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Una ventana abierta al mundo

Marzo 1972 (año XXV) - España : 26 pesetas

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Foto Embajada del Brasil, París
La Biblia de un mulato

Las esculturas monumentales de piedra policromada que el Aleijadinho ejecutó para las iglesias
TESOROS del Estado de Minas Gérais, en el Brasil, constituyen una de las expresiones más originales del
barroco latinoamericano. La fotografía muestra cuatro de los doce Profetas que se yerguen en la
DEL ARTE escalinata del atrio de la iglesia de Matosinhos, en Congonhas do Campo. El Aleijadinho, escultor
y arquitecto brasileño cuyo verdadero nombre era Antonio Francisco da Costa Lisboa (1730-
1814), era hijo de padre portugués y de madre africana. El grupo de los Profetas, así como las
MUNDIAL estaciones del Vía Crucis con todas sus capillas y sus 66 esculturas, fue ejecutado cuando el
artista tenía 60 años de edad y sufría de las secuelas de una terrible enfermedad, lo que expli¬
ca su sobrenombre cariñoso de Aleijadinho, es decir "el Baldadito". Su voluntad creadora era
tan grande que, según cuenta la leyenda, hacía atarse con ligaduras el cincel y el martillo a los
(J) Brasil muñones de los brazos.
1972
El
Correo Año
Internacional
del Libro

MARZO 1972
AÑO XXV
Página

PUBLICADO EN 12 IDIOMAS
4 TRAYECTORIA Y PRESENCIA
DE AMERICA LATINA

por César Fernández Moreno


Español Japonés
Inglés Italiano
10 LITERATURA Y SUBDESARROLLO
Francés Hindi
EN AMERICA LATINA
Ruso Tamul
por Antonio Candido
Alemán Hebreo

Arabe Persa
13 GRANDES TEMAS
DE LA CREACIÓN ARTÍSTICA

Publicación mensual de la UNESCO


(Organización de las Naciones Unidas para 17 UN ARTE ORIGINAL ABIERTO AL MUNDO
la Educación, la Ciencia y la Cultura).
por Jean Franco
Venta y distribución
Unesco, Place de Fontenoy, París-7-,

Tarifa de suscripción anual : 17 francos. 18 LA CIUDAD EN EL PAISAJE


Bienal : 30 francos.

Número suelto : 1,70 francos; España :


26 pesetas.
23 LOS BARROTES DE LA REALIDAD
El artista en la sociedad latinoamericana

por Jorge Enrique Adoum


Los artículos y fotograflas de este número que llevan el
signo © (copyright) no pueden ser reproducidos. Todos
los demás textos e ilustraciones pueden reproducirse, siempre
que se mencione- su origen de la siguiente manera : "De 27 LA LITERATURA LATINOAMERICANA
EL CORREO DE LA UNESCO", y se agregue su fecha
de publicación. Al reproducir los artículos y las fotos deberá
CRISOL DE CULTURAS
constar el nombre del autor. Por lo que respecta a las foto¬
por Rubén Bareiro Saguier
grafías reproducibles, serán facilitadas por la Redacción
siempre que el director de otra publicación las solicite
por escrito. Una vez utilizados estos materiales, deberán
enviarse a la Redacción tres ejemplares del periódico o revista
33 LATITUDES Y LONGITUDES
que los publique. Los artículos firmados expresan la opinión
de sus autores y no representan forzosamente el punto de
vista de la Unesco o de la Redacción de la revista.

34 LOS LECTORES NOS ESCRIBEN

2 TESOROS DEL ARTE MUNDIAL


Redacción y Administración
La Biblia de un mulato (Brasil)
Unesco, Place de Fontenoy, Parls-7»
Director y Jefe de Redacción
Sandy Koffler
Subjefe de Redacción
René Caloz

Asistente del Jefe de Redacción


Olga Rodel
Redactores Principales Nuestra portada
Español : Francisco Fernández-Santos
Francés : Jane Albert Hesse
Tupac Amaru, el jefe mestizo perua¬
Inglés : Ronald Fenton
no del siglo XVIII, descendiente del
Ruso : Georgi Stetsenko
último inca, en un original cartel del
Alemán : Hans Rieben (Berna)
Perú destinado a apoyar la actual
Arabe : Abdel Moneim El Sawi (El Cairo)
reforma agraria: he aqui una imagen
Japonés : Hitoshi Taniguchi (Tokio)
expresiva de la América Latina de
Italiano : Maria Remiddi (Roma)
hoy, de su cultura en plena flora¬
Hindi : Kartar Singh Duggal (Delhi)
ción. Mestizaje histórico, aportes
Tamul : N.D. Sundaravadivelu (Madras)
culturales y raciales múltiples, mo¬
Hebreo : Alexander Peli (Jerusalén)
dernidad y viejas raices, desarrollo
Persa : Fereydun Ardalan (Teherán)
y subdesarrollo... son factores que
Redactores
individualizan vigorosamente al vas¬
Español : Jorge Enrique Adoum to conjunto cultural latinoamericano.
Inglés : Howard Brabyn De algunos de sus aspectos más
Francés : Nino Frank
generales trata el presente número
Documentación : Zoé Allix de «El Correo de la Unesco». Túpac
Ilustración : Anne-Marie Maillard Amaru (José Gabriel Condorcanqui),
-sabio señor, padre justo» como le
Composición gráfica
llamó Pablo Neruda, se sublevó con¬
Robert Jacquemin
tra la dominación colonial española,
La correspondencia debe dirigirse al Director de la revista. siendo ejecutado en 1781.
Cartel de Rulz Durand
Foto © Vauthler - Decool
Desde 1967, la Unesco lleva a cabo un vasto estudio de las culturas En ningún pais latino¬
americano se quiere
de América Latina, en sus más variadas expresiones. El plan abarca
vivir más de presti¬
la literatura, la arquitectura y el urbanismo, las artes plásticas, gios fumigados por la
la música, las artes del espectáculo y una historia de las ¡deas. historia. La actualidad
universal nos envuel¬
Bajo el título general de «América Latina en su cultura», la Orga¬ ve dramáticamente y
nización va a iniciar próximamente, en colaboración con una dramáticamente nos

editorial de la región, la publicación de sendos volúmenes, en cuyo exige una definición


inmediata : o el pasa¬
planeamiento y redacción participan numerosos expertos latino¬ do de servidumbre o
americanos. En su mayoría, los textos que integran este número la transformación de

de «El Correo de la Unesco» aparecerán en forma más amplia y las formas originales
de nuestra sociedad
elaborada en varios de esos volúmenes. Se incluyen, además, citas en una convivencia
significativas de grandes escritores contemporáneos del continente. digna, donde la dis¬
Con ello, «El Correo de la Unesco» trata de presentar a sus lectores tribución de los bie¬
nes materiales no se
algunos aspectos importantes de la cultura del llamado «continente oponga a la libertad.
mestizo», cultura que, por la admirable síntesis de ideas y de razas Alfredo Pareja
que ofrece, por el vigor y la originalidad de sus realizaciones litera¬ Diezcanseco

rias y artísticas, despierta creciente interés en el mundo entero. (Ecuador)

TRAYECTORIA Y PRESENCIA
DE AMERICA LATINA Sao Paulo, la ciudad
brasileña de los rascacielos
y uno
importantes
de los más
centros
industriales de América
Latina. Su población
se calcula en 6 millones
de habitantes.
por César Fernández Moreno

«A,IMERICAes el país del América no nos interesa, pues el filó¬ mente es que, a partir de esta cadena
porvenir. En tiempos futuros se mos¬ sofo no hace profecías.» de explosiones o explosión en cadena,
trará su importancia histórica, acaso América Latina va anticipando otra:
Ha pasado siglo y medio desde que
en la lucha entre América del Norte la cultural.
Hegel hizo esta profecía sobre Amé¬
y América del Sur... Es un país de rica, mientras estaba diciendo que se Y, sin embargo, la expresión Amé¬
nostalgia para todos los que están negaba a hacerla. Lo que para él era rica Latina sigue siendo notoriamente
hastiados del museo histórico de la
porvenir, ya es presente para Amé¬ imprecisa. ¿Qué es la América Latina?
Vieja Europa... Lo que hasta ahora rica; el continente que para él era En primer término ¿por qué latina?
acontece no es más que el eco del naturaleza, es historia ya. El hablaba
Viejo Mundo y el reflejo de ajena de América del Norte y América del Entre las naciones que realizaron el
vida. Mas, como país del porvenir, Sur: en la del norte se implanta ac¬ descubrimiento, conquista y coloniza¬
tualmente la nación más fuerte del ción del nuevo continente, tres eran
mundo; la del sur, bajo su nombre lingüísticamenta latinas: España, Por¬
CESAR FERNANDEZ MORENO, ensayista
y poeta argentino, ha escrito numerosos actualizado de América Latina, repre¬ tugal y Francia. La más vasta concep¬
ensayos sobre cuestiones culturales, entre senta una de las ideas más dinámicas ción histórica de la región, por lo tanto,
los cuales cabe destacar Introducción a la debería englobar todas las tierras
del mundo actual.
poesía (México, Fondo de Cultura Econó¬
del nuevo continente que hubieran sido
mica, 1962), La realidad y los papeles (Ma¬ Una serie de factores la han pro¬
drid, Aguilar, 1967) y Argentina (Destino, pobladas por esas potencias, opues¬
movido al primer plano de la expecta¬
Barcelona, de aparición inminente). Como tas en bloque a la América anglosa¬
poeta su obra principal es Argentino hasta ción pública. El primero es la explo¬
jona, concentrada en el norte.
la muerte (Editorial Sudamericana, Buenos sión demográfica; su crecimiento
Aires, 1963; traducida al francés por Claude
continental es el mayor del mun¬ Con respecto a la composición ac¬
Couffon, Editorial P.-l. Oswald, París, 1969).
do: 2,9% anual. Actualmente cuenta tual de la América Latina, el mexicano
Ha sido fundador y director de revistas
y corresponsal de diarios y publicaciones con más de 270 millones de habitan¬ José Luis Martínez puntualiza que «es
periódicas, además de colaborar en la radio, tes, irregularmente distribuidos en algo más compleja que el simple es¬
la televisión y ef c/ne como crítico y como 21 millones de kilómetros cuadrados. quema que subsistía hasta mediados
autor. Actualmente es miembro de la Secre¬
taria de la Unesco, donde tiene a su cargo Esta explosión, que se produce en el del siglo. El conjunto original de vein¬
4 desde 1968 el programa de estudios que la
Organización está llevando a cabo sobre los
contexto económico llamado subdesa¬ tiún países subsiste (Argentina, Boli¬
via, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cu¬
rrollo, amenaza con transformarse, a
diversos aspectos de la cultura de América
su vez, en explosión política. Pero lo ba, Chile, República Dominicana,
Latina y al que nos referimos en la nota
Introductoria de arriba. que ahora nos interesa específica Ecuador, Guatemala, Haití, Honduras,
SIGUE EN LA PAG. 6
Foto © tomada del libro .Buenos Aires», fotografías de Alicia D'Amlco y Sara Fado, texto de Julio Cortázar, Editorial Sudamericana, Buenos Aires

TRAYECTORIA Y PRESENCIA DE AMERICA LATINA (viene de la pág. 4)

México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, En la región del Caribe tuvo lugar El gran ensayista argentino Ezequiel
Perú, Puerto Rico, El Salvador, Uru¬ durante los siglos XVI y XVII el des¬ Martínez Estrada, por ejemplo, tiende
guay y Venezuela). Sin embargo, piadado fenómeno de la trata: la ins- a asimilar los problemas latinoameri¬
Puerto Rico es un Estado Libre Aso¬ trumentalización de los hombres de canos con los africanos y enfatiza los
ciado a los Estados Unidos y los un color por los hombres de otro co¬ «factores de la vida nacional pertene¬
puertorriqueños tienen la ciudadanía lor. Cien millones de negros fueron cientes a un tipo de historia al que
estadounidense. Después de 1960 se «cazados» y trasladados de Africa; sólo no convienen los patrones que había¬
han creado cuatro nuevos países: Ja¬ una tercera parte de ellos pudo llegar mos tomado antes del modelo, y sí de
maica, Barbados, Trinidad y Tobago y a su destino americano. Sin embargo, los países africanos donde la esclavi¬
Guyana, de lengua inglesa predomi¬ este proceso tuvo el sorprendente re¬ tud y la servidumbre le presentan al
nante, que forman parte del British sultado que ahora podemos ver: que observador perspicaz, con similitudes
Commonwealth of Nations.» los esclavos retribuyeron a sus amos universales y típicas, formas de vivir
transmitiéndoles todo lo que pudieron comunes a los pueblos que aparente¬
La Conquista del siglo XVI aniquiló
conservar.de su cultura, enseñádoles mente ejercen su soberanía».
prácticamente las grandes culturas
muchas cosas: desde cantar y bailar
mesoamericana y andina pero, al mis¬
hasta luchar por su libertad. La idea de la región se nos vuelve
mo tiempo, les dio nueva vida dialéc¬
así más problemática a medida que in¬
tica en cuanto las transformó en el Esta América africana se hace sentir
tentamos adentrarnos en ella. El so¬
terminus ante quem de un proceso de fuertemente no sólo en la zona Inter¬
ciólogo Gino Germani señala dos con¬
occidentalización. Este proceso tam¬ media que es la región del Caribe, sino
cepciones polares, «diametralmente
bién afectó a los restantes pobladores en sus fronteras con las otras zonas,
opuestas entre sí, pero coincidentes
de América, que detentaban en aquel o sea, el norte de América del Sur y el
en acordar una existencia real a Amé¬
momento grados inferiores de evolu¬ sur de América del Norte. De tal
rica Latina». La primera «insiste sobre
ción: los que genéricamente eran lla¬ modo, esta interposición constituye a
el carácter latino, o grecorromano,
mados indios por los descubridores, la vez una barrera y un camino, y en
cristiano, hispánico o ibérico del sub-
inducidos por el gigantesco error geo¬ todos los casos un enriquecimiento.
continente americano». En la segunda,
gráfico que los llevaba a creer que ha¬ «América Latina es vista como una
Dentro de tal complejo de relaciones
bían llegado a Asia. en América Latina, son casi infinitas las unidad no solamente en términos
6 En el Interior de la actual América posibilidades de acciones y reacciones culturales y sociales, sino también y
Latina debe destacarse además la pre¬ y, paralelamente, la tentación intelec¬ sobre todo en términos políticos...
sencia de otro mundo radicalmente no tual de subsumir sus problemas en El factor unificante se origina en un
latino: el africano. otros próximos o análogos. objeto externo, antagónico y amena-
¿EL SIGLO
DEL PUEBLO?

Una visión esquemática de


la leyenda de nuestros si-
g/os /levaría a estas conclu¬
siones: que el siglo XVI fue
el siglo de los conquistado¬
res, en que entró el pueblo
de España con sus capita¬
nes a cubrir con una sola
bandera un continente de
esperanzas ; el XVII fue el
de los progenitores, en que
se formó un pueblo nuevo
para gozar de esa tierra; el
XVIII fue el de los precur¬
sores, que anunciaron la
libertad; el XIX fue el de los
caudillos, que desprendie¬
ron de España al mundo
americano y que enseñaron
el poder de la muchedum¬
bre puesto ba/o sus bande¬
ras. Siguiendo ese ritmo de
la escala, cabe preguntar
ahora : ¿ Será el XX el siglo
del pueblo ?
Germán Arciniegas
(Colombia)

A la izquierda, obreros de un
centro industrial de Buenos Aires.
A la derecha, un indio transporta
una carga de ollas de barro en
el mercado de Chichicastenango,
República de Guatemala.

zante». Si bien en la primera de estas cería que tiende a compensar, a base A pesar de esta intrincación concep¬
hipótesis el factor central parece ser de fertilidad, los territorios latinos que tual, el mundo contemporáneo redes¬
cultural y en la segunda político, debe fueron perdidos durante el periodo for- cubre con nuevo deslumbramiento este
observarse que ambas están limitadas mativo de las nacionalidades. complejo que insiste en llamarse Amé¬
por otro que es geográfico: en la pri¬ rica Latina, entidad todavía no definida,
mera se habla del «subcontinente ame¬
Tampoco sería aceptable una con¬
pero que presenta a simple vista la
cepción puramente lingüística que pre¬
ricano», en la segunda de un «objeto consistencia de lo real.
externo».
dicara como América Latina la que
forman aquellos países que hablan Si profundizáramos en busca de las
Estas peticiones de principio son
español o portugués. José Luis Martí¬ raíces de esta ostensible unidad, su
casi inevitables en toda conceptua-
nez recuerda que «de los 254,4 mi¬ historia suministra esta primera nota: ,
lizaclón de América Latina. Tampoco
llones de habitantes que forman la po¬ sucesiva dependencia del conjunto
serviría un criterio meramente racial,
blación de América Latina (1968), respecto de una potencia exterior.
que opusiera los latinos a los anglo¬
164,2 millones, o sea el 64,5 %, hablan Primero, de las monarquías ibéricas;
sajones. Y ésto, no sólo por la pre¬
español; 85,6 millones hablan el por¬ cuando ellas caen, los ingleses al prin¬
sencia de los indios, de los africanos
tugués en Brasil, o sea el 33,4 %, y el cipio y luego los norteamericanos eri¬
y de los variados inmigrantes ulterio¬
resto el francés y el inglés». Él resi¬ girán a expensas de América Latina
res, sino también por la ¡nescindible
dual 2,1 %, en efecto, habla francés sus imperios sucesores, no ya en lo
mezcla de todas esas razas que se da
o inglés y aún holandés (Curaçao, Su¬ político, pero sí en lo económico.
ejemplarmente en muchas islas de las
rinam). Y no sólo se opone a toda Esta nota de dependencia sería, aca¬
Antillas, donde se confunden bajo la
simplificación esta ensalada de len¬ so, la primera a considerar para deter¬
amplísima denominación de latina las
guas occidentales, sino también la su¬ minar el fugitivo concepto de América
sangres indígena, hispánica y africana
pervivencia de las lenguas precolom¬ Latina. Y la segunda, su inmersión en
(un caso detonante es Haití, país de
binas (hay países bilingües, como el la más fuerte polaridad histórica de
mayoría negra y donde se habla fran¬
Paraguay). la actualidad: el abismo que se abre
cés). Y asimismo por la indudable pe¬
netración racial y social de los lati¬ Por análogas razones, debería re¬ entre los países ricos y los pobres;
nos en la zona sur de los Estados Uni¬ chazarse también una concepción reli¬ oposición más vasta que la anterior,
dos; en este caso, la América Latina giosa que opusiera el catolicismo de pero no contradictoria con ella, ya que
va Invadiendo desde abajo a la anglo¬ América Latina al protestantismo de se ¡lustra en el conjunto de las Ameri¬
cas, donde la anglosajona es la rica y
7
sajona, merced a una especie de capi- las colonias anglosajonas (aproxima¬
laridad demográfica que sube a través damente la cuarta parte de Estados la latina es la pobre.
de Puerto Rico, México, Cuba, y pare Unidos es católica). Estos dos criterios se complemen-
SIGUE A LA VUELTA
TRAYECTORIA Y PRESENCIA DE AMERICA LATINA (cont.)

