INSTITUTO DE FORMCIÓN DOCENTE CONTINUA

HISTORIA MUNDIAL II

Informe de Lectura n° 1

Profesor: Adriano Cavallin

Alumna: Raquel E. Rodriguez

 EL OCCIDENTE MEDIEVAL

INTRODUCCIÓN
El presente informe tiene como finalidad analizar las invasiones del siglo V, VI y VIII,
como así los aspectos sociales, políticos, culturales, económicos y religioso, que ira
configurando las viejas estructuras que van a sostener el occidente medieval; los autores
a través de los cuales abordaremos este análisis son: Perry Anderson, José Ángel María
Cortázar, José Ángel Sesma Muñoz, y Jacques Le Goff.

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 EL OCCIDENTE MEDIEVAL
La fragmentación del imperio se sucede por los distintos aspectos cultural, social, político,
económico, religioso, que fueron afectando las estructuras internas y externas del
Imperio; Así los autores como Anderson nos sitúa en el 406 cuando los barbaros cruzan
el Rin, Le Goff con la crisis del siglo III, y Cortázar en 476 con la división del Imperio
Romano entre Oriente y Occidente.
Para Le Goff “El occidente medieval nació de las ruinas del mundo romano. En ellas
encontró un apoyo y un obstáculo a la vez. Roma fue su alimento y su parálisis.”.
Comenzar hablar de la crisis de occidente, debemos retomar el contexto germano, cuando
en los tiempos de Cesar, tuvieron un primer contacto con estas tribus, las cuales tenían
una cultura sedentaria, economía pastoril, y un modo de producción primitivo y comunal;
las estructuras germanas fueron modificadas con la llegada de los romanos, como las
guerrillas internas las cuales estaban subvencionadas por Roma para neutralizar la presión
de estos (Perry Anderson).
Otros autores como Le Goff mencionan estas grandes migraciones y posterior invasiones
por el cambio climático, el enfriamiento de Siberia a Escandinavia con la perdida de
cultivos, también la presión de los Hunos. Anderson, estas grandes migraciones que fue
un proceso de asentamiento de los pueblos germanos desde siglo I aproximadamente, a
través del foedus los romanos les permitían conservar las tierras a cambio de prestar sus
servicios, esto se puede evidenciar que para mediados del siglo IV un porcentaje
relativamente alto de generales y oficiales de origen germano formaban parte del ejercito
romano, los cuales defendían los limes del imperio.
En el transcurso de las invasiones del siglo V y VI Occidente se vio asolada
barbarizada, mientras Oriente daba continuidad al Imperio Bizantino, este mostraba
caracteres que lo iban a ser reconocible durante siglos, un imperio griego, culto,
político, urbano, mercantil y cristiano. Un rasgo distintivo fue la pervivencia de
grandes ciudades en relación con el occidente. (Cortázar)
La primera oleada de invasiones (Ver fig. 1) fue compleja y contradictoria ya que la
unidad militar política y económica quedo irreversiblemente destrozada, pero también se
suma a ello la conservación y respeto hacia el legado latino.

