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fo + bes a | Julio Pacheco Zuniga CONTENIDO PRESENTACION 5 PROLOGO 7 PROLOGO DE LA PRIMERA EDICION 9 CAPITULO 1 PLANEAMIENTO Y ORGANIZACION DE LOS TRABAJOS 19 1.1, Estudios previos 1.2, Estudio de planos y especificaciones técnicas 1.3. Organizacién de la obra 1.4. Control del avance de las obras CAPITULO 2 LECTURA DE PLANOS 25 Generalidades Los planos 1. Planos de planta .2. Elevaciones y cortes .3. Planos de detalle 2.3. Escalas, trazos y simbologia 2.3.1. Escalas 2.3.2. Trazos y simbologia CAPITULO 3 TRAZADO Y REPLANTEO, NIVELES DE OBRA 31 Verificacion de las medidas de los terrenos. .1. Forma de los terrenos . Verificacidén de la forma de los terrenos e Veriticacién del terreno que tiene 4 lados 3.2. Métodos auxiliares empleados en el trazado 3.2.1. Mediciones 3.2.2. Empleo de escuadras 3.2.4. Trazar una paralela a un alineamiento dado, separada una disten- cia «d» de dicho alineamiento 3.2.5. Dados un alineamiento base y un punto por €] que debe pasar une paralela a dicho alineamiento, trazar la paralela 3.2.6, Trazado de éngulos 3.2.7, Dividir un &ngulo cualquiera 3.3. Trazado y replanteo 3.3.1, Métodos de trazado 3.3.2. Replanteo de la cimentacion 3.4, Establecimiento y control de niveles en obra 3.4.1. El proceso de establecer y controlar niveles 3.4.2, Verificacién del relieve del terreno 3.4.3, Evaluacién del plan de niveles 3.4.4. Control de niveles en obra CAPITULO 4 FORMACION DE LOS SUELOS Y PROPIEDADES DE LOS SUELOS PARA CIMENTACION DE ESTRUCTURAS ss 4.1. Formacién de los suclos 42. Estudio de los suelos 43. Clasificacién de los suelos 4.4, Los suelos y las cimentaciones 4.4.1. Generalidades 4.4.2 Grava 4.4.3, Arena 444. Limo 445. Arcilla 4.4.6, Sucios que contienen materia orgdnica 4.4.7. Homogeneidad del subsuelo 4.4.8. Capacidad portante de los suclos CAPITULO 5 CIMENTACIONES 67 5.1. Funcién de los cimientos y tipos de cimentaciones 5.1.1. Funcién de los cimientos 5.1.2. Tipos de cimentaciones 5.2. Cimientos para muros portantes 5.3. Zapatas de concreto armado 5.4. Subzapatas 3.5. Cimientos para muros de concreto armado 5.6. Impermeabilizacién de cimientos CAPITULO 6 ALBANILERIA 95 6.1. Generalidades 6.2. Las unidades de albafileria 6.2.1. Unidades de albaiiileria 6.2.2. Ladrillos de arcilla 6.2.3. Ladrillos sflico - calcéreos 6.2.4. Bloques de concreto 6.2.5. Unidades s6lidas y unidades huecas 6.2.6. Propiedades de las unidades de albaiiilerfa 6.277. Clasificaci6n de las unidades de albafiilerfa 6.3. El mortero de asentado 6.3.1. El mortero 6.3.2. Arena 6.3.3. El agua de amasado 6.3.4. Proporciones 6.3.5. Resistencia de albafileria 6.4. Los muros de albafiilerfa 6.4.1. Aparejo de muros 6.4.2. Emplantillado 6.4.3. Espesor de las juntas horizontales 6.5. Albaiiileria reforzada 6.5.1. Albaiiileria confinada 6.5.2. Albafiilerfa armada 6.6. Control CAPITULO 7 ENCOFRADOS 7.1. Funcién de los encofrados, requisitos que deben cumplir 7.2. Cargas que actuan en los encofrados 7.2.1. Tipos de cargas 7.2.2. Peso del concreto 7.2.3. Cargas de construccién 123 7.2.4, Peso de los eneofrados 7.2.5, Cargas diversas 7.2.6, Presidn del eonereto fresco 7.3, Deflexiones 7.4, Materiales y equipos empleados en encofrados 7.4.1, La madera 7.4.2, Bneofrados metilicos 7.5, Deseripeidn de los eneofrados 7.5.1, Eneofrado de columnas 7.5.2. Eneofrado de muros 7.5.3, Eneofrado de vigas 7.5.4, Eneofrado de techos 7.5.5. Resistencia de pies derechos y puntales 7.5.6. Separacidn o espaciamiento de soleras 7.5.7, Espaciamiento nviximo entre pies derechos 7.5.8. Arriostramiento 7.6. Tolerancias admisibles en encofrados 7.7. Secuencia y plazos de desencofrado 7.8. Preservacién de los encofrados 7.9. Andamios CAPITULO 8 FIERRERIA 149 8.1. El concreto armado 8.2. Las barras de refuerzo 8.3, Habilitacién de las barras 8.3.1. Condicién de limpieza de las barras 8.3.2. Corte y doblado de Jas barras 84. Estribos en columnas $5. Ganchos estandar en barras longitudinales 8.6. Empalmes de barras 8.6.1. Empalmes en vigas y losas 8.6.2. Longitud de empalmes 8.6.3. Empalmes en columnas 8.7. Distribucién y espaciamiento libre entre barras 8.8. Recubrimiento de las armaduras CAPITULO 9 TECNOLOGIA DE CONCRETO 165 9.1. Elconcreto 9.1.1. Generalidades 9.1.2. El cemento 9.1.3. Los agregados 9.1.4. El agua 9.2. Propiedades del concreto 9.2.1. Resistencia a la compresién 9.2.2. Trabajabilidad y consistencia del concreto fresco 9.2.3. Durabilidad 9.3. Proceso de elaboracién del conereto 9.3.1. Disefio de mezclas 9.3.2. Medicién de los materiales en obra 9.3.3. Mezclado 9.3.4. Transporte 9.3.5. Colocaci6n del concreto 9.3.6. El vibrado del concreto 9.3.7. Curado 9.4. Control de la resistencia del concreto 9.4.1. VerificaciGn de la resistencia 9.4.2. Equipo y herramientas para la preparaci6n de las probetas 9.4.3. Las muestras de concreto 9.4.4. Moldeado y curado de las probetas 9.4.5. Informes y registro de resultados 9. Juntas en el concreto 9.5.1. Cambios volumétricos en el concreto 9.5.2. Necesidad de juntas en el concreto 9.5.3. Juntas en pavimentos 9.5.4. Juntas en edificios CAPITULO 10 ACABADOS . 195 10.1. Revoques 0 enlucidos 10.1.1.Revoque de paredes 10.1.2.Cielos rasos i 10.1.3.Falsos cielos rasos 10.2. Revestimientos con may6lica y cerémicos 10.4 Pisas 10.3.1. Seleceidn de pisos 10.3.2, Clasifieacion 10.3.4, Falses pisos 10.4.4, Contrapisos 10.4.3, Piss de conereto 10.4.6, Pisas de adoquines de eonereto 10.3.7, Pisos de losetas 10.4.8, Pisas de terrazo 10.3.9, Granito rasties artificial 10.3.10, Pisos ceramicos esmaltados 10.311. Baldosas cerdmicas 10.34.12, Gres cerdmica 10.313, Poreelanato 10.3, 14, Parqué 103,15, Batablados 10.3.16, Pisos vinflicos 10.3.17, Pisos de marmol 10.3,18, Marmol reconstituido 10.3.19. Piso de lajas de piedra 103.20, Canto rodado 10.4, Carpinteria de madera 10.4.1, La madera 10.4.2. Marcos 10.4.3, Puertas 10.4.4, Ventanas y mamparas 10.4.5. | Enchapados de madera 4 10.4.6, Pasos de escalera 10.4.7, Contrazdcalos 10.5, Pintura Generalidades Temple 0.5.3, Pinturas de litex 10.5.4, Oleo mate 10.5.5. Esmales 10.5.6. Imprimantes para paredes 10.5.7, Barnices 10.5.8. Preparacién de las superficies 10.6. Vidrios 10.6.1, Tipos de vidrios 10.6.2. Espesores de los vidrios 10.6.3. Dimensiones maximas CAPITULO 11 INSTALACIONES SANITARIAS 229 11.1. Sistemas de abastecimiento de agua 7 11.1.1, Generalidades Abastecimiento directo . Abastecimiento indirecto Agua caliente Cisternas y tanques elevados . Algunas exigencias técnicas referidas a las instalaciones de agua Redes de desagite y ventilacién . El sistema de desagte y ventilacion . Algunas exigencias técnicas - Redes de desagile . Trampas y tuberias de ventilacién . Ubicacién de las conexiones de aparatos sanitarios Matenales para instalaciones sanitarias Tuberias y accesorios para instalaciones de agua . Tuberfas y accesorios para redes de desagiie Valvulas para redes de agua Equipos de bombeo de agua - Tipos de equipos . Electrobombas centrifugas . Equipos hidroneumaticos Calentadores Planos de instalaciones sanitarias . Los planos de instalaciones sanitarias .7. Pruebas 11.7.1. Prueba de las tuberias CAPITULO 12 SEGURIDAD EN OBRA 253 12.1. La construccién y la seguridad 12.2. Equipos de proteccién personal 12.3. Orden y previsiones contra caidas 12.4. Manejo manual de materiales 12.4.1. Generalidades 12. Levantar cargas 12.4.3. Transportar cargas 12.5. Excavaciones 12. Accidentes frecuentes 12:: Estabilidad de taludes 12.5.3. Excavaciones contiguas a edificaciones existentes 12.5.4. Tuberias y cables enterrados 12.5.5. Owras precauciones Fallas de los encofrados Trabajos en altura 12.8. Escaleras 12.9. Riesgo eléctrico CAPITULO 1 PLANEAMLIENTO Y ORGANIZACION DE LOS TRABAJOS 1,1. ESTUDIOS PREVIOS Quienes han construido saben muy bien to aventurado que es comenzar una obra, sin planificurla oi prever todks las cirewnstaneias y las restricciones que envuelve una tarea, realmente compleja y de tanta responsabilidad, come es la consteuceiin, Cada obra en particular, aun cuando se wate de coastrucciones de la misma naturaleza ~ editicios, por ejemplo ~ plantea al consteuctor problemas singulares. Las resticciones que suclen presentarse durante los procesos constructivos se derivan de las earacteristcas propias de cada obra, asi como de las del lugar previste para la construccién, En efecto, la topografia de los ferrenos, el chima prevaleciente en la zona de los trabajos, la distancia de la obra a centros urbanos, la eventual dificultad para el tansporte de la maquinaria, asf come la, factibilidad de suministeo de agua y energia eléctrica, la disponibilidad de mano de obra especializada, ¢} abastecimiento de materiales, son entre otros, aspectos que deben ser previstos en la planificacién de las obras. La informacién acerca de los punto: icados debe obtenerse «in situ» o deducirse de la experiencia recogida a la intervenciéa en obras similares a la por construirse y, naturalmente, ser Concordante con la magnitud y caracteéristicas de lu obra encargada; sin embargo, aun cuando se trate de obras ubicadas dentro de zonas urbanis la indagaci6n es indispensable, al menos respecte al relieve del terreno, a la disponibilidad de abastecimiento de agua y a las limitaciones de espacio para el almacenamiento de matenales. 1.2. ESTUDIO DE PLANOS Y ESPECIFICACIONES TECNICAS Como bien se sabe, las caracteristicas, la forma y la calidad de Jas obras son expresadas por los proyectisias mediante planos y especificaciones téenicas. Generalmente, estos documentos son revisados y compatibilizados en conjunto en cada proyecto; no obstante. no debe descartarse la posibilidad de que, involuntariamente, se deslicen errores, omusiones y aun falta de concordancia entre los planos de las diversas especialidades Por ello, es recomendable, antes del inicio de la obra, esuidiar y cotejar entre si los planos de las diversas especialidades; por ejemplo: los de arquitectura con los de estructuras, para verificar la cabal correspondencia de las medidas; los de instalaciones Sanitarias y eléctricas con los de arquitectura y estructuras, para evitar que inapropiadas ubicaciones de tuberfas afecten la resistencia de muros y elementos de concreto armado o la concepeién arquitecténica del proyecto. Si se advirtiera, en el estudio de los planos, inconvenientes repercusiones en la calidad de la obra, habr4queformular oportuna- mente las consultas pertinentes. La practica demuestra que el tiempo © gastos en que se incurra enel estudio de planos y especificaciones técnicas so ampliamente compensados cn los resultados finales. El estudio, posibilitara la conecta interpretaci6n de los proyectos, facilitaré las labores propias de las obras: trazado, definicién de niveles, y, en general, favorecera la ca- lidad de la obra. 1.3. ORGANIZACION DE LA OBRA . Dime cémo esta organizada tu obra y te diré. que clase de constructor eres. En efecto, la limpieza de la obra y el orden; la apropiada ubicacién de almacenes, oficinas, guardiania, y el adecuado almacenamiento de los materiales, contribuyen definitivamente en la productividad. Aun en obras pequefias es indispensable, antes de iniciar los trabajos, determinar convenientemente la ubicacién de la guardiania y los espacios para el depdsito de los materiales. En obras grandes és util elaborar planos que indiquen la ubicacién de almacenes, oficinas, guardian{fas, cercos de proteccién ¢ ingresos a la obra, puntos de abastecimiento de agua y energia eléctrica, espacios para depositar los materiales, etc. Estos planos deben ser dibujados 21 Fig. 1.1 Ejemplo de organisacién fisica de ta obra. en escalas apropiadas. La Fig. 1.1 muestra un ejemplo de este tipo de planos, en la que se ha emplead6 la simbologia propuesta en la Fig. E:2} Como es comprensible, no existen soluciones ni planos tipicos. Cada obra, de acuerdo a sus propias caracteristicas, demandara planteamientos especificos; no obstante. las siguientes recomendaciones contribuirin a lograr conveniente organizacién y apropiada distribucién de los espacios: Definir, con especial atencidn, el emplazamiento de las ae requeridas para la construccién. teniendo en cuenta las < 22 WW Seer —— o- && CCD is bos iad HUTA EXISTENTS CAMINO AFIRMADO cEAco ALMACEN, OFICINA. TECHADO DESIGNATION ESPECIFICA BANCO DE DOBLADO DE FIERRO. CISTERNADE AGUA CASTE.LO PARA ELEVADOR MEZCLADORA sno PLANTA DOSIFICADORA ELEVADOR ELECTRICO DE BRAZOS GRUA TORRE DIBUJAR AESCALA CON INDICACION OE LA FUERZA DE ELEVACION DE SU MAXIMO ALCANCE Fig. 1.2 Simbologia para la elaboracién de planos de organizacién fisica de la obra. los rendimientos, los radios de accién o alcance de cada maquina y, desde luego, la secuencia prevista de ejecuci6n de los trabajos. Determinar, cuidadosamente, la ubicaci6n de las areas destinadas al deposito de los materiales (cemento, agregados, barras de refuerzo, madera, étc.), para evitar posteriores traslados 6 entorpecimiento de los trabajos. Establecer adecuados medios de seguridad con la finalidad de reducir el riesgo de accidentes. 1.4. CONTROL DEL AVANCE DE LAS OBRAS Una de las exigencias que sucie estipularse en los contratos de cons- trucci6n es el plazo de ejecucién de las obras, incluso se establece en ellos multas por incumplimiento injustificado de los plazos acordados. Para controlar el avance de las obras y cumplir con los plazos previstos €s preciso que los contratistas dispongan dé medios apropiados. Instrumentos definitivamente ttiles para el Propésito sefialado son los denominados «diagramas de barras». Los diagramas de barras indican graficamente las fechas previstas de inicio ¥ témmino de los diversos trabajos que, agrupados en rubros, constituyen en conjunto los procesos de construcci6n. El procedimiento para elaborar los diagramas de barras comprende las siguientes etapas: - Determinar cudles son jos trabajos o actividades principales del Proceso de construccién de cada obra en particular. - Estimar la probable duracién de ejecuci6n de cada actividad o trabajo. ~ Representar graficamente el proceso de construcci6n Previsto. - Cada una de las actividades o trabajos es representada en el diagrama por Una barra horizontal, cuya longitud expresa la duracién de la actividad. Desde luego, la posicién de las barras debe guardar correspondencia con la secuencia légica de progresién de los trabajos. Por ejemplo, la ejecucién de los muros podra iniciarse una vez concluida la cimentaci6n; la vestidura de los muros - es obvio -7 luego de que €stos estén constmidos e instaladas las tuberias de las instalaciones eléctricas, y asi sucesivamente, aunque algunos trabajos pueden ser programados paralelamente con otros. respetando, naturalmente,la secuencia propia del proceso constructivo. La duracién de cada actividad depende de los recursos aportados (trabajadores, equipos, herramientas y materiales). La Fig. 1.3. muestra un ejemplo de diagrama de barras. Tal como ha sido sefialado, los diagramas son medios para ejercer el control de avance de las obras. Constituyen, en realidad, patrones de referencia. 