You are on page 1of 14

ÍNDICE

Culturas Precolombinas Del Ecuador Y América ....................................................... 4


Los Mayas............................................................................................................... 4
Los Incas................................................................................................................. 6
Los Aztecas ............................................................................................................ 8
El Imperio Inca Situación Geográfica o Social del Tahuantinsuyo y Disolución del
Imperio Inca ............................................................................................................. 10
Tahuantinsuyo ...................................................................................................... 10
La Conquista Española en el Ecuador y América .................................................... 13
Bibliografía

https://es.wikipedia.org/wiki/América_precolombina

historiaecuador.blogspot.com/2005/12/resumen-de-las-culturas-

precolombinas.htmlhttp://www.monografias.com/trabajos60/culturas-

precolombinas/culturas-precolombinas.shtml

http://www.portalplanetasedna.com.ar/los_mayas.htm

http://www.precolombino.cl/mods/culturas/

http://www.americas-fr.com/es/civilizaciones/civilizaciones.html
CULTURAS PRECOLOMBINAS DEL ECUADOR Y AMÉRICA

Las Civilizaciones Precolombinas son aquellas que vivían en el Centro y en el Sur


de Ameríca antes que Cristóbal Colón la descubrió. Colón fue un navegante y
sostuvo que podía alcanzarse el lejano oriente (las Indias) desde Europa viajando
hacia el oeste. Preguntó ayuda a Portugal, Francia e Inglaterra, pero sólo los Reyes
Catolícos de España (Isabel de Castilla y Fernando de Aragón) aceptaron y
financiaron su proyecto. Cristobal Colòn, junto a 90 marineros se embarcó, el 3 de
Agosto de 1492 en Palos de la Frontera, en una grande barca llamada Santa Marìa
y dos carabelas La Pinta y la Niña. Él llegò a America el 12 de Octubre de 1492,
creyendo que eran Las Indias. Aquí encontró muchisímas civilizaciones y tres de las
más importantes son los Mayas, los Incas y los Aztecas.

Los Mayas

Las civilizaciones precolombinas eran muy


jerarquizadas y existián desde siempre. Los
Mayas vivián en los estados de Chiapas,
Yucatán, Campeche y Quintana Roo en México
y en Guatemala, en el istmo que une Ameríca
del Nord y Ameríca del Sur. Los Mayas eran
hábiles constructores y de vez en cuando dejabán sus casas, se traslandaban y
donde iban edificaban otros edificios nuevos. El principal cultivo maya era el maíz y
tenían una buena red comercial.

Los mayas primitivos se agrupaban en pequeños caseríos, distantes unos de otros.


Posteriormente fueron erigidos algunos centros ceremoniales. La vida de estos
primeros habitantes del área maya dependía enteramente de los elementos
naturales y del cultivo y recolección de sus cosechas.

Con la vida sedentaria y la práctica continua de la agricultura primitiva, surgió lo que


al principio fue el culto sencillo de la naturaleza y de los elementos ligados a la
siembra, tales como el sol, la lluvia, el viento, las montañas, el agua, etc.

La sociedad en este periodo es todavía de carácter tribal, es decir, grupos de


familias relacionadas por parentesco, que comparten una cultura, un lenguaje y un
territorio. A medida que la agricultura se hace más compleja, creándose sistemas de
riego e incluyendo el cultivo de productos comerciales, como el cacao y el algodón,
aumenta la población y empiezan a surgir centros ceremoniales, así mismo se
consolida la jerarquización de las clases sociales, que resulta de la división del
trabajo.