Fig. 1
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 EL OCCIDENTE MEDIEVAL
Anderson, el 31 de diciembre del año 406, Vándalos, Alanos y Suevos marchan por los
hielos del Rin; en el 410 los Visigodos saquearon Roma al mando de Alarico; en 439 los
Vándalos tomaron Cartago. Para el año 480 se establece en suelo romano el primer
sistema de Estados barbaros, Burgundios en Saboya, Visigodos en Aquitania, Vándalos
en el norte de África, y Ostrogodos en el norte de Italia. Así queda configurado el nuevo
mapa fragmentado con los asentamientos de los pueblos germanos.
Párrafos anteriores mencionábamos que las comunidades germanas eran extremadamente
primitivas, en cuanto a lo religioso eran arrianos, y no contaban con estructuras
institucionales fuertes, como consecuencia de ello se apoyaron fuertemente en las
preexistentes estructuras imperiales, lo que ocasiono un dualismo institucional, ya que no
era una estructura totalmente romana y tampoco germana. Ello se expresa mediante dos
códigos uno germánico basado en las tradiciones consuetudinarias y, un derecho romano
que subsistió.
La estratificación de clases cristalizo rápidamente cuando las federaciones tribales se
asentaron dentro de las fronteras romanas. A nivel político evolucionaron con la
conformación de Estados - la llegada de los Ostrogodos a Aquitania logra afirmar un
Estado dinástico institucional dentro del marco imperial -, mantenían una autoridad
central coercitiva sobre la comunidad de guerreros libres, esta fase fue lograda después
de largas y tortuosas convulsiones internas. En lo económico mantenían este dualismo
oficial que administraba y legalmente dividía al reino en dos órdenes distintas, que
demostró la incapacidad de los germanos para dominar la antigua sociedad y organizar
un sistema político nuevo y coherente que la abarcara en su totalidad. En cuanto a la
religión adoptaron unánimemente el arrianismo y no la ortodoxia católica, los Ostrogodos
en Italia y los Visigodos en Hispania hicieron legalmente difícil para los romanos la
adopción del arrianismo con el objeto de asegurar la separación de ambas poblaciones. A
nivel lingüístico ninguna región del Occidente romano fue lingüísticamente germanizada.
Otro rasgo distintivo de estas primeras invasiones fue la decadencia de las ciudades
debido a las guerras y guerras civiles, lo que produjo la introducción de fincas y
campesinos germanos junto a sus ejemplares romanos.
La segunda oleada de invasiones (Ver fig. 2) determino de forma profunda y definitiva el
Occidente medieval, y modos de producción feudal.

Fig. 2
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 EL OCCIDENTE MEDIEVAL

Anderson señala que estas migraciones germánicas se dividen en tres episodios

principales la conquista Franca como un lento y gradual avance sobre la Galia, la
ocupación Anglosajona como una oscura plétora de desembarcos en Inglaterra, y el
gradual deslizamiento Lombardo hacia el sur de Italia.
Le Goff y Cortázar, mientras en Oriente, la asunción de Justiniano en 527, y la
reconstrucción del Imperio Romano; la nueva política imperial abandona la pasividad
para pasar a la ofensiva, se puso en marcha en el 532 al mando de los generales
Belisario y Narsés, liquidan el reino Vándalo en África (533 - 534); los Ostrogodos en
Italia con su rey Totila opusieron gran resistencia, y mantuvo a los bizantinos en
constante guerra, llamada guerra Gótica, que duro 30 años (536 – 555), en el 554
arrebatan la Bética a los Visigodos en Hispania, dando su apoyo a Atanagildo a quien
impusieron en el trono. Todos ellos sucesos efímeros que debilitaron a Bizancio, y
agotaron a Occidente, sumado a las insurrecciones de los Bereberes en África, la
presión de los visigodos en Hispania trataran de expulsar a los bizantinos,
complementado a ello la peste negra a partir del 543. Todo ello conllevo crecientes
gastos militares que no encontraban compensación. La reactivación de la amenaza
Persa debido a los sucesos acaecidos, la llegada a las puertas de Constantinopla de
pueblos como búlgaros, eslavos y ávaros, evidenciaron el debilitamiento de las
estructuras de Bizancio, en ese lapso Justiniano muere en el 565.
La profundidad de estas invasiones dejo como resultado cambios lingüísticos, la frontera
de las lenguas romances retrocedió de 80 a 160 kilómetros desde Dunquerque a Basilea,
y de 160 a 320 kilómetros al sur del alto Danubio. Así el Franco legó unas 500 palabras
al vocabulario francés, y el lombardo alrededor de 300 al italiano, el visigótico 60 al
español, y el suevo 4 al portugués.
La decadencia de las ciudades que se fue dando progresivamente a partir del siglo IV en
adelante; la ruralización fue mayor en esta segunda ola de invasiones, donde las
comunidades aldeanas constituirían un rasgo sobresaliente del feudalismo medieval.
Políticamente el dualismo administrativo e institucional que hubo en las primeras
invasiones, para el siglo VII presagio su fin con la desaparición del legado jurídico
romano, el derecho germánico paso a ser gradualmente el dominante; por un lado los
lombardos promulgaron un nuevo código legal basado en las normas tradicionales
germánicas (redactado en latín); los reyes merovingios mantuvieron el dualismo
institucional, pero debido a su anarquía las normas latinas se desvanecieron
progresivamente; otro rasgo fue los impuestos sobre la tierra, fueron derrumbados debido
a la resistencia de la población y la iglesia. En el reino franco desaparece progresivamente
la recaudación de impuestos. En Inglaterra el derecho y la administración romana
desaparecieron antes de la llegada de los Anglosajones; en la España visigoda el dualismo
administrativo llega a su fin en el siglo VII durante la monarquía de Toledo.
En el aspecto religioso los primeros reinos germanos fueron arrianos, y para esta segunda
oleada este separatismo religioso comienza a desaparecer; los francos adoptan el
catolicismo con el bautismo de Clodoveo para finales del siglo V; los anglosajones hacen
la conversión en el siglo VII por las misiones romanas; los visigodos en el 587; los
lombardos en el 653. (Anderson)
Le Goff, “Las estructuras romanas no son para la Iglesia más que un marco donde tomar
forma, una base donde apoyarse, un instrumento para afianzarse. El cristianismo,
religión con vocación universal, duda antes de encerrarse en los límites de una
civilización determinada. Sin lugar a dudas, él será el principal agente de la transmisión
de la cultura romana al Occidental medieval. Pero junto a esta religión cerrada la Edad
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Media occidental descubrirá también una religión abierta y el diálogo de esos dos rostros
del cristianismo dominara esta edad intermedia.”
Anderson no desarrolla como principal elemento la Iglesia; pero Le Goff hace hincapié
párrafo anterior mencionando que sin duda alguna tendrá un protagonismo esencial tanto
en la fragmentación y posterior unificación que no logro concretarse por parte de Oriente,
donde “la Iglesia intenta dirigir el Estado y los reyes gobernar la Iglesia”; Cortázar
desarrolla la querella de las imágenes que transcurrió durante todo el siglo VII y finales
del siglo VIII, que más adelante ampliaremos.