23 24 PARTIDA CIMENTACION MUROS VESTIDURA CARPINTERIAS, PISOS, ETC. PINTADO INSTALACIONES. Fig. 1.3 Ejemplo de diagramas de barras El control consiste en comparar, durante la construccién, el avance real de cada uno de los trabajos con las duraciones previstas en el diagrama de barras. Si la ejecuci6n de una o mas de las partidas se retrasa, lo probable es que el plazo de ejecucién de la obra se extienda mas alla del previsto. Si el contro] se realiza oportunamente y en forma periddica, es posible corregir eventuales desviaciones entre lo previsto y lo realmente ejecutado, adoptando, para tal efecto, las acciones pertinentes: el aporte de mayores recursos, por ejemplo. El procedimiento de elaboraci6n de los diagrafnas de barras aqui expuesto, tiene, ciertamente, algunas limitaciones. Existen otros sistemas mds sofisticados que permiten identificar cuales son las actividades criticas o determinantes de los plazos de ejecucién de obras; no obstante, son de evidente y probada utilidad para el propdsito propuesto, es decir, el control del avance de las obras. CAPITULO 2 LECTURA DE PLANOS 2.1. GENERALIDADES La forma y las medidas de las obras son expresadas porlos proyectistas mediante los planos. Estos planos corresponden a las diversas especialidades, asi, tenemos planas-de arquitectura, de estructuras y de instalaciones. Son dibujados a escalas apropiadas y recurriéndose a trazos y simbolos convencionales y prepios de cada especialidad, aun cuando algunas represcmtaciones son comunes a varias especialidades Los. planos son identificados segim la especialidad que corresponda: los de arquitectura son designados con Ia letra A; los de estructuras, con Ia letra E; los de instalaciones sanitarias. y los de instalaciones eléctricas con las letras IS e IE, respectivamente. Las letras van acompafiadas de numeraci6n correlativa, de esta manera sé consigue su inequivoca iden tificaci6n; asf sé tiene, por ejemplo, designaciones tales como Al, A, etc; El, E2, E3, etc; IS!, E52, IS3, etc.; IE1, IE2, TES, etc. EI presente capitulo, se referiré a los planos de arquitectura, Estos son: - Planos de planta - Elevaciones - Cortes y secciones - Planos de detalles 2.2. LOS PLANOS ; 2.2.1. Planos de planta. Un plano de plantaes la proyeccién vertical de la intersecci6n de un plano virtual y el volumen o forma geométrica. materia de la representacién. Se sobrentiende que el plano virtual es horizontal, ubicado a 1.20 m del piso terminado Fig 2.1.) . Los planos muestran los diversos componentes o elementos de las obras: muros, vanos, puertas, escaleras, aparatos sani PLANTA QUE GENERA, Fig. 2.1 Planos de planta. tarios, etc., también los ejes o alineamientos que definen la ubicacién de dichos componentes, asf como las cotas o niveles de pisos terminados, y toda informacién indispensable Para la construcci6n de obras. 2.2.2. Elevaciones y cortes. Los planos de planta son representaciones graficas dibujadas en dos dimensiones; por lo tanto, resultan insuficientes para precisar la forma y medidas de las obras. Se requiere, entonces, disponer de otras representaciones graficas que nos muestren las fachadas, las alturas de entrepisos, el alto de los muros, entre otras caracteristicas de las obras: estas representaciones gréficas son los planos de elevaciones y cortes (Fig. 2.2.). ° Pee ‘CORTE QUE GENERA Fig. 2.2 Planosde corte. Relacionando e interpretando correctamente los planos de planta y los de elevaciones y cortes, podemos conocer la forma de la obra proyectada, realizar los trazados y replanteos, establecer los niveles de obra; en suma, evar a cabo la construccidn de la obra, ajustada al proyecto arquitecténico propuesto. 2.2.3. Planos de detalle. Los planes de detalle complementan los planos de planta y cortes. Dibujados a escalas apropiadas, permiten la construccién de los diversos componentes o partes de la obra: puertas, ventanas, barandas, muebles fijos; incluso son neécesarios para precisar la ubicacién de Jos aparatos sanitarios en los bafios, los encuentros de pisos, etc. Las escalas frecuchtemente empleadas para dibujar los pianos de detalle son: 1/25, 1/20, 1/10, 1/2, de acuerdo al grado de claridad que se considere necesario para su correcta interpretacién. 2.3. ESCALAS, TRAZOS Y SIMBOLOG{A 2.3.1. Escalas. El dibujo de un objeto cualquiera, cuyas dimensiones excedan el tamafio comin de una lamina, se realiza reépresentando el objeto con medidas “reducidas proporcionalmente, es decir, a escala. Las escalas de reducci6n son diversas. El dibujo de una gran extensi6n de terreno tendr4, necesariamente, que hacerse a escala pequefia, por ejemplo, 1 en 1000, es decir, que un centimetro en el plano representara 1000 cm, © sea 10 m de longitud real. En cambio, detalles de algunos elementos 0 componentes - una puerta o ung baranda, por ejemplo - generalmente son dibujados a escalas mas grandes; 1 en 2,6 1: 5. Es usual expresar las escalas mediante cocientes o quebrados: 1: 20, 1: 50, 1: 100, o sus equivalentes 1/20, 1/50, 1/100. En planos de edificaciones, las escalas usuales son: Planos de ubicacién 1: 200 1: 500 Plantas, elevaciones y cortes 1:50 1:100 Pianos de carpinterias, escaleras bafios, cocinas 1:20 i525. Detalles de carpinterias, encuentros de pisos, y otros Lids ae os gh ho! Los escalimetros son instrumentos indispensables para dibujar planos. Son reglas graduadas de tal manera que posibilitan el dibujo de planos a escala; naturalmente, también son empleados para deducir de los planos las medidas reales representadas en ellos a escala. , Si en la obra no se cuenta con escalimetro, se pueden precisar medidas empleando el metro o la cinta metalica. Si, por ejemplo, en un plano dibujado a escala 1: 50, medimos 5 cm, esta medida representa una longitud real de 250 cm, es decir 2.50 m. gC6mo la hemos obtenido? Es muy simple: multiplicando 5 cm por 50 = 250 cm (2.50 m), porque, sencillamente, una escala de 1 /50 significa que una unidad de medida tomada en el plano representa una longitud real 50 veces mas grande. Otro ejemplo: si en un plano dibujado a escala 1: 20 se mide 6.7 cm, ésta representa una medida real de 1.34 m. Verifiquelo. 2.3.2. Trazos y Simbologia. En laelaboracién de los planos se suele emplear diversos tipos de trazos, asi como ciertos simbolos convencionales, que facilitan la lectura y la interpretacién de los planos. El conocimiento de dichas representaciones grdficas es indispensable para quienes participan en la copstruccién de obras. : : Lémina 21, Traces stmbolos y representaciones. CONTORNOS ¥ AMISTAS VISIBLES CONTORNOS ¥ ANISTAS NO VISIRLES: PROYECOIONES DE VIGAS, DINTELES ¥ TECHOS JES ¥ ALINEAMIENTOS EN LOS PLANOS DF PLANTA INDICAN CORTES, ¥ BL SENTIOO EN GUE DEDEN MIRAR! MURO. PROYECCION VIGA O DINTEL SS ro os VENTANAALTA [ vano [alteizar WDENTIFICACION DE VENTAHAS [encho [alto “| ve PUERTA BATIENTE IDENTIFICA ELEVACIONES. 7 (A) EN ESTE CASO ELEV.A PUERTA DE VAIVEN MAMPARA CORREDIZA fxeo WDENTIFICACION DE PUERTAS NIVEL DE PISO TERMINADO, EN PLANOS DE PLANTA NIVEL DE PISO TERMINADO, EN PLANOS DE CORTES AREA SIN TECHO AREA SIN PISO CAPITULO 3 TRAZADO Y REPLANTEO, NIVELES DE OBRA 3.1, VERIFICACION DE LAS MEDIDAS DE LOS TERRENOS 3.1.1. Forma de los terrenos. Una porcién de drea limitada por determinado ndmero de lados, es un poligono. La forma de los terrenos corresponde a la de los poligonos. Al contorno constituido por los lados del poligono se le denomina poligonal. * Angulos de un polfgono son los 4ngulos formados por dos lados consecutivos. * Vértices son los puntos de interseccidn de dos lados consecutivos, * Diagonales de un poligono son los segmentos de recta que unen dos vértices no consecutivos. La Fig. 3.1 es un polfgono; los lados AB, BC, CD y AD constituyen la poligonal. c Fig.3.1 El poligono que muestra la figura tiene cuatro Angulos internos; uno de ellos, el 4ngulo ABC, est4 formado por.los lados, consecutivos AB y BC. Refiriéndonos a la misma figura, el poligono tiene dos diagonales: AC y BD. 3.1.2. Verificacién de la forma de los terrenos. Antes de proceder al trazado de cualquier obra es indispensable comprobar si lu forma y medidas del lote indicadas en los planos corresponden a las reales obtenidas en el terreno. La exigencia sefialada podria parecer innecesaria sino fuera porque en la practica y. con cierta frecuencia se evidencian discrepancias entre lo indicado en los planos y la verdadera forma y medidas de los terrenos. En todo caso, la constatacién debe ser de ratina para evitar problemas ulteriores, muchas veces insal- vables. Ciertamente, la verificacién de la forma y medidas de terrenos de gran extensi6n demanda la intervencién de to pdgrafos y el empleo de equipo de ingenierfa; sin embargo, cuando se trata de lotes de reducida dimensién y mds atin si son cuadriléteros la constatacién es posible efectuarla con implementos simples, tales como winchas, cordeles y estacas. 3.1.3, Verificacién de un terreno que tiene cuatro lados. Frecuentemente los terrenos tienen cuatro lados, ¢s decir, son cuadrilateros (poligonos que tienen cuatro lados). Es conveniente senalar que la forma exacta de un terreno de este tipo no es posible definirla conociendo sdlo las medidas de sus lados: es necesario conocer al menos uno de sus Angulos internos 0 la medida de una de sus diagonales. La Fig. 3.2, por ejemplo, muestra dos cuadrilateros que tienen sus lados correspondientes iguales; sin embargo, los cuadrilateros no son iguales. o A eo A B Fig.3.2 a El psocedimiento descrito a continuacién consiste en medir los lados y las dos diagonales. Desde Iwego, las mediciones deben realizarse con la mayor exactitud posible, empleando preferentemente wincha metilica Obdtenidas las medidas de los lados y diagonales, se procede al dibujo del terreno, requiriéndose de un compas, escalimetra y lapiz duro afilado, E! procedimiento es el siguiente. a) Dibujar el lado que corresponda al frente del lote; en ja Fig. 3.3, el lado AB ° Fig.3.3 6b) Con el compas, tomando como centro ¢| vértice A, trazar un arco de circunferencia cuyo radio, en la escala escogida, sea igual al lado AD (Fig. 3.4-a), c) Repetir el procedimiento indigado en b), pero tomando ahora como centro el vértice B. Con un radio igual a ta diagonal BD interceptar el arco anteriormente trazado, determinando asf el vértice D (Fig. 3.4-b) @) Uniendo los vértices A y D definimos el lado AD (Fig. 3,4-c). e) Haciendo centro en el vértice D trazar un areo de cireunferencia cuyo radio sea igual al lado CD (Fig. 3.4-d), £) Repetir lo sefialado en e) tomando como centro el vértice B. Con radio igual al lado BC interceptar el arco anteriormente trazado, se obtiene asi el vértice C (Fig. 3.4r¢), Uniendo el vértice C con los vértices B y D queda definida la forma del terreno propuesto. , i wey ae g) Comprobar con el escalimetro que la diagonal AC sea igual ala medida tomada en el terreno. e) A a Fig. 3.4 a), b), c), d), ye} El procedimiento descrito puede ser aplicado a terrenos de mas de cuatro lados, descomponiendo el lote en triangulos. 3.2. METODOS AUXILIARES EMPLEADOS EN EL TRAZADO 3.2.1. Mediciones. E] trazado de obras de gran extensién demanda, necesariamente, la intervencion de topégrafos y el empleo de instrumentos y equipos apropiados; sin embargo, el trazado de obras de reducida a mediana extensi6n es posible realizarlo simplemente con wincha y cordeles, siempre y cuando se lleve a cabo con apropiado esmero. De preferencia la wincha serd met4lica, de longitud no menor de 25 m. Es necesario indicar a los ayudantes cual es el cero de la wincha, pues como se sabe, las Winchas est4n provistas de argollas que, en algunos tipos de wincha, no forman parte de la longitud real. También es indispensable que la wincha, sca fuertemente tensada. al efectuar las medicione: Las mediciones deben ser horizontales, pues como tales estén indicadas en los planos. Cuando las medidas son tomadas apoyando la wincha en terrenos de moderada pendiente el error en que pueda incurrirse no tiene mayor significacié6n. No sucede lo mismo cuando el terreno tiene pronunciada pendiente; en este caso, €s preciso tomar medidas horizontales progresivamente por tramos, a este método se le denomina medicién por cultelacién. Por ejemplo, la longitud entre los puntos A y B es la suma de las medidas parciales (Fig, 3.5). medida horizontal AB = 14 +12 +15 Fig. 3.5 Medicién por cultelacién ? -2.2. Empleo de escuadras. Las escuadras de madera, similares a la que muestra la Fig. 3.6, son, sin duda, itiles para trazos complementarios o de reducida longitud; no es recomendable su empleo para trazados de mayor extensiém. Desde luego, debe desecharse, por no proporcionar la necesaria exactitud, la utilizacién de pequefias escuadras de fierro. 36 ESCUADRA DE MADERA Fig.3.6 Escuadra de madera, 3.2.3. Trazar una perpendicular a un alineamiento dado. Trazar una perpendicular a un alineamiento equivale a trazar un Angulo recto, es decir, de 90° El procedimiento para trazar un 4ngulo de 90° se fundamenta en el principio siguiente: si los lados de un triangulo miden 3,4 y 5 m el Angulo formado por los lados que miden 3 y 4m es un Angulo recto (Fig. 3-7) Fig.3.7 Tridngulo 3, 4, 5 Ejeinplo: Se trata de trazar un alineamiento perpendicular a un alineamiento o eje, AB (Fig. 3.8-a). Procedimiento: a) Ténsar un cordel entre las valla A y B, définiendo asf el alineamiento AB. Los travesafios de las vallas deben estar al mismo nivel. b) Con el auxilio de una escuadra de madera tensar un cordel entre las vallas C y D, Atin no se puede asegurar que el alineamiento CD sea perpendicular al alineamiento AB. (Fig. 3.8-a). + cordel Letemente tensado oe faethe A _Marca eq +! cordel tensado marca en el corde! tensado 4 oD mR Q ») A Fig.3.8 Trazado de ia alineamiento perpendicular a un alineamiento 0 eje c) A partir de la interseccién de los dos cordeles medir 3 m sobe cl cordel AB, esta medida la marcamos en el cordel estableciendo el punto P. Una vez hecha la marca no se debe modificzr la tensién del cordel AB (Fig. 3.8-b). d) Repetir la misma operacién sobre el cordel CD, pero tomando cn este caso. una medida de 4m; definiendo asi el punto Q. e) Verificar con ta wincha si !a medida entre los puntos P y Q es 5 m. Si esto se cumple, los alineamientos AB y CD son perpendiculares entre si. Es preciso que la comprobacién se reulice Culdadosamente. f) De no cumphise ia condicion indicada, sorregir el alineamiento CD. repitiendo el procedimicnio tantas vetes Cuantas sean necesarias, hasta conseguir el triangulo 3,4,5. Es indispensable, en cada correcci6n, tomar nuevamente las 37 aa medidas 3 y 4 m sobre las cordeles AB y CD respectivamente, no siendo validas las marcas anteciores 3.2.4, Trazar uns paralela a un alineamiento dado, separada una Fig.3.9 Trazado de wna parateta a un alinea- Procedimiento: a) Desde dos puntos B y C, convencionalmente escogidos sobe el alineamiento AX, se trazan perpendiculares a AX. Si la distancia d es reducida se puede emplear una escuadra de madera para trazar las perpendiculares. Si la distancia es grande, aplicar el método descrito en 3.2.; b) En las perpendiculares trazadas y a partir de los puntos B y C medir la distancia prevista «d», estableciendo los puntos PyQ ¢) Uniendo los puntos P y Q se obtiene la patalela buscada. 3.2.5. Dados-un alineamiento base y un punto por el que debe pasar una paralela a dicho alineamiento, trazar la paralela. En la Fig: 3.10-a, AX es un alineamiento base y B es un punto por el que debe pasar una paralelaa AX. Procedimiento: a) Ubicar en el alineamiento AX un punto cualquiera, tal como C. Tender un cordel que una los puntos B y C (Fig. 3.10b). b) Dividir por mitad-el segmento de recta BC para determinar el punto M (Fig. 3.10-c). oe B x aa x P Dd) a ee ~B ametnec “aM Te D9 i¢,3.10 Trazade de una paralelu a un alineamicnta y que pase por un pute dade “ah bh oh ded fi ©) Desde un punto D, elegide cbitrariamente sobre AX, se establece mediante corde! el alineamiento DM (Fig. 3,10ed), 4) Sobre el alineamionto OM y a partir del punto M medir una distancia igual a DM, obteniendo as( el punto Z (Mig, 3,10-€) €) Uniendo los puntos B y Z trazamos la paralela buscada (Fig. 3.10-f). 3.2.6. Trazado de dngulos, E1 trazado de alineamientos que forman determinados dngulos con un alineamiento dado es posible realizarlo empleando el método de La tangente trigonométrica Procedimiento: a) Tomar sobre el alineamiento dado, digamos AX, a partir del vértice previsto una distancia convencionalmente escogida, estableciendo, de esta manera, el punto C, Al segmento de recta AC lo designamos base (Fig. 3-11). b) Desde el punto C trazar una perpendicular al alincamiento AX, Sobre esta perpendicular y a partir del punto C tomar una longitud igual al producto de la longitud de la base AC, por la tangente del Angulo propuesto, definiendo asf ¢! punto B. c) Uniendo los puntos A y B y prolongando la recta se obticne el alineamiento AZ que forma con el alineamiento AX el ‘fingulo previsto, Es recomendable que la longitud de la base sea de 2, 3, 4, 6 5 m. Cuanto mas grande sea la base, mayor sera la exactitud que cabe esperar; aunque es pertinente advertir que cuando sé trata de dngulos grandes la longitud de la perpendicular resulta excesiva © inconveniente para el trazado. Aun cuando la tabla 3.1 esta referida sélo a algunos 4ngulos es de utilidad practica, Para dngules que no figuran en la Tabla, lus tangentes pueden obtenerse de computadoras provistas de funciones trigonométricas. Desde luego, el grado de exactitud que se logre con el método deserito depende del esmero con que se realice. Su empleo es ceptable en obras relativamente pequefias, mas no en proyectos que demanden mayor precisién, en los que, generalmente, se recurre a topégrafos y equipo de ingenierfa. 