Los mayas fueron básicamente agricultores, y su principal cultivo era el maíz


utilizando la técnica de la "rosa" empleada en la actualidad por los campesinos
mayas y se supone que fue la que utilizaron sus antepasados. La técnica de la rosa
consiste en cortar y quemar el monte antes de sembrar, en los últimos años se ha
puesto en duda esta técnica debido a que agota los suelos y obliga al campesino a
desplazarse cada dos o tres años en busca de nuevas tierras, así mismo, cultivaban
frijoles, caco, camote, calabaza, chile, aguacate, marañón y guayaba, tabaco y
algodón.
Los Incas

Los Incas fueron los dirigentes del imperio americano más grande. Cerca del fin del
siglo XIV, el imperio comenzó a extenderse de su región inicial en la región
de Cuzco hasta la región sur de las montañas Andinas de América del Sur. Esta
terminó brutalmente con la invasión española dirigida por Francisco Pizarro, en
1532.

En el momento de su rendición, el imperio controlaba una población estimada en 12


millones de habitantes, lo cual representaría hoy Perú, Ecuador y también una gran
parte de Chile, Boliviay Argentina.

Los Incas llamaban a su territorio Tawantinsuyu, lo que en Quechua, el idioma inca,


significa Las Cuatro Partes. Un territorio de diversos terrenos y climas muy
marcados, que comprendía una larga banda desértica en la costa, entrecortada por
ricos valles irrigados; las altas cumbres y los profundos valles fértiles de los Andes;
y las cumbres montañosas de la selva tropical al Este. La palabra Inca designa al
propio dirigente, así como al pueblo del valle de Cuzco, la capital del imperio. A
veces es usado para designar a todos los pueblos incluidos en el Tawantinsuyu,
pero esto no es correcto. La mayoría de las decenas de reinos pequeños mantenían
su identidad, aún cuando estaban ligados política y económicamente a los Incas.
El Quechua fue el idioma oficial y hablado en la mayoría de las comunidades hasta
la llegada de los Españoles, pero al menos 20 dialectos locales subsistieron en
varias partes del imperio.

Los Incas desarrollaron un estilo altamente funcional de arquitectura pública que se


distinguió principalmente por sus técnicas avanzadas de ingeniería y de trabajo fino
de la piedra. El plano de sus ciudades estaba basado en un sistema de avenidas
principales atravesadas por calles más pequeñas que convergían en una plaza
abierta rodeada de edificios municipales y templos. Las estructuras eran de un solo
piso, con un perfecto ensamblado de piedras talladas; también se usaban ladrillos
de adobe y paja en las regiones costeras. Para la construcción de grandes
monumentos tales como la gran fortaleza de Sacsayhuamán cerca de Cuzco, unos
bloques masivos poligonales fueron ensamblados entre sí con una extraordinaria
precisión. En las regiones montañosas, como la espectacular ciudadela andina
ubicada en el Machu Picchu, la arquitectura inca refleja a menudo algunas
adaptaciones ingeniosas del relieve natural.

La religión del estado estaba basada en la adoración del Sol. Los emperadores
Incas eran considerados como descendientes del Dios Sol y eran adorados como
divinidades. El oro, símbolo del Dios Sol, era muy explotado para el uso de los
dirigentes y miembros de la elite, no como moneda de intercambio, sino
principalmente con objetivos decorativos y rituales. La religión dominaba toda la
estructura política. Desde el Templo del Sol en el centro de Cuzco, se podían trazar
líneas imaginarias en dirección de los lugares de culto de las diferentes clases
sociales de la ciudad.

Las prácticas religiosas consistían en consultas de oráculos, sacrificios como


ofrenda, transes religiosos y confesiones públicas. El ciclo anual de fiestas religiosas
estaba regulado por el calendario inca, extremadamente preciso, así como el año
agrícola. Debido a este aspecto entre otros, la cultura inca se parecía mucho a
algunas culturas de la mezo-América tal como los Aztecas y los Mayas.
Los Aztecas

El azteca fue un pueblo que, mediante alianzas militares con otros grupos y
poblaciones conoció una rápida expansión y dominó el área central y sur del actual
México entre los siglos XIV y XVI, si bien es cierto que en un primer momento tras
su llegada, tuvo que enfrentarse a otros pueblos ya asentados en la zona. Tras la
muerte de Moctezuma II en el 1520, se puso de manifiesto la debilidad de este gran
imperio, derivada de aquella rápida expansión: no podían controlar aquel vasto
territorio; las divisiones internas entre provincias y las tensiones y ambiciones
independentistas de algunos pueblos, facilitó a los españoles, dirigidos por Hernán
Cortés, la conquista de este gran imperio, que culminó en 1521.

