¿Por qué han predominado la generación hidroeléctrica y termoeléctrica?

Las mismas han predominado, porque fueron las primeras en alcanzar un desarrollo
que se pudiera decir lo suficientemente maduro para ser sustentable.

Además tenemos muchos ríos que nos proveen de suficientes fuentes para realizar
muchas centrales hidroeléctricas, y válgame decir, hay que aprovecharlas.

Con respecto a las centrales termoeléctricas, también han sido desarrolladas, porque se
ha tenido la oportunidad del desarrollo de la industria petrolera y el carbón,
importante para darle una mano a las hidroeléctricas, y ser el respaldo para cualquier
tipo de contingencias.

El desarrollo petrolero, también ha dado un impulso, principalmente en el área del gas,

como elemento principal en las centrales termoeléctricas, siendo esta fuente limpia y
en consonancia con el ambiente, menos contaminante.

Energías alternativas en Colombia

El Gobierno Nacional en los últimos años ha invertido en el desarrollo y aplicación de

tecnologías alternativas de producción de energía, que funcionen con recursos renovables,
para solucionar el problema de la crisis energética mundial y contribuir a un medio ambiente
más limpio.

Entre las empresas conocidas esta Empresas Públicas de Medellín (EPM), que coloco en
funcionamiento en la alta Guajira, específicamente en Jepirachí, el primer parque eólico,
con una cantidad importante de aerogeneradores, que producen y aportan 19.5 Megavatios
al Sistema Interconectado Nacional.

Cerca de un 6% de energía consiguieron ahorrar los colombianos gracias al

programa Apagar Paga. Basado en un sistema de incentivo y castigo en las
facturas por el ahorro o malgasto de energía (de ahí su nombre), la campaña
gubernamental tenía como objetivo fomentar la cultura del ahorro, ante la
inminencia de un racionamiento dada a la crítica situación de los embalses.
¡Objetivo cumplido! pueden decir orgullosos, pero ahora viene la segunda parte:
que la iniciativa se mantenga en el tiempo y se transforme en una nueva manera
de consumir.
El plan inicial tenía prevista una duración de seis semanas, pero fue tal la
respuesta de las empresas y las familias del país que en sólo cuatro semanas se
consiguió un ahorro de 553 gigavatios, un 5,76%. Además, casi 500 empresas
reportadas por no cumplir con el ahorro energético han sido invitadas a sumarse a
la campaña por el Gobierno, y se les ha informado de métodos para hacer un uso
eficiente y racional de energía.

¿Qué medidas se proponían a los hogares y podemos seguir aplicando?

El programa Apagar Paga se basaba en una serie de sencillas prácticas cuyo

hábito, una vez iniciado, es positivo que los colombianos conserven:

 En las neveras, compruebe que los empaques permitan un cierre hermético

 No la sobrecargue, esto dificulta el enfriamiento adecuado de los alimentos
 Evite introducir alimentos calientes, esto aumenta el consumo
 En los recintos con aire acondicionado, regule la temperatura a 22º y cierre
puertas y ventanas
 Mantenga apagado el aire acondicionado si no hay nadie en casa
 Un ventilador en el techo, a baja velocidad, es suficiente para mantener el
confort en una habitación
 Limpie el ventilador. El polvo hace que el equipo trabaje y consuma más
 No deje encendida la televisión innecesariamente
 Planche primero la ropa que necesita menos calor y, a medida que la
plancha se calienta, continúe con la que necesita más.
 Sustituya lámparas incandescentes por las de bajo consumo, sobre todo las
que más tiempo permanecen encendidas
 El diámetro de ollas y sartenes debe ser igual o superior al de las hornillas
 Cocine manteniendo las tapas de las ollas puestas
 Si cocina con el horno, evite abrir la puerta innecesariamente
 Mantenga las hornillas limpias y bien instaladas
 Si cocina con gas, la llama debe presentar un color azulado. Si se presenta
amarillo es porque las hornillas no están bien reguladas

Fácil, ¿no? ¡Podemos seguir haciéndolo!

¿Cómo se llegó a esta situación?

La sombra de un racionamiento sobrevolaba Colombia, debido a la crítica

situación de los embalses y a los daños en una de las unidades de Termoflores y
de la hidroeléctrica de Guatapé, y a la coincidencia con el fenómeno de El Niño.
De hecho los edificios públicos tuvieron obligación de apagar las luces a las seis
de la tarde. Esta restricción también fue eliminada gracias al éxito de Apagar
Paga.
En el logro del programa influyeron también la mayor generación de plantas
térmicas y el aumento de los caudales, debido a las lluvias. Según detalló el
Gobierno colombiano, del ahorro logrado, 271 giga vatios corresponden a hogares
y empresas. 180 giga vatios, a las termoeléctricas. Las lluvias consiguieron
generar 10 giga vatios más y las plantas menores, otros 30 giga vatios. ¡Ahora lo
importante es preservar las buenas costumbres de ahorro enérgetico!