You are on page 1of 13

UNIVERSIDAD ESPECIALIZADA DE LAS AMÉRICAS

EXTENSIÓN DE VERAGUAS

FACULTAD DE BIOCIENCIAS Y SALUD PUBLICA

LICENCIATURA EN SEGURIDAD Y SALUD OCUPACIONAL

CONSECUENCIAS MEDIOAMBIENTALES A CAUSA DE LA INDUSTRIA

TECNOLOGÍA INDUSTRIAL II

PROFESOR:

JULIÁN GONZÁLEZ

ELABORADO POR:

LEIDYS CEDEÑO

VICTOR CORONADO

PAULA FUENTES

ANTHONY GONZÁLEZ

EYNAR RUIZ

FECHA DE ENTREGA:

05 DE SEPTIEMBRE DE 2018
INTRODUCCIÓN

Este tema nos permite conocer a fondo todo el daño que el hombre, con el uso de
las nuevas tecnologías para lograr una industrialización, ha traído un sin numero
de consecuencias en la que el hombre y el ambiente por su creado, están
sufriendo.
Con el transcurrir de los años el ser humano ha utilizado la tecnología para
modificar el ambiente para su beneficio; sin embargo, esta tecnología también ha
contribuido a perjudicar el ambiente.
Los componentes del ambiente han sufrido un serio impacto en la medida en que
el progreso tecnológico ha avanzado y se han aplicado en las actividades
industriales, mineras y agropecuarias.
CONSECUENCIAS MEDIO AMBIENTALES A CAUSA DE LA INDUSTRIA

Como el proceso de industrialización permea a todas las manifestaciones del


sistema social, afectará al medio ambiente tanto a través de su impacto directo
como indirectamente, al provocar alteraciones en la dinámica social.

El medio ambiente está siendo considerado como un factor natural, que define una
ventaja comparativa más en el análisis tradicional. Está siendo utilizado para
«explicar» la relocalización industrial a nivel internacional y legitimar dicho proceso
desde un particular punto de vista. El medio ambiente, así como todo factor
natural, no define por sí solo ventaja alguna para un país si éste está supeditado a
la dinámica del centro, que es el que se aprovechará en definitiva de la misma.

Autores como D’Arge señalan que uno de los recursos naturales clave es la
capacidad de absorción del medio ambiente, es decir, la capacidad de la
naturaleza para absorber y neutralizar flujos de desechos incluyendo entre estos
últimos la contaminación. Si se acepta esta situación --argumenta D’Arge-- debería
producirse un movimiento importante y un proceso de relocalización hacia países
con normas ambientales menos restrictivas. Este planteamiento contiene dos
falacias fundamentales. Primero, ¿cómo se determina y calcula la capacidad del
medio ambiente para absorber desechos? Segundo, es claro que se está
confundiendo una ventaja natural con una ventaja que se podría calificar de
institucional: una norma ambiental menos rígida. Así, ante la imposibilidad de
cuantificar una aparente ventaja, se le asimila a la norma, que es el resultado de
una decisión del grupo social en función de la forma en que se percibe el problema
y del proceso de negociación interno en el sistema socioeconómico y político. La
norma, evidentemente, es resultado de un acuerdo entre los que contaminan, los
que consumen y sufren la contaminación, y el nivel político. Los efectos
ambientales deben ser considerados como parte del proceso de planificación
industrial, pero lo importante es que sean introducidos en la toma de decisiones
como una dimensión más, que tiene su propia razón de ser dentro del proceso de
desarrollo, y no como un impuesto más, un costo monetario a ser considerado en
la estructura de costos.

