Fue un abogado, escritor, docente, investigador y activista político guatemalteco,
conocido por participar en la Revolución de 1944 y haber ocupando diversos cargos gubernamentales, académicos y políticos durante el Siglo XX en Guatemala, Chile, Nicaragua y Cuba. Síntesis biográfica Alfonso Bauer era hijo del periodista salvadoreño Carlos Bauer Avilés y de la guatemalteca Abigail Paiz. Sus primeros estudios los realizó en el Colegio Privado La Preparatoria; posteriormente estudió en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional en donde obtiene el título de abogado y notario. Trayectoria Para la época de la Revolución de Octubre, contaba con 26 años y participó activamente en las movilizaciones sociales de entonces. Fue diputado al Congreso de la República de Guatemala durante los meses que duró en el mando la junta revolucionaria de gobierno integrada por Jorge Toriello Garrido, Jacobo Árbenz Guzmán y Arana. Durante el gobierno del Dr. Juan José Arévalo Bermejo 1944 - 1951 se desempeñó como: Subsecretario de Economía y Trabajo. Subjefe del Departamento de Fomento Cooperativo. Magistrado Coordinador de Trabajo. Ministro de Economía. Fundador de los tribunales del Trabajo ante la aprobación del Código de Trabajo en 1947. Miembro de las primeras Juntas Monetarias. Presidente del Colegio de Abogados de Guatemala en 1950 - 1951 En los años del segundo gobierno de la revolución, el del coronel Jacobo Árbenz Guzmán, de 1951 a 1954, tuvo los siguientes cargos: Gerente General del Departamento de Fincas Nacionales. Gerente y Presidente del Banco Nacional Agrario Hacia el final del gobierno del coronel Árbenz conoció a Ernesto Guevara, quién luego sería, el Comandante Ché Guevara de la Revolución Cubana; cuando éste llegó a Guatemala a principios de 1954 procedente de Perú y con una carta de recomendación de la primera esposa del argentino, Hilda Gadea. Guevara conoció a Alfonso Bauer cuando éste lo hospedó en su casa; Bauer no tenía mucho tiempo para atender a su visitante, pues estaba ocupado con sus tareas de gobierno y con la inminente intervención estadounidense en Guatemala; en las contadas ocasiones en que veía a Guevara, siempre lo encontraba leyendo. Cuando se inició la invasión del Movimiento de Liberación Nacional, Guevara colaboró llevando y trayendo información tanto de la embajada de Argentina como de la embajada de México, esta última, donde estaban pidiendo asilo la mayoría de revolucionarios como el propio Bauer, Árbenz, y José Manuel Fortuny.Después de la contrarevolución y posterior derrocamiento del presidente Arbenz en 1954 el nuevo gobierno guatemalteco no permitió la salida de los exiliados de la embaja de México por varias semanas; cuando por fin dejó salir a los exiliados en la embajada de México, Bauer nuevamente albergó a Guevara en la casa donde se encontraba, junto con otros miembros del gobierno arbencista, entre ellos Carlos Gonzáles Orellana, Bauer fue testigo de cómo Guevara y Fidel Castro se conocieron en México; contaba que él solamente miraba que entraba un hombre alto -Castro- y preguntaba por Ernesto, y salían los dos juntos.Guevara no aparecía sino hasta varios días después. Muerte En sus últimos años laboraba en el Campus Central de la Universidad de San Carlos de Guatemala como investigador, y acababa de ser nombrado como el mejor investigador del año en dicha institución. Fiel a su ideología, apoyó a los estudiantes universitarios que exigían una verdadera autonomía universitaria, pero fue despedido por el Consejo Superior Universitario; sin embargo, debido a la solidaridad nacional e internacional las autoridades de la Universidad se vieron obligados a reinstalarlo. Debido a estas intensas jornadas, su salud se resintió y en abril de 2011 fue hospitalizado en el IGSS debido a que había sufrido de falta de oxigeno al cerebro y su estado de salud se había complicado con neumonía hospitalaria, adquirida dentro del IGSS y altamente resistente a los antibióticos. Luego de casi tres meses hospitalizado, Alfonso Bauer Paiz murió el domingo 10 de julio de 2011 a los 93 años, a las 7:45 de la noche de un ataque cardíaco. Pueblo Ruso Los rusos son el grupo étnico más numeroso de Europa y uno de los más grandes del mundo con una población de alrededor de 140 millones de personas en todo el mundo. Aproximadamente 116 millones de rusos viven en Rusia y alrededor de 20 millones más viven en los países vecinos. Un número relativamente significativo de rusos, cerca de 3 millones, viven en otras partes del mundo, principalmente en Norteamérica y Europa occidental, pero también en otras partes de Europa del Este, Asia y otras partes.
