You are on page 1of 8

Importancia del uso de material didáctico en la Educación Inicial

¿Para qué utilizar material concreto en la Educación Inicial?

El Ministerio de Educación tiene como objetivo, en el currículo de Educación Inicial, propiciar ambientes,
experiencias de aprendizaje e interacciones humanas positivas que fortalezcan el proceso educativo en l
os niños de 0 a 5; por ello uno de los aspectos importantes en el currículo es el uso de materiales conc
retos como un soporte vital para el adecuado desarrollo del proceso educativo.

Desde muy pequeños los niños manipulan objetos, se mueven, emiten diferentes sonidos, dan solución a
problemas sencillos, estas actividades que parecen no tener mayor significado, son señales del pensami
ento creativo.

En el nivel inicial el medio ambiente y la naturaleza, en general, constituyen puntos de apoyo claves pa
ra el desarrollo de un trabajo de calidad, por tanto la creatividad del docente juega un papel muy import
ante en la concreción del currículo.

¿Por qué utilizar materiales del entorno para producir material didáctico?

El medio ambiente, la naturaleza y el entorno inmediato proveen de abundantes posibilidades que puede
n ser aprovechados en favor de los niños en el proceso de enseñanza aprendizaje.

Los materiales didácticos elaborados con recursos del medio proporcionan experiencias que los niños pu
eden aprovechar para identificar propiedades, clasificar, establecer semejanzas y diferencias, resolver pro
blemas, entre otras y, al mismo tiempo, sirve para que los docentes se interrelacionen de mejor manera
con sus estudiantes, siendo entonces la oportunidad para que el proceso de enseñanza-aprendizaje sea
más profundo.

El uso de material concreto desde los primeros años ofrece a los estudiantes la posibilidad de manipular
, indagar, descubrir, observar, al mismo tiempo que se ejercita la práctica de normas de convivencia y el
desarrollo de valores como por ejemplo: la cooperación, solidaridad, respeto, tolerancia, la protección de
l medioambiente, entre otros.

Es importante que el docente considere que dentro de las etapas para el proceso de enseñanza-aprendi
zaje de todas las áreas, la etapa concreta es fundamental para lograr buenos niveles de abstracción en
los niveles superiores.

1
Elaborar material concreto con recursos del medio permite mejores niveles de eficiencia en el aula, ade
más el uso de estos recursos se encuentran al alcance de todos los estudiantes. Los diferentes contexto
s sociales, culturales y geográficos del entorno permiten una variedad de recursos para la confección de
diversos materiales.

Los materiales concretos deben ser funcionales, visualmente atractivos, de fácil uso, seguros (no peligros
os), útiles para el trabajo grupal e individual, acordes a los intereses y la edad de los estudiantes.

¿Qué aprendizajes/destrezas se promueven a través del uso de estos materiales?

Se conoce que los pequeños tienen una gran recepción con el material didáctico en los primeros años.
Por esto, su uso es cada vez más intensificado por ser esta una etapa fundamental, determinante para
el resto de los años que vienen.

El material concreto apropiado apoya el aprendizaje, ayudando a pensar, incitando la imaginación y crea
ción, ejercitando la manipulación y construcción, y propiciando la elaboración de relaciones operatorias y
el enriquecimiento del vocabulario.

Siempre que sea posible, el material concreto debe ser elaborado por los estudiantes, en cooperación co
n sus profesores. No existe comparación entre el valor didáctico del material comprado y el material hec
ho por los propios estudiantes.

Recordemos que los materiales inciden en el proceso de aprendizaje cuando son utilizados con frecuenci
a. Por esta razón los niños deben verlos, manejarlos y utilizarlos constantemente, ya que la exploración
continua y el contacto con el entorno le hace vivir experiencias de gran valor en su medio. Esto provoc
a no sólo nueva información a integrar, sino también valores, actitudes y diferentes posibilidades de hace
r.

El uso de material concreto, además, desarrolla la memoria, el razonamiento, la percepción, observación,


atención y concentración; refuerza y sirve para aplicar los conocimientos que se construyen en las activi
dades curriculares programadas para trabajar conceptos, procedimientos, valores y actitudes; desarrolla e
n los niños comprensiones sobre las reglas, análisis y precisiones que demanda cada actividad; coordina
ción óculo-manual; capacidad de resolver problemas; discriminación visual; la sociabilidad, habilidad de ju
gar juntos, regulan su comportamiento, la honestidad, elevan su nivel de exigencia.

Pueden establecer relaciones de correspondencia, clasificación, ordenamiento, identificación de idénticos,


pertenencia, asociación; reconocer características de tamaños, formas, colores, sensaciones, olores, sabo
res, sonidos, entre otras.

2
¿Qué tomar en cuenta al elaborar el material concreto?

