You are on page 1of 3

INTERNACIONAL

Gorbachov, el Kennedy de la Europa del Este


El líder soviético ha despertado grandes esperanzas en las poblaciones de
los países aliados de la URSS
HERMANN TERTSCH

Bonn - 22 JUN 1987

Miles de jóvenes se manifestaron el pasado 8 de junio en la célebre avenida Bajo los Tilos
de Berlín Este pidiendo a gritos "que caiga el muro". El motivo de la protesta, que se repitió
durante días, era en principio nimio. Los jóvenes se habían concentrado para escuchar un
concierto de rock que se celebraba al otro lado del muro. Al impedirles la policía acercarse
a la franja de seguridad junto al muro, se produjeron duros enfrentamientos, los más
graves habidos en la República Democrática Alemana (RDA) desde hace más de 10 años.
Uno de los lemas más coreados fue "Gorbachov, Gorbachov".

Dos meses antes, el 9 de abril, la población de Praga recibía al máximo dirigente soviético,
Mijail Gorbachov, con un entusiasmo insólito en Checoslovaquia desde el aplastamiento
de la primavera de Praga, en 1968. Jóvenes estudiantes, trabajadores y amas de casas
corearon el nombre del líder soviético. Centenares de miles de personas que flanquearon
el recorrido de Gorbachov por la ciudad intentaron estrechar su mano ignorando por
completo al anciano jefe del Estado checoslovaco, Gustav Husak, que, visiblemente
azorado, paseó por primera vez en muchos años por las calles de su capital.En Bucarest,
durante la visita oficial de Gorbachov a Rumanía del 25 al 27 de mayo, la omnipresente
policía secreta rumana y el temor general a la represión evitó manifestaciones de tan
exultante entusiasmo. Pese al absoluto bloqueo informativo a que el régimen del
presidente Nicolae Ceaucescu tiene sometida a la población, que no conoce aún los
objetivos de la política de renovación y apertura del Kremlin, los aplausos a Gorbachov en
 
las calles de la capital fueron posiblemente los primeros que muchos rumanos otorgan
sinceramente a un político en las últimas décadas. "Aunque me dijérais que no tenéis
problemas, no os lo creería". Así se dirigió Gorbachov a un grupo de rumanos temerosos
de admitir la dramática situación de escasez y represión en que se hallan.
Tres días más tarde, en Berlín Este, el líder soviético era recibido con una estruendosa
ovación cuando llegó al teatro de la plaza de la Gendarmería para asistir a un concierto. El
caluroso recibimiento que le fue otorgado era todo un agravio comparativo para los demás
jefes de Estado y de partido de los países miembros del Pacto de Varsovia, también
presentes con motivo de la cumbre de la alianza que se celebraba en la capital de la RDA.

Deseos y sueños

Gorbachov se ha convertido en una especie de John Kennedy del Este de Europa. En poco
más de dos años ha logrado despertar grandes esperanzas entre la población de los países
aliados de la URSS. Muchas de estas expectativas son quizá ilusorias, basadas más en los
deseos y sueños y en la suposición de que un proyecto reformista procedente del corazón
del bloque soviético tiene la posibilidad de no correr la misma suerte que los intentos
similares abortados violentamente en la periferia. Como dijo hace unos meses el anciano
Jiri Hayek, ministro de Asuntos Exteriores con Alexander Dubeek durante la primavera de
Praga, "Gorbachov no tiene que temer que tanques extranjeros le impidan su reforma
política".

Los recelos de la cúpula de los regímenes de los aliados hacia la política de Gorbachov son
tan patentes como el entusiasmo de aquellos que creen aún en la capacidad del sistema
socialista de autorreformarse. Gorbachov reconoce el derecho de cada país socialista a
adoptar su propia vía de desarrollo del sistema y, sin embargo, no oculta su deseo de ver a
los aliados aplicar sus propias perestroikas (reestructuraciones) e imponer la glasnost
(transparencia). Es uno de sus muchos dilemas.

Para dirigentes como los jefes de Estado de la RDA y Checoslovaquia, Erich Honecker y
Gustav Husak, respectivamente, las reservas contra un viraje radical en la política interna
se basan tanto en la certeza de que muchos de los objetivos económicos de Gorbachov
para la URSS están superados en estas dos sociedades socialistas modernas como en la
propia dignidad personal. Obligados en su momento a aplicar políticas impopulares por
dictado de Moscú, responde a una lógica autoestima el que hoy no cambien toda su
estrategia al primer golpe de timón de la URSS.
 

En las direcciones políticas de los países aliados de la Unión Soviética, muchos no creen en
el éxito de la política de Gorbachov. Otros, no pocos, no la desean. Ven en esta política
riesgos de desestabilización y el cuestionamiento de su legitimidad. La desestalinización
encauzada con Nikita Jruschov en el Kremlin despertó también esperanzas exageradas en
los países aliados. La consecuencia fueron las crisis de Polonia y Hungría en 1956 y el
retorno a una política en la que primaba la represión. Los incidentes en Berlín Este, las
manifestaciones en Hungría, y otros hechos demuestran que la nueva política soviética ha
puesto en ebullición los sentimientos en la periferia socialista.

El eslabón más débil

En la RDA está el eslabón más débil de la legitimidad de los regímenes implantados en


Centroeuropa por el Ejército Rojo. El reconocimiento por parte de la población del derecho
de los gobernantes a ejercer el poder sólo lo pueden conseguir los regímenes del Este,
faltos de legitimidad en su origen, a través de una continua mejora del nivel de vida o su
simulación o exageración con una propaganda autocomplaciente.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 22 de junio de 1987

ARCHIVADO EN:

Glásnot · RFA · Perestroika · Guerra fría · Reformas políticas · Mijail Gorbachov · Política exterior · URSS
· Europa este · Alemania · Centroeuropa · Bloques políticos · Europa · Bloques internacionales

CONTENIDO PATROCINADO

Quema Grasa La deformidad en valgo De Cuidar Niños a Mejor Que el Botox?


Abodminal Durante puede ser eliminada Millonaria Gracias al Madre de 57, Parece de
Toda La Noche Con Este fácilmente y sin Bitcoin 35 Sin Recurrir a la
(HEALTH TODAY) (WWW.STUFFBEYOND.COM) (MUJERES- (PORTAL DE SALUD)
EMPRENDEDORAS.NET)

Y ADEMÁS...

 
Graban cómo la mayor Dani Mateo se hace un ¿Qué fue de Adriana La divertida espera de
serpiente de la Tierra Risto Mejide con su Karembeu? Embarazada Pilar Rubio junto a sus
caza a su presa: un nueva novia y... hijos
(EPIK) (TIKITAKAS) (TIKITAKAS) (TIKITAKAS)

recomendado por

© EDICIONES EL PAÍS S.L.


Contacto Venta de contenidos Publicidad Aviso legal Política cookies Mapa EL PAÍS en KIOSKOyMÁS Índice RSS

You might also like