seguir con

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1343


exámenes rutinarios cada 3 años. Con ello se realiza la oculares en niños, tres corresponden a varones y uno a
profilaxis de la ambliopía y se logra el tratamiento pre- hembras.
coz de los defectos de refracción y de enfermedades Los accidentes domésticos son la causa más fre-
oculares que podrían conducir a deterioro visual y a la cuente en menores de 6 años. Después son los juegos,
ambliopía. accidentes de tránsito y deportes, los que predominan.
En caso de traumatismos por mordeduras de animales
Bibliografía hay que poner en observación al animal y de morir hasta
estudiar su encéfalo para descartar la rabia.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric En las lesiones potencialmente graves el diagnósti-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, 84-93.USA. co correcto, en busca de disminuir el daño visual con el
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, tratamiento adecuado, conlleva un examen exhaustivo,
2005,Argentina. casi siempre con el niño bien sedado o bajo anestesia
Braverman DE. Pediatric contact lenses [letter; comment]. J-Am-
Optom-Assoc 1998;69(7):452. general, a menos que exista una lesión craneoencefálica
Drexler W, Findl O, Schmetterer L, Hitzenberger CK, Fercher AF. que requiera control evolutivo del estado de conciencia.
Eye elongation during accommodation in humans: differences Las quemaduras representan la máxima urgencia
between emmetropes and myopes. Invest-Ophthalmol-Vis-
Sci 1998;39(11):2140-7. y el resto de los traumatismos debe ser atendido en el
García Bez O, Rodríguez Paz U, Hernández Morales L, Pérez término de las primeras 6 h, pero siempre con la búsque-
Suárez R. Escleroplastia en el tratamiento quirúrgico de la da de todas las lesiones posibles que se hayan podido
miopía. Rev Cubaana Oftalmol 1992;5(1):3-10, 20-30.
Guerra L, Martín M, Ríos T. Diagnóstico precoz de la ambliopía.
producir. Ese es el caso de un cuerpo extraño intraocular,
Rev Cubana Oftalmol; 1988;1:111-17. cuya vía de penetración con microperforación del globo
Hernández Álvarez ZM, Peláez Molina O, Chávez Quiñones E, ocular puede pasar inadvertida, si no se busca insisten-
Rubio Mesejo, L. Actualización en los efectos adversos de los
lentes de contacto. Rev Cubana Oftalmol 1990;3(3):245-9.
temente. Es de interés conocer si el niño estaba cerca
Hernández Baguer R, Martínez Palmer I. Factores a considerar en de donde estaban martillando hierro o donde pueden sal-
la prescripción de lentes. Rev. Cubana Oftalmol 1988;1(3):66-75. tar virutas metálicas. Se hace imprescindible entonces
Jensen H. Myopia progression in young school children: A un estudio radiológico simple o una TAC no contrastada.
prospective study of myopia pregression and the efect of a
trial with bifocal lenses and beta blocker eye drops. Acta Si es un traumatismo cerrado, está indicado el ul-
Ophthalmol (Sippl) 1999;200:69. trasonido modo B, para descartar diferentes lesiones
Machado Fernández EJ‚ Zanati Hussein. Queratotomía Hexagonal dentro del globo y también cuerpos extraños. Si es ne-
para la corrección quirúrgica de la Hipermetropía. Estudio de
146 ojos operados. Rev. Cubana Oftalmol. 1997; 10(1/2):13-8. cesario sedar o anestesiar al niño debe tenerse en cuen-
Rodríguez Paz U, García Ortega M, Djmila Belkaid. Las ta no usar medicamentos que aumenten la presión ocular.
ametropías en el niño escolar. Rev Cubana Oftalmol. Los traumas prenatales o al momento del nacimien-
1989;2:49-54.
Rubio Mesejo L, Chávez Quiñones E, Fernández Álvarez M. to pueden ser provocados por la compresión de los
Importancia diagnóstica de la miopía en etapas tempranas de forceps, como daños en la córnea, equímosis,
la vida. Rev Cubana Oftalmol. 1990;3(1):24-9. laceraciones, ptosis, hifema, ruptura de coroides y he-
Shatalov OA, Chentsova OB. Method of prevention and treating
the accommodation cramp and progressive myopia in morragias retinales múltiples. En la amniocentésis tam-
children. Vestn-Oftalmol 1998;114(6):31-3. bién pueden provocarse traumatismos al globo ocular,
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Optics, Refraction aunque es raro.
and Contact Lenses. San Francisco:American
Ophthalmology; 2003-2004
EXAMEN DEL NIÑO TRAUMATIZADO
Cuando se procede al examen de un niño
. Capítulo108 . traumatizado, se deben cumplir rigurosamente los pasos
siguientes:
Traumatismos oculares • Hacer una historia clínica completa en la que, si se
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra, logra la cooperación del niño, esta pueda dar informa-
Rosaralis Santiesteban Freixas ción sobre la forma, el medio y los instrumentos o sus-
tancias químicas agresoras.
Los traumatismos oculares son frecuentes en los • De ser posible, realizar la medición cualitativa de la
niños y es una de las causas principales de disminución visión y de la amplitud del campo visual por confronta-
o pérdida de la visión. Se calcula que un tercio de las ción, que es muy importante en los pacientes con
pérdidas del bulbo ocular durante los primeros 10 años traumas craneoencefálicos, hemorragia vítrea y des-
de la vida tienen origen traumático. De 4 traumatismos prendimiento de retina.

1344 Tomo III


exámenes rutinarios cada 3 años. Con ello se realiza la oculares en niños, tres corresponden a varones y uno a
profilaxis de la ambliopía y se logra el tratamiento pre- hembras.
coz de los defectos de refracción y de enfermedades Los accidentes domésticos son la causa más fre-
oculares que podrían conducir a deterioro visual y a la cuente en menores de 6 años. Después son los juegos,
ambliopía. accidentes de tránsito y deportes, los que predominan.
En caso de traumatismos por mordeduras de animales
Bibliografía hay que poner en observación al animal y de morir hasta
estudiar su encéfalo para descartar la rabia.
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric En las lesiones potencialmente graves el diagnósti-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, 84-93.USA. co correcto, en busca de disminuir el daño visual con el
Prieto Díaz. Estrabismo. Buenos Aires. ED. Científicas, tratamiento adecuado, conlleva un examen exhaustivo,
2005,Argentina. casi siempre con el niño bien sedado o bajo anestesia
Braverman DE. Pediatric contact lenses [letter; comment]. J-Am-
Optom-Assoc 1998;69(7):452. general, a menos que exista una lesión craneoencefálica
Drexler W, Findl O, Schmetterer L, Hitzenberger CK, Fercher AF. que requiera control evolutivo del estado de conciencia.
Eye elongation during accommodation in humans: differences Las quemaduras representan la máxima urgencia
between emmetropes and myopes. Invest-Ophthalmol-Vis-
Sci 1998;39(11):2140-7. y el resto de los traumatismos debe ser atendido en el
García Bez O, Rodríguez Paz U, Hernández Morales L, Pérez término de las primeras 6 h, pero siempre con la búsque-
Suárez R. Escleroplastia en el tratamiento quirúrgico de la da de todas las lesiones posibles que se hayan podido
miopía. Rev Cubaana Oftalmol 1992;5(1):3-10, 20-30.
Guerra L, Martín M, Ríos T. Diagnóstico precoz de la ambliopía.
producir. Ese es el caso de un cuerpo extraño intraocular,
Rev Cubana Oftalmol; 1988;1:111-17. cuya vía de penetración con microperforación del globo
Hernández Álvarez ZM, Peláez Molina O, Chávez Quiñones E, ocular puede pasar inadvertida, si no se busca insisten-
Rubio Mesejo, L. Actualización en los efectos adversos de los
lentes de contacto. Rev Cubana Oftalmol 1990;3(3):245-9.
temente. Es de interés conocer si el niño estaba cerca
Hernández Baguer R, Martínez Palmer I. Factores a considerar en de donde estaban martillando hierro o donde pueden sal-
la prescripción de lentes. Rev. Cubana Oftalmol 1988;1(3):66-75. tar virutas metálicas. Se hace imprescindible entonces
Jensen H. Myopia progression in young school children: A un estudio radiológico simple o una TAC no contrastada.
prospective study of myopia pregression and the efect of a
trial with bifocal lenses and beta blocker eye drops. Acta Si es un traumatismo cerrado, está indicado el ul-
Ophthalmol (Sippl) 1999;200:69. trasonido modo B, para descartar diferentes lesiones
Machado Fernández EJ‚ Zanati Hussein. Queratotomía Hexagonal dentro del globo y también cuerpos extraños. Si es ne-
para la corrección quirúrgica de la Hipermetropía. Estudio de
146 ojos operados. Rev. Cubana Oftalmol. 1997; 10(1/2):13-8. cesario sedar o anestesiar al niño debe tenerse en cuen-
Rodríguez Paz U, García Ortega M, Djmila Belkaid. Las ta no usar medicamentos que aumenten la presión ocular.
ametropías en el niño escolar. Rev Cubana Oftalmol. Los traumas prenatales o al momento del nacimien-
1989;2:49-54.
Rubio Mesejo L, Chávez Quiñones E, Fernández Álvarez M. to pueden ser provocados por la compresión de los
Importancia diagnóstica de la miopía en etapas tempranas de forceps, como daños en la córnea, equímosis,
la vida. Rev Cubana Oftalmol. 1990;3(1):24-9. laceraciones, ptosis, hifema, ruptura de coroides y he-
Shatalov OA, Chentsova OB. Method of prevention and treating
the accommodation cramp and progressive myopia in morragias retinales múltiples. En la amniocentésis tam-
children. Vestn-Oftalmol 1998;114(6):31-3. bién pueden provocarse traumatismos al globo ocular,
Cantor L. B. Basic and Clinical Science Course. Optics, Refraction aunque es raro.
and Contact Lenses. San Francisco:American
Ophthalmology; 2003-2004
EXAMEN DEL NIÑO TRAUMATIZADO
Cuando se procede al examen de un niño
. Capítulo108 . traumatizado, se deben cumplir rigurosamente los pasos
siguientes:
Traumatismos oculares • Hacer una historia clínica completa en la que, si se
Eugenio Jara Casco, Gladys Colom Serra, logra la cooperación del niño, esta pueda dar informa-
Rosaralis Santiesteban Freixas ción sobre la forma, el medio y los instrumentos o sus-
tancias químicas agresoras.
Los traumatismos oculares son frecuentes en los • De ser posible, realizar la medición cualitativa de la
niños y es una de las causas principales de disminución visión y de la amplitud del campo visual por confronta-
o pérdida de la visión. Se calcula que un tercio de las ción, que es muy importante en los pacientes con
pérdidas del bulbo ocular durante los primeros 10 años traumas craneoencefálicos, hemorragia vítrea y des-
de la vida tienen origen traumático. De 4 traumatismos prendimiento de retina.