Aprovechar los recursos que ofrecen los diferentes contextos sociales, culturales y geográficos del país.
Que posibilite que el niño realice una serie de combinaciones, que le divierta y favorezca su desarrollo fí
sico, cognoscitivo y afectivo.
Que esté directamente vinculado con las tareas concretas del proceso educativo.
Que se ajuste al nivel del desarrollo evolutivo del niño.
Que en la elaboración participen todos los sujetos que intervienen en el proceso educativo, inclusive los
padres.
Que los niños disfruten el proceso de construcción y que al mismo tiempo que les permita innovar.
Que desarrolle la creatividad y el desarrollo de la actitud investigativa a partir de la curiosidad de los niñ
os.
El ambiente de aprendizaje se divide en cuatro grandes dimensiones que al mismo tiempo están interr
elacionadas entre sí, éstas son:

1. DIMENSIÓN FÍSICA: Se refiere a todo lo relacionado con el aspecto material del ambiente, es d
ecir, el aula, los materiales y todo lo que se encuentra alrededor (espacio físico). Por otra parte, también
las condiciones de la estructura son importantes para esta dimensión, se refiere al tipo de suelo, ventan
as, mobiliario, etc.
En pocas palabras, esta dimensión

2. DIMENSIÓN FUNCIONAL: Está relacionada con la manera de utilizar los espacios para todo tip
o de actividades. Estos lugares pueden ser empleados por los infantes de manera autónoma o también
el docente tiene la oportunidad de dirigirlos.
Dentro de esta dimensión se encuentran las actividades que los niños o alumnos pueden realizar d
entro de un espacio físico determinado, un ejemplo de esto puede ser la biblioteca del aula o los rincon
es de trabajo.

3. DIMENSIÓN TEMPORAL: Se encuentra todo lo referente con la organización del tiempo y los
momentos en los que los espacios van a ser utilizados.
El tiempo de cada actividad está muy ligado con el espacio en el que se llevará a cabo cada una d
e ellas.
Es importante que cada docente tenga en cuenta que para la organización del espacio también debe
considerar la organización del tiempo y viceversa.
Esta dimensión también hace referencia al ritmo con el que se va desarrollando la clase y la velocid
ad con la que se realizan todas las actividades.

3
4. DIMENSIÓN RELACIONAL: Esta dimensión se refiere a las diferentes relaciones que se logran
establecer dentro del aula y se encuentran ligadas a los aspectos que tienen que ver con los distintos m
odos de acceder a los espacios ,las normas y la manera en que se establecen, la organización para llev
ar a cabo las actividades, la participación del docente en los diferentes espacios y en las actividades qu
e realizan los niños.
Al docente le corresponde entre otros roles el de planificar, evaluar
y mediar el proceso de aprendizaje, así como diseñar y propiciar las
situaciones en las que el niño y la niña se involucren de manera activa
y constructiva.
— Será un planificador cuando organiza el ambiente de aprendi-
zaje: distribuye los espacios, selecciona los materiales, las
actividades, estrategias, organiza la rutina diaria, adapta los
medios de que dispone tanto en el aula como en la comunidad,
al grupo y a los fines que persigue.
Se espera que el/la docente organice el ambiente de manera
tal que existan diferentes momentos durante la jornada o ruti-
na, en los cuales pueda satisfacer las necesidades básicas de
los niños y las niñas a su cargo y desarrollar sus potencialida-
des, en espacios organizados de manera tal que permitan la
interacción con el ambiente, tanto de manera natural y espon-
tánea como estructurada por el/ la docente. Asimismo cuando
se trabaja en ambientes no convencionales, el/la docente tam-
bién debe organizar el espacio donde va a trabajar: hogar,
ambiente comunitario, ludoteca, y seleccionar las estrategias
para la atención de los niños, las niñas y sus familias.
— Su papel de evaluador le permitirá conocer las reacciones,
preferencias, formas de relacionarse, nivel de desarrollo, apren-
dizajes adquiridos, juegos, el ambiente familiar y comunitario,
patrones de crianza, entre otros, para cumplir con éxito su rol
al potenciar el aprendizaje y el desarrollo de niños y niñas.
— El/la docente en su rol como mediador, propiciará la adquisi-