Cortázar y Le Goff, después de la muerte de Justiniano en el 565, se sucedieron

reinados breves hasta que en el 610 Heraclio derroca a Focas y ocupa el trono imperial,
durante cincuenta años sus hijos y nietos le sucedieron en el poder, en 695 se quiebra
la dinastía Heraclida por los golpes militares.
La crisis del siglo VII, uno de los principales frentes de invasión fue la intervención
activa de los musulmanes. En Oriente la expansión musulmán liderada por los árabes
comienza en 632, para el 636 los bizantinos fueron derrotados a orillas del rio Yarmuk,
lo que sería una muestra del poder islámico. Seis años después Bizancio pierde Siria,
Palestina y Egipto; doce años más tarde el dominio del norte de África y Armenia, las
islas de Rodas y Chipre. La flota Árabe sitiaba Constantinopla en el 673 acción que
repetiría cinco años más tarde. Afortunadamente para Bizancio tanto la necesidad del
Califa Omeya por atender otros frentes y también la efectividad del llamado fuego
griego - mezcla inflamable incluso en el agua, compuesta por nafta, azufre y pez - que
se aventaba por medio de tubos, lo que contribuye a levantar el asedio a la capital, y
permitió que la situación entre árabes y bizantinos se estabilizara parcialmente durante
cuarenta años; al final de este periodo en el 717 León III - el Isásurico, transmitió una
nueva dinastía - logra imponerse frente al Imperio de Bizancio, y encuentra en ella un
imperio menos antiguo y más medieval, reducido, coherente, militarizado, rural,
privado y griego.
En Occidente la conquista árabe sobre el Magreb, invade España entre el 711 y 719
con excepción del noroeste donde los cristianos se mantienen independientes, domina
débilmente la Aquitania sobre todo Provenza; en 732 Carlos Martel los detiene en
Poitiers, y los francos los fuerzan a retirarse hacia sur de los Pirineos; pierden Narbona
759 y se repliegan.
El siglo VIII, encuentra a Occidente con el final del dualismo institucional siglo VI para
Anderson, y para Le Goff una lenta fusión del mundo romano y del mundo bárbaro que
se dará a finales de este siglo con la conversión al cristianismo.
La dinastía carolingia al mando su líder Carlomagno intentan la reconstrucción de la
unidad occidental, ello se llevó a cabo en tres direcciones al sudeste en Italia, al sudoeste
en España, y al este en Germania.
Este intento germánico de organización tiene su primera expedición contra los lombardos
en el 754 con Pipino el breve y su aliado el papa; la segunda expedición en 756 en Pavía
con Carlomagno, captura al rey Desiderio arrebatándole la corona de Italia el 774;
mientras debe guerrear en el norte de la península, los ducados lombardos de Espoleto y
de Benevento escapan a su dominio.
Al sudoeste Pipino arrebata Narbona a los musulmanes en el 759; tras las querellas
internas de los musulmanes Carlomagno tomará Barcelona; en 778 toma Pamplona,
Huesca y Gerona.
Se redujo a los sajones en 778; fundan obispados en Bremen, Münster, Panderborn,
Verden y Minden. La conquista de Baviera y su anexión, quedo expuesta a las incursiones
de los avaros que eran de origen turco-tártaro, estos fundaron un imperio en las márgenes
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del Danubio, desde Carintia hasta Panonia, y acumulaban su botín en tiendas redondas
llamadas Ring. Para el 796 Carlomagno se apodera del Ring, y anexiona la parte
occidental del imperio avaro.
Al este se dio una cristianización por la fuerza, cuyas conquistas, donde masacre y
conversión quedaban mezcladas, este restablecimiento del imperio en Occidente fue idea
del papado y no de Carlomagno, así cualquier ofensa hecha a la religión cristiana se
castigaba con la muerte en nombre de la cristianización, que habría de practicarse durante
toda la Edad Media, mientras unos bautizaban, otros saqueaban, quemaban, mataban y
deportaban en masa.
León III el isaurico (717 - 741) tomo el poder después de veinte años de revueltas
militares, éste marcaria una nueva dinastía y también un progreso en el imperio
bizantino que abarcaría ciento cincuenta años (717 - 867), el crecimiento de la gran
propiedad, es decir que fue deteriorando paulatinamente la antigua fuerza de las aldeas
(themas), el interés en ellas se posiciona en tres polos, el primero la guerra contra los
enemigos exteriores, donde se enfrentaban los distintos poderes que pugnaban por
hacerse un lugar en el escenario de lo que fue el Imperio Romano de Oriente; segundo
