You are on page 1of 83

UNIVERSIDAD NACIONAL SAN AGUSTÍN DE AREQUIPA

FACULTAD DE ENFERMERÍA
ESCUELA PROFESIONAL DE ENFERMERÍA

“ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y SOBRECARGA DEL


CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA - 2017”

Tesis Presentado por la bachillera:


TORREBLANCA MONZÓN,
ADRIANA AMPARO
Para obtener el Título Profesional
de ENFERMERA

AREQUIPA - PERU

2018
ACEPTACIÓN DE LA ASESORA

La presente tesis, “ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y


SOBRECARGA DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA – 2017”, reúne
las condiciones y tiene mi conformidad.

_________________________________
Mg. Fresia Lizet Manrique Tovar
Asesora

MIEMBROS DEL JURADO

Dra. Brigida Aurora Manchego Carnero Presidenta


Mg. Fresia Lizet Manrique Tovar Vocal
Lic. Esp. Evelyn Leyva Márquez Secretaria

La presente tesis sustentada el día 20 de setiembre del 2018,


APROBADA POR UNANIMIDAD, queda conforme para seguir con el
trámite correspondiente.

____________________________
Lic. Esp. Evelyn Leyva Márquez
Secretaria
ÍNDICE

Pág.
RESUMEN
ABSTRACT
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO I: EL PROBLEMA
A. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA 04
B. OBJETIVOS 08
C. HIPÓTESIS 08
CAPÍTULO II: MARCO TEÓRICO
A. ANTECEDENTES 09
B. BASE TEÓRICA 11
C. DEFINICIÓN OPERACIONAL DE VARIABLES 39
D. ALCANCES Y LIMITACIONES 40
CAPÍTULO III: MARCO METODOLÓGICO
A. MÉTODO Y DISEÑO DE INVESTIGACIÓN 41
B. DESCRIPCIÓN DEL ÁREA DE ESTUDIO 42
C. POBLACIÓN DE ESTUDIO 43
D. MÉTODOS, TÉCNICAS E INSTRUMENTOS DE 44
RECOLECCIÓN DE DATOS
CAPÍTULO IV: RESULTADOS
A. PRESENTACION, ANALISIS E INTERPRETACION DE 47
RESULTADOS
CAPITULO V: CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
A. CONCLUSIONES 54
B. RECOMENDACIONES 56
BIBLIOGRAFÍA
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
ANEXOS
ÍNDICE DE TABLAS

TABLA N° 1: EDAD Y SEXO DE LOS CUIDADORES 48


PRIMARIOS DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017

TABLA N° 2: PARENTESCO Y TIEMPO DE CUIDADO DEL 49


CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017

TABLA N° 3: ESTADO CIVIL Y GRADO DE INSTRUCCIÓN 50


DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS
CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL.
CARITAS, AREQUIPA - 2017

TABLA N° 4: ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO DEL 51


CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017

TABLA N° 5: NIVEL DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR 52


PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017
ÍNDICE DE CUADROS

Pág.
CUADRO N° 1: ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y EL 53
NIVEL DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR
PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017
RESUMEN

La investigación titulada “Estrategias de Afrontamiento y Sobrecarga del


cuidador primario de personas con Discapacidad Intelectual. Caritas,
Arequipa – 2017” tuvo como objetivo general determinar la relación entre
las estrategias de afrontamiento con el nivel de sobrecarga de los
cuidadores primarios de personas con Discapacidad intelectual, cuya
población fue de 83 cuidadores primarios que asistieron a las escuelas de
padres de los 9 Centros Educativos donde se aplicó 3 instrumentos, el
primero que fue una ficha sociodemográfica, el segundo instrumentos: la
escala de Sobrecarga de Zarit y la tercera la Escala de Estimación de
Afrontamiento COPE; obteniéndose como resultado que no existe relación
entre las estrategias de afrontamiento con el nivel de sobrecarga de los
cuidadores primarios, por lo que se rechaza la hipótesis planteada y se
recomienda buscar factores que estén contribuyendo a una sobrecarga en
estos cuidadores.
ABSTRACT

The research entitled "Strategies of Coping and Overload of the primary


caregiver of people with Intellectual Disability". Caritas, Arequipa - 2017
"has as a general objective to determine the relationship between coping
strategies with the level of overload of the primary caregivers of people
with intellectual disabilities, with a population of 83 primary caregivers who
attended the parents' school of the 9 Educational Centers (schools), where
3 questionaries were applied. The first one, was the sociodemographic
record, the second, the Zarit Overload Scale, and the third, the Coping
Estimate COPE, getting as a result that there is no relationship between
the coping strategies and the level of overload of primary caregivers, so
the hypothesis is rejected and it's recommended that these factors
contribute to an overload in the caregivers.
INTRODUCCIÓN

La Discapacidad Intelectual hoy en día es una alteración en el desarrollo


del ser humano que se caracteriza por limitaciones tanto en las diferentes
conductas como en el funcionamiento intelectual, donde el aprendizaje se
convierte en un proceso lento e incompleto, las personas que afrontan su
cuidado cumplen un papel muy importante, ya que de ellas depende la
calidad de vida de las personas con Discapacidad Intelectual, donde los
cuidadores no solo se deben enfocar en la tarea del cuidado, sino también
en su salud física y emocional.

Las estrategias de afrontamiento son formas a través de las cuales una


persona puede resolver situaciones estresantes que se le presentan en su
vida diaria, se han desarrollado programas principalmente basados en la
información, apoyo y dotación de estrategias para afrontar las situaciones
problema derivadas de la convivencia y el hecho de cuidar una persona
con Discapacidad Intelectual.

1
Los cuidadores de personas con Discapacidad Intelectual pueden llegar a
padecer consecuencias negativas (somáticas, psicológicas y sociales),
derivadas de la propia tarea del cuidado, conocidas como “sobrecarga del
cuidador”. Esta afección y sus síntomas asociados repercuten de manera
negativa en su capacidad de cuidar al familiar. Por ello, las
aproximaciones terapéuticas para este tipo de pacientes, a lo largo de los
últimos años, han comenzado a considerar a la familia o cuidadores
informales de la persona con discapacidad intelectual como un foco más
de la intervención. Por esta razón, ha crecido el interés en analizar y
trabajar con cuidadores primarios que tienen a su cargo a personas con
Discapacidad intelectual, ya que según C. López (2013) algunos estudios
dan cuenta de la manera en que influye en la vida del cuidador.

Sin embargo, la evidencia encontrada en la literatura señala que las


investigaciones publicadas por enfermería siguen siendo escasas,
producto de las practicas realizadas en el Pregrado es que se obtuvieron
manifestaciones de muchos padres de familia cuidadores de personas
con Discapacidad Intelectual expresando sentirse muy estresados, es así
que no desarrollan el papel del cuidado de manera óptima, lo que conlleva
a desarrollar actitudes negativas hacia su familiar.

La presente tesis titulada “ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y


SOBRECARGA DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA - 2017”, tiene
como objetivo determinar la relación entre las estrategias de
Afrontamiento de los Cuidadores Primarios de Personas con discapacidad
intelectual y la sobrecarga que conlleva dicho cuidado.

El presente estudio tiene como propósito brindar información a las


Instituciones Educativas de Caritas, propiciando implementación de
programas que disminuyan la sobrecarga del cuidador y con ello mejorar
su calidad de vida e indirectamente propiciar un cuidado óptimo de las
personas a su cargo.

2
En el presente estudio se empezó redactando la formulación del problema
donde se toca distintos puntos, motivo de desarrollo del tema, siguiendo
con los objetivos donde se menciona que es lo que se busca lograr con
esta investigación; se desarrolló un marco teórico compuesto por los
antecedentes de dicha investigación y base teórica. Se identificó y definió
las dos variables, seguidamente se presenta los instrumentos y la
aplicación de estos a la población de estudio, culminando con los de
resultados, conclusiones y recomendaciones.

Se llegó a la principal conclusión de que no existe relación entre las


estrategias de afrontamiento con el nivel de sobrecarga del cuidador
primario de personas con Discapacidad Intelectual por lo que se
recomienda poder guiar la investigación hacia los factores que puedan
contribuir a la sobrecarga del cuidador.

3
CAPITULO I
EL PROBLEMA

A. FORMULACION DEL PROBLEMA


Según la Organización Mundial de la Salud (2013) define la discapacidad
intelectual como el estado de desarrollo mental detenido o incompleto, lo
cual implica que la persona puede tener dificultades para comprender,
aprender y recordar cosas nuevas, y para aplicar ese aprendizaje a
situaciones nuevas. También conocido como problemas o dificultades de
aprendizaje y, antiguamente, como retraso o minusvalía mental.

La definición más extendida de la discapacidad intelectual es la aportada


por la Asociación Americana de Discapacidades Intelectuales y del
Desarrollo (AAIDD), que permanece vigente en la actualidad con una
ligera modificación que sustituye el término retraso mental por el de
discapacidad intelectual, donde nos dice que ésta se caracteriza por

4
limitaciones significativas tanto en el funcionamiento cognitivo como en
conducta adaptativa tal y como se ha manifestado en habilidades
adaptativas conceptuales, sociales y prácticas. Esta discapacidad se
origina antes de los 18 años (Luckasson y Cols, 2013).

Según los datos recogidos por el IMSERSO (Instituto de Mayores y


Servicios Sociales) en las Comunidades Autónomas, a finales de 2015
había en España un total de 268.633 personas con una discapacidad
intelectual reconocida (con grado igual o superior al 33%). Esto supone un
9% del total de personas con discapacidad reconocida en España.

Según la Primera Encuesta Nacional Especializada Sobre Discapacidad


del INEI Perú 2012, el 5,2% de la población nacional (1 millón 575 mil 402
personas) padecen de algún tipo de discapacidad o limitación física y/o
mental. Esta condición afecta, en mayor proporción, a la población de 65
y más años (50,4%) y de 15 a 64 años (41,3%).

Existen en nuestro país 59,211 jóvenes con discapacidad lo que equivale


al 20.52% del total de personas con discapacidad. De este total de
jóvenes, 31,571 son hombres y 27,640 son mujeres, lo que equivale al
21.56% y 19.44%, respectivamente del total de personas con
discapacidad que habitan en nuestro país. Siendo la discapacidad
intelectual la segunda discapacidad más frecuente en jóvenes con un
21.61%. Con relación a la proporción por género, debemos indicar que la
discapacidad más frecuente en los jóvenes de sexo masculino es la
motora, seguida por la discapacidad intelectual, en el 25.63% y 21.77%
respectivamente, mientras que en las mujeres la discapacidad más
frecuente es la visual con el 24.0% seguida de la discapacidad intelectual
con el 21.42%.

El cuidador primario es aquella que dedica la mayor parte de su tiempo al


cuidado de una persona, ya sea de algún familiar o pariente cercano. Los
cuidadores de personas con alguna alteración mental o física, tienden a
emplear gran parte de su tiempo en el cuidado de los pacientes,

5
generando ciertas alteraciones en su cotidianidad que varían según el
estado de la enfermedad.

Existen dos tipos de cuidadores, los formales (profesionales) y los


informales, que son aquellas personas que dan cuidados sin ninguna
formación profesional, denominados cuidadores primarios por la cantidad
de tiempo que pasan junto a la persona enferma, ya que en ellos recae la
responsabilidad social, afectiva, entre otras, que implica una enfermedad;
la mayoría de estos cuidadores son los familiares, quienes no reciben
retribución económica a cambio del cuidado brindado (Mansilla 2015).

El cuidador primario de personas con discapacidad intelectual enfrenta


día a día situaciones estresantes que pueden mermar la propia salud
ocasionando distintos problemas físicos o mentales, es por ello que el
afrontamiento constituye una herramienta importante en el cuidado de
estas personas, donde se utilice distintas maneras de manejar las
situaciones estresantes tales como acudir a grupos de apoyo, acudir con
un profesional: Psicólogo, que facilite al cuidador a realizar su labor
eficazmente, minimizando las posibles repercusiones negativas que se
desprenden de ello.

El afrontamiento incluye cualquier esfuerzo consciente o inconsciente que


debilite las situaciones estresantes o que permitan tolerar sus efectos de
una manera poco dañina; ya que el familiar tiene a su cargo al paciente y
debe hacer frente a la discapacidad en todos sus aspectos. Las
estrategias de afrontamiento son el proceso por el que la persona intenta
"manejar" la discrepancia entre las demandas que percibe en la situación
y los recursos de los que dispone o cree disponer, y que le llevan
finalmente, a la valoración de la situación como estresante (Lazarus y
Folkman, 1984).

