You are on page 1of 9

MEDIO AMBIENTE, MEDIO, ENTORNO O CONTEXTO DE LAS

ORGANIZACIONES

IDEA CLAVE
LAS ORGANIZACIONES son sistemas que actúan
dentro de un SUPRASISTEMA GENERAL (Medio Ambiente o
Contexto) dentro del cual desarrollan su actividad,
en el que influyen y son influidas

Entendemos por medio, todo lo que rodea a la organización,


que a ella le interesa, le influye, al que no puede controlar
y que le es indispensable para sobrevivir, desarrollarse y
crecer.

En la Argentina -como en todo el mundo- el escenario


externo que rodea a las organizaciones no es un entorno pasivo.
El comportamiento social, económico y cultural de la
sociedad condiciona a las organizaciones y le influye.

En la Argentina son muchos los que consideran que son más


los impactos negativos que los positivos; se dice que en
nuestro medio subsisten modelos, sistemas y esquemas agotados
por el fracaso reiterado.

Sería simplista atribuir las causas de esa decadencia a


facto-res fatalísticos y más aún adjudicarlas a influencias
exógenas co-yunturales.

Todo proceso tiene raíces históricas, culturales,


económicas y políticas.
Los problemas que afectan al "entorno" argentino no se
diferencia en mucho con los demás países de Latino América.
Desde la "génesis", nuestros países surgieron como consecuencia
de una ruptura POLÍTICA de las colonias con las coronas
europeas (España y Portugal). Fueron rupturas que de ninguna
manera significaron un cambio en el SISTEMA impuesto durante
la conquista del nuevo mundo.
Persistió, aquí, en toda su plenitud el espíritu de la
CONQUISTA y no el de la COLONIZACIÓN. Se quedó enraizado y
fortalecido el "poder" que gozaban los Administradores de la
CORONA, dueños de tierras y bienes, ejecutores inapelables de
la Justicia, otorgadores de títulos, privilegios, cargos,
favores, regalías y dádivas. Y por añadidura, el uso del
DERECHO irrestricto por parte del PODER y no por la Sociedad.

1
Han transcurrido casi dos siglos desde aquella
Independencia "formal" que, víctima de sus propios errores se
fue transformando en un dependencia económica REAL, a tal punto
de comprometer aquella casi "romántica" declaración de
Independencia.

Octavio Paz caracteriza a este Estado -típico en Latino


Amé_ rica- como el OGRO FILANTRÓPICO, su accionar estuvo
presente en toda nuestra trayectoria, hasta nuestros días. "La
gran realidad del siglo XX es el Estado. Su sombra cubre todo
el planeta. Su realidad es enorme, lo es tanto que parece
irreal: está en todas partes y no tiene rostro. No sabemos
qué es ni quién es [...] nosotros conocemos al Estado sólo por
la inmensidad de sus devastaciones. Es el descarnada: no una
presencia sino una dominación. Es la impersona".

El Virreinato extinto formalmente, continuó existiendo en


forma y substancia a través del SISTEMA PREEXISTENTE que fue
adquiriendo nuevas formas: el Estado, el Poder Político, el
Poder Militar, el Poder Religioso, Ministerios, Lobbies,
Secretarias, Entes, Empresas del Estado, Bancos Oficiales,
Provinciales, Empresas Mixtas, Corporativismos, etc.
Entidades que lo dirigen todo, lo reglamentan todo ... Dicen
qué es lo que no se puede hacer y de lo que se puede hacer el
cómo debe ser hecho.

Nuestra sociedad se formó en la sumisión del orden


establecido por el OGRO FILANTRÓPICO, renunciando, quizás sin
saberlo, a ejercer su mejor destino, a sus capacidades más
preciadas como:
"El impulso creador. La imaginación. LA INDIVIDUALIDAD
GE-NIAL. LA INICIATIVA PROPIA. CORRER SUS PROPIOS RIESGOS.
ASUMIR SUS RESPONSABILIDADES IRRENUNCIABLES. DECIDIR LO QUE
SE QUIERE SER SIN "AUTORIZACIÓN OFICIAL" (Octavio Paz).

