1. Armar el circuito/carrera de obstáculos. En un área determinada para poder
jugar y moverse libremente se establecerá el camino que deberá correr el niño y se utilizarán objetos como conos, almohadas (para pasar encima de o sobre de), cajas (para entrar en ellas o recoger cosas, meter), hula hopos/aros (para saltar dentro de, recoger, etc). 2. Si el niño no sabe cual es la derecha y cual es la izquierda es necesario explicarle antes de empezar para poder utilizarlas como instrucciones y que entienda hacia donde debe moverse. 3. Se le explicará al niño en que consiste la actividad; se muestra el circuito y se le explica que habrá diferentes actividades que tendrá que realizar pero con los ojos vendados, por lo que tendrá que concentrarse en tu voz y en seguir tus indicaciones para poder llegar a la meta, donde deberá colocar la pelota en la canasta para hacer un gol. 4. Venda al niño para que no pueda ver nada. Mantén las instrucciones cortas y simples, dando una a la vez. A medida que se sienta cómodo con el juego puedes darle una dirección de dos pasos a seguir, tales como “Dar un gran paso atrás y dos pasos a la derecha. 5. Ahora es tu turno. Enseñaremos a los niños a concentrarse y dar indicaciones por lo que es tu turno de ser vendado y dejar que el niño te de las instrucciones necesarias para poder llegar a la meta.