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EL ALBA: Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de

Comercio de los Pueblos o ALBA-TCP (en ocasiones denominada extraoficialmente por


su nombre inicial Alianza Bolivariana para América o ALBA) es una organización
internacional de ámbito regional, fundada en 2004, formada por países de América Latina
y el Caribe que pone énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social con base
en doctrina
El ALBA se fundamenta en la creación de mecanismos que aprovechen las ventajas
cooperativas entre las diferentes naciones asociadas para compensar las asimetrías entre
esos países. Esto se realiza mediante la cooperación de fondos compensatorios,
destinados a la corrección de discapacidades intrínsecas de los países miembros, y la
aplicación del TCP (Tratado de Comercio de los Pueblos).
QUIENES LAS INTEGRAN:
Los países que actualmente integran el ALBA-TCP son: Venezuela, Cuba, Bolivia,
Nicaragua, Mancomunidad de Dominica, Antigua y Barbuda, Ecuador, San Vicente y Las
Granadinas, Santa Lucía, San Cristóbal y Nieves y Granada.
PROPÓSITO DEL ALBA: Promover la lucha contra la pobreza y la exclusión social
impulsando el desarrollo.
OBJETIVO DEL ALBA: Preservar nuestra autodeterminación y la identidad
latinoamericana y caribeña como nuevo proyecto alternativo de integración de la
subregión, en un mundo multipolar.
PROPONENTE DEL ALBA: REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA, Presidente
Hugo Rafael Chávez Frías.
Fecha de Lanzamiento: 10 de diciembre de 2001. Fecha de Creación: 14 de diciembre
2004.
Miembros Iniciales: VENEZUELA y CUBA.

