TRATAMIENTO TÉRMICO DEL ACERO INOXIDABLE

Desde la llegada del movimiento científico de los dientes, el hombre ha estado buscando un
mecanismo más eficiente. Los aparatos más antiguos eran principalmente placas palatinas con
accesorios que emanaban de ellos.

La otra variación implicó el uso de un principio de tornillo. Estos métodos eran toscos y
engorrosos. Actuaron singularmente sobre los dientes y se apoyaron completamente en la presión
directa como la fuerza motivadora; por lo tanto, los movimientos de los dientes fueron limitados.

Después de un período de años, un aparato de ortodoncia consistió en bandas en los dientes y el

uso de un alambre que se extiende alrededor del arco para producir las fuerzas necesarias para el
movimiento de los dientes.

Esto produjo una gran cantidad de ideas: por ejemplo, el tamaño y el grosor de las bandas y el
número necesario para un tratamiento adecuado; Una diferencia en el diseño de los adjuntos, y
principios involucrado durante el tratamiento; los diversos tamaños de alambres para estos
accesorios; y los varios tipos de metales a partir de los cuales se podrían construir.

En términos generales, los arcos de ortodoncia disponibles en la actualidad se construyen a partir

de aleaciones de oro o de acero inoxidable. Así, con esta elección de materiales asumimos una
gran diferencia en las propiedades de cada uno, y debemos aceptar las diferencias en la técnica
involucrada con su uso.

Arcos de oro son la opción ideal para arcos rectangulares. El oro es más verdadero en dimensión y
calidad. Las matrices utilizadas para la fabricación de alambre de oro siguen siendo más precisas, y
el oro se incorpora con metales base como una verdadera aleación; Por lo tanto, su composición
puede ser más constante. Este metal se puede adaptar con mayor precisión a los arcos de alambre
porque puede tolerar más trabajo en frío antes de romperse. La mayor ventaja del uso del oro
sobre el acero es la facilidad de soldar los accesorios necesarios para el arco.

Si se diseñara un dispositivo de templado y recocido confiable para uso de oficina, la mayoría de

los ortodoncistas utilizarían oro casi en su totalidad cuando se desea un arco rectangular. Pero en
el presente, las ventajas del oro sobre el acero pueden ser definitivamente superadas por la falta
de un dispositivo adecuado de sellado por templado.

Las últimas ollas de tratamiento térmico son una mejora con respecto a los modelos originales,
pero todavía hay mucho que desear.

Para tener una olla de tratamiento térmico disponible, uno debe mantener una batería de ellos, y
siempre tienen la facultad de quemarse cuando más se necesita. Para templar el oro, hay un
pequeño margen de error entre el alambre demasiado blando y demasiado quebradizo; por lo que
es necesario un dispositivo con un horno preciso y pirómetro. ¿Se puede diseñar y construir un
instrumento a un precio práctico para su instalación en la oficina de un ortodoncista? Si se puede
diseñar una unidad de este tipo, se debe realizar una experimentación para establecer la
temperatura crítica ideal para el temple de oro y la cantidad de latitud disponible.
Muchos ortodoncistas han pasado un largo período de tiempo produciendo un oro.

Arquear con las curvas necesarias, y colocarlo entre los soportes, solo para ver que el arco se
distorsiona o se rompe debido a un temple inadecuado. Un bucle de Strang, si se incorporara,
también tiene una tendencia a romperse tras la reactivación.

Estas tribulaciones son muy desalentadoras e innecesarias.

Los ensayos encontrados debido a la falta de un dispositivo adecuado de recocido con templado
de oro han desviado la atención hacia el uso del acero.

La introducción al tratamiento térmico con acero fue la demostración presentada por el Dr.
Mathew Lasher. El tratamiento pareció mejorar las propiedades de los arcos; Inmediatamente se
obtuvo un horno poderoso Mighty Midget de Huppert para la oficina, y todos los arcos de acero
fueron tratado térmicamente. La falta de información sobre el tratamiento térmico del acero
justifica la investigación. ¿Se podría mejorar el rendimiento del acero inoxidable por tratamiento
térmico? ¿Cuál es la mejor temperatura?