El estado todopoderoso, mesiánico, redentor, solucionador


de todos los problemas que el hombre no pudo o no quiso resolver
por sí y para sí, llegó donde llegó: una casi devastación de
la estructura productiva del país y en quiebra TOTAL. Un
ejemplo de esto puede darse al considerar nuestro propio caso:
en las primeras décadas de este siglo la Argentina ocupaba un
lugar entre los 10 países más avanzados del mundo. Hoy se vive
mejor por lo menos en otros 35 ó 40 países.

Por otro lado somos caracterizados -y nos caracterizamos-


como una sociedad conflictiva. A los argentinos nos rigen las
decisiones extremas. El nuestro es un país de contrastes. Tan

2
pronto se vive en la euforia como en la depresión. Nos
parecemos a un adolescente caprichoso. Se detiene en una
esquina y no sabe hacia dónde seguir. Casi siempre, por
apresuramiento, elige el camino equivocado. Los argentinos -
tal vez por el peso de las circunstancias- somos cambiantes,
conflictivos y, en épocas de crisis, irritables e intolerables.

ACTIVIDAD

Individual o Grupalmente:

Caracterizar el Medio ambiente que


rodea a nuestras organizaciones

Expresarlo en no más de una carilla


(escrita a máquina)

Propongan tres organizaciones diferentes


Efectúen un análisis del Medio Ambiente
de cada una de ellas

* Tenemos que aceptar la realidad que vivimos en una


sociedad con necesidades y problemas.

* La sociedad es una sociedad organizacional (está


constituída por organizaciones)

* Las organizaciones influyen y son influidas por el


Medio.

¿Cuál es el nivel de responsabilidad de las Organizaciones


para con el Medio?

3
IDEAS CLAVE:

LAS ORGANIZACIONES PRODUCEN IMPACTOS o INFLUENCIAS


SOCIALES por las son que son ILIMITADAMENTE
responsables

LAS ORGANIZACIONES NO DEBEN ATENDER PROBLEMAS SOCIALES


si no tienen:
* EXCEDENTES ECONÓMICOS

* COMPETENCIA TÉCNICA

* AUTORIDAD

La frase "responsabilidad social" es ampliamente usada en


Sociología, Antropología, Economía, Política y en los últimos
tiempos en Administración. Generalmente se entiende por ella,
"la obligación de ejecutar ciertas políticas, de tomar
decisiones, o de seguir líneas de acción que sean deseables en
términos de los objetivos y valores de una sociedad"

Desde este punto de vista, las organizaciones están


obligadas a tomar decisiones que estén dentro de la estructura
de los valores sociales de su Nación, acerca de los cuales no
existe consenso general, y hagan lo que hicieren, deben dar
apoyo a todos esos valores, estén o no de acuerdo con ellos.

Desde un punto de vista operativo, la responsabilidad


social puede ser considerada como "la obligación personal de
los individuos (organizaciones), cuando actúan por su propio
interés, de garantizar que los derechos y los intereses
legítimos de los demás no sean perturbados".
Así, las personas (organizaciones) socialmente
responsables acatarán las leyes del país porque los derechos
de los demás están en juego. Son libres de dar apoyo a las
instituciones e individuos que les gusten, o pueden asumir una
posición neutral, no dando apoyo ni interfiriendo con el
bienestar de las instituciones e individuos. Pero no pueden,
ni de palabra ni de hecho, tratar de destruir instituciones o
vulnerar los derechos e intereses de los individuos excepto
mediante procesos legales.

Entonces, LAS ORGANIZACIONES SON RESPONSABLES.

4
Pero...
¿Responsables de qué?
¿Cuál es su papel (rol)? ¿Cuáles son sus tareas?
¿Qué áreas deben aceptar como de su responsabilidad?
¿Cuáles no?
¿Es limitada o ilimitadamente responsable?
?
Las organizaciones, según Peter Drucker (ob. cit. en
nuestra bibliografía), deben distinguir dos tipos diferentes
de responsabilidad social: una se basa en la premisa que las
organizaciones son responsables por lo que LE HACEN A LA
SOCIEDAD, es decir, por las INFLUENCIAS O IMPACTOS SOCIALES,
la otra se refiere a la responsabilidad que las organizaciones
debería o podrían HACER POR LOS PROBLEMAS DE LA SOCIEDAD.

