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DERECHO PRIVADO

TEMA I

El concepto del Derecho

I) Las 4 acepciones o significados de la palabra Derecho:

1. Recto, correcto, que no es chueco o torcido.

2. Es el conjunto de preceptos, reglas o leyes que gobiernan la actividad


humana en sociedad y cuya observancia esta sancionada por la coacción
social o fuerza publica (Ejemplo: Cuando hablamos del Estado de Derecho).

3. La palabra derecho designa las facultades o prerrogativas pertenecientes


a un individuo y de las cuales puede prevalecerse respecto a sus
semejantes en el ejercicio de su actividad (Ejemplo: Cuando hablamos de
nuestros derechos).

4. Designa la ciencia referente al derecho en general y a los derechos que


establece (Ejemplo: Cuando decimos que estudiamos la materia o carrera
de Derecho).

Ejemplo: No es derecho (1), que obligues a tu hijo a estudiar Derecho (4),


porque el Derecho (2) no te da ese Derecho (3).

Derecho Positivo (Definición):

Es el conjunto de normas bilaterales, externas, coercibles y heterónomas,


que tienen por objeto regular la conducta del hombre en sociedad.

Distintos tipos de normas:

JURÍDICAS MORALES RELIGIOSAS C. SOCIALES


Bilaterales unilaterales unilaterales unilaterales
Externas internas internas y externas externas
Coercibles incoercibles incoercibles incoercibles
Heterónomas autónomas heterónomas heterónomas

Como podemos observar, si bien el objeto o de las normas jurídicas lo es el


regular la conducta del hombre en sociedad, también existen otro tipo de
normas que persiguen igual fin:

Las Normas MORALES son aquellas que surgen de la razón de cada


individuo, de acuerdo con lo que él mismo piensa que esta bien o mal. De
acuerdo con ellas nosotros haremos lo que creemos que es bueno y
omitiremos lo malo; si no es así, nuestra conciencia nos lo reprochará.

Las Normas RELIGIOSAS son aquellas que ha creado la iglesia a la que


pertenecemos, de acuerdo con lo que ella piensa que es bueno o malo. Si
no las cumplimos el dios en que creemos nos va a castigar. (Ejem: ir a misa,
confesarnos, arrepentirnos de nuestros pecados, comulgar, etc.)

Las Convencionalismos SOCIALES son aquellas creadas por la sociedad en


la que vivimos, de acuerdo con lo que ella piensa que es correcto o
incorrecto. Si no las cumplimos la sociedad nos va a rechazar (Ejem: hábitos
higiénicos, modo de consumir los alimentos, ser cortés y caballero, etc.)

Las Normas JURÍDICAS son aquellas creadas por la autoridad (Estado o


Gobierno) del lugar en que vivimos, de acuerdo con lo que ella piensa que
es justo o injusto. Si no las cumplimos voluntariamente la autoridad va a
utilizar la fuerza pública para obligarnos a cumplirlas. (Ejem: pagar
impuestos, hacer el servicio militar, etc.).

BILATERALIDAD significa que al mismo tiempo que impone una obligación,


la norma concede un derecho. (Ejem: debo respetar la vida de los demás,
pero a la vez puedo exigir que la mía sea respetada).

UNILATERALIDAD significa que la norma solo impone obligaciones y no


otorga derechos. (Ejem: debo ser cuidar mi alimentación, ir a misa y
bañarme todos los días; pero eso no me da ningún derecho).

EXTERNA significa que la norma exige al individuo una conducta externa, (lo
que importa es la conducta). (Ejem: tienes que pagar tus impuestos y comer
con cubiertos, no importa si estás de acuerdo o no).

INTERNA significa que la norma exige al individuo un comportamiento


interno (lo que importa es la intención). (Ejem: golpear a una persona para
educarlo)

HETERONOMÍA significa que la norma es creada por una persona o ente


distinto de quien debe cumplirla (el creador y el destinatario son diferente
persona). (Ejem: las normas religiosas las crea la iglesia; las jurídicas, el
Estado; y los convencionalismos sociales, la sociedad; y yo debo
cumplirlas).

AUTONOMÍA significa que la norma es creada por la misma persona que


debe cumplirla (el creador y el destinatario son la misma persona). (Ejem:
las normas morales me las hago y cumplo yo mismo de acuerdo con lo que
creo que es bueno o malo).

COERCIBILIDAD significa que el cumplimiento de la norma me puede ser


impuesto por medio de la fuerza física si no lo hago voluntariamente. (Ejem:
cuando violo la ley el gobierno me castiga con la cárcel, con multas, o
quitándome mis bienes).

INCOERCIBILIDAD significa que nadie puede emplear la fuerza física para


obligarme a cumplir la norma si no lo hago voluntariamente. (Ejem: nadie
puede obligarme materialmente a ir a misa o a bañarme si yo no deseo
hacerlo).

LAS FUENTES DEL DERECHO

Se definen como fuentes del derecho los diversos procesos a través de los
cuales se elaboran las normas jurídicas; los cuales comprenden tanto las
manifestaciones reales que dan origen a las normas jurídicas (factores
sociales, políticos, económicos, religiosos, etc.), Como las formas reguladas
por el propio derecho para la creación de las normas (proceso legislativo,
jurisprudencia y costumbre jurídica).

1. Fuentes reales o materiales


2. Fuentes históricas
3. Fuentes formales

Fuentes reales o materiales:


Aquellas situaciones o sucesos (factores sociales, económicos, culturales,
religiosos, políticos, morales, etc.) Que determinan el contenido de la norma.
Fuentes históricas: son los documentos que encierran el texto de una ley o
consejo de leyes anteriores, y que sirven de inspiración, modelo o simple
guía al legislador al crear nuevas normas jurídicas. (México copió las afores
de la legislación chilena)

Fuentes formales:
Son los procedimientos establecidos para la creación de las normas
jurídicas, siendo los siguientes:

A) Legislación
B) Costumbre Jurídica
C) Jurisprudencia
D) Doctrina
E) Principios generales del derecho.
F) Reglamentos administrativos
G) Decretos delegados
H) Decretos ley
I) Tratados internacionales

Legislación:

Es la fuente de derecho más importante en nuestro sistema jurídico, siendo


el proceso mediante el cual los órganos del estado determinados para ello,
crean las normas jurídicas generales, abstractas y obligatorias que integran
una ley; sus fases son las siguientes:

1. Iniciativa de ley;
2. discusión;
3. aprobación
4. sanción;
5. promulgación;
6. publicación;
7. iniciación de la vigencia.

