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Los guitarristas académicos de Rosario de la segunda mitad del siglo XX.

Maldonado, Osvaldo Parisi y Ernesto Bitetti participarán del seminario dictado por
Andrès Segovia en España. Desde el 50 funcionaban los cursos del Camping Musical
de Bariloche donde Jorge y Chelita participaron como maestros en algunas
oportunidades a partir de los años 60 o 70. A partir de 69 hasta 1985 en Porto Allegre
(Brasil) donde estará Jorge Martínez Zárate, Abel Carlevaro y Narciso Yepes. Y también
a partir de 1971 en Villa Gessell donde participaba Abel Carlevaro. No ahondaremos en
las tendencias generales que propiciaron el desarrollo en todo el mundo de estos
epicentros de formación, pero serán parte de los acontecimientos que generarán nuevos
tránsitos en la formación de la mayoría de los guitarristas rosarinos, a diferencia de las
tradicionales escuelas guitarrísticas.

Por otro lado habrá un grupo creciente en número e influencias folclóricas cuyos
referentes nacionales más importantes serán Atahualpa Yupanqui y Eduardo Falú.
Estas expresiones guitarrísticas de música popular, tendrá contactos aunque
marginales con los circuitos académicos. Los guitarristas académicos se dirigirán de
diferentes maneras a quienes no respondan a sus discursos, cánones estéticos,
escuelas o repertorios. Algunos lo harán con un discurso implícito negador o
abiertamente excluyente. No se seguirán los pasos de estos guitarristas por su
desinstitucionalización y dispersión ya que sus actividades serán negadas, no sin
desdén ni consciente adversidad, desde la academia y sus instituciones musicales. Ellos
se desarrollarán comercialmente en las peñas y en la industria discográfica. Irán
apareciendo en el trabajo en la medida que entran en contacto con la academia. Al
principio estos contactos aparecerán conllevando ciertos tonos de amenazas por parte
de los representantes de la guitarra académica, y desarrollarán una tibia defensa, por
momentos casi picaresca, por parte de alumnos o guitarristas que tiendan redes con lo
popular. Este mar de tensiones en las agitadas aguas creará discursos defendiendo o
atacando la ribera opuesta pero se irán resolviéndose hacia los 82 y que dará como
resultado una guitarra académica y popular típicamente rosarina, con tintes más bien
populares aunque académicos. Denominaremos a este período como de convergencia,
intentando recuperar la circularidad de las influencia entre la academia y la música
popular con los conceptos de subalternidad cultural de Carlo Ginzburg, como una
retroalimentación de una cultura dominante.

La academia guitarrística rosarina también tuvo sus conflictos y tensiones hacia el


interior. Una figura que tenderá puentes entre tendencias será la de Jorge Martínez
Zárate y su mujer Graciela “Chelita” Pomponio. Ambos tendrán una amplitud que les
permitirá enseñar, predicar y hacer crecer a ambos lados de las aguas divisorias. Esta
amplitud y apertura estará dada por la permeabilidad y permisividad del matrimonio. Lo

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popular ya no será una amenaza, como tampoco los guitarristas que no respondan a su
estética, y en el fondo no habrá estéticas opuestas y amenazantes, sino diferentes. Una
visión extremista de esta visión del matrimonio será, paradójicamente, la no creencia en
ninguna escuela. Sobre este supuesto creemos se sustentó el éxito del matrimonio,
siempre ubicados dentro de la academia y con la brújula apuntando a Europa.

Algunos guitarristas podrán ubicarse en centro del caudal, en la zona fronteriza, entre
riberas sorteando las dificultades. Abel Fleury será un temprano emergente de esta
tendencia que se mantendrá latente hasta la actualidad, cuando se tiendan puentes
entre varios de los grupos en tensión59. Raúl Maldonado en la escena local también se
ubicará en los límites o con idas y vueltas, como también Quique Núñez aunque sobre
todo en la ciudad de Santa Fe. La figura de Arsenio Aguirre encarnará un emblema de
guitarrista con repertorios populares/folclóricos en la ciudad Rosario, no tan reconocido
como guitarrista, sino más bien como cancionista y folclorista.

Para esclarecer posiciones implícitas y aplacar posibles desconfianzas, se dirá que en


el presente la Asociación Guitarrística de Rosario se encuentra en actividad y quien
escribe esta investigación es parte de la Comisión Directiva actual con el cargo de
Vicepresidente. Se aclara para intentar dilucidar o contralorear las sospechas de los
peligros de deformación o explicaciones forzadas. Para continuar con esta propuesta
nos excusamos en un caso ejemplar utilizando las palabras de Pierre Bourdieu:
“Colocados ante el desafío que representa el estudio de un mundo al que uno está ligado
por toda clase de investiduras específicas, inseparablemente intelectuales y
«temporales», al principio no puede pensarse más que en la fuga: la preocupación por
escapar a la sospecha de la posición tomada conduce a un esfuerzo por desaparecer
como sujeto «interesado», «prevenido», sospechado de antemano de poner las armas
de la ciencia al servicio de los intereses particulares, por abolirse incluso como sujeto
cognoscente al recurrir a los procedimientos más impersonales, más automáticos, y por
ende, al menos en esta lógica que de la de la «ciencia normal», los más indiscutibles.”
A pesar de que la cita anterior está contextualizada en un estudio sociológico, y
salvando la distancia entre nosotros y el autor, podemos concluir con él que “Uno no
escapa al trabajo de construcción del objeto y a la responsabilidad que él implica. No
hay objeto que no conlleve un punto de vista, por más que se trate del objeto producido
con la intención de abolir el punto de vista, es decir, la parcialidad; de sobrepasar la
perspectiva parcial que está asociada a una posición en el espacio estudiado. Pero las
operaciones mismas de la investigación, al obligar a explicitar y a formalizar los criterios

59
Al respecto puede verse (OLMELLO, 2008)

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implícitos de la experiencia ordinaria, tienen por efecto hacer posible el control lógico de
sus propios presupuestos” (BOURDIEU, 2014, pág. 17)

El relato construido en este trabajo tiene la mirada puesta en las instituciones, la


Asociación Guitarrística, en los académicos que estuvieron institucionalizados o
pretendían estarlo, y por lo tanto la mirada de la guitarra popular/folclórica estará
ubicada desde esta tradición.