¿Proporción para el tratamiento térmico de arcos de acero? ¿Sería la mejor relación temperatura-
tiempo adecuada para uso de oficina? ¿Los productos de diferentes fabricantes actuarán de
manera similar después de ser tratados con calor?

Por ejemplo, ¿un alambre suave y más flexible sería más resistente que un alambre más duro y
rígido después de que ambos fueron tratados con calor? ¿Se perdería la propiedad del acero
inoxidable durante el procesamiento?

¿La latitud de los grados de temperatura a los que se sometió el alambre a un tratamiento térmico
sería tal que pudiera utilizarse un equipo barato? ¿Cuánto variaría la relación temperatura-tiempo
en el tratamiento de arcos de diferentes diámetros? ¿Podrían templarse los alambres antes de
doblar el arco? Este documento no está diseñado para ayudar a resolver la controversia del oro y
el acero, sino que es simplemente un informe sobre el efecto del tratamiento con calor del acero
para aquellos que desean utilizar arcos de acero inoxidable.

Tenga en cuenta que el término “tratamiento térmico” se usa en lugar de “atemperar”. Al no ser
físico o químico, no sé cuál es la disposición interna de los átomos y las moléculas durante estas
pruebas. Solo puedo reportar las observaciones de pruebas manuales simples. Mi primera idea fue
obtener varios cables de diferentes fabricantes, todos de tamaño similar, .021 x .025, y
examinarlos de manera rutinaria después del tratamiento térmico; entonces llegaría a una
relación de temperatura que daría la mejor calidad para el acero inoxidable. Más tarde se
descubrió que esta primera idea estaba equivocada.

El método de prueba fue el siguiente: el horno para tratamiento térmico fue un horno de
quemado Huppert Mighty Midget. Este horno es muy práctico para la oficina de un ortodoncista.
Las temperaturas utilizadas fueron de temperatura ambiente a 1400 grados Fahrenheit. Se utilizó
un temporizador de General Electric y los intervalos de tiempo variaron de medio minuto a
setenta y cinco minutos. No es práctico intentar usar el Mighty Midget para cualquier trabajo más
cercano a una variación de cincuenta grados, debido a que es difícil mantener una temperatura
constante durante un largo período de tiempo. Durante las pruebas, la apertura y el cierre de la
puerta causaron una variación del calor en la medida de los grados, especialmente en los rangos
más altos, el alambre que se iba a tratar y someter a prueba de calor se seleccionó
cuidadosamente. Se eligió alambre del mismo fabricante, tipo de tamaño y lote. Cada sección de
arco de .021 x .025 se cortó en pedazos de alrededor de tres y un cuarto pulgadas de largo.

Se colocó un gancho redondeado en un extremo, luego se colocó cuidadosamente una marca de

rasguño a dos y tres cuartos de pulgada de la curva del gancho. Esta fue la longitud de la palanca a
probar. La media pulgada adicional era la porción colocada en la prensa durante la operación de
prueba y fue suficiente para proporcionar un accesorio seguro para evitar un error en
desplazamiento de deslizamiento.

Los alambres se seleccionaron y se trataron térmicamente a diversos tiempos y temperaturas. La

Figura 1 ilustra el método seguido en las pruebas. Un extremo del cable se colocó en la prensa, un
peso similar se suspendió del otro extremo del cable y se midió el desplazamiento vertical. Se
utilizaron pesos que no llevaban el cable más allá de su límite elástico. Después de registrar el
grado de desplazamiento vertical, los cables se compararon entre sí y con las "normales" sin
tratamiento térmico. El primer experimento fue uno para probar las propiedades producidas por
un tiempo constante pero una temperatura variable. La constante de tiempo fue de tres minutos.
La temperatura varió desde 500 grados, progresando a intervalos de 100 grados, hasta 1300
grados.

En la figura 2, la línea superior, o línea continua, es la normal sin calefacción.

La línea quebrada inferior muestra los resultados del tratamiento térmico. Cuanto menor sea el
grado de desplazamiento vertical, los conductores son los cables.