1. Iniciativa.- El proceso legislativo se inicia siempre con una iniciativa de


ley, que es un documento que contiene el proyecto o propuesta de ley a ser
aprobada por el Congreso de la Unión, que es el órgano del poder público
encargado de legislar. Durante el proceso legislativo el Congreso de la
Unión deberá estudiar, revisar y valorar, dicha iniciativa de ley a fin de
determinar si la misma debe o no convertirse en ley, pudiendo ser
modificada para ello.

El derecho de presentar una iniciativa de ley compete exclusivamente a:

1. El Presidente de la República
2. Los Diputados y Senadores del Congreso
3. Las Legislaturas de los Estados
4. Los ciudadanos en un número equivalente, por lo menos, al cero punto
trece por ciento de la lista nominal de electores, en los términos que señalen
las leyes.

2.- Discusión.- Para el ejercicio de su función legislativa, el Congreso de


la Unión se divide en dos Cámaras: la de Diputados y la de Senadores.
históricamente se ha considerado a la Cámara de Diputados como
representantes del pueblo y encargados, en el estudio, revisión y valoración
de cada iniciativa de ley, de velar por los intereses de los ciudadanos, en el
estudio, revisión y valoración de cada iniciativa de ley; y a la Cámara de
Senadores como representantes de las Entidades Federativas y encargados
de velar por los intereses del Estado.
La discusión es el acto por el cual ambas Cámaras deliberan, debaten y
deciden sucesivamente por votación mayoritaria, sobre la conveniencia o
inconveniencia de aprobar o rechazar una iniciativa de ley.

Cada vez que el Congreso de la Unión recibe una iniciativa de ley, la misma
es turnada a una de las Cámaras para su discusión, ésta Cámara recibe el
nombre de Cámara de origen (porque ahí se origina la discusión) y, en caso
de ser aprobada la iniciativa de ley por dicha Cámara, entonces la misma
pasará a la siguiente Cámara, que recibe el nombre de Cámara revisora
(porque va a revisar lo aprobado por la primera Cámara) a fin de que esta
también la apruebe, modifique o rechace, según estime conveniente.

En términos generales tanto la Cámara de Diputados como la Cámara de


Senadores pueden ser Cámara de origen y Cámara revisora o viceversa,
indistintamente, de cualquier iniciativa de ley. Dependiendo tal carácter
únicamente de cual la reciba y estudie primero y cual posteriormente. Sin
embargo, la constitución establece en el inciso “h” de su artículo 72 tres
casos de excepción a esta regla disponiendo que siempre que la iniciativa
de ley trate sobre empréstitos, contribuciones o impuestos, o sobre
reclutamiento de tropas, dicha iniciativa deberá discutirse primero en la
Cámara de Diputados, la que, por lo tanto, para tales materias será siempre
Cámara de origen.

Es lógico que la Cámara de Diputados sea siempre Cámara de origen para


la discusión de las iniciativas de ley que traten sobre empréstitos,
contribuciones o impuestos, y reclutamiento de tropas, ya que estos son
asuntos que importan directamente a los ciudadanos; que son quienes
deberán pagar dichos empréstitos y contribuciones o impuestos, o
conformar las tropas correspondientes, y, como ya se mencionó
anteriormente, la Cámara de Diputados ha sido considerada históricamente
como la encargada de velar por los intereses de éstos.

La Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores entran en sesiones dos


veces cada año a fin de estudiar y analizar, y en su caso modificar, aprobar
o rechazar, las iniciativas de ley presentadas al Congreso. El primer periodo
de sesiones tiene lugar del 15 de marzo al 30 de abril, y el segundo entre el
1 de septiembre y el 15 de diciembre. Es importante señalar que el
Congreso de la Unión no se encuentra reunido permanentemente realizando
su función legislativa, sino que ordinariamente dedica a dicha función
únicamente un máximo de 153 días por año, repartidos en los dos periodos
de sesiones ya mencionados. El resto del año las Cámaras de Diputados y
Senadores se fraccionan en una serie de comisiones encargadas del
desarrollo de diversos asuntos, dentro de las que destaca una Comisión
Permanente que mientras tanto asumirá momentáneamente las funciones
del Congreso.

La discusión y el debate camaral transcurren de la siguiente manera:

A. Una vez iniciado cualquiera de los periodos de sesiones mencionados, se


reparten entre ambas Cámaras (Diputados y Senadores) las iniciativas de
ley que se hallan recibido para su deliberación -hay que recordar que a la
Cámara que recibe primero la inciativa de ley se le llamará Cámara de
origen, y a la que la reciba una vez aprobada por la primera se le llamara
Cámara revisora. Así como que en la materia que nos importa
(contribuciones) la Cámara de Diputados será siempre Cámara de origen.

B. Una vez que la Cámara de origen a recibido una iniciativa de ley, discutirá
sobre la conveniencia o inconveniencia de su aprobación y celebrará una
votación al respecto. Si la mayoría de los miembros acuerdan la aprobación
de la iniciativa de ley, entonces la misma se envía a la Cámara revisora para
que siguiendo el mismo procedimiento ésta decida si la iniciativa de ley es
rechazada por ellos o aprobada y enviada al ejecutivo..

C. Un proyecto de ley desechado por la Cámara de origen, no podrá volver


a ser analizado por las Cámaras hasta el año siguiente.

D. Un proyecto de ley desechado en su totalidad por la Cámara revisora


volverá a la de su origen con las observaciones que aquella le hubiese
hecho. Si examinado de nuevo por la Cámara de origen fuese aprobado por
la mayoría absoluta de sus miembros presentes (67%), volverá a la Cámara
revisora que lo desechó originalmente, la cual lo tomará otra vez en
consideración, y si lo aprobare también por mayoría absoluta de sus
miembros presentes, dicha iniciativa pasará al ejecutivo, pero si no fuese de
esa manera, dicha iniciativa será desechada y no podrá volver a ser
estudiada por las Cámaras sino hasta el siguiente periodo de sesiones.