Muela, Torres y Peláez (2002), explican una de las clasificaciones más


empleadas en la literatura, la cual, divide las estrategias de afrontamiento
en: centrados en el problema, emoción y percepción. El primero enfocado

6
al problema (el afrontamiento activo, la planificación, la supresión de
actividades competente, postergación de afrontamiento, búsqueda de
apoyo social por razones instrumentales), el segundo enfocado a la
emoción ( como la búsqueda de apoyo social por razones emocionales, la
reinterpretación positiva y crecimiento, la aceptación, acudir a la religión,
la negación) y la tercera enfocada a la percepción (como enfocar y liberar
emociones, desentendimiento conductual y desentendimiento mental) que
en conjunto miden trece estilos de afrontamiento.

Es importante diagnosticar la presencia del Síndrome del Cuidador en la


familia, ya que genera consecuencias tanto en la salud física y emocional
del cuidador primario, así como también en el clima familiar y en la calidad
de cuidado que el cuidador otorga a la persona afectada por la
enfermedad. En Latinoamérica se estima que más del 50% de los
cuidadores informales dejan sus trabajos por lo que luego enfrentan
problemas financieros (Morais y cols 2012).

Caritas Diocesana es una Institución que tiene a su cargo a 8 Centros


educativos y 1 Centro Técnico Productivo donde brindan educación a
personas con discapacidad intelectual de zonas aledañas a la ciudad, la
necesidad de realizar esta investigación reside en el hecho de que
numerosas investigaciones han centrado su interés en el estudio de la
persona con discapacidad intelectual sin enfocarse en la persona que lo
cuida, por ello se requiere una mayor investigación en su cuidador
primario, por lo que planteo la siguiente pregunta:

¿Existe relación entre las estrategias de afrontamiento y Sobrecarga


del cuidador primario de personas con Discapacidad intelectual.
Caritas, Arequipa - 2017?

7
B. OBJETIVOS

1. OBJETIVO GENERAL

 Determinar la relación entre las estrategias de afrontamiento con la


sobrecarga de los cuidadores primarios de personas con
Discapacidad intelectual. Caritas, Arequipa – 2017.

2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

 Caracterizar la población de estudio por edad, sexo, estado civil,


parentesco, tiempo dedicado al cuidado, grado de instrucción y
condición laboral.
 Identificar las estrategias de afrontamiento: Enfocados al problema,
a la emoción y la percepción.
 Identificar el nivel de sobrecarga de la población de estudio:
ausencia de sobrecarga, sobrecarga ligera, sobrecarga intensa.

C. HIPÓTESIS

 Existe relación entre las estrategias de afrontamiento y la


sobrecarga en cuidadores primarios de personas con Discapacidad
intelectual. Caritas, Arequipa – 2017.

HIPÓTESIS NULA
 No existe relación entre las estrategias de afrontamiento y la
sobrecarga en cuidadores primarios de personas con Discapacidad
Intelectual. Caritas, Arequipa – 2017.

8
CAPITULO II
MARCO TEORICO

A. ANTECEDENTES

VON POLIER, G. y cols (2014), ESTADOS UNIDOS, realizó su estudio


titulado: “Correlación entre las emociones expresadas, sentimiento de
sobrecarga, y estilos de apoyo familiar en el primer episodio
esquizofrénico de adolescentes”, su resultado más relevante fue que las
familias fueron calificadas como críticas, con mayor frecuencia por los
pacientes que los evaluadores.

ZAPATA A., y cols (2013) ARGENTINA, realizaron el estudio


“Estrategias de afrontamiento en padres con niños o adolescentes con
retraso mental leve”. Los resultados nos muestran niveles de bienestar
psicológico bajo y que los modos de afrontamiento de reestructuración

9
cognitiva, expresión emocional, apertura social, aislamiento y autocrítica
son los menos empleados.

ALVAREZ R. (2012) VENEZUELA, realizo un estudio con título “Relación


entre los niveles de carga, la salud física auto percibida y los niveles de
depresión en las cuidadoras principales de niños y jóvenes con autismo”.
Donde llegaron a la principal conclusión que existe la carga leve en las
cuidadoras principales de niños y jóvenes con autismo.

PAINEPAN B., KUNHE W. (2012) VENEZUELA. Realizaron el estudio


“Sobrecarga, afrontamiento y salud en cuidadoras de pacientes con
demencia tipo Alzheimer”, donde uno de los resultados más resaltantes
que obtuvieron fue que las cuidadoras informales presentan mayores
niveles de sobrecarga. En el caso de las estrategias de afrontamiento, se
encontró que usan significativamente más afrontamiento emocional y
menos afrontamiento racional y por desapego.

JUAREZ E. (2016) AREQUIPA – PERU. En su estudio “Estrategias de


afrontamiento y estrés en padres de niños con Leucemia. Servicio de
Oncohematologia Pediátrica. H.N.C.A.S.E”. Donde su resultado señala
que la mayoría de los padres de niños con leucemia presentaron grado de
estrés moderado con riesgo de enfermar, las estrategias de afrontamiento
que más usaron fueron: el afrontamiento activo, la negación, esforzar y
liberar emociones.

MANSILLA R., PINTO B. (2014) AREQUIPA – PERU. En su estudio


“Nivel de sobrecarga y calidad de vida del cuidador principal del paciente
esquizofrénico. Centro de Salud Mental Moisés Heresi”, su resultado
principal fue que el 47,75% de los cuidadores presenta problema
moderado en la dimensión de bienestar físico; el nivel de sobrecarga de la
población estudiada es intensa en 81,98% y la calidad de vida es regular
en 68,47%.

10
CALDERON F. y col. (2013). AREQUIPA – PERU, estudio titulado
“Niveles de sobrecarga emocional en familiares cuidadores de pacientes
con Retardo Mental en el Centro de Salud Mental Moises Heresi”, tuvo
como principal resultado que el 60% de la población estudiada presenta
sobrecarga emocional intensa seguida de sobrecarga emocional leve en
un 35% de la población.

HIDALGO L. (2013) LIMA-PERU. En su estudio “Sobrecarga y


Afrontamiento en familiares cuidadores de personas con Esquizofrenia”,
donde se encontraron correlaciones entre la sobrecarga y algunas
estrategias de afrontamiento específicas. Del mismo modo, se observaron
diferencias significativas evidenciando que, según el sexo del cuidador, el
tiempo de cuidado y la fase de rehabilitación, los cuidadores pueden
hacer uso de diferentes estrategias de afrontamiento.

B. BASE TEORICA

1. Afrontamiento
1.1. Definición Conceptual
Es el conjunto de pensamientos, acciones realistas que van a poner
solución a situaciones diversas en la vida, donde se va reducir el estrés.
Son los esfuerzos tanto cognitivos como conductuales que están en
constante cambio desarrollados con el objetivo de hacer frente a las
demandas específicas internas o externas. Si estos esfuerzos resultan
efectivos en la resolución de los problemas proporcionan alivio,
recompensa, tranquilidad y equilibrio (Doping, 2012).

Lazarus (1986) define al afrontamiento como una respuesta al estrés que


tiene dos grandes funciones, la primera donde señala solucionar el
problema y en segundo lugar el afrontamiento nos permite actuar sobre

11
las respuestas emocionales y físicas que tiene relación con el estrés para
poder mantener nuestro ánimo y continuar funcionando bien.

Afrontar también se define como una serie de acciones cognitivas y


afectivas que son utilizadas en una preocupación particular; estas
acciones representan esfuerzos hechos por el individuo que conllevan a
un equilibrio, lo que puede ser de hecho resolviendo el problema o
acomodándose a la preocupación sin provocar una solución (Harvey,
2005).

En conclusión, el afrontamiento es un conjunto de procesos cognitivos y


conductuales en los cuales participan tanto recursos internos como
externos de las personas, para dar solución directa o indirecta a un
problema que aflige y poder así encontrar su equilibrio.

1.2. CLASIFICACIÓN DE FASES SEGÚN JUAREZ (2013).


1.2.1. Fase Diagnóstica
Cuando en fases anteriores la persona ha recibido apoyo o terapia
psicológica específica, es frecuente observar síntomas del bloqueo
emocional, atribución de preocupación, ocupar el tiempo de forma
compulsiva para evitar la ansiedad y anticipación de consecuencias
negativas, búsqueda de sentido, rezar y pactar con lo divino, anticipar
ideas de deterioro. Sufrimiento y muerte.

1.2.2. Fase de tratamiento


En esta fase se puede observar una evolución en el proceso de
afrontamiento en cuanto a la dirección del mismo. Los problemas que
suscita la enfermedad y su tratamiento pasan a primer plano, el espíritu
de lucha, dependencia, vigilancia, preocupación ansiosa, resignación,
fatalismo suelen ser frecuentes.

12
1.2.3. Fase Crónica o Recaída
En esta fase los pacientes que representaron un estilo de afrontamiento
positivo en escalas iniciales tras un periodo regresivo en el que
nuevamente pueden aparecer estrategias de afrontamiento dirigidos hacia
las emociones suelen retomar el control y mantener su estilo de
afrontamiento.

1.3. Métodos (Juárez, 2014)


1.3.1. Método directo
El primer paso para un afrontamiento exitoso es la correcta evaluación de
problemas, buscar y comprender por qué se sufre de estrés, esto implica
la identificación de la fuente de estrés y la constatación de los efectos que
tiene.
El afrontamiento directo implica los intentos de las personas por identificar
la fuente de estrés, desarrollar una estrategia de lucha para aliviar el
estresor. La esencia de los métodos de afrontamiento directo en la
confrontación física o mental de la fuente del estrés. El esfuerzo mental,
como la resolución de problemas o el esfuerzo físico, como charlar,
cambian las situaciones y por lo tanto son estrategias de afrontamiento
directo, entre las cuales se puede considerar:

a. Resolución Planificada de problemas: Es la evaluación de las


medidas que se han de tomar para reducir o eliminar un estresor, seguido
del esfuerzo necesario para aplicarlas, este método de afrontamiento es
efectivo ya que producen cambios positivos en la situación, la persona o
en ambos.

b. Afrontamiento confrontativo: Implica dirigirse a la fuente del


estrés el intentar cambiarlo al instante. Flokman y Lazarus, encontraron
que la expresión de la rabia, hostilidad y agresión que se asocia al
afrontamiento confrontativo hace que uno se sienta peor.

13
c. Apoyo Social: Es un término que se refiere a la red de personas a
las que uno puede acudir en momentos de necesidad, crisis o malestar
emocional, incluyen al cónyuge, parientes, padres, compañeras o
amistades. Es una estrategia de afrontamiento efectiva contra el estrés
que reduce el impacto perjudicial de los estresares ya que permite la
integración a una red de apoyo social aumentando la probabilidad de
adaptarse a los acontecimientos negativos.

d. Búsqueda de soluciones: Conductas que reflejan búsqueda de


soluciones por el propio individuo tales como la información, planificación
de probabilidades.

e. Contabilización de Ventajas: Expresa respuestas cognitivas del


individuo comparando una situación hipotética con otra peor o en el de
otras personas.

1.3.2. Método defensivo


Los métodos de afrontamiento directos se orientan hacia el cambio de la
fuente de estrés. Los esfuerzos de afrontamiento defensivos, sin
embargo, se orientan hacia la supresión de los efectos negativos del
estrés. Cuando las personas intentan huir de una situación estresante de
forma mental o física de situaciones estresantes, están haciendo uso de
métodos de afrontamiento defensivos:

a. Mecanismos de Defensa: Se manifiesta a menudo a través del


uso de mecanismos de defensa, como el uso de negación, la regresión, la
proyección o la forma reactiva, las personas intentan distorsionar la
realidad del estresor y evaluarlo como un acontecimiento no perjudicial y
no amenazador.
b. Culpar a otros: La persona culpa a otros del problema y sus
consecuencias, se considera evitativo.

14
c. Represión Emocional: Refleja el rechazo o evitación de la
expresión de sentimientos al conocer a otra persona.

1.4. Funciones
Laux y Webwe han señalado como las principales funciones del
afrontamiento, las siguientes:
 Resolver el problema
 Regular las emociones
 Proteger la autoestima
 Manejar las interacciones sociales

1.5. Componentes
Mechanic (1996) indica que el afrontamiento tiene una naturaleza
multidimensional y varios componentes en su proceso como:
1.5.1. Los rasgos de la personalidad: Son propios de cada persona y
actúan como predisponentes para afrontar los acontecimientos de la vida.

