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UNIVERSIDAD PRIVADA ANTENOR ORREGO

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas


Escuela Profesional de Derecho

CURSO: ETICA Y DEONTOLOGÍA JURIDICA

TEMA: EL DERECHO DE ACCIÓN DE LOS MENORES EN LOS


JUICIOS DE ALIMENTOS

ALUMNO: LEON VEREAU JOSE RICARDO

DOCENTE: PELAEZ CORZO, LUIS

Trujillo-Perú
2018
INTRODUCCION

Actualmente, ha cobrado importancia esencial el tema sobre los juicios de


alimentos, principalmente por lo que significa hoy en día el deterioro de la palabra
familia, en lo que se refiere a los problemas conyugales que repercuten en la
crianza de los menores de edad, ocasionando que estos sean despojados de un
derecho que podría significar la continuidad de una vida normal y una alimentación
justa.

Almeida(1989), determina que juicio de alimentos “es el acto procesal, inicial, a


instancia de parte, que interpone el alimentista o su representante legal, con las
formalidades requeridas por ley y en virtud del cual el actor somete su pretensión
al Juzgador, pidiendo una sentencia favorable a su interés”.

A nivel mundial, la mayoría de países han implementado la penalización del


impago del derecho alimentario, ya que es un derecho que cubre las necesidades
primarias de las personas, actualmente las adolescentes de entre 15 a 20 años
representan el 38% a nivel mundial de “Madres solteras”, en Holanda se multiplica
por 7 el número y en España por 10, de las cuales en Países como el Perú solo el
20% reciben pensión alimenticia de parte de los padres.
A nivel nacional es de conocimiento público que existen diversas formas para
iniciar un procedimiento que tenga como finalidad el cumplimiento de la obligación
alimenticia de los padres para con sus hijos. Desde gestiones extrajudiciales,
hasta procesos judiciales que en casos extremos puede terminar con los obligados
en la cárcel.
A nivel local, perteneciente a la ciudad de Trujillo escogí sectores de bajo nivel
socioeconómico para basar mi ensayo en este caso nos situamos en el sector El
Milagro, el cual se encuentra ubicado en una zona muy alejada en la ciudad de
Trujillo, este sector es uno de los sectores más afectados debido a que es
considerado como un sector en bajo de recursos y con un gran índice de madres
abandonadas.
Actualmente, las personas que demandan un juicio de alimentos son muchas; sin
embargo, aún es notable la existencia de personas que ignoran esta garantía
otorgada por el Estado. Es de urgencia determinar cuáles son los factores que
permiten reconocer cuando es adecuada una intervención judicial con el objetivo
de hacer cumplir de manera efectiva el derecho de alimentario que le corresponde
a cada menor por su condición de tal.
Dentro de los factores críticos que predisponen la aparición de los juicios de
alimentos destacan: La pobreza, el miedo al qué dirán (perjuicios sociales), el
miedo a agresiones, la ignorancia sobre este mecanismo.
Cerca del 45% de los niños y adolescentes peruanos según INEI (entre 0 y 17
años) viven en condiciones de pobreza, mientras que el 19% se desarrolla en
medio de la pobreza extrema, esto sumado a que tal vez esto debido a que solo
tienen una fuente de ingreso en sus hogares que, además madres según el
INEI(2015), el 25% de las madres cría solas a sus hijos y solo el 5% exige el
derecho a los alimentos,
Como bien se sabe en el Perú los menores de edad, cuentan con derecho de goce
con respecto a todos los derechos protegidos desde su concepción o anidación,
mas no cuentan con derecho de ejercicio que en mi apreciación es fundamental
poder velar por este para que el derecho alimenticio no sea vulnerado por los
padres o apoderados.
Entre madres, padres y apoderados existen muchos motivos que conllevan a la
“mala representación” no pidiendo alimentos, e indirectamente afectando el
derecho del alimentario.
El miedo a agresiones por parte de la pareja repercute en la omisión de la madre
de interponer una demanda, otro factor influyente es la ignorancia, el problema
más grande es no saber que existen leyes que velan por el derecho alimentario de
los menores de edad.