E. Un proyecto de ley o decreto desechado en parte, o modificado, o


adicionado, por la Cámara revisora volverá a la de su origen con las
adiciones o modificaciones que aquella le hubiese hecho. La Cámara de
origen discutirá y votará únicamente sobre dichas modificaciones o
adiciones sin poder alterar en forma alguna las partes aprobadas por ambas
Cámaras. Si las adiciones o modificaciones hechas por la Cámara revisora
fuesen aprobadas por la mayoría absoluta de los miembros presentes de la
Cámara de origen, se pasará todo el proyecto al ejecutivo. Si las adiciones o
reformas hechas por la Cámara de origen fueren desechadas por la mayoría
de los miembros de la Cámara de origen, las modificaciones o adiciones
volverán a la Cámara revisora para que tome en cuenta las observaciones
de aquella, y si por la mayoría absoluta de los votos de ésta fueren
desechadas en esta segunda revisión las adiciones o reformas, el proyecto
en lo que haya sido aprobado por ambas Cámaras pasará al Ejecutivo. Si la
Cámara revisora insistiere, por la mayoría absoluta de los votos presente,
en las adiciones o modificaciones sugeridas por ellos mismos, todo el
proyecto será desechado y no podrá volver a ser estudiado por las Cámaras
sino hasta el siguiente periodo de sesiones, a menos que ambas Cámaras
acuerden, por la mayoría absoluta de sus miembros presentes, que se
expida la ley sólo en los artículos aprobados y que se reserven los
modificados o adicionados para su examen y votación en las sesiones
siguientes.

F. El procedimiento antes mencionado es también el adecuado para los


casos de interpretación, reforma o derogación de las leyes o decretos.

3.- Aprobación.- Es el acto por el cual las cámaras aceptan un proyecto de


ley, pudiendo dicha aceptación ser parcial o total.

4.- Sanción.- Una vez aprobado el proyecto de ley por el Congreso, el


mismo es enviado al Ejecutivo para su consideración. El presidente de la
República cuenta con un plazo de 10 días a partir de la fecha en que recibe
la iniciativa para manifestar su rechazo o aceptación. A la facultad del
Presidente de la República de rechazar una iniciativa de ley aprobada por el
Congreso se le llama veto; a la de aprobar dicha iniciativa, sanción.

El veto presidencial, que se traduce en la negativa del titular del Ejecutivo a


aprobar todo o parte de una iniciativa de ley, está regulado por el inciso “c”
del artículo 72 Constitucional, que establece los siguiente:

“... El proyecto de ley o decreto desechado en todo o en parte por


el ejecutivo será devuelto, con sus observaciones, a la Cámara de
su origen. Deberá ser discutido de nuevo por ésta, y si fuese
confirmado por las dos terceras partes del número total de votos,
pasará otra vez a la Cámara revisora. Si por ésta fuese
sancionado por la misma mayoría, el proyecto será ley o decreto y
volverá al Ejecutivo para su promulgación...”.

En el caso de que en cualquiera de las dos Cámaras la iniciativa no


alcanzare la mayoría requerida de dos tercios del número total de votos, el
veto presidencial habrá surtido efecto, y la misma no podrá volver a
presentarse sino hasta el siguiente período de sesiones.

Así, encontramos tres tipos de sanción o aceptación presidencial a una


iniciativa de ley ya aprobada por el Congreso:

a) Sanción expresa;
b) Sanción tácita;
c) Sanción forzosa.

Como ya se mencionó, el Presidente de la República tiene un plazo de 10


días útiles para manifestar su aprobación o rechazo a una iniciativa de ley
que para tal efecto le turna el Congreso. Si dentro de dicho plazo los
Diputados y Senadores terminan su período de sesiones, entonces el plazo
del Ejecutivo se recorrerá para terminar el primer día del siguiente período
de sesiones del legislativo. Se llama sanción expresa a la declaración de
aceptación que el jefe del Ejecutivo hace de un proyecto de ley dentro del
plazo de 10 días (o en su caso hasta el primer día del siguiente período de
sesiones del Congreso) que la ley le concede para ello.

El artículo 72 fracción “b” Constitucional dispone:

“...Se reputará aprobado por el Poder Ejecutivo todo proyecto no


devuelto con observaciones a la Cámara de su origen, dentro de
diez días útiles; a no ser que, corriendo este término, hubiere el
Congreso cerrado o suspendido sus sesiones, en cuyo caso la
devolución deberá hacerse el primer día útil en que el Congreso
esté reunido...”

Llamase sanción tácita a aquella aceptación a una iniciativa de ley que la ley
presume en el Presidente de la República por no haber manifestado su
rechazo o hecho observación alguna a la misma ante el Congreso en el
plazo de 10 días útiles (o en su caso hasta el primer día del siguiente
período de sesiones del Congreso) que la ley le concede para ello.

Se conoce como sanción forzosa aquella prevista en el artículo 72 fracción


“c” de la Constitución, que establece:

“...El proyecto de ley o decreto desechado en todo o en parte por


el Ejecutivo será devuelto, con sus observaciones, a la Cámara de
su origen. Deberá ser discutido de nuevo por ésta, y si fuese
confirmado por las dos terceras partes del número total de votos,
pasará otra vez a la Cámara revisora. Si por ésta fuese
sancionado por la misma mayoría, el proyecto será ley o decreto y
volverá al Ejecutivo para su promulgación...”

En atención a lo anterior, el Presidente de la Nación sólo puede ejercer su


derecho de veto en una ocasión con relación a una iniciativa de ley en un
período de sesiones determinado. Una vez ejercitado, la iniciativa vuelve al
Congreso para el estudio del legislativo a las observaciones presidenciales,
y si las Cámaras deciden por dos terceras partes de sus miembros aprobar
nuevamente el proyecto de ley original e ignorar los cambios propuestos por
el Ejecutivo, éste volverá a recibir la iniciativa sin disponer ya de su derecho
de veto, por lo que deberá forzosamente sancionar dicho proyecto de ley, sin
importar su opinión al respecto.

5.- Promulgación.- Consiste en la aceptación expresa mediante la orden de


publicación y de su cumplimiento. El presidente puede negar su aceptación,
a tal acto se le denomina veto.

6.- Publicación.- Es el acto por el cual la ley ya aprobada y sancionada se


da a conocer a quienes deben cumplirla y se hace en el diario oficial de la
federación.

7.- Iniciación de la vigencia.- Es el momento en que la ley se convierte en


obligatoria para todos. En México existen dos sistemas de iniciación de la
vigencia:

A) Sucesivo: consiste en la entrada en vigor de la ley 3 días después de su


publicación y 1 día más por cada 40 kilómetros de distancia del lugar de la
publicación.