1.5.2. La conducta adaptativa: Es el comportamiento que se traduce en


respuesta. En cuanto al resultado o éxito adaptativo que es la forma de
estrategia empleada que puede ser la más adecuada o no.

1.5.3. Control del entorno: Implica a la multiplicidad de problemas.

1.6. Estrategias
Las personas moderan los efectos perjudiciales de los estresores
mediante estrategias de afrontamiento, también llamados estilos, modos,
formas o conducta que son destrezas a través de las cuales se hace
frente un problema o situación. Estas destrezas son inherentes a cada
individuo las cuales se pueden considerar desde un punto de vista
afectivo, cognitivo y conductual, siendo difícil establecer una división neta
debido a las interrelaciones existentes entre ellos del propio sujeto.

15
Según Doping, las estrategias o estilos vienen hacer las maniobras que
pone en marcha el sujeto para mantenerse estable a la enfermedad.
Dentro de los estilos consideramos:

a. Es estilo conductual: Implica la revisión realista de los potenciales


y limitaciones, determinando, los objetivos a corto y largo plazo, la
formulación de un plan de acción para enfrentarse al problema, la que se
basa en las raíces biológicas elementales que impulsan al sujeto de
acuerdo a su sentido.

b. El estilo emocional o afectivo: Es posible de predecirlo se centra


en los sentimientos provocados por el suceso, es la expresión de los
sentimientos puede incluir en llanto, enojo, las palabras, la desesperación
y la frustración, por eso que los distintos estados afectivos pueden
aparecer en mayor grado a lo largo de la evolución de una enfermedad
los cuales son frecuentemente predecibles. La capacidad de identificar y
comentar los propios sentimientos es la cualidad de la respuesta
emocional que frecuentemente refleja la amenaza que experimenta el
individuo de acuerdo con su personalidad e historia vital.

c. Los estilos cognitivos: Son los que ayudan al individuo a


encontrar y entender el significado personal de un suceso inesperado. En
relación a esto cada individuo posee patrones determinados por la
influencia que ejercen en sus percepciones, interpretación y actitudes.
Según Lipowski, existen dos mecanismos básicos que traducen dos tipos
de actitud:
 La Minimización: Asociado a una actitud negativa, es la tendencia
a la falla de atención, ignorancia o racionalización selectiva de los hechos
o de la enfermedad y sus consecuencias.
 Hipervigilancia Focalizada: Es el mecanismo opuesto a la
minimización se acompaña de rigidez de opinión y de inflexibilidad para
adaptarse a lo inesperado.

16
1.7. Escalas de Evaluación de estrategias de Afrontamiento
1.7.1. Escala de Afrontamiento paras Adolescentes
Elaborado por E. Frydenberg y R. Lewis, crearon una escala que evalúa
las distintas formas o modos que los adolescentes utilizan para afrontar
sus problemas. Este instrumento válido para investigación terapia y
orientación está formado por 80 items, que permiten que el adolescente
conozca las estrategias que emplea para afrontar sus problemas y que el
tutor lo ayude a utilizar las más eficaces. No se trata de una evaluación
externa sino interna de autorreflexión.

1.7.2. Escala de Estimación de Afrontamiento COPE


Este instrumento se desarrolló en EEUU, en el año 1989 por Caver,
Sheire y Weintraub, para evaluar el modo usual de los individuos que
enfrentan el estrés a través de estrategias de afrontamiento. Está
conformado por tres escalas enfocadas a tres áreas: Enfocado al
problema, a la emoción y a la percepción que en conjunto miden trece
estilos de afrontamiento. Cada escala está conformada por cuatro ítems
con cuatro respuestas de elección, nunca, a veces, Generalmente y
siempre, que reciben puntuaciones de 1,2,3,4 respectivamente, el puntaje
más alto en la escala indica que a estrategia de afrontamiento que da
cuenta dicha escala es más frecuentemente empleada.

1.8. Clasificación de la Estrategias según Juárez (2014)


1.8.1. Centradas al problema
Cuando la persona se centra en poder resolver la situación, proponiendo
distintas soluciones, ejecutando acciones para modificarla. Comprende
las siguientes estrategias de afronte que van dirigidos a modificar el
estresor.
a. Afrontamiento activo: Proceso de ejecución de acciones directas
incrementando los esfuerzos con el fin de apartar o evitar el estresor.

17
b. Planificación: Proceso de pensamiento de como uno puede hacer
frente al estresor, es decir el planeamiento mental de las estrategias de
cada acción a tomar.
c. Supresión de actividades competentes: Proceso de supresión el
cual implica dejar de lado otros proyectos, evitando ser distraído, con la
finalidad de manejar el estresor.

1.8.2. Centradas a la emoción


Cuando se valora el entorno como inmodificable y el sujeto intenta
cambiar ciertas pautas de conducta, reduciendo la perturbación
emocional.
a. Búsqueda de apoyo social por razones emocionales: Proceso
que consiste en buscar en los demás, apoyo moral, empatía y
comprensión con la finalidad de aliviar la reacción emocional negativa.

b. Reinterpretación positiva y crecimiento: Proceso que consiste


en que el individuo evalúa el problema de manera positiva asignándole
connotaciones favorables a la experiencia en sí misma, en otros casos
como un aprendizaje a futuro.

c. Aceptación: Comprende dos aspectos durante el proceso de


afrontamiento, el primero se realiza durante la fase de evaluación primaria
cuando la persona acepta que la situación estresante realmente existe, el
segundo tiene lugar durante la evaluación secundaria y consiste en
aceptar que tendrá que convivir con las situaciones estresantes.

1.8.3. Centradas a la percepción


Es cuando se valora la percepción como forma básica del afrontamiento y
así la persona actúa dependiendo de la interpretación personal que le da
a la enfermedad. Sus estrategias son:
a. Enfocar y liberar emociones: Consiste en focalizarse en las
reacciones emocionales desagradables que se experimentan y

18
expresarlas abiertamente, esto puede resultar funcional en momentos de
elevada tensión.

b. Desentendimiento conductual: Consiste en la disminución del


esfuerzo dirigido al estresor, dándose por vencido – desesperanza.

c. Desentendimiento mental: Implica que la persona permita que


una amplia variedad de actividades distraiga su evaluación en la
dimensión conductual del problema o de la meta con la que el estresor
está interfiriendo.

2. Sobrecarga del Cuidador


2.1. Definición de Sobrecarga
Carga significa trabajo, dificultad, peso, desgaste, energía necesaria para
algo. Cuando se habla de la carga o sobrecarga del cuidado de personas
con discapacidad Intelectual, se hace referencia al esfuerzo adicional que
implica satisfacer las necesidades de las personas con esta
Discapacidad, de sus cuidadores familiares y profesionales, de las
instituciones y del sistema de salud y de la sociedad general (Sánchez y
cols, 2013).
La sobrecarga del cuidador, se podría definir como aquellas variables que
están en relación con las características del paciente diagnosticado de
discapacidad intelectual y especialmente la percepción y evaluación del
cuidador. Zarit y colaboradores identificaron la carga generada por la
provisión de cuidados como “Un estado que resulta de la acción de mirar
a una persona dependiente o mayor, a un estado que amenazan la salud
física y mental del cuidador” (Zarit y cols, 1980).
Así como la de George y Gwyther que entienden la carga como “Las
dificultades persistentes de cuidar y los problemas físicos, psicológicos y
emocionales que puede estar experimentando o ser experimentados por
miembros de la familia que cuidan a un familiar con algún tipo de
discapacidad.

19
2.2. Tipos de Sobrecarga
Lopez y cols (2005), Señalan que la sobrecarga del cuidador ha sido
definida operativamente y medida partiendo del modelo derivado de la
teoría General del Estrés. En este modelo, el cuidador debe afrontar
determinados factores estresantes y su respuesta ira mediada por
procesos psicológicos que incluyen el impacto emocional, la percepción
de soporte social y las estrategias de manejo de factores.
La sobrecarga familiar repercute en distintas áreas de la vida del
cuidador: Las tareas de la casa, las relaciones de pareja, familiares y
sociales, el desarrollo personal del tiempo libre, la economía familiar, la
salud mental y el malestar subjetivo del cuidador relacionado con la
enfermedad.

2.2.1. Sobrecarga Objetiva


Salvador y Romero (2009), definen la sobrecarga objetiva con cualquier
alteración potencialmente verificable y observable de la vida del cuidador
causada por la enfermedad del paciente y se origina en las labores de
supervisión y estimulación del paciente. Está constituida principalmente
por sus propios problemas emocionales o somáticos, los problemas
económicos y el clima de convivencia en casa.

2.2.2. Sobrecarga Subjetiva


Hace referencia a la sensación de soportar una obligación pesada y
opresiva originada en las tareas propias del cuidador y en el hecho mismo
de que un familiar sufra una enfermedad de estas características
(Salvador y cols, 2009). La mayor carga subjetiva familiar está constituida
por las conductas del paciente, especialmente por la sintomatología
negativa y también se relaciona con las preocupaciones generales por la
salud, seguridad, tratamiento y futuro del paciente.

Según Jocik y cols (2004), la sobrecarga subjetiva es la percepción que


tiene el cuidador de la repercusión emocional de las demandas o

20
problemas relacionados con el acto de cuidar. Este tipo de sobrecarga
tiene mayor incidencia sobre la vida del paciente y sus familiares. La
sobrecarga subjetiva se relaciona con la tensión propia del ambiente que
rodea las relaciones interpersonales entre el paciente con sus familiares y
las preocupaciones generales por la salud, seguridad, tratamiento y futuro
del paciente (Huanca y cols, 2013).

2.3. Factores que influyen en la Sobrecarga


La sobrecarga del cuidador considera, un constructo multicausado, que se
ve influenciado por las características propias de los cuidadores, las
características clínicas del paciente, del apoyo social que poseen los
cuidadores y del soporte profesional que reciben. Según Ribe (2014), los
factores que se asocian de manera frecuente a la sobrecarga, según los
estudios son los siguientes:
2.3.1. Factores del cuidador
a. Edad: Existen discrepancias respecto de la influencia de la edad
en la sobrecarga del cuidador, así encontramos dos estudios en los que
se hallan relaciones significativas entre la edad avanzada del cuidador y
la carga y uno en los que no se encuentra ningún tipo de asociaciones
(Gutierrez y cols, 2005). El estudio de Juvang que investigo la relación
existente entre las características sociodemográficas del cuidador de un
miembro de su familia con esquizofrenia en China observaron una
correlación positiva con la carga del cuidador. Estos autores explican que
cuando el cuidador envejece en China comienza a preocuparse por quien
cuidará en el futuro a su familiar enfermo. Además, a medida que el
cuidador envejece pierde capacidades para cuidar al miembro enfermo.

b. Sexo: En la mayoría de trabajos se destaca como son las mujeres


quienes acostumbran a ejercer el cuidado del familiar con discapacidad.
Por lo general, respecto a la carga del cuidado no se detectan diferencias
significativas, a nivel cuantitativo. A pesar de ellos, los hombres y las
mujeres pueden experimentar de forma distinta la carga del cuidado. En

21
relación al rol social, en general y tradicionalmente el rol del cuidado ha
recaído más en la mujer que en el hombre. (Ribe y cols, 2011)

c. Estado civil: Por lo general en los estudios revisados no se hallan


relaciones significativas respecto al estatus civil y la carga del cuidador.
Existe un estudio en el que se valora la relación entre el estar casado con
la carga del cuidador y no se encuentra ningún tipo de relación
significativa (Gutierrez y cols, 2005).

d. Nivel de instrucción: Los hallazgos de diferentes estudios


parecen coincidir y demuestran como bajos niveles educacionales tienen
una correlación negativa con la carga del cuidador. (Zahid y Ohaeri,
2010). Cook y cols, citados por Ribe (2014), señalan que el grado
educacional puede actuar como un “buffer” en contra de la carga del
cuidador. Se asume que, un elevado nivel educacional puede implicar un
salario mejor, y un buen salario puede hacer disminuir los problemas
económicos que estén en relación con el cuidador del familiar enfermo.