Ante estos factores críticos que ocasionan los juicios de alimentos, las evidencias
más importantes que pudimos rescatar fueron las siguientes: El abandono familiar
por parte del padre o la madre, el descuido de la crianza del hijo, la inexistencia de
una debida planificación familiar.

Finalmente puedo concluir que mi principal propósito en este ensayo es dar a


conocer los motivos esenciales, por los cuales, las madres se niegan a pedir una
pensión alimenticia y así poder encontrar soluciones a la vulneración del derecho
alimentario que sufren algunos menores de edad, que al no ser blindados
correctamente por el derecho, ven vulnerados sus derechos al no poder
ejercitarlos.
Entre las soluciones que propongo yo, serían como principales las siguientes:

 Creación de régimen alimenticio del padre/madre hacia el apoderado, padre


o madre a cargo del menor de edad desde el momento de su inscripción o
reconocimiento.
 Complementar este régimen con normas complementarias que permitan
una pensión digna desde el momento de la prueba de paternidad o coito
durante el tiempo de embarazo.
 Creación de centros destinados a velar por los menores de edad, en lo que
a sus derechos alimenticios corresponde.
Estas son algunas de las posibles soluciones a este problema.
ARGUMENTACIÓN

Castillo (2008) en su proyecto “La necesidad de hacer un estudio socioeconómico


antes de fijar pensiones alimenticias” sostiene que las madres creen que si inician
un proceso por alimentos judicial o extrajudicialmente el padre tenga la idea o el
animus de quitarles a su o sus hijos. Esto no es posible, y por tal las mujeres,
padres o apoderados deben iniciar las acciones judiciales o extrajudiciales sin
miedo, además advierte que la propia ley impide que se realice una investigación
acerca de los ingresos del demandado. Además, advierte que las madres que
exigen una pensión alimenticia son más propensas a la violencia como una
reacción del demandado a aportar alimentos y esto no es solo violencia física y
psicológica si no también “violencia económica” la que podemos definir como “todo
acto que atente contra la solvencia económica de los pasivos en este caso las
madres y como consiguiente sus hijos.”
Como se sabe el derecho de alimento es un atributo, una garantía que no solo se
encuentra reconocido en nuestra norma, si no en normas supremas y tratados
internacionales como “La Declaración Internacional de los Derechos Humanos”, de
esto podemos además referir que los alimentos tienen como principal propósito la
satisfacción de necesidades esenciales del ser humano las cuales son como ya
sabemos los alimentos propiamente dicho, la salud, la vestimenta, la educación, la
recreación, entre otros que buscan la correcta formación y la dignidad humana.
Este derecho está garantizado en el Art. 287 del Código Civil Peruano, el cual
regula lo necesario en cuanto al derecho alimentario, no solo en cuando al padre
con el hijo, sino a todos los familiares que necesiten ser asistidos de tal manera ya
sea padre, madre, hijo, hermano, etc.
Al haber trabajado en una juzgado de familia de esta localidad (Trujillo) he podido
llegar a comprender mucho mejor el derecho de alimentos en el Perú y así es
como que he llegado a la conclusión que si el apoderado del menor no vela por él,
nadie lo hará, el miedo, orgullo, autosuficiencia que posean los padres no puede
privar a un menor de edad de cualquier derecho que a este le corresponda por
más insignificante que sea.
Actualmente los jueces de familia se encuentran debatiendo acerca de las
sentencias a favor de la tenencia compartida, compartiendo los gastos ,
compartiendo el tiempo del menor de edad con cada familia, etc. Pero ¿Por qué
los jueces de familia no discuten acerca de los menores de edad que no reciben
pensión, no porque el padre no quiera , sino porque las madres no lo impugnan?
Esta es una interrogante difícil de contestar y a la vez muy importante, ya que
estamos hablando del interés superior del niño y de tal vez una afectación no solo
al derecho alimentario sino también al derecho a la vida y la integridad física, ya
que el derecho de alimentos no solo es necesario para los niños de 7 o 9 años , si
no también es esencial para el “concebido” siendo de prioridad su asistencia
puesto que este derecho durante esta etapa no solo se encuentra ligado al
derecho alimentario si no básicamente a la subsistencia del menor es por ellos
que tal derecho no solo es garantizado por la legislación peruana sino también por
los tratados internacionales , los que tienen rango de ley al haber sido firmado por
estados soberanos según el principio de “PACTA SUN SERVANDA”.
De esta posición puedo aportar que se desprenden tres teorías las cuales nos
ayudaría a entender mejor mi postura en cuanto al derecho alimentario de los
menores de edad.
El primero es la teoría “Patrimonial”, esta teoría define al derecho de alimentos
como un derecho exclusivamente patrimonial, en palabras más sencillas el
derecho alimentario es un derecho que culmina con el aporte económico del padre
y obligado, o cómo podemos decir coloquialmente con el depósito mensual
termina la obligación, esto es falso, porque el derecho de alimentos es una
garantía que como ya hemos explicado va mucho más allá de poder extinguirse
con el aporte mensual del padre.
Messina (1994), indica que “puede desinteresarse del modo y la medida en el que
el alimentado lo emplea” (p.140).