La influencia de la economía industrializada en el Medio Ambiente Salvo por


esporádicas noticias que aparecen en los medios de comunicación acerca del
medio ambiente, es obvio que el gran público desconoce la influencia y los efectos
que puede tener la economía industrial en la naturaleza, salvo cuando se produce
una catástrofe de grandes dimensiones. El deterioro progresivo de la naturaleza
no es responsabilidad directa de la evolución natural de la misma, sino de la
presencia del hombre que, de forma consciente y deliberada, a sabiendas de la
destrucción masiva del medio ambiente en todo el mundo, continua de forma
imparable en su evolución negativa con las graves consecuencias que ello
produce en el todo el mundo. Ante este deterioro globalizado, la reacción es
siempre lenta y tardía.

La explotación sin medida de los recursos naturales ha llevado al agotamiento de


determinados yacimientos, a lo que se ha unido la contaminación cada vez más
extendida debido a la industrialización.

La economía está completamente globalizada, siendo la intercomunicación


productiva un hecho real, por muy distantes que se encuentren dos países
productivos. A ello se une la competencia cada vez más arraigada en la
producción de productos a bajo coste, aun cuando ello se lleve a cabo a costa del
agotamiento de determinados recursos naturales y sin preocupación alguna por el
medio ambiente.

Con la intención de poder disminuir en la medida de lo posible la destrucción de la


naturaleza por la economía industrializada, se aprobó en la Declaración de Río de
Janeiro de 1992, bajo los auspicios de la ONU, el concepto del Desarrollo
Sostenible, que, entre otros objetivos, pretende conseguir un reparto equitativo y
uso adecuado de los recursos naturales. Para ello se pretende difundir el uso de
tecnología no invasiva de la naturaleza. Pero para que el Desarrollo Sostenible de
la economía industrializada pueda tener éxito, se necesita un consenso mundial
que no existe más que en la teoría. Dicho acuerdo requiere inexcusablemente un
compromiso político de cooperación internacional a efectos de conseguir la
planificación económica sostenible, esto es, racional y prudente para mantener el
uso de explotación de los recursos naturales.

La influencia que tiene la economía industrial en la naturaleza aparece, de forma


bien sostenible, en la planificación industrial y también en el urbanismo. En este
aspecto, la incidencia de la económica industrial, en sus distintos aspectos, no es
igual en un país desarrollado que en otro en vías de desarrollo. El proceso de
industrialización representa el aspecto más dinámico del fenómeno del desarrollo
económico. Es evidente que los países que hoy se consideran desarrollados, han
pasado por un proceso de industrialización de tal magnitud, que ha modificado la
estructura de todo su sistema, siendo esa industrialización la piedra angular sobre
la cual asentar su desarrollo económico y social.
Pero la expansión industrial ha alterado profundamente los sistemas
sociales: creando nuevos bienes, diversificando los patrones de consumo,
introduciendo nuevas necesidades, alterando las estructuras económicas, sociales
y políticas y, fundamentalmente, acelerando el proceso de expansión económica a
nivel mundial. No se puede evitar que todos los países pretendan industrializarse,
lo que supone necesariamente un aumento en el consumo de productos y
sustancias contaminantes. Sin una economía industrializada es muy difícil que
puedan salir del subdesarrollo, lo que les obliga a sacrificar el medio ambiente en
el que viven, o bien, a vender sus derechos de contaminación a los países ricos, lo
que le deja al margen de cualquier progreso económico.

Los habitantes de países industrializados sufren los efectos de la contaminación


directamente, efecto en muchos casos inmediato. Es por ello, que este grave
problema no se puede solucionar de forma local sino internacional.
Por otro lado, los recursos naturales no son inagotables. Al menos no lo son en la
dimensión temporal humana. El agotamiento de un recurso natural tiene un
impacto negativo sobre el medio ambiente, pudiendo causar su colapso
económico definitivo en un determinado lugar, que arrastraría con él al sistema
social que depende de él para su subsistencia. Pero además tiene efectos graves
sobre el proceso de desarrollo, al comprometerlo en el largo plazo.