e. Estatus económico: Los ingresos económicos de cada cuidador o


familia pueden influir en la carga del cuidador. Existen estudios en países
en vías de desarrollo donde los recursos asistenciales como extra
hospitalarios son inferiores, que sostienen que un bajo nivel económico
está en relación con una mayor carga. Destacan dos estudios al respecto
realizados en Nigeria (Ohaeri, 2001) y en la India (Thara, 2003). Debido a
los gastos económicos que puede suponer el cuidado de alguien con
discapacidad intelectual la familia tiene que movilizarse y buscar más
recursos económicos y sociales. Es decir, que a la propia “carga del
cuidado” se le suma la preocupación de obtener más recursos o mejorar
su situación financiera (Ribe, 2014).

f. Estatus laboral: La mayoría de trabajos encuentran una


correlación entre el hecho de tener trabajo y presentar una menor carga

22
del cuidado. En principio algunos estudios interpretan que, el poder
trabajar estaría en relación con el hecho de poseer un mejor salario y por
tanto un mayor sustento económico que podría sufragar los costos
económicos que conlleva la discapacidad. Grandon, Jenaro y Lemos
(2008), señalan que quienes estaban desempleados presentaban unos
niveles mayores de carga. Respecto a aquellos que no trabajan
(jubilados, personas que están en el paro o retirados para cuidar al
familiar) presentan niveles de carga mayores por estar en contacto directo
con el familiar enfermo y tener menos ingresos económicos.

g. Grado de parentesco: En algunos trabajos, como el de Caqueo-


Urizar y Gutiérrez-Maldonado se observa como la mayor carga se
encuentra más en los padres que en los hijos, cónyuges, hermanos u
otros. Gutiérrez y cols (2005), detecta una mayor carga en las madres de
los cuidadores. Estas acostumbran a ser las personas sobre las que
recae típicamente la responsabilidad en el cuidado de muchos aspectos y
necesidades propias de la vida cotidiana del paciente como son: El
cuidado higiénico, la adherencia medicamentosa, el estímulo para realizar
actividades de ocio, y son quienes suelen asegurar un clima de calma en
el ambiente de la casa.
Schmis y cols (2006) reflexionan acerca del papel de los hermanos de los
pacientes con algún tipo de discapacidad. Piensan que la gran mayoría de
trabajos se centran en los padres y consideran que el rol como cuidador
de los hermanos esta poco estudiado. Se ha encontrado un trabajo
realizado en Kuwait que obtiene, como resultado de una amplia muestra
de cuidadores, que las esposas y sus hijos presentan una mayor carga
del cuidador (Zahid y cols, 2010).

h. Tiempo dedicado al cuidado: La gran mayoría de investigación


coinciden en relacionar elevados niveles de carga del cuidador con la
cantidad de tiempo dedicado al cuidador del familiar enfermo. Un mayor

23
contacto con la persona enferma está relacionado a una mayor “carga del
cuidado” (Zahid y cols, 2010).
Cuando el cuidador principal emplea la mayor parte de su tiempo al
cuidado del familiar enfermo, pierde tiempo para sí mismo y la capacidad
para la realización de las actividades propias de la vida cotidiana (relación
familia, ocio, trabajo) (Juvang y cols, 2007).

i. Conocimiento de la enfermedad: El conocimiento de las


características y consecuencias de la enfermedad está en relación con
unos niveles menores de carga del cuidador. Habitualmente las familias
comienzan a conocer la enfermedad a partir de intervenciones de índole
psicoeducativo. A pesar de su eficacia muchos estudios, entre ellos el de
Magliano y colaboradores, siguen mostrando la falta de ayuda a los
familiares debido a la ausencia y no implantación en muchos centros, de
programas con información adecuada acerca de discapacidades múltiples
(Magliano y cols, 1998).

2.3.2. Factores del paciente


a. Edad: La gran mayoría de trabajos muestran cómo se asocia una
elevada sobrecarga del cuidador en aquellos familiares que tienen a su
cargo a un familiar joven con discapacidad (Juvang y cols, 2007).

b. Sexo: Existe una mayor relación en los cuidadores cuyos familiares


con discapacidad son varones (Zahid y cols, 2010).

c. Grado de funcionamiento en la vida diaria: Un empobrecimiento


en la vida social como en el nivel de funcionamiento se muestra predictivo
de una mayor sobrecarga del cuidador (Manish, 2009).

d. Curso de la enfermedad: Existen estudios que señalan que la


carga de las familias es mayor en los estadios iniciales de alguna
enfermedad. En el primer episodio de las familias presentan niveles

24
elevados de sufrimiento, independientemente si viven o no con la persona
enferma (Jonces, 2009). Por otro lado, el estudio de Zahid y cols (2010)
encuentra que una duración prolongada de la enfermedad está en
relación directa de una mayor sobrecarga en los cuidadores.

2.3.3. Factores ambientales


a. Apoyo social: Es uno de los factores ambientales más importantes
en relación con la salud, la satisfacción vital y el desarrollo persona.
Gottlieb citado por Ribe (2014), de manera muy simple, define el apoyo
social como conjunto de recursos, con consecuencias positivas, de los
que una persona puede disponer a partir de sus relaciones sociales.
El rol del familiar del cuidado puede afectar tanto a la red social como al
apoyo del cuidador. Existen muchos estudios que revelan que la red
principal del cuidador está compuesta de amistades y familiares. Debe
remarcarse el hecho por el cual muchos cuidadores no reciben ayuda de
ninguno de estos o cuentan, en la realidad, con pocas personas en
comparación con el número de amistades y familiares que creían estar
dentro de su propia red social (Ribe, 2014).

2.4. Consecuencias de la sobrecarga


2.4.1. Repercusión de la sobrecarga en el cuidador
a. Repercusiones en la salud física: se manifiesta por trastornos del
sueño, problemas osteo musculares y esguinces, dolores de cabeza,
cansancio, reducción del ejercicio físico, perdida de energía, fatiga
crónica, sensación de cansancio continuo, consumo excesivo de bebidas
con cafeína, alcohol y pastillas tranquilizantes, riesgo de HTA, alergias,
afecciones de la piel, lumbalgias, palpitaciones, temblor en las manos,
trastornos gástricos e intestinal, problemas de memoria y dificultad para
concentrarse, respuesta inmunológica reducida, mayores concentraciones
de insulina, colesterol, triglicéridos, predisposición a sufrir accidentes,
aumentando la mortalidad hasta un 63% en cuidadores.

25
b. Repercusiones emocionales: los cuidadores presentan un mayor
riesgo en presentar síntomas psicológicos adversos, interfiriendo muchas
veces en el bienestar físico y emocional del cuidador debido a la
dependencia de la persona, al mayor grado de dependencia física y al
mayor tiempo dedicado al cuidado. Las principales repercusiones
emocionales son:
 Reacciones emocionales: Vergüenza, ira, irritabilidad, miedo y
frustración.
 Sentimientos dolorosos: Culpabilidad, preocupación por el futuro.
 Repercusiones sociales y familiares: Estas influyen
principalmente para el padre y la madre llegando a tener niveles altos de
ansiedad y depresión. Desinterés en su vida social.
 Repercusiones positivas: Depende de la adaptación del cuidador,
manifestada por la satisfacción de ayudar y afrontar mejor los retos.

2.5. Escalas de Medición de la Sobrecarga


2.5.1. Escala de sobrecarga de Zarit
La escala de Zarit, fue creada para evaluar la percepción que tienen los
cuidadores de pacientes dependientes de cuidado, inicialmente fue
aplicada en cuidadores de pacientes con demencia, por ello Zarit y su
grupo de colaboradores consideraron a la carga de los cuidadores como
clave de la buena interrelación entre las personas con demencia en la
comunidad y su cuidador, elaborado un procedimiento para su evaluación.
El instrumento original consistía en un cuestionario de 29 elementos
diseñado para evaluar la carga asociada al cuidado, teniendo en cuenta
los siguientes aspectos: salud física y psicológica, área económica y
laboral, relaciones sociales y relación con la persona mayor receptora de
los cuidados. Las respuestas a los elementos se sumaban para obtener
un índice único de la carga. En su revisión se redujo el número de
elementos a 22. Distintos trabajos que han utilizado este instrumento
informan de una consistencia interna entre 0.79 y 0.92. Respecto a la
validez de constructo, existen datos de ánimo y salud física. Por lo tanto la

26
escala consta de 22 ítems, cada una de las cuales evalúa la sobrecarga
que tienen los cuidadores abarcando las siguientes características:
consecuencias del cuidador en el cuidador, creencias y expectativas
sobre capacidad para cuidar y relación entre el cuidador y la persona
cuidada.

2.5.2. Índice del estrés del cuidador (CSI)


Es una herramienta que se puede utilizar para identificar rápidamente a
familias con preocupación por los cuidadores. Consta de 13 preguntas
que relacionan la atención con la disposición del cuidado. Hay por lo
menos un artículo para cada de los dominios principales: empleo,
financiamiento, físico, social y tiempo; las respuestas positivas a 7 o más
ítems, indican un mayor nivel de la atención. Este instrumento se puede
utilizar para determinar a los individuos de cualquier edad que han
asumido el papel de cuidador para un adulto mayor (Robison, 1983).

2.5.3. Índice del esfuerzo del cuidador


El índice de esfuerzo del cuidador (IEC) es un instrumento diseñado para
medir la carga percibida de aquellas personas que cuidan a sus
familiares. Este instrumento fue validado originalmente en 1983 por
Robinson BC en una población americana de cuidadores de pacientes
tras un alta hospitalaria por una enfermedad cardiaca arterioesclerótica o
por la implantación de una prótesis de cadera. Este cuestionario se aplica
para una población de cuidadores de personas dependientes en general.
Se trata de una entrevista semiestructurada y consta de 13 ítems con
respuesta dicotómica Verdadero – Falso, cada respuesta afirmativa
puntúa 1. Una puntuación total de 7 o más sugiere un nivel elevado de
esfuerzo (López 2005).

La validez fue estudiada mediante la validez de criterio concurrente con


tres áreas diferentes, fruto de anteriores estudios de grupos focales con
cuidadores, como son las características del paciente, la percepción

27
subjetiva del hecho del cuidar por parte del cuidador, y la salud física y
emocional del cuidador, encontrando correlaciones de Pearson
significativas en todas las áreas

3. Cuidado de Enfermería
3.1. Definición de cuidado
Históricamente existen diferentes definiciones en relación al cuidado, por
ejemplo Florence Nigthingale definió atención o cuidado en su libro Notes
of Nursing en 1859, Madeleine Leininger señala que Nigthingale
considero como componente del cuidado: el confort, ayuda y la educación
de la salud. Según García (2011) el cuidado como concepto debe ser
entendido, debido a que los conceptos sirven como base para análisis y la
investigación continua de la enfermera, considerando que en la actualidad
el concepto de cuidado se cita con frecuencia para apoyar las prácticas
de las enfermeras actuales. El uso de la palabra cuidar involucra un
sentido emergente, ya que, el concepto de cuidado se ha convertido en
objeto de estudio de la enfermera en los últimos años.

El verbo cuidar específicamente asume la connotación de causar


inquietud, entregar la atención. Para enfermería tiene un significado
mucho más amplio, se define el cuidado como ayudar al otro a crecer y a
realizarse como persona. Es una manera de relacionarse con alguien que
implica desarrollo. En tal sentido, entendiendo el cuidado como una
actitud de responsabilidad y envolvimiento afectivo con otro ser humano,
“la palabra cuidado incluye dos significaciones básicas, íntimamente
ligadas entre sí: La primera la actitud de desvelo, de solicitud y de
atención para con el otro. La segunda, de preocupación y de inquietud,
porque la persona que tiene cuidados siente envuelta y afectivamente
ligada al otro.
Cuidar como un concepto está en proceso de ser inventado o construido y
se transforma con el paso del tiempo.

28
La enfermera es la profesional que tiene la función primordial de
preocuparse y priorizar el bienestar del paciente. La forma de interactuar
en la atención es construida a partir de un complejo proceso de
sensibilidad y reciprocidad, que se refieren a la vida y formas de fortalecer
la relación de las personas.

3.2. Fundamentos de la Ciencia del Cuidado


El cuidado profesional es el punto de partida de la ciencia del cuidado, lo
que significa, que la enfermera debe de saber por qué lo hace, para que
lo hace, como lo hace y cuando lo hace, ese es la diferencia de un
cuidado profesional de enfermería de uno que no lo es. Por lo tanto, el
cuidado se enfoca específicamente en que las enfermeras profesionales
sean las responsables de planificar y ejecutar cuidados. Ellas deben de
saber, que cuidados deben de ofrecer desde que están en contacto con el
sujeto que solicite el cuidado.
Cuidar es, ante todo, un acto de vida, en el sentido de que representa una
infinita variedad de actividades dirigidas a mantener y conservar la vida y
permitir que esta continúe y se reproduzca. Es un acto de reciprocidad
que se tiende a dar a cualquier persona que, temporal o definitivamente,
requiere ayuda para asumir sus necesidades vitales.