1344 Tomo III


• Palpar el reborde orbital para descartar que exista lagrimal. En estos casos, se necesita atención oftal-
fractura. mológica especializada para evitar una epífora o lagrimeo
• Examinar los párpados, la conjuntiva y la esclera, don- pasivo permanente como secuela.
de pueden encontrarse cuerpos extraños, hemorragias La herida contusa con desgarro debe suturarse de
(hematomas), heridas y hasta puntos de perforación inmediato, previa limpieza y asepsia cuidadosa, uniendo
escleral. bien y de forma pareja sus bordes.
• Insistir en el examen de la córnea con luz oblicua y, si En las quemaduras por calor o por sustancias quí-
micas el edema y eritema son los signos fundamentales.
es posible, con lupa y lámpara de hendidura.
Si es grave y profunda, puede aparecer necrosis hística
• Observar la cámara anterior para descartar la existen-
que se debe eliminar de inmediato.
cia de sangre, el cristalino luxado u otro cuerpo extraño.
• Mirar las pupilas para valorar su tamaño, forma y res-
puesta a la luz; examinar los reflejos pupilares: directo,
fotomotor, consensual y el paradójico de Marcus Gunn.
• Si no se ha constatado o sospechado perforación del
globo ocular, examinar y evaluar los movimientos ocu-
lares en busca de paresias o parálisis musculares.
• Si el estado ocular lo permite, hacer un examen de los
medios transparentes en busca de opacidades del cris-
talino, o alteración de su posición, o de hemorragia
vítrea.
Fig. 108.1. Herida palpebral suturada, acompañada de he-
• De ser posible por parte del pediatra, realizar un exa-
morragia subconjuntival.
men del fondo de ojo por la posibilidad de hemorragia
intraocular u otro tipo de daño en polo posterior.
Conjuntiva
Lesiones oculares traumáticas La hemorragia subconjuntival es muy frecuente y,
Las lesiones pueden ocurrir en cualquiera de las salvo en el caso de existir enfermedad hematológica ge-
estructuras del globo ocular, sus anexos o las vías neral, casi siempre es traumática (Fig. 108.2), aunque
visuales. en ocasiones se producen cuando aumenta bruscamen-
te la presión cefálica. Las hemorragias subconjuntivales
Párpados pueden llegar a ser muy extensas, no obstante, desapa-
recen de forma espontánea, sin dejar secuelas, en aproxi-
Son frecuentes los hematomas y equimosis de los madamente 2 ó 3 semanas.
párpados. Si la sangre es mucha y se localiza dentro de
la órbita, puede producirse proptosis del bulbo y limita-
ción de los movimientos oculares con párpados en ten-
sión, lo que puede dar lugar a isquemia ocular. En caso
de picaduras de insectos se destaca el gran edema de
los párpados.
Las heridas incisas deben valorarse cuidadosamente
para eliminar la posibilidad de que haya lesiones en la
conjuntiva y la esclera, y determinar si hay daño en los
puntos lagrimales, canalículos y saco lagrimal. Si la heri-
da es vertical y profunda, observar si secciona las fibras
del músculo orbicular de los párpados. Se deben suturar Fig. 108.2. Hemorragia subconjuntival.
después de limpiar muy bien con agua y soluciones anti-
Los cuerpos extraños, como por ejemplo: polvo,
sépticas, extrayendo posibles cuerpos extraños
cenizas, arenas, tierra y fragmentos metálicos, son ele-
como: tierra, fragmentos de cristal, madera, entre
mentos que pueden alojarse en la conjuntiva. Provocan
otros (Fig. 108.1). dolor, escozor, lagrimeo y reacción conjuntival.
Cuando la herida se produce en el ángulo interno Para localizar un cuerpo extraño en la conjuntiva
del párpado inferior puede haber seccionado el canalículo del fondo de saco superior, se realiza la eversión del

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1345


párpado y se extrae con lavados de suero fisiológico o cal viva es realizar abundantes lavados de arrastre
agua, o con un aplicador o torunda húmedos. De no ser con agua o suero fisiológico y frotar con gasa o una
movilizado de esta forma, por encontrarse más profun- torunda la conjuntiva y la córnea afectada.
do en el tejido conjuntival, requiere su remisión al oftal- Debe instilarse colirio anestésico para aliviar el dolor
mólogo. A continuación de ser extraido el cuerpo extraño y realizar una exhaustiva limpieza de la conjuntiva
se aplica ungüento o colirio antibióticos de amplio es-
palpebral y de los fondos de saco, extrayendo todo resi-
pectro y se ocluye el ojo con un apósito estéril durante
duo de material cáustico. Se pueden aplicar neutralizantes
24 h, para lograr la cicatrización y la desaparición de los
síntomas. como el ácido láctico o ácido acético al 1 % para las
Después de las heridas conjuntivales o corneales quemaduras por álcalis y bicarbonato de sodio al 2 %
es frecuente observar una conjuntivitis traumática, pro- para las provocadas por ácidos. Se completa el trata-
vocada por el propio agente agresor o por las manos miento con la aplicación de colirio de atropina a 1 %, así
contaminadas del niño que lleva inconcientemente a su como colirios o pomadas antibióticos de amplio espectro.
ojo adolorido. A veces es necesario separar la conjuntiva bulbar
Las heridas conjuntivales obligan a valorar muy bien de la palpebral con trozos del guante de goma u otra
si hay perforación de la esclera que ella recubre, por la sustancia similar, para evitar las adherencias. No se debe
posibilidad de un cuerpo extraño intraocular. ocluir el ojo con apósito en las quemaduras por cáustico.
Quemaduras de párpados y conjuntivas. Las Como complicación de la quemadura puede pro-
quemaduras oculares, aunque menos frecuentes que las ducirse la adherencia de la conjuntiva bulbar con la
heridas y las contusiones, también son causantes de gra- palpebral, denominada simbléfaron.
ves lesiones con disminución y pérdida de visión en los La remisión al oftalmólogo es de urgencia para tra-
niños. Los agentes más comunes son: ácidos, álcalis, tamiento especializado. Se debe tener presente que las
aceite, agua caliente, cigarro, alcohol, ácido de acumula- quemaduras por álcalis son siempre más graves y de
dor, cemento, salfumante y cal viva, entre otros. más urgente atención que las producidas por ácidos.
En las quemaduras hay intenso dolor, fotofobia,
lagrimeo y blefaroespasmo; el ojo está muy rojo, con Esclera
edema palpebral y conjuntival. En los casos en que el Las heridas de la esclera son menos frecuentes.
efecto cáustico es profundo, como sucede con la cal y Las perforantes, a veces puntiformes, deben buscarse
otros cáusticos, la conjuntiva se ve blanca y avascular cuando se ha producido traumatismo por un instrumento
por necrosis del tejido. En las zonas afectadas se forma punzante o existe un foco hemorrágico subconjuntival
una escara grisácea que al eliminarse deja un lecho en la superficie de la túnica escleral.
granuloso que puede producir la adherencia de la con- La ruptura de la esclera puede ser provocada por
juntiva bulbar con la palpebral o con la córnea, al cicatrizar. un trauma contuso o punzante. La conducta es quirúrgi-
La acción de los ácidos es más lenta y menos apa- ca, previo examen radiológico en busca de cuerpo ex-
ratosa. Días o semanas después pueden provocar cata- traño intraocular.
ratas y a veces uveítis crónica solapada de pronóstico
reservado. Los agentes físicos provocan daño al ojo por Córnea
elevación de la temperatura como causa fundamental, La córnea puede afectarse con la aplicación de
mientras que la acción nociva de las sustancias cáusti- fórceps en el parto y provocar ruptura de la membrana
cas provoca la desnaturalización de las proteínas, oca- Descemet, orientadas verticalmente, lo que puede pro-
sionando lesión y muerte celular. Los ácidos penetran vocar más tarde grandes astigmatismos y llevar a una
en el tejido conjuntival y continúan provocando altera- ambliopía o anisometropía.
ciones en el ojo durante días. Los niños con erosiones o abrasiones corneales se
En las causadas por álcalis, que son mucho más atienden con frecuencia en los servicios de urgencia.
graves, su efecto es de inmediato. Precipitan las proteí- Por lo general son muy dolorosas, pero reversibles. Son
nas de los lípidos y ponen opaca la córnea en pocas ho- ocasionadas por diversos objetos, como por ejemplo: ju-
ras. En el primer momento el tratamiento consiste en guetes, uñas, cigarros o cuerpos extraños alojados en el
lavados e irrigación con agua o suero fisiológico. párpado superior, los que al rozar la córnea lesionan su
En los cuerpos de guardia oftalmológicos deben epitelio.
existir soluciones neutralizantes tanto de álcalis como de Las erosiones y los cuerpos extraños sobre la cór-
ácidos. Estos productos deben ser removidos de inme- nea se acompañan de lagrimeo profuso, dolor y fotofobia,
diato. Lo más importante frente a una quemadura por así como de inyección vascular pericorneal (ciliar).