Una de las características de la industria moderna ha sido su persistente


tendencia al aumento de la escala de producción, con lo cual los impactos
ambientales que produce tienden a ser mayores. El consumo se multiplica cada
cinco años de forma inexorable. Al no establecerse medidas racionales de
educación en el uso prudente de los recursos naturales, su agotamiento producirá,
de forma inevitable, un desastre medio ambiental de consecuencias mundiales en
los próximos años.
 El vertido de residuos (líquidos, sólidos y especialmente tóxicos), la
construcción de numerosos vertederos e incineradoras, el deshecho de
plásticos y aceites contaminantes, la producción de humos, supone un
grave peligro no sólo para la vida humana, sino también para la flora y la
fauna de un determinado territorio.
 En la Conferencia de Kyoto de 1997, los Estados firmantes se
comprometieron a reducir los gases de efecto invernadero en un 5%, para
evitar el calentamiento del planeta. Por ello se elevó dicho compromiso en
una reducción del 85 entre los años 2008 a 2012, lo que no se ha cumplido.
Tanto Rusia, China y especialmente los Estados Unidos de Norteamérica,
se negaron a firmar dicho acuerdo, precisamente los tres Estados más
contaminantes del mundo. Lo único positivo de Kyoto fue el reforzamiento
de la conciencia mundial para proteger la naturaleza.
 Es bien conocido en España, cómo se ha destruido el medio ambiente del
litoral del Mar Mediterráneo, por las urbanizaciones masivas construidas al
margen de todo control racional y de protección de la naturaleza.
 El impacto de la industria sobre la naturaleza se produce por la ocupación
del espacio, la utilización de los recursos naturales y la generación de
residuos: desechos y contaminantes.
 La solución es muy compleja y no está al alcance del sistema político y
económico en la mayoría de los Estados, que asisten a las Conferencias
Internacionales sobre el Medio Ambiente. Sólo en los países nórdicos
aparece una conciencia clara del problema en el deterioro progresivo del
medio ambiente. Pero las medidas allí adoptadas no son aplicables en
nuestro entorno geográfico, debido a diferencias sociales, económicas y
políticas.

Otros problemas más complejos pueden tener lugar a consecuencia del rápido y
desmesurado crecimiento demográfico en urbanizaciones carentes de un plan
director que garantice los recursos e infraestructuras necesarias para la
satisfacción de las necesidades básicas de las nuevas poblaciones y distritos
urbanos, tales como las necesidades de viviendas, fuentes de abasto, sistemas de
tratamiento de agua, la disposición de residuales y demás elementos que
garanticen las acciones básicas de saneamiento ambiental, las redes viales que
den respuesta al incremento del tráfico, entre otros, así como nuevas
transformaciones en el uso del suelo, la demanda de nuevas infraestructuras y
equipamientos de los servicios de alimentación, educación y salud.
Se han desarrollado procedimientos para identificar, evaluar y mitigar los efectos
para el ambiente y la salud vinculados a los principales proyectos industriales,
agrícolas y otros grandes proyectos de desarrollo antes de que los mismos se
ejecuten. Se han preparado guías de evaluaciones de impacto en salud ambiental
(EISA) por varias organizaciones internacionales incluyendo la oficina regional de
la OMS para Europa (1985,1986). Varios países también han preparado guías
nacionales.

La evidencia muestra que los factores ambientales influyen en el 80 % de las


enfermedades estudiadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se
calcula que en todo el mundo el 24 % de la carga de morbilidad (años de vida
sana perdidos) y aproximadamente el 23 % de todas las defunciones (mortalidad
prematura) son atribuibles a factores ambientales. El grueso de estos efectos
recae en los grupos más vulnerables como niños, gestantes, enfermos crónicos y
personas de la tercera edad.