CELAC:
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), fue creada en
Caracas, República Bolivariana de Venezuela, en el marco de la III Cumbre de América
Latina y el Caribe sobre Integración y Desarrollo (CALC) y de la XXII Cumbre del Grupo
de Río, reunidas los días 2 y 3 de diciembre de 2011. El acto de creación se llevó a cabo
mediante la firma de la Declaración de Caracas, por parte de las Jefas y los Jefes de
Estado y de Gobierno América Latina y el Caribe y en la cual se define a la CELAC como
un "mecanismo representativo de concertación política, cooperación e integración de los
Estados latinoamericanos y caribeños y como un espacio común que garantice la unidad
e integración de nuestra región".
PRACTIUCA DOCENTE:
SISTEMA EDUCATIVO: Aprender a valorar, es el tercer pilar en el que se apoya la
Educación Bolivariana, con el se da vida al planteamiento del Libertador Simón Bolívar
"renovemos la idea de un pueblo que no sólo quería ser libre, sino virtuoso" (Simón
Bolívar, 1819).
En nuestra sociedad necesitamos sujetos capaces de reconocerse, aceptarse y amarse
tal como son, pero también que sean capaces de verse reflejados en sus congéneres, con
la capacidad de ser solidarios, de sentir y dar apoyo ante el dolor ajeno, de preocuparse y
ocuparse de las carencias de sus compatriotas. en otras palabras que asume el rol que le
corresponde en el proceso transformador de nuestra sociedad, pero con conciencia, con
ética, aplicando la lógica, el razonamiento, con capacidad de discernir, dialogar, siendo un
sujeto de conciliación, mediación, con los valores sociales como bandera.
El maestro bolivariano debe fomentar el análisis y la crítica de los conocimiento, teorías y
técnicas, el dialogo, la discusión y creación de nuevas alternativas de solución de
problemas sociales, pero debe también promover el trabajo social voluntario, el contacto
con el entorno, con la realidad social, eso es lo que llevará al nuevo republicano y nueva
republicana a la toma real de conciencia social, teniendo conocimiento por vivencia propia
de la realidad social que los rodea, siendo esto la máxima expresión de la conciencia
social
El pensamiento Martiano da vida al cuarto y último pilar de la Educación Bolivariana, que
no es otro sino Aprender a reflexionar, una vez consolidados los tres primeros pilares, y
habiendo logrado que el nuevo republicano y republicana tenga sentido crítico, reflexivo,
participativo, con conciencia y compromiso social, solidario, cooperativo, que comprende
que el conocimiento va más allá de la memorización y repetición de viejas teorías, que
hizo de ellos ciudadanos sin capacidad de critica, de síntesis, de análisis, que los veto y
los hizo temerosos de pensar; se hará un ser "reflexivo", pensante, que trasciende el
aprendizaje de informaciones, capaz de engendrar nuevos escenarios, de nuevas
alternativas, transformando el pensamiento volviéndolo critico y creativo y dejara de ser
una simple copia de viejos paradigmas.
Este nuevo republicano Aprende a conocer apropiándose del proceso de avance y
desarrollo de la ciencia, de la tecnología, así como los elementos correspondientes a su
cultura local, regional, nacional e internacional, en forma reflexiva, con criterio propio
enriqueciéndolos y siendo transformador de ideas en búsqueda del beneficio de la
comunidad donde se desenvuelve.
La Educación bolivariana, como concepción y como práctica, no puede entenderse con un
significado homogéneo e invariable sino como un concepto histórico, con tendencias y
contenido para la normalización y el disciplinamiento o una herramienta potenciadora de
las capacidades creativas para la emancipación de hombres y mujeres.
Esta debe romper con los paradigmas de la educación tradicional, debe trascender
algunos paradigmas que tributan contraproducentemente a la formación integral del nuevo
republicano y nueva republicana, para lograr este objetivo se hace necesario contar con
maestros que ejerzan dicha función bajo el compromiso y la flexibilidad de su rol dentro
del proceso de enseñanza aprendizaje, el cual, se sintetiza afirmando que éstos no son
los/as protagonistas sino uno de los actores y actoras fundamentales de este proceso;
tomando en cuenta que en el también partica
El Sistema Educativo Bolivariano (SEB) transita hacia la construcción del modelo de la
nueva República, donde el Estado ejerce la acción de máxima rectoría, garantiza el
acceso a los derechos esenciales como principio ético y político. Refundar la República
significa construir ese nuevo modelo de sociedad plasmada en la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela; y un pilar fundamental para lograr tal fin es la
educación.
Este nuevo sistema educativo busca garantizar el carácter social de la educación
asegurándose que llegue a todos los ciudadanos, sin exclusión alguna; abarcando todas
las etapas del ser humano, desde que inicia su proceso de formación hasta el momento
en que esta listo para desenvolverse como profesional.
Este sistema bolivariano esta conformado por subsistemas que buscan cubrir cada una de
la etapas de la vida del nuevo republicano y republicana, desde la educación inicial que va
desde el maternal hasta el preescolar, que tiene por finalidad la formación integral de los
niños y las niñas entre cero (0) y seis (6) años de edad, en cuanto a hábitos, habilidades,
destrezas, actitudes y valores basados en la identidad local, regional y nacional, mediante
el desarrollo de su potencial creativo y el pleno ejercicio de su personalidad en formación,
atendiendo a la diversidad e interculturalidad. Brindará atención integral a los niños y las
niñas en la áreas: pedagógicas, salud, alimentación, recreación, desarrollo físico y cultural
Este subsistema comprende dos niveles el maternal y el de preescolar. Esta etapa se
concreta a partir del modelo Simoncito, el cual es el proyecto bandera del Estado
venezolano, a través del cual se busca incluir en el proceso de formación integral que se
llevará a cabo en el Sistema Educativo Bolivariano a todos los niños en edades
comprendidas entre los cero (0) y los seis (6) años.
El siguiente subsistema abarca la formación integral de los niños y las niñas desde los
seis (6) hasta los doce (12) años de edad, aproximadamente, o hasta concluir el sexto
