AMARNOS A NOSOTROS/AS MISMOS/AS ES UN IMPRESCINDIBLE ACTO PARA LOGRAR

DESARROLLAR EL SENTIMIENTO DE AMOR INCONDICIONAL HACIA TODO.

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“Amarás a tus prójimos/as COMO A TI MISMO/A”, fue dicho MUY SABIAMENTE hace más de dos mil
años…
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La sentencia anterior implica que, en base a una sana e imparcial lógica que parte del SUPUESTO de que
TODOS/AS somos conscientes que SOMOS EL CENTRO DE NUESTRO UNIVERSO, es imprescindible que
nos procuremos un estado de salud integral que nos reditué una BUENA CALIDAD DE VIDA que facilite el
florecimiento de nuestra PAZ INTERIOR y todo lo que ello implica (alta auto estima, alta auto confianza,
alegría por la vida, valor, determinación, generosidad, gratitud…), y de esta manera, cual si fuésemos antorchas
vivientes, podamos irradiar hacia nuestro exterior una “BUENA VIBRA” que contagie a todos/as a nuestro
alrededor…
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Tiene mucho sentido común concluir que PARA QUE PODAMOS AMAR, ACOMPAÑAR Y ATENDER a
nuestros seres queridos REQUERIMOS ESTAR INTEGRALMENTE SANOS pues de lo contrario, lejos de
poder llevar a cabo lo anterior terminaríamos por convertirnos en una CARGA, en lugar de un APOYO para los
demás…
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¿Amamos mucho a nuestros padres?...
¿Amamos mucho a nuestra pareja?...
¿Amamos mucho a nuestros hijos?...
¿Amamos mucho a nuestros amigos, nuestra actividad, nuestra religión, nuestro/a lo que sea?...
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¡Muy bien!... Atendamos entonces lo que nos fue dicho desde hace más de dos mil años: “AMARÁS A TUS
PRÓJIMOS/AS COMO A TI MISMO/A” y sumemos todo ese amor que sentimos hacia “nuestros/as
prójimos/as” HACIA NOSOTROS MISMOS prevaleciendo ese amor hacia los demás NO COMO UN AMOR
EXCLUYENTE sino como un AMOR INCLUYENTE; es decir, NOS AMAMOS TANTO, QUE ESE AMOR
HACIA NOSOTROS DESBORDA NATURALMENTE HACIA LOS DEMÁS”
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… Fatalmente, no pocas culturas –la nuestra por ejemplo- tergiversaron la esencia de la sentencia anterior
interpretándola y promoviéndola como. “Ama a tus prójimos MÁS que a ti mismo/a; SACRIFÍCATE POR LOS
DEMÁS”, lo cual es un evidente error, pues SACRIFICIO significa literalmente: “HACER O DEJAR DE
HACER ALGO QUE NO SE DESEA O QUE IMPLICA UNA DESVENTAJA”.
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Muchos son los sabios que difunden diversas doctrinas provenientes de antiguos escritos que se han encontrado
en la zona del Mar Muerto y que concluyen que aquella sentencia que reza: “AMARÁS A DIOS POR SOBRE
TODAS LAS COSAS” fue deformada y fragmentada, pues aseguran que lo que realmente expresa tal sentencia
es:”AMARÁS AL DIOS PADRE-MADRE QUE HABITA DENTRO TUYO, POR SOBRE TODAS LAS
COSAS”… que es MUY DIFERENTE.
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Saludos y bendiciones.
Juan Enrique