el sentido de fortalecimiento interno del imperio en su aspecto civilizador que tendría
influencia en Bulgaria, y más tarde en la Rusia de Kiev. El tercer polo fue la querella
de las imágenes, disputa en torno al carácter de las imágenes y su culto, que se
desarrollara en tres grandes etapas; la primera que va del 726 a 787 el auge de la
iconoclastia; la segunda entre 787 a 815 donde el Concilio II restaura el culto a las
imágenes, y el éxito de la iconodulia; la tercera, 815 a 843, se vuelve iconoclasta y la
querella concluye con el triunfo definitivo al culto de las imágenes.
El génesis de estos periodos se vio desde el siglo VI y VII, con el frenesí a la veneración
de las imágenes a las cuales le atribuían la salvación de Constantinopla en el año 626,
y la procesión de la virgen llevada por el patriarca Sergio, lo que aumento su prestigio
como icono milagroso. Durante el siglo VII los campos de batalla, las ciudades sitiadas,
los monasterio, las casas, todos ellos portaban objetos representativos a los cuales le
atribuían milagros portentosos. Una diferencia con Occidente que diferían en el culto
a las reliquias de santos.
El creciente culto a las imágenes tuvo más auge e influencia en las fronteras orientales
del imperio debido al contacto con el judaísmo como el islamismo, para el siglo VIII
vivían en contacto con monofisitas, judíos y musulmanes.
La alusión al debate de las imágenes debemos sumarle la interpretación política, ya que
León III tenía la voluntad de crear una nueva dinastía y con ello una renovación política
que estaría ligada a la exaltación de la cruz; así el emperador y su hijo Constantino V
contrapusieron la cruz de Cristo al poder de las imágenes de los santos, lo que propicio
una paralela persecución de las imágenes. De este modo la cruz se convirtió en un
referente propio del emperador, portador de un poder único por encima de cualquier
autoridad sean estas militares, civiles o eclesiásticas.
La ambición de Carlomagno era consagrar la división del antiguo imperio romano en un
occidente del cual sería el jefe. Entonces en diciembre del 800 es coronado.
El papa León III descubre una triple ventaja al dar la corona imperial a Carlomagno, al
hacer de este un emperador para todo el mundo cristiano e incluso para el mismo
Bizancio, para poder luchar contra la herejía iconoclasta y establecer la supremacía del
pontífice romano sobre toda la Iglesia.
Carlomagno logra que el basileus reconozca su título imperial mediante el acuerdo en el
814, donde devolvía Venecia, y los francos conservarían las tierras del norte del
Adriático. Meses después, más precisamente el 28 de enero se extingue la vida de
Carlomagno.
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La administración carolingia cuando aún en vida Carlomagno, puso especial cuidado en
el uso de la escritura, y su principal cometido del renacimiento cultural fue perfeccionar
el instrumental profesional de los oficiales del rey. Impuso su autoridad fomentando los
textos administrativos y legislativos, como así multiplicandos los representantes del poder
central como enviados a las distintas regiones. También se organizaba una asamblea
general – se realizaba cada año a finales del invierno - que congregaba a los personajes
más importantes de la aristocracia eclesiástica y laica del reino, entorno al soberano, este
parlamento aristocrático garantizaba a Carlomagno la obediencia de sus súbditos.
Después de la muerte de Carlomagno, la construcción carolingia en los comienzos del
siglo IX habría de desmoronarse por los abates de los invasores que no desarrollaremos
en este informe.
Todo este proceso desde las invasiones del siglo V, VI y VII junto con los nuevos modos
de producción que le dan a este periodo el feudalismo a la edad media, para Anderson; el
desarrollo que hace le Goff citando a monjes que pervivieron esos periodos y la
meticulosa descripción que hacen estos, la infaltable presencia de la Iglesia para este autor
que lo hace elemento esencial y crucial de la edad media; Cortázar y la transformación de
Oriente a Imperio Bizantino, el renacimiento, la crisis del siglo VII con las incursiones
de Islam, los periodos iconoclastas, y el resultado final la edad media. Los autores
coinciden que el paso de la antigüedad a la edad media fue un conflicto constante de las
estructuras que sostenían el antiguo Imperio Romano, y su posterior colisión o fusión
permitió el surgimiento de nuevas estructuras que configurarían el Occidente medieval.