3.3. Concepto del cuidado informal


Son numerosos los autores que han aportado una definición al concepto
del cuidado informal, en un intento de clarificar un término que al día de
hoy, sigue provocando controversia en cuanto a su definición (Benjumia,
2009). Existe cierta unanimidad a la hora de definir el término como “la
prestación de cuidado de salud a personas dependientes por parte de
familiares, amigos u otras personas de la red social inmediata, que no
reciben retribución económica por la ayuda que ofrecen” (Wright, 1987).
Otras definiciones propuestas por organismos oficiales, como la que
sugiere la ley de promoción de la autonomía personal y atención a las
personas en situación de dependencia, delimitan el cuidado no

29
profesional como “la atención prestada a personas en situación de
dependencia en su domicilio, por personas de su familia y entorno, no
vinculadas a un servicio de atención profesionalizada”. En este caso, la
definición sigue resultando algo ambigua y muy genérica, y no llega a
establecer claramente los límites de la duración de los cuidados, ni
aportar información precisa sobre la figura del cuidador principal. Sin
embargo el libro blanco de la dependencia (2005) va más allá, aportando
una definición más exhaustiva de lo que significa el cuidado familiar de
una persona dependiente, definiéndolo como “el que se presta por
parientes, amigos o vecino.

Este conjunto difuso de redes suele caracterizarse por su reducido


tamaño, por existir afectivamente en la relación y por realizar el cuidado
no de manera ocasional, sino mediante un compromiso de cierta
permanencia o duración”. En este sentido esta definición complementa la
introducida por la ley, ya que integra el carácter temporal de los cuidados,
la implicación afectiva que se da entre el dependiente y el cuidador y el
volumen de la red que proporciona las atenciones.
A efectos reales, sigue siendo la familia, sin haber manifestado
explícitamente su deseo de hacerlo, la encargada principal de los
cuidados, la que mayores recursos de salud aporta a la dependencia y la
que asume la responsabilidad del mantenimiento y el desarrollo del
dependiente que reside en el hogar (Vaquiro y Steiepovich, 2010).

3.4. Definición del cuidado formal


Es aquella persona que asiste o cuida a otra afectada de cualquier tipo de
discapacidad, minusvalía o incapacidad que le dificulta o impide el
desarrollo normal de sus actividades vitales o de sus relaciones sociales.
Es un concepto mixto formado en gran medida por la realización de tareas
de carácter de apoyo, pero definido también en términos de relaciones
sociales y familiares, generalmente parentesco, aunque se extiende a

30
lasos de amistad o de vecindad donde estos han adquirido el carácter de
relaciones primarias. (Vergero y cols, 2000).

3.4.1. Cuidador principal: es la persona familiar o cercana que se ocupa


de brindar de forma prioritaria apoyo tanto físico como emocional a otro
de manera permanente y comprometida (Venegas, 2006).
Según Vallerand y cols (2007), el término se utiliza para referirse a los
miembros de la familiar u otros importantes que atendieron al paciente en
su domicilio y que fue identificado por el paciente como su cuidador
principal.

3.4.2. Cuidador informal: son las personas que no pertenecen a ninguna


institución sanitaria ni social y que cuidan a personas no autónomas que
viven en su domicilio (Celma, 2001).
El cuidador informal principal se define como “aquella persona principal
responsable del cuidado no profesional del paciente. Reside en su gran
mayoría en el mismo domicilio del enfermo, debe estar siempre disponible
para satisfacer sus demandas y no recibe retribución económica alguna
por la función que desempeña” (Feldberg y cols, 2011).
Otros autores, aportan nuevas definiciones al concepto, como en el caso
de la conceptualización del cuidador informal principal como “aquel
individuo que asume las tareas del cuidado, con la responsabilidad que
ellos implica, es percibida por los restantes miembros de la familia como
responsable de la persona dependiente y no es remunerada
económicamente” (Fernández y cols, 2011).
La tradición familiar del cuidado entiende que son las mujeres,
fundamentalmente madres o hijas de la persona cuidada, las que asumen
el papel de cuidadoras principales en la mayor parte de los casos (Crespo
y Lopez, 2008; Vaquiro y Stiepovich, 2010).

31
4. DISCAPACIDAD INTELECTUAL:
4.1. Definición Básica
Es una discapacidad caracterizada por limitaciones significativas en el
funcionamiento intelectual y en la conducta adaptativa que se manifiesta
en habilidades adaptativas conceptuales, sociales, y prácticas. Las
personas con discapacidad intelectual tienen algunas limitaciones para
funcionar en su vida diaria, les cuesta más aprender habilidades sociales
e intelectuales para actuar en diferentes situaciones, esta aparece antes
de los 18 años. La discapacidad intelectual no sólo tiene que ver con la
persona. También tiene mucho que ver con su relación con el entorno. En
entornos inclusivos las personas con discapacidad intelectual pueden
desarrollar muchas habilidades ( Bernales, 1997).

Schalock (2005) plantea que el concepto de inteligencia que se utiliza


actualmente es uno más amplio que abarca tanto aspectos sociales
(habilidades interpersonales), prácticos (adaptarse a entornos propios y
nuevos) como conceptuales (competencias académicas y escolares).
Esto se suma a lo planteado por la línea teórica de Feuerstein (1980), que
entiende la inteligencia como un proceso que se da a lo largo de toda la
vida a través de la mediación y transmisión cultural, por lo que las
funciones cognitivas pueden desarrollarse y enriquecerse al utilizar
técnicas apropiadas.
Como plantea Schalock el concepto de la discapacidad intelectual ha ido
cambiando con los años donde: “Cada cambio es reflejo del continuo
esfuerzo realizado, por parte de diferentes disciplinas, para mejorar la
comprensión de la condición de retraso mental así como para desarrollar
una terminología y clasificación más precisa y práctica y más orientada a
la habilitación” (Schalock, 1995).

El cambio paradigmático más importante del último tiempo ocurrió en


1983 cuando la Asociación Americana de Retraso Mental (AAMR, sigla en
inglés), que lleva más de cien años definiéndolo, y que desde el 2007

32
cambió su nombre a Asociación Americana de Discapacidades
Intelectuales y del Desarrollo (AAIDD, sigla en inglés), planteó que la
discapacidad intelectual había que entenderla en un contexto social
definido, que si recibe apoyos adecuados la persona presenta mejoras en
su funcionamiento y que los servicios de rehabilitación deben basarse en
sus capacidades, limitaciones y necesidades de apoyo. (Schalock, 1995)
Además el diagnóstico se realiza con el objetivo de la planificar la
intervención de los apoyos y no con el fin de clasificar a las personas.

4.2. Factores prenatales


Todas las causas conocidas de la Discapacidad Intelectual son de índole
orgánica. Luckasson (1992) enumera trastornos asociados a la
discapacidad mental según sus causas prenatales.

4.2.1. Alteraciones cromosómicas


a. Síndrome de Down: Alteración genética causada por la triplicación
del material genético correspondiente al cromosoma 21.

b. Síndrome de X Frágil: El síndrome de X frágil es la forma


hereditaria más común de retraso mental. Afecta aproximadamente a uno
de cada 4,000 hombres y a una de cada 8,000 mujeres de todos los
grupos raciales y étnicos. El síndrome de X frágil es un trastorno genético
que se transmite de generación en generación. Es causado por una
anomalía en un solo gen. Las características más comunes incluyen,
entre otras:
 Diferentes grados de retraso mental o incapacidades de
aprendizaje.
 Problemas de conducta, como dificultades para prestar atención y
berrinches frecuentes.
 Conductas autistas, como agitar y morderse las manos.
 Retrasos en aprender a sentarse, caminar y hablar.
 Problemas del habla.

33
 Ansiedad y problemas anímicos.
 Sensibilidad a la luz, los sonidos, el tacto y las texturas.

4.2.2. Síndromes diversos


Las distrofias musculares de Duchenne y Becker son las enfermedades
distróficas musculares más frecuentes, causando debilidad en los
músculos próximos al torso. Aparecen los síntomas iniciales hacia los 10
años de edad.

4.2.3. Trastornos congénitos del metabolismo (fenilcetonuria).


Se trata de una enfermedad infantil metabólica progresiva, severa, que
puede producir retraso mental si no se trata a tiempo.
a. Vómitos.
b. Irritabilidad.
c. Piel seca, con frecuentes erupciones. Pelo claro.
d. Orina de olor a “ratón”: los niños eliminan gran cantidad de ácido
fenilpirúvico, que es un derivado del ácido acético que es el que
secretan los roedores en su orina.
e. Convulsiones: sobre todo los más gravemente afectados.
f. El desarrollo físico y la estatura son normales.

4.2.4. Alteraciones en el desarrollo del cerebro (anencefalia, espina


bífida).
La anencefalia es una de las anomalías del tubo neural más comunes.
Estas anomalías son defectos congénitos que afectan el tejido que crece
en el cerebro y la médula espinal.

4.3. Grados de Discapacidad Intelectual según Castillero (2013)


4.3.1. Leve: Se considera discapacidad intelectual leve o ligera a aquella
que poseen las personas con un Cociente Intelectual que se sitúa entre
50 y 70, correspondiendo a dos desviaciones típicas por debajo de la
media poblacional. Las personas con este grado de discapacidad

34
intelectual tienen principalmente un retraso en el campo cognitivo y una
leve afectación en el sensorio motor. Las capacidades de aprendizaje
están ligeramente atrasadas, pero pueden permanecer en el sistema
educativo, formarse y ejercer una actividad profesional adecuadamente.

Son capaces de leer, escribir y realizar cálculos, si bien suelen requerir un


periodo de aprendizaje más largo que otros. De hecho, es posible que
durante preescolar no se observen grandes diferencias con sus
semejantes. Se pueden observar algunos problemas en la memoria, las
funciones ejecutivas y el pensamiento abstracto. Sus habilidades
comunicativas y sociales pueden ser buenas, si bien suelen mostrar
alguna dificultad para detectar señales sociales y regulares sus
emociones y comportamiento. Se trata de personas autónomas en su
mayoría, precisando de orientación social en situaciones concretas, y
ayuda en temas legales, económicos o la crianza de hijos. Si bien
necesitan de apoyos, su adaptación al medio es normalmente
satisfactoria.

4.3.2. Moderado: En este grado de discapacidad intelectual las


dificultades son mayores. A nivel educativo suelen poder beneficiarse de
formación laboral concreta, generalmente de cara a realizar trabajos poco
cualificados y con supervisión. Pueden tener autonomía en el autocuidado
y desplazamiento. También pueden beneficiarse de adiestramiento en
habilidades sociales y laborales, pero es improbable que progresen más
allá de un segundo nivel en materias escolares. Pueden aprender a
trasladarse independientemente por lugares que les son familiares. En su
mayoría son capaces de realizar trabajos no cualificados o
semicualificados, siempre con supervisión, en talleres protegidos o en el
mercado general del trabajo. Se adaptan bien a la vida en comunidad,
usualmente en instituciones con supervisión.

35
4.3.3. Grave: Con un Cociente Intelectual de entre 20 y 35, los problemas
para las personas con este nivel de discapacidad son generalmente de
gran importancia, precisando de ayudas y supervisión
continuada. Muchas de ellas presentan daños a nivel neurológico.
Durante los primeros años de la niñez la adquisición de
un lenguaje comunicativo es escasa o nula. Durante la edad escolar
pueden aprender a hablar y pueden ser adiestrados en habilidades
elementales de cuidado personal. Se benefician sólo limitadamente de la
enseñanza de materias pre académicas como la familiaridad con
el alfabeto y el cálculo simple, pero pueden dominar ciertas habilidades
como el aprendizaje de la lectura global de algunas palabras
imprescindibles para su autonomía e independencia.

4.3.4. Profundo: El grado más elevado de discapacidad intelectual y


también el más infrecuente, las personas con este nivel de discapacidad
tienen un CI inferior a 20. Necesitan ser cuidados de manera constante,
teniendo muy pocas opciones a menos que gocen de un muy elevado
nivel de ayuda y supervisión. Por lo general su tasa de supervivencia es
baja. La mayoría de los individuos con este diagnóstico presentan
una enfermedad neurológica identificada que explica
su discapacidad intelectual. Durante los primeros años desarrollan
considerables alteraciones del funcionamiento sensorio motor. Puede
predecirse un desarrollo óptimo en un ambiente altamente estructurado
con ayudas y supervisión constantes, así como con una relación
individualizada con el educador.