B) Sincrónico: la ley entra en vigor en todo el territorio de su aplicación en


una fecha previamente establecida por la misma.

Costumbre Jurídica:

Es una práctica implantada en una colectividad (1er. Elemento) y


considerada por esta como jurídicamente obligatoria (2o. Elemento).
1.- Costumbre apegada a derecho.- El poder reconoce la costumbre por
estar apegada a la ley.

2.- Costumbre en contra de la ley.- No tiene trascendencia jurídica porque


contra la observancia de una ley no se puede alegar desuso, costumbre o
practica en contrario.

3.- Como forma supletoria de la ley.- En caso de lagunas y omisiones la


costumbre puede suplir la deficiencia de la ley.

Jurisprudencia:

Creo que antes de definir que es la jurisprudencia es conveniente explicar


brevemente la forma como los tribunales administran justicia en México, ya
que considero aquella como una consecuencia natural de este proceso.

Para poder administrar justicia, el juzgador debe basarse en las


disposiciones legales existentes. Así, el juez, cuando se le plantea una
controversia, debe interpretar la ley para resolver si es aplicable o no, y en
que forma, al caso específico. Este razonamiento que el juez haga sobre la
aplicabilidad o no de la ley y su significado, debe ser expuesto por éste en la
resolución que al final emita. De esta manera, cada sentencia contiene el
criterio particular de quien la dictó en cuanto a lo que la ley aplicada al caso
concreto quiere decir o dice más allá de su letra. Este criterio recibe el
nombre de ejecutoria.

Si con el transcurso del tiempo se plantea al tribunal una controversia similar


a otra ya resuelta, este deberá repetir en el análisis de las disposiciones
legales estudiadas en aquella ocasión y emitir nuevamente un juicio en
cuanto a su aplicabilidad o no y su significado; pudiendo coincidir o no el
nuevo criterio con el anterior. Nada habrá pasado si los criterios o
ejecutorias, difieren; pero si son coincidentes en repetidas ocasiones, esta
interpretación de la ley, que podemos llamar sistemática, puede volverse
obligatoria para los tribunales inferiores al autor.

La finalidad de esto es que los tribunales superiores, que es donde se


concentra por lo general mayor experiencia y conocimientos, vayan poco a
poco normando y uniformando el criterio interpretativo de la ley de los
tribunal inferiores a fin de que estos resuelvan las controversias que les
sean presentadas, como lo harían aquellos.

Esta interpretación sistemática de la ley que hacen algunos tribunales al


administrar justicia, y que llega a convertirse en criterio obligatorio para los
tribunales inferiores, es lo que llamamos jurisprudencia.

Una vez definida la jurisprudencia, cabe precisar que tribunales y de que


manera, pueden crearla, enfocándonos únicamente en aquellos cuya
jurisdicción es federal, esto es, que su competencia abarca todo el territorio
nacional, y que, por lo tanto, su criterio interpretativo, una vez constituido en
jurisprudencia debe ser obedecido por todos los tribunales de menor
jerarquía en el país. Dichos tribunales son los siguientes:

1. Federal:

A) Suprema Corte de Justicia de la Nación


B) Tribunales Colegiados de Circuito
C) Tribunal Fiscal de la Federación

2.- Estatal:

A) Tribunal Superior de Justicia del Estado.

La jurisprudencia se forma por cinco sentencias no interrumpidas por otra en


contrario, que hayan sido aprobadas por un número determinado (mayoría
absoluta) de ministros.
El criterio de interpretación así constituido será obligatorio para los jueces
inferiores.

Doctrina:

Son los estudios de carácter científico que los juristas realizan acerca del
derecho con propósitos teóricos o de interpretación de la ley y señalar las
reglas de su aplicación.

Principios generales del derecho:

Son verdades jurídicas notorias, indiscutibles y de carácter general, de las


cuales puede valerse el juez para resolver una situación determinada en
ausencia de una ley específica o clara.
Ejemplos:

"Todo mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario"


"En caso de duda se debe absolver al acusado"
"Donde la ley no distingue no debe distinguir el juez"

Decretos Ley:

Aun cuando la regla general, dada la división de poderes establecida en el


artículo 49 constitucional, es que el ley tenga su origen en el poder
legislativo, por excepciones previstas en la misma Constitución, la ley puede
tener su origen en el poder ejecutivo. Tal sería el caso de los decretos ley y
los decretos delegados.
El fundamento para los decretos ley lo encontramos en el artículo 29
constitucional que establece lo siguiente:

“En los casos de invasión, perturbación grave de la paz pública, o de


cualquier otro que ponga a la sociedad en grave peligro o conflicto,
solamente el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, con la
aprobación del Congreso de la Unión o de la Comisión Permanente cuando
aquel no estuviere reunido, podrá restringir o suspender en todo el país o en
lugar determinado el ejercicio de los derechos y las garantías que fuesen
obstáculo para hacer frente, rápida y fácilmente a la situación; pero deberá
hacerlo por un tiempo limitado, por medio de prevenciones generales y sin
que la restricción o suspensión se contraiga a determinada persona. Si la
restricción o suspensión tuviese lugar hallándose el Congreso reunido, éste
concederá las autorizaciones que estime necesarias para que el Ejecutivo
haga frente a la situación; pero si se verificase en tiempo de receso, se
convocará de inmediato al Congreso para que las acuerde.
En los decretos que se expidan, no podrá restringirse ni suspenderse el
ejercicio de los derechos a la no discriminación, al reconocimiento de la
personalidad jurídica, a la vida, a la integridad personal, a la protección a la
familia, al nombre, a la nacionalidad; los derechos de la niñez; los derechos
políticos; las libertades de pensamiento, conciencia y de profesar creencia
religiosa alguna; el principio de legalidad y retroactividad; la prohibición de la
pena de muerte; la prohibición de la esclavitud y la servidumbre; la
prohibición de la desaparición forzada y la tortura; ni las garantías judiciales
indispensables para la protección de tales derechos.
La restricción o suspensión del ejercicio de los derechos y garantías debe
estar fundada y motivada en los términos establecidos por esta Constitución
y ser proporcional al peligro a que se hace frente, observando en todo
momento los principios de legalidad, racionalidad, proclamación, publicidad y
no discriminación.
Cuando se ponga fin a la restricción o suspensión del ejercicio de los
derechos y garantías, bien sea por cumplirse el plazo o porque así lo
decrete el Congreso, todas las medidas legales y administrativas adoptadas
durante su vigencia quedarán sin efecto de forma inmediata. El Ejecutivo no
podrá hacer observaciones al decreto mediante el cual el Congreso revoque
la restricción o suspensión.
Los decretos expedidos por el Ejecutivo durante la restricción o
suspensión, serán revisados de oficio e inmediatamente por la Suprema
Corte de Justicia de la Nación, la que deberá pronunciarse con la mayor
prontitud sobre su constitucionalidad y validez”.

