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ACCIÓN SIGNIFICATIVA PRIMER SEMESTRE 2011

ENTRONIZACIÓN DE LA SAGRADA ESCRITURA

OBJETIVO: Al finalizar la acción significativa del primer semestre, la comunidad parroquial,


en sus sectores y en las familias, está sensibilizada en el sentido y en el valor que tiene la
Sagrada Escritura en la vida personal, familiar, comunitaria y eclesial, y ha crecido en el
interés por conocerla en sus aspectos básicos fundamentales.

SIGNO: Entronización de la Sagrada Escritura

MODALIDAD: Parroquial, sectorial y familiar

I. ENTRONIZACIÓN DE LA SAGRADA ESCRITURA EN EL TEMPLO PARROQUIAL:

INDICACIONES Y SUGERENCIAS:

- El EPAP y los sacerdotes motivan con anterioridad la participación en la Acción


Significativa
- Invitar a que todos los participantes a llevar la Biblia para bendecirla en la celebración.
- La acción significativa de la entronización de la Sagrada Escritura puede realizarse en la
Eucaristía que se aplica por el pueblo o también, si se considera conveniente, en todas
las Eucaristías del Domingo.
- Se prepara con anticipación el ambón donde va a ser colocada la Sagrada Escritura (o
una mesa con el atril en un lugar privilegiado), puede ser con flores, velas y/o algún
motivo especial que se puede ir renovando permanentemente, por ejemplo, con los lemas
propuestos para cada mes, pues se sugiere que este sitio permanezca durante el año.
- Si la Entronización es solemne, se usan los ciriales y la cruz alta para la procesión; si es
sencilla, la persona designada lleva en alto la Biblia durante toda la procesión hasta el
lugar designado.
- De ser posible, que muchas personas tengan el guión de la acción significativa, a través
de fotocopias o la proyección de cada momento.

AMBIENTACIÓN:

La entronización de la Palabra es especialmente significativa al iniciar la segunda etapa de


nuestro Plan Diocesano de Renovación y Evangelización, en este año del redescubrimiento
del sentido de Ella y su conocimiento básico, pues expresamos el deseo de encontrarnos con
Jesucristo, Palabra del Padre, Camino, Verdad y Vida de la humanidad.

Entronizar solemnemente la Palabra de Dios en nuestro templo parroquial hoy, es una


confesión de fe por parte de la comunidad de los creyentes. Con este gesto, reconocemos la
presencia misma de Dios en su Palabra, y la hacemos centro de nuestra comunidad
diocesana y de nuestra vida. Alrededor de su Palabra, escuchándola y acogiéndola como
Palabra de Vida, crecemos en nuestro camino de seguimiento del Señor y en nuestra
dedicación a la causa del Reino, como comunidad de creyentes, testigos del amor de Dios.

ENTRONIZACIÓN:

La Eucaristía comienza normalmente y después de la oración colecta se dirige la atención


hacia la entrada del templo.

Se aconseja conceder unos segundos de silencio orante a los participantes, para poder
prepararse a este gesto comunitario en la intimidad del corazón. La idea es crear un clima
propicio para la acogida y escucha de la Palabra de Dios.

Sacerdote: Invita al silencio.

"Que el Señor Jesús, Palabra de Vida que ilumina nuestro entendimiento e inflama con su
amor nuestro corazón, presida nuestro templo parroquial con su presencia amorosa, a través
de la Sagrada Escritura para gloria suya y bien de nuestra comunidad. Rindiendo homenaje y
culto a la Palabra de Dios, iniciemos nuestra procesión de Entronización de la Sagrada
Escritura como manifestación de nuestra alegría y recibámosla con un fuerte aplauso.” (Inicia
la procesión solemne)

CANTO:

TU PALABRA ME DA VIDA; CONFÍO EN Mi alma está llena de tristeza,


TI, SEÑOR.
Consuélame, Señor, con tus promesas.
TU PALABRA ES ETERNA: EN ELLA
ESPERARÉ.
Escogí el camino verdadero
Y he tenido presente tus decretos.