1346 Tomo III


En el caso de la erosión simple, el diagnóstico es
fácil, si se coloca papel de fluoresceína en el fondo de
saco conjuntival, lo que tiñe de verde la zona de la córnea
donde falta el epitelio. Este efecto de tinción se hace más
evidente si se usa el filtro azul de cobalto del oftalmoscopio
para iluminar la lesión. La oclusión durante 24 a 48 h es
suficiente para la cicatrización del epitelio de la córnea.
Los cuerpos extraños, por lo general son fáciles de
localizar y en la mayoría de los casos se ven a simple
vista. Se puede instilar una gota de colirio anestésico
con fluoresceína para su mejor localización y al recono-
cerlos deben de ser extraídos, lo que se hará en depen-
dencia de la profundidad a que estén situados, con un Fig. 108.3. Herida corneal con sinequia anterior.
hisopo o con una lanceta si está más profundo. Se ocluye
el ojo con una pomada oftálmica antibiótica, al menos
durante 48 h. Si el cuerpo extraño está profundo debe
enviarse al oftalmólogo, pues requerirá observación en
equipos de mayor óptica y hasta una posible interven-
ción quirúrgica. Si un cuerpo extraño no es atendido y
extraído rápida y correctamente puede dejar como se-
cuela complicaciones como queratitis y úlceras.
Las heridas de córnea pueden ser penetrantes y
no penetrantes, y pueden clasificarse, como todas las
heridas, en punzantes, incisas, incisocontusas y anfrac-
tuosas. Siempre, en estos casos, se remite al paciente
para la atención por el oftalmólogo.
En el examen se puede observar pérdida del tono Fig. 108.4. Herida corneal anfractuosa.
ocular (globo hipotónico e incluso deformado). Salida del
contenido ocular (líquido y/o tejidos, hernias del iris en los Entre las heridas penetrantes o anfractuosas
bordes de la herida), deformidad pupilar, sangramiento. (Fig. 108.4), se debe recordar los picotazos de aves,
No sucede así cuando la lesión afecta a la esclera sola- cuando el niño juega con ellas o las tiene cargadas en
mente y la herida no se ve por estar oculta bajo la conjun-
sus manos. Se debe insistir en conocer el agente
tiva. En estos casos la hipotonía del ojo es un signo
traumático por la posibilidad de la existencia de un cuer-
importante de perforación, por lo que, de ser posible, se
po extraño intraocular.
debe tomar la tensión ocular de forma digital, con mucho
Las heridas que perforan el globo ocular son siem-
cuidado y compararla con la del otro ojo. Se puede ver
pre peligrosas, no tan solo por el daño que pueden pro-
también pérdida del humor acuoso de la cámara anterior
vocar a las estructuras interesadas, sino por los peligros
y discoria, todo lo cual puede llevar a la desorganización
de infección y de oftalmía simpática, si se lesiona el
de los elementos de la córnea y cámara anterior. (Fig.
cuerpo ciliar. Esto puede provocar reacción inflamatoria
108.3). En casos de las heridas corneales se debe ocluir
el ojo afectado, sin intentar limpiar ni poner medicación del ojo sano, que aunque es rara, de no tratarse llevan a
alguna; no se hará presión sobre el globo. Se remitirá al la pérdida de la visión y a veces del globo ocular
paciente de urgencia a un servicio especializado. (Figs. 108.5, 108.6 y 108.7).
En otras ocasiones pueden existir pequeñas perfo- En ocasiones la perforación del globo es tan diminu-
raciones que no son tan fáciles de detectar a simple ins- ta que no es detectable a simple vista, como sucede con
pección y con métodos convencionales, por lo que se los cuerpos extraños pequeños, sobre todo metálicos. Los
debe siempre, ante un trauma ocular pensar en ellas y si cuerpos extraños intraoculares deben sospecharse siem-
hay dudas se puede realizar una sencilla prueba instilando pre que el niño u otra persona junto a él han estado mar-
fluoresceína y haciendo una moderada presión en el glo- tillando hierro contra hierro o después de una explosión.
bo. Se observa entonces si es que fluye líquido de la Estos traumatismos son poco frecuentes en los niños, pero
herida (efecto Seidel positivo), en cuyo caso se puede por su gravedad deben tenerse presente. Ante la duda de
afirmar la existencia de perforación. Hay que tener en la existencia o no de un cuerpo extraño intraocular se
cuenta que en pequeñas perforaciones, pueden estar debe realizar un estudio con rayos X de la órbita y remitir
ausentes en gran medida estos signos. urgente al especialista en oftalmología.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1347


Las agresiones por agentes químicos son produci-
das con frecuencia por álcalis y ácidos, así como por
otros abrasivos como desinfectantes y productos usa-
dos en fumigaciones. Dentro de estas las producidas por
álcalis son las más graves y constituyen una emergencia
médica por la evolución rápida y las complicaciones que
conllevan. Los síntomas son dolor intenso, fotofobia,
blefaroespasmo, lagrimeo, pérdida de visión, variable,
dependiendo de la magnitud de la lesión. Los signos: son:
lesiones eritematosas en párpados y /o zonas de la cara,
hiperemia conjuntival y edema, lesión del epitelio corneal
que puede llegar hasta el estroma, opacidad corneal va-
Fig. 108.5. Herida corneal antigua, suturada. riable total o parcial, secreciones filantes y /o esfacelos,
en los que pueden existir restos de tejido conjuntival o
corneal. Se asocian a complicaciones graves como uveítis,
glaucoma secundario y dejan graves secuelas con
opacidades permanentes en córnea, vascularización,
simbléfaron y deformidad de toda la superficie externa
ocular y otras alteraciones, según la intensidad de la
agresión.
TRATAMIENTO
Realizar lavado profuso y frecuente con suero fi-
siológico o incluso con agua; retirar toda la sustancia o
Fig. 108.6. Ptisis bulbi. material que pudiera estar aún en contacto con la super-
ficie ocular, instilar colirios antibióticos, lubricantes ocu-
lares, midriáticos y remitir de inmediato al oftalmólogo.
Las quemaduras y heridas perforantes del globo
ocular pueden provocar pérdida del globo ocular con el
daño funcional y psíquico al paciente. Se insiste que en
las quemaduras se debe actuar con extrema urgencia,
en especial, cuando están producidas por álcalis, que son
las más graves y pueden provocar opacificación total de
la córnea en pocas horas.
En las contusiones, según el impacto, se pueden
Fig. 108.7. Niño eviscerado. producir lesiones corneoesclerales e internas, y suele
existir participación uveal. Si la contusión es suficiente-
En casos de heridas corneales con sospecha de mente intensa, se puede producir un estallamiento del
cuerpo extraño intraocular o sin ella, se debe ocluir el globo ocular.
ojo afectado, sin intentar limpiar ni poner medicación al-
guna, no se hará presión sobre el globo y el pediatra Iris y cuerpo ciliar
debe remitir al paciente a un servicio especializado. El sangramiento del iris y del cuerpo ciliar es fre-
Quemaduras por agentes físicos o químicos a
cuente en los niños, especialmente por traumas contu-
la corneoesclera. Las agresiones por agentes físicos más
sos, asociados a juegos peligrosos como cuando se usan
frecuentes son la exposición a radiaciones ultravioleta, y
tiraflechas, piedras, pelotas duras, o cuando ocurre agre-
a radiaciones lumínica de arco voltaico de soldadura. Los
síntomas más comunes son el dolor, intensa fotofobia, sión con los puños. Se aloja una cantidad de sangre en la
moderada deficiencia visual. En el examen se suele en- cámara anterior que puede rellenarla de forma parcial o
contrar inyección ciliar, edema moderado epitelial corneal total (hifema). Requiere una rápida atención y tratamiento
y lesiones puntiformes diseminadas en toda la superficie por el especialista en oftalmología, pues de mantenerse
corneal. El tratamiento se realiza con analgésicos y la sangre y no desaparecer puede conducir a complica-
antiinflamatorios esteroideos tópicos y oclusión. ciones graves y a la pérdida de la visión (Fig. 108.8).

1348 Tomo III


por las consecuencias graves de su complicación con
hipertensión ocular. Esta afección debe ser atendida por
el oftalmólogo y con el paciente ingresado en servicio
hospitalario para su observación diaria durante 4 ó 5 días,
por el grave riesgo de su complicación.
Con menos frecuencia se ven en las afecciones
del iris las iridodiálisis, a veces grandes, que simulan do-
ble pupila y requieren tratamiento quirúrgico.

Cristalino
Como consecuencia de traumatismo contuso del
ojo, el cristalino puede salir de su lugar parcialmente
(subluxación), o sufrir una luxación total y verse en la
Fig. 108.8. Hifema traumático. cámara anterior o en el cuerpo vítreo. La conducta para
estos pacientes es cirugía de urgencia.
El hifema, de pronóstico siempre reservado, es la Luego de un trauma ocular sobre el ojo (pedrada o
causa que ocasiona más ingresos en los servicios de ur- puñetazo), en semanas o meses después el cristalino
gencia de oftalmología pediátrica. Los síntomas son: do- puede perder su transparencia, dando lugar a una cata-
lor, lagrimeo, fotofobia y disminución o pérdida de la visión, rata traumática, lo que necesitará tratamiento quirúrgico
los que están en dependencia de la magnitud del para extraerla. Es importante la edad del niño al mo-
sangramiento; con frecuencia se acompañan de vómi- mento de la catarata traumática, ya que si aún no se ha
tos y decaimiento. Si el hifema es total, impide ver el iris llevado a cabo el proceso de desarrollo visual, este pue-
y el área pupilar; por lo contrario, si es parcial, forma un de detenerse y quedar el niño con una ambliopía, si no se
nivel horizontal en la cámara anterior, fácilmente obser- toman las medidas adecuadas.
vable con buena iluminación, sobre todo, en iris claro.
La mayoría de los hifemas desaparecen sin dejar Cuerpo vítreo
secuelas, si son pequeños, como de un tercio de la cá-
mara anterior o menos, los cuales curan, por lo regular, Cuando después de un traumatismo ocular se le-
en un término de 4 ó 5 días de reposo absoluto, aunque sionan los vasos de la retina, la sangre se puede
pueden volver a sangrar si el niño no hace reposo. Este extravasar y caer en el cuerpo vítreo. Se produce en-
segundo sangramiento es una complicación muy grave tonces una hemorragia vítrea, lo que es reconocido por
si es total, porque provoca aumento de la tensión la pérdida del reflejo rojo naranja del fondo de ojo y la
intraocular y la impregnación hemática de la córnea. De permanencia de la tercera imagen de Purkinge. En oca-
no aplicarse la conducta medicoquirúrgica necesaria en siones, se producen hemorragias prerretinianas que por
cada paciente, pueden producirse secuelas como glau- sus características deben ser evacuadas hacia al vítreo
coma secundario, hemosiderosis atrofia óptica y la pér- para acelerar la reabsorción de la sangre y sus produc-
dida de la función visual. tos tóxicos. En esos casos un disparo con láser actúa
En enfermos siclémicos, en los que esta afección como punción evacuadora al vítreo (Fig. 108.9).
es frecuente, debe prestarse especial atención al aumento
de la tensión intraocular por el peligro de isquemia en la
retina y el nervio óptico, que puede aparecer con apenas
un día de evolución.
Cuando el pediatra observa hifema, es necesario
remitir de urgencia el paciente al oftalmólogo y no espe-
rar su complicación. Desde el inicio se debe poner al
niño en reposo físico con sedantes y la cabeza elevada
en 30 grados y darle reposo ocular con la oclusión de
ambos ojos para evitar sus movimientos. De ser grande
el hifema, con coágulo y no tener tendencia a
reabsorberse, debe valorarse la cirugía.
El pediatra debe tener especial cuidado con los
pequeños hifemas y no contraer el compromiso de en- Fig. 108.9. Hemorragia prerretiniana con salida al vítreo con
viar a los niños a su casa con la recomendación de reposo, un impacto de láser.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1349