Así, los decretos ley son normas jurídicas de observancia obligatoria


dictadas por el Presidente de la República en uso de facultades previstas en
la constitución y aprobadas por el Congreso de la Unión, sólo para hacer
frente rápida y fácilmente a una situación de emergencia que ponga a la
sociedad en grave peligro.

De lo anterior podemos señalar los siguientes elementos de los decretos


ley:

A.- Son normas jurídicas de derecho público creadas únicamente por el


Presidente de la República, pero deben reunir las características de
abstracción y generalidad de las leyes emanadas del Congreso de la Unión;

B.- Pueden existir únicamente durante una situación de invasión,


perturbación grave de la paz pública o cualquiera otra que ponga a la
sociedad en grave peligro;
C.- El Congreso de la Unión tiene que aprobar el uso de esta facultad por
parte del Presidente de la República;

D.- La vigencia de estas normas jurídicas durará sólo hasta que sea
superada la situación de emergencia antes mencionada;

E.- Se suspenden algunas garantías individuales en el lugar en que se


presenta la situación de emergencia.

F.- Están regulados por el artículo 29 de la Constitución.

Por lo antes mencionado, es poco común el uso por parte del


Presidente de la República de su facultad para emitir decretos ley, tan es así
que la única vez que se ha hecho uso de ella lo fue durante la Segunda
Guerra Mundial, cuando el 2 de junio de 1942 el General Manuel Ávila
Camacho declaró a nombre de la República Mexicana la guerra a Alemania,
Italia y Japón.

Decretos delegados:

Mencionamos anteriormente que la Constitución establece dos casos de


excepción en los cuales el Presidente de la República puede emitir normas
jurídicas, los decretos ley, establecidos en el artículo 29 y ya analizados; y
los decretos delegados, previstos por el artículo 131, que a la letra dice:

“El ejecutivo podrá ser facultado por el Congreso de la Unión para


aumentar, disminuir o suprimir las cuotas de las tarifas de
exportación e importación, expedidas por el propio Congreso, y
para crear otras, así como para restringir y para prohibir las
importaciones, las exportaciones y el transito de productos,
artículos y efectos, cuando lo estime urgente, a fin de regular el
comercio exterior, la economía del país, la estabilidad de la
producción nacional, o de realizar cualquier otro propósito, en
beneficio del país. El propio Ejecutivo, al enviar al Congreso el
Presupuesto Fiscal de cada año, someterá a su aprobación el uso
que hubiese hecho de la facultad concedida”

En atención a lo anterior, podemos definir a los decretos ley como aquellas


normas jurídicas expedidas por el Presidente de la República en función de
facultades delegadas por el Congreso de la Unión y previstas en la
constitución, con el fin de regular la economía o cualquier otra cuestión
necesaria en beneficio del país.

Como elementos de los decretos delegados encontramos los siguientes:

a.- Son normas jurídicas de derecho público creadas únicamente por el


Presidente de la República, pero deben reunir las características de
abstracción y generalidad de las leyes emanadas del Congreso de la Unión;

b.- Pueden existir en cualquier momento, siempre que sean oportunas para
el beneficio del país;

c.- Es el Congreso de la Unión quien delega dichas facultades al Ejecutivo;

d.- La vigencia de estas normas jurídicas durará todo el tiempo que el


Ejecutivo siga considerándolas útiles o benéficas para el país;
e.- El Presidente de la República esta obligado a rendir cuentas al Congreso
de la Unión del uso que haga de esta facultad y las normas jurídicas que por
ella emita.

f.- Están regulados por el artículo 131 de la Constitución.

Los decretos delegados si son de uso común en el derecho fiscal, tan es así
que todas las disposiciones relativas al aumento, disminución, supresión,
creación y restricción de las cuotas arancelarias que integran las tarifas
generales de los impuestos de importación y exportación, y que constituyen
la parte medular de la legislación aduanera, se contienen en decretos
delegados; al igual que la legislación en materia de estímulos fiscales está
prácticamente basada en ellos.

Reglamentos administrativos:

Los reglamentos administrativos son normas jurídicas expedidas por el


presidente de la república a fin de que una ley emanada del Congreso de la
Unión pueda ser desarrollada en la práctica o ejecutada por el Estado y
cumplida por los ciudadanos.

Debemos recordar que dentro de la división de poderes existente en nuestro


país es al ejecutivo a quien corresponde la ejecución de las leyes que emite
el legislativo. Así, el artículo 89 fracción I de nuestra constitución política
establece que es obligación y facultad del Presidente de la república
“promulgar y ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión,
proveyendo en la esfera administrativa a su exacta observancia”.

De esta manera queda establecida en favor del presidente de la república lo


que se conoce como facultad reglamentaria, y que en la práctica se traduce
en la potestad de emitir reglamentos administrativos como complemento de
determinadas leyes emitidas por el poder legislativo y que no detallan o
precisan pormenorizadamente como deberán aplicarse; descargando en el
presidente de la república la determinación de su modo de aplicación.

Con relación a los reglamentos administrativos podemos señalar los


siguientes elementos:

a.- Son normas jurídicas de derecho público creadas únicamente por el


Presidente de la República, pero deben reunir las características de
abstracción y generalidad de las leyes emanadas del Congreso de la Unión;

b.- Requieren para su existencia de la existencia previa de una ley


susceptible de ser particularizada y pormenorizada. Y desaparecerán si
desaparece dicha ley.

c.- No pueden rebasar las disposiciones de la ley que regulan, ignorando o


modificando sus supuestos o agregando alguno no contenido en la misma;
tienen que ajustarse a lo dispuesto por la ley.

d.- Su finalidad es la de facilitar el campo de aplicación de la ley,


desenvolviendo pormenorizadamente sus principios y enunciados genéricos.

e.- Están regulados por el artículo 89 fracción I de la Constitución.

