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Ponencia
Tabasco necesita una opción económicamente viable que sostenga el funcionamiento del estado
en su proceso de industrialización y consolidación de su sociedad de comercio, bienes y servicios.
El campo tabasqueño es la opción más viable, práctica y de menor plazo para el sostén de la
economía actual.
La situación actual del sector productivo rural se puede caracterizar en la siguiente forma:
I. Abandono paulatino de la actividad productiva por otras actividades que ofrecen los
sectores secundario y terciario.
II. Bajo rendimiento por unidad de superficie.
III. Dependencia de subsidios e indemnizaciones.
IV. Baja inversión productiva
Esta situación se debe a una serie factores negativos dentro de los cuales destaca, por su gran
importancia decisiva, la falta de recursos para inversión, ya sea en infraestructura y adquisición de
bienes de producción, o para capital de trabajo.
I.-El abandono de la actividad productiva hace necesaria la intervención del sector privado y de
gobierno a través del diseño de programas que en su conjunto lleven como fin resarcir en primera
instancia el abandono de la actividad cacaotera, en su mayoría, esto es ocasionado por la baja o
nula remuneración de las actividades desarrolladas y de la pérdida del interés en mantener la
actividad por parte de los sucesores de cada familia, los programas a desarrollar deben estar
orientados a lo siguiente:
II.-El bajo rendimiento por unidad productiva es causado esencialmente por dos factores:
a) EL desconocimiento del productor a los requerimientos técnicos-agrícolas necesarios para
una mayor producción, considerando que a través del tiempo se hace necesario una
mayor profundización de estos que permita mantener e incrementar la producción.
b) Participación insuficiente de las entidades encargadas del sector y la nula o baja
participación de las empresas privadas que conforman la cadena en la transferencia de
tecnología relacionada con la actividad.
III.-La dependencia de los subsidios deberá ser cada día menos si establecemos esquemas o
programas que permitan llevar al productor a un estado productivo que permita por sí mismo el
desarrollo de su actividad, los programas iniciales de independización de los subsidios podrán
orientarse a las actividades directamente relacionadas con su economía familiar, como lo es:
Siembra de plantaciones
Aplicación de insumos
Cosecha del cacao
Incentivar la actividad cacaotera a través de un esquema que permita otorgar un finiquito
por cada kilogramo de cacao entregado a cualquier comercializadora participante en el
programa.
IV.-La baja inversión productiva se deriva en gran medida de la desconfianza del sector bancario
en acreditar al sector y si bien existen diferentes fuentes de financiamiento al campo, estas no
cubren la real necesidad del sector, ya sea por exigencia de requisitos de garantía, fortaleza
económica, rápida recuperación y nivel de rentabilidad para la institución, o por lo caro y
complicado del servicio prestado. Esto deja a la mayor parte de los productores sin acceso al
crédito formal.
En monto suficiente para cubrir la inversión requerida y/o el capital de trabajo necesario.
Disponible en la fecha que se requiera.
Plazo de recuperación de capital e intereses conforme al ciclo económico de la actividad
apoyada.
Con un costo financiero acorde a la actividad que se trate, y no dictado por las variables
macroeconómicas o políticas de rentabilidad bancarias.
En otras palabras, una nueva política financiera para el campo. La implementación de un nuevo
sistema de financiamiento rural, corresponde al gobierno federal, pero a nivel estatal se pueden
establecer formas asociativas de productores debidamente habilitadas, con las siguientes
características y funciones:
Como organismo gremial habilitado, ser gestor de financiamiento ante la fuente más
indicada.
Compilar la garantía líquida de los productores y negociar las de origen oficial.
Determinar mediante una evaluación técnica, económica y financiera, la necesidad real de
financiamiento para sus agremiados y negociar con la fuente el plazo y costo de la
operación.
Dispersar el crédito en cuanto a necesidad real de cada agremiado.
Contribuir al seguimiento de la operación.
Recuperar y liquidar capital e intereses a la fuente.
Repartir ganancia neta a los productores.
Establecer esquemas de Cobertura-Agro-Crediticia que permita continuar la actividad en
años catastróficos, sin impactar a las Entidades Financieras.
Se considera que estas formas de asociación para la obtención de financiamiento, sin mediar un
nuevo sistema de financiamiento nacional, son las más adecuadas para la situación actual del
campo tabasqueño por las siguientes razones:
Cumplen con la función inmediata: Obtención de crédito en mejores condiciones para los
agremiados o socios.
Con el tiempo se va creando en los productores una cultura crediticia sana.
El productor dependerá cada vez menos de subsidios, y su objetivo primario será el de
obtener el rendimiento potencial de su cultivo y, por tanto, mayor ganancia neta por
unidad de superficie.
Muchas gracias.