42 Tabla 3.1. Valores de «a» (m) para trazar Angulos (Ver Figura 3.11). Angulos/ / Base (m) / 2 2 ie 4 3 ee 10° 0.35 0.53 0.71 0.88 15° 0.54 0.80 1.07 134 20° 0.73 1.09 1.46 1.82 25° 0.93 1.40 1.87 2.33 30° 1.15 1.73 231 2.89 35° 1,40 2.10 2.80 3.50 40° 1.68 2.52 3.36 4.20 as° 2.00 3.00 4.00 5.00 50° 2.38 3.58 47 3.96 55° 2.86 4.28 S71 74 60° 3.46 5.20 6.93 8.66 6s° 4.29 643 8.58 10.72 70° 5.49 8.24 10.99 13.74 SS Ejemplo: Trazar un alineamiento AZ que forme un Angulo de 20° con un alineamiento dado AX (Fig. 3.12). a) Sobre el alineamiento AX y a partir del punto A tomar una longitud de 5m, estableciendo asi el punto C Fig. 3.2 b) Desde el punto C traza una perpendicular a AX ©) Medimos en esta perpendicular a partir del punto C una longitud igual al producto de 5 m por la tangente de 20°, determinando el punto B, Como la tangente de 20" es 0.36397, la longitud a tomarse sera 5 x 0.36397 @ 1.82 m, coincidente con el valor que figura en la tabla 3,1.para un dngulo de 20° y una base de 5 m. d) Uniendo los puntos A y B y prolongando la recta se obtiene el alineamiento AZ, que forma un Angulo de 20° con alineamiento de AX. 3.2.7. Dividir un Angulo cualquiera. Se trata de dividir por la mitad el Angulo formado por los alineamientos AX y AZ (Fig. 3.13) x (a) (b) ‘Fig.3.13 Dividir un Angulo cualquiera a), b) Procedimiento: a) En los alineamientos AX y AZ y a partir del vértice A tomar una misma longitud definiendo los puntos B y C (Fig. 3.13-a), b) Tender un cordel que una los puntos B y C. c) Dividir cn mitad el segmento de recta BC, cordel el punto M. d) Uniendo el vértice A con el punto M y prolongando la recta se obtiene el alineamicnto AY, que divide en mitad el angulo XAZ (Fig. 3.13-b) arcando en el 3.3. TRAZADO Y REPLANTEO 3. -1. Métodos de trazado. La ubicacién y las medidas de los cimientos, muros y columnas son indicadas en los planos y estin referidas a sistemas de ejes y alineamientos, propucstos en cada proyecto en particular. Los ejes y alineamientos, perpendiculares entre sf, constituyen sistemas de coordenadas y son identificados con numeros y letras a cfectos de facilitar el trazado y el replanteo. La Fig. 3.14 muestra el plano de la cimentacién de un edificio. Como se advertira, la ubicacion de las columnas y muros y sus respectivas zapatas esti referida al sistema de ejes propuesto en el plano de trazado. Los ejes y/o alineamientos son materializados en obra mediante vallas o «tarjetas», en las que se realizan apropiadas marcas. Cada eje o alineamiento esta definido por Sus respectivos pares de vallas o «tarjetas» (Fig. 3.15 y 3.16) Las vallas son ubicadas convenientemente en el contorno de la zona de trabajo. Deben ser suficientemente sdlidas, construidas con madera en buen éstado y estar algo separadas de las escavaciones para evitar su remocidéna durante los trabajos, asimismo, deben estar alineadas. El primer paso del trazado es la definicién de los ejes 0 alineamientos base. Refinéndonos a la Fig. 3.14 tomamos como tales el alincamiento A y cl eje | x a t 7 LINDEN EET. oe Fig.3.15 Valla de madera Fig.3.16 TarjetGje yeso, para el trazado refiere al eje A En el ejemplo propuesto, Por tratarse de un edificio en esquina y con dos frentes a la calle, hay que tener extremo cuidado en respetar los retiros municipales correspondientes. Trazado el alineamiento A se procede a la definicién del jee éste debe ser perpendicular al alineamiento A; para ello podemos emplear el método descrito en el acépite 3.2.3. Definidos el alincamiento A y el eje 1, se procede a establecer los dems ejes y alineamientos referidos a las cotas que indiquen los planos, marcando su exacta ubicaci6n en las vallas o tarjetas. Es preciso insistir en la necesidad de que los ejes base 1 y A sean perpendiculares entre sf, porque de lo contrario el trazado de los Otros ejes resultarfa incorrecto ya que, como es facil advertir, el Procedimiento consiste en trazar paralelas a dichos ejes base. Como ha sido ya sefalado, las medidas indicadas en los planos son consideradas horizontales; por lo tanto, como tales deben ser reproducidas en el terreno. Es conveniente, asimismo, tomar las medidas por el procedimiento de acumulacién de las medidas, tal como muestra la Fig. 3.17; la equivocacién que, eventualmente, pueda cometerse al determinar una medida parcial no altera la correcta ubicacién de los demas ejes. Las marcas en los travesanos de las vallas son hechas con lapiz de carpintero. Un corte con serrucho, de poca profundi- 3.00 6.00 7.00 420 480 4+} i 8, ol 1 3 8) Se, = ! ' 1 Fig.3.17 traslado de ejes por acumulacién de medidas as dad, contribuye a la definicion de las marcas. Si fuera necesaria alguna correccién, las marcas anuladas deberan ser totalmente ehminadas para no incurrir en errores en ta progre: de los trabajos. Previendo que pueda producirse I remocién de las vallas es unl jadar los trazos o marcas a estucas de fierros ancladas lo, de preferencia con copereto (Fig. 3.18). Fig.3.18 Con el propésito de facilitar el trazado es conveniente distinguir entre ejes principales y ejes de segundo orden. No es recomendable exagerar en el niimero de ejes, mas vale referir el trazado a ejes principales, y relacionar a éstos los trazos complementanios. Cuando Ia complejidad de un proyecto lo demande, el trazado se simplifica dividiéndolo por sectores; précticamente, como si tratara de dos o mis obras relacionando, desde luego, los ejes correspondientes. 3.3.2. Replanteo de la cimentacién. El replanteo consiste en trazar en el terreno Ja ubicacién y las medidas de los cimientos, que indiquen los planos correspondientes. El procedimiento se realiza mediante cordeles fuertemente tensados entre los pares de vallas que definen cada uno de los ejes o alineamientos. El replanteo de cimientos corridos para muros portantes no encierra mayormente dificultad alguna. Trazos auxiliares en las vallas, por ejemplo los que corresponden a los anchos de los cimientos, facilitan el procedimiento. El replanteo de zapatas aisladas de concreto se ejecuta proyectando sobre el terreno los ejes que definen su ubicacién; la Fig 3.19 ilustra el método de replanteo. Mediante escuadras, reglas y Winchas se procede al trazado de las zapatas. de acuerdo a las medidas que sefiale el plano de cimentacién. Es necesario advertir que no siempre las columnas y consiguientemente las zapatas estan referidas a ejes, es decir, que pasan por su centro, sino que su ubicacién puede estar definida por alineamientos; al respecto, observar la Fig. 3.14. ” Fig.3.19 3.4. ESTABLECIMIENTO Y CONTROL DE NIVELES EN OBRA 3.4.1. El proceso de establecer y controlar niveles. Al inicio de la construccién y durante la progresién de los trabajos es necesario establecer los niveles previstos en los planos. Los niveles corresponden a cimientos, pisos, techos, colectores de desagiie y demd4s cOmponentes ‘de las edificaciones. El proceso de establecimiento de niveles se facilita descomponiéndolo en las siguientes etapas: Verificacién del relieve del terreno. a7 - Evaluacion del plan de niveles. - Control de niveles en obra. 3.4.2. Verificacién del relieve del terreno. Asi como la previa comprobacién de la forma y medida del terreno es indispensable para el trazado de las obras, la verificacién del relieve del terreno debe ser de rutina. En caso de contarse con planos topograficos, como ocurre generalmente en obras grandes, la labor se simplifica, pero aun cuando se trate de terrenos relativamente pequefios, la constatacién es ineludible. Debe tenerse en cuenta que en no pocos casos, por no disponer oportunamente de la informacién concerniente, los proyectistas desarrollan los proyectos refiriéndolos a terreno plano y horizontal. Sin embargo, cuando el constructor se apresta a dar inicio a los trabajos puede ocurrir que dicha suposicién no concuerde con la realidad, que, incluso, la configuraci6n altimétrica del terreno difiera sustancialmente de la suposici6n indicada. No queda, pues, mds remedio, si se quiere actuar responsablemente, que verificar, antes del inicio de la obra, el relieve del terreno, con el fin de adoptar las previsiones pertinentes en cada caso. Cuando se trate de terrenos de poca extensién no es indispensable contar con planos de curvas a nivel. Basta, en la mayoria de los casos, conocer los niveles correspondientes a los vértices, los de algunos puntos interiores y Jos de la vereda. -La informacién podemos obtenerla con relativa facilidad mediante un nivel de ingeniero y una mira. EI primer paso del procedimiento es estacionar el instrumento en cualquier punto dentro o fuera del terreno, pero apropiado para tomar lecturas de mira correspondientes a los puntos seleccionados. Asegurando firmemente en el suelo las patas del tripode y luego de nivelar el anteojo del instrumento, se toman y registran las vespectivas lecturas de mira de los puntos escogidos. Es conveniente humerar los puntos cuyos niveles se desea obtener. Hjemplo: Se trata de obtener informacién del relieve del terreno que muestra la Fig, 3.20. Fig.3.20 Procedimiento: En primer lugar definir cual es el nivel referencial (Bench Mark, BM). En el ejemplo, se ha escogido et punto P-1 como BM = + 0.00. Las lecturas de mira son: P-1(BM) 148 “2 0.74 P3 0.95 Pa 1.67 PS 1.26 Para referir los niveles de los puntos al nivel + 0.00, correspondiente al BM escogido, es conveniente confeccionar la siguiente tabla: SS es Punto Lectura de Diferencia Nivel Referido al mira (m) deAlturas BM = +0.00 eres a ae a a P-L 148 1.48 - 1.48 0.00 P.2 0.74 1.48 - 0.74 +0.74 P33 0.95 1.48 - 0.95 +053 PA 1.67 1.48 - 1.67 - 0.19 P-5 1.26 1.48 - 1.26 +0.22 ee 50 Los niveles del terreno propuesto son mostrados en la Fig. 3.21. P2 PG Pa Fig.3.21 Adviértase que la diferencia de lecturas correspondientes a dos puntos és la diferencia de nivel entre esos puntos (Fig. 3.22) Fig.3.22 Debe observarse, también, que las diferencias 0 restas obtenidas son algebraicas: por eso es que el punto P-4 tiene el nivel -0.19, es decir esta 0.19 m debajo del nivel + 0.00. Desde luego, podriamos haber escogido como BM cualquier otro punto, por ejemplo el que indique el plano del proyecto, o el nivel de vereda coincidente con el ingreso a la viviends. Para simplificar ef ejemplo no hemos tomado niveles correspondientes a la vereda; sin embargo, es imprescindible hacerlo para establecer la relaci6n entre los niveles del terreno y los de la vereda. Ademiis, con el fin de comprobar la factibilidad de conexion del sistema de desagtie al colector piiblico es indispensable determinar los niveles de los fondos de los buzones y/o colectores de la red ptiblica de desagiie. 3.43. Generalmente los proyectos de obras de mayor importancia y magnitud incluyen planes de curvas a nivel. 41 bien la elaboracton de este tipo de planos escapa del slcance del presente Capitulo, se estima de utilidad exponer agunas caracteristicas de ellos Las curvas que figuran en los planos de curvas 4 nivel representa intersecciones del terreno con virtuales planos horizontales: por lo tanto, todos los puntos que definen una curva estan en el mismo nivel. Las ontlas de un Lago tlustran el concepto expuesto, Los virtuales o imaginarios planos son equidistantes entre sf, ¢s decir, una misma distancia los separa, por ello, a la distancia que los separa se le denomina equidistancia. Su magnitud depende de la extensién y relieve de los terrenos, de la escala seleccionada y del grado de precisién requerido. En los planos figuran las cotas o niveles de cada curva, Cuando una zona del terreno es muy escarpada lus curvas aparecen muy préximas entre si. Por el contrario, si el terreno es. relativamente plano las curvas figurarén alejadas unas de las otras. Evaluacién del plan de niveles. Esta clapa consiste en cotejar la informnacién correspondiente al relieve real det terreno con diversas consideraciones © exigencias de cardcter técnico, arquitecténico, o de costos. De la evaluacién podria surgir la necesidad de modificar el plan de niveles propuesto en los planos. Por ejemplo, una pendiente pronunciada de la vereda en el frente de Ja fachada obligarfa a modificar los niveles de los pisos terminados, previstos en cl proyecto, si es que se desea que ningdn tramo de la fachada quede debayo del nivel de la vereda. Este caso es mostrado en la Fig. 3.23, Algunas veces la profundidad de la red publica de desagte resulta insuficiente para satisfacer las pendientes minimas de colector interior conexion ata 3 colector publica red mxibica S interiores: Cube en S instalaciones sanitari 4 modificaciGn de los mveles de Bg. 3.24) colectores de 1 esta circunstancia, proponer los pisos terminados indicados en los planos (F En los proyectos de conjuntos habitacionales debe ser prdctica el estudio de niveles en relacidn con las pendientes de us! chadas. Un escalonamiento las veredas en los frentes de ordenado arquitect6nicamente puede ser propuesto, Sere Upendiente de la vereda Fig.3.25 Asimismo, aspectos vinculados con la proteccién contra humedad merecen ser tenidos en cuenta en esta etapa de evaluacion También es posible, como resultado del estudio del plan de niveles, lograr significativa reduccién de los costos de las partdas de movimientos de tierra, encofrados, ete. No obstan 3.4.4. te. cualquier moditicacién que se proponga debera estar sujeta a previa consulta y aprobacion de los proyectistas fo, al Control de niveles en obra. Como ha sido ya indi inicio de la obra y durante la progresion de los trabajos es necesario efectuar marcas de los niveles, a los que se referirdn los diversos componentes de la obra: excavaciones, cimientos, muros, vigas y techos, etc., previstos en los obras de gran extensidn sera necesario emplear planos. meétodos y equipos topograticos, compatibles con la exacutud requerida En obras relativamente pequefias es aceptable adoptar procedimientos mas simples; por ejemplo, el empleo de mangueras de plidstico transparentes aprovechando el principio de vasos comunicantes. El método es ampliamente conocido en la practica de obra Al comenzar la obra los niveles son establecidds en poyos de concreto 0 €n otros elementos facilmente identificables, suficientemente estancos y convenientemente ubicados para evitar su remoci6n durante la progresion de los trabajos Conforme avanza la construcci6n las marcas se traslacian a columnas, muros etc. Es pradctica comtin en construcciones de albafileria, «corer» nivel en el perimetro interior de los diversos ambientes, marcando el nivel + 1.00m del piso terminado; a este nivel se referiran los diversos trabajos y componentes de las edificaciones: alturas de muros y de columnas, encofrados de vigas y techos, dinteles de puertas y ventanas, y, desde luego. los niveles de los pisos terminados (Fig. 3.26, 3.27, 3.28) nivel det tecro ae 2 ee 33 Fig aad ve segue espe. —! a ta; oe cope idem ene Fit 78 ra W ® ae oe (ab ees dex ecehgee: ree i ; taht Bt m . s rhe ple if # ei cate a ar pp. ceiaeneey Wott hey ak ee aE: eerrentes clare yim bei hillng aa 4 Jere sn 1) cata oe ria + say aidia oo 8 rae ne once me " oe seis Ren nets one ecnisthe a clan ke a ag wet teany ade erelgemteds ort omit mae abs, pertain rami aie ts senile: ny FORMACION DE LOS SUELOS Y PROPIEDADES DE LOS SUELOS. PARA CIMENTACION DE