Del asombro al arte: nacimiento de una cultura

tan y confirman con un tercero más Los indios, por su parte, no enten¬ vista, de la cultura occidental en ex¬
elemental: el geográfico, en que se dían ese animal centáurico compuesto pansión. Pero si bien fueron rechaza¬
apoyan, expresa o tácitamente, todos de hombre y caballo y se maravillaban dos hacia las marcas de los imperios
los que hasta ahora hemos compul¬ cuando un conquistador caía de su ca¬ y transformados en proletariados exter¬
sado. América Latina sería toda aquella balgadura: jun ser que se divide en nos, ello no sucedió hasta el punto de
tierra americana que queda al sur del dosl Los Incas creían que los caba¬ que se borraran sin dejar huellas. Es¬
río Grande o Bravo (que marca el llos comían metal (el freno que lleva¬ tuvieron presentes siempre, y lo están
límite de Estados Unidos con México). ban en la boca); cuando los españo¬ todavía, no ya como influencia, sino
La habitualidad de esta expresión (al les piden pienso para sus animales, como real componente de este nuevo
sur del río Grande, o Bravo) sería lies ofrecen orol mundo occidental en formación: han
prueba de su veracidad: al sur de este volcado en él muchos de los caracte¬
Pues bien, este asombro recíproco
río existe cierta homogeneidad cultu¬ es el huevo de donde saldrá la cul¬ res de sus distintas civilizaciones,
ral, política, racial, lingüística, religiosa. tura latinoamericana, todo su arte crea¬ caracteres que cuentan hoy mismo en¬
tre los factores más salientes de la ori¬
Se han señalado repetidamente los tivo. El arte, en general, no es otra
tres incentivos que llevaron a los espa¬ ginalidad de América Latina.
cosa que la expresión del asombro,
ñoles a colonizar América: el impulso asombro que genera el impulso de
guerrero adquirido al reconquistar su compartir con los demás lo que el ar¬
propio territorio de manos árabes; el tista ha visto de extraordinario. En el
misticismo misional católico; la codicia caso de América, éste es el impulso
(de oro, de esclavos, de mujeres). que «saca» inesperados escritores de
Entre estos móviles, cada historiador, los mismos conquistadores, hasta de hecho mismo del des¬
cada ensayista destaca el que más modestos soldados casi analfabetos: cubrimiento había nacido ipso facto
impresiona a su sensibilidad, pero no simple pero maravillosamente, ellos una cultura mestiza, no sólo por la
hay duda que el conjunto de los tres cuentan la sorprendente verdad que amplia simbiosis de razas a que obligó
factores aducidos es el que determina vieron o que imaginaron ver. la ausencia de mujeres en las expe¬
ese proceso que habría de integrar el diciones españolas, sino por la inter¬
Las grandes civilizaciones precolom¬
mundo, prácticamente, con la mitad penetración mental que la comprensión
binas eran ricas en arquitectura, en
que de él faltaba. recíproca exigía. Los españoles debían
escultura, en música (esta última ha
Cristóbal Colón era, en cierto modo, explicar a los americanos qué era
llegado casi intacta a nuestros días).
un místico; pero ello no le impide Europa, y qué era América a los euro¬
La cultura europea aportó principal¬
adoptar toda una estrategia para sedu¬ peos. Los indios primero y los mesti¬
mente el lenguaje, la religión y diver¬
cir a los Reyes Católicos con el oro del zos después debieron modificar la
sas técnicas allí desconocidas. Pero
continente que quería «venderles»... y conciencia que de sí mismos tenían
a medida que transcurría la historia, el
como americanos.
por cierto que lo consigue. «El oro es acervo cultural de América Latina iba
excelentísimo escribe , de oro se polarizándose como una estéril opción La solución a aquella falsa opción
hace tesoro, y con él, quien lo tiene que repetía la situación del conquista¬ entre lo americano y lo europeo con¬
hace cuanto quiere en el mundo y dor y el conquistado: ser europeo, sistió en ser ambas cosas, es decir el
llega a que echa las ánimas al Paraí¬ ser americano. O sea: hombre europeo modificado por Amé¬
so» Del oro al paraíso: así podría rica y viceversa. Triunfa así en la cul¬
a) por una parte, las supervivencias
titularse una biografía de Colón. tura superior latinoamericana una con¬
culturales de las grandes civilizaciones
cepción sintética de sí misma, donde
que preexistían al descubrimiento y la
se reconocen no sólo los aportes de
conquista, tales como las que tienen
las culturas autóctonas, sino también
su asiento en las actuales repúblicas
los de las culturas europeas descu¬
de México y Perú;
H ABRA que agregar ahora
bridoras, la fundamental aportación
b) por otra, la cultura europea africana que llega a América a través
un cuarto factor que es consecuencia
transportada por el descubridor y el de la esclavitud y, por último, el refres¬
de aquellos tres: el primer sentimiento
conquistador como un producto más camiento de las fuentes universales
que inundó el corazón de los descu¬
de la expansión occidental que ellos implícitas en los movimientos inmi¬
bridores y conquistadores, o sea, el
representaban; o sea, como una acti¬ gratorios del siglo XIX.
asombro. El de Colón ante América
vidad específicamente europea, aun¬
linda frecuentemente con el delirio: «El nuevo Mundo dice Paul Ri¬
que cumplida por los colonizadores en
cuando se acerca a la desembocadura vet ha sido, desde la época prehis¬
la nueva región conquistada.
del Orinoco piensa que ha descubierto tórica, un centro de convergencia de
uno de los ríos que provienen del Esta dicotomía provoca una oposi¬ razas y pueblos... Es en verdad cu¬
paraíso. ción que durante mucho tiempo fal¬ rioso que el período histórico de la
seará las relaciones de la cultura lati¬ evolución americana no sea sino re¬
Este asombro continúa en cada uno
noamericana con la europea, presen¬ petición de los sucesos étnicos que
de los españoles que lo siguieron. Los
tando como lo único auténtico y original condicionaron su poülamiento. Desde
indios que fuman, por ejemplo, son
de América Latina aquellas subsisten¬ que fue descubierta, América ha se¬
descritos por los conquistadores como
cias de las civilizaciones que no hu¬ guido siendo un foco de atracción
«hombres y mujeres que pasean fumi¬
bieran sido afectadas por el impacto para los pueblos y razas más diversos,
gándose con un tizón encendido.»
de la conquista y la colonización. En igual que lo fue durante su larga pobla¬
Un ambiente de novela de caballerías
esta concepción, por lo tanto, se re¬ ción precolombina.»
ilumina la conquista de México. La
chazaba la cultura europea como una
ciudad de Tenochtitlán (México), dice De esta manera, la posible ascen¬
manifestación colonialista y puramente
el conquistador y cronista Díaz del mimética.
dencia asiática y oceánica de todos
Castillo, «parecía a las cosas de en¬ los pueblos americanos y la posible
cantamiento que cuentan en el libro de En efecto, al ser vencidos militar¬ integración geográfica inmemorial de
Amadís». El mismo Cortés descubre mente, los primitivos habitantes de América con Africa son datos que
más al norte las costas que llama de América es decir, los verdaderos vendrían a completar la universalidad
8 California, cuyo nombre proviene de
una novela de caballerías. Nadie podía
americanos fueron
sus imperios y posesiones, recibiendo
despojados de de América; algo así como un anticipo
del mundo futuro, donde, más allá de
creer lo que le estaba pasando: nadie en cambio los beneficios, muy dis¬ las razas y de las culturas, el hombre
era dueño de su destino. cutibles desde su proprio punto de será uno.
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La Plaza de las Tres Culturas, Partiendo de esta conciencia que de sí mismos van cobrando los
en el barrio de Tlatelolco, Ciudad pueblos iberoamericanos, van surgiendo las preguntas sobre el puesto
de México. En la parte inferior, restos de los mismos en la historia, sobre su ser y sus posibilidades en ella...
de una pirámide azteca; en el centro, La América ibera va abandonando, asi, su absurdo empeño por ser
una iglesia de estilo colonial español otra que la que es. Sus diferencias, en relación con el Occidente, no
del siglo XVII; al fondo, un gran
edificio moderno.
son ya diferencias que le hagan sentirse inferior, sino simple y pura¬
mente distinta, personal... Iberoamérica encierra en su historia una
doble experiencia : la de la historia de los pueblos dominantes y la
de los pueblos dominados. Una doble experiencia que, en general,
falta a los hombres de otros pueblos de nuestros días, que sólo sabían
de imponer dominio o sufrirlo. Esta experiencia, si ha de dar frutos, 9
UN PUENTE tendrá que llevar a la América ibera a una justa asimilación de los
valores de los mundos de que es puente.
ENTRE CULTURAS Leopoldo Zea (México)
LITERATURA Y

SUBDESARROLLO
A la derecha, un bosque de
gigantescos lápices en un

EN AMERICA
acto de masas realizado en
la Plaza de la Revolución de

La Habana, conde motivo


la Campaña Nacional de Alfa¬
betización. Al iniciarse ésta
en 1961, había en Cuba

LATINA 980.000 analfabetos (el 23,6


por ciento de la población).
En un lapso de doce meses,
35.000 maestros de escuela,
100.000 estudiantes y 13.000
obreros, constituidos en «Bri¬
gadas de Alfabetización», en¬
por Antonio Candido señaron a leer y escribir a
708.000 adultos, quedando un
residuo de 3,9 % de analfa¬
betos. Las campañas de alfa¬
betización en América Latina
han reducido el indice de
analfabetismo del 32,5 por
ciento al 23,6 en el espacio
de diez años.

Ensanchemos el campo espiritual: demos el alfabeto a todos


los hombres; demos a cada uno los instrumentos mejores
para trabajar en bien de todos; esforcémonos por acercar¬
nos a la justicia social y a la libertad verdadera.

Pedro Henríquez Ureña (República Dominicana)

CiL escritor brasileño Mario aún no realizada. Desde la segunda, se nales», haciendo del exotismo un
Vieira de Mello, uno de los pocos subraya la pobreza actual, la atrofia: motivo de optimismo social.
latinoamericanos que han tratado de lo que falta y no lo que abunda. Pero también en la otra cara de la
las relaciones entre subdesarrollo y Esta ¡dea es justa y ayuda a com¬ medalla las visiones de desaliento
cultura, establece una distinción válida prender ciertos aspectos fundamentales dependían del mismo orden de asocia¬
no sólo para su país sino también para de la creación literaria en Latino¬ ciones, como si la debilidad o la desor¬
toda Latinoamérica. Dice él que en un américa. En efecto, la ¡dea de «país ganización de las instituciones consti¬
momento determinado se produjo un nuevo» produce en la literatura algu¬ tuyeran una paradoja inconcebible,
cambio marcado de perspectiva, pues nas actitudes fundamentales, derivadas frente a las grandiosas condiciones
hasta más o menos el decenio de 1930 de la sorpresa, del interés por lo exó¬ naturales. («En América todo es
predominaba entre nosotros la noción tico, de un cierto respeto por lo gran¬ grande, sólo el hombre es pequeño.»)
de «país nuevo», es decir, un país que dioso y de la esperanza en cuanto a Ahora bien, dada esta unión causal
aun no ha podido realizarse pero que las posibilidades. La idea de que Amé¬ «tierra bella patria grande», no es
se atribuye a sí mismo graneles posi¬ rica constituye un sitio privilegiado se difícil ver la repercusión que iba a
bilidades de progreso futuro. expresó en proyecciones utópicas, tener la conciencia del subdesarrollo
Sin haberse producido un cambio que influyeron en la fisonomía de la como cambio de
que perspectiva
esencial en la distancia que nos ale¬ Conquista. impuso la realidad de la pobreza de
jaba y nos aleja de los países ricos, Los intelectuales latinoamericanos los suelos, del arcaísmo de las técni¬
lo que predomina ahora es la noción heredaron ese estado de entusiasmo cas, de la pasmosa miseria de las
de «país subdesarrollado». Desde la y lo transformaron en instrumento de poblaciones, de su incultura paraliza¬
primera perspectiva, se ponía de relieve afirmación nacional y de justificación dora. La visión resulta pesimista en
la pujanza y, por lo tanto, la grandeza ideológica. La literatura se hizo len¬ cuanto al presente y problemática en
guaje de celebración y ternura, favo¬ cuanto al futuro.

recida por el Romanticismo, recu¬ La conciencia del subdesarrollo es


ANTONIO CANDIDO (Antonio Candido de rriendo a la hipérbole y convirtiendo
Mello e Souza), crítico literario y ensayista posterior a la Segunda Guerra Mun¬
el exotismo en estado de alma. Nues¬
brasileño, es profesor de literatura brasileña dial y se manifestó claramente a partir
de la Facultad de Filosofía, Ciencias y Letras tro cielo era más azul, nuestras flores de los años 50. Pero ya en el decenio
de la Universidad de Sao Paulo (Brasil). Se más lozanas, nuestro paisaje más ins¬ de 1930 se había producido un cam¬
ha distinguido como profundo conocedor y
pirador que el de otros países. bio de orientación, sobre todo en la
estudioso de la literatura de su país y, en
general, de América Latina. Entre sus obras La idea de patria se vinculaba estre¬ narración regionalista. Esta narración
destacan Ficçâo e confessäo (1956), O obser¬ chamente a la de naturaleza y en parte abandona su amenidad y su curiosi¬
vador literario (1959J, Tese e antitese (1964)
extraía de ella su justificación. Ambas dad, presintiendo o percibiendo lo que
y, especialmente, Formacäo da literatura bra-
10 sileira. Momentos decisivos (1959), en dos conducían a una literatura que com¬ había de enmascaramiento en la gra¬
volúmenes. En ^español ha publicado una pensaba el retraso material y la debi¬ cia pintoresquista o en la caballe¬
Introducción a ia literatura del Brasil (Monte
lidad de las instituciones con la super¬ rosidad ornamental con que antes se
Avila Editores, Caracas, 1968, y Casa de
valoraron de los aspectos «regio trataba al hombre rústico. No es falso
las Americas, La Habana, 1971).
decir que la novela adquirió, desde nación frente a influencias y presiones ejemplo nos hace recordar que
este punto de vista, una fuerza des- externas. en Latinoamérica el problema de los
mistificadora que se anticipa a la toma El cuadro de esa debilidad se com¬ públicos presenta características ori¬
de conciencia de los economistas y pleta con factores de orden econó¬ ginales, pues es el único conjunto de
políticos. países subdesarrollados que hablan
mico y político, tales como los niveles
En este ensayo vamos a hablar insuficientes de remuneración y la idiomas europeos (a excepción de los
alternativa o comparativamente de las anarquía financiera de ciertos "gobier¬ grupos indígenas) y que provienen cul-
características literarias en la fase nos, articulados con políticas educa¬ turalmente de metrópolis todavía hoy
día semidesarrolladas o atrasadas. En
de la conciencia amena de retraso, cionales ineptas. Salvo en lo que se
correspondiente a la Ideología de refiere a los tres países meridionales esas antiguas metrópolis (España y
«país nuevo», y en la fase de la que constituyen la «América Blanca» Portugal) la literatura fue y sigue
conciencia catastrófica de retraso, siendo un producto de consumo res¬
de los europeos, han sido necesarias
correspondiente a la noción de «país revoluciones para cambiar las condi¬ tringido, si se la compara con la de
subdesarrollado». los países desarrollados.
ciones de analfabetismo predominante,
Si nos fijamos en las condiciones como fue el caso lento de México y el Efectivamente, tanto en España y Por¬
materiales de existencia de la litera¬ caso rápido de Cuba. tugal como en nuestros países existe
tura, el hecho básico quizá sea el El analfabetismo no es, en algu¬ una condición negativa previa, que es
analfabetismo, que, en los países nos casos, motivo suficiente para el número de los que pueden eventual-
donde existía una cultura precolombina explicar la debilidad de otros sectores, mente constituir los lectores de las

adelantada, resulta agravado por la plu¬ aunque sea el rasgo básico del sub¬ obras. Esto hace que los países latino¬
ralidad lingüística todavía vigente. desarrollo en el terreno cultural. En americanos estén más próximos a las
otro sector, un hecho como el condiciones virtuales de las antiguas
Al analfabetismo se vinculan, en
desarrollo editorial de los años 40 en metrópolis que los países subde¬
efecto, las manifestaciones de debili¬
dad cultural: falta de medios de comu¬ México y Argentina mostró que la sarrollados de Africa o de Asia, que
falta de libros no era consecuencia hablan Idiomas diversos de los de las
nicación y difusión (editoriales, biblio¬
únicamente del número reducido de suyas y donde se plantea el grave
tecas, revistas, periódicos); inexisten¬
lectores y del bajo poder adquisitivo, problema del idioma en que debe
cia, dispersión y debilidad de los
pues toda América, incluso la de manifestarse la creación literaria.
públicos disponibles para la literatura,
resultado del pequeño número de lec¬ habla portuguesa, absorbió sus tiradas
Las posibilidades de comunicación
a veces cuantiosas.
tores reales (mucho menor que el del escritor latinoamericano, en el
número reducido de alfabetizados); Quizá pueda concluirse que los cuadro general del Tercer Mundo, son
imposibilidad de que los escritores malos hábitos editoriales y la falta mucho mayores, no obstante la situa¬
se especialicen en sus tareas litera¬ de comunicación agravaron todavía ción actual que reduce en tan gran 11
rias, en general realizadas como acti¬ más la inercia de los públicos, medida a sus públicos eventuales. Sin
vidades marginales o aun por mera y que había una capacidad no embargo, es también posible imaginar
afición; falta de resistencia o discrimi satisfecha de absorción. Este último que el escritor latinoamericano está

SIGUE A LA VUELTA
LITERATURA Y SUBDESARROLLO (cont.)