Retina Los traumatismos de órbita pueden provocar
Los traumatismos de la retina producen hemorra- desgarraduras del nervio, contusión o hematomas de sus
gias de tres tipos, en dependencia del lugar de la retina vainas. Este tipo de lesiones puede ser parcial o total y
donde se aloja la sangre. Las hemorragias profundas concomitar con lesiones de otras capas del ojo. Si el
son de forma redondeada; las superficiales en forma de traumatismo es al nivel del canal óptico esta situación
llama y las prerretinianas se caracterizan por ser redon- se hace más compleja, ya que si el nervio se edematiza
deadas, por lo regular grandes y con la parte superior puede añadirse, al daño por el trauma, la compresión de
horizontal (Fig. 108.10). las paredes rígidas que lo rodean, como sucede al nivel
de las láminas cribosas de la papila.
Si la lesión es en el segmento orbitario del nervio o
más atrás, el fondo puede ser normal y no debe apare-
cer la atrofia hasta varias semanas después, cuando la
atrofia de los axones descienda hasta alcanzar la papila.
En estos casos, el reflejo pupilar ausente o la presencia
del reflejo pupilar paradójico de Marcus Gunn, denun-
ciará el daño retrobulbar.
El traumatismo sobre la órbita puede fracturar su
suelo y provocar enoftalmo, descenso del globo ocular y
Fig. 108.10. Hemorragias superficiales en llama y profundas la imposibilidad de la elevación en la mirada hacia arri-
redondeadas. ba, dando diplopía. Las fracturas de fosa anterior pue-
den dañar el quiasma o la porción intracraneal del nervio
Las hemorragias retinianas por trauma del parto óptico. Los traumatismos pueden ocasionar exoftalmos
son frecuentes en los recién nacidos y se reabsorben en por hemorragias en la órbita o enfisema por rotura de la
pocos días sin mayores consecuencias. Los desprendi- pared interna a través de los senos perinasales.
mientos de retina por trauma se ven sobre todo en mio- También se debe mencionar que en los
pes altos. traumatismos graves pueden producirse lesiones a dis-
tancia, es decir, no directamente sobre el bulbo ocular,
Nervio óptico como son: las embolias grasas y el síndrome de Purtscher.
Los traumatismos sobre el nervio óptico son en
muchas ocasiones producto de lesiones craneofaciales Prevención del trauma ocular
que dañan a otras estructuras, en especial al sistema El niño sufre con frecuencia traumatismos ocula-
nervioso central, por lo tanto la lesión sobre el nervio res producto de sus juegos y su constante afán de imita-
óptico no se detecta de inicio o pasa a un plano secunda- ción, otras veces por negligencia y falta de cuidado de
rio, hasta que el paciente, recuperado de otras lesiones, y los adultos. Por lo tanto, es indispensable evitar que jue-
ya sin edema palpebral, se da cuenta que no ve por un ojo. gue con: dardos, tiraflechas, palos, piedras, tijeras, cu-
El nervio puede ser afectado por contusión, chillos y sustancias que puedan resultar dañinas, como
laceración, ruptura, hemorragias entre sus vainas o heri- ácidos y álcalis, en particular la cal y el cemento.
da punzante por una esquirla ósea. En las contusiones Otros juegos frecuentemente practicados, como por
sobre el globo puede afectarse la coroides, retina y el ejemplo, con la pelota, deben vigilarse y enseñarles cómo
nervio óptico a la vez (Fig. 108.11). seguir sus reglas correctas para no provocar traumas.
En cuanto a los tratamientos, pueden ser indicados
por los pediatras para las heridas palpebrales pequeñas
que no tengan pérdidas de sustancias ni comprometan
las vías de drenaje de las lágrimas; las hemorragias
conjuntivales, así como las erosiones y cuerpos extra-
ños superficiales de la córnea. El resto de afecciones
provocada por traumatismos oculares deben ser atendi-
do por el oftalmólogo.

Signos oculares del maltrato infantil


El espectro de lesiones oculares en el abuso sobre
Fig. 108.11. Ruptura de coroides, capas de retina y atrofia
de fibras correspondientes. los niños incluye casi todo tipo de alteraciones, aun las

1350 Tomo III


más graves que pueden conducir a la ceguera y hasta la Mayra Mier Armas, Violeta Rodríguez Rodríguez, María Carolina
pérdida del globo ocular. Es por ello que cuando una Zalazar Campos. Función visual en pacientes operados de
cuerpo extraño intraocular. Rev Cubana Oftalmol
lesión ocular no puede ser explicada de forma suficiente 1999;121(1):.
o por padres o tutores que no saben aclarar lo que pre- Mohcine Z. Therapeutic and prognostic problems of traumatic
senta el niño en sus ojos, se deben buscar: fracturas, cataracts. Apropos of 45 cases. J-Fr-Ophtalmol
1998;21(2):112-7.
lesiones en tejidos blandos, quemaduras de cigarrillos, Moreira Guillén Eneida, Sara E. Romeu Yunaka, Juan C. Martín,
mordiscos y hasta heridas para confirmar la causa Rubén Cabrera Compte Traumatismo ocular en el niño.
traumática cruel e intencional y proceder a comunicar Repercusión visual Rev Cubana Oftalmol 1999;12(2):.
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
(denunciar) el hecho a las autoridades pertinentes. Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, 528-552. USA.
Bibliografía Peláez Molina, O. Contribución del signo escleral (signo del
tatuaje) a la cirugía de los cuerpos extraños intraoculares
Acosta Díaz LR, Pérez Blázquez GJ, Martínez Ribalta J. magnéticos. Rev Cubana Oftalmol, 1988;1(3):17-26.
Pronóstico visual de los lesionados por cuerpos extraños Pérez Blázquez Gildo J, Luis Acosta Díaz, José Bouza Barrera,
metlicos intraoculares. Rev Cubana Oftalmol 1992;5(2):107-17. José Bouza Cardin y José A. Escandell Guerra. Implante
Christian CW, Taylor AA, Hertle RW, Duhaime AC. Retinal ocular de plascol liso en la cirugía extractiva del bulbo ocular.
hemorrhages caused by accidental household trauma. J Rev Cubana Oftalmol 1995;8(2)
Pediatr. 1999 Jul;135(1):125-7. Pérez Blázquez GJ, Acosta Díaz L, Bouza Barrera J‚ Bouza
Díaz Fernández JM y Alberto James Pita. Resultados del injerto Cardín J‚ Escandell Guerra JA. Implante ocular de plascol
autógeno del maxilar en las fracturas del suelo orbitario. Rev liso en la cirugía extractiva del bulbo ocular. Rev Cubana
Cubana Oftalmol 1995;8(1). Oftalmol 1995;8(2):69-76.
Perón Saavedra A, Río Álvarez J del, Durn López D, Hernández
Díaz Fernández JM, González González R. Características de las
Pérez P. Hifema traumático: estudio de 5 años. Rev Cubana
fracturas del reborde supraorbitario. Rev Cubana Oftalmol Oftalmol 1992;5(2):107-7.
1993;6(1).34-8. Saint Blancard MG, Jardines Fonseca L, Martínez Ribalta J.
Díaz Fernández JM, James Pita A. Resultados del injerto autógeno Traumatismos oculares. Rev Cubana de Oftalmol 1993,v2:112-118.
del maxilar en las fracturas del suelo orbitario. Rev Cuba Smith TJ, Mourits MP. Monocanalicular lesions: to reconstruct or
Oftalmol 1995;18(1):3-7. not. Ophthalmology 1999;106(7):1310-2.
Díaz Fernández José Manuel, Felipe Segundo Fernández Pérez,
Madelín García Gali y Moraima Rodríguez Alba. . Capítulo 109 .
Caracterización clinicoterapéutica de la dacriocistitis crónica
traumática. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(1). . Capítulo 109 .
Eid Ata Y, Acosta Díaz LR, Escandell Guerra JA, Pérez Blázquez
GJ. Pronóstico visual en el hipema traumático. Rev Cubana
Oftalmol 1993;6(1):43-9.
Eid Ata Y, Pérez Blázquez GJ, Martínez Ribalta J, Acosta Díaz L,
Problemas funcionales
López Pardo C. Estudio descriptivo, analítico y predictivo de y orgánicos que provocan
la agudeza visual en los traumatismos oculares. Rev Cuba
Oftalmol 1993;6(1):50-3.
ceguera y baja visión.
González CA, Scott IU, Chaudry NA, Oster AS, Hess DJ, Jurray-
TG. Bilateral rhegmatogenous retinal detachments with
Su prevención
Rosaralis Santiesteban Freixas, Dora Hitchman Barada,
unilateral vitreous base avulsion as the presenting signs of Josefa Romero Guerra
child abuse. Am-J-Ophthalmol 1999;127(4):475-7.
González Delgado Rosa Idalmis y Gildo J. Pérez Blázquez
Estudio descriptivo, analítico y predictivo de las heridas
La ceguera y la deficiencia visual grave o baja
perforantes del bulbo ocular. Rev Cubana Oftalmol visión en la niñez equivalen a la alteración de un sentido
2001;14(1). indispensable para el aprendizaje y desarrollo normal,
Guardia Bajuelo J, Rodríguez Romero A, Santana Álvarez J. por lo que después de conocer y tratar la causa, si es
Reconstrucción de la ruptura traumática del canalículo
posible, hay que saber cuán grande es la deficiencia,
lagrimal del párpado inferior. Rev Cuba Oftalmol
1993;6(1):39-42. cuál es el pronóstico, qué hacer con un resto de visión,
Ileana Miguel Pérez. Estudio sobre traumatismos. Rev Cubana cómo explotarlo al máximo y cómo proceder frente a un
Oftalmol 2004;17(1). niño con trastornos funcionales para saber que no es
Krohel GB. Blepharoptosis after traumatic third-nerve palsies. Am realmente un minusválido visual, demostrarlo y tratarlo.
J Ophthalmol 1979;88:598-601.
Lin KC, Glasgow BJ. Bilateral perioptico intrascleral hemorrhages
En la educación y rehabilitación de estos niños se
associated with traumatic child abuse. Am-J-Ophthalmol designa como deficiencia visual al que tiene restos de
1999;127(4):473-5. visión útiles y como ciego al que no los tiene.
Martínez Quintana S, Cabrera Salcedo E, Rodríguez Pupo A, Para ayudarlos es necesario corroborar el diagnósti-
Oliveros González ME. Contusión ocular en el niño asociada
co, conocer la causa y el estado actual de la enfermedad, lo
con hipema: estudio de 200 pacientes. Rev. Cubana oftalmol
1988; 1(3):44-51. que se debe basar en un examen físico exhaustivo.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1351