Aun cuando la mayoría de la población es de origen ruso, en Rusia conviven más
de 100 nacionalidades de las cuales 57 poseen su propio territorio y 95 no. Entre las diferentes nacionalidades, las más numerosas son las de los tártaros y los ucranianos, seguidas por bielorrusos, alemanes, chuvasios, baskires y judíos. Surgimiento de la etnia rusa Los rusos comenzaron a ser reconocidos como un grupo étnico distinto en el siglo XV, cuando se referían a ellos como rusos moscovitas, durante la consolidación del Gran Ducado de Moscú como un poder regional. Entre los siglos XII y XVI, los rusos conocidos como pomórs migraron hacia el norte de Rusia y se establecieron en las costas del Mar Blanco. Entre los siglos XVII y XX, los migrantes rusos se establecieron previamente en la mayoría de las áreas deshabitadas en Siberia y el Extremo Oriente ruso. Según la mayoría de los etnólogos, los rusos se originaron del primer pueblo Rus que fundó el Jaganato de Rus' (La dendrocronología sugiere que el asentamiento multiétnico Aldeigjuborg, actual Stáraya Ládoga fue fundado en 753, siendo dominado por escandinavos llamados a sí mismos "rus" de acuerdo con los "Annales Bertiniani", quienes paulatinamente irían siendo asimilados por los eslavos orientales, o sea "eslavizados", posteriormente formarían la Rus de Kiev), y gradualmente evolucionarían en una etnia diferente de los pueblos Rus occidentales que se convertierían en los actuales bielorrusos y ucranianos. Algunos etnólogos afirman que los rusos eran un grupo eslavo distinto, incluso antes de la época de la Rus de Kiev. Otros creen que la característica distintiva de los rusos no es principalmente su separación de los Rus occidentales, sino que son una mezcla de tribus eslavas orientales y no eslavas (por ejemplo, ugrofineses, germanos, bálticos y turcos). Sin embargo, el origen de los pueblos eslavos es en sí misma una cuestión en que no existe un consenso. Religión Los rusos son predominantemente de fe cristiana ortodoxa. Según el Centro de Investigaciones Sociológicas de la Universidad Estatal de Lomonósov Moscú, el 43,3% de los adultos se considera adherente de la Iglesia Ortodoxa Rusa, mientras el 50,6% se considera sencillamente cristiano.1 Aunque los rusos no religiosos se asocian en su mayoría con la fe ortodoxa por razones culturales. Algunos rusos son viejos creyentes, grupo cismático relativamente pequeño de la ortodoxia rusa que rechazaba las reformas litúrgicas introducidas en el siglo XVII, la Reforma de Nikon. También existen minorías de católicos, protestantes, mormones, testigos de Jehová, musulmanes, budistas, judíos y neopaganos eslavos. Rusos fuera de Rusia Las comunidades más grandes de rusos fuera de Rusia viven en estados ex- soviéticos, tales como Ucrania (cerca de 8 millones), Kazajistán (cerca de 5 millones), los estados bálticos (aprox. 2 millones), Bielorrusia (aprox. 1 millón), Uzbekistán (cerca de 1 millón), Kirguistán (aprox. 600.000), y Moldavia (aprox. 500.000). Hay también pequeñas comunidades rusas en los Balcanes, en naciones del centro y este de Europa, tales como la República Checa, así como en China y Latinoamérica. Estas comunidades pueden identificarse a sí mismas como rusas o como ciudadanos de estos países, o ambas, para variar los grados. Una cantidad importante de rusos emigraron hacia Canadá, Australia, y los Estados Unidos. Brighton Beach, en el barrio de Brooklyn de Nueva York, es un ejemplo de una gran comunidad de inmigrantes rusos recientes, pero la mayoría de ellos son judíos rusos. Al mismo tiempo, muchos rusos de antiguos territorios soviéticos han emigrado a la misma Rusia desde los años noventa. Muchos de ellos se convirtieron en refugiados de varios estados de Asia Central y el Cáucaso (por ejemplo, de la república separatista de Chechenia), obligados a huir durante el desorden político y las hostilidades hacia los rusos). Alemanes Los alemanes (en alemán Deutsche) son un pueblo que desciende de varias tribus germánicas que habitaban lo que sería posteriormente conocido como la zona de habla alemana de Europa. Con la fundación de la nación moderna de Alemania, que ocurrió recién en 1871 y que no incluyó todo el territorio de habla alemana de Europa, el término