condenado a ser siempre lo que ha retraso en función de la prolongación


sido: un productor para minorías. del estatuto colonial, traducido en la
En efecto, no hay que olvidar que persistencia de las oligarquías y del
los modernos recursos audiovisuales imperialismo extranjero. Al final,
pueden producir tal
en los cambio cuando todo llevaba a una teoría de la
procesos de creación y en los medios transformación de las estructuras
de comunicación que, cuando las sociales como condición necesaria,
grandes masas lleguen finalmente a la se produce una especie de estrangula¬
instrucción elemental, buscarán fuera ción del razonamiento, y Bonfim ter¬
del libro la satisfacción de las necesi¬ mina preconizando la instrucción como
dades universales de ficción y poesía. panacea. Nos sentimos, ahí, en el cen¬

Mejor dicho: en la mayoría de nues¬ tro de la ilusión ilustrada, ideología


de la fase de conciencia esperanzada
tros países hay grandes masas que,
sin haber alcanzado todavía el nivel de retraso, que, significativamente,
de la literatura erudita, se sumergen en hizo bien poco para implantar real¬
mente tal instrucción.
un mundo folklórico de comunicación
oral cuando, alfabetizadas y absorbi¬ Así, los Intelectuales construyeron
das por el proceso de urbanización, una visión igualmente deformada en
pasan al dominio de la radio, de la tele¬ cuanto a su posición ante la incultura
visión, de las «tiras cómicas» y dominante. Al lamentar la ignorancia
de las revistas de historietas que del pueblo y desear que desapare¬
constituyen la base de una cultura ciera, a fin de que la patria se irguiera
de masas. De ahí que la alfabetización automáticamente a sus altos destinos,
no incremente proporcionalmentç el se excluían a sí mismos del contexto y
número de lectores de literatura, como se consideraban un grupo aislado,
la entendemos aquí, sino que lance a realmente «fluctuante». Y, en efecto,
los alfabetizados, al lado de los anal¬ flotaban, con o sin conciencia de
fabetos, directamente de la fase folkló¬ culpa, por encima de la incultura y el
rica a esa especie de folklore urbano retraso, convencidos de que estos no
que es la cultura masificada. podían contaminarlos, ni afectar a la
calidad de lo que hacían.
Este problema es, además, uno de
los más graves en los países subde¬ En verdad, la Incultura general pro¬
sarrollados, por la interferencia gene¬ ducía y produce una debilidad mucho
ralizada de lo que podría llamarse el más aguda, que interfiere en la vida
know-how cultural y de los propios intelectual y en la calidad misma de
materiales ya elaborados de cultura las obras.

masificada, provenientes de los países La penuria cultural sujetaba nece¬


desarrollados, que pueden por este sariamente al escritor a los modelos
medio no tan sólo divulgar normal¬ metropolitanos y europeos en general,
mente sus valores, sino también estableciendo un agrupamiento en
actuar anormalmente a través de ellos cierto modo aristocrático respecto al
para orientar la opinión y la sensibi¬ hombre inculto. En efecto, en la me¬
lidad de las poblaciones subdesarro¬ dida en que no existía público local
lladas hacia sus intereses políticos. suficiente, el escritor escribía como
LA DIMENSIO
El analfabetismo y la debilidad cul¬ si en Europa estuviera su público
tural no influyen solamente en los ideal, y así se disociaba muchas URBANA
aspectos exteriores que acaban de veces de su tierra. Esto daba origen
a obras que los autores y los lectores Tras el auge de la novela realista y regio-
mencionarse. Para el crítico, es más
nalista, cuya acción transcurría preferen¬
interesante su interferencia en la con¬ consideraban altamente refinadas,
temente en el campo, la creación literaria
ciencia del escritor y en la propia porque asimilaban las formas y los
latinoamericana se ha enriquecido con el
naturaleza de la creación. valores europeos. estudio psicológico de los tipos humanos

En la época que llamamos de la Hay que recordar otro aspecto de de las ciudades, cuya complejidad se
este aristocraticismo alienante, que en refleja en una literatura que, considerada
«conciencia amena de retraso», el
aquel tiempo parecía refinamiento elo¬ globalmente, es una de las más originales
escritor participaba en la ideología de y vigorosas del mundo. Arriba, la calle
la Ilustración, según la cual la instruc¬ giable: el uso de idiomas extranjeros
Florida de Buenos Aires, ciudad que, como
ción trae automáticamente consigo to¬ en la creación. Ciertos ejemplos extre¬
tantas otras de América Latina, ha experi¬
dos los beneficios que permiten la mados rayaban en la comicidad más mentado en los últimos decenios un enor¬
paradójica, tal como el de un román¬ me crecimiento.
humanización del hombre y el progreso
de la sociedad. Al principio, instrucción tico brasileño tardío y de quinta cate¬
preconizada para los ciudadanos, mi¬ goría, Pires de Almeida, que publicó
noría a la que pertenecían los que a comienzos de siglo, en francés, una
obra teatral nativista: La Fête des
gozaban de las ventajas económicas
Crânes, drame de m indiennes
y políticas; después, para el pueblo,
en trois actes et douze tableaux...
entrevisto de lejos y vagamente menos
como realidad que como un concepto Todo ello no existía sin ambivalen¬ »
liberal. El Emperador Pedro II del Bra¬ cia, pues, por un lado, las élites imi¬
NATURALEZA
sil decía que habría preferido ser pro¬ taban lo bueno y lo malo de las suges¬
fesor, lo que denota una actitud equi¬ tiones europeas, pero, por otro, a En contraste con este pai¬
valente al punto de vista del argentino veces simultáneamente, afirmaban la saje casi lunar de la Pata¬
Sarmiento, según el cual el predo¬ más intransigente independencia espi¬ gonia chilena, se encuen¬
minio de la civilización sobre la bar¬ ritual, en un movimiento pendular entre tran en América Latina

barie tenía como presupuesto una la realidad y la utopía de carácter impenetrables selvas vírge¬
urbanización latente, basada en la ins¬ ideológico. Y así vemos que analfabe¬ nes, inmensas llanuras y
trucción. -sertones-, inexpugnables
tismo y refinamiento, cosmopolitismo y
cordilleras y poderosos
12 Un caso curioso es el del pensador regionalismo, pueden tener sus raíces
mezcladas en el suelo de la incultura y
ríos. Esta grandiosidad de
brasileño Manuel Bonfim, que publicó la naturaleza aparece vi¬
del esfuerzo para superarla. gorosa y frecuentemente
en 1905 un libro de gran interés, A
América Latina. Bonfim analiza nuestro Un problema que resulta interesante en la poesía, la novela y
las artes plásticas.
SIGUE EN LA PAG. 15
L,SW*J
LA REALIDAD MÍTICA

«Lo real maravilloso dice el cubano Alejo Carpentier es patrimonio de toda nuestra
América... América está lejos de haber agotado su caudal de mitologías». Esta presencia
de la realidad mítica se manifiesta en numerosas creaciones literarias y artísticas del
continente. Ejemplo, este óleo del pintor cubano Wilfredo Lam titulado «Los Abalochas
danzan por Changó», donde diversos espíritus de la mitología afrocubana (el de la
fecundidad, el de la resurrección, el dios de la guerra) sugieren una selva tropical.

En cuanto a nosotros, escritores de la vasta extensión americana,


GRANDES escuchamos sin tregua el llamado de llenar ese espacio enorme con
seres de carne y hueso. Somos conscientes de nuestra obligación de
pobladores y al mismo tiempo que nos resulta esencial el deber de
TEMAS DE una comunicación crítica en un mundo deshabitado y no por deshabi¬
tado menos lleno de injusticias, castigos y dolores sentimos también
el compromiso de recobrar los antiguos sueños que duermen en las
LA CREACIÓN estatuas de piedra, en los antiguos monumentos destruidos, en los
anchos silencios de pampas planetarias, de selvas espesas, de ríos que
cantan como truenos. Necesitamos colmar de palabras ios confines de
un continente mudo y nos embriaga esta tarea de tabular y de nombrar.
ARTÍSTICA
Pablo Neruda (Chile)

IGUE EN LA PAG. 14

oto Roberto Montandón - Universidad de Chile, Santiago

^m

¿4*
GRANDES TEMAS DE

LA CREACIÓN ARTÍSTICA (cont.)

Detalle del interior de la iglesia


de estilo colonial de San Martin

Tepotzotlán (México).

EL BARROCO

Nuestro arte siempre fue barroco :


desde la espléndida escultura
precolombina y el de los códices,
hasta la mejor novelística actual
de América, pasando por las
catedrales y monasterios colo¬
niales de nuestro continente...
No temamos el barroquismo, na¬
cido de árboles, de leños, de
retablos y altares, de tallas deca¬
dentes y retratos caligráficos y
hasta neoclásicos tardíos; barro¬
quismo nacido de la necesidad de
nombrar las cosas, aunque con
ello nos alejemos de las técnicas
en boga.
Alejo Carpentier (Cuba)

EL INDIGENISMO

El indio no es sólo historia y arqueología, sino presente,


vivo y viviente... No es justo ni razonable ni digno restar
de nuestra tradición la parte de ella que vemos todos
los días en la canción, en la danza, en el libro, en la calle,
en nuestras venas y en nuestro corazón de hombres.

Andrés Iduarte (México)


LITERATURA Y SUBDESARROLLO (viene de la pág. 12)

discutir desde el punto de vista de la tor. El poeta chileno Vicente Huidobro


dependencia originada por el retraso establece el «creacionismo» en París,
cultural es el de las influencias de inspirado en los franceses y los ita¬
varios tipos, buenas o malas, inevita¬ lianos; escribe en francés sus versos y
bles o innecesarias. expone en francés sus principios, en
revistas como L'Esprit Nouveau. Direc¬
Nuestras literaturas (como también
tamente tributarios de los mismos orí¬
las de la América del Norte) son fun¬
damentalmente ramas de las literaturas genes son el «ultraísmo» argentino y el
«modernismo» brasileño. Y todo eso
metropolitanas. Y, si dejamos de lado
no impidió que tales corrientes fueran
las susceptibilidades del orgullo na¬
cional, vamos a ver que, no obstante innovadoras, y sus propulsores, los
creadores por excelencia de la nueva
la autonomía que fueron adquiriendo
en relación con éstas, tienen todavía literatura: además de Huidobro y
Borges, los brasileños Mario de An-
un carácter marcadamente reflejo. El
proceso de autonomía consistió, en
drade, Oswald de Andrade y Manuel
Bandeira.
buena parte, en transferir la dependen¬
cia, de manera que otras literaturas Sabemos, pues, que somos parte de
europeas no metropolitanas, sobre todo una cultura más amplia, de la cual
la francesa, fueron volviéndose el mo¬ participamos como variedad cultural.
delo a partir del siglo XIX, lo que Es que, al contrario de lo que han
además ocurría también en las antiguas supuesto a veces candidamente nues¬
metrópolis. Actualmente, es necesario tros abuelos, es una ilusión hablar de
tener en cuenta la literatura norte¬ supresión de contactos e influencias.
americana, que constituye un nuevo En un momento en que la ley del mun¬
foco de atracción. do es la interrelación y 1a interacción,
las utopías de la originalidad, han per¬
Esta es la que podría llamarse in¬
dido su sentido patriótico, com¬
LA PRESENCIA fluencia inevitable, sociológicamente
prensible en una fase de formación
vinculada a nuestra dependencia,
DEL NEGRO nacional reciente, que originaba una
desde la propia Conquista, y al tras¬
visión provinciana y umbilical.
plante a veces brutalmente forzado de
La cultura africana en el Brasil culturas. En la fase actual, de conciencia del
está lejos de ser una curiosidad subdesarrollo, la cuestión se presenta
Muchos consideran el «modernis¬
etnográfica o una cosa de museo. por consiguiente más matizada. ¿Hay
mo» hispanoamericano como una es¬
Es una realidad viva y creadora una paradoja en esto? En efecto,
pecie de rito de transición que señaló la
que no se detiene en el mero pin¬ cuanto más se entera de la realidad
mayoría de edad literaria a través de la
toresquismo... A lo largo de la trágica del subdesarrollo, más el hom¬
capacidad de contribución original. Sin
historia del Brasil la contribución bre libre que piensa se cree en la ne¬
embargo, si enmendamos las perspec¬
de los negros a la formación de un cesidad de rechazar el yugo econó¬
tivas y definimos los campos, quizá
espíritu nacional y de una cultura mico exterior y de modificar las estruc¬
veamos que esto es más verdadero
brasileña ha sido tan valiosa turas Internas, que alimentan la situa¬
como hecho psicosociológico que
como su aporte ai desarrollo eco¬ ción de subdesarrollo.
como realidad estética. Es cierto que
nómico del país.
Rubén Darío, y eventualmente todo el Pero, al mismo tiempo, mira con más
Gilberto Freyre (Brasil) , movimiento, invirtiendo por vez pri¬ objetividad el problema de las influen¬
mera la corriente y llevando la influen¬ cias, considerándolas como vinculación
cia de América a España, represen¬ cultural y social. Tanto es así que el re¬
taron una ruptura en la soberanía lite¬ conocimiento de la vinculación va aso¬
raria que ésta ejercía. Pero el hecho ciado al inicio de la capacidad de
es que tal cosa no se hizo a partir de innovar en el nivel de la expresión y
recursos expresivos originales, sino al intento de luchar en el del desa¬
de la adaptación de procesos y actitu¬ rrollo económico y político. En cambio,
des franceses. Lo que los españoles la afirmación tradicional de origi¬
recibieron fue la influencia de Francia nalidad, con un sentido de parti¬
ya filtrada por los latinoamericanos, cularismo elemental, llevaba y lleva,
que de este modo los substituyeron por un lado, a lo pintoresco y, por
como mediadores culturales. otro, al servilismo cultural, dos enfer¬
medades del crecimiento, quizá inevi
Una etapa fundamental en la supe¬
tables pero en todo caso alienadoras.
ración de la dependencia es la capa¬
cidad de producir obras de primer ran¬ A partir de los movimientos estéti¬
go, influidas, no por modelos ex¬ cos del decenio de 1920 y de la Intensa
tranjeros, sino por ejemplos nacionales conciencia estético-social de los años
anteriores. Esto significa el estableci¬ más recientes, empezamos a sentir que
miento de una causalidad cultural in¬ la dependencia se encamina hacia una
terna, que hace incluso más fecun¬ interdependencia cultural. Esto no sólo
dos los préstamos tomados a otras les dará a los escritores de Latinoamé¬
culturas. Así es posible decir que el rica la conciencia de su unidad en la

argentino Jorge Luis Borges repre¬ diversidad, sino que favorecerá ade¬
senta el primer caso de incontestable más la eclosión de obras maduras ori¬
influencia original, ejercida de manera ginales, que serán lentamente asimi¬
amplia y reconocida sobre los países ladas por otros pueblos, incluso los
de origen por un modo nuevo de en¬ de los países metropolitanos e imperia¬
tender la escritura. listas. El camino de la reflexión sobre

Interesante es el caso de las van¬ el subdesarrollo lleva, en el terreno de


la cultura, al de la integración transna¬
guardias del decenio de 1920, que re¬
cional, puesto que lo que era imita¬
presentaron una liberación extraordi¬
ción va transformándose cada vez 1 E
naria de los procedimientos expresivos
y nos prepararon para alterar sensible¬
más en asimilación recíproca. IÜ
mente el tratamiento de los temas Un ejemplo entre muchos. En la obra
planteados a la conciencia del escri del peruano Mario Vargas Llosa, so-
sigue EN LA PAG. 31
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«La batalla de la Libertad»,
gigantesco mural de José Clemente
Orozco (1883-1949),
la escalinata
Palacio de Gobierno
(México). La dramática figura que
que domina
monumental del
de Guadalajara UN ARTE ORIGINAL
campea en el murai es la del
sacerdote y patriota mexicano
Miguel Hidalgo que, en 1810, lanzó
el célebre «Grito de Dolores» con que
dio comienzo la guerra de
independencia de México. Por su
concepción, por sus dimensiones,
por la manera como se integra a la
ABIERTO AL MUNDO
arquitectura, esta obra constituye
un ejemplo característico del
movimiento muralista mexicano, del
cual Orozco es, junto con Diego Rivera
y David Alfaro Siqueiros, principal
representante.

por Jean Franco áT%L hablar de arte en el universitarias e incluso de ciudades


mundo moderno, se ha vuelto cada vez enteras del futuro, como Brasilia.
más difícil señalar diferencias nacio¬
El caso mexicano es de particular
nales o continentales, puesto que han
importancia por haber sido México el
desaparecido las fronteras nacionales
primer país latinoamericano que alentó
y predomina un estilo internacional. la creación de un «arte nacional»
Por otra parte, es frecuente ver, por
como parte de un plan consciente para
ejemplo, un cuadro del francés Fer¬
inculcar al pueblo un sentido de iden¬
nand Léger en Caracas o uno del
tidad nacional en la época postrevolu-
chileno Matta en París o uno del
cionaria (es decir, después de 1917).
colombiano Botero en Nueva York. Sin
Por otra parte, el patrocinio privado
embargo, a pesar de su creciente del arte en Latinoamérica es un fenó¬
internacionalismo, el arte latinoameri¬
meno relativamente reciente. Igual que
cano es único en la medida en que
la literatura, el arte del siglo XIX era
representa la confluencia de estilos
predominantemente europeo o de
nativos, de Europa Occidental y de inspiración europea. Los latinoameri¬
América del Norte.
canos acaudalados adquirían sus cua¬
Los estilos autóctonos provienen de dros en París, y la realización de los
la escultura, la cerámica y la pintura monumentos públicos se encomen¬
de la época precolombina, y han daba a artistas europeos.
constituido una poderosa fuente de
Las primeras academias de América
inspiración para ciertos pintores y
Latina, creadas después de la Inde¬
escultores contemporáneos. Al mismo
pendencia, estaban dirigidas por pin¬
tiempo, el arte latinoamericano está
tores franceses o italianos. Lo asom¬
íntimamente relacionado con el de
broso es que unos pocos pintores
Europa Occidental y América del
nativos dotados de talento, como el
Norte, del cual ha tomado estilos tales
mexicano José María Velasco (1840-
como el impresionismo, el cubismo, el
1912), fueron capaces de crear de una
expresionismo, el abstraccionismo, el
manera original.
surrealismo y el arte Pop y Op. Incluso
un movimiento como el del muralismo Esta imitación de los modelos
mexicano, que tuvo un fuerte elemento extranjeros, común a todas las artes
nativista y popular, fue influido por los de América Latina, fue la consecuencia
frescos italianos del Renacimiento, por inevitable de la condición semicolonial

el cubismo, por el expresionismo y del Continente. El gusto estético de


aun por el surrealismo. los mecenas potenciales se formaba
en París. De ahí que, antes del decenio
Pero lo que quizá distingue más
claramente el arte latinoamericano son
de 1920, prestaran poca atención a las
creaciones de los artistas nativos. Sin
los factores sociológicos, especial¬
embargo, a su alrededor podían
mente los que se refieren a las rela¬
ciones del artista con su sociedad.
contemplar extraordinarias muestras
de la riqueza artística indígena. Así,
En muchos países el patrocinio guber¬
ciertos vestigios arqueológicos, como
namental ha llegado a ser más impor¬
los templos precolombinos de los
tante que el mecenazgo privado de las
Andes o de Mesoamérica; o bien
artes. Tal fue sin lugar a dudas el caso
la escultura y la pintura barrocas del
de México en el decenio de 1920; tal
JEAN FRANCO ha dedicado numerosos período colonial. En las zonas rurales
es también el caso de la Cuba actual,
estudios a la historia de la cultura de Amé¬
podían y pueden encontrarse los más
rica Latina en general y, particularmente, donde el patrocinio privado ha desa¬
diversos y bellos ejemplos de un arte
a su literatura y su arte. Es profesora de parecido prácticamente. Pero aun en
literatura latinoamericana de la Universidad populara menudo auténticamente mes¬
países como Brasil o Venezuela,
de Essex (Gran Bretaña) y preside la So¬ tizo, ya que combina perfectamente
ciedad Británica de Estudios sobre América donde existe un importante apoyo pri¬
motivos indígenas e hispánicos.
Latina. Entre sus obras figuran The modern vado a las actividades artísticas, o en
culture of Latin America (Penguin Books, países tan pequeños como Guatemala, Aun hoy día, los mercados rurales, | |
Londres, 1970), An introduction to Spanish el gobierno ha encomendado a los especialmente en los países andinos,
amerlcan littérature (1969) y una antología
artistas la decoración de edificios en México y en América Central,
de cuentos en español, lean Franco ha vivido
varios años en América Latina. públicos, la construcción de ciudades ofrecen magníficos ejemplos de pintura
SIGUE EN LA PAG. 20
La ciudad

en el

paisaje
Tras la fase de creación arquitectónica
precolombina, cuya huella grandiosa ha
llegado hasta nosotros en monumentos
tales como las pirámides aztecas y
mayas, la fortaleza de Sachsahuamán
en Cuzco o la misteriosa ciudad de

