El documento resume las primeras actividades de lectoescritura propuestas en el libro Pimpollito. Inicialmente, se presentan las vocales de manera desordenada y luego se reagrupan para enseñar su correspondencia con los sonidos. Luego, se introducen las consonantes S y M a través del método analítico, descomponiendo las palabras en sílabas y letras. Finalmente, se ilustran las consonantes para que los estudiantes comprendan el concepto de manera global e identifiquen la correspondencia entre sonido y letra.
El documento resume las primeras actividades de lectoescritura propuestas en el libro Pimpollito. Inicialmente, se presentan las vocales de manera desordenada y luego se reagrupan para enseñar su correspondencia con los sonidos. Luego, se introducen las consonantes S y M a través del método analítico, descomponiendo las palabras en sílabas y letras. Finalmente, se ilustran las consonantes para que los estudiantes comprendan el concepto de manera global e identifiquen la correspondencia entre sonido y letra.
El documento resume las primeras actividades de lectoescritura propuestas en el libro Pimpollito. Inicialmente, se presentan las vocales de manera desordenada y luego se reagrupan para enseñar su correspondencia con los sonidos. Luego, se introducen las consonantes S y M a través del método analítico, descomponiendo las palabras en sílabas y letras. Finalmente, se ilustran las consonantes para que los estudiantes comprendan el concepto de manera global e identifiquen la correspondencia entre sonido y letra.
El material utilizado para el análisis pertenece al libro de lectura denominado
Pimpollito, cuya autora es la Profesora de Pedagogía e investigadora María Elena
Altube.
A y B) En primera instancia, la primera aproximación propuesta a la
lectoescritura es la presentación de las vocales, las cuales se encuentran acompañadas por una colorida ilustración en donde se las dispone de manera desordenada (dentro de globos o en las aspas de un molino), para luego reagruparlas mediante una secuencia unida por guiones mediante pares caracterizados por la mixtura de las tipografías (imprenta minúscula y cursiva minúscula). De esta forma, puede decirse que, según las palabras introductorias de Altube a dicho libro, las vocales son los elementos fónicos base con un sonido particular que deben enseñarse de manera temprana, gracias a que con ellas se conforman las palabras de nuestro idioma. (cfr. Altube, 1938: p. 1-2).
Inferimos que el docente se encarga o se ha encargado de precisar su distinción
mediante ejercicios de vocalización para familiarizar la correspondencia entre la grafía y el sonido de cada una de ellas. A esto se agrega que la disposición de las vocales reagrupadas permite al alumno reflexionar y poner en práctica la escritura de manera ordenada mediante la disposición horizontal. De esta manera se inicia e camino de aprendizaje mediante los métodos sintéticos de carácter fonético al generar una conciencia lingüística de correspondencia entre el sonido y el signo con el fin de distinguir las primeras letras.
A estas primeras actividades de reconocimiento se suma la implementación de
las primeras consonantes (S y M) a través del método analítico debido a que en ambas se presenta una palabra que luego se descompone en sílabas para, posteriormente, desglosarla en letras. Finalmente, dichos términos se recomponen. Puede interpretarse que el educador, paralelamente, realiza una articulación entre el sonido de cada palabra y la forma gráfica en sus diferentes momentos de análisis (palabra-sílaba-letra).
Las consonantes tratadas en las actividades 2 y 3 son acompañadas de una
imagen que inicia con cada una del par, por lo cual se relaciona con el método global, que trabaja con imágenes que la identifican para que el estudiante comprenda el concepto desde el principio. Debido a esto, cada una de las páginas posee una ilustración de tamaño considerable para introducir los términos Seso o Masa con el fin de que el niño logre reflexionar sobre la correspondencia consonántica.