4.4. Perfil epidemiológico de la discapacidad intelectual según


Xinhua (2017)
Unos 900.000 peruanos sufren Discapacidad Intelectual (DI), una de las
399 enfermedades raras o huérfanas que se han detectado en Perú.
El 80% de los pacientes con DI tuvo un origen genético, y hay alrededor
de 700 genes que están relacionados al retraso mental, señaló el jefe de

36
Servicio de Genética del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN),
Hugo Abarca, en el Día Internacional de las Enfermedades Raras.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 7% de la población
mundial es víctima de alguna enfermedad rara; hay unos 42 millones en
América Latina y alrededor de dos millones en Perú. Estas enfermedades
raras se identifican como patologías con alto riesgo de muerte, de
invalidez crónica y degenerativa y, como su nombre lo indica, son difíciles
de diagnosticar y dar seguimiento.
Por su origen virtualmente desconocido, aunque con síntomas similares a
otros males llamados comunes, producen en el paciente múltiples
problemas socioeconómicos.
El Ministerio de Salud (Minsa) ha declarado de interés nacional el
tratamiento de personas que padecen enfermedades raras, que se inician
de manera precoz, con dolores crónicos, déficit motriz, sensorial o
intelectual y discapacidad en la autonomía.

5.- Rol del profesional de enfermería en salud mental


La enfermera como parte del equipo de salud debe estar capacitada para
poder evaluar aquellos factores de riesgo psicosociales que predominan
en la comunidad, una vez identificados tanto factores como grupos
vulnerables, esta debe planear acciones de promoción en salud mental,
programar actividades con los padres, preparando a los grupos de la
comunidad para enfrentar nuevas tareas.
Al rol que cumple la enfermera en la comunidad se le llama
asesoramiento, lo cual lo realiza de manera individual o colectiva
formando grupos de personas con intereses semejantes o problemas
similares, utilizando estrategias para lograr las metas de promoción de la
salud mental. La enfermera debe recurrir a actividades como sesiones
educativas, sociodramas, dinámicas grupales y verbalización de
sentimientos, así de esta manera poder captar a personas con problemas
en su salud para así poder brindar la atención adecuada y pertinente.

37
5.1. Modelo de Adaptación de Callista Roy
Este modelo fue elaborado en 1964, donde nos indica que el ser humano
se adapta a través de proceso de aprendizaje adquirido tiempo atrás, por
ello es que la enfermera debe de considerar a la persona como ser único,
autónomo y libre, donde forma parte de un contexto del que no se puede
separar; este concepto nos dirige a la adaptación, el cual cada persona
vive situaciones diferentes y su percepción va ser distinta para cada uno.

Callista Roy define a la enfermería como una profesión dedicada a la


atención sanitaria de las personas, resaltando la promoción de la salud de
la persona, familia y sociedad en general; también define a enfermería
como ciencia y practica que amplía el proceso de adaptación y mejora la
transformación del entorno, donde el objetivo primordial de las enfermeras
es mejorar el nivel de adaptación de las personas y de los grupos de
individuos en cada uno de los cuatro modos de adaptación ( físico,
fisiológico, adaptación de función de rol y de interdependencia) y así
poder gozar de buena salud, tener buena calidad de vida y de morir con
dignidad. La enfermería cumple un rol muy importante, ya que facilita la
adaptación al analizar el comportamiento de los cuatro modos de
adaptación y de los factores que influyen en ella, fomentando la
capacidad de adecuación y mejorando la interacción del entorno.

38
C. IDENTIFICACION DE VARIABLES

VARIABLE 1: Estrategias de Afrontamiento del cuidador primario de


personas con Discapacidad Intelectual.
VARIABLE 2: Nivel de Sobrecarga del cuidador primario de personas con
Discapacidad Intelectual.

1. DEFINICIÓN OPERACIONAL DE VARIABLES


a. ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO: Es un conjunto de
procesos cognitivos y conductuales en las que se ponen en juego
recursos internos y externos de los cuidadores primarios de personas con
discapacidad intelectual en CARITAS, para dar soluciones directa e
indirecta a un problema que aflige y encontrar su equilibrio. Las
estrategias de afrontamiento son las destrezas o maniobras que se ponen
en marcha para mantenerse estable a la enfermedad de la persona
cuidada. Y que será medido mediante el Test de COPE o estimación de
afrontamiento que se expresan en respuestas enfocada a tres áreas,
enfocado al problema, emoción y percepción.

Los puntajes a alcanzar según el área de enfoque pueden ser:


Estrategias de afrontamiento enfocados al problema: de 20 a 80
Estrategias de afrontamiento enfocados a la emoción: de 20 a 80
Estrategias de afrontamiento enfocados a la percepción: de 12 a 48

b. SOBRECARGA: Son las consecuencias psicológicas


(principalmente emocionales y de estrés), físicas, sociales y económicas
que se generan en el cuidador principal de personas con discapacidad
intelectual.
Variable de naturaleza cualitativa, medida en la escala ordinal, en forma
indirecta, mediante la escala de Sobrecarga de Zarit, esta se compone de
22 ítems con un sistema de respuesta de 5 puntos y un rango de
puntuación de 0 a 56 puntos.

39
Cuyos valores finales son:
 De 22-46 No sobrecarga.
 De 47-55 Sobrecarga leve.
 De 56-110 Sobrecarga intensa.

c. CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD


INTELECTUAL: Son aquellas personas que pasan la mayor parte de
su tiempo cuidando a personas con Discapacidad Intelectual, la mayoría
de ellos son sus propios familiares, quienes se encargan de su
vestimenta, alimentación, educación, etc.

D. ALCANCES Y LIMITACIONES

El estudio podrá ser generalizado a poblaciones con características


similares.

40
CAPITULO III
MARCO METODOLÓGICO

A. METODO Y DISEÑO DE INVESTIGACIÓN

El presente estudio de investigación es de tipo descriptivo, correlacional,


de enfoque cuantitativo y de corte transversal.

B. PROCEDIMIENTO

El presente trabajo de investigación se realizó entre los meses de julio del


2017 a octubre del 2017 siguiendo los siguientes pasos:
1. Coordinación con la decana de la Facultad de Enfermería de la
Universidad Nacional de San Agustín para que se otorgue la carta de
presentación para la ejecución.

41
2. Se solicitó el permiso correspondiente y coordinación con la
directora de Caritas Diocesana de Arequipa para que nos autorice la
aplicación de los instrumentos en la Escuela de Padres de cada colegio.
3. Aplicación del consentimiento informado a la población de estudio.
4. Aplicación de los instrumentos a la población de estudio: La cual se
realizó en los meses de agosto y setiembre del 2017, a los cuidadores
primarios de personas con discapacidad intelectual de los Centros
Educativos pertenecientes a Caritas; se utilizó una ficha de recolección de
datos sociodemográficos, la escala de Sobrecarga del Cuidador de Zarit y
el cuestionario de Estimación (COPE).
5. Procesamiento de datos: Concluida la recolección de datos, estos
fueron tabulados y procesados parcialmente codificando la información
obtenida.
6. Análisis e interpretación de los resultados.
7. Elaboración del informe final.

A. DESCRIPCIÓN DEL AREA DE ESTUDIO

Cáritas Diocesana de Arequipa, se encuentra ubicado en Calle Federico


Barreto 146 – Ferroviarios, en el departamento y provincia de Arequipa.
Cáritas Diocesana de Arequipa es una institución de la Iglesia Católica,
que promueve y ejecuta proyectos de desarrollo social sostenibles, a
favor de las comunidades de escasos recursos, en cooperación con la
empresa privada y entidades gubernamentales.
Se brinda una educación en 8 Instituciones Educativas Especiales y 1
Centro de Educación Técnico Productivo Especial para niños – niñas y
jóvenes con necesidades educativas especiales, debido a limitaciones,
como retardo mental, autismo, síndrome de Down, esquizofrenia, entre
otros, de escasos recursos económicos de las zonas periféricas de la
ciudad.
Asisten un promedio de 300 niños y jóvenes de ambos sexos, la
educación es totalmente gratuita.

42
El Programa de Redes y Educación Inclusiva busca fomentar el acceso
de niños y niñas con discapacidad a la educación básica regular,
basándose en el marco legal peruano vigente, que establece como norma
la educación inclusiva, en redes de promoción de las personas con
discapacidad.
El programa cuenta con financiamiento del Gobierno Alemán – Caritas
Alemania; teniendo como beneficiarios a 85 alumnos, 150 docentes y 85
familias en Arequipa.
Las Instituciones Educativas Especiales son:
 Nuestra Señora de la Candelaria Av. Chachani Nº 307, Fco.
Bolognesi – Cayma
 Santa Ana Pasaje Cementerio s/n – Paucarpata
 María de los Remedios Pueblo Tradicional Lara, Pasaje La Ronda
s/n – Socabaya
 María de la Esperanza Cerro San Cosme, Calle Principal s/n –
Characato
 Señor de los Milagros Pasaje Los Pinos s/n, Pasaje Buena Vista –
Mariano Melgar
 San Martín de Porres Calle Junín s/n, Porvenir – Miraflores
 Ntra. Sra. del Perpetuo Socorro Prolog. Angamos s/n, Miguel Grau
B – Paucarpata
 Ntra. Sra. de la Consolación Coop. El Carmen, Calle Bolognesi D-
19 – Hunter
 CETPRO San Alberto Hurtado S. J. Calle Eduardo López de
Romaña O-13, Parque Industrial – Arequipa

B. POBLACIÓN DE ESTUDIO
La población considerada en la investigación fue constituida por 83
cuidadores de las personas con discapacidad intelectual que estudian en
los Centros educativos pertenecientes a Caritas.

43
Criterios de inclusión:
 Cuidador que desempeñe la función principal del cuidado.
 Cuidadores de personas con Discapacidad intelectual.
 Cuidadores que asistan a la Escuela de Padres de los diferentes
colegios de Caritas.
 Cuidadores de personas con Discapacidad Intelectual matriculados
en el año lectivo 2017
Criterios de exclusión
 Cuidadores que no deseen participar en la investigación.

C. MÉTODO, TECNICAS E INSTRUMENTO DE RECOLECCIÓN DE


DATOS
Para la recolección de datos se utilizó como método la encuesta y como
técnica el cuestionario.
Se utilizó los siguientes instrumentos:
1. FICHA DE DATOS SOCIODEMOGRAFICOS
Se tomaron en cuenta los datos de sexo, edad, estado civil, parentesco,
grado de instrucción, condición laboral y tiempo dedicado al cuidado del
cuidador primario de personas con discapacidad intelectual.

2. ESCALA DE ESTIMACIÓN DE AFRONTAMIENTO COPE


Evalúa las diferentes estrategias de afrontamiento que las personas
utilizan frente a situaciones estresantes, cuyo objetivo es conocer como
las personas responden cuando se enfrentan a situaciones estresantes.
 Autor: Carver, Scheier y Weintraub
 Procedencia: Estados Unidos
 Año de edición: 1989
 Total de ítems: 52 ítems, con formato Likert, distribuido en 3 áreas
(enfocadas al problema, emoción, percepción)
 Calificación: puntaje 1 equivale a NUNCA, puntaje 2 A VECES,
puntaje 3 GENERALMENTE, puntaje 4 SIEMPRE.