Machu-Picchu (Perú), vino el largo


periodo colonial en que los cánones de
la arquitectura hispánica, aportados
por conquistadores y misioneros, dieron
lugar a una riquísima y original flora¬
ción de iglesias, palacios y plazas de
estilo barroco. Hoy día, los arquitectos
de Iberoamérica, que han asimilado
creadoramente las grandes lecciones
de la arquitectura mundial de este siglo,
hacen frente a menudo a los problemas
de la urbanización y la arquitectura
con soluciones que, siendo de un futu¬
rismo a veces extremado (caso de
Brasilia), tratan también de integrar el
paisaje y la tradición propios del conti¬
nente al lenguaje de las nuevas formas.
En ellos la ruptura modernista se
esfuerza a menudo por conservar,
recreándola, la tradición.

DE LA ESPONTANEIDAD A LA PLANIFICACIÓN FUTURISMO ACÚSTICO

En la isla lacustre de Mexcaltitán, México, se ha ido formando esta aldea circular de pescadores de cama¬ En este interior de la sala de conciertos

rones (arriba a la izquierda), admirable ejemplo de aprovechamiento del espacio. Similar por su forma pero de la Biblioteca Luis Angel Arango, en
de una concepción que corresponde al universo rigurosamente planificado de la industria moderna es la Bogotá (derecha), obra del arquitecto
ciudad-piloto de Jupia, en el Brasil (arriba), construida en las cercanías de una gran planta hidroeléctrica Germán Samper, se han empleado las
para albergar a 12 000 trabajadores. técnicas arquitectónicas más avanzadas
al servicio de la audición musical.

LA HERENCIA DE ESPAÑA
CUPULAS TROPICALES
A lo largo y lo ancho de América Latina se encuentran
bellas muestras de la arquitectura civil y religiosa que edificó La fotografía inferior muestra la Escuela de Artes Plásticas de Cubanacán,
España en el período colonial, adaptándola a las dimensiones en los alrededores de La Habana, obra del arquitecto cubano Ricardo Porro,
y a la topografía del Continente nuevo. En la foto de abajo, construida entre 1962 y 1965. En ella se da una feliz conjunción de técnicas
el atrio de la iglesia de San Francisco (siglo XVII) y la plaza modernas, de adaptación de elementos exóticos y de inspiración en el paisaje
del mismo nombre, en Quito (Ecuador). característico de la isla.

Foto Paoío Gasparini - Unesco

lili

La tradición moderna es la tradi¬


ción de la ruptura... Los ultrais-
tas latinoamericanos niegan con
violencia el pasado inmediato. El
proceso es circular : la búsqueda
de un futuro termina siempre con
la reconquista de un pasado... La
tradición también es un invento
de la modernidad. O dicho de otro
modo: la modernidad construye
su pasado con la misma violencia 19
con que edifica su futuro.

Octavio Paz (México)


UN ARTE ORIGINAL (viene de la peg. 17)

primitiva, de escultura
de grabados en madera, de tejidos y
en

de alfarería. Sin embargo, sólo después


de la Revolución Mexicana los latino¬
cerámica,

\
americanos comenzaron a desafiar
seriamente las normas del arte occi¬
dental y a reconocer el valor de sus
propias tradiciones, ya sea que perte¬
necieran al pasado, ya al arte popular.

El vigor de la tradición popular se


advierte de manera especial en los
grabados del mexicano José Guadalupe
Posada (1851-1913), cuyo estilo satírico
influyó directamente en el movimiento
muralista mexicano y, desde luego, en
toda una escuela moderna de grabado.
Posada se inspiró en una tradición
popular auténtica: el humor macabro
de las figurillas de esqueletos que se
venden en México, como mementi morí
semicómicos, para conmemorar el Día
de Difuntos. Posada atavió sus esque¬
letos con los sombreros y ropas ele¬
gantes de la clase alta mexicana
anterior a la Revolución, convirtiendo
así el motivo popular en una sátira
social virulenta.

Pero fue la Revolución Mexicana


(1910-1917) la que verdaderamente
estimuló tanto el interés por el arte
popular como las nuevas orientaciones
de la pintura y la escultura. Artistas
como el Dr. Atl y Siqueíros no sola¬
mente contribuyeron a introducir el
concepto revolucionario de la pintura
mural sino que participaron activa¬
mente en la revolución. Cuando
cesaron los combates, el Ministro de
Educación de uno de los gobiernos
postrevolucionarios, el escritor José
Vasconcelos, encomendó a los artistas
la realización de frescos en los muros
de la Escuela Nacional Preparatoria y están dotados de una poderosa fuerza con la pintura mural y que no consti¬
otros edificios públicos. satírica, y los del Hospicio Cabanas tuye sino una experiencia para una
son de carácter alegórico. Aquí se obra de mayor envergadura. Pese a
El movimiento muralista, cuyos encuentra su obra maestra sobre el ello, ha pintado un número considera¬
Objetivos eran éticos y didácticos, tema de los cuatro elementos: tres ble de lienzos, muchos de los cuales
pronto sedujo a los tres grandes figuras reclinadas, que simbolizan la son de gran calidad. Su obra se
creadores de ese período: José Cle¬ Tierra, el Agua y el Aire, rodean al caracteriza por sus proporciones mo¬
mente Orozco (1883-1949), Diego Fuego. El mural abarca la superficie numentales. El pintor emplea frecuen¬
Rivera (1887-1957) y David Alfaro entera de la cúpula del edificio. Esta temente grandes formas y se com¬
Siqueiros (1898). Resulta curioso, y obra constituye un excelente ejemplo place en producir efectos de explo¬
tal vez irónico, dado el sentimiento del estilo vigoroso, dramático y apa¬ siones, desgarramientos o fuerza des¬
antinorteamericano de la época, que sionado de Orozco. comunal. Ha sido entre los muralistas
estos tres pintores hayan sido tan En cambio, los murales de Rivera
el que ha realizado mayores experi¬
populares en los Estados Unidos mentos en su búsqueda de nuevos
son de carácter lírico, particularmente
como en su propio país y que los materiales. Consecuente con su teoría
los que corresponden al decenio de
tres pintaran allí murales. Orozco en de que la pintura es una forma de
1920, época en la cual decoró los
el Pomona College, en la New School producción, no ha vacilado en adoptar
muros de la Escuela Nacional de Agri¬
for Social Research y en el Dartmouth cultura con la historia del desarrollo
técnicas industriales tales como el
College; Rivera en el San Francisco empleo del pistolete de pulverización.
social del hombre. Sin embargo, uno
Stock Exchange, el Rockefeller Center
de sus murales más importantes es El muralismo mexicano fue el primer
y el Detroit Institute; Siqueiros en el
el que ejecutó en el Palacio Nacional movimiento artístico de América Latina
Plaza Art Centre de Los Angeles.
de la ciudad de México, sobre la que ejerció una influencia más allá de
Aunque a menudo se los considera conquista y la opresión del indio. sus fronteras nacionales y contribuyó'
conjuntamente como las principales Aunque se trata de un pintor cuyas a que organismos públicos encomen¬
figuras del movimiento muralista, los líneas y colores pueden ser tiernos daran la ejecución de murales en otros
tres pintores son muy diferentes entre y apacibles, frecuentemente optó por países, incluso en los Estados Unidos
sí. Orozco dotó a su obra de una la caricatura para representar a los durante el período del New Deal.
energía y una violencia explosivas y conquistadores españoles o a los Además, debido a la fuerte tendencia
jamás sacrificó la técnica al mensaje. ricos ociosos (como en su famoso de «retorno a las raíces», fomentada

Sin embargo, muchas de sus pinturas mural del Hotel del Prado, en la ciudad por el nacionalismo mexicano post¬
son alegóricas o satíricas y moraliza- de México, que durante muchos años revolucionario, prestó nuevo vigor a
doras en su ataque contra los ricos permaneció cubierto). la pintura figurativa, con cierta incli¬
20 corrompidos. Los murales que ejecutó David Alfaro Siqueiros, el tercero nación a idealizar a los obreros y a
los campesinos.
en Guadalajara alrededor de 1930 del trío de muralistas, ha declarado
constituyen la cumbre de su creación; en repetidas ocasiones que la pintura Por lo demás, se encuentran ten¬
los que pintó en el Palacio de Gobierno de caballete es secundaria en relación dencias similares incluso en países
que no han atravesado una situación pintores comenzaron a crear para un modernismo fue el constructivismo,
revolucionaría. En Ecuador, Oswaldo público más vasto, sin alterar su estilo cuyo principal exponente es el uru¬
Guayasamín continuó la tradición del particular, pintando grandes cuadros guayo Torres García para quien la
muralismo mexicano, aunque la mayor para los edificios públicos, diseñando esencia del arte consistía en «cons¬
parte de su obra pertenece a la cajas de galletas o carteles. Sin lugar truir de acuerdo con la ley de las
pintura de caballete. En el Brasil, a dudas, es a través de los carteles limitaciones».
Cándido Portinarl, que, a semejanza y el diseño de libros como los pin¬
Tal como sucedió con el movi¬
de Siqueiros, pintaba vigorosas figuras tores y artistas cubanos han llegado
de trabajadores entregados a sus a las masas populares. miento literario al que suele llamarse
faenas diarias, fue en realidad «realismo mágico», el surrealismo y
Un camino sumamente distinto es otros movimientos europeos sirvieron
influido por el arte europeo, en par¬
ticular por el período «monumental» el que siguieron los pintores y escul¬ para alentar a los latinoamericanos
de Picasso. tores de la mayoría de los demás a adquirir una nueva visión de su
países de América Latina, donde se propio continente. Esto sucedió inclu¬
La Revolución Cubana, al Igual que atribuía mayor valor a la técnica y sive en México donde, juntamente con
la mexicana, fomentó el desplaza¬ menor importancia al hecho de llegar el movimiento muralista, aparecieron
miento del arte de la pintura de a un público de masas. Los pioneros pintores como Rufino Tamayo (1899),
caballete hacia formas más fácilmente de esta tendencia fueron los brasi¬ quien desarrolló un arte absolutamente
accesibles al pueblo. Antes del leños que, en 1922, celebraron en Sao personal, inicialmente influido por
triunfo de la revolución de 1959, el Paulo una Semana de Arte Moderno. Picasso. Aunque vivió algunos años
arte cubano, aunque fuertemente Esto estimuló a algunos pintores en Nueva York y fue reconocido en
influido por el arte europeo y espe¬ influidos por el fauvlsmo y el futu¬ los Estados Unidos antes que en su
cialmente por el francés, era uno de rismo. Pero pronto aparecieron ten¬ país, sus colores y elementos son
los mejores de América Latina. En dencias absolutamente originales. Con totalmente mexicanos, sin ser en
primera línea figuraban Víctor Manuel, Tarsilo de Amaral (1894) se desarrolló modo alguno realistas. Su Homenaje
Amelia Peláez (cuyos retratos y dibujos el Ingenioso movimiento Antropofagia, a la raza, inmenso lienzo que se
a la manera de Matisse revelan un una especie -de respuesta brasileña encuentra en el Museo de Bellas Artes
extraordinario sentido del color), Por- a los mitos europeos sobre la América de la ciudad de México, es un ejemplo
tocarrero (en cuya obra se advierte tropical. La Semana de Arte Moderno de la manera en que Tamayo combina
la influencia del futurismo y del cons¬ valió a Sao Paulo figurar en el mapa una atmósfera onírica con colores
tructivismo) y Wilfredo Lam, pintor cultural del mundo e hizo de esta vibrantes, peculiares de México.
que utiliza en sus cuadros motivos ciudad la sede de la Bienal que lleva
de los cultos afrocubanos. su nombre. Totalmente distintos aunque igual¬
mente apartados de la tradición del
Tras la revolución, casi todos estos Otro vastago latinoamericano del muralismo mexicano, son los dibujos
SIGUE EN LA PAG. 32

ENTRE

LA GEOMETRÍA
Y LA

SÁTIRA SOCIAL

Dos ejemplos de tendencias


opuestas en la plástica latino¬
americana contemporánea. A la
izquierda, una construcción con
materiales sintéticos, titulada
« Forma en contorsión », del
argentino Julio Le Pare, triun¬
fador de la Bienal de Venecia
de 1966, representante carac¬
terizado del arte cinético
actual. A la derecha, «La fami¬
lia presidencial», del colom¬
biano Fernando Botero, critica
burlona de la sociedad, ya
apartada de la representación
realista de los personajes.
v**

'/H

Foto c Fulvio Roiter, Venecia

«La Casa de Anáhuac», museo concebido por el gran pintor mexicano Diego Rivera
para conservar las obras de 4.000 años de arte popular de su país, constituye un
testimonio palpable de su apasionada concepción artística de un «retorno a las raíces».
Anáhuac fue el nombre original de México, y con esta palabra azteca se designa
actualmente la gran meseta central mexicana. El museo, construido en la aldea
de San Pablo Tepetlapa, en los alrededores de la capital, perpetúa también, legítimamente,
la memoria del pintor, a quien se ve en la fotografía suspendida del muro, como
a través de una ventana.
El artista en la sociedad latinoamericana

LOS
BARROTES
DE LA
por

Jorge Enrique Adoum


REALIDAD
WUENTA Nabokov que «la ducir «en serie», en talleres y escue¬ popular mexicano que es funerario y
primera palpitación (de Lolita)... fue las, las imágenes que se necesitaban fúnebre a la vez. Ellos fueron capaces
dasatada por la lectura de un artículo para poblar las iglesias que otros de ver más allá de la realidad de la
de periódico que relataba que un cien¬ indígenas construían según los planos naturaleza y del hombre.
tífico, después de varios meses de es¬ llevados de España y Portugal y bajo
La independencia respecto de Espa¬
fuerzo, había logrado hacer que un la dirección de arquitectos extranjeros.
ña y Portugal no cambió fundamental¬
gran mono del Jardin des Plantes (de Resultan a veces conmovedores los mente las estructuras sociales, y tam¬
París) esbozara un dibujo; ese boceto,
esfuerzos de algunos críticos latino¬ poco hubo un cambio en la mentalidad
el primero que haya sido ejecutado
americanos por descubrir en el arte re¬ del artista colonizado: se puso a pintar,
por un animal, representaba los barro¬
ligioso de esa época algún rasgo de la con la misma técnica que le impusieron,
tes de la jaula de la pobre bestia».
personalidad aborigen: se ha llegado héroes militares en lugar de imágenes.
Lo mismo sucede, al parecer, con a hablar de una «rebelión de la pie¬ Después vinieron los paisajes (la na¬
los hombres cada vez que se los trata dra» para calificar los templos barro¬ turaleza bárbara de América era en
como a monos a quienes hay que cos y platerescos de la Colonia. Con ellos tan plácida como la de Holanda),
«enseñar» a crear: basta comparar la excepciones raras, como la del Alei¬ las escenas de la vida criolla (pintadas
inagotable riqueza de invención del jadinho, cuyos asombrosos Profetas re¬ a veces por un político y abogado
arte popular o del arte rebelde con velan una originalidad infinitamente su¬ como el uruguayo Pedro Figari), los
las obras de cualquier arte institucio¬ perior a los modelos peninsulares y cuadros de costumbres, que contri¬
nalizado. Ya Arnold von Salis obser¬ flamencos, no se puede encontrar mu¬ buyeron a crear afuera la imagen de
vaba, entre otros, la pobreza imagina¬ cho más que algún pájaro, animal o un «tipismo» que adentro se tomaba
tiva del arte griego que «no veía más planta tropicales metidos de contra¬ por originalidad, y que eran puro
allá de sus narices», es decir, más allá bando en los bajorrelieves de los tem¬ impresionismo europeo.
de sus barrotes. plos. La leyenda de Miguel de Santia¬
go, que llena de asombro a los ecua¬
En la América que aun no era «la¬
torianos, no es sino la exacerbación de
tina», el artista, que estaba realmente
la copia de los barrotes : se dice que
incorporado a su sociedad y cumplía eT^ partir de la década que
dio una puñalada a su modelo a fin
dentro de ella una función insustitui¬ comienza en 1930 el arte encara la
de poder «captar» los rasgos de la
ble, dio muestras de una asombrosa realidad social, la prisión colectiva, la
agonía para un lienzo de Cristo.
imaginación creadora en los grandes fosa común, lo real espantoso de
monumentos de piedra edificios o El arte oficial eso se sabe ex¬ nuestros países, con una declarada
estatuas , la cerámica, los tapices y presa el orden impuesto, y el artista voluntad de contribuir a alterar el or¬
la orfebrería de las culturas maya, az¬ colonizado a pesar suyo se somete a den de la injusticia, y el orden del
teca, inca o aymará. ambos; las «grandes figuras» del arte arte oficial también. Entonces, en el
colonial latinoamericano eran poco «academicismo proletario» de la pin¬
Con la conquista española, el pri¬
más que hábiles artesanos productores tura realista comenzaron a aparecer
mer colonialismo cultural de los que
de mercancías para un mercado que nuestras poblaciones indias o negras,
ha sufrido el continente aprovechó la
era al mismo tiempo un amo: la Co¬ en actitud de trabajar o de ser asesi¬
habilidad artesanal indígena para pro-
rona, la Corte, la Iglesia. nadas, que allá con frecuencia da lo
mismo. Pero ni siquiera de esta ma¬
Mientras tanto, el verdadero crea¬
nera y menos aun de la otra, la de
JORGE ENRIQUE ADOUM, poeta y ensayista dor de arte era el pueblo: aislados en
quienes casi simultáneamente comen¬
ecuatoriano, ha publicado una decena de su isla, los indígenas de Puna seguían
libros, entre los cuales cabe destacar su zaron a pintar su celda personal, aba¬
decorando sus cuentas de barro con
ciclo poético Los cuadernos de la tierra rrotada de conflictos individuales ha
(1952-1962), en cuatro volúmenes, y su obra una fabulosa fauna geométrica y los
podido el artista volver a ocupar en su
crítica Poesía del siglo XX (Í957J. En su de Pascua se fabricaban gigantescos
sociedad el lugar que tenía el creador
país fue Director Nacional de Cultura en ídolos que enclavaban en la arena; la
el Ministerio de Educación, Director de las de antes, ése que era él y pueblo al
ediciones de la Casa de la Cultura Ecua¬
estampa popular y anónima del Brasil
mismo tiempo.
toriana y Secretario del Instituto de Teatro representaba los personajes de una
y Folklore. Actualmente participa en el pro¬ extraña mitología habitada por «lobi- No se trata de un problema de te- /j
grama de estudio de las culturas latino¬
sones«, lagartos de pie y demonios mas o de técnicas. Yo he visto a unos
americanas, que está realizando la Unesco,
y es miembro de la redacción española de
zoomórficos; poco después, Posada peones de albañilería, procedentes del
El Correo de la Unesco. trasladaba a sus grabados ese arte campo, burlarse de un mural realista

