DEFINICIÓN DE EFLUENTE:

En el ámbito de la hidrología, se denomina efluente al curso de agua que surge de un río o de

un lago como una ramificación. Al curso que, en cambio, se incorpora a un río o lago, se lo
llama afluente. Confluencia es el lugar donde confluyen estos cursos: los que salen (efluentes)
y los que llegan (afluentes). Los efluentes pueden ser naturales, como aquellos que surgen en
los deltas; o artificiales, creados por el ser humano para abastecer de agua a una población o
con fines de riego. En el caso de los efluentes artificiales, suelen ser canales o acequias.

Tratamiento de aguas y efluentes

*Tratamiento de aguas
Cuando hablamos de “calidad del agua” nos referimos a las
características químicas, físicas y microbiológicas de este elemento,
las cuales determinan la calidad en general del agua y su aptitud
frente a un uso en específico. Estas propiedades o son propias del
agua o son el resultado de sustancias disueltas o suspendidas en el
líquido. Este término tiene valor cuando se le evalúa en relación al uso
que se le va a dar al agua; por ejemplo, si será apta para el consumo
humano o no. El agua a la cual se le dará un uso doméstico debe
cumplir con ciertos requerimientos en especial, entre ellos, que sea
segura para beber, que no presenta ningún tipo de organismo o
sustancia y que sea químicamente estable.

Es por ello que el principal objetivo del tratamiento de aguas es

producir agua que sea útil, confiable y consistente para el uso
doméstico a partir de una fuente de agua cruda. Una planta de
tratamiento de aguas hace uso de muchos procesos de tratamientos
individuales que se conectan en un proceso que produce agua con la
calidad deseada. Los principales factores que se deben tomar en
cuenta cuando se realiza este proceso de tratamientos son:

 La calidad del recurso de agua (normalmente referida

como calidad de agua cruda).
 Las variaciones estacionales (u otras) en la calidad del
agua cruda.
 La calidad requerida del agua tratada.
 Requerimientos regulatorios.
 Otros factores como el tamaño o capacidad de la planta,
las condiciones del lugar, la disponibilidad de trabajadores
profesionales, el grado de automatización requerida, la
economía y otros factores.
El
objetivo del proceso de tratamiento de aguas es remover los
constituyentes indeseables del agua cruda para producir agua
tratada con la calidad requerida y procesar los residuos que
resultan de dicho proceso de tratamiento en una forma que sea
fácil y segura para disponer o reusar. La selección del proceso
para el tratamiento del agua es normalmente basado en una
evaluación en general de la calidad del agua cruda, lo cual
significa que la calidad y el tratamiento del agua es evaluada en
términos de parámetros de calidad en general como la turbiedad
y los parámetros de calidad específicos como la presencia de
altos niveles de hierro en el agua cruda. La turbiedad del agua
cruda determina qué procesos de clarificación podrían usarse,
mientras que la presencia de sustancias específicas determina la
inclusión de procesos en específico en el proceso de tratamie

*Tratamiento de efluentes
Por otro lado, el tratamiento de efluentes está muy relacionada a los
estándares o las expectativas para la calidad del efluente. Además,
este tratamiento también puede neutralizar o remover desechos
industriales y químicos tóxicos. Los efluentes que constituyen esta
clase de desperdicios provienen de fábricas y de industrias como la de
papel y metalúrgica, es decir, de plantas mineras y de canteras, o de
industrias de metal y acero, entre otras. Este tipo de tratamiento se
debería realizar en plantas industriales antes de descargar los
efluentes en alcantarillas municipales o cursos de agua. En caso el
efluente no se trata correctamente, esto afectará al medio ambiente y
al ser humano por igual. Los diversos procesos de tratamiento pueden
reducir:

 Elementos sólidos suspendidos: Las cuales son partículas

físicas que atascan ríos o canales. La mayoría de los
 sólidos pueden retirarse con técnicas de sedimentación,
dejando a los sólidos como deshechos o pulpa. Los cuerpos
finos o que tengan una densidad cercana a la del agua
puede ocasionar otros problemas, los cuales podrían
solucionarse mediante filtración o ultrafiltración.
 Extracción de aceite y grasa: Muchos de los aceites
pueden recuperarse con aparatos de separación, los
cuales pueden ayudar a alcanzar los niveles de pureza de
agua deseados. Los efluentes de grandes industrias como
refinerías de petróleo, plantas petroquímicas, plantas
químicas y plantas procesadoras de gas natural contienen
grandes cantidades de aceites y sólidos suspendidos.
Estas empresas utilizan separadores API, las cuales se
diseñan para separar dichos aceites y sólidos de los
efluentes.
 Organismos biodegradables: Estas pueden servir como
“alimento” para microorganismos en el cuerpo receptor.
Los microorganismo combinan esta materia con el oxígeno
del agua para producir la energía que necesitan para
desarrollarse y multiplicarse. Sin embargo, este oxígeno es
también necesario para otros organismos, como los peces.
Si existe una gran contaminación en el río, podría
ocasionar numerosas muertes de estos animales.
 Bacterias patógenas: Estas y otros organismos que
causen enfermedades son las más relevantes cuando el
agua es utilizada para beber o en donde la gente tenga
contacto cercano con esta agua.
 Nutrientes incluyendo nitratos y fosfatos: Estos
nutrientes pueden llevar a altas concentraciones de algas
no deseadas, las cuales podrían convertirse en cargas
pesadas de organismos biodegradables.
Los
efluentes provenientes de industrias metalúrgicas son las que contienen mayor
cantidad de sólidos.

Las aguas residuales industriales se generan como consecuencia de la actividad industrial. La

diversidad de las aguas residuales industriales puede ser muy grande (aguas de proceso,
limpieza, refrigeración, etc.), ya que pueden contener contaminantes de naturaleza muy
diferente.

La mayor parte de los procesos industriales utilizan el agua de una u otra manera. Este agua,
una vez ha sido utilizada, debe ser tratada antes de ser vertida con independencia de si se
devuelve al medio natural o de si se vierte a la red de saneamiento.

En el primer caso, el tratamiento debe ser el suficiente para que el vertido no cause ningún
impacto ambiental en el medio receptor; y, si se vierte a la red pública de saneamiento, la
composición de las aguas residuales debe cumplir con todos los parámetros físicos y químicos
de la normativa vigente. Existe una tercera opción para las aguas residuales industriales ya
depuradas: la reutilización.

Puesto que el agua es un recurso natural que no debe ser malgastado, la alternativa más
sostenible consiste en el tratamiento del agua residual hasta conseguir que su calidad sea
compatible con su reutilización en el proceso. La normativa en materia ambiental, cada vez
más exigente, lleva a que en muchos casos la reutilización sea la opción más competitiva.
3. Caracterización de los efluentes.
Para la buena definición de una estación de tratamiento de aguas residuales,
es necesario disponer de los siguientes datos, cuidadosamente establecidos:

 Volúmenes diarios;

 Caudales horarios mínimo y máximo;

 Composición del agua de aportación a la fábrica;

 Fabricaciones continuas, discontinuas;

 Importancia y periodicidad de las puntas de contaminación;

 Posibilidad de separación de circuitos;

 Posibilidades de tratamientos o de recirculaciones locales o parciales;

 Contaminaciones secundarias, incluso débiles u ocasionales, que

puedan afectar seriamente al funcionamiento de ciertos órganos de los
equipos de tratamiento (colas, alquitranes, fibras, aceites, arenas, etc.).

Al realizar el proyecto de una fábrica, estos datos, recogidos después del

análisis de las fabricaciones, deben compararse con informaciones
procedentes de fábricas existentes.
Cuando se trata de acondicionar una fábrica ya existente, conviene realizar una
comparación de las cantidades de contaminantes, detectados mediante un
análisis continuo y sistemático de los efluentes, con los consumos de productos
químicos de la fábrica.