ESTRUCTURAS CAPITULO 4 4.1. FORMACION DE SUELOS Lacorteza de la tierra esti constituida por roca s6lida. Esto no se percibe facilmente, pero es explicable porque el mantillo. la vegetacion, los fragmentos de rocas, 1a arena y la grava estén esparcidos por doquier, mientras que los sedimentos cubren et fondo de los océunos. Las capas combros tienen poca profundidad en contraste con el espesor Gee kilométrico de la roca subyacente Un hecho real, aunque inadvertido, es que el relieve de la tierra es modificado constantemente. En efecto, nada de lo que vemos de la faz de Ja tierra es inmutable: todo se transforma. Lo que ocurre es que el cambio sucede a lo largo de muchfsimo tiempo: una vida entera no basta para percibirlo Los suelos, tal como los apreciamos a simple vista, proceden de ja disgregacién de las rocas y el subsiguiente transporte de los residues ntes Causantes de la alteraci6n del relieve de a otros lugares. Los a la tierra y de la formacion de los suelos son: La erosi6n El intemperismo La erosion es producida por la acciGn de diversas fuerzas de la naturaleza: uno de los agentes erosivos mas espectaculares es el agua Gran parte de la humedad absorbida por la atmdsfera cae sobre los continentes en forma de Iluvia, nieve, granizo y rocfo. mientras que un apreciable volumen de la precipitacion penetra hasta el subsuelo, pero otro mayor desemboca por gravedad al mar por los cauces de los rios o en forma de torrentes y manantiales, reponiendo de esa manera el nivel de los océanos (Fig. 4.1.) En su record, el enorme caudal de agua, desempefando el papel de sorprendente escultor. va. ao tay ao en forma incesante, ee 56 MIN Ath WIN de SFOmMME IOS Fig-4-1 Gran parte del agua, producto de le precipiiacion, desembuun en el was remodelando el reheve terrestve, arastrando. aguas abajo todo cuants encuentra en su trayecto, Los fragmentos de las rocas, por efecto de Hit sobre el fondo de los lechas de los thos, angulosa, wansformaéndose en eantos rodados. Al reducirse la pendiente por la cual transeurre el agua, disminuyen la velocidad y la fu 1 de! caudal, depositéndose sobre e} suelo, pimero las piedras grandes, lucgo las pequefias y, finalmente, el lode Jgualmente, cuando el cono de deyecci6n se ensancha, la corente de agua pierde velocidad y los fragmentos pesados van quedando que los menudos son arrastrados aguas abajo su arrastre por el pierden su forma cn el trayecto, mie (Fig. 4.2.) PLANTA ENSANCHE 4 DEL CAUCE GRAN YE OCYIAD 4 “FUERZA OL AGUA SECCION a a ¢ ine Fig 4.2 Tipico ejemplo de depdsuo de materiales en un econo de deyeceiou 87 Tambien ef hiels de lig cordillerie es otro Imponane agente erosive. Came se suhe, ef glaeiar es uni wcumulacion de nieve gradualmente conpetmida y crinsforniadi en tele, Con el hempo su pese aumenma y por efects de la pravedad enpiesa a deoplazarce Cordillera shajo, remodelande ef su lela munch al relieve terrestre Asunuisme, los aludes, 68 deci lis descomuniles musas de hielo que desde ta cordittera se precipitan viclentanente, son Cuusmites de lerribles desasues, ademas de efectivos agentes de reniodelicion del puisaje terreste. Para tener und idea dé su intense poder destructive reeordemus los aludes oeurridos en 1,962 y 1,090, vaidos desde of Muaseuran. Eh primero de ellos arrisd practicamente Ia loculidad de Ranrabirea: ¥ eb de 1,970 (lerremoate de Ancash), producto de la desintegracion del vemtisquero de S millones de metros cibicos, 6e abaliéd con velocidad de desplazamiento de la masa aluvional de 100 km. por hors sobre la ciudad de Yungay, causando una de las mayoures cathstrofes que registra Huestra historia Taibide los huayeos, frecuentes en nuestro pals, estan asociados con la accion de tas Huvias y Is falta de proteccion vegetal en las vertientes Originados por fuertes precipituciones estacionales, aleanzan inpresionantes Velocidudes y su potencia es tan grande que transportan lodo y piedeas de diversos (amanon, algunas de las cusses pueden tegar # toneladas de peso. En ef fondo de los valles frenan su velox dad expandiéndose luteralmente, pero aun son cupaces de destrusr las obras construidas por el hombre! viviendas, puentes, caninus, exe Ocurren generalmenle en zopas bajas y medias del relieve andino que caracteriza la topagratta del pais El mur, igualmente, és olr6 efectivo agente erosive Permanentemente su uceidn se manifiesta en las Costas de lov continentes. asi como destruye, tambien constraye grandes bancos de arena. Aunque nO (ih Contundente como et agua y el hielo. el viento es asimismo uN importante agente trunsformador de la lopogrufia y causunte de la formacidn de [os suglos. Erusionando las rocas y transportande materiales de ut lugar a otro da ongen a depasites eGlicos de arena, generalmente de grano tine y @ intemperismo, 11 intemperiemea #6 la otia poderose fuerte escuitora det paisaje Consions ba desintagiacion iticial dé las focas, convirtiéndelas ef Kragmantos que son acarendos posariormienle por sceion del agua y 61 viento, También los cambios de temperature originan en las rocas tensiones diferencialas en su mass. Negando # fractuarlas y desintegrarlas, Por su parte, el agua concentrada en la gtietas ¥ hendiduras de las foeas, actuando con elects de cufa al aumentar su volumen pot Congelamieno, causa el agrietamiento de ellas. Sis interesante anotar que, probablemene, hay mas agua bajo tierra que en todos los lagos y tlos, E) agua subterranea es agente de procesos quimicos y origen de diversas conformaciones geolégicas. Desgasta las roeas formanda cavernas ¥ caprichosas estalactitas y estalagmitas, consutuidas por carbonate de calcio precipitado gata a gota. Asimnisma, a simple vista podemos observar el efecto del internperismo on las particulates coloraciones que adquicren las rocas « cbido a la descomposicion quimica de los materiales, producida pur el acide carbonico y el oxigeno atmosférico que transforman los elementos methlicos en sus respectivos carbonates y Gxidos, Ahora bien, ya informades, aunque a grarides rasgos, de come actéan la erosion y el intemperisme remodelando el relieve terrestre podriamos plantearnos la siguiente pregunta: isi incesantemente aquellos poderosos agentes estan desintegrando ja superficie terrestre trasladando hacia el mar gran parte de elia. no seria razonable peysar que, finalmente, los continentes habrian de convertirse en superficies planas, de altura reducida y cubiertas por jas aguas? Ciertamente, ello podria ocusrir, aunque en millones de atios, Lo que sucede es que. felizmnente, existe oa fuerza en pugna con aquello. Esa fuerza, que confiete equilibria, es €) diastrofismo, denominacion que se refiere al proceso por e) cual la capa exterior de la corteza tertestre, por efecto de la gradual contracci6n que sufte producida por cambios de temperatura, constantemente es levantada, inclinada; compensando asi Ia desintegraci6n, producto de la erosion De manera sucinta se ha deserity Loy mecamaaion por los cuales et relieve de la tierra es modificado, Camo ya ba side sefalado, los cambios son imperceptibles y se manifiestan a través de lapsos muy grandes, pero el hecho real es que penmanentemente estan ocurniendo, dando como resultado las diversas conformaciones geoldgicas y lox multiples tipos de suclos que superpuestos en capas constituyen la superficie terrestre 4.2. ESTUDIOS DE LOS SUELOS El cérmino suelo abarea genéricamente los diversos tipos de materiales, tales como la grava, la arena, los limos, las arcillas, y las innumerables mezclas de ellos: arcilla limosa, arena limosa, grava areno: limo arenoso, ete, Roca es la parte sélida de la corteza terrestre Generalmente los suelos se presentan en capas superpuestas (Pig 43.) constituyendo el subsuelo, y son producto, de acuerdo a lo ya expuesto, de la erosion y el intemperismo, Cada capa de suelo posee ciertas propiedades espeesficas que la earacterizan para cimentaciones de estructuras. vet naan ome Sab. + Tks ~— BASS Fig 43 Perfil constituido por diversos tipes de sielos superpuestos en A través de los cimientos son transferidos al suelo el peso de las estructuras, las fuerzas que actian sobre ellas y las sobrecargas correspondientes. Las estructuras seran estables si las capas de suelo que las sustentan son suficientemente resistentes, De lo expuesto fluye la necesidad, especialmente en obras de importancia, de explorar ¢] subsuelo para saber como esta constituido y conocer, mediante anilisis y ensayos especializadas, las caracteristicas y resistencia de las diversas capas de suelo. La exploracién se leva a eo cabo excavanda pagus (¢ Alleaiia), CONVENIENIeMenIe Ubleadas én lia ‘reas destinadas a las edificacianes Durante la exeavacian de las pasas SxplariAriog SAN BApeatae, ef Sspesores variables, lay diversas eupaa de suelas, de las ue be tone muestras fepresentalivas para someterlaa, poateriormente, & AnAllals ¥ ensayos en laboratorias de mendnied de suelog. Con los fegiatres famados en el eampo, pruebas «iN stim y enaAyAS en labOrALArOS se procede a elaborar perfiles esiatignifiens, en laa ue ae puede apreuiar la naturaleza, la proftundidad y el eapeacr de tan diversas eapas descubiertas en la exeavacidn de las ealioatas CT Lay {pees we [ihe tikes * wake i ( «| Bites ff tsa Fig.4.4 Ejemptos de perfites estatigedfleas det suet Naturalmente, de detectarse » durante lax exeavaeiones gua subterdned debera determinarse el nivel que aleanga Los estudios de los suelox son vertidos en informe: que, ademas de los perfiles estatigralions correspondiente, ineluyen feaultados de los andlisis y ensayos y conelusiones conserentes a la prafindidad minima de la cimentacion, presiones admiaibles y otras reoarendaciones que se juzgue neeesarias: por ejemplo, sobre eventuales perturbaciones que pudieran originarse por alteracion del grado de humedectmiente del sueto. Estos informes son utilizadog por los ingenieros estructurales para disedar loa cimientos y las eatructuras, 4,3. CLASIFICACION DE LOS SUELOS Los diversos tipos de suelos son identiticados segiin et Sistema Uni OL fieado de Clasificacion (SUCS), Bste sistema agrupa los suclos en dos clises: suelos de particulas gruesas y suelos de partieulas finas Se considera suclo de particulas gruesas cuando mas de la mitad de la tase del suelo, al ser sometida a tamizado, es retenida en la malta N* 200. A este tipo de suelo pertenecen la yrava y la arena, Cuatide mas de la mitad de la masa del suclo pasa la malla N® 200 se le finas: limos y areillas, La abertura del proximadamente al tamaiio de la meno ay equivale a 0.074mm (74 micras) considera suelo de particul lamiz N° 200 corresponde particula apreciable a simple A su vez, a los suelos de particulas gruesas se les subclasifiea en: Gravas: Mas de la mitad de la fraccién gruesa es retenida en la malla N°’ 4 Arenas: Mas de la mitad de la fraccién geuesa pasa la malla N° 4. Aproximadamente puede considerarse que la abertura del tamiz N° 4 equivale a medio centimetro. fn los estudios de suclos, cada tipo de suelo es identificado mediante si, por ejemplo, la grava es identificads con la letra G (proveniente del idioma inglés, gravel); la arena eon ta tetra S (sand); la arcilla, C (clay); el limo, M; Pt identifica la turba y otros suelos con alto contenido de materia orgénica. Simbologti Generalmente « segdun hemos visto - las capas del subsuelo estan constituidas por diversos tipos de materiales. En estos casos, se les designa de manera compuesta, por ejemplo, GM significa grava limosa Ovros simbolos también son empleados para precisar importantes propiedades de los suclos, que trascienden en su capacidad portante y comportamiento en cimentaciones. La Norma de Edificaciones F.050 «Suelos y Cimentaciones» incluye la Simbologia de los suclos. 44. LOS SUELOS Y LAS CIMENTACIONES 4.4.1. Generalidades. En obras de importancia y caracteristicas es— 62 Ppeciales, y sobre tado, cuando es proyectada su Consiruccion ef ferrenos Cuyo siubsuelo no e% conocido, es obligatorio el estudio del suelo para cada caso en particular, No es aceptable deducir Ja resistencia y comportamiento de un suelo a partir de lap caracterioticas de otro, aun cuando estén proximos entre — si Asimismo, la informacion de Jos estudios de mechnica de suclos es valida s6lo para el area y tipo de obra que corresponden al informe # continuacién s¢ olrece can propésito iustrats vo ciertas pautay indicati vay del probable comportamiento de algunos tipos de suclos. Desde luego, no eximen de la obligatoriedad de contar, especialmente en los casos precedentemente indicados, con los correspondientes estudios de suclos la geava en 4.4.2. Grava. Con excepcién de las gravas pizarros material apropiado para cimentaciones, siempre y cuundo subyaventes no existan estratos frégiles o blandos, ni esté expuesta a socavaciGn ba eimentacion, La grava tiene reducida o casi nula capilaridad; por tanto. no © probable que Ja presencia de agua sublerrinea, o su humedceimicnto, sean causas de disminuci6én de su resistencia ni origen de asentamientos. 4.4.3. Arena. No es prudente generalizar respecto al probable comm de las capas de arena, pues debide a portamiento y resisten causas ya expuestas, relacionadas con su formacién, loa suelos de esta naturaleza se encuentran en diverso estado de compaci~ dad, ademas de tener variada granulometria. Si las arenas, me- dias y gruesas, son compactas y su granulometria es favorable ienen apropiada resistencia para sustentar estructuras. No ocu= tre lo mismo con las arenas muy finas, sobre todo si son sueltas, como es el caso de arenas cuyo origen es producto de} transporte del viento (arenas edlicas). Las capas de arena suelta son muy susceptibles a densi arse por efecto de la vibraci6n causada por movimientos sismicos, pudiendo esperarse, eventualmente, Alamiento de la cimentaciGn e indeseables efectos de cardcter uctural Cuando 5¢ trate de este tipo de suelo, cs precisdé profundizar las 5 para cimentes y definitivamente limitar las presiones de contacto cimento suclo. La raz6n de esta exigencia podemos percibirla cuando caminamos por la playa, la arena fluye a cada lado hundiéndose los pies; sin embargo, a cierta profundidad !os pies no bajan ya mas: la capacidad de carga ha aumentado. Lo mismo pasa con cimentaciones construidas a mayor profundidad. excavacic La presencia de agua en suelos arenosos, especialmente cuando se trate de arenas finas sueltas, puede ser causa de marcada disminucién de su tesistencia en caso de ocurrencia de sismos y, eventualimente, origen del fenémeno de licuefaccién. tal como ocurriera en algunas zonas de la ciudad de Chimbote en el tecremoto de 1 970. 4.44. Limo. Es un suelo de partfculas muy pequefias, relativamente no es plasuco y Uene capilaridad elevada. Cuando se encuentra en estado suelto su resistencia es pequefia; su presencia debe ser motivo de reserva por parte del disefiador y del constructor, 4.4.5. Arcilla. Es dura cuando esté seca, pero su consolidacion se produce lentamente. Cuando cs humedecida se torna plastica y deformable, modificando*su consistencia segin el grado de humedecimiento que alcance, por lo tanto, en suelos arcillosos Ja alteracion del contenido de agua en su masa juega importante rol en su comportamiento y resistencia. E] humedecimiento, que en algunos casos llega hasta la saturacion, se produce de diversas maneras. Causas potenciales de humedecimiento son Jas \luvias y el aumento del caudal de los rios y arroyos. e4 También los suelos pueden humedecerse por efecto de la capilaridad, ¢s decir, por succi6n del agua que pudiera encontrarse en capas inferiores. La succi6n es pequefa ocasi nula en suclos granulares (arenas Ye@tavas), pero sucle ser grande en suelos arcillosos, ascendiendo el agua hasta alcanzar los cimientos de los edificios. 