SIGUE A LA VUELTA
DE LA RISA MACABRA

AL GRITO TRÁGICO

A la derecha, un lienzo de la serie «Mujeres llorando», del pintor


ecuatoriano Oswaldo Guayasamin (n. 1919), quien a través de su
cuantiosa obra expresa constantemente, con gran vigor trágico, la
dolorosa realidad del indio. El grabador mexicano José Guadalupe
Posada (1851-1913) es uno de los artistas latinoamericanos más
populares en todos los sentidos del término: nacido del pueblo,
su arte se nutre de las más arraigadas creencias y tradiciones
de su pais para fustigar con crudeza a los opresores de toda laya.
Esta «Calavera catrina» (izquierda) es sumamente representativa
de su arte, que tan a menudo se inspira en la tendencia popular
mexicana a tratar con familiaridad y humor el tema de la muerte.

LOS BARROTES DE LA REALIDAD (cont.)

sobre las faenas agrícolas que contem¬ a integrarse en la arquitectura civil y se ganan la indiferencia de las capas
plaban en el mismo edificio que cons¬ el urbanismo. Pero sólo rara vez se inferiores, de las cuales se alejan.
truían El arte realista no es más «po¬ ocupa el Estado de que vaya a adornar
Rara vez reconoce oficialmente el
pular» que el arte no figurativo, así algunos edificios públicos, y éstos ins¬
Estado la existencia del artista, a
como la novela sobre el indio no es piran a las clases populares un temor
menos que resulte peligroso para el
mucho más leída que los poemas van¬ o desconfianza mayores que la gale¬
«orden»; entonces un gobierno puede
guardistas. Pero si la falta de público ría o el museo, acaso porque a me¬
estar orgulloso de la obra de un pintor
para la literatura puede explicarse par¬ nudo tienen una guardia en la puerta,
y mantenerlo preso por sostener como
cialmente por el analfabetismo, el caso o van a parar al despacho del Ministro
ciudadano las mismas ideas que en su
del arte nos pone frente a la compro¬ o del Director General, a donde aque¬
pintura; o bien las autoridades pueden
bación de que, aunque parezca más llas no tienen acceso.
decidir que se cubra o se borre el
fácil mirar un cuadro que leer un libro,
La clientela del marchand d'art y de mural que le encomendaron. En este
la galería no atrae más público que la
las galerías de arte está formada casi caso, el cliente no sólo tiene la razón
biblioteca.
exclusivamente por coleccionistas ex¬ sino el poder.
El arte es hoy día un test de cultura: tranjeros. Y por la ley de la oferta y la
ni siquiera puede decirse que todo el demanda, o a causa de las influencias
que lee visita una exposición; ese otro
exteriores, o porque también en este ERO el drama del artista
analfabetismo, aquel que colma su caso «el cliente tiene siempre la razón», de América Latina es mucho más
apetencia de lectura con la novela
no son pocos los artistas que han te¬
rosa o los relatos de vaqueros, satis¬ profundo y doloroso y no tiene paran¬
nido que someterse a las exigencias
face su necesidad de arte con los gón en ningún otro lugar. El genocidio
variables del mercado, que van desde
calendarios o los «cromos» de paisa¬ cultural de la conquista consistió en
la predilección por las tendencias euro¬
jes, perros, flores o desnudos que cortar la prolongación de las raíces.
peas en boga hasta la imposición de
adornan los talleres de zapatería y los Lo que pudo haber sido tradición no
un tipismo cuyo abandono, según se¬
corredores y cocinas de las casas. son sino reliquias de un pasado que
ñalaba el Director del Museo Guggen¬ no tuvo continuidad. Al artista latino¬
heim, hace exclamar a muchos viaje¬
americano no le dejaron mucho que
ros norteamericanos: «They paint like
heredar: le pusieron un arte 'ajeno en
everybody else. What a pitty.» (Pintan
^aw\ los organizadores de la el bolsillo y luego lo acusaron de
como los demás. Qué lástima.)
encuesta de Toronto (véase El Correo ladrón. Y su desamparo fue tan
de la Unesco de marzo de 1971) com¬ Así, la observación de Schücking grande que comenzó a cultivar local-
prueban, desconsolados, que entre la sobre los artistas que son demócra¬ mente los modelos trasplantados de
innovación artística y su aceptación tas en lo político y aristócratas en lo fuera y a tratar de inventarse con ellos
general por el público existe una dis¬ cultural, en ningún lugar tiene mayor una tradición, aun cuando no fuera
tancia de por lo menos 50 años, de¬ validez que en América Latina: deste¬ sino un mestizaje artístico.
dúzcase cuánto tiempo deberá pasar rrados ellos y su obra de su so¬ Su drama es el conflicto entre la
en nuestros países, muchos de los ciedad, llevados a un exilio forzoso búsqueda de su identidad tomo miem¬
cuales no tienen un museo de arte dentro de ella, no tanto por el rechazo, bro de una sociedad «en proceso de
moderno, en muchas de cuyas escue¬ que es ya una actitud intelectual, sino definición» y la búsqueda de su auten¬
las de bellas artes jamás se ha visto por la indiferencia o el desconoci¬ ticidad como creador, o sea lo que,
una buena reproducción y cuya ense¬ miento, trabajan para una élite a la con otras palabras, se ha definido
ñanza de la historia de la pintura uni¬ que no siempre pertenecen ni quie¬ como el dilema entre la urgencia de
versal debe conformarse con esa ren pertenecer. pertenecer y el instinto de explorar.
especie de «resumen del argumento»
Su clase es la clase media, cuyos Esas dos tendencias, que no sop
que son las reproducciones en blanco
desgarramientos y privilegios com¬ forzosamente opuestas, ya que Rufino
y negro de los libros menos costosos.
parten. Pero aun dentro de ella ocupan Tamayo y Wilfredo Lam, por ejemplo,
En cuanto a la obra de los artistas
una incómoda situación particular. han logrado conciliar la necesidad y
latinoamericanos, durante la Colonia Porque su arte está más cerca de la libertad, dieron origen a los dos
iba a parar a las cortes de España y la artesanía, del trabajo manual impreg¬ únicos movimientos artísticos sistemá¬
Portugal o a las cortes virreinales de nado de esa «indignidad social» que ticos y orgánicos de América Latina:
América o formaba parte de la arqui¬ le atribuyó la sociedad de la Colonia, el muralismo mexicano que aclimató
tectura religiosa, única manera que sufren el desdén de las capas más el realismo europeo para que expre¬
tenía de entrar en contacto con un sara la verdad histórico-social de
elevadas, para las cuales la literatura
público que, fácil es suponerlo, la puede ser de buen tono. Pero el valor nuestros países, y el universalismo
24 consideraba más un objeto de culto
que de arte.
que su obra tiene como mercancía les constructivo del Rio de la Plata que
permite dedicarse más enteramente a se propuso hacer «una síntesis de lo
Hoy día está recluida en las conta¬ ella y realizar de manera accesoria que tienen de positivo el neoplasticis-
das colecciones particulares o vuelve otras actividades conexas, con lo cual mo, el cubismo y el surrealismo».
Después de sus aciertos iniciales
de actitud y de realización la bús¬
queda del documento social y la
experimentación de las posibilidades
plásticas cada uno de los dos movi¬
mientos condujo a excesos conocidos:
por un lado, ese indigenismo pater¬
nalista que recuerda en cierto modo
el comportamiento de las sociedades
protectoras de animales, y por el otro
(ya bastante después del constructi¬
vismo de Torres García), la pros¬
pección de una originalidad individual
que ignoraba voluntariamente las ma¬
tanzas que se cometían a pocos
metros de la ventana del taller.

Hasta hace relativamente poco se


tomó el realismo por tradición latino¬
americana y David Alfaro Siqueiros
llegó a afirmar: «No hay más ruta
que la nuestra». El realismo, que era
la instantánea de una situación que,
con excepción de Cuba, se ha mante¬
nido más o menos estática, llegó a
equivaler a un curriculum vitae oficial
del pintor, aun cuando la realidad fuera
presentada simplemente como la mala
suerte o las calamidades naturales.

Pero, de todos modos, fue la pri¬


mera denuncia de la vergonzosa reali¬
dad social de nuestras «dolorosas
repúblicas» y su triunfo tuvo una
tardía consagración en una Bienal de
Venecia fue «el triunfo de un mundo
moral» pero de ninguna manera el de
una tendencia artística. Se trataba de
esa forma para ese tema.
Nadie la habría considerado una
expresión particular de América si se
hubiera tratado de naturalezas muertas .
o de representaciones realistas de la
ficción (como si no fuera el mismo
Goya el de los Fusilamientos y el de
los Caprichos). Y acaso su auge no
habría sido el mismo si la institucio-
nalización de la Revolución mexicana
no hubiera fomentado el muralismo
histórico y anecdótico.
Mientras en los países del Pacífico
y especialmente en aquellos con po¬
blación indígena se concebía general¬
mente el arte como un compromiso,
aunque a veces sustituía la realidad
social por una idealización de la
verdad histórica, en los del Atlántico,
con un mayor grado de desarrollo
económico y menores vestigios de
feudalismo, se hacía hincapié en la
verdad de los sentidos y la realidad
del arte como «cosa» en sí. El secta¬
rismo artístico acusaba al arte no figu¬
rativo de halagar los gustos de la
burguesía, pero esa misma burguesía
adquiría los cuadros realistas, por el
simple hecho de que también consti¬
tuyen una Inversión o una mercancía.
En cuanto a lo que pudiera llamarse
el público, el realismo lo dejaba con
la conciencia tranquila: presentaba, en
una cara de la sociedad, las multitudes
martirizadas y haciendo la historia y,
en la otra, los símbolos del poder eco¬
nómico, político y religioso. Los demás
se quedaban fuera del cuadro, en la
cómoda posición del espectador. En lo 25
que respecta al arte abstracto, no se
sentían aludidos.

Ahora ha surgido un arte nuevo,


SIGUE A LA VUELTA
LOS BARROTES DE LA REALIDAD (cont.)

De la influencia ajena a la autenticidad creadora

«fotografía de identidad de una socie¬ las exportaciones masivas de carga¬ aulas transportables y ensanchables.
dad que puede igualmente embarcarse mentos de subproductos artísticos. Esos viajes, que suelen reprocharse
en una guerra cruel o deleitarse en Es doloroso el caso de las artesa¬ con mayor insistencia a los escritores,
la pornografía de los espejismos en nías populares cuya imitación del mal tienen un papel de importancia capital
lugar de hacer frente a la realidad... modelo extranjero acaso haya que en la formación del artista latinoame¬
y en cuyas imágenes nos reconoce¬ explicarse por los gustos del mercado: ricano: así no se siente aislado del
mos a nosotros mismos y, alarmados, la «imaginería de Epinal» se convirtió mundo y tampoco ha perdido su ciu¬
miramos ávidamente el espejo para en algo como el lenguaje plástico dadanía.
ver cómo es realmente nuestra ima¬
típico de nuestras clases populares; La «desenfrenada creación de for¬
gen» (Damián Carlos Bayón). Enton¬ las etiquetas de las cajas de cigarros mas tropicales» del cubano Wilfredo
ces, para rechazarla, se vuelve a habanos retomaron quién sabe por Lam quizá no podría explicarse sin las
exigir un arte para el pueblo. En el qué camino la alegoría del neoclásico enseñanzas y la influencia personal de
fondo, se quiere el realismo y no la italiano; las estampas de la devoción Picasso y André Breton. La pintura del
verdad, que no es lo mismo. católica muestran Vírgenes maquilla¬ chileno Roberto Matta y su «crítica de
Existe en muchos de nuestros das como actrices de cine; el Pato la vida cotidiana, comparable a la de
países, cualquiera que sea la intensi¬ Donald ha aparecido en la cerámica Daumier» le debe mucho a Marcel
dad de su sentimiento nacionalista, indígena; los tejedores de alfombras Duchamp. Kracjberg, en cuyas obras
una actitud de inferioridad, aun cuando del Ecuador han reemplazado sus pro¬ «no sólo es volcánica la ilusión sino
no se trate sino de la reacción del pios diseños por motivos florales toma¬ la materia», es un brasileño nacido
adolescente frente al adulto. El arte dos de catálogos extranjeros. Los cerca de Varsovia, que ha vivido en
lo expresa con un movimiento pen¬ otros, no populares, son casos de Minsk, Vitebsk, Leningrado, Stuttgart,
dular: o contempla la propia des¬ estafa burda: en el corazón del trópico París, Sao Paulo y el Paraná. Kazuya
ventura con orgullo, casi una vanidosa sudamericano existe una catedral «gó¬ Sakai, en cuyo rigor geométrico «la
exhibición de la llaga, o se pone de tica» de hormigón armado, y en uno pintura no significa sino que es»,
puntillas para igualar a Europa, como de los países de mayor tradición indí¬ nació en Buenos Aires, se educó en
si se tratara de un modelo insuperable, gena una catedral de estilo «bizan¬ Japón y residió en Nueva York y
y el síntoma más claro es ese gesto tino» con torres «chinescas ». México.

que parece expresar: «Nosotros tam¬ Antes, las corrientes artísticas euro¬
bién podemos». Hay que resignarse a peas viajaban a través del Atlántico
admitir que América Latina no ha pro¬ como a lomo de muía y llegaban con d N su prólogo a El reino de
ducido ningún movimiento artístico ori¬ tal retraso a nuestro continente que este mundo afirma Alejo Carpentier que
ginal desde la época de las culturas allí eran novedad cuando en sus
«por la virginidad del paisaje, por la
aborígenes, aunque haya artistas ori¬ países de origen ya habían sido formación, por la ontología, por la pre¬
ginales dentro de las diversas ten¬ superadas. Herbert Read se negó a sencia fáustica del indio y del negro,
dencias. incluir en su Historia de la pintura por la Revelación que constituyó su
moderna a los muralistas mexicanos
reciente descubrimiento, por los fecun¬
Siqueiros, Rivera y Orozco (también dos mestizajes que propició, América
\\ OR tanto, después de la a Utrillo, por lo demás). está muy lejos de haber agotado su
pérdida de la tradición, no tenemos Hoy día, la mayor frecuencia y posi¬ caudal de mitologías». Por ello mismo,
pureza alguna que conservar, aun bilidad de los viajes que obedecen está muy lejos de haber descubierto
cuando fuere por la fuerza, como a la necesidad de saber qué pasa toda su realidad.
sucede con la música de la India. Y no afuera tendencia no siempre repro¬ El arte nuevo está contribuyendo a
se puede escapar al arte del resto del chable si se tienen en cuenta la completar el retrato de ese continente,
mundo, porque ya no hay islas libres indiferencia, cuando no la hostilidad que no es exclusivamente agrario, que
de la contaminación de ese impersona¬ del medio, la falta de museos y de no se ha quedado en la edad del maíz,
lismo frío y casi mecánico que es su información, la escasez de una verda¬ que no quiere arrinconarse en un fol-
característica actual. Resulta absurdo dera crítica que no sea superficial e klorismo exótico para gozo de los
pretender preservar únicamente el arte improvisada y esa urgencia casi infan¬ turistas del arte y uso de los fotó¬
dentro de una cultura que ya ha adop¬ til de compararse para estar tranqui¬ grafos de la televisión extranjera. Por¬
tado otras manifestaciones extrañas a los han reducido el décalage horario que así como nunca nos preguntaron
ella, como la lengua, la religión, las que, con respecto a otros continentes, cómo nos llamábamos y nosotros mis¬
costumbres. Por lo general, lo único existia en el arte latinoamericano. mos comenzamos a llamarnos con
que se ha logrado con esos intentos Ahora, al mismo tiempo que en los nombres que nos dieron Tierra
es desenterrar un modo de expresión Firme, Hispanoamérica, Indoamérica,
Europa y los Estados Unidos, en Amé¬
que se ha conservado como existía rica Latina se busca «la sucesión América Latina, Tercer Mundo, Países
antes de las Invasiones, para volver a Subdesarrollados , es posible que
contra el estatismo» (los argentinos
cuidarlo como una pieza de museo, hayamos estado creyendo durante
Pettoruti, Aízenberg, Fernández Muro),
muerta.
la reivindicación de las superficies (el mucho tiempo que somos lo que los
Incorporados, pese a todas las con¬ brasileño Camargo), el arte cinético demás imaginan y viéndonos como
tradicciones, a la «civilización occiden¬ (de la ilusión óptica del venezolano insisten en vernos desde fuera.

tal», no debe extrañar que algunos Soto a las construcciones mecánicas Si el arte ha sido siempre uno de
artistas latinoamericanos se encuen¬ del argentino Le Parc); y el afán de los medios de conocimiento del ser,
tren expresados a sí mismos en cier¬ que la obra «se convierta de objeto habremos de continuar tratando de

26 tos movimientos artísticos de Europa


y los Estados Unidos. Las influencias
en espectáculo» está
siciones con participación del espec¬
en las compo¬ encontrarnos precisamente en un arte
que intenta expresar ya no solamente
son ahora más inevitables que nunca. tador del argentino Antonio Seguí o los trabajos que hacemos sino lo
Lo que combatimos y nos subleva son en la Universidad de Caracas con sus esencial de lo que somos.
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La Universidad de Caracas es uno


de los ejemplos más destacados
de la moderna arquitectura de
América Latina. Los diversos edi¬
ficios de la ciudad
diseñados por el arquitecto vene¬
universitaria,
LA LITERATURA
zolano Raúl Villanueva, ocupan
una extension de 200 hectáreas y
están conectados entre si por pa¬
sadizos cubiertos que forman una
intrincada red. Arriba, la rampa
LATINOAMERICANA
curva que conduce al aula magna.
Y por todas partes, esculturas, mu¬
rales de mosaico y otras obras
de famosos artistas modernos,
CRISOL
como Hans Arp, Fernand Léger,
Vasarely...