En la actualidad el INHEM y el Instituto de Salud de los trabajadores (INSAT), en


conjunto con varias instituciones del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio
Ambiente y otras instituciones de diversos organismos del Estado, trabajan en
proyectos relacionados con el tema en varios de los polos de desarrollo industrial
antes mencionados, lo que pone de manifiesto el carácter intersectorial de estos
estudios. Los resultados obtenidos aportarán criterios científicamente avalados
que fundamenten la adopción de medidas dirigidas a prevenir o disminuir al
mínimo la exposición de los trabajadores y la población general a los
contaminantes derivados de la construcción, explotación y disposición de
residuales y desechos de dichas industrias y por ende de sus posibles impactos
adversos sobre la salud; elementos que se corresponden con la política y
propósitos del Ministerio de Salud Pública.
EL IMPACTO AMBIENTAL DE LAS ACTIVIDADES INDUSTRIALES

El impacto directo de la industria sobre la naturaleza se produce básicamente por


la ocupación del espacio, la utilización de los recursos naturales y la generación
de residuos: desechos y contaminantes. De estos impactos, la contaminación es el
aspecto que ha sido examinado más detalladamente, y no es raro encontrar
opiniones en el sentido de que sería la única forma de impacto de la industria
sobre el medio. Más aún, ciertos programas de industria y medio ambiente se
limitan exclusivamente a dicha manifestación.

Este enfoque prevalece en los países industrializados, cuyos habitantes sufren los
efectos de la contaminación directamente, efecto en muchos casos inmediato. El
hombre común lo percibe en sus lugares de trabajo o en sus zonas de residencia.

¿Qué es lo que pueden hacer las industrias para reducir este nivel de
contaminación?

 Uso eficiente de la energía.


 Consumir agua de manera responsable, en caso de contener sustancias
peligrosas, invertir en un equipo de desintoxicación del agua.
 Buscar nuevas oportunidades de comercialización con los residuos.
 Sensibilizar al equipo de trabajo.
 Reducir el volumen y carga contaminante de los vertidos de agua residual.
 Tomar en consideración el medio ambiente y hacer que sea una parte
importante de la gestión de tu empresa.
EFECTOS DE LA INDUSTRIA EN EL AMBIENTE

La industria no requiere sólo recursos naturales, sino también espacio. La forma


en que se va ocupando el espacio tiene efectos importantes en el sistema natural
e, indirectamente, en el sistema social, sobre todo cuando esa ocupación se lleva
a cabo a expensas de otros recursos y, muy en especial, de los terrenos agrícolas.
La ocupación del espacio agrícola por establecimientos industriales significa no
sólo un determinado impacto ambiental, sino también la pérdida del recurso tierra
para la producción de alimentos. Por lo tanto, reduce las capacidades de
sustentación del ecosistema natural frente a una población creciente.

La forma en que la industria ha vinculado países centrales con periféricos ha sido


examinada extensamente en la bibliografía de que disponemos. Sin embargo,
parece conveniente hacer un breve resumen del fenómeno destacando aquellos
aspectos de directa incidencia en la relación entre sistemas sociales y medio
ambiente.

El impacto ambiental es el efecto que produce la actividad humana sobre el


medio ambiente. El concepto puede extenderse a los efectos de un fenómeno
natural catastrófico. Técnicamente, es la alteración de la línea de base ambiental.

La ecología es la ciencia que se encarga de medir este impacto y tratar de


minimizarlo.

Las acciones de las personas sobre el medio ambiente siempre provocarán


efectos colaterales sobre éste. La preocupación por los impactos ambientales
abarca varios tipos de acciones, como la contaminación de los mares con
petróleo, los desechos de la energía radioactiva o desechos
radioactivos/nucleares, la contaminación auditiva, la emisión de gases nocivos, o
la pérdida de superficie de hábitats naturales, entre otros.

La evaluación de impacto ambiental (EIA) es un procedimiento por el que se


identifican y evalúan los efectos de ciertos proyectos sobre el medio físico y social.
La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) es el documento oficial que emite el
órgano ambiental al final del procedimiento de EIA, que resume los principales
puntos del mismo y concede o deniega la aprobación del proyecto desde el punto
de vista ambiental. La identificación y mitigación de impactos ambientales es el
principal objetivo del procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental. La
aplicación de acciones de mitigación, siguiendo la denominada "jerarquía de
mitigación", pretende contrarrestar los efectos negativos de los proyectos sobre el
medio ambiente.