4.4.6. Suelos que contienen materia org4nica. Los suelos que contienen materia orgdnica, la turba y el fango, definitivamente no son apropiados para cimentaciones. Estas capas deben ser eliminadas durante la excavacién, la que debe profundizarse hasta encontrar capas suficientemente resistentes. Los suelos de color marrén oscuro, gris oscuro © negro, o tengan olor caracteristico, estructura esponjosa o fibrosa, corresponden a este inconveniente tipo de suelo. Desde luego, un suelo producto de rellenos tampoco es apropiado para cimentaciones. 4.4.7. Homogeneidad del subsuelo. Owa caracteristica que también debe tenerse en cuenta en cimentaciones es la uniformidad del subsuelo. Cuando las capas subyacentes a la cimentacién son suficientemente resistentes la condicién es favorable: sin embargo, cuando una capa de comprobada resistencia para la cimentaci6n prevista reposa sobre otra de menor resistencia la situacién cambia sustancialmente. A modo ilustrativo, veamos el caso de una zapata construida sobre una capa de arena y que debaio de esta capa se encuentre una de arcilla blanda (Fig. 4.5.); la presién supuesta como admisible para la arena es transferida a la capa de arcilla blanda, la que fluye hacia los Jados, lo probable es que se produzca el asentamiento de la zapata. En suma, se insiste en que el aspecto de las capus superficiales no es suficiente para deducir con certeza el comportamiento de un determinado suelo: es indispensable la exploracién de las capas inferiores hasta la profundidad procedente en cada caso. 4.4.8. Capacidad portante de los suelos. Presién o intensidad de carga cs la fuerza ejercida sobre la unidad de superficie de con- Fig. 4.5 A través de la masa de arena la presién ejercida por la zapata ¢s transferide @ la capa de arcille. empujdesdole a los lados produciendo eventuaimente, 2 hundimiento de la tapana tacto entre cimiento y suelo. La unidad que expresa la presién es el kg/cm (kilogramo por centimetro cuadrado). Por ejemplo, si la carga que transmite al suelo una zapata es 60 toneladas y el area de la zapata es de 3 m, entonces la presi6n transmitida a la superficie de contacto entre zapata y suelo es: 60,000 kg = 2kg/om: 30,000 cm: Como se puede observar, la accién sobre el terreno no depende exclusivamente de la carga absoluta aplicada, sino también dei drea de contacto entre el cimiento y el suelo. Presi6n admisible es la maxima presién que una cimentacién puede transmitir al suelo sin que se reduzca el factor de seguridad previsto, mi ocasione asentamientos que afecten las estructuras. Las presiones admisibles varian sustancialmente segin el suelo de que se trate. Es frecuente considerar 4 kg/cm: para conglomerados compactos y bien graduados. A las mezclas de canto rodado y arena («hormigén») suele asignarseles valores de 3 a 4 kg/cm2. La capacidad portante de las arenas gruesas y mezclas de arena y grava compactas es aproximadamente 2 ke/em2, mientras que para arenas finas la presién admisible es limitada a | kg/cm2. es 66 Las presiones admisibles de los suelos predominantemente arcillosos dependen de su grado de dureza. Sus valores fluctéan entre 1.5 kg/cm2en caso de arcillas inorg4nicas duras y sin riesgo de humedecimiento, hasta valores muy bajos, 0.5 kg/cm2, si se trata de arcillas inorgdnicas blandas. Una arcilla es dura cuando se parte con dificultad en terrones que no se pueden pulverizar o amasar facilmente con los dedos- Una arcilla es firme o de consistencia media cuando se puede amasar, aunque con bastante esfuerzo. Las arcillas blandas se pueden amasar con relativa facilidad, pero no tienen consistencia pastosa. Las arcillas de consistencia pastosa deben desecharse para cimentaciones. " Otra manera practica e indicativa de la consistencia o dureza de los suelos es el grado de dificultad que presentan al serexcavados. La lampa penetra con facilidad en suelos blandos, mientras que la excavacién de suclos de dureza media requiere de pico. En suelos duros el pico rebota; puede penetwar, pero con esfuerzo. Los valores de las presiones admisibles aqui expuestos son simplemente referenciales e ilustratives. Pueden variar sustancialmente en cada caso en particular; desde luego, no se ofrecen para fines de diseno. CAPITULO 5 CIMENTACIONES $.1. FUNCION DE LOS CIMIENTOS Y TIPOS DE CIMENTACIONES 5... Funcién de los cimientas. Los cimientos son partes de las estructuras, que actian como transicin entre las mismas estructuras y el suelo portante. Condicién esencial de una apropiada cimentacién es que las Presiones transferidas al suelo portante no excedan las Ppresiones admisibles, correspondientes al suelo de que se trate, También es extgible que no se produzcan asentamientos diferenciales excesivos entre secciones de una estructura; esta indeseable eventualidad podria originar daitos en las edificaciones. 5.1.2. Tipos de cimentaciones. Si cereanas a la superficie de los terrenos existen capas de suelo con apropiada capacidad portante, las eimentaciones son disenadas como cimentaciones superficiales. Pero si los estratos Cercanos a Ja superficie no son adecuados para soportar las cargas previstas en cada caso en particular, la cimentacién es proyectada mediante pilotes, llegando estos hasta capas de suelo que se encuentran generalmente a considerable profundidad. Enwe las cimentaciones superficiales distinguimos los siguientes tipos: - Cimentaciones para muro portantes - Zapatas de concreto armado: aisladas, combinadas y conectadas. - Plateas o placas de cimentacién Una zapata combinada es la cimentacién de dos columnas. Este tipo de cimentaci6n es propuesto cuando dos columnas estén muy cercanas entre si, tanto que sus respectivas zapatas se superpondrian (Fig. 5. ELEVACION PLANTA Fig.5.1. Zapata combinada La zapata conectada es alternativa de solucién cuando se trate de columna ubicada en los linderos de los terrenos: una viga conecta la zapata de Ia columna exterior con otra cercana ubicada en el interior del edificio (Fig. 5.2.). ERERIOA freon 7 ELEVACIGN Fig. 5.2 Zapata conectada 5.2. CIMIENTOS PARA MUROS PORTANTES Este tipo de cimentacién es empleado en viviendas y edificios hasta de 5 pisos, estructurados con muros portantes. La cimentaci6n est4 constituida por el cimiento y el sobrecimiento; conformando, como se pue- de apreviar, una Cunentieiin escalonada, construida por ragones practicus en dos etapas (Pig. $9) snngcmuenro VARIAAL E rmsrarg O10 ‘canto fee Fig, 5.3 Cimiento para muro portante La profundidad de las excavaciones de las zanjas debe ser la indicada en los respectivos planas de cimentacion y Negar hasta la capa sustentante prevista en cada proyecto en particular En suelos del tipo conglomerado oen mezclas de grava y ena la profundidad mf{nima sera 0.60 m suelos blandos - tales camo la arena fina o suelta, y las arcillas - es recomendable profundizar las excavaciones, minimo 0,80 m, a esta profundidad, la probabilidad de capas mas consolidadas o compactas y, por lo tanto, mas encontr El ancho de los cimientos debe ser tal que la presién ejercida sobre el suelo no exceda la presién admisible especificada En suelos conglomerados 0 en mezclas de grava y arena el ancho minimo recomendable es 0.40 m, en suelos blandos, 0.50 m y mayores aun. segun sea el caso Las sugerencias aqui expuestas tienen cardcter informative y orientador Cada proyecto en particular incluye planos de cimentacién que indican la profundidad de las excavaciones y las medidas de los cimientos 70 El alto del cimiento no seré menor que 0.50 m y no debe confundirse con la profundidad de la excavaci6n, a la que ya nos hemos referido. El espesor de los sobrecimientos es el mismo que el de los muros que en ellos se apoyan. El alto es variable segdn el relieve del terreno en estado natural y los niveles de los pisos terminados previstos en los planos. Por razones de cardcter Practico es recommendable adoptar un alto minimo de 0,30 m. Frecuentemente la coronaci6n de los sobrecimientos es Nevada hasta el nivel de los falsos pisos; sin embargo, para proteger los muros contra el humedecimienta, los sobrecimientos de muros exteriores o de borde, especialmente cuando colindan con jardines, deben sobrepasar 0.20 m, al menos, el nivel de los Pisos terminados (Fig. 5.4). Fig. 5.4 Cimiento para un muro perimetrai En terrenos firmes sucle especificarse concreto simple para los cimietitos corridos. En cimentaciones sobre suelos blandos podrian ser necesarios cimientos de concreto armado (con refuerzo de acero) con la finalidad de conferirles ductilidad (Fig. 5.5 - a y b). Ductilidad es la propiedad que poscen ciertos materiales de deformarse dentro de ciertos limites, sin agrietarse: el caucho es diictil; el vidrio, fragil. Las dosificaciones usuales del concreto simple (sin refuerzo de acero) para cimientos y sobrecimientos son las siguientes: Fig. $.5b Cimienw de concreto armada CIMIENTOS: Cemento - hormig6n, propercién 1:10 en voilumen, més piedsa grande de didmeto nominal no mayor que 25 cm. en proporcién. que no excedaclh W% del volumer total. La resistencia que cabe csperarse en este tipo Wa de concreto €s de 50 a 100 k gicm2, segan la _ cantidad de agua aporiada pare ¢] amasado. SOBRECIMIENTO: Cemenio - hormigon, 1% en volumen, mis piedra. mediana de 10 cm maximo didmetro nominal y en cantidad que no tonal. sobrepase el 25% del volumen 72 La resistencia minima del concreto sera no menor que 100 kg/cm. Desde luego. en cimientos 0 sobrecimientos de concreto armado no se permite la adicién de piedra grande desplazadora Trazada la cimentacién, se procede a Is excavacién de las zanjas hasta la profundidad que corresponda en cada caso. Es recomendable que el fondo de la excavacién esté nivelado: sin embargo, ‘una moderada pendiente no afecta mayormente la cimentacién. Si la pendiente del terreno ¢3 pronunciada una solucién apropiada es el escalonamiento, debiendo solaparse los tramos de los cimientos escalonados, tal como indica la Fig. 5.6. Los escalones no deben tener una altura mayor que ei alto del cimiento y el traslape serd no menor que el alto del cimiento (Fig. 5.7). Fig. 5.7 Detalle de escalonamiento de cimientos corridos — Cuando se trate de cimientos contiguos a muros de sé6tanos y cisternas €s necesario proveer a fa cimentacién de una transicién escalonada (Fig. 5.8). Le construcci6n de cimientos no requiere de encofrado, pero Si se trata de suelos que no conservan durante la excavacién sus taludes verticales, ser necesario el encofrado u otro procedimiento apropiado. La profundidad de las zanjas es controlada mediante nivel de ingenicro © con cordeles tensados entre niveles referenciales convenientemente establecidos en la zona de trabajo. Fig. 5.8 Transicién escalonada de cimientos contiguos a cisternas Para que las columnas de amarre cumplan apropiadamente la funci6n estructural que se les asigna, los fierros de refuerzo deben quedar anclados en el cimiento. Dicho requisito obliga a instalar Jas armaduras en las zanjas antes del vaciado del cimiento. De ninguna manera debe aceptarse el anclaje sdélo en los sobrecimientos.-Si Ia colocacién de los fierros acarreara entorpecimiento de los trabajos es admisible dejar, durante el vaciado del concreto de fos cimientos, espacios para instalar en ellos los fierros. Posteriormente, al momento de vaciar el soncreto de sobrecimientos, se procede a completar la cimentacién. Para facilitar la instalacién de las tuberias de desagtie y evitar el laborioso trabajo de picar el concreto del cimiento, es necesario dejar, antes del vaciado, espacios para los Pases de las tuberias de las instalaciones sanitarias. También, previamente al vaciado del concreto, es Preciso habilitar adecuadamente la zona de los trabajos, disponiendo tablones que permitan ¢l desplazamicnto del personal, sin derrumbe de los taludes de las zanjas. Asimismo y-epertunamente deve preverse el acopio de piedras grandes para el vaciedo dal, concreto> Para que las medidas del cimicato correspondan con las indicadas en los planos es forzoso verificar el ancho de las zanjas y la verticalidad de sus paredes. El alto de los cimientos y su nivelaci se controlarén mediante sefiales que permitan referir correspondientes niveles. , va La dosificacién del conereto suele hacerse utilizando carretillas, teniendo en cuenta que el volumen de una bolsa de cemento es un pie cibico, La medicién del hormig6n, de acuerdo al Proporcionamiento ya sefialado 0 al que indique los planos, se refiere al volumen de las carretillas. Las carretillas empleadas en construccién tienen diversas capacidades: desde 2 pies ctibicos - volumen que corresponde a la carretilla plana - hasta mayores tamafios, 3 y 4 pies ctibicos. En jess. ASQ, ¢5 conycniente verificar ¢l yolumen de las carretillas disponibles para A construcci6n. Si se desea, por ejemplo, conseguir una dosificacién 1:10 ¢mpleando carretillas de 2 pies ctibicos; el proporcionamiento debe ser: una bolsa de cemento por 5 carretillas enrasadas., A tm RS Para el batido o amasado del concreto se dispone de mezcladoras que tienen diversas capacidades: desde trompitos de. 3.5 pies ctibicos, hasta mezcladoras de mayor capacidad. Sin duda, las mezcladoras con tolva de carga ofrecen mayor grado de afinamiento de la dosificacion. ' Con las debidas precauciones, el batido puede hacerse en forma manual, habilitando, para tal efecto, un lugar plano, limpio y seco, formando en el sitio seleccionado una «cama» de hormi ig6n hendida en el centro, agregando a continuacién las bolsas de cemento requeridas seguu la dosificacién prevista. Luego de agregar el cemento se procede a voltear con Jampa la mezcla, hasta conseguir una masa homogénea. Después se adiciona el agua de amasado, sin exceder la cantidad requerida pues el exceso de agua disminuir4 sensiblemente la resistencia. Batido el concreto, y transportado mediante carretillas hasta las Zanjas, es vertido dentro de ellas.Es preciso iniciar el trabajo formando una capade concreto antes de colocar las piedras grandes, Prosiguiéndose con el vaciado en forma alternada, cuidando que cada una de las piedras quede completamente rodeada de concreto sin ningtin punto de contacto entre ellas. Antes del vaciado del concreto es necesario humedecer moderadamente las zanjas. La altura dentro de las zanjas del concreto vertido, es controlada, tal como ha sido sefialado, mediante sefiales de referencia, que 7s bien pueden ser fijadas en las paredes de las zanjas, o empleando algin otro sistema que se considere conveniente. Alcanzada la aliura prefijada del cimiento y antes del endurecimiento del concreto, debe rayarse la parte superior para asegurar una efectiva adherencia entre el cimiento y imicnto. El encofrado de sobrecimientos consta de tableros, «muertos» 0 durmientes, barrotes, tornapuntas y escantillones (Fig. 5.9.