DE CULTURAS

por Rubén Bareiro Saguier

\af ULTURA mestiza por defi¬ de un lenguaje y la concreción de un parece explicar el carácter conflictivo
nición histórica, la latinoamericana es contenido en un idioma en cierta propio con que fue vivida la expe¬
resultante de la inserción ibérica medida prestado y dentro de un con¬ riencia tendiente a la creación de una
inicial la suplantación progresiva texto político no unificado. identidad cultural latinoamericana.
luego en el tronco multiforme de
Lo que a partir de la Conquista se Resultante de la imposición de la
las culturas amerindias, con el
impone en América es la «cultura occi¬ cultura occidental y cristiana en
posterior agregado del elemento afri¬
dental», el conjunto de valores y pau¬ el Nuevo Mundo, la utilización del
cano y de los aluviones inmigratorios.
tas llevados por los conquistadores. castellano-español o del portugués, y
Dada la diversidad de componentes,
Ahora bien ¿de qué manera? A través a lo más del «idioma nacional», en
un problema latinoamericano esencial
de un encuentro de culturas muy dife¬ la expresión literaria conduce a
ha sido y sigue siendo encontrar su
rentes, sin duda el mayor que se regis¬ plantear el problema de la autonomía
identidad cultural, situación que refleja
tra en la era cristiana, y el más dramᬠde las letras latinoamericanas. ¿Hasta
la literatura al buscar la apropiación
tico, porque un puñado de europeos, dónde no se trata sino de prolonga¬
gracias a la superioridad técnica que ciones de la literatura metropolitana?
les conferían las armas de fuego, la ¿Hasta qué punto la latinoamericana
rueda y los caballos, se impusieron existe como una totalidad indepen¬
RUBEN BAREIRO SAGUIER, crítico, ensayista a cientos de miles de americanos, diente? La duda surge, primero, porque
y narrador paraguayo, es profesor de litera¬
tura latinoamericana de la Facultad de Letras muchos de ellos organizados en nuestra literatura se expresa en una
de la Universidad de Vincennes, en París. Estados poderosos. Al mismo tiempo, lengua que se define por la aposición
Ha escrito numerosos traba/os sobre su espe¬
cialidad aparecidos en revistas de diversos
era la cultura racionalista del Renaci¬ calificativa de española, término que 27
miento la que se ponía en contacto reviste un sentido histórico-político
países. Como narrador se le debe el libro
de relatos Ojo por diente (de próxima apari¬ con el universo mágico de los indios. indudable. La tradición elemento
ción en Ediciones Marcha, de Montevideo). La complejidad de esta relación importante para la definición nos

SIGUE A LA VUELTA
LOS TRES
PREMIOS NOBEL
DE LA LITERATURA
LATINOAMERICANA MIGUEL ANGEL
ASTURIAS

Novelista y poeta guatemalteco, nacido


en 1899. Recibió el Premio Nobel en
1967. Entre sus obras narrativas des¬
cuellan «Leyendas de Guatemala», «El
señor Presidente», «Hombres de maíz»,
«Viento fuerte», «El Papa verde», «Los
ojos de los enterrados», «Weekend en
GABRIELA MISTRAL Guatemala», «Mulata de tal» y «Mala-
drón». Sus libros de poesía más Im¬
Poetisa chilena (1889-1957). Obtuvo el Premio portantes son «Sien de alondra» y
Nobel en 1945. Escribió «Desolación», «Ternura», «Clarivigilia primaveral». Ha escrito
«Tala» y «Lagar». también algunas piezas de teatro.

CRISOL DE CULTURAS (cont.)

resulta ajena, como un préstamo. Esto francés, y su máximo representante, del «tema negro» a manera de moda
se agrava por la inexistencia de una Rubén Darío, aceptó gustoso el califi¬ literaria. Entre los citados se destaca
unidad hispanoamericana, es decir, cativo de «galicismo mental» que se el cubano Nicolás Guillen, quien por
un soporte nacional, que sí tiene la aplicaba a la escuela. el contenido de su obra, que revela
literatura española. su condición mulata, va más allá del
España reconoció el valor de la
A decir verdad, el sistema de la negrismo.
experiencia modernista con la «gene¬
lengua, al relacionarse con un universo El indigenismo literario que surge
ración del 98», al prolongarla en la
concreto, va matizándose, de acuerdo península. Era la primera vez que las en la novela hispanoamericana hacia
con la «acomodación al mundo que antiguas colonias imponían patrones la década del 20 al 30 tuvo desde el
expresa». De esta manera ambas culturales a la metrópoli; la dirección punto de vista de la expresión una
lenguas, la peninsular y la americana, de las influencias se había invertido. actitud más timorata y deslavada que
son sólo matices del mismo sistema, el negrismo. En efecto, pese a la
pero matices que revelan experiencias La filiación americana de la renova¬
ideología de reivindicación del indio,
distintas y autónomas. De ahí viene ción modernista no depende de ele¬
su lenguaje siguió siendo el del mo¬
la diversidad de ambas literaturas, mentos aborígenes, locales o indige¬
dernismo, con los matices de la evolu¬
unidas por el sistema común y sepa¬ nistas. Movimiento esencialmente cos¬
ción operada por la presencia del
radas por el matiz, reflejo de universos mopolita, refinado, el modernismo
realismo-naturalismo. Se emplearon
históricos diferentes. Esta experiencia renegó de la realidad ambiente Darío
palabras, se mechó la escritura con
espacial y temporal es el contenido; lo expresó así: «detesto la vida y el
expresiones más o menos indígenas,
el matiz, la expresión del mismo. tiempo en que me tocó nacer» , y si
pero el criterio de selección en gran
se apeló a esos elementos, fue con
La quiebra de la «pureza» idiomática medida continuaba orientado por el
el mismo criterio exotista con que se
peninsular, tanto en los dominios de exotismo modernista. La simpatía por
hacía referencia al Oriente o a la
España como en el Brasil ruptura el indio no sobrepasó el cuadro de un
antigüedad grecolatina.
en la que no sólo está presente el interés superficial, desconocedor de
habla indígena sino también la aporta¬ los elementos constitutivos reales de

ción negra tiene mucha importancia su cultura.

en la evolución posterior de la litera¬ bN el Brasil, una fuente Ouien hace estallar la lengua
tura latinoamericana y en gran parte importante del lenguaje literario ha narrativa latinoamericana con la carga
de su actual búsqueda. sido el habla de las minorías étnicas explosiva que tiene la palabra mítica
La ruptura lingüística hace crisis y del país. Los modernistas volvieron de los indios es Miguel Angel Asturias.
se convierte en programa inmediata¬ los ojos hacia las culturas indígena y Penetrando en la raíz de la cultura
mente después de la Independencia. negra, para tomar de aquélla palabras maya-quiché, Asturias pone en eviden¬
En efecto, ya en 1825 se habla de y expresiones, de ésta ritmos, es¬ cia el valor mágico que tiene el verbo
«idioma brasileño» y, más tarde en tructuras e imágenes, además del ele¬ en esa civilización. Es más, asumiendo'
Hispanoamérica, de «idioma nacional», mento lexical.
esa función sagrada, transponiéndola
especialmente en Argentina y México. al plano de la creación literaria, Astu¬
La iniciación, en el Brasil, de lo que
Es el movimiento «modernista» el se conoce en literatura con el nombre rias exalta el poder del lenguaje, de
que habría de realizar, de manera de negrismo coincide con la del equi¬ un lenguaje que no obedece sino a
consciente y dentro de una vía culta, valente antillano: Luis Palés Matos, sus propias leyes. Es la creación por
y en la palabra, tal como la conciben
la quiebra del purismo lingüístico en Ramón Guirao, Emilio Ballagas, Nicolás
las culturas amerindias. La obra de
la literatura hispanoamericana. Si los Guillen, José Taller. Refiriéndose al
criollistas románticos renuevan intuiti¬ negrismo, el escritor haitiano René Asturias y su momento culminante,
vamente el idioma, los modernistas lo Depestre lo define como «la utiliza¬ Hombres de maíz es el ejemplo más

28 hacen en plan de elaboración, de ción de elementos rítmicos, de onoma- evidente del aporte cultural indígena
a la lengua literaria hispanoamericana.
búsqueda estética. Mientras que topeyas, de factores sensoriales pro¬
ideológicamente el romanticismo fue pios de las literaturas orales de los Otros dos escritores contempo¬
antiespañol, el modernismo fue pro negros». Se trata de la introducción ráneos acusaron el mismo impacto que
PABLO NERUDA

Poeta chileno, nacido en 1904. Premio


Nobel en 1971. En su vastísima obra
poética se destacan los libros «Veinte
poemas de amor y una canción deses¬
perada», «Residencia en la tierra», «Es¬
paña en el corazón», «Canto general»,
«Odas elementales», «Navegaciones y
regresos», «Estravagario», «Cien so¬
netos de amor», «Memorial de Isla
Negra», «Cantos ceremoniales», «Ple¬
nos poderes». Ha escrito también «Ful¬
gor y muerte de Joaquin Murieta-
(teatro).

Asturias, aunque de manera más hacia 1945, hacen de la renovación y, como se ha de ver, en programa de
discreta, más subterránea: José María lingüística el eje de la creación lite¬ emancipación literaria.
Arguedas y Augusto Roa Bastos. raria. Se trata de un proceso de apro¬
Desde comienzos del siglo XIX
Peruano el primero, su idioma materno piación progresiva por la literatura de hasta nuestros días muchos escritores
fue el quechua y en su obra, recrea¬ un acervo cultural, en última instancia
han enfocado el problema de la auto¬
dora del mundo maravilloso del indio ya existente: la creación colectiva rea¬ nomía literaria como un «descubri¬
serrano, se expresa en un español lizada por aportaciones constantes,
miento» del continente, una descrip¬
trasvasado en moldes de la lengua injertos en el tronco de la lengua patri¬
ción del medio geográfico y social. Por
aborigen. Arguedas trata de defi¬ monial. La pretendida «degeneración lo demás, cierta crítica ha puesto siem¬
nir así su instrumento expresivo: de la lengua» viejo mito colonialista pre énfasis en la consideración del
«...escribí en un tipo de castellano que se revela así semilla fecundante.
elemento telúrico en la definición de
es una especie no de mezcla pero sí
La lengua aun la literaria no es nuestra literatura, privilegiando así el
de estilo, en el cual el espíritu, las
una invención caprichosa sino un pro¬ aspecto «contenidista» como sinónimo
características del quechua están de «autenticidad».
ducto histórico. En este sentido, los
bastante vibrantes, están muy claras
en el estilo castellano».
escritores últimos, al romper la linea- La visión de América Latina durante
lidad del lenguaje, están dando cuenta la colonia era en general idílica, o en
El profesor español Antonio Tovar
del momento actual, caracterizado por todo caso desinteresada. Con el adve¬
ha hecho un vaticinio sobre «las
una mayor complejidad del mundo lati¬ nimiento de la Independencia la visión
lenguas que podrían nacer en Amé¬ noamericano. Y esto es válido también
cambia esencialmente, se vuelve inte¬
rica». Se funda en la «esperanza de
para el Brasil, donde, a partir de la resada. La promoción romántica latino¬
que al menos en rincones actualmente
radical renovación de los modernistas,
americana especialmente Andrés
marginales, en esos profundos y riquí¬ la lengua literaria sufrió un proceso
simos depósitos de viejas tradiciones, Bello en la. parte hispanohablante,
semejante al de Hispanoamérica. Gonçalves de Magalháes en Brasil
se mantenga libre y actuante esta
fecunda fusión de culturas y mezcla La ruptura que en esos autores per¬ esboza un programa preciso: a una
de lenguas». mitió la incorporación del lenguaje nueva realidad política debe corres¬
cotidiano y del regional explica la apa¬ ponder una literatura diferente. La in¬
Otro fenómeno, la voluntad actual
de realizar la síntesis de casi cinco rición de un escritor como Joäo Gui- dependencia política tenía que repre¬
maräes Rosa, que supo unlversalizar sentar una superación de la colonia,
siglos de existencia cultural conflictiva
el habla del nordeste brasileño. El ser- también en el plano de la cultura.
en una expresión literaria, merece
reflexión seria y un análisis que aun tón (sertäo) fue uno de los últimos El programa de los románticos: lite¬
está por hacer. Nunca la conciencia de reductos de las mezcolanzas del por¬ ratura de tema y contenido america¬
tal operación fue tan aguda como en tugués con las lenguas indígenas y nos, es una búsqueda de la identidad
la producción de la generación pre¬ africanas. Al sustrato de esa lengua continental, con un sentido de futuro y
sente. «Vivimos en países donde todo hablada apela Guimaräes Rosa para una concepción totalizadora de Amé¬
está por decirse, pero también donde construir el largo relato-monólogo de rica Latina.

está por descubrirse cómo decir ese Riobaldo (más para oído que para
El programa de «independencia lite¬
todo (...). Si no hay una voluntad de leído) en su Gran sertón, veredas. Ha¬
raria» de los románticos tiene una per¬
lenguaje en una novela ae América bla popular, coloquial, sus posibles li¬
fecta continuidad en la posición de los
Latina, para mí esa novela no existe», mitaciones regionales son rescatadas
escritores que surgen en la segunda
declara el novelista mexicano Carlos por la gran habilidad inventiva, por
década del siglo XX, a partir de la
Fuentes. La vía parece ser el acerca¬ la fuerza poética del novelista, que usa
novela de la Revolución mexicana.
miento entre la lengua escrita y el las palabras más como estímulos, inci¬
Estos también asumen una postura
habla viva, tarea dificultosa y lenta taciones en movimiento, que como
esencialmente ética y tratan, como los
nominaciones fijas.
que ya cumplió en poesía, y de qué
admirable manera, el gran poeta de
románticos, de buscar la identidad 29
Por lo que respecta al contenido literaria americana por el camino del
América que es César Vallejo. literario, se convierte rápidamente en tema, del contenido. La analogía se
Los escritores actuales, surgidos clave de la definición de lo americano detiene en este punto, porque natural-

SIGUE A LA VUELTA
CRISOL DE CULTURAS (cont.)