grado, último de los seis que comprende la Educación Primaria.
Desde esta edad se hace necesario formar a los niños y niñas con sentido crítico,
reflexivo, hacer de ellos seres participativos, seguros de sí mismo, independientes,
concientes de la corresponsabilidad que tienen de su actuación en el entorno en que se
desenvuelve, sea en la escuela, familia o la comunidad; con sentimientos de amor y
respeto en sus diferentes manifestaciones hacia la Patria, sus compañeros(as) y el
ambiente, entre otros; también cualidades tales como la de ser responsables, honrados,
honestos y solidarios, adquiriendo o reafirmando sus hábitos de higiene individual y
colectiva y todos aquellos que favorezcan su salud preventiva e integral, que los prepare y
forme para la vida acorde con los fines e ideales de la CRBV. Para de esta manera
comenzar a recuperar todos los valores que habíamos perdido a lo largo de los años,
consolidando así las bases para un sociedad digna, solidaria, cooperadora y
corresponsable del desarrollo comunitario.
Fundamentos Legales De La Educación:Toda persona tiene derecho a una educación
integral, de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades, sin más
limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vocación y aspiraciones.
1) La educación tiene por objeto la formación integral del ser humano a lo largo de
toda su vida y debe orientarse hacia el desarrollo de su potencial creativo y de sus
valores éticos.
2) Educar para el conocimiento de la dignidad y la igualdad de derechos entre
hombres y mujeres. d) Crear y fortalecer una conciencia de identidad de valoración
e integración nacional, en un marco de convivencia internacional, enalteciendo los
derechos humanos y las libertades fundamentales, procurando la paz universal
con base en el reconocimiento y respeto de los derechos de las naciones
Modelo educativo capitalismo y socialismo
CARACTERISTICAS DE LA EDUCACION ANTES DE 1999
La evolución de la Educación en Venezuela se realizó de una forma lenta.
El Ministerio de Educación tiene su origen en 1870, cuando el entonces Presidente de la
República Guzmán Blanco, establece por Decreto la Instrucción Pública, gratuita y obligatoria.
Para el año de 1873, el Sistema Educativo sólo atendía 3.744 alumnos en 100 escuelas públicas.
Pero en 1874, cuando se crean la Dirección de Instrucción Pública y la Dirección de Instrucción
Secundaria, se alcanza la cifra de 15.000 alumnos y se construyen 336 escuelas federales y 383
escuelas municipales y particulares. Así mismo, se comienza con la creación de los colegios
secundarios, de primera y segunda categoría, los cuales, años más tarde, fueron autorizados
para otorgar grados de educación superior.
En 1881, se crea el Ministerio de Instrucción Pública, que continuó llamándose así hasta el final
de la dictadura gomecista.
En el período que va desde 1890 hasta 1935, Venezuela se encuentra dominada
por sistemas dictatoriales y la educación sufre un estancamiento. Reflejo de ello es la
paralización casi total de la educación superior. Para el año 1936, cuando finaliza el período de
la dictadura, la educación se convierte en una de las prioridades del Estado Venezolano y el
Ministerio cambia de nombre, el cual será de Educación Nacional.
Se impulsa el proceso de alfabetización de adultos y en 1948 se crea la Ley Orgánica de
Educación Nacional.
Desde el inicio del siglo XX y hasta finalizada la dictadura de Marcos Pérez Jiménez (1948-58),
es decir, las escuelas que impartían la educación primaria y secundaria, además de las
restantes instituciones como las de educación superior fueron creciendo lentamente, pero es
precisamente a principios de la década de los años 60, donde la educación venezolana presentó
una expansión espectacular, estimulado por un proceso de masificación educativa que se tornó
favorable y un aumento en el acceso a la educación de forma notoria para todas las clases
sociales del país.
Por lo tanto, no es de extrañarse que el gran desarrollo del sector educativo en Venezuela para
los años 60, se deba principalmente a la caída de la dictadura, que trajo consigo profundos
cambios al sistema educativo, entre los que destacan el inicio del proceso conocido con el
nombre de la "democratización de la enseñanza", con especial atención a los sectores de
educación primaria y secundaria, por lo que se crearon nuevas instituciones y se incrementaron
el número de maestros y profesores.
Se puede decir que la evolución de la alfabetización ha sido creciente y especialmente acelerada
desde que finalizó la Dictadura de Pérez Jiménez hasta la época actual.
Cabe señalar, que una segunda explicación posterior de este desarrollo del sistema educativo se
encuentra ligada al entorno económico favorable que presentaba el país para los años 70,
sustentado entre otras cosas, en un aumento de los precios del petróleo en
los mercados internacionales, lo cual permitió la entrada de grandes cantidades de divisas al
país, situación no esperada en la historia reciente de la renta petrolera en la cual se apoyaba el
Estado Venezolano. Con base a lo anterior, se inicia posteriormente una política educativa
agresiva, sustentada en la teoría del Capital Humano y la cual se encuentra de manera explicita
en el V Plan De La Nación, donde el Estado Venezolano, además, se fija una política
desarrollista para las áreas económico y social, incluyendo por supuesto la educación.
Haciendo un breve repaso de la evolución educativa en los últimos años se tiene que: La tasa de
alfabetización en los habitantes de más de 10 años pasó del 51,2% en 1950 al 91,1% en 1995. En
1994 se inscribieron 695.320 niños en educación preescolar, atendidos en 8.703 centros por un
total de 42.267 profesores docentes y auxiliares. Las 15.984 escuelas de educación básica o
primaria registraron una inscripción de 4.262.221 alumnos en 1996, con una plantilla de
185.748 maestros. En un total de 1.774 centros de educación secundaria, diversificada y
profesional, se registraron 377.984 alumnos y 37.791 profesores. Un total de 594.344
estudiantes estaban inscritos en más de cien instituciones de educación superior, en
universidades nacionales y privadas, instituciones pedagógicas, politécnicas y militares, con
un personal de 49.760 docentes e investigadores.
Constitucion del 61 y99