}. Fig. 5.9 Encofrado de sobrecimiento Para la construcci6n de los tableros son empleados tablones d= 1 1/2" de espesor de anchos variables, 6", 8" y 10", de acuerdo a la altura requerida de sobrecimientos. Cuartones de 3" x 4", 0 de 4" x 45 son seleccionados para los «muertos» o durmientes. Para barrotes y tormmapuntas se utilizan piezas de 2" x3", 2" x 4" ode 3"x3",en largos apropiados. Los tableros del encofrado son farmados montando las tablas sobre les barrotes, debiendo éstos estar distanciados 0.50 a 0.60 m entre si. Los barrotes deben sobrepasar la altura de los tableros. Formular Ja relacién de madera requerida para el encofrado, constituye obligacién del maestro de obra o del encofrador. Se propone como «jercicio determinar las necesidades-de madera para el prototipo que muestra Ia Fig. 5.9. Considere que la longitud del sobrecimiento es 3.60 m y su alto 0.40 m. Escoja entre las escuadrias usuales sefialadas. A 6 FI trazado de sobrecimientos se realiza proyectando y trazando en la Superticie de! cimiento los ejes de los muros, procedimiento que se ejects atando y tensando fuertemente un cordel entre los clavos de lay vallas correspondientes que definen los ejes (Fig. 5.10). En un extremo del cordet colgamos fa plomada dejindola caer hasta que la punta de la plomada roce la superficie del cimiento. Trazamos sobre dicha superficie un punto coincidente con Ia punta de la plomada (Fig, 5.11-a). Repetimos la operacién descrita, en el otro extremo del tramo del cimiento. A continuacién marcamos el ancho del sobrecimiento (Fig. 5.11-b). Fig. 5.10 Trazado de sobrecimientos Tomando como referencia los trazos que definen las caras del sobrecimiento, trazamos, mediante cordel con ocre (tiralinea), el sobrecimiento, Estamos ya en condicién de Proceder al encofrado del mismo, Previamente habrén sido habilitados los tableros del encofrado y fijados sobre el terreno los durmientes, los cuales deben estar distanciados 0.40 a 0.60 m de las caras del sobrecimiento. Diversos son los procedimientos de encofrado. Algunos Operarios construyen los encofrados sélo con un durmiente, correspondiente a una de las caras del encofrado; la otra cara es fijada con escantillones y alambre negro N° 8. Fig, 3 Trainde de sobrectmbenios Ateniéndonos a los tyaz06 realizadog ep el Siensy, oh pases _ € fijar uno de los tableros del encofrada, BU rit bse, oe de puntiles clavados en el dusmiente GAD, Fig, 511 Pijaciin de tablere de emcofradea de soborecioneniy La verticalidad del tablero es Verificade on A wuxitio de be yonuade Esta Peracion debe hacerse com te mayor protijidad. Pare selucer te ot cam el enofrado o 60 suntan ase erases Saas gitud corresponda al ancho del sobrecimiento, Los excantillones son fijados, mediante elavos, en la superficie del cimiento, Para mantener, durante el vaciado de conereto, el expesor del sobrecimiento s¢ clava escantillones on lox bordes superiores de caras del encofrado. Cuando la altura del sobrecimiento sobrepase cierto valor, digamos, 6.50 m, el concreto, al momento del vaciado, desarrolla presién lateral, la que, eventualmente, puede causar la deformacién del encofrado. Para obtener la firmeza del encofrado es necesario proveerlo de alambre negro N° 8, tensado entre barrotes, Antes del vaciado de concrete es preciso marear, en las paredes interiores del encofrado, la altura del vaciado, de acuerdo a los niveles previstos para los sobrecimientos, También es necesario habilitar los pases y canales para la instalacién de tuberfas de desagile y ventilacién, Como en el caso de cimientos, el concreto, dosificado de acuerdo a lo exigido en las especificaciones, es batido en mezcladora,’Transportado en latas, es vertido en los encofrados, Previamente deben limpiarse y humedecerse moderadamente los recintos formados por el fondo del cimiento y los tableros del encofrado, Para lograr apropiada adherencia con el mortero de la primera hilada de los muros, antes de que endurezca el concreto debe procederse, por medio de la plancha o clayos, al rayado de la superficie superior del sobrecimiento y con In finalidad de asegurar el desarrollo de la resistencia del concreto es preciso mantener, mediante riego continuo, humedecido el sobrecimiento. Desencofrado el sobrecimiento - operacién que puede hacerse al dfa siguiente del vaciado - se prosigue con la secuencia del proceso constructivo: instalacién de tuberfas de desagile, relleno y compactacién, construccién de falsos pisos y emplantillado, 5.3. ZAPATAS DE CONCRETO ARMADO. La estructuracién de las edificaciones corresponde a uno de los siguientes sistemas > Ratrictirseiin con murns portantes » Estructurseién aporticada En el primer caso los techos a¢ apayan en los murat, datos, a au ver, transfieren al suelo portante, mediante cimentaeidn eorida par debajo de toda la longinid de los muros, eb peao de teehos, plies, tabiques y cargas de servicio, Bl procedimiento de construceida de cimientos corridos ha sido ya expuesto. Fate aedpite etd referidd ata eonatuiveidn de zapatas de concreto armado, elementos estrneturales que corremponden al tipo de estrocturaeién aporticads, Bate modelo de estructuracién exté eonstituide por un eonjunte de péetioos, distribuidos espacialmente de acuerdo al planteamiento arquiteetinivo que corresponda a cada proyecto en partieular. Un pértico esté formade por columnas y vigas. Las vigas reeiben el peso de los techos y sobrecargas correspondientes, transfiridndolos a las columnas. Bo este caso lox tabiques son erigidos posteriormente a la construccion de los pdrticos, y no desempetian la lineidn estructural asignada a los muros portantes, Las cargas sobre las columnas son cargas eoneentvadas, aleangan considerables magnitudes y son trasmitidas al suelo a través de las eapatas, En consecuencia, las zapatas vienen a constituir los elementos estructurales que cumplen fa funeidn de transicidn entre las columnas y el suelo portante, Bs importante que se advierta edino ke produce la interaccidn de presiones en las superfivies de contacto entte las eapatas y el suelo portante, Las presiones que las zapatas transmiten al suelo originan presiones, de igual magnitud pero en sentido contrario, del suelo en las Superficies inferiores de las zapatas. Ante tal accidn, las aapatas se deforman de modo similar al mostrado en ta Pig. 8.13, Obsérvese que las Zapalas se comportan como si fueran vigas o losas eh Voladizo, pero en forma inversa, Este modelo de comportamiento estructural por qué la armadura de las zapatas esté ubicada en la parte inferior, Fig S13 Las excavaciones para la construceién de zapata deberdn aleanzar la Profundidad exigida en los planos de cimentacién correspondientes. El constructor debe ser receloso si, durante la excavacidn, el suelo se encuentra en estado muy suelto o no corresponda a las caracteristicas previstas en el proyecto. Una consulta oportuna permitird tomar las medidas pertinentes en cada caso singular. Independientemente de la exigencia sefalada y relacionada con la capacidad portante del suelo, la decisién por adoptarse respecto a la profundidad de las excavaciones debe referirse a otras eonsideraciones de fndole constructiva. Por ejemplo, para racionalizar la habilitacion de los fierros de las columnas es recomendable que los fondos de la: tengan el mismo nivel; de esta manera, la longitud de los fierros sera uniforme, en concordancia con las soluciones de empalmes previstos, También cabe sefialar la conveniencia que la parte superior de las zapatas quede al menos 0.30 m debajo de los niveles de los pisos terminados; asi se facilita la instalacidn de las tuberias de las instalaciones sanitarias (Fig. 5.14). Fig.5.14 Es conveniente que la parte superior de las zapatas quede al menos 0.30 m debajo del nivel del piso terminado Si durante la excavacion, el suclo mantiene sus taludes verticales, la coastruceién de zapatas no requiere de encofrado; sin embargo, si se trata de suelos no cohesivos como la grava, la arena suelta o la mezcla de ellos, lo probable es que los taludes se desmoronen tomando el Angulo de reposo del material, obligando, por lo tanto, al eacofrado de las zapatas (Fig. 5.15). SOLADO DE CONGRETO Fig.5.15 Encofrado de zapata Algunos métodos alternativos suelen ser adoptados en sustitucién del encofrado convencional: uno de estos procedintientos es construir, luego de la excavacidn y del vaciado del solado, recintos ejecutados con ladrillos asentados de canto o de soga (Fig. 5.16). Las medidas interiores de los recintos corresponderin a las de las zapatas. Construido el recinto se procede al relleno de su parte exterior quedando asf preparado para proseguir con la construccién de la zapata. ANCHO DE ZAPATA, Muao oe LADRILOS Soy Fig.5.16 Método alternative de construccién de zapatas Ou sistema es el denominado contramuro (Fig. 5.17), el cual también puede emplearse en la construccién de cisternas. El procedimiento consiste en excavar, adicionalmente a las medidas de las zapatas, un ancho tal que permita la construccién de muros de concreto pobre. Por ejemplo, si las medidas de una zapata son 1.80 x 2.20 m y el espesor Previsto para el contramuro es 0.20 m, las medidas de Ia excavacién seran 2.20 X 2.60 m. Naturalmente, este procedimiento es aplicable sdlo si los taludes de la excavacién se mantienen verticales. 81 f oa Después de la excavacién Y ejecucidn del solado se procede a coneuur un encofrado de madera, cuyas dimensiones exteriores eorrespondan a las medidas de la zapata, quedando asi, enwe ta cara exterior del encofrado y el talud del Suelo, un espacio de 0.20 m pare construir el contramuro (Fig, 5.17-b). El paso siguiente es el vaciade de concreto en el espacio sefialado (Fig, 5,17-¢). Ein el mismo dia o al dfa siguiente del vaciado ¥ endurecido el concreto, se desmonia el encofrado quedando un recinto formado por el contvamure, expedito para proceder con la construccién de la vapata, (Fig. 5.17-d) Fig.5.17 Sistema de contramuro para la construccién de tapala Como ha sido ya indicado, en el procedimiento deserito se emplea concreto pobre, por ejemplo, cemento - hormigén 1:12, incluso se permite la adicién de piedra mediana desplazadora, El sistema de contramuro es también apropiado para construceién de cisternas de agua, reduciéndose el riesgo de derrumbe de tos taludes durante el vaciado de concreto y la formacién de «cangrejeras» en e} muro de la cisterna, que pueden ocasionar filtraciones de agua a wayés de éste, Para facilitar ¢) trazado de Jas columnas y ta distribucién ¥ colocacién de las armaduras de las zapatas y columnas es necesario construir solados de concreto en el fondo de las excavaciones. Las super- ficies de estos solados deberdn ser frotachadas, planas y uniformes. Para conseguir que los fondos de las zapatas tengan el mismo nivel por la conveniencia ya seflalada, respecto a la habilitacion de los fierros de las columnas, el espesor de los solados puede ser variable, pero no menor que 5Scm. El trazado de las columnas se realiza con el auxilio de cordeles, tensados entre los pares de vallas que definen los ejes correspondientes. Cuando 1a separacién entre vallas es grande y hay mucho viento, los cordeles tienden a desviarse Jateralmente, Por eso, es recomendable habilitar algunas vallas auxiliares para reducir la posibilidad de error. Naturalmente, el empleo de instrumentos topogrdficos asegura mayor refinamiento. Mediante la plomada proyectamos los ejes a la superficie del solado (Fig. 5.18). Luego, utilizando una escuadra y regia, dibujamos en el solado la seecién de la columna (Fig. 5.19). PLOMADA, Fig 5.19 Trazade de la seccién de columnas El wabajo debe ser ejecutado con el mayor esmero posible. Cabe advertir que el trazado de las columnas es uno de los trabajos de mayor umportancia del proceso constructivo. Los errores en que se pueda incumr se traducirdn en situaciones inconvenientes, insalvables en algunos casos 0 cuya correccién demanda significative costo adicional, ocasionanda, ademds, atraso de la obra. El paso siguiente, es la colocacién de la armadura (parrilla) de la zapata. Los fierros deben estar separados del solado 7.5 cm para protegerlos Ge la corrosion, eventualmente deri vada de la humedad o de la presencia dc sustancias agresivas que pueda contener el suelo. Se consigue la condicisn sehalada apoyando la armadura de la zapata sobre dados 0 cubos de concreto, especialmente habilitados para tal propésito. La colocacién de los fierros de las columnas en su posicién definitiva se lleva a cabo emplicando barroics de madera, de 3” x 3" 6 de 3" x 4", fijados firmemente en el suelo y alineados de acuerdo a las dimensiones de las columnas, respetando, desde luego, los recubrimientos minimos del fierro por el concreto (Fig. 5.20-a, b, c). La comprobacién de los alineamientos de los fierros se realiza con teodolito o mediante cordeles tensados cnire vallas. La fijaciGn de los fierros se complementa con tirantes © «vientos» de alambre N° 8, apropiadamente tensados. Cuando se trate de columnas con armaduras de fierro de didmetros mayores deberin adoptarse precauciones especiales para evitar la caida de los fierrds. Para tal propdsito, es necesario armar castilos de madera o emplear andamios de tubulares de acero, La resistencia exigida para e! concreto de las zapatas es especificada en los planos de estructuras de cada proyecto en particular; desde luego, no es permitida la adicidn de piedras grandes desplazadoras. Previamente al vaciado de concreto deber4 habilitarse adecuadamente el lugar de trabajo. Es necesano, asimismo, antes del verter el concreto, limpiar y regar los solados. Durante el vaciado se tendré especial cuidado de mantener los fierros en su correcta ubicacién. CORTE. B Fig 5.20 Fiyacidn de lor flerres de columnar Pace controlar la altara de vaciado y asegurarnos que las zapatas tengan el alto que corresponda es preciso establecer, en las paredes de la excawacida, marcas 0 sefiales apropiadas. 3.4. SUBZAPATAS Cuando la capa de suelo portante, prevista en el proyecto de cimentacién, se encuentra a una profundidad que demande la construccién CORTEB-B Fig.5.20 Fijacién de los fierros de columnas ‘ara controlar la altura de vaciado y asegurarnos Que las zapatas tengan | alto que corresponda es preciso establecer, en las Paredes de la xcavaci6n, marcas 0 sefiales apropiadas_ 4. SUBZAPATAS uando la capa de suclo portante, prevista en el proyecto de cimentacién, ; €Mcuentra a2 una profundidad que demande la construccién = de columnas de excesiva altura (Fig, 5.21) con el consiguiente aumento de Ja longitud de los fierros de las columnas y también mayor drea de los encofrados, puede adoptarse como alternativa Ia construccién de subzapatas (Fig. 5.22). Las subzapatas actian como elemento de transicidn, transfiriendo al suelo portante las Presiones de las zapatas, Fig.5.22 Subzapata para reducir altura de columnas Asimismo, se opta por construir Subzapatas, cuando los niveles de cimentaci6n de dos o mas zapatas préximas entre sf sean marcadamente diferentes (Fig. 5.23-a). La misma situacién se presenta €n zapatas contiguas a muros de cisternas de agua (Fig. 5.24-a). La construccién de subzapatas favorece el necesario confinamiento del suelo, reduciendo, a la vez, las Presiones que puedan generarse en las zapatas del nivel inferior 0 en los muros de Cisternas © s6tanos. cisterna a) Fig.5.24 Subzapata en capatas contiguas a cisternas El nivel del fondo de las subzapatas depende del dngulo de repaso del suelo (Figs. 5.23-b y 5.24-b). La Tabla 3.1 permite de manera prictica determinar el nivel del fondo de las subzapatas (nfsz). Tabla 5.1. Niveies de fonds de subzapatas El valor H debe ser igual o menor que el que indica la tabla. Fjemplo N° 1. La Fig. 5.25-a muestra en planta dos zapatas, Z-1 y Z-2, préximas entre si. De acuerdo a los planos, las cotas del fondo de las zapatas Z-1 y Z-2 son, respectivamente, -0.80 y -2.10. Si el suelo es areaa, determinar el nivel del fondo de la Subzapata de la zapata Z-|. Soluciéa: En ia tabla, la altura H, medida desde el fondo de la zapata Z-2 hacia arriba, es 0.5 x 1.20 = 0.60 m_ Por lo tanto, el nivel del fondo de la Subzapata requerida para Ja zapata Z-1 ser4 -2.10 + 0.60 =-1.50. El alto de la Subzapata seré 1.50 - 0.80 = 0.70m. Ver Fig. 5.25-b. Eyenwp!.['* 2. La Fig. 5.26-a muestra parte de la cimentacién de un edificio, donde se localizan la cimentacién de una cisterna para agua y dos zapatas préximas a ella. Z- 1 y Z-2. Elnivel del fondo de la cimentacién de la cisterna es -3 m. on 060 SOLUCION EN CORTE. Fig 5.25 Ejemplo N" I> sapatas prézimas entre si. Si el suelo €s comglomerado compacto, determinar ei mvel del fondo de las subzapatas correspondientes a las Zapatas Z-1 y Z-2. Selucién: En I2 tabla, para suelo conglomcrado el walor de H, medido desde el fondo de la cimentacién de la cisterna hacia arriba, es H = 0.75 D. D = 1.00 ms. H es igual 20.75 X 100=0.75 m. El mevel del fondo de las subzapatas que requieren las zapacas Z-1 y Z-2 serd = -3 + 0.15 =-2.25. Ver Fig. 526-5. {Cudl sexé ef alto de las subzapatas si el nivel del fondo de las zapatas es -1.20? Generalmente ta dosificacién del concreto empleado para la construccién de las falsas zapatas es cemento - hormigén 1:8 mas 30% de piedra de 8” de 90 3.00 1.00 2.00 4,00 a) PLANTA faa FALSA ZAPATA 2.25 b)” 4 Fig.5.26 Ejemplo N° 2: zapatas contiguas a cisternas. 