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2.2.1. 1950-1982 Confluencia asociacionista, institucionalidad y música


popular. Tendencias.

Estado de la cuestión y característica de las fuentes

Nutrieron este capítulo diferentes trabajos realizados por guitarristas de la ciudad como
el de Pablo Covacevich60; el de Carolina Belinky61, las entrevista realizadas por Roxana
Paredes a distintos personajes relacionados con Graciela Pomponio y Jorge Martínez
Zárate62 y las entrevistas realizadas por Gustavo D´Angelo a Juan Di Lorenzo, Inés
Panero de Zemp, y Alba D´Andreta63. Se sabe de la existencia, al menos hasta el 2010,
de los libros de acta de las reuniones y asambleas de la Asociación Guitarrísticas pero
sospechamos que se encuentran guardados celosamente en manos privadas. Hemos
podido acceder a algunos datos de este libro que fueron utilizados como fuentes de
primera mano del trabajo de Pablo Covacevich.

Con respecto al material de archivos sabemos de la existencia de unos álbumes de fotos


del padre de Delia Basualdo, que contenía recortes de diarios de noticias y críticas
guitarrísticas que rondaron los años 5064.

Sobre la guitarra de la segunda mitad del Siglo XX se encuentran también los trabajos
realizados por Lutges (LUTGES, 1972) que ordenaron varias cuestiones institucionales,
sobre todo las referidas a fechas hasta 1972. Sería importante acceder a actas
institucionales que den cuenta de los profesores que dictaron clases en cada institución.
No pudiendo hacer esto nos contentaremos con cruzar datos de los relatos de las
entrevistas, currículums y otros datos para llegar a conclusiones verosímiles de quiénes
y cuándo un profesor determinado dio clases de guitarra en cada instituto.

La relación que tendrá la guitarra académica con la música popular se establecerá


gracias a los trabajos sobre el folclore en la ciudad y las peñas realizadas por Daniel

60
(COVACEVICH, ASOCIACIÓN GUITARRÍSTICA DE ROSARIO. Primeros diez años de vida,
2001)
61
(BELINKY, 2014)
62
(PAREDES, 2012)
63
(DI LORENZO, 2010), (PANERO de ZEMP, 2009), (D´ANDRETA, 2010),
64
Su esposo no ha querido acceder a una entrevista para poder si quiera echarle un vistazo y
en el transcurso de este trabajo falleció. Su descendencia se mostró interesada en un primer
momento en colaborar pero no se pudo concretar ningún encuentro. No sabemos aún hoy si el
álbum todavía existe.

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Cozzi65, Andrés Hidalgo66 y Rafael Ielpi67 que desarrollaron biográficamente algunos de


los personajes de este grupo de guitarristas de música popular y sus ambientes.

Parte de este trabajo consistió en generar varias entrevistas para llevar adelante la
operación histórica de recrear los sucesos e intentar crear o sugerir una aproximación
intuida a lo largo de la investigación. Serán estos testimonios una parte fundamental de
las fuentes que irán desarrollando una representación histórica.

Situación/Contexto.

En la década del 50, según Adriana Pons, se torna ineludible el pensamiento de Keynes
y se instala la posible formación de un Nuevo Modelo de Acumulación en Argentina un
Nuevo Pacto Social (PONS, 2000, pág. 153). Un discurso Nacionalista alejaba a las
ideas comunistas sobre todo de las direcciones sindicales. Este discurso tendrá sus
implicancias culturales en la promoción de producciones artísticas y de artistas
nacionales. Desde lo musical, con en el Decreto Nacional 33711/49 y 13921/52 que
“obligaban a la interpretación y difusión de música argentina en todos los conciertos
públicos”68, y el otorgamiento de becas de estudio en el exterior a artistas de renombre
como Martha Argerich. La Constitución del 49 concedía nuevos derechos que el estado
debería garantizar como el voto femenino, expresión de la creciente actividad de la
mujer en lugares de mayor jerarquía social.

Habrá algunas tendencias sociales que tendrán cierto correlato en la vida guitarrística.
Por un lado existía sobre Rosario un dominio institucional desde las esferas superiores
de distinta índole, como lo fue la Universidad “pues mantuvo hasta fines de la década
del ´60 su dependencia con los organismos de conducción general en la ciudad de Santa
Fe” (PONS, 2000, págs. 246-251). En términos generales se puede intuir que este
respeto al dominio institucional de las esferas superiores será una tendencia que tendrá
su punto cúlmine en la violencia estatal institucional de la dictadura del 76 al 82. Esa
tendencia podrá tener el correlato guitarrístico de quienes respetaban, o veneraban las
tradiciones guitarristas estatuidas por la escuela de Tárrega y traídas al país por
Domingo Prat. Así entonces quienes hayan sido alumnos, o alumnos de alumnos de
algún guitarrista perteneciente a esta escuela se encontraría, ya por el solo hecho de
haber tenido contacto con él, en un nivel superior al maestro que no lo haya hecho.

65
(COZZI, La guitarra trasnochada, 2011),
66
(HIDALGO, s.f.)
67
(IELPI, 2000)
68
(MANSILLA, 2011, pág. 131)

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