En la zona geográfica que corresponde a la mitad sur del México actual, se


desarrolló una gran actividad cultural desde unos 2000 años a. C. En esta región
habitaron diversos pueblos, algunos de los cuales nos han dejado muestra de su
floreciente cultura, como es el caso de los restos arqueológicos de la ciudad de
Teotihuacán, ya deshabitada cuando llegaron los españoles. En la meseta central
mexicana desde finales del siglo VII hasta mediados del siglo XII, se desarrolló la
cultura tolteca que llegó a fusionarse con la maya en su expansión hasta el Yucatán.
En este marco geográfico, más concretamente en las orillas e islas del lago
Texcoco, se desarrolló la civilización azteca, una de las civilizaciones mejor
conocida de la América precolombina y la unidad política más importante de toda
Mesoamérica cuando llegaron los españoles.
Contrariamente a lo que se ha creído, el pueblo azteca no era un imperio en toda la
extensión de la palabra. Cierto, nadie podía desobedecer una orden del Gran
Orador o Huey Tlatoani, nombre correcto del emperador azteca. El hijo del Gran
Orador no siempre fue el heredero. Era un Consejo de Sabios – muy similar al
Senado Romano – el que decidía de manera democrática quien sería el próximo
gobernante principal del Gran Templo.

La civilización azteca se basó desde el punto de vista económico, en la agricultura y


el comercio.

Uno de los sistemas de colonización agrícola más interesante fue la construcción de


huertos flotantes, las chinampas, hechas con cañas, ramas, barro y limo. Además,
conocían las técnicas del barbecho y la irrigación mediante diques y acequias y
utilizaban abonos vegetales y animales.

La ganadería era pobre como el resto de la América precolombina, el pavo diversas


razas de perros, una de ellas criada para el consumo de su carne. Otro recurso eran
las aves acuáticas y el pescado, la sal del lago de Texcoco y el basalto con el que
se construían muelas de mano. En los mercados se practicaba un activo comercio
sustentado por el trueque, empleando las semillas de cacao como cambio o para
equiparar diferencias. El precio de las mercaderías variaba según la cantidad
existente.
EL IMPERIO INCA SITUACIÓN GEOGRÁFICA O SOCIAL
DEL TAHUANTINSUYO Y DISOLUCIÓN DEL IMPERIO INCA
El Imperio inca logró en su apogeo una expansión territorial de más de 2 millones de
Km² a lo largo de 9000 kilómetros de la costa del Océano Pacífico en América del
Sur. Extendiéndose sobre las actuales repúblicas de Colombia, Ecuador, Perú,
Bolivia, Chile y Argentina; enorme franja territorial concebida por los Incas
Pachacútec y Túpac Yupanqui, quienes durante su reinado engrandecieron las
fronteras del Tahuantinsuyo de manera significativa.

El Imperio inca llegó a tener los siguientes límites: al norte, el río Ancasmayo (actual
río Guáitara) ubicado en la ciudad de Pasto (Colombia); hacia el noreste, se
ensanchaba hasta la selva amazónica de las actuales repúblicas de Perú y Bolivia;
hacia el sureste, llegaron a cruzar la cordillera de los Andes, llegando más allá de lo
que ahora son las ciudades de Salta y Tucumán en Argentina; hacia el sur, llegó a
tocar el Desierto de Atacama; hacia el oeste, limitaba con el Océano Pacífico, pero
existen indicios de comercio marítimo con pueblos de la polinesia, no confirmados
científicamente

Tahuantinsuyo

La primera etapa de la dinastía inca se la conoce como “Inca provincial” recién con
Manco Cápac comienzan las primeras conquistas, pero es bajo el reinado de
Pachacutec (s. xv) cuando se llevaron a cabo las grandes conquistas. Esta última
época se la conoce como “Inca imperial”, imperio que se dividía en cuatro regiones
que en quechua se le conoce como el Tahuantinsuyo “los cuatro suyos o partes
unidos”. La que se ubicaba al este recibía el nombre de Antisuyo; la del oeste
Contisuyo; la del norte Chinchaysuyo y la del sur Collasuyo
Expansión del imperio incaico en su último siglo de existencia. Tahuantinsuyo: división territorial del imperio.