5.5. CIMIENTOS PARA MUROS DE CONCRETO ARMADO Al igual que el caso de zapatas de cancreto armado, conseguir la correcta ubicacién de los fierros de refuerzo constituye uno de los principales objetivos del proceso constructivo. Ejecutada la excavacion hasta el niyel que corresponda, se construye, en el fondo de la excavacién, un solado de concreto de 5 6 7.5 cm de espesor. En este solado se traza el alineamiento que corresponde al muro. E] trazo servird de referencia para ubicar los fierros del muro, Para ubicar correctamente los fierros se utilizan largueros de madera montados sobre travesajios fijados en el suelo, tal como indica la Fig. oi 5.27. Los fierros del cimiento deben ser colocados sobre cubos de concreto a fin de asegurar el recubrimiento de los fierros por el concreto. Fig.5.27 Fijacién de fierros en la construccién de muros de concreto armado. Comprobada la correcta ubicacién de las armaduras se procede al vaciado del concreto del cimiento. Endurecido éste, se traza en la superficie del cimiento el alineamiento de las caras de muros. Es conveniente dejar anclados en el cimiento alambres N° 8; estos servirdn para sujetar los largueros inferiores de los encofrados de los muros, el proposito es evitar que se levanten los tableros Por accion del rebote del concreto durante el vaciado. También €s conveniente construir, encima y a lo largo del cimiento, un «dado» de concreto, de un ancho igual al del rnuro, Este «dado» facilitard la labor de los encofradores. Si se trata de muros de piscinas, cisterna de gran volumen o de sétanos A contiguos a suelos con agua, es necesario impermeabilizar la junta de construcciGn entre cimiento y muro. Para tal efecto, es preciso instalar, a lo largo del cimiento, bandas impermeabilizantes (water stop). 5.6. IMPERMEABILIZACION DE CIMIENTOS La impermeabilizacién de cimientos y muros de sétanos tiene diversos grados de exigencia. Las soluciones y procedimientos a adoptarse deben derivarse de la evaluacién en cada situacién especifica, teniendo 92 €n cuenta las diversas variables que suelen presentarse; tipo de suelo, contenido de humedad del suelo o potencial riesgo de humedecimiento, caracteristicas de la obra, etc. En efecto, entre la impermeabilizacion de cimientos corridos contiguos a terrenos htimedos y la de muros de S6tanos construidos en terrenos saturados hay sustancial diferencia Sea cual fuere el caso, la impermeabilizacién debe concitar gran interés de parte de proyectistas y constructores, pues alin en cimentaciones corridas para viviendas, la omisién de procedimientos apropiados es frecuentemente origen de humedecimiento de la parte baja de los muros de la primera planta, que se manifiesta en caracteristicas eflorescencias, generalmente blanquecinas, que deterioran la pintura y, eventualmente, debilitan las mamposterias. Esto es explicable porque, por efecto de la capilaridad, el agua presente en el suelo asciende a través de la cimentaciGn arrastrando sales contenidas en el suelo, El procedimiento de impermeabilizacién de cimientos corridos consiste en un revoque o enlucido con mortero rico, aplicado en las caras exteriores de los sobrecimientos y, eventualmente, de cimientos contiguos a terrenos htimedos 0 jardines. Mayor eficacia proporcionara incluir en el mortero algun aditivo hidréfugo, El acabado del revoque debe ser pulido y la aplicacién de varias capas de asfalto es siempre recomendable. El empleo de membranas de plistico (polietileno), pegadas sobre las superficies agregaran eficiencia, mas atin si las membranas son protegidas con muros de ladrillos corrientes asentados de canto, 6 con ladrillos pasteleros, 0 con muros de concreto de poco espesor (Fig.5,28), Para anular el efecto de capilaridad, propio de los suelos arcillosos, estos deben ser reemplazados por material granular (grava, arena, hormigén) en las zonas contiguas al cimiento. Si bien es verdad que los procedimientos de impermeabilizacién significan costo adicional, no es menos cierto que su omisidn puede acarrear situaciones inc6modas y, sin duda, mayor costo. Pig.5.28 Impermiabilizacién de cimientos corridos 93 CaPITULO6 . ALBANILERIA 6.1. GENERALIDADES Aun cuando los revoques o enlucidos, los enchapes de maydlica, el asentado de losetas y baldosas, son entre otros, trabajos propies de la albafiileria, el mas representativo de la ocupacién es, sin duda, la construccién de muros de ladrillos y bloques. Los muros son los componentes basicos de las edificaciones de albaitileria y en ellas cumplen diversas funciones: la de dar forma a las edificaciones, definiendo y separando los diversos ambientes y espacies, de acuerdo a la fyacién que se les asigne en los proyectos arquitecténicos; ta de proteger de los agentes ambientales - en muches casos ciertamente severos - a los habitantes 0 usuarios de las edificaciones, Ys Por supuesto, la estructural de soporte o apoyo de techos y cargas de servicio. Los muros de albaiiilerfa convencional estén formados por unidades de albafileria (ladrillos y bloques) asentadas con mortero, una per una, en hiladas sucesivas; la funcién del mortero es unirlas o pegarias eatre si. En el caso de la albaiiilerfa armada - sistema alternative de reforzamiento que mas adelante sera descrito ~ se incorpora acero de refuerzo en los alveolos de los ladrillos © bloques. En los alveolos se vierte concreto de consistencia liquida (concrete liquide) hasta Henarlos completamente. La resistencia de un muro de albaiiileria tiene un rango de variabilidad muy amplio y depende, como es natural, de las caracteristicas ¥ propiedades de los materiales empleados en su construcciéa, y en gran medida, de los controles que se apliquen para asegurar la calidad de la ejecucién de los muros. 6.2. LAS UNIDADES DE ALBANILERIA +2 nad sera, De ets ae oll a6 en su elaboracion, las unidades comtinmente empleadas en la construccién de muros corresponden a uno de los siguientes tipos: ~ Ladrillos de areilla, ~ Ladrillos y bloques sflico - calcdreos. ~ Bloques de concreto, 2.2. Ladrillos de arcilla. La arcilla, empleada como materia prima en la elaboracién de ladrillos, esté formada por diversos elementos minerales que confieren a los productos terminados particulares caracteristicas y propiedades, En todo caso, la seleccién de arcillas apropiadas es indispensable a fin de obtener productos que cumplan los requisitos establécidos para su empleo en obras de albafilerfa. El proceso de fabricacién de ladrillos comprende diversas etapas: extraccién de la materia prima, mezclado, amasado, moldeado, secado y, por tiltimo, quemado a temperaturas que oscilan entre 750° y 1300°C, Los ladrillos son elaborados de modo artesanal © fabricados industrialmente. Los elaborados artesanalmente no tienen las resistencias comunes de los fabricados industrialmente, generalmente sus medidas no son uniformes ¥+ Por ser porosos, tienen succién excesiva que afecta la necesaria adherencia con el mortero; por el contrario, los ladrillos fabricados industrialmente bajo estrictos controles de calidad poscen mayores resistencias y regularidad en sus valores, uniformidad en sus medidas y en su color y textura, Gran diversidad de tipos de ladrillos ofrece al mercado de la construccién la industria ladrillera. Los tipos de ladrillos réciben diversas designaciones por parte de las fabricas de donde Provienen; los comuinmente usados en las edificaciones son los siguientes: ge €& PANDERETA 10x12x25cem CORRIENTE 6x 12x25c= on IKARO 9.5x12x25an 18 HUECOS Fig.6.1 Ladrilles de arcilla Para que se advierta o se conozca, ¢S conveniente sefialar que aun traténdose de los mismos tipos de ladrillos sus medidas no necesariamente son iguales. 6.2.3. Ladrillos silico - calcareos. La composicién de estos ladrillos es la mezcla intima de arena fina natural con apropiado contenido de silice, y cal viva finamente molida ¢ hidratada er Ja mezcla. La arena esta sujeta a periédicos controles quizucos y fisicos a efecto de determinar el contenido de silice y su granulometria. La cal es obtenida Por proceso de calcinacién de piedras calizas. La mezcla himeda de arena y cal es moideada en prensas automalicas y endurecida a Presién de vapor en autoclaves a 16 atmésferas durante 8 horas por lo menos. Finalmente, los ladrillos 0 bloques son sometidos a curade por exposici6n a vapor de agua. Las unidades de albafiileria silico « calcdreas alcanzan los valores mids altos de resistencia a la compresida contemplados en la clasifieacién de la Norma Técnica de Edificacién, E-070, integrante del Reglamento Nacional de Construcciones, Su geometria ¥ Sus dimensiones son uniformes, sus caras son perfectamente pianas ¥ Sin alabeos. Los fabricantes de ladrillos y Doques site . calcdrens oftecen Ml mercado de Ia construccigin wna gran Vaiiedad GE gus productos, Gas mmovacisn, relativamente reciente, es ba produceidin det blogue denominadd) <«MECANO» (Rig. 6), que esta provisto de alveotos verticals y canalcs horizontales que pammiten alojar fierros de refkerso, Las blogues se apilan sia mortero (Junta seit) p gus abveatos son Henados Son ConcTeto liguido. resulando asi un partionher sistema de atbailiteria, armada que offece vertajas s consideracie en Comparacidn Con OttOs Sstemas. comprobada fortaleza, atractiva apariencia de fas earas de tos muros, ademas de la simplicidad y Rimpleza det proceso de Comstruccidin_ “ ons meg Ee FS.62 Bloque siticice ~ calediee Mecone S28. Blogues de concrete. El empleo de bloques de concrete en la constituye, sin duda, ventaja comparativa a tenerse en caenta, Ls La calidad de los bloques depende principalmente de: ~ Origen y granulometiia de los agregados. Disefio de la mezcla, es decir proporcién de los materiales constluyentes; eyados, cemento y agua de amasado. ~ Método de dosificacién, Pucde ser en peso 0 su equivalente en volumen, - Procedimiento de mezclado, Con mezeladoras apropiadas se obtienen mezclas homogéneas, iste -16n es el mejor método de compactacion, - Procedimiento de cu Manipulacién, almacenay de moldeado. La vibra ado. ey secado de los bloques, Desde luego, la produccion de los bloques debe estar neces mente sujeta a estrictos controles de calidad. Si los bloques son claborados sin os adecuados sera justificado desconfiar de la calidad de los procedims bloques. Actualmente importantes empr as industiales fabrican y ofrecen al sector de la construccién diversos upos de bloques que cumplen los requisitgs de calidad exigidos por las normas técnicas peruanas, aplicables en cl caso de estas unidades de albafileria. La Fig. 6.3 muestra los diferentes Upos de bloques que actualmente se comercializan 6.2.5. Unidades solidas y unidades huceas. Las unidades de all feria pucden ser totalmente sélidas o tener huecos o perforaciones, perpendiculares a las caras de agiento. La diferenciacién entre umdades solidas y unidades huecas o perforadas se establece relactonande el area neta de Ja unidad, respecto a su avea bruta, Las unidades elasificadas como s6lidas no son solo las enteramente macizas (sin huecos ni perforaciones), Gimbién lo son aquellas que provistas de htecos o perforaciones, cumplen la condicién que el area de los huccos 0 perforaciones no cxceda el 25% del direa bruta de las caras de asicnto de Jas unidades ico Fig.6.3 Bloque de conereto Las unidades de albafiilerta S6lidas, tal como han sido definidas, son empleadas en la construccién de muros portantes ¥ también en Melos NO porlantes 6 tabiques, aunque, en este 6890, SU PESO Constituye relativa limitacién. Las unidades huecas 0 perforadas Cua frea neta es menor que 75% del rea bruta no deben usarse indiscriminadamente er la construccién de muros Portantes; sin embargo, silos huecos 6 al VEOl6s son suficientemente holgados o amplios, resultan apropindos para ou empleo en albafiileria reforzada, Mas adelante serh descrito este sistema de albafiileria. Cuando los huecos o perforaciones no son Perpendiculares 4 las caras de asiento, sino paralelas a ellas, lag unidades de albafiiler(s son clasificadas como tubulares; tal es el caso de los ladrillos de arcilla denominados «panderetan. Definitivamente, este tipo de ladrillo no debe Usarse para construir muros portantes. 6.2.6. Propiedades de las unidades de albafiilerta, Las saractertsticas y propiedades de las unidades de albafilerfa que trascien. a ioz Den en la resistencia y duracién de los muros y, por tanto, en las propias edificaciones, son: —Resistenciaalacompresién . ~Geometria y uniformidad dimencional . Succién. Resistencia a la compresién. La resistencia a la compresién (f .b) es la propiedad mas importante de la unidad de albaileria y, definitivamente, 1a mas trascendente en la resistencia y durabilidad de los muros y, por tanto, de las edificaciones Geometria y variabilidad dimencional. La resistencia, la durabilidad y, por supuesto, la apariencia, de los muros de albaiiilerfa, tambien estan relacionadas con ta variacién dé las dimensiones e imperfecciones geométricas que, generalmente y €n mayor o menor medida, presentan las unidades de albafiilerfa,En el caso de unidades elaboradas artesanalmente la variacién alcanza valores realmente levados, lo que, por cierto, no contribuye a obtener albaiiilerfa de calidad aceptable . tanto la yariacién dimecional, como el alabeo de las caras y, desde luego de resistencia a la compresién, son Tequisitos obligatorios que contemplan las normas y reglamentos para establecer la clasificacion de las unidades de albafiileria . Succion. La succion es la propiedad que tienen las unidades de albafiileria de absorber agua.Ciertamente la succion ¢s necesaria para desarrollar la adherencia entre las unidades de albaiilerfa y el mortero;sin embargo si la succion es excesiva las unidades sustraen , durante el asentado, agua de mortero afectando sustancalmente la adherencia . El valor de la succion depende de! grado de porosidad de los ladrillos . En general, todos los ladrillos de arcilla deben humedecerse suficientemente antes de ser asentados, especialmente los fabricados artesanalmente; no obstante, las caras de los ladrillos 102 deben estar secas o ligeramente himedas a efectos de favorecer ei mecanismo mediante e} cual se produce la adherencia. No es necesario humedecer los ladrillos silico - calc4reos ni los. bloques de concretos pues tienen, generalmente, apropiados valores de succi6n; pero sf es preciso limpiar las superficies mediante brocha y ligero riego. Absorci6n. Es un requisito que debe comprobarse, especialmente cuando los muros hayan de estar expuestos a Iluvia intensa o interperismo moderado. La absorcién se expresa en porcentaje y es indicativa de impermeabilidad. Otras caracteristicas. Ademas de las propiedades 0 indicadores de calidad comentados tas unidades de_albanileria ‘debét Cumplir los siguientes‘réqiisitos: - No presentar grietas u otros defectos similares. - Apropiada coccién y sin vitrificaciones. - Masa homogénea, sin incrustaciones de materias extrafias tales como caliche y conchuelas. - Color y textura uniformes. - Libres de eflorecencias, generalmente de origen salitroso. Comprobaci6n de las propiedades y requisitos. Todas las propiedades expuestas son comprobables mediante ensayos precisados en diversas Normas Técnicas Peruanas, INDECOPI 6.2.7. Clasificacién de las unidades de albafileria. En funcién de requisitos especificos, referidos a la resistencia a compresi6n, alabeo maximo y variacién de las dimensiones, los ladrillos y bloques son diferenciados en cinco tipos, de acuerdo a la clasificacién contenida en la Norma Técnica de Edificaciones, E- 070, y también en la Norma Yécnica Peruana 331.017. Las Normas clasifican los ladrillos en cinco tipos, cuyas resisten- cias a compresién (f’b) van desde 60 kg/cm: para el tipo l, hasta 180 kg/cm2. Naturalmente, la seleccién de los ladrillos se establece de acuerdé a las caracterfsticas de las obras previstas: altura, uso, ubicacién. Los tipos I y II pueden ser empleados en viviendas de hasta tres pisos y condiciones de servicios moderados. El tipo V es especificado en edificaciones de condiciones de servicio particularmente rigurosas. 