De los Derechos de los pueblos indígenas


Artículo 119. El Estado reconocerá la existencia de los pueblos y comunidades indígenas, su

organización social, política y económica, sus culturas, usos y costumbres, idiomas y religiones,

así como su hábitat y derechos originarios sobre las tierras que ancestral y tradicionalmente

ocupan y que son necesarias para desarrollar y garantizar sus formas de vida. Corresponderá

al Ejecutivo Nacional, con la participación de los pueblos indígenas, demarcar y garantizar el

derecho a la propiedad colectiva de sus tierras, las cuales serán inalienables, imprescriptibles,

inembargables e intransferibles de acuerdo con lo establecido en esta Constitución y en la ley.

Artículo 120. El aprovechamiento de los recursos naturales en los hábitats indígenas por

parte del Estado se hará sin lesionar la integridad cultural, social y económica de los mismos e,

igualmente, está sujeto a previa información y consulta a las comunidades indígenas

respectivas. Los beneficios de este aprovechamiento por parte de los pueblos indígenas están

sujetos a esta Constitución y a la ley.

Artículo 121. Los pueblos indígenas tienen derecho a mantener y desarrollar su identidad

étnica y cultural, cosmovisión, valores, espiritualidad y sus lugares sagrados y de culto. El

Estado fomentará la valoración y difusión de las manifestaciones culturales de los pueblos

indígenas, los cuales tienen derecho a una educación propia y a un régimen educativo de

carácter intercultural y bilingüe, atendiendo a sus particularidades socioculturales, valores y

tradiciones.

Artículo 122. Los pueblos indígenas tienen derecho a una salud integral que considere sus

prácticas y culturas. El Estado reconocerá su medicina tradicional y las terapias

complementarias, con sujeción a principios bioéticos.

Artículo 123. Los pueblos indígenas tienen derecho a mantener y promover sus propias

prácticas económicas basadas en la reciprocidad, la solidaridad y el intercambio; sus

actividades productivas tradicionales, su participación en la economía nacional y a definir sus

prioridades. Los pueblos indígenas tienen derecho a servicios de formación profesional y a

participar en la elaboración, ejecución y gestión de programas específicos de capacitación,

servicios de asistencia técnica y financiera que fortalezcan sus actividades económicas en el


marco del desarrollo local sustentable. El Estado garantizará a los trabajadores y trabajadoras

pertenecientes a los pueblos indígenas el goce de los derechos que confiere la legislación

laboral.

Artículo 124. Se garantiza y protege la propiedad intelectual colectiva de los conocimientos,

tecnologías e innovaciones de los pueblos indígenas. Toda actividad relacionada con los

recursos genéticos y los conocimientos asociados a los mismos perseguirán beneficios

colectivos. Se prohíbe el registro de patentes sobre estos recursos y conocimientos

ancestrales.

Artículo 125. Los pueblos indígenas tienen derecho a la participación política. El Estado

garantizará la representación indígena en la Asamblea Nacional y en los cuerpos deliberantes

de las entidades federales y locales con población indígena, conforme a la ley.

Artículo 126. Los pueblos indígenas, como culturas de raíces ancestrales, forman parte de la

Nación, del Estado y del pueblo venezolano como único, soberano e indivisible. De

conformidad con esta Constitución tienen el deber de salvaguardar la integridad y la soberanía

nacional.

El término pueblo no podrá interpretarse en esta Constitución en el sentido que se le da en el

derecho internacional.
DESCOLONIZACIÓN DEL PENSAMIENTO EN EL SISTEMA
EDUCATIVO BOLIVARIANO

Dentro del argot educativo nos encontramos con distintos términos que
nos llevan a hacer memoria y revisar sus connotaciones. Entre estos se
encuentra descolonización, el cual nos lleva de inmediato al término
colonización, pero ¿Qué conocemos por descolonización?Según la real
academia de la lengua española, se refiere a la “supresión de la condición
colonial de un territorio”.

En la actualidad, se ha impuesto un pensamiento colonial que se


ha mostrado de generación en generación; y una de las formas de
transformar este pensamiento, es partir de un diálogo de saberes y de
culturas que implica la participación directa de los docentes
universitarios en la organización, programación, ejecución de reglas
empíricas, revisión, comparación y reorganización de las leyes que rigen
la educación superior.