Para probar los resultados del tratamiento térmico, se suspendió un peso de dos onzas desde el
extremo de la palanca y se comparó el desplazamiento vertical con el de una normal sin
tratamiento térmico. La normalidad que no se colocó en la unidad de tratamiento térmico se
desplazó 1,3 pulgadas.

El alambre tratado a 500 grados fue desplazado 1.2 pulgadas. El alambre a 600 grados fue
desplazado 1.1 pulgadas. En el rango de 800-900 grados, el desplazamiento fue de 1.2 y 1.1
iniches. Este es el rango donde los alambres deben mostrar menos desplazamiento de acuerdo
con el anterior; es decir, la relación temperatura-tiempo ideal fue de 850 grados durante tres
minutos. A las temperaturas más altas se mantuvieron a 1.1 pulgadas de desplazamiento. En la
primera observación, esto nos llevaría a pensar que el tratamiento con calor no está mejorando las
propiedades del alambre, ya que solo hay una mejora de 1 pulgada en el desplazamiento vertical.

Se pensó que tal vez un peso menor permitiría que la elasticidad se manifestara mejor, dando así
un resultado más definido. El gráfico inferior muestra los resultados después de usar un peso de
una onza suspendido de la palanca. El cable no calentado mostró un desplazamiento de .75
pulgadas y el grado 500 mostró un desplazamiento de .7 pulgadas. A lo largo de la línea .7, .6, .7,
.7, .6, .6 desplazamiento de pulgadas muestra que no hay mucho cambio. Sin embargo, hubo una
leve mejoría en todos los casos de tratamiento térmico (línea discontinua) sobre el cable normal o
no calentado (línea continua), pero no hubo una mejora suficiente de esta prueba para justificar el
tratamiento térmico o para afirmar que es beneficioso. Todos los arcos de acero que se colocaron
en la boca y parecieron exhibir propiedades mucho mejores en el rendimiento que las que no
estaban calentadas.

El siguiente pensamiento fue que la longitud de la palanca del cable probado No fue lo
suficientemente largo para que la acción en el cable se expresara. Dos tramos de cable, siempre y
cuando el horno de tratamiento térmico se pudiera acomodar, se calentaron a 850 grados durante
tres minutos y se compararon con tramos similares de cables sin calentar. Hubo una mejora
proporcional, pero aún no lo suficiente como para hacer reclamos definitivos para el tratamiento
térmico.

La Figura 3 ilustra los resultados de la prueba de estas variables: mantener una temperatura
constante y variar el intervalo de tiempo. Como no hubo una mejor temperatura aparente durante
las pruebas anteriores, se seleccionó una temperatura constante de 850 grados, y el tiempo
elegido fue de treinta segundos a setenta y cinco minutos. Un período de tiempo de más de
quince minutos no es práctico para el uso de la oficina, pero se observaron períodos más largos
con fines informativos.

Se tomaron todas las precauciones para tener muestras de alambre idénticas. Los ganchos fueron
benton en un extremo de las muestras de alambre, y luego se midió y rayó una longitud conocida
en el alambre. El desplazamiento vertical de los cables no calentados se comparó con las
longitudes de los cables tratados térmicamente. Los cables no tratados térmicamente probados
con un peso de quinientos onzas variaron entre 0,4 y 0,55 pulgadas. Esta discrepancia es
insignificante y puede atribuirse a ligeras diferencias en las propiedades de los cables y también al
error en la medición.

Estos alambres se colocaron en el horno y se trataron térmicamente. Los alambres tratados

térmicamente no mostraron diferencias significativas, como se observa en la línea discontinua en
el gráfico inferior. Estos mismos alambres fueron probados de nuevo mediante el uso de un peso
más pesado, un peso de una onza. El desplazamiento vertical producido por el peso más pesado
fue similar en proporción al peso más ligero, como se observa al comparar los dos gráficos.