6.3. EL MORTERO DE ASENTADO 6.3.1. El mortero. La funcién esencial que cumplen los morteros en la construccién de muros de albafilerfa es pegar o unir entre si las unidades de albaftileria; por consiguiente, la propiedad m4s importante de tos morteros es su capacidad adhesiva. Contrariamente, pues, a lo que bien podria suponerse, la resistencia a la compresién no es la cualidad esencial de un buen mortero, como sf lo,es para el concreto. En efecto, la propiedad sustancial del concreto es la resistencia a la compresién, la que depende principalmente de la cantidad de agua agregada a Ia mezela en relacién a la cantidad de cemento aportado: cuanto menor sea la relacién agua/cemento, mayor sera la resistencia del concreto- Pues bien, la particularidad expuesta y referida al concreto no es estrictamente valida para definir.la calidad de los morteros de asentado de unidades de albafiileria. La cantidad apropiada de agua de amasado de los morteros es aquella que asegure efectiva adherencia entre el mortero y las unidades de albafiileria y, a la vez, confiera al mortero la necesaria trabajabilidad para ser manipulada y extendida en la cama del asentado. E] mecanismo de adherencia entre el mortero y las unidades de albanilerfa se produce porque ciertos elementos solubles de} cemento, disueltos en el agua succionada por los ladrillos, penetran y cristalizan en los poros de los ladrillos 0 los bloques; en consecuencia, considerando esta particular caracteristica de la adherencia es necesario que los aportes de agua y cemento en los morteros sean suficientes para asegurar el me- 103 canismo de adherencia descrito y, adem4s, como ha sido ya sefialado, proporcionen la imprescindible plasticidad que favorezca la' manipulacién de los morteros a fin de asegurar efectivo contacto en toda la extensién de las caras de asentado de los ladrillos o bloques. Los morteros son la mezcla de aglomerantes, arena y agua. Los aglomerantes son el cemento y la cal hidratada. El cemento es el componente a través del cual, segin hemos visto, se produce la adherencia entre el mortero y las unidades de albafileria; no obstante, es pertinente sefialar que la inclusién de cal proporciona a los morteros propiedades altamente deseables. En efecto, el aporte de cal en las mezclas las hace mAs plasticas, ademas de aumentar Ia retencién de agua; la consecuencia €s que obtienen mezclas con mayor capacidad adhesiva. La cal empleada como aglomerante es Ia cal hidratada normalizada. Es importante advertir que los lapsos de endurecimiento de las cales no son uniformes: dependen de la composicién quimica de las piedras calizas de las que se obtienen. Los lapsos de endurecimiento varfan desde unos pocos dias hasta periodos mucho mds amplios, como es el caso de cales débilmente hidraulicas. Esta particularidad es preciso tenerla en cuenta al seleccionar un determinado tipo de cal para su uso como aglomerante; por ello, es recomendable emplear cales normalizadas. 6.3.2. Arena. Las arenas estan compuestas por granos de diversos tamafios. En algunas predomina sélo un tamajfio, otras estan formadas por granos de diferentes tamaiios, en este caso se les denomina «bien graduadas». Las arenas bien graduadas tienen en su masa un minimo de vacios, caracteristica que influye favorablemente. La Norma Técnica de Edificaci6n E-070 Albafileria incluye la granulometria recomendable para morteros. Para su empleo en morteros, la arena no debe contener elementos nocivos, tales como micas, carbén, cenizas, sales 0 exceso de arcilla. Puede tolerarse hasta uno por ciento en peso, de contenido de arcilla; sin embargo, si los granos estan recubiertos por pelicula de arcilla o barro, la arena es inaprovechable a no ser que sea sometida a previo lavado. Las arenas contaminadas con sustancias orgdnicas son las més terribles, lamentablemente, en algunas ocasiones la contaminacién no es reconocible a simple vista. 6.3.3. El agua de amasado. E] agua potable puede ser utilizada sin ning&n reparo en los morteros. Si este no es el caso, cualquier agua proveniente de rios, estanques, pozos, etc., necesariamente debe ser analizada para evaluar su eventual empleo si del andlisis se comprueba que no contiene sustancias mocivas procede su aceptacién. De una ligera turbiedad del agua no puede inferirse de manera categ6rica su rechazo sin ser analizada. Definitivamente, el agua proveniente de procesos industriales © quimicos no es apropiada para su empleo en morteros: debe desecharse. 6.3.4. Proporciones. Las proporciones en volumen recomendables para mortero de asentado de ladrillos y bloques son: Muros portantes Cemento - arena 1:4 Cemento - arena Cemento - cal - arena 1 5 Aes 4 Cemento - cal - arena 1 ? 2 > No portantes Cemento - arena 1 : 6 Cemento - cal - arena 1 i 12:6 6.3.5. Resistencia de la albanilerfa. Cuando se trat6 acerca de las propiedades de las unidades de albafileria se hizo referencia a la resistencia a compresi6n, sefalandose que era la m4s importante y trascendente en la resistencia y duracién de los muros 105 mee ‘de albaifilerfa; incluso, se mencionaron normas de clasificacién de ladrillos y bloques, en las que se precisan valores de resistencia a compresion, para cada tipo normalizado, entre otras caracteristicas. Cabe, sin embargo, hacer notar la distincion entre la resistencia de la unidad de albafiileria (ladrillos y bloques) y la resistencia de la albaiiileria. f'm. Constituida por Ja unidad de albaiilerfa y el mortero, la albafiileria €s un material que tiene comportamiento que no es coincidente = aunque sf relacionado - con los comportamientos de las unidades de albafilerfa y el mortero considerados independientemente. De acuerdo a lo que sefiala la Norma Técnica E- 070 Albaiiilerfa, la resistencia a la compresién de la albafiilerfa puede determinarse mediante ensayos de prismas. Si no ¢s posible efectnar ensayos de prismas, se podran emplear los valores que la Norma sefiala en funcién del tipo de unidad de albafiileria y del tipo de mortero: en este caso es indispensable Se constate las caracteristicas de las Unidades de albaiiilerta. 6.4. LOS MUROS DE ALBANILERIA 6.4.1. Aparejo de Muros. Aparejo o amarre es la forma en que estan colocados los ladrillos o bloques en las sucesivas hiladas de los muros. (Fig. 6.4) Son tres los aparejos convencionales: - Soga. El ancho del muro corresponde al ancho de la unidad. - Cabeza. El ancho del muro corresponde al largo de la Unidad. - Canto. El ancho de! muro corresponde al alto de la unidad. En la prdctica de obra, los aparejos y amarres son seleccionados de acuerdo a los tipos de ladrillos previstos en los proyectos y ala funcién arquitectonica y estructural que se asigne a los muros. Las laminas 6, a 6.2 y 6.3 muestran ejemplos de aparejos y amarres. Requisito esencial de correcto amarre és que las juntas verticales no coincidan en hiladas sucesivas. (Fig. 6.5). 107 So) nts allele peda) cONCIDENTES eee Fig.6.5 Las juntas verticales no deben coincidir en hiladas consecutivas. Luego del trazado de los muros, ajustado a {a distribucién que senalan Jos planos de arquitectura, s¢ procede al emplantillado. 6.4.2. Emplantillado. Emplantillado ‘es la primera hilada, correspondiente al conjunto de muros de cada obra en particular. Reproduce (el emplantillado) la distribucion, los espesores y los alineamientos de los muros previstos en los planos. LADAILLOS K.K. pane cone CABEZA _ _yetapa 2° HILADA SOGA : ATHILADA (c=, (anlcertsies] ELEVACION TIPO PANDERETA 2" HILADA a tt eos 24 x ELEVACION 2° HILADA SOGA 1° HILADA wit =a ELEVACION 2° HILADA ALL - ROLLOCK “| ELEVACION Lémina.6.1 Aparejos con ladrillos king kong y pandereta 109 CABEZA AMARRE AMERICANO. i 2 HILADA 24 1" HILADA CABEZA = HILAD: AMARRE FRANCES ERA 2 ELEVACION 1 HILADA SOGA oe 2’ HILADA Ee ELEVACION LADAILLO y MEDIO. AMARAE AMERICANO ELEVACION LADAILLQ y MEDIO AMARRE FRANCES, 7 HILADA ELEVACION 2 HILADA Lémina.6.2 Aparejos con ladrillos tipo corriente io 2 HILADA mittin +> CABEZA * 1* HILADA ELEVACION 2 HILADA Een CABEZA AMARRE - AMERICANO ee fF] HA ELEVACION ZHILADA p= aries or SOGA J HILADA ELEVACION Limina.6.3 Aparejos con ladrillos de arcilla fkaro Como los niveles de los travesaiios de las vallas empleadas en el trazado de los sobrecimientos no coinciden, generalmente, con el nivel de la cara superior de los sobrecimientos, es necesario proyectar, mediante reglas clavadas en los travesafios, las marcas 0 trazos que definen los ejes 0 los alineamientos, Desde luego, las reglas deben aplomarse debidamente (Fig. 6.6). Con cordeles, fuertemente tensados entre los pares de vallas correspondientes, se obtienen los alineamientos Para el replanteo de la primera hilada de los muros. (Fig. 6.7) Fig. 6.6 Fig. 6.7 El paso siguiente es trazar los vanos de las puertas, teniendo cuidado de considerar el espesor de los derrames. Generalmente el espesor de los derrames es de 1.5 a 2 cm. Asi, por ejemplo, si en los planos figura un vano de puerta de 0.80 m, el ancho que deberd preverse en el emplantillado ser4 0.83 6 0.84 m. Tener en cuenta que los anchos de los vanos indicados en los planos incluyen los marcos de las puertas. Obyiamente, si se trata de muros de acabado cara vista o solaqueados, los anchos de los vanos coincidirdn con los indicados en los planos ya que, en este caso, no se requieren derrames. Asimismo, en el emplantillado, hay que dejar los espacios que ocuparan las columnas de amarre, de manera que entre los ladrillos y los fierros de las columnas quede una separacién que permita satisfacer Jos recubrimientos minimos de los fierros por el concreto (Fig. 6.8.). 003 003 ec sas Fig. 68 Antes de iniciar el asentado de los ladrillos es conveniente presentar en seco (sin mortero) las dos primeras hiladas de los muros. En esta operacién se comprobaré la uniformidad de las 111 112 juntas verticales y las soluciones de encuentros ¢ intersecciones de los muros, eviténdose, de acuerdo a lo ya sefialado, la coincidencia de juntas verticales en hiladas sucesivas. El espesor de las juntas verticales no sera menor que O1 cm, ni mayor que 1.5 cm. Las ldminas 6.4, 6.5, 6.6., 6.7, y 6.8 muestran ejemplos de encuentros e intersecciones de muros, 14, WHILADA 2° HILADA SOGA sash O + C4 acts CABEZA 24 stimats eee Ei t= PPP > eee CABEZA - SOGA 14, slau fea) LO oo = Ldmina 6.4 Intersecciones de muro, ladrillos king kong 12 DA 2 HILADA SOGA 7 | CABEZA my CABEZA - SOGA 4 See Lamina 6.5 Intersecciones de muros, ladrillos king kong colo on J. cea tH Of OLS i coo =O 11a see! 3 1° HILADA U bir CABEZA aa (ici) Hao CABEZA -SOGA 24 (1 To 2 HILADA tie Lamina 6.6 Interseccion de muros, ladrillos corriente Y pandereta ENCUENTROS EN T SOGA 1° HILADA. 12 tat (| aa el CABEZA 2 ida 115 PHILADA [] U cio qe AE SOGA -CABEZA aoe Ldmina 6.7 interseccion de muros, ladrillos corriente y pandereta. CRUCE DE MUROS 1° HILADA 2 HILADA 12 12, 1 tt Se AS i LE Lamina 6.8 Interseccion de muros, ladrillos corriente y pandereta 6.4.3. Espesor de las juntas horizontales. La resistencia a la compresi6n de Ja albamileria (fm) disminuye con el aumento del espesor de las juntas. En Ia practica de obra, el espesor de las juntas en gran parte depende de la uniformidad de las medidas de las unidades de albafilerfa, puntualmente de su altura; én todo caso, no debe ser menor que 1 cm ni mayor que 1.5 cm, aunque cabe sefialar que cuando se trata de ladrillos elaborados artesanalmente, precisamente por la irregularidad de sus medidas, los espesores de las juntas exceden el valor maximo indicado, dando lugar, ademas de la disminucién de la resistencia, a un mayor costo. Para controlar, durante la construccién de los muros, el espesor de las juntas se emplea escantillones. El escantillén es una regla de madera en la que se trazan las alturas previstas de las hiladas. Las alturas son submiltiplos de la altura de los muros, de manera de culminarla con ladrillos enteros. EI escantillén debe abarcar la altura total de los muros, es decir, desde la primera hilada hasta la dltima; esta exigencia es mas evidente ¢n la construcci6n de muros de acabado cara vista 0 solaqueados. La costumbre de emplear el escantillén a partir de la mitad de Ja altura no es la mids apropiada. 6.5. ALBANILERIA REFORZADA 6.5.1. Albafileria Confinada. Las edificaciones de albaiileria resisten apropiadamente las cargas de gravedad, es decir, el peso de los techos y las cargas de servicio; sin embargo, son vulnerables ante las fuerzas que originan los sismos. Al ocurrir un sismo se generan fuerzas horizontales que actuan sobre los componentes estructurales de las edificaciones, entre ellos los muros. Estas fuerzas dafian las edificaciones, agrietan los muros, hasta los derrumban. La accion destructiva de los sismos ha obligado a reforzar las edificaciones. Uno de los sistemas de reforzamiento es el denominado albanileria confinada. Lo que caracteriza a este sistema es Ja inclusién de columnas, soleras y-vigas de amarre de concreto armado, integradas con los muros y los tedios. En este modelo de reforzamiento los muros estan enmarcados (confinados) entre el sobrecimiento o las losas, las columnas y las vigas soleras integrantes de los techos (Fig. 6.9) 118 VIGAS DE AMARRE Fig. 6.9 Albanileria confinada Las columnas de amarre ubicadas en las eésquinas, ademds de cumplir la funcidn de confinamiento indicada, absorben los esfuerzos que, en un movimiento sismico, sé concentran Mmayormente en esas zonas criticas. Para asegurar la eficacia de la albaiilerfa confinada los procedimientos constructivos deben ceiiirse a ciertas exigencias, entre ellas: ~ Los fierros de las columnas de amarre serdn anclados en los cimientos (Fig. 6.10). - Asegurar efectivo enlace entre muros y columnas. Por ello, de acuerdo a la secuencia de los trabaios, los encuentros de Jos muros con las columnas deben ser dentados (Fig. 6.11). Construidos los muros se procede a la construccién de las columnas. - Apropiados empalmes entre los fierros de las columnas y los de las vigas soleras. - Adecuado anclaje de los fierros de los techos en las vigas soleras. 6.5.2. Albatiileria Armada. La albafiilerfa armada es otro de los sistemas de reforzamiento de las edificaciones. En este modelo se incorpora en los muros barras de fierro, las que son insertadas verticalmente en los alveolos o huecbs de bloques de 119 LADRILLO Fig.6.10 Fig.6.1 concreto, igualmente en ladrillos de arcilla o silico - calcdreos, disefiados para este fin. El refuerzo horizontal es ubicado cada cierto niimero de hiladas integrado en ¢l mortero de asentado de bloques de concreto, 0 en canales en el sistema de bloques apilables Mecano. (Fig. 6.12, 6.13 y 6.14) Fig. 6.13 Albanileria armada, con ladrillos silice - calcdreos 120 Fig. 6.14 Albanileria armada, con bloques mecano Lo particular de la albafiileria. armada.es el comportamiento: conjunto de las unidades de albafileria y el acero de refuerzo, aprovechandose las propiedades que caracterizan a ambos materiales de modo andlogo al concreto armado: Los esfuerzos " de traccién son confiados al accro; los de compresi6n, a la albaaileria €n conjunto. Los proyectos de édificaciones Propuestos con albanileria armada deben incluir planos, donde se muestren los didimetros y la distribucién de los fierros de refuerzo, las longitudes de empalmes y anclajes. Asimismo, especificaciones del concreto liquido a emplearse, con indicaci6n de la consistencia, método de compactacién y la resistencia prevista; y otras exigencias que el Proyectista considere necesarias. El concreto Ifquido empleado en albanileria armada deriva su nombre de la muy reducida consistencia que se requiere para el lenado pleno de los alveolos de los bloques. Naturalmente, para lograr la consistencia, pricticamente semejante a un liquido, sé necesita contenidos de agua muy grandes; sin embargo, luego de colocado el concreto en los. alveolos, las unidades de albafiilerfa absorber4n gran Parte del agua, reduciendo asf la relaci6n agua/cemento, incrementéndose como consecuencia, la resistencia del concreto y la capacidad de adherencia con la armadura,

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