mente los tiempos habían cambiado y ALGUNOS LIBROS RECIENTES SOBRE


las ideologías sufrido transformacio¬ AMERICA LATINA Y SU CULTURA
nes. Para aquellos las pautas de
apoyo eran las del liberalismo político Las venas abiertas de América Latina, por Eduardo Galeano, Casa de las Americas,
La Habana, 1971
y económico, unidas a la concepción
positivista del progreso. Cuando surge América en la historia, por Leopoldo Zea, Revista de Occidente, Madrid, 1970
la generación de escritores que J.A. El gran miedo de América Latina, por John Gerassi, Ediciones Península, Madrid, 1970
Portuondo llama de los «problemas
Historia contemporánea de América Latina, por Tulio Halperin Donghi, Alianza
sociales », la Revolución mexicana es¬ Editorial, Madrid, 1969
taba en pleno proceso; un tiempo des¬
Las Americas negras, por Roger Bastide, Alianza Editorial, Madrid, 1969
pués, se produce la Revolución rusa,
y en Hispanoamérica se gesta la lla¬ La expresión americana, por José Lezama Lima, Alianza Editorial, Madrid, 1969
mada «reforma universitaria». Aconte¬ Imaginación y violencia en América, por Ariel Dorfman, Editorial Universitaria,
cimientos eminentemente políticos que Santiago de Chile, 1970
marcaron de manera profunda las Tres novelas ejemplares (-La vorágine», «Don Segundo Sombra» y «Doña Bárbara»),
obras de ese periodo, determinando el por varios autores, Casa de las Americas, La Habana, 1971
interés principal de los autores por los Historia de la novela hispanoamericana, por Fernando Alegría, Ed. de Andrea,
temas sociales y especificando el. ca¬ México, 1966
rácter comprometido de esa literatura. El contenido social de la literatura iberoamericana, por Agustín Yáñez, Ed. Americana,
Una parte de esta narrativa la lla¬ Acapulco - México, 1967
mada «novela de la tierra» tiene sin La narrativa en Hispanoamérica, por Alberto Zum Felde, Ed. Aguilar, Madrid, 1964
embargo una línea casi idéntica a la Tientos y diferencias, por Alejo Carpentier, Ediciones Revolución, La Habana, 1963
del siglo XIX: la admiración ante la
Panorama de la actual literatura latinoamericana, por varios autores, Casa de las
naturalezabravia, que por lo demás
Americas, La Habana, 1969
hay que reducir para hacerla produc¬
tiva; el enfrentamiento del hombre con Ideología y realidad de América, por Daniel Vidart, Montevideo, 1968
la fuerza arrolladura del medio físico; Visión de los vencidos. Relaciones indígenas de la conquista, por Miguel León-
la oposición de los conceptos de «civi¬ Portilla, Universidad Nacional Autónoma de México, México, 1971
lización» y «barbarie» (en Rómulo Las Americas y la civilización (tres volúmenes), por Darcy Ribeiro, Buenos Aires, 1969
Gallegos, Alcides Arguedas, José Eus¬ Historia de la nación latinoamericana, por Jorge Abelardo Ramos, Buenos Aires, 1968
tasio Rivera, Mariano Azuela, Horacio
Letras del continente mestizo, por Mario Benedetti, Arca, Montevideo, 1967
Quiroga, para citar solamente algunos
nombres de importancia). En todo América Latina: anatomía de una revolución, por Enrique Ruiz García, Alianza
Editorial, Madrid, 1966
caso, la mayor parte de esa literatura
es decididamente política, denuncia¬ El drama de América Latina. El caso de México, por Fernando Carmona, México, 1964
dora, reivindicatoría. Raices contemporáneas de América Latina, por Gustavo Beyhaut, Buenos Aires, 1964
Hacía una política cultural autónoma para América Latina, por varios autores,
Montevideo, 1969
E.NTRE tanto, la situación introducción a la cultura africana en América Latina. Este volumen comprende tres
histórica había cambiado desde los trabajos que la Unesco considera primordiales como introducción al estudio de las
tiempos de la generación romántica. aportaciones culturales africanas en América Latina. Unesco, 1970
España había dejado de ser el blanco Política cultural de Cuba. Colección «Políticas culturales: estudios y documentos»,
de los escritores hispanoamericanos. Unesco, 1971
La colonia estaba lejos. La época en
que surge la generación de los « pro¬
Por su parte, El Correo de la Unesco ha dedicado ya un número entero a América
blemas sociales» coincide con la pene¬
Latina (junio de 1961) y otro a Brasil (agosto-septiembre de 1952), así como una
tración y las intervenciones armadas parte del número de enero de 1953 a Chile, del de febrero de 1954 a Haití y del
exteriores. Se escribe literatura anti¬ de febrero de 1955 a América Latina en general.
colonialista, denunciando las invasio¬
nes o las condiciones miserables en
que viven los explotados en las minas,
en las plantaciones bananeras, en las carse la raíz profunda del resultado
plano lingüístico. También como tema
zonas del petróleo. El inquietante fres¬ de ese choque cultural. Esta nueva
adoleció de fallas innegables: su mani-
co de la explotación del continente actitud reprocha al negrismo no haber
queismo caricaturesco; la posición
mestizo ha sido pintado de prisa, con retenido sino el aspecto superficial y
eminentemente humanitarista que in¬
indignación, con figuras retorcidas, tentaba defender a los indios de la folklórico de la condición de los negros
caricaturescas, grotescas, en las que en América. Pregona una rebeldía
explotación, condenando simultánea¬
se ha puesto más intención denuncia¬ capaz de dar cuenta de una «búsqueda
mente con el mismo gesto su cultura,
dora y redencionista que voluntad de de la identificación». Es la literatura
por el proyecto de igualación y de inte¬
crear un mundo novelesco.
gración en la sociedad «blanca» que el antillana sobre todo en lengua fran¬
Los novelistas brasileños de la dé¬ mismo entrañaba. El contrasentido era cesa la más lograda; en lengua espa¬
cada del 30 cultivaron una narrativa en ñola cabe citar a escritores como Nico¬
previsible: el indigenismo se basaba
todo equivalente a la de sus coetáneos en los criterios etnocentristas clásicos lás Guillen y Adalberto Ortiz. La posi¬
hispanoamericanos. Los más importan¬ de Occidente. Los autores que supera¬ ción ética de la negritud la ubica en la
tes son los llamados «novelistas del ron estos esquemas Arguedas, Astu¬ corriente de los «problemas sociales»
nordeste»: Graciliano Ramos, José rias son los que ponen de manifiesto en las letras hispanoamericanas.
Lins do Regó, Jorge Amado. las pautas de la cultura indígena, me¬ En síntesis, la búsqueda de la iden¬
Dentro de la corriente social es inte¬ diante una valorización de la vigencia tidad literaria mediante el cultivo de
resante destacar la tendencia indige¬ propia que tienen las coordenadas de una novela social y comprometida re¬
nista, que concierne a nuestro tema de esas civilizaciones.
presenta una etapa importante en el
manera especial. La diferencia que la Otra ocasión en que el encuentro proceso de identificación de la reali¬
separa de la posición idealizante ro¬ cultural problemático como tema se dad social misma. Pero fue una bús¬
mántica de los indianistas es el enfo¬ manifiesta en la literatura latinoameri¬ queda en cierta medida falsa. El mismo
que que proyecta sobre los problemas cana es cuando aparece la cuestión criterio de «veracidad documental»

30 reales del indio, como elemento margi¬


nado en una sociedad clasista.
negra.
negrismo
Ya vimos
como
el
vehículo
nacimiento del
expresivo
adoptado engañó, porque presentaba
una superficie deformada por la inten¬
Ya se vio el resultado poco convin¬ de ritmos africanos. Posteriormente ción redencionista que cada autor

cente que el indigenismo dio en el surge «la negritud», que trata de expli puso. En este sentido, es dudoso tam-
bien el carácter de literatura «socioló¬ LITERATURA Y SUBDESARROLLO
gica» que se le atribuyó.
José Carlos Mariátegui. ya había EN AMERICA LATINA (Viene de la pág. 15)
puesto en guardia sobre el peligro de
un realismo que aleja de la realidad. bre todo en La ciudad y los perros, parece que las dos tendencias son
Sin mencionar los abusos cuyas se¬ aparece, extraordinariamente refinada, solidarias y nacen de la misma situa¬
cuelas nefastas persisten aún a que la tradición del monólogo interior, que, ción de retraso o subdesarrollo.
condujo el intento de fundar la auten¬ perteneciendo a Joyce, pertenece
ticidad del escritor latinoamericano en
En su aspecto más grosero, la imita¬
también a Dorothy Richardson y ción servil de los estilos, temas, acti¬
el factor telúrico y la protesta. Virginia Woolf, a Döblin y Faulkner. tudes y usos literarios tiene un aire
Esto nos lleva a considerar el as¬ Aquí, el novelista del país subdesarro¬
risible o estrecho de provincianismo,
pecto «contenido» en la concepción y llado utiliza ingredientes que le vie¬ después de haber sido mero aristocra-
en las obras de los novelistas que nen por préstamo cultural de los paí¬
ticismo compensatorio de país colonial.
comienzan a publicar hacia 1945. Los ses productores de formas literarias
actuales escritores latinoamericanos originales. Sin embargo, las ajusta en Tal vez no sean menos groseras,
están realizando una síntesis, aprove¬ profundidad a su designio, para repre¬ en el lado opuesto, ciertas formas pri¬
chando los aportes culturales múlti¬ sentar problemas de su país, y com¬ marias de nativismo y regionalismo
ples, las tensiones resultantes de esos pone una fórmula peculiar. En este literario, que reducen los problemas
encuentros conflictivos, las experien¬ caso no hay imitación ni reproducción humanos a elemento pintoresco, trans¬
cias anteriores y una voluntad de pro- mecánica. Hay participación en los re¬ formando la pasión y el sufrimiento del
cursos que vienen a ser bien común a hombre rural o de las poblaciones de
fundización y de experimentación.
través de la situación de dependencia, color en un equivalente de la pina tro¬
Borges caracterizó el tránsito de una contribuyendo así a hacer de ésta una pical y del mango. Esta actitud
concepción a la otra con una frase situación de interdependencia. puede no sólo equivaler a la primera,
irónica y lúcida-.«La realidad no es sino también combinarse con ella, una
continuamente criolla». Si estos escri¬ Parece que uno de los rasgos posi¬
vez que redunda en servir a un lector
tores renuncian a la descripción lineal, tivos de la etapa de conciencia del
urbano europeo, o artificialmente euro¬
superficial del medio socioculturel, a subdesarrollo es la superación de la
peizado, la realidad casi turística que le
la intención ética explícita, es para actitud de recelo, que lleva a la acep¬
gustaría ver en América. Sin darse
abordarlo en su mayor diversidad y tación indistinta o a la ilusión de origi¬
cuenta, el nativismo más sincero corre
nalidad exclusivamente a cuenta de los
complejidad, en la discontinuidad pro¬ el riesgo de convertirse en manifes¬
blemática, contradictoria que reviste el temas locales. Quien lucha contra obs¬
tación ideológica del mismo colonia¬
contorno sociohistórico de un conti¬ táculos reales, queda más tranquilo y
lismo cultural, que su cultor rechazaría
reconoce la falacia de los obstáculos
nente subdesarrollado, oscilando entre en el plano de la razón clara y que
dos polos antagónicos: la revolución y ficticios. ¿Puede, en Cuba, hablarse de
pone de relieve una situación de sub¬
la dependencia total. artificio o evasión en la impregnación
desarrollo y consecuente dependencia.
surrealista de Alejo Carpentier, en su
' Por esto la realidad que se trasluce Sin embargo, como consecuencia
compleja visión transnacional, incluso
en las obras actuales es mítica, lúdica,
temática, tal como aparece en El del subdesarrollo, el regionalismo fue
alegórica, legendaria o simplemente Siglo de la Luces? En el Brasil, el mo¬ y sigue siendo todavía en Latinoamé¬
cotidiana. rica una fuerza estimulante en la lite¬
vimiento reciente de la poesía concreta
O como dice elocuentemente Julio adopta inspiraciones del norteameri¬ ratura. En la fase de conciencia de
Cortázar: «La auténtica realidad es cano Ezra Pound y principios estéti¬ país nuevo, correspondiente a
si¬ la
mucho más que el contexto socio- cos de Max Bense; no obstante, lleva tuación de retraso, da lugar sobre todo
histórico y político, (...) un dentista pe¬ a redéfinir el pasado nacional, permi¬ a un pintoresquismo decorativo y sus¬
ruano y toda la población de Latino¬ tiendo leer de manera nueva a poetas cita el descubrimiento y reconocimien¬
américa (...), cada hombre y los hom¬ ignorados, o iluminando conveniente¬ to de la realidad del país y su incorpo¬
mente la revolución estilística de los ración a los temas de la literatura. En
bres, el hombre agonista, el hombre
en la espiral histórica, el homo sapiens grandes «modernistas», Mario de An- la fase de subdesarrollo, funciona co¬
y el homo faber y el homo ludens, el drade y Oswald de Andrade. mo presciencia y después como con¬
ciencia de la crisis, orientándose hacia
erotismo y la responsabilidad social,
el trabajo fecundo y el ocio fecundo; lo documental y, con el sentimiento de
y por eso una literatura que merezca WONSIDERADA como deri¬
urgencia, hacia el empeño político.
su nombre es aquella que incide en el vación del retraso y de la falta de Es el caso de la región amazónica,
hombre desde todos los ángulos (y no desarrollo económico, la dependencia que atrajo a los novelistas y cuentis¬
por pertenecer al tercer mundo, sola¬ presenta otros aspectos, que mani¬ tas brasileños desde el comienzo del
mente o principalmente en el ángulo fiestan su repercusión en la literatura. naturalismo, en los decenios de 1870
socio-político), que lo exalta, lo incita, Atengámonos otra vez al fenómeno de y 1880, en plena fase pintoresquista;
lo cambia, lo saca de sus casillas, lo la ambivalencia, manifestado por impul¬ que es materia medio siglo después
hace más realidad, más hombre.» sos de copia y apartamiento, aparen¬ de La Vorágine, del colombiano José
El procedimiento aprovecha a me¬ temente contradictorios en sí mismos, Eustasio Rivera, situada entre lo pinto¬
nudo los ingredientes culturales de pero que pueden ser complementa¬ resco y la denuncia (más patriótica
base. Así la presencia temática, sub¬ rios, mirados desde ese ángulo. que social); y que vino a ser elemento
importante en La Casa Verde, de Var¬
yacente y decantada, de los símbolos Ese retraso estimula la copia ser¬
mitológicos indígenas puede ser detec¬ vil de todo cuanto la moda de los gas Llosa, en la fase reciente de alta
tada en buen número de obras actua¬ conciencia técnica, donde lo pinto¬
países adelantados ofrece, además de
les, especialmente entre los mexicanos seducir a los escritores con la emi¬ resco y la denuncia son factores en
(Fuentes, Rulfo, Arreóla, Yáñez) y en retroceso, ante el impacto humano que
gración, exterior e interior. Al mismo
se manifiesta con la inmanencia de las
escritores de otros países, como Ar¬ tiempo propone lo que hay de más pe¬
obras universales.
guedas y Roa Bastos. culiar en la realidad íocal, insinuando
un regionalismo que, siendo aparente¬ No será necesario enumerar todas
Asi concebido el tema o contenido,
dentro de la óptica expuesta, puede mente una afirmación de la identidad las otras áreas literarias que corres¬
ser considerado legítimamente como nacional, puede ser en verdad un ponden al panorama del retraso y del
un elemento definitorio de la identidad modo insospechado de ofrecer a la subdesarrollo, como los altiplanos an¬
sensibilidad europea el exotismo que dinos o el sertäo brasileño. O aun las _
latinoamericana en la literatura, por¬
que es el resultado de las aportaciones ella deseaba, como distracción, situaciones y parajes del negro cuba- íll
culturales más diversas, resultado y que así se vuelve forma aguda no, venezolano y brasileño, en los w
siempre abierto a nuevas contribucio¬ de dependencia en la indepen¬ poemas del cubano Nicolás Guillen
nes. '-« dencia. Desde la perspectiva actual. y del brasileño Jorge de Lima, en Ecué
SIGUE A LA VUELTA
LITERATURA Y SUBDESARROLLO (cont.)

Yamba-O, de Alejo Carpentier, Po¬ bían guiado por un sentido más rea¬ lleva al máximo su habitual contención

bre Negro, del venezolano Rómulo lista de las condiciones de vida y de verbal, eleborando una expresión redu¬
Gallegos, o Jubiabá, del brasileño Jor¬ los problemas humanos de los grupos cida a la elipsis, al monosílabo y a las
ge Amado. desamparados. frases mínimas, para expresar la as¬
fixia del vaquero, sometido a los nive¬
La realidad económica del subdesa¬ Entre los que entonces proponen con
les mínimos de supervivencia.
rrollo mantiene la dimensión regional vigor analítico y algunas veces con for¬
ma artística de buena calidad la des¬ Lo que ahora vemos, desde este
como algo vivo, aunque sea cada vez
más actuante la dimensión urbana. mistificación de la realidad americana, punto de vista, es una floración nove¬

Basta tener en cuenta que algunos en¬ figuran el guatemalteco Miguel Angel lística marcada por el refinamiento téc¬
tre los buenos, e incluso entre los Asturias, el ecuatoriano Jorge Icaza, nico, gracias al cual se transfiguran
mejores, encuentran en aquella di¬ el peruano Ciro Alegría, los brasileños las regiones y se subvierten sus con¬
Jorge Amado y José Lins do Regó, y tornos humanos, haciendo que los ras¬
mensión substancia para libros umver¬
salmente válidos, como el peruano otros. Todos ellos, al menos en parte gos, antes pintorescos, se descarnen
de su obra, hacen una novela social y adquieran universalidad.
José María Arguedas, el colombiano
Gabriel García Márquez, el paraguayo bastante relacionada con los aspec¬ Descartando el sentimentalismo y la
Augusto Roa Bastos y el brasileño tos regionales, y frecuentemente con retórica, nutriéndose de elementos no
Joäo Guimaräes Rosa. Solamente en restos de pintoresquismo negativo, realistas, como el superrealismo, el ab¬
los países con absoluto predominio de que se combina con cierto esquema¬ surdo y la magia de las situaciones, o
la cultura de las grandes ciudades, tismo humanitario. de técnicas antinaturalistas, como el

como la Argentina, Uruguay y quizás monólogo interior, la visión simultá¬


A pesar de que muchos.de esos es¬ nea, el escorzo, la elipsis, la novelís¬
Chile, la literatura regional se ha con¬
critores se caracterizan por un len¬
vertido en un real anacronismo. tica actual aprovecha lo que antes era
guaje espontáneo e irregular, el peso
la propia substancia del nativismo, del
En la fase de conciencia exaltada de de la conciencia social actúa a veces
exotismo y de la documentación social.
país nuevo, caracterizada por la idea en el estilo como factor positivo y da
Esto nos llevaría a proponer la distin¬
de retraso, tuvimos el regionalismo lugar a la búsqueda de interesantes ción de una tercera fase, que se podría
pintoresquista, que en varios países se soluciones adaptadas a la representa¬
llamar superregionalista. Esta fase
tenía por la verdadera literatura Se ción de la desigualdad y de la injus¬
corresponde a la conciencia lacerada
trata de una modalidad hace mucho su¬ ticia. Sin hablar del maestro consu¬
del subdesarrollo y origina una supe¬
perada o rebajada al nivel de la infra- mado que es Asturias, también un no¬
ración del tipo de naturalismo que se
llteratura. Su manifestación más am¬ velista discursivo como Jorge Icaza basaba en la referencia a una visión
plia y tenaz en la fase áurea fue acaso debe su perdurabilidad menos a la
empírica del mundo.
el gauchismo rioplatense. vociferación indignada o a la acentua¬
De este superregionalismo es tri¬
ción con la que caracterizó a los ex¬
En la fase de preconciencia del sub¬ butaria, en Brasil, la obra revoluciona¬
plotadores que a sus recursos de es¬
desarrollo, por los años 30 y 40, tuvi¬ ria de Joäo Guimaräes Rosa, sólida¬
tilo, utilizados para expresar la miseria.
mos el regionalismo problemático, que mente plantada en lo que podría lla¬
se llamó «novela social», «indigenis¬ Es el caso, en su novela Huasipungo, marse universalidad de la región. El
mo», «novela del nordeste», según los de cierto empleo del diminutivo, del hecho de haberse superado lo pinto¬
países, y que, sin ser exclusivamente ritmo de llanto en el habla, de la re¬ resco y lo documental no hace menos
regional, lo era en buena parte. Este ducción al nivel de lo animal: todo viva la presencia de la región en obras
regionalismo nos interesa más por eso junto encarna una especie de como la del mexicano Juan Rulfo, sea
haber sido un precursor de la concien¬ disminución del hombre, su reducción en la realidad fragmentaria y obse¬
cia del subdesarrollo, pero es justo a las funciones elementales, que se siva de El llano en llamas, sea en la
señalar que, mucho antes, escritores asocian al balbuceo lingüístico para sobriedad fantasmal de Pedro Pá-
como el boliviano Alcides Arguedas y simbolizar la privación. En Vidas Se¬ ramo.

el mexicano Mariano Azuela ya se ha cas, el brasileño Graciliano Ramos Antonio Candido