Fue realmente decepcionante evaluar las pruebas y llegar a la conclusión de que el tratamiento
térmico no estaba produciendo un cambio espectacular en el alambre como se anticipó. Todos los
arcos colocados en la boca durante el procedimiento normal de oficina fueron tratados con calor y
parecían mostrar propiedades definidas que no se exhibían en los arcos usados que no fueron
tratados con calor. ¿Por qué los arcos utilizados en la boca muestran una calidad superior,
mientras que los que se probaron en un experimento aparentemente no mostraron cambios?
¿Fue el "tratamiento térmico" psicológico? Los arcos colocados en la boca durante el tratamiento
tenían numerosas curvas; Los alambres probados eran rectos. ¿Por qué no probar un alambre que
era más como un arco, es decir, uno con numerosas curvas?

Este procedimiento produjo una notable mejora. Para investigar más a fondo, se seleccionó un
patrón definido de curvas, un patrón que tendría suficientes curvas para simular la tensión y la
tensión de un arco de alambre durante el tratamiento También tendría que ser uno que pudiera
reproducirse con facilidad y precisión. Las muestras de alambre se doblaron en un diseño con tres
V en cada lado del alambre y un gancho en un extremo.
El método de prueba fue el siguiente. Se midió la longitud del bucle V apretado. El extremo libre
del cable se fijó en una prensa (Figura 4). Luego se unió una escala de resorte precisa al extremo
opuesto en el gancho, y se seleccionó una tensión arbitraria para ejercer tensión en el resorte. Se
tuvo cuidado de seleccionar una tensión por debajo del límite de elasticidad. Después de que las
muestras de alambre se estiraron de la tensión, fueron retirado de la prensa y la longitud de los
bucles V se midió de nuevo. La cantidad de distorsión se comparó con la normal y con las otras
muestras de alambre tratadas térmicamente. En la Figura 5 se muestra el cable antes del
tratamiento térmico o antes de aplicar tensión. Las muestras reales se muestran, cosidas a la
tarjeta de modo que la primera curva (cerca de la prensa) se alinee con el mismo punto en las
otras muestras. Se hace referencia a los cables de diferentes fabricantes, de modo que el lector
pueda ver la reacción del tipo de cable que podría usar en la oficina.

Estos alambres son .022 x .028 de acero inoxidable adquirido de 'Tri-State Dental Supplies en
Arizona. En la figura, el segundo cable de la izquierda con un cero por debajo no fue tratado
térmicamente. Una tensión de tres libras causó una distorsión de aproximadamente dos veces y
media su longitud original. El resto de los cables se sometieron a un tratamiento térmico de 500
grados a 1300 grados, durante tres minutos, y luego se probaron mediante la prueba de tres
libras. Hay una mejora progresiva o menos distorsión hasta el cable de 900 grados, luego un
rápido descenso hacia abajo al alambre de 1300 grados. El cable de 1300 grados se rompió
durante la prueba.

Para el tratamiento térmico de acero inoxidable, existe una amplia latitud de temperatura para la
mejora del acero, es decir, de aproximadamente 700 grados a 1000 grados. La temperatura
óptima parece ser de unos 850 grados. Mantener el cable a temperaturas más bajas también
mantendrá mejor las calidades de acero inoxidable del acero.

La figura 6 muestra el cable Unitek .021 x .025. El cable en la Figura 5 era .022 x .028;
Naturalmente resistió mejor el desplazamiento. El primero a la izquierda es el cable normal o sin
tratamiento térmico. El cable de 900 grados tiene el menor desplazamiento y, nuevamente, una
disminución a las temperaturas más altas.

Los resultados del tratamiento térmico de Tru-Chrome .018 x .021 inoxidable se ilustran en la
Figura 7. La tensión utilizada para la prueba fue de dos libras. Los cables anteriores fueron
probados con una tensión de tres libras. Nuevamente se lograron aproximadamente los mismos
resultados, siendo el menos distorsionado el grado de 800 a 900 grados. La Figura 8 muestra la
mejora de los cables duros y blandos Tru-Chrome en el tratamiento térmico. Los cables blandos y
duros tratados térmicamente no deben compararse.

La tensión utilizada no fue suficiente para mostrar las diferencias entre los alambres tratados
térmicamente.