Con relación a la naturaleza jurídica de los Alimentos, Pérez (2014), señala que
una tesis patrimonial se considera como tal, cuando son susceptibles de
valoración económica, mientras que los considera de carácter personal cuando no
son apreciables pecuniariamente (p.4).

La teoría “No Patrimonial” que tiene como principales exponentes a CICU Y


RUGGIERO definen a los alimentos como un derecho extra patrimonial ya que no
aumenta de ninguna manera el patrimonio del beneficiario es decir del alimentista
todo lo contrario todo el patrimonio destinado para él será consumido por este al
momento de su desarrollo fisiológico.

La teoría “SUI GENERIS” que es la teoría en cual baso mi postura es aquella que
define al derecho alimentario como un derecho especial, que va más allá de lo
material, que tiene un fin especial con intereses familiares, que por su contenido
podría entrar en los derechos patrimoniales pero que por su naturaleza entra en la
categoría de los derechos obligacionales.
La posición Sui Generis, considera que la institución de alimentos es un derecho
sui generis precisamente por no ser voluntaria, si no legal ya que al ser voluntaria
no sería una obligación por lo que lo antes explicado no podría categorizar al
derecho de alimentos y se podría dar por concluido cuando el que proporciona los
alimentos lo decida.
En este caso el derecho de alimentos es un derecho meramente formal debido a
que debe seguir las formalidades prescritas en la ley.
Con estos apuntes se puede determinar que el derecho alimenticio es un derecho
Sui Generis tomando en cuenta que es un derecho especial y que nace con la
conformación de la familia y no un derecho genérico.

Luego de tener una visión más enfocada a lo que es los alimentos y a como se
debe tomar este derecho en cuanto a doctrina refiere, nos toca entrar un poco más
en aquellos que atacan principalmente a lo que referimos como problema
principal.
Para empezar como ya lo hemos dado a conocer anteriormente uno de los
principales motivos por el que se falta para con el menor al no pedir alimentos es
el miedo que puedan tener las madres. Este miedo se puede subdividir en
razones, para mí la principal razón es que “estamos en Perú” que significa esto,
esto significa vivir en un país en el que el machismo está muy arraigado, en donde
las mujeres aún viven escondiéndose dando explicaciones y cuidándose de los
hombres al salir de las calles, esta problemática ha hecho que se creen
innumerables leyes que favorecen a las mujeres, leyes que no ayudan para nada
al país sino que hace que los nuevos tipos penales sean inaplicables en la
realidad peruana. El miedo que puede tener una mujer a ser maltratada física,
psicológica y económicamente por el simple hecho de solicitar un derecho, que ni
siquiera la beneficia hace que solicitar tal derecho sea tan difícil y pone a esto
como la principal causa de que nos conduciría al problema materia de discusión.