Este sistema de organización territorial es atribuido al Inca Pachacútec, sin


embargo, mucho antes de consolidarse el dominio del inca sobre el vasto territorio
que llegó a someter, la ciudad del Cuzco, estaba también dividida en cuatro partes,
los cuatro señoríos del área. Cuando Manco Cápac y sus clanes se instauraron en
la zona, crearon los cuatro "suyos" incas a partir de esta división. La expansión
inca se inició con Pachacútec, quién conquistó los curacazgos del área cercana al
Cuzco: los soras, lucanas y tambos. Su hermano Cápac Yupanquicontinuó con las
conquistas bordeando la costa de los valles de Chincha y Pisco, mientras que en la
sierra central llegaría hasta Jauja. Túpac Inca extendió la ocupación del
Chinchaysuyo hasta la región de los cañaris (Tumibamba), y Amaru
Túpac conquistaría el Collasuyo hasta Chincha y el Contisuyo hasta Arequipa.
Durante los tiempos de Túpac Yupanqui la frontera norte se estableció cerca
de Quito, mientras que la frontera sur se fijó en el río Maule, al sur de Santiago de
Chile. Durante el gobierno de Huayna Cápac se conquistaron nuevas regiones en el
Ecuador y el sur de Colombia (Pasto). Estos son en general los límites conocidos
del Tahuantinsuyo. La caída del imperio inca

La llegada a Perú de los españoles se produjo después de dos viajes previos sin
éxito. Para su tercer viaje los socios Francisco Pizarro, Diego de Almagro y
Hernando de Luque, un sacerdote, contaban con el permiso de la corona española
en un tratado firmado por la emperatriz Isabel de Portugal. Este tratado, llamado la
Capitulación de Toledo, fue firmado el 26 de junio de 1529 y le daba a Pizarro la
autorización de conquistar las tierras que se llamarían Nueva Castilla, de
evangelizar a los nativos y de contribuir a la corona de España con un quinto de
todas las riquezas halladas y por hallar.

Fue en 1531 que la tripulación española llegó a las costas de Tumbes (el actual
Perú) y desde ahí se internó en el territorio del Tahuantinsuyo, llegando hasta
Cajamarca en 1532. Allí se encontraba el Inca Atahualpa, hijo de Huaina Cápac,
que en esos momentos disputaba el trono con su hermano Huáscar que gobernaba
desde el Cuzco.

Los españoles eran pocos en número, pero contaban con armas de fuego y
caballos. Ellos organizaron una emboscada al Inca Atahualpa cuando se presentó
en la plaza mayor de Cajamarca acompañado de su séquito. Se dice que el cura
(con la ayuda de un indio que hacía de intérprete) pidió al Inca convertirse a la
religión católica y someterse al rey de España. Ante los términos desconocidos para
el Inca, tiró al suelo la Biblia, lo que sirvió de pretexto para el ataque sorpresa de los
españoles. Atahualpa fue capturado y, para conseguir su libertad, le ofreció a
Pizarro llenar un cuarto de oro hasta donde llegara la altura de su mano. El cuarto
fue llenado, pero Atahualpa nunca consiguió su libertad. Los conquistadores lo
asesinaron en 1533.
LA CONQUISTA ESPAÑOLA EN EL ECUADOR Y AMÉRICA
A mediados del año 1534, los españoles ya habían tomado la ciudad de Quito y
derrotado a los ejércitos incas, que estaban debilitados por la anterior guerra civil y
además, sin líderes. El Imperio inca colapsó rápidamente aunque las selvas
orientales y las costeras de Esmeraldas permanecieron sin ser conquistadas hasta
finales del siglo xvii. La Conquista del Ecuador por parte de los españoles no podría
ser catalogada menos que de brutal; el saqueo, el pillaje y la tortura fueron las
armas principales que esgrimieron los conquistadores.