Dichoso el que, con vida intachable, Correré por el camino del Señor,

Camina en la ley del Señor. Cuando me hayas ensanchado el corazón.

Dichoso el que, guardando sus preceptos,


Lo busca de todo corazón. Éste es mi consuelo en la tristeza:
Sentir que tu Palabra me da vida.

Postrada en el polvo está mi alma, Por las noches me acuerdo de tu Nombre,

Devuélvame la vida tu Palabra. Recorriendo tu camino, dame vida.


Al llegar al altar, la Sagrada Escritura es entregada al sacerdote quien la coloca en el lugar
privilegiado, la inciensa o la venera con un gesto bien expresivo; asimismo, en
representación de toda la comunidad, se acerca a venerarla una familia completa o una
pareja de esposos, un niño, un joven, un adulto mayor, una religiosa, un representante de las
autoridades competentes o personas representativas de la comunidad. Luego de esto se
pasa al pregón.

PREGÓN DE LA PALABRA

Dos personas de la comunidad proclaman el pregón:

1. He aquí, hermanas y hermanos, la Palabra de Dios que nos llega como un gran regalo del
amor de Dios.

2. Tu Palabra, que resuena desde siempre en la historia de tu pueblo, pronunciando nuestros


nombres y llamando a nuestras puertas.

1. Es la voz del silencio sonoro de Dios, la voz eterna hecha tiempo, la voz del misterio hecha
luz, la voz de Dios hecha letra, sílaba y Palabra.

2. Tu Palabra tiene un rostro humano: Jesucristo, tu hijo amado; El que pudo decirnos
hermanos y es Palabra que pronuncia nuestros nombres y llama a nuestra puerta.

1. Abrámosle, la puerta…. Todas las puertas y ventanas. Abrámosle las manos y los brazos,
los ojos y los oídos, abrámosle el corazón y todo nuestro ser para acogerla con alegría.

2. Jesús - Palabra, pondrá luz radiante en la noche oscura de nuestras vidas, alumbrará con
su fuego ardiente el frío de nuestro egoísmo, nos liberará de nuestras esclavitudes y llenará
de esperanza nuestros ojos cansados.

1. Jesús- Palabra derramará su Espíritu de Resucitado en nuestros corazones para hacernos


capaces de amar, y nos hará ver las necesidades de nuestros hermanos para que
aprendamos a compartir en familia y en comunidad.

2. Abramos pues, hermanos y hermanas, nuestros corazones y nuestras familias a la Palabra


de Dios. Amén.

Finalmente, para cerrar el acto de entronización de la Sagrada Escritura en la parroquia, toda


la comunidad proclama la siguiente oración (Si todos pueden tener la copia sería bueno, de
no ser así que la gente vaya repitiendo después del sacerdote):

“Señor, Padre de Jesús y Padre nuestro, te damos gracias porque has querido darte a
conocer por medio de tu Palabra, porque te has revelado en Jesús. Te pedimos que nos
ayudes a acoger tu Palabra en nuestra comunidad parroquial, a redescubrir su sentido y
animarnos a conocerla profundamente de manera que ella pueda fecundar y producir mucho
fruto: fruto de amor y reconciliación en esta nueva etapa de nuestro Plan Diocesano de
Pastoral. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.”

Luego de la veneración, el pregón y la oración, empieza la proclamación de los textos.

Monición:

Desde el Antiguo Testamento, la Palabra de Dios era colocada en un lugar preponderante, y


desde ese lugar se proclamaba para todo el pueblo, iluminando sus proyectos. Con Jesús,
Palabra de vida, Palabra encarnada, es proclamada hoy como Buena Noticia para todos
nosotros. Escuchemos.

Después de la proclamación del Evangelio, se canta nuevamente “Tu Palabra me da vida” y


el sacerdote da la bendición con la Sagrada Escritura.

PRECES

Celebrante:

Demos gracias a Dios que por medio de Jesucristo, su Palabra eterna, ha creado el mundo y
por su Encarnación nos creó de nuevo, redimiéndonos. Pidámosle por el mundo entero, para
que llegue a todos la salvación. Oremos juntos diciendo:

R/. Te rogamos, óyenos.