4
ción de nuevos aprendizajes y potenciará el desarrollo, creará
condiciones para que los niños y las niñas descubran, explo-
ren, manipulen; atenderá a sus requerimientos cuando sea ne-
cesario. Propiciará que el niño o la niña incorpore y relacione
los nuevos aprendizajes con sus conocimientos previos.
colores pasteles para las paredes y los colores vivos que otorgan un
destello de alegría para las puertas y ventanas. Es necesario que en el
espacio haya una preponderancia de un solo color o de un color y sus
matices a fin de crear un clima armonioso, acogedor y estético.
Es importante que se tenga buena iluminación y ventilación. Los
espacios físicos deben ser higiénicos, confortables, amplios, bien dife-
renciados, de fácil acceso. Cada espacio de trabajo debe ser seguro,
estable y ordenado de manera que se convierta en un lugar predecible
para los niños y las niñas.
En suma, debe organizarse un espacio físico armónico, estimulan-
te y accesible, congruente con las necesidades, potencialidades e inte-
reses de los niños y las niñas y con las peculiaridades de la región.
Asimismo, es importante que en lo posible puedan acceder a espacios
al aire libre como: patio, jardín, plaza o parque, ya que todos requieren
aire, sol y luz natural.
La organización del espacio contempla también su equipamiento.
De allí que el o la docente y otros adultos significativos deben prever,
seleccionar y ubicar los materiales, el mobiliario y los equipos, recomen-
dados para el trabajo con niños y niñas entre cero y tres años. El maestro
o la maestra, ubicará apropiadamente el mobiliario y los equipos de
manera que no obstaculicen el tránsito seguro de los/as niños(as).
2.2. Mobiliario
La selección de los muebles para los distintos espacios debe estar
ligada a las características antropométricas (talla y peso) de los niños
y las niñas y al uso que se le va a dar al mueble; es preciso también
pensar en la altura de los y las docentes y adultos significativos que
5
los/as atienden, cuando se seleccionan muebles o equipos para la aten-
ción de los niños y las niñas como por ejemplo mesa para el cambio de
pañales. ¿Qué tamaño debe tener la mesa y a qué altura debemos
colocarla para respetar la postura adecuada del adulto que atiende al o
la bebé?
El mobiliario de los centros infantiles debe ser funcional, cómodo,
de buena calidad, seguro, resistente, estable, que ofrezca seguridad,
elaborado con pinturas lavables y no tóxicas y polivalente. Los muebles
deben ser simples y fáciles de limpiar, desplazar y de transformar. Es
conveniente que tengan ruedas con topes de seguridad para poderlos
mover con facilidad, lo cual permite la transformación del espacio. Pue-
den utilizarse cunas (para los bebés), colchonetas y/o hamacas para los
más grandes, mecedoras para el arrullo, biombos bajitos, estanterías,
casilleros, bibliotecas pequeñas, mesas y sillas, armarios para objetos
personales, percheros, caballetes, pizarrones, carteleras, ventiladores,
equipos para juegos de movimiento como rampas, bloques para atrave-
sar y reptar. Debe evitarse el exceso de objetos.
Todo el equipamiento debe tener en cuenta las características y
momentos de desarrollo de los niños y las niñas. Además la ubicación
del mobiliario debe permitir que el (la) docente de una sola mirada pueda
abarcar las zonas donde los niños y niñas están. En el caso de equipos,
tales como rampas, toboganes, escaleras, entre otros, deben colocarse
las normas de uso.
Es conveniente que el mobiliario destinado a los adultos sea sen-
cillo, cómodo, de calidad, buen gusto y relajante porque el trabajo con
los/as niños/as pequeños/as agota mucho y los adultos deben poder
encontrar momentos de descanso y muebles adecuados a sus necesi-
dades, peso y talla.
2.3. Material Didáctico
Organizar y disponer los materiales didácticos en los diferentes
espacios es una elección pedagógica que debe ser bien estudiada para
6
favorecer su utilización y funcionamiento. Una cuidadosa selección, or-
ganización y disposición de los materiales, favorece el aprendizaje, la
interacción entre los niños y las niñas y entre éstos, éstas y los adultos,
así como también la formación de la autonomía, valores, actitudes e
internalización de normas.
Los materiales didácticos propician el aprendizaje de una manera
directa e indirecta, por cuanto satisfacen las necesidades e intereses de
los niños y las niñas ayudándolos en la construcción de su conocimien-
to, al desarrollo de su capacidad creadora al actuar sobre cosas, explo-
rándolas, transformándolas, combinándolas e introduciendo nuevos
elementos. Dependiendo de la diversidad de los materiales se irá favo-
reciendo la adquisición de distintas destrezas y habilidades y se pon-
drán en funcionamiento distintos tipos de procesos mentales.
En la selección de los materiales debe considerarse el medio so-
ciocultural. Los materiales que utilice el niño o la niña no pueden estar
aislados de su realidad, deben estar presentes en su entorno inmediato,
ser familiares para que tengan sentido, estar vinculados a situaciones
naturales o conocidas y deben evitarse los artificialismos en esta prime
ra fase. Por ello se debe aprovechar las características de cada entorno
social y cultural.
En la dotación de materiales además del medio socio cultural, hay
que tener en cuenta:
— La procedencia del material: del entorno (ecológico), el comer-
cial, el fabricado por el maestro o la maestra o los familiares,
los objetos de uso cotidiano.
— Las cualidades físicas de los objetos: el material debe ser de
calidad, de manera que sea resistente, durable, seguro, de fácil
manipulación, fácilmente transportable y lavable, en buen es-
tado, sin aristas cortantes o piezas pequeñas que puedan ser
tragadas por el niño o la niña; no debe ser tóxico, ni alergénico.
— La cualidad pedagógica de los recursos: ser polivalentes, es decir
7
el material debe ofrecer varias posibilidades de juego, por ejem-
plo un cajón puede ser un carro y posteriormente la cuna de una
muñeca; tomar en cuenta las capacidades que puedan desarro-
llar en los niños y las niñas; el nivel de estructuración: contar
con material estructurado, semi estructurado e inestructurado.
— La cualidad estética: colores vivos y formas agradables, que
sean atractivos y llamativos para los niños y las niñas

You might also like