Aunque los incas fueron derrotados, a los españoles les tomó casi dos décadas el
poder establecer un sistema estándar de colonización. Luego de apagar algunos
focos de rebelión, las diferencias entre Almagro y Pizarro, que habían estado
latentes desde la implantación de su sociedad, finalmente explotaron. Almagro inició
abiertamente rebeliones contra Pizarro por las que fue juzgado y ejecutado como
traidor. Sus seguidores, posteriormente asesinaron a Pizarro. Luego de varios
cambios de poder más, España controló a los conquistadores restantes y Ecuador
inició un período de más de dos siglos y medio de relativa y pacifica égida colonial.

La guerra entre hermanos y las alianzas estratégicas de Pizarro con etnias en


rebeldía ante el Imperio Inca, hizo que la conquista e invasión española no fueran
difíciles de llevar a cabo. El 16 de noviembre de 1532, Atahualpa es encarcelado por
los españoles. A pesar que el Inca entregó el rescate más grande de la historia (el
mito cuenta que fue un cuarto lleno en su totalidad de oro), es ejecutado ocho
meses después por ahorcamiento, el 26 de julio de 1533. Este fue el fin del
Tahuantinsuyo, aunque la dinastía Inca sobreviviría en pequeños grupos de
resistencia que fueron exterminados de a poco, hasta el último levantamiento, dos
siglos después, liderado por Túpac Amaru II.

Una vez conquistada gran parte del Perú actual, se empezó a regar la voz entre los
españoles de un supuesto tesoro de Atahualpa, ubicado al Norte, en la ciudad de
Quito..

Ésta expedición estaba encabezada por Sebastián de Belalcázar, o más conocido


como Benalcázar. Originariamente se llamaba Sebastián Moyano, un trabajador de
campo, de condiciones pobres, que tras haber matado a una mula, cambió su
nombre y escapó hacia América en busca de mejor suerte, esto alrededor de 1507.
Con el tiempo se convirtió en un temible y cruento conquistador, fama por la cual,
lamentablemente, no se lo recuerda.

El territorio del norte fue defendido por uno de los tres generales de Huayna Cápac:
Rumiñahui, cuyo nombre significa “Rostro de Piedra”. Este territorio se hallaba en
gran conflicto, varios asentamientos, antes Quitus-Caras, se rebelaron contra el
Imperio Inca. Esto significó una gran oportunidad para Belalcázar quien se alió con
los pueblos en rebelión para poder llegar a Quito.La conquista española de gran
parte de América enfrentó a dos sociedades, o mejor dicho a dos formaciones
socioculturales muy diferentes. Dado que la finalidad era conseguir que los
habitantes de las tierras exploradas reconocieran la soberanía del Rey de España y
se prestaran a la conversión a la verdadera fe, y que la conquista se entiende como
la acción bélica de grupos organizados de españoles que proceden, para sus fines,
a dominar por la fuerza de las armas a las poblaciones aborígenes, es fácil imaginar
la crudeza del enfrentamiento entre ambas culturas.

La conquista de las tierras


americanas por parte de
españoles y portugueses, que
trajo como consecuencia el
contacto entre europeos e
indígenas durante la colonia,
produjo la génesis de nuevos
tipos de culturas; por una parte
la de criollos, mestizos, mulatos,
etc., conformando lo que se ha
dado en llamar como «culturas
nacional-latinoamericanas»; y
por otra, la de los llamados
«indios modernos». Está fuera de duda que las culturas de estos «indios modernos»
contienen un gran número de elementos derivados del tiempo precolombino, pero
igualmente, y sin duda alguna, han aceptado e integrado tal cantidad de rasgos
hispano-coloniales que ya no cabe hablar de culturas prehispánicas.

You might also like