La segunda razón que he tomado en cuenta es la ignorancia, como ya he


explicado es cierto que vivimos en un país subdesarrollado ,pero eso no significa
que tengamos que vivir en un país sumergido en la ignorancia, pero
lastimosamente tenemos leyes creadas para promover la ignorancia, en un país
que tiene un porcentaje alto de analfabetismo , donde las personas que compran
periódicos prefieren leer diarios chichas que informarse bien , las leyes dicen que
para informarse alguna ley se tiene que leer el diario y solo tienes una oportunidad
para hacerlo. Esta no es la solución a la ignorancia en la sociedad como ya lo he
demostrado la sociedad no solo influye en la comisión de delitos si no como
podemos ver ahora en la formación de los menores de edad, “futuro” del país.

Y por último tomo el orgullo y la autosuficiencia como la tercera razón que hace
que se desarrolle más este problema, esta razón aunque parezca pobre y
desestimada no significa otra cosa más que privar a tu hijo de sus derechos, una
persona es psicológicamente afectada cuando tiene problemas familiares, mucho
más cuando se convierte en madre o padre soltero, pero este no puede ser un
motivo para privar a tu hijo de un derecho que antes de su nacimiento ya tenía.
PROPUESTAS VIABLES
Para empezar con las propuestas viables que podrían dar solución a nuestro
problema principal es propicio empezar con la que podría ser la menos adecuada
para nuestro país, la creación de un régimen automático de pensiones alimenticias
en el Perú, crearía una “sentencia” automáticamente al reconocimiento del hijo o
con la prueba del ADN o coito durante la concepción del menor de edad.
La creación de esta norma tendría que tomarse con “pinzas” ya que como lo he
mencionado antes vivimos en un país en el que tal vez buscar la solución con la
creación de esta norma especial, nos complicaría un poco al momento de la
concepción, ya que habría que darle un poco más de crédito a la declaración de la
madre convirtiendo a esta en la “prueba principal” que daría motivo a esta
hipotética sentencia.
Pero al valorar ambos problemas es imperativo poner en una balanza ambos
problemas y así dar una mayor protección al interés superior del niño.
La creación de esa norma eliminaría en un porcentaje “El miedo” a demandar de
parte de las madres en el Perú, ya que al ser un régimen automático , no habría la
necesidad de demandar, sería más rápido y en todo caso caería sobre el
hipotético padre la carga de la prueba, serían los padres los interesados en
recurrir a la prueba de ADN en lugar de la madre, aceleraría el proceso de
alimentos y reduciría la carga procesal en el Perú.
La segunda propuesta viable sería la creación de normas complementarias, como
podrían ser la culminación automática del proceso al obtener la declaración del
padre o la prueba de ADN.
Esta culminación automática se podría dar al aplicarse la primera de estas normas
complementarias que a mi parecer sería “Ofrecer la prueba de ADN en la
contestación de demanda” para el demandado sería un requisito de admisibilidad
el cual al no cumplirse daría paso al auto final declarando el proceso a favor de la
madre.
Esta norma beneficiaría mucho a los alimentistas, ya que si bien es cierto se tiene
que pasar por delante los dos principales problemas como lo son el miedo y la
ignorancia habría un aumento exponencial en lo que corresponde al tiempo, ya
que obligaría a acelerar los procesos dando resultados más rápidos acelerando el
proceso, por ende las pensiones y reduciendo la carga procesal en el país.
La segunda norma complementaria que planteo en mi trabajo es plantear la
gratuidad automática del proceso de alimentos, por que como sabemos los costos
del proceso pueden ser motivo de la abstención de la petición de alimentos en el
Perú, la norma complementaria de gratuidad automática haría mucho más rápido
la presentación de demanda y por consiguiente también la culminación del
proceso.
Por último la tercera normal complementaria sería la aplicación de un beneficio
estatal para aquellas madres o padres solteros que empezaron un proceso de
alimentos pero que no resultó beneficioso, no porque no se haya podido concluir
con el proceso si no porque existen deudores alimentario morosos sobretodo
viviendo en el país de la viveza , planteo que el gobierno de una pensión
provisional de 2 años como plazo máximo después iniciado el proceso de
alimentos lo que garantizaría un apoyo económico para el que busca el
reconocimiento de tal derecho hasta el cumplimiento de tal por parte del obligado.