1. Para que el Evangelio penetre en los pueblos, se encarne en las culturas y hermane a
todos los hombres sin distinción de condición social, raza, lengua o religión. Roguemos al
Señor.

2. Para que la Palabra de Dios, viva y eficaz, llegue al corazón de nuestros gobernantes, los
transforme y los haga comprometerse en la búsqueda sincera de la paz, la justicia y el
bienestar. Roguemos al Señor.

3. Para que todos nosotros, en comunión y participación, vayamos al encuentro de la


Palabra, le abramos nuestros corazones y obtengamos de Dios la fuerza, la valentía y el
amor suficientes para responder a nuestra vocación. Roguemos al Señor.

4. Por todos los pequeños grupos de familias que van naciendo y se están formando en
nuestra comunidad parroquial para que se abran a la acción del Espíritu y así descubran la
alegría de compartir el mensaje de Dios. Roguemos al Señor.

5. Por nosotros, reunidos alrededor de la mesa de la Palabra y la Eucaristía, para que


escuchando su Palabra, comiendo su Pan y bebiendo su Cáliz formemos con todos los
cristianos un solo Cuerpo movido por un mismo Espíritu. Roguemos al Señor:
Celebrante:

Señor y Dios nuestro, que nos llamas al seguimiento de tu único Hijo, Jesucristo, y nos
invitas a trabajar por tu Reino: atiende nuestras súplicas y haznos cada día mejores
participantes en la comunidad, humanos y solidarios, para que podamos responder con amor
al amor que nos has dado y ofrezcamos los frutos abundantes del trabajo que hacemos en
nombre de Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad Espíritu Santo, por los
siglos de los siglos.

BENDICIÓN DE LAS BIBLIAS

Después de la oración postcomunión, el sacerdote invita a quienes hayan llevado la Sagrada


Escritura, a que la pongan en alto o se acerquen al presbiterio para la bendición. (Buscar una
oración apropiada en el bendicional).

II. ENTRONIZACIÓN DE LA SAGRADA ESCRITURA EN EL SECTOR

INDICACIONES Y SUGERENCIAS:

- El equipo de coordinación sectorial con la ayuda del párroco, convocan para el encuentro
y destinan el sitio de reunión
- Preparar un atril, mesa o lugar destacado para colocar la Biblia abierta.
- Velitas encendidas junto a la Biblia.
- Poner el lema del año y el lema del trimestre

AMBIENTACIÓN:

La entronización de la Palabra es especialmente significativa al iniciar la segunda etapa de


nuestro Plan Diocesano de Renovación y Evangelización, en este año del redescubrimiento
del sentido de Ella y su conocimiento básico, pues expresamos el deseo de encontrarnos con
Jesucristo, Palabra del Padre, Camino, Verdad y Vida de la humanidad.

Entronizar solemnemente la Palabra de Dios en nuestro sector parroquial hoy, es una


confesión de fe por parte de la comunidad de los creyentes. Con este gesto, reconocemos la
presencia misma de Dios en su Palabra, y la hacemos centro de nuestra comunidad
parroquial y de nuestra vida. Alrededor de su Palabra, escuchándola y acogiéndola como
Palabra de Vida, crecemos en nuestro camino de seguimiento del Señor y en nuestra
dedicación a la causa del Reino, como comunidad de creyentes, testigos del amor de Dios.

MOTIVACION:

Hermanas y hermanos, nos hemos reunido alrededor de la Palabra de Dios, que Ilumina
nuestras vidas y la vida de nuestra comunidad sectorial. En este inicio de la segunda etapa
de nuestro Plan Diocesano de Pastoral queremos acoger la Palabra de Dios en nuestro
sector así como lo hicimos en nuestro templo parroquial, para nutrir nuestras vidas y a
nuestras familias.

CANTO: Escoger alguno adecuado

TU PALABRA ME DA VIDA CONFÍO EN TI SEÑOR;

TU PALABRA ES ETERNA EN ELLA ESPERARÉ

Dichoso el que con vida intachable camina en la ley del Señor .