más graves que pueden conducir a la ceguera y hasta la Mayra Mier Armas, Violeta Rodríguez Rodríguez, María Carolina
pérdida del globo ocular. Es por ello que cuando una Zalazar Campos. Función visual en pacientes operados de
cuerpo extraño intraocular. Rev Cubana Oftalmol
lesión ocular no puede ser explicada de forma suficiente 1999;121(1):.
o por padres o tutores que no saben aclarar lo que pre- Mohcine Z. Therapeutic and prognostic problems of traumatic
senta el niño en sus ojos, se deben buscar: fracturas, cataracts. Apropos of 45 cases. J-Fr-Ophtalmol
1998;21(2):112-7.
lesiones en tejidos blandos, quemaduras de cigarrillos, Moreira Guillén Eneida, Sara E. Romeu Yunaka, Juan C. Martín,
mordiscos y hasta heridas para confirmar la causa Rubén Cabrera Compte Traumatismo ocular en el niño.
traumática cruel e intencional y proceder a comunicar Repercusión visual Rev Cubana Oftalmol 1999;12(2):.
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley‘s Pediatric
(denunciar) el hecho a las autoridades pertinentes. Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005, 528-552. USA.
Bibliografía Peláez Molina, O. Contribución del signo escleral (signo del
tatuaje) a la cirugía de los cuerpos extraños intraoculares
Acosta Díaz LR, Pérez Blázquez GJ, Martínez Ribalta J. magnéticos. Rev Cubana Oftalmol, 1988;1(3):17-26.
Pronóstico visual de los lesionados por cuerpos extraños Pérez Blázquez Gildo J, Luis Acosta Díaz, José Bouza Barrera,
metlicos intraoculares. Rev Cubana Oftalmol 1992;5(2):107-17. José Bouza Cardin y José A. Escandell Guerra. Implante
Christian CW, Taylor AA, Hertle RW, Duhaime AC. Retinal ocular de plascol liso en la cirugía extractiva del bulbo ocular.
hemorrhages caused by accidental household trauma. J Rev Cubana Oftalmol 1995;8(2)
Pediatr. 1999 Jul;135(1):125-7. Pérez Blázquez GJ, Acosta Díaz L, Bouza Barrera J‚ Bouza
Díaz Fernández JM y Alberto James Pita. Resultados del injerto Cardín J‚ Escandell Guerra JA. Implante ocular de plascol
autógeno del maxilar en las fracturas del suelo orbitario. Rev liso en la cirugía extractiva del bulbo ocular. Rev Cubana
Cubana Oftalmol 1995;8(1). Oftalmol 1995;8(2):69-76.
Perón Saavedra A, Río Álvarez J del, Durn López D, Hernández
Díaz Fernández JM, González González R. Características de las
Pérez P. Hifema traumático: estudio de 5 años. Rev Cubana
fracturas del reborde supraorbitario. Rev Cubana Oftalmol Oftalmol 1992;5(2):107-7.
1993;6(1).34-8. Saint Blancard MG, Jardines Fonseca L, Martínez Ribalta J.
Díaz Fernández JM, James Pita A. Resultados del injerto autógeno Traumatismos oculares. Rev Cubana de Oftalmol 1993,v2:112-118.
del maxilar en las fracturas del suelo orbitario. Rev Cuba Smith TJ, Mourits MP. Monocanalicular lesions: to reconstruct or
Oftalmol 1995;18(1):3-7. not. Ophthalmology 1999;106(7):1310-2.
Díaz Fernández José Manuel, Felipe Segundo Fernández Pérez,
Madelín García Gali y Moraima Rodríguez Alba. . Capítulo 109 .
Caracterización clinicoterapéutica de la dacriocistitis crónica
traumática. Rev Cubana Oftalmol 1996;9(1). . Capítulo 109 .
Eid Ata Y, Acosta Díaz LR, Escandell Guerra JA, Pérez Blázquez
GJ. Pronóstico visual en el hipema traumático. Rev Cubana
Oftalmol 1993;6(1):43-9.
Eid Ata Y, Pérez Blázquez GJ, Martínez Ribalta J, Acosta Díaz L,
Problemas funcionales
López Pardo C. Estudio descriptivo, analítico y predictivo de y orgánicos que provocan
la agudeza visual en los traumatismos oculares. Rev Cuba
Oftalmol 1993;6(1):50-3.
ceguera y baja visión.
González CA, Scott IU, Chaudry NA, Oster AS, Hess DJ, Jurray-
TG. Bilateral rhegmatogenous retinal detachments with
Su prevención
Rosaralis Santiesteban Freixas, Dora Hitchman Barada,
unilateral vitreous base avulsion as the presenting signs of Josefa Romero Guerra
child abuse. Am-J-Ophthalmol 1999;127(4):475-7.
González Delgado Rosa Idalmis y Gildo J. Pérez Blázquez
Estudio descriptivo, analítico y predictivo de las heridas
La ceguera y la deficiencia visual grave o baja
perforantes del bulbo ocular. Rev Cubana Oftalmol visión en la niñez equivalen a la alteración de un sentido
2001;14(1). indispensable para el aprendizaje y desarrollo normal,
Guardia Bajuelo J, Rodríguez Romero A, Santana Álvarez J. por lo que después de conocer y tratar la causa, si es
Reconstrucción de la ruptura traumática del canalículo
posible, hay que saber cuán grande es la deficiencia,
lagrimal del párpado inferior. Rev Cuba Oftalmol
1993;6(1):39-42. cuál es el pronóstico, qué hacer con un resto de visión,
Ileana Miguel Pérez. Estudio sobre traumatismos. Rev Cubana cómo explotarlo al máximo y cómo proceder frente a un
Oftalmol 2004;17(1). niño con trastornos funcionales para saber que no es
Krohel GB. Blepharoptosis after traumatic third-nerve palsies. Am realmente un minusválido visual, demostrarlo y tratarlo.
J Ophthalmol 1979;88:598-601.
Lin KC, Glasgow BJ. Bilateral perioptico intrascleral hemorrhages
En la educación y rehabilitación de estos niños se
associated with traumatic child abuse. Am-J-Ophthalmol designa como deficiencia visual al que tiene restos de
1999;127(4):473-5. visión útiles y como ciego al que no los tiene.
Martínez Quintana S, Cabrera Salcedo E, Rodríguez Pupo A, Para ayudarlos es necesario corroborar el diagnósti-
Oliveros González ME. Contusión ocular en el niño asociada
co, conocer la causa y el estado actual de la enfermedad, lo
con hipema: estudio de 200 pacientes. Rev. Cubana oftalmol
1988; 1(3):44-51. que se debe basar en un examen físico exhaustivo.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1351


La anamnesis es de especial importancia para rati- Las enfermedades que causan baja visión, afectan
ficar el diagnóstico y debe comprender: antecedentes al campo visual con intensidades y maneras diferentes,
de enfermedades familiares y personales, embarazo y lo que repercute en la utilidad del resto visual y el tipo de
parto, así como detalles acerca del desarrollo psicomotor. ayuda óptica que se debe prestar.
En el caso del ciego esto es relativo, pues a veces, la Además de la baja visión y la pérdida de campo
demora en adquirir determinadas habilidades se debe a visual, estos niños pueden presentar movimientos ocula-
limitación del niño ocasionada por su falta de función res anómalos, estrabismo, mala fijación ocular, ojos o
visual y la poca ayuda de los padres, que en ocasiones
cavidades malformados, defectos estéticos y de otros
están también llenos de temores y faltos de orientación.
aparatos y sistemas que agraven el cuadro clínico, por lo
Es importante conocer el comportamiento social
que cada caso debe someterse a una valoración integral
del niño y de quienes comparten con él. Los padres son
a veces los principales responsables de los trastornos y particular multidisciplinaria. En ocasiones, estos niños
psíquicos del niño por rechazarlos, malcriarlos, presentan otras afecciones asociadas: neurológicas, fí-
sobreprotegerlos, mantenerlos aislados del resto del co- sicas y psíquicas las que pueden alterar aún más su ca-
lectivo o no enseñarlos adecuadamente. pacidad de aprendizaje y su desarrollo en general.
La historia escolar puede brindar antecedentes so- La baja visión puede ser de variadas característi-
bre el aprendizaje, si logra leer y/o escribir en blanco y cas: generalmente es de lejos, por lo que el niño acerca
negro, qué tamaño de letra puede ver y otros detalles mucho los objetos para distinguirlos; cuando el defecto
que dan información sobre el uso de los restos visuales. es central, ladea la cabeza para salir del área del
Es importante señalar que en ocasiones, tanto los escotoma, o sea, de la zona de no visión; si el defecto es
maestros como los familiares, atribuyen los trastornos del campo periférico, tropieza con frecuencia con los
en el aprendizaje del niño a su problema visual cuando objetos que lo rodea (Fig. 109.1). Puede acentuarse en
hay otra causa como son retraso mental, retraso esco- la oscuridad, como sucede en las degeneraciones
lar, trastornos de conducta, trastornos auditivos, entre tapetoretinianas, o ser más intenso a la luz del día, como
otros. No es raro observar estas enfermedades ocula-
en la distrofia de conos, que tienen además dificultad en
res formando parte de síndromes.
el reconocimiento de los colores.
El niño con baja visión real es aquel que tiene una
deficiencia visual binocular importante de causa orgáni-
ca que no se resuelve con corrección óptica convencio-
nal, y no sea susceptible de tratamiento médico ni
quirúrgico. Debe entenderse por corrección óptica con-
vencional, los espejuelos, los lentes de contacto y adicio-
nes para ver de cerca de no más de + 4 dioptrías, de uso
común en la presbicia.
Cada día que pasa se tiende a usar menos los lími-
tes rígidos de visión para denominar a un paciente con
baja visión. Para que se considere que una persona tie-
ne baja visión ha de darse que la pérdida o disminución
de visión sea en ambos ojos, que mantiene resto visual
útil, y que la exploración de la agudeza visual se ha he-
cho con la mejor corrección posible por medios ópticos
convencionales, como gafas de lejos, lentes de contacto,
adiciones de cristales igual o menores a +4,00 dioptrías.
Sin embargo, con fines legales se utilizan clasifica-
ciones como la de la Organización Mundial de la Salud Fig. 109.1. Uso del telescopio enfocable.
de 1992. En ella se plantea como concepto de baja vi-
sión una agudeza visual con menos de 0,3 en su mejor Es importante tener en cuenta: si la deficiencia es
ojo. También se denomina así al defecto binocular de desde el nacimiento o adquirida durante el desarrollo, si
campo visual con menos de 10 grados, a partir del punto es o no progresiva, cuál es el pronóstico visual de la
de fijación. En ambos casos el paciente debe ser capaz enfermedad que lo causa y la búsqueda de restos visua-
de usar esa visión para planificar y ejecutar tareas, para les que puedan ser mejorados mediante técnicas com-
estar comprendido en esta denominación. plementarias o entrenamiento.