Tratados internacionales:

Los tratados internacionales son acuerdos de voluntades celebrados entre


dos o más entes soberanos en el ámbito internacional, para crear, transmitir,
modificar o extinguir obligaciones entre ellos; en nuestro país los tratados
internacionales requieren para su validez ser firmados por el Presidente de
la República, aprobados por la cámara de senadores del Congreso de la
Unión y no contrariar disposiciones constitucionales.

Los tratados internacionales están contemplados en el artículo 136


constitucional, que a la letra establece:

“Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que


emanen de ella y todos los tratados que estén de acuerdo con la
misma, celebrados y que se celebren por el Presidente de la
República, con aprobación del Senado, serán la Ley Suprema de
toda la Unión. Los jueces de cada Estado se arreglarán a dicha
Constitución, leyes y tratados a pesar de las disposiciones en
contrario que pueda haber en las Constituciones o leyes de los
Estados”.

Por lo tanto, las disposiciones contenidas en los tratados internacionales


celebrados por México con otros países, con apego a lo previsto en el
artículo 136 constitucional, tienen la fuerza de una ley para las instituciones
y ciudadanos mexicanos.

Si bien México ha celebrado a lo largo de su historia múltiples tratados


internacionales de diversa índole. El fenómeno de la globalización
económica ha propiciado la proliferación de los mismos en busca de aliados
comerciales. Y, si la mayoría de los tratados antes celebrados habían
atendido a otras cuestiones y pocos eran los que traían implicaciones
fiscales. Los nuevos tratados si contienen múltiples disposiciones fiscales
necesarias para fomentar la actividad comercial que se pretende lograr, y
asegurar el lucro económico resultante de la misma. Encontrando así
algunos acuerdos para el intercambio de información para prevenir y
sancionar casos de evasión fiscal, y los tratados suscritos recientemente
con Canadá, Suecia, Francia, Estados Unidos de América, Alemania, etc.;
cuya finalidad es evitar la doble tributación internacional.

Baste citar como un ejemplo de leyes fiscales derivadas de acuerdos


internacionales las reducciones y excenciones que en materia de impuestos
por importación y exportación, contiene el Tratado de Libre Comercio
celebrado entre Estados Unidos de América, Canadá y México.

Clasificación del Derecho

- Derecho Positivo
- Derecho Vigente

- Derecho Objetivo
- Derecho Subjetivo

- Derecho Real
- Derecho Personal

- Derecho Público
- Derecho Privado

Derecho Constitucional
Derecho Administrativo
Derecho Público Derecho Procesal
Derecho Penal
Derecho Fiscal (tributario)
Derecho Internacional
Derecho Privado Derecho Civil
Derecho Mercantil

Derecho Laboral
Derecho Social Derecho Agrario
Derecho de la Seguridad Social
(Derecho Ecológico)
(Derecho del Consumidor)

Conceptos Jurídicos Fundamentales

Los Sujetos del Derecho

- Personas Físicas
- Personas Morales

Atributos de las Personas Físicas:

1) Capacidad
A. Capacidad de Goce
B. Capacidad de Ejercicio
C. Incapacidad Natural
D. Incapacidad Legal

2) Estado Civil
Parentesco, Matrimonio, Divorcio y Concubinato

3) Domicilio
A. Voluntario
B. Legal
C. Convencional

4) Nombre

5) Patrimonio

6) Nacionalidad
A. Nacimiento
B. Naturalización

Atributos de las Personas Morales:

1) Capacidad

2) Patrimonio

3) Denominación

4) Domicilio

5) Nacionalidad

Clasificación de las personas morales:


A. 1.- Necesarias: indispensables para la realización del fin del hombre
(ejem. Estado, municipios)
2.- Voluntarias: creadas por el hombre como complemento necesario
de sus deficiencias y pudieran existir en otra forma (sociedades o
asociaciones)

B. 1.- Personas morales públicas: de derecho público (secretarias y


dependencias de gobierno).
2.- Personas morales privadas: de derecho privado (sociedades y
asociaciones)

Los supuestos jurídicos y las consecuencias de derecho.

A) supuestos simples: encierran una sola hipótesis (homicidio)

B) supuestos complejos: encierran 2 o + hipótesis (homicidio calificado)

1. Supuestos jurídicos complejos de fusión unilateral.- Las consecuencias de


uno de los supuestos nacen aun y cuando el segundo supuesto no se
realice (en la compraventa a plazos la compraventa se da aun y cuando el
comprador no cumpla a tiempo con los pagos).

2. Supuestos jurídicos complejos de fusión reciproca.- Ninguno de los


supuestos provoca por si mismo consecuencias de derecho; siendo
necesario para esto que ambos se den (los dos supuestos son
absolutamente dependientes uno del otro) (para obtener la nacionalidad
mexicana por naturalización en uno de los casos se exige ser cónyuge de
mexicano y radicar en México, son dos supuestos recíprocos, si uno no se
da no se obtiene la nacionalidad).

LOS HECHOS Y ACTOS JURÍDICOS.

El nacimiento, modificación y extinción de los derechos y obligaciones


tienen su origen en hechos o actos regulados en las normas jurídicas; esto
es, en hechos o actos a los cuales la ley les asigna distintas consecuencias
legales, que se van a aplicar cuando dichos hechos o actos se realicen. (jus
ex facto oritur = el derecho nace del hecho).

LOS HECHOS JURÍDICOS (LATO SENSU): Son todos aquellos


acontecimientos naturales o humanos, voluntarios o involuntarios, que
producen consecuencias jurídicas (crean, extinguen, transmiten o modifican,
derechos y obligaciones).

Para que un hecho sea jurídico (que tenga consecuencias legales), se


requiere que esté previsto en la ley. Esto es, que la ley le asigne derechos
y/u obligaciones a quienes los realicen o padezcan. Así, un hecho, para ser
jurídico, debe producir un cambio de derecho; esto es, debe provocar un
cambio en las relaciones jurídicas preexistentes.

Sí un hechos está previsto en una ley, y ésta le impone consecuencias


jurídicas, es porque el legislador lo consideró lo suficientemente importante
para regularlo. Según los hechos afecten el orden social, serán las
consecuencias legales que les imponga el legislador.