Dichoso el que guardando sus preceptos los guarda de todo corazón.

ENTRONIZACIÓN

El coordinador del sector coloca la Biblia en el atril o una mesita y la venera apropiadamente.
Luego todos los participantes en la acción significativa se acercan e igualmente hacen el
gesto de veneración.

PREGÓN DE LA PALABRA

Dos personas del sector proclaman el pregón:

1. He aquí, hermanas y hermanos, la Palabra de Dios que nos llega como un gran regalo del
amor de Dios.

2. Tu Palabra, que resuena desde siempre en la historia de tu pueblo, pronunciando nuestros


nombres y llamando a nuestras puertas.

1. Es la voz del silencio sonoro de Dios, la voz eterna hecha tiempo, la voz del misterio hecha
luz, la voz de Dios hecha letra, sílaba y Palabra.

2. Tu Palabra tiene un rostro humano: Jesucristo, tu hijo amado; El que pudo decirnos
hermanos y es Palabra que pronuncia nuestros nombres y llama a nuestra puerta.

1. Abrámosle, la puerta…. Todas las puertas y ventanas. Abrámosle las manos y los brazos,
los ojos y los oídos, abrámosle el corazón y todo nuestro ser para acogerla con alegría.

2. Jesús - Palabra, pondrá luz radiante en la noche oscura de nuestras vidas, alumbrará con
su fuego ardiente el frío de nuestro egoísmo, nos liberará de nuestras esclavitudes y llenará
de esperanza nuestros ojos cansados.

1. Jesús- Palabra derramará su Espíritu de Resucitado en nuestros corazones para hacernos


capaces de amar, y nos hará ver las necesidades de nuestros hermanos para que
aprendamos a compartir en familia y en comunidad.
2. Abramos pues, hermanos y hermanas, nuestros corazones y nuestras familias a la Palabra
de Dios. Amén.

PROCLAMACIÓN DE LA PALABRA

1º Lectura: Nehemias 8,1-10

Salmo Responsorial: Salmo 18, con el estribillo “ Tu palabra Señor es la verdad y la luz de
mis ojos”

2º Lectura: Lc.4,16-30 Hacer una breve reflexión de la Palabra.

Se pueden tomar algunos de estos textos si se quiere: Mc.4,1-20 / Jn.6,67-69 / Sant.1,21-25 /


2Tim.3,15-17

ORACIÓN FINAL

Démosle gracias a Dios que nos ha regalado su Palabra diciendo: Padre nuestro… Ave
María… Gloria…

“Señor, Padre de Jesús y Padre nuestro, te damos gracias porque has querido darte a
conocer por medio de tu Palabra, porque te has revelado en Jesús. Te pedimos que nos
ayudes a acoger tu Palabra en nuestro sector, a redescubrir su sentido y animarnos a
conocerla profundamente de manera que ella pueda fecundar y producir mucho fruto: fruto
de amor y reconciliación en esta nueva etapa de nuestro Plan Diocesano de Pastoral. Tu que
vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.”

SUGERENCIA: En la mesa donde se coloque la Biblia, se puede preparar una canastita con
papelitos donde tenga escrita una cita bíblica con algunas preguntas para reflexionar, al
finalizar la celebración invitar a los que participaron que tomen uno de los papelitos y sea esa
la palabra que el Señor le quiere decir para la semana, que la lleven a su familia y la lean,
comenten y vean como concretar un compromiso. Además insistir en el compromiso de
iniciarse en el ejercicio de la Lectio Divina en los Pequeños grupos de familias y en el sector.

III. ENTRONIZACIÓN DE LA SAGRADA ESCRITURA EN LOS HOGARES

INDICACIONES Y SUGERENCIAS:

- El párroco y el EPAP motivarán esta acción significativa con anticipación para realizarse
en cada uno de los hogares.
- Este documento guía debe multiplicarse o debe aparecer en la Carta a los Cristianos, la
hojita dominical, o algún otro medio conveniente.
- Preparar un atril, mesa o lugar destacado para colocar la Biblia abierta, la cual
permanecerá de ahí en adelante.
- Velitas encendidas junto a la Biblia.
- El lugar privilegiado debe estar dignamente decorado.