1352 Tomo III


CAUSAS DE LA BAJA VISIÓN nervio óptico por degeneración transináptica, lo que solo
La mayoría de las deficiencias visuales del niño ocurre en vida intrauterina.
son congénitas o aparecen en el primer año de vida. La ceguera cerebral o cortical puede tener como
Solo un pequeño porcentaje es de aparición tardía debi- causas principales, infecciones del sistema nervioso
das, por lo regular, a tumores cerebrales, infecciones, central, traumas por golpe occipital directo o por contra-
traumatismos, entre otras causas. golpe frontal, hidrocefalia, encefalopatías hipoxicois-
Entre ellas están: quémicas, dando hemorragias, edema y pérdida de tejido.
• Malformaciones oculares. Otras causas más raras son, hipoglicemia, uremia,
• Retinopatía del prematuro. leucoencefalitis esclerosante, hemorragias e infartos,
• Catarata congénita. como consecuencia de estudios contrastados
• Glaucoma congénito. intravenosos, por intoxicaciones con monóxido de car-
• Atrofia óptica. bono u otros tóxicos. La más frecuente es por el
• Albinismo. Hemofilus influenze en el curso de una meningitis. Tam-
• Miopía elevada. bién por Estreptococo neumoniae.
• Amaurosis congénita de Leber. La debida a criptococo es un cuadro clínico grave
• Retinoblastoma. y puede acompañarse de otras afectaciones del sistema
• Hipoplasia del nervio o de la mácula. nervioso como: parálisis del sexto y tercer nervio cra-
• Retinosis pigmentaria. neal, oftalmoplejía internuclear, papiledema y atrofia óp-
• Coriorretinitis. tica. Si no hay destrucción de tejido cerebral muchos
• Desprendimiento de retina. pacientes mejoran, sobre todo cuando el edema se
• Degeneraciones retinianas. reabsorbe.
• Estrabismo con ambliopía. El retardo de la maduración es otra causa de
deficiencia visual en el lactante, en la cual no hay evi-
• Ceguera cortical.
dencias de daño ocular ni cerebral y los potenciales vi-
• Tumores cerebrales.
suales evocados y la resonancia magnética nuclear son
normales. La visión se recupera o madura alrededor de
En Cuba, han sido notificadas la retinopatía de la los 6 meses y llega a ser normal con el transcurso del
prematuridad y las cataratas congénitas entre las cau- tiempo.
sas de mayor incidencia. La dislexia es el término usado para describir un
En gran parte de los países subdesarrollados esta problema en el procesamiento cortical de los símbolos
frecuencia se invierte, y ocupan el primer lugar las en- gráficos, lo que provoca retraso para la lectura. Debe
fermedades infecciosas como el tracoma y por desnu- distinguirse de la ceguera para las palabras o alexia y de
trición, o deficiencia vitamínica como la xeroftalmía. otras causas que provoquen baja visión.
En el lactante, en el cual la causa ocular no es evi-
dente mediante el examen físico, debe pensarse en la Examen oftalmológico
amaurosis congénita de Leber, el síndrome de Es necesario examinar la agudeza visual de lejos y
Joubert, monocromatismo de bastones, distrofia de de cerca, con lentes y sin estos en los ojos por separa-
conos, entre otros diagnósticos. También deben tenerse dos y de forma binocular. Si la deficiencia visual es im-
en cuenta lesiones que afecten la vía visual intracraneal, portante se usan cartillas especiales para medir la visión,
enfermedades perixosomales, como las enfermedades que se sitúan a distancias de 3 m para lejos y a 25 cm
de Zellweger, la de Refsum, la adrenoleucodistrofia para cerca, a diferencia de las que se usan regularmen-
y la lipofuscinosis, en las cuales su síntoma de presenta- te, que se colocan a 6 m y a 33 cm respectivamente.
ción puede ser la deficiencia visual, a la que se le suma La mayoría de estos pacientes tienen alterada la
más tarde retardo mental y convulsiones. Debido a la visión binocular, por dificultades en la fijación, la
gravedad de cualquiera de estas enfermedades, algunos binocularidad y la fusión. Esta última es rara en niños
con baja visión, particularmente, si la agudeza visual es
niños no sobrepasan los primeros años de vida.
de menos de 20/200 ó 0,1.
La ceguera cerebral es una disfunción posgeni-
El campo visual debe ser determinado en cada ojo
culada en la que el examen físico ocular no muestra al- por separado siempre que sea posible, aunque se haga
teraciones y las reacciones pupilares son normales, por confrontación. El color y el contraste deben ser
aunque puede asociarse con lesión pregeniculada. Si el medidos y forman parte de la evaluación visual inte-
daño ocurre posnatal, el fondo es normal, pero si se pro- gral. Para eso existen pruebas en las que no es nece-
duce en vida fetal, puede aparecer hipoplasia de papila y sario saber leer.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1353


El examen físico debe de ser exhaustivo, en busca
de cualquier elemento que influya en la deficiencia vi-
sual, que sea posible de tratar para mejorar en algo más
la visión. Las pruebas especiales, como el ultrasonido,
electrorretinograma y potenciales visuales evocados,
pueden ayudar y hasta aclarar un diagnóstico difícil, como
es una distrofia de conos. Estas pruebas electrofi-
siológicas son de gran importancia sobre todo cuando no
se encuentra la causa de la deficiencia visual y en niños
muy pequeños o que no cooperan; por lo regular se rea-
lizan con anestesia o sedación.
TRATAMIENTO DE LA BAJA VISIÓN
Después de aseverar el diagnóstico y valorar de
nuevo la posibilidad de tratamiento médico o quirúrgicos
que permitan mejorar el resto de visión que tiene el pa-
ciente, se valoran tratamientos complementarios paliati-
vos, como ejercitaciones, ozonoterapia, cámara
hiperbárica y estímulos eléctricos que favorecen la
neuroplasticidad y la oxigenación de los tejidos en busca
de mejorar en algo el resto visual, si fuera posible. Fig. 109.2. Uso del microscopio de prueba en atril.
En niños pequeños desde la etapa de lactantes y
durante el período preescolar se debe realizar El tiempo de entrenamientos de la rehabilita-
estimulación precoz de sus restos visuales, en caso de ción no es muy largo, solo el necesario para cada
que los tenga, así como de su esfera motora, del lengua- persona con el fin de garantizar el éxito del progra-
je y sus otros sentidos principales, el oído y el tacto. ma. Debe incluir lectura y escritura con el método Braille
En caso de no haber restos de visión que se pue- (Figs. 109.3 y 109.4). En los casos de niños invidentes
dan mejorar o aprovechar, debe dársele al niño el entre- si es grave la deficiencia visual el paciente debe pasar
namiento necesario para mejorar las posibilidades de a escuelas especiales donde reciba entrenamiento para
valerse lo más posible por sí solo como no vidente y aumentar las posibilidades de valerse por sí mismo,
desarrollar sus conocimientos escolares con métodos seguir estudiando y poder estar integrado a la sociedad
especiales que le permitan un adecuado desarrollo inte- al máximo a pesar de sus limitaciones, que irán dejan-
lectual, sin postergarlo indefinidamente al no querer en- do de serlo según se entrene. El momento de enfrentar
frentar a los familiares con la dura realidad. a los padres y a los propios niños con su realidad no
La rehabilitación visual consiste en un programa debe demorarse y recibirá entonces el apoyo del oftal-
de entrenamiento, que constituye la base para el uso mólogo y de su médico de base.
posterior de la visión con ayudas ópticas. El entrena-
miento debe ser individualizado y estar basado en las
necesidades concretas que se plantean para cada pa-
ciente. El niño debe conocer de forma exhaustiva cuá-
les son las posibilidades de cada una de las ayudas que
se han prescrito y saber cuáles son sus limitaciones, qué
puede hacer y que no puede hacer, y cómo debe hacerlo.
La ayuda óptica consiste en ampliar la imagen
que se forma en la retina y conseguir la percepción del
objeto. Entre las ayudas principales están los telesco-
pios para visión lejana, las lupas para cerca y los
telemicroscopios para distancia intermedia. Además, se
le debe proporcionar al niño otras ayudas visuales no
ópticas como iluminación adecuada, macrotipos,
rotuladores, filtros solares, mesas especiales y ayudas
ópticas en general (Figs.109.2). Fig. 109.3. Leyendo en el sistema Braille.

1354 Tomo III


renglón es rojo y la otra verde. Se ponen gafas con cris-
tales distintos para cada ojo, también rojo y verde. El ojo
detrás del cristal rojo puede ver todas las letras, pero el
que está detrás del verde solo puede ver las verdes. Si
se pone el cristal rojo delante del ojo enfermo y puede
leer todas las letras, llegando a ver una hilera completa,
el ojo supuestamente enfermo tiene la agudeza visual
correspondiente a ese renglón.

Fig. 109.4. Escribiendo en Braille.