Y ahora hablaremos de aquella propuesta que se encargaría de atacar
directamente el problema planteado, por lo explicado up supra fluye que si bien es
cierto se vulnera el derecho de un menor de edad al no solicitar una pensión
alimenticia, sea por la razón que fuese, esto no sería así si los menores de edad
tuvieran derecho de ejercicio con respecto a su derecho alimentario al menos.
La propuesta no significa otorgarle las facultades de un mayor de edad a una
persona que aún no ha desarrollado todas sus facultades, más bien busca que
aquellos menores de edad afectados por la decisión de sus apoderados, puedan
“defenderse” de tal decisión eligiendo por sí mismos.
Es por eso que como se es de apreciar propongo la creación de instituciones
jurídicas dirigidas por el estado y para los menores, porque por mi experiencia
laboral y personal, veo al estado solo interviniendo en los casos de los menores de
edad para retirarlos de sus casa internándolos en albergues en donde son
cuidados con mayor atención pero sin mayor afecto de su madre o su padre, que
es lo que requiere un niño, más aun si se trata de un menor de edad.
Si bien es cierto estos niños son alejados de sus familias por haberlos encontrado
en estado de indefensión o trabajando, en algunos casos también es cierto que si
se encontraban solos en casa o solos trabajando era porque o bien su madre
estaba trabajando o porque él quería apoyar en su casa, no estoy tratando de
defender a los padres que ponen a trabajar a sus hijos e incluso los golpean, en
estos casos si es apropiado la internación de los niños en albergues, pero en los
casos en los que no corresponde esto, se tiene que entender que algunos niños
son obligador no por sus padres si no por sus situaciones a intervenir de manera
activa en la manutención de la familia.
Estas instituciones estatales se encargarían de la educación en lo que a sus
derechos corresponde en los menores de edad del Perú, además les brindarían un
apoyo jurídico gratuito con el que los menores pudieran ejercer sus derechos
efectivamente sin requerir apoyo de los apoderados si estos no quisieran.
Por último me gustaría tocar un tema que no sería nada fácil de resolver, la
ignorancia como una de las causas principales que “llevan” a las madres a no
solicitar los alimentos en el Perú.
Lo mencionado Up supra nos acondiciona de razones suficientes por lo que la
ignorancia en el Perú es una de las causas principales de todos los problemas del
que este estado sufre.
Y uno de los problemas principales tiene que ver con los menores de edad, está
demostrado que muchas de las madres en el Perú no tienen idea de que existen
regímenes especiales para ellas, que protegen a su familia, a sus hijos y que
sobretodo puede acceder a un derecho tan justo y esencial como es el derecho de
alimentos.
Sin duda la ignorancia o desinformación en todo caso está afectando no solo a los
menores sino a todos los ciudadanos del Perú y en un país que no quiere
informarse, gobernado por la desinformación es muy difícil cambiar esto, la
solución no sería otra más que empezar desde los Colegios nacionales y
particulares, informando mejor a los niños desde el colegio, ya que intentar educar
a los padres de familia sería muy difícil.
Sin mas que decir doy gracias por haber leído este ensayo que no tiene otra
misión mas que dar a conocer un problema grave que vivimos en el país del que
no estamos enterados muchos.
CONCLUSIONES
 Los alimentos constituyen derechos fundamentales de las personas que
incluyen en ellas los alimentos, la salud, la vestimenta, etc. Que como país
no podemos ignorar, mucho menos cuando se trata de nuestros menores
de edad.
 La fijación de pensiones debe ser en razón y proporción a lo que necesitan
los menores peticionantes y al monto que gana el obligado a pasar pension
alimenticia.
 El cambio de régimen en el Perú beneficiaria a muchos niños en el presente
y futuro, lo que los sacaría de las calles y pondría más énfasis en la
educación de nuestros menores.
 La Convención sobre los Derechos del niño, del cual el Perú es Estado
parte; recoge un Principio fundamental como es el Interés Superior del Niño
por el cual se basa su investigación, dando a conocer esto es imposible no
pensar en el daño que se está haciendo a aquellos niños que no gozan de
sus derechos, sobre todo si es por decisión de sus apoderados o por
desinformación o ignorancia de estas , las creaciones de instituciones
dedicadas a los menores de edad suplirán estas carencias y apoyaran en la
formación de menores.
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