MOTIVACIÓN:

Hermanos: estamos reunidos como familia para acoger al Señor que viene a nosotros en el
Libro Santo, como Luz de verdad, camino y Vida. Nos disponemos a recibir la palabra que se
hizo carne y acampó entre nosotros.

ENTRONIZACIÓN:

El papá o la mamá coloca la Biblia en el atril o una mesita y la venera apropiadamente.


Luego todos los integrantes de la familia se acercan e igualmente hacen el gesto de
veneración.

PREGÓN DE LA PALABRA

Dos miembros de la familia proclaman el pregón:

1. He aquí, hermanas y hermanos, la Palabra de Dios que nos llega como un gran regalo del
amor de Dios.

2. Tu Palabra, que resuena desde siempre en la historia de tu pueblo, pronunciando nuestros


nombres y llamando a nuestras puertas.

1. Es la voz del silencio sonoro de Dios, la voz eterna hecha tiempo, la voz del misterio hecha
luz, la voz de Dios hecha letra, sílaba y Palabra.

2. Tu Palabra tiene un rostro humano: Jesucristo, tu hijo amado; El que pudo decirnos
hermanos y es Palabra que pronuncia nuestros nombres y llama a nuestra puerta.

1. Abrámosle, la puerta…. Todas las puertas y ventanas. Abrámosle las manos y los brazos,
los ojos y los oídos, abrámosle el corazón y todo nuestro ser para acogerla con alegría.

2. Jesús - Palabra, pondrá luz radiante en la noche oscura de nuestras vidas, alumbrará con
su fuego ardiente el frío de nuestro egoísmo, nos liberará de nuestras esclavitudes y llenará
de esperanza nuestros ojos cansados.

1. Jesús- Palabra derramará su Espíritu de Resucitado en nuestros corazones para hacernos


capaces de amar, y nos hará ver las necesidades de nuestros hermanos para que
aprendamos a compartir en familia y en comunidad.

2. Abramos pues, hermanos y hermanas, nuestros corazones y nuestras familias a la Palabra


de Dios. Amén.
PROCLAMACIÓN DE LA PALABRA

Se pueden tomar algunos de estos textos si se quiere: Mc.4, 1-20 / Jn. 1, 1 – 18 / Jn.6, 67-69
/ Sant.1, 21-25 / 2Tim.3, 15-17. Igualmente se reza un salmo.

ORACIÓN DE LOS FIELES

Oremos hermanos, para que la semilla de la palabra de Dios dé muchos frutos en nosotros y
nuestros hermanos.

A cada intención respondemos: “Tu Palabra me da vida, confío en Ti Señor”.

-Para que la palabra de Dios sea alimento permanente de nuestra fe. Oremos.

-Para que las palabra de Dios ilumine nuestras dudas y fortalezca nuestro hogar. Oremos.

-Para que la palabra de Dios sea consuelo en nuestras angustias y alegría en nuestros
triunfos. Oremos.

Se pueden añadir algunas intenciones particulares o familiares…

Oración:

Recibe Señor, la oración de estos hijos tuyos y concédenos el don de la sabiduría, el


entendimiento y la ciencia. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

ORACIÓN FINAL

Démosle gracias a Dios que nos ha regalado su Palabra diciendo: Padre Nuestro… Ave
María… Gloria…

“Señor, Padre de Jesús y Padre nuestro, te damos gracias porque has querido darte a
conocer por medio de tu Palabra, porque te has revelado en Jesús. Te pedimos que nos
ayudes a acoger tu Palabra en nuestra familia, a redescubrir su sentido y animarnos a
conocerla profundamente de manera que ella pueda fecundar y producir mucho fruto: fruto
de amor y reconciliación en esta nueva etapa de nuestro Plan Diocesano de Pastoral. Tu que
vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.”

Todos: El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.

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