UN ARTE ORIGINAL ABIERTO AL MUNDO (Viene de le peg. 21)

geométricos del guatemalteco Carlos abstracta ha florecido desde la expo¬ americanos más originales, Fer¬
Mérida, que se inspiran en el arte pre¬ sición de Emilio Pettoruti de 1924, han nando Botero, cuyos «monstruos»
colombino. Otros pintores jóvenes, surgido otros movimientos importantes constituyen un extraño y satírico
como los expresionistas abstractos como los titulados Otra Figuración y comentario de la sociedad. Botero

Vicente Rojo y José Luis Cuevas, se Madí. Kósice (1924), nacido en Europa, comenzó a pintar en ese estilo con su
han dedicado a la pintura, el dibujo y es la figura descollante de este último Homenaje a Mantegna en -el que por
la ilustración sin seguir la tradición movimiento con sus estructuras espa¬ primera vez introdujo figuras humanas
muralista de su país. ciales hechas de plástico transparente, con cabezas hipertrofiadas de un
madera y metal. Un exponente desta¬ tamaño grotesco. Su Familia Presiden¬
Sin embargo, es en Brasil y Vene¬
cado del arte cinético, más reciente, cial, con obispos, militares y niños, es
zuela donde el modernismo ha consti¬
es el también argentino Julio Le Pare. como una fotografía distorsionada en
tuido una política conscientemente
la cual las grandes cabezas ponen de
aplicada por los poderes públicos. Aparte de esos grandes países en
relieve la vacuidad de los rostros.
No hay duda de que Brasilia y la los que existe un patrocinio privado
Universidad de Caracas pueden exhi¬ de las artes, en Chile, Perú y Colombia Acaso estos ejemplos sean sufi-^
birse como ejemplos de modernismo. ha surgido un número extraordinario cientes para demostrar la dificultad
Brasilia, diseñada por Oscar Niemeyer, de pintores de categoría internacional de una generalización. El arte latino¬
ofrece un marco espléndido para es¬ que, obviamente, dependen del mer¬ americano llegó a su mayoría de edad
cultores como Alfredo Ceschiati. cado extranjero. En Chile, Roberto con el movimiento muralista mexicano,
Matta ha encabezado la ofensiva pero en los últimos años, al abandonar
El edificio de la Universidad de
contra el «arte oficial» y ha creado una el marco nacionalista, ha despertado
Caracas ha dispensado la misma aco¬
pintura de la irrealidad, empleando un interés internacional. El hecho de
gida que Brasilia a los artistas nacio¬
sorprendentes formas viscerales. Esta que numerosos cuadros latinoamerica¬
nales y extranjeros. En Venezuela el
tendencia internacional está repre¬ nos se exhiban actualmente en mu¬
abstraccionismo ha sido la tendencia
32 más destacada, sobre todo en las
sentada en el Perú por Szyszlo y en
Colombia por Alejandro Obregón,
seos y galerías de América del Norte
y de Europa demuestra que las artes
obras de Soto y de Cruz-Diez.
entre otros. Pero Colombia ha produ¬ plásticas del continente han dejado
En la Argentina, donde la pintura cido también uno de los artistas latino muy atrás el provincianismo.

Jean Franco
LA

AMERICANA
LITERATURA

EN
LATINO-

LA UNESCO
»ni _blL
mm
En la colección de Obras Represen¬
tativas de la literrtura universal pu¬
blicada por la Un-.sco figuran los si¬ Formación de técnicos madera, 2.000 años de pintura china, minia¬
guientes autores latinoamericanos: turas persas, acuarelas, y pinturas anterio¬
en Venezuela
res a 1960.

EN FRANCES: Alcides Arguedas El Gobierno de Venezuela y la Unesco


(Bolivia), Machado de Assis (Brasil), firmaron el 14 de diciembre un plan de
Boletín cultural
Aluizio Azevedo (Brasil), Simón Bo¬ trabajo para desarrollar la formación de de la Unesco
lívar (Venezuela), Concolorcorvo
técnicos en ese país. De cuatro años de
pseudónimo de Alonso Carrió de La Unesco acaba de publicar el primer
duración, el plan costará más de nueve
la Bandera (Perú), Rubén Darío número de un nuevo boletín mensual sobre
(Nicaragua), Manuel de J. Galván millones de dólares (aproximadamente
sus actividades. Su propósito es mantener
(República Dominicana), José Her¬ 7.500.000 sufragados por el Gobierno vene¬
informados a los periodistas y editores
nández (Argentina), Jorge Isaacs (Co¬ zolano y 1.500.000 por el PNUD). La
que se ocupan de las cuestiones culturales
lombia), Monteiro Lobato (Brasil), Unesco asesorará a las autoridades de
acerca de todo cuanto están realizando o
José Marti (Cuba), Gabriel René Mo¬ Venezuela en el establecimiento de una
reno (Bolivia), José Enrique Rodó se proponen efectuar la Unesco y los
comisión nacional y una secretaria per¬
(Uruguay), Domingo Faustino Sar¬ organismos a ella asociados. Este boletín
manente de educación técnica.
miento (Argentina), y Juan Zorrilla de suministrará cada mes, en forma más
San Martín (Uruguay). Asimismo, se detallada, una información especial acerca
ha publicado en dicha colección una de los temas de mayor interés y actualidad.
Artes de Africa
Antología de la poesía iberoameri¬
cana (edición bilingüe) con se¬
La Unesco ha organizado una exposición
lección, prólogo y notas de Federico
ambulante de artes de Africa. Reciente¬ ¿Armamentos o educación?
de Onís, y una Antología de la poe¬
sía mexicana (bilingüe), según una mente se ha enviado a unos cien países Según datos de la Oficina Internacional
selección de Octavio Paz. veinte grupos de obras que integran la de Educación, de Ginebra, el mundo gasta
mencionada colección. Esta es la décima en armamentos una suma igual a la que
EN INGLES: Manuel Antonio de Al¬
exposición ambulante de reproducciones se destina a educación y salud conjunta¬
meida (Brasil), Concolorcorvo, Ma¬
de arte y fotografías que la Organización mente. En 1967, los gastos por concepto
nuel de J. Galván, Baldomero Lillo
envía por el mundo entero. Las. exposi¬ de armas y demás equipo militar ascen¬
(Chile), Teresa de la Parra (Vene¬
ciones anteriores se han realizado en dieron a 173.000 millones de dólares. En
zuela), Florencio Sánchez (Uruguay),
Domingo Faustino Sarmiento, Juan escuelas, fábricas, universidades y centros el mismo año se destinaron a la educación

Zorrilla de San Martin, y asimismo, culturales de 85 países y han tenido como 120.000 millones y a la salud 59.000 millo¬
en edición bilingüe, la Antología de temas centrales los siguientes: Del impre¬ nes. Cabe señalar que dede entonces los
la poesia mexicana ya citada. sionismo a nuestros días, dibujos de Leo¬ gastos en armamentos han aumentado
nardo de Vinci, grabados japoneses en considerablemente.

EL AÑO INTERNACIONAL DEL LIBRO


EN EL MUNDO ENTERO
En el presente mes de marzo se celebra la Feria Inter¬ carentes de recursos, a cada uno de los cuales se dotará
nacional del Libro Escolar en Bogotá, donde funciona el Centro anualmente con 150 volúmenes correspondientes a las materias
Regional para el Fomento del Libro en América Latina, creado que se consideren más adecuadas a las características econó¬
con ayuda de la Unesco. micas y culturales de la localidad; la creación de bibliotecas,
mediante una donación inicial de 250 volúmenes, en todos
aquellos municipios que se comprometan a realizar por su cuenta
Durante la primera semana de abril, los editores y libreros adquisiciones anuales de libros por un valor equivalente a diez
de Tailandia venderán los libros a mitad de precio para conme¬ salarios mínimos de la región, requisito que les permitirá obtener
morar la primera «Semana del Libro» en dicho país. cada año una nueva donación de 250 volúmenes; y la creación
de una biblioteca en cada buque que se incorpore a la marina
mercante brasileña durante el Año Internacional del Libro.

La «Asia Foundation» de Estados Unidos hará una donación Por otra parte, el Instituto se propone conceder, dentro del
de un millón de libros y publicaciones especializadas a institu¬ marco de la II Bienal del Libro de Sao Paulo, dos premios
ciones e individuos del continente asiático en el curso de 1972. literarios de carácter nacional para obras narrativas.
*

Durante el Año Internacional del Libro, se celebrará en


Diversas instituciones brasileñas han adoptado importantes
la Unión Soviética un curso para bibliotecarios de Asia y Africa
iniciativas para conmemorar el Año Internacional del Libro. La sobre el papel que desempeñan las bibliotecas públicas en el
Fundación «Bienal de Sao Paulo», el Instituto Nacional del Libro,
desarrollo social, económico y cultural de los pueblos.
la Cámara Brasileña del Libro y el Sindicato Nacional de Editores
de Libros, han organizado la II Bienal Internacional del Libro
que se celebrará en Sao Paulo del 17 al 25 de junio del año «Libros para todos» fue el lema de la cuarta Feria Interna¬
en curso.
cional del Libro que tuvo lugar el pasado mes de febrero en
Además de la exposición bibliográfica, se realizarán una serie El Cairo, donde en el curso de la primavera se celebrará una
de actividades que comprenden debates televisados sobre la reunión auspiciada por la Unesco sobre el fomento del libro
creación literaria y los medios audiovisuales y sus relaciones en los paises árabes.
con la cultura de masas, una demostración de cómo se edita
un libro, la concesión del Premio de Literatura de las Americas,
La Unesco está preparando una bibliografía especial de libros
que asciende a 25.000 dólares, y espectáculos artísticos para
niños y adultos relacionados con el tema del libro. para niños que contribuyan a fomentar la comprensión Inter¬
nacional.
El
Instituto Nacional del Libro está gestionando la emisión
de un sello postal conmemorativo del Año Internacional, así 33
como la realización de otros proyectos de gran interés. Entre El Gobierno de Malta inaugurará este año una biblioteca de
ellos figuran la creación de salas de lectura en los municipios «Libros hablados para los ciegos».
Los lectores nos escriben

FABRICANTES DE UTOPIAS lantos del mundo moderno, son cues¬ acuerdo en que la revista es suma¬
tiones apasionantes que, a mi juicio, mente interesante e instructiva, pero a
EN VEZ DE FABRICANTES
interesan a todos. Asimismo me gusta¬ la juventud de hoy le inquietan mayor¬
ría, de ser posible, tener la oportunidad mente las cuestiones sobre el adelanto
DE ARMAS
de leer en jalguno de los próximos técnico y cultural, así como las artes
números un artículo sobre las hipótesis plásticas, el cine y la música moderna,
Sin tener en cuenta el pintoresco temas sobre los cuales no hemos
acerca de la posibilidad de que exista
concepto antropoide que el Sr. Cha-
alguna forma de vida en otros planetas. encontrado ningún artículo en los últi¬
brier tiene del hombre (véase «Los mos números.
lectores nos escriben», en El Correo de Aprovecho la oportunidad para expre¬
Rosa Ivette Rojas
la Unesco de enero de 1972), hay que sar mis mejores deseos de éxito al
Correo de la Unesco en sus veinticinco La Habana, Cuba
reconocer que el ser humano nace tan
predispuesto a la defensa como cual¬ años de vida y para hacer votos por
quier otro organismo viviente; pero de que, cuando yo sea un abuelo jubilado,
pueda seguir siempre mirando a través PARA ENSEÑAR
eso a la ruinosa y suicida carrera de
armamentos hay un abismo tan enorme de esa «ventana abierta al mundo».
"LO DIFERENTE"
que sólo no lo ven los que padecen
Daniel Piperno
de miopía mental aguda. Ninguna per¬
Valence, Francia Tengo a mi cargo el departamento
sona sensata puede poner en duda lo
de educación social de una escuela
conveniente que sería poder cambiar
los fabricantes de armas por fabricantes
N.D.L.R. El Correo de la Unesco pu¬ inglesa que acoge principalmente a
blicó en enero de 1966 un articulo titu¬ alumnos «inmigrados»: cerca del 50 por
de utopías.
lado 'Mensaje a las estrellas*, cuyo ciento de los estudiantes proceden de
Librémonos de los cavernícolas mi-
autor, D.M.A. Mercer, del departamento las Indias Occidentales y un 20 por
crocéfalos que, inexplicablemente, a de Física de la Universidad de Sou¬ ciento son originarios de la India. Du¬
pesar de la evolución, aun aparecen thampton (Gran Bretaña), se dedica a rante los dos últimos años hemos
entre nosotros y en cuya rudimentaria estudiar métodos de comunicación con tratado de elaborar un programa que
mente encuentra acomodo la tenebrosa reafirme entre nuestros alumnos el
los seres extraterrestres dotados de
Idea de que la guerra es algo consus¬ inteligencia que pudieran eventualmente acervo de «culturas» diferentes y de
tancial al hombre y, por lo tanto, existir. conciencia de grupo, pero que al mismo
«natural» e Inevitable.
tiempo les ayude a orientarse desde
El Sr. Chabrier ha tenido la osadía ahora hacia actividades que entren en
de calificar de una forma descortés, CHINA EN LA UNESCO - el marco de la sociedad inglesa.
por no decir ofensiva, el trabajo del En la preparación del programa des¬
Sr. Noel-Baker, Premio Nobel de la Por una extraña coincidencia, el tinado al primero de esos objetivos,
Paz. Sin embargo, yo no me atrevo a mismo día en que leía El Correo de la encontré sumamente útil el número de
calificar esa especie de detritus men¬ Unesco de noviembre de 1971, dedi¬ El Correo de la Unesco, de noviembre
tal con que nos ha obsequiado el cado especialmente a la lucha contra de 1971, «Respuestas al racismo». Mi
Sr. Chabrier, de Colombes (Francia). el racismo, tuve conocimiento de un propósito fundamental, al servirme de
No nos dice en su carta si, después de comunicado de prensa en el que se la revista, fue señalar la similitud de
matarlos, podemos comernos a nuestros decía que la Unesco acababa de expul¬ las tradiciones históricas y culturales
semejantes o no; y es una lástima, sar de su seno a la República de China. de Africa, las Indias Occidentales, la
puesto que hubiera servido para darle, India y la Inglaterra europea, valién¬
al menos, una exacta clasificación entre No logro comprender cómo la
dome de un material visual y literario
los habitantes de este maltrecho pla¬ Unesco, cuyo campo de acción se
limita a las esferas de la educación,
relativo a los grandes figuras de esas
neta. culturas. En ese mismo número, el
E. A. Santonja Granados la ciencia y la cultura, puede excluir
articulo sobre Míklujo-Maklai, aunque
Constantina, España de esta manera, por motivos que no
se refiere más bien a la personalidad
pueden ser sino de orden político, a
de este viajero que a la de los papúes,
un pueblo que ha servido fielmente a
me fue útil para ilustrar las discusiones
las Naciones Unidas y a la Unesco
EL SITIO ERA OTRO que tenemos en clase sobre seres
desde su fundación. Y lo que es más,
«semejantes» y «diferentes».
se me ha informado que la decisión
En el número de El Correo de la Por otra parte, diversos educadores
de expulsión fue adoptada por el
Unesco de octubre de 1971, dedicado interesados en este tipo de estudios
Consejo Ejecutivo de la Unesco, en cir¬
al Irán, en la página 10 y bajo el cunstancias en que, según se afirma, han decidido constituir un grupo de
titulo de «Bestiario persa» se publica de acuerdo con sus estatutos compete trabajo, y me será grato servirme para
la fotografía de un vaso ornado con exclusivamente a la Asamblea General ello de la documentación que suministra
siluetas de caprinos, del que se afirma de la Organización adoptar una reso¬ una publicación como El Correo.
que proviene de Sialk. En realidad, lución en ese sentido.
dicho vaso fue encontrado en el solar Robert C. Bennett
Les aseguro que soy de raza blanca Escuela «William Murdoch»
arqueológico de Hisar, nivel II A, y
data de comienzos del tercer milenio y que no estoy comprometido en modo Handsworth, Birmingham
antes de nuestra era. alguno ni con la China de Formosa ni Gran Bretaña
con la de Pekín; pero al igual que
F. Bagherzadeh
ustedes, tengo «una ventana abierta al
Consejero Técnico del Ministerio
de Cultura y Artes que me permite observar,
TAMBIÉN LOS NIÑOS
Teherán, Irán juzgar y comparar.
Georges Terlinden SE INTERESAN
Bruselas, Bélgica
SOBRE LA VIDA En casa leemos con interés y placer
N.D.L.R. El Consejo Ejecutivo de la la excelente revista que es El Correo
EN OTROS PLANETAS Unesco decidió el 29 de octubre de de la Unesco y me complace infor¬
1971, por 25 votos contra 2 y 5 absten¬ marles que pasa de mano en mano
Supongo que son muchas las perso¬ ciones, »que a partir de esta fecha el por toda la familia. En efecto, sus
nas que han hecho ya el elogio de gobierno de la República Popular de magníficas fotos y dibujos atraen enor¬
El Correo de la Unesco, pero pese a China es el único representante legí¬ memente a los niños. Stéphanie, que
ello quisiera expresarles mi felicitación timo de China ante la Unesco*. es la mayor y tiene doce años, los
personal. Tengo catorce años y desde observa con mucho interés, y me es
hace algún tiempo advierto que los grato comunicárselo a ustedes. Desde
diferentes temas de que trata la TEMAS PARA "EL CORREO" luego, se trata de una publicación para
revista me interesan profundamente y adultos y pienso recomendársela a mis
algunas veces me conciernen de modo Con un grupo de Jóvenes hemos amigos.
directo. entablado conversaciones sobre El Jacques Artus
Cartago, Irán, la futurología, los ade Correo de la Unesco y estamos de Apt Vaucluse, Francia
Acaba de aparecer
Vacation study abroad XX
Repertorio de la Unesco Cours de vacances à l'étranger
indispensable para conocer Cursos de vacaciones en el extranjero
las posibilidades que se ofrecen
en el mundo para ampliar estudios
Vacation court«* and scholarships

y viajar por el extranjero. Coure «t bouree« de v;

Curaos y becas de

La presente edición, la vigésima,


informa detalladamente sobre:

CURSOS BREVES

SEMINARIOS

ESCUELAS DE VERANO

BECAS Y SUBSIDIOS DE VIAJE

La obra se publica anualmente en


interés de los estudiantes, los educa¬
dores y cualesquiera otras personas
que deseen estudiar o viajar por el
extranjero durante sus vacaciones.
Los datos en ella contenidos provie¬
nen de más de 500 organizaciones Trilingüe: inglés, francés, español
de 60 países. 109 páginas 1,50 dólares - 6 francos franceses

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PLAZA

DE LAS TRES CULTURAS


(Véase la página 9)

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