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CONCLUSIÓN
Para concluir el informe debemos destacar que los cuatro siglos desde las primeras
invasiones hasta la muerte de Carlomagno (814) fue una lenta y larga simbiosis donde
convergieron las civilizaciones romanas y germanas, dando como resultado de esta fusión
el feudalismo que en su máxima expresión como nuevo modo de producción transformo
las estructuras del antiguo Imperio Occidental y dio origen a la Edad Media.
Le Goff “El hombre antiguo tenía que ser justo o recto, el hombre medieval tendrá que
ser fiel.”

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BIBLIOGRAFÍA
Anderson, P. (1979). “La Transición”. En Transiciones de la Antigüedad al Feudalismo.
Pp. 103-143. México. Editorial Siglo XXI.
Cortázar, J; Sesma Muñoz, J. (2000). “El Imperio Bizantino: esplendor y supervivencia”.
Cap. 2. En Cortázar, J; Sesma Muñoz, J. Historia de la Edad Media. Alianza Editorial.
Le Goff, J. (1999) “El establecimiento de los bárbaros (siglos V-VII). Cap. 1. En Le Goff.
La civilización del Occidente Medieval. Ed. Paidós.
Le Goff, J. (1999) “El intento germánico de organización” (siglos VIII-X) Cap. 2. En Le
Goff. La civilización del Occidente Medieval. Ed. Paidós.
Instituto de Historia de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Mapa Invasiones
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Blogs Sociales de Segundo. Año 2017. Mapa Europa a mediados del siglo VII.
Recuperado en: http://ccss2eso.blogspot.com.ar/2017/09/analisis-de-un-mapa-sobre-
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