alemanes pasó también a designar a los residentes de esta nación. Dentro de la Alemania moderna, los alemanes en este sentido han quedado definidos por su ciudadanía (alemanes federales, Bundesdeutsche), que se distingue de los pueblos con raíces alemanas (Deutschstämmige). Históricamente, en el contexto del Imperio alemán (1871-1918) y posteriormente, los ciudadanos alemanes (alemanes imperiales, Reichsdeutsche) eran diferenciados de los alemanes étnicos (Volksdeutsche). De los aproximadamente 100 millones de personas cuya lengua materna es el alemán, unos 66-75 millones se consideran alemanes. Existen, además, 80 millones de personas de ascendencia alemana en Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos, Francia, Polonia, Perú, Rusia, Uruguay y Venezuela. Además, en el siglo XIX hubo una importante oleada de inmigrantes alemanes en el departamento de Santander, en Colombia. La mayoría de los alemanes residentes en otros países no tienen el alemán como lengua materna.20 Esto pone el número de alemanes en el mundo entre 66 y 160 millones, dependiendo del criterio que se aplique. Nombre Mapa del Imperio romano y Germania Magna a principios del siglo 2. La palabra alemana Deutsche tiene sus orígenes en la palabra diutisc (de diot21 que significa 'gente') del alto alemán antiguo, refiriéndose al idioma germánico "de la gente". No está claro que tan común, o si fue usado alguna vez, este término fue utilizado como un etnónimo en alto alemán antiguo. Su uso como un sujeto, ein diutscher en el sentido de "un alemán" surge en el alto alemán medio, evidenciado desde la segunda mitad del siglo XII.22 Historia Distribución geográfica de las tribus germánicas hacia los años 100 - 300. Históricamente los alemanes estuvieron divididos en varios pueblos o comunidades diferentes. Así durante la Edad Media la lengua común en el norte de Alemania fueron diversos dialectos del bajo alemán medio, una lengua que comparte numerosas isoglosas con el neerlandés, mientras que el centro y sur de Alemania la lengua predominante era el alto alemán medio. En la parte oriental existían numerosos hablantes de lenguas eslavas occidentales, especialmente de polabo y sorabo. Los pueblos germanos desde la antigüedad se habían reconocido como pueblos emparentados, si bien no tuvieron una unidad política y frecuentemente guerreaban entre ellos, si bien se distinguían a sí mismos como colectivos de los pueblos eslavos y de los romanos y otros pueblos de Europa. Las dos principales comunidades lingüísticas alemanas (la del alto alemán y la del bajo alemán) emergiero Nacionalismo Al igual que en otros países de Europa, el nacionalismo llegó a Alemania durante el siglo XVIII y XIX. El nacionalismo alemán se basó tradicionalmente en el idioma y la cultura, debido a la falta de un estado centralizado. El objetivo del nacionalismo alemán en el siglo xix fue unificar los diversos estados más pequeños en un Estado nacional alemán único. Durante el siglo XIX se creó una forma estandarizada de alemán usado en la administración sobre la base del alto alemán. Desde mediados del siglo XIX el bajo alemán empezó a perder prestigio frente a la nueva forma de lengua estandarizada (si bien durante la edad media el bajo alemán había tenido mucho prestigio al ser la lengua oficial de la Liga hanseática). Religión En la actualidad, los alemanes son principalmente cristianos, dividiéndose equitativamente entre protestantes y católicos. Históricamente los protestantes superaban a los católicos, representando dos terceras partes del país, principalmente en la zona norte. Con la pérdida de las regiones protestantes luego de la Segunda Guerra Mundial, sumado además al aumento del agnosticismo y ateísmo en la región este del país, la población protestante disminuyó hasta llegar a un porcentaje similar al que representa el catolicismo. Hoy en día existen regiones rurales y urbanas en donde el cristianismo ha dejado de predominar (principalmente las regiones que antes pertenecían a la Alemania del bloque Este). [cita requerida] Por otra parte, la inmigración ha traído principalmente católicos (italianos, polacos y croatas). Pueblo italiano Características físicas En la región sur de la península apenina