Problemas funcionales o psíquicos


Los problemas funcionales o psíquicos son una cau-
sa relativamente frecuente de deficiencia visual, con exa-
men ocular normal, lo cual es difícil de pensar y plantear
en un niño. En estos pacientes es muy importante cono-
cer en qué circunstancias, cómo y cuándo apareció la
deficiencia visual, tiempo y duración, así como los resul-
tados de otros estudios, evolución, antecedentes de enfer-
medad y sobre todo de traumas síquicos o enfermedades
similares padecidas por personas conocidas. Frente a la
sospecha debe de indagarse la situación social y hablar
por separado con los padres y el propio niño.
Si la ceguera referida es bilateral, es importante
observar al niño sin que sea notado y ver cómo se des-
plaza en su entorno. En caso de ser funcional, no choca
con los objetos que lo rodean o si lo hace el choque es
aparatoso para llamar la atención, a diferencia del ver-
dadero no vidente. Son útiles en estos casos la provoca-
ción del nistagmo optoquinético con el tambor o la cinta
y la colocación frente al rostro del niño de un espejo no
muy pequeño al que se le imprime un movimiento lento
de desplazamiento que el niño tiende a seguir con la mi-
rada; también mostrarle figuras cómicas observando la
reacción de su rostro (Figs. 109.5 y 109.5A). Figs. 109.5 y 5A. Niña con deficiencia visual funcional que
Si el defecto referido es unilateral, se usan las prue- dice e impresiona que no ve y sin embargo fija y sigue su
imagen al desplazar el espejo hacia abajo.
bas de neblina con visión binocular, en la que se le hace
borrosa la imagen del ojo sano, sin que el niño se de
Otra de las manifestaciones funcionales que pue-
cuenta y así, la línea que alcance a leer en la cartilla, es
de verse en niños es la extrema contracción concéntrica
vista por el ojo supuestamente enfermo. De esta forma
del campo visual, como si mirara por un tubo, lo que
se demuestra que el niño ve. En estas pruebas es impor-
debe estar en correspondencia con la forma de despla-
tante cerciorarse de que no cierre el ojo bueno, para
zarse si es real. Si el niño no choca con los objetos que lo
evitar que descubra el truco y diga entonces la respues-
rodean a pesar de la contracción del campo, se debe
ta adecuada a la falta de visión monocular.
repetir el campo visual en pantalla tangente a las distan-
La prueba con 2 colores, rojo y verde, es muy sen- cias de 1; 0,5 y 2 m. Con ello se estudian los 30, 60 y 15°
cilla para estudiar estos pacientes. Se proyecta una car- respectivamente. Al finalizar el examen a 1 m se acerca
tilla de letras o números de tamaños decrecientes, en la el paciente a la pantalla a 0,5 m, haciéndole la observa-
cual hay una proyección de optotipos en que la mitad del ción que es para que vea mejor al estar más cerca. En la

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1355


distancia de 0,5 m, si el paciente está simulando, por lo Los factores genéticos son con frecuencia causan-
regular su campo continúa de igual tamaño que el ante- tes de enfermedades oculares tales como: microftalmía,
rior o más abierto, cuando en realidad debe ser menor o retinoblastoma, glaucoma congénito, cataratas,
más cerrados mientras más cerca está de la pantalla, y estrabismo y retinosis pigmentaria, entre otras, de aquí
más abierto mientras más se aleja, como sucedería si se la importancia que revisten los programas que incorpo-
colocara a 2 m de la pantalla. ran las técnicas de pesquisaje de estas enfermedades
En muchos pacientes, el recetarles vitaminas o al- para su prevención y control. Es necesario además, el
gún otro placebo, asegurándole que con eso se pondrá despistaje y el consejo genético en la pareja con enfer-
bien en unos días, es suficiente para recuperarse de la medades hereditarias, cuando deciden tener des-
deficiencia funcional. A la vez se debe tratar de profun- cendencia.
dizar en la causa o ganancia secundaria de estos pa- Las enfermedades transmisibles que pueden afec-
cientes. En otros casos con solución no sencilla, pueden tar el globo ocular del niño, tales como: toxoplasmosis,
ingresarse para hacer reposo ocular sin ruidos ni con- rubéola, sífilis, SIDA, blenorragia y otras se pesquisan a
versaciones y los ojos vendados, lo que en pocos días través de los programas de atención a la embarazada en
suele resolver el problema. En casos de pérdida visual el país.
funcional grave deben de ser tratados por el psiquiatra.

Bibliografía
ESTUDIO INVESTIGATIVO
En 1963 se realizó en algunos municipios del país
Cáceres Toledo M, Fernández Márquez M, Pérez Nellar J, Cáceres
Toledo O. Alexia pura. Rev Neurol 1998;26(152)615-8. una pesquisa oftalmológica a los niños asistentes a cír-
Foley J. Central visual disturbances. Dev med Chil Neurol culos infantiles, entre las edades de 2 y 4 años, en busca
1987;29:110-20. de alteraciones oculares. Posteriormente en 1972 se rea-
García, L. Causas de Ceguera en los niños de edad escolar en Cuba.
An. Soc. Ergof. Es. 1988:17-255. lizó otro pesquisaje a un total de 36 114 niños, matricu-
Hitchman Barada D, Romero García M: Visual rehabilitation with lados en círculos infantiles y jardines de la infancia, en
national manufactured technology. Cuban experiences. las edades comprendidas entre 0 y 6 años. Ese estudio
Ligthhouse, 2000;
Kaye EM and Herskowitz J. Transient post-traumatic cortical arrojó 3,3 % de niños con estrabismos, y en un porcen-
blidness. Brief u prolonged syndrome in childhood. J Chil taje mucho menor con ptosis palpebrales, cataratas con-
Neurol 1986;1:206-10. génitas, opacidades corneales, nistagmo, lesiones de la
Keane JR. Neuro-ohpthalmic signs of histeria. Neurology
1982;32:757-62.
retina por diversas causas y glaucoma congénito.
Newton NL, Reynolds JD, and Woody RC. Cortical blidness Una vez analizados los resultados del pesquisaje y
following hemophilus influenza meningitis. Ann Ophthalmol las dificultades que presentaban los niños con deficien-
1985;17:193-4.
Osorio Illas L, Hitchman Barada D. Prevalencia de baja visión y
cia visual en el aprendizaje y en sus relaciones con los
ceguera en un área de salud, Rev Cubana Med Gen Integr demás niños, el Ministerio de Salud Pública creó centros
2003;19(5). docentes asistenciales para estrábicos y ambliopes en
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric las edades de 4 a 8 años. Un primer centro en La Haba-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005,p526-552. USA. na se inauguró en 1972 y tres años después, un segundo
centro en la provincia Villa Clara.

Programa Nacional de Prevención


. Capítulo 110 . de Enfermedades Oculares en el Niño
Este programa comenzó a aplicarse en 1986, con
Prevención en oftalmología el objetivo de conocer las causas que con más frecuen-
pediátrica en Cuba cia ocasionan disminución de la visión en el niño y esta-
Eugenio Jara Casco, Gladys. Colom Serra, Rosaralis blecer las medidas de prevención, control, tratamiento y
Santiesteban Freixas rehabilitación de estas afecciones en la población de 0 a
15 años. Los datos estadísticos con que contaba el país
Las acciones preventivas en pediatría permiten el en relación con las alteraciones oculares en los niños se
desarrollo integral del niño en los aspectos físico, psíqui- referían solo a un grupo de edades, de 0 a 6 años.
co, intelectual y social. Cuba es un país en vías de desa-
Para lograr sus objetivos el programa se
rrollo, no obstante, las enfermedades que causan
disminución o pérdida de la visión son las mismas que interrelaciona con otras especialidades médicas y sus
reportan los países desarrollados. programas preventivos, como: obstetricia y ginecología;

1356 Tomo III


distancia de 0,5 m, si el paciente está simulando, por lo Los factores genéticos son con frecuencia causan-
regular su campo continúa de igual tamaño que el ante- tes de enfermedades oculares tales como: microftalmía,
rior o más abierto, cuando en realidad debe ser menor o retinoblastoma, glaucoma congénito, cataratas,
más cerrados mientras más cerca está de la pantalla, y estrabismo y retinosis pigmentaria, entre otras, de aquí
más abierto mientras más se aleja, como sucedería si se la importancia que revisten los programas que incorpo-
colocara a 2 m de la pantalla. ran las técnicas de pesquisaje de estas enfermedades
En muchos pacientes, el recetarles vitaminas o al- para su prevención y control. Es necesario además, el
gún otro placebo, asegurándole que con eso se pondrá despistaje y el consejo genético en la pareja con enfer-
bien en unos días, es suficiente para recuperarse de la medades hereditarias, cuando deciden tener des-
deficiencia funcional. A la vez se debe tratar de profun- cendencia.
dizar en la causa o ganancia secundaria de estos pa- Las enfermedades transmisibles que pueden afec-
cientes. En otros casos con solución no sencilla, pueden tar el globo ocular del niño, tales como: toxoplasmosis,
ingresarse para hacer reposo ocular sin ruidos ni con- rubéola, sífilis, SIDA, blenorragia y otras se pesquisan a
versaciones y los ojos vendados, lo que en pocos días través de los programas de atención a la embarazada en
suele resolver el problema. En casos de pérdida visual el país.
funcional grave deben de ser tratados por el psiquiatra.

Bibliografía
ESTUDIO INVESTIGATIVO
En 1963 se realizó en algunos municipios del país
Cáceres Toledo M, Fernández Márquez M, Pérez Nellar J, Cáceres
Toledo O. Alexia pura. Rev Neurol 1998;26(152)615-8. una pesquisa oftalmológica a los niños asistentes a cír-
Foley J. Central visual disturbances. Dev med Chil Neurol culos infantiles, entre las edades de 2 y 4 años, en busca
1987;29:110-20. de alteraciones oculares. Posteriormente en 1972 se rea-
García, L. Causas de Ceguera en los niños de edad escolar en Cuba.
An. Soc. Ergof. Es. 1988:17-255. lizó otro pesquisaje a un total de 36 114 niños, matricu-
Hitchman Barada D, Romero García M: Visual rehabilitation with lados en círculos infantiles y jardines de la infancia, en
national manufactured technology. Cuban experiences. las edades comprendidas entre 0 y 6 años. Ese estudio
Ligthhouse, 2000;
Kaye EM and Herskowitz J. Transient post-traumatic cortical arrojó 3,3 % de niños con estrabismos, y en un porcen-
blidness. Brief u prolonged syndrome in childhood. J Chil taje mucho menor con ptosis palpebrales, cataratas con-
Neurol 1986;1:206-10. génitas, opacidades corneales, nistagmo, lesiones de la
Keane JR. Neuro-ohpthalmic signs of histeria. Neurology
1982;32:757-62.
retina por diversas causas y glaucoma congénito.
Newton NL, Reynolds JD, and Woody RC. Cortical blidness Una vez analizados los resultados del pesquisaje y
following hemophilus influenza meningitis. Ann Ophthalmol las dificultades que presentaban los niños con deficien-
1985;17:193-4.
Osorio Illas L, Hitchman Barada D. Prevalencia de baja visión y
cia visual en el aprendizaje y en sus relaciones con los
ceguera en un área de salud, Rev Cubana Med Gen Integr demás niños, el Ministerio de Salud Pública creó centros
2003;19(5). docentes asistenciales para estrábicos y ambliopes en
Leonard B Nelson, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric las edades de 4 a 8 años. Un primer centro en La Haba-
Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
2005,p526-552. USA. na se inauguró en 1972 y tres años después, un segundo
centro en la provincia Villa Clara.