A la izquierda, la variedad dura tratada térmicamente mostró una gran mejora. En cuanto a la
rigidez, el tipo duro es superior al tipo blando, independientemente del tratamiento térmico.

Un hecho que debería estar mejor tratado es que el tratamiento térmico no pone una nueva
calidad mágica en un cable. La figura 9 muestra Hard Tru-Chrome .021 x .025. Primero, a la
izquierda, la mejora no tratada con calor, luego la progresiva, y luego una disminución gradual. La
tensión de prueba, tres libras La Figura 10 muestra la variedad suave de Tru-Chrome, pero la
tensión de prueba fue de solo dos libras. La respuesta a las diferentes temperaturas fue la misma
que en las ilustraciones anteriores.

Sin embargo, si se hubiera utilizado una tensión de tres libras en el tipo blando, la distorsión sería
tan grave que no se podría medir una comparación de los resultados de diferentes temperaturas
de tratamiento térmico.

Un cable excepcionalmente suave será un poco más mejorado que un cable duro, pero en general,
la mejora será directamente proporcional al estado original. La figura 11 plantea la pregunta:
¿puede el arco puede mejorarse mediante tratamiento térmico antes de la colocación de doblez
en el arco? El que está a la izquierda es el resultado de un cable recto tratado con washeat; Las
curvas se colocaron más tarde y se probaron. A la derecha, un cable del mismo material fue
doblado y tratado térmicamente. El alambre tratado térmicamente después del doblado exhibe el
menor desplazamiento.

El tratamiento térmico antes de la colocación de las curvas no es beneficioso. ¿El tratamiento

térmico destruye las propiedades del acero inoxidable? Después del tratamiento térmico a 850
grados, los alambres se volvieron ligeramente pajizos. Es muy posible pulirlos con oro rouge en
una rueda de trapo de tres pulgadas, impulsada por un motor de torno, un proceso que toma solo
unos segundos. Un pulidor anódico es innecesario a menos que uno tenga otros usos para
garantizar su compra. Un alambre de acero recto mostró poca variación porque el tratamiento
térmico no modificó su estructura interna. Este hecho puede confirmarse aún más tomando un
arco recto y dibujándolo con cuidado entre el dedo y el pulgar hasta que se forme un arco. Este
cable curvado tenderá a volver a su forma original debido a que su disposición interna no fue lo
suficientemente alterada

Para evitar su devolución, La mejora de los alambres tratados térmicamente con las curvas en V se
debió al hecho de que la manipulación de los alicates era suficiente para alterar la estructura
interna. El tratamiento térmico a la temperatura óptima resultó en un reordenamiento
beneficioso, que restableció la elasticidad del acero. Experimentando con los cables con Ocho
curvas en V, una acepta el desarreglo; porque la propiedad del acero para volver a una línea recta
se pierde, los cables se vuelven flexibles e impotentes. Después del tratamiento térmico, la
estructura interna se reorganiza a una nueva ventaja mecánica. Se restablece el poder.

El tratamiento térmico del acero parece ser un factor cuantitativo. Es decir, el tratamiento térmico
es el resultado de la temperatura multiplicada por el tiempo. Se puede utilizar una temperatura de
700 a 950 grados para intervalos de tiempo de tres a quince minutos. El aparente requisito parece
ser suficiente el calor absorbido para cambiar la estructura interna del alambre. Las temperaturas
inferiores a 700 grados no tienen mucho efecto, y las temperaturas superiores a 1000 grados son
demasiado altas. Los intervalos de tiempo de más de quince minutos no son prácticos para el
procedimiento diario de la oficina. El tratamiento térmico puede compararse con una operación
de soldadura de acero. Si se aplica demasiado calor, el cable muere, y si no se aplica suficiente
calor, no pasa nada. El índice más práctico de tratamiento térmico Para fines cotidianos es un
índice de color. Como en la soldadura, una pajita el color se obtiene cuando el cable ha recibido la
cantidad óptima de calor. Cuando se aplica demasiado calor, el alambre se vuelve de color
chocolate oscuro, al igual que cuando se aplica demasiado calor durante la soldadura.