El proceso de industrialización representa el aspecto más dinámico del fenómeno


del desarrollo. Es evidente que los países que hoy se consideran desarrollados,
han pasado por un proceso de industrialización tal, que ha modificado la estructura
de todo su sistema. Por este carácter dinámico y la capacidad de transformación
estructural que le es inherente, los países en desarrollo ven en la industrialización.

El proceso de industrialización de América Latina se basa en tecnologías


importadas intensivas en capital, con lo cual sus efectos, desde el punto de vista
de la ocupación, son relativamente débiles y no solucionan los problemas de
empleo ni aquellos derivados de los desequilibrios sectoriales y regionales, sino
que tienden a acentuarlos. A ello se suman todos los problemas de una creciente
dependencia tecnológica.

Se enfrenta, así, un problema complejo que tiene relación con la estructura del
sector industrial en México, que se ilustra adicionalmente en los puntos siguientes:

 La industria azucarera presenta efectos contaminantes sobre el agua


derivados de su elevado consumo energético, sus descargas de alta
temperatura y gran contenido de materia orgánica (bagazo, cachaza y
vinazas). Además, contribuye a la contaminación del aire por la utilización
de combustóleo y bagazo, careciendo totalmente de equipos de control de
emisiones.

 La industria minero-cuprífera presenta efectos contaminantes del agua por


descargas ácidas, de metales, cianuros de sodio, materiales reactivos,
aceites lubricantes usados y sólidos suspendidos, y del aire por partículas
de polvo derivadas de sus procesos.
 La industria siderúrgica afecta al agua con descargas ácidas y amoniacales;
al aire con polvos, gases y humos provenientes del carbón y gas natural en
procesos de combustión ineficientes.
 La industria del cuero genera residuos de “descarne”, “raspa”, polvo de piel
cromada y recorte; además, contamina el agua con sales, cromo, materia
orgánica, grasas, taninos vegetales y sintéticos, y el aire con polvos, gases
y humos.
 La industria de celulosa y papel contamina el agua con materia orgánica y
sustancias químicas cloradas y el aire como resultado de procesos de
combustión.
 En lo que se refiere a la minería en general, los principales riesgos derivan
de la fase de explotación, principalmente de la operación de presas de
jales. La misma puede generar escurrimientos y arrastres de residuos
minero-metalúrgicos peligrosos de alta afectación ambiental, así como la
descarga de aguas residuales en cuerpos receptores. Igual ocurre en los
procesos de beneficio de minerales, que pueden tener efectos ambientales
negativos a través de sus aguas residuales, materiales y sustancias
peligrosas y, en algunos casos, emisiones a la atmósfera. Estas últimas son
particularmente importantes en los procesos de fundición y refinación.
 Finalmente, la actividad petrolera involucra acciones de grandes
dimensiones que afectan drásticamente al ambiente. Ello es
particularmente cierto con relación a las actividades de refinación y
petroquímicas que, aunque se convierten en un importante estímulo a la
formación de polos industriales, muestran por lo general niveles altos de
contaminación, así como de deterioro de su entorno natural.
CONCLUSIÓN

El desarrollo de la industria ha producido grandes consecuencias en el mundo, las


cuales le concedieron ventajas para el incremento de la producción y agilización
del transporte; pero, además, ocasionaron problemas medioambientales, como,
por ejemplo:

 La calidad y capacidad del ambiente se tornó cada vez más débil, se


produjo un declive acelerado debido a la industria.

 Descubrimiento, uso y explotación de combustibles fósiles y de recursos


minerales de la tierra.

 Agotamiento de recursos energéticos y biológicos.

 Contaminación de las aguas superficiales.

 Contaminación de la atmósfera y los suelos, calentamiento global,


acumulación de residuos como consecuencia de descargas de residuos
industriales.

You might also like