Programa Nacional de Prevención


. Capítulo 110 . de Enfermedades Oculares en el Niño
Este programa comenzó a aplicarse en 1986, con
Prevención en oftalmología el objetivo de conocer las causas que con más frecuen-
pediátrica en Cuba cia ocasionan disminución de la visión en el niño y esta-
Eugenio Jara Casco, Gladys. Colom Serra, Rosaralis blecer las medidas de prevención, control, tratamiento y
Santiesteban Freixas rehabilitación de estas afecciones en la población de 0 a
15 años. Los datos estadísticos con que contaba el país
Las acciones preventivas en pediatría permiten el en relación con las alteraciones oculares en los niños se
desarrollo integral del niño en los aspectos físico, psíqui- referían solo a un grupo de edades, de 0 a 6 años.
co, intelectual y social. Cuba es un país en vías de desa-
Para lograr sus objetivos el programa se
rrollo, no obstante, las enfermedades que causan
disminución o pérdida de la visión son las mismas que interrelaciona con otras especialidades médicas y sus
reportan los países desarrollados. programas preventivos, como: obstetricia y ginecología;

1356 Tomo III


genética; pediatría; higiene y epidemiología; medicina En el Reglamento se establecen medidas medicope-
general e integral y otros. dagógicas para garantizar la rehabilitación integral de
La búsqueda activa de las afecciones oculares más los niños con estrabismo y ambliopes, detectados en los
frecuentes en hospitales maternos se logra con la aten- exámenes realizados al ingreso y en los de seguimiento
ción de los neonatólogos al recién nacido y la del oftal- de círculos y escuelas. El tratamiento en estas edades,
mólogo, en todos los casos que sea necesario. Ese primer de 0 hasta 5 años, es con lo que se puede obtener los
examen que se realiza al recién nacido es de importan- mejores resultados.
cia capital, ya que permite tomar acciones preventivas y Para el logro de estos objetivos el Programa cuen-
curativas que en la mayoría de los casos evitan la pérdi- ta con el apoyo y colaboración del oftalmólogo pediatra,
da de la visión total o parcial. médico de la familia, enfermera y educadoras del Cen-
Entre las afecciones oculares que se observan con tro. Actualmente algunas provincias tienen círculos in-
relativa frecuencia se encuentran las cataratas congéni- fantiles dedicados exclusivamente a niños con deficiencia
tas. De gran importancia es su diagnóstico temprano, visual.
con vistas al tratamiento quirúrgico que debe ser reali- El pediatra y el médico de la familia desempeñan
zado en los 3 primeros meses de la vida, pues, de lo un papel importante en la búsqueda activa de alteracio-
contrario, el niño podrá desarrollar ambliopía y nistagmos. nes oculares en los niños de su área de salud; ellos de-
Otras alteraciones que se pueden presentar en el recién ben realizar actividades de promoción y prevención, tanto
nacido y se debe actuar sobre ellas son la ptosis palpebral, de enfermedades como de traumatismos oculares, tan
el glaucoma congénito, las malformaciones palpebrales frecuentes en estas edades, y examinar la agudeza vi-
que expongan el globo ocular, y la retinopatía de la sual del niño preescolar como requisito de ingreso a la
prematuridad, entre otras. escuela. También se deben realizar actividades educati-
Para prevenir la ceguera en la retinopatía de la vas que contribuyan a elevar el nivel de salud ocular de
prematuridad, todo niño menor de 1 500 gramos al nacer
la población infantil.
o con edad gestacional de 32 semanas o menos, que
Con vista a realizar una prevención más completa
haya estado sometido a oxigenoterapia o no, son atendi-
dos directamente por el oftalmólogo y se les da segui- se debe extender el chequeo oftalmológico hasta las es-
miento especializado También se da atención a todo recién cuelas primarias de todo el país, porque hay un gran por-
nacido con antecedentes familiares de enfermedad ocu- centaje de niños que llegan a la escuela sin haber asistido
lar, problemas durante el embarazo, parto distócicos con al círculo infantil y, por tanto, no se les conoce su agude-
sufrimiento fetal, o que haya sido diagnosticado en el za visual. Para ello se requiere examinar los niños en los
cunero con alguna alteración ocular. primeros grados con ayuda y participación activa de los
Más tarde a través de las consultas de puericultura, oftalmólogos, técnicos y maestros previamente entrena-
de pediatría general, médicos de la familia, y otras espe- dos. Lo ideal en estos casos es que el médico de familia
cialidades, se remiten a los servicios de oftalmología tenga una cartilla para tomar visión a los niños pequeños
pediátrica, aquellos niños que presenten trastornos vi- que aun no conocen las letras y no van a círculos, dos
suales o enfermedad ocular, que no fueron detectadas al años antes de alcanzar la edad escolar, etapa en la que
nacimiento. ya suelen cooperar para este examen.
En apoyo al programa, el Ministerio de Salud Pú- Una vez detectados los niños con disminución de
blica y el Ministerio de Educación aprobaron, en junio de la visión, se les comunica a los padres para que lo lleven
1985, una Resolución conjunta relativa a la creación de
al especialista.
instituciones infantiles especiales, para ciegos y débiles
visuales donde se realiza la enseñanza pedagógica y el
Edades a las que se recomienda realizar
tratamiento médico. Actualmente funciona una en cada
provincia del país, en el municipio especial Isla de la Ju-
el examen oftalmológico
ventud y 3 más en la capital para un total de 17 en todo El primer examen se realiza luego del nacimiento o
el país. en los primeros días de nacido por el neonatólogo, el
Se modificó el reglamento de salud para la aten- pediatra o en los lugares más apartados por el médico
ción en los círculos infantiles, donde todo niño que aspire de la familia. A más tardar debe realizarse en las prime-
a ingresar en la institución debe ser sometido a examen ras semanas y siempre antes del primer mes de nacido.
oftalmológico completo por el especialista y, una vez el Realizar este examen por parte de los neona-
niño en el Círculo, el oftalmólogo debe darle seguimien- tólogos es una práctica rutinaria en los hospitales de
to, si tiene algún tipo de enfermedad ocular que requiera Cuba, ya que en ellos es donde ocurren la mayoría de
de tratamiento. los nacimientos.

Parte XVI. Oftalmología pediátrica tulo tal 1357


Este primer examen debe incluir: En conclusión, para prevenir o evitar la baja visión
• Aspecto general de ambos ojos. Tamaño y semejanza o ceguera se pueden llevar a cabo las medidas siguientes:
de ambos bulbos oculares. • Reducir la prematuridad, los abortos a repetición, los
• Examen de conjuntivas, córnea, iris y pupila. malos hábitos de fumar, infecciones e ingestión de
• Paralelismo de los ejes oculares. medicamentos o sustancias tóxicas durante el emba-
• Visualización de los medios transparentes (cristalino y razo, toxemia, etc.
vítreo) y fondo de ojo.
• Detectar o sospechar posibles defectos de refracción. • Control adecuado del niño de bajo peso al nacer, de
poca edad gestacional y controlar el uso de oxígeno
El segundo examen oftalmológico se debe realizar administrado a los recién nacidos hipóxicos, el que debe
al año de edad, con estudio de la refracción; el tercero a de ser el mínimo requerido.
los 2 años de edad. • Ofrecer consejo genético a los pacientes débiles de
En el tercer examen se deben recalcar los aspec- visión y ciegos, y a todo aquel que tenga antecedentes
tos siguientes: de enfermedad ocular hereditaria.
• Paralelismo de los ejes oculares. • Tomar medidas de contracepción y esterilización, así
• Defectos de refracción, miopías, hipermetropías y como ofrecer consejo genético a las parejas que han
anisometropías. tenido un hijo con enfermedades que afectan la visión.
• Diagnóstico prenatal de aquellas enfermedades gene-
El cuarto examen se debe realizar al niño prescolar
rales con compromiso ocular y de las oculares ligadas
de 5 a 6 años de edad, antes de iniciar la escuela prima-
al sexo.
ria. Es uno de los más importantes, en especial el exa-
men de la toma de la agudeza visual y el estudio de la • Ultrasonido diagnóstico durante el embarazo para pre-
refracción con cicloplejía. venir síndromes que incluyan malformaciones oculares.
Se continúa con el examen del paralelismo de los • Despistaje en el período neonatal de errores congéni-
ejes oculares, de los medios transparentes y fondo de ojo. tos del metabolismo.
Exámenes sucesivos de la agudeza visual en los • Registro de todos los pacientes con baja visión y cie-
escolares se deben realizar cada 2 ó 3 años hasta los 10 gos del país.
años. Luego de cumplir los 10 años, el examen de la • Incrementar la educación de los médicos en general,
agudeza visual y de los principales aspectos del examen sobre genética médica y la conducta ante los débiles
oftalmológico se debe realizar cada 3 años hasta llegar a visuales.
la edad adulta.
• Remitir a las embarazadas con baja visión y ciegas a
Edades a las que se debe realizar examen los centros de planificación familiar.
oftalmológico al niño • Insistir en el cuidado de padres y tutores para evitar
traumatismos oculares.
• Luego del nacimiento y antes del primer mes de
vida. Una labor educativa debe realizarse para disminuir
• Al año de vida. los accidentes oculares, causa frecuente de baja visión
• A la edad de 2 años. en los niños, apartándolos de situaciones y objetos peli-
• En la etapa prescolar (5 a 6 años). grosos que puedan ser su causa.
• Cada 2 ó 3 años hasta cumplir 10 años.
• Cada 3 a 4 años hasta la mayoría de edad: Bibliografía
18 años.
Nelson Leonard B, Scoot E Olitsky. Harley`s Pediatric
• Hay autores que preconizan un primer examen por Ophthalmology. Fifth Ed. Linnpincott Williams and Wilkins.
el oftalmólogo entre los 4 a 6 meses de nacidos, 2005, 508-552. USA.
que consideramos correcto, pero difícil de llevar Shatalov OA, Chentsova OB. Method of prevention and treating
a la práctica. the accommodation cramp and progressive myopia in
children. Vestn-Oftalmol 1998;114(6):31-3.

1358 Tomo III

You might also like