Entonces, diferenciamos dos áreas de responsabilidad:

a) el de responsabilidad por las INFLUENCIAS O IMPACTOS


SOCIALES (lo que la organización le hace a la sociedad)

b) el de responsabilidad por los PROBLEMAS SOCIALES


(lo que la organización puede hacer por la sociedad)

Influencias o impactos sociales.

Toda organización, especialmente las empresas, en el


desarrollo de su actividad produce acciones, actividades,
fenómenos (tales como ruido, emanaciones, humo, contaminación,
congestiona-miento de tráfico) que no forman parte de su fin,
propósito o misión. Son subproductos, no deseados por la
sociedad, pero que la organización produce en el desarrollo de
su actividad, voluntaria o involuntariamente.

Cuál es la responsabilidad de la organización por estos


dese-chos, subproductos o consecuencias negativas, no deseadas
y a veces hasta inevitables?.

Peter Drucker es tajante:


toda organización es absoluta e ilimitadamente
responsable por sus impactos sociales.
"las influencias en el mejor de los casos son una molestia ...en el peor son nocivas.
... Pero nunca son beneficiosas. Siempre implican un costo y una amenaza. Consumen
recursos.
Destruyen o malgastan materias primas.
Y paralizan los esfuerzos de la administración.

5
El hecho de reconocer la responsabilidad ilimitada por
sus im-pactos sociales, no quiere decir que la organización no
deba tomar medidas, o que incluso no pueda encontrar en ella
una oportunidad.

P. Drucker, propone un tratamiento sistemático:

1.- Reconocer que la influencia es un costo y como tal


tratar de ELIMINARLA O REDUCIRLA.
Es necesario, por ejemplo, crear un congestionamiento de tráfico diario a las 9 hs.
de la mañana debido a que todos los obreros y/ o camiones) entran a la fábrica? O se podría
organizar turnos, abrir una puerta lateral,
u otra medida que redujera o eliminara el problema? (hablamos de congestionamiento, pero
el mismo razonamiento se podría hacer para contaminación u otra influencia social
negativa)

2.- En caso de no poder eliminarlo o que sea muy costosa


su eliminación o reducción, buscar una REGULACIÓN O ACCION
COMÚN, que obligue a todos a asumir la responsabilidad por el
impacto.

Tal vez no podamos eliminar o reducir, por ej. la emanación de gases de nuestros
hornos sino es a través del uso de filtros u otros elementos purificadores muy caros, que
elevaría nuestros costos. Si nosotros los utilizamos y nuestra competencia no, nos
encontraríamos en desventaja económica. ... ¿Qué hacer? Buscar que legalmente se obligue
a todos a asumir esa responsabilidad.

Entre estos dos extremos se encuentra la parte más


estimulante y desafiante:

3.- Convertir los impactos sociales en OPORTUNIDADES.


Un ejemplo de esto es el tratamiento que la Dow Chemical, una de las principales
empresas a nivel mundial, dedicada a la fabricación de productos químicos, en su problema
de contaminación del agua y el aire, estableció
un proceso de separación de desechos líquidos y gaseosos, que luego vendió a otras
empresas que tenían el mismo problema.
Otro ejemplo en el mismo rubro, es la compañía Du Pont, que preocupada por el
mismo fenómeno desarrollo un Laboratorio de Toxicidad Industrial, tan importante y
eficiente que comenzó a vender el servicio a otras empresas.
En estos casos, y en muchos otros más, el problema de influencia social se
transformó en una oportunidad para obtener recursos.
Responsabilidad social por los problemas sociales-
Limitaciones

Somos conscientes de que las cosas no se arreglan


automáticamente. El gobierno no ha podido o ha sido incapaz

6
de solucionar los problemas de los pobres, las villas miserias,
los niños "de la calle", de las minorías.
Como contrapartida, algunas organizaciones, especialmente
las empresas, tienen éxito. Algunas personas se preguntan
¿Cómo es po-sible enviar naves a Marte, y no solucionar los
problemas del hambre o la desnutrición? O por qué las empresas,
que ganan tanto dinero, no pueden ayudar a la educación, la
salud, el orden público?
La sociedad en general se ha vuelto hacia las
organizaciones, especialmente las de éxito, en busca de
solución a sus problemas.

¿Qué debe hacer "la organización" frente a los problemas


sociales?