TRATAMIENTO DE EFLUENTES
INDUSTRIALES

1.- Tratamientos separados.

A veces resulta conveniente aislar ciertos efluentes y someterlos a un
tratamiento específico. Se impone esta forma de proceder siempre que el
efluente que procede de una unidad de fabricación presenta una de las
siguientes características:

 Concentraciones muy elevadas de D.Q.O. debido a la presencia de

compuestos solubles;

 Concentraciones medias o elevadas de H2S, de NH4 o de elementos

tóxicos.

En lugar de diluir estos efluentes, suele ser más económico utilizar uno de los
siguientes procedimientos:

 Concentración con vistas a reutilizar el producto;

 Destrucción por pirólisis directa del líquido o del vapor procedente de

su stripping;

 Extracción líquido-líquido.

Se citan tres ejemplos de reducción de la contaminación del efluente general

de una fábrica:

 Regeneración de baños usados muy diversos (galvanoplastita,

mecánica), por eliminación discontinua o continua de sus impurezas en
disolución o en suspensión;
  Tratamiento químico de licores de sales o de ácidos cuya concentración
es superior al umbral de solubilidad de la sal de calcio correspondiente,
que puede entonces precipitar;

 Tratamiento de aceites solubles por vía química, térmica o por

separación por membranas.

2.- Tratamientos biológicos.

 La posibilidad de recurrir a tratamientos biológicos, es decir, a una
depuración de tipo biológica depende de la biodegradabilidad de los
efluentes, y deben tenerse en cuenta, en su concepción, ciertas
peculiaridades de las aguas industriales:

 Las aguas que se han sometido, generalmente con varios propósitos, a

un tratamiento fisicoquímico previo, se encuentran poco cargadas de
materias en suspención;

 Su composición en nutrientes casi nunca es equilibrada, con lo que debe

practicarse una corrección referente al fósforo y/o al nitrógeno;

 Una deficiencia inicial de microorganismos debe compensarse mediante

una siembra adecuada y la aclimatación de organismos específicos;

 La presencia de compuestos biodegradables puede hacer necesario el

mantenimiento de una relativa constancia de su concentración y el
desarrollo de una flora específica;

 Las concentraciones demasiado elevadas de sales minerales y, sobre

todo, sus variaciones rápidas, pueden perturbar el desarrollo de la
depuración;

 La nitrificación-desnitrificación puede verse afectada por unas

concentraciones demasiado elevadas de D.Q.O. y de amoníaco y dentro
de ciertas zonas de PH;
  Debe prestarse una atención especial al mantenimiento de zonas de
temperaturas bastante constante, ya que la temperatura de ciertos
efluentes favorece el desarrollo de bacterias termófilas.

 Composición de la línea de tratamiento:

 Fangos activados de alta carga, a media carga o, en el caso general, en

aeración prolongada;

 Lechos bacterianos de materiales plásticos ordenados, en

pretratamiento o en tratamiento de afino;

 Lechos bacterianos tradicionales;

 Filtros de biolite, en tratamiento principal o en tratamiento de afino;

 Lagunas aireadas o mixtas, en tratamiento de afino.

*La demanda química de oxígeno (DQO) es un parámetro que mide la cantidad de

sustancias susceptibles de ser oxidadas por medios químicos que hay disueltas o en
suspensión en una muestra líquida. Se utiliza para medir el grado de contaminación

https://definicion.de/efluente/

http://www.quimtiamedioambiente.com/blog/guia-tratamiento-aguas-efluentes/

https://condorchem.com/es/tratamiento-de-aguas-residuales-industriales/

https://www.textoscientificos.com/efluentes

https://es.wikipedia.org/wiki/Demanda_qu%C3%ADmica_de_ox%C3%ADgeno