Los HECHOS JURÍDICOS provocados por el hombre, pueden dividirse en:


HECHOS JURÍDICOS VOLUNTARIOS REALIZADOS CON LA INTENCIÓN
DE PRODUCIR EFECTOS JURÍDICOS: Son actos jurídicos, los que
podemos definir como actos voluntarios realizados por el hombre con la
intención de crear, modificar, transmitir o extinguir obligaciones.

HECHOS JURÍDICOS VOLUNTARIOS, REALIZADOS SIN LA INTENCIÓN


DE PRODUCIR EFECTOS JURÍDICOS: Se ubican aquí los delitos y
cuasidelitos. Si bien el delincuente actúa voluntariamente, no desea las
consecuencias legales de sus actos (la aplicación de la sanción ni la
obligación de reparar el daño causado).

Así, los HECHOS JURÍDICOS (LATO SENSU) se dividen así en HECHOS


JURÍDICOS SRICTO SENSU y ACTOS JURIDICOS.

Los HECHOS JURÍDICOS STRICTO SENSU son los eventos producidos


por la naturaleza, o involuntariamente por el hombre, que producen
consecuencias legales (es el supuesto que produce consecuencias sin que
el hombre desee dichas consecuencias).

Dentro de los HECHOS JURÍDICOS STRICTO SENSU producidos por la


naturaleza están los terremotos, huracanes, tornados, volcanes, tsunamis,
mareas, el nacimiento, la muerte, etc.; en los HECHOS JURÍDICOS
STRICTO SENSU producidos involuntariamente por el hombre encontramos
los accidentes.

La FUERZA MAYOR y el CASO FORTUITO son HECHOS JURÍDICOS


STRICTO SENSU, que liberan a quien los sufre, de cualquier consecuencia
legal que sus actos habrían producido en caso de no haber existido la fuerza
mayor o el caso fortuito.

LA “FUERZA MAYOR”.

Por fuerza mayor se entienden, todas aquellas fuerzas (generalmente de la


naturaleza) ante las cuales el hombre se halla totalmente impotente tanto
para repelerlas como para predecirlas y evitarlas.

La fuerza mayor interviene en dos formas en el orden jurídico: o causando


daños que, por definición, no serán imputables a nadie, o haciendo
imposible el cumplimiento de determinadas obligaciones. Cuando por fuerza
mayor el deudor no puede cumplir una obligación, desaparece la
responsabilidad del deudor y éste queda exonerado del cumplimiento de la
obligación.

EL “CASO FORTUITO”.

Por caso fortuito se entienden, todos aquellos acontecimientos inesperados


e involuntarios que no pueden ser previstos y que, cuando se presentan,
eximen a quienes los sufren de la responsabilidad que les correspondería de
no haber mediado tal acontecimiento.

El caso fortuito se parece a la fuerza mayor en que ambos son involuntarios


y quien los sufre no es responsable de sus efectos; sin embargo, se
distinguen en que la fuerza mayor es inevitable aunque pueda ser
predecible, y el caso fortuito podría ser evitado, pero no es predecible.

Otra diferencia es que en la fuerza mayor no hay responsables (un


terremoto); pero en el caso fortuito si hay responsables (un incendio o
inundación provocados por humanos).

Los ACTOS JURÍDICOS son las conductas humanas realizadas


voluntariamente para producir efectos legales (son los supuestos realizados
voluntariamente por el hombre con la intención de obtener las
consecuencias previstas en la ley); como la firma de un contrato, la
celebración de un matrimonio, etc.
Así, los HECHOS JURÍDICOS (LATO SENSU) se dividen así en HECHOS
JURÍDICOS SRICTO SENSU y ACTOS JURIDICOS.

Los HECHOS JURÍDICOS STRICTO SENSU son los eventos producidos


por la naturaleza, o involuntariamente por el hombre, que producen
consecuencias legales (es el supuesto que produce consecuencias sin que
el hombre desee dichas consecuencias).

Dentro de los HECHOS JURÍDICOS STRICTO SENSU producidos por la


naturaleza están los terremotos, huracanes, tornados, volcanes, tsunamis,
mareas, el nacimiento, la muerte, etc.; en los HECHOS JURÍDICOS
STRICTO SENSU producidos involuntariamente por el hombre encontramos
los accidentes.

La FUERZA MAYOR y el CASO FORTUITO son HECHOS JURÍDICOS


STRICTO SENSU, que liberan a quien los sufre, de cualquier consecuencia
legal que sus actos habrían producido en caso de no haber existido la fuerza
mayor o el caso fortuito.

LA “FUERZA MAYOR”.

Por fuerza mayor se entienden, todas aquellas fuerzas (generalmente de la


naturaleza) ante las cuales el hombre se halla totalmente impotente tanto
para repelerlas como para predecirlas y evitarlas.

La fuerza mayor interviene en dos formas en el orden jurídico: o causando


daños que, por definición, no serán imputables a nadie, o haciendo
imposible el cumplimiento de determinadas obligaciones. Cuando por fuerza
mayor el deudor no puede cumplir una obligación, desaparece la
responsabilidad del deudor y éste queda exonerado del cumplimiento de la
obligación.

EL “CASO FORTUITO”.

Por caso fortuito se entienden, todos aquellos acontecimientos inesperados


e involuntarios que no pueden ser previstos y que, cuando se presentan,
eximen a quienes los sufren de la responsabilidad que les correspondería de
no haber mediado tal acontecimiento.
El caso fortuito se parece a la fuerza mayor en que ambos son involuntarios
y quien los sufre no es responsable de sus efectos; sin embargo, se
distinguen en que la fuerza mayor es inevitable aunque pueda ser
predecible, y el caso fortuito podría ser evitado, pero no es predecible.

Otra diferencia es que en la fuerza mayor no hay responsables (un


terremoto); pero en el caso fortuito si hay responsables (un incendio o
inundación provocados por humanos).

Los ACTOS JURÍDICOS son las conductas humanas realizadas


voluntariamente para producir efectos legales (son los supuestos realizados
voluntariamente por el hombre con la intención de obtener las
consecuencias previstas en la ley); como la firma de un contrato, la
celebración de un matrimonio, etc.

A) voluntarios actos jurídicos


Hechos jurídicos
(lato sensu) B) naturales hechos jurídicos (stricto sensu)

C) Involuntarios “ “ “ “

ELEMENTOS DE EXISTENCIA Y REQUISITOS DE VALIDEZ DE LOS


ACTOS JURÍDICOS:

Son elementos y requisitos que debe cumplir el acto jurídico para existir y/o
ser válido; esto es, para que realmente produzca los efectos legales
deseados por quien o quienes lo realizan.