La función de las organizaciones, especialmente, su


ejemplo típico, la empresa, ha sido siempre transformar las
necesidades so-ciales en oportunidades, en negocios rentables.
La organización debe su existencia al servicio de este fin.
Entonces, el cumplimiento de su misión o propósito es la
primera responsabilidad de toda organización.

La primera responsabilidad de la organización es hacia su


propia institución.

Que las organizaciones cumplan su fin es también la


principal necesidad y el principal interés de la sociedad. Por
ello la ha legitimado.
La sociedad no gana sino que pierde si la capacidad de
rendi-miento de una organización se ve afectada o disminuida
porque decide "hacer el bien", en vez de "hacer bien" por lo
que se le paga o retribuye.

Un negocio en quiebra no es un empleador deseable, no


podrá crear el capital que es necesario para la inversión y
generación de nuevos empleos, y es improbable que pueda
representar el papel de buen vecino, él debe ser un "buen
empresario", y no un "empresario bueno".
Una universidad que no prepare a sus alumnos para ser los
dirigentes y profesionales, que el futuro de la sociedad
necesita, no es socialmente responsable, por muchas buenas
obras que pueda atribuírsele. Tiene que ser una "buena
universidad" y no una "universidad buena". Tiene que tener
"buenos profesores" y no "profesores buenos"

Por consiguiente la primera "limitación" de la


responsabilidad por los problemas sociales es la

7
responsabilidad por el rendimiento específico de la
organización. La organización tiene que ser responsable,
socialmente, de ser tan competente como sea posible, en sus
propios asuntos.

La organización tiene la obligación de proteger los


recursos económicos que se le han encomendado, debe operar con
una rentabilidad adecuada, preservar la integridad de su
producto o servicio y su posición en el mercado.

"Hacer por responsabilidad social algo que es económicamente irracional e


insostenible de ningún modo supone una actitud responsable. Es sentimentalismo. Y el
resultado es siempre un perjuicio más grave" (P. Drucker)

Esto es tan válido para una empresa como para un hospital,


una universidad o cualquier otra organización.

Hay una "segunda limitación":


La organización no debe asumir responsabilidad en
áreas por las que no se tenga autoridad.

La responsabilidad (obligación de bien hacer) y la


autoridad (poder de hacer) en administración van juntas.

NO EXISTE AUTORIDAD SIN RESPONSABILIDAD, y tampoco debería


existir RESPONSABILIDAD SIN AUTORIDAD.

Por lo tanto, cuando una organización asume una


responsabilidad siempre debe preguntarse si tiene o debería
tener autoridad para ello.
Siempre que se formule el reclamo de que una organización asuma la
responsabilidad de esto o aquello, se debe preguntar: "Poseo la autoridad necesaria? Es
lógico que así sea?". Si la organización no tiene ni debe tener esa autoridad, cualquier
atribución de responsabilidad debe considerarse con grave sospecha. No es
responsabilidad; es sensualismo de poder (P. Drucker)

Existe además una "tercera limitación":

La organización no debe asumir responsabilidad en


áreas en las que no tenga competencia (capacidad técnica)

Una vieja sentencia afirma: "aquel que promete algo para


lo que no es competente, es culpable "prima facie", y es un
"irresponsable"

8
Asumir tareas para las cuales se carece de competencia
(ser incompetente) es un comportamiento irresponsable y también
es suma-mente cruel, porque crea expectativas que luego se
verán decepcionadas.

Una organización no puede asumir la solución de un


problema social para el cual no tiene competencia técnica, para
el cual no posee la capacidad analítica y técnica para
resolverlo. En consecuencia la organización, y sus
administradores, necesita saber en qué áreas es incompetente,
y tener la responsabilidad de no asumirlas.
Si uno fuese un técnico en un hospital y no un cirujano, tendría
que decir "Lo siento, pero no sé cómo extirpar el apéndice".
Uno debe ser capaz de decirlo, y si no se atreve a contestar
"no", y actúa en áreas en que no es competente es un farsante.

Si todas las organizaciones asumieran la responsabilidad


principal de su actividad (hospitales, centros educativos,
centros asistenciales, organismos oficiales) no tendríamos la
necesidad de cuestionarnos este asunto.

Esperamos que hayan podido entender claramente la


importancia de este punto. Que puedan diferenciar, ahora y en
su actividad fu-tura, la responsabilidad por las influencias o
impactos de la responsabilidad por los problemas sociales.

You might also like