44
 Áreas de evaluación:
 Afrontamiento enfocado al problema: afrontamiento activo,
planificación, supresión de actividades competentes, postergación.
 Afrontamiento enfocado a la emoción: búsqueda de soporte social
emocional, reinterpretación positiva y crecimiento, aceptación.
 Afrontamiento enfocado a la percepción: desentendimiento
cognitivo, conductual y enfocar y liberar emociones.
Validez y confiabilidad: Este instrumento cuenta con una validez de
constructo, esta se obtuvo a través del análisis factorial de las respuestas
que fueron obtenidas de un total de 978 estudiantes de la Universidad de
Miami dando valores mayores a 1.0.
La confiabilidad se obtuvo a través del coeficiente de consistencia interna
alfa de Crombach, el cual fue analizado para cada escala, los valores
obtenidos fueron altos, oscilando entre 0.60 y 0.92

3. ESCALA DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR DE ZARIT


La escala de Sobrecarga del Cuidador de Zarit fue diseñada por el autor
ZaritReever y Col en el año 1980, para valorar la vivencia subjetiva de
sobrecarga sentida por el cuidador principal de pacientes con demencia.
Consta de 22 ítems.
En concreto, mide los sentimientos de los cuidadores respecto a su
relación con los receptores del cuidado y el impacto que la asistencia
tiene sobre su salud, su economía, su vida social, y sus relaciones
interpersonales.
El cuidador indica el grado de molestia que le provoca cuando ocurre lo
que dice un ítem en particular y se evalúa cada ítem en la escala de Likert
de 5 puntos que oscila entre (1) nunca y (5) casi siempre, la suma de las
respuestas a cada uno de los ítems da lugar a una puntuación total entre
22 y 110, en la que cuanto más elevada la puntuación mayor es la
sobrecarga experimentada por el cuidador.
 Fiabilidad: La fiabilidad test – retest, se obtuvo un coeficiente de
correlación de Pearson del 0.86 entre las dos medidas. La escala arrojo

45
una consistencia interna satisfactoria, con un coeficiente Alfa de Cronbach
de 0.91.
 Validez: Se utilizó una validez de constructo, es decir confirmo que
el significado atribuido al constructo medido es correcto examinando la
relación de las puntuaciones totales de la escala con varios indicadores
tanto de los cuidadores como de los pacientes.
En la validación española se proponen los siguientes puntos de corte:
 De 22-46 No sobrecarga.
 De 47-55 Sobrecarga leve.
 De 56-110 Sobrecarga intensa.

46
CAPÍTULO IV

RESULTADOS

A. PRESENTACIÓN, ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE


RESULTADOS

En este capítulo se dan a conocer los resultados de la investigación, en


tablas ordenadas de la siguiente forma:

 Información General: Tablas de 1 a 3


 Información de variables: Tablas de 4 y 5
 Comprobación de hipótesis: Cuadro 1

47
TABLA Nº1

EDAD Y SEXO DE LOS CUIDADORES PRIMARIOS DE PERSONAS


CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA - 2017

CARACTERÍSTICAS N° %

EDAD

De 18 a 25 años 27 32.5

De 26 a 45 años 37 44.6

De 46 a 65 años 19 22.9

SEXO

Masculino 32 38.6

Femenino 51 61.4

Total 83 100.0

Fuente: Matriz de datos

En relación a la presente tabla podemos observar que el mayor


porcentaje (44.6%) pertenece a la población cuya edad oscila entre los 26
a 45 años quienes pertenecen a la etapa Adulta Joven, mientras que el
menor porcentaje (22.9%) pertenece a la población cuya edad es de 46 a
65 años de edad. En cuanto al sexo, la mayoría de cuidadores son
Mujeres.

48
TABLA Nº 2

PARENTESCO Y TIEMPO DE CUIDADO DEL CUIDADOR PRIMARIO


DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017

CARACTERÍSTICAS N° %

PARENTESCO

Padre 25 30.1

Madre 47 56.6

Abuelo 11 13.3

TIEMPO DE CUIDADO

5 años o menos 57 68.7

De 6 a 10 años 16 19.3

De 11 a 15 años 10 12.0

Total 83 100.0

Fuente: Matriz de datos

En la presenta tabla se evidencia que el mayor porcentaje (56.6%) que


ejerce el rol del cuidador son las Madres, mientras que el menor
porcentaje (13.3%) son los Abuelos.

Asimismo, el tiempo de cuidado que tienen mayor porcentaje es de 5


años a menos con un 68.7%, debido a que la mayoría de colegios
encuestados con de Nivel Inicial, mientras que el de menor porcentaje
(12%) es de 11 a 15 años.

49
TABLA Nº3

ESTADO CIVIL Y GRADO DE INSTRUCCIÓN DEL CUIDADOR


PRIMARIO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL.
CARITAS, AREQUIPA - 2017

CARACTERÍSTICAS N° %

ESTADO CIVIL
Soltero(a) 19 22.9
Casado(a) 24 28.9
Conviviente 37 44.6
Viudo(a) 3 3.6

GRADO DE INSTRUCCIÓN
Analfabeto 7 8.4
Primaria 17 20.5
Secundaria 44 53.0
Superior 15 18.1

CONDICIÓN LABORAL
Ama de casa 42 50.6
Trabajador Dependiente 17 20.5
Trabajador Independiente 24 28.9

Total 83 100.0

Fuente: Matriz de datos

En la presente tabla podemos observar que el mayor porcentaje (44.6%)


en cuanto al estado civil es Conviviente, mientras que el menor porcentaje
(3.6%) son Viudos. En cuanto al grado de instrucción la mayoría (53%)
con Secundaria, mientras que el menor porcentaje (8.4%) son
Analfabetos. En cuanto a la condición laboral el mayor porcentaje (50.6%)
son Ama de Casa, y el menor porcentaje (20.5%) son Trabajadores
Dependientes.

50
TABLANº4

ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO DEL CUIDADOR PRIMARIO DE


PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS,
AREQUIPA - 2017

ESTRATEGIA DE AFRONTAMIENTO N° %

Enfocado al Problema 34 41.0

Enfocado a la Emoción 31 37.3

Enfocado a la Percepción 18 21.7

Total 83 100.0

Fuente: Matriz de datos

En la presente tabla observamos que el mayor porcentaje (41%)


pertenece a la estrategia de afrontamiento: Enfocado al Problema; esta
estrategia es la más adecuada para emplearla en situaciones estresantes,
donde la persona busca diferentes soluciones al problema, centrándose
en el estresor, poniendo todo de su parte para poder solucionarlo;
mientras que la estrategia que le sigue es enfocada a la emoción con un
37.3%.

51
TABLA Nº5

NIVEL DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS


CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA - 2017

SOBRECARGA N° %

Ausencia 3 3.6

Ligera 24 28.9

Intensa 56 67.5

Total 83 100.0

Fuente: Matriz de datos

En la presente tabla observamos que la mayoría de cuidadores poseen


una Sobrecarga Intensa (67.5%), debido al rol que cumplen la mayor
parte de su tiempo hacia personas con Discapacidad Intelectual, donde
estas personas nacen con un Retraso en su Estado Mental y no se
pueden valer por sí mismas es así que el cuidador primario cumple un
papel muy importante en su vida, ya que depende de él la calidad de vida
que puedan tener las personas con Discapacidad Intelectual.

52
CUADRO Nº1

ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y EL NIVEL DE SOBRECARGA


DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA - 2017

Sobrecarga
Total
Estrategia de
Ausencia Ligera Intensa
Afrontamiento

N° % N° % N° % N° %

Enfocado al Problema 1 2.9 11 32.4 22 64.7 34 100.0

Enfocado a la Emoción 1 3.2 7 22.6 23 74.2 31 100.0

Enfocado a la Percepción 1 5.6 6 33.3 11 61.1 18 100.0

Total 3 3.6 24 28.9 56 67.5 83 100.0

Fuente: Matriz de datos P = 0.863 (P ≥ 0.05) N.S.

Se observa que la relación entre estrategias de afrontamiento y el nivel de


sobrecarga del cuidador primario de personas con discapacidad
intelectual no es significativa, por lo que se deduce que pese a aplicar
cualquier tipo de estrategia en las situaciones estresantes que vive día a
día el cuidador su sobrecarga siempre será intensa, ya que el cuidar a
una persona con Discapacidad Intelectual es una tarea dedicada y muy
compleja debido a que esta persona durante toda su vida va a necesitar
apoyo para realizar sus actividades.

53
CAPITULO V

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

A. CONCLUSIONES

PRIMERA: Las características sociodemográficas en relación a los


cuidadores son: edad entre 26-45 años (44.6%), sexo femenino (61.4%),
parentesco madre con un 56.6%, tiempo del cuidado de 5 años a menos
(68.7%), estado civil conviviente (44.6%), grado de instrucción secundaria
con un 53%, condición laboral ama de casa (50.6%).

SEGUNDA: La estrategia de afrontamiento más utilizada fue enfocada al


problema, seguido del estilo de afrontamiento enfocado a la emoción y
por último el estilo de afrontamiento enfocado a la percepción.

TERCERA: En relación al nivel de sobrecarga en los cuidadores de


personas con Discapacidad Intelectual fue más frecuente la Sobrecarga
Intensa (67.5%).

54
CUARTA: No existe relación entre las estrategias de afrontamiento y la
sobrecarga del cuidador primario de personas con Discapacidad
Intelectual, por lo cual se rechaza la hipótesis planteada.

55
B. RECOMENDACIONES

PRIMERA: Proponer y plantear investigaciones de temas que contribuyan


a la sobrecarga en cuidadores primarios, para así poder trabajar en ello y
disminuir la Sobrecarga para un cuidado optimo y el bienestar tanto físico
como mental de estos cuidadores.

SEGUNDA: Recomendar a los colegios que lleven un registro de


personas con Discapacidad Intelectual para mejorar datos estadísticos y
realizar intervenciones de enfermería como por ejemplo charlas
educativos a padres e hijos.

TERCERA: Brindar capacitaciones relacionado a las maneras de


enfrentar situaciones estresantes, basadas al enfoque del problema que
es la estrategia adecuada.

CUARTA: La enfermera deberá incentivar la atención integral por parte


del Centro de Salud más cercano a cada colegio, contando con el apoyo
del personal de Psicología, Medicina General, Servicio Social donde
puedan brindar charlas interactivas y participativas en conjunto con los
padres y estos puedan contar sus experiencias, dudas, hacia todas las
personas que enfrentan la misma situación, formando así grupos de
apoyo.

56
BIBLIOGRAFIA

HERNANDEZ, R. Y COLS. (2006) “Metodología de la investigación”. 4ta


edición. México, DF.

Carrasco S. (2005) “Metodología de la investigación científica”. 1ra.


Reimpreso Lima, Editorial San Marcos.

ARCOS, M. Y FLORES, G (2004) “Afrontamiento y Sobrecarga subjetiva


de los cuidadores de pacientes con diagnóstico de demencia en la
asociación peruana de Alzheimer y otras demencias filial Arequipa.
Facultad de psicología, Universidad Nacional de San Agustín.

CARPENITO, L. Teoría de Enfermería 9ºna. Edición 2005.

DUGAS WITTER, B. Tratado de Enfermería Practica, cuarta edición,


editorial Mc Graw Hill Interamericana, 200, México.

CHAVEZ, D. Y CHOQUE, F. (2009) “Nivel de Sobrecarga y estilos de


afrontamiento en el familiar responsable del paciente psiquiátrico de
HRHDE, Faculta de enfermería, Universidad Nacional de San Agustín.

MARRINER, A. Modelo y teoría en Enfermería, 5ta edición, Elservier


CIENCIA España 2003.

PINEDA, E. y ALVARADO, E. (2008) “Metodología de la investigación”.


3ra edición, Washington, DC.

POLIT, F. Investigación Científica en ciencias de la salud. 6ta edición,


México, Mc Graw Hill interamericana, 2000.

57
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

1. CANALES, F. y Cols. (1996) México. “Metodología de la


Investigación”. Editorial Limusa, Ed 9na.
2. DIGOL, A. y Ugalde, M. (2006), España, “Enfermería de salud
mental y psiquiátrica”, edit. McmxclMapson S.A., 2da edición.
3. GAFO, J. (2001), “Enfermedad mental y la familia”, edit. PROMI,
1ra edición.
4. CARBAJAL, C. y FORNES J. (2009). España, “enfermería de salud
mental y psiquiatría”, España, edit. Medica Panamericana Sur, 1ra
edición.
5. LAZARUS R. (2000) EUA, “Estrés y proceso cognitivo”, Edit. Mc
Graw Hill.
6. LEE., K. (1993) “Enfermería Psiquiátrica” Editorial Mc Graw-Hill/
Interamericana. 2da Edición España.
7. PAPALIA, D. Y WENDKOS, S. (1995) “Psicología” Editorial Mc
Graw-Hill. México.
8. Picq, L. y Vayer, P. (1977). Educación Psicomotriz y retraso
mental. Barcelona: Científico Médica.
9. Verdugo, M. A. y Bermejo, B. (1998). Retraso Mental. Adaptación
social y problemas de comportamiento. Madrid: Pirámide.
10. AARM. 2004. Retraso mental. Definición, clasificación y sistemas
de apoyo. (X edición). Alianza edictorial. Madrid, España.
11. IVADIS.2008. Conferencia nacional; Discapacidad intelectual y
dependencia.