Otra definición: son los presupuestos de existencia (validez) del acto


jurídico, sin los cuales el acto nunca llegaría a existir (invalidez).

Validez.- En relación con un acto jurídico significa la cualidad por la cual


este es susceptible de producir el efecto querido al realizarlo.

Invalidez.- Es la falta de la cualidad antes descrita.

Los elementos de existencia de los actos jurídicos son los siguientes:

1) consentimiento
2) objeto física y jurídicamente posible
3) solemnidad
4) reconocimiento de la norma jurídica a los efectos deseados por el
Autor del acto.

A falta de cualquiera de dichos elementos, el acto jurídico será inexistente y


por lo tanto no surtirá ningún efecto legal.

CONSENTIMIENTO.
Es el deseo, decisión, intención y/o voluntad libre de celebrar el acto jurídico
para producir las consecuencias jurídicas que la ley confiere al acto jurídico.

OBJETO FÍSICA Y JURIDICAMENTE POSIBLE.


Significa que el objeto o fin del acto jurídico sea permitido por la ley, y sea
posible en la naturaleza (que exista o pueda existir en a naturaleza).

SOLEMNIDAD.
Significa que el acto jurídico sea realizado exactamente como la ley diga
que deba ser realizado.
RECONOCIMIENTO DE LA NORMA JURÍDICA A LOS EFECTOS
DESEADOS POR EL AUTOR DEL ACTO.
Que la ley realmente confiera al acto las consecuencias legales que desea
su autor.

Los Requisitos de validez de los actos jurídicos:

1) capacidad
2) ausencia de vicios del consentimiento
A) error
I) error grave (obstáculo o radical)
Ii) error medio
Iii) error leve (de cálculo o aritmética e indiferente)
B) dolo
I) dolo malo o bueno
Ii) dolo determinante o incidental
C) mala fe
D) violencia
I) física
Ii) moral
E) lesión
3) licitud
4) formalidad
A) manifestación tácita de la voluntad
B) manifestación expresa de la voluntad

CAPACIDAD.
Significa que quien realiza el acto jurídico debe tener la capacidad legal
para hacerlo. Generalmente se requiere que tenga capacidad de ejercicio;
esto es, que sea mayor de 18 años y se encuentre en pleno uso de sus
facultades mentales. Aunque hay acto jurídicos que pueden ser celebrados
personal y directamente por mayores de 16 años (el testamente P.E.); y o
por menores de edad, pero representados por sus padres o tutor.

AUSENCIA DE VICIOS DEL CONSENTIMIENTO.


Significa que el consentimiento se encuentre libre de defectos.

ERROR. Se define como una apreciación falsa de la realidad (lo que se cree
no coincide con lo que es).

DOLO. Se define como las maquinaciones y artificios que una persona


realiza para inducir a otra en un error, para que así ésta realice un acto
jurídico que de otra manera no realizaría.

MALA FE. Se define como el silencio que una persona guarda cuando
descubre que otra va a realizar un acto jurídico basada en un error (una
persona se da cuenta de que otra está en un error, y no la saca del mismo).

LESIÓN. Se define como la ganancia desmedida y/o desproporcionada que


una persona obtiene aprovechándose de la suma ignorancia, notoria
inexperiencia y/o extrema necesidad de otra.

VIOLENCIA. Es la presión o coacción física (tortura) o moral (amenazas)


cometida en contra de una persona para forzarla a realizar un acto jurídico
contra su voluntad.

LICITUD.
Significa que la ley permita la realización del acto jurídico; esto es, que el
mismo no sea contrario a la ley, la moral o las buenas costumbres.
FORMALIDAD.
Significa manifestar la intención de realizar el acto jurídico en la forma
exigida por la ley.

MANIFESTACIÓN TÁCITA DE LA VOLUNTAD. Mediante ciertos actos


damos a entender nuestra intención de realizar el acto jurídico, sin decirlo ni
escribirlo.

MANIFESTACIÓN EXPRESA DE LA VOLUNTAD. Verbalmente o por escrito


manifestamos nuestra intención de realizar el acto jurídico.

A falta de cualquiera de los citados requisitos de validez el acto jurídico será


nulo, y o podrá ser anulado; esto es, no surtirá los efectos legales deseados
por quien o quienes los celebraron, y o será privado de los mismos.

Ineficacia de los actos jurídicos:

1) inexistencia

2) nulidad absoluta
I) imprescriptible
Ii) inconfirmable
Iii) a solicitud de cualquier persona

3) nulidad relativa
I) prescriptible
Ii) confirmable
Iii) declarable a solicitud del interesado

INEXITENCIA.
Implica que el acto jurídico no existió (y por lo tanto no puede surtir efectos
jurídicos).

NULIDAD ABSOLUTA.
Implica que el acto jurídico sí existió, pero ha sido, es y será nulo (y por lo
tanto no puede surtir los efectos jurídicos deseados por quienes los
celebraron, pero sí puede surtir otros no deseados por ellos).

IMPRESCRIPTIBLE. Significa que no hay un término o plazo para que la


autoridad pueda declarar la nulidad del acto, por lo que siempre se podrá
hacer tal declaración.

INCONFIRMABLE. Significa que no hay nada que se pueda hacer para que
el acto deje de ser nulo (no se puede confirmar)

A SOLICITUD DE CUALQUIER PERSONA. Significa que cualquier persona


puede solicitar a la autoridad que declare que el acto es nulo.

NULIDAD RELATIVA.
Implica que el acto jurídico sí existió, pero puede ser anulado (y por lo tanto
puede dejar de surtir efectos jurídicos).

PRESCRIPTIBLE. Significa que hay un término o plazo para que los


interesados en que el acto sea anulado, puedan solicitar a la autoridad que
declare su nulidad. Transcurrido dicho término o plazo, ya no podrán pedir
su anulación.
CONFIRMABLE. Significa que los interesados en que el acto no sea
anulado pueden realizar otros actos para perfeccionarlo y evitar que sea
anulado (pueden confirmarlo mediante otras acciones).

SOLO CIERTAS PERSONAS PUEDEN PEDIR QUE EL ACTO SEA


ANULADO. Significa que solo ciertas personas pueden solicitar a la
autoridad que anule el acto; si ellos no lo hacen, nadie más puede hacerlo.

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