la población es marcadamente meditarránea, con importantes aportes principalmente griegos. Por otro lado, en el centro, aunque comienzan a notarse aportes de las poblaciones alpinas del norte peninsular, la relación etno-cultural con el sur es más sólida. Pueden establecerse prevalencias estadísticas de distintos modelos antropológicos definidos tanto genotípica como fenotípicamente pero generalmente se establece que los rasgos más evidentes son la predominancia del color de piel blanco — interpretada tradicionalmente como raza caucasoide— y el color de pelo oscuro, castaño o negro, generalmente denominado como raza mediterránea. Origen y formación del pueblo italiano Edad antigua Fresco Etrusco, Siglo V a.c. en la Tomba dei Leopardi, Necropolis de Monterozzi, Tarquinia, Italia Los italianos tienen orígenes principalmente de los pueblos indoeuropeos (Latinos, Oscos, Umbros, Venetos, Ilirios, Sículos Griegos, etc.) y, en menor medida, preindoeuropeos (Etruscos, Fenicios y Sicanos), que en edad prerromana poblaron Italia mezclandose a menudo con la población autóctona. Todos esos pueblos, que Roma absorbió entre el siglo IV y II a.C., subieron un profundo proceso de romanización que culminó con la adquisición de la ciudadanía romana por parte de todos los hombres libres nativos de la Italia peninsular y continental (89-49 a.C.). Medio siglo después esos nuevos romanos pasaron a constituir, gracias al Emperador Augusto, una unidad política llamada Italia (7 d.C.), articulada en once regiones que en parte han sobrevivido hasta nuestros días con las mismas. Edad medieval y moderna Desde la primera década del siglo V, el Imperio Romano de Occidente, fue invadido por pueblos prevalentemente germánicos, que determinaron su caída (476) y causaron muerte y destrucciones en la mayor parte de la antigua Europa romana durante largo tiempo. La progresiva romanización de esos pueblos y la fusión con el elemento autóctono de lengua y cultura latinas les permitió constituir una serie de estados, si bien caracterizados por un modesto nivel de desarrollo. Esa época de larga duración es conocida como el Período de las grandes migraciones o de las invasiones bárbaras que conllevaron para los italianos guerras y carestías a partir del año 401, con la primera invasión de los Visigodos de Alarico seguidas, hacia el 450, por los estragos perpetrados por los hunos de Atila en el norte peninsular. Sociedad y Cultura Históricamente, desde el medioevo, los italianos se han identificado más con su ciudad y región que con el Estado italiano, unificado recién entre 1861 y 1870. Esto sigue siendo parcialmente evidente en la cultura italiana de hoy pese a que la lengua italiana reemplazó en el último siglo y medio a los numerosos dialectos y lenguas del lugar. El proceso de industrialización y modernización de Italia acaecido en los últimos decenios ha creado una sociedad uniformizada y altamente desarrollada en todos sus sectores socio-económicos: una eficiente red de autopistas, aeropuertos y ferrocarriles normales/alta velocidad24 unifican -también socialmente y culturalmente- toda Italia desde los Alpes hasta Sicilia. La religión predominante en los italianos de todo el mundo es el catolicismo. Diáspora italiana En Italia, el lugar de procedencia de los italianos, existen actualmente 61 millones de habitantes. Sin embargo, un número importante de italianos emigraron durante los siglos XIX y XX a distintos países del mundo debido a problemas políticos, económicos y sociales (casi 30 millones entre 1850 y 1976). De esta forma podemos encontrar en América grandes asentamientos de descendientes de italianos en naciones tales como: Brasil, Argentina, Perú, Uruguay y Venezuela y, aunque no fueran una influencia determinante ni étnica ni culturalmente en su sociedad, también Estados Unidos. De acuerdo con el Departamento del Interior y Ordenación del Territorio de Italia: en Brasil, Argentina y Estados Unidos existen 22.753.000, 15.880.000, y 15.502.248 de descendientes en algún grado de italianos respectivamente.1 De igual manera existen diversas fuentes que afirman que los descendientes de italianos en Brasil y Argentina serían cercanos a los 30 millones y 25 millones respectivamente.