58
ANEXOS
ANEXO Nº 1

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

CONSENTIMIENTO INFORMADO

INFORMACIÓN PARA LAS UNIDADES DE ESTUDIO

Soy estudiante de la Facultad de Enfermería de la Universidad Nacional


de San Agustín, y estoy realizando una investigación con la finalidad de
obtener el Grado Profesional de Enfermera, tiene como título
“ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y SOBRECARGA DEL
CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA – 2017” cuyo objetivo es
determinar la relación entre las estrategias de afrontamiento con el nivel
de sobrecarga de los cuidadores primarios.

Su participación consistirá en responder 3 cuestionario, el primero que


consiste en llenar sus datos como: edad, sexo, parentesco de la persona
que cuida, grado de instrucción, condición laboral; el segundo
cuestionario de Sobrecarga de Zarit conformado por 22 ítems donde tiene
que marcar con X donde se siente identificado, y el ultimo cuestionarios
con 52 ítems, que evaluará que estrategias de afrontamiento usted utiliza
para enfrentar situaciones estresantes.

Sus respuestas son anónimas, es decir, que no es necesario que Ud. nos
revele su nombre, la información que nos brinde sólo será utilizada para
fines de esta investigación. Usted tiene derecho a aceptar o rechazar
participar en esta investigación.
ACEPTACIÓN

Manifiesto que he recibido información suficiente sobre la investigación


titulada “ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO Y SOBRECARGA
DEL CUIDADOR PRIMARIO DE PERSONAS CON
DISCAPACIDAD INTELECTUAL. CARITAS, AREQUIPA – 2017”,
cuyo objetivo es determinar la relación entre las estrategias de
afrontamiento con el nivel de sobrecarga de los cuidadores primarios.

De la información recibirá he comprendido que esta investigación no es


obligatoria, por lo que tengo derecho a participar o no, sin que ello me
perjudique en algún aspecto.

También entiendo que la información que yo brinde será tratada en


absoluta reserva. Por lo manifestado es que acepto voluntariamente
formar parte de esta investigación, por lo que procedo a firmar este
documento.

Fecha: ….. / ….. / ……….

………………………………………………….

FIRMA DEL PARTICIPANTE

…………………………………...............

Torreblanca Monzón, Adriana Amparo

Investigadora
ANEXO Nº 2

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

CUESTIONARIO DE DATOS SOCIODEMOGRAFICOS

DATOS GENERALES:
Fecha:
Sexo: Masculino ( ) femenino ( )
MARQUE CON UN ASPA (X) LAS ALTERNATIVAS QUE CREE USTED
MÁS CONVENIENTE
1. ¿Cuál es su edad?
18 – 25 ( )
26 – 45 ( )
46 - 65 ( )
2. Estado civil:
Soltero ( )
Casado ( )
Conviviente( )
Viudo ( )
3. ¿Cuál es su grado de instrucción?
Analfabeto ( )
Primaria ( )
Secundaria ( )
Superior Incompleta ( )
Superior Completa ( )
4.- ¿CUAL ES SU CONDICION LABORAL?

 AMA DE CASA ( )
 DEPENDIENTE ( )
 INDEPENDIENTE ( )

5.- Parentesco con la persona cuidada: ………………………

6.- ¿Cuántos años viene realizando la tarea de cuidador?

 0 a 5 años ( )
 6 a 10 años ( )
 11 a 15 años ( )
ANEXO Nº 3

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

CUESTIONARIO DE SOBRECARGA DEL CUIDADOR DE ZARIT

Sr. Cuidador tenga usted la amabilidad de contestar este cuestionario


según las indicaciones, a partir de la experiencia en el trato de su familiar
con Discapacidad Intelectual. POR FAVOR MARQUE CON UNA X SU
RESPUESTA considerando

PREGUNTAR A NUNCA CASI A BASTANTES CASI


REALIZAR NUNCA VECES VECES SIEMPRE
1.- ¿Siente que su
familiar solicita
más ayuda de la
que realmente
necesita?
2.- ¿Siente que
debido al tiempo
que dedica a su
familiar ya no
dispone de tiempo
suficiente para
usted?
3.- ¿Se siente
tenso cuando tiene
que cuidar a su
familiar y atender
además otras
responsabilidades?
4.- ¿Se siente
avergonzado por la
conducta de su
familiar?
5.- ¿Se siente
enfadado cuando
está cerca de su
familiar?
6.- ¿Cree que la
situación actual
afecta de manera
negativa a su
relación con
amigos o otros
miembros de su
familia?
7.- ¿Siente temor
por el futuro que le
espera a su
familiar?

8.- ¿Siente que su


familiar depende
de usted?

9.- ¿Se siente


agobiado cuando
tiene que estar
junto a su familiar?

10.- ¿Siente que


su salud se ha
resentido por
cuidar a su
familiar?
11.- ¿Siente que
no tiene la vida
privada que
desearía debido a
su familiar?
12.- ¿Cree que su
vida social se ha
visto afectada por
tener que cuidar a
su familiar?
13.- ¿Se siente
incómodo para
invitar amigos a su
casa, a causa de
su familiar?
14.- ¿Cree que su
familiar espera que
usted le cuide,
como si fuera la
única persona con
la que puede
contar?
15.- ¿Cree que no
dispone de dinero
suficiente para
cuidar a su familiar
además de sus
otros gastos?
16.- ¿Siente que
será incapaz de
cuidar a su familiar
por mucho más
tiempo?
17.- ¿Siente que
ha perdido el
control de su vida
desde que la
enfermedad de su
familiar se
manifestó?
18.- ¿Desearía
poder encargar el
cuidado de su
familiar a otras
personas?
19.- ¿Se siente
inseguro acerca de
lo que debe de
hacer con su
familiar?
20.- ¿Siente que
debería hacer más
de lo que hace por
su familiar?

21.- ¿Cree que


podría cuidar de su
familiar mejor de lo
que hace?

22.- En General:
¿Se siente muy
sobrecargado por
tener que cuidar de
su familiar?
PUNTUACION

1 = NUNCA

2 = RARA VEZ

3 = ALGUNAS VECES

4 = BASTANTES VECES

5 = CASI SIEMPRE
ANEXO Nº 4

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

INSTRUCTIVO PARA CALIFICACION DEL CUESTIONARIO DE


SOBRECARGA DEL CUIDADOR DE ZARIT

La escala de Zarit proporciona una puntuación total que resulta de la


suma de las puntuaciones de los 22 ítems, la cual tiene un rango que va
desde los 22 hasta los 110 puntos.

La interpretación del puntaje total del Índice de Zarit es:

No Sobrecarga 22 – 46 puntos

Sobrecarga Leve 47 – 55 puntos

Sobrecarga Intensa 56 – 110 puntos


ANEXO Nº 5

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

CUESTIONARIO DE ESTIMACION AFRONTAMIENTO COPE

Sr. Cuidador tenga usted la amabilidad de responder este cuestionario


según las indicaciones, a partir de la experiencia en el trato con su familiar
con Discapacidad Intelectual. POR FAVOR MARQUE CON UNA X SU
RESPUESTA considerando

FRASES NUNCA A GENERALMENTE SIEMPRE


VECES

1.- Hago mucho


esfuerzo con tal de
superar este
problema
2.- Trato de
encontrar cuales
son los pasos que
tengo que dar para
solucionar este
problema
3.- Dejo todo de
lado para
dedicarme al
problema
4.- Me esfuerzo a
esperar el momento
adecuado para
encontrarle una
solución a esto que
estoy viviendo
5.- Pregunto a
aquellas personas
que han pasado por
experiencias
parecidas que
cosas hicieron
6.- Le cuento a
alguien como me
siento
7.- Trato de
encontrar el lado
bueno de lo que
estoy viviendo

8.- Aprendo a vivir


con este problema
9.- Le pido a Dios
que me ayude
10.- Me molesto y
expreso todo lo que
siento
11.- Me resisto a
creer que esto haya
pasado
12.- Ya no hago
ningún esfuerzo por
conseguir lo que
quiero
13.- Me pongo a
trabajar o hacer
cualquier cosa para
no pensar el
problema
14.- Dedico todas
mis fuerzas para
ser algo en relación
al problema
15.- Frente a los
problemas pienso
bien en las cosas
que tengo hacer
para solucionarlas
16.- Me dedico
totalmente a este
asunto y si hace
falta dejo de lado
otras cosas
17.- No hago nada
hasta que la
situación que lo
permita
18.- Busco a
alguien que me
aconseje que es lo
que tengo que
hacer
19.- Busco amigos
o parientes que me
comprendan
20.- Busco otras
formas de entender
el problema para
que se vea más
favorable
21.- Acepto lo que
paso y que no
puedo cambiarlo
22.- Pongo mi
confianza en Dios
23.- Dejo salir todo
lo que siento
24.- Me hago de la
idea de que nada
ha pasado
25.- Dejo de insistir
en lograr lo que
quería
26.- Voy a pasear y
miro TV para no
pensar tanto en el
problema
27.- Hago paso a
paso lo que tiene
que hacerse para
solucionar el
problema
28.- Pienso bien
que cosas tengo
que hacer para
solucionar el
problema
29.- Trato de no
distraerme con
otros pensamientos
o actividades
30.- Me aseguro
por no empeorar las
cosas por actuar
precipitadamente
31.- Hablo con
quién puede darme
más información
sobre la situación
que estoy viviendo
32.-. Le cuento a
alguien como me
siento
33.- Saco algún
provecho sobre lo
que está pasando
34.- Me hago la
idea de que el
problema ya
sucedió
35.- Trato de
encontrar consuelo
en la religión
36.- Siento que me
altero mucho y que
expreso todo lo que
siento
37.- Hago como si
nada hubiera
pasado
38.- Reconozco que
no puedo con el
problema y ya no
trato de resolverlo
39.- Sueño
despierto sobre
otras cosas
diferentes al
problema
40.- Hago lo que
tengo que hacer
para solucionar el
problema
41.- Pienso como
puedo manejar el
problema
42.- Trato de evitar
que otras cosas
interfieran con mi
esfuerzo para poder
arreglar el problema
43.- Me controlo
para no hacer las
cosas
apresuradamente
44.- Hablo con
quien pueda hacer
algo preciso sobre
el problema
45.- Voy donde
alguien que me
acepte y me
comprenda
46.- Trato de que
esta experiencia me
sirva para cambiar
47.- Acepto la
realidad de lo que
sucedió
48.- Rezo más que
de costumbre
49.- Pierdo el
control y me doy
cuenta de ello
50.- Me digo “ No
puedo creer que
esto me esté
pasando”
51.- Reduzco los
esfuerzos que
dedico a la solución
del problema
52.- Duermo más
de lo acostumbrado
PUNTUACION

1 = NUNCA hice esto

2 = Hice esto A VECES

3 = Hice esto FRECUENTEMENTE

4 = Hice esto SIEMPRE


ANEXO Nº 6

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTIN

FACULTAD DE ENFERMERIA

INSTRUCTIVO PARA LA CALIFIACION CUESTIONARIO DE


ESTIMACION AFRONTAMIENTO COPE

Para el uso del cuestionario se tendrá en cuenta la planilla de clasificación


tomando como indicadores las estrategias de afrontamiento en tres áreas
como sigue:

Estrategias de afrontamiento enfocado al problema:

ITEMS PUNTAJE
 Afrontamiento activo (1,14,27,40) 4 – 16 pts.
 Planificación (2,15,28,41) 4 – 16 pts.
 Supresión de actividades (3,16,29,42) 4 – 16 pts.
competentes
 Postergación (4,17,30,43) 4 – 16 pts.
 Búsqueda de apoyo social (5,18,31,44) 4 – 16 pts.
por razones instrumentales

Estrategias de afrontamiento enfocado a la emoción:

ITEMS PUNTAJE
 Búsqueda de apoyo social (6,19,32,45) 4 – 16 pts.
por razones emocionales
 Reinterpretación positiva y (7,20,33,46) 4 – 16 pts.
crecimiento
 Aceptación (8,21,34,47) 4 – 16 pts.
 Negación (11,24,37,50) 4 – 16 pts.
 Acudir a la religión (9,22,35,48) 4 – 16 pts.
Estrategias de afrontamiento enfocado a la percepción:

ITEMS PUNTAJE

 Enfocar y liberar emociones (10,23,36,49) 4 – 16 pts.

 Desentendimiento (12,25,38,51) 4 – 16 pts.


conductual
 Desentendimiento mental (13,26,39,52) 4 – 16 pts.

You might also like