La interpretación de este hecho no se explica únicamente por una


hipotética deficiencia en la metodología didáctica empleada por la
mayoría del profesorado,aunque esta puede ser uno de los posibles
motivos. Debe considerarse, también, lasevidentes dificultades que
supone la enseñanza y aprendizaje de una materia, como esla historia
regional, por dos tipos de causas: en primer lugar, porque la historia
regional forma parte delcontexto cultural y social que ejerce, se cree que
de una manera determinante, una graninfluencia en la concepción que los
estudiantes tienen de esta materia. Ensegundo lugar, por la enorme
complejidad y nivel de abstracción que tiene la ciencia histórica; de esta
manera, se podrá fortalecer la identidad cultural y social de un pueblo
partiendo desde una cohesión histórica arraigada a un nuevo
pensamiento transformador y descolonizado a fin de desmontar las
hegemonías y asimetrías coloniales.

En este sentido, si se revisan las estrategias metodológicas que tienen y


aplican los docentes se puede ver que se desarrolla una axiología
empírica, dinámica, crítica (negociar qué valores son menos pertinentes
para el diálogo) e interventora (con capacidad de participar socialmente)
y no prescriptivista, para poder visualizar un cambio en el movimiento
colonialista del docente universitario, poniendo especial énfasis en la
descolonización del pensamiento,tomando como enfoques emancipador y
critico que lleven a la transformacióndel aprendizaje de la historia
regional y que a su vez sustente las proyecciones de la independencia
como perspectiva que se hace también ostensible dentro de una
plataforma de partida de las nuevas iniciativas de integración regional e
institucional.

Por consiguiente, se puede aseverar que habrá aprendizaje en la medida


en que haya estructuras epistemológicas que las posibiliten y procesos
históricos reales, situados desde los cuales se enfrentaran las
posibilidades para la transformación en los contextos regionales.

De tal manera, lo que se pretende es desmontar una ideología catedrática


de la enseñanza de la historia regional parcelada para solamente conocer
la historia de manera segmentada-memorística y no en todas las
vertientes a que esta nos podría mostrar y desde luego la generación de
nuevas didácticas para la enseñanza de la historia regional en sentido que
no sea solo para el conocimiento local sino para trascender hacia la
historia regional latinoamericana y mantener así la unidad dentro del
continente.

Por tanto, se propone un enfoque centrado en la descolonización del


pensamiento, específicamente, del docente universitario, para alcanzar la
transformación del aprendizaje de la historia regional, logrando así el
cambio colonialista que supone dará paso a la afirmación de la identidad
cultural-social y que éste, a su vez, proyectará una recuperación del
pensamiento critico independiente donde tendrá lugar la creación de un
nuevo modelo o movimiento complejo de la descolonización.

Asimismo, se tiene que producir conocimiento propio desde la cultura.


Todo esto en una dirección que permita salir de la civilización occidental
moderna capitalista para la transformación del aprendizaje de la historia
regional y que se manifieste principalmente una propuesta soberana y
que cambie la forma de pensar del docente universitario, rompiendo con
el punto de vista objetivista y estructuralista (colonialista), ya que el
interés principal es el cambio del colonialismo que supone dará paso a la
afirmación de la identidad cultural-social latinoamericana dentro de la
desintegración colonial y afianzar la descolonización de los pueblos en
virtud de un cambio equitativo, y que este a su vez, proyecte una
recuperación del pensamiento critico independiente el cual dará lugar a
una creación de un nuevo modelo o movimiento complejo de la
descolonización del individuo, para comprender su propia identidad
cultural, más allá de los límites herméticos de las rígidas identificaciones;
de esta manera, se podrá fortalecer la identidad cultural y social de un
pueblo partiendo desde una cohesión histórica arraigada a un nuevo
pensamiento transformador y descolonizado a fin de desmontar las
hegemonías y asimetrías coloniales.De igual manera, se espera que los y
las docente universitarios fortalezcan y desarrollen las aptitudes y
conocimientos cultural propios de los territorios que sean necesarios para
transformar el pensamiento de la historia regional.

Por ende, es importante la transformación o redirección de lo que debe


ser la didáctica para la enseñanza de la historia regional por parte de los
docentes universitarios de manera quecontribuya al conocimiento y
comprensión de otros países y culturas del mundo de hoy.

En definitiva, la Historia ha de ser un instrumento para ayudar a valorara


los demás países como los nuestros que han vivido aislados por
razoneshistóricas y políticas, con el fin de contrarrestar esta situación y
fomentar lacomprensión hacia otras sociedades vecinas tale como nuestra
latinoamerica.

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