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1. ¿Cuáles son las proteínas de la clara del huevo? Y en la yema, ¿qué componentes
destacan?
La clara de huevo contiene albúminas, mientras que entre los componentes de la yema
destacan: lípidos (fosfolípidos y colesterol), proteínas (albúminas, vitelina, luteína,
fosfoproteínas...), minerales, tales como azufre, hierro y fósforo, vitaminas y agua.
Por lo tanto, podemos concluir que nutricionalmente durante el proceso de refinado de los
aceites se pierden: vitamina E (exceptuando el caso del aceite virgen extra) y ácidos grasos
esenciales (ácido linoleico y linolénico).
Los lípidos se agrupan formando glóbulos grasos. En el centro del glóbulo graso se
encuentran triglicéridos Unida a una capa de glucoproteínas encontramos los fosfolípidos.
Intercalados entre los fosfolípidos encontramos el colesterol y la vitamina A. En el exterior
del lóbulo hay una capa proteica (glucoproteínas) que forma una película lipoproteica que
aísla el glóbulo graso. En la capa de proteínas hay proteínas específicas llamadas aglutininas,
que favorecen la aglutinación de glóbulos, formando nata o crema de leche.
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4. A nivel de composición, ¿qué diferencias existen entre la carne y el pescado? ¿Y
desde el punto de vista nutritivo?
Entre los componentes químicos de la carne destacan: agua, lípidos (triglicéridos formados
por ácidos grasos de cadena larga como ácido palmítico, ácido esteárico, ácido láurico,
mirístico y aráquico. También hay ácidos grasos insaturados como ácido oleico).
Los principales componentes químicos del pescado son: agua, proteína y lípidos. El contenido
de hidratos de carbono en el músculo de pescado es muy bajo.
Respecto a su contenido en micronutrientes, destacan las vitaminas del grupo B (B1, B2, B3,
B12), las liposolubles A y D (sobre todo en los pescados grasos) y ciertos minerales: fósforo,
potasio, sodio, calcio, magnesio, hierro y yodo.
5. Qué entiendes por aminoácido limitante? ¿Cuáles son los aminoácidos limitantes
de los cereales? ¿Cómo suplementarías los cereales para obtener así una proteína
de mayor valor biológico?
Cuando una proteína tiene uno o varios aminoácidos en escasa cantidad se habla de
aminoácido limitante, es decir, la pequeña concentración del mismo limita e impide la
síntesis de nueva proteína en la cantidad suficiente para el buen funcionamiento del
organismo.
El maíz, además, también es pobre en niacina y triptófano, por lo que las civilizaciones que
han basado tradicionalmente su dieta en maíz acusan esta doble carencia.
Por otro lado, la proteína de los cereales es rica en los aminoácidos ácido glutámico, leucina
y en el resto de aminoácidos esenciales.
Por lo tanto, desde el punto de vista proteico, conviene ingerir cereales con legumbres y con
carne, ya que estos dos productos proporcionan la lisina y el triptófano necesarios para
complementar el aporte de proteínas.
1. En primer lugar se realiza una mezcla de harina, agua y sal y durante 20 minutos se
trabaja la masa (amasado). En este proceso el agua queda retenida entre las proteínas y el
almidón y se forma el gluten.
El amasado permite que se den interacciones entre los tres componentes y el agua. Se
obtiene una masa extensible, elástica que retiene CO2.
Los vegetales son ricos en glúcidos de cadena larga, especialmente en glúcidos indigeribles
(fibra), por lo que ayudan a regular el tránsito intestinal.
La cantidad de lípidos de los vegetales es del orden de 0,1-0,9%. En esta porción se incluyen
los carotenoides, que son lipófilos (se encuentran en la porción lipídica) responsables de la
coloración de los vegetales
El contenido en vitaminas minerales depende del tipo de verdura, pero, en general, suelen
aportar vitamina C, vitamina A, ácido fólico, sodio, potasio, magnesio, hierro.
Las hortalizas poseen la misma cantidad de agua que las verduras, una densidad energética
de unos 2 MJ/kg y suelen contener una mayor proporción de glúcidos asimilables. El
contenido en proteínas y lípidos es igual de bajo, pero lo que realmente es más variable es el
contenido en micronutrientes.
En cuanto a las vitaminas (vitamina A, niacina, ácido fólico, vitamina C y tiamina) y
minerales, la cantidad que poseen y aportan es variable y depende de cada hortaliza.,
mientras que otras aportan cantidades escasísimas, como el nabo. Los contenidos en,
también son muy variables.
•El mayor cambio se da a nivel de los hidratos de carbono: el almidón pasa a azúcares.
•Las enzimas pectinolíticas van hidrolizando las pectinas (en el caso de las manzanas, por
ejemplo, dan lugar a una textura granulosa.
•Hay un aumento de síntesis de enzimas porque hay cambios bioquímicos de las proteínas.
•Disminuye la concentración de ácidos orgánicos, por lo que la fruta cuando madura es más
dulce.
La materia primera de la elaboración del vino es la uva. En la piel de la uva están contenidas
las materias colorantes que dan color característico al vino.
En la pulpa de la uva están contenidos los azúcares (glucosa y fructosa) a partir de los cuales
hay fermentación alcohólica y se obtiene alcohol etílico.
La rapa (tallo del racimo de uvas) y la semilla de la uva es rica en taninos, los cuales dan
gusto astringente.
Al elaborar el vino se ha de retirar la rapa y no chafar mucho el fruto para que los taninos de
la uva no pasen al mosto.
IDA
Es la Ingesta Diaria Admisible. Esta se puede definir como la cantidad de una sustancia (por
ejemplo, un aditivo alimentario) que se puede ingerir por día en la dieta sin riesgo estimable
en función de todos los datos conocidos hasta el momento.
Listas negativas
Antes de que se estableciesen las normas generales que regulan el uso de los aditivos
alimentarios, el sistema de regulación que se seguía consistía en reunir en una lista las
sustancias que no se podían utilizar en los alimentos, quedando permitida la adición de todo
tipo de materiales que no estuviesen recogidos por esta lista.
Este sistema entrañaba unos peligros evidentes, puesto que había sustancias, de las cuales
no se conocía todavía la toxicidad, y que eran añadidas sin ningún tipo de control en los
alimentos.
Listas positivas
La regulación actual del uso de aditivos se hace mediante el sistema de las listas positivas.
Para cada tipo de alimento se autorizan unos determinados aditivos que se indican en ellas.
Lo que implica que ningún aditivo pueda ser empleado sin autorización explícita por parte de
las autoridades sanitarias. Las listas positivas son, pues, una relación de sustancias, las
cuales, después de haberse demostrado su inocuidad, su efectividad y su necesidad, se
admiten como aditivos alimentarios. Aquí figuran únicamente los aditivos que pueden ser
utilizados, excluyendo cualquier otro.
Las listas positivas, que se encuentran en las disposiciones legales que regulan cada
alimento, incluyen los datos siguientes:
Estas listas positivas son abiertas, puesto que algunos de los aditivos que en ellas figuran
pueden ser retirados, los ensayos toxicológicos no se dan nunca como acabados, y puede
surgir algún dato que haga rectificar su evaluación. Además, también pueden incluirse
nuevos aditivos. Asimismo hay que tener en cuenta que el hecho de que un aditivo sea
admitido en una lista positiva no quiere decir que se pueda utilizar en cualquier producto
alimentario.